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1. MANUAL DE PROCEDIMIENTOS INDUSTRIALES DE FLISA DE PRODUCCION EN LAS LAVANDERIA INTRODUCCION: El presente manual se

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1. MANUAL DE PROCEDIMIENTOS INDUSTRIALES DE FLISA

DE PRODUCCION EN LAS LAVANDERIA

INTRODUCCION: El presente manual se confecciona con el objeto de homogeneizar los procedimientos de producción, así como los documentos de control generados en el flujo de información asociado, utilizados en las distintas plantas de lavado de FLISA. Dada la variedad de tipos de ropa que se procesan en una lavandería, sería muy costoso y poco práctico realizar un procedimiento por cada uno de ellos. Por tanto, se agrupan en las cinco familias de ropa que se consideran actualmente en las hojas de producción: Ropa plana: incluye sábanas, fundas de almohada, cuadrantes y entremetidas. Felpa: toallas, alfombrines y albornoces. Mantelería: toda la ropa de mesa de restaurante, así como la ropa de cocina (trapos de cocina, litos, balletas y delantales). Ropa verde: incluye toda la ropa de quirófanos, tanto la ropa plana verde, como la ropa de forma verde. Ropa de forma: incluye todas las prendas de uniformidad, pijamas, batas, camisones, monos, etc. Aunque la ropa de forma verde tiene un tratamiento muy similar al de la ropa de forma normal, y la ropa plana verde tiene un tratamiento también similar al de la ropa plana normal, se consideran como familias distintas, porque tanto en el lavado, como el posterior planchado, tienen ligeras modificaciones sobre los procesos normales, que repercuten en el tiempo y en el coste del proceso. Dado que no todos los procesos se realizan con la misma maquinaria en todas las plantas, no es posible realizar un estudio en profundidad de dichos procesos, pues dependen de cada tipo de máquina utilizada. Por tanto, en este primer manual de procedimientos, no se va a profundizar en detalle en los procesos que intervienen en el recorrido de cada uno de los tipos de ropa, sino que se mencionarán los factores fundamentales que intervienen en cada operación, así como su posible forma de control. Posteriormente, en la implantación del manual en cada planta de lavado, se elaborarán los procedimientos específicos de cada proceso, adaptados a la maquinaria existente, para su utilización como documento de referencia en el tratamiento de la ropa.

Como parte indispensable del manual de procedimientos, se incluyen modelos de impresos y documentos, que sin la pretensión de ser impuestos en ningún caso como de cumplimentación obligada, pueden servir como referencia para su utilización

posterior, así como para la integración homogénea de dichos documentos en la informatización de la información generada por las plantas. Como todo manual, debe ser ampliado y mejorado en sucesivas revisiones posteriores a su implantación. Por tanto, este manual presentado como primer documento, se identifica con el número cero de redacción inicial, estando preparado para el primer proceso de revisión. 1. RECORRIDO GENERAL DE LA ROPA

Como introducción a los procesos de cada tipo de ropa, se describe a continuación el recorrido de una prenda genérica dentro de la lavandería. El ciclo del servicio del lavado de la ropa pasa por las siguientes fases: 1'.- Recogida de la ropa.- Generalmente, el transporte de la ropa desde el cliente a la planta corre a cargo de FLISA. Los camiones o las furgonetas, dependiendo del volumen de ropa a transportar, deben partir según una hoja de ruta especificada, para llegar a una hora concreta pactada entre el cliente y la lavandería. Es parte esencial del servicio de FLISA el cumplir puntualmente con los horarios establecidos, tanto de recogida como de entrega. Dado que para la mayor parte de los clientes se realiza el " servicio 24 horas ", la hora de recogida debe de establecerse lo antes posible, para tener la ropa en planta el mayor número de horas. Con la ropa en planta, se puede hacer una selección de prioridades real, no sometida a las posibles contingencias del tráfico o cualquier otro factor, que pudiera retrasar la llegada a la planta del camión, y que pudieran por tanto invalidar todas las previsiones establecidas con anterioridad. Es importante destacar que, por razones de higiene, durante un mismo transporte no se puede llevar ropa limpia y ropa sucia en el mismo compartimento, Así pues, las rutas se establecen de manera que toda la ropa limpia se entregue en sus destinos correspondientes, pudiendo a continuación realizar el recorrido de forma inversa, si fuera necesario, para recoger toda la ropa sucia. 2*.- Lavado de la ropa sucia.- Una vez que la ropa está en la planta, y realizada la selección de prioridades, se procede a clasificarla según los siguientes criterios: Tipo de tejido: lavado aparte de: - Algodón (ropa plana en general). -

Lino (ropa plana de hoteles de lujo).

-

Seda (no suele industriales).

-

Poliéster (pijamas, batas, ropa de forma en general).

llegar

a

lavanderías

-

Poliacrílicos.

El color: los diferentes tipos de colores no deben mezclarse en el proceso de lavado. Esto es todavía más importante en las 'prendas de color nueves, puesto que son más propensas al efecto del desteñimiento. Este caso suele darse en la ropa enviada para realizar un desapresto, a las que se trata con las operaciones de remojo y aclarado, no necesitando lavado ni prelavado al carecer de suciedad. Tipo de ropa: dado que generalmente, los distintos tipos de ropa están fabricados con distintos tejidos, es necesario separarlos antes del lavado. Siempre se clasifican como mínimo las familias de ropa principales presentadas en la introducción del manual. Grado de suciedad: La suciedad, definida como toda materia indeseable depositada sobre los textiles, determina un programa de lavado u otro, aún en tipos de ropa iguales. Según el tipo de suciedad, el proceso de lavado se realiza de diferentes formas: -

Suciedades ligeras: procesos habituales. Suciedades proteínicas: remojo con temperatura fría al comienzo del proceso. Grasas y aceites: temperatura, alcalinidad y humectación altos. Colorantes como café o zumos: oxidación con oxígeno o cloro.

Como norma a tener siempre presente en el lavado de la ropa se debe de cumplir que no se pueden mezclar las prenda3 de dos clientes en un mismo compartimento de una máquina de lavado. La confusión, la mezcla y el posterior envío de la ropa a un cliente equivocado supone un daño grave a la imagen de la lavandería. No obstante, existen medios, como bolsas de rejilla, que permiten lavar más de un cliente en un mismo compartimento sin que se mezclen. Estas bolsas deben estar perfectamente identificadas, para evitar los problemas anteriormente mencionados. Se suelen utilizar para pequeñas cantidades de ropa que por sí solas nó llegan a la capacidad del compartimento de la máquina de lavado. 3a.- Procesos específicos de cada tipo de ropa.- Serán descritos y asumidos como procedimientos generales para cada familia de ropa de las definidas en la introducción del manual.

RECORRIDO GENERAL DE LA ROPA EN UNA LAVANDERIA INDUSTRIAL

RECOJIDA ROPA

LAVADO ROPA SUCIA

PROCESO ROPA FELPA

PROCESO ROPA

PROCESO ROPA VERDE

PROCESO MANTELERIA

PROCESO ROPA PLANA

FORMA

EMPAQUETADO Y EXPEDICION

Así pues, generales:

se

desarrollarán • • • • •

los

siguientes

procedimientos

Ropa plana. Felpa. Ropa de forma. Mantelería. Ropa verde (referenciado a los procedimientos de ropa plana y ropa de forma).

4a.- Empaquetado y expedición,- Es un proceso común a todos los posibles circuitos de recorrido de los distintos tipos de ropa que llegan a la lavandería. En esta fase se controla el número de unidades o de kilos que se han procesado; se elaboran los documentos básicos para realizar la facturación posterior; se preparan los carros conforme a las exigencias del cliente y se almacenan para su transporte al cliente. La expedición es un proceso en el cual queda reflejada gran parte de la calidad

del servicio de FLISA, y por tanto, es un factor fundamental en la imagen de la lavandería f rente al cliente. Como complemento a la descripción general del recorrido de la ropa en planta, se incluye a continuación una adaptación del documento utilizado hasta ahora como presentación básica de cada una de las plantas de lavado, en el cual se describen los aspectos más importantes de los servicios ofrecidos por FLISA.

1.1. NORMAS A TENER EN CUENTA EN EL LAVADO DE LA ROPA DE HOSPITALES (APLICABLES AL LAVADO DE ROPA DE HOTELES). La calidad del lavado y la conservación de la ropa dependen de las características iniciales en el momento de su adquisición 1 . Estableciendo un balance de materia de la ropa desde su adquisición hasta su destrucción natural, se pretende que su vida sea lo más prolongada posible, eliminando con la máxima efectividad la suciedad en cada lavado. El equilibrio que se debe de establecer entre la conservación de la ropa y la calidad del lavado se consigue con el estudio y seguimiento de tres apartados: 1. Características textiles en el momento de su adquisición. 2. Lavado eficiente que respete las características de la ropa. 3. Control de calidad. 1.1.1. Características textiles. Una vez adquirida la ropa, se debe de proceder al análisis del tejido, presentándose dos tipos fundamentales: • Fibras naturales: provienen de origen animal o vegetal. La más usual es el algodón, que debido a su forma helicoidal, forma unas concavidades entre las fibras, en las que durante su utilización se depositan fácilmente grasas que sirven de nutrición a los gérmenes y que al lavar las prendas, facilitan la deposición de las materias orgánicas procedentes de precipitaciones de los detergentes con el calcio y el magnesio, que aíslan térmica y químicamente a los microorganismos, dificultando su exterminación. Los ensayos que deben realizarse son los siguientes: Para algodón blanco: Grado de blanco. a) con ópticos. b) sin ópticos. c) amarilleamiento. d) agrisamiento. Resistencia

a) a la tracción. b) a la perforación. c) al esclate. d) a la abrasión. índice de elasticidad. Estabilidad dimensional. Estabilidad de blanco. a) b) c)

a la luz natural. a la lámpara de xenón. al lavado, a distintos sistemas y productos de blanqueo Gramaje.

Porcentaje y características del apresto. Para algodón de color: aparte de los mencionados anteriormente; Solidez al tinte. a) b)

al lavado. al blanqueo.

Fibras sintéticas: además de los ensayos que se relacionan para las fibras naturales, deben someterse a una identificación de sus fibras, sus mezclas y sus porcentajes de composición.

1.1.2. Lavado y eliminación de materias extrañas. Para el caso de hospitales, y una vez realizada la clasificación según • • • •

Naturaleza de la ropa: algodón, lana, poliéster/algodón, Color: blanco y verde (de quirófano), Tipo de ropa, Y grado de suciedad,

Quedan los siguientes grupos de ropa para lavar1: •

SUCIA: Lavado rápido a alta temperatura.

• • •

MUY SUCIA: Lavado completo a alta temperatura. POLIESTER/ALGODON: Lavado rápido a baja temperatura. ROPA INFECCIOSA: Pre tratamiento con lavado a alta temperatura.

Para el caso de los hoteles, realmente no hacen faltan tantos programas, puesto que no llega ropa infecciosa, ni generalmente, ropa de poíiéster/algodón. No obstante, los programas de lavado de ropa hospitalaria pueden ser utilizados para el lavado de ropa hotelera, aunque conviene hacer programas distintos de menor consumo, y por tanto de menor coste.

1.1.2.1.

Características del agua utilizada. El agua utilizada en las lavanderías es agua de red, por lo tanto hay que controlar ciertos parámetros para mejorar el proceso de lavado y la durabilidad de la ropa, como son:



Aspecto: Debe ser limpia y no contener materias ni residuos orgánicos en suspensión.



Dureza: Dado que el agua siempre lleva disueltas sales, se debe de regular el porcentaje en disolución de las de Calcio y Magnesio, que en un proceso de lavado ocasionan los siguientes inconvenientes: - Gasto innecesario de jabón y detergente. - Al precipitarse sobre la ropa, dan un aspecto acartonado y un color grisáceo, que hacen disminuir su duración. Para evitarlo se utilizan descalcifícadores y secuestradores de iones de Calcio y Magnesio.

