Ensayo Divina Comedia

Ensayo: Infierno personal vs. Infierno dantesco Tatiana Alexandra Díaz Goyeneche Institución Educativa Departamental. Po

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Ensayo: Infierno personal vs. Infierno dantesco Tatiana Alexandra Díaz Goyeneche Institución Educativa Departamental. Pompilio Martínez

Docente: Ana Jaqueline Sánchez Arévalo

Materia: Lengua Castellana Curso: 1102 Cajicá – Cundinamarca 2019

MENTEFACTO ARGUMENTAL

MENTEFACTO ARGUMENTAL P1: El daño físico se vuelve insignificante ante la agonía del alma que paga por sus pecados eternamente. P2: Los pecados son acto malo, o la omisión culpable de un acto bueno obligatorio. Por extensión, se denomina pecado a todo aquello que va contra la voluntad de Dios. (Brunstad, 2016) el alma se entiende como espiritual, es decir, que está dotada de entendimiento y de libertad, y por ese concepto independiente, en sí misma, del cuerpo. (Ramos, 2019). el daño físico se entiende como la situación en la que gracias a un factor externo se ocasiona un perjuicio puramente corporal en el cuerpo (Conamed, 2009). TEMA: Representación metafórica P3: “el sufrimiento espiritual es siempre mayor al padecimiento material que en el infierno actúa como una metáfora para el alma aislada” (Tauber, 2013) P4: “el alma es superior al cuerpo porque son sus sufrimientos los que marcan en realidad, entre todos los sufrimientos del alma condenada por sus faltas el más esencial es la pena al verse privado de la luz divina ” (Tauber, 2013) P5: “¡No hay mayor dolor que el recordar de la ventura, en medio a la desgracia! i Muy bien lo sabe tu maestro cuerdo!” (Alighieri, 2013, pág. 28) P6: “Las imágenes con las que la Sagrada Escritura nos presenta el Infierno deben ser interpretadas. Ellas indican la completa frustración y vacuidad de una vida sin Dios. El Infierno

indica más que un lugar, la situación en la que llega a encontrarse quien libremente y definitivamente se aleja de Dios, fuente de vida y de alegría (II, 1999) TEMA: Sufrimiento espiritual P7: “El espíritu es la substancia del ser humano, las torturas que el sufre son las que constituyen la verdadera condena del alma pecadora.” (Torres, 1890) P8: “El hombre está constituido por cuerpo y alma, el cuerpo es tan solo la representación material de lo que verdaderamente él es (alma). por lo que es esta esencia quien en realidad soporta los mayores martirios.” (Torres, 1890) P9: “…por eso si alguno de vosotros vuelve al mundo, le suplico que restaure en él mi memoria, que yace aún bajo el golpe que le asesto la envidia.” (Alighieri, 2013, pág. 48) P10: “Tanto el dolor como el sufrimiento, sea el dolor de origen material, es decir producido por nuestro cuerpo como el psíquico, quien al final lo soporta todo, es nuestra alma.” (Del Carmelo, 2014) TEMA: Justicia Divina P11: “La justicia divina le da a aquel que mal obra el mayor de los castigos; vivir sin esperanza eternamente.”(Sarmiento, 2018) P12: “El peor castigo que el ser humano puede sufrir es vivir sin esperanza pues La esperanza es lo que hace al hombre capaz de enfrentar cualquier dolor.” (Sarmiento, 2018) P13: “por tal falta y no por otra culpa, estamos condenados, consistiendo nuestra pena en vivir con el deseo sin esperanza...” (Alighieri, La Divina Comedia , 2013)

