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• Luz Guzmán

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UNIVERSIDAD MICHOACANA DE SAN NICOLÁS DE HIDALGO

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES

TEORIA GENERAL DEL ESTADO

REPORTE DE LECTURA: “EL PRINCIPE”

PROFESOR: LIC. BLANCA ELENA ROJAS FIGUEROA

ALUMNA: LUZ MARÍA HERNÁNDEZ GUZMÁN

MATRICULA: 1545148C

SECCIÓN: 17

PRIMER AÑO

MORELIA MICHOACÁN A 15 DE ENERO DE 2016

CAPITULO I DE LOS GÉNEROS DE LOS PRINCIPADOS, Y DE LA FORMA EN QUE SE ADQUIEREN En este capítulo Maquiavelo habla de los géneros de principados entre los cuales están los hereditarios, los nuevos y los mixtos. Los principados son hereditarios cuando en ellos predomina desde mucho tiempo un linaje de una familia. Los principados también son nuevos o si no son del todo nuevos se les denomina mixtos cuando una parte se le agrega al estado hereditario del príncipe que los adquiere y toma posesión de ellos. Maquiavelo resalta que los dominios que se adquieren o están acostumbrados al sometimiento o a vivir libremente, por tal motivo se tienen que ganar por las armas ya sean propias o ajenas o por la virtud del nuevo príncipe.

CAPITULO II DE LOS PRINCIPADOS HEREDITARIOS Nicolás Maquiavelo señala que los principados hereditarios son los más fáciles de conservar pues están acostumbrados al sometimiento del príncipe por linaje y existe muy poca dificultad para gobernarlos y mantenerlos, al contrario de los nuevos. Puesto que solo basta con que el príncipe siga el orden que anteriormente fue establecido por sus antecesores, modificándolo y anexándole nuevas reglas. Esto quiere decir que un príncipe puede mantenerse siempre en el poder a menos que una fuerza ajena se lo impida. El príncipe tiene menos razones para ofender al pueblo, por lo tanto es amado, siempre y cuando no haga nada que lo haga ser odiado.

CAPITULO III DE LOS PRINCIPADOS MIXTOS Los principados nuevos y los mixtos se caracterizan por la forma de adquirirse por las armas propias y por el talento personal o por medio de las armas y fortunas de otros o por ayuda de los súbditos.

En los principados nuevos surgen grandes obstáculos y en especial si no son nuevos en su totalidad, es decir, si son añadidos a una parte anterior. En un principio los conflictos surgen como en todo nuevo principado, estos consisten basicamente en que los súbditos deciden cambiar a su antiguo rey, pensando que con esto mejoraran su condición y por ello se levantan en armas contra su antiguo señor sin darse cuenta de ese gran engaño. Esto hace que el príncipe se vea obligado a ofender a sus nuevos súbditos. De tal forma que tiene como enemigos a todos aquellos a los que ha ofendido al ocupar el principado, y no puede conservar como amigos a quienes lo ayudaron a conquistarlo, puesto que no puede recompensarlos como estos lo esperaban y no podrá utilizar ninguna medida fuerte en su contra; se necesita la colaboración de los habitantes para entrar a una provincia Cuando los estados que al conquistarse se agregan a otro estado más antiguo y son de la misma provincia y tienen la misma lengua, es más fácil conservarlos, siempre y cuando no estén acostumbrados a vivir libres de todo mandato, para asumir el poder con toda seguridad solo basta con desaparecer a la familia del antiguo príncipe; siempre que se respeten las costumbres y las ventajas de las cuales gozaban los súbditos estos permanecen tranquilos; de esta manera el principado nuevo junto con el antiguo llegaran a formar uno solo. Sin embargo cuando se adquieren