PH del agua de alimentación: Debe ser aproximadamente 7 (neutra). El PH del centrifugado final debe estar entre 6,5 y 7 para asegurarse de la ausencia de restos de álcali en la ropa. Hierro y manganeso: No debe de existir una concentración mayor de 0,1' mgr/l, ya una concentración superior entraña un desgaste importante de la ropa. Como aspecto importante en el tratamiento del agua, se comenta la incorporación de ozono en la misma, por su acción desinfectante, desodorizante y oxidante. 1.1.3. Control de calidad. Los ensayos de control de los procesos de lavado pretenden que la vida del textil sea lo más prolongada posible, y que a la vez, la eliminación de la materias extrañas sea en cada lavado de máxima efectividad. Por tanto, se establece un equilibrio entre la conservación de la ropa y la eliminación de suciedad. Si con el lavado se obtiene un desequilibrio hacia la primera parte, se obtienen resultados de limpiezas excelentes, pero a base de provocar fuertes agresiones sobre el textil. Sin embargo, si el lavado el excesivamente suave con la prenda, no se consigue una perfecta limpieza de la misma.

Teniendo en cuenta la definición de control de calidad como "proceso de regulación a través del cual se puede medir la calidad real y compararla con las normas para actuar sobre la diferencia", el programa de control de calidad se identifica por: • • • •

Tener objetivos claros e inequívocos. Capacidad de equipos instrumentales. Personal especializado. Capacidad rápida de respuesta.

Con estos fines, la cadena de lavanderías de FLISA, dispone en cada planta, de pequeños laboratorios para controlar los programas de lavado, y de un laboratorio central en Madrid, en el que se realizan controles más específicos '. Los tres controles básicos a realizar son los siguientes: • • •

Control del lavado. Control de los textiles antes y durante su uso. Control bacteriológico.

En el Manual de Control de Calidad de las Lavanderías Industriales de FLISA, se recogerán todos los detalles de aplicación a tal efecto 2.

1.2.

NORMAS A TENER EN CUENTA EN EL PROCESAMIENTO DE LA ROPA PARA TENER UN CONTROL DE LA CONTAMINACIÓN.

La ropa sucia tanto del sector hospitalario como del sector hotelero, se consideran siempre como potencialmente infectadas, por lo que los empleados tanto de recogida como los que manipulan la ropa sucia usan: -

Gorro que cubra todo el cabello.

-

Guantes de desinfectarse.

-

Máscaras de uso único.

-

Ropas y botas especiales de uso exclusivo para la zona de ropa sucia.

caucho

desechable

o

que

puedan

El personal de la zona de ropa sucia está obligado a que antes de dejar esta zona, se cambie de ropa y se lave con productos desinfectantes con las siguientes características: -

Amplio espectro de actuación.

-

Elevada actividad bactericida.

-

Fungicida.

-

Un gran poder detersivo.

-

Baja agresividad dérmica y ocular.

Y como normas generales para todo el personal de la lavandería: -

-

Utilización de uniformes limpios. Prohibición de fumar y comer en las zonas de trabajo, reservando un sitio adecuado para ello al lado del lugar de trabajo. Obligación de lavarse al final de cada jornada de trabajo con productos desinfectantes.

Además de todo esto, se siguen una serie de normas desde la recogida de ropa sucia hasta la salida de la ropa limpia, como son: •

Almacenamiento de la ropa sucia en sacos de plástico cerrados impermeables a los microorganismos y a la humedad, y resistentes a la rotura.



La zona de sucio tiene un equipo para la limpieza y desinfección de los carros a base de agua ozonizada.



Las bañeras utilizadas en la zona de sucio están identificadas, para evitar el cambio con las utilizadas para el transporte de ropa limpia.



Para evitar la recontaminación de la ropa limpia una vez terminado todo el proceso, se empaqueta en fundas de polietileno.

1.3.

NORMAS DE SEGURIDAD INSTALACIONES. '

E

HIGIENE

DE

LAS

Como medidas encaminadas al aseguramiento de las condiciones higiénicas del servicio, las instalaciones de FLISA deben cumplir los siguientes requisitos: -

-

Tener barrera sanitaria, que separe la zona de ropa sucia de la de ropa limpia. El paso de la barrera debe tener cámara de descontaminación de personas y medios de transporte. Tener vestuarios y sanitarios en ambas zonas.

-

Los desagües deben estar diseñados para que no haya peligro de desbordamiento y contaminación. El pavimento debe ser liso, resistente al agua y exento de dibujos y ranuras que dificulten la limpieza. No utilizar la misma cañería para la zona limpia y la zona sucia. Las paredes deben ser lisas, claras, lavables y libres de juntas entrantes y salientes que dificulten la limpieza. Las puertas del interior de la lavandería deben estar revestidas de material o pinturas lavables.

1.3.1. Ventilación y extracción. Teniendo en cuenta la cantidad de calor y vapor que se producen durante el lavado de ropa, la ventilación proporcionará un ambiente de trabajo adecuado y además impedirá la diseminación de microorganismos. El sistema instalado debe crear una diferencia de presión barométrica, con presión más baja en la zona contaminada. Así se garantiza que el aire fluya siempre del lado limpio hacia el lado sucio.

1.3.2. Descripción del proceso para la limpieza y desinfección de carros para el transporte de ropa. La limpieza y desinfección de carros en el túnel se hace por medio de varios difusores de agua distribuidos en distintas zonas para que abarquen toda la superficie del carro. Para el lavado se utiliza agua ozonizada debido al poder desinfectante del ozono. A esta agua ozonizada se le incorpora un producto completamente soluble en ella, que se adhiere a la superficie tratada y mantiene el efecto germicida por largo tiempo. La acción del agente germicida que se añade, se debe a la incorporación en su composición de ioduros de amonio cuaternarios con dobles enlaces conjugados, Esta molécula afecta a la actividad enzimática, impidiendo los procesos fisiológicos esenciales para los microorganismos patógenos. 2.

PROCEDIMIENTO DE RECOGIDA DE LA ROPA.

En el proceso de recogida de la ropa de un cliente pueden presentarse dos casos: a)

Que se entregue también ropa. Es el caso normal de FLISA, en el que casi todos sus clientes son fijos y habituales.

b)

Que se haga el viaje de ida en vacío.

En el primer caso, se completa el ciclo del servicio de la ropa, volviéndolo a empezar con la recogida de la ropa. Dado que en el procedimiento de expedición se contempla el proceso de entrega de la ropa, a continuación se describirá el proceso de recogida, considerando que el vehículo hace el viaje en vacío. Es importante destacar que, aunque pueda haber un ayudante de conductor, es el conductor el responsable de que el procedimiento de recogida de la ropa se lleve a cabo con total corrección. Así pues, el proceso de la recogida de ropa pasa por las siguientes fases: 1a.- El conductor, con la autorización del encargado de la planta, parte hacia el cliente. En ese momento, apunta la hora de la salida de la planta en la hoja de ruta. 2a.- Llegada a las instalaciones del cliente. Se apunta en la hoja de ruta la hora de llegada. Si el cliente tiene una báscula, que puede ser suya o de FLISA, se procede al pesaje de los carros, anotando las lecturas en el albarán de recogida. Tanto el conductor como el ayudante proceden a la identificación clara de los carros, antes de cargarlos en el vehículo. De esta forma se evita la posible confusión de carros de dos clientes distintos en el vehículo. El albarán de recogida es rellenado por el cliente, pudiendo incluir el número de unidades o de kilos de cada tipo de ropa, o bien ambas cosas a la vez, según el tipo de facturación que se haya pactado. . Aunque el número de prendas no se cuenta en las instalaciones del cliente, por cuestiones lógicas de tiempo, en el caso de que el cliente disponga de una báscula, el conductor debe de controlar el proceso de pesaje y firmar el albarán con las lecturas de la báscula y los números de los carros que se recogen, para su posterior control en planta. Una copia de dicho albarán quedará para el cliente, y otra para la lavandería. Es importante destacar que el conductor firma 'la conformidad respecto al número de carros, la fecha y la hora de recogida, y si hubiese báscula, también respecto a los kilos, pero nunca por las unidades recogidas, puesto que no las cuenta. Es necesario que el cliente tenga conocimiento de este proceso.

3'.- Salida de las instalaciones del cliente. El conductor anota la hora de salida en la hoja de ruta. 4a.- Llegada a la planta o a otro cliente. En el primer caso, el conductor anota en la hoja de ruta la hora de llegada, y junto con el ayudante, procede a la descarga del camión. Una vez que se ha descargado, entrega el albarán al encargado, el cual lo comprueba, para remitirlo después al departamento de administración. Si no hubiese coincidencia entre la ropa apuntada y la que realmente ha llegado, el encargado reflejará esta situación en las observaciones, para su correspondiente notificación posterior al cliente. En el segundo caso, en el que se recoge ropa a otro cliente, se siguen realizando recogidas a sucesivos clientes, con el mismo procedimiento que en las fases 1, 2 y 3, hasta llegar a la llegada a la planta de la fase 4. Al finalizar la jornada laboral, cada conductor debe entregar al encargado su correspondiente hoja de ruta firmada, justificando en ella todos los tiempos que no han sido invertidos en el proceso de recogida o entrega de la ropa. Como ya se indicó en el primer capítulo, no se puede transportar ropa sucia y ropa limpia en el mismo recinto del vehículo, y por tanto, es necesario diseñar las rutas para que esto no suceda. En el anexo de documentos se adjuntan modelos de hoja de ruta y de albarán de recogida.

3.

PROCEDIMIENTO DE LAVADO DE LA ROPA.

Una vez que la ropa está en la planta, y cumplidos todos los trámites de recepción indicados en el procedimiento anterior, se procede a su clasificación, y si se considera necesario a su conteo. 3.1. PROCEDIMIENTO DE CLASIFICACIÓN Y CONTEO DE LA ROPA SUCIA. Después de pasar por todo el proceso de producción, la ropa sale totalmente clasificada, lo cual significa que durante todo el recorrido que ha llevado ha sido paulatinamente separada según el tipo, o que desde un principio ha sido totalmente clasificada. Por tanto, y a modo de simplificación pueden estudiarse tres tipos de situaciones de clasificación:

1. Clasificación total en la zona de sucio. En este caso, se clasifica hasta la última prenda según su tipo, de manera que ocurra que a la salida de las máquinas de lavado no se tenga que realizar ninguna otra clasificación posterior. De esta manera, todas y cada una de las bañeras que contienen ropa limpia, pueden ser directamente procesadas \ Tiene un gran inconveniente, y es el hecho de que realizando este tipo de clasificación, generalmente quedan muchas cargas que no llegan a la capacidad de los compartimientos de las máquinas de lavado, y por tanto, su lavado por separado originaría el desperdicio de agua, productos de lavado y tiempo. Para solucionar este problema, se puede intentar rellenar la capacidad de la máquina de lavado con prendas compatibles en el lavado, pero muy distintas en cuanto a tamaño. Así, cuando la ropa salga del lavado, será más fácil de clasificar y se tardará menos que realizando una clasificación menor en la zona de sucio. No obstante, parece evidente que el aprovechamiento de las máquinas de lavado será siempre menor, o a lo sumo igual en el mejor de los casos, que con una clasificación mucho más básica. Con este tipo de clasificación, para mantener la capacidad de las máquinas de lavado en su valor más alto, es necesario un mayor número de personas en la zona de sucio, pero esto repercute en la necesidad de menos personal en la zona de limpio dedicado a la clasificación de la ropa de las bañeras, antes de pasar por las máquinas.

