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ÍNDICE Presentación............................................................................................................................................................................................................. 7 Introducción. Notas para un diccionario Biográfico de Guardianes de la Memoria Social Boliviana........................................................................... 9

I. Los diccionarios biográficos de alcance nacional............................................................................ 9



II. Los diccionarios biográficos de alcance regional.........................................................................12



III. Bruno Groppo y el enfoque sociobiográfico de la Historia.............................................15



IV. Los archiveros del incario..........................................................................................................................................17



V. Los archiveros de la colonia....................................................................................................................................17



VI. Los archiveros militares en la Guerra de la Independencia............................................18



VII. La República: el rol de los presidentes......................................................................................................19

VIII. El aporte de los intelectuales.................................................................................................................................20

IX. Las archivistas mujeres.................................................................................................................................................21



X. Los archivistas profesionales.................................................................................................................................21



XI. Los becarios.................................................................................................................................................................................22



XII. Los archiveros religiosos y empíricos.........................................................................................................23

XIII. Los extranjeros.........................................................................................................................................................................24 XIV. Acciones de los archivistas.......................................................................................................................................25

XV. Los destructores de la memoria.........................................................................................................................25

Diccionario de Archivistas de Bolivia...................................................................................................................................27 Fuentes consultadas................................................................................................................................................................................ 635 Bibliografía......................................................................................................................................................................................................... 635 Publicaciones oficiales.......................................................................................................................................................................... 653 Periódicos............................................................................................................................................................................................................. 654 Boletines y Revistas................................................................................................................................................................................. 657 Otras fuentes primarias...................................................................................................................................................................... 657 Fuentes consultadas en internet.............................................................................................................................................. 658 Índice onomástico...................................................................................................................................................................................... 661

PRESENTACIÓN Un Diccionario es una obra que requiere la participación de una especie de ejército de investigadores y demanda años de recolección de datos, que tienen que ser compulsados y contrastados. El Diccionario de Archivistas de Bolivia, elaborado por largos años por el director de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, Luis Oporto Ordóñez, no habría culminado sin el concurso decidido de los archivistas de Bolivia y de otros países, que generosamente enviaron sus referencias y también compartieron sus experiencias y trayectorias personales en beneficio de los archivos bolivianos. Nuestro reconocimiento y agradecimiento profundo a todos ellos, así como a la valiosa colaboración directa y militante de quienes en realidad son los coautores de este trabajo, por una parte, Carola Campos Lora y Edgar “Huracán” Ramírez Santiesteban, del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia, y por otra de Gonzalo Molina Echeverría, infatigable investigador de la Archivística boliviana. Esta publicación especializada, única en su género a nivel internacional, es un primer esfuerzo, de mucha dedicación por reunir información tanto de los archivistas del pasado, los ya fallecidos, como los que conforman la base social de la Archivística boliviana actual. Es una obra que implicaba recopilar de forma sustentada y documentada el trabajo de los archivistas vivos, algunos de los cuales lamentablemente se resistieron a enviar sus datos -posición que respetamos pero no compartimos en absoluto- y como cualquier producto pionero, permite labrar el terreno y abrir los surcos para sembrar la semilla que posteriormente fructificará en base al esfuerzo de otros investigadores que se encarguen de llenar los vacíos, enmendar errores y aportar con nuevas referencias biográficas a este trabajo. Esta obra es un homenaje a los cien años de servicio público de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, resultado de la fusión de la antigua Biblioteca del Congreso (creada en 1911), con el Archivo Legislativo (conformado en 1988), cuyo acervo documental y bibliográfico responde con propiedad e idoneidad a las necesidades de información de la Asamblea Legislativa Plurinacional y Vicepresidencia del Estado.

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Reiteramos el reconocimiento a los archivistas nativos y extranjeros que nos legaron gran parte de la memoria institucional e histórica de este valeroso pueblo boliviano, desde la época preshispánica hasta el actual Estado Plurinacional, y que se plasma en esta obra que ahora ponemos a consideración de la ciudadanía en general. VICEPRESIDENCIA DEL ESTADO PLURINACIONAL

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INTRODUCCIÓN

Notas para un Diccionario Biográfico de Guardianes de la Memoria Social Boliviana El Diccionario Biográfico de guardianes de la memoria social Boliviana contiene 812 entradas, de las cuales 68% corresponden a varones de todas las épocas (desde el Incario), 22% a mujeres, que aparecen con identidad propia a partir de la segunda mitad del siglo XX; 5 % a las acciones colectivas de los archivistas (reuniones, asociaciones, declaración de principios), y 5 % a instituciones y centros de archivo. Esta es una primera aproximación especializada, por lo que asumimos como propias las palabras de José Roberto Arze quien en sus “Apuntes preliminares para una bibliografía biográfica boliviana” (1978), señala que sus trabajos biográficos, “revelan que existe todavía un vasto campo por explotar”. Desde aquel año no es poco lo que se ha escrito en el campo biográfico, aunque sigue siendo insuficiente ese esfuerzo para construir una Enciclopedia Biográfica Boliviana.

I. Los diccionarios biográficos de alcance nacional Un puñado de intelectuales ha volcado sus esfuerzos en construir diccionarios de personalidades y personajes de la historia boliviana, entendida esta desde la época prehispánica. Ese esfuerzo colectivo ha indagado en diversas áreas del conocimiento, con objetivos generales más o menos afines, pero con distintos alcances y enfoques metodológicos, en la selección y estudio de los personajes biografiados. Uno de los repertorios más tempranos corresponde a José Domingo Cortés, intelectual chileno que fue Director General de las Bibliotecas Públicas de Bolivia, durante el gobierno de Mariano Malgarejo, quien escribió en 1875 el Diccionario Biográfico Americano. Obras Publicadas, impreso en París, en la Tipografía Lahure. El volumen contiene “los nombres, con los datos biográficos y enumeración de las obras de todas las personas que se han ilustrado en las letras, las armas, las ciencias,

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las artes, en el continente americano”. Sin embargo, en el plano nacional, uno de los primeros ensayos corresponde a Moisés Ascarrunz Peláez, quien publicó una selección de Hombres célebres de Bolivia (1920), con el auspicio de la Oficina Nacional de Estadística y Estudios Geográficos, “reuniendo las noticias más sumarias posibles, pero a la vez las más imparciales y exactas de los [110] hombres que han actuado en Bolivia”. Ricardo Alarcón, en “Apuntes para un Diccionario Biográfico Boliviano, 1825-1915”, publicado en Bolivia en el primer centenario de la Independencia (1925), buscaba reunir “la mayor cantidad de referencias desapasionadas, suscintas y simplemente informativas, de todo cuanto representa el cerebro y la acción de Bolivia”. Hay un enorme vacío hasta la década del 60, en la que Arturo Costa de la Torre publicó su Catálogo de la Bibliografía Boliviana, 1900-1963 (1968), al que antecede una semblanza biográfica de los autores, sin duda el mayor esfuerzo en su género, no superado hasta hoy, aunque muchos de sus datos carecen de fuentes, lo que motivó debates e incluso muchos investigadores lo usan con cierta reserva. José Roberto Arze, en su Diccionario biográfico boliviano, comenta las Figuras bolivianas en las Ciencias Sociales (1984); Eclesiásticas (1985); Geógrafos, exploradores y científicos (1987); Historiadores y cronistas (1989); y Figuras centrales en la historia de Bolivia en las épocas de la Independencia y República (1991), en la que ha combinado “los criterios de celebridad (entendida como la consagración histórica o persistencia de la fama a través del tiempo) y trascendencia (“proyección de la actuación histórica o cultural del personaje más allá de los ámbitos exclusivos de su especialidad o de su localidad)”, aclarando que “no es la adhesión a la tesis Carlyliana de considerar al ‘héroe’ como el ‘forjador’ de la historia, sino más bien reconocer en la personalidad destacada un ‘producto’ de la historia y de su clase que recobra, con mayor o menor profundidad, sobre el desenvolvimiento histórico”. Guillermo Lora, en su Diccionario Político, Histórico, Cultural de Bolivia (2002), reconstruye la historia desde la visión materialista, que “gira alrededor de los problemas sociales e históricos bolivianos”, en su estrecha vinculación con el pensamiento internacional”, y “cotejadas con las expresiones del pensamiento conservador o derechista”, alejándose de “todo criterio sectario o discriminatorio, que siempre es expresión del oscurantismo”, con la idea “de cooperar en alguna forma al hombre que lee e investiga”. Josep M. Barnadas, en su Diccionario Histórico de Bolivia (2002), obra de carácter enciclopédico, incluye biografías de personalidades (fallecidas al 31 de diciembre de 2001), instituciones, movimientos (sociales e ideológicos), fenómenos (hechos históricos) y publicaciones periódicas. Esta obra mayor de la historiografía plantea desarrollar un Diccionario con un amplio criterio de inclusión “que se deduce del postulado ‘todo es Historia’, (…) para dar paso a toda la realidad boliviana, (…) con una visión integral de la Historia”. Otros investigadores se dedican a biografías más especializadas. Julio Díaz Arguedas publicó Los generales de Bolivia. Rasgos biográficos, 1825-1925 (1929); Elsa Paredes de Salazar el Diccionario biográfico de la mujer boliviana (1965), Arturo Costa de la Torre Mujeres de la Independencia (1977), y José Macedonio Urquidi Bolivianas ilustres: las guerrilleras de la Independencia (1967). Manuel Frontaura, por su parte, se ocupó de los Expedicionarios, descubridores y exploradores de Bolivia (1971), con la

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intención de “seguir los pasos de los hombres que han descubierto Bolivia (…) del esfuerzo hecho por ellos en busca de forjar una nacionalidad. El propósito consiste en narrar su hazaña humana, destacar su valer y su valor”, especialidad que cultivó, también, Julio Díaz Arguedas en Expedicionarios y exploradores del suelo boliviano (1971). Carlos Castro Rodríguez, se ocupó de los Presidentes de la Corte Suprema de Justicia de Bolivia (1989), con breves semblanzas “de la vida de grandes magistrados que han hecho culto en el altar de la diosa Themis”, es decir, que han dirigido el alto tribunal entre 1827 y 1985. La obra fue actualizada por Guadalupe Amusquivar, en Presidentes de la Corte Suprema de Justicia de Bolivia, 1827-2007 (2009). La Literatura, en general, fue cubierta generosamente con el estudio revelador de Augusto Guzmán, en Biografías de la Literatura Boliviana (1982) exhuma “autores nacidos entre 1520 y 1925”, interesado en “su vida interior, el pensamiento vivo reflejado en su producción intelectual”. Juan Quirós, en su Índice de la poesía boliviana contemporánea (1964); Juan Siles Guevara, en Las cien obras capitales de la literatura boliviana (1975); Adolfo Cáceres Romero, en su Diccionario de la Literatura Boliviana (1977); y Roberto Ágreda, en Antología comentada de la Poesía boliviana (2010), compilan biografías de poetas y escritores nacionales, en los que se privilegia la crítica. Elías Blanco Mamani, destaca con su Enciclopedia Gesta de autores de la literatura boliviana (2004), su Diccionario de Poetas (2011) y Novelistas (2012), seguido de su colección Profetas en la cultura boliviana: Chilenos (2007, 2010); Argentinos, (2010); y Alemanes (2010). En periodismo Gonzalo Vizcarra Pando escribió una antología sobre El cuarto poder. Semillero de periodistas y escritores (1984), con “semblanzas de periodistas de todos los tiempos que cumplieron y cumplen una loable y fecunda tarea en el ámbito cultural, que aportaron con sus publicaciones al vasto campo literario de nuestro país”, con el objetivo que “sirva de documento de consulta”. En el campo educativo, Guillermo Medrano Reyes, compila la labor de Educadores en el Instituto Normal Superior “Simón Bolívar”, 1917-1969 (2003), con breves “biografías de educadores bolivianos y extranjeros, complementando con algunas autoridades educativas que apoyaron al crecimiento del Instituto”, para que sirva “como una fuente de consulta para interesados en la materia”. Una obra de carácter amplio e incluyente es la que realizaron Oscar Patricio Vargas Aguirre y Juan Carlos Montecinos Luque, que en tres tomos entregan la Trayectoria de la diplomacia boliviana. 179 años de internacionalismo (2004), con exhaustivas biografías de los Ministros de Relaciones Exteriores y diplomáticos bolivianos, señalando que “nuestra comprensión debe estar basada en la educación de las nuevas generaciones para que adquieran el grado de responsabilidad con la existencia de Bolivia”. El mundo de la fotografía, ha sido cultivado con esmero en el afán de reconstruir la historia de esta fascinante profesión que cautiva a propios y extraños. Daniel Buck, sorprende cada vez que se lee su Pioneer Photography in Bolivia: Directory of Daguerreotypists & Photographers, 1840s-1930s (1999), fuente primordial para la Historia de la fotografía en Bolivia. Desde sus orígenes hasta 1900 (2011), de Fernando Suárez Saavedra, proyecto del que ya entregó el primer tomo.

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Jorge Villanueva Suárez llena un vacío con Dibujantes, pintores y escultores bolivianos (2007), que incluye “en lo posible a todos los artistas bolivianos (sin distinción de tendencias, ideas políticas y religiosas), que se dedican a las Artes Plásticas”, con vacíos notables, por cierto. Al calor de la celebración del Bicentenario, el periódico La Razón, entregó Arte Bolivia (2009), con datos “desde tiempos prehispánicos hasta los días actuales”, con el fin de “rendir homenaje a los creadores bolivianos”. Salvador Romero Ballivián, publicó su Diccionario biográfico de parlamentarios (1979-2009), concebido como “un trabajo de sociología política (que) constituye un retrato de la elite política boliviana desde el retorno a la democracia (1982)”, destinado a ser una obra de consulta, “que permita acceder de manera rápida a información biográfica sobre los diputados y senadores titulares”. No faltan curiosos ‘diccionarios’ biográficos de personalidades (desconocidas), como el del extranjero radicado en Bolivia, L. Alcántara Lecca, que publica su tempranero Diccionario Biográfico de figuras de actualidad (1929), “escrito y ordenado sin preferencias con carácter únicamente imparcial e informativo”. Carlos GómezCornejo en su obra Figuras ejemplares (1947), “ha extraído de nuestra historia aquello, que, realmente, pudiera o debiera interesar a los niños. Y también a los mayores”. El repertorio Quién es quién en Bolivia (1942), explica que “en sus páginas figuran personalidades de todas las tendencias, actividades y corrientes ideológicas”, prometiendo “una publicación seria e imparcial”; similar línea sigue Edmundo Montenegro, con su menos difundido Diccionario biográfico de personalidades en Bolivia (1968 y 1996). Al culminar el siglo XX, Carlos Humberto Rivas Graña se adelantó con su diccionario biográfico de Personajes Bolivianos del Siglo XX (1991), el periódico La Prensa, publicó 100 gigantes del siglo (1999), “con las biografías y semblanzas de los 100 hombres y mujeres -en estricto orden de importancia- que construyeron y conmovieron la historia de la Bolivia contemporánea” y La Razón hizo lo propio en sus 100 Personajes del siglo XX (1999). A raíz de la elección del presidente Evo Morales Ayma (diciembre de 2005), en los últimos años se observa un viraje hacia una intermitente revisión historiográfica en busca de incluir a protagonistas indígenas y populares en la explicación del decurso histórico. Un buen ejemplo lo da el periódico La Razón que publicó Cien personajes de la República (2006), en el intento de “identificar y conocer a cien personalidades relevantes de la historia republicana de Bolivia (18252006)”, esfuerzo en el que “particular atención ha merecido la presencia de actores indígenas, hombres y mujeres de varias regiones [que] influyeron en la construcción de la República, [con ello] es posible mostrar el país diverso que somos…”.

II. Los diccionarios biográficos de alcance regional A nivel departamental, La Paz cuenta con más estudios. Nicanor Aranzáes fue el primero en publicar una obra, insuperada hasta hoy, con puntillosa precisión de datos (aunque paradójicamente sin identificar sus fuentes), amplitud de criterio, más afín a lo que propone Lora que otras propuestas. Se trata del célebre Diccionario histórico del Departamento de La Paz (1915), escrito en un alarde del dominio del arte de la biografía, “para recordar a los antiguos vecinos que se establecieron en la ciudad (…)

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de los que descienden las familias paceñas”, pues “con la indicación de los primeros hijos de los vecinos con la fecha de sus nacimientos, cada familia podrá fácilmente encontrar el tronco de donde procede”. Víctor Vargas Olmos, publica Personalidades en La Paz. Un homenaje al IV Centenario de la Fundación de La Paz (1948), que “en sus páginas tiene escrito glorias y heroísmos” de personalidades históricas. Julio Díaz Arguedas entrega Paceños célebres (1974), seguido de Raúl de la Quintana Condarco, con su Esbozo sobre periódicos y periodistas paceños (1988); el empresario Pedro Cáceres, publica Quién es quién en La Paz (1990), con “biografías de las personalidades más destacadas”; Rolando Costa Arduz, colaborado por cinco coautores, publicó Foro paceño del siglo XIX (1993); finalmente, Elías Blanco Mamani, regularmente engrosa su diccionario de Forjadores de la cultura boliviana, con el que sistematizó el aporte de Orureños (2006); Tarijeños (2010); Potosinos (2010); Paceños (2011), Cruceños (2012), Cochabambinos (2012) en la cultura boliviana; y Doscientos poetas paceños (2009). Llama la atención el interés de los intelectuales benianos por la labor desarrollada, a partir del clásico estudio de Manuel Limpias Saucedo, Los gobernadores de Mojos (1942), en el que confía en que “la vulgarización de los hechos de antaño tenga la virtud imponderable de despertar entre los hombres de mi tierra las ansias infinitas de trabajar, más de lo que hasta aquí se ha trabajado, por desentrañar del seno de la madre tierra los productos valiosos que harán la riqueza de sus tenedores”. Hugo Aguirre Ortiz, publica En el Beni ¿quién es quién? (1997) en seis sorprendentes tomos, con profusa información sobre “instituciones y personajes del pasado y del presente, que han contribuido con su presencia y accionar al nacimiento y consecuente desarrollo de la cultura y civilización del Beni”, buscando con ello “que cada beniano, y cada boliviano, conozca la historia de pueblos, hombres y mujeres de esta parte del país”. En la Perla del Acre, Cobija, Teddy Farrachol Arzabe, entrega su Bibliografía beniana y pandina (2006), pretendiendo “registrar lo más sobresaliente del periodismo y la literatura”, esfuerzo complementado por Oscar Jesús Ruiz Durán con Datos biográficos de los escritores en Guayaramerín (2011), “sencillo trabajo dirigido a todas las personas que de un modo u otro han contribuido y contribuyen con mucho sacrificio con la edición de sus obras literarias, para que el Beni y Bolivia toda sepa apreciar mejor a los escritores”. Osvaldo Maldonado Morató, incursiona con Apuntes biográficos para la historia de la medicina en Cochabamba (1987), tema prácticamente desconocido, con fichas redactadas a la manera de fuentes primarias, busca “exponer a quienes, cumplidos sus veinticinco a treinta años de trabajo y docencia, han sido formadores de las nuevas generaciones (y servirá para) criticar el presente”. Por su parte, Ramón Rocha Monroy, estrena su cargo de Cronista Oficial de la ciudad de Cochabamba, con Doscientos personajes cochabambinos (2010), figuras “suficientemente representativas que aportaron a que Cochabamba sea el nexo fundamental de la unidad del país”. Potosinos ilustres. Biografías breves (1987), de Wilson Mendieta Pacheco es trabajo “sencillo, pero meticuloso y, a la vez, documentado que tiene el propósito de rescatar del olvido a prominentes hijos de la Villa Imperial”. En Oruro, Marlene Durán Zuleta, ofrece Mujeres orureñas (2006), afirmando que “la memoria no puede continuar en el velo del olvido”, lo que la impulsa a biografiar a “mujeres que justifican su destino, sus torsos, sus cenizas” que “sembraron almácigos y alcanzaron la cúspide del resplandor”.

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Luego, en coautoría con Lidia Castellón de Condarco, publica su Diccionario de autores orureños (2007), “una aproximación bio-bibliográfica a los escritores nacidos en Oruro, y asimismo, a los que eligieron como residencia esta ciudad”. Santa Cruz ha mostrado su pujanza con la monumental Enciclopedia del Oriente Boliviano (2010), editada por Víctor Hugo Limpias Ortiz, por encargo del Gobierno Municipal, para conmemorar el 450 aniversario de fundación de Santa Cruz de la Sierra, “para contribuir al conocimiento y comprensión integral de la realidad integral (sic) del oriente boliviano, comprendiendo los departamentos de Santa Cruz, Beni y Pando, con 5.200 entradas, se resume la realidad histórica, y aspectos generales y particulares más relevantes”, en todos los órdenes. Por su parte, Tito Montaño Mojica, publica Hombres notables en Portachuelo. Personajes que han hecho historia (2009), “un texto de investigación dirigido a personajes que han dejado huellas profundas de bien social en la ciudad de Portachuelo”. Bernardo Trigo ha indagado sobre Tarija y sus valores humanos (1978), que recoge “las lecciones dejadas por hombres que sobresalieron por sus virtudes y talentos, desde el siglo XVI hasta el tiempo contemporáneo”. Como se puede colegir, es una tarea muy delicada la que debe asumir el compilador cuando realiza su selección biográfica, pues un Diccionario necesariamente debe ser amplio e incluyente, inclusive si se asume la metodología selectiva de identificar personalidades que han forjado el ser social y le han dado impronta al decurso boliviano. Un Diccionario es generalmente obra de largo alcance en el tiempo, muy distinto a los repertorios del tipo Quién es quién, que generalmente se actualizan periódicamente, formando mas bien un directorio. Debemos confesar que la idea de escribir un Diccionario surgió hace ya varios años, cuando publicamos Historia de la Archivística Boliviana (2006), en la que se logra identificar las bases y fundaciones de la archivística boliviana a lo largo de la historia, en los principales ámbitos de actividad del Estado (público y privado, incluyendo las de tipo eclesiástico, militar, sindical, universitario, gremial), situándola en el análisis comparativo con el desarrollo de la Archivística latinoamericana y mundial. Con Legislación Archivística de Bolivia (2007), complementamos de manera magistral la otra vertiente, la que vino esculpida por legisladores y administradores del Estado, y detrás de esas dos abstracciones, emerge con fuerza la masa humana formada por hombres y mujeres del llano. Ese objetivo se buscó también en Archivos Militares de Bolivia. Historia y tratamiento archivístico (2011), en el que se identifican a los constructores de la archivística militar. Esa trilogía nos proporcionó los elementos fundamentales para construir las bases de un Diccionario de Archivistas de Bolivia, en el que se incorporan a notables y célebres profesionales, bolivianos y extranjeros, que aportaron en temas tan diversos como la teoría científica, la planificación del servicio, las técnicas y las tecnologías, para hacer de la nuestra, una archivística moderna; y, junto a ese grupo selecto, sumamos -como paradoja de la historia- a destructores de la memoria, que han hecho los mismos esfuerzos para destruir los documentos y los archivos, quizá para no dejar huella de su actuación. Pero, definitivamente, comprendemos que no cabría posibilidad alguna de ostentar nuestros recursos

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documentales -que soportaron el paso de los siglos y sobrevivieron, digamos, casi milagrosamente a los embates destructivos- sin los ejércitos anónimos de archivistas, profesionales o empíricos, que entregaron su juventud, expusieron la vida misma, pues la han gastado generosamente, para construir, sistematizar, preservar y difundir el mayor legado de la bolivianidad: la Memoria Administrativa e Histórica del Estado. El insigne Gabriel René Moreno, es el mejor ejemplo de lo que anotamos. En Archivo de Mojos y Chiquitos, denuncia “el descabalamiento y dispersión, decretados y consumados por el Excelentísimo Gobierno de Bolivia el año 1837”, circunstancia en la que el Archivo fue retirado “de su centro por obra de autoridad y ha venido a parar a manos cuidadosas por obra de la misericordia”. Cuando tuvo en su poder los 41 legajos del Archivo, trabajó tres horas al día y aplicando su curioso “método histórico-cronológico de títulos”, los catalogó y ordenó, vaciando su contenido en 631 papeletas, los mandó transcribir a Enrique Barrenechea, a quien contrató con su propio peculio, para remitir el monumental catálogo resultante a la imprenta de Nicolás Anrique, en Valparaíso, con un presupuesto de la Legación boliviana, que se redujo considerablemente por una huelga de tipógrafos, provocando un déficit de 390 pesos, que el orgulloso polígrafo decidió cubrir. Al término de esta apasionante aventura, contrató a Zenobio Moreno para la encuadernación en pasta de los 41 volúmenes y los entregó el Archivo Nacional de Bolivia, con su catálogo impreso en 500 ejemplares. Cerrando la forzada digresión, confieso que fue tarea compleja la de identificar a los Guardianes de la Memoria, es decir a custodios que siempre fueron marginados en el recuento histórico, considerados meros individuos y no actores protagónicos de la Historia, y por ello, irrelevantes, lo que explica su ausencia generalizada en la casi totalidad de diccionarios, salvo esfuerzos aislados como el de Guillermo Lora. El Diccionario de Archivistas de Bolivia, tiene el propósito de recuperar tanto los aportes de célebres archivistas como los de simples trabajadores de archivo -hombres y mujeres- injustamente invisibilizados. Es una visión incluyente que considera a bolivianos y extranjeros que han aportado -y aun lo hacen- al desarrollo archivístico de Bolivia. El lector estará tentado de cuestionar si todos los que están registrados en el Diccionario realmente lo merecen, acostumbrados como estamos a honrar a prohombres y grandes personalidades, que han debido protagonizar actos heroicos para poder ingresar a la Historia. Para nosotros, un funcionario que ha entregado su vida, desde la preciada juventud hasta la jubilación, en custodiar un archivo, es ya digno de figurar en el Diccionario. Por esa misma senda marchará también el joven profesional que incursiona en esta labor, tan anodina para el común, tan ajena, tan distante, tan desconocida, tan árida, incluso tan despreciada. Constituyen la base social de la archivística.

III. Bruno Groppo y el enfoque sociobiográfico de la Historia El Diccionario de Archivistas de Bolivia adscribe los planteamientos del enfoque sociobiográfico que emerge progresivamente, en el campo científico como un método

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original de la historia social, como lo explica el Prof. Bruno Groppo, investigador del Centre d’Histoire Sociale du XXe Siècle (adscrito al Consejo Nacional de Investigación Científica de Francia y a la Université de Paris I Panthéon-Sorbonne), en su obra “Les dictionnaires biographiques du mouvement ouvrier: analyse comparée d’un genre scientifique” (en prensa), que compartió con nosotros en abril de este año. El Prof. Groppo sostiene que el enfoque sociobiográfico “no permaneció confinado a la historia social y de la clase trabajadora, sino abordó también otros ámbitos, vinculados o no con el movimiento obrero”. Es el caso, continúa, de varios diccionarios biográficos o enciclopedias “consagrados a la izquierda, a las mujeres (generalmente infra representadas en los diccionarios del movimiento obrero) o a grupos particulares (por ejemplo, los voluntarios de las brigadas internacionalistas en España)”. Concluye afirmando que “esta enumeración, aunque muy incompleta, muestra [que] el enfoque sociobiográfico priorizó un interés cada vez más profundo por el individuo, la biografía, la microhistoria, la historia de la vida diaria”. Cita como pionera en esta labor al Diccionario Biográfico del Movimiento Obrero Francés (DBMOF), llamado también el Maitron -por el nombre de Jean Maitron, su iniciador- “el ejemplo seguramente más significativo de lo que se convirtió en una clase científica de pleno derecho y una manera original de abordar la historia de los movimientos sociales”. Como señala, Groppo, el Maitrón desempeñó un papel de precursor, se convirtió en una referencia importante y una fuente de inspiración para otros diccionarios biográficos. En otras palabras, el enfoque sociobiográfico “contribuyó a superar la historiografía tradicional del movimiento obrero, que se concentraba sobre las organizaciones, las ideologías y los dirigentes”. Su gran mérito reside en que “al interesarse por el papel de los militantes ‘indeterminados’, permitió entre otras cosas reconstruir, sobre la base de los itinerarios individuales, el perfil de distintas generaciones del movimiento obrero”. Finalmente, señala que “el interés por el enfoque sociobiográfico se vincula en gran medida a los cambios que se producen en un momento histórico de la labour history, con el paso de la historiografía institucional político-ideológica a una historia social y cultural de los trabajadores y del mundo del trabajo, en particular bajo la influencia de historiadores marxistas ingleses como Edward Thompson y Eric Hobsbawm”. Por ello, el Diccionario de Archivistas de Bolivia, registra a profesionales e intelectuales de notable trayectoria archivística, junto a la base social de la archivística boliviana, la que en otras circunstancias no podría aparecer en un Diccionario, por eso es importante aclarar que no es un directorio de profesionales, sino un diccionario biográfico que incluye a trabajadores de archivo, sin importar si tuvieren producción intelectual, alcanzaren grados académicos o descollaren en su ámbito laboral. Nuestra recopilación incluye una selecta relación de instituciones y acciones archivística, de la base social que han marcado con su impronta el desarrollo de la archivística boliviana. Un centro de archivo viene a ser la expresión más sublime de la labor del archivista, se lo debe considerar como una especie de ‘hijo jurídico’ de aquel. Muchas instituciones nacen de forma casi natural y por ello no cuentan con una norma legal que dé razón de su existencia. En cambio, otros surgen con el beneplácito de sus autoridades, en medio de actos públicos para dar a conocer su existencia, puede ser un Archivo con un edificio monumental, con todos los recursos humanos,

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científicos y tecnológicos, o uno muy modesto, con lo esencial para desenvolverse. Unos y otros, tienen el mismo grado de importancia, pues los registros y documentos que conservan son cruciales para la sociedad y los ciudadanos, a los que sirven.

IV. Los archiveros del incario Como toda ciencia, la Archivística tiene sus precursores, en nuestro caso está conformado por una pléyade de cronistas e historiadores tempranos, como fueron los archivistas incaicos, que antecedieron a los cronistas españoles. La historia temprana de Abyayala o América se caracterizó por la construcción de una formidable memoria administrativa e histórica, que ha alcanzado notable desarrollo en Mesoamérica y Los Andes. Ya en esa época encontramos, en el caso particular de la experiencia del Qollasuyo, precursores de la archivística boliviana. Nos referimos a los archiveros del inca, quipucamayoc y amautas. Los primeros lograron desarrollar una amplia y sólida infraestructura documentaria y archivística que atesoraban los quipus, aquellas cuerdecillas de distintos colores, grosores, fibras y tamaños, con los que el Inca lograba un control preciso de la información acerca de los negocios del Imperio, complementado por una impresionante red vial incaica, el Qhapajñan, que asombró a los primeros españoles que invadieron, conquistaron y colonizaron nuestras tierras por quinientos años. El Inca conquistó un vasto territorio en base a alianzas interétnicas, doblegando naciones indígenas, a las que logró confederar para levantar un imperio. Pero no es menos cierto que fue el poder de la información lo que le facilitó la tarea. Uno de los historiadores incas llegó a decir: “Qué sería si dominaran la palabra, si con el quipo ni un par de alpargatas puede esconderse a los ojos del Inca”. La mayor parte de los archiveros e historiadores del incario han quedado hasta hoy en la oscuridad del anonimato, pues la historia no ha sido generosa para rescatar sus nombres del olvido. Guamán Poma de Ayala nos ha hecho saber, generosamente, que a esta noble labor estaban destinados sabios de la sexta y séptima calle, responsables de custodiar la memoria administrativa e histórica.

V. Los archiveros de la colonia El quipu sobrepasó el límite temporal de la era prehispánica, pues está documentado su uso en la época colonial, en la que muchos caciques presentaron quipus como pruebas de su linaje, ante las cortes de esa época, para garantizar sus derechos. El régimen hispano ordenó que se transcribieran los quipos. Muchos ex funcionarios del Incario fueron sometidos a largas sesiones para descifrar el contenido de los archivos incas. Los españoles levantaron minuciosamente datos estadísticos, demográficos y administrativos, que eran de extrema utilidad para conocer el potencial de las regiones sometidas a sangre y fuego. La mismísima crónica española en gran medida contiene los secretos del imperio inca, extraídos desde la mente de los amautas. Una vez que se recogió la información de valor estratégico, se ordenó la destrucción de los quipus en todo el virreinato del Perú. Lo propio sucedió en Nueva España, en la que se destruyeron por fuego los códices mayas y aztecas.

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Después de esa insana acción de destrucción de la memoria Inca, reinó la escritura y se impuso el papel sellado español en las colonias del Imperio de Carlos V. Entre los precursores citamos al mismísimo Virrey Francisco de Toledo, el Solón de América, quien dictó la primera ordenanza para la creación del Archivo de La Plata. Destella con luz propia el Inca Garcilaso de la Vega, historiador peruano, quien nos mostró los alcances del sistema del quipu. Acompaña en esta dignidad histórica el célebre Pedro de Cieza de León, quizá uno de los más acuciosos soldados que recogieron la memoria de la conquista del Perú, luego de la invasión y anterior a la fase de colonización. Consolidado el Estado Imperial Hispano, la administración fue honrada con ilustres historiadores de la talla de Luis Capoche y Bartolomé Arzáns Orsúa y Vela. Es la época de los notarios y escribanos, estos últimos celosos custodios de la memoria de las ciudades coloniales, que acompañaron al fiero capitán y el cura fanatizado. Azebedo, fue el primero en guardar con su vida las actas de fundación de La Paz. Le siguieron numerosos escribanos, de los que tenemos sus nombres consignados en los infolios del archivo del cabildo. Algunos han entrado a la historia por su conducta aleve, otros como verdaderos héroes, pues de ellos dependía la seguridad jurídica de los ayuntamientos. Los hemos reunido en esta obra bajo el título genérico de “Archiveros de la colonia”.

VI. Los archiveros militares en la Guerra de la Independencia La emancipación de las antiguas colonias tuvo su epicentro en la Audiencia Real de los Charcas (antiguo Territorio desprendido del Virreinato del Perú para anexarlo al de La Plata, en 1776). Los prolegómenos de la independencia nos muestra la bravura de los ejércitos indios de Julián Apaza, Túpac Katari, que estacionó tres formidables ejércitos en El Alto, Pampahasi y Quilliquilli , formando un séquito de leales en los que no faltó el Escribano mestizo, que fue su secretario y le ordenaba su correspondencia. Ya en el siglo XIX, el 25 de mayo de 1809, un grupo de patriotas apresó al presidente de la Audiencia, y el 16 de julio, Pedro Domingo Murillo y sus conjurados, tomaron la ciudad de La Paz para proclamar la independencia de España. Paradójicamente, 16 años más tarde fue la última en alcanzar la independencia. Valerosos patriotas no sólo se sumaron a las numerosas batallas por la libertad, sino que cuidaron los archivos. Hemos exhumado los nombres de valientes guerreros que protagonizaron hazañas archivísticas como Juan Manuel Cáceres, que no sólo fue Escribano y archivero de la Junta Tuitiva, sino que organizó una Compañía de Milicias de Escribanos. Pos su parte, Gregorio Lanza y Buenaventura Bueno, oyendo el clamor de la población paceña, no dudaron en mandar a seleccionar documentos de hipotecas, los que destruyeron por fuego. En esa dramática época de la historia patria, encontramos militares que arriesgaron la vida para proteger los archivos de campaña, entre ellos la egregia figura de Florencio O’Leary, bravo y paradigmático militar que a tiempo de combatir custodiaba el archivo de campaña aun a riesgo de su existencia. Analizamos también la controversial conducta de los próceres de la Independencia como el Libertador Bolívar y el General San Martín, que comulgan con una tendencia incomprensible

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de destruir correspondencia generada al fragor del combate. Simón Bolívar ordenó que se destruyera su correspondencia personal, señalando su última voluntad en la cláusula 9ª de su testamento a su albacea, quien felizmente para la historia, desoyó el pedido del Libertador. Por su parte, el General José de San Martín no delegaba a ninguno la depuración de su archivo, pues se encargaba en la tienda de campaña personalmente de seleccionar lo que luego incineraría, para no dejar huella de una actuación castrense determinada. Recuperamos también la legendaria y solitaria experiencia de la primera mujer archivista de Latinoamérica que sirvió en el Ejército Libertador al mando de Bolívar, custodiando su archivo secreto. Era Manuelita Sáenz, quien fue incorporada a la caballería patriota con el grado de Húsar. La época de la guerra de la Independencia, tan álgida y dinámica, significó que se perdiera valiosa documentación colonial, pero sobrevivieron a la acción depredadora testimonios como el de José Santos Vargas, que dejó su diario a la posteridad, por el cual conocemos la sufrida experiencia de las guerrillas. Actualmente existen cuatro archivos militares institucionalizados, uno organizado por el Ejército, pero de carácter general de las Fuerzas Armadas del Estado, dos en el ámbito del Ministerio de Defensa Nacional y uno en las Fuerza Aérea Boliviana, que organizan sus fondos documentales respetando los principios archivísticos y prestan servicios a sus instituciones, a ciudadanos y a investigadores, en base a sus reglamentos.

VII. La República: el rol de los presidentes Satisfactorio es el hecho de incorporar la memoria de varios ex presidentes de la República, que se han hecho acreedores de este honor por su labor en beneficio de los archivos. Antonio José de Sucre, el joven general, lugarteniente de Bolívar, vencedor de la Batalla de Ayacucho (9 diciembre 1824), asumió el control de la República de Bolívar (como zalameramente nominaron a esta tierra los doctores de Charcas), bajo férreo control de Casimiro Olañeta. Sucre dictó los primeros decretos para poner orden a la gestión documental y se preocupó personalmente en verificar el estado en que se encontraban los archivos de la incipiente república. La Era republicana se estrena con la organización administrativa del nuevo Estado. Los primeros decretos determinan la creación de tres ministerios y vemos con sorpresa que entre el personal designado figuran ya los oficiales archiveros. José María Urcullo, José Ignacio de Sanjinés y Ángel Mariano Moscoso, tienen el mérito de haber sido los primeros archiveros del poder legislativo. Más tarde, el presidente José Ballivián promulgó la ley de acceso a los archivos públicos, suficiente mérito para pasar a la posteridad, pues tuvo un atisbo de modernidad en una época en que se inculcaban los más elementales derechos humanos. La historia ha sido ingrata para identificar al parlamentario que redactó el proyecto del código de procederes, del mercantil y del criminal (penal) entre 1831 y 1835, donde subayece el concepto de documento auténtico y se señala el procedimiento fedatario; asimismo con el que elaboró el proyecto de ley del Notariado (1858), magnífico cuerpo normativo que trae el primer reglamento de archivos de la República, vigente hoy en día. Ante este

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vacío, identificamos a los presidentes que promulgaron esas leyes, Andrés de Santa Cruz y José María Linares. En el siglo XX, José Gutiérrez Guerra aprobó el reglamento del Ministerio de Guerra (1919), Bautista Saavedra dictó el Reglamento de Bibliotecas y Archivos, que incluye las funciones del jefe de archivo, correspondencia e informaciones (1923), en 1938 Busch promulgó la CPE que incorpora el régimen cultural y la defensa y salvaguarda del patrimonio cultural de la Nación, y junto a ellos un régimen proteccionista de los documentos históricos; en 1940, el Gral. Enrique Peñaranda puso en vigencia la norma documentaria y bibliográfica; en 1961, Víctor Paz Estenssoro dictó una serie de normas reglamentarias del régimen cultural y ordenó la transferencia de documentos históricos con antigüedad superior a los 35 años al Archivo Nacional de Bolivia; en 1976, el Gral. Bánzer declaró de utilidad nacional a las documentaciones administrativas inactivas prohibiendo su destrucción; Paz Estenssoro ratificó su alcance en 1989 por medio de tres decretos supremos, que sintetizan la genialidad de Gunnar Mendoza de incorporar la teoría archivística por medio de normas jurídicoadministrativas; en 1994, Gonzalo Sánchez de Lozada dictó el decreto supremo que establece el Reglamento Común de Procedimientos que ordena el establecimiento de archivos y bibliotecas en los ministerios del poder ejecutivo; el 2004 el presidente Carlos D. Mesa, promulgó el DS 27490 que autoriza la creación del Archivo Histórico de la Minería Nacional e institucionaliza el enfoque sistémico, iniciando así una nueva era en la Archivística nacional. El presidente Evo Morales Ayma tiene el mérito de haber promulgado la Constitución Política del Estado Plurinacional que incorpora un nuevo paradigma para la gestión documental, la obligación del servidor público de custodiar los archivos, el régimen de acceso libre a la información público y su contrapeso, el régimen de la reserva, finalmente, la definición de competencias para la creación, sostenimiento y desarrollo de archivos del nivel central del Estado, del nivel departamental y del nivel municipal, aspectos que complementan el antiguo régimen patrimonial que viene repitiéndose desde 1938.

VIII. El aporte de los intelectuales El siglo XIX, un puñado de intelectuales, papelistas y bibliógrafos pioneros aportaron a la histórica aventura archivística de esa época, entre ellos Nicolás Acosta, José Rosendo Gutiérrez y Gabriel René Moreno. La memoria recupera la gesta de los historiadores que muy temprano acometieron la noble tarea de salvar los testimonios de nuestra experiencia histórica, como es el sublime recuerdo de Gabriel René Moreno, a quien la historia le reconoce como “El Príncipe de las Letras” y nosotros como el artífice de la creación del Archivo Nacional de Bolivia, hecho que destacó ya, René Arze. Sin duda alguna, el firmamento archivístico de Bolivia se ilumina con la figura descollante del insigne Moreno, quien salva personalmente los archivos de la Audiencia Real de los Charcas y de la incipiente República, proponiendo un magistral plan de siete puntos que culminó en el proyecto presentado por Demetrio Calvimontes, promulgado como ley de creación del Archivo General de la Nación el 18 de octubre de 1883. La clase política declaró a Gabriel René Moreno “Traidor a la Patria”, a raíz de su actuación peculiar en la Guerra del Pacífico (1879), como mensajero del gobierno

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de Chile, con la misión de entregar las bases de un entendimiento que la historia denominó como “Las Bases Chilenas”, al presidente Hilarión Daza. A pesar del calificativo que lo deshonró, Moreno nunca dejó su misión autoimpuesta de rescatar lo esencial de la memoria intelectual e institucional de la Nación, que había sido condenada a la destrucción inminente. A la postre, le cupo el gran honor de dirigir el flamante Archivo General de la Nación al ingeniero alemán Ernesto Otto Rück, notable papelista y reputado bibliógrafo que atesoró un caudal de fuentes primarias del más alto valor, entre ellos los escritos de Luis Capoche, Bartolomé Arzáns de Orsúa y Vela, el Álbum de Melchor María Mercado, el Diario del Tambor Mayor Vargas, que uno a uno fue publicando Gunnar Mendoza.

IX. Las archivistas mujeres El Diccionario registra un grupo de mujeres que crece a diario, dándole a la profesión archivista un sello femenino, quizá no en el nivel de Enfermería o Trabajo Social, donde es predominante la presencia de las mujeres. En los primeros años de la Carrera de Bibliotecología se observa ya un número mayor de mujeres respecto de los varones. Es importante señalar, sin embargo que el oficio fue detentado por centurias por el sexo masculino. Es así que los quipucamayoc o los escribanos y de la colonia y los secretarios y archivistas del siglo XIX eran enteramente varones. Eso explica que en nuestro registro correspondiente al siglo XIX, tan sólo se identifiquen a dos mujeres, ambas temerarias y patriotas: Manuelita Saénz, la archivera del Libertador S. Bolívar, y Juana Azurduy de Padilla, que guardó con fervor las cartas de su esposo y las que ella cruzó con los generales argentinos. En el siglo XX van apareciendo, de manera paulatina, las figuras de mujeres, entre ellas la archivista Zaida Zárate que escribió el reglamento de archivos de la Patiño Mines. Hoy el firmamento archivístico boliviano tiene presencia femenina a nivel nacional. Muchas mujeres dirigen o tienen participación decisiva en archivos de Bolivia, entre ellas Marcela Inch, reemplazada recientemente por Ana María Lema (ABNB), Mary Money (Archivo de La Paz), Raquel Lara (Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores), Marisol Condori (Archivo del Ministerio de Justicia), Miriam Cuevas (Banco Interamericano de Desarrollo-Bolivia), Ingrid Olivares (Ministerio de Agricultura y Tierras), Carola Campo (Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia). Del total de entradas, el 22% corresponde a mujeres, que aparecen esporádicamente desde los años 40 y con identidad propia a partir de la segunda mitad del siglo XX.

X. Los archivistas profesionales Las carreras universitarias, donde se forman los profesionales de Historia y de Bibliotecología, a su turno incorporaron en sus mallas curriculares, asignaturas como Paleografía, Fuentes para la Historia de Bolivia, Archivística General, Gestión documental, Nuevas tecnologías, Organización de Archivos administrativos, Descripción y Conservación. Al paradigmático Alberto Crespo Rodas le corresponde el honor de haber sido el primer historiador profesional boliviano, titulado en la Universidad Nacional de San Marcos (Lima, Perú), y a Luis Verástegui el de haber sido el primer

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técnico boliviano titulado en Archivística, Licenciado en Bibliotecología con cursos en Museología en la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina. Una primera generación de historiadores tomó la posta. Imbuidos de nobles ideales, recorrieron el territorio nacional levantando inventarios de archivos parroquiales perdidos en la inmensa geografía rural y urbana de nuestras ciudades-aldea de esa época, entre ellos Fernando Cajías, Clara López Beltrán, Florencia Ballivián, Jorge Cortés, Martha Paredes, Isabel Alípaz, René Arze, y entre ellos, la bibliotecóloga Norah Camberos, que resguardó durante años el Archivo Histórico de la Casa Suárez en Guayaramerín, en el noreste de Bolivia. La Sociedad Boliviana de la Historia incluyó en sus congresos anuales, un marcado interés por los archivos de diversas regiones, como el oriente (Archivos de las Misiones) y occidente (Archivos de Oruro). La Carrera de Historia se convirtió en la meca de la archivística histórica boliviana. Convocó cursos de alto nivel en el que participaron Manuel Vásquez, Gunnar Mendoza y Aurelio Tanodi. Los miembros de la Sociedad Boliviana de la Historia asesoraron a la primera Asociación de Archivistas de La Paz, que se formó en 1976, de efímera existencia. En Potosí, descolló la Casa Nacional de Moneda, donde trabajaron codo a codo Guillermo Ovando Sanz y Mario Chacón Torres, asesorados desde Sucre por Gunnar Mendoza. Alberto Crespo Rodas y un grupo de estudiantes, escribieron una de las páginas más bellas de la archivística, al fundar el Archivo de La Paz (1971), que recogió los saldos de la documentación colonial que había sido condenada a la destrucción inminente por los jerarcas del distrito judicial de La Paz. Luis Verástegui fue el primer boliviano con título de técnico archivísta, extendido por la Universidad de Córdoba, impartiendo docencia en la UMSA. Fue fundador de la Carrera de Bibliotecología y uno de los primeros profesores de Archivística en esa carrera. La primera Archivista profesional graduada con esa mención, de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información de la Universidad Mayor de San Andrés fue Flora Rosso, Supervisora de Kardex de la UMSA. A ella se sumaron María Antonieta Cajías, Judith Ozuna, Carola Campos Lora, Ludmila Zeballos, Javier Saravia Tapia, Liz Quiñones, entre otros. Simón Cuba, fue el primer Magíster en Archivística, con estudios en la Universidad Internacional de Andalucía-La Rábida (Huelva, España) y Carola Campos Lora, la primera Master en la misma universidad.

XI. Los becarios El Archivo de La Paz envió jóvenes historiadores a formarse en los cursos especiales de capacitación que se habían creado por recomendación de la Primera Reunión Internacional de Archivos, realizada en Washington D.C. en 1961, al que asistieron Gunnar Mendoza, Guillermo Ovando Sanz y Mario Chacón Torres. En Madrid, Vicenta Cortés Alonso había logrado arrancar con éxito los Cursos de Organización y Administración de Archivos Históricos, que se impartieron en la Escuela Nacional de Documentalistas adscrita a la Biblioteca Nacional (Madrid, España). Por su parte, Aurelio Tanodi, fundó el Centro Interamericano de Desarrollo de los Archivos en Córdoba, Argentina, donde impulsó cursos

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de Organización de Archivos Administrativos. Contó para este propósito con el apoyo de la Organización de Estados Americanos, gracias también a Celso Rodríguez, que desde Washington apoyó incondicionalmente el desarrollo de los archivos de Latinoamérica. Los primeros en participar en esos cursos (1974) fueron René Arze y Elvira Cárdenas por Bolivia y César Gutiérrez por Perú. Siguieron esa senda un grupo de archiveros que tomaron a su cargo los más importantes repositorios del país. Una nueva generación de historiadores y bibliotecarios se formó posteriormente en los cursos impartidos por el Escuela Iberoamericana de Archivos, esta vez financiados íntegramente por España.

XII. Los archiveros religiosos y empíricos Sobrecogen las vicisitudes que tuvieron que enfrentar temerarios curas franciscanos como Manuel Mingo, el primer archivista del Archivo Conventual de San Francisco de Tarija, y el tarijeño Pedro Corvera, su primer catalogador, o Gerardo Maldini, quien ya en el siglo XX completó esa tarea. Por su parte, en La Paz, Felipe López Menéndez recogió y sistematizó los papeles del Arzobispado, con el que formó un formidable repositorio. Sitial especial tiene en nuestro panteón el senador Moisés Ascarrunz, fundador de la Biblioteca del Congreso en 1911, lo cual debe considerarse como una hazaña sin precedentes, para dotar de una biblioteca digna al Poder Legislativo que había quedado sin recursos bibliográficos a raíz de la Guerra Civil de 1898, pues a tiempo de trasladar el Poder Ejecutivo y Legislativo a La Paz, dejó atrás, en Sucre, al poder Judicial y al Archivo Nacional de Bolivia. Emulando el ejemplo temprano de Moreno, Gunnar Mendoza (Sucre), Alberto Crespo Rodas (La Paz), Armando Alba (Potosí), José Macedonio Urquidi (Cochabamba) y Hernando Sanabria Fernández (Santa Cruz), protagonizaron sus propias batallas a favor del conservacionismo patrimonial. El más paradigmático es Gunnar Mendoza, que custodió la memoria social por medio siglo (1944-1994), apoyado por historiadores de la talla de Lewis Hanke y el gran archivista Theodore Schellenberg, de quien fue Mendoza su discípulo. Miembros de la sociedad civil también aportaron con su esfuerzo en la tenaz lucha para conservar la memoria social. Supieron seguir el ejemplo de los historiadores un grupo de archiveros mineros, quienes bajo la dirección de Edgar “Huracán” Ramírez, han protagonizado la hazaña más grande de salvataje del siglo XXI, de la memoria histórica minera de destrucción inminente, los invaluables archivos de la minería nacional, tanto en las ciudades de El Alto, Potosí y Oruro, como de los centros mineros de Viloco, Colquiri, Avicaya, Catavi, Santa Fe, Bolívar, Huanuni, centros mineros que fueron cerrados a partir de 1985, condenando a los documentos a la destrucción, ante la mirada impasible de autoridades políticas y técnicas que no hicieron nada para evitar el desastre, en su insano afán de sepultar el Capitalismo de Estado con todo y su memoria. La mayoría de los archivos administrativos tenía -y tiene aún- entre sus funcionarios a los denominados ‘archivistas idóneos’, que por distintas razones no pudieron formarse en la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz. Son trabajadores a los que se les ve con cierto desdén, por encima del hombro, por el

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simple hecho de “no ser del Área”, sin considerar que mientras más alejada esté una ciudad o centro poblado de la sede de gobierno, existirá mayor número de empíricos o idóneos. Pero estos trabajadores, injustamente vilipendiados, han dado lo mejor de su ser a los archivos y los documentos, siendo muchos de ellos guardianes y custodios que luchan sin cuartel por preservar esa herencia cultural. Aquellos y éstos abrieron la senda a una generación de jóvenes profesionales que se forman en las aulas universitarias para aplicar la teoría y la ciencia archivística a nuestra praxis.

XIII. Los extranjeros El Diccionario incluye la memoria de los archiveros extranjeros, pues como Bolivia no es una isla, un puñado de aquellos aportó -y aún lo hace- con su experiencia, conocimientos y concurso generoso a la construcción de la archivística boliviana y a la organización de los Archivos. Son pocos, ciertamente, e incluso un par no llegó a conocer el país, pero en este caso debido a la notable influencia de su obra intelectual, convertida en manuales de obligada consulta en las aulas universitarias y en los Centros de Archivo, amerita plenamente su inclusión. Entre los extranjeros que han trabajado en Bolivia citamos a Ernest O. Rück, Ingeniero prusiano que llegó a ser el primer director del Archivo General de la Nación a fines del siglo XIX. Están los argentinos Aurelio Tanoni, que desde Córdoba apoyó al desarrollo del Archivo de Santa Cruz de la Sierra y Celso Rodríguez, un verdadero paladín que apostó incondicionalmente por Bolivia desde su cuartel general en la OEA en Washington. Los franceses Marie Helmer, quien estudió de forma primigenia los invaluables fondos coloniales de Potosí y Thierry Saignes, que hurgó en archivos españoles para hallar piezas maestras de la historia colonial boliviana, levantó índices de archivos nunca antes descritos. Lewis Hanke, director de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos, trabajó con remarcable consecuencia con Gunnar Mendoza en la labor editorial de obras capitales de la archivística y la historiografía colonial; Jeroen Strengers, voluntario holandés organizó los archivos de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia; José Miguel López Villalba, autor de la monumental trascripción paleográfica de los Acuerdos de la Real Audiencia de La Plata (1561-1568), enamorado de Bolivia, va y viene impartiendo su amplio conocimiento sobre paleografía del documento indiano, en La Paz y Sucre; el entrañable amigo del Perú, César Gutiérrez Muñoz, quien visita de forma intermitente los archivos de nuestro país, “cuando quiere, cuando puede y sobre todo cuando debe”, a quien nunca terminaremos de agradecer por su aporte sustantivo al desarrollo de la archivística latinoamericana. Sin duda el ejemplo más significativo es Theodore R. Schellenberg, el padre de la Archivística Moderna mundial, Archivista de los Estados Unidos, organizador de la Primera Reunión Interamericana de Archivos, semilla para muchos emprendimientos de la archivística Iberoamericana, a la que asistieron como delegados de Bolivia Gunnar Mendoza, Mario Chacón Torres y Guillermo Ovando Sanz. Subyugado por la fama del cerro rico, Schellenberg visitó Potosí en 1961, dictando conferencias públicas para asombro de propios y extraños. Otros no conocieron Bolivia, como Vicenta Cortés Alonso, pionera de los cursos de formación para archivistas

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latinoamericanos en España; Antonia Heredia quien tomó la posta y coordina la Maestría de Archivística en la Universidad Internacional de Andalucía en La Rábida (Huelva), donde se forman los profesionales bolivianos; Dan Hazen, quien desde Harvard apoya generosamente con recursos económicos a la descripción y digitalización de archivos históricos, como el Archivo de La Paz en el centro del poder político, o el Archivo Regional de Tupiza, en la periferia. Menos conocidos son Liston Fox, de la Universidad de Tennesse, quien llegó al país en 1957 para impartir cursos de Archivo, como parte de la Misión de cooperación de esa Universidad; y la Dra. Silvia Schenkolewski, enviada por el gobierno de Israel e impartir cursos de Organización de Archivos en la ciudad de Sucre, en 1993, como parte de una gira por Latinoamérica.

XIV. Acciones de los archivistas El lector podrá apreciar que el Diccionario le ha dedicado lugar preponderante a las acciones de los archivistas, esenciales para comprender el actual desarrollo alcanzado en el país. Estas acciones se expresan en las reuniones técnicas de consulta (1979-1984), congresos nacionales y departamentales, resoluciones de convenciones y congresos internacionales, tales como la Declaración de Principios de la Primera Reunión Interamericana de Archivos (1961), la Carta Americana de Archivos (1972), la Declaración de Principios de los Archivistas de Bolivia (1982), el Código de Ética del Archivista (1996) y la Declaración Universal de los Archivos (2010). Estos instrumentos esenciales ayudarán a los archivistas a comprender mejor la importancia de nuestro trabajo y la obligación que tenemos de servir a las instituciones de las que dependemos, pero también a los investigadores y a la sociedad, que han depositado su confianza en nuestra labor. La expresión más significativa que corona los esfuerzos de las acciones de los archivistas se plasma en la creación de los centros de archivo e instituciones de enseñanza superior archivística. Hemos incorporado a una parte representativa de los mismos, que con su trayectoria se convierten en hitos y ejemplos que debemos emular. Como es obvio, no es objetivo del Diccionario, incluir la totalidad de centros de archivo, que es muy grande a nivel nacional, pues esa es materia de una Guía o Directorio de Archivos de Bolivia, tarea pendiente de realizar. Finalmente, las acciones se expresan en una ya extensa producción intelectual de los archivistas, en cuyo caso debidamente documentada y verificada, se han incluido las referencias al pie de cada entrada con el título de Publicaciones Archivísticas, desde artículos hasta monografías -reiterando, publicadas o impresas-insumo básico para una Bibliografía Archivística Boliviana, proyecto que se halla en pleno desarrollo, desde hace tres años, la que, junto a Gonzalo Molina Echeverría, pensamos publicar a futuro. En algunos casos que ameritan, se decidió incluir la totalidad de producción intelectual (no sólo de la especializada archivística) de los biografiados.

XV. Los destructores de la memoria Este panorama tiene como contrapartida la ingrata memoria de los destructores y depredadores de los archivos, que se caracterizan también por su noble prosapia,

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siendo muchos reputados intelectuales, como Alcides d’Orbigny, que no tuvo reparos en llevarse como “regalo” las Actas Capitulares de La Paz correspondientes al siglo XVI. Investigadores prestigiosos a los que se tuvo que declarar “non gratos” vetándoles el acceso a los depósitos de archivos históricos. Custodios y directores fueron acusados de sustraer selectivamente valiosos documentos. A la lista se suman incluso presidentes de la República, pues dos de ellos autorizaron la destrucción de archivos, otro que trató de subastar el valioso diario del guerrillero Ernesto ‘Che’ Guevara y que hoy por ese y otros delitos de lesa humanidad, purga la pena capital. Ministros de Estado, una alta autoridad de la Corte Superior del Distrito Judicial de Tarija, políticos y burócratas, que destruyeron, subastaron documentos valiosos de los archivos históricos, o se llevaron documentos desde los archivos, para usarlos en investigaciones, pero que habiendo concluido los estudios, no los restituyeron. La violencia política desencadenó actos de destrucción masiva de archivos. El 12 de febrero de 2003, grupos sociales tomaron con violencia instituciones símbolos del poder, quemando sus archivos y bibliotecas. El 8 septiembre de 2008, en medio de la violencia política desatada, grupos opositores a la Asamblea Constituyente, planificaron la toma violenta de instituciones estatales en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, quemando sus archivos. Cuando este Diccionario ya estaba concluido, un grupo de miembros de baja graduación de la Policía Nacional, planificaron la toma violenta de las instalaciones de la Dirección General de Investigación Interna de la Policía, para destruir por fuego el Archivo del Tribunal Disciplinario de la Policía Nacional la mañana del 22 de junio de 2012. Forman parte de lo que la historiografía especializada bautizó como Biblioclastas y Memoricidas (destructores de libros y documentos), que en conjunto han provocado más daños al patrimonio documental del Estado, que todos los factores y vectores de destrucción, durante el proceso histórico. Al respecto, reflexionando sobre este mal endémico, uno de esos archivistas empíricos (‘idóneos’ los llaman) nos decía: “Habrá que levantar dos murales en el ingreso de los archivos históricos. En un costado estarán las figuras señeras de aquellos que han dado la vida para salvar los documentos, y en el otro los que con similar denuedo han dedicado todo su esfuerzo y los medios a su alcance, para sustraerlos o destruirlos”.

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A ABASCAL Y SOUSA, JOSÉ FERNANDO DE

(Oviedo, 30 de mayo de 1743. † Madrid, 31 de julio de 1821) Noble, militar y político español. Mariscal de Campo. Ingresó en el Arma de Infantería, integró la Orden de Santiago (1795) y la de Carlos III. Combatió en Argel y los campos del Rosellón. Sirvió en Santa Catarina, la Colonia del Sacramento, Santiago, La Habana (1796) y Guadalajara. Trigésimo quinto Virrey del Perú (18061816) y primer Marqués de la Concordia Española en el Perú. Fue un bastión del legalismo absolutista. Nombrado Virrey del Río de la Plata (1804), sin tomar posesión del cargo, pues fue designado Virrey del Perú, cargo que tampoco pudo desempeñar hasta 1806, debido a que fue apresado por los ingleses y obligado a realizar un largo periplo por Veracruz, La Habana, las Azores y Lisboa. Luego hizo el trayecto de 3.500 kilómetros desde Sacramento a Lima. Su gestión virreinal se centró en asuntos de salubridad pública, cultura y defensa. Creó numerosas escuelas taller, y, con la colaboración del pintor José del Pozo, creó la Real Escuela de Pintura de Lima. Auxilió a la expedición del doctor José Salvany y Lleopart, con el apoyo del protomédico Hipólito Unanue, para la vacunación antivariólica de los súbditos peruanos, que llegó a Cochabamba. Creó, en los extramuros de Lima, un cementerio, con el sostén del alto clero limeño así como del colegio médico; creó el Colegio de Medicina y el Jardín Botánico (dotado de claustro de profesores, biblioteca, salas de prácticas, etc.) para la formación de galenos y especialistas. Dio empuje a los colegios de San Pablo y del Cercado para la instrucción de los hijos de la elite peruana y fundó el Colegio de Abogados, netamente criollo. Apoyó al Virrey Liniers y a Francisco de Elío en la defensa de Buenos Aires y Montevideo, durante la invasión británica comandada por William Carr Beresford y Wizelock (1806-1807). Puso en marcha un ambicioso plan de defensa de la ciudad de Lima, el puerto del Callao, con la reparación de la antigua fábrica de pólvora y la reorganización del Ejército Real del Perú, en el que destacó el regimiento de patricios “La Concordia Española en el Perú”, como símbolo de la unión entre españoles peninsulares y americanos y la reorganización de una flotilla que custodió los mares del Sur contra extranjeros e insurgentes. Ante la invasión de España por Francia, Abascal se adelantó a jurar lealtad al rey Fernando VII. Fue apreciado por la élite limeña, con la que adoptó una política de conciliación y acercamiento. Autorizó elecciones para diputados de Lima y Cusco para las Cortes de Cádiz.

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En esa época circularon periódicos conservadores (Gaceta del Gobierno de Lima, El Verdadero Peruano) y pro constitucionales (El Peruano, El Satélite del Peruano), fueron frentes de batalla de la elite política virreinal empleada por absolutistas y reformistas hasta 1814, que se dieron también en los claustros universitarios de la Universidad de San Marcos (Lima) y la San Antonio Abad (Cusco). Nombró a J.M. Goyeneche* Comandante de los Ejércitos Reales, con el que enfrentó a las republiquetas y los ejércitos argentinos, a los que rechazó, en sus incursiones sobre Charcas. Volvió a España cargado de títulos y honores, con su título de Castilla del Marquesado de la Concordia Española en el Perú. Su archivo se encuentra en el Archivo General de Indias (Diversos, Archivo de José Fernando Abascal), “en siete cajas de documentos sin catalogar que contienen gran cantidad de documentación oficial y privada del Virrey, fundamental para la historia del Perú, de 1806 a 1816”, como informó Fernando Díaz Venteo en su obra Campañas militares del Virrey Abascal (1923). Contiene documentación del período 1804-1821, desde su nombramiento como Virrey del Río de la Plata, hasta sus últimos años de vida en España. Serveto aclara que ya existe a la fecha un catálogo. Fuente: Serveto, 2010, 9 (1): 12-15; http://es.wikipedia.org (24.4.2012).

ACEBEY AYOROA, AMILKAR (La Paz, 15 de diciembre de 1971)

Licenciado en Historia (UMSA), con estudios de especialización en historia económica, Diplomado en Educación Superior, cursos en Gestión documental, Organización de archivos y Administración de centros de documentación. Es docente interino en las carreras de Historia* y Sociología (UMSA). Tiene estudios y ensayos de investigación en temas de historia económica. Es uno de los archivistas que se ha especializado en gestión de archivos financieros e industriales. Siendo estudiante, participó en la organización del archivo del ex Banco del Estado y en el rescate de documentos del Juzgado de Corocoro (La Paz), ambos por encargo del Archivo de La Paz*. Ya como profesional, el 2003 impulsó, junto a un equipo de trabajo de la carrera de Historia, la organización del Archivo Judicial de Poopó (Oruro). Supervisó las tareas de organización del Archivo Central, Archivo de Custodia y Archivo Histórico de la Superintendencia de Pensiones, Valores y Seguros, que contiene datos sobre la regulación y fiscalización del sistema de pensiones y el mercado de valores y seguros; en los que se logró concentrar los fondos del Instituto Boliviano de Seguridad Social, el Instituto Nacional de Seguros de Pensiones, la Superintendencia de Pensiones, la Comisión Nacional de Valores, la Superintendencia de Valores, las Superintendencia Nacional de Seguros y Reaseguros y la Superintendencia de Seguros. Entre 2004 y 2009 fue responsable del sistema de Archivo y Biblioteca de la SPVS, conformado por 3.120 metros lineales de documentos. Al transformarse en Autoridad de Fiscalización y Control Social de Pensiones, fue designado Responsable del Área de Archivo y Correspondencia. En abril y julio de 2010 supervisó la primera fase de conformación del Archivo Institucional de la Empresa Minera “Inti Raymi” SA, concentrando y organizando un total de 509 metros lineales. Fuente: CV.

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ACHÁ, SAMUEL Director del Archivo Nacional de Bolivia en 1890-1896. Tuvo a su cargo el trabajo de selección del Archivo Histórico de Mizque, que fue catalogado y ordenado desde 1876, para cuyo objeto se destinaron 10.000 bolivianos para la adaptación de infraestructura y adquisición de mobiliario. En 1893, durante su gestión, se destinaron 5.000 bolivianos para la publicación del catálogo de la Biblioteca Nacional, la construcción de una sala de lectura y la adquisición de máquinas y útiles necesarios para el establecimiento de un taller de encuadernación. Fue director del Boletín y Catálogo del Archivo Nacional de Bolivia, desde el Nº 40 (1890) hasta el Nº 75 (1896). Publicaciones archivísticas: Memoria que presenta el director del Archivo Nacional al Ministerio de Gobierno. Sucre, La Industria, 1892; Boletín y Catálogo del Archivo Nacional de Bolivia (Nº 40, 1890-Nº 75,1896). Fuente: DS. 10.10.1917; Oporto, 2006: 213.

ACOSTA PERALTA, NICOLÁS

(Coroico, Provincia Nor Yungas, La Paz, 6 de diciembre de 1842. † Cantón Taca, Provincia Sud Yungas, 31 de octubre de 1893) Abogado, historiador, erudito, escritor, periodista y uno de los más importantes bibliófilos de su época. Hizo sus estudios en el Seminario de San Jerónimo y la Universidad Mayor de San Andrés. Fue secretario general de Narciso Campero* en Europa y secretario privado del Presidente Adolfo Ballivián. Munícipe del Concejo Municipal de La Paz (1878); Convencional (1880-1881); Diputado Nacional por la Provincia Pacajes (1885); miembro de la Embajada de Bolivia en Venezuela para la celebración del centenario de S. Bolívar*; Juez Revisitador de la Provincia Pacajes, época en la que llevó el archivo de la revisita a grupa de mula; Oficial Mayor de Justicia e Instrucción. Secretario de la Legación Boliviana en Londres (1873). Destacó como fundador y director de El Titicaca y otros periódicos. Miembro de la Masonería, militante del Partido Liberal de Eliodoro Camacho y Presidente de la Agrupación Científica y Literaria “Sociedad Gutiérrez”. Durante su estancia en Londres, con la cooperación de Pascual Gayangos y Clement S. Markham, logró obtener una copia del Libro Primero de Actas del Cabildo de La Paz (1548-1562), que se encontraba en la Colección Egerton del British Museum, transcribiéndolo parcialmente por primera vez, de lo que resultó un extracto o resumen de los “primeros 16 folios, [pues] no pudo leer su contenido”. Reunió una selecta biblioteca boliviana de impresos y manuscritos de valor histórico (1574-1884), afirmando que por la falta de “archivos públicos y privados y en que se deja sentir un tanto el espíritu egoísta, algo ha debido hacerse para acumular dispersos datos de distintos tiempos y lugares, a fin de reunirlos y lanzarlos a la prensa”. Con ellos escribió su afamada Guía del Viajero en La Paz. Noticias estadísticas, históricas, locales, religiosas, templos, hoteles, edificios, antigüedades, etc., publicada en La Paz, en la Imprenta de la Unión Americana, en 1880, obra dedicada a J.R. Gutiérrez*, “propagador de la afición a los estudios bibliográficos e históricos en Bolivia”. Actualmente esa valiosa colección -que fue vendida por sus descendientes a centros académicos de los Estados Unidos en 1914 -se halla dispersa en las universidades

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de Harvard (Cambridge, Massachusetts), y Northwestern (Chicago, Illinois). Es autor de Apuntes para una Bibliografía Periodística de la ciudad de La Paz (1876). También de Historia de la Confederación Peruano Boliviana y Bibliografía de sus manuscritos y Biblioteca, ambos inéditos. Publicaciones archivísticas: “Catálogo de Libros, Folletos, Manuscritos y documentos de la Biblioteca de Nicolás Acosta en las Universidades de Estados Unidos”, en: The Hispanic American Historical Review, Vol XII (1932), XIII (1933). Fuente: Acosta, 1880: 18; Aranzáes, 1915; Barnadas, 2002: I, 57; Costa de la Torre, 1968: 243-244; Costa de la Torre, 1970; Feyles, 1965: 15; Siles, 1971:1.

AGRAMONT VIRREIRA, MIRIAM (La Paz, 28 de febrero de 1949)

Estudió la carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA), y la carrera de Historia*. Cursó el Diplomado en Gestión de Archivos Administrativos y Archivos Históricos (2002). Ha combinado la experiencia bibliotecaria con la archivística. Trabajó en la Biblioteca Central de la UMSA (1977-1986), el Centro de Documentación del Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (19851987), el Centro de Documentación del Instituto para el Desarrollo de Empresarios y Administradores (1987-1989), el Centro de Documentación de Tecnología Apropiada para la Mujer Campesina (1989), en la Biblioteca Minera “Luis Ballivián Saracho” de la Asociación Nacional de Mineros Medianos (1989-1998), las bibliotecas de la Cooperación Holandesa (1994-1995), Empresa Minera “Inti Raymi” (1992-1996), Empresa Minera “La Barca” (1993-1994) y Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (2004-2005). Fue docente de Administración y Organización de Archivos del Instituto Boliviano de Estudios Empresariales y de la Universidad Privada Boliviana (2000-2007). Participó en el Seminario de Promoción de la Lectura en La Habana, Cuba (1986) y en el curso de Historiografía Boliviana de la Universidad Andina. Como archivista trabajó en el Archivo de Proyectos de la Fundación “Bolivia Exporta” (1996-1997), consultora en el Sistema Nacional de Archivos Administrativos del Defensor del Pueblo (1998-1999), en la Superintendencia General del Sistema de Regulación Sectorial (2000-2009) y en el Sistema de Archivos de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (2003-2004). Trabajó como Encargada de Archivo y Biblioteca de la Autoridad de Fiscalización y Control de Telecomunicaciones y Transportes (2009-2010). Entre su obra publicada e inédita, señalamos: Bibliografía de la Mujer Boliviana 1920-1985, coautora (1985); Bibliografía de la mujer en salud (mimeografiado, 1986); Boletín Bibliográfico Minero-Metalúrgico (1989-1998); Historia de una experiencia de trabajo colectivo: Red Local de Información Socio Económica (1996); Bibliografía sobre Historia de la Minería: Biblioteca Minera Luis Ballivián Saracho” de la Asociación Nacional de Mineros Medianos (1997, inédita); Catálogo de Artículos de Prensa: Superintendencia General del SIRESE, Superintendencia de Electricidad, Superintendencia de Hidrocarburos, Superintendencia de Saneamiento Básico, Superintendencia de Telecomunicaciones, Superintendencia de Transportes (2000-2009). Fuente: CV.

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AGUILAR, MIGUEL

(La Paz, 12 de abril de 1963) Estudió la carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Apoyó en la edición del boletín hemerográfico Eco Informe (1994-1995). Trabajó en la Biblioteca del Centro de Promoción de la Mujer “Gregoria Apaza” (1994), en el Centro de Documentación en Información Nacional (1994). Pasó al Archivo del Banco Central de Bolivia (1996–1997) y la Biblioteca de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (1997-1998). Trabajó en la organización del Archivo del Programa Integrado de Servicios Básicos de Salud y Fortalecimiento Institucional (1999-2000); fue Auxiliar del Archivo de la Oficina de Derechos Reales de La Paz (2001), Técnico en el Archivo del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (2001-2009) y en el Archivo de la Corte Nacional Electoral, donde trabajó con J. Saravia* y C. Canedo* (2009–2011). Fue contratado, en mérito a su experiencia, como Encargado del Archivo Central del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2012). Fuente: CV.

AGUILAR CALDERÓN, EDWIN J. (La Paz, 19 de mayo de 1983)

Contador público (egresado) y programador de sistemas. Es estudiante de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Antes de ingresar a la actividad archivística se desempeñó como control operativo de la empresa Prosegur (2003-2004). Asistió al III y IV Congreso Nacional, de Oruro (2006) y Potosí (2008) y al IV Congreso Internacional de Bibliotecología, Archivística y Museología (2007). El 2005 ingresó como consultor técnico al Archivo y Biblioteca Económica del Ministerio de Hacienda, donde organizó la serie Presupuestos Nacionales. El 2008 fue designado Custodio de Documentos del Servicio Nacional de Propiedad del Estado, responsable por ello de la organización técnica de los archivos de 20 entidades en proceso de liquidación. Como resultado de su trabajo, ha realizado una primera transferencia de fracciones de series inactivas al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. Fuente: CV.

AGUILAR DÁVALOS, GONZALO JAVIER (La Paz, 6 de abril de 1952)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Tiene un curso de postgrado de Especialista Superior en Periodismo Avanzado (Universidad Andina “Simón Bolívar”, La Paz) y otro en Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas. Fue docente en varias facultades de la UMSA (1979-1996). Tuvo a su cargo la cátedra de Archivo Histórico en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* de la UMSA (1990); fue docente en la Unidad Académica Campesina de Tiwanaku de la Universidad Católica Boliviana (1993 y 1995) y la Universidad Nuestra Señora de La Paz (20002004). Participó en el IX Curso de Organización y Administración de Archivos Históricos* en la Escuela Nacional de Documentalistas, Madrid, España (1981), a la

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que presentó su tesina Aportes para la mejora del servicio archivístico en Bolivia (l981); y en la Escuela Iberoamericana de Archivos. Siendo estudiante universitario se introdujo a la Archivística, participando en el Curso de Archivos Administrativos, Paleografía, Teoría archivística y Archivos Bolivianos (1976). Colaboró en Los bolivianos en el tiempo, bajo la dirección de A. Crespo*, y en la serie de fascículos Bolivia en transición: La Guerra del Chaco, publicados por la Coordinadora de Historia e Investigadores Asociados (1999). Formó parte del proyecto de Recopilación de la correspondencia diplomática entre Bolivia y Chile de 1825 a 1879 (Misión Bustillo), bajo la dirección de J. L. Roca* (1979). Trabajó con Azul Editores en la edición de Las claves del comandante, poemario de Héctor Borda Leaño (1997); participó en la elaboración de fichas históricas para la Autobiografía de Juan Lechín Oquendo (1997-1999) publicado como Memorias (2000); y fue corrector de estilo de la autobiografía de Víctor Paz Estenssoro* (1999). Publicó sus investigaciones periodísticas en el Semanario Aquí, por encargo del Servicio de Paz y Justicia (1990). Fue redactor del boletín Solidaridad y de MIC (1991-1994), donde publicó sus trabajos sobre el pueblo Mosetene, para la Coordinadora de Solidaridad con los Pueblos Indígenas de Bolivia (Regional La Paz). Editor del boletín de prensa Caminoticias; Vocerito (periódico de Alasita, 1 al 3, 1996-1997), La Prensita (periódico de Alasita del Sindicato de Trabajadores de la Prensa de La Paz, 1998). Participó en la edición de El Che en la Poesía Boliviana (1994, 1997); redactor del periódico Nuestra Imagen (1996); corrector de estilo en Presencia (1996-1997); columnista A Rajatabla en el Extra y en la revista dominical Asalto con sus notas Breves de la Historia (19992004). Su carrera archivística la inició como Encargado de archivos de Constructora CON 1115 (1977-1979), fue Auxiliar del Archivo de La Paz* (1980), donde clasificó y catalogó los Libros de padrones, visitas, revisitas y catastro de las Provincias de La Paz (siglos XVII-XIX) junto a R. Choque*. Realizó la transcripción del Diario de Campaña de Esteban Loza (22.12.1781), del Testimonio de Nicolás Tellería (15.8.1781) y del Proceso contra Pedro Obaya* (El Rey Chiquito), documentos concernientes a las Rebeliones Indígenas de 1780-1782, proyecto dirigido por A. Crespo. Fue Encargado del Archivo del Sistema y Fondo Nacional de Información para el Desarrollo del Ministerio de Planeamiento y Coordinación (1982-1985), oportunidad en la que participó en la recopilación de la Guía de Tesis (Tomo II, 1982). Con E. Cárdenas* elaboró el Manual del archivo activo, que fue aplicado en los archivos de la Universidad de San Francisco Xavier y en los ministerios de Urbanismo y Vivienda, Asuntos Campesinos y Agropecuarios, Planeamiento y Coordinación, así como en la Junta Nacional de Solidaridad y Desarrollo Social y el Estado Mayor de Ejército (1983-1985). Posteriormente organizaron el curso de Capacitación de Técnicas de Archivo y Documentación (1982); el Seminario de Microfilmación (1982); y el curso de Introducción a las Técnicas Documentales (1982); participó en el Proyecto de Sistemas de Información, con apoyo del PNUD/FAO/BRA (1983). Volvió al Archivo de La Paz como docente-archivista (1990 y 1993), ocasión en la que ordenó e inventarió la Colección Fotográfica y el Fondo Tesoro Público del Departamento de La Paz (siglo XIX), trabajó en la redacción de la “Guía del Investigador” y diseñó nuevos formularios de Registro del Investigador y Reprografía de Documentos, con I. Jiménez*; así como un Manual para el servicio al usuario del archivo y biblioteca. Más tarde se incorporó a la Red de Información SOL (proyecto impulsado por Beatriz Rossells y L. Oporto*) como responsable de la ordenación y procesamiento de su

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documentación (1993-1994). Participó en el proyecto de Organización del Archivo del Ex-Banco del Estado, por encargo del Archivo de La Paz* (1995). Fue director de la Biblioteca de la Universidad Andina “Simón Bolívar” (La Paz). Fue designado Director de la Dirección General de Registro, Control y Administración de Bienes Incautados (2007-2010). El 2011 ha realizado la evaluación y diagnóstico de los Archivos administrativos, Central y de Capitalización y Privatización del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, y se le encomendó elaborar Planes de trabajo, Guías Generales de Control, trabajo que está en curso. Publicaciones archivísticas: “Bases para un estudio objetivo de la situación económica y profesional del archivista boliviano. Plan para el levantamiento de un censo preliminar de archivos y archivistas bolivianos y conclusiones de proyección legislativa”. Relato para el punto C del temario. Por Marcela Inch, Roberto Choque C., Gonzalo Aguilar D., p. 83-94, en Segunda Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Cochabamba: Centro Pedagógico y Cultural de Portales, Imp. Taller Gráfico del Centro Portales, julio 5-7, 1982. 123 p. mimeo; Plan para la organización del Archivo Central del Ministerio de Planeamiento y Coordinación (La Paz, 1985); “Consideraciones para la reglamentación interna de archivos en la administración pública” y “Plan para el levantamiento de un censo preliminar de archivos y archivistas bolivianos”, en coautoría con M. Inch (Segunda Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos, Cochabamba, Centro Pedagógico y Cultural Portales, 1982); Manual del archivo activo: teoría, procedimientos y técnicas, en coautoría con Elvira Cárdenas de Paravicini (La Paz, SYFNIDMinisterio de Planeamiento, 1983; 1985); “Exposición audiovisual en 1981 sobre la Guerra Civil Española” (Revista Humanidades, No 1. La Paz, Facultad de Humanidades UMSA, 1987); “La sección fotográfica del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, Año XII, Número especial, 1991; “Aportes para la organización de un archivo contable: el Archivo General del Banco del Estado” (Boletín del Archivo de La Paz, 17 (16-17): 77-86, 1997). Fuente: CV.

AGUILAR MOLLINEDO, PABLO LUIS (La Paz, 22 de junio de 1967)

Estudiante de la carrera de Administración de Empresas (UMSA). Estudios de Auxiliar de Contabilidad en el Centro Especializado en Computación. Antes de ser archivero, fue barman profesional, regente del Colegio Santa Bárbara (La Paz), ayudante de mecánica y administrador de restaurante. Inició sus actividades en el ámbito archivístico (2005) en el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* como Auxiliar del Archivo Intermedio y Archivo Central, donde actualmente trabaja. Participó en el salvataje de los fondos documentales Empresa Minera Colquiri, Empresa Minera Viloco (La Paz) y Planta de La Palca (Potosí). Fuente: Expediente personal en el Archivo Central de Comibol.

AGUILAR ZEBALLOS, MARUJA (Oruro, 8 de abril de 1952)

Autodidacta. Desde muy joven tuvo que trabajar en el rubro de medicamentos. Por azares de la vida militó en el Movimiento de Izquierda Revolucionaria, gracias a lo cual ingresó a la Alcaldía Municipal de Oruro como conserje, siendo asignada a tareas de limpieza en la Oficialía Mayor de Cultura donde funcionaba la Biblioteca

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Pública. En su tiempo libre ayudaba en algunas tareas a los bibliotecarios, que eran pocos, con el tiempo les seguía a los cursos a los que asistían y así fue aprendiendo esta noble profesión. Casualmente, la Alcaldía estaba a punto de inaugurar una segunda Biblioteca Pública en la nueva Casa de la Cultura que fue construida con la cooperación del gobierno de China. Pidió ser transferida a esas dependencias y empezó a organizar la Biblioteca desde cero, proponiéndose convertirla en la mejor de su ciudad. Asiste regularmente a cursos y congresos, entre ellos a las del Sistema Universitario de Bibliotecas, siendo en rigor de verdad, la única no universitaria. La Casa de la Cultura decidió fusionar en un solo servicio la Biblioteca Pública y el Archivo Histórico Municipal. Los documentos del antiguo Archivo Histórico (colonial) estaban alojados en la célebre Biblioteca “Marcos Beltrán Ávila”, a cargo de Juan Terceros Zambrana. El escritor Carlos Condarco, Oficial Mayor de Cultura de esa época, fue el artífice de la fusión. E. Cárdenas* elaboró un índice cronológico y coordinó su traslado, haciéndose cargo del repositorio por corto tiempo. Otro de los sueños de Maruja Aguilar fue dotar de una Hemeroteca a su ciudad, que se concretó en 2003, con la transferencia de colecciones duplicadas de la Biblioteca del Congreso de Bolivia, que actualmente presta servicio público, junto a la biblioteca y archivo histórico. Fuente: Oporto, 2011: 48-51.

AGUIRRE FLORES, LILIANA

(La Paz, 14 de noviembre de 1983) Licenciada y Máster en Filología Hispánica. Es Archivista Responsable de la hemeroteca del periódico La Razón desde 2006 y del Archivo que perteneció al fotógrafo L. Flores*, quien trabajó para el periódico durante muchos años. Una colección de fotografías del trabajo particular, Flores la vendió a la empresa, en las que se encuentran aproximadamente 200 fotografías históricas, desde 1952, las que se encuentran en proceso de digitalización. Por su parte, el actual Archivo fotográfico de La Razón¸ que es resultado del trabajo de sus reporteros gráficos y el Archivo de fotografías internacionales de agencias de noticias, desde 1990, en su mayoría están digitalizados en el programa Cúmulus y está a cargo de fotógrafos del periódico y tres operadores que continuamente agregan imágenes con descripciones y descriptores para su búsqueda. En el caso de la Hemeroteca, esta colección se halla prácticamente completa desde la creación del periódico en 1990. El material del fondo documental de la Hemeroteca es de uso restringido, de uso exclusivo de la Redacción del periódico, al no estar abierto al público. Sin embargo si un investigador desea consultarlo debe enviar una solicitud a la Jefatura de Redacción. Finalmente, los documentos propios de la administración del periódico forman otro archivo que está bajo el resguardo de “File-Archivos” una empresa de Archivos en Custodia*. Fuente: Información intercambiada por Internet. (8.8.2011)

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AHLFELD, FREDERICK (1892-1982)

Geólogo alemán, montañista y fotógrafo. Emigró a Bolivia en 1924. Según Jill Neate, Ahlfeld fue “por más de medio siglo la autoridad principal [en Bolivia] de geología y mineralogía, produciendo más de treinta libros especializados e innumerables otras publicaciones”. Explorador nato e incansable, cubrió miles de kilómetros a pie y participó en más de cuarenta expediciones, en las que visitó las minas, estudió los yacimientos minerales y las altas cumbres. “Su conocimiento de [la Cordillera Real] era incomparable y sus archivos de fotos un verdadero tesoro familiar”. Se dice que los Archivos de Ahlfeld se hallan en Cochabamba. Fuente: Buck, 1999.

AHUMADA MORENO, PASCUAL (n. Chile)

Papelista y documentalista. Asumió la noble misión autoimpuesta de recopilar los documentos oficiales relativos a la Guerra del Pacífico que involucró a Bolivia, Chile y Perú, con resultados nefastos para Bolivia que perdió su Litoral, y para el Perú, que sufrió la invasión territorial y ocupación desde el sur hasta Lima y ciudades del interior, y a la postre perdió la provincia de Tarapacá y Arica. Chile extendió su frontera a grados geográficos impensados. En la campaña bélica de 1879-1882, los archivos oficiales bolivianos y peruanos fueron requisados por las tropas chilenas, mientras que otra documentación se perdió definitivamente como efecto de la ocupación militar o quedó en posesión de particulares. Los archivos de los territorios ocupados fueron declarados objetivos militares y por ello remitidos a Santiago, aunque de acuerdo al historiador chileno Sergio Villalobos, este tipo de documentación es muy amplia y puede estar en poder de particulares, instituciones o en archivos nacionales o privados, como fue el caso de dos expedientes que corresponden al relato de la muerte de un oficial del monitor Huáscar y al inventario del vapor chileno Rímac, que fueron adquiridos de un oficial de la Armada chilena en 1996 por el abogado peruano Guillermo Berdejo Díaz, quien tras pagar una suma indeterminada en dólares los donó al Congreso y a la Marina de Guerra peruana. El ilustre papelista chileno Ahumada Moreno acopió con paciencia infinita una apreciable cantidad de documentos oficiales de los tres países beligerantes, referidos a la Guerra del Pacífico, los que compilados en riguroso orden cronológico fueron publicados en ocho tomos, impresos entre 1884 y 1889, y un apéndice, con lo que ha dispuesto al uso público un impresionante archivo conformado por transcripciones de documentos oficiales de los tres países a los que sumó informes, crónicas y comentarios de prensa, además de algunos de Europa y Estados Unidos. Como afirma el autor “como trabajo intelectual, es humilde; como fuente para la historia, grande”. Fuente: Ahumada, 1884-1889; Oporto, 2006: 149; El Mercurio, Lima, 19.04.2006.

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AILLÓN SORIA, ESTHER

(La Paz, 18 de septiembre de 1961) Licenciada en Historia UMSA (1996), Maestría (2001) y Doctorado (2007) en Historia por El Colegio de México. Tiene Especialización Superior en Comunicación en la Universidad Andina Simón Bolívar, La Paz (2003), y Diplomado en Educación Superior UMSA (2004). Ha sido becaria de SEPHIS (Programa del Instituto Internacional de Historia Social de Holanda). Formó parte del colectivo Cocayapu (1990-1995) y fue Responsable del Proyecto Conservación y Catalogación de los documentos de la Real Academia Carolina, 1776-1807, Sucre (2007). Se desempeña en la labor docente en la UMSA, Universidad Católica Boliviana y en programas de postgrado. Fue Coordinadora de la Carrera de Historia de la Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca (2007). Ha planificado numerosos talleres y cursos referidos a la organización y conservación de documentos. Desde 1990 participa en cursos, seminarios, congresos y talleres, entre ellos el Cursillo de Archivos (1990), Curso de organización de Centros Documentales (1992), de Organización y Administración del Archivo de Gestión (1996), Técnicas Especializadas en la Administración de Archivos Centrales (1997), Conservación Preventiva y Restauración de Documentos para Bibliotecas (2004). También fue activa en numerosos congresos y reuniones, entre ellos las III Jornadas Paceñas de Bibliotecología (1987), el Primer Encuentro Nacional para la Guarda del Documento Audiovisual (1993), los dos Seminarios Nacionales sobre Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (La Paz, 1993 y Santa Cruz de la Sierra, 1994); el Panel sobre Archivos y Sociedad (1995), Reunión-Taller sobre la Articulación del Sistema Nacional de Información (1995), Seminario de Presentación de Proyectos para Trabajo en Bibliotecas y Archivos (1995), I Congreso de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas” (1996). Co-organizadora del Seminario-Taller sobre la Ley del Sistema Nacional de Información (1997), Primer Taller Departamental sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006), Taller Internacional para Autores y Editores Científicos (2006), y las III Jornadas de Reflexión sobre Patrimonio, Museos e Investigación (2006). Publicó Vida, pasión y negocios: el propietario de la viña San Pedro Mártir, Indalecio González de Socasa (1755-1820), Potosí y Cinti a fines de la colonia y en la guerra de la independencia (Sucre, ABNB, 2009), que fue su tesis de licenciatura. Inició su carrera archivística como Auxiliar del Archivo Histórico Municipal de La Paz (1988), Auxiliar-Técnico (1988) y docente-investigadora del Archivo de La Paz* (2006, 2009). Su aporte archivístico más importante es la organización del Archivo Histórico de la Sociedad Agrícola, Ganadera e Industrial de Cinti*, con E. García*, emprendimiento desarrollado por C. Calvo*, un ejemplo solitario de apoyo a los archivos del sector privado. Allí coordinó el Proyecto de Investigación Histórica “500 Años de la Hacienda San Pedro y Cinti” (1989-1997).

Publicaciones archivísticas: “El sur boliviano: entre dos siglos (Entrevista con el historiador Erick Langer)” (Presencia, La Paz, 21 de marzo de 1993: 14-15); “Legislación sobre patrimonio cultural de Bolivia: Una necesidad colectiva”, con Eduardo García (Presencia, La Paz, 20 de marzo de 1993: 4); “El valor de los archivos regionales: Relación de los descubrimientos de un buscador de tesoros. Entrevista al historiador Erick D. Langer” (Presencia Literaria, La Paz, 20 de junio de 1993: 12-13); “Reflexiones en torno a los archivos de la empresa privada: Los documentos de ‘La Villa de París’. El pulso del comercio paceño en el siglo XX” (Presencia Literaria, La Paz, 1 de mayo de 1994:7); “El archivo de SAGIC S.A.” (Boletín del Archivo La Paz,

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15, 1995); “Bagdad y el ‘Paceñazo’. Asonadas y saqueos de libros y documentos en el siglo XIX boliviano” (Marxismo militante, 2005, 35: 69-79); publicado también como; “Asonadas, saqueos y pérdida de libros y documentos en el siglo XIX boliviano. Bagdad y el Paceñazo” (Anuario 2003 del ABNB, Sucre, 2003: 559-570); “Política cultural alrededor de la bibliografía Interamericana”, en: Carlos Marichal, Coordinadora (México y las Conferencias Panamericanas, 1889-1938. Antecedentes de la globalización. México: Secretaría de Relaciones Exteriores, 2004: 149-161); Boletín del Archivo de La Paz, 2006, Nº 23-24: “Convenios de Cooperación con el Archivo de La Paz. El proyecto BANEST” (63-72); “Cooperación Internacional: El Proyecto Harvard I, Harvard II, y el Archivo de La Paz” (83-98); “La formación de recursos humanos: el Archivo de La Paz y las nuevas generaciones” (105-117) y “Prólogo para un encuentro. Apuntes sobre la historia del Archivo de La Paz y algo más sobre la historia y los historiadores. Entrevista con René Arze Aguirre” (145-174); “El archivo histórico” (Khana, Revista de la Alcaldía Municipal de La Paz, 2008: 50). Fuente: CV.

ALARCÓN DE LA PEÑA, ABEL

(La Paz, 10 de octubre de 1881. † Buenos Aires, 20 de octubre de 1954) Doctor en Derecho (UMSA, 1903). Novelista, profesor, escritor perseverante, político liberal, parlamentario. Fue redactor del Diario de Sesiones del Senado Nacional, Oficial Mayor de Instrucción Pública. Viajero infatigable. Fue director de la Biblioteca Pública de La Paz (1904-1906), puesto que dejó para encargarse de la dirección del Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores. “En este cargo adquirió extraordinaria competencia, manifestada en valiosos folletos, entre ellos uno relativo a la cuestión de límites con el Paraguay”, más tarde fue Jefe de la Sección Consular de ese ministerio, Secretario General de la UMSA y Subsecretario de Instrucción Pública. Miembro de número de la Academia Boliviana de la Lengua, de la que fue Secretario hasta su muerte. En 1942 se le concedió pensión vitalicia, en su condición de “Eminente servidor público”. En 1943 la ciudad de La Paz le otorgó la Medalla al Mérito. Fuente: Alarcón, 1925: 364; Quiroz, 2009.

ALARCÓN ESCÓBAR, CINTIA KARINA (Oruro, 7 de marzo de 1979)

Licenciada en Administración de Empresas (Universidad Técnica de Oruro), con un Diplomado en Comercio Internacional en la Fundación IDEA (2005) y otro en Administración de Archivos en la Universidad Nuestra Señora de La Paz (2008). Hizo también el curso de Secretariado ejecutivo contable computacional en el Instituto “Arrieta” de Oruro (1998) y es técnico medio en manejo de paquetes (2004). Asistió al Seminario de Gestión Documental y Organización de Archivos, organizado por la Movida Ciudadana Anticorrupción y la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (2006); y al de Normalización y Manejo Documental en la Gestión Pública, patrocinado por el Ministerio de Educación y Culturas (2006). Trabajó como Auxiliar de Oficina en la Corporación del Seguro Social Militar de Oruro (1998-2000) y en similar condición en la Empresa de Servicio Transtur de La Paz (2005). Realizó sus pasantías profesionales en el Área de Títulos en Provisión Nacional Universitarios del Ministerio de Educación y Cultura, que significó su primer encuentro con

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archivos institucionales, realizando también operaciones en bases de datos (20042005). Fue promovida como Profesional I en Títulos (2006), y luego como Profesional I Encargada de Archivo Central (2007-2008) y desde 2008 como Responsable de Archivo Central del Ministerio de Educación. Fuente: CV.

ALBA ZAMBRANA, ARMANDO

(Potosí, 9 de febrero de 1901. † Potosí, 20 de octubre de 1974) Estudió en el Colegio Pichincha de Potosí. Escritor, historiador, periodista, poeta y papelista, autodidacta. Su primer empleo fue en la Empresa Minera Unificada de Potosí. Fue Presidente de la Sociedad Geográfica y de Historia de Potosí, fundador de la Sociedad Geográfica y de Historia de Tarija. Socio correspondiente de la Academia Nacional de Bellas Artes de la República Argentina y de la Sociedad Argentina de Estudios Geográficos. Fundador y Vicepresidente del Instituto Boliviano de Cultura Hispánica (La Paz). Miembro prominente de Gesta Bárbara. Fue Alcalde de Potosí (1929-1930), Senador (1943), Ministro de Educación (1947), Embajador en España (1949) y Venezuela (1950). En 1941 comenzó a concentrar en la Casa de la Moneda los manuscritos coloniales que se hallaban dispersos en la ciudad por Potosí. Convirtió a la antigua Casa de la Moneda en Museo Numismático, con la más completa colección de monedas y medallas, además del taller original de acuñación que hizo restaurar. En su interior creó un Museo de Pintura Colonial y otro de Artesanías. Instaló en ella la Biblioteca de la Sociedad Geográfica y de Historia Potosí. Fundó el Archivo de documentos coloniales y republicanos, donde se originó el Archivo Histórico de Potosí* y una Biblioteca de Obras Raras; creó una Galería Nacional de Próceres, fundó la Editorial Potosí que dio a luz obras cumbres de la literatura y la historiografía boliviana y pensó en una Escuela de Artes y Archivología. Fue el primero en difundir la existencia de los archivos coloniales de Potosí. Recibió el primer Premio Nacional de Cultura, en 1969. Notable patricio, no dudó en dar apoyo solidario a perseguidos políticos, como el caso de A. Urquieta*, a quien acogió en la Casa de la Moneda, cuando aquella buscó refugio al ser perseguida por la dictadura de H. Bánzer*. Era conocido como “Armando Habla” por su notable oratoria y dominio del idioma, muy propio de esa época. Elaboró, para el Museo de Historia y Arte de la Casa de la Moneda, un Índice analítico de documentos históricos de la Villa Imperial 1545-1900, que se halla inédito. Publicaciones archivísticas: “Los archivos coloniales de Potosí” (Kollasuyo, 1939; Id. en Raúl Botelho Gozálves, Comp. El Hombre y el paisaje de Bolivia. La Paz, Biblioteca Sesquicentenario, 1975: 197-214); “Los archivos coloniales del Museo Nacional de la Casa de Moneda” (Sur, 1943); “Los archivos de Potosí” (La Razón, La Paz, 25 de febrero de 1945: 10). Fuente: Barnadas, 2002, I: 81; Blanco, 2004; Costa de la Torre, 1968: 251 - 252; Quiroz, 2009; Comunicación personal de Edgar Ramírez (24.06.10).

ALBORTA GARCÍA, IVONNE CARLA (La Paz, 9 de diciembre de 1982)

Estudió la Carrera de Psicopedagogía y cursa, como carrera paralela, Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Realizó cursos sobre la Ley Nº 1178 de

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Administración y Control Gubernamental SAFCO, Catalogación de Materiales Electrónicos y otros del área de Pedagogía y formación docente. Participó en las Jornadas Paceñas de Bibliotecología (2008). Realizó pasantías en la Biblioteca y Archivo del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas (2009) y en el Archivo de Kardex Académico de la Carrera de Informática (2009); trabajó en la organización de la documentación del programa APEMIN II transferida al Ministerio de Minería y Metalurgia (2010). Fue consultora de la Biblioteca del Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (2010); hizo prácticas en las Bibliotecas de La Paz y El Alto (2009). Trabajó en el Archivo del Ministerio de Obras Públicas Servicios y Vivienda (2011). Fuente: CV.

ALBORTA TRIGO, FREDDY

(La Paz 31 de octubre de1932. † La Paz, 17 de agosto de 2005) Fotógrafo y cineasta. En su faceta cinematográfica participó en  la realización de la película documental El día que me quieras (1997), que trata sobre la muerte del comandante guerrillero “Che” Guevara*, a partir de la histórica foto que tomó en su lecho de muerte. Asumió como referente al fotógrafo estadounidense Robert Cappa “por la fuerza de sus trabajos”. Fue reportero deportivo en Bolivia y corresponsal gráfico de United Press International y Associated Press, así como en Presencia, Última Hora y Jornada. Fue pionero en introducir la máquina fotográfica de 35 mm a los campos deportivos, donde “todos trabajaban con esas de cajón. Cuando llevé mi maquinita pequeña hasta los jugadores se burlaban: no creían que podía sacar”. Además realizó fotografía de retratos, rostros infantiles, danza, monumentos, paisajes y costumbres andinos. Junto a L. Yelincic*, introdujo la fotografía a colores, instalando su estudio “Capri Color”, dedicándose tambien a la producción y comercialización de tarjetas postales de Bolivia. Fue fotógrafo oficial del presidente V. Paz* (1952-1964; 1985-1989), pero saltó a la fama internacional por sus célebres fotos del cadáver del  “Che” Guevara, asesinado en la escuela de la Higuera el 9 de octubre de 1967. Llegó a ser considerado como uno de los fotógrafos más influyentes hasta la mitad de los ochenta. Mostró la importancia de su Archivo fotográfico en 2001, en una exposición retrospectiva sobre Víctor Paz “a quien acompañó en su encuentro con John F. Kennedy, en sus viajes a México, Venezuela, Perú”, que posó junto al mariscal Tito de Yugoslavia, al Gral. Charles de Gaulle de Francia y al rey Juan Carlos de España. Participó en una exposición itinerante de “las mejores fotografías del mundo”, en la Galería Nacional del Juego de Palma, en París (2003), Haus der Photographie de Hamburgo (2004) y en el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires (2006). Durante su labor profesional (1952-1980), coleccionó fotografías de la vida política nacional. Obra publicada: Bolivia (La Paz, Capri Color, 1977). Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Freddy_Alborta; Reportajes de Presencia, 1996:8; Dorado, 1993: 13; La Prensa, 2001:9b; Ríos, 1978:1.

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ALCOCER, MARÍA HORTENSIA Archivera. Trabaja en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* Organizó, durante la gestión de R. Arze*, el “Archivo del Siglo XX de Bolivia”, con documentos de la Presidencia de la República y de ex presidentes, como W. Guevara Arze*. Fuente: Información de René Arze.

ALIAGA CANDIA, GROVER LEOPOLDO (La Paz, 1 de octubre de 1982)

Licenciado en Informática (UMSA). Realizó investigaciones sobre Lingüística Computacional, diseñando etiquetadores, lematizadores y correctores de ortografía, rama especializada de la Lingüística Computacional y de la Inteligencia Artificial para recuperación de información. Al notar que la mayor parte de los trabajos de investigación estaban realizados por investigadores de habla inglesa, incursionó en la investigación sobre la recuperación de información en castellano. Tiene amplios conocimientos sobre Teoría de la Información, materia de la cual fue auxiliar de docencia en la Facultad de Ciencias Puras de la UMSA, con varios estudios sobre cuantificación de información, que los plasmó en su tesis de licenciatura, Recuperación de Información en el Lenguaje Castellano. Actualmente investiga la clasificación automatizada de documentos. Participó en cursos y seminarios organizados por Microsoft y Minería de Datos. El 2008 logró el primer prototipo de un sistema de búsqueda similar al Google, que permite recuperar información en las innumerables referencias -a texto completo- de los documentos incluidos en el Compendio de la Legislación Boliviana de 1825 a 2008, presentado al Ing. Armando de la Parra, Director de la Fundación de Apoyo al Parlamento y a la Participación Ciudadana FUNDAPAAC. El prototipo fue aplicado oficialmente a la segunda edición del Compendio de la Legislación Boliviana de 1825 a 2009. Fue Encargado del Centro de Documentación de la Corporación Minera de Bolivia en la ciudad de La Paz (2010) y desde el 2011 diseña la base de datos para la gestión integrada en el Sistema de Archivo de la COMIBOL*. Fuente: CV.

ALIAGA MALDONADO, DANNY SUSAN (La Paz, 12 de junio de 1983)

Licenciada en Historia, con especialidad en Archivística (UMSA). Estudia la Carrera de Derecho en la Universidad Salesiana de Bolivia. Ha cursado los Diplomados en Administración Documental y Procesos Archivísticos en la Universidad Nuestra Señora de La Paz (2008), Pedagogía y Derecho de la Familia en la Universidad Salesiana de Bolivia (2007), Educación Superior UMSA (2009). Cursa la Maestría en Salud y Seguridad Ocupacional en la Universidad Catolica San Pablo (2011). Estudió también las profesiones de Auxiliar de Oficina y Secretariado Ejecutivo (1997), Técnico Medio en Aplicaciones y Sistemas Operativos (1998), Auxiliar de Contabilidad Computarizada (1998) y Técnico Digitalizador en Documentación Histórica (2008). Participó en seminarios de Derechos Humanos, Metodología de la Investigación

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Universitaria, Educación Bursátil, Mercado de Valores, Nueva Constitución Política y Autonomías y Legislación Penitenciaria en Bolivia. Trabajó como Secretaria del Sindicato Mixto de Trabajadores en Tabaco Derby (1999), Locución y anuncios publicitarios en Radio Continental (2000), Registro entrega y catalogación de libros 14º Feria del Libro de La Paz (2000), y como Cajera Secretaria de la Cooperativa Agropecuaria Integral (2006). También realizó Pasantías en el archivo y Kardex de la prefectura del Departamento de La Paz y como Asistente Legal en el Centro Provida de la Universidad Salesiana de Bolivia. Su experiencia laboral archivística empezó con su trabajo de Control y Administración de Archivos de gestión de Súper Canal (2005), el Diagnóstico y planificación del Archivo de Gestión del Centro de Asesoramiento Empresarial y Multidisciplinario (2007), Organización de Archivos y Registros de Almacenes para la Secretaría Departamental de Deportes (2007), la Digitalización de Padrones del siglo XIX en el Archivo de La Paz* (2008), Técnico en identificación, organización y clasificación del Fondo Pólizas de Importación de la Aduana Nacional de Bolivia (2009-2010), Encargada Nacional del Departamento de Administración Documental y Archivo de la Caja de Salud de la Banca Privada (desde 2010). El 2011 defendió su proyecto de grado Reglamento de Administración Documental y Archivo de Historias Clínicas de la Caja de Salud de la Banca Privada, el primero en su género en Bolivia, que fue calificada por el Tribunal con Máxima Distinción y recomendación de publicación. Fuente: CV.

ÁLVAREZ DE ARENALES, JUAN ANTONIO

(Villa de Reinoso, Castilla, España (o Salta, Argentina), 13 de junio de 1770. † Moraya, Bolivia, 4 de diciembre de 1831) Militar argentino. Héroe trinacional de la Independencia. Combatió en territorio de la Audiencia de Charcas (batallas de Vilcapugio y la Florida, por ejemplo), en la Argentina y el Perú (que le confirió el grado de Mariscal). Al final de sus días perseguido políticamente en la Argentina, se acogió al asilo en Moraya, pequeño pueblo del sur de Bolivia, a doce leguas de Salta, donde falleció a poco de llegar. Como resultado de las batallas que dirigió formó un importante archivo epistolar con guerrilleros y comandantes de Charcas, entre otros el Gral. A. J. de Sucre*, Ignacio Warnes (70 cartas dirigidas a Arenales entre 1813-1816), Eustaquio “Moto” Méndez, el Cnl. José María Pérez de Urdininea; incluso con el Gral. Pedro Antonio de Olañeta, “el último León de Iberia”. El Archivo de Arenales se hallaba disperso en varios repositorios. P. Peña*, directora del Museo y Archivo Histórico de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno de Santa Cruz de la Sierra, gestionó ante el Consulado General de la república Argentina en Santa Cruz de la Sierra, una copia digital de este archivo que le fue entregada en mayo de 2010, hecho que “permitirá clarificar algunos aspectos de interés en la última etapa de la guerra de la independencia” de Charcas en el siglo XIX. El archivo digitalizado fue entregado también al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. Fuente: Minutolo, 1988: I-XLIII; Comunicación personal de Paula Peña (22.05.10).

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ALVÉSTEGUI LAREDO, DAVID (1887. † 1973)

Estudió Derecho en la UMSS. Periodista y político. Redactor de El Republicano y La Nación. Fundó y dirigió La Razón (1917). Fue Diputado (1916). Ministro de Gobierno y de Relaciones Exteriores (1934-1935). Embajador en el Paraguay, Brasil (1932-1934) y Argentina. Escribió la biografía de Salamanca y sobre el problema del Chaco. Presidió la delegación boliviana en la Conferencia de Paz de Buenos Aires (1936-1938). Siendo Embajador ante la Santa Sede (1935), se le encomendó la ubicación de documentos referentes a la erección de la Diócesis de Santa Cruz de la Sierra, informes episcopales, Gobernación de Chiquitos y Cartas annuas jesuitas (1740-1750), para documentar los derechos de Bolivia en el territorio del Chaco. Formó un selecto grupo de investigadores, entre ellos el Profesor Perali, antiguo y experto funcionario del Archivo del Vaticano. Recibió el apoyo del padre Pirri, custodio de la Sección Civilta Católica del Archivo del Vaticano, quien le dio acceso al Archivo de la Casa Genelizzia. Instruyó al Cónsul de Bolivia en Roma, copiar los manuscritos del franciscano Doroteo Giannecchini, que se encontraban en Florencia (curioso dato, pues ya H. Vázquez* afirmó haber copiado en su misión en el Archivo Orgnissanti, en 1932, por encargo del gobierno); asimismo las cartas annuas jesuitas que fueron publicadas en Italia a principios del siglo XIX. Alvéstegui revisó personalmente los archivos de la Orden Jesuita, colaborado por el padre Edmondo Lamalle, director de la Sección Privada del Archivo del Vaticano, quien buscó informes sobre el padre Ignacio Chomé (primera mitad del siglo XVIII). Finalmente logró copiar la correspondencia boliviana enviada al Vaticano durante el siglo XIX. La misión Alvéstegui fue la última en archivos europeos que durante 70 años recabaron copias de los archivos de España, Inglaterra e Italia, con lo que se formó un rico fondo documental de capital importancia para reconstruir el pasado colonial, como apunta J. Siles*. David Alvéstegui conservó su correspondencia privada de 1922 a 1949, la que fue entregada al Centro Bibliográfico Histórico “Joaquín Espada” (Cochabamba). Fuente: Barnadas, 2002, T. I: 112; Siles Guevara: 1973; http://censoarchivos.mcu.es (21.3.12)

AMARO TOCO Amauta. Estudió los Archivos de quipus históricos de Cuzco y Sacsahuana, empleados en sus discusiones filosóficas para demostrar la imposibilidad de los hombres “nacidos de hombre y mujer”, de ser dioses, y la anécdota histórica “sobre las reinas viudas que se retiraban al Acllahuasi y llevaban una vida de obediencia y sumisión”. Fuente: Porras, 1953: 128.

AMPUERO ALDANA, JORGE (19 de enero de 1940)

Bachiller en Humanidades. Se matriculó en el primer curso de la Escuela de Bibliotecología de la Facultad de Filosofía y Letras (1971), luego de rendir una

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prueba de cultura y haber certificado “un mínimo de cinco años de trabajo en el ramo bibliotecológico”, según resolución del Consejo Supremo Revolucionario de la UMSA de 24 de marzo de 1971, sin embargo, el golpe de Estado del 21 de agosto de ese año provocó el cierre de las universidades, truncó sus deseos. Participó en el Curso Audiovisual de Bibliotecología de la UNESCO en Cochabamba (1969); y el Cursillo de Orientación Bibliotecológica, auspiciado por el Centro Boliviano Americano (1970) y en el Curso de Archivos y Documentos Públicos UMSA-OEA (1976). Como Secretario de Estudios de la Escuela Militar de Ingeniería, elaboró el plan de organización de su Biblioteca (1959). En la EMI fue Secretario General, miembro del Consejo Superior de Estudios, Jefe de la Biblioteca Central, Asesor Académico, Secretario General de Ciencias Básicas y Coordinador del Curso Vestibular. Participó en la elaboración del Reglamento de Régimen Interno de la Escuela Militar de Ingeniería y del Proyecto Azul para la Ingeniería Militar. En 1973 el Presidente de la República le extendió el título constitucional de Subteniente de Servicios, atendiendo a los méritos y servicios de bibliotecario. Más tarde pasó a ser Encargado del Archivo y Registro Académico; y del Registro y Clasificación de Documentos y Títulos Académicos, organizando el Archivo Central Académico de la Universidad Militar, con la función de establecer un control y la seguridad de la documentación y otros materiales (1982). Fue condecorado por el Comité de Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia* (1993). Tiene, inéditos, el Proyecto de Reglamento de la Biblioteca, Proyecto para Creación de la Oficina de Admisiones y Registros y del Proyecto para la creación de un Centro de Documentación; Resumen Histórico de la Escuela Militar de Ingeniería y Reglamento de Docencia. Fuente: Oporto, 1993: 21-23.

AMUSQUÍVAR PEÑARANDA, GUADALUPE (Sucre, 18 de diciembre de 1964)

Socióloga (UMSS). Proviene de  una tradicional familia de políticos (Su tío abuelo Claudio Peñaranda, 1883-1921, fue influyente liberal, poeta, educador, diputado por Chuquisaca; periodista de La Mañana de Sucre; autor de letras de cuecas y bailecitos tradicionales de Chuquisaca; padre de Agar Peñaranda, troskista chuquisaqueña) y músicos autodidactas (José Peñaranda, su abuelo, periodista conocido por el mote de “Pepín”), cultiva ella misma la música tradicional. Ejerció la docencia en la UMSFX (1990-1995), donde fue Presidenta de la Célula de Docentes (1990-1995). Facilitadora en el curso sobre Bibliotecas del Instituto de la Judicatura, organizada por el Poder Judicial de Bolivia (2008), Auxiliar del Departamento de Planificación del Proyecto “Sucre Ciudad Universitaria” (1990-1998), y Encargada del Centro Departamental de Información y Documentación, que tuvo a su cargo el rescate de la documentación de la ex-Corporación de Desarrollo de Chuquisaca CORDECH, disuelta en la primera mitad de la década del 90. Encargada de Biblioteca, Archivo y Gaceta del Tribunal Agrario Nacional (2000-2004) y Jefa de la Biblioteca de la Corte Suprema de Justicia (2004-2012), que lleva el nombre del doctor Edgar Oblitas Fernández, Presidente del Tribunal de Justicia de la Nación en 1985 y 1988 (A iniciativa suya se tramitó el Acuerdo de Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia 15/2008). Como parte de sus

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competencias tuvo a su cuidado la publicación de la Gaceta Judicial Agraria de Bolivia, el Catálogo Bibliográfico de la Biblioteca Tribunal Agrario Nacional (2005), los Discursos Informes de los Presidentes de la Corte Suprema de Justicia 1927-1977, en dos tomos (2006); los Discursos de los Presidentes en las Aperturas de los Años Judiciales (reedición de 1927) en ocasión del Centenario de la Corte Suprema de Justicia (2007); Agenda Judicial (2008); El Poder Judicial de Bolivia. Memoria Histórica. Homenaje al Bicentenario del 25 de mayo de 1809 (2009), los Discursos Informes de los Presidentes de la Corte Suprema de Justicia 1977-2007, en dos tomos (2009) y las biografías de los Presidentes de la Corte Suprema de Justicia de Bolivia 1827-2007 (2009). Fuente: CV; Amusquivar, 2010: 79-82.

ANDRADE DÍAZ, SONIA

(La Paz, 10 de octubre de 1954) Licenciada en Bibliotecología y Archivología UMSA (2005). Secretaria Ejecutiva egresada del Lincoln Institute (1975). Hizo los Diplomados Superiores en Gestión de la Documentación y Archivos, Universidad Loyola (2005); Educación Superior (UMSA, 2007); y Administración de Archivos (Universidad Nuestra Señora de La Paz, 2008). Participó en el curso Gestión de Documentos y Archivos Administrativos, organizado por la Dirección General de Libro, Archivos y Bibliotecas y la Agencia Española de Cooperación para el Desarrollo (2007). Docente de Organización de Archivos en el Curso Virtual de Bibliotecología y Ciencias de la Información, UMSA (2010). Participó en los Congresos Nacional e Internacional de Bibliotecología (2003, 2005, 2007 y 2009). Siendo una eficiente secretaria en la UMSA, decidió estudiar Bibliotecología y Archivología. Ya titulada, fue promovida a Encargada del Archivo del Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana (2007), donde propuso la creación del Archivo Central del CEUB y de la Cooperación Universitaria Técnica Especializada COUNIT, proyecto financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y la Vicepresidencia del Estado Plurinacional. Interesada en el avance archivístico realizó gestiones ante el XI Congreso Nacional de Universidades, para integrar a las Bibliotecas, Archivos y Museos como componentes del Patrimonio de la Universidad Boliviana, en julio de 2009. Fuente: CV.

ANDRADE PADILLA, CLAUDIO FROILÁN

(Catavi, Provincia Bustillo, 31 de octubre de 1956) Fue funcionario del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* entre 1984 y 1993. Considera a esa institución como su universidad, pues en ella aprendió el valor de los archivos y los documentos. Apoyó a E. Aillón* en el proyecto de recopilación de documentos sobre la hacienda “San Pedro Mártir”. Fundó la Consultoría Especializada en Investigación Documental e Histórica, con la que se dedica a la pesquisa de fuentes para terceros, ya sea para apoyar tesis de doctorado (como la del historiador Robin Kiera, Universidad de Münster), o investigaciones (como la de la Dra. Heidi Scott, Universidad de Gales). Ha sido integrante del Comité de Historiadores de la III Olimpiada del Saber Histórico, dentro de los programas del Bicentenario del primer

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grito de libertad, en Sucre. Es autor de Rebeliones indígenas de 1780-1781 (Sucre, El Ciprés, 1994), con una versión bilingüe castellano-quechua editada por ACLO; Fancesa, monopolio y poder político (Sucre, Túpac Catari, 2000), Charcas: minería en crisis y dialéctica revolucionaria (2009); coautor de El gran salar de Uyuni (2005) “auspiciado por Asur mediante convenio legal con Verónica Cereceda”, como afirma. Fuente: Brochure: Consultoría Especializada en Investigación Documental e Histórica, prospecto. Comunicación personal (20.05.10).

ANGULO, BASILIO Importante amanuense de Julián Apaza (Túpac Katari*), a quien acompañó hasta Copacabana, donde escribió dos bandos, en Copacabana y Yunguyo, a nombre del líder indígena y de Miguel Bastidas, instando a los indios a la rebelión. Fuente: Valle de Siles, 1990.

ANTEZANA ERGUETA, LUIS (La Paz, 1928)

Político, escritor, de formación polifacética. Estudió Medicina (La Paz), Derecho, Ciencias Agrarias (Cochabamba) y Economía Agraria (Venezuela). Dedicó su vida al análisis de la historia y la economía agraria boliviana. Fue docente de Economía Agraria en la UMSA y en la Universidad de Nuestra Señora de La Paz. Abrazó las filas del Movimiento Nacionalista Revolucionario, habiendo sido designado Vicepresidente y Presidente del Consejo Nacional de Reforma Agraria (19951996) y asesor de las Cámaras de Diputados y Senadores. Fue Director del extinto Fondo Editorial de los Diputados (1988). Es académico de número de la Academia Boliviana de Historia Militar y miembro honorario de la Academia Nacional de Ciencias Genealógicas y Heráldicas de Bolivia. Autor de Evaluación económica-política de la Reforma Agraria (1986), Historia secreta del Movimiento Nacionalista Revolucionario (1985-1988), Trampas y mentiras de la Ley INRA (1999), Práctica y teoría de la Asamblea Constituyente (2003), Pisagua: proyecto de solución de la mediterraneidad de Bolivia (2003), Constituyente reformista o revolucionaria (2004), Proteccionismo y libre comercio en Bolivia (2005), La contrarevolución del 4 de noviembre de 1964 (2006), Historia del Estado en Bolivia (2007), Los tanques en la Guerra del Chaco (2010), Masacres y levantamientos indígenas en Bolivia (2010). Coautor con su hijo Alejandro de Estructura agraria en el siglo XIX (1992), Juicio y condena a la Ley INRA (1997), La segunda revolución de Cochabamba y la batalla de la Coronilla (2012) y Viva la patria, muera el Rey. Homenaje al patriota Mariano Antezana (2012). Se autodefine como “el último libelista del siglo XX”, por ello afecto al folleto boliviano, del que posee una importante colección. Igualmente, recopiló fotografías, recortes de prensa, revistas y otros documentos relacionados al proceso de la revolución de 1952, imágenes sobre los protagonistas de esa época: V. Paz*, H. Siles*, R. Barrientos*, Juan Lechín Oquendo, Germán Monroy Block, José Fellman Velarde, entre otros. En 2005, entregó su colección fotográfica al Archivo de La Paz*, para fines de identificación, descripción, digitalización y conservación. Fuente: Mamani y Sejas, 2005; Oporto y Quintana, 2005.

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AÑEZ GÓMEZ DE LA TORRE, ALFREDO (Trinidad, Beni, 14 de octubre de 1956)

Arquitecto (UMSA). Fue contratado por el Banco Interamericano de Desarrollo en Centroamérica para trabajar en reconstrucción de viviendas sociales y prevención de desastres naturales (2003-2006). Trabajó para el Ministerio de Vivienda y Urbanismo en Guanay, Totora, Aiquile, Mizque (2002-2003); diseñó el proyecto de la restauración del edificio antiguo de la Patiño Mines (Comibol), donde está el actual Ministerio de Planeamiento, durante los gobiernos de C. Mesa* y Eduardo Rodríguez Veltzé. Tiene el mérito de haber diseñado el proyecto del primer edificio expresamente construido para Archivo, el 2002, destinado al Archivo Histórico “Suárez Hnos.”* de la ciudad de Guayaramerín (Beni), proyecto financiado por el BID. El Archivo fue inaugurado el 2006, luego de la organización técnica de los documentos, proyecto ejecutado por P. Gamarra*, L. Oporto*, J. Zurita* y P. Gosálvez*. En 1986 F. Cajías* y J. Cortés*, trasladaron el Archivo desde Cachuela Esperanza a Guayaramerín, gracias a las gestiones ante el rector Fari Abidar y el director administrativo Jorge Melgar Rioja, de la Universidad Técnica del Beni. En 1999 presentaron el proyecto a Philippe Dewez, representante del BID en Bolivia (falleció en enero del 2010, siendo asesor del presidente Preval ante el BM, en el terremoto de Haití). Añez implementó el Servicio de Mejoramiento de Navegación Amazónica (Semena) con la Embajada de Bélgica; hizo también la restauración de Villa Luta (Lutgarda), la casa de Nicolás Suárez en Cachuela Esperanza (de Villa Judith no queda nada) y arreglos estructurales en la iglesia del pueblo. Fue Viceministro de Vivienda con Evo Morales (2006-2007). Actualmente se dedica a la actividad privada. Fuente: CV.

APARICIO, SEBASTIÁN DE (La Paz)

Escribano (archivista), patriota de las filas de Pedro Domingo Murillo, fue uno de los firmantes de la Proclama de la Junta Tuitiva de La Paz. El 30 de enero de 1825 el antiguo combatiente de las Republiquetas, J.M. Lanza*, lo designó Escribano de la ciudad, y dispuso se le entregase el Archivo de la Municipalidad de La Paz. Fuente: Portugal, 1976: 84; Oporto, 2008: 219.

APARICIO CORDERO, SAÚL IVÁN (La Paz, 9 de febrero de 1970)

Oficial de Policías. Egresó de la Academia Nacional de Policías como Subteniente Profesional el 27 de noviembre de 1992. Realizó el Post Grado de Seguridad Ciudadana (Universidad Policial “Mariscal Antonio José de Sucre”) y estudió Derecho (UMSA). Obtuvo las Condecoraciones, “A la Constancia” y “Caballero de la Orden”. Participó en cursos relacionados a la Carrera Policial en el Centro Nacional de Capacitación de Personal (CENCAP) de la Contraloría General de la República, Investigación Criminal, Comercio Exterior y Políticas de Seguridad Bancaria. Fue designado Jefe de Registros y Archivo de Sub-Oficiales, Sargentos, Cabos, Policías y Personal Administrativo de la Policía Boliviana dependiente de la Dirección Nacional

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de Personal (Departamento de Escalafón Único), siendo uno de los primeros oficiales de la Policía Nacional que hizo estudios especializados en Archivística, como Conservación de Materiales de Archivo (2007), Base legal de los archivos históricos en las instituciones públicas (impartidos por L. Oporto*, J. Ozuna* y L. Zeballos*) del Programa Permanente de Asistencia Técnica de la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional*, y Fundamentos de la Teoría Archivística y Gestión y Organización de Archivos Administrativos (2009). Fuente: CV.

APAZA CHOQUE, ANACLETO (La Paz, 13 de julio de 1944)

Ingresó a la Corporación Minera de Bolivia* como Agente de Control de Protección a la Propiedad (1972). Posteriormente ocupó varias funciones como Mozo de cafetería del Área de Administración de Edificios (1978), Mensajero “B” de la Sección Correos (1980), desde donde fue promovido a Auxiliar “B”, Auxiliar “C” (1986), Encargado “B” (1987), y Mensajero “B” dependiente de Secretaría General (1989). El 20 de julio de 1990 fue promovido como Encargado de Archivo, luego de la calificación de méritos y evaluación de su desempeño por Secretaría General. El 2000 se acogió a los beneficios de la jubilación luego de 28 años continuos de trabajo en la COMIBOL. Fuente: Expediente personal en el Archivo Central de la Comibol.

APAZA NINA, JULIÁN v. TÚPAC KATARI APONTE, ROSITA

Muy joven perdió a su primo en la guerra del Chaco cuando éste cayó prisionero, hecho que la llevó a incorporarse al Servicio Secreto, gracias a su amistad con oficiales del Colegio Militar, junto a su amiga Adela Bello, mujer de pollera oriunda del Beni. A su grupo se integraron Elsa Aguilera, Chabela Reyes, Zoraida Alcoreza, Cristina Velasco y Liz Morales, mujeres con dotes extraordinarias, de notable inteligencia, personalidad y facilidad para realizar contactos con el enemigo, espías que tuvieron notable desempeño durante la Guerra del Chaco, pues trabajaron en territorio ajeno, al mando de G. Velasco*, conocido como Agente “013”, jefe del Servicio Secreto. Estas aguerridas mujeres fueron infiltradas en las oficinas del Consulado del Paraguay en Salta. Rosita figuraba como comerciante arequipeña que trajinaba sus mercaderías por el norte argentino y el sur del Paraguay. La agente Adela Bello aparentaba ser cocinera de pollera y la artista de teatro Elvira Llosa aparentaba ser folklorista peruana, muy activa en la prensa y radio de esa ciudad. Alquilaron un departamento amoblado cerca del consulado, logrando cultivar amistad con funcionarios paraguayos. Invitaron a una cena a Martirián Pérez, jefe de la misión diplomática, a los agentes del servicio secreto y al resto de los funcionarios. Mientras la fiesta estaba en su apogeo, el Agente “013” y Carlos Ackerman, experto en abrir cajas de seguridad, ingresaron subrepticiamente a la residencia oficial, abrieron la caja, requisaron los archivos del Servicio Secreto del Paraguay y documentos relativos a la guerra, vaciando su contenido en dos

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maletas. Concluida la misión las espías abandonaron el departamento por la puerta de servicio, huyendo rumbo a Tupiza. Fuente: Durán, 1997: 106-109.

ARAMAYO SERRANO, SORAYA (Potosí, 28 de noviembre de 1968)

Licenciada en Turismo (Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca). Asistió al Taller Nacional Teórico Práctico sobre Técnicas de Procesamiento Documental (1991), Seminario Nacional de Archivística, a cargo de la Dra. S. Schenkolewski Kroll*, experta en archivística y bibliotecología del Estado de Israel (1993), Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (1995), Seminario La Archivística y la Preservación del Patrimonio Histórico Documental (1996). Participó como becaria, en el Seminario de Organización de Sistemas de Archivos, auspiciado por el Centro Iberoamericano de Formación en La Antigua, Guatemala (1997), hizo el curso de Manejo de Sistemas de Microfilm, dictado por el experto de los Archivos Nacionales de Francia, Joël Surcouf (1997), curso de Microfilmadora y Reveladora, dictado por el Ingeniero Adolfo Saldivias (1998), Paleografía Hispanoamericana (Siglos XV–XVIII), dictado por el Dr. J.M. López Villalba* (2000). Asistió al Primer Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos, UMSA (2002), Primer Taller Básico de Conservación Preventiva y Restauración Para Materiales de Archivo (2006), Conservación Preventiva y Restauración del Papel para Bibliotecas (2007), y al IV Congreso Nacional de Bibliotecología, Documentación, Archivística y Museología (2008). Publicó artículos en la Revista de la Casa Nacional de Moneda, el Boletín del Archivo Histórico de la Casa Nacional de Moneda y la Revista de la Fundación Cultural del B.C.B. En 1991 fue designada, por el Banco Central de Bolivia*, en el cargo de Auxiliar del Archivo Histórico de Potosí* (Casa Nacional de Moneda) y en abril de 1994 como Catalogadora, en el que se mantiene actualmente. Publicaciones archivísticas: “Documentos del Banco de San Carlos y la Compañía de Azogueros” (Boletín del Archivo Histórico de Potosí, 1995, 10: 37-39); “El Archivo Histórico y el rescate documental” (Boletín del Archivo Histórico de Potosí, 1996, 11: 33-36); “Testamento de Luis Cabello, constructor de la Casa de Moneda” (Patrimonio Monumental. Casa Nacional de Moneda. Potosí, 1999: 17-24). Fuente: CV.

ARAMAYO ZEBALLOS, CARLOS VÍCTOR

(París, Francia, 7 de octubre de 1889. † París, 1981) Estudió en el Beaumont College y Exeter College de Oxford (Inglaterra). Fue tercer secretario de la Embajada de Bolivia en Buenos Aires (1916), Diputado por Sud Chichas, Tupiza (1916-1920), Agente confidencial de Bolivia en Washington D.C. (1920). En su calidad de delegado ante la II Asamblea de la Liga de las Naciones (1921) planteó la revisión del Tratado de 1904 con Chile. Fue Embajador de Bolivia en Londres y París; y también fue Ministro de Hacienda y de Relaciones Exteriores

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(1935). Premio Cabot de Periodismo (1947). Heredó las empresas mineras de su padre, Félix Avelino Aramayo, siendo conocido en la historia como uno de los tres Barones del Estaño, junto a M. Hochschild* y S.I. Patiño*. Controló la política boliviana y fue dueño del influyente periódico La Razón. Presidente de sus empresas mineras (1926), agrupadas en torno a la Compagnie Aramayo de Mines en Bolivie S.A., con sede en Ginebra (Suiza), las que fueron expropiadas, junto a sus archivos, el 31 de octubre de 1952, por el gobierno de V. Paz Estenssoro*. Actualmente sus archivos forman parte del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: Alarcón, 1925: 366; Wikipedia (14.2.12).

ARANCIBIA ANDRADE, FREDDY

(Uncía, Provincia Bustillo, Potosí 5 de julio de 1957) Radiólogo (UMSFX); historiador, museólogo (autodidacta) y antropólogo social y cultural (UCB, Cochabamba). Fue docente de la UMSFX (1986-1987) y la Universidad Nacional “Siglo XX” de Llallagua (1987-1990). Se identifica como discípulo de G. Mendoza*, quien lo acogió en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. Miembro del Consejo Internacional de Museos, París, Francia (1994). Estudió el origen de la danza de los diablos, a la que denomina Tinku-Diablo, postulando su origen en la mina de Aullagas, trasladada a Uncía, donde actualmente se celebra en la Fiesta de San Miguel. Es autor del proyecto de restauración del palacete de Simón I. Patiño en Uncía, donde se erige hoy un museo histórico, restaurado con financiamiento de la cooperación española. Hasta allí logró hacer trasladar los archivos judiciales de la provincia Rafael Bustillos. Fue Director de Cultura y Turismo de la H. Alcaldía Municipal de Uncía (2003-2007) y Consejero Departamental por la provincia Bustillos (1997-2000). Publicó varios libros, entre ellos Leyenda e historia de la diablada. Fiesta de San Miguel en Uncía (Llallagua, Universidad Nacional Siglo XX, 1991); Uncía y Llallagua. Una historia ignorada (Llallagua, 1998); Uncía. Historia, cultura y turismo (2008). Fuente: CV.

ARANCIBIA MOLLINEDO, JOSÉ (La Paz, 17 de junio de 1952)

Capitán de Policías. Estudió en la Academia Nacional de Policías (1972). Es licenciado en Ciencias Políticas de la UMSA (1996). Realizó Diplomados en Gerencia Pública, Educación Superior (UMSA) y Museología (Universitas Platense, Sucre). Fundador del Archivo Histórico y Museos Policiales (1999), de la Academia de Ciencias e Historia de la Policía (2009) y del Colegio de Politólogos de La Paz. Trabajó en la organización del Museo Académico (2003) y del Museo del Narcotráfico (2005), que se encuentran en instalaciones de la Academia Nacional de Policías en Següencoma. Director del Archivo Histórico y Museos Policiales, obra de su creación y con escasos recursos de la institución policial. Elaboró el documento de trabajo Organización, funcionamiento, estatutos y régimen interno de la Sociedad de Amigos del Museo Policial, en 1999 (Inédito). Presentó un

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informe completo de su trabajo en su ponencia al III Encuentro Latinoamericano de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas (2011). Publicaciones archivísticas: “El Museo Histórico-Criminalístico Policial y sus proyecciones académicas” (Fuentes, 2011, 5 (12):30-35). Fuente: CV.

ARANDA, JUAN IGNACIO DE (Zaragoza, España)

Licenciado, con residencia en Lima. El célebre Marqués de Cañete lo nombró Corregidor de La Paz el 13 de diciembre de 1558. Hizo refaccionar y mejorar el edificio del Cabildo. Gracias a su descripción podemos reconstruir una sala de Cabildo, que alojaba el archivo de la ciudad: “El salón principal contenía los retratos de los reyes de España en grandes cuadros con marcos dorados: se veía al ambicioso Carlos V, al fanático Felipe II, al holgazán Felipe III, al corrompido Felipe IV, y al débil y supersticioso Carlos II, colocados en distancias proporcionadas. Las sillas canapés y mesas de madera de cedro primorosamente labradas y doradas. El Salón de sesiones del Cabildo, algo más pequeño que el anterior. Los asientos destinados a los miembros del regimiento, eran grandes sillones con respaldones dorados, distinguiéndose en la del Presidente las armas de Castilla; una colosal mesa, cuyos pies representaban las garras de un león, tenía un tapete rojo de tela ordinaria del país; sobre la mesa había un candelero de barro cocido con su gruesa vela de cebo, para ser encendida a su tiempo con un tizón; un tintero también de barro contenía el líquido fabricado de alcaparra por los activos amanuenses y algunas plumas de ave hábilmente tajadas a gavilán constituían todo el menaje de esa soberbia secretaría (…). Allí estaba guardado el estandarte real. Nos olvidábamos: lo que no debía faltar en ninguno de sus aposentos incluso el salón de sesiones, era la imagen del Crucifijo. Tal era la morada de los soberbios funcionarios de la colonia”. Fuente: Aranzáes, 1915.

ARCANI CALLE, JULIO

(La Paz, 12 de mayo de 1959) Fue Encargado del Archivo General de la Corporación Minera de Bolivia* (1987), sucesor de J. Gallardo Irigoyen*, quien fue protagonista en la organización del Archivo de COMIBOL junto a L. Jordán Espinoza*. Prestó servicios en la Corporación Minera de Bolivia como Agente de Control dependiente de Protección a la Propiedad (19731979), Mozo dependiente de Administración de Edificios (1979-1980), Mensajero “B” de la Sección Correos (1981-1986), fue ascendido por méritos propios a Encargado “B” del Archivo General (1986). El 1º de marzo de 1987 fue ascendido a Encargado del Archivo General, sin embargo su retiro se produjo el 30 de abril. Fuente: File personal.

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ARCANI LIMACHI, LEOCADIO (La Paz, 1 de diciembre de 1945)

Modesto funcionario del Archivo Central del Ministerio de Defensa Nacional, responsable del Taller de Encuadernación. En sus 29 años de servicio, ha realizado la encuadernación en pasta dura de la totalidad de volúmenes que han recibido ese tratamiento. Su taller es precario, pero “se da modos para que su trabajo esté siempre puntual”. Autodidacta en el ramo, sin embargo su obra tiene “garantía de perpetuidad”, como señala su curriculum vitae. Fuente: CV.

ARCE GÓMEZ, LUIS (Sucre, 1938)

Militar. Alcanzó el grado de Coronel. Fue dado de baja del Ejército en 1960 acusado de violar a la hija de un superior, por lo que pasó a trabajar como reportero gráfico del periódico católico Presencia, donde fue conocido como “El Mala Vida”. Fue arquero del equipo oficial del Círculo de Periodistas Deportivos de Bolivia. En noviembre de 1964 participó en el golpe de Estado contra V. Paz Estenssoro*, siendo reincorporado al Ejército con el grado de capitán. Luego del golpe de Estado de 1969 contra el Presidente L. A. Siles*, sirvió como Jefe de Seguridad del gobierno del Gral. A. Ovando Candia* quien lo llevó consigo a su exilio a España, luego de ser derrocado por el Gral. Juan J. Torres Gonzáles (1970). Retornó a Bolivia en 1974 y un año más tarde incursiona en el negocio de la cocaína. En 1978 era Jefe del Departamento II de Inteligencia desde donde apoyó al golpe del Cnl. Alberto Natush; en diciembre de 1979 tomó por asalto las dependencias del Servicio de Inteligencia del Estado, secuestró su documentación y la trasladó al Gran Cuartel General de Miraflores. Participó con L. García Meza* en el golpe del 17 de julio de 1980, siendo designado Ministro del Interior, calificado por la CIA como el ‘Ministro de la Cocaína’. En 1982, reconquistada la democracia, huyó a la Argentina, pero el 10 de diciembre de 1989 fue capturado y entregado por el presidente J. Paz Zamora*, a los EE.UU., donde fue condenado a 30 años de prisión, del que fue liberado a la mitad de su condena. El gobierno de E. Morales* logró extraditarlo y enviarlo a prisión el 9 de julio de 2009 para purgar la pena capital de 30 años sin derecho a indulto. Desde su celda denunció que T. Montaño* fue director del Archivo de Inteligencia de la Sección II (Inteligencia Militar) del Estado Mayor General, “que contiene expedientes del Servicio de Inteligencia del Estado”. El SIE, aparato responsable de la represión policial a dirigentes sindicales y políticos, fue creado en 1971 por el Gral. H. Bánzer*, estaba controlado por el Ministerio del Interior y puesto al servicio del Ejército. Con la instauración del gobierno de Lidia Gueiler en 1979, los militares decidieron evitar que ese Archivo fuera revisado por el Ministro del Interior Jorge Selum Vaca. El Gral. Rubén Rocha Patiño, Comandante General del Ejército, ordenó al Cnl. Luis Arce Gómez, Jefe del Departamento II, el asalto al edificio del Ministerio del Interior con el propósito de secuestrar el Archivo secreto del Servicio de Inteligencia del Estado, para su traslado al Cuartel General de Miraflores. El Ministro Selum afirmó que Arce “Se llevó absolutamente todo, (…) todos los expedientes que habían (…) y lo que no podía llevarse lo incendió”. En Santa Cruz un comando de la VIII División asaltó

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las oficinas de la Dirección de Investigación Criminal, con los mismos fines, pero el Ministro logró la devolución de esos archivos mediante el diálogo. Los diputados, con carácter de urgencia, emitieron una resolución camaral exigiendo la devolución de los archivos del SIE, pero estos jamás fueron restituidos. Fuente: De Frente, 1980: 8-11; Soria Galvarro, 1989; Extra, 2009. García Meza, 2010.

ARCE RUIZ, ANICETO

(Tarija, 17 de abril de 1824. † Sucre, 14 de agosto de 1906) Fue abogado, empresario y político. Presidente de la República del 15 de agosto de 1888 al 11 de agosto de 1892. De modesta familia, cursó estudios de secundaria en el Colegio Junín de Sucre y Derecho en la Universidad de San Francisco Xavier. En 1850 fue elegido diputado; perseguido por Manuel Isidoro Belzu se exilió en Copiapó (Chile) donde se interesó por el trabajo de minas y trabajó el yacimiento de plata de Huanchaca con la que llegó a ser el primer millonario del país. Rector del Colegio Pichincha de Potosí en 1857. Fue ministro de Bolivia en Argentina y Paraguay (1863). Durante la Guerra del Pacífico encabezó el Partido ‘Pacifista’, sosteniendo que el Litoral era indefendible y debía buscarse una alianza con Chile. Participó en la redacción de una nueva Constitución. Fue vicepresidente de Narciso Campero (1880-1884), pero debido a sus divergencias en la resolución del conflicto bélico con Chile, fue desterrado en 1881, instalándose en París. Regresó en 1883 y formó el Partido Constitucional, que se transformó en Partido Conservador al fusionarse con el Democrático, para la defensa de las élites empresariales. En 1885 fue nombrado ministro en Chile y, en 1886, en España y Francia. Combatido constantemente por los liberales, durante su mandato hizo construir las carreteras Sucre-Potosí, SucreCochabamba-Oruro, y Cochabamba-Beni; así como el ferrocarril hacia Chile, para el transporte de minerales. Creó el Colegio Militar, electrificó algunas ciudades y modernizó la banca y la inversión. Trató, sin éxito, de que le fuera devuelta a Bolivia la franja del litoral arrebatado por Chile o que se cediera los territorios de Tacna y Arica. Por su carácter enérgico y firme en favor del orden civil y democrático se le conoció como “el Boliviano de hierro”. Sentó las bases para el funcionamiento de un sistema de partidos políticos modernos en el país. En 1879, en plena guerra con Chile, propuso trasladar la Biblioteca Nacional “al local del extinguido colegio Junín, abonando de su cuenta un empleado para su metódico arreglo y mejor servicio por el término de seis años”, acuerdo que aceptó el Gobierno mediante Resolución Suprema de 17 de octubre de 1879. Luego de la Guerra del Pacífico, M.V. Ballivián* insta a la creación de la Oficina de Límites para estudiar las cuestiones limítrofes de Bolivia, y sugiere al Gobierno “a realizar una tarea de copia de documentos en los Archivos españoles y en el Brithis Museum”, instruyéndosele a A. Arce, Ministro Plenipotenciario y Enviado Extraordinario, la copia de 192 documentos de interés nacional, en el Archivo General de Indias* de Sevilla, enviando a esa ciudad a su secretario, L. Salinas Vega* (1886). En esa oportunidad “esboza un plan de investigación histórica para colocar a Bolivia a la altura de los trabajos realizados por otros países americanos”. En ese valioso documento, datado el 24 de diciembre de 1886, describe la precaria situación del Archivo de Indias: “Este famoso Archivo que contiene la documentación de tres siglos, no está catalogado ni menos ordenado.

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Los pocos índices que se están formando son deficientes y no expresan la materia de los legajos a que se refieren. Los papeles no están encuadernados ni foliados, sino envueltos en simples atados o paquetes [que] contienen documentos de diversas épocas y diversas materias”. Arce soñaba con formar “no sólo un Archivo Nacional muy importante, sino que en su género, uno de los más ricos de la América del Sur”. Fuente: Oporto, 2006: 148; Siles Guevara, 1970; Poder Ejecutivo, 1879; http://es.wikipedia. org/wiki/Aniceto_Arce (20.3.12).

ARCHIVEROS DE LA COLONIA Las huestes conquistadoras que poblaron la provincia de Charcas eran lideradas por aguerridos soldados a quienes acompañaban siempre un cura y un escribano. Éste, Escribano Público y de Cabildo, tenía al menos dos funciones muy claras. Por una parte, como Escribano de Cabildo debía llevar las actas oficiales (“guardar con toda fidelidad el Libro de Acuerdos del Cabildo”), resguardar el archivo de la ciudad, extender copias y hacer los traslados; juraba por ley “guardar secreto de lo que en los cabildos se tratase”. En segundo lugar, como Escribano Público es la autoridad del servicio fedatario, es decir, daba fe de ciertas actuaciones y diversas diligencias que pasaban ante su autoridad a las que protocolizaba y autorizaba con su firma (como las Relaciones), y la autenticación, velando por la autoría del titular del documento. Las Siete Partidas, compiladas por orden del rey don Alfonso “El Sabio”, señala al Escribano “como hombre que es sabedor de escribir”. El (Título 8º) del Fuero Real de España, código general de 1255, trata sobre los Escribanos Numerarios. Escriche en su Diccionario Etimológico menciona que es una ocupación “tan delicada como honorífica y respetable”. Era un cargo vitalicio y el oficio solía pasar de padres a hijos. Los Escribanos eran designados por cédula real y para ejercer en América, debían cumplir exigentes requisitos. Eran los custodios de las escrituras públicas que se conservaban en el Arca de las Tres Llaves, de las cuales una quedaba en poder del alcalde, otra en la del regidor y la tercera era custodiada por el escribano. El acceso a los registros era restringido y primaba el secretismo como norma general. Sin embargo, los Escribanos ya servían a su comunidad extendiendo traslados y otorgando copias legalizadas, como parte de sus servicios. En La Paz, entre 1548 y 1562, se sucedieron varios escribanos. En Laja, el 20 de octubre de 1548, P. de Azebedo* fue el primer escribano que certificó las actuaciones del Cabildo fundacional de la Villa de Nuestra Señora de La Paz y de los vecinos hispanos de la nueva ciudad, a los que acompañó. Francisco de Cámara fue designado por el Cabildo de La Paz el 20 de octubre de 1548 como Escribano de la ciudad de La Paz, seguido por un verdadero ejército de escribientes de los que la historia ha registrado vagamente sus nombres: Gaspar Sotomayor (que le reemplazó), Melchor de Espinoza (nombrado por La Gasca), Juan Francisco de Villalobos, Melchor de Ribera, Pedro Ibáñez de Ondarza, Melchor de Ocaña, Francisco de Reinoso, Martín de Olmos, Hernando Carrión, Pedro de Puerta, Gonzalo Franco, Antonio de Valera, Pedro Pedraza, Alvar García, Francisco Logroño, Lorenzo de Cantoral, Hernán González, Miguel Medina, Dr. Ribadeneira, Francisco Quixada, Juan Bravo, Alonso de Nociva, Francisco de Arredondo, Babiles de Arellano, Hernando Cavallero. Mas tarde aparecen Pedro de Manzaneda (1652), Juan de Aleutzia (1664), Juan de Manzaneda (1692), Antonio

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Vásquez, Enrique Charraja* (1751), Jerónimo Chávez de Peñaloza, Mariano del Prado (1814), Francisco Gonzales Manzaneda, el Escribano Álvarez (quien casó con Liberata Graneros, hija del Challat’ejeta), el patriota S. Aparicio* (1825). En Santa Cruz de la Sierra, se perdió el acta original de 26 de febrero de 1561 y el Escribano Francisco Gallego, quien acompañó a los 90 españoles que fundaron la ciudad, suplió ese vacío en nueva acta fechada el 20 de abril de ese año. El Escribano P. de Arteaga* certificó la Relación del gobernador Martín de Almendras Holguín de 1607, Pedro Marino Sarmiento la Relación del Gobernador Ruy Díaz de Guzmán (1618) y Luis Gutiérrez protocolizó la Crónica sobre la Jornada y descubrimiento de las provincias de los Moxos, Dorado y Paytití, llamados Torocíes de Lorenzo Caballero, en 1635. En el Valle de Tarija, el 4 de julio de 1574, el conquistador sevillano Luis de Fuentes estuvo acompañado por el Escribano Francisco Fernández de Maldonado. En La Plata el Escribano Bartolomé Ascanio legalizó ese mismo año una escritura presentada por el Presidente de la Audiencia Juan de Lizarazu, el Procurador General de la Compañía de Jesús en la Provincia de Charcas Juan Navarro, el comerciante español Pedro de Iriarte y tres testigos, por la que Iriarte entregaba 54.000 pesos para el descubrimiento y conversión de los Moxos. Fuente: Crespo, 1972; Gandarilla, 2004; Oporto, 2006: 88-109; Sanabria, 1961: 89, 93; 158-159; Vacaflor, 2004.

ARCHIVEROS DE LA CORPORACIÓN MINERA DE BOLIVIA Grupo de ex trabajadores mineros de la Corporación Minera de Bolivia*, dirigidos por E. Ramírez*, en 1999, quienes protagonizaron una hazaña de salvataje documental equiparable a la de G. R. Moreno*, en 1876 (Sucre), L. Subieta* y A. Alba* en 1938 (Potosí), y A. Crespo* en 1971 (La Paz). Forman parte de ese grupo de archiveros mineros, D. Segales*, A. Sánchez*, O. Quispe* y E. Copa*. Posteriormente, merced a un convenio con la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional*, la Carrera de Historia* de la UMSA y la COMIBOL, se capacitaron sostenidamente en Archivística, Gestión documental, Legislación Archivística, Conservación y Restauración de documentos de Archivo. Actualmente estos archivistas han logrado organizar los documentos de la COMIBOL en La Paz, El Alto, Oruro y Potosí, ciudades en las que se han construido edificios expresamente diseñados para archivo. En una segunda fase se han incorporado profesionales graduados de la UMSA, con los que encaran la organización y servicios en los archivos del Sistema de Archivo de la Minería Nacional*, creado por el DS 27490, dictado por el presidente C. Mesa Gisbert*. Participaron en el Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos de Empresas Estratégicas del Estado, impartida por la Escuela de Gestión Pública Plurinacional (2012). Fuente: Testimonios de los mismos; Oporto y Ramírez, 2007.

ARCHIVEROS DEL INCARIO Funcionarios del Imperio Inca, responsables de administrar el sistema contable del quipu y la memoria histórica. El primero, a cargo de los Quipucamayoc, con presencia en todos los confines del Incario, desde la Pacha (unidad social de 100 familias), hasta la Marka o ciudad inca. Eran apoyados por auxiliares encargados de transportar el

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quipu dentro del territorio del Incario, entre ellos los qachas (mandaderos) y chasquis (mensajeros). El quipu se elaboraba en cuerdecillas anudadas, de fibra vegetal o animal, en varios grosores, tamaños y colores, los cuales denotaban un significado; estaba destinado a registrar información estadística, demográfica, económica y de otros rubros de la vida social y económica (población, ejército, hombres en edad de servir en la milicia, infantes, mujeres, adolescentes, ancianos, cantidad de tejidos y cerámica, etc.). El archivo del quipu se trasladaba anualmente desde las pachas y las markas hasta el Cusco, ocasión en la que eran centralizados por orden imperial. En ocasiones sagradas y días festivos especiales, la memoria del quipu era decodificada y sintetizada por los Amawtas, responsables de elaborar la historia oficial del Incario. Tanto los quipucamayoc como los amawtas, eran ancianos que formaban la sexta y séptima calles en la nomenclatura del ciclo de vida que elaboró G. Poma de Ayala* en su célebre Nueva Corónica y Buen Gobierno. La capacidad de almacenaje del quipu era de 20 años, pero el amawta podía retener los fastos de hasta 500, sin faltar a la cronología de los hechos. La historia ha recogido los nombres de Amaro Toco*, Luis y Francisco Yutu*, el cacique y quipucamayoc Catari El Viejo*, como ejemplos de aquel ejército de archiveros del Inca. Fuente: Oporto, 2006; Porras, 1953.

ARCHIVEROS EN ACCIÓN Grupo de trabajo fundado en febrero de 2008 por los archiveros S. Cuba*, G. Illatarco* y R. A. Santos*. Se muestran como un movimiento reflexivo del quehacer archivístico nacional e internacional, con el objetivo de contribuir al rescate, conservación y difusión del patrimonio documental. Editan un boletín ocasional en celebraciones o eventos archivísticos, con el fin de difundir y analizar sus propuestas. Fuente: Comunicación personal de R.A. Santos.

ARCHIVEROS IDÓNEOS (EMPÍRICOS) Desígnase con ese denominativo a los archiveros por experiencia, que no asistieron a la universidad para recibir formación superior en esa especialidad. Constituyen, hasta hoy, la mayoría de los trabajadores de archivos en Bolivia. Desde 1976 se han organizado en Asociaciones de existencia efímera, tales como la Asociación de Archivistas de La Paz*, Comité Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia*, Comité Nacional de Trabajadores de Archivos, Bibliotecas y Museos; Comité Departamental de Trabajadores de Archivos, Bibliotecas y Museos; Asociación de Archivistas y Bibliotecarios de La Paz. En el anteproyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos*, aprobado en el Congreso Nacional de Archivistas de 2007 (Sucre), se contempla la profesionalización obligatoria de los archivistas idóneos, mediante un programa especial de titulación, que les permitirá incorporarse al Escalafón Nacional de Archivistas que se pretende formar a la manera de un cuerpo facultativo.

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ARCHIVEROS MILITARES Dentro de la institución castrense existe un reducido grupo de archiveros militares, pocos por vocación y la mayoría por destino militar, de duración anual, generalmente repetible en la misma unidad y excepcionalmente por más tiempo. La parte técnica de los archivos está a cargo de militares de vocación archivística y, desde 2000, a partir de la organización del Archivo del Ministerio de Defensa a cargo de L. Oporto* y B. Lecoña*, se incorporó técnicos profesionales formados en la Universidad. Generalmente los archivos militares están a cargo de coroneles con cursos de Diplomado de Estado Mayor (DEM), un grado de alto nivel en la estructura de mando castrense. La responsabilidad de estos jefes militares superiores recae sobre todo en el servicio fedatario, tanto en el Archivo Territorial (autenticación, certificación y extensión de copias legalizadas de libretas del servicio militar), Archivo de Contabilidad (certificación y calificación de años de servicio) y el Archivo Histórico del Ejército (calificación de fases de campaña de la guerra del Chaco), en tanto la responsabilidad técnica (tratamiento archivístico) corresponde a los profesionales. Entre los archiveros por vocación podemos citar al Tcnl. R. Sánchez Morales* (trabajó desde los 80’s en el Archivo de Territorial del Ministerio de Defensa), el Cnl. A. Colque Estrada* (organizó el Archivo Histórico del Ejército), el Cnl. S. Orellana* (reemplazó en el cargo al anterior), el Cnl. R. Soria* (organizó los archivos de la Fuerza Aérea Boliviana y reemplazó al anterior), el Mayor R. Quintana* (sistematizó los archivos de reclutamiento militar) y el suboficial Reynaldo Aguilar (fue uno de los primeros a cargo de un archivo castrense). Entre los militares que llegaron al Archivo del Ministerio de Defensa, por destino, mencionamos al Cnl. Raúl Aramayo Estrada (2002-2005), Cnl. Edgar Flores Peñaranda (2006), Cnl. Teodoro Valero Calle (participó en la Exposición y conferencia internacional de Archivos en Bogotá, Colombia, 2007), Cnl. Carlos G. Arzabe Saavedra (2008), Cnl. Hugo Quiroga Morales (2009, participó en el Primer Encuentro Latinoamericano Bibliotecas, Archivos y Museos), la Cnl. María Edme Siles Pérez (2010) y el Cnl. René V. Medrano (2011). En el caso del Archivo Histórico Militar, fueron designados en ese alto cargo, el Cnl. R. Soria, el Cnl. Rubén García (2011) y el Cnl. Edgar Bilbao La Vieja Espinoza (2012). Fuente: Informe de Bertha Lecoña sobre Responsables del Archivo Central; Oporto, 2006; Oporto, 2011d.

ARCHIVEROS PROFESIONALES Denota a los profesionales formados en cursos superiores universitarios, tanto en la carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* como la carrera de Historia*, ambas de la UMSA, aunque sólo la primera extiende títulos de licenciatura con mención de Archivología y Bibliotecología, los que se hallan agremiados en el Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia CPCIB*. Tambien se especializaron en Diplomados y en los cursos del Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos* (Cordoba, Argentina) y la Escuela de Iberoamericana de Archivos* (Madrid, España) Los archiveros formados en la carrera de Historia dirigen importantes archivos históricos de Bolivia y han organizado destacadas actividades especializadas en este campo. En 1982 han conformado la Asociación de Archivistas Exbecarios de la OEA* cuya existencia se prolongó hasta 1993, cediendo

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el lugar al Comité de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia* que se extinguió en 1996.

ARCHIVEROS SIN FRONTERAS (AsF) Organización internacional sin ánimo de lucro, fundada en Gerona (Italia) en 1998, con representantes de Perú, Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Uruguay, Francia y España, bajo los principios de la Carta Internacional de Archivos. Formada por voluntarios, colabora en el desarrollo de proyectos de cooperación y solidaridad del ámbito de la archivística y el patrimonio documental. Actúa en naciones que poseen un patrimonio archivístico en riesgo de destrucción a causa de conflictos sociales o bélicos, terrorismo o falta de recursos. Ha constatado que es el propio hombre que crea los archivos el que los destruye, a pesar de su notable importancia, pues en los archivos descansa la memoria de la humanidad. AsF ha trabajado en Fez (Marruecos) y en la Recuperación de los archivos de las dictaduras militares de Latinoamérica, como el llamado “archivo del terror” de Paraguay. Está conformado por España (Mariona Corominas), Perú (Aída Luz Mendoza), Francia (Daniele Neirinck), Bolivia (R. A. Santos*), Argentina (Guillermo G. Bustos), Brasil (Jorge Enríquez Vivar), Ecuador (Jorge Yépez), Uruguay (Liliana Gargiulo), Colombia (Jorge Cachiotis) y México (Ramón Aguilera). Desde el 2008, forma parte del proyecto internacional Organización y acceso a los archivos y documentos de los regímenes represivos de Latinoamérica. En Bolivia, R. A. Santos*, Fernando García, N. Figueroa* y Lourdes Ríos, fundaron la filial boliviana el 4 de octubre del 2007. A pesar que es objetivo de esta organización el de apoyar la desclasificación de archivos de las dictaduras, no se los vio actuar en el caso de O. Flores* quien emprendió una cruzada para abrir los archivos de la dictadura de Luis García Meza* (1980-1981), que tuvo el apoyo inesperado del fiscal M. Mendoza* y el juez R. Valverde*, quienes ordenaron su apertura la que luego de ser apelada mereció el histórico auto de la Corte Suprema que declaró la procedencia de la medida. Sus Estatutos Internacionales de Archiveros Sin Fronteras fueron aprobados el 26 de noviembre de 2003, en la Sala de Actos del Archivo Histórico de la Ciudad de Barcelona (España). Publicaciones archivísticas: Qué es el Plan de Actuación Global (PAG) (Documento No. 5, 2004); Archivos y Cooperación. Diez años de Archiveros Sin Fronteras (Barcelona, ASF, 2009). Fuente: Archiveros Sin Fronteras, 2009; comunicación personal de Aida Luz Mendoza (2.2.2010) y R.A. Santos.

ARCHIVO DE LA COMPAÑÍA DE FERROCARRILES ANTOFAGASTA-BOLIVIA (FCAB) Como parte de sus responsabilidades, la Compañía de Ferrocarriles AntofagastaBolivia, encargó fotografías de la construcción y operación de sus líneas en Chile y Bolivia, de Antofagasta (Chile) a Uyuni, Oruro, La Paz, Cochabamba y Potosí, Bolivia. El tramo del ferrocarril a Bolivia se inició en 1889. Las numerosas fotografías se encuentran en los archivos de la compañía en Londres, Antofagasta y Santiago. Algunas fueron publicadas en el álbum Desde el Pacífico. El Ferrocarril de Bolivia y Antofagasta (Chile), 1888-1988 de Howard Blakemore (1990). Fuente: Buck, 1999.

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ARCHIVO DE LA PAZ (ALP) Repositorio fundado por A. Crespo*, refrendado por el DS 09777 (15 de junio de 1971) como Archivo Intermedio Nacional, hecho que provocó un distanciamiento con G. Mendoza*, director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. El Archivo de La Paz se creó con el fondo documental colonial de la Corte Superior del Distrito Judicial de La Paz, que fue desechada y a punto de ser vendida a empresas de papel, no obstante llegó a recoger ciertos documentos de carácter nacional. J. A. Ovando*, denunció la intención de la Corte Superior de Justicia de La Paz de desechar sus archivos y llamó la atención de los historiadores, los que acordaron con la Corte, organizarlo técnicamente en la UMSA y disponerlo al servicio público. Más tarde el ALP realizó importantes esfuerzos para recoger archivos de provincias y de personajes ilustres de La Paz; y de igual manera una parte muy reducida de documentos de la UMSA. Funciona como un laboratorio de investigación para los egresados y titulados de diversas facultades de la UMSA, pero sobre todo los de la Carrera de Historia*. Durante la gestión de L. Escobari* se construyó el moderno edificio donde funciona actualmente. Carece de personal de planta en número suficiente para cumplir su misión, por lo que acude a pasantías de estudiantes de la carrera de Historia de la UMSA, quienes a tiempo de realizar prácticas, elaboran instrumentos descriptivos. Para este fin recibió generoso apoyo de la Universidad de Harvard y últimamente de la British Library. Participó activamente en la organización de talleres departamentales y en el congreso nacional de archivistas para discutir el anteproyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos. El 2010 desarrolló los Programas de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos y el Sistema de Descripción Archivística, con el que se escanearon cien mil fotografías, de la colección donada por la sucesión del desaparecido periódico Última Hora. Los resultados fueron presentados el 21 de febrero de 2011, como parte del Primer Curso de Descripción y Digitalización de Archivos fotográficos. Los directores fueron A. Crespo* (1971-1989), F. Ballivián* (1988-1990), M.L. Soux* (1990), M. Money* (1991), R. Choque* (1991-1994), L. Escobari* (1994-1999), X. Medinaceli* (2000-2004), E. Bridikhina* (2004), R. Barragán* (2005-2011) y M. Money* (2012). En su primera época tuvo vigencia la Subdirección que fue ejercida por R. Arze* (1976-1980) y F. Ballivián (1981-1989). Los Fondos, Subfondos, Series, Subseries y Colecciones Documentales, son: Colonia: Expedientes Coloniales (1558-1824), Series temáticas: Ejército (1781-1888), Remate de Diezmos (1782-1797), Iglesia (1561-1880), Tabacos, Naipes y Papel Sellado (1695-1820); Registro de Escrituras (1564-1825); Cajas Reales (1563-1824); Padrones (1613-1817); Visita de Tierras (1656-1662); Miscelánea Colonial (1580-1820). República: Ministerio de Educación (1909-1960); Ministerio del Interior, Migración y Justicia (1942-1993); Dirección General de Estadística y Censos (1949-1967); Identificación-Dirección General de la Policía (1922-1977), Censo de Extranjeros (1942-1976); Ministerio de Trabajo y Previsión Social-Patronato Nacional de Menores (1947-1951); Contraloría General de la República (1888-1993); Instituto de Trabajadores del Ministerio de Planeamiento y Coordinación (1980-1983), Instituto de Maternidad “Dr. Natalio A. Aramayo” (1955-1979); Prefectura de La Paz (18251975), Expedientes (1825-1969), Obras Públicas (Mapas y Planos, 1869-1982), Planos de Expedientes (1881-1884), Padrones (1829-1950), Catastro (1932-1953), Aduana Agropecuaria Departamental (1942-1987), Subprefectura de Yungas-Coroico (1900-

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1990); Corte Superior del Distrito (1825-1995), Protocolos y Minutas Notariales (18261900), Juzgado de Achacachi (1816-1920), Juzgado de Luribay (1860-1940), Juzgado de Pucarani (1816-1941), Notaría de Sorata (1720-1930), Juzgado de Instrucción Provincia Camacho, Notaría de Fe Pública Provincia Camacho (1768-1994), Notaría Provincia Camacho (1830-1994), Archivo de Pacajes (1857-1980), Alcaldía de Corocoro, Alcaldía de Coroico; Corporación Regional de Desarrollo de La Paz (19741987); Corporación Boliviana de Fomento (1947-1971); Facultad de Humanidades (1944-2000). Colecciones: Academia Nacional de Ciencias-Estación Biológica del Beni (1990-2004), Manufacturas de Textiles Forno (1939-1992). Miscelanea/Colección Republica: Junta de Vecinos de Sopocachi (1939), Amargo Mar (1879-1981), René Ballivián Calderón (1904-1952), Luis Ballivián Saracho (1905-1980), Fernando Baptista Gumucio (1979-1992), Mariano Baptista Gumucio (1830-1996), Guido Capra Jemio (1870-1968), Armando Cardozo González (1958-1996), Gregorio Chirveches Arrospide ((1865-1888), Compañías Comerciales Gomera (1880-1928), Alberto Crespo Rodas (1921-1964), Justo Pastor Cusicanqui (1892-1971), Laura Escobari de Querejazu (1883-1945), Raúl Espejo Zapata (1964-1983), Gloria García de Terrazas (1845-1891), Luis Fernando Guachalla (1895-1954), Kempff Bacigalupo (1851-1870), León M. Loza (1548-1953), Cristina Mejía (Ong’s, 1976-1999), Jorge Mercado (18791992), Fructuoso Ramos (Minas, 1912-1913), Carlos Navarro (1876-1856), Jorge Alejandro Ovando Sanz (1921-1927), José Manuel Pando (1897-1917), Partido Liberal (1916-1917), Francisco Javier Pescador Sarget (1947-1999), Claudio Pinilla (1883-1906), Julio Romero (1940-1959), María Josefa Saavedra (1616-1955), Sociedad Boliviana de Sociología (1948-1954), Sociedad Geográfica de La Paz (1822-1948), José Luis Tejada Sorzano (1830-1939), Julio César Valdez (1568-1934), Gualberto Villarroel (1944-1948), Alberto de Villegas (1918-1932), Federico Zuazo (1886-1895); Colección Asamblea Constituyente (2006-2007), Colección Fiesta Popular Paceña (1880-2008). Colecciones Fotográficas: Colección Histórica (1863-1990); Fondo Fotográfico Última Hora (1930-2002), Colección de la Barra de Muñoz Reyes (fines del XIX-1902), Luis Antezana Ergueta (1940-2003); Fondo Oral (1966-1996). Cuenta con una biblioteca de aproximadamente 10.000 volúmenes, una hemeroteca. Desde 1976 (N° 1) publica el Boletín del Archivo de La Paz, al 2012 llega al N° 27. En 1993 fue reconocido con un Diploma en mérito al “Servicio Documental” por el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas*. El Gobierno Autónomo Departamental de La Paz declaró al Archivo de La Paz “Patrimonio Histórico-Cultural del Departamento de La Paz”, mediante Decreto Departamental Nº 023/2012, de 20 de junio de 2012, y el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, “Patrimonio Histórico, Cultural y Documental del Municipio”, mediante Ley Municipal Nº 021, de fecha 13 de julio de 2012. Fuente: Boletín del ALP, Nº 27 (2012), Guía del Archivo de La Paz (2008).

ARCHIVO DE LA VILLA DE LA PLATA; ORDENANZA VIRREYNAL Célebre Ordenanza dictada por el Virrey F. de Toledo* (1574), que instruye la creación de los Archivos de Cabildo en la jurisdicción del Virreynato del Perú, señalando las obligaciones de los Escribanos, el acceso y su limitación, el régimen fedatario, las sanciones y los derechos de los ciudadanos.

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Ordenanza Unas de las cosas que mas es menester para el Gobierno de las republicas de estos estados de su Majestad es la guarda, e buen recaudo de las Provisiones, é Cedulas reales que de ordinario se proveen por el Real Consejo de las Indias e por los Viso Reyes, e Gobernadores que su Majestad envía… (…) quedando las dichas Provisiones todas sin ningún efecto, si no hay recaudo en la guardia, y si no estuviesen puestas por orden, de suerte que se pudiese ver, y entender de Ordinario para la ejecución, e cumplimiento de ellas que es lo que principalmente se ha de pretender, y para que de aquí adelante le haya. Ordeno y mando que en el Archivo que yo dejo proveído que haya en las Casas del Ayuntamiento en la misma sala donde se hace cabildo haya tres llaves. La una de las cuales tenga el Alcalde más antiguo, y la otra un regidor cual señalare el Cabildo, y la otra el dicho escribano, y en el dicho Archivo esté el Libro de las provisiones Originales que yo dejo encuadernadas, las que se han podido haber hasta ahora con las diligencias que por mi mandado se han hecho, el cual dicho Libro no se pueda sacar fuera de la dicha Sala, ni quitar de el algunas de las dichas Provisiones, ni para sacar Traslado, ni para sacar el original en algún Proceso, ni por otra causa ninguna, so pena de mil Castellanos, repartidos por los que tienen las dichas Llaves, en los cuales desde ahora les doy por Condenados lo Contrario haciendo, e mando que el Juez de residencia averigüe ante todas cosas lo contenido en esta Ordenanza, e pareciendo culpados ejecute la dicha Pena, y lo mismo se entienda en lo que toca al Libro de estas Ordenanzas Originales que ha de estar junto, y encuadernado con lo susodicho. Libro en que estén sacadas y autorizadas todas las provisiones y cédulas. En el mismo Libro, el traslado de estas Ordenanzas. Todo lo que se traslade a los dos meses de estas Ordenanzas, el Escribano de Cabildo, lleve a los Cabildos Ordinarios y le tenga puesto encima de la mesa y esté instruido e informado de su contenido de estas ordenanzas, para dar noticias a las Justicias y Regimiento, para que no se vaya ni se pase contra el tenor y la forma de ellas, y que si en esto hubiera descuido o remisión del escribano de cabildo, incurra en pena de 200 pesos aplicados según dicho es. Es necesario que se ponga recaudo en las Provisiones que de nuevo vinieren de su Majestad o los Viso Reyes y Gobernadores proveyeren para el buen gobierno de la República, ordena y mando que el mismo día que recibieren el Despacho aun que no sea día del Cabildo, se junten y lean las cartas y provisiones que con ellos vinieren, y sin salir de la dicha Sala las pongan luego con las demás en el dicho Libro Originales, y las hagan trasladar, y autorizar en el Libro de Provisiones y Ordenanzas que ha de estar en poder del escribano del Cabildo, y cuando partiere el Correo den aviso al Viso Rey o Gobernador que fuere del recibo de las dichas Provisiones y Cartas y de lo que se hizo en la Custodia, y ejecución de ellas y asimismo lo dejen asentado en la margen de la Provisión que se trasladare y autorizare para que de aquí adelante haya el recaudo que conviene a las dichas Provisiones y Cédulas; y este dicho Libro por muerte o ausencia del dicho escribano de cabildo se entregue al que sucediere en el dicho Oficio, so pena que si en todo lo contenido en esta Ordenanza hubiere descuido, el Cabildo incurra en pena de cien pesos repartidos como a cada uno le cupiere. Fuente: Poppe, 2000.

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ARCHIVO DE LAS SUBLEVACIONES INDÍGENAS DEL SIGLO XVIII Colección de 200 cartas producidas por indígenas en la época del Cerco de La Paz, en el siglo XVIII, formada por M.E. del Valle de Siles*, para documentar su Historia de la Rebelión de Túpac Katari, obtenida de diversos archivos los que luego fueron entregados en calidad de donación al Archivo de La Paz* (1991), con lo que se fortalece la colección organizada por J.R. Gutiérrez*, existente en la Biblioteca Central de la UMSA, de gran valor para la historia de la rebelión desde el punto de vista indígena y el que se conserva en el ABNB* (Fondo Audiencia de Charcas, Serie Sublevación General de Indios, 1777-1810). Los diarios, informes oficiales remitidos al Virrey Vertiz, por Sebastián de Segurola, al Obispo de La Paz Remigio La Santa Ortega, al Cabildo y a los comandantes I. Flores* y José de Reseguín, son fuentes que permiten conocer detalles de lo que acontecía en La Paz durante el cerco de 1781. A estos se suman otros Diarios, como el anónimo atribuido a T. Cotera*. Sin embargo, en el caso de los campamentos indígenas, no existen fuentes propias, al margen del “informe” del padre Borda y el que redactó el escribano E. de Loza*, “quien tuvo trato personal con Túpac Katari”. Generalmente los informes relativos a la visión indígena, subyacen en el expediente que consigna las declaraciones hechas durante las confesiones de los rebeldes indígenas; y numerosas cartas y mensajes intercambiados entre ellos, que suman 200. Estas fuentes permiten “reconstruir a brochazos lo que era la vida cotidiana en el campo de los que si un día fueron los vencedores, resultaron a la larga y como siempre los perdedores”. Entre ellas está la carta de Ascencia Flores a su marido Diego Quispe, el Mayor (Mocomoco, 4 de octubre); Rosa Luque al Alférez Real Diego Quispe, el Menor (Patambuco, 10 de septiembre); Nicolás Apaza a Gregoria Apaza (Peñas, 22 de octubre); Gregoria Apaza a Miguel Bastidas (Achacachi, 30 de octubre); Andrés Túpac Amaru al Alférez Real Diego Quispe (Cruz Pata, s.d.); Casimiro Arias a Quispe, el Menor (Taresquía, 1 de septiembre), Andrés Túpac Amaru a Gregoria Apaza (Azángaro, 11 y 24 de octubre de 1781); Diego Quispe, el Mayor, a Diego Quispe, el Menor (Mocomoco, 16 de agosto; Capinota, 2 de octubre de 1781); Miguel Bastidas a Quispe, el Mayor (Cruz Pata, 11 de octubre), del Común de indios a Gregoria Apaza (Sorata, 23 de mayo); de Quispe, el Menor al Mayor (Tejar, 10 de octubre). “Los rebeldes, por lo general, no escribieron personalmente sus cartas porque no sabían castellano o porque si lo conocían, no sabían escribirlo. Incluso puede verse que aun pudiendo escribir usaron amanuenses, seguramente porque ello les daba un cierto estatus. B. Lewin afirma que tres fueron los escribientes en castellano: Agustín Carlos Troche, Joaquín Anaya y Basilio Angulo Miranda. Utilizaron, por lo tanto, secretarios mestizos o criollos, conocedores tanto del castellano como de las lenguas aborígenes, las que por entonces no podrían escribirse habitualmente, salvo el caso de algunos misioneros que se emplearon en crear una grafía que en todo caso no estaba al alcance de los profanos en la materia”, mas, como lo hace notar del Valle, son “los propios sublevados los que dictan porque el estilo y la estructura que no son propiamente los que usaría una persona de habla castellana, no cambian, aun cuando hayan sido utilizados diferentes plumarios; se notan además, ciertas constantes psicológicas (….) Es por ello que el epistolario indígena tiene tanto valor sociológico y resulta una magnífica pauta para captar las situaciones y estados de ánimo”. Por esa razón se puede afirmar que son cartas de autoría de los líderes indígenas, lo que les da

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un valor testimonial de primer orden, en tanto que al amanuense criollo o mestizo le pertenecen, por lo general, los comienzos y los finales de cada misiva, es decir su parte convencional, “pero lo esencial de su contenido está en el mensaje que se quiere transmitir, en el cual se reflejan siempre los sentimientos genuinos de quien las firmaban y las circunstancias reales que se vivían”. Fuente: Valle, 1990: 342, 347; Lewin, 1957: 528-529.

ARCHIVO DE MOJOS Y CHIQUITOS La historia de este Archivo, es como lo fue la vida misma de su salvador, G. R. Moreno*, es decir fascinante y aventurera y amerita, desde todo punto de vista, contarla. Ninguno como Moreno para asumir retos que superan en gran medida la capacidad de una persona. Asumió el desafío de organizar, ordenar, encuadernar y transferir a Sucre, el Archivo de Mojos y Chiquitos, que llegó a sus manos “por obra de la misericordia”. El Archivo que contenía los documentos producidos por las Misiones de las provincias de Mojos y Chiquitos, fue custodiado por el Gobernador L. de Ribera*, quien el 5 de septiembre de 1788, reunió sus papeles en cinco cuerpos, desde 1776 hasta 1786. Más tarde, el Oidor Antonio de Villa Urrutia, Protector de las dos provincias, nombró a N. Vidal* como archivero (1795). En 1803 se nombró a Don J.J. Zuzunaga* como archivero, quien tuvo que entregar los papeles al escribano de cámara A.M. Toro* y el de Misiones al Relator L. Fernández de Córdoba*. En 1806, el Gobernador P. P. Urquijo*, completó el Archivo con legajos de 1802, un mapa de 1804, y un informe de los acontecimientos de Buenos Aires de 1806. Ya en época republicana el Archivo sufrió “el descabalamiento y dispersión, decretados y consumados por el Excelentísimo Gobierno de Bolivia el año 1837, con la mira de buscar datos administrativos para mejor proveer”. En esas circunstancias, el Archivo fue retirado “de su centro por obra de autoridad y ha venido a parar a manos cuidadosas por obra de la misericordia”, es decir, a poder del insigne Moreno, quien organizó y estudió los expedientes, durante dos meses y medio, trabajando tres horas al día y aplicando su curioso “método histórico-cronológico de títulos”, pleno de anotaciones ilustrativas, lo que dio como resultado un exquisito instrumento descriptivo y sus dos introducciones históricas sobre Mojos y Chiquitos. Cumplida la labor contrató a Enrique Barrenechea para “la copia en limpio de las 631 papeletas que contienen todos los títulos del Catálogo”, tarea en la que empleó “dos resmas de papel florete de primera clase a 12 pesos resma, para hojas de refuerzo y separación entre los expedientes agrupados en volúmenes”. Luego tomó los servicios de Zenobio Moreno para la encuadernación en pasta de los 41 volúmenes resultantes. Finalmente, contrató la imprenta de Nicolás Anrique, en Santiago de Chile, el 6 de diciembre de 1888, para la impresión de 300 ejemplares de la obra titulada Biblioteca Boliviana. Catálogo de Mojos y Chiquitos, por la suma de $. 1.030.12. Anrique recibió el encargo de “disponer los 41 volúmenes en folio”, para su transferencia al recientemente creado Archivo Nacional en Sucre (obra también de Moreno), por intermedio de la Legación de Bolivia en Santiago, oficina que había dispuesto $ 910 para la encuadernación y edición de los catálogos, “suma que se ha excedido debido a la extensión que ha tomado la obra por causa de los prólogos y las notas y no poco a la alza de salarios consiguiente a la huelga de

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cajistas que ha ocurrido en el presente año”. Ante esa situación, el escrupuloso Moreno, “se apresuró a cubrir dicho exceso, ascendente a la suma de 376 pesos”, lo que Anrique puso en conocimiento del Responsable de la Legación boliviana. El sorprendente Archivo ha sido organizado por Moreno en tres partes. Archivo de Mojos. Vol. 1-22. Extrañamiento de los Jesuitas (1767-1768, 1767-1772), Gobierno de Aymerich (1768-1772), Gobierno de Velasco (1773-1777), Gobierno de Flores y Peralta (1778-1785), Gobierno de Ribera (1786-1790; 1787-1790; 1787, 1790, 17881793, 1786-1792, 1791-1792), Gobierno de Zamora (1792-1795, 1795-1802, 17911802, 1793-1802), Gobierno de Álvarez (1802-1805), Gobierno de Urquijo (18051811), Camino y Misiones de Yuracarés (1765-1792), Estados, razones y cuadros estadísticos (1802-1820), Expedientes de curas (1792-1811) y Misiones de Cordillera (1799-1803). Archivo de Chiquitos. Vol. 23-34. Gobierno de Villaronte (1767-1774), Visita eclesiástica y estatutos (1768-1769), Gobierno de Bartelemí Verdugo (17771784, 1780-1785), Gobierno de Cañas, de Zudáñez y de López Carvajal (1786-1790), Gobierno de López Carvajal (1786-1791, 1790-1793), Gobierno de Rodríguez (17901799, 1792-1799, 1793-1799), Gobierno de Riglos (1799-1808), Gobierno de Riglos, de Álvarez y de otros (1800-1820). Archivo de la Administración de Misiones. Vol. 35-41. Disposiciones comunes (1768-1808), Gastos y frutos de Mojos (1795-1806, 1806-1808), Protectoría y Receptoría (1768-1810, 1790-1812), Gobierno de Riglos (1799-1808), Correspondencia de Gobernadores (1768-1810) e Índices, inventarios del Archivo (1767-1887). Fuente: Moreno, 1973: 521-522.

ARCHIVO FRANCISCANO DE TARIJA El convento San Francisco de Tarija contiene los documentos producidos por la Orden Franciscana en su obra misional en Tarija y el Chaco, que se expresan en el catálogo del P. P. Corvera*, elaborado en 1916, completado por el P. G. Maldini*. Conserva las memorias y hazañas de los misioneros que, “sin pretensiones de heroicidad, han relatado su vida entre los pobladores chaqueños”. En los últimos años ha sido sistematizado con técnicas modernas de Archivo por el R.P. G. Calzavarinni*, quien además ha impulsado una exitosa política editorial con la que ha editado valiosos manuscritos y reeditado obras ya agotadas, además de su propia obra de investigación.

ARCHIVO GENERAL DE INDIAS (AGI) Fue creado por el rey Carlos III, con el objetivo de centralizar la documentación referente a las colonias españolas hasta entonces dispersa en diversos archivos en Simancas, Cádiz y Sevilla. El proyecto de creación fue elaborado por J. Gálvez* en 1782 y ejecutado por J. B. Muñoz*. En 1785 empezaron a llegar los primeros documentos. Fue organizado por el Archivero propio y Oficiales, siguiendo las Ordenanzas para el Archivo de 1790. En sus ocho kilómetros de estantería, conserva unos 43.000 legajos, con unos 80 millones de páginas y 8.000 mapas y dibujos que proceden de los organismos metropolitanos encargados de la administración de las colonias. Sus fondos corresponden a los producidos por los organismos Metropolitano (Consejo de Indias, s. XVI-XIX; Casa de Contratación, s. XVI-XVIII; Consulado de Sevilla y Cádiz,

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s. XVI-XIX; Secretarías de Estado: Indias, Justicia, Hacienda y Guerra, s. XVIII-XIX; Juzgado de Arribadas, s. XVIII-XIX; Comisaría Interventora de Hacienda Pública de Cádiz, s. XVIII-XIX; Renta de Correos, s. XVIII-XIX; Tribunal de Cuentas de Ultramar, s. XIX; Real Compañía de La Habana, s. XVIII-XIX), Coloniales (Capitanía General de Cuba, s. XVIII-XIX); y Particulares (Duque de Veragua, s. XV- XVIII; General de Polavieja (1876-1898) y Virrey Abascal (1804-1859). Actualmente se encuentra distribuido en diez y seis secciones. Los documentos de la Capitanía General de Cuba fueron repatriados de La Habana después de la Guerra de España con Estados Unidos. Los documentos del Duque de Veragua (descendiente de Cristóbal Colón) fueron adquiridos en 1930. Durante el siglo XIX y XX, los gobiernos de las repúblicas americanas enviaron misiones oficiales a este inmenso repositorio, para respaldar sus derechos territoriales en los numerosos litigios fronterizos provocados como efecto de la independencia de las ex colonias americanas. Es la meca de la investigación histórica sobre América Colonial. Fuente: España, MEC, 1996.

ARCHIVO HISTÓRICO CASA SUÁREZ HNOS. El origen de este importante Archivo se remonta desde la fundación de Cachuela Esperanza (distante a 45 Km. de Guayaramerín, Beni) por Nicolás Suárez* en 1882, siendo desde entonces el centro del gran emporio de la goma con su establecimiento industrial. Luego del fallecimiento de Nicolás Suárez, en 1940, la Casa Suárez se mantuvo todavía hasta 1953, con sus hijos bajo la denominación de “Sucesores de la Casa Suárez” que vivieron la decadencia y el fin del emporio gomero. Por tanto, la producción documental de la “Casa Suárez” fue abundante en relación a las actividades industriales, comerciales, financieras, de transporte, de salubridad, de servicios básicos, salarios, mano de obra, etc. necesarios para el funcionamiento y administración de la empresa. Sin embargo, mucha de esta documentación se ha perdido lamentable e irreversiblemente, debido al deterioro de los papeles abandonados a la intemperie, los rigores del clima y “por la imprudencia e ignorancia de algunas personas, que utilizaron los documentos para envolver objetos o empapelar paredes”. Conscientes de su valor e importancia, en 1976 (noviembre) una Comisión del Instituto de Historia y Literatura del Instituto Boliviano de Cultura, a la cabeza de F. Cajías*, secundado por J. Cortés*, y la colaboración de la Fuerza Naval (depositaria de los documentos) y varios voluntarios, entraron en acción conjunta para salvar este archivo, previo diagnóstico de la situación, que se encontraba “amontonado en un viejo caserón; recoger los papeles, limpiarlos, salvarlos de las lluvias, ha sido la primera tarea”, con un ordenamiento preliminar, logrando reunir 373 legajos e identificar en 189 anaqueles la documentación contenida en folders y archivadores y una gaveta con 48 cajones llena de folders, con años topes de 1890 a 1955 y diversos tipos y formas documentales: contabilidad, rendiciones de cuentas, planillas, informes y contratos de navegación, informes de producción, transporte de mercaderías, contratos con casas comerciales de Europa, correspondencia (con casas comerciales, con los gobiernos regionales, con el gobierno central, con particulares), contratos de trabajo, historias clínicas, juicios de expropiación, tenencia de tierras, expedientes, libretas, relaciones de la situación previa y posterior a la Guerra de la

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Acre, informes sobre la participación en dicha guerra, etc. Cajías también destaca la importancia de las fuentes orales (de ex trabajadores de la Casa Suárez o vinculados a ella, como complemento de la documentación) y arquitectónicas de la región. En su informe la Comisión recomendó “la necesidad de buscar un local más adecuado ya que la citada casa no ofrecía la seguridad necesaria”. Previa aprobación de las instituciones responsables del archivo, se presentó la posibilidad de trasladarlo al Palacio de Cultura de Guayaramerín pronto a inaugurarse, sin embargo surgieron dos dificultades en cuanto a su traslado debido a que la rampla del portón del río Yata se quebró, lo que impedía el paso de las movilidades, y luego la negativa del pueblo de Cachuela para que se traslade los documentos a Guayaramerín, aunque con derecho, paradójicamente con el argumento de que formaba parte de su patrimonio histórico, tan descuidado. Así, se tomaron medidas de seguridad y resguardo, con el compromiso de habilitar un local adecuado. Una segunda comisión (noviembre de 1978) a la que se sumó P. Barbáchano*, consultor de la Unesco, inspeccionó el archivo, y tras un diagnóstico sobre el estado de la documentación, evidenciaron el deterioro y la pérdida en un 20% respecto a las anteriores visitas, lo que motivó la imperiosa necesidad y urgencia de su traslado a la ciudad de Guayaramerín, que felizmente se concretó instalándose, de manera acondicionada, en el Palacio de la Cultura de la Universidad “Mcal. José Ballivián” (inaugurado el 19 de noviembre de 1977), gracias al apoyo del Dr. Aldo Bravo, Presidente del directorio del Palacio de la Cultura del Beni y su esposa H. Suárez*. A pesar de la buena acogida, la infraestructura no reunía las condiciones adecuadas para la instalación del archivo, por lo que años después, en 1999, la Universidad Técnica del Beni, el Congreso Nacional y la Unesco firmaron un acuerdo “para el rescate y preservación de los archivos históricos del auge de la goma y de la ex-Casa Suárez”, con la cooperación de la Carrera de Historia de la UMSA* encargada de la “evaluación y clasificación de la documentación”, mientras la Unesco, en su programa de preservación del patrimonio cultural, conjuntamente la Comisión de Política Exterior de la Cámara de Diputados, gestionaría un “ambiente apropiado”. En su preservación también protagonizaron esta hazaña N. Camberos*, Hortensia Suárez y la directora del Palacio de la Cultura Carmen Gamarra. En 2002, el Banco Interamericano de Desarrollo financió la construcción de un nuevo edificio diseñado exclusivamente para el Archivo Histórico con un micro clima estable y atemperado, obra meritoria del arquitecto oriundo de esa región A. Añez* y sustentó la adquisición de 180 estantes metálicos. Por increíble que parezca ninguna autoridad se ocupó de mandar a armar la estantería y contratar personal calificado para organizar la documentación histórica. Gamarra, robándole tiempo a sus labores, logró el traslado de la documentación desde el Palacio de la Cultura hacia dos salas del nuevo edificio. En 2003, el decano de la Facultad de Humanidades de la UMSA, F. Cajías, encomendó a la historiadora P. Gamarra* un diagnóstico de la situación del archivo, quien presentó un informe técnico. Se puso en marcha una serie de planes que se frustraron por falta de recursos. Un hecho circunstancial reactivó el proyecto. El presidente del Senado y del Congreso, Sandro Giordano, ganadero oriundo de Riberalta, se interesó en el asunto. Por otra parte, el historiador A. Lijerón Casanovas* ejercía las funciones de director de Cultura de la Prefectura del Beni y asumió el desafío. Gracias a su tesón, la Prefectura financió el viaje de una comisión técnica de la UMSA y la BAHC, para la organización del archivo. La ciudad

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de Guayaramerín acogió a los archivistas con la proverbial amabilidad amazónica. Inmediatamente empezaron las tareas: se realizó el curso de organización de archivos y se organizó la documentación en cajas normalizadas. La Alcaldía designó a dos funcionarios para trabajar en el archivo y a dos obreros para armar los estantes. El Comando del Ejército (Regimiento RI 17, Independencia) destinó 10 conscriptos para esa labor. Una profesora y varios estudiantes de secundaria se sumaron a la limpieza del legado histórico. Finalmente, el 3 de diciembre de 2005, se realizó la inauguración y entrega del Archivo Histórico de la Casa Suárez, en Guayaramerín, que contó con el apoyo de la Vicepresidencia de la República, la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional (Asamblea Legislativa)*, la Prefectura del Beni, la Alcaldía de Guayaramerín y la Carrera de Historia de la UMSA. Fuente: Cajías, 1976: 17; Cajías, 1977: 1 y 4; Cortés, 1979: 15-19; Oporto, 2005c: C11; Zambrana, 1984: 9; El Deber, 2005: C6; La Razón, 1999: 38; Presencia, 1979: 1.

ARCHIVO HISTÓRICO DE LA SOCIEDAD AGRÍCOLA, GANADERA, INDUSTRIAL Y COMERCIAL (SAGIC) Archivo fundado en 1989 por el empresario C. Calvo Galindo*, Presidente del directorio de SAGIC S.A., que acopió documentos de la época de S.I. Patiño* en la hacienda “Quimbanda”, Valle de Cinti (Chuquisaca), descubiertos por el historiador E. Langer*. Más tarde, E. Aillón Soria*, fue designada coordinadora del proyecto de organización del Archivo, por la directora del Archivo de La Paz* F. Ballivián de Romero*. Realizó la primera clasificación (1989-1990) en la Hacienda “San Pedro”, con E. García Cárdenas*, trasladando el Archivo a la ciudad de La Paz, donde trabajaron Maribel Vargas (1991-2002), Arturo Filipovich (1991-1993), Guillermo Cardona (1990-1991) e I. Jiménez*, quien se hizo cargo del repositorio entre 1997 y 1998. El archivo está conformado por Balances Generales y Memorias; Planillas de Sueldos y Salarios; Asientos de Diario y Contabilidad, Correspondencia e Informes de la empresa. Recogió tres fondos históricos privados provenientes de La Casa Leytón & Vacaflores, La Villa de París (La Paz) y la colección Argandoña. Implementó un archivo de imágenes con documentales y publicidad de la destilería “San Pedro” elaborada por Ecco Publicidad (de María Angélica Kirigin de Calvo); una Colección Fotográfica que registra las distintas etapas de la empresa y un Fondo Oral con entrevistas a fundadores de la empresa, gerentes, administradores, trabajadores, arrenderos y arrieros de SAGIC. En 1991 se formó un Archivo Intermedio (19701980) y en 1994 su Archivo Central, incluyendo los archivos de gestión. El resultado fue un archivo privado modelo, único en su género. Colateralmente impulsó el Proyecto de Investigación Histórica “500 Años de San Pedro Mártir”, para lo cual se creó un Centro de Documentación Especializado, que adquirió bibliografía, encargó fotocopias de documentos existentes en el Archivo General de Indias*, Archivo General de la Nación Argentina, Archivo Nacional de Bolivia, Archivo Histórico de la Casa Nacional de Moneda*, Archivo del Juzgado de Cinti y Archivo de la Notaría de Camargo. Más tarde se incorporó un estudio de recuperación arquitectónica de las construcciones coloniales de San Pedro Mártir y el proyecto arqueológico “Valles del Sur”. Así mismo se realizó un Censo somero de los Archivos judiciales, notariales y parroquiales de Cinti (1994). El 2002, en medio de una situación financiera muy

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difícil, la empresa trasladó nuevamente los documentos a San Pedro. A esa profunda crisis se sumó la infortunada muerte de C. Calvo (2007) decretando el cierre temporal de la actividad industrial de “San Pedro” en 2004. Paradójicamente, la documentación se conserva en San Pedro Mártir, abandonada, como la encontró Langer en 1989. Fuente: Comunicación personal de E. Aillón (29.04.10).

ARCHIVO HISTÓRICO DE POTOSÍ Fundado por A. Alba*. Es el repositorio más importante sobre Cajas Reales de la Colonia. Su organización como Archivo Histórico data de los años treinta, cuando la Sociedad Geográfica y de Historia ‘Potosí’, hace conocer un amplio plan de actividades en junio de 1936, solicitando organizar un centro documental en el edificio de la Casa de Moneda. Es por Ley de 2 de octubre de 1940 que se entrega oficialmente la custodia del edificio a la Sociedad Geográfica y de Historia, comenzando hacer realidad la organización y centralización de la documentación, dispersa en distintas oficinas públicas que no prestaban ningún servicio. Continuando con su misión, el Archivo Histórico de Potosí procedió a la recuperación de la documentación de las provincias del departamento. El Archivo funciona en la Casa de Moneda, repositorio dependiente de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia*. El gobierno de L.A. Siles Salinas* (1969) ordenó transferir su administración al Banco Central de Bolivia*. Historiadores de la talla de L. Hanke*, Tibor Wittman y M. Helmer* valoraron la importancia de sus fondos. Sus directores fueron M. Chacón Torres*, E.A. Valda*, cargo que actualmente ocupa J.A. Fuertes*. G. Mendoza* asesoró a M. Chacón en la organización de sus fondos, junto a G. Ovando*. Desde este repositorio se ejecutó el primer censo de archivos de Potosí, dirigido por E. Valda, logrando recoger los archivos de las provincias de ese departamento. Desde 1985 publicó el Boletín del Archivo Histórico de Potosí, cuyo último número 12 data del año 1997. Está conformado por los siguientes fondos o secciones: Cajas Reales (1550-1825), Iglesias y Conventos (1563-1881), Escrituras Notariales (1568-1983), Cabildo, Gobierno e Intendencia (1620-1825), Ramo de Temporalidades (1626-1825), Casa de la Moneda (1626-1910), Administración de Tabacos (1645-1825), Expedientes Provincia “José María Linares” (1705-1911), Banco de San Carlos (1747-1825), Banco de Rescates (18251898), Tesoro Público (1825-1913), Prefectura del Departamento (1825-1945), Corte Superior de Justicia (1825-1954), Expedientes de la Provincia Chayanta (1830-1954), Banco de Habilitaciones (1833-1847), Honorable Concejo Municipal (1846-1920), Tesoro Departamental (1863-1979), Superintendencia Departamental de Minas (1878-1984), Registro Civil (1912-1941), Sociedad Geográfica y de Historia “Potosí” (1913-1974), Banco Agrícola de Bolivia (1967-1982). En 1993 (25 de noviembre) fue reconocido con un Diploma en mérito al “Servicio Documental” por el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas*. Fuente: Boletín del Archivo Histórico de Potosí, (12), 1997; Censo Guía de Archivos de Potosí, 1993

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ARCHIVO HISTÓRICO DEPARTAMENTAL DE SANTA CRUZ “HNOS. VÁZQUEZ MACHICADO” El origen de este Repositorio se remonta a 1987, en la gestión del Alcalde Municipal Pedro Ribera Sánchez, “con un pequeño presupuesto y un número no determinado de manuscritos y otros documentos recopilados de las Notarías, el municipio y la Judicatura”, que comprenden los siglos XVII al XIX. Recogió importante documentación de carácter departamental, sobre todo de la época republicana. Se organizó un directorio, conformado por personalidades, pero “fue inactivo y no cumplió su función”, siendo disuelto en 1993 (Ordenanza Municipal Nº 0/93 de 23 de agosto), para proceder a su municipalización. Aunque logró el apoyo de las instituciones cívicas y culturales de esa ciudad, pero no pudo concretar su más caro anhelo de dotarse de un edificio propio, provocando continuos traslados, lo que impidió que prestara servicios eficaces con la valiosa memoria departamental que no llegó a ser totalmente organizada. A la muerte de E. Zambrana*, quien ocupó la dirección del Archivo, parte del archivo fue transferido al Museo de Historia* dependiente de la Universidad Gabriel René Moreno. El Archivo recibió copia digitalizada del Archivo del Gral. A. Álvarez de Arenales*, en 2010. Publicó Archivo. Órgano oficial del Archivo Histórico Dptal. de Santa Cruz (Nos. 1, 1988- 6, 1992). Fuente: El Mundo, 1994: 15; La Estrella del Oriente, 1998: 5; Informe de Paula Peña de 22.5.2010.

ARCHIVO HISTÓRICO MUNICIPAL “JOSÉ MACEDONIO URQUIDI” El 23 de abril de 1943, José Macedonio Urquidi* es nombrado por el Alcalde de Cochabamba, director del Archivo Histórico Municipal, quien permaneció en el cargo hasta 1961, dándose así origen formal a la creación de este Repositorio, que empezó a organizarse años antes desde 1941, con la concentración de los escrituras públicas y expedientes coloniales que se encontraban en las distintas notarías (posteriormente fue incrementado con otro grupo), que inicialmente fue instalado de manera precaria “en una oficina anexa a la Jefatura de Mercados, junto al mercado conocido con el nombre de La Recoba”. Después de peregrinar por distintos lugares en busca de un espacio adecuado, fue instalado en la Casa de la Cultura (desde entonces funciona sin una infraestructura adecuada), aunque sin haberse organizado y catalogado adecuadamente; sin embargo a la jubilación del Dr. Urquidi el Archivo quedó cerrado y abandonado, ocupándose sus ambientes con la Oficina de Planificación. En 1974, A. de Morales*, presentó “un plan compendioso de organización y catalogación” de los 500 legajos, consistente en la reagrupación en tres secciones: Protocolos o Escrituras Públicas, Expedientes, y Archivo de Mizque; luego ordenados los legajos con un fichero cronológico (por año), alfabético (por notarios) y materias o temas, y contar con un Reglamento para la correcta administración y servicio a través del Registro del investigador; asimismo de un local adecuado. Sin embargo, recién en 1984 se da un paso importante con la contratación del historiador y archivista Roberto Choque* quien dirigió, a pesar de las adversidades que tuvo que enfrentar, el proyecto de reorganización del Archivo Histórico “José Macedonio Urquidi” (octubre de 1984-mayo de 1985). En su informe hace notar que toda la documentación se encontraba “sin ningún tipo de clasificación y ordenación. Se conservaba prácticamente mezclados

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sin distinguir lo que corresponde a la colonia y república en los anaqueles de los estantes de madera”. En su labor de clasificación y ordenación de la documentación identifica los siguientes dos grupos República: Expedientes Judiciales, de Cochabamba y Provincias (1825-1924), Protocolos Notariales (1825-1900), Minutas (1825-1903); y Colonia (1557-1825): Expedientes (Corregimiento e Intendencia) (siglos XVI-XVIII), Registro de Escrituras (1559-1824), Padrones (1580-1793), Visitas de Cárcel. Concluyendo en sus recomendaciones la urgente necesidad de un local propio y adecuado, equipamiento y personal; que permitirá recibir transferencias documentales e incrementar el acervo documental. De acuerdo a sus Fondos y series, no sólo conserva documentación referente al municipio de Cochabamba: Expedientes Judiciales Cochabamba (1558-1924), Expedientes Judiciales Mizque (1561-1864), Expedientes Judiciales Provinciales (1825-1900), Minutas de Cochabamba (17251900), Minutas de Quillacollo (1830-1900), Padrones de Indios (1580-1745), Protocolos Notariales de Cochabamba (1559-1900), Protocolos Notariales de Mizque (1586-1824), Protocolos Notariales de Quillacollo (1828-1900), Documentos Eclesiásticos (1825 -1867), Vistas de Cárcel (1772-1847). Como órgano de difusión publicó Retrospectiva (número 1, 1993, 2, 1994). En 1993 el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas* le confirió un Diploma de reconocimiento; y el 2004 el Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia (CPCIB)* con una plaqueta. Fuente: Censo Guía de Archivos España e Iberoamérica; Choque, 1985: 1-11; Morales, 1976:

ARCHIVO INTERMEDIO NACIONAL La idea de crear un Repositorio Intermedio se remonta a la hazaña de G.R. Moreno*, quien en su plan de siete puntos proponía destinar en Sucre, un depósito general “de manuscritos históricos de la República, una sala especial, bien segura y seca”, con el objetivo de concentrar “no tocando el suelo y sin confusión de procedencias, los archivos”. En 1883 se creó el Archivo General de la Nación, con una parte histórica, conformada por los papeles de la Audiencia de Charcas y otra administrativa, con los fondos de los Ministerios de Estado. Casi un siglo más tarde, G. Mendoza* dio otro paso importante, mediante la dictación del DS 05758 (7.4.1961), que proponía “el envío al ABNB, de los documentos de carácter nacional, con antigüedad de 35 años”. La idea fue retomada por historiadores de La Paz, esta vez con el DS 09777 (15.6.1971), que instruía exactamente lo mismo, pero con destino al recientemente creado “Archivo de La Paz, dependiente del Rectorado de la Universidad Mayor de San Andrés”, con la salvedad de excluir a los Ministerios del Interior, Relaciones Exteriores y Culto y Defensa Nacional. G. Mendoza retomó la iniciativa haciendo aprobar el DS 13956 (10.9.1976), que “declara de utilidad nacional al Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de Bolivia”*, calificando como tales “a todos los producidos a partir del año 1825”, al tiempo de definir las cinco clases documentales que caracterizan a las documentaciones bolivianas, complementado con el DS 13957, de la misma fecha, en la que a tiempo de informar que está “en estudio la provisión de un repositorio intermedio dotado de los requisitos necesarios de eficacia y seguridad contra todo riesgo donde se podrán instalar los documentos públicos inactivos”, prohíbe

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de forma absoluta la “incineración, venta, desecho y eliminación por cualquier medio” de los documentos públicos. Vuelve a la palestra con tres nuevos decretos (2.3.1989). El 22144, “declara de máxima utilidad y necesidad nacionales todas las documentaciones públicas”, ratifica el concepto de documentaciones públicas, determina las tres fases del ciclo vital de los documentos e incorpora el régimen sancionador del Código Penal para los infractores; el 22145, hace lo propio para las documentaciones inactivas y ordena la “habilitación inmediata por cada entidad de un depósito en una dependencia adecuada” para conservarlas, entre tanto “sea provisto el Repositorio Intermedio Nacional”; y el 22146 se refería al establecimiento del Repositorio Intermedio Nacional para la evaluación de las documentaciones inactivas públicas, “como un anexo y bajo la misma dirección del Archivo Nacional de Bolivia en la ciudad de Sucre, encargándose su construcción al Banco Central de Bolivia y el equipamiento sería gestionado ante la UNESCO; ratifica la exclusión de los tres ministerios señalados por el DS 13957, e incluye en esta salvaguarda al Banco Central de Bolivia*. Todavía logra hacer promulgar un cuarto DS, el 22396 (16.12.1989), que se ocupa de las documentaciones inactivas privadas, en cuyo caso “se estimulará -dice la norma- a los poseedores de documentaciones privadas a transferirlas voluntariamente a los archivos públicos u otras entidades similares”. Con estas cuatro disposiciones pensaba haber zanjado el problema de la radicatoria del Repositorio Intermedio Nacional y consolidar las competencias del Archivo Nacional de Bolivia; al parecer aceptada por la elite intelectual paceña, pues el DS 23934 (21. 12. 1994), sancionado nueve meses después del deceso de G. Mendoza, instruye el traslado de “los archivos de documentación inactiva de los Ministerios al Repositorio Intermedio Nacional cuando venciera el plazo para la permanencia de expedientes en archivo inactivo”. Sin embargo, “en mayo de 1998 el gobierno aprobó el DS 25046, de creación del Repositorio Intermedio del Poder Ejecutivo (RIPE), situado en la ciudad de La Paz, dependiente del Ministerio de la Presidencia de la República, con las mismas atribuciones que se le confirió al Repositorio Intermedio Nacional, es decir, con la misión de organizar y purgar (sic) la documentación inactiva del Poder Ejecutivo con 15 años o más de antigüedad para remitirla y entregarla al cumplir treinta y cinco años de antigüedad al Archivo Nacional, con excepción de tratados, instrumentos internacionales y documentos confidenciales”. Esta medida no consultada con el ABNB, provocó una profunda crisis en el desarrollo de la Archivística nacional, agravada por la manifiesta inviabilidad del RIPE, que no logró funcionar institucionalmente, convirtiéndose en un depósito insano, una “bodega” o una “pocilga” de documentos y de objetos, equipos y materiales obsoletos que remite hasta allí la Administración Pública, cual si se tratara de un almacén de “activos fijos”. En 2006, la dirección del ABNB explicó que “el RIPE se creó porque el Repositorio Intermedio Nacional nunca se hizo realidad”, además de “dos razones más importantes: la sede de los Ministerios del Poder Ejecutivo se encuentra en La Paz y el ABNB en Sucre”; y finalmente, que “el ABNB no tenía, a pesar de su nuevo edificio, la capacidad de funcionar como Archivo Intermedio y recibir toneladas de documentos aunque después sean eliminados”, obviamente como resultado de la evaluación técnica. La última vez que se abordó el tema fue durante el Congreso de Archivistas de Bolivia (2007) que trató el anteproyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos, en el que se diseñó una red de repositorios intermedios a nivel departamental y nacional, retomando

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la idea original de Gunnar Mendoza, al establecer en Sucre los órganos directrices de la Archivística boliviana, que regularán, también, las tareas de los Repositorios Intermedios. Fuente: Oporto, 2006: 229-230; Oporto y Rosso, 2007: 212, 218-220, 225-231, 246, 257-258.

ARCHIVO Y BIBLIOTECA NACIONALES DE BOLIVIA (ABNB) En 1874, G. R. Moreno* levantó un censo de archivos en Sucre, con el que redactó un proyecto de concentración de los recursos documentales de la colonia y la república, que luego será recogido por el diputado D. Calvimontes* quien elaboró el proyecto de ley de creación del Archivo General de la Nación en 1882. El Archivo fue organizado por Ley de 18 de octubre de 1883, que autorizó invertir hasta Bs. 40.000 para “poner en orden y clasificar el Archivo Nacional de la República, coleccionando en sección especial todos los documentos referidos a los límites de Bolivia con otros países”. El Archivo Nacional cumplía la función de archivo histórico, sobre la base de los documentos de la Real Audiencia de Charcas, en tanto el Archivo General de la Nación tenía la misión de recoger los documentos de los ministerios del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo, de acuerdo a la Ley de 28 de noviembre de 1898, la cual no se efectivizó debido al traslado de la sede de gobierno (con los Poderes Ejecutivo y Legislativo) de Sucre a la ciudad de La Paz, como consecuencia de la Guerra Civil de 1898-1899. Era una entidad dependiente del Tribunal Nacional de Cuentas (desde 1928, Contraloría General de la República). El Decreto Reglamentario del 5 de mayo de 1884 le exigía al Archivero Nacional “competencia en la materia, llevar un índice en que se consten todos los papeles, legajos y libros del archivo con expresión de su procedencia y numeración, así como una constancia documentada de todo lo que se saque del archivo así como de los que se devuelvan”. Era responsable de conservar el archivo con orden y método de modo que cada legajo tenga su carátula por orden cronológico en el lugar que le corresponde a cada una de las oficinas, respetando su procedencia. En 1936 se fusionó con la Biblioteca Nacional conformando un servicio unificado, aunque en los hechos funcionaba de esa manera desde hace mucho tiempo. Custodia los documentos coloniales de la Real Audiencia de Charcas desde el siglo XVI y los que produjo la República desde 1825 hasta 1890. Su primer director fue el ingeniero E.O. Rück* (1884-1889, 1904-1909), quien organizó los fondos por materias, hecho que se mantuvo hasta el siglo XX, en el que se introdujo paulatinamente la teoría archivística. En el siglo XX tuvo como director a G. Mendoza*, durante cincuenta años de servicio (1944-1994), gracias a cuyo trabajo se modernizó el tratamiento archivístico y se convirtió en uno de los archivos históricos más prestigiosos de América Latina. Organizó desde 1979 cuatro reuniones nacionales de consulta, fracasando la quinta. En 1985 pasó a depender del Banco Central de Bolivia*, y más tarde de la Fundación Cultural* del ente emisor. A la muerte de G. Mendoza (1994) le sucedieron los historiadores J. Barnadas*, R. Arze*, H. Poppe* (abogado), M. Inch* y A.M. Lema*. El 31 de octubre de 2002, siendo directora M. Inch, inauguró las instalaciones del moderno y funcional edificio que alberga tanto a la Biblioteca como al Archivo Nacional. En la primera década del siglo XXI, retomó el liderazgo impulsando la digitalización de libros clásicos de Bolivia, incorporándose así al Proyecto de la Biblioteca “El Dorado”, impulsado por la Asociación de Bibliotecas Nacionales de Iberoamérica (ABINIA);

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convocó a congresos y reuniones nacionales de archivistas y bibliotecarios en los que se discutieron los anteproyectos de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* y el de Bibliotecas. Desde 1994 publica el Anuario de Estudios Históricos Archivísticos y Bibliográficos, con 17 números al 2011. Está conformado por los siguientes fondos, series y colecciones: Colonia: Audiencia de Charcas (1543-1825): Cédulas Reales (1543-1820), Libros de Acuerdos (1561-1826), Correspondencia (1543-1808), Escribanía de Cámara (1748-1827), Expedientes Judiciales (1570-1825), Juzgado Mayor de Censos (16821777), Misiones de Mojos y Chiquitos (1640-1887), Guerra Civil entre Vascongados y otras naciones (1622-1643), Academia de práctica forense (1688-1831), Universidad de San Francisco Xavier (1613-1820), Sublevación General de Indios (1777-1810); Escrituras Públicas, La Plata (1549-1825); Cajas Reales, La Plata (1773-1824); Catedral de La Plata (Siglos XVII-XIX); Cabildo de Potosí. Libros de Acuerdos (1580-1817); Corregimiento de la provincia de Mizque (1565-1863); Tierras e Indios (1537-1859); Minería (1548-1826); Industria y Comercio (1549-1838); Negros (1549-1824); Guerra de la Independencia (1809-1824). República: Comandancia del Ejército Unido Libertador (1825); Ministerio del Interior y Gobierno (1825-1899); Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1825-1898); Ministerio de Hacienda (1826-1936); Ministerio de Guerra (1826-1898); Ministerio de Instrucción (Educación) (1840-1898); Ministerio de Culto (1842-1899); Ministerio de Fomento e Industria (1879-1898); Ministerio de la Presidencia (1922-1970); Ministerio de Asuntos Campesinos y Agropecuarios (19531970); Poder Legislativo (1824-1916); Corte Suprema de Justicia (1827-1923); Tribunal Nacional de Cuentas (1826-1928); Contraloría General de la República (1906-1971); Banco Central de Bolivia (1869-1987); Correos de Bolivia; Instituto Psiquiátrico (18911986); Escuela Nacional de Bellas Artes (1936-1967); Museo Nacional de Arqueología (1924-1965); Conservatorio Nacional de Música (1907-1961); Corte Superior de Distrito de Chuquisaca (1825-1950); Prefectura de Chuquisaca (1825-1916); Radio Loyola (1969-1986). Colecciones: Ernesto Otto Rück* (1560-1902); José Manuel Pando* (18711908); Otto Felipe Braun* (1826-1938); Samuel Velasco Flor* (1831-1896); Mamerto Urriolagoitia (1965-1970); Fernando Ortiz Sanz; Manuel Giménez Carrazana (18801921); Familia Mujía (1881-1934); Familia Ramírez; Familia Galindo; Luis Paz; Walter Guevara Arze* (1930-1990); Gunnar Mendoza Loza* (1926-1994). En 1993 (25 de noviembre) fue reconocido con un Diploma en mérito al “Servicio Documental” por el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas*. Fuente: ABNB, 2000: 14-23; Mendoza, 1986a: 33-44.

ARCHIVOS DE JUNTAS VECINALES Los Archivos de las Juntas Vecinales, al igual que las Organizaciones Territoriales de Base (creadas por Ley 1551, de Participación Popular de 20.4.1994), fueron legitimados por imperio de la Ley 2341, de Procedimiento Administrativo (23.4.2002), al señalar que “podrán acreditarse a través de la presentación de actas o instrumentos legales”. Este es el ejemplo de un Archivo de Junta Vecinal. El domingo 22 de abril de 2012, se realizó una asamblea de vecinos de la urbanización COVICO, un barrio más de la ciudad de La Paz (Bolivia). El orden del día contemplaba “la entrega de documentación por parte del ex presidente Melitón Quispe”, para cuyo fin unas tres decenas de vecinos se congregaron en plena calle. El acto fue inaugurado por la

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Presidenta de la Junta de Santo Domingo, Sra. Lublia Chuquimia, quien presentó al ex dirigente y le cedió la palabra. Con orgullo, el vecino tomó la palabra y entregó una carta oficial que describía el contenido del archivo de la Urbanización COVICO, que había organizado durante su gestión dirigencial. Aprovechando la circunstancia el ex dirigente rememoró la historia de la vecindad que se originó en la Cooperativa de Vivienda de la Corporación Minera de Bolivia (COVICO), formada por trabajadores de esa empresa estatal, quienes se adjudicaron 91 lotes de 150 mts.2. En 1999, los vecinos eligieron a Melitón Quispe (1950) como su dirigente y éste junto a los vecinos David Plata, Celia Roque y Alicia Mamani, iniciaron los trámites ante la Alcaldía Municipal para obtener la Planimetría legalizada, requisito esencial para construir, la Tarjeta de Propiedad, los Planos del Área de Equipamiento, los Planos de Estudios Geológicos. Al mismo tiempo, desglosaba cada uno de los inmensos documentos, ratificando que “son originales”. Adicionalmente entregó un archivador de palanca, repleto de correspondencia, mostrando su contenido, explicando que “contiene todas las cartas y memoriales que hemos presentado para conseguir nuestra planimetría”. Alguien dijo en voz alta que se debía foliar los documentos antes de entregarlos a la Presidenta. Sobre la marcha, dos vecinos realizaron la foliación de motu proprio, contabilizando 317 folios. La presidenta de la Junta con términos sencillos expuso la importancia de los documentos que acababa de recibir: “estos documentos, estimados vecinos, son como el certificado de nacimiento de la urbanización. Muy pocos dirigentes han hecho lo que don Melitón: guardar el archivo de la urbanización. Es más, pocas urbanizaciones tienen su documentación legal completa como el caso de ustedes. Los felicito”. A tiempo de concluir el acto, señaló que “mandará hacer una fotocopia simple de toda la carpeta para entregarla al representante de la Junta”. Algo sorprendente sucedió en ese momento, pues uno de los vecinos opinó que debía ser al revés, es decir “que el Representante de la Urbanización custodie los documentos originales y se entregue a la presidenta de la Junta las copias simples”. Tanta claridad sobre el valor de los documentos, sorprende sin duda alguna. De inmediato la Asamblea nombró Custodio del Archivo de la Urbanización COVICO al Representante de la Urbanización”, con la instrucción expresa que a su vez entregue el Archivo al próximo dirigente que se elija. De esa manera, aquel ‘certificado de nacimiento’ de la Junta de Vecinos de la Urbanización COVICO, junto a toda la documentación generada desde 1999, queda en poder del Archivero de la Junta, ejemplo sorprendente sobre el manejo de la documentación oficial en organizaciones vecinales. Melitón Quispe, es actualmente dirigente de una central agraria en los Yungas. Fuente: Asamblea de Vecinos de la Urbanización COVICO del Barrio de Pampahasi, La Paz (22.4.2012).

ARCHIVOS DE LAS DICTADURAS MILITARES (DESCLASIFICACIÓN DE LOS) En 2010 la Corte Suprema de Justicia de la Nación declaró procedente la demanda de Desclasificación de los Archivos de las dictaduras militares de Bolivia. Desde su creación en 1983, la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Mártires por la Liberación Nacional ASOFAMD, ha luchado denodadamente por encontrar a los desaparecidos durante las épocas de dictadura y democracias autoritarias en Bolivia. El Consejo Interinstitucional para el Esclarecimiento de Desaparecidos

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Forzados CIEDDEF, presidido por el Ministerio de Justicia, logró exhumar -después de 40 años- restos óseos de nueve combatientes de la guerrilla de Teoponte (1969). En los últimos años la ASOFAMD, impulsó la campaña de “Desclasificación de Archivos”, como contribución al conocimiento de la verdad y la justicia, demanda que no logró ser atendida por el Estado. Ante esa situación, ASOFAMD, logró un avance importante bajo la presidencia de A. Urquieta*, dentro de la única causa abierta por el delito de desaparición forzada de personas durante la dictadura de L. García Meza* (1980), pidiendo el “levantamiento de la reserva” y “acceso a los archivos secretos de las Fuerzas Armadas”, a fin de contribuir al esclarecimiento de la desaparición forzada de todos los desaparecidos, campaña que tomó un giro dramático con acciones de hecho que asumieron O. Flores Bedregal* (su hermano fue asesinado durante la dictadura de L. García Meza*, 1980), Hortensia Gutiérrez Vda. de Flores (su esposo fue asesinado en la dictadura de R. Barrientos*, 1965) y Marta Montiel Oyarzum (su padre fue asesinado en la dictadura de A. Ovando* en 1970). A pesar de dos autos favorables, emitidos por la Corte Suprema de Justicia, el Alto Mando Militar no facilitó la apertura de los archivos de las dictaduras militares. Fuente: Comunicación de ASOFAMD (16.06.10); Correo enviado por O. Flores (12.05.10).

ARCHIVOS DE QUIPUS, DESTRUCCIÓN DE LOS Luego de tomar el Cuzco, Atahuallpa ordenó a sus generales quemar los grandes archivos de quipus históricos, y “matar a todos los quipucamayocs que pudieron haber a las manos y les quemaron los quipos diciendo que de nuevo habían de comenzar”. Posteriormente, el Concilio de Lima de 1583, y los extirpadores de idolatrías, ordenaron quemar los quipus de las huacas provinciales “en razón de los hechizos y brujerías que se les atribuía”. Fuente: Mendoza, 1982: 32; Oporto y Ramírez, 2011: 130; Porras, 1953: 130, 134.

ARCHIVOS DE TELEVISIÓN BOLIVIANA, DESTRUCIÓN DE LOS A raíz del apresamiento del criminal de guerra, el nazi Klaus Barbie, alias Klaus Altmann, el periodista C. Soria Galvarro*, en su condición de Director de Noticias de Canal 7, Televisión Boliviana, realizó una extensa entrevista en el largo viaje desde La Paz hasta Alemania, que se difundió en el programa “Hora 13”, que conducía Julio Barragán el 20 de febrero de 1983. La entrevista fue contextualizada con otras entrevistas realizadas en Francia a personalidades como Christian Pineau (dirigente de la resistencia francesa durante la guerra), Beate Klarsfeld (la cazadora de nazis), Marie-Claude Ballón-Cuturie (sobreviviente de los campos de concentración y por ello testigo en el Proceso de Nuremberg) y Marie Madeleine Fourcade (heroína de la resistencia), además a dirigentes políticos, gente de la calle y residentes bolivianos en París. Cuando quiso escribir un libro sobre el tema, grande fue su sorpresa al enterarse que ese valioso material “se extravió o fue borrado”, a excepción de la entrevista al criminal nazi. Azorado, el periodista achaca tan tremenda pérdida a “la falta de recursos, la indolencia o la ausencia de una adecuada organización interna del canal estatal”, provocando “la pérdida irremediable de materiales verdaderamente importantes para la ‘memoria’ del país”. Concluye el autor,

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invocando que “las películas y videos del mismo modo que los escritos deberían considerarse documentos, fuentes documentales para la reconstrucción de nuestra accidentada historia”. El Canal estatal fue creado en 1969. Las oficinas administrativas se encontraban en la calle Ayacucho y los depósitos de archivo en El Alto. Parte del archivo se destruyó a fines de los 70’s “al inundarse uno de sus depósitos del canal ubicado en la calle Ayacucho”, y por el “hecho que mucha gente se llevara cintas para revenderlas a buen precio”, afirmó C. Mesa*. Un total de 2.800 rollos de material periodístico fueron transferidos a la Cinemateca Boliviana*. En 1997 aún se conservaban en ese depósito 1.500 videos en formato Umatic y VHS. Fuente: Soria Galvarro, 1986: 6-7; Presencia, 1997: 7.

ARCHIVOS DEL INSTITUTO CINEMATOGRÁFICO BOLIVIANO (ICB) El Instituto Cinematográfico Boliviano fue creado inmediatamente después de la Revolución de abril de 1952 para convertirse en instrumento de propaganda del gobierno del Movimiento Nacionalista Revolucionario. Su misión era la producción de informativos semanales titulados Aquí Bolivia, que se exhibían en las salas de cine del país, “en los cuales se hacía apología de los líderes “emenerristas” y se presentaban noticias políticas, sociales y económicas y hasta deportivas, en función siempre de demostrar que la revolución funcionaba”. Su importancia es notable, pese a ello, pues muestra testimonios de las grandes movilizaciones sociales de la época, fundamentalmente, de campesinos. Los noticieros continuaron durante los gobiernos de R. Barrientos* (1964-1969), L.A. Siles* (1969), A. Ovando* (1969) y Juan J. Torres (1969-1970). Otro documental impresionante se refiere al Primer Festival Indígena en el estadio Hernando Siles, “que chocaba a la clase alta que había estado acostumbrada a ver a los campesinos como pongos y semiesclavos”. La mayor parte de sus archivos se conservaron, habiendo sido entregados a la Cinemateca Boliviana*. Fuente: Presencia, 1997: 9.

ARCHIVOS EN CUSTODIA, EMPRESAS DE Empresas dedicadas a “la custodia de archivos [hecho que] implica la guardia y custodia de material documental, así como la seguridad y protección de los archivos, de los cuales son responsables” (Raúl Bossini). En España se rigen en la Ley 15/99 de Protección de Datos (abril 2008). Administran cualquiera sea el soporte: papel (copias de seguridad, fondos documentales, historiales clínicos y documentos confidenciales), imagen (acetatos, películas, video), soportes magnéticos (informáticos). Las características de su servicio son liberación de espacio físico, optimización en la gestión de Archivos en todo su ciclo vital, acceso remoto al expediente, traslado del documento, consulta y actualización, acceso controlado a documentación confidencial y conservación. Sin embargo, también ofrecen destrucción de Archivos (G. Stauffer). En España existen 24 empresas, reguladas por la Agencia Española de Protección de Datos. La más antigua (1905) y extendida (26 sucursales en España y seis en Europa) es Gil Stauffer, que ofrece un servicio, “orientado a mejorar la eficacia del negocio de sus clientes”. Han creado una Asociación de Documentación e Información y un

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Data Privacy Institute. Existen cinco empresas en Bogotá (Colombia). En Santiago de Chile, Trends Ingeniería, opera desde 1995, especializada en el desarrollo de Sistemas integrados de administración documental. Ingresó con File Archivos, a La Paz (2000) y Santa Cruz de la Sierra (2005). Se especializa en asesoramiento y gestión de Archivos empresariales, ofrece administración y custodia de Archivos físicos, consultas desde el Almacén de Custodia, resguardo de medios magnéticos y ópticos, digitalización de documentos, administración electrónica de documentos digitalizados, gestión de Archivos en sitio y asesoramiento en manejo documental. Fuente: http://www.filearchivos.com/ (8.4.12); http://es.over-blog.com (8.4.12); http://www.confidalia.es (8.4.12); http://www.gil-stauffer.com (8.4.12); http://www. proveedoresgobierno.com (8.4.12)

ARCHIVOS FOTOGRÁFICOS La fotografía, alternativa documental ampliamente utilizada en Bolivia, se inició básicamente con el trabajo pionero de M. Barrios, en Potosí en 1850. Le siguieron fotógrafos de la talla de J. Cordero* y L. Gismondi*, quienes instalaron prestigiosos estudios en la ciudad de La Paz. Gismondi estableció otro en Lima (Perú), con lo que su celebridad fue binacional. Entre otros fotógrafos destacados están: Maximiliano T. Vargas con laboratorios en La Paz y Arequipa; los hermanos Valdez en La Paz y Sucre; los hermanos Carlos (1885-1976) y Miguel Vargas (1886-1979); Hanz Swimmer; más tarde los hermanos rusos Kavlin* (1918); B. Cáceres (1900-1930), V.M. del Castillo (1925), J. Delaney (1930), Abdón Flores, con su estudio en la calle Colombia; Guerra, en la calle Oruro; el renombrado fotógrafo peruano M. Chambi* (1891-1973); y José Velarde, en 1925. Posteriormente instalaron estudios F. Alborta* (fotógrafo oficial del presidente V. Paz*) y L. Yelincic*, Antonio Eguino, el peruano G. Rojas* y otros. Los fotógrafos J. Cordero*, L. Gismondi*, J.N. Piérola* y L. Flores*, marcaron la época de oro de la fotografía paceña. En Cochabamba estaban los estudios de Félix Angulo, L. Bazoberry* (fotógrafo de la Guerra del Chaco), M. Ocaña (trabajó también en las minas de Patiño), y García, siendo R. Torrico* el que más destaca. En Potosí, Federico Arizmendi, Emilio Casas, Valentín Meriles y Pedro N. Pérez. En Sucre, los Hnos. Valdez y Alfredo González. En Tarija el estudio de los Hnos. Pérez, y en Santa Cruz de la Sierra, los fotógrafos Valdez y Cía., y Vaca Pereira. C. Portillo* en la ciudad de Oruro, y la intrépida figura del fotógrafo trajinante D. Aima* (que trabajó como tal en el departamento de Oruro y las minas a partir de 1960, cuyo archivo de negativos fue adquirido por el Museo Nacional de Etnografía y Folklore*). Otro archivo de valor innegable es el que ha formado durante largos años J. Bastos*, como resultado de su trabajo como fotógrafo en las minas de Llallagua, durante la década del setenta. Otros fotógrafos que han documentado diversas facetas del desarrollo boliviano, conforman una amplia gama de profesionales e investigadores, entre los que encontramos a antropólogos, etnógrafos, historiadores y artistas que usan la fotografía para fines ajenos a la fotografía comercial. Entre ellos citamos a Arthur Posnansky* (1873-1946) que documentó con esos registros su trabajo arqueológico en Tiwanaku; los hermanos Sintich que llegaron con la Misión Científica Francesa y trabajaron en esa ciudadela prehispánica (1903-1905); Georges Roumá levantó registros antropométricos de aymaras (1910), A. F. Bandelier* trabajó en Copacabana

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y ciudades del Perú entre 1892 y 1903 acompañado por el fotógrafo F. Lummis*, quienes recogieron “copiosas memorias, planchas, planos, vistas fotográficas” por encargo del Museo de Historia Natural de Nueva York (1859-1958); A. Arguedas* documentó su vida intelectual y familiar sistemáticamente desde 1900 hasta su muerte, Alfred Metraux realizó invaluables registros fotográficos de los Chipayas en su impenetrable hábitat (c. 1920), el francoargentino Jean Vellard documentó fotográficamente la tragedia de los Urus del Lago Titicaca (1937); R. Gertsmann* (1896-1964) activo en Bolivia entre 1924 y 1928, publicó un magnífico libro de fotografías; Herbert Kirchhoff editó otro trabajo similar; Pierre Verger viajó por el país a mediados de los años 30; y también Hans Mann (1900-1966). La lista continúa con Gustav Torlichen quien levantó registros fotográficos de la Corporación Minera de Bolivia (cuya biografía está inserta en Colorista del Collao, Biografía de Italaque y del pintor Leonardo Flores Cejudo, 1966). No podemos dejar de mencionar a los fotógrafos franciscanos H. Walpoth*, conversor de Urubichá (1938-1940); Fr. J. Bernabei* (18991901), T. Herzog (1907) y W. Kowanda* (1925). Son importantes también las fotografías de los cruceños L. Lavadenz*, M. Rojas* y los archivos de Carlos Cirbián Barros (Santa Cruz). En otro orden mencionamos los archivos fotográficos institucionales, siendo los más importantes el que ha formado el Archivo de La Paz*, enriquecido el 2010 con la donación de la que formó el periódico ya desaparecido Última Hora, y que gracias a un apoyo de la British Library, digitalizaron más de cien mil piezas; Los Tiempos de Cochabamba; el Museo Nacional de Etnografía y Folklore*; la Misión Franciscana de Schwaz (Tirol, Austria), el Archivo Parroquial de Urubichá y el Archivo de la Recoleta (Sucre); el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* y el que existe en la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional*. Fuente: García, 2009; Oporto, 2003a: 1 (6): 24-26; Oporto, 2007: 2 (7): 104-105; Oporto, 2009: 52-53; Querejazu, 2010.

ARÉVALO JORDÁN, VÍCTOR HUGO (Cochabamba, 23 de diciembre de 1946)

Boliviano notable injustamente ignorado en Bolivia. Nuevamente pareciera que el viejo refrán tiene mucho de verdad: “Nadie es profeta en su propia tierra”. Fue maestro rural en Umala, célebre comunidad aymara donde desempeñó el cargo de Alcalde por elección popular. Más tarde aparece como funcionario de aduanas, actor de teatro y cultivador de la poesía. Como muchos Archivistas idóneos* de su tiempo, estudió en el célebre curso de Administración Archivística y Paleografía que dictaron G. Mendoza*, M. Vásquez*, y otros docentes de la Escuela de Archiveros de la Universidad de Córdoba* (Argentina), en el ya lejano julio de 1976, en la Biblioteca Municipal de La Paz. Allí se organizó la primera Asociación de Archiveros de La Paz*, de la que formó parte de su mesa directiva. Con justicia se reclama discípulo de G. Mendoza* y J. Gantier*. Luego participó en el Curso de Administración de Archivos, en el Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos CIDA*, en la Escuela de Archiveros de la Universidad de Córdoba. Por ello reivindica ser discípulo de A. Tanodi*, Esther Fajardo, M. Vázquez*, Ana Schelzer, Emiliani y Aliaga. Pese a esa formación colateral, fue un gran autodidacta, pues tardíamente obtuvo el bachillerato de Ciencias en Tecnologías de la Información, y más tarde aun, el Master en Dirección de Sistemas de Información, curso a

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distancia en la Universidad de Canterbury, Reino Unido. Es Profesor titular de Metodología de la Investigación Histórica, Paleografía y Diplomática Americana (estas dos las dicta también en la Universidad de Entre Ríos), Historia Americana y Seminario de Tesis, en la Universidad Católica de Santa Fe. También es docente en el Instituto Superior No. 12 del Ministerio de Educación (Santa Fe), con el Curso de Introducción a la Archivología, y de manera innovadora, en la Tecnicatura y Licenciatura en Archivística (modalidad a distancia). Finalmente podemos decir que es profesor titular en las cátedras de Paleografía y Diplomática, Metodología de la Investigación Archivística y Seminario de Tesis en la Facultad de Ciencias de la Gestión de Paraná y en la Carrera de Historia de la Concepción, Uruguay. Fue elegido Presidente de la Federación de Archiveros de la Argentina (2010-2012) y miembro de la Comisión Científica del Brasil. Regresa a Bolivia, esporádicamente, por motivos familiares, ocasiones que se aprovechan para dictar una conferencia o participar en tertulias archivísticas. Publicaciones archivísticas. Su obra intelectual es amplia. De ellas existen en la Biblioteca de la Asamblea Legislativa Plurinacional:

1. Introducción a la paleografía hispanoamericana (1984) 2. Cuadernos de Archivística (Director). Nos. 1 (1987) al 6 (1994). 3. Técnicas documentales en archivo: la descripción archivística (1991) 4. Planificación general de los archivos (1991) 5. Apuntes para la introducción a la metodología gnoseológica de la historia (1992) 6. La Archivología en las Ciencias de la Documentación (1993) 7. Documática: aplicación informática a documentos de archivo (1993) 8. Diccionario de términos archivísticos (1995) 9. La profesionalización de los archivos (1996) 10. El acto proyectual de los archivos (1996) 11. Archivoeconomia: edificios, locales y equipos para archivos (1996) 12. Teoría, fundamentos y práctica de la Archivología (2001) 13. Técnicas documentales de archivo: ordenación y clasificación de los documentos de archivo (2003) 14. Descripción colectiva de los archivos (2005) 15. Archivos de comercio exterior (2005) Fuente: Oporto, 2009c; Oporto, 2012a; Entrevista personal con VHA, el 19.07.2010.

ARGOTE MEJÍA, MARÍA LUISA Licenciada en Comunicación (UMSS), periodista (UCB) y secretaria bilingüe inglés-español con estudios en Our Lady of Lourdes Business College (institución canadiense). Tiene un postgrado como Especialista en Gestión Universitaria (UMSS), el Diplomado en Géneros y Formatos Periodísticos (Universidad San Francisco Xavier) y el Diplomado en Gestión y Administración Universitaria (UMSS–CEUB– Universidad Nacional de España de Educación a Distancia). Fue Jefa de archivos de

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la Universidad Mayor de San Simón de Cochabamba, unidad creada en 1995, que contiene documentación desde 1826. Participó en el Congreso Nacional de Archivos que trató el proyecto de ley del Sistema Nacional de Archivos (Sucre, 2006). Publicaciones archivísticas: “Archivo Histórico de la Universidad de San Simón de Cochabamba”, en Fuentes, revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, 2010, 4 (8): 35-37. Fuente: CV.

ARGUEDAS, ANTONIO

(13 de junio de 1928. † La Paz, 22 de febrero de 2002) Militó en el Partido de Izquierda Revolucionaria en su juventud. Se afirma que pasó luego al Partido Comunista de Bolivia. Militó también en el Movimiento Nacionalista Revolucionario. Estudió Derecho. En una acción espectacular, envió microfilmes del Diario del “Che” a Cuba, copia de las fotografías que tomó el capitán F. Ramos Medina (Félix Rodríguez Mendigutia*), agente de la CIA. De esa matriz obtienen tres copias fotográficas que las entregan a los generales R. Barrientos*, A. Ovando* y Joaquín Zenteno Anaya. Arguedas tomó el Diario del “Che” Guevara* de una copia que le había entregado el agente Hugo Murray al Cnl. “Toto” Quintanilla con fines de inteligencia. Los americanos distribuyeron copias a los servicios de inteligencia de varios países de América Latina con fines de investigación. Arguedas ordenó elaborar una copia y decidió enviar el Diario a Fidel Castro, “por resentimiento contra la CIA, que lo trataba como inepto y hastiado de la intromisión norteamericana”. Pegaron las fotografías en una colección de música folklórica boliviana, en discos de vinilo, y lo llevaron hacia La Habana gracias al apoyo de los socialistas chilenos. Luego protagoniza una espectacular fuga hacia Chile el 17 de julio de 1968, en un vehículo conducido por el propio chofer del Ministerio. Luego de permanecer incomunicado, deambuló por Rusia y Estados Unidos; volvió a Bolivia, igualmente de forma espectacular. En su domicilio guardó celosamente más de un centenar de archivos secretos y las manos del Che, que también las envió a Cuba. Nuevamente se exilió en varios países, entre ellos Cuba desde donde retornó en 1976. Estuvo preso, acusado de secuestro entre 1986 y 1989. Murió trágicamente al detonarse un artefacto explosivo. Fuente: Morán, 2005; http://edant.clarin.com (23.8.11).

ARGUEDAS DÍAZ, ALCIDES

(La Paz, 15 de julio de 1879. † Chulumani, Sud Yungas, La Paz, 6 de mayo de 1946) Escritor, novelista, historiador y diplomático. Se graduó como Abogado, pero jamás ejerció. Periodista de El Diario, desde donde fustigaba, implacable, a todos los gobiernos. Ocupó varios cargos diplomáticos, lo que le llevó a vivir la mayor parte de su existencia en Europa, sobre todo en París. Fue también Jefe del Partido Liberal y parlamentario, habiendo sufrido los rigores de destierro y prisión. Formó parte de la vanguardia literaria e intelectual latinoamericana de la Belle Epoque, durante 26 años en París, donde se dedicó representar al país y sobre todo a escribir. Compartió con célebres emigrados latinoamericanos, consentidos en ser nombrados cónsules

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eternos, lo que esperaban como obligación natural de sus gobiernos. Se le ha calificado como escritor reflexivo-introvertido, “obstinado en la consecución de sus ideas, terco y cerrado a toda influencia” (Moisés Alcázar, 1963). Escribió, al inicio de su carrera, novelas de corte histórico (Pisagua, 1903) e indigenista (Wara Wara, 1904) -que luego despreció- derivando hacia el ensayo sociológico (Pueblo Enfermo, 1909) y la novela social (Raza de Bronce, 1919), con el que alcanzó la fama; la historiografía (Historia General de Bolivia) con la que alcanzó su consagración, y las de corte autobiográfico (La Danza de las Sombras, 1934), extraídas de su Diario íntimo, con las que develó la intimidad de su ser. Su vida fue metódica y sistemática: “Me levanto a las seis y media de la mañana y entre preparar mis documentos, arreglarme y tomar el desayuno llegan las ocho. A esa hora me pongo a mi mesa de trabajo y escribo hasta las once y media. Luego doy una vuelta a mi jardín talando mis árboles y rosales, removiendo tierra, sembrando e injertando, si hace buen tiempo, hasta las doce y media o tres cuartos, hora del almuerzo. Pasado éste vuelvo al jardín hasta las dos y media o tres, y, en seguida, otra vez a mi trabajo hasta las cinco. A esa hora descanso leyendo los periódicos del día o despachando mis cartas. Después de la comida, lectura hasta las diez y por fin, a la cama...” Alcázar dice de él: “Eterno inconforme, moralista inflexible, inexorable censor hasta de su propia conducta. Irradió con su obra una visión pesimista de la historia”. Aunque sus biógrafos afirman que “influenciado por Federico Enrique Amiel, María Bashkirstec, los hermanos Goncourt, Pierre Louys, Samuel Pepys, Julio Renard, escribió cotidianamente notas íntimas” confiesa a su amigo Bedregal, en carta del 4 de marzo de 1927, desde Couilly: “Y como esa mala manía la he tomado hace la friolera de 27 años y antes de haber leído siquiera a Amiel (…) mis apuntes forman hoy una respetable colección que en estos últimos tiempos me he tomado la paciencia de releer para destruir lo muy personal, agrupar las materias y reducir mis cuarenta volúmenes a 25 o 26… Hice esto bajo la penosa impresión del desastre de nuestro amigo Armando (Chirveches) y porque habiendo ya traspuesto la cumbre, voy camino de la bajada. Y hay que aligerar el fardo para no llevar mucho peso encima a la hora del gran salto…” Viviría mucho más. Esa labor la realizó sistemáticamente durante 40 años, desde 1900 hasta 1946, año de su muerte. Durante ese lapso llevó su Diario íntimo con episodios de su vida personalísima, observaciones, análisis y reflexiones de sucesos políticos, literarios, cuadros de viaje. Escribía en su cuaderno todas las impresiones del día, con observaciones penetrantes y agudos comentarios. Después los copiaba a máquina en hojas grandes que empastaba él mismo. Al final, redujo la colección a 12 tomos. Organizó, paralelamente, un archivo epistolar, con copiosa correspondencia que sostuvo con escritores famosos, sus pares, de Bolivia, Latinoamérica y París; y en todas puede advertirse el rigor crítico y el estilo apasionado y apasionante de su prosa, reuniendo un formidable corpus epistolar. “Fue así que Arguedas formó un completo archivo de su correspondencia, emitida y recibida, y que en su parte esencial está contenida en siete tomos, cosidos y encuadernados por él mismo, pues su largo e intenso trato con los papeles le había llevado a aprender y practicar la artesanía de la encuadernación. Cada uno de estos tomos, unas 1.500 páginas en total, lleva a final un detallado índice alfabético”, dice Alberto Crespo Rodas. Entre 1922 y 1939, Arguedas había tomado la costumbre de dirigir epístolas de advertencia y de admonición a los presidentes de la República, llamando la atención de sus actos de gobierno, pidiendo rectificar conductas o

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erradicar vicios ancestrales, lo que le valió enemistades y represiones veladas y abiertas, hasta la agresión física por parte del Tcnl. G. Busch*, en el palacio de gobierno el 4 de agosto de 1938. También incursionó en la fotografía, acopiando un importante archivo, que describe José Luis Roca*: “Su archivo fotográfico es un aporte documental tan valioso como sus cartas. Si estas se encuentran meticulosamente seleccionadas, cosidas, numeradas y empastadas, la presentación de aquel compite en orden y pulcritud, cada álbum corresponde a una época, a un ambiente. Los retratos asoman por unas aberturas circulares, redondas, ovaladas, al pie de los cuales está la fecha, el nombre y el número bajo el cual aparece en el índice. Allí parecen cobrar vida los protagonistas de la aventura parisiense. Mostachos a lo Kaiser, chistera, levita y bastón. Aldeanos españoles, indios bolivianos, bañistas de los años treinta con batolas pegadas al cuerpo y que el agua convierte en segunda piel, paisajes, en fin, de los dos mundos donde él vivió, captados por él mismo, donde el obsesivo escritor tornase en avezado fotógrafo”. Acopió un importante archivo de documentos sobre Bolivia, los que conseguía sistemáticamente de amigos y conocidos, entre ellos el importante y revelador Archivo del ex presidente T. Frías*, cedida generosamente por su hijo Carlos. Rufino Blanco Fombona, uno de los biógrafos de Bolívar, le alcanzó documentos valiosos del Libertador, desconocidos por Arguedas. Le dice, en su carta de 28 de julio de 1913: “Entérese bien de todo antes de ponerse a escribir, tome sus notas, aclare sus ideas, forme sus juicios. (…) Consulte mucho a O´Leary*, no sólo los dos volúmenes de narración donde está todo lo referente a Bolivia; sino los 31 volúmenes de Documentos y correspondencia de próceres: ahí encontrará usted, en potencia, casi toda la historia de su país. No se deje llevar por historias falaces del Sur, ni por tradiciones absurdas de cabezas indignas o ignaras”. El 25 de diciembre, Fombona, le envía las Cartas de Bolívar que estaba preparando para publicar con Michaud, su editor, de quien se queja diciendo que “es un miserable que me está deteniendo la publicación”. Depositó copias de su Diario Íntimo o Memorias en varios museos y bibliotecas mundiales, con estricta prohibición de que se publiquen hasta que no pasen cincuenta años de su fallecimiento, sin embargo, pocos días antes de extinguir su existencia, autorizó a sus herederas que vieran lo conveniente con respecto a esta decisión. Más aún, en vida rompió esa decisión pues con muchas de las páginas de su Diario, compuso en 1934, el primer tomo de La Danza de las Sombras, “lo más atrayente y mejor escrito de toda su obra”, según Luis Alberto Sánchez. Incluso cuando se encontraba en Buenos Aires, el 21 de enero de 1945, escribió en las páginas de su Diario: “Se me ocurre, repentinamente, reunir este y otros materiales, ensamblarlos, y publicar un libro con el título de Etapas de la vida de un escritor. La disculpa para la publicación de este libro de carácter muy personal, es que “cuando un hombre pasa de los sesenta ya puede hablar de sí con calma, sin amor, sin odio y sin cálculo”. En 1960 Editorial Aguilar encargó a Luis Alberto Sánchez, una edición de las Obras Completas de Arguedas, incluyendo en ellas una selección de las cartas enviadas a los presidentes de Bolivia en el primer tomo. Por su parte, en 1963, Moisés Alcázar llevó a la imprenta el deseo íntimo de Alcides Arguedas, publicando un tomo titulado Etapas de la vida de un escritor, con una selección tomada de esa inmensa producción inédita, gracias a la autorización de su hija, Stella Arguedas Tapia, quien por razones obvias pidió se supriman algunos nombres de personajes que aún actuaban en la escena política. En esa oportunidad publicó cuatro cartas,

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completando la selección de Sánchez. En 1979, al cumplirse el centenario de su nacimiento, la Fundación “Manuel Vicente Ballivián”, encomendó a J.L. Roca* y A. Crespo* realizar una selección de su epistolario, publicándola bajo el epígrafe de Epistolario de Arguedas. La generación de la amargura, en la que incluyen una selección obtenida de su archivo. Posteriormente, M. Baptista* publicó Cartas a los presidentes de Bolivia (1979). La responsabilidad de la custodia de semejante legado recayó en su hija Stella, la que facilitó el acceso, por dos veces consecutivas para editar y publicar estas obras, parcialmente a ese acervo, la primera en 1963 a Moisés Alcázar, la segunda en 1979 a Alberto Crespo Rodas. El 2004, su hija y nieto entregaron el Archivo y Biblioteca de Arguedas al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, el que luego de su catalogación por J. Saravia T.* fue abierto al público en 2007, en sala especial con su nombre. Publicaciones archivísticas: “Las fuentes de información histórica en periodos de anormalidad política” (Kollasuyo, 1939, Nº 4: 7-24); Etapas de la vida de un escritor (Prólogo y notas de Moisés Alcázar. La Paz, Talleres Gráficos Bolivianos, 1963); Epistolario de Alcides Arguedas. La generación de la amargura (Prólogo de Alberto Crespo Rodas. La Paz, Fundación Manuel Vicente Ballivián, 1979. Incluye un ensayo de José Luis Roca: “Arguedas y la cofradía de “El Napolitano”…”: 32, 39); Cartas a los presidentes de Bolivia, Prólogo y notas de M. Baptista (La Paz, Última Hora, 1979). Fuente: Ut supra; El Deber, 2004: A21.

ARTEAGA, PEDRO DE

(Santa Cruz “La Vieja”, c. 1578) Escribano de Cabildo y Público entre 1603 a 1607 y entre 1618 a 1622. Vivió consagrado a la labor de fedatario, ejerciendo la potestad de dar autorización firmada a diversas diligencias que pasaban ante su autoridad. Le tocó redactar y dar fe de la Relación de todo lo que en viaje del socorro que el señor gobernador Martín de Almendras Holguín vino a dar al cacique Cuñayuru y sus comarcanos contra el pueblo de Charagua y Tatamiri y Sebastián Rodríguez y Don Pedro y sus aliados desde doce de julio de 1607, que salió de la ciudad de San Lorenzo con su campo, suscrito por el Gobernador, en Cuñayuru el 10 de agosto de 1607. También certificó el estado de las cuentas del Cabildo de San Lorenzo (1620), la Información de sus provincias y fronteras con motivo del castigo a los indios chiriguanos por el general Juan Manrique de Salazar por encargo del Gobernador Nuño de la Cueva (1621); la Relación de la gobernación de Santa Cruz de la Sierra de los vecinos de la ciudad de San Lorenzo de la Frontera sobre la importancia de dicha ciudad y de Santa Cruz de la Sierra (1621). Erróneamente, creemos nosotros, L. Ribera* le atribuye la autoría de la crónica o relación del Gobernador Almendras a Arteaga, siendo tan sólo éste, el escribiente y fedatario, precisamente por su condición de Escribano. Fuente: Sanabria, 1961: 155-183.

ARUQUIPA CALCINA, BERTHA MARÍA (La Paz, 7 de abril de 1980)

Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA). Programadora en Software en Aplicaciones ATSYH (1999), Diplomado Superior en Gestión (Universidad

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Loyola). Participó en la Reunión Anual de Bibliotecología y Documentación (2000), Seminario Sobre Museos (2001), los Congresos Internacionales de Bibliotecarios, Documentalistas y Archivistas (2001, 2003, 2005, 2007, 2009), el II Seminario de Museología “El Museo como Factor de Desarrollo e Identidad Cultural” (2004), las Jornadas Paceñas de Bibliotecología, Documentación y Archivística: “Experiencias e Innovaciones en los Centros de Información de La Paz” (2004), el Seminario de Descripción Archivística (2005), el Curso de Archivo Moderno (2006), el Curso de Usuario Albalá (2008), el Primer Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano (2008), los Seminarios sobre la Base Documental del Sistema de Gestión de la Calidad (2008), Metodologías para el Manejo de Archivos y Documentos Electrónicos (2009), el Taller de Conservación y Curación del Libro (2009), y el de Implementación del Programa de Gestión Documental bajo Estándares Internacionales en el BCB (2009). Publicó Catálogo Bibliográfico de Información Ambiental (La Paz, Centro de Documentación e Información en Medio AmbienteCámara Nacional de Industrias, 2000). Trabajó en la Biblioteca Especializada de la Facultad de Agronomía de la UMSA (2001), Archivo del Fondo Nacional de Vivienda Social FONVIS (2001), Archivo de la Cámara Nacional de Industrias (2002-2003), Archivo del Banco Central de Bolivia (2004-2005, 2006 a 2011), Archivo del Programa Nacional de Cambios Climáticos del Viceministerio de Recursos Naturales y Medio Ambiente (2006), y Archivo de la Unidad de Planificación y Servicios a Operadores del Viceministerio de Transportes (2006). Fuente: CV.

ARZANS DE ORSÚA Y VELA, BARTOLOMÉ (Potosí, 1676. † Potosí, 1736)

Afamado cronista del Potosí Colonial. Los registros parroquiales muestran que Arzáns se casó el 2 de mayo de 1701 con doña Juana de Reina, unos 15 años mayor que él. Fue un autodidacta “con poca academia formal, que llenó su mente con una vasta ilustración antigua y moderna”. Hombre leal a Potosí, solidario a la vez de austero, no escatimó esfuerzo alguno para ayudar a enfermos y enterrar algunos de los 20.000 muertos que provocó la epidemia de 1719. Llegó a ser maestro de escuela. Ordenó los anales de Potosí, revisando cuanto libro se publicó en esa época (algunos de los cuales nunca fueron hallados por los historiadores contemporáneos como L. Hanke*), así como archivos y manuscritos de toda índole, con los que escribió su Historia de la Villa Imperial de Potosí, monumental obra que le tomó 30 años. La historia de este manuscrito es sencillamente sorprendente, pues habiéndola iniciado en 1705 la terminó de escribir en 1735, un año antes de su muerte, mas, fue conocida y utilizada antes de ser publicada, por ejemplo por ciertos eclesiásticos que usaron en sus sermones sus cuentos “a veces espeluznantes y a veces edificantes para imprimir en los ánimos licenciosos y turbulentos de los potosinos, el amor a la piedad y a la castidad”. Más tarde el fraile dominico Josef Lagos predicó durante nueve noches sucesivas sobre la epidemia de 1719, en base a su Historia. Otros amenazaron la existencia de Arzáns al sentirse ofendidos por sus crónicas, como el caso de un vecino iracundo que amenazó con matarlo por haber escrito sobre “los excesos de cierto juez” que era su pariente, y un oficial real que quiso eliminar al historiador

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y destruir sus escritos porque había denunciado su complicidad en un hecho de corrupción oficial (contrabando), uno de los temas favoritos de Arzáns. Muchos se interesaron en la obra y quisieron comprarla, como un francés que deseaba llevarla a su rey; y otro a España, propuestas tentadoras por ser muy bien remuneradas que Arzans rechazó sistemáticamente. Sin embargo su hijo Diego no fue tan escrupuloso y la vendió a un cura, aunque a la muerte de éste, el manuscrito fue recuperado y enviado a España, donde fue encontrado ya en era moderna, en la biblioteca privada del Rey. La obra fue analizada y estudiada por L. Hanke* y G. Mendoza*, quienes dieron a imprenta una hermosa edición publicada en tres tomos por la Universidad de Brown en Providence, Rhode Island, en 1965, editada sobre la base del manuscrito existente en la Biblioteca del Palacio del Rey, en Madrid (España) y del manuscrito que fue adquirido por G.E. Church*, del librero parisino Chadenal, en 1905, donado a su muerte a la Universidad de Brown. Arzáns tiene otra obra titulada Anales de la Villa Imperial de Potosí, que vendría a ser “un esbozo o borrador inicial de la Historia, libro aquel publicado por V. Ballivián y Roxas* (1873) y por M. Baptista* (1970). El manuscrito de Arzáns, al igual que la de Garcilaso, despierta susceptibilidad entre investigadores, como A. Crespo*, quien afirma que los sucesos narrados por Arzáns “en una proporción que es difícil de ser establecida, pertenecen al campo engañoso y fantasmagórico, de la leyenda y el hechizo”, como afirma C. Soria Galvarro*. Fuente: Barnadas, 2002, I: 200-201; Hanke, 1965:62; Soria Galvarro, 2010: C9.

ARZE, JOSÉ ROBERTO

(Cochabamba, 30 de marzo de 1942) Estudió en el colegio La Salle y otros fiscales de Cochabamba y Derecho en la UMSS. Bibliógrafo e historiador. Docente emérito de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* de la UMSA. Es miembro de las Academias Bolivianas de la Historia y de la Lengua. Por su vasta obra es figura importante entre los bibliógrafos bolivianos, con sus aportes sobre Ensayo de una bibliografía del Dr. José Antonio Arze (1968), Apuntes para el catálogo de seudónimos bolivianos (1981), Fuentes para la Historia de las Ideas en Bolivia, siglo XX (1988), Ensayo de una bibliografía del Mcal. Antonio José de Sucre (1995). Fue Director del Centro de Documentación Científica y Tecnológica de Bolivia, dependiente de la UMSA, y de la Biblioteca Municipal “Mariscal Andrés de Santa Cruz” de La Paz. Es autor, entre otras obras, del Diccionario Biográfico de Bolivia en seis tomos (1984-1991), el Manual de Bibliografía (1992), Análisis crítico de Bolívar de Marx (1998), Contribución de Cochabamba a la literatura boliviana (2002), Cien años de Historia del Seguro en Bolivia, 1904-2004 (Asociación Boliviana de Aseguradores, 2007) y Obras juveniles, 1995-1963 (edición facsimilar, 2007). Su obra incluye también Malgranda Boliviana Antologio (2004), una antología de escritos en esperanto, sus Código abreviado de catalogación (2002) y Cómo organizar una biblioteca (2005). Custodia parte del Archivo de J.A. Arze*, del que ha transcrito ocho archivadores de palanca de obras inéditas del mismo y con ellos ha publicado cuatro volúmenes: Bosquejo sociodialéctico de Bolivia y otros escritos afines (1978), Polémica sobre marxismo y otros ensayos afines (1980), que circuló con sobrecubierta titulada Ensayos filosóficos, por la represión de la dictadura de García Meza*; Escritos literarios (1981), comentarios y semblanzas; La autonomía universitaria y otros escritos afines (1989). Actualmente

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también custodia algunos documentos del Partido Comunista de Bolivia y del Partido de la Izquierda Revolucionaria. A propósito, conocer a los custodios de partidos como el PCB, es una incógnita, aunque han trascendido los nombres de Jorge “Flaco” Leytón (en la década de los 60’s), Jorge Kolle Cueto (1971), C. Soria Galvarro*, éste último tenía una colección de Unidad. Publicaciones archivísticas: “Informe preliminar sobre la situación del archivo de José Antonio Arze” (Boletín del Archivo de La Paz, 1988, 8 (11): 23-28). Fuente: Arze, 1984; 1985, 1987, 1989, 1991, 1997.

