• Author / Uploaded
• Elizabeth Figueroa

Citation preview

La obra empieza con una pequeña descripción de la tediosa y monótona vida de los pueblos de la provincia francesa, como lo es Saumur el pueblo donde transcurre, gran parte de la obra, al comenzar la obra hacen una pequeña referencia a la historia del señor Grandet quien alrededor de 1789 gozaba de una gran reputación, este era un maestro tonelero, quien sabía leer, escribir y contar, quien no llevaba poco tiempo casado con la hija de rico comerciante de madera, este aprovechando la gran fortuna de su suegro y la dote de su mujer, compro un viñedo el más hermoso de la comarca, una antigua abadía y unas cuantas alquerías a un precio muy bajo gracias a que la republica vendió las bienes del clero, una vez más la historia toma un tinte muy descriptivo al describir la casa de la familia Grandet.

La cual es miserable al tener en cuenta la millonario suma ahorrada por el avaro viejo Grandet tras años de apilar su renta, la casa estaba compuesta principalmente por la sala principal en donde Eugenia y su madre se dedicaron a hablar y coser durante tantos año, el cuarto de Eugenia que tan solo contaba con una ventana que miraba al patio, el cuarto de los esposos Grandet, la cocina, el patio, el cuchitril de Nanon, el cuarto del piso de arriba y la habitación de la casa mas importante para el viejo avaro su oficina en donde se encontraba su balanza para pesar el oro y sus montañas de bolsas repletas de miles y miles de Luises, luego la historia avanza hasta el cumpleaños número veintitrés de su única hija Eugenia, la madre le regalo unos vestidos y como era costumbre el avaro padre dio a su hija una monedita antigua; ya que este solía dar a su hija monedas antiguas y enormemente valiosa en días solemnes.

Al iniciar la velada llegaron primero los tres Cruchots; el clérigo, el presidente C. de Bonfons y el notario, los últimos dos muy amigos del señor Grandet, luego de un momento de charla del avaro con sus amigos los Cruchots, llegaron los tres Des Grassins; el señor un antiguo contramaestre, herido en Austerita y ya retirado, la señora una mujer pequeña, regordeta, blanca y bien vestida ya que encargaba sus modelos a París y Adolphe un joven, delgado, alto y rubio, ambas familias se encontraban en la velada a causa de que era las únicas en todo Saumur con la cercanía a Grandet y con la importancia para llegar a tener oportunidad alguna de conseguir la mano de la rica heredera ,tras llegar todos los invitados decidieron jugar bingo, durante el bingo un nuevo e inesperado invitado llego era Charles Grandet, el

hijo del hermano de Grandet quien vivía en Paris, Charles llego con la ilusión de pedir estadía y para entregar una carta a su tío cuyo destinatario era su padre, la llegada de este personaje sorprendió a los jugadores de bingo, quienes interrumpieron su juego, Charles entrego la carta a su tío y se dispuso junto con Nanon a llevar sus baúles repletos de ropa fina y de última moda con las tendencias de Paris.

La carta del Grandet de Paris hacia el de Saumur tenía el motivo de pedirle que recibiese en su casa a su hijo, ya que el pronto moriría y por si fuese poco también le informo que se encontraba en bancarrota y que en caso de no poder mantener darle recursos para que llegase a las Indias a ir a buscar fortuna, tras llevar su equipaje a solitario cuarto de arriba el joven se sentó junto al fuego para calentarse recibiendo constante miradas de interés por parte de su prima, la cual tras marchados los invitados arreglo lo mejor que pudo e cuarto con ayuda de Nanon y su madre, a la mañana siguiente Grandet se dispuso a ir junto a su hija uno de sus campos para revisar las obras, en el camino hasta su propiedad se encontró con el notario Cruchot, al llegar a su propiedad el viejo avaro y el notario hablaron de algunos asuntos económicos referentes a la propiedad y entre la charla Cruchot pregunto a su amigo si su hija se casaría con su sobrino, el avaro dijo que jamás permitiría que su hija se casara con él, lo cual entristeció profundamente Eugenia ya que había empezado a sentir amor por su primo, al regresar a casa el notario mostro a Grandet un periódico en el cual se leía que Grandet de París se suicido a causa de su bancarrota.

