Historia de La Filosofia de Los Presocraticos a Hegel (Ocr)

ARTHUR SCHOPENHAUER HISTORIA DE LA FILOSOFÍA [ de los Presocráticos a Hegel ] < • I H I S T O R I A DE L A FILOSO

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ARTHUR

SCHOPENHAUER

HISTORIA DE LA FILOSOFÍA [ de los Presocráticos a Hegel ]

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H I S T O R I A DE L A

FILOSOFÍA

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H I S T O R I A DE LA F I L O S O F Í A Arthur

Schopenhauer

Traducción de Edmundo González Blanco

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CDD Schopenhauer. Arlhur 109 Historia de la filosofía. - 1*. ed. Buenos Aires: Quadrota. 2005. I28p.: 19x14 cm. -1Estroboscopio) Traducción de: Edmundo González ISBN 987-1139-32-2 I. Historia de la filosofía I. Titulo

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GRUPO EDITO*

MowtRfssoe

Comentes 1471 - Buenos Aires, Argentina www.editorialquadrata.com.ar |54 - 11) 4371-2332 I 4826-5537

•Editorial Quadrata. 2005 Tapa: Kovalslcy Diagramación: Marcela Gunning Corrección: Corina 8alt> Prohibida la reproducción total o parcial por cualquier medio, sin permiso escrito de la Editorial Queda hecho él depósito que previene la ley 11.723 I.S.B.N.: 987-1139-32-2

CONTENIDO

I. Sobre la filosofía II. Filosofía presocrática III. Sócrates IV. Platón V. Aristóteles VI. Estoicos VII. Neoplatónicos VIII. Gnósticos IX. Juan Escoto Erígena X. La escolástica XI. Bacon XII. La filosofía de los modernos XIII. Algunas explicaciones más sobre la filosofía kantiana XIV. Algunas observaciones sobre mi propia filosofía XV. Bosquejo de una historia de la teoría de lo Ideal y de lo Real XVI. Hegel, Schelling y Fichte

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I S O B R E LA FILOSOFÍA

Precisemos que pretender sustituir la lectura de las obras originales de los filósofos por la de todas las exposiciones de sus teorías, o en general, la Historia de la Filosofía, es supeditarse a que otros mastiquen por uno el alimento. ¿Leeríamos la Historia Universal si pudiéramos por nosotros mismos ver y descubrir lo que nos es interesante en los acontecimientos de la antigüedad? En realidad, para la Historia de la filosofía es posible una autopsia de su contenido a partir de los mismos escritos de los filósofos; con lo que además, y en atención a la economía de tiempo, puede uno limitarse a algunos capítulos importantes bien elegidos; tanto más, se pueden obviar repeticiones que no hacen a lo fundamental. De esta manera se conocerá lo esencial de sus teorías auténticas y no falsificadas o mal interpretadas, en tanto que por las docenas de "historias de la filosofía" anualmente publicadas, sólo se consigue aprender lo que ha quedado de ellas en la cabeza de un profesor de Filosofía, siendo éste quien las ha comprendido y modificado a criterio propio, con lo cual, las ideas de un gran espíritu se empequeñecen en los cerebros de tres libros (tn dreis-psmvl-Gehim) de un tal parásito de la Filosofía, del cual salen ataviadas con la jerga de la época y acompañadas de sus profundas notas críticas. Además, puede calcularse que ese mercenario (geldsverdienender) historiador de la Filosofía, apenas pudo haber leído la décima parte de las obras que ha de hacer referencia, porque su estudio verdadero exige larga y laboriosa existencia, tal como lo hizo en los antiguos tiempos de trabajo el excelente Brucker. En cambio,

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HISTORIA

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FILOSOFIA

¿qué pueden haber investigado esas pobres gentes, que entretenidas con cátedras, comisiones, veraneos y distracciones se presentaban casi siempre en sus años de juventud con historias de la Filosofía? Por otra parte, aspiran a ser pragmáticos aparentando haber escudriñado y expuesto la necesidad de la formación y sucesión de los sistemas, y hasta a juzgar, corregir y enseñar a aquellos graves y sinceros filósofos de la antigüedad. Así pues, han de plagiar forzosamente a los que les precedieron y luego, para ocultarlo, confunden cada vez más las cuestiones dándoles el giro moderno del quinquenio corriente, como si las juzgasen según el espíritu del mismo. Por el contrario, sería muy conveniente una agrupación de los pasajes importantes, de los capítulos esenciales y de los filósofos célebres compilados en orden cronológico-pragmático, hecha en comunidad y a conciencia por eruditos honrados y talentudos, aproximadamente en la forma en que lo han hecho Gedicke primero y Ritter y Zeller después con la filosofía de los antiguos, pero mucho más extensamente; algo así como una gran crestomatía universal escrita con escrupulosidad y conocimiento del asunto. Los fragmentos que ahora expongo aquí no son copiados, sino que son pensamientos emanados del estudio de las obras originales.

