Ensayo Funes y Apologia

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Universidad de Santiago de Chile Departamento de Historia Pedagogía en Historia y Ciencias Sociales Introducción a La Producción del Saber Historiográfico. Ricardo Moneo Rios

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Ensayo N.º 1 cuento “Funes el Memorioso”, J.L. Borges y extracto, “El Oficio del Historiador”, Marc Bloch. Este ensayo corresponde a dos textos y su eventual relación, que será caldo de cultivo para el análisis final que tratare de producir en las próximas líneas, ¿será posible relacionarlos? son dos textos de dos grandes escritores, el primero erudito literato argentino y el segundo Historiador francés fundador de una corriente nueva para hacer historia, ambos fueron contemporáneos en cierta época, antes que uno muriera asesinado, en el papel la literatura se distancia por su carácter emocional, despertando tristeza, alegría y nostalgia en sus lectores, ¿la historia se aleja de esto? Algunas corrientes históricas de todas maneras se distancian de estas prácticas, por ejemplo, la historia positivista tan estructurada y objetiva, pero la historia social, reivindica las emociones dentro de la disciplina y justifica esta forma de hacer historia, respetando un método científico, además la vuelve atractiva para la lectura. Comenzare con un breve resumen y posterior reseña del cuento de José Luis Borges, para luego continuar con el libro del creador de los Annales. El escritor trasandino, a mi humilde opinión uno de los grandes de la literatura Latino América, temporalmente podemos ubicarlo desde el comienzo del siglo XX hasta finales del mismo, vivió ambas guerras mundiales, la crisis del 29, los eventos post guerra, residió tanto en américa latina como en Europa, vio con recelo los gobiernos populistas y se declaró anticomunista, por lo que fue tildado erróneamente de escritor fascista (él también se declaraba antifascista), si bien no escribió abiertamente de política, se mostró crítico con las concentraciones de poder y con las estructuras del estado, inclusive algunos lo catalogan como un escritor anarquista libertario, cito a Borges “… para mí el Estado es el enemigo común ahora; yo querría -eso lo he dicho muchas veces- un mínimo de Estado y un máximo de individuo. Pero, quizá sea preciso esperar… no sé si algunos decenios o algunos siglos -lo cual históricamente no es nada-, aunque yo, ciertamente no llegaré a ese mundo sin Estados…” palabras influenciadas por una corriente filosófica anarquista spenceriana, quizás por ello se ganó enemigos de renombre como Fidel y cometió el error de acercarse al dictador Pinochet, según la leyenda, este acto posteriormente le costó el premio nobel de literatura. Literariamente represento en sus comienzos la corriente del ultraísmo, en oposición al modernismo, posteriormente se aburre de los “ismo” y se desplaza a una corriente narrativa escrita desde lo fantástico y lo mágico, por eso años publica su libro Ficciones de 1944 en el cual aparece el cuento Funes el Memorioso, dicho relato, nos narra la historia de un común y corriente joven porteño, que en su época de veraneo en Uruguay conoce a un introvertido adolescente que lleva por nombre Ireno Funes, según el texto definido como “un joven que no se da con las personas y mentado por cosas extrañas” [CITATION Bor44 \p 84 \l 13322 ] como por ejemplo, saber la hora exacta sin tener un reloj a la vista. Después de un par de años reencuentran, pero Ireno ha sufrido un accidente, cayo de un caballo impactándose en su cabeza, el golpe lo dejo inconsciente, al momento de despertar se da cuenta que tiene el don de recordar todo a la perfección, 2