P14: “la “esperanza” es una emoción o una actitud positiva sacada de las profundidades de nuestra alma. A menudo, surge en medio de la calamidad y la desilusión. A pesar de la adversidad, tenemos la “esperanza” de que las cosas saldrán bien.” (Castaldo, 2015) TEMA: Libre albedrío P16: “El alma humana posee una voluntad propia, un libre albedrío que le concede total libertad de cometer cualquier acción, por esto es ella más que el cuerpo quien sufre las consecuencias de sus actos.” (Sarmiento, 2018) P17: “por voluntad propia, cada persona escoge y recibe, lo que su conciencia le indica que haga por lo que el castigo mayor de una mala acción debe ser dado a su propia conciencia quien fue la perpetuadora de dicho acto.” (2018) P18: “inherente a la encarnación, existe el libre albedrío, una ley que esencialmente permite que cada ser que existe en el mundo, cree su propia realidad partiendo del hecho de que cada quien cosecha lo que siembra.” (Alfonso, 2013) P19: “Oh ciega pasión y loca ira, que nos aguijonea de tal modo en nuestra corta vida, y así nos sumerge en sangre hirviente por toda una eternidad” (Alighieri, 2013)

P20: “el hombre no siempre siente remordimiento por los actos que comete pues siendo consciente ni siquiera se arrepiente de los perjuicios que haya causado y no le importan las consecuencias, lo único que el hombre hace aquí es disfrutar del mal que realizo” (Mosquera, 2013)

P21: “El mayor castigo del condenado consiste en tener el alma en eterna agonía, el dolor físico y tangible que pueda padecer nunca llegara a compararse con el sufrimiento espiritual que hace posible la existencia de su infierno. Un infierno en donde solo hay cabida para el tormento y martirio de su propio espíritu y de los demonios emocionales que debe enfrentar. Un infierno en donde su verdadera condena no es arder por la eternidad si no soportar los castigos de su propia conciencia.” (Del Carmelo, 2014)

P22: “La fuerza de voluntad le permite al hombre luchar contra la tentación de cometer pecado, pues si el ser humano tiene voluntad toma las riendas de sus actos y puede hacer uso de la plena conciencia antes de cometer cualquier acción posibilitando así su redención y la elusión de cualquier tortura espiritual que se convierta en su infierno.” (Sanchéz, 2019)

ENSAYO: INFIERNO PERSONAL VS. INFIERNO DANTESCO “El infierno es vivir día a día sin saber la razón de tu existencia.”

Siempre que el hombre piensa en el infierno su mente tiende a proyectar las mismas palabras; dolor y sufrimiento, pero generalmente siempre se piensan estos dos términos de un modo netamente físico. Si vamos al infierno nos azotaran eternamente, si vamos al infierno arderemos en una llama perpetua, etc. ¿Qué tal si el infierno en realidad va más allá de un padecimiento material? ¿El ser humano le debería tener miedo al infierno por lo que allí padecería físicamente o por lo que su alma, su espíritu en sí, tendría que tolerar? Sacándolo del tiempo y el espacio el infierno más que ser un lugar es una experiencia espiritual. Por esto se afirma que El daño físico se vuelve insignificante ante la agonía del alma que paga por sus pecados eternamente. En este enunciado debe entenderse siempre los pecados como un acto malo, o la omisión culpable de un acto bueno obligatorio. Por extensión, se denomina pecado a todo aquello que va contra la voluntad de Dios. (Brunstad, 2016) el ser humano nace con una responsabilidad social como persona que vive en comunidad. El hombre debe demostrar que tiene conciencia y principios además de ser capaz de respetar al prójimo, a Dios y así mismo. El humano al demostrar que tiene conciencia demuestra que tiene alma pues el alma se entiende como espiritual, es decir, que está dotada de entendimiento y de libertad, y por ese concepto independiente, en sí misma, del cuerpo. (Ramos, 2019). El alma sería la esencia de cada uno, nuestra sustancia espiritual e inmortal, lo que queda de nosotros al finalizar nuestro trayecto vital.

