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LA APERTURA ESPAAOLA TOMO 11

1 COLECCION DE MONOGRAFIAS DE APERTURAS DR. M. EUWE CAMPEON DEL MUNDO 1935-37

LA APERTURA ESPAÑOLA TOMO 11

•

é EDICIONES

LIMITADAS

CONDE BORRELL, 100

•

CATALAN

BARCELONA-15

TRADUCCION DEL ALEMAN POR CESAR UTRILLA CARRASCO

@KURT RATTMANN Hamburgo •

PRIMERA EDICION, 1964 SEGUNDA EDICION, 1972 TERCERA EDICION, 1978

©por EDICIONES LIMITADAS CATALAN Conde Borrell, 100 · BARCELONA-15

RES E RVA DOS

TODOS

LOS

DERE CHOS

Este libro no puede ser reproducido en todo o en parte, sin permiso.

IMPRESO EN ESPAÑA

·

PRINTED I N S P AIN

IS . .B.N. 84-85 103-09-2 Depósito legal n." B. 32.064/78

S ELEGRAM

Pallars, 94·96

Tel.

309 34 08

Barcelona-18

COMO DEBEN ESTUDIARSE LOS VOLUMENES DE LA .SERIE EUWE�

El método adoptado en la notación de las diferentes variantes de las apertw•as de la «Serie Euwe» diflere del que se adopta gene­ ralmente en las revistas alemanas. Por eso es conveniente que el lec­ tor del presente libro se /amiliarice con las explicaciones que damos a continuación, antes de seguir adelante: En primer lugar figura la línea de tuego p1'incipal. Las varian­ tes que se derivan de ella se disponen aparte, en sucesivos capítulos or­ denados detrás hacia adelante, es decir: la primera variante o des­ viación que se estudia es la más reciente, la tratada en último lugar la más antigua. Conviene considerar tambitn las siguientes particularidades de la notación (caracte1'es más gruesos o más {inos empleados en el texto), con objeto de tacilitar el estudio de las variantes:. si en los sucesivos capítulos se repite alguna serie de jugadas anteriormente examinadas, para su aclaración, se emplearán en la anotación los caracteres débiles. La primera jugada después de la desviación aparece en carac­ teres gruesos, las sucesivas tugadas que encabezan otras variantes -intércaladas enmedio- en caracte1'es débiles, cada nueva separa­ ción otra vez con caracteres gruesos para la primera jugada, las restantes débiles. Por consiguiente, cada jugada en caracteres gruesos signiflca­ rá: aqui empieza una nueva variante.

6 Juego 5:

1 . P4H 2. C3AR 3. A5C 4. A4T 5. 0-0

La variante Steenwijker

P4R C3AD P3TD C3A A2R

6. AXC

Esta captura tiene aquí más efi­ cacia que en la variante Bayreu­ ther (véase el juego 13) o que en la variante del cambio en su forma cerrada (juego 16). Las negras tie­ nen más dificultades para defen­ der su PR. 6. ...

PDXA

6. ..., PCXA: 7. P4D (7. ... , C'>(P;

8. D2R) conduce a una buena par­ tida para las blancas. También debe tomarse en consideración 7. CXP, CXP; 8. D4C. Diagrama 106 (después de 6.

..., PDXA)

7 . , CXP, y la pareja de alfiles de las negras ejercen una poderosa acción. 7. TIR, proporciona un juego cómodo a las negras, por ejemplo: 1) 7. ..., C2D; 8. P4D, PXP; 9. DXP, 0-0; 10. C3A, C4A; 11. DXD, TXD; 12. A5C, P3A; 13. A3R, C3R; 14. TRlD, A2D, con juego igual. Trifunovic-Rossolimo Amsterdam, 1950. 2) 7. .. . , A5CR!, es la continua­ ción que ofrece mejores posibili­ dades. Después de 8. P3TR, las negras no necesitan capturar e1 CR. 7. D ZR por las mismas razones apuntadas 7 ..., A5CR, es una bue­ na respuesta. .

..

.

.

SA: (véase el diagrama 106)

7. P3D La continuación más antigua. Defiende el PR y evita eficacia a la clavada A5CR. C2D 7. ... 7. A SCR no es ahora tan buena por la respuesta 8. P3TR. Por ejemplo: 1 ) 8 .. . , A4T?; 9. P4CRI la) 9. ... , A:iC; 10. CXP, y las blancas ganan un peón, puesto que su PR está defendido. lb) 9. ... , CXPC?, es aqui insufi­ ciente: El PR de las blancas está defendido y éstas a la vez pueden jugar CD2D. (Véase la diferencia .

.

Las blancas pueden elegir entre las siguientes continuaciones: 7. P3D=5A. 7. C3A=5B. 7. D1R=5C. 7. P40, no es recomendable por

7 con la jugada 7. C3A, nota a 9. P4CH, núm. 2). 2) 8. ... , AXC; 9. DXA, 0-0; 10. C2D, C2D; 1 1 . C4A, y las blan­ cas estan un poco mejor. Euwe­ Kramer, S.a partida del encuentro, 1940. Esta partida se jugó precisa­ mente en la ciudad de Steenwijker, y de aquí toma el nombre de la variante que estamos comentando. 7. .. A3D, con la idea de conti­ nuarcon8. ..., P4AD, merece consi­ derarse. Las negras liberan su jue­ go después de 8. P4D, CXP; 9. T1R, P4AR!

cerrado en el centro da poco re· sultado. Por ejemplo: Diagrama 107 (después de 9. . , P3A) . .

.

8. CD2D Las blancas hacen bien mante­ niendo cerrado el centro. 8. P4D, PXP; 9. CXP, 0-0; 10. C3AD, A3A; 1 1 . P4A, C3C; 12. P5R, A2R, y las negras tienen un con­ traataque satisfactorio gracias a la pareja de alfiles. Euwe-Bogoljubow, 4.8 partida del encuentro, 1941. 0-0 8. ... 9. C4A P3A 8. ... A3A. proporciona de todos modos una buena posición, Por ejemplo: 10. P3CO, T1R; 1 1 . A2C, P4A; 12. P4TD, P3CR; 13. R1T, A2C; 14. 01R, D2R; 15. Cl C, P3AR; 16. P4A, C1C; 17. PXP, PXP; 18. C3A, C3A, con juego igual. Gligo­ ric-Reshevsky, z.a partida del en­ cuentro, 1952.

10. P4D La continuación más usual. Ahora el mantenimiento del juego

10. P4TD, C4A;. 1 1 . P3CD, A5C; 12. C3R, AlA; 13. A2C, P3CR; 14. C2D, C3R; 15. R1T, A4A, conjuego igual, poco más o menos. Nesch­ metdinov-Kluger, Bucarest, 1954. 10. C4T, C4A; 1 1 . C5A, AXC; 12. PXA, TlR; 13. A3R, P5R!, y las negras tienen buen juego. Jansa­ Smyslov, Campeonato de Europa por Equipos, Oberhausen, 1961. 10. ... PXP 1 1 . CXP C4R 12. cxc 12. C3R. T1R; 13. P3AD, AlA, las negras tienen mejor juego. Gligoric-Szabó, Sofía. 1947. PXC 12. ... 13. C3C D1R 1 3. ..., A3D: 14. A3R, P4TD. Tri­ funovic-Gligoric, Belgrado, 1948, y las blancas están algo mejor des­ pués de jugar 15. P4AD. 13 . ..., DXD: 14. TXD, A3R; 15. A3R, y las blancas tienen un buen final.

8 D3C 14. D2R 15. P3AR A3R Con juegos iguales. Vukovic­ Gligoric, Zagreb, 1949. 5B: (véase el diagrama 106) 7. C3A Esla desusada jugada ha sido empleada varias veces por Mi­ guel Tal.

A5CR 7. ... Ahora esta clavada del caballo es buena y por tanto la jugada 7. C3A, no resulta peligrosa para las negras. 7. ... C2D, se puede jugar tam­ bién. Por ejemplo: 8. P4D, PXP; 9. DXP. 0-0; 10. A4A, C4A; 11. D3R, C3R; 12. TDlD, DlR; 13. A3C, A4A; 14. D2R, P3A, con igua­ les posibilidades, poco más o me­ nos. Tai-Szabó, Olimpíada de Leip zig. 1960. .

­

8. P3TR A4T 8. .. AXC 9. DXA. D3D; 10. P3D, 0-0- O, conduce a una buena partida para las blancas. Euwe-Vidmar, Groninga, 1946. Diagrama 108 (después de 8 ., A4T) .

.

. ..

9. D2R 9. P4CR. es de dudoso valor. Por ejemplo: 1 ) 9. . . ., A3C. la) 10. D2R, C2D; 11. P4D, PXP; 12. CXP, A4AD, y las negras tie­ nen posibilidades de ataque. Klein­ Keres, Inglaterra-U.R.S.S. 1946. lb) 10. CXP, CXPR, conduce a una p a r t i d a aproximadamente igual. 2) 9. .. , CXPC!; 10. PXC, AXP, y l as negras tienen excelentes po­ sibilidades de ataque. 9. P3D, proporciona también las mismas posibilidades. Las ne­ gras pueden defende1· su PR ju­ gando C2D, sin encerrar el AD. .

.

DlA! 9. ... P3T 10. P3D C2T 1 1 . C1D No dando tiempo a las blancas de jugar C3R, a causa de la ame­ naza C4C. AXP 12. P4CR DXP+ 13. PXA 14. R2T D4T+ Tablas por jaque perpetuo. Tal­ Keres Bled, 1961. Malo sería 14. ... , C4C, por 15. C1C! .

5C: (véase el diagrama 106) 7. DIR Una jugada original empleada especialmente por Lothar Schmid. Se propone evitar la clavada del caballo sin renunciar a la jugada P4D directamente.

Diagrama

109

(después de 7. 01 R)

15. CD2H, D2H; 16. T3D, las blan­ cas tienen la partiqa ligeramente superior. Karaklaic - O'Kelly. Za­ greb. 1955. 2b) 11. . . , P4TD; 12. T1D, DlH; 13. A4A!, C5A; 14. P3CD, C:�D;

L>.

P3A, P3A; 16. R1T, 02A; 17. P4CR,

las blancas tienen mejor juego. Karaklaíc-Jov'anic, Skolpje. 1956.

7. ...

A3R

Lo mejor, puesto que defiende indirectamente el PR. Veamos otras continuaciones: 7. ..., A3D; 8. P4D, y las negras tienen dificult�des.

7. ... C2D. es una continuación segura, por ejemplo: 8. P4D. PXP; 9. CXP, 0-0 (si 9. .. , A3A; 10. C2R, seguido de P4AR); 10. C3AD, y ahora: .

.

1) 10. .-., C4R. la) 11. CR2H, P4AR (es mejor

11.

A4AD);

12.

P4A,

C3C;

13.

P5R, A4A+; 14. RlT, A3R; 15. D3C, DlR; 16. A3R, con ventaja

de las blancas. Lothar Schmid-Pen­ rose, Olimpíada de Amsterdam. 1954. lb)

11. C5A, A5C; 12. P3TD,

7. . .. , P4A. es una continuación interesante. Por ejemplo: 8. CXP (de lo contrario las negras prote­ jerian su PR en su próxima juga­ da, con lo cual no sería posible P40), 8 . . ., 050; 9. C3D!, y ahora: 1) 9. . ., DXPH; 10. DXD, CXD; .

.

11. T1R, P5A; .12. C4A, C3A; 13. P3CD, y las blancas tienen un jue­ go excelente. 2)

9....,

CXP; 10. P:JCD!

2a) 10.... , DXT; 11. A2C, DXP;

12. DXC, A3R; lJ. C3T, P5A (evi� !ando la amenaza 14. T1T); 14. CXP, AXC; 15. PXA, 04T; 16. AXP, y las blancas tienen una

ventaja decisiva. 2b) 10...., A4A; 11.A2C,D��D. Kla­ man-Furman, semifinal del Campeo­ nato de la U.R.S.S .. 1951. y ahora las blancas podían ganar un peón con 12. AXPI, TlCR; 13. A5R.

A4T; 13. P4CD, A3C; 14. C4TD,

2c) 10...., C3A!; 11. A2C (11.

AXC; 15. CXA, PXC; 16. PXA,

CXP?, C401); 11. ..., 030; 12. C3A,

D3A, las negras tienen una buena

A4A (es más exacto jugar ensegui­

partida. Trifunovic-Giigoric, Buenos Aires. 1955.

da 12 . .. . , 0-0); 13. C5R, 0-0; 14. P30, TR1R; 15. C4R, 040; 16.

2) 10. ..., C3C; 11. A3R.

C3C, AtAD; 17. P4AR, C5C; 18.

2a) 11. ..., C5A; 12. TlD, DlR;

C4Rl, las blancas tienen mejor jue­

13. P3CD, CXA; 14. DXC, A5CD;

go. Lothar Schmid-Salm. torneo por

10 correspondencia en memoria del Dr. Dyckhoff, 1954-56.

3) 9. .. , P5Al?; 10. C4A, P4CR (10. ..., CXP; 1 1 . C3Al). 3a) 1 1 . C2R (si 1 1 . P3AD, 010; 12. P5R, C40); 11. ..., OXPR; 12. P3D, PXP; 13. PXP, DXPO; 14. AXP. TlCR; 15. AXC, TXP+; 16. RXT, A6TR+; 17. RtC, D6AR; 18. C4AI, 0-0-0; l!l. OXA, T1C+; 20. A5C, 05C+; 21. R1T, D6A+. y jaque perpetuo. Sin embargo, no debejugarse20. ... , DXC?; por 21. D8D+ o 21. D8R+. Análisis de Kuznetsov y Neustadt. 3b) 1 1 . C50, CXC; 12. PXC. DXP50; 13. C3A, D4AR; 14. P3CO, A3R; 15. PXP, AXP; 16. A3T, 03R, con juego i g u a l . Lothar .

Schmid-Puig, Berna, 1962.

8. P3CD 8� CXP. 050, seguido de 9. .. ., DXPR, no es ahora peligrosa para las negras puesto que la columna de rey está suficientemente pro­ tegida. 8. P3D, C20; 9. P3CD, P4ADI; 10. A2C, P3AR; 1 1 . C020, 0-0; 12. D3R, CtC; 13. TRlO, C3A; 14. P3A, 01R, y las negras tien �n una buena partida. Blau-Keres, Zurich, 1959.

10. P4D P3A 1 1 . P4A La mejor continuación, según los últimos experimentos. Veamos otras posibilidades. 11. D3R. D2R; 12. C3A, 0-0; 13. TOlO, A5CR; 14. C2R, TDlR, con posición satisfactoria de las negras Troianescu-Keres. Budapest, 1952. 11. C020, D2R; 12. 02R, y ahora: 1) 12. .. , 0-0; 13. C4A, A5CR; .

14. C3R, A4T; 15. C5A, D2A; 16. TOlO, y la posición de las blancas es ligeramente superior. Loth.ar Schmid, Kluger, Olimpíada de Ams ­

terdam. 1954. 2) 12 . ... , 0-0-01, la continua­

ción correcta. Por ejemplo: 2a) 13. C4A, AXC; 14. OXA (ahora sin jaque); 14. ..., PXP; 15. DXPO, C4A, con In doble amena­ za 16. ... , DXPR, y 16. ..., AXP+l 2b) 13. P4A, PXP; 14. CXP, TRlR; 15. TR10, C4R; 16. C1A, A20, las negras tienen una bu�na partida. Niephaus-Dünhimpt. Han­ nover, 1954.

1 1 . ... PXP 12. CXP D2R 13. C3Tl 0-0-0 14. CD2A Conj uego aproximadamente igual

.

.. . 9. A2C

8.

C20 A30

Juego 6:

1 . P4H 2. C3AR

Lothar Schmid-Kaliwoda. 1I Cam­ peonato del Mundo por correspon­ dencia. La Defensa Rusa

P4R C3AO

3. A5C 4. A4T

P3TD C3A

11 3. 0-0

P3D

Diagrama 110 (después de 5.

.

.., P3D)

Esta es la Defensa Rusa, que debe su nombre el haberla prac­ ticado varios grandes maestros rusos, o polacos de origen ruso (Tchigorín, Janowsky, Rubinstein). Con esta defensa las negras obtie­ nen, en la mayoría de los casos, un juego seguro, si bien en la ac­ tualidad se pone en duda su valor a causa de la variante 6C. Conside­ raremos las siguientes respuestas: 6. P3A 6A = 6B 6. TtR 6. AXC+ = 6C = 6D 6. P4D = 6E 6. P4A 6A: (véase el diagrama 110) =

6. P3A

La continuación más usual. A2D 6. ... Tenemos aquí una de las defen­ sas más importantes de la Aper­ tura Española, a la cual puede llegarse también con las variantes 6B o 14A. 6 ... CXP. según los últimos ex.

.

perimentos, esta jugada es de du­ doso valor por 7. P4D, A2D; 8. TlR, y ahora: 1 ) 8. ..., C3A; 9. PXP. la) 9. ... , PXP; 10. AXC. AXA; 11. DXD+. tal) 1 1 . ... , TXD; 12. CXP, A5R; 13. C2D (13. P3A, A4AD+); 1 3. ... , A2R; 14. CXA. CXC, y aho­ ra la jugada de Alekhine 15. A6Tl, proporciona una clara ventaja a las blancas. Por ejemplo: 1 5. ..., CXPAD; 16. AXP, 'ftCR; 17. C6A (todavía es más fuerte 17. CXP); 17 . ..., PXC; 18. AXC, T3C; 19. T4R, etc. Boleslawsky-Sliwa, encuen­ tro Rusia Blanca-Polonia. 1955.

la2) 1 1 . ... , HXD; 12. CXP, A4D; 13. A5C, las blancas tienen mejor juego. Lilienthal - Alekhine, Hastings. 1933. lb) 9 .. , CXP; 10. A4A!, AXA; .

.

1 1 . DXA+, D2D; 12. D4D, A2R; 13. AXC, PXA; 14. DXP, R1A; 15. CD2D, con ventaja de las blan­ cas Pilnik-Averbach, Estocolmo, 1952. 2) 8 . ... , P4A; 9. PXP, PXP; 10. CD2D. 2a) 10. ..., D3A; 11. CXC. PXC; 12. A5CR!, D4A; 13. A2A, A3D; 14. AXP, D5C; 15. D3D, con clara ventaja de las blancas. Kupper­ Christoffel. Zurich, 1961.

2b) 10. ..., CXC; 1 1 . ARXC (también es buena 1 1 . CXP); 1 1 . ..., AXA (11. ... , CXC+; 12. ARXC. P5R; 13. AXP, PXA; 14. TXP+ y ganan); 12. CXP, A5R y según los experimentos de los maestros

12 rusos es la única posibilidad de la� negras para defenderse (13. AXC, D3A).

da, ésta es la maniobra caracterís­ tica en la posición del diagrama. Diagrama 111 (después de 9. CD2D)

A2R 7. P4D 8. T1R 8. D2R. conduce a la variante 9B. 8. PSD. cierra el centro y con· duce a una partida complicada, sin proporcionar a las blancas una ventaja real. Debe preverse 8. ... , C1CD; 9. A2A, A5C; 10. P4A, CD2D, y ahora: 1 ) 1 1 . C3A, C1 Al; 12. P3TR, A2DI, y las negras tienen una bue­ na posición por haber podido reti­ 9. .... AIR. con la idea de contf­ rar el alfil a 2D. Por ejemplo: 13. nuar con C2D y P3AR, constituye C1R, P4CR; 14. AXP, T1CR; 15. la variante de Kécskémet, y fue P4A, PXP; 16. AXP, AXP; 17. recomendada por Alekhine. Es u n PflA, C3C, con juego vivo y apro­ poco embarazosa y por este mo­ ximadamente de iguales posibili­ tivo se practica poco. dades. Bogoljuhow-Alekhine. zo.a 1) 10. C1A, PXP; 11. PXP, P4D, partida del encuentro, Rotterdam.I92.9 y las negras tienen un juego sa­ 2) 1 1 . P:3TR!, A4T; 12. C3A, tisfactorio. 0-0. 2) 10. P3TR, C2D; 11. P5D, con­ 2a) 13. P4CRI?, A3C; 14. D2R, duce a una buena partida para las P4TR!; 15. C4TR, PXP; 16. PXP, blancas. C2T!; 17. C5A, A4C, y las negras 3) 10. A3C, es igualmente una tienen la iniciativa. Van den Bo�ch­ buena continuación, propia para Kmoch, Baam, 1941. mantener la tensión en el centro. 2b) 13. A:3R, seguido de P4CD Smyslov-Lijublinsky. Campeonato de y P5A, es la continuación correcta. la U.R.S.S.. 1949. 0-0 8. ... 9. ..., TJR, es una continuación 9. CD2D moderna. 9. PSD, y la partida entra en la La idea consiste en colocar variante que acabamos de expo­ eventualmente el AR en 2CR, y ner (8. P5D con una ligera dife­ las negras obtienen una posición rencia con la jugada T1R). sólida. La liquidación en el centro PXP no reporta ninguna ventaja a las 9. . En unión de la siguiente juga- blancas. Por ejemplo: ..

13 1 ) 10. AXC, AXA; 11. PXP, PXP; 12. CXP, AXP; 13. CXP, RXC; 14. CXA, DXD;: 15. C5C+, RlC; 16. TXD, A-!A (con l a ame· naza T7R); 17. R1A, C5C; 18. A4A, AXP; 19. T7D, A2T; 20. TlR!, C6H+l; 21. AXC, AXA; 22. C3A, Lothar Schmid-Fairhust, Dublin, 1957,

y ahora 22. ... , A5A, seguido de A3D, hubiese asegurado la igualdad. 2) 10. ClA, P3T; 11. C3C, A lAR; 12. PJTR, C4TD; 13. AXA, DXA; 14. PXP, PXP; 15. C.'1T, 03A, con juego i gual. Unzicker-Smyslov, Mos· cú, 1956.

3) 10. P3TR, A lAR; 11. A2A, P3CR; 12. C1A, A2C; 13. C3C,D2R; 14. A3R� C4TD; 15. P3C, P4A, con juego igual. Durasevic-Smyslov, Bel­ grado, 1956.

