Ensayo de La Fabula - Karla

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL “RAFAEL MARÍA BARALT” VICERRECTORADO ACADÉMICO PROGRAMA DE POSTGRADO MAESTRÍA: ADMINISTRACIÓN DE LA EDUCACIÓN BÁSICA

La Humildad Los valores son propios de las personas y están por todas partes, es decir, todas las acciones y pensamientos están llenos de valores. A nivel mundial es indispensables para la subsistencia humana, tener presente los valores, al respecto, Bello (2004:15), dice que; “Cuando hablamos de valores nos referimos a la guía de vida que marcara todo lo que hacemos y lo que no debemos hacer, los valores tienen función social de asegurar la convivencia y el respeto mutuo”. Es decir que toda sociedad debe incluir en su conjunto de normativas los valores hacia las buenas acciones o virtudes que existen en el Hombre. De igual manera, Parras (2006:102), plantea que, “Los valores son guías de la vía que permiten referirnos a una enseñanza constante y funciones sociales que aseguran la convivencia y el respeto mutuo”. Así pues, toda comunidad debe implantar los valores de convivencia. Es por esto, que los valores son pilares fundamentales para la formación integral de la persona, vienen principalmente de la familia la cual, es el agente natural y primario de la educación. Estos solo pueden convertirse en vivencia profunda así como personal cuando se aprecian y se desean para la vida propia.

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De tal manera, Codina, (2008:23) dice que, “Los valores son una realidad personal. No, se trata de enseñar un determinado sistema de valores, sino de facilitar procesos personales de valoración. Cada alumno y alumna debe reflexionar y discernir aquellos valores que desea hacer propios,

mediante

un proceso eminentemente

personal”.

Venezuela no

escapa de esta realidad, sin embargo se muestra en un letargo en relación a los valores, ya que se ven casos de: delincuencia, secuestros, maltrato familiar entre otros, todos estas consecuencias como resultado de poca conciencia en lo que refiere a convivir. Además, esto influye en los estudiantes de las instituciones educativas del país los cuales presentan en la actualidad bajo rendimiento académico a nivel pedagógico, debido a los problemas en su entorno familiar que muchas veces lo llevan a la delincuencia, es por ello, que la educación venezolana está orientada hacia la consolidación de los paradigmas planteado con la nueva tendencia enseñanza-aprendizaje en donde la actuación de los entes educativos interactúan con la comunidad de manera que juntos busquen las soluciones a los problemas comunes que afectan de forma directa al educando. Según Rodrigo (2000:65), los valores son características morales que toda persona debe poseer, tales como la humildad, la piedad y el respeto; así como todo lo referente al género humano. De igual manera, se denomina tener valores al respetar a los demás; asimismo los valores son un conjunto de ejemplos que la sociedad establece para las personas en las relaciones sociales. Sobre la base de las consideraciones anteriores, se puede decir, que los valores son de suma importancia para la convivencia de los seres humanos en sociedad, debido a que prácticamente son guía de comportamientos que reflejan la actitud de cada persona con respecto a otra. Vale la pena resaltar que los valores morales son normas a través de los cuales se rigen las conductas humanas; dentro de estos se puede considerar 2

el valor de la humildad como el hecho de tener simplemente conciencia sobre los actos negativos y positivos de la personalidad de cada individuo. Cabe agregar, que la humildad es una virtud de existencialismo, pues consiste en ser conscientes de las limitaciones y carencias así como de las fortalezas que posee cada persona; es entonces, la sabiduría de reconocer los que somos tanto física como espiritualmente, por consiguientes aceptarnos tal cual, al mismo tiempo, se dice que es la característica que define a una persona modesta, que no se cree superior que los demás. En términos más sencillos, es saber reconocer las cualidades, debilidades, capacidades, y saber aprovecharlas para ayudar a los demás sin necesidad de decirlo. Es difícil pero cierto, pensar en que todos los valores giran en torno a la humildad, pues una persona humilde, desarrollara el suficiente humanismo para respetar a su prójimo, para tolerarlo o para tratarlo como su igual por mencionar algunos ejemplos. Una persona humilde puede adaptarse a todos los ambientes, por más negativo que este sea. El apóstol Pablo, a quien muchos incrédulos sindican como un hombre de humildad aparente, escribió para los cristianos de Colosas: “Vestíos, pues…de humildad, de mansedumbre, de paciencia…” (Colosenses 3:12). El vestirse significa “cubrirse”. En verdad la humildad enclaustra una actitud mental, no es cobardía ni debilidad. El orgullo refleja debilidad; mientras que muchas veces el desplegar humildad requiere valor y fortaleza. Todo individuo tiene la capacidad de reconocerse en el pleno desarrollo de sus potencialidades, pero es la persona atenta y sabia la que se interrelaciona con humildad y actúa en el día a día sin proclamarse dueña de los resultados. Cuando un individuo se reconoce en la plenitud armónica de los distintos niveles que conforman su ser, cuando se equilibra el cuerpo, la mente, el corazón y el espíritu de una forma íntegra y global, naturalmente brota en cada uno el deseo de compartir este camino. Por el contrario, los 3

