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• Israel Maravilla Arevalo

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INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

BIBLIOLOGIA Y TEOLOGIA PROPIA Editado de varias fuentes por: Pr Edgardo Molina

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INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO BIBLIOLOGIA Y TEOLOGIA PROPIA

SUMARIO 1. Descripción de la materia Esta materia consiste en exponer las dos primeras ramas o divisiones de la teología sistemática, esto es, Bibliología o teología propia o doctrina de Dios. En lo que respecta a la Bibliología se dará énfasis al carácter de la Biblia en cuanto a su inspiración, iluminación, canonicidad, autoridad y todo el proceso providencial en su formación a lo largo de los siglos, Para que ahora nosotros apreciemos su valor incalculable. La segunda parte esto es: Teología propia, estudiaremos el Ser de dios como Persona, sus atributos, sus nombres y la extraordinaria revelación de Dios como un Ser trino. 2. Objetivo General Hacer una exposición sólida, consistente y sistemática tocante al valor, importancia y carácter sobre natural de la Biblia y de la misma manera hacerlo con la doctrina de Dios. 3. Objetivos Específicos  Que el estudiante conozca y domine esta temática como parte de la teología sistemática  que el estudiante a prenda a memorizar términos o conceptos teológico como parte de su formación Biblio-Teológico.  que el estudio de esta materia motive al estudiante a interesarse más en conocer la Palabra de Dios. 4. Requisitos. 

Lectura: El estudiante debe leer el libro: “Grandes temas bíblico de Lewis Shafer”, y hacer un reporte de 5 páginas de los temas que más le impacten o llamen su atención.



Memorización: El estudiante debe aprender a definir términos bíblicos tales como: revelación, inspiración, iluminación, vitalidad, canonicidad, atributos (de Dios) y Trinidad. INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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

Investigación: El estudiante debe investigar los temas de la Biblia sola no basta y la Santa Biblia desde la perspectiva del catolicismo y también el tema de los decretos de Dios. Presentarlos en 4 páginas (2 por cada tema) al final de la materia.



Mapa Conceptual: El estudiante debe elaborar en un pliego de papel bond un mapa conceptual de toda la materia, resumiendo los aspectos más importantes.



Examen: habrá un examen final el último sábado del mes.

5. Distribución de la calificación. Lectura

--------------------------------------------------------------------------

25% Investigación

-------------------------------------------------------------------

30% Memorización -----------------------------------------------------------------20% Mapa Conceptual ------------------------------------------------------------ 10 % Examen -------------------------------------------------------------------------15%

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CALENDARIZACIÓN CLASE

TEMAS

1ª CLASE

Introducción, origen de la

TAREA

Biblia, La singularidad de la Biblia 2ª CLASE

Preparación de la Biblia, La Biblia: la revelación de Dios, la inspiración de la Biblia

3ª Clase

La iluminación del Espíritu Santo para entender la Biblia, Vitalidad

4ª Clase

Canonicidad y autoridad, Investigación: La Biblia sola los libros apócrifos

no basta, la Santa Biblia desde la perspectiva del catolicismo

5ª Clase

La existencia de Dios, la Investigación: Decretos de personalidad de Dios

6ª Clase

Los atributos de Dios, los nombre de Dios

Dios Mapa Conceptual, Memorización

7ª Clase

Acerca de Dios el Padre

Lectura del Libro

8ª clase

La Santa Trinidad

Examen final

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INTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO BIBLIOLOGIA Y TEOLOGIA SISTEMATICA INTRODUCCIÓN La palabra teología, conforme a su etimología, está compuesta de dos palabras griegas: Ɵɛοs (Teos) “Dios” y λοϒos (Logos), “discurso o tratado” o “expresión”. De manera que Cristo como Palabra Viviente, y la biblia como la Palabra Escrita, son el Logos de Dios. Ambos son a Dios lo que la expresión es al pensamiento y lo que el discurso es la razón. La teología es por tanto, un tratado acerca de un asunto específico, es decir, Dios. Sin embargo, ya que no se puede hacer una consideración completa tocante a Dios sino se contemplan sus obras y sus planes en el Universo que Él ha creado, así como su persona, la teología puede extenderse apropiadamente hasta incluir todas las realidades materiales e inmateriales que existen y las verdades concernientes a ellos y contenido en ellos. Ahora bien, aunque no se encuentra en la Biblia la palabra “”teología”, estando compuesta por dos vocablos bíblicos, comunes, es Bíblica en su carácter. En Romanos 3:2 La Palabra ta logia tou Ɵɛοs (La palabra de Dios) ocurre en 1ª Pedro 4:11 Las palabras “Logia Teo” (Las palabras de Dios) también aparece en Lucas 8:21. Por otra parte, dentro del significado enciclopédico, la palabra teología es usada con varios significados especiales. Cuando se desea reconocer al primer exponente de un sistema teológico, el nombre del personaje es combinado con el término, como por ejemplo, teología agustiniana, teología calvinista, teología luterana, teología arminiana. Cuando se tiene a la vista la fuente de su material se emplean términos específicos tales como teología revelada, teología natural, teología católica y teología evangélica. Así, de la misma manera, la teología puede ser clasificada por el lugar de origen como teología Europea, teología de Nueva Inglaterra. Cuando se trata del contenido particular de una teología dada puede llamarse teología bíblica, teología histórica, teología práctica, teología pastoral, etc. De igual manera varias teologías pueden clasificarse por el método que emplean para su comprensión como teología dogmática, teología apologética, teología racional o teología sistemática. Entre estas clasificaciones generales hay varias formas de teología que requieren una definición particular; mencionamos algunas:

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1. Teología Natural. La teología natural es la ciencia que está basada solamente en aquellas verdades acerca de Dios y su universo que están reveladas en la naturaleza. 2. Teología Revelada. Esta expresión se refiere a la ciencia que está basada en aquellas verdades acerca de Dios y su universo que están reveladas en las Santas Escrituras. 3. Teología Bíblica. La teología bíblica se refiere a la ciencia que tiene por objetivo investigar la verdad acerca de Dios y su universo en su desarrollo divinamente ordenado y su medio ambiente histórico como se presenta en los distintos Libros de la Biblia. La teología bíblica, es a la vez, la exposición del contenido doctrinal y ético de la Biblia. Es como alguien lo ha dicho, la consideración de la verdad bíblica como fue originalmente dada en su proclamación profética. 4. Teología propia. Así se le designa a una ciencia limitada que solamente contempla la persona de Dios – Padre, Hijo y Espíritu Santo, pero sin hacer referencia las obras de cada uno de ellos. 5. La Teología histórica. Es una ciencia que traza el desarrollo de la doctrina en el paso del tiempo y se ocupa, además, de las distintas variaciones sectarias y el abandono de la verdad bíblica por parte de grupos herejes que han aparecido durante la era cristiana. 6. La Teología Dogmática. Estudia aquellas verdades sostenidas con certeza. 7. Teología Especulativa. Estudia verdades teológicas sostenidas en lo abstracto y aparte de su importancia práctica. 8. Teología del Antiguo Testamento. Así designada porque se limita a los Libros del Antiguo Testamento. 9. Teología Práctica. Se ocupa de la aplicación de la verdad al corazón del hombre. 10. Teología Sistemática. Es la ciencia que sigue un plan humanamente trazado o un orden de desarrollo doctrinal y que se propone incorporar en su sistema toda verdad acerca de Dios y su universo de todas y cada una de las fuentes existentes. La teología sistemática tiene que ver con la recopilación, evaluación y exposición de los datos y pensamientos teológicos. Por ejemplo; Chafer y Berkhof, Ryrie. A continuación presentamos las principales divisiones de la teología sistemática:

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10.1

Bibliología. Es el estudio de las verdades esenciales concernientes a la

Biblia. 10.2

Teología propia. Una consideración de las verdades tocante a Dios. Padre, Hijo y Espíritu Santo, aparte de sus obras.

10.3

Angelología. Una consideración de las verdades tocante a los ángeles no caídos y caídos.

10.4

Antropología. Una consideración de las verdades concernientes al hombre.

10.5

Soteriología. Una consideración de las verdades concernientes a la

salvación. 10.6

Eclesiología. Una consideración de las verdades concernientes a la iglesia.

10.7

Pnaumatología. Una consideración de todo lo que la Biblia contiene acerca del Espíritu Santo.

10.8

Cristología. Una consideración de lo que la Biblia dice acerca del Señor Jesucristo.

10.9

Escatología. Una consideración de todo lo que está en la Biblia y fue profético cuando fue escrito. Es el estudio de la profecía, es decir, los acontecimientos futuros.

En este vasto campo de la revelación bíblica, vamos a centrar la atención, en este módulo, las ramas de la teología propia, conocida también como Doctrina de Dios.

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SECCIÓN I BIBLIOLOGIA Introducción. Ya que la teología sistemática es el coleccionar, ordenar científicamente, comparar, exhibir y defender todas las verdades tocante a Dios y sus obras, y ya que la Biblia en sus escritos originales es, por su propia digna declaración y por todas las pruebas que mentes devotas le han aplicado, la inerrante Palabra de Dios, se deduce que el estudiante tiene que ser biblista – uno que no solamente es conocedor de la Biblia, sino que también es un creyente en el carácter divino de todas y cada una de las partes de texto sagrado. Aunque la palabra Biblia significa “Libro” las palabras “La Biblia” distingue a ese supremo e incomparable Libro. Este sobrepasa a todos los otros libros en cuanto a autoridad, antigüedad, literatura y popularidad; pero aun así su supremacía singular es vista en el hecho de que revela la verdad tocante al Dios infinito, su santidad, el pecado humano y la redención perfecta y completa del hombre. Es. Por tanto, razonable concluir que la biblia es en sí infinita, y como tal se confirma así misma, ya que ninguna mente humana ha podido comprender en su totalidad su mensaje o medido sus valores. “Toda la escritura es inspirada por Dios”, 2ª Timoteo 3:16 (pasa grafé teopneustos) es la afirmación de la Biblia por sí misma y esa proclamación no puede ponerse en tela de duda como tampoco la expresión “Dios es Espíritu”, Juan 4:24 (Pneuma ó teos), o “Dios es amor”, 1ª Juan 4:8 (Teos es ágape estín), o “Dios es luz”, 1ª Juan 1:5 (o teos fos estín). Aquí se declara que el testimonio de la biblia nos asegura que en los manuscritos originales cada oración, palabra, línea, marca, punto, jota o tilde fue colocada allí en completo acuerdo con el propósito y la voluntad divina. De esa manera el Dios Omnipresente y Omnipotente causó la formación del mensaje en cuanto a la precisa reproducción de su Palabra. Por lo tanto, es necesario como

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razonable que el Libro de Dios, el Libro del cual Él es autor, y que trae la revelación y la disciplina del cielo a la tierra, fuese en su forma original, inerrante en todas sus partes. Se le llama las Sagradas Escrituras debido a su eminencia (Juan 7:42, 5:39, 2ª Timoteo 3:15). Siendo esto un vasto campo de estudio, lo vamos a limitar a una serie de tópicos que nos ayudarán a enriquecer el conocimiento, pero por sobre todo, a amar, apreciar, valorar este maravilloso Libro, y a la vez a fortalecer nuestra fe. Los temas a considerar son: su origen sobrenatural, su revelación, la inspiración, la iluminación, su canonicidad y autoridad, su singularidad, su vitalidad y su preservación.

