INTRODUCCIÓN Los 12 nervios craneales controlan las funciones sensitivas y motoras del cuello y la car
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INTRODUCCIÓN Los 12 nervios craneales controlan las funciones sensitivas y motoras del cuello y la cara, incluyendo inervación de músculos voluntarios e involuntarios y la sensación de información sensitiva tanto general como especial. Es de suma importancia el estudio de la anatomía, función y distribución de estos nervios para la evaluación de neuropatías craneales. Los nervios craneales se sitúan en la base del cerebro y sus núcleos se organizan en el tallo cerebral de medial a lateral y superior a inferior de la siguiente forma: Los núcleos somatomotores se sitúan cerca de la línea media: Oculomotor III, Troclear IV, Abducens VI, Hipogloso XII. Los núcleos visceromotores se sitúan laterales: Edinger-‐Westphal (accesorio del III, fibras preganglionares parasimpáticas al esfínter pupilar y músculo ciliar), Lagrimal y Salivatorio superior (contribuyen al VII, origen de fibras preganglionares parasimpáticas a la glándula lagrimal y glándulas submandibular y sublingual, respectivamente.), Salivatorio inferior (fibras preganglionares parasimpáticas para la parótida), núcleo dorsal del vago IX (inerva vísceras del tórax y abdomen). Núcleos motores branquiales se sitúan aún más laterales: Motor del V (músculos de la mastocación), Motor principal del VII (músculos del segundo arco branquial), núcleo Ambiguo (IX, X, músculos de la laringe y faringe.), núcleo Espinal del nervio Accesorio (músculos esternocleidomastoideo y trapecio). Núcleos viscerosensitivos y sensitivos especiales son los más laterales: Mesencefálico del V (propiocepción inconsciente), Núcleo pontino del V(tacto fino), núcleo espinal del V (dolor y temperatura), núcleo del tracto del Solitario (gusto en su parte cefálica de los nervios VII, IX y X; e información barorreceptora y quimiorreceptora de los nervios IX y X), núcleo Vestibular (VIII, balance y equilibrio), Núcleos cocleares (VIII, información auditiva). Todos los nervios craneales tienen un orificio por donde atraviesan la base del cráneo: 1. Olfatorio: agujeros de la lámina cribiforme. 2. Óptico: canal óptico. 3. Oculomotor: fisura orbitaria superior. 4. Troclear: fisura orbitaria superior. 5. Trigémino a. División oftálmica: fisura orbitaria superior. b. División maxilar: agujero redondo. c. División mandibular: agujero oval. 6. Abducens: fisura orbitaria superior. 7. Facial: meato auditivo interno. 8. Vestibulococlear: meato auditivo interno. 9. Glosofaríngeo: agujero yugular. 10. Vago: agujero yugular. 11. Accesorio: agujero yugular. 12. Hipogloso: canal del hipogloso El trayecto, función y lesión de cada nervio será especificado en el contenido del documento.
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NERVIOS CRANEALES NERVIO OLFATORIO (I) El nervio olfatorio únicamente tiene componentes aferentes viscerales especiales. Función: olfacción. Salida del cráneo: orificios de la lámina cribosa del etmoides. Origen aparente: bulbo olfatorio. Origen real: cilios olfatorios de las prolongaciones periféricas gruesas de las células receptoras que se encuentran en la mucosa olfatoria del techo de la cavidad nasal, dispersas entre las células de soporte. Los cilios reaccionan a los olores presentes en el aire y estimulan a las células olfatorias. RECORRIDO Las prolongaciones centrales finas de las células receptoras forman las fibras nerviosas olfatorias. Los haces de estas fibras pasan a través de las aberturas de la lámina cribosa del hueso etmoides para penetrar en el bulbo olfatorio. En este sitio hay diferentes tipos de células nerviosas, la más grande de las cuales es la célula mitral. Las fibras nerviosas olfatorias hacen sinapsis con las dendritas de las células mitrales y forman áreas redondeadas conocidas como glomérulos sinápticos. Las células más pequeñas del bulbo olfatorio también hacen sinapsis con las células mitrales. En el extremo posterior del bulbo olfatorio nace una banda estrecha de sustancia blanca que discurre por debajo de la superficie del lóbulo frontal del cerebro, conocido como tracto olfatorio. Al alcanzar la sustancia perforada anterior, se divide en las estrías olfatorias lateral y medial. La estría lateral transporta los axones al área olfatoria de la corteza cerebral ipsilateral; la estría medial transporta fibras que cruzan el plano medio en la comisura anterior para llegar al bulbo olfatorio del lado opuesto. Anteriormente se decía que la estría medial llevaba fibras hacia el área septal, sin embargo, actualmente se sabe que no existe ninguna conexión de este tipo. Se habla también de una estría olfatoria intermedia que se funde con la sustancia perforada anterior. Las estrías olfatorias medial e intermedia están poco desarrolladas en el ser humano. La corteza olfatoria primaria está constituida por las áreas periamigdalar y pre-‐piriforme (lóbulo temporal). El área entorrinal (área 28) se denomina corteza olfatoria secundaria. Estas áreas son responsables de la apreciación de las sensaciones olfatorias. LESIONES La anosmia, que se define como pérdida del olfato, puede ser causada por una lesión en cualquier porción de la vía olfatoria. Esta puede tener distintas causas: Infecciones o inflamaciones. Tóxicas: fumadores crónicos. Traumáticas: fracturas del suelo de la fosa craneal anterior. Anosmia congénita. Enfermedades degenerativas: Alzheimer, Huntington, Parkinson, síndrome de Down, etc. Neoplásica (tumores): un tumor en el suelo de la fosa craneal anterior puede afectar el sentido del olfato a causa de la presión que ejerce sobre el bulbo olfatorio o el tracto olfatorio. Por lo general, esto se presenta como anosmia unilateral. Iatrogénica: terapia con radiación, cirugías en la base del cráneo o lobectomía temporal.
