La Verdad y Sus Consecuencias Eje 4

LA VERDAD Y SUS CONSECUENCIAS Integrantes KARINA SERVANDA VERGARA CORDERO LIZETH JAZMIN ZAPATA PARRA MARÍA ASTRID VAR

Views 251 Downloads 9 File size 126KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

LA VERDAD Y SUS CONSECUENCIAS

Integrantes KARINA SERVANDA VERGARA CORDERO LIZETH JAZMIN ZAPATA

PARRA

MARÍA ASTRID VARGAS PEÑALOSA TATIANA ISABEL CARVAJAL Grupo 045

Tutor JORGE ARLEY RAMÍREZ CÁRDENAS Seminario de Investigación II

FUNDACIÓN UNIVERSITARIA DEL ÁREA ANDINA ESPECIALIZACIÓN GERENCIA EN SEGURIDAD Y SALUD EN EL TRABAJO FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD MODALIDAD VIRTUAL 2020

ETICA DE LA INVESTIGACIÓN

Elementos teóricos que soportan el análisis La investigación, según refiere Ladriere (2000), “es una actividad encaminada a la solución de problemas. Su objetivo consiste en hallar respuestas a las preguntas mediante el empleo de procesos científicos”. En esta búsqueda de la verdad, el hombre es un factor importante, porque es quien realiza el proceso de la investigación. Su conducta en general va a ser determinante. Asimismo, la forma como maneje los intereses propios y de la asociación que representa. “La investigación permite cuestionar, reflexionar y actuar sobre el acontecer histórico y social en la medida que favorece un criterio propio, fundamentado científicamente; criterio que beneficia a poblaciones atendidas, la creación novedosa de estrategias y métodos de intervención, el aumento de la calidad de la investigación, el rendimiento y respeto de la imagen profesional” (Vargas, 2009, p. 158). Autores como Ander-Egg (1992) afirman que la investigación es “un procedimiento reflexivo, sistemático, controlado y crítico que tiene por finalidad descubrir o interpretar los hechos y fenómenos, relaciones y leyes de un determinado ámbito de la realidad [...] una búsqueda de hechos, un camino para conocer la realidad, un procedimiento para conocer verdades parciales o, mejor, para descubrir no falsedades parciales” (p. 57). Para Cordero (2009), la investigación requiere rigurosidad y excelencia que favorezcan la toma de conciencia y el compromiso del investigador con la realidad, de modo que se logren tanto soluciones a los fenómenos estudiados como cambios epistemológicos y paradigmáticos en los investigadores. Por otra parte, los principios y convicciones éticas, y la utilización del fin como objetivo central del logro, y no el medio como tal, contribuirán a manejar la investigación científica académica sin impedir la violación a los principios éticos. De hecho, cada una de las ciencias, tiene su código de ética que controla la conducta de sus investigadores. (Juana Ojeda de López, 2007).

Kant (1788) nos dice que “una acción es moral porque se relaciona con una forma moral universal. Surge en este momento entonces la idea de la autonomía moral. Auto que se refiere a sí mismo y Nomia que es ley. Yo mismo me doy mi ley y en mí mismo descubro la ley. Con lo anterior, se puede decir entonces que la ética se fundamenta en la razón, es decir, ser moral significa cumplir con el propio deber. De esta manera sólo la razón y no las emociones o las pasiones es la que guía nuestras acciones” Abordando parte de la importancia de la ética moral en la investigación Kant, Immanuel (1994) refiere la importancia de la formación moral la cual implica desarrollar en el individuo la capacidad de someterse a los preceptos de la razón práctica, pues la ley moral tiene fundamento y origen en la propia capacidad racional del individuo (cfr., Ak. IX: 442). La facultad de razón es, por lo demás, el rasgo distintivo del hombre, aquel que define, en sentido propio, su humanidad. De allí que Kant considere la cultura moral como un aspecto fundamental en todo proceso educativo y por ende a su vez esta postura puede adherirse a los procesos educativos de investigación. Cuando Kant (1994) expone el hecho de actuar acorde a una ley universal es entendido de manera en que las acciones determinadas por parte del hombre deben ser para el beneficio en general en cualquier circunstancia, al regirse por un imperativo propio donde la conducta que se debe tomar es por un bien colectivo más no de unos cuantos. La Declaración Universal sobre Bioética y Derechos Humanos, proclamada en el 2005 por la Unesco, consciente de la excepcional capacidad que posee el ser humano para reflexionar sobre su propia existencia y su entorno, así como para percibir la injusticia, evitar el peligro, asumir responsabilidades, buscar la cooperación y dar muestras de un sentido moral que dé expresión a principios éticos, convencida de que la sensibilidad moral y la reflexión ética deberían ser parte integrante del proceso de desarrollo científico y tecnológico y de que la bioética debería desempeñar un papel predominante en las decisiones que han de tomarse ante los problemas que suscita ese desarrollo, destacando la necesidad de reforzar la cooperación internacional en el ámbito de la bioética, teniendo en cuenta en particular las necesidades específicas de los países en desarrollo, las comunidades indígenas y las poblaciones vulnerables, proclama principios y aprueba la Declaración. Esta trata de las cuestiones éticas relacionadas con la medicina, las ciencias de la vida y las

