La Luz de Efraim PDF

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LA LUZ DE EFRAIM

La mujer virtuosa "Por lo tanto, cualquier ayuda que le preste una mujer a su marido para que éste cumpla su propia rectificación..[....]...traerá gran beneficio al alma de ella, particularmente porque supone un grado de bitul-entrega por parte de ella. "Sin embargo, hay otras cosas que ella [la mujer] debe hacer además de ayudarle a él [el marido]. Sobre todo tiene que prestar atención al cumplimiento de las mitzvot que le incumben a la mujer, como las leyes de pureza ritual si es casada, y ser estricta consigo misma referente a la leyes de tzeniut-modestia. "La modestia, no sólo en la ropa sino en la conducta, es una cualidad esencial de la mujer judía. De hecho, según ciertos sabios, nosotros los hombres agradecemos a Dios todas las mañanas por no habernos hecho mujer, no sólo porque tenemos la oportunidad de cumplir un mayor número de preceptos, sino también porque es tan difícil ser mujer. "Como tantos otros aspectos de nuestro servicio Divino, la modestia requiere intención. ¿Cuál es la intención de la mujer? ¿Parecer lo más seductora posible sin desviarse de las leyes de modestia? ¿O causar placer a su Creador adoptando un comportamiento y estilo de ropa modestos con la intención de proteger a las santas fuerzas de Hashem? "Deje que yo le haga a usted la pregunta, señora: ¿cuál es para usted el propósito interior de la modestia?” terminó el sabio. "He aprendido a verlo como una expresión de mi aceptación del Reinado de Dios", respondió Rajel. "Una vez seguí una conversación entre dos amigas mías, una—llamémosla Malka—que cumplía la Torá y la otra—Nelly—que era secular. Esta última estaba quejándose de la falta de liberalidad de los hombres en la vecindad Geúla de Jerusalem, porque se negaban a venderle libros de Kabalá. Le dijo Rivka que ella no había tenido ningún problema cuando fue a comprar esos mismos libros. Respondió Nelly, `¡Eso es porque tú llevas el uniforme puesto! Yo me niego a hacer eso`. `Yo no lo veo como uniforme`, replicó Malka. `Para mí, este estilo de ropa representa mi verdadera imagen que quiero proyectar`. "Pensaba en esta conversación en vista de todo lo que he aprendido de sus encuentros con Adam, y se me ocurre que hay mujeres que adoptan las leyes de modestia para evita la ira Divina, y en este caso, es verdad que llevan puesto un uniforme. Esto debe ser la forma más baja de aceptar el Reinado deHashem. "La mujer que cumplía la Torá—Malka—pensaba en la imagen que iba a proyectar. En otras palabras, se veía como una vasija cuyo propósito principal es trasmitir luz. En este sentido estaba expresando la forma más elevada de aceptar el Reinado Divino, ya que es enseñando a otros tu

propia aceptación total de la voluntad de Dios que trasmites Su luz. Sin embargo, aún estaba cumpliendo el propósito externo de la creación. "En cambio, si tu propósito principal es hacer bajar Su luz para causarle placer volviéndote Su espacio de residencia aquí abajo, entonces, es por eso que te esfuerzas en llevar ropa modesta y adoptar una actitud modesta. Y en este caso, lo que tú desees personalmente ya no importa. Rabí Akiva Tatz lo expresó admirablemente: ¡Deseas apasionadamente lo que Él desea!” Emocionado, el sabio dijo, "Su esposo es afortunado de tenerla. Sólo tengo que añadir una cosa a lo que tan bien expuso. A través de mis alumnos, que me hablan de sus esposas cuando acaecen problemas entre ellos, tengo mucha oportunidad de oír los argumentos de las mujeres que empiezan a guardar la mitzvá de tzeniut. Al principio del proceso, se le dice a la mujer que la tzeniut no es sólo para ella, como cualquier otra mitzvá, sino que es también para proteger al hombre, para que no sucedan los problemas de los que venimos hablando—créanme, que mis alumnos y sus esposas están plenamente concientes de ello. La reacción de la mujer cuyo cumplimiento de estas leyes es reciente suele ser, `¡Bueno, cada uno tiene que preocuparse por lo que le atañe! ¡Yo no puedo disfrazarme para evitarle problemas a otro!” Rajel se echó a reír, diciendo, "¡Conozco muy bien ese argumento!” "Cuando pasa el tiempo, y la mujer sigue creciendo, desarrollando su conciencia, su actitud hacia el servicio Divino va cambiando. Poco a poco, comprende que el nivel de cercanía a Hashem más elevado incluye a todas las almas de Israel ". "Claro, y entonces se da cuenta de que si quiere acercarse a Hashem, el problema que le cause a otra alma judía es su propio problema también…" terminó Rajel. "Pero Rab, quiero decirle", añadió, "me cuesta mucho cubrirme el pelo. Desearía oír lo que la dimensión interna de la Torá enseña acerca de eso". "Comprendo. La aceptación del yugo del Reinado de Hashem es definitivamente un proceso. La luz de la conciencia va entrando en la conciencia gradualmente a medida que la persona rectifica su pasado, y cuanta más conciencia se tiene, más desea uno acercarse a Hashem y se está listo a aceptar las consecuencias. "Según la halajá-ley, una mujer casada debe cubrirse el cabello delante de todo hombre que no sea su marido, y por supuesto, también delante de su marido en los momentos en que está ritualmente impura. Ahora bien, el Zohar añade que también debe taparse el pelo en la casa, porque la mujer que no se cubre el cabello causa que las fuerzas del mal se apeguen a la Shejiná, y por resultado, `trae pobreza a su casa`. Explican los comentaristas que esta advertencia tiene también su aspecto esotérico: tal mujer causa que la shefa-luz Divina se vaya de `Su casa`, es decir Maljut, llamada `la casa celestial`". "¡Uau!” exclamó Rajel. "Quiere decir, que si no se tapa el pelo, está causándole problemas

a Maljut—no está claro qué clase de problemas, pero no importa, porque de cualquier modo, no quiero causarlos sino todo lo contrario. Me acuerdo haber oído que la mujer tiene la mitzvá de prender las velas de Shabat, para ser como Maljut que ilumina a las almas de Israel. Eso implica que la mujer tiene más que ver con Maljut que su marido, y lo que hace la mujer le afecta a Maljut de modo particular ¿no?” "¡Excelente!” exclamó el sabio. "El Zóhar nos explica el misterio: La Shejiná es la Reina del mundo y todas las almas de Israel—llamadas luces—están arraigadas a Ella. Por consiguiente, es la responsabilidad de la mujer, que es la reina de su hogar,encender las velas de Shabat, y no su marido, porque la raíz espiritual de la mujer se haya en Maljut!” "¿Tiene la mujer que cubrirse el cabello cuando está en casa según la halajá-ley?” preguntó Adam frunciendo el ceño. "El Talmud trae el ejemplo de una mujer cuyos hijos eran modelos de sabiduría y rectitud, y explica que mereció a tales hijos `porque los muros de su casa no le vieron el pelo`. Explican los rabinos del Talmud que esta declaración se refería a todos los aspectos de su modestia en la casa, no sólo a su cabello. El Talmud recalca que el deber de ella es seguir el dictámen de la halajá-ley, que como te dije, es que se cubra el cabello en la casa solamente cuando está ritualmente impura. Es decir que la posición del Zóhar es una jumrá-interpretación estricta que pueden aceptar siempre y cuando estén los dos listos a ello". "Me imagino que depende del tamaño de su deuda personal y hasta qué punto quiere ella acercarse a Dios", murmuró la joven. "No depende sólo del punto de apego que ella desee", dijo el sabio. "Tiene que ser el deseo de ambos, porque si se tapara ella el pelo en la casa, en contra de la voluntad de su esposo, surgiría una pelea entre ellos, que sería muy dañino para ambos. Simcha Benyosef

La humildad de la entrega

La sexualidad y la paz "Cuénteme un poco acerca de Rajel, Rab," pidió el joven.

"Yaakov sabía por inspiración Divina que Leá engendraría a Yehudá, de quién provendría nuestro aguardado mashiaj, vástago de David. No obstante, también sabía que antes que el descendiente de David pudiese venir, el mundo tenía que estar preparado por una iluminación proveniente de Yosef y de su hijo Efraim". "¿Por qué?" "Porque la misión del mashiaj davídico es la de elevar a Maljut. Antes de que eso suceda, sin embargo, la impureza predominante en el mundo debido a la profanación del Pacto ha de eliminarse. Esto es lo que llamamos tikun-rectificación de yesod-fundamento, ligado al Nombre Divino El Shaddai. Vemos este Nombre cuando el Altísimo le apareció a Abraham, y le pidió que entrara en el pacto de la circuncisión. Dijo, ‘Soy El Shaddai-Dios Todopoderoso…". "Recuerdo que hablamos de este aspecto de la misión de Yosef en nuestro encuentro inicial. Yaakov quería casarse primero con Rajel porque quería que Yosef fuese primogénito, ya que su tarea había de cumplirse antes que la de Yehudá. ¡Yo pensaba que se enamoró de ella!" El sabio sonrió. "Cuando lees la Biblia," dijo, "has de tener presente que además de la historia externa, está la historia interna." "La que enseña la dimensión interna de la Torá", dijo Adam. "Usted debe tener razón, porque ¡la historia externa suele dejar tantas preguntas sin respuesta! Entonces, ¿por qué otra razón quería casarse primero con Rajel?" "Porque Rajel personifica el servicio Divino de taanug-deleite y de sed por el vínculo apasionado que llaman devekut. En cambio, Leá es madre de los hijos". "¿Qué significa la madre de los hijos? ¡Ambas tuvieron hijos, y ambas los querían!" observó el joven. "Un hombre puede casarse con dos clases de mujeres. Una que le recuerda a su madre…" "Como Yitzjak, que se consoló de la muerte de su madre al conocer a Rivka. El comprendió perfectamente que Rivka continuaría la tarea que comenzó Sara su madre, y que era digna de engendrar a sus hijos", dijo Adam. "Exacto. En cambio, hay otra clase de consorte, que es más como una compañera del alma. Esta segunda clase de esposa forma parte de él". "Sí, y con esta clase de mujer, el enfoque de su matrimonio es una profunda pasión entre ellos". "Exacto. Los hijos que el hombre pueda tener con esta segunda clase de mujer no van a intensificar el amor y la unión entre ellos, como en el primer caso. El amor que siente el uno por el otro es completo y lo abarca todo".

"¡Pero Rajel quería hijos! objetó Adam. "Rajel personifica bitul-la entrega; no quería nada para sí misma. Sólo deseaba un hijo que le dedicara toda su vida al servicio del Altísimo", explicó el sabio. "Otro ejemplo es Janá, madre del profeta Shmuel. Su esposo, Elkaná, tenía otra mujer que tenía hijos, así como Yaakov. Ante la esterilidad de su esposa, Elkaná le decía, `¿No es mi amor por ti mejor que diez hijos? O sea, si tuviésemos diez hijos juntos, ¡yo no podría amarte más!" "¿Sabe, hasta este momento no comprendí ese comentario de Elkaná. Me imagino que, como Rajel, Janá quería un hijo que sirviese a Dios. ¡Pues ambas lo obtuvieron!" "En efecto. El versículo dice claramente que el Todopoderoso respondió a las plegarias de ellas, no a las de sus esposos." "Entonces, Leá era el primer tipo de esposa, y Rajel el segundo. Pero Yaakov podría haber deseado a Rajel porque es humano querer primero lo que va a brindarte más placer. ¡Después puedes pensar en el deber!" "¡No cuando has llegado a la perfección de carácter de Yaakov!" respondió el sabio. "El interés Divino siempre pasaba antes que el suyo propio. Además, no tenía interés egocéntrico; la voluntad del Todopoderoso era la suya. Leá y Rajel están respectivamente ligadas a las Fuerzas Femeninas de creación y providencia". "En otras palabras, Leá está conectada a biná-entendimiento, y Rajel a Maljut-reinado", aclaró Adam. "Exacto. Como es de ambas que provendrían las doce tribus de las almas colectivas de Israel, ambas tenían que casarse con Yaakov". "Claro. Se necesitan ambas cosas en una mujer: el aspecto de compañera del alma, así como el de madre de los hijos. Me imagino que él necesitaba ambos aspectos para legárselos a las tribus". "Sí. Leá y Yaakov eran como dos entidades separadas que se unen. En cambio, el lazo entre Yaakov y Rajel era como el del ser emanado que regresa a la fuente, y se apega al Emisor Rajel formaba parte de su propio ser". "Debe haberle sido muy difícil a Rajel darle a su hermana Leá las señales secretas que le dio Yaakov para asegurarse que le darían a la hermana convenida a pesar del velo tupido que le impedía ver a quién le estaban dando, ya que no confiaba en Lavan, su malvado futuro suegro. Pero, ¿qué motivo tenía Laván de engañar a Yaakov, ya que, de todos modos, Yaakov tenía la intención de casarse con ambas hermanas?" "La raíz espiritual de Laván provenía de la misma fuente del mal. Para impedir que se cumpliera el plan Divino de rectificar el mundo, el modo más efectivo era causar que viniera el mashiaj davídico

a un mundo sumergido en la impureza—un mundo sin preparación alguna para recibirlo". "¡Totalmente!" sonrió Adam. "¡Estoy seguro de que lo apedrearían! ¿Y Rajel? ¿Sabía ella por qué era tan importante que Yaakov se casase con ella primero? "¡Por supuesto! Yaakov se lo explicó todo al darle las señales secretas". "De ser así, …" titubeó Adam, "¿cómo pudo ella revelar esas señales? ¿No sólo estaba traicionando a Yaakov, sino a Dios mismo!" "Ella sabía que su padre llevaría su plan a cabo inexorablemente, sin importarle nada ni nadie, y sería su hermana quien se casaría, no ella. No podía permitir que su hermana fuese deshonrada de ese modo". "¡Que sacrificio sublime! ¡Ella no podía estar segura de que Hashem la perdonaría, y más aún, que su amado Yaakov seguiría queriéndola al fallarle ella de ese modo!" "Exacto. Enseñan los sabios que una trasgresión cometida contra el prójimo es más grave que contra el Altísimo, ya que Dios se preocupa más por el honor de Sus criaturas que por el Suyo Por lo tanto, si ofendes a alguien, tienes que recibir su perdón antes de pedir a Dios que te perdone. "Está escrito que Hashem oye las plegarias de Rajel antes que cualquier otra, y que ella está destinada a desencadenar nuestra aguardada redención. La grandeza de la recompensa de Rajel nos muestra hasta qué punto es importante a ojos de Dios el no hacer daño a otra persona". "¡Uau! ¡Da qué pensar si se considera la tendencia humana a la pequeñez!" exclamó el muchacho. "Además de su amor avasallador por ella, Yaakov tiene que haber sentido admiración a pesar de todo. ¿Podría usted explicar lo que mencionó antes acerca del servicio Divino de Rajel y de Leá?" "Representan dos clases de servicio Divino. El servicio de hashpaá-sustento, o de `hijos` implica que así como el hombre se casa para tener hijos, tú estás ofreciendo tu servicio al Altísimo, y quieres `hijos` en pago. O sea que quieres cosechar lo que has sembrado. Quieres sustento espiritual, así como físico del Cielo, para permitirte vivir tu vida según los preceptos de la Torá. ¿Queda claro?" "Totalmente. El otro servicio es lo que usted llamó taanug. Esa palabra viene de oneg-deleite, ¿no?" "Sí. ¿Recuerdas lo que te dije acerca de oneg?" "Dijo usted que se refiere a al percepción de la cercanía de Dios. Por favor, hábleme del individuo que escoge el servicio Divino de taanug". "No quiere más que devekut-vínculo apasionada con su raíz de alma. El único sustento que desea

está descrito en el versículo, `Mi alma tiene sed deElokim-Dios, El Jai-el Dios vivo. ¿Cuándo vendré y apareceré ante Dios?" "Personalmente, todo mi ser ansía el servicio de taanug, Rab, pero se necesita sustento de alguna clase para existir, ¿no?" musitó el muchacho. "¡Sólo con lo que hay que gastar para festejar las pascuas correctamente…! "No cabe duda que tienes razón," respondió el sabio. "Pero en el segundo servicio, tu enfoque principal es la percepción de la cercanía de Dios. El sustento Divino te llega de todos modos, el Todopoderoso se asegura de ello. Pero no es eso la cumbre de tus deseos: a tus ojos, nada en el mundo vale en comparación con tu anhelo por devekut, que es lo que representaba Rajel. "El servicio Divino de hashpaá-sustento evoca nuestro servicio de oración semanal, ya que es el tiempo en que la cercanía entre Israel y el Altísimo está enocultamiento. Debido a eso, tres veces al día, Le dirigimos nuestras plegarias en las que expresamos nuestras necesidades, y nos sentimos más cercanos a Él cuando recibimos Su regalo de abundancia. "En cambio, el servicio Divino de taanug-deleite es como nuestro servicio de Shabat. En Shabat, los mundos celestiales regresan a su fuente, y se eleva el ocultamiento Divino predominante durante la semana. Por lo tanto, no hace falta pedir que nos sacien nuestras necesidades..". "…porque la única necesidad que sentimos es el anhelo por una cercanía cada vez mayor", terminó el muchacho con mirada pensativa. "Podemos, sin embargo, expresar nuestros deseos en el ámbito espiritual," añadió el sabio. Fijándose de pronto en la mirada de interrogación en los ojos del joven, le preguntó Yosef: "¿Qué pasa? ¿En qué piensas?" "Se me acaba de ocurrir, esta tensión entre el sustento y el deleite, ¿no fue esa la causa interna de discordia entre Yosef y sus hermanos?" "¡Excelente, Adam! Como hijo de Rajel, Yosef quería que la esencia del servicio interno del pueblo de Israel fuera la sed por el oneg-deleite de devekuta la Presencia Divina." "Pero usted dijo que el tikun-la rectificación de yesod-fundamento estaba ligado al Nombre Divino El Shaddai y al pacto de la circuncisión. El Nombre que acaba usted de citar referente a la sed del alma es El Chai!” "Buen punto; la sefirah yesod está conectada con ambos Nombres Divinos. O sea que la misión de Yosef incorpora la pureza sexual así como el vínculo apasionado. A decir verdad, el Gaon de Vilna enseñó que la razón por la cual el órgano de yesod es tan sensible y proporciona tal sentido de deleite es que, en el ámbito espiritual, está conectado con el or haganuz-la luz infinita de la creación que ocultaba el yijud-la unificación del Altísimo con las almas colectivas de Israel".

