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PROGRAMA DE TRABAJO Objetivo: Fomentar en la niñez el amor a Jesucristo Sacramentado como complemento a la preparación para hacer la Primera Comunión y como continuación de quienes ya la hicieron, a través de la realización de una hora de Adoración a Jesús Sacramentado. Dirigido a: Niños y niñas de 6 años en adelante. Requisitos: Querer ser Amigo de Jesús Sacramentado. Cita: Ultimo sábado de cada mes de 19:00 a 20:00 hrs. Se ha considerado este horario, debido a que nuestras vigilias de Adoración Nocturna las estamos iniciando a las 21:00 hrs. y se pretende aprovechar la hora restante para prepararnos a nuestra vigilia u otras actividades que se detallan más adelante. Lugar: Parroquia de Ntra. Sra. Santa Ana Actividades: 1. Se pretende que los primeros tres meses se lleven a cabo pláticas de preparación para los niños, mismos que pueden ser divididos en grupos de acuerdo a la edad y al número de cada uno de ellos (se sugieren 2 grupos uno de 6-10 años y otro de 11-17). Las pláticas consistirán en explicarles: ¿Por qué decimos que Jesús está presente en la Eucaristía? ¿Por qué lo venimos a visitar? ¿Por qué merece Adoración? ¿Cómo vamos a llevar a cabo la Adoración? ¿Cómo debemos comportarnos ante Jesús? 2. Una vez que ya se les ha concientizado sobre los puntos anteriores, se volverán a unir los grupos en uno sólo para realizar las vigilias de acuerdo con los Rituales para Tarsicios e Inesitas. Pueden acompañarlos los padres de familia. 3. Ya que esté conformado el grupo, cada Adorador Activo u Honorario, fungirá como padrino de un niño. Su función será preocuparse de él (asistencia, reporte de su salud, situación de su familia) y regalarle su ritual. 4. Periódicamente realizarán actividades recreativas para mantener su atención, como prácticas deportivas y convivios. 5. Como el objetivo claramente nos indica que no se les comprometerá a pertenecer a la Adoración Nocturna, y tampoco podemos usar los Distintivos de Tarsicios sin que se les haya impuesto, se sugiere que a todos se les dé un “distintivo motivacional” que bien puede ser una playera blanca con motivos relacionados con el grupo, una gorra, o incluso, podemos darles pequeños festones como los que usamos como recuerdos en nuestras vigilias solemnes. Relación: Como toda actividad Parroquial es necesaria la comunicación y estrecha relación con el Director Espiritual, quien en todo momento deberá estar enterado de lo que se va haciendo y de lo que se pretende realizar.

