PONENCIA 22

EL OBJETO DE ESTUDIO DE LA PEDAGOGÍA EN TIEMPOS DE PERFORMATIVIDAD Verónica Mata García El que no quiera causar horror,

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EL OBJETO DE ESTUDIO DE LA PEDAGOGÍA EN TIEMPOS DE PERFORMATIVIDAD Verónica Mata García El que no quiera causar horror, que se aleje de las cuestiones pedagógicas F. Nietzsche Los sentidos de la pedagogía se han caracterizado desde su creación por una preocupación frente a los procesos de formación humana, esta idea de formación ha tenido diferentes imágenes de acuerdo a los proyectos de mundo en el sentido histórico, en algunos momentos fue representada por la arete, la perfección, la bildung alemana, pero es a partir fundamentalmente de finales de 1800 en Europa,i que hablar de pedagogía, se reducía en su sentido de formación a prescripciones, operaciones, técnicas y procesos sometidos a lecturas externas a los saberes pedagógicos, de hecho por pedagogía se consideraba, no precisamente saberes o conocimientos, sino formas de operar y hacer funcionales los procesos de aprendizaje de los sujetos; es decir, el pedagogo era un sujeto que como técnico sólo tenía que obedecer el manual, determinado por las ciencias de la educación para cumplir con los fines devenidos del proyecto de sociedad, en otro sentido, ser pedagogo era considerado y hasta ahora un oficio, no una profesión, un oficio sin saberes propios, sin teorías, sin historia. En el presente, el sentido de la pedagogía, no ha variado demasiado, quizás, que se tiene como carrera universitaria, pero sin demasiado reconocimiento, igual que en 1800, cuando hoy se dice pedagogía o pedagogo, se abren los ojos, se frunce el seño y la gente sólo puede vincular la pregunta con la respuesta, maestro de niños, el que usa técnicas para aprender o usa técnicas para enseñar, igual que en Francia en el siglo XIX, se piensa que decidir por estudiar pedagogía es algo que nos lleva a perder el tiempo, echar por la borda nuestra vida y más si se es hombreii Lo que hemos encontrado es un gran vacío, una gran ausencia sobre la historia, los saberes, los significados y sentidos que ha tenido la pedagogía y que la ha hecho, por ejemplo, en los orígenes de la modernidad, ser el proyecto que se encargará de conducir a la propia modernidad o en otro momento la pedagogía como el centro de creación de la ciudad en la 1

Grecia de Protágoras o incluso hace muy poco en los trabajos de Jorge Larrosa o Carlos Scliar, donde la pedagogía abre a pensar éticamente sobre la creación de espacios para que las otredades puedan encontrase y ahí crear la polis, a través ya sea del cuidado de si o del comprender los sentidos de la Bildung, sin embargo, justamente son este tipo de saberes, aquellos que gracias a la época y la dirección que ha tomado, serán rechazados, ya sea por que se miran inviables o inservibles, por que no se ajustan a las intencionalidades de la educación y los mundos de la falsa política del mercado y la producción o por que frente a una pseudo capacitación en lo que se ha creído la pedagogía, escuchar al escuchar lo anterior, no se le relaciona con ámbitos de pedagogía, en tanto no se dice como se van a desarrollar los procesos o a través de que métodos o técnicas se formará al estudiante Una pedagogía que se instala en un supuesto humanismo y centra su hacer en capacidades neurocientíficas, habilidades y aptitudes determinadas como necesarias desde una ingenuidad productivista, sometiendo a los sujetos a competencias pragmáticas funcionales, como sinónimos de conocimientos y todo ello mediado por la voz de la conciencia moral (habilidades para la vida, competencias para la vida), es una pedagogía que creyéndose nueva, actual y además justa, no hace más que reproducir los procesos que desde 1800 se instalaron sobre la imagen de la pedagogía, negándole hoy desde los mismos pedagogos, por ignorancia su historia, sus sentidos y sus saberes. Usar en la jerga pseudopedagógica educar, como instrucción, coloca a la relación del pedagogo, con el alumno, como un sujetador, por un lado, de la conciencia juvenil, la cual posee la gracia, la creación, por otro lado, ordena las cosas desde el orden de los procesos de la instrucción, donde lo vital es la obediencia, el pedagogo somete a la juventud a un orden a priori de la relación, donde cada sujeto, desde sus habilidades será destinado a ocupar un lugar que lo predeterminará con respecto a qué hacer, cómo actuar, cómo vivir. Una diferencia con la imagen de técnico de la educación de 1800, es que hoy el pedagogo, no necesita tener saberes fundamentales de las Ciencias de la educación, la inversión de la ciencia por la técnica de la que habla Lyotard se aprecia en esta relación, el pseudo pedagogo, necesita administrar técnicamente el tiempo de la escuela y los espacios del aula, en otras condiciones, necesita estructurar en los procesos digitales, estructuras que puedan determinar el movimiento de los sujetos en la red, además de cumplir con los requisitos que se solicitan frente a los procesos de evaluación de los aprendizajes, los 2