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La parosmia es la percepción de olores imaginarias. Si se percibe un olor desagradable, se denomina cacosmia. Usualmente se desarrollan luego de lesiones en la cabeza o se encuentran relacionadas con enfermedades psiquiátricas. La hiperosmia es un incremento en el sentido del sentido del olfato; tiene muchas causas posibles: insuficiencia de la corteza suprarrenal, embarazo, menopausia, etc. Está relacionada a desórdenes hormonales. Por otro lado, la hiposmia es la disminución del sentido del olfato; puede presentarse debido a una deficiencia de zinc y vitamina A. NERVIO ÓPTICO (II) Sólo tiene componentes aferentes somáticos especiales. Función: visión. Salida del cráneo: agujero óptico. Origen aparente: quiasma óptico. Origen real: retina. Los conos y bastones, que son fotorreceptores, hacen sinapsis con las células ganglionares de la retina. RECORRIDO Los axones de las células ganglionares convergen en el disco óptico o papila óptico (centro de la retina) y forman el nervio óptico; atraviesa el canal óptico, entra al cráneo y se une con el nervio óptico del lado opuesto, formando el quiasma óptico. Este último se encuentra en la unión de la pared anterior y el suelo del tercer ventrículo. En el quiasma, las fibras de la mitad nasal de cada retina (incluyendo la mitad nasal de la mácula) se cruzan para proyectarse hacia el lado opuesto del cerebro, mientras que las fibras de la mitad temporal (incluyendo también la mitad temporal de la mácula) se continúan en el mismo lado. El quiasma óptico se continúa posteriormente como tractos ópticos izquierdo y derecho. Los axones que van por estos tractos o cintillas ópticas se dirigen hacia el cuerpo geniculado lateral, donde establecen sinapsis con sus seis capas de células. Las fibras de las mitades derechas de las dos retinas hacen sinapsis en el cuerpo geniculado lateral derecho; las de las mitades izquierdas hacen sinapsis en el cuerpo geniculado lateral izquierdo. Los axones de los cuadrantes superiores periféricos con respecto a la mácula finalizan en la parte medial del cuerpo geniculado lateral, mientras que los axones de los cuadrantes inferiores periféricos finalizan en la porción lateral del mismo. La mácula se proyecta hacia una región posterior relativamente amplia del cuerpo geniculado lateral. Algunas fibras alcanzan el núcleo pretectal y el colículo superior (mesencéfalo) y se relacionan con los reflejos fotomotores. Los axones de las células nerviosas del cuerpo geniculado lateral forman las radiaciones ópticas o fascículos geniculocalcarinos, que atraviesan las partes sublenticular y retrolenticular de la cápsula interna, pasan alrededor del ventrículo lateral y se curvan hacia la corteza visual (área 17 de Brodmann) en el lóbulo occipital. La corteza de asociación visual (áreas 18 y 19) es la responsable del reconocimiento de objetos y percepción del color. REFLEJOS VISUALES Algunas fibras del tracto óptico evitan el cuerpo geniculado lateral y se introducen en el brazo posterior del colículo superior (mesencéfalo). Estas fibras forman parte de las ramas aferentes de los arcos reflejos; se dirigen hacia el colículo superior y al grupo de núcleos del área pretectal.
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Reflejo pupilar a la luz Se analiza en la exploración neurológica habitual. La respuesta consiste en la constricción de la pupila cuando la luz incide en el ojo. Los impulsos procedentes de la retina estimulan las neuronas del núcleo olivar pretectal, las cuales se proyectan hacia el núcleo de Edinger-‐Westphal (accesorio) del complejo oculomotor. Este núcleo emite fibras hacia el ganglio ciliar situado en la órbita y éste inerva al músculo esfínter del iris. Ambas pupilas se contraen como respuesta a la luz que entra en un ojo por dos razones: • Cada retina emite fibras a los tractos ópticos de ambos lados. • El área pretectal emite algunas fibras a través de la línea media en la comisura posterior hacia el núcleo de Edinger-‐Westphal contralateral. Reacción de acomodación-‐convergencia Se produce cuando se centra la atención en un objeto cercano y consiste en tres acciones: • Convergencia ocular, gracias a la contracción de los músculos rectos mediales. • Contracción de la pupila, para enfocar la imagen en la retina. • Abombamiento del cristalino, debido a la contracción del músculo ciliar. Se puede comprobar pidiendo al sujeto que contemple un objeto situado a aproximadamente 30 cm en frente de los ojos después de mirar a lo lejos y observando si existe convergencia ocular y constricción pupilar. Las instrucciones provenientes de la corteza de asociación visual alcanzan el mesencéfalo a través de las fibras que atraviesan el brazo superior y terminan en el colículo superior. Este último establece conexiones con los núcleos de los pares craneales que inervan los músculos extraoculares y el núcleo de Edinger-‐Westphal, de manera que se produce este reflejo. (Nota: la acción de estos núcleos se explican en los nervios craneales III, IV y VI). Dilatación de las pupilas Se da en respuesta a dolores o estados emocionales intensos. La vía se inicia con fibras procedentes de la amígdala y del hipotálamo, las cuales influyen sobre el asta intermediolateral de la médula espinal. La vía continúa hacia el ganglio cervical superior del tronco simpático y se completa con las fibras preganglionares del plexo carotídeo, que se dirigen hacia el músculo dilatador de la pupila situado en el iris. Al mismo tiempo, se inhibe la transmisión parasimpática al músculo esfínter del iris. LESIONES Papiledema: un aumento de la presión del LCR que rodea al nervio óptico obstruye el retorno venoso. Se produce un edema en la papila óptica. Pérdida de distintas porciones del campo visual Hemianopsia bitemporal: consecuencia de una sección sagital del quiasma óptico, habitualmente producida por un tumor de la glándula hipófisis que ejerce presión sobre el quiasma. Hemianopsia nasal: lesión parcial del quiasma óptico en su parte lateral. Hemianopsia homónima contralateral: se origina por la división del tracto óptico o la destrucción de la corteza visual en un lado. Ceguera total monocular: se produce después de la sección completa de un nervio óptico. Cuadrantanopsia: se pueden presentar por una lesión cortical o por una lesión incompleta de las radiaciones ópticas.
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NERVIO OCULOMOTOR (III) Lleva fibras eferentes de dos tipos: eferentes somáticas generales y eferentes viscerales generales. • Las fibras ESG inervan a los músculos extraoculares del ojo: rectos (superior, inferior y medial), músculo oblicuo menor o inferior, músculo elevador del parpado superior. • Las fibras EVG inervan al músculo constrictor de la pupila y al músculo ciliar, que se encarga de la acomodación del cristalino para el enfoque. Función: movimiento de los ojos, junto con los nervios troclear y abducens. Salida del cráneo: fisura orbitaria superior. Origen aparente: a ambos lados de la fosa interpeduncular, cerca de la unión entre mesencéfalo el y el puente. Origen real: dos núcleos motores ubicados en el mesencéfalo. • Núcleo oculomotor principal: se encuentra en la sustancia gris periacueductal del mesencéfalo, ventral al acueducto cerebral, a nivel de los colículos superiores. Da origen a las fibras eferentes somáticas generales. Este núcleo recibe fibras corticonucleares de ambos hemisferios cerebrales; fibras tectobulbares del colículo superior, a través de las cuales le llega información de la corteza visual. También recibe fibras del fascículo longitudinal medial, a través del cual se conecta con los núcleos de los nervios craneanos IV, VI y VIII. • Núcleo accesorio o de Edinger-‐Westphal: se sitúa dorsal al núcleo motor ocular principal y da origen a fibras parasimpáticas preganglionares, que corresponden a las fibras eferentes viscerales generales. Este núcleo recibe fibras cortico-‐nucleares para el reflejo de acomodación y fibras del núcleo pretectal para los reflejos fotomotor directo y consensual. RECORRIDO El nervio oculomotor emerge de la superficie anterior del mescencéfalo. Al salir de la fosa interpeduncular, se relaciona con el borde libre del tentorio del cerebelo y se dirige hacia adelante entre las arterias cerebral posterior y cerebelosa superior. Continúa hacia el interior de la fosa craneal media en la pared lateral del seno cavernoso, donde se divide en una rama superior y una rama inferior que penetran en la cavidad orbitaria a través de la fisura orbitaria superior. A través de su rama superior inerva al músculo elevador del párpado y al recto superior. Su rama inferior inerva al recto medial, recto inferior y oblicuo inferior. Su ramo parasimpático hace sinapsis en el ganglio ciliar, da origen a fibras parasimpáticas post-‐ganglionares que pasan a través de los nervios ciliares cortos que pasan entre la coroides y la esclerótica e inervan al músculo esfínter de la pupila y al músculo ciliar. LESIÓN En una lesión completa del nervio oculomotor el ojo no se puede mover hacia arriba, hacia abajo o hacia el centro. En reposo, el ojo mira lateralmente, correspondiendo a la actividad del recto lateral, y hacia abajo, correspondiendo a la actividad del oblicuo superior. El paciente ve doble. Hay ptosis debido a la parálisis del elevador del párpado superior. La lesión de las fibras EVG provoca anisocoria por midriasis; es decir, una pupila de tamaño normal contralateral a la lesión y una pupila dilatada y arreflectiva a la luz del lado de la lesión. La acomodación del ojo está paralizada. NERVIO TROCLEAR (IV) Lleva fibras eferentes somáticas generales. Función: movimiento oblicuo del ojo a través del músculo oblicuo superior.