El alma de una persona es verdaderamente la que le da la calidad de humano, conociendo su alma se puede decir como es cada quien realmente, el cuerpo solo es un vehículo de manifestación. Pero además de ser un vehículo de manifestación gracias al cuerpo somos capaces de reaccionar a estímulos en nuestro entorno. El cuerpo es el que siente el daño físico, entendiendo este como la situación en la que gracias a un factor externo se ocasiona un perjuicio puramente corporal en el cuerpo (Conamed, 2009). Cualquier tipo de impacto que pueda afectar nuestro cuerpo es un daño físico. Siguiendo este orden de ideas sabemos que el humano es débil ante el dolor físico, siempre le tiene miedo a este y trata de evitarlo a toda costa, a pesar de saber que existen peores castigos. Ciertamente existen peores castigos que la dolencia de un daño físico, sin embargo, siempre se ve como el infierno es temido por los dolores físicos que allí se sufren. Como lo han presentado a lo largo de los años, el infierno es un lugar de tortura física, pero viéndolo desde una perspectiva diferente a la de un “lugar” propiamente dicho en el tiempo y el espacio, se puede analizar como una representación metafórica de lo que padece el alma humana. Según Yuly Tauber “el sufrimiento espiritual es siempre mayor al padecimiento material que en el infierno actúa como una metáfora para el alma aislada” (2013) el infierno es la metáfora de como el alma padece cuando se aleja no necesariamente de Dios si no del buen camino que como ser humano moral le concierne, a esto se refiere alma aislada. Pues cuando el hombre toma decisiones por fuera de su humanidad, las consecuencias son malignas para su alma, explicando así los estados agónicos o de perpetuo dolor y sus contrapartes de placer y bienestar que experimentan los seres humanos, expresados como emociones. Cada emoción indeseada que experimenta el hombre es la representación de su infierno personal, no implica que lo castiguen físicamente, ni que lo torturen con un dolor eterno. Lo

único en lo que consiste es en que su alma sufra. “el alma es superior al cuerpo porque son sus sufrimientos los que marcan en realidad, entre todos los sufrimientos del alma condenada por sus faltas el más esencial es la pena al verse privado de la luz divina ” (Tauber, 2013) en los seres humanos una herida del alma es mucho más profunda que cualquier otra que cause dolor tangible, el verdadero tormento que hace de una situación un infierno sucede cuando el alma humana en sí, sufre emociones profundamente agónicas. El infierno es la simbolización de lo que sufre el alma cuando se le priva de conocer el bien, de estar alejada de toda ventura y de como el hombre sufre al alejarse del compromiso que tiene como ser humano. Incluso en la Divina comedia Dante da a entender que su verdadero propósito es enseñar cuáles son los pecados del alma humana y cuál es el camino para encontrar la verdad y conseguir la salvación, más allá de afirmar que existe un infierno como lugar. “¡No hay mayor dolor que el recordar de la ventura, en medio a la desgracia! i Muy bien lo sabe tu maestro cuerdo!” (Alighieri, 2013, pág. 28). En este caso Dante resalta que la principal agonía que los condenados viven allí, a pesar de que están rodeados de dolor puro y tangible, es la pena que su alma vive al recordar los tiempos felices, es el sufrimiento de su espíritu al estar consciente de que aquellos momentos nunca regresaran y ese es su mayor castigo, es ese el calvario responsable del infierno en el que ahora están. El hombre se enfrenta a sus demonios y accede al infierno con base en sus decisiones, pero los demonios actuales son las emociones negativas, entre las más relevantes: la depresión, ansiedad y desesperación. Se pueden mencionar muchas más que nos llevan al punto agónico (el Infierno en sí, en forma literal), que es cuando no vemos la salida a un problema en particular, gracias a que nos alejamos del camino de la luz “Las imágenes con las que la Sagrada Escritura nos presenta el Infierno deben ser interpretadas. Ellas indican la completa frustración y