cuales hoy más que nunca, se reducen a valorar seguimiento de órdenes, cumplimiento de momentos o etapas y afirmación de verdades, obediencia, el mejor alumno es el más obediente, aquel que controla sus emociones, sus particularidades e interioriza el orden de la cultura dominante y además vigila que los otros lo hagan, que triste, en este ejemplo se encuentra un triunfo de la pseudopedagogía de la época performativa. La educación desde los discursos de la performatividad, ya no necesita pensar sobre la búsqueda de ideales de humanidad ética, la imagen de humanidad esta centrada principalmente en el aditamento de la maquinaria performativa, lo humano como dice Sloterdjik, como parque humano, adquiere hoy su sentido desde la técnicaiii. Colocar la dimensión de la técnica, nos obliga a considerar que sobre ésta podemos ubicar un sin fin de significaciones, ya que, es técnica aquello que aparece como creación, en ese sentido el lenguaje, es creación, que a su vez crea los sentidos de las cosas: es decir, crea las cosas. Desde ahí miramos la relación del hombre con la técnica en el momento en que el hombre dejó de ser animalidad y por el lenguaje pasó a ser humanidad, la creación de ordenes, de mundo, la ubicación de los objetos, incluso de la naturaleza en el mundo, la clasificación, selección, tipología, la determinación de normalidad, anormalidad, defecto, perfección, se ubican siempre a la sombra de un proyecto de mundo que como cultura crea las formas de vínculos entre los hombre y entre las cosas. En la lógica performativa, aquello que sirve a un fin útil, vale. En una sociedad cibernética el conocimiento es legitimado por la forma performativa, si es eficaz y reduce los insumos para la tarea y minimiza los gastos de tiempo, material y fuerza, entonces es necesario. La performatividad se basa en la efectividad del conocimiento y la acción para lograr el resultado deseado, fundamentalmente productivo, el valor de lo performativo esta en la eficacia para controlar aquello que en la productividad, puede ser nocivo, en la imagen de humanidad la performatividad se establece en el lenguaje que hace creer en verdades en sí mismas verdaderas, empíricamente verdaderas u objetivamente verdaderas, en tanto el sentido de las palabras frente a niveles de eficacia, y que generan efecto de productividad. De tal forma la educación y aquello que se ubica como pedagogía desde el siglo antepasado, se situa precisamente en la determinación de los procesos que otorgarán al 3

proceso su calidad de verdadero, al ser éste eficaz, funcional estructuralmente y por tanto verdadero frente a necesidades devenidas de los fines de la industrialización, los mercados y la producción, los sujetos que creen usar la pedagogía lo hacen a su vez determinados por las imágenes con sentido de verdad, de que ésta tiene que ser instrumento de creación de capacidades, competencias y controles, los sujetos sólo pueden ver lo que el orden performativo como verdad les muestra y negar lo que ese mismo orden niega, así cuando se alude a críticas sobre las ideas de aprendizaje reducido a obtención de habilidades, aptitudes y competencias y que ello es cuestionable frente a la complejidad de lo humano, simplemente no se comprende; cuando se alude a que el buen estudiante no es el que se somete a las exigencias de la idea de inteligencia o a ritmos productivista, los sujetos excluyen cualquier posibilidad de diferencia, creyendo que la inteligencia s ve en la conducta, asumida como la correcta consecución de la norma. Loa pedagogos charlatanes escoltados por los títulos que les dan identidad y los hacen ser , no se preocupan por indagar sobre la pedagogía, no obstante se articulan fácilmente al dominio

