Cambios en El Aparato Circulatorio

CAMBIOS EN EL APARATO CIRCULATORIO El volumen sanguíneo puede disminuir en los primeros meses del embarazo y aumenta ráp

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CAMBIOS EN EL APARATO CIRCULATORIO El volumen sanguíneo puede disminuir en los primeros meses del embarazo y aumenta rápidamente en el segundo trimestre, llegando al máximo aumento un mes antes del parto, lo que prepara a la madre para una pérdida sanguínea en el momento del parto, que puede ser de 500 c.c ocasionada por la placenta y su desprendimiento luego del nacimiento del bebé. Esto no representa problemas para la madre. Durante el embarazo también aumenta el numero de glóbulos rojos y la cantidad de plasma (líquido donde se encuentran los elementos de la sangre). La frecuencia cardíaca se eleva en aproximadamente 15 latidos por minuto, llegando a una frecuencia promedio de 84 latidos por minuto, este aumento de la frecuencia y el aumento del volumen sanguíneo hacen que el corazón también aumente un poco su tamaño y se incremente su trabajo. El aumento de peso en la madre entre 8 -12 kilogramos, aumenta también el trabajo del corazón. La presión arterial tanto sistólica como diastólica (movimientos del corazón), son más bajas que en la mujer no embarazada y puede aumentar un poco sólo al final del embarazo. La presión venosa en las extremidades superiores permanece constante pero en las extremidades inferiores está aumentado en el tercer trimestre, lo que puede producir edema (hinchazón) leve en las piernas. CAMBIOS EN EL APARATO RESPIRATORIO Desarrollo La mayoría de los autores encuentran pocas modificaciones a la pO2 durante el embarazo. El valor normal es de alrededor de 13.6 kPa (103 mmHg) al final del embarazo . La pO2 puede disminuir hasta 13 mmHg al cambiar desde la posición sentada a la supina , probablemente debido a una combinación de alteraciones hemodinámicas (disminución del gasto cardíaco) y cambios en la capacidad residual y el volumen de cierre. Es por eso que las mediciones de gases en sangre debieran realizarse siempre, en el embarazo, con la paciente sentada, si es que se las quiere utilizar con fines diagnósticos, como por ejemplo en la sospecha de embolia de pulmón. El aumento del consumo de O2 se asocia con su correspondiente aumento de la excreción de CO2. CAMBIOS DEL CORAZON La frecuencia cardíaca puede incrementarse entre 15 y 20 latidos por minuto. Este valor debe ser tomado con la embarazada en reposo en decúbito lateral, entre las contracciones uterinas y fuera del trabajo de parto. La variación es amplia por la acción de muchos estímulos. De acuerdo con la citada elevación del volumen minuto y de la frecuencia cardíaca materna, la cantidad de sangre expulsada por el corazón (volumen sistólico) en cada contracción se hallará también aumentada. El aumento del volumen minuto y de la oferta de oxígeno a los tejidos es proporcionalmente mayor que el aumento de su consumo. Este hecho hace que regrese una mayor cantidad de oxígeno al corazón por la circulación venosa, disminuyendo su diferencia arteriovenosa. CAMBIOS DE LA PRESION VENOSA Mientras que en las extremidades superiores la presión venosa no sufre modificaciones, en las inferiores se observa un aumento de la presión venosa femoral, probablemente debida a la presión mecánica del feto y del útero sobre la vena cava inferior y la ilíaca. Como consecuencia, se va a producir una mayor incidencia en la aparición de varices tanto en las piernas como en la vulva, así como un aumento en la incidencia de hemorroides.

