Tesis Arquetipo Femenino Carolina Narea

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UNIVERSIDAD ADOLFO IBÁÑEZ Facultad de Psicología UNIVERSIDAD CATOLICA DEL URUGUAY Facultad de Psicología DIRECCIÓN DE ESTUDIOS DE POSTGRADOS FUNDACIÓN CHILENA DE PSICOLOGÍA ANALÍTICA C.G. JUNG POSTÍTULO DE ESPECIALIZACIÓN ACADEMICA EN PSICOLOGÍA ANALÍTICA

TESIS PARA OPTAR AL GRADO DE MAGÍSTER Describiendo las dimensiones del arquetipo femenino: Test de caracterización.

TUTOR: Dr. Mario Saiz FECHA DE ENTREGA: Marzo, 2007 ESTUDIANTE: Carolina Narea Rojas

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No me ignores, porque soy la primera y la última, Yo soy la respetada y la desdeñada. Soy la prostituta y la mujer sagrada. Yo soy la esposa y la virgen. Yo soy la madre y la hija. Soy los miembros de mi madre. Soy la estéril, pero muchos son mis hijos. Yo soy la de la gran boda, pero no he tomado marido. Soy el silencio incomprensible y la idea que se recuerda con frecuencia. Soy la voz de múltiples heridas y la palabra con muchas apariencias. Soy el murmullo de mi nombre. Yo soy vergüenza y osadía. No tengo vergüenza y estoy avergonzada. Soy fuerza y soy miedo. Yo soy la guerra y soy la paz. Préstame atención. Yo soy la infortunada y la mujer magna. Anónimo

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Índice Diseño de Investigación.................................................................5 1.1 Problema de investigación.........................................................5 1.2 Pregunta de Investigación......................................................6 1.3 Objetivos.............................................................................6 1.3.1 Objetivo General:............................................................6 1.3.2 Objetivos específicos:.......................................................6 1.4 Método de investigación.........................................................7 2. Antecedentes teóricos................................................................8 2.1 El proceso de individuación en la teoría junguiana......................8 2.2 Definición del concepto de arquetipo........................................9 2.3 Conceptualización del arquetipo femenino...............................11 2.4 Descripción de las diferentes facetas del arquetipo femenino.....12 2.4.1 Juventud......................................................................13 Arquetipo de la doncella..........................................................13 Arquetipo de la mujer salvaje..................................................18 Arquetipo de la heroína...........................................................26 2.4.2 Adultez.........................................................................34 Arquetipo de la amante...........................................................34 Arquetipo de la esposa............................................................42 Arquetipo de la madre............................................................52 4.2.3 Vejez...........................................................................63 Arquetipo de la vieja sabia......................................................77 Instrumento de medición..............................................................83 Conclusiones...............................................................................87 Bibliografía.................................................................................90 Anexos.......................................................................................92 Anexo 1. .................................................................................93 Matriz de Arquetipos y subdimensiones........................................93 Anexo 2..................................................................................94 Matrices para cada Arquetipo y sus subdimensiones.......................94

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Anexo 3.................................................................................100 Instrumento de Medición validado por Pre Test............................100

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Diseño de Investigación

1.1 Problema de investigación

Durante siglos las dimensiones que se resaltaron y respetaron del arquetipo femenino fueron los relacionados con el cuidado y protección de otros. Es en los años 50 cuando surgen los movimientos feministas, que las mujeres empiezan de una manera fiera a luchar por sus derechos y utilizar otros aspectos del arquetipo femenino, que estuvieron dormidos, reprimidos y negados tanto por la cultura como por las propias mujeres. Es a partir de ese movimiento feminista que las mujeres ganan no solo el derecho a voto sino el poder de ser mucho más que las dimensiones que se les permiten ejercer culturalmente. Este cambio, a pesar de lo saludable que puede resultar, no ha estado exento de dificultades tanto para la mujer como para el hombre. Cuando en una sociedad los roles están dados no hay espacio al cuestionamiento ni tampoco a la angustia que este genera, pero cuando esto no es así y se te entrega la posibilidad de ser mucho más de los que hasta hora estabas siendo, la situación se vuelve compleja, pues estás frente a la posibilidad de elegir cómo quieres ser y en qué tipo de mujer quieres transformarte. Hoy a la mujer se le plantea la oportunidad de despertar, activar y vivir los diferentes aspectos que conforman el arquetipo femenino. De esta forma al ser capaces de desarrollar los múltiples aspectos del arquetipo, cada mujer puede vivenciarse en plenitud, lo cual redunda en un vivir armónicamente cada uno de los roles femeninos explorados.

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1.2 Pregunta de Investigación

La pregunta que surge es ¿cómo podemos acercarnos o descubrir las dimensiones del arquetipo femenino activas o en proceso de despertar en diferentes mujeres o grupos de mujeres?. Para poder responder a esta pregunta primero es menester tener un instrumento que permita indagar sobre tal problemática. A esto es a lo que atañe la siguiente tesis, siendo su objetivo principal construir un instrumento que permita indagar sobre cuál o cuáles son las dimensiones del arquetipo femenino que están predominando. Contar con esta información permite identificar las dimensiones emergentes del arquetipo femenino y poder por un lado fortalecerlas y por otro potenciar el desarrollo de aquellas que están deficitarias. 1.3 Objetivos 1.3.1 Objetivo General:

Construir un instrumento de medición que permita identificar las dimensiones del arquetipo femenino predominante. 1.3.2 Objetivos específicos:

1. Caracterizar las tres fases evolutivas de una mujer: juventud, adultez y vejez. 2. Describir los tres arquetipos asociados a cada fase Juventud •

Arquetipo de la doncella



Arquetipo de la mujer salvaje



Arquetipo de la guerrera

Adultez •

Arquetipo de la amante



Arquetipo de la esposa 6



Arquetipo de la madre

Vejez •

Arquetipo de la abuela



Arquetipo de la sanadora



Arquetipo de la vieja sabia

3. Describir los polos positivos y negativos asociados a cada arquetipo. 4. Construir la matriz arquetípica. 5. Aplicación de pretest. 6. Redefinición de la matriz en base a los resultados del pretest.

1.4 Método de investigación

Al realizar una investigación de tipo exploratoria no intentaré responder a ninguna hipótesis o respuesta tentativa, la que sí podría ser incorporada en investigaciones posteriores. Tal como se plantea en los objetivos se creará un instrumento que permita caracterizar, así como evaluar, la presencia y/o ausencia de las dimensiones del arquetipo femenino en las mujeres. Este instrumento permitirá analizar y describir los cambios en los arquetipos predominantes, y así lograr identificar las dimensiones emergentes del arquetipo femenino y poder por un lado fortalecerlas y por otro potenciar el desarrollo de aquellas que están deficitarias. El objeto de este instrumento es describir el estado actual de las mujeres a las que se les aplique, así como también nos podría servir para hacer un diagnóstico general utilizando en su aplicación métodos de muestreo. Luego de la creación del instrumento, éste será sometido a un pre test por juicio de expertos para corroborar la idoneidad de éste, de modo de que pueda ser aplicado y sus resultados validados.

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2. Antecedentes teóricos 2.1 El proceso de individuación en la teoría junguiana

Uno de los principales pilares de la teoría junguiana es el concepto de individuación, el cual se puede definir como el “proceso mediante el cual cada uno de nosotros viene a ser lo que intrínsecamente y potencialmente es, desde su nacimiento hasta la muerte”.1 Vivir el proceso de individuación es responder al llamado al cual hace referencia Joseph Campbel (1997), cuando explica que cada uno de nosotros es un héroe que esta siendo llamado a desarrollar y vivir el propio mito personal. Sólo que ésta tarea puede, en ocasiones, estar plagada de dificultades y sinsabores. Sin embargo es un camino que nos entrega el para qué de nuestra existencia. Cuando no escuchamos la llamada, nos traicionamos y nuestra alma sufre, aparece el desgano, el desánimo, la pesadumbre y los síntomas. Cuando nos negamos a nosotros mismos nos herimos, y muchas veces son estas mismas heridas las cuales nos devuelven al camino de nuestra individuación. Como ya se ha dicho tomar este camino implica coraje y resistencia. De hecho para Jung es una decisión ética que contempla fidelidad a sí mismo. Es ponerse en acción para convertir el destino en vocación autentificando su vida, es la más alta audacia de la vida, la afirmación absoluta del existente individual y la triunfante adaptación a lo universal dado, con libertad de altas posibilidades de la propia decisión. Este proceso de individuación contempla el encuentro del Yo con el Sí mismo, de modo que se establezca una relación dialéctica entre conciente e inconciente, es un acercamiento de las polaridades de modo que la tensión entre ellas disminuya. 1

http://www.analitica.com/archivo/vam1996.10/soc3.htm

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2.2 Definición del concepto de arquetipo

El concepto de arquetipo es probablemente uno de los más difíciles de definir dentro de la teoría junguiana, pues su esencia es misteriosa, incognoscible e imposible de capturar con las palabras. Para Jung (1936) los arquetipos: Son indescriptibles debido a su riqueza alusiva. (...) El intelecto discriminador

sigue

intentando

establecer

naturalmente

un

significado unívoco para éstos, lo que le impide ver lo esencial; pues lo que podemos considerar como constitutivo de su naturaleza es su multiplicidad de significados, su casi infinita riqueza

alusiva, que hace imposible cualquier formulación

unilateral. (p. 80) De hecho para Jung (1936); La psique del neonato no es una vacía "tabula rasa" sobre la que el medio externo marcará todos sus contenidos y procesos. Arquetipos e instintos representan modelos innatos preexistentes a toda experiencia sensorial y que generan, bajo ciertas necesidades y estímulos, unos prototipos de acciones (instintos) o unos modos privilegiados de captación del mundo (arquetipos). Son propios de la especie humana, se han ido seleccionando a lo largo de su filogenia y por ello constituyen parte del acervo genético específicamente humano. Preexisten a la experiencia concreta de un individuo en particular ya que son meramente formas heredadas sin contenido (pp. 41-52). Por ello son patrones universales y comunes a todas las personas independientemente de su condición, edad o sexo, educación formal o pertenencia a una cultura u otra de un tiempo histórico u

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otro; constituyen fundamentalmente lo que se conoce como inconsciente colectivo u objetivo (Jung CG. 1997). Representan pre-programaciones

potenciales,

tendencias

formativas

o

predisposiciones formales (Eibl-Eibesfeldt I. 1981) que promueven la individuación. Los arquetipos no son directamente accesibles a la conciencia ya que se encuentran vacíos de contenidos concretos, y por ello su conocimiento

teórico

es

siempre

aproximativo.

Sus

representaciones espontáneas y naturales, conocidas como imágenes arquetípicas de alto valor simbólico, esto es son plurisignificativos, sí pueden ser accesibles a la conciencia pero son muy variables en sus manifestaciones concretas (en contraste con el arquetipo único del cual derivan) dependiendo de factores culturales y sociales, así como de los momentos evolutivos por los que atraviesa un individuo en particular (Robertson R. 1999). Tales

imágenes

arquetípicas

pueden

ser

encontradas

comunitariamente en las religiones, mitos, tradiciones rituales, leyendas folclóricas de todas las culturas y épocas (…); y también pueden ser halladas individualmente en los sueños visualizaciones espontáneas o inducidas (por ejemplo a través de la técnica de la imaginación

activa),

diferentes

productos

personales

no

voluntariamente provocados por el sujeto (Jung CG. 1977:7-51). “Si el arquetipo es la estructura que tiende a hacer de nosotros un ser universal, la imagen arquetípica es lo que encierra nuestra singularidad". (Robertson R. 1999) Por eso encontramos tantas representaciones de un mismo arquetipo, de hecho por ejemplo el arquetipo de madre se ha encontrado hasta en las más arcaicas culturas, manteniendo siempre el contenido de lo nutricio, protector y también caótico.

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Los arquetipos son, semánticamente, metáforas y tienen una doble existencia, que Jung presentó de varias maneras: 1. están repletos de oposiciones internas, polos positivos-negativos; 2. son incognoscibles y son conocidos por medio de las imágenes; 3. son instinto y espíritu; 4. son congénitos, pero no heredados; 5. son estructuras puramente formales y expresan contenidos 6. son psíquicos y extrapsíquicos (psicoides). 2

2.3 Conceptualización del arquetipo femenino

Para Jung hay tantos arquetipos como imágenes arcaicas estables existen en nuestro haber socio cultural. Por lo tanto cuando se habla del arquetipo de la madre, del padre, del hijo, de héroe, etc, se está haciendo referencia a experiencias universales de toda la humanidad. Es bajo esta concepción que utilizaré el término arquetipo femenino como un concepto global que contiene los múltiples arquetipos que componen lo femenino. Dado que los arquetipos para definir el arquetipo femenino podrían llegar a ser infinitos, he tomado las “tres etapas distintas de madurez por las que debe atravesar la mujer que son: la mujer joven, la mujer en su plenitud y la mujer anciana”. (Dunn, M. 1998: 32) Estos estadios han sido determinados por la fisiología y evolución de la mujer a lo largo de siglos de desarrollo. Como los arquetipos surgen de las experiencias tanto instintivas como socioculturales, estas etapas antes descritas pasan a transformarse en estructuras arquetípicas que se repetirán a lo largo de la historia de la humanidad. El arquetipo femenino se podría considerar un sinónimo de la Diosa: 2

Presentación Dr. Mario Saiz, seminario de psiconeurociencia, Magíster Psicología Analítica

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En el pasado, la Diosa era parte viva de la estructura religiosa y social de un grupo étnico. Desde el paleolítico superior, que puede definirse como el alba de la humanidad, los sistemas de notación temporal basados en la observación de las fases de la luna (con su curso vinculado al ciclo menstrual) y los vestigios de los objetos rituales empleados en las ceremonias religiosas femeninas, nos hablan de la presencia intensa e influyente de la deidad femenina. (…) La Diosa primordial era única e incluía en su figura las fuerzas de la vida, la muerte y el renacimiento. Todas las mujeres eran sus sacerdotisas, servidoras de su voluntad y de las manifestaciones terrenales de su poder y magia. (Dunn, M. 1998:34-35) Al entrar en la época patriarcal la Diosa va perdiendo su lugar principal siendo sustituida por un dios masculino. Es en este momento en que la Diosa deja de ser única y se la divide en varias deidades, las cuales representan diversos aspectos de la Gran Diosa. 2.4 Descripción de las diferentes facetas del arquetipo femenino A continuación se describen cada uno de los arquetipos identificados: 2.4.1. Juventud •

Arquetipo de la doncella



Arquetipo de la mujer salvaje



Arquetipo de la guerrera

2.4.2. Adultez •

Arquetipo de la amante



Arquetipo de la esposa



Arquetipo de la madre

2.4.3. Vejez • •

Arquetipo de la abuela Arquetipo de la sanadora

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Arquetipo de la vieja sabia

Para desarrollar en profundidad los arquetipos antes descritos se utilizará la mirada de la terapeuta junguiana Jean Shinoda Bolen y la revisión que hace de las diosas griegas y su relación con los arquetipos femeninos, y la propuesta de la antropóloga Manuela Dunn Mascetti, quien investigó durante años la mitología de la diosas y sus múltiples dimensiones.

2.4.1 Juventud

Arquetipo de la doncella

El arquetipo de la doncella nace de la experiencia que cada mujer ha experimentado en el paso de niña a mujer. La doncella encarna lo etéreo y desvinculado de las ataduras terrenas. Aún no es conciente de sus deseos ni de sus propias fuerzas, por esto es capaz de adaptarse y obedecer pasivamente los mandatos de su entorno. En ella no hay rebelión, sino más bien una distante indiferencia a lo que ocurre a su alrededor.

Tal como ocurre en el mito de Psique, ella es, en el inicio del relato, por sobre todo doncella, inconciente de los efectos que su belleza causa. Psique vive inconsciente de sí misma y de los demás, su forma de funcionar es inocente, cándida e ingenua. Tal como en el relato, a la doncella le “ocurren” hechos, no es ella quien guía su destino. En el mito se relata que su padre, el rey toma la terrible decisión de sacrificar a su hija para congraciarse con Afrodita, quien ha lanzado 13

una maldición a su país, celosa de la belleza de Psique. El sacrificio consiste en entregar en matrimonio a Psique al monstruo de las profundidades oceánicas. Todo esto esta ocurriendo, sin embargo Psique es ajena a todo esto. Va triste al encuentro con el monstruo, pero va obedientemente. Cuando va ser entregada al monstruo es rescatada por Eros, dios del amor, y llevada a un palacio donde todos sus deseos se cumplen. Sin embargo a pesar de todo lo que ha vivido ella sigue funcionado inconcientemente, ella vive en la vida y no vive su vida. Tal como en el relato este arquetipo no conoce sus fuerzas ni sus capacidades, todo le ocurre y por esto es incapaz de asumir responsabilidades y compromisos, no hay intensión ni metas. Espera que sean otros los que decidan y cualquier decisión que tomen es siempre volátil. Otro mito que permite ejemplificar a este arquetipo es el de Perséfone o Kore. Ella es la eterna hija de su madre. La ama y la obedece por sobre todas las cosas. Y por esto sus características centrales son la complacencia y la pasividad, pues es la madre quien toma las decisiones y protege de modo que la hija nunca corra ningún riesgo y tampoco tome ninguna decisión. En el mito Perséfone es la adorada hija de Deméter. Un día mientras ella esta en un prado encuentra un narciso y cuando se dispone a recogerlo la tierra se abre bajo sus pies y Hades, dios del mundo subterráneo, rapta a Perséfone. La madre cuando se da cuenta de la desaparición de su hija la busca por todos lados. Es Hécate, la diosa de la luna oscura, de las encrucijadas, quien se compadece de la madre y la insta a pregunta a Helios, dios del viento, quien todo lo ve a preguntarle por su hija. Este dios le cuenta a Deméter lo sucedido y además agrega que fue con la autorización del padre de Perséfone, Zeus. Deméter al escuchar dicho relato y no encontrar consuelo ni comprensión por parte de los otros dioses cae en una profunda depresión, lo cual genera que las cosechas empiecen a morir y que los hombres pasen hambre y los dioses no reciban sus sacrificios rituales. Zeus pide a Deméter que cambie su actitud, pero esta no cede, entonces manda a Hermes a negociar con Hades la devolución de Perséfone.

