Farsa Del Valiente

Farsa del valiente Nicolás TEATRO POPULAR PERSONAJES JUAN, un campesino ZENAIDA, su mujer DON ROSAL*O, su suegro DON

Views 63 Downloads 1 File size 2MB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

Farsa del valiente Nicolás TEATRO POPULAR

PERSONAJES JUAN, un campesino ZENAIDA, su mujer

DON ROSAL*O, su suegro DON NABOR, un abonero DON CENÓN, un tendero

DOÑA BRÚJULA, una prestamista

35

Entra Zenarda, con una carta en la mano.

ZENAIDA

Don Rosalío! ¡ Don Rosalío! ¡Don Rosalío! DON ROSALÍO

Desde fuera: Qué se ofrece? ZENAIDA

Venga su merced, que necesito un favor.

DON ROSALÍO Desde fuera. Un favor? ZENAIDA

Sí, señor. DON ROSALÍO

Desde fuera. Un

favor, como

ZENAIDA

de

qué?

Venga usted y le diré. DON ROSALÍO

Desde fuera.

Si

se

trata

de

que no tengo un tlaco.

dinero, pierde esperanza,

ZENAIDA

No es de dinero. DON ROSALÍO

Desde fuera. Si es de levantar algo muy pesado, tampoco se va a poder.

ZENAIDA No hay nada que levantar. DON ROSALIO

Desde fuera. Si hay que ir a buscar un buey al monte, no me

da la

gana. 37

ZENAIDA

No

hay

ZENAIDA

nada que

Qué día

buscar.

hoy?

DON ROSALÍO

DON ROSALÍO

Desde fuera:

es

Entonces, qué

es

lo que

quieres,

mu-

chacha?

Diecisiete. ZENAIDA

Hoy

ZENAIDA

Que mi marido me escribió una carta, y no sé leer.

mismo

llega!

Baila de contento.

DON ROSAL*O

mismo! Y hazme favor de callarte la boca, que he terminado de leer la carta.

Hoy Entra don Rosalío calándose unas gafas, tiene pelo y barba

no

blancos. Zenaida pone atención. DON ROSALÍO

Eso sí que me dará mucho gusto, muchacha, que yo para leer es para lo único que sirvo, porque ya toy muy viejillo. Y más una carta de un muchacho como Juan tu marido, que quiero mucho, por trabajador. A ver, dame acá.

es

Zenaida le entrega la carta.

DON ROSALÍO

"...

Leyendo.

con

el favor de Dios

pude juntar la

cantidad de dos mil pesos. . ." ZENAIDA

Dos mil pesos! DON ROSALÍO Leyendo: . . .dos ml pesos, que nos alcanzarán para pagar las deudas que tenemos, y para vivir en tran-

quilhdad mientras se llega el tiempo de la cosecha."

DON ROSALÍO

Leyendo. Querida Zenaida,

esposa mía: Después de saludarte y de besarte por medio de estas líneas, te digo lo siguiente: que ya acabé mi contrato aquí donde estoy trabajando, aquí a donde vine a buscar el pan para ti y para mí y para nuestros hijos; que todo salió bien, y sin novedad, y que tuve suerte: de m a n e r a q u e regreso.

.

ZENAIDA

Bailando.

mil

pesos!

DON ROSALÍO

Silencio, muchacha, que no he terminado Zenaida pone atención.

.

ZENAIDA

Encantada. ¡Regresa! DON ROSALÍO Leyendo... . llego el día 17.

DON ROSALÍO

Leyendo. "Tambi n para los

niños,

llevo

algunos regalitos para ti, ." Yaves, mu-

y para don Rosalío. chacha? Faltaba lo mero bueno:

Rosalío', 38

¡Dos

servidor.

.

"Regalitos para don Leyendo.*Ya con esto me despi39

do, y espero, que cuando recibas ésta nada te duela, ni nada te falte. Tu marido que tanto te quiere:

ZENAIDDA

Tienen derecho a saber que les vamos a pagar.

