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INDUMENTARIA SIGLO XIX hasta1910

Siglo XIX Los hombres chisperos visten calzones con faja de seda y chaquetilla de alamares, las clases elevadas llevan frac con hombreras anchas y cuello vuelto. Calzones ceñidos o pantalones. Chaleco y corbatín o corbatas anchas. Redingotes. En 1840 el frac es ajustado y con faldones mas estrechos; el pantalón tiene trabilla, usándose levita con amplios faldones. El chaleco es corto y la corbata grande. Esclavinas. Del siglo XIX son propios el frac, la levita y el pantalón, para los caballeros, Los hombres chisperos visten calzones con faja de seda y chaquetilla de alamares además de otras prendas, Pelo se lleva rizado y largo, bigotes, patillas y perillas. Sombreros con capa alta. Zapatos con punta estrecha, que luego se ensancha. El primer tercio del siglo, la mujer sigue llevando los trajes con ligeras modificaciones. Añadiéndose en España a las modas francesas blondas y mantillas. En 1830 se almidona y ahueca la falda, baja el talle, vuelve el corsé y las mangas se acortan y se abullonan. A mediados del siglo reaparece el miriñaque de crinolina, con volantes y se usa polizón abultado por detrás y corpiño ajustado. Peinado en bandos con trenzas y rizos, con moño alto y tirabuzones que luego se substituyen por bandos con tirabuzones y moño. Cofias de terciopelo, sombreros pequeños y pamelas, con bridas de cintas. Zapatos descotados con un cruzado de cintas.

PRENDAS MASCULINAS Traje Frac •

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Chaqueta. Es negra con añadidos de seda y lleva la característica cola de la que deriva el nombre de los países anglosajones tailcoat - abrigo con cola - o tails. Por delante, la chaqueta es sin embargo más bien corta y presenta el exterior dos filas de botones (tres en cada una, no más) puestas oblicuamente por meras razones ornamentales. La chaqueta no está perfecta si no la acompaña el detalle blanco del pañuelo de bolsillo de seda y del extremo de los bolsillos de la camisa que deben estar siempre visibles. Pantalones. Son negros sin dobles ni solapas y se distinguen de los del smoking por la presencia de dos galones más que uno. Los galones son bandas de raso de algunos milímetros de ancho que discurrena lo largo de la pernera del pantalon en toda su extensión. Chaleco. Absolutamente obligatorio, es de piqué marfil salvo para las recepciones que se desarrollan en el Vaticano durante las cuales se requiere el chaleco negro. Camisa. Es blanca y habitualmente con el cuello diplomático, es decir vuelto en lo alto y con las puntas plegadas hacia el exterior. Los bolsillos son simples (a diferencia del smoking) y cerrados por gemelos. Pajarita. Es de piqué blanco como el chaleco y es una de las características principales del frac. El color blanco de la pajarita se mantiene también en el Vaticano. Zapatos. Normalmente negros, están difundidos los pump, zapatos de baile con lazos salientes al estilo del siglo XVIII.

La levita Tipo de traje de vestir de hombre utilizado principalmente en el siglo XIX generalmente de largo a las rodillas.

PRENDAS FEMENINAS Comenzaremos la descripción de las distintas piezas que componen la indumentaria femenina por lo que actualmente se conoce como ropa interior. Seguiremos con lo que es el traje propiamente dicho y finalizaremos con los distintos complementos que se utilizan a modo de adorno. 1. ‘Camisa’: Es la pieza de ropa más interior. Suele ser una pieza que vestía la mujer durante todo el dia. La camisa podía estar hecha de muy distintos tejidos, confeccionada siempre en una sola pieza con una abertura (‘coret’) para introducir la cabeza, y solía llegar más abajo de la rodilla. Las mangas suelen estar realizadas con telas mas vistosas e incluso puntillas ya que en ocasiones podían sacarse por fuera para la ornamentación exterior. También puede ser rico en bordados el escote, que coincidía con el escote del ‘gipo’.