La clasificación total implica el lavado aparte de los tipos de prendas 1: Sábanas blancas Colchas. Entremetidas. Fundas. Toallas de baño. Toallas de lavabo, de bidet y alfombrines. Albornoces. Batas blancas. Pijamas. En este caso se pueden clasificar también los pantalones de las chaquetillas por separado. Ropa de forma verde. Se pueden clasificar por separado las batas, los pantalones y las chaquetillas. Sábanas verdes. Entremetidas verdes. Servilletas. Cubremanteles. Manteles. Tiras. Mantas. Ropa acrílica. Pueden mezclarse en caso de tener que completar la carga de la lavadora: Sábanas, colchas, fundas o entremetidas. Cubremanteles y tiras, o manteles y servilletas. La clasificación total en la zona de sucio tiene también la desventaja de hacer más penoso el trabajo de los operarios de dicha zona, sobre todo en el caso de ropa hospitalaria.

2. Clasificación básica en la zona de sucio: este es el caso mas corriente de clasificación de la ropa en las lavanderías de FLISA. Se separan los siguientes grupos de ropa: Ropa plana blanca: sabanas encimeras y bajeras, tanto indiciduales comod e matrimonio, fundas, colchas y entremetidas. Ropa plana verde: sabanas y entremetidas. Felpa: toallas de todo tipo, alfombrines y albornoces. Batas blancas Ropa de forma verde Pijamas

Ropa de hospital de niños. Se lava toda junta con un programa de sabanas de hospital Mantelería Trapos de cocina Mantas La clasificación, cuando llegan los carros de ropa sucia mezclada, se realiza abriendo dichos sacos sobre una cinta transportadora. Dos o tres personas separan los tipos de ropa anteriormente mencionados, colocándolos en bañeras situadas cerca de ellos, y dejando que un solo tipo determinado de ropa siga siendo transportado en la cinta, de esta forma, al final de la cinta de clasificación solo hay uno de los grupos de ropa establecidos con anterioridad. Cuando no existe una cinta de clasificación, la separación de la ropa se realiza de la misma manera, pero con una mayor incomodidad a la hora de realizar todas las manipulaciones de la ropa. Es muy importante que ninguna maquina de lavado quede parada excesivo tiempo por estar realizándose la separación de la ropa, en cuanto la ropa esta separada, se debe intentar alimentar la maquina de lavado, para no desperdiciar el tiempo con las maquinas paradas. Esta clasificación básica exige una nueva clasificación anterior a los siguientes procesos en la zona de limpio. Como norma general a la hora de realizar la clasificación en la zona de limpio, se debe de tener en cuenta que ja. utilización de los operarios oue están trabajando directamente en una máquina, conlleva la infrautilización de dicha máquina. Por tanto, el personal que clasifica la ropa debe de servir como apoyo a las operaciones de máquina, y no formar parte de él. 3. Lavado conjunto de toda la ropa, sin clasificación inicial. Esta forma de lavar se utiliza para el caso de la ropa contaminada de los hospitales. Salvo en este caso, en que es aconsejable por razones de higiene, no es recomendable por la diversidad de tejidos que se lavan conjuntamente; el programa de lavado, al no ser específico para ninguno de ellos, no proporciona una calidad de lavado adecuada, y por tanto no resulta apropiado. 3.1.1. Conteo de la ropa en sucio. El conteo de la ropa en la zona de sucio es un proceso probado en algunas ocasiones, que todavía no ha sido estudiado en profundidad dentro de las lavanderías de FLISA. Tiene las siguientes ventajas: 1°.- Permite conocer con exactitud el número de prendas que llegan de un cliente. Esto evita las reclamaciones injustificadas del cliente por pérdidas de ropa.

2*.- Permite controlar mejor la producción por piezas. 3a.- A la vez que se está realizando el proceso de conteo de la ropa, se está separando la ropa por tipos, con lo cual, se tiene una clasificación total en la zona de sucio, evitando, como ya se dijo anteriormente, la pérdida de tiempo en la clasificación de la ropa ya lavada. Sin embargo, tiene sus desventajas, que son: 1a.-

Se necesita mucho personal contando.

2a.-

El conteo lleva mucho tiempo, y no siempre es fiable del todo.

3".-

Requiere de mucho espacio en planta, en la zona de sucio.

Hay que tener en cuenta que, mientras no exista una forma automática de conteo eficaz, el proceso manual de conteo de cada uno de los tipos de prendas tiene la limitación de que una persona puede llevar una sola cuenta a la vez. La forma más eficaz de efectuar un conteo en una lavandería que sólo disponga de lavadoras, sin perder excesivo tiempo, es la de cada una de las personas que realizan la tarea de la separación de ropa lleve la cuenta de uno de los tipos. El resto de los tipos de ropa se colocarán en bañeras o carros separados, para facilitar su posterior conteo. En el momento en que se tenga suficiente ropa como para llenar una lavadora, se prepara para ser lavada inmediatamente. Una vez preparada, se continúa el proceso de conteo. En el caso de disponer de túnel de lavado, para poder alimentar continuamente la cinta de subida o la estación de pesaje, según el tipo de túnel, es conveniente que el máximo número de personas posible esté contando el tipo de ropa que se está poniendo en la cinta. De esta forma, se cuenta con rapidez la ropa de un tipo, no dejando en ningún momento de alimentar al túnel de lavado. Por tanto, es importante que en el conteo de la ropa sucia que entra en el túnel, se dispongan las personas necesarias para que la alimentación de éste sea continua. Como documento de control de los conteos, se pueden utilizar hojas similares a los albaranes, o a los borradores de albarán. Si el cliente ha contado las piezas, el conteo en la zona de sucio servirá como comprobación de las prendas realmente recogidas.

3.2. PESAJE DE CADA TIPO DE ROPA. Una vez que la ropa ha sido clasificada por cualquiera de los procedimientos anteriores, se procede a su pesaje antes de la introducción en la máquina de lavado. Las lecturas de los pesos obtenidas en las básculas en el caso de las lavadoras, o en las estaciones o cintas de pesaje en el caso de los túneles son reflejadas en una hoja de producción de ropa lavada en el día. Este documento constará de tantas hojas como máquinas de lavado haya en la planta, estando dichas hojas situadas en cada una de las máquinas de lavar. Cada vez que se ponga en marcha una lavadora o el túnel, se reflejará el número de kilos de ropa que está lavando, así como el tipo de ropa, el cliente y la hora de inicio y fin del proceso de lavado. En el ANEXO I se adjunta una hoja de control de producción de ropa lavada por máquina. Esta hoja servirá de base para realizar el informe de producción diario por tipo de prendas y clientes.

RECOJIDA ROPA CLIENTE

ALBARAN DE RECOJIDA

HOJA DE RUTA

IDENTIFICACION DE CARROS

LLEGADA A LA PLANTA. DESCARGA

ALMACENAMIENTO Y SELECCIÓN DE PRIORIDADES

OPCION DE CONTEO

IDENTIFICACION DE BAÑERAS, SACOS O CARGAS

CLASIFICACION DE LA ROPA

PESAJE DE CADA TIPO DE ROPA

PROGRAMAS DE LAVADO, DOSIFICACION Y CONSUMOS.

PROCESO DEL RECHAZO

SELECCIÓN DE LAVADORA/TUNEL

EN EL CASO DE LA ROPA CONTAMINADA DEL HOSPITAL, NOE S POSIBLE REALIZAR LA CLASIFICACION POR RAZONES DE HIGIENE

DOSIFICACION Y LAVADO ROPA

IDENTIFICACION DE LAS LAVADORAS/CARGAS TUNEL SALIDA DE LAS CARGAS Y A LAVADORAS

FICHA DE CONTROL DE PRODUCCION DE TUNEL O LAVADORAS

3.3. PROCESO DE DOSIFICACIÓN Y LAVADO. Una vez seleccionada la máquina de lavado a utilizar, se deberá de elegir el programa adecuado para el tipo de ropa de que se trate, y se dosificará según las instrucciones de las hojas de los programas de lavados, confeccionadas por el proveedor de los detergentes, o bien por el departamento técnico de FLISA. Dichas hojas tendrán que estar al alcance del responsable de la zona de lavado, y reflejarán claramente los consumos, las dosificaciones, los tiempos de máquina y los tiempos reales para cada máquina de lavado. En el ANEXO I se incluye un modelo de hoja de programa de lavado. La dosificación puede ser manual, automática o combinada. En el caso de que sea dosificación manual o combinada, deberán existir señales visuales y sonoras, que indiquen el momento en el que es preciso dosificar un determinado producto. Aunque la dosificación puede ser realizada por cualquier operario de la zona de sucio, es el responsable lavandero quien asume la responsabilidad de que el lavado se realice en buenas condiciones, es decir: •

Con la máquina adecuada.



Con una compensación y pesaje correctos de la máquina de lavado.



Con el programa correcto.



Con una dosificación correcta.

A continuación se describen algunas características de los programas utilizados en el lavado de hospitales, que están diseñados teniendo en cuenta que se dispone de agua previamente tratada, que se encuentra en condiciones ideales de dureza, alcalinidad, ausencia de hierro y bajo contenido salino.

3.3.1. Proqamas de lavado. Aunque debe de existir una amplia gama de programas de lavado adaptados a varios tipos de suciedades por familia de ropa, se citan los del lavado de ropa hospitalaria, por ser representativos de la función genérica de cada uno de ellos. 3.3.1.1.

Programa de ropa sucia,

El primer paso consiste en realizar uno o varios enjuagues a temperatura ambiente a un nivel alto de agua para conseguir en un mínimo de tiempo un empapado general de la ropa.

Con esta operación se pretende eliminar suciedades purulentas de materias depositadas sobre la ropa no identificadas con la misma. Su eficacia mecánica es el único medio necesario para la eliminación de este tipo de suciedad, puesto que generalmente está compuesto de polvo muy fino. El paso siguiente es la llamada fase de lavado. En ella sé trata de eliminar la suciedad grasa y la pigmentaria absorbida por esta grasa que no ha sido extraída en el enjuague inicial por hallarse muy identificada con la ropa. Este tipo de grasa es la depositada por el contacto con el cuerpo humano, por la transpiración y el sudor. Esta fase de lavado no es muy enérgica ni prolongada; basta con un detergente capaz de saponificar y emulsionar las grasas, es decir, rico en tensioactivos para hacer más fácil la penetración en la fibra y en la suciedad (elevado poder humectante). Los blanqueantes ópticos que compongan el detergente deben ser adecuados para que no se alteren ni con la luz, ni con los productos empleados ni a bajas ni a latas temperaturas para el blanqueo, además de las altas temperaturas de la calandra. El tiempo de duración de esta fase suele estar entre 10 y 15 minutos y a una temperatura de 80 ° C con un nivel bajo de agua. Cuando la ropa alcanza estas temperaturas, adquiere una mayor esponjosidad y por tanto, una mejor actuación de los productos de lavado (detergencia, blanqueo y desinfección).La ropa al llegar a esta temperatura en presencia de los tensioactivos, toma un mayor volumen, debido al hinchamiento de las fibras, que fácilmente permiten el desprendimiento de residuos incrustados, la saponificación y emulsión de las grasas y la mayor facilidad de circulación del baño por el interior de los hilos. Para la eliminación de los residuos de detergente y oxidante entre las fibras, se programan un número de aclarados, generalmente cuatro, de dos minutos de duración y a nivel alto. Cuando la ropa ha pasado una fase de lavado a temperatura de 80 °C, la grasa se saponifica, emulsionada y en suspensión. Un enfriamiento repentino puede romper estas propiedades, y por tanto, las grasas pueden depositarse de nuevo en la ropa. Para no correr este riesgo, se programa una entrada de agua con enfriamiento progresivo, para que la disminución de la temperatura no sea inmediata, sino paulatina, puesto que la ropa contiene unos 2,5 litros de agua absorbida a 80 ° C procedente del lavado.

