El oficio de ser maestro: Contradicciones Iniciales

El oficio de ser maestro: Contradicciones Iniciales Las cualidades clásicas: Vocación y Moral La lucha contra los tipos

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El oficio de ser maestro: Contradicciones Iniciales Las cualidades clásicas: Vocación y Moral La lucha contra los tipos de particularismos que obstaculizaban la hegemonía real del Estado moderno en construcción adquiere una relevancia particular en el frente educativo y cultural. La maestra rural. El Magisterio no se define como una profesión, si no como misión o sacerdocio, requiere no tanto de un saber cuánto de una serie de cualidades de carácter éticomoral. la primero y más importante es la vocación. Ésta deberá complementarse con un conjunto de virtudes de todo tipo. La "certificación" relativa del oficio Las descripciones de los maestros ideales deben de ser que sea "puntual" y "asistencia asidua", por otro lado tiene que tener la "preparación pedagógica" El maestro debe de ser "sabio", sino en asuntos de teorías y métodos pedagógicos El maestro necesita de dos órdenes de conocimientos, escribía Gutierrez .-los sabios y los del pedagogo. Un buen maestro es una combinación históricamente variable de vocación, cualidades morales, conocimiento pedagógico y conocimiento de contenido. La lucha por el re conocimiento social Cuando se trata de definir y calificar la función social del magisterio. Aunque los maestros son conscientes de este conflicto en términos permanentemente ideales no hay contradicción En realidad el maestro es prisionero de la definición social que hace su oficio. Pese a la grandeza proclamada de su misión , el magisterio ha sido desde su origen una profesión con bajo reconocimiento.. En realidad el maestro es prisionero de la definición social que hace su oficio. Pese a la grandeza proclamada de su misión , el magisterio ha sido desde su origen una profesión con bajo reconocimiento. La misma expresión maestro escuela tuvo desde sus orígenes un claro sentido despectivo. El maestro de escuela como con tanto desprecio los llaman pedantes.

Un grupo de pedagogos culpaban al mismo maestro por no cumplir con la definición dominante de su función. Se le reprochaba al maestro no poseer la cultura mínima indispensable, no saber hacerse respetar. Lucio Tapia, hablando de la indiferencia encuentra la causa de esta situación en el hecho de que muchos maestros no llenan las cualidades, los requisitos necesarios para ejercer tan noble cargo. El bajo prestigio que la sociedad culta le dispensa al oficio docente esta relacionado con el origen de clase de maestros. Una profesión que se define con todos los atributos de la “nobleza” es en realidad ejercida por individuos bastante alejados de eso. El prestigio del maestro se mide en relación con el prestigio del producto de la cultura “literaria”. Una vez terminado el porfiriato el maestro Julio Hernández denunciaba que durante la dictadura se le predico oficialmente que su misión era de apóstoles y mártires que no debían jamás pensar que su profesión era igual a las demás y que o tenían derecho a los goces supremos de la vida Una vez que se tomó conciencia de la situación, dos son las estrategias generales que se proponen para dignificar al magisterio Primera: apunta a mejorar las remuneraciones, condiciones de trabajo y carrera docente. También se estableció que los profesores de los planteles privados tendrían derecho a “honores y recompensas” .