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Finalmente Hades cede, pero antes de devolver a Perséfone la invita a comer una granada. Cuando Hermes lleva a la doncella donde su madre, esta le pregunta si ha comido algo en el mundo subterráneo, enterándose entonces que comió unos granos de granada, lo cual la atará para siempre al mundo de Hades. Uno de los peligros que encierra este arquetipo es la inconciencia, pues esta puede ser la fuente de grandes males. Al no tener el control sobre la propia vida y ser manipulable e influenciable por otros, se puede terminar siendo el instrumento para que otros realicen su voluntad. Tal es el caso de Pandora, la cual fue creada con todos los dones, por Zeus para castigar a la humanidad. Pandora es entregada a los hombres como un regalo de los dioses junto con un ánfora que nunca debía ser abierta. La trampa esta en que Pandora fue inoculada por Hermes con la curiosidad. Como ella no es conciente de si misma actúa cumpliendo un programa prediseñado. Su inconciencia la hace finalmente abrir la caja, de la cual salen todos los males del mundo. Esta imagen de la mujer-doncella a la cual le pasa la vida es la imagen más tradicional de los cuentos de hadas. A la Bella Durmiente la maldicen y cuando llega el momento de cumplirse la maldición, por más que sus padres intentan protegerla, una rueca en la última torre del castillo es el instrumento por el cual se cumple el maleficio. Pero nunca en el cuento cabe la posibilidad de hacer partícipe a Bella de lo que podría ocurrirle, de modo que ella participara activamente en su protección. En la Cenicienta, su madrastra le quita el lugar que le corresponde, enviándola a la cocina a adormir entre las cenizas del hogar. Cenicienta se entristece pero no hace nada activamente para cambiar su situación, lo que finalmente ocurre es algo que esta fuera de su control. En el cuento La Bella y la Bestia, la protagonista pide a su padre como único regalo de sus viajes una rosa blanca. El padre al retornar a casa se detiene en un hermoso jardín y corta la flor para su hija, desencadenando la furia de

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Bestia, quien es el dueño del jardín. Finalmente Bestia accede a dejar en libertad al hombre si alguna de sus hijas esta dispuesta a ocupar su lugar. Solo Bella accede y se sacrifica por su padre. La rosa blanca es un símbolo de pureza e inocencia, características que ostenta Bella. Ella es una hija obediente e indiferente al mundo que la rodea; y es esta doncellez la que tiene que desaparecer para que surja la mujer. Cuando Bella finalmente ocupa el lugar de su padre, puede empezar a despertar. En cada relato el aspecto masculino suele ser representado como el secuestrador, el destructor de la tranquilidad y de una u otra forma el malo, lo cual calza con la percepción que puede tener una mujer doncella que es arrebatada de su inconciencia e ignorancia. El aspecto masculino es el que permite que aparezca la mujer y muera la doncella. El trabajo no es fundamental en su vida, pues no se ha planteado mayores metas ni tampoco anda buscando la fama o el éxito, mas bien suele estar en lugares donde este su familia o amigas y donde se sienta segura. Puede resultarle difícil mantener un objetivo, pues le cuesta comprometerse y persistir en una meta. Pero si logra encontrar algo que la motive puede descubrir que existen en ella mucha creatividad e intuición. La doncella en la relación con otras mujeres se siente muy bien y cómoda. Suele ser la representación viviente de la feminidad y por esto ser querida y admirada por otras mujeres, evocando incluso respuestas maternales en mujeres mayores. Esta tendencia a ser mimada y cuidada puede generar una actitud de fragilidad y vulnerabilidad que refuerza esa actitud externa, reforzando a su vez su dependencia y sumisión. El área de la sexualidad tiende a estar adormecida y sumergida en lo más profundo del inconciente, esperando por alguien o algo que la despierte. Tal como

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en el cuento de la Bella Durmiente que espera por el príncipe salvador. Si este llega a despertar, la doncella descubre un área de si misma que le permite gozar y disfrutar apasionadamente de la sexualidad. En cuanto a las relaciones de pareja o matrimoniales, estas suelen “ocurrirle” a la doncella. Ella al igual que en el mito de Perséfone puede sentir que fue secuestrada por el hombre que quiere casarse con ella y como su actitud es de dejarse llevar más que de tomar las riendas de la propia vida, puede incluso sentirse oprimida y pasada a llevar. Dado que su forma natural de ser es tradicionalmente femenina, tiende a ser más receptiva que activa y no buscará competir ni superar a su pareja. La doncella que este en pareja cederá ante un hombre que insista en casarse con ella. Además suelen ser elegidas y no al revés. Cuando llegan los hijos, estos también suelen ser percibidos como irrupción en la plácida vida de la doncella. Incluso pueden llegar a generarle angustia y ansiedad al verse sobrepasada en lo que a cuidados y responsabilidades implica tener un hijo. Puede sentir como si estuviera jugando a ser madre y no como un rol verdadero. Como madres son respetuosas y dejan que sus hijos crezcan con bastante libertad, aunque estos atributos también pueden jugarle en contra pues puede que sus hijos quieran o necesiten de una guía más fuerte y decidida lo cual difícilmente su madre les podría ofrecer. La familia puede ser vivida por la doncella como un peso impuesto, pues implica responsabilidades que no pueden ser descuidadas. Además como necesita sentirse protegida mantendrá fuertes lazos con su familia de origen en especial con su madre, y por otro lado esta su propia familia que la demandará como dispensadora de cuidados, en esta polaridad es posible que la doncella dé un paso atrás y deje que los otros, quizás su marido y su madre se disputen su atención y cariño. Tal como en el mito, Perséfone nunca dijo a su madre que ella voluntariamente y sin amenaza de por medio había comido los granos de granada, intuyendo

de

alguna

forma

que

eso

la

ataría

al

mundo

subterráneo

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transformándola en su reina. Perséfone dejó que su madre luchara con Zeus y Hades, manteniendo siempre una actitud pasiva. Finalmente en el mito ella logra tener espacios bien delimitados entre su esposo y su madre, siendo capaz de balancear el rol de hija y el de esposa. Si la doncella puede activar su sabiduría interior es capaz de poner límites y vivir los diferentes roles manteniendo su independencia.

Arquetipo de la mujer salvaje

La mujer salvaje se despierta cuando se toma conciencia que se es hija de Gaia, es decir, cuando se siente correr por la venas la energía de la naturaleza, como una fuerza creadora y destructora a la vez. Esta experiencia suele estar asociada al despertar de la sexualidad, pues aparecen deseos relacionados con el goce de todos los sentidos. El arquetipo de la mujer salvaje activa en la mujer la búsqueda de lo natural y la exploración de los propios instintos. Un ejemplo de este arquetipo son las bacantes, que: son mujeres que hacen propaganda a Dionisio o Baco en la calles de Tebas e invitan a las otras mujeres a unírseles en una danza frenética en el monte. Lo que proponen es una evasión de la ciudad hacia la naturaleza. Allí en el monte, la oreibasía, esa danza desenfrenada e impúdica, les conducirá al éxtasis, un estar "fuera de sí", una liberación del trabajo de la casa, de las leyes estatales y de los compromisos públicos y privados. Prometen al fiel una evasión espacial hacia donde no ha intervenido la organización política humana y la técnica.”3 En la mitología india Kali es la diosa que encarna la energía primordial, de creación y destrucción. Esta diosa representa los poderes de la naturaleza: 3

http://www.ucm.es/info/especulo/numero28/dioniso.html

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encarnando la conjunción de ambos principios. Como diosa creadora, genera mundos, los mantiene y los absorbe, en un ciclo incesante de apertura y cierre. En su aspecto destructor, Kali es la diosa sedienta de sangre, cruel y pavorosa, adornada con un collar de cabezas cortadas, que siembra la destrucción y la muerte con el fin de crear. (Dunn, M. 1998: 46). Kali aparece en la mitología india cuando ni dioses ni hombres son capaces de vencer los ejércitos demoníacos. El demonio búfalo Mahishasura, era invencible salvo ante una mujer, por este motivo los dioses crearon a Durga, la diosa era una hermosa mujer dorada que llevaba unos adornos en forma de luna en cuarto creciente, tenía diez brazos y cabalgaba en un león. Ella vence al demonio búfalo, pero no puede con los tres siguientes demonios más poderosos, esto hace que monte en cólera y de su ceño fruncido nace Kali, la cual ataca a los demonios venciendo a dos de ellos. El tercero solo pudo ser vencido cuando Kali lo hiere de muerte y bebe su sangre. (Bolen, J. 2003: 152)

Esta diosa surge de la ira y nace para proteger

ferozmente

tanto

a

dioses

como

hombres. En el mito luego que ella bebe la sangre del demonio, queda ebria de sangre y continua destruyendo. Shiva su esposo, cubre su cuerpo con cenizas y se recuesta en el campo de batalla y solo cuando Kali pisa el cuerpo de su esposo caído ella recupera la cordura.

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La energía que nace de los instintos más primitivos puede proveer a una mujer de una fuerza inimaginable e inagotable, pero si esta queda fuera de control los resultados pueden ser devastadores y tal como lo señala el mito se requiere del arquetipo de alteridad para recobrar el equilibrio interior. Esto se puede observar en mujeres que sacan fuerza de flaqueza para enfrentar las adversidades de la vida, pero esa misma fuerza que les permitió sobrevivir y superar los obstáculos, al no recuperar su cause puede ser profundamente destructiva tanto para si mismas como para las personas que las rodean. Otra forma de experimentar este arquetipo nace de la vivencia de cada mujer cuando se inicia su ciclo menstrual de hecho; la comprensión de los ciclos biológicos femeninos es un paso previo y fundamental para el redescubrimiento del universo interior de la mujer. (…)Durante el ciclo menstrual el cuerpo experimenta cambios físicos más o menos drásticos, junto con una alteración de la energía fisiológica, debido a la fluctuación de hormonas. En este ciclo existen dos polos en la sexualidad femenina, uno se alcanza en la ovulación, y se expresa en términos de receptividad y entrega; y se trata del momento más fértil del mes. El otro se manifiesta cuando llega la menstruación y se caracteriza por un incremento en el deseo sexual (…). El flujo blanco y transparente de la ovulación se denomina “río de la vida” porque es procreador. Mientras que el flujo rojo de la menstruación se le llama “río de la muerte” porque su poder sexual se inicia en el cuerpo de la mujer sin el propósito de la reproducción. (Dunn, M. 1998: 46) Otra diosa que nos permite acercarnos al arquetipo de la mujer salvaje es Lilith. Ella pertenece a la tradición judaica, aunque su origen parece ser más antiguo, remontándose a Sumeria, siendo lo más probable que se haya tomado a la resplandeciente reina del cielo como modelo, cuyo nombre Lil significa “aire” o “tormenta”. Se trataba de

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una presencia ambigua, amante de los lugares salvajes y deshabitados, asociada también con el aspecto oscuro de Inanna y su hermana, Ereshkigal, reina del inframundo. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 575) Lilith, fue la primera esposa de Adán y estaba hecha de polvo, igual que él. Lilith era hermosa y libre. Hasta el punto que se quejó de tener que yacer con Adán siempre debajo: "Fuimos creados iguales, y debemos hacerlo en posiciones iguales". Como Adán permanece intransigente, Lilith invoca el nombre de Dios, lo que le da alas, y se aleja volando del lado de Adán. Este se queja ante el Creador, el cual condolido por el desamparo del varón, envía a tres ángeles en busca de Lilith. Ella se niega a volver, pues prefiere quedarse en el Mar Rojo, región en la que abundaban los demonios lascivos, con los que había dado a luz a varios lilim (demonios bebé). El castigo de Jehová por la negativa de Lilith de regresar al lado de Adán consistirá en hacer perecer cada día un centenar de sus hijos4. Adán, entonces, recibe una nueva compañera, Eva, creada a partir de una de sus costillas, al ser carne de su carne se espera que sea sumisa y manejable. “Con el tiempo Lil, palabra de la cual posiblemente proviene Lilith, se confundió con la palabra layil que significa noche, Lilith, entonces, fue recibiendo todas las asociaciones con lo nocturno” (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 576), término que nos transmite la idea de oscuridad, de ausencia de luz, y que se relaciona con sus características personales y su ámbito de acción: la otra faz del día y los hechos que en tal momento acontecen. A partir de esta asociación a lo oscuro se han hecho muchas equivalencias y comparaciones del término "Lilith", como ser monstruoso, ente espectral, fantasma nocturno, diablesa, etc, ha sido 4

Publicado en la revista Raíces - Abril 1992 Isabel Monzón, antes que Eva

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vinculada también con ninfas de los campos de tersos cuerpos etéreos relucientes de sol; criaturas indomables, ardientes y salvajes, que fascinan y enloquecen a los campesinos enamorándolos sin remisión. Lilith es representada popularmente como una seductora mujer, sin más vestido que su propia piel, provista de abundante pelo rojo rizado que se extiende como un manto a su alrededor; y que tiene por costumbre sentarse sobre la concavidad de la media luna. (…) En la Cábala se la llama la reflexión femenina de Samael o Samael-Lilith. Satanás es el adversario por excelencia y una de las versiones de Samael, y Lilith asumiría características de "doble opuesto" y "doble contrario". Desde aquí se la entiende de nuevo como un ente maligno semianimal o medio humano, (…) mujer seductora y ambiguo ser, a medio camino entre lo humano y lo animal, fascinante demonio hembra y espectral habitante de las sombras, generadora de seres aberrantes. Pero siempre se muestra impulsada por la pasión y rodeada por un magnético halo de misterio, de trasgresión, de oposición, malignidad, peligro, desacato, rebeldía, tentación y deseo. Y por el contrario, también de frescura, espontaneidad, independencia, libertad y tal vez autenticidad.5 Según la psicóloga escritora del artículo “Lilith la sombra de Eva”, Paloma de Miguel lo más terrible de todo es el hecho de invocar el Nombre de Dios, innombrable en toda la tradición judía, por considerar que el Nombre verdadero de cualquier ser contiene las características de lo nombrado, y por lo tanto es posible conocer su esencia y adquirir poder sobre ello. Pronunciar el nombre de Dios se convierte, pues, en una osadía suprema, un acto de soberbia mucho mayor que el de hacer directamente oídos sordos ante sus mandatos; algo, demasiado grave.

5

http://www.nueva-acropolis.es/FondoCultural/simbolismo/Simbolismo7.htm

22

Para la misma autora un primer análisis del mito nos muestra que Lilith ha abierto las puertas de lo prohibido. Lilith ha roto con lo estipulado por el Creador para la raza humana. Ha quebrantado lo establecido, se ha querellado contra el orden natural de las cosas, ha abandonado el lugar propio de la Humanidad, ha transgredido los límites impuestos a los seres humanos y por ello se ha colocado fuera del mundo de los hombres y se ha convertido a sí misma en apátrida, en exilada, en extraña. Es por su actitud frente a las normas por lo que se considera a Lilith enemiga del matrimonio, adversaria de los nacimientos, contraria a los hijos, instigadora del deseo proscrito y fomentadora del desacato, en general, frente a las reglas sociales establecidas. Por todo ello, en definitiva, en el contexto judaico se la tiene por un ser nefasto y un ente maligno en general; de ahí su asociación con lo diabólico y su vinculación con la tentación y la trasgresión, a evitar, por supuesto, si se pretende mantener un orden sociocultural determinado. Lilith contiene en sí elementos suficientes que, sin hacer una valoración moral, sí nos permiten en cambio pensar en un patrón típico de lo femenino caracterizado

por

rasgos

como

la

independencia,

la

autonomía,

la

autopertenencia, la confianza en el propio criterio, el sentido crítico, la vinculación con el propio ser y el propio deseo que desde nuestra mentalidad la hacen conceptualizar como individuo libre. El mismo hecho de su "ocultamiento" en las profundidades nos mostraría que el factor Lilith puede estar en determinadas mujeres reprimido oculto en su propio interior, mas permanece latente y actúa desde las propias profundidades6. Finalmente Artemisa como diosa de la Luna, la caza, el parto y de la naturaleza salvaje representa otro aspecto del arquetipo de la mujer salvaje. Esta diosa es una diosa virgen y libre, dueña de si misma y completa en si misma, no requiere de hombre alguno para sentirse completa. “Ella es la menos civilizada y 6

http://www.nueva-acropolis.es/FondoCultural/simbolismo/Simbolismo7.htm

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la más primitiva de todas las diosas griegas, y su antiguo linaje se remontan al pasado lejano, a los tiempos remotos anteriores al culto de la tierra y a la construcción de las ciudades.” (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 373) Artemisa ha sido representada como una osa que cuida de sus cachorros o como una cierva y también como la cazadora. Ella encarna la dualidad de la vida y la muerte pues es cazadora y cazada, ya que cada animal es una representación de ella misma. Como diosa del parto ayuda a las mujeres a dejar atrás la cultura y la civilización para que se conecten con la parte más animal de ellas, aquella que las lleva a contactarse con el propio cuerpo y con la sabiduría animal de este. Sin embargo Artemisa es una diosa virgen, libre y de una inflexible autonomía. En este aspecto ella es la compañera de las muchachas que aún no son madres, aquellas que son libres y pueden correr junto a ella en sus andanzas por el bosque. Por lo tanto ella también encarna esta doble naturaleza femenina de mujer libre y a la vez ser capaz de contactarse con ese instinto tan antiguo como vital que es el de cuidar, alimentar y proteger a las crías. Como diosa de la luna creciente encarna el misterio de la noche donde las formas se tornan difusas. “A la luz de la luna, una persona conectada con Artemisa se convierte en una parte sin-yo de la naturaleza, en ella misma y una con ella durante algún tiempo.” (Bolen, J. 1994: 82) Los griegos al tomar esta imagen antigua de diosa le dieron un origen divino, en el cual ella es hija de Zeus y Latona, quien era una deidad de la naturaleza, hija de dos titanes. Cuando le llegó el momento a Latona de dar a luz a sus hijos, surgieron grandes dificultades. En ninguna parte a donde acudía era bien recibida, porque todos temían la cólera vengativa de Hera,

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la esposa legal de Zeus. Finalmente encontró refugio en la árida isla de Delos, donde dio a luz a Artemisa. En cuanto nación, ayudó a su madre en el trabajo de parto de su hermano Apolo, el cual duró nueve días y nueve noches. (Bolen, J. 1994: 75) El arquetipo de la mujer salvaje en el trabajo se expresa como defensora de ideales y de causas humanitarias, y que pueden no tener un valor comercial pero sí emocional. En este sentido la mujer salvaje puede ser marginada por sus ideales y por privilegiar seguir sus propias motivaciones y no las del grupo, dado que su interés primordial viene dictado por su fuero más interno. Es el valor subjetivo que le da a su trabajo lo que la impulsa a continuar, aunque los demás estén en su contra. Cuando se propone una meta luchará por ella y será capaz de persistir a pesar de los obstáculos que pueden surgir. Este arquetipo se relaciona muy bien con las mujeres considerándolas amigas-hermanas. Estas relaciones suelen ser muy importantes en su vida, siendo relaciones que se mantienen en el tiempo, entregándose mutuo apoyo en los momentos de dificultad. Sin embargo, este arquetipo es poco tolerante con la dependencia y la debilidad, por esto respeta solo a las mujeres que se hacen respetar pues continuamente esta luchando por los derechos de otras mujeres, y aquellas que defienden el modelo patriarcal de sumisión y obediencia suelen ser duramente atacadas por mujeres que encarnan el arquetipo de la mujer salvaje. En el plano de la sexualidad la mujer salvaje explorará y disfrutará de ésta como un acto recreativo, siendo prescindible en sus relaciones profunda, pues no le da cabida a vivir la intimidad de esta forma. Esto hace que ella tenga total independencia de los afectos cuando esta con un compañero y la sexualidad puede ser vivida como un acto desprovisto de sentimientos profundos. También puede mantenerse al margen de la sexualidad pues esta no es el foco de su atención, ni de su desarrollo.

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Cuando la maternidad llega este arquetipo fomenta la autonomía y ayuda a desarrollar las potencialidades de sus hijos. Es muy activa y le encanta que sus hijos se desenvuelvan independientemente, pero si alguien trata de dañarlos puede transformarse en una feroz defensora. Dado que espera esa independencia puede ser muy dura si alguno de sus hijos demuestra dependencia y fragilidad, pues siempre esperará que ellos se valgan por sus propios medios. Para este arquetipo las relaciones de pareja se sustentan desde un lugar de amistad y compañerismo, siendo la pareja muchas veces el mejor amigo. Por esto la relación que se establece es de igualdad. Además este arquetipo buscará parejas que le entreguen algo que la enriquezca interiormente. Sin embargo por mucho cariño que exista en la pareja, no esta dispuesta a tranzar su libertad por nada ni por nadie. Para este arquetipo la construcción de familia es secundario en su vida, y su realización personal suele estar puesta en sus objetivos e ideales por los que se plantea luchar. Pero si surge será leal y establecerá relaciones de igualdad con cada integrante de la familia y fomentará el desarrollo de cada uno, su autonomía y libertad, de esta forma se buscara que cada uno tenga su propio espacio e intereses.