Capítulo I EL ORIGEN SOBRENATURAL DE LA BIBLIA La Biblia es un fenómeno que puede explicarse de una sola manera: es la Palabra de Dios. No es la clase de libro que el hombre escribiría si pudiese, o que podría escribir si quisiera. El conjunto de las pruebas del carácter sobrenatural de la Biblia presenta una exhibición casi inagotable de consideraciones que, si se observan con objetividad nos obligan a concluir que este Libro no puede ser producto del hombre. 1. ES EL LIBRO DE DIOS. El uso de este título tiene como propósito llamar la atención a la afirmación presentada a través de la Biblia, que éste es el mensaje de Dios para el hombre y no el mensaje del hombre a otros hombres, y mucho menos el mensaje del hombre para Dios. Declarar que la Biblia es Teocéntrica, lo cual Él la reveló en sus páginas, es afirmar que ésta es antropoexcéntrica. En este Libro, Dios es presentado como el Creador y Señor de todo. Esta es la revelación de Dios mismo, el testimonio de lo que Él ha hecho y hará, y al mismo tiempo, es revelación de la verdad que toda cosa creada está sujeta a Él y manifiesta su bien más elevado así como su destino solamente estando en conformidad a su voluntad. Toda palabra de la Biblia encierra declaraciones tan sublimes como, “No hay otro Dios como tú, arriba en el cielo, o abajo en la tierra” (1° Reyes 8:23) y, otra vez, “Tuya oh Jehová, es la grandeza, y el poder, y la gloria, y la victoria, y la majestad; porque todo lo que está en el cielo y en la tierra es tuyo, tuyo es el INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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reino, oh Jehová, y tú eres exaltado como cabeza sobre todo” (1° Crónicas 29:11). 2. LA BIBLIA Y EL MONOTEISMO. Estrechamente relacionado está este tema con lo que hemos analizado anteriormente. El hecho de que Dios es supremo implica que no hay ningún otro comparable a Él; aún así casi universalmente la humanidad ha practicado la idolatría con una obstinación increíble. El pueblo Judío, del cual proceden las Escrituras humanamente hablando, no era inmune a esta tendencia. Desde los días del becerro de oro y a través de los siglos los israelitas estuvieron retrocediendo a la idolatría y eso a pesar de la revelación y del castigo. La historia de la iglesia está manchada por la adoración de imágenes tomadas del paganismo. Ahora bien, aunque la biblia claramente enseña el monoteísmo, también presenta el hecho de que Dios subsiste en tres personas o personalidades Divinas. La doctrina Bíblica de la Trinidad sostiene que Dios es uno en esencia, pero que ha existido eternamente en tres personas distintas. Indudablemente este es uno de los más grandes misterios. La doctrina alcanza más allá del límite del entendimiento humano, aunque es algo fundamental en la revelación Divina. Cuando el asunto es considerado separadamente, las personas de la Deidad presentan la misma indiscutible evidencia en cuanto al origen sobrenatural de la Biblia.

Capítulo II LA SINGULARIDAD DE LA BIBLIA La Biblia debiera estar en la parte más alta de nuestra estantería, y ella solamente. La Biblia es única. La idea de describir la singularidad de la Biblia es echando mano de la palabra “única”. ¡Eso es! La Biblia es única e incomparable. El erudito y escritor Webster debe haber tenido en mente este “Libro de los libros” cuando escribió la definición para “único”: 1) uno y especial; Singular; solo 2) diferente de todos los otros; no tiene igual o semejante.

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El profesor M. Montiero – Williams pasó 42 años estudiando libros de oriente, y dijo al compararlos con la Biblia: “Apílelos, si quiere, al lado izquierdo de su mesa de estudio, pero coloque su propia Santa Biblia al lado derecho – ella sola. Completamente sola – y con amplio espacio entre ellos. Por cuanto… hay un abismo entre ella y los así llamados libros sagrados del oriente, abismo que separa a ésta de los otros en forma total, sin esperanza y para siempre… un abismo tan profundo que no puede ser atravesado por ninguna ciencia de pensamiento religioso”. 1. La Biblia es única en su continuidad 1.1 Escrita en un periodo de 1600 años. 1.2 Escrita a lo largo de 60 generaciones. 1.3 Escrita por más de 40 autores de toda clase social, incluyendo reyes, campesinos, filósofos, pescadores, poetas, estadistas, eruditos, etc. Por ejemplo Moisés, líder político, adiestrado en las universidades de Egipto. Pedro, un pescador; Amós, un pastor; Josué, un general militar; Nehemías, un copero; Daniel, un primer ministro; Lucas, un médico; Salomón, un rey; Mateo, un cobrador de impuestos; Pablo, un rabino. 1.4 Escrita en diferentes lugares 1.4.1 Moisés en el desierto. 1.4.2 Jeremías en una celda carcelaria. 1.4.3 Daniel en una ladera de un cerro y en un palacio. 1.4.4 Pablo dentro de los muros de la prisión. 1.4.5 Lucas mientras viajaba. 1.4.6 Juan en la isla de Patmos. 1.4.7 Otros en medio de los rigores de una compañía militar. 1.5 Escrita en diferentes épocas 1.5.1 David en tiempos de guerra. 1.5.2 Salomón en tiempos de paz. 1.6 Escrita en diferentes estados de ánimo 1.6.1 Algunos escribieron desde las cumbres del gozo. 1.6.2 Otros escribieron desde las profundidades de la tristeza y desesperación.

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1.7 Escrita en tres continentes: Asia, África, Europa. 1.8 Escrita en tres idiomas 1.8.1 Hebreo: era el idioma del A.T 8.1.1 En 2° Reyes 18:26-28 es llamado “la lengua de Judá” 8.1.2 En Isaías 19:18 recibe el nombre de “la lengua de Canaán” 1.8.2 Arameo: era la “lengua franca” del Cercano Oriente hasta el tiempo de Alejandro el grande (Siglo VI A.C hasta el siglo IV A.C.). 1.8.2 Griego: Idioma del Nuevo Testamento. Era el idioma internacional en los tiempos de Jesús. 1.9 Incluye entre su material centenares de asuntos de controversia. Un asunto de controversia es tal que al mencionarse o discutirse crea opiniones contrarias. Los autores bíblicos hablaron sobre centenares de asuntos de controversia con armonía y continuidad desde el Génesis hasta el Apocalipsis. Hay una sola historia en desarrollo: La redención del hombre efectuada por Dios. 2. Única en circulación A continuación damos cifras de sociedades Bíblicas, aunque son cifras antiguas nos hace ver cuánto ha circulado la Biblia. Ahora podemos imaginarnos cuánto circula la Biblia en el mundo actual. PUBLICACIÓN BIBLICA Fecha Alrededor de 1804 (Soc.

Biblias

Nuevo

Porciones (libros

Testamento

separados, etc.)

40.000.000

X

X

965.000

X

X

Bíblica Británica) En 1928 (Gedeones de América) (Sociedad Bíblica

88.070.068

Nacional – Escocia) (Sociedad Bíblica de

6.987.961

Dublin) INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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(Sociedad Biblica

900.000

Alemana, 1927) En 1930

12.000.000

En 1932

1.330.213.815

En 1947

14.108.436

En 1951

952.666

En 1955

25.393.161

1.913.314

13.135.965

3.223.986

18.417.989

2.620.248

39.856.207

1950 – 1960 (anualmente)

3.037.898

En 1963

54.123.820

En 1964 (Soc. bíblica Americana)

1.665.559

Otras

69.852.337

En 1965

76.953.369

En 1966

87.398.961

La Biblia ha sido leída por más gente y publicada en más idiomas que cualquier otro libro. Se han producido más copias de ella en su totalidad y más porciones y selecciones que cualquier otro libro en la historia. 3. Única en su Traducción La Biblia fue el primer libro que se tradujo (la Septuaginta: Traducción griega del Antiguo Testamento Hebreo, 250 A.C) La Biblia ha sido traducida y vuelta a traducir y parafraseada más que cualquier otro libro existente. Ha sido traducida más de 240 idiomas y dialectos, uno o más Libros completos de la Biblia en 739 idiomas adicionales, un total de publicación de 1,280 idiomas. 4. Única en Supervivencia 4.1 Supervivencia a través del tiempo La Biblia, escrita en materiales perecederos, teniendo que ser copiada y recopiada durante centenares de años antes de la invención de la prensa de imprimir (imprenta), sin embargo, esto no perjudicó su estilo, su corrección, ni

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su existencia. La Biblia, comparada con otros escritos antiguos, tiene más evidencia manuscrita que 10 piezas cualquiera de literatura clásica combinada. 4.2 Supervivencia a través de la persecución Como ningún otro libro, la Biblia ha soportado los ataques mal intencionados de sus enemigos. Muchos han tratado de quemarla, de prohibirla y de ponerla fuera de la ley desde los días de los emperadores romanos hasta el presente en países comunistas. Voltaire, el destacado incrédulo francés quien murió en el año 1778 dijo: “Que 100 años después de su época el cristianismo sería borrado de la existencia y pasaría a la historia”. ¿Pero qué fue lo que sucedió? Voltaire ha pasado a la historia; mientras que la circulación de la Biblia continua creciendo en casi todas partes del mundo, llevando bendiciones por donde va. 4.3 supervivencia en medio de la critica Los incrédulos han estado refutando y atacando este Libro y sin embargo, en la actualidad permanece tan sólido como una roca. Su circulación aumenta y es más amado, querido y leído hoy más que nunca. Los incrédulos, con todos sus asaltos, han hecho tanta impresión con este Libro como la que haría un hombre con un martillo de tapicero golpeando las pirámides de Egipto. Cuando el monarca francés propuso que se persiguieran a los cristianos en sus dominios, un anciano estadista y soldado le dijo: “Señor la iglesia de Dios es un yunque contra el cual se han gastado muchos martillos”. Así es como los martillos de los incrédulos han estado golpeando contra este Libro por las edades, pero los martillos se gastan y el yunque todavía dura. Si este Libro no fuera el Libro de Dios, hace tiempo que los hombres lo hubieran destruido. Los emperadores y papas, reyes y sacerdotes, príncipes y gobernantes, todos ellos han probado su mano contra él; ellos mueren y el Libro todavía vive. 5. Única en sus Enseñanzas La biblia es única en sus enseñanzas, profecías, en su historia y en la biografía de sus personajes. Y a estos los presenta tal como son. Las biografías actuales tratando de

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encubrir, pasan por alto o ignorar la parte sombría de la gente. Como ejemplo podemos tomar el caso de los grandes genios literarios; La mayoría son pintados como “santos”. La Biblia no procede de ese modo. Cuenta las cosas simplemente como son: Los pecados del pueblo denunciados (Deuteronomio 9:24); Pecado de los patriarcas (Génesis 12:11-13; 49:5-7); Los evangelistas describen sus propias faltas y las faltas de los apóstoles (Mateo 36:31-36; Juan 10:6, 16:32).

Capítulo III LA PREPARACIÓN DE LA BIBLIA ¿Cómo fue preparada la Biblia? Muchos tienen interrogantes en cuanto al trasfondo de la Biblia, de sus divisiones y del material usado para su producción. Esta sección nos familiarizará con la construcción de ella y seguramente nos dará un mayor aprecio de la Palabra de Dios. 1. Materiales usados en su preparación 1.1 Materiales de escritura 1.1.1 Papiro. El hecho de que no se hayan podido recobrar muchos de los manuscritos antiguos (un manuscrito es una copia a mano de la Escrituras), se debe básicamente a los materiales perecederos empleados para escribir. El material de escritura más común en la antigüedad fue el papiro que se hacía de la planta denominada papiro. Esta caña crecía en los lagos poco profundos de Egipto y de Siria. Desde el puerto Sirio de Biblos se embarcaban grandes cargamentos de papiro. Se supone que la palabra griega para libros (biblos) proviene del nombre de este puerto. Las cañas eran cortadas en tiras de toda longitud y luego se les reducía a muy finas rebanadas antes de ser golpeadas y prensadas para formar dos capas que se colocaban en ángulo recto una respecto de la otra. Al secarse, la superficie blanquecina se suavizaba con una piedra o con otro implemento. Las hojas eran muy delgadas y traslúcidas.