2. ‘Chambra’: Es una camisa utilizada a finales del XIX que servia como pieza interior al corsé, de medidas reducidas, tanto en longitud como en anchura, con el cuello totalmente cerrado, y muy adornada ya que el remate permanece como pieza exterior. 3. ‘Calces’: Son las medias. Son una pieza fundamental para la protección contra el frío de las piernas. Podían estar hechas de muy distintos materiales, según su uso. Algodón o lana para uso diario, e hilo o sedas para días especiales. Para sujetarlas a la pierna se utilizaban unas cintas anudadas alrededor de la pierna, denominadas ‘lligacames’. Las medias eran tejidas manualmente formando distintos dibujos, e incluso bordándolas una vez tejidas con hilos de oro y plata. 4. ‘Sabates’: Inicialmente la mujer no utilizaba zapatos para realizar las tareas del campo. Solamente utilizaban zuecos (‘socs’), zapatillas de esparto (‘espardenyes’) o albarcas (‘albarques’). Los zapatos no tenían inicialmente forma de pie derecho o izquierdo, además solían ser planos, y si llevaban tacón, este tenía una altura de 3 o 4 dedos solamente. 5. ‘Sinagües’: Son las enaguas. Se colocan directamente sobre la camisa, y nunca se usan menos de dos a la vez, y han llegado a llevarse hasta ocho en ocasiones muy especiales. Permiten dar vuelo a la falda que se colocara sobre ellas, y van más adornadas cuanto más exteriores son. Su longitud iba en función de la moda del momento, y siempre iban bien guarnecidas en la parte más inferior para aumentar el vuelo. 6. ‘Calçons’: Son conocidos vulgarmente como pololos. Aparecen en los siglos XIX-XX, confeccionados sobre todo con telas finas de algodón, hilo e incluso seda. 7. ‘Brials’: Son faldas de uso interior o exterior, realizadas con lanilla o algodón de distintos colores. Guardan la misma estructura que las enaguas, e incluso podían ser estampadas. Finalmente quedaron como faldas de uso diario para realizar los trabajos domésticos. 8. ‘Sayes’: Son otra clase de enagua confeccionada con lana, paño o bayeta y que también se conoce como "Refajo" o "Sayas". Son normalmente de uso exterior, aunque perfectamente podría colocarse la falda o ‘guardapeus’ sobre ellas. 9. ‘Guardapeus’: Son las faldas confeccionadas en seda, con la misma estructura que las enaguas en el modo en que se anudan a la cintura, y normalmente realizadas con colores lisos, predominando sobre todos el azul. Se utilizan como tejidos, el tafetán, etc.. y como no los damascos con grandes motivos florales, frutas, etc.., y los espolines como ‘guardapeus’ de gran lujo y de síntoma de bienestar social. Cuando la calidad era extraordinaria y estaba confeccionado con la misma tela que el ‘gipo’ (corpiño) recibía el nombre de ‘basquinya’, haciendo un traje completo, que en el siglo XIX quedará como nombre para las faldas polisonadas, confeccionadas en seda. En las grandes ocasiones, estos ‘guardapeus’ o ‘basquinyes’, solían ser oscuros y se guarnecían bien para dar sensación de grandiosidad. 10. ‘Sagaleco’: Este es el nombre que recibían las faldas realizadas con algodón y que se ajustaban totalmente al ‘guardapeus’. 11. ‘Cossos’: Este nombre engloba el conjunto de piezas que se utilizan para cubrir, sujetar y ensalzar el tronco de la mujer valenciana. Podemos encontrar: ‘Cosset’,

‘Justet’, ‘Corset’, etc...: Es la pieza que cubre desde la cintura hasta los hombros, dejando los brazos totalmente libres, con lo que se lucen las mangas de las camisas. En la parte inferior aparecen unos adornos en forma de volantes o plisados. Los escotes son cuadrados normalmente y llegan hasta la mitad del pecho. 12. ‘Armilla’: Consiste en una especie de ‘gipo’ (corpiño), sin mangas, ajustado al cuerpo entre la camisa y el corpiño en sí. En invierno llevaba manga larga y estaba hecho con telas fuertes con el fin de proteger del frío.

13. ‘Gipons’: Son corpiños que llevan mangas, bien largas o bien cortas, llevando distintas piezas de decoración sobrepuestas. Las mangas eran muy estrechas y con la forma del brazo en reposo. Están realizados con distintas telas y colores, diferenciando las zonas de las ballenas del resto de la pieza. Los materiales mas cálidos se reservan para los corpiños de manga larga. 14. ‘Devantal’: El delantal se coloca en la parte delantera y se utiliza para proteger el ‘guardapeus’, ‘brial’, ‘sayes’, etc... Se confecciona en distintos tejidos, dependiendo del uso que vaya a hacerse de él: para trabajar, o para lucirlo. Los más utilizados son el hilo, el algodón, la seda o la lana. El bordado más tradicional del pueblo valenciano es el de punto de cadeneta, que puede ser del mismo color que el delantal, o bien de distintos colores combinados o lisos, e incluso hilo de oro o plata. 15. ‘Mocador de Coll’: Es la actualmente denominada ‘manteleta’, que cubre los hombros, siendo sus formas más habituales la cuadrada y la triangular. Es una pieza fundamental que llevara siempre puesta toda mujer que se precie, dejando sólo de utilizarla las mujeres de reputación dudosa. Se cruzaba sobre el pecho y se anudaba en la cintura. Normalmente los dibujos que lleva bordados coinciden con los del delantal. En las grandes ocasiones también se lucían Mantones de Manila sobre los hombros, dejando para los días normales mantones de algodón estampado y tejidos de lana para los días de frío. 16 .‘Joyes’:

se utiliza

’L’agulla’: Es una pieza de uso diario, que para construir el moño.

