Informe de Panorama Productivo - Mayo 2020

Informe de Panorama Productivo Evolución de los principales indicadores de la actividad productiva Mayo 2020 Unidad Ga

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Informe de Panorama Productivo Evolución de los principales indicadores de la actividad productiva Mayo 2020

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RESUMEN EJECUTIVO

mayo 2020

El cisne negro que implicó la pandemia del coronavirus está generando en todo el planeta una crisis económica de magnitudes sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial. En Argentina, el impacto es severo en diversos sectores productivos. El inicio del brote de coronavirus en el país llegó en un momento en el cual existían señales de reactivación económica. El poder adquisitivo había comenzado a recuperarse, al crecer 5,5% en el primer bimestre del año, gracias a la desaceleración de la inflación (4,3% en el mismo período). A ello se le sumó la mejora en ingresos de hogares de bajos ingresos, a partir de aumentos de sumas fijas tanto en jubilaciones como en salarios, y a medidas como la Tarjeta Alimentar. Son estos factores los que explican por qué en febrero se registró, por primera vez en 20 meses, un alza simultánea en las ventas de supermercados, mayoristas y shoppings (+5,3%, +11,4% y +10,9% interanual respectivamente). También influyó en ello la muy buena temporada turística, en donde las pernoctaciones en el país crecieron 6,4% interanual (producto de que Argentina quedó relativamente barata en dólares, lo cual hizo caer el turismo emisivo). La mayor demanda interna también tuvo impactos positivos en la industria manufacturera, que entre noviembre y febrero acumuló un crecimiento del 3,9% en la serie desestacionalizada. La mejora en alimentos y bebidas -consecuencia de la mencionada recomposición en el poder adquisitivo de los hogares más vulnerables- explicó buena parte de tal mejora. De este modo, estas subas en la actividad comercial, industrial y turística se hicieron sentir en el empleo asalariado privado registrado, que en el primer bimestre se expandió en 7,2 mil puestos, después de haber caído sistemáticamente todos los meses desde abril de 2018. Hubo un sector que impidió que estas mejoras fueran de mayor magnitud. La construcción, que en el primer bimestre agudizó las caídas registradas en 2019 producto de la baja actividad en la obra pública, explicó buena parte de la baja en la actividad económica (que cayó 2,2% interanual en febrero, de acuerdo al EMAE). La construcción también tuvo un comportamiento a destiempo con el resto de los sectores productivos: los datos muestran que fue la única de las 14 ramas que contrajo el empleo formal en el primer bimestre del año. Los efectos económicos de la pandemia empezaron a sentirse con fuerza durante marzo en muchos países -entre ellos Argentina- y todavía más en abril. La mayoría de los países afectados impuso cuarentenas o restricciones a la movilidad de las personas, con repercusiones dramáticas sobre la producción y el empleo. En los últimos dos meses, las revisiones a la baja respecto a las previsiones de PIB en distintos países del mundo fueron constantes. El pronóstico más reciente de JP Morgan estima caídas del 7,1% anual para Europa y del 7,7% para Estados Unidos, con magnitudes inéditas para el segundo trimestre (-46,6% y -40% respectivamente); dos meses atrás esas previsiones hubieran sido consideradas como catastrofistas por la mayoría de los analistas. Para la región, la CEPAL estima una caída del 5,3%, solo comparables con 1914 o 1930. Por su parte, el FMI estimó una caída de la producción mundial del 3,0% para 2020, cifra sensiblemente más aguda que la de la crisis financiera de 2008-9 (-1,3%). En buena parte del mundo, las respuestas de ayuda por parte del Estado han sido moneda corriente. Argentina no es la excepción. En efecto, la asistencia que está brindando el Estado argentino en estos días es la mayor de la historia contemporánea en cuanto a la cantidad de personas que están recibiendo algún tipo de ayuda: hoy el 89% de la población argentina vive en un hogar en donde al menos una persona percibe un ingreso proveniente del Estado. A las erogaciones ya existentes (jubilaciones, pensiones, AUH o salarios por empleo público), deben sumarse nuevos instrumentos creados en las últimas semanas y que ayudan a explicar el mencionado guarismo. Entre ellos destacan por su magnitud el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), que tuvo más de 8 millones de beneficiarios en abril. Solo para poner en contexto, esta cantidad de personas es sensiblemente mayor a la de los principales programas de transferencia que tiene el Estado, tales como jubilaciones y pensiones (que tienen 5,7 millones de titulares únicos) y Asignación Universal por Hijo y Embarazo (que poseen 2,4 millones de titulares de derecho¹). El IFE está focalizado en quienes más lo necesitan: en el cuarto trimestre de 2019, la pobreza en hogares que hoy lo reciben estaba en el 56% (versus un 17% en los hogares que hoy no lo perciben²). Esto se debe a que los beneficiarios del IFE son personas adultas cuya inserción en el mercado laboral es de alta vulnerabilidad (asalariados informales, cuentapropistas de bajos ingresos, desocupados e inactivos). ¹ Es decir, madres o padres que perciben el beneficio por uno o más hijos. ² Estimaciones propias en base a microsimulaciones hechas con la Encuesta Permanente de Hogares de INDEC del cuarto trimestre 2019. INFORME DE PANORAMA PRODUCTIVO