"¡Que es el máximo taanug-deleite!" musitó Adam con mirada pensativa. "O sea que la pureza sexual y el oneg de devekut-vínculo están íntimamente ligados en su fuente celestial. Esto es lo que usted ha estado tratando de decirme desde el principio. … Gracias, Rab". El sabio le dio una sonrisa calurosa. "¿Por qué crees que he entrado en complejidades de la dimensión interna de la Torá como el tema de Rajel y Leá, que son difíciles de comprender y han causado gran controversia? Si no fuese una parte íntegra de lo que estoy tratando de transmitirte, créeme, lo hubiese evitado, así como evité muchos otros temas. Sin embargo, en el fondo, lo único que ayuda al hombre a controlar su tendencia a caer en pecados sexuales es el deseo de taanug— el auténtico, proveniente de su Fuente original. Y en ese contexto mencionamos a Rajel, seguida por su hijo Yosef. ¿No sabe el Altísimo que necesitamos manutención? ¿No es por eso mismo que nos mandó al mundo, para ponernos en una situación en que pudiésemos ganarnos la vida en lugar de recibir sustento como un acto de caridad del que podemos avergonzarnos? Ahora bien, si el ganarnos ese sustento va a ocupar toda la pantalla de nuestra conciencia, ¡no hemos comprendido en absoluto el motivo de nuestra venida al mundo!" "En otras palabras", aclaró Adam, "si lo único que Dios va a ser para nosotros es –Padre nuestro que está en los Cielos, Proveedor de todos nuestras necesidades – ¡hemos perdido el tren!" Yosef sonrió "Eres muy expresivo, hijo mío. Sí, eso es exactamente lo quiero decir. Rab de Vidas cita un pasaje en el cual el Zóhar lamenta que las personas, incluso algunos sabios de la Torá, se pasen el tiempo pidiendo lo que necesitan personalmente, sin pensar en lo que la Shejiná necesita: Cuántos sabios hay aquí que estudian la ley oral día y noche, analizando sus dificultades, y gritan como perros, `¡Dame, dame!` así como en Gehinom, donde todos gritan `¡Dame, dame!` … Danos riqueza en este mundo y también en el mundo venidero. No hay quien estudie con la intención de elevar a laShejiná de Su exilio y de unificarla con Su Amado. Es como si todos fueran ciegos y tuviesen el corazón bloqueado. "Sin embargo, el enfoque aquí es diferente," observó Adam. "El Zóhar parece decir que el objetivo de nuestro servicio Divino habría de ser el de elevar a laShejiná y ayudarla a llegar a la unión. En cambio, según comprendí, lo que usted está diciendo es que el hombre debe aspirar al taanug de la cercanía de Dios para sí mismo. Entonces, la idea de este deleite espiritual le ayudaría a controlar su deseo físico, y a la vez causaría placer Arriba". "¿Es eso lo que comprendiste? Pues no es exactamente lo que quise decir, de modo que me alegro que hayamos tenido esta discusión. "Piensa en las veces que hayas tenido una relación armoniosa con tu esposa. ¿Te involucraste por el placer que pudieses derivar de ella?" El muchacho frunció el ceño. "¡No!" exclamó acalorado. "Para ser totalmente sincero, quizá haya sido esa mi intención al principio, pero después, nuestra unión física se convirtió en un profundo

vínculo de almas. Y entonces, ¡pensaba mucho más en el placer y el bienestar de ella que en el mío!" "¿Y no derivabas tú también placer?" pregunto el rab con intención. Adam se echo a reír. "¡Usted gana, Rab! Ya comprendo lo que me decía. Al principio de la teshuváel arrepentimiento del hombre, es incapaz de ver más lejos que sus necesidades materiales— aunque quizá también las espirituales. No obstante, si logra pasar esta etapa inicial, parará de pensar en sí mismo y sólo ansiará causarle placer a Hashem. Esto es lo que aprendemos de Yosef. El hecho que el sustento material viene de por sí está claro, como podemos verificar en el caso de Yosef, cuando logró controlar la tentación sexual y probó su fe total en el Todopoderoso a pesar de largos años encarcelado". "En efecto, pero aunque el sustento material no le llegue con la abundancia que él hubiese deseado, tiene que aprender a conformarse y estar satisfecho con lo que le da el Altísimo, y no pasarse el tiempo pidiendo, `dame, dame` como censura el Zóhar. Captas con rapidez," terminó el sabio. "Pido que penetre en tu corazón tan rápido como entró en tu intelecto". "Bueno, ese es el problema que me trajo a usted, Rab. O sea que yo pido lo mismo. Tengo otra pregunta acerca de la luz mesiánica. Usted Dijo que comenzaría con una iluminación de Yosef. Por favor, hábleme más de eso". "Cuando llegue el momento tendremos también una iluminación del profeta Eliahu". "¿Por qué Eliahu? "Porque Eliahu es una encarnación de Pinjas". "Sí, recuerdo. Pinjas mató a uno de los príncipes de las tribus que se atrevió a exhibir en público su unión prohibida con una mujer no judía. Tiene sentido que Pinjas venga en el momento que baje al mundo la energía de Yosef, ya que Pinjas recibió el brit shalom-pacto de la paz por recompensa". "En efecto, y como versa, la idea de shalom-paz alude a yesod-fundamento". "¿Usted quiere decir que guardar el pacto trae paz al hogar del hombre? ¡Es por eso que ya no nos peleamos tanto, entonces!" exclamó Adam. El sabio sonrió. "¡Por supuesto! En el sentido espiritual, el concepto de yesodestá ligado al de shalom y a la unificación de Maljut con su correspondiente Masculino Zeir Anpin. Discutiremos eso más adelante. La misión de Yosef era la de preparar a Israel para el yijud-la unificación del Shabat, para que pudieran ser incluidos en el yijud mientras seguían en este mundo" "¿Por qué Yosef?"

"Debido a la fuerza interior con la cual superó la prueba de tentación sexual, Yosef llegó a ser el representante de yesod-fundamento. Físicamente, yesodes equivalente al órgano masculino, y espiritualmente, indica el fundamento y arranque de todas las bendiciones. Hemos visto que la unificación entre las Fuerzas Masculinas de Providencia con las Femeninas de Maljut puede compararse a un amor de novios. El yijud-la unificación entre Maljut y su Amado lleva el nombre de shalom-paz". "¿Qué tenía que hacer Yosef para preparar a Israel para la unificación?" "Tenía que elevar su nivel espiritual para que sintieran el encendimiento espiritual, el ansia de llevar a cabo esta unificación y tener percepción de ella. "Yosef comprendió que el órgano de la sensualidad es el vehículo más apropiado para convertir las tentaciones en un fuego de kedushá. Por lo tanto, su servicio Divino personal consistía no sólo en evitar el mal, sino también en elevar el deseo sexual hasta convertirlo en un ardiente anhelo por cercanía. Su recompensa fue que sus tentaciones se volvieron el taanug-deleite por la cercanía de Dios que lo caracterizaba. Porque, sabes, no hay deleite que pueda comparase al de sentir el encendimiento del amor por Hashem, `la llama Divina` del Cantar de los Cantares, y no hay nadie mejor equipado para alcanzar tal deleite que los que han probado deseo provocado por las fuerzas del mal y conectado con yesod, logrando convertirlo en una llama de kedushá".

Adam abrió la boca como para decir algo, pero de pronto alguien tocó fuerte a la puerta y la abrió. Era uno de los alumnos de Yosef: "Perdóneme, dijo, "pero necesitamos al rab por un asunto urgente". "Tenemos que terminar por hoy", dijo Yosef. "Mañana será viernes, o sea que no nos vamos a ver. Te veré el motzae Shabat-sábado la noche, si Dios quiere". Pausó un momento y añadió, "¡Espero que estos encuentros nocturnos no sean demasiado duros para ti! ¡Es que no tengo otro momento libre que darte!" "Me paso el día esperando que llegue el momento de nuestro encuentro", respondió Adam, en un apretón de manos con Yosef. Simcha Benyosef

¿Cómo estar seguro de que es tu media alma?

"La pregunta es", comentó Adam, "¿cómo puede el hombre estar seguro de que una mujer es su verdadera media alma, especialmente si aceptamos que podemos haber tenido otras vidas? Y usted me

enseñó, Rab, que después de la muerte del hombre, se reúne con su verdadera compañera del alma en Edén". "Lo que quise decir es esto: cada vez que se encuentra en cierta encarnación, debe tener la conciencia que junto a él está su verdadera compañera del alma; o sea, que la mujer con la que se casó después de infinitas cavilaciones, es su media alma. Debe tener fe y creer que el hecho de que esté casado con ella no es porque terminó por decidirse, sino que es una señal que Dios se la escogió y arregló que se casara con ella. Si se comporta ella de forma antagonista, le está dando la oportunidad de rectificar sus defectos de carácter. El hecho de que están juntos significa que Dios les confió a los dos un tikkún que sólo pueden cumplir al estar juntos, un trabajo que sólo puede él hacer con ella, y ella con él". "Es muy difícil aceptar eso que ha dicho", musitó Rajel. "Y en cuanto a las relaciones conyugales, ¿también ahí debe empujarles el deber?” "Es la manifestación física de un elemento espiritual, y como tal, puede considerarse un deber en el sentido que es una mitzvá—llamada oná—pero, ¡es muchísimo más que eso! Por lo tanto, cuando están ambos en un grado elevado de conciencia Divina, se juntan con la intención de cumplir estamitzvá, sabiendo que si efectúan el acto conyugal con modestia y kedushá, aumentarán el grado de unión entre las fuerzas celestiales. Al mismo tiempo, sin embargo, ¿qué duda cabe que su acto exprese la profundidad de sus sentimientos mutuos?” "Por favor, háblenos de este aspecto íntimo de la unión matrimonial, Rab", pidió Adam. "Hasta ahora nos hemos enfocado mayormente en el lado negativo del acto sexual. ¿Cuáles son las expresiones de su lado correcto?” "Tienes razón. Ha llegado el momento de hablar de ello. Según la mitzvá deoná el hombre debe satisfacer a su esposa, no sólo físicamente sino también emocionalmente. El marido debe comprender que ella tarda más tiempo que él en estimularse, y debe ajustar su ritmo al de ella tanto antes como en el proceso de las relaciones. Y si tienen problemas deben de consultar a una especialista en el tema”. "Como decía, aunque las relaciones matrimoniales deben llevarse al ritmo de la mujer, ella también debe estar conciente del ritmo de su marido. El grado de sensibilidad de cada cónyuge hacia el otro refleja su nivel de humildad. "Y quiero añadir una recomendación, basado en las enseñanzas de la dimensión interna de la Torá: después de que la mujer haya estado con su marido, es importante que no se separe de él de inmediato. Debe esperar hasta que él sienta, por la flacidez de su miembro, que ya se ha vaciado todo el esperma. Además de eso, ella debe permanecer acostada un rato más, como diez minutos, después de que se separa de ella. "Ambos cónyuges deben tener la intención de santificar sus relaciones matrimoniales, y el modo de hacerlo es igual que para cualquier otra mitzvá; es decir, evitar pensamientos ajenos, y tratar de enfocarse en pensamientos dekedushá. Tienen que concentrarse en la intención y súplica al Todopoderoso de traer al mundo hijos temerosos de Dios, o bien en el deseo de brindar placer y

plenitud uno al otro. "Otros niveles de intención pueden incluir el profundo deseo de causar la dicha celestial aumentando la unificación entre El Altísimo y la Shejiná". "¿El acto matrimonial tiene tanta influencia arriba?” preguntó Rajel. "¡Por supuesto! Les vengo diciendo que cualquier acto de este mundo tiene directa repercusión en el ámbito celestial". "¡El matrimonio es un gran desafío!” exclamó Adam. "Probablemente por eso es lo que más ayuda al hombre a lograr la plenitud espiritual. ¡Pero no depende sólo del individuo poder casarse!” "Es innegable que existen algunos individuos temerosos de Dios que han sido incapaces de encontrar consorte, a pesar de su genuino esfuerzo. Tal es el decreto Divino respecto a ellos, por razones que sólo pertenecen a El Altísimo, pero como dicen, `la excepción confirma la regla`. Nadie puede determinar que en su propio caso, no vale la pena seguir tratando, y considerarse en este último grupo".

Simcha Benyosef ¿Conocemos Nuestra Propia Naturaleza?

Extraido de Revista Judaica. Editada por Centro Comunitario Sucath David ¿Conocemos nuestra propia naturaleza?

Una vez leí, en una revista"femenina", que ser madre, esposa y ama de casa son realmente tareas opuestas, "Ama de casa vs. Madre y esposa", era el título. Allí se explayaban sobre lo difícil y frustrante que es compatibilizar con éxito estos roles. Hacía mención, además, de que casi todas las mujeres en la actualidad tienen un trabajo fuera de su casa, ya sea por gusto o necesidad económica, que resulta ser, para la mayoría, mucho más gratificante y reconocido que el trabajo dentro del hogar. Por otra parte una encuesta publicada hace unos meses en un conocido diario capitalino, mostraba que las mujeres prefieren casarse entre los 35 y 40 años por el mismo motivo. La idea que este artículo transmitía era algo así como lo siguiente: Mientras el ama de casa se ocupa de tareas materiales concretas construyendo a diario su casa, limpiando, ordenando, yendo al supermercado, cocinando y haciendo todo tipo de tareas referidas al funcionamiento normal de ella, la madre y esposa encargada de la construcción del hogar, de brindar amor, educación, contención, comprensión, tiempo real con los hijos, sumado al permanente apoyo incondicional y atención que debe brindar a su marido, recibiéndolo a diario, obviamente, con una amplia sonrisa y "espléndida" (como si su día hubiese transcurrido en un spa), mira desde otro extremo y con resignación como sus pequeños, por los que tanto; invierte transforman en pocos minutos, toda su labor en un campo de batalla: juguetes regados por toda la casa, trozos de pan y masitas convertidos de repente en el nuevo decorado de nuestros pisos, la pulcra ropa lavada y planchada mostrando el menú de lo que comieron en solo media hora y, como si todo esto fuera poco, si nuestros maridos tuvieron un día lleno de dificultades es muy probable que al llegar a la noche cansados y ensimismados en lo suyo ni cuenta se den de nuestro esfuerzo y nos pidan "justamente lo que ese día no pudimos hacer." ¿Alguna de ustedes se siente identificada? Seguro que sí, ya que esto es absolutamente real y normal, y sucede en mayor o menor medida, en todas las casas. Al final del día todo parece haber sido en vano: el trabajo del ama de casa se esfumó, y todo está como cuando nos levantamos. Lo que compramos y cocinamos en "horas " se lo comieron en "minutos", lavamos, planchamos y al otro día una nueva pila de ropa nos espera para ser puesta en condiciones, la casa que brillaba mientras los niños estaban en la escuela se opaca con juguetes, mochilas, medias y zapatillas esparcidos por doquier. Y con respecto al trabajo de la madre:"¡es a futuro, trabajo de largo plazo y no se ven hoy los resultados!". Y además parecería ser que los niños siempre encuentran un motivo de qué quejarse, aunque nos hubiésemos brindado de lleno a ellos. Una sensación de "todo fue inútil, ¿para que lo hice?" nos invade y pensamos; mañana el día será igual o peor!, si agregamos algún desperfecto en la casa -que nunca faltan o nos toca visitar al dentista o al doctor con alguno de los chicos. La rutina nos agobia, es un círculo y como

tal nunca acaba, por lo tanto parece ser que siempre nos encontramos en el mismo lugar. Ahora cambiemos el cristal, como cuando el oculista amistosamente quiere corregir nuestra visión, para que disfrutemos de los placeres de la vida, ¿por qué quedarnos con una visión incorrecta, si podemos tenerla perfecta? Miremos así las cosas desde otro punto de vista; por supuesto mas positivo y alentador. ¿Qué opina el judaísmo sobre este tema? ¿Puede una mujer compatibilizar estos roles sin morir en el intento? ¿Tiene la capacidad real para combinar y realizar con éxito estas funciones? ¿Vale la pena el esfuerzo? ¿Para qué y por qué debemos hacerlo? ¿Puede sentir placer y orgullo de lo que hace sin considerarse menos mujer por atender su casa y no ser una ejecutiva reconocida en el mundo de los negocios? Ante todo deberíamos investigar y plantearnos seriamente cuál es el verdadero sentido de la vida; clarificarlo y entenderlo es el punto de partida, ser conscientes del objetivo para el cuál fuimos creados, y por otro lado analizar cuál es la función que a las mujeres nos toca desempeñar en este plan divino. Personalmente creo, y estoy segura, que muchas de ustedes asentirán, que es mas simple, lógico y alentador pensar que el ama de casa prepara a lo largo del día su casa con amor y dedicación, poniendo todo lo bueno de sí, para recibir a sus hijos y esposo tras un día de estudio y trabajo, para que al volver y reencontrarse con nosotras, las madres y esposas, transformemos todos juntos, esa casa (lista para ser disfrutada) en un hogar, interactuando como una familia con todo lo que el concepto incluye. Vemos así, entonces, que no hay transformación mas positiva que ésta, ya que el movimiento y vida que nuestra familia da a la casa es lo que verdaderamente forma el hogar y es el objetivo por el que toda mujer debería trabajar. En la vida judía la mujer es la base de nuestra existencia como pueblo y la encargada de transmitir nuestros valores de generación en generación. Cuando Hashem iba a entregar la Tora dijo a Moshé "así dirás a la Casa de Iaakob y anunciaras a los hijos de Israel" (Shemot19). Nuestros Sabios explican que "la Casa de Iaacob" se refiere a las mujeres, ya que ellas son las encargadas de educar a los hijos en el camino de la Torá. Ellas, ("nosotras") son las que tienen la fuerza de llevar su hogar adelante. La mujer es la luz, es el alma de la casa. Por otro lado el Rab Freue nos comenta en su libro "La Luz de la vida" que en la Torá se destaca en varias oportunidades la participación de la mujer en la construcción del Mishkan, entonces si la mujer fue importante por su aporte frente a la construcción delMishkán (Santuario), mucho más lo es por su influencia en ese pequeño Santuario que es el hogar judío.

Sobre estas mujeres dijo el Rey Shlomó: " Una mujer virtuosa ¿quien encontrará?… confía en ella el corazón de su esposo y recompensa no le faltará… su boca habla con inteligencia y la Torá del favor está en su lengua, se levantan sus hijos y la felicitan, su marido la alaba…" (Mishle 31) Cuando los malajim visitaron a Abraham, le preguntaron dónde se encontraba Sara y él respondió "está en la carpa", quiere decir esto en su interior puro, refiriéndose así no al lugar geográfico sino a donde ella volcaba su verdadero esfuerzo, obteniendo de esta manera la armonía del hogar. Algunas explicaciones dicen que los Malajim lo hicieron con la intención de que Abraham valore y ame ,más aún, a su esposa, ya que ella se comportaba como una mujer judía debe hacerlo. La mujer, como un ministro del interior, debe ser la que se ocupe de todo lo concerniente a lo que pasa en el interior de su hogar, que todo allí marche en orden, y esta escrito qué grande es el pago por esta labor. Debemos saber que cada acción que hacemos por nuestra familia es considerado un acto de jesed (de bondad) y es recompensada ampliamente por nuestro Creador. Por otro lado el hogar es el verdadero lugar donde la mujer puede realizar su desarrollo espiritual, es su verdadero campo de acción. Asi que ¡atención! Si buscamos nuestra verdadera realización como "mujer" fuera de allí, alerta, es muy probable que no la logremos. Un trabajo fuera del hogar, debe ser lo secundario, lo anexo, y no lo principal y prioritario. Seguro que podemos hacerlo si lo necesitamos o deseamos, pero siempre respetando esta consigna, no debe ser una escapatoria a nuestra verdadera función sino algo que nos dé mas fuerza para cumplir con nuestro verdadero rol. Ahora podemos preguntarnos con razón: muy bien, éstas son nuestras funciones, de acuerdo, pero… ¿Cómo las llevamos a cabo con éxito y alegría sin que las demandas nos superen? Debemos estar seguras y confiar en que si D-os pretende esto de nosotras, si nos encomendó esta tarea, es lógico pensar que nos dotó de los elementos necesarios para poder llevarla a cabo. Para ello nos creó con ciertas características propias, con una naturaleza distinta a la de los hombres, y a pesar de lo que el feminismo piense, esta naturaleza nunca podrá ser cambiada. Todas las mañanas en nuestra tefilá (rezo) decimos Baruj Sheazani kirtzonó(Bendito que me hizo como su voluntad) como agradecimiento a nuestras responsabilidades femeninas. Una de las explicaciones es que aquí agradecemos la versatilidad que nos dio para cumplir con éxito nuestro rol. Una de las características de la mujer es que tiene una concentración superficial, a diferencia del hombre cuya concentración es profunda; ¿Quiere decir esto que somos menos inteligentes? ¿Qué no podemos ser ni científicas ni investigadoras? No es ésa la idea ni mucho menos, y vamos a

ejemplificarlo para entenderlo mejor. Hora de preparar la cena, con una mano revolvemos una olla, con la otra revisamos las tareas de nuestros hijos, mientras que con el pie movemos el coche de nuestro bebe que llora reclamando atención, sin dejar de supervisar, por supuesto, el juego o baños de los otros niños, en tanto planificamos en nuestras mentes nuestras obligaciones para el día siguiente, suena el teléfono, nos llaman del trabajo, y por el inalámbrico o ahora el manos libres podemos resolver algún problema urgente y todo con suma naturalidad y sin perder la calma y la visión de lo que estábamos haciendo; esto es, sin duda, un regalo de Boré Olam (El Creador del Mundo). Si ponemos a un hombre sólo cinco minutos al frente de esta situación, su grito de socorro no tardará en llegar. Recordemos que en Mitzraim (Egipto) uno de los trabajos forzados fue justamente invertir los roles, darle al hombre tareas de mujeres. ¡La concentración superficial nos sirve justamente para movernos y desplazarnos con éxito de una actividad a otra sin perder de vista la anterior, cosa tan necesaria para las amas de casa y madres! Puso en nosotras además una biná ietera, una comprensión especial de las cosas, tenemos lo que llamamos comúnmente el sexto sentido. Además de hacer que nuestros actos se rijan no solo por la fría lógica de la razón y el entendimiento, hizo que todas nuestras actitudes sean movilizadas por elreguesh (el sentimiento), y eso es lo que nos permite captar las necesidades reales de cada uno de los miembros de nuestro entorno, crear un hogar feliz, donde podamos transmitir con amor y alegría a nuestra familia y a toda persona que a ella asista un ambiente cálido donde desarrollar las midot(buenas cualidades) como el jésed (la bondad), la humildad, la avodat Hashemetc. Puso en nosotras un sentido de la estética, a la mayoría de las mujeres nos gusta el orden y la limpieza, y es más ¿por qué negarlo? nos molesta lo contrario. Ahora bien, puede parecer que algunos de estos conceptos ya no encajan en esta sociedad tan moderna, estamos en el siglo XXI, eso era antes cuando no había otras posibilidades para la mujer. Estamos superadas (o deberíamos estarlo, ya que es lo que nos quieren vender), vivimos en la era de los avances tecnológicos, comidas congeladas, Fast food, lav a sec 5´, mucamas y hasta robots que hacen la limpieza de nuestros hogares, televisores-baby sitters, que entretienen a nuestros pequeños gratis con solo apretar un botón y en nuestra propia casa, guarderías y jardines de infantes bilingües con maestras especializadas que educan a nuestros hijos, dejando mucho tiempo libre para eludir sin culpa esta responsabilidad, pero no nos engañemos: Nada de todo esto puede reemplazar a la madre esposa y ama de casa en su hogar, solo bien aplicado ayuda y "mucho" a que realicemos nuestra tarea con mayor eficacia y eficiencia.

