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LOS ADVENTISTAS Y LA VIDA SALUDABLE “Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.” Juan 10:1

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LOS ADVENTISTAS Y LA VIDA SALUDABLE

“Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.” Juan 10:10

¿POR QUÉ LA IGLESIA ADVENTISTA PROMUEVE UNA VIDA SALUDABLE? Los adventistas tienen una larga tradición a la hora de promover una vida sana. Su deseo es seguir el ejemplo de Cristo atendiendo a las necesidades de salud de las personas mediante clases de vida saludable y proporcionando asistencia sanitaria a través de consultorios médicos, hospitales y centros de salud por todo el mundo. Muchos grupos se refieren a los adventistas como un ejemplo de los beneficios que produce una vida sana. En un artículo del Newsweek, “11 hábitos para llegar a los 100”, la autora Deborah Kotz enumera los principios básicos para conseguir una vida larga y saludable,1 y una de las recomendaciones es “Vive como un adventista del séptimo día.” Kotz escribe: “Los adventistas del séptimo día tienen una esperanza de vida de 89 años, cerca de una década más que el ciudadano americano medio. Uno de los principios básicos de la religión es que es importante cuidar del cuerpo porque es un préstamo de Dios, lo que significa no fumar, no beber alcohol ni tomar muchos dulces. Los creyentes normalmente realizan bastante ejercicio, son vegetarianos, y hacen de la familia y la comunidad su centro de atención.” Los adventistas y la vida saludable

Otra revista ampliamente difundida, National Geographic, también cita a los adventistas como un ejemplo de vida sana. En un artículo sobre las Zonas Azules – las zonas del mundo en las que la gente vive durante más tiempo – Loma Linda, California, una comunidad adventista del séptimo día, es identificada como uno de estos puntos calientes de longevidad. El autor Dan Buettner visitó Loma Linda, y estudió a las personas y sus estilos de vida, y en su libro, The Blue Zones, afirma sobre los residentes de Loma Linda que: “Los resultados del estudio muestran que, como grupo, actualmente lideran en los EEUU la mayor esperanza de vida.”2 Una vida saludable y longeva no se trata solo de cantidad de años, sino de calidad de esos años. “La cuestión de aspirar al bienestar no es simplemente para vivir más años, sino para servir a Dios de la manera más efectiva,” dice Scott LeMert, pastor de la Iglesia Adventista del Séptimo Día Sunnyside en Portland, Oregón.3 Es también una cuestión de calidad de vida: ¿quién quiere vivir una vida larga si está enfermo y se siente miserable durante los últimos 20 o 30 años de su vida? 3

LAS CLAVES PARA UNA VIDA LARGA Y SALUDABLE ¿Qué es lo que los adventistas del séptimo día enseñan sobre la vida saludable? Aquí hay algunos principios básicos: 1. Dios mora en nosotros y nosotros somos Su templo. Es un privilegio mantener el templo de nuestro cuerpo en buena salud para que Dios pueda trabajar mejor en nosotros y a través de nosotros y podamos llegar a ser lo que Dios quiere que seamos. En 1ª Corintios 6:19-20 dice: “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.” 2. Somos libres para escoger. Los principios de la vida sana, aunque son recomendados para todos, no son obligatorios, sino que son una elección individual. Dios no obliga a nadie sino que trabaja por invitación y decisión personal (“Porque cada uno llevará su propia carga.” Gálatas 6:5). Una vida saludable no te hace más santo sino más sano. Por supuesto, estar sano tiene muchas 4

ventajas y nos permite servir mejor a otras personas y desarrollar nuestros objetivos espirituales y físicos. Junto a la decisión viene la responsabilidad personal de nuestra propia salud. La enseñanza bíblica “Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará” (Gálatas 6:7) está ilustrada perfectamente en las decisiones y consecuencias que la gente experimenta con su salud. 3. Nutrición. Una dieta equilibrada escogiendo los mejores alimentos proporcionará los nutrientes esenciales necesarios para el crecimiento y mantenimiento de nuestro cuerpo. Los alimentos de baja calidad, una ingesta insuficiente de alimentos así como una ingesta excesiva de los mismos hacen que la maquinaria de nuestro cuerpo sufra. Los alimentos integrales, no refinados, de origen vegetal constituyen una parte importante de una dieta saludable. El principio de comer alimentos saludables es explicado muy bien en esta frase escrita por una de las primeras líderes de la iglesia adventista, Ellen White: “Los cereales, las frutas carnosas, las oleaginosas y las legumbres, constituyen el alimento escogido para nosotros por el Creador (Génesis 1:29). Los adventistas y la vida saludable