4) 10. P3TD, AlAR; 1 1 . P4CD, P40!; 12. A3C!, A5C; 13. P3T, lt'4T; 14. PDXP, CDXPR; 15. P4C, CXC+; 16. CXC, PXP; 17. PXA, PXC; 18. TXT, DXT; 19. DXP, D8R+; 20. R2C, T1R; 21. P6T, P3A, y el juego es aproximadamente igual. Fischer-Gligoric. Torneo de Candidatos, Yugoslavia, 1959. Sería débil la continuación 13. PRXP, CRXP; 14. A2C. Smyslov-Gligoric, encuentro Yugoslavia-U.R.S.S.. 1959.

C5CD 10. PXP 10. ..., P4D; 1 1 . P5R, C4TR; 12. C1A, A5CD. Milic-Pilnik Belgra­ do, 1952. y ahora la sencil la jugada 13. A2D, proporciona buena posi­ ción a las blancas. 11. AXA La continuación más practica-

da, aunque también es bueno 11. A3C. Por ejemplo: 11. ... , P4A; 12. C1A, A4C; 13. C3C, P4D; 14. P5R, y ahora: 1 ) 14. ... , C5R; 15. CXC. PXC; 16. TXP. A60; 17. T3R, P5A; 18. P�TD!, con ventaja de las blancas Euwe-Keres, 3.8 partida del encuen­ tro 1939/40.

2) 14 . ..., C1Rl; 15. C5A, P5A; 16. A2A, CXA; 17. DXC, A2D, y el juego está igualado. DXA 11. .. . 12. ClA 12. D3C. P4TD!; 13. P3TD, C3TI, y las negras tienen una partida segura. Por ejemplo: H. ClA, P4D; 15. P5R, C5R; 16. C1-2D, P5T; 17. D3D, CXC; 18. AXC. 1) 18. ... , P3AD; 19. C5C, AXC; 20. AXA, C2A; 21. T3R, C3R. la) 22. D5A?, C4A!, con ventaja de las negras. Smyslov-Keres, Cam­ peonato de la U.R.S.S., 1941.

lb) 22. A6A!, PXA; 23. D5A!, ataque muy fuerte de las blan­ cas. Si este ataque es correcto o no, carece de importancia. La po­ sición está indicada para el sacri­ ficio de l alfil blanco. 2) 18. ... , P4AD! (Botvin nik), y las negras tienen un buen contra­ ataque en el flanco de dama. 12. P5D, la continuación lógica en nuestra opinión. Las bl an cas pu ed en aspirar de este modo a que su AD sea un «alfil malo. (Sin 12. P50, las blancas deben aspirar a la configuración P4D y P5R). Esta con

14 posiblilidad no ha sido todavía experimentada. Diagrama 112 (después de 12. Cl A)

ocupar ei punto 30 con el caballo, es la continuación correcta. 2b) 16. P4A, A30; 17. D3A, P5A, con buen juego de las negras. Ba­ lanel-Szabó, Olimpíada de Moscú, 1956.

2c) 16. C3R (una idea de Brons­ tein), 16 . ... , CXPR; 17. C4A, D4A; 18. 02A, C3D; 19. DXD, CXD; 20. TXP, C3Dl; 21. TXA, CXC; 22. TXPC, TR1D, recuperando el peón con juego aproximadamente igual. 13. C5R P4D 12. ... Lo mejor, desde el punto de vis­ ta posicional (El alfil que corre por las casillas negras se compen­ sa por el fuerte peón central de las blancas). Sin embargo, este avance no deja de ofrecer sus pe­ ligros. Puesto que ahora las blan­ cas pueden preparar un ataque. 12. ..., P4A, es por esto una alter­ nativa conveniente: 1 ) 13. P3CD, P40!; 14. P3TD, C3A; 15. C5R, 010, y la posición de las negras es satisfactoria. Ya­ tes-Romanowsky, Moscú, 1925. 2) 13. P3TD, C3A; 14. P50, C4R, 15. CXC, PXC. 2a) 16. C3C, C1H; 17. P4A. 2al) 17 . ..., A3D; 18. C5A, P3A; 19. P3CR, P3CR; 20. C6T+. R1T; 21. P5A, y las blancas obtienen una excelente partida. Averbach-Smys­ lov, Campeonato de la U.R.S.S., 19Sl. 2a2) 17. ..., P3A, con idea de

D1R

13. ..., D3R; 14. P3TD, no difiere

mucho de la textual.

14. P3TD C3A 15. cxc oxc 16. P5R C5R 1�. ... ClR?; 17. C3R, 020; 18. D3A, P3AD; 1 9 . C5A, RlT; 20. A20, TlCR; 21. TOlA, C2A; 22. T3Al, y las blancas tienen excel.en­ tes posibilidades de ataque. Smys­ lov-Barcza, Budapest. 1952. .

17. C3R 17. P3AI. C4C; 18. P4A. 1) 18. ... , C3R; 19. P5AI, CXP; 20. C3R!, y en opinión de Smyslov, las blancas tienen excelentes posi­ bilidades de ataque que compensa el sacrificio del peón. Por ejemplo: 20. ..., A4A; 21. P4CD, A3C; 22. R1T, con la amenaza A2C. 2) 18. ... , C5R; 19. P5A; TR1D!, y según Hans Müller las negras pueden defenderse. Eventualmen­ te seguiría 03CD y P4A.

15

D2D 17. ... Las blancas amenazaban con ·ganar un peón con 18. D3A, seguido de 19. CXP. 18. P3A C4C P4A C5R 20. P5A TR1R Partida Sza.bó-Euwe. Budapest. 1940. La continuación fue 21. D3A, P3AD; 22. P6A, AlA; 23. PXP, AXP; 24. C5A, D3R, y la posición de las negras es segura. El ataque de las blancas no puede progresar más. 6B: (véase el diagrama 110) 19.

6. T1R La mayoría de las veces esta jugada conduce en la práctica, a las mismas posiciones que 6. P3A. Tiene la ventaja de que las blancas descartan la posibilidad 6. P3A, CXP. Por otra parte, conviene observar que las negras pueden capturar el AR.

6. ... P4CD En combinación con la jugada siguiente, ésta es la continuación característica de la variante que estudiamos y que conduce a gran­ des complicaciones. 6 . . A2D: conduce después de 7. P3A a la variante 6A, pero las blancas disponen de varias intere­ santes continuaciones: 1) 7. AXC, PXA (es mejor 7. ..., AXA) 8. P4D, PXP; 9. P5RI, PXP; 10. CXP, A2R; 11. DXP, P4A; 12. DXA+I, CXD; 13. C6A, 0-0; 14. CXD, AXC; 15. C3A, y las blancas .

..

.

tienen ventaja en el final. Larsen­ Unzicker, 1959. 2) 7. C3A, recomendado por Pachman. Si 7 . ... , P4CD; 8. A3C, A2R; sigue 9. C5D, con transposi­ ción a una Yarianle del juego 10, favorable a las blancas. Por eso es mejor 7. ... , A2R, con transposi· ci ón a la variante normal de la Defensa Steinitz (Juego 17) con la interpolación de P3TD y A4T. 6 ..., ASC merece considerarse. Por ejemplo: 1) 7. P3TR, A4T; 8. P3A, A2R, con transposición a la variante principal, nota a la jugada 8. ... , A5C. 2) 7. P3A, C20. 2a) 8. P4D, D3A! 2b) 8. P3TR! 2b1) 8 . ... , A4T; 9. P4D, y ahora 9. . . ., D3A es malo por 10. P4CR, A3C; 11. A5CR. 2b2) 8. ..., AXC; 9. DXA, A2R; 10. P4D, 0-0; 11. A3R, A4C!; 12. P5Dl, CD1C; 13. C2D, AXA; 14. DXA, y las blancas tienen una partida ligeramente s u p e r i or. Unzicker-Averbach, Estocolmo, 1952. .

7. A3C

C4TD 7. ... A2R: 8. P3A, entrando en la variante principal. .

8. P4D CXA 8. ..., PXP?. es malo por 9. P5R! PTXC A2CI 9. ..., PXP: 10. CXP, es muy favorable a las blancas. 9. ..., C20. 1 ) 10. P4CD, A2R. 9.

1(i 1 a) 1 1 . P3CD, 0-0; 12. A2C. A3A; 13. P-lA, TlC!, las negras tie­ nen una buena partida. Lasker­ Janows ky. 9.a partida del encuen­ tro, 1910. lb) 1 1 . PXP, CXP; 1:2. C40!, y las blancas estún bien. ·�) 10. PXP! 2a) 10. ..., CXP; 11. C-lD!, las blancas tienen muy buen juego. 3) 1 O. A2D!, .-\2R; 1 1 . A5T, A2C. P. Schmidt-Keres, SaJzburgo. 1943, y ahora 12. P-lA!, inmediatamente seguido de C3.-\, las blancns ejer­ cen un�> fuerte presión en el flanco de dama. Diagrama 113 (después de 9.

..., A2C)

10. A5CI 10. PXPI. CXPI; 1 1 . PXP. AXP;

12. 040, 02R, con esta continua­ ción se considera que las negras p ue dan liberar bien su juego. Pero un ingenioso análisis de Bonda­ rewsky, pone en duda esta anti­ gua opinión. La continuación pue­ de ser: 1) 13. DXP?, 0-0-01; y las blancas no pueden parar el a taque

de las negras: 14. A.)C, CXA!; 13. TXD, TR1C!; 16. DoA, CXC+; etc. 2) 13. C3A!, J>4AR; 1 -1. A5C. 2a) 1-1. ... , 02A, ec;la continua­ ción recomendada en el Laborók de Collijn fue desaprobada enton­ ces por .-\lekhine, consi d erando la ,·ariante: 15. CXC. P X C ; 1(). TXP+, AXT; 17. DXA+. H2D; 18. C4D, y el ataque de las blancas difícilmente se puede parar. 2b) 14. ... , 020; 1.). CXC, PXC; 16. T)�P+. AXT; 17. DXA+. R2A; 18. TlR. 2b1) 18. ... , TR1R; HJ. 050+, R1A; 20. T5R!, TXT; 21. CXT, D1R, y ahora gana la brillante jugada 22. CiD+!. propuesta por Bondarewsky. 2b2) 18. ..., TDlRI; 19. D5D+, R1A; 20. TJH, TXT; 21. CXT, DlR; 22. D3A+, RlCI; 23. D5D+, tablas por jaque perpetuo. Aver­ bach-Alekhine, París, 1922. Sin em­ bargo, el «coup» de problema 23. A7R!, que también se debe a Bon­ darewsky, da la ventaja a las blan­ cas, por ejemplo: 23. ... , P3T; 24. D•>D+, R2T; 25. D3D+. P3C; 26. AXA, PXA; 27. DXPD, TlA; 28. P3C, y las blancas obtendrán u n peón pasado en la columna A O (28. ..., T4A; 29. P4AR). O 23. ..., P3C; 24. A6A, AXC; 25. D5D+, R1A; 26. A)(A, T1C; 27. P3C, y las blancas tienen suficiente compen­ sación por la calidad. 10. ... P3T 11. A4TI 11. AXC (no da ninguna venta-

17

ja); 1 1 . ... , OXA; 12. C3A, P3A; 13. P50, P4A; 14. 030, 010; 15. CXPC, buscando un jaque perpe­ tuo. Lasker-Rubinstein, Ostrau. 1923. 11. ... P4C Una jugada muy interesante en teoría, pero de dudoso valor en la práctica. ll. ..., A2R, ofrece posibilidades a las negras de obtener la igual­ dad. Por ejemplo: 1 ) 12. PXP. PXP; 13. OXD+. TXD; 14. CXP, P4C; 15. A��C. CXP; 16. C3AD, CXA; 17. PTXC, R1A, con juego igual (Rauzer). 2) 12. C3A! 2a) 1 2 . ..., P5C; 13. AXC. AXA; 14. C50, P4TD (es mejor 14. ..., P4A); 15. CXA+, DXC; H). PXP, PXP; 17. D3D!, con ventaja de las blancas. Unzicker-Lehma1m, Cam­ peonato de Alemania Federal, 1953. 2b) 12. ... , C2D; 13. AXA, OXA; 14. PXP, PXP (14. ... , CXP; 15. C4D); 15. C5D, 030!, con igualdad. 12. A3c cxr ¡Una retirada «voluntaria))! 13. CXPR! Un sacrificio rico en posibilidades mencionado por Tarrasch en el l i b r o d e su encuentro c o n Schlechter, 1911. 13. PXP, P40; 14. P6R, PXP; 15. C4D, D3A; 16. C3AD, no es en modo alguno tan satisfactorio para las blancas como se creía en prin­ cipio. Por ejemplo: 1 ) 1 6 . ... , 0-0-0; 17. D4C, TlR; 18. CXC, PXC; 19. TXP!, P4TR; 20. D2R, T3T; 21. A5R, DlD;

22. P4AO, A30; 23. AXA, DXA; 24. C5A, y las blancas tienen una ventaja decisiva. Poulsen-Antzé, Es­ candinavia-Alemania, 1938. 2) lo . ... , A4A (y las negras tie­ nen las mejores posibilidades); 17. CXC, PXC; 18. Df>T+. 02A; 19. CXPR, DXD; 20. C7C+, R2A; 21. CXD, R3C, etc. (Keres). PXC 13. ... 13. ..., A2R 14. C30, es muy satisfactorio para las blancas. P3AR 14. AXP R2R 15. D5T+ 15 ..., R20; lH. D4C+. RlR; 17. A3C, es igualmente Yentajoso para las blancas. 16. A3C DxY 17. C3A P4AR 18. TOlO Las blancas tienen un ataque muy fuerte que compensa el sa­ crificio de la pieza. Análisis de Tarrasch. 6C: (véase el diagrama 110). 6. AXC+ La continuación más agresiva. PXA 6. ... 7. P4D .

Diagrama 114 (después de 7. P40)

18 7. ... CXP Esta jugada fue puesta en prác­ tica por Rubinstein. Conduce a grandes complicaciones, y según el estado actual de la teoria, son más Jiworables a las blancas que a las negras. He aqui otras con­ tinuaciones: 7. ..., PXP, conduce a una forma poco satisfactoria de la Defensa Steinitz (17C), por ejemplo: 1) 8. CXP. la) 8. ..., P4A; H. C3AR!, A2H; 10. C3A, 0-0; 11. TlR, A2C; 12. A5C, con buen juego de las blan­ cas Smyslov-Botvinnik, IJ.I' partida del encuentro, 1954. lb) 8. ... , A20; 9. D3Al, con la amenazA P5H. 2) 8. DXP, y las hlancas tienen buena posición. 7 . ., C2D, una interesante con­ tinuación de esta variante, que se debe a Tchigorin. Actualmente es poco practicada. La mejor dispo­ sición de los peones blancos pare­ ce compensar la pareja de alfiles negros. 1 ) 8. C3A, conduce a la variante lOB, y no proporciona ninguna \'enlaja. En semejante posición es conveniente poner en juego el ca­ ballo vía 2D-4A. 2) 8. C3T, P3A (es mejor jugar enseguida 8. ..., P4TD); 9. C4A, P4TD; 10. TlR, C3C; 1 1 . C3R, .-\.2H; 12. P4A, A3R; 13. P5A, con ventaja de las blancas. Rauzer-Savicki, Le­ ningrado, 1933. 3) 8. PXP, PXP; 9. 030, A3D; .

.

10. A5C, P3A; 1 1 . A3R. Gligoric­ Stalda, Venecia, 1949, y ahora está indicada 1 1 . .... P4TD. 7. ..., ASC!?, es una continuación arriesgada que se debe a Lipnitz­ ky. La Yariante critica: 8. PXP, CXP; 9. PXP (9. TlR o 9. D2R, P40, da una posición cómoda a las negras); 9. .. , AXP, y ahora: 1) 10. P3TR, A4ARI; 11. C4D, D3A; 12. D30, T1D, y las compli­ caciones de la posición proporcio­ na buenas posibilidades a l�s ne­ gras Suetin-Lipnitzky, Campeonato de la U.R.S.S., 1952. 2) 10. T1R, 0-01, y ahora 11. TXC?, es mala por la respuesta 1 1 . ... , AXP+. 3) 10. D2RI 3a) 10. ... , P4AR'I!; 1 1 . P3TRI, A4T (11. ... , AXC?; 12. PXA. o 1 1 . ... , P4TR; 12. CD2D); 12. P4CR, A3C; 13. PXP. AXP; 14. C5C, y las blancas ganan una pieza. En opinión de Konstantinopolsky 14. .. , 0-0; 15. CXC, DlR, ofrece todavía posibilidades de contra­ ataque. Pero no 15 . ... , D5T por 16. D4A+ y 17. CXA. 3b) 10. ..., D2R; 1 1 . TlR, C4A (11 . ... , P4AR; 12. P3TRI, etc.); 12. DXD+, AXD; 13. C4Dl, y las blancas t i e n e n mejor posición. Análisis de Donner. .

.

8. TlR Parece también fuerte 8. D2R, P4AR; 9. CD2Dl, CXC; 10. CXC, y ahora: 1) 10 . ..., P5R; 11. P3AR, P40; 12. PXP, PDXP; 13. CXPI

19 la) 13 . ... , PXC; 1-t. D5T+ y ganan.

lb) 13. ... , DXP+; 14. C2A+, con ventaja de las blancas. 2) 10 . ... , A2R; 11. PXP. 2a) 11. ... , PXP; 12. ('AA. 2a1) 12. ... , P5R; 13. TlD, A3D; 14. A4A, y las blancas tienen me­ jor juego. 2a2) 12. ... , 040; 13. cxr. 0-0; 14. TlD, con clara ventaja de las blancas. Alexander-Resbevsky, Has­ tings, 1937/38. 2b) 11. ... , 0-0, y esta posición

lidad. Cbristoffel Trifunovic, Torneo de la Mitrocopa, 1953. Sin embargo, la defensa puede fortalecE>rse d e modo importante con 14. ... , A3R, -

seguido eventualmente de D5TD. La tentadora 14. P3C, se refuta con 14 . ... , D3C!, pero no seria bueno 14. ... , DXC?; 15. D5T+. P3C; 16. D5C, y las blancas ganan (16 . ... , A5C; 17. AXA, DXA; 18. D6A). Diagrama 115 (después de 10. C4D!)

debe ser objeto de más amplias

invesUgaciones: Después de D4A+. RlT; 13. DXP. TlC, negras parecen tener algu nas sibilidades en compensación peón sacrificado.

12. las po­

del

8. ... P4AH P4D 9. PXP 10. C4D! 10. C3A!?, es una idea original de Botvinnik, la cual debe someterse todavia a un estudio más detenido. El plan de las blancas consiste en jugar C4D, P3A y P6R. Veamos:

1) 10 . ... , A4A; 11. A3R, AXA; 12. TXA, 0-0; 13. C4D, D1R; 14. P3A, P5A; 15. T1R, CXC; 16. PXC, y las blancas tienen ventaja posi­ cional. Boleslawsky-Smyslov, Cam­ peonato de la U.R.S.S., 1941. 2) 10. ... , A5C; 1 1 . C4D!, CXC; 12. PXC, AXP; 13. A3T, D5TI; 14. CXPAD, AXTR; 15. DXA, A2D; 16. C7RI, y el ataque de las blan­ cas compensa la pérdida de la ca-

10. ... A4A 10. ..., P4A; 11. C2R, es muy favo­ rable a las blancas, por la amenaza

12. C4A. 1) 1 1 . ... , A3R; 12. C4A, 020; 13. CXA, DXC; 14. P3AR, ganando una pieza. 2) 1 1 . ..., P3A; 12. C4A, (amenazando 13. D5T+) 12 . ..., P3C; 13. P4AI, P5D (si 13 . ... , PXP; 14. D4T!); 14. D4T. 2a) 14. ... , A2CD; 15. P3A, C4C; 16. P4T, C2A; 17. P6R!, ganando una pieza, pues tanto 1 7. ... , C3D, como 17 . ... , C3T es posible 18.

:,w

P7R!, AXP; 19. C5D, etc. Keres­ Reshevsky, A VRO. 1938. 2b) 14 . ... , A2.D; 15. P6R. 2c) 14 . ..., D2A; L5. P3A, C4C; 16. C5D. 2d) 14. ... , D2D; 15. P3A, C4C; 16. P6R, D2CD; 17. P4T, y en todos los casos ganan las blancas. lO. ..., DST, sibilidades:

con las siguientes po­

1) 1 1 . P3AR, A4A, la variante del texto.

entrando en

2) 11. P3CR!, D6T; 12. C3AD!, con ventaja de las blancas en opi­ nión de Fine, quien da las siguien­ tes variantes: 2a) 12. . .. , CXC; 13. PXC,

A2C; 14. C6R, etc. 2b) 12 . ..., P4A; 13. CR2R!, CXPA (si 13. ..., P3A; 14. C4A); 14. RXC, P5D; 15. C5D, A2C; 16. P4A, DXPT+; 17. R3A. 2c) 12. ..., CXPA; 13. RXC, DXPT+; 14. R3A, y en ambos ca­ sos el ataque de las negras no prospera.

11. P3AD 11. A3R, P5A!, y las negras consi­ guen tablas, por lo menos; 12. CXP, PXA; 13. CXD, PXP+; 14. RlA, PXT:D+; 15. RXD, A7A+; 16. R1A, T1A; 17. DXP, A4AD+, etc. jaque perpetuo.

11.... , 0-0; 12. P3A, C4C, debe considerarse, por lo tanto, como el mal menor.

1) 13. A3R?, P5A!; 14. A2A, A3C; 15. C2D, P4A, y las negras tienen una excelente partida. Rabino­ witch - Romanowsky, Le ni n g ra d o , 1938. 2) 13.

R1TI, AXC; 14. A XCI, DXA; 15. PXA. T1C; 16. P3CD, D3T; 17. C3AI, y el juego de las blancas apunta ventaja posicional. Las posibilidades de las blancas en el flanco de dama son mayores que las de las negras en el flanco de rey. Smyslov-Lowenfisch, Moscú, 1938. 12.

P3A

C7A

12. ..., D7A+; 13. R1T, es una tempestad en un vaso de agua.

13. P3CRI 13. D2D o 13. D2R, no es posible por 13. ... , C6D!

D4T 13. ... 13 ...., CXD?; 14. PXD cuesta una pieza y después de 13 . ..., C6T+?; 14. R2C, D4T; 15 .. P4AR, el caballo de las negras está perdido.

