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• Ruth Fernandez

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CREACION DEL CAPITULO FINAL DE LA LECTURA EL VOLADOR INVENCIBLE AUTOR: BENJAMIN FLORES CARBAJAL I.E. WILLIAM SHAQUESPEARE – 4°GRADO

Y llegó el día del Campeonato. Yo estaba nervioso, porque no sabia si jugábamos con quinto o sexto. Mi papá siempre me daba ánimos y mi mamá me apuraba con el desayuno. Ya en la cancha vimos jugar a quinto y sexto, el partido fue muy difícil. Los de quinto iban ganando un gol a cero pero cuando acabo el primer tiempo se dio el empate. Luego quinto anotó otro gol y ganó el partido.

Nuestro entrenador nos llevo al camerino antes que empiece nuestro partido. Allí nos habló para que no tuviéramos miedo. Sólo pensar que vamos a jugar con niños más grande que nosotros, nos desanimaba. Pero no íbamos a darnos por vencidos. Ya en la cancha, comenzó el partido. Los de quinto eran muy ágiles y más fuertes. Pero mis compañeros no se dejaban quitar la pelota.

Yo miraba atento a la pelota y la sujetaba con fuerza para que no entre al arco. Las manos me dolian pero seguia tapando y sujetándola o botándola fuera del arco. Ya iva a terminar el primer tiempo y estábamos cero a cero. Los de quinto estaban cansados porque ivan jugando dos partidos. Por eso estábamos un poco confiados. Pero de pronto un grandulón de quinto tiró fuerte y no pude agarrar la pelota y ella entró al arco.

o. Goooooooooool! gritaron y nos quedamos sorprendidos porque no lo esperábamos. Mis compañeros se desanimaron pero les hablaba para que no se den por vencidos. Ya en el segundo tiempo siguieron jugando con ganas. Yo estasba seguro de que podiamos ganarle. Pero quinto nos metió dos goles más y ellos ganaron. Anotaron tres y nosotros cero.

Todos nos pusimos a llorar. Y yo más, porque había entrenado todo el mes y no logre tapar bien el arco.

Ya en casa no tenia ganas de ver a nadie. Estabamos cansados y desanimados. Pero mi papá me habló diciendo: - Hijo mío a veces nos toca ganar y otras perder, pero no debemos desanimarnos; más bien se debe tener más valor y ver nuestros errores para así corregirlo y poder ser un buen jugador o arquero.

Además no es el último partido. Hay más partidos para jugar en la vida. Así yo tuve valor y con el tiempo me inscribí en un club de fútbol, Mis padres siempre me llevaban. Y cuando fui grande llegué a tapar en el equipo de la selección de nuestro país. Allí fue donde ganamos el Campeonato entre

equipos de varios países. Y nos llevamos la copa de oro. Gooooooooool!, ganamos!, ganamos!

FIN.

Para los arqueritos que no dejan pasar ni una pelota y sueñan ser invencibles.