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MEVLANA JALALUDIN RUMI. Masnavi. Versos espirituales. Tomo 2. Ed. Dervish International, 1993.

Sobre la tradición "Yo era un tesoro oculto y deseaba ser conocido y he creado al mundo para que se me conozca"

Destruye tu casa, y con el tesoro escondido en ella1 serás capaz de construir miles de casas. El tesoro yace bajo ella; no hay remedio, no vaciles en echarla abajo ¡No te demores! Pues con la moneda de ese tesoro se pueden construir mil casas sin trabajo. Ten seguridad de que al final esa casa será destruida y el divino tesoro se verá debajo de ella. Pero no te pertenecerá, porque en verdad2 ese precio es el salario por destruir la casa. Cuando uno no ha hecho el trabajo no recibe el pago; "El hombre no obtiene nada por lo que no haya trabajado".3 Entonces morderás tus dedos diciendo " ¡Ay! Esa luna brillante estaba escondida bajo una nube. No hice lo que me dijeron por mi bien; ahora la casa y el tesoro están perdidos y mi mano vacía." Tu has tomado tu casa o la has alquilado y no es de tu propiedad para comprar o vender. En cuanto al término del arriendo es hasta tu muerte; en ese tiempo debes hacer de ella algo útil.

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Comparar con el Hadis, "Muere antes de morir, contradice los deseos de tu carne y encontrarás el tesoro espiritual." El comentarista turco traduce ruh por Haqq Yoluna, "en honor de la verdad", en el camino de la verdad. El comentarista Lucknow, como es de costumbre, elude la dificultad. 3 Corán LIII, 39. 2

 

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Oraciones para la iluminación espiritual Oh Dios, que no tienes igual, vuelca Tu favor sobre mí; ya que con este discurso has puesto un aro en mi oreja, tómame por la oreja y arrástrame a esa asamblea sagrada, donde Tus santos en éxtasis beben Tu vino puro. Ahora que me has hecho oler su perfume, ¡no apartes de mí ese vino almizclado, oh Señor de la fe! Tanto hombres y mujeres, todos, participan de tu bondad, Tú no escatimas tus dones, oh Oyente de la oración; las oraciones son concedidas por Ti antes de ser enunciadas. ¡Tú abres la puerta en cada instante para admitir corazones! ¡Cuántas letras Tú escribes con tu Pluma Todopoderosa! Maravilladas ante ellas las piedras se convierten en cera. Tu escribes la Nun de la ceja, la Sad del ojo, y la Jim de la oreja, para deslumbrar a la razón y los sentidos. Estas letras ejercitan y suspenden la razón; ¡continúa escribiendo, oh Bello e Ingenioso Escribiente! ¡Imprimiendo constantemente sobre el No-ser las formas del mundo de las ideas, para confundir todo pensamiento!4 Sí, copiando allí las bellas letras de la página de los ideales, a saber, el ojo, la ceja, el bigote y el lunar. En cuanto a mí, seré un amante del No-ser, no de la existencia, porque el amado del No-ser es más bendito.5 Dios hizo a la razón lectora de todas estas letras, para sugerirle reflexiones sobre esa efusión de gracia.6 La razón, como Gabriel, aprende día a día su porción diaria de la "Tabla Indeleble" 7 ¡Contempla las letras escritas sin manos sobre el No-ser! ¡Contempla la perplejidad de la especie humana ante esas letras! Cada uno está perplejo ante estos pensamientos, y cava en busca del tesoro oculto, con la esperanza de encontrarlo. La perplejidad de la especie humana acerca de su verdadera meta es comparada con el aturdimiento de los hombres en la oscuridad, buscando el Qibla en todas direcciones, y recuerda el texto "Oh, la desdicha que recae sobre mis servidores".                                                               4

Aquí tenemos otra doctrina platónica "Algunos dicen que la creencia de los Sufis es la misma que la de los Ishraquin (Platonistas)" Dabistan i Muzahib, por Shea y Troyer, III, 281. 5 "Yo reconoceré el No-ser de todo este ser fenoménico, y buscaré la aniquilación". 6 El traductor Bulaq reproduce An naward así.  7 La "Tabla Indeleble" (de los decretos de Dios) se aplica aquí al Logos, el canal a través del que Dios renueva el "mundo de la creación" día por día.

 

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Luego siguen reflexiones sobre el sacrificio que hizo Abraham del pavo real de la ambición y la ostentación. Luego viene un discurso sobre la tesis de que todos los hombres pueden reconocer los dones de Dios en la cólera Divina, pero la misericordia de Dios está a menudo oculta en Sus castigos, y viceversa, y son sólo los hombres de profundo discernimiento espiritual, quienes pueden reconocer los actos de misericordia y los de cólera ocultos en sus opuestos. El objeto de este ocultamiento es el de poner a prueba las disposiciones de los hombres; en concordancia con el texto "Para probar cuáles de ustedes serán en verdad más rectos".8