En el último aclarado debe efectuarse una completa neutralización de la alcalinidad para conseguir un PH entre 6,5 y 7, y así evitar incrustaciones que destruirían la fibra. En esta fase se añade el suavizante, para conseguir un perfecto acabado y una mejora en el paso por la calandra. El blanqueo se realiza a alta temperatura a base de perborato sódico estabilizado o con agua oxigenada estabilizada. Así se evita la utilización de la lejía, que es más agresiva para la ropa. Con este programa se consiguen todos los efectos de lavado, blanqueo, bactericida, bacteriostático y aclarados eficientes de la ropa. El programa de ropa sucia se utiliza para las prendas que presentan las siguientes características: Composición: sábanas, cabezales, cubrecamas y toallas. Fibra: algodón de color blanco. Suciedad: escasa y de tipo graso.

3.3.1.2.

Programa de ropa muy sucia.

Las primeras fases de este programa son enjuagues a nivel alto de agua y temperatura ambiente. El número de los mismos se programa, cuando la práctica muestra que se elimina casi toda la sangre. La siguiente fase es el prelavado. Se realiza a nivel alto de agua y temperatura que no debe de superar en ningún caso los 36 ° C, para evitar que se fije la sangre que queda después de los enjuagues. Su eliminación total se realiza según ciertas condiciones: • •

químicamente: mediante un detergente aniónico naturaleza química neutra. biológicamente: mediante un detergente enzimático.

de

En la fase de lavado, se emplea un sistema idéntico en todos los parámetros, que para el lavado de ropa sucia ajustando dosificaciones, • teniendo en cuenta la necesidad de eliminar mayor cantidad de suciedad y mayor cantidad de colorantes que en la ropa sucia. Normalmente, este tipo de ropa contiene a veces coloraciones de productos fármacos y desinfectantes, de forma que se debe de adecuar el tratamiento de lavado, no sólo para que sea eficaz, sino para evitar que se fijen todavía más sobre la ropa. Así, por ejemplo, un tratamiento de blanqueo con hipoclorito sódico en frío o con agua oxigenada a alta temperatura, elimina las manchas de mercromina.

Sin embargo, un tratamiento con hipoclorito sódico sobre manchas de HIBITANE, las fijan hasta imposibilitar que se eliminen en sucesivos tratamientos. Estas manchas de HIBITANE tratadas con perborato sódico o agua oxigenada, no tienen dificultad para la eliminación. El programa de ropa muy sucia se utiliza para las prendas que presentan las siguientes características: - Composición: lencería en general y quirófano. - Fibra: algodón de color blanco y verde'1 -

Suciedad: abundante de tipo orgánico.

3.3.1.3. Programa para ropa de poliéster/algodón. Los tejidos de poliéster/algodón suelen encontrarse en le mercado en mezclas de proporciones 50/50 ó 65/35 según los usos a que son destinados. En cuanto a su constitución física, tienen las siguientes características: -

-

-

-

Presentan una fuerte retención de materias grasas. Los acabados especiales a base de resinas utilizadas muy frecuentemente en este tipo de tejidos, aumenta considerablemente la dificultad en la eliminación de las manchas de grasa. La humedad propia de una fibra de algodón suele ser del 6 al 8%, en cambio, la humedad de la fibra de poliéster es del 0,5 %, por lo que un tejido cuya mezcla es de 50/50 tendrá una humedad que próxima al 2,7 % ; asimismo, un tejido cuya mezcla sea de 65/35 tendrá una humedad constitucional del orden del 2,2 %. A temperaturas superiores a los 140 ° C (calandrado) el tejido empieza a tomar un brillo característico debido a la fusión. A estas temperaturas, la electricidad estática que generan estas prendas es tan pronunciada que imposibilitan su paso por la calandra, es decir, se adhieren a los cilindros y no permiten que la ropa circule normalmente. Las fibras de poliéster resisten muy bien a los agentes químicos de tipo alcalino (en los tejidos mezclados debe de tenerse en cuenta la diferencia de comportamiento del algodón frente a estos productos).

-

El blanqueo de estos tejidos puede efectuarse con cualquier oxidante. El blanqueante óptico debe ser una combinación de tal manera que unos sean afines al poliéster y otros al algodón.

Del procedimiento de lavado y el detergente adecuado para estos tejidos, se observan las siguientes características: •

La principal dificultad en el lavado de este tipo de tejidos es la eliminación de las manchas de grasa, así como el evitar los tonos grises producidos por la redeposición de la suciedad.



La temperatura de lavado no debe superar los 60 ° C. El descenso de temperatura máximo permisible para evitar arrugas es de 8 o C, por lo que siempre se programa un descenso progresivo de la temperatura automático para evitar el salto térmico.



Para la ropa muy sucia se utiliza un prelavado en aquellos casos en que la suciedad sea grasa, y un segundo lavado más concentrado en detergente para evitar la redeposición. En la utilización de las máquinas de lavado, se han de tener en cuenta los siguientes factores: •

La carga de las máquinas debe ser de un 75 % de la capacidad de la lavadora.



La reducción gradual de la temperatura y el mantenimiento de un nivel conveniente reduce el riesgo de formación de arrugas.



El centrifugado tiene que ser suave.

3.3.1.4.

Programa para ropa infecciosa.

A este tipo de ropa se le hace un pretratamiento a base de productos bactericidas. El resto del programa es idéntico al programa de ropa muy sucia. 3.3.2.

Especificaciones de los productos químicos utilizados en el proceso de lavado.

A continuación, se describen las características que deben de cumplir los productos químicos utilizados en el proceso de lavado, sea cual sea el proveedor que los suministre. 3.3.2.1. Humectante.

Debe de ser un detergente en forma de pasta o líquido con alto poder desengrasante, por su elevada concentración en tensioactivos y con naturaleza químicamente neutra. Por su efecto, las fibras adquieren una dilatación que le permite que el baño disponga de un mayor poder humectante. Se utiliza para proporcionara la ropa una esponjosidad debido a sus propiedades tensioactivas, así como elimina previamente la suciedad orgánica. Disuelve las grasas, y las mantiene en suspensión (elevado efecto antirredepositante) contribuyendo con ello a que los microorganismos que pueda contener, sean puestos al descubierto tanto de la incrustación como de los medios de nutrición. Se utiliza también en el lavado de mantas de lana por su carácter neutro. Sus características químicas son: • •

Contiene del 5 al 1 5 % de tensioactivos no iónicos y más del 30 % de tensioactivos aniónicos. PH al 1 % : 7 aproximadamente.

3.3.2.2. Producto para el prelavado. Debe ser un detergente aniónico con alto contenido de enzimas. Su acción es biológica y actúa sobre las proteínas de largas cadenas moleculares, escindiéndolas en moléculas sencillas de fácil destrucción. El tiempo de actuación de las enzimas depende de la suciedad proteínica que se halla frente a ellos, de la temperatura del medio acuoso, del PH y de la agitación mecánica. De esta forma se destruyen suciedades, que hidrolíticamente con productos químicos resultarían tan enérgicos como corrosivos en su eliminación, no dejando residuos orgánicos sobre la ropa. Sus características químicas son: • • •

Menos del 5 % de tensioactivos aniónicos. Del 5 a! 15 % de tensioactivos no iónicos. Alto contenido de enzimas.

3.3.2.3. Producto para el lavado, Debido a la calidad del agua de alimentación de la lavandería (descalcificada y con 5o HF) se puede utilizar como detergente de lavado, un jabón en polvo de alta calidad, elaborado a partir de grasas minerales minuciosamente seleccionadas, para evitar su enranciamiento. Se tiene que utilizar a alta temperatura, proporcionando a la ropa una gran suavidad. Además, admite todo tipo de blanqueantes.

Producto para el blanqueo.

3.3.2.4.

Como producto blanqueante para la eliminación de ciertas manchas durante el proceso de lavado, se utiliza el Peróxido de Hidrógeno 35 % (H202) estabilizado para evitar una pérdida de oxígeno activo. Las ventajas de la utilización del Peróxido de Hidrógeno 35 % son las siguientes: • • • • • •

3.3.2.5.

Su mezcla con el HIBITANE no produce manchas. Menor ataque a la fibra con una mejor utilización. Buena desinfección, ya que, lavando a temperaturas superiores a 40 ° C, mata las bacterias. Permite lavar la mayor parte de la ropa de color de igual forma que la blanca. No es contaminante. Una vez desprendido el oxígeno activo sólo queda agua como residuo, reduciendo el nivel de contaminación del efluente. Se utiliza como anticloro cuando hay blanqueantes clorados, dando origen a productos no contaminantes.

Suavizante textil.

Con este producto se consigue una fina película, que se deposita sobre la ropa y le proporciona un tacto suave, evitando la posterior deposición de incrustaciones, y por lo tanto, de la suciedad. Por su composición en tensioactivos catiónicos, contribuye a una acción bactericida. Otra característica que se consigue con su utilización, es la eliminación de electricidad estática. 3.3.2.6.

Germicida.

Para la desinfección de textiles se utiliza un producto con elevada actividad germicida y prolongada actividad: -

Bactericida. Pseudomonicida. Tuberculicida. Fungicida.

Su composición será la siguiente: -

4.

Cloruro de alquildinetil eti bencil amonio 12,6 % . Metilsulfato de 1 -m e t il -1 - a l q u i l o m i d o e t i l - 2 - 2 alquilimidozolio 7,2 % . Agentes suavizantes, disolventes, colorantes y aromatizantes.

PROCEDIMIENTO GENERAL DE LA ROPA PLANA.

Una vez que la ropa sale de las máquinas de lavado, comienza el proceso de tratamiento de la ropa en la zona de limpio. La salida de las cargas puede presentar tres tipos de situaciones, dependiendo del tipo de clasificación inicial realizada en la zona de sucio: 1a.- Que la ropa haya sido clasificada completamente en la zona de sucio. En este caso, se realiza directamente el proceso de preparación de la ropa anterior a su paso por las máquinas. 2".- Que se haya realizado un proceso de clasificación básica en la zona de sucio. En este caso, se realiza una segunda clasificación, para poder pasar a la preparación de la ropa vista en la situación T. 38.- Que se haya realizado un lavado conjunto de toda la ropa, sin clasificación inicial. En este caso, se debe de realizar una clasificación inicial, semejante a la clasificación básica en la zona de sucio, para después clasificar totalmente la ropa tal y como se realiza en la situación 2*. Clasificar la ropa plana totalmente, significa dejar separadas las sábanas {sin distinguir entre encimeras, bajeras, de matrimonio o individuales), las colchas, las fundas, los cuadrantes y las entremetidas. Una vez separadas las prendas, se procede a su preparación para su posterior paso por la calandra, es decir:

• Preparación de fundas, cuadrantes y entremetidas: se pueden dar dos casos: -

-

Si el cliente exige una calidad alta y una posición específica de las prendas, como en el caso de algunos hoteles, se estiran las prendas de modo que la costura quede justo en el borde, y se introducen en una posición tal que el anagrama del hotel se vea nada más salir de la plegadora. Si el cliente no exige una calidad tan alta, como es el caso de los hospitales, se puede estirar en el momento de la introducción. ROPA PLANA, SALIDA DE LAS CRAGAS Y A LAVADAS

IDENTIFICACION DE LAS BAÑERAS

SE HA REALIZADO UNA CLASIFICACION TOTAL

NO

CLASIFICACION ANTERIOR A LA INTRODUCCION

SI ESTIRADO DE LAS FUNDAS

¿HAY INTRODUCCION AUTOMATICA?

