Epoca Prehispanica en Guerrero

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DOSIER

DOSIER

La época prehispánica en Guerrero

Posiblemente durante la misma época, en las cercanías de Xochipala se desarrolló una tradición de figurillas antropomorfas de barro hechas en un estilo naturalista único. El historiador de arte Carlo Gay propuso que posiblemente eran antecesoras del estilo olmeca; sin embargo, no tienen parecido con este estilo y, como todas, han sido producto de saqueo y no han sido fechadas. Puesto que al parecer Xochipala no tuvo una ocupación anterior a 900 a.C., es poco probable que esas figurillas sean antecesoras del estilo olmeca.

Durante los salvamentos en el río Balsas, en Guerrero, se encontraron vasijas tipo Capacha asociadas a un complejo arqueológico que surgió hacia 1200 a.C. en el Occidente de México. Museo Regional de Guerrero. Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

El Clásico Temprano Esta época (200-650 d.C.) es la que menos conocemos en Guerrero. En el resto de Mesoamérica las diferentes áreas tuvieron relaciones de intercambio más o menos intensas con Teotihuacan. En ellas aparecen rasgos típicamente teotihuacanos, como arquitectura de talud y table-

Paul Schmidt Schoenberg

La antropología de la región que abarca el actual estado de Guerrero es compleja. En el siglo xvi, la variedad de lenguas era tal que el estado se asemejaba a un rompecabezas. Aunque sabemos muy poco de la región en la época prehispánica, seguramente la situación era igual de complicada. Aquí se presenta una síntesis de lo que sí se conoce.

Durante el Preclásico, en las cercanías de Xochipala, Guerrero, se desarrolló una tradición de figurillas con un estilo naturalista único. Aún no se sabe si fueron anteriores, contemporáneas o posteriores a las manifestaciones olmecas en la región. Figurilla estilo Xochipala. Museo Regional de Guerrero. Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

28 / Arqueología Mexicana

El Preclásico Es la época de la que más sabemos sobre la arqueología de Guerrero. La costa, en los alrededores de Acapulco, muy bien podría ser el lugar donde se fabricara la cerámica más antigua de Mesoamérica. Charles F. Brush encontró en Puerto Marqués la cerámica Pox, que fechó alrededor de 2300 a.C. Al parecer fue fabricada por grupos que vivían principalmente de la explotación de recursos marinos. Alrededor de 1200 a.C. apareció el complejo arqueológico Capacha, llamado así por el lugar en Colima donde fue identificado por primera vez, por Isabel Kelly. Vasijas de cerámica típicas de este complejo se han encontrado en los salvamentos arqueológicos realizados en los vasos de las presas cercanas a la desembocadura del río Balsas, en los sesenta del siglo xx, y en Chilpancingo por la arqueóloga Guadalupe Martínez Donjuán. En Guerrero es muy importante la presencia del estilo olmeca, plasmado en grandes esculturas como las de San Miguel Amuco y Teopantecuanitlán y en figurillas de barro y piedra dispersas por muchas áreas del estado, ya sea en Tierra Caliente, el Centro, las costas y la Montaña. Es probable que ese estilo apareciera alrededor de 1200 a.C.

Aunque el Clásico Temprano es un época poco estudiada en Guerrero, se han encontrado evidencias de relaciones con Teotihuacan, como las estelas de Tepecoacuilco. En este fragmento se encuentra representado Tláloc. mna. Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

la época prehispánica en guerrero

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d.f.

Regiones geográficas DOSIER

DOSIER

estado de méxico

Michoacán

Arqueología de guerrero

morelos Taxco Ciudad Altamirano

puebla

Norte

Tierra Caliente

D.F.