CUENTO VII De cómo fue creado Adán de un puñado de tierra traído por un Ángel Cuando el Todopoderoso decidió crear la especie humana para que fuera probada con el bien y el mal, comisionó al ángel Gabriel a fin de que trajera un puñado de tierra con el propósito de formar con él el cuerpo de Adán. Por consiguiente Gabriel se preparó y se dirigió a la Tierra para ejecutar las órdenes divinas, Pero la Tierra, temerosa de que el hombre creado de esa manera se rebelara en contra de Dios, y atrajera Su maldición, protestó ante Gabriel y le suplicó que se abstuviera. Ella manifestó que en el día final Gabriel tendría preeminencia sobre los ocho ángeles que entonces iban a sostener el trono, y que por lo tanto no era sino justo que prefiriera la misericordia a la condena. Por último Gabriel le concedió su petición y regresó al cielo sin tomar el puñado de tierra. Entonces Dios envió a Miguel con la misma misión y la Tierra le presentó excusas similares y él también escuchó sus clamores y regresó al cielo sin haber tomado un puñado. Se excusó ante el Todopoderoso, citando el ejemplo de las gentes a las que fue enviado el profeta Jonás, que fueron liberadas de las penalidades por haberse lamentando de sus errores9 y el texto "Si Él así lo quiere, te liberará de aquello que le niegues desviar".10 Entonces Dios envió a Israfil con idéntica orden y él también fue desviado de su ejecución por una intimación divina. Por último Dios envió a Izrail, el ángel de la muerte, quien por ser de una posición más rigurosa que los otros, cerró resueltamente sus oídos a las súplicas de la Tierra y trajo de vuelta el puñado de tierra requerido. La Tierra lo presionó con el alegato de que la orden de Dios para llevarse un puñado de sustancia en contra de su voluntad no pasaba por encima de la de tener piedad de los suplicantes; pero Izrail no quiso escucharla, destacando que, de                                                               8

Corán LXVII, 2.  Corán X,98 10 Corán VI,41  9

 

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acuerdo con los cánones de la interpretación teológica, no era permisible recurrir al razonamiento analógico para evadir una clara y categórica orden. El agregó que al ejecutar este mandato, por penoso que pudiera ser, debía ser considerado solamente como una lanza en la mano del Todopoderoso. La moraleja es que cuando cualquiera de las criaturas de Dios nos hace daño, debiéramos considerarla sólo como instrumento de Dios, que es el Único Real Agente.

El mérito de un hombre depende de los objetos de su aspiración Un día, un estudiante preguntó a un predicador, diciendo "Oh, muy ortodoxo ornamento del púlpito, tengo una pregunta para hacerte, oh señor del saber; responde a ella en esta congregación. Un pájaro se posó en lo alto de un muro; ¿qué era mejor, su cabeza o su cola?" El respondió, "Si su cara miraba hacia la ciudad, y su cola hacia las aldeas, entonces su cara era mejor. Pero si su cola apuntaba a la ciudad, y su cara hacia las aldeas, entonces prefiere su cola a su cara". Un pájaro vuela con sus alas hacia el nido, las alas de un hombre son su aspiración y meta. Si un amante se mancha con el bien y el mal, no repares en esto; más bien considera su aspiración, Aunque un halcón sea todo blanco y sin par en su forma, si caza ratones es despreciable y sin mérito. Y si una lechuza fija su afecto en el rey, ella es en realidad un halcón; no mires entonces su forma exterior. La arcilla de Adán fue amasada en los límites de una cubeta, pero él fue exaltado por encima del cielo y las estrellas. "Hemos honrado a Adán"11no estaba dirigido al cielo sino al mismo Adán, lleno de defectos como era. ¿Alguna vez fue propuesto a la tierra o al cielo recibir belleza, razón, el habla y la aspiración?12                                                               11

Corán XVII, 72. "Propusimos a los cielos y a la tierra que recibieran el depósito pero ellos rehusaron la carga, el hombre la tomó a su cargo, pero demostró ser injusto e insensible". Corán XXXIII, 72.

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¿Ofrecerías alguna vez a los cielos belleza de rostro y agudeza de pensamientos? Oh hijo, ¿alguna vez has ofrecido tu cuerpo de plata, como una ofrenda a las doncellas pintadas en las paredes del baño? No, tú pasas de largo ante esas pinturas, aunque bellas como Huríes, y antes te ofrecerías más rápido a viejas medio ciegas. ¿Qué es lo que hay en esas viejas que falta en las pinturas? ¿Qué es lo que te arroja desde las pinturas hacia esas viejas mujeres? No lo digas, pues yo lo diré con palabras claras. 'Es la razón, el sentido, la percepción, el pensamiento y la vida.' A la mujer vieja la vida le fue infundida, mientras que las pinturas de los baños no tienen vida. Si esas pinturas se agitaran con vida (alma), te arrancarían tu amor por todas esas viejas. ¿Qué es el alma? Ella conoce el bien y el mal, goza ante cosas placenteras, y sufre ante los males. Puesto que entonces, el principio del alma es conocimiento, aquel que más conoce está más lleno de alma. El conocimiento es el efecto que fluye desde el alma; quien más lo posee más se parece a Dios. Por consiguiente, amado, puesto que el conocimiento es el signo del alma, quien más sabe tiene el alma más fuerte. El mundo de la almas es en sí mismo enteramente conocimiento, y quien está vacío de conocimiento está vacío de alma. Cuando el conocimiento falta en la naturaleza de un hombre, su alma es como una piedra en la llanura. El Alma Primera es el teatro de la corte de Dios, el Alma de las almas, la exhibición de Dios en sí mismo. Todos los ángeles eran pura razón y alma, pero cuando la nueva alma de Adán apareció, ellos fueron como su cuerpo. Cuando se agruparon con gozo alrededor de esta alma nueva13 se inclinaron ante ella como el cuerpo lo hace ante el alma.

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Dijimos a los ángeles '¡Póstrense ante Adán!' y todos se postraron, excepto Iblis (satanás)" Corán VI, 10.