Juan. ZENAIDAA

Entran don

Nabor,

Cenón y doña Brijula.

don

Son siniestros.

iAy, qué contenta estoy porque ya viene mi mari-

do, porque nada le sucedió mientras estuvo lejos, porque trae regalos para mi y para mis hijos. . .! DON ROSAL*O

Y para mí! Allí dice. ZENAIDA

A ver, doña Zenaida. DON CENÓN Cuéntenos las noticias.

DOÑA BRÚJULA

porque trae dinero para pagar las deudas que tenemOs. .

Queremos saberlas. DON NABOR

DON NABOR

Todo lo que usted

nos

Desde fuera: ¡Epa, doña Zenaida!, qué pasó con el dinerito que me debe de la manta que me compró

DOÑA BRÜJULA Como la vemos

Desde fuera: Y con el que me debe a mí de las tres

Y tan sin dinero. DOÑA BRÚJULA En las noches pienso:

el otro día? DON CENÓN

hanegas de maíz que le di? DOÑA BRÚJULA

Desde fuera: Y té

a

su

con

los

marido para el

trescientos

pesos que le pres-

viaje?

diga,

nos

interesa.

tan solita y tan triste.

DON CENÓN

parada,

con ese

"ipobre Zenaida, tan desamhombre que se le fue dizque a t r a

bajar, y no aparece. DON CENÓN

Desde fuera. Qué pasó, doña Zenaida? Qué pasó col

opulencia personificada. Y yo pienso: 'cuándo podrá pagar esta mujer? Porque, viera qué mal

el dinero?

ando de centavos?

LOS TRES

ZENAIDA

me

La

DON NABOR

Vengan ustedes, señores, que les tengo buenas no-

Yamí, me da vergüenza venir a cobrarle, pero que

ticias.

otro remedio me queda? Yo vivo de eso, y tengo que

DON ROSALÍO

Ya llegaron los zopilotes! Cuidado, muchacha, que si les dices que tu marido viene con pesos, son capaces de hasta sin un dejarlo pollo, con ser éste el animal más iníerior de todos. 40

DON NABOR

ver por mi lamilia. LOS TRES

Duramente: Así

es

que:

jpáguenos

ZENAIDA

No tengo dinero ahora, pero acabo de recibir esta

41

carta...la muestra. DON ROSALÍO

Desde fuera: ;Zenaida,

no

les enseñes

esa

carta!

DON NABOR

Hacia fuera:

Quién

le

el

pidió

DOÑA BRÚJULA

consejo?

Cuando quiera un percalito, nomás me dice y se lo

Zenaida, enséñenos la carta. Que nosotros somos los amigos de usted y de su marido y estamos aquí para ayudarla.. DON NABOR .

Y aconsejarla.

una

comidi-

Muchas gracias, doña Brújula.

Desde fuera: Son como zopilotes, Zenaida. Nomás andan viendo quién

se

le encima.

muere en

los

caminos para caer-

DON CENÓN

Y no tenga pendiente por lo del maíz, que ya paga rá cuando buenamente pueda. DON NABOR

LOS TRES

que duda.

Zenaida les entrega la

¡La carta!

carta

nan para leerla.

llena de

preocupación; se amonto-

DON CENÓN Si no veníamos a cobrarle.

Veníamos a preguntarle cómo estaba usted de salud. DOÑA BRÚUJULA

.que todo salió bien.

DON CENÓN

Y a ver qué noticias tenía de su marido.

.que tuvo suerte.

DON CENÓN

DOÑA BRÚJULA

Pero ahora que vemos que está usted sin nove-

.que regresa hoy. ..

dad.

LOS TRES

La cantidad

Lo mismo le digo yo por lo de la manta. DOÑA BRÚJULA Y yo por lo del dinero.

DON NABOR

DON NABOR

42

Muchas gracias, don Nabor. DOÑA BRÚJULA Tenga veinte pesos por si quiere hacer ZENAIDA

Y cuidarla. DON ROSALÍO

.

traigo. ZENAIDA

ta para recibir al hombre. Se los da.