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El fragmento más antiguo que se conoce data de 2,400 A.C. Los primeros manuscritos se escribieron en papiro y hubiera sido difícil que sobrevivieran excepto en zonas secas tales como las arenas de Egipto o en cavernas similares a Qumrán, en donde se descubrieron los rollos del mar muerto. El papiro estaba en pleno uso hasta alrededor del tercer siglo D.C 1.1.2 Pergamino. Este era el nombre que se le daba a las pieles curtidas de ovejas, cabras, antílopes y otros animales. Estas pieles eran provistas del pelo y se las rasqueteaba, con el fin de producir un material de escribir más durable. La palabra “pergamino” proviene del nombre de la ciudad de Pérgamo, en Asia menor, pues la producción de este material de escritura estuvo asociada durante algún tiempo con aquel lugar. 1.1.3 Vitela. Era el nombre que se le daba al cuero de ternero. A menudo la vitela se teñía de color púrpura. Algunos de los manuscritos que se conservan en la actualidad con de vitela púrpura. La escritura sobre vitela teñida era generalmente de color dorado o plateado. Se dice que los más antiguos rollos de cuero datan del 1,500 A.C. 1.1.4 Otros manuscritos de escritura 1.1.4.1 Ostraca. Esta era alfarería sin vidriar, muy común entre el pueblo. El nombre técnico es “tiesto o cacharro”, y se le encontraba en abundancia en Egipto y Palestina. 1.1.4.2 Tablillas de arcilla. Se escribían con un instrumento agudo y luego se secaban con el fin de que el registro quedara en forma permanente (Jeremías 17:13, Ezequiel 4:7). De todos los materiales de escritura éste era el más barato y uno de los más durables. 1.1.4.3 Tablillas de Cera. Se empleaba un estilete metálico sobre un trozo de madera plana recubierta con cera. 1.1.4.4 Se hacían inscripciones en piedra con una pluma de hierro. 1.2 Instrumentos usados para escribir

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1.2.1 Cincel. Era un instrumento de hierro para grabar en piedra. 1.2.2 Estilo metálico. Era un instrumento de cabeza plana y con forma de cuña, el estilo se usaba para hacer inscripciones en arcilla y en tablillas de cera. 1.2.3 Pluma. Era una caña con punta, era hecha de juncos de 15 a 40 cm. De largo, quedando el extremo cortado en forma de cincel con el fin de poder hacer inscripciones de forma gruesa o delgada, con los lados ancho o angosto de la misma. La pluma de caña estaba en uso desde el primer milenio en Mesopotamia, desde muy bien pudo ser adoptada, en tanto que la idea de usar una pluma de ave parece haber provenido de los griegos en el siglo III antes de Cristo (Jeremías 8:8). 1.2.4 La tinta. La tinta era generalmente un compuesto de carbón, goma y agua 2. Forma de los Libros antiguos 2.1 Rollos. Se hacían pegando hojas de papiro unas contra otras y luego enrollaban estas largas tiras alrededor de un palo. El tamaño del rollo estaba limitado por la dificultad en usar un palo. La escritura se hacía usualmente por un solo lado. Un rollo escrito por ambos lados recibe el nombre de: “Epistógrafo” (Apocalipsis 5:1). Se tiene conocimiento de rolos que median 48 metros de largo. El rollo promedio media alrededor de 7 a 1 metros. 2.2 Forma de códice o libro. Con el fin de facilitar la lectura y reducir el bulto, las hojas se disponían en forma de un libro y se escribían por ambos lados. El comentarista Green lee dice que el cristianismo fue la principal razón por la cual se desarrolló la forma de códice o de libro. 3. Tipos de escritura 3.1 Escritura uncial. Era la que usaba letras mayúsculas, las que eran dibujadas con sumo cuidado, se le conoció como “El libro de mano” el códice vaticano y el sinaítico son manuscritos unciales. 3.2 Escrituras minúsculas. Era un escrito de letras más pequeñas de mano corrida (conectadas); fue creado para aumentar la producción de libros.

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Los manuscritos hebreo y griego fueron escrito sin separación entre palabras (el hebreo se escribió sin vocales hasta el año 900 D.C., cuando aparecen los masoretas). 4. Divisiones 4.1 Libros. Sobre esto diríamos que fue un trabajo de los judíos cuando reconocieron y definieron el canon del Antiguo Testamento. 4.2 Capítulos. Las primeras divisiones (586 A.C.) se le hicieron al pentateuco 154 agrupaciones para facilitar su lectura. Los griegos hicieron divisiones alrededor del año 250 D.C. El más antiguo sistema de división en capítulos data del año 350 D.C. 4.3 Versículos. Los primeros indicadores de versículos variaron desde el uso de espacios entre palabras, hasta letras o números. No se usaron sistemáticamente de manera universal. Las primeras divisiones en versículos ampliamente aceptadas aparecieron alrededor del año 900 D.C. La Vulgata Latina fue la primera biblia que incorporó tanto en capítulos como en versículos tanto en A.T como en N.T.

Capítulo IV. LA BIBLIA: LA REVELACIÓN DE DIOS INTRODUCCIÓN: Este tema es sumamente importante, porque presupone y forma la base de todo lo que sabemos de Dios. Aquí aprendemos a contestar la pregunta: ¿de dónde viene nuestro conocimiento de Dios? ¿Cómo podemos conocerlo? ¿Hay fuentes de dónde conocer este conocimiento? ¿Son fidedignas estas fuentes para darnos conocimiento exacto y preciso? La revelación habla de lo que Dios nos ha revelado tocante a Él mismo y su creación. Más adelante se definirá aún este término, pero al abordar este tema, hay que recordar nuestra posición ante al CREADOR con respecto a su revelación. Consideremos lo siguiente: 1. Dios es eterno, infinito y soberano. Por contraste nosotros somos criaturas finitas y sujetas a nuestro Dios. INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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2. Por eso, siendo criaturas y subordinadas a Él no tenemos derecho a demandar que Él se nos revele (Romanos 9:19-20). El hombre no sabría nada salvo que Dios se revelará a nosotros. Sin embargo, Él se revelo a nosotros no por obligación, sino por su gracia. Pero también hay que agregar que controla lo que Él quiere que sepamos (Deuteronomio 29:29). Nuestro conocimiento es limitado; Él nos revela lo que Él escoge revelarnos ¿Por qué? Hay por lo menos tres razones: 1° Él es soberano (Deuteronomio 29:29). 2° Dios es tan grande e inmenso y trascendente, es imposible conocerlo hasta el fondo, en forma absoluta, siendo nosotros finitos. 3° Nuestra pecaminosidad nos impide, por distorsionar la verdad. El creyente iluminado por el Espíritu Santo puede superar esta última limitación. Por nuestra posición ante nuestro creador y las demás cosas mencionadas, deben hacernos conscientes de nuestras limitaciones y la necesidad de comenzar este estudio con actitud sumisa y con mucha dependencia de Dios. Después de todo, la última razón por la que entenderemos es porque Él nos la permite (Hebreos 6:3). 1. Definición de revelación. Es el acto divino (de Dios) de comunicar al hombre lo que de otra manera él no sabría. O sea, es la auto revelación (o revelación de sí mismo) al hombre. 2. Tradicionalmente la revelación de Dios se distingue y divide en dos partes: 2.1 Revelación general. Es lo que Dios revela a través de medios naturales, como fenómenos de la naturaleza, mediante la conservación del universo, la naturaleza (o constitución) moral del hombre y a través de su manera providencial de tratar con los hombres.

Este tipo de revelación también se conoce como

revelación indirecta. 2.2 Revelación especial. Es la auto-revelación de Dios a través de medios sobrenaturales como milagros, la inspiración de las Escrituras, la

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encarnación de Cristo, profecía e intervención divina en la historia y naturaleza (por ejemplo el diluvio, división del Mar Rojo). También a esta clase de revelación se conoce como revelación directa 3. Las Escrituras como revelación. Al considerar este tema queremos contestar la pregunta ¿Cómo nos llegó la Biblia? Antes que todo vale la pena ver esta obra de Dios en su totalidad de producir su Palabra en forma escrita. Haremos una síntesis de esta doctrina respecto a las 5 etapas mayores que Dios usó para revelarnos su Palabra. 3.1 La obra de preparación. Dios preparó a los escritores humanos. Estos eran importantes porque en la voluntad de Dios, estos hombres serian instrumentos valiosos ya que ellos, tomando en cuenta sus cualidades personales y por sobretodo espiritual, escribirían en los manuscritos originales tal como la habían recibido y como Dios se los ordenaría. Tenemos ejemplos de Moisés, David, Jeremías, Pedro, Pablo, etc. 3.2 La obra de revelación. En segundo lugar, Dios reveló su contenido. De acuerdo a Hebreos 1:1 era una obra muy variada y compleja: “Dios habiendo hablando muchas veces y de muchas maneras…” Dios usó aproximadamente durante un periodo de más o menos de 1,600 años. Dios mismo escribió los diez mandamientos; Dios habló en forma directa a Moisés; Habló por medio de sueños e interpretaciones; por medio de símbolos y tipos; Pedro y todos los apóstoles escribieron bajo la guía del Espíritu Santo (1ª Pedro 1:21). Dios habla por medio de la naturaleza (Romanos 1:20-21). Los evangelios nos relatan que Cristo reveló la Palabra. 3.3 La obra de inspiración. Dios inspiró a los escritores de la Biblia y esta obra duró mucho tiempo, no fue de una sola vez. Esa obra de hacer constar por escritos se llama: “Inspiración”. Este término se refiere al producto: la Biblia. No se refiere al proceso, o sea solamente lo que tenemos escrito es inspirado, los escritores bíblicos dijeron muchas cosas (además de la Biblia), pero no son inspirados.

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3.4 La obra de preservación. Está demostrado por la historia bíblica y extra-bíblica que dios preservó y protegió providencialmente los Escritos a través de los siglos para que los tengamos hoy en día. La importancia y magnitud de esta obra es asombrosa. Hay pasajes bíblicos que se refieren a esta obra: Deuteronomio 10:5; Jeremías 36:27-32; Romanos 3:2. Así vemos la obra providencial de Dios en preservar la Biblia; en 2° Reyes 22:8ss – Rey Josías; La soberanía de dios en Isaías 40:5-8, esta es la garantía contra varios intentos de destruir la Biblia a través de los siglos. Los monjes en la edad media preservaron la Biblia dentro de sus monasterios. 3.5 La obra de interpretación e iluminación. Dios nos interpreta y enseña el sentido de su Palabra. Las 4 etapas anteriores son importantes, pero no es suficiente. Queda que Dios nos interprete lo que nos dijo. (ver Lucas 24:25-26; Hechos 8:30-31. Solamente Dios, El Espíritu Santo nos hace entender la Escritura por la obra de iluminación (Juan 16:7-8, 13; 1ª Corintios 2:10-13).

Capítulo V LA INSPIRACIÓN DE LAS ESCRITURAS El uso teológico de la palabra inspiración tiene como fin referirse a esa influencia controlante que Dios ejerció sobre los hombres que escribieron la Biblia. Esa expresión tiene que ver con el recibir el mensaje divino y la exactitud con que dicho mensaje es registrado en los manuscritos originales. 1. Definición. Es el acto divino por el cual el Espíritu Santo guío, dirigió o gobernó a los escritores humanos para que consignaran sin error la Palabra revelada en los manuscritos originales, sin anular su personalidad. 2. Declaración de la inspiración en la Biblia (2ª Timoteo 3:16-17). La palabra griega traducida “inspirada” literalmente quiere decir “espirada por Dios”. Inspirar,

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físicamente hablando, es atraer el aire exterior a los pulmones. Espirar es exhalar, soplar (E A Núñez, Pág. 6 Credo, 2, 1977). 2.1 La idea no es que Dios soplara sobre las Escrituras, como si estuviera echando su liento sobre los escritos después de ser producidos (por ejemplo, para verificar, autenticarlos o bendecirlos). Esta no es la idea. 2.2 Literalmente la idea sería que las Escrituras son el soplo, el aliento o el hálito de Dios. 2.3 Más exactamente, la idea es de la fuente, origen. Las Escrituras se originaron en Dios. Al fin y al cabo son el producto de Dios, viene de Dios, no de los hombres. 2.4 Aclaración: No queremos negar que Dios usó medios (es decir, hombres). Para escribir la Biblia, pero últimamente, aunque Dios usó las mentes y personalidades de los hombres, lo que resultó, lo que ellos compusieron eran las palabras y expresiones exactas que Dios quiso. La fuente de las Escrituras es Dios. 3. El trasfondo de este concepto en el A.T. Muchas veces la frase la boca de Dios se usa para referirse a la fuente, el origen, del mensaje de los profetas (Isaías 58:14; Jeremías 9:12; Ezequiel 3:16-17). En 2ª Timoteo 3:16-17 Pablo también está afirmando que las Escrituras son la boca de Dios. En el Salmo 36:6 al aliento de la boca de Jehová se le atribuye su poder creador. Este aliento produjo las Sagradas Escrituras (ver Génesis 1:2, 2:7). En el contexto de 2ª Timoteo 3:16-17, Pablo se refiere específicamente al A.T, en que Timoteo se instruyó. Hay que recordar que durante el tiempo de Pablo el N.T. se hallaba en proceso de formación. Pero el término griego “grafe” (escrituras) puede indicar todo lo que es “escrituras”, en el sentido que Pablo le atribuye de ser algo que viene de Dios. De ese modo “hay así lugar para incluir los Escritos del N.T.” (E A Núñez). 4. El proceso (Método) de inspiración 2ª Pedro habla aquí de la iniciativa Divina en la producción de las Escrituras.