tecnologías conexas aplicadas a los seres humanos, teniendo en cuenta sus dimensiones sociales, jurídicas y ambientales. La Declaración va dirigida a los Estados. Imparte también orientación, cuando procede, para las decisiones o prácticas de individuos, grupos, comunidades, instituciones y empresas, públicas y privadas. Esta Declaración establece la obligatoriedad del cumplimiento de quince principios bioéticos.

El concepto de “responsabilidad social”, por su parte, ha venido forjándose poco a poco durante la segunda mitad del siglo xx, principalmente en torno a los efectos colaterales de las empresas sobre la sociedad, y a la manera de gestionar dichos efectos de modo ético y sostenible, en el contexto de una mundialización industrial social y ambientalmente arriesgada. La entrada en una “sociedad global del riesgo” (Beck, 1986), así como el fracaso de la pretendida auto-regulación del mercado frente a los desequilibrios sociales y medioambientales, han puesto en la agenda mundial el tema de la regulación ética y política responsable de los procesos desencadenados por la sociedad tecno-científica (Ostrom, 1990). Nuestra sostenibilidad planetaria depende hoy de la responsabilidad para con nuestra propia evolución (Jonas, 1979) y el movimiento de la “responsabilidad social de las organizaciones”, aunque polisémico, se inscribe en esta lógica ética y política de regulación

Preguntas 1. Dadas las consecuencias para su propio trabajo ¿Debieron los estudiantes notificar sus preocupaciones con respecto a la profesora Kieros? Bilbeny (1992), indica “la ética propone de un cierto tipo de acción humana normativa a la que se llama acción moral y el objeto es averiguar la validez de sus preceptos y privilegios”, acorde a esta posición manifiesta por el autor es una medida correcta manifestar las preocupaciones que los estudiantes tenían frente a la manera de en que la profesora Kieros estaba actuando, a su vez la ética también se basa en lo que es moralmente bueno en el proceder, por esta razón se considera en un correcto proceder manifestar a tiempo lo que no se perciba éticamente correcto y pueda repercutir el trabajo de los estudiantes a largo plazo. Asumiendo una posición Kantiana Kant, Immanuel (1994) refiere la importancia de la aplicación de la ética como una postura moralmente buena en todas las áreas que un individuo pueda desempeñarse por ello es considerado moralmente bueno no apoyar ni guardar silencio ante una conducta que está trayendo afectación sobre otros.

Kant expone que “El ser humano no debe obrar de modo interesado si no por respeto al deber, es racional y se ha dado sus propias reglas” Esto quiere decir que el hombre debe tomar una razón de ser y estar en el mundo de tal manera que su respeto por el deber moral se convierta en un principio fundamental., el deber moral dentro de la ética de la investigación es esencial como base del deber y la razón; si los estudiantes estaban percibiendo una conducta incorrecta por parte de su profesora están en el derecho de manifestar dichas preocupaciones sin orientar estas hacia n juicio de gravedad que no es comprobado pero si tener toda la trazabilidad de la información y la transparencia bajo la cual deben ser llevados estos proceso educativos de investigación en las instituciones. Dentro de la ética de la investigación es importante actuar de modo en que no hayan perjuicios ni selectividades , la imparcialidad y la aplicación de reglas y normas deberán aplicarse a todos sin distinción ni privilegios, esto constituye una conducta ética que trae tranquilidad sobre los estudiantes que se encontraban preocupados en el manejo de la información respecto a la solicitudes de becas, por ello fue concerniente por parte de los estudiantes en manifestar sus preocupaciones con las percepciones y los datos evidenciados sobre la hipótesis inicial de falsificación de datos por la profesora Kieros.