Debemos saber que ningún niño cambia todo eso por la presencia de su mamá en su casa. Un beso deseando suerte en el día escolar, un abrazo cálido y un; te extrañé! al volver pueden marcar la diferencia en el futuro de un chico; la torta comprada en la mejor confitería no se iguala a unas simples tostadas y una torta casera hechas con el mejor ingrediente "el amor de mamá"que los espera. Cosas simples y que en esta época desestimamos tanto son de gran valor; y una madre judía lo sabe y lo hace bien. Para despedirme quisiera compartir con ustedes la siguiente historia: Una vez un grupo de mujeres, que se dedicaba en su mayoría al mundo de las finanzas y un tanto escépticas con respecto a las verdaderas funciones que debe ejercer la mujer dentro del hogar, le preguntó a un Rab. tras una charla sobre este tema -Disculpe Rab., le dijo una de las oyentes, muy interesante la charla, pero ¿podría contarnos de qué se ocupa su esposa? El, con mucho orgullo y de manera entusiasta y por supuesto sin escatimar detalles respondió: Que era directora de un refugio para niños en edad escolar. Hacía su trabajo desinteresadamente, en forma gratuita, desde hacía ya varios años, les ofrecía educación, se encargaba de que estén bien alimentados y resguardados del frío, se ocupaba no sólo de su salud física, sino psicológica y por que no de su desarrollo espiritual. Cuando era necesario bajaba de su rol de directora y cumplía el rol de chofer, enfermera, maestra, cocinera y todo lo que la situación le demandase en el momento. Buscaba e invertía todos los recursos que fuesen necesarios para que esos niños, que si no fuera por ella se encontrarían desamparados, tuvieran el desarrollo necesario para ser verdaderos hombres y mujeres de bien el día de mañana. Todas las mujeres emocionadas y algunas con lágrimas en sus ojos aplaudieron y aprobaron esa labor tan abnegada y felicitaron al Rab por tener una mujer tan bondadosa y caritativa, con tanto empuje y amor al prójimo. En ese momento el Rab añadió: por cierto olvidé decirles que esos niños son nuestros 8 hijos. ¡No hace falta comentarles como se sintieron estas mujeres ante esta acotación! Qué bien vemos estas tareas cuando se cumplen para "afuera" y lo tomamos como un trabajo altruista, y qué distinto y cuán pesado y frustrante puede ser visto por algunos cuando esto mismo se realiza para nuestra propia familia… ¿No es esto una consecuencia de haber perdido la visión real de cuales son las cosas verdaderamente importantes de la vida?

LA MUJER JUDIA

No un ama de casa

Revista Judaica. Seleccionado con permiso de "why should i stand behind the mechitas when i could be a prayer leader?" (¿por qué debo estar detrás de la mejitzá cuando podría ser una conductora de la plegaria?). publicado por www.targum.com A las mujeres se les ha concedido el privilegio de ser las hacedoras de los hogares judíos. La palabra hebrea para "ama de casa" es akeret habait. Antes de analizar lo que esto significa en el contexto judío, aclaremos lo que no significa. Una akeret habait no es un ama de casa. El rol de la mujer en el hogar como se interpretó tradicionalmente en la cultura americana es muy diferente a la manera que se interpreta en el judaísmo… Para una akeret habait, las tareas domésticas constituyen un medio para lograr un fin, y no un fin en sí mismo. Akeret es la versión femenina de ikar, que es el aspecto central o la esencia de algo. Bait generalmente significa "casa" u "hogar". Al Templo que se levantaba en Jerusalén se lo denominaba el Beit HaMikdash, beit que significa "casa de" y hamikdash que significa literalmente "santidad". A menudo, se alude al mismo simplemente como HaBait, "la Casa". Por consiguiente, en hebreo se utiliza la misma palabra tanto para un hogar como para el Templo Sagrado. De hecho, el propósito de un hogar es ser un mikdash me´at, un santuario en miniatura. D´s le ordenó a Israel construir el santuario a fin de que Él pudiera morar b´tojam. B´tojam a menudo se traduce como "entre ellos". No obstante, su significado literal es "dentro de ellos". El propósito de un santuario es ayudarnos a cada uno de nosotros a construir nuestro propio santuario interior donde D´s pueda morar. Una akeret habait es esa figura central que transforma un hogar en un santuario donde cada miembro de su familia puede convertirse en una morada para la presencia de D´s. Cuidar a los hijos significa más que simplemente garantizar que estén alimentados, limpios y que reciban tiempo de calidad. Significa jinuj, la palabra hebrea para educación y dedicación al servicio de D´s. Ser un ama de casa (occidental) también significaba estar atada a la casa. Todas las aptitudes de una mujer se suponían estaban dirigidas solamente a su hogar. No había lugar para ninguna clase de desarrollo personal o búsqueda de intereses externos, ni hablar de una carrera. Hacer algo así se vería como algo masculino y, por lo tanto, poco natural. Se pensaba que existe algo acerca de las mujeres, su "mística femenina", que les permite sentirse realizadas con los pisos relucientes. Para una akeret habait no existe contradicción entre valorar su posición central en el hogar y desarrollar sus intereses fuera de ésta. Una mujer judía tradicional que trabaja fuera del hogar se considera a sí misma absolutamente una akeret habait como una mujer que permanece en el hogar. No existe una

dicotomía "ama de casa" versus "profesional"… En Eshet Jail, se describe a la mujer ideal como una empresaria experta. El objetivo de la vida no es el dinero, el prestigio ni el reconocimiento público. Se trata de acercarse al Creador de uno, ya sea mediante la creación de un hogar judío o el conocimiento de su voluntad como se revela en la Torá. En gran parte del mundo no judío, un aspecto de ser una mujer casada era ser servil y sumisa con el esposo. Como su "compañera" (ezer k´negdó), era su deber atenderlo. He aquí sólo un ejemplo de cómo una idea fue tomada del judaísmo y distorsionada. Todo esto era parte de su deber de "obedecer" a su esposo dado que era superior a ella. Como dijo John Calvin: "Dejen que la mujer esté satisfecha con su estado de sometimiento, y no se tomen a mal que se la subordine al sexo más distinguido". Así como el hombre tenía que someterse a D´s, la mujer tenía que someterse al hombre porque éste representaba la religiosidad. Se considera que una mujer está hecha a imagen de D´s, al igual que el hombre, y no se ve a ninguno de los dos como más "religioso" que el otro. A una mujer no se la considera la pieza que le falta a un hombre, de otro modo, completo. Ella, como el hombre, equivale a la mitad del ser humano. Las dos cosas que distinguen al ser humano de los animales son el libre albedrío y la capacidad de comunicarse. Cuando una mujer se casaba, se esperaba que cediera ambos al esposo. La voluntad de éste debía ser la voluntad de ella y no se le permitía expresarse. La "unidad" de marido y mujer se lograba, por lo tanto, despojando a la mujer de su humanidad. Esta no era una unidad entre dos seres humanos, sino la adquisición por parte del hombre de un cuerpo femenino… La clave de las vulnerabilidades de las mujeres mencionadas previamente es la dependencia económica de sus maridos. Por una parte, a la mujer (occidental) se la alentó a retirarse de la población activa y a quedarse en el hogar o a entrar en trabajos de baja remuneración. De este modo, se convirtió en económicamente dependiente del hombre. Por otra parte, a la mujer no se le garantizaba, a cambio, una seguridad económica. En el supuesto caso de que su matrimonio empezara a ser abusivo, las opciones de una mujer eran a menudo quedarse y enfrentar más abuso en el hogar, o irse y vivir en la mayor miseria. Bajo la ley judía, un hombre debe garantizar la seguridad económica de su mujer tanto durante como después del matrimonio, y esto se puede hacer cumplir por los tribunales. Durante el matrimonio, lo mínimo que un hombre debe proveer a su mujer es alimento, necesidades personales, vestimenta, necesidades domésticas, cobertura médica y entierro. Esto disminuye fuertemente su capacidad de manipularla amenazando su bienestar económico. Si se divorcia de ella, tiene que pagarle una considerable suma de dinero de una vez, la cual le permitirá vivir cómodamente durante, por lo menos, un año. Esto fue instituido por los rabís hace aproximadamente dos mil años para impedir que los hombres usen el divorcio como una forma de amenazar o castigar a sus esposas, y para ayudar a hacer que el divorcio sea una opción viable para una mujer si la situación lo exige. Si una mujer trabaja, sigue teniendo derecho a que su esposo provea a todas sus necesidades. A cambio de esta seguridad económica, las ganancias de la mujer pertenecen a su esposo. Sin embargo, una mujer puede elegir la independencia económica declarando que quiere quedarse con sus ganancias. El esposo, entonces, queda eximido de algunas de sus obligaciones económicas hacia ella. Un hombre, no

obstante, no puede decirle a su mujer que trabaje y se quede con sus ganancias para que él pueda disminuir sus responsabilidades hacia ella. Cuando un hombre fallece, su viuda e hijas solteras son mantenidas por su patrimonio. Si un hombre tiene deudas y fallece, entonces una porción de su patrimonio debe destinarse a saldar todas las deudas. Lo que queda se divide entre los herederos. A fin de proporcionar seguridad económica a la mujer, a la viuda y las hijas solteras se las consideran acreedoras. La "deuda" con la viuda es proporcionarle apoyo económico hasta que fallezca o se vuelva a casar. Además tiene el derecho de seguir viviendo en su casa. La "deuda" con las hijas solteras es el apoyo económico hasta que se casen. Lo que quede es heredado por los hijos. De este modo, el sustento de una mujer no puede ser amenazado por el esposo ni durante ni después del matrimonio. Al mismo tiempo, la ley también ayuda al hombre a proporcionar la ayuda económica de una mujer. Puede parecer que las leyes referentes a los asuntos económicos entre maridos y esposas son desiguales. No obstante, los rabís sabían que tratar a los hombres y las mujeres como si fueran iguales (es decir, lo mismo), en cuanto a la posición económica, conduciría a resultados sumamente desiguales. Esto ha sido confirmado por la experiencia americana. Los rabís reconocieron que la mayoría de las mujeres se casaría y tendría hijos y, por lo tanto, no estaría preparada para mantenerse económicamente. Las leyes judías reflejan esto y proporcionan la seguridad de la akeret habait. Sin embargo, los rabís también brindaron una manera para que las mujeres casadas sean independientes económicamente. La elección entre la dependencia económica y la seguridad, y la independencia económica se le dejó a la mujer. La mujer judía y su rol central en la construcción de la familia judía siempre han sido muy valorados en el judaísmo. Esto se refleja en los valores judíos, y está apoyado por el sistema legal judío.

¿Conocemos Nuestra Propia Naturaleza?

Extraido de Revista Judaica. Editada por Centro Comunitario Sucath David ¿Conocemos nuestra propia naturaleza? Una vez leí, en una revista"femenina", que ser madre, esposa y ama de casa son realmente tareas opuestas, "Ama de casa vs. Madre y esposa", era el título. Allí se explayaban sobre lo difícil y frustrante que es compatibilizar con éxito estos roles. Hacía mención, además, de que casi todas las mujeres en la actualidad tienen un trabajo fuera de su casa, ya sea por gusto o necesidad económica, que resulta ser, para la mayoría, mucho más gratificante y reconocido que el trabajo dentro del hogar. Por otra parte una encuesta publicada hace unos meses en un conocido diario capitalino, mostraba que las mujeres prefieren casarse entre los 35 y 40 años por el mismo motivo. La idea que este artículo transmitía era algo así como lo siguiente: Mientras el ama de casa se ocupa de tareas materiales concretas construyendo a diario su casa, limpiando, ordenando, yendo al supermercado, cocinando y haciendo todo tipo de tareas referidas al funcionamiento normal de ella, la madre y esposa encargada de la construcción del hogar, de brindar amor, educación, contención, comprensión, tiempo real con los hijos, sumado al permanente apoyo incondicional y atención que debe brindar a su marido, recibiéndolo a diario, obviamente, con una amplia sonrisa y "espléndida" (como si su día hubiese transcurrido en un spa), mira desde otro extremo y con resignación como sus pequeños, por los que tanto; invierte transforman en pocos minutos, toda su labor en un campo de batalla: juguetes regados por toda la casa, trozos de pan y masitas convertidos de repente en el nuevo decorado de nuestros pisos, la pulcra ropa lavada y planchada mostrando el menú de lo que comieron en solo media hora y, como si todo esto fuera poco, si nuestros maridos tuvieron un día lleno de dificultades es muy probable que al llegar a la noche cansados y ensimismados en lo suyo ni cuenta se den de nuestro esfuerzo y nos pidan "justamente lo que ese día no pudimos hacer." ¿Alguna de ustedes se siente identificada? Seguro que sí, ya que esto es absolutamente real y normal, y sucede en mayor o menor medida, en todas las casas.

Al final del día todo parece haber sido en vano: el trabajo del ama de casa se esfumó, y todo está como cuando nos levantamos. Lo que compramos y cocinamos en "horas " se lo comieron en "minutos", lavamos, planchamos y al otro día una nueva pila de ropa nos espera para ser puesta en condiciones, la casa que brillaba mientras los niños estaban en la escuela se opaca con juguetes, mochilas, medias y zapatillas esparcidos por doquier. Y con respecto al trabajo de la madre:"¡es a futuro, trabajo de largo plazo y no se ven hoy los resultados!". Y además parecería ser que los niños siempre encuentran un motivo de qué quejarse, aunque nos hubiésemos brindado de lleno a ellos. Una sensación de "todo fue inútil, ¿para que lo hice?" nos invade y pensamos; mañana el día será igual o peor!, si agregamos algún desperfecto en la casa -que nunca faltan o nos toca visitar al dentista o al doctor con alguno de los chicos. La rutina nos agobia, es un círculo y como tal nunca acaba, por lo tanto parece ser que siempre nos encontramos en el mismo lugar. Ahora cambiemos el cristal, como cuando el oculista amistosamente quiere corregir nuestra visión, para que disfrutemos de los placeres de la vida, ¿por qué quedarnos con una visión incorrecta, si podemos tenerla perfecta? Miremos así las cosas desde otro punto de vista; por supuesto mas positivo y alentador. ¿Qué opina el judaísmo sobre este tema? ¿Puede una mujer compatibilizar estos roles sin morir en el intento? ¿Tiene la capacidad real para combinar y realizar con éxito estas funciones? ¿Vale la pena el esfuerzo? ¿Para qué y por qué debemos hacerlo? ¿Puede sentir placer y orgullo de lo que hace sin considerarse menos mujer por atender su casa y no ser una ejecutiva reconocida en el mundo de los negocios? Ante todo deberíamos investigar y plantearnos seriamente cuál es el verdadero sentido de la vida; clarificarlo y entenderlo es el punto de partida, ser conscientes del objetivo para el cuál fuimos creados, y por otro lado analizar cuál es la función que a las mujeres nos toca desempeñar en este plan divino. Personalmente creo, y estoy segura, que muchas de ustedes asentirán, que es mas simple, lógico y alentador pensar que el ama de casa prepara a lo largo del día su casa con amor y dedicación, poniendo todo lo bueno de sí, para recibir a sus hijos y esposo tras un día de estudio y trabajo, para que al volver y reencontrarse con nosotras, las madres y esposas, transformemos todos juntos, esa casa (lista para ser disfrutada) en un hogar, interactuando como una familia con todo lo que el concepto incluye. Vemos así, entonces, que no hay transformación mas positiva que ésta, ya que el movimiento y vida que nuestra familia da a la casa es lo que verdaderamente forma el hogar y es el objetivo por el que toda mujer debería trabajar. En la vida judía la mujer es la base de nuestra existencia como pueblo y la encargada de transmitir nuestros valores de generación en generación. Cuando Hashem iba a entregar la Tora dijo a Moshé "así dirás a la Casa de Iaakob y anunciaras a los hijos de Israel" (Shemot19). Nuestros Sabios explican que "la Casa de Iaacob" se refiere a las mujeres, ya que ellas son las encargadas de educar a los hijos en el camino de la Torá. Ellas, ("nosotras") son las que tienen la fuerza de llevar su hogar adelante. La mujer es la luz, es el alma de la casa. Por otro lado el Rab Freue nos comenta en su libro "La Luz de la vida" que en la Torá se destaca en varias oportunidades la participación de la mujer en la construcción del Mishkan, entonces si la mujer fue importante por su aporte frente a la construcción delMishkán (Santuario), mucho más lo es por su influencia en ese pequeño Santuario que es el hogar judío.

Sobre estas mujeres dijo el Rey Shlomó: " Una mujer virtuosa ¿quien encontrará?… confía en ella el corazón de su esposo y recompensa no le faltará… su boca habla con inteligencia y la Torá del favor está en su lengua, se levantan sus hijos y la felicitan, su marido la alaba…" (Mishle 31) Cuando los malajim visitaron a Abraham, le preguntaron dónde se encontraba Sara y él respondió "está en la carpa", quiere decir esto en su interior puro, refiriéndose así no al lugar geográfico sino a donde ella volcaba su verdadero esfuerzo, obteniendo de esta manera la armonía del hogar. Algunas explicaciones dicen que los Malajim lo hicieron con la intención de que Abraham valore y ame ,más aún, a su esposa, ya que ella se comportaba como una mujer judía debe hacerlo. La mujer, como un ministro del interior, debe ser la que se ocupe de todo lo concerniente a lo que pasa en el interior de su hogar, que todo allí marche en orden, y esta escrito qué grande es el pago por esta labor. Debemos saber que cada acción que hacemos por nuestra familia es considerado un acto de jesed (de bondad) y es recompensada ampliamente por nuestro Creador. Por otro lado el hogar es el verdadero lugar donde la mujer puede realizar su desarrollo espiritual, es su verdadero campo de acción. Asi que ¡atención! Si buscamos nuestra verdadera realización como "mujer" fuera de allí, alerta, es muy probable que no la logremos. Un trabajo fuera del hogar, debe ser lo secundario, lo anexo, y no lo principal y prioritario. Seguro que podemos hacerlo si lo necesitamos o deseamos, pero siempre respetando esta consigna, no debe ser una escapatoria a nuestra verdadera función sino algo que nos dé mas fuerza para cumplir con nuestro verdadero rol. Ahora podemos preguntarnos con razón: muy bien, éstas son nuestras funciones, de acuerdo, pero… ¿Cómo las llevamos a cabo con éxito y alegría sin que las demandas nos superen? Debemos estar seguras y confiar en que si D-os pretende esto de nosotras, si nos encomendó esta tarea, es lógico pensar que nos dotó de los elementos necesarios para poder llevarla a cabo. Para ello nos creó con ciertas características propias, con una naturaleza distinta a la de los hombres, y a pesar de lo que el feminismo piense, esta naturaleza nunca podrá ser cambiada. Todas las mañanas en nuestra tefilá (rezo) decimos Baruj Sheazani kirtzonó(Bendito que me hizo como su voluntad) como agradecimiento a nuestras responsabilidades femeninas. Una de las explicaciones es que aquí agradecemos la versatilidad que nos dio para cumplir con éxito nuestro rol. Una de las características de la mujer es que tiene una concentración superficial, a diferencia del hombre cuya concentración es profunda; ¿Quiere decir esto que somos menos inteligentes? ¿Qué no podemos ser ni científicas ni investigadoras? No es ésa la idea ni mucho menos, y vamos a ejemplificarlo para entenderlo mejor. Hora de preparar la cena, con una mano revolvemos una olla, con la otra revisamos las tareas de nuestros hijos, mientras que con el pie movemos el coche de nuestro bebe que llora reclamando atención, sin dejar de supervisar, por supuesto, el juego o baños de los otros niños, en tanto planificamos en nuestras mentes nuestras obligaciones para el día siguiente, suena el teléfono, nos llaman del trabajo, y por el inalámbrico o ahora el manos libres podemos resolver algún problema urgente y todo con suma naturalidad y sin perder la calma y la visión de lo que estábamos haciendo; esto es, sin duda, un regalo de Boré Olam (El Creador del Mundo). Si ponemos a un hombre sólo cinco minutos al frente de esta situación, su grito de socorro no tardará en llegar. Recordemos que en Mitzraim (Egipto) uno de los trabajos forzados fue justamente invertir los roles, darle al hombre tareas de mujeres.