DOÑA BRÚJULA

.

ZENAIDA

DON NABOR

DON CENÓN No le haga caso, doña

Zenaida,

tienda, y escoja lo que

Muchas gracias, don Cenón.

Hacia fuera: ¡Viejo entrometido!

A

DON CENÓN Doña Zenaida, vaya usted a la necesite, que todo es suyo.

de dos mil

DON NABOR

pesos!

y

que llega

su

marido.

43

DONA BRUJULA Nos vamos tranquilos. DON CENÓN

Cuando

lo vea,

deudas.

Se abrazan.

dígale que

no se

preocupe

por las

DON NABOR

Qué gusto me da estar otra vez contigo. ZENAIDA

Que ni se acucrde de cllas.

DOÑA BRÚJULA Adiós, doña ZENAIDA

Y a mí que hayas regresado. JUAN

Zenaida, qucde usted

Adiós, doña Brújula, adiós,

Cenón.

Pasaste muchas hambres? con

Dios.

ZENAIDA

Tuve que pedir maíz fiado.

don

Nabor, adiós don

JUAN

Hiciste bien. Ahora pagaremos.

LOS TRESs

ZENAIDA

Adiós. Salen.

Y tú, sufriste mucho?

ZENAIDA ola. Con estos vcinte pesos le, porque mi marido va a

JUAN voy

liegar

bre.

hacer un mo* con mucha ham a

JUAN Desde fuera: iZenaida 7.ENAIDA Sola. Ese

JUAN

es

él. Esa

llegó con bien.

Era un trabajo pesado, pero me lo pagaron bien. ZENAIDA

Abrazándolo otra vez: ¡Ay, Juan, cómo te quiero! JUAN Y yo, cómo te quiero a ti. Después de abrazarla. Y nuestros hijos?

es su voz.

Bendito sea Dio>

e

ZENAIDA

Están bien, gracias a Dios.

JUAN

JUAN

Desde fucra. Zenaida. ZENADA

Y don Rosalío, todavía vive? ZENAIDA

Hacia fuera.

JUAN

Todavía.

¡Aquí estoy!

Desde fuera. ¡Zenaida! Entra la. ¡Esposa mía!

JUAN

llevando

ZENAIDA

Abrendo 44

un

morral.

Mirando a su alrededor. ¡ Vaya, pues qué bonito es reAl

DE

gresar a la tierra de uno! A Zenaida. Voy a enseñarte lo que te traje. Saca del morral un rebozo colorado con

los

brazos para recibirlo.

un rapacejo enormne.

¡Esposo mio 45

ZENAIDA

Qué rebozo

tan bonito! Se lo

prueba.

JUAN

JUAN

no.

Y mira, para nuestros hijOs. Saca un sarape. ZENAIDA

Qué

bueno, así ya

no

Ambos

tendrán frío!

JUAN

Y mira, lo que comnpré para mí. Saca una chamarra de

rebelde sin causa.

falta enseñarte lo m e r o buecinturón de vibora, y de él un chorro de pesos.

ahora

Pues,

Saca

un

vieja,

juegan

hincan y

se

mi

sí,

DON NABOR, DON

con

CENÓN,

el

dinero,

DOÑA

muy contentos.

BRÚJULA

Melosos, desde fuera. iJuanito Juan y Zenaida se po toda la

guardar el dinero e n el cinturón, c o n entran los otros tres rapidez de que son capaces, pero nen a

ZENAIDA

Abrazándolo otra vez. ¡Ay, Juan, qué bien te ves! DON ROSALÍO

de que

antes

puedan

terminar.

DON NABOR

Entrando. iJuanito, hombre, qué gusto de verte, qué

DON CENÓN

bueno que ya regresaste! JUAN Don Rosalío,

Qué gusto sus cómo está usted?, cómo sigue de

achaques? DON ROSALÍO mal, pero de regalo? Pues

Juanito. . .!

m e trajiste aquí ando todavía. iQué

de verte.

