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German Andrés Díaz Gómez 11020202016 Diseño Grafico Comunicación Escrita Docente: William Guerrero Collazos Santiago de Cali, Colombia 17 de septiembre del 2020

Montaigne y la autoestima

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Michell de Montaigne era un filósofo francés, que nació en 1533, lo llamaron atípico porque comprendía lo que nos hace sentirnos mal con nosotros mismos, por tal motivo escribió un libro con el que intentaba hacernos sentir mejor.

Este aborda 3 tipos de inadecuación: 1. La inadecuación física, el sentimiento de descontento en relación con el propio cuerpo. 2. La inadecuación que experimentamos al ser juzgados y la desaprobación a nuestros hábitos y costumbres. 3. La inadecuación intelectual, es el sentimiento de que no somos tan inteligentes como deberíamos.

Para estas tres inadecuaciones Montaigne propuso unas soluciones muy sencillas. En su libro famoso “ensayos” lo que Montaigne pretendía era transformar nuestra concepción de lo que es un ser humano, Montaigne decía que estamos rodeados de modelos equivocados y que eso hace a un individuo odiarse así mismo cuando no encaja en los caprichos de ellos. “La peor desgracia para nosotros es desdeñar aquello que somos”

Montaigne menciona que, por el hecho de ser racionales, pensantes tenemos tantos problemas ya que esto afecta nuestra relación con nuestros cuerpos, al contrario de los animales tenemos repulsión por nuestra propia corporalidad, creemos que somos brutos, gordos feos y desarrollamos diferentes complejos, esto lo decía ya que conocía a varias personas que avergonzaban de su propio cuerpo, de sus flatulencias o de la manera como masticaban los alimentos. Montaigne nos invitaba a aceptar nuestro innegable lado animal. “hemos de reconocer nuestras semejanzas con los animales de la creación, reyes y filósofos defecan y las damas también” nos recuerda su texto. Montaigne al observar a los animales llega a la conclusión de que la sabiduría animal es mayor que la nuestra porque los animales se adaptan mejor a su propio cuerpo, no tienen vergüenza o pudores como nosotros, porque la relación con su cuerpo es muy natural. Él no nos igualaba con los animales para empequeñecernos si no para aceptarnos mejor, porque debemos aceptar nuestro cuerpo con humor, con naturalidad como lo hacen los animales.

Montaigne decía que el desarrollo del cerebro nos llevaba a sentir vergüenza de nuestro cuerpo, al no aceptar nuestra apariencia física e intelectual, a ser arrogantes y a imponer nuestra visión a otros de lo que nos parecía mejor. En cada sociedad hay varios parámetros como la manera de vestir, comer o decir algo en cuestión, los ideales políticos y el que este lejos de estos será juzgado y víctima de juicios 2

y preconceptos, a ser tachado de loco o algo peor a ser asesinado por defender sus ideales como lo vemos comúnmente en nuestra sociedad.

Sin embargo, Montaigne menciona que hay ejemplos de cómo las personas pueden regirse por costumbres diferentes, pero en algunas circunstancias obligados como en el caso de la colonización de España a los pueblos indígenas en Suramérica. Montaigne repudiaba la actitud colonialista y se identificaba con la causa de los indígenas. El prejuicio sobre los indios puede caer sobre todos nosotros, aunque menos catastrófica, si llevamos la contraria a las costumbres de nuestros países. Para evitar estos prejuicios debemos viajar física y mentalmente y enfrentarnos con la diversidad del mundo, porque lo que puede ser extraño para una sociedad puede ser normal para otra. Montaigne criticaba la forma en que las personas deciden lo que es bueno o malo basándose en las costumbres más que en la razón.

Otra circunstancia que hace sufrir al ser humano es lo intelectual, esa sensación de que no somos tan inteligentes como debiéramos. En la época de Michell de Montaigne un requisito para ser considerado inteligente era tener un título universitario, pero para él la mayoría de titulados, a pesar de sus becas y diplomas eran simplemente “estúpidos” lo que decía porque estos supuestos símbolos de inteligencia muchas veces no significaban nada. A Montaigne la clase de inteligencia que le importaba era la sabiduría, mencionaba que una persona era sabia sin haber ido a la universidad solo bastaba con ser humilde y modesto, aceptando las propias limitaciones intelectuales, él percibía que muchos campesinos los cuales trabajan en su castillo eran más sabios y felices que algunos universitarios, él no mencionaba que el estudio era inútil si no que observaba que muchos universitarios no eran felices o más sabios que otras personas. Montaigne quería demostrar que una universidad nos enseña a descubrir muchas nuevas cosas o a almacenar información, pero no nos enseñará a cómo utilizarla bien en nuestra vida y que esto no nos dará más experiencia. Montaigne reconocía que había más personas inteligentes que otras pero que no se debía clasificarlas de la misma manera, eso es un error igual que el sistema de acreditación académica, él pretendía corregir la forma como nos definimos porque alguien no puede tener cualidades para hacer o realizar algo, pero esto no mide nuestra inteligencia al igual que unas calificaciones académicas. Montaigne nos invitaba a no sentirnos humillados por ningún aspecto de lo que somos; después de este consejo podemos distinguir a Montaigne en alguien en el cual podemos confiar. (Bottton, 2014)

En cuanto al libro de Michell Montaigne, en sus apreciaciones sobre la valoración que tenemos los seres humanos de nuestro cuerpo, el miedo al ser juzgados y de nuestro intelecto, en la mayoría de sus aspectos menciona la total realidad que se vive, ya que en 3

su época y mas hoy en dia en nuestro vivir las personas no valoramos nuestro cuerpo y nos sentimos sujetos y afectados con la apreciación que tiene los demás hacia nosotros, igual en esta sociedad moderna nos han vendido un cuerpo escultural, esbelto, lo que con mayor razón hace que las personas se sientas defraudadas e inconformes con el cuerpo que tienen, esto también se debe a que tienen una mentalidad muy débil, al contrario otras personas que su mentalidad es más fuerte no les afecta o no se dejan llevar por lo que la sociedad y el consumismo les ofrece, esto también conlleva lamentablemente a suicidios de niños, jóvenes y adultos. Los seres humanos también estamos regidos por costumbres, empezando desde nuestra familia y después por nuestra sociedad, esto se da en la forma de pensar, de sentir, en la religión, en la comida, en nuestros gustos y preferencias y esa persona que piense de manera diferente o que no esté de acuerdo con las políticas familiares o sociales será perseguido o juzgado por su familia en primer lugar y por la mayoría de personas que no estén de acuerdo con estas apreciaciones. Debemos aprender a aceptarnos como somos ya que antes de tener una profesión, nosotros nacemos como personas, las cuales a través de la vida vamos sufriendo trasformaciones y nos vamos formando con las lecciones que recibimos a diario en la vida, esto para convertirnos en sabios que inteligentes y valorar lo que tenemos y saberlo apreciar, dejando a un lado las convicciones y aspectos que tengan las demás personas, hasta nuestra familia y sociedad.

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Referencias

Bottton, A. d. (19 de Enero de 2014). AdB 04 Montaigne y la autoestima. Recuperado de https://youtu.be/pRstxC3cy6k

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