El ensayo

El ensayo: El arte de contar ideas Un ensayo es un escrito en prosa consistente en la exposición de ideas acerca de un t

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El ensayo: El arte de contar ideas Un ensayo es un escrito en prosa consistente en la exposición de ideas acerca de un tema filosófico, político, social, etc. desde un punto de vista muy personal del autor.

El ensayo se reduce a una serie de divagaciones, la mayoría de las veces de

aspecto crítico, en las cuales el autor expresa sus reflexiones acerca de un tema determinado, o incluso, sin tema alguno. Un ensayo es un escrito en prosa, generalmente breve, que expone con hondura, madurez y sensibilidad, una interpretación personal sobre cualquier tema, sea filosófico, científico, histórico, literario, etc. No lo define el objeto sobre el cual se escribe sino la actitud del escritor ante el mismo; en el fondo, podría ser una hipótesis, una idea que se ensaya. El ensayo es producto de largas meditaciones y reflexiones, lo esencial es su sentido de exploración, su audacia y originalidad, es efecto de la aventura del pensamiento.

Tipos de ensayo Ensayo literario: El término "ensayo" aplicado a un género literario fue escogido por el escritor francés Miguel de Montaigne (1533-1592) para denominar sus libros: Essais. Algunas de las condiciones que debe satisfacer el ensayo literario es la variedad y libertad temática. El tema literario corresponde más a un problema de forma que de fondo. Ensayo científico: Una de las fronteras entre ciencia y poesía está en el ensayo. Se le ha llamado género "literario-científico" porque parte del razonamiento científico y de la imaginación artística. La creación científica arraiga, como la poética, en la capacidad imaginativa, ésta no se puede ignorar totalmente; sin embargo no se aparta de la naturaleza o de la lógica. El ensayo comparte con la ciencia uno de sus propósitos esenciales: explorar más a fondo la realidad, aproximarse a la "verdad" de las cosas. Comparte con el arte la originalidad, la intensidad y la belleza expresiva. Según la intención comunicativa del autor, los ensayos se pueden clasificar en expositivos, argumentativos, críticos y poéticos. El ensayo expositivo, como su nombre lo indica, expone ideas sobre un tema, presentando información alrededor del mismo y matizando esta información con la interpretación del autor y opiniones personales interesantes alrededor del tema en cuestión. El ensayo argumentativo tiene como propósito defender una tesis con argumentos que pueden basarse en citas o referencias, datos concretos de experiencias investigativas, alusiones históricas, políticas, u otras, fundamentos epistemológicos. El ensayo crítico describe o analiza un hecho, fenómeno, obra o situación, emitiendo un juicio ponderado. El ensayo poético expresa la sensibilidad de su autor, utilizando lenguaje literario.

Partes de un ensayo Introducción o planteamiento: Es una de las partes fundamentales del ensayo, para poder cautivar – atrapar o hechizar al lector. Esta se hace a partir de una opinión, de una pregunta, de una hipótesis o de un pensamiento metafórico. Desarrollo: tiene que ver con el proceso argumentativo de las ideas principales, secundarias y periféricas, las cuales acompañadas de citas, ejemplos, pruebas y registros lograrán sustentar la tesis principal del ensayo. Conclusión: Si el comienzo del ensayo, se presenta una tesis una hipótesis es necesario desarrollarla para poderla comprobar o desaprobar a través del proceso argumentativo

Extensión Con respecto a la extensión del ensayo, podríamos plantear que es relativa, pues un ensayo argumentativo, puede requerir mayor cantidad de hojas que un ensayo expositivo, crítico o poético. Algunos autores plantean rangos entre 3 ó 10 hojas. Al respecto es necesario aclarar que sea cual sea la extensión, debe de existir el planteamiento de una tesis, en su respectivo desarrollo de pros y contras, lo mismo que las síntesis correspondiente, pues el ensayo es una pieza de escritura completa.

