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• LunaGonzález

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Ficha técnica: Título: Asesinato en el Senado de la Nación

Dirección: Juan José Jusid Producción: Horacio Casares Guion: Carlos Somigliana Música: Baby López Fürst Fotografía: José María Hermo Montaje: Luis César D'Angiolillo Escenografía: Luis Diego Pedreira Vestuario:

Beatriz De Benedetto

Protagonistas: Pepe Soriano, Miguel Ángel Solá, Oscar Martínez, Alberto Segado, Arturo Bonín, Rita Cortese, Villanueva Cosse, Juan Leyrado, Manuel Callau, Diego Varzi, Juan Manuel Tenuta, Marta Bianchi, Selva Alemán, Ana María Picchio, Mónica Galán, Osvaldo Santoro, Manuel Vicente, Noemí Frenkel, Miguel Peludi, José María López, Guillermo Marcos País: Argentina Año: 1984 Duración: 139 min Compañías: Productora Horacio Casares Prod. S.A.

Análisis de la película:

La película “Asesinato en el senado de la nación” está situada en el gobierno de Agustín Pedro Justo, durante la “Década Infame”, y narra los acontecimientos que derivan en la muerte del senador electo Enzo Bordabehere, a partir de la investigación que lleva a cabo el senador Lisandro de la Torre sobre el pacto Roca – Runciman, y sus connotaciones en la economía nacional, oponiéndose al régimen fraudulento, represivo y corrupto de Justo. En aquellas épocas de “fraude patriótico” (método que utilizaba la clase dominante oligarca para mantenerse en el poder y librar al país, es decir a la patria, de las influencias del radicalismo y el socialismo) existió una clase obrera combativa y reorganizada dispuesta a dar su apoyo a personalidades como Lisandro de la Torre en pos de que pare el endeudamiento y la dependencia del país en beneficio de intereses extranjeros relacionados con una minoría dominante, en términos económicos, en nuestro país, a pesar de que consideraban a De la Torre un burgués. La firma del tratado Roca–Runciman, el 1º de mayo de 1933, surge a partir de la conferencia de Ottawa, en la que Gran Bretaña, como producto de la crisis del 30, decide proteger el mercado de carnes en la Commonwealth, es decir en sus colonias (Canadá, Australia y Sudáfrica) y solo importar carne de allí. Esto afectaba directamente a la Argentina, ya que Inglaterra era su principal socio económico. Para evitar que esto afectara nuestra economía, se pactó que Inglaterra se comprometía a comprar carnes argentinas en cuanto su precio fuera menor al de los demás proveedores mundiales. Además, Argentina libró de impuestos la importación de productos ingleses, y se comprometió a no habilitar frigoríficos nacionales, al mismo tiempo que creó el “Banco Central de la república” bajo conducción de funcionarios británicos, y se entregó el monopolio de los transportes en Buenos Aires a capitales ingleses. Cláusulas públicas del Pacto: 

La Argentina se aseguraba una cuota de exportación no menor a 390.000 toneladas de carne enfriada. El 85% de las exportaciones de este país debían realizarse a través de frigoríficos extranjeros. El Reino Unido "estará dispuesto a permitir" la participación de hasta un 15% de frigoríficos argentinos en la

cuota de carne (ya cubierta en su casi totalidad por el Frigorífico Gualeguaychú y el Municipal de Buenos Aires). 

La Argentina dispensaría a las empresas británicas "un tratamiento benévolo que tienda a asegurar el mayor desarrollo económico del país y la debida y legítima protección de los intereses ligados a tales empresas"

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Mientras hubiera control de cambios en la Argentina (limite del capital dispuesto para importaciones), todo lo que Gran Bretaña pagara por compras en la Argentina, podía volver al país deduciendo un porcentaje para pagos de deuda externa.

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La Argentina mantendría libres de aranceles el carbón y demás mercaderías que se importaban en ese momento exentas de impuestos, comprometiéndose a comprar en Gran Bretaña el total del carbón que consumía.

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La Argentina se comprometía a no aumentar los aranceles aduaneros.

Cláusulas secretas del Pacto: 

Se crea el Banco Central en la Argentina con gran predominancia de funcionarios y capitales británicos.

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Se fijan las bases para la creación de la Corporación de Transporte, que le terminaría por dar a Gran Bretaña el monopolio absoluto de los medios de transporte argentinos. La misma se crea en 1936 en el Pacto Eden-Malbrán, firmado luego de que el Pacto Roca-Runciman caducara y con características muy similares.

El pacto Roca- Runciman fue producto de la desesperación, y de la tendencia a beneficiar a la minoría dominante. Podrían haberse tomado otro tipo de políticas que fomenten la atracción de capitales a la industria ganadera, para mejorar la infraestructura y reducir costos, y a la vez ampliar nuevos mercados, para no depender meramente de Gran Bretaña, pero nada de esto ocurrió como explicamos anteriormente, y se benefició a un pequeñísimo grupo de criadores invernadores vinculados al gobierno y a unos pocos frigoríficos extranjeros y perjudicó a miles de pequeños y medianos productores agropecuarios y a los frigoríficos de capital nacional.

