HISTORIA Y ESTRATEGIA- Raul VOLKER

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El desarrollo estratégico sustentable: Una mirada a los atributos del arquetipo latinoamericano para un desarrollo y progreso social, económico y cultural centrado en la sustentabilidad de los recursos

VOLKER Raúl Marcelo

El desarrollo estratégico sustentable: Una mirada a los atributos del arquetipo latinoamericano para un desarrollo y progreso social, económico y cultural centrado en la sustentabilidad de los recursos

Octubre de 2012

NDICE

123-

INTRODUCCIÓN

Pág. 2

LA IDENTIDAD

Pág. 3

EL PROBLEMA DE LA IDENTIDAD LATINOAMERICANA

Pág. 4

4-

LA COSMOVISION DE LA NATURALEZA HUMANA

Pág. 5

5-

ESTRATEGIA EN EL SIGLO XX PARA UN MUNDO EN CRISIS

Pág. 6

6-

UNA ESTRATEGIA PARA LATINOAMERICA

Pág. 8

7-

EL ESTADO, LA POLÍTICA CULTURAL Y LA CULTURA POLÍTICA

Pág. 9

8-

LA SUSTENTABILIDAD: DESARROLLO EN LO ECONÓMICO,

9-

LO ECOLÓGICO Y LO SOCIAL

Pág.10

ESTRATEGIA PARA ALCANZAR UN DESARROLLO SUSTENTABLE

Pág.11

10- BIBLIOGRAFÍA

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1- INTRODUCCIÓN Se suele esgrimir al indicador de “ingreso per cápita” como un guarismo que nos da la idea acerca del bienestar de los habitantes de una región; tal es así que si éste crece, la calidad de vida de los habitantes de esa región mejora o posee un mayor "bienestar". Pero también es una realidad que puede darse que en los años de “crecimiento” económico la calidad de vida no mejora para sus habitantes, como lo expresa el economista chileno premio Nóbel alternativo de economía en 1983 Manfed Max Neex en donde critica ese indicador de crecimiento. Puede también ser confundido con el indicador de desarrollo social, ya que “en toda sociedad hay un período en el cual el crecimiento económico conlleva a un mejoramiento de la calidad de vida, pero solo hasta cierto punto, el punto umbral. Cruzando éste, si hay más creciendo se comienza a deteriorar la calidad de vida” (Max Neef, 2005). Economistas como Amarthia Sen quieren resignificar el concepto de “bienestar” según el contexto histórico cultural del desarrollo humano de una región. En este sentido el bienestar debe lograrse a través de algunas externalidades económicas primarias como "estar bien alimentado, tener un techo digno, tener salud" mas otros elemento de naturaleza psicológica como "poder elegir sus propias opciones, poder presentarse en público sin vergüenza, tomar parte en la vida comunitaria, etc.". Este funcionamiento de la economía, para Amarthia Sen está por encima de cualquier variabilidad en relación al consumo, los indicadores de producción o de ingreso de una sociedad; indicadores que en relación al bienestar concreto de los habitantes pasan a segundo plano. La economía no funciona por leyes naturales ya que la teoría económica esta atravesada por conceptualizaciones psicológicas acerca de las motivaciones individuales y acerca de las decisiones que en tiempos de incertidumbre pueden tomar "atajos heurísticos", considerado que la capacidad heurística es un rasgo característico de los humanos, como un arte, una ciencia del descubrimiento y de la invención o de resolver problemas mediante la creatividad y el pensamiento divergente, que sistemáticamente varían los principios fundamentales de la teoría de probabilidades.