2. Que hubiera ocurrido si los estudiantes hubieran guardado silencio y se hubieran dedicado únicamente a avanzar en su proyecto para poder graduarse? Vargas (2009) nos describen que la investigación debe tener aumento por la calidad, respeto por la imagen profesional, Ander-Egg (1992) dice que deber ser fundamentado científicamente, debe permitir conocer verdades, Cordero (2009) que requiere excelencia, toma de conciencia y compromiso del investigador con la realidad. Basándonos en las anteriores definiciones, estos autores nos describen ciertas características que hacen veraz una investigación. Teniendo en cuenta la situación en la que se encontraban los estudiantes (fueron presionados a ocultar resultados de ciertas investigaciones, destacando algunos resultados deseados y realizando interpretaciones exageradas de datos para que hubiese concordancia con la hipótesis). Basado en la finalidad de la investigación y en que el ser humano al tener

la capacidad de razonar y tomar decisiones libremente. Podemos decir que estos estudiantes se hubiesen graduado al presentar este proyecto, aun sabiendo que omitieron, callaron, y falsificaron información imprescindible en la investigación, pero estos estudiantes estaban comprometidos en actuar en principios bioéticos y con buena voluntad. Ellos antepusieron la bioética ante la felicidad propia de obtener un título en una prestigiosa Universidad y de dar una felicidad a sus familiares al recibir esta graduación. Kant (1788) nos dice que “para poder determinar cuándo se actúa por buena voluntad, esta debe estar relacionada con el concepto del deber. Es decir, el que actúa con buena voluntad actúa por deber”. También nos dice “que en muchas ocasiones no va en concordancia con la felicidad. Hay fines más altos que la felicidad en el hombre lo definitivo del hombre, por encima de la felicidad, es un principio interno que lo llama al cumplimiento del deber, que no es otra cosa que el cumplimiento de la Ley moral”. Ellos ubicaron en una balanza el graduarse o el hacer lo correcto, moralmente hicieron lo correcto y se sintieron que cumplieron con su deber de tener una conciencia tranquila, sin saber si más adelante todo saldría a la luz y esto mancharía sus nombres con fraude. Además, al guardar silencio y graduarse habrían contribuido a que la profesora Kieros continuara con este tipo de fraude, afectando no solamente a estudiantes, a la Universidad sino también afectando negativamente en investigaciones futuras basada en datos falsos y poca ética. Cabe resaltar que cuando hay discusiones bioéticas podemos usar la Declaración Universal sobre Bioética y Derechos Humanos, proclamada en el 2005 por la Unesco, la cual se establecen la obligatoriedad del cumplimiento de quince principios, entre los cuales queremos resaltar que “Se deben tener en cuenta las repercusiones de las investigaciones y sus resultados para la vida futura, tanto humana como no humana” por lo tanto, al no divulgar la información fraudulenta de la profesora Kieros, también se estaría repercutiendo en la vida futura. Además, declara “Consciente de la excepcional capacidad que posee el ser humano para reflexionar sobre su propia existencia y su entorno, así como para percibir la injusticia, evitar el peligro, asumir responsabilidades, buscar la cooperación y dar muestras de un sentido moral que dé expresión a principios éticos” lo que nos confirma que los estudiantes de la profesora Kieros tomaron la mejor decisión: ética profesional.

3. ¿Qué responsabilidad tuvo la universidad con los estudiantes? ¿podría la universidad haber protegido a los estudiantes de la consecuencia de su acción? Las universidades fueron creadas por causa de la necesidad humana de permitir a la gran mayoría el acceso al conocimiento, hoy en día se logra mirar los resultados ya que sus egresados ahora forman parte de diferentes organizaciones que ayudan a una causa de acuerdo a lo estudiado, con lo anterior también se encuentra la formación ética desde el estudiante hasta finalmente el profesor y coordinadores. Las universidades se centran en la responsabilidad social tanto para sus alumnos como para los profesores, en el que se puede llegar a relacionar la toma de conciencia compleja, y análisis de su entorno y de su impacto con el mismo, en donde tanto el docente con el estudiante se debe enfocar en tener un acceso a una conciencia organizacional integral ya que según Vallaerys, (2014) dice que todas las personas de la organización deben poder acceder a ese nivel de conciencia. De acuerdo a lo relacionado anteriormente la universidad debió desde un comienzo tener el control de investigar más a fondo los datos que la profesora estaba dando de acuerdo a la investigación desde un comienzo del proceso, claro está que después del tiempo los miembros de la universidad lograron descubrir el fraude cometido por la profesora. Al momento de analizar el problema y darse cuenta que los estudiantes no se encontraban bien preparados la universidad debió mostrar más apoyo y realizar un seguimiento adicional para estos estudiantes con el objetivo de ayudarlos y guiarlos de la mejor manera, enfocándolos de una manera colectiva a terminar su doctorado y así hubiera evitado que algunos desertaran y quedaran decepcionados del proceso universitario.

