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• AnNie QuiNtero

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Un mundo maravilloso es una película que me deja mucho que decir acerca del gobierno, en este caso, el mexicano, pero no solo echarle la culpa al gobierno, si no al ser humano y a los que somos ciudadanos. El ser humano en mi opinión, es cómodo, no desea hacer esfuerzo alguno, no si ese esfuerzo no es una necesidad, es decir: si se puede tomar un elevador en lugar de unas escaleras, tomaremos el elevador, pero si no hay otra opción más que tomar las escaleras tendremos que hacerlo. La forma de pensar del porcentaje mayor de las masas es asi, y buscan que las oportunidades aparezcan de la nada, lo cual es poco probable. El gobierno así como los ciudadanos tiene su deficiencia, su trabajo es ayudar y dar el “empujón” necesario para los que están aun hundidos puedan salir a respirar aire, sin embargo, desarrollan programas de los que la gente, en algunos casos, se aprovechan y buscan vivir del gobierno. En la película podemos ver como Juan Pérez se la pasa borracho, sin ganas de hacer nada, ya que el sigue día a día con su rutina, sin hacer cambios, ya que no tiene un incentivo para hacer más al respecto. Hasta que llega la promesa de Rosita, la cual juraba que si el era capaz de conseguir casa y empleo estaba dispuesta a desposarlo de inmediato, esto incentiva a Juan para salir adelante, intenta ir a conseguir un empleo y se ve rechazado por su primer intento y deja de insistir. Como dije antes el ser humano es cómodo, Juan trata de buscar de una u otra forma chantajear al “licenciado” que estaba en el gobierno para asi obtener lo que busca. Este le ofrece un empleo y un dinero para que salga adelante, el trabajo para Juan representa esfuerzo, pero decide tomar el “elevador” y así le pide al licenciado una casa, el por fin logra obtener todo lo que desea: auto, esposa, casa y trabajo. Pero ¿Qué esfuerzo tuvo que hacer para conseguir todo aquello? Ninguno, por eso mismo es que no le daba el valor que realmente tenía todo eso que le había servido en bandeja de plata. Sin esfuerzo el ser humano no da valor a las cosas, la casa de Juan así como las otras cosas que se le habían dado sin esfuerzo, cayeron, ya que Juan no supo mantenerlas, debido a que no les daba el valor que realmente tenían. Al final Juan pierde todo lo que le habían dado, desesperado busca venganza después de pasar 3 años en la cárcel, se da cuenta que esta no es factible, así que decide arrebatarle todo a una familia que realmente sabía lo que era el esfuerzo. Pero ¿no tenia Juan más opciones? Si, tenía la opción de esconderse y buscar la forma de salir adelante. Pero el gobierno ya se lo había complicado demasiado, a veces el gobierno el cual está formado por personas que el pueblo elije o debería ser así, toma decisiones por nosotros equivocadas, que afectarían de manera

negativa a los ciudadanos y gracias a esas decisiones a algunos les cuesta mucho más esfuerzo lograr las cosas que no deberían ser así de difíciles. Juan realmente lo que hizo es una mala toma de decisiones, las decisiones son caminos que pueden llevar a uno u otro resultado, malas decisiones llevan a lugares negativos y erróneos. Pienso que lo que hace falta en el gobierno para acabar con la corrupción es la simplificación de las cosas, sin tantas vueltas, cualquier trámite de gobierno siempre es embrolloso y molesto de hacer. Por eso mucha gente opta por hacer las cosas fáciles y cómodas, dar 100 pesos a un oficial a pagar la multa, pero no es tanto la multa sino el hecho de tener que ir a perder un día para poder pagar esa multa.