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Eso rompe con una visión tradicional de que la economía es una ciencia meramente racional y que las decisiones de las personas en materia económica son guiadas en forma exclusiva por la razón. Las personas como individuos en sociedad, deben contar con un conjunto de capacidades propias que representan la oportunidad de actuar en el colectivo social, atributos que tiene cada quien para lograr ese bienestar necesario para la vida. Es entonces que ese conjunto de capacidades y atributos representan la verdadera dimensión de la libertad de una persona. Se es más libre cuando se cuenta con más herramientas para lograr una vida en plenitud y felicidad; pero estos sin dudas son elementos que podemos esgrimir como sencillamente subjetividades del ser Humano. En este sentido, el valor de los recursos con los que cuenta el ser humano, depende de las oportunidades que permiten tener la misma cantidad de recursos, lo cual sería sin dudas un criterio de justicia; pero esto de ninguna manera asegura que las personas con esos mismos recursos puedan lograr el mismo bienestar para cada cual; porque los individuos difieren en sus capacidades como para llegar a convertir los recursos existentes en funcionalidades para lograr el

bienestar, la plenitud y la felicidad. Un

ejemplo de esto sería la educación ya que no todos los jóvenes que acceden a un mismo diseño curricular, no todos llegan a terminar sus trayectos educativos y muchos menos pueden acceder a la educación universitaria. Es decir, las decisiones económicas no pueden estar desvinculadas de lo cultural, lo psicológico, lo político, etc; por lo cual podemos afirmar que “lo económico es subjetivo” ya que la economía está atravesada por la subjetividad dado que a la economía la realizan y esta llevada adelante por “sujetos” incapaces de desprenderse de sus subjetividades; es decir que ningún sujeto puede ser completamente objetivo. Independientemente que estemos de acuerdo con los planteamientos de Amarthia Sen, importan estos conceptos si nos permite analizar la economía más allá de los números y las estadísticas concretas para pretender ser "objetivos". Es necesario realizar entonces un abordaje de la economía más allá de la discreción de los números, donde tienen lugar las personas, los sujetos y sus construcciones sociales realizadas e instituidas en un determinado momento de la historia.

2- LA IDENTIDAD Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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Podríamos conceptualizar a la identidad como la cuestión nuclear de cada cultura. Es el modo en que expresan su singularidad los sujetos que conforman un grupo social. Nos habla de sus particularidades y de la forma en que los sujetos de esa sociedad, modulan las variables universales en un determinado momento histórico y en una determinada dimensión espacial. Podríamos entonces, como resultado de la cultura de cada sociedad en el tiempo y en espacio, hacernos entonces la siguiente pregunta: ¿El modo de ser de América ha sido siempre el mismo? Esta es la pregunta que enmarca los contenidos arquetípicos que señalara Carl Jung acerca del arquetipo que configura los rasgos originarios del ser en lo colectivo de un pueblo. En este sentido, podríamos señalar algunas circunstancias que tal vez nos imprimieron las trazas de colonialismo, y dependencia económica que nos dan como resultado una Latinoamérica periférica y tercermundista. El sociólogo Jorge Larraín señala que "del encuentro original entre la cultura española e indígenas, emergió un nuevo modelo cultural fuertemente influenciado por la religión católica, íntimamente relacionado con el autoritarismo político y no muy abierto a la razón científica. Este modelo coexistió fácilmente con la esclavitud, el racismo, la inquisición y el monopolio religioso". Ante esta realidad, en las luchas de emancipación latinoamericana, las esferas de poder se conformaron con una clase terrateniente y hacendada que copiaron un discurso colonial y de sometimiento a una hegemonía cultural en toda Latinoamérica a pesar de ser diversa en un crisol de etnias. Desde las naciones industrializadas, comenzaron a ingresar capitales que se instalaron en las economías latinoamericanas donde el poder político seguía estando en manos de las oligarquías nacionales pero el poder económico en manos de enclaves económicos británicos y norteamericanos. Pero se comienza a dar una confrontación entre la América profunda e indígena y la América pujante del siglo XX. Es decir se genera una América periférica, dominio de occidente, depositaria del individualismo; pero por el otro, la América profunda dirigida hacia el aquí y ahora, donde predomina una visión colectiva de lo humano. Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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3- EL PROBLEMA DE LA IDENTIDAD LATINOAMERICANA Por otro lado, “es innegable que la religión ha jugado en rol fundamental en la historia de la cultura en Latinoamérica en cuanto a que se ocupa de los valores supremos y que ha servido para fundamentar un orden social compartido”. Una de las problemáticas que se nos plantea, es la cuestión de la identidad latinoamericana ya que los sectores conservadores veían en las raíces latinoamericanas, un riego para sus intereses ya que los sectores populares desean el poder de las oligarquías latinoamericanas. Pero mirar el pasado es necesario para poder afrontar la comprensión del presente, indagar ese pasado para buscar los elementos necesarios para realizar la prospectiva de poner la mirada en el futuro para que las nuevas generaciones produzcan su propia realidad social a partir del mundo que reciben como herencia y con los atributos propios del arquetipo cultural, social y económico con que afrontan el porvenir.