ARZE AGUIRRE, RENÉ DANILO (La Paz, 4 de agosto de 1947)

Licenciado en Historia (UMSA). Realizó estudios especializados en Archivística en el Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos*, en la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina (1974) y en el II Curso de Organización y Administración de Archivos Históricos*, en la Escuela Nacional de Documentalistas de Madrid*, de la Biblioteca Nacional de España (1978), donde tuvo maestros de la talla de A. Tanodi* y V. Cortés*. Su amplia experiencia en la docencia universitaria la desarrolló en las Carreras de Historia, Turismo y Bibliotecología de la Facultad de Humanidades de la UMSA, Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Nuestra Señora de La Paz, Academia Diplomática y Facultad de Derecho de la UMSFX de Chuquisaca. Fue Director de la Carrera de Historia* (1983-1988), donde también ejerció la Subdirección del Archivo de La Paz* (1976-1980), del que siendo estudiante fue uno de sus fundadores con M. Money*, R. Choque* y F. Ballivián de Romero*, a la cabeza del Prof. A. Crespo*. En ocasión del 40 aniversario del Archivo de La Paz (2011), fue distinguido con una plaqueta recordatorio. También fue Director de la Biblioteca Central de la UMSA (1990-1992), del que injustamente fue removido de sus funciones. Es miembro de número de la Academia Boliviana de Historia, corporación a la que ingresó con su discurso “Consideraciones en torno a las fuentes escritas y orales para los estudios históricos de Bolivia” (IV.20, 21), y correspondiente de las Academias de Historia de España, Argentina, Perú, Venezuela y Puerto Rico, como lo es, también, de la Asociación Peruana de Archivistas, de la Sociedad Boliviana de Historia y de la Sociedad Geográfica y de Historia de Sucre. En 1998 fue distinguido por el Gobierno de Francia con la Orden de “Caballero de las Artes y las Letras”. Recientemente la Carrera de Historia, el Archivo de La Paz y la Decanatura de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, reconocieron su obra y nominaron una sala con su nombre. Fue discípulo de G. Mendoza*, trabajó con él en la Sub-dirección del Archivo y la Biblioteca Nacionales de Bolivia* (1988-1989), institución de la que luego fue director (1994-1998). Conoció al ilustre archivista cuando investigaba sobre su tesis, impactado positivamente por la labor silenciosa pero monumental que desarrollaba al interior del ABNB. Allí, junto a Luis Ríos Quiroga propuso un reconocimiento a G. Mendoza, en forma de un “homenaje-trabajo”. Para ese propósito, pero sin aclararlo, le pidió su ya extensa bio-bibliografía. A su retorno a La Paz reunió a un grupo de intelectuales jóvenes, con cuyo concurso escribieron Estudios en Homenaje

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a Gunnar Mendoza (1978), volumen impreso en multicopiadora, pues se solventó con cuotas de los propios autores. Invitó a J. Barnadas*, para escribir un prólogo, nobleza no devuelta cuando éste hizo su propio homenaje póstumo, en 1994. Con la obra ya impresa viajó a Sucre, y junto a L. Ríos Quiroga, una mañana en un ambiente normal y rutinario, sin acto público alguno, pidió hablar con G. Mendoza. Cuando éste les recibió, le entregaron ejemplares del Homenaje. La sorpresa fue total. El Maestro quedó pasmado y retribuyó con el trabajo “Los cien años del periodismo impreso en Bolivia, 1823-1922”, con dedicatoria a los autores (Presencia Literaria. La Paz, 2 de septiembre de 1979). Cumplida la misión, regresó a La Paz. Viajó mucho fuera del país, como Profesor invitado, dictando cursos y conferencias en universidades e instituciones de España (Universidad de Alcalá de Henares), Francia (Escuela de Altos Estudios Nacionales de París), Venezuela (Caracas), Colombia (Bogotá), Perú (Lima), Paraguay (Asunción) y Ecuador (Quito), con temas referidos a la historia de Bolivia, historia andina, metodología e historia oral, archivística y bibliografía. Participó como ponente de las cuatro Reuniones Nacionales de Consulta sobre Archivos Bolivianos* (Cochabamba, 1979, 1982, 1983, 1985); como así en Coloquios, Congresos, Debates, Encuentros, Mesas, Simposios, etc., sobre historia y archivística, en Cochabamba, La Paz, Potosí, Santa Cruz, Sucre, Trinidad, y en viajes realizados al exterior. Fue invitado, en calidad de Profesor visitante, a la Biblioteca del Congreso y el Archivo Nacional de Estados Unidos (1984). Sin embargo, salir al exterior no siempre fue experiencia placentera. En 1980, a raíz del golpe de L. García Meza* se vio forzado a viajar al exterior, para lo cual decidió usar una beca de doctorado que había obtenido, en Italia. Salió con ese destino, llevando consigo a su familia, pero la falta de recursos le obligó a detenerse en México. De allí fue a Venezuela, donde impartió clases de Archivo en hoteles para sobrevivir. Ante situación tan azarosa, plena de incertidumbre, regresó a Bolivia por Santa Cruz de la Sierra, ciudad donde, gracias a la archivera cruceña Adelaida Suárez (a quien recuerda, siempre, con cariño), logró firmar un contrato con la Cooperativa Rural de Electricidad, para organizar su pequeño Archivo y Biblioteca, y un segundo, esta vez para organizar el Archivo de la Corporación de Desarrollo de Santa Cruz, conformado por toneladas de papel en completo desorden, custodiadas en inmensos depósitos. Ambos trabajos los desarrolló con competencia y profesionalidad, donde pudo demostrar su conocimiento y dominio de la ciencia archivística. Pese a ello, en ese tiempo vivió “a pan y agua”, hasta que, en 1981, G. Mendoza le apoyó para postular a una beca de la Fundación Interamericana para investigar la Guerra del Chaco (1932-1935), que felizmente ganó. Alguien le comentó que la Prefectura de Chuquisaca custodiaba documentos de esa época. En su búsqueda encontró todo menos papeles; sin embargo, en 1982, cuando visitó los almacenes de esa entidad, en medio de turriles, llantas viejas y todo tipo de objetos en desuso (que los administradores de empresa llaman “activos fijos”), descubrió con asombro un Archivo escondido, con miles de papeles amarrados con yute. Cuando los desató encontró telegramas y correspondencia, que cubrían un arco temporal desde 1846 hasta 1970, incluyendo documentos de la Guerra del Pacífico (1879-1880). De inmediato comunicó el hallazgo a la Dra. Rúa de Tirado*, directora del Centro Bibliográfico, Documental e Histórico de Chuquisaca*, con la que gestionó la transferencia de los

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documentos de ese depósito. Felizmente encontró eco en el Prefecto y Comandante del Departamento de Chuquisaca, Don Julio Loayza Valda, quien luego de verificar la importancia singular del Archivo, autorizó su transferencia. R. Arze, luego de una somera selección, personalmente trasladó lo más valioso: “he tenido el honor de llevar conmigo, jadeando, los libros más valiosos”, repitiendo así la proeza de G.R. Moreno*, de 1874. Dos camionetas fueron necesarias para trasladar el Archivo que llenó la mitad de un cuarto del edificio del Centro Bibliográfico, dependiente de la Universidad. Luego, ya en calma, consultó esas fuentes, con las que documentó su obra Guerra y conflictos sociales. El caso rural boliviano durante la campaña del Chaco (I.3), que se basa fundamentalmente en testimonios de historia oral recogida de la boca de excombatientes de la aquella guerra, que vivían en la ciudad de Sucre. Su producción intelectual se desdobla en dos áreas del conocimiento: la Historia y la Archivística. Una de sus primeras publicaciones fue el índice de los Documentos sobre la historia de Bolivia existentes en el Archivo General de la Nación Argentina, publicado en 1975 (IV.2). Compitió con historiadores de la talla de R. Condarco* en el concurso internacional convocado por la Organización de Estados Americanos (OEA)* con motivo del Sesquicentenario de la Independencia de Bolivia, obteniendo el primer premio con su investigación pionera sobre la Participación popular en la guerra de la independencia (I.2), que fuera su tesis de licenciatura, cuya publicación fue dedicada a su Maestro Gunnar Mendoza, quien la prologó la segunda edición, en 1987. Elaboró una excelente compilación sobre Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (Una Guía Preliminar), publicada en 1985 (IV.17), única en su género y de notable utilidad e importancia. Se puede afirmar que su obra historiográfica es el resultado del análisis y compulsa de fuentes primarias de archivo. Una simbiosis perfecta entre el historiador y el papelista. Ha destacado también como compilador y editor de obras históricas, sobre todo las de Gabriel René Moreno (II.2,6) y de Humberto Vázquez Machicado* (II.3, 4, 5), realizada esta conjuntamente con Alberto M. Vázquez y Fernando Vázquez Z., y sobre la obra del naturalista Alcide d’Orbigny* (II.7). Entre los trabajos intelectuales más importantes de su vida, está la que realizó para la Biblioteca Boliviana y Peruana de Gabriel René Moreno (II.2), sobre todo el tomo referido a las notas inéditas del ilustre polígrafo, pues el resto es edición facsimilar. “No se hubieran entendido las notas inéditas sin consultar y cotejar la Biblioteca Boliviana y la Biblioteca Peruana”, enorme desafío que enfrentó con ayuda de Fernando Vázquez. De motu proprio, decidió elaborar un índice analítico de las 6000 páginas de aquellos repertorios, con un método casi surrealista, “trabajando 8 páginas, en 10 horas diarias, durante seis años” de labor benedictina, pues, dada su conocida tendencia perfeccionista, leyó “hasta 3 veces las 6 mil páginas”, revisando cada detalle, cada referencia. Parte fundamental de su producción intelectual historiográfica y archivística está dispersa en publicaciones especializadas nacionales y extranjeras, algunas de ellas de escasa circulación en el país, lo que motivó inclusive, un plagio, como aconteció con “La destrucción de documentos en América Latina, el caso de Bolivia”, publicado originalmente en el Anuario Interamericano de Archivos, que apareció luego bajo autoría institucional en la revista Archivo, patrimonio documental para la historia cruceña (No. 3, 1989), que editaba A. Gómez*, Director del Archivo Histórico Departamental de Santa Cruz.

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Heredó parte del Archivo personal de J.A. Arze*. Los estudios inéditos están en poder de J.R. Arze*. La parte que corresponde a R. Arze está conformada por algunos papeles del Partido de la Izquierda Revolucionaria, recortes de prensa, correspondencia familiar, las ponencias y correspondencia del primer congreso de Sociología de 1952 (de la que J.A. Arze fue Presidente y H. Vázquez Machicado Secretario) y del tercer congreso Indigenista de 1954, organizado con el auspicio de la UMSA. Tiene también una valija con documentos de su padre y los de su propia actuación. Cuando tuvo que hacerse cargo de la subdirección y luego de la dirección del ABNB, viajó a Sucre trasladando sus archivos, en dos tortuosos viajes de ida y vuelta. Durante el golpe de García Meza*, debiendo salir al exilio, por seguridad entregó al Archivo de La Paz 1.000 documentos. Finalmente donó a ese repositorio los que corresponden al primer congreso de Sociología. Actualmente continúa catalogando el Archivo que se encuentra en su poder. Una valoración de su gestión en la dirección del ABNB, nos muestra varios logros. Inauguró el Archivo del ex Presidente Walter Guevara Arze*; y el Programa de Digitalización, con el que se han accesibilizado valiosas obras primigenias que custodia el ABNB. A él le corresponde el mérito de haber iniciado la edición del Anuario de Estudios Bolivianos, Archivísticos y Bibliográficos, que publica el ABNB desde 1994, aunque J.M. Barnadas reclame la paternidad cuando menciona que “programó y dejó prácticamente listo el primer volumen”. La adquisición, por la vía de la donación, del Archivo de Walter Guevara Arze no fue tarea sencilla, pues WGA recibió propuestas para ceder su archivo a una universidad extranjera, con costo. R. Arze pidió al ex presidente que ese archivo permaneciera en Bolivia y se lo entregara al ABNB. Luego de discutir el tema, como es lógico, WGA aceptó, pero pidió que el BCB pagara su costo. R. Arze fue enfático: “El BCB no pagará ni un centavo por el Archivo”. Este Archivo tiene un altísimo valor histórico no solamente porque contiene los documentos de la gestión presidencial (1979) de WGA, sino por los papeles del Movimiento Nacionalista Revolucionario, del Partido Revolucionario Auténtico y documentos de los ministerios de Gobierno y Relaciones Exteriores, y cuando fue embajador en Venezuela y la OEA. Finalmente, merced a la relación consanguínea entre R. Arze y WGA, llegaron a un acuerdo para la transferencia, previa clasificación y organización, tarea encomendada a  G. Molina* y F. Chuquimia*. El archivo estaba empaquetado en 136 cajas de archivo. A la conclusión del trabajo de descripción, el Archivo se selló con lacre y se entregó (7 de marzo de 1996), bajó la supervisión de Valentín Abecia, presidente de la Fundación Cultural del BCB*, al director del ABNB. El propietario pidió que los papeles de Oscar Unzaga de La Vega (líder de la Falange Socialista Boliviana), se abran el 2000. El anciano político se despidió de su archivo, recomendando a René: “en mis papeles está el testimonio de mi vida, cuídalos…”. La conclusión, si quisiéramos sacar una, es que este fondo no hubiera permanecido en Bolivia y menos aun se hubiera entregado al ABNB si no estaba R. Arze como Director de esa institución. Durante su gestión como Director del ABNB, fue sometido a dura presión por parte de la jerarquía del Banco Central de Bolivia, pero no fue la única amargura que tuvo que soportar, pues se intentó opacar su labor, sus logros, pero sobre todo su dedicación genuina al ABNB y la afección entrañable a Gunnar Mendoza, su

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Maestro. Cuando J.M. Barnadas hizo el homenaje a la memoria del maestro, fue ignorada su participación, pero lo que más llama la atención es que se lo hubiera excluido en la compilación de las Obras Completas de Gunnar Mendoza, publicadas por el ABNB, con introducciones de M. Inch, W. Lofstrom, Ignacio y Javier Mendoza. En justicia la redacción del prólogo, sino del estudio mismo, correspondía a R. Arze, no sólo por la notable obra que realizó como Director del ABNB, sobre todo por su conocimiento y relación con el Maestro.

BIBLIOGRAFÍA I. Historias y Biografía 1. La vida cotidiana en La Paz durante la Guerra de la Independencia 1800-1825. La Paz: Editorial UMSA, 1975. En colaboración con Alberto Crespo Rodas, Florencia Ballivián de Romero y Mary Money. Segunda edición. La Paz: Gobierno Municipal, 2009. Biblioteca Paceña-Colección Bicentenario, 6 2. Participación Popular en la Independencia de Bolivia. La Paz: Talleres de Artes Gráficas del Colegio “Don Bosco”, 1979. Segunda Edición: La Paz: Fundación Cultural Quipus, 1987.



3. Guerra y conflictos sociales. El caso rural boliviano durante la campaña del Chaco. La Paz: Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social, 1987.

4. Carlos Salinas Aramayo. Un Destino Inconcluso 1901-1944. La Paz: Artes Gráficas Latina, 1995.

5. Breve Historia de Bolivia. Sucre: Universidad Andina Simón Bolívar, 1996.

II. Ediciones, Compilaciones

1. Estudios Bolivianos en Homenaje a Gunnar Mendoza L. La Paz: [s.ed.], 1978.

2. Biblioteca Boliviana y Peruana de Gabriel René Moreno. Segunda edición facsimilar. En colaboración con Alberto M. Vázquez. La Paz-Sucre: FHVM, 1990-1996. 6 vols.

3. Humberto Vázquez-Machicado: Los precursores de la Sociología Boliviana. Segunda edición. La Paz: Editorial “Don Bosco”, 1991. Editores: René Arze Aguirre, Alberto M. Vázquez y Fernando Vázquez Z.

4. Humberto Vázquez-Machicado: Glosas sobre la historia económica de Bolivia: el hacendista don Miguel María de Aguirre (1798-1873). Segunda edición. La Paz: Editorial “Don Bosco”, 1991.  Editores: René Arze Aguirre, Alberto M. Vázquez y Fernando Vázquez Z.

5. Humberto Vázquez-Machicado y José Vázquez-Machicado: Santa Cruz de la Sierra. Apuntes para su historia (Siglos XVI al XX). Segunda edición. La Paz: Editorial “Don Bosco”, 1992. Editores: René Arze Aguirre, Alberto M. Vázquez y Fernando Vázquez Z.

6. Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia: Antología de Ensayos sobre los Últimos Días coloniales en el Alto Perú. Compilación y Prólogo por René Arze Aguirre. Sucre: ABNB, 1996. Edición conmemorativa del ABNB en el centenario de la publicación de esta obra. Reeditado en la Revista de Humanidades y Ciencias Sociales. Segunda Época, Vol. 13-Nº 1-2 (Santa Cruz, UAGRM, junio-diciembre de 2007). Homenaje a Gabriel René-Moreno a cien años de su partida (1908-2008).

7. El naturalista francés Alcide Dessaline d’Orbigny en la visión de los bolivianos. Selección, Prólogo y Notas de René Arze Aguirre. La Paz: IFEA/Plural, 2002.

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III. Artículos sobre Gunnar Mendoza Loza 1. “Gunnar, un maestro”. En: Estudios Bolivianos en Homenaje a Gunnar Mendoza L. La Paz: [s.e.], 1978: 5-7. En colaboración con Josep M. Barnadas. 2. “Gunnar Mendoza, un maestro”. Presencia Segunda Sección. La Paz, octubre 8, 1978: 1. En colaboración con Josep M. Barnadas. Reproducido de: Estudios bolivianos en Homenaje a Gunnar Mendoza. 3. “Al servicio de la memoria del país”. Presencia Segunda Sección. La Paz, febrero 9, 1986: 1 y 2. 4. “En Honor de Gunnar Mendoza”. Reunión, Nº 5. Madrid, julio 1986: [3] 5. “‘Al servicio de la memoria del país’”. En: Universidad Mayor de San Andrés. Gunnar Mendoza L. Doctor Honoris Causa de la Universidad Mayor de San Andrés. La Paz: Imprenta UMSA, 1987: 13-18. Discurso pronunciado en el acto de entrega del título de Doctor Honoris Causa, otorgado por la Universidad Mayor de San Andrés al historiador y archivista Gunnar Mendoza, realizado en el paraninfo universitario el 6 de febrero de 1986. 6. “René Arze Aguirre recuerda a Gunnar Mendoza. En las huellas de la historia”. Puerta Abierta-Presencia. La Paz, 8 de marzo de 1994: 1. Reportaje. 7. “Gunnar Mendoza”. Presencia Literaria. Revista Cultural. La Paz, marzo 13, 1994: 8-9. 8. “Gunnar, un maestro”. Correo Literario-Correo del Sur. Sucre, abril 3, 1994: 3. En colaboración con Josep M. Barnadas. Reproducido de Estudios Bolivianos en Homenaje a Gunnar Mendoza (La Paz, 1978) 9. “Gunnar en el Archivo y la Biblioteca Nacionales de Bolivia. Una extraordinaria misión”. Presencia Literaria. Revista Cultural. La Paz, marzo 12, 1995: 9 10. “Gunnar en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Una extraordinaria misión”. Correo del Sur. Sucre, marzo 5, 1995: 4. Versión resumida de Presencia Literaria (v. 7) 11. “Historiador y Archivista: Gunnar Mendoza L.”. En: 100 Personajes del siglo XX. Fascículo 11. La Razón. La Paz, octubre 14, 1999: 162-164 (Nº 51). Publicación simultánea de Opinión (Cochabamba) y El Nuevo Día (Santa Cruz). 12. “De omisiones y presencias. Gunnar Mendoza L.”. Brújula-El Deber, Nº 111. Santa Cruz, abril 14, 2001: 6-7. 13. “Gunnar Mendoza en la memoria del país”. Presencia en la Cultura, Nº 40. La Paz, 22 de abril de 2001: 10-11. IV. Publicaciones Archivísticas (y fuentes)

1. “La historia económica y los Registros de Escrituras”. Presencia Literaria. La Paz, 29 de junio de 1975: 4. En colaboración con Alberto Crespo y Florencia B. de Romero. 2. Documentos sobre la historia de Bolivia existentes en el Archivo General de la Nación Argentina (Índice parcial). La Paz: Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación-UMSA, 1975. 3. “‘Sin documentación desconoceríamos el pasado… y careceríamos de una base para la administración del presente y de información para el porvenir’”. Semana de Última Hora. La Paz, 9 de enero de 1976: 8-9. Entrevista a René Arze y Florencia de Romero. 4. “Documentos Públicos de La Paz”, en Boletín del Archivo de La Paz, Año I-Nº 2 (La Paz, UMSA, mayo-agosto, 1976): 27-29. En colaboración con Florencia Ballivián de Romero.

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5. “Un testimonio artístico de la región andina: la iglesia de Jesús de Machaca”, en Arte y Arqueología, Nº 5-6 (La Paz, UMSA, 1976): 265-284. 6. “La Colección Documental del Sesquicentenario del Perú y su importancia para la historiografía boliviana”, en Boletín del Departamento de Historia, Año I-Nº 3 (La Paz: UMSA, 1977): 4-5. 7. Id. Historia. Boletín de la Carrera de Historia, Nº 1-19. Edición especial (La Paz: UMSA, 1997): 27-28. 8. “Un documento inédito de Pedro Vicente Cañete en torno a la controversia de la nueva mita de Potosí”. En: Estudios Bolivianos en Homenaje a Gunnar Mendoza L. La Paz: [s.e.], 1978: 119-124. 9. “Guía sumaria para el investigador del Archivo de La Paz”, en Boletín del Archivo de La Paz, Año IV-Nº 6 (La Paz: UMSA, 1979): 3-10. 10. “La destrucción incontrolada de documentaciones de entidades públicas y privadas”. En: Segunda Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Cochabamba: Centro Pedagógico y Cultural de Portales, Imp. Taller Gráfico del Centro Portales, julio 5-7, 1982. Mimeo. p. 37-46 Relato para el temario en el punto A. 11. “Los Recursos Documentales de Archivos para la Historia Social”. Tercera Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Cochabamba, julio, 1983. mimeo. Relato para el punto Nº 7 del Temario: “Accesibilización de recursos documentales de archivo en Bolivia para su aprovechamiento en ciencias sociales: Historia social”. 12. “A propósito del centenario del Archivo Nacional de Bolivia”. Semana de Última Hora. La Paz, 21 de octubre de 1983: 5. 13. “Entre el olvido y el fuego: Destrucción de documentos de entidades públicas y privadas”. Presencia Segunda Sección. La Paz, 23 de octubre de 1983: 1-2. 14. “Historia escrita e historia oral: Notas para un estudio de las fuentes de la historia de Bolivia”, en Historia y Cultura, Nº 6 (La Paz: Sociedad Boliviana de Historia, octubre, 1984): 3-12. 15. “La destrucción documental en América Latina: el caso boliviano”, en Anuario Interamericano de Archivos, Vol. IX-X (Córdova, 1984): 38-43. 16. Un Archivo oral boliviano sobre la guerra del Chaco. Cuarta Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Cochabamba, julio, 1985. mimeo. Relato para el punto Nº 7 del Temario: “Recursos Documentales no textuales de Bolivia”. 17. Fuentes para la historia de la Iglesia en Bolivia (una guía preliminar). La Paz: CEPROLAI/ CEHILA, 1985. 18. “Los archivos históricos de Bolivia en la obra de Gabriel René Moreno”, en Signo, Nº 18-19 (La Paz, mayo-noviembre, 1986): 161-165. 19. “Fuentes orales e identidad en el contexto de la Guerra del Chaco”. Presencia Dominical. La Paz, 7 de diciembre de 1986: 9. 20. “Consideraciones en torno a las fuentes escritas y orales para los estudios históricos de Bolivia”. Semana de Última Hora. La Paz, 26 de junio de 1987: 8-9. 21. “Consideraciones en torno a las fuentes escritas y orales para los estudios históricos de Bolivia”, en Signo, Nº 21 (La Paz, mayo-agosto 1987): 3-11. 22. “Problemas teóricos y metodológicos de la historia oral”, en Temas Sociales, Nº 11 (La Paz, Carrera de Sociología-UMSA, [1987]): 65-75. 23. “Algunas notas más sobre las fuentes históricas relativas a Mojos”, en Simposio sobre Importancia de las Misiones Jesuitas en Bolivia. La Paz: Ministerio de Relaciones Exteriores y

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Culto-Comisión Boliviana del V Centenario del Descubrimiento de América. Encuentro de Dos Mundos, 1987 p. 23-32. Ponencia presentada a la mesa I. Fuentes. Trinidad, Beni, octubre 10-14 de 1987. Hay separata. 24. Algunas notas más sobre las fuentes históricas relativas a Mojos. La Paz: Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, 1987. Separata. Ponencia presentada a la mesa I. Fuentes. Trinidad, Beni, octubre 10-14 de 1987. 25. “La destrucción documental en América Latina: el caso boliviano”, en Archivo. Órgano oficial del Archivo Histórico Departamental de Santa Cruz, Año 2, Nº 3 (Santa Cruz, septiembre-noviembre, 1989): 72-78. 26. “Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Apuntes sobre su creación y desarrollo histórico”, en Boletín Informativo de los Repositorios Culturales del Banco Central de Bolivia, Año 1-Nº 1 (La Paz, enero 1995): 3. 27. “Fuentes documentales y bibliográficas sobre el Mariscal Sucre en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia”, en Boletín Informativo de los Repositorios Culturales del Banco Central de Bolivia, Año 1-Nº 2 (La Paz, febrero 1995): 1-2. 28. “Impresos y documentos sobre el Mariscal Sucre: La materia prima de la historia”, en Antonio José de Sucre. La hazaña de la Libertad. Fascículo 9 de La Razón. La Paz: INDEAA, marzo de 1995: 134-135. 29. “Entrevista: René Arze Aguirre (Director del ABNB)”. Correo del Sur. Sucre, 20 de abril de 1995: 7. Entrevista por el Círculo Femenino de Cultura Hispánica. 30. “El Archivo Nacional de Bolivia y la obra de Ernesto Otto Rück”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 1, Nº 6 (La Paz, junio 1995): 1. 31. “La Guía de Fuentes Franciscanas en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Un gran aporte documental”. Presencia Literaria. Revista Cultural. La Paz, 23 de julio de 1995: 8-9. 32. “Articulación del Sistema Nacional de Información”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 1, Nº 7 (La Paz, julio 1995): 4. 33. “Consideraciones en torno a las fuentes escritas y orales para los estudios históricos en Bolivia”, en Anales de la Academia Boliviana de la Historia 1990-1995. La Paz: Academia Boliviana de la Historia, julio de 1995: 125-135. Discurso de ingreso en la Sesión Académica del 17 de junio de 1987. 34. “Guía de Fuentes Franciscanas en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB)”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 1, Nº 8 (La Paz, agosto 1995): 1. 35. “Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB). Desafíos hacia el futuro”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 1, Nº 9 (La Paz, septiembre 1995): 4. 36. “El Archivo Nacional de Bolivia en el CXII Aniversario de su fundación”. Arte y CulturaPrimera Plana. La Paz, 29 de octubre de 1995: 6. 37. “Archivo y Biblioteca Nacionales, fuente del ‘Turismo académico’”. El Diario. La Paz, octubre de 1995; p. Reportaje de la Agencia EFE, Sucre. 38. “El Archivo Nacional de Bolivia en el CXII aniversario de su fundación”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 1, Nº 10 (La Paz, octubre 1995): 2-3.

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39. “Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia ‘Gunnar Mendoza’”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 1, Nº 11 (La Paz, noviembre 1995): 2. Partes salientes del discurso del director del ABNB en el acto de inauguración.

40. “Plan del patrimonio documental del siglo XX en Bolivia”. Última Hora. La Paz, 28 de diciembre de 1995: 29. 41. “Un plan emergente sobre el Patrimonio Documental y Bibliográfico del siglo XX en Bolivia”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 1, Nº 12 (La Paz, diciembre 1995): 1.

42. “La Biblioteca Nacional de Bolivia y el Archivo Nacional de Bolivia. Apuntes sobre su creación y desarrollo histórico”, en Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1994-1995 (Sucre: ABNB, 1995): 141-152.

43. Biblioteca Nacional de Bolivia. Archivo Nacional de Bolivia. Apuntes sobre su creación y desarrollo histórico. Sucre: BCB, 1996. Separata del Anuario 1994-1995 del ABNB.

44. “Presentación”, en Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1994-1995 (Sucre: ABNB, 1995): 13-18. 45. “Introducción”, en Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Antología de Documentos sobre la Administración del Mariscal Sucre en Bolivia 1825-1828. Sucre: Imprenta Editorial Judicial, 1995: 15-17.

46. “Nota preliminar”. En: Doroteo Giannecchini y Vincenzo Mascio. Álbum fotográfico de las Misiones Franciscanas en la República de Bolivia a cargo de los Colegios Apostólicos de Tarija y Potosí 1898. Sucre: ABNB, 1995: [11-12].

47. “El Anuario 1994-1995 del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2, Nº 13 (La Paz, enero 1996): 2. 48. “El Archivo Nacional tiene un Plan de Rescate Documental y Bibliográfico”. Puerta Abierta-Presencia. La Paz, febrero 6, 1996: 1. Reportaje.

49. “Antología de documentos sobre la administración del Mariscal Sucre en Bolivia”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2-Nº 14 (La Paz, febrero 1996): 4.

50. “Donación de fuentes documentales al Archivo Nacional de Bolivia”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2, Nº 15 (La Paz, marzo 1996): 3.

Extracto del discurso del director del ABNB en la recepción de la donación del archivo del Dr. Walter Guevara Arze. 51. “Importante transferencia documental del Archivo de La Paz al Archivo Nacional de Bolivia”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2, Nº 16 (La Paz, abril 1996): 1.

52. “Una carta de Ricardo Palma a Gabriel René Moreno”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2-Nº 17 (La Paz, Departamento de Relaciones Públicas y Protocolo, mayo 1996):3. 53. “Los archivos y su importancia para la investigación”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2, Nº 20 (La Paz, agosto 1996): 4.

54. “Gabriel René-Moreno y los documentos públicos de Bolivia”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2, Nº 22 (La Paz, octubre 1996): 3. 55. “Sobre el Archivo Nacional”. Presencia. La Paz, 26 de noviembre de 1996: 4. Carta del director del ABNB, Lic. René Arze A., al director de Presencia.

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56. “Nuevas partituras musicales de los siglos XVIII y XIX en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2, Nº 23 (La Paz, noviembre 1996): 2.

57. “Nuevas partituras musicales en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia”. Puerta Abierta-Presencia. La Paz, 29 de noviembre de 1996: 2. Antetítulo: De los siglos XVIII y XIX. Reproducido de Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Nº 23.

58. “Una carta inédita sobre el puerto de Cobija escrita desde Chuquisaca en 1827 por el Mariscal Antonio José de Sucre”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 2, Nº 24 (La Paz, diciembre 1996): 4.

59. “Presentación”, en Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1996 (Sucre: ABNB, 1996): [9].

60. “Archivos e investigación histórica”. En: Nuestra Palabra. Textos archivísticos panamericanos. Lima: IPGH, 1996: 135-147.

61. “Las aproximaciones al pasado a través de las fuentes de archivo”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 3, Nº 25 (La Paz, enero 1997): 2.

62. “El desamparo del Archivo Nacional de Bolivia: Un solo guardia cuida la memoria escrita del país”. Presencia-Reportajes. La Paz, febrero 2, 1997: 3. Reportaje por Gloria Eyzaguirre 63. “Donación al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB) de una copia manuscrita del padre Barba”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 3, Nº 28 (La Paz, abril 1997): 4. 64. “El Archivo Nacional y la protección del Patrimonio Documental en Bolivia”, en Banco Central de Bolivia. Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, Año 3, Nº 30 (La Paz, junio 1997): 3.

65. “El Archivo Nacional y la protección del patrimonio documental en Bolivia”. El Diario 3ra. Sección. La Paz, 18 de julio de 1997: 2.

66. “Cota-Cota, un refugio de Clío”. Semana de Última Hora. La Paz, 21 de septiembre de 1997: 11.

67. “René Arze, director de la Biblioteca Nacional: Bolivia no conserva de manera sistemática su memoria escrita”. Puerta Abierta-Presencia. La Paz, 21 de septiembre de 1997: 1. Reportaje. 68. “Archivos e investigación histórica”, en Revista de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia, Año 1, Nº 1 (La Paz, octubre-diciembre 1997): 19-29.

69. “Presentación”, en Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1997 (Sucre: ABNB, 1997): XI-XII.

70. “Archivo Nacional de Bolivia (ANB)”, en Diccionario Histórico de Bolivia. Tomo 1 Sucre: Grupo de Estudios Históricos, 2002: 163-165.

71. “Fuentes documentales en la obra de Gabriel René-Moreno: la pesquisa de fuentes documentales para Últimos Días coloniales en el Alto Perú”. En: Antología de Ensayos sobre los Últimos Días Coloniales en el Alto Perú. Homenaje a Gabriel René-Moreno a cien años de su partida (1908-2008). Compilación, Prólogo y Notas de René Arze Aguirre. Revista de Humanidades y Ciencias Sociales. Segunda Época, Vol. 13-Nº 1-2 (Santa Cruz, UAGRM, junio-diciembre de 2007): 233-240. 72. “Los escritos inéditos de Gabriel René-Moreno en su obra bibliográfica”, en Escaparate Cultural su Catálogo y... punto, 2007 (La Paz: Bolivia punto cultural, 2007): XIV-XVIII.

73. “La importancia para Bolivia de los escritos inéditos de Gabriel René-Moreno”, en Escaparate Cultural su Catálogo y... punto, 2007 (La Paz: Bolivia punto cultural, 2007): XIX.

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74. “Los escritos inéditos de René Moreno”. Brújula-El Deber, Nº 467. Santa Cruz, 26 de abril de 2008: 2-3. De Notas bibliográficas inéditas, publicadas en 1996 por la FHVM.

75. “Prólogo para un encuentro. Apuntes sobre la historia del Archivo de La Paz y algo más sobre la historia y los historiadores. Entrevista con René Arze Aguirre”, en Boletín del Archivo de La Paz, Nº 23-24 (La Paz: UMSA, 2006): 218-250. Entrevista por Esther Aillón Soria. 76. “Los archivos y la investigación histórica: Notas para una reflexión”, en Historia y Cultura, Nº 35 (La Paz: Sociedad Boliviana de Historia, mayo 2011): 19-32.

Fuente: Barnadas, 2002a; Boletín ALP Nº 23-24; Comunicación personal de RAA (varias fechas durante 2011 y 2012); Molina, 2012 (inedito).

ARZE ARZE, JOSÉ ANTONIO

(Cochabamba, 13 de enero de 1904. † Cochabamba, 23 de agosto de 1955) Escritor, sociólogo y político boliviano. Estudió derecho y ciencias políticas en la UMSS; se tituló Abogado (1926). Es considerado uno de los principales sociólogos y teóricos del Marxismo en Bolivia. Fundó el Partido de Izquierda Revolucionaria (PIR) en Oruro (1940), junto a Ricardo Anaya. Participó como delegado por Cochabamba en la primera Convención Nacional de Estudiantes Bolivianos, organizada por la Federación Universitaria de Bolivia (1928), para la que elaboró un Programa de Principios (junto a otros intelectuales como Ricardo Anaya y José Cuadros Quiroga), en el que plantea las propuestas de nacionalización de las minas, nacionalización del petróleo, dotación de tierras a indígenas y la reglamentación del trabajo. Rechazó la guerra con el Paraguay (1932-1935), refugiándose en el Perú. Fue crítico del llamado socialismo militar de David Toro, lo que le costó el exilio a Chile, donde fundó el Frente de Izquierda, una coalición marxista. Fue opositor al gobierno progresista del Mayor Gualberto Villarroel (1942-1946). En 1944 sufrió un intento de asesinato, recibiendo dos balazos, en el cuello y el pulmón, que deterioró ostensiblemente su salud, sufriendo secuelas hasta su muerte en 1955. Fue miembro de la comisión que trabajó la Reforma Educacional, organizó el Primer Congreso de Sociología (1952) y el Tercer Congreso Indigenista Interamericano (1954). A él se le debe la creación de varias instituciones, como el Instituto de Sociología Boliviana (1940), la Oficina de Informaciones de la H. Cámara de Diputados (1947), el Seminario de Investigaciones Sociológicas-Históricas de la Facultad de Filosofía y Letras (1948) y la Sociedad Boliviana de Sociología (1952). Su obra es extensa: Bolivia bajo el terrorismo nazifascista (1945), Proceso de la educación boliviana (1947), Sociografía del Inkario (fue socialista o comunista el imperio inkaiko) (1952), Don Manuel Rigoberto Paredes: estudio biobibliográfico (1955). Luego de su muerte se publicaron de forma póstuma: Sociología Marxista (1963), Bosquejo sociodialéctico de la historia de Bolivia (1978), Polémica sobre marxismo y otros ensayos afines (1980), Escritos literarios (1981) y La autonomía universitaria (1989). El Archivo de José Antonio Arze, conformado por 1.5 ml., contiene sus escritos y correspondencia de 1919 a 1955 y varios artículos póstumos, recortes de prensa, impresos y documentos del PIR (1947 a l950); correspondencia con personalidades bolivianas y extranjeras (cartas de líderes políticos bolivianos, latinoamericanos y europeos), escritos en varios idiomas, pues dominó el castellano, francés, inglés, portugués, alemán, italiano, ruso, esperanto y quechua. El Archivo que formó durante su existencia está custodiado por J. R. Arze* y R. Arze*. Fuente: Arze, 1988, 8 (11): 23-28; http://es.wikipedia.org (20.6.12).

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ARZE LUJÁN, EDMUNDO

(Cochabamba, 16 de noviembre de 1959) Abogado (UMSS). Investigador del Archivo Histórico de la Casa de la Cultura (Alcaldía Municipal de Cochabamba). Artista plástico; columnista sobre temas históricos, con 100 artículos publicados en Los Tiempos y Opinión de Cochabamba. Miembro de la Sociedad de Historia y Geografía de Cochabamba y del Colegio de Abogados. Realizó el análisis paleográfico de documentos del siglo XVI referentes a la fundación de la Villa de Oropeza y el reparto de cuadras y solares a favor de los primeros asentamientos españoles; así como de las primeras instituciones de la colonia en Canata y Villa de Oropeza. Realizó la descripción de cartas de dote, probanzas, compra venta, y fundaciones de capellanías, así como testamentos de españoles. Tuvo a su cargo la descripción de documentos referentes a los levantamientos indigenales (1781-1782) y de la Guerra de la Independencia. Trabajó en la organización del antiguo archivo de la Notaría de Hacienda y Gobierno, de propiedad de la Prefectura de Cochabamba en agosto de 2004. El 14 de septiembre de ese año propuso la creación del Archivo Histórico Departamental de la Prefectura de Cochabamba (idea que el Prefecto Alfonso Camacho aceptó complacido), sobre la base del fondo Notarial con documentos de la época colonial, al que se sumó el fondo transferido por E. Salazar*, responsable de los documentos de la antigua Corporación de Desarrollo Regional de Cochabamba, que se hallaban en inmediaciones de una usina eléctrica en estado de precariedad y deterioro notables. Una parte de ese fondo fue destruido por un incendio durante la llamada “Guerra del Agua” (abril de 2002). Más tarde, con el apoyo del senador Marcelo Aramayo Pérez, logró la promulgación de la Ley que autorizó al Servicio Nacional de Patrimonio del Estado la transferencia del inmueble ubicado en la calle Santivañez Nº 363, donde se procedió a la fundación del Archivo Histórico del Departamento de Cochabamba “Nataniel Aguirre”. Posteriormente este Archivo fue organizado por D. Miranda* y S. Rodriguez*. Fuente: CV; Núñez, 2004: 14-16.

ARZE ORMACHEA, SILVIA (La Paz)

Historiadora (UMSA), especialista en historia del arte y de la época colonial de Bolivia. Asesoró y apoyó varias obras de su especialidad, como los de Teresa Gisbert y C. Mesa*. En su época de juventud realizó diversos trabajos archivísticos, entre ellos un estudio sobre los archivos parroquiales. Publicaciones archivísticas: “Una iglesia en el tiempo: San Agustín”, con Isabel Canedo, María E. Muñoz, Carola Echalar y Martha Paredes (Boletín del Archivo de La Paz, 1984, Nº 8: 3-15); Guía de Archivos para la historia de los pueblos indígenas de Bolivia, en coautoría con Rossana Barragan, Ximena Medinaceli y Seemin Qayum (La Paz, CID-SAEGG).

ARZE QUIROGA, EDUARDO

(Cochabamba, 5 de enero de 1907. † La Paz, 1989) Abogado (UMSS), político, historiador, diplomático. Asistió a la guerra del Chaco, habiendo sido hecho prisionero en la batalla de “Campo Vía” en 1933; fue repatriado

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en 1936. Diputado nacional (1944) y Senador electo (1951). Embajador del gobierno de Gualberto Villarroel (1945) en las Conferencias de Chapultepec, donde se sentaron las bases de la OEA y de San Francisco, donde se fundó la Organización de Naciones Unidas. En 1952 fue Embajador de Bolivia ante las NN.UU. Fue también Viceministro de Relaciones Exteriores (1954), Embajador en Colombia (1957), Ministro de Relaciones Exteriores y Culto (1960-1962), y, en 1985, el Dr. V. Paz* le designó Jefe de Misión de la Embajada de Bolivia en Brasil. En la carrera universitaria fue rector de la UMSS (1955) y docente de la Carrera de Historia de la UMSA (1973-1985). Ingresó a la Academia Boliviana de Historia con su tesis sobre el Pensamiento de Daniel Salamanca* (1973). Fue Presidente del Instituto Boliviano de Estudios Geopolíticos “Jaime Mendoza” (1974-1979) y miembro correspondiente de la Real Academia de España (1981). Autor de Nacionalización de los ferrocarriles de la red Speyer (1940), Historia de Bolivia, siglo XVI (1962), Primera población del valle de Cochabamba y fundación de la villa de Oropesa (1974), La economía actual y la teoría del valor de Salamanca (1975) y Las relaciones internacionales de Bolivia, 1825-1990 (1991). Notable papelista, coleccionó documentos biográficos, incluyendo los relacionados a sus estudios primarios, secundarios y universitarios (1907-1935). Una importante colección de documentos sobre Daniel Salamanca y la política internacional boliviana (1912-1982), le fue entregado por la señora Raquel Salamanca de Gumucio, en nombre de la familia del ex presidente Salamanca, así como manuscritos originales, correspondencia privada y diplomática de la Guerra del Chaco y ensayos, al parecer, inéditos. Como resultado de la descripción del Archivo de Daniel Salamanca, publicó Documentos para una historia de la Guerra del Chaco, en cuatro tomos. A la muerte de Arze, el valioso archivo fue entregado al Centro Bibliográfico Histórico “Joaquín Espada”, conformado por el periódico Los Tiempos de Cochabamba. Publicaciones archivísticas: Documentos para una historia de la Guerra del Chaco. Seleccionados del Archivo de Daniel Salamanca (La Paz, Don Bosco; Cochabamba, Universitaria, 1951-1974: Tomo I. marzo de 1931-julio de 1932; Tomo II. julio-diciembre de 1932; Tomo III. 6 de diciembre de 1932-12 de diciembre de 1933; Tomo IV. 11 de diciembre de 1933-27 de noviembre de 1934); Papeles de Cochabamba en el Archivo General de la Nación Argentina (La Paz, Banco Hipotecario Nacional, 1975). Fuente: Arze, 1989: 70-71; Vargas, 2004; http://censoarchivos.mcu.es (11.02.10)

ASCARRUNZ MARTINEZ, SOFIA VALENTINA (La Paz, 23 de octubre de 1970)

Bachiller Superior en Turismo de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UMSA). Miembro de la Asociación de Familiares y Mártires por la Democracia. Estudió Contabilidad Básica en el Instituto Superior Comercial de la Nación (1990) y la carrera de Secretaria Ejecutiva en el Centro de Técnicas Secretariales (1996). Entre 1994 y 2010, realizó una serie de cursos relacionados a Programas Operativos Anuales, Responsabilidad por la Función Pública, Computación e Internet, Historia de Bolivia y Relaciones Humanas. Desde el 2003 impartió cursos de Técnicas de Organización y Manejo de Archivos (Espacio Cultural Universitario, Facultad Técnica, UMSA), Archivo, Ortografía, Técnicas Secretariales y Documentos Mercantiles (Instituto “Los Ángeles”). Entre 1991 y 2006 se desempeñó como Auxiliar

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de contabilidad (Consultora Espinoza & Asociados), Secretaria de Gerencia General (Siser), Secretaria de Administración y Finanzas (Cooperativa de Teléfonos La Paz, Alcaldía Municipal y Empresa Nacional de Ferrocarriles). Ingresó al Programa de Cedulación Gratuita como Secretaria de Coordinación General (2008); Asistente Ejecutiva en el Ministerio de la Presidencia (2010); y Encargada de Digitalización del Programa de Cedulación Gratuita (2010), habiendo sido designada como Encargada de Gestión Documental en el Servicio General de Identificación Personal y del Servicio General de Licencias para Conducir, creada por ley 145 de 27 de junio de 2011. Fue responsable de la transferencia de los Archivos Patronímicos y Documentales desde la antigua Dirección de Identificación Personal a cargo de la Policía Nacional. Elaboró el Diagnóstico de los Archivos de Identificación y organizó el Sistema de Archivo de la SEGIP, hasta el 2011. Ha elaborado textos de Técnica de Manejo y Organización de Archivos; un Manual Práctico de Redacción y Ortografía, Manual Simple de RRPP y RRHH (2003) (inéditos). Fuente: CV.

ASCARRUNZ PELÁEZ, MOISÉS

(La Paz, 24 de diciembre de 1862, † s.l. 24 de junio de 1939) Su educación básica fue realizada en su ciudad natal. Sus padres lo enviaron a Suiza pero regresó para estudiar Derecho en la Universidad de La Paz, graduándose como Abogado (1885). Integró de forma militante las filas del Partido Liberal, encarnando a una nueva generación que había formado el “ala radical” del partido, es decir “miembros jóvenes y viriles del liberalismo, que ansían las reformas y los progresos rápidos e inmediatos”. Vinculados por la semejanza de doctrinas y de escuela científica, muchos de estos formados en Europa, apoyaron la candidatura de J. Gutiérrez Guerra*, presidente con el que terminó la era liberal, pues fue depuesto -golpe de Estado mediante- por Bautista Saavedra*, líder del Partido Republicano. Como buen político de esa época, Ascarrunz incursionó en el periodismo habiendo escrito sus crónicas con el seudónimo de Ignoto. En 1889 fue director del periódico liberal El Imparcial, cerrado en 1892 debido a su posición antigubernamental, con su consecuente prisión y exilio. Pese a ello fue elegido Diputado Liberal por el Departamento de Oruro en 1895, ante lo cual el gobierno de Severo Fernández Alonso lo envió como Ministro Plenipotenciario a España (1897), pero consecuente con sus ideales, en esa capital defiende la revolución liberal de 1899. A partir de 1901 fue redactor de los periódicos liberales paceños El Comercio de Bolivia, El Diario y El Tiempo. Posteriormente, ya con el gobierno liberal en el poder, fue Diputado (1902) y Senador (1910), siendo designado presidente del Concejo Municipal de Oruro (1903), prefecto del Departamento de Oruro (1908-1909) y director nacional de Estadística y Estudios Geográficos (1918-1919). Fue también catedrático de la Escuela de Derecho y Rector de la Universidad Mayor de San Andrés (1922). Curioso, pero más tarde figura colaborando en La República, órgano afín al presidente Bautista Saavedra. En su producción intelectual, destacan La Revolución Liberal y sus Héroes (1899), El Partido Liberal en el Poder (1917) y Hombres Célebres de Bolivia (1920). Luego de la guerra civil de 1899 que provocó el traslado de las instituciones de los Poderes Ejecutivo y Legislativo a La Paz, no existía en esta ciudad una biblioteca que respondiera a las

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necesidades de información de los legisladores, hecho que provocó serias dificultades al Congreso Nacional para respaldar su acción legislativa, pues no contaba con una biblioteca que le proporcionara información esencial, tanto en doctrina como jurisprudencia y legislación comparada. Ante esta situación, en 1911, Moisés Ascarrunz Peláez presentó un proyecto para organizar “una biblioteca legislativa destinada exclusivamente al servicio del Congreso Nacional”. Con buen criterio el Senado autorizó una resolución votando la suma de Bs. 15.000 para dicho propósito. Asesorado, en esa labor, por el bibliotecario municipal Justo C. Varela, en corto tiempo logró reunir una colección actualizada de 5.000 obras para apoyar documentalmente a la definición de políticas públicas que se discutían y aprobaban en el Congreso. Sin embargo no sólo adquirió libros, sino que mandó fabricar una hermosa y sobria estantería en madera fina en los Estados Unidos de Norteamérica. No podía ser de otra manera, pues se trataba de la Biblioteca del primer poder del Estado. En su histórica misión recibió el apoyo de la crema y nata de la clase política e intelectual de esa época pletórica de liberalismo: Macario Pinilla (Presidente del Senado), Juan Misael Saracho (segundo Vicepresidente del Senado), Aníbal Capriles (Ministro de Gobierno); los Embajadores Ismael Montes (ex presidente de la República, Embajador y Ministro Plenipotenciario en Gran Bretaña), Ignacio Calderón (Ministro Plenipotenciario en Estados Unidos de América), Ricardo Mujía (Legación de Bolivia en Paraguay), Casto Rojas (Encargado de Negocios en el Perú), E. Diez de Medina* (Legación de Bolivia en Chile), Leopoldo Castellano (Consulado de Bolivia en Guatemala), Edgard Bujrj (Consulado General de Bolivia en Dinamarca); Manuel Ordóñez López (Oficial Mayor del Senado). El expresidente Ismael Montes adquirió 52 obras en librerías de España, sobre todo literatura positivista propia de la época liberal, como Derecho Constitucional (Sansonetti), Bases Sociológicas del Derecho y el Estado (Vaccaro), Sociología (Giddings; Gumplowicz; y Rossi), La Revolución Francesa (Carlyle), Derecho Civil (D’Aguanno), Economía (Buylla), Medicina Legal (Lombroso), Gobierno Congresal (Wilson), Derecho Administrativo (Goodnow), Sentido Económico de la Historia (Rogers), Historia de la Economía Política (Ingram), Así hablaba Zaratrusta (Nietzche), La Explotación de las Riquezas (Scheel), La Educación (Bunge), etc. La elite intelectual de aquella época donó importantes obras. Merecen citarse las de A. Capriles (La Justicia, de Spencer), Benedicto Goytia (Historia Universal de César Cantú en 11 tomos), Tomás O’Connor D’Arlach (Código Civil de Escovela, 22 tomos), Nicolás Suárez, el magnate del Caucho (Antropología Social de Marfol; Tratados de Política de Azcárate; y La Policía de Gámbara), S. I. Patiño*, el Rey del Estaño (Código Civil Español; y Enjuiciamiento ambos de Manresa), Juan Muñoz Reyes (Biblioteca Internacional de Obras Famosas, 22 tomos), Casto Rojas (La Revista de Hacienda; La Moneda de Oro en Bolivia y su Cuestiones Económicas y Financieras), Pedro Antonio Blanco (Diccionario Geográfico de Oruro, Diccionario Geográfico de Cochabamba, y la Monografía de la Industria Minera en Bolivia, tan útiles ayer y hoy), Juan Misael Saracho (Jurisprudencia Administrativa; y Derecho Civil de Dato), Claudio Pinilla (Derecho Internacional de López Sánchez), Manuel Vicente Ballivián (Historia del Uruguay de Bollo; Diccionario de la Política de Block; Archivo Boliviano de su autoría), Ismael Vásquez (Traité des Chemins du Fer de Carpentier, esenciales en aquella época), M.B. Mariaca (Diccionario Salvat, 9 tomos). Por su parte, el Senado Nacional mandó comprar una Historia Universal (G. Onken, 16 tomos), Historia del Consulado y el Imperio (A. Thiers, 15 tomos), Memorias del Gral. O’Leary (26 tomos), La Creación-

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Historia Natural (Brehem, 9 tomos), y varios tratados de geografía. La Sección Archivo de la Cámara de Diputados entregó 60 publicaciones oficiales, entre ellas El Redactor de Diputados (1900-1911), El Redactor del Congreso (1901-1908), y Proyectos de informes (1901-1911). El despliegue del Senado fue el acicate para que los representantes nacionales se esmerasen mandando comprar obras con su propio peculio. Así, los diputados tarijeños donaron el Código de Comercio (Pastor), los representantes de Oruro (tanto de la Capital, y las provincias de Carangas, Abaroa y Poopó) hicieron importar desde Buenos Aires La Historia de la Humanidad de F. Laurent, bella obra profusamente ilustrada, con grabados de la época impresos en litografía y encuadernada en pasta dura en 5 tomos. Los diputados de Cochabamba, fueron más allá pues hicieron traer desde París El Grand Dictionaire Universel du XIX Siécle, encuadernada en 17 tomos. ¡Sin duda el idioma no significó un óbice! Ninguna institución escatimó esfuerzos para dotar de obras a la flamante biblioteca. Desde Sucre, el Archivo de la Nación, envió un lote de 69 publicaciones oficiales (18941900), la Biblioteca Pública Municipal de La Paz entregó Mensajes Presidenciales (18801908), Memorias Ministeriales (Relaciones Exteriores, 1863-1908; Gobierno, 1872-1910; Hacienda, 1832-1911; Justicia e Instrucción Pública, 1870-1909; Guerra, 1868-1911; y Colonización, 1905-1910), el Redactor (del Congreso, 1870-1907; del Senado, 18891911; y de Diputados, 1890-1906), Proyectos e Informes del Senado (1890-1909), y Proyectos e Informes de la Cámara de Diputados (1883-1909); Presupuestos de la Nación (1865-1910), Memorias Municipales (1874-1910) y Presupuestos Municipales (1877-1911). Luego de intensa gestión Ascarrunz informó orgulloso de su exitoso trabajo al Senado Nacional, en la solemne inauguración de la Biblioteca del Congreso. Con ese acervo la Biblioteca fue inaugurada en acto solemne el 14 de septiembre de 1912, siendo designado como primer director Carlos Flores L. La estantería importada desde los Estados Unidos fue instalada en los amplios salones del edificio del Palacio Legislativo, donde los libros fueron clasificados y dispuestos al servicio de los parlamentarios. A ella se fusionó el Archivo Histórico del Congreso en 2000. Fuente: Oporto, 2008: 60-65.

ASEBEY CLAURE, RICARDO CARLOS (La Paz, 9 de febrero de 1973)

Licenciado en Historia UMSA (2004). Cursó el Máster de Historia del Mundo Hispánico. Fundación Carolina, Madrid, España (2007). Cursa la Maestría de Estudios Latinoamericanos. CIDES. Ha participado en el Curso de Diplomática del Documento Indiano, dictado por el Dr. José Miguel López Villalba* (1999); Gestión de la documentación y archivos (2005); 1º Taller departamental Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006); Conservación preventiva y restauración preventiva y restauración para materiales de Archivo (2006, 2007); Digitalización de documentos (2008); Diplomática del Documento en la Edad Moderna, dictado por M. López Villalba (2009). Publica sus artículos historiográficos en periódicos y revistas locales. Trabajó en el Archivo de La Paz* como Auxiliar (2001- 2003); Técnico Archivista (20032004) y docente archivista (2007-2008). Fue Paleógrafo en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (2005-2006). Desde 2012 se desempeña como Coordinador Archivista en la Embajada de España en Bolivia.

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Publicaciones archivísticas: “Actividades realizadas en el Archivo de La Paz de enero a diciembre de 2002” (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, 20: 56); “El Censo Guía de Archivos: Una experiencia de evaluación en la ciudad de La Paz”, con Magda Mora (Boletín del Archivo de La Paz, 2004, 21-22: 28–39; “El pasado y la inmigración. Los Censos de Extranjeros”, con Magda Mora (DesArchivando, 2007, 2: 34–35); “Segundo Taller de Conservación Preventiva y Restauración para materiales de archivo” (DesArchivando, 2007, 3: 26); “El reencuentro con el pasado” (DesArchivando, 2008, 4: 42–43); “Un nuevo instrumento de descripción. Los índices digitales del Sub-fondo Padrones Revisitarios Republicanos” (DesArchivando (2008, 5: 8–9); “Historia e inmigración. Los Censos de Extranjeros” (Boletín del Archivo de La Paz, 2010, 25: 67–70); “Los pegamentos, adhesivos, clips y grapas como factores de deterioro de los documentos” (Boletín del Archivo de La Paz, 2011, 26: 193-196). Fuente: CV.

ASOCIACIÓN BOLIVIANA DE TRABAJADORES DE LA INFORMACIÓN Fundada en octubre de 1995 en la ciudad de Sucre, como resultado del Primer Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”*. (Sucre, octubre de 1995). La primera directiva fue conformada por el bibliotecario y abogado R. Gantier* de Sucre y el archivista E. Pareja* de La Paz. Luego de organizar un curso para formación de técnicos medios en Bibliotecología realizado en Sucre, la Asociación desapareció.

ASOCIACIÓN BOLIVIANA DE TRABAJADORES DE LA INFORMACIÓN (FILIAL LA PAZ) Fundada en mayo de 1996 en la ciudad de La Paz, como resultado del Primer Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”. Su primera directiva fue conformada por J.C. Fernández*, R. Ramírez*, G. Illatarco*, R. Santos*, M. Agramont* y otros. Luego de existencia efímera y anodina se disolvió.

ASOCIACIÓN DE ARCHIVISTAS DE LA PAZ La primera asociación de su tipo en Bolivia, fue fundada en septiembre de 1976, a la culminación del Curso de Administración de Archivos organizado en La Paz por el Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de la República de Bolivia*, con el auspicio de la Organización de Estados Americanos*, el Archivo de La Paz*, la Universidad Mayor de San Andrés y el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. La directiva fue conformada por Walter Carvajal (Presidente), Roberto Gonzáles (Vicepresidente), Alcides Ayala (Secretario General), A. Quintanilla de Crespo* (Tesorera) y R. Gantier* (Secretario de Actas). Entre los vocales figuran I. Vera*, Omar Rodríguez, Rosario Fiorilo, Miriam de Rivera, Alfonso Hurtado y Josué Taborga. Se formaron comisiones de Legislación (J.L.Roca*, Marta Barrios y R. Gantier); Infraestructura (G. Ovando Sanz* y Miriam de Rivera); Formación y Profesionalización (E. Pareja*, Omar Rodríguez y Ercilia de Saavedra); y Prensa y Difusión (V.H. Arévalo*, Alfonso Hurtado y Alberto Portugal). A. Crespo* fue designado Asesor. Luego de origen tan auspicioso realizó algunos actos sociales, para extinguirse por inactividad, hacia 1979.

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ASOCIACIÓN DE ARCHIVISTAS DEL PODER EJECUTIVO Constituida el 7 de noviembre de 2007 en el Archivo (Memoria Institucional) y Biblioteca del Ministerio de Economía, Hacienda y Finanzas Públicas, oportunidad en la que G. Molina* ofreció una conferencia sobre el Archivo de Gunnar Mendoza*, en el que fundamentó la denominación del Congreso de Archivistas de este sector, con el nombre del insigne archivista. La reunión consideró aspectos económicos, institucionales, técnicos, normativos; creación de archivos centrales, jerarquización del trabajo, responsabilidad del archivero, política archivística del Estado, etc. Fue fundada por L. Sequeiros* (M. de Relaciones Exteriores y Cultos), Natalio Mamani (M. de Producción y Microempresa-Servicio Nacional de la Micro y Pequeña empresa), M. Condori* (M. de Justicia), M.R. Villegas* (M. de Planificación y Desarrollo-Fondo Nacional de Inversión Productiva y Social FSP), B. Lecoña* (M. de Defensa Nacional), J. Veizaga* (M. de Planificación y Desarrollo), G. Molina* (COMIBOL), F. Chuquimia* (M. de Economía), Miguel Rodríguez (M. de Minería) y Javier Cachi (M. de la Presidencia). L. Oporto* fue designado Asesor. Luego de largo receso, la Asociación convocó a una segunda reunión el 26 de abril de 2012, en la que se discutieron temas relacionados a los archivos del Órgano Ejecutivo del Estado Plurinacional, en cinco mesas de trabajo: 1: situación de los archivos institucionales, 2: Memorias institucionales y estructuras organizacionales, 3: Aspecto normativo, 4: Fase intermedia, 5: Acceso y transparencia a la información pública. Fuente: Convocatoria al I Encuentro de Archivos del Órgano Ejecutivo (23.4.2012); Informe de la Lic. Judit Ozuna, responsable del Archivo Central de la Vicepresidencia del Estado (2.5.2012).

ASOCIACIÓN DE ARCHIVISTAS EX BECARIOS DE LA ORGANIZACIÓN DE ESTADOS AMERICANOS Fundada en marzo de 1982 por L. Oporto Ordóñez*, E. A. Valda Martínez*, E. Cárdenas* y R. Choque Canqui*, con el fin de agrupar a ex becarios de los cursos auspiciados por la Organización de Estados Americanos* en Madrid (España) y Córdoba (Argentina), para apoyar al desarrollo archivístico en Bolivia. Organizó las “Charlas Archivísticas” en 1982, preparatorias para la II Reunión de Consulta de los Archivos de Bolivia, que organizó el ABNB* bajo la dirección de G. Mendoza* en Cochabamba con el apoyo del Centro Cultural y Pedagógico de Portales (Fundación Simón I. Patiño). La Asociación formó comisiones técnicas que prestaron asesoramiento a archivos estatales y fue considerada como brazo técnico, por G. Mendoza, apoyando activamente la organización de la II, III y IV Reuniones de Consulta de los Archivos de Bolivia*. Su primer presidente fue R. Choque y el segundo L. Oporto. En 1993, luego de 11 años de labor, la Asociación se disolvió para dar paso a la conformación del Comité de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia*, con el fin de organizar el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* , es decir unificar a los trabajadores de la información. Publicaciones archivísticas: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982; escrito por Luis Oporto Ordóñez, por encargo de la Asociación.

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ASOCIACIÓN LATINOAMERICANA DE ARCHIVOS (ALA) Creada en Lima (Perú) el 6 de abril de 1973, como entidad de carácter profesional y cultural, sin fines de lucro, para servir como ente promotor del desarrollo archivístico de los países de lengua española y portuguesa de América Latina, España y Portugal. Reconocida por el Consejo Internacional de Archivos*, para ejecutar las metas, política y programas del CIA, y consolidar la cooperación dentro de los países españoles y de habla portuguesa de América Latina, España y Portugal. La ALA se sumó al CIA como rama regional en 1976 (Resolución 5, Asamblea General del CIA, del 28 de septiembre de 1976, Washington DC, EEUU.). Funciona bajo el acta de constitución de la Asociación Latinoamericana de Archivos, adoptada en Madrid, España, en 1982. Fuente: http://www.ala.or.cr/ (10.02.10); http://www.ica.org (10.02.10).

AVAROA HIDALGO, EDUARDO

(San Pedro de Atacama, Provincia de Atacama (Bolivia), 13 de octubre de 1838. † Calama, Provincia de Atacama (Bolivia), 23 de marzo de 1879) Empresario y coronel boliviano. Fue Concejal municipal, propietario de minas de cobre. Tenía como socios a José Cerruti, Juan de los Ríos, Roberto Cruz, Anastasio Loza, Eusebio Ríos, Ramón Artola y su hermano Ignacio. Su mina más preciada era “El Inca”, “situada en las cercanías de Calama”. Pasó de ser un modesto dependiente del comerciante Aurelio Zuleta (1871) a próspero comerciante independiente, relacionado con la Casa Hnos. Barrau de Cobija y con la de Wenceslao Vidal, en Caracoles (1878). Era proveedor de charque, harina, cebada, galleta, azúcar, aceite, a Caracoles, San Pedro y otros lugares del interior de la provincia. Era distribuidor del periódico El Eco de Caracoles, que editaba Ladislao Cabrera, medio de prensa influyente en Chiu Chiu, San Pedro y Toconao, pueblos de origen colonial , cuando se produjo la aleve invasión chilena, Cabrera designó a Avaroa Subjefe del destacamento de Calama, con grado de Coronel, quedando a la defensa del puente del Topáter con ocho rifleros. Tres días antes del combate, decidió casarse por poder con doña Irene Rivero, la madre de sus hijos. Cabrera señala que Avaroa afirmó, a tiempo de negarse a abandonar la plaza: “Soy boliviano, esto es Bolivia y aquí me quedo”. Su actuación militar fue épica. Rechazó la primera avanzada chilena de cazadores a caballo, comandada por el alférez Juan de Dios Quezada. A pesar que el comandante chileno Ramírez reforzó el ataque con toda la compañía, el coronel chileno Lara, jefe de la otra columna, decidió la retirada. El Coronel Villagrán, a cargo del destacamento chileno, que “consideró la acción de Avaroa como temeraria pero patriótica”, le conminó a la rendición: “¡Ríndase!”. La respuesta de Avaroa tronó en el aire: “¿Rendirme yo?... ¡Qué se rinda su abuela, carajo!”. Y en ese grito, con esa respuesta, el ciudadano Avaroa pasaba a la historia”. El Coronel Villagrán ordenó el fusilamiento y su repaso a bayoneta en el puente del Topater: “Lo impactaron tres disparos, por lo cual quedó tendido y mientras intentaba seguir disparando murió ante el asombro de los soldados chilenos que lo veían como una gran amenaza”. Luego del combate, sus parientes entregaron un libro copiador en custodia al Convento de la ciudad de Calama, a cargo de las religiosas del Colegio Guadalupe de Alquina donde permaneció 105 años. El libro copiador consta de 136 fojas y abarca

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los años 1871-1879. En la última, fechada el 21 de marzo, dos días antes del combate suscitado en Calama, hace saber a doña Julia de los Ríos, en San Pedro de Atacama, que “esperaba el combate con los chilenos y que, luego de ello, retornaría a su casa”. Contiene cartas de orden personal, económico y político, constituyéndose “en la mejor fuente para el conocimiento de la personalidad y actividad del defensor de Calama”. Respecto a su apellido, Avaroa rubrica su firma con la “v” dentilabial y no con la “b” labial, como indistintamente se escribía y se escribe. En 1984, el libro copiador fue repatriado por gestiones del Cónsul de Bolivia en Chile, Héctor Baldivieso Rojas, apoyado por el periodista chileno Héctor Pumarino Soto. La Sra. Rosamilda Rojas de Claros trajo consigo, desde Chile, el volumen y lo entregó en La Paz al Dr. Carlos Rivas Graña, Subsecretario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, en acto público realizado el 21 de marzo de 1984. A diez meses de haber sido repatriado, el 9 de enero de 1985 el Canciller de la República, Gustavo Fernández Saavedra, lo entregó al Dr. F. Cajías*, director del Instituto Boliviano de Cultura, quien a su vez lo depositó en el Archivo Nacional de Bolivia, en Sucre. En 1987, el bisnieto de don Eduardo Avaroa, Ronald MacLean Abaroa, editó las Cartas de Abaroa, cuya transcripción, introducción e índices corrió a cargo del historiador F. Cajías de la Vega. Fuente: El Diario, 1984: 1; Hoy, 1984: 1; Hoy, 1985: 7; MacLean (ed.), 1987; Presencia, 1985: 1; Última Hora, 1985: 5; http://es.wikipedia.org (18.6.2012); http://www.diremar.gob.bo (18.6.2012).

AVENDAÑO RIVERA, CAROLINA (La Paz, 5 de abril de 1983)

Estudiante de la carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* de la UMSA. Trabajó en diferentes Archivos: Corporación de las Fuerzas Armadas de Desarrollo Nacional COFADENA, Ministerio de Educación y en la Fundación Protección al Uso del Medio Ambiente, y en las Bibliotecas de Conservación Internacional y de la Facultad de Humanidades de la UMSA. Actualmente se desempeña como técnico en el Sistema de Archivo Histórico de la COMIBOL*. Fuente: CV.

ÁVILA, FEDERICO

(12 de septiembre de 1904. † Tarija, 1974) Doctor en Filosofía (Buenos Aires). Estudió Derecho en La Paz y La Plata (Argentina). Catedrático (UMSA) y escritor. Fundador y primer rector de la Universidad Juan Misael Saracho de Tarija (1946), y del Liceo de Señoritas de Tarija (1944). Oficial Mayor y Director del Departamento de Cultura de la Municipalidad de Tarija. Trabajó en el Ministerio de Relaciones Exteriores como Jefe de la Sección de Límites; fue comisionado a Buenos Aires a estudiar Archivos. Desempeñó los cargos de Director del Departamento Consular y del Departamento de Congresos y Tratados. Fue designado Director de la Biblioteca y Archivo del Ministerio. Entre sus obras pueden mencionarse: El andinismo del Chaco (1935); La revisión de nuestro pasado (1936); Bolivianidad y sugerencias del

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paisaje boliviano (1937); El problema de la unidad nacional (1938); Bolivia en el concierto del Plata (1941); Tierra y alma boliviana (1943). Fuente: Arze, 1984: 44.

AVIS, FRANCISCO D’ Bibliotecario, Director de la Biblioteca Nacional de Bolivia, en Sucre (ca. 1865). Tuvo a su cargo la ordenación del Archivo Judicial colonial de Charcas que fue salvado de su destrucción por el Ministro D. Calvo*. En su trabajo revisó 5.000 expedientes judiciales para formar un catálogo, estableciendo su antigüedad e importancia. Entre los documentos curiosos que encontró citamos el expediente de 1631 que recoge los datos de un interesante juicio por derechos de autor: “Antonio de Encinas, autor de comedias en Potosí, contra Francisco de Hurtado por haber representado unas del primero contra convenio”; y otro referido a la vida de los curas en los finales de la colonia: expediente de 1812 sobre “Proceso de Esquivias; fraile de Mizque, por revolucionario. Noticias sobre la vida de los frailes. Escapé de aquel convento de La Plata por connivencias”. En 1875 escribió sus “Apuntes referentes al Archivo Nacional, desde noviembre 5 de 1865, con 65 fojas” Fuente: Moreno, 1927: 70-79; Oporto, 2006: 137; Rück, 1898: 67.

AYLLÓN, VIRGINIA

(La Paz, 21 de diciembre de 1958) Bibliotecóloga (UMSA) y escritora. Fue directora del Centro de Documentación en Artes y Literatura Latinoamericanas (CEDOAL), que sostiene la Fundación Simón I. Patiño en La Paz. Asistió y participó de varios Congresos, Reuniones, Seminarios, etc. sobre su especialidad, entre los que se destacan el Seminario Nacional “Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia” (LP, 1993); el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995); Congreso Departamental de la Asociación de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996), participó en la organización del evento. En septiembre de 2008, siendo Secretaria de la legación de Bolivia en los EE.UU., propició la visita a La Paz del consultor P. Kornblut* (de la ONG National Achievement Security que trabaja en la desclasificación de archivos de las dictaduras latinoamericanas de documentos existentes en los Archivos Nacionales de los EE. UU.) para asesorar al gobierno boliviano en temas de acceso a la información y desclasificación de archivos de las dictaduras. En aquella oportunidad los archivistas reunidos en la sala de reuniones de la Cancillería de la República, emitieron un pronunciamiento contra la “Destrucción de la Memoria Cruceña”, el aciago 7 de septiembre de ese año. Fue designada Directora de Planificación del Ministerio de Transparencia Institucional y Lucha contra la Corrupción (2009). Publicaciones archivísticas: “Recuperación de archivos populares: el caso de Bolivia” (47° Congreso Internacional de Archivistas, New Orleans, 1991); “Algunas reflexiones sobre los archivos sindicales de Bolivia” (Etnología, Boletín del Museo Nacional de Etnografía y Folklore,

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1995, 21: 106-118); “Del libro y sus caminos: la condena a Luis García Meza y la defensa de los recursos documentales” (Sopocachi, 1996, 27: 22). Fuente: Cv.

AYMA ZEPITA, DAMIÁN

(San Agustín de Toledo, Oruro, 27 de septiembre de 1927) Fotógrafo trajinante y agricultor aymara. Su infancia y juventud transcurrió domesticando camélidos y forrajes andinos. Su innata afición a la fotografía lo llevó a inscribirse en un curso profesional de Buenos Aires, Argentina (1948), donde permaneció hasta 1952 trabajando en importantes medios de comunicación, con esporádicos retornos a su tierra natal, en ocasión de la singular fiesta de San Agustín, cada 28 de agosto. Muy joven destacó como fotógrafo rural, siendo sus servicios muy cotizados en principales pueblos y comunidades de su provincia, fotografiando sistemáticamente aspectos descollantes de la vida rural. El hecho de haber estudiado en Buenos Aires lo convirtió en una fugaz celebridad local, llevando su fama a otros pisos ecológicos. Se convirtió así en un fotógrafo trajinante que registró el desarrollo rural de Oruro, centros mineros y ciudades importantes. Su experiencia aportó a la ardua tarea de reconstruir el largo proceso de desarrollo social del área rural del país. Estaba detrás de un bautismo o matrimonio, con el mismo interés y entusiasmo de fotografiar la gran fiesta o los hitos de las ciudades pequeñas (inauguración de un camino, una escuela, una pileta pública), uniendo en un mecanismo lineal lo “especial” con lo “cotidiano”, generando un conjunto de datos altamente contextualizados. Así tenemos bellos ejemplos salvados del olvido como el “tractor fabricado en Toledo”, rústico artefacto mecánico construido por un ex combatiente de la Guerra del Chaco “para sacar al agro de la dependiencia”; o las fotografías de la construcción del edificio de la Federación de Mineros en el histórico centro minero de Siglo XX, la inauguración del Hospital “San Juan de Dios” en Oruro por el presidente V. Paz*, o las masivas manifestaciones populares de repudio por el desvío de las aguas del río Lauca, por Chile. En su trabajo fotográfico se expresa la síntesis de la historia de la fotografía, recuerda, por ejemplo, el uso del flash a “destello” de magnesio, el bulbo (individuales y en serie), y el electrónico; el uso de negativos de película plana hasta el standard de 35 mm., que sepultó a los convencionales 110 y medio cuadro. En su larga trayectoria entre 1948 y 1989, acumuló un impresionante archivo de negativos, con gran valor informativo, que atrapa cuatro décadas de registro en lugares y regiones del altiplano de Oruro, los valles de Quime y Yungas de Inquisivi, los centros mineros de Huanuni y Siglo XX, las ciudades de Oruro, Cochabamba, Potosí y La Paz. Ese registro constituye una síntesis de la acumulación histórica (memoria social) de sociedades que continúan marginadas de la literatura escrita y transmiten su experiencia en formas comunicacionales alternativas, tanto por mecanismos propios de la oralidad como los coreográficos y visuales (fotográficos), plenos de mensajes y códigos, exteriorizados en fiestas y rituales propios de la vida rural. Este archivo fue descubierto por L. Oporto* en agosto de 1993, en una de las misiones de campo que realizó para el Museo Nacional de Etnografía y Folklore* y procedió a gestionar su adquisición, con lo que se transfirió al Musef una colección de 1.373 negativos agrupados en 73 series, plasmados en nueve formatos distintos (película

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plana: 4x6, 6x6, 6x9, 10x4, 10x15 y 13x8) y película continua (110 mm., 35 mm., y medio cuadro). El Fondo “Damián Ayma Zepita” está agrupado en dos secciones: a) Fiestas tradicionales y rituales (23% del Fondo, conformado por 25 series relativas a fiestas); y b) Lugares y sitios geográficos (registros de 57 sitios, lugares y poblaciones diversas). En esta sección se ha identificado cuatro tipos de lugares: 1. Ciudades (21 series), 2. Poblaciones provinciales y rurales (36 series), 3. Centros mineros (11 series), y 4. Comunidades indígenas (27 series). Ya anciano Damián Ayma Zepita solía pasar su vida entre Toledo, Oruro y Santa Cruz de la Sierra. Dejó de acudir al Musef en 1996. Se desconoce si vive aún. Fuente: Oporto, 1993a: 8-9.

AZEBEDO, PEDRO DE Escribano de la conquista. En la primera fundación de La Paz acompañó al Capitán Alonso de Mendoza y fue encargado de redactar el acta de la fundación usando un primitivo libro del Cabildo que conservaba con esmero en su alforja. Se trataba de un libro “pequeño, quizá un cuadernillo de pocos pliegos que al cabo de unos meses de vida capitular no tenía ya página disponible; era muy semejante al famoso ‘librito de memoria’. Protagonizó esa hazaña junto a un grupo de españoles enviados por P. de La Gasca* (luego de la guerra civil contra Gonzalo Pizarro y sus huestes rebeldes) entre ellos Francisco de Barrionuevo, Alonzo de Zayas, Francisco de Herrera, García Gutiérrez, Martín de Olmos, Fernando Vargas, Juan Vendriel, Juan Viscaino, Juan de Vargas y F. de Cámara*. Siendo Laja sitio inhóspito, en ausencia del Capitán Mendoza decidieron trasladarse al valle de Chuquiago donde procedieron a una segunda y definitiva fundación, el 23 de octubre, designándose como Escribano de Cabildo a F. de Cámara. Para sorpresa suya constataron que el valle estaba ya poblado configurando insignificante villorrio habitado por 30 vecinos españoles y 200 indígenas; se trataba de un grupo de aventureros, entre ellos un español de apellido Villalobos, que llegó atraído por las noticias que propaló la hueste del capitán sevillano Juan de Saavedra (fundador de Paria), quien en sus andanzas divisó “un valle salpicado de chozas indígenas sin orden alguno, resguardadas por gigantescos espinos, en los que moraban robustos aymaras de larga cabellera y mujeres con la rueca en la mano, hilando constantemente, rodeados de apacibles rebaños de llamas y guanacos al cuidado de pastorcillos; matizaban el paisaje ligeras vicuñas que corrían en tropel por sus alturas y barrancos, y no faltó el gigantesco cóndor en el espacio”. Saavedra y su gente reunieron oro del Choqueyapu con afán y abandonaron el valle. Fuente: Crespo, 1972: 60; Aranzáes, 1915: 669.

AZURDUY BERMÚDEZ DE PADILLA, JUANA

(La Plata (Sucre), 12 de julio de 1871. † Sucre, 25 de mayo de 1862) Hija del hacendado Matías Azurduy y la chola chuquisaqueña Eulalia Bermúdez. Dispuso su hacienda y sus indios a favor de la causa patriota. Valiente guerrillera de la Independencia, ofrendó cuatro de sus hijos a la patria y su esposo mismo fue muerto en combate por el Coronel Francisco de Aguilera. El General M. Belgrano*

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recomendó su ascenso al grado de Coronela de los Ejércitos Argentinos, “por su notable desempeño en la batalla del Villar por la causa patriota”, conferido por Decreto de Juan Manuel de Pueyrredón, Director Supremo de las Provincias del Río de la Plata, el 13 de agosto de 1816. S. Bolívar* ordenó para ella una pensión vitalicia cuando la entrevistó en Chuquisaca, el 3 de noviembre de 1825, que A.J. de Sucre* concretó en 1827, por 400 pesos. Sin embargo dos años más tarde se la retiraron, hasta que en 1848 el presidente Manuel Belzu le restituyó su derecho, pero el gobierno del Dr. José María Linares volvió a conculcar el beneficio. Perdió sus bienes, excepto una finca que tuvo que vender para hacer frente a sus necesidades más premiosas. Anciana y sin recursos, pasó sus últimos años sumida en la pobreza absoluta, pero conservaba su dignidad y un tesoro invaluable, recuerdo de su época de gloria en el ejército patriota. Era un cofre de madera que únicamente abría en ocasión de la visita de su hija, su yerno y algunos niños curiosos, entre ellos Indalecio Sandi (a quien adoptó como hijo) y el joven G. R. Moreno*, oportunidad en la que descubría las cartas de su esposo Manuel Ascencio Padilla, las del general Manuel Belgrano y de otras personalidades políticas con las que mantuvo contacto en esa época; condecoraciones, mapas y pequeños objetos. Era un archivo con papeles selectos, que había conservado como recuerdo de su actuación en la guerra y lo usaba para relatar sus hazañas de guerra. “No alardeaba, sin embargo de lo pasado, ni murmuraba de lo presente. Era sobria de palabras como un veterano. Imposible que se prestara nunca a un franco relato. Pero una vez tocada seguramente en lo noble, exclamó: ‘Guay, que al fin rajaron la tierra aquellos chapetones malditos’. Rajaron la tierra. Eso sí que es escapar llevando el terror y velocidad de un rayo”, recuerda G. R. Moreno. Fuente: Fernández, 1997; Moreno, 2009; Urquidi, 2009.

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B BACARREZA GUZMÁN, PATRICIA JACQUELINE (27 de junio de 1968)

Estudió secretariado ejecutivo y contabilidad en el Instituto “New York” (La Paz). El 2008 egresó de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información*. Asistió a varios encuentros y seminarios, reuniones, tertulias archivísticas, los congresos Internacionales de Bibliotecología, Archivística y Documentación (2005, 2007); el Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano (2008), etc. Fue Secretaria Ejecutiva en la Empresa de Correos de Bolivia y ha sido Encargada del Archivo en la Agencia Aduanera “Ultramar”. Realizó una pasantía en el Archivo de Recursos Humanos de la Aduana Nacional y ha sido auxiliar de Archivo en la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero. Fuente: CV.

BALBOA CHURA, EDWIN

(La Paz, 13 de septiembre de 1981) Licenciado en Bibliotecología y Archivología (UMSA). Diplomado en Educación Superior UMSA. Estudia Administración de Empresas en la Universidad Pública de El Alto. Auxiliar de Docencia de Catalogación y Clasificación; y Automatización de la Información UMSA (2004). Trabajó en la organización del Archivo de la ex Dirección de Telecomunicaciones (2000). Auxiliar del Archivo Central de la Administración del Fondo de Pensiones Futuro de Bolivia (2002), Pasante del Archivo Central del Ministerio de Desarrollo Económico y del Viceministerio de Cultura (2004). Analista “D” del Archivo Central del Banco Mercantil (2005-2006), Analista del Archivo Central Wamsa BM (2006-2010), Jefe de Archivo y correspondencia (2010). Fuente: CV.

BALDERRAMA GRÁJEDA, JORGE

(Catavi, Provincia Bustillo, Potosí, 2 de febrero de 1949) Estudió en el Instituto Arrieta de Oruro. Su formación archivística la debe al curso de Actualización y Capacitación Archivística (2002). Participó en el Congreso Nacional de Archivos para el tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de

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Archivos (2007). Informó que tiene un libro inédito sobre la Trayectoria del Centro de Instrucción de Operaciones en la Selva en las Guerrillas de 1967 en Ñancahuazú, de la que es excombatiente. Trabajó en la Empresa Minera Catavi por 15 años y de allí pasó a la Contraloría General del Estado (Sucre) en el que se desempeñó como Auxiliar de Archivo y Encargado del Archivo General Nacional, por 22 años. Fuente: CV.

BALLIVIÁN JAMES, MANUEL VICENTE

(Misti, Arequipa, Perú, 18 de junio de 1848. † La Paz, 7 de agosto de 1921) Geógrafo y político. Presidió la Sociedad Geográfica de La Paz (1891-1921). Fue Ministro de Bolivia ante el gobierno francés (1870) y Ministro de Agricultura y Colonización (1905-1908). Fue Director de la Oficina Nacional de Inmigración, Estadística y Propaganda Geográfica (1896-1916), desde donde llevó a cabo el Censo de Población de 1900, reputado como el primero de carácter científico en Bolivia. Sus estudios sobre geografía y orografía boliviana son de un valor incalculable y en muchos aspectos se los puede calificar como pioneros. Entre sus obras cito Estudios de geografía andina. Las posiciones geográficas de las tribus que formaban el Imperio de los incas (1902), Monografía de la Industria de la Goma en Bolivia (1912), El territorio nacional de colonias (1903), el Diccionario Geográfico de La Paz (1890), el Diccionario Geográfico de Cochabamba (1901), Historia de la goma elástica en Bolivia (1901), Monografía de la industria minera en Bolivia (1910) y su rarísimo Documentos para la historia geográfica de Bolivia (1889), a los que habrá que añadir sus informes como ministro de agricultura e innumerables reportes de sus viajes y exploraciones y las que desarrolló con otros viajeros de su época como Edwin Heath, A. Bandelier*, etc. Su aporte a la archivística fue breve, pero importante, pues dada su condición de publicista, dio a conocer sus hallazgos mediante el Boletín de la Sociedad, entre ellos del archivo que formó I. Flores* sobre el cerco de La Paz de 1781, durante la sublevación de Túpac Katari*; que fue a parar a poder del coleccionista ecuatoriano Jacinto Jijón y Caamaño; y del catálogo de documentos relativos a la historia y geografía de Bolivia, con un total de 316 entradas y más de 21 mapas, que levantó R. Villalobos* en el Archivo General de Indias en Sevilla. Publicaciones archivísticas: Catálogo de los documentos concernientes a la historia geográfica de Bolivia, reunidos en las investigaciones practicadas en diferentes Archivos y remitidos al Ministerio de Relaciones Exteriores, 1886-1889. La Paz, Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores. Comisión Especial de Límites, No. 1; Documentos para la historia geográfica de Bolivia. 2 vols. La Paz, J.M. Gamarra, 1906 (comp.) Fuente: Aranzáes, 1915; Costa Arduz, 2005: 137-138, 214-215, 271; www.biografiasyvidas.com (11.02.10).

BALLIVIÁN MARTINS DE ROMERO, MARIA FLORENCIA (Washington D.C., EE.UU., 3 de enero de 1944)

Nació en Estados Unidos de Norteamérica cuando su padre ejercía funciones diplomáticas en la Embajada de Bolivia. Pertenece a la primera generación de

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historiadores profesionales de la Carrera de Historia* (UMSA). Fue la primera profesional en titularse como Licenciada en Historia, con su tesis José María Pérez de Urdininea y su campaña en el Norte argentino (1819-1825), publicada luego como José María Pérez de Urdininea, un general de la Independencia (La Paz, Casa de la Cultura, 1978). Hizo un Cuso Internacional de Archivos en París, Francia (1975), oportunidad en la que visitó numerosos archivos estatales. Fue una de las fundadoras del Archivo de La Paz*, cuando este repositorio se instaló en Cota Cota. Llegó a ser subdirectora (1981-1988) y directora (1989-1990), con un total de 18 años de trabajo, desde 1971 hasta 1989. Bajo la dirección de A. Crespo*, participó en la descripción del Archivo colonial de Condo Condo (Oruro). En 1985 donó al Archivo de La Paz, la

colección de documentos (1904-1952) de su padre René Ballivián Calderón

Publicaciones archivísticas: “La historia económica y los Registros de Escrituras”, con Alberto Crespo y René Arze (Presencia Literaria. La Paz, junio 29 de 1975: 4); “Documentos públicos de La Paz”, con R. Arze (Boletín del Archivo de La Paz, 1976, 1 (2): 27-29); “Sin documentación desconoceríamos el pasado… y careceríamos de una base para la administración del presente y de información para el porvenir”, entrevista de Mariano Baptista a René Arze y Florencia Ballivián de Romero (Semana de Última Hora, La Paz, 9 de enero de 1976: 8-9); “El fondo de archivo de la Biblioteca Municipal de Oruro” (Boletín del Archivo de La Paz, 1978, 3 (5): 3-13; Id. en Archivos de Oruro. La Paz, Instituto Nacional de Historia y Literatura-IBC, 1978; La Paz, CIH, 1982); “El archivo parroquial de Condo Condo” (Boletín del Archivo de La Paz, 1978, 3 (5): 21-23¸ Id. en Archivos de Oruro. La Paz, Instituto Nacional de Historia y Literatura-IBC, 1978; La Paz, CIH, 1982; Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (una guía preliminar). La Paz: cehila-ceprolai, 1985: 89-91); “Archivo Gregorio Pacheco”, con A. Crespo (Boletín del Archivo de La Paz, 1986, 6 (9): 21-32). Fuente: CV; Presencia, 1975: 12.

BALLIVIÁN Y ROXAS, VICENTE

(La Paz, diciembre de 1810. † La Paz, 17 de noviembre de 1891) Estudió Humanidades en Londres y La Sorbona de París (1838). A su retorno colaboró con su tío el Mariscal J. de Ballivián*, quien lo designó Cónsul en Tacna donde permaneció hasta 1844. Salió al exilio rumbo al Perú, a raíz del golpe de Estado de Manuel Isidoro Belzu contra su tío. El 12 de marzo de 1847 a raíz de una rebelión del Batallón de Carabineros, las masas populares asaltaron su casa y destruyeron su biblioteca, perdiéndose “ediciones originales de los historiadores primitivos” y documentos inéditos que había atesorado durante años, entre ellos “una copia de P.V. Cañete* sobre la Casa de la Moneda de 1810; el diario original de la revolución de La Paz de 1809; y otro diario de los sucesos de Oruro durante la rebelión de 1781, con el proceso seguido a los Rodríguez, fuera de otros documentos y apuntes, y extractos sueltos”. Permaneció en Lima, Cuzco y Arequipa, investigando el pasado colonial. A su retorno al país en 1857, fue elegido munícipe y vicepresidente del Consejo Departamental. En 1863 volvió a Europa; estando allí, Mariano Melgarejo lo designó Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario en Francia e Inglaterra, ante la Corte de Napoleón III (1870), misión que concluye con la caída del Segundo Imperio. Infatigable investigador del pasado, con la colaboración de su hijo M.V. Ballivián James*, consultó los archivos del British Museum de Londres, el Archivo General de Indias de Sevilla* y el Archivo de la Academia de Historia de Madrid (Colección

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Mata Linares). En Londres cooperó a N. Acosta*, Pascual Gayangos y Sir Clements R. Markham en la transcripción de las Actas Capitulares de La Paz, invaluable documento obsequiado a A. d’Orbigny*. Ballivián también encontró en el British Museum, las Actas de la Diputación Provincial desde el 1 de julio de 1820 hasta el 31 de enero de 1824, cuya primera versión transcrita fue publicada en 1880 por Carlos Bravo. Como resultado de sus pesquisas en los archivos europeos, tiene el mérito de haber publicado, en 1872, el primer y único tomo de El Archivo Boliviano¸ que contiene “El Diario del Brigadier Don José de Sebastián de Segurola”*, durante el sitio prolongado, que sufrió la ciudad de La Paz en los años 1781 a 1782, durante la rebelión de TupacAmaru; “Los Anales de la Villa de Potosí”, desde su fundación hasta 1702 (copiada de un manuscrito conservado en París); un catálogo de documentos sobre la historia de Bolivia, y otro referido a impresos de la época de la Colonia, con un total de 321 entradas. G.R. Moreno*, a tiempo de comentar su obra, en 1879, dijo: “restituido a Bolivia i víctima hoi de la gota serena, no se encuentra en condiciones de proseguir su tarea adicional…”, pues además se encontraba ciego. Publicaciones archivísticas: Archivo Boliviano. Colección de documentos relativos a la historia de Bolivia, durante la época colonial con un catálogo de obras impresas y de manuscritos que tratan de esta parte de la América Meridional (La Paz, Casa Municipal de Cultura, [1872] 1977). Fuente: Aranzáes, 1915; Feyles, 1965: 15; Siles, 1970b; www.biografiasyvidas.com (11.02.10).

BALLIVIÁN Y SEGUROLA, JOSÉ DE

(La Paz, 5 de mayo de 1805. † Río de Janeiro, Brasil, 6 de octubre de 1852) Miembro de una aristocrática y acaudala familia. En 1817 se alistó en el ejército de M. Ricafort* pero en 1819 se unió a las fuerzas patriotas del Gral. José Miguel Lanza* en la Republiqueta de Ayopaya. Fue Coronel de la República y en esa condición enfrentó al Presidente peruano General Agustín Gamarra que invadió Bolivia en 1828, hecho que culminó en la suscripción del Tratado de Piquiza. Fue uno de los colaboradores del gobierno de A. de Santa Cruz*, combatiendo en las batallas de Yanacocha, Uchumayo, Socabaya y Paucarpata. Asumió la presidencia en 1841 y gobernó hasta 1847, periodo en el que aprobó una nueva Constitución, racionalizó el ejército, creó el Banco de Rescate Minero, apoyó la economía de exportación del guano y la cascarilla, mandó explorar el norte del país, creó el Departamento del Beni (1842) donde estableció varios puertos fluviales. Con notable visión promulgó la ley de archivos públicos de 31 de octubre de 1846, instruyendo el acceso libre a archivos de la Intendencia de Policía (propios del régimen municipal de mercados y comercios), gobernadores (prefectos), jueces de letras, corregidores, jueces de paz y curas, pero sin afectar a los archivos del Poder Ejecutivo, Judicial y Legislativo, que hacen al aparato real del Estado. La ley ordenaba que “una vez que los procesos (hubieran) fenecido serán archivados en las Oficinas de los Escribanos Públicos”, que eran los archivistas de la sociedad por antonomasia. Lo más significativo para esa época era la obligación de levantar inventarios de los documentos, estableciendo responsabilidad civil y penal de su custodia, y más sorprendente aun, la obligación de hacer accesible esa documentación al uso público, “depositando las colecciones de los periódicos oficiales que han de circulárseles, en sitio”. Derrocado por Manuel I. Belzu fue al exilio en Chile como Ministro Plenipotenciario y de allí a Río de

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Janeiro. A su fallecimiento en esa ciudad, dejó un importante archivo particular del que no se conoce su paradero temiéndose que la mayor parte de sus papeles se hubiese perdido, excepto sus papeles íntimos que fueron enviados a su esposa Mercedes Coll, aunque por razones desconocidas un importante conjunto de papeles quedaron en poder del publicista uruguayo Andrés Lamas, depositado por ello en el Archivo General de la Nación Argentina en Buenos Aires, entre ellos las Memorias del Gral. Ballivián, publicada con los papeles de don Domingo de Oro (Buenos Aires, 1911) y una serie de escritos elaborados por sus asesores entre 1850 y 1851 y cuatro escritos a partir de 1847, atribuido uno a Tomás Frías* y los restantes de autoría del Cnl. Wenceslao Pauneor, Jorge Tezanos Pinto y el propio Ballivián, referidos a los esfuerzos para conseguir un puerto adicional a Cobija o La Mar, los que fueron estudiados por el historiador argentino Juan Isidro Quesada. Fuente: Alarcón, 1925: 370; Bolivia Poder Ejecutivo, 1846; Oporto, 2006: 146; Quesada, 1996: 11; ; http://es.wikipedia.org (9/02/10)

BALLIVIÁN SARACHO, LUIS (Potosí, 1903. † 1980)

Abogado, catedrático y sub decano de la Facultad de Derecho de la UMSA. Representante de las universidades bolivianas en la Fundación Universitaria “Patiño”. Redactor de la Revista Jurídica del Colegio de Abogados de La Paz. Integró el bufete de abogados de Carlos Calvo, al servicio de la minería privada. Fue luego abogado de la Asociación de Mineros Medianos, Banco Minero, Empresa Minera Unificada del Sur, Phillips Brothers y Cía., Chacarilla Mines, Compañía Quimsa Cruz, Empresa Minera Porco, Sonco Ltda., y Estalsa Boliviana. Conservó la colección de documentos producida por el bufete de Carlos Calvo referente a las minas de Hochschild, Aramayo, Standard Oil Co. y la Compañía Estañífera de Caracoles. Se afirma que al haber sido “abogado de familias acaudaladas de La Paz, […] su archivo guarda valiosa información sobre redes de poder social y económico sobre todo en la primera mitad del siglo XX”. También coleccionó partituras musicales. Estas colecciones, y su biblioteca especializada, se encuentran en el Archivo de La Paz*. Es autor de “Algo sobre hipotecas en moneda extranjera”, publicado en la Revista de Hacienda (1939, No. 4). Fuente: Costa de la Torre, 1968: 322-323; Escobari, 1999: 61.

BANCO CENTRAL DE BOLIVIA (BCB) Entidad responsable de la emisión monetaria y la estabilidad macroeconómica del país. Fue creada por recomendación de la Misión Kemmerer el 26 de julio de 1926. Hacia la década de los 80, procedió a contratar consultores historiadores como C. López*, M. Money* y J.C. Fernández*, quienes recogieron, concentraron y organizaron la extensa documentación que se hallaba dispersa en oficinas y depósitos del BCB. Otro gran aporte cultural del BCB es la creación de una Fundación Cultural* (Ley 16 70, 31 de octubre de 1995) para la administración y sostenimiento financiero de los más importantes repositorios culturales de Bolivia, la Casa Nacional de Moneda*, Casa de la Libertad*, Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* y Museo Nacional de Arte. Por esos méritos, el Comité

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Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas*, declaró en 1993, al BCB “como institución impulsora de la Archivística Boliviana” siendo su presidente, el Dr. Fernando Candia. Fuente: Oporto, 1993.

BANDELIER, ADOLPHE FRANCIS ALPHONSE (1842. † 1914) Arqueólogo e historiador suizo-estadounidense. Realizó estudios etnográficos en Ecuador, Perú y Bolivia, incluyendo el lago Titicaca y Tiwanaku entre 1892 y 1903, documentándolos fotográficamente. Su primer viaje lo llevó a Ecuador, Perú y Bolivia en 1892-1893, patrocinado por Henry Villard, Presidente de la Northern Pacific. En esta ocasión trabajó en Perú y Bolivia acompañado por C. F. Lummis*, quien también hizo fotografías. Con el auspicio del Museo Americano de Historia Natural de Nueva York, regresó a Bolivia en 1894, acompañado de su esposa Fanny Ritter Bandelier, su asistente de campo en el viaje de 1892. Un centenar de sus fotografías sobre Bolivia se encuentran en el Museo de Nuevo México en Santa Fe. Algunas fueron publicadas como ilustraciones en su obra sobre las Islas del Titicaca y Koati (1910). En un “aviso a lectores”, el autor reconoce a su “amigo y compatriota, Rudolph Weber”, quien “retocó las defectuosas fotografías de objetos, paisajes y escenas de la vida Indígena”. Fuente: Boletín de la Unión Panamericana, 1914; Buck, 1999.

BÁNZER SUÁREZ, HUGO

(Concepción, Provincia Ñuflo de Chávez, Santa Cruz, 10 de mayo de 1926. † Santa Cruz de la Sierra, 5 de mayo de 2002) General y político. Dictador (1971-1978) y Presidente Constitucional de la República (1997-2001). Se formó en la Escuela de las Américas (Panamá). Fue Ministro de Educación durante el gobierno del Gral. R. Barrientos*. El 21 de agosto de 1971 derrocó al Gobierno del Gral. Juan José Torres e instauró férrea dictadura que conculcó los derechos humanos; contrajo una deuda externa impagable, propició el ingresó del país al circuito del narcotráfico y se generalizó la corrupción en la Administración Pública. Participó en el Plan Cóndor, red de inteligencia anticomunista implementado por las dictaduras de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay, Chile y Bolivia. Fue derrocado por su protegido, el Gral. Juan Pereda Asbún. Formó su propia organización política, Acción Democrática Nacionalista, para contrarrestar el Juicio de Responsabilidades que le instauró el Congreso, en 1979. Apoyó el golpe de Estado del Gral. L. García Meza* Tejada*, para detener el juicio en su contra. Ganó las elecciones de 1997. En su segundo periodo impulsó la erradicación de las plantaciones de coca excedentaria, con apoyo de EE.UU. En abril y septiembre de 2000, soportó una oleada de protestas sociales que derivaron en la llamada Guerra del Agua en Cochabamba, y el bloqueo de carreteras en el altiplano. Dimitió a su cargo por motivos de salud en 2001, dejando el cargo al vicepresidente J. Quiroga*. Durante su primer gobierno, promulgó, decreto ley mediante, los Códigos Civil, Penal y de Comercio, determinantes en el trabajo archivístico. Dictó los DS 13956 y 13957 de 10 de Septiembre de 1976, redactados por G. Mendoza*, que

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declaran de utilidad nacional al Programa de Desarrollo de Archivos y Documentos Públicos*, prohibiendo la destrucción de documentos públicos, determina las clases documentales y las fases del ciclo vital de los documentos en los archivos estatales. En su segundo Gobierno, aprobó el DS 25046 de 21 de mayo de 1998, que crea el Repositorio Intermedio del Poder Ejecutivo, destinado a recoger y evaluar las documentaciones de los Ministerios de Estado, que en los hechos nunca entró en funcionamiento. Fuente: http://es.wikipedia.org (13.2.2012).

BAPTISTA GUMUCIO, MARIANO

(Cochabamba, 11 de diciembre de 1933) Estudió en los Colegios “San Calixto” y “Bolívar” de La Paz; Derecho en la Universidad San Francisco Xavier (Sucre) y San Andrés (La Paz), e Instituciones y Literatura Inglesa, en el City London College (Londres). La política lo cautivó muy joven, lo que le impidió titularse de abogado, pero en compensación pudo conocer de cerca las vicisitudes del poder político y sobre todo le dotó de verdadera pasión para impulsar el cambio en la educación y la cultura del país. Intelectual multifacético, destacó como escritor y periodista, ministro de Estado y diplomático, en una larga y productiva trayectoria. En sus años mozos fue Secretario Privado del Presidente de la República, Dr. V. Paz* (1953-1956) y Ministro Consejero de las Embajadas de Bolivia en la Santa Sede e Inglaterra (1957-1959). Ya más experimentado, fue candidato a Vicepresidente por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) en las elecciones de 1966; Ministro de Educación y Cultura (gobiernos de A. Ovando Candia*, W. Guevara* y J. Paz*), Embajador de Bolivia en Estados Unidos de Norteamérica (1982-1985) y Cónsul General de Bolivia en Chile (1998-2000). También tuvo destacada participación como Presidente de la Comisión Boliviana de Cooperación con la UNESCO y Presidente de la Reunión de Ministros del Convenio “Andrés Bello” (Madrid, 1990). En el ámbito cultural fue Presidente de la Comisión de Cultura del H. Consejo Municipal de La Paz (1988-1989), Presidente de la Academia Boliviana de la Historia (1997-1998) y de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia* (2010). Como periodista fue director de Última Hora durante catorce años donde fundó la revista Semana, la primera en ilustrar su primera plana con desnudos por lo que el común la denominó como (la revista) “Play Boy de los pobres”. Creó la Biblioteca Popular Boliviana, que editó 50 volúmenes de autores bolivianos. Desde 1989 dirigió la Revista Domingo en el periódico Hoy. Fue Gerente General de Canal 7, Televisión Boliviana. Sus programas “Voces de Libertad” e “Identidad y Magia de Bolivia”, para la Televisión fueron galardonados. Ha visitado Japón, India, Egipto, Medio Oriente, Europa, la ex Unión Soviética, China, Sud África y los Estados Unidos de América. En su gestión como Ministro de Educación y Cultura en 1970, desarrolló un programa integral de alfabetización; creó el Banco del Libro (luego Dirección Nacional de Bibliotecas antes de su extinción el 2011), el Instituto Nacional de Etnomusicología y Folklore, la Revista Nacional de Cultura (editó tres volúmenes en forma de libro); y convocó al Primer Congreso Pedagógico Nacional (al que asistió como invitado Iván Illich). Conjuntamente con el Dr. Octavio Arizmendi Posada tuvo el mérito de ser redactor y firmante del

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Convenio “Andrés Bello” de Integración Educativa, Cultural y Científica, entre los países del Área Andina. Su tesis, “Una escuela para la vida” plantea, entre otras innovaciones, un bachillerato de ocho años, fue aprobada por la Conferencia sobre “La Crisis Mundial de la Educación”, que contó con la presencia de Paulo Freire, Pablo de Tarso, Mohamed Colmes Chalmen (Ministro de Educación de Egipto) y Charles Hurst (Rector de la Universidad Malcolm X de Chicago), reunida a iniciativa del Consejo Mundial de Iglesias en Bergen (Holanda), que se caracterizó “por sus soluciones prácticas a los problemas educativos del Tercer Mundo”. Invitado por la Organización de Naciones Unidas asistió a las conferencias sobre el Medio Humano (Estocolmo, 1972), Población (Bucarest, 1974) y Educación (Tailandia, 1990). Ha participado también en diversos seminarios y conferencias en Costa Rica, México y Santiago de Chile. Su labor ha sido ampliamente reconocida dentro y fuera del país, habiendo recibido las condecoraciones y premios, Orden del Sol (Perú, 1955), “Andrés Bello” (Venezuela, 1970), “San Carlos” (Colombia, 1970), Medalla Pahlevi, por el Programa de Alfabetización de Bolivia (UNESCO, 1976); los premios Educación Andrés Bello (Organización de Estados Americanos, 1990); “Illimani de Oro” por el Programa de TV “Voces en Libertad” (2003); Marriott Internacional, por el Programa “Identidad y Magia de Bolivia” (2003); Nacional de Ensayo con el libro Los días que vendrán (Alcaldía Municipal de Cochabamba, 1967); Gran Premio “Franz Tamayo” por su obra Otra historia de Bolivia (Alcaldía Municipal de La Paz, 1977); Nacional de Cultura (1993), Premio Nacional a la Gestión Cultural “Gunnar Mendoza” (2004), Bandera de Oro del H. Senado Nacional (2006), Premio Nacional de Periodismo (2011). Tiene 62 libros y folletos publicados, además de las traducciones de Economía Boliviana, 19521965 de Cornelius Zondag (1968) y El Mariscal Sucre en Bolivia de William L. Lofstrom (1973, 1987). Es conocido en el mundo intelectual y político como “Mago”. En su faceta archivística, Baptista afirma que fue nombrado Subdirector de la Biblioteca y Archivo Nacionales de Bolivia* en 1952, por decisión del gobierno del Movimiento Nacionalista Revolucionario. Tenía en esa oportunidad 19 años y fue testigo del estudio que hizo G. Mendoza* del Diario del Tambor Mayor José Santos Vargas*, que publicó en 1952, hecho que provocó un irrefrenable arrebato de alegría en el “Maestro de la Archivística Boliviana”, según su testimonio. Donó al Archivo de La Paz, 3000 fotografías antiguas de la ciudad y logró que la familia Mercado cediera la Hemeroteca del periódico “Ultima Hora” a este repositorio (120 vol. empastados). Asimismo obsequió su biblioteca personal (5.000 vol.) a la Asociación Nacional de la Prensa en La Paz y a las bibliotecas de Punata y Camargo. En mayo de 2012, organizó el Museo de Escritores de Bolivia, con una sección exclusiva dedicada a Franz Tamayo, en la que despliega amplia información iconográfica, fotográfica, bibliográfica y documental, entre ellos un curioso ejemplar de una Guía del Viajero a Bolivia, impresa en 1826. Fuente: CV; Oporto y Quintana, 2004: 120-122.

BAPTISTA MORALES, JAVIER (Cochabamba, 1934. † 2008) Estudió en el colegio “La Salle” (1941-1950) y en el Sagrado Corazón de Sucre (1951). Hizo el noviciado en la Compañía de Jesús de Cochabamba. Sacerdote jesuita (1966).

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Estudió Humanidades en Raymat, Lérida (1955-1958), Filosofía en Vals Le Puy (Alto Loira), Francia (1959-1961) y Teología en México. Hizo estudios bíblicos en Jerusalén (1968) y Roma (1969). Tradujo la Biblia y el Ritual al quechua (1973-1984). Fue profesor de Historia en el colegio Sagrado Corazón y de Historia de la Iglesia en el Instituto Superior de Estudios Teológicos de Cochabamba (1991-2002). Ejerció en las parroquias de Santivañez, Tiraque, Morochata, Itapaya y de la parroquia de la Compañía de Jesús de Cochabamba (1995-2002); capellán del Hogar de Ancianos del Buen Pastor. Aficionado a la historia, fue miembro del Instituto Histórico de la Compañía de Jesús en Roma (1986, 1988, 1990), socio fundador de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica (1995). Fue director del Archivo Histórico de la Compañía de Jesús. Obra: Historia de los misioneros oblatos de Bolivia (Cochabamba, 2001). Fuente: Rocha, 2010: 27.

BARBÁCHANO, PEDRO JOSÉ (España)

Conservador y restaurador de libros y documentos de archivo. Enviado por la UNESCO en 1978, impartió el primer Curso de Conservación y Restauración de Documentos de Archivo y Biblioteca en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, en el que se formaron los primeros conservadores de archivos, de los que únicamente L. Gardeazábal* continuó formándose en esta especialidad. Participó con J. Cortés* y F. Cajías* en el diagnóstico y salvataje del Archivo Histórico de la Casa Suárez Hnos.* que se encontraba en Cachuela Esperanza. Trasladaron los documentos hasta Guayaramerín y lo entregaron en custodia al Palacio de la Cultura y de Hombres Notables del Beni, donde permanecieron hasta diciembre de 2006, cuando un equipo de estudiantes de la Carrera de Historia* de la UMSA dirigido por M. P. Gamarra* y L. Oporto*, logró instalarlo en el edificio del Archivo Histórico de la Casa Suárez (construido por el Arq. A. Añez Gómez*), como parte de un proyecto financiado por la Prefectura del Beni, la UMSA y la Universidad Autónoma “José Ballivián” del Beni, para ponerlo al servicio público luego de su tratamiento archivístico.

BARBOSA, O. (Chileno)

Comandante de la fuerza expedicionaria chilena que tomó Islay y Mollendo, el 9 de mayo de 1880, oportunidad en la que informó que “una vez en posesión de la ciudad se organizó el servicio de guardias, avanzadas, patrullas i se tomaron las demás medidas de seguridad para la población, se visitaron todos los establecimientos públicos, recogiendo los archivos, i útiles de telégrafos y se recorrieron los edificios del ferrocarril i sus dependencias”. Los archivos de Antofagasta pasaron a poder del gobernador Luis García Reyes quien los derivó al Ministerio del Interior de Chile, a tiempo de emplearlos para fines oficiales, como se puede ver en su informe: “Bolivia dio en arriendo el Ferrocarril Mejillones-Caracoles el 29 de agosto de 1878, como consta en los archivos de la Prefectura boliviana que existe en esta gobernación”. Fuente: Oporto, 2006: 150

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BARNADAS, JOSEP MARÍA

(Alella, Cataluña, España, 12 de enero de 1941) Llegó a Bolivia como sacerdote, pero renunció a los hábitos para formar familia, aunque nunca dejó sus vínculos con la Iglesia. Doctor en Historia. Apasionado por el pasado histórico de Bolivia, estudió la administración de Charcas en la época colonial con el que obtuvo el doctorado en Historia en la Universidad de Sevilla (1971). Dirigió la Revista Historia Boliviana. Estudió la situación de los archivos eclesiásticos expuesta en su Varia de Archivos Eclesiásticos. Dirigió el monumental Diccionario Histórico de Bolivia que contó con la participación de más de 350 investigadores de Bolivia y el mundo. Luego de breve receso volvió a la palestra intelectual con sus polémicos ataques de ira no contenida contra el indianismo y en general contra el gobierno del presidente Evo Morales*, que por un lado coincide con sus aversiones declaradas hacia el “mesianismo, socialismo real, estatismo”, pero contradictorio con su lucha “por la cultura (por) los caminos por lo que el ser humano pueda reconocerse en su prójimo, (y el) respeto a la diferencia”. Fue Sub Director (1993) y Director (1994) del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, venciendo la resistencia de cierta élite (a la que denominó con ironía “los siete sabios”) que había nominado como director, a la muerte de G. Mendoza*, a H. Poppe*, siendo que aquél había expresado con claridad que debía sucederlo Barnadas. Luego de corto ejercicio de la dirección del ABNB fue alejado de este cargo. Fundó y fue Director del Archivo y Biblioteca Arquidiocesanos “Monseñor Taborga”, fundador y Presidente de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica, ambos en 1995, donde llegó a publicar un Anuario. Su vocación de documentalista nato lo llevó a traducir el manuscrito del Padre Francisco Eder, crónica fundamental para comprender la historia colonial de Mojos. Hizo las gestiones para repatriar el Archivo del Mariscal Otto P. Braun* (que se conserva en el ABNB), superando la indiferencia del gobierno de esa época. Apoyó a L. Calzavarini* en la catalogación de la Biblioteca y Archivo Franciscano en Tarija. Se erige como un ejemplo imitable, pues practica lo que predica, con valentía, así sea su postura equivocada. I. Publicaciones archivísticas

1. “Varia de archivos eclesiásticos”, en: Arze Aguirre, René: Fuentes para la historia de la Iglesia en Bolivia. La Paz, CEHILA/CEPROLAI, 1985. 2. El Mariscal Braun a través de su epistolario (Antología). Selección, introducción y anotación, con Guillermo Calvo. La Paz, Los Amigos del Libro, 1998. 3. Diccionario Histórico de Bolivia (Sucre, Grupo de Estudios Históricos, 2002. 2 tomos). Redactó varias entradas sobre archivística (archivos, archivistas): “Archivos Sucre”: 161162; “Archivos de Chuquisaca”: 166-167; “Archivos extranjeros de interés boliviano”: 173-176; “Centro Bibliográfico Documental Histórico de la Universidad de San Francisco Xavier”: 488-489. 4. Archivo-Biblioteca Arquiodiocesanos “Monseñor Taborga” (Sucre): guía general preliminar, con Guillermo Calvo Madrid, Fundación Mapfre, 2006.

II. Historiográfica

1. La iglesia católica en Bolivia. La Paz, Juventud, 1966. 2. Charcas: orígenes históricos de una sociedad colonial: [1535-1565]. La Paz, Centro de Investigación y Promoción del Campesinado, 1973.

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3. Los Aymaras dentro de la sociedad boliviana. La Paz, Centro de Investigación y Promoción del Campesinado, 1976. 4. El conato revolucionario de 1805: el expediente referente al proceso seguido a Aguilar, Ubalde y otros, con Carlos Ponce Sanginés y Gregorio Loza Balsa. La Paz, Municipalidad de La Paz, 1976. 5. Panorama historiográfico de estudios recientes sobre Charcas colonial. s.d., 1983. 6. Es muy sencillo, llámenle Charcas: sobre el problema de los antecedentes coloniales de Bolivia y de su histórica denominación. La Paz, Librería Editorial “Juventud”, 1989. 7. Invitación al estudio de las letras de Charcas. Cochabamba, Historia Boliviana, 1990. 8. El Seminario Conciliar de San Cristóbal de La Plata, Sucre (1595-1995): aportación a su historia en el IV centenario de su fundación. Sucre, Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos Monseñor Taborga, 1995. 9. La crónica oficial de las indias occidentales y la historia eclesiástica. Sucre, Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos “Monseñor Taborga”, 1996. 10. Descripción del Perú (1551-1553) de Pedro de la Gasca Cuzco, Perú, Centro de Estudios Regionales Andinos Bartolomé de las Casas, 1998. 11. Mojos, seis relaciones jesuíticas: geografía, etnografía, evangelización, 1670-1763. Cochabamba, s.e., 2005.

III. Autobiográfica y Biográfica

1. Autos y Actos de fe. Cochabamba, Historia Boliviana, 1983. 2. Álvaro Alonso Barba, 1569-1662: investigaciones sobre su vida y obra. La Paz, Biblioteca Minera Boliviana, [1986]. 3. Gabriel René Moreno (1836-1908): drama y gloria de un boliviano. La Paz, Ediciones Altiplano, 1988. 4. El poeta Diego Dávalos y Figueroa y su contexto colonial en Charcas: aporte documental, con Beatriz Loza. Sucre, Historia Boliviana, 1995. 5. Carlos Felipe Beltrán (1816-1898): un paŕroco boliviano amigo de los indios. Oruro, CEDIPAS, 1998. 6. El Cardenal Maurer de Bolivia: 1900-1990; breve biografía en el centenario de su nacimiento. Sucre, Judicial, 2000. 7. Los árboles y los bosques: testimonio de una disidencia. Sucre, Universidad Andina Simón Bolívar, 2001. 8. El presbítero y cronista Pedro Ramírez del Águila: aporte a su biografía y a su obra, 1596-1640. Sucre, Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos “Monseñor Taborga”, 2003. 9. Una vida entrevista. Cochabamba, Verbo divino, 2005.

IV. Bibliográfica y Metodológica

1. El trabajo científico y su método. La Paz, Juventud, 1977. 2. Introducción a los estudios bolivianos contemporáneos, 1960-1984: manual de bibliografía. Cusco, Centro de Estudios Bartolomé de las Casas, 1987. 3. El Libro, espejo de la cultura: estudios sobre la cultura del libro en Bolivia: dedicados a Werner Guttentag en su septuagésimo aniversario. Con Werner Guttentag Tichauer. Cochabamba, Los Amigos del Libro, 1990. 4. Ensayo bibliográfico sobre el latín en Bolivia: (EBLB) (siglos XVI - XXI). La Paz, Plural Editores, 2005. 5. Bibliotheca boliviana antiqua. Impresos coloniales, 1534-1825. Sucre, Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia, Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, Centro de Estudios Avanzados, 2008. T. I: 1534-1750, T. II: 1751-1825.

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V. Literaria

1. Del barroco literario en Charcas: doce cartas de Alonso Ortiz de Abreu a su esposa, o, las trampas del amor y del honor, 1633-1648. Sucre, Historia Boliviana, 2000.

2. Realidad sociohistórica y expresión literaria en Bolivia: esquemas metodológicos de aproximación a la narrativa boliviana: introducción y bibliografía, con Juan José Coy. Cochabamba: Los Amigos del Libro, 1977: Jesús Lara: Yanakuna; Jesús Lara: Ñancahuazu; Jesús Lara: Surumi; Adela Zamudio: Cuentos breves; Juan Coimbra: Siringa; Armando Chirveches: La candidatura de Rojas; Jaime Mendoza: En las tierras del Potosí; Augusto Céspedes: Metal del diablo; Adolfo Costa du Rels: La Laguna H.3; Nataniel Aquirre: Juan de la Rosa; Raúl Bótelo Gosálvez: Coca; Raúl Bótelo Gosálvez: Altiplano; Carlos Medinaceli: La chaskañawi; Alcides Arguedas: Raza de bronce; Arturo von Vacano, Sombra de exilio. Fuente: Barnadas, 1983; Barnadas, 2005.

BARRA RADA, JAVIER DAVID DE LA (La Paz, 23 de octubre de 1967)

Estudió Derecho en la Facultad de Ciencias Jurídicas, UMSA (1994). Fue custodio de los expedientes agrarios del Archivo Central del Consejo Nacional de Reforma Agraria (1996), intervenida debido al caso BOLIBRAS (adjudicación ilegal de tierras durante el gobierno de J. Paz*), a cuya consecuencia se creó el Instituto Nacional de Reforma Agraria, en la que se desempeñó como Asistente del Archivo Central y Kárdex agrarios, Asistente de Base de Datos y digitalizador de fallos agrarios en el proceso de desconcentración de expedientes a las Direcciones Departamentales. Trabajó como Asistente Técnico Jurídico y Encargado del Cálculo de Tasas de Saneamiento y Organización del Archivo de la Unidad de Tierras Comunitarias de Origen TCOs en la Dirección Nacional. Posteriormente ingresó como Técnico de Archivo al Ministerio de Hacienda, en la etapa de consolidación de la Memoria Institucional (Archivo Central, Biblioteca, Procesos Técnicos, Presupuestos Nacionales y Hemeroteca); participó en el proyecto de Hemeroteca Digital de artículos Económicos y Financieros, dirigido por H. Ramos*. Como resultado de su experiencia decide postular al Curso virtual de Técnico en Archivo de la Carrera de Bibliotecología, que lo habilita para proseguir la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA). Colaboró en la elaboración de manuales para Adjudicación de tierras y Procesos de reversión. Autor del artículo “Arquitectos Italianos en Bolivia”, que forma parte del estudio “Ribetes de la construcción del edificio del Ministerio de Hacienda”, recopilación periodística del Arq. Jorge Traverso, publicado en el Boletín Institucional del Ministerio de Hacienda Entre Nosotros Nº2 (2008). Fuente: CV.

BARRAGÁN ROMANO, ROSSANA IBETTE (Oruro, 8 de noviembre de 1957)

Estudió Arqueología en París, Francia, con una maestría en la Universidad de La Sorbona (1979) y un doctorado en Historia Social en la Ecole des Hautes Etudes en Sciences Sociales, con su tesis El Estado pactante. Gobierno y pueblos: la construcción del Estado en Bolivia y sus fronteras (París, 2003). Hizo el curso de Descripción ISAD-G, auspiciado por la AECID (España) en el Centro de Formación de Santa Cruz

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de la Sierra (2007) y el de Fuentes de información, conocimiento y gestión, en la Fundación Ciencias de la Documentación de España (2008). Siguió la línea trazada por J.V. Murra con investigaciones etnohistóricas. Fue investigadora en el Museo Nacional de Etnografía y Folklore* y fundadora de la organización Antropólogos del Sur, con Ramiro Molina Rivero (su esposo), Ramiro Molina Barrios, Verónica Cereceda, Gabriel Martínez y otros. Docente de la UMSA desde 1983. Formó parte de la Coordinadora de Historia, desde la que impulsó una corriente del pensamiento historiográfico con fuerte vínculo en la Escuela de los Annales. También enseñó en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Bolivia), UMSS (1994) y en los programas de postgrado de la UMSA (desde 1996). A partir de 1993 participó en congresos en Escocia, India, Estados Unidos, México, Perú, Argentina, Brasil, España, Ecuador y Colombia. Ocupó varios cargos académicos en la UMSA así como en el PIEB, siendo editora de la revista T’inkazos. Actualmente es docente de la Carrera de Historia* y docente investigadora del postgrado del CIDES-UMSA. Ha escrito y publicado alrededor de 8 libros sobre diversos aspectos de la historia boliviana; es coautora de más de 6 libros y compiladora de otros tantos. Sus numerosos artículos se hallan dispersos en revistas como Historia Boliviana (1983), Caravelle (1984), Anales de la Reunión Anual de Etnología (1987), Chungará (1985), Estado y Sociedad. Revista Boliviana de Ciencias Sociales (1991), Autodeterminación (1992), Revista Andina (1992, 1993), Escarmenar 2 (1996), ILCA Research Series (1997), Weekly. Economic and political. A Sameeksha Trust Publication (1997), Umbrales (2000), Barataria (2005), América Latina Hoy (2006), Latin American Anthropology (2008), Ciencias sociales (2009), Secuencia. Revista de Historia y Ciencias Sociales (2009). Ofreció conferencias en universidades y centros científicos de Alemania, Estados Unidos, Perú y España, desde 1994. Publica, con frecuencia, en periódicos como La Prensa y La Razón de La Paz. Incursionó en la archivística como investigadora en el proyecto para elaborar una guía sobre fondos documentales etnográficos de interés para el conocimiento de los grupos indígenas americanos (capítulo sobre Bolivia), financiado por la Fundación MAPFRE (Madrid, España) entre 1992-1993. Fue docente-investigadora en el Archivo de La Paz* (1993-1994) y posteriormente su Directora por dos gestiones (2005-2011). Allí publicó el Boletín del Archivo de La Paz y DesArchivando. Ha impulsado una campaña, infructuosa, para lograr la atención de las autoridades de la UMSA, locales y prefecturales, para atender apremiantes necesidades de infraestructura para el Archivo de La Paz. Durante su gestión impulsó el crecimiento de la Biblioteca especializada, desde 5.000 a 12.000 ejemplares; y ha motivado a varios intelectuales a donar sus bibliotecas y archivos. Rescató 130.000 fotografías que estaban a punto de perderse y que resultaron ser del periódico Última Hora, razón por la que gestionó con la familia Mercado, la recuperación y donación de esta colección hemerográfica completa. Bajo su dirección se elaboraron más de 60 instrumentos descriptivos aplicando las normas ISAD-G, con el apoyo de decenas de estudiantes de la Carrera de Historia, que trabajan en calidad de pasantes ad honorem, con los que además logró digitalizar los diversos fondos, con el apoyo económico de la Universidad de Harvard (EE.UU.) y del British Library (Reino Unido). Fue una de las impulsoras, desde La Paz, del Proyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos. Ha impartido el módulo de Gestión de la Documentación en el Curso-Seminario organizado por el Viceministerio de Desarrollo de Culturas y el de Descripción Archivística ISAD-G en el Diplomado de Archivos en la Universidad de Nuestra Señora de La Paz (2008).

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Ha sido coordinadora y editora de la página “Desarchivando” del Archivo de La Paz en el periódico en La Prensa, 2007 (más de 30 artículos publicados); elaboró una Guía del Archivo de La Paz (Archivo de La Paz. 2008); fue coordinadora y editora de la página Memorias del Archivo de La Paz en La Razón (2009) con más de 10 artículos publicados. El Consejo Académico Universitario de la UMSA le otorgó la Condecoración y Diploma de Reconocimiento a la Producción Intelectual (2009). El 2011 renunció a la dirección del Archivo de La Paz y pidió licencia a la UMSA para trabajar en un país europeo. Publicaciones archivísticas: Guía de Archivos para la historia de los pueblos indígenas de Bolivia, en coautoría con Silvia Arze, Ximena Medinaceli y Seemin Qayum (La Paz, CID-SAEGG); “El Archivo de La Paz: una experiencia de formación entre la historia, la archivística y la investigación” (Boletín del Archivo de La Paz, 2007, 23-24: 43-48); “Los desafíos del Archivo de La Paz: ente múltiples encrucijadas” (Boletín del Archivo de La Paz, 2007, 23-24:133-144); “La Ley del Sistema Nacional de Archivos Gunnar Mendoza Loza” (DesArchivando, 2007, 2); “La digitalización y microfilmación de Padrones del Archivo de La Paz: un proyecto de conservación, formación y devolución de la información a las comunidades del Departamento de La Paz” (DesArchivando, 2007, 3); “El proyecto de digitalización y microfilmación: Padrones del siglo XIX”, con César Lunasco y Lourdes Uchanier (Boletín del Archivo de La Paz, 2008, 25: 99-110); “Más de 50 Inventarios y catálogos del Archivo y de la Biblioteca del Archivo de La Paz” (DesArchivando, 2008, 4); “Lista General de Instrumentos Descriptivos del Archivo de La Paz impresos el 2008” (DesArchivando, 2008, 5); “La historia presente del país corre riesgo de desaparecer” (La Razón-Tendencias, La Paz, 9 de agosto de 2009: C4); “Archivo de La Paz, 3.000 metros lineales de historia” (La Razón-Tendencias, La Paz, 8 de noviembre de 2009: C8); “Catalogan y resguardan el archivo judicial de Sica Sica”, con Roger Mamani (La RazónTendencias, La Paz, 13 de diciembre de 2009: C10); “El 4º Centenario y el Archivo de La Paz” (La Razón-Tendencias, La Paz, 12 de diciembre de 2010: C10); “40 años guardando la memoria de La Paz” (La Razón-Tendencias, La Paz, 9 de enero de 2011: C3); “La historia del país en imágenes” (La Razón-Tendencias, La Paz, 23 de enero de 2011: C3); “Fotografías para la historia” (La Razón-Tendencias, La Paz, 4 de septiembre de 2011: C11). Fuente: CV.

BARRIENTOS ORTUÑO, RENÉ

(Tarata, Cochabamba, 30 de mayo de 1919. † Arque, Cochabamba, 27 de abril de 1969) General de la Fuerza Aérea Boliviana. Trajo al Dr. V. Paz* desde Buenos Aires, luego del triunfo de la Revolución del 9 de abril de 1952. Lo acompañó como Vicepresidente en su tercera presidencia (1964). Protagonizó el golpe de Estado del 4 de noviembre de 1964, mandando al exilio a su antiguo jefe. Luego de formar la Junta Militar con el Gral. A. Ovando Candia* (1964-1965), convocó a elecciones y las ganó con facilidad. Fue un militar de confianza de Estados Unidos, razón por la que, cuando la guerrilla del comandante E. ‘Che’ Guevara* apareció en escena en marzo de 1967, Barrientos la combatió con ayuda de la CIA. El 23 de junio de ese año, ordenó la toma del campamento minero de siglo XX, provocando una sangrienta incursión que pasó a la historia como “la Masacre de San Juan”. Ordenó el asesinato del comandante ‘Che’ Guevara el 9 de octubre, luego de que cayera herido en combate y preso, después que se requisara su morral con su Diario de campaña, que fue microfilmado por el agente de la CIA, F. Rodríguez*. Durante la toma del campamento guerrillero en Ñancahuazú, se encontró el archivo y una biblioteca de campaña de la guerrilla.

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Barrientos dictó el decreto 8165, el 6 de diciembre de 1967, declarando a toda la documentación generada durante las guerrillas de Ñancahuazú como propiedad del Ejército de Bolivia, siendo sometida a reserva. Sin embargo, el archivo fue considerado como botín de guerra, siendo saqueadas sus piezas más valiosas. El Ministro del Interior, A. Arguedas* sustrajo copia microfilmada del Diario del ‘Che’ y la hizo llegar a Cuba; el Gral. Federico Arana sustrajo 15 fotografías de la guerrilla y cerró trato con editorial Planeta para su publicación; el Gral. Jaime Niño de Guzmán fue denunciado por haber entregado copias del archivo del Estado Mayor y “el diario verde rosa a los hermanos Freltinelli; el Gral. Luis Reque Terán, luego de un escándalo, tuvo que devolver una pieza fotográfica al Archivo del Estado Mayor”, afirmando que él iría a decidir “qué hará con las memorias de los ex guerrilleros El Camba y Castillo”. Barrientos falleció trágicamente cuando el helicóptero que lo transportaba cayó envuelto en llamas en la población de Arque. Fuente: Orellana, 2011: 158.

BARRÓN DÍAZ, JORGE Fundador del grupo Videoteca Barbarroja, institución sin fines de lucro, constituida el 24 de marzo de 2000 en la ciudad de La Paz. Empezó su labor “con muchas ideas y pocos recursos, con un reproductor y algunos videos, los primeros donados por J. Sanjinés*, Santiago Feliú y Beatriz Palacios”, con los que organizaron su primer ciclo de Clásicos del Cine Cubano¸ en Sucre. Durante muchos años trabajaron a la manera de un “cine rodante”, visitando ciudades capitales, centros mineros, comunidades indígenas, barrios populares, escuelas, llevando la imagen en movimiento y un mensaje social, realizando además de sus tareas técnicas, una labor política (en el sentido exacto de la palabra), gracias a lo cual su amplia y extendida audiencia conoció a los más influyentes directores de cine social, entre ellos el consagrado Miguel Littín de Chile, Gutiérrez y Leduc de Cuba, Babenco de Brasil, Pino Solanas de Argentina y nuestro Sanjinés, por cierto. La videoteca Barbarroja representa al país en festivales internacionales de Nuevo Cine (La Habana) y el de Santa Cruz, haciendo conocer, gracias a su monumental acervo, la realidad boliviana en particular y latinoamericana en general. Su Archivo tiene más de 1000 títulos digitalizados de filmes, afiches originales y fichas técnicas, con los que organiza eventos cinematográficos en los nueve departamentos de Bolivia. Fuente: Barrón, 2012: 15; http://cineypunto.blogspot.com (29.3.12)

BASTOS CARRASCO, JUAN

(Siglo XX, Provincia Bustillo, Potosí, 23 de octubre de 1945) Fotógrafo minero, coleccionista de muestras minerales y numismática. Su padre trabajó en la sección Beza de interior mina y su madre se dedicaba a labores del hogar. Una circunstancia casual lo llevó al campo de la fotografía, inscribiéndose en la Escuela de Fotografía de Abdón Kapurata. Ingresó al mágico mundo de la memoria gráfica cubriendo motivos familiares, festivos, religiosos y sindicales. Compartía su trabajo en interior mina con su Estudio Fotográfico “Daguerre”, en el campamento minero. Recuerda a sus colegas, entre ellos a S. Flores*, Onofre

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Sánchez, “El Chino” Mamani, un tal Martín, Juan Aguilar y Juan Méndez. Su excelencia en el manejo de la cámara le valió el aprecio del sindicato minero que lo invitó como delegado al Congreso Minero de Corocoro. Fue apresado el 12 de julio de 1976, allanada y saqueada su casa, se llevaron sus equipos, requisaron su archivo, en el que tenía retratos de dirigentes mineros que asistieron al Congreso de Corocoro. Pasó dos interminables meses incomunicado y torturado en celdas policiales. Resentido con el sindicato y sus compañeros, renunció a su puesto en la mina y abandonó el campamento para instalarse como exitoso fotógrafo en la población aledaña de Llallagua. Logró atesorar un Archivo minero muy completo. Dejó la fotografía después de la muerte de su esposa y se dedicó a atender su local Artesanías “Bastos”, donde exponía junto a sus souvenirs, muestras mineralógicas, numismática y su invaluable archivo fotográfico. Paralelamente instaló la librería “El Sol”, con una agencia central y un quiosco ubicado en la plaza 10 de noviembre. Propuso a la Alcaldía entregar su colección fotográfica íntegra a cambio de dos años de alquiler, propuesta que no fue aceptada. Afirma que en otra oportunidad, la Universidad Nacional Siglo XX quiso incautar su colección fotográfica, viéndose en la necesidad de cerrar su centro de exposición. El 15 de agosto de 1990 alquiló un pequeño local frente a la Policía, al que bautizó con el sugerente denominativo de “Singapur” (apócope de “singani puro”), que expendía té-con-té, convirtiéndose en alternativa de una gama de noctámbulos, conformada por intelectuales, catedráticos, universitarios, artistas y políticos, que departían en prolongadas tertulias hasta que el alba los sorprendía. Los habitúes del “Singapur” lo consideraban un punto natural de confluencia, por lo que lo rebautizaron con su denominación actual “El Tinkuy” (vocablo quechua que significa “Encuentro”), donde expone la 120 fotografías que cubren 80 años de historia minera, que reflejan gráficamente el desarrollo de Siglo XX, Catavi y Llallagua, que han grativado de manera inobjetable en la historia social de Bolivia del siglo pasado. Forma parte del archivo de 600 fotografías (la mayor conocida sobre estas poblaciones), que atrapa la curiosa morfología urbanística de esos centros urbano-industriales y la abigarrada estratificación social, de actores sociales antagónicos (jerarcas de la Patiño Mines, gerentes de la Empresa Minera Catavi, dirigentes, obreros, amas de casa, estudiantes), que se desenvuelven en un contexto revolucionario por antonomasia. Recientemente empezó a publicar una colección de fotopostales a color, con imágenes del histórico monumento al Minero Desconocido, el Sindicato de Trabajadores Mineros de Siglo XX, la virgen de la Asunción con su atuendo indígena, los campamentos de Siglo XX y Cancañiri, el ingreso a la Bocamina, la plaza 10 de noviembre de Llallagua, perforistas mineros en interior mina y una asamblea de trabajadores en la plaza del minero. Su otra obsesión es el fútbol, razón por la que sostiene con su propio peculio una Escuela de Fútbol en Llallagua. Fuente: Oporto, 2002: 22.

BASS WERNER DE RUIZ, ZULEMA

(Tarija, 1922. † Tarija, 16 de noviembre de 2010) Poeta y narradora. Profesora de Educación Física. Trabajó como locutora de informativos en Radio ‘Guadalquivir’ de Tarija. Corresponsal de ‘El Diario’ de La Paz. En 1993 participó del Encuentro de Mujeres Latinoamericanas realizado en San

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José de Costa Rica. Escritora tarijeña que impulsó entre 1987 y 1988, la compilación del Corpus documental para la Historia de Tarija, que contó con la participación de la historiadora argentina C. Minutolo de Orsi* y los estadounidenses E.D. Langer* y C. Julien*. La obra fue impresa en seis volúmenes, contando para ello con el apoyo del presidente de la República, V. Paz Estenssoro* y los prefectos de Tarija, J.V.Robertson* y J. Vaca Garzón*. En marzo de 1993 denunció la incineración de la “casi totalidad de documentos del siglo XIX” del Archivo Judicial de la Corte Distrital de Justicia de Tarija, denuncia que coincidía con la apreciación del investigador E. D. Langer “quien no pudo acceder a los documentos que precisaba porque habían sido sacados en camiones para ser quemados”. Fuente: Presencia, 1993: 3.

BAUTISTA LAGASCA, JUAN Escribano del Rey Católico, que tuvo a su cargo el registro de los primeros actos de la fundación y confirmación de la Fundación de la Villa de San Felipe de Austria de Oruro. Fuente: Blanco, 1904: 29.

BAZOBERRY GARCÍA, LUIS (Cochabamba, 1902. † 1964)

Fue fotógrafo de profesión y cineasta. Tenía su estudio, “La Foto de Bazoberry”, en la Calle Yanacocha 95 (La Paz) en la década de 1920 y otro en Cochabamba en calle Argentina en la década de 1920 y 1930. Durante la Guerra del Chaco (19321935) se incorporó al Ejército y se desempeñó como aerofotogrametrista, lo que le permitió desplazarse por el frente de guerra, fotografiando y filmando los hechos. Con el conjunto de tomas logró armar la película Infierno Verde, conocida como La Guerra del Chaco, que “por tratarse de uno de los dos documentales de la campaña, es de un valor inestimable, aunque cinematográficamente no sea excepcional”, afirma el historiador C. D. Mesa Gisbert*, quien describe: “en el filme se ven relativamente pocas escenas de batalla y su aporte más importante se dedica a los días posteriores a la contienda y a la firma de la Paz en Buenos Aires”. Armando Montenegro afirma que “Bazoberry supo cuajar en sus fotografías, toda la majestad del horizonte, de la nube y del color. La ciudad naciente del alba no le ocultó ningún secreto, ni la agonía de la tarde, su cósmica serenidad”. Muchas de sus imágenes ilustran la Historia (Gráfica) de la Guerra del Chaco de M. Baptista* (1976), y en el Museo, Biblioteca y Archivo de la Guerra del Chaco (“Casa de los Héroes Nacionales de la Guerra del Chaco”, La Paz), se exponen una serie de 54 fotografías tomadas por Bazoberry. La biblioteca de América Latina en la Universidad de Tulane posee una colección de veinte de sus postales fotográficas de la guerra del Chaco. Filmografía: La Guerra del Chaco (también titulada ‘Infierno verde’), 1936. Fuente: Gumucio, 1982: 147-153; Lora, 2002: 61; Mesa, 1979: 228-9; Mesa, 1985: 33-34; http:// www.biblioteca/TulaneUniversity (10.08.2011)

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BECERRA CASANOVAS, ROGER (Trinidad, Beni, 9 de agosto de 1924)

Profesor y compositor. Supo captar con mayor autenticidad el espíritu, la pasión, el júbilo y la melancolía de los mojeños. Fue el compositor preferido de “La Dama de la Canción Boliviana” Doña Gladys Moreno. El ambiente en que creció le permitió captar y diferenciar los trinos de las aves, los murmullos de los ríos, los cantos alegres de los danzarines en las fiestas de los pueblos y a medida que crecía se fue interesando por las costumbres, la música, el folklore y las tradiciones de su tierra, por lo que decidió estudiar música en la célebre Escuela Nacional de Maestros en Sucre. Su vocación lo llevó a la investigación etnomusicológica y los géneros musicales del Beni, actividad paralela a su labor docente. Tuvo el mérito de divulgar la rica tradición beniana en conferencias sobre las danzas folklóricas y la cultura del Beni en las principales ciudades de Bolivia. En su composición musical destacan los taquiraris “Misterios del corazón”, “Viva Trinidad”, “Embrujo” (letra de Hormando Ortiz), “Quise darte”, “Recuerdos”, “No volveré a querer”, “Canción de amor”, “No pienso olvidar”, “Amor”, “Despertar”, “Inspiración y Soledad” (letra de Ambrosio García), “Vaca vieja” (carnaval con letra de Alcindo Claros), “Tata presidente” (letra de Nataniel Becerra), “Vals de la Ilusión” (letra de José Luis Herbas) “Voces del Paititi” (letra de Horacio Rivero), “Payuje de amor” (letra de Cesar Chávez) y muchas obras más. En su faceta de investigador es autor de Reliquias de Mojos (La Paz, H. Alcaldía Municipal de La Paz, 1977), Curso elemental de Teoría e Historia General de la Música, Introducción a la cultura musical (compendio o síntesis de teoría, historia, formas y temas sobre música boliviana aplicables a los contenidos programáticos del ciclo secundario) y su insuperada Historia del Caucho. Perfil del Noroeste boliviano (Trinidad, 1984). Ha sido prefecto del Departamento del Beni en el segundo gobierno del Dr. H. Siles* (1982-1985), oportunidad en la que promulgó la resolución de creación del Archivo Histórico Departamental del Beni, que llegó a ser organizado e inventariado. Lastimosamente al término de su gestión, el archivo fue abandonado aunque posteriormente volvió a crearse como Archivo Central, gracias al trabajo de M. Plaza*, por encargo de la GTZ. Fuente: http://www.sobodaycom.org (10.06.10)

(10.06.10);

http://www.pentagramadelrecuerdo

BEDOYA BALLIVIAN, MARIO

(La Paz, 17 de octubre de 1920. † Lima, 9 de febrero de 2009) Político. Siendo asesor del Diputado F. Kieffer*, observó con horror el lamentable destino de los archivos del Poder Legislativo, que se hallaban desorganizados y en proceso de destrucción. Motivó al Diputado Kieffer para sancionar una resolución que instruyera organizar el Archivo Histórico Legislativo dependiente de la Cámara de Diputados (1988). Trabajó en ese empeño con Y. Tejerina* y R. Mérida*. Elaboró un índice de la serie Documentos Reservados, que abarca desde 1903 hasta 1935, base sobre la cual se creó el Archivo Histórico del Congreso Nacional en 1998, cuando pasó a constituir un servicio unificado con la Biblioteca del Congreso (que a su vez dependía de la Cámara de Senadores). Fue Director del Instituto Boliviano de Cultura en el gobierno de J. Paz Zamora*. Se le concedió el Premio “Gunnar Mendoza” del

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Ministerio de Educación y Cultura (1998), fue condecorado por el Ministerio de Educación (2000); y la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso* reconoció sus servicios con un Diploma en septiembre del 2007. Fuente: Oporto, 2008.

BELGRANO, MANUEL JOSÉ JOAQUÍN DEL CORAZÓN DE JESÚS (Buenos Aires, 3 de junio de 1770. † Buenos Aires, 20 de junio de 1820)

Abogado, economista, periodista, político y General del Ejército de las Provincias Unidas del Río de la Plata (actual República Argentina). Participó de la Revolución del 25 de Mayo de 1810 y en la Guerra de Independencia que le sucedió. Creador de la Bandera de Argentina. Comandó uno de los Ejércitos Auxiliares enviados desde Buenos Aires, tomando La Plata y Potosí, su Lugarteniente, Juan José Castelli, “El orador de la revolución”, ordenó el apresamiento y posterior fusilamiento del Mariscal Vicente Nieto, Presidente de la Audiencia de Charcas, del Capitán de Fragata José de Córdova y Rojas y del célebre gobernador de Potosí, F. de Paula Sanz*, en su afán de implantar un gobierno revolucionario, habiendo decretado la liberación de los indios. Belgrano sufrió la derrota de Ayohuma en 1813 forzando a su tropa a salir en precipitada fuga, ocasión en la que “se llevó el libro de acuerdos del Cabildo, con los demás papeles y utensilios de valor del Tribunal Supremo” rumbo a Buenos Aires. Similar actitud tuvo con los documentos de la Audiencia de Charcas, el gobernador que Belgrano nombró en La Plata. Formó importante archivo con la nutrida correspondencia que generó durante su actuación militar. Fuente: Moreno, 1927: 70; Oporto, 2006: 218; Poppe, 2000: 7.

BELMONTE VILADEGUTT, ALFONSO GUILLERMO (La Paz, 24 de enero de 1929)

Autodidacta. En 1964, cooperó al Ing. Jorge Aramayo Montes Vicepresidente del Instituto Tecnológico Boliviano, a organizar el set de documentos que el Gobierno de Bolivia presentó al Banco Interamericano de Desarrollo, en procura de lograr financiamiento para el Instituto, con tan buena impresión que se adoptó ese modelo para otras solicitudes. En 1965 fue encargado de Archivo de la Secretaria General de la UMSA, siendo rector el Ing. Hugo Zárate Barrau. Organizó el Archivo de la Secretaria Externa del Rectorado y propuso un sistema de archivos. El Dr. Julio Garret Ayllón, Rector de la Universidad Técnica de Oruro, en una visita a La Paz quedó gratamente impresionado por el trabajo realizado en los archivos de la UMSA y solicitó la cooperación del Sr. Belmonte, quien aseguró que en treinta días hábiles de trabajo y dos meses de control y supervisión desde la ciudad de La Paz, entregaría archivos modelos a la UTO. En 1966 capacitó a dos funcionarios y en marzo entregó a la UTO un sistema moderno de archivos, con una oficina centralizadora y archivo central; en 1973 fue ascendido a Inspector de Archivos de la UMSA; en 1974 organizó 3.000 fólders del archivo de la Facultad de Arquitectura y Artes. En el noticiero Mundo Universitario, la facultad informó que contaba con un ejemplar Archivo Central, con nomencladores y códigos especiales. En 1977 entregó a la Dirección General Administrativa la Nomenclatura General de Archivos de la UMSA, con normas

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y especificaciones necesarias para uniformar y optimizar un eficiente sistema de archivos de la UMSA. En esa época creó su Oficina Consultora en Organización de Archivos y Sistema de Representaciones Comerciales, ofertando cursillos sobre manejo de documentos y microfilmación. De ella surgió la Consultora Nacional de Archivos y Documentación (CONARDO), con la que realizó consultorías para la organización de los archivos del Banco Minero de Bolivia (acumulados por quince años, 1973-1974); en los archivos de la Empresa Minera Unificada S. A. (1977); en los archivos del Fondo de Vivienda Social (1987-1991); los archivos contables de la Corporación Minera de Bolivia y los archivos de las empresas mineras cerradas a raíz de la crisis minera (1991 y 1992); los archivos de los ex-consejos sectoriales de vivienda y los del ex-Instituto de Vivienda Social. Como parte del trabajo capacitó al personal de esas empresas en el manejo del sistema unificado que ofertaba. En 1993 en mérito a sus 25 años de labor continua, el Comité de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia* le confirió la Presea y Diploma de Servicios. Su hijo, Richard Belmonte, inscrito en la Carrera de Bibliotecología de la UMSA*, continúa su tradición como Archivero del Banco Central de Bolivia*. Fuente: Oporto, 1993: 16-20.

BELMONTE ZÁRATE, DAVID CARLOS

(Provincia Inquisivi, La Paz, 2 de diciembre de 1971) Ex trabajador de interior mina del Grupo Minero Bajaderia (Centro Minero Caracoles). Forma parte del grupo de trabajadores de la Unidad Productiva de Caracoles, proyecto creado a raíz de la cancelación del contrato de riesgo compartido con la Empresa Minera Privada “Barrosquira”, que por conflictos sociales entre la Unidad Productiva de Caracoles y las cooperativas mineras de ese distrito, quince trabajadores fueron transferidos al Sistema de Archivo de la Comibol*. Belmonte es uno de los tres trabajadores mineros que desde 2008 presta servicios como Auxiliar de Archivo, realizando tareas de limpieza y conservación preventiva. Los otros dos (Eliseo y Martín Vergara) están asignados a labores de limpieza y carpintería en el Archivo. Ha participado en el Coloquio sobre el libro, la lectura y el derecho de autor, organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (2009), en el Seminario Internacional “Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Importancia de su Rescate para el Desarrollo Nacional”, organizado por el Sistema de Archivo de la COMIBOL y la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso (2008). Desde 2008 participa en el programa de capacitación continua impulsado por el Sistema de Archivo de la COMIBOL. Fuente: CV.

BELTRÁN ÁVILA, MARCOS

(Oruro, 25 de abril de 1881. † Cochabamba, 1977) Profesor y director de la Escuela Nocturna de Artesanos (1907) y del Colegio Bolívar (1910-1924) de Oruro. Historiador, crítico y escritor. Diputado y munícipe. Fundó el Liceo de Señoritas Pantaleón Dalence (1922). Director de la Biblioteca Municipal de Oruro, que actualmente lleva su nombre. Viajó en dos oportunidades

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a España a realizar investigaciones en los archivos de Madrid (1912) y Sevilla (1930); y a la Argentina (1912) y Chile (1924), a fin de buscar documentos sobre el proceso de emancipación, entre ellos los referentes a la sublevación de Juan Vélez de Córdova (1739), y de los sucesos de 1781; descubrió los papeles referidos a Alejo Calatayud de Cochabamba, así como los papeles del Conde de Tarata, y encontró en Sevilla el primer impreso boliviano que fue publicado en La Paz, en 1810, de cuyo hallazgo publicó El Centenario de la primera impresión boliviana (1943), con el que da fin a la polémica entablada con L.M. Loza*, quien afirmaba que el primer impreso fue editado en Oruro en 1813. Encontró, en el Archivo Nacional de Buenos Aires, 21 legajos y en el Archivo General de Indias, 10 legajos sobre la Audiencia de Charcas, con documentos referidos a la historia colonial e independentista de Oruro, con los que dio a luz su obra Capítulos de la historia colonial de Oruro (1925). De todos los documentos que encontró hizo sacar copias, las que luego depositó en la Biblioteca Municipal. Reunió documentos históricos en su archivo particular y conoció el archivo del erudito Jijón y Caamaño, que custodia el archivo de I. Flores*, con información sobre las rebeliones indígenas de 1780-1781, en Oruro. Con ellos escribió Historia del Alto Perú en 1810 (1918), Capítulos de historia colonial de Oruro (1925), Jacinto Rodríguez de Herrera y Sebastián Pagador (1944), La pequeña gran logia que independizó a Bolivia, 1823-1825 (1948) y Acerca del tabú bolivarista. Bolívar y la autonomía del Alto Perú (1963). Tiene, también, una novela histórica titulada el 10 de febrero (1906). J. Siles* afirma que es el iniciador de las historias regionales. Fue condecorado por el gobierno con la Medalla al Mérito (1944), Cóndor de los Andes (1954) y la Gran Orden de la Educación Boliviana (1964). Fuente: Arze, 1989: 77; Castellón, 2007: 16-17; Siles, 1973b.

BENITO HUAYTA, JUVENAL (Oruro, 7 de mayo de 1951)

Siendo estudiante de la Carrera de Historia* (UMSA) trabajó como auxiliar en el Archivo de La Paz*. Fue también estudiante de Bibliotecología. Posteriormente tuvo a su cargo el Archivo del Canal Universitario de la UMSA.

BERNABEI, JUAN (LUIS SEVERINO)

(Ronciglioni, Roma, 19 de octubre de 1871. † 23 de octubre de 1923) Se ordenó en 1894, formando parte del Colegio de Tarata. Fue designado Conversor de Yaguarú en 1896 hasta 1903. Su afición por la fotografía fue proverbial. El P. B. Pesciotti, informa que el 7 de enero de 1899, Bernabei “abrió su estudio fotográfico. En agosto-septiembre de 1901, había recibido un nuevo aparato fotográfico con todo lo necesario”. Con ese instrumento “actuó como fotógrafo siempre que la ocasión excepcional lo requirió”. Entre sus fotografías destaca la posesión de un cacique y retratos de la inauguración de la Capilla de San Pablo. Fuente: García, 2011: 125, 173

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BERRÍOS CONTRERAS, ROSMERY (Potosí, 6 de abril de 1971)

Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en la X Escuela de Archivos para Iberoamérica* (2000), ocasión en la que asistió al Pre-congreso “Los Retos del Acceso a la Información” y al XIV Congreso Internacional de Archivos, en Sevilla, España (2000). Trabajó como Auxiliar en la inventariación de archivos del fondo “Contraloría Nacional” (1994) y como voluntaria en la clasificación del fondo “Expedientes Republicanos de la Corte Superior de Justicia” (1999) en el Archivo de La Paz* (UMSA). En 1998 fue designada representante de esta institución en el primer ordenamiento del Repositorio Intermedio del Poder Ejecutivo en El Alto, con financiamiento de la Cooperación Técnica Alemana GTZ (1998). Fue consultora individual para la identificación, valoración y descripción de Archivos de Gestión en el Banco Central de Bolivia* (2003-2004), trabajó en el Proyecto ADAI* para la organización del fondo “Prefectura de La Paz”, en el Archivo de La Paz (2004-2005). Como consultora organizó los archivos de Cónsul Sistem Asociados SRL (2007-2008), trabajó en el Proyecto de Digitalización y Microfilmación en el Archivo de La Paz (2008). Pasó luego al Archivo de la Aduana Nacional de Bolivia (2009) y de ahí al Archivo Histórico de la Minería Nacional de la Comibol (2010). Fuente: CV.

BIBLIOTECA Y ARCHIVO HISTÓRICO DE LA ASAMBLEA LEGISLATIVA PLURINACIONAL (BAHALP) Institución bibliotecaria y archivística, fusionada en un solo servicio por Resolución de la Comisión de Modernización 30/98 de 1998, que presta servicios al Órgano Legislativo Plurinacional y la Vicepresidencia del Estado Plurinacional de Bolivia. Ocupa el antiguo edificio del Banco de la Nación Boliviana, luego Banco Central de Bolivia (BCB), en virtud a la ley de 17 de enero de 1991. Fue fundada como Biblioteca del Congreso, por el senador M. Ascarrunz*, en 1911 e inaugurada el 14 de septiembre de 1912, dependiente del Senado Nacional. Gracias al apoyo de la clase política y contribuciones de parlamentarios de esa época, logró adquirir valiosas obras, muchas de ellas únicas en su género. El primer director de la Biblioteca fue Carlos Flores L. Otros directores fueron S. Campuzano* (Secretario del Gral. N. Campero* en la Guerra del Pacífico), H. Siles Zuazo* (ex presidente de la República, 1956-1960; 1982-1985), Juan Lanza (abogado y archivólogo), Gontran Carranza, Marcela Meneses, Homero Carvalho (1989), Beatriz Bozo (1993-1994), Víctor Bernal Solares (1995-1997) y Raúl Argandoña Fernández. El Archivo Histórico fue organizado por M. Bedoya* y un grupo de archiveros como Y. Tejerina* y R. Mérida*, que trabajaron bajo las órdenes del diputado F. Kieffer* en 1988; posteriormente se incorporó J.C. Fernández*. La Biblioteca fue modernizada durante las gestiones vicepresidenciales de Víctor H. Cárdenas (1993-1997). Durante la gestión del vicepresidente J. Quiroga Ramírez* (19972001), se fusionaron los servicios y se automatizó los procesos técnicos, se le dotó de ambientes y una sala de lectura confortable, así como se dispuso la encuadernación de la Hemeroteca nacional que posee, ocasión en la que Carlos Cordero Carrafa y Gustavo Aliaga redactaron un Reglamento e impulsaron una labor editorial de amplio alcance,

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publicando y reeditando obras de importancia. Durante la vicepresidencia de C. Mesa* se contrató al primer director de la Biblioteca y Archivo Histórico, el historiador y archivista L. Oporto* (22 de agosto de 2002); el 2003 se creó el Sistema de Archivo del Poder Legislativo, conformado por el Archivo Central de la Vicepresidencia de la República (creado ese año), el Archivo Central del Senado Nacional, el Archivo Central de la Cámara de Diputados y el Archivo Histórico, donde vienen a refundirse dichos fondos. Desde el 2002 sostiene el Programa Permanente de Asistencia Técnica*, que beneficia a los archivos estatales con cursos de capacitación archivística, habiéndose beneficiado a 5.000 funcionarios a nivel nacional. Entre sus tesoros documentales el Archivo Histórico custodia la versión autógrafa de la partitura original del Himno Nacional Patriótico, ofrecida por Benedetto Vincenti a su amado hijo Isaac, las Actas del Primer Congreso Constituyente de Bolivia (1826), así como los de la última (2006-2008), además de los documentos producidos por ambas cámaras, incluyendo los registros sonoros de las Sesiones Ordinarias de Congreso (1988-1999); en tanto que la Biblioteca custodia la obra original de Alcides D’Orbigny (voyage dans l’Amerique Meridional, París, 1835-1847. Registrada en 2002 en el Programa Memoria del Mundo de la UNESCO) la Compilación de Leyes de Indias, el Reglamento del Régimen de Intendencias de Provincia y Exército (1782), el Gazofilacio Real del Perú de Escalona y Agüero, el libro del Centenario de Bolivia, etc. Presta servicios públicos en cumplimiento del Art. 21.6 (derecho de acceso a la información pública) y el Art. 24 (derecho de petición) de la CPE, por medio de servicios en sala y por Internet, tanto a ciudadanos de a pie como a parlamentarios e investigadores nacionales y extranjeros. Levantó el censo de archivos en las ciudades de Oruro, Tarija y Cochabamba, con financiamiento de la Agencia Canadiense para el Desarrollo Internacional registrada en 2002 en el Programa Memoria del Mundo de la UNESCO (2003), con cuyos resultados elaboró uno de los anteproyectos de Ley del Sistema Nacional de Archivos, participando activamente en los congresos y talleres de La Paz y Sucre para discutir el anteproyecto consensuado de la Ley del Sistema Nacional de Archivos*. Posteriormente, la Subdirección de Archivos de España, le solicitó el levantamiento censal en los archivos de los centros mineros de Bolivia, con financiamiento de esa entidad, labor que fue ejecutada en coordinación con el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* y el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, institución a la que cooperó en la digitalización de archivos fotográficos particulares de la ciudad de La Paz. Ha creado un Fondo Editorial, destinado a financiar la publicación de resultados de investigación. En septiembre del 2002 publicó el boletín Fuentes del Congreso, a la que la administración del Vicepresidente A. García Linera* determinó convertirla en una revista bimestral (en octubre de 2012 alcanza al número 22), indizada en el programa Scielo de revistas científicas en línea. Asimismo esa gestión vicepresidencial otorgó los recursos suficientes para su participación en la Feria Internacional del Libro de La Paz, donde se distribuyen las publicaciones oficiales de la BAH-ALP y de la Vicepresidencia del Estado. El 2006 trabajó en la digitalización de las más de 11.000 leyes de la República promulgadas desde 1825, con el apoyo financiero de la Fundación de Apoyo a la Democracia y al Parlamento, disponiendo esta información en línea. El Vicepresidente A. García Linera tiene el mérito de haber recuperado en copias legalizadas el Archivo de la Asamblea Constituyente (2006-2008) que habían quedado custodiadas por el ABNB en Sucre, Corpus documental con el que mandó compilar la Enciclopedia Historica de la Asamblea Constituyente. En 1993 el Archivo Histórico (Cámara de Diputados) y la Biblioteca del Congreso (Cámara de

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Senadores), cuya unificación hoy es la BAH, fueron reconocidos con un Diploma en mérito al “Servicio Documental” por el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas*. En conmemoración a los cien años de su creación e inauguración, la Empresa de Correos de Bolivia ECOBOL, emitió un Sello Postal, que fue entregado en acto público el 21 de septiembre en la BAHALP. Fuente: Condarco, 1977: 11-21; Oporto, 2008; Oporto y Ramírez, 2007.

BIEBER, LEÓN ENRIQUE (La Paz, 1943)

Estudió Ciencias Políticas y el doctorado en Filosofía en 1978 (Universidad Libre de Berlín, Alemania). Mostró interés en la historia política y económica y el nacionalsocialismo en México, Argentina, Ecuador y Perú. Su investigación en Bolivia analiza además el papel de la minería y la burguesía nativa, y otros temas de innegable importancia, habiendo publicado: El potencial de desarrollo de los empresarios mineros bolivianos de la segunda mitad del siglo XIX: ¿empresarios capitalistas o burguesía nacional? (1978); Empresarios mineros en el siglo XIX: bases para su caracterización social (1980); Aufzeichnung betr.: Erfolgsaussichten und Grenzen der Demokratisierungsbestrebungen in Südamerika Ende der 70er Jahre: der Fall Bolivien 19771980 (1982); Bolivia 1936-1945: en la encrucijada entre el surgimiento de un nacionalismo militante y la rivalidad germano-norteamericana (1994); La política militar alemana en Bolivia, 1900-1935 (1994); El comercio germano-boliviano, 1936-1939: un fracaso singular en el contexto del comercio de compensación de Alemania con América Latina (2000); Pugna por influencia y hegemonía: la rivalidad germano-estadounidense en Bolivia 1936-1946 (2004) y Presencia judía en Bolivia. La ola inmigratoria de 1938-1940 (2010). Precisamente en su última obra, relata el hallazgo, en el templo israelita de Cochabamba, de voluminosos legajos de documentos de la Sociedad de Protección a los Inmigrantes Israelitas (SOPRO), teniendo el inusual privilegio de ser el primero en utilizarlo desde que, en algún momento, había quedado depositado y con ello olvidado en el desván de aquella casa de oración. El Archivo de la SOPRO* está contenido en 80 carpetas con documentación relevante para esclarecer la razón que permitió a miles de refugiados sobrellevar sus más agudas penurias económicas iniciales, encontrar fuentes de ingreso y posicionarse en relativamente poco tiempo entre las clases medias de la sociedad receptora. Empleó en su obra 126 cartas de este archivo en su investigación. Paralelamente recabó 15 cartas de personas privadas, consultó documentos del Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Cultos, y empleó la historia oral, realizando 103 entrevistas personales, con lo que ha reunido la mayor cantidad de documentos y datos sobre la presencia judía en Bolivia. Otros documentos relacionados al tema reposan en el Archivo de Moritz (Mauricio) Hochschild* que ha recolectado H. Waszkis* (donado al Instituto Leo Baeck de Nueva York, donde fue organizado por M. Simonson* y catalogado por B. Schultz*) y el Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: Bieber, 2010.

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BLANCO GALINDO, CARLOS

(Cochabamba, 12 de marzo de 1882. † Cochabamba, 2 de octubre de 1943) Estudió leyes, sin llegar a titularse. Hizo estudios superiores en escuelas militares en Argentina. Fue profesor en el Colegio Militar y en la Escuela de Guerra. Se le reconoció como Coronel Honorario del Ejército peruano; “Hijo Predilecto” de Cochabamba y “Doctor Honoris Causa” de la Universidad de San Simón. Alcanzó el grado de General, fue Jefe del Estado Mayor General y Delegado Plenipotenciario en la Conferencia de Paz del Chaco. El 25 de julio de 1930 fue designado Presidente de la Junta de Gobierno conformada a la caída de H. Siles Reyes*. Su gobierno fue breve habiéndose ocupado de reformar la Constitución, por lo que convocó a elecciones generales en la que salió electo presidente D. Salamanca*, del Partido Republicano Genuino y vicepresidente J.L. Tejada Sorzano*, del Liberal. El 5 de marzo de 1931 fue nombrado Embajador ante la Santa Sede y luego Ministro Plenipotenciario en Suiza. A su retorno al país fue Prefecto de Cochabamba y Ministro de Defensa. Heredó el archivo que formó el Gral. L. Galindo*, quien sirvió bajo las órdenes de A.J. de Sucre*. En esa copiosa correspondencia se observa a un Sucre apasionado por el destino de Bolivia, a la que “armó poderosamente para su defensa, la hizo respetable y fue respetada por el prestigio que inspiraba su nombre: formó su ejército nacional para apoyar su derecho por medio de la fuerza (…) y trató de formar el alma nacional de Bolivia”. Publicó en 1918 aquel archivo epistolar, avalado por Resolución de la H. Cámara de Diputados, con prólogo y notas de su autoría. Publicaciones archivísticas: Cartas del General Antonio José de Sucre, Gran Mariscal de Ayacucho. Documentos para la Historia de Bolivia (La Paz, Imp. Moderna, 1918). Fuente: Blanco, 1918: iii; Oporto, 2006: 118.

BLATTMANN, CARL (Suizo)

Llegó a Bolivia bajo contrato con la Casa francesa Braillard & Co. en Riberalta. En 1913, fue designado Director General de la Casa Suárez Hnos.*, la empresa de caucho más importante de Bolivia, en Cachuela Esperanza. En 1919 regresó a Suiza. Una selección de fotografías del mundo de la goma tomadas por Blattmann apareció en Imágenes del auge de la goma (La Paz, 1998), de Ricardo Centeno y Patricia Fernández, quienes escribieron: “con su inseparable cámara fotográfica de fuelle, una de las pocas introducidas al país en esa época, Blattmann alternaba sus labores administrativas con el arte de la fotografía. Ninguna escena se escapaba de su lente. Fotos de las oficinas, de las casas, de las calles, de las plazas, de gente común, de ‘bárbaros’, de días de campo, de dura faena en la selva, todo está registrado en sus archivos, aunque muchas fotos han desaparecido con el tiempo”. Unas 700 de fotografías de Blattmann sobreviven, ahora en manos de sus descendientes en Bolivia. Fuente: Buck, 1999.

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BOLÍVAR Y PALACIOS, SIMÓN ANTONIO DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD (Caracas, 24 de julio de 1783. † Santa Marta, 17 de diciembre de 1830)

Hijo de familia potentada. Se educó bajo el cuidado del profesor masón Simón (Carreño) Rodríguez, ante quien formuló su juramento, en Roma en el monte Sacro, el 15 de agosto de 1805: “¡Juro delante de usted; juro por el Dios de mis padres; juro por ellos; juro por mi honor, y juro por mi Patria, que no daré descanso a mi brazo, ni reposo a mi alma, hasta que haya roto las cadenas que nos oprimen por voluntad del poder español!”. Tuvo tratos con el también masón Generalísimo Francisco de Miranda. El mismo Bolívar fue masón, como otros próceres, entre ellos F. D. O’Leary*, B. O’Higgins*, J. de San Martín*, Mariano Moreno, etc. Luego de liberar a su patria, emprendió una guerra que le llevó al Perú y de allí a Bolivia. Al final de la guerra, en 1825 inició un periplo por la “República de Bolívar”, como fue bautizado el antiguo territorio de Charcas por los doctores que decretaron la independencia contra su voluntad. Llegó a La Paz el 18 de agosto, ocasión en la fue recibido “con mil demostraciones de bondades y de agradecimiento” y se le entregó una copia del acta de la independencia suscrita por los representantes a la Asamblea, que decretó que este territorio “toma el nombre de Bolívar y la capital Sucre, y (dispuso) un millón de pesos de recompensa al ejército”; pasó a Potosí el 5 de octubre, subiendo al Cerro Rico donde pronunció su célebre discurso, “De pie sobre esta mole de plata (…) cuyas venas riquísimas fueron trescientos años el erario de España” (26 de octubre de 1825), ante las banderas de Colombia, Perú, Chile y Argentina. En Sucre, el 3 de noviembre, calificó como “un sagrado recuerdo al excelso día 16 de julio de 1809”; promulgó el decreto del 29 de diciembre convocando al Congreso boliviano para el 25 de mayo de 1826, redactó el discurso con el que entrega el proyecto de Constitución que prometió, a tiempo de delegar el mando supremo en el general A. J. de Sucre* y retornar al Perú donde debía inaugurar el Congreso de ese país. A su viaje a Bolivia le acompañó M. Sáenz*, quien fue su archivera personal, en tanto que su archivo de campaña estuvo al cuidado de F. O’Leary. Como en toda conflagración los archivos militares eran objetivos de guerra. En 1814 su correspondencia personal fue capturada en combate, salvándose únicamente un fragmento de copiadores de oficio, que luego fuera compilado por V. Lecuna*. Es también célebre la tendencia destructiva del Libertador hacia su archivo personal, como puede verse en la cláusula 9ª de su testamento en el que ordena a su albacea que “los papeles en poder del señor Pavageau se quemen”, orden que, para fortuna de la historia, incumplió el sirviente. En el mismo testamento ordena que El Contrato Social, de Rousseau, y El arte militar, de Monte-Cúculi, obras valiosísimas que pertenecieron a la biblioteca de Napoleón y que le fueron obsequiados por el general Roberto Wilson, se entregasen a la universidad de Caracas. La histórica disposición de última voluntad del Libertador fue refrendada por el Escribano público José Catalino Noguera en la hacienda de San Pedro Alejandrino de la comprensión de la ciudad de Santa Martha, Colombia, a 10 de diciembre de 1830. Los archivos de S. Bolívar que suman 283 tomos y 63 del Gral. Francisco de Miranda, fueron declarados Colombia Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. En 1999 se los entregó a la Academia Nacional de Historia de Venezuela para su custodia. En junio de 2010, mediante decreto, el presidente de Venezuela Hugo Chávez “ordenó transferir la totalidad de los archivos de Bolívar y del precursor de la Independencia venezolana, el general Francisco de Miranda,

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al Archivo General de la Nación (AGN), que depende del Ministerio de Cultura. ‘Hemos rescatado de la mano de la burguesía los archivos del Libertador (…) Ahora el pueblo va a conocer los archivos de Bolívar y de Miranda, los papeles los vamos a poner en exhibición”, afirmó en esa ocasión. El 25 de mayo de 1962, el Embajador de Venezuela entregó al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, “58 carretes de micropelícula, distribuidos en tres cajas de madera tallas con sus respectivas chapas y llaves y cada caja con una placa de bronce en la tapa con la leyenda ‘Archivo del Libertador. Bolivia’”. Fuente: ABNB, 1963: 6-7; Banco de la República, 1980; Cambio, 2010: 17.

BONIFAZ, CARMEN Fue Encargada de Negocios en El Vaticano, durante el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003). Trabajó en ese lapso en el Archivo Secreto del Vaticano, en la Sección Relaciones con los Estados: Bolivia; Fondo: Secretaría de Estado, transcribiendo la serie de la Guerra del Pacífico, en la que se observa el papel mediador del Vaticano en el conflicto suscitado por Chile contra Bolivia. Radica en Roma, Italia. Publicaciones archivísticas: “El Vaticano y la Guerra del Pacífico”, en Valentín Abecia Baldivieso: Bolivia y el Vaticano (La Paz, Plural, 2005: 91-106). Fuente: Abecia Baldivieso, 2005.

BOSQUES TISTLER, ERÉNDIRA DÉSIRÉE (México, D. F., México, 1 de febrero de 1957)

Licenciada en Ciencia Política y Administración Pública, Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México. Hizo los cursos: Técnicas de Archivo y Técnicas Especializadas para la Administración de Archivos Centrales, en el Instituto para el Desarrollo de Empresarios y Administradores IDEA, La Paz (1997-1998). Habla inglés, francés, italiano y sueco. Fue editora del Boletín Interno de la Biblioteca SITe interesa TELecomunícate (1998-2003). Editora del Boletín Interno de la Biblioteca del Centro de Documentación y Biblioteca “Ing. Javier Barros Sierra”, México DF (2004-2008). Participó en el XIV Congreso Internacional de Archivos del Consejo Internacional de Archivos (CIA), Sevilla, España (2000); Congreso Formación Profesional del Archivista y del Bibliotecario en el siglo XXI, Escuela Nacional de Biblioteconomía y Archivonomía, México, D. F. (2005); 2º y 3er Encuentro de Archivos del Distrito Federal, México, D. F. (2008, 2009). Su experiencia laboral en Gestión Documental, Análisis y Manejo de Información, se ha desarrollado en Suecia, Bolivia y México. Fue coordinadora del Archivo Hemerográfico sobre Derechos Humanos en América Latina, Sección Mexicana de Amnistía Internacional (1982-1986), Encargada de la Biblioteca y del Área de Documentación de la Embajada de México en Estocolmo, Suecia (1988-1992). En Bolivia fue Consultora en el DataRoom de ENTEL- Ministerio de Capitalización (1995), Encargada del Sistema Archivístico Descentralizado (SADES) y de la Biblioteca de la Superintendencia de Telecomunicaciones (2000-2003); Representante de SITTEL, en el Grupo

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Técnico Interinstitucional de Manejo Documental del Sistema de Regulación Sectorial (SIRESE), La Paz (2001–2003). De retorno a México, se desempeñó como Coordinadora del Centro de Documentación y Biblioteca “Ing. Javier Barros Sierra”, Dirección General de Planeación UNAM (2004-2008), Encargada de la estructuración de la Biblioteca (Beca-trabajo) Centro de Constelaciones Familiares, México, D. F. (2008-2009), Consultora Externa para el Registro e Inventariación del Archivo Personal de la Mtra. Guadalupe Pérez San Vicente - Centro Daniel Rubín de la Borbolla, México, D. F., (2009), Consultora Externa para el Diagnóstico, Evaluación y Registro del Centro de Documentación de Hábitat International Coalition América Latina, México, D. F., 2010-2011). Publicaciones archivísticas: “Sistema Archivístico de SITTEL”, (Boletín Telecomunicaciones: El Salto al Futuro. La Paz, SITTEL, 2002. 3ª Sección: 31-35). Fuente: CV.

BRAUN, OTTO PHILIPP

(Kassel, Alemania, 13 de diciembre de 1798. † 24 de julio de 1869) Alemán con estudios de Veterinaria en Estados Unidos. Se incorporó como voluntario al Ejército de Colombia en 1820 con el grado de Teniente, cumpliendo tareas de veterinario. Solicitó pasar al rango de combatiente y en 1821 participó en la Campaña de Carabobo donde fue ascendido a Mayor. Combatió luego por la liberación de Ecuador y contra la insurrección de los pastusos. En 1824, como comandante de la Guardia Personal de S. Bolívar*, combatió en la Batalla de Junín dirigiendo a los Granaderos de Colombia; después dirigió una carga de su caballería contra el regimiento que custodiaba al Virrey en la Batalla de Ayacucho (9 de diciembre de 1824), a las órdenes de A.J. de Sucre*. En 1825 Bolívar le encomendó la dirección de las tropas colombianas auxiliares enviadas a Bolivia. Al producirse la invasión peruana en 1828, al sufrir derrota se retiró a Ecuador. Ante la noticia de la asunción del mando de la República por A. de Santa Cruz*, su amigo, volvió a Bolivia, ocasión en la que adquiere la nacionalidad boliviana y sirve al Gobierno como Prefecto de La Paz. En 1835 es nombrado Comandante en Jefe de las Provincias del Sur. En 1838 triunfó en la batalla de Montenegro contra el ejército argentino, por lo que se le otorgó el mariscalato. Fue Ministro de Guerra y Marina y Ministro del Interior de la Confederación, que fue disuelta luego de la derrota de Yungay (1839), y la posterior defenestración del Mcal. Santa Cruz, por lo que asumió la presidencia José Miguel de Velasco, quien lo destituyó y removió todos sus títulos. Fue rehabilitado por el presidente Manuel Isidoro Belzu regresando varias veces a Bolivia y Perú, donde tenía intereses en minas de cobre y plantaciones de café. Este militar acopió un importante epistolario como resultado de su actuación en la guerra de la Independencia, archivo que contiene importantes referencias sobre la historia política y militar del país, con mayor incidencia para el Gobierno del Mariscal Andrés de Santa Cruz. A diferencia de otros de carácter militar, este archivo es más de carácter privado que público, es decir se trata de una colección epistolar eminentemente particular. El archivo fue repatriado por J.M. Barnadas*, en 1993, luego de una azarosa aventura que lo llevó a Alemania. Todo empezó en 1987 cuando Barnadas se enteró de la existencia del archivo de Braun y propuso al Banco Central de Bolivia* y a la colonia alemana

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en Bolivia su adquisición de los descendientes del militar alemán, pero tanto el BCB como la poderosa colonia le negaron el apoyo. Recién en 1993 se concretó la transferencia al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, donde se encuentra actualmente. Fue catalogado por Barnadas y G. Calvo* en 1998 (El Mariscal Braun a través de su epistolario (Antología). La Paz: Los Amigos del Libro). Fuente: Barnadas y Calvo, 1998; Oporto, 2006:141-142; http://es.wikipedia.org/wiki(9/02/10).

BRIDIKHINA, EVGENIA

(Ukrania, URSS, 31 de julio 1963) Estudió en la Facultad de Historia, Universidad Estatal de Donetsk, República de Ucrania (1985). Cursó la IV Maestría Latinoamericana en Historia en la Universidad Internacional de Andalucía (La Rábida) (2000) y el Doctorado en Sociología en la Universidad Complutense de Madrid (2003). Tiene un Diplomado en Formación Docente (2004). Es docente-investigadora en el Instituto de Estudios Bolivianos, en la UMSA; fue docente invitada de las maestrías en Ciencias Sociales; de Familia, niñez y adolescencia y Ordenamiento territorial y planificación urbana (2003-2009) en la UMSA; y Familia, en la Universidad Andina. Desde 1994 participa activamente en congresos nacionales e internacionales de historia. Su obra historiográfica versa sobre esclavos negros, mujer, familia y temas de vida social colonial y republicana, siendo su primera publicación Mujer negra en Bolivia (1995), a la que siguió Theatrum mundi: entramados del poder en Charcas colonial (2007), y el más reciente Una nueva historia en común: relaciones bilaterales boliviano-españolas (2012). La restante está dispersa en revistas y memorias de congresos. El 2004 fue contratada como docente archivista en el Archivo de La Paz*, siendo directora interina el mismo año; y nuevamente el 2011. El Consejo Académico Universitario de la UMSA le otorgó la Condecoración y Diploma de Reconocimiento a la Producción Intelectual (2009). Publicaciones archivísticas: “Los primeros cincuenta años de la República. Expedientes de Prefectura” (Boletín del Archivo de La Paz, 2004, (21-22): 68-75); “Conocer mejor los tesoros del Archivo de La Paz” (DesArchivando, 2010, 8: 3-4); “Archivo de La Paz cumple 40 años…!!!” (DesArchivando, 2011, 9-10: 2-3); “Adiós al gran maestro de la Historia (Alberto Crespo)” (DesArchivando, 2011, 9-10: 14-15). Fuente: CV.

BRIGADAS INTERNACIONALISTAS SOLIDARIAS PARA EL FOMENTO Y DESARROLLO DE LOS ARCHIVOS Y LAS BIBLIOTECAS DE BOLIVIA Grupo de apoyo voluntario de carácter internacional fundado por iniciativa del bibliotecario español Javier Gimeno Perelló, como resultado del Seminario Internacional de Archivística: Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Importancia de su Rescate para el Desarrollo Nacional* organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* y el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2008). La primera brigada llegó a Bolivia en febrero de 2009 y estuvo conformada por 19 voluntarios de Argentina, Chile, Colombia y España. La segunda brigada llegó entre julio y septiembre de 2009, con 36 voluntarios

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procedente de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, España, Estados Unidos, Italia y Venezuela. Los voluntarios trabajaron en el Archivo Histórico de la Minería Nacional, de El Alto, Archivo Histórico de la Minería de Oruro, el Centro de Documentación de la Corporación Minera de Bolivia, Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional*, Memoria Institucional y Biblioteca de Economía y Finanzas, Fundación “Flavio Machicado Viscarra”, Fundación “Fausto Reinaga”, Servicio Nacional de Impuestos Nacionales, Instituto Superior Ecuménico Andino de Teología (La Paz), Ayuda para el Campesino del Oriente Boliviano (Santa Cruz de la Sierra), Biblioteca Municipal de Cochabamba. Se levantó el Censo de Archivos del Servicio de Impuestos Nacionales, coordinada por el brigadista Ernesto A. Vásquez. Las dos primeras brigadas fueron coordinadas en Bolivia por L. Oporto*, con la colaboración de E. Ramírez*, C. Campos*, L. Quiñones*, R. Quispe*, D. Miranda* (La Paz y El Alto), R. Vargas* (Santa Cruz de la Sierra), Beatriz Tames e I. de Mamán* (Cochabamba). Voluntarios de la Primera Brigada: Argentina: Natalia Sturm, Damián Marcote, Carolina Góngora, Miriam Graff, Manuel Illia, Cecilia Gutiérrez, Carolina Contino, Mariano Cantoni; Chile: Karin Ballesteros, Ma. Antonieta Calabacero, Mario Urquiola, Julia Martínez, Miguel Zamora, Manuel Urquiola, Verónica Muñoz, Daniela Toledo; Colombia: Camilo Valencia, Henri Rivera, Oscar Lazo. Voluntarios de la Segunda Brigada: Argentina: Blanca Gladis Chávez, Beatriz Kessler, Ernesto A. Vásquez, Néstor Machuca, Rosana Valle, Gabriela Sierro, Olga Mora, Emilio Conill, Celeste Maldonado, Federico Zeballos, Gabriela Paz, Martín Sánchez; Brasil: Guillaume Peche; Colombia: Ana Díaz, Sandra Ruiz; Cuba: Armando Cantalapiedra, Emelinda Medina, Ileana García; España: Sara Rosenberg (nacida en Argentina), Romy Arce (nacida en Perú), Elena Cotarelo, Lidia Pausá, Julián María Guzmán Tapia, Luis Montilla, Carmen Barahona, Santiago Morán, Carlos Alfaro, Ruth Rodríguez, Martha García, Oriol Granero, Darío Ill, Maite Palomanes, Daniel Carralero, Cristóbal Gallego, Rosa San Segundo, Irene Amador; Estados Unidos: Patricia Morán; Italia: Carlo Frabetti; Venezuela: Carlos Morales Manzur. Voluntarios de Bolivia: Rolando Álvarez López, Carola Campos Lora*, Fernando Chuquimia Bonifaz*, José Flores Mamani*, Gina Miranda*, Liz Quiñones Vargas*, Rosmery Quispe Loza*, Edgar Ramírez Santiesteban*, Ludmila Zeballos Avendaño* (La Paz); Itala de Mamán*, Beatriz Tames (Cochabamba); Fernando Sandalio (Oruro), Rosario Vargas* (Santa Cruz). Universitarios Consultores del Censo de Archivos del Servicio de Impuestos Nacionales: M. Eugenia Mamani*, Cesar A. Lucero*, Magalí Silvestre*, Rocío S. Condori, Sandra N. Soruco, Marco A. Coarite, Gonzalo O. Choque, Marco A. Paucara, Rómulo Calderón, Sara I. Quispe*, Sulber Aruquipa, Martha E. Llanos, Yehuan Carvajal, Lizeth W. Limachi*, Dercy Chávez, Wilfredo F. Quispe, Ruddy Veliz, Loui A. Oporto*, José Fuentes, Lucy Espejo, Libertad E. Choque, Jorge L. Mita, Marcelo Alborta, Andrea Vanoblitas*, Alex J. Huarita, Gaby Chipana. Coordinadores: Javier Gimeno Perelló (España); Luis Oporto Ordóñez* (Bolivia). Fuente: Fuentes del Congreso; Archivo de las Brigadas Internacionalistas (La Paz).

BUCK, DANIEL

(St. Paul, Minnesota, EE.UU., 23 de septiembre de 1942) Estudió Leyes en la Universidad de Denver (1974), pero derivó en ser especialista en la historia de la fotografía de América Latina. Realizó varios viajes a Bolivia en las décadas de 1980 y 1990.Tiene un archivo fotográfico histórico de 300 fotos,

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cerca de 500 tarjetas postales de Bolivia (de las décadas 1900 a 1930), y cerca de 200 diapositivas tomadas por su esposa Anne Meadows. La gran mayoría de las 300 fotos históricas, son de Bolivia, tomadas entre 1860 y 1930. Las temáticas predominantes corresponden a paisajes, personalidades, campesinos, cholas y gente de clase media de los departamentos de La Paz, Potosí, Oruro, Cochabamba y Chuquisaca, principalmente. Identificó y catalogó colecciones referidas a Bolivia existentes en archivos y museos de Bolivia (Archivo de La Paz*; Biblioteca del Congreso*; Archivo Histórico de Potosí* en la Casa de la Moneda*; Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*; Casa de la Cultura de Oruro; Museo Histórico, Tupiza); Venezuela (Biblioteca Nacional, Caracas); Alemania (Museum fur Volkerkunde zu Leipzig; Abteilung Deustsche Fotothek, Sächsische Landesbibliothek, Dresden); Francia (Phototheque du Musee de L’Homme, Paris); Inglaterra (Pitt Rivers Museum University of Oxford; Royal Geographical Society, Londres; Benjamin Stone Collection Central Library, Birmingham); Estados Unidos (Peabody Museum Harvard University, Cambridge; Museum of Art Hispanic Society of América; International Museum of Photography George Eastman House, Nueva York; Museum of Photography Santa Mónica Getty Research Institute; Southwest Museum Los Ángeles, California; John Hay Library Brown University, Richmond; Latin American Library Tulane University, New Orleans; Library of Congress División of Prints and Photographs, National Geographic Society y Natural History Museum Smithsonian Institution, Washington, DC; Museum of New México Santa Fe; Darrah Collection Pattee Library State University, Pennsylvania; y University Library (American Geographical Society Collection), University of Wisconsin, Milwaukee. Publicaciones archivísticas. Buck, Daniel: Pioneer Photography in Bolivia: Directory of Daguerreotypists & Photographers, 1840s-1930s (Copyright © 1999. http://ourworld. compuserve.com/homepages/dbuck/ 24.07.2007); “From Bolivia with love: postcards from the past” (South American Explorer, 1997, 50); “Los silenciosos fotógrafos del pasado boliviano. Ayer, imágenes modernas… hoy, tesoros de archivo” (Foto Bolivia, 1995, 1, Parte I: No. 5, 42-45; Parte II: No. 5, 37-39). Fuente: Información intercambiada en agosto de 2010.

BUENO, BUENAVENTURA Revolucionario; acompañó a Pedro Domingo Murillo en la insurrección del 16 de julio de 1809. El 21 de julio de 1809, en unión de G. Lanza* y J. Catacora* promovió la incineración de los papeles crediticios del Archivo del fisco, que se llevó a efecto mediante autorización del Cabildo; pero solicitó también que los beneficiarios concurrieran con sus óbolos para el progreso de la causa de la independencia. Fuente: Aranzáes, 1915.

BUSCH BECERRA, GERMÁN

(San Javier, Santa Cruz, 23 de marzo de 1904. † La Paz, 23 de agosto de 1939) Militar, alcanzó el grado de Teniente Coronel. A. Lijerón* sostiene que nació en El Carmen (Beni). Se crió en Trinidad (Beni). Exploró el territorio del Chaco antes de la Guerra del Chaco (1932-1935). Aguerrido combatiente en esa contienda con

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Paraguay, participó en la célebre batalla de Boquerón. Llevó un diario de campaña que fue publicado póstumamente. Tomó el poder en 1937 mediante golpe de Estado contra el presidente David Toro, su protector. Durante su gobierno se firmó la paz definitiva con el Paraguay (1938), creó el Departamento Pando (1938) y convocó a la Asamblea Constituyente que sancionó la Constitución social de 1938, que incorporó en su texto el Régimen Económico-financiero del Estado, con lo que determinó el control sobre la riqueza del subsuelo y el control del Estado sobre la exportación de materias primas, así como la preeminencia de la legislación nacional en los negocios de las empresas privadas en territorio nacional. Se declaró Dictador en 1939 luego de imponer la entrega al Estado del 100 por ciento de las divisas por la exportación de estaño. Incorporó por primera vez, en el texto constitucional, la obligación del Estado de preservar su riqueza cultural y la defensa y salvaguarda del patrimonio histórico de la Nación. Paradójicamente ese mismo año, ante la petición de las autoridades del Comando General de la Policía Nacional, autorizó la incineración del Archivo de la Policía Nacional, desde 1899 hasta 1928. El presidente Busch apareció muerto, aparentemente acabó su existencia por mano propia. Fuente: Lijerón; 2011: 19-30; Oporto, 2006: 365.

BUSTILLOS ESPINOZA, EVELÍN MARÍA (La Paz, 26 de junio de 1980)

Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en el 2º Curso de Digitalización de Documentos (2009), seminarios: Los Archivos como Fuente de Investigación Histórica boliviana (2009), Una Visión moderna de las Bibliotecas, Archivos y Museos (2010), Taller de Encuadernación y Restauración (2010), Curso de especialización en organización de Documentos en Archivo Central (2011). Fue Coordinadora del I Curso de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos (2011). Trabajó esporádicamente en los Archivos Militares de las Fuerzas Armadas de la Nación, Corporación Minera de Bolivia*, Urudata Xeroxbol y Dipex Ltda., en el Proyecto de Digitalización de la Corte Nacional Electoral de La Paz y Potosí. En el Archivo de La Paz* trabajó como pasante en el Proyecto de digitalización de Padrones Revisitarios; y fue Coordinadora del Área de digitalización de fotografías de la colección histórica. Desde 2011 trabaja en el Archivo de la Aduana Nacional de Bolivia. Fuente: CV.

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C CABRERA ROMERO, SINFOROSO

(Quime, Provincia Inquisivi, La Paz, 18 de julio de 1923. † La Paz, 30 de enero de 2003) Dirigente sindical minero, político, notable orador. En el pasado perteneció al Partido Obrero Revolucionario y luego ingresó al Movimiento Nacionalista Revolucionario, donde ocupó una posición de izquierda, para recalar al final de su existencia en la derecha del “Gonismo” (fracción empresarial del MNR). Era uno de los dirigentes más destacados de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, por su sólida formación ideológica. Fue designado Director obrero en COMIBOL*, tomando el control social de la empresa con el derecho a veto. Autor de La burocracia estrangula a COMIBOL y Yo vi Moscú (crítica a la burocracia soviética). Fue marginado de la FSTMB pero más tarde apareció timoneando el sindicato de la oficina central de COMIBOL en La Paz. Llegó a ser Ministro de Minería (1985-1986) durante el cuarto gobierno de V. Paz*, ya afincado en el neoliberalismo. Reconocido por su labor pionera en la organización de archivos de las luchas sociales de Bolivia, organizó un archivo personal extraordinario, para lo cual tuvo que remodelar su vivienda en el barrio de Miraflores (La Paz) que le había adjudicado el Consejo Nacional de Vivienda Minera, destinando amplios espacios, incluyendo un subsuelo (como medida preventiva ante los embates de las dictaduras), en los que instaló los documentos de su archivo para accesibilizarlos a los estudiosos, cosa por demás notable. J. Strengers*, a comienzos de 1980, documentó con los papeles de ese repositorio su tesis doctoral La Asamblea Popular, Bolivia, 1971, quien habiendo recorrido casi todos los archivos y periódicos del país, quedó admirado por la riqueza documental que encontró en esa casa, como señala E. Ramírez*. S. Cabrera también se preocupó por organizar el Archivo de la COMIBOL, cuando en la década de los 90’s fue designado Subgerente de Relaciones Industriales, tuvo la iniciativa de acopiar en Oruro toda la documentación relacionada con el personal de la COMIBOL, aunque con ese curioso método hubiese trastocado los sacrosantos principios archivísticos universales. Fuente: Ramírez S., 2003, 2 (6): 22-23; http://www.masas.nu (11.02.10).

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CÁCERES, JUAN MANUEL (La Paz, 9 de enero de 1760)

Fue educado por los jesuitas, lo que le permitió conocer el latín. Pasó su juventud en Caquiaviri, Pacajes. En 1781 combatió la sublevación de Tupaj Katari y en mérito a ese hecho fue designado Teniente Capitán de la Compañía de Dragones de su provincia. Luego de la rebelión fue encargado de cobrar los “rezagos de tributos del tercio de navidad” correspondientes a 1780. Se le otorgó el cargo de Escribano real entre 1789 a 1801, en Caquiaviri. En 1799 pagó la fianza para liberar al cacique Nicolás Condori, de Santiago de Machaca, que había sido apresado por el Dr. Joaquín de la Riva, Subdelegado de Pacajes. En 1809 abrazó la causa patriota. Apoyado por Ramón Rodríguez tomó la torre de la Catedral para convocar al pueblo. Fue designado Escribano de la Junta Tuitiva con la obligación de llevar su archivo, junto al fedatario J. G. Chávez de Peñaloza*. La Junta revolucionaria le ordenó “organizar y levantar a los indios de San Pedro, Santa Bárbara y San Sebastián”. Controló con destreza el flujo de correspondencia gracias a indios guías y chasquis de Achocalla, quienes le informaron que el Obispo Remigio La Santa y Ortega y el Gobernador Dávila conspiraban “a favor de Carlota del Brasil” y “habían entablado correspondencia entre sí por (correos) extraordinarios, que entraban a esta ciudad de deshoras de la noche sin tocar corneta, encargados de que no parasen ni una hora a fin de que no hablasen con nadie”. Su accionar fue admirable pues el 29 de julio, con la aprobación de Pedro Domingo Murillo, organizó la Compañía de Milicia de Escribanos del que fue Capitán, apoyado por el teniente J.C. Vargas*, el subteniente C. Vega* y el cura Agustino José Indalecio Salazar, quien fue capellán, secretario y director político de la guerrilla de Cáceres (1812). Gracias a su influjo y ascendencia entre las comunidades originarias, con el apoyo de Eusebio Condorena logró reunir y adoctrinar a más de 3000 indígenas de las provincias Pacajes y Omasuyos, puestos a órdenes del cacique de Laja y Achacachi, Luis Eustaquio Balboa. Salió con Castro y sufriendo la derrota en Chicaloma, logró huir y se internó a las montañas. Apresado por el ejército realista, fue liberado por J.J. Castelli, a quien escoltó de La Plata a La Paz, el 25 de mayo de 1811, y fue testigo de la proclama del revolucionario porteño en la que daba por concluida la mita y la servidumbre indígena y anunció la devolución de la tierra a los pueblos indígenas. Fue conocido en el mundo andino como “ídolo de la clase indígena”, “oráculo de los indios” y “General Restaurador de los Indios del Perú”. Redactó un “Plan de Reivindicaciones” de indios y mitayos, a quienes soliviantó en Oruro y Chuquisaca. Al ser derrotado en Guaqui (1811), salió para movilizar a los indios de Calamarca, Sicasica y Ayoayo contra los españoles “opresores de su patria”. J.M. de Goyeneche* vencedor en Sipesipe, viendo cortadas sus comunicaciones destacó una división de 1200 hombres al mando de Lombera, al que Cáceres y un formidable ejército de indios logró sorprender en altas horas de la noche en Sicasica cayéndoles de improviso y con tal fuerza que alcanzó una victoria de la que sólo salvaron la vida Lombera, su capellán y siete oficiales. En 1814, entró en contacto con la guerrilla de Manuel Ascensio Padilla, luego de lo cual se pierde su rastro. Fuente: Aranzáes, 1915: 770, 796; Arze, 1985: 111; Arze Aguirre, 1979; Barnadas, 2002, I: 398; Choque, 2009; Money, 1977: 29-31; Money 1984: 43-44; Solíz, 2010.

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CÁCERES BILBAO, PÍO

(Chulumani, Sud Yungas, La Paz, 11 de julio de 1881.) Se graduó en 1898 en el Colegio Seminario de La Paz, donde estudió con una beca. Escribió muy joven en El Seminarista, y más tarde fue reportero de El Comercio de Bolivia (fundado en 1899), pasó luego a El Diario, El Comercio, El Tiempo, La Tarde y El Fígaro. Fundó la revista literaria universitaria Ciencias y Letras. Fue redactor de la revista Bolivia Ilustrada, y director fundador de los semanarios El Pueblo y Papel y Tinta. Estudió en la Facultad Libre de Derecho, abierta por Daniel Sánchez Bustamante, en 1901. Ingresó como Redactor de la Cámara de Diputados por concurso, y por ello responsable del Archivo Legislativo de Actas de las sesiones públicas. En 1902 el Senado lo convocó para cubrir la interpelación interpuesta contra el gabinete del Gral. J.M. Pando*, por los senadores Vásquez, Berríos, Ramírez, Cainzo. En 1906 fue incorporado oficialmente como Redactor del Senado ascendiendo a Jefe de Redacción. En 1912 modernizó el sistema de redacción de actas, estableciendo el servicio taquigráfico conjuntamente con el jefe de Taquigrafía Eduardo Belmonte Valdivia, para tomar las actas de sesiones con exactitud, sistema que años más tarde fue adoptado también por la Cámara de Diputados. Escribió una edición comentada y concordada de la Constitución Política del Estado (1904), pero su obra mayor es El Senado Nacional de Bolivia. Bosquejo histórico parlamentario 1825-1925, y un libro inédito Los partidos políticos en Bolivia desde 1880. Fuente: Lecca, 1929: 71-74.

CAHUAYA YAPU, ELÍAS (La Paz, 27 de abril de 1954)

Profesor del área urbana de La Paz. Su experiencia laboral en archivos se basa en el Curso taller de Archivo impartido por la Universidad Loyola, el Curso de Archivo del Instituto Líder de La Paz. Hizo también un curso de normalización y norma documental auspiciado por el Ministerio de Educación y otro sobre destrezas, técnicas administrativa y operativas de sistemas de administración y control gubernamental. Es Encargado del Archivo de la Dirección de Universidades del Ministerio de Educación, que custodia los registros y títulos en provisión nacional. Está bajo su responsabilidad la clasificación, ordenación y descripción de las series documentales, así como la gestión documental y préstamo interno de documentos. Fuente: CV.

CAJÍAS MONTAÑO, MARÍA ANTONIETA

(La Paz, 5 de mayo de 1956) Archivóloga titulada por la UMSA. Hizo el Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos (UMSA, 2002); Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999). Asistió al Congreso Departamental de la Asociación de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996), III Congreso Nacional de Bibliotecología, Documentación, Archivística y Museología (Oruro, 2006). Fue docente de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* de esa universidad. Realizó trabajos de consultoría en organización de

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archivos, entre ellos en el Fondo de Vivienda Social en liquidación. Fue la primera en estudiar los archivos eclesiásticos de La Paz como tema de tesis de grado: Origen de los archivos eclesiásticos en La Paz. Catedral y Arzobispado (1999). Publicaciones archivísticas: “¿Cuál es el futuro de los profesionales en archivos?” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 1997, 2 (2): 29-30); “La destrucción del papel en el archivo” Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 1997, 2 (2): 31-33); “El papel como soporte de información” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 1998, 3 (3-4); Origen de los archivos eclesiásticos en La Paz. Catedral y Arzobispado (XIII Reunión Anual de Etnología, I, 2000: 173-182); “La valoración del documento en los archivos y reflexión sobre el término valor”, con Jorge Veizaga (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información), 2002, 7 (10): 81-86); “Memoria del Congreso Internacional de Bibliotecarios, Documentalistas y Archivistas por una red de información para Bolivia” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2002, 7 (10).

CAJÍAS DE LA VEGA, FERNANDO JULIO (La Paz, 28 de febrero de 1949)

Licenciado en Historia (UMSA); Doctor en Historia (Sevilla, España). Forma parte de la primera generación de historiadores profesionales que trabajaron siendo aún alumnos de A. Crespo* en la descripción de archivos, levantando los índices de los archivos de Corque y de la Catedral de Santa Cruz de la Sierra. Su tesis de licenciatura, La Provincia de Atacama, 1825-1842, fue publicada por el Instituto Boliviano de Cultura en 1975 (Segunda edición, 2012). Ha sido Decano y Vicerrector; es catedrático de la Carrera de Historia* y de Turismo de la UMSA. Fue Director del Instituto Boliviano de Cultura. Miembro del Movimiento de la Izquierda Revolucionaria, con el que fue Diputado, Prefecto del Departamento de La Paz, Concejal del Gobierno Municipal de La Paz y Embajador de Bolivia en España. Formó parte del “Ala mirista”, en alusión al partido político en el que militó, en la Carrera de Historia, que fue liderada por A. Crespo*. Durante el gobierno del presidente Evo Morales* fue designado Director de Investigaciones de la Dirección Estratégica de Reinvindicación Marítima (DIREMAR), en marzo de 2011, ocasión en la que mandó digitalizar más de 6000 documentos y publicaciones referidas al Litoral boliviano. En 1972, con J. Cortés* y P. Barbáchano* protagonizó la acción de rescate del valioso Archivo Histórico de la Casa “Suárez Hnos.”, trasladándolo desde Cachuela Esperanza hasta Guayaramerín, donde fue depositado en instalaciones del Palacio de la Cultura y de Hombres Notables del Beni. Para esa operación de salvataje contaron con el apoyo de la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz y la Universidad Técnica (hoy Autónoma) José Ballivián del Beni. Ambos realizaron en ese archivo las primeras tareas de organización y preservación. Publicaciones archivísticas: “El Archivo de Cachuela Esperanza” (Presencia, La Paz, 19 de diciembre de 1976: 17; Id. Boletín del Archivo de La Paz, 1979, 4 (6): 11-15); Archivo Histórico de la Iglesia de Concepción y San Javier de Chiquitos. Actual Vicariato Ñuflo de Chávez (La Paz: Instituto Boliviano de Cultura, 1977); “El Archivo Histórico de Cachuela Esperanza” (Presencia Segunda Sección, La Paz, 11 de diciembre de 1977: 1 y 4); “El Archivo Parroquial de Corque” (en Archivos de Oruro. La Paz, Centro de Investigaciones Históricas, 1978: 25-27; La Paz, CIH, 1982; Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (una guía preliminar). La Paz: cehila-ceprolai, 1985: 88); Archivo de la Catedral de Santa Cruz. Índice provisional, con

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Clara López (La Paz: Instituto Boliviano de Cultura, 1977; Tb. en Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la Iglesia en Bolivia (Una guía preliminar. La Paz, cehila-ceprolai, 1985: 105-128); “Introducción” a Cartas de Abaroa (La Paz, Gráfica Editores, 1987: XIII-XIX).

CALERNO ALIAGA, CLAUDIA EVELIN (La Paz, 30 de octubre de 1980)

Estudió las Carreras de Historia* y Bibliotecología*. Participó en el Seminario de Archivos, dictado por la Mrta. María Elena Porras Directora del Archivo Histórico de la Cancillería del Ecuador (2002); Gestión de la Documentación y Archivos (2005); Gestión y Administración de Archivo y Kardex (2008); I Curso de Digitalización de Documentos (2008); Taller de Archivos Sonoros (2010); Curso de Aprobación del Primer Curso de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos (2011) y Curso de especialización en organización de documentos en Archivo Central (2011). Fue Encargada del Archivo Administrativo de la Bancada del Movimiento Indígena Pachakuti (2003); Encuestadora del Censo Guía de Archivos de Oruro y Cochabamba para la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso* (2003); trabajó en la organización del Archivo Central de la Superintendencia de Pensiones Valores y Seguros (2004); ordenamiento del Archivo de la superintendencia de Electricidad (2007); realizó practicas de Archivo en la Sección Kardex de la carrera de Derecho de la UMSA (2008); Encargada de Biblioteca y Recepción de Documentos en la Academia Boliviana de la Historia (2007). Trabajó en el Archivo de La Paz* en la Inventariación del Fondo Corte Superior de Distrito de La Paz (2001), el Fondo Fotográfico (2005) y la Digitalización y Microfilmación de padrones del siglo XIX (2008), Descripción y Digitalización de la Colección Visual y Documental de “Mujeres Creando” (2010); Coordinadora de Área del Proyecto de Identificación, Descripción y Digitalización de Fotografías de la Colección Histórica (2011); y la Descripción y Digitalización de Fotografías de la Colección Última Hora (2011). Fuente: CV.

CALVIMONTES, DEMETRIO (Potosí)

Abogado (1857). Fue diputado por Potosí en la Asamblea que sancionó la Constitución de 1871. Formó durante el Congreso de 1880, el ala “guerrista” que buscaba la reivindicación del Litoral perdido en la Guerra del Pacífico (1879-1880) por la vía de las armas, junto a Nataniel Aguirre, Belisario Salinas, Fernando E. Guachalla, N. Acosta*, Eliodoro Villazón y Pastor Sainz. En consenso con los “pacifistas”, designaron una comisión que negoció el Pacto de Tregua con Chile, en 1884. En 1882 presentó al Congreso Nacional el proyecto de ley elaborado por instrucción del Gobierno para la organización de un repositorio que conserve ordenadamente los papeles oficiales del Gobierno de la Nación “relativos al problema del Chaco, para la explotación y estudio del establecimiento de puertos sobre el río Paraguay y para poner en orden y clasificar todos los documentos públicos de la República coleccionando en sección especial los que directa o indirectamente se refieren a límites nacionales, departamentales o provinciales”. Con los papeles de la época Colonial, con topes cronológicos fijados en 1537, se lo declaró Archivo General de la Nación (Ley de 18 de octubre de 1883). Fuente: Oporto, 2005: 9 (14).

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CALVITO, CALIXTO Monseñor. Siendo jefe del Archivo del Cabildo Eclesiástico de La Paz, en 1873, recibió la visita de monseñor Ambrosio Huerta, primer prelado de Puno, quien trataba de ubicar documentos coloniales referentes a su obispado. Al encontrarlos en el archivo eclesiástico, solicitó a monseñor Calvito su préstamo, ante lo cual “le permitieron llevarse cuanto documento original quiso”, respaldado en un simple recibo, con lo que se provocó serio detrimento de los archivos eclesiásticos de La Paz. Fuente: Barnadas, 1985: 12; Oporto, 2006: 147.

CALVO ARANA, RENÉ

(Sucre, 1882. † Sucre, 1948) Escritor y político. Tuvo a su cargo el Tesoro Departamental de Chuquisaca (1907), fue Prefecto de Potosí (1908-1909) y Delegado del Territorio Nacional de Colonias (1910), donde dirigió la reconquista del fortín “Illampu” que había tomado una fracción del ejército del Perú. Como propietario del cine “Miñón”, introdujo esta industria en la Capital. Fue Director del Archivo Nacional entre los años 1926 a 1929 y dirigió el Boletín y Catálogo del Archivo General de la Nación (Nº 64, 18 mar. 1926-Nº 93, 1 nov.1929). Fuente: Barnadas, 2002, I: 406-407; Calvo, 1999.

CALVO AYAVIRI, JORGE GUILLERMO (Potosí, 10 de enero de 1956)

Contador Público (UMSFX), con estudios de posgrado en Pensamiento Creativo Aplicado a la Tecnología Educativa (Universidad Andina Simón Bolívar, 2002) y en Ciencias del Desarrollo (Centro de Estudios de Postgrado e Investigación de la UMSA, 2003). Docente de las Carreras de Turismo, Historia e Idiomas de la UMSFX. Su formación archivística se debe a los cursos de Archivística y Preservación del Patrimonio Histórico Documental (1996), Formación Continua en Administración de Archivos y Bibliotecas (2008) y el Curso Internacional de Paleografía Hispanoamericana (Siglos XVI-XVIII) impartido por J. M. López Villalba* (2009). Asistió al Encuentro Nacional de Conservación y Restauración “Patrimonio, Cultura y Turismo” (2003), la Mesa de Archivística en el IV Congreso de Estudios Bolivianos (2006) y al III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2011). Fundador, con J. M. Barnadas* y María Luisa Suárez, del Grupo de Estudios Históricos (Sucre, 1996), que publicó el monumental Diccionario Histórico de Bolivia (2002), del que es coautor (con J. M. Barnadas) de 417 artículos (169 biográficos, 50 institucionales, 16 sobre movimientos indigenistas, 4 sobre guerras internacionales, 169 sobre publicaciones periódicas y 9 sobre diversa temática). Es autor de A 77 años de la Guerra del Chaco 1932-2009. Homenaje de una generación inmortal al Bicentenario de la Gesta Libertaria del 25 de Mayo de 1809-2009 (Sucre, Concejo Municipal de Sucre, 2009). Presentó ponencias sobre “Fuentes primarias para el estudio de las Parroquias del Departamento de Potosí. Siglos XVIXIX. La Parroquia Nuestra Señora de Belén de Tinkipaya” (IX Festival Internacional

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de la Cultura. Potosí, 2000); “Breve catálogo del Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos ‘Monseñor Taborga’, para el estudio de las Parroquias de Nor y Sud Chichas – Siglos XVI-XX” (III Encuentro Nacional de Sociedades Geográficas y de Historia, Tupiza, 2001); “Fondos Documentales y Bibliográficos en el Archivo-Biblioteca Mons. “Taborga” para el estudio de la música en Charcas. Siglos XVI-XX” (IV Congreso Internacional y V Nacional de Charanguistas. Sucre, 2003); “400 Años de la Presencia Franciscana en Tarija. Ecos de la Prensa Franciscana en Tarija –El Antoniano– 18961953” (Academia Boliviana de Historia Eclesiástica, Tarija, 2006); “Aportes para el estudio de los Franciscanos en Charcas, siglos XVI-XX. Breve Catálogo de la Orden Franciscana en base a la documentación primaria existente en el Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos Monseñor Taborga” (III Simposio Internacional de Archivos, Bibliotecas y Museos Franciscanos de América, Tarija, 2006); “El archivo histórico de la Escuela Nacional de Maestros ‘Mariscal Sucre’” (V Congreso Internacional de la Asociación de Estudios Bolivianos, 2009). Publicó, también, “Monseñor Julio García Quintanilla. Un insigne sacerdote del Clero Chuquisaqueño” (Revista de la Casa de la Libertad, 2000, Nº 7) y “la Casa presidencial de Don Gregorio Pacheco” (Fuentes, Nº 11: 16-19). Fue Director del Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos “Monseñor Miguel de los Santos Taborga” y Director del Centro Documental Eclesial Boliviano, Sucre (2001-2005). Fue asistente del Dr. Gastone Breccia, del Instituto Latino Americano de Roma (Italia), en la catalogación del Fondo Documental Impreso del Archivo y Biblioteca Arquidiocesanos “Monseñor Taborga” (1497-1825). Dirigió en un trabajo de consultoría la orgnización del Archivo Histórico de la Universidad Pedagógica Nacional ‘Mariscal Sucre’, en base a los fondos documentales, bibliográficos y hemerográficos de la célebre Escuela Nacional de Maestros (fundada el 6 de junio de 1909), obra que continuó G. Molina*. Asesoró documentalmente 30 estudios para investigadores de varios países. Publicaciones archivísticas: “El Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos ‘Monseñor Taborga’: Centro de estudios de la historia de la iglesia en Bolivia” (Anuario 1997, del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, 1997: 467-472); El Mariscal Braun a través de su epistolario (Antología), con Josep M. Barnadas (Cochabamba, 1998); Archivo y Biblioteca Arquidiocesanos “Monseñor Taborga”. Guía general preliminar, con Josep M. Barnadas (Madrid, Fundación Mapfre, 2006) “El Archivo Histórico de la Escuela Nacional de Maestros “Mariscal Sucre”: testimonios documentales de una gran obra educativa del siglo XX” (Calderón, Raúl y Aillón, Esther: Miradas retrospectivas a la educación pública en Bolivia. A cien años de la fundación de la Escuela Nacional de Maestros de Sucre (La Paz, Carrera de Historia, 2009: 13-19). Fuente: CV.

CALVO GALINDO, CARLOS

(5 de mayo de 1940. † La Paz, 3 de febrero de 2007) Graduado en Economía en la Universidad de Londres. A partir de 1966 ocupó diversos cargos dentro y fuera del país, tales como oficial de investigación en el Consejo Internacional del Estaño, asistente de gerencia del Consolidated Tin Smelters (Londres), y asistente de gerencia del Citybank (Londres-Nueva York), que lo nombró gerente de su agencia en La Paz, donde llegó a ser Presidente de los bancos Mercantil y de Inversión S.A. En 1975 fue Subsecretario del Ministerio de Planeamiento y Coordinación y Ministro de Finanzas. Fue diputado en 1982, ocasión en la que ocupó

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la presidencia de la Comisión Económica. Como empresario llegó a ser presidente de la Cámara Americana de Comercio en Bolivia (Amcham), de la Cámara de Comercio Boliviano-Argentina, de la Asociación de Bancos de Bolivia y de la Confederación de Empresarios de Bolivia, como lo fue de la Confederación de Empresarios Andinos y de la Asociación Latinoamericana de Integración. En 1978 fue designado presidente del directorio de la Sociedad Agrícola, Ganadera, Industrial y Comercial (SAGIC). En 1988 fue director y vicepresidente de la Sociedad Boliviana de Cemento y en 1991 primer vicepresidente del capítulo boliviano del Ombudsman (Defensor del Pueblo). Fundador del Instituto Boliviano de Genealogía en julio de 1995, su Primer Presidente (1995-1997) y Presidente Honorario, asimismo, de la Academia Boliviana de Ciencias Genealógicas de Bolivia el 31 de julio de 2002. Tuvo el gran logro de haber creado el Archivo Histórico de SAGIC*, en 1989, organizado por la historiadora E. Aillón*, constituyendo en poco tiempo el archivo histórico empresarial privado más importante de la República. Impulsó, apoyado por el Gerente General de SAGIC, Ernesto Reynaga, el ambicioso Proyecto de Investigación Histórica “500 Años de San Pedro Mártir”, recopilando con el apoyo de profesionales, documentos sobre esta región en el Archivo General de Indias* (María Antonia Triano), Archivo General de la Nación Argentina (Susana Lanzillotta), Archivo Nacional de Bolivia (C. Andrade* y G. Calvo*), Archivo Histórico de la Casa Nacional de Moneda* (Ángel Medinaceli), Archivo del Juzgado de Cinti y Archivo de la Notaría de Camargo (C. Andrade, Ingrid Lizárraga y P. Quisbert*). Apoyó la realización de un Censo de Archivos judiciales, notariales y parroquiales de Cinti (1994) con la colaboración de los potosinos S. Flores*, Telma González y Arturo González. La Arquitecta Mireya Muñoz y los arqueólogos Claudia Rivera, Marcos Michel y Sonia Alconini, levantaron estudios arquitectónicos y prehispánicos, que completaron la visión histórica a cargo de E. Aillón. En 1993, en mérito a su labor archivística, el Comité de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia* le confirió el certificado de reconocimiento por sus esfuerzos en la preservación del patrimonio documental de la Nación. Formó parte del Consejo Asesor de Cultura del Banco Central de Bolivia, conformado para asesorar al ente emisor en el tratamiento administrativo a cuatro centros culturales que dependían entonces del BCB (Casa de la Libertad*, Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, Casa Nacional de Moneda* y Museo Nacional de Etnografía y Folklore*), base de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia*, proyecto en el que se empeñó personalmente, habiendo sido electo presidente de su directorio (2002-2005). A su muerte, el destino de la documentación del Archivo Histórico de SAGIC es incierto. Fuente: Oporto, 1990; Informaciones Genealógicas, 2008: 42.

CALVO GÓMEZ, DANIEL

(Sucre, 1832. † La Paz, 1880) Abogado; poeta y político; profesor y Rector del Colegio “Junín” de Sucre. Fue sensible con el destino de la memoria histórica. Siendo Secretario privado del Mariscal A.J. de Sucre*, a raíz de su defenestración en el artero motín del 18 de abril de 1828, empujado por Casimiro Olañeta y los doctores de Charcas, recogió el Archivo Presidencial que había formado, trasladándolo a lugar seguro para evitar su

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destrucción. El archivo contenía los borradores, autógrafos y papeles particulares del fundador de Bolivia; oficios de los presidentes departamentales (prefectos) y otras autoridades; y el archivo completo del Ejército Unido Libertador que ocupó Charcas después de la Batalla de Ayacucho (9 de diciembre de 1824). Estos documentos fueron obsequiados a G.R. Moreno* en 1873. Actualmente se encuentran en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. Opositor al gobierno de Manuel I. Belzu, empuñó la pluma, desde El Amigo de la Verdad y El Porvenir, y las armas (1853) para derrocarlo; consecuentemente apoyó al gobierno de J.M. Linares*. Fue diputado en 1862 y 1871 y presidente de la Convención de 1880. Siendo Ministro de Justicia, Instrucción y Culto durante el gobierno de Adolfo Ballivián (1873-1876), se produjo la nefasta circunstancia que el palacio fuera ocupado por presos políticos, lo que escandalizó a G.R. Moreno quien pidió autorización para retirar los archivos coloniales y del Estado, entre ellos el que contenía la documentación histórica del Poder Judicial, que había sido arrojada “a granel al suelo de un cuarto húmedo y solitario del primer piso, donde permanecieron más de treinta años”, por lo que “mandó desbaratar esta pirámide, ya muy truncada y minada, haciendo trasladar sus escombros a la Biblioteca Nacional”. Posteriormente, los 5.000 expedientes fueron ordenados y catalogados por el bibliotecario F. d’Avis*. Fuente: Moreno, 1927: 70-79; Oporto, 2006: 117, 137.

CALZAVARINI GHINELLO, GIUSEPPE (P. LORENZO)

(Canaro, Rovigo, Italia, 27 de noviembre de 1939. † Cochabamba, 9 de febrero de 2012) Estudió secundaria en la Casa de Estudios de la Orden Franciscana en Florencia, Italia (1962). Licenciado en Teología (Universidad Pontificia Antonianum, Roma, 1967) y Sociología (Universidad de Lovaina, Bélgica), donde presentó su tesis La Teoría del Cambio Social y América Latina en F. Houtart (1971). Tiene un Diplomado en Semiótica y Lingüística en el Centro Internazionale di Ricerca Semiótica e Lingüística y un Doctorado en Sociología en la Universidad de Urbino, Italia (1973). Laboró en instituciones Italianas (1972-1973), desde donde pasó a Bolivia como profesor del seminario “Ideología y países en vías de desarrollo” en la Universidad Tomás Frías (Potosí, 1973); fue catedrático en la UMSS (1974-1976) y docente en el Instituto Superior de Estudios Teológicos ISET (1974-1977), Instituto de Estudios Sociales y Económicos (UMSS) 1975 y en la Universidad Católica Boliviana. A raíz del golpe de Estado de 1980, volvió a Italia donde enseñó en el Instituto Superior di Scienze Religiose de Urbino. En 1983 retornó a la cátedra en la UMSS, donde ocupó la Dirección del Instituto de Investigaciones de la Facultad de Humanidades y editó la revista Runaway (19871992). Fue también director de Cooperación Técnica y Estudios Aplicados, impulsando varios proyectos socio-económicos en favor de los campesinos. En 1993 fue enviado a Tarija donde fundó el Centro Eclesial de Documentación, ejerció la docencia en la Carrera de Psicología de la Universidad Autónoma Juan Misael Saracho (1994-1996), fue Director del Instituto Superior de Estudios Bolivianos; y docente de la Carrera de Comunicación Social de la Universidad Privada “San Bernardo de Tarija”. Entre 20002002 asesoró al grupo de investigadores del Programa de Investigación Estratégica de Bolivia, en el Proyecto de Migraciones en la Provincia Cercado de Tarija. El 2002 fue docente en el Taller de literatura del Oriente, en el curso de Maestría de Historia en la

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UMSA, e impartió un módulo en el Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos (UMSA). Desde 1984 escribió regularmente en Los Tiempos (Cochabamba), Presencia (La Paz), El País (Tarija) y El Deber (Santa Cruz). Miembro del Círculo de Escritores y Artistas de Tarija (1994), de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica (1995), Sociedad Boliviana de Historia (1997) y Academia Boliviana de Historia (2006). Impulsor de la Declaratoria del Templo de Tolomosa Grande como Monumento Histórico y Artístico de Tarija (1996). El Círculo de Escritores y Artistas de Tarija reconoció sus obras publicadas entre 1996 y 1997. Fue Premio Anual de Cultura “Octavio Campero Echazú” de la Alcaldía Municipal de Tarija (1997), recibió la distinción nacional “Dr. Gunnar Mendoza Loza” (Cámara Junior de Sucre, 2003), la Condecoración “Medalla Batalla de la Tablada en el Grado de Oro” (Consejo Municipal de la Ciudad de Tarija y la Provincia Cercado) y la Condecoración Heroína “Juana Azurduy de Padilla” (Gobierno Municipal de Sucre, 2007). Entre 2007 y 2010 organizó y dirigió la nueva catalogación de las bibliotecas y el Archivo Franciscano de Tarija*. Su producción bibliográfica cubre temas sociológicos, históricos y etnohistóricos, publicada en revistas italianas desde 1973 y bolivianas desde 1979. Es autor de Nación Chiriguana: grandeza y ocaso (Cochabamba, Los Amigos del Libro, 1980); Los Franciscanos a la hora de Bolivia (Cochabamba, Ed. Harold, 1990); editor del Álbum Fotográfico de las Misiones Franciscanas en la República de Bolivia-1898 (La Paz, Banco Central de Bolivia, 1995), y del manuscrito del P. Doroteo Giannecchini, Historia Natural, Etnografía, Geografía, Lingüística del Chaco Boliviano-1898 (Sucre, Imprenta Tupac Katari, 1996). Autor de Teología Narrativa: Relatos antropológicos de la Fe Popular en Bolivia (La Paz, Don Bosco, 1996), Celebremos la Eucaristía Meditaciones y Cantos Tradicionales de Tarija (Música del Prof. Fernando Arduz Ruíz, letra de su autoría); editor de Poética y Melodías Religiosas de Navidad y Viernes Santo (En las comunidades de Tomayapo, Yunchará y Pujsara, Dpto. de Tarija), (Texto policopiado) (1998), Música y Cantos Tradicionales de Tarija (con Arduz Ruiz, Tarija, 1999), Los Cimientos de Tarija (La Paz, 2000), boletín Tesis UMSS (1984-1987). Su obra mayor viene a ser Presencia franciscana y formación intercultural en el Sudeste de Bolivia (Documentos del Archivo Franciscano de Tarija, 1606-1936) IV centenario de la fundación del convento de nuestra señora de los Ángeles (Colegio de Propaganda Fide 17551936) de Tarija (1606-2006), publicada en ocasión del IV Centenario de la Fundación del Convento Franciscano de Tarija (2007); Breve Guía Histórica Artística y Cultural del Convento de San Francisco de Tarija (Tarija, Centro Eclesial de Documentación, 2006). Incursionó en video documental con temas culturales bolivianos. Publicaciones archivísticas. Editor de Giannecchini, Doroteo y Mascio, V.: Álbum fotográfico de las Misiones Franciscanas en la República de Bolivia, 1898 (La Paz-Sucre, BCB-ABNB, 1995); “Archivo y conjunto documental del Convento de San Francisco de Tarija” (T’inkazos, 2001, 10: 129-136); Presencia franciscana y formación intercultural en el Sudeste de Bolivia (Documentos del Archivo Franciscano de Tarija, 1606-1936) IV centenario de la fundación del convento de nuestra señora de los Ángeles (Colegio de Propaganda Fide 1755-1936) de Tarija (1606-2006), 7 Tomos (Tarija, Centro Eclesial de Documentación, 2007); “Presentación” en Guía de fuentes franciscanas en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (Sucre, ABNB, 1994); “Guía de Fuentes Franciscanas

en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia” (Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1994-1995. Sucre, 1995: 201-208); “Archivo de Tarija” (Diccionario Historico de Bolivia, Sucre, 2002: 171-172).

Fuente: Barnadas, 2007; Oporto, 2012:42-43.

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CALLISAYA CUENTAS, FELIX

(Cantuyo Collantaca, Provincia Los Andes, La Paz, 23 de junio de 1963) Estudió la Carrera de Historia* de la UMSA. Cursó el Primer Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos (2002); Diplomado en Educación Superior (2005); Diplomado en Ciencias Administrativas (2007). Trabajó en el Archivo de La Paz* como Investigador Auxiliar (1991-1992), fue Archivista del Banco Central de Bolivia (1988-1989). Participó del Cursillo de Archivos organizado por el Archivo de La Paz (1990); y en el Curso Taller de Gestión de la Documentación y Archivos, organizado por el Grupo Consultor en Negocios y Capacitación (2006). Actualmente trabaja como consultor en el Archivo del Tribunal Supremo Electoral. Fuente: CV.

CALLISAYA SÁNCHEZ, CÉSAR FELIPE (La Paz, 28 de febrero de 1974)

Estudió en la Carrera de Bibliotecología* (UMSA). Alumno destacado de la gestión 2005. Hizo un pasantía en el Archivo Jurídico del SEDUCA (2004), y trabajó en la organización del Archivo Central de la Alcaldía de La Paz (2005-2006), organización del Archivo Central de la Unidad de Posgrado de Medicina de la UMSA (2006), y en la creación del Archivo Central de Clientes de ENTEL (2007). Fuente: CV.

CALLIZAYA HINOJOSA, PEDRO (La Paz, 19 de Mayo de 1960)

Egresado de la Carrera de Historia* (UMSA). Hizo el Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos (2002). Miembro fundador de la Asociación de Profesionales Indígenas Qamayus (APIQ). Docente fundador de la Universidad Indígena Tawantinsuyu Ajlla-UTA (1999-2002); docente fundador de la Carrera de Historia en la Universidad Pública de El Alto UPEA; miembro fundador y posterior Presidente de la Asociación de Historiadores Indígenas “Apu Pachakamayu”; miembro fundador de la revista Realidades de Nuestra Historia; columnista de La Prensa (2007-2008). Su carrera archivística la inició como Auxiliar de Archivo en el Archivo de La Paz* (1985) bajo la Dirección de R. Choque*. Más tarde ingresó a trabajar a la División Documentos y Archivo de la UMSA como mensajero (1993), posteriormente ascendió a Técnico de Registros en la misma División (1998), hasta llegar al puesto de Encargado del Repositorio del Archivo Central (1999). En su trabajo historiográfico ha publicado Entre el crepúsculo y la claridad. El Amanecer de los primeros hombres del mundo Andino (Oruro, UTO, 2003); “La Sublevación de WaychoLawreano Machaca, 1956”, en: Revista Oh, Domingo, La Prensa (17 de diciembre de 2006). Perfeccionó sus conocimientos archivísticos asistiendo a congresos y seminarios, entre ellos el Cursillo de Archivos (1982); Curso de Organización de Centros Documentales (1992); Taller de Técnicas de Archivo y Microfilmación (1995), Curso de Kárdex Académico (1996); La Archivística y la Preservación del Patrimonio Histórico Documental (1996); Corrientes Actuales en los Museos Iberoamericanos;

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Unificación y Armonización de la Información (1997), Seminario sobre la Ley del Sistema Nacional de Información; Automatización de Archivos (1998), Reunión de Consulta Sobre Aplicación de la Norma Internacional de Descripción Archivística ISAD-G (2004); 1er. Taller Departamental sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006); Módulo de Gestión de Archivos en el Diplomado de Administración de Archivos en la Universidad Nuestra Señora de La Paz (2008). Es autor de “Una experiencia vivida de la inundación de diciembre de 1999” (2003, inédito).

CÁMARA, FRANCISCO DE Formó parte de la hueste de Alonso de Mendoza, vecino fundador de La Paz, fue designado por P. La Gasca* Escribano en el segundo cabildo que se realizó, siendo por ello el primero de la ciudad. En 1556 fue alcalde ordinario y un año más tarde, miembro de la Santa Hermandad. Fuente: Aranzáes, 1915: 166.

CAMBEROS BOLAÑOS, NORAH VIOLETA (Potosí, 19 de agosto de 1948)

Bibliotecóloga (Universidad de Chile). También estudió en la antigua Carrera de Servicio Social, sin concluirla. Magíster en Educación Superior (Universidad José Ballivián). Hizo sus prácticas profesionales en bibliotecas de Chile. A su retorno fue contratada como documentalista de la Biblioteca Central de la UMSA (1975) y docente interina (1976), luego titular (1980), de la Carrera de Bibliotecología*. En mayo de 1980 fue designada Directora interina de la Carrera de Bibliotecología, y aceptó su ratificación -en junio de 1981- por la intervención militar, lo que provocó, con la reconquista de la democracia y la autonomía en octubre de 1982, el veto académico, forzando su salida. En La Paz tuvo un importante desempeño organizando las bibliotecas de la Facultad de Derecho (1975), Ministerio de Industria y Comercio (1978), fue también Jefe de Biblioteca del Centro Cultural Brasileño (1978); trabajó en el Servicio y Fondo Nacional de Información para el Desarrollo (1979), donde llegó a ser Coordinadora Nacional de Proyectos. Logró generosa acogida de la Universidad Técnica del Beni José Ballivián en 1983, que la nombró Directora del Palacio de Cultura y Galería de Notables del Beni (con sede en la ciudad de Guayaramerín, fronteriza con el Brasil), donde se mantuvo hasta 1999. Allí fue custodio del Archivo Histórico de la Casa Suárez Hnos.* y Coordinadora del Comité Impulsor para la construcción del edificio destinado a ese repositorio. En esta ciudad conoció a los esposos Aldo Bravo y Hortensia Suárez*, quienes en su condición de presidentes vitalicios de la Casa de la Cultura, le brindaron su apoyo incondicional. Participó con R.V. Paz* en el salvataje del fondo judicial de Riberalta, que estaba condenado a su destrucción inminente, y por ello trasladado de manera reservada con el apoyo de una fracción militar a Guayaramerín, siendo incorporado al Archivo Histórico de la Casa Suárez. Destacó en varios eventos como el Seminario Nacional Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (1993), el Curso de Documentación para Países Hispanos, Laboratorio Aplicado a las AACR (Costa Rica), Workshop on Bibliographics Standars (Lima), Administración

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de Bibliotecas Público-Escolares y Universitarias (Medellín) y Curso Internacional en Documentación Agrícola (Bogotá). En Costa Rica ofreció conferencias sobre el Servicio y Fondo de Información y Documentación de Bolivia. Fue Asesora en Depósito Legal para Centro América (1981). En su larga y productiva estadía en Guayaramerín, trabajó con los jóvenes en promoción de lectura y representando a la Universidad José Ballivián en reuniones nacionales. Pasó luego a Puerto Suárez, ciudad fronteriza al sureste del país, donde ejerció diversas ocupaciones, entre ellas la de docente de la Normal Católica (desde el 2002). En mayo de 2010 expuso una síntesis de su trayectoria en la Tertulia Archivística realizada en la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional y asistió al III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2011). Fuente: CV; Varias comunicaciones (mayo a julio de 2010) y Entrevista personal.

CAMPERO LEYES, NARCISO

(Tarija, 29 de octubre de 1813. † Sucre, 11 de diciembre de 1896) Militar y político. Tuvo esmerada educación en la Academia Militar de Sain Cyr (Francia), cuando se desempeñaba como Secretario de la Legación boliviana en ese país. Militó en las filas de Mariano Melgarejo y fue testigo del asesinato del caudillo Manuel I. Belzu (1865). En 1871 fue Ministro de Guerra. Un año más tarde fue enviado a Europa como Ministro Plenipotenciario en Gran Bretaña, Francia e Italia. Durante la Guerra del Pacífico tuvo bajo su comando a la V División, la que deambuló por el sur del país sin ingresar a combate, hecho que motivó duras críticas de su actuación, por lo que posteriormente instruyó a su secretario, S. Campuzano*, a ordenar y publicar el archivo de la V División. Durante su permanencia en Gran Bretaña, en 1872, recibió instrucciones del Gobierno de Agustín Morales, para buscar en los archivos del Museo Británico y el Foreing Office, en Londres, “documentos que afianzaran los derechos de Bolivia -especialmente al Chaco- con respecto a los de la Argentina y al Paraguay”. Para este propósito, contrató los servicios del Sr. Gárgolas, “aficionado español a la búsqueda de papeles”, al parecer de manera infructuosa. Gárgolas se dirigió, luego, a España, donde logró obtener copias legalizadas de las Cédulas Reales de 1617 y 1618, “que separaban a Buenos Aires del Paraguay, y la Real Cédula de 1796 que aprobaba la fundación de la ciudad de Orán. Asimismo una certificación de los límites de la Audiencia de Charcas desde su fundación, y un documento sobre la erección de Salta en 1806”. A tiempo de retornar a Bolivia, mandó “suscribir al país para cinco colecciones” de la Colección de Documentos relativos al descubrimiento, conquista y colonización de las posesiones españolas en América y Oceanía, publicada por Pacheco, Cárdenas y Tórres de Mendoza entre 1864 y 1884, según J. Siles*. Como presidente de la República, promulgó la Ley de 18 de octubre de 1883, que instruye la creación del Archivo General de la Nación, en base al proyecto de Ley presentado en 1882 por el diputado D. Calvimontes*, con el que se logra resguardar los documentos producidos por la Real Audiencia de Charcas y los de la República, desde 1825. Fuente: Oporto, 2006; Siles Guevara, 1971; http://es.wikipedia.org (20.3.12).

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CAMPOS CASTILLO, CONCEPCIÓN

(Provincia Larecaja, La Paz, 8 de diciembre de 1986) Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). El Consejo Municipal de La Paz le otorgó un reconocimiento por su aporte en Bicentenario de la Revolución de 1809, como recopiladora de la memoria oral del Proyecto “Mi barrio cuenta, yo cuento con mi barrio” (2009). Fue expositora, junto a D. Troche* y Sthefany Tola, del tema “representaciones y visiones femeninas sobre las mujeres del siglo XVII al XIX en los estudios de principios del siglo XXI”, en el II Congreso Latinoamericano de Estudiantes de Historia en la Universidad de San Marcos de Lima, Perú (2010). Participó como expositora en el VI Encuentro Latinoamericano de Estudiantes de Historia en Concepción, Chile (2011). Trabajó como técnico en el Proyecto de Identificación, Descripción y Digitalización, de la Colección Fotográfica de Última Hora en el Archivo de La Paz* (2010-2011). Fue auxiliar de investigación en el Archivo Histórico de La Paz (2011). De allí, pasó como Asistente al Sistema de Archivo de Corporación Minera de Bolivia* (2012). Fuente: CV.

CAMPOS LORA, CAROLA

(Catavi, Provincia Bustillo, Potosí, 7 de septiembre de 1967) Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información Mención Archivología (UMSA). Máster en Gestión Documental y Administración de Archivos, por la Universidad Internacional de Andalucía sede La Rábida, Huelva, España (2009). Hizo el Diplomado en Educación Superior, UMSA (2002) y Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos, UMSA (2002). Recibió el diploma de reconocimiento por haber obtenido el mejor promedio en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Participó en la XV Escuela Iberoamericana de Archivos* en Alcalá de Henares-Madrid, España (2005). Realizó cursos de especialización en Aplicaciones administrativas en informática en ITEMCOM (1992) y el curso de Secretariado Ejecutivo en el Centro de Técnicas Secretarias (1987-1988). Prestó servicios como Secretaria Ejecutiva en la Alcaldía Municipal de La Paz, Cámara de Diputados, Corporación Minera de Bolivia* (donde culminó como Secretaria Ejecutiva de la Presidencia Ejecutiva), Instituto Nacional de Inversiones, Societé General de Surveillance (S.G.S.). Su trayectoria como facilitadora y docente es amplia. Impartió enseñanza en Organización de Archivos Administrativos y Bibliotecas, en la Universidad Nacional Siglo XX (2002), Instituto Moderno Tramma (2002-2005), Estudio Moreno Baldivieso (2003), COMIBOL (2003 adelante), Instituto de Desarrollo de Empresarios y Administradores (IDEA, 2004),Alcaldía Municipal de La Paz (2006), Business Consulting Group & Management (2006-2008). Fue Auxiliar de Docencia en las materias de Bibliografía y Catalogación; y Clasificación en la Carrera de Bibliotecología (2000-2001); docente en el Curso Preuniversitario de la Carrera de Historia (2005), docente de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información (2009), Coordinadora Académica y Facilitadora del Primer Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas en la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2011-2012). Ha participado, coordinado y organizado varios congresos, seminarios, cursos, paneles, encuentros, coloquios, tertulias, nacionales e internacionales, entre los que destacan: Reunión de

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Escuelas de Bibliotecología, Iquique, Chile (1998), Reunión Anual de Bibliotecología organizado por el Grupo Granma y Centro de Estudiantes de Bibliotecología y Ciencias de la Información (2000), Curso sobre “Búsquedas Bibliográficas en Internet”, PIEB (2001), Congreso Internacional de Bibliotecólogos, Documentalistas y Archivistas, Goethe Institute y Asociación de Bibliotecólogos y Documentalistas. La Paz-Bolivia (2001), Seminario: Biblioteca Virtual en el contexto de las nuevas tecnologías, Red Local de Información Socioeconómica (2001), El desarrollo de la Archivística en Bolivia: pasado, presente y futuro (2003), II Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2003), Jornadas Paceñas de Bibliotecología, Documentación y Archivística: experiencias e innovaciones en los Centros de información de La Paz (2004), Congreso Nacional de Bibliotecología organizado por el Colegio de Profesionales Bibliotecólogos, Cochabamba (2005), Congreso Internacional de Bibliotecólogos, Archivistas y Documentalistas (2006), Conservación preventiva y restauración para bibliotecas, Cedoal, Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (2007),Seminario Taller: Organización de Sistemas Archivísticos, Aduana Nacional de Bolivia, Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (2007), Seminario Internacional: destrucción de la Riqueza Documental y Archivística, Vicepresidencia de la República, Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional, Corporación Minera de Bolivia (2008), Seminario: El Rol de los Clubs de Libros en Bolivia , Feria Internacional del Libro, Unión Boliviana de Clubes de Libro (2008), Seminario Nacional sobre Ciencias de la Información “40 aniversario de la Asociación de Bibliotecarios de Oruro (2009), Curso Taller: Restauración de documentos de Archivo. Corporación Minera de Bolivia, Biblioteca y Archivo Nacionales de Bolivia (2009), Taller de conservación Preventiva de documentos, II Brigada Internacionalista de apoyo a Bibliotecas y Archivos de Bolivia, Sistema de Archivo y Centro de Documentación de la Corporación Minera de Bolivia (2009), Mesa Redonda: Legislación Archivística Boliviana, auspiciado por el Centro de Estudios para América Latina, Carrera de Historia de la UMSA, Corporación Minera de Bolivia, Archivo de La Paz, Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa, Oruro (2011), 3º Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos EBAM, Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional (2011), Curso Intensivo: Honores y Distinciones en la España Actual. Sus implicaciones genealógicas y heráldicas y el ejercicio del Derecho Premial en una monarquía parlamentaria, dictado por Francisco Manuel de las Heras y Borrero, organizado por la Delegación de la Unión Europea y la Academia Nacional de Ciencias Genealógicas y Heráldicas de Bolivia. La Paz-Bolivia (2011), Seminario: La praxis profesional del Archivista Boliviano, Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia, Goethe Institut (2011), Seminario: Organización y Conservación de Archivos, Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa (2012). Desde el 2004 es Encargada y Coordinadora de Procesos Técnicos del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (conformado por los Archivos de Gestión, Central, (La Paz) Intermedio, Histórico (El Alto), Archivos Regionales de Oruro, Potosí y las localidades de Catavi y Pulacayo); Sistema de Bibliotecas Especializadas, Centros de Documentación y Museos Mineros. Asimismo es Responsable del Programa de Capacitación Continua. Bajo su responsabilidad se han elaborado los instrumentos de organización archivística y normativa para ese Sistema, tales como el Reglamento

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Específico del Sistema de Archivo, Manual de Procedimientos para la Organización de Archivos Administrativos, Reglamento del Sistema de Servicios, Reglamento para la Reserva de la Documentación e Información. Ha participado bajo la dirección de E. Ramírez* en el salvataje de fondos documentales de Empresas Mineras de la Corporación Minera de Bolivia (Colquiri, Karachipampa, Pailaviri, Unificada). En Colquiri protagonizó el salvataje de la Biblioteca del campamento de Inca Lacaya, uno de los raros ejemplos de bibliotecas mineras creada por los sindicatos de trabajadores mineros en la época del 52. Esta colección constituye hoy la Biblioteca Patrimonial “Colquiri”, organizada por las bibliotecarias voluntarias colombianas Ana María Díaz y Sandra Ruiz, de la II Brigada Internacionalista* (2009). Fue Coeditora de la Guía General del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia (2006), Coeditora de la Revista Archivos Mineros del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia (2004), Coeditora de la Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, vol. 6 Nº 8 y del vol. 6 Nº 9, (2001). Miembro del Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información (CPCIB) y del Grupo de Archivistas Latinoamericanos (GAL), conformado por 14 países latinoamericanos, España y Nueva Guinea. Obtuvo el Diploma de Reconocimiento por la Vicepresidencia del Estado Plurinacional de Bolivia por su trabajo como voluntaria de la I Brigada Internacionalista de apoyo solidario a las Bibliotecas y Archivos (2008), Socia Honoraria del Club del Libro Franz Tamayo. Pertenece a las Redes INFOCC, EBAM, Biblio-Bolivia, Escuela de Archivos de España. Ha elaborado varios trabajos que permanecen inéditos: Organización del Sistema de Archivo Institucional de la Universidad Nacional “Siglo XX” (Proyecto de grado para la Licenciatura en la Carrera de Bibliotecología, 2002); Diagnóstico de los Archivos Administrativos de la Universidad Nacional Siglo XX (Tesina presentada al Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos, La Paz, UMSA, 2002). Está en prensa su tesis de Maestría Organización del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia (Huelva, España, Universidad Internacional de La Rábida, 2011). Publicaciones archivísticas: “El Control Social del Archivo sobre la Historia: Un ensayo sobre el Archivo Reprimido” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2001, Nº 8); “Deontología y Ética del profesional de la Información” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2001, Nº 9); “Archivos de la Minería Nacional: Una mirada retrospectiva” (Archivos Mineros, Boletín del Sistema de Archivo de la COMIBOL, 2004, N° 1); “¿Memoricidio en Bolivia?: A propósito de la Historia Universal de la Destrucción de los Libros” (Fuentes del Congreso, 2005, Nº 18); Guía General del Sistema de Archivo de la COMIBOL, en coautoría con Edgar Ramírez Santiesteban y Carlos Tenorio Levandro (La Paz, SACOMIBOL, 2006); Guía Práctica para la Organización de Archivos Administrativos: 22 esquemas y 26 directrices de trabajo para el Archivero Boliviano, en coautoría con Luís Oporto Ordóñez (La Paz, BCG, 2009); “Remembranzas de un sueño hecho realidad: El Archivo Histórico de la Minería Nacional” (Bocamina: Periódico de la minería nacionalizada del Estado Plurinacional de Bolivia, Nº 3 y 4 y La Época, 2011, Nº 457); “Enfoque de Sistemas en el Archivo Histórico de la Minería Boliviana: Fuente Para la Investigación Científica” (Boletín Archivalía, Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, 2012, León, N° 9). Fuente: CV.

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CAMPUZANO, SEVERINO

(11 de febrero de 1852. † 15 de noviembre de 1943) Abogado en la Universidad San Francisco Xavier (1876). Fue Munícipe en Antofagasta (1878). En 1879, impulsó la organización de una sociedad exclusivamente destinada a las viudas y huérfanos de la Guerra del Pacífico. Comisionado honorario para el estudio de las cuestiones internacionales con Chile, emergentes del Tratado de Tregua. Vocal de la Corte Superior de Oruro, Fiscal de Gobierno, Vocal de la Corte de La Paz, Prefecto de Oruro, Profesor de Derecho en la UMSA; fue Director de la Biblioteca del Congreso y Director General de Correos y Telégrafos, Rector de la Universidad de San Andrés, en 1922. En su condición de Secretario privado del Gral. N. Campero*, organizó la Quinta División durante el primer período de la Guerra del Pacífico. Por diversas razones esta División no pudo llegar oportunamente al campo de batalla, por lo que se la calificó como la “División errante”, lo que causó notorio desprestigio del Gral. Narciso Campero. Posteriormente dirigió al ejército boliviano en campaña y fue designado presidente en reemplazo del Gral. Hilarión Daza, defenestrado en plena campaña. Estando en la presidencia ordenó a Campuzano “compilar todos los documentos inéditos, de interés histórico, relativos a la organización y campaña de la Quinta División del Ejército”. Campuzano reunió en 1884 un archivo de documentos, copias fieles de los originales, que contiene “comunicaciones oficiales y particulares dirigidas al Comandante General de la División por el Capitán General y su Jefe de Estado Mayor, por el Ministro de Guerra, Prefectos, Subprefectos, jefes de cuerpo y autoridades subalternas, así como las contestaciones respectivas. Contiene también otras comunicaciones (…) de jefes peruanos de alta graduación y de muchos individuos particulares que residían en el sur y centro de la república” y abarcan desde el 13 de marzo de 1879 hasta el 21 de marzo de 1880. La compilación fue publicada en 1884. Fuente: Campuzano, 1884; Salinas, 1967: 342.

CANEDO CÁCERES, CRISTINA (La Paz, 14 de junio de 1949)

Historiadora (UMSA). Restauradora de bienes muebles, con estudios en la Escuela de Bellas Artes (La Paz) y en el Centro Regional de Restauración de Bienes Culturales (Instituto Nacional de Cultura del Perú). Participó en el curso de Organización de Centros de Documentación (Torino, Italia) y en la XI Escuela de Archivos para Iberoamérica* (Madrid, España, 2001). Asistió al Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996). Hizo el Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos (UMSA, 2002); Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999). Fue Jefe del Departamento de Correspondencia y Archivo de la Corte Nacional Electoral y del Archivo Central del Órgano Electoral (1997-2011). Su tesis de licenciatura analizó Los procesos electorales bajo el régimen del Movimiento Nacionalista Revolucionario (1956, 1960, 1964), elaborado en base a archivos hemerográficos, pues la Corte Nacional Electoral carece de archivos de procesos electorales anteriores a 1991. Ha elaborado un Diagnóstico de los archivos de la Corte Nacional Electoral y de las Cortes Departamentales; y un Plan de organización de los Archivos de la CNE (inéditos). En enero del 2012, fue

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invitada por el director de la Dirección General de Identificación Personal para hacerse cargo de sus archivos, razón por la que dejó el Archivo del Órgano Electoral. Fuente: CV.

CANO LEAÑO, RODEL

(Telamayu, Potosí, 28 de marzo de 1963) Ingresó como Cadete a la Academia Nacional de Policías el 3 de febrero de 1986. Egresó con el grado de Subteniente Profesional el 20 de noviembre de 1989. Hizo el curso de postgrado  de Especialización de Investigación de Delitos (Escuela Superior de Policías, 1997). Alcanzó el Grado de Mayor en la Orden General No. 01/06 del Comando General de la Policía Nacional. Fue condecorado con la Orden de la Policía Boliviana “Al Mérito” en el grado de “Al Valor” (R. 131/02 Comando General de la Policía Nacional); al “Mérito” en el grado de “Caballero” (R. 480/06 Comando General de la Policía Nacional), “A La Constancia Policial” por 10 años de servicios prestados a la Institución Policial (R. 502/04 Consejo de la Orden de la Policía Nacional). Igualmente ostenta el “Emblema de Oro” (R. 01/97 Centro Especial de Investigaciones Policiales); “Insignia de Oro” (R. 04/98 Centro Nacional Antiterrorismo); condecoración “Al Valor” (Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico, 2003); “Emblema de Oro” (R. 01/03 Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico). Fue Jefe de la División de Registros y Archivo de Generales, Jefes y Oficiales y Personal Administrativo de la Policía Nacional, dependiente de la Dirección Nacional de Personal (Departamento de Escalafón  Único de la Policía Nacional). Junto a S. Aparicio* es uno de los primeros oficiales de la Policía Nacional que ha realizado cursos especializados en Archivística. Organizó, con el Comando General de la Policía Nacional y la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso*, el Curso sobre Conservación de Materiales de Archivo (2007) y el Curso sobre la Base legal de los Archivos Históricos en las Instituciones Públicas (2009), impartidos por L. Oporto*, J. Ozuna* y L. Zeballos*, como parte del Programa Permanente de Asistencia Técnica* de la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional*. Fuente: CV.

CANTUTA GUTIÉRREZ, JESICA LESLIE (La Paz, 2 de octubre de 1986)

Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Fue pasante en el Archivo de La Paz* (2006 y 2007). Hizo pasantía de Archivo en el Instituto Nacional de Reforma Agraria (2006). Archivista en el Archivo Histórico Militar del Comando en Jefe de Estado Mayor (2007). Trabajó en el Archivo de La Paz en el proyecto de microfilmación y digitalización de padrones del siglo XIX (2008), consultora en el proyecto de identificación y descripción de archivos del siglo XX en el Archivo de La Paz (2010). Trabajó como asistente del Sistema de Archivo de la Comibol* (2011). Ha publicado con Carol Flavia Cantuta: “Warisata, piedra fundamental para la liberación indígena”, en Anuario de Investigación de la Carrera de Historia (2009); “La importancia de la conservación en la Biblioteca. Lineamientos para una conservación eficaz”

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(Boletín del Archivo de La Paz) y “La Biblioteca patrimonial de Guillermo Lora”, con L. Oporto*, Adriana Mercado y Richard Quispe (Fuentes, 2010, 7). Fuente: CV.

CAÑETE Y DOMÍNGUEZ, PEDRO VICENTE

(Asunción, Paraguay, 22 de enero de 1754. † Potosí, 23 de enero de 1816) Estudió Filosofía en Córdoba (Tucumán); fue condiscípulo de Gregorio Funes (luego Dean de la Catedral y destacado miembro de la Junta Grande de 1811). Estudió Teología y Leyes en la Real Universidad de San Felipe de Santiago de Chile, donde juró como Abogado (1776). Un año más tarde fue asesor general y auditor de guerra del primer virrey de Buenos Aires, Pedro de Cevallos. Miembro del Tribunal de la Real Hacienda, Juez eclesiástico, Juez del Tribunal de la Santa Cruzada y Síndico Procurador General. En 1781 fue designado Teniente Asesor Letrado del Gobierno del Paraguay y enviado con el mismo cargo a la Intendencia de Potosí (1784), donde fue consejero del primer intendente Juan del Pino Manrique de Lara y de su sucesor F. de Paula Sanz*. Abogó por la reforma y revitalización del sistema de mita y la disposición de mejoras en la técnica minera, especialmente en el uso de azogue (mercurio). Con ese objeto redactó su obra Ordenanzas de Minería, y el Código Carolino de Ordenanzas Reales de las Minas de Potosí y demás provincias del Río de la Plata. En 1793 replicó al Discurso sobre la mita de Potosí y apuntamiento para la reforma del Reino de España e Indias de Victorian de Villava, fiscal de la Audiencia de Charcas y miembro de la Academia Carolina, quien denunció ese oprobioso sistema laboral. Se trasladó a La Plata, donde fue asesor y secretario del gobernador. Al producirse los sucesos de la Revolución de mayo de 1810 en Buenos Aires, abrazó la causa realista y con el apoyo de Goyeneche* fue designado Fiscal de la Audiencia de Charcas, donde publicó un pequeño libro titulado El clamor de la lealtad americana en defensa de la legitimidad del Supremo Concejo de Regencia, contra los atentados de la Junta Gubernativa de Buenos Aires. En 1813 perdió todos sus bienes (560.000 reales de plata). En 1814 fue nombrado rector de la Real Academia Carolina, donde los graduados eran ejercitados en leyes para prepararse a fin de trabajar ante o con la Audiencia. Gran conocedor de los documentos de la Casa de la Moneda, los utilizó en 1787 para escribir la Guía histórica, geográfica, física, política, civil y legal del Gobierno e Intendencia de la Provincia de Potosí, “con la finalidad de mejorar la administración colonial para evitar el surgimiento de la causa independentista”. Tuvo en su poder los dos primeros y perdidos tomos del Libro de Acuerdos del Cabildo (1561-1574), de los que levantó un extracto o resumen, con lo que vino a llenar un vacío documental. Según explica G. Mendoza* refiere al “periodo coincidente con la transición entre la primera fase y la segunda del trabajo minero, cuando se había agotado la tacana (mineral que podía tratarse directamente por la fundición en las huayras y hornos indígenas) y comenzaba la explotación de otras (sic) minerales de plata por el beneficio del azogue”. Los originales de este extracto formaron parte de su colección pero luego fueron a parar a destino desconocido. Cañete también revisó materiales desmembrados de las series de cédulas reales y provisiones vicereales (referidas a Cajas Reales) que incrementaron su valiosa colección. Luego cayeron en poder de S. Velasco Flor* y

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E.O. Rück*. El historiador L. Hanke* logró obtener copia microfílmica de su obra que luego entregó al Archivo Nacional de Bolivia. La Guía de Cañete fue publicada por A. Alba* en la Colección de la Cultura Boliviana de Editorial Potosí en 1952. Fuente: Mendoza, 1954; Mendoza, 1980: 59, 64-65; Soria Galvarro, 2010: C9.