estado de méxico

Centro

Costa Grande

Chilapa

Chilpancingo

oaxaca

guerrero

guerrero Zihuatanejo

Golfo de México

México

Montaña

Michoacán

Océano Pacífico

Coatlán del Río

morelos

Costa Chica

Infiernillo

Océano Pacífico

Zacapuato

als Río B

Mexiquito

Ilustración digital: Raíces

d.f. La Arboleda Placeres del Oro

Pueblo Viejo III

La Organera-Xochipala Coovisur

cuz

Ama

ío

Y

e

guerrero

R

oaxaca

Ejido Totolapan Maxela

El Caracol

Tehuehuetla

El Pochote San Miguel Las Tamacuas Zacatula

Río

morelos San Miguel Cerro de Ixtapan la Guitarra Cerro del Venado El Capire El Organal Mexiquito Cerro de puebla los Monos Cerro Don Cecilio-Coaxintlan El Mirador El Rincón Coacoyula Santo El Salto Cuetlajuchitlan Domingo Cruz Chiquita El Frijolar El Embarcador Oztotitlán Zacuantla

ac

estado de méxico

Taxco puebla Alahuiztlán Ichcateopan Cerro de Oztuma Tlamacazapa Cutzamala los Monos Atzala Palos Cañón de la Mano Santa Altos Tlachapa Acapetlahuaya Teloloapan Teocalcingo Teresa Iguala Coatepec Tlaxmalac Coyuca de Catalán Quechalapa Acatempan Huitzuco San Miguel Amuco Chaucingo Chilacachapa Atopula Los Terrones Tlapehuala Tepecoacuilco Cuetlajuchitlan Cocula Acayahualco Campo Oztotitlán Ajuchitlán El Mirador Morado San Miguel Ejido Totolapan Cuetzalan Totolapan Maxela El Caracol Ahuelicán Tetela Xalitla Tetelcingo Tecuiciapan s a s Mezcala Teopantecuanitlán Río Bal Oapan R í o M e Xochihuehuetlan zca La Trinchera Tlacozoltitlán l a Tehuehuetla La Organera-Xochipala Ahuináhuac Olinalá Tlacotepec Huamuxtitlan Coatepec Xochipala Cualac La Libertad Pueblo Viejo III oaxaca Zitlala Oxtotitlán Chiepetlan El Naranjo Zumpango Topiltepeque Petlacala Pirámides de Contlaco Coachimalco Ixcateopan Yestla Los Tepoltzis Tixtla Chiepetepec Tlapa Chilpancingo Chilapa Ayumpa Contepec Copanatoyac Xalpatláhuac Toscaquiquila Muchitlán Alcozahuapa Ayotoxtla Juxtlahuaca Mazatlan Zoyatlán Xalatzala Texmilican Quechultenango Zapotitlan Río Chiquito Colotlipa Cacahuaziziqui Acatepec Teocuitlapa Atlamajalcingo del Monte Río Pa pa g a Tlacoapa yo Tecpan Tepetixtla Texáyac Malinaltepec Metlatónoc Tepila Zitlaltepec San Jerónimo Totomixtlahuaca t

l

Soledad de Maciel

Región Mezcala Sitio arqueológico

Petatlán

Juluchuca Coyuquilla

guerrero



o

At

Océano Pacífico

a

Cihuatlán

x

Ixtapa

ac

La región mezcala en el epiclásico Michoacán

Zirándaro

as

Chontalcoatlán

Tetípac

oy

Acapulco

Nochtépec

Información: R.m. Reyna Robles. Ilustración digital: Raíces

lenguas indígenas en la segunda mitad del siglo xvi Michoacán

Náhuatl

Apaneca

Chontal

Tolimeca

Panteca

Tuzteco

puebla

tlacotepehua

Cuitlateco Yope Cuyumateca

Tlapaneco

30 / Arqueología Mexicana

Texcateca Tlaltzihuizteca

Información: Harvey, 1967, y Litvak, 1971. Ilustración digital: Raíces

Acapulco

con vestigios olmecas



con estelas



Clásico Tardío, con bóveda y arco falsos

Yopitzinco Tambuco La Zanja

Ayutla

Puerto Marqués

Clásico

Mixteco

Tepetixteca

Océano Pacífico



Coixca Tepuzteco o

Palma Sola

Preclásico

Matlame

Itzuco

guerrero

SITIOS ARQUEOLÓGICOS Etapa Lítica

oaxaca

Chumbio

morelos

Matlatzinca Texome

Tarasco

Coyuca

Azoyú

Xalapa

Estilo ñuiñe

Río

Pueblos conquistados por la Triple Alianza

Tarascos Pueblos con códices Sitios con tejidos

Charco de Ometepec

Huehuetlán

Posclásico

Igualapa

Que

tza

la

Océano Pacífico

Regiones: Infiernillo y Yopitzinco

Amuzgo

Límite estatal la época prehispánica en guerrero Información: Solanes y Vela, 2000; Villela; Schmidt; Reyna Robles. Ilustración digital: Samara Velázquez / Raíces

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DOSIER

en la solución de muchos enigmas y problemas de la arqueología mesoamericana.