Lisandro De la Torre, en defensa de los intereses nacionales, realiza una investigación sobre el negocio ganadero en nuestro país y denuncia en el Senado al frigorífico Anglo por evasión de impuestos. Para corroborar su denuncia, creó la “Comisión investigadora”, la cual tuvo complicaciones a la hora de realizar su investigación ya que en el frigorífico Anglo no contaban con los libros y las planillas de costos, ni tampoco con una oficina de costos, además de que no contaban con la colaboración del personal del frigorífico, por lo que la comisión investigadora debía buscar todo por su cuenta. La comisión investigadora recibió información de un trabajador del frigorífico, al que torturarían y despedirían posteriormente las autoridades de la empresa. En la película se puede ver como uno de los trabajadores se acerca al vehículo en el que estaba Yasky, funcionario de la comisión, y le entrega un papel que decía “Norman Star”. Yasky deduce que “Norman Star” era el nombre de un barco británico y decide inspeccionarlo junto a la prefectura. Cuando allana el barco, los ejecutivos de Anglo manifiestan que era ilegal entrar por la fuerza a un barco inglés y que de esta manera agredían al Estado británico porque equivalía a entrar a una propiedad en territorio Inglés, a lo que Yasky contesta que el barco estaba en puerto Argentino, e ingresan igual, encontrando los libros contables dentro de cajas etiquetadas como “corned beaf” con el sello del Ministerio de Agricultura. Esto era una prueba clave de la complicidad del Estado en esta maniobra de evasión impositiva. Con las pruebas, Lisandro de la Torre acusaría directamente por fraude y evasión impositiva al frigorífico Anglo y aportaría pruebas irrefutables que comprometían directamente en el negociado a dos ministros del presidente Agustín P. Justo, el Ministro de Hacienda, y el Ministro de Agricultura. En el Senado de la Nación se puede decir que De la Torre se encontraba solo contra el resto de los senadores, conservadores y cómplices del fraude, por este motivo nunca se le permitió a Bordabehere asumir su cargo de senador, ya que él era amigo y seguidor de De la Torre. En la película Lisandro manifestaba: “se dice que estoy solo. Eso puede ser cierto; estoy solo frente a una coalición formidable de intereses; estoy solo frente a empresas capitalistas que se cuentan entre las más poderosas de la tierra; estoy solo frente a un gobierno cuya mediocridad, en presencia del problema ganadero, asombra y

entristece; y así, solo, me batiré en defensa de una industria argentina esquilmada e inerme”. Durante la semana en la que se produciría el asesinato, en el medio del debate, o del discurso de De la Torre, hubo amenazas y discusiones subidas de tono. El día que se produce el asesinato, hubo una discusión entre los ministros y De la Torre, en la que el ministro de Agricultura recurrió a la fuerza y empujó a Lisandro contra el piso, a lo que Valdez Cora, en el medio del desmán y la confusión, aprovecho para dispararle a Lisandro, pero asesino a Bordabehere, quién se había interpuesto entre Lisandro y el ministro. Valdez Cora era un ex comisario, a quién se lo expulsó de la policía por corrupción. Era miembro del partido conservador y contaba con una gran cantidad de influencias en el gobierno, las cuales utilizaba para beneficiarse él o sus amigos, como en el caso del Burdel de Recoleta que querían relocalizar en provincia, y Valdez colaboró para que eso no sucediera. Valdez respondía a Don Alberto, un senador y terrateniente, también corrupto y conservador. Ramón Valdez Cora fue detenido y confesó ser el autor material del asesinato de Bordabehere. La película se encarga, durante todo el film, de representar la personalidad de este detestable hombre, corrupto, violento, que presentaba un especial desprecio por las mujeres de su familia, y las mujeres en general, inmoral y servicial a los intereses de la oligarquía, que podemos contraponer con la personalidad de Lisandro de la Torre, a quién se lo presenta como un hombre moral, justiciero, patriota, intelectual, e interesado en la voz del pueblo. A nuestro parecer, la película, y el asesinato de Bordabehere, en general, sintetizan el modus operandi de un tipo de Estado corrupto, y fraudulento, la relación entre la política y la violencia, la represión policial hacia los trabajadores, la vinculación entre la política y los negocios, y la tendencia de un Estado oligárquico a beneficiar a los grupos económicos monopólicos con los que se relacionaban y a los intereses de un Estado extranjero, como el de Gran Bretaña, dejando de lado las necesidades del pueblo y la necesidad de ser un país que no dependa económicamente de potencias extranjeras, y que pueda desarrollar su propia industria para prosperar en el mercado global.