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1. Por qué una filosofía de ministerio? INTRODUCCIÓN ¿Por qué una filosofía del ministerio? Hay tres preguntas claves las cuales son esenciales que cada Iglesia conteste si quieren crecer numérica y espiritualmente: 1. ¿Quiénes somos? 2. ¿Por qué existimos? 3. ¿A dónde vamos?

¡El intento de este librito es ayudarte a contestar estas preguntas!

Se dice, "si no apuntas a algo, no atinas a nada." O como dijo Billy Sunday una vez, "¡los hombres fallan más por una falta de propósito, que por falta de talento!" ¡Por demasiado tiempo las Iglesias han fracasado en articular su plan, su propósito, su programa, y su filosofía!"

Una filosofía escrita del ministerio ayuda a la Iglesia local a lograr varias metas: 1. Da a la congregación (y a la vez a los miembros prospectivos) un entendimiento más claro de las practicas de la Iglesia. Contesta la pregunta que se hace a menudo por los miembros de la Iglesia, "¿ Por qué está la Iglesia (el liderazgo) haciendo lo que hace?" 2. Une a la congregación hacia una meta y dirección central. 3. Establece una visón de lo que la Iglesia, por la gracia de Dios, llegará a ser. Ayuda a los miembros que no están involucrados en el liderazgo a comprender la visión completa que Dios ha dado al liderazgo de la Iglesia.

4. Provee a la Iglesia una meta Bíblica y aceptable para su éxito. Deja a la Iglesia medir sus logros por algo más que puros "números" o la "comparación" con otras Iglesias.

Por favor lean lo siguiente cuidadosamente y con mucha oración. I. La Iglesia tiene que entender las razones básicas de su existencia: A. Comunicar el mensaje de Dios--Marcos Colosenses 1:27-28, II Timoteo 4:2

16:15,

Hechos

1:8,

•Visualmente--comunicamos por medio de nuestras vidas y así afirmamos lo que testificamos. •Verbalmente--comunicamos por medio de nuestras palabras. 1. Nuestra comunicación tiene que estar de acuerdo con las Escrituras) Tito 2:1 2. Nuestra comunicación tiene que ser apropiada--(de acuerdo al entendimiento de las personas) I Corintios 9:19-23 3. Nuestra comunicación tiene que ser allegada (primero a tu familia) Marcos 5:19 4. Nuestra comunicación tiene que ser amable--(Respetuosa, humilde, sin criticar.) I Pedro 3:15 B. Celebrar la presencia de Dios. Salmo 95:1-3 Apocalipsis 4:11 1. Dos condiciones para la adoración. Juan 4:23-24 a. ¡Adoración Espiritual! b. ¡Adoración Verdadera! 2. Cuatro características de la adoración. a. Celebración--Salmos 122:1 b. Desahogo--Mateo 11:29-30 c. Inspiración--Isaías 40:31 d. Preparación--II Timoteo 2:2

C. Instruir a la gente de Dios. Efesios 4:11-16 1. Los creyentes crecen por conocer a. Este es el "¿qué?" de la vida cristiana. b. Es el contenido de las Escrituras. 2. Los creyentes crecen por entender a. Este es el "¿por qué?" de la vida cristiana. b. Son las convicciones correctos.

basadas

en

los

principios

3. Los creyentes crecen por aplicar a. Este es el "¿como?" de la vida cristiana. b. Es el comportamiento desarrollado por el contenido Bíblico que ha aprendido y convicciones establecidas. D. Demostrar el amor de Dios--I Juan 4:7-8 1. ¡El amor de Dios se demuestra por medio de la fidelidad! 2. ¡El amor de Dios se demuestra por medio del compañerismo! II. La Iglesia tiene que ser balanceada con funciones bien delineadas: Una función es la acción principal cual nos mandan las Escrituras y que debe ser practicada por la Iglesia local. A. Compañerismo 1. Explicación: Compañerismo cristiano es compartiendo la vida común. Una participación espiritual con otros creyentes. Es una comunión practica con los hermanos en Cristo. 2. Basado: Salmos 55:14, 119:63, Eclesiastés 4:9-10, Lucas 24:15, Juan 13:34, Hechos 2:42, I Corintios 1:9

B. Adoración 1. Explicación: Adoración es sencillamente honor y veneración dirigido hacia Dios. 2. Basada: Salmos 29:2, 50:23, 95:1-11, Marcos 12:28-30, Juan 4:23, Filipenses 2:10, 3:3, Apocalipsis 4:11 C. Servicio 1. Explicación: Servicio cristiano es el uso de los dones espirituales, talentos, capacidades y tiempo para la causa de Jesucristo. Es una labor espiritual, que se hace públicamente y en privado, la cual hace posible el progreso del ministerio de la Iglesia local. 2. Basada: Éxodo 23:25, Deuteronomio 10:12, Salmo 100:2, Mateo 5:16, Juan 12:26, Hechos 20:18-19, Gálatas 6:10, Efesios 2:10, 6:7, I Timoteo 6:18, Tito 2:7, Hebreos 12:28, Santiago 2:17-18, I Pedro 2:12 D. Misiones 1. Explicación: Misiones eficientes de la Iglesia local es un compromiso de tomar seriamente el mandamiento de Cristo de hacer discípulos por todo el mundo. Una perspectiva de tres dimensiones debe ser considerada--Evangelización, Edificación, y Educación. Misiones, en el verdadero sentir Bíblico, debe ser practicada localmente y al extranjero. Básicamente, las misiones incluirían, fundando Iglesias, ganando almas y haciendo discípulos. La Iglesia tiene que estar comprometida sosteniendo a misioneros (en oración y ofrenda) y desarrollando misioneros de su propia congregación. Una fuerte base local es la clave para los dos objetivos.

2. Basada: Salmos 2:8, 96:3, Proverbios 3:27, Mateo 9:35, 24:14, 28:19, Juan 4:35, Hechos 1:8, 13:2-3, Santiago 1:27 E. Evangelización: Evangelización es compartir el mensaje del evangelio a un mundo perdido. Es la responsabilidad personal que tiene cada verdadero creyente hacia los que no son salvos por medio de la sangre de Jesucristo. Su primera responsabilidad es hacia los que viven en su alrededor. Cinco áreas claves de contacto que debemos proseguir cuidadosamente y con mucha oración son--Ubicación-(donde vivimos) Profesión-- (donde trabajamos) Parentesco-- (los de nuestra familia) Recreo-- (donde nos divertimos) Educación-(donde estudiamos) Evangelización exitosa es a la vez proclamación (la acción por lo cual el incrédulo recibe una clara presentación del menaje esencial del evangelio) y afirmación (el proceso de demostrar y ser el modelo del mensaje cristiano por medio de una vida santa). 2. Basada: Salmo 125:5-6, Proverbios 11:30, Mateo 5:13-16, 28:19-20, Marcos 16:15, Lucas 14:23, Juan 4:35, 15:16, Hechos 1:8, I Corintios 9:22 F. Oración 1. Explicación: Oración, en su forma mas sencilla, es hablar con Dios. Oración es un ejercicio de alabanza, por lo cual agradecemos a Dios por sus provisiones abundantes. También, oración es el medio de pedir cosas de Dios (necesidades y deseos), y presentando otras cosas a Dios (cargas y preocupaciones). 2. Basada: II Crónicas 7:14, Salmo 145:18, Jeremías 33:3, Mateo 6:513, 7:7-8, Lucas 18:1, Hechos 3:1, 4:31, Colosenses 1:9-11, I Tesalonicenses 5:17, Hebreos 4:16, Santiago 5:13-18 G. Edificación

1. Explicación: Edificación es el proceso del crecimiento cristiano y madurez. Es el "edificar" del individuo y a la vez de la Iglesia local. 2. Basada: Mateo 28:19-20, Romanos 14:19, Efesios 4:11-16, 29, Colosenses 1:28-29, 3:16, I Tesalonicenses 5:11, II Timoteo 2:2, 3:16-17, Hebreos 5:11-14 III. El Pastor de la Iglesia tiene que ser de carácter santo y Bíblico en función: A. El pastor debe tener y seguir las cualidades bíblicas del oficio--I Timoteo 3:1-7, Tito 1:6-9 B. El pastor debe ser un hombre de oración--Hechos 6:4 C. El pastor debe ser un hombre de la Palabra de Dios--Hechos 6:4 D. El ministerio del pastor es de ser líder y no de forzar a las ovejas--I Pedro 5:1-3. E. El pastor debe estar dispuesto a pasar mucho tiempo con su gente-Proverbios 27:17, Marcos 3:14 F. El pastor debe siempre estar perfeccionando a los miembros para la obra del ministerio. Los miembros deben ser preparados y animados a ministrar o a servir--Efesios 4:11-12. Resumiendo, La obra del pastor es lo siguiente Proteger, y Perfeccionar a la Grey.

Orar, Preparar, Predicar,

IV. La membresía de la Iglesia debe estar involucrada en el ministerio: A. Cada creyente debe ministrar (servir)--Efesios 4:11-12. B. Los dones espirituales son para usar en el ministerio--I Corintios 12:11, I Pedro 4:10 1. Los dones espirituales ayudan a la vida del individuo a ser útil para Dios--I Corintios 12:14-22 2. Los dones espirituales ayudan a toda la Iglesia--Efesios 4:13-16

3. Los dones espirituales glorifican a Dios--I Pedro 4:11 C. El liderazgo laico debe ser desarrollado para reforzar el ministerio de la Iglesia local— 1. Por medio de la oración 2. Por medio de la enseñanza y predicación desde el púlpito 3. Por medio de enseñanzas especiales: a. Clases para maestros de la Escuela Dominical b. Programas de enseñanza para preparar candidatos para el diaconado c. Clases sobre el discipulado, mayordomía, misiones y la evangelización V. La Iglesia tiene que seguir la Palabra de Dios tocante a la disciplina Bíblica: Los miembros de la iglesia que fracasan en la doctrina (se meten en mala doctrina o herejía) o en su comportamiento (viviendo en pecado) deben de saber que la disciplina hasta el ser expulsado según Mateo 18:15-18 será aplicada. Antes de ser expulsado, sin embargo, será el deber de cualquier miembro de la iglesia que tiene conocimiento de la herejía o mala conducta del miembro amonestarle en amor y corregir al hermano de su error. Si el hermano errante no escucha esta admonición entonces el hermano debe ir acompañado por uno o dos testigos para de nuevo amonestarle en amor y corregir al hermano errante. Si el hermano errante todavía rehúsa escuchar la amonestación será llevado al pastor y los diáconos. Si el errante todavía rehúsa escuchar la amonestación o corrección del pastor (el está aconsejándole de parte de la iglesia), el o ella será expulsado de la iglesia. Miembros expulsados podrán ser restaurados a la iglesia cuando confiesan su error y den evidencia de su arrepentimiento. A. La Palabra de Dios parece presentar cuatro razones para rehusar compañerismo en la iglesia (cual es el paso final en la disciplina en la iglesia.) 1. Inmoralidad de la cual no se han arrepentido (todo juicio moral será basado en la Palabra de Dios, no en la opinión publica) I Corintios 5 2. Herejía doctrinal en la que persiste I Timoteo 1:19-20, Tito 3:10

3. Rehusando reconciliarse con otro hermano (a) en Cristo. Mateo 18:17 4. Manteniendo un espíritu de división el cual resulta en rebeldía a la Palabra de Dios y/o la autoridad que Dios ha ordenado, y el cual promociona el hacer problemas en la iglesia I Corintios 1:10, Romanos 16:17, II Tesalonicenses 3:6, 7, 11 B. También cada miembro debe entender y estar de acuerdo que la disciplina de la iglesia es ordenada bíblicamente basada en: 1. Obediencia a las escrituras las cuales claramente requieren la disciplina de la iglesia. 2. El compromiso de mantener la pureza en la iglesia, quitando la inmundicia del pecado I Corintios 5:6-8, Gálatas 5:9, Efesios 5:27 3. La preocupación en restaurar a los ofensores pecaminosos Mateo 18:15 4. El deseo de evitar que otros miembros pequen I Timoteo 5:20 C. Debe ser notado también que mientras la iglesia bíblicamente tiene que ser firme en su oposición al pecado la iglesia debe disciplinar a los miembros con un espíritu de mansedumbre (Mateo 7:5, I Corintios 10:12, Gálatas 6:1) y debe seguir manifestando este amor hacia los miembros culpables de pecado (II Tesalonicenses 3:15). La iglesia debe perdonar con gran deseo y amor a los que se arrepientan y confiesan su pecado (Lucas 17:3-4, Efesios 4:32). VI. La iglesia tiene que estar dispuesta a contratar personal dedicado y con dones para la obra que pueden servir como el equipo del pastor. A. Los requisitos básicos del equipo. 1. Todo el equipo tiene que ser salvo, bautizado, y un miembro de la iglesia local. 2. Todo el equipo tiene que tener un amor profundo para Dios, un anhelo para servir a Dios y ser obviamente leal al pastor. 3. Todo el equipo tiene que vivir una vida separada del pecado como la Palabra de Dios exige.

B. El trabajo y ministerio del equipo 1. Todo el equipo funcionará según la descripción de su trabajo escrito por el pastor. 2. Todo el equipo será responsable al pastor, o al supervisor bajo la autoridad del pastor. C. Las razones que es necesario tener un equipo 1. Ayudar al pastor en las necesidades y funciones del ministerio. 2. Dirigir programas y ministerios seleccionados de la iglesia. 3. Ayudar al pastor desarrollar los dones espirituales y talentos que se encuentran en la congregación para el propósito de tener un ministerio eficaz. 4. Manejar los muchos deberes de administración en los cuales la iglesia esta involucrada. 5. Asegurar que la iglesia como un entero puede cumplir correctamente su Filosofía del Ministerio. VII. La iglesia debe desarrollar y cultivar un fundamento sólido para la familia. A. La iglesia debe trabajar para establecer varios ministerios los cuales pueden enfocar las necesidades seleccionadas de la familia. 1. Una cuna competente. 2. Un programa activo para niños a. Actividades de la Escuela Dominical b. Soldados de Cristo o ministerios similares 3. Un programa balanceado para los adolescentes. Fíjate en los principios básicos de este ministerio. a. Prevenir en vez de remediar b. Almohadas suaves no hacen hombres fuertes c. Cristo tiene primer derecho a su vida d. Recibirás lo que honras.