4- LA COSMOVISION DE LA NATURALEZA HUMANA El hombre, se sabía y se sentía parte integrante de la creación. Vivía en un diálogo permanente con los otros seres del mundo visible, con los elementos, las rocas, las nubes, los animales y los seres del mundo vegetal, pero además con un mundo invisible, es así que la vida se desarrollaba en las prácticas religiosas o espirituales. El hombre, vivió temiendo y respetando aquello que, en su entendimiento formaba parte imprescindible de la vida. El hombre no dañaba la Tierra porque pensaba que él era la tierra y esta actitud lo llevaba a reconocerse como parte del todo y si se dañaba ese todo, entonces se atentaba hacia la vida misma en cualquiera de sus formas. Los pueblos latinoamericanos en su etapa precolombina, eran pueblos que mantenían una cosmovisión mágica acerca de su relación con el mundo y la naturaleza con una rica mitología con rituales ancestrales algunos de los cuales se mantienen vivos aún, como los rituales en tributo a la pachamama. Esta visión encantada del cosmos es válida virtualmente para todas las sociedades anteriores o que se desarrollaron en áreas ajenas a la influencia de la civilización Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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judeocristiana occidental. En este sentido, dos culturas en particular, la judía y la griega, fueron las responsables de los comienzos de un proceso de desencantamiento que llevo al imperio de la razón. Más adelante en el siglo XVI la expansión europea, colonización mediante, impuso la cultura occidental en prácticamente todo el planeta, por lo cual se vive en un continuo despertar y resurgimiento del pensamiento. Ese comportamiento de los hombres, ceñido a la religión en todos los ámbitos de una sociedad medieval, va cediendo terreno a un mundo donde la razón científica con la necesaria distinción entre sujeto y objeto, entre observador y observado, expulsa al ser humano de la creación, lo libra de toda responsabilidad religiosa y lo coloca en el plano de la razón cuya intención es descifrar los secretos de la naturaleza para dominarla. Con la conquista, vino la imposición de los modelos culturales europeos que trajo como consecuencia un largo periodo de negaciones, invalidación y aniquilación del sustrato cultural que mantenía esas cosmovisiones nativas. En todo ese periodo posterior a la conquista, el hombre ha conseguido romper esa relación orgánica con la tierra y el cosmos llevando al planeta al colapso ecológico; en este sentido a modo de ejemplo podemos hablar de la huella que va dejando la utilización de los elementos en función de la producción de bienes para satisfacer una demanda cada vez mayor. Ejemplos negativos de esto lo conforma la huella hídrica que deja la producción de algunos bienes consumibles que en una relación desproporcionada, desperdician recursos imprescindibles para la vida como el agua. El discurso científico ha comenzado a encender la polémica acerca de algunas realidades problemáticas de nuestra civilización: “Difícilmente podía resultar razonable reunir y almacenar un número de armas nucleares capaz de destruir el globo terráqueo sesenta veces; difícilmente podía resultar razonable dejar que el planeta se superpoblara sin desarrollar los recursos adecuados para acomodar tal crecimiento; difícilmente podía parecer razonable reducir y agotar los recursos existentes sin previsión alguna en vistas a su reposición” (Baigent y Leigh) En este contexto, aparecieron en Europa figuras como la de Francis Bacon, el fundador del empirismo y uno de los pilares fundamentales de la mentalidad científica; que no aboga ya por una relación armoniosa, de respeto y devoción hacia aquella parte del Cosmos de la que el ser humano, desde antiguo, se sentía parte integral, sino por una relación de fuerza con la naturaleza, buscando sus secretos. Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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La Tierra ya no será de ahí en adelante, objeto de culto para convertirse en un objeto simple que puede ser indagado. Así es entonces que la Tierra está allí para que el hombre ejerza su dominio sobre ella. Durante los cuatro siglos siguientes el hombre se lanzo a la conquista de toda la tierra disponible. El hombre de la mentalidad científica, empezarán a ver tan solo “recursos que deben ser explotados” sin ninguna estrategia de sustentabilidad que pudiera hacer perdurable la vida en la Tierra.