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4.1 “NUNCA” la profecía fue traída por voluntad humana. De nuevo hay otra información de la fuente de las Escrituras. El Espíritu Santo de Dios, no la mera voluntad humana es que decidió escribir algo religioso (compare a José Smith y los escritos de los mormones). 4.2 La instrumentalidad humana en el proceso de escribir las Escrituras En un sentido se puede decir que la Biblia es obra de Dios y obra de los hombres, hombres guiados y movidos por el Espíritu Santo, es decir, los hombres, NO son la fuente sino el medio humano que Dios usó para producir la Biblia. Por eso el doctor E A Núñez sugiere como traducción de 2ª Pedro lo siguiente “Los santos hombres de Dios hablaron siendo impulsados por el Espíritu Santo”, también cuando 2ª Pedro habla de la “profecía” no se refiere exclusivamente a pasajes verdaderamente proféticos, o que excluya lo demás que no es profético. Sino que incluye toda la Escritura, porque la Escritura es por naturaleza profética, es decir que es predictiva (futurista) y a la vez proclamativa que proclama la verdad de Dios”. 4.3 La extensión de la inspiración Esto significa que Dios inspira todas las palabras y toda palabra de la Biblia. Dios nos inspiró los conceptos, como algunos piensan, sino todas las palabras (ver 2ª Timoteo 3:16). Así que la Biblia habla de la inspiración plenaria (Toda escritura y verbal, Jesús dijo que la letra más pequeña del alfabeto hebreo y griego, como la “j” y aún el minúsculo signo que conocemos como “tilde” son importantes cuando se trata de la Palabra de Dios. 5. Teorías sobre inspiración Las llamadas teorías de inspiración son el producto de los esfuerzos realizados por los hombres que han tratado de explicar las relaciones existentes entre las dos fuentes de origen (Dios y el hombre). A continuación presentamos algunas de estas teorías (las primeras son conceptos equivocados y la última es la correcta). 5.1 La teoría mecánica o dictada

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Esta teoría dice que Dios dictó a los escritores lo que tenían que escribir. En otras palabras, no tomó en cuenta el estilo de escribir o la personalidad de ellos. Si Dios, hubiera dictado la biblia a los hombres, el estilo sería uniforme esta, entonces, tendría la dicción del Autor Divino, y estaría libre de la idiosincrasia de los hombres (ver 2ª Pedro 3:15-16). Por tanto esta teoría se descarta. 5.2 La teoría de conceptos Algunos creen que Dios inspiró las ideas y conceptos, pero no las palabras. Dicen que dios dio la idea general y dejó al hombre expresar todo en su propio lenguaje con el resultado de que el hombre podría haberse equivocado en algunas palabras. Completamente aparte de que el hecho de que las ideas no pueden transferirse por ningún otro medio, sino a través de palabras en todo mensaje. 2ª Corintios 2:13 indica claramente que las palabras no los conceptos son inspirados. Apocalipsis 22:18-19 dice que hay una maldición sobre la persona que quite de las palabras de la profecía del Apocalipsis. 5.3 Inspiración parcial Algunos creen que solo parte de la biblia es inspirada o que algunas partes son más inspiradas que otras. De acuerdo con esta teoría, la inspiración se extiende solo a las enseñanzas y preceptos doctrinales, pero otras partes no lo son, como la parte histórica. Dicen que esas partes son cuentos que Dios usa para enseñar una verdad espiritual. Según este punto de vista la Biblia es sin error cuando habla de verdades religiosas o morales, pero no cuando habla de historia o ciencia. 5.4 Inspiración gradual Este postulado dice que hay grados de inspiración. Los que se adhieren a esta teoría tratan de clasificar los grados que proponen por medio de palabras como “insinuación, dirección, elevación, superintendencia, guianza y revelación directa” 5.5 Inspiración natural – mística

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Según esta teoría la Biblia es como cualquier otro gran libro humano. Es un libro de sabiduría, muy elevado y sublime, pero humano. Es así como ha habido artistas excepcionales, músicos y poetas que han producido obras maestras que no han sido sobrepasadas, según dicen los que promueven esta teoría. 5.6 Inspiración verbal y plenaria Inspiración verbal significa que en sus documentos originales el Espíritu Santo dirigió la selección de las palabras usadas. Sin embargo, la personalidad del ser humano fue respetada al extremo que sus características como escritor son preservadas y su estilo y vocabulario empleados pero sin intromisión de errores. Inspiración plenaria significa que la exactitud que la inspiración verbal asegura se extiende a la totalidad de la Biblia, de manera que ésta es en todas sus partes tanto infalibles en cuanto a la verdad como final en cuanto a su autoridad divina. Esta es la doctrina tradicional de la iglesia y la que enseñaron tanto Cristo como los Apóstoles. Esta enseñanza preserva el doble origen en un equilibrio perfecto, otorgando a ambos la exacta atribución que le es dada en la Biblia.

Capítulo VI LA ILUMINACIÓN DEL ESPIRITU SANTO PARA ENTENDER LA BIBLIA El Espíritu Santo es el maestro Divino desde su advenimiento desde el día de pentecostés y hay una cantidad de pasajes bíblicos que atestiguan este ministerio específico del Espíritu. Él nos ilumina para entender la Palabra de Dios. 1. Definición. Es la obra del Espíritu Santo de ayudar al creyente a entender la revelación escrita en la Biblia. 2. Observaciones 2.1 Este ministerio es experimentado por todo creyente, 1ª corintios 2:8-10, 12.

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2.2 Está sujeto a grados. Es en que algunos entienden más que otros debido al tiempo de ser cristianos, la obediencia y sumisión al Señor, la madurez son factores determinantes. 2.3 Siempre es continua en el sentido de que el creyente sigue aprendiendo y va madurando y profundizando en su conocimiento de la Palabra de Dios. Nunca alcanza a decir que lo sabe todo y que no necesita este ministerio del Espíritu Santo. 3. La necesidad de ser iluminado por el Espíritu Santo. Esta necesidad es destacada por José Grau, quien dice que de acuerdo con las Escrituras, es posible ver y oír con los sentidos, ver y oír con la mente y al mismo tiempo ser ciego y sordo a lo que atañe al Espíritu Santo (Marcos 8:18; Isaías 6:9-10, Jeremías 5:21; Ezequiel 12:12). La condición espiritual del hombre requiere este ministerio. Aunque el hombre tiene una dimensión espiritual con la capacidad de cosas espirituales, la cual forma parte de la imagen de Dios en el hombre. Eso afirmado por la Biblia (Mateo 5:8; Juan 3:3-6; 5:24; 10:3,17). No le entra verdades espirituales. ¿Por qué? esta percepción espiritual fue afectada por la caída y el pecado. Entonces la obra del Espíritu Santo de restaurar nuestra percepción espiritual se ve en Efesios 1:18, Mateo 5:8; Hechos 16:14; Romanos 2:29; 2ª Corintios 3:15ss; Colosenses 1:9; a Juan 5:20; 1ª Corintios 2:13. El propósito y la meta de la iluminación del Espíritu Santo es poner en práctica la palabra de Dios (Salmos 119:18; 139:23-24).

Capítulo VII VITALIDAD La palabra vitalidad, se refiere a la vida o poder vivificante como ningún otro libro, la Biblia posee. Muy significativo es sin duda el uso de la palabra griega zon-viva y Energes-eficaz o poderosa en relación a las Escrituras. La palabra Zoé usada cerca de 140 veces en el N.T. significa vida ya sea como una realidad o como una forma de conducta. INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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1. Definición. Es el elemento inescrutable de vitalidad y vida que existe y emana de la Biblia como ningún otro. 2. Aclaración. Esta idea no implica que la Biblia, tenga una personalidad o que posea la vida de un ser viviente (aparte de Dios), sino declara que la vida divina se imparte en la biblia por medio del Espíritu Santo. Es algo inherente, propio de la Palabra de Dios. Así es porque la Biblia no es un libro cualquiera, sino la Palabra escrita e inspirada por Dios 2ª Timoteo 3:16. De acuerdo a Hebreos 4:12 la Palabra de Dios es viva, es eficaz, y cortante, es penetrante y es discerniente. 1ª Pedro 1:23 dice: “siendo renacido no de cimiento corruptible sino de incorruptible por la Palabra de Dios que vive y permanece para siempre”. Tampoco podemos pasar por alto aquí las palabras de Cristo cuando dijo: “Las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida” (zoé, Juan 6:63). La segunda palabra que ya ha sido citada en Hebreos 4:12 es: energes, que atribuye a las Escrituras la calidad de poseer energía o eficacia. Esta es la energía que es producida por la esencia de la vida. La Palabra de Dios escrita es el soplo de Dios, por lo tanto, tiene vida inherente. 3. El poder de la Palabra sobre el creyente La Palabra de Dios es un alimento que imparte fortaleza (1ª Pedro 2:2). La Palabra de Dios tiene un valor especial para el creyente. 1ª Tesalonicense 2:13 dice que actúa (energetai – genera energía) en nosotros. A la luz de la evidencia que tan definidamente señala que la Palabra de Dios es viva, y que además es un agente vital con poder sobrenatural, el predicador carece de excusas para presentar un mensaje poderoso. La promesa de Dio a través de Isaías es: “Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá sino que riega la tierra y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra y pan al que come, así será mi Palabra que sale de mi boca; no volverá a mi vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié”. (Isaías 55:10-11). Y con el mismo propósito Jeremías escribió: “¿No es mi Palabra como fuego dice Jehová, y como martillo que quebranta la piedra?” (Jeremías 5:29). Dios usa su Palabra. Esta es eficaz en las manos del

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Espíritu Santo para producir resultados sobrenaturales. Es por esta razón que el apóstol Pablo, con la sabiduría que dios le dio, exhorta a su discípulo Timoteo a “predicar la Palabra”

Capítulo VIII CANONICIDAD Y AUTORIDAD INTRODUCCIÓN. La investigación del canon de la Biblia es un esfuerzo por descubrir la verdadera base de su autoridad. Las Escrituras del A.T y N.T forman un canon debido a que estas son palabras autoritativas. Por medio de la expresión autoritativa se sugiere que la biblia es la voz de Dios hablando al hombre. Su autoridad es inherente, siendo como es, nada menos que un edicto imperial: “Así dice Jehová.” Los problemas relacionados con la formación del canon son grandemente simplificados por medio de una gran realidad, a saber, que la Biblia está presente, y presenta en evidencia su exhibición de la perfección Divina. Una atención razonable a los hechos en cuestión mostrarán la verdad que el método empleado en la formación del canon de la Biblia es a la vez natural y sobrenatural. A continuación mostramos todo el proceso de la formación del canon: 1. Significado de la palabra canon: La palabra canon viene de una raíz que significa caña (en hebreo es ganeh y en griego es kanon). La caña se utilizó para medir y eventualmente llegó a tener el significado de norma. Orígenes utilizó la palabra canon para expresar lo que llamamos “la regla de fe”, la norma por la cual hemos de medir y “evaluar…”. Más tarde llegó a significar una “lista o índice”. La Palabra canon aplicado a las Escrituras significa: “una lista oficialmente aceptada de libros”. Una cosa que debe recordarse es que la iglesia no creó el canon o los libros incluidos en los que llamamos Escrituras. Más bien, la iglesia reconoció los libros que fueron inspirados desde su comienzo, estos fueron inspirados por Dios al ser escritos. 2. Pruebas a las que se sometía un libro para incluirlo en el canon

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Había básicamente 5 principios guías que se usaban para determinar si un libro era o no canónico, o de la Escritura: 2.1 ¿Es autoritativo? ¿Habla el libro con autoridad de Dios como habló Jesús? (Mateo 1:22). Los profetas fueron reconocidos con este atributo. ¿Provino de la mano de Dios? ¿Viene este libro con un divino: “así dice el Señor”? 2.2 ¿Es profético? ¿Fue escrito por un hombre de Dios? 2.3 Es autentico Los padres de la iglesia eran partidarios de la política de “si éstas en duda deséchalo”. Esto realzó la valides de su discernimiento de los libros canónicos. 2.4 ¿Es dinámico? ¿Tiene el poder de dios que transforma las vidas? El libro mismo si lleva esta característica convence a los que leen que es auténtico y dinámico. 2.5 ¿Fue recibido, reunido, leído y usado? ¿Fue aceptado por el pueblo de Dios? 3. El cierre del canon La

prueba

de

la

canonicidad

nos

conducen a la conclusión que la Biblia

4.3 Las Escrituras 4.3.1 Libros poéticos 1. Salmos.

como la tenemos hoy es completa en sí, y

2. Proverbios.

que los Libros de la Biblia son los únicos

3. Job.

canónicos, inspirados por Dios.