También debe haber comunicación con los Catequistas de las comunidades, pues ellos son nuestro primer canal de comunicación para hacerles la invitación, tanto con los niños, como con los papás y padrinos. Este programa se le puede dar a conocer a los demás grupos laicos, ya que ellos mismos nos pueden ayudar en la organización y fomento de la actividad. Promoción: Es necesario que para empezar la primera reunión, se utilicen todos los medios posibles para que se entere la comunidad. Se sugiere que se tenga una reunión con los catequistas, una con los niños que se están preparando para hacer su Primera Comunión para invitarlos y una con los padres y padrinos, para solicitar su apoyo en enviarnos a los niños. Es pertinente hacer carteles y pegarlos en la entrada del Templo con dibujos llamativos y alusivos a la relación que se pretende fomentar: Jesús = Niños. También es conveniente que se haga una invitación de viva voz, al menos en cada misa que se tenga durante los domingos previos a la fecha. Después de celebrar las horas de adoración, debemos procurar agradecerle a los niños su asistencia y a todos el apoyo por permitirles estar con nosotros. El agradecimiento también es una forma de promovernos. Más adelante, las playeras, festones y actividades recreativas que se realicen con los niños, servirán de promoción para que más niños se interesen en pertenecer al grupo. Debemos buscar que nuevamente todos quieran pertenecer al grupo. Recursos Humanos: Lo ideal es que todo el Consejo Directivo de la sección sean los responsables y estén comprometidos, pues de todos es la responsabilidad, pero sobre todo del Presidente de la Sección, pues es quien lleva la batuta. Además del Consejo se pueden allegar de Honorarias o familiares que sean educadores de niños o de quienes tengan facilidad en la atención a los niños. Recursos Materiales: Se trabajará con dos herramientas principales: 1) La Eucaristía Luz y Vida para los niños, texto base para el Congreso Eucarístico Internacional; 2) Sacramento de la Eucaristía, folleto # 171 de la Sociedad EVC. Estas herramientas son sugeridas, no indispensables ni únicas, además que se tiene que considerar que las pláticas deben ser amenas y fluidas, aunque sin perder la disciplina requerida. Otros Recursos: Debido a que actualmente se pone de pretexto que los niños no pueden estar tarde en la calle o que sus padres no pueden ir a recogerlos por sus ocupaciones, se propone que al término de su hora de Adoración, haya comisionados del mismo grupo (activos y honorarios) para ir a dejarlos a sus casas. Aunque no está expresamente considerado que los niños se queden a dormir en el templo con los activos, se abrirá esta opción para aquellos que, a imitación de sus familiares adoradores, quieran quedarse a dormir en el templo, ya que consideramos que sin que ellos hagan una hora de vela durante la noche, se les puede ir fomentando el hábito de desprenderse de la comodidad de su casa por una noche al mes. Sobre todo cuando es el padre de familia u otro familiar cercano quien se encargará de atenderlo durante la noche y se cuenten con las condiciones propicias para ello.

ESTATUTOS DE LA ADORACION NOCTURNA. En el art. 18 de los estatutos se hace referencia a que existen tres tipos de adoradores: Activos

Honorarios

Tarsicios.

De los primeros dice: “son todos aquellos varones sacerdotes y seglares mayores de 18 años que se impongan la obligación de tomar parte en las Vigilias Nocturnas y contribuir con una cuota determinada.” Primero Punto: comúnmente le llamamos “Imponer el Distintivo”, pero como este artículo lo menciona es la persona quien propia y voluntariamente se impone esta obligación, ni el sacerdote, ni el presidente, ni quien lo invitó, ni Dios, le imponen la obligación, sino él mismo. Y segundo: “contribuir con una cuota determinada”. En la solicitud de ingreso que se firma, donde se SUPLICA ser aceptado en la cofradía, hay una parte donde dice que el adorador se compromete a aportar mensualmente la cantidad de “$_____.__” como cooperación. De igual manera el adorador determina esa cuota, nadie se la impone. En ocasiones cuando llegan a registrar su asistencia, solo aportan lo que les quedó de cambio, lo que les sobró del día o solo las monedas que lleven y aun así reciben su Semilla Eucarística, cuando en realidad el adorador activo mismo, se comprometió a contribuir con una cuota determinada “mínima”, pues si puede aportar más lo puede hacer, además de que en esa cooperación no se incluye el precio de la Semilla, sino que ésta es adicional y también, tiene el compromiso de adquirirla para su formación e información como parte de una familia adoradora. Dice también en este artículo que tiene la obligación de velar una hora cada mes en la iglesia de su sección SIN SALIR DEL TEMPLO y a asistir a todas las vigilias generales. En temas posteriores se verá cuáles son esas vigilias generales. Cuántos y cuántos son los activos que se saltan este artículo y se retiran a sus casas, dice el Ritual “dejándote enteramente solo” p. 235. El mismo artículo dice, que se puede hacer la excepción PREVIA AUTORIZACIÓN DEL DIRECTOR ESPIRITUAL, pero en la mayoría de los casos, él ni se entera, porque solo le avisan, si es que lo hacen, al jefe de turno o al presidente, además de que él se cree mis escusas o como él también lo ha hecho, no puede exigir o decir que no.