¡La concentración superficial nos sirve justamente para movernos y desplazarnos con éxito de una actividad a otra sin perder de vista la anterior, cosa tan necesaria para las amas de casa y madres! Puso en nosotras además una biná ietera, una comprensión especial de las cosas, tenemos lo que llamamos comúnmente el sexto sentido. Además de hacer que nuestros actos se rijan no solo por la fría lógica de la razón y el entendimiento, hizo que todas nuestras actitudes sean movilizadas por elreguesh (el sentimiento), y eso es lo que nos permite captar las necesidades reales de cada uno de los miembros de nuestro entorno, crear un hogar feliz, donde podamos transmitir con amor y alegría a nuestra familia y a toda persona que a ella asista un ambiente cálido donde desarrollar las midot(buenas cualidades) como el jésed (la bondad), la humildad, la avodat Hashemetc. Puso en nosotras un sentido de la estética, a la mayoría de las mujeres nos gusta el orden y la limpieza, y es más ¿por qué negarlo? nos molesta lo contrario. Ahora bien, puede parecer que algunos de estos conceptos ya no encajan en esta sociedad tan moderna, estamos en el siglo XXI, eso era antes cuando no había otras posibilidades para la mujer. Estamos superadas (o deberíamos estarlo, ya que es lo que nos quieren vender), vivimos en la era de los avances tecnológicos, comidas congeladas, Fast food, lav a sec 5´, mucamas y hasta robots que hacen la limpieza de nuestros hogares, televisores-baby sitters, que entretienen a nuestros pequeños gratis con solo apretar un botón y en nuestra propia casa, guarderías y jardines de infantes bilingües con maestras especializadas que educan a nuestros hijos, dejando mucho tiempo libre para eludir sin culpa esta responsabilidad, pero no nos engañemos: Nada de todo esto puede reemplazar a la madre esposa y ama de casa en su hogar, solo bien aplicado ayuda y "mucho" a que realicemos nuestra tarea con mayor eficacia y eficiencia. Debemos saber que ningún niño cambia todo eso por la presencia de su mamá en su casa. Un beso deseando suerte en el día escolar, un abrazo cálido y un; te extrañé! al volver pueden marcar la diferencia en el futuro de un chico; la torta comprada en la mejor confitería no se iguala a unas simples tostadas y una torta casera hechas con el mejor ingrediente "el amor de mamá"que los espera. Cosas simples y que en esta época desestimamos tanto son de gran valor; y una madre judía lo sabe y lo hace bien. Para despedirme quisiera compartir con ustedes la siguiente historia: Una vez un grupo de mujeres, que se dedicaba en su mayoría al mundo de las finanzas y un tanto escépticas con respecto a las verdaderas funciones que debe ejercer la mujer dentro del hogar, le preguntó a un Rab. tras una charla sobre este tema -Disculpe Rab., le dijo una de las oyentes, muy interesante la charla, pero ¿podría contarnos de qué se ocupa su esposa? El, con mucho orgullo y de manera entusiasta y por supuesto sin escatimar detalles respondió: Que era directora de un refugio para niños en edad escolar. Hacía su trabajo desinteresadamente, en forma gratuita, desde hacía ya varios años, les ofrecía educación, se encargaba de que estén bien alimentados y resguardados del frío, se ocupaba no sólo de su salud física, sino psicológica y por que no de su desarrollo espiritual. Cuando era necesario bajaba de su rol de directora y cumplía el rol de chofer, enfermera, maestra, cocinera y todo lo que la situación le demandase en el momento. Buscaba e invertía todos los recursos que fuesen necesarios para que esos niños, que si no fuera por ella se

encontrarían desamparados, tuvieran el desarrollo necesario para ser verdaderos hombres y mujeres de bien el día de mañana. Todas las mujeres emocionadas y algunas con lágrimas en sus ojos aplaudieron y aprobaron esa labor tan abnegada y felicitaron al Rab por tener una mujer tan bondadosa y caritativa, con tanto empuje y amor al prójimo. En ese momento el Rab añadió: por cierto olvidé decirles que esos niños son nuestros 8 hijos. ¡No hace falta comentarles como se sintieron estas mujeres ante esta acotación! Qué bien vemos estas tareas cuando se cumplen para "afuera" y lo tomamos como un trabajo altruista, y qué distinto y cuán pesado y frustrante puede ser visto por algunos cuando esto mismo se realiza para nuestra propia familia… ¿No es esto una consecuencia de haber perdido la visión real de cuales son las cosas verdaderamente importantes de la vida?

La Belleza bien entendida

Extraído de Tovim Hashnaim, del Rab Daniel Oppenheimer En los capítulos anteriores discurrimos acerca del proceso de la elección de la pareja para el matrimonio, sobre las intenciones y prioridades que se debe proponer, sobre el valor primordial del Jesed y de las Midot en la persona a considerar y sobre lo perentorio de invocar la Asistencia Di-vina al buscar al cónyuge. En este capítulo prestaremos atención a uno de los aspectos más espinosos para nuestra cultura: todo lo que se refiere a la apariencia física de la persona a quien se considera para contraer enlace. Entiendo, por muchas conversaciones que he tenido, que esto es uno de los impedimentos más conflictivos para mucha gente. Uno de los puntos que nos llama la atención en el relato del Jumash al presentarnos a las matriarcas, es que la Torá ponga énfasis en su belleza. Esto se menciona respecto a Sará (Bereshit 12:11), Rivká (Bereshit 24:15 - si bien no dice que esa fuera la razón por la que se la eligió como esposa) y nuevamente con Rajel (Bereshit 29:16). Considerando que aun hoy, al sugerirse un Shiduj apropiado a un muchacho observante no se hará hincapié en el aspecto físico de la joven, es obviamente mucho más llamativo que a la Torá sí le interese aludir a este item. En particular interesa notar el hecho de que la Torá divide la cuenta de los años vividos por Sará en tres partes, cuando falleció, diciendo que vivió cien años y veinte años y siete años. Rash"í dice que esta segmentación de los

años de Sará, es para enseñarnos que fue piadosa a los cien igual que a los veinte y bella como a los siete años. ¿A qué atractivo se refiere cuando la compara con una niña de siete años? Rav Yissochor Frand shlit"a cita una explicación de Rav Mottel Katz.sz"l, que será importante para echar luz a un tema tan delicado. Entendamos, sin embargo, que la dificultad en captar el núcleo del tema surge por las limitaciones que tenemos los contemporáneos, fruto del condicionamiento de una cultura que fue imponiéndonos medidas corporales muy específicas para que alguien sea considerado bello, y de ese modo, restringir nuestra sensibilidad por aspectos más íntimos y reservados de hermosura. A tal fin, comienza dándonos un ejemplo de un pasaje del Talmud (Kidushín 49:) que no está relacionado con los aspectos anatómicos humanos, pero sí con el concepto de la belleza - referente a Ierushalaim: "Diez medidas de esplendor cayeron al mundo: nueve llevó Ierushalaim y el resto se lo llevó el resto del mundo". ¿Qué significado y qué importancia tiene el hecho que Ierushalaim fuera hermosa? ¿No estamos hablando, acaso, de una ciudad a la cual la gente va por su calidad de santa y moral? ¿Acaso los peregrinos dejarían de ir a Ierushalaim, si fuera un poco menos encantadora que otras ciudades? La respuesta radica en el hecho de que efectivamente los seres humanos estamos influenciados por el entorno físico. La perfección corporal, permite que la persona entre en un estado mental más receptivo a la espiritualidad (obviamente, si es que realmente vaya en búsqueda y le interese aquella espiritualidad…). Del mismo modo, enseñan los Sabios, que hay "tres aspectos que amplían la mente del hombre: Una casa hermosa, utensilios hermosos y una esposa hermosa" (Talmud Brajot 57:) Este pasaje del Talmud, nos hace saber que cuando las condiciones de vida son agradables, y uno no está restringido por distracciones físicas, puede ser más receptivo a las cuestiones de santidad. Cuando quien visita Ierushalaim puede divisar las encantadoras colinas y los valles y bosques que embellecen el derredor de la ciudad, su mente se despeja, dando lugar a aquella santidad que está buscando. Volviendo a lo humano, el pasaje famoso del final de Mishlei (31:30), nos dice que: "engañosa es la gracia, y vana la hermosura, (sino que) una mujer temerosa del Creador debe ser elogiada". ¿En qué quedamos, es importante - o no - la belleza corporal? Para explicar este pasaje, algunos comentaristas comparan la simpatía y la belleza con el número cero. ¿Cuánto vale la cifra cero por sí misma? ¡Nada! Sin embargo, al colocarle otra cifra al comienzo, entonces los ceros que se agreguen luego, potencian aquella cifra inicial: el 1 se convierte en 10, 100,1000, o más…

Del mismo modo, el atractivo físico es el cero que solamente enaltece a la persona que ya ha trabajado sus aspectos morales de Temor al Todopoderoso. De otro modo, es solamente un cero. Quizás podamos complementar esta explicación con otra que también he visto. La hermosura periférica de la persona no es fruto del trabajo de quien la ostenta. D"s le obsequió a cada uno su aspecto exterior, razón por la cual no tiene de qué enorgullecerse, aun más considerando que la simpatía puede utilizarse correctamente, pero también sirve como medio de engaño y encubrimiento. Sin embargo, el trabajo interno de mejoría y crecimiento en las Midot, es mérito de uno mismo: "Todo está en Manos Di-vinas, salvo el temor por el Todopoderoso (que está en manos de cada ser humano)". Lo que este pasaje nos viene a enseñar es en qué aspecto poner énfasis: ¿en lo que recibimos como legado, o en lo que hemos logrado con esfuerzo? La belleza y la hermosura en una persona según la definición de la Torá, no equivalen - sino que se contrastan - a las nociones sensuales que la gente llama atractivo, irresistible, sugestivo, provocador, de lo que sería una "ganadora" de un concurso de belleza. - en donde solamente la gracia física, y nada más que eso - son la virtud de la elegida. Ni el gimnasio, ni la peluquería son lugares para adquirir valor interno. Es importante destacar - pues es parte de la carencia de sana cultura en nuestra generación - que existe la noción de elegir a la persona para "quedar bien ante el público" (la mayoría de la gente niega que sea así, pero lamentablemente es parte inherente de la actitud humana contemporánea). Esto no es algo nuevo. En la orgía que organizó Ajashverosh, rey de Persia en la historia de Esther que leemos en Purim, encontramos que "el séptimo día cuando estaba ya embriagado con el vino, dijo que llamaran a Vashtí, para mostrar a los pueblos y a los ministros su belleza, pues era hermosa" (Esther 1:11), el típico sentimiento ególatra de dominio mediante la persona que uno "posee". Por otro lado, cuando el rey Ajashverosh reclutó doncellas por todo su imperio, y estas se preparaban durante doce meses con toda clase de perfumes que estaba a su disposición para luego ser recibidas por el rey, quien terminó siendo reina - Esther- no pidió absolutamente nada para intentar embellecerse (Esther 2:15). No obstante, cayó en gracia y fue elegida reina. Este mismo hecho, la evidente intervención Di-vina (pues "caer en gracia ante la gente es un obsequio de D"s) a fin de que sea escogida emperatriz, fue el argumento principal de Mordejai a fin de convencerla de que era su misión arriesgarse para salvar a su pueblo de manos de Hamán (Esther 4:14). Todo lo que acabamos de exponer aparece muy bien en los papeles, sin estar bajo la influencia real de la presencia concreta de la que hablamos. Pues al momento de poner en práctica los ideales, es casi imposible no estar

influenciado por el aspecto físico de/la muchacho/a, precisamente porquees lo que primero se ve al encontrarse. Sin embargo, al estar bajo el encanto y el hechizo de la seducción - no hay lógica que valga. Y ese momento es tan difícil, a menos que la persona tenga su "cable a tierra" de personas en quien pueda confiar. Pirkei Avot (5:19) nos advierte del riesgo de enamorarse por la belleza, así como por cualquier factor exógeno a la devoción y entrega por otra persona. Muy contundentemente, esa Mishná sentencia que todo amor que depende de agentes ajenos (sentimientos egoístas), está destinado a no sobrevivir más allá del lapso que experimente ese interés. El ejemplo clásico, mencionado en dicha Mishná es el de Amnón, hijo del rey David quien se había enamorado de la hermosa Tamar (Shmuel II 13:1). Amnón terminó por violarla, producto de su pasión irresistible, y "y fue mayor el odio que sintió Amnón por Tamar, que el amor que había previamente tenido por ella…" (Shmuel II 13:15). ¿Le parece conocida esta historia? ¿Vivió de cerca alguna situación en la que los "ex" se odian con una pasión que no tiene comparación en otros contextos de la vida? ¿Cómo y adónde desaparecieron el deslumbramiento y la fascinación que lo tenía ciego impidiendo ver la realidad de quien estaba adorando? Quizás se deba a las culpas de haber "caído" en la trampa (propia) de la pasión y de no haber escuchado su propia conciencia que le advertía que "algo no cierra", pero que uno desoyó… Si bien en todo lo que acabamos de exponer, llamamos más la atención en la desequilibrada actitud prevaleciente hacia lo exterior y lo físico en una mujer, en relación a su valor interior como persona - por parte de los hombres y de las mismas mujeres, se debe analizar la actitud análoga exagerada respecto a la importancia que se le atribuye al poder, al dinero y a los atributos físicos del hombre en yuxtaposición a su sabiduría y corrección deMidot. Sin duda que hay muchísimo más para reflexionar sobre este tema, y este capítulo no intenta ser más que una aproximación a la cuestión, a fin de permitirnos ponderar uno de los tropiezos más comunes de nuestros tiempos. Rab Daniel Oppenheimer

Un Gran Potencial de Vida

Extraido de En Buena Hora: Nueve Meses Maravillosos

Un gran potencial de vida El deseo de traer una nueva vida al mundo es la manifestación de la esencia de la mujer judía y la base de la estructura sobre la cual se apoya todo el pueblo judío. Cuando los judíos fueron esclavos del Faraón en Egipto, él ordenó a las parteras hebreas matar a todo bebé varón de los judíos (aun dentro del útero)1. Las parteras no sólo desafiaron su cruel decreto, sino que incluso brindaron un cuidado especial a los bebés después del parto2. Cuando fueron interrogadas acerca de su atrevimiento al desobedecer la orden del poderoso Faraón, ellas sencillamente respondieron que “las mujeres hebreas no son como las egipcias, sino que son jaiot, vivaces”. El Ibn Ezra explica esto diciendo que las mujeres judías tienen un gran potencial de vida3. Al ver que no había podido hacer que las parteras se volvieran corruptas, el Faraón decidió tomar el asunto en sus propias manos. Él ordenó que todo bebé varón de los judíos fuera arrojado al Río Nilo. Cuando Amram, el líder del pueblo de Israel, escuchó acerca del nuevo decreto, él perdió toda esperanza. ¿Cómo podría soportar la atrocidad de ver el fruto de su vientre ahogándose en el río? En la desesperación, él prefirió divorciarse de su mujer, y pronto todos los hombres siguieron su ejemplo. Al ver esto, Miriam, la hija de Amram, reprendió a su padre. Ella le dijo: “Papá, tu decreto es peor que el del Faraón, pues el Faraón sólo está exterminando a los bebés varones, pero tú estás decretando sobre los varones y las niñas. El Faraón sólo decretó en este mundo, pero tú lo estás haciendo en este mundo y en el Mundo Venidero. El decreto del malvado Faraón puede llegar a tener éxito como a fracasar, pero tú eres justo y tu decreto sin lugar a dudas se cumplirá”. Así, Miriam convenció a su padre y él volvió a casarse con su esposa Yojéved. Al ver esto, el resto de los hombres siguieron su ejemplo y también volvieron a casarse con sus mujeres4. Los espejos sagrados Incluso después de haberse casado nuevamente, los maridos, consumidos por el trabajo devastador, tenían poco interés en estar con sus mujeres. Ellos estaban desahuciados por la vida de sufrimiento y carencia que estaban viviendo. No veían el sentido de traer niños a un mundo de esclavitud y pobreza. Sus mujeres, por otro lado, no perdieron la esperanza. Confiaban en un futuro mejor. No importa cuán difíciles eran sus vidas en ese momento, ellas seguían deseando el crecimiento de sus familias. Ellas comprendieron que únicamente cumpliendo con el precepto de reproducirse y multiplicarse podrían fortalecer al pueblo judío. Por lo tanto, decidieron utilizar unos espejos de cobre para arreglarse y embellecerse. De esta manera, podrían seducir a sus maridos y quedar embarazadas.

Años más tarde, cuando Dios redimió al pueblo de Israel de la esclavitud egipcia y las mujeres donaron estos mismos espejos de cobre para elMishkán, el Tabernáculo, Moshé Rabenu tomó en sentido erróneo el significado de estos espejos y consideró incorrecto utilizarlos en el Mishkán. Él dijo: “¿Cómo puedo aceptarlos? ¡Son instrumentos del instinto del mal!”. Pero Dios le dijo que aceptara los espejos: “No desprecies estos espejos pues gracias a ellos el pueblo de Israel se multiplicó en Egipto. Las mujeres los utilizaron con una buena intención: con el fin de engendrar hijos a pesar de la situación de tortura en Egipto. Por lo tanto, ellos son más preciados para Mí que cualquier otra donación”. Estos espejos de cobre que las mujeres utilizaron para atraer a sus maridos fueron fundidos para construir el kior, la pila de agua que los sacerdotes utilizarían para prepararse para el servicio en el Tabernáculo5. El mensaje es claro: una mujer que se embellece para su marido con la sagrada intención de construir una familia es tan sagrada como los sacerdotes que se preparan para el servicio Divino. El mantenimiento del mundo Dios desea que el mundo crezca y se desarrolle constantemente. Es por eso que Él estableció en la naturaleza la facultad de procrearse. Todo ser viviente se reproduce, desde una mera célula hasta las plantas y los animales. Dios nos bendijo para que nos fructifiquemos y multipliquemos6. Junto a este precepto, Dios implantó en el hombre la necesidad fisiológica y psicológica de procrear. Nuestros Sabios nos dicen que la base de la determinación de la persona para avanzar, lograr, crear, competir, explorar y gobernar está vinculada con la necesidad fisiológica de reproducirse y multiplicarse y colmar la tierra7. En nosotras, las mujeres, esta necesidad es mucho más intensa. No es simplemente la fuente de nuestra determinación, es nuestra esencia. Este “gran potencial de vida” nos proporciona la fuerza para poder soportar los dolores del parto. Nos da la esperanza para traer una nueva generación al mundo, incluso al estar subyugadas bajo las cadenas de la esclavitud en Egipto. Nos da el coraje de dar a luz y circuncidar a nuestros hijos, aun frente a la amenaza de la guillotina Nazi en el gueto de Kovna. El anhelo innato de otorgar vida que posee la mujer es más fuerte aun que el instinto de supervivencia. Esta es la razón por la cual el Faraón no pudo obligar a las parteras hebreas a obedecer su decreto, pues Dios bendijo a las mujeres judías con una fuerza que el Faraón nunca se podría haber imaginado: con “un gran potencial de vida”. Es por eso que Dios confirió a las mujeres la responsabilidad de la procreación y la crianza de los hijos, cumpliendo así Su principal deseo: kium haolam, el mantenimiento del mundo. Con este propósito, Él diseñó nuestro

cuerpo de una manera singular, adecuada para poder sostener y cuidar a un bebé: a través de caderas más anchas que las de los hombres para facilitar el nacimiento del bebé y a través de pechos para amamantar a nuestros hijos. Él también dotó a las mujeres con una gran medida de muy necesarias cualidades –entendimiento, cariño y paciencia– para criar y educar a los niños y enseñarles buenas midot. Nuestros Sabios, nos enseñan que el cuerpo del hombre está compuesto de 248 partes, mientras el cuerpo de la mujer posee 252 partes8. Los órganos adicionales en el cuerpo de la mujer son los órganos de la reproducción. Es interesante observar que la suma de 248 y 252 es 500, exactamente el valor numérico de las letras de las palabras “Perú urvú: fructifíquense y multiplíquense”9 1. Shemot 1:16; véase Torá Temimá. 2. Rashí, Shemot 1:17. 3. Shemot 1:19, véase Ibn Ezra allí. 4. Sotá 12a. 5. Véase Rashí, Shemot 38:8. 6. Véase Rashí y Rambán, Bereshit 9:7. 7. Véase Bereshit Rabá 9:7: “Pues sin el instinto del mal, la persona no construiría una casa, no contraería matrimonio, no tendría hijos ni comerciaría”. 8. Bejorot 45a. 9. M. Glazerson, Revelations about Marriage, p. 94 (Raz Ot Institute, Jerusalem). Rab Baruj Finkelstein & Mijal Finkelstein

Tzeniut – nuestra forma de vida

Extraido del libro Mi Estilo La señora Rubin salió de compras con su hija, Jani. "Es muy lindo," le dijo mientras Jani posaba delante del espejo. "El color te sienta bien y esa ropa tiene un aspecto sobriamente elegante y recatado." "Ayer a la noche disfruté mucho el Bar Mitzvá de Moshe Green," le comentó el Sr Stein a su esposa. "Fue un acontecimiento majestuoso, pero recatado." A todas las niñas de la clase les gusta Shevie, ya que es estudiosa, tiene talento, un buen corazón y recato. ¿Es sorprendente encontrar que las ropas, una fiesta, y la gente puedan ser todas consideradas recatadas?