CAPITULACIÓN DE AYACUCHO, ACTA DE LA Una copia original de este histórico documento pertenecía inicialmente a la colección de J.R. Gutiérrez*, biblioteca adquirida por el Estado hacia 1926 y entregada a la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz. Una comisión del Senado revisó la colección y encontró varios documentos originales de excepcional valor, entre ellos el Acta de Capitulación de Ayacucho, el Libro mayor de Sesiones de la Asamblea de Representantes del Alto Perú, una carta enviada por Antonio José de Sucre* a Olañeta, determinando que “estos documentos, por su importancia, debían permanecer en poder del Estado y, en octubre de 1932, los depositó en custodia [en las bóvedas] del Banco Central de Bolivia”. Refiere a la histórica rendición suscrita en el campo de Ayacucho, el 9 de diciembre de 1824, contenido en 18 cláusulas, en cuya 12°, se inserta el tratamiento relativo a los Archivos de las Provincias: ‘Don José Canterac, Teniente General de los Reales Ejércitos de S. M. C., Encargado del mando superior del Perú, por haber sido herido y prisionero en la batalla de este día el excelentísimo señor Virrey Don José de La Serna, habiendo oído a los señores generales y jefes que se reunieron después que, el ejército español, llenando en todos sentidos cuanto ha exigido la reputación de sus armas en la sangrienta jornada de Ayacucho y en toda la guerra del Perú, ha tenido que ceder el campo a las tropas independientes; y debiendo conciliar a un tiempo el honor a los restos de estas fuerzas, con la disminución de los males del país, he creído conveniente proponer y ajustar con el señor General de División de la República de Colombia, Antonio José de Sucre, Comandante en Jefe del Ejército Unido Libertador del Perú, las condiciones que contienen los artículos siguientes’: 12. Se enviarán jefes de los ejércitos español y unido libertador a las provincias unidas para que los unos reciban y los otros entreguen los archivos, almacenes, existencias y las tropas de las guarniciones. 12. Concedido; comprendiendo las mismas formalidades en la entrega del Callao. Las provincias estarán del todo entregadas a los jefes independientes en quince días, y los pueblos más lejanos en todo el presente mes. Fuente: Salinas, 1949, I: 273; Siles, 1974d: 11, 18; http://www.es.wikisource.org (25.4.2012)

CÁRDENAS ROMÁN, ELVIRA (Oruro, 2 de abril de 1941)

Contador General (Universidad Técnica de Oruro). Participó en los cursos del Centro de Formación Archivística de Córdoba (1974) con R. Arze* y C. Gutiérrez* y en la Escuela Nacional de Documentalistas de Madrid, España (1980), junto a R. Choque* y E.A. Valda*; Restauración de Libros y Documentos (Sucre; Unesco, Instituto Boliviano de Cultura y ABNB, 1979); Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (Universidad Andina-MUSEF, 1999). Empezó como

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Kardista de la Facultad de Economía, UMSA (1969-1970). Ha sido consultora de Naciones Unidas para organizar el Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1984-1985), la Organización de los Estados Americanos para el Censo de Archivos de Bolivia (1985), Organización Archivo de Clientes Banco BISA (1988), Organización y Automatización Archivo de Registro de Marcas y Patentes, Moreno Baldivieso (1994-1995), Organización Archivo Central del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (1995), organización del Centro de Documentación y Archivo de la Superintendencia de Valores (1997-1998); organización del Archivo Histórico Municipal de Oruro (2000-2001) y del Archivo Central del Fondo Nacional de Vivienda Social en Liquidación, FONVIS (2004-2005). Fue Directora del Archivo Central de la Universidad Técnica de Oruro (1975-1981), Directora de la Biblioteca y Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1985-1988, 1988-1989) y Jefa de Archivo del Senado Nacional (1995-1997). Su militancia con el Movimiento de la Izquierda Revolucionaria le permitió ser nominada Segunda Secretaria (1990) y adscrita a Asuntos Consulares, de la Embajada de Bolivia en Uruguay (1991); Asesora de la Comisión de Educación y Cultura de la Cámara de Diputados (19921994). Ha sido Instructora de los cursos de Implementación del Archivo Activo, Sucre (1983), Archivos Universitarios UMSA (1995), Taller de Capacitación para Oficiales de Registro Civil, en Poopó (2001) y Capacitación de Archivo de Gestión para el Personal de la Cooperativa de Teléfonos de Oruro (2001). Ha sido miembro de la Asociación de Bibliotecarios de Oruro, Asociación de Bibliotecarios de La Paz, Asociación de Archivistas ExBecarios de la O.E.A., Asociación de Archivistas de La Paz; Asociación de Trabajadores en Ciencias de la Información y de la Benemérita “Sociedad 10 de Febrero”. Su producción intelectual contempla, Cien Años de Historia del Club Oruro Royal, Co autora (1996), y Oruro en la Guerra del Chaco (2011). Asistió a reuniones nacionales, como la IV Reunión Nacional de la Sociedad Boliviana de Historia, Oruro (1979); I-II-IV Reunión Nacional de Archivistas, Sucre y Cochabamba (1979, 1982, 1985); Seminario Nacional Legislación, Políticas y Extrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (1993); Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996), de la que fue integrante de la directiva. A nivel internacional participó en el Seminario de Evaluación del Programa de Desarrollo de Archivos, auspiciado por la Organización de Estados Americanos y el Centro de Formación de Archiveros, Córdoba, Argentina (1986). Publicaciones archivísticas. Documentos para la historia de Oruro (1982); “El Archivo en la Organización Moderna” (Revista Universidad de la UTO, 1975, Nº 1); “La Archivalía como patrimonio nacional” (El Expreso, Oruro, 27 de abril de 1975: 2); “Hacia la Creación del Archivo Regional de Oruro” (El Expreso, 1980); “Títulos Nobilísimos de la Villa de San Felipe de Austria” (Semanario Extra, 1981), “Antecedentes para la creación del Archivo Histórico del Departamento de Oruro” (Hechos, boletín histórico. La Paz, 1982, 1: 20-24); “Creación del Archivo Histórico: Una Necesidad para Oruro” (El Diario, 1984); “Una necesidad de Oruro: organización del Archivo Histórico” (Presencia Segúnda Sección, La Paz, 11 de noviembre de 1984: 1); “Archivo de la Presidencia de la República de Bolivia” (Anuario Interamericano de Archivos, 1989, 13: 13-15); “Homenaje al archivista boliviano” (Presencia, La Paz, 20 de octubre de 1993: 2); “Homenaje a un gran archivista” (Anuario del ABNB 1994-1995, Sucre, 1995: 283289); “Homenaje al Archivo Nacional de Bolivia” (Presencia, La Paz, 20 de octubre de 1999); “Homenaje al Dr. Aurelio Tanodi, Director de la Escuela de Archiveros”, 2000); “Archivos

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de Oruro” (en Diccionario Histórico de Bolivia, 2002: 169-170); Los Archivos de Oruro” (Oruro, Heroica y Generosa. IV Centenario de Fundación de Oruro. Oruro, 2007: 129-132). Fuente: CV.

CARREÑO GONZÁLES, RONEL (Potosí, 15 de mayo de 1978)

Estudiante de la Carrera de Ingeniería de Sistemas de la Universidad Real (La Paz). Fue administrador de la Estación de Servicio “Guanay” (1998-2000), Auxiliar del Registro Civil de la Corte Nacional Electoral, Sala Provincias (2001-2002). El 2004 ingresa como Auxiliar de Archivo del Sistema de Archivo de la COMIBOL*. El 2008 es promovido a Técnico de Archivo y el 2010 a Referencista del Archivo Central. Desde el año 2004 participa en el programa de capacitación continua en el Sistema de Archivo de la COMIBOL que dirige C. Campos*. Hizo el Diplomado en Gestión Documental Integrada y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas del Estado, impartido por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (20112012). Fuente: CV.

CARREÑO SALGUEIRO, LILY IVONNE (Sucre, 23 de julio de 1975)

Licenciada en Economía, con Diplomado en Educación Superior. Trabajó en las áreas comercial y administrativa, como consultora en diferentes proyectos de instituciones públicas y privadas (1999-2003) y la docencia universitaria (2003-2009). Fue Jefe de Relaciones Internacionales de la UMSFX (2003-2006) y desde 2007 Jefa del Centro Bibliográfico, Documental, Histórico de la UMSFX de Chuquisaca*, en reemplazo de A. Fuentes*. En materia archivística se ha ido formando en cursos como el Taller básico de conservación preventiva y restauración del patrimonio documental (2007) y el Curso Internacional Avanzado de Paleografía siglos XVI- XVIII (2009). Editó 9 boletines históricos Nuestra Historia (2007-2010); y la Revista Personalidades destacadas de Nuestra Historia. “Homenaje a Don Valentín Abecia” (CBDH, 2009). Cesó en funciones el 2011. Fuente: CV.

CARRERA DE BIBLIOTECOLOGÍA Y CIENCIAS DE LA INFORMACIÓN DE LA UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN ANDRÉS Creada el 7 de diciembre de 1970 con el apoyo de la Organización de Estados Americanos*, a la cabeza del Prof. Julio Aguirre. Desarrolló sus actividades académicas en 1971, primero como una Carrera de formación de técnicos superiores, siendo la primera tesina defendida Producción intelectual en la UMSA (1980), por Eliana Asbún y Verónica Sánchez. Desde 1986 imparte la licenciatura, siendo la primera tesis defendida la de Teresa Zelaya, Información industrial para el sector empresarial y familiar manufacturero, en 1994. En 1979 editó la Revista Grama, Órgano de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información, dirigida por Constantino Tancara, Secretario

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Ejecutivo del Centro de Estudiantes, en la que figuran como docentes los archivistas Ana Schelejer, E. Pareja*, J. Vásquez* y L. Verástegui*. En 1988 se deja de lado Grama y surge la Revista de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información, en cuya nómina de docentes aparece J. Vásquez (a cargo de Reprografía) y L. Verástegui (Archivología y Museología). Desde la edición No. 2 (1997), cambió su epígrafe a Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, al 2011 llega al Nº 17. Imparte formación superior en las menciones de Bibliotecología, Archivología y Museología. Fuente: Aramayo, 2001: 6 (9); Flores, 2001: 6 (8).

CARRERA DE HISTORIA DE LA UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN ANDRÉS Fundada el 24 de enero de 1966 como Departamento de Historia dependiente de la Facultad de Filosofía y Letras de la UMSA. En 1971 fundó el Archivo de La Paz*, por iniciativa de historiadores como A. Crespo* y J.A. Ovando Sanz*, y los universitarios V. Vega*, R. Choque*, R. Arze*, F. Ballivián* y M. Money*. Fue la primera carrera universitaria que incorporó las materias de Paleografía, Fuentes para la Historia, Archivística General y Prácticas de Archivo, formando profesionales historiadores, especializados en archivos históricos. El 2003 en jornadas académicas sectoriales, aprobó la creación de la mención de Curaduría en Archivos Históricos, que no entró en vigencia. Desde 2002, mediante el Programa Especial de Titulación de Antiguos Egresados, implementó la modalidad de graduación de Proyectos de Archivo y Trabajo Dirigido en Archivos (titulándose de esa forma, hasta hoy, J. Viaña*, 2000; I. Villegas*, 2003; R. Ramírez*, 2006; y O. Mogro*, 2008). En 2008, por primera vez, aceptó la modalidad de graduación de trabajo dirigido en archivos, siendo la primera en obtener la licenciatura por esa modalidad, O. Mogro*. Edita la revista institucional Historia, publicada primero como hoja informativa (1977), luego como boletín (del cual se hizo una edición especial en 1997, desde el N° 1 (1977) al 19 (1987), a cargo de F. Chuquimia*, G. Molina* y H. Flores*), hasta alcanzar su actual formato de Revista (desde el No. 20). Desde 2007, junto con el Archivo de La Paz*, edita el Anuario de investigación Jiwasan Samaqawisa (‘nuestro caminar’). Desde la dirección de la Carrera, se apoyó la edición de la revista Realidades de la Historia, editado por H. Flores* y P. Callizaya*; al igual que Producción y Cultura, editado por el universitario Gonzalo Díaz de Oropeza y H-Aportes. Fuente: Calderón, 2006.

CARRERA DE TÉCNICO SUPERIOR EN BIBLIOTECOLOGÍA DE SANTA CRUZ DE LA SIERRA Fue creada en 2005, mediante convenio entre el Instituto “Josefina Bálsamo” y la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno de Santa Cruz de la Sierra. Después de tres años la universidad no amplió el convenio, lo que obligó a sus estudiantes a pasar a la Facultad Politécnica hasta la conclusión del Plan de Estudios. La Carrera estuvo a cargo de la Lic. Marianella Gonzáles de Calderón y Deyerli Sánchez de Romano (Licenciada en Información Científico Técnica). Entre los 35 egresados, 27 trabajan en bibliotecas de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Veterinaria 4, Ciencias Económicas 2, Tecnológica); universidades privadas (San

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Pablo 2, Tecnológica Privada UTEPSA, Domingo Savio 2, Privada Santa Cruz UPSA); Colegio y Seminario San Lorenzo (2); Pública Municipal (5); Organismos No Gubernamentales (Ayuda para el Campesino del Oriente Boliviano APCOB, Centro Boliviano Americano CBA) y un Organismo internacional (Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo AECID). Ocho trabajan en archivos (Reyna León, Operadora Logística y Custodia de Información de la Empresa RANSA; D. Moreno* y A. Otero* en el Archivo y Biblioteca de SAGUAPAC; Roxana Ramos en el Archivo de Avícola Sofía; María Rojas en el Archivo YPFB Refinación; Roxana Saldaña en el Archivo de Títulos de la UAGRM; Katherine Urquiola y Viviana Veliz en el Archivo de la Oficina Técnica del Plan Regulador). Fuente: Comunicación de D. Moreno (14.06.10)

CARRILLO CHURA, VIRGINIA (La Paz, 4 de febrero de 1980)

Estudió las carreras de Bibliotecología (2009) y Turismo (2000) de la UMSA. Ha realizado varios cursos, entre ellos, el Diplomado en Educación Superior (CEPIESUMSA). Trabajó en diferentes bibliotecas relacionadas con la gestión documental y en el Archivo Fotográfico de la misma universidad, la ONG Conservación Internacional, organizó la biblioteca de la Defensoría Nacional e Internacional del Niño. Actualmente trabaja como Técnico de Archivo en el Archivo Intermedio del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

CARTA DE LOS ARCHIVOS AMERICANOS Emanada de la Reunión Técnica sobre el Desarrollo de Archivos, realizada en Washington, D.C., del 14 al 28 de julio de 1972, convocada como parte de los objetivos del Programa Regional de Desarrollo Cultural, aprobado por el Consejo Interamericano para la Educación, la Ciencia y la Cultura (1969). Asistieron al evento diez archiveros de América, entre ellos Luis Alba Chacón de Umaña (Costa Rica), Oliver Holmes (EE. UU.), Guillermo Durand Flores (Perú), Elio Lodolini (Italia), A. Tanodi* (Argentina) y V. Cortés* (España). También asistió como miembro de la OEA, Javier Malagón, Carmen Rovira y Jorge Aguayo. En una nota de introducción, la Carta de los Archivos Americanos se refiere a la Archivalía como patrimonio nacional, y se la considera como “la fuente más importante para el conocimiento del pasado, que proporciona los fundamentos para la formación de la conciencia nacional”. Extractamos de la extensa declaración únicamente los títulos de los apartados y el texto completo de las recomendaciones (en sus dos niveles: a nivel nacional y a nivel interamericano), así como el resumen de las medidas técnicas. A. Tanodi* y V. Cortés*, recogieron los desafíos de la Carta y dieron lugar, cada uno, a concretizar los Centros Multinacionales de Formación, uno en Madrid, España; otro en Córdoba, Argentina. Consideraciones y Recomendaciones a nivel nacional 1. Generalidades (Por su extensión y considerandos, no se incluye en este texto. Nota del Editor)

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2. Legislación a) Que los Estados legislen para la eficaz conservación del patrimonio documental, tanto para la gestión gubernamental como para su uso por parte de los investigadores.

b) Esta legislación preverá la asistencia a los archivos y colecciones privados, cuando ellos lo requieran.

c) Que esta legislación tenga en cuenta todo el tesoro documental de la nación, es decir, debe incluir la salvaguarda de los documentos públicos y la supervisión de los privados.

d) Que en ellas se incluya reglamentación referente a la producción, trámite, archivo intermedio, ordenación, clasificación, catalogación y destino final de los documentos que produce y pueda producir la administración pública. e) Que la legislación regule la exportación y transferencia del patrimonio documental. 3. Creación de una unidad administrativa a) Que se establezca un órgano o unidad administrativa archivística central, que tenga como responsabilidad la vigilancia del patrimonio documental y el cumplimiento de la legislación vigente. b) Que dicha unidad esté autorizada para realizar el registro, inventario y acceso a los archivos públicos; el registro e inventario de los privados de interés nacional y facilitar el acceso a estos últimos. 4. Papel de los Archivos en el Desarrollo Integral de los países a) Considerar que la importancia de los archivos y del servicio de los archiveros rebasa, por tanto, el ámbito comúnmente conocido de la historia y la investigación, y que sirve en gran medida de base al desarrollo social, económico, político, cultural, científico y tecnológico de los pueblos. b) Que los Gobiernos fortalezcan y eleven la posición y la consideración debida a la función archivística, dignificando la profesión, puesto que el archivero no es sólo el que sirve de guía al administrador y al investigador, sino que también es el custodio de las actas públicas y el que da fe de ellas.

c) Que los Gobiernos den prioridad en los planes nacionales al apartado de los Archivos.

5. Ayuda a las Escuelas a) Hacer un estudio de las necesidades de las distintas escuelas, para que de una manera progresiva se vaya consiguiendo una mejora de las existentes y la creación de otras nuevas en aquellas áreas en que no las haya todavía. b) Que la ayuda a las mismas se considere en los niveles de expertos, profesores y becas.

c) Que los expertos puedan dedicar sus esfuerzos a los campos de la planificación, de los estudios de base o de la evaluación de los programas en marcha.

d) Que el envío de profesores pueda ser en cualquiera de las especialidades que se requiera. e) Que las becas puedan ser tanto para el perfeccionamiento del personal docente, profesional y técnico, como para estudiantes postgraduados.

f) Que para estos casos se consideren los programas que tienen preparados los organismos internacionales especializados en archivos y los de otras organizaciones regionales o nacionales, para solicitar de ellas la colaboración que pueda necesitarse.

g) Que la ayuda a las Escuelas comprenda también el equipo docente, de reprografía y de restauración.

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6. Subsidios en equipo a) Que los Gobiernos se preocupen de la construcción de edificios adecuados para la custodia y servicio de los documentos.

b) Que dichos edificios sean provistos de las instalaciones y equipo idóneos para colocación, organización, restauración y servicio de dichos documentos. 7. Publicaciones a) Que el Consejo Interamericano de Archivo CIDEA, pida a la autoridad máxima de los archivos en cada país, se encargue de la confección de la Guía de los Archiveros de dicho país, incluyendo tanto los de las instituciones públicas como privadas. b) Que el CIDEA pida a la autoridad máxima de los archivos en cada país la elaboración de un censo de todos los archivos, tanto los públicos como los privados.

c) Que CIDEA pida a la autoridad máxima de cada país la preparación de una bibliografía nacional sobre archivos.

d) Que los países con suficientes recursos económicos los publiquen por su cuenta, y los que carezcan de ello pidan la asistencia de instituciones como el Instituto Panamericano de Geografía e Historia, la Organización de los Estados Americanos, el Concejo Internacional de Archivos, la UNESCO, etc.

Consideraciones y recomendaciones a nivel Interamericano 1. Generalidades

(Por su extensión y considerandos, no se incluye en este texto. Nota del Editor) 2. Centro Multinacional de Formación de Archiveros a) Designar a la Escuela de Archiveros de la Universidad de Córdoba, Argentina, como Centro Multinacional de Formación de Archiveros. b) Que para cumplir las formalidades de formación profesional, se deben considerar por la Escuela: los planes de estudio, el material didáctico, la asistencia técnica y la planificación archivística nacional, regional e internacional.

c) Que en el plan de trabajo de la Escuela se debe incluir: la revisión de los planes de estudio para que llenen las necesidades de un centro interamericano; la preparación de un plan de estudios de un año a nivel de postgrado que sirva para conceder el diploma de archivero; la preparación de planes para cursos especiales de capacitación y perfeccionamiento y la preparación de cursos y cursillos nacionales de formación.

d) Que la Escuela dé preferencia en sus aulas en los dos primeros años a los profesores de las otras Escuelas. e) Que la Escuela preste asistencia técnica a la planificación nacional del país que lo requiera. 3. Consejo Interamericano de Archivos CIDEA

a) La conveniencia de un Consejo Interamericano de Archivos, CIDEA, para lo que se crea un comité organizador que se pondrá en contacto con las autoridades archivísticas y las asociaciones de archiveros de América, para definir sus criterios sobre el establecimiento de un grupo hemisférico o regional de archiveros, el cual podrá afiliarse al Consejo Interamericano de Archivos. b) Que la sede provisional de la Secretaría Ejecutiva de dicho órgano sea la Unidad Técnica de Bibliotecas, Bibliografía y Archivos de la Organización de los Estados Americanos.

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c) Que se autoricen los contactos preliminares con el Consejo Internacional de Archivos, para ver la posibilidad de una futura afiliación del CIDEA en calidad de rama regional.

4. Asistencia Técnica a) Que los gobiernos den prioridad a los archivos en sus planes nacionales de reforma y desarrollo. b) Que se formulen planes nacionales de Archivos que requieran la asistencia técnica y ésta sea solicitada donde y cuando convenga.

c) Que la asistencia se solicite para todos los aspectos de la labor archivística, planificación, formación, evaluación de programas y cursos, misiones de refuerzo y reuniones.

5. Recursos Económicos a) Que los gobiernos y las instituciones dediquen a los archivos en sus presupuestos un mayor monto de medios económicos.

b) Que esos medios puedan emplearse en proyectos regionales, nacionales o locales a medida que la situación lo recomiende. 6. Publicaciones

a) La publicación de un Boletín Interamericano de Archivos que sirva de vehículo de comunicación constante entre los archiveros americanos. b) Que el Centro Multinacional de Formación de Archiveros de Córdoba, Argentina, se encargue de esta tarea, siguiendo la nueva política de la OEA de responsabilizar a los países y los centros multinacionales del trabajo que es beneficioso para toda la comunidad americana.

c) Que el Centro Multinacional publique el material didáctico que utiliza para su labor docente.

d) Que el CIDEA organice un plan de colaboración para la publicación de manuales.

e) Que el CIDEA forme con las guías nacionales de archiveros, con los censos nacionales de archivos y con las bibliografías nacionales sobre archivos, las respectivas guías, censos y bibliografías interamericanas.

f) Que el CIDEA actúe como organismo coordinador de estos trabajos y se encargue de su difusión.

Resumen de las medidas técnicas



1. Es conveniente una planificación nacional, que considere la situación total de los archivos de cada país, en relación con las actividades administrativas técnicas, económicas, informativas, culturales e históricas, que son encaminadas al desarrollo integral de los respectivos pueblos. 2. En una segunda etapa, se necesitan estudios nacionales, regionales o departamentales y locales de la situación de los archivos y de las políticas de organización y servicio más eficaz. 3. Se necesita una vigilancia en el ciclo total del proceso archivístico: la producción, formación y conservación del tesoro documental. 4. Conviene establecer las normas y periodos de transferencia: los ingresos y los expurgos. 5. Provisión de los edificios, instalaciones y equipo necesarios para albergar la documentación en forma segura y capaz de dar el servicio que se requiera.

6. Preparación del personal adecuado en las oficinas productoras de la documentación y en los archivos.

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7. Confección de los instrumentos de información (guías, inventarios, catálogos) que faciliten el servicio y utilización de los documentos.

8. Establecer los contactos profesionales capaces de aunar esfuerzos, mejorar proyectos y propagar los trabajos que conduzcan a un mayor y más perfecto servicio de los archivos. 9. Fomentar la redacción, publicación y circulación de los instrumentos de información archivística y de manuales profesionales.

10. Establecer los contactos necesarios para poner en conexión los distintos programas de reproducción documental. Fuente: Boletín Interamericano de Archivos. Vol. I, 1974: 15-26, proporcionado gentilmente por la colega Norma Fenoglio.

CARVAJAL, FRANCISCO DE

(Rágama, Salamanca, España, 1464. † Jaquijaguana, cerca de Cuzco, Perú, 1548) Su verdadero nombre era Francisco López Gascón. Maestre de campo, temerario y cruel capitán de la hueste de Gonzalo Pizarro. Apodado “El Demonio de los Andes”, “amenazó de muerte a toda persona que intentase relatar los hechos que comprometía su intervención, porque entendió que eran más dignos de la ley del olvido que no de memoria ni perpetuidad”. Eso impidió que Agustín de Zarate escribiera una historia de esos hechos, pues se enteró que el “Demonio de los Andes”, había jurado matar al que se atreviese a registrar sus atroces hazañas. Garcilaso relata que estando en Roma, “como buen soldado que era, se mantuvo peleando hasta el fin de la lucha, mientras que otros se dedicaban al saqueo. A final vio que no quedaba ya nada de qué apropiarse en la ciudad y entonces se le ocurrió llevarse el copioso archivo de uno de los principales notarios de la ciudad, haciéndolo cargar sobre acémilas. El notario, que no imaginó que alguien podría robarle su archivo, valioso solo para él, hizo pesquisas para encontrarlo. Enterado Carvajal fue y le devolvió los documentos, a cambio de un rescate de más de mil ducados; con dicho dinero emprendió viaje al Nuevo Mundo”. Fuente: Condarco, 1967: 257; Oporto, 2006; Gumucio, 1989: 54; Garcilaso, 1972.

CASA DE LA LIBERTAD (SUCRE) Repositorio cultural dependiente de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia*. Bello edificio, construido antes de 1700 por la Compañía de Jesús para la Universidad de San Francisco Xavier, comprende un amplio claustro rodeado de galerías de una sola planta, bajo cubiertas que se apoyan en columnas de piedra granítica. Un gran portón de cedro nativo, tachonado de clavos de bronce con dos grandes aldabones se abre sobre la Plaza Mayor. Al fondo del claustro, enfrente del zaguán abovedado, se levanta la que fue capilla doméstica de la Universidad, destinada a Sala Mayor para la realización de los más importantes actos académicos. Allí exponían sus tesis los principales protagonistas de las revoluciones de 1809 (25 de Mayo en Chuquisaca, 16 de Julio en La Paz, 10 de Agosto en Quito, 25 de Mayo de 1810 en Buenos Aires). En julio de 1825 fue sede de la Asamblea de Representantes de las cinco provincias de Charcas, convocada por el Mariscal A. J. de Sucre* por decreto de 9 de febrero, para deliberar sobre el destino del país. Allí se firmó el Acta de

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Independencia el 6 de agosto de 1825, de la que es su custodio oficial desde 1909, año en que el Presidente de la República I. Montes*, entregó al Senador por Chuquisaca y Presidente de la Comisión Legislativa, Dr. Darío Gutiérrez, en conmemoración al Centenario del 25 de mayo de 1809. A raíz del sismo ocurrido en la ciudad de Sucre el año 1948, varias piezas históricas fueron depositadas en las bóvedas del Banco Nacional de Bolivia, entre ellas el Acta de la Independencia. En 1955 fue reinstalado el Museo Histórico, de la que forma parte el Acta de la Independencia y desde entonces se expone en una urna en el Salón de la Independencia. Hasta 1898 en ese recinto se reunió el Congreso Boliviano, se sancionó la primera constitución de Bolivia, redactada por el Libertador S. Bolívar*, así como las leyes fundamentales del nuevo Estado, y prestó juramento, como primer Presidente de la República el Mariscal A.J. Sucre*, como lo hicieron después otros mandatarios. Desde 1900 este edificio tricentenario pasó a ser un repositorio de reliquias históricas, de efigies de personajes que forjaron nuestra historia, de colecciones de documentos inéditos, de colecciones de periódicos, de folletos y de cientos de mapas y planos, algunos con tres siglos de antigüedad. Posee también una rica biblioteca especializada en historia y geografía que está a cargo de M. Plaza*. La mayor parte de estos bienes pertenece a la Sociedad Geográfica y de Historia “Sucre”, fundada en 1886, que durante varios decenios los fue adquiriendo y coleccionando. A esta prestigiosa y benemérita Sociedad le fue encomendada, por Decreto Supremo de 26 de octubre de 1939, la custodia y conservación de la Casa de la Libertad hasta 1974, año en que por Decreto Supremo de 25 de noviembre se encomendó al Banco Central de Bolivia la reparación y cuidado de la Casa y el sostenimiento de su personal. En 1983 por Decreto Supremo de 3 de agosto, elevado a rango de ley el 5 de febrero de 1986, se encomendó al Banco Central de Bolivia* la tuición y administración general de la citada Casa. El edificio en sí es el más importante monumento cívico-religioso de la Nación. Constituye una joya arquitectónica colonial y a la vez la más importante reliquia histórica. Tuvo como director a Joaquín Gantier*, nacido en Siporo (Potosí) pero considerado patricio chuquisaqueño. Ha desarrollado un museo histórico y una galería de Presidentes de Bolivia. Editó diez números de la revista Casa de la Libertad (Año 1-Nº 1, 1997 al Año 5-Nº 10, 2001). Fuente: http://www.casadelalibertad.org.bo (27.05.2010); Carta de Joaquín Gantier, 1970.

CASA NACIONAL DE MONEDA El Virrey F. de Toledo* ordenó la construcción de la primera Casa de Moneda en 1572, en la plaza del Regocijo (hoy “10 de noviembre”) por el alarife potosino Jerónimo de Leto, a un costo de 8.321 pesos, un tomín y 13 granos de plata. Ciento cincuenta años después, las autoridades españolas decidieron construir una nueva Casa de Moneda que dejase atrás las deformes “macuquinas” y proceda a la acuñación de reales de plata, columnarios o de busto. La obra estuvo a cargo del experimentado arquitecto Salvador de Villa (quien residía alternativamente en México y Lima). La construcción empezó en 1759 y concluyó en 1773. Ocupa una superficie de 7.570 metros cuadrados, con cinco patios y alrededor de doscientos ambientes. El costo de la construcción ascendió a 1.148.452 pesos y 6 reales. Durante la guerra de la independencia sus archivos fueron destruidos por las numerosas incursiones militares, incluyendo las

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de los ejércitos argentinos. Durante el gobierno de Melgajero, fue asaltada por la tropa y nuevamente sus papeles destruidos. En 1935 L. Hanke* la encontró como centro de reclutamiento. Hacia 1940, A. Alba*, presidente de la Sociedad de Geografía e Historia de Potosí, concentró en ella los documentos históricos de Potosí, que se hallaban dispersos. En 1969, mediante DS 08884 de 31 de julio de 1969, el gobierno de L.A. Siles* encomendó al Banco Central de Bolivia* su sostenimiento, siendo la primera institución que recibió ese tratamiento, a la que se sumó luego la Casa de la Libertad* y el Museo Nacional de Etnografía y Folklore*. Posteriormente ingresó en este régimen el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* y el Museo Nacional de Arte, que forman el conjunto de los repositorios culturales bajo la administración de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia*. La Casa de la Moneda sostiene al Archivo Histórico de Potosí* que custodia y administra los archivos coloniales de Potosí, sobre todo la serie de Cajas Reales. Fuente: http://www.casanacionaldemoneda.org.bo (27.05.2010); Gaceta Oficial de Bolivia Nº 9536.

CASTELLÓN DEL VILLAR, CARMEN ROSA (La Paz, 19 de junio de 1983)

Estudió el Bachillerato en Buenos Aires (Argentina). Es egresada de la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en el primer curso de Digitalización de Documentos de Archivo (2008) y en los talleres Departamentales de la “Ley del Sistema Nacional de Archivos” (2006 y 2007). Trabajó como consultora en la organización de los fondos documentales del Archivo Histórico de la Provincia Sud Chichas, con financiamiento del Programa para Bibliotecas y Archivos de la Universidad de Harvard (2004); de igual manera trabajó en la clasificación, ordenación y elaboración de la Guía General del Archivo Histórico de la Prefectura de Tarija con el Proyecto ADAI* de apoyo a los archivos iberoamericanos (2004). Fue pasante del Archivo de La Paz*, realizando la clasificación y descripción parcial del Fondo Prefectura de La Paz (2005- 2008). Fue empadronadora del ABNB en el Censo Guía de Archivos de los fondos de Hospitales, Parroquias, Notarias y Juzgados, levantando además un registro fotográfico minucioso (2006). Ingresó como Administradora de Archivo del Banco Ganadero en 2009, habiendo realizado la tarea de clasificación y control de la documentación comercial. Fuente: CV.

CASTILLO SAAVEDRA, ARACELY DEL ROSARIO (La Paz, 13 de diciembre de 1981)

Estudiante de las carreras de Historia* y Ciencias Políticas de la Universidad Mayor de San Andrés. Es parte del Comité Editor de la Revista de Historia y Ciencias Sociales Retornos. Ha colaborado con la Oficialía Mayor de Culturas con la revisión biográfica para el Mural del Bicentenario y en la recopilación de Historia Oral para el proyecto Mi Barrio Cuenta; Yo Cuento Con Mi Barrio. Ha escrito artículos de coyuntura actual. Publicó el Boletín del Archivo de Operadores de Telecomunicaciones de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Telecomunicaciones y Transportes ATT. Conformó parte de la investigación Apuntes para una Historia del Videoarte

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boliviano, patrocinado por la Oficialía Mayor de Culturas y la Embajada de los Países Bajos (2010). Actualmente trabaja como Asistente de Archivo en el Sistema de Archivo de la COMIBOL*. Fuente: CV.

CATACORA Y HEREDIA, JUAN BASILIO

(La Paz, 12 de julio de 1760. † La Paz, 26 de enero de 1810) Estudió Derecho en la Universidad del Cusco. Hombre talentoso y jurista prestigioso, fue asesor del alcalde de primer voto José Sanjinés; Defensor de pobres y asesor del Cabildo. Se adhirió a la causa de la independencia del 16 de julio de 1809 por lo que la Junta Tuitiva le designó responsable de las materias de Política y Razones de Estado, con Antonio Medina. En unión de G. Lanza* y B. Bueno*, pidió la incineración del archivo de los créditos fiscales. Fue apresado el 7 de diciembre de 1810 y ejecutado por la pena del garrote. Fuente: Aranzáes, 1915.

CATARI, “EL VIEJO”

(Villa de Oropesa, Cochabamba) Cacique y antiguo Quipucamayo de los Incas, hijo de quipucamayos y descendiente de Illa, “el inventor de los quipus, en la época de Mayta Capac”. Conformó el más importante Archivo civil de quipus históricos, referido a leyendas y noticias históricas, que le fueron transmitidas por sus padres y abuelos hasta llegar a su antecesor Illa. Afirma que los quipus fueron inventados “para hacer historia al mismo tiempo que las rodelas kerare”. En sus archivos refiere la genealogía de Manco Capac, así como el mito del surgimiento del Inca y su coya, Mama Ocllo, de la isla del Sol. Fuente: Porras, 1953: 129; Porras, 1986: 499-500.

CAZORLA MURILLO, DANNY FABRIZIO (Oruro, 28 de marzo de 1975)

Licenciado en Comunicación Social (Universidad Católica de Bolivia). Trabajó como Redactor de la sección cultural de La Patria. Fue Oficial Mayor de Cultura de la Alcaldía Municipal de Oruro (2005-2010). Dirige la revista Historias de Oruro, a través de la cual recupera y difunde fotografías de antaño de Oruro, y una serie de acontecimientos sociales y culturales. Es autor de Testimonios de la Guerra del Chaco, con Marco Flores (2005). Es custodio de la invaluable colección de discos de vinilo que inició su abuelo J. Murillo Vacareza*, a mediados de 1960, cuando obtuvo el disco Así es Oruro, a cargo de la Banda Pagador dirigida por Gumercindo Licidio, que fue una de las primeras en grabar temas musicales del carnaval. “A partir de ese disco empezamos a adquirir otros y crear un archivo fonográfico en donde hallamos los primeros antecedentes de estos registros”. “Entre ellas están las grabaciones de discos Méndez con la diablada titulada Oruro, a cargo de la banda de Eduardo Caba de La Paz, que data de 1951, que se constituye en una de las más antiguas”, señala Fabrizio Cazorla, nieto de Murillo y quien continuó con la tarea de

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su abuelo. En 1955 surgieron las grabaciones de Raúl Shaw Moreno y Los Peregrinos, quienes difundieron temas dedicados al carnaval como Diablito lucifer, un huayño con diablada, entre otras composiciones. Otro grupo muy destacado fue Los Ases Andinos, creado en 1958 y que al siguiente año grabó el álbum Bolivia con una tapa dedicada a la diablada. La Diablada tradicional, que fue conocida mucho antes de las grabaciones en estudio, y otras composiciones de antaño fueron las primeras en ser registradas en los discos de vinilo, que en esa época se hacían en Argentina y Brasil. Son 400 discos de vinilo que incluye gran parte de la historia musical del Carnaval de Oruro registrada en grabaciones en vivo y estudio, por las bandas más tradicionales y compositores casi desconocidos. Se suman a esa colección, fotografías y las tapas de los discos. Fuente: Comunicación personal, marzo 2012; Página Siete, 6.2.2012.

CENTENO, NICANOR (Chileno)

Primer Gobernador del “Litoral del Norte”, como llamaron los políticos chilenos a Antofagasta, inmediatamente después de la invasión del ejército chileno en 1879. En esa condición ordenó a “los procuradores que guardaban los archivos de las oficinas públicas, entregarlos de manera inmediata so pena de ser sometidos a la justicia ordinaria”. Gran parte de los archivos de los territorios ocupados de Bolivia y Perú fueron enviados a Santiago de Chile. En la zona de Caracoles, el 16 de febrero de 1879, una comisión designada por el Ejército de ocupación recogió los protocolos de los notarios y archivos de los juzgados, según informó el Subdelegado E. Villegas. Incluso la correspondencia particular de los combatientes fue requisada por ambos bandos. Fuente: Ahumada, 1884-189, II: 57; Oporto, 2006: 149-150.

CENTRO BIBLIOGRÁFICO, DOCUMENTAL E HISTÓRICO DE LA UMSFX (ARCHIVO HISTÓRICO DEPARTAMENTAL DE CHUQUISACA) Fundado el 27 de marzo de 1981 por la Dra. M. del C. Rúa de Tirado*, con el nombre de Centro Bibliográfico Documental Histórico. R. Gantier* afirma haber sido él junto a un grupo de universitarios quienes salvaron una documentación histórica retirada del Teatro “Gran Mariscal” cuando se hicieron obras de refacción, con la cual la Dra. M.C. Rúa de Tirado habría fundado el Centro. Está organizado en seis Fondos: Universidad de San Francisco Xavier (1624-1990), Prefectura (1879-1975), sobre este Fondo, fue R. Arze* quien lo encontró en un depósito de esa institución y solicitó al Prefecto Julio Loayza Valda, su transferencia al Centro Documental, quien instruyó su entrega. Otros fondos son: Alcaldía Municipal (1830-1976), Notarías Públicas (1826-1930), Juzgados provinciales de Tomina, Zudáñez y Yamparáez (1825-1960), Inspectoría Departamental del Trabajo (1970-1980); Guerra de la Independencia, otras colecciones; y una biblioteca. Se caracterizó por editar una gama de publicaciones especializadas con las que, se puede afirmar, devolvió una memoria histórica sistematizada a su sociedad, entre ellas Música Tradicional chuquisaqueña. José Lavadenz, 1905 (Cuadernos Nº 1, 1986); Sucre a través de sus planos, 1639-2010 (Cuaderno Nº 2: Desarrollo Urbano en Chuquisaca. 1992). Desde 1986 publicó un

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boletín titulado Centro Documental Histórico San Francisco Xavier. A la muerte de la Dra. Rúa (1997), se hizo cargo del Centro J. Loayza*, quien llegó a reeditar “Por las calles de la antigua ciudad de Sucre”, que ya había sido publicado en el boletín Nº 7, y en los Cuadernos Nº 2. Siendo Encargado del Centro el periodista Felipe Medina, el boletín cambió a Documentos para la Historia (2002). Le sucedió en el cargo A. Fuentes*, que lo publicó con el epígrafe Documentos (2003-2005). Finalmente L. Carreño* lo editó como Nuestra Historia (2007-2010). Todos fueron financiados por el Proyecto “Sucre Ciudad Universitaria”. Fuente: Oporto, 2006a; Rúa de Tirado, 1989: 3 (5); Comunicación personal de R. Arze de 4.4.12.

CENTRO DE DOCUMENTACIÓN E INFORMACIÓN (CEDOIN) En 1980 surgieron los primeros centros de documentación sustentados por Organismos No Gubernamentales, entre ellos el Centro de Información y Documentación de Bolivia (CIDOB), que publicaba un informe de coyuntura para orientar a la opinión pública sobre el carácter de los partidos políticos y sus propuestas. El Centro fue intervenido por la dictadura obligando su cierre. En su reemplazo surgió el Centro de Documentación e Información (CEDOIN), que continuó esa labor publicando Informe “R”, boletín quincenal de análisis de coyuntura, el Bolivia Bulletin (en inglés), el dossier Temas, extractado de más de 200 publicaciones periódicas de América Latina y el mundo, así como la elaboración de informes especiales. Su trabajo de recopilación y sistematización de información abarcaba 15 periódicos a nivel nacional, logrando reunir más de 3 millones de artículos, clasificados en 10 grandes áreas y 500 temas, que cubren el arco temporal desde la dictadura de L. García Meza* hasta los primeros quince años del neoliberalismo. Sus recortes de prensa, documentos y libros abarcan 200 metros lineales. El CEDOIN logró automatizar su inmenso archivo hemerográfico en 1993. Cerró sus puertas en 1999 y desde entonces el destino de sus fondos documentales era incierto hasta que la Alcaldía de La Paz aprobó, en febrero de 2009, un presupuesto de Bs. 450 mil bolivianos para su adquisición y Bs. 100 mil adicionales para equipar e implementar la nueva unidad de información que fue instalada en el Centro Cultural Municipal, ubicado en la Plaza Lira del barrio paceño de Cristo Rey. Publicó su Lista de temas, que sintetiza su metodología documental, en las que agrupa la información en diez temas, los que se subdividen a su vez. Difundió sus servicios en un prospecto institucional de circulación masiva. Fuente: La Prensa, 2009: 13a.

CENTRO DE DOCUMENTACIÓN E INFORMACIÓN BOLIVIA (CEDIB) El Centro de Documentación e Información Bolivia fue fundado por María Lohman, directora de la institución por varios años. Actualmente la dirección ejecutiva se encuentra en la responsabilidad de Marco Gandarillas Gonzales. Fue creado en 1971 como instrumento de apoyo documental al Instituto de Desarrollo Regional INEDER, empezando la acumulación de material bibliográfico y hemerográfico y la organización física, para prestar servicios internos al INEDER. En 1973 se constituyó en una unidad de información con identidad propia, especializada en Ciencias Sociales. Actualmente es la única hemeroteca especializada en Bolivia, cuyo fondo

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documental es producto del procesamiento diario de la información de la prensa nacional. Su objetivo central es el acopio de material hemerográfico, bibliográfico y audiovisual de Bolivia, para la construcción de la memoria documental e histórica del país, facilitando el acceso a la información de la sociedad en general, así como proporcionar servicios de documentación, información alternativa y educación ciudadana, en beneficio de los sectores menos privilegiados; y cooperar al desarrollo equitativo y la articulación cultural, económica y social del país. Sus recursos documentales están organizados en tres fondos: Bibliográfico, Hemerográfico y Audiovisual. El Fondo Hemerográfico es producto del procesamiento diario de la información de la prensa nacional, custodiado en un Archivo Físico y otro Archivo Digital, con bases de datos referenciales y a texto completo, automatizadas. Cuenta con 45.702 documentos (libros, cartillas, revistas, boletines, gacetas, mapas, etc.), 4.067 carpetas y cajas de archivos (artículos hemerográficos, procesados temáticamente, con 784 artículos en cada una); 3.188.528 artículos (Archivo físico); 54.973 suplementos (separatas, anuarios, periódicos semanales, mensuales); 20.340 caricaturas; 3.785.494 artículos (clasificados en 500 temas y más de 3000 subtemas); 1.380.416 artículos (base de datos hemerográfica digital); 76.952 documentos (base de datos referencial) y 1.233 títulos de videos y audios. En base a estos recursos elabora dossiers impresos, digitales y virtuales. Ha sido reconocido con la Medalla de Plata con cintillo celeste “Orden de las Heroínas de la Coronilla” en cuarto grado (3 de junio de 1997) y la Medalla del Bicentenario “Distinción Manuela Gandarillas, Mérito Institucional a la Promoción del Desarrollo Humano y Social” (13 de septiembre de 2010). Fue declarada Patrimonio Documental por el municipio de Cercado (Cochabamba), por ordenanza municipal 4363/2012 (17 de enero de 2012). Ha compilado, en base a su revista Resumen de la Realidad Nacional (1987-1991) y la Revista 30 Días la Memoria Histórica de Bolivia (1987-2001) en formato físico. El 2012 compiló Diez Años de Historia Nacional (2002-2011), en base a la revista digital 30 Días. Fuente: Información institucional por vía electrónica enviado el 23 de mayo de 2012.

CENTRO INTERAMERICANO DE DESARROLLO DE ARCHIVOS (CIDA) Fundado por A. Tanodi*, con su creación plasmó las recomendaciones de la Primera Reunión Interamericana de Archivos* en Washington DC, en 1961, aspecto que se concretó en la Reunión Técnica sobre el Desarrollo de Archivos (Washington, julio de 1972), en la que se elaboró la Carta de los Archivos Americanos, con pautas para la organización archivística latinoamericana y se decidió la creación de un Centro Multinacional de Formación de Archiveros, con sede en Córdoba (Argentina). El Centro fijó su sede en la Escuela de Archiveros de Córdoba, 2 de mayo de 1974, desde donde impartió cursos anuales y temporales, en beneficio de los archiveros latinoamericanos, hasta su cierre en 1988. Por sus aulas pasaron las primeras generaciones de archivistas latinoamericanos que luego dirigieron los archivos más importantes de sus países. Entre los primeros alumnos que recibió se encuentran C. Gutiérrez* (Perú), R. Arze* y E. Cárdenas* (Bolivia). Apoyó a la creación del Archivo Histórico Departamental de Santa Cruz, acogiendo como alumno al que sería luego su director, E. Zambrana*. Fuente: Fenoglio, 2012.

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CHACÓN TORRES, MARIO

(Potosí 21 de noviembre de 1930. † Potosí, 6 de agosto de 1984) Estudió Derecho en la Universidad Tomás Frías de Potosí. Historiador especializado en arte colonial. Profesor de Historia del Colegio “Pichincha” de su ciudad natal. Fue Oficial Mayor y Director de Cultura de la Alcaldía Municipal de Potosí, donde preparó la Nomenclatura General de la ciudad de Potosí, sancionada por Ordenanza Municipal. Presidente del Centro Amigos de la Cultura. Investigador y director, desde 1974, del Archivo Histórico de Potosí* (Casa de Moneda) hasta su muerte. Miembro del Instituto de Investigaciones Históricas de Potosí de la Universidad Tomás Frías, desde 1956, cuando fue elegido Secretario General. Discípulo de G. Mendoza* (quien en 1958 visitó el Archivo a instancias de G. Ovando S.*), que guió, bajo su sabia directriz la organización del Archivo de Potosí. Por su parte G. Ovando reconoció sus “relevantes dotes de investigador en el campo de la historia nacional” y lo consideraba “el mejor de sus discípulos”. En octubre de 1961 asistió, junto a sus dos maestros, a la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos*, en Washington DC, EE.UU., donde informaron de los trabajos de organización archivística, junto a archiveros e historiadores de América Latina y EE.UU. “La sorpresa fue mayor al establecerse que entre los archivos de Hispanoamérica los mejor organizados eran el Nacional de Bolivia, el de la República Dominicana y el de Potosí”. La Universidad Tomás Frías le otorgó una beca para catalogar el Archivo Histórico de Potosí, “encargado de seguir el método correcto (vg. el principio de procedencia y la ordenación natural) siguiendo estrictamente las instrucciones dejadas por G. Mendoza. Tal fue el origen de su carrera de Archivista”, afirma Ovando. Colaboró en la catalogación a A. Alba*, director de la Casa de Moneda*. A su muerte (1974) tomó su lugar el escritor Luis Alfonso Fernández, y M. Chacón fue nombrado director del Archivo. Asistió al Curso de Organización y Administración de Archivos*, en Madrid, España (1976), oportunidad en la que presentó su trabajo El Archivo Histórico de Potosí, Bolivia. Ha sido miembro de número de la Sociedad de Estudios Geográficos y de Historia de Potosí (1961), miembro de la Unión de Escritores y Artistas de Potosí, miembro del Instituto de Investigaciones Artísticas de la UMSA, socio correspondiente de la Asociación Latinoamericana de Archivos; miembro de la Sociedad Boliviana de la Historia (1972) y de la Academia Boliviana de la Historia (1979). Consumado historiador del arte colonial, “se distinguió por su espíritu perseverante en la investigación, sencilla, silenciosa, continua, sin pretensiones interpretativas ni filosóficas. Veía en el documento la clave de la Historia y no afirmaba nada sin ver el documento”, continúa Ovando. Volcó su interés al archivo y a la vida conventual con pasión, renunciando al mundo. Asistió a la Primera Reunión de Consulta de Archivos de Bolivia*, realizado en Sucre (1979), junto a Giussepe Rossi. Catalogó la parte colonial del Archivo de San Francisco, levantó inventario de los bienes artísticos y logró la creación del Museo Conventual. Había tomado la decisión de incorporarse al convento pero murió de forma súbita, el 6 de agosto de 1984, inmediatamente luego de dictar una conferencia histórica, durante el acto de conmemoración del aniversario nacional en el que leyó su último trabajo en la Prefectura de Potosí. “Una vez concluida su intervención, un ataque al cerebro puso fin a sus días”, relata Ovando. A su muerte, su selecta y sólida biblioteca fue adquirida por el abogado minero Oscar Bonifaz, hoy en poder de su hija, Carmen, en el barrio paceño de Achumani.

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Entre sus obras publicadas, citamos: Los pintores chuquisaqueños del siglo XIX (Potosí, Instituto de Investigaciones Históricas, 1960); Notas sobre arte republicano en Potosí (Potosí: Instituto de Investigaciones Históricas, 1960); Bibliografía preliminar de Luis Subieta Sagárnaga (Potosí: Instituto de Investigaciones Históricas, 1962. Con Guillermo Ovando Sanz); Museo de la Casa de la Moneda (La Paz: Dirección de Información de la Presidencia de la República, 1962); Pintores del siglo XIX (La Paz: Dirección de Información de la Presidencia de la República, 1963); Arte virreinal en Potosí (Sevilla: Escuela de Estudios Hispano-Americanos, 1973); Fundación del Colegio Nacional Pichincha (Potosí: H. Alcaldía Municipal, 1974); Potosí histórico y artístico (Guía cultural citadina). (Potosí: Rotary Club, 1977); Iconografía de Vicente Bernedo (Potosí: Editorial Potosí, 1988). Publicaciones archivísticas: Documentos sobre arte colonial en Potosí (Potosí, IIH, 1959), Documentos en torno a Bartolomé de Orsúa y Vela (Potosí, IIH, 1960); “Nuestro Archivo” (Vida universitaria, publicación del Departamento de Cultura de la Universidad Tomás Frías, Potosí, 1962, 1 (7): 13-14); “Catalogación del Archivo de la Casa de Moneda” (Vida universitaria, publicación del Departamento de Cultura de la Universidad Tomás Frías, Potosí, 1966, 1 (12): 15); “Manuscritos eclesiásticos en Potosí” (El Diario. Suplemento cívico, La Paz, 10 de noviembre de 1968: 5); “Centralización de Archivos y Museos Departamentales” (Presencia Literaria, La Paz, 15 de febrero de 1970:; Tb. en Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (una guía preliminar), La Paz: cehila-ceprolai 1985: 167-173); “El Archivo Histórico de Potosí y su catalogación preliminar” (Boletín del Archivo de La Paz, Nº 1, 1976: 7-15); “El Archivo Histórico de Potosí” (en Jhon J. TePaske: Research Guide to Andean History: Bolivia, Chile and Peru, Durham, 1981: 30-36); “El Archivo de Potosí” (Boletín del Archivo de La Paz, 3 (5): 27-32, 1978 y 1986, Nº 9: 28-29); “Catálogo del Archivo Colonial del Convento de San Francisco de Potosí, 1597-1825” (Anuario de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica, 2001, Nº 7: 147-157. Fuente: Barnadas, 2002, I: 503; Ovando 1984: 235-240; Valda, 1980 (doc.); Valda, 1982: 2.

CHAMBI JIMÉNEZ, MARTÍN

(Coasa, Carabaya, al norte del gran lago Titicaca, Perú, 1891. † Cusco, Perú, 1973) El más célebre fotógrafo aymara del Perú. Su primer trabajo fue en la compañía “Santo Domingo Minning” de Inambary, que explotaba oro en Carabaya. Para sobrevivir, “el pequeño Martín vendía alcohol a los mineros y les ayudaba a la extracción del mineral”. En esas circunstancias “el fotógrafo de la compañía, le enseña los rudimentos de la técnica fotográfica”. Se formó en el taller del fotógrafo M.T. Vargas*, en Arequipa, Perú. Empieza a ser reconocido a nivel internacional, a partir de la exposición de arte fotográfico que se realizó en La Paz, en 1925, con ocasión del Centenario de la República de Bolivia, galardonado con Diploma y Medalla de Oro. Tenía su estudio en la calle Márquez, en Cusco. Exhibió sus trabajos en exposiciones tanto en Perú como en Chile (Santiago y Viña del Mar). El fotógrafo norteamericano Edward Ranney reorganizó el archivo de Martín Chambi con apoyo de la fundación Earthwatch de Massachusetts (1977). 15.000 negativos fueron limpiados y ordenados y se muestra en Europa y Estados Unidos, convirtiéndose en la imagen más difundida de la fotografía cusqueña. Ranney señala que “Chambi se definió como un artista y documentalista fotográfico, arraigado en su pasado indígena [...] paradigma de la aculturación exitosa”. Los grandes temas que abordó, fueron el retrato comercial, paisajes y vistas arqueológicas, documentación etnográfica y autorretratos. “El

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constante interés de Chambi en retratarse, tanto dentro como fuera del estudio, parece reflejar una permanente conciencia de su propio proceso de aculturación, así como su confianza y placer en representarse visualmente a lo largo de los años”. Por su parte, Mario Vargas Llosa afirma que “en sus imágenes desnudó toda la complejidad social de los Andes”, que nos instalan en el corazón del feudalismo serrano, en las haciendas de los señores de horca y cuchilla con sus siervos y sus concubinas, en las procesiones coloniales de muchedumbres contritas y ebrias y en esas tiznadas chicherías que Uriel García llamó ‘las cavernas de la nacionalidad’”. Fuente: Mariaca, s.f.; Montoya, 1992: 3.

CHARRAJA ASTURIZAGA, EURICO (ENRIQUE) (Larecaja, La Paz. † 20 de marzo de 1751)

Escribano. Hijo de Carlos Inca Charraja y Magdalena López de Asturizaga. Compró el cargo de Escribano Real en 500 pesos. Aranzáes señala que lo ejerció con honradez, pues era “hombre bien intencionado y filántropo, puso en censo su casa y el oficio de escribano, en beneficio del Hospital local, que aunque no producía sino veinticinco pesos anuales, servía en alguna manera la suerte de los enfermos”. No obstante las Actas Capitulares de 1751, señalan que tuvo parte del hallazgo “en la esquina de la plaza de una fianza de juzgado que el corregidor de la provincia dicha de Larecaja tenía dadas, sin saber el Escribano [Charraja] dar razón de ellas”, por lo que el Cabildo se vio obligado “para evitar en adelante el pernicioso desbarato, quitarle la llave del oficio”, así como exigirle el inventario de toda su actuación. Al término del examen “le hicieron incapaz de servir su oficio, y que se haga visita y reconocimiento de su oficina, con inventario de los [archivos] que están a su cargo”. Fuente: Aranzáes, 1915: 242; Oporto, 2006: 100.

CHÁVEZ DE PEÑALOZA, JOSÉ GENARO DE (Arequipa, Perú)

Escribano de hipotecas y de Cabildo. En ese carácter asistió al Cabildo del 16 de julio de 1809. Acérrimo realista, autorizó en su calidad de Escribano, el acto de ejecución de los mártires del 28 de enero de 1810, en el que se colgó a Murillo. Aranzáes señala que “se manejó con los patriotas de manera indigna, pues no fue fedatario de la verdad sino el acusador y compaginador del cúmulo de calumnias según los deseos y las perversas intenciones del feroz Goyeneche”. Este escribano venal fue ultimado por el furor del pueblo el 28 de septiembre de 1814, cuando el ejército argentino tomó la ciudad de La Paz. Fuente: Aranzáes, 1915.

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“CHE” GUEVARA, ERNESTO v. GUEVARA DE LA SERNA, ERNESTO “CHE” CHOQUE CANQUI, ROBERTO (Caquiaviri, Provincia Pacajes, La Paz, 3 de enero de 1942)

Doctor en Historia. Archivista Diplomado en la Escuela Nacional de Documentalistas* de Madrid, España (1980) y en el Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos CIDA* en Córdoba, Argentina (1974). Co fundador y Presidente de la Asociación de Archivistas ex Becarios de la OEA* (1982), docente y director de las Carreras de Antropología e Historia* de la UMSA. Fue director del proyecto de re-organización del Archivo Histórico Municipal “José Macedonio Urquidi”* de Cochabamba (octubre de 1984-mayo de 1985). Fundador del Archivo de La Paz*; llegó al cargo de Director (1991 y 1994). Miembro de la Academia Boliviana de la Historia, de la Academia de Ciencias Genealógicas y Heráldicas de Bolivia y de la Sociedad Boliviana de Historia. Viceministro de Descolonización en el Ministerio de Culturas del gobierno del presidente Evo Morales Ayma* (2009). Es el primer historiador aymara que además de las fuentes oficiales, reivindicó las orales, para la reconstrucción de la historia de los movimientos indígenas, que se plasma en su producción historiográfica esencial como Masacre de Jesús de Machaca (1986); Educación Indigenal; Líderes indígenas aymaras: Lucha por la defensa de tierras comunitarias de origen, con Cristina Quisbert Quispe (2010); Historia de una lucha desigual: Los contenidos políticos e ideológicos de las rebeliones indígenas de la Pre-Revolución Nacional, con Cristina Quisbert Quispe (2012). En reconocimiento a su trabajo, el ‘Club de La Paz’ le otorgó el XVI Premio a la Cultura 2010.

Publicaciones archivísticas: “Índice de padrones de indígenas del Departamento de La paz, en el Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1981, 4 (7): 13-32); “La memoria comunitaria andina: una alternativa del Archivo Oral” (Chitakolla, 1983, 9:8); “Bases para un estudio objetivo de la situación económica y profesional del archivista boliviano. Plan para el levantamiento de un censo preliminar de archivos y archivistas bolivianos y conclusiones de proyección legislativa”. Relato para el punto C del temario. Por Marcela Inch, Roberto Choque C., Gonzalo Aguilar D., p. 83-94, en Segunda Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Cochabamba: Centro Pedagógico y Cultural de Portales, Imp. Taller Gráfico del Centro Portales, julio 5-7, 1982. 123 p. mimeo.; “Informe sobre la reorganización del Archivo Histórico de Cochabamba” (Historia, Boletín de la Carrera de Historia, La Paz, 1985, 9 (17): 1-11); “La problemática actual de los archivos en Bolivia” (Boletín del Archivo de La Paz, 1994, (14): 30-32); “Archivos de los Caciques coloniales Joseph Fernández Guarachi (1734) e Ildefonso Fernández Chuy (1778)” (Boletín del Archivo de La Paz. Homenaje 26 años, 1997, (16-17): 36-42); “Gunnar Mendoza Loza: los recursos documentales del país” (Correo del Sur, Sucre, 15 de abril de 1994: 4); “Archivos de La Paz” (Diccionario Histórico de Bolivia, Sucre, 2002: 167-168). Fuente: CV.

CHOQUE CONDORI, MARCO (La Paz, 24 de octubre de 1984)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Fue Pasante en el Archivo del Conservatorio Nacional de Música, Auxiliar del Archivo de la Administradora Boliviana de Carreteras, Auxiliar del Archivo Central del Servicio Nacional de Caminos–Residual. Trabaja como Asistente en el Archivo Regional de Oruro, dependiente del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2012). Fuente: CV.

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CHOQUE PEREYRA, EDSON ROGER (Oruro, 24 de diciembre de 1982)

Es técnico en manejo de paquetes en el Instituto de Formación Profesional CATEC, Técnico Operativo del Instituto de Computación Novell, Auxiliar Técnico Operador de Paquetes del Centro Especializado en Informática Maranatha, capacitado en Manejo de Paquetes (SEDUCA-CEIM). Estudió Quechua en la Organización Cultural Multidisciplinaria Khana Marka e Inglés en el Natural Learning Corporation en Buenos Aires (Argentina). Tiene amplia experiencia en informática. El 2010 fue contratado como Asistente de Archivo del Archivo Regional Oruro, dependiente del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

CHOQUE TICONA, GONZALO OMAR (La Paz, 4 de julio de 1983)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA) y de Contaduría (Universidad Salesiana de Bolivia). Miembro del comité Editor de A puro balduque, Boletín del Archivo Central del Servicio Nacional de Caminos (2010). Trabajó como Pasante en el Archivo Histórico Militar (2005); en el proyecto Censo Guía de Archivos del Servicio de Impuestos Nacionales, con la BAHALP (2008); auxiliar del Archivo del Ministerio de Desarrollo Sostenible (2008); Consultor del Archivo del Servicio Nacional de Caminos (2008-2010); Archivista y notificador de Electropaz (2009); Archivista de la ABC (2009). Publicaciones archivísticas: “Sobre el patrimonio Documental” (A puro balduque, Nº 1. 2010). Fuente: CV.

CHUNGARA, DOMITILA BARRIOS DE

(Siglo XX, Potosí, 7 de mayo de 1937. † Cochabamba, 13 de marzo de 2012) Mujer paradigmática en la historia del movimiento obrero. Su nombre de pila era Domitila Barrios Cuenca, pero pasó a la historia como Domitila Chungara. Esposa (concubina) en primeras nupcias, de René Chungara Barrios, trabajador minero de interior mina de siglo XX. Sufrió los rigores de la vida minera, llena de carestía, pero sobre todo del rigor de la represión por sus ideas políticas. Fue perseguida, torturada, vejada, dio a luz en interior mina. Su octavo hijo nació muerto. Salió al exilio y conoció el primer mundo. Constató la desigualdad social imperante, renegó de la injusticia. Pero también conoció a gente que como ella luchaba por mejores días para los desposeídos. Disfrutó la música de Mercedes Sosa, la “Negra”, que se le adelantó por corto tiempo en su viaje a la eternidad. Leyó en vivo y directo a Gabriel García Márquez. Quiero destacar la faceta archivística de Domitila Barrios de Chungara, pues fruto de su agitada vida sindical y política, atesoró documentos que testimonian esa trayectoria. La antropóloga María Lagos, usó parte de ese archivo en su obra testimonial sobre le Comité de Amas de Casa Mineras. Pero si cultivó la paciencia del archivista, fue también muy rigurosa con la memoria y sobre todo audaz con la palabra, que la retrata de cuerpo entero, cuando interpeló a la

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audiencia de la Conferencia Internacional de la Mujer, en México D.F., en 1975: “…si me permiten hablar…” Aquella actitud irreverente, ante un congreso internacional de mujeres, trastocó la historia de las organizaciones feministas internacionales, si bien fueron y son solidarias con países pobres y los movimientos obrero-populares, sin embargo se protocolizaron al extremo de impedir que tomaran la palabra las representantes de las bases sociales. “Si me permiten hablar” es una interpelación al feminismo de aquella época, sin duda. La antropóloga brasilera Noema Viezzer, recuperó y proyectó el testimonio de Domitila Chungara, rescató con ella la historia de las luchas sociales de las minas bolivianas, desde la perspectiva de las mujeres, invisibilizadas por los propios trabajadores y perseguidas por los dictadores que se turnaron en palacio de gobierno. No podía pensar en un mejor título que sus propias palabras: “Si me permiten hablar”, interpelando esta vez a la clase intelectual que suele ser muy cómoda creando historias y análisis en sus confortables centros de investigación. Se puede afirmar que la historia oral tuvo una época de oro a partir del “testimonio de una mujer minera”, como subtituló aquella obra testimonial la antropóloga brasilera. Un testimonio que tomó por asalto las librerías y desde allí logró sitial preferido en las bibliotecas de los centros universitarios y los gabinetes de los intelectuales comprometidos. Nunca mujer de pueblo tuvo la oportunidad de interpelar a la clase política aceptando la candidatura a la Vicepresidencia por el Frente Revolucionario de Izquierda, acompañando al dirigente campesino Casiano Amurrio. Cuando se le consultó las razones para aceptar una candidatura en el partido de aquel viejo político, controversial y sinuoso, Oscar “Motete” Zamora Medinacelli, afirmó que aceptó el cargo en memoria a Federico Escóbar Zapata, el intachable líder minero, fundador del Partido Comunista Marxista Leninista. En 2011 fue condecorada con el Cóndor de Los Andes, en homenaje a las cinco mujeres mineras que iniciaron la Huelga de Hambre del 28 de diciembre de 1977, que fue determinante para la caída de la dictadura militar. Fuente: Lagos, 2006; Oporto, 1995: 79-105.

CHUQUIMAMANI, BONIFACIO (La Paz)

Mestizo paceño. Oficial de pluma de la curia eclesiástica. Cuando Julián Apaza se proclamó virrey del Perú y acaudilló a los indígenas, “se constituyó su secretario, su confidente y amigo de toda confianza”, cambiando su nombre por el de Manuel Clavijo. Estaban a su cargo las comunicaciones y firmaba en nombre de Túpac Katari, “llevaba toda la correspondencia y cuanto asunto se rozaba con la pluma era asunto personal suyo”. Habiendo sido capturado por los españoles fue ahorcado en la plaza mayor de la ciudad de La Paz. Fuente: Aranzáes, 1915; Valle, 1980: 97; Valle, 1990: 24, 27.

CHUQUIMIA BONIFAZ, FERNANDO (La Paz, 31 de marzo de 1961)

Licenciado en Historia (UMSA). Cursó el Diplomado en Educación Superior y la Maestría en Historias Andinas y Amazónicas (UMSA). Docente titular de la UMSA

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en las carreras de Historia*, e interino en Bibliotecología. Ejerció también en la Universidad Pública de El Alto (UPEA), Universidad Privada del Valle, Instituto Normal Superior “Simón Bolívar” de La Paz. Fue Docente Archivista en el zzonio Inmaterial (2004). Participó en el Seminario Nacional “Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia” (LP, 1993); Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999); Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995), Reunión Anual de Bibliotecología y Documentación (2000) y 1er y 3er Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2009, 2011). Fue miembro de las Brigadas Internacionalistas de Apoyo a las Bibliotecas y Archivos de Bolivia* (2009). Es autor de estudios histórico, entre ellos, “Artesanos y la mutualidad paceña” (La Razón, 1998); “La población quirwua en el s. XVI en los valles paceños: Entrevista a la Dra. Carmen Loza” (Historia, 1998, Nº 23); “El testamento de Martín Cardón. Un personaje de la vida política y pública de La Paz” (Historia, 1998, N° 23), “Las sociedades de socorro mutuo y Beneficencia en La Paz, 1883-1920” (Anales de las XII Reunión Anual de Etnología, 1998). Integró el Tribunal académico que calificó los proyectos de grado sobre archivos de I. Villegas*y R. Ramírez*, los primeros en la Carrera de Historia. Trabajó en el Archivo Histórico Municipal “José Rosendo Gutiérrez” (1988), Archivo del Banco Central de Bolivia* (1988-1989), Sistema de Documentación e Información Sindical SIDIS* de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (1990-1991), Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia (1992), Archivo de La Paz* (19911992), Archivo de la Liga de Empleados de Comercio, Banca e Industria, Archivo de la Cámara de Diputados (1995), Archivo de la Sociedad de Obreros “El Porvenir” (1995). Ordenó, conjuntamente con G. Molina*, el Archivo personal del ex presidente de la República W. Guevara* (1995-1996), para su transferencia al ABNB*. Fue fundador y presidente de la Asociación de Archivistas del Poder Ejecutivo (2007). El H. Consejo Universitario de la UMSA y de la Facultad de Humanidades, le otorgaron el Diploma de Reconocimiento por la Defensa del Patrimonio Documental de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional*, en los hechos sociales de febrero de 2003. Desde 2006 desempeña el cargo de Responsable de la Memoria Institucional y Biblioteca de Economía y Finanzas, del Ministerio homónimo. Publicaciones archivísticas: “El Archivo Histórico de La Paz”’ (Ultima Hora, La Paz, 16 de febrero de 1994: 9); “Los recursos documentales del Banco Central de Bolivia” (Boletín del Archivo La Paz, 1994, 14: 33-39); “Índice general del Archivo Histórico de la Sociedad de Obreros El Porvenir” (Boletín del Archivo La Paz, 1995, 15: 44-50); “El Archivo histórico del Arzobispado de Santa Cruz, entrevista con Víctor Hugo Ramallo” (Boletín del Archivo La Paz, 1996, 16-17: 6369); “Papeles, vida y testimonio de un ex presidente de la República: Entrevista con Wálter Guevara Arze”, con Gonzalo Molina E. y Juan C. Fernández (Anuario 1996 del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, Sucre: ABNB, 1996: 483-494); “El Archivo de la Liga de Empleados del Comercio, la Banca y la Industria, una entidad de socorro mutuo y beneficencia a inicios del siglo XX” (Boletín del Archivo La Paz, 2001, 19: 54-58). Fuente: CV.

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CHURA COYO, IRENIA HILDA (La Paz, 26 de agosto de 1978)

Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA). Estudió Secretariado Ejecutivo en el Centro de Especialización en Computación y Estudios Comerciales (C.E.C.). Participó en varios seminarios y talleres. Hizo el Diplomado de Gestión Integral en los Archivos de las Empresas Estratégicas del Estado (2012), organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional. Fue Auxiliar del Archivo del Servicio Nacional de Caminos (2010). Participó en la creación y organización de la fototeca del Club Social 16 de Julio (2006), así como en la organización de su Biblioteca. Fue Auxiliar de la Unidad de Documentación del Centro de Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA, 2006). Realizó prácticas y pasantías en la organización de Archivos en el Fondo de Desarrollo Regional. Realizó su trabajo dirigido en la Biblioteca Patrimonial de la Corporación Minera de Bolivia* (2008-2009). Durante la gestión 2008 fue Auxiliar de Archivo del Departamento de Investigación y Post Grado e Interacción Social (UMSA). Responsable de la Organización y Sistematización del Archivo y Biblioteca del Sistema de Documentación e Información Sindical SIDIS* (2009-2010). Trabajó en el Servicio Nacional de Propiedad del Estado (2011-2012). Imparte docencia de la materia de Archivística en la Universidad Indígena Tawantinsuyo Ajlla de la ciudad de El Alto (2012). Fuente: CV.

CHURCH, GEORGE EARL (1835-1910)

Ingeniero estadounidense, periodista, explorador y empresario de ferrocarril. Fue agrimensor de ferrocarriles en los Estados Unidos antes de los 21 años y exploró la Patagonia argentina. Su carrera de ingeniero fue interrumpida a causa de la Guerra de Secesión estadounidense (1861-1866) en la que sirvió como oficial en el VII Regimiento de infantería de Rhode Island. También fue Vicepresidente de la Royal Geographical Society. Entre finales de la década de 1860 y mediados de la de 1870 viajó periódicamente a Bolivia por invitación de su Gobierno, para el fomento de las empresas de ferrocarriles entre los ríos Mamoré y Madera. Recogió para ese fin fotografías que posiblemente fueron tomadas por él mismo. Su biblioteca personal está conformada por libros, mapas y documentos, incluyendo un álbum de Views of Bolivia (ca. 1869-1870). Otros nueve álbumes de esta misma colección fotográfica, que presumiblemente registró durante sus viajes por Bolivia, están en la John Hay Library de la Universidad de Brown en Providence, Rhode Island. Church adquirió el manuscrito de Arzáns Orsúa y Vela* del librero Chadenal, en 1905, en uno de sus viajes a París, Francia, el que luego fue donado a dicha Universidad. Su Estudio, Aborigines of South America, fue editado por su amigo Clements R. Markham, y publicado póstumamente en 1912. Fuente: Buck, 1999; Hanke, 1976; International Bureau, 1909; Soria Galvarro, 2010.

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CIEZA DE LEÓN, PEDRO DE

(Llerena, Extremadura, España, 1518 o 1521. † Lima, julio de 1564, o Sevilla 1560) Cronista soldado, testigo de lo que narra. Aún adolescente pasó a las Indias con el objetivo de labrar fortuna. Participó de las huestes exploradoras de los capitanes Alonso de Cáceres y Jorge Robledo en el norte de la América meridional. Llegó al Perú en 1547 con Sebastián de Benálcazar, casi al final de la rebelión de Gonzalo Pizarro. Se unió a las tropas del pacificador P. de la Gasca*, quien en Jaquijaguana venció y ajustició a Gonzalo Pizarro y F. de Carvajal*. En noviembre de 1548 llegó a La Paz y fue recibido por el Capitán Alonso de Mendoza, fundador de La Paz, “quien le obsequió un excelente guisado con carne de guanacu”. La Gasca le nombró Cronista de las Indias, ofreciéndole todos los recursos que necesitase y facilitándole los papeles y documentos reservados que tenía en su poder, pues hacía escribir o escribía personalmente, todas las noches, un diario de lo que había ocurrido en el día, que aún se conservan en los archivos de España. Cieza los tuvo a la vista cuando escribió sus Crónicas del Perú, así como todos los documentos anteriores a la Conquista que pudo reunir, y todos los papeles oficiales de la Colonia. Viajó por el Perú con el objeto de observar los monumentos e interrogar a los indios viejos acerca de las antiguas costumbres de los Incas, en las célebres Informaciones de los Quipucamayos*. Excelente observador, reconstruyó los adelantos de la era incaica y describió los hechos de la conquista y las guerras civiles. Ocupa uno de los primeros lugares entre los cronistas de Indias, por lo concienzudo y amplio de su vasta obra que fue utilizada como fuente de primera mano por el cronista mayor de Indias, Antonio de Herrera y Tordesillas, y también por el Inca G. de la Vega*. Retornó a España en 1550. Dos años más tarde presentó al príncipe don Felipe, en Toledo, la primera parte de su Crónica del Perú, la única que en vida pudo ver impresa. Fuente: Aranzáes, 1915; Barnadas, 2008; Jáuregui, 1925: 106; http://enfenix.webcindario.com; www.lablaa.org; www.cervantes virtual.com; www.biografiasyvidas.com.

CINEMATECA BOLIVIANA Creada el 12 de julio de 1976, como Cinemateca de La Paz, por Acta suscrita por Mario Mercado Vaca Guzmán (Alcalde Municipal), P. Renzo Cota (Cine 16 de Julio) y Amalia Gallardo (Centro de Orientación Cinematográfica). También fueron impulsores de la Cinemateca, P. Susz* y C, Mesa*. Posteriormente cambió a Cinemateca Boliviana (RS de 29 de septiembre de 1977). Declarada como Archivo Nacional de Cine (DL 15604 de 27 de junio de 1978), ratificada como Repositorio Nacional de Imágenes en Movimiento (DS 16762 de 11 de junio de 1979), y por la Ley de Cine 1302 (20 de diciembre de 1991), que “declara al Estado boliviano, único y legítimo propietario del patrimonio nacional de imágenes en movimiento, encomienda a la Fundación Cinemateca Boliviana, el rescate y la preservación de dicho patrimonio, organizando el Archivo Fílmico Nacional” y establece la obligación del depósito legal de toda productora de cine y video. Hasta entonces, las distribuidoras de películas comerciales establecían un plazo para su comercialización, pasado el cual, las copias se incineraban en presencia de un notario de fe pública. Con la vigencia de la ley 1302, todas las copias de las producciones nacionales y extranjeras pasan a poder de la Cinemateca. Hacia 1995, había logrado conformar un impresionante Archivo con

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490 rollos de películas en soporte de nitrato (autoinflamables y explosivas, por lo que requieren de cuidado especial), 5669 películas en blanco y negro y 1044 en color, ambos en soporte de seguridad celuloide, introducida desde la década de los 40’s. La Cinemateca logró recuperar 2.800 rollos de los noticieros Aquí Bolivia, producidos por el Instituto Cinematográfico Boliviano* y de algunos del Canal Estatal*. Entre sus joyas se encuentran rarezas, únicas en su género, como Cleopatra, primera versión realizada en EE.UU. (1903), del que custodia uno de los dos originales existentes en el mundo (el segundo se halla en Roma); Lo que el viento se llevó, uno de los primeros largometrajes a color de los EE.UU. (1938); documentales producidos por José Velasco Maidana, con escenas de La Paz de los años 20’s; Wara Wara, del mismo realizador, el primer largometraje boliviano (1930); Infierno verde, copia sonorizada, del documental realizado durante la Guerra del Chaco (1932-1935), por L. Bazoberry*; Al pie del Illimani, primer documental con sonido incorporado, realizado en conmemoración del IV Centenario de fundación de La Paz (1948); Donde nació un Imperio, cortometraje sonorizado, realizado por J. Ruiz*, hacia la segunda mitad de los 40’s. Fuente: Nina, 2011; Presencia, 1997a: 9; Murillo, 1997: 10.

CÓDIGO DE ÉTICA DEL ARCHIVISTA Aprobado por el XIII Congreso Internacional de Archivos (Pekín, China, 1996), propuso un código ético para los profesionales de la archivística, considerados como los responsables del control, cuidado, custodia, conservación y administración de los archivos. Sugiere lineamientos y pautas de conducta laboral para lograr la excelencia y la confianza pública en el quehacer de los archivistas. Establece normas de conducta para la profesión archivística. Enseña a los nuevos miembros del oficio esas normas al tiempo que le recuerde al archivista profesional sus responsabilidades, para así inspirar la confianza del público hacia esta profesión. El término “archivista” que usa el Código pretende incluir a todos aquellos involucrados con el control, cuidado, custodia, preservación y administración de archivos. Pretende proporcionar un marco ético que sirva de guía a los miembros de este gremio, y no brindar soluciones específicas a problemas particulares. Código de ética del archivista 1. El archivista debe proteger la integridad del material archivístico y así garantizar que

éste continúe siendo una evidencia confiable del pasado. 2. El archivista debe valorar, seleccionar y mantener los documentos archivados dentro de sus contextos histórico, legal y administrativo, respetando así el principio de procedencia, preservando y haciendo evidentes las relaciones originales de los documentos. 3. El archivista debe proteger la autenticidad de los documentos y asegurar que su valor no sea alterado durante el proceso archivístico, la conservación y el uso. 4. El archivista debe asegurar el acceso continuo y la inteligibilidad del material archivístico. 5. El archivista debe documentar y justificar sus acciones con respecto al material archivístico. 6. El archivista debe promover el acceso más amplio posible al material archivístico y ofrecer un servicio imparcial a todos los usuarios.

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7. El archivista debe respetar el acceso y la privacidad actuando dentro de los límites de la legislación pertinente.

8. El archivista debe utilizar la confianza depositada en él para el bien común y evitar usar su posición privilegiada para beneficio propio o de otros.

9. El archivista debe procurar la excelencia profesional y la actualización de sus conocimientos archivísticos de forma sistemática y continua, compartiendo los resultados de sus investigaciones y experiencia.

10. El archivista debe promover la conservación y el uso del patrimonio documental de la humanidad trabajando de manera conjunta con los miembros de su comunidad y con otros profesionales. Fuente: http://www.agn.gob.mx/menuprincipal/archivistica/codigo.html (18.5.12)

COLEGIO DE PROFESIONALES EN CIENCIAS DE LA INFORMACIÓN DE BOLIVIA (CPCIB) Fundado el 13 de noviembre de 1995 por bibliotecólogos profesionales, siendo su primer directorio integrado por L. Verástegui*, Fernando Arteaga, F. Rosso*, Armando Gutiérrez, Eliana Martínez, Teresa Zelaya y Pablo Ramos. Desde su creación impulsó la realización de congresos internacionales y nacionales de Archivística, Bibliotecología y Documentación, estos últimos realizados en las ciudades de La Paz, Cochabamba, Oruro, Potosí y Quillacollo. Organiza cursos y talleres de capacitación y auspicia conferencias especializadas. Actualmente está presidido por Lola Sánchez. En su página web (www.cpcib.org), publican Quién es quién en Bibliotecología y Archivística, con referencias de los colegiados. Fuente: Morales, 2001: 109-112.

COLQUE ESTRADA, ADOLFO

(Cochabamba, 24 de marzo de 1960) Coronel del Ejército. Egresó del Colegio Militar del Ejército. Estudió la carrera de Analista de Sistemas en la Escuela Militar de Ingeniería y luego la carrera de Ingeniería de Sistemas en la Universidad Loyola. Fue Instructor en el Colegio Militar. Más tarde fue designado Jefe de la Unidad de Archivo Histórico del Comando en Jefe de las FFAA (1999–2004). Tuvo a su cargo la organización del Archivo Histórico de las Fuerzas Armadas de la Nación, que cuenta en sus fondos con registros del servicio militar desde 1932. A él se debe la refacción de los ambientes del Archivo Histórico, plasmado en 2003. Intentó acceder a las ayudas de la AECI, sin éxito. Recibió cooperación del My. Inf. J. R. Quintana Taborga*, cuando se desempeñaba como jefe de la Unidad de Análisis de Políticas de Defensa del Ministerio del Ministerio de Defensa Nacional, y por ello muy interesado en la modernización de los archivos de la Institución castrense. Fuente: Expediente personal Archivo del Ministerio de Defensa Nacional.

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COLQUE HUMÉREZ, MARÍA LIZ (La Paz, 14 de noviembre de 1973)

Estudió la Carrera de Ingeniería Comercial (Universidad Tecnológica de Bolivia), Ciencias de la Educación (Universidad Salesiana de Boliviana) y Electrónica Industrial (Escuela Pedro Domingo Murillo). Hizo cursos de Técnico en Aplicación y Telefonía Digital y un Diplomado en Gestión Hidrocarburífera en la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional. Su incursión a la archivística se dio luego de realizar el curso de Gestión de Archivos y Ofimática (ICCA). Trabajó como Encargada del Proyecto de Reordenamiento de Archivo Histórico de Documentos Contables de los Distritos Cochabamba y Tarija de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, empresa en la que trabajó en la Catalogación, Inventario y Codificación de Documentos de la Unidad de Privatización; Codificación del Archivo Central y Documentación de la Unidad de la Dirección Legal General; el manejo del Archivo Digital “AssetDB”. En mérito a su experiencia y responsabilidad en 2009, fue designada Responsable de la Unidad de Archivo Central, con las funciones de Manejo de los Sistemas de Control de Archivos y Gestión Documental Electrónica (LaserFiche). Fuente: CV.

COMITÉ NACIONAL DE ARCHIVISTAS, BIBLIOTECARIOS Y DOCUMENTALISTAS Fundado por L. Oporto*, E. Valda*, R. Choque*, E. Cárdenas*, J.C. Fernández*, Beatriz Bozo, Ramiro Barrenechea y Nelson Larrea, en cumplimiento de la disposición especial Nº 21 de las Recomendaciones particulares del Seminario Nacional sobre Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural y Natural de Bolivia, realizado en La Paz del 3 al 5 de marzo de 1993. El 25 de noviembre del mismo año organizó el acto de reconocimiento y condecoración a seis archivistas (A. Salazar*, A. Belmonte*, Aldana*, A. Gamarra*, N. Vargas*, I. Vera*), dos bibliotecarias (Martha Barrera y Lily Llanos) y dos custodios de memoria comunitaria (L. Condori* y D. Moricio*), todos con 25 años de servicio. Denominó al Banco Central de Bolivia* como Impulsor de la Archivística Boliviana, rindió homenaje a G. Mendoza* instando a la publicación de su obra completa, actuó como Observatorio de Archivos en Bolivia emitiendo recomendaciones técnicas por medio de conferencias y pronunciamientos públicos. Asesoró a instituciones estatales en trabajos técnicos, participó activamente en los seminarios sobre Patrimonio cultural organizado por el Vicepresidente Luis Ossio (1994), en la Reunión del Sistema Nacional de Información, convocado por la oficina de la UNESCO en Bolivia y el ABNB (1995); convocó al Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas “Gunnar Mendoza Loza”*, realizado en Sucre, del 18 al 21 de octubre de 1995, de la que salió la directiva de la Asociación Nacional de Trabajadores de la Información*, de efímera y anodina existencia, siendo su presidente R. Gantier*. Fuente: Oporto, 1993.

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CONDARCO MORALES, JULIO RAMIRO

(Oruro, 7 de octubre de 1927. † La Paz, 16 de julio de 2009) Abogado de profesión, autodidacta en Historia. Dedicó su existencia a la investigación histórica y en segundo nivel a las letras. Autor de obras fundamentales, de sólida estructura historiográfica y heurística, muchas de ellas pioneras en su género, aunque no fueron reconocidas a nivel nacional, por razones inexplicables que rayan en el celo profesional que despertó entre intelectuales de su generación. Entre las de carácter historiográfico cito El escenario andino y el hombre (ecología y antropogeografía de los Andes centrales) (1971), Protohistoria andina; propedéutica (1967), Grandeza y soledad de Moreno: esbozo Biobibliográfico del príncipe de las letras bolivianas (1971), Orígenes de la Nación Boliviana: interpretación histórico sociológica de la fundación de la república (1978), Historia de la ciencia en Bolivia: historia del saber científico en Bolivia (1978), Atlas histórico de América y Bolivia (1985), Franz Tamayo: el pensador (1989), Historia del Ilustre Colegio de Abogados de La Paz (1993), y Aniceto Arce: artífice de la extensión de la Revolución Industrial en Bolivia (1985, 2002). Tuvo un paso fugaz por la dirección de la Carrera de Historia* de la UMSA, durante la dictadura del General L. García Meza* Tejada, desde donde impulsó, infructuosamente, la creación de la Carrera de Antropología y Arqueología. Posteriormente dejó la docencia universitaria. Desarrolló notable dominio de las fuentes primarias para la historia y el método heurístico para abordarlas, con un rigor rayano en el dogma, quizá como muy pocos en su época y en la actualidad. Su interés por los archivos se debe precisamente a su pasión por la investigación histórica. En sus actuaciones se recuerda aquella que impulsó en su condición de Asesor honorífico de Historia, del Congreso Nacional, en la época del gobierno del Dr. L. A. Siles*, para tratar de recuperar documentos históricos referentes a Bolivia. Accedió a una serie de archivos, únicos en su género, para documentar su obra Zárate El “Temible” Willka. Historia de la rebelión indígena de 1899 en la República de Bolivia (1965, 1982, 2011), entre ellas los papeles que recolectó Carlos Torres Rojas, “diligente colector de valiosos documentos históricos nacionales”; el Archivo Judicial de Oruro, a cargo de Victorino Vega; Archivo Parroquial de la Iglesia de Sicasica a cargo de José Benavides; y el Archivo del General J. M. Pando*, que contiene los documentos de su actuación en la Guerra Federal de 1899, entre ellos los referidos al caudillo aymara el Willka Pablo Zárate. Su archivo personal (Colección RCM), posee Cartas de Aniceto Arce a Ricardo Arce y otras personalidades. Tiene en su poder la Colección del Ing. Roberto Arce Álvarez (Vol. 2) (Fotocopias); Documentos coloniales de Oruro, conformado por originales y fotocopias, en varios fólders, ordenados y sistematizados para escribir la historia de Oruro; Documentos de la familia Condarco, varios folders con documentos originales, recortes de prensa y otros; Iconografía de personajes bolivianos (Fotos de personajes bolivianos); Archivo fotográfico de la Revolución Federal parcialmente reproducido en Zarate, el “temible” Willka. Originales en sepia y primeras reproducciones de ellos en blanco y negro, además de negativos. En 2009 la Carrera de Historia reconoció su labor intelectual en la publicación Ramiro Condarco: homenaje al escritor forjado en los mares de tierra, dirigido por C. Loza* y E. Aillón*. La Cámara Junior ‘Jóvenes Unidos para el Progreso’, le confirió la distinción nacional “Dr. Gunnar Mendoza Loza”, de índole cultural por su aporte historiográfico en 1997 y el Ministerio de Educación y Cultura le distinguió con el Premio Nacional de Cultura, en 2004, compartido con Inés Córdoba y Gil

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Imaná. Recibió homenaje a su obra y lo propio hizo un grupo de historiadores de la Carrera de Historia, póstumamente. Publicaciones archivísticas: “Gestiones encaminadas a la preservación del patrimonio documental en riesgo de extinción o deterioro” (Boletín del Archivo de La Paz, 1977, 4: 11-21). Fuente: Duchén, 2010; Loza y Aillón, 2009; Comunicación personal de Ramiro Duchén (1.8.11).

CONDE PAZ, MARÍA CRISTINA (La Paz, 28 de agosto de 1977)

Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Trabajó como Asistente administrativa del Archivo de la Aduana Nacional de Bolivia (2000), Técnico del Archivo de Afiliados a la Administradora del Fondo de Pensiones AFP Futuro de Bolivia (2001-2002), Auxiliar del Archivo Financiero de la UMSA (20022004), Técnico del Archivo Central del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (20052006) y en el Archivo del Banco Interamericano de Desarrollo. Fuente: CV.

CONDE VILLAVERDE, MARÍA LUISA (España)

Importante archivera del Cuerpo Facultativo de España. Dirigió el Archivo General de la Administración de Alcalá de Henares. Participó como docente en el Primer Diplomado en Gestión de Documentos y Organización de Archivos Históricos que organizó el Archivo de La Paz* y la Carrera de Bibliotecología* el 2002 en la ciudad de La Paz y en el Curso de Actualización Archivística, impartido en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (2003). Su Manual de Tratamiento de Archivos Administrativos se utiliza ampliamente en Bolivia.

CONDORI CHURA, LEANDRO (26 de febrero de 1905. † 1994)

La vida y experiencia de Leandro Condori Chura es fascinante. Practicó diversos oficios desde su infancia que la pasó sirviendo a un cura de su pueblo. Merced a esa condición logró aprender a leer y escribir. En la ciudad trabajó como panadero y más tarde como fabricante de velas, hasta que se encontró con los caciques que tomaron sus servicios como Escribano, a partir de 1923. Desde entonces acompañó a los dirigentes originarios en sus largas y, a veces, infructuosas gestiones para lograr el respeto a su derecho sobre las tierras de comunidad. También ejerció como maestro, enseñando en varias comunidades, colocado allí por los caciques. Su relación con los principales dirigentes de la época, tales como Santos Marka T’ola*, Rufino Willka, Mateo Alfaro y Santos Cornejo, hacen de él un custodio del Archivo de la Palabra, es decir, conservador de la memoria histórica comunitaria. En 1992 transmitió su experiencia en una relación autobiográfica, lograda en base a largas entrevistas con el sociólogo Esteban Ticona Alejo, publicándose en una edición bilingüe titulada El Escribano de los Caciques Apoderados/Kaisikinakan

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purirarunakan qillqiripa, en la que relata su historia de vida. El valor de su testimonio es múltiple. Tiene importancia para la historia política, para la comprensión de la organización social, para la etnografía y antropología, para la sociología, en fin para un amplio conjunto de temas unidos todos por el eje central de la reconstrucción histórica del pueblo indígena aymara. Sus recuerdos sobre la historia nacional son contundentes. Por ejemplo en su valoración sobre la guerra del Chaco, a la que no asistió, afirmaba que “nada de guerras, para que vamos a ir, del pueblo indígena aymara pues tampoco nos dan educación, ni nada; nos matan como a perros y estamos muriendo como animales, ¡cómo pues nosotros!, que vayan los mistis (mestizos), los k’aras (blancos)”. Participó activamente en la época del MNR, llegando a comandar un cuerpo de policías y milicianos. “Para que voy a mentir, fui del MNR”, pero la conciencia política aprehendida de la experiencia de la vida real, lo llevó a diferenciar los proyectos históricos de la comunidad y la nación India. Retirado ya, su vida se desenvolvía en un mar agitado de recuerdos, conservando una memoria prodigiosa, registrando nombres de preclaros líderes indios, a la par de estrategas, médicos y otros que han trabajado ofrendando sus vidas en el objetivo de construir mejores días para las naciones originarias. El Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas*, le otorgó una medalla y diploma por su noble labor de custodio de la memoria comunitaria, en noviembre de 1993. Fuente: Oporto, 1993: 33-35.

CONDORI M., FREDDY RICARDO Responsable del Archivo del Instituto Nacional de Colonización, colaborado por Ana María Zárate (1982). Presentaron una ponencia al II Encuentro Preliminar de los Archivistas de La Paz (14 al 18 de junio), referida a la historia institucional del Instituto (creado el 28 de junio de 1965), elevado a estatus de institución autárquica (DL de 31 de junio de 1966), responsable de la administración de tierras fiscales calificadas como áreas de colonización, con cinco regionales a nivel nacional (I: Alto Beni, II: Cochabamba, III: Santa Cruz, IV: Tarija y V: Cobija). Su Archivo poseía documentos desde 1963, “debidamente empastados”. Publicaciones archivísticas: “Informe del Archivo del Instituto Nacional de Colonización”, coautor con María Zárate (En Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 38-39). Fuente: Oporto, 1982: 38-39.

CONDORI QUISPE, MARISOL LILY (La Paz, 16 de mayo de 1979)

Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Ha trabajado en la Biblioteca Central de Ingeniería (2001-2002) y la Biblioteca de la Escuela Militar de Ingeniería “Mcal. Antonio José de Sucre” (2003-2005). Como archivista intervino en el reordenamiento del archivo de Kardex en la Carrera de Literatura (UMSA), pasó por el Archivo del Fondo Nacional de Vivienda Social en

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proceso de liquidación (2002), realizó prácticas en el Fondo Nacional de Inversión Productiva y Social (2003). Posteriormente ejerció funciones en la Unidad de Postgrado de la Facultad de Medicina (UMSA, 2005-2006); y desde ese año es Responsable de la Biblioteca y Archivo Central del Ministerio de Justicia. Asistió al Seminario sobre el Desarrollo de la Archivística en Bolivia (2003), las Jornadas Paceñas de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2004, 2005 y 2009), Seminario de Descripción Archivística (2005), los talleres departamentales de la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006, 2007), los seminarios sobre Gestión Documental y Organización de Archivos Administrativos (2006, 2009), los Congresos Internacionales de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2001 y 2009), el I y III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2009 y 2011) y la conferencia sobre la Implementación del Programa de Gestión Documental bajo Estándares Internacionales en el BCB (2009). Organizó el curso de Administración de Archivos de Gestión en el Ministerio de Justicia (2009), por lo que la Ministra de Justicia le otorgó un Diploma de Reconocimiento y Memorándum de Felicitación. Fuente: CV.

CONGRESO DEPARTAMENTAL DE TRABAJADORES DE LA INFORMACIÓN DE LA PAZ “ALBERTO CRESPO RODAS” Realizado en La Paz, del 16 al 18 de mayo de 1996. Organizado por la Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información (Archivos, Bibliotecas y Museos). Como conclusión se fundó la Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información (Filial La Paz)*, y emitió la Carta de La Paz, en la que explican el rol de los trabajadores de la información para la defensa y salvaguarda del patrimonio cultural boliviano y la defensa de los derechos de sus trabajadores. Al poco tiempo se extinguió.

CONGRESO NACIONAL DE ARCHIVEROS, BIBLIOTECARIOS Y DOCUMENTALISTAS DE BOLIVIA “GUNNAR MENDOZA LOZA” Realizado en Sucre, del 18 al 21 de octubre de 1995. Convocado por el Comité Organizador de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia* con el auspicio del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. Al término de sus deliberaciones, se fundó la Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información*. El congreso reunido designó a los directivos de la Asociación, entre ellos E. Pareja* y R. Gantier*. Luego de un curso destinado a archivistas de Sucre, la Asociación desapareció por inactividad. Fuente: Arze Aguirre, 1995.

CONSEJO INTERNACIONAL DE ARCHIVOS (CIA) Organización No Gubernamental creada en 1948 para promover la cooperación, la investigación y el desarrollo, en todos los campos relacionados con los archivos. Después de la Primera Guerra Mundial (1914-1918), el Instituto para la Cooperación Intelectual, intentó impulsar la creación de una organización archivística

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mundial, emulando la idea de Chauncey J. Hamlin, que había fundado el Consejo Internacional de Museos ICOM. El 9 de junio de 1948 el Dr. Buck (Archivista de los EE.UU.), junto a un grupo de expertos, estableció un “Consejo Internacional sobre Archivos”, siendo Charles Samaran, director general de los archivos de Francia, su primer presidente. Su sucesor, Charles Braibant, convocó a la primera asamblea del Consejo, el 21 y 22 de agosto de 1950, en las oficinas de la UNESCO, en París. El CIA aglutina a directores de Archivos Nacionales, las Asociaciones profesionales de archivistas, archivos regionales y locales y archivos de otras organizaciones, así como archivistas individuales. Las secciones del CIA, estimulan la investigación, información y capacitación archivística, reuniendo en su seno a expertos en archivos estatales, municipales, comerciales, laborales, eclesiásticos, universitarios, parlamentarios, de partidos políticos y arquitectónicos. Otras secciones se ocupan de los archivos de literatura y del arte, los expedientes notariales, los archivos de los deportes, los expedientes militares y la sigilografía. Los comités y los grupos de trabajo ad hoc trabajan en cuatro áreas de prioridad estratégicas: Defensa y promoción; Expedientes electrónicos, manejo gerencial de archivos y automatización; Preservación y protección contra desastres; y Educación y capacitación profesional. Existe una estrecha cooperación con la UNESCO por medio de la publicación de estudios del Records and Archives Management Programme RAMP y el ICCROM. En 2009 el CIA contaba con más de 1.400 asociados en más 190 países y territorios. Es una organización que incluye entre sus socios a personas e instituciones de archivos públicos y privados, con suficiente independencia política. Tiene su sede en París en el edificio de los Archivos Nacionales de Francia. Se rige por una Asamblea general y está administrado por un Comité ejecutivo. Promueve foros regionales para debatir temas inherentes al desarrollo de la archivística mundial, la preservación, el desarrollo y el uso de la herencia archivística del mundo. Comprendiendo que los archivos registran datos de las actividades y negocios humanos, propugna el paradigma que los archivos y documentos son garantes de los derechos de los ciudadanos y de los Estados y son esenciales para la democracia y el buen gobierno. Por otra parte, afirma que los archivos constituyen la salvaguarda de la memoria de la humanidad, ya que conservan testimonios de su pasado. Fuente: http://www.ica.org (9/02/10); http://es.wikipedia.org (10.02.10)

CONVERSE, J. THOMAS (Estados Unidos)

Jefe de Archivo (Chief, Record Management Section) del Banco Interamericano de Desarrollo. Llegó a La Paz en misión oficial, como parte del proyecto de acceso a la información del Centro Carter en Bolivia, en marzo de 2005. Durante su estadía realizó una serie de visitas in situ y evaluaciones de los Archivos de cuatro entidades estatales, en los que se aplicó el proyecto piloto de acceso a la información, que incluyen a los ministerios de Gobierno, Desarrollo Económico, Servicios y Obras Públicas y la Aduana Nacional. Adicionalmente hizo una visita al recientemente reconstituido Archivo de la Comibol. Luego de la visita que realizó al Archivo Histórico de la Comibol, envió un lacónico, pero significativo informe: “Es un milagro archivístico”. En su reporte oficial al Centro Carter,

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afirmó: “Si bien la Comibol no es parte del programa piloto de transparencia gubernamental, proporcionó valiosas lecciones que se aprendieron al reconstruir un sistema de archivo que se encontraba en un estado de colapso total. Allí se utilizó al máximo al personal, materiales y espacio, para recrear un muy ordenado y vital archivo que se encontraba antes en un absoluto caos. Los archivos de la Comibol son una inspiración para los archivistas de todas partes donde se enfrentan a desafíos de todas clases”. Fuente: Converse, 2005.

COPA LÓPEZ, ERNESTO

(Tasna Rosario, Nor Chichas-Potosí, 8 de agosto de 1970) A finales de 1988 era trabajador eventual en los Almacenes Generales de la Corporación Minera de Bolivia en la ciudad de El Alto. Junto a F. Aguilar, O. Quispe*, D. Segales*, V. Lanza*, liderados por E. Ramírez*, formó parte del grupo que protagonizó el rescate del Archivo de la Comibol, que se hallaba abandonado a la intemperie en el patio del Almacén de esta empresa. Se le encomendó tareas de conservación preventiva, clasificación y ordenación de los documentos de archivo. Gracias a su notable intuición logró descifrar el método de organización de los Archivos de la Patiño Mines, que permitió restablecer su orden original de las series de ese fondo. Posteriormente participó en el salvataje de varios fondos documentales de la Corporación Minera de Bolivia (Complejo Quechisla, Viloco, La Palca, Karachipampa). Desde 2002 participa en el programa de capacitación continua impulsado por el Sistema de Archivo de la COMIBOL, que dirige C. Campos*. En mérito a su desempeño fue designado como Encargado del Archivo Regional de Potosí que forma parte del Archivo Histórico de la Minería Nacional. En 2012, fue designado Encargado del Archivo de la Empresa de Fundición de Karachipampa, dependiente del mismo sistema. Fuente: CV.

CORDERO BENAVIDES, JULIO GONZALO (La Paz, 27 de mayo de 1938)

Fotógrafo autodidacta. Estudió hasta tercero de secundaria. En 1960 su padre J. Cordero Ordóñez* lo envió a Buenos Aires a especializarse en fotografía de estudio, no obstante que el joven Cordero ya dominaba esa técnica. Heredó el archivo fotográfico de su abuelo J. Cordero Castillo*, quien documentó momentos estelares de la historia paceña en la primera mitad del siglo XX, labor que fue continuada por J. Cordero Ordóñez (su padre), Gregorio Cordero Miranda (su tío) y él mismo, por 54 años. A su empeño por conservar ese legado se debe el convenio suscrito entre el Archivo de La Paz* y la Earthwatch Institute for Field Research de Houston, Texas, que digitalizó parte de su invaluable fondo fotográfico. Junto a su hija Ninoska se halla organizando una institución para proteger el Archivo Fotográfico Cordero.

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CORDERO CASTILLO, JULIO

(Pucarani, Provincia Los Andes, La Paz, 17 de agosto de 1879. † La Paz, 27 de octubre de 1961) Es uno de los fotógrafos pioneros de La Paz, que trabajó en este rubro desde 1898 hasta 1940. Empezó en el estudio de los Hnos. Valdéz, fotógrafos peruanos con sucursales en La Paz y Sucre, donde aprendió las técnicas de la fotografía, tanto del retrato como de laboratorio. En 1898 empezó a trabajar en La Paz por cuenta propia y dos años más tarde abrió su estudio en la calle Recreo. En 1910 instaló su estudio de fotografía y cine-fotografía en la calle Ayacucho Nº 82, con un inmenso almacén en el número 74 y 76 de la misma arteria, donde expendía artículos fotográficos importados de Europa (Lumiere, Jougla Seeds y Guilleminot) y Estados Unidos de Norteamérica (fue el primer representante de Eastman Kodak); así como las primeras vistas fotográficas y tarjetas postales de Bolivia (Tiawanaku, Lago Titicaca, Copacabana y La Paz). Sus fotografías ganaron reputación por ser elaboradas artísticamente, especializándose en retratos, ampliaciones y reproducciones al bromuro, velox y citrato. Es el primer fotógrafo que realiza filmaciones de desfiles cívicos y partidos de fútbol (películas que fueron entregadas a la Cinemateca Boliviana*). Su obra fue premiada consecutivamente en certámenes realizados en Sucre (Primer Centenario de la Independencia, 1909), La Paz (Primer Centenario de la Fundación de la República, 1925. Cuarto Centenaio Fundación de La Pa, 1948) y Potosí (Ferrocarril PotosíSucre). Gracias a su reputación tomaba encargos de empresas como la Patiño Mines, documentando la vida empresarial a lo largo y ancho del territorio nacional. En 1909 fue designado fotógrafo oficial de palacio por el Gobierno de Eliodoro Villazón, el 18 de noviembre, ratificado por los presidentes Ismael Montes (1913), J. Gutiérrez Guerra* (1917) y transitoriamente por los gobiernos de B. Saavedra*, H. Siles*, D. Salamanca*, David Toro, G. Busch* y E. Peñaranda*. Ese puesto de privilegio le permitió documentar la vida política, social y legislativa del país durante décadas, creando un formidable archivo fotográfico. Abrazó la causa liberal con pasión. Fue Alcalde de Barrio de la Zona de la Nueva La Paz (San Pedro) en 1911 y 1913, Honorable munícipe en 1921, Inspector de Mercados y del Cementerio General y Miembro titular de la Legión Cívica al comienzo de la guerra del Chaco. En su faceta sindical destacó como delegado propietario del Gremio de Fotógrafos en el Directorio de la Federación Obrera de La Paz, siendo fundador de la Unión Sindical de Fotógrafos de Bolivia. Fue presidente de la Sociedad de Socorros Mutuos “San José” (1951). Llegó a ocupar el cargo de fotógrafo de la Brigada Departamental de Policía de La Paz durante 36 años consecutivos. Con A. Mariño* crearon la Sección Archivo de Identificación y Criminalística de la Policía Boliviana. Se jubiló con el grado de Teniente asimilado. A su retiro, tomaron la posta sus hijos Julio Cordero Ordóñez y Gregorio Cordero Miranda, quien se dedicó también a los estudios de arqueología; y su nieto J. Cordero Benavides*, quien conserva unas cien mil fotografías históricas. En esa época los fotógrafos no entregaban los negativos de las obras que se les encomendaban, pues cuando los interesados requerían nuevas copias, necesariamente volvían al estudio, conformando un incipiente Archivo. La labor de los fotógrafos era muy sacrificada pues debían trasladarse a ciudades capitales, y poblaciones rurales por temporadas de dos semanas, en las que habitaban hoteles y modestos hospedajes. En 1909 viaja a Sucre en ocasión del Centenario del 25 de mayo, ocasión en la que “visita casas-quinta, chalets y edificios, para tomar vistas fotográficas y llenar con ellas el

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Álbum del Centenario”, a tiempo de ofrecer sus servicios “profesionales en el Arte”, atendiendo a domicilio. En 1914, lo encontramos en el centro minero de Corocoro (La Paz), ofreciendo atención “a domicilio o fuera de la población, especialmente en retratos de arte de guaguitas, grupos de familias, grupos campestres al aire libre”. El 20 de octubre de algún año, está en Coroico (Yungas, La Paz), donde ofrece la novedad de “miniaturas al esmalte y ampliaciones al bromuro”. Emplea avanzadas técnicas de marketing, por medio de volantes impresos en los que hace gala de la modernidad de sus aparatos “para tomar vistas de elaboración, maestranzas y vistas de mensuras”, o pavonearse de sus “procedimientos modernos, al Vélox, Bromureto (sic), al Carbón, Platino y Aristotip”. Hacia 1925, el magnate del estaño S. I. Patiño* lo contrata para retratar sus instalaciones industriales en sus minas de Catavi, Siglo XX y Cancañiri. De esa manera, con el tiempo fue formando un impresionante archivo fotográfico de negativos en vidrio y películas en blanco y negro, reuniendo un total aproximado de 100.000 negativos de fotografías instantáneas en blanco y negro, con temática variada, como panorámica-paisajística, arquitectónica, social, militar, política, empresarial, policial, deportiva, religiosa, arqueológica, comercial, a las que se suman tomas de estudio y galería artística de grupos familiares y personajes políticos de diversos gobiernos. El Archivo Cordero abarca el arco temporal de 1898 a 1940, al que se incluyen las fotografías en color tomadas por J. Cordero Benavides*, con lo que los negativos llegan hasta el 2009 inclusive. La primera vez que se expuso en público el valioso testimonio fotográfico de Julio Cordero fue en 1993 en el Tambo Quirquincha, con 320 fotografías sobre aspectos urbanísticos y sociales, en la que se muestran las tradiciones culturales de la ciudad de La Paz. El inmenso Archivo de Foto Cordero llamó la atención del investigador y curador norteamericano Peter Yenne, la especialista en fotografía histórica María Adelma Benavente (Perú) y la investigadora Michele Penhall, quienes impulsaron el Proyecto Portrait of Bolivia del Earthwatch Institute for Field Research de Houston, Texas, con el que se logró digitalizar 5.000 negativos de todas las épocas. Presentaron el resultado de su trabajo en el Photo Fest de Houston en marzo de 2002, exponiendo cerca de 100 fotografías del Archivo Cordero. La muestra fue trasladada luego a la Casa de América de Madrid, que llevó a afirmar al investigador español en fotografía Rafael Doktor, que “en Bolivia existió un fotógrafo de los mismos quilates que el peruano Martín Chambi”. El Estudio Cordero se instaló sucesivamente en la calle Recreo, hoy Mariscal Santa Cruz (1900-1905); Ayacucho, entre Mercado y Potosí (1905-1921); Comercio esq. Yanacocha (1921-1936); Yanacocha esq. Potosí (1936-1940); Mercado esq. Colón (1940-1953); Loayza (1953-1967); Galería Luz, calle Mercado (1967-1985) y Edificio Colón (1985-1992). Fuente: Buck, 1999; Cordero, 1909; Cordero, 2004: 183-188; Costa Ardúz, 1993; Querejazu, 2010: 11.

CORDERO ORDÓÑEZ, JULIO

(La Paz, 22 de febrero de 1906. † La Paz, 9 de agosto de 1963) Fotógrafo. Dibujante y caricaturista innato. Hijo de Julio Cordero Castillo*, padre de Julio Cordero Benavides*. Fue expulsado del Colegio San Calixto a raíz de una caricatura que hizo del director, por lo que culminó el bachillerato en el Colegio Ayacucho. Prestó su servicio militar en el Regimiento Camacho de la ciudad de Oruro

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(1926). Marchó al frente de batalla en la Guerra del Chaco (1932-1935), alistándose en el Regimiento Bolívar de Viacha. Cayó prisionero en Campo Vía y recluido en el campo paraguayo de Paraguarí (1934-1936), junto al pintor Miguel Alandia Pantoja y al artesano Primitivo Chuquimia, con quienes organizó una sociedad para enviar recuerdos a las novias de los presos: Alandia Pantoja hacía dibujos, Primitivo Chuquimia esculturas de yeso y Julio Cordero escribía poemas de amor. Durante su prisión testimonió fotográficamente su cautiverio, gracias a una máquina fotográfica rudimentaria que logró construir. Logró evadirse de la prisión y retornó a La Paz. Deja definitivamente sus estudios de Arquitectura para dedicarse a la fotografía en el estudio Cordero. Fue fundador junto a su padre, de la Unión Sindical de Fotógrafos de Bolivia (1935-1936), con quien presentó una exposición retrospectiva en conmemoración del Cuarto Centenario de la Fundación de la ciudad de La Paz (1948). Viajó por Brasil, Argentina, Colombia, México, Paraguay, Perú y Venezuela. Se especializó en fotografía artística, a través del retrato, particularmente de rostros (de estudio y galería); y la técnica del pintado manual. Es autor del histórico retrato de Franz Tamayo, que tomó sin su consentimiento, cuando con su padre visitó al vate para tomarle una foto de carnet. Cuando entregó el retrato al sorprendido escritor, éste se enfadó pues le disgustaba que le fotografiasen, pero al ver la calidad del retrato, lo aceptó con agrado. Con su vasta experiencia y nuevas técnicas, logra que el Estudio Cordero se reactive. Con su padre, son los primeros en experimentar con la fotografía a color. Fue reportero (aunque no le gustaba) de El Diario y Última Hora (década 40-60). También registró fotos de la ciudad y lugares turísticos (Tiwanaku, Copacabana), para elaborar postales para la venta, con su hermano, el arqueólogo Gregorio Cordero Miranda. Fuente: Carrillo, 2008; Cordero, 2004; Entrevista a Julio Cordero Benavides (05.2012).

CORPORACIÓN MINERA DE BOLIVIA (COMIBOL) Ente estatal minero, creado por DS N° 3196 de 2 de octubre de 1952, como efecto de la Nacionalización de las empresas mineras de Simón I. Patiño*, Mauricio Hochschild* y Carlos V. Aramayo*. El DS N° 3223 de 31 de octubre decretó la nacionalización de las minas privadas, junto a las que nacionalizó los documentos, archivos, planos y documentos de las ex empresas, declarándolas patrimonio estatal, inviolable e inenajenable, ejemplo único en la historia archivística. Heredó los sistemas modernos implantados por las empresas de Simón I. Patiño, Mauricio Hochschild y Víctor Aramayo, que mantuvo hasta 1985, año en que la Comibol fue convertida, por imperio del DS 21060 de 29 de agosto de 1985, en empresa administradora de contratos de riesgo compartido. Sus archivos fueron abandonados en almacenes de la ciudad de El Alto, donde fueron sometidos a las inclemencias ambientales, enfrentando el riesgo inminente de destrucción, hasta que un grupo de Archiveros mineros de la Comibol*, protagonizó la hazaña de salvataje. El 14 de mayo de 2004, el presidente C. Mesa*, dictó el DS N° 27490, que autorizó la creación del Sistema de Archivo de la Comibol*.

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CORPUS DOCUMENTAL DE LA HISTORIA DE TARIJA Un acuerdo suscrito entre la Prefectura del Departamento de Tarija, la Universidad “Juan Misael Saracho” y el Círculo de Escritores y Artistas de Tarija (1986), posibilitó la compilación del Corpus Documental de Tarija (1986-1997), publicado en seis tomos, con un total de 845 documentos, que abarca desde 1590 hasta 1930. El primer tomo trata de los acontecimientos suscitados en Tarija desde el 10 de febrero de 1590 (carta del licenciado Cepeda a S. M. sobre la reducción de los indios chiriguanos), hasta el oficio de 1811 (índice de varios documentos vinculados con la actividad del Cabildo y la Junta de la ciudad de Tarija). El segundo se refiere a los acontecimientos relativos a la guerra de la independencia, desde el 27 de enero de 1810 (Oficio de José Manuel Goyeneche* con la nómina de los sentenciados por alta traición, infames subversores del orden público, a la pena de horca, con confiscaciones de sus bienes que pasan al real erario), hasta el 7 de abril de 1825 (Carta del general A. J. de Sucre* al gobernador de Salta, sobre la actividad de algunos comerciantes de Salta y Potosí). El tercero recoge los documentos que se refieren a la independencia de Tarija y su anexión a Bolivia, empezando con el oficio de 8 de abril de 1825 (Oficio del gobierno de Buenos Aires al General J.A. Alvarez de Arenales*, que informa del movimiento de tropas realistas al mando del general Pedro Antonio de Olañeta en Potosí, La Plata y Tarija) hasta la carta de 12 de abril de 1826 (Mariano Gordaliza al general J.A. Álvarez de Arenales sobre los sucesos de Tarija, la deposición de Pedro A. Flores y el movimiento de la campaña). El tomo IV muestra el proceso de separación definitiva de Tarija de la provincia de Salta, y por ende, de la Argentina, por lo que contiene la profusa documentación sobre este álgido tema desde el 3 de mayo de 1826 (oficio del ministro de Gobierno al ministro de Relaciones Exteriores, con el que le envía al Gobierno de Salta la carpeta de correspondencia referida a Tarija) hasta la carta de 9 de abril de 1868 (general Rudecindo Alvarado al general Gerónimo Espejo, rememorando el triunfo de Maypú para las armas de la patria, con una referencia al incidente que ocurrió en Tarija entre J.A. Alvarez de Arenales y Zerdeña en esa época). El tomo V, organizado por E. Langer*, es el complemento de la obra compilada por C. Minutolo de Orsi*. Abarca la época republicana desde 1825 hasta 1930. El orden de este último es distinto a los anteriores que privilegiaban el cronológico y el de Langer el temático. Por ello el primer documento transcrito es el informe de Francisco Burdett O’Connor de 1834 y el último el inventario de los bienes de Fernando Campero en Bolivia y la Argentina, de 1892. El tomo VI y final fue compilado por C. Julien* (fallecida en 2011), con la colaboración de Kristina Ángeles y Z. Bass Werner* y corresponde íntegramente a las fuentes tempranas, vale decir, las que corresponden al Siglo XVI. Para ello se indagó y se obtuvieron copias legalizadas en repositorios argentinos como el Archivo Histórico de Salta, el Archivo General de la Nación, el Museo Mitre, la Biblioteca del Honorable Congreso de la Nación Argentina, la Biblioteca Nacional y el Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores, de las provincias de Jujuy, Tucumán y Córdoba. Minutolo privilegió las fuentes de archivos argentinos, con una fuerte tendencia a justificar la pertenencia de Tarija a las Provincias Unidas del Río de La Plata. El Corpus incluye documentos de archivos bolivianos como los del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, Archivo Franciscano de Tarija*, Archivo de la Casa de la Cultura de Tarija, Archivo de la Notaría de Primera Clase de la Dra. Jacqueline A. de Arce de la misma ciudad,

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Archivo Judicial de la Corte Superior del Distrito de Tarija y del Centro Bibliográfico, Documental e Histórico de San Francisco Xavier de Chuquisaca*. Fuente: Minutolo, 1986-1997; Entrevista con E.D.Langer el 21.07.2010.

CORRAL, CASIMIRO (La Paz, 1830. † 1897)

Secretario General y ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores del presidente Agustín Morales (1871). Dispuso la creación del Archivo General del Consejo de Estado. Colaboró ampliamente con G. R. Moreno* en su trabajo de recolección de manuscritos históricos. Compiló los documentos oficiales del gobierno de Agustín Morales, con los que publicó una Memoria de los actos administrativos de ese gobierno, durante el tiempo que tuvo a su cargo la Secretaría General, es decir comprende los actos desde el 26 de noviembre de 1870 hasta el 15 de enero de 1871. Viene a ser la única fuente oficial sobre este régimen, pues no se llegó a publicar el Anuario Administrativo correspondiente a 1870, por lo que se emplea como tal por la vía supletoria. Fuente: Oporto, 2006: 149; Oporto, 2006b: 62-63, 102; Poder Ejecutivo, s.f.

CORTÉS ALONSO, VICENTA

(Valencia, España, 1 de marzo de 1925) Historiadora y Archivera. Ingresó por oposición en el Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos de España en 1954, siendo destinada al Archivo General de Indias* donde estuvo hasta 1957, al que retornó posteriormente de 1964 a 1968. En 1957 trabajó como Asesora Técnica del Archivo Nacional de Bogotá, bajo contrato suscrito con el gobierno colombiano. En 1959 pasó a asesorar al Centro de Investigaciones Lingüísticas y Etnográficas de la Amazonía Colombiana, dependiente de la prefectura Apostólica de Leticia. Estando allí, en 1959, obtuvo una beca de la Organización de Estados Americanos* para trabajar en la Sección Hispánica de la Biblioteca del Congreso de EE.UU., ocasión que le permitió participar en 1961 en la Primera Reunión Interamericana de Archivos* que tuvo lugar en Washington, fecha crucial para los archivos iberoamericanos. A su regreso a España, en 1962, desempeñó el cargo de Directora del Archivo de la Delegación de Hacienda y Centro Coordinador de Bibliotecas de Huelva hasta 1964, año que retornó al Archivo de Indias. En 1968 fue nombrada Directora del Gabinete de Documentación, Biblioteca y Archivo del Ministerio de Educación y Ciencia en Madrid, cargo que desempeñó hasta 1972, en que pasa a dirigir la Inspección General de Archivos. Al desaparecer ésta en 1984 se trasladó al Archivo Histórico Nacional donde se jubiló en 1990. En 1972, nueva fecha decisiva para los Archivos Americanos, fue la celebración en Washington de la Reunión Técnica sobre el Desarrollo de los Archivos, en la que Vicenta Cortés participó como Secretaria. Con anterioridad había sido contratada por la Organización de Estados Americanos para realizar una consultoría que la llevó a visitar los Archivos de Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, Perú y México. Su informe fue la base de trabajo de la citada Reunión, de la cual surgió la Carta de los Archivos Americanos*. Vicenta Cortés fue el alma de los Cursos de Organización y Administración

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de Archivos y Archivos Históricos para la formación de archiveros iberoamericanos, que se celebraron en Madrid de 1973 a 1992, en colaboración con la Organización de Estados Americanos, veinte años de formación de archivistas latinoamericanos, de los cuales una mayoría dirige los destinos de los archivos del subcontinente. Debido a su gran experiencia en los archivos iberoamericanos, la UNESCO solicitó su colaboración como consultora en varias ocasiones, y así surgieron los proyectos de Reorganización de la formación de archiveros y de las estructuras archivísticas en Venezuela (1974); Desarrollo de las infraestructuras de información. Sistema Nacional de Archivos en Costa Rica (1978); Proyecto piloto para la instauración de un Sistema Nacional de Archivos y Gestión de Documentos el Perú (1980); Implementación de un Sistema Nacional de Archivos y Gestión de Documentos en Nicaragua (1987). Con justicia ha sido calificada como “Archivera de América” y en mérito a su trayectoria, el VIII Congreso de Archivos del Mercosur (Montevideo, 2009) le reconoció como Socia de Honor, junto a M. Vázquez*, A. Heredia* y A. Tanodi*. El archivista peruano José Luis Abanto, publicó Una vida dedicada a los archivos: Biografía de Vicenta Cortés Alonso (2006). Publicaciones archivísticas: Archivos de España y América. Materiales para un manual (Madrid, Universidad Complutense, 1979; 2ª ed. Madrid, FCE, 2008, 2 Vol.); Documentación y documentos (Madrid, SGA, 1980); Perú: Sistema nacional de Archivos y Gestión de Documentos. RAMP. Proyecto piloto (París, UNESCO, 1981); “Balance de veinte años de la labor archivística en las Américas, 1961-1981” (Boletín de la ANABAD, XXI, 1981, 3: 395-414); Manual de Archivos Municipales (Madrid, ANABAD, 1982; 2ª ed. Madrid, ANABAD, 1989); El Archivo como ilusión. Memoria del Archivo Histórico Nacional (Madrid, Edición de VC, 1985); Diez años de cooperación archivística. Curso sobre organización y administración de archivos de Madrid (Madrid, ICI, 1985); La información y los archivos; los ciudadanos, la ciencia y la cultura (Lima, PUCP, 1998); La escritura y lo escrito. Paleografía y diplomática de España y América de los siglos XVI y XVII (Madrid: Instituto de Cooperación Iberoamericana, 1986; Reeditado, Bogotá, ICCH, 1999) y Cincuenta años de recuerdos archivísticos de América (Lima, Fondo Pro Archivo, 2004); “La descripción de los fondos de la Audiencia de Charcas en los últimos 50 años” (Anuario del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, 2005, Nº 11: 619-718). Fuente: Abanto, 2006; Gordo, 2000: 21-40; Gutiérrez, 2000: 13-19; López, 2000: 41-94.

CORTÉS ARANA, RICARDO (Sucre)

Bibliotecario-Archivero, titulado en 1945, “con 12 años de estudios en el exterior y 10 años de trabajo en Bolivia”. En abril de 1965 presentó una carta al Presidente del Directorio del Banco Central de Bolivia*, informándole sobre las “Nuevas técnicas descriptivas en archivos”, a tiempo de ofrecer sus servicios “en un afán de superación y cooperar al progreso integral de los diferentes archivos”, criticando “el notorio desdén con que son vistos en nuestro país los archivos” lo que “origina frecuentemente injustificados retardos en el despacho de los negocios y no pocos desaciertos administrativos que es preciso corregir”. Continúa indicando que “los empleados de archivos son escogidos entre los menos útiles, estimándose, erróneamente que el coleccionar papeles no demanda conocimiento alguno salvo los de leer y escribir mal”. Afirma que “todo archivo contiene la historia de una institución y sus negocios deben atenderse y ser resueltos sobre las bases que suministran los antecedentes respectivos. Los documentos son la fuente informativa primaria sobre el desarrollo económico,

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político y social de una institución y constituyen por los mismo una parte inapreciable de su patrimonio”. En la parte conceptual señala que “el sistema actual descriptivo, toma como unidad, el documento” y recomienda “la descripción colectiva, cuyas unidades deben ser los fondos, divisiones y subdivisiones de documentos orgánicos, ordenados según los principios de Procedencia y del Orden Original”, principios que “han probado ser los únicos que al mantener inalterada la estructura de los fondos documentales orgánicos, proveen la base para una ordenación objetiva y consistente, facilitando la aplicación de otras operaciones archivísticas como: Accesión, Descripción, Restauración, Microfotografía, Metodología, Heurística, Crítica Documental, Técnica de Investigación, Evaluación y Eliminación de Documentos”. Concluye, con cierto rigor académico, afirmando que “los Archivos son instituciones específicamente previstas para la conservación, organización y servicio eficaz y económico de los documentos, una vez que estos han cumplido su función activa”. El Banco se interesó en la propuesta y convocó una consultoría para organizar sus archivos, a la que respondieron Cortés y otros cuatro proponentes (V. Maldonado*, Alfredo Suaznábar, David Chávez y Jaime Medinaceli). En diciembre de 1965, propuso organizar los archivos del Banco Central de Bolivia, en “Archivos Parciales”, para los Departamentos Monetario y Bancario, “organizados bajo el sistema Variadex System donde se aplica la combinación decimal alfabética e Index Tabs, en tres colores”. En abril de 1966 se adjudicó la obra por Bs. 30.000, con un cronograma que contemplaba: Plan de organización y Reglamento de Archivos Parciales (15 días), Cursillo de Archivología (90 días); Plan de Organización y Reglamento de Archivos Generales; y, Organización de los Archivos Generales y Parciales (inclusive los de El Alto y sucursales de La Paz) con una duración de seis meses. Cortés enfrentó un verdadero viacrucis, pues no pudo cumplir su ambicioso plan. En octubre, solicitó la subrogación del contrato a favor de Juan Lanza, quien respondió que “un trabajo de tal magnitud debería ser mejor pagado”, exculpando a Cortés, por cuanto enfrentó “la falta de materiales modernos de archivología y personal entrenado” hechos que “han impedido sustancialmente a un éxito deseable en el cumplimiento del contrato”. El Banco ejecutó la multa de incumplimiento (Bs. 50 por día), llevando el contrato a “punto muerto”. Pese a ello, Cortés fue el primer consultor externo del Banco, capacitó a 33 funcionarios que participaron en el Cursillo de Archivología, de los cuales solo 18 aprobaron; elaboró el manual de Organización y Reglamentación de los Archivos Generales del Banco Central de Bolivia. Fuente: Expediente personal de Ricardo Cortés Arana, 1964-1965 (ABCB).

CORTÉS RODRÍGUEZ, JULIO JORGE FRANCISCO (Cochabamba, 3 de octubre de 1953)

Historiador (UMSA). Estudió Psicología en la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina (1971-1974) y Etnohistoria, en la Escuela Nacional de Historia y Antropología, México D.F. (1980-1981). Candidato a Maestría en Desarrollo Sostenible y Gobernabilidad en el Instituto Internacional de Gobernabilidad, Universidad Abierta de Cataluña, Barcelona, España (2005). Hizo el Curso de Organización y Administración de Archivos Históricos* en la Escuela Nacional de Documentalistas, Biblioteca Nacional de España (1979), y otros en Planificación Regional y Gestión Pública (1976-1994). Fue Secretario General del Instituto Boliviano de Cultura (1979-

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1980), Asesor de Cultura de la Vicepresidencia de la República (1983), Director de Extensión Universitaria de la Universidad Técnica del Beni (1988), Asesor de Medio Ambiente de la Presidencia de Bolivia (1990), Asesor en Desarrollo Institucional y Descentralización de la Embajada del Reino de los Países Bajos en Bolivia (19952002), Consultor en temas indígenas y medio ambiente para diversas instituciones internacionales como UNICEF, GTZ, CAF, PNUD, FAN, USAID, Fundación Interamericana; Agencia Española de Cooperación Internacional. Fue Secretario de Desarrollo Institucional de la Vicepresidencia de la Republica, Delegado Presidencial para Asuntos Parlamentarios, y para el Desarrollo Institucional y Ministro de Desarrollo Sostenible y Planificación, ambos durante el periodo vicepresidencial (2002–2003) y de Gobierno de C. Mesa Gisbert* (2003-2005). Miembro de la Sociedad Boliviana de Historia (1987), Cofundador del periódico La Palabra del Beni (1987). Profesor invitado para el postgrado de Medio Ambiente, Ciencias del Desarrollo, Ecología, Gestión Municipal (UMSA), Universidad Andina Simón Bolívar (Sucre), UMSS. Autor de Caciques y Hechiceros. Huellas en la historia de Mojos (2005). Autor del Prólogo, notas y edición del “Diario del Padre Gumercindo Gómez de Arteche” sobre el proceso de la Guayochería entre los indígenas de Mojos, publicado en la Revista de la Sociedad Boliviana de Historia (1990). En el campo archivístico, trabajó con A. de Morales* en el Archivo Histórico Municipal “José Macedonio Urquidi” de Cochabamba. Participó con F. Cajías* y P. Barbáchano* en el histórico salvataje del Archivo de la Casa Suárez Hnos.*, trasladándolo desde Cachuela Esperanza hasta Guayaramerín. En 1980 salió al exilio y trabajó como investigador del Archivo Etnográfico Audiovisual del Instituto Nacional Indigenista de México (1981-1982); y como Analista en el Archivo Histórico Central de México (1981). Publicaciones archivísticas: “Cachuela Esperanza. Su archivo” (Boletín del Archivo de La Paz, 4 (6): 15-19); “El archivo de la parroquia de San José de Chiquitos”, con Isabel Alípaz (Boletín del Archivo de La Paz, 1979, 4 (6): 28-30; Id. Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (una guía preliminar). La Paz: cehila-ceprolai, 1984: 139-141). Fuente: CV.

CORVERA, PEDRO

(Tarija, 1880. † Cochabamba, 1946) Padre franciscano. Realizó sus estudios sobre historia franciscana en el Colegio de Propaganda Fide de Tarija y se consideró discípulo del P. Gervasio Costa, maestro en disciplinas humanísticas, teológicas. Empezó a trabajar en Tarija en 1896. Salvaguardó, con Fr. Manuel Mingo*, el archivo conventual franciscano de Tarija, donde trabajó en su catalogación en 1916, obra completada por G. Maldini*. Elaboró la Guía del Archivo franciscano de Tarija, es una obra de excelencia en su género, en el que se encuentran las indicaciones de los manuscritos más preciados como son las actas de decisiones conventuales, crónicas, diccionarios lingüísticos de los pueblos originarios del Chaco, manuales de predicaciones, inventarios, crónicas de las fundaciones de pueblos en el sudeste de Bolivia, historia misionera y características del sistema reduccional franciscano. Este manuscrito ha sido fundamental para la elaboración de la obra Presencia franciscana y formación intercultural en el sudeste de Bolivia, de L. Calzavarini*.

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Publicaciones archivísticas: Guía del Archivo franciscano de Tarija (Madrid, Tavera, 1998). Fuente: Calzavarini, 2007: Parte VII; Gómez, s.f.

COSSÍO, JUAN MANUEL (Lima, Perú)

Revolucionario en 1809. Apodado El Mazamorra, la noche del 16 de julio fue portavoz del pueblo, ocasión en la que buscó al escribano J.C. Vargas*, para tratar el asunto de los documentos del crédito público, que luego fueron quemados en vía pública. Fue apresado y posteriormente desterrado hacia Argentina, pero gracias a la revolución de 1810 pudo unirse al ejército de J.J.Castelli y retornar a La Paz. En su declaración preventiva hace saber “el entusiasmo popular que hubo con motivo de la quema de los papeles del crédito público que en prenda de las deudas al fisco guardaba la Real Caja, alhajas que representaban santos recuerdos de familia”. Llegó a ser Administrador de Correos en 1837. Fuente: Aranzáes, 1915.

COSTA ARDUZ, JOSÉ ROLANDO (La Paz, 1 de agosto de 1932)

Hijo de A. Costa de la Torre*. Realizó sus estudios universitarios en Medicina (UMSA), graduándose como médico cirujano en 1960. Investigador de la historia de la medicina boliviana, con 44 libros publicados. Especialista en Neurología (1960) y Medicina Legal (Forense) como Perito de Tribunales (1964), con 19 y 37 años de ejercicio profesional, respectivamente. Fue docente universitario durante 40 años, habiendo alcanzado la condición de Docente Emérito en las Facultades de Medicina y Derecho y Ciencias Políticas; también desempeñó la docencia en las carreras de Sociología y Odontología. Luego de haber alcanzado la jubilación, continuó enseñando en programas de postgrado. En la carrera administrativa universitaria fue designado director interino de la Carrera de Medicina, Vicerrector electo, Rector interino en varias oportunidades y director del Postgrado en Medicina Social de la UMSA. En el campo de los archivos, las bibliotecas y los museos, sin tener esa formación, fue designado director responsable de la Biblioteca de la Facultad de Medicina de la UMSA, consultor para el reordenamiento de la Biblioteca y Archivo del Congreso, Interventor y consultor de la Biblioteca Central de la UMSA. Organizó dos importantes archivos fotográficos, el primero con un total de 300 fotografías de J. Cordero* que entregó a la Alcaldía de la ciudad de La Paz, con la finalidad que se organice un Museo Iconográfico. Esta colección fue empleada en su libro La Paz, sus rostros en el tiempo. Lamentablemente se halla dispersa en varios museos del municipio. El segundo archivo corresponde al Museo Fotográfico de la Medicina en la ciudad de La paz, con un total aproximado de 800 fotografías, cuyo costo fue financiado por él mismo. Ha concluido de elaborar la Bibliohemerografía Médica Boliviana, compendio comentado con un total de 10.000 registros. Editor de Crónica Aguda que alcanzó 155 números en tres años de edición (1989, 1990, 1992). Tuvo a su cargo la difícil tarea de transferir, con costo, 60.000 volúmenes de la Biblioteca del

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bibliógrafo Arturo Costa de la Torre, al municipio de La Paz, con el que se creó la Biblioteca Patrimonial que lleva el nombre del patricio paceño. Heredó una valiosa colección de más de 200 manuscritos y documentos relativos a la historia de La Paz, que los vendió recientemente al Archivo Nacional de Bolivia. Obra publicada: Bibliografía sobre Medicina Tradicional del Área Andina (La Paz, 1987); Compilación de medicina kallawaya (La Paz, 1988); Bibliografía boliviana sobre materia electoral (La Paz, 1998. dos tomos); Bibliografía andina de medicina tradicional. Bolivia, Ecuador, Perú, en coautoría con Eduardo Estrella y Fernando Cabieses (Quito, Instituto de Investigaciones Históricas, 1998); “Bibliografía geográfica de la ciudad de La Paz” (Balance bibliográfico de la ciudad de La Paz, La Paz, 1999); Historia de la Sociedad Geográfica de La Paz (La Paz, 2005); Historia de la municipalidad de La Paz (2012). Fuente: CV.

COSTA DE LA TORRE, ARTURO

(La Paz, 6 de abril de 1903. † La Paz, 30 de octubre de 1984) Estudió en la Escuela Agustín Aspiazu y el Colegio Ayacucho (La Paz). Los estudios superiores los hizo en institutos culturales de Perú y Bolivia. Historiador, biógrafo, genealogista y bibliógrafo. Fue Delegado de la Comisión de Historia del Ministerio de Educación y Bellas Artes (1955), Bibliotecario de Amigos de la Ciudad (La Paz) (19601965), Miembro de la Sociedad Boliviana de Bibliografía, y del Instituto Murillano (La Paz), fundador del Instituto de Investigaciones Históricas y Culturales de la Alcaldía de La Paz, socio correspondiente del Instituto Peruano de Investigación Genealógica de Lima (Perú), miembro Bibliotecario del Instituto Cultural Boliviano Peruano de La Paz (1963-1967). Recibió el Diploma de Honor del H. Concejo Municipal de Cultura Murillana, en reconocimiento a su importante labor de investigación y estudios históricos en beneficio de la historia paceña (1962). Como resultado de su trabajo de investigación histórica, organizó una formidable biblioteca (unos 50.000 volúmenes), que fue vendida, a su muerte, al Municipio de La Paz en una suma que bordea medio millón de dólares. Esta biblioteca luego fue declarada por el Municipio Biblioteca Patrimonial. Igualmente formó una invaluable colección de manuscritos referidos a la historia de La Paz (siglos XVII, XVIII y parte del XIX), en los que se encuentra algo de los procesos de la guerrilla de la Independencia (por ejemplo el que se instauró contra el padre Ildefonso de las Muñecas). Su obra se centra en la historia, bibliografía, biografía, genealogía y ensayos literarios, citamos algunas de ellas: Romance y descendencia del Gran Mariscal de Ayacucho en la ciudad de La Paz (1961), Semblanza biográfica del poeta Ricardo José Bustamante (1963), Las Logias masónicas de la independencia. El Mariscal de Zepita y la Logia del Oriente del Titicaca (1963), Bibliografía del Gran Mariscal de Zepita Andrés de Santa Cruz (1965). Aunque con poco rigor en las fuentes, su monumental obra Catálogo de la Bibliografía Boliviana (La Paz, UMSA, 1968. 2 Tomos), es un referente imprescindible de consulta. Publicaciones archivísticas: El Archivo Histórico y la Biblioteca de Nicolás Acosta en los Estados Unidos. Estudio histórico-biográfico (La Paz, 1970); Memorias y diarios de la Guerra del Pacífico (La Paz, Instituto de Investigaciones Históricas y Culturales de La Paz, 1980. 2 tomos). Fuente: Barnadas, 2002: I, 624-625; Costa de la Torre, 1968: 408-410.

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COTERA, TOMÁS (Lima, Perú)

Llegó a La Paz como amanuense de Domingo Chirveches. Nicolás Aranzáes afirma que “fue furioso realista, lo mismo que su patrón”. Fue apresado durante la traición de Francisco Yanguas, pero apareció nuevamente en las filas del traidor José de Indaburo el 19 de octubre de 1809. A la muerte de éste se asiló en el templo de la Merced, de donde salió para unirse a J. M. de Goyeneche*, “actuando como verdugo de los patriotas”. Ante la aproximación de José de Castelli y el ejército argentino huyó de La Paz. Secuestró el Diario anónimo de la revolución de 1809, que hoy se encuentra en la Biblioteca Patrimonial “Arturo Costa de la Torre”. Este diario lleva mecanografiado en la contratapa la siguiente glosa: “Diario de los acontecimiento de la revolución de La Paz, original de 1810 (Diario del Dr. Crispín Diez de Medina y Escribano Sr. Cotera)”. Erróneamente se le atribuye la autoría del Diario, pues Diez de Medina era de las filas patriotas, en tanto el que escribió el Diario era realista, aunque según se desprende de su lectura, no “tan furioso” como lo fue Cotera, quien autenticó y dio fe sobre el manuscrito, lo que indujo al error de autoría. Fuente: Aranzáes, 1915.

CRESPO, JULIO CÉSAR Funcionario de la Prefectura del Departamento de Cochabamba. A él se debe la organización del primer Archivo Histórico Prefectural en 1986, durante la gestión del prefecto Germán Lema Araoz, con los fondos del antiguo Archivo de Notaría de Hacienda y Gobierno, conformado por documentos de data colonial. En 1997 y 2000 se realizó el primer ordenamiento cronológico y se procedió a la fumigación y empaquetamiento de algunos volúmenes coloniales. Con el cambio de prefectos, el Archivo tuvo que trasladarse con frecuencia lo que provocó el desorden del fondo. En enero de 2004 E. Arze Luján* se hizo cargo de su custodia logrando fundar el Archivo Histórico Departamental de la Prefectura de Cochabamba al que se denominó “Nataniel Aguirre”, conformado por los fondos del Archivo Notarial y otro procedente del Archivo de la Ex Corporación de Desarrollo Regional de Cochabamba. Fuente: Núñez, 2004: 14-16.

CRESPO RODAS, ALBERTO

(La Paz, 21 de septiembre de 1917. † La Paz, 30 de agosto de 2010) Historiador y Archivista; Diplomático. Muy joven trabajó en el Ministerio de Relaciones Exteriores, desempeñando diversos cargos y en el Servicio Diplomático, desde Oficial Primero de Departamento Consular (1938) hasta embajador de Bolivia en Ecuador (1990-1992). En la Academia Diplomática fue docente y Secretario. Su condición de militante del Partido de la Izquierda Revolucionaria le valió el exilio consentido durante toda la época del Movimiento Nacionalista Revolucionario (1952-1964). Estudió historia tardíamente en la Universidad Nacional de San Marcos de Lima, Perú (1968), siendo el primer historiador profesional de Bolivia. Presentó su

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tesis sobre El Corregimiento de La Paz, 1548-1600 (publicado en 1972). Durante su permanencia en Lima publicó La Guerra entre Vicuñas y Vascongados (1622-1625) (1956), escrita en el trayecto de regreso desde España a América, y la Historia de la ciudad de La Paz (siglo XVII) (1961), con documentación revisada en el Archivo General de Indias, sacándole, así, provecho a su exilio en España. De retorno a Bolivia, en 1969 (julio) es Subsecretario de Cultura del Ministerio de Cultura, Información y Turismo, cargo al cual se vio obligado a renunciar el mismo año, debido a la situación política del país. Durante 20 años (1969-1989) es docente en la Carrera de Historia*, contribuyendo a la formación de varias generaciones de historiadores profesionales y especialistas en archivos históricos; por su labor es declarado “Profesor Emérito de la Universidad Mayor de San Andrés” (1994). Introdujo la historiografía científica y la militancia política a la Carrera de Historia. Se afirma que lideró el “Ala Mirista” en la Carrera de Historia, durante el gobierno de J. Paz* (jefe y fundador del Movimiento de Izquierda Revolucionaria) fue Embajador en Ecuador, cuyo gobierno le impuso la Condecoración de la Orden Nacional “Al Mérito” en el Grado de Gran Cruz (1992). En su trayectoria compartió la cátedra, la investigación histórica, la bibliotecología y la archivística. Fue Profesor Guía de Tesis, para que seis estudiantes se titulen de licenciados (as) en Historia (Florencia Ballivián Martins de Romero, 1975 noviembre; Blanca Gómez Asport de Aranda, 1976 enero; Max Portugal Ortiz, 1976 abril; René Danilo Arze Aguirre, 1976 noviembre; Juan Siles Guevara, 1978 octubre; Laura Escobari Cardozo de Querejazu, 1984 diciembre). Fundador del Archivo de La Paz*, del que fue su primer Director (1971-1989), luego de un salvataje de una valiosa documentación judicial y notarial del Corregimiento y la Intendencia de La Paz (desde el siglo XVI), y de expedientes republicanos, junto a un grupo de estudiantes y profesores de la Carrera de Historia, hecho considerado como una proeza. Fundó y dirigió el Boletín del Archivo de La Paz (1976-1989). Fue Director de la ilustre Biblioteca Central de la UMSA (1974-1989). Asistió y participó de varios Coloquios, Conferencias, Congresos, Reuniones, Seminarios, etc. sobre historia, archivística y bibliotecología, como así realizó viajes de observación y conocimiento en Alemania, Argentina, Canadá, Ecuador, España, Haití, Estados Unidos, Paraguay, Perú, Senegal, Venezuela. Destacamos eventos sobre Archivos: Seminario Multinacional de Archivos (Lima, 1973); Conferencia sobre Archivos convocada por el Instituto Panamericano de Geografía e Historia (Ottawa, Canadá, 1974); la Agencia del Gobierno de Canadá para el Desarrollo, patrocinó su asistencia a la Reunión de Archivos del Tercer Mundo (Dakar, Senegal, 1975); Coordinador General del Programa de Desarrollo de Archivos y Documentos Públicos*, bajo la Dirección técnica de G. Mendoza*, director del ABNB* (UMSA-OEA, La Paz, 1976); Congreso Mundial del Consejo Internacional de Archivos (Washington, D.C. 1976), y Seminario Interamericano sobre Cooperación Regional para el Desarrollo de Archivos, con los auspicios de la Asociación Latinoamericana de Archivos y el Programa de Desarrollo de Bibliotecas y Archivos de la Organización de los Estados Americanos; VIII Congreso Internacional de Archivos (Washington D.C., 1976); “Primer Curso de Archivística” (Universidad Técnica de Oruro, 1979); Primera Reunión sobre Archivos Bolivianos (Sucre, 1979); Tercera Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos (Cochabamba, 1983). Miembro fundador de la Sociedad Boliviana de Historia (1972) y director de su revista Historia y Cultura (entre 1977 y 1994); en su homenaje la SBH creó el “Premio Alberto Crespo Rodas” (2007), que se entrega anualmente el 21 de septiembre, día

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del estudiante y cumpleaños de don Alberto, en coordinación con la Carrera de Historia y el Archivo de La Paz a los mejores estudiantes de la Carrera de Historia. Fue Presidente de la Academia Boliviana de la Historia (1986-1989), a la que ingresó en 1974, con su estudio Esclavos Negros en Bolivia (1977), y miembro correspondiente de las Academias de la Historia de Venezuela, España, Paraguay, Perú, Argentina, Puerto Rico, Ecuador, Colombia, República Dominicana; miembro de las Academias de la Lengua y Ciencias de Bolivia; del Directorio de la Fundación “Manuel Vicente Ballivián”, siendo distinguido con la Medalla al Mérito por los 25 años de la FMVB (1992). Miembro Activo del Instituto Panamericano de Geografía e Historia (Comité de Archivos-Comisión de Historia); de la Asociación de Bibliotecarios y Documentalistas de La Paz (Miembro del Comité de Historia); del Consejo de Cultura de la Organización de Estados Americanos (1982-1983). La Alcaldía Municipal de La Paz le confirió el Escudo de Armas en el Grado de “Servicios Especiales” (1987, 2003); obtuvo el Premio Nacional de Cultura (1989); la Sociedad Boliviana de Escritores con la “Distinción José Santos Vargas” (1998); Condecoración de la Gran Orden Amigos de la Ciudad “Al Mérito Cívico” (1998); la Prefectura de La Paz con la Condecoración de la Orden “Franz Tamayo” en el Grado de Oficial (2002); Certificado de Distinción del Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia (2003); fue condecorado con el Cóndor de los Andes (2004); Premio a la Cultura del Club de La Paz (2006); y Diploma de Reconocimiento del Centro de Estudiantes de Historia (2006). Su contribución a la historiografía fue notable. Destaca por un estilo narrativo puro y preciso, bien documentado, haciendo gala del dominio del idioma. Como pocos docentes, lo hicieran, involucró en la labor investigativa a estudiantes universitarios, con los que escribió y publicó La Vida Cotidiana en La Paz durante la Guerra de la Independencia (1975); Siporo, Historia de una Hacienda (1984); y como coordinador de Los Bolivianos en el Tiempo (Cuadernos de Historia de La Razón, 1993); Antonio José de Sucre. La Hazaña de la Libertad (Cuadernos de Historia de La Razón, 1995). La relación intrínseca, umbilical de la historia con las fuentes, explican esa otra pasión legítima del Maestro: la organización de los archivos. La Carrera de Historia y la Sociedad Boliviana de Historia fueron los instrumentos que empleó para la concientización de la elite intelectual para organizar los archivos históricos, como se puede ver en las Recomendaciones de la II y IV Reunión de la Sociedad Boliviana de Historia de Santa Cruz (1976) y Oruro (1978), sobre los archivos históricos de esas regiones. Alumnos de la primera y segunda generación empezaron a mostrar resultados, expresados en inventarios y guías de numerosos archivos históricos. Sólo por citar algunos ejemplos, mencionamos los archivos de Condo Condo (F. Ballivián*), Corque (F. Cajías*), Catedralicio de Santa Cruz (F. Cajías*, C. López*), San José de Chiquitos (J. Cortés*), Parroquiales de La Paz (Teresa Rossaza y M. Inch*), San Agustín (S. Arze* et al.), Radio Nacional de Bolivia (L. Escobari*) o la Guía de Fuentes para la Historia de la Iglesia en Bolivia (R. Arze*). Ha publicado también La Mita de Potosí (1959); Fundación de la Villa de San Felipe de Austria (1967); Alemanes en Bolivia (1978); Alonso de Mendoza: Fundador de La Paz (1980); José Luis Tejada Sorzano: Un hombre de paz (1990), con la documentación consultada que propició su entrega al Archivo de La Paz; Los Exiliados Bolivianos, Siglo XIX (1997); 450 años de la fundación de La Paz (1998); y un opúsculo sobre su padre Luis S. Crespo (2008), en colaboración con su hermano Alfonso y su esposa A. Quintanilla*; y en coautoría publicó: Guillermo Gutiérrez. Cinco retratos de un hombre (1984); José Rosendo

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Gutiérrez: el hombre-el político-el literato (1985); La ciudad de La Paz: Su historia-su cultura (1989). Tuvo la visión de dejar su testimonio y pensamiento, en vida y obra, con dos publicaciones que fueron un éxito bibliográfico, como Tiempo Contado (1986) y Recuerdo Crepuscular (2002), más aún el primero, bastante ponderado a través de una serie de comentarios y reseñas. Su último trabajo fue una compilación de sus escritos publicados en revistas de Argentina, Perú y España y que póstumamente editó Clara López Beltrán como Fragmentos de la Patria (2010). Su influencia se hizo notar incluso luego de su retiro. Su último cargo público fue de Consejero de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia* (1997-2004). En el XX Aniversario de la fundación del Archivo de La Paz, la Carrera de Historia y la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación le confirieron un Diploma de reconocimiento (1991). Organizado por la Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información Filial La Paz (Archivos, Bibliotecas y Museos) y el Comité Organizador, del 17 al 18 mayo de 1996 se llevó a cabo el Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”*. De esta manera se rindió un homenaje de reconocimiento a la labor y contribución de don Alberto respecto a los archivos. En “Homenaje a los 40 años de la Carrera de Historia y 35 años del Archivo de La Paz”, el 11 de diciembre de 2006 se rindió un reconocimiento a ex profesores e historiadores que contribuyeron a la docencia e investigación. El homenaje a don Alberto Crespo Rodas estuvo a cargo de su discípula, la Lic. Florencia Ballivián de Romero. Publicaciones archivísticas: “La historia económica y los Registros de Escrituras”, con René Arze Aguirre y Florencia B. de Romero (Presencia Literaria, La Paz, 29 de junio de 1975: 4); “Entrevista con Alberto Crespo R.: La batalla por los archivos bolivianos” (Presencia, La Paz, 18 de abril de 1976: 8); “La colección Gutiérrez” (Boletín del Archivo de La Paz, 1976, 1 (1): 23-25); “El archivo de Poopó”, con Fernando Cajías (Boletín del Archivo de La Paz, 1978, 3 (5): 14-20); “El Archivo de la Universidad Mayor de San Andrés (Cota-Cota)” (en John J.Te Paske: Research guide to Andean History: Bolivia, Chili and Peru, Durham, 1981: 8-14); Experiencia del Archivo de La Paz en la accesibilización de Recursos Documentales para estudios de Ciencias Sociales. Tercera Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Cochabamba, julio 18-20, 1983. 12 p. mimeo. Relato para el punto Nº III/B2 del Temario: “Accesibilización de recursos documentales de archivo en Bolivia para su aprovechamiento en ciencias sociales: Temas especiales”; “El Archivo de La Paz” (Semana de Última Hora. La Paz, 29 de noviembre de 1985: 6-7); “Archivo Gregorio Pacheco”, con Florencia de Romero (Boletín del Archivo de La Paz, 1986, 6 (9): 21-32); “25 años del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 17 (16-17): 16-17); “Una mirada al Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 2006, 23-24: 13-16; 2008, 23-24: 1517; Historia y Cultura, 2008, 33: 219-222). Fuente: Molina, 2011; Oporto, 2010c.

CRUZ CORONEL, JORGE ANTONIO (La Paz, 22 de diciembre de 1963)

Militar egresado en 1985 del Politécnico Militar de Aeronáutica de la Fuerza Aérea Boliviana, con el grado de Suboficial 1º DESA. Es Egresado de la carrera de Administración de Empresas (La Paz) y de la Escuela de Perfeccionamiento Técnico Aeronáutico (Cochabamba) como Supervisor. Participó en el curso sobre Administración y Manejo de Archivos; y en el Seminario Internacional “Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Importancia de su Rescate para el

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Desarrollo Nacional”(2008). Tiene 24 años de experiencia en la carrera Militar, y de ellos cuatro en el Manejo de certificaciones de fases de campaña y en Clasificación y Organización de Archivos. Trabajó durante tres años como Archivista Militar en la Dirección General de Archivos de las Fuerzas Armadas, para realizar la organización, clasificación de archivos y la certificación de fases de campaña. En mérito a su experiencia fue designado Jefe de la Sección “A” Certificación de Fases de Campaña de la Guerra del Chaco (1932-1935), donde realiza la Certificación de Fases de Campaña tanto a los Beneméritos, viudas e hijos, para trámites de pensiones y otras instancias que se extienden de acuerdo a requisitos exigidos por este repositorio documental. Publicaciones archivísticas: Coautor del Reglamento de Administración y Procedimientos de Archivos, en el Sistema de Archivos Militares de las Fuerzas Armadas (2009). Fuente: CV.

CRUZ QUILLA, EDWIN

(La Paz, 26 de abril de 1982) Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Fue Secretario Ejecutivo del Centro de Estudiante de su Carrera (2005-2007). Auxiliar de docencia en la cátedra de Fuentes de Historia de Bolivia del curso prefacultativo de la Carrera de Historia (2008, 2009). Colaborador de la Revista Municipal de Culturas Khana, donde publicó “La Junta tuitiva: entre luces y penumbras durante el alzamiento de La Paz de 1809” (N° 49, 2008). Tiene otro artículo “Un buen estudiante? Un buen docente?: una paradoja en universidades y colegios”, en Kurawa (N° 1, 2010); “Logotipo del Servicio nacional de Caminos: una figura gráfica con historia propia”, en Boletín del Archivo Central SNC-R (N° 1, 2010). Trabajó en el Archivo Histórico de las Fuerzas Armadas (2006-2007), Auxiliar de Archivo Central del Servicio Nacional de Caminos (2010). Fuente: CV.

CUBA AKIYAMA, VÍCTOR Jefe de Biblioteca y Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, informó, en junio de 1982, que el Archivo del Ministerio contaba con “13 millones 480 mil documentos diplomáticos, consulares, notas reversales, convenios y de orden gubernamental y privada”, dispuesta, “en 108 estantes de capacidad limitada, “documentos que datan desde 1826 hasta nuestros días”. Publicaciones archivísticas: “Informe” (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 75). Fuente: Oporto, 1982: 75.

CUBA QUISPE, SIMÓN

(La Paz, 28 de octubre de 1955) Historiador UMSA. Fue el primer boliviano que cursó la Maestría de Archivística en la Universidad Internacional de Andalucía, con su tesis Gestión Documental y

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Administración de Archivos del Archivo de La Paz (2007). Cursó el Doctorado en Historia (Ph.D.) en la Universidad de Huelva (España, 2006). Diplomado en Educación Superior en “Organización y Administración Pedagógica del Aula en Educación Superior”, UMSA CEPIES (2002), Maestría en Educación Superior X Curso Formación Docente en Psicopedagogía, UMSA CEPIES (2002-2004). Hizo el Diplomado en Archivos “En Gestión Documental y Archivos Históricos”, UMSA (2002); Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999). Fue Auxiliar de docencia en la Carrera de Historia* (1994-1995). Docente de las Carreras de Historia, Bibliotecología (UMSA) y Enfermería e Historia (UPEA). Profesor del Curso Preuniversitario de la Carrera de Historia y del Instituto Normal Superior “Simón Bolívar”. También ejerció la docencia en varios establecimientos de secundaria de La Paz. Trabajó en varios archivos, entre ellos el del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1992), el Archivo de La Paz* (Auxiliar, 1991, 1994, 1997; Docente investigador, 2005, 2012), Archivo del Banco Central de Bolivia (1988-1989, 1993-1997), Archivo de la Aduana Nacional de Bolivia y Archivo de la Empresa Municipal de Aseo. Posteriormente fue Encargado del Archivo Central de la Administradora Boliviana de Carreteras (2007-2010) y desempeñó esas funciones en el Archivo del Servicio Nacional de Caminos-Residual, como Supervisor de Archivos (2010-2012). Asistió al Congreso Departamental de la Asociación de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996). Fue instructor en Cursos y Seminarios de Archivos: Aduana Nacional de Bolivia (2003), Comando en jefe de las FF.AA. de la Nación, Estado Mayor (2004), Viceministerio de Cultura (2005), Curso Internacional en Organización documental y las nuevas tecnologías (Tacna, Perú, 2009), Curso Internacional “Asistente técnico en archivo y documentación”, ambos con M y M Consulting SAC (Tacna, Perú, 2010), Curso de especialización en organización de documentos en un Archivo Central, Carrera de Historia UMSA (2011), Curso de organización de Documentos en un Archivo de Gestión u Oficina, en Autoridad de Fiscalización y Control Social de Electricidad (26-30 de septiembre 2011), Curso de organización de Documentos en un Archivo de Gestión u Oficina, Carrera de Bibliotecología UMSA (1-22 de octubre 2011), Curso de organización de Documentos en un Archivo de Gestión u Oficina, Facultad de Ciencias Sociales UMSA (5-9 de diciembre 2011). Publicaciones archivísticas: Manual de Gestión Documental y Administración de Archivos, Compilador (La Paz, Cuba Ediciones, 2007; 2011); “Inventario del Fondo Contraloría General de la República”, con Miriam Quiroga, Ximena Medinaceli, Ramiro Santander y Pablo Quisbert (Boletín del Archivo de La Paz, 1995, 16 (15): 17-26); “Organización del fondo documental de la Corte Superior de Distrito” (Boletín del Archivo de La Paz, 2001, (19): 17-25); “El fondo de la Corte Superior de Distrito”, con Ximena Medinaceli y Magda Mora (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, (20): 3-14); Los documentos en algunos “Archivos” en Bolivia” (en Boletín del Archivo de La Paz, 2004, (21-22): 40-57); “El rescate del patrimonio documental caminero” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2011, 12 (17): 87-90); “Rescate y organización del patrimonio documental del Servicio Nacional de Caminos” (Boletín del Archivo de La Paz, 2012, (27): 39-56). Fuente: CV.

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CUEVAS FERNÁNDEZ, MIRIAM (La Paz, 28 de septiembre de 1958)

Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información* UMSA (2000), Maestría en Documentación Digital (Universitat Pompeu Fabra, Barcelona, España); Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos, UMSA (2002); Diplomado en Gestión de la Información y Documentación en las Organizaciones, UMSA-Universidad de La Habana (2002); Diplomado en Organización y Administración Pedagógica del Aula en Educación Superior, UMSA (2007). Se inició como Documentalista del Centro de Documentación del Instituto Nacional de Antropología (1980-1984); de allí pasó a ser Coordinadora de Procesos Técnicos de la Biblioteca y Archivo del Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (1985-1990), ambos bajo la dirección de L. Oporto*. Es Encargada de Archivo de la Representación en Bolivia del Banco Interamericano de Desarrollo desde 1991. Realizó una pasantía en la Biblioteca del Laboratorio de Antropología Social, en la Biblioteca del Museo del Hombre y la Biblioteca Universitaria de Nanterre (París, Francia 1987-1988). Hizo también una pasantía financiada por el Musef en el Archivo Nacional de Bolivia (1990). Realizó pasantías en los Archivos de la Representación del BID en Brasilia (1996) y Perú (2001). Ha sido docente de Ordenamiento y Descripción de Archivos en la UMSA (2004). Apoyó a la organización técnica del Archivo de la Representación del Banco Interamericano de Desarrollo en Chile (2008); participó, en representación de la oficina del BID (Bolivia), en las Jornadas de Administración de Archivos del BID en Washington D.C. EE.UU, los años 1997, 2002, 2005 y 2011.   Publicaciones archivísticas: “Consideraciones generales de los Archivos del Instituto Nacional de Antropología y del Centro de Documentación”, con Luis Tejerina Cisneros (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 57-64). Fuente: CV; Oporto, 1982: .

CURSO DE ORGANIZACIÓN Y ADMINISTRACIÓN DE ARCHIVOS (ESCUELA DE DOCUMENTALISTAS DE MADRID, ESPAÑA) Cursos Especiales de Capacitación, impartidos en la Escuela de Documentalistas de Madrid (España) mediante el Programa de Becas (PEC-1224-D) de la Organización de Estados Americanos*, organizados por la Dirección General de Archivos y Bibliotecas del Ministerio de Educación y Ciencia, con el apoyo del Ministerio de Relaciones Exteriores de España y la OEA. La Escuela estaba adscrita a la Biblioteca Nacional de España. El curso fue creado por Resolución 7ª de la Primera Reunión Interamericana de Archivos* (Washington, DC, octubre de 1961): Formación profesional de archiveros, en que se recomendaba la creación de la escuela y se ofrecía un plan de estudios. El Programa estuvo bajo la coordinación de V. Cortés Alonso*. El primer curso se realizó en 1973 y el décimo en 1982. Participaron 157 alumnos de Argentina (18), Bolivia (13), Brasil (14), Colombia (8), Costa Rica (11), Chile (11), Ecuador (11), Guatemala (1), Haití (2), Honduras (2), México (12), Nicaragua (5), Panamá (3), Paraguay (5), Perú (23), República Dominicana (4), El Salvador (4), Uruguay (3) y Venezuela (7). Asistieron por Bolivia: M. Money* (1975), M. Chacón Tórres*, J. Guzmán Soliz* (1976), L. Tejerina Cisneros* (1977), R. Arze Aguirre*, Luis Tapia Campos (1978), J. Cortés Rodríguez*, L. Oporto Ordóñez* (1979), E. Cárdenas

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Román*, R. Choque Canqui*, E. Valda Martínez* (1980), G. Aguilar Dávalos* y L. Escóbar de Querejazu* (1981). Su extensión natural vendría a ser la Escuela Iberoamericana de Archivos* que se imparte en Alcalá de Henares (Madrid, España). Fuente: Cortés, 1985.

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D DALENCE, ZENÓN (Oruro, 1838. † 1916)

Médico, escritor e historiador. Estudió Medicina en Sucre. Antes de graduarse fue nombrado Cirujano Militar (1860). Participó en política lo que le llevó al exilio voluntario, viajando por Tacna, Mollendo, Arequipa y Lima, ciudad donde legalizó su condición profesional mediante exámenes en la Facultad de Medicina (1868). Se incorporó a la Armada Peruana como Cirujano. Combatió la fiebre amarilla en Islay, en la que organizó un lazareto, pero contrajo la enfermedad la que pudo salvar con dificultad. Fue llamado a Bolivia por el presidente Adolfo Ballivián, para atender sus dolencias, lo que motivó enconada polémica con el Dr. Antonio Vaca Diez. Participó activamente como médico en las acciones de Chacoma y las barricadas de Cochabamba contra el Gral. Mariano Melgarejo. Declarada la Guerra, en 1879, se presentó en Tacna y entregó su instrumental y drogas al servicio del Ejército. Fue nombrado Cirujano Mayor del Ejército asignado a la Primera División. Chile desembarcó en Pisagua 10.000 soldados trasportados por 19 barcos, y les hicieron frente 990 soldados de la Confederación, luego se produjo la batalla de Germania. En esas circunstancias fue testigo de la cruel institución castrense del “repaso”, consistente en eliminar a los heridos en el campo de batalla. A fin de erradicar esa cruenta tradición militar, en febrero de 1880 organizó el Cuerpo de Ambulancias y Depósito de Inválidos del Ejército (Cruz Roja Boliviana), en el cual tuvieron actuación preponderante los médicos y reputados artesanos bolivianos residentes en Tacna, que oficiaron como camilleros, amparado en el Convenio de Ginebra para el mejoramiento de la suerte que corren los militares heridos en los ejércitos en campaña, de 1864, que institucionalizó las propuestas humanitarias de Jean Henri Dunant, creador de la Cruz Roja. Durante el conflicto entre Chile, Bolivia y Perú, la representación internacional de la Cruz Roja se instaló en Santiago de Chile. En Bolivia se crearon filiales en todos los departamentos. El patriota Zoilo Flores equipó las Ambulancias y se organizó el Servicio de Vigilancia a cargo de seis inválidos del combate de Tarapacá, el servicio manual atendido por Ana M. (esposa del Dr. Zenón Dalence), la Sra. Vicenta Paredes Mier, ocho sanitarios enfermeros y el personal de cocina, lavandería y policía de aseo. La cruceña Ignacia Zeballos se incorporó en la Ambulancia Sedentaria y nueve hermanas de la Caridad, procedentes de Italia, ayudaron en la labor. En cada Ambulancia existían artesanos Escribientes*, siendo el principal el de Mayoría que formaba parte de la Plana Mayor,

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responsable de llevar la correspondencia y custodiar el Archivo de las Ambulancias. Dalence acopió estos documentos y con ellos escribió su muy bien documentado Informe Histórico del servicio prestado por el Cuerpo de Ambulancias (1881), en el que insertó 50 documentos del valioso archivo que custodiaron con la vida los artesanos Escribientes. La Convención de 1880 lo declaró Benemérito de la Guerra del Pacífico. En postguerra fue Munícipe y Presidente de las municipalidades de Oruro, Carangas y Caupolicán (1882). Se dedicó a escribir sobre temas históricos y colaboró en varios periódicos. Fuente: Alarcón 1925; Castellón, 2007: 42-43; Costa de la Torre, 1968; Luna, 1997: 3 (2); Oporto, 2011d: 7; Sater, 2007.

DALENCE SALINAS, GUILLERMO (Incalacaya, Colquiri, Prov. Inquisivi, La Paz, 18 de agosto de 1946) Dirigente minero, ex miembro de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB). Ingresó a Mina Matilde Corp., como operador del Ingenio (1969) y Jefe de punta mina. Participó en la reversión de este yacimiento al Estado (1 de mayo de 1971). Dirigente del Sindicato de Mina Matilde (1971), dirigió la movilización sindical de su distrito en apoyo al gobierno del Gral. Juan José Torres. Fue elegido dirigente de la FSTMB en el Congreso Minero de Corocoro (1976). Miembro del equipo clandestino de la FSTMB desde mayo de 1976 hasta la huelga de hambre de las cuatro mujeres (diciembre 1977-enero 1978). Cayó preso durante el golpe de estado del Gral. L. García Meza*, confinado a Puerto Rico (Prov. Manuripi, Pando), salió al exilio en Suecia (1980-1982). Sufrió la relocalización en 1986, pero permaneció tres años en Mina Matilde intentando montar la Cooperativa Multiactiva “Matilde” Ltda. Organizó el Archivo del Centro de Información Social y Documentación Histórica CISDH (1990). En Monteagudo, asesoró al Consejo de Capitanes de Chuquiscaca, para liberar 600 familias cautivas en las haciendas Luis Calvo y H. Siles (Departamento de Chuquisaca) y en el Proyecto Rural Luribay (1990-1991). Docente de Formación Política Social en la Universidad Nacional “Siglo XX” (1990-2000). Trabajó en el Sistema de Documentación e Información Sindical SIDIS* (1992-1998), creado por la FSTMB para organizar el Archivo de los Sindicatos Mineros a nivel nacional. Asistió al Congreso Departamental de la Asociación de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996), de la que fué electo miembro de la Directiva. Estudió Derecho en la Universidad Técnica de Oruro (1998). Es Miembro de asamblea de asociados del CEJIS (2001). Fue Ministro de Minería (2006-2007) y Presidente de la Empresa Siderúrgica del Mutún. Actualmente es jubilado minero de base. Fuente: CV.

DAMMAN, C. (Alemán)

Copista de fotografías de la Berliner Gesellschaft fur Anthropologie. Coleccionó fotografías de los pueblos indígenas de Potosí, Sucre, Cinti, Mojo y otros lugares en

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Bolivia, la mayoría de las cuales son cartas de visita y retratos de estudio; las que le son atribuidas, “pero no está claro si él las tomaba, las mandaba copiar o las adquirió para el Museo”. Actualmente, el Pitt Rivers’ Museum, de la Universidad de Oxford, tiene doce de los álbumes de Damman, de fotografías tomadas entre 1865 y 1873. Fuente: Buck, 1999.

DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS DEL ARCHIVISTA BOLIVIANO Documento elaborado por G. Mendoza L.*, Director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. Originalmente fue presentado como “Anteproyecto de declaración de principios del archivista boliviano” que se aprobó en grande en la Primera Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos (Sucre, octubre 18-20, 1979; punto V del temario). Presentado como “Proyecto de declaración de principios del archivista boliviano” (ANB. Sucre, junio, 1982) a la Segunda Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos (Cochabamba: Centro Pedagógico y Cultural de Portales, Imp. Taller Gráfico del Centro Portales, julio 5-7, 1982; p. 101-114), que la adoptó (Resolución “D”) como “documento de trabajo en la materia para todos los archivistas”, que fue publicado inicialmente en Presencia Literaria, el 4 de julio de 1982. Declaración de Principios I. Advertencia preliminar

A. La Primera Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos aprobó en grande este proyecto de Declaración de Principios, difirió su consideración final para una Reunión posterior (que se celebra en Cochabamba del 5 al 7 de julio con el patrocinio del Centro pedagógico y Cultural de Portales) y recomendó la publicación del proyecto. Gracias a Presencia Literaria se cumple esto con un gran alcance masivo. B. Excluyendo todo lirismo y abstraccionismo, comunes en este tipo de literatura, el proyecto está hecho a medida del caso en su dimensión boliviana y actual.

C. Algo más: la declaración está hecha con proyección de un ABC de los archivos en Bolivia. Esto explica y justifica las muchas repeticiones de conceptos: es que, como bien se sabe, didácticamente la repetición es imprescindible para fijar ideas. Una de las ideas básicas entre otras que la Declaración quisiera fijar, es la de recursos documentales sustituyendo a la de documentos, porque los documentos están asociados en la consideración general a la idea exclusiva de documentos históricos, y éstos a su vez evocan la idea de moho y de polilla, mientras que la idea de recursos documentales hasta es asociable a la de recursos naturales y recursos humanos, que a su vez evocan la idea de defensa: es una manera estratégica de poner en evidencia, por una parte, el valor real de los recursos documentales -cuya aplicación sobrepasa incalculablemente los límites de la historia y comprende en su ámbito la suma total de las actividades del país-, y, por otra, poner también en evidencia la necesidad de defender esos recursos tanto como los recursos naturales y humanos. II. Declaración de Principios

A. Los Recursos Documentales de la Nación

1. El documento es un medio de comunicación, comprobación y conocimiento que se hace inteligible por cualquier procedimiento tecnológico y sobre cualquier material, y sirve para que se realicen las funciones, actividades y tramites de los individuos, de las entidades privadas y de las entidades públicas en una sociedad.

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2. Los documentos acumulados por un individuo, una entidad privada o una entidad pública a lo largo de su existencia, van constituyendo conjuntos, que son las documentaciones. 3. En este entendido, las documentaciones privadas son las acumuladas como consecuencia de la función, actividades y trámites de un individuo en condición privada o una entidad privada, a lo largo de su existencia, en cualesquiera órdenes del dinamismo social: ciencia, arte, negocios en general, política, diplomacia, periodismo, sindicalismo y gremialismo, religión, beneficencia, y cualesquiera otras. 4. En este entendimiento, asimismo, las documentaciones públicas son las acumuladas como resultado de la función, actividades y trámites de cualesquiera entidades de la administración central, descentralizada, desconcentrada, local, judicial y universitaria, en cualquier época de la historia de Bolivia. 5. En el curso de su producción, las documentaciones de los individuos y de las entidades públicas y privadas se van acumulando en conjuntos indefectiblemente diferenciados según cada individuo y según cada entidad, y este hecho se traduce en un principio cardinal de la ciencia archivística, el principio de procedencia, según el cual la documentación exclusiva de cada individuo o de cada entidad debe preservarse exclusivamente de acuerdo con su procedencia en ese individuo o en esa entidad. 6. En el curso de su producción, asimismo, las documentaciones no se van acumulando de cualquier manera sino que por las necesidades de su uso se van ordenando en la forma que más consulta dichas necesidades de uso, según las diferentes funciones, actividades y trámites de los individuos y según las diferentes estructuras , funciones, actividades y trámites de las entidades públicas y privadas, y este hecho se traduce en otro principio cardinal de la ciencia archivística, el principio del orden original, según el cual la documentación de cada individuo y de cada entidad pública o privada debe preservarse de acuerdo con el orden en que originalmente se produjeron. 7. Cualesquiera funciones, actividades y trámites de comunicación, comprobación y/o conocimiento que cumplen los individuos y las entidades públicas y privadas van dando origen, en todo su curso, a otros tantos documentos en tal forma que en éstos quedan automáticamente registradas las alternativas de dichas funciones, actividades y trámites. 8. Consecuentemente, en las documentaciones producidas y acumuladas por los individuos, las entidades privadas y las entidades públicas de un país en el curso de sus existencias, se reflejan todas las alternativas de comunicación, comprobación y conocimiento de toda la actividad privada y pública de dicho país a lo largo de toda su evolución histórica. 9. Como el documento, por su propia naturaleza en cuanto medio de comunicación, comprobación y conocimiento, contiene siempre información adicional sobre personas, hechos, acontecimientos y cosas materiales o inmateriales de cualquier manera relacionados con su producción, resulta que en las documentaciones acumuladas por los individuos y las entidades públicas y privadas de un país a lo largo de su existencia, queda contenida una cantidad incalculable de información sobre personas, lugares, acontecimientos y cosas materiales e inmateriales de todo el país. 10. Como las actividades de los individuos y las entidades públicas y privadas de un país se refieren a toda clase de asuntos, y la información que se da en el cumplimiento de sus funciones, actividades y trámites se refiere asimismo a toda clase de personas, lugares, acontecimientos y cosas materiales e inmateriales, las documentaciones resultantes se refieren igualmente a toda clase de asuntos comprendidos en la actividad del país a todo lo largo de su evolución: industria, comercio, educación, salud obras públicas, justicia, transportes, comunicaciones, relaciones exteriores, arte, literatura, religión, política, ciencia, tecnología, beneficencia, derecho, periodismo, y cualesquiera otros.

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11. Consecuentemente, las documentaciones de los individuos y de las entidades privadas y públicas de un país contienen información de valor cuantitativa y cualitativamente inapreciable: a) Para la información científica y la investigación científica referente a toda clase de asuntos bolivianos y de otros países en su relación con dichos asuntos bolivianos. b) Al servir así para la extensión del conocimiento idóneo de todo el acontecer nacional, las documentaciones de los individuos y de las entidades públicas y privadas sirven para la promoción de la conciencia cívica del pueblo, entendiendo por tal la creciente autoidentificación por parte de los bolivianos de sus propios deberes y derechos, y una noción cada vez más amplia y profunda de su identidad nacional. c) Sirviendo para la información y la investigación científica sobre asuntos bolivianos, y para la promoción de la conciencia cívica del pueblo boliviano, las documentaciones privadas y públicas sirven a los fines del desarrollo nacional en cuanto éste, para la formulación de sus planes y proyectos, necesita alimentarlos con la información y la investigación científica sobre asuntos bolivianos, y contar con el apoyo de la conciencia cívica del pueblo, para realizarse a sí mismo como tal desarrollo. 12. En consecuencia las documentaciones tanto públicas como privadas constituyen recursos de valor inapreciable, recursos documentales, y deben contarse entre los demás recursos naturales y humanos que conforman el patrimonio de máximos valores materiales e inmateriales de la Nación. 13. Hay dos prejuicios generales que han hecho un daño incalculable a la significación de las documentaciones, restringiendo indebidamente la proyección de su valor real: a) Uno es el prejuicio historicista, según el cual, como en el curso del tiempo y sus alternativas, suelen sobrevivir, como veteranos de muchas crueles batallas, documentaciones viejas, y si no viejas envejecidas, se ha llegado a identificar a las documentaciones, en la imaginación general, nada más que como unos santuarios de papeles arcaicos, útiles nada más que para la “historia”, queriendo decir “historia” en este caso, inservibles para nada práctico e importante. b) Otro es el prejuicio culturalista, según el cual las documentaciones sirven nada más que para la cultura, entendiendo la cultura como un ejercicio restringido a la creación artística y literaria. La valoración cabal de las documentaciones, tanto privadas como públicas, queda objetivamente definida por los principios Nos. 9-12 de esta Declaración. 14. Todo documento tiene un ciclo vital constituido por las fases de su utilización: a) La fase activa, en que el documento se produce y por su valor de uso posibilita las funciones, actividades y trámites de los individuos y de las entidades públicas y privadas que lo produjeron. b) La fase inactiva o transicional, en que los documentos habiendo perdido su valor de uso actual pero conservando su valor potencial de información, son retirados de los trámites actuales y deben ser evaluados para identificar dicho valor de información. c) La fase de conservación permanentemente, en que el documento, reconocido su valor de información, va ser preservado en el archivo permanentemente, mientras que el documento que ha sido evaluado como superfluo es desechado bajo control legal. 15. Los documentos están continuamente amenazados en cualquiera de sus fases vitales, por riesgos deliberados o indeliberados tales como destrucción, deterioración, pérdida, extravío, apropiación clandestina, alienación.

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16. La deterioración y la destrucción de las documentaciones pueden ser: a) físicas, cuando la documentación padece en su integridad material; b) estructural cuando la documentación padece en su integridad estructural, desordenándose y entrando en caos. 17. De acuerdo con la Constitución Política de la Nación Boliviana, la riqueza documental se encuentra “bajo el amparo del Estado”. 18. En confirmación de este precepto constitucional, el Código Penal de la Nación contiene las siguientes disposiciones preventivas y punitivas con respecto a daños causados a los recursos documentales entre otros recursos nacionales: a) Artículo 223. “El que destruyere, deteriorare, substrajere o exportare un bien perteneciente al dominio público, una fuente de riqueza, monumentos u objetos del patrimonio arqueológico, histórico o artístico nacional, incurrirá en privación de libertad de uno a seis años”. b) Los artículos 357 y 358 prevén una sanción de “privación de libertad de uno a seis años” para el que “hiciere desaparecer o dañare”... “cosas de valor artístico, arqueológico, científico, histórico, religioso, militar o económico”, y cuando el daño “se realizare mediante incendio, destrucción o deterioro de documentos de valor estimable”. c) De la misma manera que todo boliviano tiene el derecho y el deber de defender los recursos naturales y humanos de la Nación, tiene el mismo deber y el mismo derecho de defender los recursos documentales de la Nación, sean públicos o privados, y en este deber y derecho deben concurrir tanto el sector público como el sector privado. 19. Así como el único medio de garantizar la preservación y aplicación de los recursos documentales públicos a la finalidades de la información, la investigación, la promoción de la conciencia cívica y el desarrollo, es tenerlos custodiados en los archivos, otro tanto puede decirse de los recursos documentales privados. 20. Si el sector privado, por suspicacia con respecto al sector público, siente renuencia a entregar sus recursos documentales a los archivos públicos, está en el derecho, el deber y la posibilidad de organizar archivos propios para la preservación y aplicación de sus recursos documentales a los fines específicos de los recursos documentales, así como el Estado organiza sus propios archivos. 21. A lo largo del curso vital de los documentos van surgiendo problemas relacionados con su producción, preservación, mantenimiento, y manejo, para que puedan aplicarse a los fines inherentes a su propia naturaleza, problemas que se van resolviendo a través del tratamiento que se les imparte por medio de las operaciones archivísticas. B. El Servicio de Archivos y Documentos 22. Operaciones archivísticas son las actividades mentales y físicas, sujetas a los principios y técnicas especiales de la ciencia archivística, que se aplican a las documentaciones a partir de su producción y gracias a las cuales puede darse a las documentaciones el uso y el destino que les corresponden de acuerdo con su naturaleza en cada una de las fases de su curso vital. 23. El dispositivo institucional mediante el cual se ejecutan idóneamente las operaciones archivistas, es el servicio de documentos y archivos. 24. En el nivel del sector público, el Servicio de Documentos Públicos y Archivos es el dispositivo estructural y funcional previsto en la maquinaria del Estado específicamente para producir, preservar, mantener y manejar los recursos documentales del país mediante el cumplimiento idóneo de las operaciones archivísticas, con requisitos adecuados al cumplimiento de los fines implícitos en la naturaleza de los documentos a saber:

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a) En la fase activa para hacer más idónea y económica la función administrativa. b) En la fase inactiva para evaluar las documentaciones a los efectos de su conservación permanente en atención a su valor informativo, y a los efectos de su desecho legalmente controlado en vista de su falta de valor. c) En la fase permanente, para posibilitar la información e investigación científica en todas las áreas de la actividad nacional; para promover la conciencia cívica; y para contribuir al desarrollo económico y social de la Nación.

25. La significación del Servicio en particular para el desarrollo económico y social de la Nación se hace evidente a través de los axiomas siguientes: a) No hay desarrollo posible sin una administración pública eficiente, y el Servicio es una de las condiciones básicas para esa administración.

b) No hay desarrollo posible sin la información y la investigación científica sobre asuntos bolivianos que el Servicio puede proveer con materiales de valor inapreciable.

c) No hay desarrollo posible sin el apoyo de la conciencia cívica popular, que el Servicio, a través de la difusión general de los valores nacionales de las documentaciones, puede estimular.

26. Si se contrasta la situación actual del Servicio en Bolivia con las proyecciones específicas de su función, resulta que según un diagnóstico preliminar de auscultación él se encuentra en una situación obvia de subdesarrollo crónico caracterizado por las deficiencias siguientes asimismo obvias: Es acéfalo porque carece absolutamente de dirección centralizada; es discontinuo e incompleto porque no tiene control sobre el ciclo vital completo de las documentaciones; está deficiente y contradictoriamente legislado y reglamentado; está deficientemente equipado; carece de principios y técnicas consistentes y uniformes; está deficientemente profesionalizado y pésimamente retribuido; no cuenta con recursos idóneos del sector público, del sector privado ni de las entidades internacionales.

27. Impedido por estas deficiencias, el Servicio no puede cumplir adecuadamente en Bolivia con ninguno de los objetivos inherentes a su razón de ser, y este incumplimiento importa gravísimos perjuicios para la administración pública, la información y la investigación científica, la promoción y la conciencia cívica y el desarrollo económico y social de la Nación. 28. De aquí resulta asimismo obvia la urgencia de incluir el Servicio en los planes del desarrollo nacional para procurar su propio desarrollo.

29. En relación con el desarrollo del Servicio, hay que tener presentes los axiomas siguientes: No hay desarrollo sin planificación; no hay planificación sin diagnostico; no hay diagnostico sin conocimiento; no hay conocimiento sin información; no hay información sin averiguación. 30. Consecuentemente, el desarrollo del Servicio ha de ser resultado de una planificación de su estructura, sus operaciones y sus proyecciones. 31. A su vez, la planificación del Servicio ha de fundarse en un diagnóstico cuantitativa y cualitativamente idóneo sobre su situación actual.

32. Este diagnóstico supone un conocimiento completo, o sea reductible a enunciados objetivos y a cifras precisas; un conocimiento particularizado, que penetre en todos los elementos esenciales; un conocimiento íntimo, que penetre más allá de lo obvio; y un conocimiento autorizado, que proceda de las fuentes mismas del Servicio. 33. No puede obtenerse este conocimiento del Servicio sino mediante una información tan completa como sea posible.

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34. La base irreemplazable para acopiar esta información es la averiguación más idónea, menos dilatada, y menos costosa o sea una encuesta a base de cuestionarios escritos que comprendan toda la realidad infraestructural y operacional del Servicio.

35. La planificación del Servicio ha de entenderse como el proceso organizado, continuo y permanente, de preparación, proyección, ejecución y seguimiento de los cambios que determine el diagnóstico en toda la infraestructura y en todas las operaciones hasta constituir el Servicio en un dispositivo estructural y funcional, que sea a su vez completo, continuo y unitario, para poder controlar los documentos a lo largo de todo su ciclo vital por medio de unidades técnicas coordinadas entre sí y con la red de la administración estatal, de manera que el Servicio quede habilitado para hacer que los recursos documentales se apliquen a todas las posibilidades inherentes en la propia naturaleza de los documentos: a) A la administración pública, a fin de que la producción y manejo de documentos sea económica e idónea ahorrando materiales, tiempo, personal, esfuerzo y dinero.

b) A la información y la investigación científica sobre asuntos bolivianos, mediante la accesibilización de los valores informativos implícitos en las documentaciones sobre cualesquiera órdenes de la actividad nacional y en cualesquiera épocas de su evolución histórica. c) A la promoción de la conciencia cívica nacional mediante la generalización popular de los valores implícitos en las documentaciones indispensables para un conocimiento y una compresión cuantitativa y cualitativamente más objetivas de nuestra propia realidad.

36. La planificación se ha de cumplir con requisitos básicos:

a) Ha de ser integral comprendiendo toda la infraestructura, todas las operaciones, y todas las fases del ciclo vital en todo el territorio nacional, pero al mismo tiempo ha de establecer las prioridades que determine el diagnóstico, y ha de ser realista evitando todo utopismo.

b) Ha de equiparar al Servicio con otros servicios en cuanto a la atención del Estado se refiere, en todos los rubros. c) Ha de ser permanente y continua, renovando objetivos y metas a medida del cumplimiento de otras, y al mismo tiempo ha de ser flexible admitiendo correcciones necesarias en el curso de su puesta en práctica.

d) Se ha de hacer mediante proyectos formales, que se traduzcan en disposiciones legales cuando sea necesario, y con toda la objetividad y cautela necesarias para no incurrir en el utopismo señalado atrás. e) Ha de estar orientada en el sentido del desarrollo nacional, con referencia a la administración pública, a la información e investigación científicas, y a la promoción de la conciencia cívica.

37. Para esto la planificación ha de dotar al Servicio de una infraestructura legal, material profesional, técnica y económica, comprendiendo:

a) Una legislación específica, compuesta de una ley nacional de documentos públicos y archivos, un reglamento nacional de documentos públicos y archivos, y un manual nacional de procesos técnicos, correlacionados con otras disposiciones legales generales y sustantivas dentro de la legislación nacional. b) Espacios de conservación y trabajo (locales) seguros y suficientes, donde las documentaciones se mantengan y se manejen idóneamente: en las oficinas públicas de origen para las documentaciones activas, en los repositorios transicionales

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para documentaciones inactivas, y en los repositorios permanentes para las documentaciones de valor permanente.

c) Equipo y material de conservación y de trabajo: instalaciones, máquinas, implementos y cosas necesarias para la producción, preservación y manejo de los documentos. d) Recursos humanos especializados.

e) Principios y técnicas dictados por la ciencia archivística, entendida como un sistema con su teoría, su metodología y su tecnología propias.

f) Recursos económicos suficientes, en forma de ingresos ordinarios y extraordinarios, existentes y potenciales, sea en el presupuesto nacional sin discriminación y en la misma cuantía proporcional con otros servicios públicos; sea en forma de contribuciones del sector privado que se beneficia con las prestaciones del servicio y debe contribuir a su desarrollo en forma directa o indirecta con becas de formación profesional, con locales y equipos de trabajo, con publicaciones, con exposiciones: sea en forma de ayuda internacional para la formación profesional, para la dotación de equipo y materiales de trabajo, y para la contratación de expertos y consultores garantizadamente idóneos. g) Atribución legal para intervenir en todas las decisiones relativas a la creación y manejo de los documentos en todas sus fases vitales.

h) Coordinación con los servicios de bibliotecas, documentación y museos dentro de la red de información nacional (NATIS) y con los demás centros conservadores y productores de información dentro de la red de información internacional (UNISIST).

38. Mientras existan las circunstancias para poner en marcha un programa integral de desarrollo, todo lo que se pretenda hacer en favor de los recursos documentales en cualquier nivel, se ha considerar de todas maneras como parte de dicho programa, o sea como parte de una planificación, y por lo mismo sujeto a los requisitos de idoneidad de toda planificación. 39. Resulta obvio que la función del Servicio es específicamente técnica, y es inaplazable obtener el reconocimiento de esta calidad junto con la liberación del calificativo de “administrativo” con que la rutina burocrática lo mantiene, condenado a una condición de inferioridad total, e impidiendo que asuma la jerarquía adecuada con dicha función. C. El archivista

40. En Bolivia la acción para la defensa de los recursos documentales públicos y privados de la Nación debe concebirse como una lucha ardua y permanente dado el subdesarrollo material y espiritual del país. 41. En esta lucha, la hueste que combate a la vanguardia para la defensa de los recursos documentales públicos y privados, tiene que ser la hueste de los propios archivistas, que militando en esa lucha cumplen con un derecho y un deber irrenunciables; y la primera victoria es mantener la lucha incesantemente. 42. La lucha será estéril si no se tienen claramente trazados los objetivos, la estrategia y la táctica dentro de un plan orgánico que debe ser elaborado por los mismos archivistas.

43. El deber primordial y el derecho primordial de los archivistas en cuanto hueste combatiente, es organizarse para estar en aptitud de librar su lucha ardua y permanente. 44. La organización de los archivistas es una organización gremial, en que la estructura va de la base a la cúspide, y el dinamismo va de la cúspide a la base.

45. El archivista tiene el deber y el derecho de luchar porque toda ventaja a favor del Servicio de Archivos se conciba como parte de un programa integral de desarrollo del sector, o

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sea como parte de una planificación y, en consecuencia, se traduzca en disposiciones legislativas concretas, proyectadas por los archivistas, y hechas cumplir, y cumplir bien, por ellos mismos. 46. El archivista debe contar con oportunidades de profesionalización específica por medio de escuelas de archivistas, de escuelas de administradores públicos, de cursos profesionales extraordinarios, de entrenamiento interno en los repositorios, de autodidactismo, de bibliotecas especializadas, de oportunidades de formación y perfeccionamiento internacional. 47. Debe contar con un dispositivo legal constituido por normas fijas de idoneidad para el ingreso a la función de acuerdo al nivel profesional, la experiencia en el trabajo y la garantía efectiva de inamovilidad, y para su ingreso y su permanencia en la función debe estar legalmente garantizado contra las agresiones del favor personal, el interés político y cualesquiera otras desviaciones que atenten contra la idoneidad como única condición para el ingreso y la permanencia en la función.

48. Debe contar con sueldos básicos, categorías, sueldos extraordinarios, bonos, seguros y otras retribuciones adecuadas a su función y su jerarquía y al nivel de vida en cada momento.

49. Debe contar con oportunidades definidas de especialización en los niveles de dirección, operación, administración y/o mantenimiento.

50. Debe contar con la oportunidad de la asociación profesional para la dignificación y elevación de su capacidad técnica, así como con la oportunidad de su organización sindical para la dignificación y elevación de su nivel económico-social. Fuente: Mendoza, 1982a; Mendoza, 2005a.

DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS DE LA PRIMERA REUNIÓN INTERAMERICANA SOBRE ARCHIVOS Sancionada por la Resolución Nº 4 de la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos* en Washington D.C., el 26 de octubre de 1961, realizada bajo la dirección del Dr. T. R. Schellenberg* y G. Mendoza*, al que asistieron 51 profesionales del continente y observadores de España. La Declaración expone los puntos programáticos que guiaron el desarrollo de la Archivística latinoamericana. Señala y define de manera orgánica el alcance de los documentos, los archivos, los archiveros, los gobiernos y los pueblos. Declaración Los documentos, públicos o privados, son la fuente informativa primaria sobre el desarrollo económico, político y social de una nación y constituye por lo mismo una parte inapreciable de su patrimonio cultural.

Los documentos públicos son propiedad del pueblo y por delegación del pueblo los administra el gobierno. No pueden ser extraídos de la custodia archivística por nadie, y cuando se hacen superfluos sólo podrán ser eliminados con aprobación de las autoridades archivísticas.

Los archivos son las instituciones específicamente previstas para la conservación, organización y servicio eficaz y económico de los documentos, una vez que éstas han cumplido su función activa. Los archivos, en consecuencia, cumplen una misión indispensable en toda sociedad y ninguna otra institución puede subrogarlos en esa misión.

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Los archiveros son los profesionales directamente encargados de hacer posible el cumplimiento de los propósitos de conservación, organización y servicio de los documentos públicos y privados en los archivos. Los archiveros tienen el deber de cumplir este encargo en forma responsable, no atenidos a preferencias personales sino de acuerdo con las definiciones y técnicas objetivas de la profesión archivística.

Los gobiernos tienen, para con los archivos, el deber de dotarles de todos los medios necesarios para el lleno de su función específica. Los gobiernos tienen, para con los archiveros, el deber de proveer a su formación y dignificación profesional, acordándoles un tratamiento conforme con la misión que desempeña en la sociedad.

Los pueblos tienen el deber de exigir a los gobiernos, a los archivos y a los archiveros el cumplimiento de sus funciones conducentes a la conservación, organización y servicio del patrimonio documental, y a prestarles todo apoyo para que esas funciones se cumplan eficazmente. Fuente: Oporto, 2006; Oporto y Molina, 2011.

DECLARACIÓN UNIVERSAL SOBRE LOS ARCHIVOS (CIA) La Declaración Universal sobre los Archivos fue aprobada por la 36ª Conferencia General de la UNESCO, en París, noviembre de 2011. Adoptada en principio (en inglés) durante la Asamblea General en Malta (2009) y aprobada por los delegados del Consejo Interamericano de Archivos* CIA durante la Asamblea General en Oslo (2010). La Declaración fue diseñada sobre la base de la declaración de la Asociación de Archiveros de Quebec y desarrollada por un Grupo de Trabajo Internacional. Busca asegurar la aceptación global del valor y alcance de los archivos, el papel que juegan para la protección de los derechos humanos, en la construcción de la memoria colectiva y el fortalecimiento de acciones administrativas responsables y transparentes. Destaca las características únicas y los requerimientos de los archivos, así como las acciones que se necesitan para asegurar una administración y acceso apropiados. Apoya el trabajo efectuado por los archiveros, quienes custodian los archivos y los valoran, cumplen con ello con su deber profesional con toda la humanidad. Declaración Los archivos custodian decisiones, actuaciones y memoria. Los archivos conservan un patrimonio único e irremplazable que se transmite de generación en generación. Los documentos son gestionados en los archivos desde su origen para preservar su valor y su significado. Los documentos son fuentes fiables de información que garantizan la seguridad y la transparencia de las actuaciones administrativas.

Juegan un papel esencial en el desarrollo de la sociedad contribuyendo a la constitución y salvaguarda de la memoria individual y colectiva. El libre acceso a los archivos enriquece nuestro conocimiento de la sociedad, promueve la democracia, protege los derechos de los ciudadanos y mejora la calidad de vida. Por ello, nosotros reconocemos: •

El carácter único de los archivos como fieles testimonios de las actividades administrativas, culturales e intelectuales y como reflejo de la evolución de las sociedades;

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•

• • • •

El carácter esencial de los archivos para garantizar una gestión eficaz, responsable y transparente, para proteger los derechos de los ciudadanos, asegurar la memoria individual y colectiva y para comprender el pasado, documentar el presente para preparar el futuro;

La diversidad de los archivos para dejar constancia del conjunto de actividades de la humanidad;

La multiplicidad de soportes en los que los documentos son creados y conservados: papel, audiovisual, digital y otros de cualquier naturaleza; El papel de los archiveros, profesionales cualificados, con formación inicial y continuada, sirven a la sociedad garantizando el proceso de producción de los documentos, su selección y su conservación para facilitar su uso; La responsabilidad de todos -ciudadanos, gestores y responsables públicos, propietarios y/o custodios de archivos públicos y privados, archiveros y otros profesionales del campo de la información- en la gestión de los archivos.

Por lo tanto nos comprometemos a trabajar conjuntamente para que: •

Se adopten y se apliquen políticas y normas legales en materia de archivos;

•

Se doten los recursos adecuados para asegurar la correcta gestión de los archivos, incluyendo profesionales debidamente cualificados;

•

• • •

Todos los organismos públicos o privados que producen y utilizan documentos en el ejercicio de sus actividades valoren y ejerzan eficazmente la gestión de sus archivos;

Los archivos sean gestionados y conservados en condiciones que aseguren su autenticidad, fiabilidad, integridad y uso; Los archivos sean accesibles a todos, respetando las leyes sobre esta materia y las relativas a los derechos de las personas, de los creadores, de los propietarios y de los usuarios; Los archivos sean utilizados para contribuir al desarrollo de la responsabilidad de los ciudadanos.

Fuente: http://www.anabad.es (12.3.12); http://unesdoc (12.3.12).

DELGADILLO HURTADO, NELVA CELIA (Sucre, 19 de noviembre de 1972)

Licenciada en Comunicación Social (UMSFX), egresada de la Carrera de Educación de la Fe “Sedes Sapiens”. Tiene un Diplomado en Educación Superior (2006-2007). Trabajó en el Festival Internacional de la Cultura–Sucre (2005). Fue redactora de La Capital, y el periódico católico Camino (Sucre). Su formación archivística la obtuvo en los cursos internacionales de Paleografía Hispanoamericana Avanzada, Siglos XVI-XVIII (2006, 2009), Conservación Preventiva del Patrimonio Bibliográfico y Documental (2007), Curso Básico de Archivos a Distancia (Lima, 2006), Seminario Taller Iberoamericano de Conservación Preventiva (Bogotá, 2004) y el de Actualización y Capacitación Archivística (2003). Participó en el Congreso Nacional de Archivos para el Tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (Sucre, 2007). Fue Capacitadora en el Curso de Conservación Preventiva para Archivos y Bibliotecas, impartido en el Archivo de la Universidad Gabriel René Moreno (Santa Cruz de la Sierra, 2005). Trabajó en el proyecto Descripción de las Escrituras Públicas de La

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Plata (1700-1825) financiado por la Universidad de Harvard; y en la digitalización del ABNB (2002). A partir del 2004 se desempeña como Archivera del ABNB. Participa, junto a otro personal, en la elaboración de catálogos de fondos y series de ese Repositorio; asimismo colabora en la corrección y edición de publicaciones institucionales. Fuente: CV.

DESTRUCCIÓN DE LA MEMORIA DOCUMENTAL POR CAUSAS DE VIOLENCIA POLÍTICA La violencia política desencadenó actos colaterales de destrucción masiva de archivos a lo largo de la historia nacional. A la caída de un régimen sobrevenía generalmente el asalto de las casas de políticos para destruir sus bibliotecas y archivos. Así se fueron en las piras el Archivo y Biblioteca del ilustre historiador J. R. Gutiérrez* (1871), del expresidente H. Siles* (1930), del expresidente E. Peñaranda* (1943), y del político Guillermo Bedregal (1964). Las dictaduras militares propiciaron el asalto del Archivo del Servicio de Inteligencia del Estado (1979), la destrucción por fuego de una parte del Archivo Legislativo (1980) y el asalto del Centro de Información y Documentación de Bolivia (1980). En el siglo XXI, el 22 de febrero de 2003, organizaciones sociales movilizadas asaltaron instituciones-símbolo del poder político, destruyendo colateralmente los archivos de la Alcaldía Municipal de El Alto, del Ministerio de Trabajo, la Biblioteca del Ministerio de Planeamiento, el Archivo del Tribunal Permanente de Justicia Militar y de los partidos políticos Movimiento Nacionalista Revolucionario, Unión Cívica Solidaridad y Movimiento de Izquierda Revolucionaria (La Paz), así como los archivos de la Sociedad “10 de febrero” y de la Prefectura de la ciudad de Oruro. El 8 de septiembre de 2008, grupos opositores a la Asamblea Constituyente en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, procedieron a tomar de forma violenta las instituciones estatales (Instituto de Reforma Agraria, Empresa Nacional de Telecomunicaciones, Empresa Estatal de Televisión, Aduana Nacional, Administradora Boliviana de Carreteras, Servicio de Impuestos Nacionales), sedes de organizaciones indígenas y el Centro de Estudios Jurídicos y Sociales, quemando sus archivos y la biblioteca del CEJIS. Ante la magnitud del hecho, los archivistas de la ciudad de La Paz denominaron al 8 de septiembre como “Día Aciago de la Destrucción de la Memoria Cruceña”. La mañana del 22 de junio de 2012, un grupo de miembros de baja graduación de la Policía Nacional, planificaron la toma violenta de las instalaciones de la Dirección General de Investigación Interna de la Policía, sacaron los voluminosos expedientes del Archivo del Tribunal Disciplinario de la Policía Nacional y les prendieron fuego en vía pública ante la mirada atónita de la ciudadanía. Similares hechos vandálicos ocurrieron en Oruro y Cochabamba. Fuente: Oporto, 2003: 2-3; Oporto, 2008b: 205-244; Oporto, 2012b; Oporto y Ramírez, 2011: 19-20.

DÍA DEL ARCHIVISTA BOLIVIANO El 7 de julio de 1982, la II Reunión de Consulta de los Archivos de Bolivia*, reunida en Cochabamba, aprobó la resolución que declara al 18 de octubre como Día del

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Archivista Boliviano*, en conmemoración a la fecha de creación del Archivo General de la Nación. Fue G. R. Moreno* quien propuso en 1876 la creación del Archivo General de la Nación, desafío recogido por Demetrio Calvimontes, que presentó el proyecto de ley de creación del Archivo Nacional de Bolivia al Congreso de la República de 1882, que la sancionó y promulgó el 18 de octubre de 1883. En 1982, G. Mendoza*, en su condición de Director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, convocó a la Segunda Reunión de Consulta de los Archivos de Bolivia, a realizarse en Cochabamba entre el 5 y el 7 de julio, con el auspicio del Archivo de La Paz*, la Asociación de Archivistas Ex becarios de la OEA*, y el apoyo económico del Centro Cultural y Pedagógico Portales de la Fundación Patiño. Una semana previa, un grupo de archivistas ex becarios de la OEA, entre ellos E. Cárdenas*, R. Choque*, G. Aguilar*, M. Inch*, L. Oporto*, reunidos en La Paz, acordaron presentar un proyecto de resolución para la celebración del Día del Archivista Boliviano, el 18 de octubre, en conmemoración al día de creación del Archivo General de la Nación. De esa manera, la plenaria del 7 de julio, analizó el punto “(d) Otros problemas: Declaración de Principios del Archivista Boliviano”. El delegado de la Asociación, presentó el proyecto de Resolución que en su primer punto declaraba a Gunnar Mendoza Maestro e Impulsor de la Archivística Boliviana, y en el segundo, reconocía el 18 de octubre, como el Día del Archivista Boliviano, en homenaje a creación del Archivo Nacional de Bolivia, en 1883. Grande fue la sorpresa de G. Mendoza, quien desconocía en lo absoluto el contenido del proyecto de resolución. Daba la casualidad que el ABNB cumpliría 100 años de creación en 1983, lo que constituyó doble motivo de alegría para el meritorio maestro. Desde entonces, en Bolivia, se celebra el 18 de octubre de cada año, el Día del Archivista Boliviano que fue reconocido oficialmente por Resolución Ministerial N° 799/12 (Ministerio de Trabajo) de fecha 15 de octubre de 2012. Al principio fueron discípulos y allegados de G. Mendoza quienes recordaban el acontecimiento. Paulatinamente, otros archiveros se sumaron a la iniciativa, entre ellos M. Quispe Laruta*, quien en solitario, desde el Archivo del Ministerio de Agricultura, elaboraba un afiche que, multicopiado, hacía circular entre los archiveros del Poder Ejecutivo. Desde el Archivo del Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, se organizaron actos conmemorativos. Más tarde el Archivo de La Paz*, congregó a estudiantes y docentes universitarios y desde el Archivo del Banco Central de Bolivia*, R. Santos* hacía circular un impreso relativo a la fecha, que se institucionalizó en las Jornadas Paceñas de Bibliotecología y Archivística, oportunidad en la que se presentó una crónica sobre el origen del Día del Archivista Boliviano. Actualmente se celebra la fecha magna de los archiveros bolivianos a nivel nacional. Fuente: ABNB, 1982; Oporto, 2005a; Oporto, 2005b.

DÍAZ ARGUEDAS, JULIO

(Laja, La Paz, 19 de marzo de 1889. † La Paz, 12 de febrero de 1980) Historiador militar. Estudió en el Colegio Militar. Egresó como subteniente en 1910 y alcanzó el grado de Coronel (1937). Participó en la Guerra del Chaco, asignado al Comando Superior en Campaña (1934). Profesor de Historia en el Colegio Militar, Escuela de Carabineros y Colegio Ayacucho. Miembro de la Academia Boliviana

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de Historia, Sociedad Bolivariana de Historia y del Instituto de Investigaciones Históricas y Culturales de la Municipalidad de La Paz. Su obra es especializada en temas castrenses: Vida y hechos del general José Miguel Lanza (1927), Los generales de Bolivia (1929), El ejército a través de un siglo (1931-1932), Los elegidos de la gloria (1937), Historia del ejército de Bolivia (1940), La guerra con el Paraguay (1942), Fastos militares de Bolivia (1943), El gran mariscal de Montenegro (1945), El derrumbe de una tiranía (1947), Sucre, organizador y conductor de ejércitos (1951), Cómo fue derrocado el hombre símbolo (Salamanca) (1957), Franz Tamayo, el poeta filósofo (1967), Expedicionarios y exploradores del suelo boliviano (1971), Paceños célebres (1974), Alcides Arguedas, el incomprendido (1978). Dejó amplia obra inédita, referenciada por E. Becker. Fue Jefe de la sección Histórica del Estado Mayor General que custodia los archivos históricos. Fuente: Arze, 1989: 98; Bequer, 2007: 178-179.

DÍAZ MACHICAO, PORFIRIO

(La Paz, 4 de septiembre de 1909. † La Paz, 22 de julio de 1981) Escritor literario e historiador autodidacta; periodista. Estudió en el Colegio Nacional Ayacucho donde publicó su primera novela corta en el periódico estudiantil ABC, logrando el primer premio de un certamen estudiantil. Dejó los estudios de Filosofía, prefiriendo la escuela de la vida, en un memorable tránsito hacia la bohemia paceña, alternando con el músico Sagárnaga, el poeta Capriles, el pintor Borda, el periodista Villarejos y el político revolucionario Viscarra Fabre. “Con ellos inicié mi libertad”, menciona. Ocupó varios cargos de responsabilidad, como Director-propietario del diario El País (1937-1946), redactor y colaborador de La Razón, La República, El Diario, Presencia y Última Hora. Fue también Consejero de la Legación Boliviana en México (1949). Tiene amplia obra literaria y como biógrafo escribió sus Lecciones sobre Santa Cruz, que tuvo la mayor tirada en su época, con 40.000 ejemplares, por encargo del Ministerio de Defensa Nacional. Trató de dar continuidad a la Historia General de A. Arguedas*, publicando cuatro tomos, con enfoque presidencialista. Miembro de la Academia Boliviana de la Lengua, participó en esa condición como consultor del Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, que le confirió una condecoración, como también lo hizo la Academia de Historia de España. El gobierno le otorgó el “Cóndor de los Andes”, la Alcaldía de La Paz la presea “Pedro Domingo Murillo”, y lo propio hizo la Universidad de San Andrés; el Papa le confirió la medalla de la “Orden de Gregorio Magno”. Fue Premio Nacional de Cultura en 1973. Siendo director de la Biblioteca Central de la UMSA (1958-1970), fundó el Museo de Escritores de Bolivia, la Biblioteca “Franz Tamayo” y el Archivo Epistolar Boliviano (1967). Escribió una biografía novelada del Comandante indígena Pedro Obaya*, El Rey Chiquito, Escribano preferido de Túpac Katari* durante el cerco a La Paz en 1781. Publicaciones Archivísticas: “Pregón para el Archivo Epistolar de la Nación” (Presencia, La Paz, 8 de abril de 1967: 3 y 11). Fuente: El Diario, 1967; Presencia, 1967; Presencia, 1967a; Presencia, 1967b; Presencia, 1970; Quiroz, 2009.

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DIEZ DE MEDINA, EDUARDO

(La Paz, 8 de febrero de 1882. † La Paz, 27 de junio de 1955) Abogado, escritor, historiador, poeta, periodista, diplomático, internacionalista y político. Ejerció diversos cargos públicos, entre ellos el de Redactor de la Convención de 1909, profesor de Derecho Internacional en el Colegio Militar (1910), Presidente del Concejo Municipal de La Paz (1910), Prefecto del Departamento de Oruro (1914) y Ministro plenipotenciario en Japón, Uruguay, Chile, Perú y Cuba. Entre sus ensayos, destacan La cuestión del Pacífico y la política internacional de Bolivia (1923) y Problemas internacionales (1936). Su obra poética es de carácter romántico, pero con formas modernistas: Martha o los tres lirios (1901), Mariposas (1903), Tríptico sentimental (1913) y Paisajes criollos (1919). Plasmó sus memorias en una obra testimonial titulada De un siglo a otro. Memorias de un hombre público (1955). Siendo Ministro plenipotenciario de Bolivia en misión especial en la República Argentina, en junio de 1924, encontró entre los libros de la legación boliviana en Buenos Aires, una copia original de las actas originales del Primer Congreso Constituyente de Bolivia, año de 1826. Sorprendido por el inusual hallazgo, al final de su lectura, en su condición de Ministro Plenipotenciario de Bolivia en Misión Especial, ordenó: “Remítase este volumen, de inapreciable valor histórico, al Honorable Congreso de Bolivia. Buenos Aires, junio 1924”. Repatriado el grueso manuscrito fue a parar a un depósito del Senado y recién en 2004 fue transferido al Archivo Histórico del Congreso Nacional, donde actualmente es custodiado. ¡80 años más tarde! Fuente: Alarcón, 1925: 380; Congreso Nacional, 1826; http://www.biografiasyvidas.com (31.05.10).

DIEZ DE MEDINA, MARIANO Alcalde ordinario de primer voto. Durante la transición a la República, el 27 de abril de 1824, ordenó se continúe el registro de actas del ilustre Cabildo, Justicia y Regimiento, gracias a lo cual se conservaron los documentos y archivo del municipio de La Paz. Para ello contó con el apoyo del Capitán Juan Romualdo Polo, alcalde ordinario de segundo voto.

DURÁN JORDÁN DE LAZO DE LA VEGA, CECILIA JULIA FLORENCIA (La Paz, 22 de septiembre de 1945)

Licenciada en Historia UMSA (1994) y Guía y Cicerone de Turismo. Postgrado Diplomado en Estudios Superiores (2001). Ejerció la docencia interina en las Carreras de Turismo e Historia* UMSA (1997-2003), y en las Universidades Nuestra Señora de La Paz (2002-2004), y Católica San Pablo (2009). Ha publicado La Mujer en las Sociedades Prehispánicas de Bolivia (1994), Juana Manuela Gorriti: su palabra y sus silencios (1995), El complejo mundo de la mujer durante la Guerra del Chaco, Coautora con Ana María Seoane (1996), Bolivia y Alemania. Facetas de una relación secular, coautora con L.E. Bieber* (2011). Pertenece a la Sociedad Boliviana de Historia desde 1997. Presidenta y Directora de la publicación de la revista Historia y Cultura desde 2011. Responsable de la recuperación, traslado, organización y catalogación de la documentación del Repositorio de la Policía Nacional Sección de Investigaciones

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“Inmigraciones Extranjeras” al Archivo de La Paz* (1995), Responsable de la Catalogación bibliográfica y organización del Centro Documental de la Fundación Cultural del Banco Hipotecario Nacional (1995). Fuente: CV.

DURÁN MENDOZA, JOSÉ LUIS

(Riberalta, Beni, 25 de marzo de 1958) Hijo del poeta Luciano Durán Boger. Cineasta y fotógrafo. Dibujante, pintor y editor de revistas y libros. Estudió arquitectura en el Nordeste de Brasil, pasó a Sao Paulo donde estudió cinematografía, arte dramático, fotografía y dibujo. Retornó a Bolivia en 1983. Trabajó en Santa Cruz y luego fue a residir en Guayaramerín, donde fue Presidente de la Sociedad de Escritores (2007-2009). Fue el primer responsable del Archivo Histórico de la Casa Suárez Hnos.*, a partir de la inauguración de su edificio en Guayaramerín. Fuente: Ruiz, 2011.

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E ELÍAS, MANUEL A. Uno de los primeros consultores de archivo de la República. Fue contratado en 1918 por el Ministerio de Hacienda con la obligación “de arreglar y poner en perfecto orden en el término de tres meses”, formando un detallado catálogo de todos los libros y expedientes, en los que se colocó los correspondientes rótulos, dividiendo todo el material metódicamente en secciones que permitan su fácil manejo. El trabajo fue realizado por 2.200 bolivianos. Fuente: O.S. 18.06.1918; Oporto, 2006: 158.

ENTRAMBASAGUAS, PEDRO DE (Chuquisaca)

Descendiente de ilustre familia de la Colonia. Su abuelo, Don Manuel de Entrambasaguas, Capitán de voluntarios en el alzamiento de 1809 en Chuquisaca, era habilitador de los gastos revolucionarios. Su padre, Don Francisco, fue asesor de la presidencia de Charcas y Oidor en Manila, Fiscal del Consejo Supremo de Castilla e Indias. En 1875, P. de Entrambasaguas era el custodio del Archivo del Congreso Nacional conformado por documentos originales de las primeras sesiones y los libros de actas, todos elaborados en papel resistente de primera calidad, debidamente encuadernados en pasta dura. Una sección de este archivo estaba constituida por los libros referentes a la fundación y organización de Bolivia conformados por 8 primeros volúmenes de actos emanados de los congresos fundadores. Allí estaban los discursos de los diputados y los proyectos, mociones, minutas de comunicación, mensajes del ejecutivo, actas, redactor de sesiones, y boletín de documentos. Ordenó los papeles a su modo y fue un vigilante denodado de su custodia, “si (su actuación) fue en extremo rigurosa e inquisitorial, le honra en gran manera y es prueba de integridad”, dijo de él Moreno; enfrentando con carácter no pocas veces la inveterada costumbre de los diputados de sacar del archivo lo que se les antojara. Fuente: Moreno, 1927: 59; Oporto, 2006: 235.

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ERGUETA, MARCELINO

(Calacoto, Provincia Pacajes, La Paz, 2 de junio de 1948) Cursó la primaria y secundaria. Ingresó a trabajar al Ministerio del Trabajo, el 2 de septiembre de 1973, a los 25 años de edad, a la División de Archivo. Hizo el curso de Archivo y Manejo de Documentación en el desaparecido Instituto Superior de la Administración Pública. La necesidad de formarse motivó su asistencia a varios seminarios y cursos sobre archivos y bibliotecología. En el desempeño de sus funciones apoyó las tareas del Jefe de la División, A. Salazar Zelaya*, hasta la jubilación de éste el 2002, razón que posibilitó su designación como Responsable del Archivo Central del Ministerio de Trabajo y Previsión Social. En febrero del 2003 fue testigo de los “acontecimientos, hechos delictivos y actos de violencia (que provocaron que) esta repartición fue (ra) saqueada e incendiada, por lo que se tuvo que rescatar la documentación de mucha importancia”. El 2010 se acogió al beneficio de jubilación, luego de largos 37 años de trabajo ininterrumpido en la misma repartición. Fuente: Correspondencia de 20 de julio de 2010.

ESCOBARI CARDOZO DE QUEREJAZU, LAURA ANGELITA

(Río de Janeiro, Brasil, 22 de febrero de 1951)

Doctora en Historia. Fue Presidenta de Sociedad Boliviana de Historia (2000-2001) y de la Academia Boliviana de la Historia (2006-2009). Directora del Instituto de Estudios Bolivianos de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UMSA). Asistió al IX Curso de Organización y Administración de Archivos*, en Madrid, España (1981); Curso de Archivos dictado por los profesores del Centro Interamericano de Desarrollo Archivístico* de Córdoba (La Paz, 1984), Curso de diseño y Legislación Archivística (Dirección de Archivos Estatales-Ministerio de Cultura, Madrid, España, 1997). Participó con la ponencia “Recursos Documentales de la Radio Nacional de Bolivia” en la Cuarta Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos No estatales (Cochabamba, 1984), en el Seminario Taller sobre la Articulación del Sistema Nacional de Información, con “La situación de los archivos departamentales y la conservación de los recursos documentales del s. XX” (Sucre, 1995). Su obra historiográfica es amplia, algunos títulos son: Producción y comercio en el sur andino. Siglo XVII (1985), Historia de la Industria Molinera boliviana (1987), 113 años de historia de la Sociedad Católica de San José (1991), Caciques, yanaconas y extravagantes (2001), Mentalidad social y niñez abandonada en Bolivia. 1900-1948 (2004), De caciques nobles a ciudadanos paceños: Historia, tradición y genealogía de los Cusicanqui, S. XVI al XXI (2011). Docente titular de Práctica de Archivos en la Carrera de Historia* (UMSA), Directora del Archivo de La Paz* (19941999), Investigadora docente del Archivo de La Paz (1990-1991, 2006 -2008). Dinamizó las acciones de rescate del Archivo de La Paz* y tiene el mérito de haber gestionado la construcción del nuevo edificio en el anexo de la Casa Montes, que ocupa el Archivo de La Paz, la Carrera de Historia, y otras de la Facultad de Humanidades. Entregó, en calidad de donación, a este archivo, una colección de documentos referidos a los títulos de propiedad de una Chacarilla ubicada en la zona de Sopocachi (1883-1945). Publicaciones archivísticas: “Recursos documentales de la Radio Nacional de Bolivia” (Boletín del Archivo de La Paz, 1987, 10: 5-12); “El Archivo del Convento de San Francisco (La Paz)”, con

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M. Gamarra (Boletín del Archivo de La Paz, 1988, 11: 7-22); “Proyectos de investigación sobre ciencias sociales en el Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz. Número especial, 1991: 12-19); “Guía preliminar de instrumentos descriptivos de los Fondos del Archivo de La Paz” con Ximena Medinaceli (Boletín del Archivo de La Paz, 1995; 15: 1-16); “El Archivo de La Paz en la hazaña de recoger archivos provinciales: el caso de la provincia Pacajes” (Boletín del Archivo de La Paz, 1995, 15: 27-31); “26 años del Archivo de La Paz. Relación de recojo de fondos documentales e infraestructura” (Boletín del Archivo de La Paz. Homenaje 26 años, 1997, 16-17: 9-15); “La historia peregrina” (Boletín del Archivo de La Paz. Homenaje 26 años, 1997, 1617: 70-73); “Recuperación del Archivo de la Provincia Camacho” (Boletín del Archivo de La Paz. Homenaje 26 años, 1997, 16-17: 87-89); “Cinco años en la dirección del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1999, 18: 7-12); “El Archivo de la Colección ‘Ballivián Saracho’” (Boletín del Archivo de La Paz, 1999, 18: 61-63); “Archivo de La Paz (ALP)” (Diccionario Histórico de Bolivia, Sucre, 2002: 161). “Historia del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 2006, 23-24: 19-36); “Academia Nacional de Ciencias. Estación Biológica del Beni” (Boletín del Archivo de La Paz, 2006, 25: 23-26). Fuente: CV; Barragán, 2008: 129.

ESCRIBIENTES DE LAS AMBULANCIAS DEL EJÉRCITO El Dr. Z. Dalence*, cirujano mayor del Ejército, organizó el Cuerpo de Ambulancias y Depósito de Inválidos del Ejército (Cruz Roja Boliviana), en febrero de 1880, “casi frente al enemigo, en una plaza bloqueada”, sin recursos económicos, pero con la voluntad férrea para atender a los heridos en el campo de batalla, “amparados únicamente en la Convención de Ginebra”. Tuvieron actuación preponderante reputados artesanos bolivianos residentes en Tacna, la mayoría de ellos sastres, zapateros y enfardeladores, oriundos de Cochabamba, Oruro y Potosí. De ellos, 40 trajinaron los campos de batalla, recogiendo heridos y sepultando muertos, portando para ello “diez camillas, dos mochila-botiquines y dos banderolas de neutralidad”. En el hospital sedentario, 21 sanitarios hacían su labor protegidos por “tres banderolas de neutralidad”. En cada ambulancia existía un Escribiente, siendo el principal el de Mayoría, como parte de la Plana Mayor. Estos tenían la responsabilidad de llevar la correspondencia y custodiar los archivos de las Ambulancias en el campo de batalla. Los Escribientes que llevaron a su cargo el prolijo y completo archivo, desde el 21 de febrero de 1880 hasta el 17 de abril de 1881, fueron José Calisto Paz, Escribiente de Mayoría, Plana Mayor, Ambulancia Sedentaria; Juan Osorio, Primera Compañía, Ambulancia Volante; y Tomás R. Quiroga, Segunda Compañía, Ambulancia Volante. El análisis de una lista de “Sanitarios desaparecidos del campo de combate el 26 de mayo”, nos permite obtener una muestra representativa de su composición. Gracias a ese documento sabemos que la mayor parte de los Maestros de Taller eran sastres de Cochabamba y Oruro, seguidos por zapateros de Cochabamba y la provincia Chichas (Potosí) y un enfardelador, también de Cochabamba como consta en el Cuadro del personal del cuerpo de Ambulancia del Ejército Boliviano, correspondiente a la revista de Comisario, levantado por el Intendente accidental de la Ambulancia, Segundo Bascones (mayo de 1880). Fuente: Dalence, 1881: II-VI; Oporto 2011a: 7.

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ESCUELA IBEROAMERICANA DE ARCHIVOS Fue creada en 1991, con 16 asistentes de Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador y Honduras. Recién a partir de 1992 Bolivia tuvo participación en ella. El 2000 participaron 3 archiveros de nuestro país. La Dirección de General del Libro Archivos y Bibliotecas de España convoca anualmente a la Escuela Iberoamericana de Archivos, a profesionales iberoamericanos para su formación en esta en cursos que se realizan durante los meses de octubre y noviembre de cada año en las instalaciones del Archivo General de la Administración, Alcalá de Henares-Madrid, con el afán de acrecentar los conocimientos archivísticos de los participantes, dar a conocer la organización de los Archivos españoles y propiciar el intercambio de experiencias profesionales, avances legislativos y académicos de los representantes de los países participantes, combinados magistralmente con visitas de estudio a los principales archivos de España, tales como el Archivo Histórico Nacional, Archivo del Ministerio de Cultura (Madrid), Archivo General de Indias* (Sevilla) y el importantísimo Centro de Información y Documentación Archivística, que proporciona la bibliografía actualizada para los pasantes. Entre 1991 y 2009 la Escuela, benefició a 20 profesionales bolivianos. En el registro histórico, Colombia (40 becarios) tiene mayor representación, seguido de Perú, Cuba, Brasil, Bolivia, México y Venezuela. La Escuela publica materiales de estudio que son distribuidos a los participantes y también en los cursos que se realizan en sus centros en América Latina. Publicaciones archivísticas: Colección Experiencias y Materiales: Santos, María Carmona De los et al.: Sigilografía; Identificación y Valoración (Madrid, 1999); Romero Fernández Pacheco, Juan Ramón: Conservación y reproducción (Madrid, 1999); Martín-Palomino y Benito, Mercedes y La Torre Mena, José Luis: Metodología para la identificación y valoración de fondos documentales (Madrid, 2000); Cruz Herranz, Luis Miguel de la; Cruces Blanco, Esther y Cayetano Martín, María del Carmen: Archivos y sistemas (Madrid, 2000).

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F FAWCETT, PERCY HARRISON

(Torquay, Inglaterrra, 1867. † Brasil, 1925?) Militar, topógrafo y explorador. En 1886 sirvió a la corona inglesa como oficial de la Artillería Real en Grincomalee (Sri Lanka), pasó luego al Servicio Secreto en África del Norte. Fue amigo de los escritores H. Ridder Haggard y Sir Arthur Conan Doyle, “quien usaría más tarde sus historias para escribir El Mundo perdido”. En 1906 viajó al Brasil para levantar la cartografía la frontera de Brasil con Bolivia, circunstancia en la que fue contratado por el gobierno de Bolivia para demarcar las fronteras de Bolivia-Brasil y Bolivia-Perú, en una serie de cuatro expediciones, entre 1906 y 1914. Entre 1911 a 1913 fue designado Jefe de la Comisión Boliviana de Límites de Perú, y Bolivia (El Mayor H.S. Toppin dirigió la Comisión peruana). Difundió sus hallazgos sobre la selva Boliviana en varios artículos: “Explorations in Bolivia”, Geographical Journal (Londres, vol. XXXV, 1910); “Por la zona del Norte de Bolivia”, Caras y Caretas (Buenos Aires, vol. XV, no. 722, agosto 3, 1912); “In the Heart of South America”, The Wide World Magazine (Londres, agosto 1912, septiembre 1912, octubre 1912 y noviembre 1912). El último mencionado, de una serie de cuatro partes, está ilustrado con numerosas fotografías de Bolivia. Fawcett desapareció en 1925, durante una expedición en Mato Grosso del Brasil. Algunas de sus fotografías bolivianas se incluyen en su libro de memorias, Lost Trails, Lost Cities (1953), editado por su hijo Brian Fawcett. Veinticuatro de sus fotografías, fechadas en 1907, 1908, 1911-1913 y 1913-1914, son custodiadas por la Royal Geographical Society en Londres. Fuente: Arze, 1987: 85-86; Barnadas, 2002; Buck, 1999: 19; Limpias, 2010: 230.

FELIPILLO Y MARTINILLO Según Porras nació en Tumbes. Fue capturado por el piloto Bartolomé Ruiz (1526). Pizarro lo llevó a Panamá y España. A su retorno, junto a Martinillo, otro indio joven, sirvió como informante de sus huestes. Enseñaron quechua a Hernando de Aldana, “el primer quechuista” español. Felipillo residió en Quito, donde conoció a la madre de Atahuallpa y cortejó a la Ñusta Inti Palla (al parecer ‘hermana y concubina’ del Inca), a quien Pizarro llamó ‘Angelina’ y la hizo su mujer, con la que tuvo dos hijos. Felipillo fue el traductor del proceso y suplicio de Atahuallpa del que se afirma tergiversó la versión del Inca por el odio que sentía. Posteriormente, recogió la

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historia de la prisión del Inca, la respuesta que dio a sus captores, así como “la cifra de los muertos que señala en cinco mil y el valor del rescate del Inca”, que fueron registrados “por la tradición de los quipus que son los ñudos de Cassamarca, donde pasó el hecho, y en los ñudos y cuentas que trujeron de cada provincia” al Cuzco. Se dice que Diego de Almagro, al enterarse de su doblez durante su expedición a Chile, lo hizo ejecutar por descuartizamiento. Fuente: Porras, 1953: 128; Porras, 1986: 499-500; Benzoni, 1967; http://www.vivatumbes.com (2.4.12); http://www.es.wikipedia. (2.4.12).

FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA, LORENZO Relator de la Audiencia de Charcas. En 1804 se le entregó la responsabilidad de administrar el Archivo de Misiones de Mojos y Chiquitos con un sobresueldo de 3000 pesos anuales. Hasta ese año, el Archivo estaba fusionado al de las dos provincias y corría a cargo del Escribano J.J. Zuzunaga*. Fuente: Moreno, 1973: 318.

FERNÁNDEZ GÓMEZ, EDUARDO (La Paz, 30 de noviembre de 1954)

Consultor de la Dirección de Reconversión de la Coca. En esa época trabajó en Covendo, donde organizó un Coro de niños, como estrategia de aproximación a la población indígena, técnica heredada de su padre, el célebre músico y literato Nicolás Fernández Naranjo. Allí conoció a N. Santos*, quien tenía en su poder 9 partituras de la época de las misiones franciscanas, que se los entregó en calidad de custodio. Fernández trasladó las deterioradas partituras a La Paz, donde las conserva como parte de la Biblioteca de su padre. Buscó infructuosamente apoyo para propiciar su restauración, ante la cooperación internacional e instituciones estatales, entre ella el ABNB*, sin resultado positivo. Felizmente logró un financiamiento de la Fundación Educación Para el Desarrollo y de Hugo Boero Kavlin, a la sazón director del Programa de Fortalecimiento Institucional. Junto a la historiadora María Eugenia Soux y el músico Carlos Aguilar Prieto, elaboró un proyecto integral para la creación del Instituto de Investigaciones Mosetenes, un Centro de Documentación y una Escuela de Música Mosetén. El Ministerio de Culturas catalogó las partituras. La Asamblea del Pueblo Mosetén le designó oficialmente custodio de ese archivo, por lo que los manuscritos aún se conservan en su poder. El destino del archivo, sin embargo, es incierto pues Fernández decidió, motu proprio, no restituir los documentos a sus legítimos propietarios y tampoco entregar a ningún organismo del Estado mientras no se concrete el ambicioso proyecto. Como resultado de su empeño, publicó una obra que recoge esa apasionante y singular historia archivística. Publicaciones archivísticas: Hallazgo y contextualización preliminar de un archivo musical Mosetén. La Paz, PFI-Artewasi, 2010.

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GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

FERNÁNDEZ MAZZI DE APONTE, CARMEN PATRICIA (La Paz, 20 de abril de 1957)

Licenciada en Historia (UMSA). Máster en Historia Política Latinoamericana de la Universidad Internacional de Andalucía de Santa María de la Rábida, España (1996). Hizo el Diplomado sobre Historia de Bolivia y Estudios del Oriente Boliviano en la Universidad Privada de Santa Cruz de la Sierra (1998); y el Diplomado en Educación Superior UMSA (2003). Ha sido Docente en las Universidades Mayor de San Andrés (1994-1996; y 2004, 2006-2007), Nuestra Señora de La Paz (1994-1996) y Privada Boliviana (2008). Es miembro de la Sociedad Boliviana de Historia desde 1995, llegando a ser Presidenta (2004 a 2010), y miembro del Comité Editorial de la Revista Historia y Cultura. Integró la Coordinadora de Historia, y fue editora de su revista Historias (1997-2003). Es miembro de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz de la Sierra (2001), al que ingresó con su trabajo “Santa Cruz y la Guerra Civil de 1949”. Fue consultora del Ministerio de Educación y Culturas para la fase de elaboración del anteproyecto de Ley Avelino Siñani y Elizardo Pérez (2008-2009). Asistió a números congresos de Historia, entre ellos el Encuentro Internacional de Historia “El Siglo XIX. Bolivia y América Latina” (Sucre, 1994), 49 Congreso Internacional de Americanistas (Quito, Ecuador, 1997), II Encuentro Internacional de Historia: “El Siglo XX, Bolivia y América Latina. Visiones de fin de Siglo” (Cochabamba, 1998). Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996). Es autora de Juana Azurduy de Padilla: La Generala (1997); “!Viva la huelga de hambre¡” de 27 mujeres del Movimiento Nacionalista Revolucionario en 1951 (Revista Historias, 1), “Prolegómenos de la Revolución Nacional”, sucesos de Santa Cruz en 1952 (Revista Historias, 2003, 6); “Santa Cruz y la Guerra Civil de 1949” (Historia y Cultura, 2005, 30:77-94); “A los 36 años de la Sociedad Boliviana de Historia”, con Florencia Durán (Historia y Cultura, 2007, 32: 87-100); “Índice de la Revista Historia y Cultura” (Historia y Cultura, 2008, 33:183-209); “Entrega del primer Premio Alberto Crespo Rodas” (Historia y Cultura, 2008, 33:229-230); “Bio-bibliografía de la maestra María Eugenia del Valle de Siles” (Bolivia-Chile: Figuras intelectuales compartidas. Colección Homenaje. Universidad de Valparaíso-Universidad de Aquino, 2009); “Alberto Crespo Rodas, el maestro y el amigo” (Historia y Cultura, 2011, 35:191-192); “José Luis Roca” (Historia y Cultura, 2011, 3:193-194); “Valentín Abecia Baldivieso” (Historia y Cultura, 2011, 35:195-196). Trabajó en el Archivo de La Paz*, como Docente Archivista (1995-1997), realizando la catalogación de los Fondos “Josefa Saavedra”, “Prefectura de La Paz”, “Facultad de Humanidades de la Universidad Mayor de San Andrés”; también llevó adelante la organización del Archivo fotográfico y la elaboración de la Guía de Archivo. Participó en el rescate de documentos en peligro de ser destruidos en el área rural y fue Encargada de la Biblioteca especializada en Ciencias Sociales. Asistió al Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia Gunnar Mendoza Loza* (Sucre, octubre 1995). Publicaciones archivísticas: “Catálogo Fondo donación Josefa Saavedra” (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 16-17:22-27); “Economía, administración y justicia: El Fondo de la Prefectura de La Paz”, con Ximena Medinaceli (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 16-17: 28-35); “Regístrese, comuníquese y Archívese” (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 16-17:49-57); “De las Revisitas a la Ley INRA” (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 16-17:73-76). Fuente: CV.

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FERNÁNDEZ PEÑARANDA, JUAN CARLOS (Santa Cruz de la Sierra, 11 de marzo de 1959)

Egresado de la Carrera de Historia* (UMSA). Cursó la VIII Escuela Iberoamericana de Archivos* en el Archivo General de la Administración, en Alcalá de Henares, España (1998). Tiene un Diplomado en Gestión de Documentos y Administración de Archivos Históricos UMSA (2002) y la Maestría en Filosofía y Ciencia Política CIDES (2005-2006). Participó en el XIV Congreso Mundial de Archivos en Sevilla, España (2000), el VI Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos, Sucre (2011); Seminario Internacional de Archivos: Normas en el Mundo Archivístico, Asociación Latinoamericana de Archivos*. Fue co-organizador de la Reunión Nacional de Consulta Archivística sobre la Aplicación de la Norma ISAD-G, Cochabamba (2006). Participó en el Comité de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas* (1993-1995); fue uno de los organizadores del Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (1995) y del Congreso Departamental “Alberto Crespo Rodas”* (1996), donde se creó la Asociación de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de La Paz*, de la que fue su Presidente. Creó la Lista [email protected] (2008). Es miembro de la Asociación Latinoamericana de Archivos*, ALA y de la asociación española ANABAD. En 2007, se le confirió el Diploma de Honor al Mérito Cultural, “por contribuir al desarrollo de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional”. Se inició en el Archivo de La Paz* como Auxiliar de investigación (1992-1993), pasó al Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores (1992), fue Asesor en gestión documental y archivística de la Segunda Vicepresidencia de la Cámara de Diputados (1993-1995), Director del Archivo Histórico de esa Cámara (1995) en reemplazo de Y. Tejerina*; trabajó como consultor en archivos del Banco Central  de Bolivia* (1994-1995), ocasión en la que presentó el proyecto para la organización del fondo documental del BCB. Como Jefe del Departamento de Correspondencia y Archivo del BCB (1995-2007), impulsó la automatización de la gestión integral documental modernización archivística, la creación del sistema de archivo del BCB, conformado por los archivos de oficina, el Archivo Central (La Paz) y el Archivo Intermedio (El Alto), y transfirió la documentación de valor permanente al ABNB. Fue Jefe de Archivo y Correspondencia de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ex Superintendencia de Bancos) (2009-2010) y desempeñó funciones en Archivo y Correspondencia en la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (2011). Fundó Documentalia SRL (2008), con la que realiza consultorías de Gestión Documental y Administración de Archivos. Trabajó como Consultor de IDEA Internacional para actualizar el Reglamento de Archivo de la Cámara de Diputados (2010). N. del A. J.C. Fernández señala en su Vita que nació en Bolivia. Publicaciones archivísticas: “Una organización en germen: los archiveros de Bolivia escriben su historia” (La Razón. La Paz, 5 de diciembre de 1993); “Papeles, vida y testimonio de un ex presidente de la República: Entrevista con Wálter Guevara Arze”, con Gonzalo Molina E. y Fernando Chuquimia (Anuario 1996 del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, Sucre: ABNB, 1996: 483-494); “Congreso de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas ‘Gunnar Mendoza Loza’” (Fuentes Etnológicas. Boletín del Museo de Antropología y Folklore, 1995, Año V); “El Archivo Nacional Intermedio” (Boletín del Archivo de La Paz, 1994, Nº 14); “El Archivo moderno, institución política de regulación” (Fuentes, 2011, 5 (12): 23-29). Fuente: Gutiérrez, 2003.

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FERNÁNDEZ QUISBERT, RAMIRO

(Colquiri, Provincia Inquisivi, La Paz, 9 de febrero de 1963) Licenciado en Historia (UMSA), con estudios de Maestría en Historias Andinas y Amazónicas (UMSA). Docente Contratado, interino e invitado, en la Carrera de Historia*. Fue Director de la Carrera de Historia en la Universidad Indígena “Tawantinsuyo Ajlla” y docente en la Universidad Pública de El Alto. Fue catedrático en el Instituto Normal Superior Simón Bolívar. Se formó en las cátedras de A. Crespo*, R. Arze Aguirre*, G. Ovando Sanz*. Es autor de Resistencia indígena, poder local y desarrollo agropecuario en los Andes (2007) y, como resultado de su experiencia docente; Didáctica de la Historia y las Ciencias Sociales (2011). Formó parte de lo que denomina ‘caza archivos’, estudiantes “que trasladaban camiones con papeles viejos, sin esperar paga ni reconocimiento alguno, pues sentían felicidad al ser parte de estas hazañas”. En 1987 y 1988 cooperó en la organización de los fondos “Prefectura de la Paz” y “Contraloría General de la República”, para su transferencia al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (en Sucre), y de la Colección del ex Presidente de Bolivia J. L. Tejada Sorzano* (en la que encontró documentos y fotografías, valiosos que empleó en su tesis sobre la Hacienda Cañamina), con la intervención de los entonces estudiantes, R. Hilari*, G. Molina*, M. Quiroga*, Jaime Mercado, E. García*, R. Santos*, E. Aillón* y otros. En 1989 y 1990, participó en el proyecto de investigación histórica-sociológica y organización del Archivo Provincial de Sud Yungas, auspiciado por el Centro de Educación y Comunicación Popular Qhana, Radio Yungas y organizaciones campesinas de la provincia, con un equipo conformado por Raúl Prada y M.L. Soux*, que recogió los archivos de notarías, registro civil, iglesias y de la misma Radio (que atesoraba la memoria histórica de las luchas indígenas campesinas de la región). El Archivo de La Paz dispuso los recursos para fotocopiar documentos de esos archivos, referidos a Padrones y Revisitas, esenciales para trámites de títulos de propiedad agraria. “Actualmente ese Archivo no existe, es un caso más de la destrucción de archivos, expresión de la falta de conciencia archivística”, afirma. Trabajó en el Archivo de La Paz* (1987-1988), al que retornó en 2012 como Docente Archivista, y se hace cargo, como Responsable, de edición del Boletín del Archivo de La Paz. Publicaciones archivísticas: “Fuentes para la historia de la industria en Bolivia” (Boletín del Archivo de La Paz, 2012, (27): 31-38). Fuente: CV.

FERNÁNDEZ ROJAS, JOHNNY

(Huanuni, Provincia Pantaleón Dalence, Oruro) Estudió Ciencias de la Comunicación Social (Universidad Católica Boliviana), cursos de post grado en Comunicación Social en Salud (Universidad Santo Tomás) y Planificación, elaboración y evaluación de Proyectos (Universidad Privada Franz Tamayo). Participó en cursos internacionales de Periodismo educativo y científico (Quito, Ecuador, 1978), Educación no formal y liderazgo juvenil (Beit Berl, Israel, 1995); Derechos Humanos, democracia y libertad de expresión (Quito, 2001) y otros eventos en Montevideo (Uruguay), Caracas (Venezuela), Río Cuarto (Argentina), México D.F. (México), Río de Janeiro (Brasil) y Lima (Perú). Tuvo destacada

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trayectoria en la Ciudad de El Alto como Corresponsal del periódico Presencia (1986-1987); consultor del Diagnóstico integral de El Alto para la Unión Nacional de Instituciones para el Trabajo de Acción Social (1987-1988), miembro del equipo de investigación sobre el impacto social del Fondo Social de Emergencia (1989-1990), y de Diagnostico integral, para el Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (1990). En el Alto fue miembro (cofundador) de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos (1986-1987), Sindicato (Federación) de Trabajadores de la Prensa (1989-1994), Central Obrera Regional (1988); Coordinación académica de la Universidad Técnica Laboral, actual UPEA (1989-1992), Comité para la Promoción Científica del Consejo Consultivo de FEJUVE (2007). También trabajó para el Banco Mundial (Proyecto Integrado de Servicios de Salud, 1993-1996, 1998-2006); Programa de Saneamiento Básico), Asociación Boliviana para la Capacitación de los Trabajadores (1996), Gobierno y Concejo Municipal de El Alto, Alcaldías de Arica (Chile) y Tacna (Perú), Centro de Estudios y Proyectos-Banco Interamericano de Desarrollo (2009-2010). Asistente de dirección del Semanario El Tunari de Quillacollo (2011). Fundador del Grupo de investigadores sociales de El Alto, que edita la revista Altoparlante (2006), Director del Centro de Documentación y Archivo de la Ciudad de El Alto (2007); elaboró la galería fotográfica e histórica de los presidentes del Concejo Municipal de El Alto (1985-2008). Como gestor cultural, participa en la Sociedad de Escritores de El Alto (2008), Centro de Residentes Quillacolleños en El Alto (2009), la Red de Integración Intermunicipal: Montero-QuillacolloEl Alto (2010), el Centro de Residentes Alteños en Quillacollo (2011), impulsó la Primera Feria del Libro de Quillacollo y la Primera Olimpiada Intercolegial de la Historia de Quillacollo (2011). Autor de En las manos (1993), Historia en imágenes (2002), Compendio histórico: Ciudad de El Alto (2007), Galería fotográfica de presidentes del Concejo Municipal de El Alto 1985-2008 (2009) y Catálogo de autores de libros de quillacolleños y quillacolleñas (2011). Fuente: CV.

FERNÁNDEZ Y G., VICENTE

(La Paz, 6 de junio de 1896. † 1953) Fue Oficial Mayor del Ministerio de Gobierno, abogado, diplomático, periodista, polemista y escritor. Dirigió El Hombre Libre, La República, Tribuna y La Razón. Colaborador y redactor de El Fígaro. Se lo califica como honesto y con vocación de servicio a la comunidad. Sufrió el rigor del destierro y el confinamiento, pues se desenvolvió en épocas de intensa lucha política. De esa experiencia escribió Quiabaya. Impresiones de un confinado. Autor del Anuario Administrativo de 1930 a 1933; de la Compilación minera, de Legislación Social y de Constituciones Americanas. Llegó a ser cónsul general de Bolivia en Italia, con sede en Génova. Fue director del Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores. Fuente: Alarcón A., 1925: 381; Costa de la Torre, 1968: 491-492; Oporto, 2006: 242; Quintana, 1988: 110; Vargas Olmos, 1948: 99.

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FEYLES SDB, GABRIELE

(Villafranca D’Asti, Italia, 1910. † Villa Allende, Argentina, Ca. 1984) Doctor en Filosofía y Teología, en la Pontificia Universidad Gregoriana (Roma). Fue destinado a Fortín Mercedes y Córdoba (Argentina). Fue adscrito al Seminario San Jerónimo de La Paz, 1944, para enseñar Filosofía y Teología, las que impartió también en la naciente Facultad de Filosofía y Letras de la UMSA. Diez de los 14 años de su “breve permanencia” en La Paz, se ocupó de transcribir “una hermosa copia fotográfica de las Actas del Cabildo” de La Paz (1548-1562), que fueron obsequiadas “al celebrar la ciudad de La Paz el cuarto centenario de su fundación en 1548, [por] el Gobierno de Gran Bretaña”, cuyos 209 folios fueron reproducidos “de un modo nítido e impecable en el anverso y reverso, tamaño natural a través de 418 fotografías en una doble serie de positivos y negativos, que se conservan en el Archivo de la Municipalidad de La Paz, en artística arca tallada, que lleva en su tapa la reproducción del templo de Laja donde se redactó el acta de fundación”, según informó el propio Feyles en 1958, al término de su misión, en la que siguió y superó la obra iniciada por N. Acosta* en 1873, continuada por Rigoberto Paredes, L. M. Loza* y el mercedario Víctor Barriga, que sólo se ocuparon de transcribir los primeros 16 folios debido a que fueron escritos en letra cortesana “de fácil lectura”, en tanto que Feyles tuvo que descifra “lo que sigue, escrito a línea tirada en letra procesal, lo que los paleógrafos llaman “letra encadenada” y que exige gran esfuerzo para su interpretación”, tarea en la que demoró una década (1948-1958). Con buen criterio decidió modernizar la ortografía “aun conservando las formas peculiares, si bien incorrectas (…) sin excesivos escrúpulos paleográficos, lo cual es de alabar, porque así la lectura resulta fácil sin detrimento de la exactitud”, siguiendo a Demetrio Mansilla, transcriptor de la documentación pontificia del Vaticano. Advierte, no obstante, “si ciertas expresiones ofrecen dificultades, se da su explicación en notas”, las que resultaron ¡1404!, cuya lectura devela la historia íntima del Cabildo de La Paz. Transcribió, también, “otro librito suelto del Cabildo de Santa Cruz de la Sierra (1634-1640)”, publicado en 1977. La edición de las Actas se concretó en 1965, en una edición a cargo de Alcira Cardona Torrico y reimpresa en la colección Memoria Paceña, por Gabriela Niño de Guzmán, en 2011. Feyles aprovechó el rico caudal al que tuvo acceso por primera vez, para escribir interesantes ensayos sobre la historia de La Paz, entre ellos “¿Dónde murió Alonso de Mendoza?” (La Razón, 23 de octubre de 1949), Títulos y blasones de la ciudad de La Paz (1952) y “La ciudad de La Paz y las alteraciones de 1550” (Kollasuyo, 11 (69), 1952). Fue también traductor de la obra de Luigi Bogliolo, La filosofía antigua (1953) y de Giusseppe Falchi (Siete años en Bolivia, 1882-1889. Memoria de Sor Ana Camila Valentini) (1966). Retornó a Argentina donde dirigió el Boletín de los amigos de Betania del Sagrado Corazón (años 80). Publicaciones archivísticas: Las actas capitulares de La Paz, 1548-1562. Recopiladas, descifradas y anotadas por G.F. (La Paz, H. Municipalidad de La Paz, 1965. 2 Tomos; Segunda edición, 2011); Libro del Cabildo de Santa Cruz de la Sierra (1634-1640) (1977). Fuente: Barnadas, 2002, I: 860; Feyles, 1965: 13-15; http://www.worldcat.org (9.5.2012).

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FIGUEROA ALBA, NINOSKA (La Paz, 26 de mayo de 1978)

Licenciada en Bibliotecología (UMSA); Secretaria Ejecutiva (Lincoln Institute). Realizó el Diplomado en Gestión de la Documentación y Organización de Archivos (Universidad Loyola). Actualmente es Archivista y Bibliotecaria de la Asociación de Familiares de Desaparecidos (ASOFAMD). Anteriormente fue Encargada de Archivo Central de La Vitalicia Seguros y Reaseguros de Vida S.A. (2006-2007); trabajó en el Inventario de Grupos Documentales en Archivos del Gobierno Municipal de La Paz (2005); fue Consultora en Servicios Archivísticos del Banco Central de Bolivia* (20032004); Encargada de Archivo del Curso Preuniversitario de la Facultad de Ciencias Puras y Naturales UMSA (2001-2002); Encargada del Archivo Administrativo de Shopping Norte (1999-2001) y Secretaria Encargada de Archivo y Kardex de Cascarena (1997-1998). Participó en los Congresos Internacionales de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2001, 2003, 2007 y 2009). Asistió a las Jornadas Paceñas de Bibliotecarios y Documentalistas (2001-2002, 2004, 2006), a los seminarios El Desarrollo de la Archivística en Bolivia: Pasado Presente y Futuro (2003), Actualización de Sistemas Automatizados en Unidades de Información (2004), a los seminarios departamentales sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006), Manejo Profesional de Archivos y Gestión Documental (2007), Bibliotecas para Comunidades Indígenas(2007), Seminario Internacional Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Importancia de su Rescate para el Desarrollo Nacional (2008), Primer Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano (INFOC) (2008) y el Curso Básico de Digitalización de Documentos (2009). Fuente: CV.

FLORES AGUIRRE, SÉMIDO

(Chayanta, 6 de diciembre de 1940) Fotógrafo profesional. Alumno de Ricardo Sánchez Quiroga. Fabricó su propia ampliadora de latón. Cuenta con un archivo singular producto de 40 años de trabajo en su laboratorio fotográfico “SEMID”, en la ciudad de Llallagua. Fuente: Entrevista a Juan Barros. (21.12.2009)

FLORES ALFARO, MARIA EUGENIA (Tupiza, Potosí, 14 de marzo de 1982)

Licenciada de Administración de Empresas (UMSA). Técnico Medio en Dactilografía. Ha cursado el Diplomado en Gestión Documental Integrada de Archivos en Empresas Estratégicas del Estado, (2012), organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional. Tiene un curso sobre Normalización y Manejo Documental en la Administración Pública, impartido por el Ministerio de Educación y Culturas. Desde el 2007 es encargada de Archivo y Legalizaciones del Ministerio de Educación. Fuente: CV.

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FLORES BEDREGAL, OLGA BEATRIZ (La Paz, 9 de julio de 1956)

Licenciada en Ciencias de la Educación. Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Por su formación Jesucristiana dirigió proyectos para mejorar la condición de vida de poblaciones vulnerables (Atención integral a la salud de los adolescentes y la adolescente gestante, Sucre; Erradicación del trabajo infantil minero, Potosí; Educación indígena, Brasil). Su hermano Juan Carlos fue asesinado durante el golpe de Estado del 17 de julio de 1980 por la dictadura de L. García Meza*, hecho que motivó su ingreso al activismo en derechos humanos. Fue fundadora de la Asociación de Familiares, Mártires y Desaparecidos. Hizo un postgrado en Derechos Humanos de las Mujeres en la WUS University y la Universidad de Graz (Austria). Implementó proyectos para la sensibilización de jóvenes con una serie de cuatro audiovisuales (Contra el Olvido). Impulsora del Juicio de Responsabilidades contra L. García Meza*, oportunidad en la que organizó las pruebas documentales, mediante un trabajo de investigación y recuperación de documentos incriminatorios, tarea que culminó en la organización del Archivo de ASOFAMD (1993), valioso repositorio que contenía cuatro series: a) Denuncias y testimonios sobre familiares desaparecidos y asesinados, con testimonios de la Masacre de Todos Santos (1979) y de presos; b) Archivos de la Comisión del Desaparecido (creada en 1982 por el gobierno de H. Siles Zuazo*, cerrada durante el gobierno de V. Paz*); c) Documentación sobre represores, operativos y declaraciones, con gran cantidad de documentos de información clasificada del Ministerio de Interior sobre los represores (planillas de pagos, prontuarios). Menciona que uno de los documentos correspondía a la ficha de un ex dirigente de la Federación de Mineros y de la Central Obrera Boliviana, registrado como ‘paramilitar’ o ‘informante’ (‘soplón’) de la dictadura; d) Registro de actividades de ASOFAMD (procesos judiciales contra agentes de la dictadura acumulados durante 6 años que duró el juicio de responsabilidades). Relata que “como una paradoja del destino vio con estupor que en 2004, en un proceso judicial contra 17 represores (‘peces gordos’ de la dictadura) ASOFAMD no presentó pruebas, pues al parecer esa información se había perdido. Ciertamente ha habido una mano negra”, concluye. En torno a los archivos de la dictadura de García Meza afirma que “tanto el acceso a la información y el conocimiento es siempre una batalla en la sociedad de clases que trata de hacer que el conocimiento y la información sea siempre de acceso de los pocos que ostentan el poder y nuestra lucha por la desclasificación (…), en este caso es la única posibilidad de dar con los desaparecidos. Los archivos militares cobran sentido en la medida que se está reconstruyendo otra historia en el “proceso de descolonización” que promueve el gobierno”. En su criterio esos archivos contienen información sobre 18 años de dictaduras y represión, los lazos internacionales de los “gobiernos nacionalistas”, con lo que se podrá conocer quién ordenó el bombardeo de los centros mineros, cómo fueron organizados los golpes y sus móviles. “Ahí están enhebrados los hilos de poder, incluso veremos la infiltración extranjera, los gastos, los criterios de ascensos de militares”. En su lucha personal por desclasificar los “archivos del terror” muestra su importancia: “Por denuncia y porque curiosamente los propios represores nos entregaron documentos, conozco varios fondos de esa naturaleza”. En esa cruzada tuvo el apoyo de Hortensia Gutiérrez vda. de Flores (su esposo fue asesinado en la dictadura de R. Barrientos*,

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1965) y Marta Montiel Oyarzum (su padre fue asesinado en la dictadura de A. Ovando* en 1970). Recibió un fuerte espaldarazo del Juez R. Valverde* que emitió dos resoluciones ordenando la apertura de los archivos militares reservados, y del Fiscal M. Mendoza*, responsable de hacer cumplir la orden judicial. El 2010 la Corte Suprema de Justicia ratificó la orden. Fuente: Correo enviado por O. Flores, el 12.05.10

FLORES JEMIO, EDSON DANIEL (La Paz, 3 de enero de 1978)

Licenciado en Historia (UMSA). Realizó cursos en la Universidad Nacional de Asunción (Paraguay), Universidad de Costa Rica (Costa Rica), Universidad Central de Venezuela (Venezuela). Actualmente cursa la maestría en la Universidad “Pablo de Olavide” en Sevilla (España). Trabajó en el Archivo de La Paz* (1999). Fue consultor archivista en la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso*, Ministerio de Servicios y Obras Públicas, Superintendencia de Pensiones Valores y Seguros, Superintendencia de Electricidad, Superintendencia General del Sistema de Regulación de Recursos Naturales Renovables. Participó en el proyecto “Reconstrucción de los archivos y lugares historiobiográficos del Cementerio General de La Paz” (Gobierno Municipal) y en los censos archivísticos de Cochabamba, Oruro y La Paz (2003-2004) y en los centros mineros (2006), para la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional. Colaboró en la elaboración de la Guía de Archivos Mineros, por encargo de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso. Fue designado Responsable del Archivo de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Electricidad. Publicaciones archivísticas: “La automatización de los mapas y planos de la Prefectura de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 2001, (19): 26-32). Fuente: CV.

