• Categories
• Realidad
• Universo
• Intuición
• Conocimiento
• Espacio

Citation preview

SAT NAM RASAYAN Es una técnica de curación milenaria a través dela meditación, de estar alerta percibiendo todo y permitiendo todo para entrar al espacio sagrado donde se da la sanación. Se requiere de un maestro especializado para enseñar la técnica y una gran devoción y contacto con el ser interno para empezar a practicarla. La super salud y la fuerza mental, es el espacio donde se encuentran mente cuerpo y espíritu para tocar una sinfonía, donde cada parte toca diferente instrumento, creando armonía. Es en esta sincronía que se da la sanación y la elasticidad entre los órganos, sistemas, pensamientos, acciones y emociones así como las intenciones que plasmamos. Al alcanzar este estado de comunicación y trabajo en conjunto es que alcanzamos la vitalidad, que nos lleva a disfrutar la vida y alcanzar nuestro único destino. En esta ciencia milenaria encontraremos muchas formas de sanación lo mas importante es que nos lleva hacia lo que podríamos llamar “el antiguo arte de curarte a ti mismo” y finalmente al compromiso de tomar plenamente la responsabilidad de nuestra vida, cuidando con todos lo elementos que tenemos, de este único vehículo por el que atravesamos por este planeta tierra, nuestro cuerpo mente para lograr lo mas importante en este viaje, la conexión con nuestro espíritu. Sat Nam Rasayan significa en sánscrito "relajación profunda en el Nombre Divino", o bien "abandono en la esencia de la Verdadera Identidad". Sat Nam Rasayan es un arte tradicional de sanación que utiliza únicamente la conciencia para sanar. El estado alterado de conciencia necesario para efectuar la curación recibe el nombre de Espacio Sagrado. Se desconocen los orígenes de esta antiquísima técnica curativa que, durante siglos, ha sido transmitida en silencio de maestro a discípulo. Su divulgación se debe al trabajo de sistematización que realiza Guru Dev Singh desde la Escuela de Sat Nam Rasayan, abierta en Europa, los EE.UU. y en México. El espacio sensible: Llamamos espacio sensible a la totalidad de las sensaciones que experimentamos. En Sat Nam Rasayan aprenderemos que sirven para relacionarse con algo, simplemente sintiendo lo que se siente al enfocar nuestra atención en un objeto, suceso o persona. Entonces, se producían dos acontecimientos importantes. Por un lado, gracias a nuestras sensaciones podemos saber que le sucede al paciente, incluso comprender y describir su dolencia. Por otro, al permitir nuestras sensaciones - es decir, al no interferir - modificamos o curamos la enfermedad. Esto implica una verdadera revolución, pues afanarnos que las sensaciones no son algo subjetivo y aislado, sino elementos de comunicación y transformación. La persona que se acerca al Sat Nam Rasayan va a entra de lleno en el mundo de la sensibilidad y de la intuición, hallando así una vía para investigar el universo de lo irracional. Es ahí donde están el amor, la intuición, los sentimientos, las sensaciones, claves fundamentales de la felicidad humana y de la confianza en uno mismo; inmensa fuerzas movilizadoras de la naturaleza. Las sensaciones con las que trabajaremos son las cotidianas, las experimentadas a nivel de piel, de órganos internos, a través de los sentidos o de los diversos estados de animo. A estas se añaden otras mas sutiles, y algunas de dificil decisión, que irán clareándose a medida que la practica de¡ estudiante avance, y con ella su sensibilidad. Todos podemos sentir, para comprobarlo basta con prestar atención a las sensaciones que nos suceden en cada instante. En el primer nivel de Sat Nam Rasayan se aprende a permitir lo que se siente. Por permitir entendemos ser conscientes de las sensaciones sin condicionarías, sin hacer proposiciones mentales o lo sentido. Se habla de algo tan simple que puede resultar difícil de entender. Consiste solo en percibir lo que se siente en cada instante, ya sea una molestia en el pie o un cosquilleo en el rostro, y dejar que esa sensación suceda sin interpretarla. No hay sensaciones mejores o peores que otras: todas son validas e importantes. El hecho de sentir cualquiera de ellas hace que aparezcan mas, lo que nos descubre la existencia de un universo sensible ilimitado. Cuando se permiten las sensaciones; no hace falta concentrarse en cada una de ellas para distinguirlas todas al tiempo; con su particular riqueza de matices. Si bien unas se perciben con nio intensidad que otras, todas están presentes en la conciencia del curador. La no - concentración es un aspecto importante del Sat Nam Rasayan que implica mantener un estado de silencio interno mientras se percibe el universo sensible.