vacuidad de una vida sin Dios. El Infierno indica más que un lugar, la situación en la que llega a encontrarse quien libremente y definitivamente se aleja de Dios, fuente de vida y de alegría (II, 1999). Dios simboliza la luz, el camino de la rectitud, pero estas palabras están ampliamente abiertas a la interpretación, pues para aquellos que no creen, pero actúan con humanidad, no habrá un infierno, porque a pesar de no amar a Dios, aman a sus iguales y esto demuestra que en su alma existe cabida para la luz. Dante afirma la existencia del infierno como lugar y representa los diferentes castigos, enfatizando principalmente los diferentes dolores tangibles que torturan a los pecadores. Aunque viéndolo en perspectiva Dante también quería mostrar como el alma padece a causa de los eternos remordimientos de los condenados por lo que el infierno personal depende del pecado que haya cometido el alma, pues cuan mayor sea su falta, mayor será su sufrimiento, al igual que en la Divina Comedia, pero no en forma literal si no espiritual y no necesariamente en un lugar específico, el sufrimiento se puede dar en cualquier parte y momento de la vida humana. Como ya sea dicho, en el momento en que el hombre se aleja del camino de la luz sufre una agonía espiritual que lo lleva a vivir lo que en realidad consiste el infierno. Según Joaquín Torres “El espíritu es la substancia del ser humano, las torturas que el sufre son las que constituyen la verdadera condena del alma pecadora.” (Torres, 1890) el alma es la parte vital del ser humano, el cuerpo humano ordinario es la imperfección personificada. Esta imperfección puede ser transformada en perfección sólo cuando el cuerpo se ofrece voluntariamente a la luz, sabiduría y dicha del alma. Cuando el cuerpo sufre lo único que se afecta es la capa superficial del ser humano. Un daño físico a pesar de ser una gran tortura no se compara con el martirio que es que el alma en esencia sufra.

Las emociones del ser humano son fuertes, trascendentales en su vida. Ellas son las que determinan como el ser humano puede llegar a verse afectado ante una situación. ¿Es peor arder en una llama infinita o permanecer eternamente atormentado por su propia conciencia? En opinión el dolor físico es un castigo que llega a la altura de ser muy cruel, pero luego de padecer eternamente el mismo daño físico, llegara un punto en el que cuerpo se acostumbrara a soportar el dolor y ya no le importara lo que sufra materialmente. Por lo que una verdadera tortura es el vivir con remordimiento y sin tranquilidad, que su propia conciencia sea su verdugo. Ese es el infierno. El infierno simboliza aquel enfrentamiento que el hombre libra con sus propios demonios, no por una acción externa, si no por su propio espíritu. “El hombre está constituido por cuerpo y alma, el cuerpo es tan solo la representación material de lo que verdaderamente él es (alma). por lo que es esta esencia quien en realidad soporta los mayores martirios.” (Torres, 1890). Son más importantes los sufrimientos espirituales del condenado que los materiales, pues el orden espiritual es superior al orden material, por lo que los goces como los sufrimientos de orden material será inferiores a los del orden espiritual. En la Divina Comedia, Dante menciona en varias oportunidades como uno de los mayores sufrimientos de las almas es su olvido en el mundo terrenal, esto es un ejemplo de dolor netamente espiritual, ¿cuán duro es para un ser humano el saber que no es recordado ni siquiera por las malas acciones que cometió? El olvido tal vez es una de las mayores penas del alma humana y nada tiene que ver con un dolor físico. “…por eso si alguno de vosotros vuelve al mundo, le suplico que restaure en él mi memoria, que yace aún bajo el golpe que le asesto la envidia.” (Alighieri, 2013, pág. 48) Dante una vez más enfatiza el dolor espiritual como una de las principales condenas para los pecadores.