Estilo En el ensayo no hay en realidad un estilo definido, sino muchos según el carácter del autor. Pero sí existe una condición esencial que todos debemos cumplir: la claridad de expresión y transparencia que puede dar al lector una mayor comprensión de la autenticidad del pensamiento plasmado por el ensayista. Debe de ser de característica lúdica, es decir agradable, ameno, ágil, atractivo, libertario y en la medida de lo posible con una alta dosis del sentido humor. De esta forma el ensayo debe atrapar y hechizar al lector Un buen ensayo, con relación a las reglas estilísticas, debe ser: Conciso y claro: El ensayo se encuentra delimitado y jerarquizado en sus componentes y en sus contenidos. Es necesario clasificar y trabajar las dominaciones jerárquicas del texto para que sea claro y preciso. Por otra parte, si existen muchas ideas el texto se vuelve confuso; el ensayo debe ser claro para que el pensamiento del que escribe, penetre sin esfuerzo en la mente del lector. Preciso: Es necesario utilizar términos precisos y no ambiguos. Muchos escritores creen que utilizando palabras rebuscadas o sinónimos solucionan este problema. Recordemos que los sinónimos no tienen igual significado, pues dependen del contexto y la cultura. Ejemplo: Perezoso, ocioso. Coherente: La dirección y la unidad del ensayo, se encuentran determinados en gran medida por la articulación lógica que le demos a las oraciones y a los párrafos. El

ensayo debe tener como mínimo dos planos básicos; el plano del contenido y el de su expresión lingüística. Los conceptos a través de sintagmas, las proposiciones por oraciones y los subtemas por párrafos. Consistente: Un ensayo adquiere consistencia en su cuerpo cuando al presentar las argumentaciones, no admite contradicciones, originando de esta forma que el texto sea natural, espontáneo, claro y preciso. Sustentado: Se utiliza mucho, pues los ensayos de corte argumentativo, en los cuales la hipótesis y las tesis principales, deben de ser desarrolladas con profundidad argumentativa, a diferencia del ensayo expositivo el cual es de carácter esquemático, pues solo describe con evidencias simples, que muchas veces no requieren de procesos de confrontación teórica o de demostraciones experimentales.

Finalidad El ensayo debe actuar como motor de reflexión, generador de duda y de sospecha, productor de ideas nuevas. El ensayo se hizo para diluir los designios de las lógicas Aristotélicas e introducirnos al mundo de la lógica borrosa donde no solo podemos hablar de una verdad o una falsedad, sino de una posibilidad o de una incertidumbre. Para escribir un buen ensayo, no solo se requieren ideas, sino que se requiere una alta dosis de lectura pertinente, para poder escribir al respecto. La inspiración para el ensayo no surge de la nada, surge de la experiencia lectora y escritora que tengamos. En síntesis, un buen ensayo, es como una buena pintura: las frases al igual que los colores, se deben combinar de una forma agradable. La armonía resultante de esta mezcla es el gran secreto de los ensayistas; pero no basta que las ideas de un ensayo, sean armoniosas, deben ser además, como los elementos de un cuadro, es decir vivos y pintorescos, para que puedan mostrar las tesis confrontadas por los argumentos de una forma cautivante y atrayente.

¿Qué es el ensayo?

¿Por qué un ensayo?

¿Qué es una revisión y sus ventajas ?

¿Cuál es la visión de un ensayo frente a la revisión?

¿El carácter didáctico e informativo del ensayo?

Metodología del ensayo

Partes del informe

Versatilidad del ensayo

¿El ensayo científico?

¿Cuál es el lenguaje de un ensayo?

Extensión del ensayo

El ensayo, método de disertaciones

Documento

complementario:

E. Ochoa H., N. Zamudio H., B.E. Barragán P., K. A. Acuña L. y T. Torres A. 2007. El ensayo: Herramienta pedagógica de trabajo del estudiante. Morelia, México.