de los discursos de cada época, sin creer en la necesidad de interrogarlos,

dudarlos, deconstruirlos, así, constructivismo, neurociencias, competencias, aprendizaje significativo, formación integral, biopsicosocial, son elementos que penetran en las formas de pensar performativamente y desde esos discursos y no desde la reflexión ética necesaria, los pedagogos de la opinión, hablan a otros y con certeza academicista, dicen saber que es pedagogía centrándola en haceres en el mejor de los casos de base moral, en el peor recetas devenidas de vagos conocimientos de las ciencias sociales, generalmente ubicados en los niveles técnicos de éstas; sin embargo, llenan de asombro a los jóvenes pedagogos, que se encuentran en la entrada de su formación, con el uso de palabras extrañamente científicas y determinante mente violentas frente a la pedagogía y sobre los sentidos de la educación. “Con toda su carga de opinionitis que ha servido para secundar la ignorancia, las consecuencias han sido desastrosas no solamente para la pedagogía, también para su relación con la educación para la imagen de humanidad” ( Morín, 218, 1975 ) Después del tecnicismo de los siglos pasados y quizás gracias a la crisis de la cual mucho se ha hablado sobre las imposibilidades de que los sujetos actúen como ciudadanos y puedan vivir juntos, desde el respeto por las diversidades, hasta los encuentros éticos y políticos de vida pública, por tanto, vivir con el otro no en un sentido meramente acumulativo, de reunirse, sumarse, ni necesariamente solo racional, hoy se tienen muchos 4

obstáculos de frente, como son, las imágenes del sentido del progreso, los ideales de la vida útil, la mirada de la pseudoformación como educación, con y en competencias, tics, como sinónimo de progreso educativo y de claridad administrativa, las inteligencias aparentemente devenidas por naturaleza, que también aparentemente selecciona desde la génesis los sujetos para cada tipo de actividades productivas, colocando siempre a la economía como centro de caracterización. Bien pues a pesar de este dominio de performatividad; sin embargo, hay intentos, los menos, modestos, por colocar a las humanidades y ahí a la pedagogía en un lugar, como en su origen, diferente al supuesto objetivismo de lo natural neurocientífico o técnico funcional, colocar a la pedagogía en el lugar de saberes, así, con todo el sentido de la aventura epistémica, saberes centrados y preocupados en ofrecer espacios abiertos en el lenguaje, para crear formas de obrar en el mundo y ahí crear imágenes de humanidad, sin imponerlas, sino siempre como en su origen y en su momento dorado, siempre en su sentido crítico, abierto, poético, sin desde ellas determinar a los sujetos los yos y los otros los extraños, sino aprendiendo de ellos, sin colocarlas como verdades, como las que ahora nos invaden y nos ahogan las imágenes artificialmente naturales de humanidad de la performatividad, los clones pseudoeducativos, técnicamente perfectos y progresistas, vacíos y llenos de mediatización, políticas de competencia y deseo de ganar por encima de lo otro, las otras imágenes, no sabemos si nos buenas o malas, perfectas o imperfectas, incluso por que no creemos en esas analogías del mundo de la administración, simplemente son imágenes que se colocan en el mundo desde una necesaria experiencia de vida y de mundo ética. Hablar de la imagen que da sentido al párrafo anterior, implica, saber de la historia de cómo llegó el concepto formación, como siempre

se colocó

desde una postura de

oposición, se ha encontrado así siempre opuesto a los formalismos y conformismos, siempre opuesto a las cosas esquemáticas, morales y obligatorias, siempre contra corriente, a lo simple, lo vulgar, quizás esa sea su fortaleza que siempre se opone, para crear historias y realidades humanas nuevas, más éticas, con lecturas más complejas. Lo entendemos cuando éste aparece en el siglo de las luces ya dentro de la historia de la pedagogía ( a propósito, para nosotros los pedagogos su siglo de oro, pero siempre a contracorriente) e implica deshacer la imagen dada por naturaleza para crear la cultura, también nace articulado, no a ideas de progreso mediático, tecnicista, sino a procesos de encuentros complejos con la idea de futuro, crear futuro significa crear humanidad y la Bildung estaba ahí estableciendo en la apertura y el regreso, la imagen de hombre, la pedagogía renacía aquí de frente a los estados modernos como el proyecto, el proceso y los 5

