Resumen libro

Resumen libro: Las mujeres siempre han sido sanadoras. Ellas fueron las primeras médicas y anatomistas de la historia oc

Views 157 Downloads 9 File size 90KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

Resumen libro: Las mujeres siempre han sido sanadoras. Ellas fueron las primeras médicas y anatomistas de la historia occidental. Las sanadoras fueron atacadas por su condición de mujeres y ellas se defendieron luchando en nombre de la solidaridad con todas las mujeres. No sólo se acusaban a las brujas de asesinato y envenenamiento, de crímenes sexuales y de conspiración, sino también de ayudar a sanar al prójimo. Las brujas eran empíricas: confiaban más en sus sentidos que en la fe o en la doctrina. No tenían una actitud religiosa positiva, sino activamente indagadora. En resumen, su "magia" era la ciencia de su época. Mientras las brujas ejercían en el seno del pueblo, las clases dominantes contaban con sus propios sanadores laicos (médicos formados en universidades.) La profesión médica ya había iniciado una activa campaña contra las mujeres sanadoras excluyéndolas de las universidades. La implantación de la medicina como profesión facilito la exclusión legal de las mujeres de su práctica (Ej: Jacoba Felici denunciada en 1322 por ser "incompetente y por haber tenido la osadía de curar, siendo mujer".) Las escasas mujeres que consiguieron frecuentar una escuela de medicina tuvieron que superar una serie de obstáculos sexistas. "La mujer tiene la cabeza casi demasiado pequeña para el intelecto, pero de las dimensiones precisas para el amor" → Famoso manual de obstetricia 1848. La única posibilidad abierta a las mujeres en el campo de la sanidad era hacer de enfermeras. Se definió como femenino el papel de la enfermera y se atribuyó sin dificultad características intrínsecamente "masculinas" al papel del médico. (Hasta tiempos muy recientes se enseñaba a las alumnas de auxiliar de enfermera a vestirse, a maquillarse y a imitar en general los modales de una verdadera "dama".)

Este ensayo es muy necesario, ya que nos hace notar que la mujer no solo lucho por el voto, la mujer lucho inclusive más para poder ejercer la profesión de medica sin ser mirada en menos, ademas nos hace ver lo terrible que fue este proceso, cuantas muertes hubieron de por medio, como las brujas fueron exterminadas, a la vez nos hace ver lo poderosas, lo fuerte que hemos sido y como las mujeres han salido adelante, simplemente apoyándose entre ellas mismas, entre nosotras.

Ehrenreich y English analizan la enfermería desde la evolución de su ejercicio, y formulan varias etapas de los cuidados: la de las mujeres curanderas, la de las brujas, la de las comadronas, y la de las enfermeras. Plantean que la supresión de las mujeres trabajadoras de la salud y el surgimiento del dominio de los profesionales hombres, no fueron procesos “naturales”, resultantes

automáticamente de los cambios en la ciencia médica. La supresión de las curanderas fue parte de un conflicto político, unido aconflictos más generales de clase y de sexo. Concluyen que la mujer no ha sido una circunstancia pasiva en la historia de la medicina. El presente sistema (el de la enfermera como auxiliar del médico), nació y se formó en la competencia desigual entre el hombre y la mujer curandera. El profesionalismo médico no es otra cosa que la institucionalización del monopolio de la clase alta masculina.En este sentido es un enfoque de la historia de la enfermería como historia de las mujeres. A continuación un ejemplo de represión atroz en el caso de la caza de brujas y la posterior subordinación de las mujeres en el sistema sanitario. Una muestra de cómo los intereses económicos y políticos son capaces de desproveer de dignidad a las personas. A lo largo de la historia muchas mujeres han sido quemadas y torturadas. Unas por sus saberes y oficios femeninos y otras por protestar ante las penosas condiciones de trabajo a las que se han visto sometidas. Las brujas fueron perseguidas durante más de cuatro siglos (XIV al XVIII) porque representaban una amenaza política, religiosa y sexual para la iglesia católica, protestante y también para el Estado. Fueel femicidio institucionalizado más grande de la historia. La quema de brujas fue un ataque a la resistencia de las mujeres de la época hacia el sistema imperante y al poder que habían conseguido gracias a su capacidad de curar, al control de la reproducción y a su sexualidad.  Se las acusaba fundamentalmente de tres delitos: a. El primero se refería a los delitos sexuales que supuestamenteejercían contra los hombres. Eran acusadas de poseer sexualidad porque la ejercían libremente.  El Malleus maleficarum (El martillo de las Brujas), es el famoso manual que utilizaba la autoridad en la inquisición. En él se explican bien los procedimientos. b. El segundo delito era tener poderes mágicos que podían influir en la salud y por lo tanto influir en la enfermedad y en la muerte.