4. Un ministerio eficaz invitando a los jóvenes solteros. 5. Un ministerio total para los adultos. a. Paseos para la Escuela Dominical b. Compañerismo de Hombres (para entrenar a hombres en la Palabra de Dios). c. Club de Damas (para entrenar a damas en la Palabra de Dios). d. Retiros para parejas e. Oportunidades de estudiar la Biblia B. La iglesia debe apoyar principios bíblicos que tienen que ver con la familia. C. La iglesia debe estudiar pasajes bíblicos y temas que tratan con la familia. 1. Moralidad 2. Roles y funciones de los dos en el matrimonio 3. Divorcio y/o casarse de nuevo VIII. La iglesia debe realizar cultos públicos que son balanceados en naturaleza y su totalidad: A. Cultos de Evangelización con el propósito de ganar almas y familias nuevas. 1. Predicación de la Palabra de Dios dirigido hacia los que no son salvos ni asisten a la iglesia. 2. La música a. Especiales que tienen que ver con los que no son salvos ni asisten a la iglesia. b. Especiales que compartan un sencillo testimonio del evangelio o un mensaje de como y cuanto Cristo tiene que ver con su vida.

c. La congregación cantará un número limitado de los himnos mas conocidos y con buen ritmo. B. Cultos de celebración o adoración con el propósito de levantar nuestros corazones a Dios en un espíritu de adoración. 1. Predicación de la Palabra de Dios dirigido hacia los creyentes en general. 2. La Música a. Especiales que ministran a corazones de los creyentes.

las

necesidades

y

b. Especiales que causan alabanza y animo para los creyentes. c. La congregación cantará coros e himnos de gozo y canciones evangelísticas. C. Cultos de edificación con el propósito de enseñar a la iglesia. 1. La predicación de la Palabra de Dios dirigida hacia la instrucción y edificación de creyentes. 2. La Música a. Menos música especiales.

congregacional

y

también

menos

b. Especiales y lo que la congregación canta debe enfatizar las grandes verdades que se encuentran en la Palabra de Dios las cuales pueden fortalecer a la iglesia y causarle crecer. IX. La iglesia debe funcionar y ministrar con un énfasis bíblico en la música. A. Siete razones para incluir a la música como una parte mayor de los cultos de la iglesia: 1. La música es una manera de adorar y alabar. Apocalipsis 5:8-12

Salmo 150,

2. La música es un canal eficaz de la instrucción bíblica. Colosenses 3:16

3. La música es evidencia de una vida llena del Espíritu Santo. Efesios 5:18-19 4. La música es un vehículo de servicio cristiano. Salmo 100:1-2 5. La música es una manera apropiada para testificar y expresar su fe en Cristo. Hechos 16:25-30, I Pedro 2:9 6. La música es una indicación de gozo. Santiago 5:13 7. La música es una fuente de consuelo y animo. I Samuel 16:23 B. Propósitos específicos de la música en el culto. 1. Relaja a los visitantes quienes quizás se sienten tensos y/o nerviosos. 2. Preparar los corazones de la gente de Dios para el ministerio de la Palabra. 3. Preparar el corazón del hombre de Dios para la predicación y/o enseñanza de la Palabra. 4. Animar a la congregación a hacer las necesarias decisiones espirituales. C. Guías para la selección y uso de la música. 1. Palabras. Gálatas 5:16-26, Filipenses 4:8 a. ¿Que dice la canción? ¿Cual es su mensaje? b. ¿Son las palabras una fuerza para Dios y la justicia o para Satanás y el pecado? Proverbios 14:34 2. Estilo de vida y testimonio de los escritores y/o cantantes. Proverbios 13:20, Mateo 12:34, Romanos 12:1-2, I Tesalonicenses 5:22 a. ¿Está el estilo de vida y el testimonio de los escritores y/o cantantes de acuerdo con la Palabra de Dios? b. ¿Que piensan los escritores y/o cantantes de Cristo? Mateo 22:42, II Juan 7-11

3. Efecto en los oyentes Juan 14:27, I Corintios 6:19-20, 15:33 a. ¿A que motiva ser o hacer la canción? b. ¿Puede esta selección ser utilizado como un vehículo de crecimiento espiritual y de bendición a los creyentes? II Pedro 3:18 4. Apropiado a. ¿Es la selección musical apropiada para este culto u ocasión? b. ¿Está de acuerdo esta selección con la "Filosofía de Ministerio de Este Culto en Particular"? I Corintios 14:40 D. Conclusión No puedes edificar una iglesia grande y poderosa sobre la música pero tampoco puedes edificar una iglesia grande y poderosa sin la música. X. El templo tiene que servir como un testimonio positivo para Cristo Jesús. A. Aun que el templo no es la iglesia debe todavía exhibir el corazón y actitud de la gente que asisten allí. 1. El templo debe estar limpio. 2. El templo debe mostrar orden. 3. El templo debe ser atractivo. 4. El templo debe ser algo que podemos usar. 5. El templo debe ser mantenido en buenas condiciones. B. Aun que el templo no es la iglesia todavía debe ser tratado con dignidad y respeto porque sirve como el centro mayor de adoración de la gente de Dios que pertenecen allí. 1. Trata a la propiedad de Dios (sus edificios, maquinas, muebles, etc.) con mas cuidado que tendrías aun con tus propias cosas.

2. Enseña a los niños a respetar la propiedad de Dios, reconociendo los años de trabajo, de diezmos y ofrendas sacrificadas que han hecho todo esto posible. XI. La filosofía de la iglesia podríamos resumirla con las siguientes diez oraciones. 1. La iglesia desea volver los espectadores en siervos. 2. La iglesia desea tener una estrategia para su futuro y su ministerio en vez de girar alrededor de los eventos y eventualidades. 3. La iglesia desea enfatizar el ministerio en vez de mantener lo que tenemos. 4. La iglesia desea ver a Cristo dar significado a toda nuestra acción y espiritualidad en nuestra actividad. 5. La iglesia desea tener el Espíritu Santo determinar nuestra estructura. 6. La iglesia desea comprometerse con gente y no con programas. 7. La iglesia desea honrar la Palabra de Dios sobre todas las palabras de hombres. 8. La iglesia desea ser fiel a su mandato el cual es defender la verdad, no ofender a gente. 9. La iglesia desea reconocer que el mensaje es fijo pero los métodos son flexibles. 10. La iglesia desea ser un iglesia que ama, y no que juzga.

2. Ganando almas personalmente. GANANDO ALMAS PERSONALMENTE Introducción R. A. Torrey dijo una vez “Mi única ambición en la vida es ganar tantas almas como posiblemente pueda”.

Esto es lo que vale más la pena en esta vida. En las páginas siguientes encontrarás un acercamiento bíblico al evangelismo personal. Este manual significa más que una serie de lecciones, en lo que es ganar almas personalmente. Este es el libro “como hacer”. El propósito es como mover y equipar a los cristianos para ganar almas. El Señor Jesucristo tiene el poder de salvar y transformar vidas y él ha escogido usar instrumentos humanos para llevar el mensaje del glorioso evangelio a los hombres moribundos . Es la responsabilidad de cada cristiano de ir a los perdidos en el poder del Espíritu Santo, y darles una presentación clara del evangelio y traerlos al lugar de la decisión, de recibir o rechazar al Señor Jesucristo como su Salvador personal. Cada cristiano es uno de dos: un camino o un estorbo; un camino, en el esparcimiento de esa gran comisión. Deja que el Señor te use para ganar almas.

CAPITULO I

¿Por qué cada cristiano deberá procurar ganar almas? Es la responsabilidad y ministerio de cada cristiano, ser un ganador de almas. Han pasado casi dos mil años, desde que nuestro Señor dejó a la iglesia en la sagrada responsabilidad de llevar al mundo el mensaje del evangelio. Sin embargo, muy pocos de los que dicen ser sus seguidores lo han obedecido. Démosle una mirada fresca a lo que él nos ha encargado hacer.

El mandamiento de Cristo. Nuestro motivo más alto en el asunto de ganar almas debe de ser el amor por nuestro Salvador, y de este amor viene el deseo de obedecer sus mandamientos. Este mandamiento ha sido dado muy claro: “Por tanto id y adoctrinad a todos los gentiles, bautizándoles en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Enseñándoles que guarden todas estas cosas y he aquí yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo. Amén.” Mateo 28:19-20 “Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” Marcos 16:15 Y díjoles: “Así está escrito, y así fue necesario que este Cristo padeciese y resucitase de los muertos al tercer día, y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y la remisión de pecados en todas las naciones, comenzando de Jerusalén”. “Y vosotros sois testigos de estas cosas…” Lucas 24:46-48. Entonces les dijo Jesús otra vez: “Paz a vosotros; como me envió el Padre, así también yo os envío” Juan 20:21, “más recibiréis la virtud del Espíritu Santo que vendrá sobre vosotros; y me seréis testigos en Jerusalén, y en toda Judea, y Samaria, y hasta lo ultimo de la tierra” Hechos 1:8 ¿Por qué obedecerle? Muy seguido el motivo más alto por evangelismo personal, es mencionado como la necesidad de la humanidad, pero de acuerdo con la Palabra de Dios, nuestro motivo más alto debe ser al amor por Cristo. Pablo dijo: “Porque el amor de Cristo nos constriñe” II Corintios 5:14. Cristo fue motivado para ir al calvario por amor, y deberá ser el amor por él lo que nos motive para testificar a otros. Pablo fue constreñido para ir a buscar almas, por su amor a Cristo. Amor por Dios. A veces la corrupción de los hombres nos detiene de amarlos, como deberíamos. Si nuestro motivo por evangelismo es nuestro amor por los hombres perdidos ese motivo no será bastante fuerte, amor por Cristo es el único motivo que nos impulsa en presencia de grandes contratiempos, derrotas o peligros. Cuando nuestro motivo por evangelismo es amor por Cristo, no renunciaremos a nuestra tarea cuando somos rechazados por pecadores. Cristo preparó a sus discípulos. El Señor Jesucristo preparó a sus discípulos para ganar almas, usando la motivación correcta. El dijo: El que tiene mis mandamientos y los guarda, aquél es el que me ama” Juan 14:21. El Señor Jesús conocía la fuerza del amor. Amor engendra amor. Cristo amaba a sus discípulos y en la base de su amor por él, él los comisionó con la vital responsabilidad del evangelismo mundial. Nuestra obediencia a su mandamiento es la prueba real de nuestro amor por él. La base en la Biblia para ganar almas, es amor. La Palabra de Dios dice claramente: Porque este es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos. I de Juan 5:3

La condición del hombre perdido. Un doctor de nombre Jonas Salk, dedicó la mayor parte de su vida al descubrimiento de una vacuna para curar la enfermedad del polio. Los esfuerzos de su vida fueron recompensados por el descubrimiento de la vacuna. Imagínate por un momento que después que el doctor Salk descubrió la vacuna él la guardó y privó de su uso a todos los que la necesitaban ¿increíble?, ¡sí!, pero hay multitudes de cristianos con la humanidad perdida y muriéndose a sus puertas y ellos nunca hacen un esfuerzo de decirles del Salvador. Síntomas de la enfermedad del pecado. El trágico síntoma del pecado nos llama a ganar almas. Los síntomas del pecado son muchos. Los pocos, que la mayoría de nosotros reconocemos son: Vaciedad. Los hombres sin Cristo, están vacíos, no hay manera de que una vida pueda ser completa sin que tenga a Cristo. La Biblia dice: “Más a todos los que le recibieron, dióles potestad de ser hechos hijos de Dios, a los que creen en su nombre”, Juan 1:12. Es cuando los hombres reciben a Cristo, que su vida vacía se llena. Sin sentido. Multitudes podrían ser llamadas “sin propósito”, “vagabundos”. El hombre perdido no tiene propósito o dirección. El posiblemente pueda encontrar un significado temporal a una meta material, pero el más profundo deseo de su corazón no encontrará satisfacción sin Cristo. El Señor Jesús dijo: “Yo soy el camino, …” su camino es el único camino que puede tener significado en su vida. Temor a la muerte. Para un hombre perdido, la muerte, es un espantoso viaje hacia lo desconocido. Para el hombre cristiano, esa es la puerta que se abre hacia una eternidad con el Señor Jesús. El ha prometido que nos dará gracia y fuerza para vencer ese gran temor, él dijo: “Yo soy la resurrección, y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto vivirá, y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente”. Juan 11:25,26. Falta de paz interna. Recientemente escuché que alguien dijo, que sentía como si estuviera viviendo en una olla de presión. El hombre perdido no tiene paz en su alma. El Señor Jesús es el único que puede traer o dar esta paz. El dijo a sus discípulos después de que les anunció que él iba a ser crucificado: “La paz os dejo, mi paz os doy; no como el mundo la da, yo os la doy, no se turbe vuestro corazón ni tenga miedo.” Juan 14:26 Soledad. No hay un amigo como Jesús. El hombre perdido, no tiene este compañero constante que nunca lo dejará ni lo desamparará. La enfermedad del

pecado, se refleja en nuestra sociedad con muchos síntomas. Cristo tiene cuidado de algo más que los síntomas. El es la respuesta para la enfermedad. La Biblia declara. La Biblia es muy clara en decir la condición de los que están sin Cristo. Ellos están: Perdidos. “Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido”. Lucas. 19:10 Pereciendo. “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda más tenga vida eterna.” Juan 3:16 Bajo la ira de Dios. “El que cree en el Hijo, tiene vida eterna; más él que es incrédulo al Hijo, no verá la vida sino que la ira de Dios está sobre él”. Juan 3:36 Ya ha sido condenado. “El que en él cree no es condenado, pero él que no cree ya es condenado, porque no creyó en el nombre del unigénito Hijo de Dios” Juan 3:18 Sin esperanza. “Que en aquel tiempo estábais sin Cristo alejados de la república de Israel, y extranjeros a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo”. Efesios 2:12 Cegados por el Diablo. “Que si nuestro evangelio está aún encubierto, entre los que se pierden está encubierto; en los cuáles el dios de este siglo cegó los entendimientos de los incrédulos para que no les resplandezca la lumbrera del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios”. II Corintios 4:3-4 En camino al infierno. “Entrad por la puerta estrecha, porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a perdición, y muchos son los que entran por ella”. Mateo 7:13 Muertos en pecado. “Y de ella recibísteis vosotros, que estábais muertos en vuestros delitos y pecados.” Efesios 2:1

El silencio es pecado. Porque nosotros conocemos al Señor Jesús como nuestro Salvador personal, estamos endeudados de decir a los incrédulos del Señor Jesús. Tener quiere decir deber. El apóstol Pablo escribió en Romanos: “A griegos y a bárbados, a sabios y a no sabios soy deudor. Así que cuanto a mí presto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma. Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es potencia de Dios para salvación a todo aquel que cree, al judío primeramente y también al griego.” Romanos 1:14-16 El mundo no nos debe “nada”, pero nosotros, debemos al mundo el mensaje de salvación. Hay en la Biblia en el libro de II de Reyes capítulo 7 una historia muy conmovedora, que ilustra el pecado del silencio. Empezando en el verso 3, la historia nos dice de cuatro leprosos que se sentaban a la puerta de la entrada de la ciudad. Su ciudad, la ciudad de Samaria, la cual estaba bajo el sitio de la armada Siria. La gente dentro de la ciudad se estaba muriendo de hambre, estos leprosos decidieron dejar su lugar a la puerta de la ciudad y entrar al campo del enemigo. Para su agradable sorpresa la armada Siria había sido espantada por el Señor, y los leprosos encontraron todo lo que necesitaban. De repente ellos se acordaron de las multitudes muriéndose de hambre dentro de la ciudad, y ellos dijeron uno al otro; no hacemos bien, hoy es día de Buena Nueva, y nosotros callamos. II de Reyes 7:9 Ellos regresaron a la ciudad y dieron las buenas nuevas. Asimismo nuestro día es un día de mucha tragedia, pero hemos encontrado buenas nuevas. Es un pecado terrible si callamos, cuando tenemos las buenas nuevas, que el mundo necesita escuchar. Es precisamente tan peligroso y pecaminoso no hacer nada, cuando está en nuestro poder hacer bien, así como es tan peligroso ir y deliberadamente hacer mal. Santiago 4:17 Fuera de las excusas. La única manera de empezar a ganar almas es ¡empezar! Muchas han sido las excusas ofrecidas por los hombres, por no intentar ganar almas. Estas excusas no nos sostendrán cuando estemos parados delante de Dios. La mayoría de cada excusa ofrecida va a caer dentro de las siguientes categorías: ¿Es realmente mi responsabilidad? Ya ha sido claramente establecido que ganar almas es la responsabilidad de cada cristiano. El Señor ha puesto este asunto altamente importante en nuestras manos. El ha escogido a los hombres para publicar la historia del evangelio. Solamente los rescatados pueden decir la historias de un alma puesta en libertad. Como cristianos si no decimos a otros como ser

salvos, la profunda y simple verdad es que ellos ¡nunca oirán! Esta es nuestra responsabilidad. Los hombre no escucharán. Aun cuando esta es la verdad, de que hay una grande indiferencia de parte de la gente; sin embargo, muchos pondrán atención. Hay muchos que están esperando escuchar las buenas nuevas. Algunos hablan del temor de ofender a los que no quieren oír, cuando el problema real no es nuestro temor de ofender a otros, sino que es nuestro temor de que nos ofendan. Recuerden, nosotros tenemos una historia que contar, aunque ellos no quieran poner atención. Se nos ha dado Divina Autoridad para decir a otros del Salvador. Tenemos la autoridad, la autoridad dada por Dios de ir a todo el mundo y predicar el evangelio a toda criatura. No necesitamos esperar para tener una invitación, ya se nos ha dado la comisión de ir. Nuestro Señor conoce la necesidad de la humanidad, y él nos ha llamado para hablar de esa necesidad. Los hombres de dan cuenta que hay algo que falta en sus vidas, aunque ellos no reconozcan cual es el factor o elemento que les hace falta. Es nuestra responsabilidad como cristianos, enseñarles que Cristo es lo que ellos necesitan. No tengo la capacidad. Posiblemente en ninguna otra área muchos de nosotros sentimos la debilidad o incapacidad, más que en esta área. Sin embargo, nuestro Dios nos ha encomendado ir. El nos ama tanto que él no nos daría una responsabilidad, sin proveer para nosotros el poder necesario para la tarea encomendada. Nuestra fuerza viene del Espíritu Santo que mora en nosotros. El nos da el poder, El nos hace capaces, El habla a través de nosotros cuando nos rendimos a él. El nos da la sabiduría que tan desesperadamente necesitamos. Nuestro temor de fracasar puede ser usado para empujarnos a tener una total dependencia en el Espíritu Santo, para permitirnos ganar almas. El ha dicho seguidme y os haré pescadores de almas. Nuestro propósito de ganar almas, nuestro programa, es buscar a los perdidos. Nuestra posición, es aquella de Embajadores de Cristo. Nuestra proclamación, es el evangelio, y nuestro poder, es el Espíritu Santo. Preguntas para consideración. ¿Cuál debe ser nuestro motivo más alto para ganar a los perdidos? ¿Cuáles son los síntomas que caracterizan a los hombres sin Cristo, y como la vida cristiana hace frente a estas necesidades? ¿Cuáles son las excusas que ofrecen los cristianos para no ganar a los perdidos? ¿Tienen algunos cristianos excusa para no ganar almas? Si o no. Da las razones de tu respuesta.

