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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA INSTITUTO DE ESTUDIOS SUPERIORES DIVINA PASTORA ARQUIDIÓCESIS DE BARQUISIMETO SEMINARIO DIVINA PASTORA

ENSAYO LABOREM EXERCENS

Autor: Leopoldo Torres Profesor: Diac. Carlos Páez

Barquisimeto, 07 de octubre de 2019

Laborem Exercens (sobre el trabajo humano) es una carta encíclica promulgada por el Papa Juan Pablo II el 14 de Septiembre de 1981, con motivo del 90º aniversario de la Rerum Novarum. La Laborem Exercens tiene una visión histórica y global de la civilización occidental, que se ha preocupado en desarrollar el lado objetivo del trabajo para poder someter a la naturaleza y liberar al hombre de toda condición de vida de pobreza y miseria, es decir, este someter la naturaleza no es visto en un sentido negativo, sino que el hombre puede dominarla y aprovechar de sus recursos para que pueda tener un sustento y que pueda salir de las condiciones de pobreza. De este modo se ha logrado acrecentar el control sobre la naturaleza, pero, el lado si subjetivo del trabajo ha sido descuidado casi en su totalidad. En este sentido, la encíclica trata la concepción del hombre y del trabajo, teniendo un enfoque general que responde a un análisis de la época moderna, en la cual se ha tenido grandes desarrollos, como en el campo de la economía, lo social, lo histórico, lo teológico, lo antropológico, entre otras. Sin embargo, generalmente acerca del trabajo humano, se ha ignorado su concepto exacto. Es por esto que la encíclica va más al fondo, llega al corazón mismo del concepto del trabajo humano. En lugar de trazar un modelo ideal, san Juan Pablo II ayuda a comprender lo que ha acontecido y sigue aconteciendo en la historia, dando así una respuesta al modo en que el hombre puede transformarse con su trabajo y así hacerse más hombre. Además, Laborem Exercens presenta ideologías, por un lado encontramos al socialismo que tratan a los seres humanos como instrumentos de producción y no como personas-sujetos de trabajo. Y por otra parte, el liberalismo que los trata como mercancía sujeta al mercado de la oferta y la demanda. Con la proletarización de los intelectuales y su desempleo, se incrementa el problema social. La encíclica nos ofrece elementos de una espiritualidad del trabajo, donde los seres humanos comparten sus actividades con la acción de Dios, el trabajo imita la acción de Dios y otorga dignidad al trabajador. Finalmente, podemos ver que todas estas realidades que nos presente la encíclica, hoy también podemos observar que el trabajo

humano es una clave, quizá la clave esencial de toda la cuestión social, si tratamos de verla verdaderamente desde el punto de vista del bien del hombre. Esta es la actualidad que nos ofrece Laborem Exercens, recordarnos a todos, la importancia del cuidado y desempeño del trabajo bien hecho, no sólo para nuestros colaboradores, sino también para el empresario. Además, exhorta a que los empresarios directos e indirectos deben actuar en contra del desempleo, buscando las condiciones para crear: salarios suficientes para el sostenimiento de una familia, así como valorar teórica y prácticamente el papel de la madre en la sociedad y defender el derecho de las personas que abandonan sus países de origen, para ir a otro en busca de mejores condiciones. En conclusión, la Laborem Exercens, viene a ser una enseñanza profunda a cerca del trabajo hombre, donde se puede desarrollar y dignificar por medio del trabajo, es por esto que aunque tiene casi 40 años de haber sido promulgada, hoy en día aún tiene actualidad y es de vital importancia que se retome su contenido para así lograr un mejor progreso de los pueblos y hacer del hombre un mejor hombre.