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Salida del cráneo: fisura orbitaria superior. Origen aparente: cara posterior del mesencéfalo, justo por debajo de los colículos inferiores. Origen real: núcleo troclear que se encuentra en la parte anterior de la sustancia gris que rodea el acueducto cerebral en el mesencéfalo, a nivel del colículo inferior. Se encuentra inferior al núcleo oculomotor principal y dorsal al fascículo longitudinal medial. Este núcleo recibe fibras corticonucleares de ambos hemisferios cerebrales. Recibe fibras tectomedulares, que lo conectan con la corteza visual a través del colículo superior. También recibe fibras del fascículo longitudinal medial, a través del cual está conectado con los núcleos de los pares craneales III, VI Y VIII. RECORRIDO El nervio troclear es el más delgado de los pares craneales y el único que sale por la superficie posterior del tronco cerebral. Abandona el mesencéfalo e inmediatamente se decusa con el nervio del lado opuesto. Corre hacia delante hacia el ojo en el espacio subaracnoideo. Pasa entre la arteria cerebral posterior y la arteria cerebelosa superior, lateral al NC III. Atraviesa la duramadre, cerca del borde libre del tentorio del cerebelo. Pasa a través de la fosa craneal media en la pared lateral del seno cavernoso, donde se une a los nervios oculomotor y abducens, y penetra en la órbita a través de la fisura orbitaria superior. Cruza medialmente cerca del techo de la órbita sobre el músculo elevador del párpado superior y el recto superior para inervar el músculo oblicuo superior. LESIONES Una lesión unilateral de un núcleo o fascículo del NC IV resulta en una parálisis del músculo oblicuo superior contralateral a la lesión, mientras que lesiones distales a la decusación de las fibras resultan en una parálisis del músculo oblicuo superior ipsilateral a la lesión. El paciente presenta diplopía vertical (visión doble), lo que se debe a que las imágenes de los dos ojos están inclinadas una en relación con la otra, ya que el oblicuo superior está paralizado y el ojo se gira medialmente y hacia abajo. Generalmente, el paciente inclina la cabeza hacia el lado sano para poner los dos ojos en un mismo plano visual (signo de Bielschowski). NERVIO ABDUCENS (VI) Lleva fibras eferentes somáticas generales. Función: movimiento lateral del ojo a través del músculo recto lateral. Salida del cráneo: fisura orbitaria superior. Origen aparente: surco medulopontino, lateral a las pirámides. Origen real: núcleo del abducens, situado en el tegmento pontino dorsal, ventral al piso del cuarto ventrículo y separado de él por la rodilla del facial (colículo facial). Recibe el fascículo tectomedular del colículo superior, a través del cual la corteza cerebral se halla conectada con los núcleos. También recibe fibras del fascículo longitudinal medial por el cual está conectado con los núcleos de los pares craneales III, IV y VIII. RECORRIDO Las fibras del nervio abducens pasan en dirección anterior a través del puente y emergen en el surco medulopontino. Asciende a través del espacio subaracnoideo de la fosa posterior, para entrar al seno cavernoso, donde viaja lateral a la arteria carótida interna y medial al NC V1. Entra a la órbita en el extremo medial de la fisura orbitaria superior, atraviesa el anillo de Zinn e inerva el músculo recto lateral.
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LESIONES Las lesiones del nervio abducens causa daño ipsilateral de la mirada lateral, por lo tanto, los pacientes con parálisis unilateral del abducens se quejan de diplopía horizontal, peor aún en la dirección del músculo parético recto lateral. Una lesión del núcleo del NC VI perjudica la mirada ipsilateral de ambos ojos. Esto se debe al hecho de que el complejo nuclear del abducens contiene interneuronas proyectándose vía el fascículo longitudinal medial al núcleo oculomotor contralateral. Por lo tanto, una lesión del lado derecho en el núcleo abducens daña la mirada hacia la derecha de ambos ojos. Mientras que una lesión del lado derecho del nervio abducens daña la mirada hacia la derecha del ojo derecho solamente. Este es el único nervio craneal en el cual la lesión de las fibras de las raíces y la lesión del núcleo no produce el mismo efecto. Existen lesiones congénitas del NC VI que incluyen el síndrome de Möbius (un desorden genético causado por la ausencia o el pobre desarrollo de los nervios craneales VI y VII, caracterizado por la parálisis de la mirada horizontal asociada a diplejía facial) y el síndrome de retracción de Duane (déficit congénito de la abducción horizontal unilateral debida a la ausencia del nervio abducens en uno de los ojos, caracterizado por la parálisis de la mirada con retracción del globo ocular). NERVIO TRIGÉMINO (V) El nervio trigémino es el más grande y es el nervio sensitivo de la mayor parte de la cabeza y motor de los músculos de la masticación. Tiene tres porciones: nervio oftámico (V1), nervio maxilar (V2) y nervio mandibular (V3). Lleva fibras tanto aferentes como eferentes. • Aferentes somáticas generales: llevan información de tacto, dolor, temperatura y propiocepción de los músculos de la masticación y de la articulación temporomandibular. • Eferentes viscerales especiales: inervan a músculos derivados del primer arco faríngeo. Función: las tres porciones del nervio tiene función sensitiva. El nervio mandibular es el único de los tres que también tiene función motora. Salida del cráneo • Nervio oftálmico: fisura orbitaria superior. • Nervio maxilar: agujero redondo. • Nervio mandibular: agujero oval. Origen aparente: parte anterolateral del puente. Origen real: posee cuatro núcleos. • Núcleo sensitivo: ubicado en la parte posterior del puente, lateral al núcleo motor. Se continúa por debajo con el núcleo espinal. • Núcleo espinal del trigémino: se continúa por arriba con el núcleo sensitivo principal en el puente y se extiende inferiormente a través de toda la longitud de la médula oblongada y parte superior de la médula espinal hasta el segundo segmento cervical en la lámina II de Rexed o sustancia gelatinosa. • Núcleo mesencefálico: se ubica en la parte lateral de la sustancia gris periacueductal. Se extiende inferiormente en el puente hasta el núcleo sensitivo principal. • Núcleo motor: ubicado en el puente, medial al núcleo sensitivo principal.
