Manual Insurreccionalista

MANUAL INSURRECCIONALISTA ´ n: unxs pocxs de nosotrxs comienzan a perseguir As´ı es como comienza la revolucio ˜ sus sue

Views 53 Downloads 0 File size 152KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

MANUAL INSURRECCIONALISTA ´ n: unxs pocxs de nosotrxs comienzan a perseguir As´ı es como comienza la revolucio ˜ sus suenos, rompiendo con viejos patrones, adoptando lo que amamos (y en el ˜ ando de d´ıa, inquiriendo, actuando al proceso descubriendo lo que odiamos). Son otro lado de la rutina y la regularidad.

Editado por:

LA COLECTIVIDAD Regeneraci´ on Libertaria http://www.regeneracionlibertaria.org

Nota del editor: el manual que te dispones a leer ha sido obtenido de Internet. ´ n caso he an ˜ adido o modificado el texto, as´ı como tampoco he escrito ni En ningu ´ n se ha limitado a esta portada, la traducido el mismo. El trabajo de edicio ´ n de cap´ıtulos, y la compilacio ´ n v´ıa LATEXpara que pueda ser le´ıdo con rotulacio mayor facilidad. Salud y rebeld´ıa.

Aviso Este manual no pretende anteponer la acci´ on violenta al trabajo de base, pac´ıfico, local, cotidiano. Es sencillamente un instrumento de lucha, un medio, una herramienta. Barricadas s´ı, pero con conciencia y enmarcadas en un proyecto de transformaci´ on a largo plazo que priorice la construcci´ on de tejido social aut´ onomo y rebelde.

MANUAL INSURRECCIONALISTA El insurreccionalismo no es una soluci´ on ideol´ogica a todos los problemas sociales, no es un art´ıculo del mercado capitalista de las ideolog´ıas y opiniones, sino una praxis continua que tiene como objetivo acabar con la dominaci´ on del Estado y la continuidad del capitalismo, y que requiere para avanzar del an´ alisis y la discusi´ on. No buscamos una sociedad ideal u ofrecer una imagen de utop´ıa para consumo p´ ublico. El estado no va simplemente a desaparecer, por lo que l@s insurreccionalistas deben atacarle para que sea derrotado; lo que se necesita es un amotinamiento expansivo y la propagaci´ on de la subversi´ on entre l@s explotad@s y excluid@s. En este texto aclaramos algunas ideas que nosotr@s y otr@s insurreccionalistas hemos trazado a partir de este problema general: si el Estado no va a desaparecer por s´ı mismo, ¿c´omo podemos entonces acabar con su existencia? Es por consiguiente, en primer lugar una pr´actica enfocada a la organizaci´on del ataque. Estas notas no son un producto cerrado o finalizado; esperamos que sean parte de una discusi´on continua por lo que ser´ an bienvenidas las respuestas. La mayor´ıa de estos apuntes proceden de n´ umeros antiguos de la revista Insurrection y de panfletos de Elephant Editions.

1

EL ESTADO NO VA A DESAPARECER; DEBEMOS ATACAR.

El estado del capital no va a “esfumarse”, como parece ser que much@s insurreccionalistas creen al no s´ olo atrincherarse en posiciones abstractas de “espera”, sino incluso posicion´andose claramente en contra de los actos de aquell@s para quienes la creaci´on de un nuevo mundo depende de la destrucci´ on del viejo. El ataque es el rechazo a la mediaci´on, al apaciguamiento, al sacrificio, a la acomodaci´ on y a la transigencia. Es a trav´es de la acci´ on y de aprender a actuar, y no de la propaganda, como abriremos camino hacia la insurrecci´ on, a pesar de que la propaganda tenga un papel importante en la clarificaci´on de c´ omo actuamos. Esperar s´ olo ense˜ na a esperar; actuando un@ aprende a actuar. La fuerza de una insurrecci´ on es social, no militar. La medida para evaluar la importancia de una revuelta generalizada no es la clase armada, sino por el contrario la dimensi´on de la par´alisis de la econom´ıa, de la normalidad.