FLORES JIMÉNEZ, IGNACIO

(Latacunga, Ecuador, 30 de julio de 1733. † Buenos Aires, Argentina, 1786) Estudió para Maestro de Filosofía (1748), enseñó matemáticas e idiomas en Madrid, pero dejó los libros para abrazar la carrera de armas, graduándose como Coronel. Su primer destino militar fue la Gobernación de Mojos, pero nunca pudo ejercer ese cargo, debido a las sublevaciones indigenales de Chayanta de 1780. Fue designado Comandante militar de todos los distritos de la Audiencia de Charcas en febrero de 1781. Acudió con 3.000 hombres en auxilio de S. de Segurola, en defensa de la sitiada ciudad de La Paz, sometida a cerco durante 109 días por el ejército indio de T. Katari*. Llegó a la Ceja de El Alto el 1 de agosto de 1781 salvando a la ciudad momentáneamente. Intentó desalojar a los indios de Quilliquilli, y combatió contra los de Achocalla, infructuosamente y tuvo que retirarse a 20 kilómetros de distancia, soportando la deserción de sus tropas, replegándose en busca de mayor auxilio. En esa circunstancia el virrey Juan José Vertiz envió a José de Reseguín en auxilio de La Paz a la que llegó el 17 de octubre de 1781. Liberándola, apresó a T. Katari*, lo entregó al Oidor Tadeo Diez de Medina quien lo sentenció a la pena del descuartizamiento, que

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se ejecutó en Peñas el 5 de noviembre de ese año. El 4 de mayo Flores fue designado Presidente de la Audiencia y ordenó a Reseguín -que regresaba victorioso de La Paz- dirigirse a Oruro para aplastar la sublevación que allí continuaba. “Cuando vuelve la paz -dice Demelás- piensa en las reformas indispensables. En primer lugar acabar los abusos, la supresión de los repartimientos” y reemplazarlo “por un sistema de tributación menos arbitrario”. Enfrenta una conspiración en el seno mismo de la Audiencia. Se queja ante el Ministro J. de Gálvez* “de la enemistad y de la “insolencia” de los auditores y del fiscal”. Pesa más el criterio del Virrey Loreto que en octubre de 1784, “en informe reservado”, pide el relevo de Flores. En mayo Gálvez ordena “retirar su mando y juzgarlo en Buenos Aires”. Los acontecimientos se precipitan a raíz de “una rebelión de la plebe de La Plata”, el 22 y 23 de julio, provocada por el asesinato de varios de ellos a manos de soldados españoles del regimiento de Veteranos. No obstante haber pacificado la ciudad fue acusado por los hispanos de haber apadrinado estos actos. El 10 de enero de 1876 recibe la orden de marchar a Buenos Aires. “Vende parte de su vajilla de plata paa pagar deudas” y “quema unos papeles”. Preso, Flores resguardó su valioso archivo y lo puso en “un baúl encaminado a Quito, destinado a su heredero, el marqués de Miraflores, su hermano”. El 3 de agosto, dicta su testamento, libera a dos negros y el 5 de agosto “murió de pesadumbre en una prisión de Buenos Aires”. De inmediato el Auditor de Guerra busca los papeles de Flores, interroga al mayordomo que afirma en su defensa: “quemó todo el coronel antes de llegar a Buenos Aires”. Durante el tiempo de su campaña y su Presidencia, acumuló valiosa documentación relacionada con el movimiento indígena, conformada por reales cédulas, órdenes del supremo gobierno, expedientes, oficios, informes y cartas que han pasado a la Comandancia General, la Presidencia y Gobierno intendencia de la Provincia de La Plata sobre asuntos de la sublevación, además documentos reservados “correspondencia sobre la política de España y con agentes secretos de Cochabamba”. A la postre el archivo fue adquirido por el coleccionista ecuatoriano Jacinto Jijón y Caamaño y hoy reposa en el Archivo Histórico del Banco Central del Ecuador, de cuya existencia M.V. Ballivián* informó, publicando el inventario con una nota introductoria, en el Boletín de la Sociedad Geográfica de La Paz. En 1982, Marie Danielle Demelás, realizó gestiones ante el Banco Central del Ecuador para la microfilmación de los cinco volúmenes que, en 1786, salvó Flores, a quien considera “hombre complejo, audaz e iluso, ilustrado y con todo muy cristiano, ni agente de la metrópoli ni rebelde contra España”. Con apoyo del Instituto Francés de Estudios Andinos, Demelás logró volcar su contenido en tres rollos de microfilme en 35 mm., y los entregó “en depósito al Museo Etnográfico de La Paz” (MUSEF), para hacerlo accesible a los investigadores de Bolivia. Fuente: Aranzáes, 1915: 299-301; 636-638; Arze, 1991: 78; Costa Arduz, 2005: 268; Demelás, 1984.

FLORES LÓPEZ, DOMINGO

(Potosí, 4 de agosto de 1893. † La Paz, 1970) Médico (UMSA) e historiador. Fue Jefe Médico de las empresas mineras de Simón I. Patiño* en Huanuni (1921-1930) y Andacaba (1938). Director de Higiene y Profilaxis en Potosí (1932); 1936-1940), Jefe de Sanidad Departamental de Cochabamba (1934) y Potosí (1940-1946). Durante la guerra del Chaco fue Director de hospitales militares

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en Cochabamba y Choreti (1932-1933), y Comisionado para el estudio sanitario del Beni (1935). Fue Presidente de la Junta Municipal de Huanuni (1939). Presidente de la Sociedad Geográfica y de Historia de Potosí (1940-1957), oportunidad en la que puso en marcha la Editorial “Potosí”; Fundador de la Sociedad de la Historia de la Medicina Boliviana, creó su biblioteca; fundó y dirigió la revista Páginas médicas (1937). Fue Director del Museo de la Casa de Moneda de Potosí y Jefe del Archivo Histórico (1947-1954), impulsando la restauración del monumental edificio. Publicaciones archivísticas: Restauración y conservación de reliquias históricas (Potosí, s.f.); “Archivo de documentos de la Casa Real de Moneda” (Boletín de la Sociedad Geográfica y de Historia “Potosí”, 1951, 11: 157-169). Fuente: Arze, 1987: 86; Barnadas, 2002, I: 870-871; Blanco, 2010, III: 70-71; Costa de la Torre, 1968: 500.

FLORES MAMANI, JOSÉ EDUARDO (Cochabamba, 1 de febrero de 1969)

Estudió las Carreras de Ciencias de la Comunicación Social (1997) y Derecho (2004) UMSA. Hizo el Diplomado en Administración de Archivos en la Universidad Nuestra Señora de La Paz (2008), otro en Ciencias Penales (2009). De cuna humilde, pues su padre trabaja en la construcción y su madre en la agricultura, supo salir adelante combinando el estudio con el trabajo, tales como encuestador en el Servicio Nacional de Reforma Agraria (1993) y el Instituto Nacional de Estadísticas (2006). El 2000 instaló un taller de llaves y desde allí supo servir como Asistente Legal y Social de la Asociación de Comerciantes Minoristas del Mercado “Figueroa”, ingresando con ello al campo de los movimientos sociales. Asistió a numerosos congresos y seminarios, siendo los más importantes el Primer Congreso Internacional de Información para el Cambio Ciudadano (2008), Mesa Redonda sobre el Día Aciago de la Destrucción de la Memoria Cruceña y el Seminario Internacional sobre la Destrucción de la Riqueza Documental y la Necesidad de su Rescate para el Desarrollo Nacional (2008); Primer Congreso Nacional de Redes de Información, Investigación y Comunicación (2009), donde participó en el Taller de edición de Revistas Científicas; Primer Congreso Latinoamericano de Archivos, Bibliotecas y Museos y en el Coloquio Internacional sobre acceso a la Información Pública, realizado al interior del IV Congreso Internacional de Archivística, Bibliotecología y Documentación (2009), apoyó a las Brigadas Internacionalistas Solidarias para el Fomento y Desarrollo de los Archivos y Bibliotecas de Bolivia (2009), lo que le valió diplomas de reconocimiento extendidos por la oficina del Secretario General de la Vicepresidencia del Estado; presentó ponencia al III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2011). Demostró indudable vocación de servicio y consciente de sus limitaciones en el campo de las ciencias de la información, fue formándose de forma paulatina en diversos cursos, como el Diplomado en Administración de Archivos y el de Preservación y Manejo de Colecciones Fotográficas, impartido por el prestigioso Centro Nacional de Patrimonio Fotográfico de Antofagasta, Chile (2010), ganó una beca para estudiar en la Escuela Iberoamericana de Archivos*, en Alcalá de Henares, Madrid, España (2010), hizo el primer Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos de Empresas Estratégicas del Estado, organizado por la

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Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). El 2007, contratado por la Vicepresidencia del Estado, fue enviado a la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional*. Allí se le encomendó el cuidado de la Hemeroteca Nacional y luego la organización del Archivo Fotográfico. Es miembro del comité editor de Fuentes, revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, en la que escribe su ya conocida sección “Cronología”, desde abril del 2009. Fuente: CV; Archivo de la BAHALP. Publicaciones archivísticas: “Curso sobre conservación del patrimonio fotográfico en Antofagasta” (Fuentes, 2010, 4 (9): 61-62; “XX Escuela Iberoamericana de Archivos” (Fuentes, 2010, 4 (11): 59-63); “Pedro López Gómez: entre la historia y la archivística” (Entrevista) (Fuentes, 2011, 5 (12): 45-47); “Vicenta Cortés Alonso y los archivos de América y España” (Entrevista) (Fuentes, 2011, 5 (13): 55-57); “Reportajes y noticias de prensa sobre el Centenario de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional (Fuentes, 2011, 5 (16): 20-22).

FLORES MURILLO, SILVIA (La Paz 12 de julio de 1969)

Licenciada en Turismo (UMSFX). Trabajó en el Proyecto FAO Holanda y en el Proyecto “500 años de San Pedro Mártir” para el Archivo de SAGIC S.A.* Participó en el Curso de Capacitación y Actualización Archivística; Paleografía Hispanoamericana; IV Congreso Nacional de Bibliotecología, Documentación, Archivística y Museología; Curso sobre Organización de Sistemas de Archivo. Trabaja en el Archivo Histórico de la Casa Nacional de Moneda*. Publicaciones archivísticas: “El microlfim en los archivos históricos” (Patrimonio documental, Casa Nacional de Moneda, Potosí, 1999: 37-42); “El Archivo del Ramo de Temporalidades” (Casa de Moneda, 2003, 3: 27-28). Fuente: CV.

FLORES QUISPE, HUGO

(Colquiri, Provincia Inquisivi, La Paz, 20 de enero de 1960) Licenciado en Historia (UMSA). Archivista. En el área de Archivo desempeñó actividades en el Servicio Nacional de Patrimonio del Estado, organizando los fondos documentales del ex Banco del Estado, ex Servicio Nacional de Cómputo, ex Corporación Boliviana de Fomento, ex Unidad de Análisis de Políticas Sociales (1996-1998); tuvo a su cargo el Sistema de Información y Documentación Sindical* (2000-2001), que concentra los archivos de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), ocasión en la que el PIEB publicó un Índice Electrónico de una parte de lo que fueron los diferentes congresos realizados por la FSTMB; fue el primer material digitalizado, en formato fotográfico, pues no existía aun el sistema de PDF. Fue Jefe del Departamento de Archivo y Kardex del Instituto Normal Superior “Simón Bolívar” (2001-2005). Trabajó en el área de Archivo de la Administradora Boliviana de Carreteras (2007-2009); implementó el Sistema de Correspondencia y Archivo del Ministerio de Transparencia Institucional y Lucha contra la Corrupción (2009 y 2010). Prestó servicios en el Archivo Central del Ministerio de Hidrocarburos

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y Energía (2010-2011). Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996). Como historiador publicó Identidades, Texto Taller para la Enseñanza de las Ciencias Sociales I y II (1998), en coautoría con la historiadora Ángeles Cárdenas. Colquiri, una mina de Estaño (La Paz, INSSB, 2003), finalmente Las Provincias Paceñas, historia, potencial turístico, con R. Fernández* (La Paz, 2007). Fue editor del periódico Realidades de Nuestra Historia, que al momento se encuentra en una pausa. Publicaciones archivísticas: “Sistema de Documentación e Información Sindical (SIDIS)” (Boletín del Archivo de La Paz, 2001, (19): 44-53); Catálogo del SIDIS (La Paz, FSTMB, 2006). Fuente: CV.

FLORES ROCHA, JUAN JOSÉ

(Cochabamba 2 de noviembre 1976) Licenciado en Ciencias de la Comunicación. Hizo el Diplomado Gobierno Abierto y Participativo Institucional. Realizó varios cursos en el Centro Nacional de Capacitación. Su trayectoria se desarrolló en el área de comunicación social tanto en instituciones del Poder Ejecutivo (Ministerio de la Presidencia, Ministerio de Autonomías, 2009-2010), Asamblea Constituyente; entidades departamentales (Delegación Presidencial Anticorrupción, 2005; Representación Departamental del Defensor del Pueblo Cochabamba; Defensoría de la Niñez y Adolescencia de Tiquipaya (2005-2006), locales (Alcaldía Municipal de Vinto, 2000; Elenco Teatral Quillacollo; 2001), y ONGs (Centro Vicente Cañas, Centro de Educación y Producción Radiofónica, 2001-2005; Institución Privada de Desarrollo Social, 2006) y privadas (Grupo Fides, Red Pío XII-Erbol, Radio Latina F.M. 107.5L, 1997-2001-2003). Con la instalación de la primera Asamblea Legislativa Plurinacional (enero del 2010) fue designado como el primer Director de Redacción, Archivo y Publicaciones en la Cámara de Diputados. Fuente: CV.

FLORES SALINAS, LUCIO

(La Paz, 8 de enero de 1928. † La Paz, 10 de noviembre de 2006) Viene de una familia de fotógrafos. Su padre Manuel y su hermano Abdón fueron fotógrafos. Estudió en el Colegio Nacional Ayacucho y en la Universidad Católica Boliviana. Como fotógrafo, viajó a la Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay, Alemania y Hungría. Empezó como fotógrafo de playa en Buenos Aires donde incursionó como reportero gráfico. A su retorno a Bolivia, tuvo la oportunidad de trabajar desde su fundación en La Nación, y los periódicos Hoy, Meridiano, La Razón, Jornada, La Voz del Pueblo. Trabajó en El Diario, Última Hora, Presencia, Los Tiempos y en las revistas Litoral, Panorama, Criterio y Enfoques. Fue condecorado por su labor con la presea “Mérito Sindical de la Prensa” y medalla de “Honor al Mérito” por el sindicato de Trabajadores de la Prensa de La Paz (1969), el Premio Nacional a la Mejor Fotografía Periodística, por la Asociación de Periodistas de La Paz y la Medalla de Honor al mérito, “como reconocimiento a los servicios que prestó a la Asociación de Periodistas

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de La Paz (1995). Fundador de la Asociación de Reporteros Gráficos de Bolivia y del Círculo de Fotógrafos Profesionales, del que fue su Presidente. Formó el Archivo fotográfico más completo sobre acontecimientos trascendentales del país desde 1946, con registros de la revolución de 1952, de las transmisiones de mando desde 1956, de visitantes internacionales ilustres, golpes de Estado y de campeonatos de fútbol. Atesoró un millón de negativos y 350 mil fotografías. “Sólo del Sudamericano de Fútbol de 1963, cuando salimos campeones invictos, tengo 5.000 fotos”, manifestó en 2004. Es autor de la conocida fotografía que registra el bombardeo del cerro Laikakota, en agosto de 1971, durante el golpe de Estado de H. Bánzer*. “Esa fue la foto más difícil que tomó en su carrera profesional”. Sus fotografías ilustran obras de historia del deporte (C. Mesa*) y la biografía de Juan Lechín (Lupe Cajías). Su valioso archivo pasó a poder de su hija Tany Flores, quien lo clasificó y catalogó, “con la intención de donarlo a la Carrera de Historia de la UMSA*”. Pudo establecer que “las fotografías sobre temas políticos están incompletas, pero el archivo de fotografías deportivas está pleno e intacto”. Al final, el Archivo fue adquirido por el periódico La Razón. Fuente: Dorado, 1993: 14; Foto Bolivia, 1996: 27; La Época, 2004: 7; Oblitas, 1999: 2-3; Sanabria, 2012: 22-23.

FORENZA ARTUNDUAGA, ANA

(Macharetí, Provincia Luis Calvo, Chuquisaca, 1929) Funcionaria del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (1974-1997), durante el cual catalogó la serie Publicaciones Oficiales del Estado. En su trabajo en el Archivo se abocó a la selección y ordenación de las Series Sublevación General de Indios, y Poder Legislativo, elaborando guías muy completas. Trabajó también en el Índice temático, toponímico y onomástico de la Serie Expedientes Coloniales. Trabajó en la conformación y complementación de la Serie Juzgado Mayor de Censos de la Audiencia de Charcas. Apoyó a G. Mendoza* en la revisión de manuscritos y elaboración del índice temático del Diario de José Santos Vargas, para su publicación (1982). A su retiro del ABNB, fue investigadora del IRD/SENAMHI de Cochabamba para la Historia del clima en Bolivia (contraparte boliviana en el Proyecto Archival Climate History Survey) del Programa Hidrológico Internacional de la UNESCO, Montevideo, Uruguay (1998-2001); apoyó al estudio sobre Salubridad en Potosí, para el Proyecto Hospital Bracamonte financiado por la Cooperación Italiana (2001-2005); y un estudio sobre Historia eclesiástica (siglos XVI-XVIII). Publicó sus artículos en el Anuario del ABNB y la Revista Timboy. Fuente: CV.

FOX, LISTON M. (Estados Unidos)

Consejero en Manejo de Oficinas de la Misión de la Universidad de Tennessee (Memphis, Tennessee) en Bolivia. Su tesis de posgrado versó sobre The instructor rating program in a selected state-supported college in Tennessee (Thesis, George Peabody College for Teachers, 1962). Integró la Misión de la Universidad de Tennessee que

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apoyó a la Escuela de Administración Pública, dirigida por Alfredo Revilla Quezada, dependiente de la Universidad Mayor de San Andrés, en 1957, cuando inició sus funciones lectivas, oportunidad en la que impartió el Curso de Archivos, que “tuvo un éxito considerable”, por lo que la Escuela “resumió las enseñanzas del Profesor Fox” y las publicó con el título de Manual de Archivos. En 1960, con el apoyo del Jefe de la Misión de la Universidad de Tennessee, Nelson M. Robinson (coautor con John Riffe Petty, de Public Utility Services in Tennessee: A Study for Subcommittee I, Tennessee Legislative Council Committee,  Knoxville, University of Tennessee, Bureau of Public Administration, 1966), publicó una “edición revisada, preparada por el Prof. Walter L. Shell”, en el que “se han retenido la forma y el plan original del profesor Fox; solamente se han hecho cambios menores para que alguna información esté a la fecha”. El Manual “es un estudio típico de las características que se requieren en una adecuada administración de archivos”, en el que se explican las “reglas básicas para la clasificación por alfabeto, y se sugieren operaciones para el almacenamiento de los archivos inactivos”. El Manual estuvo destinado a “las personas que tienen a su cargo la custodia y el arreglo de documentos”. La traducción del inglés, estuvo a cargo del Dr. José E. Guzmán, funcionario del Centro de Entrenamiento e Investigación de la División de Administración Pública del Punto IV, de EE.UU. Publicaciones archivísticas: Manual de Archivos, con Walter l. Shell (La Paz, Escuela de Administración Pública. Universidad de Tennessee, 1960). Fuente: Fox, 1960; http://books.google.com. (29.4.2012).

(29.4.2012); http://www.worldcat 2002

FRÍAS AMETLLER, TOMÁS

(Mondragón, Tarapaya, Potosí, 21 de diciembre de 1804. † Florencia, Italia, 10 de mayo de 1884) Abogado, Codificador, Financista. Secretario Privado del Mariscal A.J. de Sucre*. Fue Diputado, Ministro de Hacienda y presidente del Consejo de Estado, diplomático y presidente del Congreso Nacional. Doctor Honoris causa de la Universidad de Potosí. Presidente de Bolivia (1874-1876); impulsó el tratado de 6 de agosto de 1874, que anuló la mancomunidad de explotación del salitre y fijó la frontera en el paralelo 24. Durante su gobierno se inauguró el servicio de navegación en el lago Titicaca. Retirado de la vida pública, sirvió al país en calidad de Encargado de Negocios en Francia, en la época de la guerra del Pacífico. Acopió un formidable archivo, que fue heredado por su hijo Carlos, quien lo obsequió, generoso, a A. Arguedas*, en 1922. Éste lo trasladó a su casa parisiense de Couilly, donde llegó a decir: “Allí me refugiaré para vivir con pobreza, remover la tierra de mi huerto y seguir consultando los viejos papeles de mi archivo para hacer ver a mis compatriotas por qué suceden las cosas que hoy tanto nos alarman y consternan…”, sin saber que volvería al país. Arguedas realizó una pormenorizada descripción, una Guía del Archivo, a tiempo de valorar su importancia: “conformado por folletos amarillentos por la edad; periódicos tomados ya de moho y a punto de deshacerse en polvo; pergaminos de viejos caracteres floridos y enrevesados; cuadernos con la correspondencia privada y oficial, y sobre todo, cartas, muchas viejas cartas… es decir, todo un archivo íntimo donde duerme el recóndito pensamiento de nuestros prohombres de ayer y se esconde el secreto de sus luchas fracasadas, de sus mejores anhelos ¡ay! Los más incumplidos… Pasan

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de mil las cartas, y las hay de don Facundo Infante, ministro del Gran Mariscal de Ayacucho, y de don Felipe Rey de Castro, el memorialista peruano, también amigo de Sucre, cartas de don José Ballivián que descubren a un verdadero, gran hombre, lleno de amor por la patria y de sensibilidad familiar. Cartas atormentadas de Linares*, el bravo. Cartas hondamente sinceras de Belzu. Cartas flojas de Córdova. Cartas dolientes de don Adolfo Ballivián, el hidalgo generoso y desprendido. Cartas respetuosas y conceptuosas de Don Mariano Baptista. Cartas quejumbrosas y amargas del inimitable don G.R. Moreno*. Cartas del biógrafo Santivañez. Cartas de los presidentes Morales, Daza, Campero*, Pando* y Villazón*. Cartas de los políticos Lucas Mendoza de La Tapia, C. Corral*, Zoilo Flores, Camacho, Avelino Aramayo, padre e hijo. Cartas de los poetas Galindo y Bustamante, del historiador inédito Velasco Flor*; de los lingüistas Ballivián y Roxas* y Escobari; de los exploradores Pentland y Wiener… Casi todas llevan en el reverso, o en papel aparte, la respuesta de don Tomás, trazada con letra menuda y de firmes rasgos”. Agradeció siempre el gesto de Carlos Frías, como se observa en esta carta escrita a Juan Francisco Bedregal, el 4 de marzo de 1927: “… no veo la hora de entrar a historiar el período Frías para hacer revivir al más ilustre de nuestros próceres con ayuda de los documentos que generosamente me ha cedido el venerable don Carlos”. Fuente: Arguedas, 1963: 262-263; 341-344; http://www.redpizarra.org (16/2/12)

FRÍAS CABRERA, SANTOS

(Santa Cruz de la Sierra, 1 de noviembre de 1978) Estudió, bajo la modalidad a distancia, la Carrera de Técnico Superior en Bibliotecología y Ciencias de la Información de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UMSA). Participó en el Curso Conservación preventiva y restauración de Documentos de Archivo y Biblioteca, realizado en la ciudad de Sucre en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (2005), Curso Taller Preservando la Memoria Universitaria, en la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (2006), Curso Taller El Archivo de Gestión su Normativa y su organización, Museo de Historia- PIEB, RED-CDBC (2007), Curso Taller Organización y Manejo de Archivo de Gestión, PIEB, RED-CDBC (2008), Curso Taller Restauración de Documentos de Archivos Históricos, Buenos Aires (Argentina) y Montevideo (Uruguay), financiado por el Instituto Italo-Latino Americano (2010). Es Encargado de la Biblioteca Histórica, Hemeroteca y Archivo Histórico Prefectural de Santa Cruz. Trabaja en el Fondo Archivo Prefectural, desde 2008, en procesos de catalogación, y conservación preventiva. Fuente: CV.

FRONTAURA ARGANDOÑA, MANUEL (15 de febrero de 1906. † 1985)

No se tiene certeza del lugar de su lugar de nacimiento. Arze (1989) señala Sucre; Costa de la Torre (1968), Potosí. Abogado, periodista, docente universitario y diplomático. Fue Senador y Ministro de Estado. Embajador ante la Organización de Estados Americanos*, Naciones Unidas y la Santa Sede. En 1973 ingresó a la

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Academia Boliviana de la Historia. Acucioso y crítico investigador, cultivó la biografía: El Precursor (Alonso de Ibáñez), El dictador Linares, y Descubridores y exploradores de Bolivia. Realizó trabajos de investigación en la Biblioteca y Archivos del Vaticano sobre los derechos de Bolivia al Pacífico, y sobre el gobierno del Mariscal A. de Santa Cruz*, entre ellos una fotostática del Concordato firmado por Santa Cruz con la Santa Sede. Para estos fines, trabajó en el Archivo, la Biblioteca y la Mapoteca, donde pudo “constatar que la cartografía americana (s. XVI-XIX) es unánime al señalar una amplia costa en el Pacífico de Bolivia”, así como los libros de los siglos XVII al XIX. Su obra mayor es El Litoral boliviano (1968), “acopio de documentación histórica, geográfica, cartográfica y de derecho internacional, destinada a probar la legitimidad de los derechos bolivianos sobre la costa pacífica”. Fuente: Arze, 1989: 105-106; Frontaura, 1971; Siles Guevara, 1974; Costa de la Torre, 1968: 510-511.

FUENTES CABALLERO, ANALY (Sucre, 7 de agosto de 1969)

Estudió secundaria en Estados Unidos. Licenciada en Turismo en la UMSFX (1997). Hizo el Diplomado en Educación Superior en Univalle-Unesco (2005). Estudió en la Escuela Taller Sucre-Escuela Taller de La Habana; cursó la Maestría en Gestión Cultural en la Universidad Andina Simón Bolívar (2007). Tiene amplia formación en gestión cultural, que combina con la pintura, la docencia y la función de bibliotecas y archivos. Fue Responsable de la Secretaría de Cultura UNESCO en Sucre (19971999), Bibliotecaria de la Facultad de Humanidades (1999-2003), Guía e investigadora del Museo Charcas (2003). Fue Directora del Centro Bibliográfico, Documental e Histórico de la UMSFX*, en cuya gestión publicó 23 números de Documentos (2003-2005); Coordinadora Académica del Centro de Altos Estudios Nacionales “Federico Ahlfeld” de la Universidad Autónoma del Beni. Asistió al II Encuentro internacional sobre barroco y fuentes de la diversidad cultural (2003), el II Congreso Iberoamericano de Ciencias Genealógicas y Heráldicas, la XII Reunión Americana de Genealogía y el Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano (2008). Asistió a los cursos de Paleografía, Siglo XVI al XVIII; Gestión y Planificación de Bibliotecas; Archivística; Organización de museos. Impartió docencia en la Universidad Autónoma del Beni, en la Escuela Taller Sucre, y la Escuela de Bellas Artes. Publicaciones archivísticas: Documentos (Nº 1, mayo 2003 al Nº 23, noviembre de 2005). Fuente: CV.

FUENTES SALOMÉ, CARMEN ROSA (La Paz, 31 de agosto de 1970)

Estudió en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA), en el Sistema de Autoeducación de Adultos a Distancia de Radio San Gabriel. Educación Integral Básica Acelerada. Participó en los Talleres Regionales ARCAL de Capacitación sobre Técnicas de Modernización de Sistemas de Unidades de Información en

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Asunción, Paraguay (1999) y la Habana, Cuba (2000); en el Curso monográfico de Preservación y Conservación de materiales Bibliográficos y Documentales; Políticas y Planes de preservación auspiciado por la Agencia de Cooperación Española en Santa Cruz-Bolivia; en el II Taller de Gestión y Administración de Fuentes de Información de la Biblioteca Virtual de Salud y Medioambiente, auspiciado por la Organización Panamericana de Salud en La Paz, Bolivia (2003) y cursó el Taller de Bibliotecas para Comunidades Indígenas, conceptos, planeamiento y gestión, auspiciado por la Fundación Patiño en La Paz-Bolivia (2007). Participó en varias reuniones nacionales e internacionales, entre las que destacan la Reunión de Coordinadores del Proyecto Arcal, Red Regional de Información en el Área Nuclear (Buenos Aires, Argentina, 1999 y Río de Janeiro, Brasil, 2000), en el Conmemorative Meeting of The International System of Nuclear Information 30 years of International Cooperation (Karlsruhe, Alemania, 2000). Organizó la Biblioteca de la Cárcel de San Pedro (1993), la Biblioteca Alfonso García Robles de la Embajada de México (1995). Fue Consultora de Archivo del Proyecto de Automatización del Departamento de Calificación de Años de Servicio CAS (1995-1997), organizó la Biblioteca del Colegio de Abogados de La Paz (1997), fue consultora de la Superintendencia de Transportes (SIRESE) para la organización del Archivo Central y Biblioteca (2001-2005). Fue parte del equipo de Archivistas contratados por Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional*, hoy Asamblea Legislativa Plurinacional, para realizar el Censo Guía de Archivos Mineros (2005). Publicaciones archivísticas: “Situación de los archivos mineros de Bolivia”, con Gregorio Pérez A. y María Guarachi C. (Fuentes del Congreso, 2005, 1 (21): 234-235). Fuente: CV.

FUERTES LÓPEZ, JOSÉ ANTONIO (Potosí, 10 de agosto de 1963)

Estudió Derecho en la Universidad Autónoma “Tomás Frías” de Potosí. Ingresó al Archivo Histórico de Potosí* como Auxiliar de Archivo y Biblioteca (1982), asumió la Jefatura por concurso de méritos (1997). Participó en el curso de Organización y Administración de Archivos Históricos (1985) y de Archivos Municipales (1990) en Madrid, España. Asistió al Seminario sobre Organización de Sistemas de Archivo (Santa Cruz), Archivística y preservación del Patrimonio Histórico Documental (Cochabamba); los cursos de Diplomática del Documento Indiano (La Paz, 1999), Restauración y conservación de papel (Sucre, 2001); Paleografía Hispanoamericana s. XV-XVIII (Sucre, 2001). Presidente y socio de número de la Sociedad Geográfica y de Historia “Potosí”, y editor del Boletín de esta corporación. Miembro de la Asociación de Amigos de la Casa de Moneda de Segovia, España. Participó en el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995) y en el VI Festival Internacional de Cultura, Potosí, (2000). Estudioso de la historia minera potosina, sus resultados los ha volcado en sus libros La Casa Real de Moneda. Historia de su Construcción (1993), Molinos de Sangre. Casa Real de Moneda Circular (1997) y Documentos en torno al francés Eugenio Mulon, Talla Mayor de la Casa de la Moneda. 1842-1852 (2000) y Creación de la Villa Imperial de Potosí. La capitulación de 1561 (2012).

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Publicaciones archivísticas: “Tipos documentales de las escrituras notariales” (Boletín del Archivo Histórico de Potosí, 1991, 7: 19-20); “Informatización de fondos documentales” (Patrimonio Documental. Casa Nacional de Moneda, Potosí, 1999: 43-46); “Cedulario potosino ‘….ande ser obedecidas e no cumplidas’…” (Casa de Moneda, 2003: 3: 25-26). Fuente: CV.

FUNDACIÓN CULTURAL DEL BANCO CENTRAL DE BOLIVIA (FCBCB) Institución de derecho público, creada por la Ley 1670 del Banco Central de Bolivia* (31 de octubre de 1995). Administra un fondo fiduciario para el sostenimiento de cinco repositorios del Estado: Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, Casa de la Libertad* (Sucre), Casa Nacional de Moneda* (Potosí), Museo Nacional de Etnografía y Folklore* y Museo Nacional de Arte (La Paz). En 2009 creó un Centro Cultural en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra. La FCBCB fue creada como respuesta a las recomendaciones del Banco Mundial que instaba al Banco Central de Bolivia “devolver los repositorios nacionales al Ministerio de Educación”. Su impulsor fue C. Calvo*, luego su Presidente. J. L. Roca* presentó los borradores de sus estatutos al Comité ad hoc de Directores de Repositorios del BCB (Hugo D. Ruiz, G. Mendoza*, J. Gantier* y Luis Aitken Soux). La Fundación toma decisiones administrativas en nombre de los Repositorios y define políticas culturales. En el pasado fue un bastión de la intelectualidad orgánica conservadora, dirigida por Javier Illanes y Alberto “Kid” Bailey; aspecto que no ha variado esencialmente durante la vigencia del Estado Plurinacional. Creó diversos órganos de difusión, como el Boletín Informativo de los Repositorios Culturales, editado por el Departamento de Relaciones Públicas y Protocolo (Año 1, Nº 1, enero de 1995 al Año 3, Nº 30, junio de 1997). Luego continuó con Nexos, el Correo de la Fundación (Nº 1, julio 1999 al Nº 134, diciembre 2011). Desde febrero de 2012 edita Cultura al Día. El Correo de la Fundación. Edita, igualmente, la Revista cultural de la FCBCB (Año 1, Nº 1, octubre-diciembre de 1997), que alcanzó, en agosto, a su edición Nº 77.

FUNDACIÓN FLAVIO MACHICADO VISCARRA (FFMV) Institución sin fines de lucro, creada en 1995, a iniciativa de los amigos de “Las Flaviadas”, tradición que se mantiene viva, y los descendientes de Dn. Flavio Machicado Viscarra*, dedicada a promover la educación humanista, en beneficio, en especial de artistas, músicos e investigadores. La FFMV impulsa el fortalecimiento de un Centro de Información (CI-FFMV), de uso público, que funciona en la Av. Ecuador 2448 de la ciudad de La Paz, conformado por recursos documentales, bibliográficos, hemerográficos y fonográficos, para promover la investigación, la creatividad y el desarrollo del sistema bibliotecario y de archivos históricos de la ciudad de La Paz. Este Centro cuenta con una Biblioteca (alrededor de 12.000 volúmenes sobre literatura, historia, antropología, sociología, arte y música, política, economía, filosofía, entre los que existen ejemplares considerados antiguos, raros y curiosos, y que una parte está accesible en un catálogo digital a través de la internet desde el portal biblioteca. flaviadas.org.), Hemeroteca (colección de la prensa boliviana desde 1898 al presente; revistas bolivianas y extranjeras), Archivo Histórico (cuenta con información sobre

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la Guerra del Pacífico de 1879; la Guerra Federal de 1899; la explotación de la goma, 1890-1920; Minería, 1898-1925; Petróleo, 1915-1930; Hacienda Comanche, 1906-1986); Fototeca (serie de imágenes de los siglos XIX y XX, copias en papel, álbumes, tarjetas postales y negativos), y Fonoteca (colección de 7.000 títulos de discos de música clásica, jazz y popular en formatos de 78, 45 y 33 RPM, además de CDs). Parte de este legado se pudo apreciar en la exposición “La Paz: Momentos de historia y cultura”, que se llevó a cabo en el Espacio Simón I. Patiño, en mayo de 2009. El CI-FFMV está bastante avanzado en la organización y catalogación que cuenta con el apoyo de fondos concursables de organismos como la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y el Programa de Ayuda para Bibliotecas y Archivos de Latinoamérica, de EE.UU (PLALA). A lo largo de los últimos diez años, la FFMV ha gestionado investigaciones y ha brindado servicio de apoyo bibliográfico a diversos investigadores e instituciones. Recibió voluntarios de las 1a y 2a Brigadas Solidarias de apoyo a Bibliotecas y Archivos de Bolivia*. Entre las publicaciones que ha llevado a cabo está la reedición, en 2010, con apoyo de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia, de Copacabana de los Incas, de Fray Jesús Viscarra Fabre, publicada originalmente en 1901, obra controversial que en su tiempo llamó la atención y fue centro de una serie de comentarios, y cuyos manuscritos originales relacionados con la obra se conservan en el CI-FFMV. Fuente: www.flaviadas.org; Fundación, s.f; González, 2011.

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G GALINDO, LEÓN

(Vélez, Bogotá, República de Nueva Granada, 28 de junio de 1795. † Cochabamba, 7 de enero de 1866) Siendo estudiante del Colegio de Santafé de Bogotá, se alistó a los 14 años (1809) en el Ejército de la Patria en clase de cadete. Llegó a ser primer jefe del batallón Bogotá. Asistió a la Batalla de Ayacucho (1824) con el grado de Coronel, con notable desempeño que le valió su ascenso a General Jefe del Ejército Unido Libertador. S. Bolívar* le confirió el título de “Miembro de la comisión de libertadores de Venezuela”. En 1826 fue designado por A.J. de Sucre* Prefecto del Departamento de Potosí. En 1843 el Gral. Ballivián volvió a nombrarlo en ese cargo y entre 1855 y 1857 lo fue de Cochabamba, donde ejerció como concejil del municipio en varias gestiones. Mantuvo con Sucre correspondencia epistolar, formando un valioso archivo con las cartas autógrafas intercambiadas, las que fueron “piadosamente conservadas durante largos años de trastornos políticos en Bolivia por los descendientes del General Galindo”, entre ellos C. Blanco Galindo*, que lo mandó imprimir. Fuente: Blanco Galindo, 1918: iv.

GÁLVEZ DE OROPEZA, JULIÁN (Chuquisaca)

Estudió para cura en la universidad de Chuquisaca. Fue Notario mayor de la curia eclesiástica en La Paz. Independentista, fue nombrado por ello Secretario de Gobierno en 1809, recibiendo la comisión de llevar un documento que daba cuenta del levantamiento de la ciudad de La Paz, ante la Audiencia de Charcas, y que instaba al Intendente F. de Paula Sanz* a “no poner en armas contra la ciudad”. Al término de su misión fue recibido con honores y “repique de campanas con decreto de iluminación por tres noches”. Pudo escapar de Goyeneche* que le había condenado a ocho años en Filipinas. Se incorporó en el ejército de Castelli. Fuente: Aranzáes, 1915: 306.

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GÁLVEZ Y GALLARDO, JOSÉ BERNARDO DE

(Macharaviaya, España, 7 de enero de 1720. † Aranjuez, España, 1787) Se le considera uno de los principales impulsores de las Reformas Borbónicas, equiparable por ello a F. de Toledo*. Estudió leyes en Salamanca y se doctoró en Alcalá. Fue abogado de la embajada de Francia en Madrid. Jerónimo Grimaldi, ministro de Carlos III, lo nombró su secretario personal. Abogado de Cámara del príncipe Carlos (1762), Alcalde de Casa y Corte (1764), Visitador del Virreinato de Nueva España y miembro honorario del Consejo de Indias (1765), donde reorganizó la industria y economía de América Española, labor realizada en el contexto de la expulsión jesuítica. Dividió el virreinato de Nueva España en 12 intendencias, creó milicias provinciales y una Comandancia General. Regresó a España (1772), donde creó las Sociedades Económicas de Amigos del País. Fue nombrado Secretario de Estado del Despacho Universal de Indias-Ministro de Indias (1776). Emprendió la reordenación territorial de la América Española, dispuso la creación del Virreinato del Río de la Plata sobre la base de la secesión de los territorios meridionales del Virreinato del Perú, entre ellas la rica región minera de Potosí. Implantó de inmediato el régimen intendencial en su jurisdicción. Impulsó la Real Compañía de Filipinas. Fue autor, junto a J.B. Muñoz*, del proyecto de creación del Archivo General de Indias* en 1778, que consistía en la concentración en su seno de los documentos del Archivo de Simancas, dispersos en Simancas, Sevilla y Cádiz, que contienen los más extensos cuerpos documentales referidos a América Española, el Virreynato del Perú y Charcas. Recomendó para este fin, emplear el edificio de la Casa Lonja de Mercaderes de Sevilla. La corona lo premió con el título de Márquez de Sonora. El reglamento del Archivo se publicó en 1790, tres años después de su muerte. Fuente: España, 1782; España, MEC, 1996.

GALLARDO IRIGOYEN, JOSÉ

(Arque, Cochabamba, 1930. † 2008) Trabajó como Kardixta en la Empresa Minera Matilde (1976). Desde allí fue promovido a Auxiliar Secretario del Departamento de Extensión Social (Subgerencia de Relaciones Industriales) en la Oficina Central de la COMIBOL en La Paz (1977); junto a L. Jordán* participó en el fortalecimiento del Archivo General. En 1978, ante la jubilación de L. Jordán lo reemplazó como Jefe del Archivo General, dependiente de Secretaría General en la oficina central de la COMIBOL. En 1984 fue promocionado a Jefe de la Sección III dependiente del Archivo General. En 1985, ante las consecuencias del DS. 21060 que ordenó el cierre de las empresas mineras estatales, se acogió al retiro voluntario. Fuente: Expediente personal en el Archivo Central de la Comibol.

GAMARRA ROJAS, ARTURO

(La Paz, 25 de enero de 1909. † La Paz, 21 de abril de 2004) Se trata, sin duda, del funcionario que más tiempo trabajó en los archivos del Congreso Nacional. En su testimonio refiere: “Me inicié a trabajar en la Cámara de

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Diputados a la edad de once años, en calidad de empleado permanente”. Ejerció la ocupación de ujier durante la presidencia del célebre tradicionista e historiador, Dr. Rigoberto Paredes. Dos años más tarde fue designado ujier-mensajero de Redactores en la Cámara de Diputados, del que fue promovido al de auxiliar de Archivo (1929-1932). Participó en la guerra del Chaco, cuyo desempeño contra el ejército paraguayo le mereció varios ascensos en la zona de operaciones: Cabo (20 de octubre de 1932), Sargento (20 de marzo de 1934), Suboficial (9 de octubre). Fue desmovilizado por Orden General 11/35 como Subteniente de la Reserva (7 de agosto de 1935); condecorado con la Medalla de Guerra (Orden del Ejército 71/34, de 2 de noviembre de 1934), y la Orden del Mérito Militar en el Grado de Caballero (Orden de Ejército 47/36, de 31 de diciembre de 1936). Pasó a la reserva con el grado de Oficial de Complemento y Administración. Fue declarado Benemérito de la Patria (Orden del Ejército 1/59, de 10 de enero de 1959), de acuerdo a la Ley de 21 de diciembre de 1956 y su Reglamento de 4 de diciembre de 1957. Vuelto a la vida civil, fue adscrito a la Casa Militar del Palacio de Gobierno durante el régimen del presidente G. Busch* (1937-1939), la única ocasión que trabaja en repartición ajena al Congreso, porque un mes más tarde fue designado Jefe de Archivo de la Cámara de Diputados, durante la Convención Nacional (1938) hasta el año 1947. Durante los años turbulentos de la vida política, que determinó el cierre del Congreso, desempeñó múltiples oficios. Retornó al Congreso en 1956, convocado por el Dr. H. Siles Suazo*, según nota 13/56 de 4 de Julio de ese año. Trabajó sin mayores interrupciones hasta 1970, año en el que se cierra el Parlamento y los militares toman el poder hasta 1979. Sin embargo la “primavera democrática” de ese año es ahogada en la sangre de los mártires de Todos Santos (noviembre), y un año más tarde por el golpe del Gral. L. García Meza*. Durante la negra noche de la dictadura militar desempeñó funciones en el Consejo Nacional de Asesoramiento Legal (CONAL), a la cabeza del ex-canciller Mario Rolón Anaya, órgano que trataba de darle cierto sustento legitimador al régimen militar. Con el retorno al estado de Derecho, continuó como Jefe de Archivo de la Cámara, en su condición de Benemérito de la Patria, gracias a la inamovilidad funcionaria para Beneméritos de la Patria, una de las pocas conquistas sociales para este sector olvidado de ciudadanos. En mérito a su noble labor desempeñada, el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia*, le otorgó Diploma de Reconocimiento y Presea, en noviembre de 1993. Fuente: Oporto, 1993: 24-26.

GAMARRA TÉLLEZ, MARÍA DEL PILAR (Rurrenabaque, Beni, 8 de noviembre de 1954)

Licenciada en Historia (UMSA)*. Tiene una Maestría en Historia Andina (FLACSO), Quito, Ecuador. Fue directora del Instituto de Estudios Andinos y Amazónicos (INDEAA). Fue Docente titular de Teoría y Metodología en su Carrera. Elaboró los curriculums educativos en Ciencias Sociales y Coordinadora de Programas de Postgrado (UMSA). Directora académica en la Universidad Privada “Franz Tamayo”, Coordinadora del Departamento de Ciencias Sociales del Colegio Saint Andrew’s de La Paz. Consultora de la cooperación Holandesa y Española, en temáticas de

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la Amazonía Norte, para la Prefectura del Departamento de Beni. Directora de la Revista Historia (Carrera de Historia de la UMSA). Coeditora de Los bolivianos en el tiempo (1993). Publicó la segunda edición de la obra de Manuel Limpias Saucedo Los gobernadores de Mojos, por encargo de la Prefectura del Beni (2005). Elaboró el proyecto para la organización y funcionamiento del Archivo Histórico de la Casa Suárez* en Guayaramerín y dirigió, junto a L. Oporto*, al equipo de docentes y estudiantes de la UMSA que trabajaron en ese proyecto (2004). Su obra historiográfica sobre la Amazonía boliviana es muy sólida y se ha plasmado en Amazonía norte de Bolivia. Economía gomera, 1780-1940. Bases económicas de un poder regional. La Casa Suárez. (La Paz, Colegio Nacional de Historiadores de Bolivia, 2007. Colección Bolivia, estudios en Ciencias Sociales, Vol. 5). Publicaciones archivísticas: “El archivo del convento de San Francisco (La Paz)”, con L. Escobari (Boletín del Archivo de La Paz, 8 (11), 1988: 7-22). Fuente: CV.

GANTIER LEMOINE, RONALD (Sucre, 24 de abril de 1951)

Abogado. Bibliotecólogo y Archivista autodidacta. Máster en Derecho Constitucional. Desempeñó la Abogacía (35 años), la Bibliotecología (36 años) y Archivística. Director de la Biblioteca Central de la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca desde 1977. Participo en la fundación del Centro Bibliográfico, Documental e Histórico de la Universidad de San Francisco Xavier*. Asistió al Curso de Administración de Archivos organizado por el Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de la República de Bolivia* (1976), al término del cual formó parte de la Asociación de Archivistas de La Paz* como Secretario de Actas. Asistió al Primer Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (1995), siendo elegido presidente de la directiva. Luego de organizar un curso para formación de técnicos medios en Bibliotecología realizado en Sucre, la Asociación desapareció. Fundó con Jaime Ortiz, el Centro Documental “Teatro Gran Mariscal”. Testimonios de la época señalan que se descartaron documentos de ese centro (c. 1981). Fuente: CV.

GANTIER VALDA, JOAQUÍN

(Hacienda de Siporo, Potosí, 12 de mayo de 1900. † Sucre, 18 de febrero de 1994) Abogado y Maestro. Estudió Derecho en la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca. Maestro de la Escuela Normal Superior de Maestros, de la que fue Jefe de la Sección de Historia y Geografía. Fue Munícipe (1947-1948), ocasión en la que inauguró la Biblioteca Municipal Popular. Fundador del Ateneo de Bellas Artes y de la Escuela de Dibujo y Pintura “Zacarías Benavides”. Presidente de la Sociedad Filarmónica y director de su revista Claridad. Presidente de la Sociedad Geográfica “Sucre”. Miembro correspondiente de corporaciones académicas de Argentina (Buenos Aires, 1948; Santiago del Estero, 1970; San Felipe y Santiago de Salta, 1971;

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Catamarca, 1974), México (1966), Paraguay (1967), Uruguay (1974), Venezuela (1983). Ingresó a la Academia Boliviana de la Historia recién en 1987. Fue condecorado con la Orden del Mérito al Maestro en el Grado de Caballero por el Ministerio de Educación (1947), al que le siguieron el Cóndor de los Andes (1982) y otras cuatro de carácter nacional; tres extranjeras (España, Alemania y Cuba) y cuatro otorgadas por instituciones de Sucre. Fue Premio Nacional de Cultura (1993). Autor de Juana Azurduy de Padilla (1946), Casimiro Olañeta (1955), Historia del gran republicano Jaime de Zudáñez (1970), y numerosas obras de teatro. El 13 de noviembre de 1939 fue designado Director de la Casa de la Libertad*, cumpliendo la alta responsabilidad de Custodio de ese recinto por 55 años, donde se encuentra depositada la copia original del Acta de la Declaración de la Independencia de Bolivia (6 de agosto de 1825), que en 1909 entregó el Presidente de la República I. Montes* al Senador por Chuquisaca y Presidente de la Comisión Legislativa, Dr. Darío Gutiérrez, en conmemoración al Centenario del 25 de mayo de 1809. Fuente: Quién es quien en Bolivia, 1959: 115; Carta de Joaquín Gantier, 1970: 2; Poder Judicial, 1994.

GARCÍA, SIMEÓN Cura jesuita. Recorrió los departamentos de Santa Cruz y Beni, con el propósito de recoger manuscritos coloniales, en varios baúles, concentrándolos en su residencia fija en el colegio San Calixto de La Paz. Fuente: Barnadas, 1985: 1-18.

GARCÍA BALANZA, CORINA (Sucre, 4 de diciembre de 1974)

Graduada por excelencia como Licenciada en Derecho (Universidad Mayor, Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca, 2000). Fue secretaria y practicante jurista en el Estudio Jurídico del Dr. H. Poppe Entrambasaguas* (1993-1995). Ingresó como Técnico Medio al Archivo Nacional de Bolivia (1999). Actualmente es Procesadora Técnica de Archivo en el Departamento de Archivo del ABNB*. Participó en el Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (1999); Paleografía Hispanoamericana, siglos XV-XVIII (2000, 2006 y 2009), impartidos por el Dr. J. M. López Villalba*. Igualmente en el Curso de Restauración y Conservación del Papel, impartido por el Dr. Sebastián Dobrousski (2000); Archivos a Distancia, organizado por el Archivo General de la Nación y Escuela Nacional de Archiveros (Lima, Perú, 2006); Curso sobre Gestión de Documentos y Archivos Administrativos de la AECID (Santa Cruz de la Sierra, 2007). Asistió al Pre-congreso “Los retos del Acceso a la Información” (parte del XIV Congreso Internacional de Archivos) y a la Asamblea de la Asociación Latinoamericana de Archivos* (Sevilla, España, 2000); al IV y IX Congreso de Archivos del MERCOSUR (Asunción, Paraguay, 2001; 2011); a la Reunión del Grupo de Expertos de Archivos Nacionales del MERCOSUR (Santa Cruz de la Sierra, 2004) y al Congreso Nacional de Archivos: Tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (ABNB, 2007). Elaboró un Proyecto de Ley para institucionalizar el Sistema Nacional de Archivos de Bolivia en 2000, que luego

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publicó, como libro. Esta experiencia se volcó en el Proyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos, propuesto por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (2003). Recibió una felicitación de la Dirección del ABNB, “por el trabajo cumplido” (Sucre, 1999); y de la Dra. María Martínez de Sánchez, investigadora argentina, (2004). Publicaciones archivísticas: Legislación Archivística y Sistema Nacional de Archivos en Bolivia (Sucre, 2003); Fuente: CV.

GARCÍA CÁRDENAS, EDUARDO HORACIO (La Paz, 10 de octubre de 1954)

Estudió en la Carrera de Historia* UMSA. Inició su vida laboral como Bibliotecario del Ministerio de Minas (1984), luego de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (sede Bolivia), el Centro de Estudios de la Realidad Económica-Social y la Universidad Andina Simón Bolívar, sede La Paz. Se dedicó a la investigación en derechos humanos, derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, educación y otros, en varias ONGs (CIDEM, IPAS, UNPFPA, OPS), entre 1993 y 2006. Miembro del equipo de planificación del Ministerio de Culturas (2009-2010) y jefe de redacción del periódico gubernamental Cambio (2010-2011). Su producción intelectual es extensa, cubre historia y temas sociales, sobre todo de género y derechos humanos de mujeres, la que se halla dispersa en revistas, periódicos y algunos libros. Con C. Soria Galvarro* y José Pimentel ha publicado 1967: San Juan a sangre y fuego, relativo a la masacre de mineros en el campamento de Siglo XX (Potosí) durante el gobierno del Gral. R. Barrientos Ortuño*, publicado por el Comité Boliviano de Conmemoración del XL Aniversario del Asesinato de Ernesto “Che” Guevara* (2007). Escribió con el seudónimo de Vicuña su columna semanal “Conversaciones entre tabaco y café” (periódico Cambio) relacionada generalmente con temas de historia nacional. Es también fotógrafo aficionado. En su faceta archivística se puede mencionar que fue pasante en el Archivo de La Paz* (1986) y archivista del Archivo de la Sociedad Agrícola, Ganadera, Industrial y Comercial* SAGIC junto con E. Aillón* (1989-1993). Publicaciones archivísticas: “El valor de los archivos regionales: Relación de los descubrimientos de un buscador de tesoros (Entrevista al historiador Erick D. Langer)”, con E. Aillón (Presencia Literaria, La Paz, 20 de junio de 1993: 12-13); “El sur boliviano: entre dos siglos (Entrevista con el historiador Erick Langer)”, con E. Aillón (Presencia, La Paz, 21 de marzo de 1993: 14-15). Fuente: CV.

GARCÍA GUZMÁN, ANA MARÍA DEL PILAR (Telamayu, Potosí, 16 de junio de 1969)

Licenciada en Historia (UMSA). Hizo la Maestría de Estudios de Género del CIDES-UMSA. Su campo de especialidad es la Historia Colonial. Presentó su tesis de licenciatura sobre “Las dotes de la ciudad de La Paz, siglos XVI y XVII”. Posteriormente se dedicó a la docencia en la UMSA. Coordinadora del área de

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Ciencias Sociales en el Colegio Saint Andrew´s (2012). Forma parte del Centro de Estudios para la América Andina y Amazónica. Fue directora de la serie Historia Inmediata que publica el CEPAAA. Trabajó en el Archivo de La Paz* (1997-1998). Fuente: CV.

GARCÍA JORDÁN, PILAR

(Esquedas, Huesca, España, 1951) Doctora en Historia Moderna y Contemporánea. Catedrática de Historia de América de la Universitat de Barcelona, ejerce su docencia en Historia de América contemporánea, Historia de la Amazonía Andina, Estado-Nación en América Latina. Directora del Taller de Estudios e  Investigaciones Andino-Amazónicos, con sede en Barcelona. Directora del Boletín Americanista (Barcelona). Sus líneas de investigación prioritarias son: Estado-Nación en América Latina; Historia social, económica y política países andinos (siglos XIX-XX); Construcción de espacios locales, regionales en el contexto de estados nacionales; Políticas estatales en Perú y Bolivia (siglos XIX-XXI); Misiones franciscanas en Bolivia; Guarayos como representación. Tiene una amplia, sólida y rigurosa producción intelectual, en la que destacan las monografías: Para una historia de los Sirionó (Cochabamba, Itinerarios e Instituto de Misionología, 2011); Unas fotografías para dar a conocer al mundo la civilización de la república guaraya (Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 2009); “Yo soy libre y no indio: soy guarayo”. Para una historia de Guarayos, 1790-1948 (Lima, IFEA-PIEB-IRD-TEIAA, 2006); Cruz y arado, fusiles y discursos. La construcción de los Orientes en el Perú y Bolivia, 1820-1940 (Lima, IEP/IFEA, 2001); Iglesia y poder en el Perú contemporáneo, 1821-1919 (Cusco, Centro de Estudios Regionales Andinos “Bartolomé de las Casas”, 1991); Els catòlics catalans i la Segona República (1931-1936) (Barcelona, Publicacions Abadia de Montserrat, 1986). Autora de un centenar de artículos en revistas científicas y obras colectivas, empezó a investigar en la historia republicana del Perú a inicios de la década de los ’80 para, en la década siguiente, interesarse por Bolivia, y en la sucesiva (2001) por la historia de Guarayos. Cuenta entre sus méritos con haber investigado, en algunos casos por vez primera, en los archivos franciscanos, para rescatar la historia de las misiones entre los Guarayos y, recientemente, Sirionós. Es la investigadora que mejor conoce el alcance y contenido de los ricos recursos documentales de la orden franciscana relativos a la historia de Guarayos, y de los guarayos, como muestran sus publicaciones. En sus dos recientes obras, exhuma y publica un formidable corpus documental conformado por diarios relativos a la “conquista” y reducción de los Sirionó en Santa María, entre 19261943 (“Para una historia de los Sirionó”) y 247 fotografías de los pueblos misionales de Guarayos tomadas por frailes franciscanos y fotógrafos cruceños por encargo de los primeros (“unas fotografías para dar a conocer al mundo la civilización de la república guaraya”), poniendo así al alcance de los investigadores fuentes únicas en su género. Los cinco Diarios de Santa María y el Libro de la administración espiritual y material de la misma fueron escritos por los misioneros franciscanos Alberto Singer, Félix Haidinger, Anselmo Schermair, Francisco Schumacher y Oscar Van de Castel. Las fotografías, por su parte, fueron tomadas por L. Lavadenz* (1898), J. Bernabei* (18991901), T. Herzog* (1907), W. Kowanda* (1925), M. Rojas* (1918), A. Hoeller* (1929-1934) y H. Walpoth* (década del 1940). Fuente: García, 2009; García, 2011. Correo enviado el 30.3.12; http://www.4.ub. (25.3.12).

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GARCÍA LANZA, GONZALO

(10 de enero de 1808. † 20 de noviembre de 1885) El 17 de diciembre de 1847 fue nombrado Comandante General (prefecto) del Departamento de La Paz. Al año siguiente organizó en Cochabamba una fuerza de 600 hombres en favor de Manuel I. Belzu con los que salió a enfrentar a Carrasco que venía de Sucre. Lanza se dirigió a Sucre y cometió la imprudencia de encuartelar la tropa en el Palacio Legislativo. Algunos soldados abriendo una puerta extrajeron los archivos de la antigua Universidad y algunos autógrafos de los Congresos y los tiraron al patio, donde se destruyeron por las inclemencias del tiempo y a causa de fogatas que hacían los soldados para combatir el frío. Se dirigió a Potosí y se incorporó a la tropa de Belzu, asistiendo a la batalla de Yamparáez, favorable al caudillo, siendo ascendido a General de Brigada (30.12.1848). Combatió contra Córdova (1855), favoreció a Melgarejo acompañándole en las barricadas de La Paz, Cantería y las Letanías. Fue ascendido a Mayor General (1865). Cayó prisionero el 15 de enero de 1871, retirándose a la vida privada. Fuente: Aranzáes, 1915: 332-333; Moreno, 1927.

GARCÍA LANZA, GREGORIO

(Coroico, La Paz, 12 de marzo de 1775. † La Paz, 29 de enero de 1810) Su familia se refugió en La Paz durante los levantamientos indígenas de 1781. Estudió derecho en la Universidad del Cusco (1796). Conocedor experto de legislación española, derecho romano y obras de la época, gracias a magnífica biblioteca, “tal vez la primera en esta ciudad como posesión de un particular con 827 volúmenes”. La biblioteca fue secuestrada por el teniente Luis Guerra el 9 de enero de 1810 en la casa de Bernardo Callacagua, donde la depositó. Su esposa fue la patriota María Manuela Campos Seminario. El 20 de julio de 1809 Lanza y José de la Riva, a nombre de los conjurados pidieron la condonación de las deudas a la real hacienda, la cancelación de las escrituras y la quema de todos los papeles referentes al asunto en plaza pública, lo que autorizó el Cabildo, efectuándose en el mismo día. Lanza afirma “que comisionó a Lorenzo Umeres y Antonio Vizcarra para la selección de los documentos que no tuvieran ninguna importancia”. El 24 de julio la Junta le ordenó, y con él al regidor Sagárnaga, interceptar la correspondencia del Obispo La Santa, quien salía expulsado de La Paz, para evitar delaciones; “mediante venia del obispo se encantaron de sus papeles” (…) quien “había abierto las cartas en presencia de los comisionados y se habían enterado de su contenido”. Salió a Achacachi el 3 de septiembre encargado de la comandancia de las provincias de Omasuyos y Larecaja, ante la aproximación de Goyeneche*. Se dirigió luego a Sorata y de allí a Huarina. Allí le informó Castro de la contrarrevolución del cacique Francisco Yanguas. Consumada la traición de Indaburu, Lanza marchó a Chacaltaya y de allí a Yungas, donde se ocultó por un tiempo, decidiendo entregarse voluntariamente a Goyeneche el 27 de octubre, siendo arrestado, y liberado a los tres días con un pasaporte, dirigiéndose a Chojlla, con el objeto de rendir a su hermano Victorio. Fue apresado y entregado a Goyeneche que le condenó a la pena capital, siendo ejecutado el 29 de enero de 1810. Fuente: Aranzáes, 1915: 315, 647; 704.

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GARCÍA LANZA, JOSÉ MIGUEL

(Coroico, La Paz. † Sucre, 18 de abril de 1828) Cuando su hermano Gregorio fue ajusticiado en 1810, se hallaba estudiando en la Universidad de Córdoba (Argentina). De inmediato se sumó a la causa patriota y “así vengar la muerte de sus hermanos”. Comandó las huestes guerrilleras de Ayopaya e Inquisivi las que hostilizaron a las fuerzas realistas, al extremo que el Gral. Jerónimo Valdéz que salió en su persecución, exclamó: “¡Esta guerra es eterna!”. Luego de la Batalla de Ayacucho (9 de diciembre de 1824), Lanza fue nombrado Presidente [Prefecto] de La Paz. Recibió a Sucre* en su ingreso triunfal, designó Escribano de la ciudad al Escribano S. Aparicio*, entregándole el Archivo de la Municipalidad. Fue Diputado por La Paz en la Asamblea Constituyente, ocasión en la que el 27 de agosto, la Asamblea ofende al patriota Lanza acusándolo de “haber sacado parte del archivo de la Oficina de gobierno y llevarla consigo a Charcas”, a lo cual respondió que “los papeles que se había trahido, solo eran aquellos que hablan particularmente de su persona y por creerlos documentos calificativos de su comportación tubo por conveniente retenerlos”. Posteriormente fue Comandante y Prefecto de Chuquisaca, donde perdió la vida en los incidentes provocados por el artero golpe de mano que urdió Casimiro Olañeta contra el Mariscal Sucre. Fuente: Ascarrunz, 1920: 47-49; Oporto, 2008b: 219.

GARCÍA LINERA, ÁLVARO MARCELO (Cochabamba, 19 de octubre de 1962)

Matemático y sociólogo de formación marxista. Vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia desde 2006. Estudió primaria en el Colegio Don Bosco (Cochabamba) y Domingo Savio (La Paz); y secundaria en el Colegio San Agustín (Cochabamba). Estudió Matemáticas en la Universidad Nacional Autónoma de México (1981-1985). De regreso en Bolivia, conformó la agrupación “Ayllus Rojos Tupac Kataristas”, en comunidades indígenas del altiplano aymara. Fue parte integrante de la organización Ejército Guerrillero Túpac Katari (EGTK), de orientación marxista-indigenista, principalmente como ideólogo. Fue arrestado y acusado de insurrección, terrorismo y asalto, junto a su ex esposa, la matemática mexicana Raquel Gutiérrez, por lo que fue sometido a prisión preventiva por cinco años, hasta julio de 1997, posteriormente, sin llegar a probarse los cargos, la imputación prescribió en 2006. Con relación a este caso, la Corte Interamericana de Justicia admitió una demanda por “violación de número plural de derechos humanos” contra miembros del EGTK. Estudió Sociología en prisión y luego fue catedrático en la UMSA. Fundó el grupo Episteme, con activa participación en el análisis político nacional, destacando con sus comentarios en cadenas nacionales de televisión con el programa “Pentágono”. Sus reflexiones y las de su grupo de estudio, fueron difundidos fundamentalmente en Democracia en Bolivia: Cinco análisis temáticos del segundo Estudio Nacional sobre Democracia y Valores Democráticos, con Raúl España Cuellar; Andrés Torrez Villa Gómez (2005); El retorno de la Bolivia plebeya, con Raquel Gutiérrez (2007); La trasformación pluralista del Estado, con Luis Tapia Mealla y Raúl Prada Alcoreza (2007) y Sociología de los movimientos sociales en Bolivia. Estructuras de movilización, repertorios culturales y acción política, con Marxa Chávez

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León y Patricia Costas Monje (2008). Fue invitado por el Movimiento Al Socialismo (MAS) para acompañar como candidato a vicepresidente de Evo Morales*, siendo electo en las elecciones de 2005 y el revocatorio de mandato de 2009. Es uno de los miembros más activos del gobierno de E. Morales, propugnando una corriente ideológica llamada “esencialismo dialéctico”, y principal teórico gubernamental. A partir de la promulgación de la CPE, en febrero de 2009, por primera vez en la historia política boliviana, la Vicepresidencia del Estado cobra rol esencial en la definición de estrategias y políticas estatales, y forma parte tanto del Órgano Ejecutivo (Vicepresidente del Estado) y de la Asamblea Legislativa Plurinacional (Presidente). El aporte ideológico al proceso de cambio se expresa en Las tensiones creativas de la revolución: la quinta fase del proceso de cambio (2011); El “Oenegismo”, enfermedad infantil del derechismo: o cómo la “reconducción” del proceso de cambio es la restauración neoliberal (2011) y, Las empresas del Estado: patrimonio colectivo del pueblo boliviano (2012). Su aporte a la archivística es fundamental, pues es el artífice de la unificación del Archivo de la Asamblea Constituyente (2006-2009), cuya parte legislativa fue retenida por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (Sucre), en virtud de una resolución expresa, la que fue luego remitida a La Paz, en copias legalizadas. Actualmente junto al archivo original administrativo se custodia en la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Autorizó la transformación del antiguo Boletín Fuentes del Congreso en la Revista Fuentes de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Impulsó la edición y publicación de la Enciclopedia de la Asamblea Constituyente. Fuente: Oporto, 2006c; http://es.wikipedia.org (19.7.12)

GARCÍA MEZA TEJADA, LUIS (La Paz, 8 de agosto de 1929)

Militar. General del Ejército de Bolivia. Dictador, 1980-1981. En abril de 1952 fue parte de la compañía de cadetes que fueron derrotados por los milicianos del Movimiento Nacionalista Revolucionario. Se reincorporó en 1956 como instructor de Caballería en el Colegio Militar. Participó en el derrocamiento de V. Paz* el 4 de noviembre del 1964. Detentó altos cargos en sus destinos militares, entre ellos Comandante del regimiento de caballería Ballivián en Trinidad, Comandante de la Escuela de Aplicación de Armas (1976), Jefe de Estado Mayor de la VII División de Cochabamba (1977), Comandante de la VI División de Trinidad (1978), Comandante del Colegio Militar (1979). Durante la dictadura de Alberto Natusch fue Comandante de Ejército (noviembre 1979). Lideró el ala dura del Ejército, acosó al gobierno interino de la Presidenta Lidia Gueiler; es sospechoso de haber instruido el secuestro, tortura y asesinato del sacerdote jesuita Luis Espinal Camps (21 de marzo de 1980). Lideró el cruento golpe de Estado del 17 de julio de 1980, que contó con apoyo de la dictadura argentina. Tiene responsabilidad de alrededor de 500 asesinatos (entre ellos de Marcelo Quiroga Santa Cruz), desapariciones forzadas, 4000 detenidos y la masacre de la calle Harrington (15 de enero de 1981) que eliminó a la cúpula clandestina del Movimiento de la Izquierda Revolucionaria. Se le atribuye la venta del Diario de E. ‘Che’ Guevara*, sustraído de la caja fuerte del Comando en Jefe del Estado Mayor y puesto en subasta en Londres por la casa Shoteby’s. Fue recuperado y se

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encuentra en las bóvedas del Banco Central de Bolivia. Su gobierno fue corrupto y autoritario, financiado por el narcotráfico; además de estar internacionalmente aislado. Su Ministro del Interior, y brazo derecho, Luis Arce Gómez*, fue extraditado a los Estados Unidos durante el gobierno de J. Paz Zamora* por estar involucrado en narcotráfico. En el golpe de estado, participaron paramilitares reclutados por Klaus Barbie (que utilizaba el apellido Altman) y el miembro de la operación Gladio, Stefano Delle Chiaie. Fue depuesto por el Gral. Celso Torrelio Villa (4 de agosto de 1981). Sentenciado el 21 de abril de 1983, permaneció fugitivo de la justicia boliviana hasta su captura en Brasil en 1994. Fue extraditado a Bolivia en 1995 y encarcelado el 15 de marzo de ese año. Actualmente cumple su condena de 30 años sin derecho a indulto en el penal de máxima seguridad de Chonchocoro. Como testimonio de su actuación en la vida política y militar, el ex dictador publicó sus memorias con el sugestivo título de “¡Yo Dictador!”, un polémico libro donde relata algunos detalles de su gobierno de trece meses que se inició el 17 de julio de 1980. Fuente: García Meza, 2010.

GARCÍA MORATÓ, MIGUEL Escribano del visitador José de la Vega Alvarado designado por Cédula de 27 de mayo de 1631, con autorización para la venta y composición de tierras de comunidad en Oruro, Mizque y Chuquisaca. Hizo la Visita de Poopó en 1646, asignando, en los trámites que hacían sus apoderados, el apellido del Escribano Morató como denominación del jefe del antiguo “Ayllu de la Laguna”, como se conocía este pueblo indígena, incluso hasta fines del Siglo XIX. “El José de la Vega Alvarado había puesto nombre Miguel García Morató. De ese año nosotros nos hemos llevado Morato”. Los Uru Muratos defendieron sus derechos históricos a su territorio sobre la base de la visita de Alvarado. Fuente: Barragán, R. 1992: 17, 33-34.

GARCÍA QUINTANILLA, JULIO

(Sucre, 26 de julio de 1926. † Sucre, 26 de julio de 1984) Sacerdote e historiador. Fundador del pueblo de Quillacas. Durante 23 años fue cura rural. Notable bibliófilo, recolectó bibliografía, periódicos y documentos, que fueron catalogados y ordenados por M.I. Huanca. Fue miembro de la Sociedad Geográfica Sucre. Publicó Historia de la Iglesia en La Plata (3 vol.). Fuente: Arze, 1985: 69; Calvo, 2000.

GARCILASO DE LA VEGA, INCA

(Cusco, Perú, 12 de abril de 1539. † Córdova, España, 23 de abril de 1616) Escritor e historiador peruano. Militar. Hijo del conquistador español Sebastián Garcilaso de la Vega y de la princesa incaica Isabel Chimpo Ocllo. Recibió en Cusco esmerada educación al lado de los hijos de Francisco y Gonzalo Pizarro, mestizos e ilegítimos como él. Garcilaso el Inca inició un ambicioso y original proyecto historiográfico centrado en el pasado americano, y en especial en el del Perú.

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Considerado como el padre de las letras del continente, en 1605 dio a conocer en Lisboa su Historia de la Florida y jornada que a ella hizo el gobernador Hernando de Soto, más divulgado como La Florida del Inca. Su obra maestra, Comentarios reales, publicada en Lisboa en 1609, fue escrito a partir de sus recuerdos de infancia y juventud, de intercambios epistolares y visitas a personajes destacados del virreinato del Perú. La crítica señala que el relato constituye, pese a los problemas de sus fuentes orales y escritas uno de los intentos más logrados, tanto conceptual como estilísticamente, de salvaguardar la memoria de las tradiciones de la civilización andina, en donde hace un recorrido por la historia del Incario hasta la llegada de los españoles. En ella Garcilaso reivindica el pasado Inca, mediante un recorrido de su historia, mitos, poemas, ritos y tradiciones. Se la ha reconocido como el punto de partida de la literatura hispanoamericana. La Historia General del Perú (segunda parte de los Comentarios Reales), publicada en Córdoba, en 1617, reconstruye la historia desde la llegada de los españoles. Reunió una copiosa biblioteca, desaparecida tras su muerte, entre ellos la Historia de las Indias de Francisco López de Gómara (que sirviera de prólogo a La Florida) en el que consta La Relación de la descendencia de Garci Pérez de Vargas, material que se conserva manuscrito, en el que reivindica su ilustre genealogía española y también la incaica. En 1612 Garcilaso compra la Capilla de las Ánimas en la Catedral de Córdoba, donde quiso ser enterrado. Falleció cuatro años después, entre el 22 y el 24 de abril de 1616 como fechas probables. Fuente: www.cewrvantesvirtual.com; www.biografiasyvidas.com

GARDEAZÁBAL BENÍTEZ, LIDIA SOBEDA (Potosí, 1 de febrero de 1952)

Restauradora en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. Es monitora del Taller de Restauración de Papel y Documentos de la Escuela Taller Sucre (Programa Escuelas Talleres en Iberoamericana por la Agencia Española de Cooperación Internacional). Participó en el Curso de Conservación y Restauración de Documentos de Archivo y Biblioteca, impartido por el Prof. P. Barbáchano*, en la sede del ABNB, en 1978. Realizó estudios sobre Conservación y Restauración de Documentos (UNESCO), The International Centre for the Study of the Preservation and the Restoration of Cultural Property ICCROM, en Santiago de Chile; Conservación Preventiva de Bienes Culturales; Manejo, Conservación, Planificación y Curatoria en Archivos; Catalogación e Inventariación del Patrimonio; Restauración de Papel; V Encuentro Nacional de Conservación y Restauración: “Patrimonio, Cultura y Turismo”. Participó también en el II Simposio electrónico internacional “Conservación preventiva en bibliotecas, archivos y museos con la comunicación”. Facilitadora del Taller de Formación de Monitores; Teorías metodología y medios de enseñanza. Docente de los cursos de capacitación a funcionarios de archivos y bibliotecas que se imparten en Bolivia, con el auspicio de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia* y el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. En el ámbito particular, fue facilitadora del Curso taller de Conservación Preventiva en el Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

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GASCA, PEDRO DE LA

(Navarregadilla, Ávila, España, 1493. † Sigüenza, Guadalajara, España, 1567) Sacerdote, político, diplomático y militar español. Caballero de la Orden de Santiago y consejero del Tribunal del Santo Oficio. Estudió en la Universidad de Salamanca donde cursó Derecho Civil y Canónico y en la Universidad de Alcalá de Henares, donde recibió el grado de Maestro en Artes y Licenciado en Teología. Participó en la Guerra de las Comunidades de Castilla, a favor del rey. Fue rector de Salamanca (1528-1529), presidente de la Real Audiencia de Lima (1546). Ante el levantamiento de Gonzalo Pizarro (hermano de Francisco) y otros encomenderos contra las Leyes Nuevas y el gobierno del virrey Blasco Núñez Vela, se le encargó aplastar al rebelde y pacificar la región. El Inca Garcilaso de la Vega* lo describe “muy pequeño de cuerpo. Andando a caballo parecía aún más pequeño de lo que era porque todo era piernas; de rostro era muy feo”. Comandó un ejército de 700 arcabuceros, 500 piqueros y 400 jinetes, bajo el mando del capitán general Pedro de Hinojosa. En Jaquijahuana, desbandó la hueste pizarrista (9 de abril de 1548), capturando a Gonzalo Pizarro y sus capitanes; juzgados en proceso sumario se decretó la pena de muerte contra 48 de los sediciosos. Durante el “Reparto de Guaynarima” (16 de agosto de 1548), La Gasca distribuyó más de un millón de pesos en encomiendas entre sus soldados. Hizo luego un ordenamiento general del Virreinato. Cumplió a cabalidad su cometido, pasando a la historia con el apelativo de “Pacificador”. Tenía la costumbre de documentar sus actos, haciendo escribir ó escribiendo personalmente todas las noches, un diario de lo que había ocurrido en el día; que aún se conserva en los archivos de España. Hizo levantar las Informaciones de los Quipucamayos*. Con esos documentos escribió la Descripción del Perú (editado en 1976), con noticias sobre el medio natural y la población autóctona del Perú entre 1551-1553. Tuvo contacto con Cieza de León*, a quien ofreció ayuda económica y documental de lo que había acopiado. Culminó su brillante carrera como Obispo de Palencia y luego de Sigüenza. Fuente: Jáuregui, 1925: 106; http://es.wikipedia.org (5.5.10).

GERSTMANN, ROBERT M.

(1896. † Santiago de Chile, 1960?) Hernán Rodríguez afirma que nació en San Petersburgo (Rusia), Luis Dorn en Itelsburg (Alemania) y Buck en Viena. Ingeniero eléctrico que desarrolló marcado interés por la fotografía. En 1924 emigró a América del Sur, donde “trabajó para universidades alemanas en Perú, Chile y Argentina” (Dorn). Viajó a Bolivia en tres oportunidades, donde hizo unas cinco mil fotografías, una selección de las cuales aparecen como fotograbados en su Bolivia, 150 Grabados en Cobre (París, 1928), reeditado por la Fundación Quipus en La Paz (1996). Sus fotografías cubren un amplio espectro de Bolivia: desde el altiplano sur de La Paz hasta la frontera con Argentina, desde el oeste de la frontera chilena pasa por los Yungas, Cochabamba, Santa Cruz hasta las tierras bajas a lo largo de los ríos Beni y Mamoré. Sólo Tarija y el Chaco escaparon de su lente. Cinco de sus fotografías ilustran “The Heart of Aymara Land” de Stewart E. McMillan, National Geographic Magazine (febrero de 1927), y muchas aparecen en Bolivia (Guía Sinóptica) de Gustavo Adolfo Otero (1929). F. Ahlfeld* en el prólogo a su libro, afirma que “Gerstmann era insaciable, su energía

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no tenía límite; sólo, sin compañeros sorprendió a los salvajes Sirionós en las selvas del río Grande; después, aún siendo atacado de terciana, atravesó airoso los desiertos de Carangas, ascendió cumbres de la cordillera”. Se asentó en Santiago de Chile en 1929. Publicó otros álbumes de fotos, entre ellos: Chile: 280 grabados en cobre (1932), Colombia: 200 grabados en cobre (1951) y Chile en 110 cuadros (1960?). Incursionó en cine en Bolivia. Más de 15.000 de sus negativos en placas de vidrio se encuentran en la Biblioteca Central de la Universidad Católica del Norte, en Antofagasta (Chile). Fuente: Buck, 1994: 10-12; Buck, 1999.

GISMONDI MÓDENA, LUIGI DOMÉNICO

(San Remo, Italia, 9 de agosto de 1872. † Mollendo, Perú, 22 de mayo de 1946) Inmigrante italiano que llegó a América del Sur, por Mollendo, Perú en 1891, junto a su hermano Jacinto. Allí conoció a Inés Morán Gandarillas, con quien se casó en 1901. En Arequipa aprende fotografía y trabaja como fotógrafo, viajando con frecuencia al sur del Perú, sobre todo a Cuzco y Puno, pasando esporádicamente a Bolivia (Copacabana, Desaguadero y La Paz). En 1904 se instaló en esta ciudad, en la que abre el “Estudio Gismondi” (1907), caracterizándose por ser un prolífico fotógrafo, vendedor de artículos fotográficos y el primer editor de fotopostales con motivos paisajísticos de Bolivia. En 1918 contaba con un estudio fotográfico bien instalado, talleres y almacenes, ubicado en la calle Comercio y Yanacocha Nos. 95 y 66, donde vendía postales con vistas pre-incaicas e incaicas del Perú y Bolivia, artículos fotográficos de las mejores marcas, hacía sellos de goma. Atendía “trabajos de ‘amateurs’ con prontitud y esmero, así como llamados a domicilio y a cualquier punto de la República”. De esa manera cubrió un amplio territorio geográfico de Bolivia (Desaguadero, Copacabana, Guaqui. Lago Titicaca y sus islas; Achacachi, La Paz, Sorata, Yungas, Quime, Cochabamba, Chapare, Todos Santos, Bella Vista, Oruro, Potosí, Uyuni, centros mineros de La Paz, Oruro y Potosí, Río Pilcomayo), Argentina (Norte de Argentina), Paraguay, Chile (Arica), Perú (Puno, Sillustani, Sicuani, Cuzco, Chincheros, Ollantaytambo, Mollendo, Lima, Arequipa). Fue parte del equipo de apoyo fotográfico durante las excavaciones de A. Posnansky* en Tiwanaku. Sus históricas fotografías de los centros mineros de Tatasi, Oploca y Siete Suyos se exhiben en la Casa de la Cultura de la Universidad Técnica de Oruro. Sus fotografías ilustraron Bolivia en el primer Centenario de su Independencia (N.Y., 1925); seis de sus fotografías fueron reproducidas en la obra de Stewart E. McMillan, “The Heart of Aymara Land”, National Geographic Magazine (1927); seis grabados suyos aparecen en la obra de Napoleone Rossi di Montelera: Dalla Terra del Fuoco ala Terra degli Incas (1930). Como resultado de su trabajo y el de sus descendientes se formaron dos archivos, en Lima (Perú) y La Paz (Bolivia). El Archivo Gismondi está conformado por negativos desde 1910, en diversos soportes, como negativos en placas de vidrio y celuloide; y positivos en papel, que suman miles de registros de los cuales no se ha levantado hasta hoy un inventario, mucho menos un catálogo. Su archivo se ha acrecentado desde 1946 con registros fotográficos de su hijo L. A. Gismondi*, su nieta Ruth Graciela Gismondi Glave, su bisnieta Geraldine Gozálvez Gismondi (en el estudio de La Paz) y de su hijo César (en el estudio de Lima). El “Estudio Gismondi” fue uno de los más visitados por la sociedad paceña, un lugar

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obligado de bachilleres y graduados, para tomarse fotos oficiales destinadas a sus títulos. Pese a su prestigio, se resintió notablemente por la competencia de otros estudios fotográficos, que instalaron modernos equipos de fotografía digital de última generación. Hoy el valor mayor de Gismondi se debe a sus archivos. Fuente: Alarcón, 1925; Buck, 1999; Querejazu, 2009; Viscarra, 1918.

GISMONDI MORÁN, LUIS ADOLFO

(La Paz, 27 de septiembre de 1914. † La Paz, 23 de septiembre de 1993) Continuó con el trabajo de su padre L. Gismondi* en La Paz, siendo uno de los fotógrafos de Palacio de Gobierno, que le encomendó una galería de ex presidentes. Su técnica se basaba en negativos de 4 x 5 pulgadas, en cámara de fuelle, con el virado al sepia que Él mismo preparaba. Fuente: Dorn, 1995: 37-39.

GÓMEZ COCA, AQUILES

(San Lorenzo, Cotoca, Santa Cruz, 8 de julio de 1932. † Santa Cruz de la Sierra, 28 de noviembre de 1994) Médico, historiador y escritor. Estudió en el Colegio Nacional “Florida” de Santa Cruz de la Sierra, donde fundó el periódico estudiantil El Chuturubí (1949). Se graduó como médico cirujano en la UMSA (1960), con especialidad en otorrinolaringología en Barcelona (1962-1964). Por quince días fue Ministro de Salud del efímero y espurio gobierno del dictador Alberto Natush Busch (1979). Investigador de la historia regional y escritor. Ocupó gran parte de su vida reconstruyendo la historia social, cultural y costumbrista de Santa Cruz, con una serie de notas que publicó en sus columnas “Cositas de mi pueblo” para el Mundo y El Deber; y “Tiempos Viejos” para El Nuevo Día. Colaboró también en la revista Jisunú y fue director de la revista Guapay. Fue Presidente de la Sociedad de Escritores y Artistas, presidió la Sociedad Boliviana de Historia de la Medicina (Filial Santa Cruz) y la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz. Fundador y director de la revista cultural Archivo. Fue el primer Director del Archivo Histórico Departamental de Santa Cruz “Hnos. Vázquez Machicado” (1986), donde fundó y publicó la revista Archivo. Patrimonio documental para la historia cruceña, con siete ediciones (1988-1992). Fue Director del Museo Histórico de Santa Cruz (1990), que alberga el Fondo Melgar i Montaño*. Su obra Qué tiempos aquellos de mi viejo Santa Cruz, se publicó póstumamente en 2008. Publicaciones archivísticas: “Índice de testamentos en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, desde el año 1825 a 1838” (Archivo. Patrimonio documental para la historia cruceña, 1990, 4: 23-57). Fuente: Gómez Coca, 2008; Limpias, 271-272.

GÓMEZ ZUBIETA, LUIS REYNALDO (La Paz, 23 de diciembre de 1957)

Licenciado en Historia (UMSA). Diplomado en Educación Superior UMSA (2002). Participó en la Escuela Iberoamericana de Archivos*, Madrid, España (1993). Fue

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Alumno-Investigador (1987) y Docente-Archivista (2001-2003) en el Archivo de La Paz*; Coordinador y docente del Primer Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos, UMSA (2002). Trabajó como consultor de archivos en la Cooperación Técnica Alemana GTZ (1996-1997), BOLNET (Vicepresidencia de la República de Bolivia); Caja Central de Ahorro y Préstamo para la Vivienda (1999), Sistema de Archivo de la COMIBOL* en El Alto (2004-2005). Hizo la consultoría de Diagnóstico de la Normativa de Archivos, para el Viceministerio de Transparencia y Lucha Contra la Corrupción (2008). Pasó a desempeñar funciones en el Archivo Central de la Superintendencia de Telecomunicaciones (2007-2008) y como Encargado de la Oficina de Archivos y Tratados del Ministerio de Relaciones Exteriores (2009-2011). Desempeña como Archivista de la Autoridad de Transportes y Telecomunicaciones (2012). Asistio a varios congresos, seminarios y reuniones sobre archivos, como: Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995); Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996), de la que fue miembro de la Directiva; Seminario Taller “Ley del Sistema Nacional de la Información” (La Paz, 1997); Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (La Paz, 1999) Publicaciones archivísticas: “Los archivos bolivianos y su incierto camino a través de la historia” (Boletín del Archivo de La Paz, 1994, (14): 22-29); “El Primer Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos” (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, (20): 37-46); “Bolivia en emergencia archivística y bibliográfica. Un informe urgente y sucinto de la destrucción de archivos y bibliotecas. Sucedido en la ciudad de La Paz los días 12 y 13 de febrero del 2003” (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, (20): 37-46). Fuente: CV.

GONZÁLES, CARLOS

(Viacha, La Paz, ca. 1902) “Fotógrafo de profesión y vocación”. Así se lo describió en un reportaje de 1986. Su abuelo era Cónsul de Bolivia en Arica y le dejó una casa en herencia “que la vendió para comprar cámaras y lentes”. Lo propio hizo con otra casa que le dejó su padre en Viacha: la convirtió en material fotográfico. En 1930 casualmente tomó una instantánea del ex presidente H. Siles* a su arribo a Arica luego de su derrocamiento, y envió esa fotografía lograda en negativo de placa de vidrio a La Razón, que la publicó “a tres columnas”, nombrándolo su agente en Arica. Desde entonces, su profesión le convirtió en testigo de innumerables acontecimientos políticos de la historia boliviana. Su primera cámara fue una Autoflex, con lente de 12.9 asa 200. Luego adquirió una Rolex 500. Relata que fue uno de los primeros reporteros gráficos nativos, pues “casi todo estaba en poder de los judíos, en el Diario estaba uno apellidado Mundec, en La Razón estaba A. Linares*. Yo los desplacé y me hice cargo”. Trabajó como reportero gráfico por 50 años, en El Diario, Última Hora y La Noche, cubriendo la parte política, social y deportiva (ésta por 15 años). Fue testigo del colgamiento de Villarroel (1946). Tomó fotografías de casi todas las transmisiones de mando: “He sacado fotos de todos los presidente. Desde Villarroel hasta Lidia Gueiler ninguno se ha escapado de mi máquina”, dijo en 1986. Documentó fotográficamente la llegada de V. Paz*, en abril de 1952, los discursos encendidos de Oscar Unzaga de la Vega y otros políticos,

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y, paradójicamente, tomó una de las últimas fotografías antes del golpe de Estado del Gral. R. Barrientos* contra el presidente V. Paz. Fue también gerente editor de la revista Cultura, editada en Viacha, que tuvo 14 ediciones. Su archivo fue adquirido por J. Núñez de Arco*. Fuente: El Diario, 1967a: 4; Presencia, 1986: 3.

GONZÁLES BURGOS, ROSA JUANA (La Paz, 26 de junio de 1958)

Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA). Hizo el Diplomado Superior en Gestión de la Documentación y Archivos (Universidad Loyola). Egresó como Auxiliar de Oficina del Instituto “Tramma”. Participó en el Seminario sobre organización y sistematización de la información archivística para la aplicación del Reglamento Común de Procedimientos Administrativos y de Comunicación de los Ministerios (2000), curso de Organización y administración del archivo central (2001), el I y II Congreso Internacional de Bibliotecarios, Documentalistas y Archivistas (2001, 2003), las IV Jornadas Paceñas de Bibliotecología y Documentación (2001), el curso de Organización de archivos y usuarios de unidades de información (2005), los seminarios sobre Nuevas tendencias en la gestión de recursos de información (2006), Ética profesional (2006), y el Taller de digitalización de documentos sonoros y audiovisuales (2007). Trabajó en el Archivo del Fondo Nacional de Vivienda SocialFONVIS (1997-2003), la Biblioteca de la Escuela Militar de Ingeniería (2003), Pasante del Archivo Central del Fondo Nacional de Inversión Productiva y Social (2003), la Biblioteca y Archivo de la Gran Logia de Bolivia (2004-2005), el Archivo de la Superintendencia de Valores y Seguros (2005, 2009 al presente). Como Consultora elaboró el Manual de Organización, Clasificación y Administración del Archivo Fonográfico de la Fundación Simón I. Patiño (2006-2007) y el de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (2009). Fuente: CV.

GONZÁLES ROJAS, MARÍA FANNY

(Mizque, Cochabamba, 24 de noviembre de 1962) Secretaria Ejecutiva de Archivos Franciscanos de Bolivia, en la ciudad de Cochabamba. Apoyando al P. M. Valcanover*, director provincial del Archivo Nacional Franciscano, en la ardua tarea de concentrar los archivos franciscanos en Cochabamba. Realizó un estudio histórico y técnico de los archivos de la Orden Franciscana en la Provincia de San Antonio de Bolivia, cuya síntesis fue presentada como ponencia al II Simposio sobre Bibliotecas y Archivos del Área Franciscana en América, España y Portugal. Publicaciones archivísticas: “Iniciativas actuales de acopio y salvaguardia de la memoria histórica en los Archivos de la Provincia Franciscana de Bolivia” (Nuevo Mundo, Buenos Aires, 2004/2005, 5/6: 615-644); “Iniciativas de acopio y salvaguardia de la memoria histórica en los Archivos Franciscanos de Bolivia” (Bolivia Franciscana. Revista de la Provincia Misionera de San Antonio en Bolivia, Cochabamba, 2009, 9 (9): 267-283). Fuente: CV.

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GOYENECHE Y BARREDA, JOSÉ MANUEL DE (Arequipa, 12 de junio de 1776. † Madrid, 1846)

Militar, diplomático y político. Nació en el seno de familia acomodada, perteneciente a nobleza criolla. Estudió la carrera de Filosofía, graduándose como Licenciado y Doctor en Filosofía (1795), pero se inclinó por la carrera militar. A los ocho años ingresó como cadete en el 1° Batallón de las Milicias de Arequipa, Teniente en la 4° Compañía del Regimiento de Milicias de Caballería de Cumaña (1783), Cadete de milicias en Sevilla (1788), Capitán del Regimiento de Granaderos del Estado, tras pagar 80.000 reales (1795), Coronel de Milicias Disciplinadas de Arequipa (1805), Brigadier del Ejército (1808), Capitán General del Ejército de la Provincia del Cusco, Coronel del  Cuerpo de Arribeños de Buenos Aires (1808), Mariscal de Campo (1811), Teniente General del Ejército (1814). Actuó en la defensa de Cádiz durante el bombardeo por la escuadra inglesa de Nelson (1797 y 1800). Fue enviado por la Junta Central de Sevilla como Representante Plenipotenciario del Gobierno legítimo de España, con instrucciones de asegurar la proclamación del Rey Fernando VII en el Virreynato del Río de la Plata y del Perú. No fue bien recibido, pues llevó también una comisión de la Infanta Carlota de Borbón. Se dijo de él que “fue bonapartista en Madrid, federalista en Sevilla, en Montevideo aristócrata, en Buenos Aires realista puro y en el Perú tirano”. El Virrey Abascal* le concedió la presidencia provisoria de la Real Audiencia de Cusco y fue nombrado Oidor de la Real Audiencia de Lima (1814). Ante los acontecimientos del 25 de mayo de 1809 de Charcas y la sublevación del 16 de julio de La Paz, el gobernador de Potosí F. de Paula Sanz* pidió auxilio al virrey del Perú. Abascal, nombró a Goyeneche como Comandante en Jefe del Ejército Pacificador, al mando de 5000 milicianos de  casta e indígenas de Cusco, Arequipa y Puno, marchando a La Paz. La Junta Tuitiva de La Paz se disolvió y Goyeneche logró un acuerdo con J. Indaburu, segundo de Murillo, por lo que fue apresado y muerto (19 de octubre). Goyeneche derrotó a las fuerzas de Murillo en los Altos de Chacaltaya (25 de octubre) y envió a su primo el coronel Domingo Tristán en persecución de los rebeldes a los Yungas. Restableció el orden y condenó a ocho a pena de muerte y a quince a prisión. Murillo, Graneros, Sagárnaga y García Lanza* fueron ejecutados el 29 de enero de 1810. Ante la Revolución argentina del 25 de mayo de 1810, Abascal ordenó la reincorporación del territorio de la Real Audiencia de Charcas al virreinato del Perú. El 13 de julio de 1810 creó el Ejército del Alto Perú, al mando al general Goyeneche. Goyeneche cruzó el río Desaguadero y batió a los patriotas en la Batalla en Guaqui (19 de junio de 1811), ocupó La Paz, Cochabamba, Chuquisaca y Potosí. Su victoria le valió la concesión del título de Conde de Guaqui, al que después se le añadiría la Grandeza de España de Primera clase, otorgado por el Rey Fernando VII (1 de agosto de 1815), además del título de “Vizconde del Alto Perú”. Marchó sobre Cochabamba, ocupó la ciudad, autorizó el saqueo a sus tropas y reprimió con crueldad a los jefes rebeldes, ajusticiando al gobernador Mariano Antezana y otros 7 oficiales. El 27 de mayo de 1812, su ejército masacró a las heroicas mujeres cochabambinas, que se le habían puesto al frente. Tras las consecutivas derrotas del general Pío Tristán en la Batalla de Tucumán y la Batalla de Salta, donde éste cayó prisionero con su ejército (1813), Goyeneche se replegó hacia Oruro y presentó su dimisión como General en Jefe y fue sustituido por Joaquín de la Pezuela*. Poco después regresó a la península. Los primeros

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refuerzos europeos llegarían al Perú en abril de 1813. A su regreso a España fue nombrado Teniente General de los Reales Ejércitos, Vocal de la Junta de Guerra de Indias, Vocal del Consejo de Guerra y Presidente de la Junta de Arreglo de Comercio de Ultramar. Fue elegido diputado a Cortes por Arequipa y Senador del Reino por la provincia de Canarias, Consejero Honorario de Estado, Senador Vitalicio, Prócer del Reino, Regidor Perpetuo de Cádiz, Comisario Regio del Banco Español de San Fernando. El Rey Fernando VII le nombró su Gentilhombre de Cámara con Ejercicio y Servidumbre y Caballero de la Orden Militar de Santiago. Fue condecorado con las Grandes Cruces de Isabel La Católica, de Carlos III, San Hermenegildo, Laureada de San Fernando y la Cruz de Comendador de la Orden Pontificia de San Gregorio Magno. Una calle en Madrid lleva su nombre. Su archivo se conserva en Aranjuez, en casa particular. Contiene información sobre las campañas militares del virrey Abascal y las del propio Goyeneche. Un catálogo preliminar fue elaborado por Carlos Malamud, quien consultó el archivo para su tesis La consolidación de una familia de la oligarquía arequipeña: los Goyeneche (Madrid, Revista Quinto Centenario, 1985). Parte de su contenido fue descrito en La Guía de fuentes para la historia de Iberoamérica (Madrid, Dirección de Archivos y Bibliotecas, 1969). Por otra parte, la Hoja de Servicios del Teniente General Goyeneche se encuentra en el Archivo General Militar de Segovia (España), Instituto de Historia y Cultura Militar del Ministerio de Defensa. Fuente: Serveto, 2010: 12-15; http://es.wikipedia.org (23.4.2012)

GOYOCHEA, MAMERTO (Potosí, 1944)

Trabajador de la Empresa Minera Unificada del Cerro Rico de Potosí. Inicia sus labores en la COMIBOL* en 1969. Fue Secretario de Conflictos del Sindicato de Metalurgistas (1972-1973). En 1976 fue retirado de la COMIBOL por causa político sindicales. Ingresa a la Planta Polimetalúrgica de Karachipampa como trabajador eventual (soldador) entre 1978 y 1979. Luego se traslada a la ciudad de La Paz en 1982 para trabajar en la Empresa GROBES como soldador. En 1985 fue invitado por E. Ramírez*, fundador del Sistema de Documentación e Información Sindical SIDIS, al mismo tiempo en el que F. Valdivia Antisolis* se desempeñaba como Director General, para apoyar en las labores de tratamiento archivístico. Organizó los documentos de los Congresos de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia FSTMB y armó una magnífica colección de documentos políticos desde la Tesis de Pulacayo hasta la Tesis de la Chojlla; elaboró un catálogo de dirigentes sindicales de las empresas mineras Unificada, Colquiri, Quechisla y Matilde (19861997). Fue retirado del SIDIS al mismo tiempo en el que E. Ramírez renunció a la dirigencia sindical junto a G. Dalence*. La colección de documentos políticos fue publicada en 1993 en los Cuadernos de Educación Sindical de la FSTMB, editada por el SIDIS. Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996). Goyochea (conocido en el medio como TinTan) actualmente es Secretario Ejecutivo de la Federación Nacional de Jubilados de Bolivia. Fuente: Información de Edgar Ramírez S.

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GOZÁLVES RÍOS, PAOLA ALEJANDRA (La Paz, 9 de marzo de 1980)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Fue auxiliar contable de la División de Gestión de Información y Documentación, de FACCIA STUDIO A y B (2002–2003). Participó en el Seminario de Fuentes para una Historia de los Orientes Bolivianos 1825–1940 que impartió P. García* (2003). Trabajó en el Archivo de La Paz* en el Proyecto Harvard, en la Clasificación y ordenación de documentos (2001), y en el Proyecto de organización del Archivo Histórico de la Casa Suárez* en Guayaramerín, Beni, dirigido por P. Gamarra* y L. Oporto* (2005). Trabajó en la organización del Archivo de la Dirección de Planificación del Servicio Nacional de Áreas Protegidas, SERNAP con J.C. Zurita* (2008). Fuente: CV.

GRADOS GORRITI, PAULO CESAR (30 de junio de 1973)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Es Técnico en Electricidad y Radio Tv, y Aplicaciones. Desde 1998 se desempeña como Profesor del área de Ciencias Sociales, nivel Secundario (Colegio Enrique Lindemann; Colegio Nacional Sica Sica, provincia Aroma). Ha sido Auxiliar de Docencia del curso preuniversitario de la Facultad de Humanidades UMSA (1999, 2001, 2002). Participó en el Seminario sobre la Ley del Sistema de Información (1997); Corrientes actuales en los museos Iberoamericanos. Unificación y armonización de la información de Archivos (1998); Curso Básico de Archivística para su aplicación en el censo guía de Archivos de La Paz y Oruro (2006). En el Archivo de La Paz* ha sido Encuestador del Censo Guía de Archivos de la ciudad de La Paz (2003) y Bibliotecario (2003-2005); asimismo participó en el traslado del Archivo a Villa Fátima, y de allí a su nuevo local (1996), en el rescate de documentación de la ex Fábrica Forno (1998), con diplomas de reconocimiento por estas labores; y rescate de documentación de la Corte Superior de Distrito (1999). Trabajó en el Archivo del Banco del Estado en Liquidación dependiente del Ministerio de Hacienda, donde organizó el Fondo Gerencia General de la Corporación Boliviana de Fomento (1997-1998). Publicaciones archivísticas: Paulo Grados y Lily Silvestre: “Recuperación e inventario preliminar del fondo Fábrica Forno” (Boletín del Archivo de La Paz, 1999, 18: 58-60); “Documentación y Biblioteca de un gran héroe de la Guerra del Chaco: Fondo Bernardino Bilbao Rioja” (Boletín del Archivo de La Paz, 2004, 21-22: 76-82). Fuente: CV.

GRAY MOLINA, JOSEPH LAWRENCE Economista. Autodidacta en la especialidad de Archivística. Fue jefe de Archivo de la Superintendencia de Bancos desde 1997, manteniéndose allí hasta el 2008. El 2010 fue designado Subgerente de Correspondencia y Archivo del Banco Central de Bolivia, el primero en ocupar dicho cargo en el ente emisor.

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GRUMBKOW, GEORGES B. VON (Alemania, S. XIX)

Fotógrafo e ingeniero civil. Acompañó a Charles Wiener durante su expedición científica de 1875-1877 a Perú y Bolivia. Algunas de sus fotografías sirvieron de base para las ilustraciones de la obra de Wiener Pérou et Bolivie, récit de viaje (1880). También acompañó a Alphons Stübel en sus viajes de 1875-1877 en Perú y Bolivia y al científico francés Theodore Ber en su visita a Tiwanaku (1876). Durante sus visitas registró fotográficamente sus impresiones de viaje por Tiwanaku, el Illimani, Corocoro, La Paz, Sorata, Calamarca, Cochabamba, Chuquisaca, Mejillones, Cotaña y el Beni, lo que hizo de él uno de los fotógrafos trajinantes que más viajó en esa época. Catorce de sus fotografías ilustran la obra de Stübel y Max Uhle Die Ruinenstätte von Tiahuanaco (1892), cuarenta y dos se encuentran en el álbum de Gildemeister (que se conservan en el Museo de Arte de Lima), y muchas están en las colecciones de Stübel en Alemania. Además, se reproducen varias fotografías de Grumbkow en Spurensuche, Zwei Erdwissenschaftler im Südamerika des 19º Jahrhunderts (1994), en el Study of the Stübel-Reiss expedition, editado por Andreas Brockman y Michaela Stüttgen y en los Registros del territorio: las primeras décadas de la fotografía, 1860-1880 (1997), de Natalia Majluf. Fuente: Buck, 1999; Querejazu, 2010.

GUACHALLA, LUIS FERNANDO (La Paz, 28 de julio de 1899. † 1986)

Abogado, diplomático y catedrático universitario. Estudió la educación secundaria en el Institut Robert de Bruselas. Estudió Derecho y Ciencias Sociales en la Universidad de Chile. Abogado (1924). Catedrático de Derecho Internacional Público y Privado (UMSA). Jefe de Redacción de El Diario. Encargado de Negocios en Chile (1929), Ministro Plenipotenciario en Paraguay (1930-1931). Se incorporó como reservista a la Guerra del Chaco, participando en la batalla de Cañada Strongest. Fue designado Ministro de Guerra (1934). Fue enviado como Ministro Plenipotenciario (1936) y Embajador (1940-1943) en Estado Unidos. Fue Embajador ante las Naciones Unidas (1952). Desterrado a Chile, retornó al país en 1965. En vida reunió papeles de su actuación diplomática y epistolario, además de sus obras inéditas, originales y recortes de prensa (1895-1954). La colección fue entregada al Archivo de La Paz* por Fernando Prado y fue catalogada por Jorge Velarde. Fuente: Barragán, 2008: 132; Velarde, 2008.

GUAMÁN POMA DE AYALA, FELIPE (Región de Huánuco, Perú, c. 1534. † 1615)

Cronista peruano, dedicado a la enseñanza de la lengua castellana a los indígenas. Autor de una Nueva crónica (1600), compendio de la historia preincaica del Perú, y de su continuación, Buen gobierno (1615), muestra las injusticias que encomenderos y funcionarios de la corona infligían a los indios. Está ilustrada con dibujos del mismo autor. La obra escrita y dibujada entre 1583 y 1615, en 1200 páginas con

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400 ilustraciones recoge las fuentes primarias de su época. Describe las funciones de los quipucamayoc (responsables de administrar el registro contable del quipu) y de los amawtas (sabios que guardan la memoria oral del Incario); así como las funciones de los chasquis y cachas, ayudantes de ambos custodios de la memoria inca. Su historia es fascinante: fue descubierta por Richard Pietchmann en 1908 en la Biblioteca Real de Copenhage. Paul Rivet publicó una edición facsimilar en 1936. John V. Murra y Rolena Adorno publicaron una edición transcrita y anotada, con traducción y análisis del quechua por Jorge Urioste y los vocablos del aymara por Vitaliano Huanca. Murra considera que fue “el descubrimiento más importante del siglo para el conocimiento del mundo andino, una contribución sin igual entre las fuentes primarias”. Publicaciones archivísticas: Nueva Coronica y Buen Gobierno, pássim. Fuente: Soria Galvarro, 2010: C8; www.biografíasyvida.com

GUERRA LUNA, ELIANA

(La Paz, 7 de diciembre de 1973) Licenciada en Bibliotecología (UMSA). Programadora de sistemas. Trabajó en el escaneo de documentación del archivo de Capitalización (Ministerio de Hacienda), tuvo un contrato eventual en el Archivo del BID; Biblioteca del MUSEF; Asistente de Archivo y correspondencia de la ASFI (2007-2010). Encargada de Archivo en la Gobernación de Pando (2010). Fuente: CV.

GUERRA LUNA, MARÍA DEL ROSARIO GLADYS (La Paz, 19 de julio de 1961)

Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información, Mención Documentación (UMSA), Diplomado Superior en Gestión Documental (2001), Administración de Recursos Humanos (2001), Gestión y Competitividad en las Organizaciones (2002) y Marketing (2002). Magíster en Administración de Empresas (2002). Fue Documentalista del Instituto Boliviano de Cultura (1980-1985). Responsable de la Sección Documentación del CEDOIN* (1987-1998); Encargada de Microfilmación y Sistematización del Archivo y Biblioteca del Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (1985-1987). Es Responsable del Centro de Información y Documentación y Archivo Nacional de la Defensoría del Pueblo (desde 1998). Fuente: CV.

GUERREROS BURGOA, JOHNNY TITO (La Paz, 21 de diciembre de 1979)

Licenciado en Antropología y en Historia (UMSA). La tesis de esta última carrera, Los tres rostros del Gran Poder: de la festividad a la fiesta. La consolidación de los festivo–popular en la ciudad de La Paz en el siglo XX, fue publicada por la Alcaldía Municipal de La Paz (2012). Participó en el 1er Encuentro Latinoamericano de Archivistas, Bibliotecólogos

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y Museólogos (2009), hizo los cursos de Diplomática de Documentos; y Digitalización de documentos. Ha sido Docente investigador y Supervisor General del Proyecto de Digitalización en el Archivo de La Paz* (2008-2009). Publicaciones archivísticas: “Entrega de la documentación digital a las comunidades del Departamento de La Paz” con Lourdes Uchanier y César Lunasco (DesArchivando, 2009: 6: 1011); “Informe final del proyecto de digitalización” (DesArchivando, 2009: 8: 5-6).

GUEVARA ARZE, WÁLTER

(Ayopaya, Cochabamba, 11 de marzo de 1912. † La Paz, 20 de junio de 1996) Estudió en el Colegio Nocturno Ayacucho. Fue Presidente de la Federación de Estudiantes de Secundaria. En 1931, estudió en la Facultad de Derecho. Fue Jefe del Archivo del Ministerio de Hacienda (1932), ocasión en la que fue movilizado al Chaco como secretario del Gral. Carlos Gumucio y participó en las acciones bélicas de Ibibobo (Villamontes). En posguerra trabajó como Jefe del Departamento Demográfico de la Dirección General de Estadística (1935). Fue Presidente del Banco Minero nombrado por el Presidente G. Busch*. Abogado, catedrático universitario, diputado, senador, ministro de Estado y diplomático. Redactó el Plan de Gobierno de G. Villarroel. Fue desterrado y exilado en numerosas ocasiones. Fue presidente de Bolivia entre el 8 de agosto y el 1 de noviembre de 1979. Fue cofundador del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) en 1941. Autor del célebre Manifiesto a los ciudadanos de Ayopaya (Tesis de Ayopaya, 1946) pieza fundamental del programa del MNR. Embajador en Francia, Venezuela y Naciones Unidas. Fue Ministro Secretario de Gualberto Villarroel (1944), de Gobierno, Justicia y Migración de H. Siles* (1958-1959), de Relaciones Exteriores y Culto de V. Paz* (1952-1956), H. Siles (1959-1960) y R. Barrientos* (1967-1968). Fundó el Partido Revolucionario Auténtico PRA (1960) con el que fue candidato presidencial. Participó en el golpe que derrocó a V. Paz Estenssoro (1964). Siendo presidente del senado, fue designado por el Congreso como Presidente constitucional interino de la República (1979). En su gobierno, Marcelo Quiroga Santa Cruz inició un juicio de responsabilidades contra el ex-dictador H. Banzer*, que provocó el golpe de Estado del Cnl. Alberto Natush, la misma noche que Bolivia logró respaldo continental a su reivindicación marítima en la Asamblea de la Organización de Estados Americanos* realizada en La Paz. En 1980 terció en las elecciones como candidato presidencial, pero salió al exilio tras el golpe de L. García Meza* Se reintegró al MNR en 1989 como candidato vicepresidencial de G. Sánchez de Lozada* Fue un autor prolífico que cultivó el cuento (Tempestad en la Cordillera, 1979), temas políticos (Bases para replantear la revolución nacional, 1988), y marítimos (Radiografía de la negociación con Chile, 1978; Radiografía de la negociación del gobierno de las Fuerzas Armadas con Chile, 1988; y La cuestión marítima al finalizar el siglo XX , 1992). Su faceta archivística señala que a sus 20 años, mientras estudiaba en la Universidad, fue designado Oficial del Archivo del Ministerio de Hacienda, cargo al que retornó por breve tiempo luego de su desmovilización del Chaco (15.8.1935). Fue reemplazado en el cargo por Alejandro Aramayo. Sin embargo, lo más significativo es que como resultado de su actividad política y pública formó un importante archivo, conformado por 17 metros lineales de documentos textuales, fotografías, diapositivas, audiviosuales, recortes de prensa, cuya organización técnica fue

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realizada por G. Molina* y F. Chuquimia*. El 8 de marzo de 1996, en su domicilio, entregó sus documentos al Banco Central de Bolivia*, para su transferencia al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, refiriéndose que fue “el último capítulo de su vida pública”, concretado gracias a la exitosa gestión realizada por el director, R. Arze*. Fuente: Fernández, et. al, 1996: 483-494; Guevara, 1935; Guevara, 1992; Guevara, 1996; La Razón, 1996: A8; Última Hora, 1996: 20; http://es.wikipedia.org (28.05.2010).

GUEVARA DE LA SERNA, ERNESTO “CHE”

(Rosario, Argentina, 14 de junio de 1928. † La Higuera, Valle Grande, Santa Cruz, Bolivia, 9 de octubre de 1967) Médico argentino, nacionalizado cubano. Ingresó como médico a las filas de Fidel Castro (1955), invadió la isla con la expedición del Granma (diciembre de 1956). En diciembre de 1958 participó en la toma de Santa Clara; el 7 de febrero de 1959 es declarado ciudadano cubano, asume la presidencia del Banco Central de Cuba y firma los billetes como “Che”. Segundo hombre en la República Socialista de Cuba, participa en Punta del Este, con un histórico discurso sobre la Alianza para el Progreso; visita el mundo socialista de esa época, denunciando en foros internacionales el ‘colonialismo norteamericano’. El 3 de octubre de 1966 Fidel asombra al mundo entero dando lectura a la carta de despedida del ‘Che’, quien llegó a Bolivia el 3 de noviembre de ese año y el 7 inicia la campaña guerrillera. Once meses más tarde, el 8 de octubre, sostiene un último combate con una tropa de ‘Rangers’ del ejército boliviano. En la refriega cae herido y es apresado. Trasladado a una de las aulas de la escuela de la Higuera, es interrogado por militares y un agente de la CIA. Desde La Paz se transmite la orden de su ejecución, tarea que cumple por orden superior un suboficial que dispara una ráfaga sobre el cuerpo indefenso del ‘Che’. El ‘Che’ llevaba consigo lo que vendríamos a llamar como “El Archivo oficial de la Guerrilla”. El 8 de octubre, cuando fue apresado, militares del ejército encontraron entre sus pertenencias una mochila verde olivo que contenía un cuaderno corriente de color rojo, tamaño carta, anillado y una agenda alemana muy fina. En la tapa del primero un militar escribió: “8-Oct-67.- Encontrado dentro la mochila. Diario del 7 Nov. 66 al 8 Oct. 67- Reverso.- Proclamas.- Proclamas, informativos y mensajes”, transcripción errónea pues menciona que el documento contiene el diario desde el 7 de noviembre de 1966 hasta el 8 de octubre de 1967, cuando en realidad este cuaderno solo abarca desde el 7 de noviembre hasta el 31 de diciembre de 1966. El resto está en la agenda. El mismo día que se incorpora a la guerrilla, el 7 de noviembre de 1966, el comandante ‘Che’ Guevara empieza a escribir su diario, en el cuaderno anillado: “Hoy comienza una nueva etapa. Por la noche llegamos a la finca. El viaje fue bastante bueno. Luego de entrar convenientemente disfrazados por Cochabamba…”. Cierra el 31, con el Análisis del Mes: “Se ha completado el equipo de cubanos con todo éxito; la moral de la gente es buena y solo hay pequeños problemas (…)”. El cuaderno, analizado por el servicio de inteligencia, fue numerado con lápiz de color rojo. Empieza con la página Nº 1, correspondiente al anverso del cuaderno que trae la primera anotación del ‘Che’, referida a las incidencias del 7 de noviembre de 1966. La paginación se interrumpe en el Nº 30, que corresponde al 31 de diciembre, con la

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última anotación de ese año. Continúa en el reverso, con el Nº 31 (primer mensaje cifrado; sin fecha) y se prolonga hasta la página 81, que trae el mensaje Nº 39 suscrito por Ariel, enviado a Ramón (seudónimo del ‘Che’), fechado en agosto 26 de 1967. El cuaderno rojo tiene doble finalidad, pues además de servir para las anotaciones del diario de dos meses iniciales de la campaña, en el reverso incorpora adiciones y correcciones de su puño y letra, hechas con bolígrafo negro, rojo y verde. Este cuaderno contiene los códigos de los mensajes cifrados que recibe, los mensajes que envía, un esquema que muestra una “cueva” y un “camino”, comunicados 1 al 4 (Al pueblo de Bolivia), 5 (A los mineros de Bolivia), todos con el epígrafe de “Ejército de Liberación Nacional”, un comunicado enviado por Inti, Comisario Político de la Jefatura del ELNB (Ejército de Liberación Nacional de Bolivia). En el último mensaje, Ariel, a tiempo de informar a Ramón (El Che) escribe con rabia acumulada: “OLAS constituyó Victoria, días revolucionarios. Delegación de Bolivia fue una mierda. Sostuvieron posiciones contrarios intereses guerrilla, la formaron Aldo Flores y Ramiro Otero del PCB, Mario Carrasco del PRIN y Dr. Ricardo Calvo del FLIN. Flores trató de aparecer como representante del ELN viéndonos necesidad desmentirlo. (…) Dr. Calvo informó casa dentista fue allanada y este se encuentra clandestino, Pensamos posible canje Debray y estamos dando pasos en este sentido. Saludos Ariel. Agosto 26”. Las anotaciones del Diario del comandante continúan en una hermosa agenda alemana, modelo 151, impresa por Herstellung Baier & Schneider para Karl Klipel de Frankfurt, con acabado en tapa dura forrada en cuerina, color borra de vino, que se vendía al precio de 9.90 marcos. En ella el Che escribió el 1 de enero: “Por la mañana, sin discutir conmigo, Monje me comunicó que se retiraba y que presentaría su renuncia a la dirección del partido el 8/1. Su misión había acabado, según él. Se fue con la apariencia de quien se dirige al patíbulo”. El 7 de octubre de 1967, escribió su última anotación, haciendo una evaluación de la campaña: “Se cumplieron los 11 meses de nuestra incorporación guerrillera sin complicaciones, bucólicamente, por las 12.30, hora en que una vieja, pastoreando sus chivos, entró en el cañón en que habíamos acampado y hubo que apurarla” (…). El Ejército dio una nueva información sobre la presencia de 250 hombres (…). La noticia parece diversionista”. El diario y los escritos del comandante Ernesto ‘Che’ Guevara, “son anotaciones, no escritas para la publicación, (que) le servían como instrumento de trabajo para la evaluación constante de los hechos, las situaciones y los hombres”, como señala Fidel Castro. Fueron considerados, por ello, como botín de guerra, así como su reloj “rolex”. La historia de los manuscritos es sencillamente apasionante, pues fue centro de atención del gobierno del general R. Barrientos Ortuño y la inteligencia norteamericana, lo que impidió temporalmente que fueran cedidos a las numerosas empresas editoras que ofrecieron ofertas millonarias para editarlo. En una acción audaz el propio ministro de gobierno, A. Arguedas*, entregó una copia en microfilm a La Habana. Al poco tiempo, para sorpresa de todos, Fidel Castro presentaba la edición cubana del Diario del ‘Che’, con una introducción de su autoría. Los manuscritos fueron custodiados celosamente en los archivos del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas, declarados en reserva con el rótulo de

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“Ultra Secreto”, hasta que la Casa Sotheby’s de Londres anunció el remate del Diario original, por encargo del gobierno del Gral. L. García Meza*. Luego de intensas negociaciones a cargo de un bufete de abogados, los preciados documentos fueron recuperados y a su retorno fueron entregados al Banco Central de Bolivia, para que sean custodiados en sus bóvedas de alta seguridad. El Gral. L. García Meza Tejada, condenado a la pena capital de 30 años de presidio sin derecho a indulto, entre numerosos delitos que se le imputó, está el de “Peculado”, es decir enriquecimiento ilícito con bienes del Estado, en este caso por la venta frustrada del Diario. Con motivo de conmemorar los 40 años del asesinato del Comandante Che Guevara, el gobierno mandó imprimir una edición facsimilar del Diario del ‘Che’ Guevara, con prólogo del presidente Evo Morales y la célebre Introducción a la edición cubana de Fidel Castro, que anteceden a los facsímiles, en un folleto de 27 páginas con los datos técnicos de la impresión. Un comité -conformado inicialmente por Rafael Bauzá, Mercedes de Armas, Antonio Peredo y C. Soria Galvarro*- presidido por el Ministro de Culturas Pablo Groux, asumió la delicada misión de publicar una edición facsimilar de los diarios y escritos del comandante Ernesto ‘Che’ Guevara. Tal como fue impresa constituye una verdadera obra de arte, pues reproduce exactamente, en los mínimos detalles, los dos manuscritos. El Cuaderno Rojo muestra las visibles señales del tiempo que han castigado al soporte original; con los rótulos que a mano alzada insertó un miembro de inteligencia tanto en el anverso como el reverso, replicando exactamente el material y el tipo de color original. La agenda fue también magníficamente tratada para la edición, con un alarde que se expresa en la huella indeleble de un cigarrillo que alguien dejó encendido y que dañó la cuerina original de la tapa, repujada en bajo relieve, identificando con claridad el año “1967”. Internamente, reproduce el troquel típico de la agenda, con ‘pestañas’ caladas por cada mes del año (empezando por ‘Januar’ y terminando en ‘Dezember’). Lleva un señalador de lectura en forma de cinta, de color beige. C. Soria aclara que el proyecto original consideraba una nueva trascripción que acompañaría a la publicación facsimilar, algo que no se concretó. En su comunicación personal menciona: “No dudo que la edición facsimilar es fantástica, creo que yo por ahí la llamo magnífica. Sin embargo es incompleta y comete errores como lo de borrar alguna numeración que pusieron los militares. Convendrás conmigo como profesional en estos asuntos que había que publicar el diario tal y como está en estos momentos. Sobre la edición digital tengo que aclararte que es iniciativa y responsabilidad exclusivamente mía, con ayuda de Beatriz (N. del A.: su hija) hicimos el trabajo de cotejar y con mi hijo Antonio hicimos la edición en hipertexto y la subimos al sitio www.chebolivia.org que también es un esfuerzo particular, sin ningún respaldo oficial u oficioso. Se trata de una edición boliviana del Diario del Che “que incluye documentos no publicados en ediciones anteriores y ha sido rigurosamente cotejada con la imagen digital de los originales eliminando errores tipográficos y otras alteraciones; lleva una introducción sobre la azarosa historia del diario; incorpora dos centenares de pies de página aclaratorios complementados con 127 fichas biográficas de los personajes mencionados”. El Diario del ‘Che’ trae una adenda con la lista de libros que leyó el comandante ‘Che’ Guevara y que pueden ayudar a responder esa vieja pregunta que se han hecho

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todos: ¿Conocía Bolivia el ‘Che’ Guevara? Interrogantes que se plantearon tanto miembros de inteligencia norteamericana, como historiadores y políticos. Algunos hechos como la elección del terreno y la excesiva confianza en el Partido Comunista de Bolivia, inducen a pensar que tenía un conocimiento muy general de Bolivia, de los partidos de izquierda y de los usos y costumbres de su pueblo. La lista fue analizada por C. Soria Galvarro, quien disertó en varios foros sobre su alcance y contenido, tales como el Encuentro de promoción del libro y la lectura “Al Sur de la Palabra”, Puerto Montt, 2005; Altagracia (Argentina) 2006 y en las Ferias del Libro de La Paz (2007), La Habana (2007) y Buenos Aires (2008). No era la primera vez que el ‘Che’ estuvo en Bolivia, pues llegó muy joven, en 1953, en plena fiebre revolucionaria “cuando el 6 de julio parte rumbo a Venezuela, pero la situación que encuentra en Bolivia y su posterior contacto con exiliados latinoamericanos en Perú le hace cambiar de idea”. Era un hombre ilustrado, lector empedernido que gustaba de lectura diversa. En la agenda encontramos en la sección final, destinada a notas (“Notizen”) una lista de 46 títulos; seguida de otra antecedida por fechas (día y mes) y la entrada principal por título, en el que anota un total de 26 (noviembre 1966), 5 (diciembre), 5 (enero 1967), 6 (febrero), 5 (marzo), 6 (abril), 2 (mayo), 2 (julio), 1 (agosto) y 1 (septiembre). ¿Qué autores de libros eran de su preferencia? La lista del diario nos permite aproximarnos con cierta certeza a sus libros de cabecera, ya sea para fines de formación ideológica, planeación estratégica, o el simple deleite de leer literatura. Todos los títulos tienen un fin. Entre los libros aptos para la formación ideológica, leyó a clásicos del materialismo histórico y el marxismo: Historia del colonialismo; y Contribución a la crítica de la filosofía del derecho de Hegel (Marx); El desarrollo del capitalismo de Rusia; y Acerca de algunas particularidades del desarrollo histórico del marxismo (Lenin); Dialéctica de la naturaleza; y Ludwig Feuerbach y el fin de la filosofía clásica alemana (Engels); Historia de la revolución Rusa; y La revolución permanente (Trotsky), En torno a la práctica (Mao); La cuestión nacional y el leninismo; El marxismo y el proletariado nacional y colonial; y Cuestiones de Leninismo (Stalin); Los marxistas (Mills), La organización Política (Cole), La nueva clase (Djilas), El joven Hegel y los problemas de la sociedad capitalista (Lukas), Categorías del materialismo dialéctico (Rosental y Stacks), Revolución en la revolución (Debray), La psicología de las Fuerzas Armadas (Charderrois), Internacionalismo y nacionalismo. Sobre el problema de la constitución de la República de China (Chi), Teoría general del Estado (Brothery), El materialismo histórico en F. Engels (Mondolfo). También se interesó en obras de filosofía y ciencia histórica: La filosofía griega (Boos), Heráclito, exposición y fragmentos (Fané), Lógica (Aristóteles), Los presocráticos, y Fragmentos filosóficos de los presocráticos (Bocca), De la naturaleza de las cosas (Abentofil), De la causa, principio y sino (Bruno), El príncipe, y Obras políticas (Maquiavelo), Elogio de la locura (Erasmo), Fenomenología del espíritu (Hegel), Historia de la filosofía (Dynnik), Del acto al pensamiento (Wallon), La ciencia de la historia (Bernal), La historia como hazaña de la libertad (Croce). Selectos títulos estaban destinados a su formación intelectual, y digamos para enriquecer sus ‘conocimientos generales’:

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La sociedad primitiva (Morgan), Memorias de guerra (De Gaulle), Memorias (Churchill), Memorias (Montgomery), La Luftwaffe (Becker), El proceso de Nuremberg (Heydecker), Diccionario de Sociología (Pratt), Fuerzas secretas (F.O.Mikcshe). Se interesó en la historia de América: Orígenes del hombre americano (Rivet), Túpac Amaru el rebelde (Lewin), La guerra de las republiquetas (Mitre), El pensamiento vivo de Bolívar (Blanco Fombona), El indoamericanismo y el problema social en las Américas (Lipschitz), Breve crítica de la revolución mexicana (Silva Herzog), Pancho Villa (Lavretski), Idioma nativo y analfabetismo (Pedrazas), La economía argentina (Feuer), Las 60 familias norteamericanas (Lindberg), Nacionalismo y socialismo en América Latina (Walsh) y El pensamiento latinoamericano (Santiago de Chile). No podían faltar obras sobre Bolivia, el país elegido para importar la revolución, entre ellos libros de Historia: Viaje a la América Meridional (d’Orbigny), Nuestros banqueros en Bolivia (Marsh), La guerra de 1879 (Gutiérrez), Historia económica de Bolivia (Peñaloza); Política y partidos en Bolivia (Anaya), Petróleo en Bolivia (Almaraz); Pueblos indígenas: Sobre el problema nacional y colonial de Bolivia (Ovando), Estadística de la población indígena de Bolivia (Pando Gutiérrez), La cultura de los inkas (Lara), Costumbres y curiosidades de los aymaras (Valda), El Iténez salvaje (Leigue); y Literatura: La Villa Imperial de Potosí (Brocha Gorda), Juan de la Rosa (Aguirre; al que anota erróneamente como Nataniel Rodríguez), La candidatura de Rojas (Chirveches), Raza de Bronce (Arguedas), Aluvión de fuego (Cerruto), Socavones de angustia (Ramírez), El cuento boliviano y El dictador suicida (Céspedes). No descuidó tratados de física y medicina, en el que se ve su interés por su desarrollo en Estados Unidos: La física del siglo XX (Jordán), Fundamentos biológicos de la cirugía; Clínicas quirúrgicas de Norteamérica; Anestesia. Finalmente, para mera distracción: El lazarillo de ciegos caminantes (Concolorcorvo), Orient Express (Greene), En la ciudad (Faulkner), La legión de los condenados (Hassel), Romancero Gitano (Lorca), Cantos de vida y esperanza (Darío), La campana maravillosa (Inclan), El pensamiento de los profetas (Mattuck), Misiones secretas (Skarzeny), La cartuja de Parma (Stendal), La vida es linda y hermosa (Hikmet), Humillados y ofendidos (Dostoyevsky), Tiempo arriba (Gravina), La compuerta No 12 y otros cuentos (Lillo), Todos los fuegos (Cortazar), Aguafuertes porteños (Arlt), La neveu de Rameau (Diderot), El Embajador (West), y De fouille (Ashcroft). Fuente: Oporto, 1987a; Oporto, 2010; Soria Galvarro, passim; Comunicación personal de Carlos Soria Galvarro (7.02.10).

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GUILLAUME, JULIEN (Francia)

Según Deborah Poole, era “un especialista en fotografía antropométrica del servicio Antropométrico de Alphonse Bertillon en la Villa de París”. Fue enviado a Bolivia con la Misión Científica Francesa de 1903, bajo la dirección del antropólogo físico francés Arthur Chervin “para estudiar la ‘fisiología racial’ de los indios bolivianos, cholos y mestizos”. Obtuvo fotografías (cartas de visita y otras de gran formato) de varios miembros de la misión científica francesa y de colecciones de otros fotógrafos que habían trabajado anteriormente en Bolivia. Por ejemplo, las imágenes atribuidas a R. Villalba* (ca. 1870), aparecen entre las cartas de visita que Guillaume llevó consigo a Francia. También hizo sus propias fotografías, el portrait parlés (retratos hablados), que combina una imagen con “un conjunto de descripciones verbales y estadísticas”, usando técnicas parecidas a las que emplea la policía en el registro o declaración de un sospechoso. El objetivo de Chervin fue, según Poole, “evaluar el ‘futuro racial de Bolivia’ por medio de la ‘clasificación por categorías y comparación de tipos raciales’. Las fotografías de Guillaume aparecen en la obra de Bertillon y Chervin: Anthropologie métrique: Conseils pratiques aux missionaires scientifiques sur la manière de mesurer, de photographier et de décrire des sujets vivants et des pièces anatomiques (1909), así como en la obra de PooleVision, Race, and Modernity: A Visual Economy of the Andean Image World (1997). Fuente: Buck, 1999.

GUITERAS MOMBIOLA, ANA

(Castellterçol, Barcelona, España, 7 de junio de 1982) Licenciada en Historia (2005) y Doctora en Historia de América, por la Universidad de Barcelona. Investigadora del Taller de Estudios e Investigaciones AndinoAmazónicos (TEIAA) adscrito al departamento de Antropología Cultural e Historia de América en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Barcelona (desde el 2008). Llegó a Bolivia para realizar su tesis de Doctorado, ocasión en la que trabajó en el Archivo Prefectural del Beni, ayudando en su clasificación y ordenación. Es la primera vez que ese archivo se abrió a los investigadores. Publicaciones archivísticas: “El archivo de la prefectura del Beni. Un fondo documental por descubrir” (Fuentes, 2010, 4 (7): 14-18). Fuente: CV.

GUTIÉRREZ, JOSÉ ROSENDO

(La Paz 1 de marzo de 1840. † La Paz, 22 de septiembre de 1883) Fue educado por padres adoptivos. Estudió en el Seminario Conciliar de San Jerónimo, el Ateneo de La Paz y la Universidad Mayor de San Andrés (La Paz). Abogado, Doctor en Derecho y Ciencias Políticas (1863), internacionalista, historiador, bibliógrafo, periodista, papelista, dramaturgo, diplomático, polemista. Inspector General de Instrucción Primaria (1860), profesor del Ateneo “Bolívar” y Colegio Nacional “Ayacucho”. Catedrático de Derecho Civil en la Facultad de

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Leyes, rector del Colegio Ayacucho, Vicecancelario de la Universidad de La Paz. Muy joven fue Diputado durante el gobierno de Mariano Melgarejo (1863; 1864; 1870), convirtiéndose en defensor oficioso del Tratado con el Brasil que suscribió aquel, quien lo designó Encargado de Negocios en Chile (1866-1870), miembro de la Comisión Investigadora de Títulos de la República para las cuestiones de Límites (1872), Prefecto de La Paz (1868) y representante ante la Constituyente (1868), como lo sería luego en 1877 y 1878. A la caída de Melgarejo fue proscrito a Tacna (Perú), a su retorno fue Presidente del Ayuntamiento de La Paz (1873, 1882), Fiscal General Administrativo de la República (el único en Bolivia); Secretario General del Ejército con el Presidente Hilarión Daza, durante la Guerra del Pacífico (27 de septiembre al 27 de diciembre de 1879), Convencional (1880-1881), Senador por La Paz (1882), vocal de la Corte Suprema, Fiscal General y miembro de las Altas Comisiones de Negocios Extranjeros y de Consulta sobre Revistas de Tierras. Socio correspondiente de varias corporaciones científicas y literarias, como la Sociedad Internacional Latino-HispanaLusitana (1877), Instituto Geográfico e Histórico del Brasil, Sociedad Geográfica de Lisboa, Sociedad Internacional para el Progreso de las Ciencias Sociales de Bruselas, Sociedad de Americanistas, Liga de la Enseñanza Universal (correspondiente de la Real Academia Española), Sociedad Internacional Hispano Americana (fundador), Instituto Histórico del Brasil. Fundador de la Sociedad Obreros de “El Porvenir”, presidente de la Asociación “Julio”, fundador y presidente de la Sociedad Aymarista de La Paz, socio de la Sociedad Progresista. Recibió las condecoraciones de la Orden de la Rosa del Brasil en el grado de Comendador, Caballero de la Orden Leopoldo de Bélgica y Caballero de la Legión de Honor de Francia. Fue un notable bibliógrafo, lo que le llevó a organizar una formidable biblioteca con la que elaboró un estudio bibliográfico y bibliométrico, el primero en su género en Bolivia, Datos para la bibliografía boliviana. Sin embargo, debido a su proximidad a Melgarejo, a la caída de éste, las masas populares le cobraron su adhesión, incendiando gran parte de su biblioteca y archivo. “Las cuentas (de) la campaña del Sr. Melgarejo emprendida contra Potosí, se asegura (…) que fueron consumidas por el incendio de una de las casas de La Paz, en el día del combate”, afirma Barnadas. A él se debe la recolección de manuscritos sobre el Cerco de La Paz (1781), entre los que se encuentran el Diario del Teniente Coronel José de Reseguín y el Diario del Capitán Ledo; Diario de D.F Castañeda; Información sumaria de los hechos acontecidos en Cochabamba y un fragmento que refiere a los acontecimientos del Cusco; también dejó la memoria histórica de la revolución del 16 de julio de 1809. Elaboró una Bibliografía de los manuscritos de su biblioteca que ha quedado inédita. Esta colección, que lleva su nombre, fue ofertada al Estado en 1926 y transferida a la Biblioteca Central de la UMSA. Se trata de “2342 manuscritos, 15 corresponden al siglo XVI, 37 al XVII, 132 al XVIII, 2003 al siglo XIX y el resto son manuscritos sin fecha”, como informa José María Salinas. La Academia Boliviana de la Historia afirma que escribió La Creación de Bolivia, atribuida a Sabino Pinilla. Publicaciones archivísticas: Documentos para la historia antigua de Bolivia, sacados de la Biblioteca de J.R. Gutiérrez. Sitios de La Paz y el Cuzco, 1780-1781 (La Paz, Imprenta de la Unión Americana, 1879. Tomo I). Fuente: Alarcón, 1925: 386; Ballivián, 1977: IV; Barnadas, 2002: I, 985-986; Costa de la Torre, 1968: 547-548; Salinas, 1949, I: 173; Valle, 1980; Valle, 1990.

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GUTIÉRREZ BEDREGAL, REYNALDO (La Paz, 23 de septiembre de 1960)

Contador General y Técnico en Bibliotecología. Trabajó en el Banco del Libro como Catalogador, circulación y referencista; elaboración del Catálogo discográfico y películas de 16 mm. del Banco del Libro (1992). Actualmente desempeña como Encargado de Documentación del Museo Nacional de Arte, repositorio dependiente de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia*. Fuente: CV.

GUTIÉRREZ GUERRA, JOSÉ

(Sucre, 5 de septiembre de 1869. † Antofagasta, Chile, 3 de febrero de 1929) Economista, con estudios en Londres (Inglaterra). Trabajó en la banca privada y fue Diputado por el Partido Liberal (1914). Sucedió en el poder a Ismael Montes, siendo elegido presidente del último régimen liberal (1917-1920). Promulgó el Reglamento del Ministerio de Guerra (DS de 15 de abril de 1919), que incluyó el primero referido a Archivos Militares, con una descripción de las tareas técnicas, funciones del jefe de Archivo, correspondencia e Informaciones y regulaba el servicio fedatario. Fue derrocado por un golpe de Estado urdido por B. Saavedra Mallea*. Fuente: Boletín Militar, 1919; Oporto, 2006: 170-171.

GUTIÉRREZ MUÑOZ, CÉSAR (Lima, Perú, 30 de abril de 1945)

Archivero e historiador. Archivero de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Director fundador del Archivo Histórico Riva-Agüero (PUCP 1975-1979). Secretario Ejecutivo de la Asociación Latinoamericana de Archivos* ALA (1980-1982). Jefe del Archivo General de la Nación (1986-1988). Presidente del Comité de Archivos del Instituto Panamericano de Geografía e Historia*, IPGH (1990-1996). Miembro ordinario del Instituto Riva-Agüero/PUCP (1964). Miembro de número de la Academia Nacional de la Historia del Perú (1998) -donde edita el boletín electrónico Noticias de la Academia- correspondiente de la Real Academia de la Historia (España) y de la Academia Nacional de la Historia (Argentina). Miembro de número de la Academia Peruana de Historia Eclesiástica (1996). Fue discípulo de A. Tanodi* y V. Cortés*. Fundador del Grupo Esperanza, que aglutina en su seno a becarios de los cursos de Madrid, España y Córdoba, Argentina. Docente de Archivística, Paleografía, Diplomática en la Universidad Católica del Perú (1972-1994). Promotor y director del Fondo Pro Archivo, que edita la colección Opúsculos del Fondo Pro Archivo (desde 2004). Participa como expositor en diversas reuniones nacionales e internacionales de su especialidad. Presenció el acto de inauguración del edificio del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (31 de octubre de 2002). El 10 de mayo de 2006 -Día del Archivero Peruano- recibió la Medalla de Honor del Archivo General de la Nación; se le concedió el Diploma y la Medalla “Ricardo Palma” de la Universidad Ricardo Palma (Surco: 22 de agosto de 2007). Periódicamente viaja por el Perú para conocer de cerca la realidad archivística de su país. Ha prologado Gunnar Mendoza

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y la construcción de la archivística boliviana (L. Oporto*, La Paz, La Pesada, 2004). Al retirarse del servicio archivístico el 30 de abril de 2010, al cumplir exactamente 65 años de edad, prometió “no ocuparme más de lo que siempre hice, de los archivos”, promesa incumplida pues continuó dirigiendo el destino de los archivos del Perú y viajando intensamente por el Perú y el exterior, siempre visitando archivos. Fue uno de los diez mil invitados a la excéntrica y pomposa ceremonia de bodas del Príncipe Guillermo de Inglaterra y Kate. A su retorno (2011) pasó una corta estadía en La Paz (Bolivia), oportunidad en la que visitó el Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional*, el Archivo del Ministerio de Economía y Finanzas, el Archivo de La Paz* y el Sistema de Archivo de la COMIBOL*, ocasión en la que E. Ramírez*, jefe de dicho repositorio, lo designó “miembro honorario del Sistema de Archivo de la Comibol”. En su correspondencia de 12 de octubre de 2009 al autor de este Diccionario, afirma: “quizá el único mérito para incluirme en su lista sea mi antiguo cariño a Bolivia y mi demostrado aprecio al trabajo de sus archiveros”. Publicaciones archivísticas: 1. Materiales de enseñanza: Descripción de documentos archivísticos (1982), Textos para el estudio archivístico, con Rolf Ángel (1986) y Archivística (1991). 2. Opúsculos: El archivo universitario (1994), Archivero, pues (1999), Archivísticas (2001). En Fuentes (2005, 18: 212) reproducimos: “Juan Pablo y los Archivos”. 3. Ediciones del Comité de Archivos del IPGH: Accesibilidad a los documentos archivísticos: opiniones y lineamientos (1994), Nuestra palabra: textos archivísticos panamericanos (1996) y El archivo, los archivos: textos archivísticos panamericanos (2001). 4. Boletín informativo mensual: Mundo Archivístico (1983-1985, 33 números). Boletín electrónico El emilio archivístico (desde 1999). 5. Artículos: “El archivero” (Anuario del ABNB, 2002: Sucre, 2002: 495-498); “El cumpleaños de Don Aurelio Tanodi” (Boletín del Archivo de La Paz, 2004, (21-22): 6-9). Fuente: CV; Oporto, 2010b; Comunicación personal de C. Gutiérrez.

GUTIÉRREZ SILES, FREDDY PACÍFICO (La Paz, 24 de enero de 1962)

Licenciado en Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA). Hizo el Diplomado de Gestión de la Documentación y Archivos (Universidad Loyola), Diplomado en Gestión de Archivos (UMSA). Participó en el Panel: los Archivos y la Sociedad (1995); Archivística y Preservación del Patrimonio Histórico (1996); Jornadas Paceñas de Bibliotecología y Archivística (1995); Congreso Departamental de la Asociación de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996); I Taller Departamental: Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006); IV y V Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2007-2009); 1er. Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano (2008); Mesa Redonda ‘9 de Septiembre día Aciago de la Destrucción de la Memoria Cruceña’ (2008); Seminario Internacional: Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Importancia de su Rescate para el Desarrollo Nacional (2008); El Archivo Fílmico y su Rol en la Preservación de la Memoria Contemporánea (2008); Organización y Técnicas de Archivo (2010). Trabaja en la UMSA desde 1983. Es autor del Proyecto de Implementación y Creación del Archivo Central Contable Financiero (DAF), aprobado con Resolución del Honorable Consejo Universitario No. 665/2009 (2009), del que es responsable de su ejecución. Fuente: CV.

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GUTIÉRREZ VALENZUELA, ALFREDO

(Sucre, 14 de dicembre de 1901. † Sucre, 11 de diciembre de 1972) Abogado y Embajador. Doctor en derecho, ciencias políticas y sociales. Periodista. Escribió en La Industria, La Libertad y La Capital. Tuvo destacada carrera diplomática, como Secretario de la Comisión de Propaganda de Bolivia en Bélgica e Italia, Cónsul en Amberes (Bélgica), Consejero de la Legación en el Gran Ducado de Luxemburgo y en el de Bélgica. Publicó una Revista sobre la guerra del Chaco en francés que circuló en Europa. Fue Director del Archivo Nacional de 1920 a 1925 y dirigió el Boletín y Catálogo del Archivo General de la Nación (T. 4, Nº 28, ago. 1920-T.4, Nº 61, mar. 1923; T. 1, Nº 1, junnov. 1923-T. 5, Nº 6, ene-jun 1925). Nuevamente asumió la dirección esta vez del Archivo y Biblioteca Nacionales* (1943-1944), ocasión en la que publicó el último número de la Revista de la Biblioteca y Archivo Nacionales, que iniciara M. Santivañez* en 1936. En abril de 1944 fue reemplazado por G. Mendoza*. Siendo Prefecto y Comandante de Chuquisaca (1949), fundó el Comité de Reconstrucción de la Ciudad de Sucre, debido al sismo que asoló a esa capital en marzo de 1948. Miembro del Instituto Panamericano de Geografía e Historia*, miembro de honor del Círculo Cultural Tolosano; y representante y delegado de la Asociación de Bibliotecarios Argentinos. Lleva su nombre un Museo dependiente de la UMSFX de Chuquisaca que contiene valiosos muebles del siglo XIX de madera fina como jacarandá y ébano con tapices de brocato y gobelinos, porcelanas finas, espejos biselados, esculturas en mármol y alabastro, arañas, apliqués y candelabros de bronce adornados con cristal de roca. Fuente: Poppe, 2000: 15; Información personal de la Guía del Museo “Alfredo Gutiérrez Valenzuela”.

GUZMÁN BARRIOS, LUIS ALBERTO (Potosí, 5 de mayo de 1978)

Licenciado en Turismo de la Universidad Autónoma Tomás Frías (2008), Técnico Superior en Restauración y Cantería de la Escuela Taller Potosí (1996-1999). Participó en el seminario de Socialización Proyecto Minero San Bartolomé, patrocinado por la Universidad Autónoma Tomás Frías y Empresa Minera Manquiri (2005), y en el curso de capacitación de Métodos y Técnicas de Investigación, patrocinado por la Escuela Taller Potosí (2005). Trabajó en la Empresa Consultora “Hupa K’antaty” elaborando el inventario de atractivos turísticos de Puna, y en la organización de los archivos administrativos de aquella Alcaldía Municipal; como Encargado del banco de información bibliográfica para el Centro para el Desarrollo Regional. Actualmente presta servicios en el Archivo Regional de Potosí, dependiente del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

GUZMÁN SALVATIERRA, GUIDO

(Cochabamba, 12 de octubre 1952) Sociólogo (UMSS), Profesor Normalista en Educación Musical, con Diplomado en Estudios Andinos Bolivianos (FLACSO, La Paz, 1990). Ha participado en Seminarios sobre Historia Regional; Desarrollo de la Gestión Cultural en Cochabamba;

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Actualización Histórica de la Municipalidad de Cochabamba (organizado por el Archivo Histórico Municipal, 1995); Seminarios sobre Etnohistoria en Buenos Aires (Argentina, 1989) y Coroico (Bolivia, 1991), auspiciados por el Instituto Francés de Estudios Andinos y la Asociación de Estudios Bolivianos, a los que presentó ponencias sobre historia regional agraria. Publicó Patrones, Arrenderos y Piqueros. Estructura Agraria del cantón Toco-Cliza 1870-1910 (1994); “Análisis de la música de Carl Off sobre Carmina Burana” (1992); “Análisis sobre el desarrollo de la educación Musical en los colegios” (1990) y en la Colección Bicentenario de Cochabamba, 1810-2010, Crónicas de una Memoria. Cronología de las iniciativas y actividades sucedidas en el año del Centenario de 1910 (Cochabamba: H. Municipalidad de Cochabamba, 2010). Participó en el curso sobre Paleografía y Capacitación Archivística. Como paleógrafo participó en la elaboración del Catálogo de Expedientes Coloniales de Cochabamba, siglos XVI al XIX en el Archivo Histórico Municipal de Cochabamba (1994), y Mizque (2010). Es docente de la UMSS y Universidad Católica; profesor de Historia en los colegios Bolívar y Don Bosco. Es miembro de la Asociación de Investigadores Histórico Sociales y de la Asociación de Archiveros de Cochabamba. Fue encuestador del Censo Guía de Archivos de la ciudad de Cochabamba, organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso* (2003). Se desempeña como Asistente en Historia y Archivística en el Archivo Histórico Municipal “José Macedonio Urquidi”*.

Fuente: CV.

GUZMÁN SOLIZ, JORGE

(La Paz, 10 de julio de 1953) Trabajó en el Archivo histórico de la Cancillería (1972-1975). En 1976 participó en el IV Curso de Administración y Organización de Archivos Históricos* (con M. Chacón Tórres*) en Madrid (España), donde permaneció por un año con una beca del Instituto de Cultura Hispánica, para realizar prácticas de investigación histórica. Participó en el Seminario Nacional de Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (1993) y en el III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2011). Pasó a trabajar en el Archivo del Consejo Nacional de Edificaciones Escolares CONES (1977-1986); Archivo de la Empresa Nacional de Ferrocarriles (1986) hasta su liquidación (1994), debido a la política privatizadora del gobierno de esa época. En 1994 trabajó en la ONG Asociación XXI (Italia) en la Biblioteca del Seminario “San Jerónimo” (organizando la Biblioteca del Arzobispado de La Paz); continuó en la Biblioteca Municipal, en el Centro de Multiservicios en Salud y Educación (CEMSE) con el padre Jorge Trías y en la Biblioteca del Instituto Internacional de Integración con el embajador René Soria Galvarro. Organizó los archivos de once entidades en liquidación, que son de vital importancia para respaldar los trámites de jubilación, agrupadas en el Fondo de Vivienda Social en liquidación (1998-2005), donde encontró “la existencia de cinco contratos millonarios de consultoría para organizar esos archivos”, sin que el servicio hubiese mejorado. En 2010 pasó al Archivo Central del Ministerio de Hidrocarburos y luego al Archivo Central del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural (2012).

Publicaciones archivísticas: Boletín Histórico de Ferrocarriles (1986-1994), “Informe del Archivo del Consejo Nacional de Edificaciones (CONES)” (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 19-21). Fuente: CV; Cortés, 1985:122.

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GUZMÁN ZILVETI, MARCELO

(Monteagudo, Provincia Hernando Siles, Chuquisaca, 17 de marzo de 1984) Estudia la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en el III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios Archivistas y Museólogos (2011). En su experiencia laboral, hizo pasantías en el Archivo Histórico del Estado Mayor General del Ejército Boliviano (2006), y el Archivo de La Paz* (2007-2008). Se ha desempeñado como Auxiliar de Archivo en la Dirección de Planificación y Monitoreo Ambiental del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (2008) y luego como Técnico en el Archivo Histórico de la Fundación Flavio Machicado Viscarra* desde el 2010. Presentó un avance de dicha labor en la ponencia “Experiencia en un Archivo Familiar: El Archivo Histórico de la FFMV”, presentada al III EBAM, en coautoría con E. Navarro*. Participó en el comité editor del Boletín del Archivo de La Paz, Nº 23-24 (2008). Trabajos archivísticos: Coautor de la Guía del Archivo de La Paz (2008), innedito. Fuente: CV.

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H HAENKE, TADEO

(Kriská, Bohemia Septentrional, 5 de diciembre de 1761. † Cochabamba, 4 de noviembre de 1816) Sus primeros estudios los hizo en el seminario jesuita de San Wenceslao de Praga. Al principio estudió medicina (1712), pero se inclinó más por las ciencias naturales (1717). Luego entró al servicio de España, incorporándose a la expedición del capitán de fragata Alessandro Malaspina di Mulazo (1774-1810), pero no logró alcanzar al marino, por lo que embarcó a Buenos Aires por su cuenta, en 1789. Encontró a la expedición en Valparaíso en 1790, siguiendo con ella un periplo que lo llevó por el Callao, Ecuador, Panamá y México, Alaska, Islas filipinas y Australia, de donde siguieron a las Islas de los Amigos y regresaron por el Pacífico hasta Lima. En esta ciudad, desembarcó y posteriormente decidió abandonar la expedición para dedicarse a explorar la Amazonía peruana. Después pasó a Charcas, realizando expediciones al valle de Cochabamba, de donde no saldría más. Desarrolló su trabajo en plena guerra de la Independencia. G. Ovando* afirma que por su producción científica es considerado como el precursor de Alexander Von Humboldt y de Alcide d’Orbigny*, a tiempo de informar que “el valioso archivo personal de Haenke, todos sus escritos científicos, se dispersaron a su muerte. Seguramente parte de sus papeles fueron a dar al Archivo del Jardín Botánico de Madrid, donde en 1863, ha sido estudiado en forma preliminar, en momentos en que las ciencias que él cultivó han dado significativos saltos en su perfeccionamiento. Hay que reconocer que algo de sus trabajos científicos referentes a la América del Sur, se publicó en el siglo XIX, en periódicos, revistas, pequeños libros que hoy son rarísimos, verdaderas joyas bibliográficas difícilmente accesibles”. Su obra fue estudiada por E. O. Rück*, M.V. Ballivián* y Pedro Kramer. También se ocuparon de ella, José A. Ballivián, Belisario Díaz Romero, G. R. Moreno* y Nataniel Aguirre. En 1963, Josef Kühnel publicó una lista preliminar de su archivo que tiene unas siete mil páginas manuscritas en español, alemán y latín. Fuente: Arnade, 1954-1955; Ovando, 1974.

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HANHART, CARLOS (La Paz)

Abogado, diplomático, parlamentario, hombre de negocios. Fue auxiliar de la Comisión de Límites con el Brasil, pasó luego al Ministerio de Relaciones Exteriores como Auxiliar de la sección diplomática (1913). Se desempeñó como traductor de la Cancillería, Oficial 1 de Contabilidad y Clave, adjunto de la Legación de Bolivia en el Perú, Jefe de la Sección de Archivo y traductor, y Jefe de las Sección Consultar. En 1918 fue designado Jefe de la Sección de Archivo y Límites del Ministerio de Relaciones Exteriores. Reemplazó a Armando Chirveches en el cargo de Subsecretario de Relaciones (1920) y fue director titular de protocolo hasta 1920. Fue desterrado a Antofagasta por el gobierno de B. Saavedra*. Se dedicó luego al comercio en Oruro, donde fue elegido diputado, tomando a su cargo la Comisión de Hacienda de esa Cámara (1928), y participó en el Congreso Interparlamentario de París. Como periodista escribió en El Norte y el Tiempo. Fuente: Lecca, 1929: 135-136.

HANKE, LEWIS ULYSSES

(Oregon City, Oregon, EE.UU., 2 de enero de 1905. † Amherst, Massachusetts, EE.UU., 26 de marzo de 1993) Historiador, hispanista e hispanoamericanista. Profesor de las universidades de Hawai, Beirut, Harvard, Texas, Columbia, Irvine y Massachussetts. Fue director del Institute of Latin American Studies de la Universidad de Texas; primer Jefe y posteriormente Director de la División Hispánica de la Biblioteca del Congreso. Editor fundador del Handbook of Latin American Studies (1936-1940), por cuya labor se lo considera como el ‘Padre de los estudios latinoamericanistas’ en los Estados Unidos. Fue también director de la revista American Historical Review (1954-1960). Es el pionero en la edición de guías sobre archivos nacionales de América Latina, siendo la primera la que auspició el Joint Committee on Latin American Studies, elaborada por Roscoe R. Hill*. Se especializó en historiografía de Indias y publicó excelentes estudios sobre el padre fray Bartolomé de Las Casas (Bartolomé de las Casas, Pensador Político, Historiador, Antropólogo, 1949). A su retiro de la Universidad de Ahmerst, se dedicó a trabajar sobre Potosí colonial, ciudad que visitó por primera vez en 1935, encontrando a la Casa de la Moneda como centro de reclutamiento militar, en completo desorden y suciedad. Ya en 1956, su relación con G. Mendoza* le motivó a donar una importante colección de 12 microfilmes (1890 páginas) de manuscritos coloniales (1561-1572: extracto de los libros de cabildo de la Villa Imperial de Potosí, por V. Cañete*; 1582: Memoria de los caciques de la Provincia de los Charcas al Consejo de Indias; 1585: Relación general del Asiento y Villa Imperial de Potosí, por Luis Capoche; 1598: Información relativa a los servicios de don Fernando Ayaviri Cuisara). En 1965 fue declarado ciudadano honorario de Potosí. Cuando regresó a Potosí en 1973, la Casa de la Moneda fue sede de una reunión de la Sociedad Boliviana de la Historia y vio en ella instaladas la Biblioteca, el Museo y el Archivo, gracias al trabajo de A. Alba*. En otros viajes a Bolivia entabló amistad con A. Crespo* (1976 y 1988). Trabajó con G. Mendoza y C. Rodríguez* en la edición de guías y fuentes para la historia colonial (virreinal). Editó con G. Mendoza la obra de Bartolomé Arzáns de Orsúa y Vela, Historia de la Villa Imperial de Potosí, en 3 volúmenes, publicado en

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Providence (1965-1966), por la Brown University Press. Existe una edición peruana con nota preliminar de Alberto Tauro; [traducción del inglés por Luis Beltroy Patron], en Lima, Universidad Nacional de San Marcos, 1966. Como resultado de su trabajo acumuló importante y selecta colección documental sobre Potosí, conformado por siete series (Correspondencia, Apuntes de investigación, Folletos, Libros de L. Hanke, Fuentes sobre Potosí) procedentes del Archivo General de Indias* (Sevilla), British Museum (Londres), Biblioteca Nacional (Madrid), Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (Sucre), Archivo General de la Nación (Buenos Aires), Archivo Nacional (Paraguay), Archivo General de la Nación (Perú), y otros, referidos a Potosí. La colección fue donada a la Universidad de California en los Angeles, en el Departamento de Colecciones Especiales de la Biblioteca de Investigación “Charles E. Young”, donde se custodia actualmente. Publicaciones archivísticas. “Guía de las fuentes en Hispanoamérica para el estudio de la administración virreinal española en México y en el Perú, 1535-1700” (Boletín del Archivo de La Paz, 1977, 1 (3):29-31); Con Gunnar Mendoza y Celso Rodríguez: Guía de las fuentes en Hispanoamérica para el estudio de la administración virreinal española en México y en el Perú, 15351700 (Washington D.C.: Organization of American States, 1980); con Celso Rodríguez (Eds.): Los virreyes españoles en América durante el gobierno de la casa de Austria. Peru. 5 Vol. (Madrid, Biblioteca de Autores Españoles, 1978–1979); Handbook of Latin American Studies, editor (19361940); American Historical Review, editor (1954-1960). Fuente: Barnadas, 1996: 383-395; Hanke, 1979; Hanke, 1980:14-16; 42-43; Mendoza, 2005-2007; IV: 11-14; http://www.idih.org (9/02/10) http://www.oac.cdlib.org (9.02.10).

HAZEN, DAN

(Ohio, EEUU, 16 de octubre de 1947) Máster en Bibliotecología en el Simmons College, Boston, Massachusetts; Ph.D. en Historia Latinoamericana en Yale University, New Haven, Connecticut (Dissertation: The Awakening of Puno: Government Policy and the Indian Problem in Southern Peru, 1900-1955. 1974). Bibliotecario Asociado del Sistema de Bibliotecas de HarvardCornell. Empezó su carrera en 1990 en Bibliotecas para América Latina, España y Portugal, en las Universidades de Cornell (Ithaca, NuevaYork); California en Berkeley (California); Harvard College Library (Cambridge, Massachusetts). Ha sido Jefe del Departamento de Desarrollo de Colecciones en Cornell. Dada su extensa experiencia es invitado con frecuencia a escribir, disertar y asesorar dentro y fuera de EE.UU. Fue director de la Asociación de Bibliotecas de Investigación (ARL) entre el 2002 y 2004. Visitó Bolivia entre 1971 y 1972, mientras elaboraba su tesis doctoral regresando por periodos cortos en los ’80 y luego en 1990. Fue Asesor para programas en Archivos y Bibliotecas de la Fundación Lampadia y sus filiales en los Andes (Chile), Antorchas (Argentina) y Vitae (Brasil) hasta su desaparición a principios del 2000. Forma parte del SALALM, programa que apoya proyectos archivísticos, entre ellos la Organización del Archivo Histórico de Tupiza, a cargo de I. Villegas* y Digitalización de Padrones Coloniales en el Archivo de La Paz*, bajo la dirección de R. Barragán*. Experto en elaboración de repertorios de fuentes primarias y en digitalización de colecciones, cuya experiencia se ha plasmado en un centenar de artículos y monografías.

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Publicaciones archivísticas: SALALM/RLG Conspectus for Latin American Library Collections, Principal researcher and compiler (1984); Bibliography and Peruvian Union List of Serial Publications from Southern Peru, 1880-1950:Departments of Arequipa, Cuzco, and Puno/Bibliografía y catálogo peruano unificado de publicaciones periódicas surperuanas, 1880-1950: Departamentos de Arequipa, Cuzco y Puno (Berkeley: Center for Latin American Studies, University of California, Berkeley, 1988; Berkeley-Stanford Occasional Publications in Latin American Studies, 1); The Production and Bibliographic Control of Latin American Preservation Microforms in the United States (Washington, DC: The Commission on Preservation and Access, 1991); The Bibliographic Control and Preservation of Latin Americanist Library Resources: A Status Report with Suggestions (Washington, DC: Association of Research Libraries, 1994); Preservation Priorities in Latin America: A Report from the Sixtieth IFLA Meeting, Havana, Cuba (Washington, DC: The Commission on Preservation and Access, July, 1995); con Jeffrey Horrell y Jan Merrill-Oldham, Selecting Research Collections for Digitization (Washington: Council on Library and Information Resources, August, 1998), publicado en español: Cómo seleccionar colecciones de investigación para la digitalización (Santiago: Centro Nacional de Conservación y Restauración, Proyecto Cooperativo de Conservación para Bibliotecas y Archivos, 2000).

HELMER, MARIE

(Masevauz, Francia, 1905. † España, 1999) Abogada (1925), Filóloga (1926) e Historiadora. Estudió la mita, el arte y teatro potosinos, con apoyo del Instituto Francés de Estudios Andinos y la Escuela de Altos Estudios de París. En su larga estadía en el Archivo Histórico de Potosí* elaboró un Catálogo de las escrituras notariales del Archivo de la Casa de la Moneda en Potosí, con índice analítico parcial. t. I. (1572-1600), t. II. (1601-1650), como lo anunció en 1960 (cf. Helmer, Marie: “Luchas entre vascongados y ‘vicuñas’ en Potosí”, Revista de Indias, XX, Nº 81-82, Madrid, 1960, p. 186; Escrituras públicas coloniales de Potosí; Prólogo al catálogo del final del siglo XVI, Potosí, IIH, 1959; y en colección de Folletos Bolivianos de Hoy, La Paz, 1987). J. M. Barnadas* señala que tiene el mérito de haber llamado la atención sobre documentos coloniales apenas conocidos entonces, como la Guía de Cañete y la Visita de los indios de la provincia de Chuquito que están en cabeza de S.M. (Lima, 1568) de Garci Diez de San Miguel, documento analizado por Marie Helmer en el Archivo General de Indias* en Sevilla, sección Justicia. Publicaciones archivísticas: Escritura públicas notariales de Potosí. Prólogo al catálogo del final del siglo XVI (Potosí, Universidad Tomás Frías, 1959. Serie Archivos. Cuaderno No. 1); Apuntes para la historia del arte en la villa Imperial de Potosí. Documentos del Archivo de la Moneda (Potosí, Universidad Tomás Frías, 1959. Serie IV Arte. Cuaderno No. 2); Apuntes sobre el teatro en la Villa Imperial de Potosí. Documentos del Archivo de Potosí, 1572-1636 (Potosí, Universidad Tomás Frías, 1959. Serie VI Teatro. Cuaderno No. 1). Fuente: Barnadas, 2002; Kintana, 1951: 115-150; http://estudiosamericanos.revistas.csic.es (21.10.2009); http://www.ifeanet.org (21.10.2009).

HEREDIA HERRERA, ANTONIA (España)

Doctora en Historia de América (Universidad de Sevilla), con premio extraordinario. Académica de la Real Academia Hispanoamericana de Cádiz (1985). Miembro fundador y vocal de la Cátedra General Castaños. Ha sido profesora colaboradora

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de la Cátedra de Derecho indiano en la Universidad de Sevilla. Desde 1954 hasta la fecha ha vinculado su actividad profesional a los Archivos que ha compatibilizado con la investigación de la Historia de América. Pertenece al Cuerpo Facultativo de archiveros del Estado (Ministerio de Cultura). Fue Jefe de sección en el Archivo General de Indias, durante treinta años; Directora del Archivo de la Diputación Provincial de Sevilla; Directora de la Revista Archivo Hispalense; Directora del Servicio de Publicaciones de la Diputación Provincial de Sevilla y Directora del Archivo General de Andalucía por concurso de méritos (1995-2004). Tuvo participación decisiva en la redacción del texto del Reglamento de Archivos de Andalucía del año 2000. Fue vocal de la Comisión andaluza calificadora de documentos administrativos, vocal de la Comisión de valoración del Consejo Internacional de Archivos* (20002004). Fue invitada por la UNESCO, dentro del PNUD, a una consultoría en Santiago de Chile sobre “Organización de Archivos Históricos”. Diseñó y dirigió el “Plan de Organización y descripción de Archivos municipales de la provincia de Sevilla” cuyos resultados están publicados en la colección Archivos municipales sevillanos (13 volúmenes con todos los inventarios realizados en 62 Ayuntamientos). Ha dirigido y coordinado el Proyecto de Catalogación de la serie “consultas del Consejo de Indias” conservada en el Archivo General de Indias* (1992). A su instancia, en 1987, se constituyó el grupo de trabajo “Mesa de Archivos de Administración Local”. Ha formado parte del grupo de trabajo del Ministerio de Cultura, en representación de Andalucía, para la elaboración de las Normas Nacionales de descripción archivística (2002-2004). Imparte docencia archivística en numerosos cursos, seminarios, jornadas, másteres y cursos de expertos (Sevilla, Madrid, Barcelona, Tarragona, Bilbao, Burgos, Granada, Jaca, Pamplona, Salamanca, Victoria, Zaragoza, Valencia, etc., etc.); así como en México, Perú, Costa Rica, Chile, Argentina, Brasil, Uruguay, Portugal. Desde el 2003 codirige la Maestría en “Gestión Documental y Administración de Archivos” para archiveros hispanoamericanos, en la Universidad Internacional de Andalucía, sede La Rábida, en la que han participado profesionales bolivianos, entre ellos S. Cuba* y C. Campos Lora*. Su tesis doctoral: La renta del azogue en Nueva España, fue publicada en 1981 y su trabajo más reciente en Historia de América Casa de la Contratación y Consulado de cargadores a Indias: afinidad y confrontación (2003) publicado en las Actas del Congreso Internacional sobre los 500 años de creación de la Casa de la Contratación. Tiene publicados numerosos artículos sobre el Consulado de cargadores a Indias y sobre las relaciones Sevilla-América. En total sobre historia de América tiene editados cinco monografías y treinta artículos en revistas especializadas. Los títulos de sus publicaciones referidos a Historia y Archivística, entre monografías y artículos de revista, superan los doscientos ítems, además de variados artículos de periódico, reseñas bibliográficas y prólogos a libros. Participa con ponencias y comunicaciones en Congresos Nacionales e Internacionales sobre Historia de América y sobre Archivos. En 1986 asistió en Colombia al I Encuentro Hispanoamericano de Directores de Archivos de la Administración (Cali) con la ponencia: La informática aplicada a los archivos. Asistió a los Congresos de Archivología del Mercosur, en Córdoba (Argentina), Sao Paulo (Brasil) y Viña del Mar (Chile). En mérito a su trayectoria, el VIII Congreso de Archivos del MERCOSUR (Montevideo, 2009), le reconoció como Socia de Honor, junto a A. Tanodi*, M. Vázquez* y V. Cortés*. En la votación celebrada en enero 2002 para reconocer a los 10 mejores archiveros del s. XX, Antonia Heredia Herrera comparte el primer puesto con Manuel Vázquez.

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Votaron 174 suscriptores de todo el mundo. Su obra archivística es utilizada en las carreras de Historia y Bibliotecología* (UMSA). Publicaciones archivísticas: Archivística General. Teoría y práctica (7 ediciones), Manual de organización de fondos administrativos de corporaciones locales (1980); Manual de instrumentos de descripción documental (1981); Recopilación de estudios de Diplomática indiana (1985); Índice del Boletín de ANABAD (1989); La Norma ISAD (G): estudio, análisis y alternativas (1995); Censo del Sistema andaluz de Archivos (1997); Guía del Archivo General de Andalucía (2000); Bíbara: bibliografía archivística andaluza (2000); ¿Qué es un archivo? (2007); Terminología archivística (2011). Artículos: “Archivística hoy: tradición, novedad y desarrollo” (2003-2004); “Modelos y experiencias de valoración documental. Propuesta terminológica” (2003); “Teoría y praxis archivísticas: ¿distanciamiento?” (2003); “Los niveles de descripción: un debate necesario en la antesala de las Normas nacionales” (2003); “Formación y cultura: entre la realidad y el deseo” (2004); “La normalización de la Norma ISAD (G)” (2004); “Política archivística andaluza: luces y sombras” (2005); “La unidad documental a la hora de la aplicación de la Norma ISAD (G)” (2005); “La Norma española de descripción archivística: la NEDA” (2007); Tiene en prensa: Archivos: la identidad como punto de partida de la identidad y del desarrollo, y En torno al tipo documental. Fuente: La referencia bibliográfica de su trayectoria y sus trabajos puede recuperarse en Internet en la base de datos Bíbara, instalada en la web del Archivo General de Andalucía; AALA ed. 4 (http//www.aala.8K.com/sem 6.htm).

HERRERO, FRAY ANDRÉS Fundador del Colegio de San José de La Paz (La Recoleta). Prelado del Colegio de Propaganda Fide de Moquegua (sur del Perú), que tenía a su cargo las Misiones de Apolobamba, optó por trasladarse a España hasta donde acarreó el archivo del antiguo colegio de Moquegua que contenía datos importantes sobre las misiones de Mapiri, Guanay, Mosetenes y Apolobamba. Fuente: Armentia, 1903: 334.

HERZOG, THEODOR

(Friburgo, Alemania, 1880. † 1961) Botánico y explorador. Estudió en Zurich, Friburgo y Munich. Profesor de la Universidad Friedrich Schiller. Realizó exploraciones científicas en Cerdeña (1904 y 1906), Srilanka (1905 y 1906) y Bolivia, en dos oportunidades. En su primer viaje (1907-1908) exploró, por primera vez, la cuenca del río Paraguay, pasó a Guarayos, Provincia Velasco, las cordilleras de Buena Vista, Amboró, y los Andes de Cochabamba y Oruro. En su segunda expedición, recorrió la cuenca del río Pilcomayo, los Andes de Cochabamba y la cordillera de Quimsa Cruz. En sus viajes recolectó especies vegetales. Sostuvo nutrida correspondencia con el botánico Martín Cárdenas. La Sociedad Geográfica de La Paz y la Oficina Nacional de Estadísticas, publicaron sus informes científicos, traducidos del holandés y alemán. En su visita a Guarayos, en 1907, tomó fotografías de las misiones, que “contribuyeron a divulgar la civilización de los Guarayo fruto de la actividad franciscana”, distintas a las que tomaron los misioneros franciscanos, las que incluyó en sus informes científicos. Fuente: Arze, 1987: 95; Barnadas, 202, I: 1017-1018; García, 2009, 173.

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HILARI CHOQUEHUANCA, RUBEN LUIS (La Paz, 10 de diciembre de 1963)

Licenciado de las Carreras de Derecho e Historia* de la (UMSA). Su tesis de grado en la Carrera de Derecho titula La depredación de documentos públicos e históricos. La importancia de la creación de archivos intermedios (1992). Diplomado en Educación Superior en la Universidad Tecnológica Boliviana (2001); y UMSA-CEPIES (2002). Cursó la Maestría sobre el Programa de Formación e Innovación Institucional y Académica, auspiciada por la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI). Asistió al curso Iberoamericano de Archivos del Ministerio de Cultura de España en Alcalá de Henares, Madrid (1997). Desempeña la docencia desde 1994 en la UMSA (1994), Universidad Tecnológica Boliviana (1998), Instituto Normal Superior Simón Bolívar (2001-2005) y Universidad Pública y Autónoma de El Alto (2002). Participó en varios Cursos, Seminarios, Congresos, entre ellos el Seminario Fuentes Documentales, Carrera de Bibliotecología (1989), el Cursillo de Archivos, organizado por la Carrera de Historia* y el Archivo de La Paz* (1990), Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (1996), Foro Internacional sobre Patrimonio Documental y Archivístico en el marco de la legislación boliviana (2010). Es coautor de Historia de una Región Paceña Apolobamba, Caupolicán, Franz Tamayo (La Paz, Prefectura de La Paz, 1991), Reserva Nacional Amazónica Manuripi-Heath (La Paz, LIDEMA, PL-480, l992), Foro Paceño Siglo XIX (La Paz, UMSA, 1993), Introducción a las Ciencias Sociales (La Paz: G&D, 2000), A un lado las excusas. Texto guía de Metodología I. (La Paz: G&D, 2003) y Diseño curricular para la formación de docentes de Secundaria. (Área de Historia y Antropología) (La Paz, INSSB, 2004). Su labor fue valorada por la Corte Departamental Electoral de La Paz “Sala Provincias”, con el Certificado de Reconocimiento por su trabajo a favor del rescate documental y la preservación del patrimonio cultural (1995), y por la Federación Departamental de Profesionales de La Paz Distinción al mérito profesional dedicado al rescate cultural (2006). Trabajó en el Archivo de La Paz* como Auxiliar de Investigación (1990) y Docente-Archivista (1993-1994). Fue Archivero del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1992); realizó la recopilación de la legislación archivística en Bolivia 1825-1993 (Instituto de Investigaciones Históricas y Estudios Bolivianos, 1992-1993); trabajó en el Censo guía de Archivos provinciales de La PazRegistro Civil-Archivos notariales (Instituto de Estudios Bolivianos, 1994); fue Jefe de Archivo del Registro Civil Sala provincias de la Corte Departamental Electoral de La Paz (1995); Jefe del Proyecto de Organización del Archivo del Decanato Facultad de Derecho UMSA (1996); Director del Proyecto: Diagnóstico y Organización del Archivo H. Alcaldía Municipal de El Alto a cargo de la Consultora Geotécnica (1997); Jefe de proyecto de organización del Archivo de la Superintendencia de Bancos y Entidades Financieras, en Liquidación (1999). Publicaciones archivísticas: “Los Fondos Provinciales del Archivo de La Paz y los Archivos de Apolo” (Boletín del Archivo de La Paz, 1991. Año XII, Número especial: 53-60); La depredación de documentos públicos e históricos. Importancia de la creación de archivos intermedios (La Paz, Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas, 1992); “Sala Provincias, La Importancia de los Archivos Provinciales” (Marka, Boletín de la Corte Departamental Electoral de La Paz, 1992, Nº 17); “Necesidad de una Ley General de Archivos” (Presencia. La Paz, 31 julio 1992: 2); “La Documentación Provincial” (Presencia, La Paz, 24 de agosto 1992: 2); “El Pionero (GML)”

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(Correo del Sur, Sucre, 3 abril de 1994: 4); “Gunnar Mendoza y la Legislación Archivística” (Boletín del Archivo de La Paz, 1994, 14: 4-12); “El Registro Civil en Bolivia a 100 Años de su promulgación” (El Diario, La Paz, 10 de enero de 1999. Secc. 5ta.: 3); “Necesidad de una norma general del sistema nacional de Archivos y Sistema Nacional de Información” (El Diario, La Paz, 9 de mayo de 1999. Secc. 5ta.: 4). Fuente: CV.

HILL, ROSCOE R.

(Illinois, EE.UU., 1880. † Washington D.C., EE.UU., 30 de octubre de 1960) Graduado de Eureka College (Illinois), trabajó como director de American School en Matanza (Cuba) en 1904. A su regreso a EE.UU., estudió historia en las universidades de Chicago y Columbia. Se incorporó a Carnegie Institution (Washington DC), y trabajó en el proyecto dirigido por Franklin Jameson, con el que investigó en el Archivo General de Indias* (1911-1913) sobre los papeles de Cuba referentes a la historia de los EE.UU., publicando el Catálogo de esos fondos (1916). Trabajó posteriormente en la Biblioteca del Congreso de Washington, y fue Jefe de la División de Archivos del Departamento de Estado en National Archives de Estados Unidos. Es autor del proyecto de microfilmación de los archivos parroquiales de América Latina. Cooperó con L. Hanke*, elaborando informes anuales sobre el desarrollo de los archivos nacionales de América Latina, publicados en el Handbook of Latin American Studies en 1938. Tiene el mérito de haber publicado la primera Guía General de los Archivos de América Latina (1945), en un trabajo coordinado por L. Hanke. Ya retirado, visitó el Archivo General de Santo Domingo (1948), donde expresó a un redactor de El Caribe: “Los documentos que se conservan en un archivo forman una gran herencia del pasado de un pueblo. Allí están escondidos muy importantes datos sobre la vida y la actividad de sus ciudadanos. Desgraciadamente, mucha gente dice: ‘papeles viejos en edificios viejos’. Esto es un grave error, pues en los papeles viejos se acumula, año tras año, la historia de los pueblos y es preciso tener edificios adecuados para la buena conservación y utilización de esos documentos”. Publicaciones archivísticas: Hill, Roscoe R., & Archivo General de Indias, Descriptive catalogue of the documents relating to the history of the United States in the ‘Papeles procedentes de Cuba’ deposited in the Archivo general de Indias at Seville / by Roscoe R. Hill (Carnegie institution, Washington, D.C., 1916); “Informe anual sobre el desarrollo de los archivos nacionales de América Latina” (Handbook of Latin American Studies, tomo 3, 1938); The National Archives of Latin America (Cambridge, Mass., 1945); “Latin American Archivology, 1951-1953” (American Historical Review, 1954: Vol. 34: 256-279). Fuente: Hanke, 1980: 15-16; http://bagn.academiahistoria.org. (22.02.10); http://seleCosta de la Torre (22.02.10).

HOCHMANN STEINER, JORGE

(Cochabamba, 1 de agosto de 1940. † La Paz, 2 de julio de 1993) Descendiente de inmigrantes austriacos, gran locutor, investigador. Uno de los primeros locutores bolivianos que se formó en Radio Pío XII, en la mina de Siglo XX (Potosí). Trabajó en varios medios de La Paz y Sucre. Fue uno de los primeros

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locutores de Canal 7*, donde se desempeñó en periodismo deportivo (escribió La Fiesta del Fútbol, 1981) y periodismo de investigación histórica, con la que editó su columna “Un día como hoy en la Historia”, en Presencia y Hoy de La Paz. Creó un Archivo fonográfico y una muy bien cuidada Casseteca, organizado “con el propósito de plasmar la historia de Bolivia, con las voces de sus protagonistas, por medio de cassetes. Recuperó de los reels de cintas grandes, de la Radio Illimani, los trabajos que tienen sus respectivos libretos. Los cassetes registran acontecimientos importantes. Fue un trabajo de 25 años que deben llegar a una 250 horas”, afirmó su viuda Ruth Kellemberger. El Archivo registra momentos de la vida de nuestro país a través de sus protagonistas, presidentes, dictadores, dirigentes sindicales, personalidades, “mostrando la capacidad de todos ellos como oradores, analistas políticos, algunos verdaderos manipuladores de las masas y del sentimiento de aquellas. La viuda manifestó que durante la dictadura de L. García Meza*, tuvo el temor de perder la fonoteca. El Archivo tiene importancia para conocer el pasado, pero también para los investigadores del presente y del futuro. Entre sus históricos testimonios orales se encuentra la entrevista que concedió el ex Ministro del Interior, A. Arguedas*, quien entregó los microfilmes del Diario del Comandante E. Che Guevara* a Fidel Castro, en la que relata uno de los interrogatorios a los que fue sometido por agentes de la CIA (17.8.1968), el último discurso del Gral. R. Barrientos* en palacio de Gobierno, antes de su trágica muerte en Arque (Cochabamba) a bordo de su helicóptero (abril de 1969); las confesiones del Dr. L.A. Siles*, un presidente solitario, ante el dirigente sindical Irineo Pimentel, poco antes de su derrocamiento (23.9.1969); la suscripción del Pacto Nacionalista y la creación del Frente Popular Nacionalista entre el MNR (V. Paz*), la FSB (Mario Gutiérrez) y el dictador H. Bánzer* (22.10.1971), las palabras de agradecimiento de Klaus Altmann (Klaus Barbie), el criminal de guerra nazi “Carnicero de Lyon”, dirigidas a la Corte Suprema de Justicia por haber negado la extradición solicitada por Francia (7.1.1975), y el primer mensaje del dictador L. García Meza (18.7.1980), a pocas horas del cruento golpe de Estado con el que asaltó el poder. Fuente: Presencia, 1997: 4-5; http://www.aguanteceleste.com (26.4.2012)

HOCHSCHILD, MORITZ (MAURICIO)

(Biblis, Hessen (Frankfurt), Alemania, 17 de febrero de 1881. † París, Francia, 1965) Industrial minero judío alemán. Trabajó en Sudamérica durante la primera mitad del siglo XX. Nació en una familia dedicada a la minería. Estudió ingeniería de minas en el Bergakadamie Freiberg (Alemania). Empezó su carrera en 1905 trabajando como chacarero para Metallgesellschaft, una compañía de exportaciones mineras, en Alemania. Se trasladó a España y Australia (1911) antes de pasar a Sudamérica donde empezó sus propios negocios. Radicó en Chile, después volvió a Alemania y permaneció en Europa durante la primera Guerra Mundial (1914-1918). Regresó a Sudamérica acompañado de su esposa Käthe Rosenbaum (1919). Su negocio abarcó Chile, Perú y Bolivia, donde se dedicó al rescate de minerales. Constituyó la firma Hochschild SAMI (Sociedad Anónima Minera Industrial), siendo vicepresidente su socio Enrique Ellinger, logrando unificar en una sola administración las numerosas empresas que explotaban el Cerro Rico de Potosí. La firma Hochschild pasó a

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administrar las compañías mineras “Matilde”, “Bolsa Negra”, “Pampa Grande”, “Santa Rosa”, “Chilcani”, etc. Según sus propios informes, sus operaciones en Bolivia llegaban a controlar aproximadamente una tercera parte de la producción de estaño, el 90% de plomo, zinc y plata, y la mayor producción de tungsteno y antimonio del país (1937). Esta empresa sería la más importante de su compañía de explotación y comercialización de minerales. En los años 30’s, el Grupo Hochschild se expandió y su influencia económica y política, creció. Opositor tenaz a los gobiernos progresistas, fue arrestado y sentenciado a muerte por el gobierno boliviano (1939 y 1944); fue liberado pero secuestrado casi de inmediato. Cuando obtuvo su liberación dejó Bolivia para siempre. En 1951, donó su fortuna a la “Fundación Hochschild”. La compañía creció y se expandió a nivel mundial. Era uno de los “Barones del Estaño”, por lo que su compañía minera fue expropiada en 1952. No obstante continuó manejando el 30% de sus posesiones. Como resultado de su trabajo en Bolivia generó un valioso y extenso archivo, que fue expropiado junto a sus posesiones mineras el 31 de octubre de 1952, que forma parte del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. El Fondo Hochschild del Archivo Histórico de la Minería Nacional está conformado por 120 metros lineales, comprende desde 1923 a 1952; con los siguientes subfondos: Compañía Minera Unificada “Cerro de Potosí” (1923-1952); Compañía Huanchaca de Bolivia (1931-1952); Compañía Minera de Oruro, Secciones Colquiri y San José (1931-1952); Sociedad Estañífera Morococala (1947-1950); Sociedad Estañífera de Vinto (1929-1951) y Empresa Minera Matilde (1936-1952). Existe otra colección pequeña de documentos (1.6 pies) donada por el historiador H. Waszkis* al Instituto Leo Baeck que sostiene el Centro de Historia Judía en Nueva York. Esta colección cerrada está referida a la vida personal y profesional de Moritz Hochschild (1881-2000). La mayor parte de los materiales antiguos de este fondo son copias, pero también existen documentos originales como certificados (vg. el de nacimiento de M. Hochschild), correspondencia, recortes de prensa y fotografías. La colección fue organizada por M. Simonson* y sus colegas del Instituto Leo Baeck. El catálogo fue elaborado por B. Schultz*. Se encuentra organizada en seis series: Serie I: Personal papers, 1881-2000 (English, German and Spanish), Subserie 1 (Family, 1881-2000), 2 (Academics, 1900-1998), 3 (Correspondence, 1938-1964); Serie II (Company, 1923-2000; E, S); Serie III (Publications, 1912-1999; G, E, S), Suberserie 1 (Periodicals, 1936-1998), 2 (Other companies and relatives, 1912-1999; E, F, G, S); Serie IV (Correspondence, 1937-2002; E, G, S); Serie V (Notes of Helmut Waszkis, 1994; E, G); Serie VI (Photographs, 1930-1990). Fuente: Schultz, 2005; Tenorio, 2005: 9 (14): 87-91.

HOELLER, FRAY ALFRED (LUIS)

(Münskirchen, Austria, 15 de diciembre de 1898. † Santa Cruz de la Sierra, 29 de junio de 1941) Se incorporó al Colegio de Tarata en 1928. Fue nombrado Conversor de la misión de Yaguarú, a fines de 1929, permaneciendo una década en Guarayos. Por ese mismo año viajó a Santa María “para dedicarse a sus queridos bárbaros”. También fue Prefecto Misionero entre 1935 y 1939 y conversor en Ascensión (1940). En 1934 instaló en su celda su “atelier de fotografías”, que sumaron un centenar “de las que explícitamente consta su autoría” y otras que se le atribuyen “al considerar sus

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similitudes con las anteriores”. La labor de Hoeller permite analizar tres aspectos distintos y caracterizadores de la vida cotidiana de los pueblos guarayos. Un primer grupo de fotografías retrata a los indígenas en el contexto de su hábitat urbanizado (iglesia, casa misiones, viviendas) y rural (labores productivas como el desmonte o el cultivo). Una segunda serie, nos muestra la intimidad de las familias de Santa María, niños, adolescentes, adultos, ancianos, en parejas o grupos, algunos escasamente vestidos. “En este caso, los ojos que retratan los diversos avatares vinculados a la reducción de los Sirionó son los propios de un etnógrafo interesado en ‘recoger’ datos de una población, prontos a desaparecer tras la implementación del proceso civilizador”. El tercer grupo de fotografías, tiene como objetivo a los propios misioneros franciscanos, “los conversores a los que se unieron, en la década de los veinte, las hermanas terciarias, además de los caciques guarayos”, fotografías vinculadas a la fiesta patronal de Urubichá (1929), la visita de Fr. Francisco Buehl, vicario de Chiquitos y la celebración de bodas de oro sacerdotales del conversor, P. Camilo Agrazar. Fuente: García, 2009: 185-187.

HUANCA SOLIZ, MARCELA IVONNETH (Sucre, 13 de abril de 1989)

Licenciada en Historia, graduada por Excelencia (Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca). Destacó en su vida estudiantil, pues se le otorgó admisión directa a la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca (2007), por haber ganado las Olimpiadas del Saber Histórico “Rumbo al Bicentenario”, Sucre (2006). Fue Auxiliar de Docencia en la materia de Historiografía General y de Bolivia (2008). Obtuvo distinciones por organizar el Encuentro Nacional de Historia “Bolivia frente a los desafíos actuales”; y la Asociación de Mujeres Profesionales Universitarias de Chuquisaca la reconoció por obtener el mejor promedio de la Carrera de Historia (2008). Participó en el Curso Internacional de Paleografía Hispanoamericana (Siglos XVI-XVIII), Universidad Nacional de Educación a Distancia de España (2009), Curso Taller de Conservación Preventiva y Restauración de Papel, Centro Bibliográfico Documental Histórico (2010) y en el Curso de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos, según la Norma Internacional de Descripción Archivística, Archivo de La Paz (2011). Entre 2007 y 2008, con asesoría de E. Aillón*, Gaelle Bruneau y Pierre Díaz, ejecutó proyectos de conservación del patrimonio cultural, y catalogación de los documentos de la Real Academia Carolina (1776-1907), custodiados por el Centro Bibliográfico Documental Histórico* de la misma universidad. En 2008, junto a Edwin Arciénega, elaboró el Catálogo de la Colección Bibliográfica de Mons. J. García*, publicado por el Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos “Mons. Santos Taborga” en 2009. Realizó una consultoría en Paleografía y Catalogación de los Acuerdos del Cabildo Secular de Potosí (1585-1817), en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (2011), proyecto auspiciado por la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia* y la Latin American Microform Project del Centro de Bibliotecas de Investigación de los Estados Unidos de Norteamérica. Actualmente es consultora en paleografía, para la organización y catalogación de las Escrituras Públicas de La Plata (1549-1599), en el ABNB. Ha publicado, Tras la huella de los artesanos en

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La Plata a fines del siglo XVIII, en coautoría con A. M. Lema*, Paola Revilla y Edwin Arciénega (Sucre: USFX-IMAG, 2011); El universitariado de San Francisco Xavier en la lucha y defensa de sus derechos durante un periodo de dictaduras, 1980-1982, en coautoría con Ibert Veizaga, Jorge Castro y Rafael Abastoflor (Sucre: USFX-Icthus, 2011) y “Un polifacético funcionario público en La Plata: Don Vicente Tardío de Guzmán”, en: Lofstrom, William (Coord.), Diecisiete personajes de La Plata Virreinal (Sucre: Tupaj Katari, 2010: 49-65). En coautoría con M.C. Thompson, N. Delgadillo* y M. C. Martínez*, elaboró el Catálogo de los Acuerdos del Cabildo Secular de Potosí, que será publicado por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia y el Latin American Microform Project del Centro de Bibliotecas de Investigación de los Estados Unidos de Norteamérica. Fuente: CV.

HURTADO BARJA, OSCAR MILKO (Sucre, 16 de febrero de 1979)

Licenciado en Administración de Empresas, informático y Especialista en Dirección de Marketing (Alta Escuela de Dirección y Administración de Empresas, España). Trabaja como archivero en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, a partir de 2004. Asistió a los cursos de Paleografía Hispanoamericana (siglos XVI-XVIII); Enfoque Sistémico de la Ley 1178; Curso Básico de Archivos a distancia (Archivo General de la Nación; Escuela Nacional de Archiveros, Perú); Organización de Sistemas de Archivos (Santa Cruz de la Sierra). Participó en el Congreso Nacional de Archiveros para el tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (2007). En su desempeño trabajó en la elaboración de catálogos de las series: Escrituras Públicas de La Plata, 1700-1827; Recursos sobre Minería; Escrituras Públicas y Expedientes de la Notaría de Camargo; y en el inventario de los fondos: Instituto de Colonización y Ministerio de Hacienda. Ha apoyado en la publicación de los libros Acuerdos de la Audiencia de La Plata; Obras Completas de Gunnar Mendoza; Diario de José Santos Vargas. Fuente: CV.

HUTTEN–CZAPSKI, MAREK DE

(Boulogne- Billacourt, Francia, 7 de enero de 1930. † París, Francia, 18 de marzo de 2012) Periodista de familia aristocrática germano polaca, conocido como Marc Hutten. Trabajó para la Agencia France Presse (AFP), para la que cubrió la guerra de Vietnam, donde estuvo al borde de la muerte en varias ocasiones. En octubre de 1967 fue enviado a Bolivia, en momentos en que el ejército asesinó al Comandante Che Guevara*. Cuando el cuerpo de Ernesto Che Guevara fue expuesto en público en el pueblo de Vallegrande (150 km. al suroeste de Santa Cruz), fotografió el cadáver del guerrillero en su lecho de muerte. Marc Hutten sacó las pocas fotos en color que inmortalizaron aquel momento y dieron vuelta el mundo junto a las tomas de primer plano y en blanco y negro del fotógrafo boliviano F. Alborta*. Fuente: Página Siete: 2012: 29.

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I ILLATARCO PEÑARRIETA, GALO JAIME (La Paz, 16 de octubre 1966)

Licenciado en Historia (UMSA)*. Cursó el Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos en la UMSA (2002). Participó en la Escuela Taller de Archivos Iberoamericanos*, en Alcalá de Henares, España (1997). Ha desempeñado funciones de archivista en el Archivo de La Paz* (1991, 1994, 1996, 1997), Banco Central de Bolivia* (1988), Ministerio de Relaciones Exteriores (1992) y Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, como Encargado del Archivo y Centro de Documentación. Formó parte del Comité Organizador de la Reunión Anual de Etnología y del Comité Editor de la Memoria/Anales de dichas Reuniones. Participó en el Curso Internacional Diplomática del Documento Indiano (1999); y en el de Paleografía Hispanoamericana, Siglos XV-XVIII (2000), ambos dictados por el Dr. J.M. López Villalba*. Miembro del comité impulsor del Proyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos en La Paz (2006). Participó en el Congreso Nacional de Archivos que trató este tema (Sucre, 2007). Organizador del Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995) y Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996). Miembro de la directiva de la extinguida Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información (Filial La Paz)*. Fue docente para presos del Penal de San Pedro (1994). Participó en seminarios internacionales en Museología en La Paz (Bolivia) y Cusco (Perú). Fue Secretario de Actas, Prensa y Propaganda del Comité Ejecutivo Nacional de la Federación de Trabajadores Gráficos de Bolivia (1991-1993). Fue víctima de la represión ejercida en la época del Rector Guido Capra, quien determinó la expulsión de varios dirigentes y militantes del Partido Obrero Revolucionario de la Universidad Boliviana. Trabajó como corrector de pruebas de editorial Don Bosco y los periódicos Hoy, Meridiano y La Tercera. Tiene también estudios sobre música, entre ellas “Acercamiento a la vida y obra musical del artista polifacético Alfredo Domínguez Romero” (Memorias de la XX Reunión Anual de Etnología (2006). T. II. La Paz, MUSEF, 2007: 389-397) y la “Influencia de los mineros, la situación económica, social y política, y la canción minera boliviana” que fue tema de su tesis de licenciatura (Anales de la XXI Reunión Anual de Etnología (2007). T. I. La Paz, MUSEF, 2008). El 2009 ocupó la Jefatura de Servicios Públicos Culturales (Museos, Archivos y Bibliotecas de Bolivia) en el

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Ministerio de Culturas, habiendo sido Director interino de Patrimonio Cultural de Bolivia. Pasó a desempeñar la jefatura de la Unidad de Gestión de la Descolonización con Entidades Territoriales, en el Ministerio de Culturas. Publicaciones archivísticas: “Una fuente de información audiovisual para los investigadores, estudiantes y el pueblo” (Boletín del Archivo de La Paz, 1999, (18): 63-77); “Primer Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos” (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, (20): 4752); “Archivo etnográfico del MUSEF” (XVI Reunión Anual de Etnología. La Paz, MUSEF, 2003, Vol. I, Nº 8: 56-57); “Procesos de catalogación en el Archivo oral del MUSEF” (XIX Reunión Anual de Etnología. La Paz, MUSEF, 2006: 655-665); “Comité operativo de Censo y valoración de documentos sonoros y audiovisuales etnográficos de los países andinos” con J. Quevedo y H. Sicard (XIX Reunión Anual de Etnología. La Paz, MUSEF, 2006, Vol. II: 667-671) Fuente: CV.

INCH CALVIMONTES, MARJORIE MARCELA (Potosí, 13 de septiembre de 1946)

Historiadora (UMSA), bibliotecaria y archivista con estudios en España. Tiene amplia trayectoria en la organización y administración de archivos. Fue directora del Departamento de Biblioteca del Banco Central de Bolivia* (ocasión en la que publicó una semblanza del ilustre economista boliviano Casto Rojas). Fue dirigente del Sindicato de Trabajadores del Banco Central de Bolivia. Trabajó como consultora del Programa de Apoyo a la Modernización de la Administración Pública de la GTZ, con la que aplicó el DS 23934 (1994) que instituyó el Reglamento Común de Procedimientos en los Ministerios del Poder Ejecutivo, para cuyo fin impartió numerosos cursos de capacitación en los archivos de este sector del gobierno. Por encargo de la GTZ elaboró del DS 25046 (1998) que creó el Repositorio Intermedio del Poder Ejecutivo, asimismo proyectó el DS 26832 (2002) que creó los archivos presidenciales; a pesar de sus esfuerzos ambos no lograron concretar sus propósitos. Realizó un curso de Museología en España (2001). Sucedió a H. Poppe Entrambasguas* en la dirección del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (diciembre de 2001), donde le cupo el honor de inaugurar el nuevo edificio del ABNB el 31 de octubre de 2002. Ha editado el Anuario de Estudios Bolivianos, Archivísticos y Bibliográficos del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, y la Bibliografía Boliviana, ambas desde 2002. Impulsó las labores del Taller Nacional de Conservación; logró la instalación de la Librería “Fray Antonio de la Calancha”, gestionó exitosamente la adquisición de varias bibliotecas patrimoniales y archivos de personalidades ilustres de Bolivia (entre ellos A. Arguedas*, G. Mendoza* y G. Lora*), concretó la incorporación de Bolivia en el Proyecto de Biblioteca Virtual “El Dorado” (conformado por la Asociación de Bibliotecas Nacionales de Iberoamérica ABINIA). Coordinó la edición de catálogos de fuentes documentales, la colección Ediciones del ABNB y la edición de las Obras completas de Gunnar Mendoza en sus dos vertientes (la obra historiográfica a cargo de William Lofstrom y la archivística propiamente dicha, a su cargo, con el apoyo de G. Molina*, quien es curador del Archivo de este ilustre archivista boliviano). Convocó al Congreso Nacional de Archivos para la redacción y aprobación del Anteproyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos* (2007) e institucionalizó la ejecución del Censo Guía de Archivos de Bolivia. Ha organizado congresos y reuniones de historia, bibliotecología y archivística, posibilitando la capacitación de Archivistas

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idóneos* y la actualización de conocimientos de los profesionales a nivel nacional. Durante su gestión incrementó los fondos del ABNB con los archivos de Luis Paz Arce, jurista, historiador, político y diplomático tarijeño (septiembre de 2004); la obra musical del tenor chuquisaqueño Carlos Loayza (julio de 2010); el archivo digital del circuito “Oscar Crespo, elaborado por Julio Cors Zorrilla, ex dirigente del automovilismo departamental de Chuquisaca (junio de 2010). Se mantuvo en este alto cargo hasta noviembre de 2011. Fue reemplazada por su colega y amiga personal la historiadora A. M. Lema*. Es fundadora de la Carrera de Historia de la UMSFX de Chuquisaca (2006). Es miembro honorario de la Academia Nacional de Genealogía y Ciencias Heráldicas de Bolivia (2012). Organizó una Fundación para la Preservación del Patrimonio Documental y Bibliográfico de Bolivia, con la que en abril de 2012 organizó un Curso Internacional de Paleografía Hispanoamericana en el Periodo de Los Austrias (Siglos XVI-XVII), impartido por el paleógrafo J. M. López*, profesor de la UNED, España. Sus Publicaciones archivísticas están dispersas en revistas; prólogos e introducciones de los libros que edita el ABNB. Su tesis de licenciatura en Historia Bibliotecas privadas y libros en venta en Potosí y su entorno, 1750-1825 (La Paz, 1998), fue publicada como artículo en la Revista de la Universidad de Santiago del Táchira, Venezuela, 1999); y otras versiones referidas a: “Sobre libros y bibliotecas en Potosí, 1767-1822” (Historia y Cultura, 2000 Nº 26); “Libros, comerciantes y libreros: La Plata y Potosí en el siglo de Oro”, en La construcción de lo urbano en La Plata y Potosí, siglos XVI y XVII (Sucre, Ministerio de Cultura de España-ABNB, 2008). Publicaciones archivísticas: Guía sumaria de los archivos parroquiales de la ciudad de La Paz, con Teresa Rosaza (La Paz, 1983; Tb. en Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (una guía preliminar), La Paz: cehila-ceprolai 1985: 19-58); “Archivo del Obispado de Potosí: la población potosina en sus libros sacramentales” (Presencia, La Paz, 18 de noviembre de 1984: 13; Tb. en Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (una guía preliminar), La Paz: cehila-ceprolai, 1985: 92-95); “Situación de los Archivos de Sucre” (Presencia, La Paz, 4 de noviembre de 1984: 13); “¿Qué hacer con el Archivo y Biblioteca Nacionales?” (Presencia, La Paz, 31 de octubre de 1994: 2); Guía preliminar. Repositorio Intermedio del Poder Ejecutivo (RIPE) (La Paz, Ministerio de la Presidencia, 1998); “El derecho de acceso a la documentación pública: una necesidad para la modernización del Estado” (Anuario del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Sucre, ABNB, 1999: 537-548); El archivo presidencial” (en El Archivo, los archivos: Textos archivísticos panamericanos. Lima, IPHG, 2001: 115-121); “La gestión de la difusión en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia” (Archivum, Boletín del Archivo de la Universidad Ricardo Palma, 7 (13): 11-13); “Discurso en el acto de inauguración del nuevo edificio. Sucre, 31 de octubre de 2002” (Anuario del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Sucre, ABNB, 2002: 389-393); “Documentos bolivianos, Memoria de la Humanidad” (La Razón-Tendencias, La Paz, 9 de octubre de 2011: C2-3). Fuente: CV y comunicaciones personales.

INSTITUTO PANAMERICANO DE GEOGRAFÍA E HISTORIA (IPGH) Organismo especializado de la Organización de Estados Americanos*, sin fines de lucro. Fue creado el 7 de febrero de 1928, durante la VI Conferencia Internacional celebrada en La Habana, Cuba, a nivel de Ministros de Estados Americanos. Desde 1930, tiene su sede en la ciudad de México, en un edificio en la calle de Ex

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Arzobispado 29, Colonia Observatorio. En 1949, un año después de suscrita la Carta de la Organización de los Estados Americanos (Conferencia de Bogotá), el Instituto firmó un acuerdo (modificado el 6 de mayo de 1974) por el que se convirtió en su primer organismo especializado. Tiene cuatro comisiones especializadas: Cartografía, Geografía, Geofísica, e Historia (creada en agosto de 1946), actualmente con sede en Brasil. Desarrolla proyectos sobre Arqueología, Antropología, Folklore, Bibliografía y Archivos, e Historia Económica, Política, Social y de las Ideas. Entre los Grupo de Trabajo de la Comisión de Historia están el de Comités de Bibliotecas Especializadas y Archivos Históricos. Fuente: http://www.ipgh.org (10/11/2009)

IRAHOLA DE CAPRILES, ANA Archivista de la Corporación Boliviana de Fomento (1969-1983), institución creada en la década de los 40, como resultado de la Misión Bohan en Bolivia, con el propósito de fomentar la creación de empresas productivas estatales, para ser entregadas al sector privado, una vez que lograsen consolidar sus actividades y abrir mercados de consumo. Tenían Corporaciones de Desarrollo en los nueve Departamentos, dependientes de las Prefecturas. Iraola planteó en junio de 1982, “una metodología que innova y tiene actualización técnica”, influenciada por los métodos archivísticos de EE.UU., básicamente por materias, en cinco grupos (100: Oficina Central, 200: Empresas y proyectos de la CAF, 300: Administración Pública, 400: Organismos internacionales y 500: Organismos misceláneos), y un Archivo Contable, separado. Publicaciones archivísticas: “Plan de trabajo para la reorganización del Archivo General de la Corporación Boliviana de Fomento (CBF)” (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 76-77). Fuente: Oporto, 1982: 76-77.

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J JÁUREGUI CORDERO, JUAN ERIBERTO (La Paz, 5 de marzo de 1950)

Licenciado en Historia UMSA. Magíster en Historias Andinas por la FLACSO. Cursa el Doctorado en Historia por la Universidad Andina, sede Quito (Ecuador). En su juventud trabajó en el Archivo de La Paz*, organizando los fondos de archivos provinciales e impulsando los traslados de fondos de archivos provinciales hacia el Archivo de La Paz, donde fue también Asistente de investigación (1978) y Docente investigador (1987-1988, 1993). Posteriormente se dedicó a la docencia en la Carrera de Historia*, llegando a ser su director en dos gestiones. En su faceta de investigador y editor, fue fundador del Centro de Estudios Históricos (con L. Oporto*, 1979), del Instituto de Estudios Andinos y Amazónicos (con P. Gamarra*, 1991) y del Centro de Estudios Para la América Andina y Amazónica (con L. Oporto*, 2000). Estudió la obra de F. de Paula Sanz*, descubriendo la importancia que le dio del Intendente de Potosí a sus archivos para fines administrativos. Asistió a la Primera (Sucre, 1979), Segunda (Cochabamba, 1982) y Tercera (Cochabamba, 1983) Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos*. Ha realizado el Curso sobre Archivos y Documentos Públicos: Archivos Administrativos y Paleografía (1976) y el Cursillo sobre Archivos Administrativos (1984). Es director de Publicaciones del CEPAAA, así como editor de Retornos, Revista de Historia y Ciencias Sociales que edita ese centro. Publicaciones archivísticas: “Diagnóstico preliminar del Archivo de la Cancillería de Bolivia” (Boletín Interamericano de Archivos, 1980, Vol. 7, Córdoba, Argentina); “Breve análisis de los archivos provinciales”, con Ramiro Palizza (Boletín del Archivo de La Paz, 1984, 5 (8): 17-27); “Los archivos provinciales de Sorata y Pucarani” (Boletín del Archivo de La Paz, 1991, 13, Número especial: 43-52); Documentación existente en el Archivo Nacional de Bolivia sobre rebeliones indígenas 1780-83 (La Paz, Centro de Investigaciones Históricas, 1980; Seg. ed., 1981. Introducción de J. Jáuregui). Fuente: CV.

JÁUREGUI ROSQUELLAS, ALFREDO

(Sucre, 22 de octubre de 1879. † 21 de octubre de 1952) Abogado (UMSFX). Historiador y profesor de Estado. Fue director del Colegio Junín (Sucre) y del colegio nacional Bolívar en Oruro. Fue Presidente de la Sociedad

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Geográfica y de Historia ‘Sucre’ (1938-1951) y miembro de la Sociedad Geográfica de La Paz. En su condición de socio de la SGHS, el 25 de mayo de 1932 leyó una conferencia, en sesión pública, sobre el Dr. Jaime de Zudáñez, publicado en el Boletín de la SGHS, Nº 312, que en ocasión del Bicentenario del 25 de Mayo de 1809, la Casa de la Libertad y la FCBCB, la reeditaron. En 1936 se desempeñó como Jefe de Propaganda Nacional. Fue director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, ocasión en la que siguiendo a G.R. Moreno*, denunció los principales males que aquejaban a los archivos en las dos primeras décadas del siglo XX. El primero era el ancucu (dulce de maní) y la polilla, “que han destruido los documentos conservados en los estantes de las cámaras, oficinas, despachos y depósitos coloniales”. En su criterio, el segundo se debía, tanto al snobismo modernista que no apreciaba las “cosas viejas”, como al criollismo liberal que “quería echar un velo sobre el pasado terrible”. Caracterizó al tercer factor de destrucción como “una plaga fatal, una invasión vandálica, la de los americanistas ilustres, “los viajeros distinguidos”, “los sabios”, los que acudieron, desde la independencia, “a explotar los archivos, a tomar los documentos que quisieran y disponer como de cosa propia, con el más impúdico criterio industrial, convirtiendo en mercancía lo que debió ser guardado con respeto y estudiado con seriedad”. Califica esta acción depredadora como “el azote cruel de los archivos americanos, que no cesará mientras haya un papel que llevarse para venderlo a los archivos y museos de Europa”. Finaliza señalando que “los responsables de estos lamentables factores destructivos “son los gobiernos cuya incuria, desdén por el ayer, falta de patriotismo, ignorancia o menosprecio por todo lo que no sea política productiva”, ha destruido los más valiosos archivos. A pesar de esa situación lamentable, afirma que “bastante papel revelador, instructor, delator de miserias y espejo de grandezas quedó en los archivos cabilderos en las gobernaciones civiles, en las jefaturas militares, en las alacenas de las sacristías catedralicias, en las prelacías en los sótanos de los palacios audienciales y en los papeleros de las casas grandes”. Publicaciones archivísticas: “La formación de archivos” (Boletín de la Sociedad Geográfica e Histórica “Sucre”, 1946, (411-413): 156) Fuente: Jáuregui, 1925: 121; 126; Costa Arduz, 2005: 173; Correspondencia de 12.3.1936 de Moisés Santivañez al Ministro de Relaciones Exteriores.

JESUITA ANÓNIMO Cronista. Se jacta de haber conocido y consultado “todos los quipus del Cusco y demás provincias del Perú, tanto modernos como antiguos”. Cita los quipus de Manco Capac, “los quipus de Pacaritambu antiguos, los quipus de Cuzco de Cassamarca, de Tarma, de Quito y de otras provincias”. Cita “todos los quipus y memoriales del Cuzco”, los “quipos del Cuzco y de Sacsahuana” que referían a una disputa que tuvo el amauta Amaro Toco* sobre la divinidad de los hombres y “los quipus de Quito” que confirmaban que Huayna Capac promulgó la ley antigua que prohibía a los Incas hacerse adorar como dioses. Fuente: Porras, 1953: 128.

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JIMÉNEZ CHÁVEZ, IVÁN (La Paz, 9 de febrero de 1963)

Egresado de la Carrera de Historia* (UMSA). Estudió la historia del centro minero de Caracoles. Trabajó en editorial Santillana en la corrección de obras educativas. En 1995 fue técnico archivista (con R. Ramírez*) para dirigir la organización del Archivo del Banco del Estado (cerrado en 1992), mediante convenio entre la Comisión Liquidadora del Banco del Estado y el Archivo de La Paz* (diciembre de 1994). Tuvo importante labor en el Archivo Histórico de SAGIC* del que se hizo cargo entre 1997 y 1998. Presentó los resultados de su trabajo (“El Archivo de SAGIC S.A.: cuando las confidencias se hacen públicas”) como ponencia al II Encuentro Internacional de Historia del Siglo XX. Visiones de fin de siglo (Cochabamba, 1998). Asistió al Seminario Nacional “Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia” (LP, 1993); Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996). También pasó por el Archivo de La Paz (1986) donde redactó la “Guía del Investigador” y diseñó nuevos formularios de Registro del Investigador y Reprografía de Documentos, con G. Aguilar Dávalos*. Es autor de Las esposas de Cristo: vida religiosa y actividades económicas en los conventos de Charcas del siglo XVIII, con E. Bridikhina* (1997) y Mujeres en las minas de Bolivia, con Magdalena Cajías de la Vega (1997). Publicaciones archivísticas: “Archivos históricos de La Paz. La insurgencia de la memoria” (Medinaceli, Ximena (Comp.): Balance bibliográfico de la ciudad de La Paz. La Paz, UMSA, 1999: 87-97).

JORDÁN, ADOLFO D. Consultor de archivo, contratado en 1919 para la organización del Archivo Judicial de La Paz. Fuente: Oporto, 2006: 158; R. 9.5.1919.

JORDÁN ESPINOZA, LUIS ROBERTO (Oruro, 1910. † 1983)

Jefe de archivos de la Corporación Minera de Bolivia*. A pocos días de la nacionalización de la gran minería fue nombrado como primer Jefe del Archivo General de la Corporación Minera de Bolivia (6 de noviembre de 1952). En esa condición se hizo cargo de los archivos de la Patiño Mines, Hochschild SAMI y la Compagnie Aramayo de Mines, que la empresa minera estatal había heredado en la ciudad de La Paz, como efecto de la nacionalización impuesta por el DS 3223 de 31 de octubre de 1952. Formó el primer Archivo Central y tomó a su cargo el control de la correspondencia intercambiada con 34 centros y empresas mineras. Gracias a su gestión el Archivo General de la COMIBOL fue considerado uno de los mejores Centros de Archivo en Bolivia. El 10 de noviembre de 1956 elaboró el Índice de las empresas mineras que conformaron la Corporación Minera de Bolivia, en base a las empresas nacionalizadas, asignándoles un código numérico a cada una de ellas y agrupándolas en tres secciones: Ex Hochschild, Ex Grupo Patiño, Ex Aramayo.

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En 1957 redacta la Nomenclatura del Archivo del Departamento Técnico, mediante una codificación numérica que establece la relación de la Oficina Central de la COMIBOL, sus unidades funcionales y las Empresas Mineras de su dependencia. El mismo año elabora las Instrucciones generales de producción de documentos, estableciendo un sistema de archivo decimal para evitar duplicaciones, copias inútiles y para facilitar la clasificación, orden, acceso inmediato y seguridad en el Archivo de toda la correspondencia. El Archivo General, tenía el rango de autoridad archivística institucional, con atribuciones y competencias de ente rector para la normalización de procesos en la producción documental y como regulador de procedimientos archivísticos en toda la Corporación Minera de Bolivia. Este carácter fue reconocido en el Manual de Organización y Funciones de la COMIBOL, y es uno de los escasos ejemplos en la historia archivística boliviana. El 25 de marzo de 1964 el gerente Hermann J. Schippers instruyó el reordenamiento de los archivos para trasladarlos a los almacenes de la Comibol en El Alto, para lo cual diseñó un plan de seis puntos, siendo los más importantes el reordenamiento y tratamiento técnico de los archivos de las ex empresas existentes en la oficina central de La Paz; el traslado de documentos hasta el año 1959; el traslado de archivos existentes en los almacenes de Oruro; y la separación de la correspondencia rutinaria de los archivos mineros de las ex empresas de Patiño, Hochschild y Aramayo, consideradas “sin valor mercantil para que previo chequeo (....) se proceda a su incineración”. Dada la magnitud de la documentación, el Jefe de Archivos cumplió esta instrucción desde el 1 de abril de 1964 hasta el 9 de febrero de 1965. El resultado se tradujo en la incineración de 17.000 expedientes, carpetas y archivadores de palanca, cuya relación fue contenida en 16 actas suscritas por una comisión de alto nivel designada para verificar la destrucción de documentos, conformada por el Jefe del Archivo, el Asistente Administrativo de la Gerencia General Alberto Claure, el Jefe Administrativo Cnl. Gustavo Maldonado; el Secretario General, Félix Rospigliozzi y el Gerente de Control, Josep Anders. Bolivia ingresó en un proceso de dictadura militar a partir del 4 de noviembre de 1964 hasta el 10 de octubre de 1982 (con intervalos democráticos entre 1965-1969 y 1979), lo que provocó cambios en la estructura orgánica de la COMIBOL y se designó como máximas autoridades de la entidad a militares de alto rango. Pese a ello, estos cambios no tuvieron incidencia negativa en la organización de los archivos pues las normas estaban plenamente vigentes y su cumplimiento era obligatorio en toda la empresa. Jordán se mantuvo en el cargo y con apoyo de quien sería su sucesor en el Archivo General, J. Gallardo*, impulsó la adquisición de equipos de microfilmación, actualizó la colección de la Gaceta Oficial de Bolivia, se adquirieron cajas de archivo definitivo y gestionaron mejoras en las instalaciones de los depósitos de archivo ubicado en la ciudad de El Alto. Se jubiló en 1978. La normalización de procedimientos archivísticos tuvo vigencia hasta 1985, cuando por efectos del DS 21060, se produjo el cierre de las empresas mineras y se redujo a la COMIBOL a la calidad de administrador de contratos de riesgo compartido y arrendamiento, dentro del proceso de privatización (1985-2005), hecho que provocó el desmantelamiento del Archivo General de la empresa y su destrucción paulatina. Jordán no vio nada de aquello pues falleció dos años antes. Fuente: Lora, 2004; Oporto, 2006: 286-287; Expediente personal; Resoluciones de Directorio y Archivo de la Gerencia de Control (AHMN).

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JORDÁN SANDÓVAL, SANTIAGO

(Valle Grande, Proncia Cordillera, Santa Cruz, 21 de noviembre 1903) Profesor, Licenciado en Ciencias Económicas, Escritor, Diplomático de carrera, Periodista (colaborador en El Diario, Presencia Literaria de La Paz y El Deber de Santa Cruz), Benemérito de la Guerra del Chaco. Miembro fundador de la Asociación de Periodistas de La Paz. Empezó su carrera diplomática como Secretario del Departamento de Límites del Ministerio de Relaciones Exteriores, ocasión en la que se fijó como meta el traslado de documentos coloniales que habían sido arrojados en los sótanos del Palacio de gobierno, trasladándolos a la Cancillería. Los documentos habían sido acopiados por dos comisionados de Bolivia enviados al Archivo General de Indias* de Sevilla y al Archivo Histórico de Madrid, instrumentos importantes para sustentar los derechos territoriales de la República. Al término del fichaje que realizó, contabilizó un total de 3.219 documentos, con los que formó el Catálogo General del Archivo Colonial del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, que comprende desde el descubrimiento de América hasta la Guerra del Chaco, con un apéndice de 1572 a 1898, trabajo realizado en abril de 1937. Siendo director de Tratados y Convenios Internacionales, por iniciativa propia publicó el Registro de Tratados y Convenios Internacionales, Multilaterales y Bilaterales de Bolivia, con tres índices muy útiles para facilitar la investigación en temas diplomáticos (1944). Afirma que es una “obra muy requerida por Embajadas, Universidades y especializados en la materia”. Por orden de servicios preparó la documentación para el Tomo VI de la Colección de Tratados Vigentes, Convenciones Multilaterales, 1939-1950, con datos conexos, el mismo que “tiene la categoría de las compilaciones realizadas por diez ex ministros de Relaciones Exteriores”, publicado en 1952. Hizo lo propio, a requerimiento del comité Organizador del III Congreso Interamericano Indigenista, y preparó la ponencia “Contribución de las Naciones Unidas, Organización de Estados Americanos y Gobierno de los Estados Unidos sobre el problema indígena de Bolivia”, en agosto de 1954. Comentó la obra de G.R. Moreno* sobre la Unión Panamericana (1901), en su “Contribución de Bolivia a la Obra del Panamericanismo”, publicado por el Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Mayor de San Andrés (1968). Publicó su Alternativa de Bolivia para ingresar a la Zona de Libre Comercio, en 1962, que fue considerado para el ingreso de Bolivia a ese régimen. Participó como delegado de Bolivia a la XV Asamblea General de las Naciones Unidas (1960). Posteriormente escribió Bolivia en la integración, el desarrollo y el desafío brasileño (1972). Migró a Estados Unidos, donde escribió su último libro Bolivia y el equilibrio del Conosur, en el que plantea la tesis que Bolivia es el eje Central del Conosur y por ello escenario de grandes proyecciones económicas como nexo entre el Atlántico y el Pacífico, por medio de corredores bioceánicos. Publicaciones archivísticas: Catálogo General del Archivo Colonial del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, que comprende desde el descubrimiento de América hasta la Guerra del Chaco, con un apéndice de 1572 a 1898. La Paz (1937). Fuente: Jordán, 1992.

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JULIEN, CATHERINE JEAN

(Stanford, California, EE.UU. 19 de mayo de 1950. † Turlock, California, EE. UU., 27 de mayo de 2011) Profesional subyugada por el pasado prehispánico de los Andes, dejó un legado imperecedero con su Hatunqolla, una perspectiva sobre el imperio incaico desde la región del lago Titicaca, publicada por la Maestría en Historias Andinas y Amazónicas y el Colegio de Historiadores de Bolivia (2004). Estudió Antropología en la Universidad de California (Berkeley), obteniendo su Doctorado en 1978, con su tesis Hatunqolla: a view of inca rule from the Lake Titicaca Region, dirigida por John H. Rowe, el autor del célebre Sistema Vial Incaico. Enseñó en la Universidad de Bonn (1989-1995) e ingresó al Departamento de Historia de la Universidad de Western Michigan (1996), donde llegó a ser Directora de Estudios de Pregrado (2001) y Postgrado (2007). Siendo Profesora Asistente, la Western Michigan University, le otorgó el 2004 el título de Investigadora Distinguida, honor reservado casi exclusivamente para profesores de tiempo completo. Su investigación sobre Hatun Colla concentra su atención en el Intermedio Tardío (1480-1535) y examina la cultura material y los cambios de la política (que fue dinamizada por el Estado Inca) y las transformaciones introducidas por el arribo de los españoles en el siglo XVI. Continuó sus trabajos arqueológicos en Perú y una investigación archivística sobre América del Sur en Archivos del Perú, España y Alemania. Dada su formación interdisciplinar en Antropología y Arqueología planteó novedosas propuestas, sustentadas en vestigios arqueológicos, la investigación de campo y las fuentes tempranas, para comprender la Historia Inca, su cosmovisión e interacción con otros pueblos indígenas y con las avanzadas españolas. Dictó el Seminario “Orígenes del Oriente Boliviano” en la Maestría en Historias Andinas y Amazónicas (2003). Su investigación archivística sobre fuentes impresas de los Andes fue remarcable, aporte que le faculta ingresar con legítimo derecho a la historia de la Archivística Boliviana. Publicó catorce artículos en principales revistas, contribuyó en veintidós capítulos de importantes colecciones y casi dos docenas en publicaciones más populares. Participó con ponencias en un centenar de conferencias, muchas como invitada principal. Obtuvo catorce subvenciones y becas nacionales e internacionales, incluida una de la Academia Nacional (Gran Bretaña), la beca Humboldt (Alemania), numerosos National Endowment de Humanidades (dos para su proyecto de Alvar Núñez Cabeza de Vaca), dos becas Fulbright y una muy codiciada beca Guggenheim. La excelencia y la importancia de su investigación, publicada en inglés, italiano, alemán y español, le permitió obtener importantes premios, como el galardón Katherine Singer Kovacs de la Modern Language Association, por su Historia de los Incas (2000), conceptuada como el mejor trabajo en historia y cultura de Latinoamérica; y el Premio Voeglin de Ermine-Wheeler de la Sociedad Americana de Etnohistoria, por el mejor trabajo en Etnohistoria. Proyectó una obra de varios volúmenes sobre el Adelantado español Alvar Núñez Cabeza de Vaca. Dedicó su vida a la recuperación de la “voz” e historia de los pueblos indígenas de América del Sur, y en particular del Imperio Inca. Posteriormente fijó su interés en el oriente boliviano, donde estudió las entradas tempranas por el Río de La Plata y Santa Cruz de la Sierra, del Adelantado Alvar Núñez Cabeza de Vaca (1542), procedente del Paraguay acompañado por Ñuflo de Chávez, conduciendo desde el Iguazú una expedición de 80 españoles en canoas. Colaboró con E. D. Langer*, en el proyecto del Corpus Documental de la Historia de Tarija*, tomando a su cargo la compilación del Tomo VI, referido íntegramente a las fuentes tempranas de Tarija, vale decir las que corresponden al Siglo XVI. Fuente: Oporto, 2011b: C10.

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K KAVLIN, ALEJANDRO Y ENRIQUE (Rusia)

Los hermanos rusos Kavlin emigraron a La Paz, después de la Primera Guerra Mundial (1914-1918). Instalaron en esta ciudad tiendas fotográficas y estudios modernos, incluyendo el Estudio Fotográfico Moderno en la calle Yanacocha 76 (ca. 1918). A. Kavlin abrió otro estudio en la calle Comercio Nº 26 a finales de la década de 1920 y un tercero en la misma calle al Nº 370, con su anexo al Nº 372, un almacén para el expendio de artículos fotográficos, en la década de 1930. La firma Kavlin tenía un anuncio de media página en la Guía de Viscarra de 1918: “Estudio Fotográfico Moderno de A. Kavlin, única casa en la América del Sud, retrata de día y de noche. Retratos al platino-tipia y aristo-platino. Ampliaciones al Bromuro, pastel, sepia, al Platino, Platino al Azul y al Oleo. Trabajos Garantizados- precios módicos. Se aceptan llamados a domicilio, Yanacocha 76, La Paz”. La empresa fue también conocida como Casa Kavlin que distribuía “Materiales fotográficos de las mejores marcas Agfa Kodak, Importadores Unicos”. Ya en la década de 1930 sus estudios se habían expandido a Oruro (calle Gobierno 1478) y Cochabamba (ca. 1936). Una breve historia de la empresa, “La Increíble Historia de la ‘Casa de Kavlin”, fue publicada en el periódico Hoy de La Paz, el 24 de febrero de 1991. Posteriormente Casa Kavlin se mudó a su edificio propio en la calle Potosí 1130 (La Paz), bajo la dirección de Susana Kavlin, expandiendo su negocio a la atractiva oferta de la línea Eastman Kodak, que fabricó las primeras cámaras fotográficas automáticas e instantáneas Polaroid, alternando con la venta de productos fotográficos y a fines de los 70 e inicios de los 80’s, con el servicio técnico y distribución de equipos de microfilmación Kodak, habiendo creado el Centro de Adiestramiento de la Casa Kavlin S.A. y Kodak (1975), que impartía Cursos de Técnicas de Archivo y Microfilmación, como parte de su programa de capacitación para el uso de equipos de microfilmación destinado a sus clientes. En 1995, la Casa Kavlin dejó de representar a la transnacional Kodak para la distribución de sus productos. Susana Kavlin (18 de abril de 1965) fue la última en dirigir la empresa familiar. En 1990, creó el Museo de la Imagen “Marcos Kavlin”, para conservar “todo tipo de cámaras fotográficas, filmadoras y proyectoras antiguas”, convocando a la ciudadanía a donar sus equipos a cambio de “descuento especial por compras”. En 1999, traspasó en custodia el Museo de la Imagen a la Cinemateca Boliviana*. A principios del siglo XXI, la Casa quebró. Fuente: Buck, 1999; La Razón, 1998: B10, Presencia, 1990: 9.

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KENNING, WILLY (Santa Cruz, 1958)

Fotógrafo autodidacta. Estudió Agronomía, sin concluirla. Vivió dos años en Argentina, acompañando a su padre (fundador de Falange Socialista Boliviana) en su exilio en Tucumán. Trabajó como reportero de eventos sociales, trabajó para una revista de Rugby, hizo fotos de turismo por encargo. Se transformó en el fotógrafo oficial de la Conferencia Episcopal Boliviana y retrató al Papa Juan Pablo II en su gira por el país (1988). Tiene una colección perfectamente etiquetada de imágenes tomadas en la Argentina, en dos años de trabajo de constantes viajes, de la que publicó Argentina, una travesía aérea. También publicó Santa Cruz la otra cara de Bolivia (1991), Bolivia desde el cielo (1993), Paisajes de Bolivia (1995), Bolivia, imágenes de un viaje aéreo (1996), Bolivia, una travesía aérea (2001), Bolivia, el nuevo rumbo de una economía emergente (2001), y Bolivia espectacular (2009), con los que se consagró como fotógrafo profesional. Tiene su estudio y su Archivo en la calle Tarija de Santa Cruz de la Sierra donde guarda sus 50.000 imágenes en cajas especiales, que incluyen cientos de slides (diapositivas), clasificadas temáticamente: panorámicas, fauna, etc., identificando los lugares geográficos a los que corresponden. Publicó algunas de sus fotografías sobre el Parque Madidi en National Geographic (2000). Tiene también colecciones de revistas especializadas y mapas de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile y Perú. Fuente: Justiniano, 2001: 18-19.

KIEFFER GUZMÁN, FERNANDO

(La Paz, 1 de mayo de 1949. † La Paz, 6 de mayo de 2009) Diputado por el Departamento de La Paz en las Legislaturas 1982-1996; 1999-2001. Segundo Secretario (1986-1989) y Presidente de la Cámara de Diputados (19891991). Fue Ministro de Asuntos Urbanos (1991) en el gobierno de J. Paz Zamora* y de Defensa Nacional (1997-1999) en el segundo gobierno del Gral. Hugo Banzer*. Vivió en el Perú durante el exilio de su padre (1952-1965), lo que explica su radical oposición a las ideas marxistas y socialistas, por ello militante de la derecha boliviana y defensor a ultranza del gobierno dictatorial de Hugo Bánzer Suárez. Aficionado a la investigación histórica escribió Ingavi, batalla triunfal por la soberanía de Bolivia (La Paz, 1991), Antonio José de Sucre, un estudio del guerrero y estadista (La Paz, 1995), que muestran su interés por la vida castrense. Posteriormente escribió dos obras apologéticas sobre el gobierno de Bánzer: De cara a la revolución de 1971 (La Paz, 1999) y La capitalización: “pese a quien pese y cueste lo que cueste” (La Paz, Fondo Editorial de los Diputados, 2001). Paradójicamente, Bánzer al ser acusado por sobreprecio en la adquisición de un avión presidencial, modelo Beechcraft, declinó responsabilidades en su antiguo defensor, quien terminó en la cárcel de la que salió sólo para morir aquejado por cáncer renal. Su mérito radica en que siendo diputado apoyó las acciones de salvataje de los saldos documentales de la Cámara de Diputados, y, merced a su influencia, hizo autorizar el proyecto de M. Bedoya Ballivián* para la creación del Archivo Histórico Legislativo. Fuente: Oporto, 2006.

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KIRCHOFF, HERBERT Viajero y fotógrafo; colaborador de La Prensa y La Nación de Buenos Aires, calificado como un Poeta de la fotografía. Recorrió el territorio nacional, entre 1940 y 1941, registrando estampas de distintos pisos ecológicos, “en un país de contrastes”, desde la alta montaña en la que retrató los glaciales, el lago Titikaka, Tiwanaku, y el altiplano, la ciudad de La Paz, bajando por las regiones tropicales de Tipuani y Chulumani; los valles de Sorata; Oruro, Potosí, Sucre, Cochabamba, Beni y Santa Cruz de la Sierra, logrando captar “fotografías expresivas, extraordinarias y magníficas”, como afirma Juancito de La Paz un reporter de la época. Ese periplo le permitió formar un bello Álbum al que tituló Bolivia, que publicó por su cuenta, en la esperanza de “hacerla llegar como expresión de la belleza del suelo boliviano a todos los países que se interesan por el turismo panamericano”. En su afán de “descubrir y documentar” la Bolivia escondida y virgen, contextualiza el paisaje, la arquitectura y monumentos con fotografías de la vida rural y sus habitantes, hombres y mujeres, que expresan la “belleza primitiva” de la Bolivia íntima de los 40’s. Supo combinar “su composición etnográfica, su folklore junto al aspecto moderno del país”. Posteriormente pasó a Argentina (1945, 1949, 1961), Venezuela (1956) y Lima (1958), donde publicó libros de estampas fotográficas, siempre “con la misión de proyectar una visión del pasado y presente” de esas capitales, “con los que adquirió prestigio”. 288 de sus fotografías elaboradas en gelatina de plata, se cotizan en 7 mil euros, entre los que se encuentran Parques Nacionales Argentinos, Bolivia en acción, Perú. Las fotografías que componen este lote son las que realizó durante su viaje por Bolivia y que después publicó en el libro en las que ofreció al lector una visión del pasado y del presente de la república del altiplano. Entre sus publicaciones destacan: Bolivia. Its people and scenery (Buenos Aires, 1942 y 1944); Bolivia: sus tipos y belleza (Buenos Aires, 1942); Bolivia en acción (Buenos Aires, 1948); Los parques nacionales argentinos, 1945; La Argentina (Buenos Aires, 1949, con prólogo de Arturo Capdevila); Venezuela (1956); Lima, la única (Buenos Aires, 1958); Argentina Austral. Latitude Sout (1961). Fuente: La Noche, 1943: 8; Gumucio Dagron, 1995: 16; http://eeadv.wordpress.com/ arqueologia/bibliografia-arqueologica-de-tiwanaku/bibliografia-de-tiwanaku/ bibliografia-de-tiwanaku-k/; http://limalaunica.blogspot.com/2010/12/peru-dehttp://www.liveauctioneers.com/item/9116071; http:// herbert-kirchhoff.html; coleccionrabobank.com/?page_id=1181

KORNBLUH, PETER (EE.UU.)

Analista y Consultor de la ONG National Achievement Security (Archivos de Seguridad Nacional). Director del Proyecto NAS de Documentación sobre Chile (Washington D.C.). Consiguió la desclasificación de más de 24 mil documentos

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procedentes de la Secretaría de Estado y de la Agencia Central de Inteligencia CIA, sobre la historia secreta del apoyo norteamericano del presidente Richard Nixon y su Secretario de Estado Henri Kissinger a la dictadura del general Augusto Pinochet y a los militares golpistas para acabar con la democracia en Chile. También trabaja en la desclasificación de documentos sobre las dictaduras en Perú, Argentina, Uruguay y Bolivia, existentes en los Archivos Nacionales de los EE. UU. Los cables secretos que desclasificó confirmaron que la Casa Blanca supo desde el inicio sobre el Plan “Cóndor” y las violaciones a los derechos humanos cometidas por las dictaduras latinoamericanas en los años setenta. Los documentos revelaron el verdadero rol que jugó Estados Unidos en la historia del Plan “Cóndor”: “Ahora sabemos lo que pasó: el Departamento de Estado inició a tiempo un esfuerzo para frustrar asesinatos en el Cono Sur y Kissinger sin explicación lo abortó”. Sobre el caso peruano presentó sus resultados en el Foro Internacional “Los documentos desclasificados en la lucha contra la impunidad: Experiencias en América Latina”. En septiembre de 2008 fue invitado por la Embajada de Bolivia en Estados Unidos, para asesorar al gobierno en temas de acceso a la información y desclasificación de los archivos militares. En una reunión con archivistas bolivianos en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, hizo conocer la metodología para la desclasificación de archivos. Publicaciones archivísticas: Pinochet: los archivos secretos. Título original en inglés: The Pinochet File: A declassified dossier on atrocity and accountability (Barcelona, 2004). Fuente: http://www.eduportal.com (7.6.10); http://www.aprodeh.org (7.6.10)

KOWANDA, WILHELM Viajó a Bolivia a mediados de 1920, procedente de la Argentina a través de Villazón y visitó las misiones Guarayas de Santa Cruz, Tarija, Potosí, Tupiza, La Paz y Tiwanaku, antes de pasar al Perú. Su obra In Zonen der Zukunft, Reise-epistelnaus Bolivien (Viena, 1925) contiene un número apreciable de ilustraciones, algunos fotomontajes, presumiblemente basados en fotografías hechas por él. Kowanda visitó Yotaú y Urubichá, en 1908, durante la celebración de la fiesta nacional de Austria, conmemorando el sesenta aniversario de la entronización del Emperador Francisco José, tres de cuyas fotografías fueron reproducidas por P. García Jordán*, en 2009. Varias de sus fotografías se hallan en su obra Viajes epístolas de Bolivia y sus zonas fronterizas (Viena, Selbstverlag, 1925; 93–96). Fuente: Buck, 1999; García 2009: 180, 232-233; www.mioruro.com (27.3.12)

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L LANDOR, A. HENRY SAVAGE (Inglaterra, 1867. † 1924)

Explorador y escritor de viajes, viajó por el Lejano Oriente, Oriente Medio, África y América del Sur, donde escaló montañas, descubrió tribus, exploró ríos para navegar y recogió historias increíbles que contar. En 1911, se embarcó en una maratónica expedición de varios meses por tren, mula, canoa, vapor y a pie, a través de Brasil (desde Río de Janeiro hacia el norte de la Amazonía), Perú, sur de Bolivia y Chile, y al oeste a través de Argentina hasta Uruguay, donde tomó un barco a Inglaterra. Viajando con sólo unos pocos cargadores, empacó “seis cámaras fotográficas, especialmente hechas, con los mejores Lentes Zeiss y Goertz y 1400 placas fotográficas de vidrio incluyendo algunos para fotografía en color”, mil latas de alimentos, ocho compases, seis termómetros (…), doce fusiles de repetición, varias pistolas automáticas, miles de rondas de municiones, tres galones de aceite de ricino y “variedad de sables, picos, sierras grandes, hachas y cuchillos”. Su expedición sufrió numerosas catástrofes, provocando que la mayor parte de sus 800 fotografías se pierdan. Sin alimentos cubrieron su camino a través de la Amazonia a pie durante dieciséis días. En París, un periódico le acusó de fantasioso. Sin embargo, dondequiera que fue siempre llevó una cámara, como se observa en su diario de viaje Across South America (1913) que contiene más de 250 ilustraciones en blanco y negro, fotografías hechas por él, que incluye varias vistas de Bolivia. Fuente: Buck, 1999.

LANGER, ERICK D.

(Richland, Estado de Washington, EE.UU. 22 de mayo de 1955) Historiador (Universidad de Stanford). Profesor de la Universidad de Georgetown, Washington, DC. Director del Center for Latin American Studies de la misma universidad. Gran conocedor de las fuentes para la historia del sur de país. El resultado de su investigación fue su tesis doctoral Rural Society and Land Consolidation in a Declining Economy: Chuquisaca, Bolivia 1880-1930. Su aporte archivístico es notable y se inició a mediados de 1981, cuando descubrió -en la Hacienda “San Pedro Mártir”“un archivo que perteneció al industrial S. I. Patiño*, cuyos documentos estaban allí desde 1953, en polvorientas cajas, en medio de desechos industriales, presa de insectos,

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roedores y ofidios, pero increíblemente habían conservado su orden original, excepto varias hojas sueltas dispersas”. El archivo a la postre fue organizado por E. Aillón*. En esa misma época, Langer estuvo en Sucre y en el sur del país, donde organizó los archivos judiciales de Villa Abecia, Monteagudo y Zudáñez. En Camargo rescató los documentos de la Subprefectura y parte del Juzgado de Instrucción, pagando de su propio peculio a reos de la cárcel para rescatar documentos que yacían debajo del edificio subprefectural que había colapsado parcialmente el año anterior. En 1988 trabajó con Z. Bass Werner*, escritora tarijeña, en la compilación del Tomo V del Corpus Documental sobre la historia de Tarija*, editada por la Universidad Autónoma “Juan Misael Saracho”. En 1992, sus andanzas archivísticas lo llevaron a Tupiza, en la que junto a Willy Cardona organizó el Archivo del Juzgado de Instrucción y el fondo documental de la Casa Matriz de la Compagnie Aramayo de Mines, concluido en 1993 con Alejandra Roncallo. Tres años más tarde consiguió recursos del Latin American Microfilm Proyect para la microfilmación de ese archivo. Curiosamente, afirma, “la Alcaldía de Tupiza hizo parar el proyecto, confiscó los equipos, maltrató y expulsó de la ciudad, a los técnicos de la empresa cochabambina que realizaban la microfilmación”. Más tarde el proyecto fue retomado por I. Villegas*, que logró organizarlo por encargo de la Municipalidad, creando el primer Archivo Histórico Regional. En 1993 denunció la incineración de los archivos judiciales coloniales de Tarija, que de acuerdo a su testimonio habría autorizado la Presidenta de la Corte Superior de ese Distrito Judicial. En su descargo, la Dra. María Luisa Pacheco de Morales, señaló que “tan sólo fueron incinerados aquellos [documentos] que se encontraban ilegibles o los que no tenían ningún significado ni valor histórico”. Langer informó que los documentos “habían sido sacados en camiones para ser quemados, hecho que motivó la airada protesta de los historiadores. En 1994 encontró y organizó el archivo de la Delegación del Gran Chaco, en Villamontes, que después se trasladó a la Casa de Cultura de Villamontes. El 2005 volvió a Tarija oportunidad en la que organizó (con la ayuda de su esposa y personal de la Corte) el Archivo de la Notaría y el Archivo Judicial de Entre Ríos. Junto a Herbert S. Klein, en su condición de miembro del comité ejecutivo del Proyecto Harvard (PLALA), organización administrada por D. Hazen*, apoyó varios proyectos archivísticos de repositorios como el Archivo Nacional de Bolivia* y el Archivo de La Paz*. Publicaciones archivísticas: “Guía de fuentes de investigación no tradicionales en Chuquisaca” (en Corte Superior de Distrito Judicial de Chuquisaca. Informe de Labores. Sucre, 1981: 129137); “Crónicas de un historiador fustrado en Tarija” (Presencia Literaria. La Paz. 28 de marzo 1993: 3); “Los archivos históricos no tradicionales en Bolivia: Una lista incompleta” (Anuario del ABNB, 1994-1995: Estudios en homenaje a Gunnar Mendoza Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. René D. Arze Aguirre, editor, Sucre: ABNB, 1995: 291-299). Fuente: Langer, 1988; Presencia, 1993: 3; Entrevista personal 19.07.10.

LANZA QUIROZ, VLADIMIR E. JAIRO (Potosí, 1977)

Técnico en Sistemas Integrados Informáticos (2002). Ha participado en varios cursos, conferencias y foros relacionados con la Ley 1178 (Control y Administración Gubernamentales), lo que le ha proporcionado importantes conocimientos sobre

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la gestión documentaria en las empresas. En 2002 era trabajador eventual en los Almacenes de la COMIBOL en El Alto, ocasión en la que apoyó a E. Ramírez Santiesteban* en el salvataje de los Archivos Mineros (2003-2004). Desde el 2005, en mérito a esa experiencia, fue designado como Encargado de la Oficina de Control de Correspondencia de la Corporación Minera de Bolivia*, que forma parte del Sistema de Archivo de dicha empresa. Fuente: CV.

LARA GÓMEZ, NORKA RAQUEL

(Huanuni, Provincia Dalence, Oruro, 19 de mayo de 1967) Estudió la carrera de Técnico Laboratorista Clínico (Cuba). Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA, 2011). Tiene un Diplomado en Gestión de la Documentación y Archivos (Universidad Loyola). Trabajó como laboratorista en el Hospital Infantil Sur (Santiago de Cuba). Ingresó a trabajar en la Cámara de Diputados como secretaria del partido político Convergencia Patriótica-Izquierda Unida. Participó en el Seminario sobre el Proyecto de Apoyo a la Modernización de la Administración Pública (GTZ), Organización de Sistemas de Archivos (Academia Itinerante de Archivos AECI), Actualización en Archivos y Capacitación para capacitadotes (GTZ), Gestión de la Documentación y Archivos (Grupo Consultor en Negocios y Capacitación), Seminario Internacional Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la importancia de su Rescate para el Desarrollo Nacional (Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso). Ha desempeñado funciones de Técnico de Correspondencia (contraparte de la Cooperación Alemana GTZ) para la implementación de la Ventanilla Única en la Cámara de Diputados; Técnico Responsable evaluador de trámites de la Ventanilla Única; contraparte Camaral para la creación e implementación del Archivo Central de la Cámara de Diputados; Responsable del Archivo Central de la Cámara de Diputados y Correctora de Instrumentos Camarales (Secretaría General de la Cámara de Diputados). Redactó el Reglamento Interno del Archivo Central de la Cámara de Diputados, elaboró los instrumentos de control, descripción, flujo y transferencias documentales del Archivo Central. Fue también facilitadora de cursos de capacitación en Archivos y Correspondencia. Desde el 2010 trabaja en el Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Cultos, primero como consultora, luego como responsable del Sistema de Archivo del Ministerio. Con F. Chuquimia* dieron nuevo impulso a la Asociación de Archivistas del Poder Ejecutivo* (2012). Publicaciones Archivísticas: “Seminario Iberoamericano: Organización de Sistemas de Archivos” (Fuentes del Congreso, 2004, 13: 134-135); “Archivo Central de la Cámara de Diputados” (Fuentes del Congreso, 2004, 1 (11): 98); “Seminario Iberoamericano sobre organización de Sistemas de Archivos” (Fuentes del Congreso, 2004, 1 (13): 134); “Seminario de Gestión Documental para la H. Cámara de Diputados” (Fuentes del Congreso, 2004, 1 (21): 228); “Crónica de un Documento de Archivo” (Oporto y Ramírez: Memoria del Seminario Internacional sobre la Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Necesidad de su Rescate para el Desarrollo Nacional, La Paz, BAHALP-COMIBOL, 2011: 121-123). Fuente: CV.

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LARA OBLITAS, LOURDES (La Paz, 18 de junio de 1960)

Licenciada en Ciencias de la Educación (UMSA). Estudia Administración de Empresas. Realizó cursos de Microisis, y Técnicas de Archivo y Microfilmación (1995). Es Secretaria ejecutiva egresada del “Lincoln Institute” (1978); trabajó en Teléfonos Automáticos S.A. (1978-1979), Mitsubishi Corporation (1979-1984), Plan de Padrinos (1985), Consejo Nacional de Población del Ministerio de Planeamiento (1987-1988), Qhana Educación Popular (1988-1989), Cooperación Técnica Suiza (1989-1991; 2001-2006). Posteriormente fue documentalista de la Asociación de Instituciones de Promoción y Educación (1992-1995); bibliotecaria en la Cooperación Suiza para el Desarrollo (1998), en el Sistema Educativo de Acción y Movilización Social (1995-1998), en la Conferencia Episcopal Boliviana (1998-1999) y en Univalle (2000). Su primera experiencia en organización de archivos se remonta al 2000, cuando organizó el Archivo de Imágenes de la ONG Libercom. En el Colegio Internacional de la Sierra (Santa Cruz), organizó su biblioteca y archivo (2006); luego fue Supervisora de Archivo y Registro de Información en la Dirección de Registro, Control y Administración de Bienes Incautados del Ministerio de Gobierno (2007). Posteriormente trabajó en investigación educativa para el Observatorio de Calidad de Educación del Ministerio del ramo (2007-2008) y luego como Asistente de Gerencia y Encargada de Recursos Humanos de la Fábrica de Quesos “Flor de Leche”. Desde 2009 se desempeña como Encargada de Gestión Documental en la estatal Administradora Boliviana de Carreteras. Fuente: CV.

LARDANI, GIACOMO

(Francia, 1861. † Tarija, 1937) Sacerdote franciscano ordenado en 1884. Llegó a La Paz tres años más tarde. En 1898 se trasladó a la misión franciscana en Tarija, donde tomó fotografías en la región del Chaco a finales de los años 1890, las que fueron incluidas en la Historia natural, etnográfica, geográfica, lingüística del chaco boliviano 1898 (1996) de Doroteo Giannecchini, editado por L. Calzavarini*, O.F.M, y en el Álbum fotográfico de las Misiones Franciscanas en la Republica de Bolivia a cargo de los Colegios Apostólicos de Tarija y Potosí, 1898, de Giannecchini y Vicenzo Mascio, publicado en 1995. Fuente: Buck, 1999; Calzavarini, 2005.

LARICO RAMOS, JUAN ROBERTO (La Paz, 7 de febrero 1988)

Estudió en la Carrera de Ingeniería de Sistemas UDABOL Oruro. Participó en el curso sobre Organización de Archivos y Legislación Archivística en la Constitución Política del Estado y su Importancia Estratégica para el Desarrollo Nacional organizado por el Archivo Histórico Regional Oruro (Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*) en julio de 2009. Fue Auxiliar de Archivo de la Superintendencia de Electricidad. El 2009 trabajó eventualmente en el armado de estantería del Archivo

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Regional de Oruro. El 2010 fue contratado como Asistente del Archivo Regional de Oruro del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

LARSON, BROOKE

(EE.UU., 24 de enero de 1947) Historiadora Ph.D., Columbia University (1978). Fue directora del Departamento de Historia, de la Universidad de Stony Brook (2008-2010); profesora de Historia, SUNY-Stony Brook (1999), Directora del Centro Latinoamericano y el Caribe, Stony Brook (1994-1997), directora del Programa del Consejo Latinoamericano de Investigación en Ciencias Sociales (1981-1983). Ganó numerosas becas, entre ellas las de John Simon Memorial de la Guggenheim Foundation (2007), Woodrow Wilson International Center for Scholars (2006-2007). Su obra historiográfica es vasta: Trials of Nation Making. Liberalism, Race, and Ethnicity in the Andes, 1810-1910 (2004); Indígenas, élites, y Estado en la formación de las repúblicas andinas, 1850-1910 (2002); Ethnicity, Markets, and Migration in the Andes: At the Crossroads of History and Anthropology (1995. Co-editada con O. Harris y E. Tandeter); Colonialism and Agrarian Transformation in Bolivia: Cochabamba 1550-1900 (1988); Colonialismo y transformación agraria en Bolivia: Cochabamba, 1550-1900 (1992); La participación indígena en los mercados surandinos. Estrategias y reproducción social, siglos XVI-XX (1987. Co-editada con O. Harris y E. Tandeter); Explotación agraria y resistencia campesina en Cochabamba (1983). Realizó una revisión crítica del Archivo Municipal de Cochabamba, publicada por Jhon J. TePaske en la colección Guide to Andean History: Bolivia, Chile, Ecuador, y Peru (Duke University Press, 1981), con la que orientó las investigaciones de los bolivianistas. De igual manera escribió sobre las notables dificultades de los historiadores para acceder a los archivos municipales y provinciales, habiendo publicado sus observaciones críticas en su obra Cochabamba: (Re) construcción de la historia de Cochabamba (2000). Es una de las investigadoras que más conoce las fuentes sobre la historia boliviana. Publicaciones archivísticas: “El Archivo Histórico Municipal de Cochabamba” (J.TePaske, ed. Research Guide to Andean History: Bolivia, Chile, Ecuador and Peru. Durham, 1981: 5-7); “Memorias de su padre y patria: una entrevista con Gunnar Mendoza en 1990” (Anuario del ABNB, Sucre 1997: 387-402). “La Revolución Historiográfica Aymara: algunas reflexiones sobre la obra del Taller de Historia Oral Andina” (2003). Fuente: CV; Entrevista personal del 16.8.11.

LAUROUA, MANUEL

(Laás, Francia, 1861. † Tarija, 1937) Realizó sus estudios en Francia y Reino Unido. Fue sucesor del P. Gervasio Costa quien llegó a Tarija en 1872 (n. Grote di Castro, Viterbo; m. Tarija 1915). Lauroua llegó a Bolivia en 1898. Trabajó diez años en Tarata, de allí pasó a Tarija donde fue bibliotecario, archivero, cronista y director de las Obras Antonianas. Autor de los Anales y del libro de Necrologías (destinado a recordar a los franciscanos de Bolivia sin consideración de Colegio y Provincia de pertenencia) desde 1899 hasta 1936; colaboró en el boletín El Antoniano y fue corresponsal de la revista Archivo de la

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Comisaría Franciscana de Bolivia, editada en Tarata. En el Archivo de la Comisaría franciscana de Bolivia fue colaborador de cartillas biográficas de los franciscanos de Tarija. Su trabajo en los Anales atestigua su perfección de cronista conventual, pues fue “observador implacable, preciso y polémico”. Los acontecimientos de la ciudad de Tarija, del Chaco y Bolivia “son retranscritos con sabor y fervor de periodista”. Otro manuscrito de capital importancia es Memoria de los religiosos de este apostólico Colegio de Nuestra Señora de los Ángeles de la ciudad de Tarija que recoge centenares de biografías en los que describe sus títulos, empleos y méritos adquiridos desde su agregación hasta su fallecimiento o desincorporación.  Según L. Calzavarini* tuvo el mérito de “haber pasado de una comprensión de ‘memoria’ y ‘gesta’ a un concepto moderno de biografía: rescatar, en la secuencia de los hechos, la imagen de una personalidad, por lo cual no descartaba subrayar aspectos sobresalientes de algunos religiosos; y para otros aspectos que podríamos considerar poco edificantes”. Colaboró en esta obra con el Padre Francisco Pierini. Fuente: Calzavarini, 2005; Calzavarini, 2006a: 315-324.

LAVADENZ REYES, LUIS

(Sucre. † Santiago de Chile, 1954) Hay discrepancias sobre su fecha de nacimiento. G. Calvo* menciona 1872 y A. Costa de la Torre* 1881. Estudió Ingeniería civil en la Universidad Católica de Chile. Fue Presidente del Concejo Municipal de Santa Cruz de la Sierra y Diputado por las provincias Cordillera y Chiquitos (1910-1920). Trabajó como agrimensor en la Provincia Cordillera (1905). Incursionó en el negocio petrolero con su empresa Mineral Oil Syndicate of Eastern Bolivia, realizando labores de prospección cerca de Cuevo (1911). Posteriormente organizó la Compañía Petrolífera de Caupolicán y Calacoto (1913), para perforar en el altiplano. Sin embargo, su verdadera pasión fue la fotografía. Instaló un moderno taller de fotografía y un biógrafo en Santa Cruz de la Sierra. Fue contratado por Fray Bernardino Pesciotti para documentar “el paso de un espacio salvaje indígena a un espacio civilizado y cristiano”, es decir “mostrar una población, otrora salvaje, entonces civilizada habitante de la república guaraya”. Las fotografías fueron obtenidas entre el 25 de junio y el 8 de julio de 1898. Llegó contratado “expresamente para dar a conocer al mundo barbarizado la civilización de nuestra floreciente república”. Fotografió las iglesias de Ascensión, Urubichá y Yaguarú, el puente sobre el río Sapocó, canoas sobre el río Blanco, y Laguna Negra, el taller de carpintería, la escuela de niñas, autoridades del Cabildo de Yaguarú con trajes nativos; y con trajes impuestos por los conversores; los Caciques de Ascensión y Yaguarú con sus familias; guarayos yaguarú con “tipos antiguos”, sencillamente impactantes. Pesciotti envió la serie completa al ministro general franciscano en Roma, al presidente de la república de Bolivia, al Directorio del Colegio de Tarata y a la exposición de las Misiones Católicas, celebrada en Turín, en 1898. Fuente: Calvo, 2002: II, 51-52; Costa de la Torre; I. 614; García 2009: 171 y ss.

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LECOÑA ALAVI, MARIBEL (La Paz, 1985)

Estudió en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Participó en diferentes cursos, seminarios, conferencias y talleres. Fue Auxiliar de Docencia en las materias de Catalogación-Clasificación y Metodología de la Investigación. Auxiliar de Archivo de la Mutualidad “Tte. Gral. Germán Busch (2004), Auxiliar de Archivo en el Ministerio de Desarrollo Económico (Viceministerio de Cultura, 2005), Archivista en el Archivo de la Unión Bautista La Paz (2007), Bibliotecaria en el Repositorio Nacional (2007), Consultora en la Biblioteca “Casto Rojas” del Banco Central de Bolivia* (2008) y desde 2010 Técnico en el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

LECOÑA RODRÍGUEZ, LUISA BERTHA (La Paz, 6 de julio de 1960)

Bibliotecóloga y Archivista, egresada de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Participó en los Cursos de Bibliotecas Público Escolares (OEA: 1977, 1978, 1979), el Cursillo sobre Archivos dictado por profesores del Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos de Córdoba con el auspicio de la Organización de Estados Americanos (1976). Su formación archivística se consolidó con la asistencia a cursos, reuniones y congresos, siendo los más importantes, el Seminario Nacional sobre Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (Auspiciado por la UNESCO y la Vicepresidencia de la República, 1994); Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995); Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996), siendo electa miembro de la Directiva; IV Congreso de Bibliotecología y Encuentro Latinoamericano de Escuelas de Bibliotecología, realizado en Iquique-Chile (1998); Organización de Sistemas de Archivo Institucional, organizado por la Vicepresidencia de la República (2003); Seminario de Capacitación en Archivos para las FF.AA., organizado por el Comando en Jefe de las FF.AA. (2003). Apoyó también en el comité editor de publicaciones especializadas como Etnología, Boletín de la Biblioteca del MUSEF (1989-1996, 8 ediciones), Fuentes Jurídicas (1996-1999, 113 ediciones), Fuentes Documentales Para la Defensa Nacional (2000-2002, cinco ediciones). Empezó su experiencia laboral muy joven, como Auxiliar de Oficina en el Ministerio de Educación y Cultura (1974), de allí pasó al Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (1974), como Auxiliar de Oficina, Encargada en el Control de Ingreso y posteriormente como bibliotecaria. Acompañó a L. Oporto* en la creación del Sistema de Información y Documentación Científica del Museo Nacional de Etnografía y Folklore (1982), de la que fue Coordinadora de Procesos Técnicos, hasta 1996. Como resultado de su trabajo publicó con L. Oporto*, M.R. Guerra* y Lola Paredes el Catálogo Bibliográfico de los Pueblos Indígenas de las Tierras Bajas de Bolivia (1997). En 1987 trabajó en la organización de la Biblioteca de la Escuela Rural de Warisata junto a estudiantes de la Carrera de Bibliotecología de la UMSA. En 1992 fue contratada por Beatriz Rossells y L. Oporto* como Instructora en el Curso de Organización de Centros de Documentación por el Sistema Sol de

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Intercomunicación. Fue Coordinadora de la Red Local de Información SocioEconómica RELISE (1989-1996), en la que participaban entidades Gubernamentales y No Gubernamentales de La Paz y El alto. Fruto de esa experiencia publicó el Catálogo Colectivo de Instituciones de la Red Local de Información Socio-Económica RELISE (1997). Fue miembro de la Red Sistema Sol de Intercomunicación en la especialidad de antropología y educación (1992); participó en el Comité Organizador de la Filial La Paz de la Asociación Boliviana de los Trabajadores de la Información (19951996). Fue Consultora del Banco Mundial en la Implementación del Archivo y Biblioteca Especializada del Ministerio de Justicia y DD.HH., proyecto dirigido por L. Oporto* (1996-1999). Como resultado de esa exitosa experiencia, publicó como coautora La Biblioteca del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos: Una alternativa documental y bibliográfica para el desarrollo del conocimiento (1999). Pasó a trabajar como Consultora en la Implementación del Archivo Central y Biblioteca Especializada del Ministerio de Defensa Nacional, proyecto dirigido por L. Oporto* (2000), del que fue, Coordinadora de Procesos Técnicos y Responsable del Archivo Central y Biblioteca, desde el 2002. Como resultado de su trabajo, en colaboración, con L. Oporto*, redactó el Manual de Funciones y Procedimientos del Archivo y Biblioteca del Ministerio de Defensa Nacional (2000); Proyecto para la Implementación del Archivo Central y Biblioteca del Ministerio de Defensa Nacional (2000); Proyecto para la Implementación del Archivo General del Ministerio de Defensa Nacional (2003); elaboró los Catálogos de Inventarios de las Series de Contabilidad (2003-2005); Inventarios del Archivo Intermedio y Archivo Histórico (2006); Manual de Procedimiento para Trámites de Certificación de Aportes, Calificación de años de Servicio y otros afines (2009); Catálogos e Inventarios del Archivo Central, Archivo Intermedio y Archivo Histórico (2004-2010), que se encuentran inéditos. Fuente: CV.

