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CAPITULO I

EL PROBLEMA

Planteamiento del Problema

Las relaciones interpersonales en que participa el hombre desde el inicio de su vida como ser social, su intercambio con el adulto desde los primeros años de vida, con los contemporáneos, su participación en grupos humanos, van creando espacios de comunicación en los que se van formando las características de personalidad. El fenómeno social de la violencia abarca un espectro mucho más amplio, existe violencia en la calle, en la vida doméstica, en el ámbito económico, político y social en general. Así, los centros educativos entendidos como espacios de socialización y centros de vida, no están exentos de conflictividad. Al respecto, Iguaz (2002) describe que el sistema escolar ha sido y es, por su naturaleza, un entorno de conflictividad y genera un elevado nivel de presión, imposición y violencia simbólica sobre la población estudiantil. Afortunadamente, según el referido autor la mayoría de las veces, los conflictos son gestionados adecuadamente a través del diálogo, la asertividad, la mediación de terceros, solicitando ayuda; y en menor medida son gestionados inadecuadamente, desencadenando respuestas violentas o por medio de mecanismos de huida o evitación.

En relación a ello, Menéndez (2007), expone que las acciones negativas más habituales utilizadas por los estudiantes que maltratan a sus compañeros suelen consistir en actos verbales directos o indirectos, como insulto, burla, uso de apodos, hablar mal del compañero, enviarle notas groseras o difundir rumores falsos que pueden dañar su identidad o reputación. Otra modalidad se basa en acciones físicas, por ejemplo, pegar, golpear, empujar, intimidar, amenazar, esconder o romper objetos del alumno que sufre este tipo de maltrato. También se puede manifestar con el propósito de dificultarle la necesaria integración en su grupo de compañeros, excluyéndolo deliberadamente de actividades o juegos, impidiendo su participación, ignorándole o aislándole. Los conflictos y las malas relaciones entre iguales, los problemas de comportamiento o de indisciplina son fenómenos perturbadores pero no son verdaderos problemas de violencia, aunque pueden degenerar en ellos, si no se resuelven de una forma adecuada. Este último caso hace referencia al fenómeno llamado acoso escolar o bullying. Según los investigadores de esta problemática Barrios y Avilés (2006), el acoso a nivel educativo

se da cuando “un estudiante está expuesto, de

forma reiterada y a lo largo de un tiempo, a acciones negativas llevadas a cabo por otro u otros estudiantes” (pag.27). Así mismo se destaca la definición planteada por Olweus (citado por Gorriz 2009), en la que considera la victimización como una “conducta de persecución física, verbal y/o psicológicas que realiza un estudiante contra otro, al que elige como víctima de repetidos ataques” esta acción, negativa e intencionada sitúa a las víctimas en posiciones de los que difícilmente puede salir por sus propios medios. (pág. 9) Al respecto, los resultados del reciente estudio realizado por la Organización para Cooperación Económica y el Desarrollo (2009), realizado en forma comparativa en 23 países, se analiza el bienestar en los ambientes escolares encontrándose países como México, con la mayor incidencia del

acoso (61%), frente a Islandia, con una incidencia del (11%). En lo que se refiere a España, ésta se encuentra por encima de la media internacional (40% versus 34%) en cuanto a problemas de acoso entre compañeros (entre muchos otros), siendo la principal conclusión la necesidad de mejorar el clima escolar. En lo que se refiere a Venezuela en el informe Somos Noticia, presentado por el Centros Comunitarios de Aprendizaje por los Derechos de la Niñez y Adolescencia (CECODAP, 2013), se monitoreó la prensa desde 2009 hasta septiembre de 2013, y detectó que la violencia escolar representa el 9% en las formas más frecuentes que sufre esta población. Además según la citada fuente,

en 49 Instituciones educativas del estado Lara un 88% sufrió la

agresión verbal y 79% agresión física. Es así como se observan en los centros educativos venezolanos

la

presencia de conductas entre los niños, niñas y adolescentes, inclusive adultos, que abarcan burlas, apodos, el ignorar, hasta los ataques personales, que implica a veces el golpear o dar patadas. Estas situaciones resultan bastantes comunes en las instituciones educativas, pudiendo llegar a ser muy dañinas para quienes las sufren, generalmente en silencio y soledad. Por tanto, estas acciones de acoso, intimidación o victimización a la que el estudiante está expuesto, de forma repetida y durante un tiempo, es la amenaza más grave que tiene el sistema escolar, por lo que harían acciones sistemáticas

desde

la

escuela,

familia,

comunidad

y

organismos

competentes. De lo anteriormente expuesto surge la necesidad de que los investigadores realicen un estudio de profundización en dicho tema, el cual pretende analizar el abordaje del acoso escolar en estudiantes, tanto a nivel familiar, comunitario como institucional. Para desarrollarla se plantean las siguientes interrogantes:

¿Cuál es el conocimiento que poseen los miembros del LB Dr. Fernando Garmendia Yépez, la familia y comunidad respecto a lo que es el acoso escolar? ¿Qué tipo de estrategias utilizan para el abordaje del acoso estudiantil? Justificación. Ante los episodios de violencia escolar, algunos graves, de los que se han hecho eco los medios de comunicación y que han propiciado un clima de temor y preocupación sobre lo que está ocurriendo entre los estudiantes, resulta de especial interés conocer cuáles son los tipos de conductas violentas más habituales en los centros educativos, y a partir de ahí, adoptar las medidas que permitan prevenir el acoso, amparar a sus víctimas y frustrar el inicio y la consolidación de las conductas violentas en el aula. La presente investigación surge viendo la necesidad de estudiar el acoso escolar en los estudiantes de educación secundaria, con el propósito de orientar y sensibilizar a los estudiantes en cuanto a la cantidad de casos ocurridos en las distintas modalidades de maltrato entre pares, tal como lo informan los propios estudiantes desde su triple perspectiva de testigos, víctimas o agresores, así como estrategias de prevención ante este tipo de conductas antisociales. Por su parte, esta investigación proporcionará información que será útil a toda la comunidad educativa para mejorar el conocimiento sobre el alcance del problema en la institución y a su vez ejecutar estrategias para la prevención. Por un lado las familias, que deben implicarse en la educación de sus hijos, contribuyendo activamente a su desarrollo social y moral, participando y colaborando junto a los centros educativos. Por otra parte, la escuela, como institución socializadora y formativa, debe ser un contexto de convivencia pacífica y democrática, generando un clima escolar de cooperación, confianza, respeto, equidad y de consistencia de las normas de

convivencia, haciendo conscientes a los estudiantes de la importancia y los efectos negativos del acoso escolar, facilitando que los conflictos se resuelvan de forma dialogada. Objetivo General. -

Sensibilizar a los estudiantes de Educación Secundaria del Liceo Bolivariano Dr. Fernando Garmendia Yépez, a través de un ciclo de talleres que contribuya a un clima escolar de convivencia pacífica y armoniosa.

Objetivos Específicos. -

Instruir sobre las consecuencias negativas que repercuten en la vida

-

escolar del agresor y la víctima. Facilitar herramientas preventivas que disminuyan el índice de

-

violencia en las instituciones educativas. Promover un ambiente escolar donde vislumbre los valores. CAPITULO II MARCO TEORICO.

Moncada, J. (2010), realizó un estudio en una unidad educativa ubicada en Cabudare, Estado Lara, referido a la Aplicación de Estrategias para la resolución de conflictos en el aula en la U.E. Comandante Palavecino, Cabudare, Estado Lara, cuyo objetivo fue analizar la aplicación de estrategias para la resolución de conflictos. Este análisis fue basado en una investigación de campo, no experimental transeccional, cuyas variables fue la aplicación de estrategias de resolución de conflictos utilizadas por los docentes como gerentes de aula, el instrumento utilizado fue la escala, concluyendo que los docentes en su mayoría algunas veces o nunca tienden a aplicar las estrategias para la solución de conflictos y que además no desarrollan habilidades gerenciales para alcanzar un clima favorable para el elevar la calidad de la educación.

Por su parte, Aguilar, J. (2009) realizó una investigación en una unidad educativa ubicada en Cabudare, Estado Lara, referente a las Estrategias Pedagógicas para el manejo de las conductas agresivas y fortalecimiento de la calidad educativa en los alumnos de la Unidad Educativa “José Félix Rivas” en Cabudare, Municipio Palavecino, cuyo propósito fue generar cambios a través de estrategias pedagógicas aplicadas en el aula, para el manejo de las conductas agresivas y fortalecimiento de la calidad educativa en los alumnos de quinto grado de esa institución educativa. Esta investigación se enmarcó dentro del enfoque cualitativo y apoyado en el método de investigación participativa. La variable de estudio fue estrategias pedagógicas para el manejo de las conductas agresivas y fortalecimiento de la calidad educativa, como instrumento para la recolección de datos fue el diario de campo, grabaciones de audio y cámara fotográfica. PLAN DE ACCION. Actividad

Recursos

¿Con quién?

Ciclo de Talleres, abordando el acoso escolar como principal problema en las instituciones educativas y facilitando herramientas preventivas para disminuir dicha problemática.

Papelografo: (Papel bond, imágenes, logos, contenido)

Estudiantes pertenecientes al 3ª año, sección “B”, del LB. “Dr. Fernando Garmendia Yépez”

Trípticos: Conceptos, causas, consecuencias, tipos, medidas preventivas e imágenes.

Tiempo. Lunes 23/03/15 Hora: 10:00am.