estados con un idioma, provincia, costumbre y

organización diferente es necesario tener gran habilidad para conservarlos. En cambio existen posibles soluciones para mantener el principado: una de ellas sería que el príncipe que lo adquirió se estableciera en ese lugar, porque estando cerca se pueden eliminar o solucionar los desórdenes rápidamente, en cambio sí se está lejos se tiene conocimiento del desorden cuándo ya es demasiado grande e imposible de solucionar. Si se sigue esta recomendación es difícil que se pierda el principado. Otra solución sería establecer colonias en algunos lugares que unan un estado con otro sin tener que ocupar aquellos territorios con numerosas tropas. Estas colonias no gastan dinero, son más fieles y causan pocos problemas, la poca población ofendida es aquella a la que se le arrebatan los terrenos y casas para el establecimiento de las colonias es pobre y desorganizada por lo que no representan amenaza alguna, mientras que el resto de la población no puede considerarse ofendido ya que no se les ha arrebatado nada y tendrán temor a cometer algo y que les suceda lo mismo. Lo anterior se resume en una frase de Maquiavelo:

“Hay que considerar, pues, que a los hombres hay que conquistarlos o eliminarlos, porque tienden a vengarse de las pequeñas ofensas; pero de las grandes no pueden, de manera que la ofensa que se haga a un hombre debe ser tal que le resulte imposible vengarse”. Si en lugar de colonias se establece un ejército, la conquista en lugar de significar una ganancia se presentara como pérdida, puesto que se tendría que gastar en la guardia y los ingresos del nuevo estado, y se perjudica a la población con los desplazamientos de estos aumentando así el número de enemigos. El príncipe que adquiera una provincia nueva con lengua y costumbres diferentes a las suyas deberá conducirse como defensor de los débiles, usar su ingenio para quitarle poder a los grandes y evitar a toda costa que entre en su territorio un extranjero que sea tan poderoso como él. Puesto que siempre existen súbditos descontentos que propician desde dentro la llegada de otro poder. Solo debe preocuparse de que sus aliados no adquieran tanto poder ni autoridad, lo que lograra con el buen manejo de sus tropas. Con la ayuda de sus grupos aliados podrá someter a los más poderosos y se convertirá en el gobernante absoluto de ese estado. Quien no siga estas recomendaciones perderá tan pronto como adquirió aquel territorio. Maquiavelo nos pone como ejemplo al rey de Francia Luis XII quien cometió cinco errores: perdió a los que tenían un poder menor en Italia pues no mantuvo asegurados y protegidos a todos sus aliados que eran numerosos y débiles, incremento el poder del papa Alejandro que anteriormente ya era fuerte, se alió con el rey de España, en lugar de poner un señor tributario suyo, quien posteriormente pudo expulsarlo con ayuda del pueblo ofendido, no se estableció en el territorio conquistado ni fundo colonias. De esta manera el rey Luis XII perdió el territorio conquistado por no haber seguido las recomendaciones anteriores que llevaron a otros a la conquista y conservación del principado. “Y es que aquel que se apoya en otros para elaborar su grandeza, provoca su propia ruina, y es natural que aquel que se ha vuelto poderoso, recele de la misma astucia o de la misma fuerza, gracias a las cuales se lo ha ayudado. Si un príncipe se establece por otros medios, su poder será siempre limitado”.