Arquetipo de la heroína

El arquetipo de la heroína lanza sus primeros destellos cuando la mujer se conecta con sus ideales y es capaz de luchar por ellos. Por eso este arquetipo suele estar muy relacionado con una actitud guerrera ante la vida, luchando por causas que considera justas y legítimas. Se puede relacionar este arquetipo con la etapa de la adolescencia, donde la joven esta encontrando su camino y empieza a darse cuenta de las injusticias de la vida y desea poder hacer algo para revertir la situación. Por eso puede surgir 26

el deseo de luchar por causas humanitarias, ecológicas, de protección a los niños, a los animales y a la naturaleza. En este arquetipo se descubren las motivaciones más profundas, las que nos movilizan, las que nos dan un sentido de lucha en la vida. He usado los términos lucha y guerrera, pues este arquetipo esta mucho más cerca de la emoción de la ira transformadora, que es una energía de acción y de cambios visibles. Una representante de este arquetipo es la diosa egipcia Sekhmet. Ella se caracteriza por poseer una fuerza extraordinaria, la cual usa sin compasión contra malhechores y transgresores. Esta diosa es representada con el cuerpo de una mujer y una cabeza de leona, es la diosa de la ira y de la paz a la vez. Su nombre significa “la poderosa”. (…) “Los faraones adoptaron a Sekhmet como símbolo propio del heroísmo invencible en la batalla. Al detentar ese papel, se la representaba como la diosa que expulsaba fuego contra los enemigos del faraón, expresando su cólera hacia todos aquellos que se rebelaran en su contra (Bolen, J. 2003: 145). Se cuenta en el mito que los dioses le entregaron a los hombres poderes que les permitieran prosperar, pero estos conspiraron contra los dioses para derrocarlos. Ra enterado de este plan llama a los otros dioses entre todos deciden que Sekhmet, “la fuerza contra la cual ninguna otra fuerza resiste”, bajaría a la tierra para poner fin al complot. La diosa tomando el aspecto más feroz, descuartizó a los rebeldes y bebió su sangre, embriagándola y volviéndola sedienta de más sangre. Ra al darse cuenta que no puede detenerla, pide a Setki que mezcle unas yerbas tranquilizantes con cerveza y ocre para darle el aspecto de sangre. Sekhmet embriagada de ira bebió hasta la última gota de esta bebida, la que logró apaciguarla. Cuando Sekhmet se reunió nuevamente con los dioses fue recibida por Ra como “la que viene en son de paz” (Bolen, J. 2003: 146).

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Este poder arrasador femenino expresado por Sekhmet, ha acompañado a la humanidad a través de múltiples imágenes míticas, en las cuales las mujeres salen de su papel tradicional de ser indefenso y necesitado del poder masculino para ser cuidado y protegido. Pero en este punto quiero hacer una distinción que tiene que ver con el motivo que hace que se despierte este potencial de lucha y agresión, pues suele aparecer cuando es convocado para proteger y defenderse, más que para conquistar o destruir por destruir. Tanto Sekhmet como otras guerreras surgen para cumplir funciones muy específicas, como en el caso de Juana de Arco. Siendo ella hija de campesinos, su vida tendría que haber consistido en casarse, tener hijos y preocuparse de su hogar y del campo, sin embargo escuchó un llamado que la incitaba a realizar una misión trascendente. Para Juana el llamado fue realizado por el Arcángel San Miguel, Santa Catalina y Santa Margarita, quienes le decían: "Tú debes salvar a la nación (Francia) y al rey". Finalmente ella logra colocarse al mando de las tropas del rey Carlos, obteniendo una seguidilla de victorias, siendo éstas, a su vez, las acusantes de su caída, pues hay mucha gente que la envidia y la empieza a considerar una amenaza, hasta que la traicionan abandonándola en el campo de batalla y dejando que sea capturada por sus enemigos los ingleses. Sus días terminaron entre torturas y con una muerte en la hoguera. Juana dio su sangre y su vida por los ideales en los cuales creía férreamente.7 La heroína antes de entregarse a su causa es una persona común, que vive una vida común y que en un momento dado debe dejar la comodidad por su llamado interior. Joseph Campbell (1997) llama a este proceso el ciclo mítico, en el 7

http://www.ewtn.com/spanish/Saints/Juana_de_arco5_11.htm

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cual el héroe o heroína turbado por la situación en que vive, es empujado por la tentación o las circunstancias a abandonar la familia y lo familiar, a iniciar una aventura en lo desconocido. Sekhmet es una diosa guerrera invocada para destruir a los conspiradores que atentaban contra los dioses, ella usa la ira y la furia como motores para lograr su cometido. Santa Juana de Arco encuentra esa fuerza en su fe y amor a Dios. Ambas arquetípicamente son representantes de esta energía guerrera, que va hacia un propósito y solo se despierta cuando ningún otro camino ha conseguido el resultado esperado. También existe otra expresión de esta fuerza combativa y orientada a un objetivo claro, en la cual la ira se enfría, transformándola en una fuerza calma y tenaz de modo de utilizarla para trazar planes lógicos y calculados que permitan alcanzar la meta propuesta. Esta otra forma de funcionar es representada por la diosa griega Atenea. Esta diosa guerrera presidía la estrategia de las batallas en tiempos de guerra. Además era considerada la diosa de la artesanía y la sabiduría práctica. Las aptitudes marciales y domésticas asociadas a Atenea abarcan la planificación y la ejecución, actividades que exigen una manera de pensar decidida. Estrategia, sentido práctico y resultados tangibles son características de su sabiduría peculiar. Atenea valora el pensamiento racional y defiende el dominio de la voluntad y del intelecto sobre el instinto y la naturaleza (Bolen, J. 1994: 111). A Atenea no le gusta la guerra, pero si tiene que entrar en una por defender un ideal que considera justo será una fiera combatiente.

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Existen dos versiones del nacimiento de Atenea. En uno Zeus tiene relaciones con su primera consorte Metis, una diosa del océano conocida por su sabiduría. Un oráculo había presagiado que Metis tendría dos hijos, el primero sería una niña igual a Zeus en valor y sabio consejo, el segundo un niño que llegaría a ser rey de los dioses, destronando a su padre. Ante esta perspectiva Zeus, engañó a Metis, pidiéndole que se hiciera pequeña para luego engullirla con la hija aún en el vientre. Un día Zeus empezó a sentir un fuerte dolor de cabeza, tan intenso que Hefesto, dios de la fragua, le golpeo con un hacha la cabeza, naciendo de esa incisión con un terrible grito de guerra Atenea, totalmente desarrollada con una coraza de oro y una lanza afilada en su mano. En la otra versión solo se reconoce a Zeus como padre y madre de Atenea, siendo su nacimiento igualmente espectacular (Bolen, J. 1994: 111). Otras representantes míticas de este arquetipo son las amazonas y las valkirias, ambas descritas como doncellas guerreras. Las amazonas pertenecen a la mitología griega, se las consideraba una

antigua

nación

legendaria

de

guerreras

o

un

país

contemporáneo poblado por mujeres en los confines del mundo. Las leyendas parecen tener una parte real basada en las mujeres guerreras de los escitas, pero los griegos antiguos nunca dejaron de asombrarse de tal inversión de roles. En un anticipado uso moderno, la palabra fue empleada a menudo para referirse a mujeres

fuertes

e

independientes,

en

contraste

con

los

estereotipos convencionales de mujeres débiles y pasivas.8 Por otro lado las valkirias, pertenecientes a la mitología nórdica, son deidades femeninas menores, que sirven a Odín, el dios supremo. Su nombre significa ‘electoras del asesinado’, pues su misión era elegir a los más heroicos de aquellos que habían muerto en la batalla y llevarlos al Valhalla donde se convertían en einherjers. 8

http://es.wikipedia.org/wiki/Amazona_(mitolog%C3%ADa)

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Así se proveía a Odín de guerreros que luchasen a su lado en la batalla del fin del mundo, el Ragnarok.9 La presencia de heroínas o doncellas guerreras continua muy presente en nuestro inconciente colectivo, siendo a mi juicio la princesa Leia, de la saga “La guerra de las galaxias”, una fiel representante de este arquetipo en la actualidad, pues lucha por un ideal justo y altruista. Además en ella se unen lo mítico con lo humano, cumpliendo con las características míticas descritas por Campbell (1997) para ser una heroína, pues desde su nacimiento ya esta marcada con una misión que cambiará el orden existente en el universo. También Leia muestra una actitud cercana, compasiva y firme, junto con una gran determinación y un pensamiento lógico y estratégico, que le permite organizar y dirigir las batallas.

Leia es descrita como: valiente, franca y admirada por los jóvenes de toda la galaxia, ella utilizó su status senatorial para ayudar a la rebelión. Aunque para alguien tan a la vista del público era extremadamente arriesgado, regularmente transportó abastecimientos, entregó fondos, reclutó miembros y participó en misiones clandestinas, mientras al mismo tiempo luchaba por las reformas bajo el techo del Senado. Líder carismático de la rebelión, Leia Organa es arrogante y resuelta. Su deber para con la Alianza pasa por delante de cualquier cosa. Siempre se controla, dejando raramente que sus emociones verdaderas salgan a la superficie. Como resultado de ello, parece fría y altiva, aunque los que la 9

Ibíd.

conocen saben la verdadera profundidad de sus sentimientos y pasiones. 31

En su juventud, la preparación de la Princesa en protocolo y gracias sociales fue suplementada con entrenamiento en armas. Aunque Organa, su padre adoptivo, consideraba doloroso enseñarle habilidades que su planeta había abjurado, a medida que crecía el poder de Palpatine, el futuro emperador, Organa previó el día en que serían necesarios líderes guerreros que defendiesen la justicia y su hija sería uno de ellos.10 Cuando la heroína encuentra un ideal, también encuentra la motivación para dar todo de si en el trabajo. Pondrá pasión en lo que hace manteniendo la cabeza fría para pensar lógica y estratégicamente. Solo que a veces en pos de un objetivo se puede acorazar a tal punto que se puede volver fría, calculadora y

10

http://www.fortunecity.com/lavendar/stroheim/347/sw_leia.html

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desconsiderada, pues no le interesará quienes resulten dañados mientras ella consiga lo que quiere. A la heroína le interesa relacionarse con mujeres que tenga ideales y estén motivadas por ellos, de hecho valida a aquellas mujeres que luchan por lo que creen. Sin embargo esto mismo hace que descalifique y sancione a las mujeres que no tienen metas claras, por esta razón puede tener más afinidad con hombres competitivos y ambiciosos. Dado que este arquetipo esta centrado en el logro de metas e ideales la sexualidad suele ocupar un plano secundario dándole cabida solo cuando se incorpora como una práctica saludable y reconfortante que se puede aprender a hacer bien y obtener beneficios de ella, si no esta ésta conciencia sobre la sexualidad puede prescindir de ella sin mayores conflictos internos. Como la heroína esta centrada en una meta buscará una pareja que comparta con ella ese fin, siendo una pareja apoyadora y potenciadota de su pareja, siempre alentándolo a ser y hacer más y a construir nuevos objetivos cuando los propuestos ya hayan sido alcanzados. Por esto la heroína se siente a gusto con hombres ambiciosos y que busquen poder. Ahora bien si su pareja por diversos motivos deja de luchar activamente en pos de su ideal, la heroína puede transformarse en una bruja que devaluará y descalificará a su compañero por el poco empuje que muestra. Si bien la maternidad no es una parte fundamental de su vida, si esta llega será una madre que inspire y anime a sus hijos a sobresalir, a luchar por sus ideales y a ser cada vez mejores, en este sentido puede ser una madre que aliente a sus hijos a desarrollar al máximo sus capacidades sobre todo aquellas que les pueden ayudar a ganar poder en el futuro. Este arquetipo si esta muy presente en una mujer puede terminar sobrevalorando la competencia, promoviéndola hasta límites que puede resultar poco sano para los hijos.

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Para la heroína la familia es un espacio donde se debe impulsar las capacidades de cada uno de sus miembros, por esto ayudará a que cada quien encuentre una misión y luche por esta. Solo que si alguno de los integrantes de la familia se demora en encontrar un objetivo o lo pierde puede ser muy poco tolerante con él, volviéndose rígida e intransigente. También puede ocurrir que ella sienta que es la única que tiene un objetivo claro por el cual trabajar, y empiece a dirigir la vida de los demás porque ellos no cuentan con un rumbo definido.

2.4.2 Adultez

Arquetipo de la amante

El arquetipo de la amante es probablemente el que ha pasado por los cambios más radicales en su valoración sociocultural, debido a su relación con el eros, es decir con la parte erótica, sensual y sexual de todo ser humano. Cuando entra el patriarcado en escena, la valoración por el goce sensual y sexual deja de ser sagrada, degradándolo a un acto impuro, asociado a las necesidades de la carne y que impiden el desarrollo espiritual íntegro. En la antigüedad en cambio la sexualidad era considerada un medio para entrar en contacto con la divinidad, esto recibía el nombre de prostitución sagrada, la cual no tenía ninguna connotación negativa ni pecaminosa, muy por el contrario era respetada y venerada. La prostitución sagrada es una práctica muy antigua de la que hay pocas trazas en el occidente, solamente en la ciudad griega de Corinto y las ciudades canaanítas de la costa levantina. Originalmente la prostitución sagrada se encuentra en Babilonia, 34

cercano el tercer milenio a.J.C. como una de las formas de culto a Ishtar, quien es la misma Inanna sumeria con atributos diferentes. En su forma de Ishtar, la diosa de la cultura sumeria se convierte en la diosa de la belleza y la sensualidad babilónica, a la que agradaban los actos de amor carnal y que para asegurar su veneración y culto se consagraban vírgenes al servicio del templo, dedicándolas a la prostitución sagrada, es decir a la prostitución selectiva y puntual, cuyo provento se dedicaba exclusivamente al servicio del templo. En el gran templo de Ishtar en Babilonia, en el E-ana, cercano al Gran Esagifa, moraban las sacerdotisas que se dedican al servicio de la diosa, es decir a efectuar actos de fornicación con los que pagan el precio del rito que era entregado en el templo 11. En el arquetipo de la amante la sexualidad es una parte fundamental de la vida y para vivirla plenamente es necesario conocerla y entrenarse en ella, esto no solo implica conocer artes amatorias, sino también conocer de música, arte, danza, canto y de todos los placeres sensuales, ya que la seducción engloba todos los sentidos. Con el patriarcado todo lo asociado a la seducción femenina fue repudiado y castigado, pues generaba deseo y con este los hombres se desviaban de la senda de la espiritualidad. A tal punto llego esta descalificación que se asoció el goce femenino con la prostitución, perdiendo esta última la connotación de sacro que ostento en un tiempo remoto. Deena Metzger (2001) concluye que “no es de extrañar que, desde el principio, los primeros patriarcas, los sacerdotes de Judea e Israel, los profetas de Jehová, todos ellos condenasen a las prostitutas sagradas y el culto a Asherah, Astarté, Anath y a las 11

http://www.kalathos.com/may2000/prostitucion.html

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demás diosas. Hasta la época de los sacerdotes, las mujeres eran una puerta a lo divino. Si los sacerdotes deseaban interponerse entre el pueblo y lo divino, tenían que apartar a las mujeres de aquella función. Así pues, no se trataba de que la sexualidad fuera considerada originalmente pecaminosa por sí misma, o de que la sexualidad de

las

mujeres

amenazase

la propiedad

la

descendencia; se trataba de que para obtener el poder, los sacerdotes tenían que reemplazar a las mujeres como camino hacia lo divino” (p.234). Una representación mitológica de este arquetipo es Ishtar, la diosa del panteón sumero-acádico que se equipara a la Astarté canaanea y a la Afrodita griega. El origen del nombre es incierto, existe la palabra acadia Ishtarati que significa diosas. La palabra “diosas” escrito ideográficamente en sumerio significa Inanna, que puede derivar de Nin-anna “Dama del Cielo”; escrito silábicamente en acadio deriva de la forma Esh-tar, que probablemente significó “Dama de las Batallas”. La Inanna/Ishtar babilonia tiene tres diferentes formas de reinado divino. El primero de ellos es el aspecto de divinidad de amor carnal, divinidad sensual, concernida especialmente con el sexo extramarital. Los otros dos son el aspecto marcial como Señora de las Batallas y el otro aspecto es el planetario-celeste asociada con Venus, la estrella de la tarde. En su aspecto de divinidad amorosa Inanna/Ishtar es la protectora de las prostitutas y de los amoríos extramaritales, que por cierto no tenían connotación especial en Babilonia, ya que el matrimonio era un contrato solemne que perpetuaba la familia como sostén del estado y como generadora de riquezas, pero en el que no se hablaba de amor o de fidelidad amorosa. Inanna/Ishtar no es una diosa del matrimonio, ni es una diosa madre. El matrimonio

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sagrado o la sacra hierogamia que se representaba todos los años en el templo babilónico no tiene un implicación moral ni es modelo de matrimonios terrestres, es un rito de fertilidad altamente estilizado con tonos litúrgicos. 12 Inanna e Ishtar como diosas del amor sexual y la fertilidad, ostentaban el título de hieródula del cielo. Hieródula es un término de origen griego que significa “tarea sagrada”, “sirviente de lo sagrado”. El término “ramera” o “prostituta” usado frecuentemente para describir a las sacerdotisas de Inanna e Ishtar, ya no expresa el carácter sacro original de su servicio a la diosa, aunque el significado original de la palabra “prostituta” fuera “sustituir a alguien”. Las sacerdotisas que prestaban servicios en los templos de Inanna e Ishtar, mediante sus uniones sexuales con los hombres que acudían a celebrar un ritual sagrado, se erigían en hilos conductores de la vida creadora de la diosa. (…) La función de Inanna e Ishtar como hieródula del cielo se remonta a la idea neolítica de que el modo de ser característico de la gran madre era la procreación. Ambas diosas son llamadas vírgenes, pero dicha virginidad no aludía a una condición física, sino a la continuidad del estado de capacidad creativa de la diosa, propiciado por la unión de si misma consigo misma, y a que la fertilidad en todos los aspectos de la creación era su celebración. En esta época las ideas metafísicas tomaban cuerpo en el acto sexual llevado a cabo de forma ritual dentro del propio recinto del templo, porque la fertilidad de la vida humana, animal y vegetal dependían del cumplimiento de este ritual en un lugar sagrado 12

http://www.kalathos.com/may2000/prostitucion.html

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donde hombres y mujeres participaban mágicamente en la generación de vida de la diosa. (…) El acto sexual y el parto eran dos canales a través de los cuales la energía divina de la diosa se derramaba en la vida. A través de la sexualidad se atraía la vida al mundo; era un acto sagrado. También era sagrado porque el éxtasis que la acompañaba era la experiencia más cercana al estado de goce asociado a la existencia divina de los dioses y las diosas. Por esta razón, el acto sexual en las primeras civilizaciones era un ritual de participación, un acto mágico de fertilidad. Era expresión de lo divino porque, al entregarse completamente al instinto sexual despertado por la diosa, hombres y mujeres se ofrecían como vehículos de su fuerza generativa. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 233-234) Afrodita, la diosa griega del amor y la belleza, también es una fiel representante de este arquetipo. Ella representa la consumación gozosa de la sexualidad. Afrodita como diosa no fue asociada con la fertilidad, si no que reinó sobre la pasión y el amor vivido en libertad. Esta diosa es dueña de su propia vida, y su libertad para tener dominio de si misma se deriva del lúcido conocimiento de que el amor es una esencia que reside en el corazón de uno y no tiene nada que ver ni con la permanencia ni con la estabilidad de la relación. (…) La magia de Afrodita representa el misterio de la transformación. La diosa es la esencia alquímica que une lo masculino y lo femenino, transformando estos polos en una unidad. (Dunn, 1998: 146-147)

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Existen dos versiones del nacimiento de Afrodita, según Homero, era hija de Zeus y Dione; Hesiodo en cambio, dice que proviene de la espuma que generó el semen de los genitales de Urano, lanzados al mar por su hijo Cronos, luego que se los cortara. Afrodita es por tanto anterior a Zeus (hijo de Cronos) y, como tal, no se somete al poder del gran dios, salvo que ella misma así lo desee. Es la única diosa a la que Zeus no puede ordenarle nada y, llegado el caso, incluso él mismo podrá verse afectado por los poderes extraordinarios de esta diosa del amor. Nació Afrodita con los mejores atributos de la belleza y sin ningún condicionante que limitara su libertad. Se caracteriza por ser presumida, orgullosa de sí y celosa de su belleza. Casada con Hefesto por orden de Zeus, amaba a Ares, el dios de la guerra con el que mantuvo relaciones amorosas. Sorprendidos en el lecho por Helio, éste le contó a Hefesto lo que había visto, el cual decidió vengarse y para esto preparó una red mágica que cerró una noche sobre los amantes, exponiéndolos a la pública vergüenza delante de los otros dioses. Afrodita huyó hacia Chipre y Ares hacia Tracia cuando, a instancias de Poseidón, se retiró la red.