4. ¿Cómo deben las Universidades en general, tratar a quienes revelan información? Aluja y Birke (2004) presentan numerosas conductas éticamente cuestionables. Las dividimos en las que tienen que ver con decisiones institucionales, con los académicos, con los estudiantes. En las universidades:

Falta de calidad en la selección de los postulantes y aceptar demasiados alumnos. Uno de los asuntos clasificados por Aluja y Birke (2004: 116-118) como «conflictos de conciencia», específicamente en el rubro sobre «manipular los procesos de selección de estudiantes en detrimento de la calidad de los mismos», fue señalado por el coordinador del Posgrado de Ciencias Biológicas, que manifestó que «muchos de los estudiantes que no son de alta calidad se van con el tutor que no tiene alumnos y que está ávido de tenerlos» y que es nocivo para el posgrado aceptar muchos estudiantes. También es nocivo aceptar a los que no merecen ingresar o que no tienen la calidad suficiente. Agregó que «se aceptan más alumnos de los que puede tener un laboratorio y que esto trae como consecuencia que los estudiantes estén hacinados, que haya menos atención y menos recursos para hacer los productos». Conflicto de intereses. Macrina (2014: 209) considera que «los conflictos de interés […] se usan para cubrir una amplia gama de situaciones, que se caracterizan por la posibilidad de recibir algo de valor financiero o personal que, a su vez, puede introducir una desviación o corrupción en el juicio del científico». Shamoo y Resnik (2009: 189) afirman que los científicos y las instituciones de investigación «enfrentan situaciones personales, financieras, políticas y de otro tipo que producen conflictos con las obligaciones o deberes profesionales, éticos o legales». Se denominan de interés, pues involucran dilemas entre intereses y deberes. Un aspecto muy llamativo que se observa en el caso que nos ocupa, puede ser la percepción por parte de la mayoría de los estudiantes sobre la caracterización personal, sobre qué actos o eventos constituyen fraude académico y cuáles no; lo que los hace vulnerables a cometer ilícitos, en la medida que notamos que una gran cantidad de los estudiantes no consideran fraude académico la mayoría de las acciones que sí lo son, las cuales son percibidas por ellos como acciones puramente académicas, como lo vemos en el caso de la tutora María Kieros que al parecer elaboraba una investigación que estaba sesgada para suplir intereses personales, los estudiantes del grupo no estuvieron atentos, interesados y centrados en su investigación, razón por la cual la tutora pudo desviar a su acomodo el estudio realizado, por tal motivo los hace coautores del fraude y deberán asumir las sanciones que la

Universidad imponga, sin dejar de lado que la Institución comparte la culpa, ya que debe existir rigurosidad en la selección del personal que hace parte de una investigación que involucre personas. Una de las dificultades más habituales al abordar estos conceptos es que suele confundirse la privacidad con la confidencialidad.

CONCLUSIONES La integridad académica de sus docentes y estudiantes es motivo de preocupación en la educación superior, así como los datos arrojados en estudios de pregrado o posgrado de diferentes escuelas, los cuales muestran un aumento de la prevalencia de comportamientos de engaño y el cambio de valores de los estudiantes y docentes que son parte de la educación. El uso de códigos de honor se debe utilizar para influir positivamente en actitudes y comportamientos de los estudiantes. Una de las posturas de Emmanuel Kant (1994) relaciona que se debe obrar de tal modo “que se use la humanidad en sí mismo y en otros siempre como un fin y nunca solamente como un medio, con ello se deduce en a la importancia del caso analizado que toda conducta dentro de los procesos educativos y de investigación deben ser ética y moralmente buenas de tal modo que estas no traigan repercusión sobre sí mismo o sobre otros. La ética, entendida como el saber que reflexiona sobre las acciones reguladoras de las conductas sociales y del ejercicio de la voluntad individual como la de la profesora Kieros, esto permite la comprensión de la diversidad de sistemas de valores y constituye un referente a través del cual se establece un reordenamiento de las relaciones sociales en la educación y la investigación, creando una perspectiva ética y social que invita a la