. Cuando la Señora Rubin estaba galanteando el aspecto de su hija, ella podría haber dicho: "...tiene un aspecto sobriamente elegante y está de acuerdo con la Halajá." . El Señor Stein podía haber dicho: "...fue un acontecimiento majestuoso, pero sin embargo no fue derrochador." . Podemos describir a Shevie como una niña que no se da muchos aires. Sin embargo, más bien se usa la palabra recatada una y otra vez. La palabra hebrea para expresar recato es tzeniut. Tzeniut viene de la raiz: tzena, que significa oculto. Cuando algo está oculto, nos exige que miremos más profundamente. Tzeniut es una forma de vida que nos ayuda a mirar más profundamente adentro de nosotros mismos, de otros, y del mundo que nos rodea. . Cuando la Señora Rubin dijo: "...la ropa tiene un aspecto recatado" ella quiso decir que cuando la gente la mirara a Jani luciendo esa ropa, se darían cuenta de que su ropa no hace que se confunda quien es ella interiormente. . Cuando el Sr Stein hizo un comentario acerca del Bar Mitzvá de los Green, quiso decir que la excelencia del acontecimiento no surgió de los arreglos finos de las mesas sino que él disfrutó la alegría y la satisfacción real de la simjá. . Una de las cosas que hace que Shevie sea simpática y agradable, es que sus buenas cualidades surgen desde adentro. Podemos ver que el tzeniut es mucho más que cubrirte las rodillas y los codos. Son varias cosas que son parte de una forma de vida que nos permite concentrarnos en lo que es verdadero. Esta es la forma de vida correcta. Es la forma Judía. Tanto para hombres, mujeres, niños y niñas. ***** El profeta dice: "¿Qué es lo que Hashem te exige, sólo que hagas justicia, que ames la bondad y el favor, y que camines recatadamente con tu D´s?" (Mijá 6:8). Con estas palabras, Mijá está resumiendo la forma en que el pueblo Judío debería vivir su vida. No está mencionando el tzeniut simplemente como una de las 613 mitzvot, sino como una guía para nuestra forma de vida. Ruth, la tártara abuela de David haMelej (el Rey David), aprendió la forma de vida tzanua (recatada) de su suegra, Naomi. Ruth fue sincera. "Iré contigo dondequiera que vayas," le dijo a Naomi. "Quiero vivir del mismo modo en que tú vives." "¿Tú sabes lo que eso significa? Le preguntó Naomí a la princesa anterior de Moav. "Nuestra forma de vida es tan diferente." Naomi le explicó a Ruth varias de las halajot de la vida Judía. Mientras le describía el estilo de vida de una niña Judía, ella dijo: "No es la manera de las niñas Judías asistir a teatros y circos no Judíos" (Ruth Rabá 2:22). En vez de sólo enseñarle a ella que nosotros no debemos ir a ese tipo de lugares de entretenimiento, Naomi le estaba explicando a Ruth que esa clase de actividades no son nuestra forma de vida. Ser Judío no significa solamente hacer lo que nos ordenan y no hacer lo que está prohibido; significa vivir la forma de vida Judía. Como Ruth, necesitamos aprender y recordar que eltzeniut no es simplemente usar lo que es correcto. Es nuestra forma de vida.

Naomi le dijo a Ruth que el modo de vida Judío es diferente. Algunas personas sienten que ser diferente puede ser desafiador. ¿Tú qué piensas? ¿Cómo podemos hacer frente a ese desafío? "Yo confieso, debe haber sido un espectáculo interesante," relató Mimi. "Nosotras estábamos allá en el Parque de diversiones Hershy, un grupo de consejeras, vestidas adecuadamente, encargándonos de más de cien excursionistas vestidas con remeras musculosas, para quienes este campamento de verano era su única exposición al Idishkeit (Judaísmo). "Después de pasear a caballo un par de horas, todos los grupos se encontraron y empezamos a guiar a las excursionistas para que se lavaran las manos para almorzar. Mientras yo estaba esperando con mi grupo cerca de las fuentes, una mujer se acercó a mí. " ´Tú sabes,´ me dijo, ´yo realmente respeto a tu pueblo. Ustedes consagran su forma de vida y siguen sus reglas estrictamente sin considerar lo que otra gente piensa. Es sólo una vergüenza que a los más pequeños les resulte tan difícil ser diferente y que no quieran cuidar sus tradiciones.´ "Yo no sabía bien cómo interpretar sus afirmaciones. ¿Debía yo explicarle que la mayoría de ´los pequeños´ a los que ella se refería eran niños que nunca se habían expuesto al Idishkeit verdadero? "La mujer debió haber notado mi mirada perpleja, ya que rápidamente continuó con sus elogios. " ´No importa los pequeños,´ dijo con entusiasmo. ´Ustedes las niñas indudablemente tienen mi voto. Es decir, debe ser tan difícil no abandonar sus costumbres Amish en el siglo veintiuno en América. Que D´s las bendiga a ustedes las adolescentes.´ "Yo casi estallé de risa. ¡Amish! Entonces eso es lo que ella pensó que éramos nosotras. ¿Qué le habrá dado esa idea a ella? Luego comencé a darme cuenta. Todas nosotras, aunque no intencionalmente, estábamos vestidas con polleras negras largas, nuestras remeras de campamento tenían mangas largas con un pequeño logotipo en la espalda que no se notaba fácilmente y nuestro cabello estaba atado hacia atrás elegantemente. "Ocultando una risa, respondí, ´Usted tiene razón con respecto a lo que dijo. Nosotros nos dedicamos, nos consagramos, y seguimos nuestras costumbres con firmeza, no siempre es fácil, y seguramente D´s nos bendice por esto. Pero nosotras no somos Amish. Somos Judías, y pertenecemos a un pueblo que ha vivido este estilo desde la creación hasta el siglo veintiuno y continuará haciéndolo. "La mujer arrugó su frente, y me miró nuevamente desde la cabeza hasta los pies. Ella estaba desconcertada. ´¿Judías?´ preguntó sorprendida. Estuvo en silencio un momento como si estuviera reflexionando acerca de su respuesta. Luego dijo casi murmurando, ´Yo también soy Judía. Mis padres vinieron a los Estados Unidos desde Europa después de la guerra, pero murieron inmediatamente después de que yo nací. Me enviaron a un orfanato donde unas personas Amish, piadosas y protectoras, me cuidaron. Nunca me encontré con ninguna persona verdaderamente Judía...´ Luego la mujer comenzó a llorar. "Yo sabía que esto no era una coincidencia. Haber sido confundida con los Amish por esta solitaria mujer Judía ya no era gracioso. Era una señal clara de arriba que yo tenía una responsabilidad de

ayudarla a ella a conectarse nuevamente con sus raíces Judías. Apunté su nombre y su dirección y así comenzó, con las palabras de la mujer: ´un maravilloso viaje de regreso a casa.´ "Y yo pienso que todo fue debido a nuestro tzeniut..." **** La idea de que nuestra ropa juega un papel importante en la forma de vidatzanua se remonta a las épocas más tempranas. Aún los antiguos Egipcios conocían esto. La esposa de Potifar estaba constantemente pensando formas de llamar la atención de Iosef haTzadik. Ella entendía que tendría más éxito en atraer su atención si el se vistiera en forma diferente. La Torá nos cuenta: "y ella lo atrapó a través de su ropa" (Bereshit 39:12). La esposa de Potifar proyectó, "Tengo que resolver cómo hacer para que él se cambie su ropa. El se viste como un Hebreo piadoso. Mientras que él continúe vistiéndose así, jamás me prestará atención a mí. Una vez que yo logre que se vista como un Egipcio, será más probable que me responda" (Zohar, Perashat Vaieshev 238). La forma de vestirse de Iosef también lo protegía de otro modo. Iosef sabía el poder de la ropa, especialmente para una persona en una posición de poder. Después de todo, cuando él llegó a ser soberano, se entremezcló con todos los oficiales superiores, ¡y además con el mismo Parhó! Vestirse como un Egipcio ciertamente hubiera hecho su vida más fácil. Pero él se mantuvo firme. Se imaginó la imagen de su padre en su mente y se preguntó a sí mismo: ¿Podría yo presentarme delante de mi padre vestido como un Egipcio? ¡Jamás! Más tarde, cuando los Judíos fueron esclavizados, Parhó decretó que las niñas Judías fueran educadas con la cultura Egipcia. Aún sin su decreto, esto podría haber sucedido fácilmente. ¡El pueblo Judío estuvo viviendo al lado de los Egipcios durante cerca de doscientos años! Sin embargo, las mujeres y las niñas Judías guardaron su distancia. ¿Cómo pudieron lograr esto? Nuestros Sabios dicen: "Ellas no cambiaron su forma de vestir" (Bamidbar Rabá 13:17) Malka Touger La Mujer Judia Religiosa y la Maternidad

Extraido de Esperando Milagros. Edit. Bnei Sholem EN EL TRANSCURSO DE LA PREPARACIÓN de este libro me he encontrado con que hay importantes diferencias en la experiencia de la gravidez de las mujeres religiosas y la de otras mujeres occidentales. Esto es resultado del impacto de la ley y la fe judaicas en casi todo aspecto de nuestra experiencia de la maternidad, infundiendo al embarazo y el parto de una significación personal, social y espiritual formidable. El pueblo judío es maravillosamente diverso y las mujeres judías religiosas se presentan en muchos envoltorios, pero los siguientes son cuatro aspectos de la experiencia de la gravidez que fueron comunes a todas las integrantes del reducido grupo de madres que aparecen en este libro:

I. LA CONCEPCIÓN SE RELACIONA CON LA RENUNCIA AL CONTROL, NO LA PLANIFICACIÓN La diferencia más dramática se relaciona con el hecho de que una vasta mayoría de mujeres religiosas no planifican sus embarazos artificialmente. En el puñado de casos en que las mujeres sí emplearon el control de la natalidad al comienzo del matrimonio o después de tener algunos hijos, aquello fue considerado una anomalía de la norma de la vida conyugal. Shira, quien se casó a los veintitrés años, es un caso típico en su renuencia a planificar su primer embarazo: Teníamos planeado esperar para tener hijos hasta que mi marido y yo termináramos los estudios y pudiéramos mantenernos económicamente… [pero] también sentía como que mi marido y yo estábamos preparados para volvernos una familia, que aquello nos haría completos, y sentía como que los tiempos de esta decisión no era algo que quería que estuviera en nuestras manos. Aquello pudiera sonar extraño, pero sentía como que era una decisión demasiado grande como para poner nuestras manos encima Bina, una mujer de cuarenta y cinco años y madre de catorce hijos, describió de un modo semejante su renuencia a emplear el control de la natalidad: Le dije [a mi amiga] que ahora lo único que quería era disfrutar de mis nietos y no quedar embarazada, y me dijo que tenía que emplear el control de la natalidad de manera definitiva, pero yo pensaba: “Después de veinticinco años de mi vida de dejarlo todo en manos de Di-s … ¿ahora, al final, Él no debería estar a cargo de todo?” Como resultado de esta actitud, a lo largo del libro las mujeres se las arreglan y hasta se regocijan con lo que se percibe generalmente como embarazos "inoportunos". Por ejemplo, Ester, quien dio a luz mellizos a menos de un mes del primer cumpleaños de su hijo mayor, o Rivka, que habla de sus sentimientos con respecto al hecho de quedar encinta en su noche de bodas, tan sólo seis meses después de haber conocido a su marido. Este concepto se vincula también con la negatividad o ambivalencia que sienten muchas mujeres religiosas con respecto a ciertos estudios prenatales como la amniocentesis, puesto que hay muy pocas situaciones que justificarían una autorización rabínica para poner fin a una gravidez. La Sra. Moskovitz, una mujer de cincuenta y ocho años y madre de quince hijos, recordó una acalorada discusión que tuvo con una obstetra durante su embarazo número catorce, a los cuarenta y tres años de edad. La médica trataba de convencerla de que se hiciera una amniocentesis y que se sometiera a un aborto si el feto tenía síndrome de Down. Ella recuerda: Tuve discusiones muy fuertes con ella y le dije que aun si yo estuviera segura de que tendría un hijo con síndrome de Down o cualquier clase de problema, Hashem ishmor (Di-s nos proteja), era aun así un néfesh (ser vivo), y le dije: “Si estoy caminando por la calle y veo a una persona que está loca, ¿acaso tengo permitido asesinarla?” II. ACTITUD POSITIVA CON RESPECTO A LAS FAMILIAS NUMEROSAS Otra diferencia fundamental entre las mujeres religiosas es su actitud positiva con respecto a la formación de familias numerosas. Esto se basa en el mandamiento bíblico de “ser fructíferos y multiplicarse”, lo cual se interpreta en la Mishná como tener un mínimo de un hijo de cada género.

En la práctica, no obstante, por lo general las autoridades en Ley Judía alientan a las parejas a tener tantos hijos como sea posible. El mandamiento de la procreación asume un sentido de urgencia especial en vista de la declaración del Talmud de que “el Mashíaj no vendrá sino hasta que hayan nacido las personas suficientes como para permitir que todas las almas que estén esperando para venir a este mundo sean ubicadas en cuerpos”. Además de este razonamiento místico para tener familias numerosas, la motivación de las mujeres religiosas de tener muchos hijos se ha hecho aun mayor desde la destrucción de la comunidad judía europea durante la Shoá (lit. “destrucción completa”/ el Holocausto). Una muy conocida rabanit que aparece de manera anónima en el libro mencionó la Shoá como el principal factor de motivación en su decisión de tener muchos hijos: “Pasamos el minián (quórum para rezar de diez personas)” era todo lo que decir en lo concerniente al número de hijos que ha tenido. La siguiente cita guarda relación con un viaje que hizo a Iad Vashem (el Museo del Holocausto de Israel) cuando se casó, a los dieciocho años de edad, hace más de treinta años: De manera que fui a Iad Vashem y salí con la sensación de hacer descender tantas almas como me fuera posible, que aquella era la única respuesta que había … Fue así como salí y fue así como continué durante treinta años … [y] siempre tuve la sensación de que los muertos estaban concediendo la vida (hametim natnú et hajaím). En otras palabras, me veía como una shelijá(agente) con la misión de traer vida … Fue de esa experiencia que obtuve las fuerzas para dar la respuesta: empezar a tener hijos. La rebetzn Tzipora Heller es una popular docente del Seminario para MujeresNevé Ierushalaim, así como madre de muchos hijos. Habló de la conexión entre tener una familia numerosa y el énfasis del judaísmo en la importancia de dar a otros antes que recibir: Vivimos en una sociedad antiinfantil (la sociedad occidental). Los hijos son una bendición y convierten a los padres en algo mayor de lo que eran en todo nivel, salvo el económico, y aun en ese aspecto se dice que todo niño viene al mundo con su propiaparnasá (sustento económico). Pero la sociedad que tenemos (la sociedad occidental) ve en todo respecto a los hijos que tenemos como algo que dista de ser una bendición; se los ve como un agotamiento emocional, un agotamiento físico, porque se nos enseña a ver el acto de dar como algo malo para ti y el acto de tomar como bueno para tu persona. Entre las madres, había una sensación común de que su misión principal en la vida era criar muchos hijos como judíos religiosos. Esta es una suposición tan básica para las mujeres religiosas que en la mayoría de los casos ni siquiera surgió como tema en las entrevistas. Cuando sí lo hacía, era en casi todos los casos para hablar de una reacción negativa de un pariente o amiga, o para expresar la creencia de que cuando la familia es más grande aquello es mejor para los hijos. Tikva, una mujer de veintinueve años y madre de tres hijos menores de cuatro años, explicó que la maternidad es un desafío, pero que al oír de algún nuevo embarazo siempre se siente feliz. Explicó: Hablé con alguien que se crió con trece hijos en su familia. Ella [me dijo]: "Ahora es un placer. Tengo seis hermanas. Somos amigas. No pasa un día sin hablar con casi todas". Es una conexión maravillosa. De modo que tenemos esperamos tener una familia numerosa.

Aunque las mujeres a quienes entrevisté abogaban todas por tener familias más numerosas que el promedio, parecía haber dos actitudes imperantes con respecto al espaciamiento de los hijos, lo cual se relacionaba principalmente con las actitudes respecto de la importancia de la lactancia versus la importancia de tener tantos hijos como fuera posible. La mayor parte de las entrevistadas creían que era importante hacer una pausa entre los embarazos a fin de permitir el tiempo necesario para la lactancia, lo cual es coherente con el precepto de la Ley Judía que desalienta, de ser posible, el destete de un niño menor de dos años. Las mujeres perciben esta pausa como un momento para recobrar las fuerzas y centrarse en el recién nacido. En ocasiones, cuando no se considera la pausa lo suficientemente prolongada, entonces aquello pudiera producir en la madre sentimientos encontrados. Elisheva, una madre de treinta y cinco años en espera de su tercer hijo, expresó sensaciones de arrepentimiento sobre el hecho de destetar a su hijo cuando tenía menos de un año: [David] tiene ahora casi tres años y es todavía muy sensible, y cuando llora puede oírlo todo el vecindario … Cuando quedé embarazada de Aarón, dejé de darle de mamar a David, cuando tenía menos de un año. Se enganchó con las mamaderas, que le destruyeron los dientes y no son naturales. Cuando le daba de mamar, antes de quedar embarazada, aquello lo relajaba y desarrolla la conexión entre el bebé y la madre. En otras palabras, yo no quería dejar de amamantarlo … pero fui de un médico que me dijo que si estaba embarazada tenía que abandonar la lactancia, a pesar de que conozco muchas mujeres que siguen haciéndolo … No es una ciencia … pero tengo la sensación de que todas estas dificultades lo han afectado mucho. Por otra parte, había una considerable minoría de mujeres que no valoraban la lactancia y no tenían reparos en dar a luz con incluso un año de diferencia. La Sra. Moskovitz, por ejemplo, oraba en todo parto para tener el mérito de volver a dar a luz al año siguiente. Iojéved, una madre de cuarenta y dos años embarazada de su décimo hijo, me contó de los cambios de actitud con respecto a la lactancia: Mis primeros cuatro hijos nacieron con un año de diferencia; la lactancia no era buena, me dolía. Después la lactancia mejoró y los bebés empezaron a nacer con dos o más años de diferencia. Cuando empecé a dar de mamar era muy inglesa y me sentía como un animal, como una vaca, y me parecía desagradable, repugnante y todo lo demás. Ahora me gusta, me pongo al bebé encima y paso a hacer lo que yo desee. Es higiénico, conveniente y económico. ¿Veo que los más pequeños, a quienes di de mamar durante más tiempo, terminen siendo más sanos? No, definitivamente no. No puedo decir de ningún modo que me sienta más vinculada con los niños a los que amamanté, en absoluto. Jana Weisberg

Agua, Fuego y Pan Buscar en Tora.org.ar Extraido de Agua, fuego y pan. Los preceptos de la mujer

Agua, fuego y pan. Tres elementos básicos para la existencia humana. Puesto que Dios quiso que Su bendición estuviera en estos elementos, Él nos otorgó preceptos relacionadoscon cada uno de ellos: la inmersión en las aguas de una mikvé, el encendido de las velas de Shabat y Yom Tov, y la en Todo separación de la jalá al preparar el pan. Cada judío debe observar estos tres preceptos, los cualestienen la propiedad especial de crear una atmósfera especialen el hogar judío. Sin embargo, el mérito de cumplir conellos recae principalmente sobre la mujer, el ama de casa (véase Mishná Shabat 2:6). Enviar Asimismo, vemos que nuestra matriarca Sará fue bendecida a través de comentario de estos tres elementos: una nube estaba sobre su tienda constantemente esta página (señal de pureza), una vela ardía en su hogar desde la víspera del Shabat hasta la víspera del Shabat siguiente, y había bendición en su masa (Gur Arié, Jayé Sará 24:67). Vemos también que el Talmud (Berajot 31b) dice que la profetisa Janá, al rogarle a Dios que le concediera un hijo, hizo en su plegaria una mención específica de estos tres preceptos, los cuales cuidaba meticulosamente. Finalmente sus plegarias fueron respondidas, y ella dio a luz al profeta Shemuel. En efecto, las iniciales de los nombres de estos tresmandamientos forman la sigla del nombre de Janá:

Auriel Silbiger

Sara - La Voz de una Lider

extraido de Cuidando el Jardin En los tiempos modernos, nos esforzamos por resolver cuáles son las funciones respectivas del hombre y la mujer. La Torá no sólo nos ha provisto de un claro entendimiento de la singularidad de cada uno de ellos, sino que ha también incluido ejemplos de la vida real de relaciones armoniosas entre maridos y esposas. Aunque estas historias tuvieron lugar hace más de tres mil quinientos años, cuando examinamos las vidas de los grandes padres de nuestra nación descubrimos eternas perlas de sabiduría que pueden enriquecer cualquier matrimonio. LOS PRIMEROS PADRES JUDÍOS

Hay una relación que es única, no obstante, porque concierne al primer padre y a la primera madre del pueblo judío: Avraham y Sara. Nuestro primer Patriarca y nuestra primera Matriarca fueron una pareja indivisible que, lado a lado, ejecutaron la voluntad del Creador. En un tiempo en que proliferaba el paganismo, Avraham y Sara trabajaron con diligencia para enseñar el concepto de un Di-s ético, benevolente y universal. Modificaron juntos el carácter moral de un incalculable número de personas. Mientras que Avraham les enseñaba de la existencia de Di-s a los hombres, Sara difundía este conocimiento entre las mujeres. Mientras que Avraham invitaba gente a su hogar, Sara los atendía. UNA MORADA ESPIRITUAL El Midrash (citado en Rashi, Bereshit 24:67) relata que durante toda la vida de Sara se producían en su hogar tres milagros: por encima de la entrada de su tienda se suspendía una nube protectora, había una bendición presente en su masa, y sus velas ardían de un Shabat al siguiente. Sara transformó su hogar en un santuario espiritual, un refugio de la ideología que imperaba en ese entonces. Al hogar judío se le llama un microcosmos del Beit Hamikdash, el Santo Templo que se levantaba en Ierushalaim. Los milagros que se producían en el hogar de Sara tenían su paralelo en los milagros del Templo. La nube que representaba la presencia Divina afirmaba la grandeza interior. Tal como el Beit Hamikdash fue construido como un hogar para Di-s, el hogar de Sara, también, era una morada idónea para Él. La masa de Sara estaba bendecida de manera que sus invitados se sentían saciados durante un largo tiempo. De modo similar, el pan del Templo permanecía caliente y fresco toda una semana y era la fuente del sustento y la prosperidad de la nación. Las velas de Sara ardían radiantemente siete días enteros, llevando un brillo de espiritualidad a la oscuridad de la semana. De modo similar, la llama de la Menorá del Templo ardía brillantemente hasta el encendido del día siguiente. La luz de la Menorá, al igual que la de Sara, simbolizaba el crecimiento de un nivel espiritual a otro nuevo y más elevado. Sara mejoraba, antes que reemplazar, cada nuevo Shabat —y cada nueva etapa del crecimiento espiritual— con la luz y la fuerza de todos los anteriores. EL HOGAR JUDÍO El mensaje que irradiaba de la tienda de Sara era que el hogar judío tiene un potencial inmenso. Sara demostraba en cierto sentido que un hogar judío adecuado es superior al Templo, pues el Templo fue construido para emular la casa de ella, y no a la inversa. A través del hogar espiritual y material que construyó, Sara personificaba la función de ézer kenegdó, una ayuda para su marido, haciendo su parte, tal como él hacía la suya. Juntos, los dos tejieron un bello tapiz de benevolencia y buenas acciones. Jana Weisberg

Sara - La Voz de una Lider

extraido de Cuidando el Jardin En los tiempos modernos, nos esforzamos por resolver cuáles son las funciones respectivas del hombre y la mujer. La Torá no sólo nos ha provisto de un claro entendimiento de la singularidad de cada uno de ellos, sino que ha también incluido ejemplos de la vida real de relaciones armoniosas entre maridos y esposas. Aunque estas historias tuvieron lugar hace más de tres mil quinientos años, cuando examinamos las vidas de los grandes padres de nuestra nación descubrimos eternas perlas de sabiduría que pueden enriquecer cualquier matrimonio. LOS PRIMEROS PADRES JUDÍOS Hay una relación que es única, no obstante, porque concierne al primer padre y a la primera madre del pueblo judío: Avraham y Sara. Nuestro primer Patriarca y nuestra primera Matriarca fueron una pareja indivisible que, lado a lado, ejecutaron la voluntad del Creador. En un tiempo en que proliferaba el paganismo, Avraham y Sara trabajaron con diligencia para enseñar el concepto de un Di-s ético, benevolente y universal. Modificaron juntos el carácter moral de un incalculable número de personas. Mientras que Avraham les enseñaba de la existencia de Di-s a los hombres, Sara difundía este conocimiento entre las mujeres. Mientras que Avraham invitaba gente a su hogar, Sara los atendía. UNA MORADA ESPIRITUAL El Midrash (citado en Rashi, Bereshit 24:67) relata que durante toda la vida de Sara se producían en su hogar tres milagros: por encima de la entrada de su tienda se suspendía una nube protectora, había una bendición presente en su masa, y sus velas ardían de un Shabat al siguiente. Sara transformó su hogar en un santuario espiritual, un refugio de la ideología que imperaba en ese entonces. Al hogar judío se le llama un microcosmos del Beit Hamikdash, el Santo Templo que se levantaba en Ierushalaim. Los milagros que se producían en el hogar de Sara tenían su paralelo en los milagros del Templo. La nube que representaba la presencia Divina afirmaba la grandeza interior. Tal como el Beit Hamikdash fue construido como un hogar para Di-s, el hogar de Sara, también, era una morada idónea para Él. La masa de Sara estaba bendecida de manera que sus invitados se sentían saciados durante un largo tiempo. De modo similar, el pan del Templo permanecía caliente y fresco toda una semana y era la fuente del sustento y la prosperidad de la nación.

Las velas de Sara ardían radiantemente siete días enteros, llevando un brillo de espiritualidad a la oscuridad de la semana. De modo similar, la llama de la Menorá del Templo ardía brillantemente hasta el encendido del día siguiente. La luz de la Menorá, al igual que la de Sara, simbolizaba el crecimiento de un nivel espiritual a otro nuevo y más elevado. Sara mejoraba, antes que reemplazar, cada nuevo Shabat —y cada nueva etapa del crecimiento espiritual— con la luz y la fuerza de todos los anteriores. EL HOGAR JUDÍO El mensaje que irradiaba de la tienda de Sara era que el hogar judío tiene un potencial inmenso. Sara demostraba en cierto sentido que un hogar judío adecuado es superior al Templo, pues el Templo fue construido para emular la casa de ella, y no a la inversa. A través del hogar espiritual y material que construyó, Sara personificaba la función de ézer kenegdó, una ayuda para su marido, haciendo su parte, tal como él hacía la suya. Juntos, los dos tejieron un bello tapiz de benevolencia y buenas acciones. Jana Weisberg

Diez pasos para los shidujim (enlaces) Pasos 1 y 2

Introducción Existe hoy en día un fenómeno ocurriendo en la comunidad observante: el creciente número de solteros mayores. No intentaremos hacer un análisis de la situación ni dar posibles razones para la misma. Preferentemente, vamos a ofrecer algunos pasos prácticos para la auto-superación y la construcción de relaciones y vínculos, lo cual, con la ayuda de Hashem, conducirá a encontrar la pareja correcta y a casarse. (Estos pasos son también beneficiosos para mantener el propio matrimonio de una manera positiva y cariñosa). No es bueno para una persona permanecer soltero. (Ver Bereshit 2:18 ). El Rab Avigdor Miller, zt”l , frecuentemente enfatizaba que una persona no puede llegar a cumplir su objetivo básico en la vida, la perfección espiritual, sin la asistencia de su ezer kenegdó (ayudante).

¿No sabemos esto todos? Ciertamente, pero el repaso es siempre útil. La Guemará enseña que aun mejor que aprender un tema 100 veces, es aprenderlo 101 veces. ( Jaguigá 9b ). Esperemos y recemos a Hashem para que la información en esta obra sea útil para los solteros, sus padres, sus amigos y todo el conjunto del pueblo de Israel, a fin de poder tener el privilegio de asistir a muchas bodas en un futuro cercano.

Paso 1

Comience Dando las Gracias

Venid, cantemos al Eterno; gritemos nuestro júbilo por la Fuente de nuestra salvación. Presentémonos ante Su presencia con gratitud... Pues Hashem es magno. (Tehilim 95: 1-3) No necesita esperar hasta el gran día de celebración para alabar a Hashem. Haga arrancar el proceso comenzando por el final: Hashem ya ha preparado un maravilloso shiduj para usted. Agradézcale por esto ahora. Usted ha estado rezando por ello y está cada vez más y más preparado, por lo tanto agradezca ahora a Hashem por Su ayuda. Cuando las personas trabajan por cierto objetivo durante mucho tiempo y no tienen éxito, algunas veces se deprimen y ven sólo lo negativo. Tendemos a olvidar la enorme parte de nuestra vida que ha sido exitosa. Sea agradecido con Hashem por los ojos con los que ve, por los oídos con los que oye, por las manos con las que escribe y por la voz con la cual habla. Sea agradecido a Hashem por sus padres, hermanos, amigos y parientes. Aprenda a decir: “Gracias, Hashem por la composición de mi familia. Por favor provee a cada miembro de mi familia con lo que él/ella necesita”. Cuanto más agradecemos a Hashem por las bondades que nos concede, más nos dará. ¿Estamos mirando el mundo con una perspectiva amarga, notando sólo lo que nos falta o estamos agradecidos por la abundancia que estamos

disfrutando en el presente? Empiece hoy a ser más agradecido por todo lo que tiene. Quizá pueda comenzar un programa para identificar una cosa específica cada día por la cual estar agradecido. Su nueva actitud puede convertirse en el punto de inflexión en su vida. Una persona constantemente agradecida desarrolla una personalidad que atrae a los demás. ¿Cómo le retribuiré al Eterno todo el bien que me prodigó? La copa de la salvación alzaré y el nombre del Eterno invocaré. (Tehilim 116:12-13) Cuando nos concentramos en retribuir a Hashem por todas Sus bondades, mereceremos la ayuda de Hashem para así continuar proclamando nuestro agradecimiento por Su salvación. Cada vez que escuche sobre un nuevo compromiso matrimonial, puede sentirse feliz si se da cuenta de que Hashem le está demostrando lo que pronto hará por usted. Puede decir: “¡Gracias, Hashem, por mi shiduj !”. Esto incrementará su confianza en Hashem y lo ayudará a rezar con mayor paciencia y con fe de que su rezo se tornará pronto en una realidad.

Paso 2

Viendo el Futuro

¿Quién es sabio? Aquel que prevé el futuro. (Tamid 32a) No podemos predecir el futuro. Sin embargo, podemos ver claramente que determinados tipos de comportamiento no serán beneficiosos e, inclusive, son dañinos para nuestro desarrollo. Aprendimos en el capítulo anterior que una persona debe estar continuamente agradecida a Hashem por lo que tiene y por lo que pronto tendrá. Si usted se concentra solamente en lo que le falta y en lo solitario que está, pone en movimiento una profecía auto-realizante: estará más solo. Sin embargo, si usted “ve” el futuro y se enfoca en las cosas buenas que

están ocurriendo, se embarcará en una profecía auto-realizante positiva y las cosas buenas le sobrevendrán más pronto. Hashem ayuda a aquellos que luchan por mejorar. La Guemará enseña que una persona está obligada a agradecer a Hashem con cien bendiciones diariamente ( Menajot 43b ). Cuando usted cuenta sus bendiciones, éstas se incrementan y se multiplican. Las palabras agradables son como un panal de miel, dulces para el alma y sanas para los huesos. (Mishlé 16:24) La vida y la muerte están en poder de la lengua. (Ibíd. 18:21) No debemos malgastar las palabras. Palabras vanas o cínicas, los así llamados chistes, no están en línea con los pensamientos positivos. Enfóquese en un futuro positivo. Si usted continuamente se dice. “No hay probabilidades. Nunca voy a casarme” puede estancarse en esa rutina y nunca salir de ella. Si, en cambio, usted se dice: “Hashem me ama y tiene un gran shiduj para mí, que me fue preparado antes de que yo naciera” (Ver Sotá 2a ), eso ocurrirá más pronto. Una nota de precaución: Aunque es beneficioso prever el futuro y enfocarse en lo bueno que va a ocurrir, uno no debe ignorar el presente. Algunos solteros conciertan varias citas, unas muy próximas a las otras, para conocer la mayor cantidad posible de personas. Esto puede generar que no consideren seriamente a cada persona como potencial cónyuge, creyendo que alguien mejor está por venir: uno más alto, más inteligente, más instruido, con mejor apariencia o más delgado. Si una persona sale de esta manera, falla en enfocarse en la persona especial que está frente a ella. “Los ojos de un tonto están enfocados en los confines del mundo” ( Mishlé 17:24 ). No es necesario buscar el shiduj en los confines de la tierra. ¡Deténgase y piense! Evalúe cuidadosamente lo que ya tiene. Directamente relacionado con este tema está la importancia de juzgar a toda persona positivamente (Ver Avot 1:6 y nuestro libro Cómo juzgar a las personas ). Si usted le da a la actual cita el beneficio de la duda, no descartará inmediatamente a la persona frente a usted, en su apuro por encontrar a la

siguiente persona en la lista. No juzgue instantáneamente las acciones de su nuevo candidato. Funciona recíprocamente: si le da a su candidato el beneficio de la duda, su candidato hará lo mismo por usted.

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Pasos 3 y 4

Pasos 3 y 4

Paso 3

Volviéndose Más Joven

Cuando las personas envejecen, suelen comenzar a pensar que no tienen nada más para aprender. Poseen una rutina establecida y ya lo han visto todo. Este tipo de actitud se traduce en una falta de entusiasmo hacia la vida. ¡Hay tanto en el mundo para aprender, tanto para hacer y lograr! La falta de entusiasmo por la vida es una aflicción que debemos evitar a toda costa. Una persona sabia aprende de todos, todo el tiempo. ( Avot 4:1 ). Cuanto más vivimos, más deberíamos desarrollar el entusiasmo y el interés por la vida. Una persona a quien le falta entusiasmo no puede ser un buen oyente. Aquel que está ansioso por aprender y escuchar lo que el otro tiene para decir, será capaz de desarrollar una mejor relación. Si usted habla demasiado sobre sí mismo, no podrá saber más sobre la persona con la cual sale ni albergará entusiasmo por él o ella. Escuchar y aprender será mucho más beneficioso. Cuando estamos dispuestos a aprender de otros, nos será posible comprometernos a preocuparnos por alguien de manera de unir dos individuos en una sola unidad. Cuando dos personas luchan por ayudarse y confían uno en el otro, hay un potencial para crecer. No es preciso que dos en busca de un shiduj tengan idénticos objetivos. En una relación exitosa,

cuando usted desea algo para usted, su compañero también lo quiere para usted. ¿Pero qué ocurre si usted nunca llega tan lejos en su búsqueda de pareja? Luego de una o dos salidas la historia ha concluido. ¿Cómo puede avanzar hacia la próxima etapa? Déle al otro persona una oportunidad. La persona que los presentó piensa que la relación tiene algún potencial. Escuche lo que su candidato/a tenga para decir. No lo juzgue por su apariencia externa. Trate de determinar por qué vale la pena conocer a la persona que tiene enfrente y, con la ayuda de Hashem, tendrá éxito.

Paso 4

Sea Positivo

Si usted es positivo y optimista, las personas le corresponderán en la misma forma. Hemos aprendido la importancia de saludar a todos con alegría. Si usted habla con más calidez en su voz, su actitud hacia los demás mejorará. Utilizando frases más amables también ayudará a las personas con las que interactúa, a sentirse más distendidas. Así como es importante ser positivo, también lo es hacer que otros tengan una opinión positiva de usted. ¿Qué puede hacer para crear una imagen positiva? Comience cumpliendo su palabra. Cuando concierte una cita, sea puntual. Si le ocurre un retraso inevitable, sea considerado y contáctese con la otra persona para explicarle la situación. Muestre integridad y carácter en todos sus tratos. Si va a un restaurante, trate al mozo o a la moza de una manera que hable bien de usted. Cuando las personas ven que pueden confiar en usted, estarán ansiosas de volver a verlo otra vez. Si ha estado saliendo gran cantidad de años y hasta ahora no ha tenido éxito, es hora de reevaluar su situación. Para poder encontrar el shiduj apropiado, puede que tenga que hacer cosas que jamás ha hecho. Usted necesita metas claras, desafiantes y realistas y planes para lograrlas. Necesita trabajar

diariamente en desarrollarse a usted mismo, paso por paso. En el camino que una persona quiere ir, será conducido (Makot 10b) Existen muy pocas limitaciones a lo que usted puede ser o hacer cuando reconoce este principio. Usted posee reservas de potencial talento esperando ser descubiertas o liberadas. Cuando las descubra, se convertirá en una persona más completa y satisfecha. Hay determinadas funciones por las que usted fue puesto en esta tierra para alcanzar. Sólo usted puede cumplirlas. Cuando, con ayuda Divina, encuentre su shiduj , usted y su compañero podrán destrabar juntos vuestro potencial combinado en todas las diversas partes de vuestra vida. Satisfacción, realización y felicidad serán el resultado de eso. No sabemos cuál es nuestra suprema misión en la vida y cómo se va a desarrollar. Nuestros Sabios nos enseñan que Boaz, un gran tzadik que tuvo sesenta hijos a través de su larga vida, no cumplió su supremo propósito hasta su último día. Cuando se casó con Ruth y Oved fue concebido, Boaz alcanzó su propósito en la vida y murió al día siguiente. Oved se convirtió en la semilla de la realeza, el abuelo del rey David y el ancestro del Mashiaj. Aunque no sabemos cuándo seremos convocados para realizar nuestra suprema misión en la vida, debemos prepararnos para ella todos los días. Podemos lograr grandes cosas si tratamos consistentemente de realizar nuestro potencial.

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Pasos 1 y 2 Pasos 5 y 6 Pasos 5 y 6

Paso 5

Autodisciplina

¿Quién es fuerte? Aquel que conquista su mala inclinación. (Avot 4:1) Cuando estamos en control de nosotros mismos, tenemos mayores posibilidades de encontrar el shiduj correcto. Esté atento a otros y sus necesidades. Uno de los objetivos en el matrimonio es el dar a nuestro compañero. Practicando esto desde ahora, perfeccionará las cualidades que necesita para un matrimonio exitoso. Una forma sugerida de entrenarse para un buen matrimonio es ensayar para esta relación, desviándose de su camino a fin de hacer feliz a otra persona en su vida cotidiana. Elija un amigo, pariente o conocido y concéntrese en ser un buen amigo para él o ella. Si usted se mantiene en esto todos los días, hallará que avanza en la dirección deseada. Lenta pero seguramente, su personalidad cambiará. Se volverá menos egocéntrico, más lúcido y más amigable, una persona más fina, superior y más amable. Le ofrecerán sorprendentes opciones de candidatos más adecuados, de acuerdo al principio de midá kenegued midá : de acuerdo a cómo usted actúa con otros Hashem hará que otros actúen con usted. Implica disciplina, pero bien valdrá la pena. “De acuerdo a las dificultades, las recompensas se incrementarán” ( Avot 5:26 ) Conforme fortalezca su cumplimiento de la mitzvá de “amar a su prójimo como a sí mismo” ( Vaikrá 19:18 ), usted alcanzará un nivel de fortalecimiento en la relación con otros que lo preparará para un gran shiduj . Paso 6

Alégrese

Luego de discutir los beneficios de aprender de otros (Paso 1) y los beneficios del autocontrol (Paso 5), podemos examinar otra lección contenida en la misma mishná : “¿Quién es rico? Aquel que está contento con su porción”(Avot 4:1) Las personas que hasta ahora no han sido exitosas en encontrar el shiduj apropiado, pueden pensar que sus amigos casados han recibido una mejor suerte en la vida: deben tener mejor apariencia, mejores empleos, familias más lindas, personalidades más encantadoras y más dinero. Este tipo de pensamiento sólo lo hará estancarse. Necesita mirar dentro de usted para descubrir lo que en realidad es. ¿Qué ha hecho en el pasado que haya sido placentero? ¿Cuál ha sido su éxito más grande en la vida hasta ahora? ¿Qué trabajo ama usted? ¿Cuáles son sus intereses? ¿Cuáles son sus sueños para realizarse en la vida? Si no le gustan las respuestas que dio a esas preguntas de arriba, ahora es un buen momento para reflexionar sobre su situación y asumir el fuerte compromiso de cambiar. Hashem nos dice: “Abre ampliamente tu boca (expresando tus deseos) y Yo la llenaré” ( Tehilim 81:11 ) ¿Qué es lo correcto para usted? ¿Qué lo hará verdaderamente feliz? Si usted está teniendo dificultades para arrancar, rece a Hashem por ayuda. Debemos comenzar cada proyecto rezando y continuar pidiendo ayuda en cada paso. Cuando piensa sobre lo que usted es, debe “estar contento con su parte”. Agradezca a Hashem sinceramente por todo lo que Él ha hecho por usted. Se levantó esta mañana. Vive en un ambiente cálido y confortable. Puede respirar, comer, caminar, ver, hablar y oler. Una vez que haga esto, estará más preparado para pedirle Hashem algo más: el shiduj que sea apropiado para usted. Abra grande su boca (figurativamente) para pedirle ayuda a Hashem para encontrar ese alguien especial que coincidirá perfectamente con sus necesidades.