CAPITULO IV POR QUÉ EL REINO DE DARÍO, CONQUISTADO POR ALEJANDRO, NO SE REBELÓ CONTRA LOS SUCESORES DE ÉSTE DESPUÉS DE SU MUERTE Todos los principados que han existido se han gobernado de dos maneras distintas: ya sea que el príncipe elige de entre sus siervos ministros que lo ayudarán a gobernar, o de la forma en que el príncipe sea asistido por nobles los cuales no son nombrados por el sino que por su linaje deben la posición que ocupan. Estos últimos tienen estados y propios súbditos, que los reconocen por señores y son queridos por ellos. Mientras que en los Estados que son gobernados por un príncipe asistido por siervos, el príncipe ejerce una mayor autoridad porque en toda la provincia no hay quien tenga el suficiente poder para considerase superior y no se reconoce a otro soberano solo a él, y si se obedece a otro, es porque se trata de un ministro del príncipe, sin manifestarle ningún afecto. Cuando en los estados el príncipe se asiste de siervos es más difícil que otro conquiste su territorio, pero sería fácil que este último lo conserve. Esto se entiende que un nuevo príncipe que quiere conquistar no podrá esperar que la una rebelión de los súbditos lo apoye, ni que los ministros puedan ser corrompidos pues son esclavos y deudores del príncipe y en caso de que estos lo hicieran no podrían traer consigo al pueblo puesto que este solo reconoce a un príncipe. Por lo que únicamente puede confiar en sus propias fuerzas y no en la revuelta de otros. Pero si se vence al antiguo príncipe de tal forma que no pueda rehacer sus ejércitos, solamente podría preocuparse de la familia de este, pero siendo está destruida no existe ningún peligro pues el pueblo se obliga solamente con el príncipe. Sin embargo si el príncipe se asiste por nobles puede ganar el estado con cierta facilidad aliándose con algún noble ya que siempre existe un descontento y con cierto deseo de cambio. Estos pueden abrir el camino y facilitar su victoria, pero cuando se trata de permanecer en un estado no bastara con que se elimine a la familia del antiguo príncipe, sino que deberá luchar contra todos los que lo ayudaron en la conquista y los que se han oprimido, “porque quedan los señores que podrían encabezar nuevas rebeliones en su

contra y a quienes es difícil eliminar o satisfacer, por lo que el gobierno es débil y se pierde en cuanto halla la más mínima oportunidad. Fue por todo lo anterior que Alejandro magno tuvo que utilizar una gran estrategia para vencer a Darío, después de su victoria y habiendo eliminado a la familia del antiguo príncipe, el estado permaneció seguro en Manos de Alejandro Magno.

CAPITULO V

DE QUE MANERA DEBEN GOBERNARSE LAS CIUDADES O LOS PRINCIPADOS QUE VIVÍAN BAJO SUS PROPIAS LEYES, ANTES DE SER ANEXADOS En este capítulo Maquiavelo le dice al nuevo príncipe que hay tres formas de conservar estos principados: la primera es destruirlos, la segunda es habitar en ellos y la última es permitir que se sigan rigiendo por sus leyes, obligando a pagar un tributo y establecer un gobierno compuesto por un corto número de personas que le sean leales. “De este modo la ciudad que vivían en libertad se conservan fácilmente si se cuenta con el apoyo de los ciudadanos”. Pese a todo lo anterior Maquiavelo nos dice que el medio más eficaz para conservar tales principados o ciudades es la destrucción, puesto quien conquista una ciudad que está acostumbrada a vivir libremente y no la destruye, deberá esperar que esta lo destruya a él. Porque los hombres no dejaran de pensar en el goce de la libertad o si vivían en un principado no dejaran de lado sus antiguas leyes y buscaran cualquier oportunidad para rebelarse e imponerlas nuevamente.