Al norte del estado de Guerrero, cerca de Tepecoacuilco, se localizaron dos fragmentos de estelas. En ambos se muestran personajes ataviados a la manera teotihuacana, y en éste se representa a Chalchiuhtlicue. mna. Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

32 / Arqueología Mexicana

ro, figurillas de barro de estilo teotihuacano, cerámica como la Anaranjado Delgado y vasijas trípodes cilíndricas con soportes cónicos o rectangulares, floreros y “candeleros”. En Guerrero, especialmente en el centro del estado, es raro que aparezcan estos elementos y las culturas del Preclásico continuaron sin muchos cambios. En el norte, cerca de Tepecoacuilco, se localizaron dos fragmentos de estelas con personajes ataviados a la manera teotihuacana, posibles representaciones de Tláloc y Chalchiuhtlicue. Se conocen también otras tres estelas que posiblemente indican contacto con Teotihuacan: una de Acatempan, municipio de Teloloapan, otra de San Miguel Totolapan y, finalmente, una de Acapulco. En el Palacio Municipal de Tecpan se encuentra un marcador de juego de pelota que se localizó en Acatolín, a 10 kilómetros de Tecpan; tiene cierto parecido general con el marcador, o estela, de La Ventilla, en Teotihuacan. Al igual que las estelas, que no fueron encontradas en excavación controlada, en la Costa Grande se tiene conocimiento de piezas de cerámica Anaranjado Delgado. Tal vez lo único del Clásico Temprano encontrado en exploración controlada proviene de una excavación de Gordon Ekholm en Tambuco, Acapulco. Se trata de vasijas trípodes cilíndricas con soportes rectangulares huecos, del tipo que Ekholm llamó Acapulco Brown, aunque para él los soportes se parecían más a los de vasijas similares del sitio maya de Uaxactún, en Guatemala, de la fase Tzakol (300-600 d.C.); asimismo, sugirió que ambos lugares podrían haber recibido influencia teotihuacana. Ha llamado mucho la atención una cantidad importante de máscaras de piedra en estilo teotihuacano encontradas tanto en Teotihuacan como en Guerrero. Por el tipo de piedra –la mayoría parecen ser de serpentina–, su lugar de origen podría ser la Montaña de Guerrero. Un ejemplar soberbio fue encontrado en excavación por el arqueólogo Porfirio Aguirre en 1921, cerca de Malinaltepec, que aún tiene incrustaciónes de amazonita, turquesa, concha nácar y concha roja. Otro elemento que se ha encontrado en Teotihuacan, que probablemente venga del centro de Guerrero, aunque en

El Clásico Tardío. La cultura Mezcala

Máscara excavada en 1921, cerca de Malinaltepec, Guerrero, que es uno de los mejores ejemplos de las hechas en piedra, y que se encuentran tanto en Teotihuacan como en Guerrero. En este último caso, en su mayoría provendrían de la región de la Montaña, donde se encuentra la serpentina con que fueron elaboradas. mna. Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

