Las Meninas Velasquez

“LAS MENINAS” DE DIEGO VELÁZQUEZ: FUENTE DE INSPIRACIÓN PARA PICASSO TABLA DE CONTENIDO INTRODUCCIÓN.................

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“LAS MENINAS” DE DIEGO VELÁZQUEZ: FUENTE DE INSPIRACIÓN PARA PICASSO

TABLA DE CONTENIDO

INTRODUCCIÓN................................................................................. 1

DESARROLLO ..................................................................................... 2

CONCLUSIONES ................................................................................. 6

REFERENCIAS .................................................................................... 8

INTRODUCCIÓN

En este ensayo se analizará la famosa obra de arte “Las Meninas” del pintor barroco español Diego Velázquez y cómo su trabajo influyó a uno de los maestros del cubismo Pablo Picasso. Para ello, se van a comparar las dos interpretaciones hechas por los mismos, teniendo en cuenta las semejanzas y diferencias halladas en las pinturas, los diferentes estilos y técnica que poseen los artistas, las características principales encontradas con respecto al movimiento histórico y los diferentes puntos de vista que cada uno quiso transmitir mediante su obra. Finalmente entender porque Picasso vio a Velázquez como una fuente de inspiración perteneciendo a un movimiento tan diferente.

Figura 1: Las Meninas de Diego Velázquez, 1656 Fuente: http://www.theculturetrip.com

Figura 2: Las Meninas de Picasso, 1957 Fuente: http://www.ingridfugelliegezan.wordpress.com

DESARROLLO/ANALISIS El cuadro “Las Meninas” es considerada la gran obra maestra del pintor del Siglo de Oro Diego Rodríguez de Silva y Velázquez, nacido en 1599, Sevilla, España, y considerado uno de los máximos exponentes de la pintura española y maestro de la pintura universal. En primer lugar, se ha aceptado que el retrato de la visita de la infanta Margarita a sus padres, los reyes Felipe IV y Mariana de Austria. Estos entran al estudio y su reflejo es captado en el espejo del fondo. Margarita (la niña al centro del cuadro), fija su mirada en la presencia de sus padres y se inclina para realizar una reverencia. Velázquez también parece detener un instante la obra misteriosa que está ejecutando para inclinarse un poco hacia su izquierda y recibir a sus majestades. Como se observa en la figura 3 el niño que se sitúa en el extremo derecho del cuadro, patea al perro bajo él en un gesto que nos hace pensar que el animal debe levantarse para recibir a tan distinguidos visitantes.

Figura 3: Las Meninas de Velázquez, 1957 Fuente: http://culturacolectiva.com

En esta escena en la que la infanta y los servidores interrumpen lo que hacen ante la aparición de los reyes, subyacen numerosos significados, que pertenecen a campos de la experiencia diferentes y que la convierten en una de las obras maestras de la pintura occidental que ha sido objeto de una mayor cantidad y variedad de interpretaciones. Existe, por ejemplo, una reflexión sobre la identidad regia de la infanta, lo que, por extensión llena el cuadro de contenido político. Pero también hay varias referencias importantes de carácter histórico-artístico, que se encarnan en el propio pintor o en los cuadros que cuelgan de la pared del fondo; y la presencia del espejo convierte el cuadro en una reflexión sobre el acto de ver y hace que el espectador se pregunte sobre las leyes de la representación, sobre los límites entre pintura y realidad y sobre su propio papel dentro del cuadro. (Velázquez y la familia de Felipe IV , 2013, p. 126).

Velázquez emplea una serie de recursos para conseguir la perspectiva y profundidad. Las figuras se suceden en tres planos distintos que ilumina a través de una ventana el primer plano para ir progresivamente acentuando la penumbra a medida que se aleja hacia el fondo. De repente, esta penumbra se rompe bruscamente por un nuevo foco de luz que, penetrando a través de la puerta amplía enormemente el espacio y aclara el fondo. También es la pincelada la que se va haciendo cada vez más difusa y menos compacta a medida que se aleja del ojo del espectador. La definición de los personajes del primer plano también contrasta con el tratamiento esbozado de los elementos que decoran el recinto. Con esta obra sumamente realista, Velázquez ha conseguido una iluminación natural, un aire casi respirable y una perspectiva increíble. El filósofo Michel Foucault hace una de las interpretaciones más famosas de este cuadro: “En el momento en que colocan al espectador en el campo de su visión, los ojos del pintor lo apresan, lo obligan a entrar en el cuadro, le asignan un lugar a la vez privilegiado y obligatorio, le toman su especie luminosa y visible y la proyectan sobre la superficie inaccesible de la tela vuelta. Ve que su invisibilidad se vuelve visible para el pintor y es transpuesta a una imagen definitivamente invisible para él mismo (…)”. (1966, p.15).