CAMBIO DE LOS PULMONES Durante el embarazo ocurre el desplazamiento de abdomen hacia arriba presionando el diafragma y disminuyendo levemente la capacidad pulmonar. Se observan mayores necesidades de oxigeno durante el embarazo, sobre todo debido al útero y su contenido. Se requiere mas oxigeno parque hay mas trabajo renal y cardiaco y también en pequeña proporción incrementos para el trabajo de los músculos respiratorios y las mamas. El consumo total de oxigeno del organismo aumenta en 15 a 20%. Durante el embarazo, el aumento de gasto cardiaco y la ventilación alveolar es mayor de lo necesario para cubrir el aumento de consumo de oxigeno. Por tanto, a pesar del aumento en el consumo total de oxigeno, se observa una reducción en la diferencia de oxigeno arteriovenosa y descenso de la PCO2 arterial, lo que indica hiperventilación. CAMBIOS DEL APARATO URINARIO  Desde los primeros días del embarazo, durante todo su transcurso y, después, en el puerperio todas las mujeres experimentan diversos cambios en su aparato genitourinario. Aquí, le contamos de forma práctica los cambios específicos del sistema urinario de la mujer gestante, los cuales se deben a diversos cambios tanto fisiológicos, mecánicos o anatómicos como emocionales y hormonales que en conjunto dan diversos cambios al sistema urinario. Los más notorios son: 1. Aumento en el deseo y la frecuencia urinaria, con menos volúmenes urinarios. 2. Aumento en el deseo de orinar en la noche (se conoce como nicturia). 3. Sensación imperiosa de orinar e incontinencia o perdida involuntaria de orina con pequeños esfuerzos como la tos, el vomito, la risa, el llanto y otros. 4. Mayor sensación de vejiga llena y no confort local en área supra púbica con algo de dolor “bajito”. 5. Son más susceptibles las infecciones urinarias bajas conocidas como cistitis o altas conocidas como pielonefritis. CAMBIOS DEL ESQUELETO El embarazo cambia la postura y tensa la espalda, lo que provoca a menudo dolores en esta parte del cuerpo. Algunas medidas que pueden ayudarle a reducir los dolores de espalda son:  Utilizar zapatos de tacón bajo  Dormir de lado con una almohada entre sus piernas  Sentarse en una silla con un buen respaldo  Tratar de no estar mucho tiempo de pie  Doblar las rodillas al recoger algo, en lugar de doblar la cintura  Aplicar calor o frío en las áreas específicas o dar masajes en el área  Evitar levantar objetos pesados  Realizar ejercicios especiales recomendados por el médico  Utilizar fajas para sostener el abdomen  Ir a un masaje por parte de un terapeuta-masajista certificado. Asegúrese de informarle al profesional médico que usted está embarazada. ALIMENTACION DEL EMBRION La mujer embarazada incrementa sus necesidades energéticas por lo que debe aumentar la ingestión de proteínas, vitaminas, minerales, hidratos de carbono y grasas, debido a las crecientes exigencias que tiene para alimentar al bebé que lleva formándose en su vientre, por lo que el sano crecimiento del feto depende de la dieta alimenticia que tenga la madre, y debe ser más de calidad que de cantidad. El feto se alimenta y recibe oxigeno de la placenta que se encuentra unida a la pared del útero y se conecta con el feto a través del cordón umbilical. Si la madre no llevara una alimentación adecuada, la placenta igualmente absorberá los nutrientes y el oxígeno de la sangre de la madre, con lo cual la madre se debilitará, generando problemas posteriores para la madre, durante el parto y en casos extremos podría afectar al bebé que lleva dentro. La placenta es un órgano muy complejo que alimenta al feto, libera hormonas y enzimas, cuenta con un espacio con vellosidades donde se realiza funciones metabólicas endocrinas y depende casi por completo de la sangre de la madre. La placenta transporta el alimento y oxígeno del sistema circulatorio de la madre hacia el feto y el feto envía productos de eliminación hacia la placenta. De esta forma se produce un intercambio entre la madre y el feto, la circulación