Es necesario recordar un punto señalado en el art. 6 de los estatutos que al final dice que toda la jerarquía de la ANM tiene por oficio “cumplir y hacer cumplir a sus subordinados estos Estatutos… …con decisión inquebrantable” De

los

Honorarios,

dice:

“son todas las demás personas, hombres y mujeres que por su edad avanzada, trabajo excesivo, atenciones familiares, estudio o enfermedades, estén IMPEDIDOS para concurrir a la iglesia de noche, pero que en sus propias casas pueden hacer su hora de guardia” Es de resaltar la palabra clave para tener esta condición: IMPEDIDOS, ya que no señala que pudieran o no asistir, sino que alguna de esas causas que se señalan realmente le impidan asistir. De hecho cuando un adorador activo está impedido para asistir, se le puede pasar a honorario de manera temporal y en cuanto le sea posible nuevamente regresar a activo, se realizará el cambio nuevamente en su condición de adorador. Pero para ello se requiere de comunicación efectiva y eficaz con el Consejo y con el Director Espiritual, pues es común que se utilicen pretextos para no pasar la noche en el templo y aún cuando la imposibilidad ya terminó, se quiera conservar la calidad de honorario, por la comodidad. Los

tarsicios

son:

“jóvenes y niños que han hecho su primera comunión de 10 años y no mayores de 18” que tienen su turno por separado de los honorarios y activos, ritual y reglamento propios que se verán también más adelante. En este caso es necesario hacer notar que aunque sin contradecir los estatutos es preciso que se acepten con las condiciones que así lo requieran a todos los niños que quieran acercarse a Jesús Sacramentado a través de los turnos de San Tarsiscio y Santa Inés, pues aunque no hayan hecho su primera comunión, su participación en las vigilias servirá (aunque no sustituyan) como preparación para la comunión, y aunque no tengan la edad señalada, se comenzará a formar en ellos el hábito y la necesidad de comunicación, adoración y amor al Sacramento de nuestra fe. En el artículo señalado, se menciona también que los padres de familia procurarán que sus hijos formen parte de los turnos de San Tarsicio, para motivar ahí, “junto al sagrario los más nobles sentimientos y se forjarán íntegros católicos y serán los futuros adoradores activos de la Sección”.

Esta tarea también en la mayoría de los casos está descuidada. De hecho en no pocas ocasiones se emplea a los niños como pretexto para que los adultos no asistan: es que hace frío, es que se duerme… Sin embargo también es común que se quiera llevar a los hijos a la Adoración Nocturna ya en la etapa de la adolescencia, después de haber abandonado su formación católica e imponerles que asistan a la cofradía, con nulos resultados, pues lo que no se cultiva desde temprano, no se puede cosechar. En los tres casos, para recibir el distintivo es necesario ser presentado por un adorador activo, aunque en el caso de los niños, es un Tarsicio activo quien lo hace. Se le presentará al consejo y éste hará lo mismo presentándolo al grupo. Desde ese momento el presidente, jefe de turno y el presentador, que hace las veces de padrino, asumen la tarea de formarlo en el estudio de los estatutos y de las prácticas de la obra. Se señala que deberá tomar parte al menos de tres vigilias seguidas de prueba, pero se ha juzgado en el caso de la sección de Santa Ana, que deben asistir al menos un año para la formación y práctica, pues tres vigilias se cumplen de manera relativamente fácil, pero hace falta un año completo para darse cuenta si realmente es el deseo imponerse la obligación de velar una noche al mes, durante la época de lluvias, a pesar de las fiestas a las que me inviten, del frío que se siente en algunas épocas del año, a pesar de que coincidirá con mi programa favorito o el que tanto he esperado. Ese año le servirá al aspirante determinar y valorar que tan ferviente es su amor a Jesús Sacramentado y si está dispuesto a seguirle por este camino. Una vez realizada la ceremonia de recepción del distintivo y jura de bandera, de acuerdo a lo dispuesto en el ritual y estatutos, se inscribirá su nombre en el Registro General de Sección que es el libro donde deben estar registrados todos los adoradores desde el inicio de la sección hasta los actuales, en orden y número progresivo.