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Jorge Ruiz Sáez A01212169 Teorías Avanzadas de Diseño El consumismo, un problema de la evolución humana. El consumismo es y siempre ha sido un acto irresponsable y sobre todo dañino para el equilibrio ecológico en su totalidad, ya que actualmente existen muchos problemas que se relacionan con el excesivo consumo y explotación de recursos naturales que ocurre a nivel mundial y así mismo esta presente el problema contaminante que existe en la gran mayoría de los procesos de producción. La palabra consumismo es un término que se utiliza para describir los efectos de igualar la felicidad personal a la compra de bienes y servicios o al consumo en general. De otra manera podemos decir que “cuanto más consumes, más feliz eres.” De esta manera caprichosa de vivir podemos observar que el consumo desmedido de bienes y servicios en una sociedad que busca aceptación mediante el materialismo, impacta en los recursos naturales y el equilibrio ecológico. Un ejemplo bastante interesante acerca de los recursos naturales “necesarios” para vivir en la sociedad actual que evoluciona rápidamente y busca satisfacer y lograr la comodidad extrema del ser humano es que si todos las personas del mundo consumiéramos los mismos recursos que la sociedad estadounidense, requeriríamos dos planetas más iguales a la Tierra para sustentar nuestras necesidades. Los principales problemas que acarrea el consumismo hoy en día son: A nivel regional: la preferencia de productos innecesarios o fácilmente sustituibles de una población que son producidos en otra región ayuda a desequilibrar la balanza comercial entre ellas. A nivel social: Muchas veces ayudamos a la mala distribución de la riqueza, ya que los consumidores son por lo general de un nivel socioeconómico inferior que los dueños de las compañías generadoras de los productos objetos de consumismo y así mismo la basura que se origina es de gran importancia. A nivel familiar: Al ser consumistas aumentamos nuestros gastos de manera innecesaria comprando cosas que pudiéramos evitar o reducir como productos cuya publicidad promete milagros, productos de vida útil baja o productos sustitutos de otros naturales. A nivel personal: Diversas opciones consumistas son menos saludables que las que no lo son. Por ejemplo, en lugar de comprar un jugo de naranja empaquetado que además de contener conservantes, viene

con envases que acaban en la basura inorgánica podríamos comprar naranjas y hacerlo de manera natural y saludable. A nivel cultural: Las expresiones culturales como trasmisores de sentido y valores se modifican de tal manera que hoy el joven de la generación que se está formando, es preparado para consumir y no para ser una persona independiente y crítica. Existen varios indicadores de consumismo que nos ayudan a no caer en éste, algunos indicadores son: Un producto se utiliza una sola vez o un pequeño número de veces respecto a uno similar que podría durar mucho más. La cantidad de basura inorgánica que generamos es notablemente superior a la cantidad de basura orgánica. Cuando el dinero domina a las personas, la ciudad se convierte en un gran mercado y sus habitantes en seres productores y consumidores. Querer tener más y ser más grandes que los otros en lugar de preocuparnos por el bien común. Las acciones que pueden reducir el consumismo a nivel doméstico y personal son considerar diversas causas en un producto antes de su adquisición, cuál es su impacto en la salud, en el ecosistema y en la economía local y personal. También debemos pensar en el motivo que hace requerirlo, si es una necesidad concreta o creada artificialmente por medio de la publicidad o la moda. Y por supuesto para reducir el consumismo en el planeta los diseñadores debemos relacionarnos cada día más con la naturaleza ya que al notar hechos concretos como el cambio climático hace que nos paremos a pensar y se nos cree una conciencia un poco más sostenible con la naturaleza, que es, a fin de cuentas de quien vivimos y de donde procedemos. Debido a esto el diseñador debe pensar verde, debe fundamentarse en el ecodiseño para entender e incorporar dicho pensamiento de cuidado medioambiental en el diseño de productos con objeto de reducir su eventual impacto negativo en el medio ambiente a lo largo de todo su ciclo de vida. Últimamente hemos entrado en una fase en la que el reciclaje es bastante importante para casi todos debido a que se ha difundido dicha responsabilidad por los medios de comunicación, de esta manera se ha logrado que la gente se concientice debido a que el pensamiento en muchas personas ha cambiado para bien y el que no, lo imita por encajar.