1

2

AUTO-ACTIVIDAD versus revuelta dirigida: de la insurrecci´ on a la revuelta.

Como insurreccionalistas, la revoluci´ on es nuestro punto constante de referencia. Precisamente porque es un evento concreto, debe ser construido diariamente a trav´es de un gran n´ umero de modestos intentos que no tienen todas las caracter´ısticas liberadoras de una revoluci´on social en un sentido estricto. Estos intentos modestos son insurrecciones. En ellos, el alzamiento de la mayor parte de l@s explotad@s y excluid@s de la sociedad y las minor´ıas sensibilizadas pol´ıticamente abre el camino hacia que una posible implicaci´on de estratos cada vez m´as amplios de explotad@s genere un flujo de rebeli´ on que pueda conducir a la revoluci´on. Las luchas deben desarrollarse, tanto a largo plazo como intermedio. Es necesario el planteamiento de estrategias claras para permitir as´ı la utilizaci´on de m´etodos diferentes de una manera coordinada y productiva. Acci´ on aut´ onoma: la autogesti´ on de la lucha significa que aquell@s que luchan son aut´onom@s en la toma de decisiones y en sus actos; justamente lo opuesto a una organizaci´on de s´ıntesis que siempre intenta tomar el control de la lucha. Las luchas sintetizadas dentro de una u ´nica organizaci´ on que las controle son f´ acilmente integradas dentro de las estructuras de poder de la sociedad actual. Las luchas auto-organizadas son por naturaleza incontrolables cuando se esparcen a trav´es del contorno social.

3

DES-CONTROLABILIDAD versus revuelta controlada: la propagaci´ on del ataque.

Nunca es posible conocer el resultado de una lucha concreta por adelantado. Incluso una lucha parcial puede llegar a tener las consecuencias m´as inesperadas. El camino desde varias insurrecciones que puedan tener lugar -parciales y espec´ıficas- hasta la revoluci´on, no puede estar garantizado de antemano por ninguna estrategia a seguir. Lo que el sistema teme no son estos actos de sabotaje en s´ı mismos, si no que se extiendan socialmente. Cada individu@ proletarizad@ que dispone incluso de los m´etodos m´as modestos puede alcanzar sus objetivos, sol@ o junto a otr@s. Es materialmente imposible para el Estado y el capital vigilar el aparato de control que opera sobre todo el territorio social. Cualquiera que quiera realmente combatir las redes del control, puede llevar a cabo su propia contribuci´on te´orica y pr´ actica. La aparici´ on de los primeros eslabones rotos coincide con la propagaci´on de los actos de sabotaje. La pr´ actica an´ onima de la auto liberaci´on social puede expandirse hacia todos los campos, rompiendo as´ı los c´ odigos de prevenci´on introducidos en su lugar por el poder. Las peque˜ nas acciones, por consiguiente, f´acilmente reproducibles, requieren de m´etodos no sofisticados al alcance de cualquiera, son por su simplicidad y espontaneidad incontrolables. Por ello se mofan incluso de los desarrollos tecnol´ogicos m´as avanzados de la contra-insurgencia.

2

4

CONFLICTIVIDAD PERMANENTE versus mediaci´ on con las fuerzas institucionales.

La conflictividad debe verse como un elemento permanente en la lucha contra aquell@s que tienen el poder. Una lucha que pierda este elemento termina empuj´andonos hacia la mediaci´on con las instituciones, creciendo acostumbrad@s al h´abito de delegar y creyendo en una emancipaci´on ilusoria consumada por decreto parlamentario, hasta el punto de llegar a participar activamente en nuestra propia explotaci´ on. Deber´ıan quiz´ a ser razones individuales las que nos hicieran dudar sobre el intento de alcanzar nuestros propios objetivos con m´etodos violentos. Pero cuando la no violencia viene a ser elevada al nivel de principio de no violencia y la realidad est´a dividida entre “buenos” y “malos”, los argumentos dejan de tener valor, y todo se ve en t´erminos de sumisi´on y obediencia. Los dirigentes del movimiento anti-globalizaci´ on, a trav´es del distanciamiento y denunciando a otr@s, han dejado claro una cuesti´ on: que entienden sus principios como una demanda de poder sobre el movimiento como un todo.

