Grupo Colina

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RESUMEN Viernes 2 de Abril de 1993, Henry Pease anuncio haber recibido el documento que incluia la denuncia del secuestro y ejecución extrajudicial de u profesor y nueve estudiantes de la universidad La Cantuta a cargo del denominado Grupo Colina. del Ejército, denominado Grupo Colina. El documento consignaba nombres y cargos de los oficiales implicados y detalles sobre el asesinato de los detenidos en un descampado de la zona denominada Huachipa. A fin de evitar que se investigue el tema, el Consejo Supremo de Justicia Militar se vio en la obligación de abrir instrucción contra los efectivos mili-tares que resultaren responsables. El general Nicolás hermosa ríos, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, fue invitado al congreso para informar sobre la denuncia, negando to da participación militar en los sucesos y acusando a la oposición de usar documentos fraudulentos y apócrifos. El 22 de Abril el general Luis Perez Documet, jefe de la división de Fuerzas Especiales marcho en una caravana de tanques y vehículos blindados hacia la sede de Conjunto de las Fuerzas Armadas. En el mensaje a la nación del 24 de Abril el presidente de la Republica Alberto Fujimori, señaló que las discrepancias entre el poder político y el poder militar habían sido superadas. Tratando de desmentir la denuncia el gobierno uso a la policía para que emitiera un informe sobre una pericia en el cual se descalificaba como apócrifos los documentos presentados. Pero debido a las evidencias halladas el ejército termino por admitir que hubo personal militar destinado a un operativo en La Cantuta la. Todos los militares en actividad bajo la orden jerárquica de Hermoza Ríos fueron enjuiciados, dándose posteriormente una ley de amnistía para todos ellos. El 5 de Mayo de 1993 el general Rodolfo Robles Espinoza por intermedio de su esposa presento en una conferencia de prensa una carta en la que detalla que el secuestro, desaparición y asesinato en la Cantuta estuvo a cargo del grupo Colina de acuerdo a planes operativos diseñados y autorizados por la más alta instancia, siendo

el mayor Santiago Enrique Martin Rivas como el jefe del operativo y el mayor Carlos Pichilingue Guevara como jefe administrativo. El 8 de Julio se entregó información en la que se ponía al descubierto las fosas en las que se encontraban los cadáveres de los secuestrados y asesinados. Estos fueron encontrados en Cieneguilla, calcinados y enterrados. Junto a estos restos se hallaron dos llaveros pertenecientes a Armando Amado Condor y a Juan Mariños Figueroa. Admitiéndose de esta forma la denuncia anónima y la carta presentada. Frente a esto Montesinos armo una formula en la se inculpaba a los integrantes del grupo Colina cuyos nombres ya eran de dominio público, alejándolo de la zona de riesgo a los mandamases. Luego del anuncio de la detención del mayor Santiago Enrique Martínez Rivas, Fujimori, Montesinos y Hermoza empezaron a gobernar mucho más juntos. En declaraciones de Martin Rivas afirma que todo era una maniobra de montesinos, para que ellos callaran y no cayeran Fujimori, Hermoza y Montesinos.

En esta

describe la estrategia de Montesinos, en la cual designa como general a Juna Rivero Lazo. Pichilingue cuenta que el 20 de Diciembre de 1993 Rivero Lazo es detenido, sumándose él a la detención como parte de la estrategia. El depósito de municiones estaba ubicado a media hora de la ciudad de Pisco. Era un lugar muy resguardado protegido, el cual era muy difícil de localizar, ningún periodista podía llegar. Una mañana llego un helicóptero para trasladarlos al cuartel general del ejército. Esto se dio después de acaloradas discusiones y discrepancias. El 19 de Enero se dio inicio al proceso a puertas cerradas y con una duración de tres días. El 23 de febrero, los militares procesados amanecieron en sus habitaciones del Cuartel Bolívar convertidos en flamantes sentenciados. La promesa que después del juicio todo volvería a la normalidad no aconteció para nada y, más bien, volvieron del tribunal con una ruma de años a purgar en la prisión militar. El efecto inmediato de la Ley de Amnistía fue la libertad de los militares presos. Los militares abandonaron el confinamiento del Cuartel Bolívar, después de un año y medio de reclusión, sin embargo Santiago Martin Rivas sorprendió con un anuncio que hubo de ser consultado a la jerarquía: decidió fijar como su domicilio la misma habitación en la que estuvo recluido, en la cual permaneció hasta Marzo de 1997

El general Rivero Lazo fue destinado a la sexta región en Bagua, como segundo de Luis Pérez Documet; al coronel Federico Navarro lo enviaron a Iquitos; al mayor Carlos Pichilingue a Ba-gua y Santiago Martin Rivas se quedó en Lima. En noviembre todos ellos fueron dados de baja. Recibieron cincuenta mil dólares de recompensa y les consiguieron puestos de trabajo en distintas ciudades del interior, todos separados y distanciados. A pesar de esta ley de Amnistía el tema de la violación a los derechos humanos nunca pasó al olvido. Montesinos puso informantes en el Cuartel Bolívar cuya función era referir de manera minuciosa los movimientos, las visitas, la rutina del militar que convirtió su celda en vivienda. Cuando el jefe del Grupo Colina decidía salir a la calle, eran otros los encargados del reporte: los vigilantes encubiertos como taxistas siguiendo sus quehaceres. Empezando el año 1997 el agente Martin sufrió un accidente de tránsito que según afirma no fue de casualidad. El 5 de abril apareció descuartizada la agente Mariella Barreto, con quien tuvo una hija. Los documentos que contienen las investigaciones policiales y judiciales de dicho crimen afirman que Martin Rivas acreditó su ausencia de la ciudad de Lima cuando ocurrió el sucedo. La Fiscalía le retiró los cargos ante la falta de elementos incriminatorios. Ese crimen es uno de los varios misterios del período Fujimori Montesinos y todo esfuerzo por resolverlos. El uso del terrorismo de Estado, estuvo sometido a muchos ocultamiento durante una década. Sin embargo dos militares, antes de ser capturados, contaron a un periodista esta. De la cual se puede deducir que no hay crimen perfecto.