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RECORRIDO El nervio trigémino sale a través de la cara anterior del puente como raíz motora y una gran raíz sensitiva. Se dirige hacia delante saliendo por la fosa craneal posterior y descansa sobre la superficie superior del vértice de la porción petrosa del hueso temporal en la fosa craneal media. La raíz sensitiva se expande para formar el ganglio trigeminal con forma semilunar, ubicado dentro de un saco de duramadre conocido como cavum trigeminal o de Meckel. Sus divisiones nacen del borde anterior del ganglio. Las sensaciones de dolor, temperatura, tacto y presión, provenientes de los receptores periféricos que se encuentran en la piel del rostro y las membranas mucosas, se propagan a lo largo de los axones cuyos cuerpos celulares están ubicados en el ganglio semilunar o ganglio sensitivo del trigémino o ganglio de Gasser. Las prolongaciones centrales de las neuronas ganglionares forman la gran raíz sensitiva del nervio trigémino, que se dirige a la cara anterolateral del puente. Dentro del puente, se dividen en ramas ascendente y descendente; las ramas ascendentes terminan en el núcleo sensitivo principal y las descendentes terminan en el núcleo espinal o del tracto espinal del trigémino. Las fibras sensitivas provenientes de la rama maxilar terminan en el medio del núcleo espinal y las fibras provenientes de la rama mandibular terminan en la parte superior del núcleo espinal. Por estas fibras viajan sensaciones de tacto, presión, dolor y temperatura. La información propioceptiva viene del núcleo mesencefálico del trigémino, cuyas neuronas descienden como ganglios que se van con la rama mandibular del trigémino y recogen información de husos neuromusculares de los músculos de la masticación y de la articulación temporomandibular. Se dice que el núcleo mesencefálico del trigémino funciona como un ganglio dentro del sistema nervioso central. Los axones de las neuronas en los núcleos sensitivos principal y espinal, y las prolongaciones centrales de las células del núcleo mesencefálico dan origen a las fibras trigémino-‐talámicas, que cruzan el plano mediano y ascienden como el lemnisco trigeminal para hacer sinapsis en el núcleo ventral posteromedial del tálamo; ascienden a través de la cápsula interna y llegan a la corteza sensitiva primaria, donde se hacen conscientes las sensaciones. El núcleo del trigémino no es exclusivo del nervio trigémino, es compartido con fibras sensitivas de los nervios facial, glosofaríngeo y vago. Las distintas ramas del trigémino recogen información sensitiva de distintas partes de la cara: Rama oftálmica: recoge la sensibilidad del globo ocular (ojos, conjuntiva, contenidos orbitarios), párpado superior, cavidad nasal, seno frontal, celdillas etmoidales, dorso de la nariz, parte anterior de pericráneo, duramadre, fosa craneal anterior y parte superior del tentorio. Rama maxilar: recoge la información sensitiva de la porción media de la fosa craneal media, nasofaringe, paladar, seno maxilar, piel de los lados de la nariz y párpado inferior, cavidad nasal, placa dentaria superior, mejilla en su porción superior y labio superior. Rama mandibular: recoge sensibilidad de la mejilla en su porción inferior, labio inferior, arcada dentaria inferior, pabellón auricular anterior, meato acústico externo, fosa temporal, celdillas mastoideas, placa dentaria inferior, duramadre del piso medio en sus porciones laterales y 2/3 anteriores de la lengua por medio del nervio lingual, una de sus ramas.
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El origen de las fibras eferentes viscerales especiales es el núcleo motor del trigémino en el puente, a partir del cual se forma la raíz motora del trigémino que se ubica dorsal a la raíz sensitiva. Estas fibras pasan por el ganglio del trigémino, sin hacer sinapsis en él, y se van con la rama mandibular del trigémino. A través de placa neuromuscular inervan a músculos derivados del primer arco faríngeo: Músculos de la masticación Tensor del tímpano. Tensor del velo palatino. Vientre anterior del digástrico. Milohioideo. REFLEJOS TRIGEMINALES Los colaterales de los tractos trigeminales ascendentes secundarios hacen sinapsis con los siguientes núcleos de nervios craneales para establecer respuestas reflejas: 1. El núcleo motor del trigémino para producir reflejo mandibular. 2. Los núcleos motores del facial de ambos lados, que resultan en un reflejo palpebral bilateral, el reflejo corneal (directo y consensual), en respuesta a la estimulación corneal unilateral. 3. El núcleo ambiguo, el centro respiratorio de la formación reticular y la médula espinal (núcleos del nervio frénico y células del cuerno anterior para los músculos intercostales), produciendo el reflejo del estornudo en respuesta a estimulación de la membrana mucosa nasal. 4. El núcleo motor dorsal del vago como parte del reflejo del vómito. 5. El núcleo salivar inferior para el reflejo de la salivación. 6. El núcleo del hipogloso para los movimientos reflejos de la lengua en respuesta a la estimulación lingual. 7. El núcleo salivar superior, lo que causa el reflejo de lagrimeo en respuesta a la irritación corneal. LESIONES Lesiones supranucleares Son bilaterales pero en su mayoría son contralaterales y relacionadas con el control de los músculos de la masticación vía fibras corticobulbares. Las lesiones de motoneurona superior unilateral pueden interrumpir la vía corticobulbar desde la corteza motora hasta el puente. Debido a que la mandíbula se desvía hacia el lado paralizado, se dice que se desvía lejos de la lesión. Las lesiones de motoneurona superior bilateral conducen a paresia espástica masticatoria. La vía sensitiva se puede interrumpir en cualquier lugar a partir de las fibras trigeminotalámicas hasta el tálamo, hasta el giro postcentral. Lesiones de bulbo raquídeo Afectan al núcleo motor y sensorial. Las lesiones de la porción dorsal medial del puente afectan al núcleo motor. Se puede presentar paresia ipsilateral, atrofia y fasciculaciones de los músculos masticatorios. Se sugiere que involucran al tracto corticospinal (hemiplejía contralateral), núcleo sensitivo primario del trigémino ( hemianestesia ipsilateral de la cara), tracto espinotalámico., oftalmoplejía del fascículo lontgitudinal medial internuclear y fibras descendentes simpáticas. Lesiones que afectan a la médula lateral o al cordón cervical superior afectan al tracto espinal y núcleo del trigémino y causan dolor ipsilateral facial y pérdida de la temperatura.
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Lesiones nucleares de la médula baja o cordón cervical espinal superior pueden resultar en pérdida de sensibilidad en la mejilla, frente lateral y mandíbula. Lesiones específicas: Tumores, malformaciones cavernosas, enfermedad desmielinizante, isquemia, siringobulbia. Lesiones del espacio subaracnoideo: Lesiones que afectan al nervio preganglionar causan paresia ipsilateral motora y/o dolor facial ipsilateral con un bajo reflejo corneal. Lesiones específicas: Tumores del ángulo cerebelopontino, enfermedad inflamatoria, trauma, compresión neurovascular, diseminación perineural del tumor. Lesiones del ápex petroso y la Cavidad de Meckel Pueden afectar al tronco principal del trigémino y al ganglio, causando dolor hemifacial severo o pérdida de sensibilidad. Lesiones específicas: Lesiones infecciosas, neoplasmas, lesiones inflamotorias, etc. El síndrome de Horner; el cual es postganglionar involucra dolor ipsilateral para la cabeza, cara, y porción retroorbitaria. Lesiones en el seno cavernoso Disfuncionalidad del III, IV,VI, rama oftálmica y rama maxilar debido a una lesión del seno que conduce a oftalmoplejía unilaterial con pérdida de sensación o dolor para las ramas del trigémino mencionadas y síndrome de Horner. Síndrome de la fisura orbitaria superior: Disfunción del III, IV, VI y rama oftálmica que deriva en oftalmoplejía y perdida de sensibilidad y dolor en la rama oftálmica asi paresia oculosimpaática y exoftalmos. Lesiones específcios: Neoplasma, inflamatorias, infecciones, apoplejía pituitaria, afectación debido a radiación. Lesiones del trigémino distal Pueden darse por trauma local o inflamación. Trauma a ramas distales trigeminales • V1: Los nervios supratroclear y supraorbitario son los más lesionados luego de un trauma frontal de la cabeza. • V2: El nervio infraorbitario se lesiona comúnmente. Nervios palatinos se pueden lesionar por fracturas del paladar duro. • V3: Los nervios alveolares inferiores se lesionan con fracturas mandibulares. Síndrome de la mejilla adormecida: Se manifiesta también en labio superior. Es causado por lesiones en el agujero infraorbitario. Síndrome de barbilla adormecida: Puede ser causado por diseminación perineural de un cáncer a nivel de la cabeza o cuello. NERVIO FACIAL (VII) Lleva fibras aferentes somáticas generales, aferentes viscerales especiales, eferentes viscerales especiales y eferentes viscerales generales. Salida del cráneo: agujero auditivo interno, agujero estilomastoideo. Origen aparente: surco medulopontino.