5

ILEGALIDAD; la insurrecci´ on no es robar bancos.

El insurreccionalismo no es una ´etica de la supervivencia: tod@s sobrevivimos de varias formas, a menudo en compromiso con el capital, dependiendo de nuestra clase social, nuestro talento o nuestros gustos. Naturalmente no nos oponemos al uso de m´etodos ilegales para liberarnos de las cadenas del trabajo asalariado para as´ı vivir y poder realizar nuestros proyectos, no obstante no divinizamos la ilegalidad ni la transformamos en alg´ un tipo de religi´on con sus m´artires; es simplemente un m´etodo y a menudo un m´etodo adecuado.

6

´ INFORMAL; sin revolucionari@s o acORGANIZACION tivistas profesionales, sin organizaciones permanentes.

De los partidos/sindicatos a la autoorganizaci´on: Dentro del movimiento revolucionario existen diferencias muy profundas: la tendencia anarquista hacia la calidad de la lucha y su autoorganizaci´on y la tendencia autoritaria hacia la cantidad y la centralizaci´ on. La organizaci´ on se emplea para tareas concretas: por ello estamos en contra de los partidos, sindicatos y de las organizaciones permanentes, todos ellos act´ uan para sintetizar la lucha y convertirla en elementos de integraci´ on para el capital y el Estado. Su fin pasa a ser su propia existencia, en el peor de los casos primero construyen la organizaci´on y despu´es encuentran o crean la lucha. Nuestra tarea es actuar; la organizaci´ on es s´olo un m´etodo. Por ello nos oponemos a la delegaci´on de la acci´ on o de la pr´ actica a una organizaci´on: necesitamos generalizar la acci´on que nos dirija hacia la insurrecci´ on, no controlar las luchas. La organizaci´on no debe servir para la defensa de

3

ciertos intereses, sino para atacar ciertos intereses. La organizaci´ on informal se basa en un n´ umero de compa˜ ner@s unid@s por la afinidad; su elemento propulsor es siempre la acci´ on. Cuanto mayor sea el n´ umero de problemas, est@s compa˜ ner@s los enfrentar´ an como una unidad, aumentando as´ı su afinidad. Sabemos que la organizaci´on real, la capacidad efectiva de actuar junt@s, sabiendo donde encontrar al otr@, analizando y estudiando los problemas junt@s, pasando a la acci´on, todo tiene lugar en funci´on de la afinidad alcanzada y no tiene nada que ver con programas, plataformas, banderas o partidos m´as o menos camuflados.La organizaci´ on insurreccionalissta informal es por lo tanto una organizaci´on singular que se aglutina entorno a una afinidad com´ un. La minor´ıa y l@s explotad@s y excluid@s: Nosotro@s somos l@s explotad@s y excluid@s, y por eso nuestra labor es actuar. Aunque algun@s critiquen que toda acci´ on que no es parte de un movimiento social visible y amplio sea “actuar en nombre del proletariado”. Por ello, aconsejan analizar y esperar, en lugar de actuar. Supuestamente, nosotr@s no somos explotad@s al lado de explotad@s; nuestros deseos, nuestra rabia y nuestra impotencia no son parte de la lucha de clases. Esto no es m´as que otra separaci´on ideol´ ogica entre los explotad@s y l@s subversiv@s. La minor´ıa insurreccionalista activa no es esclava de los n´ umeros sino que contin´ ua actuando contra el poder incluso cuando el conflicto de clases se encuentra a un bajo nivel dentro de l@s explotad@s de la sociedad. La acci´ on anarquista no debe en consecuencia aspirar a organizar y proteger al conjunto de la clase explotada, en una amplia organizaci´on para presenciar la lucha desde el principio hasta el final, sino que deber´ıa identificar los aspectos individuales de la lucha y tenerlos en cuenta en sus conclusiones de ataque. Tambi´en, debemos alejarnos de la imagen estereotipada de las grandes luchas de masas y del concepto del crecimiento infinito de un movimiento que est´ a para dominar y controlarlo todo. La relaci´ on con la multitud de explotad@s y excluid@s, no puede ser estructurada como algo que debe resistir el paso del tiempo, es decir basarse en el crecimiento sin fin y en la resistencia contra el ataque de los explotadores. Debe tener una dimensi´on espec´ıfica m´as reducida, una que sea decididamente una relaci´ on de ataque y no de retaguardia. Podemos comenzar a construir nuestra lucha de tal manera que las condiciones de la revuelta puedan emerger y el conflicto latente pueda desarrollarse y sacarse hacia el exterior. De esta manera se establece un contacto entre la minor´ıa anarquista y la situaci´on espec´ıfica donde puede desarrollarse la lucha.