CAPITULO II

El proyecto de Dios para su relación con todos los hombres. Antes de que nuestro Señor volviera al cielo, él dejó a sus discípulos con su plan para evangelizar el mundo. El dijo: “Por tanto id, y adoctrinad a todos los gentiles, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado y he aquí yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo” Mateo 28:19-20 Debemos de ver otra vez como es que ésta “Gran Comisión” debe de ser llevada. Debe de ser hecha prontamente, con persistencia y poder. Pero, ¿cómo? Casi han pasado dos mil años, desde que nuestro Señor dejó a la iglesia con la responsabilidad de llevar el evangelio al mundo, y esa responsabilidad aún no ha sido cumplida. No solamente en lejanas tierras hombres aún viven y mueren sin oír la presentación clara del evangelio, pero también en las vecindades de la iglesias en nuestra propia tierra hombres viven sin Dios y sin el mensaje del evangelio. No necesitamos una nueva comisión. La iglesia no necesita una nueva comisión de Cristo. Este no es el día para hacer cosas nuevas. Debe de ser el día de obedecer el mandamiento ya dado, de ir a todo el mundo y predicar el evangelio a toda criatura. Con las manos marcadas por los clavos, el aún está apuntando a millones que nunca han oído. La iglesia creyente en la Biblia, debe de obedecer el mandato de la Biblia que él ha dado. La iglesia que aún está tratando de decidir en cual área poner el énfasis, simplemente no está obedeciendo el plan que Cristo les ha dado. El Señor Jesucristo dijo: Id y ganad almas. El plan paso por paso. El Señor tiene una descripción, para que nosotros sigamos en el trabajo que nos ha dado para hacer. Los discípulos primitivos siguieron este plan, y dentro de una generación sin nuestras facilidades modernas de viajar, y sin nuestro métodos modernos de la publicación de la Palabra de Dios; el mensaje del

evangelio viajó de labio a oído hasta que finalmente tocó los límites del imperio Romano. •

Paso uno – Id. Cristo dijo; “Por tanto id…” nosotros debemos ir a donde está la gente, de casa a tienda, a calle, diciéndole a la gente como ser salvo. Esta palabra id, es la única palabra que hace la gran diferencia en ganar almas. Muchos cristianos sinceros, han hecho esta pregunta que puede ser considerada completa o decisiva, pero hay algunas cosas de gran importancia que deben ser mencionadas. Debemos estar seguros de nuestra propia salvación y un conocimiento absoluto de la Palabra de Dios; pero, hay una cosa que es muy simple, sin embargo, absolutamente necesario. Debemos de ir a buscar almas, muchos cristianos tienen seguridad de su salvación, han memorizado el plan de salvación, se han dado cuenta de que los perdidos van rumbo al infierno, y aún han asistido a sesiones donde entrenan bien como ganar a los perdidos; pero, ellos nunca salen a ganar almas. Debemos decidir ir, sino estamos yendo estamos desobedeciendo a Dios, El nos ha ordenado ir, nuestro ojos serán abiertos a las necesidades de los hombres mientras vamos. Mientras vamos, vemos la desesperación de la humanidad sin Cristo, nuestros corazones están pesando sólo mientras vamos. Compasión, no viene por el hecho de estudiar como ganar almas, no por la sesiones de entrenamiento en ganar almas, viene de ganar almas. Muchos cristianos tienen todas las verdades bíblicas claramente establecidas en sus mentes, pero poseen corazones fríos, porque no van. Si deseamos una carga por almas, entonces debemos ir a buscar almas. Cuando Dios hizo a cada creyente un mensajero del evangelio, él tenía en su corazón, no solo la salvación de los perdidos, pero de los creyentes. Para un cristiano, descuidar ganar almas, y no salir a buscar almas quiere decir, que se volverá frío, duro, y sin gozo. Estancamiento engendra decadencia (putrefacción). La Palabra de Dios dice: “Irán andando y llorando los que llevan la preciosa simiente, más volverán a venir con regocijo, trayendo sus gavillas.” Salmos 126:6

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Paso dos – explicar el plan de salvación. El Señor Jesús dijo: “…Enseñad a todas la naciones…” Debemos de dar una clara presentación del evangelio. Mucha gente ha perdido su efectividad en ganar almas, por intentar usar terminología que común, y ordinariamente, gente corriente no comprende. Usemos, términos y lenguaje que la gente comprenda. Esto, absolutamente no es un llamado para un lenguaje vulgar de la calle, y lengua común que están usando los llamados “evangelistas”; pero, antes bien, una simple súplica por el uso de términos que la gente común entienda. La persona ganadora de almas no debe intentar ser teólogo, pero,

antes bien un testigo del poder de la salvación del Señor Jesucristo. Recuerden que, nuestro mensaje, es más que proclamar los hechos acerca del Señor Jesús. Esto debe incluir, un llamado al compromiso personal y rendición al Señor Jesucristo. •

Paso tres- Bautizarlos. La Biblia enseña que el primer paso de obediencia para el Nuevo cristiano, es el paso del bautismo. El Señor Jesucristo dijo: “…bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo…”

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Paso cuatro – enseñarles. Debemos de alcanzar a la gente y enseñarles. Esa es la tarea de la iglesia local. Cada nuevo cristiano, deberá estar fielmente involucrado en la iglesia local creyente y predicadora de la Biblia. El Señor dijo: Nuestro trabajo no está terminado hasta que el evangelizado se convierta en evangelista.

Nuestros grandes fracasos. La comisión dada en Mateo 28: 19-20, no solamente nos enseña el plan paso por paso, de lo que debemos hacer; también nos (dirige) enseña nuestros más grandes fracasos en el trabajo de ganar almas. Nuestro primer fracaso. Nuestro primer fracaso, es tener buenas intenciones, pero, buenas intenciones no lleva a nadie a Cristo. Debemos de ir, nadie va a ser salvo a menos que vayamos primero. Nuestro Segundo fracaso. Nuestro Segundo y más grande fracaso en el trabajo de ganar a los perdidos, es que cuando vamos, no damos una clara presentación del mensaje de salvación. Es muy fácil ser despistados. Los hombres deben de ser confrontados con el mensaje de Cristo y ser traídos al lugar, de poner su fe y confianza personal en el plan de la salvación. Nuestro tercer fracaso. Mucha gente habla a los perdidos acerca de Cristo, y de esos perdidos, algunos confían en él para la salvación, pero, nunca dirigen a ese convertido nuevo a seguir a Cristo en el bautismo del creyente. Este es nuestro tercer fracaso grande. NO está bien llevar a una persona a Cristo, y nunca enseñarle a esa persona que debe ser bautizada. Nuestro cuarto fracaso. El Señor Jesús nos ha enseñado que después de la salvación, el nuevo cristiano debe de ser enseñado en las cosas que él nos ha mandado. Es nuestra responsabilidad, trabajar con esos bebés en Cristo, enseñándoles las cosas de Dios y manteniéndoles haciendo que fielmente asistan a la iglesia. Nosotros

fallamos muy seguidamente en esta área, al seguir el mandamiento de Cristo Jesús. Relaciones con toda la gente. Cada individuo con los cuales nos ponemos en contacto, puede encontrarse en una de estas cuatro áreas. Primero. La persona a la cual nadie ha buscado. Debemos de proponer en nuestro corazón de ir y buscarla y ganarla para Cristo. Segundo. El hombre que ha sido buscado pero, nunca ha sido salvo. Debemos dar a este individuo una presentación clara del evangelio para que acepte a Cristo como su Salvador personal. Tercero. El cristiano que nunca ha sido bautizado. Hay mucha gente que ha recibido a Cristo como su Salvador personal pero nunca lo ha seguido en el bautismo del creyente, desde que fue salvo. Debemos de enseñarle por la Palabra de Dios, que el primer paso de obediencia para el Nuevo cristiano es el paso de identificarse él mismo, con Cristo y su Iglesia, siguiéndole en el bautismo. Cuarto. La persona que no está fielmente asistiendo a la iglesia local, la iglesia creyente en la Biblia. Mucha gente dicen que han recibido a Cristo como su Salvador personal, pero que no asiste a la iglesia creyente local fielmente. El Señor Jesús dijo: “Enseñándoles que guarden las cosas que os he mandado…” Aquí es donde entra la iglesia local creyente en la Biblia, para crecer en la gracia y conocimiento del Señor Jesucristo. Cada uno de las personas con las cuales estamos en contacto en cualquier parte del mundo, cae en una de las cuatro categorías que siguen: Primero – en el que nunca ha sido traído a Cristo. Segundo – en la persona a la que se le ha hablado, pero aún no es salva. Tercero – en el individuo que ha sido buscado, y ha sido salvo, pero nunca ha seguido al Señor Jesucristo en el bautismo del creyente desde que fue salvo. Cuarto – esta es la persona que ha sido buscada, salvada, y bautizada, pero no está asistiendo fielmente a la iglesia local creyente que predica la Biblia. En Mateo 28:19-20 El Señor Jesús ha dado un plan o proyecto, para tratar con toda la gente. Para llevar este plan que él ha prometido que necesitamos su poder, y su presencia. Preguntas para consideración. ¿Cuáles son los pasos que el Señor Jesús ha dado, para seguir y alcanzar a los perdidos? ¿Cómo adquiere un cristiano un peso, o carga por los perdidos?

CAPITULO III

Cristo nuestro ejemplo. El Señor Jesucristo es nuestro supremo ejemplo en ganar almas. Su pasión consumidora era buscar y salvar a los perdidos. El motivo detrás de su trato con toda la gente, era ganarlos para él mismo. El fue el próspero ganador de almas. Si deseamos ser prosperados en el trabajo de ganar almas para él, debemos de estudiar su vida y su trato con los perdidos. Es imposible describir al Señor Jesús adecuadamente, como un Ganador de almas, pero, es necesario para nosotros encontrar las cosas demostradas con su vida y ministerio que necesitamos hacer, en orden, de este tan importante trabajo. El nos ha llamado a ganar almas. Con esto en mente, tenemos una de las historias más familiares en la vida del maestro ganador de almas, y tratemos de encontrar en ello todo lo que nos ayudará para ganar a los perdidos. El ejemplo que hemos escogido, se encuentra en el capítulo cuatro del evangelio de San Juan, cuando Jesús habla con la mujer en el pozo. El le dijo a ella, de su poder, para darle vida eterna. Juan 4:13.

Estar enfermo y no tener curación, es un estado sin esperanza, por un tiempo; pero, estar enfermo en pecado y no tener un Salvador, es un estado sin esperanza, para la eternidad. Cristo es nuestra esperanza. El tiene el poder de darnos vida eterna. Los perdidos deben de ser hechos consientes de ello. El la dirigió para despertar su necesidad espiritual. Juan 4:16-18 Necesitamos un doctor cuando estamos enfermos. Entonces, nosotros nunca buscamos un Salvador, hasta que nos damos cuenta que estamos con una enfermedad de pecado. Los hombres deben de ser hechos consientes de su necesidad espiritual. El rehusó ser desviado de su propósito. Uno de los trucos de Satanás es desviar al ganador de almas. Juan 4:19-26. Cristo estaba tan consumido por su propósito que él rehusó ser desviado de él. Ella confió en él como su Salvador y empezó a ganar almas. Juan 4:28-30 Esta es la Victoria, esta es nuestra razón para testificar, para ganar a los perdidos. Nuestra meta debe de ser, ver salvos a los perdidos y que ellos digan a otros del Salvador. Hay un número de cosas que se encuentran en la vida del Señor Jesús, al principio de los versos del capítulo cuatro, dirigiéndonos hacia su conversación con la mujer en el pozo, que necesita estar en la vida de los que desean ganar almas. El se apartó de su camino para ganar almas. El no tomó la ruta normal en este viaje. El se apartó de su camino para hablar con esta pecadora y perdida. La Biblia declara “… le era menester pasar por Samaria”. Hay aquí una divina compulsión, sentimos su interés por esta mujer perdida. La mayoría de nosotros está deseoso de testificar a la gente perdida, si es que cruzan nuestro camino y así encontrar a los que no son salvos. No debemos solamente aprovechar las oportunidades, debemos de proveerlas. El estaba interesado en toda la gente. La mujer de este capítulo, no es exactamente el tipo de persona que la mayoría de las iglesias están buscando. Si deseamos la semejanza de Cristo en ganar almas, debemos de dejar de considerar el adaptarlos a nuestras iglesias, debemos dejar de preguntarnos ¿de quién somos responsables? Debemos de amar a toda la gente. El habló con ella acerca de su alma aunque, él no sentía que le agradara. La Biblia dice: “… estaba pues, Jesús cansado, del camino…” él estaba agotado. El mayor número de nosotros, hacemos solamente lo que sentimos que queremos hacer: oramos, leemos nuestras biblias, y testificamos cuando sentimos que queremos hacerlo. El Señor Jesús se elevó por encima de su cansancio, y habló con esta mujer, nosotros debemos aprender a seguir su ejemplo, y elevarnos sobre nuestra sensibilidad y hacer lo que es correcto, ya

sea que sintamos que queremos o no. Debemos de vivir por principios y no por sentimientos. Si verdaderamente hemos nacido de Nuevo, tenemos dentro de nosotros el secreto de un próspero o dichoso ganador de almas. El maestro ganador de almas, el Señor Jesús, vive en nosotros. El hablará a través de nosotros, y hará que hagamos lo que debemos hacer en el trabajo de ganar almas, mientras rendimos nuestras vidas a él. Preguntas para consideración. ¿Cuáles son las tres cosas que caracterizó al Señor Jesús, al ganar a la mujer samaritana? ¿En cuáles de estas áreas necesitas trabajar más en tu vida?

