Caso de Emprendimiento

Fundación Universidad del Norte Caso de Emprendimiento: Juan Pablo González Pérez Presentado por: Stephania Caro Gabri

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Fundación Universidad del Norte

Caso de Emprendimiento: Juan Pablo González Pérez

Presentado por: Stephania Caro Gabriella Jaramillo Daniela Moya Laura Villarreal

Presentado a: Prof. Eduardo Gómez Araujo

Desarrollo del Espíritu Emprendedor Administración de Empresas Escuela de Negocios Barranquilla, Febrero 24 de 2017 1. Información personal

Nombre: Juan Pablo González Pérez Genero: Masculino Fecha de Nacimiento: 12 de Abril de 1972 Grado de formación académica: Formación universitaria Año en que concluyó sus estudios más recientes: 1995 1.1 Datos de la empresa Nombre: GUIAR S.A.S Año de creación: 2003 Sector: Inversiones/Arquitectura Número de trabajadores: 300 aprox.

JUAN PABLO GONZALEZ PEREZ Un emprendedor de provincia Características y perfil del emprendedor Juan Pablo González Pérez nació en Socorro, Santander el 12 de Abril de 1972 en un hogar conformado por su madre, padre (Q.E.P.D) y hermano. Se refiere a su familia como personas humildes, luchadoras y trabajadoras. Además, menciona que gracias a su familia cuenta con valores éticos y morales bien fundamentados. De tal forma que para Juan Pablo el trabajo siempre fue visible, una actividad de todos los días. Al terminar sus estudios escolares, decidió ingresar a la universidad en el año 1990 con apoyo de su padre, para estudiar lo que siempre quiso: Arquitectura. Juan Pablo es graduado de la carrera de arquitectura de la Universidad de Santo Tomas de Bucaramanga. En el año 1995 se graduó e inició su vida laboral con su padrino, quien tenía obras de construcción y desde ese momento no ha dejado de trabajar un solo día. Su primer trabajo fue como almacenista, luego ascendió a residente de obra y por último director de obra. En la empresa valoraron mucho su trabajo ya que produjo más de lo que le pedían y por consiguiente le aumentaron el sueldo. Además, su jefe le propuso darle un porcentaje de las

ganancias. Sin embargo, Juan Pablo no estaba ahí por el dinero, su objetivo era aprender y ganar experiencia en el campo laboral. En el año 2001, cuando prácticamente se encontraba en lo más alto en cuanto a su trabajo, decide retirarse. Hubo quienes cuestionaron su decisión y trataron de persuadirlo, sin embargo su respuesta era clara: quería ser independiente. No quería trabajar para nadie. Tal como el menciona, renunció a muchos millones de pesos, que en caso de haber querido ser trabajador toda su vida, habría sido exitoso. Desde el 2001 hasta el 2003, Juan Pablo trabajó como independiente, realizando obras a diferentes constructoras. Incluso a su anterior lugar de trabajo, pero esta vez como contratista. Así ahorro hasta tener suficientes recursos como para realizar una inversión. Juan Pablo se considera un empresario normal, con pasión y amor por lo que hace. No es una persona ostentosa ni ambiciosa, simplemente trabajadora. A este arquitecto le gusta proponer, innovar, salirse de su zona de confort y no caer en un estereotipo, es por eso que sus obras siempre marcan la diferencia. Definitivamente, no se considera ``uno del montón´´. Para González Pérez el miedo es un fantasma necesario que aunque algunas veces no le permite a las personas avanzar, es lo que hace ser precavidos a la hora de tomar decisiones, ya que mantiene alerta. De ahí parte su premisa de que el éxito de su empresa se debe a que desde los inicios evalúa los riesgos, y sabe cuáles vales la penar correr y cuáles no.

Visualización (Idea de negocio) El arquitecto Juan P. González desde muy pequeño vio a sus padres trabajar por el bienestar de su hogar. El mayor legado que su padre le pudo dejar es el espíritu de emprendimiento, las ganas de salir adelante y ser su propio jefe. De tal forma, para él la familia ha sido un factor fundamental, un pilar y un apoyo desde siempre. Teniendo tal influencia, que puede ser un alentador o un destructor de sueños.