7

LO INDIVIDUAL Y LO SOCIAL: individualismo y comunismo, un falso problema.

Tomamos lo mejor del individualismo y lo mejor del comunismo.

4

La insurrecci´ on comienza con el deseo de l@s individuos de romper con las circunstancias forzadas y reguladas, el deseo de reapropiar la capacidad de crear nuestra propia vida como creamos adecuado. Esto requiere que venzan la separaci´on existente entre ellos y sus condiciones de existencia. En el lugar donde un@s poc@s, l@s privilegiad@s controlen las condiciones de existencia, no ser´ a posible para la mayor´ıa de l@s individu@s decidir realmente su existencia en base a sus decisiones. La individualidad s´ olo puede proliferar donde la paridad de acceso a a las condiciones de existencia son una realidad social. Esta igualdad de acceso es el comunismo; lo que l@s individuos hacen con ese acceso est´ a limitado por ell@s mism@s y por aquell@s que le rodean. De tal manera que no hay igualdad o identidad de l@s individu@s impl´ıcita en el comunismo verdadero. Lo que nos fuerza a buscar una identidad o la igualdad son los roles sociales impuestos por el sistema actual. No hay contradicciones entre individualidad y comunismo.

8

NOSOTR@S SOMOS L@S EXPLOTAD@S, somos la contradicci´ on: no es tiempo de esperar.

Ciertamente el capitalismo contiene profundas contradicciones que lo empujan hacia metodolog´ıas de adaptaci´ on y evoluci´ on, dirigidas hacia la evasi´on de las crisis peri´odicas que le afligen; pero no podemos permanecer pasiv@s en espera de esas crisis. Cuando ocurran ser´an bienvenidas si favorecen el proceso insureccional. Como explotad@s, sin embargo, somos la principal contradicci´on del capitalismo. Por ello cualquier momento es siempre el adecuado para la insurrecci´on, precisamente por ello podemos percibir que la humanidad podr´ıa haber acabado con la existencia del estado en cualquier momento de su historia. Una ruptura en la reproducci´on continua de este sistema de explotaci´ on y opresi´ on ha sido siempre posible. LUCHAREMOS contra la propiedad, el principio de autoridad, el Estado, la pol´ıtica, la religi´on y todos aquellos poderes que obstaculizan la total emancipaci´on del ser humano. Contra la Propiedad: Porque es una injusticia inhumana el que una persona detente la riqueza producida por otras personas o la tierra que s´olo a la humanidad pertenece, y es un atributo para la sociedad, tan importante como la vida lo es para el individuo. Porque tiene su origen en un violento y criminal despojo del m´ as fuerte contra el m´as d´ebil, creando la odiosa existencia de los par´ asitos de la sociedad, que no tienen otra misi´on social que la de vivir del trabajo ajeno, mediante la explotaci´ on y miseria de los dem´ as. Porque crea el capitalismo y establece la ley del salario, que condena al ser humano a una permanente esclavitud econ´omica y a los vaivenes de la desequilibrada econom´ıa. Contra el Principio de Autoridad: Por suponer ´esta el relajamiento de la personalidad humana al someter a unas personas a la voluntad de otras, despertando en ellas instintos que le predisponen a la crueldad e indiferencia ante el dolor de un semejante; y por ser la autoridad el instrumento que sirve para someter por la violencia al individuo a los intereses de la propiedad. Contra el Estado: Porque coarta el libre desenvolvimiento y normal desarrollo de las actividades ´eticas, filos´ oficas y cient´ıficas de los pueblos; y por ser el fundamento b´asico que mantiene el principio de autoridad y defiende la propiedad mediante los cuerpos armados, la polic´ıa la magistratura y