ESTIRADO DE LAS SABANAS Y COLCHAS

SI

PASO POR LA CALANDRA DOCUMENTO DE CONTROL EN LA PLEGADORA

PLEGADO Y APILADO EN CANTIDADES FIJAS PROCESO DE EMPAQUETADO Y EXPEDICION

En ambos casos, es conveniente la disposición de las prendas en una pequeña bandeja situada delante de la introductora, para facilitar la recogida de las mismas, sin tener que girarse cada vez que se coja una. Preparación de sábanas y colchas 1 : también se pueden dar dos



Casos: -

-

Que haya introductora automática, en cuyo caso no se preparan las sábanas, introduciéndolas automáticamente sin diferenciar entre encimeras, bajeras, de matrimonio o individuales ni las colchas 2 . A la salida de la plegadora se distinguen y se separan, para lo cual es necesario una mesa de apilamiento. Que no haya introductora automática, en cuyo caso es necesario extender las sábanas y las colchas sobre unas mesas, con dos de sus bordes doblados, para facilitar su recogida. La producción de la introducción manual es igual a la de la introducción automática, sin embargo, la productividad por persona es menor, puesto que se necesitan más personas en la labor de extensión de las prendas.

Cuando las prendas salen de la plegadora, se deben de apilar en lotes de cantidad predefinida, para así colocarlas en la cinta de empaquetamiento, y ser contadas por paquetes. Si un lote tiene un número de unidades distinto al predefinido, la persona que está atendiendo-la plegadora, que es la que coloca las prendas en la cinta de la empaquetadora, pone un cartel con el número de prendas que lleva. Durante el proceso de la ropa plana se realiza también el proceso de ropa rota y de rechazo, que se describirá posteriormente. En el ANEXO I se incluye un modelo de documento de control de la producción por prendas de la plegadora.

Se deben definir documentos de Información de las distintas velocidades de planchado para cada tipo de ropa. Este documento se debe de confeccionar en la implantación del manual en cada lavandería, puesto que depende de cada calandra. La introducción de sábanas y colchas no puede realizarse a la vez en la misma calandra, puesto que necesitan velocidades de planchado distintas, al tener distinto grosor de tejido.

5.

PROCEDIMIENTO GENERAL DE LA ROPA DE FELPA.

A la salida de las cargas de ropa de felpa de las máquinas de lavado, se pueden presentar los siguientes casos: 1°.- Que salgan de un túnel de lavado con secadoras, y se les haya dado todo el tiempo de secado necesario n , es decir, aproximadamente entre 25 y 30 minutos de aire caliente, y de 3 a 5 minutos de tiempo de enfriamiento 2. 2°.- Que salgan húmedas, bien porque hayan salido de lavadoras o de túnel sin secadoras, o bien por no haberle dado todo el tiempo de secado necesario en un túnel con secadoras. En el primer caso, se procede al proceso de clasificación con el mismo planteamiento que el realizado para la ropa plana, procediendo a la preparación de las prendas para su posterior doblado, ya sea manual o automático. Clasificar la ropa de felpa totalmente, significa dejar separadas las toallas de baño, las de lavabo, las de bidet, los alfombrines y los albornoces3. En el segundo caso, las cargas deben de pasar por las máquinas secadoras durante el tiempo indicado en el punto 1 o, o por lo que le reste hasta llegar a dicho tiempo, si es que ya se le ha secado algo en las secadoras de un túnel provisto de ellas. Una vez secas las cargas, se separan tal y como se ha indicado en el proceso del primer caso. El tiempo de secado de la ropa de felpa depende del grosor de la prenda, de la temperatura de secado y de la carga de la máquina secadora. Evidentemente, habrá que emplear más tiempo con las prendas nuevas, así como en el caso de que la secadora se cargue por encima de su capacidad. El tiempo de enfriamiento se aplica en eJ proceso de secado para evitar las arrugas que pueden producirse con un cambio brusco de temperatura. Como ya se ha mencionado en la parte general de este manual, la clasificación puede realizarse por la persona que está en la máquina, al tiempo de introducir las prendas en ella. Sin embargo, esto obliga a emplear un tiempo en la separación que hace desaprovechar la capacidad máxima de proceso de la

máquina, lo cual es totalmente contrario al objetivo de producción que se está apuntando. Por ello, la clasificación debe de ser realizada por personas que no están en un puesto de máquina.

ROPA DE FELPA. SALIDA DE LAS CARGAS YA LAVADAS

IDENTIFICACION DE LAS BAÑERAS

PASO POR SECADORAS

¿TOTALMENTE CLASIFICADA? SI

NO

CLASIFICACION DURANTE LA INTRODUCCION

CLASIFICACION ANTERIOR A LA INTRODUCCION

DOCUMENTO DOBLADORA DOBLADO AUTOMATICO

APILADO EN CANTIDADES FIJAS

DOBLADO MANUAL DE ALFOMBRINES, TOALLAS BIDET Y ALALBORNOCES.

DOCUMENTO DE CONDICIONES GENRALES DE APILAMIENTO

PROCESO DE EMPAQUETADO Y EXPEDICION

Se podría realizar un documento de control de la producción de las secadoras, pero esto exigiría el poner los kilos de cada carga en la bañera, una vez que han salido de las máquinas de lavado. De momento, este proceso se considera poco útil, por no conocerse la aplicación práctica que supondría la utilización de dicho documento. El plegado de las prendas puede ser manual o automático (en la máquina de plegado de toallas). Si se utiliza la plegadora 4 , cuando salen las prendas ya dobladas, se deben de apilar en lotes de cantidad predefinida, de forma similar al caso de la ropa plana, para así colocarlas en la cinta de empaquetamiento, y ser contadas por paquetes. Si un lote tiene un número de unidades distinto al predefinido, la persona que está atendiendo la salida de las prendas de la plegadora, que es la que coloca las prendas en la cinta de la empaquetadora, pone un cartel con el número de prendas que lleva. En el ANEXO I se incluye un modelo de documento de control de la producción por prendas de la plegadora de toallas. Las máquinas de doblado automático suelen disponer de una serie de programas de control del tipo de plegado, que pueden ser adaptados a las exigencias de cada cliente en particular. Dichos programas serán incluidos en el procedimiento implantado en cada una de las plantas de lavado. En el caso de que se realice el doblado manual de las prendas, caso de los alfombrines, las toallas de bidet y los albornoces, el proceso que se sigue una vez doblados, es el mismo que el que se ha descrito con las prendas que salen de la máquina de doblado automático. Durante el proceso de la ropa de felpa, se realiza también el proceso de ropa rota y de rechazo, que se describirá posteriormente. En las máquinas plegadoras de toallas sólo se introducen las toallas de baño y las de lavabo. En el caso de toallas de hotel, es necesario colocar la toalla de manera que pueda leerse el anagrama una vez realizado el plegado.

6.

PROCEDIMIENTO GENERAL DE LA ROPA PE FORMA.

Se consideran los mismos casos de partida de la clasificación de las cargas una vez que han salido de las máquinas de lavado, que en el procedimiento de ropa plana. La clasificación completa de la ropa de forma significa dejar separados totalmente chaquetillas, pantalones, camisones y batas \ teniendo en cuenta que, salvo en el caso de la ropa contaminada de hospital y la ropa de los niños, que se lavan sin clasificación inicial, el resto de ropa de forma se clasifica según su color, lavando aparte lo blanco, lo verde y lo azul. Una vez realizada la clasificación, hay tres alternativas de proceso de la ropa de forma 2 :

• Alternativa 1: Paso por el túnel de planchado. Con esta alternativa, el proceso se descompone en los siguientes pasos: 1. Colocar las prendas en perchas. 2. Colocar las perchas en el carril del túnel. 3. Pasar las prendas a una velocidad y una temperatura adecuada a la humedad y al tipo de tejido. 4. Recogerlas del final del carril una vez planchadas. 5. Doblado automático de las chaquetillas y los camisones, las máquinas plegadoras de ropa de forma, disponen de distintos programas de plegado, y conviene que, aunque dichos programas seleccionen el plegado automáticamente, se pasen las chaquetillas y los camisones aparte.

Hay rnás tipos da ropa de forma, como pueden ser los monos de trabajo, o los uniformes de las camareras de hoteles, pero la r o p a de forma más numerosa es la que viene de un hospital y, por tanto, la que se tendrá en cuenta en el procedimiento. También puede realizarse el proceso de la forma sin haber clasificado totalmente las prendas. En este caso, se clasifican después de haber pasado por el proceso de planchado o de secado. Parece que es más rápido hacer la clasificación antes del planchado o secado, sin embargo, es algo que hay que demostrar en el "Estudio de tiempos y métodos", que está previsto realizar.

ROPA DE FORMA. SALIDA DE LAS CARGAS YA LAVADAS. IDENTIFICACION DE LAS BAÑERAS SE HA REALIZADO UNA CLASIFICACION TOTAL

NO

CLASIFICACION ANTERIOR A LA INTRODUCCION

SI

DOCUMENTO MAQUINA TUNEL

ALTERNATIVA 1

ALTERNATIVA 2

PASO POR TUNEL DE PLANCHADO

PASO POR SECADORA

ALTERNATIVA 3

PASO POR SECADORA

PLANCHADO EN PRENSA, MANIQUI O PLANCHA

DOBLADO MANUAL O AUTOMATICO

DOCUMENTO MAQUINA DOBLADORA

PROCESO DE EMPAQUETADO Y EXPEDICION

6. Doblado manual de los pantalones. También se puede realizar el doblado automático, pero suelen aparecer problemas con los cordones de la cintura, pues se enrollan en muchas ocasiones en los rodillos de la máquina. 7. En el caso de que el cliente lo exija, se empaquetarán juntas sólo las prendas del mismo tamaño, por lo cual será necesario clasificarlas según tallas. La alternativa 1 es la más utilizada en el proceso de los camisones y los pijamas de hospital, aunque también se puede utilizar para el resto de prendas de forma. Alternativa 2: Secado en las secadoras. Esta alternativa tiene los siguientes pasos: 1. Secado durante unos minutos de la ropa, de manera que no pierdan totalmente la humedad. 2. Planchado en una prensa, en un maniquí, o en una plancha manual. Para realizar estos planchados, la ropa no puede tener la humedad con la que salen de las máquinas de lavado, por lo que se realiza el paso anterior de secado. 3. Doblado manual o automático, con las mismas consideraciones de los puntos 5o y 6o de la alternativa 1. 4. Clasificación según tallas, si procede. La alternativa 2 se suele utilizar para prendas que exigen una mayor calidad en la presentación, como es el caso de la ropa de forma blanca y las batas de los médicos de hospital. No obstante, también se puede utilizar para el resto de ropa de forma. En el caso de las batas blancas de médico y de las chaquetillas blancas de hospital, no se suelen empaquetar, sino que se envían colgadas en perchas para no perder la calidad de planchado que se les ha dado. • Alternativa 3: Secado total en secadoras consta de los siguientes pasos:

1

. Esta alternativa

1. Introducción de la ropa en secadoras, y secado total de la ropa. 2. Doblado manual o automático, con las mismas consideraciones de los puntos 5o y 6o de la alternativa 1. 3. Clasificación según tallas si procede. La alternativa 3 se suele utilizar para prendas que exigen una menor calidad en la presentación, como es el caso de la ropa de forma verde y la ropa de hospital de los niños. En concreto, en el caso de la ropa de forma verde de hospital, que es la utilizada para los quirófanos, el dar un acabado muy exigente en el planchado no tendría sentido, puesto que en la lavandería sólo se realiza el

proceso de desinfección, teniendo que pasar después, y en las instalaciones del hospital, por un proceso de esterilización que arruga la ropa. Es importante destacar que, durante todo el proceso de la ropa de forma, sea cual sea la alternativa elegida, y la calidad exigida, deben de evitarse la formación de las arrugas. La mejor manera de que no se produzcan es intentar que no se apelotone la ropa ni en las máquinas de lavado, ni en las bañeras, ni en las secadoras, ni en ningún otro sitio en el que se encuentre apilada, manteniéndola lo más holgada que sea posible. El tiempo de secado no se especifica, puesto que depende del tipo de ropa, del grado de humedad, de la temperatura de secado y de la carga de la secadora. Sin embargo, si es Importante tener en cuenta tres cons ide racion es, para evitar la formación de arrugas en el secado de la ropa de forma: •

Que se le aplique un tiempo de enfriamiento suficiente, de manera que, como también se indicó en el proceso de lavado de la ropa, no sufra un cambio brusco de temperatura, lo cual fijarla las arrugas que pudieran haberse originado.