CAPITULO VI DE LOS PRINCIPADOS QUE SE ADQUIEREN CON LAS ARMAS PROPIAS Y EL TALENTO

Desde tiempos antiguos los hombres sabios intentan seguir siempre el camino de los grandes hombres e intentan imitar las acciones de los que han sido grandes en el ejercicio de su talento, para que el suyo aunque sea menor se alimente del de aquellos. Los principados que son totalmente nuevos son en promedio no tan difíciles de conservar, según sea el talento y la astucia de quien ejerza el poder. Cuando el hombre se deja de ser común y se convierte en príncipe se presume que tiene un gran talento o una enorme fortuna. Sin embargo quien menos confía en la fortuna es quien más tiempo conserva su conquista. También facilita en gran medida las cosas el que un príncipe al no poseer otros territorios, se vea obligado a establecerse en el que ha adquirido recientemente. En cambio quienes llegaron por su propio talento a ser príncipes y no por fortuna conservan los territorios adquiridos más fácilmente, como ejemplo se encuentra Moisés, quien no obtuvo de la fortuna más que la oportunidad, que le dio todo lo necesario para ajustarlo a su parecer. Sin esa oportunidad no hubiesen podido hacer nada con su talento. Maquiavelo en este capítulo resalta que era necesario que Moisés se encontrara en Egipto al pueblo de Dios (Israel), quienes estaban sometidos como esclavos ante los egipcios, para que sintiera el deseo y la disposición de seguirlos y así liberarlos. Esa oportunidad hizo que Moisés fuese afortunado y sus habilidades le permitieran reconocer la oportunidad a través de la cual pudo lograr su objetivo. También en este capítulo se señala que las dificultades del nuevo principado nacen en gran parte de las nuevas leyes y costumbres que el nuevo príncipe se ve obligado a implantar para establecer su gobierno y seguridad. Porque se gana como enemigos a todos aquellos a quienes beneficiaban las antiguas leyes y se gana solo la tibieza de los que se benefician con las nuevas, de modo que el príncipe se expone a caer con ellos. Si para lograr mantener su principado se apoya en sí mismo y usa la fuerza raras veces corre peligro de perderlo; en cambio sí depende de otros acabara mal y nunca llegaran a ninguna parte. Lo anterior quiere decir que es necesario siempre estar bien armado e imponer leyes a la fuerza y estar preparado para reprimir cualquier rebelión. Por la tanto si no se está armado no se puede implantar las leyes y mantenerlas por tanto tiempo.

CAPITULO VII DE LOS PRINCIPADOS NUEVOS ADQUIRIDOS CON LAS ARMAS Y BUENA FORTUNA DE OTROS “Aquellos que solo por la suerte se convierten en príncipes, poco esfuerzo necesitan para llegar a serlo, pero deben trabajar arduamente para mantenerse en el”. Nicolás Maquiavelo Este capítulo va dedicado a todos aquellos que logran llegar al poder por medio del dinero o por las fuerzas de otros. Estos príncipes no se sostienen solos, sino por la voluntad y fortuna de quienes lo llevaron al trono y no saben cómo conservar esa posición. Ya que no saben cómo mandar, carecen de bases sólidas y relaciones con otros estados, de tal manera que están destinados al fracaso. Sin embargo si cuentan con un talento o virtud propia que le dé el entendimiento de las formas para conservar lo que la fortuna les ha dado y sepan establecer las bases que otros pusieron antes de su llegada al poder pueden conservar su nueva adquisición. Se pueden citar como como ejemplos a dos príncipes, uno que adquiere su principado por talento y otro por las armas y fortuna de otros: Francesco Sforza y Cesar Borgia. El primero dejo de ser un hombre común y se convirtió en duque de Milán gracias a los medios con los que contaba y con su talento y virtudes lo conservo fácilmente, después de haberlo adquirido con dificultad. Por el contrario Cesar Borgia, el duque valentino quien consiguió su principado por fortuna y suerte ya que por medio de armas y fortuna de otros (su padre) consiguió sus objetivos, pero perdió el principado tan rápidamente como lo adquirió. Pero por causas mayores que estaban fuera de su alcance. [….] capitulo6 Siguiendo con el caso del duque Cesar Borgia quien consiguió su poder y principado en Romaña gracias a su padre el papa Alejandro VI y a las tropas del rey de Francia Luis XII, pero debido a que dependía de ellos para poder lograr sus objetivos, decidió no depender de las armas y fortuna de otros. Lo primero que hizo fue exterminar a las familias de los antiguos