A los 13 años aproximadamente, se encontraba compartiendo con los amigos de su padre y uno de estos lanzo una idea. Dijo que Juan Pablo debía estudiar Ingeniería de petróleos porque ese era el futuro del país. Juan Pablo, quien siempre tuvo claro desde pequeño lo que quería, sabía que esa no era su carrera ya que nunca iba a ser dueño de un pozo petrolero. Incluso su padre en ese momento menciono que no le recomendaría ninguna carrera, pero si una donde fuera su propio jefe, donde no tuviera ``perro que le ladre´´. En ese momento nacen las ganas de estudiar arquitectura y tener su propia firma de arquitectos. En el año 2003, cuando Juan Pablo se encontraba haciendo algunas obras a diferentes constructoras, uno de los dueños se le acerco para pedirle que fuera jefe de un proyecto que lanzarían en ese momento. Juan Pablo, quien se caracteriza por ser arriesgado, le dijo que por qué jefe, que si no podía ser socio. En ese momento, se crea la primera sociedad de la que el arquitecto hizo parte.

Estrategias y acciones realizadas para aprovechar la oportunidad En el año 2003 empezó una nueva etapa para el joven arquitecto, ya era su propio jefe. Sin embargo, esto no era suficiente. Cualquier emprendedor que quiera poner en marcha su proyecto, debe idear algunas estrategias que le permitan guiarse por el camino indicado, con el fin de llegar al objetivo que se ha propuesto. Juan Pablo no fue la excepción, de hecho, tenía claro que emprender sin experiencia es un acto valiente, que se debe alabar. Sin embargo, es un camino doloroso, con muchas piedras y huecos en el camino. Por esa razón, primero se dedicó a trabajar para adquirir experiencia y escaló rápidamente en esa empresa. Luego, ahorró realizando trabajos independientes hasta que pudo ser socio de un proyecto, como se ha mencionado anteriormente. Las principal estrategia de este admirable emprendedor fue mantener siempre a flote tres actitudes que son imprescindibles a la hora de tomar el camino del emprendimiento. Debido a

que el tenía claro que no todos los emprendedores logran ser exitosos porque se rinden en la mitad del camino o porque su idea no es captada por la sociedad. En Juan Pablo se destaca la determinación, para saber de donde se viene y hacia donde se va. Él tenía claro que no podía dejar los valores que le inculcaron por tomar el camino más rápido y fácil hacia el éxito. Él sabía de qué era capaz y sabía que contaba con las herramientas para lograrlo. Constancia, para despertarse cada día con más ganas de seguir y llevar a cabo sus proyectos. De tal forma que sin importar las dificultades y tropiezos, la motivación continuara intacta. Gracias a esta virtud él desafió su voluntad e hizo todo lo posible para alcanzar lo propuesto. Por último, la perseverancia, lo que no lo dejaba rendirse. A pesar de tener días buenos y días malos, este emprendedor no permitió que esto frustrara su proceso. Además, a esto se añadía la dedicación con la que Juan Pablo González realizaba cada uno de sus proyectos.

Obtención de recursos Gracias a los tres pilares que formaron a Juan Pablo González como persona y luego como empresario, se añade uno que fue tal vez el determinante en su proceso: el ser ahorrador. Asimismo, uno de los factores que debe cubrir la persona emprendedoras, es analizar de dónde o de quién puede obtener los recursos para materializar la idea de negocio. En este punto es donde muchos negocios se quedan en el papel como meras ideal y donde otros se crean. Juan Pablo González se ha caracterizado a lo largo de su carrera por ser una persona ahorrativa, austera y sobria. Como se mencionaba, en los dos años en que el arquitecto se dedico a trabajar en diferentes obras como independiente, únicamente realizaba gastos necesarios y ahorraba el resto del dinero.