5- LA ESTRATEGIA EN EL SIGLO XX PARA UN MUNDO EN CRISIS El mundo que habitamos atraviesa un periodo de crisis financiera que tiene una fuerte réplica sobre la economía real. Las consecuencias son enormes y todo hace temer que el fenómeno se extienda en el tiempo. En otros momentos históricos, cuando han ocurrido crisis económicas en el mundo, las tensiones sociales se han recrudecido, y más precisamente en la crisis de 1929 sobrevino la Segunda Guerra Mundial. Este es un temor latente a este fenómeno que cuando ocurre destruye profundamente los lazos sociales. Ya en el final del siglo XX, los analistas recibieron la caída de la Unión Soviética como un hecho positivo que venía a pacificar el mundo finalizando todo un periodo nefasto llamado como “la Guerra Fría” entre las dos superpotencias; pero en definitiva que es lo que ocurre en esta primera década del siglo XXI con respecto a las hipótesis de guerra? Hay autores que no sólo temen que pueda ocurrir sino que afirman que vivimos en un estado de guerra permanente, con opiniones cercanas a los autores clásicos de la filosofía política, Hobbes y Rousseau. Uno de estos autores es Eric Hobsbawn, quien ve la desaparición de Unión Soviética como un acontecimiento desfavorable ya que lo considera un fenómeno geopolítico de consecuencias catastróficas para el mundo y cuyas consecuencias son negativas en varios sentidos. Hobsbawn opina que el siglo XX ha traído más muertes que en toda la historia conocida de la humanidad; con una cifra que llega a los 187 millones de personas que han perdido sus vidas, cercanos al 10% de la población mundial en 1913. Ha sido entonces, un siglo de guerras constantes en donde no se han conocido prácticamente periodos de paz. Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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El historiador Niall Ferguson tiene una tesis abarcativa para explicar la violencia en el siglo XX. Esta dice que en las guerras concurrieron tres ingredientes indispensables, el conflicto étnico, la inestabilidad económico – financiera y la desaparición de algún Imperio. Otro historiador Inglés, Paul Johnson, atribuye los males del siglo XX a la voluntad demoníaca de poder de algunos líderes como Hitler y Stalin, y en el auge del “relativismo moral”, el declive de la responsabilidad personal y el rechazo de los valores judeocristianos. En América Latina el fenómeno de la guerra entre Estados no se ha dado con tanta frecuencia, sin embargo hay que señalar que Chile y Argentina desplegaron tropas en las fronteras, en apresto por una guerra inminente que nunca ocurrió; aunque la Argentina si conoció la guerra en su expresión más acabada en un breve conflicto con Gran Bretaña. En todo este orden de cosas, aunque en América Latina ningún ejército haya atravesado las fronteras de otro país en el siglo XX, el continente ha sido el escenario de grandes enfrentamientos civiles. No se puede afirmar que el número de guerras internacionales haya ido en descenso de forma constante desde mediados de los años sesenta, cuando las disputas entre estados cedieron su lugar a los problemas internos ya que la cifra de éstos no dejo de crecer hasta los años noventa, pero se puede decir que en este momento, el turbulento escenario se estabilizó. El historiador Ferguson considera que EE.UU. es un imperio al que le faltan los rasgos más importantes que permiten controlar grandes dominios a lo largo de todo el mundo: En primer lugar, EEUU depende del capital internacional para atender su déficit, no dispone del número de diplomáticos suficientes para atender sus asuntos en todo el mundo y su pueblo no posee la voluntad de afrontar las responsabilidades internacionales de un imperio; pero aunque considera que las condiciones y las actitudes de los Estados Unidos lo alejan de convertirse en un gran imperio, recomienda que esta debe asumir esa responsabilidad para traer la estabilidad y la paz al mundo. La globalización ha avanzado en casi todos los aspectos, en el económico, en el tecnológico, y en el cultural, pero no ha avanzado demasiado en lo político y los estados territoriales siguen siendo las únicas autoridades reales. A pesar de que existen unos doscientos estados, en la práctica solo unos cuantos tienen peso, y de todos ellos Estados Unidos es el más poderoso; pero ningún estado o imperio Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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ha sido lo suficientemente extenso y poderoso como para ser lo suficientemente hegemónico políticamente. No parece factible que Estados Unidos, ni ninguna otra potencia estatal pueda consolidar así su dominio por encima de todo el resto del mundo.