desde lo que vio y ve, lo que escucho y escucha, lo que leyó y lee. No obstante, el accidente lo deja postrado en la cama sumergido en su habilidad infalible, en su observación implacable, en su memoria perfecta. Cuando intercambian palabras, el protagonista asombrado se da cuenta que está en presencia de alguien distinto, después de algunos años Funes muere de una pulmonía mal cuidada, a tal manera llega su impacto, el porteño y muchos otros que tuvieron relación con este ser divino escriben sobre el memorioso. Entiendo que J.L. Borges escribe ficción, pero incorpora sus influencias filosóficas y hechos de su vida a sus obras, las que adquieren un matiz profundo y llamativo, dicho esto, el percance de Irenio está ligado con el accidente del escritor bastante trillado por lo demás, tras el golpe con una ventana, su herida mal suturada le provoco fiebre y la septicemia lo tuvo al borde de la muerte según se sabe. Al leer el cuento me llama profundamente la atención algunas circunstancias sobre Funes, por ejemplo, la pequeña habilidad o cierto control que él tiene por el tiempo, pudo responderle exactamente a Bernardo Haedo cuando le pregunto por la hora sin ningún problema, esto fue antes del accidente lo que evidencia que nuestro protagonista no es una persona común, luego, al caer de un caballo la generalidad (hablando de secuelas neuronales) nos dice que un individuo debe perder la memoria y no recordar nada más, por el contrario, Funes puede “recordarlo todo”, con estas dos observaciones puedo llegar a una hipótesis sobre el memorioso, para mí, Fuenes luego de despertar se convierte en una figura divina, omnipotente, que todo lo podría saber si se lo propone, ya Pedro Ipuche al escribir póstumamente sobre él lo define como «un Zaratustra cimarrón y vernáculo» [CITATION Bor44 \p 83 \l 13322 ] y el porteño narrador de esta historia nos contaba “Entonces vi… me pareció monumental como el bronce, más antiguo que Egipto, anterior a las profecías y a las pirámides” [CITATION Bor44 \p 90 \l 13322 ] . Además, nuestro protagonista dijo: «Más recuerdos tengo yo solo que los que habrán tenido todos los hombres desde que el mundo es mundo» [CITATION Bor44 \p 88 \l 13322 ]. Funes puede analizar el “pasado” y el “pasado cercano” desde otro sentido, desde una perspectiva omnipotente, los detalles y los cambios de su cuerpo, de la naturaleza, del lenguaje y de la sociedad pasan lentos por su lado. Es un testigo divino del mundo. Como buena lectura de Borges el lenguaje ocupado se aleja de nuestro espacio y tiempo, por lo tanto, debe ser leído con un buen diccionario de cabecera, por último, me parece que este relato entrega bastante a la imaginación, y de cierta manera nos habla de historia, la pregunta es ¿Qué tipo de historia? Por otro lado, tenemos el libro Apología para la historia o el oficio de historiador de Marc Bloch quien junto a Lucien Febvre funda en 1929 la escuela de los Annales, sui generis en escribir historia, enfocada en la sociedad y los procesos de esta, se separa de la historia positivista que nos hablaba de los héroes y los procesos “importantes” de la disciplina. Este libro tiene la característica de haber sido escrito en un contexto conflictivo tanto social y político, cuando Marc Bloch (judío-francés) primero fue sacado de su cargo público debido a las políticas racistas del gobierno de Vichy en una Francia dominada por los nazis, ya había comenzado su trabajo en el oficio del historiador cuando en 1943 interrumpe su labor para unirse en la resistencia francesa al 3

régimen Hitleriano en Francia, en 1944 fue detenido por la policía de “inteligencia” alemana en plena Guerra Mundial, posteriormente torturado y asesinado, debido a esto la obra tuvo que ser publicada varios años después de su muerte, por su amigo Febvre en 1949, por ultimo su hijo la reedita incorporando cambios y notas para culminar en una obra póstuma de antología. En los pasajes leídos se puede evidenciar como el autor entrega una completa metodología de trabajo, da su opinión de diferentes temas que conciernen al historiador y del concepto historia, entrega consejos y directrices para el correcto desempeño de los historiadores desde una mirada social, en breves palabras es un compendio teórico metodológico de la disciplina. Es importante para un análisis posterior concebir como entiende Bloch La Historia, la vamos a definir de la siguiente forma, no es solo la “ciencia del pasado” [CITATION Mar49 \p 21 \l 13322 ] ya que de esta manera no es posible tratarla como ciencia, para él esta disciplina es la “ciencia del hombre en el tiempo” [CITATION Mar49 \p 58 \l 13322 ] la forma en la que se escribe y el romanticismo que sugiere no la inhabilita como ciencia, de hecho la hace atractiva para nuestras mentes, ósea que el fondo científico no se altera por el romanticismo que pueda implicar la forma con la que se escribe, es enormemente relativa ya que siempre está detrás del hombre y su multiplicidad de caminos, por ende, la vamos a ubicar siempre al lado del ser humano y su entorno social, busca saber lo que sufrieron, pensaron o lo que hicieron en un tiempo especifico, por lo tanto se vuelve fundamental estudiar el contexto temporal, con ello se explicaran los hechos del presente y los orígenes que puedan existir en el pasado, no obstante se debe tener cuidado de no ocupar esos orígenes para enjuiciar la contemporaneidad ya que se puede caer en desacreditación. Para Boch el presente y pasado se relacionan ampliamente, ya que estos dos términos convergen y conforman un estudio único, en una simple frase, debemos conocer a profundidad tanto el pasado como el presente, arriesgándose a caer en el roce benevolente de algún tema polémico, por último, la observación de manera regresiva y exhaustiva es una virtud que debe estar presente en cada erudito de la historiografía. De no seguir estos consejos, para el autor se puede caer en una desvalorización de los hechos Históricos que terminara contraponiendo la historia real de la historia ficticia. Acabo de resumir lo que apunté y entendí de Marc, así que me daré el gusto rebelde de cerrar esta síntesis con la cita que más me agrado “acabo de hablar, acabo de actuar y mis palabras o mis actos se hunden en el reino de la Memoria” [CITATION Mar49 \p 64 \l 13322 ] . Me pareció un texto bastante grafico de lo que debe entenderse de esta materia, aporta definiciones que vamos a ocupar durante nuestra formación y de cierta manera su autoridad inspira veracidad, además siento un cierto grado emotivo al escribir, imagino que en el fondo Marc Bloch intuía que eran sus últimas páginas. No obstante, a modo de crítica constructiva creo que entender el pasado y enjuiciar el presente a partir de la comparación de distintas épocas no me parece un “demonio” como lo califica Bloch, creo que es una definición peyorativa, por el contrario, esa producción y lectura es válida si contiene argumentos sólidos, y esa es una de las grandes virtudes de la historia, lo que la hace atractiva, entendiendo el presente y mirándolo desde otro punto de vista. Por otro lado, siento que desplaza a un segundo 4

