Sobrevivir Para Contarlo

SOBREVIVIR PARA CONTARLO CAPITULO 1 Inmaculée nació en Ruanda un pequeño país de África, en provincia occidental ruandes

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SOBREVIVIR PARA CONTARLO CAPITULO 1 Inmaculée nació en Ruanda un pequeño país de África, en provincia occidental ruandesa de Kibuye en la aldea de Mataba. Su familia fue muy unida y con buenos valores iniciando con sus padres Leonard Ukulikiyinkindi y Marie Rose Kankindi, el primero era maestro y ayudaba mucho con sus buenas obras igual que la madre, tenía tres hermanos, Aimable Ntukangwe, el mayor, Damascene Jean Muhirwa y John Marie Vianney Kezeneza, el menor. CAPITULO 2 Inmaculée descubre la gran división étnica que existen en Ruanda y es afligida por la misma debido a que no es aceptada en una escuela pública debido a que es Tutsi, pero con esfuerzo logra entrar a Lycée de Notre Dame d’Afrique. CAPITULO 3 Se desata la guerra en Ruanda, Inmaculée lo descubre gracias a su profesor, los Hutus fuera de la escuela amenazan a Inmaculée, cuando va a su aldea en navidad se entera que su padre fue capturado y torturado dejándolo sin comida por el que era el alcalde de su aldea. CAPITULO 4 Inmaculée obtuvo una beca en la universidad Nacional de Butare, se había esforzado mucho para conseguirla, después de dos años en la Universidad Inmaculée encontró un chico con el cual tuvo un noviazgo. El presidente de Ruanda hizo un pacto con los rebeldes Tutsi para que tuvieran un papel en el manejo del país. CAPITULO 5 Inmaculée vuelve a casa para semana Santa, va con un amigo llamado Vianney, se encuentra con toda su familia excepto, Aimable que está en Senegal. Su hermano Damascene advierte a la familia del peligro que están corriendo por los Hutus, a la madrugada se enteran que acaban de matar al presidente de Ruanda y no sabían que en ese momento el genocidio había iniciado. CAPITULO 6 Todo el día la familia de Inmaculée estuvo pendiente de las noticias que decían en la radio, pero llegaron a la aldea los Hutus asesinando y todos los integrantes de la

aldea fueron a la casa de Inmaculée a pedir ayuda de Leonard, su padre. Inmaculée tuvo que salir corriendo de la casa ya que se aproximaban los Hutus, salió corriendo con Aimable hasta la casa del Pastor Murinzi CAPITULO 7 Inmaculée se dio cuenta del rechazo que sufría por su antigua mejor amiga y de su antiguo profesor, sus hermanos llegaron donde ella estaba y le contaron lo ocurrido, dejándola impactada debido a que quemaron su casa y sus padres salieron huyendo sin saber a dónde. CAPITULO 8 El pastor trató de hacer lo que más pudo para cuidar a todas las mujeres, las cambia de cuarto para que no sospecharan que ellas están ahí, pero no podía mantener a los hombres en la casa también así que Inmaculée debía decirle a su hermano que debía irse y así lo hizo. CAPITULO 9 El pastor tuvo que esconder a las seis mujeres en un baño minúsculo de aproximadamente un metro de ancho por un metro veinte de largo, allí pasaron días, hasta que una muchedumbre pasó a revisar la casa del Pastor, con mucho miedo se aferraron a Dios y no las encontraron, pero volverían a pasar y la búsqueda sería mucho más profunda así que Inmaculée en medio de sus oraciones tuvo la idea de dejar el armario en frente de la puerta del baño y así lo hizo el padre. CAPITULO 10 Inmaculée se apegó a Dios como nunca, nunca paraba de rezar y pensar que su familia estaba bien, un día el padre llegó a darles malas noticias, el país estaba paralizado hasta que no se matara al último Tutsi en Ruanda. CAPITULO 11 Al entrar por segunda vez a la casa del pastor los asesinos, Inmaculée se encontraba en un conflicto con su conciencia debido a que los odiaba con todas sus fuerzas, pero oraba por que se pudieran salvar, es así que entendió que eran como niños y que como niños merecían el mismo amor y perdón que correspondía a todos. CAPITULO 12 Inmaculée oraba sin parar aferrándose a su rosario como un alca, logrando enfocas