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RESUMEN EJECUTIVO

Otro de los programas que sobresale y tiene escasos antecedentes en la historia argentina es la Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP). La ATP tiene dos grandes grupos de beneficiarios. Por un lado, los empleados formales del sector privado, que trabajan en empresas altamente afectadas por la pandemia. Por el otro, los monotributistas y autónomos que quedaron excluidos del IFE pero que registraron un recorte significativo en sus ingresos. En el primer caso, el Estado paga al trabajador parte de su salario; en el segundo, se compromete como garante de créditos a tasa cero (que recién se comenzarán a pagar en noviembre y en doce cuotas). El Fondo de Garantías (FOGAR) y el Fondo de Desarrollo Productivo (FONDEP) de este Ministerio son los instrumentos que permiten respectivamente la garantía y el subsidio de la tasa de interés a los trabajadores independientes. Hasta el momento, ya se aprobaron 316 mil créditos a trabajadores independientes por un monto de 36.333 millones de pesos. La ATP ya aprobó el pago de parte del salario de abril de 2,2 millones de asalariados que trabajan en 247.000 empresas. El carácter inédito de estas cifras se debe a la premisa de que es fundamental preservar tanto el bienestar de los trabajadores como el capital organizacional de las firmas, los cuales serán fundamentales para consolidar la recuperación de los próximos meses. Un dato relevante es que la asistencia al salario tiene un marcado carácter progresivo, es decir, tiene en cuenta el diferente grado de vulnerabilidad existente al interior de los trabajadores formales y las empresas, beneficiando más a los asalariados de menores ingresos y a las PyMEs. Esto ocurre porque el diseño de la ATP plantea cuatro situaciones distintas. En primer lugar, a quienes ganan neto menos de un salario mínimo vital y móvil (SMVM), el Estado le cubre el 100%. Aquí se encuentra aproximadamente el 15% de los beneficiarios de la ATP. En segundo orden, a quienes ganan entre uno y dos SMVM (entre $16.875 y $33.750) el Estado le asiste un SMVM. De este modo, en los asalariados cuya remuneración está levemente por encima de $16.875, la cobertura por parte del Estado es cercana al 100%, en tanto que en quienes se acercan a dos SMVM la cobertura es cercana al 50%. Aquí se encuentra alrededor del 28% de los beneficiarios de la ATP. En tercer lugar, a quienes ganan entre dos y cuatro SMVM (entre $33.750 y $67.500) el Estado le cubre exactamente el 50% del salario. Aproximadamente el 42% de los beneficiarios de la ATP se encuentra en esta situación. Por último, a quienes ganan más de $67.500 el Estado le cubre un máximo de dos SMVM ($33.750). De esta manera, mientras mayor sea el salario, el porcentaje cubierto por el Estado decrece. Alrededor del 15% de los asalariados beneficiarios de la ATP se encuentran en esta condición. Esto último implica que alrededor del 85% de los beneficiarios de la ATP tiene garantizada por lo menos la mitad de su salario. Este diseño, además de proteger más a los asalariados más vulnerables, tiene un impacto mayor en las PyMEs. La razón es que -al igual que en todo el mundo- en Argentina los salarios son menores cuanto más pequeña es una empresa; de este modo, la cobertura de la masa salarial por parte de la ATP es mayor en las empresas chicas. Por ejemplo, en las menores de 25 empleados, la ATP cubre en promedio el 70% del salario neto. En las de más de 800 empleados, esa cifra es del 50%. Al día de la fecha, casi el 99% de las empresas beneficiarias de la ATP tiene menos de 100 empleados. Más del 60% de los empleados beneficiados con la ATP está en empresas de este tamaño. Asimismo, el 57,3% de los desembolsos del Estado por la ATP está dirigido a estas firmas, un 26,8% a firmas de entre 100 y 800 empleados y un 15,9% a las más grandes (de más de 800 empleados). Empresas aprobadas en la ATP, según tamaño (en %) Tamaño