Un personaje importante y con estatus, es la partera, a ellas acuden desde el mismo instante en que las mujeres se sienten mal o sospechan que están embarazadas. Son ellas quienes tienen un contactoestrecho con la embarazada, atienden a la madre desde el primer mes y en el momento del parto. En la actualidad las parteras ya no cuidan a la mujer durante puerperio, sólo bañan a la parturienta y en ocasiones a la niña/o, no lavan la ropa, ni le dan el nombre de su animal mitológico (tona). Sólo le indican a las parturientas los cuidados que debe seguir, cuidarse de lo alto/bajo; frío/caliente, detrabajar hasta los cuarenta días y no tener relaciones sexuales durante este tiempo.

La partera también puede ser curandera y de esa manera curar diferentes “males”, Doña Petra es partera y curandera, así que puede observar y vigilar a las embarazadas y atender a alguna persona de otros males que lo aquejen, no realiza “daños” a otras personas, sólo cura, aunque siente que se enferma con mayorfacilidad, por tanto mal que trae la gente, su hija ya no quiere que atienda, porque en ocasiones peligra su vida, pero a pesar de esto doña Petra sigue atendiendo partos. El curandero es una persona que tiene cualidades para sanar; existen categorías de acuerdo al dominio de alguna técnica o empleo de ciertos recursos, y así se encuentran “sobadores”, “chupadores”, “hierberos”. Sin embargo,es frecuente que los curanderos ejecuten varios procedimientos combinados, pueden efectuar una “limpia”, realizar una sobada, recetar una planta medicinal y/o aplicar inyecciones para el dolor o vitaminas. La adquisición del conocimiento es generalmente a partir de sueños o de la transmisión de éstos por la madre/padre o abuela/o. Doña Petra partera y curandera, platica la forma en la cual...

Con la lectura brujas, parteras y enfermeras por Barbara Ehrenreich y Deirdre English, nos refuerza que la mujer no solo lucho por el voto, la mujer no ha sido una circunstancia pasiva en la historia de la medicina, que ha luchado inclusive más para poder ejercer la profesión de medica sin ser mirada menos, además nos hace ver lo terrible que fue este proceso, cuantas muertes hubieron de por medio, como las brujas fueron exterminadas, a la vez nos hace ver lo poderosas, lo fuerte que hemos sido y como las mujeres han salido adelante, simplemente apoyándose entre ellas mismas, entre nosotras. El presente sistema (el de la enfermera como auxiliar del médico), nació y se formó en la competencia desigual entre el hombre y la mujer curandera. Se plantean que la supresión de las mujeres trabajadoras de la salud y el surgimiento del dominio de los profesionales hombres, no fueron procesos “naturales”, resultantes automáticamente de los cambios en la ciencia médica. La supresión de las curanderas fue parte de un conflicto político, unido a conflictos más generales de clase y de sexo. A lo largo de la historia muchas mujeres han sido quemadas y torturadas. Unas por sus saberes y oficios femeninos y otras por protestar ante las penosas condiciones de trabajo a las que se han visto sometidas. Las brujas fueron perseguidas durante más de cuatro siglos (XIV al XVIII) porque representaban una amenaza política, religiosa y sexual para la iglesia católica, protestante y también para el Estado. La quema de brujas fue un ataque a la resistencia de las mujeres de la época hacia el sistema imperante y al poder que habían conseguido gracias a su capacidad de curar, al control de la reproducción y a su sexualidad.

