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• Joanna Mamajón

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 Tema: Los contenidos.  Libro: Los contenidos en la reforma. Madrid, Santillana, 1992.  Autor: César Coll

Los contenidos en la Educación Escolar. La importancia atribuida a los contenidos de la enseñanza y el aprendizaje es una de las novedades que más llama la atención en las propuestas curriculares, en los Decretos de Enseñanzas Mínimas. Los contenidos han jugado siempre un papel decisivo en las en las orientaciones y programas oficiales, pero en las últimas décadas ha habido una tendencia a minimizar su importancia e interés hasta tal punto que los contenidos que se dan son el origen de una buena parte de los males que aquejan a la educación escolar. El enfoque curricular adoptado en la actual Reforma educativo apuesta por la importancia de los contenidos. No debe interpretarse en ningún caso como una vuelta a planteamientos tradicionales de la enseñanza centrado únicamente en la transmisión y acumulación de conocimientos. Esta importancia de los contenidos de las actuales propuestas suponen una reformulación y reconsideración del concepto de contenido y de los significa enseñar y aprender contenidos específicos y del papel que juega en los procesos de desarrollo y de socialización de los seres humanos y sobretodo el papel que juega en las decisiones de qué, cuándo y cómo enseñar y evaluar. ¿A qué responde la tendencia de minimizar la importancia de los contenidos? Se cree que es una tendencia a las limitaciones y errores de la educación tradicional. Esta visión ha estado asociada con una interpretación de la enseñanza y aprendizaje como una pura transmisión y recepción, es decir, transmitida y acumulativa. Atribuyen a los alumnos y a las alumnas un papel esencialmente receptivo y conciben al profesor como el responsable de transmitir ese conocimiento. La reacción crítica a esta concepción tradicional ha cristalizado a partir de ciertas interpretaciones pedagógicas de los estudios más recientes sobre la psicología infantil y la psicología del desarrollo, presentada como una concepción progresista. Esta concepción entiende que la educación escolar ideal no es la que transmite los saberes constituidos, sino la que asegura unas condiciones óptimas para que los alumnos desplieguen sus posibilidades y capacidades cognitivas, afectivas, sociales y de aprendizaje. El rechazo a una concepción transmisiva y acumulativa de la enseñanza y aprendizaje ha llevado a un cuestionamiento de la importancia de los contenidos. El planteamiento curricular rompe con ambas concepciones, propugna una interpretación radicalmente constructivista de la enseñanza y el aprendizaje y sostiene al mismo tiempo que los contenidos juegan un papel muy importante en la educación. Esta propuesta está apoyada en numerosas investigaciones y elaboraciones. Las propuestas conceden una importancia considerable al aprendizaje de determinados contenidos específicos y destaca la influencia educativa del profesor como uno de los factores determinantes de que la actividad constructiva de los alumnos se oriente en una u otra dirección.

¿Está justificada esa crítica de que los contenidos han tenido y tienen un peso excesivo en la educación? Por lo que hemos visto está justificada en la medida en que la importancia que se les concede ha estado vinculada a una concepción transmisiva y acumulativa de la enseñanza y el aprendizaje. Los contenidos designan el conjunto de saberes o formas culturales cuya asimilación y apropiación por los alumnos y alumnas se considera esencial para su desarrollo y apropiación por los alumnos se considera esencias para su desarrollo y socialización. La asimilación de algunas formas o saberes culturales está plenamente garantizada mediante la participación en la observación de las actividades. En resumen, lo propio y específico de la educación es que está formada por un conjunto de actividades especialmente planificadas con el fin de ayudar a que los alumnos asimilen unos saberes culturales, que al mismo tiempo se consideran esenciales para su desarrollo. Qué se entiende por contenido en las propuestas curriculares Los contenidos curriculares son una selección de saberes culturales cuya asimilación es considerada esencial para que se produzca un desarrollo una socialización adecuada de los alumnos en el marco de la sociedad al que pertenecen, cuya correcta y plena asimilación requiere una ayuda específica deberían ser incluidos como contenidos de enseñanza y aprendizaje en las propuestas curriculares. La enseñanza y aprendizaje de contenidos específicos es un medio imprescindible para desarrollar las capacidades de los alumnos. La concepción transmisiva y acumulativa del aprendizaje es sustituido por el aprendizaje significativo. En estas propuestas curriculares de la Reforma se considera que los HECHOS Y LOS CONCEPTOS son únicamente un tipo de contenidos, y que junto a ellos tiene que tenerse en cuenta los PROCEDIMIENTOS, ACTITITUDES, VALORES Y NORMAS. No pueden considerarse ambos dentro del mismo nivel, porque supone aceptar el principio de que todo lo que puede ser aprendido por los alumnos puede y debe ser enseñado por los profesores. Esto pretende romper con la práctica habitual centrada en el exceso en la memorización, suponiendo acabar con una tradición pedagógica cuya asimilación se deja por entero a la única y exclusiva responsabilidad de los alumnos. En función del objetivo que se persigue en cada caso, un mismo contenido puede ser abordado en una perspectiva conceptual, procedimental e incluso actitudinal, se considera conveniente abordarlo desde las tres perspectivas. Es necesario planificar y desarrollar actividades que permiten trabajar de forma interrelacionada los tres tipos de contenidos.