Empresas

Empleo

Monto ATP

Hasta 25 empleados

93,4

39,6

34,8

Entre 25 y 100 empleados

5,4

23,3

22,5

Entre 100 y 800 empleados

1,2

24,4

26,8

Más de 800 empleados

0,1

12,7

15,9

Total

100

100

100

Vale agregar que la asistencia al sector productivo también ha sido reforzada por otros instrumentos. Entre ellos, sobresalen los créditos al 24% para las empresas, de los cuales ya se otorgaron 157.000 millones (y otros 43.000 millones están en proceso de aprobación). El FOGAR garantizó 30.000 millones para que ello fuera posible.

Fuente: CEP XXI sobre la base de AFIP.

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El impacto del COVID-19 en la actividad productiva. La pandemia provocó que la actividad económica se contrajera de un modo inédito a partir del 20 de marzo, cuando comenzó el aislamiento social, preventivo y obligatorio. En marzo, la industria cayó 16,8% interanual, la mayor baja desde 2002. La construcción cayó 46,8%, la mayor caída desde por lo menos 1993. El empleo, de acuerdo a la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL), retrocedió 0,5% en ese mismo mes, la mayor contracción desde 2002. Los primeros datos de abril muestran caídas todavía mayores en sectores importantes (tales como autos, siderurgia, turismo, gastronomía, construcción y comercio), producto de que se trató del primer mes con cuarentena completa. Ahora bien, dentro de este escenario de marcada negatividad, hay heterogeneidades. Según datos de AFIP, en recreación y cultura (que incluye servicios ligados al esparcimiento, deportes y actividades culturales) y en hoteles y restaurantes, el 67% del sector registró caídas mayores al 30% real interanual en el período que va del 12-3 al 12-4. Este porcentaje oscila entre el 51 y el 57% en la industria, transporte y comercio. En estos tres casos, hay marcadas heterogeneidades internas: en el sector manufacturero, las ramas ligadas a bienes esenciales (como alimentos, medicamentos y productos de higiene personal y limpieza) tuvieron relativamente baja afectación, lo cual contrasta con lo que ha ocurrido en complejos como el automotriz, el metalmecánico, el siderúrgico o el de textil-indumentaria, entre otros. En el caso del transporte, las firmas que se dedican al transporte de bienes esenciales pudieron operar con relativa normalidad, en tanto que las que se dedican al transporte de pasajeros o de bienes no esenciales estuvieron muy afectadas. Algo similar ocurre con las empresas del rubro comercio: mientras que los supermercados incluso aumentaron su facturación en términos reales (alrededor del 12% de acuerdo a nuestras estimaciones preliminares, producto del stockeo preventivo, el cierre de restaurantes y el mayor tiempo que las personas pasan en los hogares), los comercios de bienes tales como electrodomésticos, electrónica, indumentaria o muebles (entre muchos otros) estuvieron profundamente afectados. La contracción de la actividad productiva incluso llegó a algunos rubros esenciales, como la venta de combustibles, que sufrió la gran caída en el uso del transporte propio. A la inversa, hubo sectores no exceptuados de la cuarentena que, gracias a sus posibilidades de teletrabajar, pudieron funcionar con mayor normalidad, como es el caso de software y diversos servicios profesionales, científicos y técnicos. .