.

DOÑA BRÚJULA

Con tantos pesos. .. JUAN No son tantos. ZENAIDA

Apenas para el gasto. DON NABOR

Juan

saca del

morral

una

chaqueta de militar,

con

bolones

dorados.

Ya los vimos, DON CENÓN No te

hagas,

hagas,

no te

DOÑA BRÚJULA SO mero era

en

que

suenan.

Y ese rebozo qué bonito!

DON ROSALÍO

tiempos

humilde.

no seas

lo que quería,

que

era

acordarme para

ac

Y esa chamarrita!

yo federal.

DON NABOR

ZENAIDA

Y el

Pruébesela, don Rosalío.

JUAN

DON ROSALÍO y mi sable,

para

espuelas tar a los conejos. Sale, llevando la chaquela. J a m e ponerme

DON CENÓN

pan

co

sarape, tanmpoco

Ahora sí,

señores,

ya

está feo.

quiero

salir de deudas

con

us 47

46

les debo? tedes, cuánto D O N NABOR

Ya

nos

quieres

JUAN

pagar tan pronto?

Ujule, pues estoy fregado! DON NABOR

DON CENÓN

Mira, para no alegar más, dame la chamarrita y

Si no hay tanta prisa.

DOÑA BRÚJULA enemos

cua-

trocientos pesoS.

la vida

por

delante.

Juan se quita la chamarray se la da, y también cuatrocientos pesos.

JUAN

hay que pagar mientras está el dinero,

eñores,

que vuelay no sabe uno ni cómo. Cuánto se lede-

be

a

usted de la manta, don Nabor?

Son seiscientos cuarenta y dos pesos, Juanito. JUAN

Hombre, don Nabor, una pieza de manta, seiscieny dos

A don Cenón. A usted cuánto le debo? DON CENÓN Setecientos ochenta pesos. JUAN

A Zenaida.

pesos

Pues cuánto maíz

te

comiste, vieja?

ZENAIDA

DON NABOR

Pero Juanito, si

te

la di hace seis meses,

son los in-

Me dio dos hanegas, y una que le debíamos desde antes.

tereses.

JUAN

JUAN

Haga otra vez la cuenta, don Cenón, porque ésa no

Pero cómo va a ser tanto?

está bien.

DON NABOR

DON CENÓN

Pues eso es. JUAN Pues

no me

Es

parece legal.

DON NABOR

Pues no es legal, es que así es la vida.

JUAN

que no pagas a tiemp0, muchacho, por eso hace más pesado0. JUAN A don Nabor. Usted que es juez, deme aquí

se

te

una

manita.

DON NABOR

Voy

a

decirle

al

DON NABOR Pues de

no te va a

aquí soy

48

Poniéndose la chamarra. Ahora sí que estamos a mano. JUAN

DON NABOR

tos cuarenta

DON NABOR

yo.

Págale, págale. Lo que diga

juez.

salir la

tirada, porque

ahora el juer

DON CENÓN

Voy

a

sarape.

hacerte

una

rebajita.

el señor está bien.

Dame setecientos y

el

49

Juan le da setecientosy el sarape DOÑA BRÚJULA

DON CENÓN

Poniéndose el sarape. Cuando

Malagradecida! se te

ofrezca

tienda, yo te presto.

algo de la

JUAN

Y

DON NABOR

No se peleen que aquí está la autoridad. JUAN

a usted, doña Brújula, cuánto le debo?

Y ahora qué vamos a comer, vieja?

DOÑA BRÚJULA

ZENAIDA

Cualquier cosilla, novecientos pesos. JUAN

Pero si me dio trescientos.

DOÑA BRUJULA Pues sí, muy cierto. Trescientos, y tres meses de intereses a doscientos pesos cada mes, cuánto es? DON NABOR

Novecientos. DOÑA BRÚJULA Y si he sabido que eras tan rejego, ni te presto.