sentimientos de obediencia extrema y sumisión contaminan la vivencia en libertad de cada cual con vacíos argumentos y banales normativas, tratando de dictarle a otros lo que supuestamente consideran está bien o está mal. Se observa claramente, que la humildad es una invitación a desarrollarnos a través de una práctica realista, pues radica en ser conscientes de nuestras limitaciones e insuficiencias y actuar de acuerdo a ello. En efecto, siempre las personas encuentran cosas en su cuerpo y alma que no les gusta, capacidades que no estan aprovechando o cualidades que no estan desarrollando. Lo importante es aceptar la situación e intentar luchar por superarse día a día. Resulta oportuno, señalar que el valor de la humildad así como muchos otros se encuentran inmerso en las moralejas de las fabulas de Esopo quien fue un escritor griego originario de Asia menor. La historia cuenta que era un esclavo jorobado, tartamudo y de extrema fealdad. Se dice que, incluso, fue acusado, sin base cierta, de haber robado un cáliz de oro del templo de Delfos. En castigo por este delito, fue arrojado a un abismo por los habitantes de Delfos. Sus relatos se caracterizan por ser narraciones cortas y tener siempre una conclusión moralizante o "moraleja". En ellas, Esopo "humaniza" las conversaciones de los animales y plasma todos los vicios y virtudes de los hombres, con un gran talento satírico. Sus fábulas eran verdaderas alegorías morales. Conviene distinguir claramente la fábula género literario de la fábula argumental o argumento: Aristóteles hablaba de esta última cuando escribe que la fábula es uno de los seis elementos que forman la tragedia junto con los caracteres, el canto, la elocución, el pensamiento y el espectáculo. (Poética, cap. VI, 1450a). Así pues, la fábula trágica es su argumento o el encadenamiento de acciones y hechos expuestos que forma la narración o, de otra forma, en el lenguaje cinematográfico, la sinopsis. Un ejemplo de fábula es el "El gato y el ratón" en donde se pueden identificar las características de esta. 4

En el transcurso de la historia, muchos escritores han dado su opinión particular sobre la fábula, algunos la han considerado más que un elemento lúdico o un género literario en el que se puede dar una enseñanza ejemplarizante al lector. Platón, quien fue un filósofo griego atacó duramente a la fábula de Esopo por la preponderancia que él le daba a la lógica sobre la estética; sin embargo, Platón se oponía no solo al uso de las fábulas en la enseñanza sino a todo uso de arte, puesto que el arte alejaba el alma de la verdad, de la cual poseía por naturaleza la semilla y la disposición para el conocimiento. (Nervi, 1965) Asimismo, Rousseau (2005:115) critica fuertemente el uso de las fábulas en el entorno educativo y las tilda de deformadoras del carácter inocente de los niños. Para Rousseau las fábulas son relatos de difícil entendimiento para un niño y son escritos cargados de mensajes de moral equívoca, porque muestran que es el más fuerte y astuto quien vence y posee ventajas sobre quienes adolecen de falta de sagacidad. Sin embargo, hay quienes desde una posición más neutral defienden a las fábulas ya que aseguran que pueden ser beneficiosas en ciertos procesos de aprendizaje, uno de esos defensores fue Karl Vossler (1947:70) que dijo a propósito que una fábula puede servir como elemento de ayuda en el aprendizaje, pero no para los niños, puesto que un correcto entendimiento de las mismas necesita al menos la experiencia de quien tenga al menos 40 años. Otros autores como Alfonso Francia (1992:8), destaca la importancia del género para fomentar actitudes y comportamientos precavidos en niños y adolescentes; es más, afirma que una gran cantidad de técnicas y recursos hacen de la fábula un medio pedagógico de primera calidad y del cual se puede hacer uso para mejorar el proceso educativo. De los anteriores planteamientos se deduce, que las fábulas no son vista de la misma manera por las personas hay quienes opinan que son una 5