Por otro lado, en un momento histórico muy diferente aparece Pablo Picasso, nacido el 25 de Octubre de 1881, Málaga, España, protagonista y creador inimitable de las diversas corrientes que revolucionaron las artes plásticas del siglo XX, desde el cubismo hasta la escultura neofigurativa, del grabado o el aguafuerte a la cerámica artesanal o a la escenografía para ballets. Figura 4: Las Meninas de Picasso, 1957 Fuente: https://zcosmos.wordpress.com

La admiración de Picasso hacia “Las meninas” de Velázquez lo llevó a realizar una serie de 58

cuadros en los que intentó explicar y dar una reinterpretación de cada uno de los detalles de la obra más aplaudida y estudiada de Velázquez. Los ejecutó entre el 17 de agosto y el 30 de diciembre de 1957. Actualmente se encuentran en el Museo Picasso de Barcelona. (http://culturacolectiva.com, 2017).

La intención de Picasso no fue en ningún momento hacer una copia de la obra de Velázquez sino una interpretación de la misma respetando la esencia de la obra velazqueña. El artista establece en sus obras una síntesis entre la tradición clasicista de Velázquez y las influencias más primitivas que se presentaban en el cubismo; el volumen, la composición y la atmósfera se respetan en la obra de Picasso no obstante los personajes y objetos representados han sufrido una dramática reinterpretación de estilo cubista. “Si alguien se pusiese a copiar Las Meninas, totalmente con buena fe, al llegar a cierto punto y si el que las copiara fuera yo, diría: ¿Y si pusiera ésta un poquito más a la derecha o a la izquierda? Yo probaría de hacerlo a mi

manera,

olvidándome

de

Velázquez.” (Pablo Picasso, 1950) Esta obra de sección horizontal (véase Figura 5: Las Meninas de Picasso, 1957 figura 5) es la primera, más grande y

Fuente: http:// arte.laguia2000.com

elaborada de las de la serie, así como la más fiel a la composición vertical creada por Velázquez. Todas las figuras del lienzo original están presentes, interpretando los mismos papeles y ocupando similares posiciones. Observando la compleja organización espacial y los grupos de figuras del famoso cuadro de Velázquez, Picasso emplea una paleta de negros, grises y blancos fragmentada para proveer estructura al espacio y sus figuras. El mismo Velázquez parece más corpulento en la versión de Picasso que en la suya y sostiene dos paletas en vez de una, aunque ninguna de las obras revela lo que está pintando el artista. Si analizamos algunas de los personajes más importantes de toda la serie debemos destacar a la infanta Margarita, que es el centro de la composición original y también fue una figura de gran importancia para Picasso, así el artista Figura 5: Infanta Margarita de Picasso, 1957 Fuente: http://totenart.com

dedicó unos catorce cuadros a su exclusiva representación. Como se observa en la figura 6, Picasso se detuvo en la observación de su cuerpo y de su rostro, a menudo empleando un tratamiento de formas simplificado y geométrico. La cara, demasiado grande en relación con el cuerpo, tiene un tratamiento pictórico muy sugerente, que le permite cruzarla con franjas de color verde, negro, azul y blanco.

CONCLUSIONES

Entonces se puede concluir que: 

“Las Meninas”, obra famosa del pintor Diego Velázquez refleja claramente el movimiento que el representa, El Barroco, y se denota en las propiedades pictoricas propiamente ya dichas. La perspectiva, el juego de luces y los trazos ténues son caracteristicas que representan a Velázquez y por lo cual, se volvió un gran artista.



Las interpretaciones hechas 300 años despues por Pablo Picasso, no son copias, sino fueron creadas gracias a la admiración que él sentia por Velázquez. Además Picasso agregó su estilo único que refleja el movimiento al que pretenece y representa, El Cubismo. Utilizó distintos tonos de colores, posiciones varias y le dió un significado especial.

REFERENCIAS Portus, Javier, Diego Velázquez 'Las Meninas'. En :, Velázquez y la familia de Felipe IV, [1650-1680], Museo Nacional del Prado, Madrid, 2013, pp. 126-129 n.16. Recuperado

de:

https://www.museodelprado.es/coleccion/obra-de-arte/las-

meninas/9fdc7800-9ade-48b0-ab8b-edee94ea877f

Foucault,

M

(1966)

Las

palabras

y

las

cosas.

París.

Recuperado

de:

https://drive.google.com/file/d/0Bwm3dI13n5jlM2FiOTQ5ZjEtZWJmYi00NmUxLTk wZDMtMzZhZjNkNWEwMDRj/view?ddrp=1&hl=es#

Ayala, R. (2017). Cómo interpreta Foucault a Las Meninas, la obra más estudiada e incomprendida. 07 de Junio de 2017, de Cultura Colectiva Sitio web: http://culturacolectiva.com/las-meninas-de-velazquez/