Desde el Preclásico apareció en Guerrero una tradición de tallado de figuras de piedra pulida, principalmente figuras humanas completas y máscaras. Según Miguel Covarrubias, quien describió el estilo, esos objetos se caracterizan por ser esquemáticos y estilizados: “...hechos sobre la base de una forma de hacha con cortes y planos arreglados de manera simétrica, con los rasgos apenas sugeridos”. Covarrubias afirmó que el estilo tiene cuatro variantes principales, las que parecen reflejar diferentes épocas. En primer lugar, un estilo olmecoide, seguido de un estilo transicional, con rasgos tanto olmecas como teotihuacanos; en tercero, un estilo teotihuacanoide y, finalmente, un estilo local que abarca la cuenca del río Balsas, que llega a Arcelia hacia el oeste, la parte sur de los estados de México y Morelos hacia el norte y Chilapa hacia el sureste. En ese estilo se tallaron figurillas antropomorfas y máscaras; animales: jaguares, ranas, monos y pájaros; representaciones de templos;

herramientas: hachas, cinceles, punzones y pulidores; cuentas de piedra verde y orejeras. Originalmente, Covarrubias llamó a este estilo, y al área que abarca, Mezcala, por estar la población de este nombre aproximadamente en el centro de su área de distribución. Ahora, gracias a las investigaciones llevadas a cabo por la arqueóloga Rosa Ma. Reyna Robles durante muchos años, sabemos mucho más de esta área que sobre cualquier otra en Guerrero (Reyna Robles, 2000). Ella ha logrado determinar que “Mezcala” es mucho más que un mero estilo artístico; los objetos tallados en piedra se encuentran asociados consistentemente a la cerámica Blanco Granular y, lo que es muy importante, a un estilo arquitectónico caracterizado por patios hundidos, edificios porticados –abiertos de un lado y con techos planos sostenidos por columnas– y taludes y tableros decorados con clavos empotrados. La conjugación de este complejo, formado por una tradición de lítica pulida, cerámica y arquitectura, permite en palabras de Rosa Ma. Reyna conocer a esta área como una “cultura arqueológica”.

Las vasijas de la cerámica llamada Blanco Granular posiblemente se utilizaban para transportar algún tributo, por ejemplo miel. Museo Regional de Guerrero. Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

pequeñas cantidades, es la cerámica llamada Blanco Granular, principalmente en forma de ánforas de fondo plano con tres asas alrededor de la parte media del cuerpo, decoradas con anchas líneas rojas o negras y en el borde exterior con caras hechas al pastillaje. Posiblemente se utilizaban para transportar algún tributo, por ejemplo miel.

Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

El territorio guerrerense guarda las claves para adelantar

DOSIER

La cultura Mezcala es más que un estilo plasmado en objetos. Se le asocia con un estilo arquitectónico que se caracteriza, entre otros rasgos, por el uso de taludes y tableros decorados con clavos empotrados, como este ejemplo de La Organera-Xochipala, Guerrero. la época prehispánica en guerrero

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DOSIER Desde el Preclásico apareció en Guerrero una tradición de tallado de objetos de piedra pulida, como figuras humanas completas, máscaras y templos, los que se caracterizan por ser esquemáticos y estilizados. Ese estilo, con variantes que indican distintas épocas, sobrevivió por varios siglos y se le conoce como Mezcala. Museo Regional de Guerrero. Fotos: Marco Antonio Pacheco / Raíces

34 / Arqueología Mexicana

Cada vez que un arqueólogo mete una pala o una cucharilla al suelo de Guerrero encuentra sorpresas, las que dan un giro a las hipótesis sobre la arqueología mesoamericana. Apenas hemos tocado la superficie de la riqueza arqueológica de Guerrero; aún hay trabajo para muchas generaciones de arqueólogos.

Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

Un rasgo que llama la atención en Guerrero durante esta época es la construcción de arcos y bóvedas falsas, tipo maya, los que se han localizado en La Organera-Xochipala, en Oztotitlán, cerca de Teloloapan, en Tehuehuetla, en Chilpancingo, en el sur de Morelos y en Teopantecuanitlán y sus cercanías. En 1977 investigué La Organera-Xochipala y propuse que la presencia de las bóvedas se debió a que Xochipala se encontraba en una ruta entre el área maya y el Altiplano Central, después de la caída de Teotihuacán, dando por hecho que todas las bóvedas de Guerrero correspondían al Clásico Tardío. Pero Rosa Ma. Reyna y Guadalupe Martínez excavaron el sitio de Coovisur, en Chilpancingo, donde apareció una tumba de bóveda falsa y, como ofrenda al muerto, vasijas con iconografía olmeca, lo que ubica la tumba alrededor de 500 a.C. o antes. Esta bóveda, entonces, es tan antigua, o más, que la más antigua conocida del área maya, en Calakmul, Campeche. Las bóvedas de La Organera-Xochipala sí son del Clásico Tardío y es posible que reflejen una tradición arquitectónica establecida en Guerrero desde el Preclásico o que sean parte de un conjunto de elementos que llegaron desde el área maya hasta Xochicalco, Morelos, durante el Clásico. La extensión de su distribución, que coincide con otros elementos de la cultura Mezcala, también podría indicar que se trata de otro elemento característico de esta cultura.