4.3.2 Cinco rollos 1. Cantar de Cantares

4. El canon Hebreo

2. Rut

4.1 La ley

3. Lamentaciones.

1. Génesis.

4. Ester.

2. Éxodo.

5. Eclesiastés

3. Levítico

4.3.3 Libros históricos

4. Números

1. Daniel.

5. Deuteronomio

2. Esdras – Nehemías 3. Crónicas.

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4.2 Los profetas 4.2.1 Los profetas anteriores 1. Josué. 2. Jueces. 3. Samuel. 4. Reyes. 4.2.2 Profetas posteriores 1. Isaías. 2. Jeremías 3. Ezequiel 4. Los doce.

Capítulo IX LOS LIBROS APOCRIFOS 1. Definición: La palabra “Apócrifo” quiere decir “cosas escondidas, secretas u ocultas” en términos generales los libros designados apócrifos son los libros incluidos en las Biblias católicas, pero no en las versiones usadas por los evangélicos. 1.1 La mayoría fueron escritos durante los dos últimos siglos antes de Cristo, la lista abajo indica cuales son el tipo de literatura que componen. 1.2 La siguiente lista es según los libros apócrifos incluidos en la Biblia Dios habla hoy (en todas las Biblias católicas) INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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Nombre del Libro

Fecha

Tipo de Literatura

1. Tobías

Alrededor del año 200 A.C

Romántica - Religiosa

2. Judith

Alrededor del año 150 A.C

Romántica Religiosa

3. (Adiciones a Ester)

140 a 130 A.C

Leyenda

2° a 1° Siglo A.C

Leyenda

4. (Adiciones a Daniel) se compone de:  Oración de Azarías  Susana  Daniel, el dios bel y la serpiente

Alrededor del 1er siglo antes de Cristo

5. 1° Macabeos

Alrededor del año 110 A.C

Histórico

6. 2° Macabeos

Alrededor del año 110 a 70

Histórico

A.C 7. Eclesiástico

32 A.C

Didáctico

8. Sabiduría

30 A.C

Didáctico

150 a 50 A.C

Profético

9. Baruc (Baruc incluye la carta de Jeremías, escrito entre el 300 y 100 A.C)

1.3 La iglesia católica los llama “Deuterocanonicos”, es decir el segundo canon, con lo cual la misma iglesia romana admite que su inclusión en el canon fue hecha mucho tiempo después de haberse cerrado el canon de los libros inspirados NOTA: Existen también apócrifos del Nuevo Testamento, escritos durante los primeros siglos D.C ninguno fue admitido en el canon por la iglesia debido a las narraciones fantásticas, leyendas y errores sin ningún valor (José Grau pág. 220). 2. ¿Por qué fueron escritos estos libros apócrifos del A.T.?

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Parece que el motivo era informar a los cristianos judíos y a los otros respecto a los 400 años entre el cierre del canon del A.T y el tiempo de Cristo. Este propósito se ve particularmente en los libros históricos de los macabeos. 3. El valor de estos libros Como se ha señalado, algunos son leyendas con errores y enseñanzas inmorales y herejías. Pero otras son informes históricos y sociológicos de costumbres y ambientes de aquellas épocas A.C, entre ellos los Macabeos. 4. ¿Por qué no consideramos los libros apócrifos como canónicos? 4.1 Según Romanos 3:2 a los Judíos les fue encomendado y confiado el canon del A.T. Estos libros nunca formaron parte de del canon Judío además no existe manuscritos del A.T editados por los Judíos que contenga los apócrifos y todos estos libros fueron escritos después del cierre del canon Judío 4.2 Josefo (30 a 100 A.C) el famoso historiador judío afirmó que estos libros nunca formaron parte del canon Judío y los excluyó de su lista de libros canónicos. 4.3 Un grupo de Judíos eruditos se reunieron en Cammia en el 90 D.C y rechazaron estos libros 4.4 Los apócrifos jamás fueron citados por Jesús ni por los apóstoles aunque ellos citaron el A.T aproximadamente 280 veces (sin contar ciento más de alusiones). Además la mayoría de las citas se basaban en la versión Alejandrina Antiguo Testamentario de los 70, que incluía los apócrifos, sin que nunca hiciera referencia a ningún apócrifo como Palabra de Dios. 4.5 Los apócrifos no fueron reconocidos por la iglesia cristiana durante los 4 primeros siglos D.C y muchos de los líderes de ese tiempo enfáticamente los rechazaron (Orígenes, Cirilo de Jerusalén, Atanasio, etc.). Además, Jerónimo (340 al 420 D.C), el famoso erudito y traductor de la versión alejandrina al latín que forma la base para la versión oficial de la iglesia católica hoy rechazó los apócrifos. 4.6 Los apócrifos no fueron recibidos oficialmente por la iglesia católica hasta el año 546 D.C, en el concilio de Trento, y eso no por las demás iglesias. Y esta

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reacción tomó lugar bajo un ambiente de fuerte reacción a Martin Lutero y otros reformadores, quienes rechazaron los apócrifos. NOTA: aplicando las pruebas de canonicidad en estos libros (asunto que ya explicamos en un capitulo anterior), se ve que fallan en cumplir con ellas

SECCIÓN II TEOLOGIA PROPIA O DOCTRINA DE DIOS Introducción. La teología sistemática, tal como la hemos definido con anterioridad, es el conjunto de todas las doctrinas bíblicas y clasificadas en un orden lógico para su mejor comprensión. Es como un panorama general de todo lo que es el estudio de la doctrina bíblica. Si leemos INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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la Biblia de principio a fin, nos encontraremos con diversos temas acerca de Dios, la humanidad, la vida, la muerte, la historia, el mundo espiritual, la iglesia, etc., todos estos temas están allí como sepultados o entretejidos entre toda la narrativa y toda la literatura bíblica. Para su mejor estudio hubo quienes se dieron a la tarea de seleccionar y ordenar todo en base a temas y sub-temas, desarrollando todo un estudio de cada una de las partes principales. Es por eso que la teología sistemática no es un conjunto de doctrinas inventadas, sino el ordenamiento y estudio sistemático de las doctrinas que ya están reveladas en la Biblia. En ese orden de ideas, pasaremos a estudiar este cuerpo de doctrina conocida como Teología propia o doctrina de Dios. La expresión teología propia es una designación más o menos moderna que representa el punto lógico para el comienzo del estudio de la Teología sistemática, siendo como es, un tema primordial, a saber, una investigación científica de lo que puede conocerse de la existencia, las Personas y las características del Dios trino

– Padre, Hijo y Espíritu Santo – y muy aparte de sus obras. Debido a

que tanto como la Teología sistemática es tan vasto es sabio reservar las consideraciones de las obras del Dios trino, tal y como son reveladas en la antropología, soteriología, la eclesiología, la escatología, Cristología y Pneumatología. Hombres sinceros y pensadores capacitados han estado ocupados en un esfuerzo efímero por penetrar en el vasto campo que representa el conocimiento de Dios. Sin duda cada generación ha añadido algo a la totalidad de la especulación finita con relación a Dios. En medio de todas las conjeturas del hombre respecto al conocimiento de Dios, el Señor ha hablado a través de una revelación específica de sí mismo y para aquellos que han sido iluminados dicha revelación es final y de largo alcance. Pero para los que están en tinieblas muy poco es añadido a través de la revelación, y como prueba de ellos está su indiferencia hacia las Escrituras y su inhabilidad natural en recibirlas (1ª Corintios 2:14; Salmos 10:4). Si procedemos sobre la suposición de que la Teología es el conocimiento sistematizado de Dios, de quién y para quién son todas las cosas, habrá buenas razones para comenzar con la doctrina de Dios. Emprenderemos el estudio de la Teología propia con dos presuposiciones: (1) Dios existe, y (2) Él se ha revelado en su divina Palabra. Por esta razón no es imposible comenzar con el estudio de Dios. Consultemos su revelación para saber

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qué es lo que Él nos ha revelado de sí mismo, y para conocer la relación que guarda con sus criaturas.

Capítulo I LA EXISTENCIA DE DIOS 1. PRUEBA BIBLICA DE LA EXISTENCIA DE DIOS Para nosotros la existencia de Dios es la gran presuposición de la teología Cristiana. No tiene sentido hablar del conocimiento de Dios a menos que se admita que Dios existe. La presuposición de la Teología Cristiana tiene sus características muy definidas. La suposición es, no simplemente que haya algo, alguna idea o ideal, alguna potencia o tendencia determinada a la que se le debe dar el nombre de Dios, existente por sí, consciente por sí, sino que hay un Ser personal, del que se originan todas las cosas, que trasciende toda la creación, aunque a la vez es inmanente en cada parte de ella. Así que, en tanto que la existencia de Dios se acepte por fe, esta tiene su base en una información fidedigna: La Biblia. El cristiano acepta por la fe la verdad de la existencia de Dios. Pero no por una fe ciega, sino por una fe que se basa en la evidencia, y la evidencia se funda, ante todo, en la Escritura como Palabra inspirada por Dios, y luego, en la revelación de Dios en la naturaleza. La Biblia presupone la existencia de Dios desde su primera declaración: “En el principio creó Dios los cielos y la tierra” (Génesis 1:1). No solo describe a Dios como el creador de todas las cosas, sino también como el sustentador de todas sus criaturas y como el gobernante de los destinos de individuos y naciones. La Biblia testifica que Dios hace las cosas según el consejo de su voluntad, y revela la realización gradual de su gran propósito de redención. 2. PRUEBAS DE LA EXISTENCIA DE DIOS CONOCIDAS COMO RACIONALES O NATURALES En el transcurso del tiempo y debido muy especialmente a la influencia de pensadores racionalistas se desarrollaron y cobraron fuerza en la teología INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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algunos argumentos para probar racionalmente la existencia de Dios. Algunos de éstos en esencia ya habían sido sugeridos por platón y Aristóteles, y los otros fueron añadidos en tiempos modernos por los estudios de la filosofía de la religión. De dichos argumentos aquí sólo mencionamos los más comunes: 1. El argumento Ontológico. La ontología es la ciencia o la discusión sistemática tocante al ser verdadero; la doctrina de las categorías o las características universales y necesarias de toda la existencia. Este argumento se ha presentado en diversas formas por distintos pensadores, pero en su más perfecta forma lo presentó Anselmo. Su argumento es que el hombre tiene la idea de un ser absolutamente perfecto; Que la existencia es un atributo de la perfección y que por lo tanto debe existir un ser absolutamente perfecto. El argumento ontológico consiste en una línea de razonamiento que parte de Dios, la primera causa absoluta de todas las cosas y se dirige a las cosas que Él ha causado - específicamente, la idea innata de la existencia de Dios - Dios es conocido como el creador de la mente humana en la cual este concepto de Él se encuentra. De acuerdo con este argumento la existencia de Dios está confirmada por el hecho que la mente humana cree que existe. 2. EL argumento Cosmológico. Este argumento se admite y se expresa así: Todo lo que existe en el mundo debe tener una causa adecuada, y siendo así también el universo la debe tener, es decir una causa indefinidamente grande. El argumento cosmológico presenta evidencia de que Dios existe y que es la Primera Causa de todas las cosas. Existen 4 teorías que han sido propuestos por filósofos y metafísicos en cuanto al origen del universo material: 2.1 Que la constitución de la naturaleza es eterna y que sus formas han existido siempre. 2.2 Que la materia ha existido siempre, pero su constitución presente y su forma han estado sujetos a un auto-desarrollo, lo cual era la creencia de Epicuro, y es también la creencia del ateo moderno.