LECUNA SALBOCH, VICENTE

(Caracas, Venezuela, 14 de septiembre de 1870. † Caracas, 20 de febrero de 1954) Ingeniero, banquero, educador e historiador. Pasó su primera infancia en Cuba, donde vivieron sus padres por motivos políticos. Regresó a Venezuela en 1877. A partir de 1884 estudia en la Universidad Central de Venezuela donde se gradúa como Ingeniero en 1889. Trabajó en la construcción del Ferrocarril Central entre Caracas y los Valles del Tuy y en el Gran Ferrocarril Alemán, de Caracas a Puerto Cabello. También lo hizo en la construcción del mercado principal de Caracas, en 1895. Participó en la Revolución de Queipa (1898), liderado por el general José Manuel Mocho Hernández. Fue director de la Escuela de Artes y Oficios (19111920), Presidente del Banco de Venezuela (1915), Senador por el Estado de Lara del Congreso Venezolano (1921). Presidió el Colegio de Ingenieros de Venezuela (1930 y 1931). Publicó artículos sobre monopolios y temas diversos sobre industria y comercio en el Boletín de la Cámara de Comercio de Caracas, sobre la necesidad de las vías de comunicación y sobre aspectos económicos de los ferrocarriles, en la Revista del Colegio de Ingenieros de Venezuela. Hombre sensible por su ciudad desde fines de la década de 1930 inició una campaña para salvar la vegetación de Caracas, en especial la ceiba de San Francisco y la arboleda de “El Calvario”, así como para establecer parques infantiles y sanear el barrio de “El Silencio”. Su obra

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cultural es magna. En 1915 se le encargó la organización del Archivo del Libertador Simón Bolívar. Para la conmemoración del centenario de la muerte del Libertador, en 1930, inició la publicación de una serie de diez volúmenes de las cartas de Bolívar a Sucre, con el título de Cartas del Libertador, consideradas como “una valiosa prueba que permite entender las altas miras del Libertador, cuando, superando todo género de dificultades decidió la separación de las provincias que integraban la antigua Audiencia de Charcas (generalmente conocidas como el Alto Perú), para formar con ellas nueva República, cuya razón y sentido era la de actuar como equilibradora en medio de las aspiraciones que moverían a las nuevas naciones”. En 1916 se le encargó la restauración de la Casa Natal del Libertador que se reinauguró en 1921. En 1939 publicó Proclamas y discursos del Libertador. En 1947, el Primer Congreso de Sociedades Bolivarianas le dio el título de Primer Historiador Bolivariano de América. Fue Individuo de Número de la Academia Nacional de la Historia, institución que presidió entre 1931-1933 y de la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales (1933). En 1942 su nombre fue inscrito en la Galería de Colegiados Ilustres del Colegio de Ingenieros de Venezuela. Por sus méritos la Universidad de San Marcos de Lima le confirió el título de Doctor Honoris Causa (1924). El Consejo Municipal de Caracas lo declaró ciudadano eminente en 1950 y ese mismo año el Presidente de Bolivia lo condecoró con la Orden del Cóndor de Los Andes. Lecuna dejó listas para su publicación, La Revolución de Queipa; Bolívar y el Arte Militar; y Catálogo de Errores y Calumnias en la Historia de Bolívar. Compiló, en dos tomos del archivo de Bolívar, los Documentos referentes a la creación de Bolivia, mandados a publicar por el gobierno del General Juan Vicente Gómez, con motivo del Centenario de la Batalla de Ayacucho (9 de diciembre de 1924), los mismos que el gobierno de Andrés Pérez obsequió, en reedición especial, a Bolivia en el Sesquicentenario de su Independencia (1975). De su autoría también salió La Entrevista de Guayaquil. Restablecimiento de la verdad histórica (1948) Obra publicada: Documentos referentes a la creación de Bolivia. 2 tomos. Caracas, Litografía del Comercio, 1924; Cartas del Libertador. Tomo I, 1799-1817. Caracas, Litografía y Tipografía del Comercio, 1929; Tomo XI, 1802-1830. New York, NY, The Colonial Press Inc., 1948; La Entrevista de Guayaquil. Restablecimiento de la verdad histórica. Caracas, Academia Nacional de la Historia de Venezuela, 1948; Cartas de Santander, 1819-1839 (3 tomos). Caracas, Litografía y Tipografía del Comercio, 1942; Selected Writings of Bolivar, 1810-1822. New York, The Colonial Press Inc., 1951. Fuente: Lecuna, 1924: I-II; Lecuna, 1948; Oporto, 2006: 115; http://es.wikipedia.org (28.05.10).

LEMA GARRETT, ANA MARÍA

(Neuilly s/Seine, Francia, 23 de febrero de 1962) Licenciada y Maestra en Historia (Université de París), Doctora en Historia (Ecole des Hautes Etudes en Sciences Sociales, París), y Maestra en Investigación en Ciencias Sociales para el Desarrollo (Universidad Fundación PIEB). Fue Investigadora Asociada del Instituto Boliviano de Biología de Altura (1991), del Centro de Datos para la Conservación, Liga de Defensa del Medio Ambiente y PL 480 (1992); y del MUSEF* (1992); Asesora (Fundación Ushuaïa, Francia, 1993); Regidora del Canal FR3, Francia (1994); Asistente de investigación de la Dra. Isabel Lavadenz (1998);

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Investigadora del Programa de Educación Intercultural Bilingüe (2000); Consultora de Heifer Internacional (2007-2008). Fue Directora Nacional de Investigación en la Subsecretaría de Asuntos Étnicos del Ministerio de Desarrollo Humano (1994-1997); Consultora de la Subsecretaría de Asuntos Étnicos del Ministerio de Desarrollo Humano (1996-1997); Coordinadora para Bolivia del Atlas de los Pueblos Indígenas de la Amazonía, financiado por el PNUD (1996-1997); y Jefe del Museo Nacional de Etnografía y Folklore, Regional Sucre (2009-2011). Profesora invitada de la Maestría de Historia Andina, FLACSO, Quito, Ecuador (1990); Universidad Gabriel René Moreno (2000); Escuela de Líderes del Comité pro-Santa Cruz-UAGRM (2002-2004); ISEAT (2005); Universidad Nur (2001-2008); Universidad NUR-Fundación UNIR Bolivia (2006-2007); UPIEB (2003-2006); y Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca (2009-2010). Desde 1998 trabaja para el PIEB como Responsable, Supervisora y Asesora académica y Coordinadora del Programa de Fondos para Proyectos de Investigación. Ha publicado, como autora, De la huella al impacto. La participación popular en municipios con población indígena. Urubichá, Gutiérrez y Villa Montes (La Paz: PIEB, 2001); La voz de los chiquitanos. Historias de comunidades de la provincia Velasco (Santa Cruz de la Sierra: APAC, 2007) y El sentido del silencio. La mano de obra chiquitana en el Oriente boliviano a principios del siglo XX (Santa Cruz de la Sierra: UPIEB, 2009). Tiene, además, siete obras como editora, coautora y compiladora, en diversos tópicos históricos. En su faceta archivística participó en el rescate de documentos de los Archivos de la Parroquia, Subprefectura y Municipio de Coroico (1986), realizado con J. Saravia*, por encargo del Archivo de La Paz*. Fue designada Directora del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, en reemplazo de M. Inch*, en noviembre de 2011. Publicaciones archivísticas: “Archivos Yungueños” (Boletín del Archivo de La Paz, 1995, Nº 15: 32-36). Fuente: CV.

LEÓN PINELO, ANTONIO DE (Perú)

Marchó muy joven a España donde fue nombrado Relator del Consejo de Indias, lo que le permitió ingresar a las bibliotecas de Madrid y Simancas, institución en la que compulsó más de ciento veinte mil documentos, a los que puso índices y advertencias. El resultado de esa labor fue su Discurso sobre la importancia, la forma y disposición de la Recopilación de Indias. Posteriormente logró la autorización para revisar los archivos de las chancillerías reales, para completar su trabajo. Publicó, en 1623, Política de Indias, en 1635 Epítome de la Biblioteca de Oriente y Occidente NáuticoGeográfico, en el que registra catorce mil nombres, y en 1643 publicó su Historia del Consejo de Indias. Fuente: Jáuregui, 1925: 121.

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LEY DEL SISTEMA NACIONAL DE ARCHIVOS, PROYECTO Anteproyecto consensuado en el Congreso Nacional de Archivos de Bolivia (2007) que convocó el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, sobre la base de dos ponencias presentadas por el ABNB y por la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional*. El anteproyecto de Ley contempla todas las fases de archivo y el control de la autoridad técnica a lo largo del ciclo vital de los documentos, aunque deslinda competencias sobre la fase de la gestión documental resultante de la atención de trámites. La norma recoge las enseñanzas de G. Mendoza* y fue enriquecida con las conclusiones de los Talleres Departamentales que se realizaron en La Paz, Cochabamba, Sucre y Santa Cruz de la Sierra y numerosos foros organizados por el ABNB. Constituye un modelo de elaboración de una norma archivística que apropia la teoría archivística, la combina con la práctica archivística, la compatibiliza con la normativa jurídica vigente, y recoge el criterio de los trabajadores de los archivos. Al haber sido trabajada anteriormente a 2009, ha quedado obsoleta pues fue diseñada para un país de régimen de gobierno centralizado, siendo Bolivia hoy un país pluricultural de régimen autonómico, y por ello con competencias específicas y excluyentes a nivel nacional, departamental, municipal, indígena y territorial, que tiene un efecto directo en la administración de los archivos, las bibliotecas y los museos. Fuente: Oporto, 2009; Informe del ABNB sobre el Proyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos.

LIJERÓN CASANOVAS, ARNALDO

(Trinidad de Mojos, Beni, 16 de julio de 1947) Estudió Filosofía en la Escuela Nacional de Maestros de Sucre, 1971. Licenciado en Pedagogía por la Universidad Autónoma del Beni, 1997. Siendo colegial, presidió el Comité Juvenil San Vicente. Como ejecutivo de la Federación de Estudiantes de Secundaria, integró el Comité Pro-Universidad Beniana y el primer Comité Cívico del Beni, 1967. También fue dirigente de la Junta Vecinal y FEJUVE-Beni. Presidió el Comité Cívico del Beni, 79-80. Caminó en la Marcha Indígena por el Territorio y la Dignidad de 1990 y escribió una crónica. Investigador de la Historia, la Geografía y la Cultura de Mojos/Beni en base a los archivos y hemerotecas de Sucre, La Paz, Potosí, Santa Cruz, Cochabamba y el Beni. Ensayista y expositor en auditorios nacionales sobre temas amazónicos. Innovador de la Chope Piesta Santísima Trinidad, 1986. Investigador y difusor del conflicto limítrofe Beni-Cochabamba, del cual tiene su tesis “Trópico Cochabambino, brutal falacia cartográfica”. Ha publicado libros sobre historia, cultura y biografías amazónicas. Gestor de instituciones culturales del Beni. Fue Presidente de la Casa de la Cultura del Beni, Sociedad Beniana de Escritores y Fundación “Kenneth Lee”. Preside ahora la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos del Beni. Promotor del Ballet Folklórico del Beni y del Instituto Beniano de Bellas Artes. Es Asesor Cultural del Rectorado de la Universidad Autónoma del Beni. Pertenece a la Sociedad Boliviana de Historia, Sociedad de Escritores de Bolivia y Academia Boliviana de la Lengua. Ha sido distinguido por entidades y organizaciones benianas, declarado Hijo Predilecto de Trinidad por el Gobierno Municipal, recibió la Medalla al Mérito Cultural del Viceministerio de Cultura y

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el Colegio Nacional de Historiadores. Tuvo el mérito de propiciar el proyecto de instalación del Archivo de la Casa Suárez Hnos.*, a cargo de M.P. Gamarra*. Publicaciones archivísticas: “¡Ahora sí es una realidad el Archivo Histórico de Cachuela Esperanza!” (Fuentes, 2006, 2 (1): 2). Fuente: CV.

LIMACHI MAMANI, LIZETH WENDY (La Paz, 12 de junio de 1987)

Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Es Técnico en Aplicaciones Office. Formó parte de las Brigadas Internacionalistas* de apoyo a las Bibliotecas y Archivos de Bolivia. Participó en el 1er Curso de Digitalización de Documentos (2008); Mesa Redonda: “9 de Septiembre día aciago de la destrucción de la memoria cruceña” (2008); Seminario Internacional “Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Importancia de su Rescate para el Desarrollo Nacional”. Sistema de Archivo COMIBOL (2008); V Encuentro Latinoamericano de Estudiantes de Historia (2009). Fue expositora en el 1er. Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2009). Trabajó como pasante de Biblioteca en el Archivo de La Paz* (2008), pasante en el Archivo de la Confederación General de Trabajadores Fabriles de Bolivia (2008); consultora en el Archivo del Ministerio de Hidrocarburos y Energía (2009); pasante en el Archivo del Banco Ganadero (2009); consultora del Censo de Archivos del Servicio de Impuestos Nacionales (2009); inventariadora del Proyecto de Restauración de Patrimonio Histórico del Gobierno Municipal de La Paz (2009), y consultora del Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional* (2011). Publicaciones archivísticas: “El Archivo de la Confederación General de Trabajadores Fabriles de Bolivia” (Fuentes, 2010, 4 (10): 32-37). Fuente: CV.

LIMPIAS SAUCEDO, MANUEL

(Trinidad, Beni, 12 de diciembre de 1892. † Guayaramerín, Beni, 21 de julio de 1927) Escritor, periodista e investigador, fallecido prematuramente. Encaró el desafío de recoger noticias sobre los gobernadores de Mojos desde el Prefecto José de Borja (18431845) hasta el Prefecto Jesús Mansilla (1920). Fue el primero en usar los documentos del Archivo de la Notaría de Hacienda del Departamento del Beni, conformado por “un rimero de oficios, decretos, leyes e instrucciones gubernamentales que son pasto de la polilla en los sucios y viejos estantes”, con los que creó “la narrativa de los actos políticos y administrativos del Beni, frecuentemente turbados por los motines y levantamientos pretorianos”. Fabián Vaca Chávez afirma que “Limpias ha tenido el mérito de desentrañar un pasado que yacía oculto en los archivos de Mojos”. Como resultado de su trabajo escribió su obra cimera, Los gobernadores de Mojos, publicada póstumamente en 1942. Fuente: Limpias, 1942.

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LINARES, ALFREDO

(Viena, Austria, 6 de junio de 1909. †?) Su nombre de pila era Alfred Mayer Loeble, un judío austríaco que llegó a La Paz, huyendo de la represión nazi, en abril de 1939, en la que instaló un pequeño estudio fotográfico. Su primer trabajo fue como reportero de Última Hora, y más tarde de La Razón, contratado por Guillermo Vea Murguía, ocupación con la que recorrió todo el país y también el extranjero. Cubrió la entrevista del presidente Enrique Hertzog con Juan D. Perón y Evita en la frontera argentino-boliviana, acompañó al Príncipe Felipe de Inglaterra a su visita a Guaqui y “escoltó en una visita a las dos Princesas de Braganza” de Brasil; estuvo en Riberalta con un incógnito Orson Welles, y se internó a caballo a la selva de Cobija con el periodista Marcelo Urioste. Fue el fotógrafo que cubrió el bárbaro asesinato del presidente Gualberto Villarroel (21 de julio de 1946). Se especializó en crónicas especiales para el suplemento literario dominical de La Razón. Sus fotos se publicaron en La Nación de Buenos Aires y la revista Life. Una de sus fotos, tomadas a un indio tocando el pututu, fue usada por el Banco Central de Bolivia para ilustrar su billete de corte de mil pesos. Más tarde fundó la Empresa “Foto Linares”, que la regentó hasta 1965, año en el que retornó a Viena. Luis Ramiro Beltrán lo visitó en su domicilio de Viena (1995), donde pudo apreciar que conservaba objetos de su estadía en Bolivia: “libros y música, platería, tejidos y artesanías. Pintura y fotografías”. Fuente: Beltrán, 1998: 8-9.

LINARES LIZARAZU, JOSÉ MARÍA

(Ticala, finca de Potosí, 10 de julio de 1808. † Valparaíso, Chile, 23 de octubre de 1861) Perteneció a noble y acaudalada familia de los condes de Casa Real y Señores de Rodrigo en Navarra, emparentados con la nobleza española. Se educó en la Universidad Mayor Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca. Tomó el poder en 1857, mediante golpe de Estado. Gobernó bajo el principio de la ética, pero fue implacable con sus enemigos y contra quienes transgredían la ley. Habiéndose declarado Dictador, aplicó severas medidas de fiscalización, redujo drásticamente los fondos del ejército y sus efectivos, fue escrupuloso y austero en el manejo del erario público, ordenó la reducción de sueldos para combatir el déficit público. Fue depuesto por otro golpe de Estado (1861). Mandó publicar el primer mapa oficial de Bolivia, elaborado por un grupo de militares jóvenes, el Tcnl. Juan Ondarza, el comandante Juan Mariano Mujía (exploradores del territorio nacional entre 1842 y 1859) y el Mayor Lucio Camacho (levantó el trazado). Tiene el mérito de haber promulgado la Ley del Notariado, el 5 de marzo de 1858, que transformó la cultura archivista boliviana de la época, pues reguló el trabajo de los notarios, instruyó cuidadosamente la forma de organizar los archivos, determinando los alcances sobre la tenencia y transferencia de archivos en casos de destitución, muerte, suspensión, así como de su destino final. Viene a ser el primer reglamento oficial de archivos en la historia de la República. Con la vigencia de esta ley desapareció la antigua institución del Escribano Público, siendo reemplazado por el Notario de Fe Pública. Se implantaron normas precisas para la organización de los archivos públicos notariales, observándose un impulso efectivo para la normalización de procedimientos comunes en los archivos de las

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curias eclesiásticas, hacienda y tribunales especiales. Se les ordenó retener sus archivos para franquear los testimonios que se les pidieran y otorgar instrumentos concernientes a su especialidad. Además, se les instruyó a los notarios de hipotecas entregar sus archivos, quedándose sólo con ciertos libros. En 1860, consecuente con esa línea de acción, el Gobierno ordenó a los Secretarios de los Tribunales, la entrega de todos los protocolos formados por los antiguos escribanos que subsistían en los archivos de dichas oficinas, disposición que alcanzó a los expedientes y demás piezas en que aquellos hubiesen intervenido como cursores o actuarios, medidas imprescindibles para establecer la función fedataria de los archivos, cuyo procedimiento estaba regulado por el arancel oficial. La ley, pese a su antigüedad, se mantiene en la actualidad, sin haber sido modificada sustancialmente. Fuente: Poder Ejecutivo, 1858; Oporto, 2006: 194; http://es.wikipedia.org. (10.02.10).

LINEO MORALES, RAFAEL

(Llallagua, Provincia Bustillo, Potosí, 15 de septiembre de 1950) Trabajó como reportero y director de Radio “Llallagua”, Jefe de prensa y Director de Radio “La Voz del Minero”, Director de Radio “Nacional” de Huanuni y Radio “San Lorenzo” de Cochabamba. Apresado durante la dictadura de H. Bánzer* y L. García Meza*. Secretario Ejecutivo de la Federación de Trabajadores de Radio y Televisión de las Minas, fundador del Sindicato de Trabajadores de la Prensa Minera. Asesor cultural de la Asociación de Conjuntos Folkóricos, Miembro de la Federación de Artistas y Compositores del Norte de Potosí. Fue designado como Director de Radio Nacional de Huanuni, en el distrito homónimo. Actualmente, es custodio del Archivo Sonoro de dicha Radio. El 2010 autorizó el proyecto de organización del Archivo de Radio Nacional de Huanuni, plasmado por Magdalena Cajías de la Vega y J. Ocsa*. Fuente: Ocsa, 2010; Entrevista personal (20.12.2011).

Lizondo Díaz, Miguel Ángel (Potosí, 27 de marzo de 1968)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Cursó los Diplomados “Curso de Postgrado en Historia del Oriente Boliviano”, en la Universidad Gabriel René Moreno (2003), y en Gestión Publica Intercultural, UMSA, SNAP, PIA, IICCA (2012). Trabajó en Archivos del ex-Ministerio de Planeamiento y Coordinación (1992), Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1992), Ex Banco del Estado (1996), Archivo de La Paz* (1998). Como consultor participó en la organización del Archivo de la Ex Corporación Boliviana de Fomento (a cargo de la Unidad de Control de Activos Entidades en Liquidación y/o estructuración del Ministerio de Finanzas, 1997); Organización del Sistema de Archivos de la Contraloría General de la República, como funcionario y consultor (2001-2002); participó en la organización del Archivo Histórico Casa Suárez* en Guayaramerín (2005-2006); Consultor en el Banco Central de Bolivia* (2003-2004) y en la Súper Intendencia de Saneamiento Básico (2007-2008). Realizó trabajos de investigación para el Plan de Rehabilitación de las Aéreas Históricas de Potosí: Prefectura del Departamento-Honorable Alcaldía Municipal-Agencia Española de Cooperación Internacional-Junta de Andalucía (1998); y para la Fundación Cultural Huáscar Cajías

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Kauffman (1999-2001). En el área de archivos realizó el Cursillo de Archivos (Archivo de La Paz, 1990); Seminario de Fuentes Documentales, organizado por el Centro de Investigación Antropológicas “Tiwanaku” y el Instituto Internacional de Integración Convenio “Andrés Bello” (1992); Instructor en el I y II Cursillo de Registro y Archivos para el personal de las FF. AA. (1996); Seminario Taller “Ley del Sistema Nacional de Información”* (1997); Seminario Internacional de Salvaguarda de Archivos Sonoros y Etnográficos: de la Catalogación a la Digitalización (2005). También realizó un curso de Programador de sistemas (CITEC, 1992), y entre otros: los Seminarios “Epistemología de la Historia” (1995); “Ciencia, Método y Objetividad en el Conocimiento Humano” (UMSA 1998); “Etnia, Nación-Relaciones de Poder” (1999); Curso de Catalogación de la Biblioteca del Archivo de La Paz (2000); Tierra Territorio (2001); Curso de la Ley 1178 (2001); Coloquio “Guilles Riviere. 30 Años de Antropología Andina” (2001); Coloquio de “Antropología Visual” (2002). Asistió al Encuentro Internacional de Historia “El Siglo XIX, Bolivia y América Latina” (Sucre, 1994); Encuentro Internacional de Historia “Los Borbones Entre Dos Mundos” (Cochabamba, 1994); Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995); Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996); II Encuentro Internacional de Historia “El Siglo XX, Bolivia y América Latina, Visiones de Fin de Siglo” (Cochabamba, 1998); Congreso Internacional de Etnohistoria (San Salvador de Jujuy, 1998). Fuente: CV.

LOAYZA VALDA, JOAQUÍN

(Camiri, Santa Cruz, 1 de diciembre de 1959)

Estudió Derecho en la UMSFX de Chuquisaca. Trabajó en la organización del Centro Bibliográfico y Documental de la UMSFX*, repositorio departamental, fundado por la Dra. M. C. Rúa de Tirado*, a su muerte la sucedió en el cargo (1997). Es Subdirector del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* desde 2000. Músico autodidacta, en su juventud abrazó ideales socialistas, que trasunta en algunos de sus escritos. Es autor de “Por las calles de la antigua ciudad de Sucre. Los nombres que antaño tuvieron”, publicado en el boletín del Centro Documental Histórico Universidad de San Francisco Xavier (1990, 3 (7): 6-14). Publicaciones archivísticas: “El folleto como fuente primaria de investigación. Un caso concreto aplicado a la economía política en Bolivia en el siglo XIX” (Centro Documental Histórico Universidad de San Francisco Xavier, 1989, 3 (5): 8-13) ; “El Centro Bibliográfico Documental, Histórico de la Universidad en el marco del desarrollo de una política de información e investigación científica” (Tribuna, Órgano de comunicación de los Estudiantes de la Facultad de Derecho, Sucre, nov. 1995: 10); “Legislación boliviana sobre archivos” (Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 2003. Sucre, 2003: 761-782); “La Biblioteca Nacional de Bolivia: su misión y objetivos en la realidad nacional y en la sociedad de la información” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información. Memoria II Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística, 2003, 8 (13): 117-120); “Fuentes de información para la Guerra de la Independencia, existentes en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia” (La Guerra de la Independencia. Silencio y Memoria. Memoria del Encuentro Internacional de Historiadores. Cochabamba, H. Municipalidad-UMSS, 2010: 242-250): “Una mirada desde el corazón de un archivero y bibliotecario” (Revista cultural FCBCB, 16 (76): 40-43). Fuente: CV.

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LÓPEZ, LUIS Consultor de archivo contratado en 1919 por la Prefectura de Tarija, “para la buena conservación y distribución metódica y cronológica del archivo, por la suma de 1.000 bolivianos”. El trabajo realizado consistió en ordenar, catalogar y encuadernar los documentos, folletos y publicaciones oficiales existentes en el archivo de la prefectura del departamento de Tarija. Fuente: Oporto, 2006:158; OS. 26.7.1919.

LÓPEZ BELTRÁN, CLARA

(La Paz, 15 de diciembre de 1951) Licenciada en Historia, Doctora en Investigación (Dottorato di Ricerca) por la Universidad de Turín (Italia) y Maestría y Doctorado (Ph.D.) en la Universidad de Columbia (EE.UU.). Realizó el curso de ‘Ayudante de Documentación’ en la Escuela de Documentalistas de Madrid* (1972). Participó en el Curso de Archivos y Documentos Públicos* (1976). Tiene amplia trayectoria en docencia de pregrado y postgrado en las universidades de San Andrés (La Paz), Turín (Italia), Industrial de Santander (Colombia), Católica de Chile, La Rábida (España), Columbia (Nueva York), Smith College (Massachusetts) y Vassar College (Nueva York). Se desempeñó como investigadora asistente en el Instituto de Investigaciones Sociales, durante la gestión de E. Arze Quiroga* y del Instituto de Investigaciones Históricas (1977), bajo la dirección de A. Crespo Rodas* (UMSA). Trabajó como investigadora en el Programa de América Latina de la Fondazione Luigi Einaudi (Turín, Italia). Participó como investigadora invitada del Instituto Superior de Investigaciones Científicas (Madrid); del Instituto de Estudios Avanzados del Museo Nacional de Etnología de Osaka (Japón) y del Instituto de Estudios Superiores de la Universidad de Bologna (Italia). Gracias a becas internacionales, estudió los fondos de los Archivos de la Casa de Moneda* (Potosí), Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (Sucre), Archivo de La Paz*, General de Indias* (Sevilla), General de la Nación (México y Buenos Aires) y de la Nación del Perú (Lima). Participó con ponencias en innumerables congresos nacionales e internacionales, entre ellos los de Latin American Studies Association, Asociación de Historiadores Latinoamericanistas de Europa y España (AHILA), Congreso Internacional de Americanistas, Reunión Anual de Etnología, Congreso Internacional de Etnohistoria. Escribió 29 artículos publicados en revistas nacionales y extranjeras y 11 colaboraciones en libros de edición internacional. Su obra historiográfica se expresa en los libros: Estructura económica de una sociedad colonial. Charcas en el siglo XVII (1988), Biografía de Bolivia. Un estudio de su historia (1993), Alianzas familiares. Elite, género y negocios en La Paz. Siglo XVII (1998). Fue editora, con Akira Saito, de Usos del documento y cambios sociales en la historia de Bolivia (2005). Pertenece, como miembro de número, a la Academia Boliviana de la Historia y Academia Boliviana de Ciencias Genealógicas y Heráldicas; Sociedad Boliviana de la Historia, Latin American Studies Association, Asociación de Historiadores Latinoamericanistas Europeos, American Historical Association, Instituto Panamericano de Geografía e Historia*, Association for Latin American Art, Federación Internacional de Estudios de América Latina, Latin American Jewish Studies Association y Bolivian Studies Association. Fue Directora del Instituto

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Nacional de Historia y Literatura y Asesora-Coordinadora del Repositorio Nacional (Instituto Boliviano de Cultura). En su trayectoria archivística inventarió varios fondos parroquiales entre ellos los de la Catedral de Santa Cruz de la Sierra. Ha sido la primera profesional historiadora que trabajó en la organización técnica de los archivos del BCB, como Encargada del Archivo Histórico del Banco Central de Bolivia* (1988-1989). Tuvo importante participación en la evaluación de los Archivos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, en su condición de representante del Instituto Boliviano de Cultura (1988), habiendo constatado la incineración de 12 camionadas de papeles de la Estándar Oil de Bolivia (1938-1939). En esa ocasión revisó las instalaciones del Archivo Central (edificio de la empresa), Archivo de la Calle Reyes Ortiz, Depósitos de El Alto y el Archivo de la Planta de Entre Ríos. En sus recomendaciones mencionó la necesidad de reorganizar el Archivo Administrativo, crear el Archivo Histórico de Conservación Permanente y centralizar los fondos documentales. Publicaciones archivísticas: “Riquezas incautadas a los rebeldes” (Crespo, Alberto (Comp.) Aportes documentales. La Paz, 1975); Archivo de la Catedral de Santa Cruz (Índice provisional), con F. Cajías (La Paz, Instituto Boliviana de Cultura, 1977; Tb. en Arze Aguirre, René: Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (Una guía preliminar), La Paz, Ceprolai, 1985: 103-128); “¡Una excelente noticia! El catálogo de expedientes coloniales del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1999, 18: 16-15); “Lo que se escribe y lo que se entiende: el lenguaje escrito en la sociedad colonial de Charcas (hoy Bolivia)” (López, Clara (Ed.): Usos del documento y cambios sociales en la historia de Bolivia. Osaka, National Museum of Ethnology, 2005: 9-26). Fuente: CV; López 1988.

LÓPEZ DONOSO, ÁLVARO RODRIGO (Sucre, 2 de mayo de 1977)

Licenciado en Derecho, Ciencias Políticas y Sociales (Universidad Mayor Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca) con Diplomado en Derecho Administrativo y Regulatorio (Univalle). Trabajó como empadronador del Censo Guía de Archivos (Cuarta Fase) y posteriormente como Archivero-Procesador, Técnico de Archivo en el ABNB. Participó del Curso de Paleografía sobre escritura de los siglos XVI-XVIII, impartido por J. M. López Villalba* (2009). En su desempeño archivístico ha elaborado inventarios y catálogos de los Fondos de archivo Ministerio de Hacienda, Instituto Nacional de Colonización; Notarías y Juzgados de Camargo. Fuente: CV.

LÓPEZ MENÉNDEZ, FELIPE

(Corocoro, La Paz, 5 de febrero de 1884. † La Paz, 1967) Estudió en el Seminario Conciliar de San Jerónimo (La Paz). Se ordenó sacerdote en 1907. Historiador, escritor y periodista. Párroco de las iglesias de Puerto Acosta, Mocomoco, Paolo, Santa Cruz de Vallesmeno, Atén, Callapa, Mecapaca, Chaca, Palca, Collocollo, Achocalla, Corocoro, Taraco, Tiahuanacu y otras parroquias. Párroco de la Iglesia de La Merced (1927-1934). Capellán del Antiguo Hospital Loayza. Maestro de ceremonias de la Catedral. Oficial Mayor de la Curia (1919). Canciller de la Curia

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y Tesorero Eclesiástico; Promotor de Justicia y Canónigo Prebendado y Arcediano del Cabildo Metropolitano de la Catedral de La Paz desde 1952. Profesor de Castellano y Filosofía del Colegio Seminario. Catedrático de Filosofía en el Colegio “La Salle” y “Santa Ana”; Profesor de instrucción elemental en varias parroquias del Departamento de La Paz. Escribió sus reflexiones en La Verdad, La Razón y Presencia. Director del semanario El Mensajero y Orientación Religiosa. Fundador y Director del periódico La Nación (1918), corresponsal de El Pueblo de Buenos Aires. Le corresponde el mérito de haber organizado el Archivo del Arzobispado de La Paz, junto a los Canónigos Teodosio Sáenz y Roberto N. Corrales. En esa época se trataba del archivo del obispado, hasta 1845 y desde esa fecha era exclusivamente capitular, es decir del cabildo Catedral, dándole con ello mayor alcance pues abarcaba al movimiento diocesano. Actualmente se denomina Archivo Eclesiástico Canónigo “Felipe López Menéndez”. Es autor de El Arzobispado de Nuestra Señora de La Paz (La Paz, Imprenta Nacional, 1949). Fuente: Barnadas: II: 110-111; Costa de la Torre: 628-629; López, 1949; Oporto, 2006: 263.

LÓPEZ RAMÍREZ, JUAN JOSÉ (Oruro, 23 de abril de 1984)

Estudia la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Fue consultor Responsable de Archivo de la Consultora Reingeniería Total S.R.L., Biblioteca de la Consultora Reingeniería Total S.R.L., Auxiliar del Archivo Central de ENTEL–RANSABOL, Auxiliar del Archivo del Servicio de Asistencia Técnica (S.A.T.), Auxiliar de la Biblioteca Central de la Facultad de Ingeniería UMSA. El 2010 fue contratado como Asistente del Archivo Regional de Oruro del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

LÓPEZ VILLALBA, JOSÉ MIGUEL

(Zaragoza, España, 30 de mayo de 1953) Estudió la Diplomatura de Magisterio (Universidad Complutense de Madrid) y la Licenciatura de Geografía e Historia (Universidad Nacional de Educación a Distancia), donde con posterioridad se doctoró en Historia con la tesis Diplomática Municipal Medieval de Guadalajara. Actualmente ejerce como Profesor Titular de Paleografía y Diplomática en la Carrera de Historia de la Universidad Nacional de Educación a Distancia, en Madrid. Es de destacar su actuación como profesor asociado de Archivística en la Universidad de Zaragoza (España) en la Carrera de Biblioteconomía y Documentación, así como su participación actual como director en los Cursos de Archivos que imparten diferentes instituciones como la Consejería de Cultura de Castilla-La Mancha o la UNED de las Islas Baleares. Su vinculación con Bolivia se remonta a su contacto con los primeros alumnos que participaron en la Escuela Iberoamericana de Archivos para Hispanoamérica*. En las aulas del Archivo General de la Administración (Alcalá de Henares, Madrid), ha impartido durante más de 15 años la docencia de Paleografía y Diplomática Hispanoamericana. Gracias a estos contactos llegó por primera vez a Bolivia en agosto de 1999, para impartir el

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Curso sobre Paleografía y Diplomática del Documento Indiano (MUSEF), con auspicios de la Universidad Andina Simón Bolívar, que fue el verdadero germen de otros muchos cursos y proyectos desarrollados en las ciudades de La Paz, Sucre y Potosí. Dichos cursos de formación sobre documentación histórica para Archivistas han sido el semillero de muchas vocaciones de archivistas, entre los que podemos destacar la mayor parte de la generación de profesionales de los archivos de la que actualmente presume con orgullo el Estado Plurinacional de Bolivia y de la que se considera maestro en la formación acerca de la documentación histórica y notarial. Por otro lado ha conseguido, desde posiciones fuertemente comprometidas con la búsqueda de la justicia social, que esta dinamización de las fuentes históricas en los archivos de Bolivia sea vista como el patrimonio indiscutible del pueblo y además ha logrado por medio de sus proyectos vinculados con Bolivia que muchas de estas fuentes vean la luz y sirvan tanto en el presente como en el futuro para que los bolivianos conozcan mejor su pasado, entre ellos el proyecto de transcripción de los libros de acuerdos de la Real Audiencia de la Plata de los Charcas, con cerca de 7.000 páginas y 10 volúmenes, en base a los documentos de la Audiencia, desde su fundación (1561) hasta su cierre definitivo con la llegada de la República (1826), obra que felizmente fue publicada, con lo que culminó exitosamente el proyecto que dirigió. En 2012 volvió a Bolivia a dictar el Curso de Paleografía Hispanoamericana en el Periodo de Los Austrias (Siglos XVI-XVII) con el auspicio de la Fundación Para la Preservación del Patrimonio Documental y Bibliográfico de Bolivia. Publicaciones archivísticas: “Apuntes sobre la conceptualización diplomática del procedimiento administrativo hispano en la transición del medioevo al Estado moderno” (Fuentes, 2006, 3 (1): 12-17); Acuerdos de la Real Audiencia de La Plata de los Charcas, Director Técnico del Proyecto (Sucre, Corte Suprema de Justicia-AECID-ABNB, 2007, 10 tomos). Existe una edición digital en CD. Fuente: CV.

LORA, JOSÉ FRANCISCO Secretario del Rectorado de la Universidad Mayor de San Simón de Cochabamba. En 1955 el Dr. Enrique Levy Meruvia, Secretario General de la UMSS lo designó Responsable del Archivo de la Universidad Mayor de San Simón, ordenándole elaborar el catálogo del Archivo con la finalidad de facilitar la búsqueda y ubicación de originales para las certificaciones o testimonios que otorgaba la Universidad. El 25 de marzo de 1955, Lora informó que el Archivo resguardaba 426 volúmenes empastados de documentos y correspondencia y 204 libros antiguos y de poco uso. Posteriormente organizó el Archivo en cinco colecciones ordenadas cronológicamente: 1) 1826 a 1900 (72 libros empastados y 7 paquetes en desorden), 2) 1901 a 1930 (128 libros empastados y 37 paquetes en desorden), 3) 1931 a 1952 (213 volúmenes empastados y 73 paquetes en desorden) y 4) 1953 y 1954 (16 libros empastados y 16 paquetes para empastar). En 1995 se reorganizó el Archivo y a partir del 2000 se informatizó bajo la dirección de M.L. Argote Mejía*. Fuente: Argote, 2010.

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LORA ESCÓBAR, GUILLERMO

(Uncía, Provincia Bustillo, Potosí. † La Paz, 17 de mayo de 2009) Historiadores y bibliógrafos discrepan sobre el lugar y la fecha de nacimiento de Guillermo Lora. Algunos sostienen que vino al mundo en Potosí el 25 de julio de 1925 (Costa de la Torre, Guttentag; Severiche, éste basándose en el documento de identidad de GL), otros mencionan genéricamente que fue en Uncía en 1922 (MesaGisbert), lo que llevó a afirmar que “es un misterio”, aunque a raíz de su muerte reportes de prensa mencionan que nació en Uncía el 31 de octubre de 1922. Su padre, Enrique Lora, fue un pequeño empresario agricultor y minero que tenía su hacienda sobre el río Umirpa, que desemboca en el río Chayanta. Su madre era una digna mujer de pollera. Con su hermano Mariano, dueño de la Compañía “Porvenir” de Colquechaca, Enrique fue socio minoritario de S. I. Patiño* en 1907, a la postre la entraña minera les dio la espalda. Se educó en Oruro y La Paz (colegios San Calixto y “San Simón de Ayacucho”). Llegó a ser Presidente del Centro de Estudiantes y editó un número del periódico estudiantil ABC, en el que criticó a varios profesores. El director -como insano acto de desagravio- ordenó la quema del ‘panfleto’ en el patio del establecimiento. Sirvió en el Ejército en Cochabamba, donde se inscribió en la facultad de Derecho. Allí descubrió su pasión por la política y la literatura luego de leer Trotsky, literatura y revolución. En La Paz ingresó de lleno al activismo político del POR y concluyó sus estudios en la Universidad Mayor de San Andrés. “Por un acto de conciencia no defendí mi examen de grado”, acota. En ese contexto, la clase minera de Siglo XX, tempranamente politizada, rebelde y contestataria, se convirtió en la pesadilla de los tres Barones del Estaño, S. I. Patiño, M. Hochschild* y V. Aramayo*. Una tropa del ejército, enviada para proteger los intereses de Patiño, masacró a mineros, mujeres y niños el 21 de diciembre de 1942, en las proximidades de Catavi. Ante esta situación, el POR decidió dejar el activismo citadino para insertarse en las minas. En marzo de 1946 Guillermo Lora fue enviado con la misión de introducir el ideal trotskista al Tercer Congreso Minero reunido en Catavi. Con esa memorable acción, “el POR irrumpió en el escenario laboral en 1946”. Allí conoció y trató a Juan Lechín, a quien infructuosamente intentó adoctrinar e incorporarlo al POR. Era la época dorada del trotskismo. El 8 de noviembre de 1946 la delegación de Llallagua presentó la tesis política del partido, al Congreso Extraordinario minero reunido en el centro minero de Pulacayo, cuyos delegados la aprobaron como Tesis Central de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia. Ese documento ideológicodoctrinario iluminó el firmamento político como una estrella que guiaba a la senda de la revolución socialista. Los acontecimientos se sucedieron incontenibles:

• 1947, los trabajadores forman el bloque minero parlamentario, combatiendo al gobierno de la “Rosca” desde el Congreso.

• 1951, triunfa el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) en elecciones, desconocidas por el régimen que prefirió entregar el poder a una Junta Militar. • 9 de abril de 195, el MNR decide tomar el poder por la vía insurreccional.

• 31 de octubre de 1952: mineros revolucionarios imponen parte de la Tesis de Pulacayo, obligando al gobierno a nacionalizar los yacimientos minerales, sus ingenios, equipos, campamentos y archivos. El histórico decreto de nacionalización de las minas fue suscrito en Catavi, en el campo “María Barzola”, denominado así en homenaje a aquella heroica mujer minera inmolada en la masacre de 1942.

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• 2 de agosto de 1953: campesinos levantados en armas imponen la reforma agraria. El presidente Paz Estenssoro* firma el histórico decreto en Ucureña.

G. Lora fue diputado por las minas en 1947 e intentó terciar sin éxito en las elecciones de 1985. En 1970 presidía la Asamblea Popular, oportunidad en la que rechazó la invitación del Gral. Juan José Torres, quien le había ofrecido un tercio de las cuotas del poder ejecutivo, como respuesta tajante ante la negativa del gobierno de incorporar una especie de “comisarios políticos” para cada ministro de Estado. La cuota subió a la mitad del gabinete, pero la decisión era irrevocable. El POR volvió al trajín conspirador en el locus urbano luego de la debacle de la clase obrera en agosto de 1985, “haciendo activismo político y revolucionario todos los días”. Se definía como “revolucionario a tiempo completo los 365 días del año. Soy un político profesional y por ello he renunciado a la vida de un ciudadano normal. No tengo esposa o hijos, pues un revolucionario debe entregarse a su causa sin ningún condicionante”. Su labor conspirativa se sintetiza en su Obra Completa, impresa en 69 tomos, que abarca el arco temporal desde 1942 (Importancia del Trotskysmo dentro de la historia y de la lucha de clases de Bolivia) a 2002 (Diccionario). En ella se reponen títulos emblemáticos de la bibliografía política, como La Revolución Boliviana (1963), Documentos Políticos de Bolivia (1970), Historia del Movimiento Obrero Boliviano (1976), Diccionario PolíticoHistórico-Cultural  de Bolivia (1985), sus notas políticas publicadas en Lucha Obrera (19486) y Masas (1954 adelante), como sus apuntes mecanografiados, publicados con el epígrafe La Colmena. En conjunto, expresa la época dorada del trotskismo. Esta extensa bibliografía constituye una radiografía de más de medio siglo de teoría y praxis política en Bolivia, escrita bajo una óptica de crítica acerba, y a veces hasta salvaje, contra el sistema capitalista y sus seguidores (“cipayos”, “agentes del imperialismo”). Ninguna ola del agitado y escabroso océano político nativo fue ignorada por ese juez implacable u oráculo incontestable, figuras que asumió conscientemente Guillermo Lora, a quien se lo conocía en el círculo íntimo como “El Viejo”, “El Fiero” o “Puka Takara”, en curiosa mezcla de fervor y temor al líder trotskista que supo “rayar la cancha” de sus adversarios ideológicos. Cuando uno analiza la obra completa, se pregunta: ¿Cómo el legendario político trotskista logró la proeza de escribir durante 60 años continuos? ¿Cuáles fueron las fuentes que empleó? ¿Dónde se encuentran estas fuentes primarias? ¿Cuál su destino final? Durante 60 años, G. Lora recolectó diversos materiales documentales, con los que formó su Archivo Político, que “fue organizado para la labor subversiva, de oposición franca y lucha contra el sistema capitalista”, como afirman sus curadores. Paradójicamente, se hallaba invisible hasta hace poco, pues fue exhumando como consecuencia de la venta de su Biblioteca Patrimonial al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, para lo cual un grupo de militantes del Partido Obrero Revolucionario, acometió la ardua labor de catalogarla. Allí se puso en evidencia la existencia del Archivo Político de Guillermo Lora. De inmediato el ABNB tomó la decisión de realizar un proceso de valoración y descripción para facilitar su transferencia. Para ese propósito, se conformó un equipo de curadores y especialistas, todos voluntarios, que tuvo a su cargo el tratamiento archivístico: J. C. Fernández*, Coordinador; Rina Pérez (ex Dirección Nacional del POR), Curadora del Archivo Político; M.A. Peñaloza*, O. Mogro-Moreno*, Ramiro Santander, Exalto Berna, J. Sullcani*, T. Maquera*, Antonio Alfaro, Silvia Paredes (ex POR), Andrés Acosta (ingeniero químico); Jeannette Suxo, Rolando Rojas, Angélica Pinto y José Crespo.

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Fuente: Costa de la Torre, 1968: 633-635; Mesa, et al; Oporto, 2009c: 28-33; Oporto, et al., 2010: 23-26; Severiche, 2009.

LORINI, IRMA

(La Paz, 26 de agosto de 1946) Estudió en la Carrera de Historia* de la UMSA, antes de inscribirse en la Universidad San Miguel de Tucumán, donde obtuvo la Licenciatura en Historia (1975). Tiene un posgrado de Maestría en la Universidad Libre de Berlín, donde se graduó en Ciencias Políticas e Historia, con su tesis La Nueva Izquierda Boliviana de los años 70. Contenidos ideológicos de la programación del MIR (1988). Hizo el curso de doctorado en Historia, aunque no llegó a presentar los exámenes, escribió su tesis El movimiento socialista “embrionario” en Bolivia, 1920-1939. Entre nuevas ideas y residuos de la sociedad tradicional, publicado en 1994. Estudió el movimiento socialista en Bolivia en su obra El nacionalismo en Bolivia de la pre y posguerra del Chaco, 1910-1945 (2006), y un opúsculo crítico, en coautoría con Carlos Jahnsen, Nuevo Movimiento Social Indígena en Bolivia. Evo Morales presidente (2007). Dirigió el Departamento de Historia del Instituto Nacional de Historia y Literatura, desde donde impulsó un plan agresivo para detener la destrucción de la memoria histórica del país. Denunció, con el apoyo de un Comité de Rescate de Archivos, la quema de documentos del Ministerio de Trabajo, ordenada por el ministro I. Sandóval Rodríguez*, ante la eventualidad que grupos de poder de derecha utilicen la información referida a líderes sindicales que contenían las carpetas destinadas a la pira pública en la actual plaza de los Héroes. Con L. Oporto*, levantó diagnósticos de los archivos del Ministerio de Asuntos Campesinos y de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, y ordenó los papeles de L. M. Loza*, que posteriormente los transfirió al Archivo de La Paz*. Fue documentalista nata, lo que la llevó a compilar y publicar fuentes sobre la historia boliviana, entre ellas el Catálogo de folletos de la Minería Boliviana, existentes en el Repositorio Nacional (1979) y la Bibliografía comentada sobre minería boliviana, existente en el Instituto Iberoamericano de Berlín (1985). En Fribourg llevó adelante un proyecto sobre Oralidad y Argentinidad, publicada por el Prof. Walter Berg y Markus Sch’afhauser. Colaboró en el Diccionario Histórico de Bolivia, que publicó J. Barnadas* y en el Anuario del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. Publicaciones archivísticas: “En torno a la protección de documentos” (Historia, Boletín de la Carrera de Historia, 1997, Edición especial, p. 190); “Censo de Archivos en el Departamento de La Paz” (Historia, boletín de la Carrera de Historia, 1997, Edición especial, p. 315-316). Fuente: Conversación personal. (27/2/12).

LOZA, ESTEBAN DE Escribano de su Majestad y de Guerra, a cargo del archivo y correspondencia de la expedición a cargo del Teniente Coronel José de Reseguín, comandante de las tropas que rompieron el segundo cerco de La Paz. Escribió un prolijo Diario de los acontecimientos, desde el 1 de octubre (salida de Oruro) hasta el 22 de diciembre de 1781 (retorno a Oruro y retiro de Reseguín a Cochabamba). El comandante Reseguín utilizó las anotaciones del Diario de Loza para enviar sus informes al Virrey Vértiz, como suyos. El Diario describe las tres cartas que envió Tupac Catari* y Miguel

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Bastidas para negociar con Reseguín, la primera de 12 de septiembre de 1781 traía el indulto del Virrey Jáuregui para los indios que se restituyesen a sus casas y provincias y las dos últimas; la petición de paz y la entrega de B. Sisa*, que había sido hecha prisionera. Se le atribuye el dudoso mérito de anotar las últimas palabras de Túpac Katari, antes de ser ajusticiado: “al llegar al patíbulo se volvió y en alta voz exhortó a los indios a que detestasen la obediencia de los principales rebeldes Tupac Amarus, asegurándoles que cuanto les decían era fingido y que los engañaban lo mismo que lo había hecho él que escarmentaran en su persona”. Fuente.: Valle, 1980; Valle, 1990; Lewin, 1957.

LOZA, LEÓN M.

(Oruro, 28 de diciembre de 1879. † La Paz, 1 de agosto de 1954) Estudió en las Universidades de Oruro, Cochabamba y La Paz. Escritor, historiador, abogado, bibliógrafo y periodista. Abogado de la Alcaldía de Oruro (1916), de la Nacional Match Factory (Monopolio de Fósforos) (1917), del general Quiróz. Delegado del gobierno boliviano en la Defensa Jurídica del Chaco (1932 hasta 1938) y abogado del Gobierno en el asunto de la Standard Oil Company SOC (1938). Catedrático de Ciencias Económicas, Rector de la Universidad de Oruro. Diputado (1902) y Senador Nacional por Oruro (1925). Se inició en el periodismo en 1895. Fue Redactor de La Evolución, El Ferrocarril, La Tarde, El Día (Oruro), el Comercio, El Artesano, el Eco Liberal, La Juventud (Cochabamba, 1893), El Imparcial, La Razón, El Comercio (La Paz) y director de El Diario (1914). Presidente de la Sociedad Geográfica de La Paz, fundador y Vicepresidente de la Academia Boliviana de Historia (1929), miembro de las Sociedades Geográficas de La Paz, Sucre, Tarija y Cochabamba. Correspondiente de la Sociedad de Nueva York y de la Sociedad de Americanistas de París. Fue un gran papelista, lo que llevó a reunir importante documentación oficial que incluye correspondencia de ex presidentes de la República, entre ellos los de la Misión Kemmerer (1897 y 1950), y de los numerosos juicios que atendió, con los que sustentó su defensa de los intereses del país y fue la base para su vasta obra, entre la que destaca, Bolivia, el petróleo y la Stándar Oil Company (1939); Historia de la Bandera, Actas capitulares de La Paz, Historia del Obispado de la Catedral de La Paz. Fruto de su vocación de papelista, publicó El Centenario de la primera impresión boliviana. Comprobaciones históricas (1913), basándose en un impreso orureño de 1913, sin embargo M. Beltrán*, en su misión en los archivos españoles, encontró que el primer impreso boliviano corresponde al 1810, sobre el cual publicó un opúsculo en 1943. Autorizado por Resolución del Ministerio de Justicia e Instrucción, de 9 de marzo de 1909, catalogó documentos de data colonial del archivo del antiguo Corregimiento de Paria, que se encontraban en la Biblioteca de la Prefectura de Oruro, de los que no se conoce su destino. Dejó inédita su Historia de los juicios de responsabilidad, cuyo manuscrito se encuentra en la sección de Libros Antiguos, Raros y Curiosos de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso*. Reunió una impresionante biblioteca de 36.000 ejemplares (lamentablemente perdida o dispersa). Fue Director General de Archivos, Bibliotecas y Publicidad. En las solapas de sus obras anuncia haber publicado Bibliotecas y archivos peruanos; Bibliografía de manuscritos de la Biblioteca Loza; Informe de la Dirección General de Archivos y Bibliotecas; Proyecto sobre reglamentación de archivos y bibliotecas; Epistolario boliviano; Fuentes de la historiografía de Bolivia. Ha publicado un

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“Breve comentario de la Bibliografía de Pedro Vicente Cañete y Domínguez”*, que viene en el anexo de la Guía Histórica, Geográfica y Política… del mismo Cañete (edición de A. Alba*, 1952). Parte de sus papeles fueron entregados al Archivo de La Paz*, que cubren el lapso de 1750 a 1950. Fuente: Cañete, 1952: 765-789; Costa Arduz, 2005: 180-181; Costa de la Torre, 1968: 635-636; Familia Loza, 2005: 4 (17); Loza, 1939; Oporto, 2005: 4 (17); Poder Ejecutivo, 1909; Soux, 1990: 15-34; Torres, 2010: 7.

LOZA VIDAURRE, MARÍA CARMEN BEATRIZ (La Paz, 23 de julio de 1962)

Licenciada en Historia (UMSA), Doctora en Demografía y Ciencias Sociales (EHESS) y postgrado en el Instituto de Altos Estudios para América Latina. Fue docente de la Maestría en Historias Andinas y Amazónicas (2004). Destaca como acuciosa investigadora y por ello conocedora de las fuentes primarias, con las que ha elaborado importantes estudios entre los que resalta su trabajo sobre la Cosmovisión Kallawaya presentada para la Declaratoria de Obra Maestra del Patrimonio Intangible de la Humanidad por la UNESCO (2002-2003), elaborado con la colaboración del médico homeópata Walter Álvarez, director ejecutivo del Instituto Boliviano de Medicina Tradicional Kallawaya. Más tarde estudió la presencia de Max Uhle en el Altiplano de Bolivia, con el respaldo científico del Max Planck-Institut für Wissenschaftgeschichte, sobre la base del análisis de las libretas de campo de este arqueólogo. El análisis de este valioso archivo, le lleva a plantear la existencia de un doble registro (el individual y el científico), con una estructura dual (heterogénea y en mosaico), su dimensión (espacio-temporal) y el registro (selectivo, estacional y minimalista), con los que configura el carácter de las libretas de los científicos como fuente histórica, planteamiento que viene a ser un alarde metodológico. Trabajó con el Cabildo Indígena y el Gobierno Municipal de Mojos sobre la Ichepakene Piesta de San Ignacio de Mojos para la postulación a la declaratoria de Patrimonio Intangible de la Humanidad, con un equipo conformado por David Block (autor de Amazonía Boliviana), Akira Saito, Gary Vanvale (autor de Historia de Mojos del siglo XIX a la guerra del Chaco) y el líder mojeño Miguel Ángel Peña Guaji, Viceministro de Interculturalidad del Ministerio de Culturas (fallecido trágicamente el 27 de mayo de 2010). Trabajó en el Archivo de La Paz* como docente investigadora (2006-2007), al que donó una colección de documentos sobre los títulos de propiedad de Antacagua y Avicaya, provincia Omasuyos, que datan de 1660 a 1934. Desde 2010 trabaja en la organización del Archivo fotográfico de la despenalización de las medicinas tradicionales andinas (1978-2010) para el Instituto Boliviano de Medicina Tradicional Kallawaya que incluirá un sitio Web bilingüe castellano inglés. Publicaciones archivísticas: “Fuentes de subempadronamiento de la población de Charcas” (Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1994-1995. Sucre, 1995: 187-200); “El Quipu y la prueba en la practica del Derecho de Indias, 1550-1581” (Historia y Cultura, Nº 26, 2000: 11-37); “Las libretas bolivianas de Max Uhle: un análisis histórico” (Itinerarios de Max Uhle en el Altiplano boliviano. Sus libretas de expedición e historia cultural (1893-1896), Berlín, IberoAmerikanisches Institut, 2004). Fuente: Loza-Balza, 2004; Información personal de CBL.

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LOZANO, PEDRO

(España. † Santa Cruz, Bolivia) Miembro de la Compañía de Jesús. Llegó a América a principios del siglo XVI. Obtuvo los papeles de los jesuitas del Paraguay y se dedicó a la defensa de la orden. Sus apuntes sobre la flora cruceña desaparecieron de su celda el mismo día de su fallecimiento. Escribió su Descripción chorográfica del terreno, ríos, árboles y animales de las dilatadísimas provincias del Gran Chaco, obra que fue publicada recién en 1733. Fuente: Jáuregui, 1925: 140-141.

LUCCA CALDERÓN DE LA BARCA, ENZO DE (La Paz, 18 de marzo de 1965)

Autodidacta. Rechazó ingresar a una universidad debido a sus ideales anarquistas. Viajó intensamente por Bolivia y Europa, actividad concebida como una especie de universidad mundial en la que se ha formado, puesto que despreció la academia. Se autodefine como “Artista de la Fotografía”. Plantea su obra como documento testimonial y recrea sus imágenes con una importante carga ideológica que traspone los límites de lo meramente descriptivo. Su aguzado e implacable lente no tiene preferencias y atrapa por igual en su cárcel de luz, la miseria y grandeza humana. Desde 1986 trabaja como fotógrafo desarrollando su trabajo en dos vertientes: artística y fotoreportaje. Su obra artística ha sido expuesta en la Casa de la Cultura y el Museo Nacional de Arte. Sus fotoreportajes se han publicado en Presencia, Perspectiva, El Caraspas, El Juguete Rabioso, Mujer Pública, Pulso, Le Monde Diplomatique, Enlace (La Razón) y Página 7. También lo hace para Agencia Fides, Reuters y Agencia Jatha. Es miembro del Círculo de Fotógrafos Profesionales y de los entes sindicales COSTRATEB y FDMERLP. En un alarde de su capacidad analítica y crítica, como testigo privilegiado de la historia, publicó dos obras representativas, el Manual de Historia, en el que a través de 1000 fotografías pretende reconstruir el proceso boliviano concebido como la recuperación de una “Memoria urgente de una revolución permanente”, y su emblemática historia Aymara, poder e identidad, “escritos a través de imágenes” sobre la base de 500 fotografías como elemento narrativo, los que vienen a ser los primeros ensayos en su género. “Allí se encuentran publicadas mis mejores fotografías”, afirma. Diremos que se complementa con su ideario ideológico plasmado en su ensayo El ser y el poder (Epistemología). Su obra fotográfica e intelectual expresa su condición ligada al anarquismo. En su recuento autobiográfico señala que entre 1996 y 1997, tomó 36.000 imágenes en negativos, como fotoreportero de la Agencia Jatha, habiendo quedado la mayor parte en poder de aquella casa y solo una pequeña parte en poder del autor. Ya en la era digital, llegó a tomar 50.000 fotografías y tiene en su poder un archivo de 10.000 negativos digitales “de las que [en su criterio] seguramente valen unos cientos”. Fuente: CV y entrevista personal (10.6.11).

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LUCERO HUANCA, CÉSAR AUGUSTO (La Paz, 29 de marzo de 1988)

Estudia en la Carrera de Historia* (UMSA). Fue expositor en el V Congreso Nacional de Bibliotecología, Documentación, Archivística y Museología, en Quillacollo, Cochabamba (2010) y en el III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2011). Realizó pasantías en el Archivo Histórico Militar, Archivo de La Paz*, Repositorio Nacional de Música y Administradora Boliviana de Carreteras. Fue consultor en el Archivo Central del Servicio Nacional de Caminos (2010) y Técnico Archivista digitalizador en el Archivo de La Paz dentro del Proyecto Digitalización de fotografías de la colección Última Hora (2010). Desempeña las funciones de Asistente (2011) y Técnico (2012) en el Archivo Regional de Oruro dependiente del Sistema de Archivo de la COMIBOL*. Publicaciones archivísticas: “Desastres naturales y archivística”; y “Archivística y fotografía: entre las imágenes, el archivo y la comunidad” (Q’urawa, 2011, No. 4: 39-43; 44-47); “¿Qué son los archivos?” (La Patria-Revista Dominical. Oruro, 22 de julio de 2012: 2). Fuente: CV.

LUMMIS, CHARLES FLETCHER (Estados Unidos, 1859-1928)

Folclorista, historiador y fotógrafo, acompañó a A. Bandelier* en su expedición al Perú (1892-1893) y viajó solo a Tiwanaku y La Paz entre septiembre y octubre de 1893. Sus archivos fotográficos y literarios que se encuentran en el Museo de Southwest, en los Ángeles, California, que él fundó, incluyen entre cincuenta a setenta y cinco negativos de vidrio y copias de escenas bolivianas. La Biblioteca Huntington en San Marino, California y el Museo de Nuevo México, en Santa Fe, poseen pequeñas colecciones de sus fotografías. Existen referencias sobre su vida en Turbesé Lummis Fiske y Keith Lummis, Charles F. Lummis, the Man and His West (1975) y Christopher B. Donnan, “Lummis at Tiahuanaco”, en: The Masterkey (vol. 47, no. 3, July-September 1973). Fuente: Buck, 1999.

LUNASCO CUSI, AUGUSTO CESAR (La Paz, 17 de febrero de 1986)

Licenciado en Informática (UMSA). Tiene un Diplomado en Administración de Archivos (Universidad Nuestra Señora de La Paz) y el Diplomado en Educación Superior (UMSA). Se tituló con el Proyecto de Grado, “Sistema de Descripción Archivística para el Archivo de La Paz” (SISDA), realizado como pasante en el Archivo de La Paz* (2007), que posteriormente lo contrató como Coordinador del Área Técnico-Informático del Proyecto de Digitalización y Microfilmación de Padrones Revisitarios del Siglo XIX (2008-2009); actuó también como instructor de la parte Técnica-Informática del Segundo Curso de Digitalización de Documentos, organizado por el Archivo de La Paz y la Carrera de Historia* (2009), el mismo que replicó la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia. Expuso sus avances

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al I Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos: “La información para la inclusión social y cultural”, organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional. Grupo de Estudios Sociales en Bibliotecología y Documentación (GESBI)-Argentina (2009). Presentó los resultados de su trabajo en la ponencia Descripción Archivística y Tecnologías de Información, presentada al I Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2009). Ha sido Coordinador de proyectos de automatización de la Biblioteca del Archivo de La Paz (ISIS, KOHA-UMSATIC, LILDBI y otros). Fue, luego, responsable de la organización e implantación del Sistema Documentic-Archivo en el Archivo Central de la Entidad de Depósito de Valores de Bolivia (2010). Es autor de Sistema de Descripción Archivística para el Archivo de La Paz (SISDA), proyecto de grado en Informática (2007); y Creación del Sistema de Búsqueda de Material Bibliográfico en el Archivo de La Paz (inéditos). Publicaciones archivísticas: “La riqueza documental del Archivo de La Paz al alcance de nuestras manos. Instrumentos descriptivos digitales”, con Stephany Tola (DesArchivando, 2009, Nº 6: 14-17); “El Proyecto de digitalización y microfilmación: Padrones del Siglo XIX”, coautor con R. Barragán y Lourdes Uchanier (Boletín del Archivo de La Paz, 2008, Nº 25: 99104); “Descripción archivística y tecnologías de información” (Boletín del Archivo de La Paz, 2011, Nº 26: 89-100); “Una herramienta de administración y acceso del patrimonio fotográfico. Un acercamiento a la labor informática de dos proyectos del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 2011, Nº 26: 139-145); “Un archivo de fotos en línea” (La Razón-Tendencias, La Paz, 30 de enero de 2011: C3); “La Colección ‘Movimientos Sociales’ del Archivo de La Paz”, con Lizeth Troche (Boletín del Archivo de La Paz, 2011, Nº 26: 163-172). Fuente: CV.

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M MAC FARREN, PETER

(La Paz, 14 de junio de 1954) Periodista, inversionista y fotógrafo autodidacta. Como fotógrafo recorrió África, México, Haití, Cuba y Jamaica (1972). Publicó sus trabajos en los diarios Miami Herald, Wall Street Journal, New York Times, y las revistas Newsweek y Times. En la década del 80 fue corresponsal de Newsweek, New York Times y el canal de TV ABC de Estados Unidos. Fundó el Complejo Cultural “Kusillo” (con dos museos de niños, “K’usillo” en La Paz y “Tanga-tanga” en Sucre); apoyado por la Fundación Quipus que él mismo organizó. Publicó 11 libros de fotografías. Incursionó en política intentando hacerse de una concesión de agua dulce en la vertiente del Silala en Potosí para su comercialización. Editó el primer periódico boliviano en inglés, Bolivian Times, ya desaparecido. Se dedicó a coleccionar piezas etnográficas de arte plumario. Es editor de libros de fotografía. Tiene un valioso archivo fotográfico. Recopiló las fotografías que tomó la misión francesa Créqui Montfort en su trabajo en Bolivia, Argentina, Chile y Perú. Las fotografías que tomaron en Tiwanaku en 1903 se conservan en los archivos de la Biblioteca del Museo de l’Homme, en París. En 1999, Dominique Morelon confirmó que existían allí las copias impresas en un álbum, y las placas originales de fotos de Tiwanaku que realizaron en 1903 los hermanos austriacos Víctor y Fausto Sintich, quienes vivían en La Paz y fotografiaron a destacados bolivianos de la época. Una copia de este álbum se encuentra en el Brooklyn Museum de EE.UU. Fundó la Agencia Boliviana de Fotos con más de 80 mil fotografías del país, que custodia en sus colecciones, “más de 7 mil fotos de Ficho Viaña, testimonio de los últimos 15 años de historia social boliviana” y los propios registros de MacFarren de “dos décadas del folklore nacional”. En 2001 inició el proyecto de organización del Archivo Nacional de Fotografía Digitalizada, con una donación de US$ 15.000, entregada por el Embajador de EE.UU. Manuel Rocha, para digitalizar el patrimonio fotográfico histórico y cultural de Bolivia, “para su fácil catalogación y manipulación”, en base a material adquirido mediante donaciones. Fuente: Mac Farren, 2009: 9-11; El Deber, 1999: C5; El Diario, 2001: 11; La Razón, 2001a: A25; Última Hora, 2001: 14.

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MACHACA MAMANI, VÍCTOR HUGO (La Paz, 22 de julio de 1991)

Estudiante de la Carrera de Historia* (UMSA), con estudios de Dactilografía Computarizada en el Instituto Educativo San José. Obtuvo un “Diploma de Reconocimiento” por su desempeño académico en la Carrera de Historia (2009, 2010). Participó en el Concurso Municipal de Investigación “Nuestra Historia desde Miradas Jóvenes”, integrando los Grupos Juveniles de Investigación “Timi2 pero Intrepi2” y “Vive La Paz”, obteniendo el Tercer Lugar en la VIII versión de este concurso con la obra “La ficción de Julio: la Historia de un bicentenario inventado” (2009), y el primer lugar en el IX Concurso de Investigación “Nuestra Historia desde Miradas Jóvenes” con “El mercado Lanza: imaginario en construcción, un pasado en destrucción” (2010). Participó en el curso Los archivos como fuente de investigación histórica boliviana (2009); 5º Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos (2009); y en la tertulia archivística: Archivos Paraguayos sobre la Guerra del Chaco (2010). Trabajó en el Archivo de La Paz* como Pasante (2010) y Auxiliar de Investigación del Proyecto de Catalogación de la Discográfica del Repositorio Nacional, bajo la Dirección de la Dra. Beatriz Rossells, en el Instituto de Estudios Bolivianos (2011); Coordinador del Equipo de Fotógrafos Documentalistas para el registro Documental de la Festividad del Gran Poder 2011 para el Archivo de Imágenes Fijas del Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (2011). Actualmente es Pasante de Investigación en el Departamento de Investigación del MUSEF. Publicaciones archivísticas: “Las mujeres hacen historia en el Archivo de La Paz” (Historia de Mujeres: Mujeres, Familias e Historias, Santa Cruz: Musef, 2011); “Los jóvenes en su paso por el Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, Nº 26, 2011: 173-183). Fuente: CV.

MACHICADO MENDOZA, HÉCTOR FERNANDO (La Paz, 4 de diciembre de 1962)

Licenciado en Bibliotecología y Ciencias de la Información, mención Bibliotecólogo-Documentalista (UMSA). Cursó el Diplomado en Educación Superior (2001), en Gestión de la Información y Documentación en las Organizaciones, Universidad de La Habana y UMSA (2002), en Gestión de la Documentación y Archivos, Universidad Loyola (2005). Participó del Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996), en los Congresos Nacional e Internacional de Bibliotecología, Documentación, Archivística y Museología; en el Seminario Buenas prácticas y lecciones aprendidas en Bibliotecología y Archivos (2011), y las Jornadas de Investigación en Bibliotecas y Archivos (2011). Docente titular de Automatización de la Información (desde 1994) y Publicaciones Periódicas y Oficiales (desde 2009), en la Carrera de Bibliotecología. Dictó, también, Archivística (2007-2010). Fue consultor en el Archivo Histórico de SAGIC* (1995-1997), Responsable de la Unidad de Documentación del Programa de Investigación Estratégica en Bolivia (1995-1999), elaboró el Plan del Archivo para Inspectorate (2000), consultor del Archivo de la Superintendencia de Telecomunicaciones (2000), elaboró la base de

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datos para el Archivo Central del Ministerio de Justicia (2000); Jefe de la Unidad de Archivo Central, Correspondencia y Biblioteca del Fondo Nacional de Desarrollo Regional FNDR (2001-2009), consultor de Archivos del Servicio Nacional de Patrimonio del Estado SENAPE (2009-2011). Afiliado al Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia CPCIB* (2003). Recibió Diploma de Honor y Mérito a la Carrera Docente de Bibliotecología (2007). Sus publicaciones versan sobre temas bibliotecológicos. Es autor de “Las actividades de los proyectos en las Bibliotecas ganadoras de La Paz”, en Nexos, N° 9 (1998); “La realidad virtual”, en Revista de Bibliotecología, N° 3-4 (1998); “Tecnología de la Información en Bibliotecas beneficiarias del Programa de Fortalecimiento de Unidades Informativas del PIEB”, en Nexos, N° 10 (1999); “Metodología para establecer un sistema de gestión documental en una organización”, en Revista Bibliodocencia, Nº 11 (2005) y Las publicaciones en serie en el marco de los FRBR (2010). Es coautor del Manual de Técnicas de Procesamiento Documental: (Sistema Sol, Convenio Andrés Bello) (1991); De tanto haber andado yo ya soy otra: bibliografía sobre la mujer boliviana (1991); Las campeonas: mujer y deporte en la prensa nacional (1992); Volar entre sonidos, colores y palabras: mujer y actividad cultural en la prensa (1992) y Catálogo Colectivo de publicaciones periódicas de las bibliotecas zonales de la ciudad de La Paz (2010). Fuente: CV.

MACHICADO MURILLO, MARIA CRISTINA (La Paz, 26 de febrero de 1986)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en el I Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios Archivistas y Museólogos EBAM (2009) con su ponencia “Un acercamiento a los archivos familiares: el archivo histórico de la FFMV” y en el VI Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos (Sucre, 2011). Trabajó en el Archivo de La Paz*, organizando los Fondos Corte Superior de Distrito (19141917) y Estación Biológica del Beni (2007). Auxiliar de investigación en el Proyecto Relaciones Interétnicas en que catalogó el Archivo de Cintas Magnetofónicas Radio Nacional Huanuni, y el Archivo Judicial de Poopó (2008-2009). El 2009 se incorporó a las Brigadas Internacionalistas de Apoyo a los Archivos y Bibliotecas de Bolivia*. Es autora, con Fernando Machicado, del proyecto de organización y difusión de los acervos de la Fundación Flavio Machicado Viscarra, en el que dirige los trabajos técnicos del Archivo Histórico y la catalogación de la Biblioteca, con ayuda de ADAI, desde 2009. Publicaciones archivísticas: “Acervo histórico del Centro de Información de la Fundación Flavio Machicado Viscarra (FFMV)” (DesArchivando, 2010, Nº 8: 7-8). Fuente: CV.

MACHICADO SARAVIA, EDUARDO (La Paz, 21 de septiembre de 1940)

Realizó estudios superiores en la Universidad de Barcelona, España (1961) y la Sorbona, Francia (1965). Retornó a Bolivia en 1967. Gerente de la Empresa Minera Canteras de Comanche (1965-1989). Fue Concejal de la Alcaldía de La Paz (1993). De

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esa época datan su “Estudio para la explotación del granito en sus diferentes fases” (1968), “La utilización de la madera y su explotación en los países Andinos” (1974) y “Análisis de Mercado para el Granito en Comanche” (1988). Desarrolla su vocación por la historia y la archivística desde la muerte de su padre Flavio Machicado Viscarra*, en 1986, realizando distintas labores para salvaguardar la documentación familiar y bibliográfica que su padre conservó, acumuló y legó. Desde 1995, como director ejecutivo de la Fundación Flavio Machicado Viscarra* (FFMV) dedica parte de su vida a ordenar y clasificar la colección hemerográfica de prensa boliviana y extranjera, cronológicamente desde 1898 hasta el presente. De igual manera levantó inventarios de la Biblioteca y el Archivo Fonográfico de la FFMV. Actualmente lideriza distintos proyectos entre jóvenes profesionales para mejorar los servicios de acceso a fuentes de información, con el fin de disponerlo al uso público. Es autor de Laqa Jaqi, el hombre de la tierra (2004), Conversaciones para una Reflexión Histórica: La vida de don Flavio Machicado Viscarra (2006). Por su labor mereció la Medalla a la Labor Distinguida, Prefectura de La Paz (1992), Medalla de la ciudad de la Habana y Medalla Colina Lenin, Alcaldía Regla (Cuba 1993). Publicaciones archivísticas: “Acceso libre a la información: Centro de Información de la Fundación Flavio Machicado Viscarra” (Fuentes. Revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, 2011, (12): 41-44). Fuente: www.flaviadas.org

MACHICADO VISCARRA, FLAVIO

(La Paz, 3 de noviembre de 1898. † La Paz, 19 de agosto 1986) Industrial e ilustre promotor de la cultura en la ciudad de La Paz. Hijo de Jorge Machicado Silva y Rosa Viscarra Fabre. Empezó su vida de viajes y estudio a muy temprana edad, con estadías en Lima, Santiago de Chile, Estados Unidos y Francia. Estudió Finanzas en la Universidad de Harvard (Estados Unidos). Sin embargo su vocación cultural empezó a plasmarse a su regreso al país en 1922. Este industrial, propietario de la cantera y hacienda de Comanche (Provincia Pacajes del departamento de La Paz), fue hombre de ideales revolucionarios, frugal en el comer y en el vestir, austero en los placeres, gozaba intensamente de las pequeñas cosas. Fue especialmente reconocido por su pasión por la música, plasmada en la creación de la tradición paceña de “Las Flaviadas”, sesiones sabatinas gratuitas de música clásica, iniciadas en los años 20 del siglo XX -que fueron concebidas por el joven Flavio Machicado en el verano de 1916, mientras escuchaba música en su departamento en la ciudad de Boston (Massachusetts, Estados Unidos)- y que se convirtieron en un espacio cultural, que reunía a personalidades del ámbito cultural, artístico, académico, inclusive político. Picado por la manía de coleccionista, logró conformar y enriquecer un patrimonio documental, bibliográfico, sonoro y visual, sobre la colección heredada de la familia Machicado Silva (que se originó a mediados del siglo XIX), con una extensa Biblioteca de aproximadamente 12.000 volúmenes, y casi 7.000 títulos de discos de 78, 45 y 33 RPM, que fueron la base para la creación, en 1995, de la Fundación Flavio Machicado Viscarra (FFMV)*. Fue condecorado con el Cóndor de los Andes en grado de Comendador (1986) y declarado Hijo Predilecto de la Ciudad de La Paz (1986). Fuente: www.flaviadas.org; Badani, 2009; Cajías, 1994; Machicado Saravia, 2006.

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MALDINI, GERARDO

(Casteldaiano Montese, Italia, 10 de enero de 1922. † Tarija, 3 de junio de 1998) La Guerra del Chaco (1932-1935) dejó bastante destrucción en las parroquias del Chaco. Los pocos hermanos que llegaron a Tarija fueron ocupados sobre todo en obras de acción social, pues la Guerra Mundial no había permitido un adecuado flujo de franciscanos. El P. Gerardo Maldini llegó a trabajar en las Escuelas de Cristo en Potosí. En 1947 pasó al Chaco con el nombramiento de Padre Comisario, para trabajar en la reconstrucción de las obras parroquiales. Continuó su labor en las décadas del 70 y 80. Durante sus estadías en Tarija, se encerraba por días en el archivo conventual, lo que le permitió emprender investigaciones históricas que fueron publicadas en el periódico Presencia. Fue miembro honorario de la Academia Boliviana de la Historia Eclesiástica. Desde 1980 quedó permanentemente en Tarija, dedicándose fundamentalmente a salvaguardar obras pictóricas, la biblioteca y el monumental Archivo Franciscano de Tarija*. Manuel Gómez Mendoza dice de él: “gran cronólogo y custodio del archivo y bibliotecas, a él se le debe el cuidado y recolección de obras de arte presentes hoy en el Museo Fray Francisco Miguel Marí”. Fruto de su experiencia misionera y de estudio fueron los libros Franciscanos en Tarija y…más allá (Tarija, 1988; La Paz, 1993) y Caminar con San Francisco, algunos años después, que incluyen biografías de franciscanos. A él debemos las reediciones de las crónicas del P. Alejandro María Corrado, El colegio franciscano de Tarija y sus misiones, Tomos I y II (1990) y del P. Antonio Comajuncosa, Manifiesto histórico, geográfico, topográfico, apostólico y político de lo que han trabajado, entre fieles e infieles los misioneros franciscanos de Tarija: 1754-1810 (1993). En 1995 amplió el archivo conventual y con la ayuda de J. M. Barnadas* completó la catalogación que realizó P. Corvera* en 1916. Colaboró con C. Minutolo de Orsi* en la compilación del Corpus Documental para la Historia de Tarija* (1987). En mérito a sus servicios de más de 25 años, el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas* le reconoció con un Diploma. Publicaciones archivísticas: Guía del Archivo del Colegio Franciscano de Tarija, con Pedro Corvera (Madrid, 1988). Fuente: Calzavarini, 2005; Gómez, s.f.; http://www.franciscanosdetarija.com (9.02.10)

MALDONADO ÁLVAREZ, AMEL ABEL (La Paz, 13 de diciembre de 1978)

Estudió Derecho en la Universidad Católica San Pablo La Paz, Filosofía en “ISET Juan XXIII” (Lima, Perú) y Teología en la Pontificia Universidad Católica (Santiago de Chile). Trabajó en la Biblioteca Histórica de la Congregación Sagrados Corazones (Lima, Perú), Biblioteca Monte Mar de la Congregación Sagrados Corazones (Lima, Perú), Biblioteca Histórica y Archivo Administrativo de la Congregación Sagrados Corazones (Santiago de Chile). Desempeñó la función de Técnico (2011) y fue designado Encargado (2012) del Archivo Regional de Potosí dependiente del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Ha cursado el Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas del Estado, organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). Fuente: CV.

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MALDONADO ARCE, VÍCTOR Auditor profesional. Profesor de Clasificación y Archivo. Fue funcionario del Banco Central de Bolivia*. Propuso, en 1965, organizar el Archivo del Banco Central de Bolivia, en Archivo Antiguo (desde 1944) y Archivo Actual, “en El Alto y ciudad”, clasificando su documentación en a) Papeletas y comprobantes, b) Correspondencia recibida y despachada, c) Registros y libros, d) Otros documentos. El Archivo Antiguo tendría por límite a 1944, pues en su criterio, “la ley obliga la conservación de archivos por un espacio de 20 años, de modo que se debe comenzar por el apartamiento -para su posterior incineración- de los documentos prescritos, previa calificación e intervención de la Superintendencia de Bancos”. Fuente: Plan de trabajo, propuesta el 30 de diciembre de 1965.

MALDONADO PÉREZ, NANCY

(Berenguela, Provincia Pacajes, La Paz, 2 de enero de 1981) Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Hizo el curso de Técnicas de oficina en el Centro de Estudios Técnicos Acelerados Loreto. Estudia idioma alemán (nivel intermedio) e inglés (básico). Complementó su formación archivística en el curso de Gestión de Documentación y Archivos (2005), coordinó el curso de Organización de Archivo y Usuarios de Unidades de Información (2005), participó en los talleres departamentales de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (2006, 2007), hizo el Curso Básico de Archivística para su aplicación en el Censo Guía de Archivos de La Paz y Oruro (2006) y participó en el Curso de digitalización de Documentos. Cursó el primer Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas Estatales, en la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). Su trayectoria laboral empezó como Pasante en el Archivo de La Paz* (2006), donde luego fue Investigadora (2007) y Archivista (2008). Pasó a desempeñar funciones de apoyo en control de documentos en la Administradora Boliviana de Carreteras desde el 2009. Fuente: CV.

MAMÁN, ITALA DE

(Sucre, 2 de enero de 1950) Estudió el bachillerato en Humanidades en el Colegio Santa Ana (Santa Cruz de la Sierra) y Ciencias Políticas en la Universidad Católica (Libera Universitá Degli Studi Sociali Pro Deo, Roma, Italia). Hizo la Licenciatura en Historia en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (Lima, Perú), la Maestría en Historia Andina en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Quito, Ecuador) y los estudios de Doctorado en Historia en la Escuela de Post Grado de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (Lima, Perú). Hizo el Diplomado en Educación Superior en la UMSS. Hizo también un post grado en Archivística en el Ministerio de Cultura de España (Madrid), y varios cursos de Paleografía, Archivística, Diplomática en el Archivo Provincial de Guadalajara (España). Tiene amplia trayectoria como catedrática en instituciones superiores y universidades del Perú (Instituto Italiano

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de Cultura; Universidad Nacional Mayor de San Marcos) y Bolivia (Instituto Americano de Cochabamba; Universidad Mayor de San Simón; Universidad Católica Boliviana de Cochabamba). Organizó la Asociación de Archivistas de Cochabamba y el Seminario Nacional sobre la Norma General de Descripción Archivística (ISAD-G) en 2004. Desde el Archivo Histórico ha realizado cursos permanentes de capacitación para funcionarios de archivos del Departamento de Cochabamba. Fue profesora en el Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos en la UMSA (2002). Su experiencia profesional específica en archivos, es también destacable. Fue contratada como Historiadora en el Archivo Histórico Municipal “José Macedonio Urquidi”* de Cochabamba (1988-1994), desde donde fue promovida al cargo de Jefe de Archivo Histórico en 1994 y luego como Jefe de Patrimonio del Gobierno Municipal de esa ciudad, y por ello se hallaban bajo su dependencia, la Biblioteca, la Hemeroteca, el Archivo Histórico y los Museos (2007-2011). Publicó la revista Retrospectiva con dos ediciones (Año 1, No. 1, 1993 y Año 2, No. 1). Es muy activa en la labor de extensión cultural, y tiene numerosos cursos, seminarios, conferencias y coloquios internacionales y nacionales, en temas de historia colonial y nacional, entre ellos el Seminario Internacional La Guerra de la Independencia. Silencio y Memoria. Bicentenario de Cochabamba, 1810-2010 (Cochabamba, Alcaldía Municipal, 2011). Publicaciones archivísticas: “El Archivo Municipal y su Hemeroteca” (Los Tiempos¸ Cochabamba, 3 de febrero de 1996: A9-A10); “Archivos de Cochabamba” (Diccionario Histórico de Bolivia, Sucre, 2002: 165-166). Fuente: CV.

MAMANI HUMÉREZ, FROILÁN (La Paz, 29 de diciembre de 1970)

Licenciado en Historia (UMSA). Ha cursado Secretariado Comercial, es Guía de Turismo y Operador de Sistemas. Ha sido Auxiliar de docencia en la materia de Práctica de Archivos de la Carrera de Historia* (2000), Auxiliar de investigación en el Instituto de Estudios Bolivianos (2001-2003). Ha presentado ponencias en la Reunión Anual de Etnología y los congresos de Estudiantes de Historia. Ha publicado sus avances de investigación (v.g. “Villazón en el contexto histórico de la Aduana Nacional de Bolivia”) en revistas y anuarios nacionales, entre ellos los que edita la RAE, la revista de Historia de la UMSA, la revista Realidades de la Historia. Participó en el Congreso Departamental “Alberto Crespo Rodas”* de la Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información Filial La Paz* (1996) y en el Seminario sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (1997). Fue Consultor documentalista en Santillana Ediciones (2006). Consultor en el Proyecto de investigación “Santiago de Huata: historia de una región del Titicaca” para la Fundación Grupo Ukamau (2006), y “La regionalización de Oruro” para la Fundación Diálogo (2007), y en el Proyecto ASDI-SAREC/IEB: Dinámica intercultural en las regiones del lago Poopó, el río Desaguadero y el lago Titicaca; Proyecto Facultativo UMSA: De T’unupa al Catamarán: Vertientes, ríos y bahías en las historias y búsquedas de las culturas y poblaciones de Wata, Copacabana y Kaki (2007). Trabajó en la organización del Archivo del Banco del Estado (1995-1998), Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores (1995), Archivo de la Corporación Boliviana de Fomento (1997), Archivo de

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La Paz* (2000) y Archivo Judicial de Poopó (2004). En el Archivo de la Aduana Nacional trabajó en consultorías entre 1997 y 2008 y a partir de 2009 fue designado Técnico en Archivo Aduanero II. Publicaciones archivísticas: Guía de consulta del Archivo Judicial de Poopó (Publicación conjunta con Ximena Medinaceli, noviembre, 2004) Fuente: CV.

MAMANI MAMANI, LUPE JIMENA (La Paz, 11 de julio de 1983)

Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en el 1er y 2º Taller Departamental de la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006, 2007), 2° Taller de Conservación Preventiva y Restauración de Materiales de Archivo (2007), Taller Práctico “Comentario y Análisis de Documentos Etapas y Metodología” (2007), 1er. Curso de Digitalización de documentos (2008), Diplomado en administración de Archivos (2009), Taller de Conservación y Curación del Libro (2009), Diplomática del documento en la Edad Moderna (2009), Los Archivos como Fuentes de Investigación Histórica Boliviana (2009), II Curso Básico de Digitalización de Documentos (2009), Taller de Clasificación y Catalogación de Fotografías Digitales (2010), 1ra. Reunión Nacional de Direcciones de Tecnologías de Información y Comunicación (2010), Conferencia sobre Archivística, gobierno electrónico y transparencia institucional (2011). Expositora del Primer Curso de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos (2011). Pasante, Técnico, Auxiliar de Biblioteca, Auxiliar de Investigación y Coordinadora de Área del Archivo de La Paz* (2006-2011), donde participó en el Proyecto de digitalización y microfilmación de padrones del siglo XIX, y en el Área de Verificación y Descripción de Fotografías de la Colección Histórica. El ALP le otorgó Certificado de reconocimiento por su desempeño (2011). Como resultado de su trabajo, elaboró los catálogos: Contraloría General de la República; Corte Electoral, Tarjetas de Visita, y colaboró en la Guía del Archivo de La Paz (2008). Fue también Auxiliar en el Centro de Historia y Archivo Metodista “Rev. Aníbal Guzmán”, para documentar el libro “Historia del Instituto Americano La Paz 1907–2007. Un siglo de Servicio Educativo Metodista en Bolivia” (2007), del Rvdo. D. Quispe*. Desde 2012 trabaja en la catalogación de documentos de la Embajada de España. Publicaciones archivísticas: “Los tesoros documentales: los artesanos de la Catedral de Nuestra Señora de La Paz, con Hilda Sinche (DesArchivando, 2007, Nº 2: 45); “Entre las donaciones y la salvaguardas del patrimonio documental visual: fondo Fotográfico Histórico del Archivo de La Paz”, con Nilda Llanqui (Boletín del Archivo de La Paz, 2008 N° 25: 51-60). Fuente: CV.

MAMANI NINA, EUGENIA (La Paz, 19 de marzo de 1986)

Estudia la Carrera de Historia* (UMSA).Técnico en Computación; Ofimática y Auxiliar de Oficinas en el Centro de Estudios Técnicos Acelerados Loreto. Realizó cursos de Idiomas Nativos (Lengua Aymara) en la UMSA. Fue Pasante

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de Catalogación en el Repositorio Nacional de Bolivia, Técnico de Archivo de la Federación de Trabajadores Fabriles de Bolivia, Pasante en el Archivo de La Paz*. Participó como consultora en el Censo Guía de Archivos del Servicio de Impuestos Nacionales, en la ciudad de La Paz, como parte del equipo que trabajó bajo la dirección técnica de L. Oporto Ordóñez* y la coordinación de Ernesto A. Vásquez, voluntario de la II Brigada Internacionalista*. Ha participado en varios seminarios, coloquios, congresos, encuentros, etc., en temas de historia y archivística. Técnico Archivista en el Archivo Regional de Oruro del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2010-2011). Fuente: CV.

MAMANI ROMERO, LUIS

(Ánimas, Chocaya, Provincia Sud Chichas, Potosí, 18 de agosto de 1961) Militar egresado de la Escuela de Sargentos de la Armada Boliviana “Reynaldo Zeballos”. Estudió Derecho en la Universidad Boliviana de Informática. Tiene 25 años de experiencia en la carrera Militar, habiendo alcanzado el grado de Suboficial Mayor DECASOF. Participó en el Seminario Taller sobre Administración y Manejo de Archivos y en el Seminario Internacional Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Importancia de su Rescate para el Desarrollo Nacional (2008). Su experiencia específica en archivos es de 8 años en los que realizó tareas de organización, clasificación y restauración en el Archivo Histórico Militar de las Fuerzas Armadas de Bolivia. Es autor del Reglamento de Administración y Procedimientos de Archivos, en el Sistema de Archivos Militares de las Fuerzas Armadas (2009). Publicaciones archivísticas: “Mi vivencia en el Archivo Histórico Militar” (Hitihasa, 2007). Fuente: CV.

MAMANI SARZURI, ROCÍO (La Paz, 12 de junio de 1976)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Ha cursado el Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas del Estado, impartido por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). Participó como expositora en el I Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2009).Trabajó en el Archivo de Gestión del Área de Formación Docente del Ministerio de Educación; Archivo de La Paz* (organización del Fondo Ministerio de Instrucción y Educación; Policía Nacional (Serie Prontuarios), Proyecto de Digitalización de Padrones Siglo XIX, Colección de Fotografías Ultima Hora) y en el Archivo Central del Servicios de Caminos-Residual. Es Encargada de la Mapoteca del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Publicaciones archivísticas: “Fondo Fotográfico “Última Hora”, con Lourdes Uchanier, Eliana Ticona, Patricia Kuno (DesArchivando, 2009, 6: 8-9). Fuente: CV.

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MANCILLA MAMANI, JUDITH C. (La Paz, 23 de noviembre de 1982)

Egresada de Sociología (2010), documentalista, Archivista videográfica. Especialización en Idioma Aymará, en la Carrera de Lingüística UMSA. Realizó cursos de programación de sistemas en la carrera de Informática UMSA. Estudiante de la Cátedra Virtual “Integración Latinoamericana”, dictada en las universidades de Cuyo (Argentina), Valparaíso (Chile), Mayor de San Andrés (Bolivia). Organizó y participó en varios seminarios y foro debates respecto a metodologías de investigación social y temas nacionales sobre movimientos sociales. Ejerció el periodismo radial en Radio Cadena Nacional “Programa Dirección”, Radio Qhana “Programa a toda máquina: la revista”, Radio Pasión Boliviana “Programa Contacto Radial”, cubriendo el área socio-político y cultural. Fue asistente de investigación en el Proyecto “Las seis Federaciones del Trópico de Cochabamba en el proceso de construcción de un Instrumento Político IPSP-MAS”, a cargo de la Universidad Mayor de San Andrés, la carrera de Sociología, y el Instituto de Investigaciones Sociológicas, que publicó el libro homónimo (2012). Asistente de Investigación en el Proyecto “La Federación Carrasco Tropical y el Origen del IPSP- MAS”, siendo editado el libro por el Rectorado de la UMSA (Septiembre 2012). Asistente de investigación del Proyecto “Coca y Minería”, libro editado por el Instituto de Investigación Sociológica (2006). Fue asistente de Dirección del film A vuestras Macanas tiembla el enemigo, dirigida por el cineasta L. Mérida*, en producción con TV Desarrollo y Wallparrimachi y fue Coordinadora de difusión y distribución del documental Cocaleras marchando por la vida, del mismo director; Asistente de Dirección, encargada de Casting del Film cinematográfico Manuelas: Heroínas de la Coronilla; Actriz del Film Manuelas: Heroínas de la Coronilla; Asistente de Dirección del Programa televisivo Memorial, que se emite los fines de semana por Bolivia TV. Ensayista del periódico Cambio, con homenajes biográficos a celebridades que aportaron en la cultura boliviana. Junto a L. Mérida, fue Consultora en la Vicepresidencia del Estado, del Proyecto de catalogación y pauteado del archivo videográfico “Memorial de Movimientos Sociales del siglo XX”. Fuente: CV.

MAQUERA COLQUE, TIBURCIO

(Carabuco, Provincia Camacho, La Paz, 23 de marzo de 1964) Licenciado en Historia (UMSA). Hizo su tesis sobre Reforma Agraria en Carabuco, 19401960. Consecuencias de las relaciones sociales en el proceso de reforma agraria (2003). Es egresado de la Carrera de Antropología a distancia de la Universidad Católica de Bolivia (Cochabamba). Asistió al Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996). Trabajó en el Archivo Central del Banco Central de Bolivia* a contrato (1989-1990); en 1991 era empleado de la pulpería del BCB. A partir de 1993 pasó a trabajar como empleado de planta en el Archivo Central del ente emisor. Hizo el Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999); Diplomado Gestión de Archivos organizado por la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información de la UMSA* (2008). Fuente: CV.

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MARCA MORALES, GERVACIA SANTUSA (La Paz, 19 de junio de 1980)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Fue expositora en el IV (2006) y V (2009) Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos, en Sucre. Trabajó en el Archivo de la Aduana Nacional de Bolivia (2001-2002); Beca-trabajo en el Fondo Fotográfico del Archivo de La Paz* (2003-2004). Fue Auxiliar de investigación del Instituto de Estudios Bolivianos en el Proyecto de Relaciones Interétnicas región del Lago Poopó y el río Desaguadero (convenio ASDI/SAREC), que incluyó la reorganización del Archivo Judicial de Poopó en Oruro (2006-2007); luego Investigadora Adscrita (20082010); Auxiliar de investigación de la Fundación Simón I. Patiño, proyecto Imagen, Historia y Sociedad, Bolivia Siglo XIX (2004-2005); Paleógrafa del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* en los proyectos, Cervantes y el Corregimiento de La Paz (2005); La cultura urbana en la Edad de Oro: Potosí y La Plata, 1580-1680 (2005-2006). Publicaciones archivísticas: “El fondo fotográfico del Archivo de La Paz”, con Lidia Quispe (Boletín del Archivo de La Paz, 2004, 21-22: 58-67); “Los fotógrafos en la ciudad de La Paz, 18461899” (Revista Cultural de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia, 2009, 59: 33-41); “La fotografía: El espejo de la memoria” (Mendieta, Pilar e Iño, Weimar, Coord.: Memoria de Oruro: Ensayos bibliográficos e históricos (La Paz: Instituto de Estudios Bolivianos UMSA-ASDI/ SAREC, 2009. Tomo I); “Símbolo de modernidad: Fotógrafos en la ciudad de Oruro, 18801930” (Mendieta, Pilar, Coord.: Vivir la modernidad en Oruro 1900-1930 (La Paz: Instituto de Estudios Bolivianos y UMSA-ASDI/SAREC, 2010: 245-284). Fuente: CV.

MARCELLY P., HUGO Fue director de la Sección Registros y Archivo del Servicio de Inteligencia del Estado, durante la dictadura de L. García Meza* (1980-1981). Tuvo a su cargo el Archivo Secreto de esa época, custodiado con el apoyo de Enrique Zapata (Encargado de Kardex), Haroldo Endara Vaqueros (Secretario), Mariana Pacheco Arzadum (Auxiliar) y siete secretarias. Fuente: Última Hora, 1997.

MARIÑO, ALBERTO Funcionario administrativo de la Policía Nacional. Junto con J. Cordero Castillo* organizó y creó la Sección Archivo de Identificación y Criminalística de la Policía Boliviana. Fuente: Cordero, 2004.

MARKA TOLA, SANTOS

(Quyrawara e Pacajes, La Paz, 1879. † La Paz, 1939) Líder indígena aymara. Kuraka principal del ayllu Jilata de Kallapa y Lulluma (Provincias Pacajes y Sicasica de La Paz). Isidro Canqui, Cacique desde la época del presidente Gregorio Pacheco, transfirió sus poderes a Marka Tola (1916) como Cacique

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Apoderado de la provincia Pacajes, ante las autoridades nacionales y prefecturales. Marka Tola lideró el vasto movimiento de reivindicación de los caciques apoderados de los departamentos de La Paz, Oruro, Cochabamba y Chuquisaca (1920), impulsando una asombrosa campaña de reivindicación de los derechos sobre las tierras comunitarias de origen, exigiendo la devolución de los títulos de propiedad que habían sido arrebatados en distintas oportunidades. Llevó el singular juicio ante la Fiscalía General de la República, el Congreso Nacional y la Corte Suprema de Justicia. Su campaña le costó prisión y persecución política (1916-1918), acusado falsamente de promover una sublevación indigenal. El encarcelamiento de Jilakatas era frecuente, con el propósito de detener sus reclamos y sobretodo arrebatarles sus títulos de propiedad. En 1913, más de 150 indígenas fueron apresados, sufriendo el decomiso de sus documentos de propiedad, como el caso de Florentino Carrillo, a quien le arrebataron un título de 135 fojas perteneciente a los Caciques Sebastián y Martín Llanque, de Jesús de Machaca; al propio Marka Tola le quitaron un título antiguo, de Kurawara, de tres cuerpos. Marka Tola se convirtió en investigador nato; recurrió al Archivo Nacional de Bolivia en busca de títulos. Con claridad política, asoció la sustracción de títulos con los intentos de “expropiarnos de nuestros lejítimos derechos sin que los convecinos tengan parte en nuestras propiedades: cuyos títulos ingenies (sic) rescatarlos para el deslinde general y para indicar los mojones antiguos que claramente se explican en los referidos títulos”. En los valiosos documentos constaba el nombre de caciques y ayllus de 1660, asimismo los mojones de los pueblos de Caracollo, Toledo y Kurawara de Pacajes. Su demanda de devolución se extendió a títulos de 1561, 1567 y 1718. Con seguridad absoluta exigía al Congreso de 1918 “que los hacendados si tienen títulos antiguos que consten en el término de 30 días y sean iguales al que acompañamos del año 1585 de Carlos y Sebastián Llanqui del repartimiento de los pueblos en 1775”. Marka Tola, que llevaba ya 12 años en su exigencia ante los tres poderes del Estado, al establecer la extrema vulnerabilidad de su Archivo, en una acción sorprendente, en julio de 1920, decidió entregar cinco expedientes relativos a las diligencias seguidas por los originarios del Departamento de la Paz al Archivo Nacional de Bolivia, de donde ya no podían ser sustraídos. Fuente: Choque, 2002: II, 148-149; Choque, 2010: 230, 231, 236, 249.

MÁRQUEZ SALEG, MELA

(La Paz, 23 de febrero de 1964) Directora, productora y montajista cinematográfica. Boliviana de origen palestino. Estudió Comunicación Social en la Universidad Católica de La Paz (1984) y estudios especializados en el Centro Sperimentale di Cinematografía, donde fue asistente de cátedra de Roberto Perpignani (1988) y catedrática de edición (1993-1999). Estudió Semiología del lenguaje en la Universitá la Spienza di Roma (1990), donde impartió un seminario de edición (1992), replicado en la Universidad Autónoma de México (1993). Se inició en el camino del cine, cuando siendo niña al observar de cerca el trabajo del poeta y escritor boliviano Oscar Soria Gamarra, quien por entonces era un icono del cine boliviano. Es co-realizadora, con el Taller Cinematográfico Ukamau, del cortometraje Pata imilla laureado con el Cóndor de Plata (1981). En su estancia en Roma participó como voluntaria en la película La entrevista (F. Fellini, 1987) y realizó

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el cortometraje en 16mm Passaggero (1988). Tiene en su haber el montaje de cerca de una treintena de obras audiovisuales de diversos formatos y géneros, en Italia, Bolivia, Australia, Nueva Zelanda e Inglaterra (1986-2005). Obtuvo el premio a mejor editora por el corto en 35 mm Dark nights (P. Monfaat) en el London Film Festival (1992); fue editora del corto de animación en 16 y 35mm Swan song (C. López) que obtuvo mención especial en el New York Film Festival (1993). Su opera prima, el largo Sayariy, logró mención especial en el Venice Film Festival (1995), premio a la crítica en el Sydney Film Festival (1996) y premio especial en el Festival First People, Montreal, Canadá (1998). Realizó el largo documental en  video Ahí estás… Che Guevara (Italia-Bolivia, 1998), que documenta el encuentro mundial “Che Guevara 30 años”, filmado en Vallegrande, Cuba y Congo (1997). Trabajó en París y Jerusalén con el director israelí Ron Havilio, montando el film en episodios Potosí. Temps du Voyage (2000-2006). Participó como asistente de dirección de El atraco (P. Agazzi, 2004) y en la postproducción del largometraje Loud whispers. Fue presidenta de la Unión de Trabajadores del Arte y la Cultura UTAC y de la Asociación de cineastas de Bolivia. Directora de la Cinemateca Boliviana*, desde 2010. Durante su gestión (2012) impulsó el proyecto Imágenes de Bolivia que determinó salir al rescate del patrimonio fílmico disperso de Bolivia, para resguardarlo en su repositorio, con financiamiento español de la AECID de 91 mil dólares. El plan propone el catastro, rescate y conservación de la memoria histórica del audiovisual en Bolivia, “acudiendo a personas públicas y privadas que tengan audiovisuales en sus casas, para una recolección voluntaria en todo el país”. La segunda fase consiste en identificar y ubicar cintas y películas en estudios, archivos o colecciones de diferentes países. El equipo está dirigido por Carolina Capa y María Domínguez, expertas argentinas en catalogación y conservación de archivos fílmicos. Entre los tesoros que encontraron están los noticieros del cineasta José María Velasco Maidana, Actualidades Urania, de 1929, joya del cine silente, por ser uno de los primeros noticieros producidos en Bolivia. Velasco Maidana fue el director de Wara Wara, la primera película silente del país (1930), que custodia la Cinemateca. Este proyecto logró descubrir otros tesoros: Instalación del Congreso de 1907, las Alasitas de 1917, el Carnaval paceño de 1926, la película Tiahuanacu (1919), Santa Cruz, tierra del futuro (1929). Fuente: CV, Página Siete, 2012: 26.

MARTÍNEZ LÓPEZ, MARÍA DEL CARMEN (Sucre, 20 de junio de 1960)

Técnico Medio Universitario (UMSFX, 2005), donde estudia la Carrera de Historia. Como muchos, se ha formado en cursos como el de Manejo, Conservación, Planificación y Curaduría en Archivos (Sucre, 1996), Paleografía Hispanoamericana, Siglos XVIXVIII, impartido por el Dr. J. M. López* (2000, 2005), Capacitación y Actualización Archivística, impartido en el ABNB por la Dra. M. L. Conde Villaverde* (2003), Curso Básico de Archivística a distancia (Escuela Nacional de Archiveros de Perú, 2006), Manejo Profesional de Archivos y Gestión Documental (Santa Cruz, 2006). Participó en la pasantía sobre el Tratamiento de la documentación judicial (siglos XVI al XVIII), en Valladolid, España (2009), en el II Congreso Nacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2004) y el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y

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Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (1995). Fue bibliotecaria en el ABNB* (1979-1998), siendo transferida a su actual cargo como Archivera, responsable de la organización, descripción y conservación de la serie Mojos y Chiquitos, Manuscritos de la Biblioteca Gabriel René-Moreno y del Fondo Notarías de la Colonia. Trabajó en el proyecto Cedulario Real de la Audiencia de La Plata (Siglo XVI), bajo la coordinación del Dr. José Enciso Contreras, docente de la Universidad Autónoma de Zacatecas (México), cuyo resultado fue publicado por el ABNB. Ha elaborado, junto al equipo de archiveros del ABNB, catálogos, inventarios y guías. Publicaciones archivísticas: “Biblioteca Gabriel René-Moreno. Catálogo de manuscritos y de hojas sueltas impresas”, con J. Terán (Anuario del ABNB, 2000: 727-809). Fuente: CV.

MARTÍNEZ MUJICA, GABY DORIS (Oruro, 24 de junio de 1956)

Estudió la secundaria en el Colegio “Santa Ana” de Oruro y es Técnico Superior en Bibliotecología con estudios (UMSS). Participó en el curso de Archivos auspiciado por la Asociación de Bibliotecarios de Quillacollo (1998), Normalización Archivística organizado por la Agencia de Cooperación Internacional de España en Santa Cruz de la Sierra (2005), Seminario Taller de Legislación Archivística y Gestión Documental organizado por la Universidad Mayor de San Simón y Sindicato de Trabajadores y la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso* (2006), Congreso Nacional de Archivos para el tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (2007); curso taller de Archivística organizado por el Gobierno Municipal de Cochabamba y la UMSS (2007), el Taller Departamental Sobre La Ley de Archivos, organizado por la UMSS, el Archivo Histórico Municipal “José Macedonio Urquidi”* y la Asociación de Archiveros (2007) y el taller de Organización de archivos de gestión y bases legales, en la Caja Nacional de Seguro Social (2008). Conjuntamente con I. de Mamán* y Beatriz Thames participó activamente en la organización de las actividades de las Brigadas Internacionalistas* en Cochabamba (2009). Ha sido Presidenta de la Asociación de Archiveros de Cochabamba y es miembro Activo de la Red de Bibliotecas y Centros de Documentación de Cochabamba. Desde el 2000 es Responsable de Archivo Institucional de la Escuela Técnica de Salud. Ha realizado la catalogación de documentos históricos en el Archivo Histórico de la Honorable Municipalidad de Cochabamba (2009); trabajó como consultora en la Organización del Archivo Histórico de la Prefectura de Cochabamba (2009) y como consultora para la Organización del Archivo Central Administrativo e Intermedio de la Prefectura del Departamento (2010). Como resultado de su trabajo ha elaborado el Inventario del Archivo Central de la Escuela Técnica de Salud; Proyecto del Sistema de Archivo Institucional; Aplicación de la Norma ISAD-G e ISAAR; Reglamento de archivo Institucional; Manual de procedimientos y organización del Archivo Central Escuela Técnica de Salud (2008); Catalogación de los Archivos Históricos Judiciales de Mizque (Archivo Histórico “José Macedonio Urquidi); Inventario descriptivo del Archivo Histórico de la Prefectura de Cochabamba; Instrumento Descriptivo de Ubicación Física del Archivo Histórico de la Prefectura de Cochabamba (2009), que se hallan inéditos. Fuente: CV.

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MARTÍNEZ QUINTEROS, MARÍA ANA LORENA (Sucre, 18 de diciembre de 1959)

Licenciada en Bibliotecología (UMSA). Especialista en Sistemas de Gestión de la Calidad ISO 9001, en el Instituto Boliviano de Normalización y Calidad IBNORCA (2008). Diplomado en Educación Superior (2001), Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos (UMSA, 2002). Se tituló con la tesis Colecciones históricas privadas en La Paz, Julio Ramiro Condarco Morales y Gastón Velasco Carrasco (1999). Participó en el Seminario Nacional Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (1993), el Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (1999); Taller de Manejo, Conservación y Curaduría de Archivos impartido por Diane Vogt O’Connor (1996); Jornadas de Capacitación de Archivos Universitarios en Coquimbo, Chile (2001, 2002). Tiene cursos especializados en Normas ISO en Bolivia, Argentina y Colombia. Es Docente titular, desde 1992, de Preservación y Restauración de Documentos en la Carrera de Bibliotecología*, y dicta de forma interina otras cátedras. Docente de Diplomados en la Universidad del Valle (2003), docente del Legislación Archivística Boliviana en el Diplomado de Gestión de los Archivos (2007) y en el Diplomado de Organización de Archivos de la Universidad Nuestra Señora de La Paz (2008). Trabaja desde 1998, en Archivos. Se desempeñó como Ayudante de Investigación del proyecto Recursos Documentales en el ABNB sobre la Orden Franciscana en Bolivia, dirigido por G. Mendoza* (19871988). Hizo la consultoría para la implantación de la gestión documental en Boliviana de Seguros y Reaseguros (1989-1990), consultora del BID para la Organización del Archivo de la Gerencia de Operaciones del BCB (1991-1992), organización del Archivo administrativo de la OMS/OPS (1992-1993), elaboración del Manual del Archivo Pasivo de la Sociedad Boliviana de Cemento (1994), organización del Archivo Nacional de Fonvis (1994), creación del Sistema Integrado de Archivo de Mutual La Primera (1995), de igual manera para el Servicio Integrado de Archivo (1995), con el Banco Mundial para el proyecto de sistematización de la documentación del Departamento de Calificación de Años de Servicio (1995-1996), para el Sistema Integrado de Información Documental de la Contraloría, donde fue jefa de Archivo Central (1996-1997), para Diagnóstico del Archivo de la Prefectura de Tarija (1997), y del Archivo Central de ENDE Cochabamba (1997), con el BID para la organización del Archivo de Recursos Externos del Ministerio de Capitalización (1997), Archivo de Expedientes para la Administradora del Fondo de Pensiones Futuro de Bolivia (1997, 1999), reorganización del Archivo de la Sociedad Boliviana de Valores (1998), Archivo del SITTEL (2000). Profesional de Archivo Central del Fondo Nacional de Inversión Productiva y Social (2001-2004), Encargada de Documentación y Archivo de la Superintendencia de Hidrocarburos (2004-2009). Hizo una consultoría para la organización del Archivo de expedientes de personal profesional de la cooperación Canadiense (2007). Publicaciones archivísticas: “Aspectos de los archivos universitarios y su tratamiento académico” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 1999-2000, Nº 6-7: 4548); “Riesgos y salud del archivero universitario” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2001, Nº 9: 63-66). Fuente: CV.

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MARTÍNEZ RUEDA, EDGAR FERNANDO (Huanuni, Provincia Dalence, Oruro, 1963)

Abogado (UMSA), con estudios de postgrado en la Universidad Andina Simón Bolívar (1999) y la Universidad Privada de Santa Cruz UPSA (2004). Fue Inspector del Proyecto de Certificación Gratuita a Mayores de 18 años (financiado por el PNUD); Secretario General y Consultor del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA); Consultor del Viceministerio de Desarrollo Municipal; Consultor Jurídico del Viceministerio de Planificación Estratégica y Participación Popular; y similar cargo en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. Realizó trabajos de corrector en las editoriales: “Don Bosco” y “Gisbert”. Fue designado Director General Ejecutivo de la Gaceta Oficial de Bolivia en enero de 2007. Custodio oficial de la Gaceta Oficial del Estado Plurinacional (antigua Gaceta Oficial de Bolivia). En su gestión se logró digitalizar la normativa boliviana (leyes, decretos, resoluciones supremas y otras disposiciones legales) para disponerlas de forma libre en el sitio web de la institución. De igual manera, dispuso, convenio mediante, que las Gobernaciones (antiguas Prefecturas) de Departamento, distribuyan y pongan a la venta las ediciones físicas de la Gaceta, en las oficinas de cada Gobernación, aspecto inexistente antes de 2010. Fuente: CV.

MARTÍNEZ DE TINEO, JUAN VICTORIANO (España)

Fue Presidente interino de la Audiencia de Charcas (1767-1769). Tuvo a su cargo la ejecución de la orden de expulsión de los jesuitas en el territorio de Charcas, especialmente de las misiones de Mojos y Chiquitos, donde dispuso la administración de las temporalidades y la secularización de sus colegios. Dispuso que el Archivo de la Universidad de San Francisco Xavier, de los jesuitas, fuera enviado a Lima. Fuente: Arze, 1991: 105.

MASCIO, VICENZO (Italia)

Fotógrafo. En 1897 fue contratado por misioneros franciscanos para fotografiar sus misiones en Sucre, Tarija y el Chaco para la exposición “Arte Sacro-Misiones y Obras Católicas” en Turín, en 1898. Los Álbumes de trabajo de Mascio se encuentran en el Archivo Franciscano de Tarija* y en el Archivo Nacional de Bolivia*, en Sucre. Fueron publicadas en la obra de D. Giannecchini* y V. Mascio, Album fotográfico de las Misiones Franciscanas en la República de Bolivia (1995) y en la Historia natural, etnografía, geografía, del Chaco boliviano de 1898 (1996), editado por L. Calzavarini*. Fuente: Buck, 1999.

MATA LINARES Y VÁSQUEZ DÁVILA, BENITO MARÍA DE LA (Madrid, 1752. † 1829)

Nacido en una prominente familia de funcionarios (su padre era miembro del Consejo de Castilla). Estudió y enseñó en Alcalá de Henares y Salamanca. Fue

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nombrado Oidor de la Audiencia de Chile (1776), promovido a la Audiencia de Lima (1778) y fue también Juez Conservador de Propios y Arbitrios (1781). Ese año se trasladó al Cusco, donde presidió el juicio a Túpac Amaru II. Juez severo, autorizó infame tortura a Diego Cristóbal Túpac Amaru y a miembros sobrevivientes de la familia insurgente antes de su ejecución (1783), ganándose reputación de crueldad. Perseguidor implacable de criollos prominentes que él sospechaba habían sido cómplices de Túpac Amaru, entre ellos el obispo Moscoso y Peralta, su vicario general Pérez Armendáriz y miembros de las familias Peralta y Ugarte. A pesar que permaneció en Cusco como subdelegado de la Visita de Escobedo y fue primer Intendente de la Provincia (1784), el virrey Croix pidió que fuese retirado del Cusco (1786) y la Corona lo promovió a la Regencia de la Audiencia de Buenos Aires (1787), pero allí se enfrentó al Cabildo y al  propio virrey Avilés, por lo que se le llamó a Madrid para que formara parte del Consejo de Indias (1803). Durante la ocupación francesa participó del gobierno de José Napoleón como miembro del Consejo de Indias  (1808-1811), Regidor en el Ayuntamiento de  Madrid (1806-1809) y miembro del Consejo de Estado (1812-1813). Fue destituido en 1814, tras el retorno de Fernando VII. Llevó vida discretísima, hasta su muerte, sin ninguna actividad pública dada su condición de notorio afrancesado (1813-1829). Formó un copioso archivo que abarca el siglo XVII y fundamentalmente el XVIII, cuyos papeles personales fueron donados por su familia a la Real Academia de la Historia de Madrid (1851). En 1981, E. Arze Quiroga* levantó un catálogo. Se trata de 92 tomos de documentos referidos en gran medida al vasto territorio de la Audiencia de Charcas: Gran Chaco, Chiquitos, Mojos, Yuracarés y Sirionós (6, 11, 56, 76), Cochabamba (12, 54, 66, 69-70), Apolobamba (66), Lípez, Chichas, Tarija (13), Santa Cruz (29, 76), La Plata (30, 66, 78), la Mita de Potosí (37, 38, 39, 69), Porco y Chichas (40), Chayanta (41), Chile (26), Argentina (11, 19, 20, 27, 52-53, 69, 78, 81), Paraguay (28, 60, 65, 67, 74, 80), Perú: Cusco, Chucuito, Lima, Trujillo (14, 21-25, 44-51, 58-59, 82, 88, 96), Cuba, Venezuela y Ecuador (73, 75, 76, 87, 89-91), Méjico, Guatemala, Santo Domingo (76, 87). Los otros temas tratan de política colonial española en América. Sus papeles propios están en el tomo 72. Fuente: Arze Quiroga, 1981: 6-8; http://genealogiaroriguezmonge.com (17.4.12); http:// www.es.wikipedia.org (17.4.12).

MATHEWSON, E.P. Empleado de la Compañía Minera de Cobre de Anaconda. Documentó fotográficamente las labores de la mina Huanchaca. La mayoría de sus fotografías retratan los campamentos mineros en Huanchaca y Pulacayo, incluidas mujeres palliris que trabajan en la clasificación de mineral, una planta de fusión, plazas, rebaños de llamas, mercados, escenas callejeras y policías. Algunas son de calles y plazas de La Paz y Oruro. Treinta y un de sus fotografías de bromuro de 10 por 8 pulgadas referidas a Bolivia, tomadas en enero de 1901, forman parte de la colección de Benjamín Stone en la Biblioteca Central de Birmingham, Inglaterra. Los grabados fueron obtenidos por Sir B. Stone (1838-1914), miembro del Parlamento, viajero mundial y fotógrafo, a principios de 1900. Fuente: Buck, 1999.

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MAYTA QUISPE, PAOLA

(La Paz, 17 de agosto de 1984) Estudia la Carrera de Historia* (UMSA). Técnico en Software Administrativo de la Academia Técnica de Software y Hardware For Windows (ATSYH), Secretaria Ejecutiva ATSYH. Trabajó en el Archivo Histórico Militar del Estado Mayor General de Bolivia; Pasante en la Catalogación del Patrimonio Discográfico Musical Boliviano en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UMSA), en la Biblioteca “Arturo Costa de la Torre” de la Casa de la Cultura-Alcaldía Municipal y en el Sistema del Archivo de la COMIBOL* en la ciudad de El Alto. Ha participado en varios seminarios, encuentros, coloquios, tertulias en temas de historia y archivística. En 2010 pasó como Técnico Archivista en el Archivo Regional de Oruro del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*, luego fue destinada al Archivo Histórico Minero de Pulacayo (2011). Fuente: CV.

MEDINACELI GONZÁLES, MARÍA XIMENA EMILIA (La Paz, 24 de abril de 1955)

Licenciada en Historia (UMSA), con Maestría en Historia Latinoamericana (Universidad Internacional de Andalucía, La Rábida, España) y Doctorado en Ciencias Sociales, mención Historia (Universidad de San Marcos de Lima, Perú). Es docente titular de la Carrera de Historia* (UMSA) desde 1994; fue investigadora del Centro de Investigación y Desarrollo de la Mujer (1986-1990). Tiene amplia obra intelectual publicada, fruto de investigación en fuentes primarias de archivos. Entre los más importantes mencionamos La construcción de lo urbano en Potosí y La Plata (2009); La Paz: historia de contrastes (2007); ¿Nombres o apellidos? El sistema nominativo aymara en Sacaca, Siglo XVII (2002); Tras las huellas del poder: una mirada histórica de las conspiraciones políticas en Bolivia, siglos XIX y XX, en coautoría con M.L. Soux* (2002); De indias a doñas. Mujeres de la élite indígena en Cochabamba, con P. Mendieta* (1997); Mujeres en rebelión. La presencia femenina en la rebeliones de Charcas del siglo XVIII, con S. Arze* y Magdalena Cajías de la Vega (1997); Imágenes y presagios. El escudo de los Ayaviri, mallkus de Charcas (1992); Alterando la rutina: mujeres en las ciudades de Bolivia, 1920-1930 (1989). Especialista en historia prehispánica, sus avances de investigación (49 artículos) se hallan dispersos en revistas de Bolivia (La Paz, Sucre, Cochabamba), Estados Unidos (Pittsburgh) y Perú (Lima, Cusco). Pertenece a la Academia Boliviana de la Historia (2003), Sociedad Boliviana de la Historia. Formó parte de la Coordinadora de Historia y es miembro del Instituto de Estudios Bolivianos. Su trayectoria archivística es breve, pero sustancial. Junto a S. Arze*, R. Barragán* y Seemin Qayum, realizó la compilación de la primera guía de fondos documentales etnográficos de Bolivia (1994). Fue docente investigadora del Archivo de La Paz* (1994-1996), Directora interina (1996) y más tarde titular (2000-2004). Organizó, en esa condición, un primer seminario para la discusión del anteproyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos*. Tuvo el mérito notable de haber organizado y dirigido el primer Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos, conjuntamente las Carreras de Historia y Bibliotecología* (2002), que contó con profesores del más alto nivel, tanto nacionales como extranjeros. El 2009

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fue condecorada por la Universidad Mayor de San Andrés con el Diploma y Medalla de Reconocimiento a la Producción Intelectual. Publicaciones archivísticas: Guía sobre fondos documentales etnográficos de interés para el conocimiento de los grupos indígenas, en coautoría con S. Arze, R. Barragán y S. Qayum (La Paz, Plural, 1994); “Guía preliminar de instrumentos descriptivos de los Fondos del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1995, 16 (15): 1-16); “Inventario del Fondo Contraloría General de la República”, con M. Quiroga, S. Cuba, R. Santander y P. Quisbert (Boletín del Archivo de La Paz, 1995, 16 (15): 17-26); “Fondo de la Corte Superior de Distrito: Una invitación a nuevas investigaciones” (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 17 (16-17): 18-21); “Economía, administración y justicia: Fondo de la Prefectura de La Paz”, con P. Fernández (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 17 (16-17): 28-35); “La Biblioteca del Archivo de La Paz: una guía para el usuario y una experiencia de reordenamiento” (Boletín del Archivo de La Paz, 2001, (19): 33-43); “El fondo de la Corte Superior de Distrito”, con S. Cuba y M. Mora (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, (20): 3-14); “Homenaje a Gunnar Mendoza” (Boletín del Archivo de La Paz, 2004, (21-22): 10-13); “La accesibilidad a los documentos del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 2004, (21-22): 83-90). Fuente: CV.

MEDRANO REYES, GUILLERMO (La Paz, 10 de enero de 1955)

Historiador (UMSA). Magíster en Geopolítica de los Recursos Naturales (UMSA). Diplomado en Educación Superior; Diplomado en Geografía Humana y Ambiental (UMSA). Ha sido docente, en la Carrera de Historia*, de Paleografía (1999, 2000, 2012), Práctica de Archivos (2005) y Didáctica de la Enseñanza de la Historia (UMSA), y en el Instituto Normal Superior “Simón Bolívar”. Desempeñó en la Universidad Pública de El Alto como Subdirector de la Carrera de Sociología, fundador y docente de la Carrera de Historia. Es autor de Historia del comercio exterior de Bolivia, 19001920 (2010), Educadores en el Instituto Normal Superior “Simón Bolívar”, 1917-1967 (2003), La Paz, Vanguardia revolucionaria de Bolivia: líderes y movimientos sociales en su historia, con Daniela Medrano (2011). Participó en la III Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos (Cochabamba, 1983), el Cursillo sobre Archivos a cargo del Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos* de Córdoba (La Paz, 1984), el Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (La Paz, 1999) y de Paleografía Hispanoamericana, siglos XV-XVIII (Sucre, 2000), ambos dictados por el Dr. J.M. López Villalba* y el Seminario de Archivos a cargo de la Dra. M. Elena Porras, directora del Archivo Histórico de la Cancillería del Ecuador (2002). Trabajó como Técnico III de la División de Archivo y Biblioteca del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo (1984) y fue Jefe del Departamento de Documentación y Publicación de la Alcaldía de La Paz y por ello tuvo bajo su dirección al Archivo Histórico de la Casa Municipal de Cultura de La Paz (1994). Trabajó como docente investigador del Archivo de La Paz* (1998, 2003 y 2005), participando en el recojo de documentos de la Corte Superior de Distrito Judicial de La Paz, el traslado del Archivo del Dr. Javier Pescador, el montaje de la Exposición Fotográfica (1999) y el Diagnóstico del Fondo Documental de la Prefectura de La Paz (2000). Publicaciones archivísticas: “Diagnóstico Guía Fondo Documental de la Prefectura. Serie: Padrones del Departamento de La Paz, siglos XIX-XX” (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, (20): 24-28). Fuente: CV.

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MEJILLONES QUISPE, GUILLERMO (La Paz, 8 de junio de 1983)

Estudia la Carrera de Historia* (UMSA). Hizo el Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas del Estado, impartido por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). Ha trabajado como pasante en el Archivo Histórico Militar, Archivo de la Administradora Boliviana de Carreteras ABC, Archivo y Biblioteca de la Casa de la Cultura, Archivo La Paz* (UMSA). Ha escrito artículos relacionados con la Guerra del Chaco, Historia del club Strongest; y temáticas culturales como fiesta y danza. Miembro del Comité Editor del boletín estudiantil Q’urawa. Se encuentra trabajando la tesis de Licenciatura con título tentativo: El Servicio de Inteligencia entre 1927-1938. El espionaje en la Guerra del Chaco. Desde el 2010 trabaja como Técnico de Archivo en el Sistema de Archivo de la COMIBOL*. Fuente: CV.

MELGAR I MONTAÑO, P. ADRIÁN

(Postrer Valle, Provincia Valle Grande, Santa Cruz, 8 de septiembre de 1891. † Mairana, Santa Cruz, 23 de mayo de 1966) Sacerdote católico. Estudió en el Seminario cruceño. En el ejercicio sacerdotal empezó como ayudante del cura de Vallegrande (1920-1923), fue Vicepárroco de Postrer Valle (1923-1934). Canónigo de la Diócesis de San Roque en Santa Cruz (1934-1939). De allí se retiró a Mairana. En su trayectoria archivística anotamos sus estudios etnográficos en el Archivo Diocesano de Santa Cruz de la Sierra (1934-1939), de donde nació su afición por el estudio de la historia cruceña, habiendo llegado a acopiar un valioso fondo documental conformado por 16 carpetas coloniales y republicanas, siendo reputado como “la mejor fuente de información (…) sobre los acontecimientos locales durante la guerra de la Independencia”. Publicó la Revista Archivo que alcanzó 8 números (1936-1937). Escribió El clero cruceño durante la Independencia (1913), Rasgos históricos de la Santa Iglesia Catedral y Obispos de la Diócesis de Santa Cruz de la Sierra (1915), Documentos para la historia de Bolivia (1918), Historia de Valle Grande (T. I y II, 1955-1959). Ha dejado inédito su “Apuntes para la historia eclesiástica boliviana. Los capellanes castrenses durante la Guerra de la Independencia en la Provincia de Santa Cruz” y su “Autobiografía”. Esta colección fue depositada en la Biblioteca Central de la Universidad Gabriel René Moreno, donde fue inventariada por H. Sanabria*. Posteriormente fue transferida al Archivo Histórico del Museo Histórico de esa universidad. Fuente: Barnadas, 2002: 184; Oporto, 2006: 254; Sanabria, 1973: 3-10.

Mendieta Parada, María del Pilar (La Paz, 19 de abril de 1959)

Licenciada en Historia UMSA (1994), con Maestría en Ciencias Políticas CESUCEBEM (1999), y Doctorado en Ciencias Sociales, Universidad Nacional de San

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Marcos, Lima, Perú (2007). Hizo el Diplomado en Educación Superior UMSACEPIES (2003). Fue Asesora de Historia de la Casa de la Cultura Franz Tamayo (19941995), Docente en la Universidad Católica Boliviana (desde 1995), en la Carrera de Historia* de la UMSA (1995-2010), y Docente investigadora del Instituto de Estudios Bolivianos, Facultad de Humanidades UMSA (1998-2011). Fue Coordinadora e investigadora del Instituto de Investigaciones Históricas de la Carrera de Historia UMSA (2011, 2012). Investigadora en diversos proyectos desde 1992. Participó, desde 1991, en cursos, seminarios y congresos sobre Historia, en Bolivia, Perú, Chile y Estados Unidos. Es autora de De Indias a Doñas. Beatriz Guayro, Barbola Turumaya y María Paxima. Mujeres de elite en Cochabamba en el siglo XVI (con Ximena Medinaceli, La Paz: Subsecretaria de Asuntos Étnicos de Género y Generación, 1997), Indígenas en Política. Una mirada desde la historia (La Paz, IEB, 2008) y Entre la alianza y la confrontación. Pablo Zárate Willka y la rebelión indígena de 1899 en Bolivia (La Paz Plural-IFEA, 2010). Tiene numerosos artículos publicados en revistas especializadas. Su experiencia archivística se desarrolló en el Archivo de La Paz*, como Docente Archivista (1996-1997, 2000-2001, 2006-2007, 2010-2011). Integró el Comité Editor del Boletín del Archivo de La Paz Nº 23-24 (2006), Nº 25 (2008), Nº 26 (2011). Ingresó a la Academia Boliviana de Historia (2012). Publicaciones archivísticas: “En busca de la historia del departamento de La Paz en el siglo XX. Documentos y tesis en el Archivo de La Paz-UMSA” (Boletín del Archivo de La Paz, 2001, Nº 19: 5-16); “El Archivo de La Paz: un laboratorio para la investigación” (Boletín del Archivo de La Paz, 2006, Nº 23-24: 37-41); “Joyas documentales del Archivo de La Paz: serie de padrones y revisitas, y el proceso Mohosa (1899-1905)” (Boletín del Archivo de La Paz, 2008, Seg. ed. Nº 23-24: 99-104); “El Archivo de La Paz y su función de servicio” (Boletín del Archivo de La Paz, 2008, Seg. ed. Nº 23-24: 119-123). Fuente: CV.

MENDOZA ARUQUIPA, GERMÁN (La Paz, 11 de octubre de 1972)

Licenciado en Historia (UMSA). Su tesis fue publicada como Llaxa, Capital Primigenia de la Metrópoli Paceña (La Paz, 2010). Técnico en Computación Profesional, en el Instituto Superior San Pablo (Ciudad de El Alto). Participó en el V Congreso Internacional de Etnohistoria, Universidad Nacional de Jujuy, Argentina (1998); y en el 1er Encuentro Internacional de Estudiantes de Historia (La Paz, 2001). Asistió a las versiones VIIXI y XIII del Simposio Internacional de Estudiantes de Historia, organizado por la Universidad Nacional de San Agustín, en Arequipa, Perú (2001, 2008) y a las ediciones XVIII-XXIII de la Reunión Anual de Etnología (RAE) organizado por el Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (2004, 2009). En temática archivística tan solo participó en el Seminario Técnicas de Archivo y Documentación, organizado por la Prefectura del Departamento de La Paz (2006). Tiene experiencia como Archivista habiendo desempeñado funciones en el Archivo de La Paz* (UMSA) (2000-2001, 2004-2005); Bibliotecario de la Biblioteca especializada de Historia del Instituto Normal Superior Simón Bolívar (2003); técnico del Archivo del Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (2002 y 2004); trabajó en la ordenación del Archivo Histórico de la Casa Suárez* del Beni (2005). Fue consultor (empadronador) en el Censo de

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Archivos organizado por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (2008). Fue Archivista del Servicio Nacional de Caminos en Liquidación (2008) y Consultor en la Catalogación del Archivo Oral del Museo Nacional de Etnografía y Folklore (2009). Fuente: CV.

MENDOZA GONZÁLEZ, JAIME

(Sucre, 25 de julio de 1874. † Sucre, 26 de enero de 1939) Médico de profesión; escritor, poeta, periodista, historiador, parlamentario. Destacado y prolífico intelectual, cuyo pensamiento lo expuso desde el punto de vista sociológico, histórico, geopolítico, geográfico, literario y médico. Estudió en el Colegio San Cristóbal de Sucre y Medicina en la Universidad de San Francisco Xavier (1901). Prestó sus primeros servicios en la empresa de Simón I. Patiño. Participó en la campaña del Acre (1903-1905), asistiendo a soldados y siringueros (trabajadores de la goma), cuya vivencia se expresa en su novela histórica Páginas Bárbaras (1917). En 1905 retornó a Llallagua y Uncía, donde trabajó por diez años como médico de la provincia, lapso en que tuvo activa participación en la vida cultural y deportiva en la que presidió el Club de Tiro y promovió la fundación de hospitales y escuelas que llevan su nombre. En su novela En las tierras del Potosí (1911), denuncia el drama social de la vida minera, por lo que Rubén Darío lo denominó el Gorky boliviano. Visitó, con fines de estudio, Chile (1907), Francia, Alemania e Inglaterra (1911 y 1913). A su retorno a Sucre, fue profesor de Patología, Pediatría (1916-1920), Psiquiatría y Medicina Legal (1924-1929), en la Universidad de San Francisco Xavier, experiencia difundida en “Lecciones de patología general” (inédita), “Lecciones de Medicina Legal” (en Archivos bolivianos de Medicina, Sucre Nº 2, 1946), y varios sobre psiquiatría y la ciencia médica, publicados en la Revista del Instituto Médico Sucre (1924-1938). Denunció la situación de la niñez desvalida (v. El Niño boliviano), en particular de los niños mineros, por lo que propuso la creación de ligas defensivas de la niñez. Fundó, en el hospital Santa Bárbara, una sala de niños. En su faceta periodística fue fundador de La República (1917) y Nuevas Rutas (1919), y colaboró en La Mañana, La Capital, La Industria, La Prensa, La Tribuna, El País, El Tiempo (Sucre); El Norte, El Hombre Libre, La Razón, La República, El Diario (La Paz); La Patria (Oruro); y El Sur (Potosí). Notable exponente de la integración territorial, planteó una solución geopolítica para superar el enclaustramiento del país, por medio de La Ruta Diagonal. Sus ideas sociales y sus críticas a la política vial del gobierno de H. Siles*, provocó su confinamiento en Quiabaya (La Paz). Fue el primer Rector autonomista de la Universidad de Chuquisaca y pasó a ser Senador por Chuquisaca, en las legislaturas de 1931 a 1936. Acuñó, con sentido constructivo, la consigna “Pisar fuerte en el Chaco” (1927), publicada en 1932 para el Senado Nacional, la que fue apropiada de manera bélica por el presidente D. Salamanca*. En relación a la Guerra del Chaco fue portavoz de una solución pacifista, pero concurrió al campo de batalla como director de los hospitales militares de Macharetí y Charagua, donde escribió sobre aspectos sanitarios, geográficos, crónicas, vialidad, política, expuesta en La tesis Andinista, Bolivia y el Paraguay (1933), La tragedia del Chaco (1933), y El ideal pacifista: líneas adicionales al libro La tragedia del Chaco (1933). Durante ese conflicto, dirigió la Comisión Revisora de Documentos sobre el Chaco (creada por el

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Ministerio de Relaciones Exteriores) en el Archivo Nacional de Bolivia* (1933-1935), a la que incorporó a su hijo G. Mendoza*, que ya tenía experiencia como dactilógrafo y ayudante de los trabajos históricos y geopolíticos de su padre. Advirtiéndose que el Archivo Nacional estaba desorganizado, en abril de 1933, el ministro de Instrucción Rodas Eguino invitó a J. Mendoza a hacerse cargo de su dirección, que declinó por razones de salud. Producto de sus funciones públicas y actividades privadas, reunió un importante archivo conformado por escritos inéditos y publicados, correspondencia, documentos del Senado, además de documentación personal, que fue recopilado, organizado y catalogado por G. Mendoza, en su monumental obra Bio-Bibliografía de Jaime Mendoza, obra que contiene: I. Catálogo general cronológico. Escritos de JM (1890-1939/1993) y publicados sobre JM (1903-1993); II. Sección Archivo Jaime Mendoza, que contiene los originales de sus escritos y de los que se publicaron sobre JM (1893-1993). Es autor de La Universidad de Charcas y la idea revolucionaria (1924), Ayacucho y el Alto Perú (1924), Figuras del pasado. Gregorio Pacheco, Rasgos Biográficos (1924), La creación de una nacionalidad (1925), El factor geográfico de la nacionalidad boliviana (1925), El Mar del Sur (1926), La Ruta Atlántica (1927), El Macizo Boliviano (1935), éstas “constituyen la exposición sistemática y completa de la doctrina de la ‘reintegración territorial’ preconizada por Mendoza para su patria”. Sus novelas son Los Malos pensamientos (1916), Memorias de un estudiante (1918), El desertor (1926), Los héroes anónimos (1928), El lago enigmático (1936). En poesía, destacan Poemas (1916), Oruro (1926), Voces de antaño (1938). Fuente: Mendoza, 1933; Mendoza, 2005, V: 499-507; Oporto, 2007a; La República, 1933.

MENDOZA LOZA, GUNNAR

(Uncía, Provincia Bustillo, Potosí, 3 de septiembre de 1914. † Sucre, 5 de marzo de 1994) Fue el último polígrafo boliviano del siglo XX. Ejemplo de trabajo metódico, sostenido y perseverante, con vocación de servicio en el cumplimiento del deber. Archivista, historiador, bibliógrafo. Afectado por la “célula primordial del oficio”, a temprana edad fue ayudante de los trabajos historiográficos-geopolíticos de su padre, el ilustre médico y escritor Jaime Mendoza*, uno de sus maestros-modelos, quien estimuló la naciente vocación historiográfica de su hijo. Realizó sus estudios elementales bajo la supervisión de sus progenitores (1920-1925), época en la que vivía en la ciudad minera de Uncía (Norte de Potosí). De allí pasó a Sucre donde concluyó los estudios en el Colegio Sagrado Corazón (1926-1931), obteniendo certificados de “Testimonio de Honor por su Buena Conducta y Aplicación” y el Primer premio en certámenes y asignaturas. Sus estudios superiores los realizó en la Facultad de Derecho de la Universidad Mayor de San Francisco Xavier de Chuquisaca (1932-1936), no obstante, desistió graduarse como abogado, pues se volcó a la Historia y a los Archivos. Fue becario de la Fundación Rockefeller de especialización en archivología y bibliografía en el Instituto de Archivos de The American University y el Archivo Nacional Estados Unidos, en Washington, D.C. (1958-1959). En tal calidad visitó varios países de América Latina; visitó Potosí y elaboró el plan para la organización del Archivo Histórico de Potosí* de la Casa de la Moneda (1958).

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Mientras realiza sus estudios de Derecho, muy joven tuvo su primer empleo como miembro de la Comisión Revisora de Documentos sobre el Chaco del Ministerio de Relaciones Exteriores en el Archivo Nacional de Bolivia (1933-1936). Es su primer contacto con el ANB con la compulsa, desciframiento y copia de documentos coloniales y republicanos. Fue incorporado en dicha Comisión por su padre Jaime Mendoza, que estuvo a su cargo en una primera fase. Durante la conflagración con el Paraguay en la Guerra del Chaco (1932-1935), también sirvió como reservista auxiliar en calidad de secretario en el Hospital Militar de Charagua (1934), del que Jaime Mendoza era director. Fue Director de la Revista de la Universidad de San Francisco Xavier (1938-1971); Redactor, editor y director del periódico El País de Sucre (19371938), de propiedad de su fundador, José Prudencio Bustillo. Tuvo descollante trayectoria en la Historia y la Archivística, habiendo alcanzado el alto cargo de Director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, ocupando dichas funciones durante medio siglo (1944-1994). A nivel internacional fue Consultor sobre Bibliografía Boliviana en la Biblioteca del Congreso de los EE.UU. (1958), sitial reservado a destacados intelectuales latinoamericanos. Fue designado Director del Programa para la Producción de la Guía a los Documentos Inéditos sobre América Latina en los Estados Unidos de Norteamérica en el Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Texas (1963-1967); Profesor Visitante de Archivología y Archivología Latinoamericana de la Escuela de Bibliotecarios de la Universidad de Texas (1965-1967); Consultor de Bibliografía Boliviana en el Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Texas (1965-1967); Consultor de la UNESCO en El Salvador sobre la “Situación y planificación del Servicio de Documentos Públicos”, a cuya conclusión del mismo presentó un diagnóstico (Obras Completas, Vol. III, T. 4: 6), por el que el Archivo General de esa Nación le extendió el Diploma al Mérito “Por sus eficientes servicios en el planeamiento de la organización de este Archivo y de los Archivos Públicos del Estado” (San Salvador, 23 de febrero de 1973). Presidente de la Comisión Permanente de Accesibilidad, Principios y Técnicas de la Asociación Latinoamericana de Archivos. En Bolivia intercaló permanentemente sus dos facetas, la de archivista e historiador. Su faceta archivística se caracterizó por una lucha diaria contra el tiempo para catalogar los fondos coloniales y republicanos que forman el Archivo Nacional de Bolivia, a la par de los esfuerzos titánicos para evitar la destrucción incontrolada de la memoria administrativa e histórica. Gestionó el decreto supremo para la declaratoria de importancia nacional del Programa de Descripción Archivística y de la elaboración de Guías Descriptivas, con lo que legalizaba una acción eminentemente técnica; fue Director Técnico del Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de Bolivia* (1976-1982); organizador de las Reuniones Nacionales de Consulta sobre Archivos Bolivianos* (1979, 1982, 1983, 1985), cuyos Documentos de Trabajo elaborados por Mendoza orientaban el Temario, además en calidad de expositor. Asumió la dirección de la Comisión Redactora de la Sección de Chuquisaca de la Monografía de Bolivia para la conmemoración del Sesquicentenario de la Independencia (1975) y fue Coordinador del Proyecto de Declaratoria de Sucre como Ciudad Patrimonio de la Humanidad (1990). Como historiógrafo, destacan sus estudios sobre la historia social, principalmente, con la edición, como publicista

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documental, de fuentes documentales, entre ellas el Diario de un comandante de la independencia Americana,1814-1825, de José Santos Vargas* (1952, 1982); la Relación general de la Villa Imperial de Potosí: Un capítulo inédito en la historia del Nuevo Mundo de Luis Capoche, en coedición con Lewis Hanke* (1959); la Causa criminal contra Francisco Ríos, El Quitacapas,1809-1811 (1963); la Historia de la Villa Imperial de Potosí de Bartolomé Arzáns de Orsúa y Vela* en coedición con Lewis Hanke (1965); el Álbum de paisajes, tipos humanos y costumbres de Bolivia, 1841-1869 de Melchor María Mercado (1991); Sucre y la organización de la República de Bolivia en 1825 (1998. Según su correspondencia oficial inédita que se conserva en el Archivo Nacional de Bolivia). Gabriel René-Moreno (Cf. Gabriel René-Moreno, bibliógrafo boliviano. Sucre: USFX, 1954), Jaime Mendoza (entre otros trabajos dedicados a su padre destaca la monumental “Bio-bibliografía de Jaime Mendoza”), José Santos Vargas y Bartolomé Arzáns de Orsúa y Vela, son personajes con quienes se identificó plenamente, fueron sus maestros-modelo. Su preocupación y atención constantes sobre la situación de los Archivos y Documentos de Bolivia, se orientan a la preservación y conservación, utilizando magistralmente las normas jurídico administrativas, con proyectos originales elaborados por Mendoza, promulgadas por distintos gobiernos (Decretos Supremos 05758, 13956, 13957, 22144, 22145, 22146, 22199, 22396), formando una sólida legislación archivística. Asimismo proyectó normas sobre bibliotecas (Depósito Legal: 1834, 4650). Gracias a su labor paciente y metódica, logró la atención de distintos regímenes, entre ellos el del V. Paz*, que aprobó decretos fundamentales para la elaboración de guías descriptivas y sobre todo en su titánica lucha para lograr recuperar el sitial de Archivo Nacional, con el DS 05758 (7 de abril de 1961), que ordena la transferencia de los documentos con antigüedad superior a los 35 años, producidos por las entidades estatales de carácter nacional. El dictador H. Bánzer* también apoyó su iniciativa con la promulgación de dos decretos supremos del 10 de septiembre de 1976, declarando de utilidad nacional el Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de Bolivia (DS 13956), y la prohibición absoluta de la destrucción, por cualquier medio, de las documentaciones públicas inactivas (DS 13957). En su cuarto gobierno, V. Paz, actualizó el alcance de los decretos Bánzer, emitiendo tres emblemáticos decretos, de 2 de marzo de 1989: 22144 (“Se declara de máxima utilidad y necesidad nacionales todas las documentaciones públicas”), 22145 (“Se declara de utilidad y necesidad nacionales las documentaciones inactivas”) y 22146 (“Se encarga al Banco Central de Bolivia el establecimiento de un repositorio especial donde se preserve y evalúe la destinación final de las documentaciones inactivas de las administraciones central y descentralizadas”), es decir la creación del Repositorio Intermedio Nacional, en cuya concepción dependía de forma integral del ABNB. Además del DS 22199, 24 de mayo de 1989, disponiendo de un edificio propio, funcional y exclusivo para el ABNB. El gobierno de J. Paz*, por su parte, amplió el alcance de los decretos Mendocianos, a la declaratoria de necesidad y utilidad nacional a las documentaciones privadas (DS 22396, 16 de diciembre de 1989). Los decretos Mendocianos constituyen una sólida base de la archivística boliviana, pues mediante ellos se apropia de la teoría archivística moderna para su adaptación magistral a la praxis archivística boliviana, constituyendo un enfoque modélico para la gestión documental y la organización archivística.

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Curiosamente, en La Paz, se erigió un frente archivístico antagónico que copió in extenso el espíritu del DS 05758, para dar lugar a la creación de un Archivo Intermedio Nacional bajo dependencia del rectorado de la Universidad Mayor de San Andrés, hecho que provocó un notable distanciamiento entre ambas capitales archivísticas, rivalidad que intentó dar por concluida con el lanzamiento del Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de la República de Bolivia. Elaborados por G. Mendoza, o bajo su dirección y supervisión, las Guías y Catálogos inéditos y publicados, constituyen eficientes instrumentos descriptivos documentales y bibliográficos, de los fondos y colecciones del ABNB y de materiales sobre Bolivia existentes en Archivos y Bibliotecas del exterior del país, que son derroteros en la búsqueda, localización y control de las fuentes, permitiendo accesibilizar la información para la consulta e investigación. Sus ensayos, comentarios, crítica, estudios y artículos -inéditos y publicados en periódicos, revistas y boletines, cuyo pensamiento se refleja en teoría y metodologíase refieren a la Archivística y la Historiografía. También escribió notas preliminares y prólogos a obras de otros autores sobre archivística, arte, historia, literatura, etnografía, sociología y para la publicación y difusión de documentos o fuentes particularmente del ABNB en periódicos y revistas (Vol. I, T. 2). Asimismo G. Mendoza fue centro de varias entrevistas y reportajes (periódico, radio y televisión) y respondió a cuestionarios (inéditos y publicados) referidos al ABNB, sobre archivística e historiografía, o a su obra. Las conferencias o disertaciones, discursos o palabras y charlas, como exposiciones orales en relación a su trabajo intelectual, fueron ampliamente presentadas por G. Mendoza, sobre archivística, historiografía, bibliotecología, arte y cultura, así como en ocasión de las distinciones y homenajes, congresos y reuniones, presentaciones de libros, actos oficiales del ABNB y otros. Impulsó y asistió a varios congresos, conferencias, coloquios, reuniones, seminarios, etc., particularmente sobre archivística y fuentes documentales, asimismo sobre bibliotecas, con ponencias o documentos de trabajo que orientaban el temario, habiéndose identificado 24, con su asistencia y/o envío de ponencia (14 nacionales y 10 internacionales). Por otra parte también impartió clases como instructor. Destaca su asistencia, con G. Ovando Sanz* y M. Chacón Torres*, a la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos* en Washington, D.C. (octubre 9-27 de 1961), donde se diseñaron las acciones institucionales para el desarrollo de la archivística latinoamericana, teniendo una importante participación, pues fue co-organizador de la Reunión junto a T.R. Schellenberg, quien, sorprendentemente visitó Potosí para ese efecto, en 1960. Mendoza presentó dos ponencias en los respectivos grupos de trabajo: “Estado actual de la archivística latinoamericana” (publicado como Situación actual de los Archivos Latinoamericanos. Manual de Información Básica. Archivo Nacional de los Estados Unidos-Reunión Interamericana sobre Archivos, Washington, D.C, 1961) y “El problema de la ordenación de documentos en América Latina” (Problemas de la ordenación y la descripción archivísticas en América Latina. Washington D.C.: Reunión Interamericana sobre Archivos, 1961; Problemas de ordenación archivística. Sucre: Universidad de San Francisco Xavier-Archivo Nacional de Bolivia, 1967). Fue determinante su participación “por su concurso eficaz en los trabajos preparatorios y el desarrollo de la Reunión” (Resolución Nº 23. Voto de simpatía y reconocimiento).

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En su condición de Director del ABNB asiste al Congreso Extraordinario del Concejo Internacional de Archivos* (Washington, D.C., mayo 9-13, 1966) con el trabajo “La publicación de documentos históricos en América Latina” (Archivum. Revue Internationale des Archives, vol. XVI, Conseil International des Archives, París, 1966). Entre las reuniones sobre bibliotecas, se cuenta la Primera Reunión Nacional de Trabajo sobre el acervo bibliográfico y bibliografía nacional del Sistema y Fondo Nacional de Información para el Desarrollo (SYFNID) (La Paz, 23 y 24 de mayo de 1978) con su relato: “Situación del Depósito Legal de publicaciones nacionales en Bolivia y medios para mejorarla [1969-1976]”, que incluye un proyecto de Decreto Supremo. Por su inagotable labor y producción intelectual, así como ejemplar maestro y meritorio servidor público en la preservación de los Recursos Documentales y del Patrimonio Documental, la investigación y la cultura, fue admitido por destacadas instituciones y organizaciones académicas y culturales del país y del extranjero: Academia Boliviana de la Historia (aunque ingresó tardíamente en 1988, no obstante fue invitado en 1944), Academia Nacional de Ciencias de Bolivia (miembro fundador en 1960, vocal de Historia), Academia Nacional de la Historia-Argentina (1989), Academia Nacional de la Historia-Venezuela (1991), Asociación Argentina de Estudios Históricos, Asociación de Archivistas de los EE.UU., Asociación de Bibliotecarios de Chuquisaca (fundador y Presidente, 1960), Asociación Latinoamericana de Archivos, Ateneo de Bellas Artes (Sucre, 1953), Club de la Unión (Sucre, 1956), Comité de Archivos de la Comisión de Historia del Instituto Panamericano de Geografía e Historia* (1973), Consejo Internacional de Archivos* (París), Instituto de Estudios Latinoamericanos-Universidad de Texas (Austin), Instituto de Investigaciones Artísticas-Facultad de Arquitectura UMSA, Instituto de Investigaciones HistóricasUniversidad Tomás Frías de Potosí (1956), Instituto Paraguayo de Investigaciones Históricas, Rotary Club (Sucre), Sociedad Bolivariana (Sucre), Sociedad Boliviana de Bibliografía (1968), Sociedad Boliviana de Historia (socio fundador, 1972), Sociedad Boliviana de Historia de la Medicina (1987), Sociedad Geográfica “Sucre”, Sociedad Geográfica y de Historia “Potosí” (1992). De igual manera, ha sido merecedor de varias distinciones y homenajes -sin importarle ser recompensado, tomándolo mas bien como estímulo para continuar en la ardua labor que él se imponía (autoexigencia)- a los cuales respondía con un trabajo intelectual o discurso: Premio Nacional de Literatura-Ministerio de Educación y Bellas Artes (1956), Premio anual Vocación de Cultura-Sindicato de Trabajadores de la Prensa de Chuquisaca y el Semanario El Noticiero (1978), Condecoración Nacional de la “Gran Orden Boliviana de la Educación”-Ministerio de Educación y Cultura (1979), Premio a la Cultura de la Fundación Manuel Vicente Ballivián (1979), Condecoración española de “Gran Maestre de la Orden del Mérito Civil” (1985), Placa de Homenaje de la Asociación de Residentes Chuquisaqueños de La Paz (1986), Condecoración Municipal “Gran Churuquella” Alcaldía de Sucre (1987), Placa de Homenaje de la Asociación Nacional de Expositores del Libro-La Paz (1988), Premio Nacional de Cultura-Ministerio de Educación y Cultura (1988), Condecoración de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (1990). El reconocimiento académico a sus importantes aportes a la memoria histórica del país se expresa en la otorgación del título de Doctor Honoris Causa por las Universidades

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de San Simón de Cochabamba (1984), San Andrés de La Paz (1985) y la Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca (1986). Extrañamente, el reconocimiento de la Universidad Tomás Frías de Potosí, a pesar de haber sido sancionado (1988), nunca le fue otorgado. Especial mención tiene la publicación del trabajo-homenaje Estudios Bolivianos en Homenaje a Gunnar Mendoza L. (La Paz, 1978), por un grupo de investigadores dirigido por R. Arze*, que el maestro retribuyó con el trabajo “Los cien años del periodismo impreso en Bolivia, 1823-1922” (Presencia Literaria. La Paz, 2 de septiembre de 1979). Uno de los reconocimientos que recogió con mayor placer es la designación de “Maestro e Impulsor de la Archivística Boliviana”, expresado por el cuerpo de Archiveros de la Nación en la II Reunión de Consulta de Archivos Bolivianos (Cochabamba, julio de 1982). Asimismo fue objeto de otras distinciones y reconocimientos: La H. Alcaldía Municipal de Potosí, en ocasión de la Reunión de la Sociedad Boliviana de Historia, mediante Ordenanza Municipal Nº 59/73 de 20 de noviembre de 1973, declara a Gunnar Mendoza y Joaquín Gantier* “Hijos distinguidos de Potosí”; la Academia Nacional de Ciencias de Bolivia en el “Año de las Bodas de Plata”, le confiere un Diploma “en testimonio a sus 45 años de labor científica” (La Paz, septiembre 26, 1985); la Asociación Boliviana Pro-Arte le confiere un Diploma de “Mención al Mérito Intelectual en reconocimiento a su labor cultural en beneficio del país” (La Paz, julio 7, 1986); el I Congreso Internacional de Etnohistoria (Buenos Aires, julio 17-21, 1989) rindió un homenaje a Gunnar Mendoza y Jhon V. Murra, “en reconocimiento a su actividad científica en favor del desarrollo de la disciplina”; la Academia Nacional de Ciencias de Bolivia, mediante Resolución Interna Nº 275/92 expresa su homenaje y gratitud “a la tarea de los Académicos que han contribuido en más de un cuarto de siglo, al desarrollo científico de Bolivia y al prestigio de la Nación” al otorgarle la “Medalla de Oro y Diploma de Honor” como Académico fundador (La Paz, marzo 16, 1992); y el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas*, con los auspicios de la Vicepresidencia de la República-Presidencia del H. Congreso Nacional, le confieren Diploma de Reconocimiento “por sus valiosos servicios a la Nación, conservando, accesibilizando y difundiendo la memoria colectiva del pueblo boliviano” (La Paz, noviembre 25, 1993). De forma póstuma el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia lo declaró “Director Perpetuo del ABNB”, en abril de 1994. Al fallecimiento de Gunnar Mendoza, hecho que ha causado profundo pesar en la colectividad intelectual y social, se ha realizado una serie de homenajes desde los discursos durante las Honras Fúnebres (velatorio y sepelio), las expresiones de pesar por parte de instituciones y/o autoridades nacionales, locales, oficiales y/o públicas y privadas; amigos y familiares; hasta los homenajes póstumos (marzo 7, 1994-abril 30, 1997) realizados en Sucre, La Paz, Potosí, Cochabamba, Santa Cruz. A su muerte le sucedió en la dirección del ABNB, el historiador de origen catalán, J. M Barnadas*, y sucesivamente R. Arze*, H. Poppe*, y M. Inch* y desde noviembre de 2011, A. M. Lema*. En ocasión del décimo aniversario de su fallecimiento, la familia de G. Mendoza entregó al ABNB su Biblioteca y Archivo, catalogado por el curador oficial, G. Molina E.*, cuyo trabajo sirvió de base para la compilación de su vasta y documentada Obra completa en las dos vertientes que cultivó con pasión y vocación: la obra historiográfica y la archivística, principalmente. Sus escritos ineditos y dispersos en diversas publicaciones, fue compilada y publicada por el ABNB en 8 volúmenes

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bajo el título de Gunnar Mendoza Loza: Obras completas. No deja de llamar la atención la decisión de la dirección del ABNB de invitar al historiador norteamericano William Lofstrom para compilar la obra historiográfica de G. Mendoza (Vol. I y Vol. II), siendo que existen en el país meritorios profesionales bolivianos, y más que ese detalle, discípulos que han trabajado estrechamente vinculados al Maestro y por ello conocedores de la naturaleza de su obra. Es así que a excepción de la vertiente archivística (Vol. III y Vol. IV), trabajada por M. Inch, y una sección, llamémosla Miscelánea (Vol. V, a cargo de Ignacio Mendoza; Vol. VI, Javier Mendoza), tanto la obra historiográfica como la valoración global de la obra completa (esta vez por la vía del prólogo), fueron encargados a extranjeros, lo que no pone en discusión el cariño y la simpatía manifiestos, que tienen estos hacia Bolivia y hacia G. Mendoza. El Vol. VII corresponde a los Índices onomástico, toponímico y temático, y el Vol. VIII al “Catálogo Archivo Gunnar Mendoza L.”, este abarca su producción intelectual de 1926 a 1994 y la documentación relacionada con ella (originales mecanografiados; correspondencia; tarjetas; invitaciones, noticias de prensa; libros y folletos; artículos en revistas y boletines; 14 ficheros; fotografías; casetes, videocasetes). Finalmente, entre los varios homenajes póstumos tributados a Gunnar Mendoza, se destaca el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza*” (Sucre, 18-21 de octubre de 1995); la Empresa de Correos de Bolivia emitió el “Sello Postal conmemorativo del Académico Dr. Gunnar Mendoza Loza” en su serie “Científico Boliviano” (2002); el Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia* en la distinción a miembros honorarios y personalidades del ámbito de la Bibliotecología y Archivística le confirió el “Certificado de Homenaje Póstumo”, “en reconocimiento a su valioso aporte a las Ciencias de la Información y al desarrollo de la Bibliotecología en Bolivia” (La Paz, 16 de mayo de 2003); el ABNB y la Fundación Cultural “La Plata”, organizaron el “Homenaje a Gunnar Mendoza L. en el décimo aniversario de su fallecimiento” (Sucre, 5-12 de marzo de 2004): Ofrendas florales en el Cementerio General (viernes 5), Misa en la Catedral Metropolitana celebrada por el Arzobispo de La Plata (sábado 6), Coloquio sobre La vida y obra de Don Gunnar Mendoza Loza (jueves 11), Entrega al ABNB, por la Sucesión Mendoza, del archivo y biblioteca de Gunnar Mendoza e inauguración de la Sala “Gunnar Mendoza Loza” en el nuevo edificio del ABNB (viernes 12); el XII Festival Internacional de la Cultura Sucre 2005 fue denominado “Homenaje a Gunnar Mendoza Loza”, organizado por la Fundación Sucre Capital Cultural, con los auspicios del Viceministerio de Cultura, la Prefectura de Chuquisaca y del Gobierno Municipal de Sucre. La Asamblea Docente-Estudiantil (5 de junio de 2007) de la Carrera de Historia (Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca), fundada el 29 de noviembre de 2006 por Resolución 087/2006 del H. Consejo Universitario, por votación mayoritaria aprobó “el 3 de septiembre como fecha central de festejos, en conmemoración a Gunnar Mendoza, nacido en la fecha mencionada en Uncía-Potosí”. Con motivo de la semana de la Carrera de Historia en conmemoración al primer año de vida académica, y “tomando como fecha central el 3 de septiembre, natalicio de Gunnar Mendoza Loza”, se hizo reconocimiento de homenaje “a la amplia obra de Gunnar Mendoza Loza, archivista, historiador, impulsor y artífice del pensamiento boliviano”, que fue expresada con la

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publicación: Homenaje de la Carrera de Historia a: Gunnar Mendoza Loza. En la Imposición de la Semana de la Carrera de Historia (Sucre: Proyecto “Sucre Ciudad Universitaria”, Departamento de Cultura-USFX, 2007). En Sucre el 17 de febrero de 2009 se llevó a cabo el acto público de inauguración y nominación de la Biblioteca Pública “Gunnar Mendoza Loza”, al antiguo edificio del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia ubicado en calle España Nº 43, donde pasó 50 años al mando del ABNB.

OBRAS COMPLETAS DE GUNNAR MENDOZA LOZA*1 VOLUMEN I Prólogo Ensayo biográfico de Gunnar Mendoza por William L. Lofstrom M. Tomo 1: Obras Historiográficas

1. Año en que fue fundada la Villa de La Plata.



3. La Universidad de San Francisco Xavier en el Coloniaje, 1624-1824.





2. Guerra civil entre Vascongados y otras naciones de Potosí. Documentos del Archivo Nacional de Bolivia (1622-1641). 4. Monografía de Chuquisaca: Historia Colonial, Historia de la Independencia, Cultura. 5. Informe sobre la fecha de nacimiento de Gabriel René-Moreno. 6. De Asiento minero a Villa Imperial: Potosí, 1545-1825.

Tomo 2: Notas Preliminares y Transcripciones de Fuentes Archivísticas



1. Posición geográfica de los indios Urus del lago Poopó: Un documento colonial. 2. Documentos coloniales relativos a la Universidad de San Francisco Xavier en el Archivo Nacional de Bolivia. 3. Causa criminal contra Francisco Ríos “El Quitacapas” años 1809-1811. 4. Un documento inédito sobre la Audiencia de Charcas y el 25 de Mayo de 1809. 5. Documentos de protesta social en Chuquisaca antes del 25 de Mayo: Pasquines coloniales en la Biblioteca Nacional de Bolivia. 6. Documentos para la historia de la Independencia de Bolivia: Judas Tadeo Andrade, interprete del estado de ánimo popular en las postrimerías del coloniaje, 1789-1800. 7. Primer mensaje de Gobierno Republicano en Bolivia: 10 de julio de 1825. 8. La espada de Ayacucho en la Casa de la Libertad de Bolivia: Composición documental. 9. Una figura femenina del 25 de Mayo de 1809. Cartas inéditas de doña María Antonia Río de Ussoz. 10. Sobre el paradero de las respuestas al “Interrogatorio para todas las ciudades, villas y lugares de españoles, y de pueblos de las Indias Occidentales, Islas y Tierra Firme: al cual se ha de satisfacer, conforme a las preguntas siguientes, habiéndolas averiguado en cada pueblo con puntualidad y cuidado”, para Indias circulado por Cédula Real de 1605.II.20. 11. Documentación básica existente en el Archivo Nacional de Bolivia sobre la fundación y evolución de la Facultad de Derecho de la Universidad de San Francisco Xavier, 1681-1825. 12. Bolívar en Chuquisaca: Una aproximación documental. *1 Para propósitos del Diccionario, sólo se desarrolla el contenido de lo Vols. I, II, III y IV; los Vols. V y VI, de manera general con los respectivos Tomos.

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13. Documentos inéditos sobre el 25 de Mayo en Chuquisaca. Comunicación del brigadier Juan Manuel de Goyeneche comandante en Jefe del Ejército Realista del Alto Perú, al Mariscal Vicente Nieto, Presidente de la Audiencia de Charcas.

14. Proclama del Mariscal Vicente Nieto, Presidente de la Audiencia de Charcas, a los habitantes de la ciudad de La Plata (hoy Sucre) asegurándoles que sólo busca restablecer la justicia y la paz y precaver mayores daños de los que ya ha causado “El día fatal del 25 de Mayo de 1809”. 15. A un siglo y medio del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Bolivia y la Santa Sede. 16. Material básico para la publicación del expediente tramitado en la presidencia de La Plata sobre la fuga del Dr. Bernardo Monteagudo que se encontraba preso en la cartel de corte acusado de complicidad en los sucesos del 25 de Mayo de 1809 en Chuquisaca.

17. El Himno a Chuquisaca. Letra y música según sus originales auténticos en el Archivo Nacional de Bolivia.

VOLUMEN II Tomo 1: Estudios de Códices (Manuscritos inéditos) 1. Una crónica desconocida de la guerra de independencia altoperuana el Diario del Tambor Mayor Vargas. 2. Descripción de las provincias de la Audiencia de Charcas: 1780-1781 por Francisco de Paula Sanz. 3. El doctor don Pedro Vicente Cañete y su Historia física y política de Potosí 4. Relación general de la Villa Imperial de Potosí: Un capitulo inédito en la historia del Nuevo Mundo por Luis Capoche. 5. Historia de la Villa Imperial de Potosí por Bartolomé Arzáns de Orsúa y Vela. 6. Terminología y tecnología minera en el área andina de Charcas: García de Llanos, un precursor, 1598-1611. 7. Vocación de arte y drama histórico nacional en Bolivia: El pintor Melchor María Mercado (1816-1871): Un precursor.

VOLUMEN III Tomo 1: Archivística

1. Prólogo a La importancia de los archivos por T. R. Schellenberg. 2. Introducción a los Principios archivísticos de ordenación por T. R. Schellenberg. 3. Problemas de ordenación archivística. 4. Archival underdevelopment in Latin America. 5. Proyecto preliminar para la compilación de una Guía a las fuentes manuscritas en repositorios de América Latina. 6. Una información cuantitativa y cualitativamente idónea, punto de partida imprescindible para la planificación y el desarrollo de los Servicios de Archivos y Documentos Públicos de América Latina. 7. Proyecto para la producción de guías sumarias a los archivos nacionales y otros repositorios de documentación permanente de América Latina. 8. Metodología básica para el cálculo de la destrucción de documentaciones en los archivos coloniales de Bolivia.

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9. Procedimiento para la ordenación e indización de una colección de cartas personales de varios remitentes a un mismo destinatario.

10. Para una Declaración de Principios del Archivista Boliviano. 11. Proyecto Franciscano. Instrucciones básicas.

12. Algo más sobre la inaudita destrucción de recursos documentales en Bolivia.

13. Producción, destrucción y aprovechamiento de recursos documentales en Sucre, 15401988: Un minigrama. 14. Proyecto para la producción de guías sumarias (siglos XVI, XVII y XVIII) 1) a los recursos documentales sobre Charcas en el Archivo General de la Nación Argentina, y 2) a los recursos documentales sobre el Río de la Plata en el Archivo Nacional de Bolivia. Tomo 2: Estudios y acciones para el aprovechamiento de recursos documentales inéditos

1. Advertencias a la Guía Preliminar a los Registros de Escrituras Públicas de la ciudad de La Plata (hoy Sucre) 1549-1825. 2. Advertencias al Cedulario Real de la Audiencia de Charcas.

3. Bolivian Collections of the Library of Congress and suggestion for their development.

4. Respuesta a la encuesta relativa a “Datos para el trabajo sobre documentación relativa a grupos negros en América Latina que será publicado por la Unesco”.

5. Situación actual de las fuentes inéditas para la historia de Bolivia existentes en el territorio nacional, y medidas aconsejables para preservarlas y hacerlas accesibles para la investigación. 6. Project to microfilm material bearing on Spanish Viceregal Rule in México and Peru up to 1700: Memorandum para el Dr. Lewis Hanke. 7. Cuestionario sobre libros parroquiales de bautizos, matrimonios y entierros en el Arzobispado de Sucre.

8. Exposición conmemorativa del 350 aniversario de la Universidad de San Francisco Xavier: Manuscritos e impresos relativos a los antecedentes, fundación y evolución de esta Casa de Estudios, 1580-1974. 9. Exposición conmemorativa en el Sesquicentenario de la República de Bolivia: Manuscritos en el Archivo Nacional de Bolivia y la Biblioteca Nacional de Bolivia.

10. Proyecto preliminar para el intercambio de reproducciones de materiales de investigación histórica entre Bolivia y Argentina.

11. Guía de fuentes virreinales en Hispanoamérica: Guía de fuentes inéditas en el Archivo Nacional de Bolivia para el estudio de la administración virreinal en el distrito de la Audiencia de Charcas, años 1537-1700. 12. Nota explicativa a la “Documentación sobre rebeliones indígenas, 1780-1783” en el Archivo Nacional de Bolivia.

13. Recursos documentales inéditos en el Archivo Nacional de Bolivia para la historia social de la minería en el área andina del distrito de la Audiencia de Charcas, 1548-1826. 14. Recursos documentales en el Archivo Nacional y la Biblioteca Nacional de Bolivia para la historia de la medicina en Bolivia. 15. Guía básica para la selección de recursos documentales judiciales que deben venir al Archivo Nacional de Bolivia (en orden alfabético de títulos).

16. Una mini-ojeada en el Archivo Nacional de Bolivia y la Biblioteca Nacional de Bolivia a los recursos documentales sobre el origen del periodismo boliviano desde el siglo XVI.

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17. Guía de fuentes franciscanas en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia.

18. Origen de la empresa privada en Bolivia (minería, comercio, agroindustria): una microaproximación, 1549-1611. Tomo 3: Legislación archivística

1. El drama crónico y silencioso de las documentaciones inactivas.



3. Informe sobre las disposiciones relativas a archivos y bibliotecas en el proyecto de Ley sobre Patrimonio Cultural de la Nación.





2. Sobre la inaudita destrucción y la impostergable defensa legal de los recursos documentales en Bolivia.

4. Proyecto (versiones a y b) de disposiciones legales para el capítulo archivos, más anexos con destino al proyecto de Ley del Patrimonio Nacional a considerarse en el Seminario de Santa Cruz.

Tomo 4: Consultorías

1. “Para realizar estudios viajará al exterior el escritor Gunnar Mendoza”.



3. El Archivo Histórico de Potosí (Casa de Moneda).



2. Archivo de Potosí: Guía preliminar de la documentación del Coloniaje 1551-1825. 4. “El reportaje de la semana”.

5. Situación actual de los Archivos Latinoamericanos: Manual de información básica.

6. Estudio sobre la situación y planificación del Servicio de Documentos Públicos en la República de El Salvador.

Tomo 5: Reuniones de Archivos

1. Fuentes para la historia económica de Bolivia: Enseñanza de la historia económica de Bolivia. Reunión de la Sociedad Boliviana de Historia.

2. Segunda Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Documento de Trabajo. Palabras en el acto inaugural. Proyecto de disposiciones legales para detener la destrucción incontrolada de los recursos documentales de la nación en las entidades públicas y privadas.

3. Tercera Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Documento de trabajo. Accesibilización de recursos documentales en los archivos para estudios de ciencias sociales.

4. Tercera Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Experiencia del Archivo Nacional de Bolivia en la accesibilización de recursos documentales para estudios de ciencias sociales. 5. Cuarta Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Se estudiará la preservación y accesibilización de los recursos documentales no estatales de Bolivia.

6. Quinta Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Esquema básico de documento de trabajo. Situación actual de los recursos documentales gráficos en Bolivia. Tomo 6: Artículos, cuestionarios y entrevistas relativos al ABNB

1. La Biblioteca y el Archivo Nacionales de Bolivia: Entrevista con su Director. 2. La Biblioteca y el Archivo Nacionales. 3. Reportaje gráfico a la Biblioteca Nacional de Bolivia y al Archivo Nacional de Bolivia. 4. 1975: Sesquicentenario de la Biblioteca y Archivo Nacional.

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5. Respuestas al cuestionario sobre el estado de los archivos nacionales. 6. El patrimonio de la Biblioteca y el Archivo Nacionales. 7. Respuesta de Gunnar Mendoza L., director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia al cuestionario presentado por el Ing. René Aguilera Fierro, presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Tarija, para Radio “Los Andes” de esa ciudad. 8. Cuestionario presentado por la Srta. Prof. Teresa Grog Higueras sobre los puntos siguientes relativos a la Biblioteca Nacional de Bolivia. 9. Entrevista Radio Panamericana, reportera Cristina Corrales, 1986.

10. Respuesta de la Dirección del Archivo Nacional de Bolivia al cuestionario que remitió por encargo de S.E. Dr. Víctor Paz Estensoro el Dr. Aníbal Revollo Gonzales, subsecretario de la Presidencia de la República. 11. Entrevista al Dr. Gunnar Mendoza, director de la Biblioteca y Archivo Nacionales del lro. Intermedio “A” Colegio “Sagrado Corazón”.

12. Respuesta del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia al cuestionario de la Srta. Patricia Jáuregui para el semanario Prensa Libre de esta ciudad. 13. Entrevista con el Sr. Carlos Mendizábal de Ultima Hora.

14. Entrevista del Sr. Valentín Uvarov de la Agencia Tass, a Gunnar Mendoza L., director del Archivo Nacional de Bolivia y la Biblioteca Nacional de Bolivia.

15. Respuesta del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia al cuestionario del Seminario Nacional sobre Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural y Natural de Bolivia.

VOLUMEN IV Tomo 1: Discursos, palabras, relativos al ABNB

1. Discurso pronunciado por el Director de la Biblioteca y el Archivo Nacionales, Sr. Gunnar Mendoza L. en el sepelio de los restos de D. Moisés Santibáñez.

2. Discurso del Director del Archivo Nacional de Bolivia y la Biblioteca Nacional de Bolivia, Sr. Gunnar Mendoza L. en el acto de recepción del edificio adaptado para dicho plantel por la Oficina de Reconstrucción de la capital de la República, Sucre.

3. Donación al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia de una colección de micropelícula a cargo del Dr. Lewis Hanke. Instituto de Estudios Latinoamericanos, Universidad de Texas. 4. Palabras de Gunnar Mendoza L.: Homenaje a Ernst Otto Rück patrocinado por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia.

5. Discurso pronunciado por el señor Gunnar Mendoza L., Director de la Biblioteca Nacional de Bolivia, en las honras fúnebres de la señorita Rebeca Salazar Brito. 6. Video “Identidad y tejidos jalq’a”.

7. Discurso del acto de posesión del Subdirector del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, Lic. René Arze Aguirre. 8. Palabras del Director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia en la posesión del Dr. Josep M. Barnadas como subdirector del plantel.

Tomo 2: Aportes al desarrollo institucional

1. Bases para la organización de un Instituto de Investigaciones Históricas Bolivianas en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia.

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2. Memorial sobre las necesidades actuales del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, para el Instituto Boliviano de Cultura. 3. Proyecto de resolución para el establecimiento de un Centro Nacional de Restauración de materiales de archivos y bibliotecas en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia

4. Palabras pronunciadas por Gunnar Mendoza L., Director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia al recibir la condecoración de la Orden Boliviana de la Educación. 5. Anteproyecto de Resolución del Directorio del Banco Central de Bolivia para la cesión del terreno que se menciona para los efectos del nuevo edificio del Archivo y la Biblioteca Nacionales de Bolivia.

6. Memorial al Presidente y directores del Banco Central de Bolivia para que en la nueva Ley Orgánica del Banco y de conformidad a la Ley N° 781 de 1986.II.5 se consagre la continuación del sostenimiento y desarrollo de los cuatro Repositorios Nacionales a cargo del Banco Central de Bolivia.

Tomo 3: UMSA-OEA. Programa de Desarrollo del Servicio de Documentos Públicos y Archivos de Bolivia

1. Prefacio.



3. El Servicio de Documentos Públicos de Archivos de Bolivia: Recapitulación histórica.



2. Supuestos teóricos.

4. Situación actual del Servicio de Documentos Públicos y Archivos de Bolivia: Diagnóstico preliminar de auscultación. 5. La Encuesta.

6. La planificación del Servicio: Principios básicos. 7. Conclusiones.

8. Anexos.

Tomo 4: Cuestiones de Bibliotecológicas y Bibliográficas

1. La primera Biblioteca Pública de Bolivia, 1825.



3. “Toda obra impresa en el país deber ser depositada necesariamente en los fondos bibliográficos de la nación’”. Decreto Supremo 4650.





2. Biblioteca Pública de Bolivia, 1825: Fundamentos ideológicos.

4. Palabras pronunciadas por Gunnar Mendoza L., Director de la Biblioteca Nacional de Bolivia y del Archivo Nacional de Bolivia, en su calidad de Presidente de la Asociación de Bibliotecarios de Chuquisaca en la inauguración oficial de esta el 17 de marzo de 1960.



5. Castalia Barbará, la divina providencia y las bibliotecas de Bolivia.



7. Joyas impresas y manuscritos en la Biblioteca Nacional y Archivo Nacional.



6. Asociación de Bibliotecarios de Chuquisaca: Declaración de principios. 8. Plan básico para el establecimiento de una Biblioteca Popular en Sucre.

9. Cuestiones de bibliotecología básica para entrenamiento inicial del personal de la Biblioteca Nacional de Bolivia.

10. Palabras del Sr. Gunnar Mendoza L., Director de la Biblioteca Nacional de Bolivia, en el acto de inauguración de la Biblioteca Pública Escolar N° 1.

11. Situación del Depósito Legal de publicaciones nacionales en Bolivia y medios para mejorarla. 12. Exposición: Los cien primeros años del periodismo impreso en Bolivia, 1823-1922.

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13. Compilación de disposiciones legales de la República de Bolivia sobre bibliotecas y cuestiones afines, 1825-1982.

14. Necesidad de un estudio objetivo sobre la situación económica de los bibliotecarios de Bolivia, incluyendo como punto de partida un censo de bibliotecas y bibliotecarios.

15. Necesidad de encarar con disposiciones legislativas concretas los problemas de la profesionalización del bibliotecario en Bolivia.

VOLUMEN V Tomo 1: Discursos en Actos de distinciones a Gunnar Mendoza. Tomo 2: Crítica, Prólogos, Reseñas. Tomo 3: Ensayos. Tomo 4: Iniciativas. Tomo 5: Entrevistas, Cuestionarios. Tomo 6: Prosa. Tomo 7: Poesía. Tomo 8: Obras sobre Jaime Mendoza. Tomo 9: Escritos sobre personajes. Tomo 10: Temas Culturales y Artísticos.

VOLUMEN VI Tomo 1: Ensayos y otros. Tomo 2: Fuentes Bibliográficas para la Historia. Tomo 3: Notas Preliminares, prólogos (Adiciones). Tomo 4: Notas Preliminares a fuentes (Adiciones). Tomo 5: Reseñas y Comentarios (Adiciones).

VOLUMEN VII Índices Onomástico, Toponímico y Temático.

VOLUMEN VIII Catálogo “Archivo Gunnar Mendoza L.”: Escritos inéditos y publicados. Fuente: Arze Aguirre, 1999; Arze Aguirre y Barnadas , 1978; Mendoza, 2005-2007; Molina, 2008; Oporto, 2004.

MENDOZA MIRANDA, MILTON HUGO (La Paz, 11 de agosto de 1969)

Abogado (UMSA). Fiscal de materia del distrito de La Paz. Presidente de la Asociación de Fiscales de Bolivia. Fiscal a cargo de la investigación para la ubicación de los restos de mártires de la democracia que fueron asesinados y desaparecidos durante la dictadura del Gral. L. García Meza* (1980-1981), quien tomó el gobierno por medio de un golpe sangriento que contó con el asesoramiento de la dictadura argentina. El 2010 el Fiscal Mendoza solicitó al Juez R. Valverde* que instruyera la apertura de los archivos de la última dictadura militar. En su requerimiento fiscal al Comando en Jefe de la Fuerzas Armadas, el Dr. Mendoza ordenó la apertura de los archivos militares para investigar en ellos la existencia de los documentos reservados

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de la última dictadura. A pesar de sus esfuerzos, sus gestiones no tuvieron el éxito deseado. Posteriormente (2011) participó en las elecciones para renovar el Órgano Judicial, habiendo logrado una suplencia. Fuente: Datos personales proporcionados por el Dr. Mendoza.

MENDOZA SUÁREZ, LORNA KARINA (Trinidad, 21 de septiembre de 1971)

Estudió Secretariado Ejecutivo en el Instituto El Porvenir. Licenciada en Administración de Empresas (Universidad Técnica del Beni). Se desempeñó como Profesora Interina del Nivel Inicial (1993-2006), Administradora Departamental SEDES–BENI (2006), Consultora en la Prefectura del Beni (2006-2010), y, desde 2010, Jefe de Memoria (Archivo) Institucional del Gobierno Autónomo del Dpto. del Beni, en reemplazo de P. Vincenti*. Fuente: CV.

MENESES, LUPE

(Vallegrande, Santa Cruz de la Sierra, 15 de junio de 1954) Licenciada en Literatura (UMSA). Especialista en catalogación de bienes culturales con cursos especializados, entre ellos el XVII Curso Latinoamericano de Preservación y Revalorización del Patrimonio y la Identidad Cultural (Caracas, 1992), Catalogación e Inventario del Patrimonio Cultural (2000), Séjours Culturel en la Maison des Cultures du Monde (París, Francia), y el Seminario Taller Políticas de Promoción y Conservación del Patrimonio Cultural (Cartagena de Indias, 2007). A nivel nacional participó en cursos de Catalogación de Patrimonio Artístico (Sucre, 1986) y de Patrimonio Histórico Cultural (Potosí, 1987), Técnicas Documentales en Antropología y Materiales Especiales (La Paz, 1987), Inventariación y Catalogación de Patrimonio Artístico (La Paz, 1995), Ley del Sistema Nacional de Información (La Paz, 1997), Taller de catalogación e informatización de bienes culturales (La Paz, 1999). Publicó, Oruro, catálogo de su patrimonio (1993); Catalogación de Bienes Culturales (1998); Catastro, Evaluación y Estudio de la Pintura Mural en el Área Centro Sur Andina (1998); Catálogo de Bienes Culturales-Bolivia (2004). Fue docente de la UMSA (19891990). Como conferencista en temas de su especialidad, mereció el reconocimiento de varias instituciones, nacionales e internacionales. Trabajó como Catalogadora de Bienes Culturales del Centro Nacional de Catalogación de Patrimonio Artístico del Instituto Boliviano de Cultura (1986), fue promovida a Jefe del Centro Nacional de Catalogación (1992); Jefe a.i. de la Unidad Nacional de Patrimonio Artístico y Monumental del Viceministerio de Cultura (1999); tuvo a su cargo la catalogación de las obras del escritor costumbrista Antonio Paredes Candia (2002); fue Directora General de Patrimonio Cultural a.i. (2005, 2009); Jefe de la Unidad Nacional de Catalogación y Museos (2006); y desde 2009 es Jefe de la Unidad de Registro y Catalogación del Patrimonio Material e Inmaterial del Ministerio de Culturas. Como parte de sus responsabilidades, desde 1992 hasta el cargo actual, tiene bajo su responsabilidad el Archivo Nacional de Catalogación de Patrimonio Histórico y Artístico, el cual está físicamente contenido en una base de datos y catálogos

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impresos, conformado por registros técnicos de catalogación, con un total de 26.000 fichas a nivel nacional. Fuente: CV.

MÉRIDA COIMBRA, LUIS

(Cochabamba, 25 de mayo de 1951) Documentalista. Escritor. Poeta. Estudió Pedagogía audiovisual en el CESPAC, Lima, Perú (1982) y en el ICAIC, La Habana Cuba (1985). Desarrolla su campo de acción audiovisual desde hace treinta cinco años. Fundador del Centro de Comunicación Juan Wallparrimachi. Organizador del II Encuentro Latinoamericano de Video “Cochabamba 89”. Pionero del Video Educativo en Bolivia. En Cuba realizó la videografía para el XX Aniversario del Comandante Ernesto Che Guevara. Trabajó en el Departamento de América con el Comandante Manuel Piñeiro (Barbaroja), en el Instituto Cubano de Artes e industrias Cinematográficas y la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano. Su obra documentalista obtuvo reconocimiento internacional por Che Vive (producción cubana-boliviana), el video más reproducido en Bolivia en la década del 80. Su ficción Trilogía obtuvo el premio “Mazorca de Plata” (1990); su obra formó parte de la muestra Latinoamericana itinerante en el IV Encuentro Latinoamericano “Cosco 92”, en el Perú. Recibió la “Mazorca de Plata” por su documental Mujeres Cocaleras marchando por la vida y el premio de la OCCIC al “Mejor Reportaje” realizado en Bolivia (1993). Su docuficción: Fragmentos de la Selva fue galardonada con el premio internacional Anaconda 2005, patrocinada por el PRAIA, CAF, FIDA en los países amazónicos. Su obra poética De Huella De Oficios fue seleccionada finalista por el premio Casa de las Américas de Cuba (1985). Escribe en varios periódicos de Bolivia y América. Sus documentales Che Vive y Fragmentos de la Selva fueron seleccionados dentro de los “Los cien documentales del siglo XX” por la Cinemateca Boliviana y Dosfera Brasil-Argentina (2009). Director y guionista en la película histórica Manuelas: Heroínas de la Coronilla (2012). Trabajó como consultor del Proyecto de Catalogación y Pauteado del Archivo Videográfico “Memorial de Movimientos Sociales del siglo XX”, junto a J. Mancilla*. Fuente: CV.

MÉRIDA SUÁREZ, RENÉ (La Paz, 27 de abril de 1951)

Estudió la primaria en la Escuela “Eloy Salmón”, la secundaria en el Colegio “George Rouma” y sus estudios superiores en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Sus primeras prácticas las realizó junto a M. Cuevas* en el Centro de Documentación Antropológica del Instituto Nacional de Antropología (1980), entidad dirigida por L. Oporto*. Fue Catalogador del Instituto Superior de Administración Pública y Jefe de Procesos Técnicos del Sistema Municipal de Bibliotecas (1981-1988). Trabajó en la creación y organización del Archivo Histórico de la Honorable Cámara de Diputados, juntamente con Y. Tejerina* (1988). Desde 1998 ejerce el cargo de Responsable del Archivo Histórico del H. Congreso Nacional. Es Facilitador oficial del Programa de Asistencia Técnica*, especializado en

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Instrumentos Legislativos, programa que sostiene la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional*, en el que participó activamente en cursos de capacitación a los funcionarios de los Archivos Centrales del Senado Nacional y de la H. Cámara de Diputados, y de la misma manera para los archiveros de la Primera Asamblea Legislativa Plurinacional de Niños, Niñas y Adolescentes (2009). Como varios archivistas, participó en el Curso de Archivos Administrativos organizado por la UMSA y la OEA (1976), el Seminario de Legislación, Políticas y Estratégicas del Patrimonio Cultural de Bolivia, organizado por la Vicepresidencia de la República/ Presidencia del H. Congreso Nacional (1993). Asistió al Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* en Sucre (1995) y al Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996). Participó en el Seminario de Presentación de Proyectos para trabajo en Bibliotecas y Archivos y en el Taller de Técnicas de Archivo y Microfilmación, organizado por el CEDOIN, RELISE, y el CICON (1995), y en el Curso de Gestión Documental y Organización de Archivos Administrativos, organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso y la ONG Movida Ciudadana Anticorrupción (2006). Fue becado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España y la Agencia Española de Cooperación Internacional, al Curso de Gestión de Documentos y Archivos Administrativos, realizado en el Centro de Formación de Archivos en Santa Cruz de la Sierra (2003). Ha elaborado la indización de los Parlamentarios de Bolivia, desde 1825; organizó los Fondos de Diputados y Senadores, y otros que fueron entregados a este Repositorio (vg. Fondo Ostria Gutiérrez); es custodio de la Colección Oficial de Leyes de Bolivia, desde 1825. Publicaciones: “Publicaciones de los Poderes Ejecutivo y Legislativo” (Fuentes, 2004, 3 (16): 186); “Mensajes Presidenciales a la Nación y al Honorable Congreso Nacional”, con L. Oporto Ordóñez (Fuentes, 2005, 4 (19): 232-233); “Noticias del Poder Legislativo” (Fuentes, 2006, 2 (1): 3). Fuente: CV.

MERLOTT FLORES, LUIS HIPÓLITO (La Paz, 30 de enero de 1954)

Contador General. Fue Jefe de Almacenes y luego Jefe de Habilitación del Ministerio de Urbanismo y Vivienda, Contador General de COFER, Responsable de Activos Fijos y Almacenes del Ministerio de Hidrocarburos, donde fue designado Técnico de Archivo Central (2010). Fuente: CV.

MESA GISBERT, CARLOS D. (La Paz, 12 de agosto de 1953)

Estudió Literatura en la UMSA y cine en España. En su juventud destacó por su labor periodística, habiendo logrado alcanzar la jefatura de Noticias del canal estatal y de otros privados. Implantó un peculiar estilo de periodismo de investigación y análisis crítico de la realidad noticiosa, con lo que abrió una nueva era en la comunicación de medios televisivos, sobre todo con su serie de investigación histórica Detrás de las

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noticias y de crítica sociopolítica De cerca. Como resultado de su trabajo periodístico, junto a Mario Espinoza, ha formado un impresionante archivo de imágenes en movimiento que cubre la historia política, social y cultural de Bolivia, desde 1952, copia del cual entregó a la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional*. Es autor, entre otras obras, de Cine boliviano. Del realizador al crítico (Coautor, La Paz, Gisbert, 1979), La Aventura del cine boliviano (La Paz, Gisbert, 1985), Presidentes de Bolivia: entre urnas y fusiles (La Paz, Gisbert, 2006); Presidencia sitiada. Memorias de mi gobierno (La Paz, Fundación Comunidad/Plural, 2008); y con sus padres José Mesa y Teresa Gisbert, Historia de Bolivia (octava edición, 2012) En las elecciones de 2002 acompañó, como candidato a la Vicepresidencia de la República, la fórmula del Movimiento Nacionalista Revolucionario, liderado por la fracción de Gonzalo Sánchez de Lozada*, quien le otorgó la misión de “combatir la corrupción institucionalizada en el país”. En su condición de Vicepresidente de la República nombró a L. Oporto* como Director de la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional, a quien calificó como “una personalidad del más alto nivel profesional que jerarquizó el cargo y convirtió a la Biblioteca en un verdadero repositorio de primera importancia”, declarándola por Resolución Secretarial como Repositorio Oficial del Poder Legislativo, autorizando por esa misma norma, el desarrollo del Programa Permanente de Asistencia Técnica* de la BAHC. Autorizó la firma del Convenio de Cooperación Técnica a favor del Archivo Histórico de la Comibol, suscrito entre la Vicepresidencia de la República, la Corporación Minera de Bolivia* y la Carrera de Historia* de la UMSA (2003), hecho que permitió la capacitación de los trabajadores de la Comibol, los que por esa vía se aproximaron a la archivística científica. La política económica y sobre todo el proyecto de venta del gas a Chile, que impulsó el gobierno del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, provocó las protestas de las organizaciones sociales que exigieron su renuncia, acción respondida con una desmedida represión militar que provocó la masacre sangrienta de 66 alteños, que radicalizó las protestas sociales hasta provocar su renuncia y posterior huida a EE.UU. El 18 de octubre de 2003, el H. Congreso Nacional designó como Presidente de la República a Carlos D. Mesa Gisbert. El 14 de mayo de 2004 en su condición de primer mandatario, dictó el DS 27490 que autoriza la creación del Archivo Histórico de la Minería Nacional y la aplicación del enfoque sistémico en la administración archivística boliviana, norma que facilitó la disponibilidad de recursos económicos suficientes para la construcción de tres edificios para el Archivo Histórico de la Minería Nacional en El Alto, Oruro y Potosí, la restauración de las imponentes Casas-Gerencia de Catavi y Pulacayo, hecho que refleja en su libro de memorias como “Una de las mayores satisfacciones fue la de otorgar el financiamiento para la creación y construcción del Archivo Nacional de la Minería en el Alto, bajo la dirección de un hombre notable, Edgar “Huracán” Ramírez*, ex secretario ejecutivo de la Federación de Mineros y uno de los más admirables archivistas empíricos de nuestra sociedad”. Fuente: Mesa, 2008: 56; Oporto, 2006; DS 27490.

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MEYENDORFF, BARON KONDRATII EGOROVICH Y BARONESA NATALIA MEYENDORFF (Rusia)

Pareja que viajó por tren y coche en 1907, desde Antofagasta (Chile), en un periplo por el altiplano boliviano (a través de Uyuni, Oruro y La Paz) hasta Perú (donde visitaron Puno y Cusco, antes de descender a la costa en Mollendo). Su libro, L ‘Empire du Soleil: Pérou et Bolivie (1909), contiene 111 fotograbados, presumiblemente de fotografías hechas por ellos, o tal vez adquirido a lo largo del viaje. En el título del libro, el nombre del Barón aparece como Conrad de Meyendorff. Fuente: Buck, 1999.

MICHEL, FRANZ A.

(Santa Cruz de la Sierra) Doctor en Derecho (Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca). Trabajó en Camiri como Director de las cooperativas de agua, luz y teléfonos y Radio Sararenda; enseñó en el Instituto Politécnico; fue Presidente Regional de la Asamblea de Derechos Humanos; y apoyó a la creación de la Casa de Cultura de esa ciudad. Fue docente invitado en la Universidad de Friburgo (Alemania) y en Biel-Bienne (Suiza), y en la Universidad Salesiana de Santa Cruz. Como líder cívico desempeñó funciones de Presidente del Comité Cívico de las quince provincias cruceñas, y miembro del Consejo Preautonómico del Comité Pro-Santa Cruz. Publicó sus estudios en la Biblioteca Cruceña que financia la Fundación Nova. En su faceta archivística, tiene el mérito de haber creado y dirigido el Instituto de Documentación y Apoyo Guaraní, y consolidó un repositorio documental en base a los expedientes judiciales de Lagunillas. Fuente: Michel, 2011.

MINGO DE LA CONCEPCIÓN, FR. MANUEL (Cuenca, España, 1726. † Tarija, 1807)

Estudió Filosofía y Teología en el Colegio de Misiones de Santa María del Monte (Murcia). Se ordenó sacerdote en 1750. Llegó a Tarija en 1755 destinado a trabajar en la Escuela de Propaganda Fide, habiendo pasado varios años en las reducciones chiriguanas de Tarija (1757). Empezó el trabajo misionero en Pilipili sin éxito. Cuando el hermano Fray Pilar implantó el régimen misional desde la Frontera de Chuquisaca hasta Cordillera, fue notable impulsor ante las autoridades de la Audiencia de Charcas y eclesiales, a fin de que el Colegio de Propaganda Fide se consolidara. Fue P. Guardián del Colegio de Propaganda Fide (1757-1774), dedicándose a la biblioteca y el archivo, del que fue su primer custodio y cronista por 17 años. Como archivero revisó la documentación conventual desde 1606 y organizó los papeles según cajuelas con descripción de contenidos. Precisamente, escribió la primera historia conventual, en su condición de cronista (1788-1801). Esa recolección de papeles, la comunicación continua con los hermanos de las reducciones, además, su propia actividad de misionero, le permitió escribir su Historia del origen, fundación y progresos del Colegio

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de Propaganda Fide de misioneros apostólicos franciscos observantes de la Villa de Tarija y de las conversiones o reducciones de indios que están a la dirección y cargo de dicho Colegio, situado en el Virreynato de Buenos Aires dentro del Arzobispado de Charcas y en la jurisdicción de la Franciscana Provincia de San Antonio del Cusco: y contiene al fin dos documentos utilísimos para el acertado gobierno de los religiosos conversores y dos exhortaciones humildes a los mismos. Datado en 1791, fue duramente criticado por los censores conventuales, por lo que presentó una versión revisada en 1795, la que fue también rechazada. Ante esta situación, en 1807 enfrentó a los censores diciendo que estaba “ciego” y “que prefería la devolución del manuscrito al sepulcro del archivo”. El P. Antonio de la Cuadra afirmaba de la obra de Mingo: “De tres partes de su historia, la una es superflua; y las otras dos, llenas de fastidio, por la repetición y rudeza de la palabra, ajena de todas las historias de que están llenas las librerías”. En el “Acta capitular” de rechazo del manuscrito se decidió confiar la responsabilidad de otro escrito de historia de las misiones del Colegio de Propaganda Fide al P. Antonio Comajuncosa, que la dejó manuscrita con el título de “Manifiesto…”. L. Calzavarini* afirma que los dos manuscritos son complementarios. El texto de 1791 del P. Mingo de la Concepción ha sido editado por el P. Bernardino del Pace con el título de Historia de las misiones franciscanas entre chiriguanos (Tarija, 1996). Fuente: Barnadas, 2002: II, 235-236; Calzavarini, 2005.

MINUTOLO DE ORSI, CRISTINA (Argentina)

Historiadora argentina. Acometió la ardua tarea de conformar el Corpus Documental de la Historia de Tarija*, recabando copias legalizadas de archivos argentinos y bolivianos, que abarcan el arco temporal de 1559 a 1930. Contó para ello con el apoyo del presidente de la República Dr. V. Paz Estenssoro*, los Prefectos del Departamento de Tarija, Dr. J. V. Robertson Trigo* y José Vaca Garzón, las historiadoras argentinas Norma Ledezma de Rustia, Mirtha Díaz de Durán, María Teresa Montes de Hessling y la escritora tarijeña Z. Bass Werner*. La obra fue emprendida con motivo de la conmemoración del bicentenario del nacimiento del caudillo tarijeño Coronel Eustaquio “Moto” Méndez. Posteriormente se incorporaron los historiadores de EE.UU., E. D. Langer* y K. Julien*, que completaron dos tomos adicionales. Fuente: Minutolo, 1987-1988; Entrevista con E.D. Langer el 21.07.2010.

MIRANDA, LUCAS

(Condo, Oruro, 18 de octubre de 1914. † Llapallapani, Oruro, 1991) Su padre, Toribio Miranda, inició una larga lucha legal para implantar escuelas en el área rural de Oruro, logrando fundar una en Condo, donde estudió su hijo Lucas. Recuerda que sus profesores eran Macedonio Antezana y su esposa María Pinto, con los que estudió hasta sexto de primaria. El escribano apoderado Santos Marka Tola* lo designó, a su vez, maestro: “El anciano Marka Tola me ha visitado cuando estaba enseñando en la escuela en Jancoñuño. Ha llegado a las 3 de la tarde acompañado con Feliciano Marasa y otro Valentín Achu que era del lado de Potosí. Entonces me ha encargado para que yo enseñe”. De igual manera lo designó

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apoderado de su pueblo. “De escribano yo he hecho unos como escritos, como borrador para Sucre para que acerque a las autoridades de Sucre. En tiempo de Paz Estenssoro* nosotros estábamos pidiendo autorización para todas las estancias para los 5 departamentos. Estábamos pidiendo alcaldes escolares nombrados por Santos Marka Thola”. Conoció a D. Moricio*, quien luego sería su sucesor: “Daniel Moricio ha sido mi alumno, por lo que es mi alumno yo lo he puesto de dirigente para los Urus”. Afirma que fue el quien le presentó a J. Murillo*, “le he entregado al Dr. Murillo Vacareza* para que reclame a los Muratos”. Conoció la copia de la Venta y Composición de Tierras que había otorgado De la Vega Alvarado. Esta fue extendida por el Archivo Nacional de Bolivia*, en Sucre, a Eustaquio Acancalle de Quellía, de la que L. Miranda obtuvo una copia manuscrita. Tuvo estrecha relación con J. Murillo, a quien conoció en 1936: “Mucho me quería Josermo Murillo Vacareza. Yo también sé venir cuando me llamaba por correo. Entonces ese doctor muy conocido, él me ha orientado mucho. Bastante de los Urus. Es como mi papá el Doctor, mi padre siempre es, él me ha enseñado todo”. Estuvo con el maestro acompañándolo en sus últimos momentos de vida. Hacia 1990, Ramón Conde logró que sea recibido por el presidente J. Paz Zamora*, a quien se le confirió un reconocimiento tramitado por el Ministro de Educación M. Baptista*. Fuente: Barragán, 1992: 50-51, 62, 170.

MIRANDA CLÁUREGUI, MARIA TERESA (Sucre, 10 de abril de 1947)

Profesora de Historia, Geografía, y Sociología (Secundaria). Egresada de la Escuela Nacional de Maestros, Sucre (1970). Fue maestra de escuela en Quechisla y Huanuni (1971-1979); en las escuelas Genoveva Jiménez e Ignacio León (1979-1980), en el colegio Juan Misael Saracho de Oruro (1980-1986) y en Tarabuco (1987-1989); de ahí pasó a la Dirección Distrital de Sucre (1990). Desempeñó, luego, funciones de Encargada de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Casa de la Libertad* (1992-2009). Elaboró el Catálogo de Folletería de la Biblioteca de la Casa de la Libertad (Sucre, FCBCB, 2006). Miembro de la Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información-Filial Sucre (1997). Asistió al Curso de Bibliotecología auspiciado por la Universidad Técnica de Oruro (1980) y el Curso Audiovisual de Bibliotecología organizado por el Departamento de Bibliotecas de la UTO (1984). Asistió al Seminario Nacional de Archivística, auspiciado por la Embajada de Israel-Instituto Cultural Boliviano Alemán-Casa de la Libertad, en Sucre (1993), a la Reunión-Taller sobre la Articulación del Sistema Nacional de Información (ABNB-UNESCO, 1995); Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995); Taller sobre manejo, Conservación, Planificación y Curatoría en Archivos (1996); Seminario sobre Archivística y Preservación del Patrimonio Histórico Documental (1996); Curso de Paleografía Hispanoamericana (siglos XVXVIII), impartido por el Dr. J. M. López Villalba* (2000), Curso de Restauración y Conservación del papel (ABNB, 2000); Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos UMSA (2002); a varios de los Congresos Nacionales e Internacionales de Bibliotecología, Documentación y Archivística, que organiza el Colegio de Profesionales en Bibliotecología y Ciencias de la Información*; y al Taller

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Básico de Conservación Preventiva y Restauración para Archivos y Bibliotecas (Casa de la Libertad-ABNB, Sucre, 2007). Publicaciones archivísticas: “Catálogo del Archivo Histórico”, con Gaby Zamora (Revista de la Casa de la Libertad, Nos. 1, 2 (1997), 3, 4 (1998), 5 y 6 (1999). Fuente: CV.

MIRANDA POMIER, DIRZI GINA (La Paz, el 12 de noviembre de 1971)

Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información, mención Archivo (UMSA); Diplomado en Gestión de Archivos (UMSA), Diplomado en Educación Superior (UMSA-CEPIES). Docente interina de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Responsable de la Biblioteca de la Dirección de Pensiones; Encargada del Archivo y Biblioteca de la Superintendencia de Telecomunicaciones; Consultora del Archivo y Centro de Documentación del Fondo de Inversión Productiva y Social. Entre el 2009 y 2010 desempeñó como Encargada de Archivos de la Cooperativa de Teléfonos Automáticos. Pasó luego a desempeñar funciones en el Archivo Central del Fondo Nacional para el Desarrollo Regional. Es autora del Manual del manejo de Correspondencia para la Cooperativa de Teléfonos de La Paz (inédito). Fuente: CV.

MIRANDA RENDÓN, HUGO (Sucre, 26 de mayo de 1939)

Ingeniero de Minas de amplia trayectoria profesional. Realizó estudios de especialización en Administración de Empresas en la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica). Ingresó a la Corporación Minera de Bolivia* el 10 de febrero de 1961 como Ingeniero Agrimensor en la Empresa Minera Catavi. Fue gerente en varias empresas mineras y dependencias de la COMIBOL (v.g. Catavi, Quechisla, Bolívar, Huanuni, Matilde, Administración Central Oruro, Gerencia General COMIBOL). Su primer retiro se produjo el 4 de febrero 1966. El segundo periodo de servicios comprende desde el 21 de abril de 1966 hasta el 3 de octubre de 1985. Fue miembro del Directorio General y Presidente Ejecutivo de la Corporación Minera de Bolivia (2006-2011). En 1985, el gobierno boliviano aprueba el DS. 21060 que instruye el cierre de las empresas mineras estatales, la reducción de personal y por consecuencia el despido masivo de más de 23 mil trabajadores mineros de la Corporación. Ante semejante costo social, la gloriosa Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), organiza la Comisión para la Rehabilitación de la Empresa Minera Corocoro, que fue la primera empresa programada para su cierre. En este emprendimiento el Ing. Miranda participa en colaboración con otros prestigiosos profesionales de COMIBOL (v.g. Walter García, ex Gerente de Operaciones y Julio Navarro, ingeniero metalurgista y funcionario de la Gerencia de Proyectos). El Plan de Emergencia de Corocoro fue entregado a la administración de la COMIBOL y a pesar de haber sido considerado como una de las mejores propuestas para reactivar Corocoro el gobierno del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) la rechazó. El Ing. Jaime Villalobos, titular del Ministerio de Minería, instruyó hundir

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la mina con todo lo que tenía dentro. En 1987, la misma comisión dirigida por el Ing. Miranda Rendón, elaboró el Plan de Emergencia para la Rehabilitación de Catavi. Entre 1989 y 1991, dirige el Plan de Rehabilitación de las Empresas Mineras San José, Unificada, Quechisla, Bolívar, Caracoles, Colquiri, Huanuni, Santa Fe y Viloco. Esta propuesta de reactivación de la minería estatal, nunca entró en ejecución porque contradecía a los efectos del 21060, que impulsaba el libre mercado y la reducción de la minería estatal. El Ing. Miranda conservó en su Archivo particular los Planes de Rehabilitación y toda la propuesta escrita de reactivación de la minería estatal, luego del DS. 21060, los que se convirtieron en una valiosa colección de documentos, que hoy se encuentra bajo custodia del Sistema de Archivo de la COMIBOL* desde el 25 de mayo de 2010, fecha en la que el Ing. Hugo Miranda tomó la decisión de fortalecerla con esta extraordinaria entrega. Durante su gestión como Presidente Ejecutivo de la COMIBOL, el Ing. Miranda prestó invaluable apoyo al Sistema de Archivo de la COMIBOL, aprobando los reglamentos específicos de su funcionamiento, entre ellos el Reglamento del Régimen de la Reserva. Fuente: File personal; Información de Edgar Ramírez S.

MISIONES INTERNACIONALES SOBRE ARCHIVOS Varias Misiones Internacionales de Apoyo a Bolivia se concretaron. La primera fue la Misión de la Universidad de Tennessee, para apoyar a la Escuela de Administración Pública (dirigida por Alfredo Revilla Quezada), dependiente de la Universidad Mayor de San Andrés, que envió a L.M. Fox*, Consejero en Manejo de Oficinas, en 1957, para impartir el Curso de Archivos, con tal éxito que la Escuela recopiló y publicó sus lecciones en el Manual de Archivos (1957), y una “edición revisada, preparada por el Prof. Walter L. Shell”; traducida por el Dr. José E. Guzmán, funcionario del Centro de Entrenamiento e Investigación de la División de Administración Pública del Punto IV, mandada a publicar en 1960, por el Jefe de la Misión, Nelson M. Robinson. Ese mismo año, T.R. Schellenberg*, Subdirector de los Archivos Nacionales de EE.UU., visitó Potosí para invitar a G. Mendoza* a participar como co-organizador de la Primera Reunión Interamericana de Archivos*, que se celebró en Washington D.C. (octubre de 1961), de la que emanarían las principales acciones de desarrollo archivístico Iberoamericano. En 1976, una misión de la Universidad Nacional de Córdoba (Argentina) fue enviada a La Paz, con el propósito de impartir clases en el Curso de Administración de Archivos y Paleografía, organizado por G. Mendoza con la colaboración de A. Crespo*. En 1978, el Prof. P. Barbáchano* fue enviado por la UNESCO, a Sucre, para impartir el primer Curso de Conservación y Restauración de Materiales de Archivos, y paralelamente, para realizar una inspección técnica de evaluación de la situación del Archivo de Nicolás Suárez*, Patriarca de la Goma, en Cachuela Esperanza (Beni), a solicitud del Instituto Boliviano de Cultura. En 1984, el Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos* de Córdoba (Argentina), envió al Dr. A. Tanodi*, para asesorar la organización del Archivo Histórico de Santa Cruz, al que se apoyó en sucesivas misiones, incluyendo la capacitación de personal en el CIDA. En 1993, el Gobierno de Israel, envió a la Dra. S. Schenkoleswky*, para dictar un cursillo de Archivos en Colombia, Ecuador y Bolivia, ocasión en la que visitó Sucre. En 1999, la Universidad Andina Simón Bolívar y el Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, solicitaron a la Embajada de España, el envío del Dr.

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J.M. López Villalba*, para dictar el Curso de Diplomática del Documento Indiano, que marcaría el inicio de una serie de visitas del experto, quien dictó cursos de paleografía y dirigió el equipo que trasncribió los Acuerdos de la Real Audiencia de Charcas (2007). Por su parte, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, sostiene en Santa Cruz de la Sierra, el Centro de Capacitación Archivística, que imparte cursos especializados para becarios de Iberoamérica y África. En 2006, el Centro Carter, abrió una oficina en La Paz, para impulsar la transparencia en la gestión pública, enviando al Dr. T. Converse*, Jefe de Archivos del BID, para levantar un diagnóstico situacional y proponer un plan de acción. Fuente: Fox, 1960; Mendoza, 1982; Oporto, 2006.

MOGRO-MORENO MERCADO, MARÍA OLGA ALICIA (La Paz, 7 de julio de 1957)

Licenciada en Historia (UMSA). Cursó el primer Diplomado de Gestión y Organización de Archivos Históricos (UMSA, 2002); Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999). Participó en el Taller Departamental para la discusión del anteproyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos*. Trabaja como técnico en el Archivo del Banco Central de Bolivia* desde 1996. Fue la primera en graduarse en la Carrera de Historia* con la modalidad de trabajo dirigido que fue realizado en el Archivo del Banco Central de Bolivia, con el título Reglamento del sistema de archivo del Banco Central de Bolivia (UMSA, 2008). Publicaciones archivísticas: “La función archivística en el Banco Central de Bolivia” (Anuario del ABNB 2011, No. 17: 677-695, Sucre, ABNB, 2011). Fuente: CV.

MOLINA ALANES, RAMIRO (Sucre, 12 de agosto de 1961)

Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Es Técnico Aeronáutico (Bolivia), Piloto Civil (Bolivia y Uruguay). Participó en tres Congresos de Archivística y seis de Museología en Bolivia, así como seis Congresos Internacionales de Historia Aeronáutica, y Museos Aeronáuticos en el exterior. Es autor de Resumen Histórico de las Brigadas Aéreas, Institutos y Unidades de la Aviación Militar (con dos ediciones 2001 y 2002). Tiene más de 300 artículos sobre historia general, militar y aeronáutica publicados en libros, gacetas y revistas de Bolivia y el exterior. Archivista, investigador e historiador de la Fuerza Aérea Boliviana; Académico de Número de la Academia Boliviana de Historia Militar; Vicepresidente del Instituto Boliviano de Historia Aeronáutica. Director del Acervo Histórico “Cnl. Amalia Villa de la Tapia” de la FAB. Con el propósito de organizar los archivos militares y capacitar a personal en esta actividad, en 1996 dictó la materia de Archivos, en cursos organizados por la División de Archivo Militar del Comando en Jefe de las FF.AA. Por la evidente necesidad para la investigación histórica, en 1994 y 2005, presentó el proyecto de creación del Archivo Intermedio de la FAB; sugerencia que se concretó con la creación del Archivo Central de la Fuerza Aérea Boliviana. Fuente: CV.

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MOLINA ECHEVERRÍA, GONZALO (Oruro, 8 de septiembre de1962)

Estudió la Carrera de Historia* en la UMSA. Fue Auxiliar de Docencia de Metodología y Técnicas de Investigación (1987); Paleografía (1987); Archivística y Fuentes para la Historia de Bolivia (1987-1988). Se caracteriza por la acuciosidad remarcable en sus trabajos de investigación y descripción archivística. Se inició con una beca-trabajo como Auxiliar de Archivo de la Carrera de Historia y desde entonces ha desarrollado una amplia experiencia de trabajo, entre ellas en el Archivo General del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1988, 1992); Archivo General del Banco Central de Bolivia* (1988-1989); en el proyecto para el establecimiento y organización del Archivo Histórico Municipal de Oruro (convenio Interinstitucional Carrera de Historia y H. Alcaldía Municipal de Oruro) (1991); Archivo de La Paz* (1994-1995, 1998-1999); Archivo del Decanato de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la UMSA (1995-1996); en la organización de la Colección Documental y Archivo del Dr. W. Guevara Arze*, alto dirigente político del MNR y ex Presidente de la República, para su transferencia al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (1995-1996); Archivo de Catholic Relief Service (2002); fue Supervisor del Censo Guía de Archivos de Oruro y Cochabamba para la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional* (2003-2004); trabajó en el Archivo Histórico de la Minería Nacional (20072008); y consultorías en el Proyecto de organización del Archivo de la Universidad Pedagógica Nacional Mariscal “Sucre”, antigua Escuela Normal de Maestros (2009, 2010); y en la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional (2011-2012). Es ferviente admirador de la vida y obra de Gunnar Mendoza Loza*, Director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (1944-1994). Su trabajo más importante fue la organización y catalogación del Archivo Gunnar Mendoza Loza (materiales inéditos y publicados) (2004-2005), transferido al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia por la Sucesión Mendoza-Pizarro el 2004, por cuyo encargo lo inventarió previamente (1994-1995). Contratado por la Sucesión Mendoza, el 2000 realizó el Registro Inventario descriptivo de la “Bio-Bibliografía de Jaime Mendoza” (Por Gunnar Mendoza L. I. Catálogo general cronológico. Escritos de: A) 1890-1939/1993, y sobre: B) 1903-1993 JM publicados; II. Sección A-JM (Archivo Jaime Mendoza*): Escritos inéditos y publicados de y sobre JM, correspondencia, documentos Senado, 1893-1993). Asimismo participó, en representación de la Sucesión Mendoza, en la inventariación notariada del AGML y del AJM (2001). Desde 1984 asistió a 27 Congresos, Cursos, Reuniones, Seminarios de Archivística, Documentación, Bibliotecología, entre éstos: Cursillo sobre Archivos (Archivo de La Paz-CIDA-OEA. LP, 1984); Seminario “Fuentes Documentales de Bolivia” Archivo de La Paz (Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* UMSA. LP, 1989); Cursillo de Archivos (Fac. Humanidades-Carrera de Historia-Archivo de La Paz. LP, 1990); Seminario “Los Archivos en los Medios de Comunicación” (Fac. HumanidadesCarrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información-UMSA. LP, 1994); ReuniónTaller sobre la Articulación del Sistema Nacional de Información (ABNB-UNESCOEmbajada de Francia en Bolivia. Sucre, 1995); Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Comité de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia-Comisión Nacional de

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Organización del Congreso. Sucre, 1995); Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información Filial La Paz-Comité Organizador. Especialidad Archivos. LP, 1996); Seminario-Taller “Ley del Sistema Nacional de Información” (Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información, Filial La Paz-UNESCO, Bolivia-Vicepresidencia de la República-Comisión de Ciencia y Tecnología del H. Senado Nacional. LP, 1997); Primer Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos (Archivo de La Paz. Carrera de Historia-Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información. LP, 2002); “Curso Taller de Organización de Sistemas de Archivo Institucional” (Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional-Carrera de Historia, UMSA. LP, 2003); Congreso Nacional de Archivos: Tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de Archivos (Archivo Nacional de Bolivia. Sucre, 2007); IV Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (CIBDA), “De la sociedad de la información a las sociedades del conocimiento” (Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia. LP, 2007); “I Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano” (Fundación Ciencias de la Documentación, España-Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional-Academia Diplomática Boliviana-Viceministerio de Transparencia y Lucha contra la Corrupción. LP, 2008); Mesa Redonda sobre Legislación Archivística Boliviana (Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional-Sistema de Archivo de la COMIBOL-Centro de Estudios Para la América Andina y AmazónicaCarrera de Historia UMSA. Oruro, 2011).Dictó un curso de Paleografía (Taller de Investigación Antropológica de la Carrera de Antropología de la Universidad Técnica de Oruro, 1998), y asistió al Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999) y al Curso de Paleografía Hispanoamericana (siglos XV-XVIII) (Sucre, 2000). Presentó ponencias y exposiciones en Encuentros y Seminarios, como: Encuentro de Organizaciones de Investigación Histórica (Instituto de Estudios Andinos y Amazónicos. LP, 1992); Seminario Nacional “Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia” (H. Congreso Nacional-Vicepresidencia de la República. Área Patrimonio Documental de La Nación-Sub Comisión de Archivos. LP, 1993); II Curso de Administración de Archivos (Proyecto de Desarrollo Organizacional del Ministerio de la Presidencia-Ministerio de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente-Cooperación Técnica Alemana GTZ. LP, 1996); Homenaje al Día del Archivista Boliviano. Mesa Redonda Historia de la Archivística Boliviana (BAHALP-Carrera de Historia Cátedra Archivística (Los 50 años de la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos, Washington, D.C., octubre 9-27 de 1961. LP, 2011). Intervino activamente en exposiciones sobre Gunnar Mendoza, entre ellas la “Exposición-Homenaje a Gunnar Mendoza Loza: 50 años al servicio del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, 1944-1994” (Sucre, 1994) (v. 3); en el lanzamiento oficial del Premio Nacional de Ensayo “Gunnar Mendoza Loza” (H. Alcaldía Municipal de Sucre-Plural EditoresJornadas dedicadas a la “Semana del Libro”, Sucre, 2002) (v. 9); Panel “Homenaje a Gunnar Mendoza Loza en el décimo aniversario de su fallecimiento” (Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia-Archivo y Biblioteca Nacionales de BoliviaFundación Cultural La Plata, Sucre, 2004) (v.11); “Gunnar Mendoza Loza: Archivista, Historiador y Bibliógrafo” (Carrera de Historia UMSA: Cátedra Archivística, LP, 2011). Conferencias y ponencias sobre “El Archivo de Gunnar Mendoza Loza (AGML): Un legado Archivístico e Historiográfico”: ante la delegación de estudiantes de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información*-UMSA, a cargo de L. Oporto O.*

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(Sucre, 2005); III Congreso Nacional de Bibliotecología, Documentación, Archivística y Museología (Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de BoliviaAsociación de Bibliotecarios de Oruro, Oruro, 2006); Congreso de Archiveros del Poder Ejecutivo de la República de Bolivia “Gunnar Mendoza” (Comité Ad-Hoc de Archiveros del Poder Ejecutivo, LP, 2007); Tertulia Archivística: “Sesión Especial de Homenaje al Dr. Honoris Causa Gunnar Mendoza”, en conmemoración a los 14 años de su fallecimiento (Archivistas_Bolivia-Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional, LP, 2008); “Quinto Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos”. Mesa “La construcción de la memoria: un desafío para los archivos históricos” (Asociación de Estudios Bolivianos-Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia-Museo Nacional de Etnografía y Folklore, Sucre, 2009); Conmemoración del natalicio de Gunnar Mendoza y fecha consagrada al aniversario de la Carrera de Historia (Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca). Ciclo de Conferencias “en homenaje al natalicio del insigne historiógrafo Gunnar Mendoza Loza”: Exposición sobre la “Vida y obra de Gunnar Mendoza” (Coordinación de la Carrera de Historia-Centro de Estudiantes de la Carrera de Historia GECO-H, Sucre, 2009); III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos EBAM (Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional-Grupo de Estudios Sociales en Bibliotecología y Documentación GESBI (LP, 2011). Presentación de las Obras Completas de Gunnar Mendoza Loza: ABNB-Sucesión Mendoza (Sucre, 2008), IX Feria Internacional de Libro (Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia-ABNB-Sucesión Mendoza, Santa Cruz, 2008) (v. 12), Biblioteca “Georges Rouma” de la Universidad Pedagógica Marisca (Sucre, 2010). Fue co-editor de Historia. Boletín de la Carrera de Historia (Nos. 16, 17: 1985) y una edición especial (Nos. 1-19: 1997); Boletín del Archivo de La Paz (Nº 14, 1994; Nº 15, 1995; Nº 18, 1999); Archivos de Oruro, Tarija y Cochabamba (L. Oporto, dir. La Paz: BAHCN, 2004). Tiene amplia experiencia en trabajos de revisión, corrección e información, de publicaciones entre ellas Fuentes para la Historia de la Iglesia en Bolivia (Una guía preliminar) (R. Arze Aguirre*, 1985); Boletín del Archivo de La Paz Nº 20 (2002) y Nº 27 (2012); Educadores en el Instituto Normal Superior “Simón Bolívar”, 1917-1967 (G. Medrano Reyes*, 2003); Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia: una historia en común (Sucre: ABNB, 2005); Historia de la archivística boliviana (L. Oporto O. 2006); Orureños en la Cultura Boliviana (Elías Blanco Mamani. 2006); Obras Completas de Gunnar Mendoza Loza (Sucre: ABNB, 2005-2007); Diario histórico de todos los sucesos ocurridos en las provincias de Sicasica y Ayopaya durante la Guerra de la Independencia americana; desde el año 1814 hasta 1825. Escrito por un comandante del partido de Mohosa, ciudadano José Santos Vargas. Año 1852 (La Paz: ABNB-FCBCB-Plural editores, 2008); Potosinos en la Cultura Boliviana (Elías Blanco Mamani, 2010); Diccionario de Ciencias Sociales (Roberto Ágreda Maldonado, 2012); Fuentes, revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional (Vol. 4-Nº 9, 2010 a Vol. 6-Nº 21, 2012), y en las ediciones del Pasanaku editorial del Centro de Estudios Para la América Andina y Amazónica: Archivos Militares de Bolivia: Historia y Organización Archivística (L. Oporto O., 2011); Archivos Gráficos (Carteles) de Bolivia: Historia y Tratamiento Archivístico del Archivo de la Fundación Cinemateca Boliviana (Fabiola Carla Nina López, 2011); Directrices para la Descripción Archivística en el Archivo Central de la COMIBOL (L. Quiñones Vargas*, 2011); Diccionario de Archivistas de Bolivia (L. Oporto O., 2012).

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Trabajó como Auxiliar de investigación en la recopilación de datos e información en los siguientes temas: Esclavitud negra en La Paz siglo XVII (Herbert S. Klein. Universidad de Columbia, Nueva York, EE.UU, 1984); Seguridad Social (Tesis de Doctorado de Carola Echalar. Universidad de Pitsburg, EE.UU., 1985); “Orígenes del Movimiento Nacionalista Revolucionario en la post-guerra del Chaco (19351946)” (Tesis de Fernando Gallego M. Barcelona, España. La Paz-Sucre, 1985-1989); “Los vecinos de la ciudad de La Paz, en Charcas (1650-1675)” (Dra. Clara López B.*, 1990); Testamentos y cartas/recibos de dotes (1600-1650) (Dra. Verónica Salles-Reese. Georgetown University, Washington D.C., EE.UU., 1994); Auxiliar de Investigación del Instituto de Estudios Bolivianos de la Facultad de Humanidades de la UMSA (“Biobibliografía de Juan Siles Guevara”, 1996); “Historia del tabaco: industrialización, comercio, consumo” (Guadalupe Cajías de la Vega, 1999-2000). Realizó las siguientes transcripciones documentales (siglos XVII, XVIII y XIX): Cabildo de Potosí Libros de Acuerdos. Extracto años 1565-1575 (microfilm para Marcela Inch*, 1987); Manuscritos del siglo XIX de interés familiar (Fernando Baptista, 1991); Sección Audiencia de Charcas-Lima-Estado-Buenos Aires, Guerra de la Independencia Americana (s. XIX, microfilm para José Luis Roca*, 1991 y 2004); Cabildo de Tarija (1610-1682), para la edición Historia de Tarija (Corpus Documental) (Rossana Barragán, 1992, 1993); Expedientes Coloniales siglo XVIII (Archivo Nacional de Bolivia) (Héctor Ormachea, 1994); Escrituras Públicas, siglos XVII-XVIII: relaciones familiares, filiación o parentesco (genealogía) (Rolando Rivero, 2000, 2001, 2002); Escrituras Públicas siglos XVII-XVIII: relaciones familiares, filiación o parentesco (genealogía) (Eduardo Dávalos, 2006); Expedientes Coloniales y Escrituras Públicas, siglos XVIIXVIII (Archivo Nacional de Bolivia) sobre o relativas a Teatro (Carlos Cordero C., 2006-2007). Publicaciones archivísticas

1. “Hoy se recuerda el Día del Archivista boliviano”. Presencia-Puerta Abierta. La Paz, octubre 18, 1996, p 1.

2. “Papeles, vida y testimonio de un ex presidente de la República: Entrevista con Wálter Guevara Arze”, en Anuario 1996 del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (Sucre: ABNB, 1996), p. 483-494. Coautoría con Juan Carlos Fernández P. y Fernando Chuquimia B. 3. “Conservación y manejo de fotografías del Archivo de La Paz”, en H-aportes (boletín del Grupo Mayo-Carrera de Historia), Nº 6 (La Paz, octubre, 1999), p. 7-8.

4. “Registro Inventario de libros de la Contraloría General de la República transferidos al Archivo Nacional de Bolivia”, en Boletín del Archivo de La Paz, Nº 18 (La Paz-UMSA, 1999), p. 30-52.

5. “La historia del Archivo de La Paz y nuestras historias”, en Boletín del Archivo de La Paz, Nº 23-24, 2006, p. 76. Opinión personal. Segunda edición: La Paz, 2008, p. 193. 6. [125 años del Archivo Nacional de Bolivia]. Correo del Sur. Sucre, octubre 18, 2008, p. 2.

7. “El Archivo Nacional en Sucre, un guardián de la memoria”. La Razón-Tendencias. La Paz, octubre 26, 2008, p. C4.

8. “Homenaje a Ernesto Otto Rück en el centenario de su fallecimiento (1909-2009)”, en Fuentes. Revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, Vol. 4, Nº 9 (La Paz, agosto de 2010), p. 33-34 y Anexos (I-IV), p. 39-44. Nota Preliminar a “Palabras de Gunnar Mendoza L.: Homenaje a Ernst Otto Rück patrocinado por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia”, p. 35-39.

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9. Carta al Director. Correo del Sur. Sucre, septiembre 30, 2010, p. 3. Sobre campaña de recolección de “papel en desuso de las oficinas”.

10. “El Diario de un guerrillero de la independencia: José Santos Vargas, Memoria del Mundo”, en Fuentes, Vol. 4, Nº 10 (La Paz, octubre de 2010), p. 16-31.

11. “El Diario de un Guerrillero de la Independencia: José Santos Vargas, Memoria del Mundo”, en Revista de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia, Nº 68 (La Paz, enero-febrero 2011), p. 51-56. 12. “Primer curso de descripción y digitalización de archivos fotográficos”, en Boletín del Archivo de La Paz, Nº 26, 2011, p. 147-161. 13. “La Primera Reunión Interamericana sobre Archivos”, en Fuentes, Vol. 5, Nº 16 (La Paz, octubre de 2011), p. 36-50. En coautoría con Luis Oporto Ordóñez.

14. “Archivos Gráficos (Carteles) de Bolivia: Cinemateca Boliviana”, en Fuentes, Vol. 5, Nº 16 (La Paz, octubre de 2011), p. 60-63. Reseña.

15. “Archivos Militares de Bolivia”, en Fuentes, Vol. 5, Nº 17 (La Paz, diciembre de 2011), p. 56-62. Reseña.

16 “Directrices para la Descripción Archivística en el Archivo Central de la Comibol”, en Fuentes, Vol. 6, Nº 20 (La Paz, junio de 2012), p. 61-64. Reseña. Artículos sobre Gunnar Mendoza L.





1. “Gunnar Mendoza, en vida y obra” (primera parte). La Razón D-Ventana, N° 52. La Paz, marzo 27, 1994, p. 18-19.

2. “Gunnar Mendoza, en vida y obra” (segunda parte). La Razón D-Ventana, N° 53. La Paz, abril 3, 1994, p. 18-19. (“las Paginas de Gesta” del Centro de Documentación e Información Cultural “Gesta Bárbara”, bajo la dirección de Elías Blanco M.). 3. “Gunnar Mendoza L., maestro archivista”. Correo del Sur-Correo Literario, Nº 49. Sucre, abril 3, 1994, p. 5 (suplemento homenaje).

4. “Gunnar Mendoza; una vida y una obra consagradas”. Hoy. La Paz, abril 5, 1994, p. 2-3.

5. “Gunnar Mendoza L., paradigma de la archivística”. Primera Plana-Arte y Cultura, Nº 151. La Paz, abril 17, l994, p. 1-2 y 6. 6. “Panorama archivístico de Gunnar Mendoza L.”, en Boletín del Archivo de La Paz. Nº 14, 1994, p. 15-21. 7. “Homenaje: Gunnar Mendoza, a tres años de su fallecimiento”. Presencia-Puerta Abierta. La Paz, marzo 6, 1997, p. 2.

8. “Gunnar Mendoza en la memoria y en el corazón”, en Anuario 1997 del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (Sucre: ABNB, 1997), p. 435-466. 9. “Premio Nacional de Ensayo: una evocación de Mendoza”. Correo del Sur-Puño Letra (Suplemento Cultural). Sucre, diciembre 19, 2002, p. 7.

10. “El Archivo Gunnar Mendoza Loza (AGML): un legado archivístico e historiográfico”, en Fuentes del Congreso. Boletín de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional, Nº 15 (La Paz, septiembre-octubre, 2004), p. 168-169. 11. “El Archivo Gunnar Mendoza Loza (AGML): un legado archivístico e historiográfico”, en Agua del Inisterio. Nº 9 (Sucre, Fundación Cultural La Plata, junio, 2005), p. 13-16. 12. “Los escritos de Gunnar Mendoza: Un legado Archivístico e Historiográfico”. El MundoEl Nuevo Lampión, Nº 208. Santa Cruz, junio 15, 2008, p. 6-7.

13. “Las Obras Completas de Gunnar Mendoza Loza: Un gran legado archivístico e historiográfico”. Nueva Crónica y Buen Gobierno, Nº 24. La Paz, 12 al 15 de septiembre de 2008; p. 16-17. Publicación (bisemanario) del Instituto Prisma y Plural Editores.

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14. “Evocación de Gunnar Mendoza”. Correo del Sur. Sucre, marzo 6, 2009, p. 3. Varios (Selecc.) “La Biblioteca de Juan Siles Guevara, un legado cultural que debe conservarse”. Presencia-Puerta Abierta. La Paz, septiembre 11, 1996, p. 1. Reportaje a Gonzalo Molina E.; Presidentes de Bolivia; vida y obra. Fascículos de Presencia (19 números: marzo 11-agosto 26, 1997). La Paz: Agencia Gesta de Servicio Informativo Cultural; “Apuntes biográficos de Hugo Molina Viaña”, en Retornos. Revista de Historia y Ciencias Sociales, Nº 2 (La Paz: La Pesada ediciones, 1999), p. 91-99; “Noticias” (Noticiero informativo). En: H-aportes (una publicación del Grupo Mayo-Carrera de Historia), Nº 9-10 (La Paz, mayo-junio, 2000), p. 11-15 (texto y fotos GME); “H-aportes; un año de publicación”. En: H-aportes (una publicación del Grupo Mayo-Carrera de Historia), Nº 9-10 (La Paz, mayo-junio, 2000), p. 16; Doce artículos publicados En: Diccionario Histórico de Bolivia. 2 Tomos. Redactado bajo la dirección de Josep M. Barnadas. Sucre: Grupo de Estudios Históricos, 2002; “Ensayo Bio-Bibliográfico de Guillermo Ovando Sanz (1917-1990)”, en Retornos. Revista de Historia y Ciencias Sociales, Nº 7 (La Paz: La Pesada ediciones, 2007), p. 123-164; “Centenario de la Biblioteca ‘Georges Rouma’”, en Fuentes, Vol. 4, Nº 11 (La Paz, diciembre de 2010), p. 2030. En colaboración con Salomón Jadue Castro y Valentina Ramírez; “Gesta Bárbara de Tupiza”, en Fuentes, Vol. 5, Nº 13 (La Paz, abril de 2011), p. 18-29; “Luis Oporto Ordóñez, archivista e historiador”. La Esquina-Cambio, Nº 74. La Paz, mayo 8, 2011, p. 7; “Alberto Crespo Rodas: Ensayo Bio-bibliográfico”, en Fuentes, Vol. 5, Nº 15 (La Paz, agosto de 2011), p. 16-32; “Evocación de José Enrique Viaña: Un Bárbaro potosino”. Correo del Sur-Puño y Letra (Suplemento Cultural), Nº 475. Sucre, septiembre 29, 2011, p. 6; “Día del libro infantil”. La Época, Nº 519. La Paz, 1-7 de abril de 2012, p. 18; “Hugo Molina Viaña, la Poesía y los Niños”. Correo del Sur-Puño y Letra. Sucre, abril 12, 2012, p. 2; “Documentos para la historia de la Independencia de Bolivia. Causa criminal contra Francisco Ríos ‘El Quitacapas’. Años 1809-1811”. La Prensa y El Alteño. La Paz, mayo 25, 2012, p. E13. Suplemento Especial Chuquisaca 1809. Fuente: CV.

MONEY OROZCO, MARY (La Paz, 12 de mayo de 1949)

Licenciada en Historia (UMSA). Ph. D., Universidad de Columbia, Nueva York (EE.UU.). Docente titular de la Carrera de Historia de la UMSA* y del Instituto Normal Superior “Simón Bolívar”, en la época cuya administración dependía de la UMSA. Presidenta y fundadora del Colegio Nacional de Historiadores de Bolivia. Siendo alumna de A. Crespo* participó en la fundación del Archivo de La Paz*; donde fue luego investigadora y directora a.i. (1991). Trabajó como consultora en la organización de los archivos del Banco Central de Bolivia* (1982-1987), catalogó el Archivo Histórico Municipal “José Rosendo Gutiérrez” de La Paz (1976), del que fue su directora (1982). Participó en el Curso de Organización y Administración de Archivos Históricos en la Escuela Nacional de Documentalistas* de Madrid, España (1975). Docente titular de la Cátedra de Paleografía en la Carrera de Historia, dictándola también en la de Bibliotecología y Ciencias de la Información*. Dirigió con éxito la Maestría en Historias Andinas y Amazónicas (2003-2005), logrando editar 8 volúmenes de la Colección homónima, con auspicio del Colegio Nacional de Historiadores de Bolivia y Producciones Cima de Carmelo Corzón. Sus obras Los obrajes, el traje y el comercio de ropa en la Audiencia de Charcas (La Paz, Embajada de España, 1989) y Oro y Plata en los Andes (La Paz, CNHB, 2004), merecieron premios a la mejor obra publicada. Fue designada directora titular del Archivo de La Paz

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(2012), oportunidad en la que impulsó una reestructuración de la institución y la reorganización de sus fondos. Publicaciones archivísticas: Catálogo de Expedientes Coloniales del Archivo José Rosendo Gutiérrez (La Paz, HAM, 1972); Índice de registro de escrituras del Archivo Histórico Municipal “José Rosendo Gutiérrez” (La Paz, H. Municipalidad de La Paz, 1977); “Índice de registros de escrituras del Archivo de La Paz (UMSA)” (Boletín del Archivo de La Paz,1984, 8: 27-47); “Fondos documentales de la Prefectura del Departamento de La Paz”, con M. Paredes y R. Palizza (Boletín del Archivo de La Paz, 1986, 6 (9): 3-8); “Veinte años del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1991, Número especial: 11-18); “Bibliografía de reciente adquisición en el Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 2001, 19: 74-6); “Fondo oral del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, 20: 33-36); La Paz a través de sus archivos históricos (La Paz, CIMA, 2011). Fuente: CV.

MONROY, EUSEBIO (La Paz)

Abogado, vivió en Corocoro. En 1912, junto a su hijo Humberto y al Cacique de Kurawara de Pacajes, Martín Vásquez, convenció a indígenas de esa comunidad, “que los títulos primordiales de los terrenos del Alto Perú se encontraban en los Archivos de Lima y para traerlos a Bolivia se necesitaba una fuerte erogación de dinero, además de efectuar un viaje a la capital de los Virreyes”, es decir, los documentos coloniales de la composición de tierras practicadas por los visitadores Francisco de la Mazueca Alvarado (1645), Gerónimo Luis de Cabrera (1659) y Juan Bravo de Rivero (1677). Los indígenas pagaron 2000 bolivianos al tramitador. En 1914, la estafa a los indios sumó 36.000 bolivianos. Al final esos documentos “resultaron papeles sin importancia y uno de ellos falsificado”. El Cacique apoderado S. Marka Tola*, advirtió sobre el engaño de los Monroy, no obstante, éste afirmó que “los indios podían obtener testimonios de esos documentos”. Abogados de esa época estafaron a los indígenas, arrebatándoles sus títulos y para apoderarse de los terrenos, provocaron falsas sublevaciones con el fin de apresar a los caciques y enviarlos a prisión. Fuente: Choque, 2010: 202, 203, 208, 212.

MONTAÑO, TITO Capitán de Ejército. Se formó en la Escuela de las Américas, centro de adoctrinamiento de muchos de los dictadores de Latinoamérica, sostenido por EE.UU. en la zona del Canal de Panamá. Participó en el golpe de Estado de L. García Meza*, el 17 de julio de 1980, como Jefe de Servicios Reservados. Cumple condena a pena capital de 30 años sin derecho a indulto. En declaraciones formuladas a la prensa, el Cnl. L. Arce Gómez*, lugarteniente y ministro del Gral. García Meza, hizo saber que T. Montaño era responsable del Archivo del Servicio de Seguridad del Estado, ubicado en la Sección II del Estado Mayor General, afirmando que ese archivo contiene “un registro documental que las Fuerzas Armadas (FF.AA.) guardan desde los años 80’s del siglo pasado llamado Diario de Inteligencia”, en el cual podría especificarse la ubicación del lugar donde descansan los restos del líder socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz, asesinado durante el golpe. “Por honor a la verdad”, el ex ministro asegura que el informe de todas las actividades de las FF.AA. fue redactado por el Comandante

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de Cuerpo de Ejército 1º y se encuentra, “actualmente en el Departamento II del Ejército acompañados del anexo que es el informe del Comandante del 1er Cuerpo de Ejército acantonado en Oruro”. Sin embargo, se conoce que el jefe de Registro y Archivo fue H. Marcelly*. Fuente: Solano, 1997; Extra, 2010: 8¸ http://www.la-epoca.com (13.5.10); http://www. cambio.bo (13.5.10).

MONTECINOS ROJAS, MÓNICA (La Paz, 4 de mayo de 1974)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Es Técnico medio en Alimentación (Centro Nacional de Formación Integral CENAFI); Técnico Superior en Gastronomía Escuela Hotelera. Hizo el Diplomado en Educación Superior del CEPIES UMSA (2006); y el Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos (UMSA, 2007). Completó sus conocimientos archivísticos por medio de conferencias y cursos como El Desarrollo de la archivística en Bolivia: pasado, presente y futuro (Carrera de Bibliotecología, UMSA); Investigación de quipus y quipolas en Europa, Dra. Carmen Beatriz Loza (UMSA); Fuentes para una historia de los orientes bolivianos (Biblioteca y Archivo del Congreso Nacional). Participó en el Segundo Taller de conservación preventiva y restauración de materiales de archivo (ALP); en el Primer Encuentro Nacional de Redes de la Información: Bibliotecas, Centros Documentales y Archivos, como invitada especial (Santa Cruz de la Sierra) en el que presentó su estudio sobre el “Rescate documental de la Serie Abastecimientos de la Guerra del Chaco 1932-1935” y su informe sobre la “Organización de folletería, mapoteca y hemeroteca de la Guerra del Chaco 1932-1935”. Ha sido presidenta y fundadora del grupo Multidisciplinario ITIHASA, que analiza temas sociohistóricos de Bolivia. En su desempeño laboral abrazó el voluntariado para trabajar en el Archivo de La Paz* durante la gestión de la Directora L. Escobari*, y luego de la misma manera, por dos años, como Archivista del Archivo Histórico Militar de las FFAA., donde organizó el fondo documental de la Guerra del Chaco (serie Abastecimientos 1932 -1935) y la rica colección de folletería de la Guerra del Chaco 1933–1934; participó en el rescate documental de documentos de especias de la Guerra del Chaco, 1933 (capítulo absolutamente desconocido de la historia militar boliviana); y organizó la serie de Telegramas y radiogramas de la Guerra de Chaco 1932–1935. Colaboró de forma voluntaria en la organización de las actividades académicas que desarrolló el Archivo Histórico Militar. Fue invitada al Colegio Militar (La Paz) para dar conferencias sobre el Rescate documental de los archivos militares y su valor para la historia de la institución militar; de igual manera, el Colegio de Sargentos de Cochabamba la invitó para dar charlas sobre la administración y conservación de archivos de gestión e históricos. Publicaciones: “Una revisión a la prensa paraguaya El Orden” (Fuentes del Congreso, 2006, N° 4); “Entrevista al Director del Archivo Militar de las FF.AA.” (Boletín ITIHASA, 2007, N°3); “La Casa de Pedro Domingo Murillo: Hoy Museo Nacional” (Boletín ITIHASA, 2007, Nº 9) Fuente: CV.

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MONTES CANAZA, NOEMÍ VALERIA (La Paz, 3 de abril de 1982)

Estudió la Carrera de Bibliotecología* (UMSA). Empezó como Responsable del Archivo de la Casa de Justicia de El Alto (2007); Encargada del Archivo de Yamashita Consulting (2008); Auxiliar de Archivo de la Superintendencia de Pensiones, Valores y Seguros (2009); Auxiliar de Archivo del Fondo de Desarrollo del Sistema Financiero y de Apoyo al Sector Productivo (2010); Auxiliar de Archivo y Biblioteca de la Autoridad de Fiscalización y Control Social y Electricidad (2010). Fuente: CV.

MONTES GAMBOA, ISMAEL

(Corocoro, La Paz, 5 de octubre de1861. † La Paz, 16 de octubre de 1933) Participó en la batalla de Tacna, durante la Guerra del Pacífico, el 26 de mayo de 1880. Abogado, político y periodista. También actuó como Ministro de Guerra en la Batalla de Riosinho, durante la campaña del Acre (1901). Fue Munícipe, Diputado, Embajador plenipotenciario en Francia e Inglaterra; Ministro de Guerra (1899-1901) y de Guerra y Colonización (1901-1903) durante el gobierno de José Manuel Pando*. Ejerció el poder en dos oportunidades. Primero entre 1904 y 1909 y la segunda de 1913 a 1917. En 1911, apoyó la iniciativa de M. Ascarrunz*, empeñado en crear la Biblioteca del Congreso, adquiriendo 52 obras de lo más actualizado en librerías de España, sobre todo literatura positivista, entre ellos Derecho Constitucional (Sansoneti), Bases sociológicas del Derecho y el Estado (Vaccaro), Sociología (Giddins), La revolución francesa (Carlyle), La educación (Bunge), Sentido económico de la Historia (Rogers). Durante su primer mandato se suscribió el oprobioso Tratado de Paz y Amistad con Chile, el 20 de octubre de 1904, acuerdo impuesto por la fuerza de las armas, pues el territorio del Litoral boliviano fue invadido por fuerzas de ocupación de Chile en 1879, en una guerra no declarada. En 1909 entregó -al Senador por Chuquisaca, Dr. Darío Gutiérrez y Presidente de la Comisión Legislativa- el Acta original de la Declaratoria de Independencia de Bolivia, en conmemoración al Centenario del 25 de mayo de 1809 para que sea depositada en la Casa de la Libertad*. Su antigua residencia, conocida como “Casa Montes”, preciosa construcción republicana, bellamente decorada con iconografía de la época y otros detalles que la hacen singular, fue transferida a la Universidad Mayor de San Andrés, donde funciona el Archivo de La Paz*, y las direcciones de las Carreras de Historia*, Bibliotecología*, Literatura, Filosofía y Lingüística. El viernes 30 de marzo de 2012, su nieta Elena Montes, visitó la histórica Casa, con el objetivo de conocer la residencia donde vivió su ilustre abuelo. El Archivo de La Paz, resguarda fotografías históricas donadas por la familia Montes; y un pequeño fondo del Partido Liberal (1916-1917). Fuente: Soux, 1990; Carta de Joaquín Gantier, 1970; Comunicación personal de la Dra. Mary Money (29.3.12).

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MORA FERAUDI, MAGDA

(Tupiza, Potosí, 16 de noviembre de 1952) Estudió en la Carrera de Historia* UMSA (2005). Su trayectoria archivística está ligada al Archivo de La Paz*, desde 1996 hasta 2010, como Auxiliar, Técnico Archivista (Proyecto Harvard), Censo Guía de Archivos de la ciudad de La Paz; Catalogadora del Fondo Ministerio del Interior, Migración y Justicia y de la Colección Censo de Extranjeros. Participó en el Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996), en el Curso de Diplomática del Documento Indiano (1999), 1er y 2do Taller de Conservación Preventiva y Restauración de Materiales de Archivo (2006-2007), Taller Departamental sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2007), Curso de Conservación Preventiva y Restauración de Papel para Bibliotecas (2007), Taller Práctico sobre Metodología de la Investigación Documental (2007), 1º Curso de Digitalización de Documentos (2008), Curso de Diplomática del Documento en la Edad Moderna (2009). Publicaciones archivísticas: “El Fondo de la Corte Superior de Distrito (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, 20: 3-14); “Corte Superior del Distrito de La Paz: 1900-1905” (Boletín del Archivo de La Paz, 2002, 20: 15-23); “El Censo Guía de Archivos: una experiencia de evaluación” (Boletín del Archivo de La Paz, 2004, 21-22: 28-39); “El pasado y la inmigración. Los censos de extranjeros”, con Ricardo Asebey (DesArchivando, 2007, 2: 34-35); “Los pegamentos, adhesivos, clips y grapas como factores de deterioro de los documentos”, con R. Asebey (Boletín del Archivo de La Paz, 2011, Nº 26: 193-196). Fuente: CV.

MORALES AYMA, JUAN EVO

(Isallavi, cantón Orinoca, Oruro, 26 de octubre de 1959) Paradigmático líder de origen aymara. Desde niño desarrolló labores agrícolas y al cuidado de un rebaño de llamas; sólo cursó hasta ciclo medio en el colegio “Marcos Beltrán Ávila” de Oruro. Fue ladrillero, panadero y trompetero, y mostró dotes de buen futbolista. En 1982, junto a su familia migró hacia el Chapare (Cochabamba), donde incursionó en la dirigencia sindical como Secretario de Deportes de su sindicato (1983), Secretario General (1985), Secretario Ejecutivo de la Federación del Trópico de Cochabamba (1988 ) y Presidente del Comité de Coordinación de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba desde 1996. Fue elegido Diputado uninominal por la circunscripción 27 del Chapare (1997). Sus acciones contestatarias contra el gobierno de H. Bánzer* motivó su desafuero y expulsión del Congreso Nacional en enero de 2002. Postuló nuevamente en elecciones generales de junio de ese año, con el ‘Movimiento al Socialismo’ (MAS), en las que logró el apoyo de 581.884 votos, con los que obtuvo 36 congresistas, “expresión viva de la Bolivia multicultural y pluriétnica”. El 2003 lideró la resistencia de los movimientos sociales a sistémicos contra el gobierno de G. Sánchez de Lozada*, logrando su renuncia al Congreso y posterior huida del país rumbo a EE.UU. Con las elecciones municipales de diciembre de 2004, su partido se convirtió en la primera fuerza política del país. Los gobiernos neoliberales le acusaron de “terrorista”, “guerrillero” y “narcotraficante”, desatando una campaña de satanización, criminalización y penalización de los movimientos sociales y de los cocaleros. En

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las elecciones generales del 18 de diciembre de 2005, obtuvo el 53.7 por ciento de los votos y se convirtió en el primer presidente indígena de Bolivia y América Latina. Su gobierno nacionalizó los hidrocarburos, convocó a la Asamblea Constituyente (2006) que redactó la nueva Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, promulgada el 7 de febrero de 2009, que creó el Estado Plurinacional con Autonomías. La carta magna incorporó en su texto avanzados principios referidos a los archivos y documentos públicos, como el derecho de acceso a la información de forma libre, el remozado derecho de petición, la obligación de los servidores públicos de custodiar e inventariar los documentos propios de la función pública, prohibiendo sustraerlos y/o destruirlos, así como el de guardar secreto de las informaciones reservadas; un moderno y descentralizado régimen referido al patrimonio documental del Estado, con competencias exclusivas y compartidas a nivel central del Estado, Departamental y Municipal, para el desarrollo y sostenimiento de archivos, bibliotecas y museos; determinando atribuciones a las universidades para la investigación científica, y el de promover el rescate y registro de los saberes y conocimientos de los pueblos indígena originario campesinos, a los que incorpora con reconocimiento pleno de sus derechos. Entre 2006 y 2012 promulgó 71 leyes referidas al patrimonio cultural (tangible e intangible) y el fomento de turismo, de las cuales, tres disponen la creación de museos, dos de bibliotecas, una referida a la identificación de espacios para el reconocimiento a la memoria de los Líderes, Héroes y Próceres Indígenas Originarios Campesinos y Afrobolivianos del Estado Plurinacional de Bolivia, y tres de archivos históricos en los Municipios del Departamento de Tarija (Ley Nº 3405, 23 de mayo de 2006); el Museo y Archivo Histórico y Universitario del Departamento de Tarija (Ley Nº 3807, 24 de diciembre de 2007) y el Archivo Histórico Institucional del Departamento de Potosí. Fuente: Gaceta Oficial de Bolivia, 2006-2012; http://www.presidencia.gob.bo (19.7.12); http:// es.wikipedia.org (19.7.12).

MORALES BELLIDO, HUGO BERNARDO (Potosí, 4 de diciembre de 1957)

Licenciado en Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA), con Diplomados en Gestión Universitaria; Educación Superior y Gestión de la Información y la Documentación en las Organizaciones (UMSA). Jefe de la División de Documentos y Archivos de la Universidad Mayor de San Andrés. Ha sido Presidente del Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia (CPCIB)* (2005-2010) y Docente de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información (1998-2006). Asimismo ha dictado cursos de capacitación y actualización a los trabajadores de la información en el país. Ha fundado y dirigido la Red Boliviana de Información en Ciencias de la Salud (REBICS), perteneciente a la Red Latinoamericana liderizada por BIREME, experiencia que volcó en su tesis de licenciatura con una propuesta innovadora titulada Análisis de la estructura de información en ciencias de la salud (en el eje central del país) (1999). Como representante Nacional del Centro Coordinador de Bolivia, firmó la Declaración de San José “Hacia la Biblioteca Virtual en Salud” Proyecto de BIREME, aprobado en la VI Reunión del Sistema Latinoamericano y del

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Caribe de Información en Ciencias de la Salud, y el IV Congreso Panamericano de Información en Ciencias de la Salud (San José, Costa Rica, 23-27 de marzo de 1998). Ha organizado cuatro Congresos Internacionales de Bibliotecología, Documentación y Archivística CIBDA (2003, 2005, 2007 y 2009), con bastante éxito y asistencia de varios países. Fue Supervisor del Área de Ciencia y Tecnología de la UMSA, ocasión en la que dirigió la Comisión Técnica del Sistema de Unidades de Información de la UMSA, siendo coautor del texto Manual para la automatización de información en el Sistema de Unidades de Información de la UMSA (2001). Ha participado en diferentes eventos internacionales en Brasil, Chile, México, Argentina, Estados Unidos, Costa Rica, siendo el más importante la Conferencia Pre-Cumbre. Libraries @ the Heart of the Information Society, preparatoria para la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información, realizada en Ginebra Suiza (noviembre de 2003), organizada por la IFLA (International Federation of Library Associations). Tiene artículos sobre Bibliotecas y Bibliotecología, que están indizados en IRALIS (International Registry for Authors) www.iralis.org y E-LIS E-prints in Library and Information Science http://eprints.rclis.org (2006). Publicaciones archivísticas: “El Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia C.P.C.I.B en la sociedad” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2001, 6 (9): 109-112; “Informe de gestión del Presidente del Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia” (Fuentes, Revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, 2010, N° 9: 45-53); “Automatización de procesos en la división de documentos y archivo de la Universidad Mayor de San Andrés”, con Sandra Soliz (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2006, 10 (15): 27-30). Fuente: CV.

MORALES QUISBERT, MARY HEBERLIN (La Paz, 3 de septiembre de 1988)

Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Ha trabajado como pasante en el Centro de Investigación Documental de la Mujer “Adela Zamudio”, en el archivo de Kardex de la Carrera de Medicina y colaboró como auxiliar del Archivo Central de la UMSA. Trabajó como Asistente en el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* en la ciudad de El Alto (2011). Fuente: CV.

MORALES Y SANCHEZ-TAGLE, ADOLFO DE (Cochabamba, 1911. † 1993)

Genealogista, poeta y archivista. Fue colaborador de la revista Kollasuyo; Agregado cultural en las embajadas de Madrid y Buenos Aires; Director del Museo Nacional de Arte y del Museo Histórico Militar; fundador de Instituto de Investigaciones Históricas de La Paz y del Instituto Genealógico Boliviano (actual Academia Boliviana de Ciencias Heráldicas y Genealógicas). Muy joven, según relata J. Siles*, se interesó por la genealogía, levantando datos en las parroquias de Cochabamba, La Paz, Potosí, Tupiza, logrando reunir el material básico para un Nobiliario de de la Audiencia de Charcas, obteniendo el apoyo económico de C.V. Aramayo*. “La edición alcanzó

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a tirar casi todas las pruebas de galera pero vino la revolución de 1952 y la edición quedó en nada”, refirió Morales en una entrevista que le hizo J. Siles. Entre 1950 y 1958, trabajó investigando en los archivos de Indias de Sevilla, el Archivo Histórico de Madrid; el Archivo del Conde de Guaqui (Goyeneche); la Biblioteca de Menéndez y Pelayo, en Santander, donde está el Archivo del Virrey Joaquín de la Pezuela. Para ello hizo un curso de Catalogación de Manuscritos y otro sobre Paleografía. Tomó notas de los datos, en cuadernos y fichas, de la Lista de pasajeros de Indias al Perú (s. XVI a 1800); de la Bula ereccional de la Universidad de San Francisco Xavier; las Ordenanzas referentes a Oruro; Probanzas de méritos de Antequera, Peranzurez de Campo Redondo, Mendoza, Castro de Padilla; fundación de ciudades; rebeliones de Oruro, s. XVII; documentos eclesiásticos del siglo XVI; entradas de conquistadores; y las cinco rebeliones del siglo XVI en Charcas. Cuantificó las existencias del Archivo de Indias, organizado “en 14 secciones, y un total de 35.796 legajos, con un término medio de cien expedientes cada uno, o lo que es lo mismo con un acervo de 3.579.000 expedientes, la mayor parte voluminosos”, que luego lo presentó como Discurso de Ingreso a la Academia Boliviana de Historia (junio de 1985). Trabajó en el Archivo Histórico Municipal de Cochabamba (década del 70), apoyando las tareas del director de ese repositorio, E. Ocampo*. Publicaciones archivísticas: Archivos. Cursos de Cultura de Invierno (La Paz, MEC, 1960); “El archivo histórico de Cochabamba” (Boletín del Archivo de La Paz, 1976, 1 (2): 21-26); “Breves consideraciones sobre los documentos que nos faltan conocer de la verdadera historia de la Época de Dominación Española en Bolivia a través de los fondos documentales que se conservan en los Archivos españoles y muy principalmente en el Archivo General de Indias de Sevilla en su sección denominada Audiencia de Charcas” (Khana, Revista Municipal de Arte y Letras, 1955, 3 (2): 140-146); “Catálogo de pasajeros al Reino del Perú desde 1560” (Revista del Instituto Peruano de Investigaciones Genealógicas, 1954, 6, 7 y 8); “Los fondos socioeconómicos y demográficos del Archivo de Cochabamba”. Relato del punto Nº 3 del Temario (Tercera Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Cochabamba: Centro Portales, 1983); “Documentos inéditos sobre el fundador de La Paz” (Presencia Literaria, La Paz, 28 de octubre de 1984: 1); “Noticias esquemáticas sobre los Archivos y la Casa de contratación de Sevilla” (Anales de la Academia Boliviana de Historia, 1995: 35-42). Fuente: Barnadas, 2002: II, 289; Oporto, 2006; Siles, 1974: 3.

