nietzsche

Friedrich Nietzsche Crepúsculo de los ídolos o Cómo se filosofa con el martillo lntroducción, traducción y notas de And

Views 204 Downloads 3 File size 142KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

Friedrich

Nietzsche Crepúsculo de los ídolos o Cómo se filosofa con el martillo lntroducción, traducción y notas de Andrés Sánchez Pascual

El libro de bolsillo Biblioteca de autor Alianza Editoria 1

Cómo el «mundo verdadero» acabó convirtiéndose en una fábula 61

Historia de un error 1. El mundo verdadero, asequible al sabio, al piadoso, al virtuoso, - él vive en ese mundo, es ese mundo. (La forma más antigua de la Idea62 , relativamente inteligente, simple, convincente. Transcripción de la tesis «yo, Platón, soy la verdad».) 2. El mundo verdadero, inasequible por ahora, pero prometido al sabio, al piadoso, al virtuoso («al pecador que hace penitencia»). (Progreso de la Idea: ésta se vuelve más sutil, más capciosa, más inaprensible, - se convierte en una mujer, se hace cristiana ... ) 3. El mundo verdadero, inasequible, indemostrable, imprometible, pero, ya en cuanto pensado, un consuelo, una obligación, un imperativo. (En el fondo, el viejo Sol, pero visto a través de la niebla y el escepticismo; la Idea, sublimizada, pálida, nórdica, konigsberguense63 .) 4. El mundo verdadero - ¿inasequible? En todo caso, inalcanzado. Y en cuanto inalcanzado, también desconocido. Por

57

58

Crepúscu1o de 1os ido1os

consiguiente, tampoco consolador, redentor, obligante: ¿a qué podría obligarnos algo desconocido? ... (Mañana gris. Primer bostezo de la razón. Canto del gallo del positivismo.) S. El «mundo verdadero» - una Idea que ya no sirve para nada, que ya ni siquiera obliga, - una Idea que se ha vuelto inútil, superflua, por consiguiente una Idea refutada: ¡eliminémosla! (Día claro; desayuno; retorno del bon sens [buen sentido] y de la jovialidad; rubor avergonzado de Platón; ruido endiablado de todos los espíritus libres.) 6. Hemos eliminado el mundo verdadero: ¿qué mundo ha quedado?, ¿acaso el aparente? ... ¡No!, ¡al eliminar el mundo verdadero hemos eliminado también el aparente! (Mediodía, instante de la sombra más corta; final del error más largo; punto culminante de la humanidad; INCIPIT ZARATHUSTRA64 [comienza Zaratustra].)

Notas del traductor: 48-64

57. 58. 59.

60. 61.

62. 63. 64.

157

por ejemplo, el§ 15 de Más allá del bien y del mal (p. 38 de la edición citada), así como el§ 21 (página45). Nietzsche dice, en realidad: aufdeutsch [en alemán]. Sobre el tema de la «voluntad» y la «voluntad libre» véase el largo § 19 de Más allá del bien y del mal (pp. 41-43 de la edición citada). El problema de la relación entre el lenguaje y la gramática por un lado, y el pensamiento y la filosofía, por otro, preocupó a Nietzsche desde muy temprano. Véase, por ejemplo, la parte final del ensayo titulado La visión dionisiaca del mundo, escrito por Nietzsche en el verano de 1870 (incluido en El nacimiento de la tragedia, edición citada, pp. 270 y ss.), y sobre todo el importante estudio Sobre verdad y mentira en sentido extramoral (1873). A los «lazos de la gramática (o metafísica del pueblo)» alude Nietzsche en el § 354 de La gaya ciencia. Pero donde más incisivamente toca este tema es en Más allá del bien y del mal (véase edición citada, pp. 20, 40, 44-45 y 64. Sobre el no-pesimismo del artista trágico véase Ecce horno (edición citada, pp. 75 y ss.). Este capítulo es, en realidad, una apretada «historia de la filosofía» al hilo de la contraposición entre «mundo verdadero» y «mundo aparente». Probablemente Nietzsche toma esta contraposición del libro del filósofo G. Teichmüller ( 1832-1888), titulado Die wirkliche und die scheinbare Welt [El mundo real y el mundo aparente] y publicado en 1882. La lectura de Teichmüller por Nietzsche está atestiguada por una tarjeta postal enviada por éste a su amigo Overbeck desde Génova (23 de octubre de 1883) en que le dice: «Viejo y querido amigo, al leer a Teichmüller me quedo cada vez más asombrado de qué poco conozco yo a Platón y de cuánto 'TTAO'.Twv'LteL [platoniza] Zaratustra». Teichmüller, catedrático de filosofía en Basilea, fue colega de Nietzsche en aquella Universidad; a su marcha, Nietzsche intentó ser nombrado sucesor suyo en la cátedra de filosofía, mas no lo consiguió. Véase también el § 1O de Más allá del bien y del mal (pp. 31-32 de la edición citada). Mantenemos con mayúscula la palabra «Idea» (Idee) para subrayar el carácter platónico que Nietzsche le da aquí. Konigsberguense =kantiana. Esta expresión es eco del § 342 de La gaya ciencia, titulado Incipit tragoedia [comienza la tragedia], que anticipa el texto de lo que será luego el§ 1 del «Prólogo de Zaratustra». Véase Así habló Zaratustra, edición citada, p. 33, y nota 1 del traductor (página 443 ). Por otra parte, como ha indicado con razón E. Fink (véase La filosofía de Nietzsche. Traducción de Andrés Sánchez Pascual. N. 0 164 de la co-