El espíritu humano soporta finalmente todo el dolor. El hombre es un ser compuesto por dos elementos carne y alma. El alma posee la razón, la carne los sentidos; a los que sin embargo la carne no imprime movimiento alguno sin la unión del alma; en cambio el alma sí retiene su ser racional sin la carne. Según Juan del Carmelo “Tanto el dolor como el sufrimiento, sea el dolor de origen material, es decir producido por nuestro cuerpo como el psíquico, quien al final lo soporta todo, es nuestra alma.” (2014) sin el alma el cuerpo no es nada finalmente, por tal razón es el alma la que sufre vivamente cada martirio que le es impuesto al hombre. El alma es el constituyente que hace al hombre, humano. Se afirma que el alma es la que hace posible que el hombre pueda vivir un infierno, Dante no desconoce esto, y aunque no lo hizo el eje central de su obra si fue lo que dio a entender en varias ocasiones, la diferencia radica en que estas agonías espirituales, el hombre las sufre todo el tiempo en la tierra gracias a sus acciones, no en un lugar que existe específicamente para eso. El infierno personal de una persona se vive en el momento en el que pierde su humanidad y lleva a cabo actos que luego su propia alma castiga. Este castigo que el hombre vive también se da gracias a lo que se le llama justicia divina, algo que a través del tiempo se ha puesto en duda, pues se afirma en repetidas ocasiones que lo divino desconoce el juicio, y esto es acertado, pues Dios únicamente representa la infinitud de apertura hacia la misericordia, compasión y alegría infinita, pero independientemente de eso existe una ley de encarnación, una ley en la que se dice que cada acción humana tiene sus debidas consecuencias. Aunque Dios sea misericordioso, no significa que sea injusto. Si un hombre realiza actos ruines a conciencia del perjuicio que causa, pronto sus acciones lograran que su espíritu sufra el infierno que se merece por ello, a esto se refiere la justicia divina.

Según Lurdes Sarmiento “La justicia divina le da a aquel que mal obra el mayor de los castigos; vivir sin esperanza eternamente.”(Sarmiento, 2018) la esperanza es aquella que le da al hombre las fuerzas para continuar, las fuerzas para soportar la dificultad que se presente, sin ella el hombre es un ser vacío. Sin razón de existir. El infierno significa perder precisamente eso; la esperanza. Si se sabe que nunca se dejara de sufrir, ¿Por qué seguir luchando? La esperanza es el motor que le da sentido a la vida del humano. Sin sentido nada vale la pena, es literalmente dejar de vivir sin estar muerto. “El peor castigo que el ser humano puede sufrir es vivir sin esperanza pues La esperanza es lo que hace al hombre capaz de enfrentar cualquier dolor.” (Sarmiento, 2018) nada tiene que ver la esperanza con el dolor tangible, pues la esperanza es algo netamente espiritual, y sin embargo es la perdida de esta es la peor tortura que el alma humana puede padecer. El hombre necesita esperanza para continuar ante una circunstancia difícil, para que su sufrimiento tenga un significado y sienta que aún tiene la posibilidad de redimir una acción. Aquel que es pecador a conciencia terminara matando la esperanza en su alma, pues luego vera como su espíritu les niega la cabida a emociones positivas e incrementa el dolor de remordimiento. “por tal falta y no por otra culpa, estamos condenados, consistiendo nuestra pena en vivir con el deseo sin esperanza...” (Alighieri, La Divina Comedia , 2013) En la Divina Comedia todos los círculos tienen un común denominador; la ausencia de esperanza, factor que actúa como un fuerte potencializador del martirio de las almas pecadoras. Incluso la misma puerta del infierno dice que antes de entrar se debe abandonar toda esperanza, porque allí nunca se alcanzará la redención. Por lo que se puede afirmar que el infierno de Dante es un lugar donde por encima de todo, carece la esperanza.