FACTURACIÓN REAL Porcentaje de empresas del sector con caídas mayores al 30% interanual

Recreación y cultura

67%

Hoteles y restaurantes

67%

Industria

57%

Transporte y almacenamiento

55%

Comercio

51%

Construcción

46%

Serv. profesionales, científicos y técnicos

38%

Servicios inmobiliarios Salud y servicios sociales

36%

% de empresas con variación > -30% en su facturación real

29%

Información y comunicaciones

27%

Resto de sectores

27%

Fuente: CEP XXI sobre la base de AFIP. Los datos corresponden al período que va del 12/3 al 12/4. Los datos de empresas están ponderados por participación en el empleo.

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Todo indica que los cuarenta días comprendidos entre el 20 de marzo y fines de abril fueron el piso de la actividad económica y que en mayo gradualmente la producción se está reactivando. Diversos indicadores van en esa dirección. En primer lugar, durante las dos primeras semanas de la cuarentena el 43,1% de los asalariados formales del sector privado estuvo potencialmente habilitado para circular. Ello se explicó mayormente por las cadenas agroalimentarias, la producción de medicamentos y energía, el transporte de bienes esenciales y servicios tales como telecomunicaciones y salud. Con el correr de las semanas, nuevas actividades fueron incorporándose a las exceptuadas de la cuarentena, de modo que actualmente el 66,4% del empleo privado formal se encuentra potencialmente habilitado para trabajar en las empresas. Esta cifra es decididamente menor (52%) en el Área Metropolitana de Buenos Aires, que aún se encuentra en la fase 3 de la cuarentena, y mucho mayor en provincias como Corrientes, Chubut, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, Mendoza, Neuquén, Salta, San Juan y Tucumán, en donde supera el 80%. Un dato relevante es que un tercio de los asalariados formales privados exceptuados de la cuarentena son mujeres y dos tercios son varones³. Este porcentaje es el mismo que en situaciones de normalidad, lo cual indica que en el aislamiento se mantuvieron las desigualdades en la inserción laboral. Ello se debe a que el sector de salud altamente feminizado- compensó en parte a actividades esenciales de alta masculinización -como el complejo agroalimentario y el energético- que tienen mayor peso en el empleo. El camino hacia la normalización económica se visualiza en otros indicadores. Por ejemplo, la demanda de energía eléctrica en la industria también está mostrando una creciente reactivación. De acuerdo a CAMMESA, la demanda energética de las grandes firmas productoras de materiales para la construcción cayó 93,7% en la semana posterior al 20 de marzo. Hoy esa caída, comparada contra la semana previa a la cuarentena, es del -34,9%. En las grandes empresas productoras de papel y madera, la demanda energética -tras caer 37,2% en los primeros días de la cuarentena- está hoy en niveles similares a los de mediados de marzo. Las industrias metálicas también están teniendo mayor actividad respecto a la de fines de marzo: hoy demandan 46,1% menos que en la pre-cuarentena (cuando esa cifra era -80,9% en los días posteriores al 20 de marzo). Cifras similares se observan en las grandes firmas textiles (hoy -49,9% respecto a la precuarentena, cuando tras el 20 de marzo esa cifra era de -84%).