MORENO RIVERO, GABRIEL RENÉ

(San Lorenzo de la Barranca, Santa Cruz, 7 de noviembre de 1836. † Valparaíso, Chile, 28 de abril de 1908) Estudió en colegios de Santa Cruz de la Sierra, y el Colegio “Junín” de Sucre. Bachiller en Letras, Estudios Superiores y Humanidades en el Colegio “San Luis” y en el Instituto Nacional de Santiago de Chile. Bachiller en Filosofía en 1858. Abogado, graduado en la Universidad Nacional de Chile (1868). Escritor, bibliógrafo, erudito, historiador, periodista, sociólogo, biógrafo, ensayista, crítico literario y papelista (archivista). Fue catedrático de Aritmética y de Historia de América; Profesor del Colegio “San Luis”; director interino de la Biblioteca Nacional de Chile (1868), y luego titular (1869, 1883); catedrático de Literatura preceptiva en el Instituto Nacional de Chile (desde 1883 hasta su muerte). Secretario ad honorem de la Legación de Bolivia en Chile (1873-1874). Redactor y colaborador de la Revista Chilena, Revista del Pacífico, Revista de Artes y Letras, Anales de la Universidad, El Mercurio y El Imparcial.

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Fundador y Presidente de la Academia Literaria (Academia Chilena de la Lengua); Miembro fundador del Círculo “Amigos de las Letras”; socio de varias instituciones y cenáculos literarios de Chile. Investigó los documentos coloniales, libros, folletos, papeles de los archivos y bibliotecas de Sucre, Santiago de Chile, Buenos Aires y Lima. Viajó por América y Europa por cerca de cuatro años, con fines de estudio e investigación histórica.

Su trabajo bibliográfico fue monumental, al igual que el archivístico, pues recogió todo cuanto pudo referido a la historia patria. Acopió y sistematizó los impresos bolivianos, con los que publicó obras fundamentales: Proyecto de una estadística bibliográfica de la Tipografía boliviana (Santiago, Imprenta del Mercurio, 1874), y la Biblioteca Boliviana. Catálogo de la Sección de Libros y Folletos (Santiago de Chile, Imprenta Gutenberg, 1879), con su Primer Suplemento a la Biblioteca Boliviana. Epítome de un Catálogo de Libros y Folletos, 1879-1899 (Santiago de Chile, Imprenta Barcelona, 1900), y Segundo Suplemento a la Biblioteca Boliviana. Libros y Folletos, 19001908 (Santiago de Chile, Imprenta Universitaria, 1908), además del Ensayo de una Bibliografía General de los periódicos de Bolivia, 1825-1905 (Santiago de Chile, Imprenta Universo, 1905). Asimismo acopió todo tipo de fuentes, incluyendo la copia a mano de documentos oficiales. Últimos días coloniales en el Alto Perú (Santiago, Imprenta Cervantes, 1896), constituye un estudio clásico de la historiografía boliviana, al que le agregó los Documentos inéditos de 1808 y 1809 (Santiago, Imprenta Barcelona, 1901). Felizmente para la historia nacional, los impresos y manuscritos, junto a la colección de periódicos, fueron adquiridos por el Gobierno Nacional en 1909, remitiéndolos a la Biblioteca Nacional para su conservación y uso.

Como siempre lo hacía, una mañana llegó con sus escribientes a proseguir sus tareas en el viejo archivo colonial y en el del Estado. Grande fue su sorpresa al encontrar que “el palacio se había convertido en un cuartel inmundo; invadido por presos políticos y centinelas de vista”. Su descripción es escandalosa: “El cuarto de las alacenas servía de calabozo al reo cabecilla de una conspiración, descubierta in fraganti esa noche”. Moreno suspendió su trabajo y planteó que el archivo fuese sacado de aquel paraje, lo que consiguió sin mucha dificultad. “El archivo fue trasladado en mantas y canastos a la biblioteca pública, donde ahora yacen los archivos de la Audiencia de Charcas”, refiere R. Arze*. En 1876 denunció que el Archivo de Mojos y Chiquitos* fue arrojado mayestáticamente a una “covacha y un cuarto oscuros que tienen a la vez de noria y de aljibe…”. Su testimonio es aterrador: “…penetré un día con cuatro empleados del ministerio en aquel nauseabundo y mortífero recinto. El aire estaba saturado de una humedad helada y penetrante que acabó por alterar la salud de todos los que entramos y hubo de costar la vida de uno de los empleados. Junto a las resumidas paredes había grandes legajos y libros sobre una tosca armazón desvensijada, sobre una caja antigua y sobre el hueco de una ventana. El suelo estaba cubierto de revueltos manuscritos hacia la altura de un decímetro. Al remover aquella masa en perfecto estado de putrefacción, se exhalaba un hedor insoportable, y brotaban a millares los insectos y roedores. Alcé del lomo un expediente al parecer en buen estado, y cedieron deshaciéndose sus hojas anteriores y posteriores”. “¡Era el cuaderno número primero con las cuentas documentadas de la revolución de 1809!”, acota G. Ovando*. Para evitar su destrucción, seleccionó durante ocho días, llevándose a lomo de mula, los documentos de lo que hoy es el

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Archivo de Mojos y Chiquitos hasta Antofagasta, todavía entonces puerto boliviano, y desde allí por barco con dirección a Valparaíso y en ferrocarril a Santiago (Ovando, 1996: 110). Posteriormente, este Archivo fue ordenado, descrito y catalogado para su repatriación a Bolivia. En base a esas dolorosas experiencias, Moreno empezó a plantear la idea de un Archivo General de la Nación, comprendido como el repositorio oficial de la documentación colonial y republicana. Efectivamente, la evolución de la historia del Archivo Nacional de Bolivia se asemeja, en parte, al lento desarrollo que ha experimentado la archivística en otros países. En el caso de Bolivia, la organización del repositorio oficial del Estado se concreta recién a finales del siglo XIX, cuando se logra constituir el Archivo General de la Nación (1883), fusionándose posteriormente con la Biblioteca Nacional para formar un servicio unificado (1936), que viene a ser el único ejemplo en su género. Los antecedentes de creación del Archivo Nacional de Bolivia se remontan precisamente a la hazaña archivística de Gabriel René Moreno, quien se fijó como misión la recolección exhaustiva de la documentación colonial y republicana de importancia histórica para el país. Entre 1874 y 1875, levantó un minucioso censo archivístico en la capital de la República, identificando los diezmados archivos coloniales, a la par de los malhadados archivos de la Guerra de la Independencia y la desgraciada suerte de los archivos republicanos, de manera que vislumbra las causas de la destrucción documental. En su dramático informe acuñó el concepto de archivo como “el paraje donde yacen hacinados los que fueron en un tiempo archivos, o la gran bodega por excelencia de papeles coloniales”; construyó la célebre frase que expresa la importancia de la memoria escrita: “si el dinero es el nervio de la guerra, bien pudiera añadirse que las cuentas son el nervio de la verdad histórica”. Caracterizó la falta de conciencia de la sociedad ilustrada como “el sublime desdén boliviano”; y jerarquizó como causas principales de la destrucción, “a la violencia transitoria y con arrepentimiento de los militares” y “el poder del Ancucu, que se comió lo esencial de la memoria colonial”, como sostiene en su informe. Al término de aquel tremendo recuento de los daños, desafió a la clase ilustrada y al Gobierno afirmando magistralmente, en 1876: “se equivoca mayestáticamente el soberbio desdén boliviano, si cree que aquí se está abogando por la formación del gran archivo nacional. Dios libre al suscrito de caer con ludibrio en tamaña extravagancia, por más que la hora sea oportuna para la empresa”. Al mismo tiempo, lanzó nuevos dardos al centro mismo de la inteligencia criolla: “Un ministro que se llama Casimiro Corral y otro que se llama Daniel Calvo dieron dos pasos en este sentido que habrán de ser del todo perdidos sin la urgente cooperación de un tercero que viniese a completar la obra”. El ministro de Justicia, Instrucción y Culto, D. Calvo*, instruyó el traslado de los documentos del Poder Judicial a la Biblioteca Pública. Moreno protagonizó la primera misión de salvataje de documentación histórica de Bolivia. En 1876 publicó los resultados de su trabajo sobre la situación de los archivos públicos (el primer censo de archivos en Sucre), proponiendo su célebre plan de siete puntos para la organización del Archivo General de la Nación. El proyecto archivístico de Gabriel René Moreno, consistía en siete medidas necesarias para “la ejecución de un acto breve, fácil y

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barato: poner en salvo los restos de los archivos históricos contra el despilfarro y el aniquilamiento”: 1. Que se destine en Sucre, para depósito de manuscritos históricos de la República, una sala especial, bien segura y seca; bajo custodia, si es posible. La capilla interna de Junín, cerrada desde hace treinta años, pudiera servir para el objeto a falta de otro local, sugiere. 2. Que allí se junten y acomoden en el mejor orden material, no tocando el suelo y sin confusión de procedencias, los archivos mencionados en este escrito. 3. Que a ellos se alleguen todos los papeles, registros y libros que en las oficinas públicas de los Departamentos se viere que corresponden a la época colonial, o sean pertenecientes a los Gobierno-intendencias, Reales Cajas de La Paz, Cochabamba, Potosí, pudiendo, empero, quedar en la respectiva localidad los archivos de su cabildo, curia y escribanías. 4. Que al depósito general se trasladen todos los expedientes y papeles del fuero de minería colonial, arrumbados en alguna oficina de Potosí; prescripción que debe extenderse a los libros y papeles del banco de rescates, casa de moneda y otros establecimientos nacionales en la misma época. 5. Que en la forma especificativa más conciliable con la facilidad de estas medidas se levanten inventarios de los de diversos legajos que se formaren del depósito general; y que, por el funcionario a cuyo cargo corra dicho depósito, se lleve un libro donde se vayan anotando los donativos de manuscritos históricos que en adelante se hicieren. 6. Que se sienten a favor del depósito cortapisas precautorias y sanciones penales contra el abuso de autoridades, ya muy aceptado allá, de sacar piezas de los archivos a título de ministro, diputado, y/o socapa del servicio público, y que se obligue al particular que necesitare un documento, a sacar copia en el local mismo y bajo custodia, como es de uso común fuera de Bolivia en establecimientos de esta especie. 7. Sería por ahora regla que este depósito esté siempre cerrado y a cargo o bajo la vigilancia de un funcionario superior de otra oficina activa, el cual podrá diputar con calidad de custodio, para el caso muy raro de consulta, copia o de muy calificada y responsable sustracción de pieza, a un empleado de su dependencia y confianza. En todo caso se procederá dejando constancia de cualquiera operación o acto verificado en el depósito. Se puede afirmar que Moreno desarrolló una política integral para el tratamiento de los documentos públicos oficiales, sin descuidar el mínimo detalle. Allí ya se perfila el Archivo General, sobre la base de la documentación colonial, plantea la organización de los fondos de archivo aplicando el respeto al principio de procedencia, enuncia criterios sobre el tratamiento a las documentaciones de carácter nacional, departamental y local, el método de control de las transferencias, la responsabilidad

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funcionaria por la custodia de la documentación, los servicios de consulta, saca y de tipo fedatario. Sin duda, constituye el antecedente inmediato de creación del Archivo Nacional, desafío que recoge el diputado Demetrio Calvimontes*, en 1882, presentándolo al Congreso para su sanción, hecho que se produjo el 18 de octubre de 1883. Calvimontes fue el tercero al que hacía mención Moreno. R. Arze afirma que Moreno “merece ser considerado como el custodio número uno de la memoria del país y como el creador intelectual del Archivo Nacional de Bolivia, repositorio que fue fundado en la ciudad de Sucre en 1883”. No fue el único archivo que logró salvar, pues arremetió con la misma tenacidad para recuperar el invaluable Archivo de Mojos y Chiquitos, hazaña de dimensiones colosales, pues organizó, ordenó y catalogó los 41 tomos del Archivo, contratando personal con su propio peculio y mandó imprimir el monumental Catálogo de Mojos y Chiquitos, al tipógrafo Nicolás Anrique, propietario de la Imprenta Gutenberg, en Santiago, en diciembre de 1888. Publicaciones archivísticas: “Los archivos históricos de la capital de Bolivia” (Revista Chilena, Vol. 6, Santiago de Chile, 1876: 111-141; reproducido en el Boletín de la Sociedad Geográfica de Sucre, 1927, N° 279-282: 53-83; en su Estudios de Literatura Boliviana. Parte Segunda. Potosí, Editorial Potosí, 1956: 47-89; La Paz, Juventud, 1989: 33-60); Biblioteca Boliviana. Catálogo del Archivo de Mojos y Chiquitos (Santiago de Chile, Imprenta Gutenberg, 1888; La Paz, Juventud, 1973). Fuente: Arze, 1996; I: 163-165; Arze Aguirre, 1986:161-165; Costa de la Torre, 1968: 718-723; Moreno, 1927: 69, 81-83; Moreno, 1973: 522; Oporto, 2006: 147, 203-205; Oporto, 2011e: 51-53; Ovando, 1996: 109.

MORENO MENACHO, DILZA

(San José de Chiquitos, Santa Cruz, 21 de enero de 1960) Secretaria Ejecutiva Bilingüe. Egresada de la Carrera de Idiomas (UEB). Hizo la Carrera de Técnico Superior en Bibliotecología* impartido por el Instituto “Josefina Bálsamo” y la Universidad Gabriel René Moreno (2009). Ha realizado el Diplomado en Gestión de la Información y Automatización de Bibliotecas UAGRM (2009). Participó en el curso de Actualización de Archivos (2005), Conservación preventiva y restauración de documentos en Archivos y Bibliotecas (2005), Taller de Archivística UAGRM (2006), Norma ISO, su aplicación en bibliotecas y centros de documentación (2007), Organización y Manejo de Archivos Empresariales (2007), Curso Gestión Documental (2008), Manejo de Archivos de Oficina y su Trascendencia a la Gestión de Información, CAINCO (2009). Asistió al Taller Departamental sobre el Proyecto de “Ley del Sistema Nacional de Archivos” y al V Congreso Internacional Bibliotecología, Documentación y Archivística (2009). Se desempeñó como Secretaria de Gerencia Administrativa y Financiera de la Cooperativa de Servicios Públicos de Santa Cruz, SAGUAPAC (1981-1992), siendo ascendida a Jefe del Archivo Central desde 1992. Precisamente a su labor se debe la creación del Archivo Central de esa institución. Atendiendo una solicitud del Cap. Alfonso Siles ha elaborado el Diagnóstico y sugerencias para el Archivo de Identificación de Santa Cruz (2007) y para el Tcnl. José Villarroel, el Diagnóstico y sugerencias para el Archivo de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico FELCN, Santa Cruz (2008). Fuente: Comunicación personal (14.06.10)

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MORICIO CHOQUE, DANIEL

(Chapipata, Morros, Territorio Uru, isla del Lago Poopó, Oruro, 1920) Sucesor de L. Miranda*. Fue el primer líder del pueblo indígena Uru-Murato que empezó a usar por primera vez el nombre de “Grupo étnico Uru-Murato”, como una estrategia meditada para el reconocimiento de antigüedad de sus derechos sobre tierra y territorio. Como apoderado de su comunidad llevó a cabo permanentes gestiones para garantizar los derechos de ese pueblo indígena. La memoria histórica de Daniel Moricio nos retrotrae a tiempos remotos en los que su pueblo “no conocía gente,...estaba tribu”, según refiere en su testimonio autobiográfico recopilado por R. Barragán*. Describe la crisis producida por la gran sequía de 1937 (aquella que fuera ampliamente documentada por Jean Vellard en registros fotográficos) a raíz de la cual se dispersó en nueve grupos, como extrema estrategia de supervivencia. Su memoria conservó valiosa información relativa a la actitud de los Uru-Muratos sobre la guerra del Chaco, habiendo solicitado amparo, ante la conscripción inminente. El argumento para eximirse de esa obligación era que los Uru-Muratos “no tienen ninguna clase de culpables, no saben abusarse, entonces de que van a ir...”. Su relato sobre la transición al idioma castellano es sugerente, pues paradójicamente había aprendido a escribir siendo reservista en un cuartel altiplánico. Indudablemente la influencia de la vida de cuartel era crucial en las transformaciones de los indígenas que llegaban hasta esos recintos. De esa manera Moricio pensó haberse habilitado para enseñar como maestro en la escuela Uru-Murato, donde fuera primer maestro L. Miranda, quien verdaderamente lo introdujo en las artes gramaticales y el dominio relativo de aquel idioma, extraño pero vital para el relacionamiento con la institucionalidad estatal. Como depositario de la historia larga y la historia corta de los Uru-Muratos, Daniel Moricio, se convierte en uno de los ejemplos más connotados de los narradores orales de la historia comunitaria. R. Barragán logró rescatar su memoria de vida entre 1987 y 1992 en una serie de entrevistas biográficas, por medio de las cuales pretendía reconstruir la historia de los Uru-Muratos. Al margen de la investigación, logró gestionar ante el Centro de Desarrollo Pesquero, un permiso para la comercialización de sus productos, con el apoyo de Ramiro Molina Rivero (ex secretario Nacional de Pueblos Indígenas durante el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada y director del Museo Nacional de Etnografía y Folklore* en el gobierno de Evo Morales). Moricio fue secretario general de los Uru-Muratos desde 1955 hasta 1992. “Tengo muchos documentos. Ya pues estoy dejando una historia y yo he luchado mucho tiempo y esto no va a morir. Voy a dejar a un depósito y ellos buscarán eso. Por eso yo dejo esa mi historia que no se pierda lo que he hecho un esfuerzo para colaborar y defender a mis hermanos que somos pobres”. En 1993, el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas*, lo declaró Archivo viviente comunitario de ese pueblo indígena. Fuente: Oporto, 1993: 35-36: Barragán, 1992: 17-18.

MOSCOSO, ÁNGEL MARIANO (La Paz, 1789. † Sucre, 1846)

Político. Cursó estudios de Derecho en la Uni­versidad de San Francisco Xavier (1809). Se matricu­ló en la Real Academia Carolina de Practican­tes Juristas (1812). Junto a sus

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hermanos José Eustaquio, José Antonio y Rudesindo, formó parte del grupo afín a Casimiro Olañeta. Como diputado de la Asamblea de Representantes, abogó por la independencia de Charcas, tanto del Perú como del Río de la Plata. El 10 de julio de 1825 fue designado junto a J.I. Sanjinés* Secretario de la Asamblea, siendo estos los primeros archivistas oficiales de la naciente república. El 21 de julio se nombró como Secretario Redactor de Actas a M.M. Urcullu*. Estos secretarios tuvieron a su cargo la responsabilidad de organizar el Archivo del Congreso de Bolivia, que en esa época ocupaba los claustros de la antigua Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca y recibió como herencia forzada los documentos de la Audiencia de Charcas. El método de trabajo era muy simple pero efectivo, en primer lugar los secretarios redactores tomaban notas de las sesiones públicas y secretas, luego los parlamentarios les entregaban copias escritas de sus discursos para la transcripción a las actas y la publicación de los Redactores. Los secretarios tenían a su cargo tres redactores de planta, es decir un oficial primero, dos oficiales auxiliares y un portero Su función consistía en “arreglar el archivo, poner corrientes los libros, vigilar la impresión de El Redactor, ordenar las actas, mantener la correspondencia oficial y tomar todas las disposiciones concernientes”. Los redactores de planta tenían la obligación de “estender las actas de las sesiones que deberán comprender una relación clara y breve de cuanto se haya tratado y resuelto en cada sesión. Tenían a su cargo la dirección de la secretaría y los archivos de la Asamblea que se regía internamente en base a un reglamento particular. El personal de la Secretaría era apoyado por un número de escribientes”. Fue nom­brado Juez de 1ª Instancia de La Plata y de la Prov. de Yamparáez (1826) y según Barnadas “parece que en 1828 estuvo del lado de quienes urdieron la sedición contra el Presidente A.J. de Sucre*”. Murió desempe­ñando la Fiscalía de la Corte Suprema. Fuente: Barnadas, 2002; Congreso Nacional, 1926; Congreso Nacional, 1927; Cordero Carrafa, 2002; Oporto, 2006.

MUJICA BLANCO, FELICIDAD (La Paz, julio de 1976)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Fue Auxiliar del Archivo de La Paz* y trabajó en diversas consultorías en los archivos del Banco Central de Bolivia*.

MUÑOZ, JUAN BAUTISTA

(Museros, Valencia, España, 1745. † Valencia, 1799) Fue Cosmógrafo Mayor de Indias. El Rey le ordenó escribir una Historia del Nuevo Mundo, en 1799, “con la idea de dar adecuada respuesta a las obras detractoras de la colonización española escritas por el Abate Raynal (Amsterdam 1770) y Guillermo Robertson (Londres, 1777), con una obra bien documentada, que deshiciera falsedades y equívocos”. Para ese fin surgió el proyecto de creación del Archivo General de Indias*, encomendado a J. Gálvez* y ejecutado por J.B. Muñoz. En su labor reunió importante colección de fuenes documentales con las que escribió su Historia del Nuevo Mundo, de la que se publicó un solo tomo. Legó su archivo al rey, que lo mandó ordenar en 1799. En 1817 la mayor parte de su archivo se envió a la Real Academia de la Historia. Fuente: España, MEC, 1996; es.wikipedia.org 29.5.12.

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MUÑOZ, MARIANO DONATO

(Sucre, 12 de diciembre de 1823. † La Paz, 20 de octubre de 1894) Abogado en Bolivia (1844) y en Perú (1858). Laureado con el grado de Doctor en Derecho y Ciencias Políticas por la Universidad de San Francisco Xavier. Miembro numerario de la Universidad de Sucre y Honorario de la Facultad de Leyes y Ciencias Políticas de la de Santiago de Chile (1866). Tuvo una notable trayectoria, ocupando cargo de profesor de Gramática Castellana, Inspector de Liceos, Delegado de la Universidad, Censor de la Academia de Práctica Forense, Redactor de las Actas del Congreso de 1848; Inspector de Instrucción Primaria y Oficial Mayor de Instrucción Pública en Cochabamba, Auditor de Guerra del Ejército, Vocal y Presidente de la Corte Superior de Cochabamba, Diputado por Chuquisaca y el Departamento de Litoral, Senador y Vicepresidente del Senado, antes de que Melgarejo tomara el poder, lo que es una muestra de su notable habilidad y preparación. Fue temido Secretario General de Estado y Ministro de Relaciones Exteriores del gobierno del Gral. Mariano Melgarejo, habiendo suscrito en esa condición, junto al Ministro Plenipotenciario de Brasil Felippe Lopes Netto, el Tratado de Límites con el Brasil, el 27 de marzo de 1867. Se le acusa de corresponsabilidad por los desmanes ocasionados en el régimen de Melgarejo. Su faceta archivista es sorprendente, pues ya fuera del gobierno fue contratado por el Embajador del Perú en Bolivia, Sr. Bueno, para arreglar el Archivo de la Legación Peruana en La Paz. Con ayuda de un buen carpintero acomodó los archivos en tres baúles, con chapas en buen estado, cerrados y sellados, remitiéndolos al Viceconsulado de La Paz, a cargo de Juan de la Cruz Lizárraga, quien los entregó de la misma manera al nuevo Embajador. Entre los documentos de ese Archivo se encontraba el autógrafo del Tratado Defensivo celebrado entre Perú y Bolivia el 6 de febrero de 1873. No obstante, se sabe que luego, el Archivo se desordenó, como se constató en febrero de 1879, cuando ante la emergencia suscitada por la Guerra con Chile, el Embajador del Perú en Bolivia J.J. Quiñones pidió al archivo el texto del Tratado. “Ante el requerimiento todos los empleados lo han buscado con escrupulosidad hasta haber adquirido la convicción de que realmente no existía”. Frente a esta situación el Embajador pidió una copia al Gobierno de Bolivia y otra auténtica a Lima. Otro aporte singular de Muñoz es la publicación de dos obras capitales. La primera Memoria presentada por el Ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores a las Cámaras de 1870, que fue escrito en 1868, está referida a la administración interior (1864-1868), es decir a la seguridad interior y al régimen de gobierno; y a la política internacional. Se trata de la reunión de los documentos más importantes sobre el gobierno de Mariano Melgarejo, entre los que destacan los de la política agraria (una reforma agraria para favorecer al latifundio), obras viales (propuesta Haviland para la carretera La Paz-Cochabamba), habilitación y poblamiento del puerto de Mejillones, creación del Departamento de Tarata, etc. En política internacional trascribe el Tratado de Alianza contra España, la Guerra de la Triple Alianza, los tratados de límites y documentos sobre la navegación del Amazonas. La segunda obra es la edición de la Memoria de Casimiro Corral* a la Asamblea Constituyente de 1871, que no figura en los catálogos bolivianos y parece ser mas bien una reimpresión de los Actos administrativos del gobierno provisorio, durante la Secretaría General dirigida por el Doctor Casimiro Corral. Comprende los actos

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desde el 26 de noviembre de 1870 hasta el 15 de enero de 1871, que incluye en anexo, el Mensaje del presidente provisorio Agustín Morales a la Asamblea Constituyente de 1871. Fuente: Ahumada, 1884-1886, II: 8; Oporto, 1994: 7; Oporto, 2006: 149; Oporto, 2006b: 62-63, 102; Poder Ejecutivo, s.f.; Ascarrunz, 1920.

MURILLO MAYORGA, LIZETH BÁRBARA (La Paz, 4 de diciembre de 1984)

Licenciada en Bibliotecología y Archivología (UMSA). Trabajó en el Archivo de Kardex de la Facultad Técnica UMSA (2007), fue Auxiliar de Biblioteca y Archivo (2007-2008) y del Archivo de Contabilidad (2008-2009) del Centro Psicopedagógico y de Investigación en Educación Superior UMSA, Auxiliar del Archivo de Postgrado de Medicina (2008-2010), Verificadora de la Colección de Fotografías de Última Hora en el Archivo de La Paz* (2011). Fue contratada como Técnico del Archivo Regional de Oruro de la COMIBOL* (2012). Fuente: CV.

MURILLO MENDOZA, MAX RAÚL

(Catavi, Provincia Bustillo, Potosí, 26 de marzo de 1963) Licenciado en Historia (UMSA). Estudió el bachillerato en el célebre Colegio jesuita “Juan XXIII”, de la ciudad de Cochabamba, donde se forjaron muchos líderes progresistas. Fue Director de Estudios de esa institución en 1992 y 1995. Tiene importante trayectoria en investigación histórica y social. Trabajó como encuestador del Instituto Nacional de Estadísticas (1983-1985), Extensionista del Centro de Teología Popular y del Instituto de Historia Social Boliviana (1985-1987), Director del Instituto “Jesús Obrero”, en El Alto (1987-1988), ayudante de investigaciones en el Instituto de Investigaciones Históricas y Estudios Bolivianos UMSA (19901991), consultor de Participación Popular en el Chapare, Cochabamba (1996-1997), consultor del proyecto de Reforma Educativa para el Ministerio de Educación (19982001). Desde 2001 es director ejecutivo de la ONG “K’anchay”, desde donde impulsa proyectos educativos y de desarrollo rural, sobre todo en el Chapare, el valle de Cochabamba y el Norte de Potosí. Experto en monitoreo y evaluación de proyectos sociales. Escribe frecuentemente en las listas de la Internet sobre temas de desarrollo rural, educación, producción agraria, salud, historia y política. Miembro fundador del Instrumento por la Soberanía de los Pueblos y del Instituto de Estudios Andinos y Amazónicos. En su faceta archivística participó en el equipo inicial que ordenó los archivos del Banco Central de Bolivia* (1988-1989), cuando sus documentos se hallaban depositados en un inmenso galpón, en la ciudad de El Alto, con papeles desde 1870. De allí pasó al Sistema de Información y Documentación Sindical (SIDIS), con una beca universitaria junto a un grupo de estudiantes, con el que organizó los documentos de los sindicatos mineros de Bolivia, en memorables jornadas de rescate, clasificación y ordenación, dirigida por E. Ramírez*de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia. Fuente: CV.

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MURILLO VACAREZA, JOSERMO

(Oruro, 27 de agosto de 1900. † Oruro, 17 de agosto de 1987) Doctor en Filosofía y Letras (Universidad de Buenos Aires). Profesor de Sociología y Derecho Indiano; fundador de la Facultad de Ciencias Económicas y del Instituto Politécnico. Rector de la Universidad Técnica de Oruro (1940-1942). Presidente de la Sociedad de Geografía e Historia, Sociedad Boliviana de Sociología (filial Oruro), del Grupo Tradición y del Comité Departamental de la UNESCO. Historiador interesado en la historia de los pueblos indígenas de Oruro. Ayudó personalmente a L. Miranda*, como “intermediario urbano que hace múltiples escritos, moviendo muchas veces sus influencias” en los trámites que realizaba ante las autoridades de esa ciudad. Continuó apoyando a su sucesor, D. Moricio*. Reunió un importante archivo relativo a la historia de Oruro y del pueblo indígena Uru-Murato, entre cuyos documentos se encontraba una copia de la Visita de venta y composición de tierras que otorgó el visitador José de la Vega Alvarado en 1646. Coleccionó, durante su existencia, tres bibliotecas. La primera fue donada en 1921 a la municipalidad de Oruro con un vasto material sobre literatura universal y producciones teatrales de principios del siglo XX. La segunda, que enriqueció hasta la década de los cincuenta sufrió pérdida irreparable a causa de la intervención de agentes políticos de esa época. La tercera es la que aún se conserva y fue enriquecida por sus nietos. J. Murillo ha conservado una valiosa fototeca con imágenes desde el siglo XIX hasta el XX, conformada por tarjetas de visita, fotografías de los Hnos. Murillo; postales y una considerable cantidad de negativos sobre viajes, actividades culturales y eventos desarrollados en el departamento de Oruro. Asimismo tiene una colección de recortes hemerográficos desde 1916 hasta 1987, colección que registra datos de actividades políticas, culturales, sociales y hechos de trascendencia histórica. Los recortes provienen de El Tiempo, El Industrial, La Patria, La Razón (primera época), El Diario, Presencia, Hoy, Última Hora y otros. Felizmente esta labor fue continuada por su hija Ammy Murillo y sus nietos. Asimismo, existe una mapoteca con referencias cartográficas del departamento de Oruro y el desarrollo urbanístico de esa ciudad, desde principios del siglo XX, y en menor cuantía, de otras ciudades del país. Organizó un archivo fotográfico sobre el Carnaval de Oruro, en el que recolectó fotografías desde fines del siglo XIX. Esta labor fue continuada por sus nietos. Fabrizio Cazorla* publicó varias de sus fotografías en la Revista Historias de Oruro. Fuente: Arze, 1984: 102; comunicación personal de Fabrizio Cazorla, marzo de 2012.

MUSEO NACIONAL DE ETNOGRAFÍA Y FOLKLORE (MUSEF) Fue creado el 27 de agosto de 1962 por el gobierno del presidente V. Paz Estenssoro*, como Museo de Arte Popular y Artesanías de Bolivia. Su primer director fue Luis Zeballos Miranda, quien trabajó junto a Julia E. Fortún. En 1974 fue reconocido como Museo Nacional de Etnografía y Folklore, siendo director el ceramista Hugo D. Ruiz, quien le dio notable impulso y modernizó su administración, gracias a sus conocimientos de etnografía adquiridos en el Centro de Estudios Etnográficos “Paul Coremans” de México D.F. En un alarde de modernismo apoyó el estudio del Uso Tradicional de la Coca para el Banco Mundial, dirigido por el antropólogo norteamericano William E. Carter y el boliviano Mauricico Mamani Pocoata (el

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primer antropólogo aymara de Bolivia). Los historiadores, el aymara R. Choque* y el norteamericano Philiph Parkerson, formaron parte del equipo de investigadores. Los resultados del estudio fueron considerados oficiales para los planes de control y erradicación de la coca durante el gobierno del dictador H. Bánzer S.* La fama del pequeño museo trascendió la frontera y pronto recibió apoyo de importantes investigadores como John V. Murra, Nathan Wachtell, Dr. Tomoeda, T. Saignes*, Martha Hardman, Tristan Platt, Olivia Harris, Xavier Albó, entre ellos. En el ámbito local, la élite que dominaba el mundo cultural calificó despectivamente al Musef como el “museo de los indios”, pues había contratado como investigadores de planta a intelectuales aymaras como el historiador R. Choque, el antropólogo Mauricio Mamani, el lingüista Juan de Dios Yapita. En las postrimerías del gobierno de Bánzer, el Musef se había convertido en un sitio que daba la palestra a líderes indígenas y opositores. Notable fue el seminario que organizó junto al Instituto Boliviano de Cultura en el que tuvo como expositor al marxista radical, jefe del MUPS, Neftal Viris, poco antes de ser asesinado por una patrulla militar durante el efímero y sangriento régimen del Cnl. Alberto Natush Busch. Durante la dictadura de L. García Meza, el Musef ofreció generoso asilo al pintor Diego Morales quien tuvo que vivir clandestino en los altillos de la casona del Marqués de Villaverde, apañado por el director H. Ruiz. En esa misma época, desafiando el férreo control que desde el Instituto Boliviano de Cultura se ejercía sobre las instituciones culturales, el Musef abrió sus puertas a las nacientes agrupaciones políticas indianistas que sesionaban en secreto en sus instalaciones. Por allí pasaron ideólogos como Constantino Lima, Fausto Reinaga, Sebastián Mamani, Ramón Conde, el Inka Waskar Choquehuanca, quienes en apariencia discutían temas folklóricos y exóticos cuando en realidad debatían propuestas ideológicas de los partidos indios. Su director, H.D. Ruiz sufrió delaciones del personal del Musef y fue encerrado en tres ocasiones en celdas de inteligencia del Estado. Por otra parte, el Musef tenía excelentes relaciones con sectores de la élite política que sirvieron como escudo para evitar el avasallamiento de la institución, que no solo gozaba de prestigio internacional, sino que recibía el apoyo del Banco Central de Bolivia* para su sostenimiento, junto a la Casa de la Moneda* y la Casa de la Libertad*. El Museo se había fundado con la donación que hizo el Dr. V. Paz Estenssoro de centenares de ponchos y tejidos ceremoniales que le fueron obsequiados durante sus visitas a las comunidades indígenas después de la firma del Decreto de Reforma Agraria, al entregar los primeros títulos ejecutoriales de propiedad comunitaria de la tierra. Posteriormente, gracias al financiamiento del Banco Central de Bolivia, logró adquirir valiosas colecciones etnográficas de pueblos indígenas. Fue el primer museo de Bolivia que montó espectaculares exposiciones sobre culturas y pueblos indígenas como los Ayoreo y Chipaya. En poco tiempo reunió testimonios de cultura material de 36 pueblos indígenas de Bolivia, desde el altiplano hasta el chaco, la amazonía y el oriente. Nuevas generaciones de antropólogos, historiadores, conservadores y sociólogos se incorporaron de forma paulatina: Ramiro Molina Barrios (el alto), Ramiro Molina

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Rivero (el chico), R. Barragán*, L. Oporto Ordóñez*, Luis Bredow, Álvaro Diez Astete, Roberto Santos, Roberto Fernández, Freddy Taboada y una larga lista. En 1982 el director Ruiz contrató a L. Oporto Ordóñez para dirigir la Biblioteca y el Archivo Etnológico. De inmediato la Biblioteca y Archivo puso en marcha el programa de Antropología de Urgencia, que tenía el propósito de registrar y documentar la vida cotidiana de los pueblos y organizaciones indígenas. El programa ejecutó 159 misiones de antropología de urgencia, con los que levantó registros orales y audiovisuales de congresos indianistas, campesinos y obreros; así como fiestas tradicionales, relevamientos etnográficos y entrevistas a líderes indígenas, con los que formó un formidable archivo integrado etnológico, el único en su género en el país, conformado por registros magnetofónicos, audiovisuales, fotográficos y documentales. Adquirió el Archivo fotográfico de D. Ayma Zepita*, un fotógrafo rural trajinante del altiplano de Oruro. El programa fue cerrado en 1996, cambiando su política a una de carácter museológico, ampliando su oferta museográfica, con nuevos servicios, en base a los archivos etnográficos que fueron acumulados entre 1982 y 1995. Los directores que sucedieron a H.D. Ruiz, la arquitecta Elizabet Torres y Ramiro Molina Rivero lograron ampliar sus instalaciones, con la construcción de un moderno edificio destinado a las salas museológicas, el departamento de Investigación, la Biblioteca, los Archivos Etnológicos, el Laboratorio de Conservación, una tienda de souvenirs y un restaurante de la cadena Angelo’s de La Paz. Actualmente el Musef vende sus servicios, con los que autofinancia algunas de sus actividades. En 1993 (25 de noviembre) fue reconocido con un Diploma en mérito al “Servicio Documental” por el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas* Fuente: Ruiz, et al., 1987.

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N NAVA LÓPEZ, ANA MARÍA (Sucre, 13 de mayo de 1960)

Estudió en el Instituto Profesional “Aurora Rossells”. Egresó como Técnico Medio Universitario en Bibliotecología de la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca, en convenio con la Universidad Mayor de San Andrés. Trabaja desde 1986 en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, donde desempeña funciones de procesos técnicos, elaborando instrumentos descriptivos de los fondos documentales que resguarda el ABNB. Se formó en importantes cursos como el Taller sobre Manejo, Conservación, Planificación y Curaduría en Archivos (Dra. Diane Vogt O’ Connor, 1996); Curso de Archivos a Distancia (Archivo General de la Nación-Escuela Nacional de Archiveros, Lima, 2006); Paleografía Hispanoamericana (siglos XV-XVIII) impartido por el Dr. J. M. López Villalba*, profesor de Paleografía y Diplomática de la Universidad Nacional de Educación a Distancia-España (2000, 2005); Seminario sobre Organización de Sistemas de Archivo (Centro Iberoamericano de Formación de la Agencia Española de Cooperación Internacional (Santa Cruz de la Sierra, 2001); Capacitación y Actualización Archivística (ABNB y Universidad Andina Simón Bolívar, 2002); Manejo Profesional de Archivos y Gestión Documental (Santa Cruz de la Sierra, 2006). Igualmente participó en el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995) y el Congreso Nacional de Archivos para el Tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (Sucre, 2007). Trabajó en el cotejo de la trascripción del Diario histórico de todos los sucesos ocurridos en las provincias de Sicasica y Ayopaya durante la Guerra de la Independencia americana, desde el año 1814 hasta el año 1825, escrito por un comandante del partido de Mohosa, José Santos Vargas (1852), para su edición por el ABNB (Sucre, 2008). Fuente: CV.

NAVARRO CUÉLLAR, ELIANA NOEMI

(Buenos Aires, Argentina, 12 de mayo de 1985) Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Ha realizado labor de voluntariado en el Hogar de Niños “Gota de Leche” (1999–2000) y como Guardazonas del Zoológico Municipal (2001-2002). Participó en el programa International Cultural

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Youth Exchange, con una experiencia en el grupo de teatro “Tuchlaube”, en Aarau, Suiza (2003-2004). Participó en pasantías, en el Archivo Histórico Militar del Estado Mayor (2006) y en el Archivo de La Paz* (2007). Fue consultora de apoyo para la Sistematización y organización del Archivo de la Dirección Jurídica del Servicio Nacional de Áreas Protegidas SERNAP (2007). Trabajó en el Catálogo de Mapas y Planos del Fondo Prefectura de La Paz del Archivo La Paz (2008); hizo una consultoría para la sistematización de información documental del proyecto “Planteamiento de un modelo de evaluación Ex Post para el Centro de Promoción de la Mujer Gregoria Apaza, El Alto (2008). Trabajó como Técnico Archivista, en la descripción y clasificación del Fondo Fotográfico Última Hora del Archivo La Paz (2010-2011). Es Técnico del Archivo Histórico de la Fundación Flavio Machicado Viscarra*, desde 2010. Asiste a reuniones y congresos en Historia (IX Congreso de Historiadores de la Minería, 2007), seminarios organizados por la Carrera de Historia (Descolonización, Asamblea Constituyente); la Reunión Anual de Etnología, que organiza el Museo Nacional de Etnografía y Folklore*; los Congresos de Estudios Bolivianos de la Asociación de Estudios Bolivianos; los seminarios del Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Antropológicas (“Brindis con el Inca, abstracción andina e imágenes coloniales de los queros”). Ha sido miembro del comité organizador y coordinador del V Encuentro Latinoamericano de Estudiantes de Historia (2009). Ha participado en el VI Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos, donde presentó su ponencia sobre “Descripciones peligrosas y desafíos del relato visual. Algunas experiencias en la descripción de fotografías del fondo Última Hora del Archivo de La Paz (Sucre, 2011), y en el III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (La Paz, 2011), con la ponencia “Experiencias en un archivo familiar: El archivo histórico de la Fundación Flavio Machicado Viscarra”, escrito con M. Guzmán*. Fue facilitadora en el curso de Organización del Archivo de Gestión, en el SERNAP, con el tema “Organización del expediente” (2007) y en el Primer Curso de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos, con el tema “La fotografía como fuente documental” (ALP, 2011). Asistió al Taller práctico “Comentarios y análisis de documentos etapas y metodología” (2007), 2° Taller Departamental “Ley de Sistema Nacional de Archivos” (2007) y al 2° Taller de conservación preventiva y restauración de materiales de Archivo (2007). Acostumbraba publicar sus ensayos historiográficos, como “La Mariposa de Acero” y “Madame déficit” en El Quinto piso, periódico mural de la Facultad de Humanidades (2011). “La Mariposa de Acero” fue publicada también en Memorias de La Razón (2011). Realizó entrevistas para el proyecto “Mi barrio cuenta, Yo cuento con mi barrio”, en el marco del Bicentenario del grito libertario paceño. Tiene dos trabajos en prensa: Entre pluma y sermón. Acercamiento a un discurso del diario de expedición de las Salinas; “No eres tú, soy yo” Lo que tiene el Archivo que no tienen nuestras familias. Carta confesión de un pasante historiador. Publicaciones archivísticas: “El mundo de los mapas: una base de datos para una óptima búsqueda”, con Gaby Chipana (DesArchivando, 2007, 2: 36); Catálogo de Mapas y Planos de la Prefectura de La Paz (2008), “Descripciones peligrosas y desafíos del relato visual: algunas experiencias en la descripción de fotografías del Fondo Última Hora del Archivo de La Paz” (Anuario de Investigación 2010-2011. Jiawasan Sarnaqawisa (Nuestro caminar). La Paz, Carrera de Historia, 2011: 269-286). Fuente: CV:

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GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

NAWROT, PIOTR

(Posnan, Polonia, 1955) Musicólogo. En 1974 ingresó a la organización “Misioneros del Verbo Divino”. Licenciado en Teología y Sociología en la Universidad Católica de Lublin, Polonia, (1981). Hizo la Maestría en Música Litúrgica en la Universidad de Washington (1988). Es miembro del Instituto Anthropos (Alemania) y de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica. Es docente de Teología Pastoral en la Universidad Adam Mieckiewicz en Posnan. Investiga la música reduccional en las Misiones de Mojos y Chiquitos, con el apoyo de la Fundación Simón Guggenheim, desde 1994, analizando la influencia indígena en el establecimiento y desarrollo del barroco musical en las Reducciones Jesuíticas, para ello trabajó en la sistematización de los documentos de las misiones de Chiquitos y de Mojos. Estudió a profundidad los Archivos Musicales de Chiquitos, recuperados por Hans Roth de manos de los propios indígenas, de cuyo resultado es su libro Músicas de Vísperas en las Reducciones de Chiquitos (1994), en el que sustenta el valor universal de los archivos musicales, hecho que impulsó a A. Parejas*, Marcelo Arauz y Cecilia Kenning, a organizar el Primer Festival Internacional de Música Renacentista y Barroca “Misiones de Chiquitos” (1996). Nawrot fue designado Director Artístico el Festival de Música Barroca (1998). Este festival es organizado bienalmente por la Asociación Pro Arte y Cultura, de la que Nawrot es miembro desde 2003, contribuyendo a la organización del Congreso sobre Música Barroca, paralelamente a la realización del Festival. Trabaja en el proyecto de recuperación, catalogación y estudio del Archivo Musical de San Ignacio de Mojos. Por su obra, en marzo de 2012, obtuvo el Premio Internacional Reina Sofía a la Conservación y restauración del patrimonio cultural. Publicaciones archivísticas: “Archivos Musicales” y “Música renacentista y barroca en los Archivos de Bolivia” (Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1996. Sucre, 1996: 363376); Archivo Musical de Moxos. Antología. 4 vols. (Cochabamba, APAC/Verbo Divino, 2004) Fuente: Limpias, 2011: 410.

NINA CRUZ, FRANCISCO

(La Paz, 2 de abril de 1978) Licenciado en Administración de Empresas. Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Hizo el Diplomado en Gestión de Archivos en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información (2009), el Diplomado en Manejo y Administración del Patrimonio Documental para el Servicio al Público Usuario en Archivos, Museos y Bibliotecas (2010). Fue Auxiliar de Docencia (2001), Auxiliar de Archivo en el Servicio Nacional de Migración, donde trabajó con Y. Tejerina* (2003-2005), Jefe de Unidad de Supervisión y Evaluación del Servicio Nacional de Migración (2005-2006), Jefe de Archivo Nacional del Servicio Nacional de Migración (2006-2007), Responsable de Archivo Central en la Unidad de Titulación del Fondo Nacional de Vivienda Social (2007-2008), Consultor Individual de Línea para la Gestión Documental y Administración en los Archivos Central e Intermedio en el Banco Central de Bolivia (2008-2010). Participó en varios seminarios como La Importancia de los Archivos para la Democracia y el Acceso a la Información (2005), Gestión Documental y Organización de Archivos

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Administrativos (2005), Base Documental del Sistema de Gestión de Calidad (2008), Mesa Redonda: “9 de Septiembre día Aciago de la Destrucción de la Memoria Cruceña” (2008), Gestión Documental: Un Enfoque al Sistema de Calidad (2009), Metodologías para el Manejo de Archivos y Documentos Electrónicos (2009), Conservación y Curación del Libro (2009), V Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (CIBDA 2009), Implementación del Programa de Gestión Documental bajo Estándares Internacionales en el BCB (2009), El desafío de las Unidades de Información en el Estado Plurinacional actual (2009), Acceso a la información pública en Bibliotecas y Archivos de La Paz en Conmemoración del Día Internacional de los Derechos Humanos (2009), Seminario de Actualización en Archivos, Bibliotecas y su Conservación (2009), Manejo de los Sistemas de Gestión KHOA y ABC (2010) y Una Visión Moderna de la Bibliotecas, Archivos y Museos (2010). Fuente: CV.

NINA FERNÁNDEZ, SAÚL T. Responsable del Archivo General de la empresa Teléfonos Automáticos S.A. (TASA). En junio de 182 presentó un informe sobre la empresa y el Archivo. TASA se creó el 14 de abril de 1941, con 2.000 accionistas. En 1982 tenía 55.000 abonados. “El Archivo de Accionistas se instaló paralelamente con la fundación de la empresa”, hasta mediados de 1969, “año en que se creó la oficina del Archivo General, centralizándose la mayoría de los documentos”, con la responsabilidad de organizar toda la documentación recibida, habiendo organizado dos tipos de archivo: una sección de documentos históricos de los accionistas (con el historial de cada socio, ordenado numéricamente) y el Archivo General para los documentos administrativos, con una sección Activa (1965) e Inactiva (desde 1941). Señala que se realiza destrucción “bajo control legal interno”. Publicaciones archivísticas: “Informe. Situación Archivo General. Teléfonos Automáticos SA (TASA)” (Oporto Ordóñez, Luis: Problematica de los Archivos de La Paz. La Paz, AAEOEA, 1982: 49-53). Fuente: Oporto, 1982: 49-53.

NINA MACHACA, ROSMERY (La Paz, 1 de abril de 1987)

Estudió en la Carrera de Historia* (2011) y cursa la Carrera de Derecho (UMSA). Es Técnico en sistemas informáticos (2007). Realizó cursos de Paleografía, Archivística y Práctica de Archivos; aprendizaje de la norma archivística (ISAD G) para la elaboración de instrumentos de descripción, catálogos, índices y guía de archivo. Asistió al 2º Curso Básico de Digitalización de Documentos (2009), y al de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos (2011). Hizo una pasantía en los Archivos Militares de las Fuerzas Armadas de la Nación (2006), Archivo La Paz* (2008, 2009), Repositorio Nacional de Bolivia para la Catalogación del Patrimonio Discográfico de Música Boliviana (2008), trabajó en la Fundación La Paz (2009) y la Biblioteca Arturo Costa de

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la Torre (2010). Participó en el Proyecto de Recopilación Oral de la Memoria Histórica de Excombatientes de la Guerra del Chaco en la Ciudad de Santa Cruz. Trabajó como Auxiliar de Correspondencia y Manejo de Archivo Central en el Gobierno Municipal de La Paz (2009), Técnico Archivista en la organización del Fondo Fotográfico Ultima Hora (2010–2011), y en la Descripción y Digitalización de la Colección Visual y Documental de Mujeres Creando, ambos del Archivo La Paz* (2011). Fuente: CV.

NINA SILES, MÓNICA

(La Paz, 22 de diciembre de 1982) Licenciada de la Carrera de Bibliotecología* (UMSA). Ha trabajado en el Archivo de Recursos Humanos de la UMSA, Archivo de la Superintendencia de Pensiones Valores y Seguros, Archivo del Servicio Nacional de Caminos-Residual. Trabajó en la Biblioteca de la Unidad Educativa “Steve Güldeng”; organizó la Biblioteca Especializada del Hospital La Paz, en la cual promovió la firma del Convenio interinstitucional con la Biblioteca Virtual de Salud Pública. El 2011 trabajó como Técnico en el Archivo Intermedio del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Ha cursado el Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas del Estado, organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). Fuente: CV.

NINO, BERNARDINO

(Abruzos Alquilanos, Prátola, Peligna, Italia, 29 de agosto de 1868. † Buenos Aires, Argentina, 1923) Estudió la primaria en su pueblo natal. Pasó al Seminario Episcopal de Sulmona, donde recibió las cuatro órdenes menores, iniciándose para el sacerdocio. Entró a la Orden Franciscana en 1886. Fue ordenado sacerdote franciscano en 1891 y se embarcó a América. Llegó a Bolivia en 1893 y fue destinado a las reducciones de indios Chiriguanos. En 1901 fue elegido prefecto de Misiones, durante seis años abrió las Misiones del Parapiti Grande. Fue Viceprefecto en 1907. En 1905, escribió su Historia de las Misiones de Potosí. En 1911, practicó la visita de las Misiones de Tarija y escribió Rasgos históricos de las Misiones de Potosí, por orden del comisario delegado general Fr. Wolfango Priewasser, que se publicó en El Archivo Franciscano. En 1911 fue elegido Delegado del Comisario en Bolivia para las misiones, conventos, y colegios. La conquista espiritual del pueblo guerrero chiriguano, sólo fue posible luego de una labor de inteligencia. “Cuando se propone hacer la historia de una tribu o raza, debe comenzar con la descripción de la comarca”. Efectivamente, Bernardino Nino realizó la monumental proeza desde 1891 hasta 1910, es decir por casi dos décadas, en las que recorrió cerros y montañas, ríos y lagunas, anotando datos sobre el clima, la fertilidad, flora y fauna, diversa y extendida, antes de estudiar a los hombres, su ciclo vital y sus costumbres. Nada escapó a su interés: el idioma, la demografía, la religión y creencias, la estructura política y la jerarquía, pueblos, casas y trabajo; vestidos y adornos; la familia, los hijos y los rituales del ciclo de vida (pubertad, uso de la tembeta); agricultura, animales y comida; fiestas, cantos y carnaval; guerra ofensiva

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y defensiva; enfermedades, fármacos, muerte y luto; ‘infieles’ y neófitos, y un largo etcétera. En un capítulo aparte, se ocupó de describir a cada uno de los pueblos indígenas de muchos de los cuales queda tan sólo esa descripción, ayer etnográfica, hoy fuente primaria de valor incalculable, pues fueron extinguidos en esa curiosa empresa de evangelización que no es otra cosa que la historia del etnocidio. Tapuí (Izoceños), Sirácuas (Empelotos), Yanaíguas (Ñanaíguas), Cayuguari; Tobas, Matacos (Noctenes), Chorotis, Güisnáis, Taipetes… En 1910-1911 escribió su célebre Etnografía Chiriguana, un estudio de los indios del Gran Chaco, que contiene más de tres docenas de ilustraciones, presumiblemente basadas en fotografías hechas por él, incluyendo imágenes de familias, caciques, misiones y iglesias, brazaletes de latón y cadena, niños de escuela, bailarines de carnaval, arcos y flechas, franciscanos, arrieros y grupos de otros indios, tales como Tobas y Chorotis. Fue impresa en la Tipografía Comercial de Ismael Argote, en 1912. La obra fue elaborada como ponencia para el XIX Congreso Internacional de Americanistas que debía reunirse en La Paz en 1914. Fuente: Buck, 1999.

NORDENSKIÖLD, ERLAN (Suecia, 1877. † 1932)

Explorador, etnólogo, arqueólogo y antropólogo, viajó por Panamá, Colombia, Perú, Argentina y Bolivia entre 1899 y finales de la década de 1920. Entre sus muchas publicaciones, Indianer Och Hvita I Nordostra (1911), un relato de su viaje de 19081909 a través de las tierras bajas orientales de Bolivia, e Indianlif I Gran Chaco (1910), relato de sus exploraciones de 1901-1902, en el Gran Chaco de Bolivia. Junto a Eric von Rosen, hizo fotografías sobre sus expediciones. El Museo Etnográfico de Gotemburgo tiene 1.023 fotografías de sus viajes por Bolivia, al parecer la mayoría realizados por él mismo, el Museo Etnográfico Estatal de Estocolmo tiene 135, y los archivos de la American Geographical Society de la Universidad de Wisconsin en Milwaukee tiene nueve. Fuente: Buck, 1999.

NÚÑEZ DE ARCO, JAVIER (La Paz, 1951)

Investigador y restaurador de Arte. “Tengo la historia y la evolución de la fotografía desde los primeros daguerrotipos, ferrotipos y una cantidad de tipos desde 1850”, afirma. Es depositario de la memoria fotográfica que cohabita con juguetes de hace más de un siglo, la colección entera de la revista Life, las primeras películas en todos los tamaños y formatos desde 1914 (Pathe Baby), álbumes con fotografías al estilo art-déco, postales, libros históricos, crónicas desde 1585, catálogos, panfletos publicitarios de los hermanos Lumiere (inventores del cine) y Kodak, fotografías antiguas restauradas y ampliadas. Su Archivo posee 5.000 placas de vidrio, 2.000 fotografías en papel, 2.000 postales, 200 cartes de visite, 200 gabinet cards, de unos 200 fotógrafos de todas partes (Helsby, Ward, Talbot, Chambi, Stubel, Vargas, Valdéz), y una Colección de 35 años de historia de Bolivia fotografiada por el periodista C. González* que trabajó en La Razón, Última Hora, El Diario y La Noche. Tiene fotografías

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de la Guerra de la Triple Alianza (1865-1870), la salida del Ejército a la Guerra del Pacífico (1879), la Guerra Federal (1899), la campaña del Acre (1900), Zárate Willka, Guerra del Chaco (1932-1935), el álbum de S.I. Patiño* con los aviones que obsequió en esa época. Entre sus reliquias figuran un ambrotipo (1840), daguerrotipo (1850), 10 ferrotipos (1970), 100 estereotipos, 3 microfotografías, 10 placas de vidrio iluminadas a mano, 2 fotografías panorámicas de Shüller (de casi cuatro metros de longitud), una fotografía positiva en cuero hecha en Cochabamba en 1863 (única en su género); la Biblioteca y Colección de miles de placas de vidrio que tomó el arqueólogo A. Posnansky* (1897-1946) sobre Tiwanaku, la Isla del Sol, Guaqui y el Altiplano boliviano. Núñez inauguró su Museo Fotográfico, el 16 de junio de 2005, cerrando un Fotencuentro realizado en La Paz. Fuente: La Razón, 1993: 9C; La Presa, 2005: 12b; Hernández, 2001: 22-24.

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O OBAYA, PEDRO

(.¿?.† La Paz, 4 de agosto de 1781) Importante Escribano indígena. Comandante tuerto, denominado “El Rey Chiquito”, sobrino de Túpac Amaru, brazo derecho de Túpac Katari*. Participó activamente en el cerco a La Paz de 1782. Propuso un plan para engañar a los españoles con cartas fraguadas para que salgan al descubierto, pero fue apresado en el intento el 27 de abril y ahorcado estando muy enfermo. Fuente: Valle, 1990; Díaz, 1962.

OBLATOS DE MARÍA INMACULADA, ARCHIVO DE LOS La Orden de los Oblatos de María Inmaculada fue fundada por el P. Eugenio de Mazenod (Vicario General de Marsella) en mayo de 1825 con el nombre de Oblatos de San Carlos (Provenza). Por su parte P. Bruno Lanteri, fundó la Orden de Oblatos de María Virgen (Turín). El 17 de febrero de 1826, se fusionan con el nombre de Oblatos de María Inmaculada, con sanción del Papa León XII, difundiéndose a Inglaterra e Irlanda (1845), Canadá y Estados Unidos (1841), Ceylán (1847), África (1848), Holanda (1880), Alemania (1895), España (1882) y desde allí pasa a Uruguay (1931), Argentina (1935), Haití (1943), México (1950), Perú (1960), Chile (1960) y Brasil (1962). En Bolivia se creó el Vicariato del Chaco (Cuevo) en 1919, pero a raíz de la Guerra del Chaco (1932-1935), la Vicaría del Pilcomayo quedó en territorio paraguayo y estableció su Prefectura Apostólica en Asunción (1936). Los Oblatos ingresan a las minas de Catavi en julio de 1952 donde erigen el Distrito Vicarial el 2 de diciembre de 1953, con sus casas en Siglo XX y Llallagua. Es el cuartel general de mineros revolucionarios de clara tendencia comunista. Fundan las de La Paz (1953), Corque, Oruro (1954) y Cochabamba (1956). El 26 de septiembre de 1956 se crea la Provincia Chile-Bolivia de Nuestra Señora de Monte Carmelo, “segregada de la Provincia Canadá-Este”. Los primeros misioneros oblatos canadienses Valerien Gaudet y Alexandre Gazé provienen de las minas chilenas de salitre y “deben su llegada a Monseñor Sergio Pingnedoli” que contó con el apoyo de Monseñor Gian-Battista Montini (futuro Papa Pablo VI). Posteriormente llegó una élite de misioneros como Mauricio Lefebvre, Enrique Bujold, Marcelo Grondin, Santiago Gelinás, Santiago Monast, Lino Grenier, Lorenzo Dessaulniers, Roberto Durette y Greogrio Iriarte. Su

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actividad misionera se caracterizó por una fuerte confrontación con los sindicatos y dirigentes mineros. Llegaron a erradicar el comunismo pero terminaron convencidos de la justicia de los reclamos mineros, debido a las condiciones infrahumanas de explotación, la baja expectativa de vida y el futuro incierto. Debido a la defensa militante de los derechos humanos, la represión militar se volcó contra los Oblatos. Esa dramática trayectoria se encuentra descrita, con detalle y precisión, en que un impresionante corpus documental conocido genéricamente como Archivo de María Inmaculada (OMI), conformado por una profusa correspondencia, informes, notas personales, informes médicos y artículos escritos por los curas oblatos, desde la era de Valerie Gaudet (1952) hasta la de los PP. René Villegas (1988-1991) y Luis Joliceur (1993-1994). El Archivo -al parecer se encuentra en Cochabamba- fue empleado por el jesuita J. Baptista* en su obra 50 años de presencia de los Misioneros Oblatos de María Inmaculada en Bolivia. Tiene su correlato social en los documentos sonoros producidos por la Radio Pío XII, fundada por Lino Grenier el 1° de mayo de 1959, luego dirigida por Gregorio Iriarte y actualmente a cargo de Roberto Durette. Dos brazos documentales: religioso-eclesial y laico-civil. Ambos archivos son vitales para comprender la vida minera y campesina del Norte de Potosí. Fuente: Baptista, Javier: 2002; Iriarte, Gregorio, 1976; López Vigil, José Ignacio, 1985; Mansilla Torres, Jorge, 1983.

OBLITAS, MARIO Jefe del Archivo del Consejo Nacional de Reforma Agraria, institución creada el 2 de agosto de 1952. El Archivo depende de la Oficina de Registro de Propiedad. Fue retirado de su puesto de trabajo durante la dictadura del Gral. L. García Meza*, tiempo durante el cual se afectó al Archivo, quitándole uno de sus ambientes. En su informe menciona que el Archivo contaba con una sola máquina de escribir, y que acudían muchos interesados e investigadores a consultar los expedientes de titulación agraria. También refiere que se contrataron dirigentes campesinos “con la justificación de que aquellos podrían orientar en su lengua nativa a los campesinos usuarios”. El CNRA firmó un convenio con el Centro Nacional de Computación, para la microfilmación de los procesos agrarios concluidos, registros con valor legal, de acuerdo a ley. La importancia de este archivo se expresa en que “1640 expedientes fueron puestos a la vista en los últimos tres meses” (cif. Marzo a mayo de 1982). Publicaciones archivísticas: “El Archivo del Consejo Nacional de Reforma Agraria” (Oporto Ordóñez, Luis: Problematica de los Archivos de La Paz. La Paz, AAEOEA, 1982: 26-30). Fuente: Oporto, 1982: 26-30.

OCAMPO MOSCOSO, EDUARDO

(Oruro, 13 de octubre de 1908. † Cochabamba, 1985) Periodista. Ingresó a trabajar a La Prensa a los 15 años y luego pasó a La Patria de Oruro, de los que fue Director; como también lo fue de los periódicos El Valle, El País y Los Tiempos de Cochabamba. Formaba parte del movimiento cultural “Los Osos”, en la década de los 20. En 1928 fue uno de los organizadores de la Federación

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Universitaria Boliviana. Estudió Derecho y fue profesor de Letras (castellano, literatura y filosofía); cultivó la Literatura. Ha dejado un valioso caudal de producción cultural que se resume en sus libros, referentes a la historia del periodismo, así como ensayos que hizo acerca de la bandera boliviana y temas referidos a la literatura potosina y orureña. Ha merecido distinciones y premios en concursos literarios de Oruro, Potosí, La Paz y Cochabamba (1929-1952). En 1943 obtuvo, luego de Carlos Montenegro y Gustavo Adolfo Otero, el tercer lugar en el Concurso Nacional de Ensayo sobre la Influencia y Función del Periodismo en el Proceso Histórico de Bolivia, convocado por la Asociación de Periodistas de La Paz, el que sirvió al correr de los años de base esquemática para publicar su Historia del Periodismo Boliviano (1978). El Gobierno Municipal de Cochabamba lo declaró “Ciudadano Meritorio” (1978). Fue director del Departamento de Cultura de la Universidad Mayor de San Simón de Cochabamba. Director del Archivo Histórico Municipal de Cochabamba “José Macedonio Urquidi” desde 1971 (o 1972), hasta su muerte. Animó la publicación del Expediente del juicio de Arenales a Blanco. Fuente: Durán, 1978.

OCHOA, JOSÉ VICENTE

(La Paz, 8 de diciembre de 1859. † Sucre, 17 de enero de 1898) Abogado, Universidad de Chuquisaca (1878); educador y escritor, publicó sus artículos en La Reforma, El Comercio y La Tribuna. Miembro del Partido Conservador. Trabajó en el Ministerio de Justicia e Instrucción Pública (1878), Profesor en el Colegio Ayacucho (1881); Oficial Mayor del Ministerio de Relaciones Exteriores. Cumplió misiones diplomáticas en Chile (1891). Ministro de Instrucción Pública y Colonización (1895-1896) y de Instrucción Pública y Fomento (1896-1897). Miembro de la Sociedad Gutiérrez. Diputado (1894), Munícipe y Presidente del Ayuntamiento de La Paz. Durante la Guerra del Pacífico (1879-1881), el presidente Daza le encomendó llevar el Diario de la Campaña. Posteriormente publicó Semblanzas de la Guerra del Pacífico (1881); Abaroa (1892); Diario de Campaña del Ejército Boliviano en la Guerra del Pacífico (1899). En el género biográfico publicó Borrones y perfiles (1885) y Paceños ilustres (1888-1889). Fuente: Arze, 1984: 106; Ascarrunz, 1920.

OCSA LAIME, JORGE VÍCTOR WÁLTER (Tarija, 15 de octubre de 1978)

Estudió Sociología e Historia (UMSA). Al concluir la secundaria, ingresó al programa de Obras Sociales de Caminos de Acceso Rural OSCAR, en Alto Beni, experiencia que le motiva a ingresar a la Carrera de Sociología y desembocar en la de Historia, para analizar con propiedad los procesos sociales de Bolivia. Participó en el proyecto Indimedia de Medios de Comunicación Alternativa. Durante una década fue una especie de observador participativo en los movimientos sociales en Cochabamba (Guerra del Agua), La Paz (Jornadas de Febrero Negro; Guerra del Gas de 2003, y la Jornadas de junio de 2005). En su trayectoria combinó la investigación de los procesos sociales con la archivística, fundamentalmente en el estudio del movimiento minero

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de Huanuni (Relocalización minera de 1986). Retorna a Huanuni en la coyuntura de la toma del cerro de Posokoni (6-8 de octubre de 2006), que culmina en la elaboración de un documental histórico dirigido por Magdalena Cajías de la Vega. El 2008 participó en el proyecto de organización del Archivo Central del Ministerio Público (Fiscalía General en La Paz), junto a J. Sullcani*, Sonia Tórrez Cosme y Jhenny Quispe Condori. A partir del 2007, empieza su trabajo con los Archivos Sonoros de Radio Nacional Huanuni, con auspicios del Instituto de Estudios Bolivianos y la cooperación Sueca ASDI, bajo el proyecto Proceso dinámico de las Relaciones Interétnicas en la región del lago Poopó y el río Desaguadero, resultado del cual se publicó 50 Aniversario Radio Nacional Huanuni (La Paz, IEB-ASDI, 2010) (Incluye CD). Fuente: Entrevista personal del 8.8.11.

O’ LEARY, DANIEL FLORENCE

(Cork, Irlanda, 1801. † Bogotá, Colombia, 24 de febrero de 1854) Militar y político irlandés. Desembarcó en el Orinoco en 1818, con el rango de alférez formando parte del cuerpo de Húsares rojos. Combatió en La Gamarra (1819) y fue enviado como adjunto al Estado Mayor y al escuadrón de dragones de la guardia, donde conoció al Libertador S. Bolívar*, que lo nombró su edecán (1819). Participó en la Batalla de Pichincha (1822), ocasión en la que A. J. de Sucre* ordenó su ascenso a teniente coronel. En 1820 formó parte de las negociaciones de armisticio entre S. Bolívar y Pablo Morillo. Luego de la creación de Bolivia, el Libertador lo ascendió al rango de coronel. En 1827 se casó con Soledad Soublette, hermana del general Carlos Soublette, con la que tuvo nueve hijos. En 1829 combatió al lado de Sucre en la Batalla del Portete de Tarqui, donde fue ascendido a general de brigada. Participó en misiones diplomáticas, hasta el reconocimiento de la independencia de Venezuela por España, Inglaterra y Francia. Fue Encargado plenipotenciario de Venezuela en Madrid, Londres, París y el Vaticano. En 1841 regresó a Venezuela como cónsul británico en Caracas y Puerto Cabello. Dos años después se instaló en la hacienda “El Chocho” (Bogotá). Su faceta archivística es tan intensa como su vida militar y política. Desde 1818 comenzó a reunir datos y documentos relacionados con la Guerra de la Independencia y con la vida del hombre extraordinario que la dirigía, Bolívar. Durante las campañas de Venezuela, Nueva Granada, Ecuador y Perú, continuó recolectando documentos, con la colaboración eficaz de sus “conmilitones, Sucre, Héres, José Gabriel Pérez, Espinar y más que ninguno de Pedro Briceño Méndez”. En el transcurso de la campaña se perdieron muchos papeles importantes, porque en aquellos tiempos las marchas eran penosas y no siempre era fácil conducir el equipaje del Estado Mayor, sin embargo de ello logró salvar la mayor parte de lo que llegaba hasta sus manos. Muchos archivos patriotas fueron capturados por los ejércitos realistas, requisados de los jefes militares que cayeron presos o muertos en combate, pues los archivos eran objetivos estratégicos. Terminada la guerra escribió a un antiguo rival de Bolívar, el Gral. Pablo Morillo, quien en la posguerra residía en la Coruña, España, pidiéndole que le devolviera los archivos incautados, logrando de esa manera recuperar muchos documentos tomados por los realistas. En 1831, después de la muerte de S. Bolívar, viajó a Jamaica donde ordenó su archivo y comenzó la redacción de sus memorias,

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publicadas póstumamente por su hijo, Simón O’Leary, bajo el título de Memorias del General O´Leary. Publicaciones: Memorias del General O’Leary, 1815-1830. Caracas, Gaceta Oficial, 1883. Manuel Pérez Vila compiló los Índices en dos tomos (Caracas, Imprenta Nacional, 1956); Bolivar y la emancipación de Sur América. Memorias del General O’ Leary (traducidas por su hijo Simón B. O, Leary) (Tomo I: 1783-1819; Tomo II: 1819-1826). Madrid, Sociedad Española de Librería, s/f; Últimos años de la vida pública de Bolivar. Tomo apéndice (18261829). Madrid, Editorial-América, s/f; Cartas de Sucre al Libertador (1826-1830). Madrid, Editorial América, 1919; Cartas de Santander, 1819-1839 (3 tomos). Fuente: Lecuna, 1924: 3-4; O’Leary, 1883: I, v; Oporto, 2011d: 219; http://www.es.wikipedia. org (12.02.10).

OLIVA, JUAN ANELLO

(Nápoles, 1572. † Lima, Perú, 1642) Religioso Jesuita. Se ordenó en 1593 y cuatro años más tarde partió al Perú. Residió en las misiones jesuíticas de Juli, y en los Colegios de Chuquisaca, Potosí, Arequipa y Callao, del que fue Rector en 1636. Historiador postoledano, reunió una vasta bibliografía y archivos para documentar su obra, en cuatro partes, titulada Vidas de varones ilustres en la Compañía de Jesús de la Provincia del Perú, antecedida por una historia sintética del Perú antiguo, y de su descubrimiento y conquista, para cuyo propósito consultó las obras de Cieza*, Acosta, Garcilaso*, Herrera, los papeles de Blas Valera y posiblemente la obra manuscrita de G. Poma de Ayala*. En su obra transcribe largos relatos y leyendas, no consignados en otras crónicas y que él dice haber recogido personalmente de labios de un anciano Quipucamayoc* y cacique de Cochabamba, llamado Catari el Viejo*. Su aporte es fundamental en lo relativo a episodios de historia quiteña, como el entierro de Atahuallpa, el avance de Titu Atauchi sobre Cajamarca, la derrota de los españoles en Tocto, la ejecución de Sancho de Cuéllar y el tratado de paz Tito Atauichi-Francisco de Chávez y la lucha de Almagro y Alvarado contra Huayna Palcón y Quizquiz, propios de la escuela quiteña de Gómara, Zárate, Valera y Garcilaso*. Fuente: Porras, 1986: 499-500.

OLIVARES GONZÁLES, INGRID ROSARIO (La Paz, 11 de Octubre de 1958)

Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Egresó como secretaria ejecutiva del Lincoln Institute. Participó en cursos de Modernización del archivo administrativo (1992); Taller sobre encuadernación de libros y archivos (1994); Capacitación archivística (1995); Seminario: Conservación del patrimonio cultural de Bolivia (1999); Seminario taller: Deontología y ética del profesional de la información (1999); Taller de Lucha Contra la Corrupción, Enriquecimiento Ilícito e Investigación de Fortunas “Marcelo Quiroga Santa Cruz” (2010). Desarrolló su experiencia laboral en distintas bibliotecas de la UMSA (1978-1998), hasta que ingresó al Proyecto de Reforma Institucional del Ministerio

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BIBLIOTECA Y ARCHIVO HISTÓRICO DE LA ASAMBLEA LEGISLATIVA PLURINACIONAL

de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, como Responsable de Archivo y Correspondencia (2005), cargo en el que se mantiene en el actual Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras. Fuente: CV.

ONDEGARDO Y ZÁRATE, JUAN POLO DE

(Nació en España. † La Plata, Charcas, 4 de noviembre de 1575) Célebre cronista de la conquista. Llegó al Perú con el virrey Blasco Núñez de los rebeldes, otro con la Audiencia”. F. de Carvajal* lo apresó en Cusco (1546), pero logró fugar al ser conducido a Lima. Estuvo al servicio de P. de La Gasca* en la batalla de Sajsawamán (1548), de donde pasó a La Plata para apaciguar a los rebeldes, organizando expediciones hacia Tucumán y La Plata. Combatió contra el rebelde Francisco Hernández Girón en Chuquinga y Pucará (1554). Nombrado Corregidor del Cuzco (1558-1561), descubrió cinco momias de los incas y estudió las creencias y costumbres indígenas. Asesoró al virrey Conde de Nieva en el reparto de encomiendas. El marqués de Cañete lo envió al Cusco para continuar de Toledo*, para quien redactó las ordenanzas para la explotación de las minas de Potosí, y obtuvo una encomienda en Cochabamba. Los originales de sus crónicas y descripciones de la moral, religión y costumbres de los incas se encuentran en los archivos de Simancas y el Escorial. Junto con el jurisconsulto Juan de Matienzo, uno de sus fundadores de la Audiencia de Charcas, escribió por encargo de Toledo, la Memoria acerca del asiento de los Charcas,en 1559. Acompañó a Toledo en su visita al país, muriendo en el transcurso de la misma. Fuente: Jáuregui, 1925: 104; 122; Wikipedia (1.03.2012).

OPORTO ALMARAZ, LOUI ÁLVARO (La Paz, 1 de marzo de 1978)

Estudia en la Carrera de Antropología-Arqueología (UMSA). Participa en las Reuniones Anuales de Etnología que organiza el MUSEF. También asiste a reuniones de Archivos. Trabajó como Auxiliar en el Proyecto de Organización del Archivo del Servicio Nacional de Áreas Protegidas, bajo la dirección de J.C. Zurita* (2007-2008). Se sumó a las Brigadas Internacionalistas de Apoyo a las Bibliotecas y Archivos de Bolivia*, que realizó el Censo Guía de Archivos del Servicio de Impuestos Nacionales (2009). Realizó la ordenación del Archivo del Gobierno Municipal de Colquechaca, en el Archivo Histórico Regional de Potosí que forma parte del Sistema de Archivo de la COMIBOL* (2010). Pasante del Área de Investigaciones del Musef para levantar Fuente: CV.

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GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

OPORTO ORDÓÑEZ, LUIS

(Siglo XX-Llallagua, Provincia Bustillo, Potosí, 19 de agosto de 1953) Licenciado en Historia (UMSA), participó en el VII Curso de Organización y Administración de Archivos Históricos, en la Escuela Nacional de Documentalistas*, Madrid, España (1979). Hizo el Diplomado en Educación Superior y la Maestría en Historias Andinas y Amazónicas (UMSA). Docente contratado de la Cátedra de Archivística (UMSA). Fue docente interino en las carreras de Artes y Arquitectura (1982), Antropología (1990-1996), Sociología (2004), Bibliotecología y Ciencias de la Información* (2006-2008). Es también docente de la Universidad Programa de Investigación Estratégica en Bolivia PIEB. Fue docente de Historia en el Instituto Normal Superior Simón Bolívar de La Paz (2004-2005), Docente del Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos, organizado por el Archivo de La Paz* y la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información UMSA (2002); Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos (2008) y de Museología y Patrimonio (2009), organizados por la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información; Diplomado de Organización de Archivos de la Universidad Nuestra Señora de La Paz (2008), Diplomado de Gestión Documentaria y Organización Archivística en la Universidad Alas Peruanas y en el Archivo Regional de Moquegua (Perú, 2010), los Diplomados de Periodismo e Investigación de la Asociación Nacional de la Prensa (2010-2011) y el Diplomado en Gestión Documental Integrada y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas del Estado, organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2011). Profesor invitado a los cursos de Maestría de la Escuela de Altos Estudios Nacionales de las Fuerzas Armadas de Bolivia (2011-2012). Ha dirigido, como tutor, los proyectos de grado en archivística de I. Villegas* (2002), Fabiola Carla Nina (2009) y L. Quiñones* (2011). Empezó su carrera archivística como Auxiliar de investigación en el Archivo de La Paz (1978). Luego de su retorno de España, se incorporó como Documentalista de campo en el Centro de Documentación Antropológica del Instituto Nacional de Antropología (1979-1980). Ganó la plaza de Jefe de esa repartición en 1980. Durante la dictadura de L. García Meza*, su puesto fue entregado a un paramilitar que jamás asistió a su fuente laboral. En 1981, se le restituyó el cargo. En 1982 pasó al Museo Nacional de Etnografía y Folklore* como Director de la Biblioteca y Archivo (19821996). Allí fundó el Sistema de Información y Documentación Científica y creó las Misiones de Antropología de Urgencia, con las que llevó a cabo 159 misiones de campo, con las que registró fiestas tradicionales de pueblos campesinos, documentó los efectos del decreto 21060, con el que Bolivia ingresó a la era neoliberal (1985), que determinó la relocalización (despido forzoso) de 23.000 trabajadores de los centros mineros, que provocó el despoblamiento temprano de los campamentos mineros. Documentó de forma sistemática los congresos indianistas y sindicales de la Confederación Sindical Única de Campesinos de Bolivia, de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia y de la Central Obrera Bolivia. Como resultado de 14 años de trabajo, construyó los archivos etnológicos de los pueblos indígenas de Bolivia, únicos en su género. Posteriormente fue contratado como consultor del Banco Mundial para la organización de la Biblioteca Jurídica y dirigir el Archivo

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Central del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (1996-1999), formando la biblioteca jurídica más completa y actualizada en su campo, con una inversión de 300 mil dólares. Al término de su labor, pasó como consultor para la creación y organización del Archivo General del Ministerio de Defensa Nacional (2000-2002). En esta institución, logró recoger toda la documentación que se hallaba dispersa en las dependencias del Ministerio de Defensa, incluso los del servicio de inteligencia, los que concentró en un sólo edificio. Se sumaron a este fondo, el Archivo de la Dirección General Territorial, con 8 millones de registros de servicio militar, el Archivo de Contabilidad de las Fuerzas Armadas, con datos desde 1932. Encontró los saldos del Archivo de campaña de la Guerra del Pacífico, la serie valiosa de Sanidad de la Guerra del Chaco, la serie de órdenes generales diarias desde 1932, y el fondo de Intendencia Central del Ejército, íntegro desde 1900. Allí encontró una singular serie de libretas de trabajo de sastres y costureras del Ejército, que vistieron a las tropas bolivianas desde 1900 hasta 1930. En agosto de 2002 fue contratado por el Vicepresidente C.D. Mesa Gisbert* como el primer Director General de la recientemente unificada Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (actual Asamblea Legislativa Plurinacional). Encontró este repositorio reducido a una condición de biblioteca de barrio, con escasos 4.000 ejemplares, pues inexplicablemente se habían depurado de las colecciones, la valiosa biblioteca con la que se creó ese repositorio en 1911, así como las colecciones de literatura nacional y extranjera. Se descartaron invaluables obras raras, antiguas y curiosas, las que se hallaban listas para el descarte. La primera tarea que desarrolló fue la creación del Sistema de Archivo del Poder Legislativo, conformado por el Archivo Central de la Vicepresidencia del Estado (creado en 2003), Archivo Central de la Cámara de Senadores y Archivo Central de Diputados (creado en 2003) y el Archivo Histórico, como Repositorio Oficial del Poder Legislativo, como fue reconocido en el Reglamento de la Vicepresidencia de la República de 2002. Creó también el Programa Permanente de Asistencia Técnica*, que busca cerrar la brecha existente entre archivos de primer nivel y archivos incipientes de tercer o cuarto nivel. Durante su larga trayectoria recibió numerosas becas. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia, le otorgó una beca completa para trabajar por tres meses en la Biblioteque de Amerique del Musée de l’Homme, en París, Francia (1987). El historiador T. Saignes* auspició su incorporación a la Societé des Americanistes de París, institución que le facilitó el acceso a sus depósitos en los que reunió una colección completa de su célebre Journal editado desde 1896 y los informes de la Misión Científica Francesa Crequi Montfort de 1900, los que envió junto a 150 kilos de libros, a la Biblioteca del Museo Nacional de Etnografía y Folklore. Gracias a una beca Fullbright provista por la American Library Association trabajó como funcionario federal en la Biblioteca y Archivo de Smithsonian Institution (Washington D.C., EE.UU., 1994-1995), que le permitió visitar la famosa Biblioteca Benson del Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Texas, Austin. Visitó también la Biblioteca del Banco Interamericano de Desarrollo y otras instituciones en Chicago y Nueva York. Al término de su misión, envió a la Biblioteca del Musef, 200 kilos de libros especializados en Antropología. Fue Secretario General (1982-1984) y Presidente de la Asociación de Archivistas Ex Becarios de la Organización de Estados Americanos* (1984-1990); Presidente

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del Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia* (1994-1995); Secretario General del Colegio Nacional de Historiadores de Bolivia (2002-2006) y Presidente del Centro de Estudios Para la América Andina y Amazónica (2011-). Miembro de la Internacional Union of Anthropology and Etnological Studies, Viena, Austria (1982-1996) y de la Societé des Americanistes de París, Francia (1987). Es integrante de la institución “Amigos de la Ciudad”, el ente cívico más antiguo e influyente de la ciudad de La Paz (2011). Es Miembro de número de la Academia de Ciencias Genealógicas y Heráldicas de Bolivia (2011), de cuyo directorio es vocal, corporación a la que ingresó con su trabajo “Guardianes de la Memoria, Diccionario de Archivistas de Bolivia”. Obtuvo el primer lugar en la Categoría “C” del Concurso Latinoamericano de Investigación en Bibliotecología y Archivística “Fernando Báez”, con su ensayo sobre La Destrucción de la Memoria Oficial de Bolivia (2006). Fue condecorado por la Prefectura del Departamento de La Paz con la Orden “Franz Tamayo” en el grado de “Oficial” (2005); el Centro de Investigaciones Etnoarqueológicas de las Repúblicas de Bolivia y el Perú/Centro de Investigadores en Ciencias Sociales de la República de Venezuela, le confirieron la presea “Sagrado Escudo Patrio” (2005); el Gobierno Regional de Cusco le otorgó la medalla “Sol del Cusco” como visitante distinguido (2006); el Centro Cívico “Illimani” le otorgó la presea “Cumbre, Unión y Trabajo” (2006), el Centro de Investigaciones Etnoarqueológicas de las Repúblicas de Bolivia y el Perú/Centro de Investigadores en Ciencias Sociales de la República de Venezuela, le confirieron la presea “Sol de Oro del Cusco” (2007), y el Consejo Académico Universitario de la UMSA le otorgó la Condecoración y Diploma de Reconocimiento a la Producción Intelectual (2009). Fue declarado Huésped Ilustre por el Gobierno Municipal de Colquechaca (Norte de Potosí) en agosto del 2009, Visitante Distinguido por el Gobierno Municipal de Tarija (2010) y Huésped Distinguido por el Gobierno Municipal de Cobija (2011). Durante su trabajo en el MUSEF levantó los registros y archivos etnológicos de Bolivia. El 2002 ha creado el Programa Permanente de Asistencia Técnica que sostiene la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional (actual Asamblea Legislativa Plurinacional), mediante la cual ha organizado y realizado 55 cursos de capacitación para archiveros de instituciones públicas de los ministerios del Poder Ejecutivo, Ministerio Público, Poder Legislativo, Corte Departamental Electoral, universidades del sistema boliviano, gobiernos municipales, Policía Nacional, Cajas de Salud y Ejército de Bolivia, capacitando un total de 1.300 servidores públicos. Es editor de revistas especializadas, entre ellas Fuentes Revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, con 57 ediciones (2002-2012), Fuentes de Defensa, editado por el Archivo del Ministerio de Defensa Nacional con 5 ediciones (2000-2001), Fuentes Jurídicas, editado por la Biblioteca y Archivo del Ministerio de Justicia con 138 ediciones (1996-2000), Fuentes Etnológicas, editado por la Biblioteca y Archivo del Museo Nacional de Etnografía y Folklore con 8 ediciones (1994-1996); Etnología, Boletín del Museo Nacional de Etnografía y Folklore (19821996), Sol de Intercomunicación y Correo Sol editados por la Secretaría Boliviana del

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Convenio Andrés Bello (1990-1993), Revista del Museo Nacional de Etnografía y Folklore (1982-1996), Luratha, boletín del Centro de Documentación de Antropología (1979-1982), Historia, boletín (luego revista) de la Carrera de Historia de la UMSA (1980-1982); Hechos, boletín de Historia (1980); Cultura Boliviana (1982-1984). Participó en 145 congresos nacionales e internacionales, como expositor, y visitó con propósitos académicos y de estudio, las ciudades de Buenos Aires (Argentina); Bogotá y Cartagena de Indias (Colombia); Sao Paulo y Río de Janeiro (Brasil); Viña del Mar, Santiago y Arica (Chile); Alejandría y El Cairo (Egipto); Austin, Texas; Washington D.C.; Chicago, Illinois; Miami, Florida y Nueva York (Estados Unidos); Madrid, Orense, Valencia, Sevilla y Barcelona (España); París (Francia); Atenas (Grecia); Trivandrum (India); México D.F. (México); Cusco, Tacna, Moquegua y Lima (Perú); Asunción (Paraguay); Londres (Reino Unido); Moscú (Rusia); Montevideo (Uruguay). Organizó la Reunión Regional de Centros de Documentación de Antropología (1980), el Encuentro Internacional de Historia de la Minería (1984), el Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano (2008), el Seminario Internacional de Archivística: Destrucción de la Riqueza Documental e Histórica y la Necesidad de su Rescate para el Desarrollo Nacional (2008), el Coloquio Internacional sobre el Acceso a la Información Pública (2009, el I y II Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos EBAM (2009, 2011), del cual es fundador con Vanesa Beraza (Argentina). Obra intelectual. Comprende sobre Historia, Archivística, Bibliotecología y Bibliografía, Museografía y Conservación, Antropología, Etnografía. Tiene, además de sus libros y folletos, Prólogos a obras de otros autores y más de 430 artículos publicados en revistas impresas y electrónicas, nacionales y extranjeras. Por razones metodológicas, solamente se describen folletos y libros que abarcan cuatro áreas: I. Historia 1. Cuatro testimonios de historia social de Siglo XX (Potosí). La Paz, MUSEF-Túpac Katari, 1985.



2. La Universidad Nacional “Siglo XX”, y el resurgir de un pueblo minero. La Paz, Túpac Katari, 1987. 3. Doña Costa. 64 años de historia entre Senajo, Llallagua y La Paz. La Paz, MUSEF, 1990.

4. Las Mujeres en la historia de Bolivia. Imágenes y realidades del Siglo XX (1900-1950). La Paz, Embajada de los países bajos, 2001.

5. Área de Reflexión Histórica. Introducción a la historia de Bolivia. La Paz, UMSA, 2005. (Coautor con Juan H. Jáuregui, Ramiro Fernández y Simón Cuba). 6. Historia de la memoria política y administrativa de Bolivia. La Paz, Fundappac, 2005.

7. Uncía y Llallagua, Empresa Minera Capitalista. Estrategias de Apropiación Real del Espacio, 1900-1935. La Paz-Lima, Plural/Instituto Francés de Estudios Andinos, 2007. 8. La guerra de la Independencia. Silencio y memoria. Memoria del Encuentro Internacional de Historiadores. Coeditor con Juan H. Jáuregui. Cochabamba, UMSS, 2010.

II. Archivística

1. Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982.

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2. Un pionero.... Semblanza de Gunnar Mendoza. La Paz, Asociación de Archivistas Ex becarios de la OEA, 1982. 3. Archivos y Archivistas. La Paz, MUSEF-Túpac Katari, 1991. 4. Biografías breves de archivistas, bibliotecarios y custodios de memoria comunitaria. La Paz, Comité de Documentalistas y Bibliotecarios de Bolivia, 1993. 5. Gunnar Mendoza y la Construcción de la Archivística Boliviana. La Paz, La Pesada, 2004. 6. Reunión de Consulta sobre la Aplicación de la Norma Internacional (General) de Descripción Archivística ISAD (G). Documento de Conclusiones y recomendaciones. La Paz, Archivo Histórico Municipal de Cochabamba, Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional, Archivo del Banco Central de Bolivia, 2004. 7. Archivos de Oruro, Tarija y Cochabamba. Anteproyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos. Director. La Paz, Vicepresidencia de la República, 2004. 8. Gestión documental y organización de archivos administrativos. La Paz, BCG, 2005. 9. Historia de la archivística boliviana. La Paz, PIEB, 2006. 10. Archivos mineros de Bolivia. El rescate de la memoria social. Coautor con Edgar Ramírez. La Paz, Vicepresidencia de la República-Ministerio de Cultura de España, 2007. 11. Legislación Archivística Boliviana. El ABC normativo del archivero boliviano. Coautor con Flora Rosso. La Paz, BCG, 2007. 12. Guía práctica para la organización de archivos administrativos. 22 esquemas y 26 directrices para el archivista boliviano. Coautor con Carola Campos, La Paz, BCG, 2009. 13. Acceso a la información pública. Archivos y bibliotecas en la Constitución Política del Estado. La Paz, Vicepresidencia del Estado, 2009. 14. Destrucción de la riqueza documental y bibliográfica y la necesidad de su rescate para el desarrollo nacional. Memoria del Seminario Internacional de Archivística. Coeditor con Edgar Ramírez. La Paz, BAHALP-Vicepresidencia del Estado, 2011. 15. Archivos militares de Bolivia. Historia y organización archivística. La Paz, CEPAAA, 2011.

III. Bibliotecología y Bibliografía

1. Catálogo. Materiales del Instituto Lingüístico de Verano, 1955-1980. La Paz, Instituto Nacional de Antropología, 1980. 2. Bibliografía sobre culturas de tradición oral. Catálogo. La Paz, Instituto Nacional de Antropología-Instituto Andino de Artes Populares, 1980. (Con la colaboración de Miriam Cuevas). 3. Bibliografía sobre teoría y metodología de la Historia. La Paz, Centro de Investigaciones Históricas, 1983. 4. Organismos e instrumentos de integración andina. Documentos constitutivos del Pacto Andino, 1960-1991. Coautor con Beatriz Rossells. La Paz, Ministerio de Educación y Cultura, 1992. 5. Pueblos indígenas de las tierras bajas de Bolivia. Catálogo etnológico. Coautor con Rosario Guerra y otros. La Paz, CEDOIN, 1996. 6. Bolivia en las principales bibliotecas de los EE.UU. La Paz, Tomás Catari, 1996. 7. La Biblioteca del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, una alternativa para el desarrollo del conocimiento. La Paz, MJDH, 1999. 8. ¿Un país desinformado? Estudios sobre información científica, cultural y educativa en Bolivia. Coautor con Beatriz Rossells. La Paz, PIEB, 2004. 9. La Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional. Las bibliotecas a través de la Historia. La Paz, Vicepresidencia de la República, 2008.

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IV. Museografía y Conservación

1. Conservación y Restauración de materiales de archivo. La Paz, Centro de Investigaciones Históricas, 1979.

2. Museo Nacional de Etnografía y Folklore. 1962-Bodas de Plata-1987. Una puerta abierta a la cultura boliviana 25 Años de Servicio a la Nación. Coautor con Hugo D. Ruiz y Álvaro Diez Astete. La Paz, MUSEF, 1987. 3. Museos, parques naturales y educación en Bolivia. La Paz, CENDES, 1988.

4. Poblaciones autóctonas de Bolivia. Opiniones del público paceño. La Paz, MUSEF, 1994. (Con la colaboración de Vivian León y Jorge Ortiz).

Fuente: CV.

ORDÓÑEZ KOCK, VÍCTOR HUGO (La Paz, 11 de agosto de 1948)

Arquitecto (UMSA), con Maestría en Planificación de Desarrollo Turístico y cursos especializados en esa rama (México D.F.). En la función pública fue Jefe de Patrimonio y Servicios Generales, Jefe de Comunicación y Prensa, Responsable de Restauración del Palacio de Gobierno, del Hemiciclo de la Cámara de Senadores y del edificio de la Vicepresidencia de la República. Ocupó la cartera de Viceministro de Turismo en el gobierno de C.D. Mesa*. Docente de la Universidad Católica Boliviana y del Instituto Boliviano de Turismo. Fue fundador de la Sociedad Boliviana de Fotografía y Presidente del Círculo de Fotógrafos Profesionales donde creó junto a sus colegas la revista Foto Bolivia. Su experiencia en fotografía de prensa se vio consagrada al trabajar por dos años como corresponsal del matutino Última Hora, México D.F., y para la revista argentina Nosotros de la Comisión Económica para América Latina CEPAL. Participó de varias exposiciones colectivas y sus trabajos se han visto publicados en postales, estampillas y libros donde la imagen lo es todo. Es Secretario General del Sindicato de Fotoperiodistas. Proyecta compartir las imágenes rescatadas de todos sus viajes por el país y el mundo, editando algunas publicaciones. Ha recorrido desde joven todos los rincones de Bolivia, “con la mejor compañía, mi cámara fotográfica”, afirma en su testimonio. Gracias a su pasión por la montaña, tiene la más vasta colección de fotografías de la Cordillera Real de Los Andes, así como de los picos más importantes del continente. Cuenta con un archivo fotográfico de los atractivos y sitios de interés turístico de cada uno de los departamentos de Bolivia, un archivo fotográfico muy completo de los Vicepresidentes de Bolivia desde 1993 hasta el 2004 y una colección de fotografías de Presidentes de Bolivia. Fuente: CV.

ORBIGNY, ALCIDE CHARLES VICTOR MARIE DESSALINES D’

(Coveron, Loire, Francia, 6 de septiembre de 1802. † Saint Remis, Francia, 30 de junio de 1857) Naturalista, geógrafo, botánico, geólogo, paleontólogo y zoólogo. Caballero de la Legión de Honor, Miembro de Honor de la Sociedad Geográfica Francesa, e integrante de numerosas academias científicas de Europa y América. En 1825 el Museo de Historia Natural de París lo comisionó para realizar un viaje de exploración y estudio de la

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América del Sur. Asesorado por famosos científicos, como Cuvier y Humboldt, partió en 1826, hacia Buenos Aires donde arribó en enero de 1827, protagonizando un periplo con el que recorrió parte de Brasil, Uruguay, Perú, Chile, Bolivia, y la Argentina, llegando incluso hasta zonas inhóspitas habitadas por poblaciones indígenas, el que concluyó en 1834. Durante sus viajes de exploración, estudió y recolectó datos históricos, geográficos, climáticos, antropológicos, botánicos, paleontológicos, zoológicos y geológicos. Al término de su misión publicó, entre 1835 y 1847, su monumental obra Voyage dans l’Amerique Méridionale (traducido al español como Viaje a la América Meridional), en nueve volúmenes comparable únicamente con la de Humboldt acerca de la América equinoccial. A su regreso a Francia fue nombrado director del Museo y profesor de Paleontología en la Universidad de París. En mérito a su proeza, el gobierno boliviano le hizo Oficial de la Legión de Honor Boliviana. A. d’Orbigny seguramente nunca olvidó el aprecio y el calor humano de los habitantes de La Paz, pues cuando salía de Bolivia, un funcionario de la Prefectura, en una muestra de aprecio absolutamente desproporcionada, le obsequió las Actas Capitulares originales del Cabildo de La Paz, registro minucioso de las actuaciones administrativas de los primeros pobladores entre 1548 a 1562. El sabio francés “llevó el voluminoso infolio a París como una de las piezas más valiosas de su abundante colección”. La historia de este manuscrito es fascinante y por ello digna de contarse: “A su muerte el museo pasó a ser propiedad del Gobierno francés, mediante el pago de 55.000 francos a sus herederos. En esa misma fecha el manuscrito del libro de Cabildo fue adquirido por un señor Gaudry”, su suegro, quien intentó ponerse en comunicación con el gobierno de Bolivia, para la devolución de la pieza documental a la Municipalidad de La Paz, sin obtener respuesta. “En 1872 el libro pasó a formar parte de la colección Egerton del Museo Británico. Alrededor de 1873, Nicolás Acosta*, mientras se hallaba en Londres desempeñando el cargo de Secretario de la Legación de Bolivia, intentó descifrar el voluminoso documento con la ayuda de Pascual Gayangos y Clemente S. Markham”. Más tarde V. Ballivián y Roxas* las copió y posteriormente se publicaron parcialmente por iniciativa de Carlos Bravo en 1880. Finalmente fue Gabriel Feyles* quien logró transcribir las Actas Capitulares y publicarlas íntegramente en 1965, por encargo de la Alcaldía Municipal de La Paz. No es lo único que se llevó d’Orbigny de Bolivia, pues también le fueron obsequiadas las Actas de la Diputación Provincial de La Paz, comprendidas desde el 1º de julio de 1820 hasta el 31 de enero de 1824, quedando hasta hoy en poder de sus herederos. En relación a su memoria de viaje de A. d’Orbigny, la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (Asamblea Legislativa Plurinacional), gestionó su declaratoria como Memoria de la Humanidad, presentada en marzo de 2002, por el Comité Regional del Programa Memoria del Mundo de la UNESCO, iniciativa apoyada por la Representante Regional (Ecuador) del Programa, Mtra. María E. Porras. Finalmente, la IV Reunión del Comité Regional para América Latina, en Managua, Nicaragua, el 19 de noviembre de 2002, aprobó la inscripción, en el Registro de la Memoria del Mundo, de la obra Voyage dans l’Amerique Meridionale, “dado el valor excepcional y el interés regional de una colección documental que debe ser protegida para el beneficio de la humanidad” y que forma parte de la “Memoria científica de América Andina, las expediciones e investigaciones científicas en Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú, siglos XVIII-XIX”. Fuente: Arze, 1987: 127; Feyles, 1965; Oporto, 2006:126-127; Certificación de Memoria de la Humanidad de la obra de Alcides d’Orbigny voyage dans l’Amerique Meridionale.

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ORELLANA CHÁVEZ, SIMÓN (Potosí, 24 de marzo de 1954)

Licenciado en Historia (UMSA). Militar. Coronel de la reserva activa. Estudió en el Colegio Militar del Ejército “Cnl. Gualberto Villarroel” (La Paz). Participó en el Curso C-2 de la Escuela de las Américas (Zona del Canal, Panamá) y el Diplomado de Estado Mayor. Fue Director de Archivos Militares de las FF. AA. (2003-2009) y Director de Archivos, Biblioteca y Museo del Colegio Militar del Ejército (2009). Durante su gestión en la dirección de archivos militares, por primera vez en la historia de la archivística de Bolivia, se dio apertura y acceso controlado a los fondos documentales del Archivo Histórico de las Fuerzas Armadas de Bolivia, para lo cual trabajó con estudiantes de la Carrera de Historia y el apoyo de M. Money*, en la organización y sistematización de series documentales de la Guerra del Chaco, documentos de carácter clasificado hasta entonces. Miembro del Grupo Multidisciplinario de Historia “Itihasa” con M. Montesinos* (La Paz); fue docente titular de la Escuela Militar de Inteligencia del Ejército; Universidad Andina Tahuantinsuyo Ajlla, Colegio Militar del Ejército y desde 2010, de la Carrera de Historia de la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca. Participó en el Congreso Internacional de Historia y Geografía (Santa Cruz); en la Mesa debate Bicentenario de la Independencia (2009). Presentó su ponencia sobre “La destrucción de documentos en las Fuerzas Armadas”, en el Seminario Internacional de Archivística sobre la “Destrucción de la riqueza Documental y Bibliográfica”, organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional* y el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2008). Su tesis de Licenciatura versó sobre La Campaña de Ñacahuazú (sic), una reconstrucción a través de la Historia Oral (La Paz, UMSA, 2007). Ha elaborado el Proyecto del Sistema de Archivos Militares de las FF. AA. (en ejecución), el Proyecto de Fusión de los Archivos Históricos de Defensa y FF. AA. (presentado al Ministerio de Defensa Nacional) y una paropuesta para El Sistema de Archivos y Bibliotecas en el Colegio Militar del Ejército. Publicaciones archivísticas: “Las Fuerzas Armadas de Bolivia y los documentos, del caos al rescate documental: estudios de casos” (Oporto y Ramírez: Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la necesidad de su rescate para el desarrollo nacional. La Paz, BAHALP, 2011: 157163); “Prólogo” a Archivos Militares de Bolivia. Historia y organización archivística, de Luis Oporto Ordóñez. La Paz, CEPAAA, 2011; “Rescate del fondo documental del Tribunal Permanente de Justicia Militar” (Boletín del Archivo de La Paz, 2012, Nº 27: 73-81). Fuente: CV.

ORGANIZACIÓN DE ESTADOS AMERICANOS (OEA) La Primera Conferencia Internacional Americana, efectuada en Washington D.C (1890), estableció la Unión Internacional de las Repúblicas Americanas y su secretaría permanente, que vendría ser precursora de la Organización de Estados Americanos OEA. En 1910 se convirtió en la Unión Panamericana. Finalmente, el 30 de abril de 1948, 21 naciones del hemisferio se reunieron en Bogotá, Colombia, para adoptar la Carta de la Organización de los Estados Americanos, considerada como una organización internacional panamericanista para fomentar el diálogo multilateral y la toma de decisiones. Trabaja para fortalecer la paz y seguridad, consolidar la democracia,

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promover los derechos humanos, apoyar el desarrollo social y económico y promover el desarrollo sostenible en América. Tiene su sede en Washington, DC, Estados Unidos de América y oficinas regionales en distintos países miembros. Está compuesta de 34 países miembros. Los únicos miembros suspendidos han sido Cuba y temporalmente Honduras. En cumplimiento de sus funciones, impulsó la creación del Instituto Panamericano de Geografía e Historia* y desde allí ha desarrollado el Programa Especial de Capacitación Archivística, en cumplimiento de la Primera Reunión Interamericana de Archivos*, creando los Cursos de Administración de Archivos Históricos (Escuela Nacional de Documentalistas* de Madrid, España) y de Archivos Administrativos (Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos*, Córdoba, Argentina). Fuente: Website oficial (diciembre de 2009).

OROPEZA ALCÓCER, DANIEL Militar. Alcanzó el grado de Mayor. Fue nombrado Jefe de Correspondencia, Informaciones y Archivo, desde 1979, por el Prefecto Cnl. Mario Escobari Guerra. Fue designado Jefe de Archivo el 12 de noviembre de 1979, promovido desde su antiguo cargo de Jefe de Bienes y de Personal. Señala, en su informe presentado a la Segunda Reunión Preliminar de Archivos (1982), “al final de cada gestión, se archiva toda la documentación por secciones respectivas, cronológicamente ordenadas, seleccionadas y numeradas, pasando al depósito del entretecho”. Publicaciones archivísticas: “Informe general de la sección Correspondencia y Archivo de la Prefectura del Departamento de La Paz” (Oporto Ordóñez, Luis: Problematica de los Archivos de La Paz. La Paz, AAEOEA, 1982: 31-33). Fuente: Oporto, 1982: 31-33.

OSCO QUISPE, EDWIN GABRIEL (La Paz, 1 de junio de 1972)

Licenciado en Bibliotecología y Ciencias de la Información, mención Archivología, UMSA (2008). Proviene de cuna minera, pues trabajó y formó parte de la Cooperativa Minera Aurífera “Ingenio Ltda.” En 1994 ingresó a trabajar en la Secretaría Nacional de Cultura (actual Ministerio de Culturas), como responsable del Archivo Central, logrando su sistematización, durante la gestión del Viceministro Ramón Rocha Monroy (1997). Elaboró una monografía sobre la salvaguarda del patrimonio documental que presentó a la Viceministra M. Isabel Álvarez Plata (2003); coordinó el rescate del patrimonio documental de la Casa Agramont, por encargo del Viceministro F. Cajías* (2005); elaboró el Reglamento de Archivos del Ministerio de Educación y trabajó en la creación de la Biblioteca del Poder Ejecutivo, por encargo del ex presidente Eduardo Rodríguez Veltzé (2006). Miembro fundador de la Sociedad Científica de Bibliotecología y Ciencias de la Información que agrupa a estudiantes de esa carrera (2004). Organizó el Seminario de Gestión y Transferencia Documental de los Archivos de Oficina al Archivo Central (2005). Participa activamente en seminarios y cursos especializados. Tiene escrito un Reglamento de Archivos del Ministerio de Educación (2006, inédito). Fuente: CV.

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OSTRIA GUTIÉRREZ, ALBERTO

(Sucre, 7 de febrero de 1897. † Santiago de Chile, 1965) Abogado, Profesor, Escritor, Diplomático, Periodista. Cursó sus estudios en Sucre y en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Río de Janeiro (Brasil). Fue Director de El Diario de La Paz. Catedrático de Derecho Internacional (UMSA), Presidente de la Sociedad Bolivariana de La Paz y Académico de Número de la Academia Boliviana de la Historia. Fue Primer Secretario de las Legaciones de Bolivia en Argentina y Brasil (1917-1920). El Presidente Carlos Quintanilla lo nombró Canciller (1939-1941). Siendo primer secretario de la Legación de Bolivia en España, cuya Embajada estaba a cargo de S.I. Patiño*, recibió las instrucciones de la Cancillería boliviana de indagar en el Archivo General de Indias* de Sevilla, los documentos que sustenten su derecho al Litoral perdido como resultado de la guerra injusta de 1879. En junio de 1923 empezó su trabajo, con el apoyo económico de Patiño. Con algunos funcionarios de dicho Archivo seleccionó los documentos de interés para Bolivia, los catalogó y envió las fichas a La Paz, donde se analizaba y decidía de cuáles debían hacerse las copias. “El envío de documentos a la Cancillería duró un año, desde el 6 de julio de 1923 hasta el 14 de julio de 1924”, relata J. Siles Guevara*. Ostria envió más de 50 documentos, de los siglos XVI al XVIII, referentes a los derechos de Bolivia al Pacífico. Siles afirma que “la misión de Ostria Gutiérrez sirvió para iniciar la búsqueda sistemática de los papeles que guardan los archivos españoles sobre los incuestionables derechos coloniales de Bolivia al mar, que ninguna propaganda interesada de Chile podrá jamás desvirtuar”. La vocación de papelista de Ostria le llevó a coleccionar documentos oficiales, los que mantuvo en su poder en vida. El diputado F. Kieffer*, en su condición de Presidente de la H. Cámara de Diputados, en 1991 recibió los documentos que reunió, los que se encontraban en los Estados Unidos de Norteamérica, en custodia de su hijo quien decidió entregarlos al Archivo Histórico del Congreso Nacional, cuando se encontraba de directora la Sra. Y. Tejerina* (1990-1991). Son 45 cajas, que contienen valiosos documentos, entre ellos: Apuntes sobre la realidad agraria en Bolivia (1954); carta dirigida a José Mora Otero, Secretario General de la OEA, con relación a la investigación y esclarecimiento de la muerte de Oscar Unzaga de la Vega (15 de mayo de 1959); carta de Roberto Arce acerca de la situación política de Bolivia (10 de octubre de 1956); instrucciones (5 de noviembre de 1941) del General Peñaranda al Embajador de Bolivia en Chile (reservado); Aniceto Arce, Cónsul de Bolivia en Arica (reservado) sobre posible preparativos bélicos de Chile contra Bolivia; Gustavo Adolfo Navarro (Tristán Marof): “El peligro nazi en Bolivia”; discursos pronunciados en las sesiones de la Cámara de Diputados (27 y 30 de agosto de 1941); carta abierta al Presidente Gualberto Villarroel, por Pedro Zilveti Arce; Exilio, mayo de 1945; Memorando al Sr. Edmundo Vásquez, Embajador de Bolivia en Brasil, referente a los estudios de exploración, perforación y explotación del petróleo boliviano en la faja subandina, de 12 de julio de 1950. Contiene sus obras manuscritas: “Un pueblo en la Cruz. El Drama de Bolivia” (1956); “El Traje del Arlequín”, escrito en colaboración con Adolfo Costa du Rels (1921); “La Doctrina del No-Reconocimiento de la Conquista en América”, ensayo presentado para su incorporación al Instituto da Orden dos Adbogados Brasileiros (1938); “Una Revolución Tras los Andes” (1944); “Alcides Arguedas, Historiador”

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(1961); “Sabastito”, “Nochebuena triste”, “El ciego”, “Venganza”, “Como el agua turbia”, “El perro de Mr. Thompson”, “La promesa”, “Mientras rodaba la noche”, “La quincena trágica”, “El fiña-toro” (el toro enojado), “Justicia”. Es autor de Estado de Sitio (1921), Rosario de Leyendas (1924), Las fronteras de Bolivia (1941), Una obra y un destino. La política internacional de Bolivia después de la Guerra del Chaco (1946) y Apuntaciones sobre negociaciones portuarias con Chile (1998), manuscrito inédito publicado por el Archivo Biblioteca Nacionales de Bolivia, donado por la nieta del autor, Susana Ostria Calvo.. Fuente: Costa de la Torre, 1968: 773-774; Siles Guevara, 1973c: 3.

OTERO HINOJOSA, ARMANDO

(Santa Cruz de la Sierra, 10 de diciembre de 1961) Técnico Superior en Bibliotecología UAGRM (2009). Diplomado en Gestión de la Información y Automatización de Bibliotecas UAGRM (2009). Entre 1982 y 1987 se desempeñó como Secretario del Proyecto CIPCA–CORDECRUZ. Desde diciembre de 1996 a la fecha, es Ayudante de Archivo de la Cooperativa de Servicios Públicos de Santa Cruz, SAGUAPAC, bajo la dirección de D. Moreno Menacho*. Fuente: Comunicación personal de Dilza Moreno Menacho (14.06.10)

OVANDO CANDIA, ALFREDO

(Cobija, Pando, 5 de abril de 1918. † La Paz, 24 de enero de 1982) Militar y político. Participó en la Campaña del Chaco en la generación denominada “Tres Pasos al Frente”. En su condición de Comandante en jefe del Ejército en 1964, secundó el golpe de Estado contra el presidente V. Paz* y co-gobernó con el Gral. R. Barrientos* (1965-1966), fue presidente cuando éste candidateó (1966) y volvió a ese cargo al derrocar al presidente L.A. Siles* (1969), impulsando un gobierno progresista que nacionalizó el petróleo, expropió la principal empresa petrolera norteamericana Gulf Oil Co., instaló la primera fundición de estaño en el país y llevó adelante campañas de alfabetización. Durante su régimen se produjeron los hechos de Teoponte, en los que se inmoló una columna guerrillera del Ejército de Liberación Nacional. Fue luego, Embajador en España. Durante su gobierno promulgó el DL 7098 de 19 de marzo de 1965, que incorporó la microfilmación en los archivos, primero bancarios luego de la Administración pública, como sistema de sustitución, otorgando valor legal a los microfilmes, hecho que propició la destrucción de los originales, como sucedió efectivamente, en el Archivo de la Dirección de Territorial del Ministerio de Defensa Nacional. En 1970, gestionó la donación de la Biblioteca del escritor y diplomático Adolfo Costa Du Rels, a la sazón Embajador de Bolivia ante la UNESCO, al Archivo Biblioteca Nacionales de Bolivia*, quien a tiempo de confirmar su deseo de donarla, aclaró “que, si bien fue otrora, importante, ha quedado al presente reducida a modestas proporciones, a raíz de la ocupación de mi domicilio por las tropas alemanas al finalizar la última guerra”. Fuente: Oporto, 2007: 208; Presencia, 1970a; http://es.wikipedia.org (15.4.12).

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OVANDO SANZ, GUILLERMO

(Oruro, 10 de febrero de 1917. † La Paz, 17 de enero de 1990) Arquitecto, historiador, archivista y bibliógrafo. Estudió en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile, especialidad Planeamiento y Urbanismo (1936-1942), donde fue profesor de Geometría en la “Escuela para Obreros de la Construcción” (1942-1946); y se organizó en torno al Centro Boliviano de Estudios de Arquitectura y Planeamiento. Realizó estudios de Bibliografía Boliviana en la Biblioteca Nacional de Chile, despertando su vocación de historiador y bibliógrafo. Participó en los Cursos de verano en Organización y administración de bibliotecas, Catalogación y clasificación de impresos, en la Escuela de Temporada de la Universidad de Chile (1945). De regreso a Bolivia, en la ciudad de Cochabamba abre su oficina y se ocupa de planificar y construir varias residencias; interviene en las discusiones del Plan Regulador de Cochabamba (1947-1954) y publica varios artículos de prensa en defensa de dicho plan. Fue candidato a la Alcaldía en 1947, proponiendo un ambicioso plan de modernización urbana de la ciudad. Trabajó en el Lloyd Aéreo Boliviano (1947-1953) como Jefe de Arquitectura y de Construcciones en Aeropuertos, que le permite realizar viajes por todo el país. Fue profesor de Geometría en la Academia de Artes Plásticas de Cochabamba (1951-1953) y publica una serie de artículos de prensa sobre arte. Luego se traslada a Potosí, donde desarrolló amplia y fructífera labor en la docencia y la investigación (1954-1971). En la Facultad de Ingeniería de la Universidad Tomás Frías es catedrático de Arquitectura y Urbanismo, Organización y Presupuestos, y Materiales de Construcción. Como jefe de la Oficina Técnica (1955) participa del informe de la Comisión impulsora para la conclusión del nuevo edificio de la Universidad con una serie de sugerencias y recomendaciones. Fue Vicerrector de la Universidad Tomás Frías (1959-1962). En la Universidad organiza las denominadas series temáticas de Exposiciones Permanentes de Arte y Técnica (1955-1963), publicando una serie de catálogos que alcanzan a 50 números, que comprenden “tanto muestras pictóricas como plásticas, técnicas, folklóricas, etc.”. Su vocación por la historia y la archivística le impulsan a fundar el Instituto de Investigaciones Históricas (IIH) de la Universidad Tomás Frías (6 de noviembre de 1956), del que fue Director, con intelectuales como Alberto Subieta Torres (Vice-Director) y M. Chacón* (Secretario), con el objetivo de estudiar y difundir el acervo cultural e histórico potosino (I.2). Publicó con el IIH dos números de la Revista del Instituto de Investigaciones Históricas (Vol. I-Nº 1, 1959-1960 y Vol. I-Nº 2, 1962), quedando trunco un tercer número ya preparado. A través de la revista y una serie de publicaciones difundió trabajos de investigadores nacionales y extranjeros; asimismo de documentos inéditos del Archivo de Potosí a través de sus investigaciones. Los 18 Cuadernos del IIH (1958-1964), muchos con Prólogo de GOS, se clasificaban en Series temáticas referidos a: I. Archivos, II. Bibliografía, III. Minería, Mita, IV. Arte, V. Historia eclesiástica, VI. Teatro, VII. Arqueología, VIII. Historia comparada y IX. Literatura. Esta producción bibliográfica, junto a otras publicaciones de la Universidad, fueron presentadas en el Primer Concurso Nacional de Publicaciones Universitarias (Potosí, 1960), obteniendo el primer premio.

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Desde el IIH asistió en la organización y catalogación del Archivo Histórico de Potosí* (Casa de la Moneda) con A. Alba* y M. Chacón*, bajo el asesoramiento de G. Mendoza*. Con el auspicio del IIH y la Universidad, en mayo de 1960 visita Potosí el Dr. T.R. Schellenberg*, Director Asistente del Archivo Nacional de los Estados Unidos, quien dictó la conferencia “La importancia de los Archivos”. Y en 1961 (19 julio) se rinde un homenaje al fundador de la Sociedad Geográfica y de Historia “Potosí”, L. Subieta Sagárnaga*, con la participación del Rector Alberto Villalpando y el director del Departamento de Cultura, ocasión en la que GOS presentó una bibliografía preliminar (I.5). En 1961 (febrero) asistió al II Seminario Interamericano de Educación, en Estados Unidos, invitado por la International Educational Exchange Activities (Departamento de Estado), oportunidad en que visitó las Naciones Unidas, la Unión Panamericana y la Biblioteca del Congreso, y sostuvo entrevistas con personalidades en el ámbito de la historia y la archivística como Charles Arnade, L. Hanke*, T.R. Schellenberg y otros. Junto a G. Mendoza y M. Chacón, asistió a la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos* (Washington, D.C., octubre de 1961), organizado por The National Archives de los Estados Unidos, a la que presentó el trabajo “Relaciones entre la profesión archivera y los museos”. Becado por la OEA y el Instituto de Cultura Hispánica viaja a España (19651967) con fines de investigaciones históricas. En Madrid trabajó en el Archivo Histórico y en la Real Academia de la Historia que custodia la soberbia colección Mata Linares, en la que revisó documentos referidos a la Encomienda en Charcas y la actuación de P. V. Cañete*. Se trasladó a Sevilla, para investigar en el Archivo General de Indias*, en las secciones de las Audiencias de Charcas, Buenos Aires, Lima, Patronato, y Justicia. Obtuvo copias de documentos sobre la Visita de Francisco Alfaro, el trabajo y la Escuela de Minas en Potosí y la presencia de Tadeo Haenke* en Charcas. Dependiente del Ministerio de Educación, en potosí (1968-1970) es supervisor de reparación de escuelas y dirige la construcción del Kindergarten “Jaime Mendoza” (Sucre) y en la Alcaldía Municipal de Potosí (1969-1970) es Asesor en Planificación y Urbanismo. Como arquitecto e historiador potosinista fue asiduo defensor en la preservación e identidad histórica patrimonial de los monumentos arquitectónicos. Participó en el Primer Congreso de Historiadores Bolivianos (La Paz, 1970), en la que se trataron temas sobre historia, archivos y bibliotecas, fuentes, presentando la ponencia “Normalización de citas documentales y bibliotecas” (Presencia Literaria. La Paz, febrero 15). Después de 17 años de residencia, de Potosí se traslada a La Paz y trabaja en el Ministerio de Urbanismo y Vivienda (1971-1985) como Subdirector General de Arquitectura, promovido a Director en 1977. Tuvo a su cargo la restauración del Templo de la Merced (La Paz) y de la Casa de la Libertad (Sucre) por encargo de ese ministerio en su calidad de Director del Departamento de Preservación y Restauración de Monumentos Históricos y Arquitectónicos de la Dirección Nacional de Arquitectura, que contó con el apoyo del Banco Central de Bolivia* y el Comité de Desarrollo de Obras Públicas de Chuquisaca (1975-1976). Fue catedrático de Urbanismo en la Facultad de Arquitectura de la UMSA (1972-1974), dictó Historia Monográfica de Bolivia (1972-1979) y Archivística y Fuentes para la Historia de Bolivia (1979-1989) en la Carrera de Historia*.

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En 1975 publicó La Academia de Minas de Potosí, 1757-1970 (I.7), resultado de sus investigaciones en el Archivo General de Indias, Archivo Histórico de Potosí y Archivo Nacional de Bolivia. Trabajo que, por otra parte, estaba dedicado a resaltar a Potosí como centro minero y a la antigua Escuela de Metalurgia como antecesora de la Facultad de Ingeniería. Fue impetuoso defensor del término Charcas en lugar de “Alto Perú” para referirse a la unidad territorial colonial que dio origen a Bolivia (I.10). J. Barnadas* respaldó esa tesis con su estudio Es muy sencillo: llámenle Charcas (La Paz, 1989), designándolo “abanderado de Charcas”. Fue asiduo admirador y seguidor de la obra de G. René-Moreno* y de G. Mendoza, que se refleja en sus trabajos. Como editor, fue miembro del Comité Asesor de la edición de la Historia de la Villa Imperial de Potosí de B. Arzáns de Orsúa y Vela* (edición de L. Hanke y G. Mendoza. 3 Vols. Providence, Rhode Island University Press, 1965-1966) y de Tadeo Haenke. Su obra en los andes y la selva boliviana (I.6). Con el apoyo del Ing. Alberto M. Vázquez editó en 7 volúmenes las Obras Completas de Humberto Vázquez-Machicado y José Vázquez-Machicado (I.11), monumental emprendimiento al que le dedicó diez años de investigación, preparación y edición, en el que ponderó la contribución a la historiografía de ambos historiadores cruceños. El 27 de julio de 1989, en acto oficial realizado en la Biblioteca del H. Senado Nacional, la directiva de esa Cámara reconoció el trabajo de ambos intelectuales, “por su valiosa contribución y enaltecimiento de la cultura y el pensamiento nacionales, en enorme y meritorio esfuerzo intelectual y editorial que honra a la Nación” (H. Senado Nacional, R. Nº 127/89, La Paz, 16 de enero de 1989). De 1981 (agosto) a 1989 (diciembre) dirige la Colección de Folletos Bolivianos de Hoy (diario de La Paz) (I.8). Mensualmente, y con Prólogo o una breve Nota de GOS, en 4 volúmenes, de 25 números cada volumen, alcanza a publicar 100 números. En una tarea de recuperación y difusión de gran importancia, puso al alcance algunos considerados raros y curiosos a través de tres tipos de materiales: reimpresiones (ediciones facsimilares), de folletos, siglos XIX y XX (como Informes oficiales o memorias y crónicas de viajeros); reproducciones (reediciones) de trabajos publicados recientemente o de actualidad, o partes de libros (capítulos), artículos de prensa, revistas o boletines; y publicación de trabajos inéditos). Una variedad de temas que refieren a todo el territorio de Bolivia a lo largo de los siglos XVI-XX, incluyendo el Litoral, sobre de Archivística, Arte, Bibliografía, Biografía, Crónicas, Ecología, Exploración y colonización del Oriente y del Chaco, Geografía, Geopolítica, Historia, Literatura, Minería, Música, Política, Prólogos, Salud, Teatro, Tradiciones y costumbres, Urbanización, etc., , “con la idea de facilitar al público nacional y extranjero, particularmente a los estudiosos de nuestro pasado y nuestro porvenir algo del material sumamente importante que, editado en épocas pasadas o en la presente, tuvo escasa circulación y hoy se conserva en pocas bibliotecas públicas y privadas”. Fue miembro fundador de la Sociedad Boliviana de Historia (1972), con el propósito de impulsar el estudio de la historia y la preservación y difusión de las fuentes documentales; contribuyó con varios artículos a la revista Historia y Cultura, órgano oficial de la Sociedad, cuyo primer número apareció en 1973. Académico de número de la Academia Boliviana de Historia con su tesis “Manuel Vicente Ballivián, el hombre del Noroeste” (18 de julio de 1986). Miembro del Colegio de Arquitectos de Bolivia, de la

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Sociedad Boliviana de Bibliografía, Sociedad Boliviana de Ecología, Sociedad Boliviana de Historia, Sociedad de Amigos de la Historia de la Villa Imperial de Potosí, Sociedad Geográfica y de Historia “Cochabamba”, Sociedad Geográfica y de Historia “Potosí”, Sociedad Geográfica y de Historia “Sucre”, Societé des Americanistes, París. Obra publicada La Bibliografía general de Guillermo Ovando Sanz, compilada por G. Molina*, de la que presentamos una selección abarca temas referidos a la historia, biografía, bibliografía, archivística, difusión de fuentes documentales, reseñas bibliográficas, ecología, y urbanismo y planeamiento. I. Libros, folletos y ediciones

1. La primera Revista boliviana (Revista de Cochabamba, 1852). Potosí: Instituto de Investigaciones Históricas, Universidad Tomás Frías, 1958. (Serie II. Bibliografía, Cuaderno Nº 1). Separata de Universidad, 42.



2. La fundación del Instituto de Investigaciones Históricas de la Universidad de Potosí, 1958. Separata de Khana, II/31-32

3. El curato de la Iglesia Matriz de Potosí en 1807. Potosí: IIH, UTF, 1960. (Serie V. Historia Eclesiástica, Cuaderno Nº 1). Separata de Revista del IIH, I/2

4. Dos bibliotecas coloniales de Potosí (Documentos inéditos del Archivo Histórico de Potosí, 17701806). Gainesville: University of Florida, 1961. De Journal of Inter-American Studies, III/1

5. Bibliografía preliminar de Luis Subieta Sagárnaga. Potosí: IIH, UTF, 1961. En colaboración con Mario Chacón Torres (Serie II. Bibliografía, Cuaderno Nº 2). Separata de Revista del IIH, I/2

6. Tadeo Haenke. Su obra en los andes y la selva boliviana. Selección, Prólogo y Notas de Guillermo Ovando-Sanz. La Paz-Cochabamba: Los Amigos del Libro, 1974. 7. La Academia de Minas de Potosí, 1757-1970. Ensayo documental. La Paz: Banco Central de Bolivia, Academia Boliviana de la Historia, 1975. 8. Colección de Folletos Bolivianos de Hoy. 4 vols. (100 números). 1981 (agosto)-1989 (diciembre).

9. Un importante libro de Chelio Luna-Pizarro sobre el departamento de Pando. Colección de Folletos Bolivianos de Hoy, Vol. III, Nº 17 (La Paz, marzo, 1987).

10. “El término ‘Alto-Perú’ para designar a Bolivia es un absurdo”. Reportaje de Tatiana Davidovna Vartañan a Guillermo Ovando Sanz en 1976. Segunda edición. Colección de Folletos Bolivianos de Hoy, Vol. III, Nº 22 (La Paz, agosto, 1987).

11. Obras Completas de Humberto Vázquez Machicado y José Vázquez Machicado. Edición de Guillermo Ovando Sanz y Alberto M. Vázquez. La Paz: Editorial Don Bosco, 1988. 7 vols.

12. Adiciones y correcciones a la Bibliografía Boliviana (1659-1908). Cochabamba-La Paz: Los Amigos del Libro, 1996. Separata de la Bio-Bibliografía Boliviana 1995 13. Gabriel René Moreno. La Paz: Fundación Humberto Vázquez Machicado, 1996. II. Publicaciones Archivísticas (y fuentes)

1. “Documentos Inéditos sobre Casimiro y Pedro Antonio de Olañeta”. El Diario. Tercera Sección. La Paz, 5 de abril de 1959: 1.

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2. [Prólogo]. En: Marie Helmer. Escrituras Públicas coloniales de Potosí (Prólogo al Catálogo final del siglo XVI). Potosí: Instituto de Investigaciones Históricas, Universidad Tomás Frías, 1959; p. 1-2 (Serie I. Archivos, Cuaderno Nº 1).

3. La mita de Potosí en 1795 por Gabriel René Moreno. Con una adición de siete documentos inéditos compilados por Guillermo Ovando Sanz. Potosí: IIH, UTF, 1959. (Serie III. Minería, mita, Cuaderno Nº 1). Separata de Revista del IIH, I/1.







4. “Dr. Theodore R. Schellenberg”. En: La importancia de los Archivos. Conferencias presentadas por la Universidad Tomás Frías. Potosí: Departamento de Cultura, 1960; p. 2. Folleto de propaganda.

5. “Entrevista de los redactores de Verdad Universitaria”. Verdad Universitaria. Órgano de la Juventud Universitaria Católica, Nº 2 (Potosí, 19 de noviembre de 1961), p. 9-10. I Reunión Interamericana sobre Archivos (Washington, D.C., octubre de 1961). 6. Documentos del Archivo de Potosí. Índice del Libro de tasas de los repartimientos, provisiones y remates. Sucre: Universidad de San Francisco Xavier, 1964.

7. “Fuentes para la historia boliviana en los EE.UU. de América”, en: Humberto Vázquez Machicado. Fuentes para la Historia Boliviana en los EE.UU. Potosí: Instituto de Investigaciones Históricas, Universidad Tomás Frías, 1964; p. 1-10. Contiene “Bibliografía preliminar de Humberto Vázquez Machicado” (Serie I. Archivos, Cuaderno Nº 3).

8. British Interests in Potosí, 1825-1828; Unpublished Documents from the Archivo de Potosí. Reprinted from The Hispanic American Historical Review, Vol. XLV, Nº 4 (Febraury, 1965). 9. “Un documento sobre el arrendamiento de una mina de la corona en Porco, año 1593”. Presencia Literaria. La Paz, 25 de junio de 1972: 3-4. 10. “La reedición del Catálogo de Mojos y Chiquitos de Gabriel René-Moreno”. Presencia Literaria. La Paz, 16 de junio de 1974: 3. 11. “Los restos del Archivo de Tadeo Haenke”, en: Tadeo Haenke. Su obra en Los Andes y la selva boliviana. Selección, prólogo y notas de GOS. Cochabamba, Los Amigos del Libro, 1974, p. 189-195. 12. “La importancia de los archivos”. Revista Informativa, Nº 1 (La Paz: Ministerio de Urbanismo y Vivienda, 1976), p. 24-25. 13. “Curiosidades archivísticas”. Presencia Literaria. La Paz, 4 de agosto de 1985: 2 14. Los intereses ingleses en Potosí. Documentos del Archivo de Potosí 1825-1828. 3a. edición. Colección de Folletos Bolivianos de Hoy, Vol. II, Nº 24 (La Paz, sept., 1985). 15. Documentos del Archivo de Potosí, Bolivia. Índice del Libro de Cartas de los Oficiales Reales al Rey y al Consejo de Indias (1712-1793). La Paz: Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Departamento de Historia, Universidad Mayor de San Andrés, 1975. 16. “Un documento poco conocido: el acta del claustro de la Universidad de San Francisco Xavier de la Plata, sobre las pretensiones portuguesas y brasileñas en 1809”. Historia y Cultura, Nº 13 (La Paz: SBH, abril, 1988), p. 93-110. 17. Un documento poco conocido: el acta del claustro de la Universidad de San Francisco Xavier de la Plata, sobre las pretensiones portuguesas y brasileñas en 1809. La Paz: Don Bosco, 1988. Separata de Historia y Cultura, 13.

18. “El archivo de Mojos y Chiquitos”. Correo Literario-Correo del Sur. Sucre, 21 de marzo de 1996: 2. Reproducido, sin las notas, de: Gabriel René Moreno (Cap. VI, 99-110) (I. 19).

Fuente: Barnadas, 2002: II, 437-438; Costa de la Torre, 1968: 779-780; Hanke, 1974: 42; Molina, 2007: 123-164; Siles Guevara, 1974c: 2.

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OVANDO SANZ, JORGE ALEJANDRO

(La Paz, 25 de octubre de 1921. † La Paz, 1999) Abogado, escritor y periodista. Fue miembro del Partido Comunista de Bolivia. Oficial Mayor de la Vicepresidencia de la República y Catedrático de Historia Económica en la Universidad Mayor de San Andrés; especialista en Sociología política. Su padre Alejandro fue miembro de la Comisión Financiera del Ferrocarril Cochabamba Santa Cruz (1921-1927), cuya documentación estaba conformada por informes, memorándums, proyectos de contratos de construcción, correspondencia y telegramas sobre la construcción del Ferrocarril Cochabamba - Santa Cruz. Al fallecimiento de su hijo Jorge Alejandro, su esposa, el año 2000 donó esta documentación al Archivo de La Paz*. Participó activamente en el salvataje de los documentos coloniales que la Corte Superior del Distrito de La Paz había decidido descartar para venderla a una recicladora de papel. A la postre, gracias a su intervención, estos documentos fueron la base para la creación del Archivo de La Paz, en una acción épica liderada por A. Crespo*. Cultivó una biblioteca especializada. Su obra intelectual analiza capítulos relevantes de la historia económica y política de Bolivia. Sobre el problema nacional y colonial de Bolivia (1961); El Indigenismo (1979); Historia Económica de Bolivia (1981); El enclaustramiento no será perpetuo (1984); El Tributo indígena en las finanzas bolivianas del siglo XIX (1985); La Guerra Civil de 1879 (1985); Cobija, unida por siempre a Bolivia (1992); Cercos de ayer y de hoy (1993). Fuente: Barragán, 2008: 138; Costa de la Torre, 1968: 780-781; http://censoarchivos.mcu.es (11.02.10)

OZUNA TARIFA, MARÍA JUDITH (La Paz, 14 de octubre de 1960)

Secretaria Ejecutiva. Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información (Mención Archivología) y Licenciada en Derecho (Área Privada), en la UMSA. Participó en cursos cortos de Organización de Archivos Administrativos (UMSA) y Conservación del Patrimonio Cultural de Bolivia (Contraloría General de la República). Fue becaria en los cursos especializados auspiciados por la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI), Gestión de Documentos y Archivos Administrativos en el Centro de Formación de Archivos de Santa Cruz de la Sierra (2003), Conservación y Restauración de Documentos de Archivos en Cartagena de Indias, Colombia (2008) y en la XVIII Escuela de Archivos para Iberoamérica*, en Madrid, España, auspiciado por el Ministerio de Cultura de España (2008). Fue Jefe de Archivo de la Subsecretaria de Migración (1994-1997); trabajó en la Biblioteca y Archivo del Instituto Nacional de Reforma Agraria (1997-1999) y como Analista Documentalista en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (1999). Actualmente es Encargada del Archivo Central de la Vicepresidencia de la República/Presidencia del Congreso Nacional, desde su organización, en la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamble Legislativa Plurinacional*. Publicaciones archivísticas: “Archivo Central de la Vicepresidencia de la República” (Fuentes del Congreso, 2004, 1 (11): 99); “Documentación del Y2K” (Fuentes del Congreso, 2004, 1 (13): 141); “Archivo vicepresidencial del Lic. Jaime Paz Zamora”, “Documentación del Centro de

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Investigación del H. Congreso Nacional (CICON)” (Fuentes del Congreso, 2004, 1 (14): 150); “Documentos del Archivo Histórico del Honorable Congreso Nacional. Inventario de la serie Montepíos”, con Luis Oporto Ordóñez (Fuentes del Congreso, 2006, 2 (1): 8-9); “Proceso de conservación de la documentación del Archivo Central de la Vicepresidencia de la República” (Fuentes del Congreso, 2007, 2 (11): 166). Fuente: CV.

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P PACHACUTEC YUPANQUI, INKA Noveno inka. Gran organizador del Imperio. Derrotó siendo joven aún a los Chankas en las batallas de Cuzco, Ichupampa y Yawarpampa, hecho que le valió el reconocimiento de su padre, que lo nombró su sucesor. En su reinado de 30 años logró expandir el Imperio, sometiendo a diversos reinos. Organizó el Imperio en cuatro suyos o territorios, impulsando una labor de reorganización que reformó el sacerdocio, reorganizó el ejército, edificó el templo del Sol, reconstruyó el Cuzco, modernizó la administración del Estado con el establecimiento de una casta de administradores y un minucioso sistema de estadísticas sobre la base del quipu, fortaleciendo la red vial incaica en la que construyó pukaras, tambos y templos. Fuente: Arze, 1991: 115-116.

PACHECO CARVAJAL, FERNANDO EDMUNDO (15 noviembre de 1973)

Licenciado en Derecho, Ciencias Políticas, Jurídicas y Sociales. Tiene amplia formación en Derecho Procesal y Oralidad, Derecho Constitucional y Educación Superior, habiendo desempeñado funciones en Juzgados de la Corte Superior del Distrito de Chuquisaca y en la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Mereció el reconocimiento de la “Cátedra Unesco”, conferido por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura, Universidad Técnica de Oruro y la Dirección de Relaciones Nacionales, Internacionales, Convenios y Becas (2005). En 1991, fue Jefe de Archivos de Hansa Ltda. El 2011 es Encargado de la Unidad de Archivos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (Tribunal Supremo de Justicia). Fuente: CV.

PACHECO CERQUEIRA, FRANCISCO (Nació en Arequipa. † La Paz en 1770)

Receptor del Santo Oficio, elegido por el Tribunal de la Inquisición. En 1665 fue designado Notario público del Cabildo Eclesiástico. Espiaba, por su condición de

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empleado de la Inquisición, a los paceños, y por ello se le acusa de haber causado males al vecindario durante el tiempo que desempeñó este oficio. Fuente: Aranzáes, 1915: 573-574.

PACHECO LEYES, GREGORIO

(Livillivi, Provincia Sud Chichas, Potosí, 4 de julio de 1823. † Tatasi, Potosí, 1899) Industrial minero que creó la Compañía Huanchaca, con un capital de 2 millones de pesos, junto con A. Arce*, Manuel Argandoña y Belisario Peró. En 1884 fue elegido presidente de la República. Como resultado de su actividad minera y política, organizó un archivo particular compuesto de 105 libros copiadores por el sistema de agua, cada uno de 500 páginas, con lo que forma 4 metros lineales. Comprende la correspondencia expedida. Tiene índices alfabéticos en cada libro; contiene 11 series, siendo la más voluminosa la de Correspondencia General (1846-1915), incluyendo una titulada “Reservado” (6 libros: 1884-1890). Este archivo fue adquirido por la UMSA alrededor de 1960, por 10 mil bolivianos, cuando era director de la Biblioteca Central P. Díaz Machicao*, de un señor apellidado Harriague. Fuente: Crespo y Ballivián, 1986: 21-32.

PANDO SOLARES, JOSÉ MANUEL

(Luribay, La Paz, 27 de diciembre de 1848. † Kenko, alturas de La Paz, 17 de junio de 1917) Político y militar. Estudió medicina hasta sexto año. Abandonó la carrera al impulso de la política. Presidente de la República (1899-1904). Se incorporó al ejército en 1871. Se retiró a la vida privada en 1876, pero al declararse la Guerra contra Chile, volvió a la vida militar. Fue herido en la batalla del Campo de la Alianza en Tacna (1880). Ingresó al Partido Liberal en 1884. Es uno de los grandes exploradores del siglo XIX, que recorrió los ríos Madidi, Madre de Dios, entre otros, del norte del país, que hoy convertido en un departamento, lleva su nombre. Fue diputado por Chuquisaca en el gobierno de Severo Fernández Alonso. Protagonizó el levantamiento de 1898, que derivó en una guerra civil que enfrentó a La Paz contra los conservadores de Sucre; condujo las fuerzas federales, junto al ejército aymara de Pablo Zárate, al que a la postre traicionó y condenó. Luego del triunfo de los liberales, la convención de 1899 lo hizo Presidente. Combatió contra los filibusteros en la Guerra del Acre, dirigiendo las tropas que defendieron Bolivia frente a Brasil. Firmó con ese país el Tratado de Petrópolis por el que Bolivia cedía territorio en el norte a cambio de una compensación económica. Durante su gobierno se levantó el censo de población de 1900, y tuvo superávit en la balanza comercial, por el auge del caucho. Construyó el ferrocarril La Paz-Guaqui, y vías de penetración de los valles a los llanos. Reestructuró el ejército con una misión francesa, fundó una escuela agrícola y ganadera y un colegio de minas. Fue Delegado en los Territorios de Colonias y Comisario de Límites con el Brasil y uno de los grandes terratenientes de la época, beneficiado por las leyes de 1874 y 1880. Rompió con el presidente I. Montes* y en 1915 fundó el Partido Republicano. Retirado a la vida privada murió por un ataque cardíaco en el Kenko (alturas de La Paz) el 17 de junio de 1917, creyéndose en primera instancia que fue un asesinato,

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por lo que se condenó a un inocente, a la pena de muerte por fusilamiento. Organizó un valioso archivo, con los documentos de su actuación en la Guerra Federal de 1899, que fue heredado por la Sra. Ninfa Pando viuda de Dauelsberg, fallecida el 23 de junio de 1958. El Archivo fue adquirido posteriormente por Jorge Edmundo Mercado quien permitió al historiador Ramiro Condarco Morales*, su utilización en su libro Zárate El “Temible” Willka, publicado en 1965, 1983 y 2011. Una parte de los documentos referidos a este tema se encuentran en el Archivo de La Paz* (1891-1917) y otra en el ABNB* (1871-1908). Fuente: Barragán, 2008: 139; Condarco, 1982: 7; http://es.wikipedia.org (22.7.11).

PAREDES OVIEDO, MARTHA BEATRIZ (La Paz el 4 de marzo de 1952)

Licenciada en Historia (UMSA). Auxiliar de Investigación en el programa “Historia de la Universidad Boliviana 1970-1982”. Miembro de la Sociedad Boliviana de la Historia, del Colegio Nacional de Historiadores y del Grupo de Estudios Históricos “La Pesada”. Es importante mencionar su trabajo en el Archivo de La Paz*, donde ha desarrollado la Guía de los Fondos Documentales de la Prefectura del Departamento de La Paz (1825-1976), en colaboración; el Índice de Protocolos Notariales (18261900), en colaboración; ordenamiento de los expedientes de Escrituras Coloniales (1558-1825); selección, clasificación, ordenamiento y fichaje de los expedientes de Cajas Reales de la ciudad de La Paz (1563-1825); ordenamiento de Expedientes de la Corte Superior del Distrito de La Paz (1825-1958); clasificación y ordenamiento de Libros y Expedientes del Ministerio de Hacienda (1871-1967) y de los documentos de la Corporación Boliviana de Fomento (1943-1970); trabajó en el recojo, clasificación, ordenamiento y parte del fichaje de la documentación del Juzgado de Pucarani (1816-1946); realizó el fichaje y ordenamiento de la serie Padrones y Revisitas de la Colonia y la República (1613-1932); igualmente, en el selección, clasificación y ordenamiento de documentos pertenecientes a la Sub-Prefectura y Sub-Alcaldía de Coroico; la clasificación y catalogación del Fondo documental de la Sociedad Geográfica de La Paz (1492-1947); la catalogación del Fondo documental de donación Carlos Navarro (1876-1958); la clasificación y parte de la catalogación de Mapas y Planos de la Prefectura del Departamento de La Paz; la publicación de un expediente sobre el Litigio de un solar cedido por Alonso de Mendoza en 1550 a Alonso Guallpa Mayta (1550-1643). Encargada del Archivo de la Municipalidad de La Paz (19861987). Posteriormente en 1990 paso a trabajar en el Archivo Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, donde fue encargada de la Microfilmación de Convenios y Tratados; Encargada de la reestructuración y ordenamiento del Archivo y Biblioteca (1991); compiladora y correctora de la publicación de Tratados y Convenios Bilaterales (19891990). Bibliotecaria y Supervisora del Archivo General del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1992); Encargada del ordenamiento y clasificación del Archivo de la Secretaría General Administrativa del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1993); impulsó la catalogación de libros de las Bibliotecas de la Unidad de Política Exterior (UDAPEX) y de la Academia Diplomática Boliviana (1994); Encargada del Archivo de Tratados de la Dirección de Coordinación con el Poder Legislativo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1996). Fue inscrita en el Escalafón

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Diplomático como Primer Secretario. Ha sido Responsable del Programa de la Red de Archivos Diplomáticos Iberoamericanos (RADI). En el Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Cultos ha desarrollado los siguientes trabajos: Ordenamiento y catalogación de la Correspondencia Diplomática recibida de la Legación de Bolivia en Chile; Correspondencia Diplomática en relación al proceso de la Confederación Perú-Boliviana; en la elaboración, conjuntamente con Krupzkaya Mariscal, del Reglamento de los Archivos y las Bibliotecas del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, aprobado mediante Resolución Ministerial Nº 525/2003 de 20 de noviembre de 2003. Mereció “Memorando de Felicitación” por la labor desempeñada en el Ministerio de Relaciones y Culto. El 2009 fue designada como Primera Secretaria de la Embajada Boliviana en la Santa Sede (Vaticano). Asistió al Seminario Nacional “Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia” (LP, 1993); Congreso Departamental de la Asociación de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996). Hizo el Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999); el Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos (UMSA, 2002). Publicaciones archivísticas: “San Agustín, una iglesia en el tiempo”, con Silvia Arze, Isabel Canedo, María E. Muñoz y Carola Echalar (Boletín del Archivo de La Paz, 1984, N° 8: 3-15); “Red de Archivos Iberoamericanos” (Boletín del Archivo de La Paz, 1999, Nº 18: 82-85); “Del Contenido del Archivo Correspondencia Diplomática con el Perú en el Gobierno de Sucre” (Boletín Informativo del Ministerio de RR.EE. y Culto, s.d.); “VIII Reunión de la RADI (Red de Archivos Diplomáticos)” (Fuentes del Congreso, 2006, 2 (2): 28). Fuente: CV.

PAREJAS MENDOZA, EFRAÍN (La Paz)

Estudió en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Fue profesor de la misma (1979). Consultor de la COMIBOL* para la organización del Centro de Documentación Minera, en base a documentos técnicos y geológicos de esa empresa estatal, proyecto en el que se aplicó técnicas bibliotecarias. Trabajó posteriormente en Fundempresa, que tiene los registros de las empresas de comercio a nivel nacional. Publicaciones archivísticas: “La experiencia y consultoría en documentación” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, La Paz, 2002, 7 (10): 63-68).

PAREJAS MORENO, ALCIDES

(Portachuelo, Santa Cruz, 28 de octubre de 1944) Doctor en Historia de la Universidad de Sevilla. Ha publicado una veintena de libros de investigación histórica y numerosos artículos en revistas nacionales y extranjeras. Es miembro de Número de la Academia Boliviana de Historia, de la Academia Nacional de Ciencias y de la Academia de Historia Eclesiástica. Miembro de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz y de la Sociedad Boliviana de Historia. Doctor Honoris Causa de la Universidad Privada UPSA.

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Escribió una novela ambientada en la historia de la invasión, el cruel proceso de conquista hispana y la fundación de Santa Cruz de la Sierra, El Señor de El Dorado. Su obra historiográfica se refiere esencialmente a Santa Cruz: Historia de Moxos y Chiquitos a fines del siglo XVIII (La Paz, Instituto Boliviano de Cultura, 1976), Historia del oriente Boliviano. Siglos XVI y XVII (Santa Cruz de la Sierra, Universidad Gabriel René Moreno, 1979; 2011), Los pueblos indígenas del Oriente Boliviano en la época de su contacto con los españoles (Santa Cruz de la Sierra, Universidad Gabriel René Moreno, 1976); Chiquitos: historia de una utopía, con Virgilio Suarez (Santa Cruz, UPSA-Gobierno Municipal, 2007); Chiquitos: un paseo por su historia (Santa Cruz, Gobierno Municipal, 2007); El carnaval cruceño a través del tiempo (Santa Cruz, La Hoguera, 2009). Es columnista en la prensa escrita. Sus artículos periodísticos fueron recopilados en su obra Porque me importa (Santa Cruz, La Hoguera, 2003). Miembro connotado del movimiento cívico cruceño; es presidente de la Asociación Pro Arte y Cultura (APAC). Premio Nacional de Gestión Cultural 2003 “Gunnar Mendoza”, compartido con el sociólogo Marcelo Arauz Lavadenz y más antes Premio Anual de la Cultura de la Fundación Manuel Vicente Ballivián. Impulsor de la autonomía cruceña, considerada por él como un paso para su independencia, comulgando con ideas de Nicomedes Antelo y G.R. Moreno*. Es uno de los historiadores orgánicos del movimiento cívico cruceño. Ha impulsado la organización de los archivos de Santa Cruz. En su estadía en Sevilla, levantó el catálogo de documentos de la Sección V (Audiencia de Charcas) del Archivo General de Indias*. “La sección V consta de 736 legajos, de los cuales 202 corresponden a los siglos XVI y XVII y el resto al XVIII y primeros años del XIX”, afirma el autor, habiendo limitado su trabajo al Oriente boliviano, “ya en el ramo secular ya en el eclesiástico”. A él se debe en gran medida el impulso para la organización del Archivo Histórico Departamental ”Hnos. Vázquez Machicado”* Fue declarado por el Concejo Municipal de Santa Cruz de la Sierra como “Hijo Ilustre de la Ciudad” con la condecoración Cruz de la Orden del Capitán Ñuflo de Chávez, por destacarse como escritor e investigador (2008). Publicaciones archivísticas: Documentos para la Historia del Oriente Boliviano, siglos XVI-XVII. Catálogo de documentos de la Sección V (Audiencia de Charcas) del Archivo General de Indias (Santa Cruz, Don Bosco, 1982); “Fuentes para la historia eclesiástica del oriente boliviano” (Anuario de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica, 1996, 2: 223-226); “Vehemente llamado a las autoridades: El Archivo Histórico necesita edificio propio” (El Mundo-Revista Cultural, Santa Cruz, 17 de agosto e 1996: 6. Entrevista de Freddy Oviedo Quiroz). Fuente: Valda, 1982: 2; http://www.ecdotica.com (11.02.10); http://www.eldeber.com.bo (11.02.10).

PATIÑO, SIMÓN I.

(Santivañez, Cochabamba, 1 de junio de 1860. † Buenos Aires, Argentina, 20 de abril de 1947) Industrial minero. Descubrió la veta fabulosa “La Salvadora”, con lo que transformó la historia de la minería nacional en general y del estaño en particular. Emprendedor y temerario, abrió una carretera desde Uncía hasta Challapata para conectarse al ferrocarril y al Pacífico. Introdujo tecnología de punta para la explotación minera. En un audaz golpe de mano, adquirió las acciones de la Empresa Estañífera de Llallagua, de capitales chilenos, con lo que levantó su imperio, mediante la creación de la

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primera empresa transnacional minera, la Patiño Mines & Enterprises, Consolidated Incorporated (1924), registrada en el Estado de Delaware, EE.UU., conformada por las minas de Llallagua, Catavi, Siglo XX, Huanuni, Oruro, Colquechaca, Oploca y otras. Hizo tender la línea del Ferrocarril Machacamarca-Uncía, inaugurada el 21 de mayo de 1921, obra de ingeniería moderna, “con 24 puentes, alcantarillas y obras de desagüe y un túnel de 90 metros de longitud; con dos terminales, una en Machacamarca y otra en Uncía; talleres para reparación del material rodante y un motor diesel de 50 caballos de fuerza; cuatro locomotoras de 54 toneladas de peso, tipo Mallet Compound, con seis ejes motores, las cuales quemaban carbón y una más pequeña para maniobras, con un total de 7 vagones de carga, 10 coches para pasajeros y cuatro furgones para equipaje”. Patiño incorporó a su imperio minas de estaño de Malasia y las fundiciones de Williams Harvey en Liverpool, en Alemania y Estados Unidos. Era uno de los Barones del Estaño, grupo que dominó la política industrial minera en Bolivia, por medio de políticos, abogados e intelectuales conocidos como “la rosca” minera. Patiño se retiró de Bolivia para vivir en París y otras capitales europeas, desde donde controlaba su vasto imperio, por medio de una red de comunicación desde su cuartel general hasta el último centro minero, empleando la correspondencia oficial y una red de archivos. Para este propósito introdujo la archivística moderna norteamericana, con la que estandarizó la gestión integrada de la documentación, con severas normas que regían el trámite y las transferencias al archivo definitivo, con la sede central en La Paz y regionales en Oruro, Potosí, los centros mineros, especialmente Catavi, y su cuartel general en París. Nada podía quedar al margen de su control. Fue un patriota a su manera, pues apoyó a Bolivia en tiempos de paz y de guerra. Siendo Embajador de Bolivia en España, en 1923, dispuso de sus recursos para sostener la Misión de A. Ostria Gutiérrez* en el Archivo de Indias de Sevilla*, en la que indagó la existencia de documentos que prueben el derecho de Bolivia al Litoral del Pacífico. En el conflicto con el Paraguay por la posesión del Chaco (1932-1935) dotó de aeroplanos de guerra y además del apoyo económico que brindó. Su imperio estañífero en Bolivia se derrumbó como efecto de la nacionalización minera, de 31 de octubre de 1952, dispuesta por el Gobierno de V. Paz*, medida con la que también se nacionalizaron sus archivos y mapotecas. Actualmente ese Archivo forma parte del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: Oporto, 2007; Querejazu, 1977: 3; Siles, 1973c: 3; http://es.wikipedia.org (21.3.12)

PAZ CERRUTO, RAMIRO VÍCTOR (La Paz, 9 de agosto de 1941)

Ha cursado estudios militares y académicos en Estados Unidos e Inglaterra. Es graduado de Peekskill Military Academy, del Wharton School de la Universidad de Pensilvania y del London School of Economics, donde obtuvo su doctorado. En la primera recibió el premio Leo S. Rowe y en 1967 el Congreso de EE.UU. lo eligió Adlai Stevenson Fellow. Durante su extensa trayectoria sirvió en 20 países. Fue asesor económico principal en Timor Oriental (2002-2003), Asesor técnico de Naciones Unidas en Perú (1982), de la Corporación Andina de Fomento en Caracas (1979-1980), del Banco Interamericano de Desarrollo en Guatemala (1975), Asesor industrial de

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MONUDI en Guatemala (1974) y oficial de préstamos para Perú y Chile del BID (1965-1970). Fue director del Instituto Internacional de Integración (1982-1985). Fue candidato a la Vicepresidencia de la República con Vanguardia Revolucionaria “9 de abril” de Carlos Serrate Reich. Investigador de la historia económica, plasmó su visión en Crisis económica, ¿sin solución? (1982) y Control inflacionario y crecimiento económico (1983); y la geopolítica nacional, en sus dos últimas obras, Dominio Amazónico (2005) que resume cinco años de investigación sobre este bosque tropical húmedo; y En Los pasillos del Poder (2006), una colección de recuerdos del autor ligadas al poder público, que se desenvuelve en los pasillos y entretelones de múltiples juegos políticos. Conservó un preciado archivo, conformado por correspondencia privada intercambiada entre padre e hijo, muchas de ellas de carácter íntimo. Conmocionó a la opinión pública al editar Las Cartas de Víctor Paz Estenssoro a Ramiro (La Paz, CIMA, 1994), en la que exhumó ese inusual archivo epistolar, publicado primicialmente en el periódico Hoy de La Paz en varias entregas. Las cartas fueron ofertadas al BCB, para que se las entregue al ABNB*, pero esta institución no las aceptó. Cuando realizaba su investigación sobre la Amazonía, protagonizó una impresionante “operación comando” de salvataje del Archivo Judicial de Riberalta que se hallaba expuesto a una destrucción inminente, dado que su contenido afectaba intereses de grupos locales de poder. Con la ayuda de un contingente del ejército boliviano, procedió a retirar gruesos expedientes judiciales para trasladarlos de forma totalmente reservada, en horas de la noche, desde Riberalta hasta Guayaramerín, empleando un camión militar que le proporcionó, según su testimonio, el Comandante Freddy Bersatti (Senador del Movimiento Al Socialismo en la legislatura 2010). Gracias a esa temeraria acción, logró salvaguardar la escasa memoria judicial de Riberalta y depositarla con la sana ‘complicidad’ consentida de N. Camberos*, directora del Archivo Histórico de la Casa Suárez*, quien ordenó levantar una lista de inventario, que R.V.Paz lo hizo certificar en la Corte Suprema de Justicia, por el ministro Guillermo Arancibia y en el ABNB* por el director J.M. Barnadas*. Hoy ese fondo forma parte del Archivo de la Casa Suárez Hnos. Paz afirma que “sustrajo los documentos de noche, para evitar que un grupo de personas fueran a quemar el archivo”. Publicaciones archivísticas: Las Cartas de Víctor Paz Estenssoro a Ramiro (La Paz, Producciones Cima, 1994); “La historia amazónica y un salvataje” (La Época, La Paz, 13 marzo de 2010, 9 (419): 19). Fuente: Entrevistas a RVP (agosto de 2004).

PAZ ESTENSSORO, ÁNGEL VÍCTOR

(Tarija, 2 de octubre de 1907. † Tarija 7 de junio de 2001) Estudió en el colegio San Luis de Tarija y Bolívar de Oruro. Abogado en 1927 (UMSA). Político y estadista notable. Presidente de Bolivia en 4 periodos (1952-1956; 1960-1964; 6 de agosto de 1964-4 de noviembre de 1964 y 1985-1989). Comenzó su carrera como ayudante de la Oficina Nacional de Estadística. En 1929 era redactor de la Cámara de Diputados. En la guerra del Chaco fue interventor general de la contraloría en el primer cuerpo de ejército (1932) y marchó luego al frente donde combatió en la batería Seleme. En 1937 ingresó a la Patiño Mines como abogado, con excelente salario. Renunció un año después y fue elegido diputado por Tarija. Entre

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1938 y 1939 fue presidente del Banco Minero y también catedrático de Historia de las Doctrinas Económicas en la UMSA. Entre 1940 y 1943 su labor parlamentaria lo consagró como uno de los más destacados parlamentarios. Desde allí lideró una fuerte oposición al gobierno de E. Peñaranda* y combatió a “La Rosca”, grupo oligárquico al servicio de la gran minería. Fue uno de los fundadores del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) en 1942, partido del que fue jefe durante casi 50 años (1942–1990). Fue ministro de Economía por cinco días (1941) y ministro de Hacienda y Estadística (1943-1945). El 20 de diciembre de 1943, protagonizó un golpe de estado junto al Mayor Gualberto Villarroel, que derrocó al General E. Peñaranda. A la caída de Villarroel (21 de julio de 1946) partió exiliado a Buenos Aires (19461952). A su retorno al país asumió la Presidencia de la República (1952-1956). A la postre terminó estatizando las empresas de Patiño, su antiguo jefe, en octubre de 1952. Autor intelectual de la revolución boliviana del 9 de abril de 1952 (nacionalizó las minas de S. Patiño*, M. Hochschild* y V. Aramayo*, impuso el capitalismo de Estado), implementó cuatro medidas fundamentales: 1) La Nacionalización de las minas de estaño (31 de octubre de 1952); 2) La Reforma Agraria; 3) El Sufragio Universal; y 4) La Reforma Educativa (Código de la Educación Boliviana del 20 de enero de 1955). Reformó el Código de Seguridad Social, creó el Comité Nacional de Rehabilitación Industrial, dio el impulso decidido a la empresa estatal del petróleo, YPFB; impulsó la demanda ante el mundo de la cuestión marítima de Bolivia, combatió la inestabilidad monetaria, impulsó tareas de colonización, construcción de carreteras y un gradual impulso al desarrollo económico y social. Cerró el Colegio Militar, instauró milicias armadas mineras y campesinas y fue forzado a aceptar el control obrero con derecho a veto en la administración de las minas nacionalizadas. En su gobierno se creó la Central Obrera Boliviana (17 de abril de 1952) e instruyó por decreto la sindicalización en los centros industriales y las comunidades indígenas, mediante la creación de centrales agrarias. Fue implacable con la oposición. Cumplido su período, entregó el mando al elegido, Hernán Siles Zuazo*, que gobernó entre 1956 a 1960. Fue alejado de Bolivia por el nuevo gobierno como Embajador ante el Reino Unido (1956-1958). En las elecciones de 1960, volvió a ser nominado presidente. En su segundo mandato institucionalizó las medidas revolucionarias, mantuvo un crecimiento del PIB próximo al 6%, diseñó el Plan Decenal de Desarrollo (1962-1971), aplicó un plan de salvación de Comibol y rompió relaciones con Chile por el desvío del río Lauca. Dedicó sus esfuerzos y recursos económicos del país a impulsar un polo de desarrollo en Santa Cruz, al que dio rápido crecimiento y progreso; creó un ingenio azucarero en Bermejo, Tarija, y realizó una serie de obras para impulsar el desarrollo y, especialmente, la agricultura y la industria. Con afanes prorroguistas, sin duda alguna, pero también con el propósito de institucionalizar las transformaciones sociales de 1952, convocó a una asamblea constituyente a la que ordenó reformar la Constitución, logrando ser nuevamente nominado en las elecciones de 1964, hecho que derivó en el golpe de estado de René Barrientos Ortuño, que terminó anticipadamente su tercer mandato. Salió al exilio en 1964, permaneciendo en Lima (Perú), ejerciendo la cátedra en la Universidad de San Marcos. Retornó al país cuando se produjo el golpe organizado por el Coronel

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H. Banzer Suárez*, apoyado por su propio partido, el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y la Falange Socialista Boliviana (FSB), logrando cogobernar entre 1971 a 1973. Tras romper con Banzer, que militarizó su gabinete, fue enviado al exilio nuevamente (1974).

Retornó al país en 1978 como candidato presidencial. Ocupó el segundo lugar en los comicios de 1979, impidiendo la nominación de su rival, Hernán Siles, mediante el llamado “empantamiento” o “empate catastrófico”, que obligó al congreso a nominar presidente interino a W. Guevara*, defenestrado por un fallido golpe de Estado; y en la misma calidad a Lidia Gueiler Tejada, igualmente golpeada, esta vez por L. García Meza*. Logró su elección en 1985, con el apoyo del partido del Gral. H. Bánzer. Impulsó una serie de políticas económicas de carácter neoliberal, establecidas mediante el Decreto Supremo 21060 (29.8.85), como una cruel paradoja de la Historia, pues privatizó las empresas estatales, con el que cierra el ciclo de capitalismo de Estado y hace ingresar a Bolivia al modelo de libre mercado que se prolongó formalmente hasta diciembre de 2005, con un alto costo social, pues despidió a 23.000 trabajadores mineros, cerró los centros industriales mineros y autorizó la entrega de yacimientos a empresas transnacionales y cooperativistas mineros. Gobernó constitucionalmente hasta 1989. Durante su primer gobierno apoyó el desarrollo cultural en Bolivia. Fundó el Museo de Artesanías y Artes Populares en 1962 (actual Museo Nacional de Etnografía y Folklore*); impulsó las excavaciones en Tiwanaku; reglamentó el régimen cultural de la Constitución Política del Estado, dictando el DS 5918; apoyó al Archivo Nacional de Bolivia dictando los DS 05758 de 7 de abril de 1961 (ordena la transferencia obligatoria de documentos históricos de carácter nacional al ABNB), promulgó la Ley 781 de 5 de febrero de 1986, que eleva a rango de ley el DS 19718 de 3 de agosto de 1983, que dispuso encomendar al BCB, a través del Ministerio de Finanzas y de Educación y Cultura, la tuición y administración general de la Casa de la Libertad* (Sucre), Casa de la Moneda* (Potosí) y el Museo Nacional de Etnografía y Folklore (La Paz), garantizando su viabilidad y sostenibilidad, contra el criterio del Banco Mundial que recomendó la transferencia de estos repositorios al Instituto Boliviano de Cultura. En agosto de 1986, envió al director del ABNB, G. Mendoza*, un cuestionario de cuatro puntos: Disposiciones legales sobre la creación del ABNB; Disposiciones sobre custodia de documentos; plazo de transferencia de documentos oficiales al ABNB y requisitos para la incineración; documentos que deben pasar al ABNB. El informe sirvió para la dictación de los Decretos Supremos de 2 de marzo de 1989, 22144 (declara de utilidad nacional a los documentos públicos activos), 22145 (declara de utilidad nacional a los documentos públicos inactivos y prohíbe su destrucción) y 22146 (creación del Repositorio Intermedio Nacional) de, aprobados en base a los proyectos elaborados por G. Mendoza, igualmente mediante DS 22199 de 24 de mayo de 1989, declara de máxima necesidad y utilidad pública la dotación de un edificio propio para el ABNB. Durante su último gobierno apoyó financieramente el proyecto de C. Minutolo de Orsi* de compilar el Corpus Documental para la Historia de Tarija. Era miembro notable de la Asociación de Amigos del Museo y Archivo Franciscano. Era un documentalista consumado. En una ocasión, estando de visita oficial en Lima, filmó el desfile militar instalado en su honor, oportunidad en la que la prensa de Lima comentó que “posee una valiosa colección de fotografías y

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películas tomadas por él mismo en varios países”. L. Calzavarini*, destaca su faceta de fotógrafo-documentalista, afirmando que “una Brownie lo acompañó desde sus trece años. Era un regalo de su padre Domingo Paz Rojas”. Desde entonces, “la afición a la fotografía marcó sus andanzas de exilado y ex presidente, acumulando álbumes de países europeos, Estados Unidos, Japón, India, Tailandia y Paquistán. Siendo presidente, gustaba montar a caballo para tomar fotografías del Altiplano y de los Yungas”. Logró organizar diez álbumes, pero el de la Guerra del Chaco (19321935), se quemó, en diciembre de 1989, en los depósitos de la empresa de custodia de bienes Exprinter Liftvans en El Alto (La Paz), junto a “documentos oficiales y personales” de sus distintas gestiones de gobierno. La destrucción del archivo del Dr. V. Paz, por fuego, fue calificada por el Ministerio de Educación y Cultura “una irreparable pérdida desde el punto de vista histórico para el país”, motivándolo a invitar a “ex presidentes de la República, ex Vicepresidentes y jefes de partidos políticos (…) para que depositen sus documentos personales, correspondencia oficial y particular, fotografías, recortes de prensa, en el Repositorio Nacional del Instituto Boliviano de Cultural, donde serán convenientemente resguardados y clasificados como parte del patrimonio de la nación y para su utilización posterior por estudiosos e investigadores de nuestra historia”. Concluida su cuarta gestión de gobierno, en 1990 renunció a la jefatura del MNR y se retiró definitivamente a la vida privada, recluyéndose en su sobria casa solariega, en la Finca de San Luis (Tarija). Parco en la palabra y en las actitudes, fue calificado como maquiavélico e implacable con sus enemigos políticos. Muchos afirman que no confiaba en nadie y veía en todos un enemigo potencial. Fue odiado en extremo por muchos y apreciado por pocos. L. Oporto* logró una entrevista postrera en su retiro, que fue filmada en video. En ella que se ve a V. Paz hojeando archivos fotográficos, mostrando sus clásicas “cachimbas” en un escritorio de fina madera y en un paseo corto en su huerto de árboles frutales; hablando animadamente de aspectos triviales de su vida privada y temas culturales, pero sin mencionar una palabra de su controversial actuación política. Sonreía sardónicamente, a intervalos. Este pasaje puede retratar su personalidad: En el patio de aquella casa, un humilde hombre cuidaba el jardín, cuando el Dr. Paz preguntó intempestivamente, con un tono amable y seco: “hijo, este señor quiere saber de dónde eres”. El hombre detuvo su faena y respondió, sin sonreir, y sin levantar la cabeza: “Soy de la mina de Atocha, usted me ha relocalizado Doctor”. Este valioso documento se halla en el Archivo de Video del MUSEF. Fuente: Calzavarini, 2000: 4-5; La Nación, 1955; Mendoza, 2005-5007, III: 797-805; Mesa, 2006; Última Hora, 1990; Entrevista al Dr. Víctor Paz Estenssoro en octubre de 1990, en la casa Solariega de la Finca “San Luis”.

PAZ ZAMORA, JAIME

(Cochabamba, 15 de abril de 1939) Licenciado en Ciencias Sociales y Políticas con mención en Relaciones Internacionales en la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica). Se formó en el Colegio Jesuita “Sagrado Corazón”, de Sucre. Ingresó a la orden religiosa de los Redentoristas y estudió filosofía y teología, en Córdoba, Argentina, sin llegar a ordenarse. En su

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juventud abrazó ideas socialistas. Fue fundador y líder del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (1971), partido inscrito en la Socialdemocracia europea. Organizó la resistencia clandestina contra la dictadura del general H. Bánzer*. Fue elegido Vicepresidente por el Congreso en 1982, cargo al que renunció el 14 de septiembre de  1984 para habilitarse como candidato presidencial, en las eleciones 1985. Fue proclamado Presidente por el Congreso (5 de agosto de 1989) a pesar de haber quedado en tercer lugar durante las elecciones generales de ese año, gracias al apoyo político que recibió de su antiguo torturador, el ex dictador Bánzer. Mostró su pragmatismo expresado en su célebre frase: “tender puentes sobre ríos de sangre para gobernar”. Fue el primero en abogar por el uso potencial, medicinal e industrial de la coca, impulsando la “Diplomacia de la coca”, lo que provocó la reacción de la Embajada norteamericana que retiró la visa a sus principales colaboradores y provocó la encarcelación de su principal asesor, Oscar Eid, acusado de conexiones con el narcotráfico. Su gobierno quedó marcado por acusaciones de  corrupción y supuestos vínculos con el  narcotráfico. Promulgó la Ley 1178, de Administración y Control Gubernamentales (20 julio de 1990), que a pesar de no ser una ley archivística, sus dramáticos efectos colaterales inauguraron una nueva era archivística, caracterizada por la creación e institucionalización de los Archivos Centrales en las instituciones estatales, así como el régimen por la responsabilidad por la función pública. Con esta medida se controló la destrucción sistemática de la documentación pública. De igual manera el régimen de responsabilidad, extensivo a la custodia y descripción de los documentos a cargo de los servidores públicos, es determinante para plasmar la teoría del valor que incide en la organización de los archivos administrativos (de Gestión y Central) y las transferencias intraarchivísticas, por lo que facilita la determinación de plazos de conservación de los documentos en los archivos de oficina y su transferencia a los archivos centrales, así como desde estos a los archivos intermedios. Reglamentó la Ley 1178, mediante el DS 23318-A (3 de noviembre de 1992), con lo que entró en vigencia el concepto de responsabilidad por la función pública y los 8 subsistemas del control y administración, entre ellos el de Organización Administrativa que regula el funcionamiento de los Archivos de Oficina. Aprobó el DS 22396 de 16 de diciembre de 1989, que declara de utilidad nacional a las documentaciones del sector privado, prohibiendo su destrucción, norma elaborada por G. Mendoza*. Fuente: Oporto y Rosso, 2007; http://es.wikipedia.org (15.4.12)

PEÑA HASBÚN, PAULA

(Santa Cruz de la Sierra, 25 de julio de 1968) Historiadora (Universidad Católica del Uruguay). Realizó cursos de postgrado en Historia de las Relaciones entre Estados Unidos y América Latina (Universidad Estatal de Carolina del Norte). En la vida política cruceña ha destacado como analista política y miembro connotada del Comité Cívico Pro intereses de Santa Cruz. Desde 1991 trabaja en la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, como docente de Historia de Santa Cruz y Directora del Museo de Historia y Archivo Histórico de esa Universidad. Ha realizado cursos de Archivos, Bibliotecas y Museos, como también ha participado de los Talleres sobre la Ley de Patrimonio y la

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Ley de Archivos. Asimismo ha presentado ponencias en Seminarios Internacionales, sobre el invaluable acervo documental que existe en Santa Cruz de la Sierra. El Museo de Historia, alberga en la actualidad dos Archivos Históricos: El Archivo Histórico de la Universidad propiamente dicho, con documentos desde 1600, y una parte del Archivo Histórico Departamental “Hermanos Vázquez Machicado”, con documentos relativos a los siglos XIX y XX, que fue transferido desde ese repositorio luego del deceso de E. Zambrana*, su fundador y director. Desde 2007, estos archivos están siendo catalogados y se programó en 2011 su digitalización. En su condición de directora del Museo y Archivo Histórico, solicitó al Consulado General de Argentina en Santa Cruz de la Sierra, una copia de los archivos de J. A. Álvarez de Arenales*, por la importancia que tienen para el período de la Independencia y por su vinculación con Ignacio Warnes, que fue entregado en mayo de 2010, en el marco del Bicentenario de la independencia argentino-cruceño. Son dos DVD que contienen carpetas con los documentos de Arenales, al parecer recopilado toda la documentación sobre Arenales y han creado ese archivo digital. Por ejemplo, en relación a Warnes hay una carpeta con 70 cartas dirigidas a Arenales entre 1813 y 1816. Fuente: CV; Comunicación personal.

PEÑALOZA BRETEL, MARCO ANTONIO ROMELIO (La Paz, 28 de noviembre de 1963)

Licenciado en Historia (UMSA, 1992); con estudios superiores en la Carrera de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid (España) (1986-1987). Magíster en Historia Andina por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales-Sede Ecuador (1995); Especialista en Organización y Gestión de la Información Documental Curso On-Line en la Universitat Jaume I de Valencia, España (2002-2003). Consultor de archivos en el Banco de Crédito de Bolivia S.A.; INGAMA (Beneficiadora de Almendra) Riberalta (Beni); Transredes S.A.; Corporación Minera de Bolivia* (COMIBOL); Alcaldía Municipal de La Paz; Secretaría Nacional de Cultura; Archivo Casa Günther; Documentic, WF; Universal Brokers S.A.; Entidad de Depósito de Valores de Bolivia S.A.; Servicio Nacional de Registro Civil-Dirección Departamental de La Paz (2002). Catedrático en las universidades Andina Simón Bolívar (Sede Ecuador), Colegio Militar del Ejército, Pontificia Universidad Católica del Ecuador y UMSA. Profesor de Historia y Geografía en el Colegio Alemán Mariscal Braun (La Paz). Ha sido Secretario General Servicio Nacional de Caminos (2006); Jefe del Departamento de Gestión Documental de la Administradora Boliviana de Carreteras (2006-2007), y Jefe del Departamento de Gestión Documental Banco Central de Bolivia, desde 2007. Siente pasión por el fútbol. Llegó a ser director del Centro de Información de la Federación Boliviana de Fútbol (1999-2000); director de la Revista Futbolivia, 1999-2000. Publicó con la Federación Boliviana de Fútbol Historia Contemporánea del Fútbol Boliviano (1960-1993); y The Strongest 90 Años de Historia, 1998. Su obra histórica está dispersa en artículos y en Bolivianos en el tiempo. Tiene inéditos varios escritos archivísticos, como resultado de sus informes de consultoría: “Evaluación y Política Archivística de los Repositorios Municipales” (Alcaldía Municipal de La Paz); “Tratamiento Archivístico e Investigación Histórica en el Archivo Casa Günther” (Alcaldía Municipal de La Paz).

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Publicaciones archivísticas: “Desfetichización del papel, el sello y la firma: propuesta de desobediencia sistémica” (Anuario del ABNB 2011, Nº 17: 697-717, Sucre, ABNB, 2011). Fuente: CV.

PEÑARANDA DEL CASTILLO, ENRIQUE

(Larecaja, La Paz, 15 de noviembre de 1892. † Madrid, España, 22 de diciembre de 1969) Militar. General. Fue Comandante del Ejército de Bolivia durante una fase de la Guerra del Chaco (1932-1935). Tomó el poder mediante golpe de Estado (15 de abril de 1940). Presidente conservador, aliado de los Estados Unidos. Se opuso a la nacionalización del petróleo y reprimió la huelga minera con crueldad, provocando la masacre de Catavi, el 21 de diciembre de 1942. Fue acusado del fracaso de la guerra, por lo que acopió un archivo con el cual escribió sus Memorias sobre la Campaña del Chaco, que pensó publicarla en dos tomos. Terminada la redacción del primero, lo mandó a imprimir en 1943, en una tirada de 1.000 ejemplares, cuyos pliegos estaban listos para su encuadernación y posterior venta al público. Sin embargo, en ese ínterin su gobierno fue derrocado por un grupo de militares patriotas jóvenes, que lo acusaron de haber entregado el estaño a los EE.UU., a precios ínfimos durante la II Guerra Mundial (1939-1945). Su residencia en La Paz y su propiedad agrícola, fueron destruidas en el asalto que acompañó a su caída. Ante tal eventualidad, Peñaranda salvó la vida, pero dejó atrás sus preciadas memorias. Así transcurrieron 59 largos años, hasta que gracias al interés personal del Dr. Carlos Serrate Reich, previa autorización del hijo del ex presidente, Ing. Ernesto Peñaranda, se logró recompaginar 156 ejemplares que fueron publicados en 1992, en tanto del segundo se desconoce su suerte. Tuvo el mérito de sancionar el DS de 9 de mayo de 1940, que creó la Dirección Nacional de Bibliotecas, Archivos y Publicidad, “para conservar metódicamente ordenada toda la documentación manuscrita e inédita relativa a la vida nacional, producida por los poderes públicos, a partir de la colonia hasta el presente”, instruyendo “cuidar de la buena y metódica conservación de los papeles, expedientes y de todo documento que interesando al proceso de desarrollo de la vida nacional, se encuentre en las oficinas públicas de la nación o en poder de los particulares, reivindicándolos previa indemnización en su caso. Contribuir a la reorganización de los archivos de todas las reparticiones fiscales, municipales y otros que dependan de los Poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial”. Fuente: Oporto, 2006: 177; Peñaranda, 1943; DS. 9.5.1940.

PEREYRA ARZE, DIÓMEDES DE

(Cochabamba, 8 de diciembre de 1897. † 17 de enero de 1976) Estudió Evolución, Cosmografía, Religión y Literatura en la Universidad de Cleveland, Ohio (EE.UU.). Más tarde estudió Literatura en la Sorbona (Francia). Fue periodista y escritor en Nueva York, y corresponsal de prensa en París y Madrid. Vivió en Nueva York a partir de 1918. Trabajó como obrero de la empresa del caucho Acron, que lo designó su vocero. Durante la época de la Guerra del Chaco, fue Secretario de la Embajada de EE.UU., dirigida por el Embajador Bowles, “el gran periodista del New York World’s”, como señala J. Siles Guevara*. Allí fue redactor del boletín

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de informaciones para el Departamento de Estado sobre la República española. En esas circunstancias (junio de 1933), la Cancillería boliviana lo contrató para realizar una investigación (complementaria a la que hacía J. Vázquez Machicado* en Sevilla), en los fondos del Archivo de Simancas, con el objetivo de “conseguir documentos sobre los límites coloniales de Charcas y la gobernación de Paraguay, y dar con un documento jurídico mencionado por B. Saavedra*”. Pereyra realizó su trabajo durante cinco meses. Retornó a Madrid y allí revisó los papeles de la Academia de la Historia y la Biblioteca Nacional, donde fue el primer investigador en revisar la Biblioteca de Ingenieros Militares, encontrando “una valiosa cantera de documentos y mapas referentes al Chaco”. Finalmente se movió a Segovia, para indagar en el Archivo Militar. J. Siles afirma que “tuvo reales deseos de volver a Bolivia y cumplir su deber con la patria, pero sólo percibía 20 libras y debía mantener a su esposa y un hijo de 11 años”, extremo que el propio Pereyra desmintió. Colaborado por fotógrafos y copistas, seleccionó, fotografió e hizo transcribir 300 documentos y un centenar de mapas útiles para probar los derechos en el Chaco, que fueron remitidos al gobierno de Bolivia. En enero de 1935 fue designado a Chile, para similar misión. Se dio modos para retornar a Bolivia, en 1936, donde fundó la Sociedad de Escritores y Artistas de Bolivia. Retornó luego a EE.UU., donde fue contratado por Nelson Rockefeller, Coordinador de Asuntos Interamericanos, como codirector de la División de Publicaciones en Washington D.C. y Nueva York (1941-1943). Posteriormente fue Director fundador del Boletín de las Naciones Unidas y jefe de publicaciones en español de la ONU (1947-1950). En 1952 retornó a Cochabamba. Fuente: Pereyra, 1973: 2; Rocha, 2010b; Siles Guevara, 1973e.

PÉREZ APAZA, RAMIRO GREGORIO (La Paz, 25 de mayo de 1979)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en los cursos de Organización de Archivos y Legislación Archivística en la Constitución Política del Estado y su Importancia Estratégica para el Desarrollo Nacional, organizado por el Archivo Regional de Oruro del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*; Gestión Pública con Enfoque Intercultural, organizado por el Servicio de Nacional de Administración de Personal. Asistió como expositor en el III Congreso Internacional de Archivística (2005), organizado por el Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información*. Participó también en Simposios y Congresos como expositor en temas de Historia. Fue Auxiliar del Archivo de La Paz* (UMSA), Auxiliar de Archivo en la Facultad de Arquitectura (UMSA), Auxiliar de Archivo en la Aduana Nacional de Bolivia. Empadronador del proyecto Censo Guía de Archivos Mineros, organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional*. Trabajó en el Censo Guía de los Archivo de la Ciudad de La Paz, auspiciado por la Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* y Archivo de La Paz. Auxiliar de Archivo en la Superintendencia de Pensiones, Valores y Seguros; Asistente de Oficina y Encargado de la organización del Archivo de la Consultora Iniciativa Bolivia. Facilitador en talleres de capacitación en el Plan de Desarrollo Municipal (Municipio de Umala), Provincia Aroma del Departamento de La Paz. Auxiliar de Archivo del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2009). Técnico Archivista del Archivo

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Regional de Oruro de la misma (2010). Consultor Archivista en el Archivo del Banco Central de Bolivia (2011). Publicaciones archivísticas: “Situación de los archivos mineros de Bolivia” con Carmen Rosa Fuentes Salomé y María Guarachi Condori (Fuentes del Congreso, 2005, 1 (21): 234-235). Fuente: CV.

PÉREZ DE LARREA, BARTOLOMÉ Primer Escribano Público y de Cabildo de Oruro, nombrado el 1° de noviembre de 1606, por el Oidor. Antes de su nombramiento levantó el Acta de fundación de la Villa, el Escribano de Cámara del Rey, Juan Baptista Delagasca y el Escribano de su Majestad Cristóbal Pérez. Los restantes autos, el pregón, la delimitación de la jurisdicción de la Villa, la elección de alcaldes ordinarios, la elección del alférez real, alguacil mayor, fiel ejecutor, alcaldes de la Santa Hermandad, procurador general, mayordomo, el juramento del Cabildo, el pleito homenaje del Cabildo, y las primeras cédulas reales confirmatorias, corrieron a su cargo, así como el archivo del cabildo de la villa de Oruro. Fuente: Blanco, 1904: 29.

PÉREZ DE URDININEA, JOSÉ MARÍA

(Hacienda Anquioma, Luribay, Corregimiento de La Paz, 31 de octubre de 1784. † La Paz, 4 de noviembre de 1865) Militar y político. Estudió en el seminario de La Paz y luego en Cochabamba. Actuó en la Guerra de la Independencia de Bolivia y de la Argentina. Fue Gobernador de la Provincia San Juan (Argentina). Presidente de Bolivia (18 de abril al 2 de agosto de 1828). Ingresó al ejército realista en 1809. Actuó en la represión de las revoluciones de Chuquisaca y La Paz. Se pasó a los patriotas después de la Batalla de Suipacha (7 de noviembre de 1810), combatió en la Batalla de Guaqui (1811), donde resultó herido. Se unió al Ejército del Norte de Manuel Belgrano*, combatiendo en Tucumán y Salta, participó en las campañas argentinas en Charcas. Fue Jefe de la retaguardia patriota en Humahuaca (1816). Pasó al Ejército de los Andes en la campaña de Chile (1817), participó en la Batalla de Chacabuco, tuvo actuación destacada contra el ejército de La Serna (1817). Regresó a Chile (1820), siendo ascendido a Coronel. A principios de 1825, bajo el mando del gobernador salteño J.A. Álvarez de Arenales* participó en la última campaña a Charcas, como jefe de una avanzada, para enfrentar a Pedro Antonio Olañeta. Continuó su camino hacia el norte, hasta rendir al último oficial realista José María Valdez. A.J. de Sucre* lo incorporó al Ejército boliviano y lo designó Ministro de Guerra (1827-1828), posteriormente Presidente del Consejo de Ministros. A la renuncia del Mariscal de Ayacucho, se hizo cargo del gobierno (abril-agosto de 1828). Fue acusado de no impedir la invasión de Agustín Gamarra. En 1838 fue reincorporado al Ejército por el Mariscal A. de Santa Cruz*, Presidente de Bolivia y Protector de la Confederación Peru-Boliviana. Participó de la Batalla de Yungay (1839). Fue Ministro de Guerra en los gobiernos de José Ballivián (18411842) y Jorge Córdova (1855-1857). Sus papeles se encuentran en la Colección “José

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Rosendo Gutiérrez”, en la Biblioteca Central de la Universidad Mayor de San Andrés. El Archivo fue empleado por F. Ballivián*, en su tesis José María Pérez de Urdininea. Un general de la Independencia, 1819-1825 (La Paz, 1979). Fuente: Serveto, 2010, 9 (1): 12-15; http://es.wikipedia.org (24.4.2012)

PÉREZ VÁSQUEZ, FEDERICO (La Paz, 17 diciembre 1946)

Estudió hasta el tercer año de Economía (UMSA). Es Contador General titulado en el Instituto de Educación Bancaria de La Paz. Tiene amplia y notable trayectoria en su campo profesional, pues fue Encargado de Costos e Importaciones de Química Boliviana S.A. (1971-1973); Tesorero General del Banco Central de Bolivia* (19731987); Contador Programa Fondo Rotativo Minero del Fondo Social de Emergencia (1988-1990); Asesor Contable del Instituto de Educación Bancaria (1993); Contador del Centro Médico Veterinario, Comercial y de Servicios Ltda. (1994-1999), de Pharmandina de Comercio S.A.; Gerente Administrativo y Financiero de Security Alarm Systems Ltda. Fue Ayudante de la Cátedra de Contabilidad Bancaria y Profesor de Contabilidad Básica y docente en el Instituto de Educación Bancaria. Es miembro del Colegio Departamental y Nacional de Contadores. Tiene conocimiento especializado de la legislación tributaria empresarial, lo que tiene singular importancia en el trabajo de archivo. Desde junio del 2000 trabaja como Jefe del Archivo Central del Gobierno Municipal de La Paz, habiendo emprendido la organización total del Archivo Central del municipio más grande del país. Es autodidacta en archivos, por lo que asiste a cursos y talleres especializados, entre ellos el Curso Taller Gestión de la Documentación y Archivos (2005), Curso Archivo y Conservación (2006), Taller Legislación y Conservación de Archivos Públicos (2007), Seminario Restauración de Documentos de Valor Patrimonial (2009). Fuente: CV.

PÉREZ ZABALAGA, VIVIANA LIZ (La Paz, 3 de septiembre de 1977)

Estudió la carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Es Técnico en Aplicaciones de Computación. Fue docente del idioma inglés en el Instituto TEA (2001). Participó de varios congresos, seminarios, talleres relacionados con las Ciencias de la Información. Fue Pasante en la Biblioteca Especializada del Instituto de Ingeniería Sanitaria y Ambiental (2004), Biblioteca de la Sociedad de Ingenieros de Bolivia (2005-2006), Pasante del Archivo Central de la Fiscalía de Distrito del Ministerio Público-Fiscalía de Distrito de La Paz (2007), Asistente del Archivo del Cementerio General de La Paz (2008). Trabaja como Técnico en el Archivo Histórico del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

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PEZUELA GRIÑÁN Y SÁNCHEZ MUÑOZ DE VELASCO, JOAQUÍN DE LA (Naval, 1761. † Madrid, España, 1830)

Noble, Marqués de Viloma; militar y político español. Estudió en el Colegio de Artillería de Segovia. Combatió en el sitio de Gibraltar y contra Francia en Guipuzcoa y Navarra (1793-1794). Fue enviado a Lima como comandante del Ejército Realista. Partió del Callao (abril de 1813) y desembarcó en Quilca, pasando a Charcas, con refuerzos y 10 cañones medianos. Se limitó a evitar que las Republiquetas apoyaran al Ejército del Norte (argentino). En una de esas batallas se apoderó de la correspondencia del general Manuel Belgrano*, lo que le permitió planificar la Batalla de Vilcapugio (1 de octubre de 1813) obligándolo a retirarse a San Salvador de Jujuy; ocupó Salta (mayo de 1814), sin embargo, la victoria de las Republiquetas en Vallegrande y Santa Cruz (Batalla de Florida), lo obligó a replegarse, con su ejército diezmado en dirección a Cotagaita (Potosí), desde donde envió al general Juan Ramírez Orozco a reprimir la rebelión de Cusco, La Paz y Arequipa. Atacó por sorpresa al Ejército de Rondeau en Venta y Media, derrotándolo en la Batalla de Sipesipe (Viloma), lo que le valió el título de Marqués de Viloma y su ascenso a Teniente General. Trigésimo sexto Virrey del Perú (octubre de 1816-29 de enero de 1821), sucedió a J. de Abascal*. Apoyó las expediciones de José de la Serna hacia el norte Argentino y a Chile. Tras las victorias patriotas de Chacabuco y Maipú, retiró sus fuerzas, enfrentó a la Expedición Libertadora del Perú de San Martín*, pero no logró expulsar a la escuadra chilena de Thomas Cochrane de la costa peruana. Debido a sus ideas absolutistas, soportó la oposición interna de sus generales, la mayoría de ellos liberales, los que a la cabeza de José de La Serna, lo derrocaron por medio del llamado Pronunciamiento de Aznapuquio (29 de enero de 1821). Pezuela regresó a España y en 1825 fue nombrado Capitán General de Castilla La Nueva. Formó un archivo muy completo de sus actuaciones militares que se encuentra en la Biblioteca de Menéndez Pelayo (Santander, España). El archivo está catalogado en 16 legajos de manuscritos, 7 de impresos y uno de correspondencia dirigida a su hijo. Contiene su Memoria Militar, cuya primera parte fue publicada por Félix Denegri Luna (Revista Histórica, T. 21, 1954; y Colección Documental de la Independencia del Perú. T. 21: Memorias y diarios¸ 1971). La segunda parte de la Memoria de Gobierno. Diario de las ocurrencias que han habido en el mando del Excmo. Señor D. Joaquín de la Pezuela desde el 7 de julio de 1816 hasta el 29 de enero de 1821, fue editada por Vicente Rodríguez Casado y Guillermo Lohmann Villena (Sevilla, Escuela de Estudios Hispano-Americanos, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1947. XLVI, 912 pp. Publicaciones de la Escuela de Estudios Hispano-Americanos de Sevilla nº XXVI, serie 3ª. Memorias, relaciones y viajes, nº 3). G. Serveto publicó la segunda parte en el Anuario del ABNB, 2007. Fuente: Serveto, 2007: 531-611; Serveto, 2010: 12-15; http://es.wikipedia.org (24.4.2012); http://www.bibliotecademenendezpelayo.org (25.4.2012)

PIÉROLA AGUILAR, JOSÉ NICOLÁS (Ca. 1880. † La Paz, 4 de mayo de 1973)

Fotógrafo profesional. Se dedicó a la impresión de tarjetas postales, quien, a diferencia de muchos, se especializó en verdaderas fotografías, en lugar de copias impresas, gracias a cámaras y máquinas reveladoras introducidas en 1902 por la

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compañía Eastman Kodak. Sus tarjetas postales llevan su firma estampada en alto relieve. Utilizó acertadamente la fotografía como herramienta en la promoción turística de Bolivia. Sus fotografías ilustraron Bolivia en el primer Centenario de su Independencia (1925). Estudió la carrera de medicina en la UMSA, la que abandonó por su pasión por la fotografía y sus constantes viajes. Su prestigioso estudio fotográfico estaba en la Plaza Murillo Nos. 25-26 (posteriormente fue el cine París). Se especializó en detalles de fino acabado de los tradicionales álbumes familiares y marquería, usando material importado de Chile, Perú, Francia y Estados Unidos. Sus álbumes, con diferentes tipos de hojas y cortes ondeados en las fotografías y postales, rematados en esquineros dorados y plateados, con impresiones en sello seco que servían para destacar y sujetar las fotografías en los álbumes, logrando un acabado exquisito. Era importador de equipos e insumos de fotografía, favorecido por su dominio del idioma inglés que además le facilitaba atender a su clientela extranjera. Formó parte de la Unión Sindical de Fotógrafos de La Paz; fue socio del Club Social “16 de Julio” y socio fundador de la Sociedad de Protección Mutua (1920-1949). Introdujo uno de los primeros automóviles que se vio en las calles de la ciudad de La Paz, un Chandler de siete asientos, que lo compró luego la familia de la prestigiosa Casa S. Howson S.A., que lo conserva actualmente en exposición en sus salones del Paseo del Prado, como carro de colección. Fue el primero en incursionar por el Oriente, empleando burros para transportar sus cámaras. En su archivo fotográfico, en placas de vidrio, copias en papel y fotopostales, subsisten fotografías de la ciudad de La Paz de antaño, en blanco y negro, con temática variada, como panorámica-paisajística, arquitectónica, social, política, a las que se suman tomas de estudio y galería artística de retratos y grupos familiares. Sus archivos fotográficos son parte del testimonio de una época que ahora constituye un documento gráfico de mucha importancia. Fuente: Buck, 1997; Sra. Ana María Piérola Ergueta, 14.5.2012.

PiÉrola MonrRoy, JosÉ Reynaldo

(La Paz, 6 de mayo de 1920. † La Paz, 9 de noviembre de 2006) Fotógrafo y Laboratorista autodidacta. Incursionó en la fotografía por los años 1940, siguiendo los pasos de su padre J. N. Piérola Aguilar*. En los 60’ trabajó en Foto Linares*; y como técnico en impresión para la Alianza para El Progreso, USAID Bolivia (1964-1974). En 1967 obtuvo el primer premio, una moderna filmadora, en el concurso lanzado por la Casa Kavlin*. Su trabajo destaca por sus fotomontajes. También desarrolló el arte de la filmación en video, principalmente de acontecimientos sociales, tanto de bodas, quince años, cumpleaños, etc. Su laboratorio, ubicado en el centro de La Paz (calle Oruro N° 110, colindante con la ex Comibol), era uno de los más grandes, con proceso de revelado y copiado manual. Por los 80’ realizó trabajos fotográficos para la empresa municipal de agua (SAMAPA), con tomas y ampliaciones, que eran su especialidad. En 1980 ganó el primer premio en la especialidad de montaje otorgado por el Instituto Cultural Boliviano Alemán y en 1983 obtuvo el Premio en el concurso lanzado por SOS Aldeas Infantiles. En 1987 realizó más de tres centenas de fotografías para la edición de la Historia Ilustrada de la Academia de Policías 1937-1987, en homenaje al cincuentenario de su fundación;

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edición a cargo de Ricardo Rada Laguna y Cnl. DESP. (r.) Rodolfo Tapia Pacheco. También realizó algunos trabajos para la Armada Boliviana. En 1992 hizo tomas del departamento cautivo del Litoral, del Salar de Uyuni, los océanos Pacífico y Atlántico y muchas más. En los 70’ incursionó en el teatro, formando parte del Grupo Rimega, haciendo sus presentaciones en el teatro privado que sostenía la familia García, ubicada en la zona de San Pedro, sobre la calle Riobamba. Fuente: Sra. Ana María Piérola Ergueta, 14.5.2012.

PLANTAROSA DÍAZ, TERESA (La Paz, 17 de junio de 1970)

Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Cursó la carrera de Técnico en Aplicaciones (Centro de Informática Boliviano-Alemán). Es Técnico superior en Idioma Francés. Su formación complementaria se dio a través de varios cursos y seminarios, tales como el Panel sobre el Pasado, Presente y Futuro de la Información (1993), Valores Históricos y Artístico de los edificios antiguos y su adaptación como centros de información (1993), Los Archivos en los medios de comunicación (1994), Los Archivos y la sociedad (1995), Congreso de Archiveros, Bibliotecarios y Museístas (1996), Deontología y ética del profesional de la información (1999), Organización y sistematización de la información archivística con la aplicación del Reglamento Común de Procedimientos Administrativos (2000), Técnicas archivísticas y metodología de los servicios documentales (certificado expedido en Cádiz) (2000), II Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2003), Infometría de la información (2007). Participó en el I Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas del Estado (2012), organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional. En su experiencia laboral, trabajó como bibliotecaria del Penal de San Pedro en La Paz (1994), responsable de los procesos técnicos del Archivo Central del Ministerio de Capitalización (1996-1997), responsable del Archivo de la Empresa Nacional de Electricidad, Cochabamba (1997), técnico del Archivo del Fondo de Inversión Social FIS (1998). Desde 1991 se desempeña como Responsable del Archivo del Club de Tenis de La Paz. Fuente: CV.

PLATA LAURA, FRANCISCO (La Paz, 4 de octubre de 1979)

Estudio la Carrera de Historia* (UMSA). Como muchos archivistas de su generación ha participado en el seminario sobre el Desarrollo de la Archivística en Bolivia: pasado, presente y futuro (2003), Gestión Documental y Organización de Archivos Administrativos (2006) y en los talleres de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (2006, 2007). Se ha desempeñado como archivista desde 2001, en varias instituciones, como el Archivo de La Paz* (2001-2002), Aduana Nacional de Bolivia (2002, 2008) y el Banco Central de Bolivia* (2003-2006, 2009-2010). Desempeña funciones en la Autoridad de Instituciones Financieras y Seguros. Fuente: CV.

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PLAZA ESCÓBAR, LUIS MANUEL (La Paz, 4 de mayo de 1959)

Historiador (UMSA). Estudió Filosofía (autodidacta) y un curso de periodismo en el Instituto Nueva Acrópolis (Santa Cruz de la Sierra). Diplomado en Historia de la Amazonía (UMSA). En su obra historiográfica destaca su tesis “Pensamiento y vida en las Misiones Jesuitas de Mojos, Siglos XVII-XVIII”. Co-editor de Mojos, seis relaciones jesuíticas 1670-1763 (Historia Boliviana, 2005) y Manual de Historia Latinoamericana (Sucre, 2008). Tiene artículos biográficos y filosóficos que aparecieron en revistas y anuarios. Participó en el V Congreso de Etnohistoria (Jujuy, 1998), 1er Congreso de Historia (2003), Congreso de Misiones Jesuitas (2004), 1er Congreso Sudamericano de Historia (Santa Cruz, 2003), Congreso de Bolivianistas (Sucre, 2006, 2009), y en las Tertulias sobre Antropología que organiza la organización Antropólogos del Sur (ASUR). Como coordinador Nacional del Voluntariado de la Compañía de Jesús, participó en el proyecto de apoyo a la educación rural (1999-2001) en comunidades indígenas de Santa Cruz, Beni y Cochabamba. Fue docente de la UMSA (2004); Universidad Nuestra Señora de La Paz (2004), Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca (2006), Centro de Estudios e Investigación Jurídica y Social CEIJS (2008). Enseña “Introducción a la historia” e “Historia Latinoamericana” en la Universidad San Francisco Xavier. Fue consultor en el área sociológica para la Universidad Nacional Siglo XX de Llallagua (2004), comunidad de Bella Vista (Beni); comunidades de Llallagua, Azurduy y Monteagudo (UNICEF). Como archivista trabajó en la organización y catalogación del Archivo de la Comisión Episcopal de Educación (1997-1998); Auxiliar del Archivo de La Paz* (1998); Responsable de la biblioteca del Proyecto Centro de Información para el Desarrollo de la Asamblea Constituyente (USAID- Plan “Sucre: Ciudad Universitaria” 2006–2007); fue consultor para la organización de los archivos del Ministerio de Justicia (1996), Ministerio de la Presidencia (1996-1997), Viceministerio de Educación Superior Ciencia y Tecnología (1998); Proyecto de Desarrollo Organizacional de la GTZ (1998); Prefectura del Beni (2002-2003); Archivos de oficina de Llallagua y Camiri de la GTZ– PADEP (1998) y el sistema de archivos de las Alcaldías de Colquechaca y Ocurí en el Norte de Potosí. Para estos municipios elaboró las bases para la implementación de Bibliotecas Públicas (2003-2004). Trabajó en la sistematización de la biblioteca PADEP (2004-2005). Organizó el Archivo de la Asamblea Constituyente (2006). Fue facilitador de Archivística para la GTZ en la Prefectura del Beni, Alcaldía de Trinidad, Servicio Departamental de Educación e Instituto Normal Superior en la ciudad de Trinidad (2001-2002). Docente de Archivos Administrativos en el Diplomado de Ciencias de la Información (2008) y facilitador en Archivos Administrativos del Instituto Aurora Rossells (2008) y del Instituto de Formación y Capacitación Laboral de La Paz (2012). Dirige el Grupo de Investigación Centauro, en Sucre. Ingresó como consultor en la segunda fase del Censo Guía de Archivos (2005), luego como funcionario (2006), al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. El 2010 pasó a servir en la Casa de la Libertad* como Responsable de la Biblioteca. Es autor del Diagnóstico y Anteproyecto para la creación del Archivo Departamental del Beni; Diagnóstico para la creación del Archivo Central de la Prefectura del Beni y Reglamento de archivos para el Archivo de la Prefectura del Beni. (Inéditos). Publicaciones archivísticas. Organización de Archivos de Gestión. Manual para secretarias (Sucre, 2010). Fuente: CV.

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POPPE ENTRAMBASAGUAS, HUGO

(Sucre, 15 de marzo de 1925. † Sucre, 28 de mayo de 2001) Profesor de Historia y Geografía (Escuela Normal de Maestros, Sucre, 1947). Doctor en derecho (Universidad de San Francisco Xavier, 1952). Jurisconsulto e historiador. Profesor de la Escuela de Maestros, Director de la Universidad Popular de San Francisco Xavier, Catedrático universitario y Director de la Biblioteca Central de la Universidad de San Francisco Xavier. Magistrado de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (1970, 1982, 1995), Ministro de Educación y Cultura (1971), Magistrado y Presidente del Tribunal Andino de Justicia del Acuerdo de Cartagena. Presidente de la Comisión Redactora de la Constitución Política del Estado de 1967. En su época juvenil fue Presidente de la Federación de Estudiantes de Chuquisaca y más tarde, Secretario General del Centro de Estudiantes de Derecho. Fue muy activo en la vida académica, cívica y cultural, habiendo formado parte de numerosas corporaciones, tales como la Fundación Gran Mariscal de Ayacucho, el Comité del Bicentenario del Nacimiento del Gran Mariscal de Ayacucho, el Comité Cívico de Intereses de Chuquisaca, Colegio de Abogados de Chuquisaca, Instituto Boliviano de Genealogía, Asociación Americana de Juristas, Sociedad Latinoamericana de Sociología, Sociedad de Escritores y Poetas Andinos, Grupo Cultural Anteo y Academia Boliviana de la Historia. Fue Presidente de la Sociedad Geográfica y de Historia “Sucre”. Fue editor y director de revistas especializadas como Foro Sucrense (órgano del Colegio de Abogados), Universidad Popular, Tribuna Universitaria, Boletín de la Sociedad Geográfica y de Historia “Sucre” y Anuario del ABNB. Autor de varias obras históricas, entre las que sobresalen Revolución nacional y autonomía universitaria (1995), Hay que romper la dependencia impuesta por Chile (1992), Tres ilustres chuquisaqueños (1992), Tribunales jurisdiccionales internacionales y comunitarios (1992), Antonio José de Sucre y la obra de su creación (1995), Se necesita coraje para ser juez (1995), La revolución calumniada (1996). Prologó varias obras y escribió numerosos artículos y reseñas, que los publicó en el Anuario del ABNB, revistas y periodicos de Sucre, (Unión, Correo del Sur) y de La Paz (Presencia Literaria, La Razón, la revista Signo), fundamentalmente. Dejó seis obras inéditas. Sostuvo intensa polémica sobre la fecha de fundación de la ciudad de La Plata (hoy Sucre) con G. Mendoza*, a la sazón director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, logrando éste último imponer su criterio de forma oficial. A la muerte de Mendoza (1994), la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia*, lo nombró Director del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, hecho que provocó la reacción negativa de la sociedad intelectual, recayendo dicho cargo, finalmente en J. Barnadas*. Posteriormente la Fundación lo designó en reemplazo de R. Arze*. Durante su corta gestión (1998-2001) escribió su primera Publicación archivística, a la manera de una Historia legislativa de la Biblioteca y Archivo Nacionales de Bolivia (1999), en la que ignoró la monumental obra de G. Mendoza, provocando nuevamente una reacción generalizada de la comunidad de intelectuales e historiadores, lo que le obligó a retirarla y volverla a reponer con “recompaginación y reencuadernación” en diciembre del 2000; aunque persistió la omisión a la obra de G. Mendoza. Publicaciones archivísticas: La biblioteca y Archivo Nacional de Bolivia. Legislación e Historia. Historia y compilación de leyes (Sucre, Imp. Qori Llama, 2000); “El Mariscal Braun a través de su epistolario” (Anuario 1999 del ABNB, 1999: 585-589); “Colección de manuscritos de

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la Biblioteca Gabriel René - Moreno” (Anuario 2000 del ABNB, 2001: 719-726); “Epistolario íntimo de Gregorio Pacheco” (Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 2002. Sucre, 2003: 499-508). Fuente: CV.

PORTILLO, CARLOS

(Oruro, s. XIX. † Oruro, 1959) Fotógrafo, comerciante. Fundador de la Estudiantina 10 de Febrero; Socio meritorio de la Sociedad de Socorros Mutuos. Antes de dedicarse a la fotografía, administró junto a su esposa Filiberta Lazcano, la bodega de licores Callaviri, ubicada en la plaza Castro de Padilla. Fueron testigos de varios hechos políticos y sociales que se suscitaban en las inmediaciones de la plaza, lugar estratégico para observar estos acontecimientos. El fotógrafo argentino Nemesio García, que instaló una casa comercial, al marcharse de la ciudad le aconsejó a Carlos Portillo “aprendiera el oficio de fotógrafo”. Fue cuando tomó la firme decisión de instalar su estudio en la misma plaza Castro de Padilla (1917). Posteriormente se trasladó a la calle Bolívar. Con su cámara registró imágenes de Oruro de antaño (vistas de la ciudad, calles, plazas, edificios, gentes, y una serie de acontecimientos como desfiles, procesiones religiosas, carnavales, actividades deportivas, aniversarios institucionales, etc.); captó el primer vuelo por los cielos de Oruro del aviador orureño Juan Mendoza Nernuldes (15 de noviembre de 1921); también fue retratista. Sus fotografías representan la memoria visual de Oruro y de su sociedad, siendo en esa época el único fotógrafo de Oruro que cobró importancia y prestigio. Sus fotografías fueron publicadas, en la monografía correspondiente a Oruro, en el libro Bolivia en el Primer Centenario de su Independencia (New York, 1925). Formó un importante archivo de fotografías, sobre la historia gráfica de Oruro, que fue recuperado, en parte, por su hija Bertha. Algunas de sus fotos se conservan en el Museo de la Casa de la Cultura Simón I. Patiño. Fuente: Candela, 2011: 10-11; Cazorla, 2012: 17-19.

PORTILLO ESPADA, SUSY NINFA

(Siglo XX, Provincia Bustillo, Potosí, 21 de septiembre de 1965) Licenciada en Sociología (UMSS) con Maestría en Derechos Humanos y Diplomado en Educación Superior. Docente en las universidades de UNIVALLE y UNICEN, en las carreras de Comunicación Social y Trabajo Social. Paleógrafa en el Archivo Histórico Municipal “José Macedonio Urquidi”* de Cochabamba (1995, 2008) y en el Archivo Franciscano de Cochabamba (2010). Participó en la Reunión de Consulta sobre la Aplicación de la Norma Internacional (General) de Descripción Archivística ISAD-G (2004); Taller departamental sobre la “Ley de Archivos” (2007); Taller “La Archivística y la Legislación sobre Patrimonio Documental” 2007); Jornadas de Reflexión a cargo de los voluntarios de la Primera Brigada Internacionalista de apoyo a las Bibliotecas y Archivos (2009), todos en Cochabamba. Tiene, inéditos, el Catálogo de Expedientes Coloniales de Cochabamba (1995) y el Catálogo de los Expedientes Coloniales Mizque. Fuente: CV.

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PORTUGAL ORTIZ, FRITZ MAX (La Paz, 13 de abril de 1943. † La Paz, 5 de mayo de 1999) Licenciado en Historia (UMSA) y arqueólogo autodidacta. Acucioso investigador de la historia. Pionero en el estudio prehispánico del Beni, con su tesis Arqueología del Río Beni (La Paz, IBC, 1978), también estudió las culturas Wankarani, Chiripa, Mairana, y las que se desarrollaron en los Yungas. Autor de La esclavitud negra en las épocas colonial y nacional de Bolivia (La Paz, IBC, 1978), Escultura prehispánica boliviana (La Paz, 1998), Exploraciones arqueológicas subacutáitcas en el lago Titicaca con Carlos Ponce, Johan Reinahrd y Eduardo Pareja (La Paz, 1992). Fue director del Archivo Histórico Municipal “José Rosendo Gutiérrez” de La Paz, en cuyo desempeño elaboró los índices de la serie de Escrituras Públicas, labor que continuó M. Money*. Publicaciones archivísticas: Índice del Registro de escrituras coloniales. Nota preliminar de Max Portugal Ortiz (La Paz, Archivo Histórico Municipal José Rosendo Gutiérrez, 1977); Guía del Archivo Histórico Municipal José Rosendo Gutiérrez. Catálogo de expedientes del siglo XIX (La Paz, Archivo Histórico Municipal José Rosendo Gutiérrez, 1979). Fuente: Oporto, 2006: 358; Sagárnaga, 2003:294.

POSNANSKY, ARTHUR

(Viena, Imperio Austro-Húngaro, 12 de abril de 1873. † La Paz, 27 de julio de 1946) Ingeniero Naval Militar con estudios en la Academia Real e Imperial de Pola. Constructor, urbanista, cineasta, fotógrafo, investigador, escritor, historiador, minero, explorador, empresario, aventurero, paleontólogo, antropólogo y arqueólogo. Autor de Tiahuanacu, la cuna del hombre americano (1945, 1957 dos volúmenes), libro clásico de la arqueología universal, fruto de sus estudios de las ruinas de Tiwanaku. Introdujo el primer automóvil en la ciudad de La Paz (1903). Participó en la campaña del Acre, en el conflicto internacional contra el Brasil (1899-1903), al mando de su lancha “Iris” (inicialmente llamada “Anni”). Reconocido como “Héroe de la Guerra del Acre”, ostentó el grado de Capitán del Ejército de Bolivia. Documentó sus estudios sobre Tiwanaku, Isla del sol, Guaqui y el Altiplano boliviano, en fotografías de placas de vidrio de 24 x 30 cm., que datan de 1897 a 1946, tamaño excepcional para entonces. Una valiosa fotografía doble muestra una hermosa panorámica de la zona. Las fotos muestran las primeras excavaciones en Tiwanaku, la Iglesia de Tiwanaku, Akapana, la Puerta del Sol, la Isla del Sol, la Isla de la Luna, estudios antropométricos de los Urus Uchusuma y Chipayas de Carangas, templos y viviendas prehistóricas, el traslado del monolito Pachamama (Bennett) a la ciudad de La Paz, el proyecto del templete semisubterráneo en la plaza del Estadio. Organizó una biblioteca selecta de 160 ejemplares, manuscritos, anotaciones, álbumes fotográficos, afiches de exposiciones en el mundo, mapas. Conservó la tipografía que empleó para publicar el libro de Guamán Poma de Ayala* (1944), y las fotografías del 17º Congreso Internacional de Americanistas celebrado en Tiwanaku en 1910, donde presentó su ponencia Monumentos Prehistóricos de Tihuanacu y El Signo Escalonado. Completan su colección, fotografías del Lago Titicaca, tomadas en la segunda mitad del siglo XIX por exploradores y pioneros del occidente, entre ellos imágenes del vulcanólogo A. Stübel (1835-1904), el arqueólogo alemán Max Uhle (1856-1914), el etnólogo suizo

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A. Bandelier* (1842-1914) y el arqueólogo norteamericano Wendell C. Bennett. Parte de sus fotografías ilustraron sus obras Tihuanacu e Islas del Sol y la Luna, Titicaca y Koati, con álbum de 35 vistas (Paz, 1910), Guía General Ilustrada para la Investigación de los Monumentos Pre-históricos de Tihuanacu e Islas del Sol y la Luna (Titicaca y Koati), con breves apuntes sobre los Chullpas, Urus, y escritura de los aborígenes del Altiplano Andino, con un cromo, 54 grabados, tres planos y cuatro facsímiles (La Paz, 1912). Tihuanacu, La Cuna del Hombre Americano T. 1 (Nueva York, J.J. Augustin Publisher, 1945); Tihuanacu, La Cuna del Hombre Americano T. 2 (La Paz, Don Bosco, Ministerio de Educación de la República de Bolivia, 1957). Estas colecciones quedaron en poder su hijo Manuel, las que fueron vendidas al investigador J. Núñez de Arco*, su actual poseedor. Fuente: Costa de la Torre, 1968: 848-849; MacFarren, 2009: 9-11.

POZADAS GANDARILLAS, JAVIER EDUARDO (La Paz, noviembre de 1976)

Licenciado en Ingeniería de Sistemas de la Universidad Católica Boliviana (2003), Diplomado en Sistemas Computacionales a nivel internet (julio/2007). Hizo la Maestría en Gestión de Sistemas de Información (Universidad Católica Boliviana). Fue Asistente Ad Honorem de los Laboratorios de Computación de la Universidad Católica Boliviana (2001), luego trabajó bajo la modalidad de Beca en los referidos Laboratorios (2002-2004). Consultor responsable de mejoras tecnológicas de la importadora “La Salvadora Hnos.”. Pasante de Sistemas en la Representación del Banco Interamericano de Desarrollo en Bolivia (2004-2006). En 2007 pasa al Proyecto Saneamiento Legislativo impulsado por el Programa de Fortalecimiento de las Instituciones Democráticas. Desde 2010 desempeña funciones en el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*, como Encargado del Área de Informática. Bajo su responsabilidad se encuentra la definición del soporte informático para impulsar la gestión documental integrada y el Centro de Procesamiento de Datos. Fuente: CV.

PRADO, MARIANO

(La Paz, 18 de julio de 1771. † 1830) Formó parte de las filas patriotas de Pedro D. Murillo, a las que sirvió desde su puesto de Escribano. Primero fue de Número y luego de Gobernación y Guerra, precisamente en época de la rebelión de julio de 1809. Participó en la toma del cuartel para dotar de armas al movimiento rebelde. Tuvo importante actuación como Escribano de la Junta, autorizando el acuerdo del Cabildo por el cual se declaró la guerra a Puno el 12 de septiembre; de igual manera el acuerdo capitular de los tratados con Goyeneche el 17 de octubre, disponiendo su difusión en carteles colocados en vía pública. El 30 de octubre dio fe de la renuncia de Murillo como miembro de la Junta Tuitiva. Estuvo presente en el proceso contra Rodríguez y Castro, dando fe -como Escribano- que aquellos arrancaron los carteles y los pisotearon. Certificó la ejecución de Rodríguez, afirmando que se realizó en el cuartel a puerta cerrada y antes de haberse firmado

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la sentencia. Su adhesión a la causa patriota provocó la pérdida de su oficio y su destierro perpetuo de la provincia, habiendo salido rumbo a la Argentina. En 1816 se le restituyó su cargo. Fuente: Aranzáes, 1915: 614.

PRIEWASSER, P. OFM WOLFGANG

(María Schmolln, Baviera, Austria, 9 de diciembre de 1861. † Cochabamba, 3 de febrero de 1954)

Ingresó en el noviciado franciscano de Salisburgo a los 18 años. El 25 de agosto de 1879 cambió su nombre de pila (José) por el de Wolfgang. Fue ordenado sacerdote el 29 de junio de 1884. Se alistó en el Colegio misionero de Propaganda Fide de Tarata, partiendo del puerto de Génova el 1° de mayo de 1888 en el vapor “Orión” con destino a Arica y de allí se incorporó al Colegio de Tarata en 15 de julio de 1888. El Prefecto del Colegio de Propaganda Fide, fray José María Gianelli, lo destinó a la misión de los Guarayos. Allá se dedicó al aprendizaje del idioma e interiorizarse de la vida, historia y costumbres del pueblo Guarayo, en el que instaló talleres de talabartería, zapatería y otras manufacturas. Entre 1898 y 1899, retrató fotográficamente “las tareas fundamentales desempeñadas por varones Guarayos, como mensajeros y cargadores, uno de ellos incluso aparece portando un arma”, como muestra P. García Jordán*. Como resultado de su estadía publicó Los franciscanos de Tarata y los indios Guarayos. Fue nombrado Guardián, y Prefecto de las misiones de Argentina, Paraguay y Bolivia, recolectando datos para sus escritos. Estudió la biografía de fray Bernardino de Cárdenas y dejó inédita su obra A modo de ensayo biográfico: El Iltmo. Mons. Fray Bernardino de Cárdenas. En su condición de Guardián de los Hospicios pertenecientes al Colegio Apostólico de Tarata, redactó los Estatutos del Hospicio y en ellos reglamentó el trabajo del Archivo y Biblioteca, ordenando al Vicario un cuidado especial en su buena conservación conforme las constituciones generales y mandó poner un bibliotecario para que cuide los libros y sobrevigile él mismo sus trabajos y tenga algunas suscripciones de revistas úitiles y haga venir cada año obras nuevas de importancia. En su visita al Colegio de Tarata en 1909 recomendó a los Prefectos de Misiones se manden al Archivo Franciscano de Tarata, los informes y noticias de sus respectivas misiones, y otros datos de interés y dignas de publicarse. Fue director de la revista Archivo de la Comisaría Franciscana de Bolivia, editada en Tarata, en la que publicó las Necrologías (“libro a leerse diaria y públicamente, terminando con una oración para todos los difuntos”), con noticias de los religiosos desde 1825. La edición de 1918 presentó el “índice general” de diez años de actividad. L. Calzavarini* supone que el libro Necrologías tenía su base en el Archivo de la Comisaría Franciscana de Bolivia. El corresponsal desde Tarija de la revista fue el Padre M. Lauroua*. Fuente: Calzavarini, 2005; García, 2009: 173, 176; http://www.guarani-raity.com.py (23.12.11).

PRIMERA REUNIÓN INTERAMERICANA SOBRE ARCHIVOS (PRIA) Organizada por T. Schellenberg* y G. Mendoza*, celebrada en Washington D.C. (del 9 al 27 de octubre de 1961) a la que asistieron 51 profesionales del continente y observadores de España. Ha sido la base constitutiva del desarrollo de la archivística

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iberoamericana, aspecto que constituye un legítimo orgullo para la Archivística boliviana. Lo “Iberoamericano” se comprende a partir de la cruenta conquista española de territorios americanos. Es un término acuñado para morigerar los efectos de lo que los historiadores han venido en denominar el “Encuentro de dos mundos” y sin eufemismos la “invasión y etnocidio”. En el plano archivístico, esa experiencia ha dado lugar a una prolífica tradición que se expresa en una praxis compleja de desigualdades y reciprocidades: “América surge como realidad dentro de la vida cultural europea en una de las grandes crisis que sufre esta cultura. El descubrimiento del Continente Americano se origina en la ineludible necesidad que siente el europeo de un mundo nuevo. Europa necesita de América, por esto la descubre” (Leopoldo Zea). La generación de mecanismos institucionales de cooperación institucional es una característica del siglo XX. Un hito fundamental en ese desarrollo es la creación del Comité de Archivos (1947), organismo especializado de la Comisión de Historia del Instituto Panamericano de Geografía e Historia*, establecido para “ayudar a la conservación, arreglo y conocimiento de los archivos históricos de América”. Este Comité designó a T. R. Schellenberg, para organizar la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos (PRIA). Schellenberg tuvo que viajar hasta Potosí para entrevistarse con G. Mendoza, con quien planificaron el amplio programa de la reunión. El célebre archivista norteamericano aprovechó su presencia en esa ciudad para dictar conferencias sobre organización de archivos. Asistieron a la PRIA G. Mendoza, G. Ovando Sanz* y M. Chacón Tórres*, quienes presentaron sus ponencias, al igual que los directores de archivo de Latinoamérica y Estados Unidos. El PRIA concluyó sus debates con la Declaración de Principios* y sus resoluciones se convirtieron en una verdadera base programática para el desarrollo archivístico entre las décadas de 1970 y 1980. Se puede afirmar que la cooperación iberoamericana tuvo su inspiración en esas resoluciones. Se crearon varios grupos de trabajo, entre ellos el de la Guía a las Fuentes de América Latina, que publicó la Guía de fuentes para la historia de Ibero-América conservadas en España, en cuya labor tuvieron preeminencia los historiadores. Durante la reunión, Schellenberg había distribuido la versión española de su obra Técnicas Descriptivas de Archivos, la que motivó las observaciones de la entonces archivista principiante V. Cortés Alonso*, y le siguieron los Problemas de Ordenación y Clasificación de G. Mendoza y el Manual de archivología Hispanoamericana de A. Tanodi*. La agenda del PRIA, intensa y productiva, se plasmó en reuniones y creación de centros y seminarios. La Reunión Técnica sobre el Desarrollo de los Archivos (1972) aprobó “la Carta de los Archivos Americanos*, equiparable a las tablas de la ley para todos”, según Vicenta Cortés. Se estableció el Centro Interamericano de Formación de Archiveros. Se convocó al Seminario Interamericano sobre la Integración de los Servicios de Información de Archivos, Bibliotecas y Centros de documentación en América Latina y El Caribe (1972); Seminario Multinacional sobre Planificación y Reorganización de Archivos Nacionales (1973); Reunión Regional de Expertos para el Desarrollo de los Archivos Nacionales de América Latina (1976); Seminario Interamericano de Cooperación Regional para el Desarrollo de Archivos (1976), V. Cortés Alonso, resume sus alcances: “este encuentro fue la primera piedra de la que han ido saliendo varios sillares del edificio de los archivos americanos. Es más, la semilla allí sembrada, simbólicamente, estaba germinando y se convertiría en un buen semillero de nuevas iniciativas”. Efectivamente, la PRIA originó un vasto programa de cooperación

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técnica que desarrolló España a favor de los archivos Iberoamericanos. V. Cortés Alonso fue la responsable de ejecutar el punto 7 de las Resoluciones del PRIA (Cf. Formación de Archiveros) desarrollado en base al Proyecto de Javier Malagón, donde surgieron los cursos auspiciados por el Centro Interamericano para el Desarrollo de los Archivos* en Córdoba, Argentina (1972-1988) y los de la Escuela Nacional de Documentalistas* en Madrid, España, con becas del Programa Especial de Capacitación de la OEA (PEC-1224), que se inició en 1975 y culminó en 1992, impulsado por José Sánchez Belda y ejecutado por V. Cortés Alonso (Inspectora General de Archivos y directora del Curso), Carmen Crespo Nogueira (Directora del Centro de Conservación y Restauración) y Carmen Pescador del Hoyo (Directora del Archivo General de la Administración, en Alcalá de Henares). En 1975 España apoyó el funcionamiento del Centro de Restauración y Microfilmación de Documentos para el Caribe y Centroamérica, con sede en Santo Domingo. La experiencia española adquirió su propia impronta, desvinculándose de la OEA, con un agresivo programa que dio excelentes resultados, impulsado desde la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, que inició los cursos de la Escuela de Archivos para Ibero-América* en 1991 e instalando el Centro Iberoamericano de Formación Archivística en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia). En otro rubro se organizó en Madrid, en 1989, el Grupo Iberoamericano de Gestión de Documentos, abordando la álgida problemática de los archivos administrativos, colectivo que publicó dos obras de importancia Archivos Administrativos Iberoamericanos, Modelo y Perspectivas de una Tradición Archivística (1996) y Hacia un Diccionario de Terminología Archivística (1997). De esa manera, España se situó entre los países más desarrollados en materia archivística, generando programas en todos los ámbitos para apoyar los archivos históricos y administrativos. Sin embargo, avanzó más allá, cruzando el límite de los archivos públicos, aproximándose a los archivos de los sindicatos, por primera vez en América Latina. En 1992, organizó la Primera Reunión Iberoamericana para la Recuperación de Archivos y Documentación de los Trabajadores y Movimientos Sociales, de la que surgió la Asociación Iberoamericana para la Recuperación y Protección de los Archivos de los Trabajadores y sus Organizaciones (AIRPATO). Fuente: Oporto, 2006; Oporto y Molina, 2011: 36-50.

PROGRAMA DE DESARROLLO DEL SERVICIO DE ARCHIVOS Y DOCUMENTOS PÚBLICOS DE LA REPÚBLICA DE BOLIVIA Este Programa fue creado con el apoyo de la Organización de Estados Americanos*, que en 1974 estaba a cargo de Javier Malagón, quien dispuso de una ayuda económica para la realización de un Curso de Archivos, que contaba con el auspicio institucional de la Universidad Mayor de San Andrés y el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. El Programa contempló un plan ambicioso, que consistía en la capacitación de los archivistas del sector público del Estado, su organización gremial en una Asociación Nacional, y la ejecución del Censo Nacional de Archivos Públicos, que sería la base para la planificación del Sistema Nacional de Archivos, sustentado en una base normativa que preparaba el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*. De esa manera pretendía alcanzar los objetivos trazados en la Primera Reunión Interamericana de Archivos* (PRIA). La coordinación del Programa recayó

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en A. Crespo* y la dirección técnica en G. Mendoza*, quien en septiembre de ese año logró el apoyo del gobierno del Gral. H. Bánzer*, que promulgó el DS 13956 que declara de utilidad nacional al Programa y se aprobó el concepto de Documento y Documentaciones Públicas, las Clases Documentales, y las Fases del Ciclo de Vida del Documento, y el DS 13957, por el que se prohibía la incineración, venta, desecho y eliminación por cualquier medio que se haga de los documentos públicos, mientras se erigiera un repositorio intermedio nacional. En junio de 1976 el Programa inició su trabajo en medio de los mejores auspicios, con el Curso de Organización de Archivos Administrativos y Paleografía, inaugurado por el Ing. Rolando Sahonero Numbela. G. Mendoza, tuvo a su cargo el módulo de Teoría General de Archivos; Archivos e individuos; Archivos y Entidades Públicas; El Documento. La profesora Ana Malaguti de la Escuela Nacional de Archiveros de Córdoba, dictó el módulo Producción y Gestión de Documentos y Archivos Administrativos; el Prof. Moyano el de Paleografía, que incluyó prácticas en el Archivo de La Paz*. Al término del curso se creó la Asociación Departamental de Archivistas*, dirigidos por Wálter Carvajal, Josué Taborga e I. Vera*, con el asesoramiento de A. Crespo, J.L. Roca* y G. Ovando Sanz*. Se nombró Secretaria de la Asociación a A. Quintanilla*. El Censo no se efectivizó por razones ajenas a la dirección técnica, que presentó un informe en la II Reunión de Consulta de Archivos Bolivianos, en Cochabamba, en julio de 1982. Fuente: Mendoza Loza, 1982; Oporto, 2004; Oporto, 2006.

PROGRAMA PERMANENTE DE ASISTENCIA TÉCNICA DE LA BAHALP Programa creado en septiembre de 2002, impulsado por la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso (actual Asamblea Legislativa Plurinacional)*, destinado a superar la perversa brecha tecnológica creada en los archivos estatales, que sitúa a numerosos repositorios en estadios primarios de desarrollo y a otros muy pocos, que cuentan con recursos humanos calificados y alta tecnología informática en sus procesos técnicos, como archivos de primer nivel. Desde su creación en septiembre del 2002, el Programa impartió un total de 160 cursos en las ciudades de La Paz, El Alto, Oruro, Cochabamba, Santa Cruz de la Sierra, Potosí, Cobija, Tarija y las ciudades provinciales de Guayaramerín (Beni), Pucarani (La Paz), Llallagua (Potosí), Rurrenabaque (Beni); con un total de 2.300 servidores públicos capacitados en diversas áreas de la archivística. El Programa se canaliza mediante solicitud escrita por la institución beneficiaria, hacia la dirección de la BAHALP, que destina facilitadores de su planta de profesionales. En 2009 asesoró a la Subcomisión de Interés Legítimo de la Comisión Nacional de Acceso a los Archivos Militares, presidida por el obispo Rolando Villena, Presidente de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia. El Programa fue institucionalizado, incluyéndoselo en el Reglamento de la Vicepresidencia del Estado. Fuente: Congreso Nacional, 2000; Informes publicados en las ediciones de Fuentes.

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PROYECTO ADAI: APOYO AL DESARROLLO DE LOS ARCHIVOS IBEROAMERICANOS. PROGRAMA ADAI Creado por iniciativa de España, presentada a la VII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno en Isla Margarita (Venezuela), celebrada en octubre de 1998, para analizar la creación del Programa: Sistema de Archivos Iberoamericanos, cuyo objetivo era la preservación, conservación y difusión del Patrimonio Documental de los Países Miembros, que tuvo el apoyo posterior de la Asociación Latinoamericana de Archivos* (ALA). En realidad se denomina oficialmente como Proyecto: Red Iberoamericana de Archivos (IBEROARCHIVOS): Programa de Apoyo al Desarrollo de los Archivos Iberoamericanos, identificado por la sigla ADAI. El Programa se financia con un Fondo multilateral destinado a apoyar proyectos archivísticos de especial relevancia, presentados por instituciones tanto de los países miembros del Comité Intergubernamental que aportan cuotas a ese Fondo, como de países no miembros de ese Comité. Fuente: http://www.ala.or.cr (10.02.10)

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Q QUEREJAZU CALVO, ROBERTO

(Sucre, 1913. † Cochabamba, 7 de octubre de 2006) Abogado, diplomático e historiador. Estudió en el colegio Sagrado Corazón de Sucre y la carrera de Derecho en la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca. Siendo estudiante aún, participó en la Guerra del Chaco. En 1939 ingresó al Servicio de Relaciones Exteriores, donde sirvió durante 20 años. Wálter Montenegro lo calificó como “autor de algunos de los más valiosos libros de historia producidos en Bolivia”, entre ellos Masamaclay. Historia política, diplomática y militar de la Guerra del Chaco (1965), en la que destaca la defensa del fortín Boquerón dirigida por el coronel Manuel Marzana y 500 valientes que resistieron veinte días de asedio de miles de soldados paraguayos. Cultivó la biografía, habiendo escrito en este género, Che Guevara, el quijote de Ñancahuazú (1982); Adolfo Costa Du Rels: el hombre, el diplomático, el escritor (1982); Andrés de Santa Cruz, su vida y su obra (1992); y La dramática vida de Daniel Salamanca (1998). También es autor de Chuquisaca, 1539-1825 (1987). El gobierno de C. Mesa* le confirió el “Cóndor de los Andes” en el grado de Gran Cruz (2004). Siendo Embajador de Bolivia en el Reino Unido, hacia 1969, visitó París para entrevistar al escritor Adolfo Costa Du Rels, quien le hizo saber que la familia de S.I. Patiño* había “decidido incinerar toda la documentación relativa a las empresas que tuvo en Bolivia”. En seguida entrevistó a Antenor Patiño quien confirmó, que a la muerte de su padre, “se habían acumulado papeles (…), en una amplia habitación (del edifico Nº 45 de la Avenida Foch) en la que, en anaqueles metálicos arrimados a las cuatro paredes y en otros cruzados en el centro, en cajones de todo tamaño y maletas de todo tipo (reventando por la abundancia de su contenido), se veía una impresionante cantidad de copiadores antiguos, archivadores, balances, actas de directorios, informes de gerentes y técnicos, etc., es decir, varias toneladas de documentos depositadas allí en el más completo desorden, sirviendo de pasto a la humedad y los ratones, en vísperas de ser convertidos en cenizas”. Obtuvo el permiso de la familia para revisar los documentos y trabajó “intensamente, haciendo una selección febril de todo lo que a primera vista, sin tiempo de leer nada más que unas líneas de cada archivador, le parecía de interés (…) relativos a las empresas ‘La Salvadora’, ‘Patiño Mines’, ‘Huanuni’, ‘Fundición de Liverpool’ y a las actividades de los directorios en Oruro, La Paz y Nueva York”, logrando recolectar “150 kilos de documentos arrancados de los copiadores, archivadores y paquetes”. Fue

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la base para escribir Llallagua Historia de una montaña (1977), sobre la minería del estaño en Bolivia, 1884-1952, que completó con información de archivos públicos y particulares de La Paz, Cochabamba y Sucre, entre 1972 y 1974. También revisó documentos referidos a la Guerra del Pacífico en la Biblioteca del Museo Británico y el Public Record Office, cuyo resultado se tradujo en sus libros, Bolivia y los Ingleses, 1825-1948 (1973) y Guano, Salitre, Sangre. Historia de la Guerra del Pacífico (1979). El destino de ese archivo es desconocido pero al parecer permanece en poder de la familia del historiador. En abril de 2010 su hija Moira entregó al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* 302 libros, folletos y 33 publicaciones periódicas, de los que 159 están referidos a la Guerra del Chaco (95 de autores bolivianos, 43 paraguayos y 20 de otras nacionalidades). El resto refiere a la Guerra del Acre, Guerra del Pacífico, historia de Chuquisaca, al Mariscal Andrés de Santa Cruz, a la Iglesia Católica en Bolivia y otros temas. Fuente: Siles Guevara, 1974b: 1; Querejazu, 1977: 3; Nexos, 2010.

QUINTANA TABORGA, JUAN RAMÓN

(Aiquile, Cochabamba, 3 de diciembre de 1959) Mayor de Informática del Ejército. Licenciado en Sociología (UMSA). Fue jefe de la Unidad de Análisis de Políticas de Defensa del Ministerio de Defensa Nacional, durante el segundo gobierno del Gral. H. Bánzer* (1997-2001). Militar muy interesado en la mejora de los archivos históricos de la Institución militar. Intentó sistematizar la información de defensa sobre la base de los registros de conscripción y servicio militar, para la formulación de políticas de defensa. Organizó una reunión interamericana de Defensa de la que salió el Libro Blanco de Defensa. Posteriormente dejó el Ejército y se dedicó a la investigación de la historia del ejército de Bolivia, habiendo publicado Soldados y ciudadanos. Un estudio crítico sobre el servicio militar obligatorio en Bolivia (1998), en la que empleó la información que acopió de los archivos de Territorial (servicio militar) del Ministerio de Defensa Nacional. Posteriormente fue Ministro de la Presidencia del gobierno de Evo Morales Ayma*, cargo que dejó por presiones políticas de la oposición, sin dejar de apoyar al partido en función de gobierno, siendo designado principal operador político y jefe de campaña de las gobernaciones de Pando y Beni. En junio de 2010 fue designado Director Ejecutivo de la Agencia para el Desarrollo de Macroregiones y Zonas Fronterizas. Volvió al gabinete en el Ministerio de la Presidencia en enero de 2011. Fuente: Oporto, 2011d: 195-196.

QUINTANA RÍOS, SANDRA EDITH DE LA (La Paz, 24 enero de 1971)

Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información*-Mención archivos (UMSA); hizo el Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos UMSA (2002); Diplomado en Educación Superior (UMSA). Estudia la Carrera de Antropología. Realizó una estancia en Restauración de manuscritos e impresos en la sección Libros y Documentos del Instituto del Patrimonio Histórico y Cultural de España. Trabajó en la Biblioteca del Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (2001),

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Biblioteca del Colegio Saint Andrew´s, Archivo Central de la Contraloría General de la República, Archivo de la Superintendencia de Telecomunicaciones. Es Responsable de la Biblioteca de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Capacitadora del Instituto Tramma; docente de la Universidad Nuestra Señora de La Paz; Espacio Simón I. Patiño; Empresa URUDATA, Universidad Nacional “Jorge Basadre Grohmann”, Tacna, Perú. Impartió docencia en el Diplomado sobre Administración de Archivos de la Universidad Nuestra Señora de La Paz. Es Docente de Ordenamiento en la Carrera de Bibliotecología. Fue miembro del Comité Editorial de la Revista Fuentes del Congreso (2002-2005). Participó en el Proyecto de conservación preventiva del Fondo Antiguo del Seminario Mayor San Jerónimo. Es Especialista en conservación y restauración de materiales de bibliotecas y archivos en soporte papel. Publicaciones archivísticas: “Conservación preventiva. ‘Una tarea de concientización’” (Fuentes del Congreso, 2003, 1 (5): 7). Fuente: CV.

QUINTANILLA ZUAZO, ALICIA (Oruro, 31 de diciembre de 1920)

En 1954, trabajó como asistente de investigación de su esposo, el historiador A. Crespo Rodas*, en el Archivo General de Indias* en Sevilla, España. Asistió al Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de Bolivia*, auspiciado por la OEA y la UMSA (1976). Desempeñó el cargo de Secretaria de la Asociación de Archivistas de La Paz*, que se creó al final de ese curso. Trabajó en el Departamento de Espectáculos de la Alcaldía Municipal de La Paz (1977), fue Vicepresidenta (19771980) y Presidenta (1981-1983) de la Cruz Roja Departamental de La Paz, Presidenta y fundadora de la Asociación Amigos de Zípoli (1986-1990). Hizo un curso de Administración Cultural en Quito, Ecuador, en el que presentó su tesina sobre los Archivos Ministeriales (1991). Organizó la Biblioteca de la Academia de Ciencias (1977) y la Biblioteca privada Gutiérrez Vea Murguía (1978). Es cofundadora de la Fundación Boliviana para la Música Barroca en La Paz, y fundadora de la Escuela de Música de San Ignacio de Moxos (1996). El 8 de mayo de 2006, entregó en calidad de donación al Archivo de La Paz* la colección de documentos (1886-1895) de sus antepasados los abogados Juan Federico Zuazo (1825, padre), Juez de Partido (1847), Juez de Letras en varias provincias y Ministro de la Corte Superior de Distrito de La Paz, Munícipe (1870), Prefecto de La Paz (1886) y Vicepresidente de la República (1892) y Federico Zuazo (1857, hijo), Municipe (1881-1886), Diplomático, Gobernador de La Paz (1898-1899). La colección contiene el Informe del ex Munícipe Federico Zuazo de sus actos en el Concejo Departamental (1888), el libro copiador de la Prefectura; libro copiador de telegrama y fotocopias de telegramas de 1899, encuadernadas en pasta dura. Fuente: CV; Barragán, 2008: 152-153.

QUINTEROS, MARIANO Notario Real “de todas las islas y tierra firme del mar Océano”. Fue Notario mayor del Obispado de La Paz y de la Santa Cruzada. Actuó en la colonia. Fuente: Aranzáes, 1915: 627.

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QUIÑONES VARGAS, LIZ XIMENA (La Paz, 28 de marzo de 1979)

Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Se tituló con el Proyecto de Grado Directrices para la elaboración de instrumentos de descripción en el Archivo Central de la Corporación Minera de Bolivia, elaborado bajo la tutoría de L. Oporto*. Fue auxiliar de docencia en Catalogación y Clasificación (2001). Se desempeñó como consultora en el Área de Archivos del Banco Central de Bolivia* (1999, 2003-2004), ex Dirección de Telecomunicaciones (2000), Empresa de Información Consultores Zelaya-Salinas & Asociados (2002-2003), Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (2002), Dirección de Administración Territorial del Gobierno Municipal de La Paz (2003). Participó como expositora en el III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2011), oportunidad en la que presentó su libro, resultado de su proyecto de grado. Trabajó en bibliotecas de la Universidad Andina Simón Bolívar (1999) y del Conservatorio Nacional de Música (2003). Ingresó al Archivo de la COMIBOL como pasante para elaborar su proyecto de grado. En virtud de su interés y desempeño, fue incorporada al personal de planta como Encargada del Centro de Documentación de la Corporación Minera de Bolivia* (2006), promovida como Encargada del Área de Descripción del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2010), con el propósito de poner en práctica su proyecto de grado. Es facilitadora del programa de capacitación continua del Sistema de Archivo de la Comibol. Fue docente de Descripción en el Diplomado de Gestión Integrada de Documentos y Archivos de las Empresas Estratégicas Estatales (2011), organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado. Publicaciones archivísticas: Directrices para la descripción archivística en el Archivo Central de la Corporación Minera de Bolivia. La Paz, CEPAAA, 2011; “Los instrumentos de descripción en el Sistema de Archivo de la Comibol” (Fuentes, Revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, 2011, 5 (17): 5-16). Fuente: CV.

QUIROGA GISMONDI, MIRIAM TERESA (La Paz, 24 de octubre)

Licenciada en Historia (UMSA). Idiomas castellano, alemán, italiano. Ha sido docente de la Carrera de Turismo (1992-2002), Carrera de Historia* (2000) y del Curso Pre Facultativo de Humanidades (2000). Impartió docencia en la Universidad Católica Boliviana (1994-1998), Universidad Nuestra Señora de La Paz (1996-2004), en el Instituto para el Desarrollo de Empresarios y Administradores (1999-2001). Ha publicado Temas de Historia de Apolo, en coautoría con M.L. Soux*, R. Hilari* y Ángela Cárdenas (La Paz, Prefectura del Departamento, 1990); María Virginia Estenssoro. Escritora, periodista y profesora boliviana (La Paz, Ministerio de Desarrollo Humano, 1997). Tiene seis artículos publicados en diversas monografías y revistas de La Paz. Presentó una ponencia en el Encuentro de Organizaciones de Investigación Histórica auspiciado por el Instituto de Estudios Andinos y Amazónicos, sobre las investigaciones realizadas en el Archivo de La Paz, junto a G. Molina*, R. Luis Hilari* y R. Santos*. También fue ponente en los Encuentros Internacionales Siglo XIX Bolivia

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y América Latina (Sucre, 1994) y Siglo XX Bolivia y América Latina (Cochabamba, 1998), en el Encuentro Internacional “Los Borbones entre Dos Mundos”, Siglo XVIII (Cochabamba, 1995). Trabajó en el Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores (1992). En el Archivo de La Paz* se desempeñó como Auxiliar de Paleografía (1987), Investigadora Auxiliar (1989), Auxiliar de investigación (1989, 1991-1992), Docente Archivista (1995, 1997, 1998, 2000); fue Directora Interina (1995); tuvo a su cargo la organización del Fondo Contraloría Nacional y el rescate de documentación de la Provincia Coro-Coro (1995). Publicaciones archivísticas: “El Archivo de la Parroquia de Apolo” (Boletín del Archivo de La Paz, 1991, 13: 61-64); “Inventario del Fondo Contraloría General de la República”, con Ximena Medinaceli, Simón Cuba, Ramiro Santander (Boletín del Archivo de La Paz, 1995, 15: 17-26); “La Biblioteca especializada del Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 16-17: 43-48). Fuente: CV.

QUIROGA RAMÍREZ, JORGE FERNANDO ARTURO (Cochabamba, 5 de mayo de 1960)

Ingeniero Industrial (Universidad A&M de Texas), con Maestría en Administración de Empresas (Universidad St. Edward’s de Austin). Trabajó para IBM (1981), en la empresa minera Mintec y en el Banco Mercantil de Bolivia, del cual es socio mayoritario, como lo es también de Aerosur. Político, fue líder del derechista partido Acción Democrática Nacional (ADN) fundado por  H. Bánzer*. Fue Subsecretario de Inversión Pública y Cooperación Internacional del Ministerio de Planeamiento (1989, 1990) y Ministro de Finanzas (1992). Fue Vicepresidente del Gral. Banzer (1997-2000), designado Presidente de la República por sucesión constitucional (7 de agosto de 2001-6 de agosto de 2002). Durante su gestión vicepresidencial apoyó la unificación, en 1998, de la antigua Biblioteca del Congreso y la Hemeroteca Nacional (dependientes del Senado) y del Archivo Legislativo (de Diputados), en un servicio único, constituyendo formalmente la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso* (actual Asamblea Legislativa Plurinacional). Autorizó al Programa de Gobernabilidad, mediante resoluciones expresas, disponer los recursos para la restauración, remodelación e instalación de la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional (Resolución 02/98 de 11.5.1998) y la elaboración del Reglamento de dicha institución (Resolución de 004/2000 de 11.11.2000). En su calidad de Presidente de la República, promulgó la Ley 2341, de Procedimiento Administrativo (23.4.2002), que regla el Derecho de Petición, establece un procedimiento común y obligatorio para la gestión de trámites en las instituciones estatales y establece el régimen de la reserva de los documentos públicos, con lo que se fortalece y homogeneiza el trabajo técnico en los Archivos de Oficina y los Archivos Centrales de la Administración del Estado. Fuente: Cordero Carrafa, 2000; http://es.wikipedia.org (25.4.12).

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QUISBERT CONDORI, PABLO LUIS (La Paz, 22 de junio de 1972)

Estudio la Carrera de Historia* (UMSA). Fue presidente de la Coordinadora de Historia. Asistió al Seminario Nacional “Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia” (LP, 1993); Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996), congresos internacionales de Historia. Trabajó en el Archivo de La Paz*, Archivo del Banco Central de Bolivia*. Fue consultor de la GTZ en el Diagnóstico del Archivo de Poder Legislativo. Publicaciones Archivísticas: “Inventario del Fondo Contraloría General de la República”, con M. Quiroga, S. Cuba y R. Santander (Boletín del Archivo de La Paz, 1995, 16 (15): 17-26). Fuente: Entrevista personal. (10.11.2011)

QUISPE, DELFIN

(Comunidad Cajiata-Segunda Sección Ancoraimes, Provincia Omasuyos, La Paz, 24 de diciembre de 1969) Realizó sus Estudios superiores en el Instituto Superior Ecuménico Andino de Teología-ISEAT- Bachillerato en Teología en el que presentó su Tesina Inicios de la obra metodista en el Distrito Lago (1928-1939) (1995), con estudios superiores en la Universidad Bíblica Latinoamericana, en la que obtuvo la Licenciatura en Ciencias Teológicas con su tesis Una lectura histórica de la obra metodista entre los aymaras en la región de lago Titicaca (1928-1960) (2001). Estudia la Carrera de Historia* (UMSA). Es Pastor ordenado de la Iglesia Evangélica Metodista en Bolivia desde 1993. Fue Docente de Formación Cristiana en Primaria y Secundaria en los colegios “Calama”, Eucaliptus (Oruro), y en el Instituto Americano Caranavi (1998-2000), donde fue Director general (2003-2004). Ha sido Presidente de Iglesias Unidas de Caranavi (2002-2004); Capellán del Instituto Americano de La Paz (2008); Director nacional de Educación Teológica y Formación Cristiana Colegios de la Iglesia Evangélica Metodista en Bolivia (2009-2010); Pastor de la Iglesia Metodista “La Reforma” (2010). En su labor archivística ha destacado por la organización del Centro de Historia y Archivo Metodista “Rev. Aníbal Guzmán” CEHIAM (con apoyo de S. Cuba*), habiendo sido su Director (2005-2007). El 2006 en ocasión de la celebración del centenario de la IEMB, se procedió a la reapertura de este Centro de Historia y Archivo, constituyéndose en un espacio para la investigación histórica, principalmente sobre el trabajo misionero de las iglesias protestantes en Bolivia en los aspectos religiosos, evangelización, servicios sociales en educación, salud, desarrollo rural. Como resultado de su trabajo historiográfico ha publicado Historia de la Iglesia Evangélica Metodista en Bolivia-Una iglesia evangélica inculturada (19062006) (La Paz, IM, 2007); Historia del Instituto Americano de La Paz (1907-2007) (La Paz, IM, 2008). Como resultado de su trabajo archivístico ha recopilado documentos históricos y fotografías en la región de Lago Titicaca-Ancoraimes y la zona de los yungas-Caranavi. Fuente: CV.

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QUISPE CALLEJAS, SARA ISABEL (La Paz, 17 de mayo de 1987)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Realizó pasantías en el Archivo de La Paz*, Área Expedientes Coloniales (2009); Instrumentos descriptivos y Digitalización de Expedientes (2009); en el Servicio de Impuestos Nacionales Distrital Tarija, como archivera designada para el levantamiento de datos del Proyecto del Censo Guía de Archivos (2009); el Proyecto Mi barrio cuenta y yo Cuento con mi barrio, recopiladora oral de la Memoria de los barrios (2009) y técnica archivista digitalizadora y catalogadora en el Archivo de La Paz* dentro del Proyecto Digitalización de fotografías de la colección Última Hora (2011). Desempeña el cargo de Asistente en el Archivo Regional de Oruro dependiente del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*, sobre el cual presentó, junto a D. Segales* y P. Mayta* un informe al III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos EBAM (2011). Fuente: CV.

QUISPE CALLIZAYA, VERÓNICA (La Paz, 6 de abril de 1986)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en el Seminario Los Archivos como Fuente de Investigación Histórica Boliviana (2009), igualmente en los cursos de Organización de Archivos de Oficina, y el de Organización del Archivo Central; finalmente, el curso de Organización de Archivos de Oficina (2010). Cursó el Primer Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos de las Empresas Estratégicas Estatales, organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). Empezó su trabajo en archivos, como ayudante (pasante) del Archivo Histórico Militar (2006), fue Catalogadora del Patrimonio Discográfico Musical Boliviano, existente en el repositorio Nacional de Bolivia (2007), Auxiliar de Investigación III del Archivo de La Paz* (2008). Se incorporó como consultora en el archivo del Programa de Conservación Vial de la Administradora Boliviana de Carreteras (2008-2010). De allí pasó al Archivo de Vías Bolivia- Administradora de Rodaje y Pesaje. Fuente: CV.

QUISPE CRUZ, ALAN ÁLVARO (La Paz, 27 de noviembre de 1986)

Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Es Técnico en Sistemas Informáticos en el Centro Especialización en Computación (2005). Como parte de su formación en el ámbito investigativo e histórico participó en varios seminarios, encuentros, coloquios, como Reunión Anual de Etnología (2005-2009), V Encuentro Latinoamericano de Estudiantes de Historia” (2009), IX Congreso de Historiadores de la Minería (2007) y V Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos (2009); XIII Simposio Internacional de Estudiantes de Historia, “Encuentros y Debates” en conmemoración a la gesta revolucionaria del 16 de Julio de 1809 (2009). En materia Archivística realizó

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pasantías en el Archivo Histórico de las FF.AA de la Nación (2006) y en el Archivo de La Paz* (2008). Fue consultor informático en la Representación Presidencial a la Asamblea Constituyente REPAC (2006), Archivo de Gestión de Roghel-Bolivia Corp. (2007), Archivo Central del Padep-GTZ (2008-2010). Fue Auxiliar Técnico de Archivo y Oficina del Fondo Indígena (2009) y del Servicio Holandés de Cooperación al Desarrollo-SNV (2008). Fue Técnico Archivista especialista en digitalización de fotografías, documentos y artículos de prensa de las colecciones “Mujeres Creando”, “Comunidad diversidad-Familia Galán” y del fondo fotográfico “Última Hora” en el Archivo de La Paz (2010-2011) y de los Archivos Sonoros en el Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (2011). Asistente de Archivo en el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2012). Fuente: CV.

Quispe Fernández, Zenón (La Paz, 5 de abril de 1979)

Licenciado en Historia UMSA (2006). Hizo el Diplomado en Educación Superior (2002). Cursó la Maestría en Ciencias Sociales del Desarrollo de la Universidad del PIEB (2010) y es Doctorante en el programa de Historia* de América Latina de la Universidad Pablo de Olavide, Sevilla, España (2010-2012). Fue Asesor en la H. Cámara de Diputados (2002-2003), Asesor Político de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (1998-2001, 2001-2006), investigador y coordinador sobre Tiwanaku para The History Channel (2006). Impartió docencia en la Universidad Pública de El Alto (UPEA), Universidad Indígena Boliviana Aymara Túpac Katari, y el curso Pre-universitario de la Carrera de Historia de la UMSA (2008 y 2009). Participó en congresos nacionales e internacionales de Historia y movimientos sociales como Frente Patriótico “Manuel Rodríguez” de Chile, Movimiento Indígena Mapuche y Arauco Malleco (2006). Hizo el curso de Digitalización de Documentos en el Archivo de La Paz* (2008). Ganó la consultoría convocada por el Ministerio de Educación para la realización de Historia de las ciudades de Bolivia (2008) y el video documental sobre Achacachi, la Insurgencia Aymara, UMSA-UNAM (2000-2002). Publicó sus reflexiones sobre “¿Es simplemente un relato? Testimonios de una lucha social: Huarina 2000 y 2001” (Historia. Revista de la Carrera de Historia, 2005, Nº 29); “Las fronteras en Latinoamérica” (La Comuna, Quito, 2004); “En busca del cultivo tradicional de la hoja de coca en La Paz” (DesArchivando, 2008, Nº 5). Se desempeñó como docente archivista en el Archivo de La Paz. En 2012 fue designado director de la Carrera de Historia de la Universidad Pública de El Alto. Publicaciones archivísticas: “Una joya en el Archivo de La Paz: El libro Mayor del año 1809 de la Real Caja de la ciudad de La Paz”, con Cecilia Ramallo (Bicentenario, Nº 1, La Paz, 2008: 118119); “Un poco de paleografía” (DesArchivando, 2009, 6: 6-7); “La última transferencia realizada por el Archivo de La Paz: Fondo SENAPI” (DesArchivando, 2009, 6: 43); “La función social de los archivos: el servicio a comunarios en el Archivo de La Paz”, con Cecilia Ramallo (Boletín del Archivo de La Paz, 2011, 26: 59-62). Fuente: CV.

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QUISPE JARRO, ADRIÁN

(La Paz, 8 de septiembre de 1958) Estudió en la Carrera de Historia* (UMSA). Trabajo en el Archivo de La Paz* (Auxiliar de Archivo, 1991, 1994-1996; Auxiliar de docencia, 1997). Se desempeñó en el proyecto de organización del Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores (1992), en el Archivo del Banco del Estado en Liquidación (1995); hizo una consultoría en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (2002). Asistió a la VI Escuela Taller de Archivos para Iberoamérica* (Madrid, España, 1996); el Cursillo de Archivos organizado por el Archivo de La Paz (1991). Participó como instructor del Curso de Actualización Archivística organizado por la Universidad Andina Simón Bolívar y el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (2002); y asistió al Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995). Fuente: CV.

QUISPE LARUTA, MARTIN (La Paz, 2 de julio de 1951)

Estudió en la escuela “Juan Francisco Bedregal” y el colegio “Georges Rouma” de La Paz. Estudió Electricidad en la Facultad Técnica de la UMSA por tres semestres. Participó en el Seminario de Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural (1993) y en el Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (1996). Se incorporó a la administración pública como mensajero y auxiliar de oficina (1977), siendo promovido a Subdirector (1987) y director del Archivo del Ministerio de Agricultura y Asuntos Campesinos (1989). El Ministro Justiniano de esa época, facilitó su participación en el XIV Curso de Capacitación Archivística del Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos* de la Universidad Nacional de Córdoba. Durante su estancia realizó pasantías en el Archivo General de la Nación (Buenos Aires) y en el Archivo del Hospital de Córdoba (Argentina), donde organizó la serie de historias clínicas. Desde entonces, se caracterizó por asistir sistemáticamente a congresos y reuniones archivísticas. Trabajó en el Archivo Histórico de la COMIBOL. Fuente: Oporto, Luis: en Boletín Informativo del Museo Nacional de Etnografía y Folklore.