guía excelente para el proceso de enseñanza-aprendizaje, y otros sostienen que son difíciles de comprender además muestran dos personalidades distintas en las que existe una diferencia física e intelectual. Desde el punto de vista de la investigadora las fábulas pueden ser útil en un determinado momento, ya que a través de ella se puede enseñar ciertos valores contenidos en las mismas a estudiantes de cierta edades que sepan diferenciar lo bueno de lo malo así como determinadas actitudes. A continuación, se presenta una de las fábulas de Esopo en la que se puede apreciar la estética con la que el escritor muestra las características de los personajes involucrados en la acción. El ciervo, el manantial y el león Agobiado por la sed, llegó un ciervo a un manantial. Después de beber, vio su reflejo en el agua. Al contemplar su hermosa cornamenta, sintióse orgulloso, pero quedó descontento por sus piernas débiles y finas. Sumido aún en estos pensamientos, apareció un león que comenzó a perseguirle. Echó a correr y le ganó una gran distancia, pues la fuerza de los ciervos está en sus piernas y la del león en su corazón. Mientras el campo fue llano, el ciervo guardó la distancia que le salvaba; pero al entrar en el bosque sus cuernos se engancharon a las ramas y, no pudiendo escapar, fue atrapado por el león. A punto de morir, exclamó para sí mismo: -- ¡Desdichado! Mis pies, que pensaba me traicionaban, eran los que me salvaban, y mis cuernos, en los que ponía toda mi confianza, son los que me pierden. Moraleja: Muchas veces, a quienes creemos más indiferentes, son quienes nos dan la mano en las congojas, mientras que los que nos adulan, ni siquiera se asoman.

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Esta fábula, tiene dos maneras de ser interpretada, la primera es que todas las personas deben ser agradecidas con Dios por todas las cosas que les ha dado tanto física como espiritualmente, no se debe estar luchando contra él por los defectos sobre todo físicos que se pueda tener; ya que si se está despreciando continuamente ese legado, entonces se sufrirá sin ser necesario. Por otro lado, la segunda forma de interpretar esta fábula es que en ocasiones las personas terminan recibiendo ayuda de quien menos espera, y en

las

que

tanto

confían

y

que

están

diariamente

a

su

lado

terminan traicionándolos en todos los aspectos de su vida, sorpresivamente hay quienes pierden su hogar o trabajo por causa de las intrigas de su más ferviente amiga. Finalmente, esta fábula se relaciona con la vida de la investigadora debido a que desde niña hay ciertos aspectos de su físico que no le gustaban y por lo cual recibía sobrenombres por parte de sus compañeros de estudio, pero que en la actualidad ha superado esos conflictos emocionales y se acepta tal cual es. También, se presentó un problema en el trabajo con la persona que consideraba su amiga desde bachillerato quien la traicionó sin medir las consecuencias de sus actos, pues confiaba en ella y le contaba todo, esto le ocasionó una decepción que desde ese momento para la investigadora la única amiga ahora es su madre.

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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Codina, A (2004). Los valores como herramientas gerenciales. Gerencia y negocio de Venezuela documento en línea disponible en http://www.degerencia.com/artículos.phpPortid:644 De la Cuesta, M (2002). Investigación Ética en Empresas Socialmente Responsables. UNED. Madrid. Francia, (1992) A. Educar con Fábulas, (p.8) Madrid: CCS. Rousseau, J. (2005). Emilio o la Educación, Editorial Porrúa (p.115) México D.F. Vossler, K. (1947) La Fontaine y sus fábulas. Espasa Calpe (p.70). Buenos Aires.

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