Que no se cargue en exceso la secadora. Que una vez que ha salido de la secadora, no se deje apilada dentro de las bañeras durante mucho tiempo.

7.

PROCEDIMIENTO GENERAL DE LA MANTELERÍA.

También se consideran los mismos casos de partida de la clasificación de las cargas una vez que han salido de las máquinas de lavado, que en el procedimiento de ropa plana. Dentro de la ropa de mantelería, se pueden hacer las dos siguientes clasificaciones: •

Mantelería de mesa: incluye todas las prendas que pueden ser colocadas en una mesa de restaurante.



Mantelería de cocina: incluye todas las prendas que se utilizan en la cocina de un restaurante, como son los trapos de cocina, las balletas, las rejillas, los delantales o mandiles, y las que utilizan los camareros, como los picos o los litos.

Generalmente, es mucho mayor el volumen de mantelería de cocina que la de mesa. Además, el acabado es más exigente en la de mesa, por razones lógicas de imagen del restaurante. Dado que el proceso de ambos tipos de ropa es diferente, incluso para el lavado, se estudiarán separadamente los procesos cada uno de ellos. En el diagrama de

flujo incluido, sólo se considera el caso de la mantelería de mesa, puesto, como se ha dicho anteriormente, llega a la lavandería en mayor volumen.

7.1.

MANTELERÍA DE MESA.

La clasificación completa de la mantelería de mesa significa dejar separados totalmente servilletas, cubremanteles, manteles normales, manteles grandes, manteles banquete y tiras. El proceso de este tipo de ropa puede realizarse con dos alternativas, antes de realizarse la clasificación completa: •

Alternativa 1: Para prendas de mantelería que salgan de las máquinas de lavado con un grado de humedad bajo \

El grado da humedad contenida en la ropa depende del factor G de la máquina de lavado que se haya utilizado. Este factor es representativo de la fuerza centrífuga aplicada a la ropa

MANTELERIA DE MESA. SALIDA DE LAS CARGAS YA LAVADAS

ALTERNATIVA 1

IDENTIFICACION DE LAS BAÑERAS

ALTERNATIVA 2 PASO POR SECADORA

¿SE HA REALIZADO UNA CLASIFICACION TOTAL?

NO

CLASIFICACION ANTERIOR A LA INTRODUCCION

ESTIRADO AL TIEMPO DE PASAR POR LA CALANDRA

ESTIRADO

DOCUMENTO DE CONTROL EN PLEGADORA

PASO POR CALANDRA

DOBLADO AUTOMATICO O MANUAL, SEGÚN TAMAÑO

APILADO EN CANTIDADES FIJAS

DOCUMENTO DE CONDICIONES GENERALES DE APILAMIENTO

PROCESO DE EMPAQUETADO Y EXPEDICION

También se utiliza con prendas acrílicas y prendas con un alto contenido en poliéster, que salen del lavado con un porcentaje de humedad también muy bajo, por sus propias características. Este proceso conlleva los siguientes pasos: 1. Clasificación completa anterior a la introducción en la calandra.

2. Estirado de las prendas ya clasificadas. Debe de realizarse de tal

forma que el dobladillo quede siempre hacia el mismo lado. Esto facilita la introducción de las prendas, que debe de hacerse con el dobladillo hacia arriba; así, en el plegado posterior, queda bien presentado. Además se facilita también el posterior doblado manual de las piezas „que no pueden ser dobladas automáticamente. El estirado se puede hacer dos formas: en el momento de pasar cada prenda, o antes de pasarlas todas. Parece que es mucho más rápido el estirar las prendas en mesas y después introducirlas, que estirarlas en el momento de pasarlas. No obstante, lo primero requiere de un mayor número de personas, para no dejar parada la calandra, sin embargo, proporciona una mayor calidad en el planchado, por ser más fácil colocar todos los bordes bien, para que no salgan arrugados. El estirar las prendas justo antes de pasarlas por calandra, requiere no observar hacia qué parte está el dobladillo, pues de lo contrario sí que se pierde tiempo de máquina. Las únicas prendas de este tipo que no se estiran son los manteles de banquete y las tiras, por las dimensiones que tienen. 3. Doblado manual de las prendas que no han podido ser dobladas por la plegadora, como es el caso de las servilletas ' y de todos aquellos manteles cuyas dimensiones sobrepasan en mucho a las de una sábana de matrimonio. 4. Apilado en cantidades fijas y posterior proceso de empaquetado y expedición. Alternativa 2: Para las prendas de mantelería que hayan salido con un grado de humedad muy alto, o para las que tengan un alto grado de incrustación. En este caso, se pasa la mantelería por la secadora antes de su clasificación completa, durante un tiempo que oscila entre 6 y 10 minutos. Esta alternativa se utiliza para eliminar humedad de la ropa, y así facilitar el paso por la calandra de misma. Dado que las prendas de mantelería suelen ser más gruesas que las de ropa plana, absorben una mayor cantidad de agua, y por tanto, en el proceso de calandrado posterior encuentran una mayor resistencia al avance en el deslizamiento sobre la teja. Esta resistencia produce la deformación y el descuadre de la prenda, obteniéndose una presentación de muy baja calidad. En este caso es preciso realizar un proceso de desincrustación de la ropa2.

Esta misma resistencia se tiene también cuando hay incrustaciones en la ropa. Si estas incrustaciones van acompañadas de un alto grado de humedad, el resultado obtenido en el planchado es bastante malo. En el caso de mantelerías de mesa muy finas y con poca suciedad, como es el caso de los hoteles de lujo, dado que pueden pasar por un programa de mantelería en un túnel de lavado, si éste tiene secadoras finales, se realiza ya el proceso de secado, no teniendo que pasarlas por las otras secadoras. En muchas ocasiones, e! diente quiere un doblado especial de su mantelería, lo cual hace todavía más difícil el poder realizar el doblado automático en la plegadora. El plegador no suele dar todos los dobleces necesarios para mantelería, por lo generalmente, se tienen que colocar varias personas detrás de la plegadora, para realizar estos últimos pliegues. El proceso de desincrustación de la ropa será analizado en el " MANUAL DE CONTROL DE CALIDAD DE LAS LAVANDERÍAS DE FLISA * previsto para su realización en el ejercicio del ano 1995.

8. PROCEDIMIENTOGENERALDELAROPAVERDE. Las cargas de ropa verde que salen ya lavadas, presentan los mismos tipos de situación que los expuestos en el procedimiento general de la ropa plana, aunque como ya se ha comentado, salvo en el caso de ropa infecciosa, para la cual no se realiza clasificación alguna, lo normal es separar la ropa verde del resto de ropa. En el caso de la ropa verde, además de las situaciones de clasificación definidas en apartados anteriores, existe una clasificación también utilizada frecuentemente, y es la de lavar junta toda la ropa verde, ya sea ropa de forma o ropa de cama. Como la ropa de forma verde tiene un alto contenido de poliéster en su tejido, cuando se lava con ropa plana verde, es necesario aplicar el programa de ropa de forma verde. De lo contrario, se alcanzaría una temperatura en el proceso de lavado, que originaría arrugas en la ropa de forma. En este caso, una vez que han salido del proceso del lavado, se procede a realizar una clasificación completa \ quedando separadas los siguientes tipos de prendas: •

Ropa plana verde: dejando apartadas las sábanas de las entremetidas .



Ropa de forma verde: quedando aparte los pantalones, las batas de quirófano y las chaquetillas.

Una vez realizada la clasificación completa, si es que no se hubiese realizado antes del lavado, con la ropa de forma se realiza el mismo recorrido que el definido en el PROCEDIMIENTO GENERAL DE ROPA DE FORMA, y con la ropa plana se sigue el mismo recorrido que el definido en el PROCEDIMIENTO GENERAL DE ROPA PLANA.

Únicamente hay que tener en cuenta que la ropa de forma verde es algo más gruesa que el resto de prendas de forma, y por tanto, las variables de tiempo máquina aplicadas en cada uno de los procesos alternativos explicados, presentan ligeras modificaciones, aunque dichas variaciones no significan un trato distinto en la concepción general del recorrido de dicha ropa.

ROPA VERDE. SALIDA DE LAS CARGAS YA LAVADAS.

IDENTIFICACION DE LAS BAÑERAS ¿SE HA REALIZADO UNA CLASIFICACION TOTAL? CLASIFICACION

FORMA VERDE

PLANA VERDE

PROCESO ESPECIFICO DE LA ROPA DE

PROCESO ESPECÍFICO DE LA ROPA PLANA

PROCESO DE EMPAQUETADO Y EXPEDICION

9. PROCEDIMIENTO DE EMPAQUETADO Y EXPEDICION El proceso de empaquetado y expedición es el último que se realiza en la cadena de producción de las lavanderías industriales. Se puede subdividir en otros dos procedimientos: • •

Procedimiento de empaquetado. Procedimiento de expedición.

9.1.

PROCEDIMIENTO DE EMPAQUETADO.

Como la gran mayoría de los productos elaborados, una vez finalizados su proceso de producción se procede a su empaquetado. Las razones que justifican el gasto en el empaquetado son las siguientes: -

Facilita el almacenamiento y el manejo del producto. Sirve para una mejor utilización de los equipos de transporte. Protege el producto. Da una mejor imagen de la lavandería.

La primera razón es bien obvia, y más en el caso del manejo de prendas. Las prendas después de su doblado, pasan al empaquetado. De esta forma, quedan bien sujetas, sin la posibilidad de que se desdoblen por el camino. Además así se pueden manipular varias prendas de una sola vez. Para el manejo y apilamiento dentro del carro de transporte, también supone una ventaja, puesto que se puede disponer en varias posiciones, que no serían posibles si las prendas se almacenaran sin empaquetar. Además, así se puede distribuir la ropa en los carros de manera que durante el transporte, no sufran desplazamientos que pudieran ocasionar el deterioro de la calidad final ofrecida en el proceso de producción anterior. En cuanto a la protección del producto, es también evidente que cuando la ropa va empaquetada en el plástico, queda resguardada de las posibles manchas que se pudieran originar en el propio transporte de la ropa desde la lavandería hasta las instalaciones del cliente y, en el caso de ropa hospitalaria, también evita los posibles contactos contaminantes, que pudieran tener consecuencias realmente problemáticas en los casos de infección. El empaquetado es un gasto necesario para la empresa de la lavandería, y que además está plenamente compensado con la disminución de otros costes que pudieran originarse sin el empaquetado, como pueden ser: -

Coste de tener que utilizar más carros para el transporte.

-

Coste de tener que afrontar mayores reclamaciones por parte del cliente por deficiencias en la recepción y presentación de la mercancía.

El proceso de empaquetado consta de los siguientes pasos: 1. Las prendas, una vez que han sido apiladas en las cantidades predefinidas para los lotes1, se colocan a la espera de su proceso en una máquina de empaquetado manual o automática. La diferencia entre los dos tipos de máquinas radica en que las automáticas suelen tener una cinta de transporte en la que se pueden disponer los lotes una vez que van saliendo del proceso anterior; sin embargo, las empaquetadoras manuales no disponen de cinta de transporte, y por tanto, han de ser dispuestos en una mesa u otro elemento auxiliar, a la espera del empaquetado. 2. Opción del etiquetado de los lotes con notas que reflejan el cliente, el tipo de ropa y el número de unidades que contienen cada uno de ellos. Este proceso conlleva las siguientes ventajas: - Permite realizar un conteo mucho más correcto y exhaustivo. - Se identifican mejor los lotes, pudiendo distinguir mejor la ropa de los clientes una vez procesada, evitar las posibles mezclas. - Proporciona una mejor imagen de control interno frente al cliente. Sin embargo, tiene el inconveniente de que la persona que realiza dicha tarea, dado que aparte de etiquetar los lotes, tendría que comprobar cada uno de ellos2 y apuntarlos en la hoja de borrador de albarán, no puede realizar ninguna otra operación dentro de la lavandería.