Bóveda falsa en La Organera-Xochipala, Guerrero. Pertenece al Clásico Tardío y es posible que refleje una tradición arquitectónica establecida en Guerrero desde el Preclásico. Se trata de otro de los rasgos característicos de la cultura Mezcala.

El Posclásico Se ha realizado poca arqueología relacionada con este periodo (900-1500 d.C.), posiblemente porque está mejor cubierto en las fuentes, especialmente respecto al siglo xv, cuando tuvieron lugar las conquistas aztecas. La tradición lítica del área Mezcala continuó sin muchos cambios; en el Templo Mayor de Tenochtitlan se han encontrado muchas figuras y máscaras. También se siguió fabricando la cerámica Blanco Granular, aunque al parecer ya no llegó al Centro de México. En el Norte, Tierra Caliente y el Centro apareció una nueva cerámica llamada Yestla-Naranjo, nombre que viene del área donde se identificó primero, cerca de Tlacotepec. Se trata de cajetes y molcajetes trípodes, con soportes hemisféricos ya sea alargados y huecos con una bolita de barro adentro que suena, de cabeza de serpiente o de estribo. Están decorados con líneas paralelas combinadas con figuras geométricas –triángulos, xicalcoliuhquis y círculos sencillos y concéntricos–, pintados en negro o negro y rojo sobre un fondo anaranjado, tanto en el exterior como en el borde interior. Esta vajilla apareció desde finales del Clásico Tardío, alrededor de 800 d.C., y llegó a ser una de las cerámicas más comunes durante el Posclásico Temprano (900-1200 d.C.). Como apareció repentinamente, incrustándose dentro del complejo Mezcala, parece haber estado relacionada con la llegada de un grupo nuevo a la región, probablemente los chontales. Robert Barlow señala que para los aztecas, “chontal” quería decir, despectivamente: “...idioma que hablan en la garganta... que no se escribe porque no se pronuncia”. El mismo Barlow consideró que hay evidencia de que los chontales llegaron a establecerse, como cuña, en medio de una población muy amplia de matlatzincas, que se extendía desde el sur del estado de México hasta Tlacozoltitlán, Guerrero; esto pudo haber ocurrido hacia 1250 d.C. o incluso antes, si es que la cerámica Yestla-Naranjo corresponde a este grupo. Más al poniente vivieron grupos como los itzucos y los mazatecos, de los que, al igual que con los chontales, no tenemos datos sobre sus len-

guas. Así como había islas de hablantes de matlatzinca en toda esta región, también en algunos sitios se han encontrado fragmentos de cerámica Rojo-sobre-Blanco, muy similar a la cerámica atribuida a los

La cerámica Yestla-Naranjo fue una de las más comunes en Guerrero durante el Posclásico Temprano. Al parecer, su aparición se relaciona con la llegada de los chontales a la región. Museo Regional de Guerrero. Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

La Triple Alianza conquistó varios poblados de Guerrero. En la Matrícula de Tributos se registraron las provincias sometidas y los productos que se debían entregar. Matrícula de Tributos, lám. 17. Foto: Ramón Viñas / bnah / CNCA-INAH-MEX

matlatzincas del valle de Toluca. Posteriormente, quizá alrededor de 1250 d.C., otro grupo, que hablaba un dialecto nahua, los coixca, llegó a ocupar el área oriental de los chontales y los matlatzincas.