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Origen real: posee tres núcleos • Núcleo motor principal: ubicado en la profundidad de la formación reticular, en la parte inferior del puente. La porción que inerva los músculos de la parte superior del rostro recibe fibras cortico-‐nucleares de ambos hemisferios cerebrales. La porción que inerva los músculos de la parte inferior del rostro recibe sólo fibras cortico-‐nucleares del hemisferio cerebral opuesto. • Núcleos parasimpáticos: se ubican en posición posterolateral al núcleo motor principal. El núcleo salivatorio superior recibe fibras aferentes del hipotálamo a través de las vías autónomas descendentes. El núcleo lagrimal recibe fibras aferentes del hipotálamo para las respuestas emocionales y de los núcleos sensitivos del nervio trigémino para la lagrimación refleja secundaria a la irritación de la córnea o la conjuntiva. • Núcleo sensitivo: parte superior del núcleo del tracto solitario que se encuentra en la médula oblongada. Recibe las sensaciones del gusto. COMPONENTES FUNCIONALES Aferentes somáticas generales (ASG): sensación somática del meato auditivo externo, pabellón auricular y área retroauricular. El estímulo aferente es de dolor y temperatura y va hasta el ganglio geniculado del facial que se encuentra en la porción petrosa del hueso temporal. Luego sigue conjuntamente con el nervio facial hasta el núcleo espinal del trigémino y sigue el tracto trigeminotalámico. Aferentes viscerales especiales (AVE): sensación gustativa de los dos tercios anteriores de la lengua, paladar duro y blando, a través de la cuerda del tímpano. El estímulo gustativo va hasta el ganglio geniculado del facial, sigue el trayecto del nervio facial y va a la parte cefálica del núcleo solitario, que recibe la información gustativa. Eferente visceral especial (EVE): inerva los músculos derivados del II arco faríngeo, que corresponden a los músculos de la expresión facial: orbicular del ojo, cigomático mayor, orbicular de los labios, elevador de la comisura de los labios, depresor de la comisura de los labios, risorio, buccinador, mentoniano, vientres frontal y occipital del fronto-‐occipital, corrugador superciliar y platisma. También inerva el estapedio, estilohioideo y vientre posterior del digástrico. Las fibras se originan del núcleo motor principal del facial. Las fibras siguen el trayecto del facial hasta llegar a la parótida, donde el facial da sus dos troncos para inervar éstos músculos. Eferente visceral general (EVG): inervación visceral motora (parasimpática) a la glándula lagrimal, mucosas oral y nasal, a través del nervio petroso mayor, y glándulas submandibular y sublingual a través de la cuerda del tímpano. Estas fibras parasimpáticas preganglionares se originan en los núcleos salivatorio superior y lagrimales. • Núcleos lagrimales: originan fibras parasimpáticas preganglionares que siguen el trayecto del nervio facial, hasta el ganglio geniculado. A nivel del ganglio geniculado, estas fibras forman el nervio petroso mayor, al que se le une el nervio petroso profundo para formar el nervio vidiano. La porción parasimpática del nervio vidiano hace sinapsis en el ganglio pterigopalatino y, posteriormente, estas fibras parasimpáticas post-‐ganglionares inervan la glándula lagrimal y glándulas de la mucosa nasal y oral. • Núcleo salivatorio superior: origina fibras parasimpáticas preganglionares que siguen el trayecto del facial y se unen con la cuerda del tímpano. Posteriormente, se unen al nervio lingual, rama del nervio mandibular. Adyacente al nervio lingual está el ganglio submandibular, en donde hacen sinapsis estas fibras, para convertirse en fibras parasimpáticas postganglionares que inervan las glándulas submandibular y sublingual.
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RECORRIDO Las fibras de la raíz motora primero se dirigen hacia atrás alrededor de la cara medial del núcleo abducens, formando la rodilla del facial. Pasan alrededor del núcleo por debajo del colículo facial en el piso del IV ventrículo y finalmente se dirigen hacia adelante para salir del tronco cerebral. La raíz sensitiva (nervio intermediario de Wrisberg) está formada por las prolongaciones centrales de las neuronas unipolares del ganglio geniculado; contiene fibras parasimpáticas preganglionares eferentes de los núcleos parasimpáticos. La raíz sensitiva sale con la raíz motora. Las dos raíces del nervio emergen de la superficie anterior del cerebro entre el puente y la médula oblongada. Discurren lateralmente en la fosa craneal posterior con el nervio vestibulococlear y penetran en el conducto auditivo interno. Se relaciona íntimamente con la arteria cerebelosa anteroinferior que se ubica en posición ventral entre los nervios y la superficie pontina. Al final del conducto, el nervio entra en el canal facial y discurre lateralmente a través del oído interno. Al alcanzar la pared medial de la cavidad timpánica, el nervio se expande para formar el ganglio geniculado sensitivo y gira bruscamente hacia atrás por encima del promontorio. En la pared posterior de la cavidad timpánica, el nervio facial gira hacia abajo en el lado medial de la entrada del antro mastoideo, desciende por detrás de la pirámide y emerge a través del orificio estilomastoideo. En la porción petrosa del temporal, el facial da las ramas terminales siguientes: nervio petroso mayor, nervio para el estapedio, cuerda del tímpano y ramo anastomótico para el vago. Tras salir por el agujero estilomastoideo, emite la rama para el vientre posterior del músculo digástrico, la rama para el músculo estilohiodeo y nervio auricular posterior que inerva a los músculos auriculares. Al ascender entre el conducto auditivo externo y la apófisis mastoides, emite los ramos occipital y auricular. Luego corre hacia delante por la glándula parótida, lateral a la apófisis estiloides, a la vena retromandibular y a la arteria carótida externa; se divide detrás del cuello del hueso maxilar inferior en ramas que perforan la cara anteromedial de la glándula parótida y se separan cubiertas por esta. Forman una red (plexo parotídeo) que se distribuye a los músculos de la cara, excepto a los músculos masticadores, que son inervados por el Nervio Trigémino (V). Antes de dividirse en sus ramas terminales convencionalmente presenta dos troncos, los cuales clásicamente son denominados los troncos superior (temporofacial) e inferior (cervicofacial). REFLEJOS Reflejo nasopalpebral o glabelar: se evoca por la percusión con el dedo sobre la raíz de la nariz. Es importante que el golpe sea ligero y que el paciente no se encuentre visualmente amenazado por la aproximación directa de los dedos de frente. La respuesta refleja es el cierre brusco de ambos ojos. Reflejo de chupeteo: La percusión del labio superior con el borde de un depresor no produce respuesta visible, salvo durante la infancia o por lesiones bilaterales de la motoneurona. LESIONES Lesiones supranucleares: parálisis/paresia contralateral de la porción inferior de la hemicara (parálisis central). La parte superior de la cara se mantiene normal debido a la inervación ipsilateral y contralateral.