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De Ares y Afrodita nacieron Deimo (Terror), Fobos (Temor) y Harmonía. Fue amante de mortales como Anquises y Adonis, el que murió al cabo de poco tiempo en manos de un jabalí, quizás por venganza de Ares. La diosa ejemplifica aspectos de la naturaleza femenina que se manifiestan en la materia como la belleza física, la conciencia femenina integrada en el cuerpo (como por ejemplo, la sabiduría instintiva) y la capacidad de interconectar con las más profundas emociones y con las relaciones (el principio de eros), todas ellas asociadas con la diosa. La diosa era considerada virgen, pues en latín “virgo” significa soltera, que no está casada, y no está constreñida ni limitada por las leyes del hombre. El atributo virginal de la diosa es el de no pertenecer a ningún hombre. No se la ve ni como contraparte ni como una versión femenina de ningún otro dios.13 El arquetipo de la amante va a buscar trabajos novedosos, innovadores e intensos, privilegiando aquellos que le resulten interesantes aunque esto signifique descartar los que tengan una mejor remuneración pero que sean rutinarios y monótonos. Le gusta estar en compañía de mujeres que gocen con todas las expresiones creativas, así como con otras que sean tan sensuales, espontáneas y apasionadas como ella o con otras que disfruten de su personalidad magnética y encantadora. Tal como Afrodita, la belleza juega un rol preponderante en su vida y por lo tanto encontrará agradable compartir con amigas secretos de belleza que las lleven a exaltar los atributos personales. Sin embargo esta misma coquetería puede generarle la animadversión de otras mujeres que ven en esta representante de la diosa del amor y la belleza una rival que hace peligrar sus relaciones de pareja. 13

http://www.nozal.com/pintura/dioses/afro1.htm

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La sexualidad es para el arquetipo de la amante un componente fundamental de la vida, entendiendo que esta ésta asociada a todos los goces sensuales, por esto el sexo es disfrutado plenamente y explorado en múltiples dimensiones. Como el sexo tienen tanta importancia en la vida de este arquetipo si esta área de la relación falla es muy probable que cambie a su compañero y busque uno con el cual si obtenga el placer que desea. El arquetipo de la amante ama el estado de enamoramiento, estado que buscará en caca relación que establezca. Cuando se enamora tratará al otro como si fuese un dios y se consagrará a él en cuerpo, mente y alma. Pero cuando ese estado de encantamiento comienza disminuir bien podría dejar a su pareja por otra, repitiendo este patrón muchas veces. La amante necesita entrar en relaciones apasionadas, intensas y creativas, por lo cual suelen estar colmadas de conflictos y pasiones desenfrenadas. La maternidad para este arquetipo es vivida de una forma entretenida y lúdica. Los hijos sienten que se les mira sin un ojo crítico ni juzgador, muy por el contrario suele sacar a la luz las mejores capacidades de los niños haciéndolos sentir inteligentes, hermosos y capaces, en definitiva haciéndolos sentir especiales, lo que contribuye a que el niño se sienta confiado y seguro de si mismo. El problema surge cuando esta atención tan especial que le es brindada al niño y hace que este brille es quitada, ya que ese es uno de los problemas de este arquetipo, pues al quitar esa atención el otro se siente perplejo e inseguro, preguntándose que pasó o que hizo para perder ese estado de gracia ante su madre, y en realidad solo pasó que ella probablemente haya puesto su atención en otro lugar. La familia para este arquetipo puede resultar un estorbo para su libertad y sus ansias de vivir la mayor cantidad de experiencias nuevas, sintiendo las rutinas del hogar como algo monótono que la agobia y aburre. Por otro lado si la familia

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llega en un momento de su vida tal que es capaz de integrarla como una experiencia más nueva y apasionante, la amante le aporta luz y encanto al hogar, haciendo que cada miembro se sienta único.

Arquetipo de la esposa

El arquetipo de la esposa se activa cuando las constantes seducciones y relaciones efímeras ya no satisfacen ni alegran a la mujer, ella entonces, buscará la compañía y compromiso de un consorte para las buenas y las malas, en la salud y la enfermedad, en definitiva para compartir la vida, con todo lo que eso conlleva. En este arquetipo surge la fragilidad y la vulnerabilidad en la mujer, pues su felicidad y complitud depende de otro, si hay o no un compañero y si este es leal o no. A diferencia de los otros arquetipos que hemos revisado hasta ahora, el de la esposa es dependiente de otro. Sus decisiones siempre van a estar subordinadas a la aprobación o no de su pareja. La esposa suele sentirse realizada con los éxitos de su compañero. Pero estas características del arquetipo no siempre fueron las mismas. En la antigüedad existían ritos que buscaban la unión de los opuestos, del cielo y la tierra, de la luz y la oscuridad, de lo femenino y lo masculino. Para que esta unión se llevara a cabo y así se pudiera mantener los equilibrios de la naturaleza, la gran diosa debía unirse al dios y así cumplir con el rito que permite que la vida siga existiendo. Cuando esto ocurría se llevaba a cabo el matrimonio sagrado, en el cual los consortes se transforman en uno, quedando en un mismo nivel, ninguno esta por sobre el otro, cada uno es parte fundamental del balance. Desde Sumer y Egipto hasta el comienzo de la era cristiana, el ritual del matrimonio sagrado entre la diosa madre virgen y su hijoamante, el dios, dio a la psique una imagen de totalidad y relación; 42

unificó las dos dimensiones del cielo y la tierra, del espíritu y la naturaleza, que el lenguaje separa. El ritual del templo se reflejaba en la ceremonia laica del matrimonio que era, y todavía es para algunos, una de las experiencias más importantes de la vida humana. La imagen de la unión humana estaba anclada en la unión simbólica de la tierra y el cielo, que se celebraba anualmente entre el rey y la suma sacerdotisa, que personificaba a la diosa, en el recinto del templo. Los ecos de esta ceremonia resuenan incluso ahora en la enorme excitación que provoca un matrimonio real. La psique parece necesitar una imagen sagrada de totalidad para preservar su equilibrio, que depende de que se mantenga una relación equitativa y dinámica entre los arquetipos masculinos y femeninos. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 538) Es cuando comienza el patriarcado que el dios masculino se transforma en el principio fundamental de la vida, sustituyendo el lugar que antes ocupaba la gran diosa como generadora de vida. Este cambio en la valoración hizo que el principio femenino quedara supeditado al masculino, perdiendo la calidad de iguales. Al quedar el principio femenino degradado y desvalorizado, la imagen de la esposa pasó de ser una igual con su esposo, a una figura secundaria que queda en la sombra mientras su esposo brilla, siendo sólo una propiedad de este. El mito que mejor muestra este cambio de paradigma es el de Hera y Zeus.

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El nombre de Hera significa “señora”, no es, como el de Zeus, indoeuropeo; y las imágenes de serpientes, leones y aves acuáticas que la acompañan le otorgan un linaje más antiguo. Heródoto pensaba que los griegos habían tomado a la diosa Hera de los indígenas pelasgos de la Grecia septentrional. Hera podría remontarse a la diosa serpiente del Neolítico que gobernaba sobre las aguas celestiales. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 361)

La importancia de Hera en el periodo más arcaico queda atestiguada por el gran número de edificaciones erigidas en su honor. “Los templos de Hera en los dos centros principales de su culto, Samos y la Argólida, fueron los primeros templos monumentales construidos por los griegos, en el siglo VIII a.de C”.14 Baring, A. y Cashford, J. (2005) mencionan que en Olimpia, el templo de Hera existía mucho antes que el templo se Zeus; “allí haciéndose eco de los sellos minoicos, el dios aparece de pie, como guerrero con barba y yelmo, junto a la diosa sentada en su trono”.(…)” Por otro lado, el epíteto que Homero da a Hera “bopiis”, que significa ojos de vaca, sugiere que era también una diosa de la tierra, cuya imagen siempre fue la vaca desde las épocas más antiguas, como en sumeria con Ninhursag y Egipto con Hathor”. (p.362) En el mito griego Hera es hija de Rea y Cronos, y fue tragada por su padre junto con sus hermanos a penas nació. Cuando fue liberada por Zeus ya era una

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hermosa doncella que atrajo las miradas de éste, que por entonces ya había vencido a Cronos y los titanes y se había convertido en el soberano de los dioses. Para estar más cerca de la doncella virgen, Zeus se transformó en un tembloroso y frágil pajarillo, del que Hera se compadeció. Para calentar a la criatura muerta de frío, Hera lo mantuvo junto a su pecho. Entonces, Zeus se despojó de su disfraz, volvió a tomar su apariencia de dios e intentó violarla. En algunos relatos se cuenta que él logró su cometido (Dunn, 1998: 153), mientras que en otros se dice que ella se resistió hasta que él prometió casarse con ella. Ambas versiones concuerdan que la luna de miel duró trescientos años. (Bolen, J. 2005: 190) Cuando acabó la luna miel Zeus volvió a sus andanzas y promiscuidad que había mostrado pre-matrimonialmente. Estas constantes infidelidades causaban los celos y la ira de Hera, dirigiendo su rabia y frustración hacia las otras mujeres y no hacia su marido, el cual pasa a ser quien determine la felicidad o infelicidad de ella. Hera probablemente fue una representación de la gran diosa y su matrimonio forzado, posiblemente nos habla simbólicamente de la resistencia que hubo entre la cultura que veneraba a la gran diosa y a la tierra como dadora de vida y la nueva cultura que se estaba imponiendo, donde lo masculino, patriarcal y por ende el dios es quien pasa a ocupar el lugar central destronando a la diosa. Homero es un buen representante de este cambio cultural pues se encarga de transformar a Hera la regia en una parodia cómica del modelo de esposa manipuladora y mezquina de la Iliada, que usa la mayor parte de su tiempo tramando venganzas contra las ninfas seducidas por su marido. Esta cualidad de dependencia emocional frente al cónyuge, es una característica determinante de la Hera del patriarcado. Ella se transformará en una bruja cada vez que se sienta defraudada o se aislará del mundo para curarse.

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Hera como diosa del matrimonio, fue reverenciada y vilipendiada, honrada y humillada. Ella más que ninguna otra diosa, posee atributos marcadamente positivos y negativos, conviviendo en ella la alegría y el dolor. Hera engendró con Zeus cuatro hijos, el impulsivo Ares, dios de la guerra, Hebe, diosa de la juventud, Eris, diosa de la discordia e Ilítia, diosa de los partos. Celosa de que Zeus alumbrase solo a Atenea, ella también procreo sola, el hijo de esta asombrosa fecundación, fue Hefestos, el maltrecho dios de la fragua. Cuando nació Hera quedó tan horrorizada que lo lanzó del Olimpo. Este se vengó de Hera por haberle rechazado haciendo un trono mágico para ella que, cuando se sentó, no le dejaba levantarse de él. Los demás dioses rogaron a Hefesto que volviese al Olimpo para liberarla pero éste se negó repetidamente. Dionisio le emborrachó y le llevó de vuelta al Olimpo a lomos de una mula. Hefesto liberó a Hera tras recibir a Afrodita por esposa. Otra alusión a su antiguo papel como gran diosa se nos presenta a través de su relación con el héroe Heracles, (…) su nombre significa “gloria a Hera”, y los doce trabajos que la diosa le impone simbolizan los doce meses durante los cuales el sol trabaja en su recorrido anual. Aunque en el relato Heracles emprende estas pruebas no por voluntad propia, sino a instancias de Hera. La imagen del sirviente o hijo-amante de la diosa que el nombre de Heracles implica, sugiere que el antiguo ritual en el que el sol se unía con la luna llena, posiblemente se oculta tras este relato. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 367) Esta imagen de la gran diosa con su hijo-amante que podría estar a la base del relato de Heracles, se transforma en una caricatura donde Hera es la celosa esposa de Zeus que hostiga a sus amantes y a los hijos que engendra con ellas. En el relato griego Hera hizo todo lo posible por deshacerse de Heracles. Cuando Alcmena estaba embarazada de Heracles, Hera intentó evitar que éste naciera.

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Sus planes fueron frustrados por Galantis, la sierva de Alcmena, quien dijo a Hera que ya había traído el niño al mundo. Hera al descubrir el engaño la transformó en una comadreja. Cuando Heracles era aún un infante, Hera envió dos serpientes para matarlo mientras dormía en su cuna. Heracles estranguló una serpiente con cada mano y su niñera le halló divirtiéndose con sus cuerpos flácidos como si fueran juguetes. Esta anécdota parte de una representación del héroe asiendo una serpiente en cada mano, justo como las familiares diosas minoicas habían hecho una vez. Un relato del origen de la Vía Láctea cuenta que Zeus había engañado a Hera para que amamantase al infante Heracles. Al descubrir quién era éste, lo retiró de su pecho, y un chorro de su leche formó la mancha que cruza el cielo. (…) Otra historia cuenta que cuando Hera descubrió que Leto estaba embarazada y que su marido, Zeus, era el padre, prohibió que Leto diera a luz en tierra firma, o el continente, o cualquier isla del mar. Leto encontró la isla flotante de Delos, que no era el continente ni una isla real, y dio a luz allí. Más tarde la isla fue santificada a Apolo. Alternativamente, Hera secuestró a Ilitía, la diosa de los partos, para evitar que Leto diese a luz. Los demás dioses obligaron a Hera a dejarla ir. De cualquier forma, primero nació Artemisa y ésta ayudó a nacer a Apolo. Otra versión afirma que Artemisa nació un día antes que Apolo, en la isla de Ortigia, y que ayudó a Leto a cruzar el mar hasta Delos el día siguiente para dar a luz a Apolo. Esta furia vengadora de Hera en los mitos griegos ni siquiera reconoce cuando la culpa es plenamente de Zeus, como en el mito de Calisto y Arcas. Calisto era una seguidora de Artemisa que hizo

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voto de permanecer casta. Pero Zeus se enamoró de ella y se disfrazó de Apolo para poder atraerla hasta sus brazos. Hera, la esposa de Zeus, convirtió entonces a Calisto en una osa como venganza. Más tarde, el hijo que Calisto tuvo con Zeus, Arcas, estuvo a punto de matarla cuando estaba de cacería, pero Zeus los subió a ambos al cielo como las constelaciones Osa Mayor y Osa Menor. Hera no estaba satisfecha con la situación de Calisto y Arcas en el cielo, por lo que pidió ayuda a Tetis, su niñera. Tetis, una diosa del mar, maldijo a estas constelaciones a orbitar para siempre alrededor del cielo sin bajar nunca del horizonte, lo que explicaría por qué son circumpolares.15 La dimensión de esposa esta presente en otras diosas como la diosa egipcia Isis, reina del cielo, la tierra y el inframundo. Ella es hija de Nut, la diosa del cielo y Geb, el dios de la tierra, y se casó con Osiris, su hermano-esposo. Cuenta el mito que Osiris se convirtió en el primer rey de Egipto y fue el creador de la civilización. Pero Set, su hermano, envidioso de su fama y virtud construyó un arcón del tamaño de su hermano y una noche en el palacio durante los festejos, hizo que trajeran el cofre bellamente tallado, y prometió dárselo a quien entrara perfectamente en el. Cuando Osiris se tendió, surgieron setenta y dos conspiradores que clavaron la tapa del arcón, lo sellaron con plomo fundido y lo arrojaron al Nilo. Isis vencida por la aflicción, se corto el pelo, se vistió con ropa de duelo y recorrido el Nilo buscando a su marido. Resulto que el cofre se detuvo en la costa de Biblos, donde un árbol ericáceo creció envolviéndolo. Tan hermoso y fragante era el árbol que el rey y la reina del lugar ordenarlo talarlo y convertirlo en una columna de su palacio. Isis al descubrir el lugar donde fue llevado el árbol se hace pasar por nodriza, siendo tomada al servicio de la 15

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reina. Isis cuida del hijo de la reina y quiere entregarle la inmortalidad, para lograrlo tiene que colocar al pequeño entre las llamas. Una noche su madre entra sin previo aviso y ve esta escena, se horroriza y grita, quitándole la posibilidad de la vida eterna a su hijo. Isis entonces se manifiesta como la diosa que es y pide que le entreguen el tronco usado como columna. Saca el arcón que contiene a su marido y lo lleva de vuelta a Egipto. Cuando abre el cofre se recuesta sobre su hermano-esposo y de esta unión ella queda encinta. Luego esconde el cofre, pero Seth lo encuentra y desmiembra el cuerpo en catorce pedazos. Isis los busca con la ayuda del hijo engendrado con Osiris, Horus; su hermana, esposa de Seth; Neftis y el hijo de ella con Osiris, Anubis. Cada pedazo hallado es sepultado con todo el ritual que se le debe a un dios, solo sus genitales no se encuentran. De esta forma Osiris encuentra la paz transformándose en el rey del inframundo, donde juzga las almas de los muertos, las que se pesan en uno de los platillos de un balanza; el otro lo ocupa la pluma de la verdad. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 268-271) Isis es una devota y fiel esposa, que a pesar de todos los peligros a los que se ve enfrentada sigue buscando y luchando por recobrar a su hermano-esposo. También Ishtar, la diosa babilonia de la fertilidad, baja al inframundo para rescatar a su hijo-amante Tamuz. El mito cuenta que un jabalí salvaje hiere mortalmente a Tamuz, Ishtar al descubrir esto desciende al inframundo para despertarlo del sueño que lo mantiene hechizado. Exige que se le permita entrar por las puertas del inframundo, entonces Ishtar atraviesa las siete puertas en su descenso, siendo despojada de sus vestidos, hasta que llega desnuda a presencia de la diosa del inframundo, durante los tres días de oscuridad, es como si la superficie del

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mundo hubiera caído bajo el poder de un hechizo. Se detiene la fertilidad; todo se sume en un profundo sueño, hasta que Ishtar y Tamuz vuelven al mundo. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 257) La danza de los siete velos es una alegoría del drama sagrado de la vida, muerte y resurrección del rey de la fertilidad, y del viaje que Ishtar emprende al inframundo para devolverle la vida a Tamuz. Los siete velos representaban las siete capas de las apariencias terrenales o ilusiones, que se desmoronan a medida que uno se aproxima al misterio de la inconmensurable (Dunn, 1998: 163). En este arquetipo, tan dependiente de lo que haga o deje de hacer su pareja, se puede observar los polos de creación y destrucción por los que una mujer atraviesa según como sienta que el otro responde a sus expectativas. Un ejemplo de esto es Medea, única descendiente de Eetes, rey legítimo de Corinto. (…) Ella envenenó al usurpador de su trono, para luego reclamarlo como propio y colocó a Jasón su esposo como rey. El reinado y el matrimonio fue feliz durante diez años, y tuvieron siete hijos y siete hijas. Al final de este tiempo Jason sospechó que Medea había asesinado a su antecesor y usando ese argumento pidió la separación, pues se había enamorado de Glauca, hija del rey Creonte de Tebas. Al principio Medea se resistió pero luego disimuló haber aceptado esta nueva situación y mando un regalo a la futura esposa de Jason, usando de emisarios a sus hijos. Cuando

Glauca

se

puso

la

túnica,

regalo

de

Medea

inmediatamente se incendió y nadie pudo evitarlo. Luego sacrificó a sus hijos matándolos con un cuchillo en un templo dedicado a Hera y huyó del lugar en un carro tirado por serpientes aladas. (Dunn, 1998: 124-126)

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En este mito el ser esposa lo es todo y cuando esto se le es arrebatado a Medea, ella es capaz incluso de sacrificar a su hijos y con eso el rol de madre, porque el rol de esposa esta por sobre cualquier otro rol. Ella pasa de ser una maravillosa y amantísima esposa a una fría asesina. Para la esposa lo más importante es la relación con su pareja. Si bien es capaz de desempeñarse bien en el mundo laboral, privilegiará aquellos trabajos que no interfieran en su vínculo y que le proporcionen tiempo para estar con su consorte o pareja. Si él necesita de más apoyo o si es traslado por el trabajo, la esposa lo seguirá y subordinará su trabajo al de él, pues su relación es más importante. En cuanto a la relación con otras mujeres, si el arquetipo de la esposa es el que prima en la mujer, ella tenderá a reunirse con otras mujeres que estén es su mismo estado civil, si esta casada se reunirá con otras mujeres casadas, generalmente las esposas de los amigos o compañeros de trabajo de su marido. Si esta soltera buscará alianzas estratégicas con otras mujeres solteras de modo de acompañarse en la búsqueda de novio. Las relaciones son más bien superficiales con las otras mujeres, pues el centro de su atención es su consorte, siendo capaz de cancelar compromisos previamente adquiridos con amigas por él. La sexualidad para la esposa es parte del contrato matrimonial. De hecho lo considera necesario y adecuado. Puede disfrutar del sexo siempre y cuando su compañero la estimule de modo que entre ambos descubran los placeres del sexo. Si esto no es así, la esposa puede permanecer largos periodos sin sexo, considerando que la relación puede desarrollarse plenamente sin necesitarlo. La pareja para la esposa es su centro y su eje, su vida gira en torno a su consorte y siempre estará atenta a sus necesidades. Su felicidad esta en poder de su pareja, ya que si este la conciente, la considera y la respeta, se siente infinitamente feliz, pero si su pareja le es infiel, no cumple con lo prometido o

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simplemente la descuida por su trabajo u otros intereses, la esposa se sentirá resentida y deprimida. En cuanto llegan los hijos, la esposa se encargará de promover la lealtad y admiración de los niños por su padre, incluso si este comete errores, ella lo justificará y defenderá por sobre los intereses y necesidades de sus propios hijos. Como su relación esta primero, si los hijos representan una amenaza a esta, buscará la forma de sacarlos del medio. También puede sentir que con la llegada de los hijos la estrecha y cómplice relación que había construido con su pareja se ve deteriorada y esto puede enojarla y deprimirla. El mantener a la familia unida es parte del rol de esposa y ella realizará todas las acciones necesarias para conseguir. Siempre estará del lado de su pareja y respaldará lo que él proponga, lo cual muchas veces deja desprotegidos a los hijos, pues no modera las diferencias entre ellos.