ámbitos que harían de la humanidad, cultura y expresión de ella misma, siempre rompiendo y siempre reconstruyéndose, como diría el siglo XVIII. ¨La Bildung neohumanista entiende que la persona esta dotada de una autonomía no exenta de leyes y que no consiste en una narcisista autocreación. Une individualidad y generalidad social, libertada y necesidad. Uniones que trazan el ideal al que asintóticamente debe llegar la educación si no quiere dejar de serlo”. (Salmerón, 37, 2002) Lo anterior implica que aquellos que desean hacer de la educación un acto de la práctica pedagógica, tendrán que tener cuidado en abrir en los espacios de ésta, los ámbitos para que se pueda desplegar la formación, cosa bien compleja, si se reconoce en ese espacio la necesidad de las relaciones entre particularidad y universalidad; es decir, en otro contexto histórico, las posibilidades de la vida privada y la vida pública, la educación en este momento articulada a la pedagogía como Bildung, implica que el acto de ella misma, tiene como telos el hombre con formación ético, político, creador y recreador de cultura, la humanidad liberada de las ataduras de su naturaleza y mirada como espacio del ejercicio de la libertad social pública y la ética privada, para crear la ciudad y hacerse cargo de ella, esos son los fines de la educación, que hoy tanto urge, frente a colectividades amorfas o uniformantes, hoy necesitamos un respiro de Bildung. Que si la Bildung debe o no encontrarse en un proceso de formación de pedagogos, resulta como pregunta ingenua o peligrosa, ingenuo por que aquel que crea que no es necesario hablar de formación en pedagogía, y diga que ese es un discurso que no se sabe de donde se crea o como llegó, lo que denota es su ignorancia frente a la historia, frente las coyunturas de sentido de la pedagogía, la ignorancia también puede ser un gran riesgo, el pedagogo de opinión, del que ya hablamos, pero no saber que se es ignorante y creer que se sabe todo, eso si es un verdadero peligro, ya decía Cesar Carrizales, ¨…el que cree que todo lo sabe, no se da cuenta que nada sabe ¨, entonces, puede excluir algo de lo cual nunca se ha enteradoiv Pero como decía Kant ¨…es más tolerable que un ignorante considere en su presunta práctica que la teoría es inútil y superflua, que ver que un experto ( un maestro de pedagogía, por ejemplo) le concede a la teoría un valor puramente escolar, como para ejercitar la inteligencia, mientras afirma que en lo práctico pasa algo muy diferente, que cuando trasladamos la teoría de la escuela al mundo nos percatamos de que perseguimos vanos vacíos ideales y sueños filosóficos, en una palabra que lo que se puede oír con agrado en teoría carece de validez para la práctica.( Kant, 98, 2004) Esta cita de Kant, discute muy bien la problemática de aquellos que creen que saber de formación en 6

pedagogía puede ser innecesario, inservible, como una pérdida de tiempo, cuando el discurso de la Bildung se este o no de acuerdo, se sepa o no, es un discurso coyuntural en la historia del sentido pedagógico, quizás, el más peligroso y por tanto el más excluido, dado que proponía, no solamente, la relación ética entre universalidad y particularidad, sino creaba las imágenes de encuentro, acuerdo ético, diferencia y mismidad, creaba desde los griegos las imágenes de ciudadanía y ciudad, colocando al ciudadano, como aquel responsable de la ciudad y por ende era necesario que éste viviera procesos constantes de creación de visones de mundo y de vida; es decir Bildung: formación. Pero quizás sea más criticable, que sabiendo de los sentidos de la formación en pedagogía, justamente por esa razones se le quiera excluir, alejar de la mirada de los pedagogos en formación, puesto que si se le desaparece del lenguaje, se borra y también desaparece como realidad, es decir, deja de existir. Hablar de formación es peligroso para el pensamiento único, la sociedad red, la sociedad de la información, para la productividad, el mercado, el consumo, los mundos reducidos a lo laboral y las capacitaciones, las políticas de competencia en la escuela, las inteligencias emocionales o múltiples, las neurociencias, todas ellas articuladas a la creación de una realidad aparentemente dada y transparente, el mundo reducido al ciclo de economía, industria y tecnología, el mundo que más violencia ha generado en tanto que los sujetos no se encuentran; se confrontan, compiten y se destruyen, por que ya no hay formación, no hay ciudad, las escuelas son grandes centros de capacitación para el trabajo y la sociedad civil se ha quedado muda, cada uno encerrado en su esfera, con su televisor, su computador, creyendo que esta conectado con un mundo convertido en vacío, control y límites de moral productiva, eficientista, funcional, pero no de formación, Por que negar a los pedagogos saber hoy de la formación, por que no presentarla como lo que históricamente fue y sigue siendo, aunque los pedagogos y la escuela la quieran desconocer, por qué no permitir que los estudiantes de pedagogía opten en libertad, poder elegir en algún momento en su práctica, a la formación, por qué se quiere excluir los sentidos históricamente esenciales de la pedagogía, aquellos discursos que le dieron vida, origen y proyección de mundo y de cultura, aquellos que la crearon como parte del origen de la cultura occidental, entre humanidad y cultura la pedagogía como proceso y como producto, o como el proyecto mismo de la modernidad en el siglo de las Luces. Finalmente tendríamos que reconocer que al introducir la Bildung en las escuelas, ésta se ha acartonado aplastada por los procesos administrativos de evaluación, organización y control, en algún sentido desde Humbolt, a la Bildung se le centró demasiado en los 7