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Pasos 3 y 4

Pasos 7 y 8

Pasos 7 y 8

Paso 7

Relacionándose con los Demás

Exploremos ahora el próximo paso para alcanzar el shiduj correcto: “¿Quién es honrado? Aquel que honra a los demás” ( Avot 4:1 ). Entrénese para conceder más honor y respeto a los demás. ¿Cómo se puede lograr esto? • Busque y encuentre lo bueno en cada persona y en cada situación. • Evite discusiones y esfuércese por siempre llevarse bien con los demás. No tiene que coincidir con todo lo que otros dicen. Puede haber diferencias de opinión. Sin embargo, debe siempre demostrar que le gusta la gente y que respeta y valora sus opiniones. • Perdone a aquellos que lo desairan. No guarde rencor. La vida es demasiada preciosa para desperdiciarla en pensamientos insignificantes. Si quiere que las personas queden bien impresionadas con usted, el truco es no decirles abiertamente lo grande que es usted. La Mishná enseña: “¿Quién es honrado? Aquel que honra a los demás”. Cuando usted se interesa en otros, ellos estarán interesados en usted. Cuando respeta a otros y los admira, responderán recíprocamente. “Así como el agua refleja el propio rostro, así el corazón de una persona se refleja en el corazón del otro” ( Mishlé 27:19 ). La palabra hebrea para respeto, kavod , está relacionada con la palabra kaved , pesado. Un aspecto de honrar a otros es apreciar que cada persona tiene un pesado paquete de cualidades que merecen reconocimiento y

admiración. Otro aspecto es darse cuenta de que casi toda persona que conoce, tiene una pesada carga de asuntos a resolver. Todos necesitan aliento, elogios y reconocimiento. La mitzvá de honrar a otros puede ser dividida en dos partes: • Deje de lastimar a la gente. No diga ni haga nada que pueda disminuir la autoestima de alguien. Las actitudes negativas son difíciles de ocultar y tienden a ser trasladadas a otros planos, tales como las citas para matrimonio. Quién está envuelto en este tipo de actividad está destinado a recibir trato similar, midá kenegued midá . • Diga sólo esas cosas que puedan construir a las personas y los haga sentir importantes. Infle su autoestima y usted recibirá un trato similar.

Paso 8

Sea Organizado

El orden denota virtud (Rab Avigdor Miller, Viaje hacia la Grandeza. Pág. 329) El orden es necesario en todas las áreas de la vida, pero especialmente en los shidujim . Sepa lo que usted está buscando en un shiduj y preséntese en una forma ordenada. Cuando sabe hacia adónde se encamina, puede llegar a su objetivo. El Talmud enseña que el desorden y la falta de limpieza son causas de pobreza ( Shabat 62b ). Esto se refleja en el nombre del ángel a cargo de la riqueza: “limpieza” ( Pesajim 111b ). Nuestro entorno se refleja en aquello que defendemos y en lo que luchamos por alcanzar. Una casa limpia demuestra que uno se preocupa por sí mismo y por su salud. Una superficie de escritorio organizada es señal de que uno está enfocado en su trabajo y en sus planes para lograr.

Si se toma el tiempo para ser organizado, podrá lograr más cosas con claridad, enfoque y concentración. Planee lo que quiere decir antes de cada cita. Presente su tema en una forma clara, vívida e interesante de modo que su candidato pregunte más. No malgaste el tiempo de él o de ella con pensamientos confusos y poco claros. Usted está aquí en este mundo para un propósito específico. Hashem le ha concedido un alma y la capacidad para elegir amigos con los cuáles transitar la vida. Si usted piensa detenidamente en lo que usted es y en lo que quiere de la vida y se presenta de una forma clara, tendrá éxito en encontrar al compañero predestinado. Cada persona tiene un potencial ilimitado. Su orden interior lo ayudará en las interacciones con los demás. Usted puede desarrollarse para estar en un nivel superior y poder construir la relación que durará toda la vida, creciendo continuamente para ser más grande.

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Pasos 5 y 6 Pasos 9 y 10

Pasos 9 y 10

Paso 9

5 Claves para la Superación

Hemos presentado diferentes técnicas que mejorarán sus relaciones interpersonales. Es crucial mantener estas técnicas en mente cuando

encuentre al shadján o a un potencial compañero para el matrimonio. A continuación se exponen cinco claves para mejorar su desempeño cuando salga:

Sonría Más Cuando sonríe a otros, ellos se sienten valiosos y más útiles. Los científicos dicen que sonreír sólo toma 13 músculos, en tanto que fruncir el ceño toma 112 músculos. ¿Por qué malgastar todo ese esfuerzo? Relájese y sonría más. Todos nos vemos mejor cuando sonreímos. Si quiere dejar una buena impresión cuando conoce a alguien, ¡sonríale! Además, un shadján que lo recuerda a usted con una sonrisa en el rostro. Estará mucho más inclinado a ayudarlo y devolverá más rápidamente sus llamados.

Evite Discusiones Si usted gana todos sus argumentos, perderá todos sus amigos. La Guemará enseña: “Una persona debe coincidir fácilmente con otros en temas generales [que no interfieran con los principios de la Torá]” ( Ketuvot 17a ). Cuando un shadján haga una sugerencia que a usted no le gusta, puede rechazarla sin discusión. El mismo principio puede ser aplicado a un shiduj . Cuando un pretendiente dice algo con lo que usted discrepa, puede cambiar de tema sin discutir. Es importante llevarse bien con otra gente. “Aquel que es placentero para su prójimo, lo es también para Hashem” ( Avot 3:13 ). Evitar discusiones es una forma de promover la paz, y esto causará que la gente lo aprecie más. “Sé de los discípulos de Aharón, que amaba la paz y perseguía la paz” ( Avot 1:12 ).

Diga “Por Favor” y “Gracias” Las pequeñas cosas que la gente hace son las que otros tienden a notar y recordar. Cuando usted agradece a los shadjanim por su tiempo y sus esfuerzos a favor suyo, ellos con sumo gusto lo tendrán presente y harán más por usted. Una nota de agradecimiento por sus favores mantendrá su nombre con preferencia en sus mentes.

Un shadján usualmente merece una nota y tal vez un presente por orientarlo, aun si el shiduj no prosperó. El shadján pudo haber invertido mucho tiempo, esfuerzo, dinero (en llamadas de larga distancia), reflexiones y sentimientos por su causa. (A propósito, no espere mucho tiempo en informarle al shadján acerca de cómo resultó la salida. ¡Demuestra así que se interesa!). Inclusive si el shiduj no era para usted, su consideración puede resultar en que alguien se acuerde de usted y lo derive a un amigo o a otro shadján . Cuánto más agradecido sea, más recibirá de Hashem para estar agradecido.

Busque Áreas para Elogiar a Otros Elogiar a otros los hará sentirse bien consigo mismos y positivos hacia usted. Esto se aplica tanto a potenciales pretendientes como a shadjanim . Si su candidato es puntual, generoso o cortés, tome nota de eso y mencióneselo a él (y al shadján ). Comenzará la relación con una nota positiva. Al tratar con un shadján , puede elogiarlo/a también. Destaque su consideración y persistencia y hará que se sienta apreciado.

Escuche bien Aunque hemos tratado muchas veces sobre la importancia de escuchar, es una de las cosas más importantes para tener en cuenta cuando se embarca en una presentación. Nunca podrá avanzar en una relación a menos que se enfoque en escuchar a la otra persona. Las palabras shemá Israel , las cuales recitamos, al menos, dos veces por día, nos pueden recordar la gran mitzvá de prestar atención a los demás. La atención que les presta a otros es el indicador principal de lo importantes que son para usted. Cuando escucha a los demás, usted demuestra que le interesan y ellos, a su vez, lo querrán más y le prestarán más atención.

Paso 10

El Factor Decisivo

Simplificar los temas puede ayudarnos a despertarnos hacia verdades obvias. La primera cosa para reconocer es que todo está en manos de Hashem y no podemos esperar encontrar un shiduj sin rezarle a Él. Sin embargo, también debemos hacer nuestro hishtadlut (esfuerzo). El secreto para el éxito en formar pareja puede ser resumido en dos formas de hishtadlut :

• Enfóquese en las necesidades de otros. Deje de ser egocéntrico y comience a pensar en las necesidades e intereses de los demás. Piense en formas para ayudarlos. Vea si puede ayudar a alguien más a encontrar un shiduj . Las probabilidades son que sus esfuerzos por otros retornarán a modo de bumerang de vuelta a usted, tarde o temprano. La Guemará dice: “Cuando uno reza por otros por algo que él mismo necesita, Hashem le responderá primero a él” (Bavá Kamá 91a ). Quizás usted ya ha estado rezando por shidujim para sus amigos durante años y, con todo, aún está soltero. ¡No se deje vencer! “Un tzadik cae siete veces, pero siempre vuelve a levantarse” ( Mishlé 24:16 ). • Luche por superarse. Ocúpese de trabajar en sí mismo y en sus metas de superación. Desarrolle los talentos únicos que Hashem implantó dentro de usted. Puede tornarse más positivo y más efectivo y encontrará un mejor shiduj .

Quiera Hashem ayudarlo a usted a encontrar un gran shiduj y a tener éxito también en ayudar a otros a encontrar sus shidujim .

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Pasos 7 y 8

El Zohar y el Shiduj

Extraido de El zohar, V Regresamos al versículo anterior: "Itzjak (Isaac) tenía cuarenta años cuando tomó por mujer a Rivka (Rebeca), hija de Betuel el arameo de Padán Aram, hermana de Labán el arameo" (Génesis 25:20). ¿Y qué nos importa todo esto? Pues he aquí que ya fue dicho dos capítulos antes que "Betuel engendró a Rebeca" (Ibíd. 22:23), y ahora vuelve la Torá y dice: "hija de Betuel, el arameo", y después agrega otro detalle: "de Padan Aram", y después otro más: "hermana de Labán el arameo". Pero he aquí que explicaron que todos estos datos aparentemente superfluos vienen a hacer hincapié en que la futura matriarca se encontraba y habitaba entre malvados y, con todo esto, ella no actuó de acuerdo con sus actos sino como una mujer justa. Porque logró mantener su nivel de excelencia en su comportamiento a pesar de que ella era "hija de Betuel" yaunque provenía "de Parán Aram" y siendo la "hermana de Labán", y a pesar de que todos eran malvados y dedicaban sus pensamientos para hacer el mal. Pero ella ascendió por actos dignos propios que realizó y no hizo de acuerdo con sus actos ni se dejó influir por ellos. Y si bien aquí El Zohar señala esta desconexión positiva entre Rivka y su familia a partir de su extraordinario crecimiento espiritual, los orígenes de tal fenómeno los podemos encontrar en la misma palabra hebrea "patriarcas":avot, palabra que claramente señala al nivel de padre, al "av", quien comienza un ciclo completamente nuevo, un cambio de generación. En el caso del primer patriarca, Abraham, esto resulta evidente: nace en una tierra extranjera y en el seno de un hogar inclinado hacia la idolatría. Los sabios del Midrash nos enseñan que el padre de Abraham, Teraj, vendía imágenes idolátricas, pero que Abraham, en cierta ocasión, quedándose solo en el comercio de su padre, "rompió las imágenes". Es decir, Abraham se separa por completo de su educación y de su medio, lo cual es reflejado por las primeras palabras que escucha de boca del Creador: "El Eterno le dijo a Abram: "Vete de tu tierra, de tus familiares y de la casa de tu padre, a la tierra que he de mostrarte. Y Yo te convertiré en una gran nación; te bendeciré y engrandeceré tu nombre, y tú serás una bendición. Bendeciré al que te bendiga, y al que te maldiga, lo maldeciré; y todas las familias de la Tierra se bendecirán en ti"" (Génesis 12:1-3). Pasaje bíblico que debe ser comprendido del siguiente modo: Yo te convertiré en una gran nación, etc, bajo tres condiciones: que te marches de tu tierra, de tus familiares y de la casa de tu padre. Y retornando al pasaje bíblico que El Zohar se encuentra analizando, se aclara que la explicación anterior no es suficiente porque ahora cabe

meditar en esto y preguntar: si Rebeca hubiese tenido veinte años o más, o incluso trece, edad que la Torá considera un paso fundamental hacia la adultez espiritual,entonces la alabanza de sus buenos actos sería y debería ser consideradade ella misma y como un alto mérito personal por no haber actuado como ellos, los miembros de su familia; pero, ahora, considerando que tenía tres años, ¿cuál es su alabanza que se le puede adjudicar realmente como un acto y un nivel propio? Rabí Iehuda dijo a modo de explicación y respuesta: ella tenía solamentetres años y a pesar de ello ya era capaz de realizar todo este acto de separarse de la conducta malvada de su familia, ya que poseía el nivel espiritual y la madurez para poder comprenderlo. Rabí Itzjak, por su parte, dijo: a pesar de que ella hizo todo esto no sabemos si sus acciones eran aptas o no. Es decir, no sabemos si los hacía como actos propios que pudieran ser atribuidos a ella. (137a) Pero ven y observa la siguiente enseñanza basada en el Cantar de los Cantares: está escrito: "Como una rosa entre las espinas, así es mi amada entre las doncellas" (2:2): "Como una rosa" se refiere a la Congregación de Israel, quien yace entre la gente de las demás naciones como una rosa entre las espinas, lo cual también puede ser aplicado al caso de Rivka creciendo en medio de una familia vil. Y el misterio del asunto que se analiza es el siguiente: Isaac proviene del lado de Abraham, que es el Jesed supremo, es decir, la Bondad suprema,quien hizo bondad con todas las criaturas, a pesar de ser Itzjak unrepresentante del Juicio severo. Significa: no debemos olvidar que el Juicio esencial de Itzjak surge de la Bondad esencial de Abraham. Y Rebeca, por su parte, proviene del lado del Juicio severo, pero se apartó de entre ellos y se unió a Isaac; porque a pesar de que ella proviene del lado del Juicio severo, era leve, y un hilo de gracia pendía de ella. Es decir: Isaac era Juicio severo y ella, Rebeca, era juicio leve, era "como una rosa entre las espinas". Porque si no hubiese sido leve, el mundo no hubiese podido soportar el Juicio severo de Isaac. De manera similar, El Santo, Bendito Sea, une parejas en el mundo: uno fuerte y una suave, para que todo sea rectificado y para que el mundo sea armonizado. Busqueda de Pareja

Extraido de La Sabiduria Femenina - En el jardin de la paz (para mujeres) Hay que saber que la muchacha que piensa que puede confiar en su propio juicio para encontrar su pareja, está muy equivocada… Encontrar al marido apropiado Antes de que entremos en el mundo de la mujer casada con todos los desafíos que se deben enfrentar, vamos a enfocarnos en el tema de encontrar la pareja apropiada. Esto puede ser complejo y doloroso, o simple y fácil – depende del nivel de Emuná de la mujer. Quien estudiará este capítulo e interiorizará el mensaje que contiene, no sólo que esta fase de la vida le será fácil y apacible, sino que también después de haber encontrado a su cónyuge, podrá más fácilmente afrontar el cambio y la novedad de la vida de casados. Escondido a la Vista Hay que saber que la muchacha que piensa que puede confiar en su propio juicio para encontrar su pareja, está muy equivocada. Incluso si juntara toda la información posible sobre el hombre que le proponen, nunca podría saber si el alma detrás de la máscara de carne y hueso, es la verdadera alma gemela que le pertenece. Sólo a los más grandes Tzadikim, la élite de las generaciones,como el Ariza”l, se les había revelado todo sobre las almas, como sus previas reencarnaciones, la rectificaciones espirituales que requieren, sólo ellos podrían ver si dos almas son verdaderamente adecuadas una para la otra. Ya que tal conocimiento no está disponible para la gente de nuestro nivel espiritual, de ninguna manera podemos confiar en nuestros propios ojos mundanos. Por lo tanto, todas las pruebas y comprobaciones dependientes de nuestra visión, toda comprensión intelectual y juicio, son simplemente ilusorios.

Los Ojos Llorosos de Lea Entonces, ya que no podemos ver el alma de un compañero anticipadamente, ¿cuál es el consejo? Rezar antes de actuar, como aprendemos de nuestros antepasados. De nuestros Patriarcas: cuando Abraham envió a su siervo Eliezer para encontrar una esposa para su hijo Isaac, le dijo : “El Eterno, Di-s del Cielo… enviará Su ángel delante de ti…”. Es decir, Abraham le prometió a Eliezer que recibirá una ayuda Divina en la búsqueda de una buena y digna esposa para Isaac. Por lo tanto, Eliezer, antes de comenzar su misión activamente, rezó a HaShem. De nuestras Matriarcas: Lea, nuestra Matriarca, de quien todos decían que terminaría casada con el malvado Esaú, clamó con infinitas lágrimas para salvarse de tal amargo destino. Ella rezó con mucho fervor, emoción y lágrimas para que HaShem le conceda un esposo piadoso, hasta la Torá declara que sus ojos eran delicados" – rojos y sensibles – de tanto llanto. Los rezos de Lea fueron contestados. Y en verdad mereció, por medio de sus plegarias, no sólo casarse con Jacob nuestro Patriarca, sino engendrar a la mayoría de las tribus de Israel. Aprendemos de aquí que la plegaria debe preceder al esfuerzo, sobre todo en la búsqueda de una pareja. Por lo tanto, antes de que una muchacha se dirija a las casamenteras o a sus amigas para encontrar a su cónyuge, debería anteponer su plegaria a HaShem – el Supremo Casamentero – y rogarle por el mejor esposo posible, ya que Él es el Único que sabe quién es. Por esta razón, el éxito en encontrar a la verdadera "media naranja", depende de la plegaria. Rab Shalom Arush

Por Una Como Ella Marcos Yaroide

reproducciones 129 Son luz, son vida, amor Amiga, son la fuente de vida que dios creo Para darnos la luz del sol

Son tiernas, son bellas, vaso fragil Luna llena, el complemento perfecto de la creación Porque no cuidarlas como una flor

No a la violencia a las mujeres No cortes sus alas deja que vuelen Por una como ella estamos hoy aqui No a la violencia a las mujeres No cortes sus alas deja que sueñen Por una como ella estamos hoy aqui

Delicadas, amadas, rosas rojas Tan enamoradas, son las fuentes de vida que dios creo Para darnos la luz del sol Son tiernas, son bellas, vaso fragil Luna llena, el complemento perfecto de la creación Porque no cuidarlas como una flor

MATRIMONIO MIXTO 1) Las Bases

[email protected] Uno de los temas más preocupantes y poco entendidos es el de los matrimonios "mixtos". Además de la falta de información objetiva al respecto, es un tema muy complejo emocionalmente. Por un lado, los padres sienten que cuando un hijo se casa con una persona que no es judía, está rompiendo la perpetuación de la cadena judía milenaria y no lo quieren permitir. Por el otro lado, hay una incomodidad de manifestar abiertamente la oposición al matrimonio mixto, ya que tiene implicancias racistas. ¿Por qué descartar a una persona como pareja solamente por el hecho de que no haya nacido de vientre judío?. Parece ser una actitud discriminatoria.