Arquetipo de la madre

El arquetipo de la madre nace de la experiencia real de la maternidad no solo de nuestra especie sino de la observación de la preñez de todas las especies. La madre es el origen, la vida, la muerte y la resurrección; representa míticamente el eterno retorno y fue venerada, respetada y temida. La imagen de la diosa madre atraviesa todas las culturas y es una de las más antiguas explicación mítica de la creación del universo y de la vida. La gran diosa-madre tuvo distintas representaciones simbólicas en las culturas, como la luna, la tierra, las aguas primigenias y el cielo. Fue hace aproximadamente 20.000 años que la imagen de la gran diosa-madre aparece sobre un amplio territorio, extendiéndose desde los Pirineos hasta el lago Baikal en Siberia. Se encontraron 52

estatuas de piedra, hueso y marfil, diminutas figuras de cuerpos largos y pechos caídos, redondeadas imágenes maternales cuyas formas abultadas anticipaban el nacimiento. (…) Nuestros antepasados del Paleolítico superior observaron que la gestación era similar a los ciclos lunares, de hecho sobre un refugio rocoso en Laussel, en la Dordoña se encontró una estatua femenina de 43 cm de altura. Los escultores del paleolítico la cincelaron en piedra caliza con utensilios de silex y colocaron en su mano derecha un cuerno de bisonte en forma de luna creciente, con muescas de los trece días de la fase creciente de la luna y de los trece meses del año lunar. Con su mano izquierda apunta hacia su vientre grávido. Su cabeza se inclina hacia la luna creciente, dibujando una curva que conecta la fase creciente de la luna con la fecundidad del útero humano, y que pasa por sus dedos, posados sobre su vientre, para ascender, a través del ángulo que forma su cabeza, hasta el cuerno creciente de su mano. De esta manera se reconocen las pautas de relación que vinculan el orden celeste el terrestre. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 24-25)

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La diosa de Laussel (bajorrelieve en roca, c. 22.000-18.000 a.C., 43 cm de altura. Dordoña, Francia)

Esta asociación de la gran diosa-madre con la luna también pertenece a otras culturas y tal como lo señala Joseph Campbell: Las fases de la luna eran las mismas para el hombre del Paleolítico que hoy para nosotros; también eran idénticos los procesos propios del útero. Podría ser, pues, que la observación inicial que condujo al nacimiento, en la mente del hombre, de la mitología de un misterio que informa de los asuntos terrenales y celestiales, fuese el reconocimiento de una armonía entre estos dos órdenes articulados a partir del factor del tiempo: el orden celeste de la luna creciente, el terrestre del útero. (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 25) El arquetipo de la diosa-madre se encuentra en múltiples culturas a lo largo del globo. Para la cultura maya la gran diosa madre esta especialmente relacionada con la luna, ella es Ixchel y abarca tanto núcleos terrestres como celestes. Es la patrona de la fecundidad, la procreación, el nacimiento de los niños, la medicina, la adivinación y el tejido. Muchas de sus representaciones en figurillas y esculturas es la de una mujer dando a luz. Era la consorte de Itzamná señor del cielo. Mientras su marido se muestra algunas veces como el dios sol, ella parece haber sido la diosa lunar. Era también la patrona de la preñez y la inventora del arte de tejer (Cervantes, S. 2002) En el panteón mesoamericano también se encuentra la diosa azteca Tlazoltéotl, que si bien no constituye la par de Ixchel como deidad en otra cultura, sí comparte con ella varios atributos y es considerada también una diosa que pertenece a la etapa madurativa de la mujer, ejerce acciones de madre protectora, vinculada también a la luna, cuida a las mujeres durante el parto y resguarda las 54

actividades de los médicos, sacerdotes y hechiceros. Al tener el atributo de “devoradora de inmundicias” tiene la propiedad arquetipal de destruir el pecado y transformarlo, reconstruye y permite el nuevo acceso a los dioses con una naturalidad que lleva a pensar que los hechos considerados como acciones negativas tenían un sentido de naturalidad si eran reconocidos y enfrentados, el aspecto moral se centraba más en una obra de purificación que en el del pecado mismo. (Cervantes, S. 2002) También encontramos entre la cultura preincaica a la Pachamama, siendo la veneración a ella probablemente la más antigua de las manifestaciones religiosas de la región andina de América del Sur. Corresponde a una concepción en que la tierra es considerada un ser vivo sagrado, fundamento de la existencia. Para esta tradición el dios del cielo Pachacamac, se entrega a la diosa de la tierra y perece en ella al fecundarla. De esta unión nacen los dioses del cielo, los gemelos llamados Wilka, varón y hembra16. Para los afrocubanos la divinidad creadora es Yemayá, (…) orisha mayor, madre de la vida y madre de algunos dioses. Dueña del mar y de la luna. Diosa de la maternidad universal y de las aguas salobres. Es la dueña de las aguas y al representar al mar como fuente fundamental de la vida se considera madre universal. No sólo es dueña de los mares, sino de todo lo que hay en ellos.17 Otra diosa que ha ocupado el lugar de diosa madre es Isis, en el antiguo Egipto. Ella es la reina de los dioses; la gran diosa madre; recuperadora y embalsamadora del cuerpo de Osiris, su hermano-esposo, protectora de Horus su hijo, hasta que éste pudo luchar por su patrimonio. Su morada en los cielos era la

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http://www.catamarcaguia.com.ar/Cultura/Pachamama.php http://www.conexioncubana.net/index.php?st=content&sk=view&id=3050&sitd=331

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estrella Sotis (Sirio) de la constelación de Orión (asociada a Osiris). Ella es Hija de Nut y Geb, esposa y hermana de Osiris y madre de Horus. Isis fue diosa de la maternidad y del nacimiento, protectora de las madres y de los niños y la familia en general; se le considera como la que instituyó el matrimonio; pero también era la perpetua viuda inconsolable; a pesar de ser diosa no puede ya relacionarse con Osiris, no puede entrar en el reino del más allá, lamentándose así de su eterna soledad. Isis es la diosa principal en todos los ritos relacionados con la muerte. Según el mito de Osiris fue Isis quien buscó y recuperó el cuerpo despedazado de Osiris, asesinado por su hermano Seth. Reconstruyó a Osiris ayudada por Anubis y Neftis e impregnada de su cuerpo concibió a Horus, quien más tarde vengaría la muerte de su padre. Por este motivo también fue llamada "La Gran Maga", por el milagro de la recomposición del cadáver de Osiris y por haber procreado con él. Además por medio de la magia creo la primera cobra, usado su veneno para obligar a Ra a revelarle su nombre secreto, nombre que le dio poder sobre él. Cuando finalmente Horus estuvo en edad para desafiar y vencer a Seth, Isis intercedió por la vida de su hermano suplicando clemencia. Horus se puso furioso contra ella y le cortó la cabeza; entonces Thot, por medio de sus palabras mágicas transformó su cabeza en la de una vaca y se la colocó. (…) Una de sus representaciones más frecuentes es la de madre dando pecho a Horus o al faraón representado como Horus, o con tocado de buitre y el disco solar entre los cuernos. Es imposible limitar sus atributos ya que posee los poderes de una diosa del agua, de la tierra, de la cosecha, de la estrella, como reina del más allá y como mujer. Llevó atributos de todas las divinidades

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femeninas, que eran otras tantas personificaciones de Isis; así a partir del Reino Nuevo aparece como Hathor, con los cuernos liriformes y el disco solar. Incluso fue identificada como la parte femenina del abismo acuoso primordial del que surgió la vida. Los primeros cristianos adoptaron gran parte del culto a Isis asimilándola a la Virgen María. Su función maternal, proteccionista y las imágenes de la Virgen María y el Niño están inspiradas en el culto a esta diosa.18 Para la religión cristiana la Virgen María, ocupa el lugar que antaño tenía la diosa madre. En ella se condensan todas las características de una diosa protectora, amante de su hijo y de toda la humanidad, compasiva y amorosa. Ella es la personificación de arquetipo de la madre es la idealización de la feminidad. Un ser de pureza absoluta que nunca cae en el pecado y aunque se muestre humana,

la

tradición

cristiana

decretó

su

ascensión

a

los

cielos

sobrehumanizándola, transformándola en una diosa. María simboliza a la madre abnegada que todo lo da por su hijo. Esta imagen ha influido poderosamente en la mente colectiva de buena parte de las mujeres

occidentales,

entendiendo

que

la

maternidad

es

entregarse

completamente a los demás, en especial a los hijos. Otro aspecto que comparte María con las otras diosas, es su fecundación extraordinaria, la cual suele tener un componente milagroso, dado que quien fecunda es la encarnación del principio masculino, es decir, un dios. Por ejemplo en el caso de Isis, es su unión con Osiris desmembrado, la que da origen a Horus. Este tipo de concepciones extraordinarias llevan al nacimiento de un héroe, el cual esta destinado a crear una nueva alianza, un nuevo orden que permitirá la renovación y el desarrollo del clan, tribu o civilización al cual pertenece. 18

http://www.egiptologia.org/mitologia/panteon/isis.htm

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En la religión cristiana se instauró como dogma la virginidad de María, es decir se considera un hecho real y concreto, de hecho la virgen María es triplemente virgen, pues fue concebida sin pecado origina, concibió sin sexualidad y se mantuvo virgen luego del nacimiento de Cristo. Ella esta libre de toda mácula de la fecundación por medio del sexo. Este dogma ha conducido a la idea que virgen significa virgo intacto, es decir himen intacto, por lo que María fue madre sin sexo, pero en un sentido concreto y no alegórico. Esto ha llevado que la maternidad por medio del sexo se suela asociar a un acto impuro, que genera dificultades a la hora de vivirse los otros aspectos del arquetipo femenino en la mujer moderna y occidental. La profundización de la fe en la maternidad virginal ha llevado a la Iglesia a confesar la virginidad real y perpetua de María incluso en el parto del Hijo de Dios hecho hombre. En efecto, el nacimiento de Cristo "lejos de disminuir consagró la integridad virginal" de su madre. La liturgia de la Iglesia celebra a María como la 'Aeiparthenos', la 'siempre-virgen'.(499 - catecismo de la Iglesia Católica). La imagen de María, la madre-virgen, representa una renuncia a la sexualidad, exaltando la maternidad al punto que las otras dimensiones del ser mujer históricamente fueron descalificadas y devaluadas. Para Manuela Dunn (1998) “el parto de la virgen fue un ideal imposible al que debían aspirar las fieles de la religión; la meta espiritual de las mujeres era convertirse, como María, en pura e inmaculada, y la maternidad se convirtió en una carga piadosa de la que la mujer no podía, por ningún motivo, distraerse mediante deseos sexuales”.(p.219). En tanto para Badinter (1991) “(…) la inimitabilidad de la Virgen María deja a todas las mujeres [occidentales] identificadas con Eva, la pecadora, de modo que el ideal tiene en última instancia una función punitiva, puesto que, obviamente, ninguna mujer podrá alcanzarlo”.(p.195)

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En la tradición judaica, tradición de la cual sale la simbología de la Virgen, la referencia directa, la figura mitológica que le antecede es Eva, la primera mujer creada directamente por Dios Padre. Eva es un puente entre Dios Padre y la humanidad; pero un puente roto. Madre de todos los hombres, Eva fue seducida por la serpiente, y su pecado provocó que Dios expulsara al hombre del paraíso y creo la necesidad de la redención.(…) Así, el mito judaico de la caída da origen a la historia de la salvación cristiana. Según esta tradición, la Virgen es la nueva Eva, la mujer prometida que dará a luz al Salvador Cristo, que encarna la redención del pecado original de Eva y Adán y es símbolo de la salvación consumada. Como Eva, la Virgen es un puente, pero un puente íntegro que reconstruye el vínculo que une a la humanidad con Dios; la concepción de Cristo es el símbolo de esa unión que al realizarse de nuevo produce al hombre perfecto; en la redención del pecado y la reconciliación entre lo divino y humano, su integración mística, la perfección que el verbo (el espíritu, el pensamiento) alcanza haciéndose carne y acto. La Virgen María remedia así el daño causado por la primera y conquista al mal, simbolizado por la serpiente vencida bajo sus pies.19 De lo anterior se deduce que la mujer debe optar entre la posición de Eva o la de María, es decir, entre la mujer que daña, desobedece y quiebra la unión entre Dios y el hombre, pero que se permite ser llevada por sus impulsos. O María que representa la reparación del puente en base a la obediencia, sumisión, la castración de la sexualidad y la glorificación de la maternidad.

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http://www.nodo50.org/mujeresred/victoria_sendon-mujer_y_sagrado.html

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Por otro lado para los griegos la madre primero tomó la forma de la madre tierra personificada en Gea, la cual engendra a Urano dios del cielo y con él engendra a los titanes, los que encarnan las fuerzas de la naturaleza. Esta idea griega ya es bastante antigua, de hecho en Babilonia se encuentra Tiamat, que es el abismo original, la diosa madre del caos del cual nace Marduk, dios solar, que mata a su madre la parte en dos y con una parte crea la cubierta del cielo y con la otra el suelo, y en el medio crea al hombre. También en el antiguo Egipto, el cielo y la tierra son las deidades primigenias, siendo en este caso Nut, la diosa del cielo y Geb, el dios de la tierra. Para el arcaico pueblo egipcio “Nut fue representada como una mujer con el cuerpo arqueado sobre la tierra (Geb). En ella circulan las barcas que contienen la personificación de los astros y se consideraba que ella engullía al sol cada tarde y da a luz su forma renovada cada mañana”.20 Rea, hija de Gea y Urano, fue otra de las formas que asumió la madre. Ella es la madre de los dioses olímpicos. Es por sobre todo madre, y cuando su esposo Cronos, engulle a sus hijos para evitar la profecía que dice que uno de sus hijos lo destronará, ella maquina un plan para que este sea destronado y sus hijos logren la libertad. Protege y cuida que Zeus, su último hijo no sea engullido por el padre. Luego lo deja al cuidado de las ninfas del mar y cuando ya esta en edad para enfrentar a su padre, urden un plan que termina con el derrocamiento de Cronos y con el reinado de Zeus en el Olimpo. Rea logra su cometido que es por sobre todo liberar a sus hijos del yugo de su padre. Finalmente Démeter, es la heredera de la tradición de todas las anteriores diosas madres mencionadas. Ella es hermana de Zeus, y con él engendra a Perséfone, la cual pasa a ser su vida, su hija bienamada y protegida. El mito que fue contado en el arquetipo de la doncella, muestra a una madre nutricia y totalmente dedicada a su hija, que al perderla sufre de tal manera que toda la tierra se seca y los frutos mueren. Ella solo existe en su rol de madre y cuando este desaparece puede aparecer la depresión, surgir en ella un sin sentido y un 20

http://www.omardamar.com.ar/diosas.htm

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profundo vacío. También puede transformarse en una madre devoradora y tal como se señaló en el arquetipo de la doncella, la hija para liberarse de su dominancia la desobedece solapadamente. El arquetipo de la madre predispone para buscar trabajos que estén orientados a ayudar, cuidar y proteger de otros. Incluso si ocupa cargos o lugares que son de liderazgo, eminentemente distantes o solitarios este arquetipo encontrará la forma de expresar su solidaridad y cuidado por los demás. Pero si tiene que elegir entre su rol maternal y su desarrollo profesional, no tendrá dudas en priorizar por su familia y sus hijos. Si esto es llevado al extremo ella será una madre nutricia pero sin límites, dará todo por sus hijos descuidándose a si misma., siendo incapaz de retomar su carrera incluso cuando los hijos ya son capaces de valerse por si mismos. La relación que establece con otras mujeres suele ser maternal y de cuidado. Establece relaciones profundas y cariñosas con otras mujeres. Tienden a pedir apoyo emocional y a confiar más en la opinión de otras mujeres en especial si son madres, antes que en la de sus maridos. La sexualidad para este arquetipo puede ser vivida como algo placentero, cariñoso y tierno, transformándola en un acto de cuidado, intimidad y amor. Por este motivo la sexualidad va a tender a ser más bien tierna y si llegara a faltar solo sería necesaria reemplazarla por otros espacios de ternura y caricias. También existe la posibilidad que la sexualidad sea vista como un acto orientado a la procreación, por lo tanto algo imprescindible e inevitable si se quiere ser madre. Si esta es la postura la mujer puede estar identificada con la imagen de María, y puede considerar el sexo como algo pecaminoso y sucio, impidiéndole cualquier posibilidad de goce en ese plano. En cuanto a la pareja, este arquetipo buscará un compañero que comparta el deseo de tener hijos y de formar una familia. Es muy importante para una mujer

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con este arquetipo activado sentirse protegida y apoyada por su pareja. También cabe la posibilidad que tenga hijos sin un padre presente y en ese caso ella luchará incansablemente por sus hijos y por darles todo lo que ellos necesiten para su sano desarrollo. Uno de los riesgos de estar poseído por este arquetipo es que el ser madre devora todas las otras áreas del ser mujer y entonces se termina siendo madre de todos los que la rodean, incluyendo la pareja. Para el arquetipo de la madre lo más importante de su vida son sus hijos y por ellos pueden darlo todo. Sin embargo suelen ser ciegas a los efectos que su abnegación y total entrega tienen sobre sus hijos. Pues en su aspecto más saludable este arquetipo nutre y satisface las necesidades de los hijos, ayudándolos a crecer como mujeres y hombres sanos, felices y seguros. Pero en su aspecto sobreprotector, pueden ser mujeres que impidan que sus hijos se valgan por si mismos, al mimarlos en demasía y con esto, sin quererlo, promoviendo el desarrollo de seres inseguros e incapaces de confiar en sus propias capacidades. Si algún hijo ya de adulto le señala esto a su madre es muy posible que ella se sienta agredida pues todo lo que hizo fue con y por amor. A menos que otros arquetipos se activen es muy posible que la madre viva a través de la vida de sus hijos y por tal motivo se sentirá traicionada si este hijo bienamado quiere independizarse, victimizándose y usando la culpa para manipular. También la familia para este arquetipo suele ser muy importante pues es el núcleo que recibe a los hijos. La madre será protectora y generosa con su familia, velando por que cada integrante de ella se sienta cómodo y querido. Sólo que esto puede desembocar en una falta de límites, donde la familia se transforme en un saco sin fondo de permanentes requerimientos, que terminan transformándose en una prisión para la mujer que es absorbida completamente por las exigencias de su familia, posponiéndose permanentemente y sintiendo mucha culpa si ella no cumple con dichas las peticiones.