1 58

Notas del traductor: 65-78

lección Alianza Universidad, pp. 174 y s.), al hablar de «la sombra más corta» Nietzsche alude claramente, una vez más, a Platón y a su «alegoría de la caverna». En cuanto al «mediodía», sabido es que constituye uno de los símbolos de la filosofía nietzscheana. Según el último plan trazado por Nietzsche para La voluntad de poder (véase antes, «Introducción», pp. 13-14), el libro cuarto de esa obra, luego desechada, se habría titulado «El gran mediodía». Un conciso fragmento inédito de la primavera-verano de 1888 dice lo siguiente: «Existen pensadores de mañana, existen pensadores de tarde, existen búhos de noche. No olvidar la species más aristocrática: la de los pensadores de mediodía, - aquellos en que constantemente el gran Pan duerme. Entonces toda luz cae perpendicular... » 65. Palabras de Cristo en Evangelio de Mateo, 5, 29. 66. Véase Evangelio de Mateo, 5, 3: «Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos». 67. También en el § 3 de la tercera de sus Consideraciones intempestivas, titulada Schopenhauer como educador, Nietzsche había mencionado la Trappe; allí, al hablar de la «duplicidad extraordinariamente peligrosa» de la naturaleza de Schopenhauer, cita la anécdota (narrada por W. Gwinner en su obra Arthur Schopen-

hauer aus personlichem Umgange dargestellt. Ein Blick aufsein Leben, seinen Charakter und seine Lehre [A. Schopenhauer, expuesto a base de un trato personal con él. Una mirada a su vida, a su carácter y a su doctrina], Leipzig, 1862, p. 168) según la cual, al contemplar una vez Schopenhauer un retrato de Rancé, «el gran fundador de La Trapa», exclamó: «Esto es obra de la gracia». Sin duda, al mencionar aquí La Trapa, Nietzsche alude a Schopenhauer. Éste habla repetidas veces de La Trapa y de su fundador en El mundo

como voluntad y representación. 68. Véase Evangelio de Lucas, 16, 15: «Vosotros sois los que os las dais de justos delante de los hombres, pero Dios ve vuestros corazones; 69. 70. 71.

72. 73.

porque lo que es estimable para los hombres es abominable ante Dios» (palabras de Jesús a los fariseos). Expresión evangélica; véase Evangelio de Mateo, 3, 17. Véase antes nota 42. Véase el § 68 del segundo tomo de El mundo como voluntad y representación, titulado precisamente «Sobre la doctrina de la negación de la voluntad de vida», que se refiere al§ 68 del primer tomo. Nietzsche emplea aquí uno de sus juegos predilectos de palabras, la aliteración, y dice: Schlucker und Mucker. Nietzsche emplea una vez más una aliteración: Hinsichten, Rück-

sichten, Absichten.