CAPITULO IV

Areas críticas al ganar almas. En el trabajo de ganar almas, hay un número de áreas críticas que los ganadores de almas necesitan reconocer. Una lista larga puede posiblemente ser dada en este punto, pero actualmente los partes más duras al ganar almas, personalmente, caen en tres categorías. Si podemos prepararnos para estás tres áreas, estaremos fuertes para prevenir lo que podría ser un fracaso. El acceso. Alguien ha dicho, “tenemos solamente una oportunidad para dar una buena impresión”. Muchos cristianos con buenas intenciones, son derrotados en su intento de ganar almas, porque fallan al dar una primera y buena impresión. Si el evangelio ofende a una persona, no hay nada que se pueda hacer, pero si nuestra manera de presentar el evangelio es ofensiva, podemos cambiarla.

Debemos de aprender, una mejor manera de abrir una conversación con una persona no salva. Déjame ofrecer las siguientes sugerencias: Moverse hacia la persona con un propósito, sonreír, estar entusiasmado al dar tu nombre, mencionar lo que andas haciendo, ofrecer material escrito, empezar una conversación casual. Durante el acercamiento, o acceso, si alguien es rudo o ruda hacia el ganador de almas, debemos de recordar lo que Dios dice en su Palabra, “la blanda respuesta quita la ira…” Proverbios 15:1, muy cortésmente pedir disculpas a la persona y dulcemente o suavemente, declarar otra vez tu propósito. Cambiar la dirección de la conversación a cosas espirituales. Satanás se complace cuando hablamos y hablamos con personas que no son salvas y nunca les damos una clara presentación del evangelio. Debemos discernir la verdadera condición espiritual del individuo antes de poder ayudarlo, y en orden; para que esto pueda lograrse, debemos de encaminar la conversación a cosas espirituales. Una vez, que la conversación se ha encaminado al asunto espiritual, entonces puede darse el plan de salvación. Algunas sugerencias para dar la vuelta a la conversación a cosas espirituales, son las siguientes: • • • • •

Asistencia a la iglesia. Condición mundial. Criar hijos. La eternidad. Estudio de la Biblia, etc.

Para un claro acceso a este asunto, debe de ser seguido por una simple pregunta: “¿Haz tú alguna vez invitado personalmente al Señor Jesucristo, a que entre en tu corazón?” o “¿Sabes tú que si murieras hoy que irías al cielo?”

Tirando la red. Después de que el plan de Salvación ha sido dado, la persona no salva debe de ser traída al lugar de decisión, de confiar en Cristo allí mismo como su Salvador. Cuando presentamos el evangelio tenemos la responsabilidad de pedir, rogar, un veredicto o una respuesta, no hay terreno neutral. El hombre debe de recibir o rechazar al Señor Jesucristo. El Señor Jesús dijo: “Venid en pos de mí y os haré pescadores de hombres.” La crisis para los pescadores se da al desembarcar el pescado, ya sea por red o por línea. Así es con los pescadores de hombres. Ellos pueden localizar los peces y darles el evangelio, pero la crisis es traerlos a tierra y desembarcarlos. La persona no salva debe ser traída, al lugar donde personalmente debe aceptar a Cristo como su Salvador. Recuerden que la mayoría de la gente, (están) o son completamente ignorantes, del simple plan de Dios para salvación.

Ellos no saben que todo lo que es necesario, es poner su fe en el trabajo terminado de Cristo para ser salvos. La gente no sabe como orar. Ellos no entienden la fraseología común cristiana, como: “Vuelve al Señor”, “salvado”, “nacido otra vez”. Debemos de ser capaces de explicarles con la ayuda del Espíritu Santo, exactamente que es lo que deben hacer, en orden, para ser salvos. Aquí hay algunos pasos a seguir que pueden ayudar. Asegúrate que ellos entiendan el plan de salvación. Pregunta: ¿Crees tú que debes de ser cristiano? Pregunta: ¿Crees tú que Dios sostendrá su palabra y te salvará si tú le pides? Declara: Oremos: -Justo- empieza a orar no una oración larga, no digas amén. Instruye a la persona como orar. - Las cabezas permanecen inclinadas, ojos cerrados. - Si es necesario dirige en oración. - Pregunta si han orado por el perdón de sus pecados, y para recibir a Cristo. - Dirígeles a la Palabra de Dios (Romanos 10:13). - Somos salvos por fe, no por lo que sentimos. Algunos tendrán más dificultad en esta área, que otros. Recuerden, que Dios quiere usarnos para llevar el evangelio a los perdidos. El nos ayudará, para vencer nuestras dificultades. Preguntas para consideración. ¿Qué es lo que queremos decir cuando decimos que una cosa en particular al ganar almas es una área crítica? Hacer una lista de las tres áreas críticas al ganar almas, y explicar las maneras en que podemos mejorar en estas tres áreas. ¿Cuál área es la más delicada o crítica para ti? ¿Por qué?

CAPITULO V

Venciendo el temor al ganar almas. Nos damos cuenta como cristianos que debemos de testificar a otros. Hemos sido mandados o enviados por Cristo. En adición a esto, sentimos en nuestros corazones un llamado interior para testificar, por lo que hemos experimentado en nuestras vidas. Esto es realzado, cuando cada día estamos en contacto con individuos que están viviendo vidas sin sentido y sin esperanza. Sin embargo tenemos temor. Temor ¿de qué?

Hay un número de temores que incomoda a la gente, cuando viene el asunto de ganar almas. El temor de rechazo personal. Muy seguido, la gente confiesa que no testifican a otros por temor de ofenderlos. El problema real no es que tengamos temor de ofender a otros, nuestro temor es que la gente nos vaya a ofender. El temor a su diferente modo de vivir. Hemos desarrollado en nuestras mentes el concepto de que ciertos individuos no pondrán atención, no escucharán lo que tenemos que decirles acerca de Cristo. Algunos tienen temor de los ricos, otros tienen temor de los educados, otros temen testificar a los que tienen la apariencia de una cultura rebelde, en nuestra sociedad. Recuerden, no es nuestro negocio juzgar y adivinar que individuos oirán o escucharán, y quiénes no lo harán. Es nuestra responsabilidad, dar el mensaje del evangelio a todos los hombres. El temor de no saber como ganar almas. Si siempre vamos a ganar almas, debemos de empezar en cierto punto. En mi vida empecé por pasar folletos, más tarde empecé por una breve presentación de mi propio testimonio personal. Todo el tiempo estaba tratando de aprender un método simple para explicar a un individuo que él estaba perdido, que Cristo murió por sus pecados, y que él podría ser salvo poniendo su fe en el trabajo terminado de Cristo en la cruz. Yo simplemente memoricé unos pocos pasajes de la escritura que señalaba cada cosa que el pecador debía ver. Yo aprendí como localizar estas escrituras en el Nuevo Testamento, leerlas al no salvo, y hacer un pequeño comentario de explicación acerca de cada uno. Cualquiera puede ir aumentando cosas a cada principio como este. El punto es que tenemos que empezar en alguna parte. El temor de fracasar. Muchos cristianos tienen una idea errónea del significado de éxito en ganar almas; no hemos fracasado cuando la persona a quién hemos testificado rechaza a Cristo, si hemos ido en el poder del Espíritu Santo, hemos dado una clara presentación del evangelio y traído al individuo al lugar de poner su fe en Cristo para ser salvo, entonces eso es todo lo que podemos hacer. Sería un fracaso si no hubiéramos buscado a ese perdido. Temor es una cosa común. El cristiano que desea ganar almas, necesita aprender que el sentimiento de temor es un sentimiento muy común, puede ser controlado, y aún usado como una gran ventaja. Yo personalmente sentí por mucho tiempo, que yo era un pecador terrible, porque tenía temor cuando me dirigía a testificar. La verdad aún tengo muchos de esos temores, la diferencia es que he aprendido que son sentimientos muy normales y que Dios hará que los venzamos.

El Espíritu Santo estará trabajando. El Espíritu Santo tiene posesión de cada cristiano, y le da el poder de decir a otros del Salvador. El Espíritu Santo nos ayudará a vencer el temor. La Biblia dice: “Porque Dios no nos ha dado espíritu de temor, sino de fortaleza y de amor y de templanza” II de Timoteo 1:7 El Espíritu Santo también trabajará en el corazón del no creyente a quién testificamos, dándole la convicción de pecado, y su necesidad del Señor Jesús. Recuerda lo que Cristo dijo, cuando comisionó a sus discípulos: “Y yo estoy con vosotros todos los días…” Mateo 28:20 Preguntas para consideración. ¿Qué es lo que la mayoría de los cristianos temen al ganar almas personalmente? ¿Cuál es tu mayor temor en tu intento de ganar a los perdidos para Cristo? ¿Estás de acuerdo de que el temor es un sentimiento normal?

CAPITULO VI

Compartiendo tu testimonio personal. Cada cristiano tiene una historia que compartir. Esa historia es el testimonio personal del cristiano. El testimonio personal es uno de los más poderosos instrumentos que pueden ser usados al ganar almas. Normalmente el testimonio del cristiano consiste en decir a otra persona lo que era su vida antes de conocer al Señor Jesús, como fue que él conoció a Cristo y lo que ahora significa vivir la vida cristiana No obstante, los detalles de testimonio varían de persona a persona, habrá ciertos elementos en el testimonio de cada cristiano. Los elementos del testimonio de un cristiano deberá ser como sigue: Mi vida antes de recibir a Cristo como mi Salvador personal. Recuerden, los perdidos necesitan a Cristo porque son pecadores por naturaleza, están separados de Dios por el pecado, y la dirección de los hombres perdidos está lejos de Dios. Cuando compartes tu testimonio personal, ciertamente no es necesario hacerlo detalladamente, concerniente a cosas pecaminosas que has hecho. Algunas personas, parecen tener mucho orgullo de todas las cosas terribles que hicieron antes de ser salvos. Esto no es honrar a Cristo, y hace que algunas personas se queden con la idea, de que solamente la gente muy mala necesita ser salva. El hombre moralmente recto que no tiene a Cristo, piensa que no es lo suficientemente malo para que necesite ser salvo, después de haber escuchado a alguien “jactarse” de sus pecados cuando estaba dando su testimonio. Como llegué a conocer al Señor Jesús como mi Salvador personal. Debemos aprender a decir la historia de nuestra salvación, en claros y simples términos que puedan fácilmente ser entendidos. Haz muy simple la experiencia de tu salvación. Los hombres son salvos poniendo su fe en Cristo para salvación. Los detalles circundando la experiencia de la salvación, no será la misma en diferentes individuos. Debemos de tener cuidado de que la gente no esté esperando, que sea exactamente el mismo día de la semana y el tiempo en que otra persona fue salva, para ser salvos en un orden. La salvación, viene a través del arrepentimiento hacia Dios y la fe en el Señor Jesucristo. Algunas cosas inusuales pudieron haber tomado lugar cuando tu fuiste salvo, cuando tú pusiste tu fe en Cristo y no fue por las circunstancias que te rodearon que fuiste salvo. Lo que Cristo significa para mí como un cristiano. Seguidamente en este punto simplemente declaramos que ahora sabemos que vamos al cielo cuando muramos, Cristo es y sigue siendo nuestro objetivo en esta vida, nuestro hogar, nuestras familias, nuestras amistades y la paz que él trae cada día a nuestros corazones. Los perdidos necesitan saber como el ser un cristiano te ayuda en realizar tus metas, desde como escoger la compañera

de tu vida, criar hijos, enfrentarse a los fracasos y como manejar grandes contratiempos. Dale gracias a Dios por la absoluta seguridad de que el cielo es nuestro hogar eterno, pero debemos transmitir a la gente la manera en que la vida cristiana nos ayuda aquí, ahora, mientras vamos en dirección al cielo. CAPITULO VII

Ganando almas en lugares públicos. Actualmente hay dos tipos de evangelismo personal. Uno será lo que llamemos evangelismo personal planeado. Este será donde nombres y áreas específicas son planeados. El Segundo tipo de evangelismo personal será lo que llamemos contacto en evangelismo personal. Este se da cuando los cristianos hablan a los no salvos acerca de Cristo dondequiera, y cuando quiera que puedan estar en contacto con ellos en las actividades, día a día. El mayor número de las iglesias y la mayor parte de los cristianos nunca emplean ningún tipo para ganar almas con excepción del tipo planeado; pero si podemos aprender como tratar a la gente, acerca de la salvación, donde quiera que podamos estar en contacto con ellos, empezaremos a ver a un gran número viniendo a Cristo y conocerlo como su Salvador. Esta es la manera simple en que podemos ganar almas a donde quiera que vayamos. ¿Has estado alguna vez en un lugar público y sentido que deberías testificar, tú sabías que era tu responsabilidad testificar, pero nada más no lo hiciste? Ahora, ¿cómo podemos testificar y ganar a los perdidos en lugares públicos? Sé amigable y gracioso (no chistoso) en tu primer contacto. Solamente tenemos una oportunidad para dar una primera buena impresión. Cuando llegas a un lugar de negocios, la gente te mirará y determinará ciertas cosas acerca de ti. La mayoría de nosotros tenemos una manera de calibrar a la gente con primeras impresiones. Debemos concienzudamente trabajar en ser muy amables y bondadosos, en nuestros primeros contactos con la gente en lugares públicos. Aprender el arte de voltear la conversación a cosas espirituales. Mucha gente habla acerca de las condiciones del tiempo, pero la mayoría de nosotros trata de evitar el “riesgo” en temas de conversación. El “riesgo” en los temas de conversación es uno que te pone dentro de las partes sensitivas tocante a la vida de otra persona. Temas tales como el estado del tiempo, deportes, e hijos. Mencionando, solo unos cuantos, estos son temas de poco riesgo. La relación de una persona con el Señor es definitivamente un tema de riesgo. Sin embargo, debemos hablar con ellos tocante a este asunto en forma ordenada, para verlos salvos o salvados. En mi opinión, la mejor manera de hacer esto es siendo muy directos y declarando: “Déjame que te haga una pregunta” y entonces le haces la pregunta, “¿alguna vez, has orado personalmente e invitado al Señor Jesucristo a que entre en tu corazón?” Habrá alguien en ese lugar de negocios, en la calle, en la parada de autobús o en el

restaurante, que tú nunca volverás a ver. Deja que ese pensamiento agarre tu corazón. Nunca cambies una mala escena hablando demasiado fuerte. Yo no estoy de acuerdo con gente que entra en un lugar, y llaman toda la atención hacia ellos mismos. Ellos dicen: “Oh, Gloria a Dios, aleluya, ¡yo he sido salvo hoy!, ¡Hombre es muy grande haber conocido a Dios! ¡Aleluya!”. Estas personas logran que toda la gente, en ese lugar de negocios lo miren, y piensen: “Bueno, si ser un cristiano hace de ti una persona loca, yo no quiero ser uno”, el Señor Jesús dijo: “Os haré pescadores de hombres”. Los pescadores no atrapan los peces caminando hacia el agua y espantando los peces. El mismo principio se usa en ganar almas personalmente. Recuerden, ahora estamos hablando acerca de testificar a individuos en lugares públicos. Cuando hables con individuos, habla en un tono suave, sólo para que esa persona en particular te oiga o escuche. Lleva la conversación como el Espíritu Santo te guíe. Ve tan lejos como el Espíritu Santo te dirija. El Espíritu Santo efectúa la convicción, no las elocuentes palabras del que testifica; confía en que Dios traerá convicción a los corazones. Cita la escritura. Cuando testifiques en lugares públicos, es mejor si te es posible citar la escritura y no sacar tu Biblia. Cuando sacas tu Biblia, en un momento te conviertes en un predicador. Puede ser que no avergüence a la persona con quién estás hablando, pero todos los demás te verán, y entonces empezarán a detenerse y clavar la mirada y maravillarse de lo que está sucediendo. Es mejor solamente citar las escrituras. Cuando solo citas las escrituras, la gente que te rodea puede pensar que nada más es una conversación ordinaria, pero, realmente tú estás dando la Palabra de Dios. Memoriza las escrituras y el plan de salvación. No uses mucha escritura. Recuerda, tú tienes solamente unos minutos para testificar en la parada del autobús, en un elevador, o el lugar de negocios. Pueda ser que solamente puedas obtener alguna información acerca de las personas y visitarlas más tarde en sus hogares, o tal vez, puedas presentarles todo el plan de salvación y que ellos puedan ser salvos en un lugar público. Tú nunca sabrás lo que la gente está pasando; una persona pudo haber ido a ver al doctor esa mañana y haberse enterado que tiene una seria enfermedad, tal vez esté deprimido y con el corazón quebrantado. El Señor, puede haberte enviado para que hablaras justo con aquella persona, tú nunca podrás saberlo. Tenemos la autoridad divina de hablar a cada persona y una obligación de testificar por todas partes, trabaja para ser más eficaz en los lugares públicos. Haz que cada instante cuente, al usar muchas referencias de las escrituras, lograrás que hagas mejor uso de esos breves momentos para ganar un alma para Cristo.