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4.2.3 Vejez Arquetipo de la abuela Este arquetipo se corresponde con el momento de la menopausia en una mujer. Cuando esta etapa del ciclo natural de una mujer se activa, ella esta lista para iniciarse en los misterios de su mundo subterráneo, estableciendo un vínculo profundo consigo misma. Cuando ya la crianza se ha completado, se han logrado metas importantes en la vida y buena parte de las preocupaciones de subsistencia están cubiertas, la mujer puede concentrase en si misma, mirarse y revisarse por primera vez con la mirada de los años pasados y preguntarse qué quiere para si misma. En esta etapa muchas veces vienen los nietos, que son una enorme alegría, permitiéndole disfrutar de una maternidad sin responsabilidades, ella puede darse el gusto de regalonearlos sin el peso de tener que educarlos. Por eso en esta etapa muchas abuelas se permiten jugar y mimar a sus nietos como no lo hicieron con sus propios hijos. Esto abre un espacio para la reconciliación entre los abuelos y sus hijos, si es que han quedado resentimientos de infancia. Es el tiempo en que los hijos al transformarse en padres pueden comprender mejor a sus propios padres y los abuelos tienen la posibilidad de desplegar todos los juegos que no se permitieron con sus nietos. La abuela es la puerta de entrada al tercer ciclo de la mujer que esta asociado a la vejez y la sabiduría, aunque uno no implique al otro. De hecho la sabiduría es un camino que requiere conciencia y una revisión profunda de los anhelos, sueños, deseos, de lo que hemos hecho con nuestras vidas y también es adentrase en la propia sombra y mirar aquellos aspectos de nuestra identidad que posiblemente se han ocultado a los otros y, a veces, especialmente a nosotras mismas.

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Stein (1983, citado en Strahan, 2001) explica que este periodo de mitad de la vida es una espacio de transitoriedad que lleva a la mujer a cuestionarse sobre su vida. Este es un espacio liminal o de transición que se halla entre dos periodos definidos. En él coexiste la muerte de lo que ha sido y la preparación de lo que será. (…)A mitad de la vida, mediante la experiencia de la liminalidad, el alma se libera del auto engaño y despierta a un nivel que permanece más allá de la derrota y de la muerte del ego. Es un tiempo para volver a lo reprimido. (…) La menopausia invita a que aparezcan nuestros fantasmas más inoportunos; exige una confrontación más esencial con nuestra sombra. Es un periodo para reconciliarse con ella. Es una zona neutral en la que una mujer puede reconocer la distancia entre sus ideales y la realidad. Puede reconocer lo que es incompleto en ella, lo que le da miedo y lo que esta herido. Es un periodo para enjugar las lágrimas todavía no vertidas; las lágrimas por lo que fue, por lo que podría haber sido, y por lo que ya nunca será.(pp.254-255) Ella descubre, cuando es capaz de traspasar la amenazadora vivencia de mirarse a si misma, que tiene un riquísimo mundo interior y puede empezar a disfrutarlo. Por esto para los demás ella puede parecer distante o indiferente, pero solo es la expresión de una profunda conexión con su experiencia subjetiva interna, desarrollándose en ella una aguda intuición sobre los procesos íntimos de si misma y de aquellos que la rodean. En el arquetipo de la abuela surge la necesidad de centrarse en el mundo subjetivo, en sentir intuitivamente lo que pasa tanto en su interior como en

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aquellos que ella ama. Es en su mundo interior donde encuentra la riqueza y el sentido de su ser. Una buena representante de este arquetipo es Hestia la diosa griega del fuego del hogar y del templo. Para Jean Shinoda Bolen (2005):

La manera de percibir de Hestia se produce mirando hacia dentro y sintiendo de manera intuitiva qué es lo que pasa. Este método permite entrar en contacto con nuestros valores poniendo bajo el foco lo que tiene significado desde el punto de vista personal. Mediante este foco interno se puede percibir la esencia de la situación. También permite obtener una comprensión interna del carácter de las demás personas y ver la pauta o sentir el significado de sus acciones. Esta perspectiva interna proporciona claridad en medio de la multitud de detalles a los que se enfrentan nuestros cinco sentidos.(pp.154)

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Privilegiará la soledad y la independencia, manteniendo férreos límites que impidan que otros lleguen a irrumpir en su espacio tanto físico como íntimo. Esto puede conllevar un potencial peligro que es el aislamiento. Para Manuela Dunn (1998): Uno de los principales temas (…) es su soledad, a la que concede un gran valor. Es realmente distinta en su modo de enfocar la vida, ya que puede refugiarse y revitalizarse en los momentos de sosiego. Su sabiduría parte también de su capacidad de ponderar los acontecimientos y comprender su significado profundo. Sin embargo, podría estar tan centrada en su vida interior que olvidara su ser mundano, dañando su propia psique (p.237). Por esto si la abuela es capaz de descubrir su mundo interior, encontrarse con su sombra tanto tiempo velada, disfrutar de lo hallado y salir del ostracismo y aislamiento en el que se puede encerrar, ella obtendrá las llaves del reino interior y exterior, y aprenderá a deleitarse de ambos reinos. En cuento al trabajo el arquetipo de la abuela preferirá trabajos que exigen calma y paciencia, cualidades que en ella son innatos. Mantendrá relaciones cordiales y fáciles con quienes la rodeen, sin embargo también esta la posibilidad de que al ser pasiva e inalterable su trabajo e incluso su presencia pasen desapercibida para los demás. Este arquetipo establece relaciones cálidas y cercanas con las mujeres que la rodean y suele escuchar comprensivamente a sus amigas, manteniendo una actitud ecuánime. Tiene pocas amigas, con las que ha cultivado una amistad profunda, compartiendo momentos de intimidad. Dado que ella disfruta profundamente de la soledad un potencial riesgo es que se aísle cada vez más, incluso dejando fuera de su mundo a sus más íntimas amigas.

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El arquetipo de la abuela creará un ambiente cálido y acogedor en el hogar, esperando que su compañero se encuentre a gusto en él, buscando que él sienta que el hogar es un remanso de paz y un verdadero refugio del mundo exterior. Por otro lado si este arquetipo esta muy centrada en si misma, puede sentir a su pareja como un invasor que irrumpe en su mundo despojándola de la tranquilidad alcanzada. La sexualidad puede ser vivida como una experiencia agradable y cálida, que disfruta sobretodo por la sensación de intimidad y acercamiento con su pareja. Sin embargo también puede prescindir del sexo y sentir incluso que este no tiene mucha cabida en su vida. Los hijos para este arquetipo son atendidos y cuidados con amor y ternura. Ella los deja ser y puede darles pocas pautas para vivir sus vidas. Espera que ellos se desarrollen dentro de un clima amable y grato. Como este arquetipo desarrolla profundamente la capacidad de introspección y se complace con su retiro hacia su mundo interior, deja a sus hijos a su libre albedrío, sintiendo estos que su madre se encuentra muy distante de ellos, aunque les siga prodigando atenciones. La familia para la abuela es un espacio acogedor y tranquilo, un refugio sagrado donde cada miembro de ésta encuentra protección y amor. Si esto se exagera lo que el arquetipo hace es construir una fortaleza alrededor de su familia donde el mundo exterior no tiene cabida, aislándolos a todos. Arquetipo de la sanadora El arquetipo de la sanadora esta íntimamente relacionado con la experiencia de las pérdidas y los dolores más profundos. En este periodo es posible que la mujer enviudezca o comience a perder a amigas y amigos que la han acompañado a lo largo de su vida. Por esto este arquetipo puede estar

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asociado a fuertes emociones, provocadas especialmente por la toma de conciencia que el tiempo se va acabando y que es ahora cuando debe decidir cómo quiere vivir lo que le queda de vida. Esta conciencia de finitud hace que la mujer cambie su actitud ante la vida, y esta puede tomar un curso evolutivo o involutivo. Cuando el camino que toma es involutivo la mujer se puede volver amarga, lamentándose por lo que no fue y que podría haber sido, culpando a los que la rodean y a la vida de sus desdichas, y quedando estancada en viejos rencores y mezquindades. Se encierra en si misma envenenando a todos aquellos que se acerquen con sus emociones y buscará la amera de hacer sentir culpables a los que se sienten feliz viviendo. Si el curso que toma su vida es evolutivo, la mujer podrá conectarse con los dolores de las pérdidas, tanto de personas como de decisiones no tomadas y despedirse de ellas. Probablemente lo más difícil de esta etapa es ser capaz de entrar y sostener el dolor de mirar hacia atrás, permitirse morir como la que fue, para luego dejar que nazca la que es y será. Si ella logra atravesar este desierto de infortunios y penas profundas, lo primero que se percibirá es que es capaz de reír, con una risa sincera, espontánea e inocente, esta es la risa curativa, es alegría pura y los que la rodean sentirán esta energía liviana, cálida y gozosa que ella despliega. Tanto los griegos como los japoneses le entregaron un espacio a la risa transformándola en divinidades que ayudaron a restablecer el orden perdido. Baubo es un personaje menor entrado en años que aparece en el mito de Démeter y Perséfone. Cuando Démeter al perder a su hija se va errar por el mundo llega a Eleusis, donde es acogida por los reyes como niñera. Al entrar al cuarto donde se encuentra la reina Metanira con su hijo en brazos, viejas evocaciones se apoderan de ella,

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(…) Démeter se quedó callada y cabizbaja, y solo se sentó en una silla ordinaria que la criada Baubo le trajo más tarde. Démeter, sin embargo, siguió guardando un doloroso silencio del cual nadie podía arrancarla, hasta que Baubo consiguió animarla con sus chistes picantes. Sus bromas le hicieron sonreír, y cuando la doncella se levantó la falda y mostró sus partes. Démeter rió y se curó. Entonces aceptó un simple refresco de cebada y menta y accedió a ser la niñera del bebé. (Bolen, Jean Shinoda. 2003:168) En tanto en Japón es Uzume la que encarna la risa curativa. (…) Y sucedió que cierto día quiso el Sol crear un pueblo que fuera superior a todos los demás, para que habitara aquellas hermosas islas japonesas, y tomando un haz de sus propios rayos, formó una encantadora mujer, a la que llamó Amaterasu, que quiere decir diosa de la luz. Cuando la hubo creado, le dio el poder de ser diosa y madre del nuevo pueblo. Para que no se encontrara sola, bajó con ella del cielo un brillante cortejo de dioses, de los que únicamente se recuerdan los nombres de Ame-No-Uzume, diosa de la Alegría, y Ame-No-Moto, o Susanoo, dios de la Fuerza. Fue pasando el tiempo; en aquellas islas todo era alegría y bienestar, y un gran pueblo las iba llenando poco a poco. Servían con gran fidelidad a la divina Amaterasu, y cuando llegaba la mañana de cada día adoraban con humildad al Sol naciente. Pero aquella felicidad incomparable iba a ser turbada por el carácter violento y rebelde de Ono-Mikoto, uno de los príncipes de la corte de Amaterasu, y también de origen divino. Para enojar a la diosa, decidió matar cierto cervatillo por el que Amaterasu sentía gran cariño. Cuando lo hubo hecho, entró en el salón donde 69

estaba la Reina y lo arrojó contra el bastidor en el que la diosa bordaba; con tanta fuerza, que rompió su labor y fue a caer sobre sus pies. Amaterasu se quedó asombrada; un profundo dolor embargó su ánimo y por vez primera lágrimas amargas asomaron a sus negros ojos y bañaron sus mejillas de rosa. Tanta pena le produjo, que pensó huir del palacio y ocultarse de la vista de los mortales, puesto que al conocer el dolor el mundo y la vida misma le parecían despreciables. Y así lo hizo. Una noche, cuando todos dormían en su palacio, se fue hacia el monte. Sola, como una sombra más entre las infinitas de la noche, anduvo largo tiempo, hasta que llegó a una profunda gruta. Entró en ella, y para que nadie fuera a buscarla, tapó su entrada con una enorme roca. Así transcurrió mucho tiempo. Aquellas islas, al no estar iluminadas por la luz de Amaterasu, quedaron sumidas en negras tinieblas. También desapareció la luz de las almas de sus habitantes; todos estaban tristes y no sabían qué hacer. Entonces los dioses decidieron traer junto a ellos a la diosa. Para esta empresa tenían que valerse de todo su ingenio, porque ya sabían que su Reina era firme en todas las decisiones que tomaba. Así, pues, organizaron un brillante cortejo; los mejores músicos, creadores de las más dulces melodías, formaban parte de él. Anduvieron largo rato por el bosque, hasta que por fin llegaron ante la gruta donde se encontraba Amaterasu. Una vez allí, formaron todos un gran círculo. Los músicos empezaron a tocar. Los trinos de los pájaros se fundían con las canciones; parecía que el bosque estuviera encantado. Apenas había empezado a oírse la música, uno de los dioses dijo a la diosa Ame-No-Uzume que saliera a bailar, y así lo hizo. Más hermosa

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que nunca, vestida con deslumbradoras túnicas, comenzó a danzar al son de la música. Sus manos dibujaban en el aire extrañas figuras y su cuerpo se movía con mágico encanto. Los dioses y todos los que integraban el cortejo, admirados de tanta belleza, no cesaban de alabar la hermosura de Ame-No-Uzume y su maestría en la danza. Entonces Amaterasu, extrañada de oír aquella música, sin saber de dónde venía y, sobre todo, los elogios tributados a la bella danzarina, sintió deseos de ver a qué era debido todo aquello. Poco a poco, fue acercándose a la entrada de la gruta, y para contemplar mejor lo que sucedía ante ella, corrió un poco la pesada roca que tapaba la entrada de su retiro. En aquel instante, uno de los dioses que esperaba ante la gruta tal momento, se cogió con fuerza a la roca y la retiró a un lado, dejando libre la entrada. Amaterasu se quedó maravillada ante el espectáculo que tenía ante sus ojos. Algo, sin embargo, le molestaba. No podía sufrir que los dioses admiraran tanto la belleza de Ame-No-Uzume. Y éstos, para que no se disgustara y accediese a marchar con ellos, le dieron un espejo para que pudiera contemplarse y comprobar por sí misma que era la más hermosa de todas las mujeres. Una vez tranquilizada, Amaterasu tuvo a bien acceder a la súplica de todos sus súbditos y volvió a reinar sobre ellos.21 Ser capaces de reírse de las desventuras y de si mismas es probablemente el acto más sano que se puede realizar cuando las penas nos abruman. Cuando es posible que esta risa clara y franca surja, aun quedan esperanzas para nuestro corazón.

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http://www.class.udg.mx/~adag/leyendas/dos.html

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La sanadora surge del dolor. Es una mujer que su intensa conexión con las propias aflicciones la ha llevado a comprender las angustias y sufrimientos de los demás, transformándola en un faro de luz en la oscuridad de los sinsabores de la vida. Lo que la caracteriza por sobre todas las otras cualidades es la compasión. Jean Shinoda Bolen (2003) la define como “un amor no posesivo que no precisa la reciprocidad ni el racionamiento: cuanto más demos, más tendremos. La mujer madura y sabia ha aprendido cuál es la diferencia entre la codependencia y la compasión y, por lo general, lo ha conseguido a partir de su propia experiencia en ambos campos” (p.194). La sanación de este arquetipo emana de la capacidad de ponerse en el lugar el otro, acogerlo sin juicios y conmoverse con su sufrimiento. La sanadora siente dentro de si el dolor del otro y lo transmuta invitándolo a descubrir en si la curación para sus heridas. Su mirada es tierna y bondadosa, devolviéndoles a quienes la rodean la capacidad de amar al prójimo como a si mismos, reconciliándolos con la vida misma. La sanadora nos devuelve la gratitud y el disfrutar de lo pequeño, nos hace redescubrir lo trascendente de compartir una taza de té con otro ser humano. Ella nos ayuda a sentirnos parte del universo vivo y que cada acción que realizamos es una acto sagrado. Los chinos representaron a la compasión como una bodhisattva llamada Kuan Yin. “Las cualidades asociadas a ella son la bondad, la ternura, la sensibilidad, la empatía y la amabilidad” (Bolen, J. 2003: 182). Kuan Yin “la que oye el llanto del mundo”, es la más amada de las deidades chinas por su misericordia, cercanía y compasión con todos aquellos que la invoquen.

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Cuando el Budismo llego a China, el Bodhisattva Avalokithesvara pasó a identificarse con Kuan Yin. Pero esencialmente, la Diosa, es preexistente al Budismo y este lo que hizo fue "sincretizarla" como una entidad de eminente contenido Budista. Su origen se remontaría muchos siglos atrás, vinculándose luego al Budismo, al Taoísmo y el Shintoismo. (…) Kuan Yin es una bodisatva, es decir, un ser que ha trascendido la existencia fenoménica y que sin embargo continua accesible a los seres para conducirles a la libertad. (…) Ella encarna la compasión y la sabiduría en perfecta unión, y se manifiesta como la actividad salvadora y protectora. Las representaciones de Kuan Yin, a menudo van vinculadas a las del Dragón, poderoso símbolo de espiritualidad, sabiduría, fuerza y poderes divinos de transformación. (…) La posición de Kuan Yin es única en las Jerarquías Celestiales, está libre de orgullo o deseo de venganza, poco dispuesta a castigar aún a aquellos que lo tienen bien merecido. Aquellos que pueden sufrir horribles destinos kármicos en otros sistemas, pueden obtener

renovación

y

purificación

simplemente por implorar su gracia con total y absoluta sinceridad.

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Kuan Yin ha hecho voto de permanecer en este plano (terrenal) y no entrar en los reinos celestiales hasta que todas las demás entidades vivientes hallan completado su proceso de iluminación y se liberen del ciclo de nacimiento, muerte y renacimiento (samsara). Hay muchas leyendas que dan cuenta de los milagros realizados por ella para socorrer a aquellos que buscan su ayuda. Tales historias siempre realzan su compasión para con todos los seres, su santidad, su iluminación, su amor incondicional y su accesibilidad. Esa accesibilidad se manifiesta también en su adoración y en la meditación sobre ella, casi exenta de dogma o ritual. Ella es evocada como: (…) el faro que dirige a los navegantes del gran mar de la existencia, cuya luz es visible desde cualquier costa. Ella es lo más pequeño y lo más grande, el corazón del corazón y la esfera sin perímetro de lo real. Dentro y fuera, sin dualidad ni diferencia, por eso no importa cómo pensemos en ella, si como una deidad objetivamente existente o como un poder subjetivo de la mente de Clara Luz. Tangible y sutil, Ella es ambas verdades, y por cualquier punta de su estrellado manto que tiremos de ella, igualmente su esplendor ilimitado nos alcanzará e iluminará. 22 El peligro de este arquetipo es que posea a la mujer transformándola en una especie de gurú que flota sobre el mundo y que se ubica por sobre lo mundano, olvidando que ella aún esta encarnada y que su espiritualidad no la puede alejar del mundo terrenal, ni mirar en menos a aquellos que según sus parámetros no hayan alcanzado el estado de iluminación.