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Lesiones nucleares y fasciculares: paralisis/paresia ipsilateral de la hemicara completa (parálisis facial periférica). Ejemplo: síndrome de Millard-‐Gubler, que es una lesión de la porción ventral del puente que afecta los nervios craneales VI, VII. NERVIO VESTIBULOCOCLEAR (VIII) Lleva fibras aferentes somáticas especiales. Salida del cráneo: agujero auditivo interno. Origen aparente: surco medulopontino. Funciones: audición y equilibrio. El nervio vestibulococlear consta de dos partes distintas: el nervio vestibular y el nervio coclear. Ambos están vinculados con la transmisión de información aferente desde el oído interno hasta el sistema nervioso central. NERVIO COCLEAR Conduce impulsos nerviosos vinculados con el sonido desde el órgano de Corti en la cóclea. Las prolongaciones periféricas de las neuronas localizadas en el ganglio espiral de la cóclea inervan las células ciliadas del órgano de la audición u órgano de Corti. En la base de la cóclea, las prolongaciones centrales de estas neuronas forman el nervio coclear propiamente. Este discurre por el conducto auditivo interno, pasa por el ángulo ponto-‐cerebeloso y entran en la superficie anterior del tronco encefálico a través del surco medulopontino, sobre la cara lateral del nervio vestibular. Al llegar a la médula oblongada, las fibras se dividen en una rama que entra en el núcleo coclear posterior y otra que entra en el núcleo coclear anterior. Ambos núcleos están ubicados sobre la superficie del pedúnculo cerebeloso inferior. Los núcleos cocleares dan origen a la vía auditiva: se decusan para formar el cuerpo trapezoide y la estría acústica posterior. Las fibras hacen relevo en el núcleo olivar superior. Los axones ascienden a través de la parte posterior del puente y del mesencéfalo, formando el lemnisco lateral. Al alcanzar el mesencéfalo, las fibras hacen sinapsis en el núcleo del colículo inferior. Luego ascienden al cuerpo geniculado medial y pasan a la corteza auditiva a través del la radiación acústica de la cápsula interna. La corteza auditiva primaria (áreas 41 y 42) incluye los giros de Heschl sobre la superficie superior de la circunvolución temporal superior. NERVIO VESTIBULAR Conduce impulsos nerviosos desde el utrículo y el sáculo, es decir, información vinculada con la posición de la cabeza. También conduce impulsos desde los conductos semicirculares que proporcionan información vinculada con los movimientos cefálicos. El ganglio vestibular o de Scarpa, ubicado en el oído interno, recibe información de las prolongaciones periféricas de sus neuronas: los nervios ampollares y los nervios maculares. Los nervios ampollares provienen de las ampollas de los conductos semicirculares anterior, lateral y posterior; dan la información de aceleración y desaceleración angular (al rotar el cuerpo con la cabeza). Por otro lado, los nervios maculares reciben información de las máculas acústicas (utrículo y sáculo), que recogen información de aceleración y desaceleración lineal, horizontal y vertical.
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Las prolongaciones centrales de las neuronas del ganglio vestibular forman propiamente el nervio vestibular, que discurre a través del conducto auditivo interno y entran al tronco cerebral a través del surco medulopontino. Una vez dentro, se dirigen hacia los núcleos vestibulares superior, inferior, lateral y medial de la médula oblongada, donde hacen sinapsis. Estos núcleos también reciben fibras provenientes del cerebelo a través del pedúnculo cerebeloso inferior. Los núcleos vestibulares establecen conexiones con el cerebelo, la médula espinal y la corteza cerebral para que se den reflejos posturales. Estas conexiones permiten coordinar los movimientos cefálicos y oculares para que pueda mantener la fijación visual sobre un objeto. La información recibida del oído interno puede ayudar a mantener el equilibrio e influir sobre el tono muscular de las extremidades. Las fibras ascendentes hacen sinapsis en el núcleo ventral posterolateral del tálamo y se dirigen hacia la corteza cerebral, hasta el área vestibular en la circunvolución poscentral inmediatamente por encima de la cisura. La corteza cerebral sirve para orientar al individuo consciente en el espacio. LESIÓN Los trastornos de la función coclear se manifiestan como sordera y acúfenos. Puede darse por daño de las células receptoras en el órgano espiral de Corti en la cóclea, una lesión del nervio coclear, lesión en las vías auditivas centrales o una lesión en la corteza del lóbulo temporal. Las lesiones del oído interno incluyen enfermedad de Ménière, laberintitis aguda y traumatismos. Las lesiones del nervio coclear incluyen tumores y traumatismos. Los trastornos de la función del nervio vestibular incluyen vértigo y nistagmo. El nistagmo vestibular es una oscilación rítmica incontrolable de los ojos y la fase rápida se aleja del lado de la lesión. Esta forma de nistagmo es esencialmente una alteración del control reflejo de los músculos extraoculares, que es una de las funciones de los conductos semicirculares. Normalmente los impulsos nerviosos pasan en forma refleja de los conductos a los núcleos de los nervios craneales tercero cuarto y sexto, que controlan los músculos extraoculares, a través del nervio vestibular, los núcleos vestibulares y el fascículo longitudinal medial; el cerebelo ayuda a coordinar los movimientos musculares. Causa del vértigo incluye la enfermedad del Laberinto, como la enfermedad de Ménière. El vértigo también puede ser causado por lesiones del nervio vestibular, los núcleos vestibulares y el cerebelo. NERVIO GLOSOFARÍNGEO (IX) Lleva fibras aferentes viscerales especiales, aferentes viscerales generales, aferentes somáticas generales, eferentes viscerales generales y eferentes viscerales especiales. Salida del cráneo: agujero yugular. Origen aparente: surco retroolivar. Origen real: núcleo ambiguo, núcleo salival inferior (parasimpático) y núcleo solitario. RECORRIDO El nervio glosofaríngeo es un nervio mixto que emerge del surco retroolivar, bajo la forma de filamentos radiculares que se disponen en línea vertical. Estos filamentos se reúnen para formar el tronco del nervio glosofaríngeo, que sale del cráneo por el foramen yugular. En su trayecto a través del foramen yugular, el nervio presenta dos ganglios: superior (o yugular) e inferior (o petroso);
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formados por neuronas sensitivas. Al salir del cráneo, el nervio glosofaríngeo tiene un trayecto descendente, ramificándose en la raíz de la lengua y en la faringe. COMPONENTES FUNCIONALES Aferentes viscerales especiales: pertenecen a neuronas sensitivas cuyos cuerpos se localizan en el ganglio inferior y conducen impulsos gustativos originados en el 1/3 posterior de la lengua. Llegan al tronco cerebral al núcleo solitario en su porción superior. Aferentes viscerales generales: recibe información de quimiorreceptores del cuerpo carotídeo y de barroreceptores del seno carotídeo. Estas fibras constituyen un nervio independiente. Conducen impulsos que informan continuamente al sistema nervioso central sobre las variaciones de presión arterial y de la norma de CO2 en la sangre. Llegan a la porción caudal del núcleo solitario. Aferentes somáticas generales: reciben información de tacto, dolor y temperatura de la caja del tímpano, parte de la membrana timpánica, orofaringe y trompa auditiva. Llegan al núcleo del tracto espinal del trigémino. Eferentes viscerales generales: pertenecen a la división parasimpática del sistema autónomo. Se inicia en el núcleo salivatorio inferior y terminan en el ganglio ótico después de un trayecto a través de los nervios timpánico (nervio de Jacobson) y petroso menor. Del ganglio ótico, situado junto al nervio mandibular, salen fibras postganglionares que, a través del nervio auriculotemporal, llegan a la glándula parótida. Eferentes viscerales especiales: destinadas a los músculos estilofaríngeo y constrictor superior de la faringe, ambos de origen branquiomérico (III arco). Estas