EVOLUCIÓN DEL EMPLEO EXCEPTUADO . Total nacional, empleo privado formal en las empresas en cantidad de trabajadores

4.300.000 4.100.000 3.900.000 3.700.000 3.500.000 3.300.000 3.100.000 2.900.000

Decreto 459/2020: Decisiones administrativas Decisión administrativa nuevas excepciones en 607/20, 622/20 y 625/20: Decisión 490/2020: incorpora talleres Habilitación de actividades de comercios, industrias y administrativa mecánicos y la venta online construcción obra privada en 9 provincias 450/2020: incluye de autopartes y libros 66,4% del total de sector forestal, Decisión administrativa los empleados maderero, corralones, Decisión 524/20: habilita locales de minería administrativa registrados Decisiones administrativas cobro de impuestos y 467/2020 y 729/20: Habilitación de servicios de seguros de 468/2020: comercios en Salta, y siniestros, en 21 provincias incorpora servicios actividades en Mendoza, y CABA notariales y obras General Pueyrredón y Santa Fe de energía

43,1% del total de los empleados registrados

2.700.000

20-mar 21-mar 22-mar 23-mar 24-mar 25-mar 26-mar 27-mar 28-mar 29-mar 30-mar 31-mar 01-abr 02-abr 03-abr 04-abr 05-abr 06-abr 07-abr 08-abr 09-abr 10-abr 11-abr 12-abr 13-abr 14-abr 15-abr 16-abr 17-abr 18-abr 19-abr 20-abr 21-abr 22-abr 23-abr 24-abr 25-abr 26-abr 27-abr 28-abr 29-abr 30-abr 01-may 02-may 03-may 04-may 05-may 06-may 07-may 08-may 09-may 10-may 11-may 12-may 13-may

2.500.000

Fuente: CEP XXI sobre la base de AFIP.

³

Estas cifras corresponden al empleo asalariado formal privado y no al total del empleo, en donde las mujeres explican el 44% del total del empleo (dato del cuarto trimestre de 2019 según la Encuesta Permanente de Hogares). Esta diferencia se explica porque las mujeres participan relativamente más en el empleo público (54% son mujeres, mayormente por educación y salud) y en el asalariado informal (49% son mujeres). Además de estar particularmente sobrerrepresentados en el empleo asalariado privado formal, los varones tienen mayor protagonismo entre los cuentapropistas (59%) y empleadores (70%).

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La dinámica inflacionaria. De acuerdo al INDEC, la inflación fue del 1,5% en abril, la menor desde noviembre de 2017. Se trató de un mes totalmente anómalo, con desafíos metodológicos y operativos a la hora de medir precios, los cuales están experimentando todos los institutos de estadística del mundo. Tales desafíos tienen que ver con la imposibilidad de hacer relevamientos presenciales (los cuales se están resolviendo con modalidades alternativas, como el relevamiento por Internet o por teléfono). Asimismo, hay precios que hoy no existen, pues las empresas estuvieron cerradas: es, por ejemplo, el caso de cines, teatros, transporte de larga distancia o comercios de bienes no esenciales. En efecto, el INDEC informó que el 23,6% de la canasta no pudo ser relevada. La inflación de abril estuvo mayormente impulsada por alimentos y bebidas, que treparon 3,2%, particularmente debido a estacionales como las verduras y las frutas. Un dato relevante es que se observó una heterogeneidad pocas veces vista entre regiones (en NOA los alimentos subieron 4,7% mientras que en Patagonia 0,4%), y que en parte tiene que ver con una asimetría muy marcada en el ritmo inflacionario de los supermercados vis à vis los comercios de proximidad. De acuerdo a la base de Precios Claros -que utiliza la Secretaría de Comercio Interior del Ministerio de Desarrollo Productivo, y que permite relevar diariamente precios online de unos 900 productos de alimentos, higiene y limpieza en supermercados-, la inflación de alimentos fue del 1% en abril. En particular, sobresale una clara tendencia a la desaceleración de precios a partir del 20 de marzo, la cual perdura hasta hoy. La razón de ello tiene que ver con la aplicación de Precios Máximos, que incitó a los comercios a retrotraer sus precios al 6 de marzo, con alto acatamiento en supermercados. ¿Por qué entonces se produjo tanta brecha regional en la inflación de alimentos? De acuerdo a la última Encuesta Nacional de Gasto de los Hogares (ENGHO-INDEC 2017-18), en Argentina el 30% del gasto en alimentos se realiza en supermercados. Sin embargo, esa cifra es del 53% en la Patagonia y del 15% en el NOA, en donde predominan más las tiendas de proximidad. Si la inflación de alimentos fue allí más alta, la principal razón entonces se debe a que el compromiso de retrotraer precios fue muy alto en las cadenas de supermercados y menor en el resto de los comercios.