Asegúrate que la persona está bajo convicción de pecado y manifiesta el deseo de ser salvo. No busques una gran demostración emocional, porque algunas veces no la habrá, somos salvos cuando ponemos nuestra fe en el trabajo terminado de Cristo, no por emociones. Trae la red. Después que te has acercado y has dado el plan de salvación, es tiempo de jalar la red. Algunas veces, pueda ser que la persona incline su cabeza y ore algo breve. Cuando tú oras no lo hagas en voz alta. Posiblemente tú desees decir cuando has terminado de orar: “Ahora, si tú pones tu confianza en Cristo como tu Salvador, quiero que tomes mi mano”. Hazle saber que el hecho de tomar su mano no es lo que le salva, pero que está expresando su fe en Cristo y la evidencia de ello está en lo que está orando. Somos salvos cuando ponemos nuestra fe en Jesucristo para que nos salve. Dale una breve palabra de estímulo. Tú puedes decir: “Estoy muy feliz de que hoy hayas dado tu corazón al Señor, quiero animarte. Yo quiero que me des tu nombre y dirección para que pueda venir a visitarte y hablar contigo y leer unos versos de la Biblia y ayudarte a que te establezcas en tu nueva fe como cristiano”. Has arreglos para que recojas a esa persona y traerla a la iglesia. Deja con él un buen folleto y dale un amigable hasta luego, deja todo tan placentero como posiblemente puedas. Determina en tu corazón que vas a ser más afectivo a donde quiera que vayas, en decir a la gente perdida acerca del Señor Jesucristo. En esos lugares públicos, haz lo mejor para ser usado por Dios al ganar almas. Tú fallarás y estarás a veces avergonzado, alguna persona sacudirá su cabeza hacia tí y te dirá: “no”, pero si tú amablemente persistes, verás a alguna gente salva, e ir al cielo, quiénes habrían muerto perdidos e ido al infierno, si tú no hubieras determinado en tu corazón que testificarías por Jesucristo en lugares públicos. Preguntas para consideración. ¿Cuáles son los dos tipos para ganar almas personalmente? ¿Cuál tipo ofrece la mejor oportunidad de ganar almas? ¿Qué errores son más frecuentemente cometidos, cuando tenemos oportunidad de testificar en lugares públicos? ¿Por qué es tan importante el primer contacto con un individuo?

CAPITULO VIII

Localizando a los perdidos. Necesitamos valentía compasiva para acercarnos a la gente conociendo su relación con Dios, hay gente dondequiera. El problema no es encontrar a la gente, pero sí es ir desarrollando los mejores métodos de recoger suficiente información, acerca de grupos de personas para ayudarles en su necesidad espiritual. Aquí hay algunos pasos a seguir: Desarrollar métodos para obtener información - Usar todos los medios posibles para hablar a la gente. Cuando vas a visitar una área, haz un alto a lo largo del camino y pregunta a la gente por direcciones, luego pregúntales: “¿Has alguna vez invitado al Señor Jesús a que entre en tu corazón como tu Salvador?”, cuando te detengas a comprar gas, pregunta al que te atiende si él es un cristiano. Usa cada manera posible para hablar a la gente y después de que empieces la conversación, dirígete a las cosas espirituales. Muchos serán ganados para Cristo. Organiza un sistema de retener o guardar nombres. Lleva contigo una libretita, donde escribas la información que necesites de los individuos. Una pequeña libreta de notas que puedas guardar en tu bolsa o bolsillo, no te costará mucho y será de gran utilidad. Escribe los nombres en tarjetas que pueden ser archivadas. Esto queda como un recuerdo permanente. Toma tiempo para escribir, para que pueda ser legible cuando lo leas más tarde. No tengas confianza en tu memoria con el destino de un alma eternal Escríbelo o anótalo. No pienses por un momento que va a ser posible para tí recordar a cada uno con los cuales has hablado. Esto pronto se hace imposible. Escribe nombres y direcciones - la edad aproximada, apunta la fecha, y la condición espiritual.

Información específica debe ser recogida, cuando hablamos con individuos acerca de Cristo. La información debe incluir nombre correcto, dirección, y edad del individuo y su condición espiritual. Aprende abreviaturas que pueden ser usadas para condición espiritual - (P – Perdido, S.N.B. – salvado no bautizado) Si una persona está perdida escribe un “P” mayúscula sobre su nombre. Si ha sido salva pero nunca bautizada escribe “S.N.B.” arriba del nombre. Esto ayudará a muchos a regresar y hablar con ese individuo en particular.

La lista se convierte en una lista de oración. Es imposible ganar almas sin oración. La oración significa tener el poder de Dios y su bendición en ganar almas. Ora por los perdidos que tú conoces y ora ardientemente que Dios te dirija a otros que necesitan al Salvador. También ora que Dios te ayude a ser un fiel testigo con los que tú estás en contacto. Preguntas para consideración. ¿Cuál es el problema real del ganador de almas, para encontrar gente con las cuales hablar acerca de Cristo? ¿Por qué no es prudente simplemente usar tu memoria, para recordar los nombres de gente no salva? ¿Qué información debe ser recogida acerca de individuos? ¿Por qué es tan importante tener una lista de oración? ¿Tienes tú una?

CAPITULO IX

Testificando a los que hemos fallado. Muchas veces en nuestras vidas cristianas, hemos sentido como si hubiéramos sido un miserable fracaso en el asunto de testificar. Había alguien, alguna persona definida a la cual debíamos de haber testificado y nosotros nada más caminamos y salimos de la tienda, fuera de un hogar o de un cuarto de hospital o dondequiera que haya sido y fallamos en testificarle. Tal vez era alguien con el cual trabajaba juntamente por un tiempo y no le testifiqué. Pudo haber sido un miembro de mi familia y hemos tratado de ganarlo para Cristo. Ahora aquí está la pregunta, ¿cómo podemos regresar y testificar a gente a la cual y con la cual hemos fallado?, ¿cómo? Quiero darte unas cuantas cosas simples que te facilitarán en ayudar a otro que tiene un hondo sentido de arrepentimiento y cargo de conciencia porque han fracasado en testificar, algunas veces aún a los que ellos aman. Debemos de darnos cuenta que es nuestra responsabilidad el testificar a toda la gente. Tal vez no lo estamos haciendo, pero es nuestra responsabilidad. Es nuestra responsabilidad en el hogar de testificar a cada miembro de la familia. El hombre deberá de hacer su primer trabajo para Dios en su propio hogar. Ahora quiero decir algo acerca de testificar en el trabajo. Si tú tienes un trabajo público y entras a trabajar a las ocho de la mañana y sales del trabajo a las cinco de la tarde, a ti no te están pagando para que camines de un lado a otro de la compañía con tu Biblia en la mano predicando. Te están pagando para que trabajes, si tú estás en tu descanso o la hora del lonche, puedes testificar o si te das cuenta que tienes un momento libre y quieres dar un testimonio a la gente, ¡puedes hacerlo! Pero no te vuelvas un predicador, en el tiempo en que otra persona te está pagando para que trabajes. Tú no vas a ganar un buen testimonio, tú vas a perder tu testimonio. Si te pagan por una hora, haz el trabajo de una hora. La oportunidad vendrá para que testifiques. Pero tú tienes la responsabilidad de

asegurarte de que cada uno de los que trabajan a tu alrededor sean salvos, ya habrá un tiempo para que hables con ellos. Yo deseo que pudiéramos animar a mucha gente joven cristiana a sentir una carga por cada persona en su salón de clase, testificarles, darles un folleto evangélico, compartir su testimonio y entonces personalmente ir a ellos uno a uno y tratar de ganarlos para Cristo. Es nuestra responsabilidad de testificar a toda la gente. Debemos de darnos cuenta que hemos fallado a nuestros compañeros de trabajo y amistades en no testificarles. Ahora, porque sabemos que debemos testificar a toda la gente, a veces vamos a reconocer que hemos fallado. Hablamos mucho acerca de nuestro temor de ofender a la gente, cuando nuestro real problema es, no el temor de ofender a la gente, tenemos temor de que la gente nos ofenda. Hemos conocido algunas gentes por un periodo largo de tiempo y nunca una sola vez les hemos dicho como ser salvos.

Pide a Dios que te perdone y luego pide a la gente para que te perdone. Deja que te de una ilustración de lo quiero decir, nuestros corazones se sienten agitados por nuestro fracaso en testificar a los que están a nuestro alrededor. Mientras comenzamos a preguntarnos qué es lo que se puede hacer, debemos primero buscar que Dios nos perdone. Dios nos perdonará (1ra de Juan 1:9), entonces debemos de buscar el perdón de quiénes hemos fallado. Simplemente ve a la persona a quién has fallado y dile: “Deseo que me perdones”, lo más seguro es que ellos te preguntarán, “bueno ¿por qué causa?” diles porque yo soy un cristiano y nunca una sola vez te he dicho como conocer a Cristo, por favor ¿puedes perdonarme? Entonces tú dirás: “Déjame decirte como conocer al Señor Jesús como tu Salvador” y procede con el plan de salvación. ¿Cuántos de nosotros conocemos a gente a la cual hemos fallado sin siquiera tratar de ganarlos para Cristo? Hagamos el propósito de que vamos regresar a ver esa gente, pedirle que nos perdone, y tratar de ganarlos para el Salvador. Tal vez tú digas: “Bueno es un poco humillante tenerles que pedir que me perdonen”. Sí, lo es, pero necesitamos hacerlo. Es duro admitir que hemos hecho mal y que hemos fallado, pero lo hemos hecho. Adquiere la libertad de un corazón culpable. Testifica a los que les has fallado. Preguntas para consideración. ¿Es realmente la responsabilidad de un cristiano testificar a toda la gente? ¿Cuál es la palabra clave para testificar a los que hemos fallado? Haz una lista de la gente perdida a la cual has fallado aún en tratar de ganarlos para Cristo.

CAPITULO X

Persuadir a los convertidos que sigan a Cristo en el bautismo. Seguidamente, cristianos que hacen el trabajo de ganar almas se les ha escuchado decir, “yo he visto venir a gente a Cristo para conocerlo como su Salvador, pero estoy teniendo problema en hacer que sigan a Cristo en el bautismo”. Intentaré dar algunas ideas en este asunto de hacer que los convertidos se bauticen, a los que desean ganar almas. Obedeciendo su mandato. El modelo para ganar almas nos es dado por el Señor Jesús. Leer una y otra vez Mateo 28:19-20, debemos de ir a donde está la gente. Entonces debemos de enseñarles como ser salvos. Después de la salvación, el cristiano debe de seguir al Señor Jesucristo en el bautismo del creyente. Entonces el nuevo convertido debe de ser enseñado en lo que Cristo ha ordenado, este es un plan muy sencillo de seguir, no trates de complicarlo. Debemos de salir a buscar almas. Segundo debemos de traerlos al lugar donde ellos, reciban o rechacen a Cristo. Después de la salvación, el convertido, recibe la orden de bautizarse, ¡no hay nada que preguntar o dudar acerca de ello! Tenemos la responsabilidad de enseñar a esta persona lo que Cristo ha ordenado al cristiano, lo cual debemos hacer. El bautismo es una declaración pública de fe en Cristo, del creyente ante los hombres. Esta es una demostración exterior de un acto interior, y es una figura de nuestra muerte, sepultura y resurrección en el Señor Jesucristo, no solamente muestra el bautismo la muerte, sepultura y resurrección del Señor Jesucristo, pero también enseña la identificación del creyente con Cristo. El bautismo, su completa declaración de su propia muerte en Cristo (II de Corintios 5:14), muerto al pecado, muerto a sí mismo y muerto a la vida vieja. Esto también es una declaración de haber sido levantado con Cristo, después de haber sepultado la vida vieja, para andar en novedad de vida con él. El bautismo de todos los creyentes como es registrado en la palabra, es una figura de la muerte, sepultura y resurrección de Cristo. La Palabra de Dios claramente dice que el bautismo es para todos los creyentes a pesar, de la edad, sexo, o color. Cuando una persona ha puesto su confianza en Cristo como su Salvador. Enséñale o muéstrale un buen verso en la seguridad de la salvación. Juan 10:27-29, Juan 3:16, Romanos 8:35, 38-39 Pregúntale: “¿Vas a creer las mentiras del Diablo, o la Palabra de Dios?” Pregúntale: “¿Estás agradecido por lo que Dios ha hecho por ti?” Declara: “Entonces tú estarás deseoso de obedecer al Señor “. Busca Mateo 28:19-20 y muéstrale exactamente lo que la Palabra de Dios dice que debe hacer.

Satanás no impidió al ganador de almas que visitara, él impidió que la persona perdida fuera salva. Declara: “Ahora, no dejes que el (diablo), o ninguna otra cosa impida que obedezcas a tu Salvador en el bautismo del creyente”. Explica al nuevo convertido que bautizamos en cada servicio. Todos los arreglos, como ropa y el adquirir la información necesaria, son cuidados ya arreglados por la iglesia. Asegúrate que tienes el nombre, la dirección, y el número de teléfono. Los arreglos para recoger el convertido (de su casa, etc). Ten especial cuidado de él, cuando viene a la iglesia por primera vez, siéntate con él en el servicio, explícale que el pastor va a predicar y entonces invítalo a él y a otros a pasar al frente en el servicio. Asegúrale que no tiene que hablar mucho. Dile lo que van a preguntarle y deja que él practique las respuestas. Tú estás tratando de que se le quite el temor. Asegúrale que no lo pondrán en vergüenza. Hazle saber que tú irás con él al frente, preséntale al trabajador personal y explícale lo que ha tomado lugar en la vida de la persona. Preguntas para consideración. Haz otra vez una lista de simple plan que Cristo nos ha dado a seguir para salvar almas. ¿Hay algunas preguntas, acerca de si la persona debe o no ser bautizada después de ser salva? ¿Qué es lo que simboliza el bautismo? ¿Cuál es la primera cosa que el ganador de almas debe hacer, después de haber llevado a una persona perdida a Cristo? ¿Qué queremos decir, cuando decimos que el bautismo es un paso de obediencia?