11. P3AR. merece atenta conside­ ración. Las negras deben renun­ ciar a la continuación 1 1 . . .. , 0-0, y conformarse con la jugada 11. ..., D5T, de dudoso valor.

1 1 . .. . ,

Un intento de reforzar el ataque, aunque no muy satisfactorio. Sin embargo, este experimento es útil para la teoría.

D 5T

14. D2R Las blancas

pueden también

�ceptar el sacrificio: 14. R.>).,.C, 'C(A; 1 1 . CXP, conduce a juego casi igual. 9 . .. ., PXA (en lugar d e 9. ..., P30) seria débil por 10. CXP, 0-0; 11. C3AD, TlR; 12. A5C, A2C; 13. C5A. Szabó-Balanel. Buda­ pest, l9S4. la2) 9. CXC. PXA; 10. DXP, 0-0; 11. DXPT, TlC, y las ne­ gras han liberado su j uego. Res­ hevsky - Unzicker, Olimpiada de Dubrovnik, 1950 y también Fuderer­ Euwe, Beverwijk. 1952.

lb) 8. A3C, P30; 9. A5D, A2C; 10. CXP. CXA; 11. CXC, AXC;

5.) 12. PXC, A2C, y según Hellstab las blancas tienen a lo sumo igualdad. 2) 7. ... , 0-0; 8. P5H. 2a) 8. ..., C4D; 9. A3C, C3C; 10. CXP, CXC; 1 1 . DXC, P4D; 12. PXP a. p., DXP; 13. D4R, A3A; 14. C3A, y las blancas tienen u n juego algo mejor. Suetin-Petrosian. Campeonato de la U.R.S.S., 1950. En opinión de Pacbman, la continua­ ción 12 . ..., AXP; 13. D4H, P4AD , conduce a la igualdad. 2b) 8. ... , C1R. 2b1) 9. CXP, CXC; 10. DXC, P4D; 11. PXP a. p. AXPI, con jue­ go cómodo para las negras. Pérez­ Keres, Olimpíada de Munich, 1958.

2b2) 9. A4A, P4D; 10. AXC, PXA; 1 1 . CXP, A2D; 12. C3C, P3C; 13. C3A, C2C; 14. A6T!, T1R; 15. AXC, RXA; 16. 040, A3R; 17. C4T, y las blancas tienen clara ven taja posicional. Maric-Lokvenc, Sarajevo, 1958. En opinión de Rellstab es correcta la continua­ ción 9. ..., P3Al; 10. AXC, PDXA; 1 1 . DXP, DXD; 12. CXD, y las blancas están solamente un poco mejor. 2b3) 9. P3A, PXP; 10. CXP, P3D; 1 1 . PXP, PXP (es mejor 1 1 . ..., DXP, aunque las blancas pue­ den continuar igualmente con 12. C5D); 12. C5D, A3A; 13. D3D, con una excelente partida en compen­ sación del peón. Cholmov - Lein, Campeonato de la U.R.S.S., Baku, 1961.

7. ...

C5R

8. CXP 8. TIR, C4A; 9. AXC, PDXA; 10. CXP, 0-0 (también es suficiente 10. ... , C3R); 1 1 . C3AD. no está sufi­ ciente acreditado. Por ejemplo: 1) 11. ..., TlR; 12. A3R, A l A (si 1 2. ..., P3A, Bogoljubow proponía 13. D2R!, PXP; 14. CXPI, etc.). la) 13. P4A, P3AI; 14. PXP, DXP; 15. D3A, A4A!; 16. A2AI, TDlD; 17. T3R, A3C; 18. TD1R, A3D, con juego igual. Keres Alekhi -

­

ne, Kemeri, 1937.

l b ) 13. D5Tl, P3CR; 14. D5C, DXD; 15. AXD, P3T; 16. A6A, con final favorable para las blan­ cas. Teschner-Keres, Olimpiada de Helsinki, 1952.

2) 1 1. ... , P4AI, la respuesta mo­ derna con el propósito de blo­ quear el P5R. 2al) 12. P4A, C3R; 1:-t C:iA, A3C!, y las blancas no pudieron evitar los molestos peones doblados en la columna de AD. Darga-lvkov, Hastings, 1955/56. Si 13. A3R, CXC; 14. DXC. DXD; L'i. AXD, A3R, y las blancas tienen un final algo mejor. 2b) 12. CD2R!, C3R; 13. CXC, DXD; 14. TXD. AXC; 15. C4D, A l A!, y el final es favorable a las negras por la pareja de alfiles. (Análisis de Pachman) Si 15. C4A, TD1D; 16. A3R, A l A. Si después de 15. C4D, se contesta 15. ..., TDlD, se consigue únicamente la igualdad con 16. A5CI, TXC!; etc. 8. ...

0-0

56

Examinemos otras continuacio­ nes: 8. ..., C4A, esta jugada n o está libre de objeción, a causa de 9. C5Al Por ejemplo: 1) 9. . .. , CXA?; 10. CXP+. H1A; 1 1 . A6T, RlC; 12. D4C o 12. P4AH, y las blancas ganan. 2) 9 . . . , AlA?!; 10. T1H!, CXA; 1 1 . C6D+. 2a) 11. ... , AXC; 12. PXA+, R1A; 13. P3CD, D3A; 14. PXC!, DXT; 15. PXP!, y las blancas ga­ nan (Szabó ). 2b) 1 1 . ... , PXC; 12. PXP+, A2R; 1�. PXA, CXPH.; 14. 04C, 0-0; 15. DXC, P4CD, y las ne­ gras pueden defenderse. 3) 9. ... , 0-0; 10. D4C, P3CH. 3a) 1 1 . AXC, PDXA; 12. CXA+, DXC; 13. D3C, TlR; 14. T1R, A4A; 15. C3A, y las blancas tienen un juego ligeramente superior. Szily­ .

Averbach, encuentro Budapest-Mos­ cú, 1949. 3b) 11. A6T!, es una continua­

ción debida a los maestros rusos. Conduce a grandes complicacio­ nes con excelentes perspeotivas para las blancas. 8. ..., CXC; 9. DXC, C4A, esta simplificación es u n camino se­ guro para consegui r la igualdad. Por ejemplo: 10. C3A, 0-0 y ahora: 1) 1 1. A5CR, AXA! (malo es 1 1 . . . .., CXA?; 12. AXA, CXC; 13. D4TR, ele.); 12. DXC, A2R; 13. D3R, P4D; 14. PXP a. p., AXP; 15. C4R, A4AR, con juego igual.

Prins - Pachman, Trentschin - Teplitz 1949. 2) 1 1 . CiD, P:1D! (si 1 1 . ... , CXA; 12. D;-�c. P3D; t:i . 'flD!, A2D; 14. 040); 12. CXA+. DXC; 13. PXP. D / P; 14. DXD. PXD; 15. A3C, C.(P; 16. DXP, A30; 17. D4D, AXA; 18. DXA. D1A; 19. TR1R, y las blancas ejercen una fuerte presión. ( Análisi s de Evans.) 3c) 12. ..., A3R!; 13. PXP (si 13. A1A, P4D!) 13. ... , DXP!; 14. D4CD, D3CD; 15. DXD , PXD; 16. A3C, CXA, con juego totalmente igual. Persitz - Dunkeblum, Haifa-Tel Aviv, 1958. ,

,

Diagrama 139 (después de 8. . ., 0-0) .

57 9. C.>A PDXC; 14. TlD, DlR; 15. T3D, y Esta jugada es poco eficaz para las blancas tienen ataque a cam­ la continuación del gambito. Las bio del peón. En opinión de Pach­ posibilidades de las blancas son man, las negras pueden defender­ se con éxito jugando: l;) . ... , P4AR!; un tanto azarosas. 9. P3AD, CD>. CXC, 0-01; 16. C7H+, R1 T; 17. P3CR, D6T; 18. D2R,

C5C; 19. D2C, 04TI, con la ame­ naza 20. ..., 04AD+, y 2 1 . ... , T7A (Mikenas). ll. T3C, es quizá más fuerte que 1 1 . T3T. Por ejemplo: 1 ) 11. ... , A3T; 12. C'>(A, PXC; 13. TXPD, C3A; 14. T3T, D2R; 15. P4D, AX A; 16. DXA, 0-0-0; 1 7. AXC, PXA; 18. OlA, R2C; 19. C20, TD1R; 20. T3R, 02A; 21. C3C, con ventaja de las blancas.

Diagrama 145 (después de 10. .. , A4CR)

Tringov - Ciocaltea, Olimpíada de Varna, 1962.

1 1 . T3T 1 1 . C X A ? , AX T ; 1 2 . C4C,

1 1 .. C3A 12. CXA PXC 13. TXPD 0-0 Las negras tienen una excelente compensación por el peón. En cuanto a las blancas, tendrán que perder varios tiempos debido a la molesta posición de su torre, para conseguir desarrollar sus piezas

.

2) 11. ... , C3T, necesita un exa­ men más detenido. Podría conti­ nuarse con 12. D5T+. C2A; 13. CXA (13. A3C, CD4R); 13. ... , PX C; 14. TXP, 0-0; 15. T3T, P3T. .

.

65 del flanco de dama. La partida Smyslov-Lutikov- Campeonato de la U.R.S.S.. 1961, se continuó con 14. T3T, D2R; 13. C3T, TD1R; 16. C2A, C5R; 17. A3C+, R1T: 18. P:�A. C4A; 19. P4D, AXA; 20. PXC, A6R+; 21. CXA. DXC+; 22. R1T, PXP; 23. A2A, P3T; 24. A4R, C4R, v las negras recuperaron su peón �on una posición desahogada para sus piezas. B de 14 Aa: (véase el diagrama 143)

8. ...

P4D

8 . . ., C3A o 8. .... P3T se refuta con 9. D:iC! 8. ..., A2R; 9. 0-0. 1) 9. ... , AXC; 10. D.'5T+. A3C; 11. DXAR, y las blancas tienen mejores posibilidades. Szabó-Snoz­ .

ko. Borowsky. Tata Tovaros. 1935. 2) 9. . . ., P4D; 10. P4AD!, AXC; 11. AXC+, PXA; 12. D5T+· A3C;

13. DXAR, C3A.; 14. D5R+, D2R; 15. A4A, y las blancas tienen jue­ go preferible. Averbach-Vassilejew, Leningrado. 1948.

7. P4D

La continuación más antigua, y posiblemente más prometedora que 7. 0-0. En el estado actual de la teoría, conduce normalmen­ te a un juego niYelado.

9. P:·� A

.

9, P4AD , es una variante nueva,

y por lo tanto poco experimenta­ da. Por ejemplo: 1) 9. . .. , PXP; 10. AXC+. I:>XA; 11. D4T, D2D; 12. C3AD, C3A; 13. P5R 7. ... 0-0, P4A. 8. C:5C la) 14. DXD+, RXD; 1.>. A3H, 8. 0-0?!, sugerido por 13rons­ PXP; 16. AXP, A30; 17. TD1D, tein y Konstantinopolsky. El sa­ R�iA, con juego aproximadamente crificio de pieza es i ngenioso, pero igual. Shamkowitsch - Schianowsky, de dudoso valor. Por ejemplo: Campeonato de la U.R.S.S.. 1961. 8. .... PXC lb) 14. DXPA, PXP; 15. CDXP, 1) �l. TlR+. A:¿R; 10. DXP, CXC; 16. CXC, AXC; 17. TlR, AX C!; 1 1 . A;>CR(si 1 1 . TXA, C3A); 0-0-0!; 18. TXA, D4C, y las 11. ..., A:iC, y las blancas no tie­ negras han conseguido liberar su nen ninguna compensación por juego. su pérdida de material. Nechmet 2) 9. .. . , P3T, proporciona una dinov-Schianowsky, Campeonato de buena partida a las negras. Por la U R S.S. 1961. ejemplo: 10. PXP, DXP; 11. C3AD, 2) 9. DXP, CH2R; 10. TlR (si A:>CD. O 10. C3TR, PXP. 10. P5D, sigue P4CD); 10 . ..., OlA!, P6HI 9. ... y según los análisis de los teóri­ 9. ..., PXP; 10. 0-0!, con exce­ cos yugoslavos, las negras dispo­ lentes posibilidades d e ataque nen de suficientes recursos defen­ para las blancas. Pero sería malo sivos (11. P3TH, H1 D). 10. DXP, por 10. . .., 02R+. ­

.

.

,

( )()

9. .... P3T, 10. PXP, P)A, etc.

13. C3A, C5CH. O 13. P3TH, D1R, seguido de 14 . ..., D3C . 2) 1 1 . AXP, A3D, y si 1 2. 0-0. 0-0, conduce al número le. Y si 12. C3A, D2H; 13. D2H, A5CR, con­ duce a la variante 12 . ... , C3A, que analizamos mas adelante. 3) 1 1 . C3A!, seguido de 12. C5R, proporciona la ventaja a las blancas. Diagrama 146 (después de 10. ..., A3D)

10. P4ARI 10. AXP. P:H; 1 1 . C3TH, AXC; 12. PXA. A:3D, y las negras tienen muy buenas posibilidades de con­ traataque, a causa de la mala dis­ posición de los peones blancos. 10. ...

A3D 10. ..., C3A. es menos exacto, porque se renuncia a la posibili­ dad de C2R y C3T. Una posible continuación puede ser: 1) 1 1 . 0-0, A3D. la) 12. C3A, P4CD (si 12. ..., AXP?, es malo por 13. C5R); 13. C5R, CXC; 14. PAXC, A5CR; 15. DlR, P7R; 16. T2A, PXA; 17. A5C, 0-0, y las negras tienen una buena partida. Bannik-Gufeld, Cam­ peonato de la U.R.S.S., 1961. lb) 12. AXC+. PXA, y ahora el refuerzo de la posición, median­ te la maniobra C3A-5R, merece considerarse. le) 12. AXP, 0-0, y a las blan­ cas no les resulta fácil sacar ven­ taja de su peón de más. Veamos:

1 1 . AXP La captura inmediata del PR, no puede ser lo mas fuerte. Veamos otras continuaciones: 11. D3A, D3A; 12. DXPR+, CR2R, y las negras tienen sufi­ ciente compensación por el peón de menos. Euwe-Keres, Campeonato Mundial. 1948. 11. DST+!. P3CR (si 11. ... , A3C, la continuación puede ser 12. D3A, D3A: 13. DXPR+, CR2R; 14. D6R!) 12. D3A, D3A; 13. DXPR+, CR2R, y es discutible si las negras consi­ guen suficiente contraataque por el peón sacrificado. La diferencia con la variante 11. D3A, estriba

67 en que el punto 3CÜ, no puede ser ocupado por las piezas negras y especialmente por ningún caballo. 11. 0-0! 1) 1 1 . ... , A:-.:�CH; 14. DXA, con ventaja de las blancas. Skold­ Keres. Estocolmo. 1959. 2) 1 1 . ... , P3T; 12. c:rrH, D5T; 13. D1R!, igualmente con ventaja de las blancas. :�) 1 1 . ..., C:�A. con continuacio­ nes semejantes a la variante 10 . .. . , C0A, indicada anteriormente.

HXD, AXP; 16. C6H, con ganan­ cia de un peón (Keres). 1:�. C3A 13. 0-0, C3CH; 14. T1R, mere­ ce investigarse más detenidamente. A5CH 13. ... Lewin-Schianowsky, Campeonato de Ucrania, 1961, continuaron: 14. P3TR?. AXC; 15. DXA, C4A; 16. R:2A, 0-0; 17. P3CR, TD1R, con clara Yentaja de las negras. Más correcto !'ería 14. 0-0 , AXP; 13. T1H, con juego casi igual. Si 14. ... , 0-0; 15. 020, amenazando C3H.

11. ... D2H 14. Ab: (\'éase el diagrama 142) 12. D2H C3T! 5. ... A2D Un importante refuerzo para el Considerablemente más sólido desarrollo de las negras. Otras que ,). ... , P4A, por lo cual juega continuaciones no son completa­ un importante objetivo en la prác­ mente satisfactorias: tica. 12. .... C3A; 13. C:�A. A5CH (para (). P4D impedir 14. C5R). Diagrama 147 (después de 6. P4D) 1) 14. P:nR, C4TR!; 15. R2A, CRXP; 16. AXCR, DXD+; 17. RXD, AXC+; 18. HXA, 0-0; 19. P3CR, P4CR; 20. C2D, PXA; 21. P4CR, y según Aronin, las negras tienen fundadas esperanzas de conseguir las tablas. 2) 14. CD2D, 0-0, y el resulta­ do no está claro. Vukovic-Marko­ vic, Zagreb, 1946. 12 . .... A6D?, 13. DXA, AXP; 14. C7A!, y ganan. Taimanov-Sachodja­ kin, Leningrado, 1945. El juego se bifurca en las si­ 12 . .... A5CR, 13. DXA, DXA+; guientes ramificaciones: 14. D2R, DXD+ (o 14. ..., AXP; 6. ... , CR2R = A de 14 Ab 6. ..., P3CR = B d e 14 Ab 15. C6R!, D8A+; 16. A10); 15.

6X

6. ..., C3A, conduce también al juego 6, evitando así las negras la dudosa variante 6C. Por eso se prefiere normal mente este rodeo en la práctica, que conduce a l a variante 6A. A de 14 Ah: La Variante Neo-Steinitz (véase el diagrama 147) CR2R 6 . ... El desarrollo de este caballo se conoce como la variante Neo-Stei­ nitz. Diagrama 148 (después de 6.

...,

CR2R)

12. CR2D, P4TR; 13. A:3C, A4AD, y las negras tienen una excelente partida. Sergeant - Rubinstein. Has­ tings, 1930. lb) 8. A3CI, con transposición a la nota sobre 8. 0-0, es la res­ puesta correcta. 2) 7. ..., C3C, es la continuación normal. Las negras renuncian voluntariamente al ataque contra el enroque. 2a) 8. CD2D, A2R; 9. T1R. 2al) 9. .. , P3T; 10. C1A, A4C; 1 1 . PXP, AXA; 12. TXA, CDXP; 13. CXC, CXC; 14. C3R, y las blancas tienen mejor juego. Unzicker-Lete­ lier, Olimpíada de Leipzig, 1960. 2a) 9 .. . , O-O; 10. ClA, C5T!, con juego igual. Partida en consulta Johner, Michel y Nageli, contra Ale­ khine y Bernstein, Berna, 1913. 2b) 8. P5D, C1 C. 2b1) 9. AXA+, CXA; 10. P4A, A2R; 1 1 . C3A, 0-0; 12. A3R, P4AR (amenazando seguir con 13. ... , C5T); 13. PXP. TXP; 14. C4R, con ventaja de las blancas. Darga-Geller. Bled, 1961. 2b2) 9. P4A, A2R; 10. C3A, 0-0; 1 1 . AXA, CXA; 12. A3R, P3T; 13. P4CD, C3A; 14. ClR, P4TD; 15. P3TD, P'>(P; 16. PXP, TXT; 17. DXT, C5C; 18. DlA, A4C, y las ne­ gras tienen una posición satisfac· toria. Perez-O'Kelly, Zavenaar, 1961. 7. P4TR, es una buena prepara­ ción contra la eventual 7. ..., C3C, pero tiene el inconveniente de debilitar el flanco de rey. Veamos: 7. ..., P3T; 8. A3R, PXP; 9. PXP, .

.

7. A3C La continuación más practicada, amenazando 8. C5C. Veamos otras variantes: 7. 0-0. Este enroque parece algo prematuro, porque ahora las negras pueden emprender u n ata­ que directo contra el flanco de rey. Pero falta saber si las blancas de­ ben temer este ataque. 1) 7. ..., P3T. la) 8. CD2D, P4CR!; 9. PXP, PXP; 10. TlR, C3C; 1 1 . ClA, P5C;

69

P4D; 10. P�'5R, P4CD; 1 1 . A2A, lb) 8 . ... , C.íT!; 9. CXC, DXC; C4T; 12. C:3A, .-\;)C, con posibili­ 10. C:)C, P:iCR; 1 1 . 0-0, A3T; 12. dades para ambos bandos. Euwe­ A/A, D�(C, CXP; 13. P3AR, R1Rl 2a) 14. 0-0, C4C; 15. P4AR, C5R; 16. C2D, CXC; 17. AXC, D5T; 18. TDlR, R1D, y las negras pudieron conducir su rey a una casilla segura. Rabar-Taimanov, en­ cuentro Yugoslavia-U.R.S.S., Belgra­ do. 1956. 2b) 14. PXC. D5T+ y 15. ..., DXPR, con ventaja de las negras. 6. ASD, P3AD; 7. AXPAR+, RXA. es una interesante conti­ nuacion propuesta por D. P. de Haan, de La Haya. El AD de las negras carece ahora, colocado en la casilla 2CD, de la diagonal libre, lo cual dificulta la defensa. Hasta ahora faltan ejemplos, pero esta

ingeniosa idea merece experimen­ tarse en la práctica. �aluralmente las negras, pueden jugar 6. ..., A2C. Pero después de 7. AXA, CXA; 8. 0-0, P3D; !). P-10, las blancas tienen una buena posición. 6. CXP no conduce a nada a causa de ti. ... , CXA; 7. PTXC, D4C. Por ejemplo: 8. C3AR, DXPC; 9. T1C, DoT; 10. CL\, A2C; 1 1 . P4D, P3D. 6. 0-0, proporciona la opor­ tunidad a las negras de fortalecer el centro, aunque las blancas ob­ tienen ventaja de espacio. Por ejemplo: 6. ... , P3D; 7. P4D, CXA (si 7 . ..., PXP; 8. DXP, P4AD?, se refuta con 9. AXP+, RXA; 10. D5D+. A3R; 1 1 . C5C+); 8. PTXC, P3AR; 9. C3A, A2C; 10. C4TR y ahora: 1) 1 0. ..., C2R; 1 1 . PXP, PDXP; 12. D3A, D2D; 13. T1D, D3R; 14. A3R, P4C? (es correcto jugar 14. ... , P4TR, con idea de continuar con 15 . ..., P4C o 15 . ... , D5C); 15. CXPI, PTXC; 1 6 . D 5 T + , D 2 A ; 1 8 . TXT+ . AXT; 19. T8D+, y ganan. Spassky-Taimanov, Campeonato de la U.R.S.S., 1955. 2) 1 0. ... , D2D; 1 1 . P4A, 0-0-0 12. C3A, C2RI; 13. PDXP, PDXP; 14. DXD+, TXD; 15. PXP, P5C, con juego igual. Unzicker-Taima­ nov, Torneo Memorial Alekhine, Moscú, 1956. Si las blancas juegan para ganar un peón, las negras obtienen una compensación suficiente. 6. ... PXP

7. DXP 8. PTXC 9. 0-0

CXA C2R

9. ASC, con idea de provocar la débil jugada P3AR, es una propo­ sición de Vukovic que merece considerarse. Evita 9 . ... , C3A, a causa de la respuesta 10. AXD, CXD; 1 1 . CXC, HXA; 12. CXP, ganando un peón. Sin embargo, las consecuencias de 9. ... , P3AR, son completamente soportables. Por ejemplo: 10. A3R, C3A; 1 1 . D2D, A2C; 12. C3A, A5C; 13. 0-0, P3D; 14. D2R, AXC; 15. PXC, 0-0, con juego aproximadamen­ te igual. Niephaus-lindblom. Wa­ geningen, 1957. 9. C3A. C3A; 10. D3D, con la idea de jugar C5D, y oportuna­ mente CXPC, es muy digna de tomarse en consideración. Por ejemplo: 1 0. ..., A5C; 1 1 . 0-0, AXC; 12. PXA, 0-0; 13. P4A, PXP; 14. DXPA, D3A; 15. A3T, TlR. Terchner-Van den Berg. en­ cuentro Alemania - Holanda, Dort­ mund, 1957. y ahora las blancas podían haber mantenido la pre­ sión mediante 16. TDlDI (si 16. ... , D3R; 17. D3A, seguido de 18. A2C, si 17 . ... , DXPR?; 18. TR1R). 9. ... C3A A2C 10. D5D 11. P4A ll. CSR. D2R; 12. A4A, ClD; 13. D2D, C3R; 14. A3C, P3D; 15. C3D, D2D; 16. C3A, A2R; 17. P4A, P4ARI, y las negras tienen u n

92 buen contrajuego. Antoschin-Tai­ manov, Campeonato de la U.R.S.S 1955. 1 1 . ... A2R La p a r ti da Gipslis-Taimanov, Campeonato de la U.R.S.S., 1958, continuó con 12. T1D, 0-0!; 13. C3A, C4T; 14. DXPD, CXPC; 15. TJ.C, DXD; 16. TXD, AaO segui­ do de 1 7. ... , AlA, ganando la ca­ lidad. El intento de mantener la presión sobre el PO ha resultado inútil. Tampoco la ganancia de u n peón da nada: 12. PXP, PXP; 13. TXT, DXT; 14. DXPC. Una buena continuación sería: 12. C3A, seguido de 05T y C5D. Si 12 . ..., C4T, seguiría 13. 010, y si 12 . ... P5C, 13. C2R. ..

