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UNIVERSIDAD MONTRER LICENCIATURA EN NUTRICION Alimentación y Cultura Título del trabajo: Patrón alimentario en Estados Unidos Profesora: Nallely Alfaro Uribe Alumna: Yuriko Gpe.Moriya Villaseñor

Introducción En el presente trabajo se hablara de los patrones alimentarios de Estados unidos, un país que cuenta con diferentes estilos de alimentación, debido a la gran variedad de comida que existe en dicho país, de todas partes del mundo. Los factores que influyen para que no sea del todo sano su alimentación, el estilo de vida tan acelerado que llevan los americanos. Los patrones alimentarios que se siguen en México en comparación con Estados unidos. Las medidas de calidad, políticas y modelos a seguir sobre los alimentos en Estados Unidos. Ha resultado eficaz para el país. Patrón alimentario en Estados Unidos

Los estilos y hábitos de comida varían entre las poblaciones según su procedencia. Así como los patrones alimentarios. Los hábitos alimenticios en Los Estados Unidos son muy diferentes de los hábitos en México y el resto del mundo. Los americanos comen todo tipo de comida de todo el mundo. Hay muchos restaurantes mexicanos, italianos, chinos y otras nacionalidades. Los Estados Unidos son conocidos por la comida rápida incluso McDonald’s y otras cadenas que son muy poco saludables. Un gran problema de los americanos es la obesidad causada por el consumo de estos alimentos con muchas calorías. No es fácil definir a la cocina típica de EUA porque tendría que describirse la gastronomía de los nativos americanos quienes cocinaban pavo, maíz, habas, girasol, papa, pimiento, pepino. Posteriormente esa alimentación se enriqueció con ingredientes procedentes de Europa, creando distintos platillos como la tarta de manzana, transformando la pizza la cual en un inicio era con auténtica salsa de tomate, hierbas naturales y pocos ingredientes. Otra mezcla que se dio fue la comida tex mex, combinación de la española con la mexicana, tortilla dura, tostadas, carne con chile. Y la vieja hamburguesa que en sus inicios era como una ruedita de carne con verdura encima o alrededor se transformó en la famosa hamburguesa que conocemos hoy por atender a las necesidades de la industria. En los Estados Unidos, las comidas de desayuno son café, cereales, tostadas y muchos carbohidratos. En Estados Unidos el común de la gente vive de forma acelerada y razón por la cual, tiene que tratar de alimentarse lo más pronto posible para volver a sus actividades diarias y el trabajo en general. Es por ello que se habla mucho de la comida chatarra en los Estados Unidos, lo cual ha provocado la presencia de enfermedades y sobrepeso lo que ha causado muchas muertes al paso de los años. Las tendencias del consumo alimentario en México y el mundo, al comenzar el siglo XXI, obedecen al contexto de la mundialización, caracterizado por la rápida y creciente homogenización de los patrones de consumo, así como por una participación cada vez menos importante de los productos primarios en el comercio y donde Estados Unidos juega un papel protagónico. En México, el patrón alimentario tiende a homogenizarse con el modelo industrializado estadounidense, en virtud de su condición de importador neto de alimentos cuyo componente nutricional es, por cierto, discutible. Paradójicamente y dadas las condiciones de salarios bajos, se considera que en México el 65% del

consumo alimentario familiar cotidiano está formado todavía por productos en fresco, y sólo 35% corresponde a los industrializados. O sea que, después de más de 50 años de industria alimentaria en el país, los bajos ingresos aparecen como una ventaja neta al conservar una base alimentaria más pertinente que la moderna, con un patrón de consumo alimentario tradicional. Adoptar plenamente el modelo occidental industrializado representa, para todos los sectores de la población mexicana, problemas de salud, dada la ausencia de información adecuada y de una política gubernamental que oriente al consumidor, hoy día perteneciente sobre todo a los estratos medios y altos de la población, pero, como la industria alimentaria tiene vocación universal y crece su oferta para el consumo masivo de bajo costo, con productos como pastas para sopa, galletas, tortillas de maíz y trigo, aceites y grasas, café soluble y golosinas, entre otros, terminará por alcanzar a la totalidad de los mexicanos. Es muy probable que la obesidad, pero sobre todo la desnutrición aumente en las próximas generaciones, mientras no exista en México regulación legal efectiva que permita una expansión diferente de la industria alimentaria en donde el objetivo son las ganancias y no producir bienes saludables y nutritivos, faltan verdaderas directrices gubernamentales en cuanto a educación o por lo menos comenzar con alfabetismo en nutrición, para orientar a la población en la elección de alimentos, en lugar de que la publicidad oriente por productos indeseables que principalmente van dirigidos a niños y jóvenes como cereales, pastelillos, panes a base de harina refinada y con alto contenido de azúcar, bebidas altas en calorías y frituras industriales Estados Unidos tuvo resuelto desde hace décadas el asunto de la autosuficiencia en alimentos básicos, sumado a que transformó alimentos convirtiéndolos en productos de alto valor agregado, fortaleció sus políticas de calidad, inocuidad, contenido nutricional, innovó en tecnología y en diversidad de alimentos. Mientras que nuestro país no ha resuelto los problemas de autosuficiencia ni en seguridad alimentaria, probablemente por ser una economía débil, por políticas precarias o por la falta de éstas y en cumplimiento a acuerdos internacionales que afectan las estructuras de producción internas o de pequeño volumen. Los dos países tuvieron patrones alimentarios bastante diferentes, pero en los últimos años se está compartiendo cada vez más alimentos, platillos, hábitos y costumbres; aunque en esa combinación se ha ido perdiendo preparar platillos típicos mexicanos con ingredientes naturales, ya que la publicidad, la globalización y lo práctico que resultan la comida rápida y los alimentos industrializados,

muestra que el vecino país lleva las de ganar en cuanto a la adopción de su patrón alimentario.

Estados unidos es la economía agrícola más eficiente del planeta Desde los años treinta ese país tuvo excedentes agrícolas que reflejaron su capacidad de satisfacer las demanda interna de bienes primarios, resultado de una política que se remonta al siglo pasado y no es cuestión de suerte, casualidad ni mucho menos buen clima. El consumo de alimentos en EUA Existe una variedad de factores: Cambios en las preferencias de los consumidores, Cambios en precios, Mayor ingreso real en la población, Más asistencia alimentaria a los necesitados. Desarrollo en investigación, Desarrollo de nuevos productos, Fáciles de preparar Tecnología de alimentos. Más importación de fruta, hortalizas, Crecimiento del mercado de alimentos preparados fuera de casa Publicidad, Criterios gubernamentales de mejoría nutricional, Cambios sociales, Familias más pequeñas, Familias con un solo padre, Hogares con dos salarios, Diversidad étnica.

Conclusión 

Es necesario concientizar y orientar a la población mexicana sobre un estilo de vida saludable para evitar enfermedades y obesidad. Dar a conocer más información sobre el tema a una edad temprana para crear hábitos desde pequeños.



Las medidas de calidad, políticas y modelos que se emplean en los Estados Unidos son eficaces. Es importante que México empiece a aplicar este tipo de medidas ya que son alarmantes las estadísticas en cuanto a la obesidad en nuestro país.

Bibliografía    

www.azosumos.org www.jornada.unam.mx www.fao.org Guías alimentarias en América Latina Contreras, H. y Arnáiz M. (2005). Alimentación y cultura: perspectivas antropológicas. España: Ariel.