6- UNA ESTRATEGIA PARA LATINOAMERICA En la realidad latinoamericana, se experimenta una articulación entre la desigualdad socioeconómica y la posibilidad de participación social de los grupos más desaventajados en la vida institucional, es decir se tiende siempre a repetir y perpetuar la exclusión, el desempleo, la inseguridad, la marginación educativa, etc; estas externalidades negativas de estas economías del subdesarrollo, afectan primordialmente a los grupos que pertenecen a las minorías étnicas que subyacen en el sustrato social. Muchas de estas comunidades pose en idiomas, cosmovisiones y sistemas políticoeconómicos propios que se encuentran enraizados en las propiedades del mismo entorno natural y social. En este sentido, muy pocas de estas comunidades de este variado abanico de culturas, han sido integradas en la concepción de los “estados Latinoamericanos” ya que muy a menudo se las condena como parte de un pasado anti moderno. Teniendo en cuenta estos conceptos, cabe preguntarse acerca de la posibilidad de conservar el acervo cultural ante el avasallamiento de las identidades extranjeras por sobre las identidades locales infligida por la cultural oficial y las prioridades del gobierno que se encuentra en el poder. También se podría plantear que oportunidades tienen las identidades locales de contrarrestar los efectos de la globalización económica cultural que busca homogeneizar y eliminar las diferencias socioculturales como dando por supuesto que la cohesión social descansa en la universalización de la producción de bienes y servicios en un mercado transversal y homogéneo de acumulación y consumo. En este sentido, se puede indagar acerca de los ARQUETIPOS que conforman la diversidad de identidades latinoamericanas, para que sepamos que interpretación tendremos de la realidad. Si bien el arquetipo no determina de un modo directo la experiencia de un sujeto, dice Carl Jung, se puede decir que establece un PATRÓN formal, según el cual se van a ordenar los distintos elementos psíquicos de una persona. En base a estos conceptos, los Mitos, Las Leyendas y los personajes colectivos que forman parte del acervo cultural de una comunidad, y que perduran a través del tiempo y Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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del espacio, están dentro de nosotros y existen potencialmente en el inconsciente, son SÍMBOLOS ARQUETÍPICOS que marcan un patrón o un marco al pensamiento y a las emociones. Que configuran el MARCO o la VENTANA desde donde estoy mirando, analizando, razonando el mundo. Teniendo en cuenta esto entonces, deberíamos tener presentes las posibilidades reales que existen para construir y salvaguardar modelos socio económicos y políticos alternativos que ofrezcan vías de integración y participación efectivas para el desarrollo de las identidades Latinoamericanas frente a la hegemonía de los procesos y mecanismos restrictivos de la globalización; entonces, el desafío a resolver desde la política es resolver las diferencias socioculturales para no perpetuar las desigualdades intergeneracionales de pobreza, exclusión y discriminación que subyacen en las sociedades latinoamericanas. Desde esta mirada, la estrategia para la conquista de una genuina igualdad de oportunidades, debe centralizar sus objetivos en la construcción de espacios y alternativas para poner fin a la exclusión social, optimizar el acceso a los beneficios sociales y resolver las diferencias socioeconómicas y culturales estructurales.