Cuando el hombre se condena a sí mismo a través de sus acciones, su humanidad inicia un retroceso, en donde su alma se despoja de cualquier emoción buena dejando así solamente la vivencia de emociones negativas e incluso comienza a desarrollar una clase de odio a sí mismo y hacia su vida. Según Chris Castaldo “la “esperanza” es una emoción o una actitud positiva sacada de las profundidades de nuestra alma. A menudo, surge en medio de la calamidad y la desilusión. A pesar de la adversidad, tenemos la “esperanza” de que las cosas saldrán bien.” (2015) Se dice que la esperanza fue un regalo de Dios al mundo, y esto significa que la esperanza es aquella que mantiene vivo al ser humano y que si se arrebata se vivirá la experiencia de un verdadero infierno a través del alma. El ser humano, mantiene su humanidad, también a través de la esperanza, ya que es este el sentimiento que mantiene viva la luz dentro del hombre, el que le da la fuerza interior para continuar y redimirse. Dante en la Divina Comedia presenta un infierno en donde por ninguna circunstancia puede haber este anhelo por una redención. De la misma manera sucede cuando nuestra alma pierde esperanza vivimos un infierno en vida. Cuando se menciona que, gracias a sus acciones, el hombre hace que su propia alma se condene así misma se habla de un libre albedrío que este posee. Esta capacidad que le permite decidir sobre su vida y realizar los actos que este decida. “El alma humana posee una voluntad propia, un libre albedrío que le concede total libertad de cometer cualquier acción, por esto es ella más que el cuerpo quien sufre las consecuencias de sus actos.” (Sarmiento, 2018) Nadie, ni ninguna ley de la naturaleza puede torcer nuestra voluntad. Se considera que el ser humano está capacitado para tomar decisiones vinculando a estas su racionalidad y tomando así la mejor la alternativa acorde al camino recto que es su responsabilidad seguir. Pero cuando esto

no sucede y la conciencia opta por cometer pecado conscientemente, el alma se condena y es ella quien debe pagar el precio de su acto. Según Lurdes Sarmiento “por voluntad propia, cada persona escoge y recibe, lo que su conciencia le indica que haga por lo que el castigo mayor de una mala acción debe ser dado a su propia conciencia quien fue la perpetuadora de dicho acto.” (2018) nada está por encima de la voluntad del hombre, es el mismo con sus propias decisiones quien día a día construye su propia realidad, el hombre es capaz de iniciar y dirigir su acción mental sólo de acuerdo con la naturaleza de su consciencia. Por lo que es el alma la responsable de la incontinencia del hombre. Ella es la que debe sufrir más que el cuerpo las consecuencias de sus actos por medio de emociones agónicas que la carcomen. La caída en el pecado del hombre recae totalmente en su alma y espíritu pues aquí se encuentra su conciencia. Por ende, se afirma que el castigo del pecador debe sufrirse mayormente en su alma, dejando de un lado el daño físico y solo concentrando la atención en los sufrimientos del espíritu. “inherente a la encarnación, existe el libre albedrío, una ley que esencialmente permite que cada ser que existe en el mundo, cree su propia realidad partiendo del hecho de que cada quien cosecha lo que siembra.” (Alfonso, 2013) La ley de causa y efecto predomina en esta circunstancia. Luego de haber cometido pecados a plena conciencia, el alma padecerá, porque ningún pecador que tenga total uso de su razón podrá vivir en paz. En lo más profundo de su alma siempre habrá oscuridad, siempre libraran un infierno con ellos mismos. Dante en la Divina comedia resalta este libre albedrío dándole a este tipo de pecados a plena conciencia un castigo mayor que al resto. “Oh ciega pasión y loca ira, que nos aguijonea de tal modo en nuestra corta vida, y así nos sumerge en sangre hirviente por toda una eternidad” (Alighieri, 2013) como ya se dijo nada es superior a la voluntad del hombre, el decide por que