,

lSC: (véase el diagrama 158). 4. ... P3CR Esta jugada ocasiona más difi­ cultades a las negras que en la co­ rrespondiente de la Variante 22 F. PXP 5. P40 5 . ..., CXP, como en 22A, no es satisfactoria, porque después de 6. CXC, PXC; 7. DXP. D3A; 8. P5R, 03C; 9. DXD, las negras tienen que tomar con el PAO, creando una debilidad permaJuego 16:

neG�e en su posición. Ahora las blancas pueden jugar 6. CXP. porque, no ocupando el alfil la casilla 5CD. no está amenazado por el caballo. 6. CXP A2C 7. A:m Y las blancas están mejor. 7. CX C PCXC; 8. 0-0, C2R; 9. P3AD, 0-0; 10. A3R (10. ... , P4AR; 1 1 . P3A), continuaciqn re­ comendada por Steinitz, conduce igualmente a una buena partida para las blancas. .

ISD: ('·éase el diagrama 158) CRZR 4. ... No es recomendable. Steinitz se esforzó en vano en querer demostrar que con esta jugada las negras consiguen la igualdad. 5. P4D 5. 0-0, P:·m; 6. P3A, A2D=A de 14 Ab. 5. ... 6. CXP 7. DXC 8. 030 y las blancas tienen partida.

PXP CXC C3A una buena

La Variante del Cambio

l. P4H P4R 2. C3AR C3AD 3. A5C P3TO 4. AXC Este cambio se funda en la con-

sideración de que las negras obtie­ nen más desventaja con su peón doblado que las blancas con la renuncia a la pareja de alfiles. Pero la verdad de este juicio no

está demostrado y la mayoría de los expertos sostienen lo contra­ rio. Por este motivo, la jugada del texto se j uega muy raras veces hoy día. 4. ... PDXA captura con el PC ha sido desechada por la teoría y apenas se emplea en la práctica. Pero no está demostrado que esta jugada sea totalmente mala. Por ejemplo: 4. ..., PCXA, 5. P4D (.>. CXP es mala, a causa de 5. ... D4C!), PXP; 6. DXP (ü. CXP merece muy seria atención, pero faltan ejemplos covincentes), 6. ... , D3AI y ahora: 1) 7. 0-0, DXD; 8. CXD, T1C; 9. C3C (9. P:3CD es de dudoso va­ lor en opinión de Alekhine causa de 9 .. , P4AD, seguido de 10. ..., P5Al); 9 . ... , C2R!; 10. A2D, C3C; 1 1 . A3A, C5A!; 12. T1R, A2R; 13. CD2D (13. AXP?, T1CI etc.); 1 3. . .., 0-0; 14. C4A (hasta aquí la partida Du­ ras-Alekhine. Mannheim, 1914). 14. ..., P3Dt con juego igual. Las blan­ cas pueden -si quieren- forzar las tablas de la siguiente forma: 15. C4-5T, A2D; 16. C4D, T3C; 17. C4A, TD1C; 18. C5T, etc. (Alek­ hine). 2) 7. P5R, D3C; 8. 0-0, DXPA; 9. C3A, en opinión de Alekhine es la mejor continuación de las blan­ cas. Pero faltan experimentos so­ bre este sacrificio de peón. La captura con el PO es una desventaja mayor que con el PC, La

,

pues las blancas obtienen una mayoría de cuatro peones contra tres en el flanco de rey. Por otro lado, esta jugada da más posibili­ dades para un activo contrajuego, debido a las columnas abiertas de rey y dama, y el dominio de las diagonales de los alfiles. A la vista de tales ventajas, en la práctica se juega casi exclusivamente la juga­ da del texto. Las blancas pueden elegir entre las siguientes conti­ nuaciones: Diagrama 161 (después de 4. .. , PDXA) .

,

.

.

5. P4D=16 A 5. C3A=16 B Merecen también mencionarse: 5. CXP. pero esta debe des­ echarse por: 5. ... , 050!; 6. C3AR, DXPR+; 7. D2R, DXD+; 8. RXD. Las blancas no tienen nin­ guna compensación por la pérdida de la pareja de alfiles. 5. P3D. e s una continuación tranquila, que permite a las negras la elección entre tres buenas juga­ das: 5. ... , P3A; 5 . . . , A3D y 5. ..., A4AD. .

94 5. 0-0. Esta continuación es mejor que la reputación de que goza. Por ejemplo: 1) 5. ... , A5CR, pues esta clavada demuestra que el enroque ha sido prematuro. La continuación pue­ de ser 6. P3TR y ahora: la) 6. ... , P4TR!, el sacrificio de Alapin, que en el transcurso de los años se ha manifestado como rico en posibilidades para las negras. Por ejemplo: 1a1) 7. PXA, PXP, y las blancas deben restituir la pieza inmediata­ mente: 8. P3CR, PXC; 9. DXP. 1a2) 7. P3D, D:�A; 8. PXA (8. CD2D, es peligroso, por 8. . .. , P4CR); 8. . .. , PXP; 9. C5C, D3T; 10. C3TR, D5T; 11. A5C, D4T; 12. A3R, PXC; 13. DXD, TXD; 14. P4CR, Tl T, y las blancas tienen probabilidades de igualar la parti­ da, pues las negras apenas podrán conservar su PTR. la3) 7. P4Dl (Barendregt), plan­ tea una situación poco clara: Des­ pués de 7. ... , AXC (si 7. ... , PXP?; 8. PXA, PXP; 9. C5C); 8. DXA, DXP; 9. C3A, o 8. . .. , PXP; 9. TlD, las blancas obtienen buenas posibilidades por el peón sacrifi­ cado. lb) 6. ..., A4TI?, conduce a un dudoso sacrificio de peón: 7. P4CR, A3C; 8. CXP, D5T; 9. D3A, P3A; 10. CXA, PXC; 11. P3D, 0-0-0; 12. R2C, A3D; 13. TlT, C2R. Fuchs-Udovcic, Berlín, 1962. 2) 5 . ..., P3A, es la respuesta más segura aunque las posibilidades

de las blancas son aquí algo ma­ yores que en la análoga jugada de la variante 16. B. La wntinuación puede ser: 6. P4D, PXP; 7. CXP, P4AD; 8. C3C, DXD; 9. TXD. 2a) 9 . . . . , A 2 D ; 1 0 . A 4 A I , 0-0-0; 1 1 . C3A, TlR; 12. C5Dl, con ventaja de las blancas. Baren­ dregt Sliwa Marienbad, 1961; Fuchs Malich, Berlín, 1962 y Barendregt­ T.eschner, Berg en Dal, 1960. 2b) 9. ... , A3D; 10. C5TI, P4CD; 11. P4AD y tablas. Barendregt-Sza­ bó, Marienbad, 1961. La posición de las blancas, sin embargo, debe considerarse un poco mejor. Tam­ bién es buena la continuación: 1 1 . P4TD, C2R; 12. C3A, T1CD. Pérez­ Spassky, La Habana, 1962. -

,

­

16A: (véase el diagrama 161) 5. P4D Esta jngada no plantea a las ne­ gras ninguna clase de dificultades especiales. Diagrama 162 (después de 5. P4D)

5. ... PXP Las negras pueden tratar de

95

evitar el siguiente cambio de da­ mas, pero esto no es lógico: S. .. , C3A, fue recomendada por Schlechter, pero todavía no ha sido experimentada en la práctica. Probablemente las blancas pueden o b t e n e r la v e n taja del modo siguiente: 6. CXP!, P4A (6. ... , CXP?, se refuta con 7. D2H, DXP; 8. C3AR, D5C+; 9. CR2D!, A4AR; 10. P3AR gana11do una pieza); 7. P3AD (Merece también conside­ ración 7. 0-0); 7 . . . , PXP; 8. D3C!, D2R; 9. PXP, C2D (Tam­ bién 9. . .. , CXP; 10. 0-0, es satisfactorio para l a s blancas); 10. C3AD, CXC; 1 1 . C5D!, y las blancas tienen una ventaja con­ siderable. S . .. , ASCR. es un gambito reco­ mendado por Alapin, que se jugó a menudo, aunque casi siempre sin éxito. El plan de las negras debe ser recuperar el peón per­ dido y con eso corren peligro de caer en una posición desventajosa: 6 . P X P , D X D + ; 7. R X D , 0-0-0+; 8. R1R! (si 8. R2R, se guiria 8. .. , T1R!), y ahora: 1) 8. ... , A4AD; 9. P3TR, A4T; 10. A4A, P4A: 1 1 . CD2D, C2R; 12. A5C!, AXC; 13. PXA TR1R; 14. T1D!, PXP; 15. PXP, y las blancas tienen una clara ventaja.. �asker­ \1arshaiL Nueva York. 1924: 2) 8. . . , P3A; 9. A4A, PXP; 10. AXP, C:3A; 1 1 . AXC, PXA. conti­ nuación recomendada por Sveno­ nius, es también insuficiente: 2a) 12. CD2D, A3T y las negras .

.

.

.

.

.

..

·

.

·

-

t i e n e n una ligera iniciativa en compensación d e l p e ó n sacri­ ficado. 2b) 12. CR2D!, para jugar P3AR es más fuerte. La gran mayoría de peones blancos en el flanco de rey -cuatro contra dos- debe hacerse sentir. 6. DXP

DXD

7. cxo Esta es la posición que se pro­ p o n í a n a l c a n zar las b l a n c a s cuando jugaron 4. AXC. S i ahora se quitasen todas las piezas del tablero, las blancas ganarían fácil­ mente el final gracias a su mayo­ ría de peones en el f1anco de rey. Pero tn esta posición quedan todavía muchas piezas menores, de modo que es una tarea muy difícil hacer valer dicha mayoría de peones. En opinión de Ale­ khine. Las negras disponen de hermo­ sas posibilidades, que conducen por lo menos a un juego igual. Lasker ha sido el único .maestro que gustaba de emplear la varian­ te del cambio y la jugaba con éxito. A2D 7. ... La continuación más usual y al mismo tiempo la mejor. Las ne­ gras se disponen a jugar inmedia­ tamente el enroque largo. Otras continuaciones tampoco son especialmente desventajosas para las negras:

9ti Diagrama 163 (después de 7. CXD)

2) 9. CD3A, 0-0-0; 10. A4A, A3A; 1 1 . 0-0, C3A; 12. P3A, A2R; 13. C3C, P3CR; 14. TR1R, C20; 15. ClD, C3C, y las negras tienen me­ jores posibilidades. Lasker Steinitz 13! partida del encuentro Montreal, 1894. Las blancas pueden jugar mejor 13. TD10 u 1 1. T1D. 3) 9. C2D, seguido de P3CD con idea de fortalecer la posición, puede ser considerada. 7. ... A30; 8. C3AD, C2R. 1 ) 9. U-0, 0-0; 10. P4A. la) 10 . ... , TlR; 1 1 . C3CI, P3A; 12. P5AI, P3CO; 13. A4A, A2C?; 14. AXA, PXA; 15. C4D, con clara ventaja de las blancas. Lasker-Ca­ pablanca, San Petersburgo, 1914. En opinión de Capablanca, las negras podían conseguir la igualdad con 1 3. ..., AXA, 14. TXA, A20. lb) 1 0. ... , A4AD!, es la mejor defensa ( 1 1 . A3R, TlR). 2) 9. A3R, A20; 10. 0-0-0, 0-0-0; 1 1 . P4A, TR1R; 12. C3C. 2a) 1 2. ..., C4D; 13. CXC. PXC; 14. P5R, A3A; 15. TR1R y las blan­ cas están mejor. Grünfeld-SchOn­ mann, partida por correspondencia, 1918. 2b) 12 . ..., P3A, seguido de C3C, proporciona una posición segura a las negras. -

.

7. . ., C3A. 1 ) 8. P3AR, A 2 D ; 9. A3R, 0-0-0; 10. C2D, TlR; 11. R2A, P3CR; 12. TD1 D, P4TR; 12. P4TR, P4A; 14. C2R, P3C con juego igual. Lasker- Showalter, Cambridge, Ssprings 1904. 2) 8. 0-0, A2R; 9. T1R, 0-0; 10. A4A, y las blancas están lige­ ramente mejor. 7. ..., P4AD: 8. C2R, A2D. 1 ) 9. P3CD, P5AI (recomendado por Schl�chter en « D e u tsche Scbacbzeitung», año 1908); 10. PXP, A5Tl la) 1 1 . P3AD?, 0-0-0; 12. C2D, A7A; 13. P3A, A4A; 14. P4TD, C3A; 15. A3T, A6R; 16. CIAR, A2T; 17. P5T, T6D; 18. P5A, TRlD; 19. R2A, C2D y las negras tienen una ventaja decisiva. Ver­ 0-0-0 8. A3R linsky - Alekhine, San Petersburgo, 9. C2D 1909. lb) 1 1 . C40, 0-0-0; 1 2. C3C, 9. C3AD, es una continuación es mucho mejor. En todo caso, más cómoda para las negras: 9. . . . , también las negras tienen buenas TlR; 10. 0-0-0, A5CD; 1 1 . CR2R, P4AR; 12. PXP, AXP; 13. posibilidades de contraataque. .

,

,

97 P3TD, A3D y las negras tienen una buena partida. Smyslov-Keres, Moscú, 1940. 9. ... C2R 9. ..., P3CR; 10. 0-0-0, A2C; 11. C2R, C2R, es igualmente una continuación muy segura para las negras. Marco-Euwe, Pistyan, 1922. TlR! Esta jugada, recomendada por Alekhine conduce a un activo con­ traataque de las negras. La torre ejerce una fuerte presión sobre la columna de rey y después del avance r.egro P4AR, la pareja de alfiles entra en juego con efec­ tividad.

pueden obtener el e qu il i b ri o de la posición mejor quP. con el in­ mediato avance 5. P4D (16 A). Diagrama

1.64 (después de 5. C3A)

10. 0-0-0

1 1 . TRlR ll. P3AR. C3C; 12. A2A, A4AD; 13. C2-3C, A30; 14. P3C, P4TR, es una continuación muy promete­ dora para las negras. Schonmann­ Keres, partida por corresponden­ cia, 1936. 1 1 . ... C3C . 12. C2R A3D 13. P3TR P4AR Las negras tienen buenas pers­ pectivas. En la partida Petterson­ Alekhine, Orebro, 193S, la continua­ ción fue: 14. PXP, C5T; 15. C4AD, CXPC; 16. T1C, CXA; 17. CXC, A4A, con clara ventaja de las negras. 16 B: (véase el diagrama 161) S. C3A Con esta jugada las blancas

P3.-\ 5. . . La mejor respuesta. Otras con­ tinuaciones son, por lo menos, sa­ tisfactorias para las blancas. S ... C3A = Apertura Española de los Cuatro Caballos. Juego 7. S. .... A3D; 6. ·P4Dl es bueno para las blancas. S .., A4AD, se jugaba antigua­ mente a menudo, pero no p u ede recomendarse: 1) 6. CXP, es una continuación emprendedora. la) 6. ..., AXP+; 7. RXA, D5D+; 8. R1R, DXC; 9. D3A, C3A; 10. P3D, y las blancas tienen buena posición. lb) 6 . ..., D4C; 7. P4D, DXP; 8. D3A, DXD; 9. CXD, y las blancas están algo mejor (9. ... , A5CR?, 10. C5R!). 2) 6. P3D!, esta jugada propor­ ciona una posición sólida. Puede seguir: .

.

.

.

.

98 2a) 6 .. , D3D; 7. A3R, AXA; 8. PXA, C2R; 9. D2R, P3A; 10. C4TR, A3R; 1 1 . P4CR, y la posi­ ción de las blancas es muy buena. Kohnlein-Tarrasch, Nuremberg, 1907. 2b) 6. . . , A5CR, conduce a las variante� que se estudiarán al tra­ tar de la jugada 5. ... , A5CR. 2c) 6. ..., P3A, se puede con­ siderar. 5. .... A5CR. Esta clavada del ca­ ballo, con una réplica adecuada, es poco ventajosa: 1) 6. P3TR. A4T!; 7. P4CR, A3C; 8. CXP, A4AD; 9. D2R, D3A; 10. CXA, PTXC, y las negras tienen u n hermoso juego en compensa · ción del peón. Rabinowitsch-To­ lusch, Leningrado, 1937. 2) 6. P3D, A4AD; 7. A3RI 2a) 7. ... , AXA; 8. PXA. D2R; 9. 0-0, 0-0-0; 10. D1R, C3T; 1 1 . T1CI, P3A; 12. P4C!, C2A; 13. P4TD, y las blancas tienen clara ventaja. Capablanca-Janowsky. San Petersburgo. 1914. 2b) 7 . ., D3D; 8. AXA, DXA; 9. D2DI 2b1) 9. ... , AXC?; 10. l?XA, C2R; 1 1 . 0-0-0, C3C; 12. D3R, y las blancas tienen una clara ventaja. Lasker-Tarrasch, Nüremberg, 1896. 2b2) 9. ... , P3A; 10. D3R, y las blancas tienen buena posición. 5. .., A5CD. Esta jugada es de dudoso valor, a causa de la si­ guiente liquidación: 6. CXP, D4C; 7. C3A, DXPC; 8. T1CR, D6T; 9. TXP, A5C; 10. C1CR, AXD; 1 1 . CXD, AXP; 12. P3A, etc. .

.

.

..

.

5. .. 030, es una nueva idea de Bronstein. Por ejemplo: 1) 6. P4D, PXP; 7. CXP (si 7. DXP, sigue 7 . ... , A5C); 7 . ... , D3C; 8. D3A, A5CR; 9. 03C, 0-0-0; 1O. P3TR, A2D; 1 1. DXD, PTXD; 12. A4A, A5CD; 13. 0-0-0, C2R. Goldenov-Bronstein Campeonato de la U.R.S.S., 1952. 2) 6. P3D, seguido de A3 R, C2D, 0-0 y P4A merece prefe­ rencia, segun el libro del mismo torneo. .

.

Diagrama

165 (después

de 5.

..., P3A)

6. P4D 6. P3D, A3D, con las siguientes continuaciones: 1) 7. A3R, P4AO. A la vista de los ejemplos que siguen, esta po­ sición parece ser completamente favorable a las negras.

la) 8. D2D, C2R; 9. C2R, C3A; 10. P3A, D2R; 1 1 . 0-0, O-O; 12. C3C, P3CRI; 13. C1R, A3R; 14. P4AR, PXP; 15. AXPAR, TD1D; 16. AXA, OXA; 17. D2A, C4R; 18. P3CD, P4Al, con clara ventaja de

99 las negras. Colle Alekhine. Scarbo­ rough. 1926.

6. ... 7. DXP

-

1 b) 8. C2R, C2R; 9. C3C, A3R; 10. P3A, 020; 1 1 . 0-0, 0-0; 12. 02A, C3A; 13. C20, TOlO; 14. TOlO, P3CO; 15. P3A, A2R; 16. C3C, P4TO; 17. Cl A, A30; 18. D2A, C2R; 19. T20, P4A!, y las ne­ gras tienen buenas perspectivas. Romanowsky-Botvinnik, Moscú 1935. 2) 7. C2R, C2R; 8. C2D, es una mejora introducida por Roma­ nowsky, que, sin embargo, resulta artificiosa: 8. . .. , A3R; 9. 0-0, C3C; 10. C3CD, 0-0; 1 1 . A3R, P3C; 12. RlT, 02R; 13. P4AR, P4AR; 14. PAXP. CXP; 15. PXP, C5CI; 16. A4A. 2a) 16. ... , AXA, con ventaja de las negras. Tartakower -Alekhine, Semmering, 1926. 2b) 16. ... , TXPI; 17. C3C-40, T4TR!, con ventaja decisiva de las negras (Alekhine). 3) 7. ClCR, C2R; 8. CR2R. Esta concentración de piezas es idea de Pachman. En el aspecto posi­ cional produce un buen efecto, quizá hasta pueda ser la mejor perspectiva de las blancas en la continuación cerrada (18 B) de la variante del Cambio. Por ejemplo: 8 . ... , C3C; 9. 0-0, 0-0; '10. P4A, PXP; 1 1 . CXP, A4AD+; 12. RlT, C4R; 13. D1R, TlR; 14. A3R, AlA; 15. D3C, RlT; ló. TDlR, P4AD, con juego aproximadamente igual. Orbaan-Donner, Campeonato de Ho­ londa, 1950.