Al sur del río Balsas había grupos que hablaban cuitlateco, que abarcaban desde San Miguel Totolapan hasta la Costa Grande, en las cercanías de Atoyac y de Coyuca. Del lado oriente del estado, al sur de Chilapa, en la cuenca de los ríos Azul y Papagayo, se encontraba el señorío independiente de Yopitzingo, cuyos habitantes, los yopes, posiblemente hablaban un dialecto del tlapaneco, idioma que hoy se habla en la Montaña. No se sabe nada de la arqueología de esta región. Gracias al trabajo de Barlow con las fuentes del siglo xvi, sabemos que los aztecas de la Triple Alianza comenzaron a incursionar en Guerrero desde el reinado de Itzcóatl (1433-1440 d.C.), quien conquistó a los chontales de Cocula, Teloloapan, Tetela, Cuetzalan, Iguala y Tepecoacuilco. No pudo conquistar a los chontales al poniente de Taxco, mientras que al oriente quedaron libres Oapa y Tlacozoltitlán. A su muerte, en 1440, Moctezuma Ihuilcamina (1440-1469) conquistó Tlacozoltitlán y estableció una guarnición cerca de Chilapa, en 1458, para vigilar la frontera con el señorío de Yopitzingo. Con la ayuda de tezcocanos, Moctezuma reconquistó varios pueblos chontales, como Teloloapan, y se apoderó de Coatepec, Acapetlahuaya y Oztuma, dejando muchos muertos. En tierra chontal sólo permaneció independiente Alahuiztlán. Por el lado de la Mixteca, incursionó hasta Olinalá, partiendo desde Izúcar. Oztuma se había rebelado, pero Axayácatl (1469-1481) lo reconquistó. Tízoc (1481-1486 d.C.) reanudó el empuje azteca hacia los cuitlatecos y tepuztecos del sur, y para el final de su reinado posiblemente había llegado hasta Zumpango. Finalmente, Ahuítzotl (1486-1503) puso fin, de una vez por todas, a la resistencia chontal de Alahuiztlán y Oztuma, que se había rebelado otra vez. En 1487 llevó a cabo una impresionante matanza de más de 42 000 chontales y se llevó presos a 2 200 para sacrificarlos. Esto fue el fin de la nación chontal, razón por la que sabemos tan poco acerca de ellos. Los aztecas atravesaron entonces la sierra para llegar a la Costa Grande, y conquistaron la provincia de Cihuatlán. Al parecer, su intención era rodear a los tarascos por la costa, pero llegó la conquista española y no pudieron culminar su plan. la época prehispánica en guerrero

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DOSIER

cronología prehispánica de guerrero

(900-1521 d.C.)

Posclásico

Aztecas

Localizadas en la zona del bajo Balsas, en Guerrero, paletas como ésta –asociadas a grupos de la tradición hohokam del suroeste de Estados Unidos– parecen indicar contacto de Guerrero con aquella distante región. mna.

Oztuma

Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces

Códice Mendocino, f. 18r.

Vasija.

Alahuiztlan Figurilla. Templo Mayor de Tenochtitlan.

(600-900 d.C.)

Clásico Tardío

Ñuiñe

Yestla-Naranjo Mezcala

Los enigmas y el futuro

Cajete trípode.

Acapulco Xochipala

(2500-900 a.C.)

(900-300 a.C.)

Preclásico Temprano Preclásico Medio

(300 a.C.-300 d.C.)

Preclásico Tardío

(300-600 d.C.)

Clásico Temprano

Vasija.

Estela. Piedra Labrada.

Estela. Tepecoacuilco.

Cuetlajuchitlan Botellón.

Teopantecuanitlán Pintura rupestre.

Escultura 4.

Juxtlahuaca Oxtotitlán Chilapa Vasija. Capacha.