Otro paso para curar es relacionar las sensaciones con aquello que se quiere sanar. A esto se le llama individualizar. Así adentrarse en la practica del Sat Nam Rasayan, la sensación de distancia que se produce en nuestra relación con el universo desaparece y todo se vuelve cercano. Lo que inicialmente fueron sensaciones de duda, de limitación o de, separación, dejan lugar a otras mas amplias que reflejan el mundo que nos rodea. Permitir sensaciones es relativamente fácil de aprender, pero en algún momento surgirá el obstáculo: irrumpirán los condicionamientos, los pensamientos que nos distraen, las dudas o las ganas de interpretar y de controlar las sensaciones. Todo esto generara resistencias, que son sensaciones de limitación. ¿Qué haces ante ellas? Muy sencillo: si yo permito la sensación de resistencia y la incluyo en mi espacio sensible como una mas, desaparece y, al desaparecer, se diluyen también los condicionamientos que la producían. Esta es la clave del primer nivel. Permitir resistencias será la estrategia para lograr un espacio sensible amplio e intenso, y también para curar. Todo lo anterior nos ofrece una perspectiva de la curación efectuada por un principiante de Sat Nam Rasayan. El sanador se relaciona con el enfermo y con la enfermedad y permite sus propias sensaciones. Detecta, entre ellas, las de mayor tensión (resistencias) y las diluye. En ese instante, algo se mitiga en la dolencia del paciente, que inicia una evolución favorable. Aun a riesgo de caer en el simplismo, el primer nivel de Sat Nam Rasayan podría resumiese de la siguiente manera: el curador siente las sensaciones que produce el enfermo y haciendo que desaparezcan sus resistencias, modifica la enfermedad. A través de sus sensaciones, el curador puede deducir lo que le sucede al paciente. Este "diagnostico" o comprensión del problema, no tiene por que ser de orden medico. El curador, por ejemplo; puede sentir que el paciente tiene un "exceso de aire en el sistema nervioso" afirmación que cobra sentido en culturas orientales pero no en las occidentales) o "un susto"(comprensible para un indígena mexicano. Estos diagnósticos no son científicos, pero tienen poder. Un mismo paciente podría ser diagnosticado por un médico occidental de ulcera gástrica y por un chaman de perdida de contacto con su alma y ser ambos capaces de curarlo desde sus respectivos abordajes. En Sat Nam Rasayan el diagnostico no es imprescindible para curar. Se obtiene curación tanto si el curador entiende como si no entiende el significado de lo que siente. El espacio Sat Nam Rasayan es la manifestación de¡ espacio sagrado en la conciencia, una experiencia de orden espiritual que no se puede definir, pero sí reconocer. Aunque tenga lugar en la conciencia del curador, el espacio sagrado esta mas allá del individuo, no puede ser poseído ni controlado. Una de las cualidades del Espacio Sagrado es la neutralidad. Para introducir este concepto diremos que, en la vida cotidiana, estamos siempre especulando acerca de la realidad, que interpretarnos lo que sucede según nuestros acondicionamientos. En vez de relacionamos &rectamente con las cosas, lo hacemos a través de nuestra idea de lo que son. Al obrar ast creamos distancia entre nosotros y todo lo demás. En el Espacio Sagrado, en cambio, el curador se relaciona de un modo neutral con la realidad. En la relación neutral, la conciencia no juzga y, por consiguiente, la experiencia resulta novedosa. No hay dolencia ni distancia. Todo es directo y cercano. El sanador siente que aquello con lo que se relaciona sucede en él, es parte de su propia existencia, que conciencia y la del otro resaltan ser la misma. Se trata de una experiencia de Unidad esencialmente idéntica a la que relatan los místicos de cualquier época y cultura. En este estado de neutral el curador, al modificar su experiencia, modifica también el objeto de su relación. Esto implica una trascendencia, concepto difícil de entender y de aceptar. La persona que con" con el Espacio Sagrado puede cambiar el mundo, sin necesidad de manipularlo, por el mero hecho de introducir cambios en su propia percepción. El único instrumento que maneja el curador de Sal Nam Rasayan es su conciencia. Llegado a este punto, el lector se estará planteando múltiples interrogantes ¿Cómo es posible dejar de interpretar, calificar, juzgar, controlar o rechazar las experiencias, si todos hechos sido educados y condicionados para hacerlo desde "os?