QUISPE LOZA, ROSMERY GLORIA

(Cochabamba, 10 de septiembre de 1977) Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información, mención Archivología, UMSA (2008). Participó en diferentes cursos, seminarios y talleres de actualización en las áreas de la Bibliotecología y Archivística. Realizó el Diplomado en Gestión de la Documentación y Archivos efectuado por la Universidad Loyola (2005) y el Diplomado de Gestión Integral de Documentos y Organización de Archivos de Empresas Estratégicas Estatales, organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). Participó en el curso virtual Archon y Sistema Integrado de Archivos, realizado por L&D Soluciones Consultores en Bibliotecología, Arequipa, Perú

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(2009). Fue Asistente de Archivo en la Superintendencia de Telecomunicaciones (2000), Auxiliar de Archivo de la Administradora de Fondo de Pensiones Futuro de Bolivia (2001), Técnico en la Biblioteca del Conservatorio Nacional de Música (2002), becaria en la Biblioteca de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (2002). Trabajó en el Archivo de Oficina de la Subgerencia de Recuperación y Realización de Activos del Banco Central de Bolivia* (2003-2004), Archivo Central del Gobierno Municipal de La Paz (2004), Archivos de Oficina, Central e Intermedio del Banco Central de Bolivia (2004-2005), pasante en el Archivo del Banco Interamericano de Desarrollo (2006–2008). Fue encargada del Archivo Central del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2008-2010) y encargada de Referencia y Circulación (2011). Presentó un informe sobre su trabajo en este archivo, en el III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2011). Dejó la institución en febrero de 2012. Fuente: CV.

QUISPE LOZA, VLADIMIR RUBÉN (La Paz, 1983)

Licenciado en Bibliotecología y Ciencias de la Información, mención Archivología, UMSA (2008). Cursó el Diplomado en Gestión de Archivos, UMSA (2007), realizó el Curso Virtual Archon y Sistema Integrado para la Gestión de Archivos organizado por L&D Solutions Consultores en Bibliotecología, Arequipa, Perú (2009). Fue Auxiliar de Docencia en Automatización de la Información, UMSA (2004), consultor individual en Gestión Documental y Administración de Archivo y Técnico en el Archivo del Banco Central de Bolivia* (2007-2010). Fuente: CV.

QUISPE TICONA, AUSBERTO

(Comunidad Quella Quella, Segunda Sección Laja, Provincia Los Andes, La Paz, 9 de febrero de 1987) Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Realizó un curso de especialización en Organización de Documentos en el Archivo Central, organizado en la Carrera de Historia* (2011). Fue pasante en organización y automatización de la Biblioteca Especializada de la Carrera de Ingeniería Industrial UMSA (2006). Realizó prácticas en organización de Archivos en varias unidades de la Universidad Mayor de San Andrés, desarrolló prácticas en organización de archivos en el Ministerio de Minería y Metalurgia (2008). Fue Consultor de Archivos y Control de Calidad en el Servicio Nacional de Camino-Residual (2009-2011). Trabajó como Asistente en el Sistema de Archivos de Corporación Minera de Bolivia* (2012). Fuente: CV.

QUISPE VELÁSQUEZ, OCTAVIO

(Provincia Pacajes, La Paz, 22 de marzo de 1965) Ingresó a trabajar a la Corporación Minera de Bolivia* el 15 de agosto de 1997, como Auxiliar en los Almacenes Generales de la COMIBOL en la ciudad de El Alto.

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Junto a E. Ramírez* y otros trabajadores, protagonizaron el salvataje del Archivo de la COMIBOL. Es uno de los testigos del abandono de los archivos mineros en los patios de los almacenes, bajo cubiertas precarias y galpones improvisados, expuestos a los embates climatológicos. A mediados de 1999, E. Ramírez propicia el rescate de los archivos que se encontraban en riesgo inminente de destrucción, ejecutan los primeros trabajos de limpieza y conservación preventiva y la identificación de fondos documentales. Actualmente, luego de una década de trabajo en el Sistema de Archivo de la COMIBOL*, es Encargado del “Archivo Transitorio”, responsable de la custodia de los archivos de la Gerencia Administrativa Financiera de la COMIBOL. Junto a un grupo de 12 Técnicos de Archivo, fue becado por la Corporación para cursar el Primer Diplomado de Gestión Integral de Documentos y Organización de Archivos de Empresas Estratégicas Estatales, organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional (2012). Fuente: CV

QUIPUCAMAYOCS, INFORMACIONES DE LOS Producida la invasión y cruenta conquista del Perú, virreyes y gobernadores ordenaron levantar declaraciones de los antiguos quipucamayocs y amautas, empeñados en describir el pasado incaico, empleando cuestionarios previos, destinados a recoger las declaraciones, las que fueron protocolizadas. Estas declaraciones han pasado a la historia como las Informaciones tomadas a los Quipucamayocs, de las que se conocen las ordenadas por Vaca de Castro* (dio lugar a Descendencia y gobierno de los Incas), La Gasca* (dieron vida a la Crónica de Cieza), Cañete* (informan las obras de Santillán y Polo de Ondegardo*), Toledo (inspiran la Historia Índica de Sarmiento de Gamboa) y Martín Enríquez (trascienden en la obra de los cronistas post-toledanos). Fuente: Porras, 1953: 129-130.

QUIPUS Sistema de contabilidad, “instrumento numérico de contabilidad” (Valcárcel), al mismo tiempo que un recurso nemotécnico, que servía de poderoso auxiliar a la tradición oral “un aide memoire (Baudin). Tipos de quipus: los más simples y generalizados son los quipus numéricos o estadísticos “que dan la cifra”. Pero, los quipus “de alta cultura, eran patrimonio de las escuelas y las clases dirigentes”, estos eran los quipus históricos, legislativos, administrativos, religiosos, militares, los de subsistencia, cronológicos o calendarios. Los quipus históricos, que requerían escuelas especiales de quipucamayocs; no podían reproducir los razonamientos ni la calidad y circunstancia de los hechos, y únicamente “sugerían a la memoria del aprendiz o descifrador por los objetos adheridos al quipu, pero principalmente por ciertos textos literarios contenidos en versos cortos o frases rítmicas, que estimulaban la memoria del quipucamayo. Es la asociación quipu-cantar, merced a la cual sobrevivieron las leyendas religiosas de los Incas, sus hazañas guerreras, que se conservaban más que en la memoria de los quipucamayocs”. El quipu es una serie de cordeles de diversas longitudes que penden de un cordón más grueso (Cordón Madre), que puede tener

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la longitud de un metro (de 5 a 6 varas, Tschudi). Los cordeles secundarios o Ramales contenían una serie de nudos de distinto grosor situados a diversas alturas y que indican las decenas, las centenas y los millares. Este nudo es el elemento principal del quipu y el determinante de su nombre porque quipu significa nudo. Las unidades se hallan en la parte inferior de la cuerda, las decenas al medio y las centenas y millares en lo alto. Cada cuerda de quipu consta de cuatro divisiones que no pueden dar un número mayor de 9.999. El cordón final de la derecha indica la suma total del quipu y es como un resumen numérico o Cuerda Totalizadora. Los nudos del quipu son de diversas clases: simples, dobles, triples, franciscanos, etc. Las cuerdas de los quipus históricos suelen ser de distintos colores: negro, rojo, azul, pardo, oscuro, amarillo, blanco; que indican la calidad de las cosas contadas por el quipu. La capacidad de registro de memoria del quipu contable era de 20 años. Existían Archivos de quipus desde la Pacha (unidad urbana de cien familias), la Marka (mil familias), las Sayas (cada una de cinco mil familias), el Señorío (diez mil familias) y el Suyu (Estado), a lo largo y ancho del Tawantinsuyo. Fuente: Porras, 1953: 131-135.

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R RADA, AGUSTÍN DE

(La Paz, 9 de octubre de 1870. † La Paz, 13 de septiembre de 1944) Político, abogado, escritor, periodista, museólogo y arqueólogo. Corresponsal del diario La Prensa de Buenos Aires desde 1902. Excepcional compilador, muy allegado al Congreso Nacional. Estudió la secundaria en el Colegio Nacional Ayacucho de La Paz y se graduó como abogado de la UMSA. Perteneció a diversas instituciones científicas, entre ellas la Academia de Historia, la Sociedad Geográfica de La Paz, de la Sociedad Boliviana de Filatelia (de la que fue Presidente) y del Club de La Paz. Miembro de la Comisión Organizadora del Congreso Internacional de Americanistas que se reunió en La Paz. Era socio corresponsal del Centro Jurídico de Madrid. En 1894 empezó a formar un museo arqueológico, adquirido en 1941 para el Estado por el gobierno del Gral. E. Peñaranda*, mediante RS de 10 de julio de 1941. Su colección numismática fue transferida al Banco Central de Bolivia*. Ingresó a la Administración Pública como Secretario de la Junta Revisitadora de Paria (1895). En 1897 fue nombrado oficial primero de la Cámara de Diputados, ascendido a Oficial Mayor, cargo en el que se mantuvo hasta 1928. Fue Redactor en las dos Cámaras del Congreso y de numerosas Asambleas Constituyentes, actuando como Oficial Mayor en la Convención Nacional de 1920. Desde 1905 tomó a su cargo la edición del Anuario Legislativo, editó el Anuario Administrativo de 1906 y 1910; publicó Estadísticas parlamentarias y el Apéndice No. 6 al Índice general de Leyes desde 1909 hasta 1919. Recuperó valiosos documentos de la historia política de los siglos XIX y XX con los que organizó el Archivo Parlamentario. Fuente: Alarcón, 1925: 379; Barnadas, 2002: I, 665; Costa de la Torre, 1968: 877-878; Costa Arduz, 2005: 154; Lecca, 1929: 240-241; Oporto, 2006: 29.

RAMÍREZ PACAJES, RENÉ (La Paz, 17 de mayo de 1978)

Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Trabajó en el Archivo de Impuestos Internos Bolivia, Archivo del Ministerio de Educación, y en las Bibliotecas del Instituto Nacional de Estadística y de la Facultad de Derecho (UMSA). Actualmente presta servicios en el Archivo Central del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

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RAMÍREZ SANTIESTEBAN, EDGAR FIDEL “HURACAN” (Potosí, 28 de octubre de 1947)

Notable autodidacta. Dirigente sindical minero, político y archivista. Estudió hasta el quinto curso de primaria en la Escuela Fiscal “Alonso de Ibáñez”, de la ciudad de Potosí (1952-1960). Dejó los estudios para trabajar como sastre (1960) y peón de Interior Mina en la Empresa Minera Unificada del Cerro de Potosí  (7 de junio de 1969). Fue militante (1960) y dirigente nacional de la Juventud Comunista de Bolivia (1966). Promovido al Partido Comunista de Bolivia, ocupó varios cargos, tales como Responsable del Comité Regional de Potosí, Miembro del Comité Central y Miembro de la Comisión Política (máxima dirección). Fue expulsado el 9 de noviembre de 1982 por sus diferencias políticas en cuanto a la forma de conducción de la Unidad Democrática y Popular (UDP), que aceptó gobernar sobre la base del Parlamento de 1980, lo que a la postre desencadenó la crisis interna de ese frente y la reducción del mandato constitucional del Dr. H. Siles* (1982-1985). Su trayectoria laboral fue muy accidentada. Siendo peón de Interior Mina, debido a su militancia política, fue apresado y despedido en septiembre de 1971, por la dictadura del Gral. H. Bánzer*. Obtuvo un nuevo contrato como su mismo cargo el 4 de julio de 1973, luego pasó al cargo de Carrero de Interior Mina el 1 de octubre de 1973 y Perforista en 1974 hasta 1985. A partir del régimen neoliberal instaurado por el gobierno del Dr. V. Paz* (1985). Luego fue enviado a trabajar como sereno, pero con su mismo ítem de perforista, en la Empresa Minera Mutún (Santa Cruz 1998), como una forma de doblegar su resistencia al nuevo régimen. Allí contrajo enfermedad hepática crónica. Fue evacuado luego de la intervención de organizaciones defensoras de los derechos humanos, para su medicación. El régimen se ensañó con él, transfiriéndole con el ítem de “Barredor” y luego secretario a la Agencia de la COMIBOL en Tupiza, donde trabajó hasta finales de 1999. De allí fue transferido como “Estibador” de Almacenes Generales de la COMIBOL en Oruro y luego a los Almacenes de la COMIBOL en la ciudad de El Alto (2000). Es Jefe del Sistema de Archivo de la COMIBOL* desde el 2003. En la actividad sindical fue consecuente como pocos con sus ideales y principios. Ha sido Delegado de Interior Mina, en la EMUCP Sección Cuarta Kéller (1974), Secretario General del Sindicato Unificada, Potosí (abril a junio de 1976 y enero a mayo de 1978). En la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia ocupó las carteras de Secretario de Prensa (1978), Cultura (1980), Organización (1982), Relaciones (1986), Secretario General (1988-1994). Fue Secretario Ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (1996). Miembro de la Comisión Codificadora del Código de Minería (1986-1987). En su calidad de dirigente de la Federación de Mineros organizó el Programa de Abastecimiento Minero en forma de una pulpería sindical, para paliar el cierre de pulperías de abastecimiento de víveres en las minas nacionalizadas (1988), cerradas como consecuencia del DS. 21060 (29 de agosto de 1985). Coordinador del Equipo Técnico de la Federación de Mineros para la elaboración del Proyecto de Rehabilitación de la COMIBOL-Oruro (1991). Viajó junto a Víctor López Arias en busca de financiamiento para rehabilitar las minas de la Corporación Minera de Bolivia, a Bélgica, Holanda, Francia, Italia, Suiza, Suecia, Noruega, Dinamarca, Alemania e Inglaterra. Se entrevistó con Yasser Arafat y los

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ministros de Finanzas y del Trabajo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Túnez (1991). Renunció a la Secretaria General de la FSTMB (1995) y a la COB a fines de 1997, para reincorporarse a sus bases. Su trabajo político motivó su detención durante el régimen del Gral. R. Barrientos*, el 30 de abril de 1967, saliendo al exilio a Londres (Inglaterra). Se benefició con la amnistía de enero de 1969, pero fue nuevamente detenido en septiembre de 1971, ya durante el régimen del Gral. H. Bánzer*, por lo que fue desterrado a Chile en junio de 1976. La Cruz Roja Internacional y ACNUR lograron gestionar su asilo en Ámsterdam, Holanda (1977). Es uno de los sobrevivientes del “Plan Cóndor”. Permaneció en la clandestinidad en Bolivia después del golpe de Estado de 1980 junto a otros 7 dirigentes, con la misión de dirigir a la Federación de Mineros. Su actividad política fue intensa, siempre en el ojo de la tormenta. Afirma que nunca se sintió “víctima de Violencia Política, porque siempre fue conspirador contra las dictaduras”, por lo que no presentó su solicitud para el resarcimiento económico que fija la Ley de 11 de marzo de 2004. Considera que “solo cumplía con mi deber, mi obligación con las bases que me eligieron”. Por esa misma razón no se acogió, en 1987, a los beneficios extralegales del nefasto bono “tres por uno”, con los que el gobierno neoliberal del Dr. V. Paz Estensoro cooptó a la dirigencia sindical y liquidó al movimiento obrero minero revolucionario de Bolivia. Participó en reuniones y congresos laborales de carácter internacional: invitado por los Sindicatos Mineros de Suecia-Kiruna (1988), Conferencia Internacional de Trabajo Minero en Minas diferentes a las del Carbón, organizada por la O.I.T. (Ginebra 1990), Congreso de la Federación Sindical Mundial, Checoslovaquia (1985), Congreso de la central Mundial de Trabajadores, Egipto (1989), Conferencia en los Encuentros Latinoamericanos de Sindicatos de Empresas del Sector Público y del Estado, Lima, Perú (1992), Congresos de la Federación Internacional de Mineros, Bogotá, Colombia (1989), Lima, Perú (1992), Guayaquil y Quito, Ecuador (1993), Asamblea Anual de la Organización Internacional del Trabajo (1997). Los movimientos sociales, las instituciones locales y nacionales, fueron generosos y agradecidos con la obra de este notable dirigente. Los Sindicatos Mineros de Catavi y Siglo XX le confirieron el “Diploma por la Defensa de las minas nacionalizadas” (1989). La Alcaldía de la ciudad de Potosí lo declaró “Hijo Grato” (1993). La Alcaldía de la ciudad de El Alto, lo condecoró con la presea “Prócer Bartolina Sisa”, en el grado “Mérito al Servicio Cívico Personal” (2008) y la Asamblea Legislativa Plurinacional le otorgó la condecoración “Orden Parlamentaria al Mérito Democrático Diputado Marcelo Quiroga Santa Cruz” por “su aporte y vocación de servicio inconmensurable en defensa de la democracia de Bolivia” (6 de octubre de 2010). En su agitaba vida sindical y política ha coleccionado una biblioteca especializada en ciencias sociales y políticas, que sobrepasa los 8.000 ejemplares, los que sumados a su experiencia y conocimiento vivencial de la realidad boliviana, ha servido para documentar sus estudios. En base a esa doble fuente, ha escrito y publicado “Fundamentos teóricos y realidad histórica de la cogestión obrera en COMIBOL”, en: El sector Minero, Crisis y Perspectiva (La Paz, ILDIS-FLACSO, 1986); “Potosí, y el Descubrimiento de América”, en: Revista de Investigaciones Históricas (Universidad “Tomás Frías”, 1977); Estrategia de Dominación Imperialista. Un ensayo Inicial. Publicación

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Colectiva (Brasil, Editorâo Electronica Adison Lopez, 1997), “Movimiento Sindical y Neoliberalismo”, en: Revista Teórica (Caracas, 1998), “Neoliberalismo y Movimiento Sindical en Bolivia”, en: Publicaciones del Centro de Investigaciones Económico Sociales (1999), “El Decreto del Despojo y la Dependencia”, “La Guerra del Chaco y los Movimientos Sociales” (conferencias en el Paraninfo de la UMSA, 2000). Fue proverbial su notable dominio sobre historia política, social y sindical de Bolivia y Latinoamérica, hecho por el que fue invitado como conferencista por la UMSA (Facultades de Derecho, Humanidades y Economía), la FLACSO (Bolivia), las Universidades Técnica de Oruro, Tomas Frías de Potosí; Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Potosí, Sindicato de la Prensa de La Paz, Federaciones de Maestros de La Paz y Oruro, Centrales Obreras Departamentales; Centrales Obreras Regionales, sobre la Cogestión Obrera en las Empresas del Estado (1984). Disertó en varios sindicatos e instituciones del Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela. Fue docente interino de la Universidad Nacional  “Siglo XX” de Llallagua (1995). Por su vasto conocimiento de temas de minería y sindicalismo, fue designado como asesor en la elaboración de las tesis de grado: Las Radioemisoras Mineras (Comunicación Social, de Luisa Limachi); Sub Sector Minero Estatal y Políticas Sociales (Trabajo Social, de Norah Soruco de Salvatierra); La Minería Mediana (Marcelo Moscoso Z); Nulidad del contrato 111 Suscrito entre el Estado Boliviano y la SAGAP (Derecho, de Guido Gutiérrez Farfán).

Siempre estuvo atento a preservar la memoria minera. Cuando se produjo el golpe de Estado de 1980, el gobierno dictatorial ordenó la destrucción del edificio de la Federación de Mineros, donde Miguel Alandia Pantoja pintó tres murales y seis cenefas en 1958. Edgar Ramírez gestionó su salvataje, pese a encontrarse en la clandestinidad en La Paz. Logró que Víctor López planteara ante la oficina de la UNESCO en Lima, Perú, la necesidad de su rescate, aprovechando la circunstancia que el hijo Sergio Alandia, hijo del pintor de la revolución, era funcionario de Naciones Unidas (1980-1981). Hoy los murales se encuentran en el olvido, a excepción de uno que está bajo custodia del Ministerio de Culturas. Su faceta archivística ha sido igualmente sorprendente, aleccionadora y descollante. En 1980, el Gral. L. García Meza* instruyó la destrucción del emblemático edificio de la FSTMB. Ante esta coyuntura, la dirigencia minera autorizó que su archivo fuera trasladado temporalmente a Francia para su microfilmación, con el compromiso de retornarlos a Bolivia cuando la situación política se normalizara. Los archivos fueron microfilmados pero nunca retornaron al país. Ante esta situación, propuso la creación del Sistema de Documentación e Información Sindical* (SIDIS), repositorio del que fue Presidente de su Directorio, en cumplimiento de la Resolución aprobada en un congreso orgánico de la FSTMB. Con este proyecto logró reconstruir el Archivo de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, con el apoyo de la Carrera de Historia* mediante el préstamo de los archivos de los sindicatos mineros, que lo enviaron a La Paz para su fotocopiado, devolviéndose luego las carpetas a los distritos mineros. El SIDIS se encuentra en el edificio de propiedad de la Federación Minera en la calle Arturo Costa de la Torre, en la ciudad de La Paz.

Más tarde protagonizó en solitario, el rescate del Archivo de la Compañía Aramayo Franke y escasa documentación de la Comibol, que sobrevivió a la incineración instruida por un administrador venal, en la oficina de esa empresa en la ciudad de Tupiza (1998). Es autor del Proyecto de Organización del Museo y Archivo

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de la Guerra del Chaco, para la Federación de Beneméritos de la Guerra del Chaco y la Alcaldía Municipal de Tupiza (1999). La mayor proeza de este archivista empírico, es la titánica labor de salvataje de la documentación histórica de la COMIBOL, que fue la base para la creación del Archivo Histórico de la Minería Nacional. Cuando fue enviado a los almacenes de El Alto, observó con estupor el estado de abandono y destrucción inminente al que fueron sometidos los archivos de la Comibol, lo que le motivó a organizar un grupo de archivistas mineros* con los que puso a salvo aquellos invaluables documentos, en una acción titánica que fue calificada por T. Converse*, archivero del Banco Interamericano de Desarrollo, en visita oficial a Bolivia, como el “milagro boliviano” y “modelo para países subdesarrollados”. Merced a un convenio de Cooperación y Asistencia Técnica con la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* y la Carrera de Historia*, se logró la capacitación de los archivistas mineros. Posteriormente, con la participación de L. Oporto*, elaboró el Proyecto del Sistema de Archivo Nacional Minero de la Comibol, que fue avalado por el Decreto Supremo 27490 de 14 de mayo de 2004, que instruye la creación del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia, los recursos económicos para la construcción de tres edificios expresamente diseñados para repositorios archivísticos en las ciudades de El Alto, Oruro y Potosí; la restauración del chalet del Jefe de Estación de la empresa Aramayo en El Alto y las casas-gerencia de Catavi y Pulacayo y la contratación de personal calificado. El Sistema de Archivo Minero cuenta con la participación de profesionales titulados de las Carreras de Historia, Bibliotecología*, Informática, Administración de Empresas y Derecho, de las Universidades de La Paz, Potosí y Chuquisaca, quienes trabajan conjuntamente con aquellos archivistas mineros que protagonizaron la hazaña archivística del salvataje de los archivos de la minería boliviana. El modelo archivístico del Sistema de Archivo de la Comibol motivó a formar un equipo académico, conformado por E. Ramírez, C. Campos* (Comibol) y L. Oporto (Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional), que diseñó una malla curricular destinada a socializar ese exitoso método, para su aplicación a nivel nacional, por medio del Diplomado de Gestión Documental Integrada y Organización de Archivos en Empresas Estratégicas, aprobado mediante Resolución No. 151/2011 del Ministerio de Educación y ejecutado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional, a partir del 2011. Publicaciones archivísticas: “Sinforoso Cabrera Romero y su vocación archivística” (Fuentes del Congreso, 2003, 1 (6): 22-23); Archivos Mineros de Bolivia. El rescate de la memoria social. La Paz, BAHC, 2007; y La destrucción de la riqueza documental y bibliográfica y la necesidad de su rescate para el desarrollo nacional. Memoria del Seminario Internacional de Archivística (La Paz, 29 de octubre al 1° de noviembre de 2008), coautor con Luis Oporto Ordóñez. La Paz, BAHALP, 2011. Fuente: CV. Entrevista personal del 15, 17 y 23 de febrero de 2012.

RAMIREZ SIMON, ROLANDO (La Paz, 28 de junio de 1957)

Licenciado en Historia (UMSA), se tituló con su proyecto de grado El sistema de Archivo de la Aduana Nacional de Bolivia (2005). Hizo el Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos, UMSA (2002) y la XII Escuela de Archivos para

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Iberoamérica* en Madrid, España (2002). Escribe poesía (vg. Pasos interminables, La Paz, 1992; Como la paz de los cisnes en el agua, 1998; Todas mis ventanas dan a la calle, inédito). Miembro de la Comisión Organizadora del Taller Departamental de La Paz, participó en la redacción del Proyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos* de Bolivia, aprobado en el Congreso Nacional de Archivos realizado en Sucre en abril de 2007. Ha participado en varias reuniones, congresos y seminarios, tales como el Seminario Nacional sobre Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (Congreso Nacional y Vicepresidencia de la República, 1993), Congreso “Alberto Crespo Rodas” de la Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información-Filial La Paz (1996); Seminario-Taller “Ley del Sistema Nacional de Información” (1997); II Curso para Documentalistas de Unidades Informativas Especializadas en Ciencias Sociales (PIEB, 1999); Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano, impartido por el Dr. J. M. López Villalba*, de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (1999); Conservación Preventiva en Bibliotecas, Archivos y Museos (Fundación Patrimonio Histórico Argentino, 2003); Importancia de los archivos para la democracia y el acceso a la información (Centro Carter, 2005). Desarrolló sus actividades archivísticas desde 1989, trabajando en el Archivo de La Paz* (1989, 1990, 1992-1994), en los archivos del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (Proyecto BOL/89/031 PNUD, 1992-1993), Cámara de Diputados (1994), Lotería Nacional de Beneficencia (1994-1995), Unidad de Coordinación y Control de Activos Fijos de las Entidades en Liquidación y/o Reestructuración (1995-1998), Administración de Almacenes Aduaneros (AADAA), Sistema de Documentación e Información, SIDIS (1999-2000). Fue gerente de la Empresa Consultor Archivos de Bolivia SRL (1997-1999). Desde el 2000 es Jefe del Departamento de Documentación Aduanera (Archivo General) de la Aduana Nacional de Bolivia. Bajo su dirección se ha diseñado y aplicado el Sistema Nacional de Archivos de la Aduana Nacional, que lo presentó como proyecto de grado en la Carrera de Historia (2005). Su experiencia se expresa en varios documentos de trabajo, entre ellos el Proyecto de organización de los archivos del ex Banco del Estado (con I. Jiménez*) y de la ex Corporación Boliviana de Fomento; Diseño y aplicación del Sistema Nacional de Archivos de la Aduana Nacional (2000); Proyecto de actualización tecnológica del Archivo Sindical de la FSTMB. Sistema de Documentación e Información (SIDIS); Proyecto y ejecución de la “Organización y clasificación del archivo general” Ex Administración de Almacenes Aduaneros (AADAA) (1996). Publicaciones archivísticas: “La Ley del Sistema Nacional de Archivos: un instrumento para la democracia y la transparencia” (Boletín del Archivo de La Paz, 2008, 25: 9-10). Fuente: CV.

RAMOS QUISPE, VIVIANA

(La Paz, 2 de diciembre de 1985) Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Ha participado en el proyecto “Mi Barrio Cuenta Yo Cuento Con Mi Barrio”. Realizó pasantías y trabajos en la Catalogación del Patrimonio Discográfico Musical Boliviano, en el Repositorio Nacional de Bolivia; en el Archivo y Biblioteca Arturo Costa de la Torre (Casa de la Cultura); Organización y digitalización del fondo fotográfico Ultima Hora, del Archivo de

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La Paz*. Trabajó como Técnico en el Archivo Histórico de la Corporación Minera de Bolivia* (2011). Fuente: CV.

RAMOS TÓRREZ, HERNÁN GUALBERTO (Oruro, 5 de noviembre de 1959)

Licenciado en Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Pasó la primaria y secundaria en Oruro y la localidad minera de Huanuni. Estudió Administración de Empresas en la Universidad Autónoma de Guerrero, Acapulco (México). A su retorno a Bolivia, se matriculó en la Carrera de Filosofía y Letras (UMSA); finalmente, ingresó a la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información (1985), donde fue Auxiliar de la cátedra de Clasificación. Participó en el 60º Congreso Mundial de Bibliotecólogos, organizado por la IFLA, en la Habana, Cuba (1994), Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996); fue expositor en el Seminario de Estrategias sobre Calidad de Servicios (1999), y disertante en la Reunión Anual de Bibliotecología y Documentación auspiciada por RELISE y la Universidad Santo Tomás de Aquino (2000). Participó como comentarista y relator, invitado por el Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia*, en el Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2004). Editor de Eco Informe, Boletín Ambiental Hemerográfico, CEDOIN (1995–1996); Boletín Lecturas Agrarias, INRA (2001-2003) y compilador de Dossier Agrario: compilación de artículos de prensa (2001-2003). Como resultado de su labor redactó el Manual básico de CDS MICRO/ISIS (1999), Catálogo de expedientes agrarios del INRA (2000), Proyecto de digitalización del Archivo de Planillas de Pago del Ministerio de Hacienda (2005), Winisis básico y Winisis avanzado: Guía para trabajadores de unidades de información (2008, 2009) y Proyecto de Creación del Archivo Central y Biblioteca Especializada del Ministerio de Medio Ambiente y Agua (2010). Publicó las Licencias Ambientales en el Website del ministerio; elaboró el Proyecto del Archivo Central y Biblioteca del Ministerio de Medio Ambiente y Agua; además, el Manual de Procedimientos y el Reglamento Específico, aprobados por Resolución Ministerial (2010). Ingresó como Clasificador a la Biblioteca Municipal de La Paz, fue documentalista en el Centro de Documentación e Información CEDOIN* (1988), donde fue Responsable del Área de Documentación (1995-1997). Organizó cursos de capacitación en el programa Micro Isis para secretarios de Comisiones de la Cámara de Diputados del Congreso Nacional; organizó seminarios especializados con la participación de la archivista Colombiana Mariel Álvarez; elaboró un breve diagnóstico del Archivo Fotográfico de Presencia (cuadro era directora Ana María Romero de Campero); organizó seminarios archivísticos para la Central Obrera Boliviana, organizó la Biblioteca del Banco Mundial en La Paz (1995), fue consultor del Archivo de Procesos Agrarios (1997) y responsable Biblioteca Central del Instituto Nacional de Reforma Agraria (2003), organizó la Biblioteca de Help Age; asesoró y capacitó al personal del Sistema Municipal de Bibliotecas. Impartió Ética Profesional en el Instituto de Educación Técnica “José María Escrivá de Balaguer” (2001-2002); responsable del Proyecto de Fortalecimiento del Ministerio de Hacienda, con la misión de crear y organizar la Memoria Institucional y Biblioteca especializada (2004); asesoró en

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el manejo del programa Winisis a la Biblioteca de la Cooperación Británica y a funcionarios de la Universidad Pública de El Alto. Fue invitado por la Fundación UNIR, como Documentalista, con la tarea de diseñar un portal denominado “Banco Temático”, el que, con algunas modificaciones, aún se encuentra en la Internet (2006). Creó el Centro de Información e Investigación “El Sabueso”, con el que impartió Talleres de Winisis (básico y avanzado), dirigido a estudiantes de las carreras de Bibliotecología* e Historia* y trabajadores de unidades de información (2007). Ingresó como Consultor del Viceministerio de Medio Ambiente para la reorganización del Archivo de Proyectos Ambientales de la Dirección General de Medio Ambiente (2008). En 2011 fue contratado como Encargado del Centro de Documentación de la Corporación Minera de Bolivia*, que forma parte de la estructura del Sistema de Archivo, dirigido por E. Ramírez*. Publicaciones archivísticas: “Elementos básicos de la sistematización de la información”, en el boletín Enredando (2001). “Documentación Agraria: entre el pasado y el presente” (Fuentes del Congreso, Boletín de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso, 2003, 1 (10): 91-92); “Biblioteca ‘Augusto Valdivia’: Más de 3.000 documentos Agrarios” (Entrevista) (Gaceta Agraria, 2004, Nº 7); “Biblioteca y Archivo Central del Ministerio de Hacienda: Memorias de una apertura” (Fuentes del Congreso, Boletín de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso, 2005, 1 (22): 242-243). Fuente: CV

RAMOS VILLCA, REMBERTO FÉLIX (La Paz, 1982)

Licenciado en Historia, titulado bajo la modalidad de Excelencia Académica en la UMSA (2010). Obtuvo en 2007, el Premio “Alberto Crespo Rodas” a la excelencia académica, otorgada por la Sociedad Boliviana de la Historia, el Archivo de La Paz*, y la Carrera de Historia*. Investigador y Archivista. Ha publicado diversos artículos en el campo histórico y simultáneamente trabajó en instituciones archivísticas. Realizó la clasificación y ordenación del Fondo Universidad Mayor de San Andrés, en el Archivo de La Paz (2006-2007); fue Coordinador General de Catalogación de la Colección Discográfica de Música Boliviana, en la oficina de Depósito Legal y el Repositorio Nacional (2007); Técnico digitalizador del Proyecto de Restauración, digitalización y microfilmación del Fondo de Padrones Revisitarios del Archivo de La Paz (2008); Empadronador del Censo Guía de Archivos, sexta fase, ABNB* y Banco Central de Bolivia* (2009). Trabajó como Técnico en el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2010). Prepara un estudio sobre “Razón, política y movilidad social en la administración pública. Institucionalidad en los primeros años de la Revolución Nacional”. Publicaciones archivísticas: “Desafíos técnicos y humanos: una experiencia del Proyecto de Digitalización” (DesArchivando, 2008, 5: 10). Fuente: CV.

Reuniones Nacionales De Consulta Sobre Archivos Bolivianos La Primera Reunión Interamericana de Archivos*, generó dos polos de desarrollo de la Archivística Iberoamericana, en Madrid, España (V. Cortés*) y Córdoba, Argentina

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(A. Tanodi*). En Bolivia tomó la posta, de motu proprio, G. Mendoza*, que hizo declarar de utilidad nacional al Plan de Elaboración de Guías Descriptivas de Bolivia, mediante decreto supremo y redactó un Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de la República de Bolivia*, para cuyo fin organizó las Reuniones de Consulta de los Archivos de Bolivia, todas organizadas por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, a fin de darle sustento social a su ambicioso proyecto. La Primera (Sucre, octubre 18-21 de 1979), contó con el apoyo del Instituto Boliviano de Cultura y la Universidad Mayor de San Andrés. Trató la problemática de la organización de Asociaciones de Archivistas de Bolivia; la situación documental del siglo XX; los archivos universitarios; la Ley General de Archivos y el Anteproyecto de Declaración de Principios del Archivista Boliviano*. La Segunda (Cochabamba, julio 5-7, 1982), logró el auspicio del Centro Pedagógico y Cultural de Portales, y el apoyo de la Asociación de Archivistas Ex Becarios de la OEA*, y tuvo como Coordinadora a la Dra. Beatriz Rossells. Abordó una amplia agenda sobre la Destrucción incontrolada de documentaciones de entidades públicas y privadas (R. Arze Aguirre*), Proyectos de disposiciones legales para detener la destrucción incontrolada de los recursos documentales de la nación en las entidades públicas y privadas (G. Mendoza L.); Plan para la organización de Asociaciones Departamentales de Archivistas y la Asociación Nacional de Archivistas de Bolivia (L. Verástegui* y L. Oporto O*); Bases para un estudio objetivo de la situación económica y profesional del archivista boliviano; Censo preliminar de archivos y archivistas bolivianos (M. Inch*, R. Choque*, G. Aguilar*); Creación de la Carrera de archivero medio administrativo (W. Carvajal); y Proyecto de Declaración de Principios del Archivista Boliviano (G. Mendoza L). La Tercera (Cochabamba, julio 18-20, 1983), con el mismo auspicio, se refirió a la Accesibilización de recursos documentales en los archivos para estudios de ciencias sociales. La Cuarta (Cochabamba, noviembre 18-20, 1985), organizada por el Archivo Nacional de Bolivia con el auspicio del Centro Pedagógico y Cultural de Portales, analizó la situación actual de los Recursos Documentales no Estatales en Bolivia y la iniciativa en favor de las documentaciones del sector privado. Las reuniones de consulta cerraron su ciclo con la Quinta, que planeó analizar la Situación de los Recursos Documentales Gráficos en Bolivia (1986), pero no se concretó, pese a una segunda convocatoria (1987). En octubre de 1995, se realizó un Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”*, en Sucre, convocada por el Comité de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia* y el ABNB, y en 1996, el Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”*, como mandato del primero. En 2007, el ABNB convocó al Primer Congreso de Archivistas de Bolivia, para tratar el Proyecto del Ley del Sistema Nacional de Archivos*. Fuente: Boletín del Archivo de La Paz, Nº 7, 1981; Mendoza, 1982a; Mendoza, 1985; Mendoza, 2005: Vol. IV, T. 5; Presencia, 1987.

REVOLLO VELASCO, ANTONIO

(Independencia, Cochabamba, 19 de julio de 1936) Licenciado en Ciencias Económicas (1966) y Auditor Financiero (1967), ambos por la Universidad Técnica de Oruro. Ingresó a trabajar a la Corporación Minera de

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Bolivia* el 1 de agosto de 1958. Fue un destacado y meritorio trabajador, debido a su disciplina, entrega, transparencia, entereza, eficacia y capacidad. Resolvía todos los problemas financieros relacionados con las medidas políticas coyunturales en casi las dos décadas que le ocupó desempeñarse en diferentes cargos de importancia. Por ello el personal, con cariño, lo llamaba Mandraque, por sus atinados y valiosos consejos, para resolver problemas, debido a sus vastos conocimientos en el manejo de la información económica financiera de la empresa. Luego de ocupar el cargo de Asesor Económico de la Presidencia Ejecutiva (2000-2003), fue miembro del Directorio General, Vicepresidente (2004-2005) y Presidente Ejecutivo (2006). Fue testigo privilegiado de los cambios y transformaciones que sufrió la primera entidad minera estatal boliviana, desde su humilde puesto de planillero en la década de los 50’ hasta su retiro en el máximo cargo ejecutivo, el 2006. Tuvo notable y destacada carrera administrativa. Empezó como Planillero dependiente del Área de Construcciones de los Almacenes Generales de Oruro. El 29 de agosto de 1966 fue transferido a la Oficina Centra La Paz como Auditor “C”, dependiente de la Dirección de Auditoria Interna. Ocupó diferentes cargos en el área financiera de la Oficina Central, entre ellos, Auditor “B” (1967) y Auditor “A” (1968). En 1969 fue becado por el gobierno de Italia para participar en el curso de Gestión de Materiales y de Dirección de los Servicios de Administración de Personal, en Turín. El 20 de febrero de 1973 lo promueven como Supervisor Grupo “A”, dependiente del Departamento de Auditoria Interna. En abril de 1976 es promovido al cargo de Sub Jefe del Departamento de Auditoría. En 1979 es transferido y promocionado al cargo de Director de Contabilidad Institucional. En marzo de 1981 es nombrado Subgerente de Finanzas ad-ínterin. Mediante Resolución General del Directorio N º 175/84 de 28 de diciembre de 1984, se dispone su ratificación en el cargo de Subgerente de Finanzas. Durante la época del DS. 21060 (1985), con la que se convierte a la empresa en administradora de contratos de riesgo compartido, es nombrado Jefe de la Oficina de Contabilidad desde el 1 de marzo hasta el 30 de abril de 1987, en un momento álgido de reestructuración organizativa. A partir del 1 de junio de 1987 lo ratifican como Sugerente Administrativo Financiero. El 31 de octubre de 1988, al Conmemorarse el 36º aniversario de la Nacionalización de las Minas, fue reconocido “por su brillante trayectoria laboral y disciplina funcionaria al servicio del país”. En noviembre de 1990, a través de la de la carta P-789/90, el Directorio General y la Presidencia, reconoce “su eficiencia y responsabilidad en el manejo de información económica y financiera de la empresa”. En enero de 1993, solicita su retiro voluntario debido a que el ente estatal se encontraba en proceso de reestructuración, petición que la Gerencia General dejó en suspenso, “en reconocimiento de su ponderable labor y por su importante conocimiento en el manejo de la información económica financiera de la primera entidad minera estatal”. Recién el 10 de mayo de 1994, se acepta su petición y prescinde de sus servicios, acogiéndose a “los beneficios de la gratificación extraordinaria [el sistema de tres por uno] y voluntaria”, en conformidad a la Resolución de Directorio General Nº 753/93. Volvió, no obstante, a dirigir la COMIBOL, en 2006, como presidente ejecutivo, alto cargo del el cual, consciente de la importancia de los archivos para la gestión de la empresa y el desarrollo de sus funciones, apoyó con fuerza y militantemente, la organización del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Durante su gestión como Presidente Ejecutivo, se aprobaron el

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Manual de Organización de Archivos de Gestión y el Reglamento del Sistema de Servicios del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia. Lo notable y singular es que, durante los más de 40 años como empleado, fue conformando una impresionante colección de documentos de archivo, relacionada con el área financiera, económica y social de la empresa. La Colección Especial Antonio Revollo, como se la denominó, es de invaluable valor legal e informativo, de innegable trascendencia, que abarca el arco temporal de 1952 a 2000. Está constituida por 120 metros lineales de documentos de archivo. Hoy se encuentra bajo custodia del Archivo Histórico de la Minería Nacional de la Corporación Minera de Bolivia. Fuente: Expediente personal. Archivo de la Comibol.

REYES ANGULO, BISMARK NAPOLEÓN

(Portachuelo, Provincia Sara, Santa Cruz, 20 de marzo de 1972) Coleccionista. Agricultor. Se dedica al cultivo de arroz, yuca y maíz en su ciudad natal. Estudió Derecho (sistema semipresencial) en la Universidad Técnica Privada de Santa Cruz. Arqueólogo aficionado, con cursos de Arqueología en San Carlos (municipio de la provincia Ichilo, 2006) e interesado en la historia de la cultura Chané, de la que recuperó, desde 1988, unas 100 piezas arqueológicas (hormas, vasijas, herramientas, urnas). Radicó en Buenos Aires, Argentina (1997-1998); a su retorno a Portachuelo, se dedicó al trabajo de la madera y al cultivo del arroz. Trabajó también en EE.UU. (2000-2001). Su interés por la cultura y la historia lo llevó a coleccionar fotografías históricas, logrando acumular 1.000 registros de los siglos XIX y XX, sobre La Paz, Sucre (Familia Argandoña), Santa Cruz (vistas de calles y casas antiguas, personajes, Carnaval de antaño, Guerra del Chaco), Potosí. Tiene una biblioteca de unos 1000 ejemplares, entre ellos obras calificadas como históricas y raras, siendo la más antigua, un manuscrito de 1574, de Derecho Canónigo, que contiene los protocolos de un notario desconocido. Adquiere fotografías históricas de anticuarios para incorporarlas a su archivo. Conserva, entre una serie de miscelánea, un documento sobre la Junta Municipal de Portachuelo (1900), el plano de la ciudad de Montero (1927), cartas de excombatientes de la Guerra del Chaco, recibos de la primera empresa de Luz y Fuerza de Santa Cruz de la Sierra (1930), documentos de la prestación vial (1909, 1911 y 1930); un manuscrito del Dr. Samuel de Oropeza, Presidente de la Corte Suprema de Justicia (1890); otro del Nuevo Sistema Económico para América, de Campillo y Cossío con tapas de cuero de oveja (1743); El Manual del destilador, licorerista, perfumista (1865); Novenario a Nuestra Purísima Concepción (1873), Código Penal Boliviano (1888). Ha sido acreedor de un reconocimiento por parte del Museo de Historia de Santa Cruz (UAGRM) “por su aporte con significativas donaciones de libros, fotos antiguas de Santa Cruz de antaño, y documentos de la historia regional” (2003). Fue ganador del concurso del documento más antiguo en el municipio de Portachuelo; obtuvo el segundo premio en el concurso “Fotografiemos el Patrimonio Histórico de Santa Cruz de la Sierra”, convocado por la Dirección del Centro y Patrimonio Histórico y la Dirección de Cultura, Patrimonio y Turismo del Gobierno Municipal Autónomo de Santa Cruz, en la categoría “Memoria histórica”(2011), cuyo objetivo buscaba “dejar para las nuevas generaciones fotografías que sean un patrimonio documental, cultural,

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artístico y arquitectónico”. Varias fotos de su colección de Santa Cruz de antaño se publicaron en la Agenda municipal (2012) y un libro que está por imprimirse sobre las fotos del concurso “Fotografiemos el Patrimonio Histórico de Santa Cruz”, del cual obtuvo el segundo lugar. Sueña con implementar un Museo Arqueológico y Archivo Histórico en Portachuelo, con el afán de “dar a conocer al público y nuevas generaciones, sus tesoros bibliográficos, documentales y fotográficos”, no obstante el poco interés de las autoridades locales. En su visita a la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional* (julio de 2011), obsequió una edición del Himno de La Paz (estrenado el 16 de julio de 1863), con música de Eloy Salmón (1842-1889) y letra de Ricardo José Bustamante (1821-1886), impreso durante la gestión del alcalde Humberto Muñoz Cornejo (1938). Lo notable de este impreso es que trae las cinco estrofas del Himno paceño, que son desconocidas por la ciudadanía, que sólo entona la primera. En su segunda visita (marzo de 2012), facilitó sus colecciones fotográficas de retratos del siglo XIX y un Álbum de la Glorieta de Sucre de los Argandoña-Urioste (1904), para su digitalización, con las que se ha creado la Colección “Bismark Reyes”. También hizo importantes donaciones al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, en Sucre. Últimamente ha hecho una donación de 200 partituras musicales de la época franciscana al investigador P. Nawrot*, director artístico del IX Festival Internacional de Música Renacentista y Barroca Americana “Misiones de Chiquitos” (26 de abril al 6 de mayo del 2012). Fuente: Cazas, 2012; Sosa 2012; Suárez 2012; Entrevista personal. 15.08. 11.

REYES DÁVILA, NORMAN (Potosí, 29 de marzo de 1932)

Profesor de inglés, egresado de la Normal Superior “Simón Bolívar de La Paz. Trabajó como docente en la UMSA, Instituto de Educación Bancaria (fundador), Instituto Anglo Americano, Escuela Industrial “Pedro Domingo Murillo”, hasta su jubilación en 1988. Una vez retirado, empezó su trabajo de misionero itinerante arquidiocesano, habiendo fundado 24 parroquias en la ciudad de La Paz, siendo la primera la de la “Sagrada Familia” en el barrio de Achachicala. En 1990 hizo un curso de Cristología y Catequesis en Bogotá (Colombia). A su retorno, el 1 de marzo de 1990, Monseñor Gonzalo del Castillo, le delegó la responsabilidad de organizar el Archivo Capitular (ubicado en la parte superior de la Sacristía de la Catedral), cumpliendo esta labor hasta 1993, unificando en el mismo, los Archivos de la Curia, el Sacramental y el de la Administración contable. Ese mismo año centralizó los cuatro repositorios, formando el Archivo Eclesiástico “Canónigo Felipe López Menéndez”, del que es su Director desde 1998. Participó en el Seminario de Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (1993). En marzo de 2006 fue ordenado como Diácono Permanente Castrense. Entre otra de sus facetas, ha cultivado la narración de cuentos de doble sentido, todos enmarcados en la doctrina cristiana. Fuente: CV y entrevistas personales en mayo de 2010.

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REYES ZÁRATE, WILLIAM RAÚL (La Paz, 12 de febrero de 1978)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Hizo un Diplomado en Filosofía e Historia del Arte. Ha sido profesor en el Colegio Yachay Wasy Leonardo Da Vinci (2003) y del Colegio Ecológico Utasawa (2006). Fue Auxiliar de investigación en el Instituto de Estudios Bolivianos y la Carrera de Historia (2001-2008). Coautor De Tunupa al Catamarán: ríos, vertientes y bahías en la región del Lago Titicaca (La Paz: UMSA/ IDH, 2009); con Claudio Rossell y Marcelo Ticona del compendio 100 personajes de la República (La Razón, Edición 16 aniversario, 2006). Publicó dos contribuciones en Cuaderno de lecturas del Curso Preuniversitario (La Paz, UMSA, 2006). Presentó ponencias, en coautoría a la Reunión Anual de Etnología, seminarios del IEB, Congreso Internacional de Etnohistoria, Simposio Internacional de Estudiantes de Historia. Ha sido miembro del Comité Editorial de Historia Nº 29. Revista de la Carrera de Historia (2005). Trabajó en el Archivo de La Paz* como Pasante (20012002), consultor en el proyecto de Inventario documental del Archivo Judicial Histórico de Poopó, Siglos XVII-XX (2004), Consultor del Archivo Nacional de Bolivia en el Censo Guía de Archivos judiciales, eclesiásticos y privados de La Paz y Oruro (2006). Desde el 2009, trabaja en el Archivo Central de la Aduana Nacional de Bolivia. Colaboró en la edición Nº 23-24 del Boletín del Archivo de La Paz (2006, 1a. ed.; 2008, 2da. ed.) y contribuyó con los artículos: “La tesis en el Archivo de La Paz”, con Sonia Torrez (2006: 77-84); “El Boletín del Archivo de La Paz: 30 años de historia” , con Sonia Torrez (2006: 91-104; 2008: 49-61); “Los certificados de tierras”, con Nancy Maldonado (2006: 175-177; 2008: 125-127). Fuente: CV.

REYNOLDS IPIÑA, GREGORIO

(Sucre, 6 de noviembre de 1882. † La Paz, 13 de junio de 1948) Poeta, diplomático y periodista. En 1913 ganó los Juegos Florales de La Paz, con su poema “El Mendigo”. Miembro de número de la Academia Boliviana de la Lengua y de la Real Academia Española. En su carrera diplomática del; fue Cónsul de Jujuy, Argentina; Primer Secretario y encargado de Negocios en el Brasil. Jefe de la Sección de Fomento del Ministerio de Gobierno y Fomento; Secretario de la Inspección General de Instrucción Secundaria; Rector de la Universidad de San Francisco Xavier (1926), durante cuya gestión recibió el título de Doctor Honoris Causa. Fue director del Archivo y Jefe de la Sección Límites del Ministerio de Relaciones Exteriores en 1918, siguiendo la obra otros directores, como Hugo Vidal (apoyado por el archivero Carlos Funes) y Antonio Ávila Jiménez (esposo de la poetisa Hilda Mundi). En 1941, el Archivo estuvo a cargo de Ernesto Daza Ondarza y el subdirector Guillermo Eguino. En 1942, asume Alberto Frías Yanguas. Fue compilador del Anuario de Leyes y Disposiciones Supremas de 1914 (La Paz, 1915). Entre sus obras de poesía, citamos: Quimeras (1915), El cofre de psiquis (1918), Redención. Poema cíclico (1925. Primer Centenario de la Fundación de la República), Sucre (La ciudad y el Héroe) (1938), Illimani (1945), Poesías Escogidas (1948). Fuente: Costa de la Torre, 1973; Oporto, 2006: 242; Vargas Olmos, 1948: 99; Información personal de M. Paredes (2005); http://www.bv.umsa.bo (28.05.10)

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RIBERA, LÁZARO DE Gobernador de Mojos (1786-1792). Se caracterizó por el extremo cuidado que le dio a su Archivo, con el que documentó sus informes generales, desde aquel que remitió en 24 de agosto de 1786 hasta el 5 de septiembre de 1788. El informe contiene el estado general de Mojos antes de la implantación del nuevo plan de gobierno, luego de la expulsión de los Jesuitas. Lázaro remitió todos los documentos a la Real Audiencia de Charcas. Fuente: Moreno, 1973: 317.

RIBERA ARTEAGA, LEONOR

(Santa Cruz de la Sierra, 1906. † Santa Cruz de la Sierra, 23 de agosto de 1984) Licenciado en Derecho, Ciencias Sociales y Políticas (1941), Doctor en Derecho por la Universidad Gabriel René Moreno. Fue Ministro de la Corte Suprema de Justicia. Participó en la Guerra del Chaco (1932-1935). En la época de posguerra fue designado Jefe de Extranjería y Archivo de la Policía de Seguridad de Santa Cruz de la Sierra (1935). Ensayista, Periodista de amplia trayectoria, fundó periódicos y revistas y fue jefe de redacción y columnista de numerosos medios de comunicación. Fue profesor de secundaria en el Colegio Nacional “Florida”, catedrático de Filosofía en la Academia de Bellas Artes; ejerció la docencia universitaria llegando a ser Jefe del Departamento de Humanidades y Relaciones Internacionales de la Universidad Gabriel René Moreno. Siendo universitario impulsó una campaña de reivindicación marítima en todo el país. En Sucre suscribió junto a J. Gantier* una proclama de protesta contra la revista Selecciones por alusiones lesivas a la heredad nacional. Miembro de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz. Fue director de la Revista de la Universidad Gabriel René Moreno (Nos. 1, 1938 al 7, 1940). Fue designado director de la Biblioteca y Archivo de la Universidad cruceña, creado durante la gestión del Rector Melchor Pinto Parada, en 1946. Publicó el Catálogo de la Biblioteca Universitaria (1947). En su gestión, que se prolongó hasta 1950, acrecentó las colecciones y donó valiosos documentos de propiedad de su familia. En 1965, el Archivo fue separado de la Biblioteca. Escribió obras referidas al derecho y de carácter universitario (El Poder Judicial en Bolivia y su reforma, 1954; El Cabildo Abierto en el Derecho Municipal, 1958; Historia, reforma y misión de la Facultad de Derecho de la Universidad Gabriel René Moreno, 1963; El Derecho Internacional y la misión de la Universidad por la paz hacia la integración, 1967). Luego de su muerte, su esposa entregó su biblioteca a la Univesidad Gabriel René Moreno que constaba de 13.000 ejemplares (1986). Fuente: Quiroz, 2009; Oporto, 2006: 254.

RIBERA VACA, JOSEFINA (Santa Cruz)

Archivera de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno de Santa Cruz de la Sierra. El Archivo cuenta con 800 metros lineales de documentos propios de la administración universitaria, tales como resoluciones (desde 1908), correspondencia, comprobantes de contabilidad, títulos de bachiller, académicos y en provisión

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nacional, fondos facultativos, planoteca y miscelánea, desde 1938. Participó en la Escuela Iberoamericana de Archivos*. Estuvo casada con E. Zambrana*. Publicaciones archivísticas: Reseña histórica del Archivo Administrativo e Histórico de la Universidad Gabriel René Moreno. Santa Cruz, 2004. Fuente: CV.

RICAFORT PALACÍN Y ABARCA, MARIANO

(Huesca, España, 20 de febrero de 1776. † Madrid, España, 16 de octubre de 1846) Militar, político y gobernador colonial español. Comenzó su carrera militar en la  guerra del Rosellón (1793). Tomó parte en la guerra contra Portugal (1801). Fue ascendido a teniente y destinado a Madrid (1803). Combatió en Extremadura contra las tropas napoleónicas, alcanzando el grado de Coronel. Viajó a América en la expedición del Mariscal  Pablo Morillo para sofocar las insurrecciones independentistas (1815), incorporándose al  Ejército Real del Perú. Fue nombrado presidente de la Real Audiencia de Cusco por el Virrey Abascal*, siendo enviado como Brigadier a las campañas de Charcas. A su regreso a Lima fue herido en el camino de Canta y de igual manera en los combates del primer sitio del Callao, quedando discapacitado para el servicio militar, por lo que regresó a la península. Fue, luego, Capitán General y presidente de la Real Audiencia de Filipinas (18251830), Capitán General de Cuba (1832-1834), Senador por Huesca (legislatura de 1837-38), Capitán General de Galicia; ministro del Tribunal Supremo de Guerra y Marina, Comandante General de las Islas Canarias (1840) y Capitán General de Aragón y de Andalucía (1841). Recibió la Gran Cruz de la Orden de San Fernando, Isabel la Católica, San Hermenegildo y Santa Ana de Rusia por acciones de guerra. En 1843 fue destinado al cuartel en Madrid, donde murió tres años después. A fines de 1817, atacó a la tropa del guerrillero Eustaquio “Moto” Méndez y a las tropas argentinas del Tcnl. Gregorio Araoz de la Madrid, logrando recuperar el control de la Villa de Tarija, reprimiendo atrozmente a la población por haber apoyado a las “montoneras” patriotas. Durante la ocupación de esa plaza, ordenó quemar los documentos del Cabildo capitular, junto a otros testimonios, entre ellos el Acta de Fundación de la ciudad. Fuente: Vacaflor, 2004; http://es.wikipedia.org (26.4.2012).

RIESTER, JÜRGEN

(Koblenz, Alemania, 20 de mayo de 1941) Estudió en Bonn con el Prof. Dr. H. Hermann Trimborn, en 1969. Se graduó con Suma Cum Laudae en Antropología. Estudió también Religiones Comparativas, y Sociología. Experto en Antropología de Desarrollo en comunidades indígenas y campesinas; Evaluación, Planificación y Organización de proyectos en zonas rurales; Educación y capacitación de grupos de base; Antropología visual (dirección y coautor de más de 50 documentales y CD’s interactivos); y Coordinación del Micro Informativo Indígena (1250 programas). Ha publicado obras que recogen la memoria de los pueblos indígenas, en los que -a diferencia de otros estudiosos que trabajan con

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‘informantes’- señala a estos indígenas como autores o coautores de sus obras. Es un pionero en la sistematización de los saberes de los pueblos indígenas de Santa Cruz. Entre 1973 y 1980 fue docente de Antropología Cultural en la Pontificia Universidad Católica del Perú. Publicó más de 20 libros y unos cincuenta artículos científicos sobre problemática indígena. Ha sido editor de los primeros números de la Revista científica del Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (CAAAP). Participó en muchos congresos internacionales, como el de los Americanistas, en Stuttgart (Alemania), Madrid (España), Roma (Italia). Ha sido nominado Premio de Cultura Fundación “Manuel Vicente Ballivián” (1985); Doctor Honoris Causa por la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (1987). La Pontificia Universidad Católica del Perú, le ha otorgado el “Diploma de Reconocimiento por sus labores pioneras, en la enseñanza de los primeros cursos sobre Antropología de la Amazonía entre 1973 y 1980” (2010). Su trayectoria es sencillamente impresionante. Entre 1963 y 1966 trabajó en el Oriente Boliviano con los indígenas Chiquitano y Guarasug’we y visitó 26 pueblos indígenas en tierras bajas de Bolivia. Entre 1970 y 1972 trabajó con indígenas Chiquitano, Chimane y Guarayo. Entre 1974 y 1975 investigó problemas de colonización con Ribereños y grupo Ashaninka, en la selva peruana; y realizó trabajos en barriadas de Lima. Entre 1977 y 1978 fue Jefe de la Misión Científica de la Asociación Científica Alemana (investigación interdisciplinaria) entre los pueblos Isoseño-Guaraní. Desde 1980 realiza investigaciones en el pueblo Chiquitano, sobre su cultura intangible; y en el pueblo Ayoreo, sobre su memoria colectiva. Su trabajo se facilitó gracias a numerosas becas que obtuvo, entre ellas del Intercambio Académico Alemán (DAAD) (1963-66); Asociación Científica Alemana (DFG) (1969-1972; 19771978; 1980-1985); Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (1964), del gobierno español para trabajar en el Archivo de Indias*, en Sevilla, por 5 meses (1967) y como experto integrado por el CIM (1986-1988). En su larga trayectoria logró la aprobación de más de 20 proyectos de investigación por parte de la Asocia­ción Científica Alemana (DFG). En 1980 fundó la institución Apoyo Para el Campesino-Indígena del Oriente Boliviano (APCOB), de la que es su Director. Su trabajo fue evaluado por el Ministerio Peruano de Agricultura (Colonización Selva Baja), HIVOS-Holanda en la zona de la Selva peruana, Gobierno de Noruega (Misión Alianza de Noruega-La Paz), GTZ-oriente boliviano, FAO (Noruega- situación indígenas chaco paraguayo). Realizó un diagnóstico sobre la situación de la pobla­ción indí­gena de la zona baja de Bolivia (para el Ministerio de Educación y Planeamiento de Bolivia); elaboró la base de datos sobre La cultura intangible del pueblo Chiquitano, por encargo del AECID, España. Como resultado de su trabajo antropológico, recogió y sistematizó la memoria histórica de los pueblos indígenas del oriente boliviano, durante sus largas estadías en los numerosos pueblos indígenas de Bolivia y Perú, en los que realizó sus experiencias de campo, lo que constituye su gran mérito archivístico. Fuente: CV; Oporto, 1991.

RIVERA BERNAL, GABRIEL RENÉ (La Paz, 3 de marzo de 1975)

Abogado, con Diplomado internacional en Preparación, Gestión y Evaluación de Proyectos de Inversión (Universidad de Chile y CIADE). Fue asesor legal y

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consultor en instituciones estatales y privadas, fundaciones y ONG’s. Docente en la Universidad Boliviana de Informática. Trabajó como archivero del departamento de procesos técnicos del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (2009). Realizó, como consultor, el Diagnóstico para el Fortalecimiento y Modernización de los Archivos Judiciales Distritales de Bolivia, para el Consejo de la Judicatura, con apoyo del Gobierno de Dinamarca, ocasión en la que presentó un Plan de fortalecimiento y modernización, en base a la información recogida de los Servicios Judiciales de todo el País (2009). Fue empadronador y coordinador en el Censo Guía de Archivos, IV y V Fases, ejecutado por el ABNB, en dos ciudades capitales y provincias de los 9 Departamentos de Bolivia, recopilando la información archivística de Instituciones Públicas y Privadas, con financiamiento del Ministerio de Cultura de España (2007-2008). Participó en el Curso Internacional de Paleografía Hispanoamericana (Siglos XVI-XVIII); y el curso a distancia de Introducción a la Archivología (Argentina, Santa Fe). Fuente: CV.

RIVERO COIMBRA, LUIS ENRRIQUE (Montero, Santa Cruz, 4 de marzo de 1974)

Estudió Ciencia Política en la Facultad de Ciencias Jurídicas Políticas y Sociales de la Universidad Gabriel René Moreno (1994-1998). Cursó la Maestría en Desarrollo Municipal y Administración Pública en la misma universidad (2004-2006) y estudió en Montero la carrera de Técnico Medio en Administración Comercial. Trabajó en el Proyecto de Investigación y Recopilación de datos y Documentos Hemerográficos de los Movimientos Políticos e Identitarios del Departamento de Santa Cruz, 18102002 (2003). Miembro del equipo organizador del Primer Congreso Sudamericano de Historia, convocado por el Museo de Historia (UAGRM) y el Instituto Panamericano de Geografía e Historia* (2003); investigador del Proyecto “Historia Eclesiástica de Santa Cruz” (1605-1900) con el Padre Fray Roberto Tomichá (2003-2004). Participó en el Curso de Responsabilidad por la Transparencia y Resultado en la Gestión Pública, Conservación Preventiva y Restauración de Documentos de Archivos y Bibliotecas (2005), Normalización Archivística (2005), Conservación y Restauración de Documentos (2006). Es autor de El Espíritu de Un Siglo (1989), La Permanente Construcción de Lo Cruceño. Un estudio permanente sobre la identidad en Santa Cruz de la Sierra (2000-2002), El Deber de 1907 (2004), El 24 de Septiembre, revisión histórica, 18891994 (2004). En su experiencia archivística, trabajó como consultor del Censo Guía de Archivos en Santa Cruz, para el Archivo Nacional de Bolivia (2004); encargado del Proyecto de Ordenación y Catalogación de los Archivos Históricos del Arzobispado de Santa Cruz de la Sierra (2005-2007); encargado del Proyecto de Ordenación de los Archivos del Museo Histórico de la Catedral de Santa Cruz (2004-2005); investigador de los Inventarios Históricos de los Pueblos de la Chiquitania, con el Doctor Eckar Kuhne (2004-2005); responsable del Archivo Histórico Departamental de Santa Cruz “Hnos. Vázquez Machicado”*, dependiente del Museo de Historia y Archivo Histórico de Santa Cruz desde 2009. Fuente: CV.

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RIVEROS MAMANI, GERMÁN (La Paz, 23 de noviembre de 1980)

Estudió la carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (2004) y la Carrera de Historia* UMSA. Fue Auxiliar de Archivo y Biblioteca en la Facultad de Medicina UMSA (2005-2006); Encargado de Procesos Técnicos del Centro de Promoción de Minería (CEPROMIN) en la Regional La Paz, Oruro y Potosí; Responsable del Archivo y Memoria Institucional en el Fondo Nacional de Desarrollo Alternativo (2009). Fue contratado como Técnico del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2010). Fuente: CV.

RIVIALE, PASCAL

(Clamart, Francia, 22 de febrero de 1961) Doctor en Historia de la Universidad Denis Diderot, París 7. Fue investigador del Instituto Francés de Estudios Andinos (Lima, Perú). Es Archivero de la Sección del Siglo XIX de los Archivos Nacionales de Francia, en París. Investigador asociado al Centro EREA, en Villejuif (Centro Nacional de Investigación Científica). Investigó el archivo fotográfico de Georg von Grumbkow sobre Tiahuanaco, tomadas en 1877, que se conserva en Francia en el Museo del Quai Branly (París) y en el Museo de Remiremont. Investiga la existencia de otros fondos fotográficos en el Museo del Quai Branly y en el Museo Nacional de Historia Natural (París). Está preparando un libro a partir del diario del francés Théodore Ber, quien efectuó una de las primeras excavaciones en Tiahuanaco en 1877. Acaba de publicar una reedición en francés del libro de Charles Wiener Pérou et Bolivie (primero publicado en Paris en 1880), con una introducción de su autoría en la que comenta el uso de las fotos de G. Grumbkow* para los grabados de su libro. Se publicó bajo el titulo Voyage au Pérou et en Bolivie (1875-1877), Paris, Ginkgo éditeur, 2010. Es autor de varios ensayos sobre la obra antropológica de A. d’Orbigny*: “La etnografía pintoresca de los viajeros a las Américas, durante la primera mitad del Siglo XIX”, en Entre textos e imágenes. La representación antropológica  del indio americano. Fermin del Pino, Pascal Riviale y Juan José Villarías (coord.). Madrid, CSIC, colección “De acá y de allá”, 2009, pp. 181-191; “Un naturaliste en quête d’antiquités”, en Alcide d’Orbigny. Du Nouveau Monde au passé du monde. Textes réunis sous la direction de Philippe Taquet. Paris, Muséum national d’Histoire naturelle/Nathan, 2002 y “L’œuvre archéologique d’Alcide d’Orbigny”, en Alcide d’Orbigny à la découverte des nouvelles républiques sudaméricaines. Sous la direction de Philippe de Laborde Pédelahore. Biarritz, Atlántica, 2000, pp. 363-386; Une petite histoire de la présence française en Bolivie au XIX”, Las Andes au 19e siècle: L’archéologue et l’ingénieur. Catalogue de l’exposition organisée au musée Charles de Bruyère, Remiremont, du 12 juin au 26 septembre 2004, pp. 17-20; “De l’exploration à la production iconographique: Les débuts de la recherche archéologique en Bolivie”, Las Andes au 19e siècle: L’archéologue et l’ingénieur. Catalogue de l’exposition organisée au musée Charles de Bruyère, Remiremont, du 12 juin au 26 septembre 2004, pp. 21-33; “Les Amériques en vitrine: Une petite histoire des collections américaines dans les musées français”, Las Andes au 19e

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siècle: L’archéologue et l’ingénieur. Catalogue de l’exposition organisée au musée Charles de Bruyère, Remiremont, du 12 juin au 26 septembre 2004, pp. 34-39. Fuente: Comunicación personal. 11.11.2011.

ROA BALDERRAMA, RONALD

(La Paz, 27 de enero de 1955. † Santa Cruz de la Sierra, 9 de agosto de 2010) Licenciado en Historia (Universidad Mayor de San Andrés). Realizó estudios de cerámica y del idioma italiano en el Istituto Statale D’Arte en Florencia (Italia). Tiene un Diplomado en Historia y Estudios del Oriente Boliviano (Universidad Privada de Santa Cruz) y otro en Educación Superior (Universidad Autónoma Gabriel René Moreno). Cursó la Maestría en Educación Superior en la misma universidad. Su labor docente es amplia y muy reconocida, tanto en La Paz, donde empezó como auxiliar de docencia de Historia de la Cultura y Ciencias (UMSA), pasando a impartir la asignatura de Historia en los cursos Pre-Universitarios de la UMSA y como profesor invitado impartió Artes Populares, en el taller Libre de Integración Popular, y Dibujo Artístico, en el Departamento de Artes (UMSA). Fue destacado profesor de secundaria. Desde 1970 impartió la asignatura de Artes Plásticas en la Escuela “Irene Nava de Castillo”, Historia de la Cultura en el Colegio “San Calixto”, en la ciudad de La Paz. En 1988 cambia de residencia a Santa Cruz de la Sierra, donde enseñó Historia del Arte y Artes Plásticas en el Colegio “La Salle”, e Historia en el Colegio “Madre Josefina Bálsamo”. Fue también profesor de la materia de Historia del Arte y Estética en la Escuela Superior de Bellas Artes “Hernando Siles” (La Paz) y Profesor de Artes (Dibujo, Pintura y Cerámica) en el Instituto de Bellas Artes y Codirector de la carrera de Bellas Artes en el Instituto Técnico Superior “Madre Josefina Bálsamo”. En la bella capital oriental, impartió docencia en la Universidad Privada de Santa Cruz; fue profesor de Filosofía y Arte en la Facultad de Ciencias del Hábitat en la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, donde fue promovido como docente de la Unidad de Post grado. Gracias a su sólida formación materialista, en su faceta de artista plástico e intelectual comprometido, tuvo un notable desempeño como político, intelectual y artista. Fue asesor de la Federación de Artesanos y Artistas Populares de La Paz. Ocupó el alto cargo de Secretario General del Instituto Boliviano de Cultura (1985-1986), y fue Asesor de la Asociación Boliviana de Artistas Plásticos ABAP, Filial Santa Cruz (1990-2010). En Santa Cruz de la Sierra, logró introducirse paulatinamente en instituciones culturales, como la Casa de la Cultura Raúl Otero Reiche donde ejerció la Vicepresidencia (1996-1997). Como ceramista ha creado, con compañeros de su época en La Paz, un personaje que retrata al paceño bohemio y dicharrachero: el Tilincho. Este personaje se ha convertido en parte característica de la Feria de Alasitas en la ciudad de La Paz. Desde 1972 participa activamente en conferencias, debates, mesas redondas sobre problemas culturales, histórico-artesanales-artísticos y otros de carácter nacional y latinoamericano. Su obra historiográfica se caracteriza por el revisionismo, plasmada en Manuel Lascano. La visión de Bolivia y del mundo desde Santa Cruz en el siglo XIX (La Paz, Colegio Nacional de Historiadores, 2007), con una segunda edición publicada como Manuel Lascano. El artista más importante de Santa Cruz en el siglo XIX (2009). Su tesis de licenciatura Arturo Borda. Historia secreta de un ser horriblemente libre (2010), fue publicada por la Fundación Cultural del Banco Central

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de Bolivia*, luego de un proceso en el que el autor se sintió maltratado. Su obra redescubre a un Arturo Borda, cuyos méritos fueron minimizados por historiadores del pasado, quienes lo tipificaron como alcohólico y por ello, de poca trascendencia para la historia del arte plástico boliviano. Ha publicado también Historia del Arte en Santa Cruz, Catálogo (Santa Cruz, ABAP, 1996). Su vocación de historiador deriva a una fructífera experiencia archivística, pues fue el custodio privilegiado de los saldos del Archivo del singular artista plástico, Arturo Borda. Más tarde, debido al interés del Dr. Reymi Ferreyra, Rector de la UAGRM, tuvo la oportunidad de organizar la sección histórica del Archivo Central de la Universidad, desde el 31 de agosto de 2009, habiendo revisado alrededor de 97 metros lineales de documentación, que se encontraba ensacada en más de cien talegas de nylon, de los cuales logró clasificar y ordenar 20 metros lineales, y ha identificado 55 metros lineales, con la colaboración del pasante Jhonatan Santillán Delgado. Faltaba revisar alrededor de 80 talegas (50 metros lineales), cuando lo sorprendió la muerte aleve. Llegó a publicar una nota que muestra el valor de este archivo, Informe del material documental histórico del Archivo Central de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, la misma que se halla inédita. En este proceso de búsqueda preliminar documental en torno a la historia de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, ha dejado una rica información de fuente primaria, debidamente puesta en valor. Como resultado de su intensa vida intelectual, signada por la bohemia y un interés genuino en desentrañar la historia cultural boliviana, logró coleccionar una selecta biblioteca y archivo particular. Luego de su muerte, su familia, en especial su viuda, Dioselinda Velasco, ha creado un Centro Cultural que lleva el nombre del siempre recordado Ronal Roa Balderrama, desde el cual propician actividades culturales y de las artes plásticas. Fuente: CV.

ROBERTSON TRIGO, JUAN VÍCTOR

(Tarija, 12 de marzo de 1942. † Tarija, 3 de noviembre de 2009) Médico Anatomo-Patólogo, el primero en Tarija. Estudió en la Universidad de La Plata (Argentina) y se especializó en la Universidad Católica de Chile. Prefecto del Departamento de Tarija en 1986. Apoyó la iniciativa de la Dra. C. Minutolo de Orsi* para compilar el Corpus Documental sobre la Historia de Tarija, en homenaje al bicentenario del nacimiento del héroe tarijeño Eustaquio ‘Moto’ Méndez. Acudieron para ese fin a archivos de Bolivia y la Argentina, para recopilar documentos. Su sucesor, el prefecto José Vaca Garzón, continuó el proyecto hasta su culminación. Al concluir el proceso, el corpus fue publicado en seis tomos. Fuente: Langer y Bass Werner, 1988.

ROCA GARCÍA, JOSÉ LUIS

(Santa Ana del Yacuma, Beni, 25 de agosto de 1935. † Santa Cruz de la Sierra, 7 de abril de 2009) Estudió primaria en su pueblo natal y Cochabamba, y secundaria en el Colegio Nacional “Florida” de Santa Cruz. Se graduó como abogado en la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca (1958). Hizo un postgrado en Historia y

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Derecho Comparado en Southern Methodist University, Dallas, Texas, EE.UU. Abrazó la política y la dirigencia empresarial. Fue periodista, embajador, ministro de Estado, senador de la República por Pando, presidente de la Confederación de Ganaderos. Político conservador, participó en la fundación del Partido Demócrata Cristiano a los 18 años. Fue consultor de organismos nacionales e internacionales. Fue Embajador en Colombia durante el gobierno del Gral. Juan J. Torres (1970), en 1980 fue designado Embajador en Gran Bretaña, del que pasó al exilio por el golpe de Estado de L. García Meza*, de tal manera que pasó a ser investigador honorario del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Londres. Fue presidente de la Sociedad Boliviana de Historia (1984, 1990), miembro de número de la Academia Boliviana de Historia, de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz y de la Academia Cruceña de Letras. Notable autodidacta en Historia, ejerció la cátedra titular de Historia de América, formando la primera y segunda generación de historiadores profesionales en la Carrera de Historia* de la Universidad Mayor de San Andrés, de la que no obstante, fue expulsado por los estudiantes a inicios de 1980. Como una paradoja de la vida académica, volvió a impartir clases -a las que asistieron aquellos estudiantes que lo defenestraron, ya profesionales- en la Maestría de Historias Andinas y Amazónicas, el 2002. En sus inicios no era precisamente acucioso, pues no respaldaba sus afirmaciones en documentos de fuente primaria, sino acostumbraba hacer los que escriben ensayos. Posteriormente, sus afirmaciones históricas se basaron en datos absolutamente confiables, pues tuvo cuidado de usar documentos de archivo y aplicar el ejercicio de la compulsa documental. Si bien no estudió Historia, pues era abogado, asumió el rigor del método historiográfico. Puso la Historia al servicio de su región. Defendió a ultranza el título de “Oriente” para caracterizar a la vasta extensión territorial que corre desde los llanos de Manso hasta la Amazonía. Es decir, que en su imaginario, el Oriente boliviano era la referencia geográfica única para identificar tanto al oriente propiamente dicho, como a la amazonía, a pesar que son dos espacios geográficos, históricos, económicos y culturales distintos, tratando de esa manera construir un concepto de geopolítica histórica hegemónica. Su pasión por Santa Cruz de la Sierra y el proyecto histórico regional autonomista, motivó su adhesión militante, con lo que ‘ideologizó’ la historiografía que él mismo pretendía erigir como ciencia, poniéndola de esa manera al servicio de la “causa” cruceña. Mas, es importante señalar que no adhirió, por ello, a causas separatistas sino al derecho regional a un desarrollo autónomo, sin desligarse del tronco del Estado, Bolivia. Su obra historiográfica es sustanciosa, crítica y fundamental. Publicó varios libros, cito por su innegable importancia su obra completa: Casimiro Olañeta, artífice de Bolivia (La Paz, Amigos del Libro, 1978), Derrotemos el hambre (La Paz, UNICEF, 1986), Gabriel René Moreno, el Hispanoamericano (La Paz, Don Bosco, 1988), Olañeta: dos caras e historiadores (La Paz, ABNB, 1999), La Fisonomía del Regionalismo Boliviano (La Paz, Plural, 1999), 1809: La revolución de la Audiencia de Charcas en Chuquisaca y en La Paz (La Paz, Plural, 1999),  Por qué cayó el mariscal Sucre (La Paz, Garza Azul, 1999), Bolivia después de la capitalización. Una crítica al “gonismo” y sus reformas (La Paz, Plural, 2000), Economía y sociedad en el Oriente Boliviano, siglos XVI-XX (Santa Cruz, Cotas, 2001), El Hotel de Sal. Juicio a Bolivia: año 2016 (con Xavier Nogales. La Paz, Realficción, 2002) y Ni con Lima ni con Buenos Aires. La formación de un Estado nacional en Charcas (La Paz, Plural, 2007). Colaboró notablemente (con 15 articulos) en el Diccionario Histórico de Bolivia,

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que editó J.M. Barnadas* el 2002. En 1976 se lo ve integrando como miembro de una comisión en el directorio de la Asociación de Archivistas de La Paz*. Su aporte a la archivística fue importante, pues trabajó en la redacción de los estatutos y el primer proyecto de ley de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia*, que acoge al Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, Casa de la Libertad*, Casa Nacional de la Moneda*, y al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, amenazados por las “recomendaciones del Banco Mundial que señalaban la urgencia de ‘devolver esos repositorios al Ministerio de Educación y Cultura’, pues en criterio de los tecnócratas de ese organismo internacional, nada tenían que hacer bajo la administración del Banco Central de Bolivia”. Finalmente, gracias a la Ley 1670 (31 de octubre 1995), pasaron a depender de un Fondo Fiduciario que fue planteado precisamente en el trabajo de Roca. Hizo también trabajos llamémosle ‘técnicos’, como resultado de consultorías que tomaba para superar tiempos difíciles. Publicaciones Archivísticas: Gabriel René Moreno íntimo (1836-1908). José Luis Roca (Compilador). La Paz: Proyecto Cultural Don Bosco 1986. Referido al Epistolario de Gabriel Rene Moreno. Fuente: Oporto, 2009a; Lizárraga, 1991 (doc.).

ROCABADO, TERESA

(Uncía, Provincia Bustillo, Potosí, 12 de marzo de 1958) Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información UMSA*. Fue Supervisora de Archivos de Kárdex de la Universidad Mayor de San Andrés y Jefa del Archivo de Títulos y Diplomas de la Universidad Mayor de San Andrés (2002-2003). Fue también docente de su carrera. Directora de la Biblioteca Central de la UMSA (2012). Fuente: Información secundaria.

ROCABADO MORALES, JORGE CARLOS (La Paz, 27 de agosto de 1975)

Licenciado en Administración de Empresas (UMSA). Realizó Cursos de Auxiliar de Contabilidad en el Instituto SISMEC (1997); Taller de Contabilidad Intermedia a Moneda Constante UMSA (1998); Panel sobre Capitalización UMSA (2001); Ley 1178-SAFCO (2011); Revalorización de Activos Fijos (2011). Es miembro del directorio y gerente administrativo de la Consultora Programas en Seguridad y Salud ocupacional “Prosyso srl.” (2011-a la fecha). Fue contratado por la Organización Mundial de la Salud para realizar un trabajo de consultoría en la auditoría de Recursos Humanos para el complejo hospitalario Viedma, Cochabamba (2001, enero a mayo). Auditorías practicadas: Hospital clínico Viedma, Instituto Gastroenterológico Boliviano-Japonés, Hospital materno infantil “Germán Urquidi”. Fue analista de marketing en Servicios Múltiples en internet (1999-2000). Miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio San Calixto (Secretario general, septiembre de 2007 a marzo de 2009; y Asesor Ejecutivo, enero de 2010 a la fecha). Fue Coordinador de las exposiciones de material bélico y fotográfico de la Guerra del Chaco (2009 y 2010); Coordinador, en representación de CONEXCHACO, del Comité Organizador de concursos de bandas

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estudiantiles del departamento de La Paz, en la preparación y realización del desfile en homenaje al cese de hostilidades de la Guerra del Chaco (2010, 2011 y 2012). En la Confederación Nacional de Ex combatientes de la Guerra del Chaco (CONEXCHACO), se desempeñó como Auxiliar de contabilidad (2002), Contador-cajero (2002-2005); actualmente es Director Administrativo (desde 2006) y responsable (desde diciembre 2010) del Museo, Biblioteca y Archivo de la Guerra del Chaco* (“Casa de los Héroes Nacionales de la Guerra del Chaco”, La Paz), bajo la administración de la Armada Boliviana-Escuela Marítima con el Cargo de Profesional V. *El Museo, Biblioteca y Archivo de la Guerra del Chaco, tuvo su origen en los años 80, creado por los Directorios de CONEXCHACO de entonces. Posteriormente en fecha 30 de septiembre de 2010 se firma un convenio suscrito entre la ARMADA BOLIVIANA y CONEXCHACO (organizada el 8 de agosto de 1954), con el objeto de instalar y organizar con perspectiva de crecimiento y sostenibilidad histórica las dependencias de Museo, Biblioteca y Archivo concernientes a la Guerra del Chaco con la denominación “Casa de los Héroes Nacionales de la Guerra del Chaco”, en la ciudad de La Paz (Obispo Cárdenas esq. Bueno Nº 1499). Entre 1985 y 1995, alojó en una sala un pequeño repositorio, que luego de ser ampliado y renovado ha sido reinaugurado en mayo de 2012. Instalado en tres ambientes adecuados y organizados por el tipo de material correspondiente, como ser: Armamento: ametralladoras, fusiles máuseres, municiones, etc.; Fotografías: de la contienda bélica tomadas por L. Bazoberry*, retratos de los presidentes de la CONEXCHACO, y de los Héroes Bernardino Bilbao Rioja y Manuel Marzana; Vestimenta: uniforme Boliviano y Paraguayo, más estandartes de las federaciones departamentales y nacionales. La Biblioteca, con aproximadamente 700 volúmenes (libros, revistas y folletos) sobre la Guerra del Chaco y otros temas concernientes a lo militar y la Historia de Bolivia. Archivo: conserva aproximadamente 40.000 hojas de filiación (en 200 archivadores) con sus copias de Resoluciones Supremas y/o Ministeriales de declaratoria de Beneméritos de la Patria (Ley de 21 de diciembre de 1956), ordenados por sectores y accesibles a través de un sistema de consulta informática. Entre los propósitos del Museo, Biblioteca y Archivo de la Guerra del Chaco están: Rendir homenaje a los hombres y mujeres que expusieron sus vidas en resguardo de la Patria; Mantener viva la memoria de lo sucedido en el conflicto; Exhibir el material histórico de la contienda bélica; Inculcar a los visitantes el valor del patrimonio patrio; Conservar, exponer y difundir material de la Guerra del Chaco como parte de la Historia de Bolivia; Mantener, cuidar y resguardar material físico documental de la Guerra del Chaco; Ofrecer a la ciudadanía material donde se encuentra escrita la historia de la Guerra del Chaco; Colaborar a investigadores en trabajos referentes a la Guerra del Chaco; Organizar adecuadamente el material bibliográfico y de archivo. Fuente: CV.; Candela, 2012:16-18.

ROCHA USTAREZ, CARMEN LILIANA

(Uncía, Provincia Bustillo, Potosí, 23 de julio de 1989) Estudió la Carrera de Historia en la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca, donde llevó la materia de Archivística por dos años. Fue voluntaria en el Archivo “Monseñor Miguel de los Santos Taborga” de la Arquidiócesis de Sucre. Hizo sus prácticas de Archivística en el Archivo de la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca. Participó en la Feria Científica de Tecnología de la Universidad de Sucre, con el tema “Conservación preventiva en los documentos de La Academia Carolina”. Participó durante 6 meses en la Escuela Taller de Sucre en el Área de Conservación del Papel. Fue jurado en el Concurso de Historia que se

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realizó en la ciudad de Sucre para los colegios, con el nombre “En busca del cofre”. Es autora de “La mujer en la Revolución”, en coautoría de S. Zalles* y Janeth Cruz, publicado en Mujeres, Familias e Historias. Fuente: CV.

RODRÍGUEZ, CELSO

(Buenos Aires, Argentina, 16 de marzo de 1929. † Nueva York, EE.UU., 28 de octubre de 2009) Sus padres fueron los asturianos Manuel Rodríguez y Benigna Rodríguez. Estudió en la Universidad de Buenos Aires para Contador público. Se marchó a los Estados Unidos -cuya ciudadanía adquirió, sin perder la identidad argentina que siempre le caracterizó- para graduarse en Historia Latinoamericana; primero de Licenciado por la Universidad del Estado de Nueva York (Buffalo) (1968), luego de Doctor por la Universidad de Massachusetts (1974). Asistió en la cátedra y en la investigación al eminente americanista L. Hanke*. Estuvo en la Organizacion de Estados Amaricanos OEA, donde sirvió entre 1979 y 1994, apoyando incondicionalmente a la archivística de Bolivia en general y a la cruceña en particular, impulsando la creación del Archivo Histórico Departamental, desde su cuartel general en la OEA. Fuente: Anuario Interamericano de Archivos. Córdoba, Argentina, Vol. VII

RODRÍGUEZ DE MAMAN, SISSIBELL ITALA (Cochabamba, 17 de junio de 1984)

Licenciada en Ciencias Jurídicas y Políticas, UMSS (2009). Tiene un Diplomado en Docencia Universitaria (UMSS). Asistió a varios cursos, entre ellos el de Legislación Archivística y Archivo de Gestión (2008); Gestión Documental, Organización y Legislación del Archivo de Gestión (2009); la Reunión de Consulta sobre la Aplicación de la Norma Internacional (General) de Descripción Archivística ISAD (G) (2004); el Taller sobre la Ley de Archivos (2007); La Archivística y la Legislación sobre Patrimonio Documental (2007); las Jornadas de Reflexión a cargo de los voluntarios de la Primera Brigada Internacionalista de apoyo a las Bibliotecas y Archivos de Cochabamba (2009). Se acogió a la modalidad de graduación de trabajo dirigido para lo cual suscribió un Convenio Interinstitucional entre la Carrera de Derecho de la UMSS y la Oficialía Superior de Cultura de la Municipalidad de Cochabamba, para elaborar la Propuesta de Archivo Administrativo de la Casa de la Cultura de la Municipalidad de Cochabamba (2007-2008), con la que se graduó. Anteriormente trabajó como encargada del Archivo de la Asociación Cristiana Boliviana (2004-2005; 2008-2009). Fue encargada de la organización de Archivos en la consultora “Aguilar Rivera Asesores Multidisciplinarios (2006-2008); y con D. Martínez* trabaja como consultora en el proyecto de Organización del Archivo Histórico de la Prefectura del Departamento de Cochabamba (2009). Ha sido Asesora Legal de la Asociación de Archiveros de Cochabamba. Fuente: CV.

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RODRÍGUEZ MENDIGUTIA, FÉLIX

(La Habana, Cuba, 1941) Agente de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de los Estados Unidos; anticastrista recalcitrante. Alias “Lázaro”, conocido también como “El Gato”. Participó en la Invasión de Bahía de Cochinos (1961), en la captura de Ernesto “Che” Guevara* en Bolivia (1967), en 300 incursiones en Vietnam del Sur para la CIA; y en el asunto Irán-Contra (1985-1986). Después que el periodista francés Régis Debray confirmara la presencia del comandante “Che” Guevara en la guerrilla de Ñancahuazú, los gobiernos de Bolivia y EE.UU. instalaron un segundo regimiento “Ranger” contrainsurgente en Santa Cruz. En ese contexto, F. Rodríguez fue enviado a Bolivia por la CIA, bajo la identidad encubierta del empresario Félix Ramos (junto a otro agente cubano-estadounidense, Gustavo Villoldo), el 1 de agosto de 1967, con la misión de “cazar al guerrillero cubano-argentino”. Instalado en la zona de combate, torturó e interrogó a prisioneros y envió al Batallón Ranger a la zona de La Higuera para la capturar al ‘Che’. El comandante, herido y capturado en el combate del 8 de octubre, en la Quebrada del Yuro, fue encarcelado en la escuela a La Higuera, donde llegó F. Rodríguez junto al Coronel Joaquín Zenteno Anaya, en las primeras horas de la mañana del 9 de octubre. Según su propio testimonio “al mediodía recibió personalmente la orden del presidente R. Barrientos* de asesinar al Che Guevara, transmitiéndola a los oficiales bolivianos con la indicación de que los disparos no fueran dirigidos al rostro para simular una muerte en combate”. Interrogó nuevamente al “Che” y lo sacó del aula para tomarle varias fotografías, las últimas en las que aparece con vida, comunicándole que sería fusilado, junto a otros dos prisioneros. A las 13:10 fue asesinado por el suboficial Mario Terán. Rodríguez ordenó que el cuerpo de Guevara fuese atado al helicóptero que lo transportó a la población de Vallegrande, donde fue expuesto al público durante dos días, antes de ser enterrado clandestinamente en una fosa común que fue descubierta en 1997. F. Rodríguez fue el primero en estudiar y fotografiar sistemáticamente todos los documentos que traía el ‘Che’ en su mochila, sobre todo su Diario, página por página; realizó un número indeterminado de fotos del ‘Che’, enviando todo a la CIA, documentos que mantienen como secretos, en los archivos de la Agencia hasta hoy. El 2005 F. Rodríguez supervisó la inauguración del Museo y Biblioteca “Bahía de Cochinos” en la Pequeña Habana (Miami), donde fue designado como uno de sus directores. Fuente: http://es.wikipedia.org (28.7.11).

ROJAS, MIGUEL

(Santa Cruz de la Sierra) Fotógrafo cruceño, contratado por el Prefecto Bernardino J. Pesccioti para documentar la visita a Guarayos del Internuncio Rodolfo Caroli, en 1918. El fotógrafo documentó la única escena dedicada en toda la serie a la nueva Iglesia de Yotau, que Caroli ensalzó por considerarla un monumento de civilización hasta las fronteras de la barbarie. Rojas fotografió paso a paso la visita del ilustre prelado, en Yotaú, Ascensión y San pablo, con lo que permite mostrar el orden social y la civilización conseguida en los poblados, en la que se distingue también la ornamentación con el

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típico arco floral en la calle y el uso del palio bajo para proteger del sol al Internuncio. Escenas de la banda de música, la parada militar, Misioneros bien uniformados, niños de la escuela con su palma en la mano y niñas que le precedían con alfombras de flores, arrojadas a sus pies, la costumbre del reparto de carne, habitual en las grandes festividades guarayas y la práctica lúdica del palo encebado para gozo de los muchachos. El acucioso fotógrafo registró otra serie de fotografías en las que aparecen las autoridades civiles y religiosas, incluyendo a las autoridades guarayas y a un grupo de la población nativa. Fuente: García, 2009: 179-183.

ROJAS ACEVEDO, ALEJO FERNANDO (Lima. † La Paz en 1730)

Estudió en el Colegio Real de San Felipe. Cura de Sayán y catedral de Lima. Felipe V lo elevó al obispado de Santiago de Chile en 1719. Pasó a La Paz en 1723, donde tuvo el mérito de haber llevado los libros parroquiales de manera correcta, con apoyo de su secretario Francisco Borja Macuaga. Fuente: Aranzáes, 1915: 662.

ROJAS CÁCERES, J. GERMÁN (Perú, Ca. 1907. †¿?)

Reportero gráfico. Fundador de la Asociación de Periodistas de La Paz y de la Revista Policial. Inició su trabajo fotográfico junto al arqueólogo A. Posnansky*, para su libro Tihuanacu, la cuna del hombre americano. Trabajó en La Crónica y La Prensa (Perú), prestando luego servicios en Caras y Caretas (Buenos Aires), Excelsior (México) y Mundial (Montevideo). En Bolivia colaboró en El Diario, Última Hora, La Calle, Semana Gráfica y periódicos de la época de la Guerra del Chaco (1932-1935). Registró los acontecimientos del 21 de julio de 1946, en los que fueron victimados el presidente Villarroel y sus ayudantes Hinojosa, Toledo, Eguino, Escóbar Uría y Ballivián; así como la necropsia del cadáver del líder falangista Oscar Unzaga de la Vega y el matrimonio de C. San Román*, en el Panóptico de San Pedro. En diversas oportunidades organizó exposiciones para difundir su obra (1920-1993), pero también “para interesar a personas y entidades que quisieran comprarlas”, oportunidad en la que exponía 200 fotos, agrupadas en 28 temas (presidentes, desde J.L. Tejada*, ministros, Guerra del Chaco, medios de comunicación social, Villarroel, matrimonios, carnavales y fiestas, artesanías, teatro, reinas, desfile de colegios). Parte de su archivo fue adquirido por la Alcaldía Municipal de La Paz. En uno de sus prospectos sintetiza que su trayectoria consistió en “un trabajo que fue placer, fue aventura, fue riesgo y también sonrisa”. Fuente: Asociación de Periodistas de La Paz, 1988, 1993; Iñiguez, 1987: 11; Presencia, 1993a: 2.

ROJAS ROSALES, ANTONIO Economista y Antropólogo. Se interesó en el estudio de la dependencia cultural de los pueblos indígenas, en un ensayo provocador titulado “Identidad cultural

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latinoamericana: subordinación o dominación, plasmando sus conclusiones en siete aspectos que confluyen en la divisa: “Unir sin uniformar. Juntos pero distintos. Sólo la diversidad crea. Muera la uniformidad. Viva la diversidad” (Revista Nuevamérica. La cultura como pretexto). Estudió por primera vez los fondos documentales del Banco Nacional de Bolivia, presentando los resultados de su investigación como ponencia a la IV Reunión de Consulta de los Archivos de Bolivia* (1985), organizado por G. Mendoza* en Cochabamba. Posteriormente falleció de forma trágica en un asesinato no esclarecido. Publicaciones archivísticas: “Recursos documentales del Banco Nacional de Bolivia, Sucre” (Boletín del Archivo de La Paz, La Paz, 1987, 2 (10): 13-32). Fuente: Mendoza, 1995: 4.

ROMANO, SANTIAGO

(Marigliano, Italia, 1849. † Tarija, 1912) Documentalista de la Orden Franciscana. Ha sido conocido por su Diccionario Chiriguano (1916). Vivió los tristes acontecimientos de la secularización de las misiones chaqueñas, de los que anotició en Archivo de la Comisaría franciscana en Bolivia. Sufrió también un juicio criminal, que relató en forma de diario, en un documento de cinco libritos de tupidas páginas. Hombre de gobierno, en sus escritos manifiesta también temple de escritor: realiza observaciones del entorno chaqueño, contextos de vida reduccional y colores psicológicos de personajes. Fuente: Calzavarini, 2005.

ROMERO, FANOR G. Consultor de archivo contratado en 1919 por la Prefectura de Chuquisaca, “por 3.500 bolivianos, para realizar trabajos de arreglo y organización de los archivos de la Prefectura del Departamento, con el propósito de asegurar la conveniente conservación de los documentos públicos, por medio de la encuadernación de todos los expedientes y la provisión de estantería”. Fuente: Oporto, 2006: 158; OS. 13.10.1919.

ROMERO COLLAO, FRANCISCO XAVIER (La Paz, 5 de marzo de 1982)

Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Técnico medio en Programación de Sistemas. Fue Encargado de Archivo de Transportes Aéreos Militares (2009), Encargado de Archivos de MugeBusch (2009-2010), Auxiliar de Archivo del Vicedecanato de la Facultad de Odontología UMSA (2010-2011). Trabajó en el Sistema de Archivo de la Comibol* (2012). Fuente: CV.

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ROSSELL VELEZ, JORGE

(Trinidad, 21 de agosto de 1949) Asistió a tres cursos de capacitación en archivos realizados en Trinidad y en Sucre por la GTZ de Alemania y en el Archivo de la UGRM de Santa Cruz. Ha participado en congresos y seminarios sobre Archivística y Bibliotecología. Autor de un modelo de archivo aprobado en un congreso en Sucre. En 1994 fue designado para recoger los papeles que se hallaban desorganizados y dar nacimiento al Archivo General de la Universidad Técnica del Beni, y desde entonces siguió en este trabajo. Desde 2005 viene desempeñándose como Jefe del Archivo General de dicha Universidad. Fuente: CV.

ROSSO RAMÍREZ, FLORA

(Potosí, 21 de noviembre de 1950) Licenciada en Bibliotecología, con mención en Archivología (UMSA). Profesora normalista de primaria, egresada de la Escuela Nacional de Maestros de Sucre. Ha sido la primera en titularse en la mención Archivología de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (1995) con su tesis sobre Los archivos bancarios de la ciudad de La Paz. Caso del Banco Nacional de Bolivia. Cursó el Diplomado de Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos, organizado por el Archivo de La Paz* (2002); el Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999). Fue consultora del Banco Interamericano de Desarrollo BID, y durante varios años docente de la carrera de Bibliotecología. Fue Supervisora de Kárdex Académico de la UMSA, logrando sistematizar con éxito estos archivos académicos, por medio de pasantías pagadas por las distintas facultades de la UMSA. Asistió al XIV Congreso Internacional de Archivos, organizado por el Consejo Internacional de Archivos en Sevilla, España (2000). Miembro fundadora del Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia CPCIB*; a ella se debe la tramitación exitosa de la personería jurídica de esa corporación. Publicaciones archivísticas: Coautora con Luis Oporto Ordóñez: Legislación Archivística de Bolivia. El ABC normativo del archivero boliviano. La Paz, BCG, 2007.

RÚA DE TIRADO, MARÍA DEL CARMEN

(Padilla, Chuquisaca, 11 de mayo de 1934. † Sucre, 13 de diciembre de 1997) Maestra de Educación Primaria (1954), Abogada (1974) y digna archivista. En el ámbito político fue aguerrida, con ideales que la llevaron a defender la causa de los trabajadores, campesinos, mujeres trabajadoras del hogar y humildes sectores de la sociedad chuquisaqueña. Enseñó durante años las primeras letras a sectores sociales excluidos históricamente. Destacó como dirigente del Centro de Estudiantes de la Facultad de Derecho y Secretaria Ejecutiva del Magisterio Urbano de Chuquisaca durante los últimos años de la dictadura del Gral. H. Bánzer*. Integró la Comisión de Derechos de la Persona del Colegio de Abogados de Chuquisaca, de la que fue Vocal Secretaria del Tribunal de Honor. Tiene el mérito de haber sido la primera Presidenta de la Sociedad Geográfica y de Historia “Sucre”, habiendo organizado el Primer Encuentro Nacional de Sociedades Geográficas y de Historia de Bolivia. En 1964 la

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Facultad de Derecho le otorgó el Anillo al “Mejor Estudiante” y en 1990 el Comité Cívico Femenino de Chuquisaca rindió homenaje a su trayectoria. Incursionó en la archivística en 1981, cuando Jorge Zamora Hernández, Rector de la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca la contrató para realizar un estudio sobre la existencia de incunables y documentos para la historia del Departamento de Chuquisaca y Bolivia. El resultado de la consultoría entusiasmó al Rector, quien mediante resolución ordenó la creación del Centro Bibliográfico Documental Histórico* de esa universidad. Fue directora de este importante archivo hasta 1992. Participó en el Curso de Organización y Administración de Archivos Históricos, impartidos en la Escuela Nacional de Documentalistas de Madrid*, España. Fue discípula de G. Mendoza* y V. Cortés*. Editó la serie Cuadernos, con dos entregas, y el Boletín del Centro, entre 1986 y 1991 (Nos. 1 al 8). Desde estas publicaciones orientó, informó y defendió militantemente el destino de los archivos. Fue una mujer de temple, temeraria al momento de defender a los archivos. Con su muerte Bolivia perdió a una de las defensoras más connotadas de los archivos. Publicaciones archivísticas: “Fuentes de la historia regional, el Centro Bibliográfico, Documental Histórico de la Universidad Mayor, Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca” (Centro Documental Histórico San Francisco Xavier, 3 (5), 1989: 2-7); Música tradicional chuquisaqueña; y Sucre a través de sus planos, 1639-2010. Sucre, CBDH, 1992. Fuente: Sociedad GHS, 1999: 62.

RÜCK FRANKE, ERNEST OTTO

(Kassel, Prusia, Imperio Alemán, 29 de diciembre de 1833. † Sucre, 5 de mayo de 1909) Ingeniero, bibliógrafo, historiador, geógrafo, archivero, y coleccionista. Trabajó como ingeniero en las minas de José Avelino Aramayo (1855), enclavadas en las alturas andinas de Portugalete, en la provincia Sud Chichas (Potosí). Dirigió la Escuela de Minas de Potosí en 1872. Funcionario público en diversas instituciones nacionales (entre ellas el Tribunal Nacional de Cuentas), departamentales y del municipio. Primer Director del Archivo Nacional de Bolivia designado el 17 de enero de 1884, cumplió funciones hasta 1889, oportunidad en la que dirigió y redactó el Boletín y Catálogo del Archivo General de la Nación (Nº1, 1886-Nº 38, 1889). Le sucedió S. Achá*. A él se debe que el Archivo dependiera del Tribunal Nacional de Cuentas (actual Contraloría General de la República). Fue Director Nacional de la Oficina de Crédito Público (1904) y luego volvió a ocupar la dirección del ANB (1904 a 1909). Coleccionó poco más de 500 manuscritos de altísimo valor para la historia, que se conoce como “Colección Rück”, formada sobre la base de la que hizo el bibliófilo S. Velasco Flor*, adquirida a sus herederos por Rück. Comprende documentos para la historia de Bolivia y América Hispana desde 1560 (Fragmento del libro Fundición de barras de plata, firmado por Fernando de Ibarra, Antonio Ramírez y Juan de Herrera Villalobos) hasta 1897 (Potosí. Miscelánea de apuntaciones históricas estadísticas y mineras, informe de don Federico Moltes relativos al cerro; Descripción del mineral de San Miguel de Aullagas, por Jáuregui). De ella forman parte 33 volúmenes de los Libros de Acuerdos del Cabildo de Potosí (1585-1817), los únicos que se han salvado de todo el archivo del Cabildo de la Villa Imperial de Potosí, que tienen incalculable interés no sólo para la historia de Potosí y de Bolivia, sino América hispana toda, precisamente

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por la importancia que tuvo la Villa Imperial en la Colonia. Obras hoy clásicas, forman esa colección: Antonio López de Quiroga. Información de sus méritos y servicios (12.1.1690); Anales de la Villa Imperial de Potosí, 1545-1763 de Martínez Arzáns y Vela; Libro de la Mita de Potosí, 1736-1754; Descripción de la Villa de Potosí y de los partidos sujetos a su Intendencia de Juan Pino Manrique (1787); Guía Histórica, Geográfica, Física, Política y Legal del Gobierno e Intendencia de la Provincia de Potosí, de Pedro Vicente Cañete (1787); Expediente curiosísimo, ilustrado con siete láminas iluminadas, de Judas Tadeo Andrade en Cochabamba (1791); Proyecto político de reforma en el Gobierno de España de Victoriano de Villaba (1797); Informe sobre la pacificación de los indios rebeldes del Gobernador Francisco de Viedma al Virrey de La Plata (1800); Arte de los metales en que se enseña el beneficio de los de oro y plata por azogue por el Licenciado Álvaro Alonso Barba (1804); Revisita, numeración y empadronamiento de Indios, en San Pedro de Atacama, por el Juez Real Pedro Antonio de Gurruchaga (1804); Nuevo Plan de Gobierno para las reducciones de Indios Chiriguanos y Chaneses por Francisco de Viedma (1807); Decreto de la Junta Provincial Gubernativa de las Provincias Unidas del Río de la Plata, a nombre de D. Fernando VII, en español y quichua firmada por Domingo Mateu (1813); Orden de Castelli y Monteagudo acerca de la igualdad de los Indios, Tihuanacu, 25 de mayo de 1811; Avisos médicos populares y domésticos con la historia de todos los contagios y su preservación por el Dr. Antonio Pérez de Escóbar (1818); Diario del Dr. José María Bozo sobre la descripción de plantas indígenas y de varias expediciones a las provincias de La Paz (1828); Album de Melchor María Mercado, libro muy curioso y de mucho interés etnográfico, con 122 ilustraciones a la aguada, casi todas de 1859; el Diario Histórico de todos los sucesos ocurridos en las provincias de Sicasica y Ayopaya durante la Guerra de la Independencia Americana desde el año de 1814 hasta el año 1825, escrito por un comandante del partido de Mohoza, año de 1852. Este diario, único en su género en Hispanoamérica, fue escrito por José Santos Vargas*, en medio del fragor de la lucha, el olor de la pólvora y los gritos de ira y dolor de los combatientes, por un soldado apenas alfabeto, en el habla propia del pueblo y es el reflejo más crudo e intenso de la lucha de la emancipación en Charcas. De esa fuente bebió el insigne G. Mendoza*, que dio a la luz de la imprenta las obras de Melchor María Mercado, Judas Tadeo Andrade y la versión trunca del Diario de Santos Vargas (18161821), publicado por la Universidad de San Francisco Xavier (1952), posteriormente la versión completa (1814-1825), adquirida por el Gobierno en 1963, fue editada por Siglo XXI de México (1982), siendo hoy una obra clásica en el tema de la Guerra de la Independencia, que nos acerca al alma misma del pueblo en uno de los momentos más álgidos de su historia. En 1898, Rück remitió el catálogo de su valiosa colección a Lima, donde fue impreso, que llamó la atención del gobierno del Perú, señalando que “esta copiosa e importantísima colección podría ser adquirida por el Gobierno del Perú, para reforzar considerablemente la documentación que existe ya en el Archivo Nacional, pues la conseguiría a un precio relativamente barato, porque el señor Rück la ofrece en venta por la reducida suma de L. 3.000” (Boletín Bibliográfico, Año 14, julio 15 de 1901). Felizmente para Bolivia, la colección fue adquirida por el Gobierno de la Sra. Carlota Uriburu viuda de Rück y entregada a la Dirección de la Biblioteca Nacional, a cargo de Jorge Mendieta, bajo acta de 3 de octubre de 1913. El Acta es reveladora, pues muestra que la entrega se hizo sobre la base de 9 catálogos, incluyendo el que mandó imprimir el propio Rück (del que faltaron 127 manuscritos y 31 estaban truncos), y “un sobrante de gran significación que no figura en ninguno

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de los catálogos entredichos”: 170 manuscritos incompletos y sin año, tres amarros de documentos impresos y manuscritos, 105 mapas, planos, cuadros y oleografías, 148 volúmenes europeos (la mayoría alemanas), 9 volúmenes americanos y 12 volúmenes bolivianos, todos empastados; y un verdadero tesoro documental de 8447 piezas: 4302 bolivianas, 855 americanas, 2843 europeas (la mayoría alemanas). Publicaciones archivísticas: Boletín del Archivo Nacional (1886-1889); Biblioteca de Ernesto O. Rück. Catálogo. Bolivia, Sucre, capital de la República. Lima, Imprenta y encuadernación de Gmo. Stolte, 1898: 66. Fuente: Arze Aguirre, 1996; Barnadas, 2002: II, 791-792; Biblioteca Nacional, 1913; Mendoza Loza, 1961: 26-31; Rück, 1898: 66.

RUIZ CALBIMONTES, JORGE

(Sucre, 16 de marzo de 1924. † Cochabamba, 24 de julio de 2012) Cineasta. Estudió Agronomía, en Casilda, Rosario (Argentina), profesión que no ejerció, dedicando su esfuerzo de vida al cine, en el que descolló como verdadero pionero al haber realizado la primera película sonora del país, Virgen india (1949), la primera a colores, Donde nació un imperio (1950), la primera secuencia con sonido sincronizado, Bolivia busca la verdad (1950), que es a la vez el primer audiovisual con copias en aymara y quechua para su difusión en el mundo rural; la primera película antropológica -y su obra cumbre- premiada internacionalmente, Vuelve Sebastiana (1953), el primer largometraje del cine sonoro boliviano (La Vertiente, 1958) y documentó El clamor del silencio (1979), “aquel minuto sin ruido al cumplirse 100 años de la pérdida del litoral”, a causa de una guerra de ocupación, sin declaratoria, que llevó adelante Chile en 1879, por el cual Bolivia perdió su acceso soberano al Litoral del Pacífico. Su primer cortometraje fue Viaje al Beni (1947), región por entonces ignota y de difícil acceso. Trabajó en la Distribuidora Bolivian Films, con Augusto Roca, su amigo de toda la vida (1948); fundó Telecine con G. Sánchez de Lozada* (1954), fue director técnico del Instituto Cinematográfico Boliviano (1956-1964) y fundó su productora Cine y Video (1980). Su carrera como realizador fue intenso y productivo con más de cien obras; filmó en Bolivia, Ecuador, Chile, Argentina, Perú y Guatemala. Solicitó a la Cinemateca Boliviana* la custodia de su archivo fílmico, entidad que conserva casi la totalidad de las películas que realizó. Por Vuelve Sebastiana, se lo reconoce como el “padre del cine indigenista andino”, por la cual obtuvo el Gran premio del Festival del Sodre (Montevideo, Uruguay), el primer galardón internacional conferido a un cineasta boliviano. En Bolivia el Conacine condecoró al cineasta por sus aportes al cine. Fue distinguido con el Premio Nacional de Cultura (2001) y en 2003, el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, España, realizó un homenaje a su obra cinematográfica. Su vida y obra fue analizada en su biografía escrita por José Antonio Valdivia en Testigo de la realidad. Fuente: La Prensa, 2012; La Razón, 2012; Página Siete, 2012a.

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S SAAVEDRA MALLEA, BAUTISTA

(Sorata, La Paz, 30 de agosto de 1870. † Santiago de Chile, 1 de mayo de 1939) Hizo sus estudios en el Colegio San Calixto, La Paz. Abogado (UMSA), escritor, catedrático de Derecho, Presidente de la República (1920-1925). Como periodista, fue redactor de El Telégrafo. En 1903 se desempeñó como funcionario de la Sección de Límites del Ministerio de Relaciones Exteriores. El año siguiente fue enviado a estudiar en los archivos de España, información relativa a Bolivia, trabajo que le ocupó dos años, al cabo de los cuales regresó a Bolivia con valiosos documentos que fueron empleados para la defensa nacional en sus diferendos limítrofes. Trabajó de manera ardua en el Archivo General de Indias* de Sevilla y Simancas, la Biblioteca Nacional y el Depósito Hidrográfico, con 14 escribientes a su cargo. Un ejemplo es elocuente: el cedulario de Charcas (1563-1734), compuesto en 24 volúmenes, requería más de 4 meses. Su plan de trabajo fue dividido en seis partes: 1) Obispado y Audiencia de Cusco (1535-1814), 2) Región de los Chunchos, hasta 1810, 3) Misiones de Cajamarquilla y Uyacalí, 4) Misiones de Apolobamba y Toromonas, hasta 1810, 5) Audiencia de Charcas, hasta 1810, 6) Régimen de Intendencias en el Virreinato del Perú. El resultado se tradujo en el Alegato boliviano: Defensa de los derechos de Bolivia ante el Gobierno Argentino, en el litigio de fronteras con el Perú, que publicó en 1906, con el título Defensa de los derechos de Bolivia ante el gobierno argentino en el litigio de fronteras con la república del Perú (dos tomos), en el que publica documentos de importancia histórica. Desde España remitió a Bolivia el mayor caudal recolectado sobre los límites fronterizos de Bolivia con el Perú. Fue Ministro de Instrucción en 1907; Ministro Plenipotenciario en Lima (1912-1913). A su retorno al país fue elegido Senador por La Paz (1914) y Diputado por Potosí (1918). Presidente de la República en 1920 mediante golpe de Estado, luego elegido constitucionalmente por la convención de 1921. Tuvo el mérito de organizar los festejos del primer centenario de la fundación de la República. El 15 de noviembre de 1923 dictó el Decreto que instruye “el establecimiento de una sección con el nombre de Biblioteca y Archivo en los Ministerios de Estado, que se ocupe de la adquisición, catalogación y custodia de libros, folletos y documentos, servida por uno o más funcionarios que se entenderán con la ordenación y la clasificación cuidadosa de todas las publicaciones, expedientes, oficios, cartas, etc.”. Con esta orden se dio un paso fundamental en la organización de los recursos documentales de la Nación, pues por primera vez en la historia se

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aplica una política que considera como recursos documentales, tanto a los materiales bibliográficos como archivísticos. Es autor de El ayllu. Estudios sociológicos sobre América (1914); La democracia en nuestra historia (1917); La Aurora de la Independencia Hispanoamericana (La Paz, Fundación Manuel Vicente Ballivián, 1977). Fuente: Alarcón, 1925: 406; Arze, 1984: 132; Oporto, 2006: 158-159; Siles Guevara, 1970a: 1, 4.

SÁENZ, MANUELITA

(Quito, Ecuador diciembre de 1795; o 1797. † Paita, Perú, 23 de noviembre de 1856) De acuerdo a Galo René Pérez habría nacido en diciembre de 1795, aunque no existe prueba documental. Pasó a la historia como “La Libertadora del Libertador” Simón Bolívar*, debido a que le salvó la vida en varias ocasiones. Fue hija ilegítima del español Simón Sáenz de Vergara (Regidor del Cabildo de Quito) y la dama criolla Doña Joaquina Aizpurru. Fue educada por las monjas de los monasterios de la Concepción y Santa Catalina, donde aprendió las primeras letras. Adquirió notable destreza con el caballo en la hacienda materna de Catahuango (cerca de Quito), convirtiéndose en experta amazona. En 1817 se casó con James Thorne. Es la primera archivera latinoamericana, cuya existencia fascinante, ha inspirado a escritores y poetas de Ecuador, Colombia, Perú, Chile, Cuba, Venezuela, Argentina, México y los Estados Unidos, plasmada en extensa bibliografía (seis biografías, ocho novelas, dos obras de teatro, dos guiones de cine, cerca de una docena de poemas, tres estudios de su correspondencia, dos largometrajes cinematográficos, una serie televisiva, artículos periodísticos y ensayos de carácter histórico). Entre 1817 y 1822, espía para la causa de la independencia americana, junto a la guayaquileña Rosita Campusano. En 1822 retorna a Quito, viaje que coincide con la batalla del Pichincha que sella la independencia del Ecuador, el 24 de mayo. Conoce a Simón Bolívar el 16 de junio en el baile de la victoria, y se mantendrán unidos hasta la muerte de Bolívar en 1830. En septiembre de 1823 sofoca un levantamiento contra Bolívar en Quito, vistiendo por primera vez el uniforme militar. Las historias que sobre ella se han escrito afirman que “maneja la espada y la pistola, usa bigote postizo, se perfuma con agua de verbena y fuma cachimba, incluso delante de Bolívar, quien no permitía que nadie fumara en su presencia”. Separada de su marido, regresa a Lima incorporándose al Ejército con el grado de húsar, ocasión en la que se le encarga manejar el Archivo Secreto del Libertador. El 6 de agosto de 1824 participa en la batalla de Junín (con Bolívar), siendo ascendida a capitán de húsares; en la Batalla de Ayacucho, el 9 de diciembre de 1824 (junto a Sucre), es ascendida a coronel del Ejército colombiano. “En su tragedia gloriosa, Manuela acude, bella, como era, presta a la lucha, con vituallas y mulas, a exponer su propia vida, e incluso con un lápiz y un papel para describir el suceso épico en el mismo campo de batalla”, como afirma Marcelo Larrea, parafraseando a Tania Roura. Bolívar la convoca para viajar a la República que tomó su nombre, Bolívar, en agosto de 1825. A su retorno a Lima es expulsada del Perú, luego de fracasar en su intento de sofocar un levantamiento contra Bolívar en 1827, quien combatía contra la rebelión de José Antonio Páez en Venezuela. En 1828 llega a Bogotá, pero Santander la destierra en 1834 a Jamaica. Paralítica y confinada a un sillón, vive en Paita en la pobreza, elabora dulces, borda y vende tabaco, que le genera magros

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recursos. Muere el 23 de noviembre de 1856, contagiada de difteria. Para evitar la expansión de la epidemia, el gobierno ordena la incineración de sus pertenencias y es enterrada en una fosa común. Ante esta lamentable situación, el General Antonio de la Guerra, interviene y logra salvar el cofre que contenía su correspondencia con Bolívar y otros papeles. Mucha documentación ha desaparecido, como despareció el cementerio donde reposaban sus huesos; otra parte fue entregada al gobierno de Colombia y hoy se custodia en museos, centros de investigación histórica, bibliotecas y colecciones privadas. Fuente: Bruzzone, 2006; Larrea, sf.; Navarro, sf.

SAIGNES, THIERRY

(Francia, 1946. † Coroico, La Paz, 1992) Doctor en Historia (París, Francia). Fue Director del Consejo de Ciencia y Tecnología de Francia y Vicepresidente de la Sociedad de Americanistas de París (Francia). Apasionado investigador del pasado prehispánico de Bolivia, empezó su prolífica obra con su tesis de doctor, Une “frontière fossile”: la cordilière chiriguano au XVIIIe siècle. Contribution à l’étude des rapports entre Indiens et Espagnols dans une bordure coloniale de l’Amérique ibérique. Luego vino, Caciques, tribute and migration in the Southern Andes: Indian society and the 17th century colonial order: Audiencia de Charcas (London, Institute of Latin American Studies, 1985); y sus importantísimos aportes sobre los Andes y el mundo chiriguano: Los Andes Orientales: Historia de un olvido (La Paz, CERES-IFEA, 1985); En busca del poblamiento étnico de los Andes bolivianos. siglos XV y XVI (La Paz, Museo Nacional de Etnografía y Folklore, 1986); Ava y karai: ensayos sobre la frontera chiriguano, siglos XVI-XX (La Paz, Hisbol, 1990); Borrachera y memoria: la experiencia de lo sagrado en los Andes, con Carmen Salazar-Soler (La Paz, Hisbol, 1993); Historia del pueblo chiriguano, con Isabelle Combés (Lima, Instituto Francés de Estudios Andinos, 2007). Su faceta archivística es igualmente importante. En su labor investigativa encontró documentos de alto valor para la historia de la minería en Bolivia y levantó inventarios e índices de archivos bolivianos. Fue impulsor de los estudios etnohistóricos en los Andes. En la década de los 80, encontró un valioso manuscrito en el Archivo del Duque del Infantado (Madrid). Se trataba del curioso diccionario sobre terminología minera del siglo XVII, redactado por el minero García de Llanos, cuyo contenido es revelador sobre la forma de trabajo minero en la época colonial. Saignes entregó este manuscrito al Musef*, institución que lo publicó con un estudio introductorio de G. Mendoza*. En 1986 anunció el descubrimiento de un nuevo escrito de Luis Capoche, “cuatro siglos después de la Relación General de Potosí (1585) en la forma de “discursos de las cosas más ymportantes y necessarias al gobierno de la villa ynmperial de potossi… donde se trata el origen de las capitanías que asisten en esta villa…”, dirigido al Excmo. Señor don Juan de Mendoza y Luna, Marqués de Montesclaros, fechado el 1 de marzo de 1610, en el mismo Archivo donde encontró la obra de Llanos. Saignes destaca el “hondo sentimiento (casi lascasiano) de justicia y de buen gobierno que anima al autor: si se perjudica a la república de indios”. Publicaciones archivísticas: “El Fondo colonial de la Prefectura de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1976, 1 (2): 1-5); “El archivo franciscano de Tarija. Inventario de Manuscritos” (Boletín del Archivo de La Paz, 1977, 1 (3): 15-29; Tb. en Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la

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iglesia en Bolivia (una guía preliminar). La Paz: cehila-ceprolai, 1984: 142-145); “El fondo colonial de los notarios de Larecaja” (Boletín del Archivo de La Paz, 1979, 4 (6): 20-24); García de Llanos, Diccionario y maneras de hablar que se usan en las minas y sus labores en los ingenios y beneficios de los metales. Con un estudio de Gunnar Mendoza y un comentario de Thierry Saignes. La Paz, MUSEF, (1609), 1983 (Serie Fuentes Primarias No. 1); “Cuatro siglos después de la “Relación General de Potosí”, se descubre un nuevo texto de Capoche” (Presencia dominical, La Paz, 30 de marzo de 1986: 11). Fuente: Platt, et al., 1993.

SALAMANCA UREY, DANIEL

(Cochabamba, 7 de julio de 1883.† Cochabamba, 17 de julio de 1935) Abogado y político. Ministro de Hacienda e Industria del gobierno de J.M. Pando* (1903-1904). Fue elegido Presidente Constitucional por el Congreso Nacional de 1931. Durante su mandato se produjo la Guerra del Chaco (1932-1935), que enfrentó a los pueblos boliviano y paraguayo. Detrás del conflicto empresas petroleras, como la Estándar Oil Co., movían sus fichas para defender sus intereses. El Presidente Salamanca era partidario de “pisar fuerte en el Chaco” -acuñado por J. Mendoza* con fines pacíficos para asentar la presencia efectiva de Bolivia en el Chaco-, afirmaba que “debemos defender el Chaco porque es nuestro, y es el patrimonio que nos legaron nuestros mayores (…) para nuestros hijos, para nuestros nietos, para la Bolivia de siempre!” Siguió los acontecimientos con riguroso cuidado y marchó al frente a imponer su criterio. Al informarse del “resultado de la batalla de El Carmen, intentó reemplazar al comandante del ejército boliviano, general Peñaranda*, pero fue derrocado por un golpe militar liderado por éste oficial”, en el episodio conocido como el “Corralito de Villamontes”, sede del Comando Superior de Ejército en Campaña, el 23 de noviembre de 1934. Acusado por historiadores y militares del desastre de la campaña, Salamanca “reunió en su Archivo personal la documentación relativa la curso de los acontecimientos políticos, militares y diplomáticos de la Guerra del Chaco”, con la intención de escribir sus Memorias, dejando “algunos borradores relacionados principalmente con el episodio de Laguna Chuquisaca” que desencadenó el conflicto. Posteriormente, Raquel Salamanca de Gumucio, entregó el Archivo conformado por manuscritos originales, correspondencia privada y diplomática de la Guerra del Chaco y la política internacional boliviana (1912-1982), y ensayos inéditos, al historiador E. Arze Quiroga*, quien lo organizó y publicó en 1951 “en forma parcial y con criterio simplemente selectivo, los documentos principales, (…) para hacer con probidad y verdad, la Historia de la Guerra del Chaco”, Documentos para una historia de la Guerra del Chaco, en cuatro tomos. A la postre, el Archivo de Daniel Salamanca fue depositado en el Centro Bibliográfico Histórico “Joaquín Espada”, que sostiene el periódico Los Tiempos de Cochabamba. Fuente: Arze Quiroga, 1951-1974; http://es.wikipedia.org (15.9.11).

SALAZAR, EVA Responsable de los documentos de la antigua Corporación de Desarrollo Regional de Cochabamba, que se hallaban en inmediaciones de una usina eléctrica, en estado

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de precariedad y deterioro notables. Una parte de ese fondo fue destruido por un incendio durante la llamada “Guerra del Agua” (abril de 2002). Posteriormente fueron recuperados con motivo de la creación del Archivo Histórico Departamental de Cochabamba. Fuente: Núñez, 2004: 14-16.

SALAZAR CACHI, LADISLAO RENÉ (La Paz, 27 de junio de 1966)

Estudió la Carrera de Historia* en la UMSA. Miembro de la Asociación de Historiadores Indígenas “Apu Pachakamayu” (2006). Es coautor del Módulo Análisis y Reflexión Histórica para el curso preuniversitario de la Carrera de Historia de la UMSA (2001). Tiene amplia experiencia en trabajos de campo en el área rural de La Paz (19861991), Pastoral Juvenil (1996-1999) y Educación Alternativa (1999-2001). Trabajó como investigador en la Nación Uru para el THOA (2003) y fue parte del Mecanismo de Control Social en la Región Norte de Potosí (2003). Participó del Congreso Departamental de Trabajadores de la Información “Alberto Crespo Rodas”* (La Paz, 1996); en el Seminario Internacional de Archivos Sonoros (2005) y en el Seminario La Museología y las Unidades de Información Documental (2006). Fue responsable de Registro y Control de Correspondencia y Organización del Archivo de la Comisión Episcopal de Laicos y Juventud de la Conferencia Episcopal de Bolivia (1986-1994), asistente en el proyecto de organización del Archivo del Ex-Banco del Estado (19951996); consultor en clasificación, ordenamiento y catalogación de documentos de la División Sumarios, 1979-2000, de la Oficina de Ética de la Aduana Nacional de Bolivia (2002); técnico del Archivo de La Paz* (2001); consultor para la organización, ordenamiento e inventariación de documentos del Ex BANEST, 1992-1999 de ECA– Aparicio Asociados (2001–2002). El 2003 se incorporó como auxiliar de Archivo al Museo Nacional de Etnografía y Folklore*. Actualmente es responsable del Archivo Central. Publicó últimamente un artículo referido a este centro de archivo: “El Archivo Central y los cincuenta años del MUSEF” (Revista cultural, fcbcb, 16 (76): 29-33). Fuente: CV.

SALAZAR ZELAYA, ALBERTO (Oruro, 22 de noviembre de 1942)

A los 21 años de edad ingresó a trabajar en el Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral, siendo designado en 1963, Auxiliar de Gabinete del Ministro. A partir de 1964 pasó a cumplir funciones en la División de Archivo e Informaciones, desempeñando primero el cargo de Auxiliar, luego Ayudante, Secretario y, en marzo de 1980, Jefe del Departamento de Trámite Documentario y Archivo. En lo que toca a su formación y capacitación en técnicas de archivo, participó en el Curso de Técnicas de Archivo y Microfilmación organizado por el Centro de Adiestramiento de la Casa Kavlin S. A. y Kodak (1975), dentro de su programa de capacitación para el uso de equipos de microfilmación; en el Curso sobre Archivos y Documentos Públicos (1976); Curso de Introducción a la Documentación, organizado en Cochabamba,

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por el Centro Pedagógico y Cultural de Portales (1986). Finalmente, participó en el Curso de Sistemas Documentales Computarizados, organizado por la Asociación Multidisciplinaria de Profesionales (1989). En mérito a su formación y experiencia, formó parte del staff de profesores del Curso de Manejo y Administración de Oficinas, contemplado en el Subprograma de Fortalecimiento de la Estructura Administrativa del Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral, a cargo de la Oficina Sectorial de Análisis Administrativo y la Dirección Sectorial de Planificación de ese Ministerio, con la materia Manejo de Archivos (1985). En esa oportunidad, fue felicitado “por su valiosa colaboración en el desarrollo del curso con la seguridad de que su aporte sirvió para mejorar la eficiencia y eficacia de los funcionarios participantes”, en oficio suscrito por el Dr. Gabriel Porcel Salazar, Ministro de Trabajo y Desarrollo Laboral. Finalmente, podemos indicar que el trabajo de este meritorio funcionario, fue reconocido por el Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral el 17 de mayo de 1990, que le confirió el Diploma de Reconocimiento “En mérito a 26 años de eficiente labor al servicio del país, como funcionario de ese Portafolio de Estado”, suscrito por el Ministro y el Subsecretario de Trabajo, Dr. Eusebio Gironda. Fuente: Oporto, 1993: 12-14.

SALINAS FERRUFINO, MARIANELLA (La Paz, 20 de mayo de 1964)

Licenciada en Informática (UMSA). Cursó el Diplomado en Educación Superior (UMSA). También hizo el curso de Auditor Interno de la Calidad ISO 9001:2000 para la implementación de Sistemas de Gestión de la Calidad. Participa en congresos y reuniones especializadas, tanto en Bibliotecología como Archivística, destacando el Curso para el manejo a nivel de usuario del Sistema Integrado para la Gestión de Centros Archivísticos Albalá (2007), primer Encuentro de Información para el Cambio Ciudadano (2008), seminario Internacional sobre la Destrucción Documental (2008), V Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2009), y el Taller de conservación y curación del libro (2009). Formó, con Teresa Zelaya, la Empresa Servicios de Información Consultores Zelaya-Salinas y Asociados (1993), con la que realizó consultorías para la organización del Archivo Central del Ministerio sin Cartera, responsable de Capitalización (1996); diseño del Sistema Integrado de Archivo de la Empresa Eléctrica Valle Hermoso-Cochabamba (1997); Sistema de Inventariación del Archivo de la Empresa Nacional de Electricidad ENDE-Cochabamba (1997); Organización y Automatización del Archivo de Proyectos del Fondo de Inversión Social (1998-1999); Análisis, Clasificación y Ordenamiento de Leyes y Decretos, 1960-1999, para el Ministerio de Justicia y DDHH (1999); Diagnóstico de la Situación de Archivos del Defensor del Pueblo (2004); Diseño y Organización del Sistema de Archivos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional FNDR (2005); Diseño y Organización del Sistema de Archivos Físicos y Electrónicos de Conservación Internacional-Bolivia (2005-2006). Fue también consultora de archivo, contratada por el Banco Interamericano de Desarrollo para el Proyecto de Fortalecimiento Institucional del Ministerio de Desarrollo Sostenible y Planificación (2001-2004) y para el Proyecto Escudo Epidemiológico del Ministerio de Salud y Deportes

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(2007). Disuelta la sociedad Zelaya-Salinas (2007), pasó a ejercer como Consultora Individual de Línea en la Gestión Documental y Administración del Archivo del Banco Central de Bolivia*. Posteriormente fue contratada para la implementación del Proyecto de Gestión Integrada de los Documentos del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2011), y de ahí, pasó a desempeñar funciones en el Archivo de la Cooperativa de Teléfonos de La Paz. Es autora de “Situación actual de las Unidades de Información en Bolivia” (La Razón, 1998); Coautora del Manual de Técnicas de Procesamiento Documental SISTEMA SOL (La Paz, Secretaría Nacional del Convenio Andrés Bello-Ministerio de Educación y Cultura, 1991); y de “Servicios de Información, Consultores. Experiencia de trabajo”, con Teresa Zelaya (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2003, Nº 13: 33-43). Fuente: CV.

SALINAS JARDÍN, MARIO (Potosí)

Ingeniero de minas. Gerente de la Empresa Minera Unificada. Ordenó el traslado de documentos de data antigua de la Empresa a la antigua pulpería Velarde. No se conoce el origen del fuego que destruyó la documentación, lo evidente es que los documentos se constituyeron en factor de expansión del fuego. La memoria minera de Potosí ardió por tres días consecutivos. Nunca se ordenó una investigación oficial sobre este trágico suceso. Ninguna institución se pronunció al respecto. Fuente: El Potosí, 2004.

SALINAS MARIACA, RAMÓN (La Paz, 31 de julio de 1902)

Abogado y escritor. Autor de la Compilación de Códigos bolivianos (tres ediciones, 1946, 1954 y 1955), Las constituciones de Bolivia (1947), Código de Justicia Militar (1948) y en la vena histórica, Viva Belzu. Compendio de la vida y obra de este gran caudillo (La Paz, Ediciones Abaroa, 1974) y Vida y muerte de José Manuel Pando (La Paz, Biblioteca Popular Ultima Hora, 1978). Coleccionó un valioso archivo de 7.006 documentos coloniales (1559: expediente seguido por Hernán Gómez de Herrera contra Alonzo de Arteaga por las cuentas de la correduría de la Villa de La Plata) y de los primeros años de la república (1838: documentos del Ejército del Sur de la Confederación al mando del General Felipe Braun, relativo al servicio en general de dicho ejército). La colección conforma tres cuerpos: el primero, referido a la administración colonial y la guerra de la independencia; el segundo, a la campaña del Gral. A.J. de Sucre*, General en Jefe del Ejército Unido Libertador, contra el General Pedro Antonio de Olañeta; y documentos relativos a la guerra entre Bolivia y la República Argentina, 1836-1837. Levantó un Catálogo de Documentos Coloniales y de los primeros años de la República de Bolivia (inédito). Fuente: Costa de la Torre, 1968: 946.

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SALINAS VEGA, LUIS

(La Paz, 1856.† La Paz, 1916) Político y periodista. Estudió Derecho en la Universidad de Chile. Fue portador, junto a GR. Moreno*, de las “bases chilenas” en el que Chile proponía un arreglo con Bolivia a espaldas del Perú. Fue acérrimo enemigo político de N. Campero*. Fundó “La Patria” (1880), “La Nación” (1890), dirigió “El Comercio de Bolivia” (1902-1905). Fue Secretario de A. Arce Ruiz* en su misión de Ministro Plenipotenciario y Enviado Especial a España, con el objetivo de investigar en el Archivo General de Indias* de Sevilla la ubicación de 192 documentos esenciales para la defensa de los límites de Bolivia. Salinas se encargó de buscar los documentos y supervigilar la tarea de los copistas. Estudió los documentos referidos a los límites con el Paraguay, tropezando con dificultades por su desconocimiento de la paleografía, que le impedía leer los documentos del siglo XVI: “a pesar de mi buena voluntad. Estos documentos tienen signos, abreviaciones y palabras que hay que conocer”, confiesa, en su informe de 11 de enero de 1887. Ya como Encargado de Negocios en España y Francia, marcha a París, donde instala un centro de acopio de la documentación. Deja en Madrid cuatro copistas y contrata al investigador Rodríguez Villa y luego al erudito Marcos Jiménez de la Espada, para guiar la investigación, a los que se suman los copistas Francisco Delgado y Pedro Torres Lanza. Regresó a Madrid en 1888 para estudiar, por dos meses, los límites con el Paraguay y Argentina, pasa a Alcalá de Henares y Simancas. Dejó al Secretario de la Legación, Néstor Rojas, la copia de los nuevos documentos y retornó a París. Envió, en enero de 1888, tres cajones, antecedidos por el Catálogo de los documentos referentes a Bolivia. Audiencias de Charcas, Lima, Cusco y Buenos Aires y Virreynatos del Perú y La Plata. Encontrados en los diversos archivos de España (Manuscrito). A su retorno a La Paz, M.V. Ballivián* publicó el catálogo de documentos que formó Salinas (Catálogo general de Archivos, o sea documentos relativos a Bolivia encontrados en el Archivo General de Indias y en el de la Real Academia de la Historia. La Paz, Edición oficial de Ministerio de Relaciones Exteriores, 1889), ponderando su labor, afirmó que: “ha logrado encontrar documentos de alta importancia, pues a la petición original de 192 documentos indicados por la Cancillería Boliviana, la prolijidad de Salinas Vega ha añadido más de 500 documentos [en los cuales] se encuentran copias de Tratados, Capitulaciones de conquistadores, Reales Cédulas, Visitas, Descripciones geográficas, Probanzas de méritos, Cartas de Audiencia, Fundación de ciudades y asientos mineros, legajos de las Audiencias de Charcas, Lima, Cusco y Buenos Aires, Patronato e Indiferente General, del Archivo de Indias; y a la Colección de Mata Linares y Papeles de Jesuitas de la Real Academia de la Historia y hasta documentos del Archivo de Simancas, además de 40 planos y mapas de las regiones orientales del país”. Fue Ministro Plenipotenciario en Brasil, hacia 1899, y actúa en el incidente separatista del Acre, provocado por el filibusterio Luis de Gálvez. Fuente: Ballivián, 1889: II; Barnadas, 2002: II, 823; Siles Guevara, 1970; http://www.historia. ibolivia. (20.3.12)

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SAMSON, ROBERTO VON (Alemán)

Ingeniero de minas. Organizó el Archivo de Catastro Minero, que custodiaba y administraba el Servicio de los Planos Mineros de las concesiones de yacimientos mineralógicos a nivel nacional. El Archivo de Planos Mineros dependía de la Dirección General de Minas, y era la única institución responsable del levantamiento de planos mineros y su catastro. En 1926, la Asociación de Industriales Mineros, impuso a uno de sus técnicos de origen alemán, lo que provocó la airada reacción de los ingenieros Néstor Thenier y Ernesto Prado, quienes lanzaron graves cargos a la Asociación, exigiendo que el Archivo sea administrado por un ingeniero boliviano, además señalando que “quien ha de recoger los lauros que legítimamente le corresponde es el ingeniero Samson”. Fuente: El Diario, 11.12.1926; La Razón, 7.12.1926.

SANABRIA FERNÁNDEZ, HERNANDO

(Vallegrande, Santa Cruz, 14 de diciembre de 1909*. † Santa Cruz de la Sierra, 10 de agosto de 1986) Estudió en el Colegio Junín (Santa Cruz) y la Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca. Abogado, escritor, historiador, bibliógrafo, papelista y periodista. Fue profesor de secundaria en las asignaturas de Geografía (Colegio Nacional Florida); Profesor de Historia y director en colegios secundarios; Director General de Educación. Combatió en la guerra del Chaco, donde fue herido en acción, por lo que se le condecoró. Publicó 50 libros y más de 250 artículos, ensayos y otros. Estudió temas referidos a manifestaciones culturales (El habla popular de Santa Cruz, Cancionero popular de Vallegrande, Música popular de Santa Cruz); historia (Cronistas cruceños del Alto Perú Virreinal, Breve Historia de Santa Cruz, En Busca de El Dorado, Crónica Sumaria de los Gobernadores de Santa Cruz); biografía (Apiaguaiqui-Tumpa, biografía del pueblo chiriguano; Ñuflo de Chávez, El caballero andante de la selva; Cañoto, un cantor del pueblo en guerra heroica; La ondulante vida de Tristán Roca); cultivó la narrativa (Tradiciones, leyendas y casos de Santa Cruz de la Sierra; La muña ha vuelto a florecer); y la poesía (Figuras de antaño; Poemas provincianos). En la Universidad Gabriel René Moreno fue Vicerrector, catedrático de Sociología y Director de la Biblioteca Central. También enseñó Historia del Arte en la Escuela de Bellas Artes. Fue Consejero Cultural en la embajada de Bolivia en España, miembro del Comité de intereses Pro Santa Cruz, Casa de la Cultura “Otero Reiche”, Academia Boliviana de la Historia, Academia Boliviana de la Lengua, Fundación Ramón Darío Gutiérrez y primer presidente de la Academia Cruceña de Letras. Su faceta archivística es singular. Fue el padre de la archivística cruceña. En los años ’70, revisando los papeles del archivo prefectural, encontró una agenda personal del Dr. Tristán Roca, prefecto del departamento en 1864, quien mediante Decreto Prefectural de 24 de julio, instauró la bandera cruceña que flameó por primera vez durante un movimiento social contra el gobierno del Gral. Mariano Melgarejo, quien ordenó su persecución y muerte. La enseña cruceña fue escondida entre los archivos de la Prefectura junto a la agenda del prefecto Roca, quien había anotado en ella la dramática historia del emblema cruceño. Esa información fue utilizada para reivindicar el uso de la enseña departamental, que volvió a flamear el 24 de julio de 1981, durante una movilización cívica contra el dictador L. García Meza* en Puerto Suárez. El 11 de noviembre fue izada oficialmente

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junto a la bandera nacional en el patio de banderas del ente cívico que declaró al 24 de julio “Día de la bandera cruceña”. Aquel viejo archivo prefectural fue la base para la creación del Archivo Histórico Departamental de Santa Cruz. Por otro lado, como resultado de sus investigaciones y su amplia trayectoria, Sanabria acumuló un archivo personal muy valioso, conformado por manuscritos, fotografías, pergaminos, medallas, diplomas y todo aquello que refleja su personalidad polifacética, entre ellos un viejo cuaderno de escuela con hojas rayadas y una caligrafía perfecta (“Recitaciones 5º grado de la Escuela Fiscal de Niños de Vallegrande. Año 1921”) y una biblioteca privada con unos 7.000 volúmenes que fue comprada por la Biblioteca Municipal el 2001. Fue condecorado con más de una docena de medallas entre ellas la Medalla de Cultura impuesta por el presiente L. A. Siles Salinas* en 1969, y fue acreedor de más de dos docenas de preseas, entre ellas la Condecoración con la Orden de Gabriel René Moreno, en el Grado de Mérito Extraordinario, por sus servicios a la Universidad y la Cultura cruceña, otorgada en 1979. Fue distinguido con la Medalla Nacional de Cultura, Orden Boliviana de la Educación, Orden Española del Mérito Civil. El 20 de marzo de 1986, fue condecorado con el Cóndor de los Andes en el grado de Gran Comendador, por sus valiosos aportes a la cultura y a la historia de nuestro país. Existen tres fechas que manejan los biógrafos de Sanabria: 1912 (JMB), 1913 (passim) y 1909. Marcelino Pérez, en su obra Hernando Sanabria Fernández (19091986) Inventario Bibliográfico, recurriendo a la partida de bautismo de Hernando Sanabria, afirma que “nació el 14 de diciembre de 1909 y que su nombre de pila fue Hermógenes”. La confusión -señala- se genera a raíz del pedido del propio Sanabria, en 1944, de una fe de edad en base a una prueba supletoria en la que presentó a dos personas que testificaron que él había nacido el 12 de diciembre de 1912, por la supuesta inexistencia de la partida parroquial. Publicaciones archivísticas: “Sobre el Catálogo de Moxos y Chiquitos” (La Razón, La Paz, noviembre de 1948); “Las tres partidas de bautismo de Gabriel René Moreno” (Revista de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, 1967, 27-28: 87-92); “Índice del Fondo Melgar i Montaño en la sección Manuscritos de la Biblioteca Universitaria” (Revista de la Universidad Boliviana Gabriel René Moreno, 1972, 31-32: 44-59; Id. en Marcelino Pérez Fernández. Hernando Sanabria Fernández (1909-1986). Inventario Bibliográfico. Santa Cruz, UPSA, 1995: 226); “Los Archivos de Santa Cruz” (Presencia Literaria, La Paz, 15 de febrero 1970: 1-2; Id. Boletín del Archivo de La Paz, 1977, 2 (4): 3-10; Id. en: Jhon J. TePaske: Research Guide to Andean History: Bolivia, Chili and Peru. Durham, 1981: 37-44; Marcelino Pérez Fernández. Hernando Sanabria Fernández (1909-1986). Inventario Bibliográfico. Santa Cruz, UPSA, 1995: 253-256); “Archivo Histórico de Santa Cruz, lugar donde se encuentra la memoria de nuestro pueblo” (El Deber, Santa Cruz, 1 de noviembre de 1992); “Ciencia y técnica: Relación del proyecto del Archivo de Santa Cruz” (en Marcelino Pérez Fernández. Hernando Sanabria Fernández (1909-1986). Inventario Bibliográfico. Santa Cruz, UPSA, 1995: 163-164). Fuente: Costa de la Torre: 955-956; Imaña, 2005; Quiroz, 2009; http://www.redpizarra.org (11.02.10); http://www.lahoguera.com (11.02.10).

SÁNCHEZ ARDILES, ALFONSO (Potosí, 26 de enero de 1946)

Fue encargado de la Sección Inspectores de la Compañía Boliviana de Energía Eléctrica. En su juventud destacó como Subcampeón Nacional de Billar (1969). Militó en el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). En su faceta sindical

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era miembro del Comité de Bases de Trabajadores de COBEE, en la época en que esa empresa no contaba con representantes ante la Central Obrera Boliviana (19801982). Se desempeñó como Secretario de Relaciones (1983), Secretario General (19841985), Director Laboral ante la Caja Ferroviaria, elegido en el Congreso laboral de la Confederación de Luz, Fuerza, Teléfonos, Aguas y Jubilados de Bolivia (1986-1994). Durante el gobierno de la Unión Democrática y Popular (UDP), del Dr. Hernán Siles Suazo*, intentó nacionalizar las instalaciones de COBEE en La Paz y Oruro. Entre 1995 y 1996, el consorcio español Iberdrola adquirió las instalaciones de COBEE en 65 millones de dólares (excepto las plantas de Zongo y Oruro), creando la empresa Electropaz. Sánchez, en representación de los trabajadores, denunció el incremento ilegal de tarifas por más de 5 años por esa empresa. Amparados en el Código Laboral español, los ejecutivos instruyeron su retiro junto a 90 trabajadores. Ingresó a la Corporación Minera de Bolivia en 2001, como peón de los Almacenes en la ciudad de El Alto, ocasión en la que se incorpora al naciente Archivo Histórico de la Minería Nacional. Se sumó al equipo de trabajadores que formó E. Ramírez Santiesteban*, los que protagonizaron el salvataje del Archivo de la COMIBOL en la ciudad de El Alto. Participó en los cursos de Organización de archivos, Legislación archivística e Historia de la minería. Colaboró en la construcción de estantería con materiales reciclados para facilitar el traslado de documentos a su interior. Apoyó en tareas de clasificación y ordenación de los Fondos Patiño, Hochschild y Aramayo; colaboró en la elaboración de cuadros de clasificación y el árbol de series. Pasó, como consultor en línea como especialista en instalaciones eléctricas. Colabora en el mantenimiento de los sistemas de electricidad de los tres Archivos en El Alto, Oruro y Potosí. De manera simultánea, apoya en las labores de organización de los fondos documentales del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

SÁNCHEZ DE LOZADA Y SÁNCHEZ BUSTAMANTE, GONZALO (La Paz, 1 de julio de 1930)

Político y empresario. Militante y Jefe del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR). Estudió la Carrera de Filosofía y Letras en la Universidad de Chicago, sin obtener un titulo. Retornó a Bolivia donde fue productor de cine con la empresa Telecine. Creó la Compañía Minera del Sur (COMSUR), con la que amasó una de las más grandes fortunas de Bolivia. Fue Diputado (1979), Presidente del Senado Nacional (1985-1986), Ministro de Planeamiento y Coordinación, durante el cuarto gobierno de V. Paz* (1986-1988). El Congreso de 1993 lo eligió Presidente, y a Víctor Hugo Cárdenas, intelectual aymara, Vicepresidente. Durante su primer mandato, municipalizó el territorio nacional; creó los  Territorios Comunitarios de Origen (TCO), promulgó la Ley del Instituto Nacional de Reforma Agraria, la Ley Forestal, la Ley de Reforma Educativa, el Seguro Materno Infantil, creó el Ministerio de Justicia, el Tribunal Constitucional, el Consejo de la Judicatura; y la Defensoría del Pueblo. Privatizó las Empresas Estratégicas del Estado, por la vía de la capitalización y entregó la explotación de yacimientos petrolíferos a empresas transnacionales, incorporando a Bolivia a la economía de libre mercado. Impulsó la búsqueda de los restos del Comandante Che Guevara*, a cargo de un equipo de arqueólogos cubanos-argentinos, repatriados luego

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a Cuba. Durante su segundo mandato (2002-2003), promulgó medidas económicas antipopulares, lo que provocó la movilización de las organizaciones sociales, que tomaron por asalto las principales instituciones estatales incendiándolas junto a sus archivos, y la totalidad del Archivo institucional de la Alcaldía de El Alto, reducida por fuego. Ordenó a las Fuerzas Armadas reprimir a los movimientos sociales con uso de armas letales, dejando como saldo 64 muertos y 228 heridos, en el episodio conocido como “La Guerra del Gas”, lo que provocó su renuncia y posterior huida a Estados Unidos. En Bolivia es juzgado por crímenes de lesa humanidad y aun se pide su extradición. Su aporte a la archivística ha sido esencial. Aprobó el DS 23934, de 21.7.1994, que establece el procedimiento administrativo en la atención de trámites, la formación de expedientes y los servicios, así como la creación de los Archivos de Oficina, los Archivos Centrales y Bibliotecas en los Ministerios del Poder Ejecutivo, y las transferencias de documentación inactiva desde los Archivos de Oficina a los Archivos Centrales y desde estos al Archivo Intermedio Nacional*. Otro mérito más le cabe, al haber ordenado la reglamentación de la Ley 2341, mediante la aprobación del DS 27113 (23 de julio de 2003), referido al procedimiento administrativo boliviano que regla el derecho de petición, el servicio fedatario y el régimen de la reserva de la documentación. Posteriormente, a instancias de la directora M. Inch* del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, aprobó el DS 26832 (6 de noviembre de 2002), que dispone la creación de los Archivos Presidenciales, aunque esta norma nunca entró en vigencia. Fuente: Oporto, 2007; Poder Ejecutivo, 2002; http://es.wikipedia.org (23.4.12).

SÁNCHEZ MORALES, ROLANDO

(Cochabamba, 1 de noviembre de 1939) Teniente Coronel del Arma de Ingeniería, en la especialidad de Comunicaciones. El 14 de septiembre de 1964, siendo ayudante de la IV División de Ejército en Camiri, cayó en acto de servicio en una revuelta del pueblo contra el Alcalde Ibáñez. Lo evacuaron a La Paz y de allí al Hospital Walter Reed de Estados Unidos, para su rehabilitación (1966). En su estadía en ese país, llevó el curso de Archivística y Microfilm en el Ejército de Estados Unidos de América. En enero de 1976 retornó a Bolivia. Reemplazó al Cnl. Loayza, en el cargo de Jefe del Departamento de Microfilm en el Ministerio de Defensa Nacional. En 1980 fue ascendido al grado de Teniente Coronel. En junio de 1986 presentó un informe sobre los Archivos del Ministerio de Defensa (Dirección General de Operaciones, Dirección General Territorial, Dirección General de Administración y Presupuesto y un moderno sistema de microlfilm, con el que microfotografiaron varias series, las que fueron incineradas. En 1997 se acogió a la jubilación. No obstante continuó trabajando en el Archivo de la Dirección de Territorial (documentos del servicio militar) bajo contrato hasta el 2004. El 2003, la Reunión Anual de Bibliotecología le otorgó el Diploma de Reconocimiento a su labor archivística. Publicaciones archivísticas: “Sistemas de Archivo en las diferentes direcciones y dependientes del Ministerio de Defensa Nacional” (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los Archivos de La Paz, AAEOEA, 1982: 71-74). Fuente: Oporto, 1982: 71-74; Hoja de antecedentes y filiación de los SS.GG.JJ.OO.SOFS y SGTOS. Departamento de Personal. Ministerio de Defensa Nacional.

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SANDÓVAL RODRÍGUEZ, ISAAC

(Buena Vista, Provincia Ichilo, Santa Cruz, 22 de agosto de 1937) Estudió la Licenciatura en Ciencias Jurídicas en la Universidad Pública “Gabriel René Moreno” (1963) y la Maestría en la Universidad de Carabobo (Venezuela) en 1975, centro de estudios donde ejerció la docencia durante su exilio (1972-1976). También fue Profesor Contratado de la Universidad Nacional de Ingeniería en Lima, Perú (1976-1977). A su regreso al país, enseñó en la Universidad Mayor de San Andrés (1979-1993) y en la Universidad Gabriel René Moreno (1993-2002). Muy joven empezó el ejercicio profesional en Santa Cruz de la Sierra y La Paz (1963) que se prolongó, salvo su estadía fuera del país, hasta 1990. Fue perseguido políticamente por el régimen dictatorial del Gral. H. Bánzer* (1971-1977) y posteriormente por el régimen del Gral. L. García Meza* (1980-1981). Descolló como experto en derecho laboral, llegando a integrar la comisión de Armonización de la legislación laboral en el Grupo Andino, en Lima, Perú (1977-1978). Fue designado Conjuez de la Corte Nacional del Trabajo en La Paz (1987-1988); miembro del Jurado de Imprenta de La Paz (1989-1992) y Santa Cruz de la Sierra (2000). Fue Magistrado (2006) y Presidente (2008) del Tribunal Administrativo del Banco Interamericano de Desarrollo. Desempeñó la cartera de Ministro de Trabajo y Asuntos Sindicales con Juan José Torres Gonzáles (1971) y Lidia Güeiler Tejada (1980). El Dr. H. Siles* le designó primer Rector de la Universidad Nacional Obrera Siglo XX (1985-1987), obra de los trabajadores mineros de Bolivia. Presidió la Asociación Boliviana de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social (1980-1984), el Colegio Nacional de Abogados (1983-1985), la Asociación Iberoamericana de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social, Lima, Perú (1995-1999). Fue distinguido como Doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional Siglo XX (1993); Universidad de Ciencia y Tecnología de Ica, Perú (1999) y Universidad Gabriel René Moreno (2007). Distinguido como Profesor Honorario de la Facultad de Derecho de la Universidad Central del Este en la República Dominicana (1997). Se le confirió la Orden al Mérito Judiciario “Epitacio Pessoa”, en el grado de Comendador, Brasil (1995); Medalla de Oro al Mérito Profesional del Colegio de Abogados de La Paz (1998); Medalla al Mérito en la Investigación Social del Gobierno Municipal de Santa Cruz (1999); Medalla al Mérito Profesional de la Asociación de Abogados Laboralistas, La Paz (2000); Medalla de Oro “Guillermo Cabanellas de Tórrez”, AIDT, México (2002); “Chuubi de Oro”. Federación Departamental de Fraternidades de Santa Cruz (2002); Premio Departamental de Cultura. Prefectura de Santa Cruz (2002), Condecoración Universitaria “Franz Tamayo” Facultad de Derecho de la UMSA (2006); Medalla al Mérito Intelectual de la Facultad de Derecho Universidad Autónoma Gabriel R. Moreno (2006); Medalla “Dr. Serapio Reyes Ortiz” en el grado de Preclaro, otorgada por el Colegio de Abogados de La Paz (2007); y la Condecoración por su Aporte a la Democracia, por el Presidente Evo Morales, en Palacio de Gobierno (2007). Miembro de Número de la Academia Boliviana de la Historia (2000); Titular de la Sociedad Boliviana de Escritores (2001); Correspondiente de la Real Academia de la Historia de España (2002); Miembro de Número de la Academia Iberoamericana de Derecho del Trabajo (2002). Retirado de la vida política y pública, publicó desde 2005, la compilación de su producción intelectual de sus Obras Completas, contenidas en seis gruesos volúmenes. Siendo Ministro de Trabajo (1980), asumió la decisión

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de incinerar en vía pública papeles oficiales con información comprometedora referente a los dirigentes sindicales, que fueron objeto de seguimiento por parte de infiltrados y agentes de inteligencia de la época de la dictadura militar. La quema se realizó en inmediaciones de la plaza San Francisco, pero se descubrió que entre los archivadores de palanca, destinados a la hoguera, existían otros legajos ajenos a estos asuntos que fueron trasladados para incrementar la masa documental y hacerla más espectacular. A raíz de ese suceso se conformó una comisión para el salvataje de documentos, coordinada por I. Lorini*, Jefa del Departamento de Historia del Instituto Nacional de Historia y Literatura y L. Oporto*, Jefe del Centro de Documentación Antropológica, del Instituto Boliviano de Cultura. Fuente: Oporto, 2006: 198; Oporto 2010a: 56-59.

SANGRO, PRÍNCIPE DE SAN SEVERO, RAIMUNDO DI Denodado y quijotesco defensor de los quipus. En 1750 escribió una Lettera Apologetica sosteniendo que el sistema utilizado por los peruanos era superior a la escritura fonética de los europeos, publicando una serie de tricomias magníficas que reproducían los signos principales del lenguaje de nudos y las correspondencias alfabéticas de estos, inventadas en el delirio indianista del autor, calificadas como “heréticas”, ante las amenazas eclesiásticas, “di Sangro tuvo que humillarse ante Benedicto XIV”. Fuente: Porras, 1953: 133.

SANJINÉS ARAMAYO, JORGE (La Paz, 31 de julio de 1936)

Director de Cine y guionista. Director del Grupo Ukamau. Estudió Filosofía en la Universidad Mayor de San Andrés, y Cine en el Instituto Cinematográfico de la Universidad Católica donde realizó tres cortometrajes (1958-1959). A su retornó conformó el Consejo Nacional de Cultura Para el Cine (1961) y dirigió el Instituto Cinematográfico Boliviano (1965-1966). Realizó varios cortometrajes, entre ellos Revolución (1963), que mereció el premio “Joris Ivens”, en Leipzig (1964), mediometrajes, Un Día Paulino y ¡Aysa! (Derrumbe) (1964) y la serie de cortos Bolivia Avanza, El Mariscal Zepita e Inundación (1965). Entre sus logros está la fundación de la primera Escuela Fílmica Boliviana (1961), el Grupo Ukamau, con Oscar Soria, al que se sumaron Ricardo Rada y Antonio Eguino; organizó el Cine Club Boliviano, que llevó a cabo el Primer Festival Fílmico Boliviano en la UMSA, en el que se exhibieron realizaciones cinematográficas bolivianas producidas desde 1948. Sus largometrajes son Ukamau (1966), Yawar Mallku (1969), El Coraje del pueblo (1971), Jatum Auka (1973), Llojsiy qaimanta ‘Fuera de aquí’ (1977), Las banderas del amanecer (1983), La nación clandestina (1989), Para recibir el canto de los pájaros (1995) y Los hijos del último jardín (2004), ganador del Premio ALBA de las Letras y de las Artes (2009). Como resultado de su trabajo, la filmografía que ha producido, constituye un invaluable archivo fílmico, con alto contenido social, por ello mismo, patrimonio boliviano. Fuente: http://es.wikipedia.org (24.4.12).

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SANJINÉS BARRIGA, JOSÉ IGNACIO DE (Potosí, 1786. † Sucre, 15 de agosto de 1864)

Abogado, político y poeta. Estudió Derecho en la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca (1812). En 1825 fue elegido diputado por Potosí. Junto a A.M. Moscoso* y M.M.Urcullu*, ocupó el cargo de Secretario de la Asamblea Deliberante, responsable del Archivo del Congreso, junto a Manuel Molina (18251826); fue reemplazado por el diputado José Miguel Loza el 26 de junio de 1826. Ejerció el Rectorado del Colegio “Pichincha” de Potosí (1830). Con el Presidente A. Santa Cruz* desempeñó el Ministerio del Interior y RR.EE. (1835-1838), en el que impulsó el estudio de la frontera con Brasil, alegando la inaplicabilidad del Tratado Hispanolusitano de 1777. Ha pasado a la historia como el autor de la letra del Himno Patriótico (Himno Nacional), estrenado en 1845, una pieza tradicional de la primera generación republicana. El investigador Porfirio Miranda sostuvo que dos mujeres potosinas inspiraron o influyeron en la creación del Himno Nacional, por cuyo favor compitieron Sanjinés y L. Vincenti* (autor de la música). Una de ellas fue la dama potosina Carmen Corina Daza, hija el Cnl. Melchor Daza, con quien luego se casaría L. Vincenti, en Sucre. El manuscrito autógrafo se custodia en la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional*. Escribió, con M. E. Calvo, Contestación al Manifiesto publicado por el Gobierno de Buenos Ayres sobre... la declaratoria de guerra que ha espedido..., Sucre, 1837; Canto dedicado al héroe vencedor, por un Boliviano aficionado a las musas, La Paz, 1841 (atribuida). Fuente: Barnadas, 2002, II: 849-850; Chacón, 1977, 44; Congreso Nacional, 1926; Congreso Nacional, 1927; Cordero Carrafa, 2000; Daza, 2011; Mendieta 1987: 75-76; Miranda, 1976; Oporto, 2006; Vázquez, 1988: I, 112-113, 116-118, 226, 277-278.

SAN MARTÍN, JOSÉ FRANCISCO DE

(Reducción de Yapeyú, Argentina, 25 de febrero de 1778. † Boulogne-sur-mer, Francia, 17 de gosto de 1850) Se educó en España. Formó parte del Regimiento de Murcia; combatió durante la guerra contra Napoleón, actuando en la victoria de Bailén (1811). Retornó a su patria y combatió por la Independencia, organizando el Regimiento de Granaderos a Caballo. Llegó a ser designado Gral. en jefe del Ejército auxiliar al Alto Perú, pero renunció y planificó la campaña libertadora de Chile, para lo cual organizó el Ejército de los Andes y junto a las tropas de Bernardo O’Higgins, cruzó los Andes. Derrotado en Cancha Rayada (18 de marzo de 1818), triunfó en Maipú (5 de abril de 1818), en 1821 tomó Lima al mando de su ejército de 6.450 plazas, proclamando la Independencia el 28 de julio, asumió el mando con el título de “Protector del Perú”. Apoyó la campaña sobre Bolivia y Ecuador. El 27 de julio de 1822, se entrevistó con Bolívar y se retiró a la vida privada. Este prócer de la Independencia se caracterizó por destruir personalmente los documentos de su actuación militar, que portaba en su Archivo de campaña, “como lo acostumbró hacer magnánimamente en medio de su poderío aun respecto de sus enemigos, conservando únicamente los que pudiesen ser útiles para la historia”. En el lecho de muerte, ordenó a su esposa que destruyera los pocos legajos que habían sobrevivido a la sistemática práctica destructiva. Incapaz de cumplir la orden, persuadida más bien de su valor e importancia para

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la historia, convocó al Gral. Bartolomé Mitre, a quien entregó el Archivo, dejando a su discernimiento la selección de los que fuesen de verdadera utilidad, y el resto se destruyera. Asombrado Mitre recogió el paquete y con ello escribió la Historia de San Martín en cuatro tomos. Fuente: Arze, 1991: 174-175; Mitre, 1890, I: ix; Oporto, 2006: 113-114.

SAN ROMÁN, CLAUDIO (Carasa, Cochabamba)

Teniente de la reserva en 1942, luego ascendió a coronel, y, según algunas fuentes, a general de Ejército. Afiliado al Movimiento Nacionalista Revolucionario, sufrió prisión en 1949. Organizó personalmente los archivos de Control Político, organismo de inteligencia y de represión política, durante el primer (1952-1956) y segundo (1960-1964) gobierno de V. Paz*, en estrecho vínculo con la Embajada de EE.UU., al extremo que “su estructura, sus recursos y los hombres fueron proporcionados por el FBI”. Era tal su poder que “la correspondencia, las charlas telefónicas, los negocios o las confesionales estaban rigurosamente registrados y catalogados en los ficheros de Control Político”. En su tarea inquisidora prefirió a las mujeres a las que utilizó “como cebo, como delatoras, como motivo de chantaje o como referencia de las debilidades de los revolucionarios de acero”. Se afirma que “en los archivos [del Control Político] se encuentra la historia detallada [con respaldo de documentos, fotografías, etc.] de la historia amorosa de las mujeres que tuvieron algo que ver con los políticos”. Organizó un Archivo de Inteligencia de la oficina de Control Político, conformado por “decenas de miles de fichas, rigurosamente ordenadas por orden alfabético unas y por extrañas claves, otras [que] ocupaban tres cuartas partes de la estancia”; un mueble metálico guardaba varios centenares de fichas de cartulina blanca con datos de miembros de la Policía Boliviana y de las Fuerzas Armadas; periodistas, políticos, autoridades de gobierno y opositores. Una gaveta contenía carpetas de cartulina café con fotografías, cartas y documentos interceptados al correo, con datos de las personas a las que se vigilaba. Finalmente un inmenso estante con archivadores de palanca que contenían recortes de prensa, relacionados a pronunciamientos de la oposición. De esa manera llegó a acumular “cientos de archivadores contiendo declaraciones y obras documentaciones pertenecientes a hombres que no compartían con el criterio oficialista”, grandes ficheros, “con 50.000 nombres y filiaciones de militantes de la oposición”, como informó Tribuna Universitaria y El Diario, que calificó a este Archivo como “la repartición mejor organizada del gobierno”. Los Archivos del Control Político se encontraban en Palacio de Gobierno, pero el centro de torturas estaba ubicado en la calle Potosí esquina Yanacocha, posteriormente transferida a la Universidad Túpac Katari (Actual Facultad Politécnica) y se afirma que usó su propia residencia (calle Fernando Guachalla y Abdón Saavedra) con estos fines, que fue expropiado y funcionó en ella el Liceo Francia, demolido en junio de 2012 para construir el Liceo de Señoritas Bolivia III. Fuente: El Mundo, 2006: 12; Presencia, 1964: 1; Presencia, 1964a: 5; Tribuna Universitaria, 1964: 1; Vistazo, 1964.

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SANTA CRUZ Y CALAHUMANA, ANDRÉS DE

(La Paz, 5 de diciembre de 1792. † Versalles, Francia, 25 de septiembre de 1865) Descendiente de Juana Basilia Calahumana, hija del cacique de Huarina, y del realista José Santa Cruz y Villavicencio. Estudió en el Colegio San Francisco de La Paz. Fue colocado por su padre en el ejército realista en Tumupasa, luego lo envió ante J.M. Goyeneche* que lo tomó como capitán; combatió en la batalla de Guaqui (1811); fue batido por el capitán patriota Juan José García el 4 de mayo de 1817; y sucedió lo mismo en Cerro de Pasco, esta vez por el Gral. Álvarez de Arenales*, el 6 de diciembre de 1820. Se entregó ante Lavalle ofreciendo sus servicios al General J. de San Martín*, que lo aceptó y lo enroló con el grado de Coronel. Luego fue comisionado por Riva Agüero en una expedición sobre el Sur, que se le confió junto a Gamarra, rumbo a La Paz y Oruro. Llegó a Laja el 6 de agosto de 1823, ocupó La Paz e incautó una imprenta, la primera en La Paz. En Zepita alcanzó la victoria sobre las tropas del Gral. Valdez el 25 de agosto de 1823, que le valió su ascenso a Mariscal, pero luego tuvo que huir precipitadamente por Ilo. Combatió como Jefe de Estado Mayor General en Junín (1823), al mando de S. Bolívar* quien le ascendió a General de Brigada y en Ayacucho (1824) con A.J. de Sucre*, que le dio el grado de General de División. Bolívar le elevó a Gran Mariscal de los Ejércitos del Perú el 22 de enero de 1825. Se le designó Presidente del Departamento de La Paz y Chuquisaca, en cuya actuación fundó la primera Biblioteca Pública, en Chuquisaca (1825), nombrando a Agustín Fernández de Córdoba como director, y tres oficiales de apoyo, sostenidos económicamente con tributos de cinco curatos. Fue Presidente del Perú, Presidente de Bolivia en 1829 y Supremo Protector de la Confederación Perú Boliviana, el 1 de mayo de 1837, luego de combatir contra Gamarra y Salberry, quien murió fusilado. El 17 de noviembre de 1836 destruyó un ejército de 5.000 plazas comandado por Blanco Encalada, enviado por Chile. Durante su gobierno, Bolivia se mostró ante el mundo como una potencia militar, país respetado y respetable. Enfrentó a los ejércitos de Argentina y Chile a los que derrotó, aunque Chile envió un segundo ejército al mando de Manuel Bulnes que enfrentó al mariscal en la batalla Yungay, el 20 de enero de 1839, adversa para las armas de la patria, con lo que se disolvió la Confederación Perú- Boliviana, conformada por tres estados, dos en el Perú y Bolivia. Su obra cultural fue magna. Promulgó el Código de Procederes, el Código Mercantil (1833) y más tarde el Código Militar. El Código Civil introduce el concepto de documento auténtico (cuyo espíritu se mantiene en el actual que data de 1975). Este cuerpo jurídico introduce en Bolivia, el concepto de Proceso (trámite), esencial para normar la relación entre la sociedad civil y el Estado. El Código Civil instituye los derechos civiles de los ciudadanos de esa época, y reglan el derecho de petición, con el que se accedía a los archivos oficiales para obtener copias legalizadas y hacer valer sus derechos. El 30 de junio de 1838 ordenó el establecimiento de bibliotecas públicas en las principales ciudades del país, incluyendo el Litoral, a las que dotó de recursos financieros, técnicos y humanos para su sostenimiento y desarrollo, instituyendo, por primera vez en Bolivia, el depósito legal. Durante su trayectoria militar y gubernamental, reunió un archivo personal conformado por más de 8.000 documentos, principalmente correspondencia personal, que involucra a las más importantes figuras de la historia de Sudamérica de principios de la independencia, además de documentos originales oficiales, complementado por una pequeña pero valiosa colección de periódicos (Vg. El Iris de La Paz, 1829-1839, órgano oficial de su administración) y libros referidos a la época

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de su actuación. Cubre el arco temporal de 1829 a 1839, época de la Confederación. Este archivo tiene importancia para Bolivia, Argentina, Chile y Ecuador. El archivo del Mariscal Andrés de Santa Cruz pasó a poder de su hijo Oscar Santa Cruz que la conservó con esmero, tarea que continuó su nieto, el ingeniero Andrés de Santa Cruz Schukrafft*, quien lo organizó y catalogó. La labor fue continuada por Andrés de Santa Cruz García, biznieto del mariscal. Fuente.: Oporto, 2011d; Parkerson, 1976: 26-27.

SANTA CRUZ SCHUFKRAFFT, ANDRÉS

(La Paz, 11 de agosto de 1893. † La Paz, 7 de febrero de 1980) Nieto del Mariscal A. de Santa Cruz*. Ingeniero civil e historiador. Estudió en Francia (1922). Tuvo a su cargo, como ingeniero jefe, la construcción de los ferrocarriles Atocha-Villazón, La Paz-Yungas y La Paz-Beni. Fundador (1922) y Presidente de la Sociedad de Ingenieros de Bolivia (1936-1937) y de la Sociedad de Propietarios de Yungas. Miembro de la Sociedad Geográfica de La Paz, Academia Boliviana de la Historia y correspondiente del Instituto Peruano de Investigaciones Genealógicas. Autor de Cuadros sinópticos de los gobernantes de Bolivia 1825-1956 y de la del Perú 1820-1956 (1956); Notas y apuntes para la biografía del Gran Mariscal de Zepita (1962). Ingresó a la Academia de Historia con su tesis El gran Mariscal Santa Cruz. Su política con Chile y la Confederación Perú-Boliviana (1957). Fue nombrado Embajador en misión especial, para la repatriación de los restos del Mariscal Andrés de Santa Cruz, en 1965. Heredó el Archivo del Mariscal Andrés de Santa Cruz*, del que se han editado seis tomos. Publicaciones archivísticas: Archivo Histórico del Mariscal Andrés de Santa Cruz. Tomo I. 1820–1828, La Paz, Universidad Mayor de San Andrés, 1976

Tomo II. 1829–1831, La Paz, Instituto de Investigaciones Históricas, 1981 Tomo III. 1833–1834, La Paz, Universidad Mayor de San Andrés, 1992 Tomo IV. 1835, Lima, Universidad del Pacífico, 1991

Tomo V. 1836, Santa Cruz de la Sierra, Banco Santa Cruz, 1993

Tomo VI. 1837, Cochabamba, Universidad Mayor de San Simón, 2001 (Clemencia Santa Cruz de Siles). Fuente: Academia, 1980; Arze, 1989: 157; Barnadas, 2002, II: 866; Costa Arduz, 2005: 208.

SANTA MARÍA DE MICHEL, LUZ Jefa de la División de Archivo y Documentación de la Junta Nacional de Acción Social, en 1982. Organismo responsable de las políticas de la niñez, creada en 1971. Presentó un diagnóstico del Archivo, a la II Reunión Preliminar de los Archivistas de La Paz (14 al 16 de junio de 1982), con una breve historia institucional y archivística, en el que señala que contiene los documentos de la Dirección Nacional del Menor y del Instituto Nacional de Adaptación Infantil, además de los documentos de la Junta. En sus recomendaciones señala la destrucción de documentos “innecesarios” (documentos de personal que ya constan en los Files de la Dirección de Personal, una

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encuesta demográfica de salud, tarjetas y libros de control de asistencia, historias clínicas) y la reorganización técnica de la División. Publicaciones archivísticas: “Diagnóstico de la División de Archivo y Documentación. Junta Nacional de Acción Social” (Oporto Ordóñez, Luis, 1982: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA: 22-25). Fuente: Oporto, 1982: 22-25.

SANTA Y ORTEGA, REMIGIO DE LA

(Yecla, Murcia, España, 1 de octubre de 1745. † Ávila, Lérida, España, 14 de noviembre de 1818) Obispo de La Paz (10 de febrero de 1799). Fue destituido en julio de 1809. Complotó contra los patriotas usando chasquis y correos clandestinos. Expulsado de La Paz, organizó la resistencia en Irupana, excomulgando a los patriotas. Perseguido por G. García Lanza*, fugó a Cochabamba por Tapacarí. En el valle degradó a los clérigos patriotas. Regresó a La Paz donde intentó trasladar la sede episcopal a Puno. Se retiró precipitadamente a esa ciudad ante la proximidad de Juan J. Castelli (noviembre 1810), trasladando consigo una buena parte de los archivos de la Catedral de La Paz. Desde aquella ciudad despachó asuntos de importancia. Cuando decidió continuar viaje rumbo a Lima, los papeles catedralicios quedaron en Puno. De sus actuaciones formó un archivo particular que fue publicado por Carlos Ponce Sanjinés en 1954. Fuente: Aranzáes, 1915: 702-706; Armentia, 1903: 186-187; Arze, 1985: 111; Ponce, 1954.

SANTIVAÑEZ, MOISÉS

(Sucre, 13 de septiembre de 1860. † Sucre, 26 de junio de 1953) Escritor y político. Estudió Leyes en la UMSFX. Concurrió a la Guerra del Pacífico (1879-1880), donde fue ascendido a subteniente del Batallón Colorados. Fue Prefecto del Departamento de Tarija (1913-1916). Profesor de la Escuela Normal de Maestros de Sucre. Director de la Biblioteca Nacional en 1911, 1919 y 1920, cuando publicó la Revista de la Biblioteca Nacional. Hizo gestiones para unificar la Biblioteca Nacional y el Archivo Nacional en 1919, frustrándose esa intención por el golpe de Estado de 1920, que lo envió al exilio. Volvió al cargo en 1933, logrando su anhelo de unificar ambos repositorios durante el gobierno de José Luis Tejada Sorzano* (1936). Ese año volvió a publicar la Revista de la Biblioteca y el Archivo Nacionales. En marzo de 1933 entregó el Archivo de Mojos y Chiquitos, en calidad de préstamo, al Ministerio de Relaciones Exteriores, para su copia. Ante la demora de tres años, viajó a La Paz a verificar el trabajo, habiendo constatado que se hacían las últimas copias, por lo que, en correspondencia de 12 de marzo, solicitó sean “devueltos por intermedio de A. Jáuregui Rosquellas*, quien los remitirá a esta oficina” (vg. Archivo y Biblioteca Nacionales). El 17 de marzo se efectivizó la devolución. Fuente: Barnadas, 2002, II: 872; Costa de la Torre, 1968: 974; Mendoza Loza, 2005, V. 4, T.1: 3-4; Oporto, 2006; Poppe, 2000; Correspondencia de 12.3.1936, de M. Santivañez al Ministro de Relaciones Exteriores.

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SANTOS, NICASIO

(Covendo, pueblo indígena Mosetén, La Paz) Custodio indígena de un archivo de 9 partituras musicales del pueblo Mosetén de Covendo, copiadas entre 1900 y 1980, que Santos los resguardaba en una caja de cartón, en medio de las ramas de un árbol, al interior de su vivienda. Las partituras proceden de la época de las misiones franciscanas del siglo XVIII, que fueron copiadas por Tomás Huasna, dos de ellos los más antiguos, con cánticos dedicados a la Virgen María, Navidad, Cuaresma y Semana Santa. Originalmente las partituras, en número mayor, eran custodiadas por 5 o 6 maestros violinistas de la familia Huasna, que subrogó la responsabilidad a las de Nates y Bayas. Las partituras se leían durante las misas, interpretadas en violines, siendo transmitidas de generación en generación, hasta llegar en número ya reducido a poder de Santos, a quien le fueron entregados por su padre. Un episodio extraño aconteció al ser destruidos los violines por las esposas mosetenes, lo que provocó que se extinguiera la práctica musical, aunque Nicasio fue el único que logró reconstruir su violín y continuar con la tradición. En 2003, ya anciano, entregó las partituras sobrevivientes al extensionista de la Dirección de Reconversión de la Coca, E. Fernández*, hecho ratificado 3 años más tarde por la Asamblea del Pueblo Indígena Mosetén y la Organización de Mujeres Indígenas Mosetén. Actualmente el Archivo de partituras musicales y otros documentos de alto valor para este pueblo indígena se encuentra en poder de Fernández. Fuente: Fernández, 2010, p. 41-42, 51, 97.

SANTOS VARGAS, RENÉ ARMANDO (La Paz, 26 de agosto de 1960)

Estudió las Carreras de Historia* y de Bibliotecología* (UMSA). Participó en la X Escuela de Archivos de Iberoamérica*, Madrid, España (2000). Cursó el Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos (2002); el Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (LP, 1999). Asistió a los Congresos Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas “Gunnar Mendoza Loza”* (1995) y Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996). Participó con ponencias en congresos internacionales, entre ellos, el Congreso de Archivología del MERCOSUR: VI (Campos de Jordao, Sao PauloBrasil, 2005), VII (Viña del Mar, Chile, 2007) y VIII (Montevideo, Uruguay, 2009); XX Reunión de Etnología (2006); III Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2006), el Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano INFOCC (2008); Congreso Internacional de Información INFO 2008 (Cuba) y Taller Internacional Los archivos y los nuevos espacios en la sociedad de la información del conocimiento (Cuba, 2008). Miembro de la Asociación Latinoamericana de Archivos*. Fundador de Archiveros Sin Fronteras-Bolivia y Archiveros en Acción, con S. Cuba*, G. Illatarco* y N. Figueroa*. Cofundador de la extinta Asociación de Trabajadores de la Información de La Paz (Archiveros, Bibliotecarios, Documentalistas y Museístas de La Paz). Fue Supervisor de Archivos en el Departamento de Correspondencia y Archivo del Banco Central de Bolivia*, donde continua desempeñando funciones de archivista.

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Publicaciones archivísticas: “Archivística: conocimiento y Arte” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2006, (10) 15: 117-124); “Hacia una cultura archivística” (Gaceta del Archivista, Escuela Nacional de Biblioteconomía y Archivonomía, 2006, 1 (4); “Descripción Archivística” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2002, 7 (11): 33-39); “XIV Congreso Internacional de Archivos (Sevilla-España)” (Boletín del Archivo La Paz, 2001, N° 19: 59-65). Fuente: CV.

SANZ, FRANCISCO DE PAULA

(Málaga, España, 1745. † Potosí, 15 de diciembre de 1810) Importante funcionario real, enviado a Potosí por el Ministro J. de Gálvez*. Fue Director de la misión para estudiar la implantación del Estanco de Tabacos en el Virreinato del Río de La Plata (1778-1783), Superintendente de Real Hacienda y Presidente de la Intendencia de Buenos Aires (1783-1788). Realista ultramontano, combatió a Dámaso y Nicolás Catari (1781). Acérrimo defensor de la Mita minera, tema sobre el que polemizó con el fiscal Vitorian de Villaba. Su asesor fue P.V. Cañete*. Volvió a Potosí como Intendente (1788-1810), colaboró a Abascal* y Goyeneche*, en su cruenta campaña contra el levantamiento independentista. El 10 de noviembre de ese año, durante la rebelión de Potosí, se lo apresó y entregó a J.J. Castelli*, quien ordenó su fusilamiento, junto al presidente de la Audiencia V. Nieto y al Gral. José de Córdoba. Su ilustración y eficacia administrativa se basaba en los Archivos del Estanco del Tabaco que mandó organizar y ordenar. Fuente: Arze, 179; Valda, 2002: II, 877-878.

SARAVIA GUTIÉRREZ, JAVIER ABEL (La Paz, 10 de noviembre de 1954)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Hizo el Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos, UMSA (2002) y el Curso de Organización de Sistemas de Archivos, en el Centro Iberoamericano de Formación de la Agencia Española de Cooperación Internacional, en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia (1998). Participó en el Seminario Nacional “Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia” (LP, 1993); en cursos de Descripción Archivística (2005); Importancia de los Archivos para la Democracia y el Acceso a la Información, auspiciado por el Centro Carter en La Paz (2005); Taller Departamental sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006); Conservación Preventiva y Restauración para Materiales de Archivo (2006). Docente de Historia de Bolivia, Teoría de la historia, y Movimientos indígenas, en la Universidad Indígena Tawantinsuyu (2008-2009). Desempeñó funciones en el Archivo de La Paz* (1985-1986), Instituto de Investigaciones Históricas y Estudios Bolivianos (1987), Archivo Histórico Municipal “José Rosendo Gutiérrez” de la Casa Municipal de Cultura (1987-1996). Participó en el rescate de documentos de la Subprefectura y del Municipio de Coroico, con A. Lema*. Levantó los índices del Archivo Judicial de Luribay, bajo la dirección de F. Ballivián* y A. Crespo* (1985-1986), y la catalogación de las series de Registro de Escrituras y Expedientes Coloniales, bajo la dirección de F. Ballivián*.Trabajó en la reorganización, ordenación,

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catalogación, codificación e índización de documentos del Archivo Histórico Municipal, continuando la labor de M. Money* (1987-1996). Obtuvo becas de trabajo en el Archivo de La Paz (1997-1998), Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, Archivo Histórico de la Casa de la Moneda de Potosí* (1997); e Instituto de Estudios Bolivianos (1998). Trabajó en el Diagnóstico de los Archivos del Registro Civil de la Corte Departamental Electoral de Chuquisaca y Potosí (2007). Es Archivero del Organismo Electoral Plurinacional desde 1998. Es autor de “El Gran Hotel París; monografía” (Anales de la Reunión Anual de Etnología. La Paz, MUSEF, 1994). Fuente: CV.

SARAVIA TAPIA, CARLOS JAVIER

(Santa Cruz de la Sierra, 4 de mayo de 1974) Es interesante anotar que su primera carrera fue Medicina, pero habiéndola concluido, entregó su título y decidió estudiar lo que su vocación mandaba. Es Licenciado en Bibliotecología con mención en Archivología (UMSA). Se graduó con su tesis Los archivos personales. Tiene un Diplomado en Escrituras Creativas, pues cultiva también la poesía. Participó en el II, IV y V Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística, el seminario sobre Planificación de Unidades de información aplicadas a las nuevas tecnologías de la información (2006); El Museo como factor de desarrollo e identidad cultural (2004). Igualmente asistió a varios cursos y seminarios en Medicina. En su experiencia laboral, trabajó en la catalogación de la Biblioteca y Archivo Arturo Costa de la Torre de la Municipalidad de La Paz; en la organización del Archivo institucional del Ministerio sin Cartera responsable de Participación Popular, y en la catalogación de la Biblioteca del Círculo de la Unión. El 2004 fue contratado como bibliotecario por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, donde realizó la catalogación de la Biblioteca y del Archivo Íntimo de A. Arguedas*, importante experiencia sobre la que publicó “Los libros de un escritor polémico” (Suplemento Puño y letra de Correo del Sur, Sucre. 4 de octubre, 2008) y “Bibliotecas personales, aproximación teórica a su tratamiento. El caso de la Biblioteca Arguedas en el ABNB” (Anuario del ABNB, N°11, Sucre, 2005: 747-753). En 2007 organizó -bajo la dirección de J. Saravia Gutiérrez*- el Fondo Registro Civil, que forma parte del Archivo de la ex Corte Nacional Electoral (actual Tribunal Supremo Electoral), conformado por documentos administrativos del periodo 1991-2007. Pasó luego a desempeñar como bibliotecario del Colegio Saint Andrew’s y de la Academia Boliviana de Ciencias Genealógicas y Heráldicas (2011). Publicaciones archivísticas: “Papel sellado, testigo de la independencia” (Revista Domingo de La prensa, La Paz. 25 de mayo de 2008); “Conservación de imágenes del movimiento” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2003, 8 (12): 43-46); “Papel sellado colonial en La Paz (siglos XVll-XlX)” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2005, 9 (14): 99-116). Fuente: CV.

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SEGALES CALLIZAYA, DANIEL (La Paz, 21 de septiembre de 1969)

Estudiante de la carrera de Lingüística de la Universidad Mayor de San Andrés, prosiguió cursos del idioma inglés en el Centro Boliviano Americano. Estudió también para Técnico Medio en Computación en el Centro de Especialidades en Computación (CEC). Participó en el Seminario Internacional sobre Políticas Archivísticas y Bibliotecológicas, Asociación de Bibliotecarios de Oruro–ABO (2009) y en el curso de Organización de Archivos y Legislación Archivística en la Constitución Política del Estado y su Importancia Estratégica para el Desarrollo Nacional, organizado por el Sistema Archivo, Archivo Histórico Regional Oruro de la Corporación Minera de Bolivia (2009). Se formó en los cursos de capacitación en Archivística desde el 2002 mediante el Programa de Capacitación Continua, que dirige C. Campos*, con el Archivo Histórico de la Minería Nacional. Participó en el Diplomado de Gestión Integral y Organización de Archivos de la Empresas Estratégicas del Estado (2012), organizado por la Escuela de Gestión Pública del Estado Plurinacional. Es uno de los archiveros que junto a E. Ramírez Santiesteban protagonizó el salvataje de los archivos de la COMIBOL en la ciudad de El Alto. Por sus méritos y su destacado desempeño fue designado Encargado del Archivo Regional de Oruro del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*. Fuente: CV.

SEGALES VILLEGAS, HERMINIA (La Paz, 5 de marzo de 1959)

Autodidacta. Estudió hasta segundo medio en el Colegio María Auxiliadora (La Paz). Su primer trabajo fue como Técnico en Codificación de textos en la Biblioteca “Martín Cárdenas” del Ministerio de Agricultura, La Paz (1992-1995). Pasó a la Alcaldía Municipal de Oruro como Técnico de Archivo Central (1996-1998). En 2001, fue contratada como responsable de Archivo del Viceministerio de Participación Popular (Ministerio de Autonomías). Considera su logro el “haber instalado el Archivo Central, reconstruyendo estantes que se encontraban en mal estado y recogiendo toda la documentación que estaba en diferentes oficinas, depósitos, con humedad, en sacos y cajas, muchas para desechar”. El Archivo Central fue organizado en julio de 2001, gracias al apoyo del ex Viceministro Iván Arias, quien la felicitó por haber levantado el archivo. “Actualmente estoy trabajando de igual manera, sin importarme el volumen, peso y polvo, muchas veces arreglando los estantes con alambres y hasta [uso la] cuchara como desarmador, o con lo que se pueda”, confiesa en su testimonio autobiográfico. “Amo mi Archivo porque es parte de mi vida, sin importarme el ítem bajo (remuneración económica) que actualmente percibo. No fue fácil mantener el Archivo, muchas veces con lágrimas, porque para algunas autoridades que han pasado por la Institución, no era necesario y no han sabido valorar el trabajo”. Asistió al Taller Departamental de la Ley del Sistema Nacional de Archivos, organizado el por Archivo de La Paz* (2006). Fuente: CV.

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SCHELLENBERG, THEODORE ROSSEVELT

(Harvey County, Kansas, EE.UU., 24 de febrero de 1903. † Arlington, Virginia, EE.UU., 14 de enero de 1970) Recibió su licenciatura en 1928 y su maestría en 1930, en la universidad de Kansas. Se graduó en Historia en la Universidad de Pennsylvania, donde recibió su doctorado en 1934. Comenzó su carrera como Secretario Ejecutivo de la Comisión Mixta sobre Recursos de Investigación del Consejo Americano de Sociedades Doctas y del Consejo de Investigación de Ciencias Sociales. En 1935 fue designado a los Archivos Nacionales, después de servir pocos meses como historiador del Servicio de Parques Nacionales. En 1945 dejó los Archivos Nacionales para trabajar por tres años como Archivista de la Oficina de Administración de Precios, pero retornó a los Archivos Nacionales en 1948 como Asesor del Archivista de los Estados Unidos. Fue nombrado Director de Administración Archivística en 1950 y Archivista Asistente de los Archivos Nacionales en 1956. Invitado por G. Ovando*, en mayo de 1960 visitó la Universidad Tomás Frías. El 10 del mismo mes, con el auspicio de la Universidad y del Instituto de Investigaciones Históricas, pronunció una importante conferencia sobre “La importancia de los Archivos”. Visitó el archivo de Potosí, llevándose buena impresión de las labores del Instituto y de la Sociedad Geográfica y de Historia “Potosí”, en torno a la catalogación del Archivo. Organizó la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos*, celebrada en Washington D.C., del 9 al 27 de octubre de 1961, al que asistieron los archivistas bolivianos G. Mendoza*, M. Chacón* y G. Ovando* junto a 47 profesionales del continente y observadores de España. Schellenberg presentó sus trabajos más importantes: “El futuro de la profesión archivística”, “El principio de procedencia”, “La importancia de los archivos”, “Principios archivísticos de ordenación”, “Reconocimiento del principio de procedencia” y “Técnicas descriptivas de archivos”, que forman parte de su magna obra. Se retiró del servicio en 1963. Es reconocido como ‘Padre de la Valoración Archivística Americana’ por su obra cumbre Archivos Modernos. Principios y Técnicas (1956), obra que define la metodología archivística con instrucciones técnicas específicas para la gestión del trámite y la administración archivística. Marca una diferencia clara con el método “pasivo” de adquisición archivística de Jenkinson, donde el administrador decidía lo que debía conservarse y lo que debía destruirse. Planteó un papel más activo de los archivistas para realizar la valoración. Su modelo del valor documental primario (administrativo) y secundario (investigación) para el manejo y valoración de expedientes y de archivos, permitió que los archivistas asumieran mayor control sobre los materiales documentales, hecho que fue reconocido por la Administración de los EE.UU. en la época de posguerra. Como resultado de la extensa adopción de los métodos de Schellenberg, especialmente en los Estados Unidos de América y países anglosajones, nació la profesión del Gestor de Documentación (Records Manager), como moderna disciplina separada de la archivística, aunque íntimamente relacionada con ella. Publicaciones archivísticas: Modern Archives Principals and Techniques (Chicago, 1956), edición en castellano Archivos Modernos: Principios y Técnicas (La Habana, 1958), La importancia de los Archivos (Potosí, 1959), Introducción a los Principios Archivísticos de ordenación (Sucre, 1960) Técnicas descriptivas de archivos (Córdoba, 1961). Fuente: Oporto, 2009; Oporto y Molina, 2011.

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SCHENKOLEWSKI-KROLL, SILVIA

(Humberto Primo, Provincia de Santa Fe, Argentina, 1938) Archivera Diplomada en la Universidad Hebrea de Jerusalén (1965), MA en Historia Judía (1969) y PhD en Judaísmo Contemporáneo (1985). Es Docente Titular (senior lecturer) en el Departamento de Ciencias de la Información de la Universidad de Bar Ilan. Publicó El movimiento sionista y los partidos sionistas en Argentina, 1935-1948, y más de cuarenta trabajos y proyectos sobre temas de archivística y corrientes políticas en el judaísmo argentino. Es miembro de Latin American Jewish Studies Association y fundadora de la Asociación de Investigadores del Judaismo Latinoamericano de Israel. Fue co-editora de los tomos II y IV de Judaica Latinoamericana, coordinadora académica de la Sección de Judaísmo Latinoamericano de los X, XI y XIV Congresos de Ciencias Judaicas organizadas por la Organización Mundial de Estudios Judaicos de Jerusalén. Participó en los congresos que LAJSA organizó en Buenos Aires, México, Río de Janeiro, Princeton, Hanover y Tel-Aviv. Dictó un seminario de doctorado en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Buenos Aires sobre el tema “La izquierda judía en Argentina durante la primera mitad del siglo XX” (2003). Dictó un seminario de doctorado en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata sobre el tema “Sionismo, bund y comunismo: corrientes políticas-ideológicas en la comunidad judía de Argentina” (2008). Es miembro académico del Centro Liwerant para el Estudio de América Latina, España y Portugal y sus Comunidades Judías de la Universidad Hebrea de Jerusalén (2010). Durante 1989-1999 fue editora de Arkhiyyon, órgano de la Asociación de Archivos de Israel. Fue miembro de las comisiones directivas de la Sección de Educación Archivística y de la Sección de Archivos Empresariales Laborales, del Consejo Internacional de Archivos* (1996-2004). Es asesora académica del Archivo del Estado de Israel. Participó y organizó numerosos congresos y encuentros de sus dos especialidades, judaísmo argentino y archivística, así también dictó cursos en universidades de Argentina. Organizó el Encuentro CIA-SAE-RIBEAU, en Huerta Grande (2003). Dictó un curso sobre archivos empresariales en la Escuela de Archivología de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Nacional de Córdoba (2005), el curso sobre Macro Evaluación de Documentos (2007) y sobre Acceso a Archivos (2011) (Cf. Fuentes, vol. 6-Nº 20, junio 2012: 5-10) Participó en el Segundo Congreso de Educadores en Archivística de Asia Pacífico, con el tema “La educación archivística como parte de las ciencias de la información: el caso de Israel”, en Tokio (2006). Participó en el VII Congreso de Archivología del Mercosur CAM, disertando sobre “Legajos personales como fuentes de la memoria personal y colectiva “, Viña del Mar (2009) y en el IX CAM, “Archivos de empresas, de la gestión documental a la investigación histórico-social en el siglo XXI”, Asunción (2011). A partir de 2007 coordina las Jornadas de Archivística en el marco de las conferencias y exposiciones anuales de TELDAN. En 1993 realizó una gira, organizada por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, por Venezuela, Ecuador, Perú, Bolivia y Chile, como experta en archivística, dictando cursos en archivos nacionales y universidades, ocasión en la que visitó la ciudad de Sucre. Fuente: CV.

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SCHULTZ, BENJAMIN

(Alemania, 10 de agosto de 1977) Tiene una Maestría en Historia Económica en la Universidad de Mannheim (Alemania). Trabajó para Naciones Unidas en Afganistán; en el Banco Mundial en Washington DC y para el Crédito Agrícola en Frankfurt, Alemania. Actualmente lo hace en el Departamento de Asuntos Políticos de Naciones Unidas. Fue pasante interno por tres meses en el Centro de Historia Judía del Instituto “Leo Baeck”, en Nueva York, en el que tuvo a su cargo la organización y catalogación de la Colección Moritz (Mauricio) Hochschild*, con el apoyo del archivista M. Simonson* y bajo la supervisión de Viola Voss, ambos del Instituto (2003). Publicaciones archivísticas: Guide to the Papers of Moritz Hochschild (1881-1965), 1881-2000. AR 25048. Processed by Benjamin Schultz. Nueva York, Leo Baeck Institute, 2005. Fuente: Comunicación personal de Benjamin Schultz, del 7.6.10.

SEQUEIROS LORDEMANN, LOLA LOURDES KOLSKA (La Paz, 13 de noviembre de 1962)

Economista (UMSA), con estudios de postgrado en Relaciones Internacionales; Educación Superior; y Estudios alternativos en proyectos de turismo y comercio internacional. Realizó consultorías y desempeñó funciones como Administradora en la cooperativa San Bartolomé (1984-1986), Instituto Boliviano de Turismo (19861989), cooperativa Jach’a Mallku (desde el 2000). Fue docente de Economía en la Escuela Militar de Ingeniería (1997), Economía del Turismo en Univalle (desde 2001) y Hotelería en la Universidad Real (2005). Realizó consultorías en proyectos de ecoturismo en el Fondo Nacional de Medio Ambiente (2005) y el BID (2005). En su experiencia archivística trabajó en la Corporación Regional de Desarrollo de La Paz, como encargada de Biblioteca y Archivo (1990) y en el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, como encargada de Biblioteca y Archivo Central (1991-2008). Fuente: CV.

SILES GUEVARA, JUAN

(Oruro, 8 de marzo de 1937. † Oruro, 24 de diciembre de 1995) Historiador, bibliógrafo, archivista y crítico. También cultivó la poesía y como pocos historiadores gustaba de la literatura. Sus estudios los realizó en Santiago, Chile, en la escuela de los padres franceses y en el Liceo de Aplicación; de Historia y Geografía (1956-1960) y de Filosofía en la Universidad de Chile (1961-1964). Su estudio de réplica Ensayo crítico sobre: “Chile y Bolivia. Esquema de un proceso diplomático”, de Jaime Eyzaguirre, provocó polémica y su salida de Chile. Al retornar a Bolivia estudia en la Facultad de Filosofía y Letras de la UMSA (1964-1967), obteniendo la licenciatura en Historia con la tesis “Tres primeras misiones diplomáticas bolivianas ante las grandes potencias durante la república oligárquica” (La Paz, octubre de 1978). Estudió inglés en la Universidad de Georgetow, Washington, D.C. (1976) y de Master of Arts en la Universidad of Texas, Austin, especialidad en Historia Latinoamericana (1976-1978).

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Como tantos otros historiadores (Condarco*, Mendoza*, Ovando*, Roca*, Sanabria*), fue admirador y seguidor de la obra de G. René Moreno*, destacando dos de sus trabajos (II.1, III.2). Riguroso en las fuentes, bibliógrafo y crítico, sostuvo polémica con Arturo Costa de la Torre* (Catálogo de la bibliografía boliviana), Ramiro Condarco Morales* (geografía), Jedú Antonio Sagárnaga Meneses (prehistoria e historia) y sobre la película “Amargo Mar”. Y en torno a su obra Las cien obras capitales de la Literatura Boliviana (IV. 2), objeto de observaciones particularmente de Jesús Lara. En la Facultad de Filosofía y Letras-UMSA fue Presidente del Centro de Estudiantes (1966-1967) y miembro del Comité de Redacción de la revista Logos (2/1966, 3/1967, 4/1968). Durante su gestión, el Centro publicó una serie de 14 títulos sobre arte, bibliografía, filosofía, historia, literatura, política y teatro. Trabajos que eran resultado de una serie de conferencias organizadas por el Centro, contribuciones de los catedráticos y de los estudiantes, correspondiendo dos a JSG (I.1, II.1). Varias de estas publicaciones fueron reseñadas por él en la revista Logos. Fue Director de Literatura, Bibliotecas y Archivos del Ministerio de Cultura, Información y Turismo/Ministerio de Educación y Cultura (1967-1970). Entre otras actividades, impulsó las publicaciones de clásicos bolivianos y de bibliografías (II. 3,5) en la Biblioteca Popular Boliviana del Fondo Nacional de Cultura (Castalia Bárbara, de Ricardo Jaimes Freyre; Anales de la Villa Imperial de Potosí, de Bartolomé Arzáns Orsúa y Vela; La Audiencia de Charcas, de Gabriel René Moreno; Antología, de Carlos Medinaceli; La creación de la Pedagogía Nacional, de Franz Tamayo). En 1968 (abril-mayo) realiza un viaje en misión oficial para la investigación y recopilación sobre la obra de Ricardo Jaime Freyre (II.5,7; III.1) en bibliotecas de Tucumán y Buenos Aires. Y con Alberto Crespo, proyectaron la idea de la creación del Premio Nacional de Cultura (D.S. Nº 08783, 4 de junio de 1969), que fue impulsado por el Ministro Walter Montenegro. En el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, desempeñó varias funciones: Jefe del Departamento de Documentación (1971-1978), Director de Europa, Asia, África y Oceanía (1978-1979), Director de Derecho Boliviano al Mar (1979-1981), Cónsul General en San Francisco, Estados Unidos (1981-1982), Director General de Formación y Especialización (1986-1987), Director General de Asuntos Culturales (1987-1992), Director General de Biblioteca y Archivo (1992-1994). Desde el Ministerio se autoimpuso el desafío de investigar y documentar las distintas misiones oficiales y particulares, en Archivos Españoles (Vicente Ballivián y Roxas*, 1871; Aniceto Arce*, 1886; Luis Salinas Vega*, 1887; Bautista Saavedra*, 1904; Rosendo Villalobos*, 1908; Alberto Ostria Gutiérrez*, 1923-1924; Marcos Beltrán Ávila*, 1924, 1930; José Vázquez Machicado*, 1931-1936; Humberto Vázquez Machicado*, 1931; Diómedes de Pereyra*, 1933; Alberto Crespo Rodas*, 1954-1956; Adolfo de Morales*, 1950-1958; Guillermo Ovando Sanz*, 1966; José de Mesa y Teresa Gisbert, 1966-1968); Archivos Ingleses (Vicente Ballivián y Roxas, 1871; Narciso Campero* y Nicolás Acosta*, 1872; Roberto Querejazu Calvo*, 1970) y Archivos Italianos y del Vaticano (Humberto Vázquez Machicado, 1931-1933; David Alvéstegui*, 1933-1934; Manuel Frontaura Argandoña*, 1962-1965), que explican en gran medida los esfuerzos de Bolivia para sustentar sus derechos limítrofes, que hoy engrosan los acervos del fabuloso Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores.

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Fue docente en las Carreras de Historia*, Turismo, y Filosofía de la UMSA (19721994), en la Universidad Católica Boliviana (1973-1976), y en la Academia Diplomática Boliviana-Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (1976-1990). Por otra parte, el trabajo bibliográfico de JSG se extendía a sus estudiantes, a quienes encomendaba la elaboración de índices de suplementos literarios como Presencia Literaria, El Diario Literario, Semana de Última Hora, Domingo de Hoy. Fue miembro fundador del Movimiento Cultural Literario “Prisma” (La Paz, 15 marzo 1968), que inició sus actividades el 2 de abril con un homenaje al poeta José Eduardo Guerra en el Instituto Cultural Boliviano Alemán, con la participación de JSG, como Coordinador del movimiento cultural. También fue miembro del Instituto Panamericano de Geografía e Historia* (1969); del Instituto de Investigaciones Artísticas de la UMSA (1966-1967); de la Sociedad Boliviana de la Historia (1972, miembro fundador), del que fue Vicepresidente (1984-1991), Secretario (1972, 1974, 1994), miembro del Consejo de Redacción de la Revista Historia y Cultura (Nos.: 6/1984, 7/1985, 8/1985, 9/1986, 10/1986) y del Consejo Editorial (23/1994). Miembro de Honor de la Society of Phi Kappa Phi, Capítulo Austin, Texas (1977); de la Academia Boliviana de la Historia (discurso de Ingreso: “La última misión diplomática chilena y el comienzo de la Guerra del Pacífico”, La Paz, 9 de febrero de 1979, v. I.4); correspondiente de la Real Academia de la Historia de España (1980), de las Academias de Historia de Argentina (1989), Venezuela (1991) y Puerto Rico (1991). Miembro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de la Academia Nacional de Ciencias (1979) y Miembro de Honor de la Asociación de Egresados de la Academia Diplomática de Bolivia (1986). Asistió y participó de varios Coloquios, Congresos, Reuniones, Simposios, etc., entre otros: Mesa Redonda sobre la Revolución del 16 de Julio de 1809 (La Paz, septiembre 1968), con la exposición “Bibliografía de la Revolución” (II.2); Primer Simposio de Ciencias de Bolivia (La Paz, 1969); Primer Congreso de Historiadores de Bolivia (La Paz, enero 1970), en la que se trataron temas sobre historia, archivos, bibliotecas y fuentes, presentando la ponencia “Notas sobre un plan para el estudio de la historia republicana de Bolivia” (Presencia Literaria. La Paz, febrero 15, 1970) y “Dos archivos históricos Bolivianos poco conocidos: Oruro y Cochabamba” (V.5,6,7,8); Primera Reunión de la Sociedad Boliviana de Historia (Conmemoración del Bicentenario de la Casa de la Moneda, 1773-1973. Potosí, noviembre 1973), expuso sobre “Don Tomás Frías, diplomático” (“Frías diplomático, su última misión”. Presencia Literaria. La Paz, noviembre 25 de 1973, p. 3 y 4); IV Reunión Nacional de Historiadores (Oruro, mayo 1978), con “Marcos Beltrán Ávila, historiador orureño” (“Marcos Beltrán Ávila, historiador”. Presencia Literaria. La Paz, julio 2 de 1978, p. 3). Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto-Comisión Nacional del V Centenario del Descubrimiento de América. Encuentro de Dos Mundos, coordinó la organización del “Coloquio Internacional sobre Historia colonial de Potosí” (Potosí, julio 20-23 de 1988) (Discurso de inauguración: “Potosí, ciudad primada”. El Siglo. Potosí, julio 22 de 1988, p. 4). Es de destacar que la Carrera de Historia le rindió un Homenaje en mérito a su labor docente (1 junio 1995), oportunidad en leyó su discurso titulado “No dejemos de soñar a Bolivia” (Primera Plana-Arte y Cultura. La Paz, julio 2, p. 6-7; y en Historia

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y Cultura, Nº 24, La Paz, octubre 1997, p. 277-279. Homenaje Carrera de Historia. Esta edición fue dedicada a la memoria de los socios fallecidos, entre ellos a JSG). La Academia Nacional de Ciencias de Bolivia en su Reunión Plenaria Pública (La Paz, abril 30 de 1997) en Homenaje a los Académicos de Número y Miembros del Consejo Superior de Investigaciones Científicas recientemente fallecidos, rindió un “Homenaje al Lic. Juan Siles Guevara por el Académico Teodosio Imaña Castro”. Durante más de 30 años de su vida intelectual y académica, organizó una biblioteca especializada y selecta de aproximadamente 10.000 volúmenes (libros, folletos y colecciones de revistas y boletines) en ciencias sociales y humanísticas (boliviana y extranjera), inclusive ediciones agotadas y raras: antropología, arqueología, arte, bibliografía, biografía, educación, geografía, historia, filosofía, literatura, política, psicología, sociología. Entre la colección de revistas bolivianas destacan Arte y Arqueología, Cultura Boliviana, Historia y Cultura, Historia Boliviana, Kollasuyo, Signo. De alguna manera JSG era bibliófilo y bibliómano compulsivo, pues prefería comprar libros sacrificando algunas prioridades u obligaciones. Varias reseñas y comentarios bibliográficos eran parte de su biblioteca. Habiendo sido bien aprovechada, en 1994 la ofreció en venta a la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la UMSA, pero la negociación no se concretó. Finalmente fue vendida por sus herederos a la Universidad Técnica de Oruro. Obra publicada Su producción intelectual (historia, geografía, bibliografía, biografía, crítica, archivística, de 1963 a 1995), comprende: Libros, folletos, separatas; Trabajos en monografías (contribuciones); Prólogos, Presentaciones; Artículos, Notas, etc. en Revistas, Boletines; Artículos, Notas, etc. en Periódicos; Entrevistas, Reportajes. Presentamos un extracto. I. Historia 1. Ensayo crítico sobre: “Chile y Bolivia. Esquema de un proceso diplomático”, de Jaime Eyzaguirre. La Paz: Centro de Estudiantes Facultad de Filosofía y Letras UMSA, 1967. Otras ediciones: La Paz, 1976, 1979.

2. Bolivia’s Right to the Pacific Ocean. A critical essay on Jaime Eyzaguirre’s “Chile and Bolivia: outiline of diplomatic process”. Translated by María Alicia Crespo de Parkerson. La Paz: Fundación “Manuel Vicente Ballivián”, 1980.

3. Le Droit Bolivien au Pacifique. Essai critique sur: “Chili et Bolivie schema d’un processus Diplomatique”. De Jaime Eyzaguirre. Traduction Claude Fisbach. La Paz: Comission Nationale pour la Rememoration de la guerre du Pacifique, 1980.

4. La última misión diplomática chilena y el comienzo de la Guerra del Pacífico. La Paz: Academia Boliviana de la Historia, 1980. Separata de Anales de la Academia Boliviana de la Historia 1973-1979. Contiene: Palabras del director de la Academia, discurso de respuesta del académico Jorge Escobari Cusicanqui.

II. Bibliografía 1. Contribución a la Bibliografía de Gabriel René Moreno. La Paz: Centro de Estudiantes Facultad de Filosofía y Letras UMSA, 1967. Separata de la revista Logos Nº 3.

2. Ensayo de una bibliografía histórica sobre la revolución del 16 de Julio de 1809 en La Paz. La Paz: Instituto de Investigaciones Históricas y Culturales de La Paz, 1968.

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3. Bibliografía de Bibliografías Bolivianas. La Paz: Ministerio de Cultura, Información y Turismo-Departamento de Literatura, Bibliotecas y Archivos, 1969.

4. Bibliografía de Bibliografías Bolivianas. La Paz: Centro Nacional de Documentación Científica y Tecnológica-UMSA, 1983. Adiciones de José Roberto Arze. 5. Bibliografía preliminar de Ricardo Jaimes Freyre. La Paz: Ministerio de Informaciones, Cultura y Turismo-Departamento de Literatura, Bibliotecas y Archivos, 1969.

6. Bibliografía selecta de Historia de Bolivia. La Paz-Cochabamba: Editorial Los Amigos del Libro, 1975. Separata de la “Bibliografía Boliviana del año 1974”.

7. Ensayo de una bibliografía de Ricardo Jaimes Freyre. La Paz: Don Bosco, 1985. Separata de Signo, Nº 14 (La Paz, marzo 1985).

8. Ensayo de una bibliografía boliviana de fuentes éditas para su historia diplomática. La Paz: Don Bosco, 1985. Separata de Historia y Cultura, Nº 7 (La Paz, abril 1985).

III. Ensayo Biográfico

1. Ricardo Jaimes Freyre, historiador del Tucumán. Sevilla: Anuario de Estudios Americanos, 1977. Id. Separata T. XXXIV.

2. Gabriel René Moreno Historiador Boliviano. La Paz: Editorial Los Amigos del Libro, 1979.

3. Perfil de la vida y obra de Manuel Vicente Ballivián. Un científico boliviano. La Paz: Fundación Manuel Vicente Ballivián, 1979.

IV. Compilaciones

1. Revisiones bolivianas. La Paz: Ed. Camarlinghi, 1969.

2. Las cien obras capitales de la Literatura Boliviana. La Paz-Cochabamba: Editorial Los Amigos del Libro, 1975. V. Publicaciones Archivísticas

1. “Prólogo”, p. 5-12. En: José Vásquez Machicado. Catálogo de documentos referentes a Oruro en el Archivo General de Indias de Sevilla. Oruro: Editorial Universitaria, 1966

2. Id. “Catálogo de documentos referentes a Oruro en el Archivo General de Indias de Sevilla”, en Signo, Nº 60-62 (La Paz, 2002): 101-106 3. “La misión de José Vásquez Machicado en el Archivo de Indias (1931-1936)”, en Revista Diplomática e Internacional, Nº 5 (La Paz, 1 de abril de 1967): 17-21 4. “Un archivo colonial boliviano desconocido”, en Bolivia, Nº 1 (La Paz, 1969): 15

5. “Dos archivos históricos Bolivianos poco conocidos: Oruro y Cochabamba”, en Anuario de Estudios Americanos, T. XXVI (Sevilla, 1969): 677-681

6. Dos archivos históricos Bolivianos poco conocidos: Oruro y Cochabamba. Sevilla: Anuario de Estudios Americanos, 1969. Separata T. XXVI.

7. Id. Presencia Literaria. La Paz, 8 de marzo de 1970: 2 y 3 8. Id. Boletín del Archivo de La Paz, Nº 1, 1976: 3-6

9. “La primera misión boliviana en archivos españoles”. Presencia Literaria. La Paz, 11 de octubre de 1970: 1

10. “La primera misión boliviana en archivos españoles II”. Presencia Literaria. La Paz, 18 de octubre de 1970: 1 11. “La misión Bautista Saavedra en archivos españoles”. Presencia Literaria. La Paz, 1 de noviembre de 1970: 1, 4

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12. “La primera misión boliviana en archivos europeos”. Presencia Literaria. La Paz, 22 de noviembre de 1970: 1, 4

13. “La misión Campero-Acosta en archivos británicos”. Presencia Literaria. La Paz, 7 de febrero de 1971: 1 14. “La misión de Humberto Vásquez Machicado en los Archivos italianos”, en Revista Diplomática e Internacional, Nº 19 (La Paz, diciembre-abril de 1971): 55-57 15. “El primer monumento de la literatura boliviana”. Presencia Literaria. La Paz, 6 de agosto de 1972: 7 16. “Tres cartas inéditas de René-Moreno”. Presencia Literaria. La Paz, 6 de mayo de 1973: 2 17. “La Misión de Alberto Crespo Rodas en el Archivo de Indias (1954-1956)”. Presencia Literaria. La Paz, 26 de agosto de 1973: 3 18. “La misión de Rosendo Villalobos en archivos españoles”. Presencia Literaria. La Paz, 16 de septiembre de 1973: 2 19. “Misiones de Marcos Beltrán Ávila en archivos españoles”. Presencia Literaria. La Paz, 23 de septiembre de 1973: 3 20. “Misión de Ostria Gutiérrez en el Archivo de Indias”. Presencia Literaria. La Paz, 30 de septiembre de 1973: 3 21. “Misión de Diómedes de Pereyra en archivos españoles”. Presencia Literaria. La Paz, 7 de octubre de 1973: 2-3 22. “La misión de David Alvéstegui en los archivos italianos”. Presencia Literaria. La Paz, 14 de octubre de 1973: 2 23. “Guía del Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto”. Presencia Literaria. La Paz, 17 de febrero de 1974: 2 24. Id. Boletín del Archivo de La Paz, Nº 3, 1977: 11-14 25. Id. Boletín Informativo. Archivo y Biblioteca Central Cancillería de la República, Nº 3 (La Paz, junio de 1996): 2-4 26. “Misión de Adolfo de Morales en archivos españoles (1950-1958)”. Presencia Literaria. La Paz, 24 de febrero de 1974: 3 27. “Misión de Manuel Frontaura Argandoña en el Archivo del Vaticano (1962-1965)”. Presencia Literaria. La Paz, 28 de abril de 1974: 2 28. “Misión de José de Mesa y Teresa Gisbert en archivos europeos (1966-1968)”. Presencia Literaria. La Paz, 3 de noviembre de 1974: 2 29. “Misión de Roberto Querejazu Calvo en archivos ingleses (1970)”. Presencia Literaria. La Paz, 24 de noviembre de 1974: 1 30. “Misión de Guillermo Ovando en archivos españoles”. Presencia Literaria. La Paz, 9 de diciembre de 1974: 2 31. El ejemplar boliviano del Acta de Capitulación de Ayacucho. La Paz: Imprenta del Estado, 1974 32. Coplas a la muerte de Don Diego de Almagro, Primer Gobernador de la Nueva Toledo. Introducción, trascripción paleográfica y notas. La Paz: Instituto Boliviano de Cultura, 1975 33. “El Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto”, en J.Te Paske: Research guide to Andean History: Bolivia, Chili and Peru (Durham, 1981: 15-18). 34. “El Archivo de la Catedral de Oruro”. Presencia Literaria. La Paz, 20 de noviembre de 1983: 2 35. Id. Boletín del Archivo de La Paz, Nº 9, 1986: 9-12

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36. “El Archivo de la Parroquia de San Pedro de La Paz”. Presencia Literaria. La Paz, 17 de marzo de 1985: 2 37. “Discurso de respuesta del académico Juan Siles Guevara”. En: Anales de la Academia Boliviana de la Historia 1990-1995 (La Paz: Academia Boliviana de la Historia, julio de 1995): 43-44. Al discurso de ingreso de Adolfo de Morales (junio de 1985) “Noticias esquemáticas sobre los Archivos y la Casa de Contratación de Sevilla”. Fuente: Molina, 2012a (inédito).

SILES REYES, HERNANDO

(Sucre, 5 de agosto de 1882. † Arequipa, Perú, 23 de noviembre de 1943) Abogado (Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca). Catedrático universitario y rector de su alma mater. Fue Diputado (1920-1923), Ministro de Instrucción y Agricultura (1922) y de Guerra y Colonización (1923), Senador (19241926). Presidente de la República (1926-1930). Fundó el Partido de la Unión Nacional (1927-1928), el primero en su género. Durante su gobierno se creó el Banco de la Nación Boliviana (Banco Central de Bolivia) y la Contraloría General de la República, por recomendación de la Misión Kemmerer. Hombre muy culto, formó una biblioteca especializada y un archivo personal, que fue destruido “el miércoles 28 de mayo de 1930, inmediatamente después del derrocamiento (por) una muchedumbre (que) asaltó su residencia, la saqueó y quemó sus libros y archivo personal. La destrucción y el incendio de la casa fue obra de la plebe -señala Arguedas*- pero la pérdida del archivo y de la correspondencia personal fue obra del los Cholos”, vocablo con el que se A. Arguedas* refería a “todo el que piensa bajamente, de donde resulta que hay caballeros cholos que son los más” (...) “gentecilla que Siles había distinguido y favorecido con puestos diplomáticos en Europa: a la hora de su caída se mezclaron a la turba que atacó y deshizo la casa de la madre política y fueron ellas quienes abrieron a balazos y encabezaron el saqueo y la destrucción de la vivienda y, sobre todo, del archivo privado de Siles con furia afanosa, con ardor diligente, empeñosamente y con un entusiasmo y una decisión en que se veía el más grande deseo de borrar las huellas escritas. Curiosos pueblos aquellos, sin juicio, sin voluntad, sin memoria”, sentenció. Fuente: Arguedas, 1982: II, 198-199, 208; Arze, 1991, 181-182; Barnadas, 2002: II, 905-906.

SILES SALINAS, LUIS ADOLFO

(La Paz, 21 de junio de 1925. † La Paz, 19 de octubre de 2005) Hijo del presidente H. Siles* (1926-1930) y hermano por padre del ex presidente H. Siles Zuazo* (1956-1960 y 1982-1985). Estudió Filosofía en Lima (Perú) y luego en la UMSA. Se graduó como abogado en la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca (1949). Fue catedrático en universidades de Bolivia, Ecuador y Estados Unidos. Fue vicepresidente (como líder del Partido Social Demócrata), del General R. Barrientos*, ejerciendo de 1966 a 1969. Tuvo un papel preponderante como presidente del Congreso Constituyente que promulgó la Constitución de 1967. En 1969 sucedió constitucionalmente a Barrientos, tras la trágica muerte de éste el 27 de abril de ese año. Inauguró la televisión en Bolivia, fue fundador del Pacto

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Andino (Comunidad Andina de Naciones). Fue derrocado por golpe militar el 26 de septiembre de 1969 protagonizado por el General A. Ovando*. Fue presidente de la Comisión de Justicia y Paz en defensa de los derechos humanos, muy crítico al gobierno del Gral. H. Bánzer*. Fue también miembro de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la Organización de Estados Americanos* y fundador de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia. En 1979 apoyó la candidatura de la UDP y en 1980 fue candidato presidencial de una coalición de partidos de centro y algunos grupos de izquierda. Apoyó el movimiento organizado en 1981 contra la dictadura de L. García Meza*. Fue magistrado de la Corte Suprema de Justicia. Destacó por su sensibilidad con la historia y los archivos al disponer mediante DS 08884 de 31 de julio de 1969, la tuición la Casa de la Moneda*, por parte del Banco Central de Bolivia*, para atender “en forma directa las obligaciones de sostenimiento del personal, reparaciones del edificio y cuidado de las diversas secciones del Museo y Archivo”, política que se consolidó al sumarse la Casa de la Libertad*, el Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* y el Museo Nacional de Arte, administrados por la creación de la Fundación Cultural* (1995) que creó el Banco Central de Bolivia*, con ese fin. Fuente: Wikipedia (5.6.12); Gaceta Oficial de Bolivia Nº 9536.

SILES ZUAZO, HERNÁN

(La Paz, 19 de marzo de 1913. † Montevideo, Uruguay, 6 de agosto de 1996) Abogado. Político. Fundó el Movimiento Nacionalista Revolucionario (1942) junto con V. Paz*. Asumió el poder interinamente después de la Revolución del 9 de abril de 1952, a nombre de Paz. Fue electo Presidente Constitucional (19561960), sucediendo a Paz. Luego del golpe de Estado del 4 de noviembre de 1964, salió al exilio. Retornó para participar en las elecciones de julio de 1979, donde salió vencedor, pero no pudo asumir el mando debido al “empantanamiento” en el Congreso que no logró dirimir el voto a favor de Siles o Paz, designando como solución temporal sui géneris, al Presidente del Senado W. Guevara Arze*, para hacerse cargo interinamente de la Presidencia de la República por un año, hasta las elecciones de 1980. Un cruento golpe de Estado (1 de noviembre de 1979) derrocó al Gobierno de Guevara, provocando la resistencia popular encabezada por la Central Obrera Boliviana que generó a su vez la violenta represión denominada “Masacre de Todos Santos”, donde murieron más de 100 personas y se produjeron 30 desaparecidos. El dictador Cnl. Alberto Natusch Busch se vio forzado a devolver el poder al Congreso que eligió a la Presidenta de la Cámara de Diputados, Lidia Gueiler, como segunda Presidente interina de la República, hasta las elecciones del 29 de junio de 1980, en las que triunfó Siles, lo que nuevamente generó un golpe de Estado, el 17 de julio de 1980, por un grupo de militares ligados al narcotráfico, liderados por el Gral. L. García Meza* y su lugarteniente L. Arce Gómez*, con apoyo de la dictadura militar argentina, impidiendo la asunción de Siles Suazo. La dictadura no logró consolidarse y en medio de pugnas internas y sin reconocimiento internacional, el último dictador militar, el Gral. Guido Vildoso convocó al Congreso de 1980 y restituyó el poder a los civiles el 10 de octubre de 1982. Siles gobernó con el Frente de Unidad Democrática y Popular, conformado

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por el Movimiento Nacionalista Revolucionario de Izquierda, el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (de J. Paz Zamora*, su Vicepresidente), y el Partido Comunista de Bolivia. Presionado por huelgas sociales, la tenaz oposición del empresariado privado y los partidos políticos de derecha, soportó el desplome de precios de las materias primas, la bancarrota económica con la mora de la deuda externa, que agudizó el proceso hiperinflacionario que alcanzó al 27.000%, con que se destruyó el poder adquisitivo de los asalariados, llevando el país a la anarquía. Siles facilitó la extradición del criminal de guerra nazi Klaus Barbie, que fuera protegido por las dictaduras militares; restableció las relaciones diplomáticas con la República Popular de China. Fue abandonado por el Vicepresidente J. Pazamora, soportó las jornadas de marzo protagonizadas por mineros sindicalizados, fue secuestrado por un comando paramilitar y finalmente se vio forzado a renunciar a su mandato convocando a elecciones anticipadas. Concluido su gobierno (1985), se retiró de la vida política, en Montevideo donde falleció. Sus restos mortales fueron repatriados a La Paz, y depositados en el Museo de la Revolución (Plaza Villarroel de la ciudad de La Paz). Durante su segundo Gobierno, atendió las necesidades del Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, Casa Nacional de Moneda* y Casa de la Libertad*, disponiendo formalmente su traspaso al Banco Central de Bolivia*, mediante el DS 19178 (3 de agosto de 1983), que incorpora, además, al Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* a su seno, sacándolo del estado de miseria crónica en la que se debatía, decreto que fue elevado a rango de Ley el 5 de febrero de 1986. Fuente: http://www.es.wikipedia.org (22.3.2012)

SILVESTRE PATZI, MAGALÍ (La Paz, 24 de agosto de 1984)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en el II Taller Departamental de la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2007). Trabajó como consultora en la Unidad de Patrimonio Tangible Intangible de la Alcaldía de La Paz (2009); Pasante en la Biblioteca y Archivo Histórico Arturo Costa de la Torre (2009) y en el Archivo del Banco Ganadero (2009); participó en el Censo Guía de Archivos en el Servicio de Impuestos Nacionales (2009) y fue pasante en el Archivo del Ministerio de Economía y Finanzas (2010). Fuente: CV.

SIMONSON, MICHAEL

(Rapid City, South Dakota, EE.UU., 18 de julio de 1968) Estudió la Carrera de Comunicación, Información y Bibliotecología en la Universidad de Rutgers, Nueva Jersey (2005), con una beca del National Endowment for the Humanities. Realizó el programa de entrenamiento bibliotecario en la Biblioteca Pública de Brooklyn (Nueva York); fue pasante interno en el Instituto Leo Baeck (2002). Presidente de la Mesa Redonda de Archivistas del área Metropolitana de Nueva York (2008-2010), miembro de la Sociedad Americana de Archivistas y participante activo del Consejo de la Biblioteca Metropolitana de Nueva York (Metro). Supervisor del tratamiento técnico de colecciones de materiales originales en diversos soportes,

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incluyendo la microfilmación, digitalización y descripción archivística, de acuerdo a las normas EAD, para fines de investigación. El trabajo del Instituto “Leo Baeck” se facilita con becas para archivistas voluntarios. Recibía estudiantes internos de Alemania y Austria. Es responsable del montaje de exhibiciones, publicaciones, acceso a investigadores en el Instituto. Dicta clases sobre historia judía para todo público. Es responsable de contactar con filántropos y aplica la política de preservación archivística del Instituto. Dirigió el trabajo técnico de organización y conservación archivística de la Colección Moritz (Mauricio) Hochschild* (empresario minero alemán que trabajó en Bolivia), donada al Instituto por el historiador alemán H. Waszkis*. La organización y catalogación estuvo a cargo del interno B. Schultz*. Simonson tuvo a su cargo la organización de las fotografías de la colección y Viola Voss desarrolló la base de datos de la Colección en 2005. Fuente: Schultz, 2005; Comunicaciones personales de Michael Simonson (31.05.10; 1.06.10); M. Simonson (2.6.10) y B. Zhultz (7.6.10).

SIÑANI SIÑANI, RAMIRO (La Paz, 12 de abril de 1970)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Participó en el Congreso Departamental de Trabajadores de Información Filial La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996), Seminario Taller: Ley del Sistema Nacional de Información* (1997); Conferencia Corrientes Actuales en los Museos Iberoamericanos. Unificación y Armonización de la Información y Automatización de Archivos (1998); Conferencia “Los Archivos Españoles y la Escuela Taller de Archivos para Iberoamericanos”, por la Dra. M.L. Conde*, Directora del Archivo General de la Administración de España (2002); La Importancia de los Archivos para la Democracia y el Acceso a la Información (2005); Gestión Documental y Organización de Archivos Administrativos (2006); Técnicas de Archivo (2007). Trabajó como Técnico Auxiliar de Archivo en la Unidad de Control de Activos de Entidades en Liquidación, en la organización de los Fondos “Banco de la Nación Boliviana”, “Banco del Estado”, “Corporación Boliviana de Fomento” y “Centro Nacional de Cómputo” (1998); fue Auxiliar del Archivo de La Paz* (20002002). Desde el 2002 es Auxiliar de Archivo de la Aduana Nacional de Bolivia. Fuente: CV.

SISA VARGAS, BARTOLINA

(Caracato, La Paz, 24 de agosto de 1761. † 6 de noviembre de 1782) Hija de familia mestiza muy numerosa. Mujer del líder indígena J. Apaza (Túpac Katari*), a la que le reconocía como Virreina. Se dice de ella que fue “chola intrépida y audaz” que comandó íntegramente los ejércitos indígenas cuando su marido salió al encuentro de I. Flores*, y que tenía don de mando incluso sobre Túpac Katari, quien “no emprendía la más pequeña acción, sin previa consulta a ella. Asistía a las funciones muy alhajada, tenía su asiento bajo de sitial y todos le doblaban la rodilla”. (Aranzáes). La vida de los españoles pendía de su decisión, dictaba órdenes de proscripción o perdón por medio de su secretario Juan Hinojosa, también mestizo. Capturada el 2 de julio de 1781, fue ahorcada después de un fallo sumario, junto a su

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secretario. Generó, como otros líderes indígenas, un archivo epistolar de alto valor para comprender el movimiento insurreccional indígena. Fuente: Aranzáes, 1915: 724; Barnadas, 2002, II: 915-916.

SISTEMA DE ARCHIVO DE LA COMIBOL Repositorio oficial de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol)*. Fundado por E. Ramírez*, creado por DS. 27490 de 14 de mayo de 2004 durante la presidencia de C. Mesa*. Reúne los documentos producidos y recibidos por las ex empresas mineras, Patiño Mines & Enterprises, Consolidated, Incorporated (PMCI), de Simón I. Patiño*; Empresa Minera Unificada de Mauricio Hochschild*; y la Compagnie Aramayo de Mines en Bolivie, de Carlos V. Aramayo*; y posterior a la nacionalización de las mismas (DS 3223 de 31 de octubre de 1952), los documentos de la Corporación Minera de Bolivia y sus numerosas empresas. Es el repositorio institucional más extenso en su género en el mundo entero, pues abarca un total de 25.000 metros lineales de documentos, distribuidos en tres edificios diseñados y construidos expresamente para archivos, con recursos propios de la Comibol, ubicados en las ciudades de El Alto (declarado por Ordenanza Municipal como “Patrimonio Documental de la ciudad de El Alto”, el 2004), Oruro y Potosí. Otros repositorios del Sistema de Archivo de la Comibol, se encuentran en La Paz, el centro minero de Catavi y el de Pulacayo. A su interior se desempeñan Archiveros empíricos* junto a Archiveros profesionales* de las Carreras de Historia* y Bibliotecología*. Fuente.: Campos, 2004; Oporto y Ramírez, 2007; Tenorio, 2005.

SISTEMA DE INFORMACIÓN Y DOCUMENTACIÓN SINDICAL (SIDIS) El 7 de julio de 1986, Simón Reyes, dirigente de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB) y Juan Cristóbal Soruco del Centro de Documentación e Información (CEDOIN), suscribieron el convenio interinstitucional que crea el Sistema de Información y Documentación Sindical SIDIS, “por medio del cual la FSTMB inició el trabajo de recuperar, sistematizar, proteger, catalogar su archivo histórico y crear más óptimas condiciones de accesibilidad irrestricta”. Es el mayor esfuerzo realizado por un organismo sindical (por ende privado), para recoger y concentrar las documentaciones de los sindicatos afiliados a ese ente en cada uno de los centros mineros. El método desarrollado no se ajustó a la archivística propiamente dicha, pues no se trataba de transferencias reguladas, sino más bien de préstamos temporales de los originales para su fotocopiado y posterior devolución. En esa etapa la participación de los obreros fue crucial: “unos aportaron más que otros, hubieron compañeros que entregaron en forma desprendida sus ‘archivos personales’, sus ‘álbumes de fotos’, sus ‘recuerdos’. Algunos, cuando se enteraron que había SIDIS fueron al Archivo a dejar ‘sus aportes’ a la historia”. Se trata de una obra colectiva, como todo aquellos que protagonizaron los mineros. El Archivo del SIDIS fue organizado por iniciativa de E. Ramírez* con el impulso de Víctor López Arias, máximo dirigente de la FSTMB, y un grupo de estudiantes (Germán Choque, I. Jiménez*, Marino Oña, F. Chuquimia*, H. Flores*) de la Carrera de Historia* (UMSA), mediante convenio de 7 de julio de 1988. Sus Directores fueron F. Valdivia*,

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J. Strengers* y G. Dalence*. Recibió financiamiento de War on Want (Inglaterra), SNV (Holanda) y OCSD (Canadá). En 2002 el SIDIS publicó el índice electrónico de cinco fondos (en realidad eran dos). Pero de ellos únicamente dos corresponden a fuentes primarias, es decir, la serie de 25 congresos de la FSTMB y las memorias de la Asociación de Industriales Mineros (1930-1952), los otros tres son más bien fuentes secundarias (cf. Boletines de la FSTMB y recortes de prensa, 1938-1939). En 1993 (25 de noviembre) fue reconocido con un Diploma en mérito al “Servicio Documental” por el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas* Fuente: Flores, 2002; Oporto, 2006: 293-294.

SOCIEDAD DE PROTECCIÓN A LOS INMIGRANTES ISRAELITAS (SOPRO), ARCHIVO DE LA Legado documental formado por la Sopro como resultado de su trabajo institucional. Se conoce de su existencia gracias al trabajo del historiador L. Bieber* quien logró acceder a los documentos existentes en la sede de Sopro en la ciudad de Cochabamba. Este Archivo está conformado por 80 archivadores, ordenados según criterios administrativos de esa institución. Las carpetas carecen de rótulos temáticos. Casi en su totalidad los documentos están redactados en alemán. Existe otro archivo de Sopro en su sede principal en La Paz, que conserva una serie de originales sobre diversos aspectos de la vida judía en Bolivia. Finalmente Bieber afirma que la American Jewish Joint Distribution Committee de Nueva York, conserva muchos documentos relacionados a la mencionada Sociedad de Protección. Bieber ha publicado un catálogo de 126 cartas existentes en el Archivo de Sopro en Cochabamba. Fuente: Bieber, 2010.

SOLANO MEDINA, RAÚL

(Catavi, Provincia Bustillo, Potosí, 31 de octubre de 1943) Suboficial del Ejército. Estudió en la Escuela de Clases “Maximiliano Paredes”, actual Escuela Militar de Sargentos (1957-1959). Hizo cursos de postgrado en Orientación y actualización en Armamento especial e Inteligencia militar en la Escuela de las Américas, Panamá (1968); Especialización en Grafología y Grafocrítica, en la Escuela de Detectives y Dirección de Investigación Nacional (1975) y el Curso de Actualización y Capacitación de Inteligencia (1976). Participó en las acciones contraguerrilleras en Ñancahuazú (1967), y Teoponte (1970). Fue destinado al Departamento II del Ejército (1974) y enviado a la Escuela de las Américas como Instructor (1974-1975). Fue condecorado por su desempeño militar como “Graduado Distinguido” en la Escuela de las Américas; Presea “Guerrillero José Miguel Lanza” en Grado de Caballero; Presea “Eduardo Avaroa”, Grado de Caballero por servicios especiales a las FF.AA. Era el responsable de la custodia de los Diarios de la Guerrilla del ‘Che’ Guevara* desde 1969 hasta julio de 1980, cuando fue destinado al Ministerio del Interior. En su relevo entregó estos documentos al Mayor Luis Landa Shaille. A raíz de aquello fue acusado, como cómplice del Gral. L. García Meza*, por los delitos de sustracción y venta ilegal de los diarios del comandante guerrillero ‘Che’ Guevara y “Harry” Pombo Villegas. Fue detenido desde el 9 de marzo de 1989 hasta el 10 de octubre de 1990. Salió en libertad condicional y fue declarado inocente en el Juicio

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de Responsabilidades contra la dictadura de L. García Meza, mediante sentencia de 21 de abril de 1993. Acopió documentos relativos a ese golpe de Estado, con los que pretende escribir un libro. Fuente: Solano, 1997.

SORIA GALVARRO TERÁN, CARLOS ALBERTO (Parotani, Provincia Quillacollo, Cochabamba, 1944)

Cursó el bachillerato en el colegio nocturno “Teodomiro Beltrán” de Cochabamba. Hizo estudios de Historia* (UMSA), interrumpidos en 1971 debido a la persecución dictatorial por su militancia política de izquierda. Se inició en la labor periodística en radios mineras de Catavi y Siglo XX, en los primeros años de la década de los 70, para luego desarrollar extensa carrera periodística autodidacta en medios radiales, escritos, televisivos e incluso digitales. Fue detenido el 17 de julio de 1980 durante el golpe de Estado iniciado con el asalto a la sede de la Central Obrera Boliviana COB. Fue confinado en Puerto Cavinas, a orillas del río Beni, luego de su expulsión del país, recibió asilo político en México. Estando en prisión fue testigo de la masiva destrucción de documentos del Parlamento sobre la que hizo una contundente denuncia, a su retorno al país con la reconquista de la democracia. En 1987 obtuvo el título de Periodista en Provisión Nacional según la Ley 494 de Profesionalización de Periodistas. Fue docente universitario en las carreras de Comunicación Social de la Universidad Técnica de Oruro (UTO) y de la UMSA, por 15 años. Según ha declarado él mismo, su inclinación por apoyar el trabajo periodístico en la investigación documental proviene de sus estudios de Historia y particularmente de la influencia del historiador A. Crespo* de quien fue discípulo. Su primer libro, Con la revolución en las venas (1980) describe la resistencia de los mineros de Siglo XX y Catavi (Norte de Potosí) a la dictadura del Gral. H. Banzer*, fue escrito con la escasa documentación salvada de la persecución política; gran parte de la edición de este libro fue secuestrada y quemada por la nueva dictadura instalada en julio de 1980. Siendo Director de Noticias de Televisión Boliviana hizo un reportaje sobre el criminal de guerra nazi Klaus Barbie (alias Klaus Altmann) en base a un extenso diálogo sostenido durante su expulsión de Bolivia en 1983 y con numerosas entrevistas realizadas en Francia. Poco después descubrió que todo el material audiovisual había desaparecido de los archivos de Canal 7, a raíz de lo cual hizo una severa exhortación para conservar la imagen en movimiento como documento esencial de la época moderna, expuesto a un rápido deterioro dada la extrema vulnerabilidad del soporte magnético. No obstante esa sensible pérdida, publicó Barbie-Altmann: de la Gestapo a la CIA (1986), en el que trascribe la entrevista completa con Barbie conservada únicamente en audio. El libro contiene algunos documentos incontrastables de la vinculación del personaje con los regímenes represivos bolivianos. Fue testigo de cargo ante la Corte Suprema de Justicia en el Juicio de Responsabilidades contra el ex dictador L. García Meza* y sus colaboradores, ocasión en la que su libro sobre Barbie, fue arrimado al expediente del juicio como pieza documental. Desde comienzos de los 90 empezó a dar a conocer algunos trabajos sobre la presencia del comandante ‘Che’ Guevara* en Bolivia, tema que en el transcurso del tiempo se convirtió en su más sobresaliente especialidad. En aquel periodo publicó cinco volúmenes de recopilación documental bajo el rótulo

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genérico de El Che en Bolivia: Documentos y testimonios (1992-1996), los mismos que tuvieron una segunda edición en 2005, con los auspicios de el diario La Razón de La Paz. Entre 1991 y 1997 dirigió el Centro de Documentación e Información* (CEDOIN), inmenso y muy útil archivo documental hemerógrafico que fue intervenido por la dictadura de julio de 1980. Lamentablemente cerró sus puertas en 1999. Diez años después fue transferido al gobierno municipal de La Paz y se encuentra en el Centro de Información Municipal de Cristo Rey. Gracias a su persistente dedicación al tema “Che Guevara en Bolivia”, logró acceder a la documentación original que la cancillería boliviana dejó en custodia en las bóvedas del Banco Central de Bolivia* luego de rescatarla de manos de una casa rematadora de Londres. Pudo fotografiar allí gran parte de dicho material lo que le permitió publicar la trascripción del manuscrito original del Diario de Pombo (el guerrillero cubano Harry Villegas Tamayo) del que se conocían hasta entonces solamente traducciones de segunda mano, muy poco fieles de la edición en inglés. Asimismo, una libreta de rigurosas evaluaciones trimestrales que el Che anotaba sobre los combatientes que lo acompañaban. Ambos documentos se publicaron primicialmente en el suplemento de La Razón Tras las huellas del Che en Bolivia (2006). También dio a conocer una lista de más de cien libros de cabecera, contenida en cinco páginas de la agenda alemana donde el ‘Che’ escribió gran parte de su diario, expresado en su ensayo Los libros: compañía inseparable del Che, que le sirvió para dictar conferencias, entre otras, en las ferias del libro de La Paz, La Habana y Buenos Aires. En marzo de 2009, con ayuda de su hijo A. Soria Galvarro*, puso en www.chebolivia.org toda su producción relativa al ‘Che’. Allí también fue colocada una nueva trascripción del Diario rigurosamente cotejada con los originales, la misma que debía acompañar la réplica facsimilar publicada por el Ministerio de Culturas de Bolivia en octubre de 2009. El sitio es frecuentado por un promedio mensual de alrededor de mil cibernautas de más de 80 países, lo que da una idea de la dimensión internacional de su trabajo investigativo y documental. Otros libros que ha publicado son: Coati 1972: relatos de una fuga (1997), sobre el escape masivo de los presos políticos de una isla del lago Titicaca; ConTextos y ReCuentos (2002), recopilación de su obra dispersa; en co-autoría, 1967: San Juan a sangre y fuego (2007), sobre la masacre minera lanzada para evitar la convergencia de los mineros con la guerrilla del Che. Colabora en diarios y revistas y desde 2007 es Director Adjunto de “Sur Agricultura: la radio de Río Abajo”, en el municipio rural de Mecapaca (La Paz). Publicaciones archivísticas: “La quema de los Archivos del Congreso” (Revista Semana de Última Hora, 17 de diciembre de 1982: 4-5; Id. en Re Cuentos (La Paz, Plural, 2002: 79-83); Id. en Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica, y la Necesidad de su Rescate para el Desarrollo Nacional, La Paz, BAHALP, 2011: 245-248); “CEDOIN: la memoria del país día a día” (Con Textos, La Paz, Plural, 2002: 243-249); “Che Guevara: las fuentes bolivianas y su tratamiento biográfico” (Visiones de fin de siglo: Bolivia y América Latina en el siglo XIX, La Paz, Coordinadora de HistoriaIFEA, 2001: 249-270). Fuente: CV.

SORIA GALVARRO VALDIVIA, ANTONIO RODRIGO (La Paz, 28 de agosto de 1968)

Licenciado en Información Científico-Técnica y Bibliotecología, con especialidad en Archivística en la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana (Cuba). A

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su retorno a Bolivia trabajó como Asesor de la Agencia de Cooperación Técnica Alemana GTZ, en el proyecto de creación y organización del Archivo Central de la Cámara de Diputados del Congreso Nacional; en el fortalecimiento de servicios públicos en la Prefectura del Beni y la Mancomunidad de Municipios del Norte de Potosí. Pasó a desempeñar funciones en el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (SERNAP), para la implementación del Sistema de Gestión de la Información Institucional para el desarrollo del sistema de correspondencia y creación de la biblioteca y Archivo Central. Al parecer este último objetivo no fue concretado pues el SERNAP carece de Archivo Central. Pasó a trabajar en la Fundación Tierra, en el proyecto TICs, como gestor de la Información del Observatorio de la Tierra en Bolivia. El 2009 fue designado Jefe de la Unidad de Comunicación Social del Ministerio de Hidrocarburos y Energía. Trabaja como consultor de Archivo en la Empresa Nacional de Electricidad, en Santa Cruz de la Sierra. En el ámbito particular trabaja con su padre, C. Soria Galvarro*, en la sistematización de información relacionada al Che Guevara*, en el sitio www.chebolivia.org Fuente: CV.

SORIA ROSAS, KARINA CECILIA (Oruro, 15 de diciembre de 1974)

Estudió Arquitectura en la UMSS de Cochabamba (1993-1999). Participó en la elaboración y ejecución de Proyectos en el área rural de la ciudad de Cochabamba para la Escuela Técnica Forestal de la UMSS (2000) y en la elaboración y ejecución de proyectos de viviendas unifamiliares en La Paz (2001). Trabajó como Asesora Técnica del Programa de Repliegue de Transferencia de Viviendas en la Gerencia Regional de COMIBOL Oruro (2003-2009). Asistió al Seminario Internacional sobre Políticas Archivísticas y Bibliotecológicas, organizado por la Asociación de Bibliotecarios de Oruro (2009), y al curso de Organización de Archivos y Legislación Archivística en la Constitución Política del Estado y su Importancia Estratégica para el Desarrollo Nacional, organizado por el Archivo Histórico Regional Oruro de la Corporación Minera de Bolivia (2009). Ha sido Jefe del Centro de Documentación de la Gerencia Regional de COMIBOL, Oruro (2007-2008); luego transferida como Auxiliar al Archivo Histórico Regional de Oruro (2009-2010), y al Archivo de Pulacayo (2011). Fuente: CV.

SOUX MUÑOZ-REYES, MARÍA LUISA (La Paz, 16 de enero de 1958)

Doctora en Historia. Docente titular de la UMSA. Miembro de la Sociedad Boliviana de la Historia, y de la Academia Boliviana de la Historia. Fue Jefa de la Oficina de Relaciones Internacionales del Ministerio de Educación durante la gestión de la ministra de Educación Magdalena Cajías (2006-2007). Secretaria Ejecutiva de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia* (2009-2012), desde la que apoyó las labores del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, el Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, la Casa de la Libertad*, la Casa de Moneda* y el Museo Nacional de Arte. Durante su gestión en la Fundación Cultural del BCB se despidió a M. Inch (diciembre de 2011) de la dirección del Archivo y Biblioteca Nacionales de

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Bolivia*. El Consejo Académico Universitario de la UMSA le otorgó la condecoración y diploma a la producción intelectual 2009. Entre su obra cito a Siporo, historia de una hacienda (1984), escrita bajo la dirección de A. Crespo*, siendo ella alumna de la Carrera de Historia*. Este trabajo se basó en la documentación de la hacienda del mismo nombre que perteneció a su familia. Su obra historiográfica se centra en el siglo XX, fundamentalmente, con algunos estudios sobre la guerra de la independencia: La coca liberal y circulación a principios de siglo (1993); De terratenientes a amas de casa: mujeres en la élite de La Paz en la primera mitad del siglo XX, con Seemin Qayum y R. Barragán* (1997) El complejo proceso hacia la independencia de Charcas (1808-1826) (2010); “Proyectos convergentes, discursos divergentes. Apuntes sobre la cultura política en Oruro, 1808-1811”, ponencia publicada en Oporto Ordóñez, Luis y Jáuregui Cordero, Juan (Editores): La Guerra de la Independencia. Silencio y Memoria. Bicentenario de Cochabamba. Memoria del Encuentro Internacional de Historiadores. Cochabamba, Municipalidad de Cochabamba, Universidad Mayor de San Simón, 2010: 73-81. Fue docente investigadora (1988) y directora (1990) del Archivo de La Paz*, institución a la que se mantuvo muy ligada por varios años. Publicaciones archivísticas: “Fondos y series documentales que se encuentran en el Archivo de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1990, 11 (12): 7-14); “Archivo de La Paz. Catálogo del Fondo León M. Loza” (Boletín del Archivo de La Paz, 1990, 11 (12): 15-34); “Catálogo del Fondo Julio César Valdez (Boletín del Archivo de La Paz, 1990, 11 (12): 35-52); “La sublevación de Túpac Katari y el trabajo archivístico de María Eugenia de Siles” (Boletín del Archivo de La Paz, 1994, (14): 1-3); “Los archivos especiales” (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 17 (16-17): 18-21).

STEVERLYNCK CAREAGA, JULIO MAURICIO (Potosí, 16 de febrero de 1960)

Arquitecto urbanista (UMSA). Maestría en Planificación y Manejo de Recursos Naturales en el Centro de Levantamientos Aeroespaciales SIG, Cochabamba (2004). Fue Ayudante de la cátedra de Introducción a la Tecnología en la Facultad de Arquitectura (1983-1985). Fue docente invitado del postgrado en Ecología y Conservación del Instituto de Ecología de la UMSA (2006). Expositor en conferencias, congresos, reuniones y bienales, en su especialidad, en Bolivia, Chile, México, Estados Unidos. Dirigió la construcción de obras civiles para instituciones nacionales y residencias particulares en La Paz y otras ciudades. Fue Asesor en el proyecto del Sistema de Información Geográfica del Proyecto Ordenamiento Territorial-Intervales (1997-1999). Consultor del Proyecto PSAC del Ministerio de Desarrollo Sostenible (2003), Jefe de la Unidad de Ordenamiento Territorial del Ministerio de Desarrollo Sostenible (2004), Coordinador del proyecto de Ordenamiento Territorial Macro Regional del Chaco Boliviano financiado por el PNUD (2006-2007), Construcción y dirección de obra para la construcción del Archivo Histórico Minero Regional Oruro y de Potosí (COMIBOL) (2008), Diseño y construcción del Instituto Normal Superior Tecnológico Humanístico El Alto (2009). En el ámbito archivístico, junto al Arq. Aito Añez*, elaboró el diseño de refuncionalización y remodelación de la Casa Suárez para el Archivo Histórico del Departamento del Beni (2000); y en asociación con el Ing. Fernando López Deheza, dirigió la construcción del primer edificio del Sistema de Archivo de la COMIBOL* en la ciudad de El Alto. Fuente: CV.

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STRENGERS, JERÖEN (Holanda)

Doctor en Historia. Miembro de la Federación Sindical Mundial de Trabajadores. Participó como voluntario en el proyecto de creación y organización del Sistema de Información y Documentación Sindical* (SIDIS) de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, acompañando a E. Ramírez*. En 1988 obtuvo ayuda financiera del SNV de Holanda. En 1992 asume la dirección del SIDIS. Publicó La pesada carga de la deuda (1986), y, La Asamblea Popular. 1971, que fue su tesis de doctor en Historia. Fuente: CV; Oporto, 2006: 294.

SUÁREZ CALLAÚ, NICOLÁS

(10 de septiembre de 1851. † Cachuela Esperanza, Beni, 9 de enero de 1940) Existe controversia sobre el lugar de su nacimiento. Mientras Tito Montaño afirma que nació en Portachuelo, Víctor Hugo Limpias señala San Ignacio de Velasco, ambos del Departamento de Santa Cruz. Industrial de la goma, comerciante, “esforzado y audaz explorador”. Recorrió el curso íntegro del río Beni. Con sus hermanos Francisco y Rómulo, fueron conocidos como “Los tres cruceños”. Fundó “Cachuela Esperanza” (1882) su establecimiento industrial y estación de transferencia, “habiéndola convertido en una pequeña ciudad, en la que existía hasta una imprenta en que se editaba revistas e impulsaba la actividad cultural”. A diferencia del industrial minero S.I. Patiño*, que fijó residencia en París, Suárez vivió hasta el final de su existencia, en ese “enclave de modernidad, dotada de telégrafo, electricidad, agua potable, un moderno hospital con rayos X, escuela, cine, teatro, club, bibliotecas, campos deportivos, tiendas, almacenes”. En el establecimiento industrial se encontraba la gerencia, oficinas, viviendas de lujo para su familia y otras para los técnicos y peones, gerencia, maestranza, carpintería, una locomotora y seis vapores de carga. Defendió la heredad nacional en la revolución separatista del filibustero Plácido de Castro; organizó y financió la “Columna Porvenir”, el 8 de octubre de 1902, pequeño ejército privado, del que formaron parte los indígenas Belisario Marupa y Constantino Tibubay, con el que recuperó su establecimiento industrial “Bahía” (actual Cobija, capital de Pando), en la célebre batalla del 11 de ese mes, en la que “ordenó arrojar flechas incendiarias, sirviéndose de Bruno Racua, “soldado ixiameño práctico en el manejo de esa arma”, quien “le prendió fuego al sernambí colocado en la punta de la flecha”, con la que provocó un incendio y el “triunfo completo: el enemigo dejó 53 muertos, de los que 27 habían caído en las trincheras” y seis prisioneros fueron fusilados. La Columna, a la que dotó de armas, vestimenta y víveres, “en once meses de campaña supo hacer alianzas con el bosque, el río y la barraca para obtener sus triunfos”, a un costo de 8.402.68 bolivianos. Durante la Guerra del Chaco (1932-1935) organizó y financió una columna de soldados benianos. Diversificó su industria con el beneficio de la castaña y la ganadería. La Casa Suárez se extinguió después de 1952. Su faceta archivística se generó, a raíz de las conferencias del Cnl. Federico Román, antiguo empleado de Suárez, quien actuó en la Campaña como Capitán, publicadas como “La acción de la Columna Porvenir en la campaña del Acre” (Revista Militar, Nos. 5 al 8, de 1922), en la que “ponía en duda el patriotismo

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de Nicolás Suarez”. Éste escribió el “Memorial de los Sucesos de la campaña del Acre”, para responder al artículo, sustentado con un Archivo con documentos oficiales de la Delegación Madre de Dios, Prefectura del Beni, Comité Directivo de la “Columna Porvenir”, del primer jefe y oficiales de la Columna; publicaciones de prensa contemporáneas y posteriores; cartas y atestaciones de testigos de la campaña; de los empleados de sus barracas gomeras; de miembros del Comité Directivo, que totalizan 138 documentos, y “un plano comprensivo del territorio a que se extendían las proyecciones del movimiento revolucionario de 1902”. “Mantuve -afirma Suárezlos documentos en la reserva que me aconsejaba mi carácter, ajeno como soy a ostentaciones y satisfecho de haber cumplido mi deber como ciudadano boliviano y Jefe de una casa industrial”. El Archivo fue publicado por su hijo in extenso, como Anotaciones y documentos sobre la Campaña del Alto Acre, 1902-1903, dividido en tres partes: documentos relativos a la conferencia del Cnl. Román y la respuesta de Nicolás Suárez; el Memorial de los Sucesos; y los documentos que lo sustentan. Las listas de la “Columna Porvenir” fueron reconocidas oficialmente por el gobierno nacional, “para establecer con precisión los derechos de los excombatientes”, caso sui géneris en la historia de la archivística boliviana. Por otra parte, como resultado de su empresa industrial, sobrevivió el Archivo Histórico de la Casa Suárez Hnos.*, conformado por documentos administrativos, comerciales y financieros de la empresa, que se encuentra en Guayaramerín. Publicaciones archivísticas: Anotaciones y documentos sobre la Campaña del Alto Acre, 1902-1903. Barcelona, Tipografía La Académica, 1928, pp. 8-10, 112-113, 131-132. Fuente: Barnadas, 2002: II, 947-948; Limpias, 2010: 568-569; Lora, 2002: T. 67, V. II, 373-374; Mercado, 2010: 178; Montaño, 2009: 4-5; Oporto, 2006: 226.