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2.3 Que la materia es eterna pero su clasificación presente y su orden son la obra de Dios, como enseñaban Platón, Aristóteles y muchos otros. 2.4 Que la materia es una cosa creada, habiendo sido traída a la existencia de la nada por el poder engendrador de Dios, la cuál es la revelación bíblica. Su declaración es que Dios por su infinito poder ha causado que la materia inexistente exista. Está escrito: En el principio creó Dios los cielos y la tierra (Génesis 1:1), y, “…De modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía” (Hebreos 11:3). El argumento cosmológico depende de la validez de 3 verdades contribuyentes: (1°) que todo efecto tiene su causa; (2°) Que el efecto depende de la causa para su existencia, y (3°) Que la naturaleza no puede producirse a sí misma. 3. El argumento Teleológico. El argumento teleológico ofrece evidencia que Dios existe desde la base del orden y la adaptación del universo. La palabra teleología está compuesta de las palabras telos y logos y por lo tanto significa la doctrina de la finalidad o del propósito racional. Otra manera de definir este argumento es como lo expresa L. Berkhof: por donde quiera que el mundo se contemple, revela inteligencia, orden, armonía y designio, denunciando así la existencia de un ser inteligente y de firmes designios tal como lo exige la producción de un mundo tal. Según Kant Dios es el gran arquitecto que diseñó el mundo. El argumento teleológico no podría ser mejor expresado que como aparece en las palabras del salmista: “El que hizo el oído ¿no oirá? El que formó el ojo ¿no verá? El que castuga a las naciones ¿no reprenderá? ¿No sabrá el que enseña al hombre la ciencia?” (Salmos 94:9-10). El hecho de la existencia de un diseño, que es demostrado en toda cosa creada, exhibe la inteligencia y el propósito racional del creador. 4. El argumento Antropológico. El argumento antropológico está muy relacionado con el argumento cosmológico y teleológico pero a la vez este argumento está limitado al

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campo de la evidencia, en cuanto a la existencia de Dios y sus cualidades, que pueden ser deducidas de la constitución del hombre. Hay factores filosóficos y morales en la constitución del hombre que pueden ser proyectados con el fin del encontrar sus orígenes en Dios, y en esa base este argumento ha sido también designado con el nombre de argumento filosófico o argumento moral. Pero debido a que la amplitud de este argumento comprende la totalidad del hombre, el uso de la expresión argumento antropológico es más satisfactorio. 5. El argumento Histórico Etnológico. Su forma principal es la siguiente: entre todos los pueblos y las tribus de la tierra se encuentra un sentimiento de lo divino, que se manifiesta en culto externo. Siendo universal este fenómeno, debe pertenecer a la misma naturaleza del hombre. Y si la naturaleza del hombre tiende a la adoración religiosa, esto sólo hallará explicación en un Ser superior que dio al hombre una naturaleza religiosa. Resumen: Evaluando estos argumentos racionales se debe indicar ante todo que los creyentes no los necesitamos. No depende de ellos nuestra convicción de la existencia de Dios, sino que aceptamos con fe la revelación que de sí mismo ha hecho Dios en Las Escrituras. Si hay tantos en la actualidad que quieren afianzar su fe en la existencia de Dios sobre tales argumentos, se debe en gran parte a que se rehúsan a recibir el testimonio de la Palabra de Dios. Además, en un intento de utilizarlos para convencer a los incrédulos será bueno no olvidar que ninguno de ellos puede conducir hasta una absoluta convicción. El hecho de que hoy mismo sean muchos los que en ellos encuentran indicaciones satisfactorias de la existencia de Dios, puede tomarse como una señal que no están enteramente desprovisto de valor. Tienen algún valor para los mismos creyentes, pero los llamaremos “testimonios más bien que argumentos”. Tienen importancia como interpretaciones de la revelación general de Dios, y exhiben cuan racional es creer en un ser divino. Todavía más, pueden servirnos de algo para hacer

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frente al adversario, aunque no prueben la existencia de Dios de manera clara y absoluta; pueden servirnos para entrar en dialogo con los incrédulos y en consecuencia silenciarlos o taparles la boca.

Capítulo II LA PERSONALIDAD DE DIOS Dios ha declarado en Su Palabra inerrante que el hombre, muy contrariamente a otras cosas materiales, ha sido creado a imagen y semejanza del Creador. Está escrito: “…Hagamos al hombre a nuestra imagen conforme a nuestra semejanza… y creó al hombre a su imagen, a la imagen de Dios lo creó” (Génesis 1:26-27). De este modo se deduce, por lo tanto, que hay una semejanza entre Dios y el hombre. En este modo de comparar las cosas la Biblia procede a presentar la naturaleza y el carácter de Dios. Él es una Persona con sus facultades y elementos constituyentes que son básicos de la personalidad. Esas facultades y elemento en Dios son perfecto en grado infinito, pero en su naturaleza éstos mantienen un parecido extraordinario a esas facultades y elementos imperfectos pertenecientes al hombre. En este punto debemos aclarar lo siguiente: No se afirma de ningún modo que la naturaleza corporal del hombre esté incluida en esta comparación, ya que se dice de Dios que Él es Espíritu (Juan 4:24). Se deduce, por lo tanto que esta semejanza está circunscrita solamente a la parte inmaterial del hombre. Cuando se describen las características de Dios en lenguaje humano se usan expresiones llamadas antropomorfismos. Estos frecuentemente se usan en relación al cuerpo humano y a sus distintas propiedades (ver Deuteronomio 33:27; Juan 10:29; Isaías 66:1; 2° Crónicas 16:9; Isaías 59:1). Los elementos que se combinan para formar la personalidad son: el intelecto, la sensibilidad (emociones) y la voluntad; pero todos estos actuando juntos requieren una libertad tanto de acción externa como de selección de fines hacia los cuales se dirige la acción. La inteligencia tiene que dirigir, la sensibilidad tiene que desear y la voluntad tiene que determinar o decidir la dirección que conduzca a fines racionales. No puede haber personalidad alguna, ya sea humana, angélica o divina, sin estos INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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completos pero esenciales aspectos. Sin estos no podría haber personalidad. El testimonio de la Biblia es que el hombre, los ángeles y Dios poseen los elementos esenciales que conjuntamente constituyen la personalidad. Se dice de Dios que es inteligente y omnisciente (Salmo 147:5); de igual manera se dice que Dios posee sensibilidad. Él ama la justicia y odia la iniquidad; Él es un Dios compasivo. Su amor infinito lo ha movido a ofrecer el sacrificio supremo por medio del cual la redención ha sido provista para beneficio del hombre pecador. “Dios es amor” (1ª Juan4:16). Y finalmente, el atributo de la voluntad también está presente en Dios: “Nuestro Dios está en los cielos; todo lo que quiso ha hecho” (Salmos 115:3); “…y Él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay quien detenga su mano y le diga: ¿Qué haces?” (Daniel 4:25).

Capítulo III LOS ATRIBUTOS DE DIOS 1. Definición. La Biblia presenta una revelación que aunque limitada por las barreras impuestas por el lenguaje humano, es la de una persona y esta revelación atribuye esas elevadas características que son propias de Él. Esas cualidades que son atribuidas reciben propiamente el nombre de atributos. Así que los atributos son características, propiedades o perfecciones de la persona o el carácter de Dios. Todas las cosas que existen tienen atributos o cualidades así es que Dios por cuanto este ha de tener ciertos atributos o características, que por tratarse de Él que es perfecto, algunos las llaman las perfecciones de Dios. 2. Clasificación de los atributos. Los atributos de Dios presentan un tema tan vasto y complejo y tan alejado del alcance de las facultades finitas que cualquier esfuerzo por clasificarlos solo pueden ser aproximados entre corrección y cabalidad. Del mismo modo, también, los atributos están interrelacionado e interdependientes que la posición exacta de algunos de ellos es difícil si no completamente imposible. Es evidente que ninguna otra área de la teología sistemática ha ocasionado mayor confusión y desacuerdo entre los teólogos que el causado por el esfuerzo de INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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ordenar la categoría de los atributos Divinos. En general los teólogos han separado esos atributos en divisiones bajos diferentes terminologías. Una clasificación de esos atributos representa, según se dice, aquellas características que solamente aparecen en Dios y no se encuentran por ninguna parte de la creación; la otra clasificación representa aquellas características en Dios que, hasta un grado limitado, se encuentran en los ángeles y en espíritus humanos, que de manera objetiva proceden de Dios hacia otros seres. Algunas de estas divisiones se expresan como: incomunicables y comunicables; naturales y morales; inmanentes o intransitivos y emanentes o transitivos; pasivos y activos; absolutos y relativos; negativos y positivos. 3. Clasificación de los atributos: Explicación detallada 3.1 Atributos incomunicables: tienen como propósito representar estos atributos que no admiten ninguna extensión o grado y que pertenecen solamente a Dios entre estos tenemos la autosuficiencia, simplicidad, infinidad, eternidad e inmutabilidad. 3.2 Los llamados atributos comunicables, los cuales, en grado limitado, se encuentran en los seres creados, son: sabiduría, benevolencia, santidad, justicia, compasión, verdad, etc. 3.3 Los atributos naturales pretenden indicar lo que es inherente en Dios (que son los mismos incomunicables). 3.4 Mientras que los atributos morales son aquellos que operan por virtud de la voluntad Divina (que vienen a ser lo comunicables). 3.5 Los atributos inmanentes o intransitivos, son aquellos que permanecen dentro del propio ser de Dios. 3.6 Mientras que los emanentes o transitivos proceden de Dios y producen ciertos efectos 3.7 Los atributos absolutos son aquellos que tienen que ver con la relación de Dios consigo mismo. 3.8 Mientras que los atributos relativos tienen que ver con su relación con otros. 3.9 Los atributos negativos, según se cree son aquellos que están libres de las limitaciones finitas.

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3.10 Mientras que los atributos positivos son aquellos que en grado limitado pertenecen a las criaturas. Nota: ha habido muchos malos entendidos cuando se ha sugerido esta última distinción. Se ha afirmado que debido a que la expresión negativo en este caso sugiere algo que no está en Dios, estos atributos podrían referirse a alguna limitación Divina, por el contrario, la expresión sugiere algo que está en la criatura que no está en Dios. Puede decirse de dios que Él es incorpóreo mientras que el hombre es corpóreo, Dios es inmutable pero el hombre es mutable; Dios es independiente mientras que el hombre es dependiente, etc. 4. Explicación de algunos atributos: Aquí usaremos la clasificación de incomunicables y comunicables 4.1 Atributos incomunicables 4.1.1 Existencia propia. Dios existe en sí mismo y por sí mismo. Nada ni nadie existió antes de Él y todo lo que existe, existe después de Él. En Juan 5:26 se nos dice que “Dios tiene vida en sí mismo”, es increado (o sea no creado). A diferencia de las criaturas no depende de ninguna fuente externa. Antes que existieran otros seres, Él existía. Su existencia es un misterio que no lo alcanzaran a comprender ni los hombres ni los ángeles. Solo Él sabe porque existe y cómo existe, ha existido y existirá (Salmo 145:3). 4.1.2 Eternidad. Cuando se dice que Dios es Eterno quiere decir que ha existido siempre en el pasado, existe ahora en el presente y existirá en el futuro: sin principio y sin fin. La definición que Dios da de sí mismo es esta: “Yo Soy el que Soy” (Éxodo 3:14). Esa definición nos habla de un eterno presento en que vive Dios, eso es eternidad, el nombre Jehová que se aplica a Dios quiere decir,” Él que era, él que es, y Él que ha de ser”. Esto también habla de eternidad. Estos dos atributos, existencia propia y eternidad, se complementan mutuamente. Un ser que tiene existencia propia y

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existe en sí y por sí, tiene que ser eterno, si es eterno tiene que ser increado 4.1.3 Inmutabilidad. Este atributo significa que Dios es inmutable e invariable, que no puede cambiar ni para bien ni para mal. Si Dios pudiera cambiar, dejaría de ser inmutable. Los hombres, las cosas y las sustituciones cambias, ya sea mejorando o empeorando pero no tienen este atributo que pertenece sólo a Dios. Sería un absurdo que Dios puede ser más Omnipotente o más santo. Eso implicaría imperfección y mutabilidad lo cual sería impropio de Dios (Mateo 3:6 y Santiago 1:17). 4.1.4 Omnipresencia. Quiere decir que Dios está presente en todo lugar al mismo tiempo no que Dios se divida para estar en todo lugar, sino que toda su persona con toda su capacidad puede ejercer en cualquier parte y en todo tiempo sin necesidad de moverse de un sitio para otro para dominar el escenario de acción. “Dime dónde está Dios, dijo un ateo a un niño a lo cual respondió el niño si se lo diré si primero me dice usted dónde no está” (ver Salmos 139:7-12). Esta verdad de Omnipresencia de Dios debiera impresionarnos y debiera motivarnos un deseo de vivir en santidad ya que no podemos escondernos de Él para pecar. Recordemos siempre que Dios nos ve y nos oye en todo lugar y en todo tiempo. También esto debe animarnos y fortalecernos (Salmos 139:17-18; Mateo 28:20; Jeremías 23:23-24). 4.1.5 Omnipotencia Por este atributo se da a entender que Dios todo lo puede, que su poder es ilimitado para hacer todas las cosas que su naturaleza y su carácter lo sugieren. En Dios no hay imposibilidad natural (Él todo lo puede), pero si hay lo que algunos llaman “imposibilidad moral” por

