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A media del trascurso de los tiempos esto se ha solucionado poco, y es notable como los intereses privado han motivado a desequilibrar no solo a la sociedad en la que nos encontramos si no los valores y los criterios de las personas. Gaitán ha sido como el símbolo de la liberación. Este problema me parece muy importante porque los dirigentes actuales de nuestro país se deben fortalecer en la inversión en seguridad y calidad de vida en los campos.

UNA ESTRUCTURA POLITICA Muchas personas extranjeras se hacen preguntas referentes el por qué Colombia es rica en varios aspectos tales como: capacidades y potenciales geográficos, humanas, con diversidad de cultura, ambiental entre otros. Pero el principal problema es que Colombia le ha tocado enfrentar varios compromisos esencialmente con los dirigentes. Básicamente lo que se puede determinar son varios aspectos en los cuales la guerra y enfrentamientos se son los protagonistas de este tema.

En la actualidad la población se encuentra en un pasivo estado, en el cual no asimila su poder superior e indestructible el silencio aflora y la individualidad priman en nuestra sociedad, por consiguiente el pueblo, rodeado de amenazas sufre la desdicha de ser gobernando por quienes poco a poco consumen todo. Es posible que la ausencia de conocimientos pertinentes para reconocernos como un país rico y con gran potencial. “poderes externos, activos invisibles e insensibles, buscan redención a la vez que hacen la guerra” Un triste amaneces comienza entre las ruinas, una nación donde el pueblo es excluido. El pueblo es obligado a producir para así “mantener” al estado perverso. Así como Ospina cita a los antiguos comerciantes quienes preocupados por sus propios intereses se impusieron en el gobierno de la nueva

república para bloquear toda posibilidad de una nueva economía independiente y que permitieron que el país siguiera siendo un productor de materias primas para la gran industria mundial y un gran consumidor de manufacturas extranjeras. Cabe decir actualmente el país vive en un crítico proceso y es en este donde entramos a desvalorizar nuestro poder. En Colombia el pesimismo ante este planeta hay muchos factores en las cuales es triste escuchar que los más perjudicados con la actual situación nacional son conocedores de la pronta solución de la misma. “SI ALGO QUE NADIE IGNORA ES QUE EL PAÍS ESTA EN MUY MALAS MANOS” Cuando se construye un régimen irresponsable y antipopular se hace absolutamente necesaria la fuerza de sostener a cualquier precio un orden o desorden social que el pueblo difícilmente defenderá como el suyo

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Con el inicio de la guerra fría Washington hallo en la alianza un cómplice muy bien dispuesto, especialmente después de la eliminación de Gaitán. La gente se la ha pasado esperando a que quienes tienen el poder les hagan el favor de transformar al país. Y es lógico: los que tienen privilegios y oportunidades y se lucran del Estado deberían tener la iniciativa de cambiar las cosas. Lamentablemente esta época del Frente Nacional y lo que la género trajo como consecuencia el desplazamiento de millones de campesinos a las ciudades buscando escapar del terror y de la ruina, pero la historia se repitió nuevamente con la guerrilla, el paramilitarismo y como siempre la violencia en el campo trae más violencia, escases de alimentos en los principales ciudades.

Además, no contamos con un estado que asuma responsablemente sus obligaciones y que genere estrategias que mitiguen este desorden social, cuando se podría impedir con un poco de conciencia patriarca, de generosidad y de previsión.

Donde se le brinden igualdad de derechos, oportunidades económicas, acompañadas de principios morales, pero ante todo un buen ejemplo del estado, puesto que son el modelo a seguir y recordando siempre que todo proyecto histórico que pretenda erradicar los males sin conocer su

fuente está condenado al fracaso, es decir país que no conoce su historia tiende a repetirla y es lo que hemos vivido por décadas en Colombia. Pero, afortunadamente para las futuras generaciones se vislumbran nuevos horizontes ya que hay una nueva mentalidad en algunos jóvenes en el sistema educativo de generar campañas que fortalecen los principios éticos y morales, que incentivan la empresa, el emprendimiento, la crítica, la libertad de expresión, el respeto a los derechos y demás aspectos que integralmente benefician a un país tan rico en riquezas materiales como en su calidad humana. seguramente, con todos los problemas que trae consigo el país no se podría de cierta forma arreglar, puesto que después de tantos años de decadencia, de errores, del mal manejo, de guerras civiles, de corrupción, y el abandono frio con el que ha dejado el estado al pueblo colombiano, no es para nada sencillo componer lo que desde un principio debió ser como tal el concepto de Estado, que para estos días es totalmente tergiversado, desigual, conforme, y simplemente acomodado para los sectores más “fuertes” del País, esos que hacen las leyes casualmente para su beneficio. Finalmente, un gran paso para un cambio radical en el país es tener sentido de pertenencia por lo cual somos colombianos, tener iniciativa hacia el sentimiento de querer un mejor Estado, para los ancianos, jóvenes y niños; sentir seguridad por

parte del estado sin que acosta de eso la educación y la salud estén por el piso. El pensamiento inequívoco de que si se quiere una cosa, no se puede la otra, tiene que desaparecer del lenguaje colombiano y definitivamente habría un cambio cultural radical, donde se daría una iniciativa oportuna de tomar las riendas y forjar el cambio que se necesita. Ante la imposibilidad de reacción de los colombianos el autor solo cita el cómo en algún tiempo (corto o mediano plazo) en Colombia cada quien debe velar por que el estado cumpla con su labor y beneficie a cada uno de los habitantes de esta nación. Aunque se da un vistazo positivo sobre la situación de algunas personas en pro de desarrollar el proyecto nacional, no es claro como la mayoría de la población que no cuenta con la educación que maneja la mayoría de las personas citadas por el autor, puedan tener herramientas que promuevan un cambio. Un cambio radical que debe procurar el restablecimiento del estado como un verdadero estado democrático. Es un escrito no realista por lo cual, no pasa de ser un libro de cultura general una lectura ligera, no plantea soluciones basadas en hechos realmente relevantes para el país, por el contrario solo cita una y otra vez que la responsabilidad es de algunos pocos como la elite política; y de algunos muchos como el pueblo, pero nunca cita su autorreflexión sobre lo que sucede en el momento, en el momento de su escrito.