siglo XIX cuando llamados

‘Arracades’: Son los pendientes. Es en el cuando empiezan a utilizarse las perlas y surgen los más utilizadas actualmente, los de racimo de uvas.

‘Joya’: Es de después

una pieza que se ajusta al cuello por medio cintas. Inicialmente era una cruz, y fueron surgiendo colgantes más elaborados.

‘Pinta’: Solía

Es la peineta. Es la pieza más preciada. cincelarse en latón o plata sobre dorado.

17. grandes

Piezas de abrigo: Sobre todo se utilizaban mantones y pañuelos de lana.

18. ‘Mantellines’: Son las mantillas que han utilizado las mujeres siempre para cubrirse la cabeza. Reciben distintos nombres dependiendo de los tejidos con que han sido confeccionados: ‘Mija Lluna’, que es la más utilizada a lo largo de la historia, y confeccionada con pana, paño, tul, seda, hasta el terciopelo más gordo. ‘Dengue’, en blanco o negro, bordados o decorados con cinta. ‘Mantellina de Tovalla’, recordando a las antiguas toallas que se utilizaban para la limpieza personal, eran mas amplias que las anteriores y muy largas. ‘Terno’, es la más moderna que se encuentra, y mezcla un poco las características de todas las anteriores. ’Mantellines de Blonda’, Son piezas rectangulares de mayor o menor tamaño confeccionadas con blonda y otros tipos de encaje.

SIGLO XX (1990-1910)

La Primera Guerra Mundial desmanteló los antiguos sistemas y valores sociales que habían empezado a resquebrajarse a finales del siglo XIX. La vida social cambió y por ende su visión global al acelerar los cambios en varios aspectos de la sociedad y cultura. .......El nacimiento de una clase media dio pie a un nuevo estilo de vida, y a medida que las mujeres salían del hogar para participar en el mundo con estudios superiores y funcionales, decidieron liberarse del corsé y buscaron prendas más prácticas.

Los diseñadores de moda y los artistas pusieron grandes esfuerzos en crear nuevos tipos de vestimenta. Para las mujeres de ese período que tenían una vida activa, el atuendo diario fue alcanzando gran funcionalidad con los trajes sastre. La moda del siglo XX evolucionó a partir de una forma encorsetada y artificial a una más natural apoyada por el sujetador. .......Hacia principios de siglo surgieron los medios de comunicación necesarios para difundir las noticias sobre moda, y su campo de influencia se expandió rápidamente. Las revistas como Vogue y la Gazette du Bon Ton

establecieron un sistema para informar al mundo de los nuevos avances de la moda. .......Las ilustraciones jugaron un papel muy importante en estas revistas, un buen número de artistas como Paul Iribe y Georges Lepape, hicieron que este período fuera considerado como la época dorada de la ilustración de moda. En 1910 se fundó la Cámara Sindical de la Costura Parisina, cuyo objetivo era controlar la programación de colecciones y evitar la proliferación de mercancías no autorizadas y de imitación. París establecía las bases de un sistema que le permitía conservar su hegemonía como centro de la moda Hacia el año 1910 la vestimenta femenina abandonó la austeridad característica de fines del siglo anterior y se hizo más suntuosa. Volvieron las telas como el terciopelo, el brocado, las sedas brillantes, los encajes y los bordados, La falda, ya sin miriñaque, se recogía con pliegues que le daban un movimiento particular La chaqueta de brocado llegaba hasta la cintura y tenía adornos de piel de zorro blanco en el cuello, en los puños o en manguitos para abrigar las manos. Los sombreros tenían gran importancia en la indumentaria. Por lo general eran de ala ancha: en invierno, de fieltro o terciopelo con adornos de pieles y plumas: en verano, de paja con flores, pequeñas frutas de tela y tul. El accesorio más común era el bolso y se confeccionaba de terciopelo o de raso bordado con piedras o perlas. El calzado era, por lo general, de raso o de gamuza con tacones altos.