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ejemplo: Dios no puede mentir, no puede cambiar, no puede pecar. La imposibilidad aquí radica en su misma perfección en su carácter. Aunque Dios es Omnipotente sin embargo Él no hace todo lo que puede sino lo que quiere. Esto no significa destrucción de su Omnipotencia, significa que Dios, dentro de su Omnipotencia, es libre para actuar, con el beneplácito de su voluntad. 4.1.6 Omnisciencia. Dios conoce todas las cosas del pasado, presente y futuro, con un conocimiento completo y correcto. Un ser que es Eterno, Todopoderoso y que puede estar en todo sitio al mismo tiempo (Omnipresencia), es muy lógico que puede tener un conocimiento perfecto de todas las cosas. Él que diseñó, creó y sostiene este mundo, ¿No ha de conocerlo en todos sus detalles? De otra manera ¿Cómo podría gobernar y dirigir con perfección como su persona lo requiere? (ver 1° Crónicas 28:9; Salmos 147:5; 2° Reyes 8:10-13; Romanos 8:27) 4.2 Atributos comunicables 4.2.1 Amor. “Dios es amor” (1ª Juan 4:8. Alguien preguntó una vez: “¿Y por qué es que Dios ama?” se le respondió: “Así como la naturaleza del Sol es brillar, así la naturaleza de Dios es amar”. El cristianismo es la única religión que presenta al Ser Supremo como un Dios de amor. Las religiones paganas tienen dioses odiosos, vengativos y malos (ver Juan 3:16; 1ª Juan 4:8-10). 4.2.2 Justicia. Dios es infinitamente justo tanto en su persona como en sus tratos con la humanidad. En su seno la justicia tiene su asiento en su trono. Por causa de la justicia perfecta de su carácter, es infaliblemente cierto que hará lo recto, esto es, obrará de acuerdo con los principios de la justicia. No puede hacer ninguna transacción con lo injusto, ni tampoco puede disimular el mal en ninguna de sus formas. La injusticia está a distancia infinita de Él. Siendo

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perfectamente justo, también lo es en todo lo que hace. Por eso la Biblia dice: “Justo es Jehová en todos sus caminos” (Salmos 145:17). Muchas personas ven el amor como el único atributo de Dios, ignorando su justicia y limitando su carácter. Basados en que Dios es amor, muchos falos maestro enseñan que al fin, por pecadores y malo que hayamos sido, dios abrirá sus brazos y nos recibirá en su seno. Ignoran estas personas que Dios es fuego consumidor. La muerte de Cristo en la cruz es manifestación del amor de Dios, de esto no hay duda. Pero jamás hay que olvidar que esa muerte fue también manifestación de la justicia Divina. Allí se encontraron las fuerzas que operan en el mundo: el pecado que merece ser castigado; La justicia que demanda el castigo y el amor que pide la misericordia. 4.2.3 Verdad Esta es otra de las excelencias del carácter de Dios; Así como es amor también es verdad y por lo tanto es veraz en sus dichos y fiel en el cumplimiento de sus predicciones. En Él no puede existir la mentir ni el engaño (Salmo 100:5; 146:5-6; Isaías 25:1; 2ª Timoteo 2:13; Tito 1:2; Apocalipsis 15:3). 4.2.4 Sabiduría La sabiduría ha sido definida como la “conducta prudente en el manejo de los negocios”. Bien podemos aplicar esto a Dios y decir que Él es sabio porque observa una conducta prudente en el manejo de sus negocios (O sea sus tratos con los seres creados). Dicho en otras palabras: Dios tiene un propósito especial en cada cosa que hace y tanto el propósito como los medios que emplea son morales y buenos porque su sabiduría es infinita (Salmos 104:24; Efesios 1:8; Romanos 11:23). 4.2.5 Santidad Frecuentemente se asigna a la santidad de Dios un lugar entre sus atributos morales; sin embargo hablando estrictamente, no es un

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atributo sino la combinación de todos sus atributos morales. Dios es bueno y amoroso porque es Santo; es justo porque es Santo; es veraz porque es Santo y obra con sabiduría porque su santidad no lo permite de otra manera. Dios es absolutamente santo y por lo tanto no puede pecar ni tolerar el pecado. La santidad de Dios reclama la santidad de sus hijos: “Sed santos porque yo soy santo” (1ª Pedro 1:16). Él nos ha sacado del pecado para que vivamos en santidad.

Capítulo IV LOS NOMBRES DE DIOS Introducción. Es digno de notarse, verdaderamente, que los nombres de la deidad ocurren en grupos de tres, siendo algunas de estas ocurrencias (1) Los tres nombres primarios de la deidad en el A.T: Jehová, Elohim y Adonaí; (2) Los tres mayores compuestos con Jehová: Jehová Elohim, Adonaí Jehová, Jehová Sabaoht; (3) Tres compuestos con El: El Shadai, El Elyon y El Olam; (4) El título completo de la Deidad en el N.T es: Padre, Hijo y Espíritu Santo; (6) El título completo de la segunda persona es: Señor Jesu-Cristo; (7) La distinción trinitaria es: La Primera Persona, La Segunda Persona y la Tercera Persona.

1. Los nombres primarios de la Deidad en el A.T 1.1 Jehová A pesar de toda la investigación que los eruditos han hecho al nombre Jehová, muy poco se sabe de lo que está preservado en el Sagrado Texto. Se ha perdido su pronunciación original, y eso se debe a la renuencia de los judíos a pronunciar el Nombre durante muchos siglos (quizás por una actitud de reverencia).

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La nueva revelación de Jehová es como el que existe en sí mismo (Éxodo 3:14): “YO SOY EL QUE SOY” y la palabra hayah (comparar con Yawe) de que evidentemente se forma la palabra Jehová, conlleva también la idea de un continuo llegar a ser. Así por este sobrenombre se revela que Jehová es “Él que existe en sí que se revela a sí mismo”. 1.2 Elohim Este es el apelativo más frecuente en el A.T. Elohim es el plural de Eloah. Algunos la hacen derivar de una raíz que significa: EL FUERTE, y otros de una raíz que denota temor, de aquí se proclama la idea esencial que es la fuente de la reverencia. Hasta tiempos más recientes los teólogos han sostenido que la forma plural de Elohim indica la Trinidad del ser en una esencia. El pronombre plural de Elohim puede servir para indicar la pluralidad de personas o la unidad en una esencia. 1.3 Adonaí Este nombre de la deidad aparece con gran frecuencia en el A.T y expresa dominio y posesión soberana. El significado del nombre Adonaí es Señor y se aplica en las escrituras del A.T tanto a la deidad como al hombre. 2. Nombres compuestos: El nombre supremo Jehová se compone con Elohim, como Jehová Elohim, traducido como Jehová Dios (Génesis 2:4); Con Adonaí como Adonaí Jehová, traducido como Señor Dios, y con Sabaoht como Jehová Sabaoht, traducido como Señor de los ejércitos. El nombre primario Elohim se compone con Shadai, como El Shadai, traducido como “Dios Todopoderoso” (Génesis 17:1); Con Elyon, como el Elyon, traducido como “El Dios Altisimo”; y con Olam, como El Olam, traducido como Dios eterno (Génesis 21:33). Todavía, Jehová se combina con 7 apelativos: Jehová-Jireh, “Jehová proveerá” (Genesis 32:14); Jehová-Rafa “Jehová es tu sanador” (Éxodo 15:26); Jehová-Nisi, “Jehová nuestra bandera” (Éxodo 17:8-15); Jehova-Shalom, “Jehova es paz” (Jueces 6:23-24); Jehová-ra-ah, “Jehova mi pastor”, (Salmo 23:1); Jehová-

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tsidkemu, “Jehová justicia nuestra”, (Jeremías 23:6); Jehova Shamma, “Jehová está allí” (Ezequiel 48:31). 3. Epítetos del A.T. Dios es mencionado metafóricamente en el A.T como Rey, Legislador, Juez, Roca, Fortaleza, Castillo, Libertador, Pastor, Esposo, Labrador y Padre. 4. Nombres de la Deidad en el N.T. El nombre completo y final de la Deidad es Padre, Hijo y Espíritu Santo. Esto puede hacerse más explícito como Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo. Los titulo de la primera persona son mayormente limitados a combinaciones asociadas con la palabra Padre. Él es Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo; El Padre de misericordias; Se dirige a Él como Abba Padre; Padre celestial; Padre santo; Padre justo; Padre de las luces y Padre de Gloria. En todo hay como 300 títulos o designaciones en la Biblia que se refieren a la segunda persona, sin embargo, su nombre completo y final es Señor Jesucristo, siendo Señor el título de Deidad, Jesús es el título de humanidad, Cristo es el título de su oficio como Profeta, Sacerdote y Rey. No hay nombres revelados del Espíritu Santo. Él es conocido por medio de títulos descriptivos tales como: El Espíritu de Dios, El Espíritu de Cristo. Hay más de 20 de estas designaciones.

Capítulo V INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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ACERCA DE DIOS, EL PADRE (Por Lewis Sperry Chafer, Teología Sistemática) 1. El padre como la primera persona Significa que hay tres Personas en la Trinidad: Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo y que ellas son un sólo Dios. La primera persona es designada como el Padre. Por lo tanto el Padre no es la Trinidad, el Hijo no es la trinidad y el Espíritu tampoco es la trinidad, la Trinidad incluye las tres personas. En la revelación del Nuevo Testamento el Padre aparece eligiendo, amando y dando; El Hijo se revela sufriendo, redimiendo y sustentando; Mientras que el Espíritu se manifiesta regenerando, impartiendo poder y santificando. Dado el orden irreversible del Padre mandando y comisionando al Hijo, y el Hijo mandando y comisionando al Espíritu Santo, el Padre se designa correctamente en la teología como la primera Persona sin rebajar en ninguna manera la inefable Deidad de la segunda o la tercera Persona. En la revelación concerniente a la paternidad de Dios pueden observarse 4 aspectos diferentes: 1.1 La paternidad sobre la creación. Aunque las tres personas participaron en la creación y participan el sostenimiento del universo físico y de las criaturas que existen en él, la primer persona, o sea Dios el Padre, en una manera especial es el Padre de toda la creación. De acuerdo a Efesios 4:14-15 Pablo demuestra que toda la familia de criaturas morales, incluyendo ángeles y hombres son declaradas para constituir una familia de la cual Dios es el Padre. De una manera similar, en Hebreos 12:9 la primera Persona es nombrada como “el Padre de los Espíritus” lo que parece incluir todos los seres morales tales como ángeles y hombres. En base a estos textos hay suficiente campo para concluir que la primera Persona de la Trinidad, como el Creador es el Padre de toda la creación, y que todas las criaturas que tienen vida física deben su origen en Él, solamente en este sentido es correcto referirse a la paternidad universal de Dios. Todas las criaturas participan en este sentido en la hermandad universal de toda la creación. INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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1.2 La paternidad por íntima relación El concepto y relación de Padre y el Hijo se usa en el A.T en muchas instancias para relacionar a Dios con Israel. De acuerdo a Éxodo 4:22, Moisés instruyó a Faraón: Jehova ha dicho así: “Israel es mi hijo, mi primogénito”. Esto era más que ser meramente su creador y era menos que decir que ellos eran regenerados, pues no todo Israel tenía vida espiritual. Afirma una relación especial de cuidado Divino y solicitud para con Israel similar a la de un padre con su hijo. 1.3 El Padre de nuestro Señor Jesucristo La revelación más importante y extensa con respecto a la paternidad se relaciona con la vinculación de la primera Persona a la Segunda persona. La primera Persona se describe como: “El Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo” (Efesios 1:3). La revelación teológica más comprensiva del N.T es que Dios el Padre, la primera Persona es el Padre del Señor Jesucristo, la segunda Persona. La relación del Padre e hijo, por lo tanto se refiere a la Deidad y unidad de la Santa Trinidad desde toda la eternidad, en contraste a la encarnación, en la cual el Padre estaba relacionado a la humanidad de Cristo, la cual empezó en un tiempo. La obediencia de Cristo está basada sobre su calidad de Hijo, no en ninguna desigualdad con Dios el Padre en la igualdad de la Trinidad. 1.4 El Padre de todos los que creen en Cristo En contraste al concepto de Dios el Padre como creador, el cual se extiende a todas las criaturas, está la verdad de que Dios es el Padre, en una manera especial de aquellos que creen que Cristo y han recibido la vida eterna. El hecho de que Dios es el Padre de toda la creación no asegura la salvación de todos los hombres, ni tampoco les da a todos vida eterna. La Escritura declara que hay salvación sólo para aquellos que han recibido a Cristo por la fe como su Salvador. La afirmación de que Dios el Padre es Padre de toda la humanidad, y que hay, por lo tanto, una hermandad universal entre los hombre, no significan que todos son salvos e irán al cielo. La Escritura enseña, en lugar de lo anterior, que sólo aquellos que creen en Cristo para salvación

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son hijos de Dios en sentido espiritual. Esto no es en el terreno de su nacimiento natural dentro de la raza humana, ni en el terreno en el cual Dios es su creador, sino más bien está basado sobre su nacimiento segundo, o espiritual, nacimiento dentro de la familia de Dios (Juan 1:12; Gálatas 3:26; Efesios 2:19; 3:15; 5:1).

