H. Spencer Lewis - Alquimia Moderna - Mar52

Pensamientos y Cosas Alquimia Moderna por el Dr. H. Spencer Lewis, Ph.D., F.R.C. (Tomado del “Rosicrucian Digest” de Fe

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Pensamientos y Cosas

Alquimia Moderna por el Dr. H. Spencer Lewis, Ph.D., F.R.C. (Tomado del “Rosicrucian Digest” de Febrero de 1933) Revista “El Rosacruz” Marzo 1952

A

que estamos familiarizados con el progreso de la física, la química y la ciencia de la metalurgia, nos asombramos recientemente con algunas declaraciones hechas a un tribunal. Esto pasó durante el proceso de un hombre que trató de criticar públicamente las pretensiones de aquellos que están todavía activamente ocupados en la búsqueda de las leyes y principios no revelados de la alquimia y la química. QUELLOS DE NOSOTROS

Este hombre, evidentemente desprovisto de todo interés en la lectura de los libros de texto modernos o siquiera las noticias científicas de los periódicos, y mostrando, además, una inferioridad de comprensión que ostentaba un complejo de superioridad, hizo la audaz declaración de que en su creencia cualquiera que pensara que la transmutación de los metales era posible, o que sostuviera que los metales bajos podían transmutarse en oro, era un loco. Hizo esta declaración con toda la certeza de quien no tiene idea de que está haciendo una declaración absurda, probando el desconocimiento de las materias que se suponía eran su estudio especial. En otras palabras, tenía la actitud de ser una autoridad en asuntos que él mismo probaba que le eran completamente desconocidos. A menudo encontramos estos tipos en la vida diaria. Aquellos que menos saben acerca de un asunto dado, son los que hacen la exposición más segura y están prontos a vocear sus opiniones públicamente con más vehemencia y más explicaciones que la persona que está mejor versada. La declaración del hombre causó una ola de sorpresa, y el juez, el jurado y los espectadores no pudieron contener una sonrisa. Pero, nos preguntamos

Alquimia Moderna cuántas personas saben la extensión en que todavía hoy se trabaja en el antiguo arte de la alquimia, en este atareado mundo moderno. Pocas personas inteligentes, que estén familiarizadas con los progresos alcanzados por la ciencia, tienen ya la menor duda de la posibilidad de hacer oro de los metales bajos. La transmutación del zinc, del plomo y otros metales similares en una imitación química de oro puro, se ha hecho en muchas universidades y laboratorios de instituciones industriales. No hay ningún misterio ni secreto acerca del procedimiento; es la simple combinación artificial de varios procesos de la naturaleza, para producir oro de la misma manera como ella lo produce. La diferencia química o física entre un trozo de zinc o plomo, y uno de oro, es muy conocida de los sabios; los pasos científicos necesarios para cambiar el zinc en oro son conocidos también. Pero llevar a cabo esta obra e imitar la naturaleza en sus procesos es una cosa tediosa y extremadamente costosa. Por esta razón, la manufactura artificial hasta de un pequeño grano de oro, en un laboratorio, es demasiado costosa para producir beneficios comerciales. Sería como tomar mil dólares en oro1 y convertirlos en una pieza que costara menos de diez dólares y decir que este proceso es valioso para las artes y la industria. Probablemente pasará mucho tiempo antes de que la ciencia sea capaz de producir artificialmente un poco de oro con tan pequeño gasto como el que puede ocasionar la obtención de la misma cantidad de oro en las montañas de California. Millares de desempleados se han ido a trabajar a las minas de oro de California, desde hace dos años. Con cada miembro de la familia trabajando duro y cuidadosamente desde la mañana hasta la puesta del sol, cada familia entera ha podido extraer de la tierra cerca de cinco dólares oro por día2. Esto les permite vivir durante la época de los negocios, y aunque pocos han hecho más dinero con esta simple manera de trabajar las minas, sacan oro de la tierra y es más ventajoso que cualquier procedimiento que pueda inventarse en los laboratorios científicos. Sin embargo, lo mismo que los antiguos alquimistas, místicos y Rosacruces, emplearon muchos años de su vida experimentando con la transmutación sólo con el propósito de probar las leyes fundamentales de la naturaleza, así también los laboratorios de la industria y la ciencia, hoy, creen que vale la pena gastar miles de dólares en hacer un grano de oro que sólo valdría unos pocos dólares. En algunas partes del mundo la alquimia es todavía una ciencia separada de la química corriente. Se considera un arte sintético y una de las ciencias herméticas, y por esta razón, queda separada de la química moderna. Por supuesto, el hombre que hizo las declaraciones en el tribunal no sabía nada de esto y no sabía que el ridículo que él hacía de los interesados en alquimia era un menosprecio de la inteligencia de millares de hombres y mujeres de gran 1 2

Se refiere a mil dólares de 1933, equivalentes a US$17,500 de Febrero 2012. Dos dólares de 1933 equivalen a Febrero 2012 a aproximadamente US$35.