Qué comer, ni qué comer! DONA BRUJULA Para que vean que no les tengo rencor, ni mala voluntad, les compro el rebozo. JUAN

Qué dices, Zenaida, se lo vendemos? ZENAIDA

Véndelo, a mí que me importa! DOÑA BRÚJULA Les doy cincuenta pesos.

Juan le da el rebozo,

Juan le da hasta el iltimo centavo que tiene

doña

Brijula se lo pone y le da el dinero.

DON CENÓN

Yo

JUAN DOÑA BRÚJULA Y

queda

una cuenta

pesos que le zENAIDA Pues

tenga

presté

a

pendiente, tu mujer.

que

son

los veinte

sus v e i n t e

Y

pesos. Se los da.

50

a

agradecer, si

no

estén

Salen don

ZENAIDA

lo voy

Ya acabamos de arreglar nuestros asuntos. DOÑA BRÚJULA En caridad de Dios. DON CENÓN

DOÑA BRÚJULA Y ni me lo agradece.

Qué se fregada!

creo que nos vamos.

DON NABOR

Ya me quedé sin nada.

es

usted

una

vieja

tristes, que

Cenón,

ya

se

les

don Nabor y doña

compondrá la vida. Brújula.

JUAN

Ay, Zenaida,

tres meses

de andar

cargando el chun51

de, para

quedarme sin nada llegando

ZENAIDA

Ay, Juan,

tanto que

Y

chamarra!

JUAN

mí mi

a

me

a

mi

tierra.

ZENAIDA

Ni mi rebozo dejaron.

gustaba mi rebozo!

DON ROSALÍO

A Zenaida. Te dije que eran como zopilotes, muchacha, pero no me hiciste caso.

ZENAIDA

Y el sarape de los niños,

tan

JUAN

Y mis dos mil

Zenaida llora a moco tendido, y Juarn la imita. Se abrazan.

bonito que estaba!

DON ROSALÍO Pero no se apuren, muchachos, que mientras hay vi-

pesos

ZENAIDA

da, hay esperanza.

Ay, Juan, qué triste estoy!

JUAN

JUAN

Pero si faltan tres meses para la cosecha. ahora

Y

Se abrazan

qué

hacer?

vamos a

ZENAIDA

Y el año no viene muy bueno. JUAN Y nadie me da trabajo aquí. Y si voy cen la misma.

lamentos.

entre

DON ROSALÍO

sombrero

Entra

don

miltar y toda

la

Rosalio

espuelas, da un sable,

con

ag1lidad

Zaida

lo

miran

trististmoi,

al

primero

acordarie

asustados,

Ay, qué dolor! tjano,

tutlta al

chaqustade con

después

sus

serenidad.

Qué

la R c o b r a n d o

á n tan

en nos

Calma, señores, JUAN

les pasa?,

p o r qué

la

yo voy

Pero si usted no tiene ni DON ROSALÍO Pero tengo mañas.

diablo

es

Salen los tres. Cenóny doña

tivamente.

tristes?

dejaron

DON ROSALÍO

el

O N ROSALÍO

Ya

Ay, qué tristeza!

destenturas.

de

ha

JUAN

tsenano blandiendo Juany mientras sus piernas, permiten le y luugo asombrados que una

me

ZENAIDA

Y ay, jaray, jarayja Y ay, jaray, jarija jarayja' ;Y ay, jaray,

Desde fuera:

fuera,

por

viejo

a

ayudarlos.

un

centavo, don Rosalío.

Acuérdate, Juan,

que por

diablo.

que más sabe

Vengan.

Entran, después de un momento, don Nabor, don Brújula, con chanarra, sarapey rebozo, respec-

calle.

53

DON ROSALÍO DON NABOR

Qué

contento

estoy

con

mi chamarrita!

DON CENÓN

Y

yo

E n dónde?

mi sarape!

con

DON ROSALÍO

DOÑA BRÚJULA

Y

yo

La vi. DON NABOR

Por

mi rebozo!

con

cuando andaba

en

la

revolución.