Aun vivimos en una sociedad en la que se hacen evidente los rastros machistas En la actualidad, vemos la presencia de las mujeres en la Universidad como algo normal, esto se debe a que las mujeres ven el avance educativo como una forma de alcanzar un escalón social más alto y cercano a la igualdad respecto a los hombres, por lo que considera la educación como herramienta para logra el cambio social. En general, el feminismo ha facilitado el acceso de las mujeres a la enseñanza en sus diferentes niveles, y ha contribuido mucho a la progresiva incorporación de las mujeres a las distintas profesiones, fomentado la presencia de la mujer en la universidad y en el ámbito científico y técnico, de forma que no quede al margen del desarrollo actual. También ha hecho visibles a muchas mujeres de la historia, destacando sus aportaciones, y ha revisado la ciencia y la cultura desde nuevos enfoques feministas. el feminismo ha contribuido mucho a la progresiva incorporación de las mujeres a las distintas profesiones, con la ayuda de otras personas y grupos sociales, que han ido removiendo obstáculos. La presencia de las mujeres en todas las profesiones, en relativamente pocos años, es un hecho positivo y revolucionario. Su mayor formación y cultura es un beneficio para toda la sociedad, y enriquece la creación científica y técnica. Sin embargo, para que esa aportación sea más completa -sin desatender sus familias- resulta imprescindible una legislación adecuada y una mayor implicación de los hombres en la familia. Algunas mujeres optan por trabajar en casa, desarrollando un trabajo de gran repercusión social, que también la legislación y la sociedad deben reconocer de forma adecuada. No se ha conseguido todavía la igualdad total de oportunidades. A nivel legislativo se han introducido algunas reformas importantes, pero en la práctica las mujeres tienen a veces sueldos inferiores y menos oportunidades que los hombres. El feminismo será un movimiento el cual su fin ha sido y será el buscar la autonomía de la mujer y que por ello busquen su igualdad de derechos ante los hombres, sin la necesidad de llegar a la violencia y de poder tener una mejor sociedad en la que no exista tanta agresión de unos hacia otros, sin importar el género, creencias tanto religiosas como políticas y así exista la tolerancia entre nosotros mismos. Y también que por medio de esto, las mujeres no lleguen a exagerar y a confundir igualdad a libertinaje de derechos…. Como al parecer lo consideran una porción de la población.

Las mujeres han sido sometidas a prejuicios e injusticias en lo que a la educación se refiere ya que durante gran parte de la historia les fue negado este derecho. Puesto que la existencia de lo que denominamos carreras tradicionalmente masculinas o femeninas es resultado de una serie de estereotipos y prejuicios sexixtas, deuna construcción social, la solución al problema debería ser tan fácil como ignorarlos. Lo ideal seria que las personas pudieran elegir una carrera universitaria libremente en función de sus capacidades.  En general, el feminismo ha facilitado el acceso de las mujeres a la enseñanza en sus diferentes niveles, y ha fomentado la presencia de la mujer en la universidad y en el ámbito científico y técnico, de forma que no quede al margen del desarrollo actual. También ha hecho visibles a muchas mujeres de la historia, destacando sus aportaciones, y ha revisado la ciencia y la cultura desde nuevos enfoques feministas. el feminismo ha contribuido mucho a la progresiva incorporación de las mujeres a las distintas profesiones, con la ayuda de otras personas y grupos sociales, que han ido removiendo obstáculos. La presencia de las mujeres en todas las profesiones, en relativamente pocos años, es un hecho positivo y revolucionario. Su mayor formación y cultura es un beneficio para toda la sociedad, y enriquece la creación científica y técnica. Sin embargo, para que esa aportación sea más completa -sin desatender sus familias- resulta imprescindible una legislación adecuada y una mayor implicación de los hombres en la familia. Algunas mujeres optan por trabajar en casa, desarrollando un trabajo de gran repercusión social, que también la legislación y la sociedad deben reconocer de forma adecuada. No se ha conseguido todavía la igualdad total de oportunidades. A nivel legislativo se han introducido algunas reformas importantes, pero en la práctica las mujeres tienen a veces sueldos inferiores y menos oportunidades que los hombres. El feminismo será un movimiento el cual su fin ha sido y será el buscar la autonomía de la mujer y que por ello busquen su igualdad de derechos ante los hombres, sin la necesidad de llegar a la violencia y de poder tener una mejor sociedad en la que no exista tanta agresión de unos hacia otros, sin importar el género, creencias tanto religiosas como políticas y así exista la tolerancia entre nosotros mismos. Y también que por medio de esto, las mujeres no lleguen a exagerar y a confundir igualdad a libertinaje de derechos…. Como al parecer lo consideran una porción de la población.  Sin embargo, hace siglos, la creencia en la existencia de brujas era real. Eran, generalmente, mujeres, aunque también había brujos, pero en la tradición occidental es un personaje muy simbólico asociado a lo femenino, la noche y lo subversivo. La imagen que tenemos de ellas es la de mujeres solitarias, que experimentaban con remedios caseros, pero, en realidad, ponían en práctica diversos conocimientos, en lo que podríamos definir como uno de los primitivos