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http://www.terra.es/personal/javierou/con-kuanyin.htm

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Otra diosa oriental que representa a la compasión es la diosa tibetana Tara. El mito cuenta que: El Bodhisatva Avalokiteshvara tenía inmensa compasión por los seres vivos. Aunque se esforzaba sin cesar por ayudar a los seres, sentía un gran pesar al ver que tantos seres continuaban cayendo, sin remedio, en los reinos inferiores de existencia, como los infiernos. Vio que eran muy pocos los seres que progresaban en el camino hacia la Iluminación. En total desesperación, debido a una compasión inaguantable, Avalokiteshvara lloró de angustia, rezando para que su cuerpo se rompiera en mil pedazos y rogando para morir, ya que sentía que había sido incapaz de realizar su tarea de rescatar a los seres vivos del sufrimiento. De sus lágrimas de compasión, surgió Tara. Apareciendo de esta manera milagrosa, Tara se dirigió a Avalokiteshvara diciéndole: “O Ser Noble, no abandones la sublime tarea de beneficiar a los seres sintientes. Yo he sido inspirada por ti y me he regocijado en todas tus acciones altruistas y desinteresadas. Yo entiendo los grandes apuros y dificultades por los que has pasado. Pero tal vez, si adopto la forma de un Bodhisatva femenino con el nombre de Tara, como una contraparte tuya, entonces eso podría asistirte en tus más loables esfuerzos. Al escuchar esta aspiración de Tara, Avalokiteshvara se llenó de un entusiasmo y de un coraje renovados para continuar sus esfuerzos dirigidos a los seres, y en ese momento, tanto él como Tara fueron bendecidos por el Buda Amitaba, debido al compromiso que mantenían al permanecer en el camino del Bodhisatva. 23 23

http://www.budismotibetano.net/portal/index.php?option=com_content&task=view&id=187&Itemid=34

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La función de Tara es socorrer, salvar y liberar las almas, ayudarlas a atravesar por la existencia de modo que terminen con el ciclo de reencarnaciones. Es por esencia el principio femenino de la liberación y la sabiduría. La sanadora buscará trabajos que privilegien la reflexión y una actitud compasiva, puede que este en lugares donde tenga que acoger a otros y ayudarlos en los estancamientos emocionales que les impiden continuar su camino de individuación. Es importante que la sanadora mantenga la conciencia de materialidad, de lo contarios considerará inferiores aquellos trabajos relacionados con la producción de tangibles o con aquellos que estén más bien volcados hacia el mundo exterior. La sanadora acoge a sus amigas, animándolas a encontrar la sanación a sus heridas en sus propios corazones y a contactarse consigo mismas. Sólo que si esta identificada con la imagen de la gurú es posible que descalifique y critique a aquellas amigas que según ella no siguen el camino espiritual, sintiendo que la única manera de lograr la trascendencia es meditando y conectándose hondamente con la intuición. En cuanto a la pareja ella establece un vínculo amoroso y abierto con él, siendo capaz de escucharlo atentamente sin juicios lo que él pueda manifestar de si mismo o de la relación, esto permite que se cree un ambiente de confianza y calidez. Sin embargo, cabe la posibilidad que conectada con la omnipotencia ella deje de estar abierta a recibir lo que el otro tenga que decir, arguyendo que ella siempre sabe lo que le ocurre. La sexualidad puede ser vivida como una comunión con el otro, que la ayuda a trascender su propio ego, a sentirse encarnada y a disfrutar de ella. Si se ubica en el polo de la gurú considerará el sexo como no espiritual invalidándolo como práctica de trascendencia.

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En cuanto a la relación con sus hijos, los ayudará a desarrollar la intuición, entendiendo esta como la capacidad para escuchar su voz interior y percibir a los demás sin máscaras. Puede que este deseo que sus hijos se conecten consigo mismos la lleve a afirmar que ellos deben hacer lo que les dice porque tiene la razón que le da su poder especial de empatía e intuición. En la familia la sanadora promoverá la compasión y el respeto por cada uno de los miembros que la componen, dejando fuera los juicios que impiden que los seres humanos se sientan en confianza y seguros. Si esto es llevado al extremo ella impedirá que surjan conflictos, describiendo a su familia como un remanso de paz donde nunca hay problemas ni emociones negativas, lo cual llevará a que los miembros se resientan por la represión que ella realizará, pues hará sentirse culpables e inferiores a aquellos que quieran manifestar un desacuerdo.

Arquetipo de la vieja sabia El arquetipo de la vieja sabia es el último arquetipo del ciclo de la mujer. Está relacionado con la preparación para la muerte y el desapego a la vida material. La experiencia de la humildad es la que se vive más plenamente pues nos acerca a la vivencia de ser iguales a todos y únicos a la vez. Sintiendo que cada quien tiene su espacio y el derecho a estar en la vida. En este arquetipo se comienza la disolución del ego y se acerca la unión con la totalidad. Siendo la muerte un misterio tan inconmensurable como el nacimiento, ambos están íntimamente ligados. Nos llevan a un origen del cual nadie tiene pruebas científicas de su existencia y que sin embargo pareciera que el alma intuye. La experiencia de la muerte nos acerca a todos, pues lo único cierto de nuestras vidas es que todos moriremos algún día. Hacer conciencia de aquello nos conduce a una actitud sencilla ante la vida y los demás.

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Posiblemente desde los albores de la conciencia humana, todos nuestros antepasados han percibido que la muerte es un retorno al origen, un entrar en la madre primordial del cual todos venimos. Por eso es posible que una mujer que tiene activo este arquetipo mantenga una actitud meditativa, mística, de disfrute pleno y de desapego. Lentamente aquellos polos que la fueron determinando a lo largo de la vida van desapareciendo y los límites de lo bueno y lo malo, de lo masculino y femenino se hacen difusos y tenues. Una imagen que nos habla de este arquetipo es Sofía. En el libro de Proverbios (siglo IV y III a.C.) dice ella: Desde la eternidad fui formada, desde le principio, antes del origen de la tierra. Fui engendrada cuando no existían los océanos, Cuando no había manantiales cargados de agua. Antes que las colinas fui engendrada. No había hecho aun la tierra ni los campos, Ni el polvo primordial del orbe. Cuando colocaba los cielos, allí estaba yo, Cuando trazaba la bóveda sobre la superficie del océano; Cuando sujetaba las nubes en lo alto, cuando afianzaba las fuentes del abismo, Cuando marcaba su límite el mar Para que las aguas no desbordaran sus orillas; Cuando asentaba los cimientos de la tierra, yo estaba junto a Él, como aprendiz, yo era su alegría cotidiana, jugando todo el tiempo en su presencia, jugando con la esfera de la tierra

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y compartiendo mi alegría con los humanos. Sofía aparece en el Antiguo Testamento, “como consorte invisible e innombrable de Yahvé, se manifiesta en la imagen de la artesana principal de la creación, y, en ese sentido, como entidad trascendente” (Baring, A. y Cashford, J. 2005: 529). Para Baring y Cashford (2005) Sofía aparece como la consorte del dios padre, la imagen de la luz, la verdad, el entendimiento, la intuición, la compasión y la justicia. Es el equivalente femenino de la deidad masculina, el fundamento del mundo, la artesana principal. Sofía se describe a si misma como el poder que anima la naturaleza y la vida humana. Sofía representa el arquetipo de la sabiduría espiritual o del saber del alma. La sabiduría que ostenta es intuitiva, es aquella que nos conecta con certezas que provienen de nuestra alma y que están en un nivel distinto del conocimiento empírico, simplemente es algo que se presiente y que puede no tener una explicación racional, y sin embargo saber que es verdad. El arquetipo de la vieja sabia invita a la introspección y a buscar las respuestas de nuestra existencia en el interior. Entrar en contacto con este arquetipo es una experiencia mística y espiritual. El arquetipo de la vieja sabia simboliza la fidelidad plena a si mismo. En este arquetipo se trasciende el ego y es el si mismo el que pasa a ser el centro del mundo psíquico.

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Otra representación de la vieja sabia la encontramos en la diosa griega Hécate, diosa de las encrucijadas y suele mostrársela como una vieja que esta frente a una encrucijada de tres caminos, que pueden representar nuestro pasado, presente y futuro. Ella puede ver estos tres caminos a la vez y llevarnos a tomar una decisión.

Bolen (2003) describe a Hécate como “la testigo presencial de nuestro interior en cada encrucijada, aunque nuestro ego niegue, reprima, distorsione y no pueda reconocer lo que esta sucediendo” (p.105). Hécate es una figura difusa en la mitología, aparece acompañando a Démeter en la búsqueda de su hija, para luego transformarse en parte del séquito de Perséfone, la reina del mundo subterráneo. Ella puede entrar en ese mundo oscuro y volver a salir, por lo tanto cuenta con la libertada para moverse en ambos mundos. La vieja sabia nos invita y a veces nos obliga a ubicarnos en encrucijadas. Simbólicamente éstas representan momentos en nuestras vidas en los que el inconciente atraviesa la conciencia, en los que lo eterno atraviesa lo transitorio; en otras palabras, momentos y lugares en los que una voluntad superior exige la rendición del ego. La vieja sabia ha atravesado en sí misma muchas encrucijadas; ha alcanzado un lugar de entrega conciente en el que las demandas del ego ya no son relevantes. Ella se ha convertido en un instrumento y por lo tanto está desapegada.

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Desapego no significa indiferencia. Significa que ha pasado por ahí. Ha sufrido, pero puede reponerse del sufrimiento. Sufre más dolor en presencia de una persona inconciente de lo que esta persona puede ser capaz de percibir, pero puede sufrir el dolor y al mismo tiempo mirarlo de frente. No es indiferente ni está ausente. Está ahí totalmente presente. Puede ser lo que es y vivir su verdad desnuda. La vieja sabia puede permitirse ser honesta. No esta interesada en jugar juegos desgastados. Cerca de ella, los demás pueden experimentar su propia esencia. Su verdad llana hace que a veces sea difícil de aguantar. Pero su verdad es la medida de su amor. No tiene nada que perder, porque lo que ella es nadie se lo puede quitar. No tiene nada puesto en su ego y puede amar sin deseos de controlar. No tiene ninguna razón de persuadir. (Woodman, M. 2001: 134) Este arquetipo buscará trabajos que le permitan ayudar a otros a conectar con su propia sabiduría interior, de modo que cada uno encuentre su propio camino hacia la autorrealización. Si su sabiduría es genuina dejará que los demás vivan lo que tienen que vivir en su proceso de aprendizaje, sino ella se sentirá con el derecho de guiar a otros por el camino de la verdad, tomando una actitud soberbia y prepotente. En cuanto a las relaciones con mujeres la vieja sabia es capaz de ver en cada una de las mujeres que la rodean aspectos de su propia alma y de la divinidad, lo cual contribuye a que sus relaciones sean compasivas y tiernas. Aquellas que la rodeen se sentirán cómodas y seguras, sintiendo su energía envolvente que nace de la experiencia de vida y de haber transitado por los dolores y las alegrías. Si esta en el polo de falsa introspección ella juzgará a las mujeres que considere que no han alcanzado una conexión profunda consigo mismas como superficiales y poco valiosas.

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En el área de la pareja, dejará que sea la libertad lo que impere entre ellos, siendo un amor sin egoísmo y sin posesión lo que logra cultivar. Pero también es posible que perciba a su pareja como una amenaza a su misticismo y lo aparte de ella, sin consideración hacia él o devaluándolo por considerarlo demasiado terrenal. En cuanto a la sexualidad ella puede percibirla como una experiencia mística que le permite contactarse con la divinidad, logrando sentir o presentir que hay algo más allá de si misma que ordena y sentido a lo que nos rodea. Si cada vez se aleja más del mundo exterior puede sentir que la sexualidad solo la distrae de la conexión con la totalidad. En cuanto a los hijos ella los animará a encontrar aquello que les da sentido a sus vidas, ayudándolos a escuchar lo que su voz interior tiene para decirles. Respetando sus espacios, actividades e inquietudes. Sin embargo, si se conecta con la idea de que todos tienen que encontrar su misión en la vida y que debemos avocarnos a ello permanentemente puede obligar a sus hijos a que entren en una dinámica de permanente introspección, sin respetar sus propios tiempos. Disfrutará cada momento intensamente junto a su familia, pues tiene la conciencia de liminalidad que le otorga la sabiduría para saber que cada instante que esta junto a ellos es sagrado y maravilloso. Si ella se siente demasiado especial puede extrapolar esta sensación a su familia sintiendo que ellos están llamados a realizar alguna contribución increíble al mundo, transformando su misticismo en una megalomanía.

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Instrumento de medición Diseño Se identificaron seis subdimensiones para cada arquetipo definido. A su vez, cada subdimensión se clasificó también en un polo positivo y negativo. Las subdimensiones son: •

Relación con mujeres: Se entenderá como la manera en que la mujer establece contacto y vínculos ya sea con mujeres de la familia, amigas, compañeras de trabajo u otras.



Pareja: Esta está relacionada con cuales son los criterios primordiales para una mujer para establecer un vínculo de pareja



Sexualidad: Esta evaluará la forma en que la mujer se conecta tanto con su sexualidad como con la de su compañero.



Hijos: Se relaciona con el estilo de acercamiento y cuidado hacia los propios hijos



Familia: Se revisa las motivaciones y criterios para la formación y mantención de su familia



Trabajo: Se entenderá por trabajo el tipo de acercamiento y motivaciones que tiene la labor productiva que desempeña.

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De manera tal que para cada arquetipo se construyó una matriz como la que se muestra a continuación:

Mujer Joven Arquetipo de la Doncella Aspecto Aspecto Subdimensión positivo negativo Relación con mujeres Pareja Sexualidad Hijos Familia Trabajo

De esta forma se identificaron 108 categorías (ver Anexo 1) creando para cada una de ellas una aseveración. Ésta debe ser evaluada con un valor de 1 a 4 según el nivel de aprobación de las personas, de esta forma el valor 1 indica una menor aprobación mientras que el valor 4 indica una alta aprobación o adhesión de la encuestada a dicha aseveración. El orden que se presenta cada una de las aseveraciones en el instrumento es aleatorio. Procedimiento de Aplicación El instrumento de medición es un cuestionario auto suministrado al sujeto de estudio. Este se puede aplicar por un profesional validado con un instrumento impreso donde se pueden realizar las preguntas o permitir que se realice autodidactamente. También puede ser remitido vía correo electrónico en formato planilla electrónica u hoja de cálculo el cual es soportado por MS Windows en su formato MS Excel ®, Open Office para Linux y Mac Excel ® para Mac. Es decir, en cualquier plataforma informática, lo que reduce que este mecanismo se transforme en una barrera o impedimento.

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Una vez contestado el instrumento por el sujeto de estudio debe ser devuelto al psicólogo o investigador por esta misma vía, quien aplicará los procedimientos respectivos de análisis. Plan de Análisis El plan de análisis de este instrumento está diseñado para software de computación estadística como MS Excel ®, R ®, Stata ®, SAS ® o SPSS ®, entre otros. Para su análisis descriptivo basta con agrupar las variables según el arquetipo correspondiente, luego identificar las aseveraciones negativas y positivas para posteriormente graficar en barras la suma de éstas. Con este procedimiento se identifica cuál o cuáles pueden ser los arquetipos más imperantes en las mujeres encuestadas y en qué valor, si positivo o negativo. Ejemplo: Se trabajó con una versión de prueba del Paquete Estadístico para las Ciencias Sociales (SPSS15.024). El proceso de análisis descriptivo comprende una serie de procedimientos que finalizan en la representación gráfica. Para esto se creó un registro de cada una de las variables con valores de 1 a 4, estando ya establecidos cuáles corresponden a qué arquetipo y además si son positivas o negativas. Luego es necesario activar el comando Separar Archivo (Split File) para identificar a el arquetipo y las aseveraciones positivas de las negativas para posteriormente obtener estadísticos descriptivos (SUMA). Finalmente se solicita un gráfico de barra de la tabla de frecuencia de las variables agrupadas en donde se presenta gráficamente qué arquetipo o arquetipos son los que más prevalecen en la mujer encuestada y en con qué atributos, si positivos o negativos.

24

http://www.spss.com/registration/login/login009.cfm?Demo_ID=37

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Validación del Instrumento Se realizó un pre test del instrumento creado, siendo este aplicado a psicólogas clínicas conocidas por la investigadora en su condición de expertos por su experiencia en la aplicación de diferentes test, en su carrera profesional. Y en su conocimiento sobre psicología analítica. Posteriormente se recibieron los comentarios de ellas, que fundamentalmente correspondían a modificaciones de forma y no de fondo, como por ejemplo que algunas aseveraciones utilizaban conceptos o palabras que podrían llamar a confusión por parte de los entrevistados. Una vez recibidos e incorporados la mayoría de los comentarios se da por validado el instrumento de medición (Ver Anexo 3).

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Conclusiones Al final de esta tesis siento que he recorrido un largo camino, no sólo de la revisión bibliográfica y teórica, sino que para mi significa el cierre y el inicio de grandes cambios. Al iniciar este magíster mi vida era una y hoy me atrevo a decir que da dado un vuelco en 180º. Al revisar cada arquetipo fui aprendiendo de ellos y también pude identificar algunas características que compartía y otras que no. Hécate además de la diosa de las encrucijadas es la partera, la que ayuda a otras mujeres a dar a luz y creo que fue ella la que me entregó la fuerza para completar esta etapa de la tarea. También me llevó al mundo subterráneo y a veces me invitó y otras me obligó a mirar detenidamente aspectos de mi y de mi vida que, por qué no decirlo, detesto o niego en mi. Y esa ha sido una experiencia amorosa y dolorosa. Un viejo terapeuta que conocí hace años realizaba unos maravillosos talleres que llamaba “amor y duelo”, extraña mezcla pueden pensar algunos y sin embargo que verdadera. Porque en un duelo siempre hay amor y dolor y solo si trasciendes ambas experiencias puedes pasar a la etapa que te aguarda a la vuelta de la esquina. Mi deseo es que esta tesis permita que otras mujeres y hombres realicen el camino que yo seguí y logren maravillarse y sorprenderse de todo lo que pueden aprender de si mismos y de todo lo que les queda por recorrer aún. Considero que una de las principales contribuciones de esta tesis es el instrumento final, que es la condensación de cada uno de los arquetipos revisados. Cada arquetipo tuvo su fundamento filogenético en una etapa vital de la vida de una mujer, pero también al ser un arquetipo es un sustrato que habita en cada uno de nosotros, esto significa, por ejemplo, que si bien la abuela puede surgir de la vivencia de una mujer que terminó con la crianza de los hijos, que entro en la menopausia y que ya están llegando los nietos, el arquetipo de la abuela esta en cualquier mujer y podría activarse siendo ella muy joven y entonces establecería pautas de relación como los descritos en el arquetipo. Por lo tanto, cuando una mujer conteste este cuestionario es posible que cualquiera de estos arquetipos pudiera estar activo y eso estaría hablando de las 87

pautas de relación y de funcionamiento que tendrá esa mujer en su vida actual, pues también es posible que si se vuelve a aplicar tiempo después sean otros los arquetipos activos. La idea es que al aplicar este test, ya sea individual o colectivamente a un grupo de mujeres determinado, los resultados den cuenta de el o los arquetipos dominantes, de modo que se puedan construir intervenciones orientadas a activar los arquetipos que estén más deprimidos, comprendiendo que para la teoría analítica

el

proceso

de

individuación

es

integrar

nuestras

múltiples

potencialidades. El test además de arrojar información en cuanto al arquetipo dominante también nos entrega información sobre el polo del arquetipo que está predominando. Cada arquetipo tiene un aspecto potenciador y otro estancador del desarrollo. Esto quiere decir que puede resultar, por ejemplo, que el arquetipo que más predomina es el de la madre, pero el de la madre devoradora, a la cual le cuesta dejar que los que la rodean sigan su propio camino, sintiendo este proceso natural como una traición y culpando a los otros por abandonarla. En este caso también resulta de vital importancia la información que podemos obtener del cuestionario para una posible intervención terapéutica. Finalmente mi última reflexión va orientada a la vejez. Me encontré en la investigación que había mucha literatura sobre las dos primeras etapas de la vida de la mujer, la juventud y la madurez, pero cuando llegué a la vejez me tope con que Shinoda Bolen y Elizabeth Strahan, han tratado y revisado en profundidad el tema, pero siempre hablando de la vejez como una única etapa sin distinguir las diferentes sub-etapas por las que puede transitar una mujer mayor. De hecho me tomó bastante tiempo, por una parte buscando material y averiguando si alguna otra autora había tratado el tema más en detalle; y por otra nombrando a los arquetipos que a mi juicio surge como parte del proceso vital en una mujer en esa etapa. Finalmente los arquetipos que surgieron fueron la de la abuela, la sanadora y la vieja sabia, los cuales están ampliamente explicados en los antecedentes teóricos.