DON NABOR

DON NABOR

Vamos a

aquí cerca,

bailar,

porque

hicimos u n

negocio muy

bueno.

cómo

Y

es

Nicolás? la historia del valiente

DON CENÓN Cuéntenosla.

Cuando termina el baile entra Suena la música. Ellos bailan. ni espuelas, ni sombrero, don Rosalio, sin chaqueta militar,

ni sable, pensativo.

Se sientan los tres alrededor de don go más

alto, y empreza

a

Rosalío,

que se sienta

en

al-

contar.

DON ROSALÍO DON CENÓN

En qué piensa,

don Rosalío?

DON NABOR

está

Por qué

tan

cabizbajo?

DON ROSALÍO Estoy acordándome de

u n a cosa.

DON CENÓN

De qué

se

acuerda usted?

DOÑA BRÚJULA muy triste? DON ROSALÍO

De algo

De una historia. DON NABOR

Cuál historia? DON ROSALÍO La historia del valiente Nicolás.

DON CENÓN La oyó usted?

54

Esto es que el valiente Nicolás e r a u n soldado de caballería: traía sombrero tejano, chaqueta militar, u n gran sable y espuelas.

DOÑA BRUJULA

Y

cómo

e r a su

cara?

DON ROSALÍO

Era para espantar a cualquiera. DON NABOR

Y qué hacía? DON ROSALÍO

Pedía dinero prestado. DON CENÓN

Por eso era valiente? DON ROSALÍO Era valiente, porque

no lo pagaba. DOÑA BRÚJULA Y cómo hacía para no pagar?

55

DON CENÓN

DON ROSALÍO

Degollaba

al que le cobraba.

Ay, qué caray,

diga

me

había

escapatoria con ese

DOÑA BRÚJULA

usted!

Bendito sea Dios que los tiempos

DON CENÓN

han cambiado!

DON CENÓN

Lo degollaba?

iQue

DONA BRUJULA

Le

no

valiente Nicolás!

DON NABOR

No

pues

cortaba la cabeza al que le cobraba?

ya

hay

no

valientes Nicolases!

DON NABOR

Porque ahora, el que debe paga.

DON ROSALIO

LOS TRES

Con el sable que traia.

DON CENÓN Yo no le hubiera prestado ni un centavo.

Lo que uno le cobra. DON NABOR

Y la

DOÑA BRÚJULA Ni yo.

prueba

de eso la tiene usted

en

mi chamarra.

DON CENÓN Y en mi sarape.

DON NABOR

DONA BRUJULA

Ni yo.

Y en mi rebozO.

DON ROSALÍO

LOS TRES

Los hubiera degollado.

Y en el dinero que traemos aquí guardado. ¡Bendi-

LOS TREs

to sea Dios, que los tiempos han cambiado!

Por qué?

DON ROSALÍO

DON ROSALÍO

Porque también degollaba al que no le prestaba. DON CENÓN

iAy, qué caray, qué hombre tan terrible ha de haber sido el valiente Nicolás!

Sí señores, bendito sea Dios, que ya no hay valien-

tes Nicolases. Bueno, pues ya les conté la historia, ya me despido. Sale. Los tres que quedan, bailan otra vez el mismo baile regocijado.

DON NABOR

Y

no

había nadie que le avisara al

DON ROSALÍO

No había

juez

LOS TRES

que

se

le

juez?

DON ROSALÍO

56

a

los

Desde fuera: ¡Y ay, jaray, jarayja!

Y ay, jaray, jarija!

pusiera enfrente.

Por qué? Porque

JUAN

jueces también

Y ay, jaray, jarayja Don Cenón, don Nabor y doña Brijula guardan silencio, y alrededor. Enira Juan, disfrazado del valiente Nicoven a

los

degollaba.

su

57

lás,

máscara

con una

Los demás

se

espantable, chaqueta, sombrero, sable,

retirana

un

rincón y

etc.

lo observan temerosos.