5

la c´ arcel. Porque mantiene al ej´ercito y la armada, cuya misi´on destructora es inhumana al lanzar unos pueblos contra otros, destruyendo los sentimientos de sociabilidad y solidaridad propios del ser humano, para convertirse en medio de dominaci´on de los pueblos fuertes contra los d´ebiles. Contra la Pol´ıtica: Porque, entendiendo pol´ıtica como actividad desempe˜ nada por les pol´ıtiques en el seno del Estado para obtener privilegio y poder, esta presupone la anulaci´on de la persona, ya que, entregando la voluntad propia a otra extra˜ na, se desvirt´ uan los intereses colectivos por una falsa mayor´ıa parlamentaria. La pol´ıtica es el medio que emplea el vigente sistema de dominaci´on (la democracia representativa al servicio de las oligarqu´ıas y el Capital) para legitimar los intereses de la propiedad y las leyes en su tarea de respaldo y defensa del Estado. Contra las Religiones: Porque atentan contra el libre pensamiento, creando una jerarqu´ıa moral que predispone a admitir sin protesta toda tiran´ıa y desvirt´ uan las relaciones sociales por el terror y el fanatismo, negador de la raz´ on y el progreso cient´ıfico. Contra otras formas de Poder: Contra todo tipo de prejuicios raciales, sexuales o de cualquier otra condici´ on que impidan el desarrollo libre y en igualdad de los seres humanos. Contra las estructuras que derivan del Estado y el Capital creadas para un mejor sostenimiento del Sistema, que suponen el sacrificio de la Libertad individual y colectiva en pro de una delegaci´on hacia personas supuestamente m´ as cualificadas que pretenden representarnos, tales como partidos y sindicatos reformistas. Contra las jerarqu´ıas de toda ´ındole.

NUESTROS PRINCIPIOS. La Libertad: Entendida como el desarrollo natural, sin condiciones de todos ser nacido, actuando atendiendo a los dictados de su propia conciencia y voluntad con independencia para pensar, expresarse y actuar. Es, por tanto, la negaci´on de cualquier forma de autoridad que somete moral y materialmente. Esta idea de Libertad lleva impl´ıcitas: La Igualdad: De todos los seres vivos, a todos los niveles, por lo que las relaciones deben basarse en el libre consentimiento y la revocabilidad de los acuerdos. Para que las relaciones sean libres y justas no puede existir la propiedad privada pues ´esta mantiene y es fuente de todas las desigualdades. Redistribuyendo y reorganizando la producci´on, se eliminar´ıan los brazos ociosos de esta sociedad. Colectivizando la propiedad y poniendo a disposici´on de les productores la tierra y los instrumentos de trabajo, las relaciones econ´omicas ser´ıan igualitarias porque buscar´ıan satisfacer las necesidades de la comunidad, no enriquecerse; como ocurre en el Sistema capitalista, que busca, por encima de todo, el beneficio econ´ omico de unes poques. El concepto de igualdad es contrario a toda idea de naci´ on o patria, las fronteras son un invento de los Estados para salvaguardar sus intereses, crear conflictos y desigualdades absurdas entre las personas. La Solidaridad y el Apoyo Mutuo: Como forma de vida en contra de la competitividad y la explotaci´ on de unos sobre otros. La Solidaridad como principio que sostiene las relaciones sociales y medio para resolver posibles conflictos, respetando las diferencias, la libertad individual y el bien colectivo. Practicando el apoyo rec´ıproco y la sinceridad en todas las relaciones. Combatimos las divisiones sociales de clases formadas sobre el privilegio de unas personas sobre otras. 6

Nos mostramos contrarios a las ideas de las religiones con sus supersticiones, a los desequilibrios ecol´ ogicos, la medicina intoxicante y al desprecio al resto de los animales y seres, siendo defensores de la libre sexualidad y contrarios a la dominaci´on de un sexo sobre otro. Somos contrarios a los Sistemas de educaci´ on jer´ arquicos y competitivos; defendemos la Pedagog´ıa Libertaria.