sanguínea de la madre y el feto son completamente independientes. DESARROLLO EN SEMANAS Primer trimestre de embarazo - 0 a 4 semanas Una vez que el óvulo es fecundado, experimenta un proceso de división a medida que baja al útero por las trompas de Falopio. La célula se divide en 2 durante las primeras 24 horas y al cuarto día es una masa constituida por más de 100 células llamada cigoto. El huevo continúa dividiéndose a medida que es arrastrado por las trompas de Falopio hacia el útero. Mientras baja, el útero se ha ido preparando gracias al aumento de los estrógenos y de la progesterona. En este momento tu bebé es un conjunto de células denominado blastocito con una masa en el interior que es el embrión en sí mismo, rodeada de una cavidad llena de fluido que se convertirá en el líquido amniótico y otro conjunto de células externo que se transformará en la placenta. Una vez que se desarrolla ésta, comienza a producirse la hormona del embarazo hCG (gonadotropina coriónica) cuya función es detener la ovulación y aumentar la producción de estrógeno y progesterona (para impedir que se desprenda el blastocito del útero). Esta hormona es la que reacciona en los tests de embarazo, por eso hacia el final de la 3ª semana ya podrás saber si estás embarazada. En la 4ª semana, el embrión está formado como un disco con tres capas de células que originarán posteriormente los diferentes tejidos del cuerpo humano. El disco interno (endodermo), se convertirá en los pulmones, el hígado y el sistema digestivo. El disco medio (mesodermo), constituirá los huesos, músculos, riñones, órganos sexuales y el corazón del bebé. Por último, el disco externo (ectodermo) formará la piel, el cabello, los ojos y el sistema nervioso. En este momento, tu hijo mide aproximadamente 3 milímetros y está completamente adherido a su placenta. - 5 a 8 semanas El embrión crece a un ritmo frenético. En la 5ª semana se empiezan a formar los riñones, el hígado y el sistema nervioso. También la espina dorsal, la cabeza y el tronco. Una protuberancia en el centro del embrión se convertirá en el corazón del bebé. En la 6ª semana el embrión ha crecido aproximadamente 6 milímetros. Si pudieras ver a través del útero, te encontrarías una cabeza enorme, manchas oscuras a los lados donde están sus ojos y las ventanas de la nariz que comienzan a tomar forma. Dos hoyos a los lados de su cabeza marcan sus oídos en crecimiento. Debajo de la apertura que más tarde será la boca de tu bebé, hay pequeños pliegues que desarrollarán su cuello y la mandíbula inferior. Dentro, la lengua y las cuerdas vocales comienzan a formarse. El cerebro aumenta de tamaño y el corazón ya late a un ritmo de 100 a 130 pulsaciones por minuto -casi dos veces más rápido que el tuyo. - 9 a 12 semanas Sus dedos se desarrollan formándose las huellas digitales. Todas las articulaciones trabajan, permitiendo a tu bebé mover sus miembros. El crecimiento del cerebro aumenta rápidamente. Aproximadamente 250.000 nuevas neuronas se producen cada minuto. Sus párpados se han cerrado y no se abrirán hasta 27 semanas después. Los lóbulos de la oreja ya se han formado y hacia el final de la semana las funciones de su oído estarán completas. Su labio superior está totalmente formado y su boca, nariz y las ventanas de la nariz van cambiando. Cada día, más detalles minuciosos -incluyendo las uñas diminutas tanto de la mano como del pie y el pelo de pelusa de melocotón- comienzan a aparecer en su cuerpo. Sus dedos están ahora completamente separados. Sus piernas se alargan y sus pies pueden ser bastante grandes. Al final del trimestre, tu bebé mide cerca de 6,3 cm de largo y pesa unos 14 gramos. La cabeza empieza a redondearse y la cara se forma completamente (ya se puede ver su perfil). Sus ojos, que al principio estaban a los lados de la cabeza, se han acercado sobre la cara y sus oídos están cerca de sus posiciones, a los lados. Segundo trimestre de embarazo - 13 a 16 semanas Mucho más proporcionado que hace unas semanas, su cabeza es ahora aproximadamente un tercio del tamaño de su cuerpo. Durante este periodo le comienzan a aparecer pelos en la cabeza y en las cejas. Su piel está cubierta con un vello suave y delgado llamado lanugo, que crece sobre su cuerpo con el fin de proteger la piel. - 17 a 20 semanas Además del lanugo, el cuerpo de tu bebé está cubierto con una sustancia grasosa llamada vermix, cuyo fin también es proteger su piel. Esta grasita va desapareciendo a medida que trascurren las semanas. Ya le funcionan las cuerdas vocales y podría llorar. Sus ojos y orejas ya han alcanzado su ubicación definitiva. Los huesos