DON CENÓN Téngalo, señor. JUAN

JUAN Pasando

a primer término,

canta:

"Corrido del valiente

Poniéndose el sarape. A doña Brijula: Y viene a mi mujer.

ese

rebozo le

con

DOÑA BRÚJULA

Nicolás".

Pues téngalo, señor.

DOÑA BRÚJULA iAy, Dios santo,

ya

JUAN Pues ahora

llegó!

te

DON NABOR

lugar

no

sólo que ya estaría mnuy contento, m e quiere acabar de gustar.

es-

suelta el aire! Es bien

te-

sí,

DON NABOR

Ay, estamos perdidos!

Y

DON CENÓN

iAy, estamos fregados! DOÑA BRÚJULA Vámonos antes de que

lo viera usted cuando

se

rregoso. DON CENÓN nos

cuando hiela! Bien frío. DOÑA BRÚJULA Y cuando llueve! ¡Unos lodazales!

Y

pida!

DON NABOR

Ya no soy juez, porque me degüella.

DON NABOR

JUAN

Pasea blandiendo el sable alrededor de ellos Elc. la salida: iAy, jaray, jarayja. .

Don Nabor y

compañía se abrazan

dos. El valiente Nicolás los mira y

e

impidiéndoles

DON CENÓN

detiene. Pausa. El

va-

liente Nicolás, viene hasta ellos. JUAN

A don Nabor: ¡Qué bonita chamarrita! DON NABOR

Téngala, señor JUAN

Poniéndose la chamarra. A don Cenón: Y ese sarape, no

está malo, para el frío. 58

éste.

.

entre si y lo miran aterrase

Mucha razón tiene usted, señor, muy feo el lugar

Por qué

no se

vuelve

a

su

tierra?

DOÑA BRÚJULA Bueno, no es que lo corramos. DON CENÓN Pero como dice que aquí no le gusta. DON NABOR

Para que esté contento. JUAN Pues yo sí me iría con gusto a mi tierra. LOS TRES

Pues

váyase hombre, qué espera? 59

JUAN

No,

dinero para eso. hace falta mucho

.

.

JUAN

LOS TRES

Ningún

Mirándose entre si con tristeza: i Ya nos fregó!

menos,

dos mil pesos. Levanta el sable.

DON CENÓN Pero

JUAN

Pensativo: iSaben cuánto me hace falta? Como dos

no se

enoje. A

sus

compañeros.

Pues ni

modo,

va-

mos juntando.

mil pesos. DON CENÓN

Hombre,

eso es

el dinero el valiente.

Juntan

mucho dinero.

entre

los tres,

con

trabajos. Luego

van

hasta

JUAN

Por eso pienso que me voy a tener que quedar avi-

A nombre de mis compañeros, permítame hacerle el regalo de los dos mil pesos que necesita para re-

vir aquí. Los tres

DON CENÓN

van a un

rincón y hablan

entre

sí lo

tierra, para que viva muy su mujer. Tenga. Le da el dinero.

gresar

siguiente:

DON NABOR

JUAN

Más vale precaver que tener que remediar. DON CENÓN

LOS TRES

Pero dos mil pesos es mucho dinero! DOÑA BRÚJULA

JUAN

a

su

contento con

Está bueno, gracias. Guarda el dinero. Adiós.

Adiós.

Usted dígale que se vaya, don Nabor, usted esel

juez.

Mientras sale, blandiendo el sable. iAy, jaray,.

.etc.

LOS TRES

Estamos salvados!

DON NABOR

Ya

no soy DON CENÓN

juez. Renuncié.

Pero tiene la DON NABOR

Acuérdese. DONA BRÚJULA

Se toman de la manoy bailan regocijadamente. Salen. Entran

bailando, también regocijadamente, don Rosalio, Zenaida

obligación .

Hace

Juan,

de.

que se ta el final.

la seña de

quita la máscara del valiente Nicolás. Baile has

degüello.

Ay, Dios! DON CENÓN Al

valiente Nicolás: No señor?

60

le

alcanzará

con

nos, *

61