CAPITULO XI

Sigue el trabajo con los nuevos convertidos. Los ganadores de almas son responsables de los que han ganado para el Señor. De alguna manera ellos se convierten en los padres espirituales para esos bebés en Cristo. Será aún más correcto decir que es la iglesia local la que tiene la responsabilidad de esos nuevos cristianos y el ganador personal de almas se convierte en la extensión de su iglesia para los que conducen a Cristo. Nuestra responsabilidad es ayudar a cada nuevo cristiano a crecer en el Señor e involucrarse fielmente en la iglesia local cristiana, predicadora de la biblia. Cada nuevo creyente deberá de seguir a Cristo en el bautismo, asistir a la iglesia fielmente, leer la Biblia, orar, dedicarse a ganar a otros para Cristo y ser un diezmador. La responsabilidad de la iglesia hacia el nuevo convertido. Los creyentes deben ser entrenados en las cosas que son esenciales para vivir una vida cristiana victoriosa. Este entrenamiento es la responsabilidad de la iglesia. Ellos deben ser enseñados en: • Lo que la Palabra de Dios dice, acerca de la seguridad de la salvación • Cómo ser victoriosos sobre el pecado en la vida diaria. • El hecho de que Dios los ama, y perdonará y limpiará de todo pecado. • Cómo leer la Biblia y aplicarla a su vida. • La necesidad de la oración y cómo orar. • La importancia del lugar de la iglesia local en el trabajo de Dios en el mundo de hoy. • La manera de decir a los perdidos, cómo ser salvos. Qué hace el nuevo convertido por la iglesia local. Hay ciertas cosas que los nuevos cristianos, hacen por la iglesia local que ningún otro grupo puede hacer. Usualmente los nuevos convertidos vienen de grupos de gente que no están siendo alcanzados por el ministerio de la iglesia, por lo tanto sus amistades y familia, abren nuevas avenidas de avangelización y ministerio. Los nuevos convertidos sienten la emoción y la exitación en su nueva vida cristiana, la cual produce un entusiasmo contagioso entre los demás cristianos en la iglesia.

Los nuevos convertidos expresan una fuerte lealtad a la iglesia, y están deseosos de asistir y participar en la iglesia local. Los nuevos convertidos tienen un fresco y ardiente testimonio, y ejemplifican un sello dinámico al decirle a otros lo que Cristo ha hecho por ellos. Cosas que recordar en relación con los nuevos convertidos. Recuerden que estos son bebés en Cristo. Ellos son recién nacidos y deben de ser tratados con especial cuidado. Hay algunas cosas que debemos recordar, en orden, cuando tratamos con estos nuevos cristianos para que ellos crezcan y se desenvuelvan. Como todos los bebés, ellos deben recibir debido amor y atención. Debemos de empezar inmediatamente a instruirlos en las cosas de Dios y como vivir una vida cristiana. Ellos deben de recibir la alimentación adecuada. Esta alimentación viene de la Palabra de Dios. Por supuesto que la dieta debe empezar con la leche de la Palabra de Dios y entonces progresar a la carne. No debemos esperar que estos nuevos bebés en Cristo tengan o adquieran madurez instantánea. Habrá algunos problemas durante el crecimiento y los encontraremos a lo largo del camino. Cuando se vigila propiamente a los nuevos convertidos, ellos crecerán y serán cristianos maduros que producirán o traerán a otros bebés a la familia de Dios. La gran comisión es obedecida cuando el “evangelizado” se convierte en “evangelista”, cuando los nuevos cristianos están diciendo a otros como ser salvos. Preguntas para consideración. ¿Por qué es el ganador de almas responsable por el resultado del trabajo con los que ganó para Cristo? ¿Qué se le debe de enseñar al nuevo convertido? ¿Cuáles son las cuatro cosas, que deben ser recordadas en la relación con los nuevos convertidos?

CAPITULO XII

Presentando el evangelio. Uno de los problemas claves, que enfrentamos en ganar almas es en encontrar un método simple o plan para conducir al perdido a Cristo. Muchos están bajo convicción cuando no testifican, ellos saben que el Espíritu Santo los ayudará, ellos saben también que cada cristiano debe ser un testigo, pero ellos ¡simplemente no saben como llevar un alma a Cristo! El método usado debe ser simple para empezar, pero puede ser amplificado mientras el ganador de almas va buscando almas. Muchos cursos y libros en ganar almas fallan porque espantan a los cristianos. Cuando yo apenas empezaba y salía tratando de ganar almas, un cierto libro fue puesto en mis manos, de acuerdo con el autor de este libro, se supone que yo debía de memorizar 40 versos de la escritura antes de que yo pudiera empezar. Parece que algunas personas que escriben material en como ganar almas, nunca han ganado a alguien para Cristo, mientras otros que escriben han sido ganadores de almas para Cristo por años y ellos escriben el libro en el modo y nivel de ganar almas sobre sus quince años de experiencia. Ganar almas como todas las cosas, debe tener un empiezo muy simple. Al presentar el evangelio estamos actualmente tratando de hacer tres cosas. La primera cosa que debemos hacer es ubicar donde se encuentra la gente espiritualmente. Podemos usar el pasaje que Dios nos da en Mateo 28:19-20 como guía para saber si alguien es salvo, salvo pero no bautizado, o salvado y bautizado pero no asistiendo una iglesia local que creen la Biblia, y predican la Biblia. La Segunda cosa que estamos tratando de hacer es presentar el mismo evangelio. La tercera cosa para hacer es jalar la red. Una vez que el evangelio ha sido presentado, debemos de traer a la persona al lugar de poner la confianza en Cristo como su Salvador personal. En este capítulo nos dilataremos en el segundo punto mencionado arriba, el de presentar el mensaje del evangelio. La presentación del evangelio. Hay tres cosas usadas en la presentación del evangelio.

Bosquejo.- Este bosquejo del evangelio envuelve una lógica presentación del mensaje del evangelio. Podemos referirnos a esto como el bosquejo. Referencias de la escritura.- Podemos llamar a este el músculo de la presentación – tu debes de tener más que huesos – el bosquejo; debe de haber algo de músculo en los huesos. Ilustraciones.- Podemos llamar a esto la carne de la presentación. Algunas veces, estas ilustraciones son de la forma de historias, algunas veces comentarios, pero en el modo de ilustrar lo que tú estás diciendo. Ahora tenemos el esqueleto, lo cual es el bosquejo, tenemos algunos músculos, los cuales son las referencias de las escrituras, para enredar a los huesos, tenemos alguna carne, las ilustraciones para hacer todo interesante. Cuando yo empecé a testificar, el único verso que pude utilizar fue Juan 3:16. Yo enredé Juan 3:16 alrededor de cada hueso en mi bosquejo. Eso fue suficiente para ayudarme. Cuando tú empiezas como un principiante en ganar almas, dando la presentación del evangelio; la presentación puede ser breve, pero más tarde puede desenvolverse de una manera que tú podrías hablar por una hora, usando el mismo esqueleto simple, solo poniendo unos cuantos músculos más en los huesos, y mucha más carne. Un bosquejo que tú puedas usar. Ahora déjame darte un bosquejo, yo he puesto este bosquejo en un librito llamado “Deja que yo te haga esta pregunta”. En el librito he formado un bosquejo de cinco puntos, pon algo de músculo en el esqueleto, y una poca de carne en el músculo. Actualmente si la persona no tiene costumbre de haber testificado, él solo puede tomar el librito y leerlo. Tiene en el bosquejo bastante músculo y bastante carne para que empieces. El bosquejo que he desarrollado en el librito es uno que llamo “lógica del evangelio”. Es una manera “lógica de presentar el evangelio”. Empieza donde debe de empezar; con el amor de Dios, Dios ama a toda la gente. Algunas gentes no se pueden amar, pero Dios ama a toda la gente. Yo recuerdo que tomándome la mano derecha y sosteniendo mi dedo pulgar izquierdo, mi dedo pulgar me recordaba que Dios ama a toda la gente. Mi dedo índice me recuerda del siguiente punto en ese pequeño bosquejo. Ahora todos los hombres son pecadores (estamos hablando solo acerca de los huesos, en un momento le pondremos el músculo y la carne). Tercero.- yo tomo mi dedo de en medio y eso me dice: el pecado debe de ser pagado, el cuarto pequeño punto de ese bosquejo es fácil de recordar, cuando agarras el dedo del anillo el que está enseguida del dedo chiquito, este te dice que las buenas nuevas es que Cristo pagó por mis pecados. Si yo solamente le doy a alguien estos cuatro puntos, él morirá perdido e irá al infierno. Vamos a agregar el quinto punto: Por arrepentimiento y fe recibimos a Cristo como nuestro Salvador personal. Ahora piensa acerca del bosquejo, sólo los huesos. Hazme un favor ¿quieres?, agárrate el pulgar y di en voz alta, “Dios ama a toda la gente”, ahora toma tu primer dedo y di “todos los hombres son pecadores”, ahora el dedo de en medio

y di en voz alta “el pecado debe ser pagado”. Esta bien ahora toma tu dedo del anillo y di así “las buenas nuevas es que Cristo pagó por nuestros pecados”, pon en ello un poco de entusiasmo. Ahora el dedo pequeño, este es el quinto punto del bosquejo, “por arrepentimiento y fe recibimos a Cristo como nuestro Salvador”. Ahora tenemos cinco huesos y ese es nuestro bosquejo. Ahora pongamos algo de músculo en ello. Eso nos lleva a las referencias en la escritura. Sugiero que te quedes en un libro de la Biblia. Puedes usar el evangelio según San Juan, el libro de Romanos. El libro más familiar para la gente es el libro de Romanos, algunas veces llamado el “camino” de los Romanos. Yo uso un verso del libro del evangelio según San Juan, luego salto en medio del libro de Romanos para adquirir los últimos cuatro. Regresemos al primer hueso del esqueleto – Dios ama a toda la gente. Ahora ese es solo un hueso, pongamos un poco de músculo en ello. Usemos Juan 3:16 para probar que eso es verdad, y enreda ese músculo de Juan 3:16 alrededor del hueso, “Porque de tal manera amó Dios al mundo…” Ahora toma el segundo hueso y ponle más músculo. “Todos los hombres son pecadores”, un buen verso para esto es Romanos 3:23, “Por cuanto todos pecaron…” ¿no crees que ese es un buen músculo para ese hueso? Ahora vayamos al tercero. El tercer hueso es “El pecado debe ser pagado”, ¿no es esa una cosa lógica para que sigamos? Dios nos ama, somos pecadores, y el pecado debe ser pagado. Un buen músculo para este hueso es Romanos 6:23, “porque la paga…”, tú puedes agregar “más la dádiva…” Pero usemos solo la primera parte, “Porque la paga del pecado es muerte”. Ahora estamos listos para el cuarto hueso que es: Las buenas nuevas es que Cristo pagó por nuestros pecados, y necesitamos encontrar algo de músculo para ese hueso. Romanos 5:8 “más Dios encomienda su amor …” aún los niños pueden memorizar este verso y ponerle estos músculos. Vayamos al último – Por arrepentimiento y fe recibimos a Cristo como nuestro Salvador, un buen músculo pequeño para este hueso es – Romanos 10:13 “Porque todo aquel que invocare…” ¿no es eso lo que estamos diciendo? Ahora tenemos un bosquejo, el cual es el esqueleto; tenemos las referencias de las Escrituras, los cuales son los músculos; ahora necesitamos algunas ilustraciones que son la carne. Por supuesto tú puedes darle sólo hueso y músculo para empezar, ese es un modo fácil de hacerlo. Tal vez se vea un poco flaco caminando por todos lados, pero eso está bien, si quieres engordarlo un poquito puedes usar algunas ilustraciones. Cuando hablo acerca de Dios amando a toda la gente, algunas veces digo: “Algunas gentes son más difíciles de amar que otras, pero Dios ama a todos. ¿Conoces a alguien difícil de amar? Ahora quieres ilustrar que todos los hombres son pecadores, algunas gentes son grandes pecadores, algunos son pequeños pecadores, pero todos son pecadores. Solamente un pequeño comentario ilustra el punto. Tú puedes usar un modo de demostrarlo, tú puedes tener dos objetos, uno un poco más largo que el otro, y puedes decir “Algunas gentes han ido más hondo que otras en pecados”. Tal vez haya dos vasos en la mesa donde alguien había estado sentado tomando, uno pudiera estar lleno y el otro a la mitad. El vaso que está

lleno es como la gente que ha ido muy hondo en el pecado - otras no tan hondo como los demás. Solo busca una manera de ilustrar el hueso y el músculo. Entonces llegas al lugar de decirles que el pecado tiene que ser pagado. Algunas veces doy esta ilustración: “Si yo voy al banco, a pedir dinero prestado, tengo que firmar mi nombre en la nota; eso quiere decir que tengo que pagar este dinero, ¿no es así? Yo lo pedí prestado, yo tengo que pagarlo”. Esta es una manera fácil de ilustrar y yo digo: “Yo soy pecador y tengo que pagar por mi pecado, ¿correcto?” Entonces tú puedes ilustrar que Cristo murió para pagar por nuestros pecados. Hay muchas maneras de hacer eso. Algunas veces yo tomo mi Biblia, volteo mis manos con las palmas para arriba, y pongo mi Biblia en una de las manos y digo: “Imaginémonos que esta mano con la Biblia en ella es mi vida y esta pequeña Biblia representa mi pecado que está en mí”. Digamos que esta mano vacía es Jesús, porque el nunca pecó. Cuando Jesús fue a la cruz, Dios tomó todos nuestros pecados, puso todos nuestros pecados en Jesús y Jesús pagó por ellos. Entonces pongo mi Biblia en mi otra mano, así que la mano representando mi vida ahora está vacía. ¿No es esa una manera muy buena manera de ilustrar que Cristo pagó por nuestros pecados? Algunas veces y cuento una historia acerca de una víbora en un jarrón: Imagínate que estás sentado en un cuarto y allí está este hermoso jarrón, un jarrón muy caro al lado tuyo. Suponte que hay una víbora dentro del jarrón, y saca su vieja cabeza y está a punto de morderte, yo estoy sentado acá con una pistola en mi mano, y quiero matar la víbora para evitar que te muerda, pero para matar la víbora tengo que romper ese jarrón costoso. Pero yo pienso tanto en tí y tu vida que mataré a la víbora y perderé el jarrón y salvaré tu vida. Jesús es el hermoso jarrón. El pecado es la terrible víbora. Cuando Jesús tomó nuestros pecados y los puso en su propio cuerpo, Dios literalmente dio un golpe mortal a su propio hijo y Jesús murió en la cruz. Pero cuando él murió, tomó nuestros pecados, y él resucitó de los muertos y vive para salvarte. Entonces el quinto hueso y músculo en el cual tenemos que poner una poca de carne es por arrepentimiento y fe que debemos recibir a Cristo como nuestro Salvador personal. Algunas veces tomo una silla y digo: “Esa silla me sostendrá ¿no es así?” “Sí, señor”, entonces yo me paro y digo: “Me está sosteniendo ¿no es así?’ “No, no te está sosteniendo porque no estás sentado”. Entonces me sentaré en ella y diré: “¿ahora me está sosteniendo verdad?” “Muy bien yo creo que Dios me ama, yo creo que soy un pecador, y yo creo que el pecado tiene que ser pagado y yo creo que Cristo pagó por él, así que yo soy salvo, ¿correcto? ¡No!, yo tengo que poner mi fe en Cristo, como si me sentara en aquella silla, ¿correcto?” Hay muchas maneras fáciles de ilustrar, una vez yo era pastor de una pequeña iglesia en un pueblo y aquí había una buena historia que contar. Imagínense que fui a la tienda del pueblo, que estaba en la esquina, y compré todo lo que había

en la tienda- pagué por ello con mi dinero, entonces vine corriendo hacia tí y te dije: “acabo de comprar todo lo de esa tienda – y todo es tuyo”. Pero aún no es tuyo hasta que vayas y lo recojas, ¿correcto? Jesús compró tu salvación en la cruz, es tuya, pero no es tuya hasta que tú se lo pidas y pongas tu confianza en él como tu Salvador. Recuerda que cuando estamos presentando el evangelio, estamos haciendo tres cosas, estamos dando un bosquejo, estamos usando referencias de la Escritura, y estamos usando ilustraciones para que nos ayuden. Podemos hablar un minuto o una hora mientras lo desarrollamos de esta manera, y dices la maravillosa historia de la salvación. Preguntas para consideración. ¿Cuáles son las tres cosas que el ganador de almas debe aprender a hacer?