PXP

7. CXP se juega poco: 7. ..., P4AO; 8. CR2R, DXD+; 9. CXD, A2D; 10. A4A, 0- O-O; 11. C3R, A3A; 12. P3AR, C2R; 13. R2A, P3CR, y las posibilidades son aproximadamente iguales. Lasker­ Schlechter, Londres. 1899. 7. ... 8. CXD

DXD A3D La continuación más u s u a l . También merece consideración ahora: 8 . .. A2D (compárese con 16A). Por ejemplo: 1) 9. A4A, 0-0-0; 10. 0 - 0 - 0 , C2R; 1 1 . C3C, C3C; 12. A3R, P3C; 13. P3A, C4R, y el juego de las ne­ �ras es ligeramente s u p e r i o r . Bemstein-Alekhine, Berna, 1932. 2) 9. A3R, 0-0-0; 10. 0-0-0, C2R. 2a) 1 1 . P4A, C3C; 12. C3C, A3D; 13. P3C, TR1R, y según un análi­ sis de Fine, las negras tienen posi­ bilidades algo mejores. 2b) 1 1 . P3TR, C3C; 12. C3C, A5CD; 13. C2R, TRlR; 14. P3T, Al A; 15. C3A, A3R. Bronstein-Smys· lov, torneo de Candidatos, Zurich, 1953, con juego igual. .

.

9. A3R 9. CR2R, C2R; 10. A4A, C3C; 1 1 . AXA, PXA; 12. 0-0-0, R2R; con juego aproximadamente igual. 9. ... 10. 0-0-0

C2R

100 10. 0-0, es posiblemente me­ jor. A2D 10. ... 10. .., 0-0. es también una buena jugada, 11. C3C, C3C; 12. A5A, A5A+; 13. R1C, Tl R. 1) 14. P3C, A4R; 15. A4D, A5C, y las negras tienen buena posición. 2) 14. TRlR, P3C; 15. A3R, A4R; 16. A40, C5T; 17. T1C, A3R; lR. P4A, A3Dl 2a) 19. AXPC, AXP. y las ne­ gras tienen una buena partida. .

Juego 17: P4R 2. C3AR 3. A5C

l.

La

2b) 19. A2A, C3C; 20. P5A. A)(C; 21. PTXA, C1A; 22. AXP. AXP; 23. Tl T, PXA; 24. TXA, P4CD; 25. TlR, C2D, y las negras están mejor. Alekhine-Lasker, San Peters­ lJurgo, 1914. 0-0-0 1 1 . C1C La posición de las negras es muy satisfactoria. La partida Ra­ binowitsch - Lowenfisch, Leningrado, 1937, continuó con 12. C5A, A5C; 13. P3A, A4T; 14. C6R, TDlC; 15. A5A, A2A; 16. AXA, PXA. con ventaja de las negras.

Defensa

P4R C:-{AD P3D

La defensa más sendlla de la Apertura Española. La ju gada del texto, ya citada por Ruy López el año 1561, fue recomendada por J ae­ nisch en 1847, pero fue Steinitz quien la puso de moda con sus experimentos en el año 1889. Des­ pués de Steinitz, esta defensa la

Steinitz

jugaría principalmente Lasker y Capablanca. Desde 1920 este sistema defen­ sivo se juega poco, pues en el esta­ do actual de la teoría proporciona muy pocas posibilidades de con­ trajuego. 4. P4Dl Amenazando ganar un peón con 5. PXP o 5. P5D. Otras jugadas se emplean poco y por otra parte tienen poca im­ portancia. La mayoría de ellas conducen a las variantes del juego 14 en las cuales las negras no pue­ den contar con la jugada P4CD. No tiene ningún interés exten­ dernos en largos comentarios y por eso daremos solamente unas breves explicaciones: 4. P3D, compárese con el jue­ go 1 1 .

101 4. P3A, búsquese en la variante 14A. En la 6.a partida del encuentro Ca­ pablanca-Marshall l909 la continua­ ción fue: 4 . ... , A5C; 5. P3D (en el espiri tu del juego 1 1 ). 4. AXC+. PXA; 5. P40, P3A es prácticamente como en 1 4 B. 4. P4A, se aproxima al juego 14C.

A2D 4. ... Protección indirecta del PR. 4. ..., PXP. debe considerarse prematuro: 5. DXP. A2D; 6. AXC, AXA; 7. A5CI y las blancas tienen un juego superior. Morphy-Harr­ witz. París. 1858. 4 ..., ASC, procede de los círcu­ los ingleses y Marshall la jugó a menudo. Sin embargo, esta jugada no es satisfactoria para las negras. Por ejemplo: 1 ) 5. PXP, PXP; 6. DXD+. TXD; 7. AXC+. PXA. la) 8. A3R, P4AR!; 9. PXP, A3D; 10. CD2D, C2R, y las negras tienen buen juego. Duras-Marshall. Nürem­ herg, 1906. lb) 8. CR2D! da una buena par­ tida a las blancas. 2) 5. P5DI, P3TD; 6. A4T, P4CD; 7. PXC, PXA; 8. P4A, con ventaja de las blancas. .

5. C3A Defiende el PR y al mismo tiempo amenaza con ganar u n peón (6. AXC etc.). 5. AXC. AXA. 1 ) 6. PXP. AXP, con juego igual.

2) 6. C3A. 2a) 6. ... , C3A; 7. D3D=17C. 2b) 6. ... , P3A merece consideración. S. PSD, se juega muy pocas ve­ ces y no es tan fuerte como la ju­ gada del texto. Por ejemplo: 5. ..., C1 C; 6. A3D, A2R. 1 ) 7. C3A, C3AR; 8. C2R, P3A; R P4A, C3T; 10. C3C, C4A; 11. A2A, P4CD con juego aproximadamente igual. Lasker - Blackbume, Londres, 1899. 2) 7. P4A es más lógica. Esta continuación puede considerarse como una mejora de la variante 6E. 5 . ... Diagrama

167 (después

C3A ..., C3A)

de 5.

Las negras protegen indirecta­ mente su PR. 5. ..., PXP; 6. CXP, C3A, es, sin embargo, una continuación exacta, pues las negras eliminan de este modo la incómoda variante Í 7C (6. AXCI). Examinemos ahora: 1) 7. 0-0, A2R, con transposi­ ción a la variante 17 A.

102 2) 7. AXC, PXA; �. 03A, es un intento de aprovechar el prema­ turo abandono del centro (5. ..., PXP). 2a) 8. . . . , A2H; 9. P5Rf�· PXP; 10. CXP, AXC; 1 1 . OXA+, C2D; 12. 0-0, 0-0; 13. T10, A30; 14. C5C, con ventaja de las blancas. 2b) 8. . . . , P4A; 9. C5A, AXC (si 9. .. ., P3C; seguiría 10. A5C!, PXC; 11. P5R); 10. OXA, 020; 1 1 . D3A, T1CO; 12. 0-0, A2R; 13. P3CO, y las blancas tienen mejor juego. Lowenfisch - Dubinin, L e n i n g r a d o ,

1934. 2c) 8. . , T1CD! en opinión de Keres es una continuación satis­ factoria para las negras, que i m­ pide 9. P5R?, PXP; 10. CXP, a causa de 10 . ... , P5R! Si 9. A5C, las ..

negras continúan con 9 . .. ., A2R.

5. ..., CRZR (Steinitz) continua­ ción segura, pero demasiado pasiva.

6. A5C, P3A; 7. A3R, C1A; 8. C2R, A2R; 9. P3A, 0-0; 1 0 A3D, 1)

.

C3C; 1 1 . C3C, R1T; 12, 0-0, D1R; 13. T1A, C10; 14. T1R, P4AD; 15. C2D, C5T!; 16. T2A, P4CO!, y las negras tienen una buena partida.

8.• partida del encuentro Lasker-Stei­ nitz, Moscú, 1896. 2) 6. PXP, PXP; 7. A5C, P3TR; 8. AXCD, PXA; 9. A3R, C3C; 10. 030, A30; 11. C20, C2R; 12. C4A, C1A; 13. 0-0-0, con buen juego de las blancas. Lasker-Steinitt, tor­ neo de San Petersburgo, 1896. 3)

6. A4ADI, con la amenaza 7.

C5CR, es lo mejor. La continua­ ción puede ser:

3a) 6. . .., PXP; 7. CXP, CXC; 8. DXC, C3A; 9. D3R. -- 3a1) 9. ... , C4R; 10. A3C., A3R; 1 1 . P4A, y las blancas tienen ventaja.

Lasker-Steinitz, 1894. 3a2) 9 . .. . , A3R; 10. C5D, A2R; 11. A20, 0-0; 12. 0-0, C4R; 13. A3C, con ventaja de las blancas.

3b) 6 . . . , C4T. Maroczy-Steinitt, Londres, 1899, o .

3c) 6. . ., P3TR. Schlechter-Stei­ nitz, Londres, 1899, son mejores con· .

tinuaciones. Pero las blancas tie­ nen siempre ventaja. 3d) 6. ... , P3A no está entera­ mente exenta de peligro (compá­ rese la diferencia con el número

1), pero merece también conside­ ración.

Partiendo de la posición del dia­ grama 167, consideraremos las siguientes variantes:·

6. 0-0=17A 6. PXP=17B 6. AXC=17 17A:

(véase el diagrama

167)

6. 0-0 La continuación clásica. Las ne­ gras están forzadas a jugar ense­ guida PXP, con lo cual las blan­ cas obtienen una considerable ventaja de espacio. Esta variante se obtiene lo mayoría de las veces de 18B. A2R 6. ... 6. . ., PXP, 7. CXP, A2R. 1) 8. TlR=la variante del texto. .

1 03 Diagrama 168

(después

de 6. o-·0)

2) 8. P3CD. 2a) 8. ... , 0-0; 9. A2C, C1R; 10. C5D!, con ventaja de las blancas. Tarrasch - Blackburne, Manchester, 1890. 2b) 8. ... , CXC!; 9. DXC, AXA; 10. CXA, C2D! 2h1) 1 1 . D4A, P3ADI, seguido de 12. ..., 0-0; y P4D. En opinión de Alekhine, las negras consiguen de este modo u n juego libre. 2b2) 11. A3T, P3TD; 12. C3A, A3A; 13. DJR, 0-0; 14. TD1D. A de 2b2) 14. ..., C3C?; 15. P4A, T1R; 16. P5R!, eon ventaja deci­ siva. Maroczy - Wolf, Montecatlo, 1903. B de 2b2) 14 . ... , AXC!; 15. DXA, T1R; 16. TRlR, T1AD; 17. D3T, C4R; 18. A2C, D4C!, con juego igual. Lasker - Capablanca, Nueva York, 1924. 3) 8. cxc. 3a) 8. ... , PXC; 9. A4T! Alekhine considera esta continuación favo­ rable para las blancas. Marco-Bre­ yer, Budapest, 1913.

3b) 8. ... , AXC; 9. D2R!, 0-0; 10. A5C, TlR, (amenazando 1 1 . ..., CXP); 11. TR1R, P3TR; 12. A4AR. 3b1) 12 . ..., C2D; 13. AXAI, PXA; 14. D4A, A4C; 15. A3C!, P4AD; 16. TDl D, con vent aja de las blancas. Alekhine-von Freymann, 1907. 3b2) 12 . ... , C2T; 13. A4AI, y las blancas tienen ventaja (13. . .. , A4CR; 14. A3CR, A5TR?; 16. D5TI). 4) 8. AXC, PXA; 9. D3A! (reco­ mendado por Alekhine); 9. ..., 0-0; 10. P5R, C5C!; 11. CXP, CXPR; 12. CXC, PXC; 13. T1 0 , OlA; 14. D2R, P3AR; 15. A3R, A3R, con juego igual. Tal-Book, Es­ tocolmo, 1960-61. 7. T1R Protegiendo el PR por segunda vez y amenazando de nuevo con ganar un peón: 8. AXC, etc. 7. AXC. AXA; 8. D3D no es ahora tan fuerte como en la va­ riante 17C. Por ejemplo : 1) 8. ... , PXP; 9. CXP, A2D. Con esta continuación las blancas se apoderan de la iniciativa: la) 10. P3CD, 0-0; 11. A2C, P3A; 12. TD1D, D2A; 13. TRlR, TR1R; 14. CR2R, TD1D; 15. C4A, AlAR; 16. D3C, R1T; 17. P3A, D4T; 18. CD2R, C1C; 19. P3TD, e tc. Ptlls­ bury-Steinitz, Viena, 1898. lb) 10. A5C, 0-0; 1 1 . TD1R, P0TR; 12. A4T, C2T; 13. AXA, DXA; 14. C5D, DlD; 15. P4AD, TlR; 16. P4A, P3AD; 17. C3AD, D3C; 18. P3CD, etc Lasker-Capa­ blanca, 14.8 partida del encuentro, 1921. .

104 2) 8. ..., C201 (compárese con la variante 17C, 7. ..., C20). 2a) 9. P50, C4AI; etc., l&s ne­ gras tienen un juego libre. 2b) 9. A3R (amenazando 10. P5D); 9. ... , PXP; 10. AXP, 0-0; 1 1 . TOlO, A3A, y las negras han liberado totalmente su juego. Las­ ker-Rabinowitsch, Moscú, 1925. 7. ... PXP Las negras se ven forzadas a abandonar el centro. 7 . .. , 0-0?; 8. AXC, AXA; 9. PXP, PXP; 10. DXO, costará por lo menos un peón. Por ejemplo: 1) 10. ... , TOXD; 1 1 . CXP, AXP? (aún no ha costado nada, pero las negras están perdidas); 12. CXA, CXC, 13. C30, P4AR; 14. P3AR, A4A+. l a ) 15. RlA?, con esta jugada las blancas no consiguen nada, por 15. ... , A3C!, etc. lb) 15. CXA!, CXC; 16. A5C) ganando la calidad (16. ... , T40; 17. A7R, TlR; 18. P4AD). Seger-Ma­ billus, Breslau, 1889 y Tarrasch-Marco, Dresde, 1892. 2) 10. ..., TRXD; 11. CXP, AXP? (véase n.0 1); 12. CXA, CXC; 13. C30, P4AR; 14. P3AR, A4A+. 2a) 15. CXA?, no conduce a nada (compárese la diferencia con lb). 2b) 15. RlAI al contrario que en la variante la, ahora esta es la jugada que da la victoria (15. ... , TlAR; 16. R2R!). .

8. CXP 0-0 8. ..., CXC conduce a las si­ guientes variantes: 1 ) 9. AXA+. la) 9. ... , OXA; 10. DXC, 0-0; 1 1 . P3CO, TRlR; 12. A2C, AlA; 13. TOlO, 03A; 14. T3D, T3R; 15. TD3R, TOlR; lo. P3TR, v las blan­ cas tienen una estupenda partida. Tarrasch-Schlechter, Leipzig, 1894. lb) 9. ... , CXA!; 10. DXC, A3A; 11. D4C, AXC; 12. OXA, 0-0. Con este planteo las blancas sólo tienen una pequeña ventaja. 2) 9. DXC, AXA; 10. CXA, 0-0. 2a) 11. A3C. 2al) 1 1 . ... , 'tlR; 12. TOlO, P3TR; 13. A4T, C2D; 14. AXA, TXA; 15. 04A, T4R!; 16. C40, T4AD; 17. 03C, C3C; 18. P4AR, 03A; 19. 03AR, TlR, y las negras han liberado su juego. Tarrasch­ Lasker, 4.8 partida del encuentro, 1908 2a2) 1 1 . ... , C5C; 12. AXA, DXA; 13. P3TR, C4R; 14. T3R, P3TO; 15. C3A, P3AD, y las negras tie­ nen también un juego libre. Duras­ Vidmar, Carlsbad, 1911. 2b) 11. D3A! 2b1) 11. ... , P3A; 12. C4D, C20; 13. C5A, yl.as blancas tienen ven­ taja (De una partida Capablanca­ Ponarow). 2b2) 1 1 . ..., ClR, y las negras pueden ofrecer resistencia. En esta posición las blancas ti e­ nen las siguientes continuaciones: 9. P3CD=l7Aa

105 9. 9. 9. 9. 9.

CR2R AlA A5C CXC AXC

17Ab 17Ac 17Ad = 17Ae 17Af

El juego de las negras está algo más libre. Tylor Keres, Hastings, 1937.

=

=

-

=

17 Ah:

=

Diagrama 169 (después de

8.

.

.., 0-0)

(véase el diagrama 169)

9. CR2R Este intento de evitar provisio­ nalmente el cambio de piezas, es igualmente débil.

9. ... P3TD! 9. ..., C4R?; 10. C3C, AXA; 1 1 . CXA. TlR; 12. P3C, AlA; 13. A2C, P3CR; 14. P4AR, CD2D; 15. D3A, P3TD; 16. C4D, A2C; 17. TD1D y las blancas tienen considerable­ mente las mejores posibilidades. Janowsky-Lasker, 6.a parida t del en­ cuentro. 1909. 17 Aa:

(véase el diagrama 169)

9. P3CD Este desarrollo del AD por el flanco de dama ha sido recomen­ dado especialmente con calor por el Dr. Tarrasch. Pero las blancas no co�siguen ventaja.

cxcr 9. ... 9. ..., TlR; 10. A2C, AlAR; 11. AXC, PXA, y el juego está igua­ lado. (Bilguer). AXA 10. DXC P4D! 11. CXA . 11. .. ., CZD, también libera el jue­ go de las negras. 12. 13. 14. 15. 16.

PXP A3T 030 AXT TXA

CXP A3A AXT P3TD PXC

C5CR! 10. A3D A3A 1 1 . C3C Las negras tienen una posición excelente. Janowsky-Lasker, 8.a par­ tida del encuentro, 1909. 17 Ac:

(véase el diagrama 169)

9. AlA Recomendado igualmente por Tarrasch. Las blancas evitan el cambio de su alfil, con idea de utilizarlo más tarde ventajosamen­ te. Una buena idea que, sin em­ bargo, pierde demasiado tiempo. T1R 9. ... 9. . .. CXC; 10. DXC, TlR, tam­ bién es buena continuación. Por ejemplo: 1 ) 11. P3A, A3R. la) 12. D2A, P3A; 13. A2D, D3C, y las negras tienen u n a buena par.

106 tida. Euwe - Capablanca, Londres, 1922. lb) 12. C5D, CXC; 13. PXC, A4A y las negras han liberado to­ talmente su juego. 2) 11. P3CD. 2a) 11 . ... , A3A?; 12. A2C, AlA; 13. C5D, C5C; 14. P3TR, AXC; 15. P)(A, C3A; 16. A5C!, TXT+; 17. TXT. P3TD; 18. A3D, y las blan­ cas están considerablemente me­ jor. Tarrasch - Vogel. Nüremberg, 1910. 2b) 11. ..., A3R!; 12. A2C, P3A!, y las negras han liberado totalmente su juego. Por ejemplo: 13. TDlD, D3C; 14. 020, P4D! 2c) 1 1 . ... , C5CI 2c1) 12. C5D, A5TR; 13. P3C, P3AD!; 14. PXA. DXP; 15. A4AR, PXC; 16. A3C, D4T; 17. DXPD, C4R; 18. A2C, A6T, con ventaja de las negras. Dückstein-Keller Zurich, 1960. 2c2) 12. A2C, A3AR; 13. D2D, con juego igual. 10. P3TR conduce a las siguien­ tes continuaciones: 1 ) 10. ..., CXC; etc.=Nota a 9. ..., CXC; n.o 2. 2) tp. ... , AlAR; 1 1 . A2C, P4D!, con juego igual. 3) 10. ..., P4D! es lo mejor en opinión de Keres. Si 1 1 . PXP o 1 1 . P5R, sigue siempre 1 1 . ... , A5CDI 10. P3A, es de dudoso valor a cau­ sa de la respuesta: 10 . ..., P4DI Veamos: ro. P3CD,

1) 11. PXP, A4ADr; 12. TXT +. AXT; 13. PXC, DXC+; 14. DXD, AXD+; 15. RlT, AXC, y las ne­ gras tienen un juego favorable. Moritz-Wagner Frankfurt. M. 1923. 2) 1 1 . CXC. AXC; 12. P5R, A4A+; etc. y las negras tienen una buena partida. 3) 11. CXP, CRXC; 12. PXC, A4AD!; 13. PXC, TXT; 14. DXT, AXC+; 15. A3R, ADXP; 16. P3A, y las blancas pueden defenderse con holgura. ,

10. ... AlAR 10. ..., CXC; 1 1 . DXC, A3A, se­ guido de C2D, es sin duda la con­ tinuación más sencilla. 11. A5CR 11. P3CD, se puede contestar igualmente con 1 1 . ... , P4D. 1 1 . ... P3TR 12. A4T 12. AXC. DXA; 13. CR5C, TOlA; 14. C50, 010, no conduce a nada. Las blancas han cedido a su con­ trario la ventaja de la pareja de alfiles. 12. ... P4CR CXC 13. A3C C4T 14. DXC 15. A2T A2C Las negras han liberado total­ mente su juego. Encuentro KashdanL. Steiner, 1931. 17 Ad: (véase el diagrama 169) 9. A5C Una continuación segura.

9. ...

P3TR

107 9 ..., CXC; 10. DXC, AXA; 11. CXA=Nota a la jugada 8. ..., CXC. .

(véase la nota a la jugada 6. ... , PXP; n . o 3a).