La etimología de la palabra ensayo

La palabra ensayo proviene del verbo ensayar que significa probar. Al parecer el término relativamente es nuevo, sin embargo se encuentra que tanto los griegos como los romanos ya utilizaban este estilo de expresión, pero es hasta el siglo XVI cuando la esta forma de escritura adquiere las características y nombre con el que hoy en día se conoce. El filósofo francés Miguel Montaigne (1533-1592) lo utilizó y le dio el nombre con que ahora lo conocemos.

Una de las primeras cosas que realizamos cuando iniciamos una investigación es la revisión

documental, en este documento encontramos que no todos los

documentos representan, para nosotros, la misma importancia. Por ello, es común que aunque la mayoría de las revisiones se realizan en torno a un tópico,

se

llegue a tener una tendencia a favorecer ciertos documentos, sin que con ello la revisión deje de ser importante; finalmente el propósito de nuestra revisión juega un papel central de cómo los autores se expresan del tema en estudio. Mas propiamente la revisión se convierte en un ensayo en el momento mismo en que nuestra visión deja de ser objetiva, en el sentido de la imparcialidad, y se convierte no solo en la presentación de lo relevante que cada autor mencionó, sino que además nuestro conocimiento influye en la critica de la obra. Mas propiamente, el ensayo científico muestra una clara visión de los contenidos de las obras en relación a un tema, pero a demás, incorpora nuestro juicio del por qué es relevante lo que un autor menciona, por ejemplo, el ensayo podría destacar la información de un autor con respecto a otro a través de diversos mecanismos como: marcar las ventajas de un modelo ideológico, presentar la incompletes o completes de la obra y en el peor de los casos, pero no menos usado en la redacción del artículo científico, la confrontación de dos corriente o de dos resultados.

Ensayos sobre ciencia y filosofía

Así por ejemplo, existen tanto revisiones de tratados filosóficos y de tratados puramente científicos; una manera de conocer el lado humano del conocimiento del mundo, como es percibido, a través de varios autores lo puede dar las revisiones de la filosofía de diversos personajes importantes históricamente, en los que se nota que el autor no critica la posición de los autores sino que mas bien muestra las frases que el consideró importantes dentro de sus trabajos. Sin embargo, parece contradictorio que si queremos ser objetivos solo analicemos la obra en el sentido se citar las partes de la obra de lo que a nuestro juicio consideramos adecuado. Aunque como podemos apreciar,

la revisión

no se

alejar del aspecto subjetivo del que reconoce la importancia de la obra, al menos, a diferencia del ensayo trata de no tomar la parte de juez y emitir juicios sobre cuales son las ventajas o las fallas de la obra.

Para un buen sector las revisiones cuentan con el inconveniente de mostrar, casi de manera histórica, cómo se dio la evolución de un determinado tema o cuáles son las características de las obras que giran en torno al tema. Pensando en función de que él que lee la obra es una persona que no cuenta con conocimientos previos del tema, la revisión de una obra le dará la ventaja de poder conocer de manera rápida y objetiva cuál es la información que gira en torno al tema, en cambio el ensayo, por contar con el juicio de una persona, estará generando un conocimiento poco mas que subjetivo. Resulta claro que lo mejor sería contar las obras acerca del tema y generar nuestros propios ensayos... Sin embargo, no podemos dejar de reconoce que el ensayo generado por nosotros mismos puede ser un trabajo que en el futuro nos permite generar el informe final

de una serie de investigaciones, tal informe podría representar parte del trabajo final de un artículo o las ideas centrales en una tesis.

El ensayo es un intento por acercarnos al entorno del tema, generar una explicación de cómo el que escribe el ensayo analiza el mundo de posibilidades en relación al tema. Uno de los principales valores con que cuenta el ensayo es la expresión personal, una responsabilidad juiciosa sobre el entorno, una interpretación personal de la realidad de cómo el autor analiza las obras.

El carácter didáctico e informativo del ensayo le da un toque especial , sobre todo si consideramos que ese carácter didáctico radica poner lo complicado en terrenos sencillos y no solo en conocimientos complicados.