del oído interno y las terminales nerviosas del cerebro se han desarrollado lo suficiente como para que pueda escuchar sonidos como sus latidos cardíacos y la sangre que pasa por el cordón umbilical. Tu bebé come más. También produce el meconio, una sustancia negra, pegajosa, resultado de la pérdida de células, la secreción digestiva y la ingesta del fluido amniótico. Este meconio se acumulará en sus entrañas y lo verás en su primer pañal sucio (aunque algunos bebés lo pasan al útero antes de nacer). Hacia la 20ª semana, el bebé mide aproximadamente 20 cm largo y pesa cerca de 255 gramos. - 21 a 24 semanas Tu bebé mide alrededor de 27 cm y pesa entre 560 y 680 gramos. Parece muy delgado, pero irá engordando proporcionalmente y pronto tendrá más grasa. De ahora en adelante se empiezan a desarrollar sus sentidos, especialmente los del tacto y del gusto. Su sistema límbico (el que controla los sentimientos y emociones) está en pleno desarrollo. Sus sistemas digestivo, circulatorio y respiratorio están madurando y preparándose para la vida fuera del útero. Los vasos sanguíneos se desarrollan en sus pulmones para que estén listos para la respiración. - 25 a 28 semanas En algún momento durante el séptimo mes, tu bebé cambiará de posición y adoptará una definitiva; la mayoría de los bebés giran y se ponen de cabeza con la cara mirando hacia atrás. Tu bebé ya se asemeja a como se verá al nacer, aunque más delgado y más pequeño. Los párpados empiezan a separarse y es capaz de entreabrir los ojos y notar la luz que penetra por la matriz. Los pulmones, el hígado y el sistema inmunitario aún tienen que madurar, pero si naciera, tendría un 65% de probabilidades de sobrevivir y sería un bebé prematuro. Ahora debería medir alrededor de 36 cm y pesar poco más de 1 kilo. Tercer trimestre de embarazo - 29 a 32 semanas Sus pulmones están todavía madurando. Las uñas de las manos, de los pies y las pestañas siguen creciendo. Las glándulas suprarrenales del bebé han comenzado a producir hormonas como andrógeno y estrógeno. El fluido amniótico que lo rodea cada vez es más pequeño, a medida que el bebé crece y ocupa todo el útero. El feto sigue estando activo y aquellos primeros movimientos ligeros han dado lugar a codazos y puñetazos que a veces te cortarán la respiración. Sus ojos se abren y se cierran y es capaz de distinguir entre la luz y la oscuridad, incluso puede seguir una fuente de iluminación de delante hacia atrás. Su peso está entre los 1,8 y 2 kilos y mide entre 38 y 43 cm de longitud. - 33 a 36 semanas Tu bebé ya es demasiado grande como para moverse libremente en el líquido amniótico. Permanece más o menos en una posición, generalmente con la cabeza hacia abajo. En estas últimas semanas las miles de neuronas del cerebro de tu bebé lo ayudarán a escuchar, sentir e incluso ver formas tenues. Sus órganos se están preparando para la vida fuera del útero. Sus riñones están produciendo orina. Dependiendo del percentil del niño debería estar pesando entre 2,6 y 3 kg y medir entre 40 y 48 cm. Se le forman cúmulos de grasa que le redondean el cuerpo. La piel de su cara ya es rosada. Al final de esta semana, tu bebé será considerado a término. - 37 a 40 semanas ¡Tu bebé está listo para nacer! Su longitud generalmente varía entre 48 y 53 cm y su peso puede estar entre los 3 y 4,5 kg. Depende del sexo, normalmente los niños son más altos y pesan más. La mayor parte de la vermix (la grasa que lo cubre) ha desaparecido aunque pueden quedar algunos restos en sus pliegues. Lo más probable es que tenga el pelo y las uñas largas, de hecho puede haberse arañado. Los huesos del cráneo de tu bebé todavía están separados y se quedarán así para permitirlos comprimirse bastante y así caber por el canal de nacimiento durante el parto (las fontanelas se cierran meses después de haber nacido).