Me parece que hay que subdividir el tema en partes: • ¿En qué se basa la oposición al matrimonio mixto? • ¿Cómo se puede aceptar dicha actitud sin contradecir el instinto natural que el judío tiene de luchar en contra de la discriminación, especialmente luego de todo lo que hemos sufrido en carne propia como pueblo, a raíz de la discriminación racial? • ¿Qué argumento se le puede dar al amigo o amiga no judío, o a sus padres, para explicar el motivo por el cual uno no quiere considerar la posibilidad de matrimonio con el o ella? Las Bases La fuente primaria en la cual se basa la prohibición para el judío de casarse con alguien que no lo es, está en la Torá (Deut. 7:3): "No te cases con ellos (los gentiles, de los cuales hace mención en los versículos anteriores), no des a tu hija al hijo de él, y no tomes la hija de él para tu hijo". El motivo de dicha prohibición sigue en el siguiente versículo: "Porque él va a desviar a tu hijo de Mi y servirán a dioses ajenos..." (se puede entender el término "dioses ajenos" también como ideales que no conforman con los de la Torá, por los cuales uno inclina la cabeza y les rinde culto). Nuestros sabios señalan el Talmud (Ievamot 23a) y el comentarista Rashi lo trae en su comentario sobre el versículo citado, que de la expresión precisa de dicho versículo (" el (y no ella) va a desviar a tu hijo ") se desprenden dos cosas. En el caso de que tu hija se case con el hijo de ellos, el "hijo de ellos" (esposo de tu hija) va a terminar alejando a tus hijos (o sea, nietos) del camino de la Torá. En el caso de que tu hijo se case con la "hija de ellos", ya los nietos que nazcan no están considerados como tus hijos, sino hijos de ella, o sea ya no son judíos. Queda claro entonces, que aquí no se trata de una discriminación racial que nace del rechazo subjetivo y personal que el judío tenga para con el gentil. Se trata de una orden Divina objetiva que viene acompañada de una explicación. Si tu hijo se casa con una mujer no judía, los hijos de ella ya no serán considerados tus hijos. En el caso que tu hija se case con un hombre no judío, inevitablemente los nietos se desviarán muy lejos del camino del judaísmo aunque sigan siendo judíos. Teniendo en cuenta que el deber principal del judío es cumplir con sus obligaciones como tal, respetando los preceptos de la Torá, es evidente que deviene indispensable casarse entre judíos, porque, de lo contrario no podrá cumplir debidamente con sus responsabilidades fundamentales de manifestar la dimensión Divina en el mundo, que es posible solamente por medio del cumplimiento de Su voluntad. Para entenderlo mejor, hace falta aclarar un punto más. No solo que está prohibido para el judío casarse con una persona que no lo es, sino que esimposible que se case. Puede haber convivencia y puede haber cohabitación, puede haber, incluso, procreación, pero no existe matrimonio . Las leyes de la Torá son tan (o más) objetivas como las leyes de la Naturaleza. Del mismo modo que uno no puede alterar la Gravedad, por ejemplo, no puede alterar las leyes de la Torá. El estudio de la Torá no tiene como objetivoinventar las leyes de la vida, sino descubrir la estructura Divina inherente en la existencia.

¿Qué es el Matrimonio? Si nos ponemos a analizarlo, resulta bastante desafiante tratar de explicar cuál es la función del matrimonio en general. Si dos personas se quieren, ¿Por qué no vivir juntos?. El día en que no quieran compartir más sus vidas, cada uno puede irse por su lado! Aún en el caso que se casen, el día que no quieren vivir más en pareja, existe el divorcio que los separa. Así que ¿cuál es la función del matrimonio? Generalmente la gente contesta que es nada más que un formalismo, una norma de la sociedad para "legalizar" la pareja. Pero si lo analizamos un poco, decir que el matrimonio es nada más que una norma social, implica que no tiene un sentido verdadero. Es arbitrario. Entonces, si a uno no le importa la autoridad y/o el estigma social, ¿está bien que viva en pareja y que tengan hijos sin casarse? Si llegamos hasta el fondo del asunto, creo que no queda otra alternativa que la que entiende a la institución del matrimonio como una idea Divina. El concepto de casarse tiene su origen en la Torá. Aunque hayan muchas sociedades que no se basen en la Torá, y aún así tienen asumidos el concepto del matrimonio, no quita el hecho que en su origen, el verdadero sentido es Divino. Para dar un ejemplo: ¿De dónde viene la semana de siete días? ¿Por qué no ocho o seis? El ciclo semanal de siete días nace con los siete días de la Creación. Para el que acepta la Torá, el ciclo semanal tiene un sentido espiritual profundo. Para el que no cree en la Torá, la semana de siete días no tiene sentido alguno. Del mismo modo es en cuanto al matrimonio. Para el que no cree en la Torá, el concepto del matrimonio no tiene mucho sentido y razón de ser. Es simplemente un trámite para registrar formalmente a la pareja para que los hijos del padre lo puedan heredar. Para el que cree en la Torá, el concepto de matrimonio asume una importancia y significado mucho más profundos y sustanciales. Las fuentes talmúdicas y cabalísticas enseñan que el matrimonio no es meramente la unión entre dos individuos totalmente independientes entre sí, sino que es una reunión entre dos mitades de una y la misma unidad . La pareja comparte la misma alma que, al nacer , se dividió en dos mitades. Al casarse, vuelven a reunirse y completarse. Se trata de una unión no sólo a nivel físico, emocional y/o intelectual, sino de una unión a nivel esencia l. Hay almas que son compatibles y almas que no lo son. Además del caso del matrimonio mixto, la Torá enumera una cantidad de "uniones matrimoniales" que no son consideradas válidas, por ejemplo el "casamiento" entre hermanos biológicos o un hombre con una mujer casada, o sea el incesto y el adulterio. No se trata simplemente de prohibiciones, sino de hechos. En estos casos no rige el matrimonio, aunque sea posible cohabitar y procrear. Así, que, es muy fácil explicarle a una persona no judía que uno no puede casarse con ella. No se trata de un defecto que tiene. Se trata, nada mas ni nada menos, de una concepción de matrimonio delineada en la Biblia a la cual uno se siente atado. Un caso hipotético: ¿qué pasaría si un chico y una chica (ambos judíos) deciden casarse y están profundamente enamorados y media hora antes de casarse se enteran que son hermanos biológicos? ¿Se casarían?. Obviamente, el hecho que no pueden casarse no implica un menosprecio o que el amor

profesado fue falso. El amor es un factor importante en una relación de pareja, pero no es el único factor. Puede suceder que un joven judío encuentre compatibilidad con una persona que no lo es y quiere formar su familia con esa persona. Dicha compatibilidad es posible solamente en el caso que ninguno de los dos manifieste el potencial esencial que los distingue. Mientras al judío no le importe su judaísmo y al no judío no le importe su fe, marcha todo bien. ¿Qué pasa el día que alguno de los dos se despierta y decide dar importancia a su identidad más profunda y esencial? Aparece, entonces, la incompatibilidad. O sea, dicha relación puede funcionar mientras que los integrantes "no existen" plenamente. En el momento en que cualquiera de los dos "aparece", la relación no tiene más sentido y desaparece. Conozco unos cuantos casos de parejas mixtas que estaban muy enamorados hasta el momento en el cual nacieron sus hijos. Ahí empezaron las discusiones muy fuertes en cuanto a su educación, por más que hasta el momento ambos habían resuelto el tema teóricamente . La madre judía quiere circuncidar al hijo, por ejemplo, mientras que el padre no-judío se niega a que su hijo sea diferente a él, etc. De golpe, salta al primer plano la incompatibilidad, pero ya es bastante tarde -- hay un hijo de por medio al cual cada uno de los padres y los abuelos quiere llevar a su redil... Claro que se puede traer ejemplos de parejas judías que viven con muchos conflictos, pero hay que examinar si su vida se lleva realmente de acuerdo a las normas delineadas en la Torá. Por lo menos, la pareja judía tiene siempre el potencial de lograrlo. Surge la pregunta: ¿Qué pasa en el caso de un judío no-practicante o ateo? ¿Sigue siendo relevante esa incompatibilidad? Si uno no practica el judaísmo ¿por qué darle importancia justamente en el momento de elegir la pareja? Para entender esto, hace falta definir otro concepto básico: ¿Qué es el ser judío? ¿Qué es lo que distingue al judío de su vecino que no lo es? Aclaro que no estoy preguntando ¿Quién es judío? sino ¿Qué es? Ya que la respuesta a la pregunta de ¿Quién es? Es obvia: el que nace del vientre de una mujer judía o se haya convertido en judío de acuerdo a las normas estipuladas en la Torá, pero no responde a la pregunta de ¿qué es? Generalmente me contestan que ser judío significa "sentirse parte del pueblo judío", pero esa respuesta sirve solamente para trasladar la pregunta, ya que ¿Qué es, entonces, el pueblo judío? ¿Un pueblo compuesto de individuos que no tienen otra definición mas allá de pertenencia a un pueblo que no tiene definición? Es como decir que un árbol es integrante de un bosque. El razonamiento es al revés. Una vez que sé lo que es un árbol puedo definir lo que es un bosque: un conjunto de árboles, pero, ¡no puedo definir al árbol, diciendo simplemente que es algo que es parte de un bosque! También es obvio que no es válido definir al judío por el cumplimiento de las Mitzvot, porque también allí el razonamiento es a la inversa: se tiene la obligación de cumplir con las Mitzvot debido a que se es judío, y no se es judío porque se cumple con las Mitzvot. ¡Téngase presente que un niño recién nacido es judío aunque no haya cumplido con ninguna Mitzvá y no tenga fe consciente alguna!

Continua... Rabino Eliezer Shemtov, [email protected]

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2) ¿Qué es, entonces un judío? 3) ¿Qué pasa con la Conversión? 4) El Verdadero Problema

2) ¿Qué es, entonces un judío?

¿Qué es, entonces un judío? Luego de años de estudiar el tema y una cantidad sinfín de conversaciones con judíos de todo nivel de práctica religiosa y orientación filosófica, creo que la definición más contundente es que lo que distingue al judío es la Neshamá (alma) que posee. El alma del judío es diferente al alma del no judío. Tienen potenciales, características y necesidades diferentes. Cada judío tiene la misma esencia que cualquier otro, la cual hereda de su madre. Es el común denominador que relaciona al judío ruso con el sirio, yemenita, canadiense o marroquí a pesar que no hablen el mismo idioma y tengan idiosincrasias diferentes. La única diferencia entre un judío y otro es simplemente el grado de manifestación de esa esencia que logra expresar. En algunos, dicha esencia se manifiesta en cada momento, en otros se la ve una vez al año y en otros, puede llegar a expresarse una sola vez en la vida. Esto no va en contra de la aspiración de ser un ser "universal", ya que para poder realmente ser un ser "universal" hace falta cumplir debidamente con la funciónespecífica que uno tiene dentro de la realidad universal. Ser un ser "universal" no implica negar el rol particular que uno tiene, sino insertarse en la sociedad con una identidad y objetivo bien definidos. ¿Cuál es la característica especial de la Neshamá? Rabí Schneur Zalman de Liadí, fundador del Movimiento Jabad, lo define de la siguiente manera: " Un judío no quiere ni puede apartarse de D-os". Puede ser que el judío no esté consciente que por medio de una acción u otra esté afectando su relación con D-os, pero al estar consciente de las consecuencias de sus acciones, no quisiera perjudicar dicha relación. Cada judío tiene una

"línea roja" por la cual no está dispuesto a pasar aunque tenga que pagar por ello con su vida. Muchos judíos lo son muy a pesar suyo. Pasan su vida negando su condición de judío, pero en algún momento inesperado, cuando sus defensas están bajas, y están distraídos, salta. Muchos judíos invierten tiempo, energía y recursos en negar su condición de tal. Esta conducta es una prueba más de su condición de judío inalterable, ya que si así no lo fuera, ¿por qué les importa tanto negarlo? Así que el problema no empieza cuando un chico se casa con una chica no judía. El problema radica en que ha sido privado de una educación y formación judías a tal punto que ya ni se da cuenta de lo que es y de la incompatibilidad básica y esencial que existe entre él y su novia no judía. Para muchos, la oposición al matrimonio mixto parece ser una actitud elitista, incluso racista. ¿Por qué negarle a un hijo casarse con una chica sólo por el hecho que no sea judía? ¿Qué diferencias prácticas hay entre su comportamiento y el de ella? Quizás estaría de acuerdo con quienes opinan así si no fuera por el hecho que atribuyo esa actitud irracional por parte de los padres a la Neshamá que poseen, a pesar de todo. La Neshamá no los deja aceptar con brazos cruzados el pasar esa "línea roja" que corta la cadena en forma tajante aunque ellos mismos no sepan explicar por qué les molesta tanto. ¿Cuál es la característica especial de la Neshamá? Rabí Schneur Zalman de Liadí, fundador del Movimiento Jabad, lo define de la siguiente manera: " Un judío no quiere ni puede apartarse de D-os". Puede ser que el judío no esté consciente que por medio de una acción u otra esté afectando su relación con D-os, pero al estar consciente de las consecuencias de sus acciones, no quisiera perjudicar dicha relación. Cada judío tiene una "línea roja" por la cual no está dispuesto a pasar aunque tenga que pagar por ello con su vida. Muchos judíos lo son muy a pesar suyo. Pasan su vida negando su condición de judío, pero en algún momento inesperado, cuando sus defensas están bajas, y están distraídos, salta. Muchos judíos invierten tiempo, energía y recursos en negar su condición de tal. Esta conducta es una prueba más de su condición de judío inalterable, ya que si así no lo fuera, ¿por qué les importa tanto negarlo? Así que el problema no empieza cuando un chico se casa con una chica no judía. El problema radica en que ha sido privado de una educación y formación judías a tal punto que ya ni se da cuenta de lo que es y de la incompatibilidad básica y esencial que existe entre él y su novia no judía.

Para muchos, la oposición al matrimonio mixto parece ser una actitud elitista, incluso racista. ¿Por qué negarle a un hijo casarse con una chica sólo por el hecho que no sea judía? ¿Qué diferencias prácticas hay entre su comportamiento y el de ella? Quizás estaría de acuerdo con quienes opinan así si no fuera por el hecho que atribuyo esa actitud irracional por parte de los padres a la Neshamá que poseen, a pesar de todo. La Neshamá no los deja aceptar con brazos cruzados el pasar esa "línea roja" que corta la cadena en forma tajante aunque ellos mismos no sepan explicar por qué les molesta tanto. continua... Rabino Eliezer Shemtov, [email protected]

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1) Las Bases 3) ¿Qué pasa con la Conversión? 4) El Verdadero Problema

3) ¿Qué pasa con la Conversión?

¿Qué pasa con la Conversión? Una de las "soluciones" que la gente propone para solucionar el dilema del matrimonio mixto es "convertir" al novio/a no judío/a en judío/a. ¿Es una solución válida? Encontramos que el judaísmo reconoce la posibilidad de convertirse en judío. El proceso de "Guiur" (Conversión) es muy simple. Consiste en tres pasos: 1) Circuncidarse (en el caso de un hombre); 2) Sumergirse en una Mikve (baño ritual); 3) Aceptar el cumplimiento de la Torá en su totalidad . Dichos pasos tienen que realizarse ante un tribunal rabínico válido . (Un tribunal rabínicoválido quiere decir tres rabinos que aceptan la Torá como palabra Divina y cumplen con sus preceptos en su vida personal.) El judaísmo no es proselitista, ya que entiende que no hace falta ser judío para merecer la gracia de D-os y un lugar en el Mundo Venidero. Para un gentil, hace falta cumplir con el código de leyes conocido como las "Siete Leyes de los Hijos de Noé" para merecer el lugar máximo en el Mundo

Venidero. En el caso que un no-judío desea - con sinceridad - convertirse en judío y asumir una vida de acuerdo a las normas delineadas en la Torá, lo aceptamos con brazos abiertos. Es evidente. Que en el caso que uno quiere convertirse al judaísmo para poder casarse con un/a judío/a, es poco probable que su "conversión" sea sincera. Me viene al recuerdo una anécdota de un chico judío que decidió casarse con una chica no judía. Los padres del chico insistieron que la chica vaya a estudiar algo de judaísmo antes de aceptarla como nuera. La chica se fue a una institución religiosa para estudiar los fundamentos del judaísmo. Por mas que el motivo inicial para ir a estudiar fue simplemente para aplacar a los futuros suegros, en el transcurso de sus estudios descubrió un mundo nuevo que la atrajo de verdad y se dedicó a los estudios con un interés genuino. Pasaron los meses y el chico la llamó para saber cuándo se iban a casar. ‘¿Cómo?,´ preguntó la chica. ‘¿Piensas que me interesa casarme con un chico que estaba dispuesto a casarse con una chica no judía?´ Hay quienes argumentan que si no aceptamos dichas "conversiones" o parejas "mixtas", terminaremos alejando a los jóvenes judíos quienes contraen "matrimonio" con parejas no judías o convertidas "cosméticamente". En cambio, si los aceptamos, estamos "ganando almas" para el pueblo judío. En primer lugar, el judaísmo no es un negocio y menos cuando esté basado en mentiras y engaños. El judaísmo se basa en tratar de cumplir al máximo de nuestra capacidad con la voluntad de D-os. No hay que estar más preocupados por el futuro del pueblo judío de lo que Dos mismo lo está. D-os también conoce dicho argumento y sus "beneficios" para el futuro de dichos individuos y para el pueblo judío. No obstante, dice claramente en la Torá (Deut.7: 7), que no tiene preferencia por el pueblo judío debido a su superioridad en cantidad ni en poder, sino por su cualidad de la humildad y por el pacto que ha hecho con nuestro patriarca Abraham. El pueblo judío ha sobrevivido a todos sus opresores, no gracias a su viveza, dinero o poder político, sino gracias a su sinceridad, autenticidad y auto sacrificio para preservar dicha pureza y autenticidad. Además: por más que quisiéramos y por más que nos parezca conveniente aceptar dichas ‘conversiones´, no está en nuestras manos negar o cambiar los hechos. No está en nuestras manos hacer ese ‘favor´, de la misma manera que no está en nuestras manos hacer el favor a unos padres quienes querían un hijo varón y les nació una hija. Podemos hacerle a la niña cambios cosméticos, pero no deja de ser otra cosa que una mutilación engañosa y cruel. Es interesante notar la expresión que el Talmud (Ievamot 48b) utiliza al hablar de ‘conversos´ (auténticos): ‘Guer shenitgaier kekatan shenolad dami´. Quiere decir: Un converso que se convirtió está considerado como un bebé recién nacido. Cuando el Talmud habla de un esclavo que se liberó, no dice un ‘liberado´ que se liberó, sino un esclavo que se liberó. ¿Por qué, entonces, al hablar de un converso no se dice un gentil que se convirtió, sino un converso que se convirtió? También, ¿por qué se compara al converso con un niño recién nacido? Nuestros sabios lo explican de la siguiente manera:

Un converso auténtico es una persona que, aunque haya nacido de un vientre no judío, nació con una Neshamá, un alma judía. Es esa Neshamá la que le empuja a ‘convertirse´. O sea, en cierta manera, podemos decir que nació (destinado o con una predisposición a convertirse en) ‘converso´. Por ese motivo es que se le compara con un ‘bebé recién nacido´. Un bebé recién nacido, hace nueve meses que existe. La diferencia entre el momento antes de nacer y después de nacer es que antes de nacer no es un ser independiente. Del mismo modo, un ‘converso´ antes de pasar por el proceso de conversión se considera como un judío en estado ‘embriónico´ y no tiene las responsabilidades de un judío. Una vez que se convierte, se transforma en un judío pleno. Pero, como señalamos antes, para que dicha transformación ocurra, hace falta pasar por el proceso de conversión auténtico y no por los procesos ‘cosméticos´ que abundan y se hacen pasar por opciones mas ‘abiertas´. Hay quienes preguntan: ¿Por qué hace falta que el converso sea más practicante que la mayoría de los judíos, quienes no lo practican plenamente y no se consideran "religiosos" y aún así no pierden su condición de judíos? En otras palabras: si el judío no-practicante está considerado judío, ¿por qué no se considera como judío a una persona que se haya ‘convertido´ por medio de una ‘conversión´ que no concuerda con la Halajá? La respuesta es muy sencilla. Un judío de nacimiento es judío a pesar de todo lo que piense, hable o haga. La misma Torá que determina este hecho, dice también que uno que quiere convertirse en judío debe - antes que nada - aceptar cumplir con la Torá en su totalidad para que sea aceptado como tal. Si uno dice que está dispuesto a aceptar los 613 preceptos, pero que hay uno solo que no le gusta y no lo quiere aceptar, se le dice ‘¿Quién te obliga a convertirte en judío?´ ¡Es preferible que no se convierta y que siga cumpliendo con su misión en la vida como no judío, a que se convierta en judío y caiga en infracción! En realidad, es un criterio muy entendible. Si uno nació en el Uruguay, por ejemplo, la ley uruguaya lo considera como uruguayo, haga lo que haga. En cambio, si uno quiere adquirir la ciudadanía uruguaya, pero dice que no está dispuesto a reconocer como válida alguna cláusula de la constitución uruguaya ¿lo aceptarán? Claro que no. Si no le gusta la constitución uruguaya, pues que busque su ciudadanía en otro país con cuya constitución esté de acuerdo... Uno que no quiere reconocer a la constitución uruguaya en su totalidad puede ser aceptado como residente extranjero pero no como ciudadano legal. El ciudadano naturalizado debe aceptar la constitución del país como autoridad máxima para que se le otorgue la ciudadanía. ¿Acaso alguien quiere sugerir que sea más fácil convertirse en judío que asumir una ciudadanía? ¿Acaso las leyes Divinas son mas negociables que las leyes humanas? continua... Rabino Eliezer Shemtov, [email protected]

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