INFLACIÓN DIARIA EN ALIMENTOS – PRECIOS CLAROS Media móvil 7 días - var. intradiaria, marzo 2020 a abril 2020 0,25%

Inicio del aislamiento obligatorio

0,20% 0,15% 0,10% 0,05% 0,00%

26/04/20

19/04/20

12/04/20

29/03/20

22/03/20

15/03/20

08/03/20

01/03/20

-0,10%

05/04/20

Impacto de “Precios Máximos”

-0,05%

Un virus para el que (aún) no tenemos defensas físicas ni económicas. La crisis está llevando al Estado a casi cada rincón de las economías del mundo, desde el sistema de salud al rescate de algunas industrias o la liquidez de los bancos centrales. Este momento apremiante exige reescribir las reglas de juego sobre cómo se fomentan sectores estratégicos para que las economías y sociedades sean más resistentes. Ello será impensable sin el rol protagónico de un Estado eficaz e inteligente, cuyo trabajo en conjunto con el sector privado será fundamental para crear soluciones científicas y tecnológicas que permitan garantizar la seguridad económica y sanitaria de sus habitantes y disminuir sosteniblemente la pobreza y la desigualdad.

Fuente: elaboración propia sobre la base de Dirección de Análisis y Evaluación de Mercados (Secretaría de Comercio Interior - Ministerio de Desarrollo Productivo), en base a Precios Claros.

INFORME DE PANORAMA PRODUCTIVO

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SEMÁFORO DE LA PRODUCCIÓN MEDICAMENTOS: De acuerdo a la consultora IQVIA, las ventas de medicamentos se dispararon 21,8% interanual en marzo. CARNE VACUNA: tras crecer 2,4% en el primer trimestre, en marzo la faena y la producción aumentaron 5,0% y 3,4% interanual respectivamente. Por su parte, las exportaciones lo hicieron en 7,8% (en especial por demanda china). GALLETITAS, PASTAS Y PANIFICADOS: aumentó 6,5% en el primer trimestre, y fue de las pocas ramas industriales que creció en marzo (+3,8%) por tratarse de alimentos esenciales posibles de stockear en el contexto de cuarentena. AGROQUÍMICOS: creció 7,0% interanual en el primer trimestre, y 11,3% en marzo. La cuarentena tiene un impacto acotado ya que la actividad agropecuaria funcionó con mayor normalidad que el resto de los sectores productivos. REFINACIÓN DE PETRÓLEO: si bien se mantuvo estable en el primer trimestre del año (+0,3%), cayó en marzo (-9,8%) debido a que, con el inicio de la cuarentena, la actividad se vio perjudicada por la fuerte baja en el consumo de naftas. QUÍMICOS: tuvo una leve baja en el primer trimestre (-0,5%), y marzo registró una más pronunciada (-4,0%) con heterogeneidad en el sector por la cuarentena. La química básica, pinturas y otras sustancias transversales a la industria retroceden con mayor fuerza, mientras que medicamentos, alcohol en gel y agroquímicos permitieron atenuar las caídas del complejo. VINOS: aumentó 20,5% en el primer trimestre; el crecimiento de marzo (+7,4%) respondió a las mayores exportaciones debido a que los despachos al mercado interno cayeron. Sin embargo, la facturación declarada del sector cayó 37% interanual (en términos reales) en el período que va del 12/3 al 12/4. SIDERURGIA: en abril cayó 74,6%, de acuerdo a la Cámara Argentina del Acero. Algunos productos que abastecen a actividades esenciales (envases para alimentos y aerosoles, chapa para hospitales modulares, tubos para exportación, tubos para garrafas de oxígeno y alambre especial) permitieron que la caída no fuera mayor. ALUMINIO: acumuló una baja de 7,7% en el primer trimestre del año. En marzo, el retroceso fue del 11,9%. Tras el inicio de la cuarentena, el sector ha estado funcionando al 50% de su capacidad. AUTOMOTRIZ: Por la cuarentena, el sector no tuvo producción en abril (-100% interanual). Acumula una caída del 38,3% en el primer trimestre, según ADEFA. MINERALES NO METÁLICOS: con una baja de 21,7% en el primer trimestre, la crisis sectorial se aceleró por el coronavirus y en marzo el retroceso fue de 40,7% i.a.. De acuerdo a datos anticipados, el consumo de cemento cayó 55,2% interanual en abril y según el Grupo Construya, la venta de materiales para la construcción se contrajo 74,3%. MAQUINARIA Y EQUIPO: con la pronunciada baja de marzo (-24,7%), el primer trimestre cerró estable (+0,4%). La facturación declarada del sector se contrajo 59,1% real interanual en el período que va del 12/3 al 12/4. MOLIENDA DE OLEAGINOSAS: registró un retroceso de 3,9% interanual en el primer trimestre, acelerado por la baja de marzo (-7,2%) por la menor producción de aceites y subproductos de soja y girasol ante la baja de la demanda externa. PRODUCTOS TEXTILES: el sector cayó 14,9% i.a en el primer trimestre. En marzo tuvo una profunda baja (-29,6%) debido a que se encuentra altamente afectado por la pandemia, con la mayoría de las empresas del sector con facturación interanual negativa incluso en términos nominales. Datos de CAMMESA muestran reactivación en mayo en las grandes firmas del sector. OTROS ALIMENTOS: la producción de frutas, hortalizas y legumbres cayó en el primer trimestre (-15,2%) con una baja acentuada en marzo (-19,4%). Esto último respondió a las menores ventas internas de vegetales congelados de bares y restaurantes ante el aislamiento obligatorio por el coronavirus. Algo similar ocurrió con la producción de café. NOCHES DE ALOJAMIENTOS EN HOTELES: luego de crecer 6,5% interanual en el primer bimestre, el sector hotelero se encuentra paralizado por el coronavirus. La facturación real se contrajo 75% interanual a partir del 12 de marzo. Nota: todas las variaciones son interanuales. INFORME DE PANORAMA PRODUCTIVO

