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• Franz Arturo Lozada Hernandez

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Fiebre Marce/o}. Melero

E TROD -cCió

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a cemperacur.i. normal del cuerpo humano refleja el '----~-"-----' equilibrio encre dos procesos opuesws: l) b.

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ducción de energía en forma en 105 valores, de acuerdo con el cerricorio anacórnico que se emplea en la medición . Así, la cemperacura recc;1I es 0,3°C superior a la obcenida, en el mismo rnomemo, en la Q\•idad oral y é.sca, a su \'ez.. excede en 0,6°C a la regiscrada simulrineamenre en la axila.

Fiebre El término fiebre define a la ele1'ación regulada de la ¡emperatura corporal por encima de los valores normales (>37,5°C en b . cavidad oral) debido a la reprogramación de los cenrros rermorregula37,2°C y los vespertinos >37,7°C. Cuando la fiebre es muy elevada (>41.5°C) se la designa como hiperpireria. En la fiebre la temperatura corporal se eleva coruo resultado de una rcspues1a homcoscácica incacca (véase más adclame la diferencia con hipertermia) . El rérmino hipotermia define a la remper.nura corporal cenrr.i! IococC11; grupo A, toxina del shock róx.ico del Stnphyiococms m1rem), producidos en un foco infeccioso. estimulan la sinresis y liberación a la circulación -desde los monociros/macrófogos, neutrófilus. algunos grupos de linfociros T, fibroblasros y celula.s endoreliaJe.s activadas- de proteínas proinflamarnrias de bajo peso molecular 15 .000-30 .000 dakons) y corla vida media inrra1•ascular, llamadas cirocinas. Por lo menos una docena de éstas son capaces de producir fiebre. y se las denomina pirógenos endógenos (generados en bs células del huésped). Las mejor conocidas son: inrerleucina (JL)-1 alfa, 11-1 beca (probablcmeme el más potente de los plrógenos endógenos), el facror de necrosis mmoral (TNF) alfu, la IL-6, la l L-18 y algunos inrerferones. E.seas moléculas, una vei liberadas, pueden inducir la expresión de onas similares (cascada de cirncinas) , así como la de sus propios recepcorcs. Se ha demosua.do que las cicocinas rnmbién pueden originarse en células no inmunes de tejidos neoplásicos. !.as cirocinas pirogén.icas circulanccs cscablecen la comunicación biológica enrre el sisrema inmune }' el sislcma ner.~oso cenrral (SNC). Probablemente sean inmpaccs de

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airavcsar la barrera hemawencefálica. Al ser reconocidas por las células endoteliales de! organo va.sculosum de la lámina terminalis (OVLT) -redes de grandes capibres que rodean J los cenrros 1ermorreguladores hiporalámicos- inducen, a rravés de la expresión de la en7.Íma cicloox.igenasa 2, la producción de mediadores lipi