En el ANEXO I se muestra un ejemplo de hoja de condiciones generales de empaquetado, en la que se indica e) número de unidades de hay que disponer en un lote, de cada uno de ios tipos de ropa. De no ser así, no tiene sentido este puesto de trabajo, pues resulta de peor imagen frente al cliente el etiquetar un lote con un número erróneo de unidades, que equivocarse en un lote no etiquetado.

TRANSPORTE DE LOS LOTES A LA MAQUINA DE EMPAQUETAR

DOCUMENTO DE ETIQUETADO OPCION DE ETIQUETADO DE LOS LOTES

EMPAQUETAMIENTO MANUAL O AUTOMATICO

COLOCACION EN JAULAS

DOCUMENTO DE IDENTIFICACION DE CARROS

CONTEO (Solos e apunta lo que esta en las jaulas)

BORRADOR DE ALBARAN (general o específico por clientes)

IDENTIFICACION DE CARROS

PESAJE DE LOS CARROS LLENOS

DOCUMENTO ALBARAN DE ENTREGA (Con los Kilos en sucio, en limpio y de rechazo, así como el número de piezas a que corresponden)

ELABORACION DEL ALBARAN DE ENTREGA

PROCESO FINAL DE LA EXPEDICION

3. Empaquetado de la ropa. Es conveniente que el paquete no quede herméticamente cerrado dentro del polietileno, puesto que de ser así, la humedad residual de la ropa1 no encontraría una vía de salida del paquete, lo cual podría producir una condensación y una posible formación de hongos. 4. Colocación de los paquetes en los carros. En algunos casos, el cliente exige una determinada colocación de los distintos tipos de prendas en los carros, lo cual exige la preparación de varios carros para la colocación simultánea en cada uno de ellos del número de paquetes requeridos. En el ANEXO I se incluye un modelo de hoja de condiciones particulares de colocación en carros para un cliente específico. 5. Conteo de la ropa. La persona que recoge los lotes ya empaquetados y los coloca en los carros, es la encargada de llevar registrado el número de ellos, así como las unidades en el caso de que algún paquete tuviera un número distinto al especificado2. Es importante guardar siempre la norma de que SOLO SE APUNTA COMO CONTADO LO QUE ESTA COLOCADO EN CARROS. De esta forma, cuando se cambie de turno, se podrá conocer qué ropa está contada, y qué ropa no lo está. El conteo se debe de apuntar en lotes, en el albarán de entrega. En el ANEXO I se incluye también un modelo de borrador de albarán, que puede ser general, o estar particularizado para cada uno de los clientes. 6. Identificación de carros. Aunque los carros deben de estar ya identificados cuando se coloca el primer paquete, se puede realizar una segunda identificación con el número de unidades que van incluidas en cada carro. Tiene las mismas ventajas y desventajas que el etiquetado de los lotes. Luego, aunque la identificación del carro con el cliente es obligatoria, la especificación del número de piezas contenidas es opcional. La humedad residual es aquella que queda en la ropa después de haberla pasado por todo el proceso de producción. Cuando en un lote haya un número de unidades distinto al determinado en la hoja de condiciones de apilamiento, se debe de colocar una etiqueta indicando el número que lleva, aún en ei caso de no optar por la opción de etiquetado de todos y cada uno de los lotes.

7. Pesaje de los carros ya listos para su expedición. Esta lectura de peso también se anota en el borrador de albarán. 8. Elaboración del albarán de entrega. Una vez confeccionado el borrador de albarán, se prepara el documento de albarán de entrega, en el cual deben de figurar los siguientes datos: - Kilos lavados en el día. - Peso de la ropa que está en los carros1 - Kilos de rechazo. Se incluye una columna para reflejar las unidades de rechazo, pero en lo posible se ha de intentar no contar el rechazo, dado el tiempo que se pierde en ello. - Número de piezas de cada uno de los tipos de ropa que hay en los carros.

-

Números de los carros enviados.

Si bien es cierto que todos estos datos pueden reflejarse en el albarán de entrega, cuando un cliente no exige el conteo de ropa en limpio, o no exige el peso por facturar por piezas, no es imprescindible rellenar todos los datos anteriormente señalados. El albarán de entrega puede estar mecanizado o hecho a mano. Por cuestiones de imagen, conviene que esté mecanizado, para lo cual es necesario que pase por el departamento de administración. Los albaranes de entrega estarán numerados correlativamente. Cuando se anule uno de ellos, se reflejará en él el albarán que le sustituye. 9.2.

PROCEDIMIENTO DE EXPEDICIÓN.

Los pasos que sigue el proceso de expedición son los siguientes: 1. Depósito de los carros ya terminados en la zona de expedición de la lavandería. Es conveniente en ese momento, apuntar la hora a la que se termina de apilar el conjunto de los carros, para después poder establecer un control del número de horas que la ropa pasa en limpio dentro de la planta. Con este peso y el peso de la ropa lavada en eJ d(a, se puede tener una aproximación del trabajo de cada turno.

PROCESO DE EXPEDICION

DEPOSITO DE LOS CARROS EN ESPERA

APUNTAR EN BORRADOR DE ALBARAN LA HORA DE FINAL DE APILADO

CARGAR EN CAMION ESPECIFICACION DE RUTAS

DISTRIBUCION HACIA EL CLIENTE

LLEGADA AL CLIENTE

HOJA CONTROL DE RUTAS

DESCARGA

PESADO DE LA ROPA (Si el cliente tiene bascula)

FIRMA DEL CLIENTE DEL ALBARAN DE ENTREGA

El hecho de apuntar el número de los carros que se le envían a un cliente sirve para el control interno de la ruta que siguen los carros. En la mayoría de los casos, la pérdida de uno de ellos en las instalaciones del cliente supone un coste mayor que la facturación de la ropa lavada que se le ha entregado en dicho carro. Por tanto, es necesario llevar este control, incluso a nivel informático si hace falta. Evidentemente, cuantas más horas de esas 24 que se establecieron como nivel de servicio, pase la ropa en limpio, mayor será la capacidad de la lavandería de responder a una posible urgencia que haya surgido con un cliente. 2. El conductor, acompañado por su ayudante, si es que lo necesita,

3. 4. 5.

6.

7.

carga el camión con los carros del cliente, que toque llevar, previo aviso al encargado de planta. El conductor recoge el albarán de entrega, así como cualquier otro documento que tuviera que llevar al cliente aprovechando el transporte. Se apunta en la hoja de ruta la hora de salida de la planta. Una vez que el camión ha llegado a las instalaciones del cliente, se entregan los carros, pesándolos, si el cliente tiene báscula en sus instalaciones y quiere pesarlos. También se apunta la hora de llegada al cliente. El responsable de la recogida de la ropa en las instalaciones del cliente, firma el albarán de entrega, quedándose una copia él y otra el conductor. Generalmente, se recoge ropa de nuevo, con lo cual comienza el recorrido de la ropa tal y como se indicó en el capítulo 2 de procedimiento de recogida de la ropa.

El procedimiento de empaquetado y expedición tiene una gran trascendencia dentro del servicio de la lavandería, puesto que de su buena realización depende, no sólo la imagen de la empresa, sino también la facturación al cliente y el control interno de la producción. Por tanto, todos los esfuerzos encaminados a la mejora de este procedimiento repercuten directamente en la mejora del servicio prestado al cliente.

10. PROCEDIMIENTO DE ROPA ROTA Y DE RECHAZO. El procedimiento de ropa rota y de rechazo es un mecanismo de control que efectúa siempre que una prenda comienza un nuevo proceso en su recorrido. Fundamentalmente, se trata de una rápida inspección visual, tanto al comienzo del proceso, como al final del proceso. El correcto seguimiento del procedimiento garantiza la ausencia de la mayor parte de los envíos de ropa al cliente en condiciones defectuosas, que posteriormente serán devueltos por él, con el consiguiente coste de un nuevo proceso, y con el deterioro de la imagen causado por el descuido del detalle.

Como primera aproximación al mecanismo de control de la ropa, el procedimiento actúa según los siguientes pasos: 1. Inspección visual rápida1 de la prenda antes de su introducción en una máquina, o su comienzo de proceso manual. 2. Si la prenda está rota, se pasa directamente a realizar el procedimiento general de la ropa rota. 3. Si la prenda está manchada, se procede según el procedimiento general de la ropa de rechazo. 4. Si la prenda no está rota ni manchada, se continúa el proceso que se estaba realizando. 5. Una vez que la prenda ha pasado por la máquina, o que ha sido procesada manualmente, se realiza de nuevo una segunda inspección visual. Si la prenda está rota se procede según el procedimiento general de la ropa rota; si está manchada o arrugada, se realiza el procedimiento general de ropa de rechazo. 6. Si la prenda está en buenas condiciones de acabado, se procede a su empaquetado y posterior expedición. La inspección visual debe de ser rápida para no retrasar eJ proceso de producción. Evidentemente, cuanto más entrenado es té el personal, mayores serán las garantías de acierto en su Inspección.

INSPECCION VISUAL DE LA PRENDA ANTES DE LA INTRODUCCION DE LA MAQUINA

¿MANCHADA?

¿ROTA? NO

SI

PROCESO GENERAL ROPA ROTA

PASO POR MAQUINA

PROCESO GENERAL ROPA DE RECHAZO

INSPECCION VISUAL EXTERIOR

¿ROTA?

NO

SI PROCESO GENERAL ROPA ROTA

MANCHADA O ARRUGADA

SI

NO PROCESO GENERAL DE EMPAQUETADO

PROCESO GENRAL ROPA DE RECHAZO

Puede que en el proceso de empaquetado alguna prenda quede enganchada, arrugada, manchada o incluso quemada. En estos casos, se realiza una inspección visual de la ropa dañada, aplicando posteriormente los procedimientos generales de ropa rota o ropa de rechazo, según corresponda.

Tal y como se ha mencionado con anterioridad, el procedimiento de rechazo y ropa rota se subdivide en dos:

Procedimiento general de ropa rota Procedimiento general de rechazo 10.1. PROCEDIMIENTO GENERAL DE ROPA ROTA.

El procedimiento general que se explica a continuación responde al siguiente diagrama de flujo:

COMUNICARLO AL ENCARGADO

INSPECCION DE LA ROTURA

CAUSADO POR CLIENTE O POR LA LAVANDERIA

ENVIO A DEPARTAMENTO CONTROL CALIDAD INVESTIGACION CAUSAS

ENVIO DOCUMENTO DE RECHAZO/ROTO

DOCUMENTO DE RECHAZO/ROTO

Cuando se ha detectado una rotura en una prenda, se deja aparte, a la espera de la finalización del proceso, para su posterior comunicación al encargado. Si se para cada vez que se encuentra una prenda rota, se originan discontinuidades en el proceso de producción perjudiciales en el seguimiento del mismo.

Sin embargo, cuando se observan dos prendas rotas consecutivas, es necesario parar de inmediato, para que el encargado adopte las medidas oportunas. De no hacerlo asi, se corre el riesgo de que sea la maquina la que este rompiendo la ropa, provocando mas roturas en prendas que después habrá que abonar al cliente.

Una vez que el encargado esta enterado de la rotura, realiza una inspección visual para intentar determinar las causas de la misma. Si le resulta excesivamente difícil determinarlas, tendrá que recurrir a la consulta con el departamento de control de la calidad.