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SEMÁFORO DE LA ECONOMÍA REAL

ACTIVIDAD ECONÓMICA Por la construcción, en febrero la actividad económica retrocedió 2,2% frente al mismo mes de 2019, acentuando la caída del mes anterior. En la medición mensual, cayó 1,1% y promedió, durante el primer bimestre de 2020, una baja de 2,0% interanual. Para marzo, se espera que la actividad haya acelerado su caída, producto del inicio de la cuarentena. En marzo, la industria cayó 16,8% interanual, su peor baja desde 2002. Este desempeño fue consecuencia de los efectos de la pandemia en el país. Todos los sectores cayeron frente al año anterior; alimentos y bebidas (-2,0%) y químicos (-4,0%) tuvieron las menores bajas, por tratarse de productos esenciales.

INVERSIÓN La construcción cayó 46,8% interanual en marzo, mes en que comenzó la cuarentena. Se trata de la caída más profunda desde por lo menos 1993. La mayor parte de esa contracción se explica por el bajo dinamismo de la obra pública. Datos privados de abril muestran un agravamiento de la situación: de acuerdo al Grupo Construya, la venta de materiales para la construcción se contrajo 74,3% interanual. Las importaciones de bienes de capital cayeron 24,8% en marzo con respecto al mismo mes de 2019 y acumularon en el primer trimestre de 2020 una baja del 21,2%.