“Me mostrarás la senda de la vida.” Salmos 16:11

“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.” 1ª Corintios 10:31

Estos alimentos, preparados del modo más sencillo y natural posible, son los comestibles más sanos y nutritivos.”4 En 1ª de Corintios 10:31, Pablo ofrece una amplia perspectiva: “Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.” Estas senci­ llas afirmaciones han constituido las líneas directrices entre los adventistas por más de 150 años. De forma más específica, los adventistas promueven los siguientes principios para una dieta saludable: • Come una gran variedad de frutas y verduras, preferentemente frescas o congeladas. Se recomienda una dieta vegetariana, pero debe ser una elección personal de cada miembro. Algunos adventistas comen carnes limpias tal como se describe en Levítico (p. ej. peces con escamas y aletas, aves, ternera, cordero). Muchos adventistas incorporan en sus comidas una variedad de alternativas a la carne como hamburguesas vegetales, tofu y otros alimentos proteicos de origen vegetal disponibles en las tiendas de comida saludable y supermercados. Un número cada vez mayor de adventistas sigue una dieta vegana que está completamente basada en vegetales. Una dieta basada en vegetales no es solo saludable para el individuo, sino que se considera también como más sana para el planeta. • Escoge preferentemente panes y cereales integrales en lugar de pan blanco, arroz blanco Los adventistas y la vida saludable

y comidas elaboradas con cereales refinados. Ejemplos de alimentos integrales incluyen copos de avena, granola, pan integral, arroz integral, pasta integral, y quinoa. • Come legumbres con frecuencia, incluyendo lentejas, judías, guisantes, soja, tofu y humus. • Incluye frutos secos y semillas con frecuencia (normalmente a diario) en tu dieta. Nueces, almendras, pipas de girasol, semillas de lino, cacahuetes, mantequilla de almendra y de cacahuete, son algunas de las múltiples opciones disponibles. • Toma un desayuno saludable cada día y haz las cenas moderadas en calorías. • Si consumes productos lácteos y huevos hazlo con moderación. Muchas personas optan por tomar leche de soja (preferentemente fortificada con calcio y B12). • Limita el azúcar, los refrescos y los dulces. Disfruta de los dulces naturales como las bayas, piña, melocotones, mandarinas y dátiles. En lugar de bebidas azucaradas, escoge zumos naturales de frutas, como el zumo de uva, zumo de naranja o zumo de manzana. • Limita la sal y los alimentos con alto contenido en sodio. Aunque esto pueda resultar un concepto nuevo para muchas personas, es bastante conocido entre las personas interesadas en una nutrición óptima. 7

4. Estamos diseñados para movernos.

6. La moderación es la clave.

Ser activo físicamente es una parte importante de la salud y puede incluir distintas actividades, como la marcha rápida, montar en bici, nadar, correr, deportes activos, entrenamiento de fuerza, y la jardinería. Además, en lugar de estar sentado durante mucho tiempo, toma frecuentes descansos para caminar o estirarte. La siguiente declaración sobre la actividad física ha servido como guía a la iglesia durante más de 100 años: “Cuando el tiempo lo permite, todos los que puedan hacerlo, debieran caminar al aire libre en verano e invierno.”5 Este consejo ha sido recomendado para todos los miembros, y con el tiempo se ha ido valorando y practicando más.

La moderación implica evitar las cosas que son dañinas y ser prudentes con las cosas que son buenas. En otras palabras, no excederse o irse a los extremos. Trabajar una cantidad de horas saludable, no ser unos adictos al trabajo. Tomar tiempo para el esparcimiento, pero sin gastar todo el tiempo en juegos. Comer buenos alimentos, pero en cantidades saludables. Ser activos, pero sin excederse. No estar sentados durante mucho rato, romper los largos periodos de sedentarismo con momentos breves de actividad. La moderación mantiene la vida en equilibrio.

5. Tabaco, alcohol y drogas recreativas dañan la salud. Los adventistas sienten como un deber cristiano el evitar aquellas cosas que claramente destruyen la salud (como fumar) o que pueden influir negativamente en la mente o nublar el juicio (como las drogas y el alcohol). Se desaconseja el uso de la cafeína, ya que puede ser adictiva y dañar la salud. Por ejemplo, en lugar de usar como estimulante las bebidas energéticas cafeinadas, una opción más saludable sería una buena noche de sueño o una comida saludable.