En general, los pasos a seguir después de la inspección visual son los siguientes:

1. Determinación de si la rotura ha sido producida por el cliente o por la lavandería. 2. Si al rotura ha sido ocasionada por el cliente, se le envía la prenda con un control que especifique la causa del envio. Si aun asi el cliente sigue enviando ropa rota, será necesario realizar una separación de la ropa rota enviada en la zona de sucio, antes de introducirla por cualquier proceso de lavado. De esta forma se evita el hecho de que el cliente responsabilica a la lavandería por la rotura de su ropa. Parece habitual que un cliente exija indemnizaciones por roturas, que no se han producido en la planta. Dado que, en muchos casos es difícil demostrar que esas roturas no las produce la lavandería. Es necesario cumplir rigurosamente este procedimiento, para evitar las mencionadas consecuencias. 3. Si la rotura ha sido ocasionada en la lavandería, y nos e sabe donde se ha roto, es necesario avisar al departamento de control de calidad, para que investigue proceso tras proceso, dentro del recorrido de la ropa, el punto en donde se produce la rotura.

En el seguimiento del procedimiento de la ropa de rechazo es muy importante tener en cuenta la norma NO ENVIAR NUNCA ROPA ROTA MEZCLADA CON ROPA EN BUEN ESTADO. El cumplimiento de esta norma pasa por la concienciación de los encargados y de los operarios de planta sobre la gravedad del tema.

10.2.

PROCEDIMIENTO GENERAL DE ROPA DE RECHAZO, Una vez que se ha producido rechazo, y sea antes o después de su paso una maquina, se debe de seguir en el procedimiento que se indica a continuación, para intentar eliminarlo y evitar posibles recirculaciones de ropa con manchas irrecuperables con los procesos de lavado normales. Los pasos a seguir una vez que se tienen las prendas de rechazo son los siguientes: 1. Entregarlo al lavandero: es conveniente que siempre sea la misma persona la que realice la entrega, para evitar confusiones en la ropa de rechazo de los diferentes clientes. 2. El lavandero realiza una inspección visual de rechazo, determinando su causa y su posible causa. 3. En general se pueden presentar dos tipos de rechazo: Rechazo recuperable: asu vez se subdivide en rechazo de maquina y rechazo por manchas. El primero se produce por arrugas en el proceso de la ropa en una maquina, como por ejemplo, el mal planchado de ropa plana al paso por una calandra. El segundo se produce por las propias manchas que trae la ropa del cliente. El tratamiento del rechazo recuperable empieza precisamente con la determinación del tipo de que se trata. Si se trata de rechazo de maquina, se puede optar por dos soluciones: si hay suficiente como para llenar una lavadora, se le aplica un proceso de remojo y centrifugado, ahorrando así tiempo, agua y detergentes; sin embargo, si hay poco, se lava con la ropa sucia normal del mismo cliente.

ENVIARLO A LA ZONA DE LAVADO

INSPECCION VISUAL

INSPECCION DE LA MANCHA

MANCHA O ARRUGA RECUPERABLES O MANCHA IRRECUPERABLE

RECHAZO DE MAQUINA

LAVADO CON PROGRAMA ESPECIAL RECHAZO

PROGRAMA DE LAVADO

LAVADO CON ROPA NORMAL

APUNTAR EN DOC. CONTROL LAVADOS

REVISION DEL RECHAZO A LA SALIDA PROCESO GENERAL DE RECHAZO Y ROTO

ENVIO A DEPARTAMENTO CONTROL CALIDAD. INVESTIGACION

ENVIAR AL CLIENTE CON CARTEL RECHAZO/ROTO

CARTEL RECHAZO/ROTO

Si se trata de rechazo de mancha, se lava con un programa especial de rechazo, más fuerte que el normal y generalmente, de menor duración. Una vez que se ha aplicado el proceso correspondiente a cada uno de los dos tipos de rechazo mencionados, se revisa a la salida de la máquina de lavado, para la comprobación de la eficacia del tratamiento. Después se continúa el proceso normal de la ropa, pasando de nuevo por el proceso general de ropa rota y de rechazo. Rechazo irrecuperable. Si el lavandero sospecha que la mancha del rechazo es irrecuperable, lo envía al departamento de control de calidad, donde se analizan las causas, y si efectivamente no tiene solución, se informará al encargado del problema. Será el encargado quien avise a los operarios del tipo de mancha irrecuperable que se ha producido, para que no lo envíen al rechazo, sino que lo coloquen aparte para enviarlo al cliente con un cartel de rechazo en el que se especifique la causa del envío de dicho rechazo. En el ANEXO II se incluye un trabajo sobre las posibles soluciones a las diferentes manchas que suelen presentarse en la ropa. En todos los procesos de lavado realizados con la ropa de rechazo, es importante destacar que se deben de apuntar en la hoja de producción de lavados del día, sin embargo, no se contabiliza en el total de la producción de ropa lavada en el día. Es conveniente explicar los tres tipos de facturación que se suelen realizar en las lavanderías, para comentar cómo se contabiliza el rechazo a la hora de realizar las facturas a los clientes. •

Facturación en sucio: se factura la ropa de un determinado cliente que se ha lavado en el día, sin contar dentro de los kilos lavados los de rechazo. Así, el rechazo se factura como ropa lavada, pero una sola vez, la primera.

• Facturación por piezas: se facturan las piezas que son entregadas al cliente una vez procesadas. El rechazo se factura el día en que se entrega. •

Facturación en limpio: se factura por los kilos entregados en limpio. En este caso, las piezas que se reflejan en el albarán de entrega, deben de coincidir en peso con los kilos entregados. El rechazo producido se factura el día que se entrega, una vez que está limpio.

La ropa que se entrega como rechazo irrecuperable, se factura como ropa normal, sin embargo, en el albarán se especifica aparte el número de unidades de este tipo de rechazo entregadas1.

La facturación de la ropa rota es similar a la de la ropa de rechazo, con pequeñas diferencias: la ropa rota por el cliente se factura como ropa normal, pero se envía aparte con una nota de la causa de la rotura; la ropa rota en la lavandería puede enviarse con una nota de la causa, o puede no enviarse, pactando con el cliente el precio de la indemnización por la rotura.

11. PROCEDIMIENTO DE IDENTIFICACIÓN DE LA ROPA EN PLANTA. La identificación de la ropa en todos y cada uno de los procesos por los que pasa, es una de las tareas más importantes dentro de la producción de la lavandería industrial. Debido al gran volumen de ropa que se maneja, a la similitud de las prendas de los clientes y al numeroso grupo de personas que conforman la plantilla de un turno de trabajo, las posibilidades de confusión son muy altas. Como ya se ha mencionado en apartados anteriores, la confusión o mezcla de la ropa de los clientes supone una mala imagen del servicio de la lavandería al cliente, aparte del trastorno que para éste supone. Como es normal, las mezclas no las originan las máquinas, sino los operarios en las diversas actividades de transporte y clasificación de la ropa. De hecho, la mayor parte de las confusiones se producen en las separaciones de ropa, ya sea en la zona de sucio o en la de limpio. La mayor parte de los problemas se producen por mezcla de ropa. Salvo en el caso de la confusión de bañeras enteras, o de carros enteros de ropa, el mayor problema se presenta en la mezcla de piezas sueltas en las zonas de trabajo. En este procedimiento de identificación de ropa, se define como ZONA DE TRABAJO a todo espacio que puede ser ocupado con ropa en el momento de su proceso, así como a todos los elementos como máquinas, mesas u otros elementos auxiliares, que pudieran estar incluidos en él. Por ejemplo, y aunque no se trabaje directamente en él, el suelo de la zona de unión entre la calandra y la plegadora forma parte de la zona de trabajo, puesto que en cualquier momento una prenda determinada puede caer en él con facilidad. El recorrido del proceso de identificación de ropa pasa por las siguientes fases: 1. Recogida de los carros en las instalaciones del cliente. El conductor identifica los carros por medio de chapas autoadherentes con el nombre de dicho cliente, con rotulador de tinta borrable, con un papel adherido al carro o con cualquier otro medio que permita la identificación segura de la ropa. 2. Descarga de los carros y clasificación de la ropa. Pesaje de la ropa en bañeras, en sacos o en cargas. El lavandero se respesponsabiliza de que se identifiquen claramente; en el caso de bañeras, con etiquetas, y en el caso de cargas o sacos en los túneles de lavado, mediante la

IDENTIFICACION DE CARROS

RECOGIDA DE CARROS

DESCARGA EN PLANTA. CLASIFICACION Y PESAJE EN BAÑERAS, SACOS O CARGAS

IDENTIFICACION DE BAÑERAS, SACOS O CARGAS

PASO POR EL TUNEL O LAVADORAS

IDENTIFICACION DE BAÑERAS

IDENTIFICACION DE ZONAS DE TRABAJO

SALIDA DEL PROCESO DE LAVADO

PROCESOS MANUALES O EN MAQUINA

SUBPROCESO DE CAMBIO DE CLIENTE

IDENTIFICACION DE LOTES

IDENTIFICACION DE CARROS

EMPAQUETADO

COLOCACION DE LOS PAQUETES EN CARROS

Introducción del código del cliente en la pantalla del ordenador de control. 3. Una vez las cargas que han salido del proceso de lavado, se identifican todas y cada una de las bañeras con carteles autoadhesivos con el nombre del cliente. Además es conveniente mantener todas las bañeras pertenecientes a un mismo cliente lo mas agrupadas posible. 4. Cuando se comienza a procesar la ropa de un cliente dentro de una zona determinada de trabajo, es necesario identificar dicha zona con un cartel indicativo del cliente. Ese cartel debe de estar situado tanto al principio del proceso que se esta realizando, como al final. Después de procesar la ultima prenda de un cliente, y antes de procesar la primera del cliente siguiente, es totalmente necesario cumplir rigurosamente el subproceso de cambio de cliente, el cual consta de los siguientes pasos: a. Comprobar que no hay ropa del cliente anterior en la zona de trabajo b. Llevar el rechazo identificado a la zona de lavado. c. identificar la zona de trabajo con el cliente siguiente.

SUBPROCESO DE CAMBIO DE CLIENTE

DESPUES DE LA ÚLTIMA PRENDA DE UN CLIENTE Y ANTES DE PROCESAR LA PRIMERA DEL CLIENTE SIGUIENTE.

COMPROBAR QUE NO HAY ROPA DEL CLIENTE ANTERIOR EN LA ZONA DE TRABAJO

IDENTIFICAR LA ZONA DE TRABAJO CON EL CLIENTE SIGUIENTE

LLEVAR EL RECHAZO IDENTIFICADO A LA ZONA DE LAVADO

5. En el proceso de empaquetado, la identificación puede realizarse mediante

otra etiqueta, sin embargo, y dado que la persona que está realizando el proceso de empaquetado y la que realiza el de expedición, deben de contar los lotes, y apuntarlos en el borrador de albarán de un determinado cliente, ese mismo documento le sirve como referencia del cliente que se está procesando. El cambio de cliente pasa forzosamente por el aviso del operario que lleva la ropa a empaquetar. 6. En la colocación de los paquetes en los carros, también debe de realizarse la identificación de los mismos, y siempre antes de colocar las prendas dentro 1. Debe de realizarla la persona encargada de la expedición. Como medio de identificación, también puede servir el documento opcional que indica el número y el tipo de unidades que hay en él.

Conviene señalar que, para la realización de todos los procesos de identificación de la ropa en la lavandería, es necesario que se encargue a un número de personas lo más reducido posible, incluso a ser posible, una sola persona por máquina o proceso, para evitar la dispersión de la responsabilidad entre todas las personas del proceso.

Cuando una bañera. un carro, una mesa, o cualquier medio auxiliar de transporte y colocación de la ropa estén libres y