Ese día tras el segundo desayuno Grandet dijo a su sobrino en el patio la terrible noticia de la muerte de su padre y como si lo anterior no fuese nada, también le dijo que lo más horrible era que se encontraba en bancarrota, el joven parisino estuvo en una tristeza constante a causa de quedar huérfano, a causa de la pobreza de primo la enamorada Eugenia dio a su primo sus ahorros en monedas antiguas que valía unos seis mil francos y Charles en señal de agradecimiento dio a Eugenia un cofre que le había dado su madre que era de oro y contenía la imagen de su padre y su madre su objeto mas preciado, acepto la monedas considerando a Eugenia una acreedora de su viaje, durante los días siguientes Charles empezó a relacionarse con Eugenia y su amor mutuo fue aumentando poco a poco, hasta el fatídico día de la separación a causa de la marcha de Charles a las indias a buscar fortuna, no

sin antes jurarse amor eterno, pocos días después de la partida de Charles la casa recobro su habitual comportamiento, mientras Grandet encomendaba a su amigo el banquero Des Grassins para que fuese a Paris para que el hablara con los acreedores de su hermano para recobrar el honor de la familia, Des Grassins jamás regreso a Saumur ya que se estableció en París enamorado de una actriz, en el trascurso de los años Adolphe Des Grassins contrajo matrimonio, lo cual dejo el camino libre para Cruchots en la lucha por la mano de la rica heredera.

Hasta el año nuevo de 1820, Grandet estaba de un humor excelente permitiendo que prendieran el fuego, le dio unos cuantos francos a Nanon y como era costumbre una moneda antigua a su hija, el viejo avaro insistió en ver las monedas a lo que la heredera y su madre encontraban cualquier pretexto, hasta que Eugenia confesó que había regalado sus monedas, lo que hizo que el avaro castigara a su hija a permanecer a pan y agua en su habitación, hasta que la señora Grandet muy enferma le pidió a Cruchot el notario que convenciera a su esposo ya que el si le escuchaba, un día llego temprano el notario, mientras el viejo avaro espiaba a su hija desde la banca del patio, con deseos de perdonarla y abrazarla, Cruchot dijo a viejo avaro que ese trato era muy cruel, a lo que el banquero le conto la historia de cómo regalo 6 mil luises, a lo cual el notario dijo que no era nada ya que, si su esposa moría Eugenia podría pedir la herencia de su madre de cerca de cuatrocientos mil luises de la renta, lo cual hizo reflexionar y perdonar al avaro, un día Eugenia se encontraba en el cuarto de su madre con el cofre de Charles comparando junto con su madre la cara de charles y sus padres, a lo que llego el viejo avaro e intento arrancar el oro del cofre y diciendo a su hija que era una digna negociante, así estuvo la escena hasta que el avaro regreso el cofre.

En octubre de 1822 murió la señora Grandet, a lo que Grandet hizo a su hija renunciar a su herencia, durante los siguientes años el viejo avaro enseño a su hija todo lo que debía, al tercer año vio que le inculcado a tal punto la avaricia que le confió la casa, en 1827 el viejo avaro contrajo una parálisis y murió después de un tiempo, la solitaria heredera dio mil doscientos francos a Nanon, quien en menos de un mes se caso con Antonie Cornoiller, quien fue nombrado guarda general de las propiedades y tierras de la señorita Grandet, en 1831 Eugenia recibió una carta de su primo, en donde dijo que

recientemente había regresado a París y que pronto contraería matrimonio con una horrible señorita de apellido D`Aubrion y además que devolvería su préstamo con todo e intereses para lo cual debería ir a donde la señora Des Grassins, la cual llego al poco tiempo, mientras Eugenia hablaba con un cura enviado por los Cruchot para que la persuadiera del matrimonio, la señora Des Grassins, entrego a Eugenia una carta en donde informaba lo de la llegada de Charles a parís junto con el dinero, pero decía que llevaba cerca de un mes en parís y que había intentado ya dos veces pedir la mano de la horrenda damisela, Eugenia estuvo en la habitación de su padre toda la tarde, hasta la hora en que el presidente y sus simpatizantes llegaban visitar a Eugenia, al terminar la velada, Eugenia llama a presidente, y le dio un dinero para que fuese y pagara la deuda de su tío y además regresara el cofre a Charles, para que al regresar contrajesen matrimonio.

El presidente C. de Bonfons salió a París y una vez allí se reunió con el señor Des Grassins y junto a este pagaron la deuda con interés a los acreedores del señor Grandet de Paris, tras hecha la diligencia fue a buscar a Charles, quien se encontraba reunido con su suegro quien le decía que hasta que no pagase la deuda de su padre no permitiría que recibiese el apellido D`Aubrion ni que se desposara, luego el presidente entrego a Charles el titulo de pago y le dijo que Eugenia tendría una fortuna de cerca de 14 millones y que se casarían, al regresar a Saumur el presidente elaboro un buen contrato de matrimonio que especificaba que en caso de no tener hijo, el viudo quedaría con todos los bienes de su cónyuge, al poco tiempo del matrimonio Eugenia enfermo y parecía que habría de morir pronto, pero sobrevivió y el que si pereció fue el presidente lo que incremento la fortuna de Eugenia, quien tras enviudar, recibió al igual que hace unos años atrás la promesa de compromiso del marqués de Froidfond, que al igual que hace algunos años llenaba la sala de la casa y le daba regalos al igual que los Cruchots y Des Grassins de antaño aunque no acepto y se quedo sola dando su dinero a la caridad.