intentos de práctica química, médica o botánica. No hay que olvidar que, en el contexto de hace siglos, la práctica médica se realizaba en entornos domésticos.  –¿Quiénes eran las brujas? Eran parteras, alquimistas, perfumistas, nodrizas o cocineras que tenían conocimiento en campos como la anatomía, la botánica, la sexualidad, el amor o la reproducción, y que prestaban un importante servicio a la comunidad. Conocían mucho de plantas, animales y minerales, y creaban recetas para curar, lo cual fue interpretado por los grupos dominantes del medievo como un poder del Diablo. Las brujas no eran personas malas y feas, como las ha descrito la literatura universal, sino mujeres generadoras de un conocimiento específico. En el medievo, cuando predominaba un modelo social masculino, el saber de las brujas fue considerado amenazante, por lo que fue perseguido y destruido junto con ellas en las hogueras. ¿Por ese motivo fueron perseguidas y condenadas a muerte? –Sí, pero además porque las elites eclesiásticas, políticas y económicas, que se consolidaban en aquellos tiempos, comenzaron a desarrollar un modelo social muy masculino y consideraban que el saber que las mujeres tenían, especialmente en sexualidad y reproducción, representaba una amenaza. Las brujas comenzaron a almacenar conocimiento muy importante sobre el control de la reproducción y sabían preparar diversos abortivos. Este conocimiento implicaba la posibilidad de ejercer una sexualidad más libre, lo cual ponía en riesgo la hegemonía masculina y, por ello, los hombres expropiaron su conocimiento y las aniquilaron en las hogueras. Asimismo, la mayoría de estas mujeres vivían solas, en casas en el bosque, independientes, generaban sus propios ingresos y esto provocaba mucha desconfianza. –¿Resultaría muy aventurado afirmar que las brujas fueron las primeras mujeres científicas? –Sí, porque las mujeres han generado conocimiento desde hace mucho tiempo y porque, además, no se puede considerar científico un conocimiento hasta la institucionalización de la ciencia en el siglo XIX, cuando ya se empezó a enseñar en las universidades. Sin embargo, en ese momento las mujeres no tenían permitido estudiar en las universidades y continuaban con la tradición de ilustrarse en los conventos, en los salones de té o en sus hogares, con el padre o el esposo. Luego, de manera gradual, la mujer se fue incorporando a la educación media y superior en áreas como enseñanza, enfermería o farmacéutica. Hasta llegar a la década de los 90 del siglo pasado, en que 50 por ciento de los universitarios ya eran mujeres. La escritora, que ha viajado a Barcelona para presentar su libro, explica que durante la caza de brujas histórica “el abanico de mujeres que podían ser