fibras eferentes del glosofaríngeo se originan en neuronas situadas en el núcleo ambiguo. LESIÓN La afectación del par craneal IX puede producir caída del velo del paladar ipsilateral; al hablar, la úvula y la pared posterior de la faringe se desvían al lado sano y alteración del reflejo nauseoso del lado afectado (al estimular el pilar posterior de la faringe, el reflejo nauseoso estará abolido o disminuido comparándolo con el lado normal). También se afecta la sensibilidad del tercio posterior de la lengua. NERVIO VAGO (X) Lleva fibras aferentes viscerales especiales, aferentes somáticas generales, aferentes viscerales generales, eferentes viscerales especiales (IV y VI arco faríngeo) y eferentes viscerales generales. Salida del cráneo: agujero yugular. Origen aparente: surco retroolivar. Origen real: núcleo motor principal, núcleo dorsal del vao, núcleo del tracto solitario. Función: tiene funciones sensitivas (región amigdalina, parte posterior de la nariz y la garganta, la laringe, el oído, el estómago), motoras (músculos de la laringe) y parasimpática (corazón, bronquios, estómago, esófago, intestino, páncreas e hígado), dependiendo del núcleo al cual este asociado. RECORRIDO El nervio vago sale de superficie anterolateral de la parte superior del bulbo raquídeo como raíces que surgen del surco retroolivar y el pedúnculo cerebeloso inferior. El nervio se dirige hacia fuera a través de la fosa craneal posterior y abandona el cráneo a través del agujero yugular. Tiene dos ganglios sensitivos, uno superior y otro inferior, que se ubican superior e inferior al agujero yugular respectivamente. Debajo del ganglio inferior se le une el nervio accesorio y se distribuye hacia las
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ramas faríngeas y laríngeas recurrentes. El vago desciende verticalmente en el cuello junto con la vena yugular interna, la arteria carótida común y la carótida interna dentro de la vaina carotídea. El nervio vago derecho entra al tórax y pasa por detrás de la raíz del pulmón derecho (contribuye al plexo pulmonar), luego se dirige a la superficie superior del esófago (contribuye al plexo esofágico) y luego entra al abdomen a través del orificio esofágico del diafragma. El tronco vagal posterior se distribuye a la parte posterior del estómago. A través de la rama celiaca se distribuye al duodeno, hígado riñones, intestino delgado y grueso (hasta la flexura cólica izquierda). Los plexos celiaco, mesentéricos superior e inferior son los que proporcionan la inervación. El nervio vago izquierdo entra al tórax, cruza el lado izquierdo del arco aórtico y desciendo por detrás de la raíz del pulmón izquierdo (contribuye al plexo pulmonar). Desciende sobre la superficie anterior del esófago y contribuye al plexo esofágico, ingresa al abdomen a través del orificio esofágico del diafragma. El tronco vagal anterior se distribuye al estómago, hígado, parte superior del duodeno y cabeza del páncreas. COMPONENTES FUNCIONALES Núcleo motor principal: está formado por el núcleo ambiguo y se ubica en la profundidad de la formación reticular de la médula oblongada. Recibe fibras cortico-‐nucleares de los dos hemisferios del cerebro. Las fibras eferentes inervan los músculos intrínsecos de la laringe y músculos constrictores de la faringe. Núcleo dorsal del vago: es un núcleo parasimpático que se ubica debajo del piso del IV ventrículo, lateral al núcleo del hipogloso. Recibe fibras aferentes del hipotálamo y del nervio del glosofaríngeo, para el reflejo del seno carotídeo. Sus fibras eferentes van a la musculatura involuntaria de bronquios, corazón, esófago, estomago, intestino delgado e intestino grueso hasta la flexura cólica izquierda. Núcleo sensitivo: está ubicado inferior al núcleo del tracto solitario. Recibe fibras de gusto de los axones periféricos de células nerviosas ubicas en el ganglio inferior del vago. Las fibras eferentes van a la parte ventral del tálamo contralateral. De allí las fibras atraviesan la cápsula interna y la corona radiada para llegar a la corteza en el giro postcentral. La información que viene del tronco termina en el núcleo espinal del trigémino. REFLEJOS Participa tanto en la aferencia como la eferencia del reflejo del vómito. • Aferencia a través de receptores gustativos y aferencias autonómicas del intestino grueso. • La eferencia a través del núcleo dorsal del, núcleo ambiguo, y cuerno anterior de la médula espinal que inervan músculos respiratorios y abdominales. También participa en la fase respiratoria del estornudo aumentando su actividad eferente en los músculos que inerva. El nervio vago tiene parte importante en los impulsos aferentes de la deglución junto con el nervio glosofaríngeo. LESIÓN La lesión al nervio vago se puede dar a nivel de sus ramas y dependiendo de cuál sea, es su manifestación clínica. Por ejemplo, si se lesiona la rama faríngea el paciente va a tener disfagia. Si se dañan las ramas laríngeas puede existir parálisis del músculo cricotiroideo y voz débil. Si hay una
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lesión en el nervio laríngeo recurrente existe parálisis de cuerdas vocales, disfonía y voz ronca. Si se dañan ambos nervios laríngeos se produce afonía. Si llega a darse una lesión bilateral del nervio vago hay una parálisis laríngea completa y asfixia. NERVIO ESPINAL O ACCESORIO (XI) Es un nervio eferente somático general formado por dos raíces: la raíz craneal y la raíz espinal. Salida del cráneo: agujero yugular. Origen aparente: surco retroolivar. Origen real • Raíz craneal: se forma a partir de axones provenientes del polo o porción caudal del núcleo ambiguo en la médula oblongada. • Raíz espinal: se forma a partir del núcleo accesorio, de los axones de las células nerviosas motoras ubicadas en el asta gris anterior de la médula espinal en los cinco o seis segmentos cervicales superiores y la porción caudal de la médula oblongada. RECORRIDO La raíz craneal se origina de la porción caudal del núcleo ambiguo en la médula oblongada que recibe fibras cortico-‐nucleares de ambos hemisferios cerebrales. Las fibras eferentes del núcleo surgen lateralmente de la médula oblongada sobre la superficie anterior del surco retro-‐olivar y luego discurren por la fosa craneal posterior para unirse con la raíz espinal. Finalmente abandonan el cráneo a través del agujero yugular. Posteriormente se separan y la raíz craneal se une a las raicillas del nervio vago para formar la rama laríngea recurrente que inerva los músculos intrínsecos de la laringe, exceptuando al músculo cricotiroideo que es inervado por el nervio laríngeo superior, el cual es rama del nervio vago. La raíz espinal se origina a partir del núcleo accesorio, de un conjunto de neuronas motoras ubicado en el asta gris anterior de la médula espinal en los cinco o seis segmentos cervicales superiores y porción caudal de la médula oblongada. Desde su origen las fibras se dirigen dorsolateralmente y salen de la parte lateral de la médula espinal en la mitad del camino, tanto de la salida de la raíces ventrales sensitivas como de la entrada de las raíces posteriores motoras, para formar un tronco nervioso que asciende en el cráneo a través del agujero magno. Luego se une a la raíz craneal, la cual pasa lateralmente a medida que pasan a través del agujero yugular. Al salir se separa de la raíz craneal para dirigirse caudal y lateralmente, pasando a través del triángulo posterior del cuello, para penetrar la superficie e inervar al músculo trapecio y músculo esternocleidomastoideo. FUNCIÓN Se encarga de la inervación de los músculos intrínsecos de la laringe responsables del movimiento de las cuerdas vocales, a través de la raíz craneal que se une a la raicillas del nervio vago, siendo parte esencial del vago: • Músculo cricoaritenoideo posterior • Músculo cricoaritenoideo lateral • Músculo tiroaritenoideo • Músculo interaritenoideo *Excepción: músculo cricotiroideo, que es inervado por el nervio laríngeo superior que es rama del nervio vago. A través de la porción espinal inerva a los músculos esternocleidomastoideo y trapecio.
