El Malestar en La Cultura

EL MALESTAR EN LA CULTURA Resumen El malestar en la cultura plantea y aplica o desarrolla una tesis de que “el precio de

Views 69 Downloads 1 File size 181KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

EL MALESTAR EN LA CULTURA Resumen El malestar en la cultura plantea y aplica o desarrolla una tesis de que “el precio del progreso cultural debe pagarse con el déficit de dicha provocado por la elevación del sentimiento de culpa” El malestar es aquel sentimiento de culpa como el mas importante problema para le desarrollo cultural. La finalidad de la vida esta regida por el planteamiento de placer. Todo ser humano busca alcanzar, conseguir y mantener dicha finalidad, evitando el dolor y displacer. Procurando tener placeres cada vez mejores e intensos. Sin embargo no esta en los planes del ser humano en el desarrollo de su vida que todo sea placentero y dichoso. El libro dice que el cuerpo del ser humano se corrompe y muere, el mundo exterior (mundo natural) nos quita, nos abate destructivamente con furia y, más dolorosamente, el tener que compartir las desgracias y sufrir con otros y a otros seres humanos. Freud dice que la vida como esta como nos dan como esta impuesta nos resulta difícil y gravosa, nos trae muchos dolores, desengaños, tareas insolubles. Para poder soportar esto tenemos varias clases de calmantes tales como el trabajo y la ciencia que quiere decir las distracciones que dan valor a la miseria, el arte y varias formas de distraerse o fantasear con ilusiones con respecto de la realidad, en su forma máxima, sublimación, que solo esta en muy pocos que son como los talentos y dotes propios del ser humano, sustancias como el alcohol y otras drogas que nos insensibilizan ante la pena y miseria de la vida humana, nuestra vida. El lineamiento o el programa que nos impone el principio de placer, el de alcanzar la felicidad de ser felices, es imposible. Lo que no significa que se deba o se intente buscar una forma de alcanzar dicha felicidad. El ser humano puede drogarse intoxicarse con sustancias o ahilarse para encontrar sosiego, pero la mejor forma para evitar el displacer suele ser el de integrarse a una comunidad, trabajando, para someter la naturaleza a la voluntad humana por medio de la ciencia y la técnica. En el aspecto social podemos ver y encontrar la religión, un grupo de masas que recrea una realidad efectiva, desprendiéndola de ciertos rasgos que suelen ser incomodos e intolerables, a la par que siguiendo el sentido de los deseos propios. La religión implica una concepción de la vida evidentemente infantil donde el sujeto se proclama solo o desvalido, y manifiesta una añoranza, un anhelo paternal. Los sistemas religiosos están ubicados en la cúspide de las ideas que corresponden a las actividades psíquicas del ser humano, por lo tanto, es significativo el uso que hace Freud como ejemplo que guiara su discurso hacia su visión aséptica (en su sentido original de cautelosa) de aquello que tiene a lo religioso como máxima realización.

Freud dice que gran parte de nuestra miseria y dolor se debe a la cultura, ya que la gran híper potencia de la naturaleza y la delicadeza de nuestra humanidad, de nuestros cuerpos, no son las únicas variables o fuentes del dolor, del penar humano. También la insuficiencia de los vínculos sociales y familiares, entre el estado y la sociedad. Un ejemplo de Freud es el siguiente: la religión hace daño cuando impone a todos por igual (su camino para conseguir felicidad, placer y protegerse del sufrimiento) ya que cada ser humano es diferente, al no alcanzar esa ese camino propuesto o tener un fallo hace predominar el sentimiento de la culpa denominado pecado. Hay cierto desacuerdo en el pensar humano y el obrar así como hay un acuerdo múltiple entre sus mociones de deseo. Mociones las cuales el ser humano intenta intervenir para liberarnos del sufrimiento que nos causa la imposibilidad de satisfacerlas todas. Su acuerdo (es decir que se nos vengan todas juntas) es a la ves lo que atenta con esa intervención es una de las causas que tengamos pocas posibilidades, es terrible imaginarse como se complican las cosas cuando se nos impone una manera de pensar, una manera de obrar, que además de estar en desacuerdo entre si, están en desacuerdo con nuestra natural manera de pensar y nuestro deseo de obrar. El querer ser de la persona contra el deber ser de la persona. Muchas personas dicen que encontraríamos mas felicidad regresando a nuestra manera a nuestra sociedad, con condiciones primitivas como sea que se defina el concepto de cultura, es indudable que todo aquello con lo cual intentamos protegernos de la amenaza que acecha desde las raíces del dolor y sufrimiento proviene y pertenece justamente a esa misma cultura. La cultura intenta controlar y regular los vínculos que se establecen en la sociedad, y que parte de ella se someten a la arbitrariedad del individuo. Dice Freud que el hombre es lobo del hombre. Hay una pulsión de muerte en el individuo, hetero y auto destructiva, manifestada como agresión y es tarea de la cultura controlar esa agresión precisamente a través de su contrario el amor. El amor es otra de las fuertes bases de la cultura. El amor surge como necesaria consecuencia del instinto reproductor de la especie. Dependemos de otros individuos para tener dicha satisfacción, pero se debe tener en cuenta que dicha dependencia es externo algo que no podemos dominar ni controlar o dominar totalmente, es algo riesgoso. Partiendo de esto la cultura se establece que se debe subliminar en esa ternura a los prójimos que promulgan religiones, permitiéndonos estar lo suficientemente desligados de los objetos como para no dañarnos en su posible perdida. La convivencia humana solo se vuelve posible cuando se aglutina o aglomera una mayoría más fuerte que los individuos aislados y cohesionan frente a estos. La sustitución del poder del individuo por el de la comunidad es el paso cultural decisivo. Su esencia consiste en que os miembros de la comunidad se limiten en sus posibilidades de satisfacción, en tanto que el individuo no conocía tal satisfacción. Esta limitación trae el malestar individual, tras ese camino único para todos, el ser humano por obra del intelecto cultural experimenta limitaciones y la justicia exige que nadie escape a ellas. Aquel individuo que se desvié se le hará sentir culpable por romper dichas normas. La cultura se edifica sobre la renuncia de lo natural de lo pulsional se basa en la no satisfacción de lo natural de las pulsaciones.

El desarrollo cultural es una lucha continua por la vida de la especie humana. Da a enseñar la lucha entre la vida y la muerte el contenido de la vida en general. La cultura regula y deshabilita el peligroso gusto del individuo hacia la agresión, asi mismo lo guía a la conquista de este. La mayoría fuerte se impone violentamente sobre el individuo y lo limita. Utilizando la agresión que como normas y valores el individuo interioriza, se introyecta en aquello que Freud llama superyó, vigilando, juzgando y castigando al individuo desviado del camino único que han decidido los demás para su convivencia, así mismo la renuncia pulsional o natural crea la conciencia moral que con el tiempo pide mas y mas renuncias dando como resultado la imposibilidad de la satisfacción “la desdicha”. La posición que tiene Freud ciertamente no la de un optimista que dice que vivamos en el mejor de los mundos pero tampoco el de un pesimista. Lo de él es un escepticismo una cautela que lo mantiene a la expectativa de lo que pueda pasar.