Puerto Marqués (cerámica Pox)

Cerámica tipo Mecedora. Información: Paul Schmidt. Fotos: Marco Antonio Pacheco / Raíces; Paul Schmidt

36 / Arqueología Mexicana

El territorio guerrerense guarda las claves para adelantar en la solución de muchos enigmas y problemas de la arqueología mesoamericana. Hay indicios de posibles restos olmecas tan antiguos como los de la costa del Golfo en Chilapa y las cercanías de Mezcala, lo que tendría implicaciones tanto para la vieja hipótesis de Miguel Covarrubias como para la polémica acerca de qué elementos son olmecas y si algunos de ellos aparecieron primero en el Golfo o en el Altiplano, o si lo olmeca es una cultura o un estilo que abarca diferentes etnias. No sabemos aún a ciencia cierta la antigüedad ni la distribución de las figurillas del estilo Xochipala; si fueron anteriores, contemporáneas o posteriores a las manifestaciones olmecas. Sigue siendo enigmática la importancia de Guerrero para los mayas del Clásico. ¿Se podría haber originado la bóveda falsa en Guerrero? ¿Cuál fue la importancia de Guerrero para los mayas: un lugar de paso hacia el centro durante el Clásico Tardío, o un posible proveedor de materias primas, como piedra verde? ¿Hay jadeíta en Guerrero? Por las fuentes sabemos que los aztecas conquistaron muchas partes de Guerrero y que los yopes, en los alrededores de Acapulco y Tierra Colorada, eran una fuerza que los aztecas respetaban; sin embargo, hasta la fecha no se ha investigado algún sitio azteca ni yope en Guerrero. Por último, ¿las paletas del bajo Balsas indican contacto o intercambio con algún grupo o grupos de la tradición hohokam del suroeste de Estados Unidos? Son muchísimos más los problemas clave que hemos identificado, los que eventualmente se irán resolviendo con más exploración e investigación. Las áreas de las cuales sabemos más son principalmente el

Vasija localizada en Tezahuapa, Tixtla, Guerrero. Su inusual forma sugiere la existencia de contactos con Sudamérica, durante el Preclásico. Foto: Archivo Paul Schmidt

centro, la Tierra Caliente y el norte del estado. Se conoce muy poco de la Costa Grande y casi no hay nada de investigación sobre la Costa Chica, la Montaña y la sierra. Cada vez que un arqueólogo mete una pala o una cucharilla al suelo encuentra sorpresas, las que dan un giro a nuestras hipótesis sobre la arqueología mesoamericana. Esto es lo que sucedió hace apenas un par de años en un proyecto de salvamento cuando se iban a colocar las torres para una línea eléctrica entre Chilpancingo y Chilapa; en un sitio cerca de Tixtla se descubrieron varias vasijas de formas inéditas en Mesoamérica, formas que sugieren posibles contactos con Sudamérica durante el Preclásico. Sabemos que hay muchos sitios monumentales –como Piedra Labrada, en la Costa Chica, Contlalco, en Tlapa, y muchas más– que están siendo saqueados sistemáticamente. Apenas hemos tocado la superficie de la riqueza arqueológica de Guerrero; aún hay trabajo para muchas generaciones de arqueólogos. Paul Schmidt Schoenberg. Doctor en antropología por la Tulane University. Ha realizado investigación arqueológica en varias regiones, principalmente en Guerrero. Investigador del iia, unam, donde tiene a su cargo el proyecto de “Arqueología de superficie Chilapa-Zitlala, Guerrero”. Para leer más…

La riqueza arqueológica de Guerrero apenas se vislumbra. Muchos grandes sitios, como Piedra Labrada –de donde procede esta estela– aguardan su investigación y protección. Foto: José Esteban

Niederberger, Christine y Rosa Ma. Reyna Robles (eds.), El pasado arqueológico de Guerrero, Centro Francés de Estudios Mexicanos y Centroamericanos/Gobierno del Estado de Guerrero/inah, México, 2002. Reyna Robles, Rosa Ma., “Guerrero y la cultura arqueológica Mezcala”, en Arqueología Mexicana, vol. II, núm. 41, 2000, pp. 68-73. Schmidt Schoenberg, Paul, y Jaime Litvak King, “Problemas y perspectivas de la arqueología en Guerrero”, en Roberto Cervantes Delgado (ed.), Primer Coloquio de Arqueología y Etnohistoria del Estado de Guerrero, inah/ Gobierno del Estado de Guerrero, México, 1986, pp. 27-51.

la época prehispánica en guerrero

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