´ NUESTRAS TACTICAS. Los fines no justifican los medios, ´estos s´olo pueden aplicarse en funci´on de sus principios. Entendemos t´ acticas como nuestros principios desarrollados en todos los ´ordenes de vida social, proceso ´este que constituye la Revoluci´ on Social. Todos los movimientos sociales que han pretendido cambios, lo han intentado asumiendo el poder, demostrando que cada vez que un salvador, un partido o un comit´e se ponen a legislar, heredan los mismos vicios y problemas. Por eso el insurreccionalismo rechaza el poder. No forma partidos para conseguirlo, no apoya candidatos, no forma ej´ercitos ni guerrillas a favor de ning´ un gobernante. Se opone a todo Sistema parlamentario, fascista o comunista y no colabora con ninguno. Es su u ´nico lugar la oposici´on al poder. El insurreccionalismo pretende debilitarlo concienciando a la gente de su inutilidad e inculcando la idea que se puede funcionar al margen de ´el, para lo que crea escuelas, sindicatos, comunas, colectividades y dem´as grupos que existen sin el apoyo del Estado. El insurreccionalismo no se integra en las instituciones, no se legaliza, no participa en ayuntamientos, parlamentos, comit´es ni universidades, demostrando sus ideales al funcionar organizando su propia existencia. Adem´as, los anarquistas no tenemos l´ıderes ni funcionarios bur´ ocratas, ni pagamos a nadie para que trabaje por nosotros. Tampoco recibimos subvenciones. Por tanto, desarrollamos nuestra actividad voluntariamente. Por ello nuestras t´ acticas son: La Acci´ on Directa: Es la actuaci´on permanente sin intermediarios. La persona se enfrenta directamente con sus problemas, tomando las riendas de su vida sin interferencias, desarrollando as´ı su capacidad de autodefensa, viviendo conscientemente. Estamos en contra del conformismo, ya que impide la acci´ on directa creando pasividad y despreocupaci´on. No usamos los cauces que emplea el poder, promulgamos la abstenci´on activa electoral porque votar es un acto de irresponsabilidad, al dejar en manos de otres la decisi´on sobre los problemas fundamentales de la vida social, y adem´ as se legitima el principio de poder. Nuestro objetivo no es conquistar el poder pol´ıtico, sino destruirlo, por lo que no colaboramos con el Estado, y creemos que entrar en el Sistema implica aceptar sus premisas. La acci´ on directa no implica necesariamente acci´on violenta. De esta forma nos defendemos de los medios que utilizan el Estado y las clases privilegiadas para impedir y neutralizar nuestra rebeli´ on. Nuestro prop´osito es la consecuci´on de une equilibrio social sin Estado, y, para conseguirlo, rechazamos cualquier imposici´on gubernamental, as´ı como participar en cualquier guerra generada por el capital y el Estado. Abogamos por el desmantelamiento de las c´arceles, reformatorios y manicomios; defendemos el derecho de que nadie gobierne nuestras vidas y la ocupaci´on de espacios donde podamos poner en pr´actica nuestros principios libertarios. Frente a las agresiones y humillaciones a que nos somete el capital, apoyamos las luchas obreras de matiz anarcosindicalista. La Propaganda por el Hecho: Es difundir el ideal revolucionario con nuestras acciones diarias. Es practicar una ´etica revolucionaria en las relaciones de nuestra vida cotidiana en las que sea posible, demostrando la rebeld´ıa y la oposici´on al sistema establecido mediante nuestra conducta. Defendemos una confrontaci´ on permanente mediante ataques a toda persona, instituci´on o s´ımbolo 7