plano (por lo menos en las páginas que leímos) una rama importante que es la geografía, no solo porque es una rama que en lo personal me atrae, sino porque todas nuestras relaciones económicas, religiosas, sociales-políticas e históricas se desarrollan en un entorno espacial especifico, que está en constante cambio, al igual que nuestra disciplina, también nos entrega información y marca un patrón de conductas en el ser humano. Análisis: Estimo que, si usted compañero profesor compilo una lectura teórica de nuestra disciplina junto con una obra literaria que en el papel puede ser totalmente distinta, debe existir más de una relación o contraposición en ello, que a simple vista puede estar oculta. Por una parte tenemos a un maestro en historia que nos entregó fundamentos para ser un buen historiador, en la otra esquina un personaje casi divino, según mi hipótesis expuesta en la primera parte de este ensayo, el cual recuerda absolutamente todo, inmediatamente después de decir eso se me viene a la cabeza la siguiente interrogante, ¿Funes por el hecho de recordarlo todo, es lo que un buen historiador o profesor de historia quiere para él? Quizá el profesor de Marc Bloch en el siglo XIX respondería a esa pregunta con un si inmediatamente y agregaría la objetividad y los relatos planos de los hechos importantes de la Historia Universal a esa respuesta, pero el fundador de la escuela de los Annales creo que no estaría de acuerdo con él, ya que su historia es más amplia, razona y analiza mas detalladamente, observa otras características, colabora activamente con otras ciencias, Bloch dejo bien en claro que en esta ciencia se debe trabajar de la mano con otros especialistas, así como un Egiptólogo trabaja con un Arqueólogo, o un Epigrafista. Con esto cito al autor de la Apología “Aislado ningún especialista entenderá nada sino a medias, incluso en su propio campo de estudio; y la única historia verdadera, que no puede hacerse sino con ayuda mutua, es la historia universal”[CITATION Mar49 \p 73 \l 13322 ] esta referencia que me permite terminar con la idea anterior y dar paso a mi conclusión final, en sus palabras el escritor habla de HISTORIA UNIVERSAL, ¿Es eso lo que hace Funes? Creo que sería imposible compararse con Ireno por razones obvias, es un ser omnisciente. Por ello creo que la historia que hacemos los estudiosos de esta disciplina es una historia distinta, cercana a la que se explica en el oficio del historiador, mas teórica, más práctica y a la vez mas terrenal, que recoge detalles, que observa, que analiza, que clasifica, una historia que piensa y alejada de un memorioso divinizado. Para mi Funes es la historia universal ya que no tiene que preocuparse de detalles, ya que no debe analizar causas ideológicas, en guerras o héroes, en corrientes de pensamiento ni en movimientos sociales, Ireno Funes es la historia universal, porque es este ser divino que todo lo sabe, no necesita ayuda de nadie, lo que Marc Bloch llamaría la Historia perfecta, la historia verdadera.

Ricardo Moneo Rios Estudiante de Pedagogía en Historia y Cs. Sociales 5

Universidad de Santiago de Chile

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