emociones se deja llevar, pues a diario la balanza esta ante él y su labor es decidir qué acto realizar sabiendo las consecuencias de estos, es por esto que sus almas sufren en mayor medida; porque son las enteramente pecadoras. El infierno personal de cada uno se ve reflejado precisamente en estas consecuencias, porque para quien es malo conscientemente su alma lo castiga. El infierno de Dante también parte de las consecuencias de las acciones humanas y de la voluntad de cada persona, pero la diferencia es que estas consecuencias se evidencian sobre todo de una forma física, por el contrario, el infierno personal de cada uno es una batalla espiritual consigo mismo. Pero existen casos en donde todo lo dicho no sucede, según Sheila Mosquera “el hombre no siempre siente remordimiento por los actos que comete pues siendo consciente ni siquiera se arrepiente de los perjuicios que haya causado y no le importan las consecuencias, lo único que el hombre hace aquí es disfrutar del mal que realizo” (Mosquera, 2013) El ser humano puede no sentir ninguna clase de tormento espiritual, pues su alma carece de humanidad. Por lo que llegar a afirmar que el tormento espiritual es el peor castigo que se puede infringir y que es la viva representación del infierno de cada persona es caer en la generalización. Pero más allá de eso podemos decir que a pesar de no ser sufrido por todos, el sufrimiento espiritual es mucho peor que el castigo físico ya que “El mayor castigo del condenado consiste en tener el alma en eterna agonía, el dolor físico y tangible que pueda padecer nunca llegara a compararse con el sufrimiento espiritual que hace posible la existencia de su infierno. Un infierno en donde solo hay cabida para el tormento y martirio de su propio espíritu y de los demonios emocionales que debe enfrentar. Un infierno en donde su verdadera condena no es arder por la eternidad si no soportar los castigos de su propia conciencia.” (Del Carmelo, 2014) Esta afirmación es lo que representa el verdadero infierno personal, un estado en el que el

alma siente agonía y tortura por sus propias emociones y gracias a los actos que el hombre llevo a cabo. La divina comedia logra simbolizar este sufrimiento espiritual a través de los diferentes castigos de los condenados, castigos que logran que los pecadores se torturen así mismos lo cual es lo que realmente hace de ese un lugar insoportable e infernal para el alma. Para que hombre logre evitar llegar a experimentar la vivencia de su infierno personal, para que su alma viva en paz y no se torture a sí misma, el hombre tiene una opción; hacer uso de su voluntad. “La fuerza de voluntad le permite al hombre luchar contra la tentación de cometer pecado, pues si el ser humano tiene voluntad toma las riendas de sus actos y puede hacer uso de la plena conciencia antes de cometer cualquier acción posibilitando así su redención y la elusión de cualquier tortura espiritual que se convierta en su infierno.” (Sanchéz, 2019) Solo la voluntad del hombre puede lograr que este evite caer en el pecado, que evite salir del buen camino y que pierda su humanidad por un deseo ya sea carnal o consciente. Si el hombre se lo propone, el mismo es capaz de redimirse y nunca tener que vivir un infierno.

¡Gracias!

Referencias Alfonso, L. (01 de Enero de 2013). Investigacion y Ciencia. Obtenido de https://www.investigacionyciencia.es/revistas/mente-y-cerebro/el-poder-del-beb567/libre-albedro-10767 Alighieri, D. (2013). La Divina Comedia . Barcelona : Ediciones Brontes S.L. Alighieri, D. (2013). La Divina Comedia . Barcelona: Ediciones Brontes S.L. . Brunstad, C. (09 de marzo de 2016). Cristianismo activo. Obtenido de https://cristianismoactivo.org/que-es-el-pecado Castaldo, C. (1 de Agosto de 2015). En contacto. Obtenido de https://www.encontacto.org/lea/revista/notas-teologicas/no-sin-esperanza Conamed. (28 de septiembre de 2009). law¡. Obtenido de https://leyderecho.org/dano-fisico/ Del Carmelo, J. (07 de Abril de 2014). El blog de Juan del Carmelo. Obtenido de https://www.religionenlibertad.com/blog/34630/sufrimiento-del-cuerpo-sufrimiento-delama.html II, J. P. (22 de Julio de 1999). El Pais Diario. Obtenido de https://elpais.com/diario/1999/07/22/sociedad/932594404_850215.html Mosquera, S. (03 de Marzo de 2013). La revista. Obtenido de http://www.larevista.ec/orientacion/psicologia/vivir-sin-remordimientos Ramos, P. (14 de febrero de 2019). el refugio del alma . Obtenido de https://refugiodelalma.com/que-es-el-alma-humana.html