que coarte la libertad de las personas. La Cultura: Divulgar la Cultura insurreccionalista y revolucionaria a trav´es de escritos, publicaciones y dando a conocer el arte, la literatura, la m´ usica ´acratas, as´ı como fomentando los ateneos libertarios, radios libres, centros sociales. . . La Federaci´ on: Es la uni´ on voluntaria en igualdad que asegura la autodeterminaci´on. De este modo se a´ unan fuerzas y se suprimen privilegios. Negamos los pa´ıses y sus fronteras y luchamos contra todo tipo de imperialismos y colonialismos. La federaci´on funciona de forma asamblearia, sin jerarqu´ıas, de forma que nadie pueda estar por encima de nadie. Los diferentes grupos que formen una federaci´ on son libres para unirse o separarse de ella. La forma de tomar acuerdos es por unanimidad, no existe el voto. De esta manera, se suprime la dominaci´on de las mayor´ıas sobre las minor´ıas y viceversa. Somos conscientes de que la federaci´on s´olo entendida en un marco ideol´ogico libertario se convierte en una t´ actica para extender la lucha no s´olo a la mera actuaci´on del grupo, as´ı como la forma de organizar las relaciones entre las c´elulas de una nueva sociedad.

NUESTRAS FINALIDADES. Nuestra finalidad es que las ideas insurreccionalistas revolucionarias incidan en la sociedad de tal manera que se recupere la conciencia social, as´ı como la conciencia de la clase trabajadora, que entendemos est´ a basada en comprender la situaci´on de explotaci´on en la que nos vemos sometidos bajo el sistema actual. Esta comprensi´on de nuestra situaci´on de explotados y oprimidos se ve complementada con los mecanismos a aplicar para que dicha situaci´on desaparezca y se pueda lograr un equilibrio en las relaciones de las personas entre ellas y con el entorno. Son estos mecanismos los principios y t´ acticas anarquistas. Se puede decir, por tanto que nuestra finalidad es alcanzar una sociedad basada en la libertad, la igualdad y la solidaridad entre las personas. Es el u ´nico modelo de organizaci´on social que nos permite un equilibrio con la naturaleza, as´ı como un desarrollo social basado en los principios insurreccionalistas revolucionarios.

Manual de los disturbios. Este documento, abierto a ser debatido y mejorado, pretende servir de gu´ıa elemental para activistas dispuestos a defender la libertad de expresi´on, manifestaci´on y rebeli´on. La capucha es nuestra amiga. En las manifestaciones la polic´ıa suele utilizar c´amaras de v´ıdeo y de fotos. Graban las acciones de los activistas para reconocerlos y as´ı tener ”pruebas” que les imputen en un futuro juicio. Otras veces directamente graban a un bloque de manifestantes de una organizaci´on determinada como forma de control y recogida de informaci´on. Tambi´en pueden servir como prueba las im´agenes captadas por los periodistas de la prensa. Un pa˜ nuelo o una bufanda obstaculiza este accionar de