SUÁREZ SUÁREZ, HORTENCIA

(Villa Bella, Provincia Vaca Diez, Beni, 11 de septiembre de 1929. † Santa Cruz de la Sierra, 12 de julio de 2010) Mujer beniana de gran valía. Hizo sus estudios de primaria y secundaria en la Escuela “Juana Azurduy de Padilla” y el Colegio Nacional “Pedro Kramer” de Riberalta. Se tituló Cirujano-Dentista en la Facultad de Odontología de la UMSS. La pequeña ciudad en la que nació, Villa Bella, fue abandonada por sus pobladores, por lo que tuvo que trasladarse a la ciudad fronteriza de Guayaramerín, donde fue profesora ad honorem del Colegio Nacional “Manuel Antonio Ojopi”. Fue impulsora de obras y actividades sociales, culturales y deportivas a favor de la mujer. Perteneció a varias organizaciones cívicas y culturales como el Comité Pro-Agua Potable de Guayaramerín (fundadora y presidenta, en 1962), Secretaria General de la Unión Mujeres de Bolivia, Presidenta de la Asociación Democrática de Mujeres, Socia del Centro de Residentes Benianos en Cochabamba, Socia Honoraria de la Sociedad de Escritores y Artistas de Bolivia. Junto a su esposo, el Dr. Aldo Bravo Monasterio (fallecido en 1996), trabajó incansablemente para mejorar las condiciones de vida de obreros, gente humilde, y desamparados de esa región del país. Ambos, con la colaboración de amigos y gente del pueblo construyeron un hospital (que luego fue entregado a la Caja Nacional de Seguridad Social). Erigieron, con su propio peculio, el Palacio de Cultura y Galería de Notables del Beni, edificio que fue igualmente

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transferido en calidad de donación a la Universidad Técnica (hoy Autónoma) del Beni “Mcal. José Ballivián”, el 19 de noviembre de 1977. Ese mismo año, los esposos Bravo-Suárez, fueron declarados Presidentes Vitalicios del Palacio de la Cultura y Galería de Notables del Beni. Bolivia le fue muy reconocida con esta generosa dama y su esposo. Fue honrada con numerosas condecoraciones, entre ellas “Insignia Venera” Tercer Grado del Instituto Boliviano de Cultura (1977), “Gran Boliviana de la Educación” en el grado de Oficial por el Ministerio de Educación y Cultura (1983), “Nuestra Señora de La Paz” por la Alcaldía y Casa Municipal de Cultura de La Paz (1983), “Escudo de Oro del Beni” por el Centro Cultural “Moxos” (1983), “Gran Moxos” por la Casa de la Cultura del Beni (1987), “Medalla al Mérito Universitario” por la Universidad Técnica (hoy Autónoma) “José Ballivián” del Beni (1992). Fueron reconocidos como Notables, y por ello sus retratos se exhiben en el Palacio, paradójicamente, recién en 1993. En el plano archivístico se la recuerda por su apoyo total al salvataje y traslado, desde Villa Bella hasta el Palacio de Notables en Guayaramerín, del Archivo de la Casa “Suarez Hnos.”*, obra protagonizada por F. Cajías de la Vega*, J. Cortés Rodríguez* y P. Barbáchano* en 1978. Igualmente, autorizaron el rescate clandestino que hizo R. V. Paz*, con la complicidad consentida de N. Camberos*, en 1996, del Archivo Judicial de Riberalta, ante la situación de despojo y destrucción a manos de particulares, en la que se encontraban los obrados judiciales de épocas históricas. Fuente: Paz, 2009; Comunicación personal de Norah Camberos del 12 de julio de 2010, por Internet.

SUÁREZ VEINTEMILLAS, PATRICIA (La Paz, 10 de septiembre de 1966)

Estudió la carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Hizo el Diplomado en Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos UMSA (2003) y el Diplomado de Documentación Sonora, en la Fonoteca Nacional del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (México, D.F.). Ha participado de diferentes seminarios y cursos en el área de Archivos Fonográficos y Audiovisuales, entre ellos Seminario: La Salvaguardia de Archivos Sonoros y Audiovisuales Etnográficos en el Centro Bartolomé de Las Casas, Cusco, Perú (2006), Seminario Internacional: Uso y Aplicación de la Guía de Análisis Documental del Sonido Inédito en la Biblioteca Nacional y Archivo General de la Nación de Colombia (2007), Seminario Latinoamericano de Archivos Audiovisuales, en la Cineteca Nacional, Santiago, Chile (2008), y La Salvaguarda del Patrimonio Sonoro y Audiovisual: Un Reto Mundial, en la Fonoteca Nacional de México (2009). Trabajó en el área del cine con especialidad en Producción. Participó de talleres sobre Producción Cinematográfica en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños (Cuba). Trabajó en la organización del Centro de Información y Documentación Educativa (Cide) dependiente del Centro Boliviano de Investigaciones Acción Educativa (Cebiae). Fue Responsable del Centro de Documentación en Artes y Literaturas Latinoamericanas (Cedoal) que administra el Archivo Fonográfico, dependiente del Espacio Simón I. Patiño en la ciudad de La Paz, cuya labor es la de fortalecer la investigación musicológica en el país y está dirigida a profesores, músicos, críticos

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musicales e investigadores. También estaba a su cargo el Archivo Hemerográfico “Gesta Bárbara” que reúne importantes colecciones de Suplementos Culturales de los principales periódicos de La Paz y el país (vg. Presencia Literaria, El Diario Literario, Semana de Ultima Hora, Fondo Negro de La Prensa, Tendencias de La Razón, de La Paz, y El Duende de La Patria de Oruro, etc.). En 2010 ingresó al Archivo de la Mutualidad “Tte. Gral. Germán Busch” de las Fuerzas Armadas del Estado Plurinacional. Fue promovida en 2012 al cargo de Jefa del Archivo. Publicaciones archivísticas: “La salvaguarda de los Archivos Sonoros en Bolivia. Una breve descripción de los archivo sonoros etnográficos: de la catalogación a la digitalización” (Fuentes del Congreso, de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso, 2006, 2 (2): 23); “Registros sonoros en Bolivia una breve descripción del Archivo Fonográfico del Espacio Simón I. Patiño de La Paz” (Fuentes, Revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, 2010, Nº. 7: 19-22); “Escapando de la Galaxia Guttentag” (Oporto y Ramírez: Destrucción de la riqueza documental y bibliográfica y la necesidad de su rescate para el desarrollo nacional. Memoria del Seminario Internacional de Archivística. La Paz, BAHALP, 2011: 165-172). Fuente: CV.

SUBIETA SAGÁRNAGA, LUIS

(Tarapaya, Potosí, 14 de junio de 1875. † Potosí, 1966) Estudió en el Colegio Pichincha de Potosí. Maestro e historiador. Profesor de la Escuela Preparatoria (1904-1906) y de Historia y Moral en el Colegio Pichincha (19061930). Fundó el Centro Literario Musical y la Sociedad “Linares” (1906). Reorganizó la Sociedad Geográfica y de Historia (1912) y editó su Boletín. Formó parte de la avanzada positivista de Manuel Vicente Ballivián en Potosí. Fue el primer Rector autonomista de la Universidad Tomás Frías (1930-1931), alto cargo en el que fue designado por la Federación de Estudiantes. Fue señalado como “Maestro de la Juventud” (1940 y 1951). Contribuyó a la fundación del museo, archivo, editorial, biblioteca y hemeroteca de la Casa Nacional de la Moneda*. “Hombre de la misma pasta de un René-Moreno, de un Vicuña Mackena, de un José Toribio Medina”, dice de él G. Ovando*. El gobierno le otorgó el Cóndor de los Andes en 1957. Entre otros títulos, publicó: Album Biográfico (Historia de Bolivia) (1911), La Mita (1917), Bolívar en Potosí (1922), Crónicas del Ejercito Nacional (1922), Potosí Antiguo y Moderno (1928), El Chaco Boreal ante la Historia (1932), Estudio biográfico de Modesto Omiste (1941-1943), J. Alonso de Ibáñez, precursor de la Independencia americana. Estudio Biográfico (1941). Publicaciones archivísticas: Documentos para la historia, publicados con motivo del centenario del Dr. José María Linares (1908); “Documentos históricos referentes a la campaña del General Santa Cruz sobre el Alto Perú” (Boletín de la Sociedad de Geografía e Historia de Potosí, 1914, (4): 132153); “Reconcentración de los archivos públicos”; “Fuentes públicas y particulares” (Boletín de la Sociedad de Geografía e Historia de Potosí, Nº 7, 1936); “Documentos inéditos” (Boletín de la Sociedad de Geografía e Historia de Potosí, 1942, (10): 54-62); “Documentos históricos” (Boletín de la Sociedad de Geografía e Historia de Potosí, 1951, (11): 133-140). Fuente: Barnadas, 2002: II, 954-955; Ovando y Chacón, 1961.

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SUCRE Y ALCALÁ, ANTONIO JOSÉ DE

(Cumaná, Venezuela, 3 de febrero de 1795. † Berruecos, cerca de Pasto, Colombia, 4 de junio de 1830) Joven militar, predilecto del Gral. S. Bolívar*, quien le otorgó el mando del Ejército Unido Libertador con el que libró la Batalla de Ayacucho (1824), logrando el triunfo a favor de los patriotas, terminando con ello la presencia española en América Latina, excepción de Charcas en el que se atrincheró el Gral. realista Pedro Antonio de Olañeta, quien organizó un gobierno autónomo de España y de Bolívar. El Liberador le ordenó cruzar el río Desaguadero para aplacar al ultramontano jefe, quien finalmente sucumbió en una escaramuza a manos de su propia tropa, el regimiento de Chicheños, comandada por el Gral. Carlos Medinaceli, quien defeccionó para pasarse a las filas patriotas. Sucre tomó a su cargo el gobierno transitorio en Charcas, luego constitucionalmente, por delegación de Bolívar a su favor. En sus tres años de gobierno (1825-1828) creó la Academia Militar, organizó la Hacienda nacional, estableció el sistema postal, ordenó levantar planos del puerto La Mar (antes Cobija), mejoró los hospitales, suprimió los conventos de San Agustín y Santo Domingo estableciendo en ellos escuelas de huérfanas y huérfanos; asimismo creó Escuelas de Artes y Oficios en las ciudades capitales de la República, prestando especial interés a Potosí, donde fundó la Escuela de Mineralogía y escuelas de primeras letras para sus provincias, reorganizó la Casa de Moneda, parte de cuyos archivos se perdieron durante la guerra. La obra de su administración está documentada en el periódico oficial El Cóndor de Bolivia. A su genio corresponde la redacción de dos documentos de valor trascendental. El primero es el Tratado de Regularización de la Guerra (1820) que reconoce “el sagrado carácter de los prisioneros, obliga al respeto de las poblaciones y sus habitantes, sean cuales fueran o hubieran sido sus opiniones, destinos, servicios y conducta con respecto a las partes beligerantes”; y La Capitulación de Ayacucho* (1824), que determina en su artículo 12, la obligación del ejército Español y Unido Libertador de “enviar jefes a las provincias unidas para que los unos reciban y los otros entreguen los archivos, almacenes, existencias, y las tropas de las guarniciones”, fijando plazos de 15 días a un mes. Sorprende la faceta archivística del joven mariscal, quien tenía la costumbre de visitar personalmente las oficinas del piso inferior del Palacio de Gobierno, con el propósito de “estimular con su presencia a los empleados”. Durante su gestión se sentaron las bases organizativas de los archivos de oficina, de los que sobrevivieron “quince tomos del folio común en pasta entera y firme, donde aparece el trasunto completo del múltiple despacho del gobierno”, referidos a los fecundos tres años de su administración. Instruyó, por DS de 12 de diciembre de 1825, poner en orden el flujo de documentación oficial, implantando el número correlativo de gestión, “desde el primero de enero desde el uno hasta fin de año con el número que acabe, sin mezclar en esta numeración correspondencias con otros”, lo que actualmente se conoce en Bolivia como el código Cite que identifica a la oficina productora de documentos y el número de cartas que ha expedido. El Poder Ejecutivo de esa época estaba conformado por dos Secretarías de Estado; la primera a cargo de las secciones de Hacienda y Gobierno y la segunda a la Administración militar. Se designó al personal ministerial de las Secretarías, entre los que estaban “tres oficiales mayores, cuatro oficiales primeros, cuatro oficiales auxiliares archiveros y tres porteros”. Mediante Ley de 1 de diciembre de 1826, dispuso que el archivo de la Representación Nacional se conserve “cerrado con tres sellos, y en una caja bajo de tres llaves, que tendrán el Presidente, el Vicepresidente y el Secretario Diputado de la

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Representación Nacional”. El arcaísmo colonial del arca de las tres llaves sobrevive con claridad en este archivo. Su secretario privado salvó los archivos de su gobierno cuando se produjo el aleve golpe de mano el 18 de abril de 1828, que motivó su precipitada salida del país. Estos archivos fueron a parar en poder de D. Calvo*. Fuente: Blanco, 1918: 13-14; Costa Ardúz, 2002: 9; Mesa, Gisbert, 2001; Moreno, 1927: 71; Oporto, 2006: 117, 136.

SULLCANI CARPIO, JUAN NATALIO (La Paz, 29 de mayo de 1976)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Ha realizado los diplomados de Gestión de Archivos (2007) y Manejo y Administración del Patrimonio Documental para el Servicio al Público Usuario en Archivos, Museos y Bibliotecas (2010). Auxiliar del área de Historia (2003) y del Programa de Administración Facultativa UMSA (2004). Participó en el III Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística, CIBDA (2005), Seminario Internacional sobre la Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la Importancia de su Rescate para el Desarrollo Nacional (2008) y la Implementación del Programa de Gestión Documental bajo Estándares Internacionales en el BCB (2009). Asistió al Curso de Catalogación de la Biblioteca del Archivo de La Paz (2000), Taller sobre la Organización de Sistemas de Archivo Institucional (2003), Archivística para su Aplicación en el Censo-Guía de Archivos de los Departamentos de La Paz y Oruro (2006), 1er Taller Departamental “Ley del Sistema Nacional de Archivos” (2006). Trabajó como archivista en el Centro de Investigación Multidisciplinaria (2001-2004), Archivo de La Paz* (2004-2005); fue consultor de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* para el Censo Guía de Archivos Mineros de La Paz, Oruro y Potosí (2005); trabajó en los archivos del Proyecto de Salud Integral (2005-2006), en la creación del Archivo de la Fiscalía del Distrito de La Paz (2006-2007), en el Archivo de la Unidad de Titulación del Fonvis (2007) y desde el 2008, en el Archivo del Banco Central de Bolivia*. Fuente: CV.

SUSZ KOHL, PEDRO ROBERTO (La Paz, 2 de octubre de 1950)

Licenciado en Comunicación Social, Universidad del Salvador y Especialización en cine (Centro Dramático, Buenos Aires, Argentina). Fue cofundador del Departamento de Arte y Experimentación Audiovisual de la Escuela de Ciencias de la Educación y Comunicación Social de la Universidad del Salvador (1973), Responsable del Departamento de Cine del Centro de Cultura Experimental de Buenos Aires (19741975). Disertante en el Simposio El cine Olvidado de América Latina, México (1982), Primer Simposio Nacional de Cine (1982), Seminario de Tele educación (1982), Simposio Archivo de la Imagen en Movimiento para el Siglo XXI, Estocolmo (1983), Disertante del Primer Seminario Nacional sobre Políticas de comunicación, Ministerio de Informaciones (1986), expositor ante la Comisión de Asuntos Culturales del Parlamento Latinoamericano (1989), disertante del simposio ¿Es Posible una Televisión Alternativa? (1990), disertante al V Festival Internacional de Cine y Video de los

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Pueblos Indígenas (1996). Ha sido Jurado del Festival Llama de Plata (1977, 1978, 1986), Concurso de Fotografía, FAO (1982), Festival del Nuevo Cine Latinoamericano, La Habana, Cuba (1987), Concurso Nacional de Video, Instituto de Cooperación Iberoamericana (1990), Concurso de Video Población y Medio Ambiente, Lidema (1991), Concurso de Fotografía, Carrera de Bellas Artes (1993), Selección de Proyectos del Fondo de Fomento Cinematográfico (1994-1996), Festival Llama de Plata (1996). Miembro del Directorio de Canal 2 TSB (1989-1991), del Consejo Asesor de la Revista Encuentro (1989-1991) y del Movimiento Cultural de Interpelación a los partidos políticos “Para Seguir Sembrando, Para Seguir Soñando” (1997-2001). En la Alcaldía Municipal de La Paz fue miembro del Consejo de Cultura (1985-1986), Asesor General de la Oficialía Mayor de Cultura (1994-1995, 2000-2001), Asesor en Patrimonio (1997), Oficial Mayor de Culturas (2002-2004) y Director de Gobernabilidad desde 2005. Miembro de la Comisión Proyecto de Ley del Depósito Legal (1979, 1980-1989), Asesor General del Instituto Boliviano de Cultura (1988-1989), Vicepresidente del Comité Coordinador del Depósito Legal (1990-1991) y miembro de la Comisión de Políticas Culturales de la Presidencia de la República (2004). Miembro de la Comisión Redactora de la Agenda XXI de Ciudades para la Cultura organizada por las ciudades de Porto Alegre y Barcelona (2002-2003), Responsable de la redacción final de la Agenda XXI de Ciudades para la Cultura (2004), Presentación oficial a nombre de los municipios del mundo de la Agenda XXI de ciudades para la Cultura en la Inauguración del Forum Universal de las Culturas en Barcelona (2004). Profesor de Educación popular, Cine, Crítica cinematográfica, Capacitación cinematográfica, Historia de la narración fílmica, Lenguaje audiovisual, Realidad nacional (UMSA, Alcaldía Municipal de la Paz, Universidad Católica Boliviana, Fundación Cinemateca Boliviana, Taller Arawi, Centro de Multiservicios Educativos, Consejo Nacional del Cine, Universidad de Playa Ancha, Universidad Federico Santa María de Valparaíso y Universidad Católica de Chile, 1979-1998). Miembro del Tribunal de Excepción para la titularización de Docentes de la Carrera de Ciencias de la Comunicación de la UMSA (1986) y Profesor emérito de la Universidad Central de Cochabamba (1996). Asesor técnico (1976-1979) y Director Ejecutivo (1979-2002) de la Fundación Cinemateca Boliviana; Director Ejecutivo (1985-1991) y miembro del Directorio (1993-2001) del Consejo Nacional del Cine, Presidente de la Comisión Redactora de la Ley General del Cine (1977-1978), Representante de Bolivia ante la Federación Internacional de Archivos Fílmicos en México, Estocolmo, Viena, Buenos Aires, Montevideo, La Habana, Madrid, París (1980-1999), Miembro del Consejo Nacional Autónomo del Cine (1982-1984), Asesor de Difusión en Cine y Televisión del Instituto Boliviano de Cultura (1982), representante de América Latina ante la comisión sobre El Patrimonio Audiovisual del Tercer Mundo, organizada por la Federación Internacional de Archivos Fílmicos y la Unesco (1983), Reunión de expertos de la UNESCO para la Salvaguardia de las Imágenes en Movimiento, Viena (1984), co-fundador de la Coordinadora Latinoamericana de Archivos de Imágenes en Movimiento (1985). Expositor invitado en el Primer Taller de Formación Audiovisual organizado por Escuelas Radiofónicas de Bolivia (1975) y eventos organizados por la Federación Boliviana de Cine, Academia Nacional de Policías, Facultad de Arquitectura y Artes, Carrera de Literatura, Comunicación Social, Antropología y Arqueología, Carrera de Filosofía (UMSA), Centro de Estudios Sociales, Centro Canadiense de Estudios para la Cooperación Internacional, Consejo Nacional del Cine, Asociación Boliviana de Cineastas, Fundación Simón I. Patiño (2004).

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Como periodista ha documentado de forma sistemática la crítica cinematográfica, en la revista Cine 70 (Buenos Aires, 1974), El Diario (1976-1978), Radio Cristal, Revista Cultural de los domingos (1977, 1978-1980, 1986-1988), Canal 7 (1978), Canal 13 (1979), suplemento dominical en Hoy (1982-1997), revistas Clarín Internacional, Visión boliviana, Criterio, Imagen, Revista Boliviana de comunicación, Encuentro Revista de Cultura de la HAM, Nueva Sociedad (Caracas, 1976-1991), Última Hora (1997-1998) y semanario Pulso (1999-2005). Conductor, junto a C. D. Mesa*, del programa Bolivia en su Cine, de Canal 7 (1983), Cine Club TV de Canal 2 (1988-1994), 100 años de cine en Bolivia, Canal 7 (1997) y Laser 98 (1997-2000). Corresponsal del Internacional Film Guide (Londres) y de las revistas Cortocircuito (París) y Enfoque (Santiago, 1987-1991). Miembro del Consejo de redacción de Sopocachi (1994-1996), Escarmenar (1995-1997). Miembro Honorario de la Asociación de Periodistas de La Paz (1994). Su producción intelectual abarca el género de la crítica cinematográfica. Publicó, La Cuestión Nacional a la luz de los Clásicos del Marxismo (1975), coautor de 57 números del folleto Notas Críticas, Cinemateca Boliviana (1976-1989), Medios Audiovisuales (1983), El cine Brasileño (1984), La Vanguardia Cinematográfica (1984), La Pantalla Ajena (1985), Sergio Eisenstein (1986, 1999), David W. Griffith (1986), Cine y Educación en Bolivia (1989), La Campaña del Chaco y el Ocaso del Cine Silente Boliviano (1990), Filmo-Videografía boliviana básica, 1904-1990 (1991), Federico el Grande, ensayo sobre Fellini (1997), Cronología del Cine boliviano 18971997 (1997), Políticas Culturales: Una propuesta Inédita de la Sociedad Civil (1999), Andrei Tarkovsky (2000), Orson Welles (2001), Luís Buñuel (2002), La Diversidad Asediada (2005), Teoría y práctica de la Constitución Intercultural (2006), Poder y Deseo en el cine de Buñuel (2006). Ha sido realizador y productor de 13 montajes audiovisuales desde 1973. Fue galardonado con Medalla de Oro otorgada por el Comité de Juventudes Paceñas (1988), Premio Nacional de Cultura (1990), Premio al Mérito Cultural Franz Tamayo (1992), Premio “Personalidad Destacada del Año” otorgado por la revista Enfoques (1995), “Visitante Ilustre”, Alcaldía Municipal de Cochabamba (1997), “Ciudadano Notable”, Alcaldía Municipal de La Paz (1997), Medalla al “Mérito Cultural” en el grado de Comendador otorgada por la Prefectura de La Paz (1997), “Illimani de Oro” del Rotary Club Chuquiagomarka (2001). Fuente: CV.

SUXO ITURRI, NARDI

(La Paz, 26 de septiembre de 1955) Licenciada en Ciencias Jurídicas y Políticas (Abogada) UMSA. Hizo cursos de posgrado en la Universidad Carlos III, Madrid, España. Cursó el Diplomado en Derechos Humanos, CEBEM; Diplomado en Educación Superior (UMSA). Especialista en trabajo de Centros Penitenciarios, capacitadora de capacitadores de Reforma Penal Internacional en Costa Rica y Perú. Participó en XVII Curso Interdisciplinario en Derechos Humanos del Instituto Interamericano de Derechos Humanos (Costa Rica), el III Curso de Derechos Humanos y organismos de protección, en la Universidad Diego Portales (Chile). Otros cursos en derechos humanos y resolución de conflictos en San Juan de Puerto Rico, Buenos Aires, Nevada (EE.UU.), Lima y Ginebra. Se autodefine como “profesional con aptitudes ejecutivas, organizativas, y de dirección de instituciones”. Tiene sólida formación jurídica en el ámbito de los Derechos

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Humanos. Con amplia experiencia en el trabajo con organismos de la sociedad civil y su relacionamiento con entidades estatales. Realizó el Estudio socioeconómico de barrios marginales de Munaypata y Panticirca de La Paz para la Asociación Alemana de Educación de Adultos (1987), Posibilidades y Retos de las Reformas al Código Penal e inclusión del tema de género para el Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (1986); Estudios constitucionales sobre Amparo Constitucional y Hábeas Corpus, para el Instituto de Investigaciones Sociales (1986), Las trabajadores del Hogar y la Legislación Laboral en Bolivia (1987). Publicó artículos en periódicos y revistas nacionales e internacionales sobre temas socio legales desde 1982; temas sobre derechos del niño; propuestas de inclusión de niños/as en la Constituyente y textos sobre personas privadas de libertad, migrantes, adultos mayores y personas con algún tipo de discapacidad. En su experiencia profesional, desempeñó múltiples ocupaciones. Fue Asesora Jurídica del Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (1986-1987), Oficial de Registro Civil, Abogada en la Profesión Libre (1988), Asesora Jurídica de Defensa de Los Niños Internacionales (1989-1992), Directora del Proyecto Capacitación y Derechos Ciudadanos; Jefa de Estudios de la Carrera de Derecho de la Universidad Católica Boliviana (1993-1996), Directora del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Católica Boliviana (1995-1998), Directora del Instituto de Capacitación Democrática-PNUD, Corte Nacional Electoral (seis meses), Representante del Centro Carter en Bolivia, Delegada Adjunta Segunda, Área de Derechos Humanos del Defensor del Pueblo (1999-2004), Viceministra de Transparencia y Lucha Contra la Corrupción y Ministra de Transparencia Institucional y Lucha contra la Corrupción del gobierno del presidente Evo Morales Ayma*. Impartió docencia en cursos de grado y posgrado, desde 1992, Derecho Penitenciario (Universidad de Los Andes), Derechos Humanos (Universidad Católica Boliviana y Academia Nacional de Policías), Derecho de Familia (Universidad San Francisco de Asis), Conciliación y mediación (Universidad del Valle), Métodos de combatir la corrupción (Universidad Andina Simón Bolívar), Acceso a la Información como Derecho Humano (SNAP), Técnicas de Investigación Jurídica (Universidad de La Salle), Profesora revisora de tesis a nivel Nacional e Internacional. Participó en 34 seminarios, congresos y reuniones especializadas en los temas de su interés. Es miembro de la Asociación Americana de Abogados, Red de Defensores de los Derechos Humanos de Bolivia y Colegio de Abogados de La Paz (fue Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos). Fue distinguida por el Gobierno Francés “por su labor en defensa de los Derechos Humano”, declarada como “Visitante distinguida” en Estados Unidos y Medalla como profesional meritoria del Colegio de Abogados de La Paz. Trabajó para implantar la cultura de transparencia, por medio de la apertura al público de los archivos del poder ejecutivo, impulsó las acciones para garantizar el acceso a la información pública, mediante la Ley 004 de Transparencia Institucional y Lucha contra la Corrupción (2009), que implementó las unidades de transparencia en los organismos estatales y declaró imprescriptibles los delitos económicos contra el Estado, con un efecto notable en el calendario de transferencias de los archivos administrativos. Formuló el proyecto de Ley de Acceso a la información pública, que presentó a la Asamblea Legislativa Plurinacional, en el que, sin embargo, minimiza el papel de los archivos administrativos y públicos. Fuente: CV.

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T TABORGA BAZOBERRY, JOSUÉ Archivista de amplia experiencia. Participó activamente en el Curso de Paleografía y Archivística, de 1976, que organizó G. Mendoza* y A. Crespo* como parte del Programa de Desarrollo de Servicio de Archivos y Documentos Públicos de Bolivia*, financiado por la Organización de Estados Americanos*, oportunidad en la que se organizó la Asociación de Archivistas de La Paz*, de cuya mesa directiva formó parte. Trabajó en el Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto. Pasó, luego, como Jefe, al Archivo del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo desde 1975. Presentó una ponencia al II Encuentro Preliminar de los Archivistas de La Paz (14 al 18 de junio de 1982), con una historia institucional y la descripción de los Fondos del Archivo. Este Ministerio fue creado el 26 de junio de 1936, pues desde 1825, como Departamento de Turismo, formaba parte del Ministerio de Hacienda. Encontró al Archivo del ministerio en mal estado, con su documentación dispersa, por lo que encaró la tarea de concentrarla para crear el Archivo General y Biblioteca, trabajaba “con la documentación producida por el Despacho del Ministro y de las dos Subsecretarías, en estrecha colaboración con la Secretaría General, para protocolizar las resoluciones ministeriales”. Al finalizar cada año recibía “la documentación producida en los microarchivos de las Direcciones, que venían en paquetes”, y adjunto un índice de su contenido. Publicaciones archivísticas: “Breves consideraciones sobre la situación del Archivo en el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo” (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 40-42). Fuente: Oporto, 1982: 40-42.

TAMAYO DAZA, ARTURO

(Huanuni, Oruro, 27 de septiembre de 1955) Ingeniero Mecánico (Universidad Técnica de Oruro, 1979), de amplia trayectoria profesional. Trabajó en la Empresa Nacional de Fundiciones (ENAF) (1978), en la Empresa Constructora ECOL Ltda. (1980), como Jefe de Planta en la Fábrica de Plásticos Juancho en la ciudad de Santa Cruz (1980), Jefe de división de mantenimiento en el Complejo Metalúrgico de Karachipampa en Potosí (1986), Director de Área de Mantenimiento y Montaje, Servicios Técnicos y Generales

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(STG) (1992), Gerente Técnico y Responsable de Presupuestos de la Empresa STG Construcciones e Ingeniería S.R.L. (1994), Miembro y Coordinador Nacional del Comité de Normalización de Tanques Sometidos a presión de IBNORCA (2001), Evaluador Externo en representación de la Sociedad de Ingenieros de Bolivia para la Acreditación de la Facultad de Ingeniería de la UMSA conjuntamente al Consejo de Acreditación de la Enseñanza de la Ingeniería A.C. de México (2001), fue Gerente General de Therconsult S.R.L., Presidente Ejecutivo de la Corporación Minera de Bolivia (2004-2005); durante su gestión se impulsó la aprobación del DS. 27490 de creación del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*, su decidido apoyo con este emprendimiento permitió la designación de un importante presupuesto para la edificación del primer edificio de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia en la ciudad de El Alto. Fuente: File personal Comibol.

TANCARA MAMANI, MIRIAM MARLENI

(Comanche, Provincia Pacajes, La Paz, 4 de octubre de 1985) Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA, 2010). Realizó cursos de Programación de Sistemas (INCOS-El Alto, 2005), Bienestar Social sobre Pedagogía Académica para Auxiliares (UMSA, 2009). Actualmente cursa estudios en Administración de Empresas (INCOS–El Alto). Fue expositora en el IV Congreso Nacional de Bibliotecología, Documentación, Archivística y Museología, (CIBDA, 2008). Participó en los seminarios de Organización de Archivos y Usuarios de Unidades de Información, auspiciado por la Asociación de Bibliotecarios y Documentalistas de La Paz (2005); Sistema de Estanterías Abiertas en las Unidades de Información (2006); Conservación de Bienes Culturales y Documentales en Centros de Información; Acceso a la Información Pública, Archivos y Bibliotecas en la Constitución Política del Estado, organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional (2009); El desafío de las Unidades de Información en el Estado Plurinacional, organizado por la Sociedad Científica de Bibliotecología y Ciencias de la Información (2009). Fue Auxiliar de Docencia en Automatización de la Información (2009), Administración de Unidades de Información (2009) y Metodología de la Investigación III (2011). Realizó Pasantías en la Biblioteca de la Universidad Salesiana Boliviana (2008), Kárdex de Ciencias Puras (2008), Biblioteca Central de la UMSA (2008), Área de Talento Humano en la Administradora Boliviana de Carreteras (2009) y en el Archivo de la Autoridad Regional Jurisdiccional Administrativa Minera La Paz-Beni–Pando (2011). Fue pasante en el Centro de Documentación en Artes y Literaturas Latinoamericanas (CEDOAL) de la Fundación Simón I. Patiño, y luego trabajó como Técnico Documentalista en el Archivo Fonográfico (2010). Fue Auxiliar en la Biblioteca del Instituto de Estudios Bolivianos (UMSA, 2010). Fue contratada como Asistente de Archivo en el Sistema de Archivo de la COMIBOL* (2012). Fuente: CV.

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TANODI, AURELIO

(Hum, Distrito de Zagreb, Croacia, 1 de Septiembre de 1914. † Córdoba, Argentina, 14 de julio de 2011) Realizó sus estudios en el Colegio Nacional Varazdin (Croacia), entre 1925 y 1933. Estudió Historia en la Facultad de Filosofía, Universidad de Zagreb (1933-1937), obtuvo la Licenciatura en Historia (1937) y el Doctorado en Filosofía, especialidad de Historia (1944), Derecho en la Universidad de Graz, Austria (1945-1946), Archivología en la Escuela de Paleografía y Archivología del Archivo Secreto Vaticano (1947-1948) y Bibliotecología en la Biblioteca Apostólica Vaticana (1947-1948). Recibió el título de Doctor Philosophiane Honoris Causa, otorgado por la Universidad de Colonia (Köln, República Federal de Alemania), en 1984. Como consecuencia de la II Guerra Mundial (1939-1945), emigró a Suiza y luego a Argentina (1948). Al serle reconocida la ciudadanía argentina el 29 de agosto de 1952, confesó: “me arrodillé y besé la tierra”. Su obra en Argentina fue monumental. En 1959 creó la Escuela de Archiveros: “la concebí como un instituto: además de enseñanza debía funcionar como un centro de investigaciones, asesoramiento, coordinación y extensión archivística”. El esfuerzo no logró concretarse por falta de presupuesto e interés. Sin embargo, no desmayó. Impulsó las Jornadas Archivísticas y los cursos rápidos, con los que viajó a los cuatro puntos cardinales de su patria adoptiva: “Dictaba cursillos de una semana en varias ciudades argentinas, se hicieron asesoramientos, se publicaron libros, monografías y artículos”. Federico Finó lo vinculó con la Unesco, Charles Kecskemeti con el Consejo Internacional de Archivos* y T. Schellenberg*, con los colegas latinoamericanos y el Comité de Archivos del Instituto Panamericano de Geografía e Historia* (OEA), con cuyo patrocinio asistió a la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos* (Washington, DC, 1961). Su participación fue vital e importante, pues en consideración a su trabajo fue designado Presidente de la Comisión de Formación profesional de archiveros, que tomó en cuenta su exposición sobre la “Formación profesional de archiveros en América Latina”, para la redacción del punto “III. Trabajos prácticos”, de las recomendaciones. Igualmente fue designado Vocal, junto a Carlos Daniel Valcárcel, Director del Archivo de la Universidad de San Marcos (Perú), de la Comisión de Resoluciones de la PRIA, presidida por G. Mendoza*, Director del Archivo Nacional de Bolivia, con la facultad de “revisar, coordinar, reelaborar, elaborar cualesquiera proyectos de resolución, y presentarlos para su aprobación final ante la asamblea general de la Reunión”. En cumplimiento de sus resoluciones, fundó el Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos CIDA*, que en 1972 fijó su sede en la Escuela de Archiveros de Córdoba, desde donde impartió cursos anuales y temporales, en beneficio de los archiveros latinoamericanos, hasta su cierre en 1988: “Hubo luminosos éxitos, alegrías y satisfacciones, apoyo desde arriba y desde abajo. Aquí está la pléyade de los ex-alumnos, algunos que como docentes son buenos colaboradores, amigos que forman la familia archivística. A mis alumnos los miraba un poco con ojos de padre, sufría cuando los retaba o debía aplazar”. Visitó varios países latinoamericanos con fines de estudio y docencia universitaria. Notable humanista, fue gran amigo de Bolivia, a la que apoyó desde siempre, sobre todo a la bella Santa Cruz de la Sierra, organizando el Archivo Histórico Departamental de Santa Cruz, y numerosos cursos de formación archivística. En mérito a su trayectoria el Departamento de Asuntos Culturales de la OEA publicó De archivos y archivistas. Homenaje a Aurelio Tanodi (1987) y el VIII Congreso de Archivos del Mercosur

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(Montevideo, 2009), le reconoció como Socio de Honor, junto a M. Vázquez*, A. Heredia* y V. Cortés*. Publicaciones archivísticas: Esta es vasta. Branka Tanodi compiló en 1989 la “Bibliografía de Aurelio Tanodi” (Boletín Interamericano de Archivos, Vol. XIII, Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos, Córdoba, 1989). La relación total de sus escritos alcanzan a 155 ítems, siendo su primer artículo publicado “Najstariji dokumenat varazdinske povijesti” (‘El documento más antiguo de historia de Varazdin’) (1939) y el último “La situación de los archivos iberoamericanos”, Jahrbuch für Geschichte von Staat, Wirtschaft und Gesellschaft Lateinamerikas, Band, Gohlan Verlag, Köln, Wien (1987). Su primer artículo inédito es “Entre archivos y bibliotecas” (1952) y el último “Regionalización de la enseñanza archivística y el CIDA” (1988). En ella destaca con luz propia, su Manual de Archivología Hispanoamericana (1961) reeditado el 2009, actualizado por Branka Tanodi. Fuente: Oporto, 2011c; OEA, 1979.

TANODI, BRANKA MARÍA

(Zagreb, Croacia, 24 de julio de 1943) Hija de A. Tanodi*, llegó a la Argentina en 1954, radicándose en Córdoba. Doctora en Historia y Técnico en Archivos Históricos de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC); Directora del Archivo General e Histórico y Asesora de los Archivos de la UNC. Profesora Titular por concurso de las materias de Paleografía y Diplomática, en las Escuelas de Historia y Archivología, en la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UNC. Para la Organización de los Estados Americanos (OEA)* realizó Misiones de investigación y asesoramiento en España, Francia, Italia, Estados Unidos, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Uruguay y otros países latinoamericanos, en las especialidades de Paleografía, Diplomática y Archivología. Participó en Washington D.C., en representación de los Archivos Públicos Latinoamericanos en el Working Meeting on Cultural Heritage Partnerships Archives in Latin America, organizado por el Banco Mundial y la OEA. Miembro del Comité Ejecutivo del Consejo Internacional de Archivos* (Sección Archivos Universitarios e Instituciones de Investigación, ICA/SUV). Evaluadora de proyectos archivísticos para el Consejo Nacional de Acreditación Universitaria y Directora de Programas de Investigación en Paleografía, Diplomática y Archivística, disciplinas sobre las cuales ha publicado numerosos artículos en revistas nacionales y extranjeras, también varios libros. Dicta y organiza cursos de postgrado y participa en calidad de conferencista invitada a diferentes Congresos nacionales e internacionales en Argentina, Latinoamérica y Europa. Directora de publicaciones del Archivo General Histórico de la Universidad Nacional de Córdoba. Publicaciones archivísticas: La escritura en Córdoba del Tucumán (1573-1650). Córdoba, Universidad Nacional, 1994; Escrituras de los pueblos originarios e hispanoamericanos. Córdoba, Brujas, 2010; trabajó en la actualización de la segunda edición del Manual de Archivología Hispanoamericana, Córdoba, Brujas, 2009. Fuente: CV; comunicaciones personales 1.8.11 y 8.8.11.

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TARQUINO PORTILLO, MARCELO EDGAR (La Paz, 9 de enero de 1977)

Encargado del Archivo Financiero-Contable dependiente del Archivo Central del Ministerio de Defensa Nacional, cuya parte técnica está a cargo de B. Lecoña*. Ha realizado la clasificación y ordenación, además de la codificación e inventarios, instrumento con el que se facilita de manera expedita e inmediata el servicio fedatario. Como muchos funcionarios de archivo, es autodidacta, pero con notables ganas de superación, por lo que participó en seminarios y cursos, y el II Congreso Internacional de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2002). Tiene planes de digitalizar el archivo para “poder dar mayor información a los usuarios”. Comprendiendo la necesidad de una formación sólida, se matriculó en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información de la UMSA*. Fuente: CV.

TEJADA SORZANO, JOSÉ LUIS

(La Paz, 12 de enero de 1882. † Arica, Chile, 4 de octubre de 1938) Abogado en 1904 (UMSA). Incursionó en el periodismo junto a una pléyade de jóvenes que compartían la columna “Palabras libres” en El Diario de La Paz, entre ellos A. Alarcón*, A. Arguedas*, Armando Chirveches, Benigno Lara, Fabián Vaca Chávez y Roberto Zapata. Allí empezó a publicar sus reflexiones sobre la riqueza económica boliviana, temas parlamentarios y políticos. En su Informe sobre los negocios de estaño (Santiago de Chile, 1905), muestra ya sus grandes potenciales como analista. Viajó a Londres a estudiar Economía en la Universidad de Oxford (1906) donde escribió sus cuestiones económicas: Después de la crisis (1909); pasó luego a la Universidad de la Sorbona en París. A su retorno al país, abrazó el liberalismo, fue nombrado Subgerente del Banco de la Nación Boliviana (1911). Desde allí escribió La reforma bancaria en Bolivia (1913). Fue diputado por Yungas (1914-1918), época en la que publicó sus Cuestiones Económicas: Finanzas bolivianas (1914) y El Ferrocarril La Paz a Yungas (1918). Fue ministro de Hacienda en el gabinete del presidente J. Gutiérrez Guerra* (1919), habiendo salido al exilio a causa del golpe de Estado del republicano B. Saavedra* (1920), que lo llevó a Arica, Tacna, Nueva York, California y Lima. Regresó a Bolivia en 1925. Bajo el liderazgo de D. Salamanca* terció en las elecciones de 1927, con el lamentable resultado de volver al destierro, esta vez a Los Ángeles. Retornó en 1930 y el 4 de enero de 1931 fue elegido vicepresidente de Daniel Salamanca, con cuyo gobierno empezó la guerra del Chaco, que se prolongó por tres años, hasta 1935. En el ínterin, Salamanca fue derrocado en pleno frente de guerra (27.11.34) por el Gral. E. Peñaranda*, quien transfirió constitucionalmente el poder al vicepresidente Tejada Sorzano. En junio de 1935 concluyeron las acciones armadas y su gobierno afrontó las negociaciones de paz y el proceso penal contra la Stándar Oil. Visitó las minas de Catavi en 1936, poco antes de su derrocamiento, el 16 de mayo. Tejada Sorzano tuvo la costumbre de documentar de forma constante sus actuaciones, en un archivo personal que llevaba consigo en toda circunstancia, incluso cuando salió al exilio por tres veces. Formó un corpus documental significativo de cuatro metros lineales, con fechas extremas desde sus años escolares (1890) hasta su último día en la presidencia de la República, en mayo de 1936, con “diversos papeles, actas y resúmenes de reuniones de las muchas comisiones oficiales

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que integró”. A ellas se sumaron ayudas memorias, correspondencia, sus estudios sobre economía nacional. Su archivo está formado por diversidad de tipos documentales y correspondencia de distinta procedencia y carácter, a la que respondía sistemáticamente: “un agricultor del Beni, un minero de Lípez, un prisionero en el Paraguay, un periodista extranjero, un humilde elector, el maestro del pueblo, el militar de una guarnición alejada, el amigo de otras épocas”. Su espíritu sereno se retrata en esa correspondencia: “Nada de quejas, acusaciones, recriminaciones. Nada de eso sirve a la marcha de una patria”. Su archivo en el exilio es notablemente nutrido, pues “un exiliado, desconectado por fuerza de su país, alejado de sus problemas, solo puede tener correspondencia con otros exiliados”. En esa época dura, Tejada “llevó su archivo de un lugar a otro. Fuera de que muchos testimonios son destruidos”. Su archivo fue organizado en 12 grupos: Documentos parlamentarios (1914-1918); Sociedades con empresas extranjeras (1920); Cuestiones económicas y financieras (1918); El exilio (1920-1930); entrevistas con personalidades políticas; documentos de la presidencia de la República (1934-1936); El armisticio con el Paraguay (1935); Correspondencia con jefes de misiones diplomáticas; correspondencia personal con amigos; Correspondencia con su madre política (primer) y su suegro (segundo matrimonio); Recortes de prensa y álbumes de fotografías. Este Archivo Particular fue transferido por su hija a la Biblioteca Central de la UMSA y posteriormente al Archivo de La Paz* (1988). Su biblioteca fue donada por su esposa Lucía Flores Vda. de Tejada, a la Universidad Católica Boliviana, en 1972. Fuente: Crespo, 1990; Presencia, 1972.

TEJERINA, YOLANDA

(La Paz, 13 de junio de 1930) Estudió en el colegio Inglés Católico. Incursionó en la Bibliotecología con los cursos de Cultura Hispánica, impartidos por catedráticos de EE.UU. traídos por la OEA y la UNESCO (c. 1970), en los cuales se formó toda una generación, entre ellas Marcela Meneses, Irma Viscarra, Victoria Suárez, Eduardo Cassis, pues aún no existía la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información*, que sería impulsada por Julio Aguirre. Perfeccionó sus conocimientos en esta materia con cursos en Moscú, Rusia (1991), la Universidad Salesiana en Bogotá y la Escuela Interamericana de Bibliotecología en Medellín (Colombia), Caracas (Venezuela) y en congresos en Chile y Argentina. Fue Directora de la Biblioteca Municipal (1970-1988). En 1988 M. Bedoya* y F. Kieffer* (Segundo Vicepresidente de la Cámara de Diputados) descubrieron documentos históricos en los sótanos de una bóveda del antiguo edificio legislativo. La directiva de Diputados, conformada por F. Kieffer (ADN), Eudoro Galindo (MNR) y Alfonso Ferrufino (MBL), al margen de su color político, determinaron contratarla como responsable del proyecto de organización técnica del Archivo Legislativo. Junto a R. Mérida* y Silvia Britto, trabajó durante tres meses, llegando a catalogar 4.800 documentos. Fue la primera directora del Archivo Histórico, cargo que ocupó hasta 1995. Realizó consultorías para la organización del Archivo de Migración del Ministerio de Gobierno hasta el 2004. Publicaciones archivísticas: “El Archivo Histórico del Congreso” (Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1994-1995. Sucre, 1995: 323-325).

Fuente: CV

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TEJERINA CISNEROS, LUIS (Potosí, 15 de abril de 1953)

Estudió la Carrera de Historia* y se graduó como abogado (UMSA). Elaboró el índice de la Revista de la Sociedad Geográfica de La Paz, con la que obtuvo su título de Técnico Superior en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información*. Asistió al Curso de Organización y Administración de Archivos*, en Madrid, España (1977). Fue Jefe del Centro de Documentación de Antropología (Instituto Boliviano de Cultura), docente universitario en la UMSA. En junio de 1982, presentó un informe sobre los valiosos archivos del Instituto Nacional de Antropología, creado por DS de 14 de marzo de 1975, en base a la antigua Dirección Nacional de Antropología, creada en 1962. Los Archivos especiales que custodiaba eran únicos en su género: Fotográfico (2249 registros), Fílmico (22 películas de 8 y 16 mm.), Diapositivas (3000), Microfílmico (Archivo del Instituto Lingüístico de Verano), Mapoteca (189 planos), Musical (189 partituras, 1912-1977), Magnetofónico (180 horas) y Discográfico (3000 fonoregistros), al que se añadía el Archivo Administrativo. A él se debe la incorporación de Archivística en la malla curricular de la Carrera de Bibliotecología. Fue Coordinador del equipo de archivistas de la Carrera de Historia, que participó en la organización de los archivos del Banco Central de Bolivia*, bajo la dirección de C. López* (1988-1989). Trabajó en Santa Cruz de la Sierra y en Cobija como consultor del Centro de Estudios Jurídicos y de Investigación Social (CEJIS). Publicaciones archivísticas: “Consideraciones generales de los Archivos del Instituto Nacional de Antropología y del Centro de Documentación”, con Miriam Cuevas (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 57-64). Fuente: CV; Oporto, 1982: 57-64.

TEJERINA CISNEROS, WILBERT (Potosí, 6 de mayo de 1963)

Sociólogo (UMSA). Fue director del Centro de Investigación y Apoyo Campesino en Potosí (2003-2008), institución con la que realizó amplia labor de diagnóstico, y desarrollo sostenible en comunidades indígenas de Potosí. Consultor experto en asuntos de interculturalidad del Programa de Apoyo a la Gestión Pública Descentralizada y Lucha Contra la Pobreza PADEP-GTZ. Fue Asesor Técnico Nacional en Desarrollo Comunal (Proyecto Agroforestal Q’omer Jallp’a. FAO/Holanda/ Prefectura Potosí) (1998-2002), Asesor Técnico de la Federación de Ayllus del Sur de Oruro, Challapata (1995-2009); Investigador de FLACSO- Programa Bolivia (19911992). Docente de Historia Social de Bolivia en el Centro de Formación y Capacitación Anconcagua. Prov. Los Andes, La Paz (1990 -1991). Investigador de Antropólogos del Sur Andino (ASUR 1988-1989). Fue corresponsal científico del Museo Nacional de Etnografía y Folklore*, en las ciudades de Sucre y Potosí (1988). Bibliotecario del Colegio Nacional “Felipe Segundo Guzmán”, La Paz (1984-1985). Es autor de Gestión Pública Intercultural, en colaboración con V. Villalta y S. Ruiz, (2009); Leyes de Arriba, Normas de Abajo. Gestión y Normativa Comunitaria de Recursos Naturales en Villa Serrano (2006), Historia Rural de Bolivia (1995), Yura, tierras y contribuyentes: Siglo XIX, Tesis de Licenciatura en la Carrera de Sociología (l989); “Índice analítico de la Revista Gesta

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Bárbara de Potosí: 1918 a 1919” (Inédito) y “Bibliografía antropológica existente en unidades y centros de documentación de Potosí”, en Luratha, Boletín del Cida, No. 6 (1984).Tiene una faceta temprana dedicada a exhumar fuentes primarias en archivos de Bolivia, cuyos resultados publicó en varios artículos. Publicaciones archivísticas: “Guía a los recursos documentales sobre Corregimientos del Departamento que se encuentran en las series de correspondencia de la Prefectura de Potosí, 1829-1900 del Archivo Histórico de Potosí” (Boletín del Archivo Histórico de Potosí); “Inventario provisional de los fondos documentales depositados en el Archivo del Arzobispado de la ciudad de Sucre-Bolivia” (Etnología, 1988, Musef, Nº 16). Fuente: CV.

TENORIO LEVANDRO, CARLOS ANTONIO (La Paz, 4 de julio de 1971)

Licenciado en Historia (UMSA). Trabajó como auxiliar del Archivo del Banco Central de Bolivia* (1994-1996). En el Archivo de La Paz*, trabajó en distintas modalidades (Auxiliar de Archivo, 1996; Prácticas de Archivo, 1997; y en la Administración de la Biblioteca Especializada, 2001). Asistió a la XI Escuela de Archivos Iberoamericanos* (Madrid, 2001), participó en el Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano, impartido por J. López Villalba* (1999) y el Diplomado Gestión Documental y Organización de Archivos Históricos (2002). Asistió a los Congresos Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995) y Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996). Fue encargado del Archivo Histórico del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia* (2006-2007). Trabajó durante años como documentalista en la editorial española Santillana, que edita libros de texto. Redactó su tesis en base al Archivo de M. Hochschild* que forma parte del Sistema de Archivo de la COMIBOL*, siendo la primera en su género que se hace en base a ese repositorio. Pasó a desempeñar funciones de asistente administrativo en el Archivo de Yacimientos Fiscales Petrolíferos Bolivianos (2012). Publicaciones archivísticas: “Inventario del Archivo Notarial de Puerto Acosta, Provincia Camacho” (Boletín del Archivo de La Paz, 1999, (18): 53-57); coautor con E. Ramírez y C. Campos, Guía general del Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia, La Paz, SACMB, 2006; “El Archivo Histórico de la Minería Nacional: el Fondo Hochschild” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2005, 9 (14): 87-96). Fuente: CV.

TERÁN COVARRUBIAS, MARÍA CRISTINA (Cochabamba, 22 de agosto de 1957)

Estudió en el colegio Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús (Irlandés). Secretaria Ejecutiva egresada del Instituto “Nuestra Señora de Lourdes” (Canadiense) (1976). Participó en los Seminarios de Actualización Histórica (1992, 1993,1994); Seminario Internacional “Los Borbones Entre dos Mundos” (1995); Curso Taller de Paleografía (1996); II Congreso Nacional de Bibliotecología: Documentación y Archivística (2004); Diplomado Gestión Cultural (2008); Jornadas de Reflexión de las Brigadas

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Internacionalistas de Apoyo a las Bibliotecas y Archivos de Cochabamba (2009); Seminario Taller Preservación y Gestión del Patrimonio Cultural (2009); Taller de Gestión Documental, Organización y Legislación del Archivo de Gestión (2009). Encargada de Catalogación (1991-2003) y Responsable del Archivo Histórico Municipal “José Macedonio Urquidi” de Cochabamba (2004 adelante). Publicaciones archivísticas: “Fuentes del Archivo Histórico Municipal ‘José Macedonio Urquidi’ para la Independencia de Cochabamba” (La Guerra de la Independencia. Silencio y Memoria. Memoria del Encuentro Internacional de Historiadores. Cochabamba, H. Municipalidad UMSS, 2010: 239-241). Fuente: CV.

TERÁN RÍOS, JULIETA JUDITH (Sucre, 16 de junio de 1956)

Estudió la Carrera de Historia en la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca. Se formó bajo la dirección de G. Mendoza*. Tiene importante trayectoria archivística, que empezó en 1987 como Ayudante de investigación en el proyecto sobre Actividades de la Orden Franciscana (siglos XVI-XX), y posteriormente como archivera del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, realizando la descripción documental de la serie Expedientes de la Audiencia de La Plata; Manuscritos de la Biblioteca Gabriel René Moreno y otros (1990-1998), hasta su actual responsabilidad como Jefa del Departamento de Archivo en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, desde 1998. Su formación archivística, se ha ido dando en diversos cursos como el Curso Interamericano de Capacitación Archivística (OEA-Archivo General de la Nación, Lima-Perú, 1994); Curso Básico de Archivística a distancia en la Escuela Nacional de Archiveros de Perú (2006); Archivística y Preservación del Patrimonio Histórico Documental (1996); Manejo, Conservación, Planificación y Curaduría en Archivos (1996); Introducción a las Técnicas Documentarias (1997); Organización de Sistemas de Archivo (Centro de Formación Archivística de Santa Cruz de la Sierra, 1998); IX Escuela de Archivos Iberoamericanos*, Madrid, España (1999), Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (1999); Paleografía Hispanoamericana, Siglos XV-XVII (2000); Primer Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos, La Paz (2002); Capacitación y actualización archivística (Sucre, 2002); Manejo profesional de Archivos y Gestión Documental, Santa Cruz de la Sierra (2006). Participó en el II Seminario Internacional de Archivos de Tradición Ibérica en Río de Janeiro, Brasil (2002); Simposio Electrónico Internacional sobre Conservación Preventiva en Bibliotecas, Archivos y Museos, Argentina (2003); Seminario de Conservación Preventiva para Archivos y Bibliotecas, Lima, Perú (2003); Congreso Nacional de Archivos: Tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (2007) y en el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (1995). También se desempeña como facilitadora en cursos especializados, tales como Conservación preventiva y restauración de documentos para bibliotecas, Cochabamba (2004), Docente Coadjunta del Curso internacional avanzado de paleografía, siglo XVI-XVIII, Sucre (2009), Curso internacional el Archivo y la Era Digital, Tacna, Perú (2008) y como capacitadora de empadronadores en las diferentes fases del Censo Guía de Archivos de Bolivia. Participa con el personal del ABNB en la elaboración de instrumentos de descripción de fondos y series, editados e inéditos.

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Publicaciones archivísticas: Colaboró en la publicación de la Guía de Fuentes Franciscanas en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (Sucre, 1994); coautora con M. del C. Martínez López; “Biblioteca Gabriel René-Moreno. Catálogo de manuscritos y de hojas sueltas impresas” (Anuario 2000 del ABNB, 2001: 727-809). Fuente: CV.

Terrazas Céspedes, Mario Alejandro (Cochabamba, 6 de septiembre de 1975)

Estudia en la Carrera de Historia (UMSA)* y Contaduría General. Es Programador de Sistemas, Técnico en Aplicaciones. Trabajó como Auxiliar del Archivo de La Paz* (1999), Archivero del Departamento de Correspondencia y Archivo del Banco Central de Bolivia* (2000-2001), Auxiliar y Técnico del Archivo de la Aduana Nacional (20022008), Consultor en el Archivo del Servicio Nacional de Caminos, en Liquidación (2008), Consultor de Delta Consult para el Archivo del Servicio Nacional del Sistema de Reparto (2009) y Archivista del Departamento de Gestión Documental del Banco Central de Bolivia (2011). Fuente: CV.

TERRAZAS O., PEDRO J.

Archivista del Banco del Estado, entidad creada por Ley 9440 de 4 de noviembre de 1970, en base al Departamento Bancario, Comercial y de Fomento del Banco Central de Bolivia*, para impulsar la política productiva y de fomento a las exportaciones. El Archivo fue creado en 1979, pero contenía documentación desde 1904 y 1920 (Actas del Directorio del Banco de la Nación Boliviana), libros que son “una muestra bella del empaste de esa época romántica, hechos en Inglaterra, con los más finos materiales y papel de la mejor calidad”, que los encontró, “tirados en el suelo bajo las peores inclemencias del tiempo”, junto a los papeles del antiguo Departamento Bancario, que fueron trasladados a un “repositorio” en El Alto, sin sufrir “mella alguna”, aunque “totalmente desorganizado”. El Archivo del Banco del Estado fue organizado en archivos de oficina, un Archivo Central aproximadamente de 1200 metros lineales, y un “Archivo transitorio”, ubicado en El Alto, con documentos desde 1904 a 1980. Publicaciones archivísticas: “Los archivos del Banco del Estado” (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA 1982: 65-70). Fuente: Oporto, 1982: 65-70.

TICA BENDEZÚ, JIMMY

(La Paz, 16 de noviembre de 1976) Estudió la Carrera de Literatura en la UMSA. Hizo el Diplomado en Educación Superior, UMSA (2007); Diplomado en Gestión de Archivos en la Universidad Nuestra Señora de La Paz (2008). Es Encargado del Centro de Documentación y Archivos de la empresa estatal Insumos Bolivia, tema sobre el que presentó una ponencia al III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas

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y Museólogos (2011). Empezó sus labores en la ex-Secretaría Ejecutiva PL-480, Título III, desde enero del 2001. Ese programa facilitaba la donación de trigo de procedencia norteamericana, que el gobierno de Bolivia monetizaba, destinando los recursos a proyectos y programas de desarrollo. Con la dictación del D.S. 29727 de 1° de octubre de 2008 se crea Insumos-Bolivia, institución descentralizada del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, “quedando todos los derechos, obligaciones, convenios y acuerdos vigentes [del antiguo PL-480] con plena validez jurídica”. Con esa norma, se detiene la internación de trigo norteamericano. En este tiempo ha logrado la unificación de los archivos de gestión, central e intermedio de Insumos-Bolivia, que conserva y administra los archivos de la ex-Secretaría Ejecutiva PL-480, Título III. Ha logrado un control exacto de aproximadamente medio centenar de convenios bilaterales, ejecutados a través de variados proyectos, referidos a seguridad alimentaria, salud, infraestructura, caminos, agropecuaria, medio ambiente, constituciones de sociedad, becas; así como importaciones y exportaciones, fideicomisos o programas de cooperación externa adquiridos por Bolivia en calidad de donación, crédito o contravalor. Ha logrado también la clasificación de programas mediante la consolidación documental de áreas técnica, financiera, contable, legal y administrativa auditada (interna y externa) de proyectos. Como resultado de su trabajo, además del Archivo, ha formado una biblioteca, mapoteca, planoteca y videoteca. Ha normalizado el funcionamiento de los Archivos de Gestión de Insumos-Bolivia. Ha desarrollado un servicio archivístico en cumplimiento al derecho de información de instituciones públicas, privadas y comunidad en general. Tiene obra literaria publicada en revistas y prepara la edición de una obra titulada Siglo XX americanos. Publicaciones archivísticas: “Historia sucinta del Archivo y Biblioteca y el Centro de Documentación del Ex – PL.480 en Bolivia” (Fuentes, 2010, 4 (6): 35-37). Fuente: CV.

TICONA RAMOS, ELISA

(La Paz 6 de noviembre de 1984) Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Hizo el Diplomado en Administración de Archivos (2008). Participó en seminarios y cursos de Archivos, Memoria del Mundo, dictado por la Directora del Archivo Histórico de la Cancillería del Ecuador (2002), El Desarrollo de la Archivística en Bolivia: Pasado Presente y Futuro (2003), Descripción Archivística (2005), Gestión y Transferencia Documental de Archivos de Oficina al Archivo Central (2005), Conservación y Curación del Libro (2009), Digitalización de Documentos (2009), Los Archivos como Fuente de Investigación Histórica Boliviana (2009), Archivística para su Aplicación en el Censo Guía de Archivos de La Paz y Oruro (2006), 2º Taller Departamental sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2007), Conservación Preventiva y Restauración de Materiales de Archivo (2007), Diplomática del Documento en la Edad Moderna (2009), Filosofía y principios de los Archivos Sonoros (2010), Organización de Documentos en un Archivo de Gestión u Oficina (2011). Participó como expositora en el I y III Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos EBAM (2009, 2011), Curso de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos (2011). Trabajó en el traslado de documentos

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del Archivo del Juzgado de Sicasica al Archivo La Paz (2006). Obtuvo Memorándum de felicitación por su labor en el Archivo La Paz* (2007) y por su desempeño académico en la Carrera de Historia (2010). Empezó como voluntaria del Archivo (2001); y participó en diversos proyectos, como ADAI (2005), Digitalización y Microfilmación de Padrones del Siglo XIX (2008), Fondo Fotográfico Última Hora (2009), Auxiliar de Biblioteca (2010-2011). También hizo una pasantía en el Archivo de la Dirección General de Docente del Ministerio de Educación y Culturas (2006), fue Auxiliar de la Materia Prácticas de Archivo (2006), técnico en el Archivo de Fortaleza Sociedad de Fondos de Inversión S.A. (2009). Es Técnico Archivista en la Segunda Jefatura de la Embajada de España en La Paz (2012). Publicaciones Archivísticas: “Fondo fotográfico Última Hora”, con Lourdes Uchanier, Rocío Mamani y Patricia Kuno (DesArchivando, 2009, (6): 8-9); Id. en Boletín del Archivo La Paz, 2011 (23-24) 121-137); “Prontuarios: una fuente para identificar a los habitantes de la Provincia Camacho, 1954-1955”, con Rocío Mamani (DesArchivando, 2009, (7): 43-45); “Rescatan 27 mil fotografías del archivo de Última Hora”, con Lourdes Uchanier, Rocío Mamani y Patricia Kuno (La Razón-Tendencias, La Paz, 20 de diciembre de 2009: C18); “Los prontuarios de 1954-1955

dan pauta de la sociedad paceña” (La Razón-Tendencias, La Paz, 17 de enero de 2010: C5) “Trabajo concluido… Fondo de identificación, serie Prontuarios” (DesArchivando, 2010, (8): 31).

Fuente: CV.

TOLEDO, FRANCISCO DE

(Oropesa, Toledo, España, 10 de julio de 1515. † Sevilla, 25 de abril de 1584) Conocido también como “El Solón Colonial”, o el “Solón del Perú”. Noble y militar español, Virrey del Perú. Nació en el Palacio de los Álvarez de Toledo (en ese tiempo, Condes de Oropesa). Descendiente del rey Alfonso XI de Castilla y de Doña Leonor Núñez de Guzmán (que a su vez era descendiente de la familia de Santo Domingo de Guzmán). En 1535, se unió a la Orden de Alcántara, de carácter religioso-militar. Por casi veinte años sirvió al emperador en los Ejércitos de campaña en Flandes e Italia. Fue amigo cercano del emperador Carlos V, y estuvo presente en su lecho de muerte en 1558. Fue el quinto de los Virreyes del Perú. Ocupó dicho cargo desde el 26 de noviembre de 1569 hasta el 23 de septiembre de 1581, recibiéndolo de manos del gobernador Lope García de Castro. Durante su gobierno, en 1570, fue instalado el Tribunal de la Inquisición. Se levantaron fortificaciones en la costa contra los ataques de piratas, y acabó con el reducto inca en Vilcabamba. Ordenó la cruel ejecución de Túpac Amaru. Su obra fue monumental. Centralizó los aspectos esenciales de la administración colonial y estableció las bases del sistema colonial en el Perú. Reguló la encomienda e implantó la mita minera, considerada como “la maquinaria de hombres para la mina”. A su genio se debe la estrategia de reducción de comunidades indígenas, centralizando la dispersa población rural, lo que facilitó notablemente la recaudación de tributos, y la identificación de las comunidades responsables de “enterar la mita minera”. Fomentó el cultivo de coca, insumo esencial para los mitayos. Entre 1570 y 1575 ordenó levantar la Visita General, para lo cual empleó más de 50 personas (cronistas, geógrafos, frailes, naturalistas, médicos, intérpretes de lenguas indígenas, pajes, lanceros y arcabuceros). En 1574 se encontraba en

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La Plata (Charcas, hoy Bolivia) y desde allí ordenó, mediante Ordenanza Real, la creación del Archivo de la Villa de La Plata (Sucre), estableciendo el modelo de archivo que debían llevar los Cabildos en la jurisdicción del Virreinato del Perú. Es el archivo más antiguo en las colonias de España en América. La Ordenanza de creación del Archivo de la Villa de La Plata*, contiene un reglamento modélico que norma la administración archivística, considerando todos los elementos: la caja de conservación de las escrituras, el depósito de archivo, la extrema seguridad, el régimen de responsabilidad por la función del Escribano, el acceso y uso oportuno de la información, el régimen de la reserva, los traslados (copias), la gestión documental y el servicio de mensajería, la entrega del archivo del cabildo en caso de muerte del Escribano. En fin, muestra la importancia crucial del archivo de Cabildo para la vida administrativa, económica y social de la época colonial. Fuente: Arze, 1991: 133-134; Barros s.f.; Poppe, 2000; ABNB. Expedientes Coloniales 1764, N° 131, 203 fs. http://es.wikipedia.org (4.03.10).

TORO, ÁNGEL MARIANO Escribano de Cámara, designado como Archivero de las Provincias de Mojos y Chiquitos, en reemplazo del Escribano J. de Zuzunaga* en 1804, quien le entregó a Toro los expedientes de las dos provincias “bajo de un inventario formal”. A partir de ese año se dispuso que “haya de dividirse el despacho de las dos provincias entre los dos escribanos de cámara de la Real Audiencia. Fuente: Moreno, 1973: 318.

TORRE CESPEDES, MARY CECILIA; LA (Sucre, 1 de febrero de 1966)

Licenciada en Bibliotecología y Archivología (UMSA). Estudió Turismo en la Universidad de San Francisco Xavier. Desempeñó funciones en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, desde 1988, bajo la dirección de G. Mendoza*, quien le encomendó la organización y clasificación de los Fondos de la República de Bolivia: Ministerio de Gobierno, Ministerio de Guerra, Ministerio de Instrucción Pública, Ministerio de Hacienda (1825-1900). Tuvo a su cargo la revisión, foliación y transferencia de archivos de la Corte Superior del Distrito de Chuquisaca. Trabajó en la transcripción del fondo Real Audiencia de Charcas: Cedulario Real; Expedientes de abogados; Practicantes juristas. Participó en la elaboración de la Antología de Documentos sobre la Administración del Mariscal Sucre en Bolivia (18251828). A la muerte del maestro, pese a ser funcionaria de planta, decidió renunciar al ABNB para estudiar la Carrera de Bibliotecología* en la UMSA, pues su anhelo era ser profesional, habiéndose titulado en 2007. Tiene vasta experiencia laboral en archivos. Trabajó en el Archivo Intermedio del Banco Central de Bolivia* (1996-1997); fue consultora de Salinas & Zelaya en la organización del Archivo de la Unidad de Coordinación de Administración de Contratos y Adquisiciones de la Unidad Técnica del Proyecto de Reforma Institucional de la Vicepresidencia de la República (20002002); organizó los archivos del Proyecto Integrado de Servicios Básicos de Salud y Fortalecimiento del Sector Institucional - PSF (2000). Organizó el Archivo de Oficina

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del Programa de Apoyo a la Gestión Pública Descentralizada y Lucha Contra la Pobreza, PADEP (2002-2003) y el Archivo del Programa de Apoyo a la Democracia Municipal, PADEM, con apoyo de la cooperación alemana GTZ (2005). Trabajó como consultora del Archivo fonográfico del Centro de Documentación en Artes y Literaturas Latinoamericanas CEDOAL de la Fundación Simón I. Patiño (2004-2006). Trabajó también en las bibliotecas de Humanidades de la UMSA y la de la Ayuda Técnica Suiza COSUDE. Actualmente se desempeña en la Biblioteca Central de la Universidad Católica Boliviana “San Pablo”, y en los proyectos Scielo y Cybertesis. Como muchos archivistas, asistió a cursos de bibliotecología, y archivística, entre ellos: Manejo, conservación, planificación y curaduría en archivos (1996), Técnicas de Administración Archivos Centrales (1997), Restauración y conservación del papel (2000), Desarrollo de la archivística en Bolivia: pasado, presente y futuro (2003), Salvaguarda de los archivos sonoros etnográficos (2005) y Archivos de prensa: El registro de la historia (2006). Asistió a reuniones especializadas como el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (Sucre, 1995), la Reunión–Taller sobre la Ley del Sistema Nacional de Información (1997), Conservación del patrimonio cultural de Bolivia (1999), los Congresos Internacionales de Bibliotecología, Documentación y Archivística (20012009), IV Jornadas paceñas de Bibliotecología y Documentación (2001), III Jornada sobre patrimonio Museos e investigación (2006). En septiembre y octubre de 2009, gracias a una beca de la Federación Internacional de Asociaciones e Instituciones Bibliotecarias y el Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas (CUIB), con el auspicio de la Universidad Nacional Autónoma de México, participó en el Diplomado en tecnología para bibliotecarios de América Latina y el Caribe, en México D. F. Aprovechando su estadía en esa ciudad, asistió al XXVII Coloquio de investigación bibliotecológica y sobre la información. Fuente: CV.

TORRES, CARLOS

(Chulumani, Yungas de La Paz, s. XVIII) Amanuense, conocido como El Sietejetas. Apoyó a Pedro Domingo Murillo en la redacción y custodia de los numerosos pasquines contra el Rey, escritos durante 1805. Bajo la dirección de Murillo, pergeñaba los pasquines, cuidándose de disimular desde la caligrafía y estilo hasta la propia gramática, deslizando en su contenido términos generales del “vulgar uso, motes comprensivos de cualidades o defectos”. Fue apresado el 10 de agosto, siendo sometido a torturas. Fue defendido brillantemente por el doctor Basilio Catacora, quien sostuvo por primera vez en la historia penal de la Colonia un silogismo contundente cuando afirmó que “la prevención no debía ser lugar de tortura, sino de simple seguridad”, ideada por el genio de Murillo. El 28 logró fugar de prisión, ayudado por Mariano Graneros, El Challat’ejeta, quien era alguacil de la real cárcel. Después el propio Murillo fue liberado. El revolucionario apadrinó a la hija de Graneros. Fuente: Aranzáes, 1915: 740-741.

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TORRICO, ANDRÉS MARÍA

(Punata, Cochabamba, 8 de diciembre de 1795. † Sucre, 28 de agosto de 1875) Abogado. Estudió en el Seminario de San Cristóbal de Sucre, del que fue luego su regente, con las cátedras de Latinidad, Filosofía y Teología. Se tituló en los dos derechos, Teología y Ciencias Eclesiales. Fundó la Universidad de San Simón en Cochabamba y la Academia de Práctica Forense de esa ciudad. Fue secretario General de Santa Cruz y en ese carácter director secreto de la Asamblea de Sicuani; Ministro de Estado, suscribió con Santa Cruz el célebre decreto del 30 de junio de 1838, de creación de las Bibliotecas Públicas en las capitales de Departamento y las provincias de Tarija y el Litoral. Miembro de la comisión revisora del Código Penal de Santa Cruz. En 1840 fue prefecto del Litoral. En 1858 fue designado magistrado de la Corte Suprema, desde 1862 su presidente, ocasión en la que envió de obsequio a Lima, a Don Francisco de Paula Vigil, el gran cuerpo de autos del caso célebre denominado ‘La revolución comunera’, incitada por la política de José Antequera Castro, que provocó una rebelión que se prolongó entre 1721 y 1735 en el Paraguay, caso que había sido atendido por los oidores de la Real Audiencia de Charcas. Como corolario, el gobernador Antequera fue condenado a muerte y ajusticiado en Lima. Al singular obsequio, adjuntó los restos del archivo secreto de la antigua Audiencia. Fuente: Amusquivar, 2010: 28-30; Aranzáes, 1915: 41-42; Moreno, 1927.

TORRICO ZAMUDIO, RODOLFO

(Cochabamba, 29 de agosto de 1890. † Cochabamba, 5 de junio de 1955) Huérfano a los 12 años, se crió con su tía la célebre escritora Adela Zamudio, quien ejerció notable influencia en su concepción del mundo, en sus ideas sobre todo por medio de la fotografía. Apodado como “El Turista Torrico”, era “un viajero solitario, amante apasionado de la naturaleza, la ha recorrido a pesar de todo, sin más auxilio y equipaje que un abrigo y una máquina fotográfica sujetos al hombro. Desde su lago histórico, dormido en una porción de la extensa meseta andina, al pie de los colosos de la Cordillera, hasta sus ríos navegables, tributarios del Amazonas y del Plata, lo ha visto todo y todo ha sido reproducido en el objetivo de su pequeño aparato”, como escribió la célebre poetisa cochabambina. “A los 20 años ya había retratado la vida cotidiana de Cochabamba y sus paisajes y se había aventurado por otros rincones de Bolivia”, afirma Ricardo Herrera. El “Turi” captó con su cámara el inicio de la aeronavegación militar y comercial de Bolivia, y testimonió escenas de la Guerra del Chaco (1932-1935) y de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, por entonces con precarias calles de tierra y carretones, así como de las fincas y taperas de su entorno. El resultado de sus trajines se expresa en un impresionante archivo de 9000 registros y de sus conocidas tarjetas postales, editadas y distribuidas por la librería de Arnó Hnos., sobre todo en las ciudades de La Paz y Cochabamba. Su obra ilustró Bolivia en el primer Centenario de su Independencia (1925) y más de 600 de sus fotografías fueron incluidas en Bolivia Pintoresca (1926), editados ambos por The University Society (Nueva York). Inmortalizó la vida cotidiana de su ciudad natal en la primera mitad del Siglo XX, registrando paisajes, evocaciones de la guerra del Chaco, la aviación en Bolivia y del desarrollo urbano de Cochabamba. Su familia creó una Fundación que custodia el invaluable archivo histórico, del cual se han publicado tres álbumes

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con motivo del Bicentenario de la Independencia de Cochabamba (2010). En junio de 2011 se presentó el libro Viajes por tierra oriental¸ en el que se reúnen sus fotografías de Santa Cruz, Beni y Pando. Fuente: Buck, 1997; Herrera, 2011; Rocha, 2010b.

TORRICOS CÓRDOVA, JESÚS GREGORIO (Sucre, 1 de enero de 1963)

Técnico Medio Universitario a distancia en Bibliotecología (UMSA). Trabajó como auxiliar del Archivo y Biblioteca del Convento de la Recoleta (1986-1987) y participó como ayudante de investigación en el proyecto La Orden Franciscana en Bolivia (siglos XVI-XX) en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (1988-1990). En 1990 ingresó como Archivero en el ABNB, donde trabaja en la descripción de Fondos y en la diagramación de las ediciones oficiales. Se formó en cursos de Fotografía (Hans Ramstedt, Corporación Técnica Sueca, 1991), Manejo, Conservación, Planificación y Curaduría en Archivos (Diane Vogt O’Connor, 1996), Introducción a las Técnicas Documentarias (1996), Manejo de Sistemas de Microfilm (Casa Nacional de Moneda, 1997), Organización de Sistemas de Archivo (Centro Iberoamericano de Formación, de la Agencia Española de Cooperación Internacional, 1998), Curso Internacional de Diplomática del Documento Indiano (Dr. J. M. López Villalba*, 1999), Inventariación y Catalogación (Centro de Catalogación de Patrimonio Artístico Escuela Taller Sucre, 2000), Restauración y Conservación del Papel (ABNB y Fundación Suiza Pro Helvetia, 2000), Paleografía Hispanoamericana, Siglo XV–XVIII (ABNB y Universidad Andina Simón Bolívar, dictado por el Dr. López Villalba, 2000), Capacitación y Actualización Archivística (Universidad Andina Simón Bolívar, 2003), Manejo Profesional de Archivos y Gestión Documental (Criteria Inc, Santa Cruz, 2006). Participó en el Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”* (1995). Fuente: CV.

TROCHE GUZMÁN, LIZETH DANIELA (9 de octubre de 1987)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA) y la Carrera de Antropología (UMSA). Concurrió a congresos internacionales de estudiantes y de Historia (2006-2011). Participó en el 1er y 2º Taller Departamental sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006, 2007); Taller de CEPAL de América Latina para Bibliotecas (2008); Descriptores/Thesaurus para Bibliotecas (2008); de WINISIS (2008); Bibliotecas para comunidades indígenas, concepto, planteamiento y gestión (2008); 1er Curso de Digitalización de Documentos (2008); Los Archivos como fuente de investigación histórica boliviana (2009); Curso Básico de Digitalización de Documentos (2009); Catalogación del Patrimonio Intangible (2010); 1er Curso de Descripción y Digitalización de Archivos Fotográficos (2011). Ha sido miembro del Comité Editor de Retornos. Revista de Historia y Ciencias Sociales, Nº 8 del Centro de Estudios para la América Andina y Amazónica CEPAAA. Fue Pasante en el Archivo Histórico Militar (2006). Trabajó en el Archivo de La Paz*: Pasante, 2007; Auxiliar de Investigación,

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Coordinadora de área de Trabajo, 2008-2010; Proyecto “Recopilación oral de la memoria histórica de los excombatientes de la Guerra Chaco”, 2009; Coordinadora Académica y Administrativa del Proyecto “Identificación, Clasificación, Numeración y Sellado de Fotografías de la Colección Histórica y el Fondo Fotográfico Última Hora”, Programa para Archivos y Bibliotecas de Latinoamérica, Harvard, EEUU., 2011; Coordinadora Académica y Administrativa del Proyecto “Preservación de la memoria: De los archivos de poder a los archivos sociales. De los movimientos Sociales a la presidencia indígena, Bolivia 1992-2010”, Programa SEPHIS-Instituto Internacional de Historia Social de Holanda, 2011; y Coordinadora de descripción y digitalización de la Colección Visual y Documental “Mujeres Creando”, 2011. Consultora en Gestión y Administración del Archivo y Centro de Documentación “K’ewa” parte de la Comunidad Investigación Acción en Derechos y Ciudadanías DIVERSIDAD (2012). La carrera de Historia y el Archivo de La Paz le otorgaron Diploma de Reconocimiento por Desempeño Académico (2006); el Gobierno Municipal por su participación en el Proyecto “Mi barrio cuenta, yo cuento con mi barrio” (2009); la Carrera de Historia y el Archivo de La Paz por la Supervisión General de los proyectos “Preservación de la memoria: De los archivos de poder a los archivos sociales a la presidencia indígena, Bolivia 1992-2010”, “Identificación, Descripción, Digitalización de la Colección Histórica y el Fondo Fotográfico Última Hora del Archivo de La Paz” (2011). Como resultado de su trabajo elaboró los Catálogos: Colección Asamblea Constituyente (2008); Índices Corte Superior de Distrito 1825-1833 (2008); Fondo Fotográfico Última Hora (2011); de la Colección Fotográfica Histórica (2011); Fotografías sobre Movimientos Sociales de Última Hora (2011); Artículos sobre Movimientos Sociales de Última Hora (2011); Mujeres Creando (2011); Audios de Radio ERBOL sobre Movimientos Sociales (2011); Familia Galán (2011); y de la Biblioteca Armando Cardozo (2011). Publicaciones: “Rituale Romanum Libro Sagrado de más de un siglo de vida” (DesArchivando, 2007, 2); “La Importancia de recuperar la oralidad Coadyuvante para la etnohistoria” (Anales de la XXI Reunión Anual de Etnología, Tomo I, 2008); “Colección Armado Cardozo: Para saber más sobre el deporte nacional en la segunda mitad del siglo XX” (DesArchivando, 2009 (7): 6-9; “Fotos que hacen noticia y noticias que hacen fotos” (Tendencias de La Razón, La Paz, 6 de febrero 2011:C6-7); “Dos proyectos exitosos”, con Cesar Lunasco (DesArchivando, 2011, (9–10): 62-63). Fuente: CV.

TÚPAC KATARI (APAZA NINA, JULIÁN)

(Ayo Ayo, Provincia de Sica Sica, La Paz, 1750. † Peñas, La Paz, 14 de noviembre de 1781) Julián Apaza, líder aymara de los levantamientos indígenas de 1781 en el Altiplano paceño, que adoptó el nombre de Túpac Katari, tomándolo del Cacique de Tungasuca Túpac Amaru II y de Tomás Catari, de Chayanta. Fue sacristán y panadero antes de iniciar su rebelión. Se denominó Virrey. El líder rebelde formó un formidable ejército de cuarenta mil hombres con el que cercó a la ciudad de Chuquiago (actualmente La Paz), dos veces en 1781. Dominó el valle desde tres inmensos campamentos: El Alto (bajo su comandancia), Pampahasi (bajo la comandancia de Bartolina Sisa, la virreina; Andrés Túpac Amaru y Miguel Bastidas) y Quilliquilli (de mando compartido). En

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esa época Chuquiago contaba con una población de 53.260 blancos y mestizos y 20.000 indios. Se afirma que durante el cerco sucumbieron 14.000 de sus habitantes. El partido de Yungas tenía 308 fincas, además de las comunidades, con una producción de 250 mil cestos de coca por año, que reportaban 2.000.000 de pesos anuales. El corregimiento producía cacao, arroz, vinos de Río Abajo y frutas, transportados por llamas. Estableció una especie de Corte compuesta por cuatro oidores que llevaban por distintivo una banda cruzada al pecho y tenían atribuciones especiales; el primero corría con la venta de la coca, el segundo custodiaba los expolios de guerra, el tercero se hallaba a cargo de la plata labrada, oro y alhajas, y el cuarto hacía la distribución de los víveres. Tenía a su servicio dos capellanes, Isidro Escobar, ayudante de Palca y Julián Bustillos de Pucarani. Desarrolló un eficiente sistema de gestión documental y archivo. En esta labor era atendido por un secretario mestizo (B. Chuquimamani*) y varios escribientes y amanuenses (vg. P. de Obaya* “El Rey Chiquito”, Agustín Carlos Troche, Joaquín Anaya y B. Angulo*). Los secretarios firmaban y despachaban las comunicaciones, los escribanos recogían la correspondencia y los escribientes y plumarios cooperaban en estas tareas, asistidos por indios cañaris responsables de trasladar la correspondencia hasta su destino. Cada jefe indígena, incluidas B. Sisa* y Gregoria Apaza, tenían escribanos, escribientes y amanuenses a su servicio. Fuente: Aranzáes, 1915: 623, 720; Lewin, 1957: 528-529; Valle, 1990.

TUNO, CRISTINA DELVY

(La Paz, 20 de marzo de 1971) Licenciada en Bibliotecología (UMSA). Estudió secretariado ejecutivo en el Centro de Técnicas Secretariales. Restauradora de libros de la Biblioteca Municipal de La Paz “Andrés de Santa Cruz” (2001). Consultora del Archivo de Fonvis en liquidación (2002). Organizó la colección bibliográfica de la Aduana Nacional (2004). Archivista de la Gerencia Financiera del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (2004-2005). Consultora del Repositorio Nacional (2007). Archivista en el Servicio de Impuestos Nacionales (2008). Trabajó en la digitalización del Archivo de Personal del SIN (2009). Archivista en la Unidad de Bienes Inmuebles del Gobierno Municipal de La Paz (2009). Fuente: CV.

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U UCHANIER LECOÑA, LOURDES (La Paz, 11 de febrero de 1979)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Fortaleció sus conocimientos archivísticos en varios cursos, entre ellos el Seminario de Archivos (dictado por la Mtra. María Elena Porras Paredes), los Cursos Básicos de Conservación Preventiva y Restauración para materiales de Archivo (impartidos por el Museo Nacional de Etnografía y Folklore* y el Espacio Simón y Patiño). Se desempeñó como auxiliar de investigación en los estudios que realizaron Mabel Arancibia (2000) en el Archivo del Estado Mayor del Ejército (dependiente del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de la Nación), en el proyecto de investigación Historia de Achacachi (2001) de la Carrera de Historia (UMSA) y en el Instituto de Estudios Bolivianos de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UMSA), donde realizó trabajos de Paleografía e investigación en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia*, Archivo Judicial de Oruro y el Archivo del Juzgado de Instrucción de Poopó (2005-2010). Entre 2002 y 2004 trabajó como Auxiliar en el Archivo de La Paz*, primero voluntariamente luego con contrato. Más tarde fue consultora en Descripción y Catalogación del Archivo Histórico Regional de la Provincia Sud Chichas, con I. Villegas Borges*, que contó con el financiamiento del Programa para Bibliotecas y Archivos Latinoamericanos de la Universidad de Harvard (2004) y luego como Paleógrafa del Proyecto Cervantes y el Corregimiento de La Paz, financiado por la Subdirección de Archivos Estatales de España, el mismo estuvo dirigido por el Archivo y Bibliotecas Nacionales de Bolivia, realizando, además, la transcripción y recopilación de información del Archivo del Arzobispado de La Paz y el Archivo de la Honorable Alcaldía Municipal de La Paz (2005). Fue también consultora en Servicios de Gestión Documental y Administración de Archivo, en el Banco Central de Bolivia* (2005–2006). En 2007 trabajó, con Zenón Flores Mamani, como pasante en el Archivo de La Paz, para levantar un diagnóstico de la serie Registro de Escrituras del Fondo Corregimiento e Intendencia de La Paz, cuyo resultado permitió la actualización del Inventario de la serie, que abarca 73 cajas y 269 legajos; de la misma manera elaboró el Catálogo de Testamentos (167 escrituras). Entre 2008 y 2010, en virtud a su experiencia, el Archivo de La Paz la contrató como Responsable del Área del Proyecto de Digitalización de la serie Padrones Revisitarios del siglo XIX dirigido por R. Barragán*, en el que participaron también J. Guerreros Burgoa* y C. Lunasco Cusi*, como coordinadores

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de área, experiencia que presentó en una ponencia, suscrita con J. Guerrero*, en el I Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2009). Publicaciones archivísticas: “El Proyecto de digitalización y microfilmación: Padrones del siglo XIX”, con Rossana Barragán y Cesar Lunasco (Boletín del Archivo de La Paz, 2008, (25): 99-109); “El Fondo Fotográfico Última Hora” (DesArchivando, 2009, (4): 5-6); Id., con Elisa Ticona, Rocío Mamani y Patricia Kuno (DesArchivando, 2009, (6): 8-9); “Proyecto de Digitalización: entrega de la documentación digital a las comunidades del Departamento de La Paz”, con Jhonny Guerreros y Cesar Lunasco (DesArchivando, 2009, (6): 10-11), “Entrega de material digital a las comunidades del Departamento de La Paz”, con Jhonny Guerreros (DesArchivando, 2009, (7): 53-55). Fuente: CV.

URCULLU, MANUEL MARÍA (DEL BARCO) (La Plata, 16 de julio de 1785. † Sucre, 1856)

Jurista. Hijo del vizcaíno Andrés del Barco y Urcullu y de Bárbara Gutiérrez de Ceballos. Estudió en el Seminario de San Cristóbal y la Universidad de S. Francisco Xavier. Existe contradicción sobre sus estudios de Derecho, pero según Gantier, se bachilleró en 1804 y doctoró en 1805. Fue Juez y Fiscal de lo penal en la Audiencia, siendo reconocido como el más diestro y estudioso abogado de la Capital. El Gobierno de Buenos Aires lo nombró Fiscal de la Cámara de Apelaciones, por cuyo motivo sufrió tenaz persecución realista. No obstante, el Gral. Pedro Antonio de Olañeta lo designó Asesor de su Ejército. En la Asamblea Deliberante 1825 fue diputado por La Plata y elegido el 21 de julio Secretario Redactor de Actas “para que llevase un extracto de lo más substancial que presentaban los discursos pronunciados por los señores diputados”, es decir, tuvo la responsabilidad de custodiar ese archivo legislativo. Fue vocal de la Corte de Justicia (1825), en la que se mantuvo hasta 1827. Ocupó la Comisión de Estado. Integró la Comisión encargada de elaborar el Código Civil (puesto en vigencia en 1832). En 1827 fue el primer Presidente de la Corte Suprema de Justicia reasumiéndola en 1832, 1835, 1844 a 1847. Participó en la elaboración del proyecto de reforma constitucional de 1848 (frustrada por un nuevo golpe de estado). Bajo la Pre­sidencia de Belzu sufrió prisión y destierro. En 1855 fue elegido como miembro de la Comisión Codificadora que elaboró el nuevo Código Civil (no sancionado), la Ley de Organización Judicial y el Código de Procedimiento Criminal. Autor, con M. E. Calvo*, Observaciones sobre la reforma que debe hacerse del Código Penal Boliviano (La Paz, 1834); Apuntes para la historia de la revolución del Alto Perú, hoy Bolivia, por unos patriotas (Sucre, 1855) (Atribuido a su autoría según G.R. Moreno*). Fuente: Abecia, 1939; Abecia Baldivieso, 1973: 217-222; Arnade, 1972; Barnadas, 2002; Congreso Nacional, 1926; Congreso Nacional, 1927; Cordero Carrafa, 2000; Gantier, 1975: 55; Oporto, 2006.

URQUIDI GÓMEZ ORTEGA, JOSÉ MACEDONIO (Cochabamba, 18 de noviembre de 1881. † 1978)

Bachiller del Colegio Sucre (1901). Primer Presidente de la Federación Universitaria Local de Cochabamba. Abogado titulado en la Universidad Mayor de San Simón

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(1913), Escritor. Profesor de los Colegios Sucre y Bolívar por 30 años. Catedrático de Derecho Público, Sociología y Derecho Internacional; Decano Honorario Vitalicio de la UMSS; se le confirió la Medalla al Mérito por sus 40 años de labor universitaria. Munícipe en la Capital y Provincias. Miembro del Congreso de Facultades de Derecho; Delegado al II Congreso de Municipalidades (Santiago de Chile). Asesor Jurídico de la Delegación de Plenipotenciarios de Bolivia a la VIII Conferencia Panamericana (Lima, 1938). Periodista, llegó a ser Director de El Heraldo, El Día, La Patria, El Comercio, El Ferrocarril y La República de Cochabamba; Colaborador de Nueva Democracia de Nueva York. Miembro de la Sociedad Geográfica, Historia y Letras; Colegio de Abogados; Instituto Americano de Derecho Internacional (Washington D.C.); de la Sociedad Geográfica de Sucre. Obtuvo el primer premio en la Exposición de Bibliografía y Certamen Literario de Ecuador (1939), Premio Nacional y Medalla de Oro a la Cultura por el Senado Nacional; Ciudadano de Honor del Uruguay por su obra Ensayo biográfico sobre José Gervasio Artigas; Hijo Predilecto de Cochabamba (1960). Fue condecorado con el Cóndor de los Andes en Grado de Comendador (1974). Fue Director del Museo Público. Fundador y director del Archivo Histórico Municipal (1941-1966), lapso durante el cual logró reunir más de 550 volúmenes de documentos coloniales, que se conservan en el archivo que lleva su nombre. Ese acervo está conformado por protocolos de los Escribanos y Notarías Públicas, y expedientes de pleitos sustanciados ante los alcaldes ordinarios del Cabildo y ante los corregidores de Cochabamba. El valioso material documental fue estudiado paleográficamente por Urquidi, quien escribió con esos recursos su obra fundamental El origen de la noble villa de Oropesa (1950, 1971, 2011), demostrando “que la primera fundación fue hecha por el capitán Jerónimo de Osorio el 15 de agosto de 1571”, como afirma Martha Urquidi Anaya. Escribió también, ente otros títulos, Figuras históricas. Diputados altoperuanos en el Congreso de Tucumán, 1816 (1916), La obra histórica de Arguedas. Breves rectificaciones y comentarios (1923), Los fastos del tiempo heroico. La última revolución de Cochabamba (1943), Los derechos del patrimonio o de la propiedad intelectual (1945), Exhumación de los restos del general Esteban Arze (1951). Gran parte de su obra histórica fue reimpresa por el Gobierno Municipal de Cochabamba, en conmemoración del Bicentenario de la Independencia de Cochabamba de 1810. Fuente: Costa de la Torre, 1968: 1047-1050; Urquidi Anaya, 2005: 171-175.

URQUIETA, ANITA ESTELA

(Llallagua, Provincia Bustillo Potosí, 25 de septiembre de 1944. † La Paz, 23 de junio de 2010) Presidenta de la Asociación de Familiares de Detenidos, Desaparecidos y Mártires por la Liberación Nacional (ASOFAMD). Se desempeñó como contadora general en el magisterio y era una incansable luchadora en defensa de los derechos humanos en Bolivia. Formó parte del Consejo Interinstitucional para el Esclarecimiento de Desapariciones Forzadas (CIEDEF), presidido por el Ministerio de Justicia, que después de 40 años logró exhumar restos óseos de nueve combatientes de la guerrilla de Teoponte (1970), de los cuales hasta ahora cuatro fueron identificados científicamente y entregados a sus familiares. También formó parte del Consejo Nacional de Derechos Humanos del Estado Plurinacional de Bolivia, cuyo objetivo es implementar el Plan Nacional de Acción de Derechos Humanos. La ministra de

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Justicia, Nilda Copa expresó que era “una mujer comprometida y luchadora por el ejercicio y respeto de los derechos humanos, además de la profundización de la democracia en Bolivia”. Remberto Cárdenas, ex ejecutivo de la Confederación de Trabajadores de la Prensa de Bolivia, la recuerda en su lucha tenaz por la recuperación de la democracia y militante a tiempo completo del Partido Comunista de Bolivia (PCB). “Ella era parte de la resistencia contra la dictadura de H. Banzer* y L. García Meza*. Compartimos varias tareas en la difusión del periódico del partido comunista Unidad, y diversas reuniones de acciones de resistencia a la dictadura. Con ella nos vimos en el exilio y uno de nuestros acuerdos fue volver a Bolivia para incorporarnos en la resistencia contra las dictaduras”. El patricio potosino A. Alba*, le otorgó refugio cuando era perseguida por la dictadura de H. Bánzer*. Durante su presidencia, ASOFAMD logró un avance importante dentro de la única causa abierta por el delito de desaparición forzada de personas durante la dictadura de L. García Meza Tejada, traducido en el “levantamiento de la reserva” y “acceso a los archivos secretos de las Fuerzas Armadas”, a fin de contribuir al esclarecimiento de la desaparición forzada de todos los desaparecidos. Fuente: Comunicación de ASOFAMD (16.06.10); Cambio (24.06.10).

URQUIJO, PEDRO PABLO Gobernador de Mojos (1805-1811). Completó el Archivo de las provincias de Mojos y Chiquitos con legajos desde 1802, más un mapa topográfico de las provincias de 1804, y los papeles que daban cuenta de las acciones de la toma de Buenos Aires por los ingleses en 1806. En 1810 mandó levantar un Censo de los pueblos de Mojos (San Joaquín: 734 habitantes; San Ramón: 3858; Magdalena: 3796; Trinidad: 2081; Loreto: 1411; Exaltación: 1376; Santa Ana: 770). Fuente: Moreno, 1973: 167-168; 317.

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V VACA DE CASTRO, CRISTÓBAL

(Izagre, León, 1492. † Valladolid, España, 1556) Licenciado en Leyes en la Universidad de Valladolid (España) y Magistrado. Fue enviado para resolver las rivalidades entre Pizarristas y Almagristas. Entró a Lima el 7 de agosto de 1542. Derrotó a Diego de Almagro el Mozo, en la Batalla de Chupas (16 de septiembre de 1542) y lo condenó a muerte por degollamiento. Fue Gobernador del Perú y Capitán General del Ejército Real. Hizo levantar, como otros españoles, Informaciones de los Quipucamayos*, refundidas en su Discurso sobre la descendencia y gobierno de los Incas (1608), con datos de verdadero interés sobre la historia incaica. “Convocó a gran número de ingas viejos del Cuzco para averiguar sus antigüallas”. “Le trajeron cuatro muy viejos”, dos de estos eran naturales de Pacaritambo y se sumaron el uno de Callapiña y el otro Supno”. Estos ancianos sobrevivieron a la masacre provocada por los generales de Atahuallpa, que huyeron “por los montes atemorizados; pidieron término para alistar sus quipos y declararon cada uno separadamente, por medio del intérprete indio Pedro Escalante ante Vaca de Castro y los vecinos del Cuzco Juan de Betanzos y Francisco de Villacastín, los cuales iban escribiendo lo que por los quipos iban declarando”. Así se habría tenido una primera versión de la historia de los Incas, “dividida según la biografía y reinado de cada uno de ellos hasta Huáscar y Atahuallpa”. Retornó a España en 1545, luego de permanecer prisionero del Virrey Blasco Núñez de Vela. Curiosamente, tras llegar a Valladolid, el 23 de junio, el Consejo de Indias lo condenó a prisión “por enriquecimiento ilícito”, por diez años. Fue absuelto por el Rey Felipe II, el 8 de octubre de 1556, otorgándole una plaza en el Consejo de Castilla. Fuente: Porras, 1953: 129-130; http://es.wikipedia.org (29.4.2012).

VACAFLOR DORAKIS, ELÍAS (Tarija, 2 de junio de 1956)

Estudió Arquitectura. Fue Diputado por Tarija por el partido Acción Democrática Nacionalista que lideró el Gral. H. Bánzer* (1993-1997). Director del Archivo Histórico Departamental de Tarija, dependiente de la Prefectura del Departamento (2004-2011). Organizó los fondos documentales de ese archivo con el financiamiento del Programa de Archivos de Harvard (EE.UU.) y de ADAI (España). En 2009, logró

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dotar de un edificio propio al Archivo, gracias a sus gestiones ante la prefectura de Tarija, adquirió para ese fin la casa que fue propiedad de Burdet O’ Connor, uno de los generales del libertador Simón Bolívar*. Elaboró el proyecto de ley de creación de archivos históricos municipales de Tarija que fue promulgado por el presidente Evo Morales* (2006). En su faceta de historiador ha publicado Tarija, historia de los cabildos abiertos de 1825 y 1826 (La Paz, Fundappac, 2009). Dejó el Archivo de Tarija en enero de 2011. Publicaciones archivísticas: “El Archivo Histórico de Tarija”, (Fuentes, 2004, 1 (11): 110-111). Fuente: CV.

VALCANOVER, MAURICIO

(Trento, Italia, 30 de noviembre de 1937) Padre de la Orden de San Francisco. Miembro de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica. Presidente del Presidium del Congreso de Archivistas que trató el Proyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos* (Sucre, 2007). En 2002 fue designado miembro de la Comisión de Historia, Arte y Cultura, responsable de la administración de Museos, Bibliotecas, Archivos y Publicaciones, por el Ministro Provincial con su Definitorio, junto a Ferruccio Módena, José Rossi y L. Calzavarini*. En 2005 fue nombrado Archivero Provincial y tomó para sí el desafío de concentrar el material archivístico franciscano en un solo depósito, creando el Archivo Nacional Franciscano en Cochabamba, y al mismo tiempo ubicar y conservar el material fotográfico, como lo establecen las resoluciones de 2003. En 2008 concluyó la monumental tarea, como lo señala el informe oficial del Capítulo 2008: “El Hno. Mauricio y sus colaboradoras han hecho realidad el Archivo Nacional Franciscano, no solamente en lo referente a organización física, sino sobre todo el trabajo de reposición ordenada de cada documento, transcripciones, revisión, preparación de ediciones, elaboración de índices, cursos de capacitación, etc.”. En esa misión, fue colaborado por la Lic. M.F. González*, Secretaria Ejecutiva de los Archivos Franciscanos. Publicaciones archivísticas: “La estructuración eclesiástica territorial de la Audiencia de Charcas a comienzos del siglo XVII. Un documento significativo” (Anuario de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica, 2000, (6): 75-101). Fuente: González, 2010.

VALDA, MARIA ESTHER

(Cochabamba, 25 de febrero de 1962) Trabajó en Bibliotecas Municipales por dos años y tres en la Jefatura de Patrimonio Cultural y Archivo Histórico. Actualmente trabaja en el Archivo de Patrimonio y Servicios Culturales y Archivo Histórico Municipal en Cochabamba. Fuente: CV.

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VALDA MARTÍNEZ, EDGAR ARMANDO (Potosí, 14 de mayo de 1956)

Licenciado en Historia (UMSA). Profesor de Estudios Sociales y Lenguaje, egresado de la Escuela Normal Superior “Simón Bolívar” (La Paz). Archivista y periodista. Hizo el VIII Curso de Administración de Archivos Históricos en la Escuela Nacional de Documentalistas* de Madrid, España (1980) y un Diplomado en Archivística. Magíster en Educación Superior (Universidades Autónoma “Tomás Frías” de Potosí y “Enrique José Varona” de Cuba). Cursa un Doctorado en Historia en la Universidad de Santa María de La Rábida, Huelva, España. Miembro de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica; Sociedad Boliviana de Historia; Sociedades Geográficas y de Historia de Potosí y Tarija; Centro de Estudios Para la América Andina y Amazónica; cofradías de la Virgen del Rosario y de Copacabana; Centro Católico “Fray Vicente Bernedo”; Federación de Trabajadores de la Prensa; Sociedad Boliviana de Escritores; Sociedad Cultural “Potosí”. Miembro del Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia* (1994). Fue condecorado como “Joven Sobresaliente de Bolivia y de Potosí. Logros Culturales” por la Cámara Junior Internacional de Bolivia y “Potosino del Año” de la Honorable Alcaldía Municipal de Potosí. Trabajó como Documentalista de campo del Centro de Documentación Antropológica, Instituto Boliviano de Cultura. Fue Director del Archivo Histórico Potosí*, desde donde dirigió el Censo-Guía de Archivos de Potosí, con la cooperación de la Dirección General de Archivos Estatales-Ministerio de Cultura de España; Subdirector y Director de la Casa Nacional de Moneda de Potosí* (2003-2007); Director y Catedrático de la Carrera de Turismo de la Universidad Autónoma “Tomás Frías” de Potosí. Es Coordinador de la Carrera de Historia de la UMSFX de Chuquisaca y director del Archivo-Biblioteca Arquidiocesanos “Monseñor Miguel de los Santos Taborga”. Fundador y director de varios archivos en la ciudad potosina. Apoyó en la organización del Archivo Histórico de Tarija; a la catalogación del Archivo Parroquial de la Iglesia de la Inmaculada Concepción de Puna. Ha publicado, entre otros titulos: Catálogo de folleteria de Ferrocarriles de Repositorio Nacional (La Paz, 1980), Potosí durante la independecia de Charcas, 1810-1817 (Potosí, 1989), Potosí y la Virgen de Copacabana. F.T. Yupanqui, ch’ujlla y la janaxkacha (Potosí, 1992), De Casa de Moneda a Museo de Arte (Potosí, 2003); Pueblos de Chuquisaca en el proceso de la Independencia de Charcas, 1809-1825 (con Eduardo Caballero, Ibert Veizaga, Rafael Abastoflor. Sucre, 2011); Escribió varios artículos sobre archivos potosinos y en defensa del patrimonio documental de la Nación Publicaciones archivísticas: “Algunas notas sobre el Archivo Parroquial de Puna” (Presencia Literaria, La Paz, 22 de julio de 1984: 4; Tb. en Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (una guía preliminar), La Paz: cehila-ceprolai, 1985: 96-102); “Algunas notas sobre pérdidas documentales durante nuestra independencia” (Presencia Literaria, La Paz, 11 de agosto de 1985: 2); “Algo más sobre el Archivo Parroquial de Puna” (Presencia Literaria, La Paz, 13 de octubre de 1985: 2); “Algo sobre las parroquias coloniales potosinas” (Presencia Literaria, La Paz, 18 de agosto de 1985: 2); “Algo sobre el Archivo del Centro “Fray Vicente Bernedo” de Potosí” (Presencia Literaria, La Paz, 13 de abril de 1986: 4); Informe del Censo-Guía de los archivos de Potosí (Potosí, Archivo de la Casa de Moneda, 1993); “Sobre la destrucción de recursos documentales del archivo tarijeño” (Puerta Abierta de Presencia. La Paz, 27 de marzo de 1993: 1); “Sobre otra ‘salvajada’ documental en La Paz” (Puerta Abierta de Presencia. La Paz, 18 de mayo de 1993: 3); “Fuentes eclesiásticas en el Archivo Histórico de la Casa de Moneda de Potosí” (Anuario

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de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica, 1995, (1): 73-78); “El Archivo del Colegio Nacional Pichincha de Potosí” (Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Anuario 1994-1995. Sucre, 1995: 313-322); “El Archivo Historico de Potosí” (AHP. Catálogo Cajas Reales. Potosí, Casa Nacional de Moneda, 1995:7-49); Documentos Coloniales en Potosí” (Anuario 1996 del ABNB, Sucre, 1996: 501507) “La historia de un pueblo a través de sus fuentes parroquiales: el caso de la Inmaculada Concepción de Puna. Siglos XVII-XX” (Anuario de la Academia Boliviana de Historia Eclesiástica, 1996, (2): 115-122); “Los archivos el Departamento de Potosí” (Boletín del Archivo de La Paz, 1997, 17 (16-17): 58-61); “Archivo Historico de Potosí” (Diccionario Historico de Bolivia, Sucre, 2002: 163); “Archivos de Potosí” (Diccionario Historico de Bolivia, Sucre, 2002: 170-171); Fuente: CV.

VALDEZ, MOISÉS (Potosí)

Fotógrafo trajinante. Viajó por Sud Chichas (Potosí) durante fines de la década de 1880, tomando fotografías por encargo de la Compañía Minera Aramayo y Franke. Retrató a personajes de la mina, como capataces, operaciones mineras y vistas de las aldeas. Instaló su centro de operaciones en la mina de Quechisla, donde instaló su trípode, con la que “atrajo a una muchedumbre de mineros curiosos”, a los que atrapó inesperadamente el lente, inmortalizando una de las primeras imágenes del sur de Bolivia (1884). Fuente: Buck, 1996: 1 (6): 37-39.

VALDIVIA ANTISOLIS, FERNANDO JAVIER (La Paz, 24 de noviembre de 1954)

Periodista. Fue editor de Plumazo, semanario alternativo de análisis político que se editaba en Santa Cruz de la Sierra en la época más dura de la confrontación entre los departamentos de la llamada Media Luna y el gobierno del Presidente Evo Morales*. Desde el 2009 Coordina en esa ciudad la Casa de las Culturas de la Patria Grande, con gente identificada con el proceso de cambio que impulsa el presidente Evo Morales. En sus palabras, “Santa Cruz sigue siendo un terreno en el que todavía hay que sembrar con paciencia”. Trabajó en el Centro de Documentación e Información* CEDOIN y el Sistema de Información y Documentación Sindical* SIDIS. En ambos casos las labores nacieron de una inquietud fundamentalmente política: la preservación de la memoria. La organización de un archivo que concentre la memoria de los trabajadores mineros nació del espíritu revolucionario de E. Ramírez* y del interés del historiador J. Strengers*. Fue creado inicialmente como un brazo especializado de CEDOIN, mediante convenio suscrito con la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia FSTMB. Al principio fue asumido casi como un desafío personal de F. Valdivia, en oficinas del CEDOIN. Se partió de la hipótesis de que la gran mayoría de los documentos destruidos de la FSTMB en el golpe de 1980, provenía de sus propios afiliados, es decir los sindicatos mineros diseminados en todo el país. Entonces se visitó cada centro minero para pedir a los compañeros de los sindicatos que prestaran sus archivos para ser duplicados en fotocopias. Se recurrió también a dirigentes y ex dirigentes que conservaban sus propios archivos personales. Muchos papeles fueron rescatados de los baños públicos, donde se utilizaban con otros fines. En un “joint venture” inédito con la FSTMB, se planeó una gira a Europa, con recursos de J. Strengers y F. Valdivia para buscar financiamiento,

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que lo entregó la Central Sindical Holandesa (SNV), con la condición “que apareciera una imprenta donada a Juan Lechín, que llegó a Bolivia en plena dictadura de L. García Meza*”. La casualidad hizo que F. Valdivia y otro compañero lo recibieran y guardaran clandestinamente. A la postre el SNV apoyó con un financiamiento de $US. 50.000, además aceptó pagar el salario del cooperante J. Strengers y el 50% del director del proyecto, con un riguroso control tanto por parte del SNV como la FSTMB, responsable de efectuar los desembolsos. Se firmaron convenios con diversas instituciones, entre ellas la Carrera de Historia* de la UMSA, con la finalidad de otorgar becas trabajo a estudiantes que estuvieran haciendo su tesis en el tema de minería. Por el SIDIS pasaron Germán Choquecondori (Inka Huáskar Chokewanka), I. Jiménez*, Marino Oña, M. Murillo* y F. Chuquimia*. En algún momento hubo un cuestionamiento de instituciones especializadas en archivística a la FSTMB, sobre la conducción del proyecto por una persona sin la debida especialización académica, pero se explicó que el proyecto era sobre un patrimonio histórico privado de la FSTMB. Ante esta situación, F. Valdivia presentó su renuncia y se hizo cargo transitoriamente J. Strengers. Posteriormente visitó Alemania, y allí tuvo una reunión con el encargado de la reconstrucción de los archivos sindicales de los mineros alemanes, cuya documentación desapareció durante la 2da. Guerra Mundial. Le explicaron el método empírico aplicado al SIDIS, mientras el archivero alemán tomaba apuntes. Al cabo de tres meses escribió indicando que no había encontrado ninguna nomenclatura más apropiada que la ideada en el SIDIS, pidiendo la autorización para su uso en el trabajo de los archivos mineros alemanes. En el trabajo realizado en el SIDIS, se expresa la voluntad de los trabajadores mineros por contribuir a la recuperación de sus archivos. Sin ellos, que los alojaban en sus viviendas cuando llegaban a los centros mineros para recoger los archivos, que los apoyaban y alentaban, no hubiera sido posible este trabajo. Si hubiese que encarnar todo este empeño, F. Valdivia pide que se le bautice con el nombre de Edgar “Huracán” Ramírez, un hombre sabio. Fuente: Correo electrónico de 8.10.2010.

VALENCIA ROJAS, JORGE (La Paz, 1 de agosto de 1954)

Estudió la Carrera de Historia* y la Carrera de Ciencias Políticas de la UMSA. Su formación archivística la obtuvo en diversos cursos de Archivos, como el que organizó la OEA y el Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos CIDA* (La Paz, 1984). Participó en el Congreso Nacional de Archivos y Bibliotecarios, en el Seminario Nacional de Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (1993). Es especialista en la Ley 1178, de Administración y Control Gubernamental, habiéndose formado en los cursos realizados en la Contraloría General de la República durante diez años. En el ámbito académico fue auxiliar de docencia en la Carrera de Historia y docente en el Curso Preuniversitario. Ha sido profesor en Instrucción Cívica a nivel de secundaria. Como servidor público ha desempeñado funciones de Encargado de Archivo y Centro de Documentación de la Prefectura del Departamento de La Paz (1995); auxiliar del Archivo del Banco Central de Bolivia* (1995), el mismo cargo en el Ministerio de Hacienda (1997), y es Oficial de Archivo de la Contraloría General de la República desde 1997. Fuente: CV.

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VALVERDE, ROGER Juez del Distrito Judicial de La Paz. Protagonizó la histórica Resolución 101/10, de 4 de marzo de 2010, que autorizó “el levantamiento del secreto militar de los documentos, archivos en cualquier tipo de soporte físico, fuentes de información que será entregada a la comisión de fiscales y será mantenida en reserva”, para que “la comisión de fiscales que investiga la desaparición de Marcelo Quiroga Santa Cruz, Carlos Flores y Renato Ticona, en 1980, acceda a todo tipo de información de las dictaduras en el país”. La orden fue emitida ante el requerimiento del fiscal M. Mendoza*, que atiende la demanda de los familiares de las víctimas de la violencia política de las dictaduras militares, quienes pidieron se levante el secreto militar o reserva de los archivos militares para encontrar los restos de sus seres queridos. Esta determinación del Juez permitió a la comisión de fiscales “acceder a los archivos de las Fuerzas Armadas (FFAA) y citar a los funcionarios militares para tomarles declaración relativa al caso que investigan”. Una orden judicial y dos resoluciones ministeriales que datan de 2009 fueron resistidas por las autoridades militares, por lo que se solicitó al Juez pronunciarse respecto del levantamiento del secreto militar para acceder a cualquier información relativa a la dictadura de L. García Meza* (1980-1981). La autorización se basó en la resolución de la Corte Suprema de Justicia del 2005 que instruyó el levantamiento del secreto militar en relación con las muertes de octubre de 2003, durante el gobierno del presidente G. Sánchez de Lozada* (hoy asilado en Miami, EE. UU.).

VALLE DE SILES, MARÍA EUGENIA DEL

(Santiago, Chile, 14 de enero de1928. † La Paz, 17 de enero de 1994) Historiadora, y docente universitaria. Culminó sus estudios universitarios en 1953, obteniendo la licenciatura en Historia en la Universidad de Chile. Luego obtuvo una beca para completar sus estudios en España. Boliviana por adopción y decisión, a mediados de los sesenta del siglo XX se viene a la ciudad de La Paz, cuya confesión es evidente: “Yo soy chilena, me casé con un boliviano y con eso adopté una patria. Me vine a Bolivia feliz, como dispuesta a quererla, a entregarme a ella, y eso lo pude realizar apenas llegaba. Al llegar aquí consideré que el camino más adecuado para insertarme en esta realidad no podía ser la vida social y familiar, tenía que ser mi trabajo”. Precisamente al llegar a El Alto y bajar con rumbo a la ciudad de La Paz en compañía de su esposo, le llamó la atención la topografía, por lo que se interesó en el tema del cerco a la ciudad ocurrido en 1781. Su vocación de maestra la plasmó como docente de “Historia de América y de Metodología de la Historia”, en la Universidad Católica de Valparaíso; su incorporación a la Carrera de Historia* de la Universidad Mayor de San Andrés, se da a partir de 1966 mediante concurso público, año en que se inauguran las actividades académicas de dicha Carrera, y obtiene la cátedra de “Historia de América Colonial”, y al año siguiente dicta “Historia Universal Moderna”. Su pasión por la historia la llevó a especializarse en el estudio de las sublevaciones indigenales de 1780-1782, al revisar cuanta documentación le era posible en los repositorios del Archivo General de Indias* (Sevilla, España), el Archivo Histórico Nacional (Madrid, España), el de la Real Academia de Historia (Madrid, España), la Biblioteca del Palacio Real (Madrid, España), el Archivo

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General de la Nación (Buenos Aires, Argentina), el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (Sucre), la Colección “José Rosendo Gutiérrez” de la Biblioteca Central de la Universidad Mayor de San Andrés (La Paz), el Archivo “José Rosendo Gutiérrez” de la Casa Municipal de Cultura (La Paz), el Archivo de La Paz*, el Archivo de la Catedral de La Paz. Resultado de sus indagaciones, formó una importante Colección sobre el tema (1781-1785, de copias fotostáticas), que la donó en 1991 al Archivo de La Paz, clasificada en las siguientes series temáticas: Correspondencia, Juicios, Confesiones, Análisis causas de la sublevación, Informes, Defensa del protector de naturales, Sentencia y fallos de los procesados en Peñas, Cartas de Tupac Katari*, Acusación y defensa de Jacinto Rodríguez, Juicios a los Rodríguez; abarca temas referidos particularmente al cerco de La Paz de 1781, la sublevación de Chayanta de los hermanos Katari, la rebelión del 10 de febrero de 1781 en Oruro, los conflictos internos en ambos bandos, entre españoles y entre los indios. Antes había hecho donación de una colección de fotografías de la familia Salinas Vega. Las cartas, diarios e informes que reunió en su pesquiza archivística alcanzan cerca de 200. Afirma que “con el conjunto podría, tal vez, intentarse una historia de la rebelión, desde el punto de vista indígena”. G. Mendoza* a tiempo de valorar su trabajo la calificó como “historiadora por destino vocacional… Sus trabajos de especialización en la sublevación general de indios de 1780-1782 en Charcas y más específicamente en las provincias paceñas, presentan el aporte cuantitativo y cualitativo más consistente, porque la localización y accesibilización de fuentes primordiales debe ser por de pronto la tarea básica del historiógrafo de Bolivia. Con sus libros, María Eugenia del Valle de Siles ha hecho una introspección en aguas profundas archivísticas”. Es autora de Testimonios del Cerco de La Paz. El campo contra la ciudad 1781 (La Paz: Biblioteca Popular Boliviana de “Última Hora”, 1980); Bartolina Sisa y Gregoria Apaza: Dos heroínas indígenas (La Paz: Última Hora, 1981); Historia de la rebelión de Túpac Catari (La Paz: Editorial Don Bosco, 1990); Francisco Tadeo Diez de Medina. Diario del alzamiento de indios conjurados contra la ciudad de Nuestra Señora de La Paz, 1781 (Transcripción, Introducción, Notas y Estudio de María Eugenia del Valle de Siles. La Paz: Banco Boliviano Americano, 1981), del manuscrito encontrado en el Archivo General de Indias. Posibilitó, en 1993, la adquisición por el Banco Boliviano Americano, del manuscrito completo del Diario del Oidor Francisco Tadeo Diez de Medina sobre el cerco de La Paz de 1781, que se encontraba en poder de un anticuario de la ciudad de La Paz (Luis A. Wallpher G.) para su donación al Archivo de La Paz. El Sr. Wallpher admitió que se fotocopiara el manuscrito para su estudio, lo que le posibilitó a la autora una segunda edición del Diario en 1994, el cual, sin embargo, había sido ubicado por la historiadora en 1981, “en manos de una familia que, si bien permitió se revisase el texto, nunca autorizó la fotocopia o su uso en la edición completa del libro que por entonces estaba terminando Siles”. Socia fundadora de la Sociedad Boliviana de Historia (1972); Miembro Honorario del Instituto Nacional de Estudios Históricos “Túpac Amaru”, del Perú (1985); Miembro de Número de la Academia Boliviana de Historia, a la cual ingresó con su discurso “Gregorio Francisco de Campos, un obispo ilustrado que presiente la independencia” (Anales de la Academia Boliviana de la Historia 1990-1995. La Paz: Academia Boliviana de la Historia, 1995, p. 234-252. Sesión Académica de 18 de abril de 1991); y correspondiente de la Academia Chilena de Historia (1992) y de la Real Academia de la Historia de España (1994). Su labor meritoria en el campo de la historia, la investigación y la cultura fue reconocida con el “Lazo de Dama de

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la Orden del Mérito Civil de España” (1968), Premio de Cultura de la Fundación Manuel Vicente Ballivián (1993), y el “Cóndor de los Andes”, otorgado por el gobierno de Bolivia (1993). Publicaciones archivísticas: “La partida bautismal de Bartolina Sisa y los archivos parroquiales” (Presencia Literaria. La Paz, 12 de octubre de 1975: 2); “Tres archivos de la iglesia de La Paz: Archivo metropolitano de la catedral; Archivo de la Curia Arzobispal; Arquidiócesis de La Paz” (Boletín del Archivo de La Paz, 1976, 1 (1): 16-22; Tb. en Arze Aguirre, René. Fuentes para la historia de la iglesia en Bolivia (una guía preliminar). La Paz: cehila-ceprolai, 1984: 59-64). Fuente: Barnadas, 2002: 1102-1103; Castro, 1994: 8-9; Presencia-Puerta Abierta, 1993b y 1993c; Soux, 1994: 1-3; Wallpher, 1994.

VANOBLITAS CRESPO, TANIA ANDREA (La Paz, 2 de abril de 1989)

Estudia la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Ha participado en las Jornadas Paceñas de Bibliotecología y Archivística (2006), el Seminario sobre Conservación de Bienes Culturales y Documentales en Centros de Información (2007), IV Congreso Internacional de Bibliotecología, Documentación y Archivística (2007), la conferencia sobre la Implementación del Programa de Gestión Documental bajo Estándares Internacionales en el Banco Central de Bolivia* (2009). Trabajó en la organización del Archivo de la Facultad de Arquitectura, Artes, Diseño y Urbanismo (2008); elaboración del Directorio Nacional de Medio Ambiente y la sistematización de la Documentación del Archivo del Programa de Investigación Ambiental PIEB (2008-2009). Integró el equipo de empadronadores del Proyecto del Censo Guía del Archivos del Sistema de Impuestos Nacionales organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del Honorable Congreso Nacional* (2009), fue Mensajera de la empresa Santa Efigenia Ltda. Actualmente es Auxiliar de Archivo de la División de Documentos y Archivo de la Universidad Mayor de San Andrés. Fuente: CV.

VARGAS, JUAN CRISÓSTOMO

(La Paz, 27 de enero de 1772. † La Paz, 16 de enero de 1817) Escribano de número de la ciudad de La Paz (1803-1816). Adherente de la revolución del 16 de julio de 1809, participó activamente en el Cabildo de 4 de octubre de 1809. Formó parte de la compañía de milicias de Escribanos como teniente. Goyeneche* lo sancionó con la pérdida del oficio por seis meses, pero continuó trabajando con los patriotas. Mariano Ricafort* le persiguió tenazmente hasta hacerlo fusilar en la Plaza. Fuente: Aranzáes, 1915: 706, Money, 1977: 33 y 37.

VARGAS, MAXIMILIANO T.

(Arequipa, Perú, ca. 1874. † Lima, Perú, 1959) Fotógrafo que instaló en Arequipa el estudio más moderno en su género en el Perú. Enseñó fotografía a Martín Chambi* (el más importante fotógrafo peruano) del siglo XX, a quien lo tomó como aprendiz desde 1908 hasta 1917. Se trasladó a La Paz

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donde instaló su estudio fotográfico a principios de 1900, en la plaza Murillo. Retrató cholas y mercados, así como tarjetas postales de la élite paceña, “con su estilizado logotipo MTV”. Se le reputa como “un iniciador de la fotografía documental, sensible a registrar el patrimonio arquitectónico y arqueológico”, habiendo trabajado en Tiwanaku. Sus fotografías ilustraron el libro Bolivia en el primer Centenario de su Independencia (N.Y, 1925). Vargas, junto a Chambi, Figueroa Aznar y Avelino Ochoa, influenciaron decididamente en la obra de los fotógrafos L. Gismondi* y J. Cordero*. Continuó su labor en Arequipa, se mudó a Lima hacia 1930. En 1940 cayó en el olvido. Fuente: Convocatoria Fotográfica, 2006; Chávez, 2009.

VARGAS ÁLVAREZ, MARÍA DEL ROSARIO (La Paz, 19 de febrero 1962)

Técnico Superior en Bibliotecología y Ciencias de la Información (Universidad Gabriel René Moreno, 2007), Operador en Unidades de Información (2005) y Oficial I en Gestión Administrativa Universitaria (2003). Presidenta de la Red de Centros de Documentación de Santa Cruz de la Sierra. Asistió al Primer Seminario de Historia Cruceña (1996), Organización de Sistemas de Archivos (2004), II Simposio Electrónico Internacional sobre Conservación Preventiva en Bibliotecas, Archivos y Museos (2005), Preservando la Memoria Universitaria (2006), Normas ISO su aplicación en Bibliotecas, Centros de Documentación y Archivos (2007), Taller Departamental sobre la Ley del Sistema Nacional de Archivos* (2007), Seminario Internacional Destrucción de la Riqueza Documental y Bibliográfica y la importancia de su rescate para el desarrollo nacional (2008), Mesa Redonda 9 de septiembre: día aciago de la destrucción de la memoria cruceña (2008), El Archivo fílmico y su rol en la preservación de la memoria contemporánea (2009), 1er Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2009) y el Coloquio Internacional Acceso a la información pública, archivos y bibliotecas en la Constitución Política del Estado (2009). Se ha desempeñado como Bibliotecaria en la Biblioteca Central de la UMSA (1991), Biblioteca de la Facultad de Humanidades UAGRM (1995-1998) y desde el 2006 es Jefe de la Biblioteca de la Facultad de Tecnología. Como archivista trabajó en el Archivo de la universidad cruceña (1992–1994), Biblioteca y Archivo Histórico del Museo de Historia (1999-2006), donde tuvo a su cargo la organización del Fondo “Melgar y Montaño” y del Archivo Prefectural. Fuente: CV.

VARGAS CAERO, JORGE CARLOS

(Arani, Provincia Arani, Cochabamba, 2 de junio de 1960) Militar. Coronel AEMA de la Fuerza Aérea Boliviana. Director General de Archivo Central de la FAB. La Fuerza Aérea Boliviana ha institucionalizado el Archivo Central a nivel de Dirección General, constituyéndose en el cuarto archivo militar, junto al Archivo Histórico de la Fuerzas Armadas, Archivo Central de la Dirección Territorial y Archivo General del Ministerio de Defensa Nacional (que alberga en su seno al Archivo de la Corporación de Desarrollo de las Fuerzas Armadas). El Archivo de la FAB conserva la memoria histórica de la institución aérea militar, “mediante la clasificación, preservación

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y acceso a la consulta de la riqueza documental de la FAB”. Es el ente rector de la política archivística de la FAB, que “en coordinación con los ingenieros de sistemas, busca la implementación de un Sistema Integrado de Gestión Documental, con criterios de eficiencia, eficacia y efectividad, que contribuya al acceso de a la información” y al fortalecimiento institucional. Impulsa el Plan Nacional de Digitalización Electrónica, “que pretende a mediano plazo la recuperación y conservación de los Archivos de Correspondencia, Archivos de Gestión, Archivo Intermedio y Archivo Histórico, que conforma en su conjunto el patrimonio documental de la FAB, custodiado en el Archivo Central”. Siguiendo la tradición de las instituciones castrenses, este Archivo ha propuesto un blasón distintivo que fue autorizado por el Estado Mayor, de acuerdo al Art. 78, b) de la Ley Orgánica de la FF.AA. Publicaciones archivísticas: “Plan Estratégico hacia un Programa de Gestión Documental Electrónica, 2011-2014” (Revista Aeronáutica, Órgano oficial de la Fuerza Aérea Boliviana, 2011, No. 57: 96-97). Fuente: Vargas, 2011.

VARGAS CRUZ, NORBERTO (La Paz, 6 de junio de 1949)

Estudió bachillerato en la Universidad Popular “Túpac Katari”, especializándose en Radio electrónica. A partir de 1964 ingresó a la Presidencia de la República, donde trabajó hasta 1974 como mensajero del Archivo. En 1975 fue promovido al cargo de Auxiliar de Archivo y luego es ascendido al cargo de Jefe de Control de Documentos en 1976, en el que se mantuvo hasta 1986. Fue ascendido a Subjefe de la Gaceta Oficial de Bolivia, dependiente de la Secretaria General de la Presidencia, luego desempeña las funciones de Subdirector de Archivo y Jefe de Control de Documentos (1990). Finalmente, desde octubre de 1990 a la fecha se desempeña como Director General de Archivo de la Presidencia de la República. Se puede afirmar, por todo lo anterior, que meritorio funcionario dignifica la noble función de archivero. Adquirió notable experiencia en el manejo y archivo de la documentación en general que se tramita en la Presidencia, o aquella que es remitida por los diferentes ministerios y entidades de la república. La trayectoria de este funcionario es representativa de muchos otros que desarrollan su trabajo en instituciones públicas y privadas de la República. Se caracteriza, como muchos, por haber ascendido desde el más humilde puesto de trabajo, hasta el cargo de alta responsabilidad que ocupa en la actualidad. En ese lapso vio pasar a dos juntas militares y 18 presidentes de la República. Numerosas autoridades han expresado su agradecimiento por los servicios de este noble funcionario: Diploma de Reconocimiento por 25 años de trabajo, otorgado por J. Paz Zamora*, Presidente de la República (1989); Carta de felicitación por Lealtad demostrada con el país, otorgado por el Gral. Fza. Aé. Fernando Sanjinés, Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación; condecorado por el Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas* con Presea de Oro y Diploma de Reconocimiento por 25 Años de Servicio a la Nación (1993); condecoración Orden Boliviana del Trabajo en segundo grado, Reconocimiento a 35 años de servicios, RS 218780 del Ministerio de Trabajo (1999). Fuente: Ordóñez, 1993: 14-16; Cambio, 2009: 13-16.

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VARGAS LORENZETI, OSCAR Militar. General de Fuerza. Fue Comandante del Batallón “Topáter” de la II División de Ejército, acantonado en Oruro en diciembre de 1972, oportunidad en la que recibió al primer contingente de reclutas bachilleres que instruyó el gobierno del dictador H. Bánzer*. Más tarde, ya retirado del servicio activo, fue designado Ministro de Defensa Nacional el 25 de abril del 2000, cargo en el que se mantuvo hasta el 6 de agosto de 2001. En el ejercicio de sus funciones contrató los servicios de consultoría a cargo de L. Oporto* y B. Lecoña*, para la organización del Archivo General del Ministerio de Defensa Nacional, proyecto que contó con la colaboración del Gral. Liborio Fernández Lizarazu, Director General Administrativo, y Marcelo Ossio, Director de la Unidad de Programación y Operaciones. Gracias a su determinación personal, firmó la Resolución Ministerial No. 2180 de 21 de septiembre de 2000 que autoriza la creación del Archivo General del Ministerio de Defensa Nacional, con la que se aprobó el Reglamento Específico y el Manual de Procedimientos para la Gestión Documental y Organización del Archivo General, ordenó la concentración de los Archivos de la Dirección de Territorial, Archivo de Contabilidad y Archivo Administrativo, e igualmente autorizó los recursos económicos para la adquisición de estantería metálica especialmente diseñada y construida para el Archivo General, la refacción y adecuación del antiguo edificio donde funcionaba la Botica del Ejército en Campaña (1932-1935) destinado en tiempo de posguerra al Tribunal Supremo de Justicia Militar. Fuente: Mesa, 2006: 472-473; Oporto, 2006: 185-186; Oporto, 2011, 105 y ss.; Oporto y Tinta, 2012: 14.

VARGAS MEDRANO, JOSÉ SANTOS (Oruro, 28 de octubre de 1796. † ca. 1853)

Hijo de don Blas Mariano Vargas, Capitán de Caballería de los Ejércitos Reales, Escribano Público de Cabildo, Gobierno y Guerra, y de doña María Guadalupe Medrano. Quedó huérfano de madre en 1802 (a los 5 años) y de padre en 1804 (a los 7 años). Hasta 1810 estuvo a cargo de su tía abuela Gregoria Díaz y luego de su maestro de primeras letras, albacea y tutor, José Jacinto Quevedo. En circunstancias de la incursión a Oruro de las tropas patriotas comandadas por Esteban Arze (noviembre de 1811), huyó hacia los valles cochabambinos ante la represión de las tropas realistas. Allí permaneció hasta septiembre de 1814, como sirviente doméstico y Secretario de cartas, que le permitió ejercitar su vocación de escritor. Al conocer a su hermano Andrés Vargas, cura guerrillero, quien además había llevado un diario, recibe el estímulo de él y decide incorporarse a la guerrilla y, asimismo, llevar un diario. Se incorporó a la guerrilla en 1814, a los 18 años de edad, con decisión, convicción, vocación y remarcado interés en experimentarla y relatarla, aun arriesgando su vida, pues estaba afectado por la triple manía de curiosear, averiguar y comunicar: “Ansioso estaba yo de ser patriota, mucho más con la intención de saber y apuntar lo que sucediese. Ello es que me entropé por ser más testigo ocular de los hechos”. Durante su experiencia guerrillera escribió su célebre Diario histórico de todos los sucesos ocurridos en las provincias de Sicasica y Ayopaya durante la Guerra de la Independencia americana; desde el año 1814 hasta el año 1825, que lo concluyó en 1852.

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Su Diario es un testimonio extraordinario, una radiografía de la guerrilla, “por su minuciosidad en detalles de toda índole constituye una aproximación microscópica a esta lucha”. Con el fin de publicar la obra, JSV presenta su Diario al presidente de Bolivia, General Manuel Isidoro Belzu, le pide un premio y se lo dedica. Lamentablemente los numerosos intentos (por lo menos diez, entre 1825 y 1853) fracasan. Sin embargo, vaticina el futuro de su obra: “Quedo con el consuelo de que en los siglos venideros [mi diario] saldrá a luz cuando no sea en éste, y en todo el hemisferio americano”. Vaticinio que G. Mendoza Loza* lo cumple como un mandato un siglo más tarde (primera versión) y 130 años después (segunda versión), por generosidad del destino. A juicio de G. Mendoza, el Diario es único en su género: “Por su alcance temporal dentro de la guerra de independencia hispanoamericana, por la condición netamente social y cultural del autor, por su punto de vista y su ejecución, es un libro sin par, absolutamente, en la bibliografía del tema en todo el mundo. Abundan, ciertamente, los diarios de guerra de jefes y oficiales, y los hay también de soldados, en conflictos bélicos regulares, pero, reiteramos, el caso de un diario de guerra de un soldado en condición popular en una guerra popular, irregular y nacional, escrito en lenguaje popular y con ideas y sentimientos populares, es, lo repetimos, único”. El valor historiográfico y archivístico del diario se evidencia porque fue escrito por un protagonista y testigo de los hechos de la guerrilla, en la unidad geográfica denominada los Valles en el centro del territorio, en las estribaciones de la cordillera de los Andes, y de aquellos que averiguó desde su puesto de Tambor Mayor (1815), Sub-Tte. de Granaderos (1816), Tte. de Caballería (1819), Capitán (1821) y Comandante (1823), inclusive su diario circulaba entre sus compañeros y amistades; aunque varios pasajes fueron averiguados y escritos después de la guerra: “Mi trabajo nada contiene que no sea la pura verdad harto notoria para mis contemporáneos y para los pocos que acaso se dedican al importante estudio de nuestra historia. Además tal es la fidelidad de mi diario que puedo asegurar francamente no carecer él de hecho alguno interesante ni de los que puedan denominarse accidentales”. Corresponde a una categoría de diario de guerra personal y voluntario, con el propósito de informar y comunicar (primordial estímulo) para “que se sepa en la posteridad de los sucesos de la lucha, para que se sepa cuánta sangre, cuántos esfuerzos, cuánto valor y heroísmo cuesta a la Patria su libertad, para saber apreciarla mejor, conservarla y respetarla”. Ciertamente la guerrilla de Ayopaya fue la última que sobrevivió y contribuyó decisivamente en la independencia de Bolivia, como que el comandante general José Miguel Lanza fue uno de los representantes diputados por La Paz de las Provincias del Alto Perú en la Asamblea General de la declaración de independencia el 6 de agosto de 1825. Sin embargo, recuerda el vaticinio de uno de sus compañeros de guerrilla de que “otros gozarán los frutos del árbol de la libertad”. Desalentado, se retira al cantón Mohoza, doctrina de Santiago, parcialidad Urinsaya (departamento de La Paz), lugar recóndito donde se convirtió técnicamente en indio, adscribiéndose en el Ayllu Vilacha en calidad de originario y contribuyente al fisco por un pedazo de tierra junto a su esposa Juana Rodrigo y sus hijos. El valioso manuscrito, acopiado inicialmente por S. Velasco Flor*, pasó a poder de E.O. Rück*, cuya colección fue adquirida por el gobierno para la Biblioteca Nacional en 1913. Existen dos versiones manuscritas del Diario por el mismo autor, que se conservan en la Biblioteca Nacional de Bolivia: la primera, trunca (1816-1821), fue publicada en tres entregas en la Revista Universidad

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de San Francisco Xavier (“Una crónica desconocida de la guerra de Independencia altoperuana: El Diario del Tambor Mayor Vargas”: Nos. 37-38, 39-40, 1951; Nos. 4142, 1952) y luego como libro (Tambor Mayor Vargas. Diario de un soldado de la Independencia altoperuana en los valles de Sicasica y Hayopaya 1816-1821. Sucre: Universidad San Francisco Xavier, 1952); y la segunda, completa (1814-1825), por la editorial Siglo XXI (Diario de un comandante de la Independencia Americana 1814-1825. México, 1982). Ambas ediciones con valiosos estudios de su descubridor y editor, G. Mendoza Loza. La empresa editorial Plural y el ABNB (La Paz, 2008), publicaron una segunda edición, con las notas inéditas de G. Mendoza, ilustraciones (mapas, dibujos, fotografías), más un CD. Lleva la siguiente dedicatoria: “A la memoria de don Gunnar Mendoza, descubridor de los diarios de José Santos Vargas”. Sin embargo, la segunda versión completa del manuscrito no había ingresado, entre otros, juntamente con las demás piezas documentales y bibliográficas de la Colección Rück al momento de su adquisición, no obstante de que figuraba en el catálogo de 1898. En 1963, a 50 años de la adquisición de la Colección Rück, el diario fue recuperado y adquirido por el gobierno, gracias al empeño y gestiones de Gunnar Mendoza, director del ABNB. Mediante Resolución Suprema Nº 122293 (24 septiembre 1963), el manuscrito fue adquirido de la familia Costa du Rels-Urriolagoitia por intermedio de la Compañía de Importaciones “Sucre” Limitada, cuyo propietario atendía un negocio de anticuario. A solicitud de Gunnar Mendoza, en la dirección del ABNB se hicieron presentes el Dr. Gustavo Barrero, Fiscal de Partido, del Ministerio Público; el Sr. Eduardo Arce, de la Contraloría Departamental; y el Dr. Atanasio Rojas Plata, Notario de Gobierno, Hacienda y Minas, a objeto “de verificar el ingreso, existencia, integridad estado de conservación de los documentos”, entre otros tres, del “Diario histórico de todos los sucesos ocurridos en las Provincias de Sicasica y Ayopaya durante la Guerra de la Independencia Americana, desde el año 1814 hasta el año 1825. Escrito por un comandante del Partido de Mohosa, ciudadano José Santos Vargas. Año de 1852” (“Acta de Comprobación”, Sucre, 28 de octubre de 1963). El célebre Diario fue inscrito por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, el 2009, en el “Registro Regional de América Latina y el Caribe del Programa Memoria del Mundo de la UNESCO”. El Comité Regional es una de las ramas del Programa Memoria del Mundo destinado a proteger y difundir el Patrimonio Documental en los archivos y bibliotecas, que a su vez es un programa paralelo del Programa Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad. Fuente: Mendoza, 1982b; Molina, 2010, 10: 16-31; Rück, 1898.

VÁSQUEZ, JAVIER Técnico Superior en Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA). Fue docente de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (1979). Impartió la cátedra de Reprografía (1988) y fue Director de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA). También ocupó el cargo de archivista en el Senado Nacional (1993). Fuente: Grama, 1979; Revista de Biblitecología 1988.

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VÁSQUEZ BLACUTT, ISRAEL PEDRO (Oruro, 12 de febrero de 1984)

Estudió la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (UMSA). Hizo el Diplomado en Poder Constituyente y Estado (Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, 2006). Este joven valor empezó a trabajar en bibliotecas especializadas de la UMSA, primero como pasante en la de Antropología y Arqueología de la carrera homónima (2004), y en la de la Facultad de Ingeniería (2004). Posteriormente como Auxiliar en la Biblioteca de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación bajo la modalidad de Beca Trabajo (2005); Auxiliar del Centro Documentación e Investigación Educativa (CIDE) del Centro Boliviano de Investigación y Acción Educativas CEBIAE (2007). Destacó en trabajos de investigación, como la Compilación de Leyes para Oruro, para la Brigada parlamentaria de Oruro (2006). Fue miembro del Comité Editor de la Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información (Vol. 9, No. 14, 2005). Suele publicar notas de opinión en periódicos de La Paz. Trabajó como Documentalista en el Archivo Fonográfico dependiente del Centro de Documentación en Artes y Literaturas Latinoamericanas CEDOAL de la Fundación Simón I. Patiño, donde realizó notable labor gracias a que cultiva la música (2008-2010). Pasó luego a desempeñar funciones en el Archivo del Ministerio de Transparencia, a partir de noviembre de 2010. Publicaciones archivísticas: “Una historia infausta: La destrucción del Patrimonio Cultural” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2003, 12(8): 47-48; publicado también en: Técnicas de lectura y estudio: Curso preuniversitario de la Carrera de Bibliotecología (La Paz, 2006); “Memoria Institucional de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información de la UMSA” (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 2005, 14(9): 139-150). Fuente: CV.

VÁSQUEZ MÁRQUEZ, SHINDY KAREN

(Provincia Caranavi, La Paz, 3 de enero de 1990) Realizó el Servicio Premilitar en el Regimiento Colorados de Bolivia (2005-2006). Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA), graduada por la modalidad de Excelencia. Participó en diversos cursos, seminarios y congresos, entre ellos: Seminario Conservación de Bienes Culturales y Documentales en Centros de Información (2008), IV Congreso Nacional de Bibliotecología, Documentación, Archivística y Museología (2009), Catalogación de Materiales Electrónicos (2010); fue disertante en el Curso “La Lectura y el Desarrollo de los Conocimientos”. Realizó pasantías en diversas instituciones, tales como: Archivos de unidades académicas de la UMSA (2008), MUSEF* (2008), Biblioteca de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UMSA, 2009). Apoyó en el Proyecto de Catalogación de la Hemeroteca del MUSEF (2010). El 2012 fue contratada como Asistente en el Sistema de Archivo de la Corporación Minera de Bolivia*, en la ciudad de El Alto. Fuente: CV.

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VÁSQUEZ TORRES, CEDELIA (La Paz, 28 de octubre de 1962)

Licenciada en Bibliotecología (UMSA). Realizo servicios de Consultoría en el Archivo Central del Servicio de Impuestos Nacionales (2008-2009) y el Archivo de la Dirección de Liquidación de los ex Entes Gestores del Servicio Nacional de Patrimonio del Estado (2009-2010). Asistió al Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”* (1996). Fuente: CV.

VÁZQUEZ MACHICADO, HUMBERTO

(Santa Cruz de la Sierra, 27 de abril de 1904. † La Paz, 17 de diciembre de 1957) Abogado (UMSA), Escritor, Diplomático con estudios especiales en Historia y Etnografía Americana. Representó a Bolivia en el II Congreso de Historia de América en Buenos Aires y en el XXIV Congreso de Americanistas, celebrado en Hamburgo en 1930. En 1928 fue designado Canciller del Consultado General en Hamburgo (Alemania). En 1931 fue invitado a realizar las investigaciones de los títulos de Bolivia sobre el Chaco en archivos históricos de Berlín y Roma, con el nombramiento de Comisionado. En Roma fue colaborado por el Cónsul Luis Segarini, para la búsqueda de la bula ereccional del Obispado de Charcas y Santa Cruz de la Sierra. Recibió un providencial apoyo del Archivero de la Embajada de España en la Santa Sede, Fr. José Pou y Martí y el R.P. Leturia S.J., director de las revistas Archivum Historicum SJ y Monumenta Histórica SJ, que le abrió las puertas del Archivo Segreti del Vaticano. Trabajó en el Archivo de la Sagrada Congregación de Propaganda Fide, el Archivo de España en la Santa Sede y el Archivo Secreto Vaticano. Revisó documentos sobre la época de la Independencia de las Nunciaturas en Brasil y Nueva Granada, encontró correspondencia del General Andrés de Santa Cruz para un acercamiento a Roma. Se le ordenó pasar a España a colaborar con su hermano José Vázquez*, pero antes se dirigió al Archivo Orgnissanti de Florencia para copiar las obras de los padres Doroteo Giannecchini y del padre Mingo de la Concepción*, útiles para el conflicto del Chaco. En Madrid revisó, ya por cuenta propia, los Archivos Hidrográfico y Naval. A su retorno a Bolivia, presidió la comisión demarcadora de límites con Brasil. Cuando trabajaba en Hamburgo (Alemania), encontró el archivo de José Manuel Goyeneche* del cual levantó un índice que se mantiene inédito. Fue el que organizó por primera vez el Archivo de José Rosendo Gutiérrez*, adquirido por la Universidad Mayor de San Andrés y que hoy se encuentra depositado en la Biblioteca Central de la UMSA. Fue invitado por el gobierno de EE.UU. para visitar varios archivos. El resultado de ese viaje de estudios fue la elaboración de una nota sobre las Fuentes documentales sobre Bolivia en los archivos de Estados Unidos. Miembro de la Academia Boliviana de la Historia y de la Sociedad Geográfica de La Paz. Tuvo una amistad muy cercana con G. Mendoza*, a quien junto a su hermano José, consideraban como un valor de la historiografía joven. Autor del Manual de Historia de Bolivia, que publicó en varias ediciones con Teresa Gisbert y José de Mesa. A su muerte, los esposos MesaGisbert continuaron con la edición del Manual, en el que incluyeron a C. D. Mesa*, retirando el nombre de H. Vázquez Machicado. Su extensa obra historiográfica

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fue editada en siete volúmenes por Alberto Vázquez y G. Ovando Sanz*: Obras Completas de Humberto Vázquez-Machicado y José Vázquez-Machicado. Edición de Guillermo Ovando Sanz y Alberto M. Vázquez. La Paz: Talleres Artes Gráficas Don Bosco, 1988. Vols. I-VII. Publicaciones archivísticas: Fuentes para la Historia Boliviana en los Estados Unidos de N.A. Potosí: Instituto de Investigaciones Históricas, 1964. Serie I, Archivos, Cuaderno Nº 3. Prólogo de Guillermo Ovando Sanz (Reproducido en Obras Completas de Humberto Vázquez-Machicado y José Vázquez-Machicado La Paz, 1988. Vol. VII: 445-471); Catálogo de documentos referentes a Potosí en el Archivo General de Indias de Sevilla. Potosí: Ed. Potosí, 1964. Nota preliminar de Armando Alba (p. XI-XIII) y Prólogo de Humberto Vázquez-Machicado, p. XVII-XIXII (El Catálogo de documentos… no fue publicado en las Obras Completas, sólo la Nota Preliminar y el Prólogo); “Papeles inéditos de Gabriel René-Moreno” (La Paz, mayo de 1943), en: Academia Boliviana de la Historia-Banco Central de Bolivia. Papeles inéditos de Gabriel René-Moreno. Casimiro Olañeta (Esbozo de biografía). La Paz: Academia Boliviana de la Historia-Banco Central de Bolivia, 1975, p. 1-14. Fuente: Siles Guevara, 1971a; Vázquez, 1988.

VÁZQUEZ MACHICADO, JOSÉ

(Santa Cruz de la sierra, 4 de febrero de 1898. † La Paz, 20 de marzo de 1944) Abogado, Diplomático y Periodista. Estudió Historia en Alemania. Prestigioso papelista y documentalista. Fue nombrado por el gobierno Sevilla, por el presidente D. Salamanca* a mediados de 1931, “para la búsqueda de documentos que afianzaren los derechos de Bolivia en el territorio del Chaco”. En su trabajo descubrió el Catálogo de los documentos obtenidos por la comisión paraguaya en su propia investigación. En febrero de 1933, concluyó su revisión documental en las secciones Patronato, y Audiencias (Charcas, Lima, Buenos Aires), con cuyos datos levantó un Catálogo que envió a la Cancillería en La Paz. Posteriormente revisó las secciones Contratación e Indiferente General, labor concluida en mayo de 1933. Se dirigió a Madrid donde revisó los Archivos Histórico Nacional, del Museo Naval, de la Biblioteca del Palacio, de la Academia de la Historia y de la Sección Manuscritos de la Biblioteca Nacional. Por su parte, el Gobierno instruyó a D. Pereyra* revisar los Archivos de Simancas y Madrid. Volvió a Sevilla a copiar centenares de documentos autenticados requeridos por el Gobierno en base a su Catálogo. El resultado más importante de su trabajo es el monumental Catálogo descriptivo del material del Archivo de Indias referente a la Historia de Bolivia, compuesto de tres volúmenes y de 5.030 fichas (3.334 de la Audiencia de Charcas, 1.118 de Buenos Aires y 578 de Lima) que abarcan desde el siglo XVI hasta los primeros años del XIX. El Catálogo fue publicado parcialmente en Potosí y Oruro. Su obra historiográfica es amplia, recogida y sistematizada por G. Ovando Sanz*, quien la editó con el concurso de Alberto M. Vázquez, en siete densos tomos de las Obras Completas de Humberto y José Vásquez Machicado, que incluye también su veta archivística. Publicaciones Archivísticas. Obras Completas de Humberto Vázquez-Machicado y José VázquezMachicado. Edición de Guillermo Ovando Sanz y Alberto M. Vázquez. La Paz: Talleres Artes Gráficas Don Bosco, 1988. Vols. I-VII. Volumen VII. Prólogo al Catálogo de documentos referentes a Potosí en el Archivo General de Indias de Sevilla (819-838), consta de: Prólogo al Catálogo de documentos referentes a Potosí en el Archivo General de Indias de Sevilla preparado por José Vázquez-Machicado (821-824) (Nota de Armando Alba); Prólogo (p.

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825-838) (El Catálogo de documentos referentes a Potosí en el Archivo General de Indias de Sevilla. Potosí: Ed. Potosí, 1964, no fue publicado en las Obras Completas); Catálogo de documentos referentes a Oruro en el Archivo General de Indias de Sevilla. Oruro: Imp. Universitaria Técnica de Oruro, 1966. Prólogo de Juan Siles Guevara (p. 5-12). (No fue publicado en las Obras Completas); Catálogo descriptivo del material del Archivo General de Indias referente a la historia de Bolivia. La Paz: Instituto de Investigaciones Históricas UMSA-Archivo de La Paz, 1976. 5 Vols.: I: Audiencia de Charcas (Primera y Segunda parte); II: Audiencia de Buenos Aires (Primera y Segunda parte); III: Audiencia de Lima (No fue publicado en las Obras Completas); Catálogo descriptivo del material del Archivo de Indias referente a la historia de Bolivia. La Paz: Ministerio de Educación y Cultura, 1989. Fuente: Costa Arduz, 2005: 213; Siles Guevara, 1967.

VÁZQUEZ MURILLO, MANUEL (Tucumán, Argentina, 1932)

Licenciado en Teología (1956) y en Archivología (1973), por la Universidad Nacional de Córdoba. La archivística ha sido su profesión y materia de su docencia universitaria desde 1973. Se especializó en Selección de Documentos de Archivo y en Teoría Archivística, con dos obras señeras como son el Manual de Selección Documental y su Introducción a la Archivología, que fueron ampliamente utilizados en Iberoamérica. Escribió otros manuales de importancia referidos a la Administración de Documentos y Archivos, Patrimonio Documental y Selección de Documentos de Archivo. Es autor de gran cantidad de artículos en revistas archivísticas iberoamericanas, traducciones del francés e inglés, etc. En 1984, con los auspicios de la OEA, el CIDA, el Archivo de La Paz* y la UMSA, dictó la materia “Selección documental”, en el Cursillo de Archivos. Actualmente jubilado, sigue preparando cursos y escritos cuyo denominador común es la adecuación de la Archivología a las necesidades y exigencias del siglo XXI en Iberoamérica. El 2002, en una votación realizada por 174 suscriptores de todo el mundo de la publicación AALA ed. 4 (www. aala.8K.com/sem 6.htm) alcanzó el primer puesto que comparte con la archivera española Antonia Heredia Herrera. En mérito a su trayectoria, el VIII Congreso de Archivos del MERCOSUR (Montevideo, 2009), le reconoció como Socio de Honor, junto a A. Tanodi*, A. Heredia* y V. Cortés* Publicaciones archivísticas. El Patrimonio Documental (1981); Manual de Selección Documental (Córdoba, Argentina, 1982; Bogotá, 1992 y Sevilla, 1995); Estudio del Carácter Original de los documentos (1988); Introducción a la Archivología (Bogotá, 1997); Cómo seleccionar Documentos de Archivo (Buenos Aires, Alfagrama, 2006); Administración de Documentos y Archivos. Planteos para el siglo XX (Buenos Aires, Alfagrama); Política de la Administración de Documentos y Archivos (2003). Fuente: CV.

VEGA, CAYETANO

(La Paz, 8 de agosto de 1775. † La Paz, 28 de agosto de 1824) Escribano de Número (entre 1798 y1824). Fue también Escribano de Diezmos (18001808). Abrazó la causa patriótica en las juntas conspirativas del 16 de julio de 1809, siendo uno de sus secretarios. Junto a J.M. Cáceres* y J. C. Vargas* formó la Compañía

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de Milicia de Escribanos. Aplastada la rebelión, J. M. Goyeneche* lo hizo apresar pero al obtener la libertad continuó su labor patriótica. Apoyó a la causa rebelde con dinero y vituallas. El 12 de marzo de 1811 donó una inmensa carpa de campaña muy difícil de conseguir, que entregó al capitán de la Sala de Armas José Benigno Salinas, quien certificó haber “recibido el obsequio que en calidad de donativo ha puesto en esta Sala el Secretario D. Cayetano Vega, dos Ticudas de Campaña tegidas de lana costosamente grandes capases y de toda comodidad y lucimiento propios para un Ejército, con todos sus aperos corrientes para el servicio y uso de las Tropas Auxiliares dirigidas por la Excelentísima Junta Guvernatiba de Buenos Aires (…) siendo su balor por lo más ínfimo de más de trescientos pesos (….)”. Fuente: Aranzáes, 1915: 770-771; Money, 1977: 31-41: Money, 1984: 44-45.

VEGA TOLA, MARIANELA SUSY (La Paz, 1 de noviembre de 1985)

Estudia la Carrera de Historia* (UMSA). Es Técnico en Aplicaciones. Asistió al 2do. Taller Departamental “Ley del Sistema Nacional de Archivos” (2007), al 1er. Curso de Digitalización de Documentos (2008), y al curso de Digitalización de Fotografías (2011). Hizo una pasantía para la clasificación de documentación de la Serie Documental Comando Superior del Ejército en Campaña, 1930-1935, en la Dirección General Archivos Militares de las Fuerzas Armadas de la Nación (20062007). En el Archivo de La Paz* trabajó como pasante (2007), Técnico en el Proyecto de Digitalización y Microfilmación de Padrones del Siglo XIX (2008), Proyecto de Descripción y Digitalización de Fotografías, Coordinadora y supervisora de Digitalización de Fotografías del Fondo Fotográfico Última Hora (2011), Auxiliar de Almacén de Valores Corte Nacional Electoral (2009), URUDATA Sofware XEROBOL Proyecto de Digitalización de las Unidades Documentales de Partidas del Registro Civil en Bolivia (2009). Fuente: CV.

VELASCO CARRASCO, GASTÓN

(La Paz, 26 de abril de 1910. † La Paz, 31 de septiembre de 2002) Estudió la secundaria en Antofagasta (Chile). Participó en la Guerra del Chaco (19321935) como jefe del Servicio Secreto, conocido como Agente “013”. En esa época montó una operación encubierta para infiltrar espías bolivianas, entre ellas R. Aponte*, en las oficinas del Consulado del Paraguay en Salta. Ingresaron subrepticiamente a la residencia oficial, abrieron la caja y requisaron los archivos del Servicio Secreto del Paraguay y documentos relativos a la guerra, vaciando su contenido en dos maletas. Miembro del Concejo Municipal de La Paz (1944-1945), Convencional Diputado por La Paz (1945), Prefecto del Departamento de La Paz (1953-1954). Presidente de la Federación de Sociedades Mutuales, Presidente del Centro Cultural “20 de octubre” y Presidente de Acción Marítima. Patricio paceño. Recibió la Medalla al Mérito Militar y el Cóndor de los Andes. Su abuelo y su padre coleccionaron documentos desde la fundación de la República y relacionados a la causa marítima, con los que formó una biblioteca especializada sobre la Guerra del Pacífico (1879-1880), que contiene más de

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dos mil piezas históricas, entre ellas 67 mapas originales desde 1800, 713 libros, 200 folletos y revistas, 3 partes de guerra, 14 legajos de la Prefectura del Litoral, 4 sellos y billetes, 76 títulos de periódicos históricos (Vg. El Iris, El Titicaca), 3 de Antofagasta (El Caracolino, El Litoral y El Noticiero) y 200 retratos y fotografías, el estandarte de la Primera Compañía de Bomberos de Antofagasta y sus estatutos (1875), la bandera que protegió la niña Genoveva Ríos, dos trajes de marineros confeccionados con bayeta de la tierra. Esta valiosa colección fue estudiada por L. Martínez*, como tesis de Licenciatura en la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* (1999). Fue autor de la letra de la “Marcha Marítima” (música de Edgardo Otero de la Vega), que se entona cada 23 de marzo. A su muerte, su hija María Isabel, transfirió dicha colección a la Alcaldía de La Paz, en marzo del 2004, cumpliendo su última voluntad. Fuente: La Prensa, 2004: 11; Martínez, 1999; Quién es quién en Bolivia, 1959: 299-300.

VELASCO FLOR, SAMUEL (Potosí, 1838-1880)

Abogado (1866); notable papelista e historiador. Fue Diputado (1873-1878). Tuvo en su poder 33 de un total de 63 volúmenes de los libros del Cabildo de Potosí (1561-1825), y posteriormente fue a parar en poder de otro coleccionista, el alemán avecindado en Sucre, E. O. Rück*, quien luego fue el primer director del Archivo Nacional de Bolivia (1884-1889). Las Actas del Cabildo de Potosí fueron adquiridas por el Estado en 1913, como parte de la Colección de O. Rück*, integradas a la colección de manuscritos de la Biblioteca Nacional. Posteriormente, en 1968, por resolución interna fueron transferidas al Archivo Nacional de Bolivia. Tanto o mayor valor aún tienen los materiales manuscritos de la Colección Rück que suman más de 500 piezas. Esta colección manuscrita está formada sobre la base de la que hizo Velasco Flor, adquirida a sus herederos por Rück. En base a su invaluable Archivo, escribió sus Apuntes para la historia de Bolivia, que cubre el proceso boliviano de 1860 a 1861 y una síntesis de Sucre, de 1865 a 1866. Autor de Vidas de Bolivianos Célebres (Potosí, Tipografía del Progreso, 1871), en la que reseña la trayectoria de Manuel Ascencio Padilla y Juana Azurduy, publicando documentos autógrafos de aquellos. Un ejemplar de esta obra, catalogada como rarísima, existe en la Biblioteca de la Universidad de Texas (EE.UU.). Sin embargo, una de sus obras más importantes es la Matrícula estadística de abogados (3 junio 1753-28 diciembre 1876), publicada en la Imprenta de Pedro España, en 1877, que consigna 489 referencias de abogados que ejercieron en la época del dominio español (Juan José Segovia, 1753; Dionisio Barrientos, 1825) y 1508, desde 1825 a 1876 (Ángel María Miranda, 1825; Ramón Peñaranda, 1876). Velasco afirma que la matrícula reúne “la autenticidad oficial exigida en un libro de este género y que puede servir de título de abogado en provisión nacional”. No estaba equivocado, pues la matrícula fue autorizada por Acuerdo de la Corte Superior de Chuquisaca, “a catorce de octubre de 1910 (….) con el propósito de dar toda la autenticidad necesaria al libro de matrícula de abogados recibidos en este Distrito, desde el año de 1858 y que puede servir de suficiente comprobación legal en casos de extravío de títulos y otras emergencias”, aunque aceptan que “el libro no es al presente sino una simple nómina sin garantía alguna”, resuelven “traspasarlo al que se abre en esta fecha a continuación, minuciosamente

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confrontado, debiendo rubricarse en cada una de sus páginas por los magistrados”, y finalmente, “se encomienda al señor presidente su depósito, no pudiendo salir de oficina bajo pretexto alguno”. Firman el Acuerdo, José María Buitrago, Demetrio F. de Córdova, Abel Torricos y Juan Fernández, refrendado por el secretario Leónidas Dorado. La matrícula fue impresa por la Corte Superior, actualizada a 1913, en el que alcanzó a 1634 abogados. Publicaciones archivísticas: Foro Boliviano: Matrícula estadística de abogados (3 junio 1753-28 diciembre 1876). Sucre, Imprenta de Pedro España, 1877. Fuente: Hanke y Mendoza, 1980: 64; Rück, 1898: 66; Velasco, 1877; http://200.87.17.235/bvic/ Captura/upload (27.4.2012).

VERA ARAGÓN, CRISPÍN (Madrid. † La Paz, 1795)

Estudió en la Universidad de Alcalá de Henares, en Madrid. Fue secretario del Rey quien le premió con el cargo de Escribano de la ciudad de La Paz en 1764. Empezó su actuación en La Paz en 1753 hasta 1760. Lo fue también en el de la Real Hacienda y Minas entre 1760-1773 y 1779-1782. Como tal tenía la obligación de publicar los bandos acompañando al pregonero Antonio Pineda, al alguacil mayor Rafael Arteaga Vermúdez. Luego sirvió como Escribano de Intendencia y Guerra (1784-1801) y pasó a órdenes del gobernador Sebastián de Segurola como secretario dejando la Escribanía. Fuente: Aranzáes, 1915: 780; Money, 1984: 39-44.

VERA COLOMO, IRMA

(La Paz, 21 de enero de 1941) Egresó del Instituto Comercial Superior de la Nación (INCOS); Escuela Modelo de Altos Estudios Comerciales, Bancarios, de Administración Pública y de Administración Industrial; del curso de Secretaria Comercial Caja (1959). Estudió Técnicas de Secretaría, en el Centro de Adiestramiento e Investigaciones en Administración Pública (1959). Con esos cursos se habilita como archivera, pues tienen mucho que ver con el manejo y administración de documentos públicos. En 1972 concluyó el bachillerato, egresando del Centro Piloto “Max Paredes”, en 1990 egresó de la Carrera de Ciencias Políticas de la UMSA, y en 1991, cursaba el segundo año de Derecho. Su formación en Ciencias Políticas la motivó a participar en diversos seminarios especializados, como aquel de 1989 sobre el Origen y Desarrollo del Estado en la Formación Social Boliviana, dictado en la UMSA. Desarrolló una amplia trayectoria en la labor archivística a partir de 1961. Trabajó como Auxiliar Primero del Patronato Nacional de Reclusos, del Servicio de justicia del Ministerio de Gobierno (1959). Fue promovida a Auxiliar de la Sección Gobierno (1960) y como Oficial Segundo, desempeñándose como Secretaria de la Oficialía Mayor de Justicia (1961). El 3 de enero de ese año fue designada Jefe de Archivo, por memorándum 92-120-61, firmado por el Dr. Alcides Alvarado, Subsecretario de Gobierno, Justicia e Inmigración. En enero de 1962, “en atención a sus eficientes

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servicios”, el Dr. José Antonio Arze Murillo, Ministro del ramo, la ratifica. Participó, como muchos otros, en el Curso de Teoría Archivística y Archivos Bolivianos (1976), y cursos de computación, organizados tanto por el Ministerio del Interior, como por la Asociación Multidisciplinaria de Profesionales (1990), y en el curso de Oratoria y Liderazgo Personal, organizado por la Dirección Nacional de Juventudes. Participó en la XI Asamblea General del Instituto Panamericano de Geografía e Historia* (1977). En 1982 asistió a la II Reunión de Archivistas Exbecarios de la OEA (La Paz) y en la II Reunión de Consulta de los Archivos Bolivianos, (Cochabamba). En 1983 asistió a la III Reunión de Consulta, en la misma ciudad, y en 1993 al Seminario Nacional “Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia”. A nivel gremial, participó en la Asociación de Archivistas de Bolivia, como Vocal y Secretaria de Actas. Fue, igualmente, miembro de la Asociación de Oratoria y Liderazgo Personal (ACERBIL). Fue distinguida en tres oportunidades por sus servicios y meritos: El Movimiento Nacionalista Revolucionario le confirió el Diploma de Honor, “En mérito a sus labores administrativas” (1962); el Ministerio del Interior, Migración y Justicia le otorgó el Diploma de Honor “En merito a sus 27 años de trabajo en ese Despacho”, en un documento firmado por el Ministro Fernando Barthelemy (1987), y finalmente, el Comité Organizador de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia*, le otorgó la presea de oro y Diploma por 30 años de servicio a la sociedad (1993). Publicaciones archivísticas: “Informe de la situación del Archivo del Ministerio del Interior, Migración y Justicia” (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 54-56). Fuente: Oporto, 1982: 54-56 ; Oporto, 1993: 9-12.

VERÁSTEGUI VILELA, LUIS ARMANDO

(Potosí, 10 de octubre de 1929. † La Paz, 18 de mayo de 2006) Técnico Archivista titulado en la Escuela Nacional de Archiveros de Córdoba* (1950). Bibliotecólogo en la Carrera de Bibliotecología de la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina, donde también estudió Turismo y Hotelería. Trabajó como redactor en La Voz del Intelectual. Ejerció el oficio de archivista en el Archivo Histórico de Córdoba donde elaboró el inventario de la Sección Minas de la Provincia. Regresó al país en 1976 y se incorpora a la Biblioteca Central de la UMSA. Fue docente de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información*, desde sus inicios, invitado primero por el Dr. Roberto Juarroz, director adjunto de la OEA* dictando la cátedra de Publicaciones Periódicas y Referencia Especializada, y luego como profesor titular de Archivística y Museología (1988). Participó en el Programa de Formación Profesional de Bibliotecarios en la Escuela Interamericana de Bibliotecología. Entre 1983 y 1986 fue director de la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información, y tiene el mérito de haber logrado implementar la licenciatura, pues hasta entonces solamente formaba técnicos superiores. Fue subdirector de la Biblioteca Central de la UMSA, y por ende del Sistema Universitario de Bibliotecas de la UMSA. Participó en congresos y reuniones nacionales e internacionales de notable importancia, como la Reunión Interamericana de Bibliotecas Públicas y Archivos, realizada por la UNESCO en Caracas, Venezuela (1992), Encuentro Departamental de Bibliotecarios

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de Oruro (1983 y 1990), Congreso de Estudios Bolivianos (1985). Miembro del comité organizador de las Jornadas Paceñas de Bibliotecología (1985, 1986 y 1987). Dictó, con Fernando Arteaga, el Curso de Bibliotecología y Archivos, en la Universidad Juan Misael Saracho de Tarija (1992). Fue el primer presidente del Colegio de Bibliotecólogos (Colegio de Profesionales en Ciencias del a Información de Bolivia*), participó como miembro de la Asociación de Bibliotecarios de La Paz y de la Asociación de Bibliotecarios de Bolivia. Publicaciones archivísticas: “Estudio de un plan para la organización de Asociaciones Departamentales de Archivistas y, como fase final, la Asociación Nacional de Archivistas de Bolivia”. Relato para el punto B del temario (Segunda Reunión de Consulta sobre Archivos Bolivianos. Cochabamba: Centro Pedagógico y Cultural de Portales, Imp. Taller Gráfico del Centro Portales, julio 5-7, 1982. mimeo., p. 69-7); “Creación de los Archivos Nacionales latinoamericanos” y “Repertorio de las primeras ediciones xilográficas”. (Revista de Bibliotecología y Ciencias de la Información, 1998, (3-4): 13-16; y 40-42, respectivamente. Fuente: Arteaga, 2005: 117-118.

VERDUETA QUISBERT, JUAN MARCELO (La Paz, 1 de julio de 1980)

Estudió Ingeniería de Sistemas (Universidad Técnica de Oruro) y en la Carrera de Historia* (UMSA). Hizo el Curso de Especialización en Organización de Documentos en Archivo Central (2011); participó en el 3er Encuentro Latinoamericano de Bibliotecarios, Archivistas y Museólogos (2011). Participó en diez seminarios sobre historia y ciencias sociales. Publicó “La Carrera de Historia de antaño, luces y sombras” (Revista Historia N° 31, 2011). Ha sido socio y presidente del Club de Apoyo y Fortalecimiento Académico, en la Facultad Nacional de Ingeniería de Oruro (2001-2006). Dirigente estudiantil de las Carreras de Ingeniería de Sistemas (2004-2005) y la de Historia (2009-2011). Hizo una pasantía en el Archivo de La Paz* (2008), trabajó como Técnico Archivista en el Proyecto: Preservación de la Memoria Social. De los archivos de poder a los archivos sociales. De los movimientos sociales a la presidencia indígena, Bolivia 1992-2010 (ALP-Radio ERBOL, 2011); trabajó en el Archivo Gerencia de Gestión de Recursos Humanos de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (2011-2012). Actualmente es Asistente Administrativo en la Autoridad de Agua Potable y Saneamiento Básico. Fuente: CV.

VIAÑA ARMIJO, JOSÉ

(Potosí, 4 de junio de 1958) Historiador, arquitecto y archivista. Docente de la UMSA. Hizo la Maestría en Historias Andinas y Amazónicas. Trabajó como responsable del Archivo Central de la Contraloría General de la República. Fue el primer titulado como licenciado en Historia, con un proyecto de grado archivístico, referido al Manual de organización de archivos para organizar los Archivos de la Contraloría General de la República, dentro del Programa Especial de Titulación de Antiguos Egresados de la UMSA,PETAE. (2000).

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VIDAL, NICOLÁS (Siglo XVIII)

Archivero de las Misiones de Mojos y Chiquitos (1795), designado por el Oidor Don Antonio de Villa Urrutia, Protector de las Provincias de Mojos y Chiquitos, “para tomar razón de todos los papeles que mensualmente se reciben en la Protección, en los que se copian los oficios que dicho señor remite a los gobernadores de las referidas provincias y respectivos receptores y de las razones que se llevan sobre todos los efectos de producción y auxilios correspondientes a las provincias”. Fuente: Moreno, 1973: 521-522.

VILLAFUERTE VELÁSQUEZ, RICARDA

(Siglo XX, Provincia Bustillo, Potosí, 7 de febrero de 1959) Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA), es Técnico Medio en Aduanas de la Escuela Nacional de Aduanas. Secretaria Comercial del Instituto Pío XII (Siglo XX, Potosí), Secretariado Administrativo Empresarial del Instituto Británico (La Paz), realizó cursos en Principios de Administración, Mercadeo y Análisis Financiero y Contabilidad, Costos y Análisis Financiero en el Instituto para el Desarrollo de Empresarios Administración IDEA, Empresa Minera Yana Mallcu Ltda. (EMUSA, Pucro, Potosí). Trabajó como Secretaria en varias instituciones públicas como H. Alcaldía Municipal de El Alto, Prefectura del Departamento de La Paz, Empresa Editorial Universo. Fue Suplente de la Encargada del Centro de Documentación del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA, 2001). Colaboró en la organización de la Biblioteca del Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (2005). Trabajó en el Área de Procesos Técnicos en la Biblioteca del Instituto Nacional de Estadística; en la Organización del Archivo Central en la Administradora Boliviana de Carreteras (2008); en el Archivo del Servicio de Impuestos Nacionales (2008); en la digitalización y organización de files de personal del Archivo del Servicio de Impuestos Nacionales (2009). Archivista en Organización de Archivos en la Cámara de Despachantes de Aduana Oruro (2009). Fuente: CV.

VILLALBA, RICARDO (Siglo XIX)

Reputado como el fotógrafo más importante del siglo XIX. Fue, además, el único fotógrafo boliviano miembro de la Sociedad Francesa de Fotografía (1880). Instaló un estudio en la década del 60 de ese siglo, por el que “pasearon una gran variedad de tipos humanos indígenas de los Andes”. Su obra fotográfica fue extensa y se halla dispersa en la Biblioteca de Bremen (Alemania), la Universidad de Tulane y en la Colección George Eastman (Estados Unidos), que posee su álbum Tipos y costumbres de los Andes, obra calificada como pionera en la región. Buck hace saber que “se descubrió una extensa colección de tarjetas de visita de alrededor de 1870. Villalba tomó doscientos retratos, del formato de tarjeta de visita y muchos coloreados a mano de indígenas-arrieros, tejedores, pastores, aguateros, sirvientes, mensajeros, soldados y campesinos que vivían en La Paz y Oruro, extraordinaria colección que inmortalizó una galería de la servidumbre boliviana

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del siglo XIX, pasó a manos de la naturalista estadounidense Elizabeth Agassiz, quien luego la donó al Museo Peabody, de la universidad de Harvard”. Fuente: Mariaca, sf.; Buck, 1996, 1 (6): 37-39.

VILLALOBOS, FRANCISCO DE Escribano de Cabildo y Público de los primeros años de la ciudad de La Paz. Tuvo a su cargo el traslado de las actuaciones asentadas en el primer libro de Cabildo -constaba de 209 folios, de 42 cm por 30 cm- a uno nuevo, operación realizada por un escribiente, bajo la supervisión del escribano de Cabildo, labor que tomó 11 meses. Al respecto Villalobos informó: “Y yo (…) fiz sacar y trasladar todo lo susodicho en este libro de otro pequeño según y como en él estaba y doy fe que va bien y verdaderamente sacado y corregido según estaba en el otro libro. Y parece que pasó todo lo contenido en este libro su merced Pedro de Azebedo, escribano que se nombra de su majestad y ante Francisco de Cámara* así mismo que se nombra de su majestad y ante Gaspar de Sotomayor, escribano que parece fue nombrado por el Cabildo desta dicha ciudad y ante Melchor de Espinoza escribano que se nombra de su majestad”. Fuente: Feyles, 1965: I, 91; Oporto, 2006: 103.

VILLALOBOS NIETO, ROSENDO

(La Paz, 2 de marzo de 1859. † La Paz, 31 de agosto de 1940) Abogado (UMSA). Escritor, poeta, periodista, profesor. Diplomático, adjunto a la Legación de Bolivia en el Perú, y parlamentario. Fue diputado (1904-1907), llegando a la presidencia de esa Cámara en 1906 y 1911. Oficial mayor del Ministerio de Colonias (1902). Prefecto de La Paz y director de Correos y Telégrafos (19121917). Presidente de la Academia Boliviana de la Lengua. Director de la Biblioteca Municipal de La Paz (1877), que organizó con Claudio Pinilla y José Vicente Ochoa. En 1908 fue encomendado para revisar los fondos del Archivo General de Indias* en Sevilla, el Archivo de Simancas, de la Real Academia de Historia y del Depósito Hidrográfico en Madrid, para “obtener documentos y mapas que apoyen los derechos de Bolivia en el litigio de fronteras con el Paraguay”. Socio fundador de la Academia Boliviana de la Historia (1928). Miembro de varias sociedades académicas y culturales. Dada su limitación en el campo histórico y su desconocimiento de la paleografía, se limitó a levantar un inventario de los documentos existentes en los Archivos de Indias en Sevilla y Simancas, con 316 entradas (25 sin fecha, 70 del siglo XVI, 62 del XVII, 132 del XVIII, y 21 del XIX) y más de 21 mapas (siglos XVI al XVIII), catálogo publicado por M.V. Ballivián* en el Boletín de la Sociedad Geográfica de La Paz. También logró la copia de 86 documentos referidos a descubrimientos, entradas y reducciones de Mojos y el Chaco; Fundación de ciudades y gobernaciones (La Plata, Santa Cruz, La Paz, Oruro, Tucumán), Jurisdicción de Charcas y el Virreinato de La Plata; Alzamientos chiriguanos, invasiones portuguesas y descripción del Río Mamoré. Publicaciones archivísticas: “Documentos para la historia geográfica de Bolivia”. Prólogo de M. V. Ballivián (Boletín de la Sociedad Geográfica de La Paz, 1912, Nº 36-38). Fuente: Alarcón, 1925: 416-417; Costa Arduz, 2005: 214-215, 271; Siles Guevara, 1973a: 2.

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VILLA QUISBERT, ÁNGELA (La Paz, 4 de junio de 1971)

Es técnico auxiliar contable en el Instituto Arrieta, cursa el tercer año de la Carrera de Contaduría Pública y ha egresado de la de Bibliotecología y Ciencias de la Información* de la UMSA, que le otorgó el Diploma a la Excelencia Académica (2006) y su Carrera hizo lo propio (2007). Desde 2004 participó en actividades relacionadas al área de la información, entre ellas El Museo como Factor de Desarrollo e Identidad Cultural (2004), Jornadas Paceñas de Bibliotecología y Archivística (2005), Descripción Archivística (2005), Ética profesional (2006), Conservación y Restauración de Documentos (2007), IV Congreso Internacional de Bibliotecología (2007), Primer Encuentro Internacional de Información para el Cambio Ciudadano (2008). Trabajó como encuestadora, transcriptora, crítico y codificadora de encuestas del Ministerio de Educación y Desarrollo Humano, entre 1993 y 2004, con breves desempeños como Encargada de registro de personal docente y administrativo (1995), auxiliar de oficina (1995) y profesora de grado (1996-1997). De allí pasó a la GTZ a realizar transcripción de hojas de costo de los años 2004 al 2005. Sus prácticas de archivo las hizo en la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional*, trabajando en el Censo Guía de Archivos Mineros (2005) y en la transcripción de la legislación de 1888, 1920 y 1937 (2006). Pasó a realizar pasantías en la Organización Panamericana de Salud (2007) y como Auxiliar de Archivo del Departamento de Investigación y Postgrado e Interacción Social de la UMSA (2007-2008). Desde 2008 trabaja como Técnico Documentalista “A” en el Archivo Central de la Gerencia Regional La Paz (Aduana Nacional). Fuente: CV.

VILLEGAS ANTEZANA, REYNALDO Sargento del Ejército. Archivista militar, responsable del Archivo de Personal del Ejército, en el que implementó el Área de Microfilmación en 1977. En la II Reunión de Archivistas de La Paz de 1982, presentó un informe del Archivo, organizado por un sistema alfanumérico, actualizado a 31 de diciembre de cada año, con documentos activos, inactivos y de valor permanente. Menciona que mantenía estrecha relación con “el Archivo del Comando en Jefe, conocido como Departamento Histórico y el Archivo General del Ministerio de Defensa Nacional. Publicaciones archivísticas: “Breve informe de las actividades de la Sección Archivo del Departamento Personal del Ejército” (Oporto Ordóñez, Luis: Problemática de los archivos de La Paz (Bolivia), La Paz, AAEOEA, 1982: 47-48). Fuente: Oporto, 1982: 47-48.

VILLEGAS BORGES, IRIS AMÉRICA (Villazón, Potosí, 16 de febrero de 1971)

Licenciada en Historia (UMSA), con Maestría y Doctorado en Ciencia Política en la Universidad Internacional de Andalucía y Universidad de Salamaca (20052007). Estudió Turismo en la UMSA y Crítica y Curaduría de Arte (2007), hizo el

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Diplomado en Educación Superior y en Historia del Arte y Filosofía, UMSA (2001). Desempeñó la docencia en la Universidad Nuestra Señora de La Paz (1998-2005). Fue asesora de la Ministra de Educación y Culturas, Magdalena Cajías de la Vega (2006-2007); catedrática del Diplomado en Gestión de la Documentación y Archivo (Universidad Loyola, 2005) y profesora del curso pre-facultativo de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UMSA, 2004). Como consultora de Servicios de Información Consultores Zelaya-Salinas, implementó un “Sistema Piloto de Gestión Documental”, para el Consejo de la Judicatura en Sucre (2002); levantó un diagnóstico documental y capacitó en oficinas del Defensor del Pueblo en Potosí, El Alto, Santa Cruz, Cochabamba y el Chapare. Dirigió el Proyecto del Archivo Histórico de la Provincia Sud Chichas, para el Gobierno Municipal, con el financiamiento de la Universidad de Harvard (2004), que fue su proyecto de grado en Historia con el que se tituló en el Plan Excepcional de Titulación de Antiguos Egresados (2003), cuyo Catálogo está publicado en sitio Web: http:://sudchichas.compassolutions. com; Supervisora del Censo-Guía de Archivos (Tarija y Cochabamba), por encargo de la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso*, con auspicio de la Cooperación Canadiense (2003). En coordinación con BolNet, trabajó en la Gaceta Oficial de Bolivia y fue responsable de la entrega de los documentos históricos al Archivo y Bibliotecas Nacionales de Bolivia* (2001). Con la Cooperación Técnica Alemana (GTZ) desarrolló proyectos relacionados al Sistema de Organización Administrativa y Archivos (proyecto de Modernización de la Administración Pública, PROMAP) en el Poder Ejecutivo y Legislativo (2001); organizó el Archivo del Ex-Ministerio de Planeamiento y Coordinación (proyecto de Desarrollo Organizacional, PRODO); y el Archivo del Ministerio de Justicia (1996-1997). Con la empresa Archivos de Bolivia, organizó los Archivos de la Administración Autónoma de Almacenes Aduaneros (2005, 2007). Fue auxiliar de archivo en el Archivo de SAGIC* (1995); Archivo de La Paz* (1994) y Archivo de la Cancillería de la República (1992). Trabajó para el Ministerio de Planificación para el Desarrollo en la catalogación de la documentación del proceso de capitalización y privatización (2006). Fue encargada del ordenamiento y el funcionamiento de la Biblioteca de la Superintendencia de Telecomunicaciones (1998). En el área social, fue consultora de la Asociación de Productos Naturales San Agustín (PRONASA) (2001-2002); y Asociación Nacional de Productores de Quinua, ANAPQUI (1999-2000). Participó en el IV Encuentro Nacional de Sociedades Geográficas e Históricas de Bolivia, con la disertación “El Archivo Histórico de la Provincia Sud Chichas” (2003); en el Seminario de Archivos, dictado por la Mtra. María Elena Porras, Directora del Archivo Histórico de la Cancillería del Ecuador (2002) y en el Seminario Nacional de Legislación, Políticas y Estrategias del Patrimonio Cultural de Bolivia (1993). Formó parte del Comité de Selección de Personajes del Siglo XX, patrocinado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) (2000); del comité editorial de “La Guerra del Chaco” y “La Revolución de 1952”, publicados por la Coordinadora de Historia y La Razón. Encargada de la Memoria Anual 1998 y la investigación de la Historia de las Telecomunicaciones para la Superintendencia de Telecomunicaciones (SITTEL) (1999). En 2012 pasó a trabajar como jefe de gabinete del Despacho del Ministro de Culturas, Pablo Groux. Publicaciones archivísticas: Archivos de Oruro, Tarija y Cochabamba. Anteproyecto de la Ley del Sistema Nacional de Archivos, bajo la dirección de L. Oporto Ordóñez (La Paz, Biblioteca

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y Archivo del Congreso. La Paz, 2004); “El Archivo Histórico de la Provincia Sud Chichas” (Memorias del IV Encuentro Nacional de Sociedades de Estudios Geográficos e Históricos de Bolivia. Santa Cruz de la Sierra, Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz, 2004). Fuente: CV.

VILLEGAS VARGAS, MARIA RENEE (Potosí, 9 de julio de 1954)

Estudió la carrera Literatura (UMSA). En su juventud se identificó con movimientos progresistas. Fundó y formó parte de la Asociación de Archivistas del Poder Ejecutivo*.Trabaja con temas de archivo desde hace 19 años. Fue documentalista del Fondo Productivo Social (2009-2011) y pasó luego al Archivo de la Autoridad de Transportes y Telecomunicaciones (2012). Fuente: CV.

VINCENTI, LEOPOLDO BENEDETTO (Roma, Italia, 1815. † 1914)

Estudió en el conservatorio de París. Integró la expedición del almirante Abel A. Petit-Thouars, en su segundo viaje alrededor del mundo. Desembarcó en Valparaíso y trabajó por varios años como director de bandas militares y maestro de música de escuelas en Chile. Se casó con la dama boliviana Carmen Corina Daza, hija del patriota Melchor Daza, con el que tuvo dos hijos, Gregorio e Isaac. Es autor de Misa de Gloria a tres voces y Gran Galopa. Se sabe que el 24 de septiembre de 1847 dirigió el Elisir d’amore de Donizetti en el Teatro Municipal de La Paz. Años después regresó a su país donde falleció. La partitura original del Himno Nacional de Bolivia, es uno de los documentos históricos más emblemáticos del Estado que custodia la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional*, en las bóvedas del edificio antiguo del Banco Central de Bolivia, transferido para uso a la Vicepresidencia del Estado en 1991. El imaginario popular tejió una serie de leyendas, afirmando por ejemplo que la belleza de esta canción de música melodiosa y letra cautivante es resultado de una competencia desatada entre el músico y el poeta, rendidos ante el amor de una mujer, quien inspiró los versos y la música. Se dice también que es uno de los himnos más bellos, junto al del Perú y la Marsellesa francesa. Otros mencionan que el autor vendió a Bolivia una Canción Nacional que compuso para otros países; finalmente que el título original fue Canción Patriótica. La leyenda se erigió en verdad suprema por mucho tiempo. Es una Marcha Militar, compuesta en cuatro estrofas y un coro, que resalta la rebeldía (primera, segunda, tercera y cuarta estrofas; Coro), destaca la riqueza del territorio (segunda y tercera) y expresa gratitud a los héroes de la guerra de la independencia (primera, segunda y tercera). Es el único himno nacional de autoría de Vincenti, pues la leyenda generalizada que éste trabajó para otros países de Sudamérica componiendo himnos nacionales, cae por su propio peso pues los autores de esas marchas son otros artistas. La historia de Vincenti es épica. En 1845 el Gral. José Ballivián*, empeñado en reorganizar el ejército, prestó atención a las bandas de música, pues las consideraba fundamentales para implantar disciplina en las tropas. Con ese fin ordenó al Gral. Agustín Morales contratar al músico

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italiano, como Director de Bandas del Ejército. En poco tiempo el diligente director -que llegó a La Paz en septiembre de 1845- reorganizó las bandas de los batallones 5º, 6º y 8º de Infantería, “a las que halló tocando de oído” y las “transformó en orquestas para ejecutar sinfonías con instrumentos y temas modernos”. En el ínterin Ballivián preparaba la conmemoración del cuarto aniversario de la célebre Batalla de Ingavi en la que el 18 de noviembre de 1841, el presidente del Perú Agustín Gamarra, al mando de su ejército, perdió la batalla y la vida. Ballivián decidió obsequiar ese día un Himno Patriótico a la Nación, reformar el Escudo Nacional y concluir la construcción del Teatro Municipal. Encomendó a Vincenti componer la canción, en dos escasos meses para cumplir esa tarea. “Su trabajo fue agotador, (y) muchas veces se acostaba vestido para ir de madrugada a los cuarteles. (…) El exigente director rechazaba un texto y otro, fue entonces que el Dr. J.I. Sanjinés*, abogado y poeta, le presentó los inspirados versos”. Porfirio Miranda sostuvo que dos mujeres potosinas y el Cnl. Melchor Daza, inspiraron o influyeron en la creación del Himno Nacional. Una de ellas fue precisamente la dama potosina Carmen Corina Daza, con quien luego se casaría en la ciudad de Sucre. El Himno se estrenó el 18 de noviembre de 1845 en la Plaza Murillo. En un solemne Te-Deum frente a palacio de Gobierno, el Maestro dirigió tres bandas militares con 90 instrumentos, interpretando primero la obertura Fra Diavolo de Auber y el Himno Patriótico luego, “cantado por doce aficionados” y que luego “recorrió las calles de La Paz, arrancando aplausos de fervor cívico de la gente”. Esa noche asistieron al Teatro Municipal el Presidente Ballivián y su gabinete; el Prefecto y el Alcalde, junto a lo más selecto de la sociedad paceña, quienes escucharon la interpretación del Himno Patriótico, conmemorando el triunfo de las armas bolivianas en Ingavi. “Los primeros versos para el maestro fueron sublimes y según expresó en sus cartas familiares, tienen una belleza que eriza los cabellos y enciende fuego en las venas”. El Himno Patriótico Nacional fue consagrado como Himno de Bolivia durante el gobierno del Gral. M. Isidoro Belzu, por Orden del Ministerio de Instrucción Pública de 27 de marzo de 1852, por el cual se envió “diez ejemplares de un Himno al Ser Supremo y otro a Bolivia, para que se distribuyan en las Escuelas de varones y niñas, a fin de que abran sus ejercicios escolares, cantando el primero y cierren, cantando el segundo”. En noviembre de 1895, el Senado Nacional concedió un premio de cinco mil bolivianos a Vincenti y cuatro mil a Sanjinés. El “Día del Himno Nacional” fue instituido por Resolución Biministerial de los Ministerios de Defensa Nacional y Educación, Cultura y Deportes en 1991, por la cual cada 18 de noviembre se le rinde homenaje, a las 12:00 del día, a nivel nacional. Su letra fue traducida al aymara, quechua y mojeño. La portada del manuscrito original lleva el título: A la noble y heroica nación boliviana. Himno Patriótico Nacional, compuesto por L. Benedicto Vincenti. (Nótese la castellanización del nombre). Antecede a la partitura el epígrafe: Himno Patriótico Nacional de Bolivia. Autógrafo dedicado a su amadísimo hijo Isaac, por el autor L. Benedetto Vincenti. El original autógrafo permaneció en poder de su hijo Isaac, quien pidió una certificación en 1895 a Juan Roncal, Marcelino Hidalgo y Francisco Suárez. Fue entregado al gobierno que la derivó a la Cámara de Senadores para la custodia oficial, en la actual Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Fuente: Miranda, 1976; Oporto, 2011f.

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VINCENTI LEIGUE, CLAUDIA PATRICIA (Santísima Trinidad, Beni, 15 de julio de 1980)

Egresada de la Carrera de Derecho y Ciencias Jurídicas y Políticas de la Universidad del Valle (Beni). Se inició en la Archivística en el Curso Taller “Principios Básicos, Normas Generales y Administración de Archivos” dictado por el Proyecto de Apoyo a la Modernización de la Administración Pública PROMAP-GTZ (2002), dictado por M. Plaza*. Participó como Facilitadora de cursos para funcionarios de la Prefectura, el Servicio Departamental de Educación del Beni, la Honorable Alcaldía Municipal de Trinidad, la Universidad Autónoma del Beni “José Ballivián” y la Normal Integrada “Clara Parada de Pinto”, impartido por la Prefectura del Beni y el Programa de Apoyo a la Gestión Pública Descentralizada y Lucha Contra la Pobreza “PADEP-GTZ”. Fue parte activa en la creación del Archivo y Biblioteca Prefecturales, ejerciendo el cargo de Jefe de la Memoria Institucional de la Prefectura, desde 2002 hasta 2010. Como Representante del Archivo Prefectural del Beni, participó en varios eventos como el “Primer Congreso Sudamericano de Historia” (2003), oportunidad en la que expuso la ponencia “Recuperación del Patrimonio Documental del Beni: Creación de la Memoria Institucional de la Prefectura del Beni”, “IV Congreso de Estudios Bolivianos” (2006); “Primera Reunión sobre Análisis de Anteproyectos de la Ley del Sistema Nacional de Archivos de Bolivia” (2006); “Congreso Nacional de Archivos: Tratamiento de la Ley del Sistema Nacional de Archivos” (2007). En otros cursos, mencionamos la “Ley 1178” (2003), Curso Taller “Derechos Humanos y Servidores Públicos” (2003), “Paleografía Hispanoamericana (Siglos XVI – XVIII)”, dictado por el Dr. José Miguel López Villalba* (2006), “Catalogación, Clasificación e Indización Bibliográfica”, impartido por el Lic. H. Morales Bellido* (2008), “Software Especializado en Bibliotecas para Automatización”, dictado por Armando Blacutt Villegas (2008), “Taller Básico de Conservación Preventiva y Restauración para Archivos y Bibliotecas” (2008). Fuente: CV.

VIRREIRA PACIERI, ALBERTO (Oruro, 14 de mayo de 1902)

Abogado y diplomático. Estudió el bachillerato en el Colegio Nacional Ayacucho de La Paz. Siguió la carrera de Derecho en la UMSA (1929). Ingresó al Ateneo de la Juventud y fue acogido en el Círculo de Bellas Artes, donde fue elegido Secretario (1924). Ingresó en la carrera diplomática, como Oficial Segundo del Ministerio de Relaciones Exteriores hasta alcanzar el cargo de jefe del Servicio Diplomático. Fue Auxiliar de Propaganda y Culto, Auxiliar de Archivo, encargado de la Sección de Propaganda, adscrito a la Sección de Protocolo, Jefe de la Clave Reservada, Subsecretario de Relaciones Exteriores. Desempeñó funciones en Legaciones de Bolivia en Europa y América. Fuente: Lecca, 1929: 342-343.

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VIRREIRA SÁNCHEZ, EFRAÍN Abogado, bibliotecario y archivista. Trabajó en la organización del Archivo de la Corte Superior del Distrito de Cochabamba. Es autor del Manual de Biblioteconomía, que tuvo el mérito de ser el primero en publicarse en Bolivia por un bibliotecario boliviano. Fue presidente de la Asociación Boliviana de Bibliotecarios hasta 1982.

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W WALPOTH, FRAY HILDEBERTO (CONRADO)

(Saint Ulrich, Austria, 21 de octubre de 1901. † Ascensión de Guarayos, Santa Cruz) Religioso de la Orden Franciscana. Se incorporó al Colegio de Tarata el 5 de abril de 1925. Fue destinado a Guarayos en 1930, a la misión de Urubichá, y como conversor en Salvatierra, población a la que se ausentaba con frecuencia. Entre 1940 y 1950 registró fotográficamente los poblados “en la fase inmediatamente anterior a la secularización, de importancia para la reconstrucción del espacio y la memoria de los poblados guarayos”, pero sobre todo “fotos dedicadas a Salvatierra”. En casi la totalidad de las 39 fotografías que publicó P. García Jordán*, Walpoth observa “un interés prioritario por mostrar, cual etnógrafo, la población Sirionó en su ‘estado natural’ y la rapidez de cambios conseguidos por los franciscanos entre una población a la que ‘redujeron’, en torno a 1938”. Su interés se centra en grupos familiares, frente a las cabañas o en el bosque, “expectantes” algunos, apáticos otros, ante la cámara; “tensando el arco como disponiéndose para la caza, una madre amamantando a su hijo”, etc. Fuente: García, 2009: 189-191.

WASZKIS, HELMUT (Alemán)

Nació en Alemania, pero se considera “americano”. Afirma con convicción que conoce y ama Bolivia. Comercializador y rescatador de minerales crudos, cuya actividad se extiende a empresarios mineros y casas comercializadoras de minerales del Perú, Bolivia y Brasil. Apasionado investigador, se ha especializado en Historia de la Minería Hispanoamericana. Ha publicado Mining in the Americas (Cambridge, Woodhead Publishing, 1993), en el que analiza la historia de la minería desde la época colonial hasta el siglo XX. En 1987 publicó Philipp Brothers: the history of a trading giant, 1901-1985; y el 2003 The Story of Metal Trading, Metal Traders, Ore and Metal Merchants, from Early Times to today. Attempting to write a history of an unusual business, en coautoría con Peter M. Waszkis. También es autor de la biografía del Dr. Moritz Hochschild 1881-1965. The man and his companies. A german Jewish mining entrepreneur in South America. (Frankfurt, Vervuert Iberoamericana, 2001, 246 p.).

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Moritz (Mauricio) Hochschild* fue un importante empresario minero judío-alemán que trabajó en Bolivia en la primera mitad del siglo XX. Fue uno de los “Barones del Estaño de Bolivia”, quien hizo cuantiosa fortuna empezando como comerciante de metal de rescate, hasta rivalizar con otros empresarios de la época. Sus propiedades industriales y sus archivos, junto a los de S. I. Patiño* y C.V. Aramayo*, fueron expropiados en 1952. Con ese propósito H. Waszkis recolectó documentación archivística acerca de la empresa minera de Hochschild, correspondencia personal de la familia del magnate, publicaciones impresas, recortes de prensa, fotografías y la propia correspondencia que generó en su trabajo de investigación, formando con ello la Colección Moritz (Mauricio) Hochschild* que la donó al Centro para la Historia Judía del Instituto “Leo Baeck” en Nueva York (EE.UU.) el 2002. Realizó muchas investigaciones en Potosí, La Paz y Sucre, y ofreció treinta conferencias en el Instituto de Minas de Potosí. Fuente: Waszkis, 2001; Lang, sf; Comunicación personal del 11.6.10)

WICKY, JEAN CLAUDE (Suiza, 1946)

Fotógrafo. Sus fotografías son ampliamente difundidas en libros, revistas, periódicos y en exposiciones. Fue empleado de oficina y jugador de fútbol. En un viaje que dura más de cinco años recorre el mundo, “para poner alas a sus sueños”. Durante su estadía en Japón (1972-1973) es cuando inicia su vocación de fotógrafo. Llegó a Bolivia en 1974, como “fotógrafo mochilero, al altiplano”; circunstancialmente pasó un día en una mina trabajada por cooperativistas y salió de ella “tan conmovido, tan trastornado” que decidió hacer un trabajo de fotografía del mundo minero boliviano. Resultado de su visita a otros lugares de América, es su primera exposición “A través de la América India”, en 1978, en Moutier (comuna suiza del cantón de Berna), con la que se dará a conocer en el mundo de la fotografía. En 1982 realiza un reportaje sobre los Hieleros del Chimborazo en Ecuador para la revista GEO de España. La Fundación Suiza para la Fotografía, auspicia sus exposiciones, como la de París en 1985 (“La fotografía suiza desde sus orígenes hasta nuestros días”, en la que participa con 40 de sus fotografías adquiridas por la Fundación). Entre otras exposiciones, en 1997 participa en la exposición del museo del Elysée, Lausane, Suiza (“Las colecciones de fotografías de la Confederación Suiza”), habiendo sido destacado su trabajo en 1992 en el libro La fotografía en Suiza de 1840 a nuestros días. En 1984 está otra vez en Bolivia, con diferentes estancias exploró 30 centros mineros hasta el 2001; época de la relocalización y del empoderamiento de las cooperativas mineras, donde “muchos trabajan de manera individual y con ellos la mina se hace más peligrosa por los accidentes. Los gases, los derrumbes; se convierten en los vestidos fúnebres con los cuales se desquicia la muerte”. Durante dos años no tomó una sola fotografía, por razones técnicas y por la desconfianza natural de los mineros. Se dotó de una batería en seco de cinco kilos y un foco de 250 watts; con los que entraba a la mina, cada día y salía más sucio que los propios mineros, provocando hilaridad y admiración en los curtidos mineros. Su tarea en interior mina no fue sencilla, pues tuvo que arrastrarse 20 o 30 metros por pasadizos hasta el agotamiento, para “rendir, retratar ese ambiente de oscuridad y de soledad”. Era temerario: escaló chimeneas verticales en roca

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madre a través de escaleras metálicas (allí tomó su célebre fotografía en Santa Rosa, Mina Argentina, Viloco-La Paz) o de madera, poco seguras. Es el único fotógrafo que compartió con mineros cooperativistas “sus vidas, sus esperanzas, sus alegrías, sus penas, sus rebeldías, sus luchas, hasta sus terribles alcoholes”; logró “retratar su mundo, pero también su dignidad, su nobleza y su orgullo”, para remarcar que “en ese sentido no fotografío lo que se ve sino lo que se siente”. Metafóricamente afirmó que si bien ‘fotografiar es pintar con la luz’, “yo he hecho lo contrario. Tomé fotos en las tinieblas y transporté este mundo de obscuridades a la luz para que la gente que vive en la luz tome conciencia de esa realidad”. En esas miradas que capturó “se concentra el trabajo sacrificado; pero también el peso de la historia y de la minería de Bolivia”. Llegó a la conclusión “que hay más palabras en una mirada que en cualquier voz”. Como resultado de su impresionante experiencia, en el que se le fue la vida misma, publicó un Álbum, libro que no está dedicado al mundo académico, sino a los mineros, por lo que obsequió su edición a las escuelas de las minas. Filmó luego una película a la que tituló “Todos los días, la noche”, que retrata la labor minera, realizada esencialmente en la oscuridad: el minero entra a la mina de madrugada y sale de ella cuando es de noche; llega a su hogar, come frugalmente y descansa su cuerpo en un camastro. Su vida es la noche misma. Su película se convirtió en un espejo de una realidad que algunos quieren ocultar. “Jean Claude Wicky hizo de las imágenes de los mineros bolivianos un arte. Retrató al minero, a la palliri, al joven o niño de las minas, pero con ese toquecito que hace llegar hasta el alma”. Como fiel testimonio de su experiencia sobre la vida minera, la serie de fotografías (“Campamentos”, “Interior mina”, “Palliris”, “El Tío”) fueron expuestas en el Museo Nacional de Arte en 1998, revelando una realidad a través de las imágenes de los trabajadores en aquellos oscuros y lúgubres socavones, cuya sensación para Wicky fue “fotografiar el trabajo de los mineros con la mayor exactitud posible y traducir el ambiente de oscuridad y soledad de la mina”, que impresionan ante la mirada del espectador, para activar y recuperar la memoria histórica. Fuente: Bocamina, 2011:6; Soliz, 1998: 8-9b; Vargas, 1998:10b.

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Y Yampasi Machaca, MarÍa (La Paz, 16 de agosto de 1972)

Licenciada en Informática-mención ingeniería de sistemas. Auxiliar de técnicas de oficina (CETAL); Auxiliar contable (Instituto Boliviano de aprendizaje IBA-Don Bosco). Entre los Cursos aprobados, están el de Educación en Salud (Centro de Investigación, Educación y Servicios-CIES); Internet (Instituto de Investigaciones en Informática, Carrera de Informática UMSA); Software de diagnóstico (Fundación INFOCAL); Diseño de páginas WEB (Facultad de Ingeniería-Carrera de Ingeniería Electrónica); Java-base de datos (Facultad de Ciencias Puras y Naturales-Carrera de Informática); Formulación del presupuesto SIGMA (Gestión Pública & Empresarial-Consulting Group). Seminarios: Función de las AFP’S en las instituciones (dictado por Gerentes, Ejecutivos de los Fondos y Catedráticos de la UMSA); Modelos y Métodos matemáticos-estadísticos aplicados a la actividad Bibliotecaria y de la Información (Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación-Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información*); Convergencia en Tecnologías WEB (Facultad de Ciencias Puras y Naturales-Postgrado en Informática); Sistemas de Administración de Bienes y Servicios de la ley SAFCO (Universidad Mayor de San Andrés-Centro de Estudiantes Campesinos de la UMSA). Asistió al Congreso Nacional de Ciencias de la Computación (Facultad de Ciencias Puras y Naturales-Carrera de Informática). En su experiencia laboral fue Facilitadora y Capacitadora de Adultos (Misión Sueca Libre en Bolivia Alfalit-boliviano, 1996-1997); y de Secretaria en el Policlínico-El Alto de la Caja Nacional de Salud (1997-1998), en Artes Gráficas Alarcón (1999-2001) y en la Confederación Nacional de Ex combatientes de la Guerra del Chaco (2003 a la fecha). Se desempeña como Responsable de la Biblioteca y Archivo de la Guerra del Chaco (“Casa de los Héroes Nacionales de la Guerra del Chaco”, La Paz), bajo la administración de la Armada Boliviana-Escuela Marítima con el Cargo de Profesional V (desde diciembre 2010). Fuente: CV.

YELINCIC, LEOPOLDO

(Uncía, Potosí, 13 de septiembre de 1927. † La Paz, 5 de octubre de 2001) Hijo de un inmigrante yugoslavo que llegó a las minas de Uncía al promediar 1916 a fin de instalar un negocio de Almacenes Generales en sociedad con Jorge Sapunar.

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A la muerte de su padre fue internado en el Colegio de Artes y Oficios “Don Bosco” en La Paz. Estudió fotografía por correspondencia, haciendo una carrera profesional primero en el periódico Los Tiempos de Cochabamba, luego en el Servicio de Información de los Estados Unidos (USIS) en La Paz, desde 1958; y más tarde en Foto Linares, durante 20 años. Con F. Alborta* instaló “Foto Capri Color”, que de acuerdo a datos de su viuda, L. Yelincic fue el primer fotógrafo a colores en La Paz. Militó en su juventud en Falange Socialista Boliviana, partido político fundado por Oscar Únzaga de la Vega (1916-1959). Por ello fue desterrado a Curaguara de Carangas (Oruro) entre 1953 y 1957. A él se le atribuye la carismática fotografía de Unzaga de la Vega, que recorrió el mundo. Los últimos años de su existencia trabajó en el periódico católico Presencia. Como resultado de su trabajo ha formado una colección fotográfica que fue entregada a la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional*. Abarca desde los años 50 a los 60 y excepcionalmente posteriores. Está conformada por un total de 619 unidades o piezas fotográficas, tanto en color como blanco y negro, y algunas diapositivas. Cubre amplia variedad temática, pero tiene como referencia las actividades del Servicio de Información de los Estados Unidos en Bolivia, tales como las obras de la Alianza para el Progreso y el Servicio Interamericano Agrícola, por lo que viene a ser un archivo ‘institucional’ de USIS, lo que denota su singular importancia, ya que su trabajo le permitió desplazarse por el territorio nacional. Entre sus registros tenemos líderes políticos norteamericanos, como Richard Nixon, Dwight Eisenhower y Dean Rusk, en sus visitas oficiales a Bolivia. Líderes y políticos bolivianos como H. Siles Zuazo*, Juan Lechín Oquendo, el Gral. R. Barrientos Ortuño*, el Dr. V. Paz*, el líder falangista Oscar Unzaga de la Vega, y personajes como Alfonso Prudencio Claure ‘Paulovich’, Raúl Salmón de la Barra, Ana María Campero, Erika Brockman, muy jóvenes. Retrata también las minas de Bolivia y paisajes de Cochabamba y Santa Cruz. Fuente: Oporto, 2003a: 24-26.

YUTU, LUIS Y FRANCISCO

Antiguo quipucamayo. Sus Archivos de quipus, junto a los de Juan Huallpa y Diego Roca, fueron utilizados por Blas Valera como cita para atestiguar que los Incas no adoraban al demonio, como constan en “los quipos de Yutu, Ingas, los de Huallpa Inga y la común tradición” para afirmar que “los primeros pobladores del Perú no adoraron ídolos ni estatuas sino tan sólo las luminarias del cielo y las estrellas”. Fuente: Porras, 1953: 128.

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Z ZALLES CUESTAS, SOLANGE LEONOR (La Paz, 25 de septiembre de 1981)

Licenciada en Historia (UMSA), Máster de Historia en el Mundo Hispánico, realizado con beca de la Fundación Carolina y la Fundación MAPFRE, en la Universidad Jaume I, Castellón de la Plana, España (2009-2011). Hizo el Diplomado de Educación Superior en la Universidad Amazónica de Pando (2011). Es Docente de la UMSFX de Chuquisaca, desde 2010. Tiene experiencia en investigación histórica desde 2004 (Proyecto: “El proceso dinámico de las relaciones interétnicas en el lago Poopo y el río Desaguadero”, Instituto de Estudios Bolivianos), hasta 2008 (“La Fiesta del Poder el poder de la fiesta” que forma parte del proyecto “La fiesta popular”, Instituto de Estudios Bolivianos). Es autora de Los Caminos del poder local en Yungas: coca, vialidad y fiscalidad (Sucre: Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, 2011), que fue su tesis de Licenciatura en Historia; el resto de su producción intelectual que versa sobre temas de historia se halla publicado en revistas y anuarios nacionales. Asistió a varios congresos y seminarios sobre Historia y Ciencias Sociales, nacionales e internacionales, desde el 2001. Participó en el Curso Taller de Organización de Sistemas de Archivo Institucional, organizado por la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (2003), el Primer Curso de Digitalización de Documentos, auspiciado por el Archivo de La Paz* y el Museo Nacional de Etnografía y Folklore* (2008), y el Curso sobre Investigación Genealógica y Heráldica Indígena, organizado por el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia* (2010). Se desempeñó como Consultora y Auxiliar del Archivo de la Contraloría General de la República, tanto en La Paz, como en la Gerencia Departamental de Chuquisaca (2001-2002), Radio Latinísima 96.5 (2001), Departamento de Documentación Aduanera (2000–2003), fue Encuestadora del Censo Guía de Archivos de la ciudad de Cochabamba, para la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (2003), Consultora y Archivista en la Agencia de Cooperación Alemana GTZ– PADEP (2004-2005, 2008), y Archivista en el Proyecto de Digitalización y Microfilmación de Padrones del siglo XIX del Archivo de La Paz (2008). Fuente: CV.

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ZAMBRANA CASCALES, ERNESTO

(Santa Cruz de la Sierra, 25 de octubre de 1953. † Santa Cruz de la Sierra, 18 de noviembre de 2007) Estudió la primaria y secundaria en la Escuela Fiscal “Basilio de Cuéllar” y en el Colegio Nacional “Florida”, donde obtuvo el bachillerato. Estudió en la Escuela Nacional de Archiveros de la Universidad Nacional de Córdoba* (Argentina). En sus 54 años de existencia, desarrolló notable trayectoria signada por tres facetas, pues fue archivero, historiador y dirigente cívico de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra (tierra a la que amó entrañablemente, brindándole su conocimiento y experiencia). Su maestro y mentor, tanto en la historiografía como en la archivística fue H. Sanabria*, de quien se consideraba “heredero intelectual”. Fue también destacado discípulo del célebre archivero argentino A. Tanodi*, quien junto a C. Rodríguez* prestó su incondicional apoyo a Santa Cruz, para impulsar el desarrollo archivístico a inicios de los 80. Fue encargado de Archivo de la Cooperativa de Teléfonos Automáticos de Santa Cruz (COTAS), ocasión en la que organizó el primer Museo Tecnológico e Histórico en su género en el país. Trabajó como encargado del Archivo General, subdirector de la Biblioteca Central y Secretario General del Instituto Politécnico, de la Universidad Autónoma “Gabriel René Moreno”. En 1983 A. Tanodi encabezó una misión técnica del Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos* (CIDA), con el propósito de levantar un diagnóstico archivístico de Santa Cruz de la Sierra con el apoyo de la Organización de Estados Americanos* (OEA). Gracias a las gestiones de Luis Roca García (representante alterno de Bolivia en la OEA), un año más tarde Ernesto Zambrana fue enviado como becario a la Escuela de Archiveros de la Universidad de Córdoba. En 1985, una segunda misión argentina conformada por Erminda Bobone, B. Tanodi* y E. García, además de capacitar al personal de archivo, cuantificó el volumen documental existente en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra. En 1987 E. Zambrana participó en la fundación y organización del Archivo Histórico Departamental “Hnos. Vázquez Machicado”*, repositorio que dirigió por 12 años. Participó en 1999 en el Curso Internacional Diplomática del Documento Indiano (La Paz), a cargo del Dr. J.M. López* (Universidad Nacional de Educación a Distancia, de España). Un año más tarde, asistió al Curso Taller de la Escuela Iberoamericana de Archivos* (Alcalá de Henares, Madrid, España). El 2 de octubre de 2002, el Gobierno Municipal le encomendó ubicar y copiar documentación de los Archivos de Sevilla y Madrid, referentes a la historia colonial de Santa Cruz. El 2004 formó parte del Comité Organizador del Taller Nacional sobre la Norma Internacional (General) de Descripción Archivística, que se realizó en la ciudad de Cochabamba, oportunidad en la que presentó su “Breve reseña histórica del Archivo Histórico Departamental Hermanos Vázquez Machicado”. En el Congreso Nacional de Archivos (Sucre, 2007) presentó la propuesta de los archiveros de Santa Cruz al anteproyecto de Ley del Sistema Nacional de Archivos*. Fue también colaborador de la Revista Archivum que edita el Dr. Lorenzo Huertas en la Universidad “Ricardo Palma” de Lima (Perú). Fue miembro del Instituto de Estudios Genealógicos “Dr. Hernando Sanabria Fernández” y de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos, institución a la que representó en el I Encuentro Iberoamericano de Academias de Historia. Conformó el organismo del Concejo Municipal para la nominación de calles, plazas, avenidas, parques, barrios y erección de monumentos, de cuya experiencia queda su obra mayor La historia de Santa Cruz de la Sierra a través de sus calles (Santa Cruz de la Sierra: COTAS, 1992), que fuera entregada al Rey Juan Carlos de España en ocasión

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de la “Exposición del Galeón de Manila” (Sevilla). En este mismo género escribió (en coautoría con Damián Vaca Céspedes), “El Arenal” en la vida cruceña (Santa Cruz de la Sierra: CRE, 2003). Su prestigiosa pluma prologó el libro Cien años de vida cruceña, de H. Vázquez *, asimismo la obra El cruceño y los diez mandamientos de N. Gandarillas. Otra faceta de Ernesto Zambrana es su participación en el movimiento cívico cruceño, habiendo figurado como miembro del Club Social “24 de Septiembre”, delegado de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos ante la Asamblea de la Cruceñidad. El Comité Pro Santa Cruz (ente fundado en 1950), le designó Director Titular de Cultura. Participó en las fraternidades cruceñas “Cupesí”, “Terebinto” y “Crema Camba” (de esta última presidente por muchos años). Fue asesor cívico y presidente del Tribunal de Honor de la Federación de Fraternidades Cruceñas (fundada en 1984), habiendo publicado en esa época su historia institucional titulada Federación de fraternidades cruceñas. Un compromiso con Santa Cruz (Santa Cruz de la Sierra: FFC, 2002). Fundó “El Patio Cruceño”, en la casa de la familia Zambrana-Ribera, sitio de encuentro intelectual en el que se rendía una especie de “acto de fe cívica” a Santa Cruz de la Sierra. Fuente: Oporto, 2008a: 10-11.

ZÁRATE, GUILLERMO Dean del Arzobispado de La Paz, “ante la aproximación de las fuerzas patriotas de Cochabamba, después de la victoria de Aroma, en 1814, destruyó en parte su archivo, quizá para impedir que cayeran en manos enemigas. Otra parte de su archivo desapareció con la ruina de su casa, que era lindante con el cuartel de granaderos que fue volado en 1814. Fuente: López, 1949: I, II.

ZÁRATE, ZAIDA Ingresó a trabajar como responsable de los archivos de la Patiño Mines en la ciudad de La Paz, en 1930. Catorce años más tarde elaboró una propuesta para la organización de los archivos de gestión a fin de “procurar que sea fácil conseguir de inmediato los datos relacionados con los diversos asuntos que se estudian, tramitan y resulten en esta oficina central así como ubicar la sección a las que se pasan las cartas y documentos en trámites”. El sistema de Zárate tenía cinco pasos: a) Recoger de la oficina de correos la correspondencia institucional en un maletín con llave; b) Clasificar la correspondencia en ordinaria y reservada; c) Atender la ordinaria, clasificándola por firmas, respetando la procedencia; pasarla a la Vicepresidencia previo registro en el libro; d) Distribuirla a las secciones de la empresa con el proveído del vicepresidente; e) Recoger la correspondencia despachada para su expedición anotando como “contestada” u “observada” en el libro de registro. El sistema Zárate introdujo el concepto de reserva de la documentación, restringiendo su acceso a personal de alta confianza que designe la Vicepresidencia. La Patiño Mines aplicó en todas sus oficinas dicho método. Fuente: Campos, 2004: 8-9; Oporto, 2006: 285-286.

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ZEBALLOS AVENDAÑO, LUDMILA

(Mecapaca, Provincia Murillo, La Paz, 3 de noviembre de 1971) Licenciada en Bibliotecología y Ciencias de la Información (Mención Archivología y Bibliotecología), (2009), y en Ciencias de la Comunicación Social, ambas en la UMSA (2001). Cursó la XIX Escuela Iberoamericana de Archivos* (Madrid, España 2009), hizo el Diplomado de Derecho Constitucional para no Abogados (2008), y el Diplomado en Gestión Documental y Archivos Históricos (2002). También participó en el Curso MERCOSUR sobre Construcción de Bibliotecas Digitales (Montevideo, Uruguay, 2003). Al margen de su formación superior, se ha especializado en otras áreas, por medio de cursos y talleres, como el de Acceso a Información científico-técnica de calidad para la investigación e innovación agraria AGORA; Creación de Centros de Información y Bibliotecas Virtuales para la Prevención y Atención de Desastres (2007), Gestión de Documentos Electrónicos (2007); Catalogación de Grabaciones Sonoras en el Sistema MARC (2009), Conservación Preventiva y Restauración del Papel para Bibliotecas y Conservación Preventiva y Restauración para Materiales de Archivo; Lenguajes Documentales; Descripción Archivística; Conservación del Patrimonio Cultural y Natural de Bolivia; Desarrollo de la Archivística en Bolivia. Desde el 2001 participa en los Congresos Internacionales de Bibliotecología, Documentación y Archivística (CIBDA) que organiza el Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia* (CPCIB) siendo el de 2009 su quinta versión. Igualmente asiste a las Jornadas Paceñas de Bibliotecología y Archivística, que organiza la Biblioteca Municipal de La Paz, la Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información* con el apoyo de la Biblioteca del Goethe Institüt. Coordinó la organización del Curso de Sistema de Archivo Institucional; la Mesa Redonda “Día aciago de la destrucción de la Memoria Cruceña” (1 de noviembre de 2008); el Seminario Internacional “Destrucción Documental y Bibliográfica y la Importancia de su rescate para el Desarrollo Nacional” (29-30 de octubre de 2008); el Seminario de Gestión Documental y Organización de Archivos Administrativos (Movida Ciudadana. H.G.M. de La Paz); el Coloquio sobre “Acceso a la Información pública, archivos y bibliotecas en la Constitución Política del Estado” (julio de 2009); las Tertulias Archivísticas (desde el 2008); el I Encuentro Internacional de Información Para el Cambio Ciudadano (2008); la Conferencia “Fuentes para una historia de los Orientes bolivianos (1825-1940); y el I Encuentro Latinoamericano de Bibliotecas, Archivos y Museos: Los Archivos; nuevos retos de la agenda mundial (2009). Ingresó a la Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso Nacional* (actual Asamblea Legislativa Plurinacional), en enero de 2001 en el cargo de Referencia y Circulación, hasta el 2010 (agosto). Es miembro del cuerpo de facilitadores del Programa Permanente de Asistente Técnica de la Biblioteca y Archivo Histórico*, con el que ha impartido cursos en La Paz, Cochabamba, Santa Cruz de la Sierra y en las provincias de La Paz y Beni. El 2010 participó en seminarios internacionales en Tacna y Moquegua (sur del Perú). Desde el 2010 (septiembre) es Responsable del Centro de Documentación en Artes Literaturas Latinoamericanas CEDOAL del Espacio Simón I. Patiño Publicaciones archivísticas: “Documentación y archivística (CIBDA 2005)” (Fuentes del Congreso, 2005, 1 (21): 226); “XIX Escuela de Archivos para Iberoamérica” (Fuentes, 2010, (6): 61-63). Fuente: CV.

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ZURITA ZABALETA, JUAN CARLOS (La Paz, 9 de abril de 1978)

Estudió la Carrera de Historia* (UMSA). Cursó también la carrera de Auxiliar de Contabilidad. Trabajó como encuestador en el Censo Guía de Archivos de la ciudad de Cochabamba, para la Biblioteca y Archivo Histórico del H. Congreso Nacional* (actual Asamblea Legislativa) (2003), fue auxiliar del Programa de Admisión Facultativa de la UMSA (2004). Participó en el grupo de historiadores que organizaron el Archivo Histórico de la Casa “Suárez Hnos.”*, bajo la dirección de M. P. Gamarra*, en Guayaramerín (2005). Trabajó como técnico en los archivos del Comando en Jefe de las FF.AA. de la Nación (2006); fue Coordinador en el proyecto de sistematización del archivo de la Dirección Jurídica y Monitoreo Ambiental del Servicio Nacional de Áreas Protegidas SERNAP (2007-2008); consultor de archivos en la Superintendencia de Pensiones, Valores y Seguros (2009) y de la Unidad de Investigaciones Financieras de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (2009). Asistió al Curso Taller de Organización de Sistema de Archivo Institucional (Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso, 2003), Curso básico de archivos para la aplicación del Censo Guía de Archivos (Biblioteca y Archivo Histórico del Congreso*, 2006). Participó en el Taller Departamental para la Ley del Sistema Nacional de Archivos (2006). Organizó el Curso de Archivos de Gestión para funcionarios del SERNAP (2006 y 2008). Desde el 2011 pasó a trabajar como consultor en el Archivo de Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero. Fuente: CV.

ZUZUNAGA, JUAN DE Archivero de las Misiones de Mojos y Chiquitos (1803-1804). Arregló los papeles y expedientes pertenecientes a ellas y elaboró un inventario formal que los entregó al Escribano de Cámara Don Ángel Mariano Toro, “sobre que haya de dividirse en adelante, el despacho de las dos provincias de Mojos y Chiquitos entre los dos escribanos de Cámara de la Real Audiencia y corra el Archivo de Misiones a cargo del relator Don Lorenzo Fernández de Córdova con el sobresueldo de 3000 pesos anuales”. Fuente: Moreno, 1973: 521-522.

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GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

Índice alfabético onomástico A

Abascal y Sousa, José Fernando de/27 Acebey Ayoroa, Amilkar/28 Achá, Samuel/29 Acosta Peralta, Nicolás/29 Agramont Virreira, Miriam/30 Aguilar, Miguel/31 Aguilar Calderón, Edwin J./31 Aguilar Dávalos, Gonzalo Javier/31 Aguilar Mollinedo, Pablo Luís/33 Aguilar Zeballos, Maruja/33 Aguirre Flores, Liliana/34 Ahlfeld, Frederick/35 Ahumada Moreno, Pascual/35 Aillón Soria, Esther/36 Alarcón de la Peña, Abel/37 Alarcón Escóbar, Cintia Karina/37 Alba Zambrana, Armando/38 Alborta García, Ivonne Carla/38 Alborta Trigo, Freddy/39  Alcocer, María/40 Aliaga Candia, Grover Leopoldo/40 Aliaga Maldonado, Danny Susan/40 Álvarez de Arenales, Juan Antonio/41 Alvéstegui Laredo, David/42 Amaro Toco/42 Ampuero Aldana, Jorge/42 Amusquívar Peñaranda, Guadalupe/43 Andrade Padilla, Claudio Froilán/44 Andrade Díaz, Sonia/44 Angulo, Basilio/45 Antezana Ergueta, Luis/45 Añez Gómez de La Torre, Alfredo/46 Aparicio, Sebastián De/46 Aparicio Cordero, Saúl Iván/46 Apaza Choque, Anacleto/47 Aponte, Rosita/47 Aramayo, Zeballos, Carlos Víctor/48

Aramayo Serrano, Soraya/48 Arancibia Andrade, Freddy/49 Arancibia Mollinedo, José/49 Aranda, Juan Ignacio de/50 Arcani Calle, Julio/50 Arcani Limachi, Leocadio/51 Arce Gómez, Luis/51 Arce Ruiz, Aniceto/52 Archiveros de la Colonia/53 Archiveros de la Corporación Minera de Bolivia/54 Archiveros del Incario/54 Archiveros En Acción/55 Archiveros Idóneos (Empíricos)/55 Archiveros Militares/56 Archiveros Profesionales/56 Archiveros Sin Fronteras (ASF)/57 Archivo de la Compañía de Ferrocarriles Antofagasta-Bolivia/57 Archivo de La Paz (ALP)/58 Archivo de La Villa de La Plata; Ordenanza del Virrey Francisco de Toledo/59 Archivo de las Sublevaciones Indígena del Siglo XVIII/61 Archivo de Mojos y Chiquitos/62 Archivo Franciscano de Tarija/63 Archivo General de Indias (AGI)/63 Archivo Histórico “Casa Suárez”/64 Archivo Histórico de la Sociedad Agrícola, Ganadera, Industrial y Comercial (SAGIC)/66 Archivo Histórico de Potosí/67 Archivo Histórico Departamental “Hnos. Vázquez Machicado”/68 Archivo Histórico de Cochabamba “José Macedonio Urquidi”/68 Archivo Intermedio Nacional/69 Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB)/71 Archivos de Juntas Vecinales/72

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Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional

Archivos de las Dictaduras Militares (Desclasificación de los)/73 Archivos de Quipus (Destrucción de los)/74 Archivos de Televisión Boliviana (Destrucción de los)/74 Archivos del Instituto Cinematográfico Boliviano (ICB)/75 Archivos en Custodia, Empresas de/75 Archivos Fotográficos/76 Arévalo Jordán, Víctor Hugo/77 Argote Mejía, María Luisa/78 Arguedas, Antonio/79 Arguedas Díaz, Alcides/79 Arteaga, Pedro de/82 Aruquipa Calcina, Bertha María/82 Arzáns de Orsúa y Vela, Bartolomé/83 Arze, José Roberto/84 Arze Aguirre, René Danilo/85 Arze Arze, José Antonio/95 Arze Luján Edmundo/96 Arze Ormachea, Silvia/96 Arze Quiroga, Eduardo/96 Ascarrunz Martínez, Sofía Valentina/97 Ascarrunz Peláez, Moisés/98 Asebey Claure, Ricardo Carlos/100 Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información/101 Asociación Boliviana de Trabajadores de la Información (Filial La Paz)/101 Asociación de Archivistas de La Paz /101 Asociación de Archivistas del Poder Ejecutivo/102 Asociación de Archivistas Ex Becarios de la Organización de Estados Americanos/102 Asociación Latinoamericana de Archivos (ALA)/103 Avaroa Hidalgo, Eduardo/103 Avendaño Rivera, Carolina/104 Ávila, Federico/104 Avis, Francisco d’/105 Ayllón, Virginia/105 Ayma Zepita, Damián/106 Azebedo, Pedro de/107 Azurduy de Padilla, Juana/107

662

B

Bacarreza Guzmán, Patricia Jacqueline/109 Balboa Chura, Edwin/109 Balderrama Grájeda, Jorge/109 Ballivián James, Manuel Vicente/110 Ballivián Martins de Romero, Florencia/110 Ballivián y Roxas, Vicente/110 Ballivián y Segurola, José de/112 Ballivián Saracho, Luis/113 Banco Central de Bolivia (BCB)/113 Bandelier, Adolphe Francis Alphonse/114 Bánzer Suárez, Hugo/114 Baptista Gumucio, Mariano/115 Baptista Morales, Javier/116 Barbáchano, Pedro José/117 Barbosa, O./117 Barnadas, Josep María/118 Barra Rada, Javier David de la/120 Barragán Romano, Rossana Ibette/120 Barrientos Ortuño, René/122 Barrón Díaz, Jorge/123 Bastos Carrasco, Juan/123 Bass Werner, Zulema/124 Bautista Lagasca, Juan/125 Bazoberry García, Luis/125 Becerra Casanovas, Roger/126 Bedoya Ballivián, Mario/126 Belgrano, Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús/127 Belmonte Viladegutt, Alfonso G./127 Belmonte Zárate, David Carlos/128 Beltrán Ávila, Marcos/128 Benito Huayta, Juvenal/128 Bernabei, Juan (Luis, P. Severino)/129 Berríos Contreras, Rosmery/130 Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional (BAHALP)/130 Bieber, León Enrique/132 Blanco Galindo, Carlos/133 Blattmann, Carl/133 Bolívar y Palacios, Simón Antonio de la Santísima Trinidad/134 Bonifaz, Carmen/135 Bosques Tistler, Eréndira Désirée/135 Braun, Otto Philipp/136

GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

Bridikhina, Evgenia/137 Brigadas Internacionalistas Solidarias Para el Fomento y Desarrollo de los Archivos y las Bibliotecas de Bolivia/137 Buck, Daniel/138 Bueno, Buenaventura/139 Busch Becerra, Germán/139 Bustillos Espinoza, Evelín María/140

C

Cabrera Romero, Sinforoso/141 Cáceres, Juan Manuel/142 Cáceres Bilbao, Pío/143 Cahuaya Yapu, Elías/144 Cajías Montaño, María Antonieta/143 Cajías de la Vega, Fernando/144 Calerno Aliaga, Claudia Evelin/145 Calvimontes, Demetrio/145 Calvito, Calixto/146 Calvo Arana, René/146 Calvo Ayaviri, Jorge Guillermo/146 Calvo Galindo, Carlos/147 Calvo Gómez, Daniel/148 Calzavarini Ghinello, Giuseppe (P. Lorenzo)/149 Callisaya Cuentas, Félix/151 Callisaya Sánchez, César Felipe/151 Callizaya Hinojosa, Pedro/151 Cámara, Francisco de/152 Camberos Bolaños, Norah Violeta/152 Campero Leyes, Narciso/153 Campos Castillo, Concepción/154 Campos Lora, Carola/154 Campuzano, Severino/157 Canedo Cáceres, Cristina/157 Cano Leaño, Rodel/158 Cantuta Gutiérrez, Jesica Leslie/158 Cañete y Domínguez, Pedro Vicente/159 Capitulación de Ayacucho/160 Cárdenas Roman, Elvira/160 Carreño Gonzáles, Ronel/162 Carreño Salgueiro, Lily Ivonne/162 Carrera de Bibliotecología y Ciencias de la Información (UMSA)/162 Carrera de Historia (UMSA)/163 Carrera de Técnico Superior en Bibliotecología de

Santa Cruz de la Sierra/163 Carrillo Chura, Virginia/164 Carta de los Archivos Americanos/164 Carvajal, Francisco de/168 Casa de La Libertad/168 Casa Nacional de Moneda/169 Castellón del Villar, Carmen Rosa/170 Castillo Saavedra, Aracely del Rosario/170 Catacora y Heredia, Juan Basilio/171 Catari, El Viejo/171 Cazorla Murillo, Danny Fabrizio/171 Centeno, Nicanor/172 Centro Bibliográfico, Documental e Histórico de la UMSFX/172 Centro de Documentación e Información (CEDOIN)/173 Centro de Documentación e Información Bolivia (CEDIB)/173 Centro Interamericano de Desarrollo de Archivos (CIDA)/174 Chacón Tórres, Mario/175 Chambi Jiménez, Martín/176 Charraja Asturizaga, Eurico (Enrique)/177 Chávez de Peñaloza, José Genaro de/177 Choque Canqui, Roberto/178 Choque Condori, Marco/178 Choque Pereyra, Edson Roger/179 Choque Ticona, Gonzalo Omar/179 Chungara, Domitila Barrios de/179 Chuquimamani, Bonifacio/180 Chuquimia Bonifaz, Fernando/180 Chura Coyo, Irenia Hilda/182 Church, George Earl/182 Cieza de León, Pedro de/183 Cinemateca Boliviana/183 Código de Ética del Archivista/183 Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información de Bolivia (CPCIB)/185 Colque Estrada, Adolfo/185 Colque Humerez, María Liz/186 Comité Nacional de Archivistas, Bibliotecarios y Documentalistas/186 Condarco Morales, Julio Ramiro/187 Conde Paz, María Cristina/188 Conde Villaverde, María Luisa/188 Condori Chura, Leandro/188

663

Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional

Condori M., Freddy Ricardo/189 Condori Quispe, Marisol Lily/189 Congreso Departamental de Trabajadores de la Información de La Paz “Alberto Crespo Rodas”/190 Congreso Nacional de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Bolivia “Gunnar Mendoza Loza”/190 Consejo Internacional de Archivos (CIA)/190 Converse, Thomas J./191 Copa López, Ernesto/192 Cordero Benavides, Julio Gonzalo/192 Cordero Castillo, Julio/193 Cordero Ordóñez, Julio/194 Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL)/195 Corpus Documental de la Historia de Tarija/196 Corral, Casimiro/197 Cortés Alonso, Vicenta/197 Cortés Arana, Ricardo/198 Cortés Rodríguez, Julio Jorge Francisco/199 Corvera, Pedro/200 Cossío, Juan Manuel/201 Costa Arduz, Rolando/201 Costa de la Torre, Arturo/202 Cotera, Tomás/203 Crespo, Julio César/203 Crespo Rodas, Alberto/203 Cruz Coronel, Jorge Antonio/206 Cruz Quilla, Edwin/207 Cuba Akiyama, Víctor/207 Cuba Quispe, Simón/207 Cuevas Fernández, Miriam/209 Curso de Organización y Administración de Archivos (Escuela de Documentalistas de Madrid)/209

D

Dalence, Zenón/211 Dalence Salinas, Guillermo/212 Damman, C./212 Declaración de Principios del Archivista Boliviano/213 Declaración de Principios de la Primera Reunión Interamericana sobre Archivos/220 Declaración Universal sobre los Archivos (CIA)/221

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Delgadillo Hurtado, Nelva Celia/222 Destrucción de la Memoria Documental por causas de violencia política/223 Día del Archivista Boliviano/223 Díaz Arguedas, Julio/224 Díaz Machicao, Porfirio/225 Diez de Medina, Eduardo/226 Diez de Medina, Mariano/226 Durán Jordán de Lazo de la Vega, Cecilia Julia Florencia/226 Durán Mendoza, José Luis/227

E

Elías, Manuel A./229 Entrambasaguas, Pedro de/229 Ergueta, Marcelino/230 Escobari Cardozo de Querejazu, Laura Angelita/230 Escribientes de las Ambulancias del Ejército/231 Escuela Iberoamericana de Archivos/232

F

Fawcett, Percy Harrison/233 Felipillo y Martinillo/233 Fernández de Córdoba, Lorenzo/234 Fernández Gómez, Eduardo/234 Fernández Mazzi de Aponte, Carmen Patricia/235 Fernández Peñaranda, Juan Carlos/236 Fernández Quisbert, Ramiro/237 Fernandez Rojas, Johnny/237 Fernández y G., Vicente/238 Feyles, Gabriele/239 Figueroa Alba, Ninoska/240 Flores Aguirre, Sémido/240 Flores Alfaro, María Eugenia/240 Flores Bedregal, Olga Beatriz/241 Flores Jemio, Edson Daniel/242 Flores Jiménez, Ignacio/242 Flores López, Domingo/243 Flores Mamani, José Eduardo/244 Flores Murillo, Silvia/245 Flores Quispe, Hugo/245 Flores Rocha, Juan José/246 Flores Salinas, Lucio/246

GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

Forenza Artunduaga, Ana/247 Fox, Liston M./247 Frías Ametller, Tomás/248 Frías Cabrera, Santos/249 Frontaura Argandoña, Manuel/249 Fuentes Caballero, Analy/250 Fuentes Salomé, Carmen Rosa/250 Fuertes López, José Antonio/251 Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia (FCBCB)/252 Fundación Flavio Machicado Viscarra (FFMV)/252

G

Galindo, León/255 Gálvez de Oropeza, Julián/255 Gálvez y Gallardo, José Bernardo de/256 Gallardo Irigoyen, José/256 Gamarra Rojas, Arturo/256 Gamarra Téllez, María del Pilar/257 Gantier Lemoine, Ronald/258 Gantier Valda, Joaquín/258 García, Simeón/259 García Balanza, Corina/259 García Cárdenas, Eduardo Horacio/260 García Guzmán, Ana María/260 García Jordán, Pilar/261 García Lanza, Gonzalo/262 García Lanza, Gregorio/262 García Lanza, José Miguel/263 García Linera, Álvaro Marcelo/263 García Meza Tejada, Luis/264 García Morató, Miguel/265 García Quintanilla, Julio/265 Garcilaso de la Vega, Inca/265 Gardeazábal Benítez, Lidia Sobeda/266 Gasca, Pedro de la/267 Gerstmann, Robert M./267 Gismondi Módena, Luigi Doménico/268 Gismondi Morán, Luis Adolfo/269 Gómez Coca, Aquiles/269 Gómez Zubieta, Luis Reynaldo/269 Gonzáles, Carlos/270 Gonzáles Burgos, Rosa Juana/271 Gonzáles Rojas, María Fanny/271

Goyeneche y Barreda, José Manuel de/272 Goyochea, Mamerto/273 Gozálves Ríos, Paola Alejandra/274 Grados Gorriti, Paulo Cesar/274 Gray Molina, Joseph Lawrence/274 Grumbkow, Georges B. Von/275 Guachalla, Luis Fernando/275 Guamán Poma de Ayala, Felipe/275 Guerra Luna, Eliana/276 Guerra Luna, María del Rosario Gladys/276 Guerreros Burgoa, Johnny Tito/276 Guevara Arze, Wálter/277 Guevara de la Serna, Ernesto “Che”/278 Guillaume, Julien/283 Guiteras Mombiola, Ana/283 Gutiérrez, José Rosendo/283 Gutiérrez Bedregal, Reynaldo/285 Gutiérrez Guerra, José/285 Gutiérrez Muñoz, César /285 Gutiérrez Siles, Freddy Pacífico/286 Gutiérrez Valenzuela, Alfredo/287 Guzmán Barrios, Luis Alberto/287 Guzmán Salvatierra, Guido/287 Guzmán Soliz, Jorge/288 Guzmán Zilveti, Marcelo/289

H

Haenke, Tadeo/291 Hanhart, Carlos/292 Hanke, Lewis Ulysses/292 Hazen, Dan/293 Helmer, Marie/294 Heredia Herrera, Antonia/294 Herrero, Fray Andrés/296 Herzog, Theodore/296 Hilari Choquehuanca, Luis Rubén/297 Hill, Roscoe R./298 Hochmann Steiner, Jorge/298 Hochschild, Moritz (Mauricio)/299 Hoeller, Fray Alfred (Luis)/300 Huanca Soliz, Marcela Ivonneth/301 Hurtado Barja, Oscar Milko/302 Hutten–Czapski, Marek de/302

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Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional

I

Illatarco Peñarrieta, Galo Jaime/303 Inch Calvimontes, Marjorie Marcela/304 Instituto Panamericano de Geografía e Historia (IPGH)/305 Irahola de Capriles, Ana/306

J

Jáuregui Cordero, Juan Eriberto/307 Jáuregui Rosquellas, Alfredo/307 Jesuita Anónimo/308 Jiménez Chávez, Iván/309 Jordán, Adolfo D./309 Jordán Espinoza, Luis Roberto/309 Jordán Sandóval, Santiago/311 Julien, Catherine Jean/312

K

Kavlin, Alejandro y Enrique/313 Kenning, Willy/314 Kieffer Guzmán, Fernando/314 Kirchoff, Herbert/315 Kornbluh, Peter/315 Kowanda, Wilhelm/316

L

Landor, A. Henry Savage/317 Langer, Erick D./317 Lanza Quiroz, Vladimir E. Jairo/318 Lara Gómez, Norka Raquel/319 Lara Oblitas, Lourdes/320 Lardani, Giacomo/320 Larico Ramos, Juan Roberto/320 Larson, Brooke / 321 Lauroua, Manuel/321 Lavadenz Reyes, Luis/322 Lecoña Alavi, Maribel/323 Lecoña Rodríguez, Luisa Bertha/323 Lecuna Salboch, Vicente/324 Lema Garrett, Ana María/325 León Pinelo, Antonio De/326 Ley del Sistema Nacional de Archivos/327 Lijerón Casanovas, Arnaldo/327 Limachi Mamani, Lizeth Wendy/328 Limpias Saucedo, Manuel/328

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Linares, Alfredo/329 Linares Lizarazu, José María/329 Lineo Morales, Rafael/330 Lizondo Díaz, Miguel Ángel/330 Loayza Valda, Joaquín/331 López, Luis/332 López Beltrán, Clara/332 López Donoso, Álvaro Rodrigo/333 López Menéndez, Felipe/333 López Ramírez, Juan José/334 López Villalba, José Miguel/334 Lora, José Francisco/335 Lora Escóbar, Guillermo/336 Lorini, Irma/338 Loza, Esteban de/338 Loza, León M./339 Loza Vidaurre, Carmen Beatriz/340 Lozano, Pedro/341 Lucca Calderón de la Barca, Enzo de/341 Lucero Huanca, César Augusto/342 Lummis, Charles Fletcher/342 Lunasco Cusi, Augusto Cesar/342

M

Mac Farren, Peter/345 Machaca Mamani, Víctor Hugo/346 Machicado Mendoza, Héctor Fernando/346 Machicado Murillo, María Cristina/347 Machicado Saravia, Eduardo/347 Machicado Viscarra, Flavio/348 Maldini, Gerardo/349 Maldonado Álvarez, Amel Abel/349 Maldonado Arce, Víctor/350 Maldonado Pérez, Nancy/350 Mamán, Itala De/350 Mamani Humérez, Froilán/351 Mamani Mamani, Lupe Jimena/352 Mamani Nina, Eugenia/352 Mamani Romero, Luis/353 Mamani Sarzuri, Rocío/353 Mancilla Mamani, Judith C./354 Maquera Colque, Tiburcio/354 Marca Morales, Gervacia Santusa/355 Marcelly P., Hugo/355 Mariño, Alberto/355

GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

Marka Tola, Santos /355 Márquez Saleg, Mela/356 Martínez López, María del Carmen/357 Martínez Mujica, Gaby Doris/358 Martínez Quinteros, María Ana Lorena/359 Martínez Rueda, Edgar Fernando/360 Martínez de Tineo, Juan Victoriano/360 Mascio, Vicenzo/360 Mata Linares y Vásquez Dávila, Benito María de la/360 Mathewson, E.P./361 Mayta Quispe, Paola/362 Medinaceli Gonzáles, María Ximena Emilia/362 Medrano Reyes, Guillermo/363 Mejillones Quispe, Guillermo/364 Melgar i Montaño, Adrián/364 Mendieta Parada, María del Pilar/364 Mendoza Aruquipa, Germán/365 Mendoza González, Jaime/366 Mendoza Loza, Gunnar/367 Mendoza Miranda, Milton Hugo/380 Mendoza Suárez, Lorna Karina/381 Meneses, Lupe/381 Mérida Coimbra, Luis/382 Mérida Suárez, René/382 Merlott Flores, Luis Hipólito/383 Mesa Gisbert, Carlos D./383 Meyendorff, Baron Kondratii Egorovich y Baroness Natalia Meyendorff/385 Michel, Franz A./385 Mingo de La Concepción, Fr. Manuel/385 Minutolo de Orsi, Cristina/386 Miranda, Lucas/386 Miranda Cláuregui, María Teresa/387 Miranda Pomier, Dirzi Gina/388 Miranda Rendón, Hugo/388 Misiones Internacionales sobre Archivos/389 Mogro-Moreno Mercado, María Olga Alicia/390 Molina Alanes, Ramiro/390 Molina Echeverría, Gonzalo/391 Money Orozco, Mary/396 Monroy, Eusebio/397 Montaño, Tito/397 Montecinos Rojas, Mónica/398 Montes Canaza, Noemì Valeria/399

Montes Gamboa, Ismael/399 Mora Feraudi, Magda/400 Morales Ayma, Juan Evo/400  Morales Bellido, Hugo Bernardo/401 Morales Quisbert, Mary Heberlin/402 Morales y Sanchez, Adolfo de/402 Moreno, Gabriel René/403 Moreno Menacho, Dilza/407 Moricio Choque, Daniel/408 Moscoso, Ángel Mariano/408 Mujica Blanco, Felicidad/409 Muñoz, Juan Bautista/409 Muñoz, Mariano Donato/410 Murillo Mayorga, Lizeth Bárbara/411 Murillo Mendoza, Max Raúl/411 Murillo Vacareza, Josermo/412 Museo Nacional de Etnografía y Folklore (MUSEF)/412

N

Nava López, Ana María/415 Navarro Cuéllar, Eliana Noemi/415 Nawrot, Piotr/417 Nina Cruz, Francisco/417 Nina Fernández, Saúl T./418 Nina Machaca, Rosmery/418 Nina Siles, Mónica/419 Nino, Bernardino/419 Nordenskiöld, Erlan/420 Nuñez de Arco, Javier/420

O

Obaya, Pedro/423 Oblatos de María Immaculada, Archivos de los/423 Oblitas, Mario/424 Ocampo Moscoso, Eduardo/424 Ochoa, José Vicente/425 Ocsa Laime, Jorge Víctor Wálter/425 O’ Leary, Daniel Florence/426 Oliva, Juan Anello/427 Olivares Gonzáles, Ingrid Rosario/427 Ondegardo y Zárate, Juan Polo de/428 Oporto Almaraz, Loui Álvaro/428 Oporto Ordóñez, Luis/429

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Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional

Ordóñez Kock, Víctor Hugo/434 Orbigny, Alcide Charles Victor Marie Dessalines d’/434 Orellana Chávez, Simón/436 Organización de Estados Americanos (OEA)/436 Oropeza Alcócer, Daniel/437 Osco Quispe, Edwin Gabriel/437 Ostria Gutiérrez, Alberto/438 Otero Hinojosa, Armando/439 Ovando Candia, Alfredo/439 Ovando Sanz, Guillermo/440 Ovando Sanz, Jorge Alejandro/445 Ozuna Tarifa, María Judith/445

P

Pachacutec Yupanqui, Inka/447 Pacheco Carvajal, Fernando Edmundo/447 Pacheco Cerqueira, Francisco/447 Pacheco Leyes, Gregorio/448 Pando Solares, José Manuel/448 Paredes Oviedo, Martha/449 Parejas Mendoza, Efraín/450 Parejas Moreno, Alcides/450 Patiño, Simón I./451 Paz Cerruto, Ramiro Víctor/452 Paz Estenssoro, Ángel Víctor/453 Paz Zamora, Jaime/456 Peña Hasbún, Paula/457 Peñaloza Bretel, Marco Antonio/458 Peñaranda del Castillo, Enrique/459 Pereyra Arze, Diómedes de/459 Pérez Apaza, Ramiro Gregorio/460 Pérez de Larrea, Bartolomé/461 Pérez de Urdininea, José María/461 Pérez Vásquez, Federico/462 Pérez Zabalaga, Viviana Liz/462 Pezuela Griñán y Sánchez Muñoz de Velasco, Joaquín de la/463 Piérola Aguilar, José Nicolás/463 Piérola Monrroy, José Reynaldo/464 Plantarosa Díaz, Teresa/465 Plata Laura, Francisco/465 Plaza Escobar, Luis Manuel/466 Poppe Entrambasaguas, Hugo/467 Portillo, Carlos/468

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Portillo Espada, Susy Ninfa/468 Portugal Ortiz, Max Fritz/469 Posnansky, Arthur/469 Pozadas Gandarillas, Javier Eduardo/470 Prado, Mariano/470 Priewasser, Wolfgang/471 Primera Reunión Interamericana sobre Archivos (PRIA)/471 Programa de Desarrollo del Servicio de Archivos y Documentos Públicos de la República de Bolivia/473 Programa Permanente de Asistencia Técnica de la BAHALP/474 Proyecto ADAI: Apoyo al Desarrollo de los Archivos Iberoamericanos/475

Q

Querejazu Calvo, Roberto/477 Quintana Taborga, Juan Ramón/478 Quintana Ríos, Sandra Edith de la/478 Quintanilla Zuazo, Alicia/479 Quinteros, Mariano/479 Quiñones Vargas, Liz Ximena/480 Quiroga Gismondi, Miriam Teresa/480 Quiroga Ramírez, Jorge Fernando Arturo/481 Quisbert Condori, Pablo Luis/482 Quispe, Delfín/482 Quispe Callejas, Sara Isabel/483 Quispe Callizaya, Verónica/483 Quispe Cruz, Alan Álvaro/483 Quispe Fernández, Zenón/484 Quispe Jarro, Adrián/485 Quispe Laruta, Martín/485 Quispe Loza, Rosmery Gloria/485 Quispe Loza, Vladimir Rubén/486 Quispe Ticona, Ausberto/486 Quispe Velásquez, Octavio/486 Quipucamayos (Informaciones de los)/487 Quipus/487

R

Rada, Agustín de/489 Ramírez Pacajes, René/489 Ramírez Santiesteban, Edgar Fidel “Huracan”/490

GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

Ramírez Simon, Rolando/493 Ramos Quispe, Viviana/494 Ramos Tórrez, Hernán Gualberto/495 Ramos Villca, Remberto Félix/496 Reuniones Nacionales de Consulta sobre Archivos Bolivianos/496 Revollo Velasco, Antonio/497 Reyes Angulo, Bismark Napoleón/498 Reyes Dávila, Norman/500 Reyes Zárate, William Raúl/501 Reynolds Ipiña, Gregorio/501 Ribera, Lázaro de/502 Ribera Arteaga, Leonor/502 Ribera Vaca, Josefina/502 Ricafort Palacín y Abarca, Mariano/503 Riester, Jürgen/503 Rivera Bernal, Gabriel René/504 Rivero Coimbra, Luis Enrrique/505 Riveros Mamani, Germán/506 Riviale, Pascal/506 Roa Balderrama, Ronald/507 Robertson Trigo, Juan Víctor/508 Roca García, José Luis/508 Rocabado, Teresa/510 Rocabado Morales, Jorge Carlos/510 Rocha Ustarez, Carmen Liliana/511 Rodríguez, Celso/512 Rodríguez de Maman, Sissibell Itala/512 Rodríguez Mendigutia, Félix/513 Rojas, Miguel/513 Rojas Acevedo, Alejo Fernando/514 Rojas Cáceres, J. Germán/514 Rojas Rosales, Antonio/514 Romano, Santiago/515 Romero, Fanor G./515 Romero Collao, Francisco Xavier/515 Rossell Velez, Jorge/516 Rosso Ramírez, Flora/516 Rúa de Tirado, María del Carmen/517 Rück Franke, Ernest Otto/517 Ruiz Calbimontes, Jorge/519

S

Saavedra Mallea, Bautista/521 Sáenz, Manuelita/522

Saignes, Thierry/523 Salamanca Urey, Daniel/524 Salazar, Eva/524 Salazar Cachi, Ladislao René/525 Salazar Zelaya, Alberto/525 Salinas Ferrufino, Marianella/526 Salinas Jardín, Mario/526 Salinas Mariaca, Ramón/526 Salinas Vega, Luis/528 Samson, Roberto Von/529 Sanabria Fernandez, Hernando/529 Sánchez Ardiles, Alfonso/524 Sánchez de Lozada y Sánchez Bustamante, Gonzalo/531 Sánchez Morales, Rolando/532 Sandóval Rodríguez, Isaac/533 Sangro, Príncipe de San Severo, Raimundo di/534 Sanjinés Aramayo, Jorge/534 Sanjinés Barriga, José Ignacio de/535 San Martín, José Francisco de/535 San Román, Claudio/536 Santa Cruz y Calahumana, Andrés de/537 Santa Cruz Schuhkrafft, Andrés/538 Santa María de Michel, Luz/538 Santa y Ortega, Remigio de la/539 Santivañez, Moisés/539 Santos, Nicasio/540 Santos Vargas, René Armando/540 Sanz, Francisco de Paula/541 Saravia Gutiérrez, Javier Abel/541 Saravia Tapia, Carlos Javier/542 Segales Callizaya, Daniel/543 Segales Villegas, Herminia/543 Schellenberg, Theodore Roosevelt/544 Schenkolewski-Kroll, Silvia/545 Schultz, Benjamin/546 Sequeiros Lordemann, Lola Lourdes Kolska/546 Siles Guevara, Juan/546 Siles Reyes, Hernando/552 Siles Salinas, Luis Adolfo/552 Siles Zuazo, Hernán/553 Silvestre Patzi, Magalí/554 Simonson, Michael/554 Siñani Siñani, Ramiro/555 Sisa Vargas, Bartolina/555

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Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional

Sistema de Archivo de la COMIBOL/556 Sistema de Información y Documentación Sindical (SIDIS)/556 Sociedad de Protección a los Inmigrantes Israeilitas (SOPRO), Archivo de la/557 Solano Medina, Raúl/557 Soria Galvarro Terán, Carlos Alberto/558 Soria Galvarro Valdivia, Antonio Rodrigo/559 Soria Rosas, Karina Cecilia/560 Soux Muñoz, María Luisa/560 Steverlynck Careaga, Julio Mauricio/561 Strengers, Jeröen/562 Suárez Callaú, Nicolás/562 Suárez Suárez, Hortencia/563 Suárez Veintemillas, Patricia/564 Subieta Sagarnaga, Luis/565 Sucre y Alcalá, Antonio José de/566 Sullcani, Juan Natalio//567 Susz Kohl, Pedro Roberto/567 Suxo Iturri, Nardi/569

T

Taborga Bazoberry, Josué/571 Tamayo Daza, Arturo/571 Tancara Mamani, Miriam Marleni/572 Tanodi, Aurelio/573 Tanodi, Branka/574 Tarquino Portillo, Marcelo Edgar/575 Tejada Sorzano, José Luis/575 Tejerina, Yolanda/576 Tejerina Cisneros, Luis/577 Tejerina Cisneros, Wilbert/577 Tenorio Levandro, Carlos Antonio/578 Terán Covarrubias, María Cristina/578 Terán Ríos, Julieta Judith/579 Terrazas Céspedes, Mario Alejandro/580 Terrazas O., Pedro J./580 Tica Bendezú, Jimmy/580 Ticona Ramos, Elisa/581 Toledo, Francisco de/582 Toro, Angel Mariano/583 Torre Céspedes, Mary Cecilia la/583 Torres, Carlos/584 Torrico, Andrés María/585 Torrico Zamudio, Rodolfo/585

670

Torricos Córdova, Jesús Gregorio/586 Troche Guzmán, Lizeth Daniela/586 Túpac Katari (Apaza Nina, Julián)/587 Tuno, Cristina Delvy/588

U

Uchanier Lecoña, Lourdes/589 Urcullu, Manuel María (del Bar­co)/590 Urquidi Gómez Ortega, José Macedonio/590 Urquieta, Anita Estela/591 Urquijo, Pedro Pablo/591

V

Vaca de Castro, Cristóbal/593 Vacaflor Dorakis, Elías/593 Valcanover, Mauricio/594 Valda, María Esther/594 Valda Martínez, Edgar Armando/595 Valdez, Moisés/596 Valdivia Antisolís, Fernando Javier/596 Valencia Rojas, Jorge/597 Valverde, Roger/598 Valle de Siles, María Eugenia Del/598 Vanoblitas Crespo, Tania Andrea/600 Vargas, Juan Crisóstomo/600 Vargas, Maximiliano T./600 Vargas Álvarez, María del Rosario/601 Vargas Caero, Jorge Carlos/601 Vargas Cruz, Norberto/602 Vargas Lorenzeti, Oscar/603 Vargas Medrano, José Santos/603 Vásquez, Javier/605 Vásquez Blacutt, Israel Pedro/606 Vásquez Marquez, Shindy Karen/606 Vásquez Torres, Cedelia/607 Vázquez Machicado, Humberto/607 Vázquez Machicado, José/608 Vázquez Murillo, Manuel/609 Vega, Cayetano/609 Vega Tola, Marianela Susy/610 Velasco Carrasco, Gastón/610 Velasco Flor, Samuel/611 Vera Aragón, Crispín/612 Vera Colomo, Irma/612 Verástegui Vilela, Luis Armando/613

GUARDIANES DE LA MEMORIA DICCIONARIO BIOGRÁFICO DE ARCHIVISTAS DE BOLIVIA

Verdueta Quisbert, Juan Marcelo/614 Viaña Armijo, José/614 Vidal, Nicolás/615 Villafuerte Velásquez, Ricarda/615 Villalba, Ricardo/615 Villalobos, Francisco de/616 Villalobos Nieto, Rosendo/616 Villa Quisbert, Ángela/617 Villegas Antezana, Reynaldo/617 Villegas Borges, Iris América/617 Villegas Vargas, María Renee/619 Vincenti, Leopoldo Benedetto/619 Vincenti Leigue, Claudia Patricia/621 Virreira Pacieri, Alberto/621 Virreira Sánchez, Efraín/622

W

Walpoth, Fray Hildeberto (Conrado)/623 Waszkis, Helmut/623 Wicky, Jean Claude/624

Y

Yampasi Machaca, María/627 Yelincic, Leopoldo/627 Yutu, Luis y Francisco/628

Z

Zalles Cuestas, Solange Leonor/629 Zambrana Cascales, Ernesto/630 Zárate, Guillermo/631 Zárate, Zaida/631 Zeballos Avendaño, Ludmila/632 Zurita Zabaleta, Juan Carlos/633 Zuzunaga, Juan de/633

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Este libro se terminó de imprimir en junio de 2012 La Paz - Bolivia