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• Ismael de Galleta

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Sierra Arriaga Arturo Natanael Grupo: 103 La dinámica del capitalismo de Fernand Braudel. La rutina, acciones inconscientes que realizamos, es decir, cosas del pasado que rigen nuestras vidas, ha llevado al hombre a una búsqueda por entender el presente, dando paso al surgimiento de la historia. La historia tradicional estudia al hombre pero no sus necesidades básicas (alimento y bebida), algo que se encarga de estudiar la historia económica, la cual está en evolución ayudándose de ciencias auxiliares. El estudio del hombre a lo largo del tiempo ha demostrado que han habido muchos cambios, cambios que han llevado al mismo a formar agrupaciones al momento de volverse sedentarios, dando paso a un juego demográfico que tiende a un equilibrio, donde existen pueblos más numerosos o escasos que otros. Esas poblaciones fueron abastadas por enfermedades (como la peste negra), guerras, malas condiciones de vida, etc. lo cual las llevó a una pérdida de población, así como a una búsqueda de una solución a sus problemas y satisfacción de sus necesidades, desarrollando medios técnicos, por lo tanto, tecnología. Este desarrollo originó concentraciones económicas por la creación de la moneda y las ciudades, dando pie a la modernidad, la expansión de la moneda y la tiranía de las ciudades. Esta modernidad en evolución creó dos economías: la economía de intercambio, que se daba entre la producción y el consumo (mercado elemental); y la economía de mercado, que se basaba en organizar la producción y dirigir el consumo. La economía de mercado tuvo dos registros: uno inferior (mercados, tiendas y buhoneros) y otro superior (ferias y Bolsas), estos dos registros son elementos importantes que surgen por un valor de intercambio, es decir, todo lo que traspasa la estrecha puerta del mercado adquiere un valor de intercambio, mientras que todo lo que queda fuera no tiene sino un valor de uso. Estos valores crean una vida material y por consiguiente una vida económica. El desarrollo de la sociedad hacia un capitalismo pasó por varios acontecimientos. En el siglo XV surgen los mercados urbanos, por el alza de los precios industriales y la baja de los agrícolas. En el siglo XVI crecieron las ferias internacionales (centros de intercambio en fechas determinadas) por el tráfico de dinero y créditos, creando un sistema de cambios, y por la llegada de metales de América surgió una superestructura. En el siglo XVII hubo un estancamiento económico, las ferias ceden el paso a las Bolsas y a las plazas mercantiles, un flujo continuo que sustituye a unos encuentros intermitentes;

así como un florecimiento de las tiendas. En el siglo XVIII hubo una aceleración económica; las Bolsas de: Londres, Ámsterdam, Ginebra, Génova y París entran en juego; el dinero y el crédito fluyen así cada vez más libremente de una plaza a otra. Surge el private market contra el public market, el cual está vigilado por las altivas autoridades urbanas creando un control de compras fuera de los circuitos del mercado, es decir, es un “contramercado”. Si comparamos la economía europea (donde han ocurrido todos estos acontecimientos) con las del resto del mundo, parece deber su desarrollo más avanzado a la superioridad de sus instrumentos e instituciones: las Bolsas y las diversas formas de crédito. Sin embargo, todos los mecanismos y artificios del intercambio pueden encontrarse fuera de Europa, desarrollados y utilizados en grados diversos. El intercambio (que da equilibrio) formó una economía de mercado. El mercado es un nexo imperfecto entre producción y consumo, para Adam Smith era una “mano invisible”, un mercado autorregulador. Y una economía de mercado dio paso a la creación del capitalismo. Hay dos términos importantes en este modo de producción: capital y capitalista (individuos con fortunas heredadas por grandes familias que antes eran de señores feudales). Gracias al capitalismo surgen grupos de grandes negociantes que poseen medios para falsear el juego a su favor, creando monopolios, esto debido a que existen, como ya se mencionó, dos economías de mercado: una natural y otra donde los mercaderes se aprovechan para subir los precios, creando un sistema para ser intermediarios entre la producción y el consumo, teniendo así el control del mercado y los precios. Esto anterior es llamado el Fernhandel: un campo en el que se maniobra libremente para obtener los máximos beneficios, teniendo considerables acumulaciones de capital que solo se reparte entre unas pocas manos. La creación de los monopolios surgió porque los mercaderes invertían en varios sectores (porque los beneficios cambian sin cesar de sector y porque no hay un buen sector donde invertir, solo en el comercio del dinero) para obtener el máximo beneficio, quitando de enfrente a la competencia. El mundo de la mercancía o del intercambio (uno elemental y otro competitivo) se encuentra estrictamente jerarquizado (división del trabajo). Esta jerarquización es utilizada como el mercado o el consumo por el capitalismo, el cual surgió cuando estos tres elementos estaban desarrollados y creció la vida material. Toda sociedad se descompone en varios “conjuntos”, el económico, el político, el cultural y el jerárquico-social, el capitalismo surge gracias al Estado, a los intereses del conjunto político, el capitalismo es

por lo tanto, una realidad de orden social, una realidad de orden político e incluso una realidad de civilización. Vincular el capitalismo, su evolución y sus medios a una historia general del mundo permite comprender que existen unas condiciones sociales en la base del progreso y el triunfo del capitalismo, dichas condiciones sociales (producto del capitalismo) son, entre muchas otras: la distribución del mundo entre privilegiados y no privilegiados; y el surgimiento de una sociedad mundial jerarquizada, es decir, una desigualdad entre países. Consecuencia del capitalismo surgen dos variaciones de economía: la economía mundial, que se refiere a la totalidad de la economía del mundo; y la economía-mundo, que se refiere a la economía de una parte del mundo que forma un todo económico. Las características de este último son: ocupa un espacio geográfico determinado; tiene una ciudad dominante (capital económica, actualmente New York); y se divide en zonas sucesivas, regiones que se extienden en torno al centro. El centramiento, descentramiento y recentramiento parecen estar ligados a crisis económicas prolongadas, a luchas o choques. La revolución industrial dio pie al surgimiento del capitalismo, gracias a la apertura de otros mercados y el centramiento de Londres en la economía-mundo. Concluyendo con que el capitalismo sigue basándose en la explotación de los recursos, posibilidades internacionales y apoyándose en monopolios, dejando en claro que no engloba a toda la economía ni a toda la sociedad que trabaja.