TlR 10. ... , C2T 10. A4TR P3TR 11. P3TR 10. . ., CXC; etc.= Nota a la ju­ ll . .. ., AlAR; 12. A5CR, P3TR; 13. gada 8 . . . . , CXC. MT, T1C; 14. T1C, es una conti­ 10. ..., TIR, no carece de peligros. nuación más ventajosa para las Por ejemplo: blancas que la del texto. Tarrasch­ 1) 1 1 . AXCD=17Af. 2) 1 1 . C5AI, AXC; 12. PXA, Steinitz, Viena, 1898. P3T; 13. AXCD, PXA; 14. D3A, 12. P4A AlAR P4D; 15. T2R, con j uego rico en Las negras están presionadas, posibilidades para las blancas. pero su posición es susceptible de Ahues - Rabinowitsch, Mannheim, defensa. .

1914.

DXA 11. AXA 12. C5D DlD 13. P3AD C3A 14. A l A TlR 15. D3A CRXC 16. cxc AXC 17. PXC A2D 18. D4A D4C con juego igual. Wolf-Maróczy, Te­ plitz-Schonau, 1922. 17Ae:

(véase el diagrama 169)

9. cxc Se juega poco, aunque de nin­ gún modo es mala.

9. ... PXC 9. ..., AXG?, también ahora es mala y todavía menos i ndicada que en la varíante 1 7Af (compárese con esta variante). 10. A3D Lo mejor, en opinión de Ta­ rrasch. 10. A4T, merece consideración

17. Af:

(véase el diagrama 169)

9. AXC Esta continuación es la más practicada. 9. ...

PXA

9. ..., AXA?; 10. CXA, PXC; 1 1 .

C2R. 1) 11. ..., CXP?; 12. C4Dl y ganan 2) 1 1 . ..., D2D; 12. C3C, TRlR; 13. P3C, con ventaja de las blancas. Tarrasch-Lasker, 2.8 partida del en­ .

cuentro, 1908.

10. A5C 10. P3CD, no es fuerte, 1 0. ..., P4Dl; 1 1 . P5R, A5CDI Forgacs-Wolf, Nüremberg, 1906.

T1R 10. ... P3TR 1 1 , D3D · 12. A4T C2T TXA 13. AXA Las blancas tienen una libertad de movimientos ligeramente ma­ yor.

108 Esta pos1c1on se presentó dos veces en el curso del encuentro Capablanca - Lasker. Capablanca continuó en la 3.a partida con 14. T3R. Lasker jugó en la 6." partida 14. D4A. Ambas partidas después de maniobras poco interesantes, terminaron en tablas. 17 B:

(véase el diagrama 167)

6. PXP Con esta jugada, recomendada por Schlechter, las blancas obtie­ nen una ligera iniciativa.

lb) 10. . .. • D2R; 1 1 . D30, P3T; 12. A4T, TlD; 13. D3R, P4CR; 14. A3CR, P4C; 15. A3C, y las blancas tienen ventaja Esta ventaja con­ siste principalmente en la debili­ dad de la casilla 4AD de las negras. Lasker - Forgacs, San Petersburgo, 1909. 2) 7 . . . , P3TR; 8. A4TR, A3D (9. C5D, P4C) es una continuación en­ teramente suficiente para conse­ guir la igualdad. .

7. AXA+

DXA

7 . . .., COXA, es quizá mejor y .

Diagrama 170 (después de 6. PXP)

6. ... CDXP La mejor respuesta. 6 . . ., PXP; 7. A5C, es una conti­ nuación molesta para las negras. Por ejemplo: 1) 7. ... , A5CD; 8. 0-0, AXC; 9. PXA, P3TR; 10. A4TR. la) 10 . ... , P4C; 11. A3C, CXP; 12. CXP, y las blancas tienen bue­ nas perspectivas. Por ej_emplo: 1a1) 12 . ... , CXC; 13. AXC, etc. o 1a2) 12. ... , CXA; 13. AXC. AXA; 14. PAXC (Lasker). .

de todos modos es muy merece­ dora de ser tomada en considera­ ción. 8. C4D Una idea de Schlechter. Las blancas evitan el cambio de pie­ zas y eventualmente pueden adop­ tar la continuación C5A. Obsérvese la curiosa formación de los cuatro caballos en la diagonal a1-h8. 17 C: (véase el diagrama 1 67) 6. AXC! AXA 7. 030 Diagrama 171 (después de 7. D3D)

109 El mejor método. Las blancas amenazan: 8. PXP con la ganan­ cia de un peón, preparando al mismo tiempo el enroque largo. Con esta continuación las blan­ cas obtienen una clara ventaja y sobre esta base, la defensa Steinitz apenas se juega hoy. 7. ... PXP No hay otra cosa mejor. 7. ..., C2D, crea todavía mayores dificultades a las negras. 1 ) 8. P5D. Esta jugada es débil. 8 . . .., C4A; 9. D4A, A2D; 10. P4CD, C3T!; 11. A3R, A2R; 12. 0-0, 0-0; 13. P4TD, RlT; 14. C5CD, DlC; 15. P3A, P3AD, y las posibi­ lidades son a p r o x i m a d a m e n t e iguales. Nimzowitsch-Breyer, Gotero­ burgo, 1920. 2) 8. A3Rl (con la amenaza 9. P5D, ganando una pieza). 2a) 8. ..., P3CD? (con idea de sostener el centro); 9. D4Al, A2C; 10. C5CR!, con ventaja decisiva. 2b) 8. ..., PXP; 9. AXP! (obsér­ vese la diferencia con la variante 17A, nota a la jugada 7. AXC, apartado 2b. Aquilas negras tienen más dificultádes porque todavía no han desarrollado su AR). 2bl) 9. ... , P3A; 10. C4TR, C4A; 1 1 . D2R, 020; 12. C5A, y las blan­ cas están ciertamente mejor. Nim­ zowitsch-L. Steiner, Niendori, 1927. 2b2) 9. . .. , C3A; 10. 0-0-0, igualmente con superioridad de las blancas. 2b3) 9. .. , C4A; 10. AXC, PXA; 1 1 . D3Rl (Keres), y las blancas tie.

nen una gran ventaja. Se amenaza con 12. C5R y si 12. ..., I)3A segui­ ría 13. 0-0-0, etc. (12. ..., A3D no va bien 13. 0-0-0, amena­ zando P5R). 3) 8. A5CI jugada recomendada por Alekhine y es también muy fuerte. A2D 8. CXP 8. ..., C2D, es insuficiente: 9. CXA, PXC; 10. D6T, C3C; 11. D7C, R2D; 12. D6TI, OlA; 1 3'. 030, y las blancas tienen una partida superior. Bogoljubow Balla Pistyan, -

192i

,

8. ..., P3CR. 1) 9. CXA, PXC; 10. D6T, 020; 1 1 . D7C, TlA; 12. DXPT, A2C; 13. 0-0, 0-0. Las negras han obte­ nido un buen desarrollo y un exce­ lente contraataque, en compensa­ ción del peón sacrificado. Nimzo­ witsch-Capablanca, San Petersburgo, 1914. 2) 9. A5C!, A2C; 10. 0-0-0! 2a) 1 O ... , 020; 1 1 . P3TR, 0- O; 12. TRlR, y las blancas tienen una posición notablemente mejor. Ale­ khine-Brinckmann, Kecskemet, 1927. 2b) 10. ..., OlA, es algo mejor. 8. ..., A2R. Tarrasch consideraba esta continuación como la relati­ vamente mejor. Esta jugada con­ duce a la variante del texto. Por ejemplo: 9. A5C, 0-0; 10. 0-0-0! (con la amenaza 11. C5AI); 10. ... , A2D= variante del texto. .

9. A5C 10. 0-0-01

A2R

1 10 Ahora se ha completado el des­ arrollo de la variante 17C. 10. 0-0, no es tan buena y con­ duce a posiciones que también pueden obtenerse con la variante 17 A (véase por ejemplo: 17 A, nota a la jugada 7. AXC). Juego 18:

1 . P4R 2. C3AR 3. A5C

0-0 10 . ... 11. P4A Las blancas están mucho mejor. Spielmann - Maroczy, 1920.

Gotemburgo,

La Defensa Berlinesa

P4R C3AD C3A

Diagrama 172 (después de 3 . ..., C3A)

transforma en el Juego 11. Las ne­ gras tienen aquí poco que esco­ ger, pues no pueden jugar P4CD. Llamamos la atención sobre las siguiente líneas falsas: 4. ... , C2R; 5. CXP? (Un error, 5. C3A pro­ porciona un buen juego a las blancas); 5. ... , P3A; 6. C4A (el al­ fil no puede retirarse a causa de 6 . ..., D4T+) ; 6 . . ., P3Dl (no se puede tomar el alfil, pues seguiría 7. C6D, mate; y si 6. ... , P4D, l a respuesta sería 7 . P5Rl); 7 . A4T, P4CD, ganando pieza. 4. D2R. con esta jugada entra­ mos en el Juego 9, aunque se debe estar muy atento porque las ne­ gras tienen menos elección que en dicho juego, ya que no habien­ do jugado P3TD, no disponen d e l a continuación P4CD. .

Esta es una defensa segura. Hace medio siglo aproximadamente se jugaba mucho. Pero hoy es opi­ nión general que las defensas de­ rivadas de 3. ... , P3TD proporcio­ nan mayor elasticidad a las negras. Las blancas pueden escoger entre las continuaciones siguientes: 4. P4D = 18 A 4. 0-0 = 18 B De poco valor son estas otras: 4. C3A conduce a la Española de los Cuatro Caballos. 4. P3D. continuación t ranquila que la mayoria de las veces se

18 A: {véase el diagrama 172) 4. P4D

Este avance prematuro del PD tiene ahora más importancia que en una variante similar en la cual la defensa ha jugado P3TD (Jue­ go 12) En caso necesario, las blan­ cas disponen de la retirada AlAR. 4. ...

PXP

111 4. ..., CRXP presenta las conti­

nuaciones siguien tes: 1 ) 5. 0-0, A2R; 6. D2R, con transposición a la variante 18 Ba. 2) 5. PXP, P4D; 6. 0-0, A4AD. 2a) 7. CD2D, 0-0; 8. D2R, CXC; 9. DXC. C2R; 10. D3A, A3C; 1 1 . A5C, P3AD, con juego igual. Showalter-Pillsbury, Nüremberg, 1898

2b) 7. C4D, 0-01, con transpo­ sición a una variante conocida de la Defensa de los Dos Caballos, sin peligro para las negras. 3) 5. P5D. 3a) 5 . ... , C2R; 6. CXP, P3AD; 7. 0-01?, CXPD?; 8. TlR, CD3A; 9. C2DI, con ventaja de las blan­ cas. Kondratjew-Nikitin, encuentro Leningrado-Moscú, 1960.

Kondratjew demostró que las blancas pueden obtener un fuerte ataque con 7 . ..., PXA; 8. P6D, C4AR; 9. CXPA, RXC; 10. D5D+. Por ejemplo: 10. . .. , R3A; 11. DXC5R, AXP; 12. P4CR. 3b) 5. ..., ClC; 6. D2R, C3AR; 7. 0-0, A2R; 8. DXP, 0-0; 9. C3A, y el juego de las blancas es u n poco más libre. 3c) 5. ... , A4A; 6. PXC, PCXP (es una sugerencia de Tal, ingenio­ sa pero insuficiente); 7. 0-0, CXP 8. TX C, PXA; 9. D5D(Kondratjew). 3d) 5. ..., C3D!; 6. C3A, P5R; 7. C5C, C4R; 8. D4D, con ventaja d e las blancas. Barry-PiUsbury.1900. La variante 6. ..., CXA; 7. CXC,P3TD; 8. C3A, C1C; 9. CXP, P3D, condu­ ce a la igualdad (Keres).

5. 0-0 S. PSR, no ofrece peligro para las negras. Por ejemplo: 5. ... , C5R. 1 ) 6. 0-0, A2R!; 7. CXP, 0-0; 8. C5A, P4D; 9. CXA+, CXC. E�ta es una antigua variante que proporciona una buena partida a las negras. la) 10. P3AR, C4AD; 11. P4CD. 1al) 1 1. . , C3R; 12. P4AR, P4AR; 13. A4T, P3A; 14. A3C, con ventaja de las blancas. Zuckertort ..

­

Winawer, Viena, 1882.

1a2) 1 1 . ..., A2DI; 12. A2R, C5TI, en nuestra opinión,, esta continua­ ción proporciona una posición muy satisfactoria a las negras. lb) 10. P3AD. 1bl) 10. ... , P3AD; 1 1 . A3D, C3C, y las negras tendrán que resolver algunas dificultades. Spielman-Elis­ kases, 3. a partida del encuentro, 1932. l b2) 10. ... , A3R; 11. P3A, P3AD; 12. PXC, PXA; 13. A5C, D2AI; 14. AXC. DXA; 15. PXP. D4A+. y las negras han conseguido liberar su juego. le) 10. C2D, Alekhine considera­ ba esta jugada como la mejor con­ tinuación de las blancas. 2) 6. D2R, C4A; 7. 0-0, A2R; 8. TlD.-0-0; 9. AXC, PCXA; 10. CXP, DlR; 11. C3AD, P3A; 12. C5A. Tal-Furman. Campeonato de la U.R.S.S., Riga, 1958. y ahora las ne­ gras podían haber conseguido una buena posición con 12. ... , PXP; 13. DXP, C3R. Sin embargo, en opinión de Petrosian, Jo mejor es 9 . ... , P6D; 10. PXP, PDXA; 1 1 .

112 P4D, C5T, seguido de C3C y C4D. 5. CXP, A2R (en opinión de Tartacover la continuación 5 . ..., CXP; 6. 0-0, D3A!, no da nin· guna compensación a las blancas por el peó.1 sacrificado). Pero esta variante no ha sido experimenta­ da en la practica. 6. 0-0, P:�TD!, conduce también a la 1 iberación del jpego de las negras. Por ejemplo: 1) 7. A4T?, CXC; 8. DXC, P4A, ganando una pieza. 2) 7. A2R?, se refuta con 7. . . , CXP. 3) 7. A4AD, entonces 7 . ... , P4D es una respuesta muy buena. Des­ pués de 8. PX P CXP; 9. CXC, PXC, la fuerte posición del caba­ llo negro en el punto 40 compen­ sa la debilidad de los peones (Aiekhine). 4) 7. AXC. PCXA, conduce al Juego 16, con las mismas oportu­ nidades aproximadamente. Ale­ khine dió la ventaja en esta varian­ te a las negras. 5) 7. CXC, PCXC; 8. A30. 5a) 8. ... , P3D; 9. C3A, U-0; 10. P4A, TlR. Bogoljubow-Lasker, Nue­ va York, 1924. En opinión de Alek& ine, las blancas podian obtener ahora un excelente ataque del modo si­ guiente: 11. P3TR, C2D; 12. A3R, A3A; 13. 020, TlC; 14. P3CD, se­ guido de 15. TDlR. 5b) 8. ... , P4DI, es la respuesta correcta, en opinión de Alekbine. Las negras obtienen u n juego có­ modo.

Diagrama 173 (después de 5. 0-0)

.

,

5. ...

A2R

S. .. , P3TD, es lo más sencillo, .

en opinión de Keres. Después de 6. AXC, PDXA; 7. DXP, DXD; 8. CXD, la partida se transforma en la variante del cainbio (Juego 16). 6. D2R 6. PSR. C5R, compárese con la

nota a la jugada 5. P5R. 6. ...

0-0

6. ..., P3TD, también ahora es l a mejor j ugada, en opinión de Keres. 7. P5R

ClR 8. TlD P4D 9. P3AI Esta continuación para reforzar el juego de las blancas ha sido re­ comendado por Fine. 9. AXC. PXA; 10. CXP, D2D; 1 1 . C3AD, P4AD; 12. C3C, P3AD; 13. C4T, P5A, conduce a la igual­ dad. Barry - Lasker, Cambridge Springs, 1904.

9. . .. A4AR 9. . . PXP: 10. CXP, A3R; 11. . .

113 A4AO, C5C; 12. P3TD, OlA; 13. A3C, y las blancas recobran el peón con buena partida. 10. PXP 10. AXC. se contestaría i ntercalando la jugada 10. ... , PGD. 10. ... C5C P3AD 1 1 . C3T 12. A4T Las blancas tienen una buena partida. Análisis de Fine. 18 B: (véase el diagrama 172)

lO

Ba: La Variante Río de Janeiro

4. .. CXP Esta es la variante de la Defensa Berlinesa que se jugó mucho a la entrada de este siglo. .

5. P4D 5. TIR, facilita la defensa de las negras. Por ejemplo: 5. ... , C3DI (si 5 . ... , C3A; 6. CXP, CXC; 7. P4DI); 6. CXP. y ahora. 1) 6. ... , CXC; 7. TXC+, A2R.

la) 8. AlA, 0-0; 9. P4D, A3A; 10. TlR, TlR; 1 1 . P3AD, TXT; 12. 4. 0-0 DXT, C4A; 13. A4AR, P3D, con La continuación natural y al posibilidades iguales. Steinitz-Zuc­ mismo tiempo la mejor. kertort, encuentro 1886. Diagrama 174 (después de 4. 0-0) 1b) 8. C3A. 1bl) 8 . ... , CXA?; 9. C5D, 0-0; 10. CXA+, RlT; 1 1 . D5T (amena­ zando 12. DXPT+ ), P3CH; 12. D6T, y las blancas ganan debido a la amenaza 13. T5TI 1 b2) 8. . , 0-0; 9. A3D, condu­ ce al número 2b por transposición de jugadas. 2) 6. ... , A2R (lo más seguro). 2a) 7. C3AD, CXA; 8. C5D, 0-0; 9. CXC, PDXC; 10. CXA+, El juego presenta ahora las si­ Rl T; 1 1 . CXA (ahora es mala la guientes alternativas: continuación 1 1 . D5T?, TlR; 12. 4. ... , CXP=18Ba DXPA, TXC, con juego igual). 4 , A4A =18Bb ' Conviene tener en cuenta que 2b) 7. A3D, 0-0; 8. C3AD. las negras pueden transformar el 2b1) 8. ..., C1R; 9. C5D, A3A; 10. juego en la Defensa Steinitz (Juego C4CR, P3D, y las negras tienen 17); 4. .. , P30; 5. P4D, A2D; 6. C3A, una posición segura. El intento de A2R. Lasker y Capablanca, princi­ buscar u n ataque con 1 1 . TXC. palmente, han esquivado así la TXT; 12. C4XA+. PXC; 13. P3CD, C4R; 14. A2C, P3A; 15. C3R, peligrosa variante 17 C. ..

.

.

.•.

114

P40; 16. A5A, P5D, es insuficiente. Riga (Defensa abierta, juego 7). Janowsky-Lasker, Nüremberg, 1896. con mejora del juego de las blan­ cas. 2b2) 8. ... , CXC; 9. TXC. S. ..., P3TD (Morphy) presenta A de 2b2) 9. .. . , A:3A; 10. T3R, P3CR; 1 1 . D3A, A2C; 12. P3CD. las siguientes continuaciones: l) 6. A4T=befensa Abierta. C1R; 13. A3T, P3D; 14. TD1R, C3A; 15. P3T, y las blanca1> están mejor. 2) 6. AXC. PDXA. 2a) 7. D2R, A4AR; 8. TlD, A2R; Neschmetdinow - Kotkow, Campeo­ 9. PXP. OlA, con juego igual. nato de la U.R.S.S., 1957. B de 2b2) 9. . .. , P3ADI; 10. Spielmann - Bogoljubow, Estocolmo, P3CD, C1R; 1 1 . A2C, P4D; 12. D3A, 1919. A3A; 1 3. T2R, C2A, y la posición 2b) 7. TlR, C3A; 8. C3A. de las negras es satistactoria. Stei­ 2bl) 8. ... , A2R; 9. A5C, 0-0; nitz-Zuckertort, encuentro 1886. 10. PXP. y las blancas tienen una 2b3) 8. . .., A3A; 9. C4C, A5D; 10. buena partida (Collijn-Lárobook). C2R, A3C, y las negras tienen mu­ 2b2) 8. ... , P5Rl (Schlechler); 9. cha libertad de movimientos.Stein­ CXP. CXC; 10. TX C+. A2R, con Smyslov, Campeonato de la U.R.S.S., juego igual. 1961. 3) 6. A3D, P4D; 7. P4A, CDXPI; 5. D2R, C3D!, conduce a una 8. CXC, PXC; 9. PXP, C3A; 10. partida igual. TlR+, A2R; 1 1 . A4AD, 0-0; 12. P4TD, P3AI, con mejores posibili­ Diagrama 175 (después de 5. P4D) dades para las negras. Marco-Guns­ berg, Hastings, 1895. 5. ..., C3D, es una antigua conti­ nuación, de nuevo puesta en prác­ tica en los últimos años. Por ejem­ plo: 1 ) 6. AXC, PDXA; 7. PXP, C4A; 8. DXD+ (si 8. D2R, segui­ ría 8. ..., C5DI; 9. CXC, DXC. Por ejemplo: 10. C3A, A5CR, o 10. C2D, A4AR). 8 . . .., RXD; 9. C3A. la) 9. ... , P3TR; 10. A2D, A3R; A2R 5. ... 11. C2R, P4A; 12. A3A, y las blan­ La continuación clásica. 5. ..., P4D?, se refuta con 6. CXP cas tienen mejor juego. Tarrasch­ (si 6. ... , A2D; 7. CXPI). Lasker. Hastings, 1895. lb) 9. . .. , A2R; 10. A 5C, P4TR; 5 . ..., PX P; 6. TlR, P4D, conduce a una modalidad de la variante 1 1 . TDlD+, RlR; 12. C2R, A3R;

115 13. C4A, con ventaja de las blan­ cas. L. Schmíd-Torán, Olimpíada de Munkh, 1958. le) 9 ..., R1R; 10. C2R!, A3R; 11. C4A, A4D; 12. CXA, PXC; 13. . P4CR, C2R; 14. A4A, y el final, en todos los casos, es algo mejor para las blancas. Por ejemplo: 1cl) 14. ... , C3C; 15. A3C. A4A; 16. R2C, C1A; 17. C1R, P4CR; 18. C3D, C3R; 19. P4AR. Panno-Benko, Portoroz, 1958. 1c2) 14. . .., P4AD; 15. TD1D, P4TR; 16. P3TR, PXP; 17. PXP, P50; 18. P3A, C3A; 19. TR1R, A2R; 20. PXP, PXP; 21. P3T! Kupper­ .

fuerte ataque. Halprin - Pillsbury. Munich, 1900. En opinión de Pach­ man, sin embargo, 1.11) está claro que después de 10. ... , C4Al, las blancas tengan suficiente compen­ sación por el peón sacrificado. 2b) 7 . ..., CR5D; 8. CXC, CXC; 9. DXC. P4D. 2b1) 10. PXP al paso DXP; 11. D3A, A3R; 12. C3T, P3AD; 13. A3R, D5C; 14. D5R. Spassky-Sanguinetti, Campeonato Mundial de estudiantes, Vama. 1958.