Capítulo VI LA SANTA TRINIDAD Introducción: La doctrina de la Trinidad siempre ha estado erizada de dificultades y por tanto, no causa asombro que la iglesia en su intento de definirla repetidamente haya sido tentada a racionalizarla, formulándola en términos que estaban lejos de hacer justicia a los datos de la Escritura. 1. La doctrina de la trinidad en la historia 1.1 El periodo anterior a la reforma Los judíos de la época de Jesús insistían reciamente en la unidad de Dios, y esta insistencia se introdujo en la iglesia cristiana. El resultado fue que algunos borraban por completo las distinciones personales en la deidad y que otros dejaran de hacer plena justicia a la divinidad esencial de las Personas Segunda y Tercera de la Santa Trinidad, Tertuliano fue el primero que utilizó el vocablo trinidad y primero también en formular la doctrina; pero su definición fue deficiente, puesto que enseñaba una injustificada subordinación del Hijo al Padre. Orígenes fue todavía más lejos en esta dirección enseñando explícitamente que el Hijo está subordinado al Padre con respecto a la esencia, y que el Espíritu Santo está subordinado aún al Hijo. Defraudó de la esencia Divina a estas dos Personas de la Deidad y proporcionó un escalón a los arrianos que negaban de Divinidad del Hijo y del Espíritu Santo, presentando al Hijo como la primera criatura del Padre, y el Espíritu Santo como la primera criatura de Hijo. De esta manera la consustancialidad del Hijo y del Espíritu Santo con el Padre fue sacrificada para conservar la unidad de Dios. INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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1.2 el periodo posterior a la reforma Después de la Reforma no encontramos ningún avance en la doctrina de la Trinidad pero sí solamente la repetición de algunas de las definiciones erróneas de los primero siglos. Los arminianos revivieron la doctrina de la subordinación, principalmente, a través, según parece, para mantener la unidad de la deidad. Atribuyeron al Padre cierta preeminencia sobre las otras dos Personas en orden, dignidad y poder. Finalmente hubo algunos que reconociendo la afirmación de la doctrina de una Trinidad ontológica como ininteligible quisieron alejarse de ella y se sintieron satisfechos con la doctrina de una trinidad económica, una trinidad tal como se revela en la obra de redención y en la experiencia. Durante mucho tiempo disminuyó el interés en la doctrina de la Trinidad y la discusión teológica se enfocó más particularmente sobre la personalidad de Dios. 2. Dios como Trinidad en Unidad La palabra “Trinidad” no sólo indica la cantidad de tres sino que también implica la unidad de los tres. Este concepto se usa como término técnico en la teología. No es necesario insistir que cuando hablamos de la Trinidad de Dios nos referimos a la Trinidad en la Unidad y a una Unidad que es Trina 2.1 La personalidad de Dios y la Trinidad Sobre el tema de la personalidad de Dios ya se habló bastante en los capítulos anteriores, es suficiente decir que los atributos comunicables de Dios dan importancia a su personalidad puesto que lo revelan como un Ser racional y moral. La forma original de la personalidad no está en el hombre, sino en Dios. 2.2 La prueba Escritural de la doctrina de la Trinidad Muy fuera de toda duda la doctrina de la Trinidad es una doctrina revelada. Al mismo tiempo se trata de una doctrina que no habríamos conocido, ni hubiéramos sido capaces de sostenerla de algún grado de confianza sobre la sola base de la experiencia; Pues llegó a nuestro conocimiento mediante

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revelación especial del mismo Dios. Por tanto es de la mayor importancia que recojamos las pruebas escriturales de ella. 2.2.1 Pruebas del A.T El A.T no contiene una revelación completa de la existencia trinitaria de Dios, pero contiene varias indicaciones de ella. Y esto es exactamente lo que debía esperarse. La Biblia nunca trata de la doctrina de la Trinidad como una verdad abstracta, pero revela la vida trinitaria en sus diversas relaciones como una realidad viviente, y hasta cierto punto, en conexión con las obras de creación y providencia; Pero particularmente en relación con la obra de redención. Su más fundamental revelación, no estaba dada en palabras sino en hechos. Algunas veces se ha encontrado una prueba de la Trinidad en la distinción de Jehová y Elohim y también en el plural Elohim, aunque esta distinción en un poco dudosa. Es mucho más admisible que los pasajes en los que Dios habla de sí mismo en forma plural (Génesis 1:26, 11:7), contengan una indicación de distinciones personales en Dios, aunque estas no apunten a una Trinidad sino tan solo a una pluralidad de personas. Indicaciones todavía más claras de tales distinciones personales se encuentran en aquellos pasajes que se refieren al Ángel de Jehová quien por una parte se le identifica con Jehova, y por la otra se le distingue de Él. (Génesis 16:7-13; 18:1-21; 19:1-28); Y también en los pasajes en los que se personifica la palabra o la sabiduría de Dios (Salmos 33:4-6; Proverbios 8:12-31). De esta manera el A.T contiene acerca de la Trinidad una clara anticipación de la revelación que en forma más completa tiene el N.T. 2.2.2 Las pruebas del N.T El N.T lleva consigo una revelación más clara de las distinciones que hay en la Deidad. Si en el A.T. Jehová está representado como el Redentor y Salvador de su pueblo, en el Nuevo el Hijo de Dios claramente se destaca en esa capacidad (Mateo 1:21; Lucas 1:76-79, INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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2:17; Juan 4:42). Y si en el A.T. es Jehová quien mora en Israel y en los corazones de los que le temen en el Nuevo es Jehová el que mora en medio de Israel y en los corazones de los que le temen, en el Nuevo es el Espíritu Santo El que habita en la iglesia (Hechos 2:4; Romanos 8:9; 1ª Corintios 3:16; Gálatas 4:6; Efesios 2:22). El N.T ofrece la revelación clara de Dios que envía a su hijo al mundo (Juan 3:16); Y los dos, El Padre y el Hijo envían al Espíritu Santo (Juan 14:26, 15:26, 16:7). Encontramos al Padre dirigiéndose al Hijo (Marcos 1:11); El Hijo comunicándose con el Padre (Mateo 11:25-26; 26:39) y el Espíritu Santo orando a Dios en los corazones de los creyentes (Romanos 8:26). DE esta manera las Personas de la Trinidad, separadamente, se perfilan con claridad en nuestro entendimiento. En el bautismo del Hijo, El Padre habla desde el cielo y el Espíritu Santo desciende en forma de Paloma (Mateo 3:16-17). En la gran comisión Jesús menciona las tres Persona: “…Bautizándoles en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo” (Mateo 28:19). También se mencionan juntos en 1ª Corintios 12:4-6; 2ª Corintios 13:14 y 1ª Pedro 1:2 3 Formulación de la doctrina de la trinidad La doctrina de la Trinidad puede discutirse mejor y brevemente, relacionándola con varias proposiciones que juntas constituyen un epitome de la fe de la iglesia en relación con este punto. 3.1 Hay en el Ser Divino una sola esencia indivisible (ousia, en griego significa esencia). Dios es uno en la esencia de su ser o en su naturaleza constitucional. Algunos de los primero padres de la iglesia usaron el término “sustancia” como sinónimo de “esencia”. Por esta razón en el presente, los dos términos: sustancia y esencia se usan indistintamente. 3.2 En este Ser Divino hay tres personas o subsistencias individuales: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Esto está probado por los diversos pasajes citados anteriormente. Aquí hay que aclarar que en Dios no hay tres individuos uno junto al otro o separados uno del otro, sino solamente INSTITUTO BIBLICO SALVADOREÑO

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distinciones personales de uno mismo, dentro de la esencia divina, que es una no solo genérica sino también numéricamente. 3.3 La esencia de Dios, plena no fragmentada, pertenece por igual a cada una de las tres personas. Esto significa que la esencia Divina no está dividida entre las tres personas, sino que está plenamente con todas su perfecciones en las tres Personas de tal manera que tiene una unidad numérica de esencia. 3.4 La Subsistencia de y operación de las tres personas del Ser Divino están marcadas. Hay un orden seguro en la Trinidad ontológica. En subsistencia personal el Padre es primero, el Hijo, segundo, y el Espíritu Santo, tercero. Difícilmente sería necesario decir que este orden no entraña ninguna prioridad de tiempo o de dignidad de esencia, sino solamente un orden lógico de derivación. El Padre no es engendrado ni procede de ninguna de la tres Personas; El Hijo es eternamente engendrado del Padre, y el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo desde toda la eternidad. Generación y procesión tienen lugar en el Ser Divino e implican una cierta subordinación como el modo de subsistencia personal pero ninguna subordinación que tenga que ver con la posesión de la esencia Divina. Esta Trinidad ontológica y su orden inherente es la base metafísica de la Trinidad económica. 3.5 Hay ciertos atributos personales por medio de los cuales se distinguen las tres personas. Estas son obras internas del Ser Divino, que no terminan sobre la criatura. Son operaciones personales, no ejecutadas por las tres personas juntamente y son incomunicables es decir, generación es un acto solamente del Padre, filiación pertenece al Hijo solamente y procesión puede atribuirse solamente al Espíritu Santo. Por otra parte la creación se atribuye principalmente al Padre, la redención al Hijo y la santificación al Espíritu Santo. 3.6 La iglesia confiesa que la Trinidad es un misterio que sobrepasa la compresión del hombre. La Trinidad es un misterio no precisamente en el sentido bíblico en que eso es una verdad que anteriormente estuvo

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escondida, pero que ahora ha sido revelada; sino en el sentido que el hombre no puede comprenderla y hacerla inteligible. Es inteligible en algunas de sus relaciones y modo de manifestación, pero ininteligible en su naturaleza esencial. 4 Varias analogías sugeridas para arrojar luz sobre el Tema Desde muy al principio de la era cristiana se hicieron intentos de arrojar luz sobre el Trino ser de Dios, sobre la Trinidad en la unidad y la unidad en la Trinidad, por medio de analogías traídas de diferentes fuentes. Aunque todas resultaron deficientes no puede negarse que fueron de algún valor en la discusión cristiana. Esto se aplica particularmente a aquellas que se derivan de la naturaleza constitucional o de la psicología del hombre. Atendiendo al hecho de que el hombre fue creado a la imagen de Dios, no es sino natural aceptar que si hay algunos rasgos de la vida trinitaria en la criatura, los más claros se hallan en el hombre 4.1 algunas de estas ilustraciones o analogías se tomaron de la naturaleza inanimada o de la vida de las plantas, como el agua de la fuente, el arroyuelo y el río; o la niebla, la nube y la lluvia; o en la forma de lluvia, nieve y hielo (el agua en sus tres estados: sólido, gaseoso y liquido); o como el árbol con su raíz, tronco y ramas. Estas y todas las ilustraciones parecidas son muy deficientes, pero nos dan una pequeña luz sobre el tema de la Trinidad. Es claro que a estas ilustraciones les falta completamente la idea de la personalidad. 4.2 Otras de mayor importancia, fueron sacadas de la vida del hombre, por ejemplo en la parte física el hombre tiene cabeza, tronco y extremidades; Pero por sobre todo está la parte de la constitución de los procesos de la mente humana. Estas fueron consideradas de especial significación porque el hombre lleva la imagen de Dios. A esta clase pertenece la unidad psicológica del intelecto, los afectos y la voluntad, (San Agustín)la unidad lógica de tesis, antítesis y síntesis (Hegel). En todas éstas tenemos una cierta trinidad en unidad, pero no una tri personalidad en unidad o sustancia.

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