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• JuliaCuetosPérez

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CASO CLINICO ENCOPRESIS Se trata de un problema complejo de encopresis no retentiva primaria, que engloba características que pueden perjudicar el éxito de la intervención: elevada frecuencia de episodios encopréticos y falta de colaboración. El caso pone de manifiesto la importancia del contexto específico de cada niño a la hora de programar un tratamiento individualizado. M. es un varón de 10 años, el mayor de dos hermanos. Su hermana es una niña de 6 años. Ambos son adoptados. En el momento de consulta sus padres están iniciando un proceso de separación. Sus relaciones son buenas, viven juntos aún y ambos están de acuerdo en solucionar el problema de M. Es la madre quien acude a consulta y la que se muestra más preocupada e interesada en manejar el problema. Cuando llega a consulta (su padre está en viaje de trabajo) M. cursa quinto de primaria con un rendimiento muy satisfactorio. Le gusta estudiar, y aunque ha tenido varios accidentes encopréticos en el entorno escolar (clase, recreo, etc.), no le importa ir al colegio y dice que mantiene buenas relaciones con sus compañeros. Acude a consulta remitido por un cuñado de la madre, quien conoce a la terapeuta. Evaluación: La primera entrevista se llevó a cabo sólo con la madre. En la entrevista se solicitó información sobre comienzo, evolución, tratamientos anteriores (médicos e informes médicos), frecuencia de accidentes y cantidad y calidad de heces). Se pregunta también a la madre por alguna/s circunstancias en que la conducta encoprética tenga más probabilidades de ocurrir. Enseguida señala la madre que los accidentes pueden ocurrir en cualquier momento, pero que cuando el niño está entretenido jugando ocurren a menudo. Refiere también que a veces riñe a M., diciéndole que es muy mayor para hacerse caca. La madre se muestra, en general, preocupada y comprensiva con la conducta de M. Ha hablado con la maestra y esta le ha dicho que cuando se da cuenta de los accidentes, intenta socorrer a M. para que el resto de niños no se enteren. De hecho, la madre de M. lleva al colegio una nueva muda de repuesto que permanece en el colegio para posibles accidentes posteriores. La entrevista con M. tiene lugar tras la entrevista con la madre. M. se muestra tímido inicialmente, aunque esta característica se desdibuja a medida que avanza la entrevista. M. dice que estudia muy bien, y que le gusta el fútbol, la nintendo y jugar con los amigos. Cuando se le pregunta por su encopresis, señala que no se da cuenta de sus ganas de defecar. Al ser preguntado por los accidentes en la escuela, M. dice que la maestra le ha ayudado alguna vez para que no se den cuenta los compañeros; y que en otras ocasiones se dieron cuenta y hubo algunas bromas pero que no le 1

molestaron mucho. Mario se muestra intrigado con las preguntas de la terapeuta, pero no da demasiadas muestras de interés sobre el problema. Cuando se le pregunta a M. por su interés por solucionar el problema, dice que sí le gustaría. Registro de observación (para la madre y para M) Para establecer la LB se pidió a la madre y a M. que realizaran un registro de observación de 14 días. Los datos obtenidos indicaron una frecuencia de deposiciones de 27 veces en la semana 1 (3,85 deposiciones diarias) y de 18 veces en la semana 2 (2,57 deposiciones diarias). De ellas, M. evacuó en el lugar adecuado 8 veces. El 72% de las veces la evacuación (correcta e incorrecta) se produjo en el hogar; el 25% (en actividades fuera de casa –futbol; casa de un amigo; clase de música), y sólo 1 vez en el colegio. La mayoría de los episodios se produjeron por la tarde, mientras M. estaba en casa jugando.

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