Asimismo, estos ahorros alcanzaron para cubrir la primera inversión de Juan Pablo. Aunque esta era pequeña y en sociedad luego generaría ganancias que le permitirían crear su propia empresa mas adelante. Juan Pablo nunca perdió el norte, y aunque estaba viendo los frutos de su inversión en corto plazo, no fue conformista y siempre buscó más allá de lo que tenía frente a sus ojos. Puesta en marcha de la empresa Juan Pablo González tenía claro que una empresa no nace de un día para otro, y que su creación es todo menos fácil. Éste sabía que requeriría esfuerzo, dedicación, pasión y arduo trabajo. En el 2001 cuando Juan Pablo renuncia y formaliza la idea de negocio, tuvo claro que su empresa sería de inversiones en arquitectura. En el 2003, se asocia con su jefe de ese momento, invierte todo el capital que había ahorrado y junto a otro inversionista crean la sociedad Inversiones Duzago. Dicha empresa financiaba y vigilaba construcciones en Santander. Inversiones Duzago creció e hizo un nombre, sin embargo en el 2004 la sociedad se disolvió por razones personales y Juan Pablo González se quedó con la razón social. Ese año Inversiones Duzago se convierte en GUIAR S.A.S (Grupo de Inversiones en Arquitectura S.A.S), el sueño de González. El primer proyecto que desarrollo GUIAR S.A.S fue un condominio en el Socorro, Santander, de 50 casas aproximadamente. Luego, construyeron un edificio de 20 apartamentos, lo cual en ese momento era innovador para ese municipio. Para Juan Pablo González, desde el inicio de la empresa su activo más importante ha sido el recurso humano. El arquitecto valora a los jóvenes y busca darles oportunidades y herramientas para que crezcan dentro de la empresa. Además se encuentra abierto a nuevas ideas de negocio y en lo posible financiarlas. En el año 2006 se expande hacia Bogotá, Bucaramanga y Barranquilla. La empresa continua creciendo y un claro ejemplo de su capacidad es el edificio Mirage 57 ubicado en la ciudad de Barranquilla. Este proyecto cuenta con apartamentos de más de 400 metros cuadrados, spa,

turco, teatrino, golf y la mejor vista de la ciudad. Sin embargo para la empresa esto no era suficiente, su propietario Juan P. González quería darle un valor agregado. De tal forma que el edificio contará con servicio de chef sábados y domingos y con masajistas todos los días de la semana. Además, GUIAR S.A.S es una empresa comprometida con el medio ambiente. En este mismo proyecto, se creó un sistema independiente para los aires acondicionados con el fin de recoger el agua que estos botan y destinarla al riego de plantas y lavado de andenes. Otro ejemplo que ha hecho que la empresa de Juan P. González prospere y se haya mantenido en un mercado tan competitivo es su visión de negocio. Por ejemplo, en un proyecto en Bogotá, aconsejaron destinar una parte de la edificación para arriendo externo. De dicho arriendo se reciben más de 10 millones de pesos que van destinados a la administración, disminuyendo los pagos de los copropietarios.

Experiencia empresarial Juan Pablo González Pérez es un claro ejemplo de lo que la visión emprendedora puede hacer en la vida de una persona. Además muestra que ninguna idea es pequeña y que aunque se este cómodo en un lugar, no hay que conformarse. Actualmente, se puede evidenciar que gracias a sus actitudes y aptitudes está donde quiere estar. Juan Pablo describió su experiencia como ``un tobogán de emociones´´, probablemente por los caminos por los que tuvo que recorrer. Además, unos días se encontraba arriba y otros días abajo, y siempre busca la manera de resolver la situación para salir victorioso. Él tuvo momentos de desánimo y frustración, pero reconoce que vale la pena si todo eso sirvió para estar donde esta hoy. La clave según Juan Pablo está en saber reconocer los ciclos de la economía. Entonces, aprovechar cuando hay impulso para trabajar y recoger. Luego, reconocer cuando hay ``caída´´ en el mercado y guardar.

Según su experiencia, el arquitecto afirma que nada se debe dejar al libre albedrío. Por el contrario, en su empresa las decisiones se toman entre varios profesionales que se reúnen y estudian todas las probabilidades con el fin de no dejar nada incierto. Otro aspecto que Juan Pablo ha desarrollado en su vida como empresario es al reconocimiento de problemas y soluciones. Por ejemplo, sus empleados ya saben que al llamarlo para informarle un problema, este debe venir acompañado de tres posibles soluciones. Al hacer una comparación entre la experiencia que tuvo desde el año 1996 hasta el 2001, cuando era trabajador de una constructora, con su vida como propietario de GUIAR S.A.S, este emprendedor comprende cuánto camino ha recorrido y se nota orgulloso de eso. Juan Pablo González afirma que una de las mejores experiencia de tener su propia empresa hoy en día, es poder apoyar a sus “hijas”, empresas pequeñas producto del emprendimiento de personas que trabajan en GUIAR. Este emprendedor a sus 44 años tiene ganas de seguir creciendo y de expandir su empresa, ya que aunque ha logrado llevar a cabo proyectos que nadie a su edad podría, piensa que falta ``mucha tela por cortar´´. Finalmente, Juan Pablo menciona que su lema en su vida tanto estudiantil como professional es: ``ser bruto pero decidido´´.