7- EL ESTADO, LA POLÍTICA CULTURAL Y LA CULTURA POLÍTICA La pregunta que se esgrime hoy acerca de las categorías en lo que hace a la política, es en cuanto a la participación e igualdad en una sociedad democrática y la conceptualización de los temas que se van instalando en los ámbitos de discusión lo que hacen a la esencia misma de aquello que insta a la conflictividad social permanente; igualdad y participación en una sociedad democrática, como los conflictos sobre propiedad, participación política y acceso a los recursos naturales que se desprenden de ella, son estas conflictividades. Hoy desde las esferas políticas con marcos democráticos, se establecen pautas de negociación que están en todos los países sólo pobremente desarrollada ya que en muchos países latinoamericanos, están instaladas los gobiernos de caudillaje, con el monopolio de la política, donde esta manera de ejercerla es a menudo corrupta con un autoritarismo profundamente arraigado, con relaciones clientelistas de poder y de corrupción directa. En esto precisamente esta presente la configuración arquetípica de una sociedad con sus identidades en dialogo a veces anacrónico y desencontrados con sus raíces. Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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En este plano conflictivo debe ubicarse una educación política "para" y "con" los pueblos en su búsqueda del arquetipo de la identidad, en este sentido hay que preguntarse acerca de los valores que sostiene esa sociedad y cuál es la dirección y qué lugar quiere ocupar pueblo quiere asumir esa comunidad en la diversidad cultural posible; y más precisamente, quien ha de de ejercer el liderazgo necesario para llegar hasta ese punto deseado. En cuanto a la figura de liderazgo necesaria para llevar adelante la tarea, es imprescindible poseer los atributos para bajar a la realidad cotidiana los valores que sostiene la sociedad en su conjunto tanto en su historia, sus costumbre, pero además en las subversiones que agitan a diario con los temas que se instalan en las crisis que requieren de alguien que madure las posibilidades y construya las alternativas posibles, de alguien que construya el sueño de un futuro donde esa sociedad debe llegar, alguien que exprese en los demás, “la visión” de cuál es el destino que tiene esa sociedad en el futuro del mundo; pero ese liderazgo lo ejerce quien extrae de la gente, sus deseos mas íntimos aunque ocultos para cada individuo; lo que hace el líder entonces, es colocarlo ahí, en el lugar en que cada individuo íntimamente desea situar sueño y esperanza acerca de “en que comunidad desea desarrollarse y vivir”.

8- LA SUSTENTABILIDAD: DESARROLLO EN LO ECONÓMICO, LO ECOLÓGICO Y LO SOCIAL En lo que hace al contexto latinoamericano, podemos advertir cierta conexión entre etnicidad y pobreza; lo cierto entonces, es que la realidad en las distintas sociedades latinoamericanas está marcada por desfavorecer a perpetuidad en los niveles más pobres de la población en el desarrollo económico en general; pero desde el final de la década de los 90 esta situación ha comenzado a mejorar sustancialmente en todos los países de la región.

Si la actividad empresarial se condiciona a la lógica del éxito mercantil, se asume que las entidades productivas deben lograr un permanente nivel de competencia. Por esta razón en el presente, los proyectos alternativos que buscan sus realizaciones en otra lógica, han compensado su falta de competencia en lo mercantil, fundamentalmente evolucionando hacia acciones que acercan los proyectos a las estructuras de las empresas privadas. En general, los proyectos alternativos que no sostienen una lógica mercantilista, no han sido un medio para transformar el entorno social, económico o político. Por el contrario, en lo fundamental, es la estructura dominante la que asimila, a lo largo del tiempo, de una u otra forma las iniciativas alternativas. Un obstáculo que encuentran estos proyectos sociales, son de índole estructural, ya que los desempeños económicos y sociales de los proyectos alternativos no pueden mantenerse al margen del marco legal y macroeconómico donde operen y actúen. No queda duda que la cuestión de la propiedad, las relaciones con el Estado, el acceso al mercado interno, a créditos, a Lic. Raúl Marcelo VOLKER Página | 13