8

la polic´ıa. Una braga militar tambi´en sirve, pero no es una prenda tan “com´ un” y si la polic´ıa te detuviera durante una manifestaci´ on o tras ella, no dudar´ıa en acusarte de ”tirapiedras”. Asimismo, en estos casos es aconsejable no llevar demasiadas ”pintas”, es decir, que por la est´etica se intente pasar por ”ciudadanos corrientes”. Los medios de comunicaci´ on del poder criminalizan la capucha justamente por su alta efectividad antirrepresiva. Protecci´ on legal. En algunas manifestaciones, los convocantes disponen de una ”comisi´on legal”. Esta comisi´on la componen uno o varios abogados vinculados a la organizaci´on. En caso de que los organizadores repartan octavillas con los tel´efonos de estos abogados, no dudes en coger una. En cualquier caso lo m´ as recomendable es apuntarse el tel´efono en el brazo u otro lugar del cuerpo por si la polic´ıa te cachea y te quita lo que lleves encima o lo pierdas. Estos abogados estar´ an atentos al tel´efono por si hay detenidos. Para las manifestaciones en las que no hay ”comisi´ on legal”, y sobre todo en general para la gente joven, lo recomendable es estar activo en alguna organizaci´ on pol´ıtica que tenga contacto con abogados (adem´as de que la lucha anticapitalista, cuanto mejor organizada, m´as efectiva). Si te detienen, lo primero que debes intentar es ponerte en contacto con un abogado para que desde fuera se sepa que has sido detenido y se pueda empezar a trabajar por tu liberaci´on. La estrategia policial. Una vez que los antidisturbios tienen orden de cargar, en ocasiones la l´ınea policial se abalanza a golpes sobre los manifestantes desde un solo lado; a veces desde varios a la vez para provocar el p´ anico. Si la manifestaci´ on es masiva, pueden utilizar varias l´ıneas para “dividir el bloque en partes”. Otras veces simplemente sacuden sus escudos con sus porras mientras avanzan lentamente. Todo depende de la estrategia represiva que tengan. En la mayor´ıa de los casos lo que buscan es la ”dispersi´ on”, es decir, que la gente corra presa del miedo y se disgregue. Aqu´ı es importante mantener la calma y llamar a la calma (por ejemplo, con los brazos levantados) a la gente que tengamos a nuestro alrededor. Si observamos que la distancia entre los antidisturbios y los manifestantes es prudente, llamar a la calma hace que la gente se tranquilice y tome conciencia de que su situaci´on inmediata no corre peligro, pues es normal que en momentos de p´anico se tienda a correr sin detenerse a mirar atr´ as aunque la polic´ıa est´e a´ un a mucha distancia. La comunicaci´on y cooperaci´on en esos momentos es muy importante. Tambi´en se ha de tener en cuenta que los antidisturbios son m´ as lentos que nosotros, por su vestuario y equipamiento. Cu´anto m´as tiempo aguantemos sin ceder terreno a la polic´ıa, m´ as cuotas de libertad estaremos expropiando al estado; tengamos en cuenta que las cargas policiales no suponen otra cosa que un intento de coartar nuestra libertad de expresi´ on. Lo que expresamos en las manifestaciones, la acumulaci´on de fuerzas que supone, y el mensaje que con ellas se quiere transmitir, se ven abortados salvajemente por la represi´on policial. Los enfrentamientos callejeros no son sino una respuesta enfurecida a esta represi´on y una defensa firme de nuestra libertad de expresi´ on.

9

C´ omo frenar el avance policial. Una vez iniciados los enfrentamientos, para aguantar la posici´on los diferentes grupos de manifestantes pueden utilizar varios m´etodos, [Desde Resistencia y r-Evolucion suprimimos los metodos Violentos, dejando a continuacion solo los metodos No-Violentos]: - Bloqueo de calles. Esto es efectivo sobre todo para obstaculizar el avance de los furgones policiales. Puede servir cualquier cosa, cubos de basura, papeleras, vallas de obras, etc. Pero tengamos en cuenta que un furg´ on policial puede abrirse paso ante una barricada compuesta por estos materiales ”livianos”, si se lo propone. Por eso, lo m´as efectivo para este caso es cruzar coches: entre varios manifestantes (m´ınimo 4 ´o 5), agarrar el coche por uno de los extremos (la parte delantera o trasera), contar ”uno, dos y tres” y levantar. En cuatro o cinco veces que se repita este proceso el coche habr´ a quedado en medio de una calle. Esto ralentiza el avance de los furgones de antidisturbios y da tiempo a los manifestantes para pensar y reorganizarse. - Descentralizar la acci´ on. Otra de nuestras bazas es crear diferentes focos aut´onomos de resistencia, desbordando el esquema represivo de los antidisturbios. Si nos movemos a menudo en grupos peque˜ nos a los helic´ opteros policiales les cuesta m´as localizar los puntos ”calientes”, lo que entorpece la comunicaci´ on y coordinaci´on de los agentes a pie. Esto nos da un tiempo valioso para actuar. -La Clasica sentada.

10