Sanchéz, G. (25 de Febrero de 2019). La Mente es maravillosa. Obtenido de https://lamenteesmaravillosa.com/la-fuerza-de-voluntad/ Sarmiento, L. (12 de Junio de 2018). Gran hermandad blanca. Obtenido de https://hermandadblanca.org/sabes-realmente-en-que-consiste-la-justicia-divina/ Suarez, M. (10 de Juio de 2015). Bien interesante. Obtenido de http://bieninteresante.net/elinfierno-es-un-lugar-o-un-estado-del-alma/ Tauber, Y. (25 de Junio de 2013). ¿Qué es el alma? Obtenido de https://es.chabad.org/library/article_cdo/aid/899895/jewish/Que-es-el-Alma.htm Torres, J. (1890). Diccionario apologético de la fe católica. Barcelona: Editorial San francisco de Sales.

Rúbrica – EnsayoANA JAKELINE SÁNCHEZ ARÉVALO Valoración /Criterios Tesis

Introducción

Organización

Coherencia

Superior

Alto

Básico

Bajo

El ensayo contiene una tesis original e interesante que cumple con las características: Universal, categórica, contracultural y macro proposición. La introducción es atractiva, plantea el tema principal y anticipa la estructura del trabajo.

El ensayo contiene una tesis sólida que está presentada de manera clara y concisa, pero no cumple con alguna de las características expuestas. La introducción claramente plantea el tema principal y anticipa la estructura del trabajo; pero no es La mayoría de los argumentos están claramente vinculados a una idea principal (tesis) y están organizados de manera lógica.

La tesis es un poco vaga y podría presentarse de manera más clara y concisa; además no tienen en cuenta las características trabajadas.

No se comprende cuál es la tesis

Plantea el tema principal, pero no anticipa adecuadamente la estructura del trabajo o no es particularmente atrayente para el lector. La mayoría de los argumentos están vinculados a una idea principal (tesis), pero la conexión con ésta no es algunas veces ni clara ni lógica.

No hay una introducción clara del tema principal o la estructura del trabajo. Los argumentos no están claramente vinculados a una idea principal (tesis).

En general, el trabajo está bien escrito, pero hay algunos errores de gramática o problemas de estilo que no dificultan la comprensión La mayor parte de la información en el trabajo está presentada de manera clara, precisa y correcta.

El trabajo se comprende en general, pero hay varios errores que dificultan la comprensión.

Es muy difícil comprender lo que quiere decir el escritor.

La mayor parte de la información en el trabajo está presentada de forma clara y precisa, pero no es siempre correcta o relevante. Hay demasiado resumen de la trama sin análisis, o se incluye demasiada biografía del autor. El trabajo se comprende en general, pero hay varios errores que dificultan la comprensión.

Hay varios errores de información, y ésta no queda siempre clara. O, el trabajo es un mero resumen de trama sin ningún análisis.

Todos los argumentos están vinculados a una idea principal (tesis) y se desarrollan de manera lógica a través de tres cadenas argumentales, contraargumento, definitoria, derivada y derivada práctica. El trabajo está muy bien escrito, con corrección gramatical, y un estilo formal apropiado.

Información

Toda la información presentada en el trabajo es clara, precisa, correcta y relevante.

Estilo/gramática

El trabajo está muy bien escrito, con corrección gramatical, y un estilo formal apropiado.

En general, el trabajo está bien escrito, pero hay algunos errores de gramática o problemas de estilo que no dificultan la comprensión

Es muy difícil comprender lo que quiere decir el escritor.