Y ahora las negras debían con­ tinuar con 14 . ..., A3D. D es pués de 15. DXP, 0-0-0, las negras Neikirch. Olimpíada de Munich, tienen buenas posibilidades de ataque, en compensación del peón. 1958. 2b2) 10. C:iA, P3AD; 1 1 . A3R, 2) 6. PXP, CXA; 7. P4TD. A4AR; 12. P4A, es quizá más 2a) 7 . ..., P30; 8. P6RI? (un sacri­ ficio de peón, propuesto por Ja­ fuerte. 6. D2R nowsky: 8. PXC, CXP; 9. T1R, Con otras continuaCiones las A2R; 10. CXC, PXC; 11. DXD+. RXD; 12. TXP. A30, conduce a negras consiguen rápidamente la igualdad: la igualdad. 6. PX P 0-0, etc. 2a1) 8. ..., AXP; 9. PXC, C4R; 6. TlR, C3Dl 10. C4D, A2D; 1 1 . C3AD, A2R; 12. 1) 7. PXP, CXA; 8. P4TD, P3DI P4A, C5C; 13. C50, 0-0; 14. P5A, y las blancas tienen un fuerte ata­ etc. 2) 7. AXC, PDXA; 8. PXP, que. Didier-Pillsbury, Paris, 1900. 10. C4A, etc. ... , A2R; 11. P4AR, C20; 12. P5A, A4D; 13. C3AD, P3AD (considérese 6. P5D, C3D! 1) 7. AXC, PDXA; 8. PXP, 13 . ..., C3C); 14. CXA. PXC; 15. T3T!, 0- O; 16. T3T, con ventaja P3AI; 9. PXP, AXP; 10. A3R, de las blancas. Vasiukov-Scbam­ 0-0, las negras tienen mejor jue­ go. Tchigorin - Zuckertort, Londres, kowitsch, Moscú, 1962. 2a2) 8. ... , PXPI; 9. PXC, C2R; 1883. 10. C3A, C3C; 1 1 . C5C, A2R; 12. 2) 7. PXC, CXA; 8. P4A, C5D; D5T, AXC; 13. AXA, D2D; 14. 9. CXC, PXC; 10. DXP, 0-0; P3CD, y las blancas tienen u n con juego igual. ,

116 3) 7. C3A, CXA; 8. CXC, P3TD; 9. C3A, C1C; 10. CXP, P3D;. 11. C3A, 0-0, igualmente el juego está igualado. 6. ... C3DI 6 . ..., P4D; 7. CXP, o 6 ..., P4A; 7. PXP, son continuaciones ventajosas para las blancas. 7. AXC PCXA 7. .., PDXA; 8. PXP, C4A; 9. T1D, A2D; 10. P6RI, PXP; 11. C5R, y la posición de las blancas es dominante. Esta variante de­ muestra claramente la diferencia entre las jugadas 6. T1R y 6. D2R. 8. PXP C2C 8. ..., C4A, no es buena por 9. D4Rl 0-0 9. C3A 9. ..., C4A, no es tan buena a causa de un ingenioso sacrificio de calidad de las blancas. 10. C4Dl, A3T; 1 1 . D4C, AXT; 12. DXPC, TlAR; 13. RXA. C3R, y ahora no puede jugarse 14. C5A, P4Dl Sho­ walter-Tarrasch, Viena, 1898, si no sencillamente 14. CXC. Diagrama 176 (después de 9. ..., 0-0) .

.

10. TlR Esta jugada tiene una gran im­ portancia contra el avance P4D. Desde que Pillsbu ry introdujo esta jugada en el torneo de Viena 1898, la totalidad de la variante se considera ventajosa para las blan­ cas. Pero la ventaja de éstas es pequeña, en definitiva, y por eso es cuestión de preguntarse si la jugada 10. C4Dl no proporciona mejores ocasiones de iniciativa a las blancas: 1) 10. ... , C4A; 11. T1D, D1R; 12. C5A, P3A (si 12. ... , C3R. Fine re­ comienda 13. C4R); 13. A6T, C3R; 14. D4C, con ventaja de las blan­ cas. 2) 10. ..., A4A; 11. TlD. 2a) 11. ... , AXC; 12. TXA. 2a1) 12. ..., P4D; 13. PXP a. p., PXP; 14. P4CDI, D3A; 15. A3R, A4A; 16. TD1D, P3TD; 17. P4C, y las blancas tienen ventaja. Schle­ chter-Reti, Viena, 1914. En la segunda partida del en­ cuentro. Keres-Unzicker, Hamburgo, 1958, se jugó 14 . ..., TlR; 15. A3R, A3R; 16. D3A, D2D; 17. C4R,A4A? (en opinión de Brinckmann l o correcto era 1 7. ... , A4D. Por ejem­ plo: 18. P4A, AXC; 19. TXA, P4TDI); 18. C3Cl, AXP; 19. TlAD, con ventaja de las blancas. 2a2) 12 . ..., T1R; 13. A4A, C4A; 14. A3C, P4D, con una posición satisfactoria para las negras. Ke­ res-Zinzadse, Tiflis, 1946. En opinión de Keres las blancas podían obte­ ner la iniciativa, con 1�. D5TI,

1 17 pues la ganancia del peón: 13 . ... , P3C; 14. D3A, TXP; 15. A4A, sería muy peligrosa para las negras. 2b) 1 1 . ..., D1R; 12. A4A, y ahora las negras pueden jugar P4D o P3A (Keres). Sin embargo en la partida. Vukovic-Vidmar, Ljubljana, 1947, las negras consiguieron la igualdad con: 12. ... , AXC; 13. TXA. C4A; 14. A3C, P3A; 15. PXP. DXD; 16. CXD, TXP; 17. C4A, P3D. 10 . ... C4A 10 ..., A4A, no es buena ahora, por 1 1 . C4R! C3R 1 1 . C4D 12. A3R CXC P4AD! 13. AXC Con esta jugada se inicia la va­ riante Río de Janeiro, que toma su nombre del lugar donde nació su iniciador el Dr. Caldas Viana. .

Diagrama 177 (después de 13. P4AD!)

P4D 14. A3R 15. PXP al paso AXP Las negras han quedado con un peón doblado, pero ha desapare­ cido la debilidad de su casilla 4AD y al mismo tiempo el alfil entra en juego. 16. C4R La continuación más impor­ tante, aunque las blancas apenas pueden confiar en obtener ventaja. Marco - Teichmann, Ostende, 1907,

Otras jugadas ofrecen únicamente posibilidades de igualdad. 16. DST, A2Cl, etc. (17. AXP? P3CI. 8.a partida del encuentro Ta­ rrasch-Lasker. 1908.

16. TD1D, A2C!, etc. (17. AXP? D4C!). 16. P4A (Alapin) 16 . ... , A4Al, etc. (Berger). 16. ... A2C 16 .... AXP+?; 17. RXA, D5T+; 18. RlC, DXC; 19. AXP, DXD; 20. TXD, TlD; 21. T7R, sería una continuación ventajosa para las blancas. .

17. CXA 17. CXP?, costaría una pieza con

17 . ..., AXC; 18. AXA, D4Cl 17. AXP, no es tampoco satisfac­ toria. 17 . ... , AXA; 18. CXA, AXPI; 19. RXA, D4C+ y 20. ... , DXC. PXC

13. ..., P4D; 14. C4Tl, la continua­ ción antigua, es ventajosa para las blancas a causa de la debilidad del punto 4AD de las negras. PiUs­

Tarrasch-Lasker, lOa partida del encuentro 1908. Las blancas están solamente un poco mejor. La con­

bury-Tarrasch, Viena, 1898.

tinuación podría ser: 18. P4AD,

17. ...

118 T1RI; o 18. TD1D, D3A; 19. P4AD, TRlR, y cuando sea necesario T3R. 18Bb:

La Defensa Beverwijk (véase el diagrama 174)

4. ... A4A Una continuación interesante, que ha sido estudiada y analizada por O'Kelly, van Scheltinga y Ha­ berditz. Esta varia nte es parecida a los juegos 8 y 19.

5. CXPI 5. P3A=19Aa. S. C3A=A pert ura Española de los cuatro caballos, Juego 8, 5. 0-0. Diagrama 178 (después de 5. CXPl)

la2) 9. TlDl, 0-0; 10. A4AD, P3AD; 11. P4TDI, RlT; 12. T3TI, con excelentes posibilidades de ataque para las blancas. Ü'Kellyr 1Dückstein, Zürich, 1960. lb) 7. DXC. D2R; 8. P-!D. 1b1) 8. ... , C3C. Krogius-Spassky, Campeonato de la U.R.S.S., Lenin­ grado, 1960, y ahora las blancas po­ dían haber logrado ventaja de una m a n era sorprendente, con 9. AXP+I, AXA; 10. DXPC, o 9. ... , RXA; 10. D5A+ (Simagin). lb2) 8. ... , C3A; 9. AXC. PDXA; 10. T1 R, DXD; 11. TXD+, A2R; 12. A4A, A4AR; 13. T2R, T1D, y ahora las blancas están solamente un poco mejor. 2) 6. CXPA (jugada muy pode­ rosa); 6 . , RXC; 7. D5T+. P3CR; 8. 050+, R2C. 2a) 9. DXC5R, P4D; 10. D4TD, T1AI; 1 1 . AXC, PXA; 12. DXPA, D2RI; 13. P4D, TXPII Draxl-Pos­ chauko, Walchsee, 1953, y las blan­ cas se enfrentan con problemas, que apenas tienen solución para su defensa. Para u n análisis P.X­ haustivo de esta complicada posi­ ción, véase el número de diciem­ bre 1953 de la Osterreichischen Schachzeitung. 2b) 9. AXC (9. A4A?, es mala por 9. .. , D2R); 9. ..., T1Rl; 10. A4T, P3A; 11. D3D, D5T; 12. P3CR, D6T, y las negras tienen un ataque muy fuerte. Kuznetsov - Spassky, Moscú, 1960. S. ..., CSD; 6. A4A, P3D, conti­ nuación al parecer mucho más .

cxc 5. ... S. . ., CXP. Esta idea, que se de­ be a los análisis del maestro vie­ nés Haberditz, es sin duda la me­ jor posibilidad de las negras. Si­ guen varios ejemplos importantes: 1 ) 6. D2R, CX C. la) 7. P4D, A2R; 8. PXC, C4A. lal) 9. D4C, 0-0; 1 0. A6T, C3R; 11. A3D, P4ARI, con juego igual. Keres-Szabó, Budapest, 19SO. .

..

.

119 prometedora, aunque sin razón, como ha demostrado Van Schel­ tinga: 1) 7. AXP+. RlA, etc. 2) 7. CXP, D2R (amenazando 8. . .. , A5CH); 8. P3AD, A5CR; 9. D4T+, A2D; 10. D1D, A5CR, con repetición de ,iugadas. 3) 7. C3AR!, y las negras·no tie­ nen ninguna compensación por el p eón. 6. P4D P3A La con t inua ción recomendada por O'Kelly durante el torneo de Beverwijk 1946. 6 . ., P3TD (Van Scheltinga) da lugar a las siguientes continuacio­ nes. 1) 7. PXC, PXA; 8. PXC, DXP; 9. C3A, P3A; 10. P5R, D3C, y las negras li beran su juego con la ju­ gada P3A, eventualmente. Por ejemplo: la) 11. D2R, 0-0; 12. C4R, A5D, etc. lb) 1 1 . TlR, 0-0; 12. C4R, A2R; 13. C6D, D3R. 2) 7. A2RI, es la mejor respuesta. Las negras pueden difícilmente jugar para ganar u n peón: 7. . . , CXP; 8. PXA, CXPAD; 9. P4CD, C3R; 10. A2C, y las blancas tienen un juego superior. CXP 7. PXC 7. ..., PXA; 8. PXC, es una con­ tinuación favorable a las blancas, a causa de la debilidad de los peo­ nes de las negras. (Compárese la diferencia entre 6 . .. , P3TD y 6. ..., P3A).

8. A3D P4D 9. PXP al paso 9. AXC, etc. conduce a un final de tablas. Zwetkow-Alexander, Hil­ versum 1947. 9. D3A, se contestaría con 9. . , D5T; 10. P3CR, A5CR; 1 1 . D4A, P4CR. ,

..

9. ... C3Af 9. .... CXPD; 10. TlR+, es ven­ tajoso para las blancas, porque 10 . ..., A3R?, es mala por la res­ puesta: 1 1 . TXA+, y 12. D5T+. Diagrama 179 (después de 9. ..., C3A!)

..

.

.

10. TlR+ 10. D2R+, A3R; 1 1 . A5CR, DXP; 12. A:>(C, PXA; 13. C2D, D4R; 14. C4R, A3C: 1 5. RlT, 0-0-0, y las negras tienen una buena partida Krogius-Spassky. Campeonato de· la U.R.S.S., Tiflis, 1959. 10. ASCR!; DXP (10 , 0-U, es mala por 11. AXC, y 12. 05'.f. Las blancas tienen también m�iot··jue­ go con 10. ... , AXPD; 11. C3A); 1 1 . C3A, A3R; 12. AXC. PXA; 13. C4R, D4R; 14. CXA, DXC; 15. D3A, D4CR; 16. P4TD, 0-0-0; .

•

...

120 17. P5T, A4D; 18. A4R, con ventaja de las blancas. Schamkowitsch-Aro­ nin, Moscú, 1962. A3R 10. ... 11. A5CR! Recomendada por Kmoch. ll. ASA, 0-0; 12. AXA, PXA; 13. TXP, D2D, y las negras tienen mejores posibilidades de ataque. Vlagsma-O'Kelly, Beverwijk, 1946. 1 1 . ... DXP Las negras no pueden evitar los peones doblados. Por ejemplo: 11. ..., 0-0; 12. C2D, AXPD; 13. AXC! Juego 19: 1. P4R 2. C3AR 3. A5C

1) t:-3. . . , DXA; 14. C4R, D2R; 15. CXA, y ganan (si 15 . ..., DXC?; 16. AXP+>· :.:l) 13 . ... , PXA; 14. D5T, y las blancas tienen una ventaja deci­ siva. 11. ..., AXP; 12. C2D, A2R; 13. A4AD!, con ventaja de las blancas (13. ... , AXA; 14. AXCf). .

12. C20 Las blancas tienen mejor juego. Kmoch da la siguiente continua­ ción en el libro del torneo de Be­ verwijk, 1953: 12 . . . , 0-0-0; 13. AXC, PXA; 14. C4R, D4R; 15. CXA, DXC; 16. D3A. .

La Defensa Cordel P4R C3AD A4A

Esta jugada del alfil se encuen­ tra ya en los más antiguos análisis de la Partida Española (el manus­ crito de Gottinga de 1480). En el siglo pasado, el teórico alemán Cordel analizó y recomendó la jugada del texto (19B). Pero en la práctica los maestros se mostraron más o menos recelosos respecto de esta jugada. No obstante, en el último dece· nio el maestro O,Kelly ha rehabi­ litado la Defensa Cordel (19A). 4. P3A Lo mejor. Otras continuaciones dan menos resultado: 4. CXP. este pseudo-sacrificio

n o es recomendable en esta posi­ ción: Diagrama

180 (después de 3.

..., A4A)

1) 4. ..., D4C; 5. C4C, P4TR; 6. AXC (6. P4D?, costaría una pieza por 6. ..., A5C+), PDXA; 7. P4D, AXC; 8. AXD, AXD; 9. PXA, AXP, con juego igual (Cordel). 2) 4. ... , C5D!, con las amenazas

121 5. ... , CXA; 5. ..., D4C, y 5. ... , D2R, es muy fuerte, en opinión de O,Kelly. Cordel no exan•Íi1a esta continuación. 4. 0-0. El enroque inmediato permite a las negras la jugada des­ congestionadora 4. . .. , C5DI Por ejemplo: 1) 5. A4T, CXC+; 6. D.XC. C3A, con una partida cómoda para las negras. 2) 5. CXC. AXC; 6. P3AD, A3C; 7. P40, P3AD. 2a) 8. A4AD, P3D; 9. P4TD, C3A; 10. PXP, PXP; 11. DXD+. AXD; 12. T1R, 0-0, con juego igual. Neschmetdinov-Filip, Bucarest. 1954. 2b) 8. A4T, P3D; 9. C3TI, C3A; 10. A2A. 2bl) 10 . ... , A3R; 11. A5C, P3TR; 12. AXC, D.XA; 13. P50, A2D; 14. C4A; A2A; 15. D3D, y las blancas están mejor. Portisch-Spassky, en­ cuentro Budapest-Leningrado, 1961. 2b2) 10. ..., 0-0; 11. A5C, P3TR;. 12. A4TR, D2R; 13. C4A, y las blancas tienen un juego ligera­ mente más libre. 4. C3A. En este caso 4. ..., C5DI, es una respuesta particularmente fuerte (si 5. CXP, D4C, etc.). Las negras pueden elegir ahora entre las siguientes continuacio­ nes (véase el diagrama 181): 4. ..., C3A=19A 4. ..., CR2R=19B 4. ..., P4A=19C 4. ..., D3A. Esta antigua conti­ nuación, aunque ocasionalmente

recomendada por Alekhine, no es satisfactoria. Por ejemplo: 1) 5. P401, PXP; 6. P5RI, D3C; 7. PXP. la) 7. . . . , A5C+; 8. C3A, P4D; 9. 0-0, CR2R; 10. D3C, AXC; 1 1 . PXA, con juego favorable d e las b l a n cas, p a r t í d a en consulta. Blackbume y Pillsbwy-Schiffers y Steinitz, Nüremberg. 1896. lb) 7 . . . , CXPD?l; 8. CXC, D3C; 9. D4C, C2R; 10. P6R 1 , con ventaja de las blancas. Winogra­ dow-Kirenkow, Leningrado, 1957. Si , RlA, seguiria 10. A3R, AXC; \:J 11. AXA. DXAR; 12. C3A, con fuerte ataque (Aronin). .

•

•••

Diagrama 181 (después de 4. P3A)

Es fuerte, en nuestra opinión, el avance inmediato 9. P6R. Por ejemplo: 9. ... , PAXP; 10. A3R, AXC; 11. AXA, DXAR; 12. AXPC, o 9. ... , AXC; 10. PXPD+, ADXP; 1 1 . AXA+, RXA; 12. A3R, etc. 2) 5. 0-0, CR2R. 2a) 6. P4D, PXP; 7. A5C, D3C; 8. ADXC, AXA; 9. PXP, 0-0.

122 l9Aa: (posición diagrama 182). Yates-Samisch, Baden-Baden, 1925. y las blancas podrían conseguir 5. 0-0 ventaja jugando 10. P5D. En lugar El enroque era más usual hasta de 8. ..., AXA. Alekhine recomen- hace poco tiempo que el avance dó 8. ... , CXA. Por ej.emplo: 9. ·inmediato :5. P4D. PXP, A3C; 10. C3A, 0-0; 11. ;). ... 0-0 A3D, P3D; 12. P:)R, D3T, y las 6. P4D A3C! negras tienen una posición muy Esta retirada del alfil es el fun­ lihre. damento de toda la variante. 2b) 6. P3D, P3TR; 7. CD2D, 6. ..., PXP, sería ventajosa para 0-0; 8. C4A, C3C, con una parti­ las blancas. Por ejemplo: 7. PXP, da satisfactoria para las negras. A3C; 8. P5R, C1R (o 8. ..., C5R; 9. K.ieninger-Alekhine, Munich, 1941. P5D, C2R; 10. A3D); 9. P5D, C2R; 19A: (véase el diagrama 181) 10. P6D. 4. ... C3A Diagrama 183 (después de 6. .. ., A3C) La continuación moderna, in­ troducida por el maestro O'Kelly. Aunque ya habíamos encontrado la misma idea en los ejemplos 8 y 18 (desarrollo del alfil a la casilla 4AD), parece que es aquí única­ merite donde esta variante adquie­ re su pleno valor. Diagrama 182 (después de 4. ... , C3A)

Nosotros estudiaremos a con­ tinuación: 5. 0-0 = 19Aa. 5. P4D = 19Ab

7. T1R No es fácil decidir qué continua­ ción proporciona a las blancas mejores ocasiones de alzarse con la iniciativa. Veamos otras variantes: 7. PXP, CRXP; 8. 050, C4A; 9. A5C, parece una línea fuerte, pero no proporciona ninguna ventaja clara. Por ejemplo: 1) 9. ... , C2R (desde hace poco tiempo la respuesta que más prác-

123 ti ca. Las negras obtienen, median­ te un juego exacto, una posición aproximadamente igual. la) 10. 010, C5R; 11. A4TR, P401; 12. C020, P3AO (es más segura 12. . .. , A4AR); 13. A30, P4AR; 14. PXP a. p., CXP6A; 15. 02A, P3C; 16. TOlR, A4AR, y la ventaja de las blancas es muy pe­ queña. Bronstein-O'Kelly, Hastings, 1953-54.

lb) 10. 04A. lbl) 10 . ... , P3TR?; 11. 04TRI, TlR; 12. AXPTRI, y las blancas tienen u n ataque irresistible. Ber­ tok-Simonovic, Campeonato de Yu­ goslavia, 1951.