Alquimia Moderna sabiduría, y especialmente de aquellos cuyas actividades diarias están relacionadas con la metalurgia, la física y la química de manera científica, y que dedican sus noches y horas libres a la búsqueda sumamente interesante de la alquimia. Un Gran Jefe Una de las grandes figuras del movimiento alquímico en Europa, y quizás el alquimista más avanzado en el mundo hoy3 es F. Jollivet Castelot, de París. No sólo es un científico eminente que ha dedicado la mayor parte de su vida al estudio de la transmutación y la química sintética, sino que es también el director de la Sociedad Alquímica de Francia y editor de una revista trimestral llamada La Rose-Croix que lleva el emblema Rosacruz. Es también miembro honorario de la Orden Rosacruz en América, AMORC. Hace algunos años publicamos en nuestra revista Triángulo una fotografía de Frater Castelot en su laboratorio. Tenemos información continua de miembros asociados con él acerca de las realizaciones alcanzadas conjunta o individualmente. Su revista está llena de interesantes noticias de sus laboratorios y de citas de otros periódicos y revistas científicas que tratan del arte y la ciencia de la alquimia y la transmutación. Uno pensaría que después de haber llevado a cabo, en numerosas ocasiones, la obra de producir pequeñas cantidades de oro puro, la búsqueda del procedimiento y de los principios llegaría a su fin. Pero de nuevo recuerdo al lector que la verdadera búsqueda no es con el propósito de hacer oro, ni con la intención de revelar una manera más sencilla de producir oro. La idea de los estudios y experimentos alquímicos es observar las leyes de la naturaleza, y encontrar medios más sencillos para demostrarlas. En la transmutación, y generalmente en el estudio de la alquimia, se revelan más principios fundamentales del universo que en los experimentos que se efectúan en cualquier laboratorio. Esto es lo que hace esta materia tan atrayente y tan llena de nuevas y sorprendentes condiciones, situaciones y revelaciones. Fue en 1894 cuando Frater Castelot publicó su primer libro en que trata de sus grandes estudios en alquimia y en transmutación, después de haber sido estudiante de los principios místicos y Rosacruces que revelaban el trabajo y los procesos secretos usados por los antiguos místicos y alquimistas. En 1904 Frater Castelot publicó otras instrucciones importantes acerca de la ciencia de la alquimia. Desde entonces sus escritos han sido leídos en las sociedades científicas más importantes del mundo y citados en muchos libros y tratados populares de asuntos científicos. En 1896 Frater Castelot y otros fundaron la Sociedad Alquímica de Francia. Místicos y Laboratorios Ocasionalmente, quienes tratan de criticar a los Rosacruces tildándolos de 3

1933.

Alquimia Moderna seres poco prácticos debido a sus ideas avanzadas y programas progresistas, se basan en que los antiguos Rosacruces se interesaban en la alquimia y en la búsqueda de oro artificial. Piensan que esta búsqueda hace evidente que los Rosacruces son unos soñadores y no hombres prácticos. Tales personas no se dan cuenta de que la madre de la química moderna fue la alquimia, y que aunque el hijo, en la forma de química moderna, ha crecido hasta llegar a ser una gran ciencia universalmente reconocida, la madre no ha dejado de existir, pues la alquimia se limitaba a ciertos campos de investigación que todavía no están agotados ni aún por las más modernas adquisiciones de la ciencia. Como antes se dijo, los Rosacruces y místicos que llevaban a cabo tantos experimentos en sus laboratorios, trataban, por medio de las leyes materiales del universo, de descubrir principios universales que tenían su acción y reacción en el mundo espiritual, lo mismo que en el mundo material. Creían que así como la diferencia entre el metal bajo y el oro puro era una diferencia de carácter, constituida por las varias ratas4 de vibración y por la presencia de elementos impuros o poco evolucionados, así también las diferencias en el carácter humano eran el resultado de elementos impuros e inarmoniosos que podían ser transmutados y cambiados en la pureza de una vida espiritual aquí en la Tierra. Mucho se habla en estos días acerca de las vibraciones y su efecto en nuestra salud y nuestra vida en general. Estamos aprendiendo que toda vida consiste de vibraciones que nos afectan, y que forman todo aquello que sentimos o comprendemos. Fue en los laboratorios de los alquimistas y místicos donde se descubrió primero la ley de las vibraciones y se probó que era un hecho real; y mientras estos místicos buscaban un elíxir de vida para prevenir la enfermedad, la vejez, y la llamada muerte, y cambiar la materia baja en oro puro, encontraron leyes y principios que capacitaban al hombre para curar la enfermedad y vencer muchos de los obstáculos de la vejez. También encontraron maneras de producir muchos de los metales modernos, como el bronce, y muchas aleaciones que han sido extremadamente valiosas para la industria y los intereses comerciales. Así, tenemos que dar gracias a estos antiguos místicos por los progresos modernos que dejaron a la humanidad, y también a aquellos místicos que todavía continúan sus investigaciones y sus búsquedas de soñadores que prueban sus sueños en el crisol del materialismo lo mismo que en el crisol de la espiritualidad. Ellos tratan de convertir sus sueños en algo práctico y aplicable, y de sus esfuerzos hemos derivado tantos beneficios que no autorizan a nadie a criticar a los místicos y sus sueños.

4

Tasas.