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servicios, a infraestructura como transporte, la tasa de inflación y de intereses, etc. son elementos cruciales que deciden sobre el éxito o fracaso de un proyecto alternativo. No basta la voluntad ni el sacrificio de los involucrados de llevar un proyecto al éxito económico mas allá de la lógica de la ganancia e inmerso en la conceptualización de la sustentabilidad de lo producido, no es suficiente promover una economía social que, incluso contemple el desarrollo humano local, ni que se destaque por momentos las externalidades de solidaridad que resultan de la realización de los proyectos; siempre hay que tomar en cuenta e involucrarse de la misma manera en lo que hace a la política fiscal, la política monetaria y mercantil, y en la construcción de infraestructuras y de servicios para que todos los espacios económicos, sociales y culturales estén en una misma sintonía y en un funcionamiento en sincronía para que no se desperdicien las oportunidades de procurar un mejor espacio social para el desarrollo del ser humano.

9- ESTRATEGIA PARA ALCANZAR UN DESARROLLO SUSTENTABLE El desarrollo sustentable para los países, requiere de un manejo de los recursos naturales que en todo momento este atravesado por la conceptualización económica de la responsabilidad social en cuanto a la futura disponibilidad de dichos recursos naturales, humanos, sociales, económicos y tecnológicos, con el fin de alcanzar una mejor calidad de vida para la población contemporánea y, al mismo tiempo cuidar que los patrones de consumo actuales no afecten el bienestar de las generaciones futuras. Estos temas debieran estar por encima de las de las prioridades asignadas por los gobiernos, las empresas y la población en su conjunto, ya que cada país aplicará sus propias estrategias para alcanzar ese desarrollo sustentable, y muchas veces estas pueden entrar en colisión con los intereses y necesidades de las otras naciones; es decir que muchas veces los resultados no son los adecuados, y que algunas veces se experimentan externalidades negativas que no se pueden prever por lo cual se hace imprescindible un monitoreo responsable y un involucramiento mayor de todos los actores sociales a los que les cabe algún tipo de responsabilidad. Llevar adelante estas estrategias requiere modernizar la gestión institucional, especialmente en los países en desarrollo, con personal técnico, sistemas de información, mecanismos legales y administrativos que tengan como insumos informacionales todo el conocimiento acerca de la problemática ambiental desprovista del sesgo ideológico, así mismo son necesarios para planificar todas las acciones gubernamentales y empresarias, las huellas que deja a su paso, todo lo producido para la satisfacción de las necesidades humanas, ya que toda acción del hombre deja huella en lo hídrico, en lo energético, en lo biológico, etc; y precisamente es aquí donde se manifiestan en forma catastrófica, muchas externalidades no deseadas; cuando los incentivos racionales para el cuidado del futuro de todos, son insuficientes es cuando se hacen imperiosas las políticas de gestión y sistemas de control que planifiquen una manera diferente de encausar la producción mas allá de que al consumo lo determinen simplemente los caprichos y los tiempos de la oferta. Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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Llegadas estas instancias, El Estado debe: •

atender las responsabilidades, el compromiso de la comunidad y el cambio de las prioridades;



aplicar un manejo adecuado de los recursos de propiedad pública;



mejorar la gestión de la demanda para una mayor eficiencia.

En un contexto de esta magnitud, con estas relaciones de poder, las empresas deben: •

incentivar un cambio organizacional profundo, que promueva nuevas y mejores relaciones

entre

los

actores

organizacionales:

empresarios,

trabajadores,

proveedores y comunidad, favoreciendo con ello un desarrollo sustentable que valorice la diversidad cultural, social y territorial del país; •

impulsar la responsabilidad ambiental a través del fomento a buenas prácticas y la autorregulación ambiental;



asumir los efectos ambientales de las conductas organizacionales sobre las personas y el entorno, como parte de un proceso de mejoramiento continuo.