CAPITULO XIII

Ganado por uno. La Biblia dice en Juan 1:42, “Y él lo trajo a Jesús” ¿Recuerdas la historia en Juan capítulo uno?, algunos hombres que habían sido discípulos de Juan el Bautista, empezaron a seguir a Jesús. Se quedaron con él ese día y confiaron en él como su Salvador personal. Uno de los hombres que siguió a Jesús fue Andrés, el hermano de Simón Pedro, la Biblia dice, “El primero encontró a su hermano, Simón... y lo trajo a Jesús”. Yo no sé exactamente dónde encontró Andrés a Pedro, tal vez a la orilla del mar o tal vez en el camino yendo hacia la orilla del mar, posiblemente cerca de su casa, pero él lo encontró y cuando lo encontró él, Andrés estaba excitado. El estaba emocionado porque había encontrado al Señor Jesús como su Salvador personal. Yo justamente lo puedo ver diciendo a Pedro lo que él había experimentado en su propia vida.

La Biblia dice que él trajo a Pedro, a Jesús. ¿No es esto maravilloso? Pedro fue ganado por uno y el que lo trajo a él (Pedro) a Jesús, fue su propio hermano, Andrés. Ahora de nosotros que conocemos a Cristo como nuestro Salvador, tenemos el mensaje que los hombre perdidos deben oír, ellos deben de creerlo y recibirlo. Dios nos ha confiado a nosotros la sagrada responsabilidad de ganar a los perdidos para Cristo. Lo que estamos por considerar bajo el tema de “ganado por uno”, es un plan paso por paso para llevar a alguien a Cristo, no quiero que esto sea nada más que otro intento de dar una lección de como ganar almas. Quiero que pongamos junto todo lo discutido en este libro, en un capítulo. Puede Dios movernos, ayudarnos, y equiparnos, para ganar a los perdidos para Cristo. Preparación. Asegúrate que tú eres salvo. Tú nunca harás mucho para Dios hasta que sepas absolutamente en tu propio corazón que tú has encontrado a Jesucristo como tu propio Salvador. El principio fundamental para ganar almas se encuentra en Mateo 16, empezando con el verso 13. Cuando Jesús llegó a las costas de Cesarea de Filipos, él preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que yo el Hijo del Hombre soy? Cuando la gente oyó la autoridad con que el Señor Jesús habló, ellos dijeron: “este debe ser Juan el Bautista”. Cuando vieron los milagros que Jesús hacía, ellos dijeron: “él es Elías”. Otros observaron las lágrimas y compasión del Señor Jesús y dijeron: “pues, él es Jeremías”. Jesús detuvo a sus discípulos y les preguntó: “pero Uds. ¿quién dicen que soy yo? Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente”, este es el fundamento para todo. Si tú sabes, desde la punta de los dedos de tu pie hasta tu cabeza que Jesucristo es el Hijo de Dios, y que todas las cosas son posibles con él, porque él ha cambiado tu vida, puede cambiar a otros; entonces, hermano, tú estás listo para decirle a la gente acerca de ello. Esa es la preparación que necesitas. Saber con seguridad que tú eres salvo. Yo recuerdo, la primera persona a la que tuve la oportunidad de llevar a Cristo, yo salí para ir a ganar almas con un hombre nuestra iglesia, no había planeado que estaría ganando almas, yo había ido para ser un compañero silencioso, yo iba a sentarme y a dejar que él hablara. Fuimos a un hogar a ver a cierto hombre, pero cuando llegamos a ese lugar, el hombre no estaba. Yo pensé que nos habíamos escapado, pero este hombre, con él que yo iba le dijo a la dama de la casa, “¿es Ud. una cristiana?”, “si”, dijo ella, otra vez pensé que nos habíamos escapado. Pero él le preguntó a un muchacho joven que estaba parado junto al lado de su madre, si él era un cristiano y dijo que no. El ganador de almas estaba determinado de decirle a muchos como ser salvos. Pasamos a la casa, nos sentamos, y empezó a hablar; justo en medio de la conversación, el hombre de la casa llegó. De repente mi amigo se dio vuelta y dijo: “Clarence, tu habla con el muchacho; yo voy a hablar con su papá. Hermano yo deseaba, que hubiera habido un hoyo allí bastante grande para haberme metido. No sabía qué decir, el muchacho y yo caminamos afuera de la

casa, y dejamos que mi amigo y su papá se quedaran adentro. El joven se reclinó contra la pared de ladrillo de la casa, estilo ranchero, y esperó que yo empezara a hablar, yo no sabía que decir, yo sabía que yo había sido salvo y podía compartir un poquito de mi testimonio, así que le dije al muchacho: “la salvación es como un regalo, el paquete está envuelto, la cinta está amarrada, y Dios te lo da a ti. Este es Jesús, y si lo recibes puede ser tuyo, ¿puedes tomarlo?” Bueno que intento tan incierto - pero para mi sorpresa, el dijo: “Sí, lo tomo” y él le pidió a Dios que le perdonara sus pecados y que lo salvara. Cuando yo terminé allí, yo pensé, si el Señor puede usar algo como “eso”, él puede usar lo que sea. Dios hizo algo en mi corazón ese día, y le doy las gracias por ello. Conoce el plan de salvación y lleva contigo un Nuevo testamento. Cualquiera puede memorizar el plan de salvación, nosotros debemos saber como ser salvos en una forma ordenada, para decir a otros como ser salvos. Lleva contigo un Nuevo Testamento, no una Biblia grande, cuando salgas a ganar almas. Si tú te acercas a un hombre llevando una Biblia grande, él sabe por qué te estás acercando, si tú caminas hacia él con un Nuevo Testamento escondido, él no sabe por qué te estás acercando. Ahora, algunas personas dicen: “Yo quiero que todos sepan que yo soy un cristiano. Yo llevaré una Biblia tan grande como un catálogo de Sears Roebuck, y así voy por la calle haciéndole saber a todos, yo estoy del lado de Dios”. Eso está bien, pero si vas así, espantarás hasta la muerte a mucha gente. Lleva un Nuevo Testamento. Ve bien arreglado y limpio. Cuida de tu aliento y olor de tu cuerpo (en otras palabras báñate). Ten cuidado como te ves (apariencia), asegúrate que tu cabello y tu ropa están bien. Esa es la razón que las damas se deben vestir como damas, y los hombres como hombres. Cuida de tu apariencia; eso es lo primero que el mundo ve. Si los pierdes cuando te acercas, los has perdido (a ellos). También cuida de tu aliento y olor de tu cuerpo. Tomemos en cuenta. Date cuenta que hay hombres perdidos alrededor de nosotros, estate consciente de las almas. Recuerda los dos tipos de evangelismo personal mencionado antes, evangelismo por contacto y evangelismo planeado. Debemos de aprender en nuestros contactos con la gente, cada día, como voltear la conversación a cosas espirituales y presentar el evangelio. Hace algunos años fui a una farmacia y me senté para comer un Sandwich y un sujeto se sentó a mi lado, y me volteé hacia él y le dije: “Dispénseme (un poco fuerte), es Ud. un cristiano? ¿Ha recibido a Cristo en su corazón? El se dio cuenta de que yo le estaba hablando a él, así que él tomó una servilleta de papel que estaba enfrente de él y escribió en letras grandes, “yo estoy sordo”, yo extendí mis manos hacia las servilletas y tomé un montón, y escribí en una, ¿eres un cristiano?, y se la di a él; él extendió su mano hacia las servilletas y

tomó un montón y empezó a escribir, y esto es lo que escribió: “Yo crecí en Texas. He vivido 20 años de mi vida, y ni una sola vez, alguna persona me preguntó si yo era un cristiano”, y en letras grandes escribió, “YO SOY UN ATEO. No me moleste”, yo pensé: “querido Dios si alguien hubiera tenido contacto con este sujeto antes cuando él era un muchacho, si alguien hubiera hablado con él cuando su corazón estaba tierno y buscando, si alguien hubiera tomado un tiempo para darle el evangelio, hoy iría el camino al cielo, en lugar de ir rumbo al infierno”. Gente hay alrededor de nosotros, por todos lados, tú crees que no escucharán, pero muchos de ellos sólo están esperando escuchar. Estate consciente de las almas. Alguien te dijo a ti cómo ser salvo. Recuerda alguien te dijo como ser salvo, cuando Jesús estaba delante de sus discípulos, él dijo: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio”. Eso es exactamente lo que hicieron. Ellos dijeron a la gente como ser salvos. Cuando esas gentes fueron salvas, ellos dijeron a otros. Cuando ellos fueron salvos, ellos dijeron a otros… y a través de los siglos, el evangelio encontró su camino hacia un hombre que me habló de él. Si yo no le digo a otros, ellos no van a oír. Porque yo conozco a Cristo, yo debo dar el mensaje cristiano a otros, yo tengo una deuda porque alguien me habló. Hombres sin Cristo están perdidos, y van rumbo al infierno. Date cuenta que los hombres sin Cristo están perdidos y van rumbo al infierno. Una vida sin Cristo termina en una eternidad sin Cristo. Deja que este pensamiento agarre tu alma. La historia en Lucas 16:22-24 dice, “… el hombre rico también murió, y fue sepultado, etc.” Los hombres están perdidos y yendo al infierno. Cristo puede y salvará. Es alentador saber que no hay uno que esté tan perdido, tan encaminado al infierno, tan mezquino, tan ciego por el pecado, que Cristo no pueda salvarlo. Saber esto es maravilloso. Tu nunca vas a encontrar a nadie que el Señor no pueda salvar, si esa persona pone su confianza en Cristo, ¡ese es un pensamiento glorioso! Si es un hombre de negocios que hace más de cien mil dólares al año o si es un pobre hombre limosnero, no hay diferencia; Jesús puede salvar a cualquiera, no hay una ninguna ramera, caminando las calles de la ciudad, que Cristo no pueda salvar; no hay un borracho tirado en un callejón, que Cristo no pueda salvar.

Dios te usará para ganar almas. Tú nunca harás ninguna cosa en tu vida más grande que ganar alguien para Jesús, Dios quiere usarte a ti. Nuestro maravilloso Señor ha escogido a los hombres para llevar la historia del evangelio. Visitación. Toma un tiempo definido para ir, y anda con un propósito. Ahora, prométele a Dios que irás, si tu vas a someter a alguien, sométete tu mismo a Dios. Lo mejor que puedes decir es, Señor yo te prometo, que voy a ir a buscar almas. Aquí es donde el énfasis debe ser puesto. Fuérzate a ti mismo para ir, impúlsate a ti mismo y esfuérzate a ir, ve con el propósito de ganar almas, no vamos a tocar solamente unas cuantas puertas para poder decir: “Bueno yo he cumplido con mi responsabilidad, yo he hecho bastante, yo fui a visitación”, ¡no! nosotros vamos con el propósito de ganar gente para Cristo. Podemos ganar a los perdidos si solamente vamos a buscar almas, ir con un propósito: ganar a los perdidos para Cristo. Una niña fue a su clase de Escuela Dominical un Domingo en la mañana y su maestra dijo: “El próximo Domingo quiero que hagamos algo diferente. La próxima semana no quiero que vengan solas, yo quiero que cada una traiga una amiga, y cada persona que traiga una amiga tendrá una estrella al lado de su nombre en la lista de la clase. La niña estaba sentada esa mañana y en su corazón ella soñaba ver una estrella cerca de su nombre el próximo Domingo. Ella iba a hacer todo lo que pudiera para traer una amiga a la Escuela Dominical. Tan pronto como salieron de la Escuela Dominical ella empezó a formar una lista de la gente que invitaría, mientras la semana avanzaba, no recibió ninguna promesa de ir con ella. Finalmente se acercaba el Domingo, ella pensó, hay una persona que irá conmigo, y ese es mi papá. Ella sabía que él iría. Sucedía que el nombre de su papá era Esteban Paxon, él era un hombre no usual. El cojeaba y tartamudeaba y tocaba su violín en las danzas del Sábado en la noche, pero él amaba a su pequeña niña. Cuando ella le preguntó: “¿Papá irías conmigo?”, él dijo: “Sí, dulzura, yo iré.” Llegó el Domingo en la mañana, y la pequeña niña regresó a su clase con su gran papá a su lado. Cuando la maestra vio a su padre allí, ella supo que algo era diferente, y que ella tenía que cambiar su clase normal de Escuela Dominical y ese día daría el mensaje del evangelio, y como ella lo hizo Dios la bendijo; y cuando terminó la lección, Esteban Paxon el que tartamudeaba y cojeaba para ir a tocar su violín pidió a Jesús que lo salvara. Pero Esteban Paxon dijo: “Esto no es suficiente, yo quiero tener un propósito en mi vida.” El dejó de tocar su violín en las danzas del Sábado en la noche, y compró un caballo viejo y empezó a viajar, y empezó Escuelas Dominicales. Antes de que Esteban Paxon muriera, él caminó cien mil millas a caballo. El empezó 1314 Escuelas Dominicales, y personalmente ganó para Jesús 83 000 muchachos y muchachas. ¿Por qué? Porque no era suficiente dar excusas y decir, yo cumplí con mi responsabilidad. Yo he tocado unas cuantas puertas. El había sido empujado por un propósito de ganar almas.