SECTOR EXTERNO El saldo comercial fue positivo en marzo, alcanzando más de un año y medio de superávit, desde septiembre de 2018. Al igual que sucedió en el mes anterior, el superávit se debió a una baja mayor de importaciones que de exportaciones. En marzo el saldo fue de US$ 1.145 millones y acumuló el primer trimestre un superávit de US$ 3.297 millones. Las ventas de productos primarios cayeron 1,7% en marzo, explicado principalmente por la caída de los precios (-1,9%), mientras que las cantidades se mantuvieron estables (+0,2%). La caída respondió a las menores ventas de cereales (-1,3%) y pescados (-17,4%). De todas maneras, en el acumulado, los productos primarios crecieron un 8,1% siendo el único rubro que registra crecimiento. Las exportaciones totales cayeron en marzo 15,9% interanual, mayormente por un efecto cantidad (-14,4%), y en menor medida por precio (-1,7%). El desempeño es resultado de la baja en los envíos hacia países que en marzo comenzaron a sentir con más fuerza el brote de coronavirus, como los envíos a los países del NAFTA (-46%), Brasil (-16%) y países de UE (-13%). En el acumulado de 2019 las exportaciones cayeron 6,8% (en valores). Las exportaciones de manufacturas agropecuarias (MOA) cayeron 18,2% i.a. y alcanzaron el valor más bajo de marzo, desde 2010. La baja se explica por la caída en derivados de la soja (aceite, harina y pellets), aceite de girasol, maní preparado y lanas. La contracción de la demanda de la UE explica buena parte de la caída. Las ventas externas de manufacturas industriales (MOI) retrocedieron 20,5% en marzo, con la baja en las cantidades más pronunciada desde 2016. Brasil explicó principalmente el desempeño por la caída en las exportaciones de la industria automotriz. Las importaciones retrocedieron 19,7% en marzo, especialmente por una baja en las cantidades. Todos los usos económicos retrocedieron, destacándose vehículos (-31,8%), y combustibles y lubricantes (-27,6%).

EMPLEO Y CONSUMO Las ventas de supermercados, mayoristas y shoppings crecieron en febrero de forma simultánea por primera vez en 20 meses. Las variaciones interanuales de 5,3%, 11,4%, y 10,9% respectivamente, afianzaron las mejores tendencias registradas desde mediados de 2019. Estos resultados se explican por la mejora en el poder adquisitivo de asalariados privados, la baja base de comparación y el año bisiesto (que alargó el mes un 3,5% frente a febrero de 2019). Por la caída de precios regulados, la inflación minorista se desaceleró al 1,5% en abril, la menor desde noviembre de 2017. En alimentos fue del 3,2%, producto de alzas en frescos y en tiendas de proximidad. En supermercados, la inflación de alimentos fue del 1% de acuerdo a la base de Precios Claros. El dato adelantado de abril de ventas minoristas (CAME) da cuenta de una pronunciada caída en comercios PyMEs (-57,6%), que también se extendió a los shoppings, ya que tuvieron que permanecer medio mes completamente cerrados. Por el contrario, la facturación en supermercados se incrementó a partir del 12 de marzo, producto del stockeo de los hogares y del mayor consumo de alimentos al interior del hogar en el marco de la cuarentena. En el último mes sin aislamiento, el empleo asalariado privado creció 0,2% frente a enero en la medición sin estacionalidad (primera vez en 2 años); también desaceleró su baja interanual (-2,3% en febrero desde -2,5% en enero). Con la cuarentena, la EIL arroja una caída de 0,5% mensual del empleo (la peor para un mes de marzo desde 2002). El 66,4% del empleo asalariado registrado privado se encuentra hoy en sectores exceptuados de la cuarentena. A fines de marzo, dicha cifra era del 43%. El salario real cayó 2,5% interanual en febrero, la menor baja en casi dos años. En tanto creció 5,5% entre diciembre y febrero, producto de la desaceleración de la inflación y por bonos a cuenta de paritarias. INFORME DE PANORAMA PRODUCTIVO

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Unidad Gabinete de Asesores

AUTORIDADES Presidente de la Nación Dr. Alberto Fernández

Vicepresidenta de la Nación Dra. Cristina Fernández de Kirchner

Jefe de Gabinete de Ministros Lic. Santiago Cafiero

Ministro de Desarrollo Productivo Dr. Matías Kulfas

Director del Centro de Estudios para la Producción XXI (CEP-XXI) Dr. Daniel Schteingart

INFORME DE PANORAMA PRODUCTIVO

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