Metodología del ensayo La metodología usada en la redacción del ensayo tiene dos vertientes una es la parte objetiva (o científica) y la sujetiva (o literaria). Así, el ensayo siempre cuenta con la parte científica porque relaciona los hechos y la parte subjetiva o literaria por contar con el juicio critico del ensayista. El ensayo es, entonces, la unión casada de dos mundos: el de la ciencia y el de la originalidad del ensayista.

El ensayo no es una innovación de un tema sino una construcción de entes generados en base a la experiencia que el ensayista ha tomado de su realidad, entonces, es el ensayo una forma particular de acercarse al mundo; para dos ensayistas la concepción del mundo puede ser diferente, es aquí lo cognitivo deja

de ser menos que relevante para incorporase a lo epistemológico, es decir, a la concepción propia de entorno del mundo que el ensayista ha construido del tema.

La versatilidad del ensayo

El ensayo hace la incorporación en diversas disciplinas, es el ensayo el espacio en el que caben todas las diversas disciplinas del conocimiento humano, existiendo tratados sobre ensayos desde ensayos de filosofía, ciencia, arte religión , arte, política, etcétera. La convergencia o divergencia de enfoque no solo se pueden presentar en el ensayo para un mismo tema, sino que, se puede generar la convergencia de diferentes áreas del conocimiento para abordar una problemática. El ensayo puede ser de profundidad o superficial, el cual dependerá del enfoque que se le de al trabajo.

Partes del ensayo El ensayo cuenta con tres partes importantes en su estructura: el planteamiento, el desarrollo y las conclusiones. En el planteamiento, se cuenta con la exposición del problema y la tesis que se ha de defender en el desarrollo, la segunda parte. Es el planteamiento lo que la mayoría de ocasiones se presenta como resumen (abstract) en el artículo científico. El la segunda parte, el desarrollo, se presenta la defensa de la tesis a través del análisis de los juicios que giran entorno a las

posturas que tiende a defender la

tesis, en la última parte, la conclusión, se

estructura a través de regresa a la primera parte, el planteamiento del problema, con la finalidad de resaltar la importancia de los hechos que validaron la hipótesis, para finalmente atar cabos y dar una respuesta a las interrogantes planteadas.

¿Cuál es el lenguaje con que se redacta un ensayo?

En principio el ensayo no tiene un modelo riguroso de cuales son las reglas de organización, quitado las partes de la estructura misma como es el planteamiento, desarrollo y conclusiones. Es importante resaltar que el ensayo tiene a su vez algo de ciencia y algo de literatura. Por un lado la exposición del ensayo debe de ser clara y sistemática , pero por otro lado, debe de ser bella. La belleza se centrara en la forma en que el ensayista comunica de manera sencilla y con vocablos adecuados tanto el planteamiento, cómo la defensa de la tesis.

Aunque la

subjetividad del ensayista es algo implícito en el ensayo, el ensayista debe de ser lo mas objetivo posible, es decir, evitar que la obra tienda ser una expresión matizada de cruces de prejuicios y prioridades personales.

Finalmente, el titulo del ensayo debe de reflejar el contenido del ensayo a manera de poder captar la atención.

La práctica de generación de ensayos generará en nosotros un estilo mas depurado de expresión, pero además es importante el análisis de trabajos en ensayos de otras personas lo que nos mostrará como se encuentran diferentes técnicas.

Extensión del ensayo La versatilidad misma del ensayo nos muestra que el ensayo puede ocuparnos un libro entero, pero que también puede contar con unas cuantas cuartillas. Sin embargo, la calidad de la obra es lo mas importante, es decir, la precisión del contenido

y la eficiencia de la comunicación del mismo. Su finalidad no es

imponer verdades sino mostrar posibilidades de concepción.

Documento

complementario:

E. Ochoa H., N. Zamudio H., B.E. Barragán P., K. A. Acuña L. y T. Torres A. 2007. El ensayo: Herramienta pedagógica de trabajo del estudiante. Morelia, México.