1b2) 10 . ..., C3R; 11. A4TR, P40; 12. PXP a. p., O X P; 13. CD20, C4AR; (la continuación 14. ..., P3AD; 14. A4T, C4AR, es más exac­ ta v si ahora 15. C4R, 040); 14. C4R, 05A; 15. A5C, C301; 16. CXC, (es mejor 16. AXD, CXO; 17. AXPI), OXCD; 18. TD10, 04A, con juego igual. Boleslawsky - O'Kelly, Bucarest, 1953.

lb3) 1 0. ..., P3AO; 11. D4TR, TlR; 11. A4AO, P40; 13. PXP a. p., DXP; 14. A4A, 03C; 15. C5R, C4AI; 16. D3T, TXC; 17. AXT, C50; 18. 03C, y las blancas tienen el juego un poco mejor. Matanovic-Bobot­ sov, Olimpíada de Amsterdam, 1954.

2) 9. ..., 01R (según las últimas investigaciones, esta jugada da más elasticidad al juego de las ne­ gras q u e 9 . . .., C2R. Pero a pesar de algunos éxitos. no se ha demos­ trado de ninguna manera que la

jugada 9. . .. , OlR sea preferible a 9. ... , C2R). 2a) 10. C02D?, P30!; 11. PXP, A3R; 12. AXC, PXA; 13. D4D, P3A; 14. TDlR, D3Cl; 15. A4T, MD, con la ventaja de las negras. Gipslis-Spassky, Riga, 1959.

2b) 10. C3T, P3TO; 11. A4AD. 2bl) 1 1 . ... , A2T; 12. P4CD, C3R; 13. D4R, C2R; 14. TOtR, P40; 15. PXP a. p . , con clara ventaja de las blancas. Smyslov-Spassky, en­ cuentro Moscú-Leningrado, 1960.

2b2) 1 1 . .... C3R; 12. TDlR, CXA; 13. CXC. 02R; 14. 020, P3T; 15. C3A, A4A, con posibilidades para ambos jugadores. Vasiukov-Tolush, encuentro Moscú-Leningrado, 1960.

En lugar de 12. TD1R, sin em­ bargo, la jugada 12. D4Rl, es sensi­ blemente más fuerte. Por ejemplo. 12 . ..., CXA?; 13. CXC, P3C; 14. D4T, etc. También la continuación: 12. ... , C2R; 13. TDlR, proporciona mejor juego a las blancas. 2b3) 11 . ... , C2R; 12. 020, A2T; seguido de P4CD y A2C, cuando sea posible, es un esfuerzo para las negras que merece considerarse. 3) 10. T1R, D3R; 11. OXD, CXO; 12. A4TR, P3A; 13. PXP, PXP; 14. CD20, P4D; 15. P4A, C3R-50; con juego igual. Matanovic-lvkow, en­ cuentro Yugoslavia - U.R.S.S., Lem­

�erg, 1962.

7. A5C. Esta continuación no promete nada especial. Por ejem­ plo: 7. ..., P3TR!; 8. A4TR (si 8.

124 ADXC, DXA; 9. AXC, DXA; 10. CXP, DXPR); 8. ..., P3D!, y ahora: 1) 9. AXCD, PXA; 10. PXP, PXP.

1) 7. ... , PCXA; 8. CXP, CXP; 9. TlR, C3D; 10. A4A. la) 10. ..., P4AD; 1 1 . PXP, AXP; 12. D5D, con ventaja de las blan­ cas. Teschner-Alexander, Hastings,

la) 1 1 . DXD, TXD; 12. CXP, 1953 .'14. A3T; 13. TlR, CXPt (Keres� Y las lb) 10 . . . , P3Al; 1 1 . C3D, C2A; . negras tienen un Juego rJ �o en . 12. C2D, y las blancas están u n . posibilidad�s. En un anáhs1s de poco mejor. L. Schmid - Scheipel, Van Sch elt1 0ga: 12. ... , P4C; 13. Kissingen, 1954. A3C, CXP; 14. CXPAD, A3Tl; 15. le) 10 . . P4TD, fue propuesta CXT, TX�. a pesar de la desvenpor O•Kelly. . taja matenal las negras henen 2) 7. ... , PDXA!; 8. CXP (si 8. ventaja. Por ejemplo: 16. T1R, A5C, en opinión de L. Schmid R. P4AR (amenazando 17. .. . , P5A); ... , A5C es m u y conveniente), 17. C3T, ·f7Dl CXP; 9. TlR. lb) 11. D4T, 030; 12. CD2D, 2a) 9. ... , C3A?; 10. P4TD, P4TD, C2D, y las blancas no pueden ob- 1 1 . A5C, P4A; 12. C2D!, y las blan­ tener ninguna ventaja de la débil cas tienen ventaja. L. Schmid-O'Ke­ posición de los peones negros (13. lly, Torneo memorial Dr. Dyckhoff C4A, D3R, y ahora 14. C5T? no es por correspondencia, 1954-56. buena por 14. ..., C4A; 15. DXP, 2b) 9 . ... , cm, en opinión de A3T). L. Schmid, es la respuesta correele) 1 1 . CD2D, A5C; 12. C4A, P4C; ta, que conduce a la igualdad. 13. A3C, CXP; 14. DXD, TRXD; Diagrama 184 (después de 7. TlR) 15. CRXPR; A3R; 16. TR1R, CXA; 17. PTXC, A4ADI; 18. P3C, P4TD; 19. CXPAD, T6D, y la pareja de alfiles de las negras compensa su peón de menos. Smyslov-Spassky, encuentro Moscú-Leningrado, 1958, 2) 9. P4TD, P4TD; 10. TlR, con transposición a la variante del texto, nota a la jugada 8. P4TD, número 2b (si 10. C3T, seguiría 10. ... , PXP, seguido de 1 1 . . , P4C y 1 2. ... , CXP). .

. _.,

.

.

7. AXC. n o dá mucho, pero exige un juego muy preciso por parte de las negras. Por ejemplo:

7. ...

P3D

7. ..., PXP. merece atenta

deración. Por ejemplo:

consi­

125 1 ) 8. PXP, P4D; 9. P5R, C5R; 10. C3A, A5C; 1 1 . AXC, PXA; 12. CXC, PXC; 13. TXP, AXC; 14. DXA (14. PXA. D4D, o también 1 4. ... , P4AR); 14 . ... , AXP; 15. A3R, AXPC; 16. T1C, P4ARI; 17. PXP a. p., y tablas. Unzicker - Fischer. Olimpíada de Leipzig, 1960. 2) 8. P5R, C1R; 9. A5C, P3A; 10. PRXP, CXP; 1 1 . PXP, P3D; 12. P3TR, P3TR; 13. A3R, C2R; 14. C3A, y las blancas tienen el juego u n poco más libre. Suetin-Estrin. semifinal del campeonato de la U.R.S.S., 1958. 8. P3TR Es usual evitar la clavada 8. ...; A5C, aunque quizá la jugada del texto no sea la mejor. Veamos otras continuaciones. 8. A5C, P3TR; 9. A4TR. 1 ) 9 . .. . , A5C?; 1 0. P4TDI, P4TD ; 1 1 . AXCD, PXA; 12. PXP. AXC; 13. DXA, PXP; 14. C3T, con ven­ taja de las blancas. Unzicker-O'Ke­ lly, Olimpíada de Leipzig, 1960. 2) 9. ... , PXP. 2a) 10. CXP, CXC; 1 1 . PXC, P4D; 12. P5R, P4C; 13. A3C, C5R, y las negras tienen una posición satisfactoria (Análisis del doctor Krause). 2b) 10. PXP, A5C, y las negras tienen una buena partida. 8. P4TD (Keres), merece muy atenta consideración. Por ejemplo: 1 ) 8 . ... , P3TD; 9. AXC, PXA; 10. PX P, PXP; 1 1 . DXD, TXD; 12. A5C, y las blancas tienen u n

final ventajoso (Keres). Pachman, sin embargo, indica como más fuerte la variante 1 0. ··�· C5C!; 1 1 . T1A, PXP; 12. D2A, 02R. Pero también ahora las blancas están mejor con 1 1 . T2R, PXP; 12. CD2D, 02R; 13. P5T, A2T; 14. C4A. 2) 8. ... , P4TD. 2a) 9. P3T, C2R; 10. CD2D, P3A; 1 1 . A3D, C3C; 12. C1A, C4T, con juego igual. Kupper - Dückstein, Zürich, 1959. 2b) 9. A5Cl 2b1) 9. . . . , P3T; 10. A4T, A5C (es mejor 10. . .. , D2R); 1 1 . AXCD, PXA; 12. PXP, PXP; 13. DXD, TDXD; 14. CXP, P4C; 15. A3C, TR1R; 16. C3T, A3R, Averbach­ Barcza, Estocolmo, 1952, y ahora las blancas podían obtener ventaja de este modo: 17. CXPAD, T7D; 1 8 . P4C, y s i 1 8. ... , A2D; 19. C4A, T7A ; 20. C6XP (análisis de Moisejew). 2b2) 9. . . . , D2R; 10. C3T, P3T; 1 1 . AXCR, DXA; 12. C4A, A5C; 13. AXC, AXC; 14. DXA, PXA; 15. PXP, PXP; 16. DXD, PXD; 17. TRlD, y el final está claramen­ te mejor para las blancas. Dely­ Forintos, Campeonato de Hungría, 1962. 8. ... D2R , 8. ... C2R (Dr. Krause) también es bueno: 1 ) 9. PXP, PXP; 10. DXD, TXD; 1 1 . CXP, CXP!, con juego igual. La jugada 12. TXC?, es mala, a causa de 1 2. ... , T8D+; 13. R2T,

126

A4AHI Minev-Stoltz, Bucarest, 1953. Sin embargo, no es bueno jugar enseguida 13. ... , TXA?, por 14. C3DI 2) 9. C3T. 2a) 9. .. . , P3A; 10. AlA, C3C; 11. C4A, A2A; 12. PXP, PXP; 10. D2A, A3R; 14. P3CD, P4C; 15. C3R, y el juego de las blancas es un poco mejor. Rellstab-Zvetkov, Hel­ sinski, 1952. 2b) 9. .. , PXP; 10. PXP, P4D; 1 1 . P5R, C5R, conduce a una bue­ na partida para las negras. 3) 9. CD2D, ofrece posibilidades de iniciativa a las blancas. .

Diagrama 185 '(después de 8. . , 02R) ..

las negras, porque la conocida maniobra C1C-3T-4AD es ahora sorprendentemente menos eficaz. He aqui varios ejemplos: 9. C3T. PXP!; 10. PXP (16. CXP, es más correcto); CRXP! (esta jugada no es posible en el Giuoco Piano por la respuesta A5D); 1 1 . C5C, P4D; 12. AXC. PXA; 13. P3A, P3TR; 14. CXC, PXC; 1 5 . PXP. D3A, con clara ventaja de las negras. Bergsma­ Vlagsma, Rotterdam 1953. 9. P5D, C1D (es más exacto 9 . . . , ClC); 10. A3D, C4T; 1 1 . P4CR, C3AR; 12. C:H, P4TR!; 13. C2T, PXP; 14. PXP, C2T!, y las negras han liberado su j uego. Alexander­ O'Kelly, Hilversum, 1947. 9. A5C, P3TR; 10. ADXC, DXA; 1 1 . C3T, C2R; 12. C4A, C3C; 13. CXA. PTXC. y las negras tienen también una buena partida. Blau­ Van Scheltinga, Hilversum, 1947. ,

.

19 Ah: (véase el diagrama 182)

S. P4D Diagrama 186 (despues de 5. P4D)

La posición del diagrama mues­ tra mucha semejanza con la De­ fensa Cerrada del Giuoco Piano, considerada como l iberadora para las negras. La única diferencia es que el A R de las blancas ocupa la casilla 5CD en la posición del diagrama (y no está en 4AD como en el Gi­ uoco Piano). Esta diferencia faci­ lita en la Española la defensa de

La continuación más agresiva

127 y también la más fuerte, según recientes investigaciones. 5. ... PX P ..., A3C. conduce ciertamente, por transposición de jugadas, a l a variante 1 9 Aa (después d e 16. 0-0, 0-0), pero las blancas pueden tratar de sacar provecho de l a posición en s u jugada 6.d.. Por ejemplo: 1) 6. AXC, PCXA (6. ... , PDXA? 7. CXP, y las blancas han ganado limpiamente un peón, 7. ... , CXP, es mala por 8. D2R); 7. CXP,0-0. la) .8. A5C, DlR, y las blancas apenas tienen otra cosa mejor que conformarse con el jaque perpe­ tuo: 9. AXC, PXA; 10. D4C+. RlT; 11. D4A, etc. En la partida Gulbrandsen-Zuidema, Campeonato Mundial Juvenil, La Haya, 1961, las negras obtuvieron una posición superior de esta manera: 9. D3A?, CXPI; 10. DXC, P3A; 11. A4A, PXC; 12. DXPR, D2A; 13. A3R, A3T. lb) 8. C2D, A3T, y las blancas no pueden enrocar. 2) 6. A5C, P3TR: 7. A4TR, P4C; 8. A3C, CXP; 9. AXP, CXA; 10. CXC, P3ADI; 11. A3D, P4D, y las negras tienen una posición satis­ factoria (Análisis de O•Kelly). Si 12. D2R, seguiria 12. ..., D2R). 3) 6. CXPI, CXC (sería intere­ sante considerar 6. ..., D2R); 7. PXC, CXP; 8. D4CI (una idea de Szabó), AXP+; 9. RlDI, D5T; 10. DXPC, TlA. 5.

:�a) 11. A6T, A4A; 12. TlA. 3al) 12. ... , P3AD?; 13. T4AI, DXP; 14. A4A, y las blancas tie­ nen un fuerte ataque. Robatsch­ Biau, Berna, 1957.

3a2) 12 . ..., C7 A+; 13. TXC (si 13. H2A, seguiría 13. ... , P3AD, y 14 . ... , P4D), DXT; 14. C2D, D4AI, seguido eventualmente de D3C y las negras tienen una defensa sufi­ ciente. 3b) 11. P4CDI (Barcza) ofrece buenas posibilidades a las blancas. Por ejemplo: 3b1) 11. ... , P3AR?; 12. P6RI, D4T +; 13. R2Al, etc. 3b2) 11. ... , D4T+; 12. R2A, D3C; 13. DXD, PAXD; 14. C2D, CXC; 15. AXC, y las negras tienen difi­ cultades para desarrollar su juego. Por ejemplo: 15. ..., P3TD (o 15. ... , P3AD); 16. A6TI, PXA (o 16 . ..., PAXA); 17. AXT. RXA; 18. TR1AR. En lugar de 13. ..., PAXD, tampoco 13. ... , PTXD, es mucho mejor: 14. TlAR, con la amenaza 15. A3D (15. ... , A3C; 16. T1R). Si 12. ... , A5T; 13. A6TR, A2R. Ree­ Zuidema, Campeonato juvenil de Holanda, 1962, lo más sencillo es: 14. C2D, CXC; 15. RXC, y las blancas tienen muy buen j uego. 6. P5R Esta es la continuación más usual, pero también merecen con­ sideración las dos variantes si­ guientes: 6. PXP. A5C+; 7. C3A (si 7. A2D, CRXP), CRXP; 8. 0-0. 1) 8. ..., AXC; 9. '-pXA, 0-0

128

(no es bueno 9 . ..., P4D, a causa de 10. A3T); 10. P5D!, CXPAD; 11. D3D, CXA; 12. DXC, C2R; 13. P6D, seguido de 14. A3T, y las blancas tienen posibilidades de ataque. 2) 8. ... , CXC; 9. PXC, A2R, y 10. P5D, con ataque. 6. 0-0, CXP; 7. PXP, A3C (sería malo 7 . ..., A2R; 8. P5D, C1C; 9. T1R); 8. D2A. 1) 8. .. , C3A?; 9. TlR+. C2R; 10. A5C, P3A; 11. AXC!, PXA; 12. P5D, y las blancas tienen una clara ventaja. (Van Seters, Bruselas). Si 12 . ..., PXP, seguiria 13. D5AR. 2) 8. .. . , C3D; 9. TlR+, C2R; 10. A3D, P3TRI; 1 1 . D2R, R1A, y es dudoso si el ataque de las blancas compensa la pérdida del peón (12. C3A, C3D·4A, o 12. P3CD, C1R). .

6. ... C5R 7. 0-0 7. PXP, A5C+, es una continua­ ción cómoda para las negras. Por ejemplo: 1) 8. A2D, CXA; 9. CXC, 0-0; 10. 0-0, P3TD; 11. A4T, P3D; 12. P3TD, AXC; 13. DXA, C2R; 14. TDlR� A3R; 15. D4A, A4D, con juego igual. Jiménez-Fischer, Olim­ píada de Leipzig, 1960. 2) 8. R1A, P3TDI (sino seguiría 9. D4T); 9. A4T, P4CD; 10. A2A, P40, y las negras tienen una buena partida. 7. ... P4D 7. .., 0-0?, proporciona a las blancas una posición superior: 8. .

PXP A3C; 9. P5D, C2R; 10. A3D. P4AR; 11. CD2D, C4A; 12. P6D, C3C; 13. A4A+, con fuerte ata­ que. Smyslov-Randvir, Pemau, 1947. •.

8. PXP al paso 8. CXP, es un intento de conse­ guir una clara ventaja posicional en el centro. Por ejemplo: 8. ... , 0-0; 9. AXC (si 9. CXC. PXC; 10. AXP, seguiría 10. . .. , A3TI) PXA, y ahora: 1 ) 10. A3R, D1R; 11. P3A, C3D; 12. A2A. Glígoric - Keller, Zürich, 1959, y ahora las negras podían lograr una buena partida jugando 12. ..., C5A. En lugar de 11. P3A, Tal recomendó en el libro del tor­ neo 1 1 . C2D, pero entonces l a ju­ gada 1 1 . ... , A2D, proporciona una posición satisfactoria a las negras. 2) 10. P3A, C4C; 11. A3R, P3A; 12. R1T, AXC; 13. AXA, PXP; 14. AXPR, A3T, con juego igual. Glí­ goric-Fischer, Buenos Aires, 1960. En lugar de 12. R1T, era más fuerte 12. P4AR. 8. . . 0-0 8. .. , CXPD, tal vez se pueda jugar según Keres. Por ejemplo: 9. AXC+, PXA; 10. PXP, A3C; 11. A5C, P3A; 12. T1R+, R1A. .

.

9. PDXP

D3Al Esta continuación de gambito se debe al maestro danés. J. Nielsen. 9. DXP, es insuficiente. Por ejemplo: 10. PXP. 1) 10. ..., A3D; 11. C3A, A4AR; 12. T1R, y las blancas oonservan la mayoría de peones, sin grandes

129 riesgos. Kupper-Paoli, Olimpíada de Amsterdam, 1954. 2) 10. ... , TlD?; 1 1 . D2A, CDXP; 12. CXC!, TXC; 13. A3R, T5C; 14. A3D, y las blancas tienen ventaja. Menos clara sería la continuación: 12. D.X C, CXA; 13. C5C, P3CR; 14. 04TR, P4TR; 15. CXP!, A2R!; 16. C5C (análisis del Dr. Paoli).

13. ... , TDlR?, es prohibitiva por 14. P8A=D.

AXC 14. CXC 15. A5C! La clave de las últimas jugadas, Las blancas obtienen un des­ arrollo ventajoso: 15. ... , AXC (15. ..., D3C; 16. A8D); 16. TXT+, TXT; 17. DXA, DXD (17 . ... , DXA?, es mala por 18. DXPAD, ele.); 18. PXD, AXPA; 19. TlAD, y las blancas ganaron en el final. Stein - Spassky. Campeonato de la U.R.S.S., Moscú, 1961. I9B: (véase el diagrama 181) 4. ... CR2R Esta antigua continuación, que se consideraba como mala, ha sido rehabilitada por Fischer con éxito. Diagrama 187 (de!'pués de 4. .., CR2R)

PXA 10. AXC 1 1 . PXP A3D 11. . ., A3Cl, según los últimos análisis esta jugada es la única po­ sibilidad de las negras. Por ejem­ plo: 12. T1R, A4AR; 13. C3A, TR1R; 14. CXC, AXC; 15. A5C, y ahora n9 se puede jugar. 1) 15. ... , AXC; 16. DXA, DXA; 17. TXT+, TXT; 18. DXPAD, T1AD; 19. D7DI, y ganan; 19 ..., TXP; 20. D8R mate; sino. 2) 15 . ... , D3DI; 16. A8D, AXPAD; 17. AXA, DXA, y no es fácil a las blancas hacer valer su peón de ventaja. El alfil de las negras ocu­ pará una excelente posición en la casilla 40. 12. TR1Rl 12. C3A, A4AR; 13. A3R, AXPA; 14. T1AD, CXC; 15. PXC, A5R; 16. C5C, A4D; 17. D2A, D3CI, y la fuer­ te pareja de alfiles de las negras 5. 0-0 pueden compensar la inferioridad S. P4D, PXP; 6. PXP, A5C+; de los peones en el final. L.Schmid­ 7. A2D (7. C3A, P4D; 8. PXP, J. Nielsen, torneo por corresponden­ DXP; 9. 0-0, AXC, da una posi­ da en memoria del Dr. Dyckhoff, ción satisfactoria a las negras) 1954-56. AXA+; 8. DXA, es una continua­ ción más cómoda para las negras. A4AR 12. ... Por ejemplo: TR1R 13. C3A .

.

.

130 1) 8. .. . , P4D; 9. PXP, CRXP; 10. AXC+, PXA; 1 1 . 0-0, 0-0. la) 12. C5R, C2RI; 13. T1R, P3A; 14. C3AR, A5C, con juego igual. Arulaid - Florian, encuentro Estonia­ Hungría, 1957.

lb) 12. C3AI lb1) 12. . . . , P3A; 13. CXC, DXC (mejor que 13 . ... , PXC, pues la casilla 40 de las negras debe con­ servarse libre para el AD); 14. D4A, 030; 15. DXD. PXD; 16. TR1R, R2A; 17. TOlA, A2C; 18. C2D, TR1R, y el final está igual. Pógats-Dózsa, Campeonato de Hun­ gría, 1962. Más débil sería 14. ...,

T2A; 15. TR1R, A3R; 16. C2D, TlD; 17. C3C, y_las blancas tienen ven­ taja posicional. Boleslawsky-B. Os­ molovsky, Kiev, 1957.

8. PXP CRXP 9. TlR+ 9. CSR, se contesta con 9. ..., 03AI (Canal). Por ejemplo: 10. C3AD, CRXC; 1 1 . PXC, 0-0; 12. A3T, TlD, y las negras han liberado su juego. (Análisis de Barden en un artículo en