acusadas de brujería era muy amplio. En realidad cualquier mujer que tuviera un comportamiento que molestara podía ser tachada de bruja y perseguida como tal: la amante o la esposa de las que te querías librar, la viuda con propiedades ambicionadas por los familiares o los vecinos...”. Unas mujeres que estaban especialmente en peligro eran las sanadoras y curanderas, que atesoraban conocimientos tradicionales y actuaban como médicos de las clases populares. “En determinado momento, se empieza a ver su actividad como peligrosa y maléfica”. ¿Qué ocurrió? “Ah, ese es el gran misterio. Sin duda hubo más de un motivo. Siempre hacen falta chivos expiatorios y ellas eran buenas candidatas, pero además aumentó el acceso de las mujeres al mundo laboral y significativamente coincide el momento en que se las expulsa de ese ámbito del trabajo con la intensificación de la caza de brujas. Básicamente se persigue a las que llaman la atención, las que escapan del control masculino, lo que se perciben como una amenaza social. 

En varias ocasiones me he preguntado por qué existe la asociación entre brujas y mujeres. No es que no haya excepciones, pero cuando pensamos en una bruja casi siempre figuramos a una mujer. Cuando visualizamos a un hombre con magia, en cambio, se trata de un mago. Aún más, subsiste una connotación negativa hacia las brujas. ¿Cuál es la razón? ¿Hay algún acontecimiento histórico o alguna explicación lógica que lo fundamente? La respuesta no es sencilla. Pócimas, conjuros y adivinación eran algunas de las actividades más comunes realizadas por estas personas que han sido caricaturizadas hasta el cansancio a partir de la Edad Media. No obstante, detrás de esas representaciones chuscas se esconde una serie de hechos que hasta nuestros días están siendo revelados con el fin de obtener un panorama más amplio acerca de las capacidades de estas mujeres y reconocerlas justo como lo que fueron: el preámbulo de la comunidad científica. Su basto conocimiento de herbolaria y las propiedades de diversos minerales fue (por decirlo de algún modo) la sabiduría predecesora de la alquimia, que a su vez es tomada por muchos como una especie de química primitiva. Sus conocimientos eran valorados, respetados y considerados importantes y necesarios, pero se les fue desprestigiando y asociando con la idea de que no poseían sabiduría de mujer, sino que un ser maligno les otorgaba poderes, y todo lo que sabían y practicaban era debido a un pacto con el Diablo» Indagando un poco más, cualquier interesado en develar los secretos de la magia y hechicería podrá toparse con una realidad que va más allá de la superstición religiosa: las brujas representaban un peligro para el orden político y científico del Medioevo y épocas posteriores. Las mujeres que presentaban conocimientos más adelantados que los de algunos hombres, aun sin haber recibido algún tipo de

educación, eran consideradas una amenaza; no obstante, un juicio bajo los cargos de saber demasiado era una idea por demás ridícula

La imagen de la enfermera se crea en base al glamour y a la femineidad. Simplemente la Mujer Ideal, trasplantada del hogar al hospital pero esta vez más o menos libre de obligaciones reproductoras. Ofrecía al médico obediencia, la virtud de una buena esposa, y al paciente la altruista devoción de una madre, mientras ejercía sobre el personal subalterno del hospital la gentil pero firme disciplina de un ama de casa acostumbrada a dirigir la servidumbre.  Estas mujeres, que fueron ampliando sus conocimientos a través del intercambio de saberes sobre las propiedades curativas de las plantas, eran sanadoras y trabajaban para la comunidad. De ahí que en muchos estudios sean consideradas las primeras médicas y anatomistas de la historia de Occidente.

Pero a finales de la Edad Media y en el Renacimiento, la lucha por el control masculino del conocimiento, de la ciencia, desencadenaría la 'caza de brujas'.