Las estrategias económicas se orientan a producir más con menos. Esto significa pasar de un crecimiento cuantitativo a un desarrollo productivo basado en la eficiencia, la innovación, la producción limpia y en la práctica de la recuperación, el reciclaje y la reutilización de materiales como insumos para los nuevos productos en la procuración de la sustentabilidad de los espacios ambientales. Por otra parte, se hace imprescindible realizar cambios estratégicos en el patrón de inversiones, tanto pública como privada y social, reencauzándolas hacia los proyectos sustentables y de alta rentabilidad en lo social ya que debe ser de ahora en más la preocupación central de todos los líderes de la región: cuidar el capital social para garantizar la sustentabilidad para las generaciones futuras. La escala económica y el consumo deben ser coherentes con las capacidades regenerativas y asimilativas de los sistemas globales que sostienen la vida, para lo cual es necesario fijar precios adecuados de los recursos escasos. Las estrategias ambientales se deben enfocar a conservar la biodiversidad de las especies y los ecosistema; recuperar aquellos ecosistemas que están degradados con políticas ambientales que concienticen a las empresas acerca de los daños ocasionados en la posibilidad y los beneficios de buscar la rentabilidad de usar con mayor eficiencia las tierras de cultivo; desarrollar e implementar estrategias para prevenir el calentamiento global, reducir el uso de combustibles fósiles y sustituirlos con otras fuentes de energía; gestionando adecuadamente los residuos domésticos e industriales. Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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Las estrategias en cuanto a lo humano, deberían focalizarse en reducir la explosión demográfica y disminuir la migración hacia las ciudades fomentando un desarrollo rural sustentable; pero para llevar a cabo estas políticas de migración, se deberían adoptar medidas que minimicen las consecuencias de la urbanización y generar entonces políticas de acceso más igualitario a los recursos básicos, desarrollar programas de salud y educación de mayor alcance, se deberían acometer con políticas preocupadas en la protección de la diversidad cultural y combatir con verdadera decisión la pobreza absoluta que constituye uno de los flagelos más vergonzosos de de la humanidad llegados a este estado de desarrollo tecnológico y científico. Es imprescindible para consolidar estas ideas, cambiar los patrones de consumo de la población para evitar excesos que produzcan sobre contaminación y que este consumo ya no sea como producto de la manipulación ejercida por la oferta haciendo foco en el inconsciente vulnerable del consumidos; tener políticas en el claro objetivo de redistribución de los ingresos para eliminar las fuertes diferencias en la distribución de la riqueza generando más fuentes de empleo e incentivar el consumo responsable. En cuanto a las estrategias que se debieran desarrollar en el marco de la utilización de las tecnologías, se debería apuntar a la utilización de tecnologías más limpias y eficientes, que procuren la utilización de menos recursos naturales y menos consumo de energía; incentivando la utilización de las tecnologías tradicionales de poca contaminación; apoyar políticas gubernamentales para la investigación e inversión en la adopción de nuevas tecnologías mejoradas y el instituto de instrumentos para accionar el fomento de la utilización y las exigencias de estas nuevas tecnologías superadoras.

10- BIBLIOGRAFÍA Cachanosky, R. (2006). El Síndrome Argentino. Buenos Aires: Ediciones B. Correa, H. (s.f.). Los fundamentos del pensamiento de alta estratégia. Argentina: UAI. Golovanevsky, L. (17 de Abril de 2007). VULNERABILIDAD Y TRANSMISION INTERGENERACIONAL DE LA POBREZA. Un abordaje cuantitativo para Argentina en el siglo XXI . Buenos Aires, Buenos Aires, Argentina: Universidad de Buenos Aires. Howsbawm, E. (1999). Historia del siglo XX. Buenos Aires: Crítica. Jung, C. G. (1994). Tipos Psicológicos. Barcelona: Sudamericana. Kliksberg, B. (2007). Mas Ética, más desarrollo. Buenos Aires: Temas. Max-Neef, M. A. (1993). Desarrollo a escala humana. Montevideo- Uruguay: Nordan Comunidad. Lic. Raúl Marcelo VOLKER

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MAX-NEEF, M. (1982). LA ECONOMIA DESCALZA. Señales desde el mundo invisible. Estocolmo, Buenos Aires,Montevideo: EditorialNordan, 1986. Sen, A. (2008). Sobre ética y economía. Alianza.

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