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II FILOSOFÍA P R E S O C R Á T I C A

Los filósofos eleácicos son los primeros que se han preocupado de la contradicción entre lo percibido y lo pensado: > "Los manea son algo, no uxlo acaba con la muerta, y la sombra luminosa huye de las hogueras encendidas." Propercio, Elegía IV, 7, 1 \ 2. Sabido es que los romanos quemaban los cadáveres ( T ) . 54. Así como Cosmogonía es histona del mundo, sabemos que Zoogonía es la historia de los animales. ( T ) . 55. Véase Praefxlracto evanjfeücu. II, 10.

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HISTORIA

DE

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FILOSOFIA

bres (aunque éstos, en un principio, son el trabajo de alfarero de Prometeo); con todo, no tienen un solo Dios creador. Porque aunque después, un par de filósofos que conocieron el judaismo hayan querido transformar en uno semejante al padre Zeus, no le importa a éste; tampoco importa que el Dante, sin haberle pedido permiso para eso, le quiera identificar de buenas a primeras en su Infierno con el Domeneddio, cuya inaudita sed de venganza y crueldad se ensalza y se describe allí mismo54. Finalmente (porque se ha echado mano de todo), es completamente inexacta la noticia infinidad de veces repetida, de que los salvajes de Norte América adoraban con el nombre de gran espíritu a Dios, el creador del cielo y de la tierra. Este error ha sido combatido recientemente por medio de un folleto sobre los salvajes norteamericanos, que John Scouler ha leído en una sesión de la Sociedad etnográfica de Londres celebrada en 1846, y del cual publica un extracto L! Instituí Journal des Sociétés savantes':. Dice: "Cuando se nos habla, en los trabajos sobre las supersticiones de los indios, del gran espíritu, nos inclinamos a suponer que esta expresión indica una idea que está conforme con lo que nosotros la relacionamos, y que su creencia es un teísmo sencillo y natural. Pero esta interpretación está muy lejos de la verdadera. La religión de estos indios es, por el contrario, un fetichismo puro que consiste en medios mágicos y encantamientos. En el trabajo de Tanner, que vivió desde su infancia entre ellos, hay detalles exactos y dignos de notarse, pero en cambio distintos de las invenciones de ciertos escritores; en efecto, por ellos se ve que esta religión de los indios es en realidad un fetichismo semejante al que existía antes entre los finlandeses y existe hoy todavía entre los siberianos. Entre los indios que viven al Este de la cordillera, el fetiche consiste en cualquier objeto al cual se le atribuyen propiedades misteriosas, etc". En conformidad con todo esto, la opinión que aquí se trata ha de suplantar a su contraria, a saber: que únicamente un pueblo, aunque pequeño, insignificante, despreciado por todos sus contemporáneos y que vivía solo entre todos los demás sin creencia alguna en la continuidad después de la muerte pero que había sido escogido para ello, ha conservado el monoteísmo puro o el conocimiento del verdadero Dios; y esto, no por medio de la filosofía sino simplemente por revelación, para la cual es también apropiado; porque ¿qué valor tendría una revelación que no enseñase sino aquello que lo mismo pudiera saberse sin ella? Así pues, el hecho de que ningún otro pueblo ha concebido jamás una idea tal, debe contribuir a estimar el mérito de la revelación.

5ó. Por ejemplo, en el c a n i o XIV; verso 70; y en el c a n t o X X X I , verso 92. 57. Sesión II, Julio J e 1847.

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XIV A L G U N A S O B S E R V A C I O N E S SOBRE M I PROPIA FILOSOFÍA

Apenas habrá ningún sistema filosófico tan sencillo y compuesto de tan pocos elementos como el mío; por eso se puede apreciar y comprender fácilmente con una sola ojeada. En último término, se basa en la absoluta unidad y conformidad de sus ideas fundamentales, y es en general un signo favorable para su verdad, que en efecto es aneja a la unidad: á-rrAout; ó TVC; aXr) Gtiat; )\oyo(, t