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Por último deseo compartir mi anhelo de poder realizar una estandarización del instrumento, lo cual permitiría aplicarlo en mujeres chilenas de diferentes edades y niveles culturales, aportando importante información sobre el proceso de individuación por el cual están transitando.

89

Bibliografía 1. Baring, A. y Cashford, J. (2005). El mito de la diosa. Madrid: Siruela. 2. Bolen, Jean Shinoda. (2005). Las diosas de cada mujer (11ª ed.). Barcelona: Kairós. 3. Bolen, Jean Shinoda. (2003). Las diosas de la mujer madura. Barcelona: Kairós 4. Campbel, J.(1959). El héroe de las mil caras. Editorial México: Fondo de cultura económica.1997 5. Cervantes, Susana. 2002. Un acercamiento al ser femenino en el estudio arquetipal de dos diosas mesoamericanas. México. Tesis para postular al grado de Magíster en Psicología Analítica 6. Dunn, M. (1998). Diosas. Barcelona: Robin Book. 7. Eibl-Eibesfeldt I. (1981). El hombre preprogramado. Madrid: Alianza Editorial. 8. Jung CG. Sobre el concepto de inconsciente colectivo (1936). En Obras Completas, Vol 9, 1 Madrid: Ed Trotta; 2002. 9. Jung CG. (1934). Arquetipos e inconsciente colectivo. Barcelona: Paidós; 1997 10.Jung CG. (1952). Símbolos de transformación. Buenos Aires: Paidós; 1977 11.Jung CG. (1937). “Las visiones de Zoísmo”. En Psicología y simbólica del arquetipo. Buenos Aires: Paidós; 1977 12.Robertson R. (1999). Arquetipos junguianos. Barcelona: Paidós. 13.Metzger, D. (2001). “11. Seduciendo al mundo de nuevo: El retorno de la prostituta sagrada”. En Ser Mujer (4ª ed.). Editado por Woodman, M. et al. Barcelona: Kairós, pp. 231-242 14.Strahan, E. (2001). “12. Más allá de la sangre: Las mujeres de esa edad”. En Ser Mujer (4ª ed.). Editado por Woodman, M. et al. Barcelona: Kairós, pp. 243-256 15.Woodman, M. 2001. “5. La feminidad conciente: madre, virgen, anciana.” En Ser Mujer.(4ª ed.). Editado por Woodman, M. et al. Barcelona. Kairos, pp 113-145. 16. http://www.conexioncubana.net 90

17. http://www.analitica.com/archivo/vam1996.10/soc3.htm 18. http://www.ucm.es/info/especulo/numero28/dioniso.html 19. http://www.nueva-acropolis.es/FondoCultural/simbolismo/Simbolismo7.htm. Paloma de Miguel “Lilith, la sombra de Eva” 20. http://es.wikipedia.org/wiki/Amazona_(mitolog%C3%ADa) 21. http://www.ewtn.com/spanish/Saints/Juana_de_arco5_11.htm 22. http://www.kalathos.com/may2000/prostitucion.html 23. http://www.nozal.com/pintura/dioses/afro1.htm 24. http://es.wikipedia.org/wiki/Hera 25. http://www.catamarcaguia.com.ar/Cultura/Pachamama.php 26. http://www.conexioncubana.net/index.php? st=content&sk=view&id=3050&sitd=331 27. http://www.omardamar.com.ar/diosas.htm 28. http://www.egiptologia.org/mitologia/panteon/isis.htm 29. http://www.nodo50.org/mujeresred/victoria_sendon-mujer_y_sagrado.html 30. http://www.fortunecity.com/lavendar/stroheim/347/sw_leia.html 31. http://www.class.udg.mx/~adag/leyendas/dos.html 32. http://www.terra.es/personal/javierou/con-kuanyin.htm 33. http://www.budismotibetano.net/portal/index.php? option=com_content&task=view&id=187&Itemid=34 34. http://www.spss.com/registration/login/login009.cfm?Demo_ID=37

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Anexos

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Anexo 1. Matriz de Arquetipos y subdimensiones. Arquetipo según etapa de la vida Subdimensiones

Mujer Joven Arquetipo de la Virgen Perséfone/Pandora Aspecto positivo Aspecto negativo

Mujer Adulta Arquetipo de la Amante Afrodita/Psique/Musas/Femme Fatale Aspecto positivo Aspecto negativo

Mujer Vieja Arquetipo de la abuela Hestia Aspecto positivo Aspecto negativo

Arquetipo de la Mujer Salvaje Lilith Aspecto positivo Aspecto negativo

Arquetipo de la Esposa Hera/Medea Aspecto positivo Aspecto negativo

Arquetipo de la Sanadora Hécate Aspecto positivo Aspecto negativo

Arquetipo de la Heroína Atenea/Atalanta/Amazonas/Medusa Aspecto positivo Aspecto negativo

Arquetipo de la Madre Demeter/María/Isis/Yocasta Aspecto positivo Aspecto negativo

Arquetipo de la vieja sabia Sofía Aspecto positivo Aspecto negativo

Relación con mujeres Pareja Sexualidad Hijos Familia Trabajo

Subdimensiones Relación con mujeres Pareja Sexualidad Hijos Familia Trabajo

Subdimensiones Relación con mujeres Pareja Sexualidad Hijos Familia Trabajo

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Anexo 2. Matrices para cada Arquetipo y sus subdimensiones Mujer Joven Arquetipo de la Doncella Subdimensiones

Aspecto positivo

Aspecto negativo

Relación con mujeres

Mis amigas me consideran muy femenina

Mis amigas me cuidan pues me consideran vulnerable

Pareja

Él me eligió y yo acepté estar a su lado

Siento que fui secuestrada por mi pareja

Sexualidad

Puedo disfrutar y gozar de mi sexualidad

Siento que estoy obligada a tener sexo para complacer a mi pareja

Hijos

Respeto y les entrego libertad a mis hijos

Me siento sobrepasada por la crianza de mis hijos

Familia

Quiero que cada miembro de mi familia se conecte con su niño interior

Siento que la familia es una carga demasiado pesada para mi

Trabajo

Puedo desarrollar un trabajo creativo e intuitivo

Me cuesta comprometerme con un trabajo

Arquetipo de la Mujer Salvaje Subdimensiones

Aspecto positivo

Aspecto negativo

Relación con mujeres

Mis amigas son como mis hermanas

Yo respeto solo a las mujeres que se hacen respetar

Pareja

Mi mejor amigo es mi pareja

Mi independencia y espacios propios están primero que mi pareja

Sexualidad Hijos Familia Trabajo

Yo vivo y disfruto mi sexualidad como un acto recreativo Yo promuevo la independencia de mis hijos El espacio de cada integrante es importante Yo soy emprendedora y me gustan los desafíos

La sexualidad es secundaria en mi vida Mis hijos deben ser capaces de valerse por sus propios medios Formar familia es secundario en mi vida Yo lucho por mis ideales férreamente sin importan lo que digan

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Arquetipo de la Heroína Subdimensiones

Aspecto positivo

Aspecto negativo

Relación con mujeres Pareja Sexualidad

Me gusta que las mujeres luchen por sus ideales Apoyo a mi pareja para que logre sus metas El sexo es saludable y se puede aprender a hacer bien

Prefiero relacionarme con hombres que con mujeres Me atraen solo hombres con poder y con ambiciones en la vida El sexo es algo de lo que se puede prescindir

Hijos

A mis hijos los inspiro y animo a sobresalir y luchar por sus ideales

Espero que mis hijos sean competitivos y con metas claras

Colaboro para que cada miembro de mi familia tega un objetivo claro y luche por el Trabajo duro y estratégicamente para conseguir mis metas

Planifico todas las actividades familiares de modo que sean eficientes y organizadas El pensamiento frio y lógico me sirven para lograr mis metas

Familia Trabajo

95

Subdimensiones

Mujer Adulta Arquetipo de la Amante Aspecto positivo

Aspecto negativo

Relación con mujeres

Disfruto compartiendo secretos de belleza con mis amigas

Las mujeres se ponen celosas de mi coquetería

Pareja

Prefiero las relaciones apasionadas, intensas y creativas

Cuando una relación no me satisface busco otra rápidamente

Sexualidad

Disfruto intensamente del sexo

Si el sexo no me satisface con quien estoy busco otro compañero

Hijos

Me gusta hacer sentir a mis hijos especiales

Puedo por momentos entregarme intensamente a la relación con mis hijos

Familia

En mi familia aporto luz y encanto

Siento que mi familia es incompatible con mi libertad

Trabajo

Me gustan los trabajos innovadores e intensos

Privilegio lo interesante del trabajo por sobre la paga

Subdimensiones

Arquetipo de la Esposa Aspecto positivo

Aspecto negativo

Relación con mujeres

Mis amigas son mujeres con pareja

Evito juntarme con mujeres sin pareja

Pareja

Me acomodo al rol e intereses de mi pareja

La infidelidad es lo peor que puede ocurrir en una relación

Sexualidad

El sexo es parte de mi compromiso en la relación

La pareja puede estar plena sin relaciones sexuales

Hijos

Promuevo la lealtad hacia la pareja en mi hijos

Mis hijos no pueden entorpecer el desarrollo de mi relación

Familia

El rol de la esposa es mantener a la familia unida

Siempre respaldo a mi pareja en decisiones familiares

Trabajo

Mi relación de pareja es más importante que el trabajo

Yo dejaría de trajabar por el bien de mi relación de pareja

96

Arquetipo de la Madre Subdimensiones

Aspecto positivo

Aspecto negativo

Relación con mujeres

Me gusta cuidar y proteger a mis amigas

Confio más en mis amigas que son madres que en mi pareja u otros hombres

Pareja

Busco una pareja que comparta el deseo de tener hijos

Mi pareja es como un hijo más para mi

Sexualidad Hijos Familia

El sexo es un acto cariñoso y tierno Mis hijos son lo más importante para mi Soy protectora y generosa con mi familia

El sexo es para procrear Si mis hijos me dejan alguna vez sola yo me muero Siempre me pospongo por mi familia

Trabajo

Busco los trabajos en los que puedo ayudar a los demás

Mi rol de madre esta muy por sobre mi desarrollo profesional

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Mujer Vieja Arquetipo de la Abuela Subdimensiones

Aspecto positivo

Aspecto negativo

Relación con mujeres

Me gusta escuchar y entregar calidez a mis amigas

Me gusta tanto estar sola que me cuesta tener amigas

Pareja

Me gusta que mi pareja se sienta a gusto en el hogar

En mi mundo interior mi pareja no tiene cabida

Sexualidad

El sexo es una experiencia agradable y cálida

El sexo no es muy importante para mi

Hijos

Les entrego un ambiente afectuoso y seguro a mis hijos

Mis hijos tienen plena libertad para hacer lo que deseen

Familia

Mi familia es un espacio acogedor y tranquilo

Mi familia es un santuario donde el mundo exterior no entra

Trabajo

Prefiero los trabajos que exigen calma y paciencia

En mi trabajo paso desapercibida

Arquetipo de la Sanadora Subdimensiones

Aspecto positivo

Aspecto negativo

Animo a mis amigas a contactarse consigo mismas

La mujeres que no han desarrollado su intuición no están completas

Me gusta escuchar serenamente a mi pareja La sexualidad me permite entrar en comunión conmigo y el otro

Yo siempre sé lo que le pasa a mi pareja

Hijos

Busco que mis hijos escuchen su voz interior

Mis hijos deben hacer lo que les digo pues suelo tener la razón

Familia

Promuevo la compasión y el respeto en mi familia

En mi familia todo es paz no hay cabida para el conflicto

Trabajo

Elijo trabajos que privilegien la reflexión y una actitud compasiva

Solo los trabajos instrospectivos tienen valor

Relación con mujeres Pareja Sexualidad

El sexo no es espiritual

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Subdimensiones Relación con mujeres Pareja Sexualidad Hijos Familia Trabajo

Arquetipo de la Vieja Sabia. Aspecto positivo Cada una de mis amigas refleja un pedacito de mi alma Con mi pareja estamos juntos por una opción libre y amorosa La sexualidad es una experiencia mística que me permite conectarme con mi ser divino Animo a mis hijos a encontrar su misión en la vida Disfruto intensamente cada momento junto a mi familia En mi trabajo busco que los otros encuentren su sabiduría interior

Aspecto negativo

Solo las mujeres que han logrado la sabiduría interior pueden ser mis amigas Mi pareja entorpece mi conexión conmigo misma El sexo solo me distrae de las verdades esenciales Mis hijos deben ser introspectivos y meditativos Mi familia esta llamada a cumplir una misión trascendente Solo yo puedo ayudar a otros a encontrar el camino hacia la verdad

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Anexo 3. Instrumento de Medición validado por Pre Test. Arquetipos Femeninos, una caracterización. Se les solicita contesten los datos indicados. Luego, lean cuidadosamente cada una de las aseveraciones presentadas y evalúen, según su percepción, con nota 1, 2, 3 ó 4. En el caso que la aseveración presentada no corresponda a su caso (por ejemplo no tiene hijos) se le solicita que se sitúe en aquella situación. Nombre: Edad: Nivel Educacional: Ocupación actual: Situación de pareja: Hijos (número y edad): N 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12

Aseveraciones Mis amigas me consideran muy femenina Siento que fui secuestrada por mi pareja Puedo disfrutar y gozar de mi sexualidad Me siento sobrepasada por la crianza de mis hijos Quiero que cada miembro de mi familia se conecte con su niño interior Me cuesta comprometerme con un trabajo Mis amigas son como mis hermanas Mi independencia y espacios propios están primero que mi pareja Yo vivo y disfruto mi sexualidad como un acto recreativo Mis hijos deben ser capaces de valerse por sus propios medios El espacio de cada integrante es importante Yo lucho por mis ideales férreamente sin importan lo que digan

1

2

3

4

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13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46

Me gusta que las mujeres luchen por sus ideales Me atraen sólo hombres con poder y con ambiciones en la vida El sexo es saludable y se puede aprender a hacer bien Espero que mis hijos sean competitivos y con metas claras Colaboro para que cada miembro de mi familia tenga un objetivo claro y luche por él El pensamiento frío y lógico me sirven para lograr mis metas Disfruto compartiendo secretos de belleza con mis amigas Cuando una relación no me satisface busco otra rápidamente Disfruto intensamente del sexo Por momentos puedo entregarme intensamente a la relación con mis hijos En mi familia aporto luz y encanto Privilegio lo interesante del trabajo por sobre la paga Mis amigas son mujeres con pareja La infidelidad es lo peor que puede ocurrir en una relación El sexo es parte de mi compromiso en la relación Mis hijos no pueden entorpecer el desarrollo de mi relación El rol de la esposa es mantener a la familia unida Yo dejaría de trabajar por el bien de mi relación de pareja Me gusta cuidar y proteger a mis amigas Mi pareja es como un hijo más para mi El sexo es un acto cariñoso y tierno Si mis hijos me dejan alguna vez sola yo me muero Soy protectora y generosa con mi familia Mi rol de madre esta muy por sobre mi desarrollo profesional Me gusta escuchar y entregar calidez a mis amigas En mi mundo interior mi pareja no tiene cabida El sexo es una experiencia agradable y cálida Mis hijos tienen plena libertad para hacer lo que deseen Mi familia es un espacio acogedor y tranquilo En mi trabajo paso desapercibida Animo a mis amigas a contactarse consigo mismas Yo siempre sé lo que le pasa a mi pareja La sexualidad me permite entrar en comunión conmigo y el otro Mis hijos deben hacer lo que les digo pues suelo tener la razón

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Promuevo la compasión y el respeto en mi familia Solo los trabajos introspectivos tienen valor Cada una de mis amigas refleja un pedacito de mi alma Mi pareja entorpece mi conexión conmigo misma La sexualidad es una experiencia mística que me permite conectarme con mi ser divino Mis hijos deben ser introspectivos y meditativos Disfruto intensamente cada momento junto a mi familia Solo yo puedo ayudar a otros a encontrar el camino hacia la verdad Mis amigas me cuidan pues me consideran vulnerable Él me eligió y yo acepté estar a su lado Siento que estoy obligada a tener sexo para complacer a mi pareja Respeto y les entrego libertad a mis hijos Siento que la familia es una carga demasiado pesada para mi Puedo desarrollar un trabajo creativo e intuitivo Yo respeto sólo a las mujeres que se hacen respetar Mi mejor amigo es mi pareja La sexualidad es secundaria en mi vida Yo promuevo la independencia de mis hijos Formar familia es secundario en mi vida Yo soy emprendedora y me gustan los desafíos Prefiero relacionarme con hombres que con mujeres Apoyo a mi pareja para que logre sus metas El sexo es algo de lo que se puede prescindir A mis hijos los inspiro y animo a sobresalir y luchar por sus ideales Planifico todas las actividades familiares de modo que sean eficientes y organizadas Trabajo duro y estratégicamente para conseguir mis metas Las mujeres se ponen celosas de mi coquetería Prefiero las relaciones apasionadas, intensas y creativas Si el sexo no me satisface con quien estoy busco otro compañero Me gusta hacer sentir a mis hijos especiales Siento que mi familia es incompatible con mi libertad Me gustan los trabajos innovadores e intensos Evito juntarme con mujeres sin pareja Me acomodo al rol e intereses de mi pareja

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La pareja puede estar plena sin relaciones sexuales Mis hijos deben ser leales a su padre Siempre respaldo a mi pareja en decisiones familiares Mi relación de pareja es más importante que el trabajo Confío más en mis amigas que son madres que en mi pareja u otros hombres Busco una pareja que comparta el deseo de tener hijos El sexo es para procrear Mis hijos son lo más importante para mí Siempre me pospongo por mi familia Busco los trabajos en los que puedo ayudar a los demás Me gusta tanto estar sola que me cuesta tener amigas Me gusta que mi pareja se sienta a gusto en el hogar El sexo no es muy importante para mi Les entrego un ambiente afectuoso y seguro a mis hijos Mi familia es un santuario donde el mundo exterior no entra Prefiero los trabajos que exigen calma y paciencia La mujeres que no han desarrollado su intuición no están completas Me gusta escuchar serenamente a mi pareja El sexo no es espiritual Busco que mis hijos escuchen su voz interior En mi familia todo es paz no hay cabida para el conflicto Elijo trabajos que privilegien la reflexión y una actitud compasiva Solo las mujeres que han logrado la sabiduría interior pueden ser mis amigas Con mi pareja estamos juntos por una opción libre y amorosa El sexo solo me distrae de las verdades esenciales Animo a mis hijos a encontrar su misión en la vida Mi familia esta llamada a cumplir una misión trascendente En mi trabajo busco que los otros encuentren su sabiduría interior

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