Ir de dos en dos. El Señor Jesús envió a sus discípulos de dos en dos. Una persona deberá de hablar mientras que los otros siguen como compañeros silenciosos. El compañero silencioso ayuda a quitar los estorbos, para que el ganador de almas testifique. Yendo de dos en dos también ayuda para evitar mala apariencia, también da sostenimiento al ganador de almas. Confrontación. Había un sujeto en la ciudad de Boston hace más de cien años, que enseñaba la clase de Escuela Dominical a un grupo de jóvenes. En caso de que nunca hayas oído de él, se llamaba Eduardo Kimball. Kimball, tenía una pequeña clase de Escuela Dominical para jóvenes y él tenía una carga acerca de todos, para que conocieran a Cristo. El era más bien dicho una persona tímida. Uno de los muchachos de su clase trabajaba en una tienda de zapatos en Boston, así que Kimball empezó a caminar hacia la tienda de zapatos y él estaba tan nervioso y temeroso que caminó enfrente de la tienda y se pasó de largo. El estaba bajo honda convicción se dio la vuelta y dijo: “Yo voy a entrar y voy a hacer lo mejor que pueda”. Cuando Kimball entró, el muchacho no estaba trabajando en la parte de enfrente de la tienda, él estaba en la parte de atrás en el cuarto de almacén de los zapatos, Kimball caminó y se puso al lado del muchacho y lo mejor que pudo, y en un estado nervioso, le dio el plan de salvación. Para la sorpresa de Kimball, el joven muchacho allí mismo en el almacén inclinó su cabeza y pidió a Dios que le perdonara sus pecados. Eduardo Kimball más tarde murió y fue a la Gloria, nadie lo recuerda. Pero el hombre joven que encontró ese día en la tienda de zapatos se llamaba D. L. Moody. Encuentra algo que complementar. Ahora no trates de ser un viejo lisonjero y quieras amontonarle tanto que nadie crea. Justamente encuentra algo bueno que decir. Recuerdo que visité una familia que vivía en una vieja choza toda destartalada, yo estaba absolutamente temeroso de entrar, no porque fuera a encontrar gérmenes y suciedad, sino porque yo sabía que en cualquier momento toda la casa se caería. Yo sabía que tenía que decir algo para complementar. Yo miré alrededor y vi a todos los niños y no podía ver si estaban bonitos porque estaban tan sucios. Vi a la mamá y vi que tenía dos dientes uno arriba y uno abajo, en sus mandíbulas. Pensé, ¿qué cosa buena puedo decir acerca de ella? Su esposo estaba acostado afuera debajo del carro. El era un tipo viejo que no trabajaba. De repente de detrás de la casa vino un perro pequeño, pero blanco llamado “bola de nieve”, “bola de nieve” era la niña de los ojos de cada uno. Lo acababan de bañar. Ellos no bañaban a los niños, ni limpiaban la casa, pero ellos bañaban al perro y dije: “Ese es el perro más bonito que he visto en toda mi vida, Uds. son el grupo más afortunado de tener un perro como ese”. Bueno ese día se enamoraron de mí, porque ellos sabían que cualquiera que amaba a su

perro, como ellos lo amaban, tenía que tener tanto sentido común como ellos tenían. Nos hicimos buenos amigos. Sé genuino, sé la clase de persona que a la gente le gusta ver venir a su casa. Trata de hacerlo. Ten cuidado acerca de entrar a sus casas. Evita toda apariencia de mal. Yo conocí a una dama que fue salva y era una ganadora de almas. Ella tenía tanto celo que ella iría a donde fuera. Una noche ella llegó de visitación para ganar almas y dijo: “Hermano Sexton, Ud. no va a creer esto. Encontré a un sujeto que atendió a la puerta cuando no estaba listo para recibir visitas; pero no le dimos mucha atención a eso, nosotras pasamos de todos modos, a la casa”. Yo pensé, “Oh, no, yo tendré que ir a arreglar ese asunto.” Ten cuidado cuando vas a entrar a las casas, por una visita no vale la pena perder tu testimonio. Retírate tan lejos del mal y la apariencia del mal que nadie pueda poner a tus pies ninguna culpa. Evita la apariencia del mal. Ten cuidado acerca de meterte a las casas. Sólo uno debe hablar. Algunas personas quieren hablar todo el tiempo. Sólo una persona debe hablar, mientras la otra observa. Vuelve la comunicación a cosas espirituales. La mejor manera de hacer esto, es ir directamente al asunto. Simplemente da a conocer a la gente el propósito de tu visita, después de haberlos saludarlos y haberse presentado con ellos, dígale: “déjeme que les haga esta pregunta”. Entonces pregúntales si alguna vez personalmente han invitado a Jesús a que venga a su corazón como su Salvador. Percibe la verdadera condición espiritual de la otra persona. No solamente te apresures inmediatamente en darles el evangelio. La persona puede ya ser salva. Date cuenta primero donde se encuentran espiritualmente antes de que empieces. Dios nos ha dado un plano a seguir en Mateo 28:19-20. Suponte que él quiere oír del evangelio. Estamos derrotados cuando tenemos la idea preconcebida de que alguien no quiere oír el evangelio. Cree que la gente quiere oír. Cuando tú encuentres gente diles: “déjame que te haga esta pregunta” y pregúntales si alguna vez han puesto su confianza en Cristo. Si la respuesta que recibes es “no”, simplemente diles: “Deja que te enseñe unas cuantas cosas de la Biblia”, toma tu Nuevo Testamento y ábrelo mientras estás haciendo esta declaración: “Esta es una cosa muy simple de hacer”. Háblale del amor de Dios. Dios es amor. Empieza del modo correcto. El amor de Dios es trampolín para todo lo demás. Dios ama a toda la gente y tiene un plan para sus vidas.

No discutas. Algunas personas prefieren ganar un argumento que un alma. Quédate en el objeto. El Diablo tratará de desviarte. Algunas gentes dirán cosas como: “Bueno ahora, espera un momento, ¿es malo fumar cigarrillos?” o “mira yo no tengo que ir a la iglesia para ser cristiano”, “tú sabes, que la gente cree diferentes cosas acerca de la Biblia”, “dime una cosa ¿por qué hay tan diferentes clases de iglesias?”, “voy a ser honesto contigo, cuando yo era un niño, no había en la iglesia más que un montón de hipócritas, y no quiero nada que ver con ellos.” Encontré una gente que me dijo: “Tú sabes, que hay tantos hipócritas en la iglesia”, y dije: “Como sabe, eso es correcto; he visto tantos hipócritas que yo no quiero ser un hipócrita, tú tampoco quieres ser uno, ¿no es así?, ¿no?, bueno déjame decirte como no ser una”. Entonces sólo diles como ser salvos. Algunas gentes dicen: “Bueno hay tantas y tantas clases de iglesias en el mundo”, yo digo: “Eso es verdad, eso es tan correcto como puede ser; pero déjame decirte esto: Olvidemos las iglesias por un momento y hablemos acerca de lo que la Biblia dice”, tú estás de regreso en el tema. Quédate en el mismo libro de la Biblia. Sugiero que uses el camino de los Romanos o el evangelio según San Juan. Esto lo mantiene simple, no confundas a la gente yendo a través de la Biblia de libro en libro, no esperes que sean estudiantes de la Biblia hasta después de que sean salvos. Demuéstrale que él es un pecador, refiérete a ti mismo como un pecador. Cuando uses un verso para enseñarle que es un pecador, hazle saber primero que tú eres un pecador. Simplemente dile: “Todos somos pecadores – yo soy un pecador – tú eres un pecador – todos somos pecadores”. Muéstrale la paga del pecado. Cuando leo Romanos 6:23, “Porque la paga del pecado es muerte”, yo digo salario significa pago. Tú trabajas, tú tienes tu salario, ese es el pago que recibes. La paga del pecado es muerte. Separación eterna de Dios. Explícale que Jesús pagó por nuestros pecados. Este es un excelente lugar para una ilustración acerca de Cristo llevando nuestros pecados en la cruz, nuestros pecados fueron puestos en él. El pagó nuestra deuda para que nosotros no tuviésemos que pagarla. Revisa los puntos principales. Asegúrate que él entienda. Gente rehúsa poner su confianza en Cristo, no porque no quieran, pero porque no entienden. Muéstrale que él debe recibir a Cristo por fe.

Romanos 10:13 es un buen verso para usar aquí, “Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor será salvo”, algunas veces me paro cerca de una silla y digo: “Esta silla puede sostenerme, pero no me sostiene hasta que confío que me sostendrá” y me siento. Cristo puede salvarte hoy pero no lo hará hasta que pongas tu fe en El para salvación. Dile: tengamos una breve oración. Solamente empieza a orar. Recuerda nunca preguntes: “¿Te interesa si te muestro algunas cosas de la Biblia?” Automáticamente da a la persona una oportunidad para que diga: “Bueno realmente ahorita no tengo tiempo, voy a ir a la tienda, me voy a vestir, mi esposo va a llegar en un momento, o solamente no tengo tiempo, ¿podrás regresar?”. Ellos no saben si vas a tomar una hora o un minuto, nunca digas: “¿Te interesa si te enseño algunas cosas?” Dile: “Deja que te enseñe algunas cosas de la Biblia” e inmediatamente empieza la presentación del evangelio. La misma cosa se aplica cuando llegas al lugar de que reciban a Cristo. No digas: “¿podemos orar?” Solo di oremos, y empieza a orar, inmediatamente empieza a orar. No digas amén. Cuando llegues al lugar donde vas a decir amén, a la oración di: “Con nuestras cabezas inclinadas y los ojos cerrados, aquí mismo hoy quiero que le pidas a Dios que perdone tus pecados y te salve. Sabemos que él lo hará, lo sabemos por la Biblia, aquí mismo hoy ora esta oración”: Señor yo sé que soy pecador, si muero hoy, iré al infierno. Yo sé que Jesús murió por mí. Perdóname mis pecados, ven a mí corazón y sé mi Salvador”. Haz que la persona ore, sólo haz que él ore, y no digas amén. Generalmente la gente no sabe como orar. Cuando yo fui salvo, si me hubieran pedido que orara, no lo hubiera hecho, porque no sabía como orar, yo tenía vergüenza. Me dijeron la manera que debía orar y me dijeron que orara en silencio. Cuando terminé de orar me preguntaron, lo que había hecho y dije: “Sí”. Esto es exactamente lo que te estoy alentando a que digas. Dirígeles en la oración. Hazle esta pregunta: ¿Haz pedido a Dios que te perdone tus pecados, que venga a tu corazón, y que sea tu Salvador? Si la contestación es “Si”, regresa inmediatamente a la Biblia y muéstrale lo que Dios ha prometido que hará. Romanos 10:13”Porque todo aquel…” Esta es la promesa de Dios, pon tu fe en la Palabra de Dios. Dios cumplirá su promesa. Explicación. Explícale la promesa de Dios para salvar. Dile lo que la Biblia ha prometido. Este individuo ha hecho la decisión más importante de su vida. Dale un verso de seguridad. Juan 3:16, Un gran verso en seguridad. Haz que el convertido vea de esta manera la verdad de la Palabra de Dios. Tal vez quieras leer Romanos 8:38-39 o Juan 10:27-29.

Antes de que hagas el intento de hacer que él obedezca a Cristo como un nuevo cristiano, dirígelo para que vea la promesa que Dios ha hecho para que él sea salvo para siempre. Manifestación. Haz una oración de gracias. No sólo te apresures en irte. Haz que él le dé gracias a Dios. Pídele que dé gracias a Dios en voz alta. El tal vez diga: “Gracias Señor por salvarme amén.” Dirígelo a que haga una profesión pública de fe. Ahora aquí es donde regresamos al plano de Dios en Mateo 28:19-20. Toma tu Biblia y ve sobre ello. Lee para él Mateo 28:19-20 y enséñale que Dios nos manda que busquemos pecadores. Entonces haz esta manifestación: “El Diablo no me impidió que fuera yo a ti”, muéstrale que debemos enseñar a la gente como ser salvos, entonces haz este comentario: “El Diablo no impidió que tú fueras salvo”, simplemente dile: “determina que serás fiel en asistir a la iglesia local”. Pasa por su casa y lleva al convertido al siguiente servicio de la iglesia. Quita sus temores haciéndole saber que tú estás al tanto de tener todos los detalles. Siéntate con él durante el servicio y pasa con él al frente durante la invitación, no te olvides de la responsabilidad que tenemos de seguir instruyendo a estos nuevos bebés en Cristo. Planea tener compañerismo con él en los días que siguen en adelante.

3. Los Bautistas no son protestantes. Los Bautistas no son protestantes Bob Dalton Todos los buenos Bautistas deben por lo menos protestar de vez en cuando, aunque los Bautistas no son protestantes. Los orígenes de los Bautistas no tienen raíces en el protestantismo. El término protestante se refiere a todas las denominaciones que se han separado de la iglesia Católica desde la Reforma. Ha sido la costumbre norteamericana dividir a la mayoría de la gente en tres grupos religiosos: Protestantes, Católicos y Judíos y se asume que como el Bautista no es Católico ni Judío entonces debe ser un protestante. Los Bautistas y los protestantes tienen orígenes muy distintos y separados. Es correcto decir que los protestantes tienen su origen en la iglesia Católica. Los Luteranos, los presbiterianos y todos los Calvinistas que bautizan a infantes como los de la Reforma, salieron de frente del romanismo. Martín Lutero, Juan Calvino, y Ulrico Zwinglio son los tres reformadores más notables, los cuales eran Católicos Romanos antes de ser salvos. Otros protestantes como los

Anglicanos y los metodistas son también de Roma solo que un poquito más lejanos. Los Metodistas se originaron en la Iglesia Anglicana. El término Protestante se aplica a un movimiento religioso bien distinto, el que empezó en la Reforma de 1529 en la “Dieta de Séller” en Alemania (una Dieta es una asamblea formal que se junta para discutir asuntos públicos). El emperador Católico del Santo Imperio Romano, Carlos V, les permitió practicar su religión a los gobernantes políticos que eran luteranos (dentro de sus territorios). Les concedieron esto en la primera "Dieta de Séller” en 1526. En la segunda “Dieta de Séller” (1529), Carlos fue llamado para limitar los privilegios de los Luteranos y expandir el catolicismo en todo el territorio. Carlos ya estaba libre de las distracciones militares que le habían forzado a dar las concesiones de 1526, a los Luteranos. Este intento de expandir el catolicismo, una vez más lastimó a la iglesia Luterana y trajo una protesta formal de los príncipes luteranos. Acusaron a Carlos de violar el acuerdo que habían hecho en 1526. Los Bautistas no tenían nada que ver con esta protesta. El hecho es que los Luteranos consideraron a los “Anabautistas” como herejes (en aquella época) y por esta razón merecían la muerte. Los Luteranos estaban de acuerdo con la iglesia Católica en contra de lo que ellos llamaron “Anabautistas” o los que rebautizan. Los Bautistas se originaron de este grupo de ideas del Nuevo Testamento y las tradiciones de donde vinieron los Anabautistas. Sólo los Anabautistas de Suecia era asociados íntimamente con los protestantes en cuanto a su origen. La Dieta de Séller pronunció la pena de muerte sobre los Anabautistas o sobre cualquier otro grupo que rebautizara a los que habían sido bautizados como infantes. Los Luteranos no objetaron esta pena de muerte, más bien lo confirmaron. El origen de los Bautista ha sido un tema de intenso debate. Actualmente la idea que prevalece es, que los Bautistas modernos salieron del separatismo inglés del siglo XVI. Otros creen que los Bautistas descendieron de los Anabautistas de la época de la Reforma. Y otros dicen que ha habido una sucesión orgánica, y que se nota una sucesión literal y visible de iglesias Bautistas desde el periodo de los apóstoles hasta el presente. La sucesión es por una cadena de ordenaciones (o sucesión apostólica), bautismo correcto, o sucesión de iglesias. No hay evidencia histórica y ciertamente no hay evidencia bíblica de una sucesión orgánica. Las Escrituras dan la idea que la iglesia del Nuevo Testamento fue organizada, por lo menos, en su forma embrionaria durante el ministerio terrenal de Cristo.

Mateo 16:18, 18:17. Cristo en Mateo 16:18 prometió la perpetuidad de la iglesia por todas las edades. Pablo en Efesios 3:21 la confirma. Usando estos fundamentos bíblicos algunos historiadores Bautistas como Tomas Armitage y Juan T. Christian, dicen que sólo es una sucesión de principios bíblicos. Armitage dice: " El mero intento de procurar arrastrar una línea no justifica el hecho de que personas que han sido bautizadas correctamente, o ministros ordenados descendiendo en línea directa desde los apóstoles, o de iglesias organizadas sobre estos principios; sean un intento de edificar una torre sin error”. También dice: "La doctrina pura se encuentra en la Palabra de Dios, la cual es incorruptible y es la única línea no quebrantada, que se puede arrastrar en el cristianismo”. Christian también rechaza cualquier forma de sucesión visible de la iglesia. Armitage también cree que los Bautistas se originaron en los días de Cristo y que las pisadas de los Bautistas a través de las edades, pueden ser arrastrados más fácilmente por su sangre, que por su bautismo. Es una línea de sufrimiento en vez de una sucesión de obispos, unos mártires de principios en lugar de algunos decretos de los concilios, una soga de amor en vez de una cadena de hierro en sucesión. A pesar de todo es una sucesión real y correcta (la de los Bautistas), que en cada época han sido como los abogados de libertad para todos y han mantenido el evangelio del Hijo de Dios que da libertad a todo hombre. Los Bautistas no son protestantes.

Creo que por ahora es todo lo que tengo en lista.