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LESIONES Manifestaciones por lesiones que se dan a nivel unilateral del nervio accesorio son las siguientes. Cuando hay un deterioro de la función del músculo trapecio puede ocurrir lo siguiente: • Rotación hacia abajo y afuera de la escápula ipsolateral a la lesión. • Hundimiento moderado del hombro ipsolateral Cuando se presenta deterioro en la función músculo esternocleidomastoideo ocurre lo siguiente: • Debilidad al girar la cabeza hacia el lado opuesto a la lesión. NERVIO HIPOGLOSO (XII) Lleva fibras eferentes somáticas generales. Salida del cráneo: conducto del hipogloso. Origen aparente: surco preolivar. Origen real: núcleo hipogloso derivado de la placa basal de la médula oblongada. RECORRIDO Se origina del núcleo hipogloso que se encuentra en el tegmento de la médula oblongada, el cual recibe fibras cortico-‐nucleares cruzadas y directasde ambos hemisferios cerebrales. Sin embargo, las células que inervan el músculo geniogloso sólo reciben fibras corticonucleares del hemisferio cerebral opuesto. Estas fibras siguen lateralmente al lemnisco medial y dan origen al nervio hipogloso que sale a través del surco pre-‐olivar. El nervio cruza la fosa craneal posterior y abandona el cráneo a través del conducto del hipogloso. El nervio se dirige hacia abajo y hacia delante en el cuello, entre la arteria carótida interna y la vena yugular interna, hasta alcanzar el borde inferior del vientre posterior del digástrico. Gira hacia adelante y cruza las arteria carótida interna y externa y el asa de la arteria lingual. Pasa a ser profundo hasta el borde posterior del músculo milohioideo y discurre por la supeficie lateral del músculo hiogloso. El nervio envía ramas a los músculos de la lengua. En la parte superior del trayecto, el nervio del hipogloso se une con fibras de C1 procedentes del plexo cervical. FUNCIÓN Inervación de los músculos extrínsecos e intrínsecos de la lengua. Los músculos extrínsecos de la lengua se originan en estructuras externas a la lengua y se insertan en la lengua. Hay cuatro músculos extrínsecos principales en cada lado: geniogloso, hiogloso, estilogloso y palatogloso; de los cuales el palatogloso es el único que no está inervado por el nervio hipogloso, sino por el vago. Los músculos intrínsecos de la lengua se originan e insertan dentro de la lengua. Se dividen en longitudinales superiores, longitudinales inferiores, transversos y verticales. Los músculos intrínsecos de la lengua contribuyen a la precisión que los movimientos de la lengua requieren para hablar, comer y tragar. Dichos músculos modifican la forma de la lengua: • Alargándola y acortándola. • Rizando y desrizando su punta y los bordes. • Aplastando y dando vuelta a su superficie. • Trabajando en parejas o en un lado cada vez.
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LESIONES Las lesiones del nervio o núcleo hipogloso se manifiestan con signos de neurona motora inferior en la musculatura homolateral a la lesión. Presenta las siguientes manifestaciones: Desviación de la lengua al protruirla hacia el lado de la lesión, por acción del musculo geniogloso. Fasciculaciones de los músculos en la mitad homolateral de la lengua. Atrofia en la mitad homolateral de los músculos de la lengua. Parálisis fláccida o paresia de los músculos de la mitad homolateral de la lengua. Si un paciente tiene una lesión de las fibras corticonucleares, no existirá atrofia ni fibrilación de la lengua y, con la protrusión de la misma, la lengua se desviará hacia el lado opuesto de la lesión.
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CONCLUSIÓN Los Nervios Craneales son los doce pares de nervios que tienen origen aparente en la porción ventral del tallo cerebral y uno en la porción dorsal del mismo. Su origen real se encuentra en la configuración interna del tallo cerebral y muchos de ellos constan de núcleos accesorios o más de un núcleo por sus múltiples funciones: Aferentes y eferentes, viscerales, somáticos, generales o especiales (combinaciones de estas). Los Nervios Craneales son parte del sistema nervioso periférico e inervan la cara y el cuello, acompañando en función a los nervios raquídeos salientes de la médula espinal que inervan el resto de las extremidades. Al igual que en la médula espinal, a nivel de los Nervios Craneales hay fascículos, o haces de sustancia blanca que llevan diferente información de la cara y cuello. Los pares craneales tienen un origen aparente que es el lugar donde el mismo sale o entra en el encéfalo. El origen real es distinto de acuerdo a la función que cumplan. Las fibras de los pares craneales con función motora (eferente) se originan de grupos celulares que se encuentran en la profundidad del tallo encefálico (núcleos motores) y son homólogas de las células del asta anterior de la médula espinal. Las fibras de los pares craneales con función sensitiva o sensorial (aferente) tienen sus células de origen (núcleos de primer orden) fuera del tallo encefálico, por lo general en ganglios que son homólogos de los de la raíz dorsal de los nervios raquídeos. Los núcleos sensitivos de segundo orden se encuentran en el tallo encefálico. Los núcleos de donde parten los pares craneales se ubican en una región generalizada conocida como tegmentum que recorre el tronco del encéfalo. A nivel del mesencéfalo, la estructura superior del tronco del encéfalo, parten el par III y IV. A nivel de la protuberancia, la estructura media del tronco del encéfalo, parten los pares V, VI, VII y VIII. A nivel del bulbo raquídeo, la estructura inferior del tronco del encéfalo, parten los pares IX, X, XI y XII. Según su aspecto funcional, se agrupan de la siguiente forma: Los pares I, II y VIII están dedicados a aferencias sensitivas especiales. Los pares III, IV y VI controlan los movimientos oculares, los reflejos fotomotores y la acomodación. Los pares XI y XII son nervios motores puros (XI para el esternocleidomastoideo y el trapecio; y XII para los músculos de la lengua). Los pares V, VII, IX y X son mixtos. Los pares III, VII, IX y X llevan fibras parasimpáticas.
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BIBLIOGRAFÍA ADEL K. AFIFI, NEUROANATOMÍA FUNCIONAL BARR, EL SISTEMA NERVIOS HUMANO. UNA PERSPECTIVA ANATÓMICA RICHARD S. SNELL, NEUROANATOMÍA CLÍNICA BINDER, DEVIN K.; SONNE, D.; FISCHBEIN, NANCY. CRANIAL NERVES: ANATOMY, PATHOLOGY, IMAGING.
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