señores de Romaña quienes habían sido desposeídos, con los que se evitaba que a la muerte de Alejandro el nuevo papa tuviera a quien devolver los bienes y territorios conquistados(en un principio cuando llego a Romaña vio que todos los señores estaban desunidos habiendo robos, delincuencia y desorden en aquel lugar, mando traer a Ramiro quien puso orden de inmediato a la fuerza de tal mode que los súbditos le tenían odio al duque y este en compensación mando cortar en dos a Ramiro para saciar el odio de el pueblo; la segunda fue ganarse a todos los nobles de Roma haciéndolos sus nobles y ofreciéndoles grandes pagos, de modo que en poco tiempo se ganó su afecto, y así reducir la influencia del futuro papa; la tercera fue buscar el mayor control posible sobre el Colegio Cardenalicio, y la cuarta fue concentrar en sí mismo el máximo poder antes de la muerte de Alejandro, quien anteriormente le había dado mucho poder. Por lo tanto quien juzgue conveniente en su principado nuevo protegerse de los enemigos y ganar amigos, vencer por la fuerza o el engaño, hacerse amar y ser temido, seguido y reverenciado por los soldados, implacable con los que pueden o deben ofender, innovador en las cosas del estado, severo y agradable, capaz de suprimir la milicia desleal y crear una nueva, y además es hábil para fomentar la amistad de reyes y príncipes desde seguir los pasos del Duque del ejemplo anterior. CAPITULO VIII DE LOS QUE OBTIENEN EL PRINCIPADO A TRAVES DE LA MALDAD Hay otros modos de llegar a ser príncipe, estos consisten en llegar a ser príncipe por medios criminales o nefastos; o cuando un ciudadano común y corriente se convierte en príncipe porque lo eligen sus conciudadanos. En este capítulo Maquiavelo se centra en los actos criminales y se citan dos ejemplos: el de Agatocles quien llego a ser rey de Siracusa a partir de un acto criminal. Quien toda su vida llevo una conducta criminal y se convirtió en militar, hasta el punto en que llego a ser pretor de Siracusa y fue aquí cuando su ambición creció, comenzó a planear la manera en que podía llegar a convertirse en príncipe y mantener el territorio conquistado por la fuerza. Hizo un pacto con Almicar quien tenía un poderoso ejército, y una mañana convoco al pueblo y al senado de Siracusa, con el pretexto de tratar asuntos importantes de la república. Estando todos ahí reunidos Agatocles dio la señal para que los soldados asesinaran a los senadores y a los hombres más ricos del pueblo. Con esto conservo fácilmente el principado. Pero esto

fue gracias a sus grados militares los cuales se ganó a costa de sacrificios y mantuvo su poder gracias a su audacia y severas disposiciones. Pero a él no se le puede llamar hombre virtuoso. “No se podría llamar hombre virtuoso a quien asesina a sus conciudadanos, traiciona a sus amigos, no respeta la palabra empeñada, carece de piedad y religión. Todas estas acciones llevan al poder pero no a la gloria”. El otro ejemplo es el de Oliverotto da Fermo quien fue criado por su tío Giovanni Fogliani. Oliverotto milito bajo las órdenes de su hermano y rápidamente se hizo de gran prestigio gracias a su fuerza física, astucia y valentía. Pero no le gusto obedecer a otros, fu en ese momento en que pensó en apoderarse de Fermo con el consentimiento de su hermano y la ayuda de algunos habitantes de la ciudad. Regreso a Fermo reorganizo sus planes y celebro un banquete para su tío Giovanni y todos los ciudadanos importantes de Fermo, en el que Oliverotto comenzó a debatir temas muy delicados y peligrosos, ante esto Giovanni y otros invitados debatieron con él. Oliverotto los invito a pasar a una habitación para tratar esos asuntos de manera más discreta y no en público. Cuando apenas se habían instalado todos salieron de sus escondites soldados que mataron a todos. Oliverotto se proclamó príncipe de Fermo, pues muertos todos aquellos quienes podían oponérsele y dañarlo, se arraigó en el poder con nuevas instituciones civiles y militares.sin embargo cayo prisionero de Cesar Borgia, un año después de sus crímenes y fue estrangulado junto con su hermano. “El mantenimiento del poder depende del buen o mal uso que se hace de la crueldad” Por lo tanto al apoderase de un principado, el príncipe deberá estudiar sobre los crímenes que son precisos para cometer y ejecutarlos todos a la misma vez y no de manera continua, de esa forma podrá tranquilizar a sus nuevos súbditos y ganárselos por medio de favores que tiene que hacerles poco a poco. Quien lo haga al contario deberá estar siempre preparado y no podrá apoyarse en los súbditos, porque nadie le tendrá confianza, debido a las continuas ofensas. CAPITULO IX DEL PRINCIPADO CIVIL