¿Cómo liberarse de las proposiciones?, Tal vez al principiante le resulte imposible lograr una vivencia neutral, pero quizá pueda alcanzar esa neutralidad borrando los límites de sus sensaciones. El espacio sensible es un medio para aprender la neutralidad. A medida que el curador avance en su práctica, las fronteras entre sensación, percepción y conocimiento irán difuminándose. Llegará el momento en que, sea capaz de no hacer proposiciones., de silenciar su mente y permitir su experiencia sin necesidad de traducirla a reconocer el Espacio Sagrado sólo con proponérselo. Para realizar una curación, le basta con mantener sensaciones. "Al igual que produces pensamientos, produces silencio. Al igual que propones, dejas de proponer", dice Guru Dev Singh. El curador avanzado de Sat Nam Rasayan es capaz de mostrarse neutral y de estable su relación con el Espacio y manifestar una intención curativa. En este estado alterado de conciencia, donde las leyes y las percepciones nada tienen que ver con las habituales, la conciencia del curador se funde con aquello que está curando y lo transforma. El linaje de Sat Nam Rasayan es el conocimiento del Espacio Sagrado manifestado a través de sucesivas generaciones de maestros y alumnos. Este conocimiento se adquiere exclusivamente por enseñanza. El linaje no sólo está compuesto por personas sino también por el Conocimiento mismo que, encamado en ellas, permanece vivo. Es una entidad cuyas facultades van más allá de las atribuidas al ser humano. Este linaje se caracteriza por la ausencia de forma y de ritual. No se asocia a ninguna religión o ideología en concreto. Conocer el Espacio Sagrado sólo depende de nuestra capacidad para alcanzar la neutralidad. Cualquier persona de cualquier ideología o religión puede practicas Sat Nam Rasayan. El origen del linaje del Sat Nam Rasayan se pierde en el tiempo. Podemos rastrear su pista a lo largo de la Historia estudiando la vida de los escritos de determinados santos y curadores, Se sabe de maestros taoístas y Sufis poseedores de este conocimiento. La moderna Escuela de Sat Nam Rasayan toma como punto de referencia a un santo Punjabi del siglo XVL llamado Guru Ram Das (1531-84), cuarto Guru de la Tradición Sikh. Entre sus muchas cualidades destaca su perfecta neutralidad. Aunque Guru Ram Das no fue el creador del Sat Nam Rasayan, encarnó el Espacio Sagrado con tal perfección que se le considera un arquetipo de este sistema. Yogui Bhajan y su discípulo Guru Dev Sinh, devotos de Guru Ram Das y pertenecientes a la religión Sikh, son hoy las personas más versadas en este sistema. Ni uno ni otro es Guru, pero en ambos se manifiesta el Espacio Sagrado de modo estable, requisito imprescindible para ser maestro en este =le. Guru Dev Singh aprendió Sat Nam Rasayan de Yogui Bhajan al estilo tradicional, es decir, en silencio. Antiguamente, los conocimientos espirituales poder espiritual de las enseñanzas- se transmitían mediante un proceso de inducción, el adepto aprendía del maestro por el mero hecho de estar junto a él, dentro de su aura o influencia psíquica, El maestro hacía uso de su relación con el Espacio Sagrado para inducir la experiencia en el discípulo. Nunca fue necesaria la palabra para transmitirlo y practicarlo. Este método de enseñanza que sólo permite uno o dos alumnos al mismo tiempo, incluso uno por generación, resulta minoritario en extremo, Yogui Bhajan, que lleva más de veinticinco años impartiendo conocimientos nunca antes expuestos, le pidió a Guru Dev Singh, en 1988, que diera a conocer el Sat Nam Rasayan fundando una Escuela donde cualquiera pudiese aprender a curar. La condición del maestro pasó de Yogui Bhajan a Guru Dev Singb, quinto en obediencia al primero, está elaborando el actual método de enseñanza.