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7. El bienestar precisa descanso. Para ser productivo y disfrutar de una buena salud física y mental, todo el mundo necesita de periodos de descanso y relajación, así como de una adecuada cantidad de sueño (por lo menos siete u ocho horas cada noche para los adultos, y más para los niños). Una vida de descanso también incluye tomar por lo menos un día libre a la semana para descansar y recuperarse. Los adventistas creen en la celebración del Sábado, 24 horas cada semana, en las que se dejan de lado las obligaciones normales del trabajo, siendo un tiempo de dedicación a la familia, de adoración y recreación en la maravillosa naturaleza que Dios nos ha dado para disfrutar. Los adventistas y la vida saludable

“Cuando el tiempo lo permite, todos los que puedan hacerlo, debieran caminar al aire libre en verano e invierno.” Consejos sobre la salud, 52

“Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.” 3ª Juan 1:2

8. Un ambiente saludable es un elemento fundamental para la buena salud. Algunas de las mejores formas de prevenir las enfermedades son simples: lavarse las manos, mantener el cuerpo y la ropa limpios, mantener la cocina y las zonas en las que se prepara la comida limpias y libre de gérmenes, y mantener el espacio habitable limpio e higiénico. También, es esencial disponer de agua corriente no contaminada y de un saneamiento y eliminación de desechos adecuados. Los adventistas hacen hincapié en que el agua es la mejor opción de bebida que tenemos, en lugar de las bebidas azucaradas. La luz solar también es beneficiosa para la salud, pero tomada en cantidades moderadas para evitar el cáncer de piel. Ayudar a mantener nuestro medio ambiente limpio y no contaminado, incluyendo el aire que respiramos, es un componente esencial para la buena salud de todos. 9. La salud engloba la totalidad del individuo. Los adventistas creen que las dimensiones física, mental, social y espiritual de la vida deben trabajar juntas de una forma equilibrada para conseguir un nivel óptimo de salud. Así, es importante desarrollar hábitos saludables no solo para nuestro cuerpo, sino también para nuestra mente y espíritu. La salud integral de la persona incluye hábitos como limitar el estrés, desarrollar buenas estrategias de Los adventistas y la vida saludable

afrontamiento, ser esperanzado y optimista, dedicar tiempo a la oración y a la meditación en las obras y la Palabra de Dios, hacer voluntariado en la comunidad, desarrollar buenas relaciones, reforzar la vida familiar, mostrar compasión y demostrar amor y perdón. 10. La atención médica regular ayuda a proteger la salud. Incluso aun cuando parezca que se ha hecho todo correctamente, es posible romperse un brazo, coger una infección o desarrollar un problema de salud crónico. Obtener atención médica regular, incluyendo exámenes y chequeos preventivos, es un aspecto importante de la vida saludable. Esto incluye las visitas regulares al dentista y las limpiezas bucales, junto con el cepillado diario y el uso de hilo dental. Por supuesto, no todos los adventistas alcanzan todos estos objetivos, pero muchos están comprometidos a llevar una vida sana. Ellos también se esfuerzan por animar y ayudar a otros en este viaje, manteniendo una actitud no crítica que permita a las personas escoger, aprender y adoptar unas prácticas de vida más saludables conforme Dios les guía.

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QUÉ REVELAN LAS INVESTIGACIONES Como muchos adventistas eligen un estilo de vida más saludable que la población general, el Instituto Nacional de Salud (NIH) de Estados Unidos ha financiado estudios sobre los hábitos de salud de los adventistas. Además, actualmente la Universidad de Loma Linda está llevando a cabo el Adventist Health Study-2 (Estudio de la Salud Adventista-2), un segundo gran estudio sobre la salud de los adventistas, financiado por el NIH, que incluye a más de 90.000 miembros de toda Norte América. Estudios previos encontraron que los adventistas como grupo tienen menos enfermedad coronaria, menores tasas de muchos cánceres, y viven significativamente más años que la población general. El primer Adventist Health Study mostró un número importante de hallazgos: • Las mujeres adventistas viven una media de 4,4 años, y los hombres adventistas unos 7,3 años más que sus vecinos no adventistas. • Los investigadores encontraron cinco conductas entre los adventistas que incrementaban la 12

longevidad hasta unos 10 años: no fumar, llevar una dieta basada en vegetales, comer frutos secos la mayoría de los días de la semana, hacer ejercicio físico de forma regular y mantener un peso saludable.6 El Adventist Health Study-2 ha observado además ventajas adicionales de salud en las dietas basadas principalmente en vegetales7. Comparados con los no vegetarianos, los adventistas vegetarianos tienen: • Menos obesidad (pesaban de media unos 13 kilos menos que los no vegetarianos). • Menos diabetes (una tasa un 55% menor). • Menos hipertensión (una tasa un 42% menor). • Menores niveles de colesterol (una tasa un 55% menor). • Menos cáncer (cerca de la mitad de la tasa de cáncer de colon). • Menos enfermedad coronaria (una tasa un 3050% menor de ataques de corazón). • Menos mortalidad total (un riesgo de muerte por cualquier causa un 12% menor según los últimos hallazgos). Los adventistas y la vida saludable