procesos academicistas y sin embargo, ¨…no puede formularse un modelo pedagógico coherente ignorando el concepto de Bildung tal y como lo formularon los neohumanistas, Una escuela basada en un modelo rousseauniano de educación que lo fía todo a la bondad absoluta del individuo frente a la pérfida sociedad es totalmente inviable, por su parte una escuela pragmática, entendida como el lugar en el que se imparten conocimientos y se estima al individuo sólo en cuanto potencial engranaje, es tan viable como indeseable (…) ésta le confiere al educador poderes de ingeniero diseñador de una cadena de montaje, anulando toda posibilidad crítica. ( Salmerón, 37, 2002) Así la pregunta sobre una pedagogía alejada de las cuestiones pragmáticas que parece la determinaron desde finales de 1800 hasta nuestra época, tiene en la Bildung una respuesta y querer no mirarla se convierte en un absurdo en un juego perverso para desaparecer de las escuelas de pedagogía, la teoría pedagógica de la Bildung y convertir al pedagogo en un sujeto funcional a la competencia productiva del pensamiento único

NOTAS

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i

“Durante el período comprendido entre 1883 1914, la pedagogía en Francia se abre paso más allá de las Escuelas Normales Primarias y de las Escuelas Normales Superiores incursionando en las facultades de letras de las universidades, como cátedra universitaria. Paradójicamente, Ferdinand Buisson profesor de la cátedra de pedagogía o ciencia de la educación en la Sorbona, desde 1896 hasta 1902, se refería así a la pedagogía en su lección inaugural. “No se humilla la pedagogía recordando que ésta sólo puede ser una ciencia de aplicaciones, y aplicaciones de segunda mano (…) .Con Durkheim, la pedagogía se encuentra en un punto intermedio entre la ciencia y el arte, pues el arte esta referido a todo lo que es la práctica pura, sin teoría, de esta manera intenta reorganizar el discurso institucional de la pedagogía, pero no le proporciona a ésta un discurso que le sea propio sino que la deja dependiendo totalmente, del desarrollo de las ciencia de la educación. Además la pedagogía como teoría práctica sería tan sólo una aplicación de las nociones que desarrolle esta ciencia, quedando así imposibilitada de crear sus propios conceptos” Rios Beltran Rafael Las ciencias de la educación. Entre universalismo y particularismo cultural , Universidad Antioquia Colombia ii

Los alumnos de dos grupos de primer semestre de la carrera de pedagogía, preguntaron aproximadamente a 400 personas, ¿qué es pedagogía?, las respuestas se centraron fundamentalmente en: maestro de niños, persona que usa técnicas para enseñar y aprender, pedagogía es educación, lo alarmante fue cuando hicieron la misma pregunta a estudiantes y algunos maestros de la carrera y encontraron el mismo tipo de respuesta iii

.-“ya no es la naturaleza la que rodea por doquiera al hombre , de manera inextricable, sino una segunda naturaleza , creada artificialmente por el hombre: la técnica” Meyer, La tecnificación del mundo, Gredos, Madrid, 1966, p 17 iv

Esta frase nos recuerda el mito de la caverna, éste donde los hombres atados de frente a la piedra sólo podían ver los reflejos o sombras de aquello que fuera acontecía; sin embargo el hombre que logró salir, al ser deslumbrado por la luz, creyó que la verdad era el deslumbramiento, del cual los hombres de adentro nada sabían y ahí sintió superior puesto que creía que veía más, veía la verdad, cuando ni unos ni el otro lograban ver todo, incluso no ven las cosas ven lo que desde su visión se deja ver, ficción, pero no la verdad, así cuando alguien no sabe de algo y cree que todo lo sabe, termina descalificando lo que no sabe, dado que no se encuentra en su espectro de visión, al final todo se vuelve creación, metáfora BIBLIOGRAFÍA Salmerón M. Novela de formación y peripecia, Antonio Machado, Madrid, España, 2002 Kant, Immanuel Filosofía de la historia. Qué es la ilustración, Caronte Filosofía, La Plata, Argentina, 2004 Morín, Lucien Los charlatanes de la nueva pedagogía, Herder, España, Barcelona, 1975 Meyer, La tecnificación del mundo, Gredos, Madrid, 1966 Rios Beltran Rafael Las ciencias de la educación. Entre universalismo y particularismo cultural , Universidad Antioquia Colombia, 2003