sus pensamientos y energía en Dios, el padre llegó al baño a decirle que su padre era un miembro del PFR pero ella se negaba a aceptarlo y lo refutó. CAPITULO 13 El enfrentamiento entre Hutus y Tutsis estaba cada vez más en auge, las naciones unidas retiraban sus tropas y el mundo entero hacia como si nada ocurriera en Ruanda, el pastor compartió su secreto con dos de sus hijos menores, los más amable y comprensivos, llegaron dos mujeres más al pequeño refugio. CAPITULO 14 Inmaculée con su gran apego a Dios tuvo una visión, él quería que aprendiera inglés, dado que se creía que soldados de la ONU vendrían ayudarlos y ellos solo hablaban en ingles, para esto el pastor le entregó a Inmaculée dos libros en este idioma y un diccionario de inglés a francés, el novio de Inmaculée llegó a casa del pastor, pero nada volvería a ser igual con él dado que no era el mismo de antes. CAPITULO 15 Inmaculée escuchaba en la radio que tropas francesas habían llegado a Ruanda y tuvo le pidió al pastor que las llevara hasta donde estaban las tropas, el pastor pensando que ya con tanto encierro estaban perdiendo la razón las llevó una madruga a ver una película, pero fue un error ya que un criado los vio. CAPITULO 16 Los hutus fueron a la casa del pastor después de que el criado les contara sobre lo que vio, pero no las encontraron gracias a las oraciones de Inmaculée, Dios las protegió. Después de esto los soldados franceses llegaron por fin al pueblo donde ella estaba y el pastor decidió sacarlas de ahí para entregarlas a los soldados. CAPITULO 17 Inmaculée junto con las demás Tutsi llegaron al campamento francés gracias a la ayuda del pastor y sus hijos, allí se enteró de lo que le había pasado a su familia, como los mataron. Los trasladaron a la base militar de los franceses al norte de Ruanda. CAPITULO 18 Inmaculée leyó la carta que su hermano Damascene le había escrito antes de tratar de irse del país, y recordó como había sido asesinado su hermano y la valentía con la que había enfrentado a sus asesinos.

CAPITULO 19 En el campamento de refugiados Inmaculée hizo muy buenos amigos, tuvo un pretendiente llamado Pierre al cual tuvo que dejarle claro que solo tenía espacio para Dios en su vida. Inmaculée recibía a los refugiados y uno de tantos fue Aloise una mujer que había ayudado su madre, esta mujer le prometió que cuando se terminara la guerra se la llevaría a ella y sus amigos a la capital para cuidarla. CAPITULO 20 Por órdenes de altos mandos los soldados franceses tenían que desalojar el refugio, Inmaculée quedó impactada con esta noticia, pero los soldados franceses los llevarían a una base del PFR, pero a mitad del camino los abandonaron e Inmaculée tuvo que ir con dos hombres a la base del PFR. CAPITULO 21 Gracias a Bazil que era un miembro del PFR y vecino de Inmaculée, los soldados y el capitán del PFR supieron que si eran Tutsi y les ayudaron, los llevaron a un refugio por un tiempo y después los llevaron a la capital donde Aloise esperaba que estuviera su esposo y así fue, fueron a la casa de Aloise que estaba destruida y entre todos la reconstruyeron en unas pocas semanas. CAPITULO 22 Inmaculée buscó trabajo en la ONU, fue varias semanas y logró conseguirlo gracias a Pierre Mehu, el cual le dio un trabajo de secretario y posteriormente fue ascendiendo, cuando fue el momento se fue de la casa de Aloise, con su amiga Sarah la cual la encontró en casa de Aloise después de volver del trabajo. CAPITULO 23 Inmaculée con ayuda del capitán de la ONU pudo regresar a su aldea, la primera vez que fue escuchó los relatos de las muertes de su familia pero no lo soportó y se llenó de odio su corazón, en la noche oró para que no tuviera esos sentimientos y logró evitarlos, cuando volvió enterró a su madre y su hermano con ayuda de familiares y vecinos. CAPITULO 24 Inmaculée tuvo un sueño que la llenó de esperanza, vio a su familia, después de esto fue a su pueblo, visitó a sus familiares, las tumbas de su madre y hermano y finalmente fue a la cárcel del pueblo donde Semana, el nuevo alcalde estaba y

donde encontró al asesino de su familia y lo perdonó.