“Jehová dará poder a su pueblo; Jehová bendecirá a su pueblo con paz.” Salmos 29:11

“Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, y mi alma lo sabe muy bien.” Salmos 139:14

Un informe sobre la longevidad de los adventistas en la revista Archives of Internal Medicine señala que solo un 20% de los hombres americanos alcanzan los 85 años o más6. En Japón, el país con la mayor longevidad del mundo, llega al 23,6%. Pero, entre los adventistas en conjunto, el 41% alcanzan la edad de 85 años, y cerca de la mitad de los hombres vegetarianos alcanzan la edad de 85. El estudio del National Geographic sobre las Blue Zones (Zonas Azules) encontró que había 10 veces más personas que llegaban a los 100 en Loma Linda, California (una comunidad constituida en su mayoría por adventistas) que en el resto del país.8 Estos estudios destacan muchas de las ventajas de vivir un estilo de vida adventista que ha sido enseñado en la iglesia por más de 150 años. Cuando estas ideas fueron promovidas por primera vez en la iglesia, la teoría microbiana de la enfermedad todavía no era ampliamente conocida; las personas rara vez se bañaban, la aspirina no estaba disponible y no existían los rayos X, los antibióticos, la pasteurización o la vacunación sistemática. Con todo, estas enseñanzas adventistas sobre la salud han pasado la prueba del tiempo, están en harmonía con las actuales investigaciones en salud basadas en la evidencia, y Los adventistas y la vida saludable

han dado lugar a gente con unas claras ventajas de salud y longevidad. Ahora ya conoces lo que los adventistas enseñan sobre el sano vivir y por qué fomentan un estilo de vida saludable. Si estás interesado en una vida larga y saludable, también puedes beneficiarte de estos simples pero profundos principios de una vida saludable. Como dice en 3ª Juan 1:2, “Amado, yo deseo que seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud.”

Referencias: 1. U.S. News and World Report, 11 Health Habits that will help you live to 100 (http://health.usnews.com/health-news/living-well-usn/slideshows/inpictures-11-health-habits-that-will-help-you-live-to-100) 2. Dan Buettner, National Geographic Society, The Blue Zones (http://travel. nationalgeographic.com/travel/happiest-places/blue-zones-californiaphotos/) 3. Nancy Haught, The Oregonian, 08 Mayo, 2012 4. Ellen White, Consejos sobre el régimen alimenticio, p.296 5. Ellen White, Consejos sobre la salud, p. 52 6. Gary Frazer et al. Archives of Internal Medicine 161:1645-1652 7. Gary Frazer, Adventist Health Study 2, 6º Congreso Internacional de Nutrición Vegetariana, 24 Feb., 2013 8. Dan Buettner, National Geographic Society, The Blue Zones

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RESUMEN

1. Cuida bien de tu cuerpo-templo (Dios habita dentro de ti). 2. Una vida saludable es una elección (fomentada, no obligada). 3. Lleva una alimentación saludable, dando preferencia a los alimentos de origen vegetal (frutas, verduras, cereales integrales, frutos secos y legumbres) y limita los alimentos muy refinados y las comidas ricas en grasas saturadas y colesterol. 4. Sé físicamente activo cada día, cuando sea posible. 5. Evita el tabaco, el alcohol, las bebidas con cafeína, las drogas recreacionales y otras sustancias dañinas. 6. Practica la moderación en el trabajo, el juego, el tiempo que pasas delante de una pantalla y en el comer.

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7. Duerme lo suficiente (de siete a ocho horas por la noche para los adultos, y más para los niños y adolescentes), y toma al menos un día a la semana de descanso laboral para descansar y reforzar los vínculos familiares y espirituales. 8. Toma el sol, agua limpia y aire puro de forma adecuada; comprométete con una buena higiene y en preservar un medio ambiente saludable. 9. Adopta un estilo de vida holístico: desarrolla relaciones saludables, ten una perspectiva más esperanzadora de la vida, mantén un equilibrio entre el estrés y la relajación, sé agradecido y optimista, practica la oración y la meditación en la Biblia, invierte tiempo en el servicio desinteresado, y muestra amor y perdón en tu vida diaria. 10. Obtén atención médica y dental de forma regular, incluyendo chequeos preventivos.

Los adventistas y la vida saludable

“¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.” 1ª Corintios 6:19-20

“A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia; amando a Jehová tu Dios, atendiendo a su voz, y siguiéndole a Él; porque ÉL es VIDA para ti, y prolongación de tus días.” Deuteronomio 30:19-20