investigación a preguntarse por las normas, valores, pautas de conductas, visiones y racionalidades presentes en los heterogéneos actores sociales con los que interactúa. Se hace necesario, razonar los principios éticos como factor determinante en la conducta del investigador como se hace en el análisis de posturas del presente caso analizado, tomando en consideración que el estudio de ese conjunto de principios está presente en la producción de un nuevo conocimiento. Tal objetivo es alcanzado por la actuación de hombres y mujeres que, organizados como una comunidad de iguales, cumplen sus metas y actúan de acuerdo con ciertas normas de conductas relacionadas con la ética. La Declaración Universal sobre Bioética y Derechos Humanos, proclamada en el 2005 por la Unesco nos sirve de guía cuando hay dilemas, el Artículo 18 nos dice que “se adoptan la toma de decisiones y tratamiento de las cuestiones bioéticas, declara que se debería promover el profesionalismo, la honestidad, la integridad y la transparencia en la adopción de decisiones, en particular las declaraciones de todos los conflictos de interés y el aprovechamiento compartido de conocimientos”. Es decir, que cada vez que se presente un dilema bioético se debe actuar conforme a la descripción del artículo 18, basados en los principios anteriores para alcanzar así una decisión que beneficie la ética profesional. Es importante saber que una organización interesada en el tema de la Responsabilidad Social debe involucrar en su direccionamiento estratégico en primer plano a la comunidad y al medio ambiente que lo rodea. Se plantea que "el direccionamiento estratégico busca siempre una adecuada combinación e integración de los medios con que cuentan las organizaciones para lograr sus objetivos ya que una organización orientada al crecimiento de la Responsabilidad Social, establecen estrategias dentro de un marco de acción que le permita alcanzar los objetivos planteados por la compañía.

REFERENCIAS Acta Bioethica. (2011). vol.17 no.2 Santiago nov. 2011. ¿Confidencialidad, anonimato?: las otras promesas de la investigación. (págs. 199-204). Meo. A, I. (2010). Consentimiento informado, anonimato y confidencialidad en investigación social. La experiencia Internacional y el caso de la sociología en Argentina. Institute of Education (Universidad de Londres) y CONICET (Argentina). (Pág.13).

Revista de la Educación Superior Volumen 45, Issue 179, Julio–Septiembre 2016, (Págs.86-87). Ojeda de López, Juana; Quintero, Johana; Machado, Ineida. (2007). La ética en la investigación Telos, vol. 9, núm. 2. (pág. 350).

Kant, Immanuel (1994), "Replanteamiento de la cuestión sobre si el género humano se halla en continuo progreso hacia lo mejor", en Immanuel Kant, Ideas para una historia universal en clave cosmopolita y otros escritos sobre filosofía de la historia, Madrid, España, Tecnos (Ak. VII: 79-94). Werner, Heisenberg (1985). La Responsabilidad del Investigador. Editorial Plaza y Janes. Babbie, E. (2000). Fundamentos de la investigación social. Editorial Thomson S.A, España. Bilbeny,

N.

(1992).

Aproximación

de

la

ética.

Editorial

Ariel,

Barcelona.

https://www.redalyc.org/pdf/993/99318750010.pdf Ander-Egg, E. (1992). Técnicas de investigación social. México. El Ateneo. Cordero, Z. R. (2009). La investigación aplicada: una forma de conocer las realidades con evidencia científica. Revista Educación, 33(1) 155-165. Vargas, S. (2009). La investigación aplicada: una forma de conocer las realidades con evidencia científica. Revista Educación, 33, 155-165 Kant, E. (1788). Crítica de la razón práctica. Madrid: Alianza Unesco. (2003). Declaración internacional sobre los datos genéticos humanos. Recuperado de http://portal.unesco.org/es/ev.php-URL_ID=13177&URL_ DO=DO_TOPIC&URL_SECTION=201.htm

Vallaerys, (2012). El papel de las universidades en la formación integral de los futuros profesionales. Artículo de reflexión, 99,100,102.

file:///C:/Users/User/Desktop/junior/ADMINISTRACION%20EMPRESAS %201/EL_PAPEL_DE_LAS_UNIVERSIDADES_EN_LA_FORMACION_INTE.pdf Vallaeys, (2014) La responsabilidad social universitaria: un nuevo modelo universitario contra la mercantilización obtenido de: https://www.redalyc.org/pdf/2991/299129977006.pdf