Las brujas vivieron y murieron en la hoguera mucho antes de que apareciera la moderna ciencia médica. La mayor parte de esas mujeres condenadas como brujas eran simplemente sanadoras no profesionales al servicio de la población campesina y su represión marca una de las primeras etapas en la lucha de los hombres para eliminar a las mujeres de la práctica de la medicin Las mujeres sabias, o brujas, poseían multitud de remedios experimentados durante años y años de uso. Muchos de los preparados de hierbas curativas descubiertos por ellas continúan utilizándose en la farmacología moderna. as mujeres conocían las aplicaciones medicinales de muchas hierbas y plantas y el conocimiento sobre muchas de ellas se aprendían de generación en generación desde tiempos anteriores a la institucionalización del cristianismo. Al mismo tiempo descubrieron nuevas fórmulas y aplicaciones a través de la experimentación. La gente consideró este conocimiento como un cierto tipo de magia, al igual que lo creyeron los jerarcas de las iglesias cristianas y los gobernadores de los estados.

La partera tradicional posee muchos conocimientos y habilidades que infortunadamente pocos son utilizados en la práctica de medicina. Son

conocimientos complejos y básicos a la vez, vasados en le respeto a la integridad de cada mujer y por lo tanto, al ritmo de su propio cuerpo. La partera tradicional trabaja y colabora en la salud del bebé recién nacido y le cuida por el tiempo que juzgue necesario. También cuida la salud de la mujer, educa sobre planificación familiar y está accesible para ayudarla con sus necesidades a través de su vida. Su sabiduría la obtiene como aprendiz tradicional, método informal y costumbre antigua de la profesión que puede incluir: El aprendizaje por su experiencia como madre, asistiendo a otras mujeres, de sus ancestros, colegas, sanadores, otros servidores de la salud y de manera autodidacta; sueños, ejemplos de la naturaleza, de su espiritualidad y de Dios. Además de recibir poco dinero, muchas parteras tienen que luchar para ganarse el respeto que se merecen por su trabajo. Los doctores y otras personas descartan los aportes de las parteras con demasiada frecuencia. Cuando a las parteras no las valoran como integrantes de una comunidad de trabajadores de salud que comparten las mismas metas, se limita su capacidad para atender a las mujeres. De hecho, las parteras pueden quedar excluidas del sistema de salud cuando se prohíbe que una mujer traiga a su partera consigo al hospital en una emergencia.

En la actualidad, la sociedad maneja un concepto peculiar acerca de la enfermería, creen que somos subordinados de los doctores, o que simplemente nuestra tarea es administrar medicamento, tal vez esas críticas puedan tener cierta justificación en la forma como se trata a los doctores, les damos cierto poder sobre nosotras, ya que la gran mayoría de la enfermeras, y no digo todas, se muestran mucho más que atentas con ellos. Sin embargo, también existe cierto roce entre ambas profesiones, por un lado la medicina imponiendo su ciencia y por el otro, la enfermería haciendo respetar sus conocimientos. Lo que si es cierto es esto: Todo tiene su historia, lo que somos hoy es el producto de lo que fuimos ayer, y en nuestra historia de profesión siempre va existir esa época en donde la enfermería no era muy bien vista, donde no se valoraba el trabajo, incluso no era recompensado, una época de oscuridad, donde la única mujer que fue capaz de cambiar la historia, es hoy la mujer más respetada y querida, ella es nuestra Florence Nightengale. Pero también hay una parte no muy cierta en la historia de la enfermería, y la pregunta sería ¿es cierto que nuestros orígenes son la brujas?, si la respuesta es sí, para mí no estaría mal, saber que fuimos mujeres con la capacidad y técnica suficiente como para hacer temblar de miedo a los más grandes, La Iglesia y el Estado y el motivo es que las brujas, o mejor llamarlas “sanadoras” hacían eso sanar, haciendo uso de conocimientos básicos en botánica y estudiando los beneficios de las plantas, curaban esos males que escapaban de la manos de los doctores, tal vez porque ellos no veían más allá de lo externo, y que por no quedar mal ante la sociedad, “crearon” historias falsas, haciendo suponer que las cosas que hacían ellas eran malas, eran actos del

demonio, además que formaban pequeñas reuniones satánicas, pero viéndolo desde otra perspectiva, tal vez si organizaban reuniones, pero no para invocar al demonio, si no para intercambiar conocimientos, o incluso para curar a alguien, y los actos que hacían eran de buena voluntad sin desear hacerle daño a nadie , incluso ayudaban hasta la clase alta.